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LA ÉTICA Y BIOÉTICA EN EL TRATO AL PACIENTE

La ética es la ciencia que estudia la moral del hombre en la sociedad, se dice que la
ética es normativa porque esta estudia las normas morales. En mi parecer esta nos
dice, cuando es una acción de nosotros buena o mala, o cuando la debemos de
tomar como justa o injusta.

A todos los profesionales del área de la salud siempre se nos recalca que debemos
ser éticos con nuestros pacientes. Tenemos un compromiso moral con nuestros
pacientes y es que en implícitamente nosotros estamos buscando un bien para un
ser humano. Ya sean pacientes sanos o enfermos, vengan de donde vengan,
buscamos hacerles un bien.

Algo que siempre se debe de recordar es que el paciente tiene una autonomía
propia, y es que al tomar decisiones no solo debemos de considerar nuestro punto
de vista, sino el del propio paciente y en ocasiones hasta de la familia. Se busca una
corresponsabilidad por parte del profesional y paciente.

Por ello, tomar en cuenta opiniones, saberes e inquietudes del paciente y hasta de
la familia, nos permite disponer de mayor y mejores posibilidades de hacer las cosas
de forma conveniente. Nosotros como profesionales de la salud tenemos una
obligación moral muy importante, esta tiene que ver con el conocimiento, con el
manejo de los diagnósticos que damos, con nuestra capacidad y de los esquemas
terapéuticos que utilizamos, en pocas palabras con nuestra preparación como
profesionales.

Debemos estar en constante aprendizaje, porque con el paso del tiempo las cosas
cambian. Es inaceptable querer dar un diagnóstico o realizar algún tratamiento
cuando nosotros no sabemos del tema o no estamos seguros de lo que estamos
haciendo. Debemos de trabajar para buscar un bien, no para llegar a perjudicar aún
más a nuestros pacientes.

La bioética la definimos como el “estudio sistemático de la conducta humana en el


ámbito de las ciencias de la vida y de la salud, analizadas a la luz de los valores y
principios morales”.

Entendemos que esta tiene como finalidad que los profesionales de la salud
desarrollemos un pensamiento que esté fundamentado en la ética, quiero decir, que
la hora de tomar decisiones que afecten a la vida de nuestro paciente, tengamos
muy presente los criterios éticos.

En la bioética tenemos cuatro principios:

La autonomía, la cual tenemos muy clara. Los pacientes tienen la capacidad de


tomar decisiones de manera libre y se deben respetar siempre, no intentar
manipular sus decisiones de ningún modo.
La beneficencia, buscamos tener la mayor cantidad de beneficios y disminuir los
posibles daños, claramente tomando en cuenta a nuestros paciente en todo
momento.

No maleficencia, no vamos a hacer daño intencionalmente o no vamos a empeorar


la situación de nuestros pacientes a propósito. Al hacer esto nos olvidamos por
completo de nuestras obligaciones morales.

Y por último tenemos la justicia, tenemos que tratar los casos iguales de forma
igual, de esta manera evitamos la desigualdad o disconformidad de nuestros
pacientes.

A lo que llegamos es que tanto la ética como la bioética están sumamente ligadas al
trato hacia nuestros pacientes. Tenemos que tenerlas muy presente, porque día a
día trabajamos con diferentes pacientes y todos desdén de recibir la mejor atención
y beneficios de nuestra parte. Todos tienen el derecho de una buena consulta y que
se escuche sus opiniones o dudas sobre los diagnósticos o tratamientos que damos.
Nosotros no tenemos el libre albedrío de realizar lo que queramos sin antes tomar
en consideración a nuestro paciente.
Referencia:

José Narro Robles José Rodríguez Domínguez CVTLFA. Ética y salud. Retos y
reflexiones [Internet]. Scielo.org.mx. 2004 [citado el 16 de mayo de 2023].
Disponible en:
https://www.scielo.org.mx/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0016-3813200400060
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