TEOLOGIA PROTESTANTE EN LA SEGUNDA MITAD DEL SIGLO XIX

Pensamiento Cristiano

Tarea 2

Desarrollo

1. Teología de la Mediación:

A mediado del siglo XIX en Alemania se da una especie de “despertar” en la teología

protestante, mediante la llamada” teología de la mediación”, que buscaba armonizar el
pensamiento moderno con las exigencias de la fe tradicional.

La “teología de la Mediación” pueden comprenderse de dos modos:

Negativo: Si se identifica mediación y compromiso, se le puede acusar al teólogo de

comprometer el mensaje con el pensamiento moderno; es decir, a repetir la tradición recibida
mediante un vínculo entre la tradición y el pensamiento actual.

Positivo: Repensar y reformular la tradición, hasta el punto de que la “teología de la

mediación” es casi una tautología.

La resistencia de la nueva ortodoxia:

La resistencia de la nueva ortodoxia estaba dirigida a una recuperación del pasado, una
especie de neopietismo o de un antirracionalismo común a todo “despertar” no había una
visión pragmática de la teología.

Su despertar combatió la teología de la “mediación”, a la cual se opuso en nombre de la fe y

de los valores tradicionales denunciando la erosión disolvente de la crítica.

2. La escuela de Erlangen:

Los teólogos de esta escuela se mantuvieron fieles al concepto de conciencia religiosa de

Schleiermacher, aunque preferían el concepto de “experiencia”.

- Se interesaban en saber cómo llegar a una certeza en lo referente a Dios, a la revelación,

Cristo y el Espíritu, etc.
- Kant criticaba a quienes pretendían acercarse a Dios mediante argumentos racionales, con
lo cual estaban de acuerdo estos teólogos. Por tanto, también descartaban la teología
especulativa post-hegeliana.

3. El nuevo biblismo:
- Este ambiente ortodoxo y confesional, para un despertar teológico conducía a un radical
retorno de la sagrada escritura

- Este biblismo tenía como centro la universidad de Greifswald:

O Joham Tobías Beck(1804- 1|878), se distinguió por el pathos de sus discursos religiosos
que por la claridad estilística insistía en la primacía de la revelación.
Martin Kahler( 1835- 1912) tuvo gran influencia sobre este biblismo: Comprendió el
problema de la duda, mediante interrogantes como: ¿Cómo puede el sujeto alcanzar al
objeto? Presenta a la duda como algo que no se puede superar solo recurriendo a la
subjetividad de la experiencia, sino que esta debe combinarse con la objetividad del
testimonio bíblico.

La teología liberal: Esta teología está arraigada en las teorías modernas y seculares del
conocimiento, y se ha movido hacia la participación en el trabajo de la iglesia como la
prioridad para los cristianos a expensas de delinear la creencia teológica, lo que ha llevado
al abandono de muchas creencias ortodoxas en muchas denominaciones principales.

Albrecht Ritschl : Padre de la llamada “teología de los valores”

Para este pensador su propósito primordial fue interpretar la reforma del siglo XVI
mediante el retorno a las enseñanzas Novo testamentarías para contrarrestar las
deformaciones teológicas del catolicismo romano, del pietismo y del romanticismo.
Ritschl manifestaba, que el pensamiento cristiano no debe moverse en el terreno de las
ideas generales, en el plano de la metafísica, sino en el de la revelación de Dios en Cristo.
Según Ritschl Jesús tiene para nosotros el valor de Dios, a su juicio, el contenido del
cristianismo se centra más en los valores que en las verdades. Su interés dogmático está
en la soteriología; a partir de esta, el cristianismo se define por la confianza en Dios y la
práctica del amor al prójimo en el ejercicio de la vida social y profesional.
Wilhelm Herrmann: Propone la tesis de la experiencia actual del poder salvador de Jesús,
según el testimonio de la escritura. Su teología es la fe cristiana y explicar que significa que
Dios nos haya salvado en Jesucristo. Según él ni la Biblia ni el dogma eclesiástico
fundamentan la fe.
Adolf Von harnack (1851-1930)
Harnach Fue la figura más importante de la escuela Ritschl. Con sus investigaciones marcó
los estudios sobre los orígenes cristianos a fines del siglo XIX y principio del siglo XX.
Adolf Von insistió en la importancia del testimonio y en los estudios de los orígenes
cristianos y, por otra parte, consideró que la fe cristiana primitiva se expresó
esencialmente en término de moralidad o ética llevando las tesis de Ritschl a las últimas
consecuencias.
La iglesia cristiana, ante las nuevas interpretaciones que aparecían se endureció hasta
convertirse en católica.