Herramientas de análisis de entorno/mercado

CAME

El Análisis CAME es una herramienta estratégica que complementa al Análisis DAFO

(también conocido como FODA) y proporciona información para establecer las pautas
de acción en base a los aspectos identificados en el análisis DAFO. CAME es un acrónimo
que representa las siguientes acciones estratégicas: Corregir (debilidades), Afrontar
(amenazas), Mantener (fortalezas) y Explotar (oportunidades).

Para realizar un análisis CAME, se deben seguir los siguientes pasos: determinar los
objetivos del negocio, realizar un análisis DAFO, seleccionar acciones importantes, y
finalmente, realizar el análisis CAME aplicando las estrategias de corregir, afrontar,
mantener y explotar.

Las acciones del análisis CAME son: corregir las debilidades, afrontar las amenazas,
mantener las fortalezas y explotar las oportunidades. Estas acciones se aplican en
función de los resultados obtenidos en el análisis DAFO.

El análisis CAME se utiliza en la planificación estratégica de negocios, como en la

elaboración de planes de negocios, definición de programas y proyectos.

Existen cuatro estrategias del análisis CAME:

1. Estrategia ofensiva (unir fortalezas y oportunidades)

2. Estrategia defensiva (afrontar amenazas con fortalezas)
3. Estrategia de reorientación (unir debilidades y oportunidades)
4. Estrategia de supervivencia (corregir debilidades para afrontar amenazas).

La diferencia entre el análisis DAFO y el análisis CAME radica en que el DAFO es un

análisis inicial que identifica fortalezas, debilidades, oportunidades y amenazas, mientras
que el CAME se enfoca en las acciones futuras a realizar para corregir debilidades,
afrontar amenazas, mantener fortalezas y aprovechar nuevas oportunidades. Ambas
herramientas están relacionadas, ya que el DAFO es el punto de partida para el análisis de
negocio y el CAME son las acciones estratégicas a seguir para alcanzar los objetivos de la
empresa.

El análisis CAME es una herramienta utilizada para corregir las debilidades, afrontar las
amenazas, mantener las fortalezas y explotar las oportunidades de una empresa. Se realiza
en cuatro pasos: establecer objetivos generales, realizar un análisis FODA, seleccionar los
aspectos más importantes y realizar el análisis CAME basado en debilidades, amenazas,
fortalezas y oportunidades. Se definen acciones para corregir las debilidades, afrontar las
amenazas, mantener las fortalezas y explotar las oportunidades. Se pueden establecer
estrategias ofensivas, defensivas, de supervivencia y de reorientación. Las acciones deben
ser congruentes con la estrategia de la organización. Se recomienda consultar fuentes de
información como libros y sitios web especializados en el análisis CAME.

PESTEL

El análisis PESTEL es una herramienta utilizada por las organizaciones para identificar y
evaluar los factores que pueden afectar su negocio en el presente y en el futuro. PESTEL
es un acrónimo de Político, Económico, Social, Tecnológico, Ecológico y Legal. Este
análisis se utiliza para examinar oportunidades y amenazas que surgen de estos factores
externos y permite tener una visión favorable al realizar investigaciones de mercado, crear
estrategias de marketing, desarrollar productos y tomar decisiones para la organización.
Los factores políticos, económicos, sociales, tecnológicos, legales y ecológicos son
considerados en el análisis PESTEL. Cada uno de estos factores tiene un impacto en el
desempeño de la empresa y es importante tenerlos en cuenta al tomar decisiones. El
análisis PESTEL proporciona información valiosa para la empresa, ya que permite
identificar amenazas y oportunidades en el entorno externo. Es una técnica sencilla de
aplicar, pero con resultados significativos para el negocio.

FODA

El análisis FODA (Fortalezas, Oportunidades, Debilidades y Amenazas) es una herramienta

ampliamente utilizada en el ámbito empresarial para evaluar la situación interna y externa
de una organización. Esta metodología proporciona una visión integral de la organización
al identificar y analizar sus fortalezas, debilidades, oportunidades y amenazas.

El análisis de las fortalezas permite identificar los aspectos internos en los que la
organización se destaca y tiene ventajas competitivas. Estas fortalezas pueden estar
relacionadas con recursos humanos altamente capacitados, tecnología avanzada, una
sólida reputación en el mercado o una base de clientes leal. Reconocer y aprovechar estas
fortalezas es fundamental para el éxito y crecimiento de la organización.
Por otro lado, el análisis de las debilidades pone de manifiesto aquellos aspectos internos
que representan obstáculos o limitaciones para el desempeño de la organización. Estas
debilidades pueden estar relacionadas con procesos ineficientes, falta de habilidades
específicas, recursos limitados o una mala gestión. Identificar y abordar estas debilidades
es esencial para mejorar la competitividad y eficiencia de la organización.

El análisis de las oportunidades se centra en los factores externos que pueden ser
favorables para la organización. Estas oportunidades pueden surgir de cambios en el
mercado, avances tecnológicos, demanda creciente de productos o servicios, nuevas
regulaciones favorables, entre otros. Identificar y aprovechar estas oportunidades brinda a
la organización la posibilidad de expandirse, diversificarse y obtener una ventaja
competitiva.

Por último, el análisis de las amenazas se enfoca en los factores externos que pueden
representar riesgos o desafíos para la organización. Estas amenazas pueden incluir
competidores fuertes, cambios en las preferencias del consumidor, fluctuaciones
económicas, avances tecnológicos de la competencia, entre otros. Identificar y mitigar estas
amenazas es esencial para garantizar la continuidad y estabilidad de la organización.

El análisis FODA es un proceso dinámico que proporciona información valiosa para la

planificación estratégica. Ayuda a la organización a comprender su posición en el mercado,
a identificar áreas de mejora, a aprovechar oportunidades y a enfrentar los desafíos
externos. Con base en los resultados del análisis FODA, se pueden desarrollar estrategias
efectivas que capitalicen las fortalezas internas y aprovechen las oportunidades externas,
al mismo tiempo que se abordan las debilidades y se minimizan las amenazas.

En resumen, el análisis FODA es una herramienta esencial para comprender la situación

de una organización y tomar decisiones estratégicas fundamentadas. Proporciona una
visión completa de los factores internos y externos que afectan a la organización, y permite
desarrollar estrategias que impulsen el crecimiento y el éxito empresarial.

5 FUERZAS DE PORTER

El documento "Las cinco fuerzas competitivas que le dan forma a la estrategia" de Michael
E. Porter, publicado en enero de 2008, analiza las cinco fuerzas que afectan la competencia
en un sector y cómo comprenderlas puede ayudar a una empresa a desarrollar una
estrategia rentable y resistente.
Las cinco fuerzas competitivas son: competidores directos, clientes, proveedores, posibles
entrantes y productos sustitutos. Estas fuerzas determinan la estructura de un sector y la
naturaleza de la competencia dentro de él.

La rentabilidad de un sector depende de la intensidad de estas fuerzas. Si son intensas,

como en las industrias de líneas aéreas y hotelería, las empresas tienen dificultades para
obtener retornos atractivos. Si son benignas, como en los sectores de software y artículos
de aseo personal, muchas empresas pueden ser rentables.

La comprensión de estas fuerzas y sus causas subyacentes permite anticipar la

competencia y tener un impacto en ella a largo plazo. La estructura del sector es tan
importante como la posición de la empresa, y comprenderla es clave para un
posicionamiento estratégico efectivo.

El documento también examina las características económicas y técnicas que determinan

la fortaleza de cada fuerza competitiva. Se analiza la amenaza de nuevos entrantes, la
amenaza de productos sustitutos, la rivalidad entre competidores existentes, el poder de
negociación de los compradores y el poder de negociación de los proveedores.

Las barreras de entrada, como las economías de escala, la diferenciación del producto, los
requisitos de capital y las políticas gubernamentales, son factores que influyen en la
amenaza de nuevos entrantes y en la rentabilidad de un sector.

En resumen, el documento destaca la importancia de comprender las cinco fuerzas

competitivas y cómo influyen en la rentabilidad de un sector. Esto proporciona una base
sólida para desarrollar estrategias empresariales efectivas y mantener una posición
competitiva en el mercado.

CADENA DE VALOR

El análisis de la cadena de valor es una herramienta desarrollada por el profesor Michael

E. Porter que permite descomponer una empresa en sus actividades constitutivas para
identificar fuentes de ventaja competitiva. Se basa en la idea de que una empresa consiste
en una serie de funciones y actividades, y al comprender y mejorar la forma en que se llevan
a cabo estas actividades, se puede lograr una ventaja competitiva.

La cadena de valor se compone de tres elementos básicos: las actividades primarias

(logística, producción, comercialización y servicios), las actividades de soporte
(administración de recursos humanos, compras, tecnología, etc.) y el margen, que es la
diferencia entre el valor total y los costos totales incurridos por la empresa.

El análisis de la cadena de valor ayuda a identificar aquellas actividades de la empresa que

pueden generar ventaja competitiva. Se destacan tres tipos de actividad: actividades
directas (creación de valor para el comprador), actividades indirectas (que permiten el
funcionamiento continuo de las actividades directas) y el aseguramiento de la calidad.

Además, Porter amplió el concepto de cadena de valor al sistema de valor, considerando

que una empresa está inmersa en un conjunto complejo de actividades realizadas por
diferentes actores. Esto incluye las cadenas de valor de los proveedores (que suministran
a la empresa), los canales (mecanismos de entrega de productos) y los compradores
(determinan las necesidades del cliente y la diferenciación).

El análisis de la cadena de valor permite a la empresa evaluar y mejorar sus actividades

internas, así como comparar su estructura de costos y posición en la cadena de valor con
la de sus competidores. También se utiliza para reaccionar a las estrategias de los
competidores y ajustar y mejorar la propia cadena de valor.