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Desde primera instancia el agua a utilizarse en la fabricación de concretos y morteros debe ser un
agua limpia, que no contenga materiales que perjudiquen en la vida útil del concreto. El agua es
importante ya que permite que el cemento realice la función de aglomerante, es por esto que se
debe tener en cuenta una buena relación agua cemento ya que agua adicional en un diseño
perjudicara al concreto en el momento de fraguado al crear porosidad reduciendo así la
resistencia, al requerir una mezcla más fluida esta se debe realizar utilizando aditivos y evitar
lograr esto con agua. Se debe evitar aguas con sustancias como aceites, materiales orgánicos,
ácidos y sustancias alcalinas.
A continuación, se presenta una tabla con respecto a las impurezas que se pueden encontrar en el
agua y que se deben evitar para una durabilidad de material.
También es fundamental mencionar que se debe lograr un buen curado al concreto ya que de esto
dependerá el desarrollo de la resistencia, por ende, el agua utilizada puede producir manchas en el
concreto y generar deterioro. Se debe evitar aguas con partículas de hierro y material orgánico ya
que son los que generalmente causan manchas al material.
Ambientes agresivos
La durabilidad del concreto está ligado a los materiales empleados en su diseño, pero además de
esas características existen factores que perjudican la vida útil del material, para concreto
reforzado es importante proteger al acero por lo que las sustancias más agresivas que generan
corrosión son los cloruros y el anhídrido carbónico (dióxido de carbono) del aire. Los ambientes
marinos presentan tener una alta incidencia en el diseño del concreto, pues los cloruros están
presentes en el agua de mar y en la humedad relativa, introduciéndose en el concreto atreves de
los poros y fisuras, hasta llegar al acero produciendo rotura o corrosión. Pero estos cloruros
también se ven presentes en ambientes no marinos, por lo general en deshielo o en climas de
invierno, ya que penetran y acumulan dentro de los poros del concreto afectando la vida útil del
material.
Con respecto al dióxido de carbono del aire este reacciona con las sustancias alcalinas del
concreto, reduciendo el PH y ocasionando desprendimiento del material lo que se verá afectado el
acero con corrosión.
Además, existen otros factores que cuando se ha iniciado la corrosión en la armada ya sea por
cloruros O anhídrido carbónico, estos lo que determinan es la cinética del proceso, es decir,
controlan la velocidad de corrosión, pudiendo ser responsables de velocidades muy lentas o muy
rápidas (Oretaga, Perdrix, & Ventura , 2005), estos factores se conocen como acelerantes y una
vez se ha iniciado la corrosión en ambientes expuestos, estos aceleran el proceso de la perdida útil
del concreto y acero. Los factores más importantes en cuanto a acelerantes en la corrosión son la
humedad, acceso de oxígeno al acero y la temperatura.
La NTC 5551 clasifica los tipos de clases de exposiciones que tiene el concreto esto lo determina
por medio del grado de agresividad del ambiente y el microclima al que se verá expuesta la
estructura ya sea por humedad relativa, temperatura y viento, además de procesos físicos y
químicos que puedan afectar a la estructura. A continuación, se presenta un resumen de la
clasificación a exposición ya mencionada en la NTC 555
Actualmente se llevan procesos para incrementar la vida útil del concreto y prevenir daños en el
material, por lo que se puede llegar a utilizar o emplear en un diseño aditivos inhibidores de
corrosión, protección catódica, y aplicación de capas protectoras en superficie del concreto o
meterse directamente a los materiales de diseño, es decir buscar las mejores características para
las condiciones expuestas del concreto.
Oretaga, B., Perdrix, A., & Ventura , P. (2005). LA AGRESIVIDAD AMBIENTAL Y LA DURABILIDAD DE
LAS ESTRUCTURAS DE HORMIGON .