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ANALYTICS: EL USO DE BIG DATA EN EL MUNDO REAL

CÓMO LAS EMPRESAS MÁS INNOVADORAS EXTRAEN VALOR DE DATOS INCIERTOS


El concepto de Big data cuenta con múltiples interpretaciones, ya no se limita únicamente al
ámbito tecnológico. Ha pasado a ser una prioridad empresarial debido a su capacidad para
impactar profundamente en el comercio global. Más allá de abordar desafíos empresariales
tradicionales, la Big data está poniendo sobre la mesa nuevas formas de transformación en
procesos, empresas de diversos sectores y la sociedad en general. Según una investigación
reciente, las empresas están utilizando la Big data para lograr resultados orientados al cliente,
aprovechar datos internos y crear un conjunto de información más efectivo.
El estudio reveló que las empresas, sin importar el sector, la ubicación o el nicho donde se
desenvuelvan, adoptan un enfoque práctico y pragmático hacia la Big data. Las soluciones más
eficaces identifican los requisitos del negocio y adaptan la infraestructura, fuentes de datos y
análisis para soportar oportunidades comerciales. Obtienen nuevos conocimientos de fuentes
internas, definen estrategias tecnológicas y actualizan progresivamente infraestructuras a lo largo
del tiempo.
Podemos decir que el concepto de Big data se puede representar en la unión de los siguientes 4
conceptos que describimos a continuación:
1. Volumen: Se refiere a la cantidad masiva de datos que las organizaciones intentan
aprovechar para mejorar la toma de decisiones. Aunque el tamaño considerado como
"alto" varía según el sector y la ubicación geográfica, se observa un crecimiento
constante en el volumen de datos. Hablamos de Big data cuando nos referimos a una
cantidad que oscila entre un terabyte y un petabyte.
2. Variedad: Implica la gestión de múltiples tipos y fuentes de datos, incluyendo datos
estructurados, semiestructurados y no estructurados. Esto requiere integrar y analizar
datos provenientes de diversas fuentes, tanto tradicionales como no tradicionales, como
sensores, dispositivos inteligentes e incluso, redes sociales.
3. Velocidad: Se refiere a la rapidez con la que se crean, procesan y analizan los datos. Con
la creciente demanda de datos en tiempo real, la velocidad se convierte en un factor
crítico. Los datos generados en tiempo real necesitan ser capturados, almacenados y
analizados de manera rápida para ser útiles en procesos como la detección de fraudes o el
marketing multicanal.
4. Veracidad: Esto está referido a la calidad y confiabilidad de los datos. Es importante
asegurarse de que los datos sean precisos y estén libres de errores, ya que decisiones
basadas en datos incorrectos pueden tener consecuencias graves en cualquier ámbito.
Estas dimensiones combinadas definen el concepto de Big data y su impacto en la toma de
decisiones empresariales y la transformación digital.
La promesa de lograr un valor de negocio importante y cuantificable a partir de Big data
solo puede hacerse realidad si las empresas crean una base de información que respalde
el volumen, la variedad y la velocidad de los datos de rápido crecimiento. La incapacidad para
conectar los datos almacenados en nichos empresariales y departamentales ha sido durante años
uno de los retos del business intelligence. Esta integración es incluso más importante, aunque
mucho más compleja, en el caso de Big data. Es fundamental que las empresas centren sus
iniciativas en ámbitos que puedan proporcionar el máximo valor para el negocio. Para muchos
sectores, esto significará comenzar con una analítica de clientes que permita prestar un mejor
servicio a los mismos como resultado de comprender verdaderamente y efectivamente sus
necesidades y además, ser capaces de anticiparse a sus comportamientos futuros que es
realmente el valor agregado de esta metodología.
La digitalización masiva ha cambiado el equilibrio de poder entre individuos e
instituciones, difundiendo el concepto de Big data. Para proporcionar valor a clientes y
ciudadanos capacitados, las empresas deben enfocarse en comprender a los clientes como
individuos y utilizar tecnologías avanzadas y análisis para entender sus interacciones y
preferencias. Buscar primero internamente permite a las empresas mejorar sus datos, software y
habilidades existentes, ofreciendo un valor comercial a corto plazo y obteniendo experiencia
crucial para futuras expansiones. La mayoría de las organizaciones desean aprovechar la
información almacenada en repositorios existentes mientras amplían su capacidad de manejar
mayores volúmenes y variedades de datos mediante la expansión de su data warehouse.
Las organizaciones en todo el mundo se enfrentan a una variedad creciente de
herramientas analíticas y a una escasez de habilidades en este aspecto. La efectividad de la Big
data depende de abordar esta brecha. Esto implica invertir en adquirir tanto herramientas como
habilidades, con la expectativa de que surjan nuevos roles y modelos de trayectorias
profesionales. Es muy importante que las empresas se enfoquen en el desarrollo profesional de
sus analistas internos, quienes ya están familiarizados con las problemáticas y procesos de
negocio de la empresa. Al mismo tiempo, tanto universidades como individuos deben trabajar en
el desarrollo de sólidas habilidades analíticas, independientemente de su formación o
especialidad.
Para competir en una economía global integrada, las empresas necesitan comprender
diversos aspectos como mercados, clientes, productos, normativas y competidores, entre otros.
Esta comprensión requiere el uso eficaz de información y analíticas, consideradas por muchas
empresas como su activo más valioso. Con la creciente adopción de la Big data, las empresas
están transformando su forma de competir y ganar, aprovechando la amplia gama de información
disponible para mejorar la toma de decisiones y el rendimiento en toda la empresa. Al
proporcionar información, habilidades y herramientas a todos los niveles de la organización,
algunas empresas pioneras están liderando este cambio. Aunque no todas las organizaciones
necesitan utilizar todas las funcionalidades de la Big data, en cambio sí, todas tienen la
oportunidad de aprovechar nuevos datos, tecnologías y analíticas para generar valor y obtener
ventajas competitivas. En una economía globalmente integrada, se espera que las empresas
continúen expandiendo el uso de la Big data para impulsar el valor comercial y mantenerse en
competitividad.

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