Proyecto: Creación de una marca de ropa femenina que rompa los

esquemas de belleza irreales y así contribuya a la disminución de

desórdenes alimenticios.

Laura Marcela Caicedo Prieto

Docente: Viviana Marcela Corredor Gómez

Institución Universitaria Escuela de Artes y Letras

Programa Académico: Diseño de Vestuario.

Ciudad: Bogotá

Año: 2014
Formulación del problema:

¿Existe una marca de ropa femenina que esté enfocada en los estereotipos
reales, con medidas normales; y les preocupe que los estereotipos de belleza
inalcanzable aumenten los casos de desórdenes alimenticios?
Objetivo de la investigación

Objetivo general: Crear una marca de ropa femenina que genere autoestima
en las mujeres de cualquier talla, reduciendo de este modo los desórdenes
alimenticios, a través de las prendas de vestir.

Objetivos específicos:

 Elaborar un estudio minucioso de ergonomía, patronaje y siluetas con el

fin de diseñar prendas de vestir que resalten las cualidades de cada
cuerpo y talla.

 Cambiar los estereotipos de belleza inalcanzables por posibles, con lo

cual las mujeres van a valorar su cuerpo.

 Contribuir al cambio de mentalidad frente al estereotipo de belleza con el

fin de reducir desórdenes alimenticios; donde las mujeres no van a
esperar ser como nadie solo como ellas mismas, ya que verán otros
estereotipos y tipos de belleza.
Justificación

El presente proyecto se realiza con el fin de disminuir desórdenes alimenticios,

ocasionados por los estereotipos creados por la misma moda y ayudar desde
esta área a cambiar el mismo, por un estereotipo de belleza real “demostrar que
"ser una mujer normal es bello" (AFP, 2014) , donde las mujeres del común se
vean reflejadas en una marca de ropa femenina, preocupada por entender y
atender la necesidad específica de cada una de ellas, con prendas de excelente
calidad, diseño, patronaje y uso adecuado de las siluetas que favorezcan cada
tipo de cuerpo; esto aumentará la confianza, la autoestima de las mujeres que
sean nuestras clientes, donde el lema será que lleguen buscando realzar sus
cualidades y no esperando verse como una modelo de revista.

Debemos tener presente que cada persona tiene su figura física concreta, estos
modelos “obligatorios” en la sociedad a seguir, figuras idealizadas por la
sociedad y no figuras reales y que cada vez más, vemos este prototipo de
belleza como lo “normal”. Así es como la estética femenina es utilizada como
objeto de manipulación, es un ideal estético, donde la mayoría de las mujeres
no poseen este físico ideal, por lo que los intentos por conseguirlo, pueden
conllevar a caer en distintas problemáticas. (Jóvenes, No seas presa de la talla)

Y ya que después de todo, nuestra función social como diseñadores es ayudar

a la población a la cual nos dirigimos, hacer una moda con sentido social,
donde no solo creemos prendas hermosas con diseños novedosos, si no
prendas que tengan un impacto en la vida de nuestros clientes y en este caso
que evite problemas de salud, como los desórdenes alimenticios que afectan
principalmente a las mujeres, que a pesar de los años, aún siguen siendo
“víctimas” de lo que imponga la sociedad como bueno o malo, bello o feo.
Marco teórico

Estereotipo

Según la definición que se recoge en la RAE (Real Academia Española) “es

una imagen estructurada y aceptada por la mayoría de las personas como
representativa de un determinado colectivo. Pueden ser de tipo sociales (clase
social), culturales (costumbres que tengan.) o raciales (grupo étnico del que
formen parte.)”. (Definicion.de) Suelen unirse estas tres características y no se
separan completamente, cuando hablamos de estereotipo.

Estereotipos Que Sufrimos Las Mujeres

Estas ideas impuestas y asumidas, sobre las características, actitudes y

aptitudes de las mujeres, que hemos aprendido e interiorizado gracias a la
cultura en la cual estamos inmersos, han permitido que estos modelos irreales
que nos venden, la estética de la mujer como algo perfecto y “normal” lo cual
genera que si no se tiene este tipo de cuerpo o medidas, las mujeres empiecen
a cuestionar su belleza natural y que sea el estereotipo irreal el incuestionable,
incluso que rara vez se llega a pensar que perjudiquen a las mujeres que son
las más afectadas; ya que de forma consciente o inconsciente lo permiten
siguiendo como norma lo que se estipule principalmente en los medios de
comunicación y acepte el resto de sociedad.

Y esto se ve claramente como lo menciona la Federación Mujeres Jóvenes al

decir comentarios como: “La belleza exterior en las mujeres facilita el acceso a
una mejor posición social y laboral. O la típica imagen de que una mujer guapa
y delgada puede tener al chico que quiera. Estar delgada y tener buena
presencia, igual a éxito social” es decir, que aquellas fuera de este grupo las
“gorditas” tienen que luchar más por conseguir las cosas, incluso más
inteligentes porque es lo único que tienen, de ahí también surgen comentarios
como que no existe una mujer bella e inteligente, si es bonita es tonta o si es
inteligente es fea; pero claramente es falso las dos cosas son compatibles y se
poseen, lo que sucede es que muchas que son bonitas no lo creen y esta es la
imagen que proyectan a la sociedad, ya que si uno no se quiere, pues quien lo
va a querer.

Hay que recordar que al fin y al cabo la belleza, sea cual sea el concepto que
tengamos o creamos que es lo lindo, lo bello, con el tiempo va cambiando y al
final la belleza interior de la persona es la que sale a relucir y así sea un cliché
el interior, es lo que más valor tiene y si cultivamos más esta parte y si con
nuestro físico, sea el que sea, así tengamos un gordito o estrías, si nos
queremos cada cicatriz, cada gordito así con ese amor, aceptación por ti mismo
tal cual eres, así te verán los demás, “perfecta” con tus propias imperfecciones
que al fin y al cabo es lo que nos convierte en seres humanos.

Sin embargo; el impacto de la publicidad, los medios de comunicación que

muestran diariamente en sus producciones pautas de publicidad, noticieros
estas modelos, actrices que son altas, delgadas, de pelo largo, con cutis
perfecto, lo cual permite claramente que las mujeres tomen ciertas
determinaciones en cuanto a su apariencia física al creer que tienen que verse
como ellas, y al compararse con estas, van a sentir que no es perfecta y esto
les va a causar baja autoestima y estar buscando ese inalcanzable, al que
nunca se llegará y si se llega muchas veces se hacen cambio extremos que
generalmente arriesgan la salud.

Y aquí es cuando la edad es un factor sumamente importante ya que ente los

12 – 23 años la mayoría de mujeres experimentan cambios corporales,
hormonales “que muchas veces rechazan, y es por esta inconformidad y en
busca de una perfección irreal es que se puede caer en enfermedades como la
anorexia y la bulimia alimentada por este rechazo, no aceptación corporal, para
evitar el proceso de maduración”. (Jóvenes, No seas presa de la talla) También
el paso de los años es un tema que asusta a muchas mujeres y en búsqueda
de la “eterna juventud” se recurre a cremas, botox, cirugías, etc.; ya que
actualmente estamos en una sociedad donde a los 30 ya se es “viejo”, donde a
esta edad ya conseguir trabajo es difícil por la misma razón y esto genera que
se crea que si a esta corta edad ya se es viejo hay que actuar al respecto,
además de afectarnos psicológicamente, nuestra autoestima, confianza y
cuestionar nuestras capacidades intelectuales y que físicamente ya no somos
tan bellos; pero esto no es más que producto de lo que la sociedad nos vende,
ya que a tan corta edad no solo estamos muy bien para trabajar sino que
físicamente y espiritualmente aun somos “ jóvenes” .

También cuando hablamos de belleza es inevitable no tener al peso como un

factor que lo acompaña, ya que después de todo, este es medido por el famoso
IMC (Índice de Masa Corporal), que impone qué números son los indicados
para cada persona y de los cuales no se puede ni aumentar ni disminuir. Y es
que las famosas medidas son las que determinan e imponen cuáles son las
“correctas” y no sobrepasarlos puede llegar a provocar que tomemos medidas
innecesarias y riesgosas para nuestra salud. De igual modo los estereotipos
son los que han creado esta fuerte asociación entre peso/belleza ya que uno de
los claros parámetros que ha establecido es, que ser delgado es lo bello y tener
unos cuantos kilos demás, es feo automáticamente.

De ahí se establecen las temidas y otras veces muy satisfactorias medidas

cuando se llegan a las que se creen son las perfectas; con las cuales se
establecen las tallas y realizan los moldes de los patrones con los que se
confecciona las prendas, así que estas no solo son ese número que indica si
estamos en el peso correcto o no, si no que dependiendo de este, también se
determina si somos talla S o XL; pero claro está seamos la que seamos, que
pocas veces será la S o XS siempre buscaremos ser estas tallas y si pasamos
de la M a la L ya sentimos que engordamos mucho, pero hay que aclarar que
día a día los tallajes son más pequeños y que bien una talla “L” bien podría ser
una M o S y esto hace que creamos que necesitamos bajar de peso cuando en
realidad no es así y no hemos adquirido ni un kilo, ni aumentado de talla,
simplemente dependiendo de la marca, de cómo tengan las medidas de cada
uno de sus moldes, las tallas puede que no sean las correctas y nos llevemos
una falsa impresión.

Y estas características físicas ideales son las que han creado un ideal estético y
algo que como lo dice la Federación Mujeres Jóvenes podríamos llamar
“feminidad perfecta” e irreal, inalcanzable que vemos como normal, como real
cuando es la forma en la que nos lo venden y muestran todos los días, que lo
llegamos a considerar de este modo y se nos olvida que lo real, lo común, lo
que predomina es lo que si es viable, pero en especial los jóvenes no ven esto,
y la publicidad se aprovecha de estos factores psicológicos que incluyen la
inconformidad, e insatisfacción con ellos mismos; ya que, en un mundo
consumista, materialista donde la portada es lo que cuenta muchas veces la
esencia, el interior de la persona que es en realidad lo que cuenta, queda
relegado en otro aspecto y los aspectos banales son los que más importan, la
forma de verse, vestirse y claramente el físico cuentan, igual que las cosas
entre mejor se vean, más se venden; estamos en un punto donde cada vez que
salen nuevas cosas (celulares, teléfonos, ropa) nos hacen desear tenerlo; nos
generan la necesidad innecesaria, superflua; con los estereotipos sucede lo
mismo, hacen que deseemos ser o tener ese físico que no poseemos.

Y recurrir a todos los productos milagrosos que nos vendan, cirugías, dietas que
expongan o no la vida, lo que importa es llegar a ese ideal. Pero por qué ocurre
esto, es aquí donde los factores Socio-Culturales que son el contexto como lo
menciona la Federación Mujeres Jóvenes y donde se crean este tipo de
prototipos, “la cultura ha sido partícipe de estas nuevas enfermedades, el
autocontrol y el sometimiento van encaminados a ser alguien distinto al ser que
eres. Es aquí, donde el imaginario social colectivo se ve latente, un modelo de
cuerpo idealizado”. (Jóvenes, No seas presa de la talla)

Pero es necesario recordar que la percepción es un referente, es decir, que

para unos la belleza es una y para otros esa belleza puede ser fealdad. “Aquí
la subjetividad juega un papel importante sobre la imagen corporal, más si
tenemos en cuenta, que esta se puede distorsionar cuando tenemos baja
autoestima y no creemos que seamos bellos, así mismo, nos veremos gordos
así estemos flacos”. (Jóvenes, No seas presa de la talla) Y esta idea de que ser
delgado es lo correcto nos lo alimentan día a día con la publicidad en televisión,
con las presentadoras de entretenimiento, las modelos, las portadas de
revistas, los posters de las nuevas colecciones de ropa, los tallajes cada día
más pequeños, la dificultad de encontrar prendas de tallas más grandes o que
tengan un diseño adecuado, o un escalado correcto para que se ajuste igual
que las tallas pequeñas; de hecho, lo correcto es hacer el molde desde cero, no
escalar algo que muchos hacen y por esto las prendas en tallas más grandes se
deforman y no quedan adecuadamente como deberían serlo para los usuarios
de estas, que igual que las tallas pequeñas merecen productos de calidad, que
posean una silueta y patronaje especial para ellos.

Y como se ha reiterando a lo largo del texto, esto permite que enfermedades

como la anorexia y la bulimia sean hoy por hoy comunes y que vayan en
aumento; y que cada día hayan más casos y muertes a causa de estas, que
aparte de ser complicadas para tratar, ya que muy pocas son las que se
recuperan totalmente, los tratamientos son sumamente costosos, además de
ser una enfermedad silenciosa que muchas veces los familiares del afectado la
descubren cuando ya ha avanzado considerablemente.

Publicidad y estereotipos

La publicidad tiene una gran incidencia a la hora de hablar de estereotipos ya

que es a través de esta que se venden, se posicionan, se crean y es la
encargada de establecer un público objetivo y lo que se intenta es influir en el
pensamiento colectivo a través de los medios. “Un ejemplo es cuando se
muestra que los carros son para los hombres y las cremas para las mujeres”.
(Definicion.de) Siempre se muestra que los hombres son más fuertes, los que
trabajan y las mujeres las amas de casa, que tienen que cuidarse para verse
bien sin arrugas, estrías, etc.; y nos preguntamos por qué seguimos en una
sociedad machista, cuando desde siempre de forma directa o indirecta, es lo
que siempre se vende y así no lo veamos, conscientemente estas ideas van
quedando en nuestro inconsciente.

La belleza es un concepto que ha estado presente siempre, en todas las

culturas, civilizaciones desde las más antiguas han tenido este concepto
presente; claro está, que para cada una de ellas la “belleza” es algo totalmente
diferente; para algunos la mujer ideal, perfecta, bella era la que fuera más
voluptuosa, con caderas amplias que fuera resistente para tener hijos, pues la
fertilidad era lo primordial, en algunas tribus actuales del África el cuello largo es
sinónimo de belleza, aquella que tenga más aros en el cuello y logre mayor
altura, será considerada así, algo que dentro de nuestra cultura, ejemplo, esto
no solo seria extravagante sino antiestético, feo todo lo opuesto a la belleza. “El
vestuario, el peinado, los rasgos, los tatuajes, los accesorios, etc., hacen que la
belleza sea un producto que está siempre a la vista”. (Diego.)

Los medios imponen figuras esbeltas de proporciones casi "sub-reales", de

belleza inalcanzable, forzando a las mujeres a someterse a todo tipo de cirugías
y el uso de cualquier tipo de productos químicos como bótox, colágeno y
metacrilato, entre otros, para poder ser o sentirse bellas. Pero no se detienen a
reflexionar y pensar que todo este tipo de figuras son alteradas digitalmente
mostrando un cutis perfecto, sin arrugas, un cuerpo sin gorditos, estrías,
rasguños nada y si es verdad que con una buena alimentación y ejercicio es
posible tener un cuerpo “perfecto”; pero todo es un proceso de constancia,
disciplina que no pasa ni de un día a otro; ni milagrosamente, pero lo más
importante es que nos sintamos bien, sea como sea, ya que podemos comer
bien y hacer todo el ejercicio de este mundo logrando un cuerpo tonificado que
es un ideal de belleza, pero si no tenemos amor propio, si tenemos baja
autoestima, no nos veremos bellos nunca.

Aprovechando este tema de la autoestima, como dice Larrea: "Las mujeres

tienen la autoestima más frágil, Se ven "acosadas por la estética, la publicidad,
la mentira y la obsesión por el perfeccionismo" y caen en la búsqueda de esa
mujer perfecta. La presión (…) por el hombre pareja, pero también por el
hombre jefe, el hombre político y el hombre como único ostentador del poder"
(Diego.).
Los estereotipos de belleza y la moda

La moda es un escenario primordial al momento de contextualizar y hablar de

estereotipos y del aumento de casos de anorexia y bulimia se hayan disparado
en los últimos años; cuando las jovencitas pretenden a como dé lugar entrar en
blusas y pantalones que son cada vez más estrechos. Haciendo que así
tengamos un peso y medidas adecuadas creamos que por no entrar en un
pantalón talla 6, que en realidad es 4 ya somos talla 12; haciendo que la
realidad sea no solo relativa, si no que gracias a este tipo de prendas cada día
más pequeñas, nos hacen ver una realidad distorsionada.

Carlos Teutli Solano concluyó que más del 60% de las consumidoras de
revistas femeninas en México adoptan cambios en su identidad por imitar los
estereotipos que se manejan en las revistas. Se encontró que las consumidoras
empiezan a configurar conceptos diferentes a su propia corporalidad y
paulatinamente desvalorizan sus propios rasgos faciales, raciales y
conductuales a través de modelos con aspecto enfermizo que también se ve en
los comerciales de ropa, bebidas refrescantes o las cantantes de moda.
(Buenas tareas, 2010)

La moda aumenta el riesgo de anorexia y bulimia

Cada año aparecen 20 mil casos más; el 90% de los casos es entre las
mujeres. Y muchas veces es por seguir las tendencias impuestas por artistas o
modelos.

La anorexia consiste en dejar de comer por miedo a engordar y se caracteriza

por dietas rigurosas y actividad física excesiva que provocan alteraciones
emocionales como depresión, irritabilidad y baja autoestima, explicó el director
del Hospital General de México, Francisco Navarro Reynoso.

En tanto, la bulimia consiste en ingerir grandes cantidades de alimento, seguido

de la provocación de vómito, también en el uso de laxantes, lo que ocasiona
disminución de los nutrientes como el potasio y el hierro, situación que podría
derivar en anemia severa. Estos padecimientos afectan en México a por lo
menos tres millones de personas, muchos de ellos escolares.

Es aquí donde se empiezan a ver claramente las afectaciones que pueden traer
consigo esta imposición de estereotipos de belleza irreales, enfermizos, donde
la salud física y mental resulta seriamente afectada.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que en el planeta al menos
el 1% de los adolescentes y adultos jóvenes sufre anorexia y otro 4,1% de
bulimia. Denominados trastornos de la conducta alimentaria (TCA), se estima
que entre un 5% y un 13% de este grupo poblacional presenta síndromes
parciales de estas alteraciones, aunque se carece de una estadística precisa de
los casos en el mundo, señalan especialistas. De acuerdo con la
OMS, la anorexia inicia en edades que van de los 14 a 18 años, en tanto, que la
bulimia suele ser más frecuente en mayores de 16 años, es más difícil de
detectar debido a que los jóvenes se esconden para vomitar y comen
normalmente o eso aparentan. Esto a largo plazo deja daños en varios órganos
y es necesario un tratamiento psiquiátrico para lograr una adecuada
recuperación. (Pulsoslp.com.mx, Vanguardia.com.mx, Esmas.com y Universia
Mexico, 2012)

Estos problemas de salud se podrían evitar si nuestra sociedad no enfatizara la

delgadez como primer criterio de belleza. No es nada raro ver cómo personas
con un peso normal hacen dieta para adelgazar. “Este fenómeno es de
extraordinaria importancia para la aparición y mantenimiento de la anorexia y la
bulimia nerviosas, unos trastornos psicológicos que conducen a graves
desajustes en el comportamiento alimentario y que afectan a mujeres,
preferentemente jóvenes, mucho más que a hombres”. (Raich R. M., 1994) Y lo
más lamentable es que muchas veces se toma como un tema a la ligera, sin la
importancia que tiene, solo se piensa que las personas con este tipo de
padecimiento no comen porque sí, o que el problema es que en casa no se les
“obliga” a comer, que son consentidas y cómo es posible pensar que no se
desea comer, pero nunca ven el trasfondo y mucho menos se piensa en cómo
se debe sentir la persona; se cree que es más por ser malcriadas, que en
realidad un padecimiento sumamente complejo y con una recuperación larga,
costosa y que no solo involucra al paciente sino a la familia.

María Victoria Carrillo Durán, escribe que en la actualidad, existe una

orientación muy fuerte hacia los factores sociales como causas de los
Trastornos de la Conducta Alimentaria, anorexia y bulimia nerviosas, aunque
está comprobado que estas enfermedades son multicausales, parece existir
una corriente de opinión contraria a la moda y sobre todo hacia la publicidad
como causantes directos de estos trastornos, de la que se han hecho eco en los
medios de comunicación y la opinión pública, por el efecto que producen las
imágenes y la venta de productos adelgazantes por la publicidad, sobre
adolescentes preocupadas por cuestiones estéticas y con una personalidad que
se define por rasgos especiales, capacidad de auto-exigencia,
perfeccionamiento, excesiva sensibilidad, entre otros. Se realizó una
investigación de campo a enfermas de anorexia y bulimia en la Unidad de
Trastornos de la Conducta Alimentaria del Hospital Niño Jesús de Madrid,
comparando resultados con las opiniones de una muestra sana. Concluyendo
que la publicidad goza de mala prensa a priori, que la información dirigida a
adolescentes es más influyente que las otras características sociales del
entorno y que por encima de las causas sociales, las causas de tipo personal
como la aceptación y necesidad de popularidad son detonantes más fuertes de
adelgazamiento que la publicidad y la moda, aunque se confirme en el contexto
social su influencia en anorexia y sobre todo en bulimia nerviosa. (Carrillo
Durán, Universidad Complutense - Madrid. Tesis doctotal., 2004)

Así, la línea que existe entre los estereotipos de belleza y los desordenes
alimenticios (bulimia y anorexia) es muy delgada y ahí en el contexto de ambos
esta la moda y la publicidad como contexto. Y es por lo mismo, que desde la
moda es posible abordar esta problemática ya que después de todo las prendas
de vestir influyen emocionalmente, hacen que una persona se sienta mejor con
sí misma, que se valore y se quiera y las tallas también ya que si aumentamos
de talla nos preocupa, por esto es necesario mostrar que lo normal es no ser
perfecto, ni mucho menos tener medidas especificas y que estar
extremadamente delgado tampoco es normal o sano, ya que cada cual tiene
sus propias medidas, su anatomía establecida, una genética que influye y
siempre que se tenga buena salud con estas y uno se sienta bien con ellas, es
lo que debe prevalecer.

Y mostrar un estereotipo real, que muestre las medidas que son comunes en la
sociedad, sin intentar copiar el de otros países o solo una parte de la sociedad,
mostrando que si subimos un kilo no es el fin del mundo, o si tenemos estrías,
que es posible ser felices, siendo tal cual somos y no pretendiendo ser nadie
más y que a veces en la imperfección está lo bello.
Pero y entonces ¿Por qué a las mujeres les cuesta sentirse bellas? ¿En qué
se basa esta percepción? Tal cual lo menciona este artículo del periódico
publimetro de Bogotá. Sentirse bella resulta una cuestión difícil para aquellas
mujeres para quienes este concepto es imposible de alcanzar desde su aspecto
físico. Pero es que la belleza no es sólo tener unas medidas perfectas.

Según un estudio publicado en marzo de 2011 en el Journal of Adolescence,

las mujeres se sentían más feas en circunstancias muy diversas, esto con res-
pecto a la cantidad de veces que un hombre se piensa a sí mismo como "feo".
Un claro ejemplo, es la variedad de ropa que un hombre puede comprar, pues
es mucho más limitada que en el caso de la mujer. Ellas buscan más prendas
que puedan realzar su figura o esconder sus defectos. Y esta necesidad de em-
bellecerse aplica también a la hora de conseguir perfumes, carteras, accesorios
y otro tipo de productos de belleza.

Uno de los criterios por los que siguen siendo juzgadas las mujeres es su apa-
riencia física. Según Kika Rocha, experta en belleza de Dove, “muchas ve-
ces entregamos esa decisión de sentirse bella a todas las personas y circuns-
tancias que nos rodean, entonces, cuando dejamos que eso esté en manos de
otras personas nos afectamos. Ahí es cuando hay que cambiar esa perspectiva,
pues no todos los días nos sentimos tan felices o tan bien de salud, siempre
hay que tratar de encontrar ese poder que está dentro de nosotras y poderlo sa-
car”.

Sentir que no es bella tiene uno de sus mayores puntos en la comparación,

pues los medios de comunicación están infestados de mujeres casi perfectas,
que en la mayoría de los casos solo dejan pensar que si usted no luce como
una de las modelos o presentadoras de la televisión, usted sencillamente es
una mujer normal, no necesariamente una mujer bella.

“Es difícil cuando las redes sociales o la misma publicidad que vemos a diario,
se encarga de mostrar mujeres muy lindas físicamente, entonces automática-
mente uno se hace un concepto de belleza difícil de alcanzar. Es como si uno
no pudiera competir contra este concepto” asegura la psicóloga Annie de Ace-
vedo.

Muchas personas alrededor del mundo han defendido la necesidad de emplear

modelos que no respondan al canon habitual de delgadez para hacer sentir me-
jor a las mujeres y para que se sientan identificadas con las que promocionan
los productos que van a adquirir. Sin embargo, a la hora de la verdad, esto no
sucede, porque se siguen utilizando los mismos prototipos que logran bajar la
autoestima de las que las observaban. Después de ver revistas y televisión,
cientos de mujeres creen que deberían ser más altas, más delgadas, tener me-
jor cabello, quitarse unas cuantas arrugas, comprar mejor ropa o empezar a ha-
cer ejercicio.

La recomendación de Annie es que las mujeres tienen que hacer un esfuerzo

para rescatar todo aquello de ellas, las cosas que consideran bonitas, atractivas
de su propio ser. Para ello es necesario empezar a cambiar el ideal poco a
poco, para llegar a decir “me voy a querer, yo soy una persona que vale, soy
una persona valiosa y voy a reflejar eso con mi belleza diariamente”.

Tanto para Kika como para Annie, todas las mujeres tienen algo bello, que in-
cluso las demás pueden llegar a envidiar; se trata de no desistir en la búsqueda
de eso que la hace diferente a usted. Puede que su cabello no luzca como us-
ted quisiera, pero sus manos se roban todas las miradas. Entonces ahí ya exis-
te algo por lo cual sentirse bella.

Así mismo, Kika agrega “usted puede o no rescatar su belleza: está en sus ma-
nos. No deje que nadie distinto a usted lo defina. Si su amiga le dice que el ves-
tido le queda mal, tenga valor de decirle por qué usted considera que se le ve
bien. Esté orgullosa de eso y llévelo con actitud”.

Es por eso que marcas como Dove han decidido romper los esquemas y lanzar
la campaña el cortometraje Elige Sentirte Bella de Dove donde se capta a muje-
res reales en San Francisco, Delhi, Shanghai, Londres y Sao Paulo, quienes ex-
presan sus opiniones sobre su propia belleza.

Las mujeres tomaron una decisión sobre cómo se ven a sí mismas: 'normal' ver-
sus el frecuentemente evitado 'bella'. El corto revela que las mujeres a menu-
do luchan por reconocer su propia belleza. "Aunque la mayoría de las mujeres
no se describen como bellas, 80% está de acuerdo en que todas las mujeres
tienen algo bello. Es hora que las mujeres piensen diferente sobre esta deci-
sión", dijo Steve Miles, vicepresidente Sénior de la compañía. (Garzón, 2015)

Y es que dichos como: no hay mujer fea sino mal arreglada, nos dan el puno de
partida para decir que efectivamente, no hay nadie feo o bello simplemente
cada cual posee distintas características que hacen que sea bella a su modo
este dicho dice que todas tienen su propia belleza, solo que tienen que saber
explotarla, pero lo que las detiene no es porque no posean una belleza natural
si no porque los estereotipos y la sociedad llegan a tal punto de influencia que si
no tenemos X o Y cualidades especificas ya no son lindas o bellas o no encajan
en esos minuciosos parámetros que hacen que lo sean y se convierte en algo
psicológico, más complejo de tratar ya que todos pueden verte bella, pero si
uno mismo no ve y no cree que lo sea, pues nunca lo verá así. Y tal cual, lo dice
el artículo anterior cuando tenemos amor propio, autoestima y carácter no
importa lo que diga ni la sociedad ni mucho menos los estereotipos solo cuenta
lo que cada una de nosotras creamos de nuestra imagen, pero es inevitable
compararse y no seguir un modelo que desde las muñecas (Barbie) nos han
mostrado.

Ergonomía

Según el RAE (Real Academia Española) es el estudio de datos biológicos y

tecnológicos aplicados a problemas de mutua adaptación entre el hombre y la
máquina. (RAE)

Por Ergonomía entendemos que es la parte de estudio del trabajo que, con la
utilización de conocimientos anatómicos, antropométricos, fisiológicos, psicoló-
gicos, sociológicos y técnicos, desarrolla métodos para la determinación de los
límites que no deben ser superados al llevar a cabo, el hombre, las distintas ac-
tividades laborales. En otras palabras es la adaptación del medio al hombre, es
la determinación científica de la conformación de puestos de trabajo. La antro-
pometría, es uno de los elementos que entran en consideración para el dimen-
sionamiento de todo lo que utiliza el hombre, y se define como "antropometría"
a la "ciencia de la determinación y aplicación de las medidas del cuerpo huma-
no"

Las medidas del cuerpo humano, ya sea en reposo o en movimiento están de-
terminadas por el largo de los huesos, las capas musculares y la mecánica de
las articulaciones. Para una correcta conformación del puesto de trabajo es ne-
cesario el conocimiento de las medidas más importantes del cuerpo humano y
las extensiones de los movimientos de las manos, brazos, piernas y pies. Las
dimensiones y proporciones del cuerpo humano son muy diferentes de una per-
sona a otra. (Melo)

Lo mismo ocurre cuando se realiza una prenda de vestir , es un objeto externo

al cuerpo humano que necesita ciertas características para que funcione y se
adapte a las necesidades que se requieren, las prendas nos acompañan todos
los días todo el día, son esa segunda piel que se mueve con nosotras y
dependiendo del tamaño, peso, medidas de nuestro cuerpo tiene algunas
características precisas que hacen que la prenda se ajuste correctamente y nos
favorezca; por esto uno de los puntos más importantes al momento de cambiar
los estereotipos de belleza irreales es mostrar los reales pero con prendas que
tengan un diseño pensado especialmente para ese común denominador de la
belleza real y natural.
Marco referencial: Antecedentes del proyecto

En oposición a los estereotipos de belleza que poco a poco se nos han

impuesto como lo normal y real, existen proyectos que van encaminados a
mostrar modelos no solo sanos, si no reales como lo hizo Nickolay Lamm que
creó la muñeca Lammily, tiene 26 años y es un diseñador gráfico de Pittsburgh
(Estados Unidos).
Conocida y considerada como la anti-Barbie, es más pequeña, morena, con
una anatomía realista e incluso con celulitis; pronto saldrá a la venta en Estados
Unidos. Él creó la muñeca con el fin de demostrar que "ser una mujer normal es
bello".
"Recuerdo que quería comprar una muñeca para hacer un regalo", dijo el joven
a la AFP, "se parecían todas a modelos". "No tengo nada en contra de las
modelos, pero da la impresión de que algo está mal en casa. He querido
mostrar que está muy bien parecerse a una persona normal", añadió.
Lamm creó una simulación de la muñeca en su ordenador utilizando las
medidas de una joven promedio de 19 años -163,3 cm de alto, 68 kg y 85 cm de
pecho- registradas por estadísticas de la agencia federal de prevención de
enfermedades (CDC). Como la gente empezó a preguntar cómo podía comprar
la muñeca, el joven lanzó una petición en una página de financiación
compartida para poder fabricarla.
De unos 28 centímetros de altura, la muñeca se ha vendido en la preventa a 25
dólares la unidad. Según Lamm, este jueves las ventas totales ya ascendían a
220.000 dólares. La muñeca podrá adquirirse en Estados Unidos a partir de
enero e incluirá una amplia gama de trajes y pegatinas representando
elementos físicos como el acné o celulitis.
El joven planea ahora crear muñecos que reflejen otros orígenes étnicos, con
morfologías distintas, muñecos masculinos y otros de estrellas que representen
"modelos" para los jóvenes. (AFP, 2014)
Y son este tipo de proyectos que van cambiando poco a poco la mentalidad en
las personas, ya que desde pequeñas el tener una Barbie también era una
manera de mostrarnos que la belleza era ser alta, esbelta, rubia, de piel y ojos
claros, rasgos que solo unos poseen, pero que no son el común denominador.
Y al crear muñecas que tengan distintas particularidades les mostrará a las
niñas desde pequeñas que hay distintos tipos de belleza y que tener granos o
estrías es totalmente normal.
Así como la iniciativa de Lanzar una agencia de "modelos gorditas", el productor
Michael Beras de Miss Gordita decidió lanzar su propia agencia de modelos
denominada Michael Beras Plus Size Models. La primera agencia de modelos
gorditas. Ya tenemos algunas chicas en el staff”, señaló el director de la agencia
Michael Beras y fundador del célebre concurso Miss Gordita. “Queremos
explotar un mercado que crece en países como Argentina y Brasil, sin embargo,
aquí está abandonado”, sostuvo. “Tendremos también acompañamiento
psicológico. También estilistas. El mercado XL en Paraguay está desierto y es
gigante. Haremos desfiles, catálogos de prendas XL. Siguiendo con mi
proyecto de romper esquemas”, explicó. “Va a contar con una página en
Facebook, una Fan Page que habilité hoy. Para tener informaciones
actualizadas acerca de la agencia. Estamos viendo los detalles para el lugar
físico y todo el trámite legal”, finalizó Michael Beras. (Penayo, 2014)
Mostrando cómo así solo nos vendan y muestren modelos talla 2 y 4 la realidad
es que el mercado en cuanto a las tallas grandes está sumamente descuidado y
del mismo modo ahí un público el cual no tiene una marca que lo respalde.
Siempre se muestra el mismo estereotipo nunca el real ni mucho menos las
tallas “grandes” que aparte de tener un baja demanda no se toman la molestia
de tener ni un buen diseño ni patronaje.
La Revista “Vogue” considerará a modelos más gorditas, decidió no considerar
a las modelos demasiado delgadas para sus publicaciones con la finalidad de
proyectar la imagen de la mujer saludable. Tampoco trabajarán con modelos
menores de 16 años o que parezcan sufrir trastornos alimentarios. La decisión
concuerda con la medida que pidió tomar el Consejo de Diseñadores de Modas
de Estados Unidos (CFDA), que recomendara en 2007, no considerar modelos
menores de 16 años y que no tengan una alimentación saludable. Por otro lado,
las empresas relacionadas con la moda en Italia y España también han optado
que las modelos demasiado delgadas no sean las predominantes en las
pasarelas. Además, el gobierno de Israel aprobó también una ley contra
modelos demasiado delgadas. (P. Cano, Semanario Siete)

A pesar de este tipo de medidas y recomendaciones seguimos viendo que en la

mayoría de publicaciones y pasarelas las modelos son bastantes delgadas,
aunque de un tiempo para acá en eventos como el Miss Universo no se
volvieron a ver candidatas con extrema delgadez como en otros años, de igual
modo el tener como exigencia que las modelos no sean tan delgas o que
demuestren que están sanas y no tienen ningún problema o desorden
alimenticio es una gran ayuda para que ellas tampoco se sometan a regímenes
de dietas y ejercicios extremos y que aquellos que vean publicaciones se vea
un poco más reflejada en estos modelos, más reales. Y el prototipo de belleza
sea replanteado poco a poco.

Solo esperamos que esto no sea una moda pasajera puesto que la revista 'Elle'
también se suma a la moda de las modelos 'rellenitas'. La protagonista de su
última portada es una modelo de la talla 48. La publicación sigue los pasos de
otras como 'Glamour', con la publicación de la foto de una modelo luciendo
“michelines” sin complejos, originó el año pasado un gran debate en EE UU,
donde lectores y medios de comunicación han aplaudido la publicación de la
fotografía y han comenzado a replantearse los cánones de belleza.

Ahora es la revista Elle la que ha querido romper con las tendencias de la talla
36 sacando en portada una fotografía de Tara Lynn, una modelo que viste
prendas de la talla 48 en adelante. Según la publicación, el objetivo de esta
iniciativa es mostrar la sensualidad de las mujeres con curvas. Lynn, que posó
hace poco para V Magazine junto a otras "modelos XL", luce bella y provocativa
en una serie de fotos de David Oldham, en las que queda demostrado que una
mujer no necesita ser esclava de los cánones de belleza femeninos, para
resultar atractiva. La revista pretende que este tipo de modelos se vean como
algo normal y no excepcional. Estas mujeres también pueden ir a la moda y
vestir de forma elegante a pesar de no estar delgadas. (20 minutos, 2010)

En Colombia la revista SoHo, para celebrar la edición número 150, hizo un

homenaje a la belleza cotidiana de las mujeres colombianas. En la portada hay
un desnudo horizontal de la joven comunicadora caleña Carmenza Larrahondo,
que pesa 98 kilos y mide 1,65 de estatura. “Siempre me han gustado las
portadas de Soho, las mujeres que eligen tienen las curvas que yo quisiera
tener, pero me ha gustado mucho la portada de Carmenza porque mi imagen
está mucho más cerca de este tipo de cuerpo que al de las 149 portadas
anteriores”, dice Laura Agudelo, comunicadora bogotana, autora del primer blog
(la pesada de moda) dedicado a contar las experiencias de una mujer con
sobrepeso que busca opciones para verse bien con la oferta de ropa que hay
en el mercado nacional. “Sé que hay muchas mujeres que después de esta
portada se van a sentir orgullosas de sus formas redondas”.
“En el mundo hay cosas bellas y cosas feas y uno decide qué quiere ver, uno
decide dónde está lo feo y dónde está lo bello, es algo muy subjetivo. Hemos
limitado la belleza a la idea de perfección y a estándares impuestos” dice Laura,
“pero hay belleza en muchas otras cosas, hay diferentes tipos de estéticas. Y
están también los contrastes”.

Desde el 2005, Laura se ha dedicado a romper los paradigmas de la belleza y a

promover la sana vanidad de las mujeres talla XL. Ante la restringida oferta de
ropa que hay para las mujeres con sobrepeso, Laura acabó con el supuesto de
que hay que vestirse de ilusiones ópticas para verse menos grandes. Porque
las opciones eran tres: el negro, los colores planos y oscuros, y las rayas
verticales, como si tuvieran que esconderse y notarse lo menos posible.

La pesada de moda decidió ir contra la corriente porque le encanta la moda,

“las reglas están para romperlas”, dice en su blog, y recomienda todo lo que
está vetado para las mujeres talla grande: las rayas horizontales, los
estampados, los diseños ajustados y la creatividad en todo sentido. Ropa
moderna, de diseño, con texturas y color, toda una liberación en la que se
pueden encontrar desde jeans stiletto, hasta lencería y accesorios. En el blog
hay outfits que ella misma modela y recomendaciones de marcas, tiendas y
diseñadores que le están apuntando a un segmento recién descubierto.

Según el grupo DNP, firma de investigación de mercado de Nueva York, dentro

de la industria de ropa femenina las ventas del segmento de tallas grandes son
las que registran un incremento más alto. Esto en Estados Unidos, en parte
porque casi el 65% de la población femenina es talla grande, de talla 14 en
adelante, según Plunkett Research Ltd. de Houston.

El mensaje de Laura es sentirse bien, vestir como plazca e ir contra los mitos
imperantes sobre lo que deben usar o no las gordas. “Cuando me preguntan
siempre les digo, ¿te gusta cómo te ves en el espejo?, ¿estás cómoda?, ¿te
sientes linda?, si responden afirmativamente a las tres preguntas, entonces mi
respuesta es ¡úsalo!”.

Esta es una tendencia mundial, cada vez más mujeres con sobrepeso, que
además son amantes de la moda, se manifiestan en contra de la
homogenización de la belleza y de las restricciones de los estereotipos del
mercado. Se llaman FATshionistas, término que nace de la unión de “fat” y
“fashionista”. Son gorditas glamurosas, con estilo y, sobre todo, con amor
propio. Esto último es esencial, o sino, que lo diga Adriana Convers,
comunicadora de 25 años, una de las pocas FATshionistas colombianas: “ser
gorda no significa ser fea. Somos hermosas tal como somos y no es una frase
de cliché, es una realidad”. Desde su blog, FatPandora, Adriana se declara
“adicta a la moda y con un problema serio con las compras” y recomienda
tiendas, accesorios y outfits que ella modela con mucho estilo.

La periodista argentina Laura Pereyra pesa 114 kilos y es la fatblogger más

leída de Latinoamérica, su blog, “Yo la más pesada de todas. Cómo ser XL en
un mundo small” protagonizó un capítulo del programa Tabú de NatGEO sobre
la belleza y los estereotipos que atentan contra la libertad, la individualidad y en
últimas, contra la salud: “Para mucha gente es un tabú ser gordo, se esconden
y se pierden de cosas bellas y de vivir, pero el mundo continúa sin ellos, y es
una pena”. Pereyra expresa que la gordura es una oportunidad para ver otro
tipo de valores humanos: “yo hablo desde la aceptación, no hago apología de la
gordura pero sí de la realidad compleja de las personas gordas” y añade:
“mucha gente no se termina de aceptar como es y ese es el comienzo de
muchos de los problemas y desordenes alimenticios”.

Según la doctora Debora McPhail, de Memorial University de Newfoundland, es

más peligroso el pavor que produce la gordura que la gordura misma. Hoy en
día “las niñas temen más la gordura que el cáncer, la guerra nuclear o perder a
sus padres”, dice. Esto tiene efectos desastrosos en la imagen corporal de la
mujer, y aunque mucha gente se preocupa porque la obesidad no es saludable,
es menos saludable la obsesión por una dieta sana y el exceso de ejercicio. Y
señala “así como hay gordos sanos, hay también flacos poco saludables”.

“Es que el matoneo empieza por la casa” dice Laura Agudelo, “Son las mamás,
las abuelas, las tías, las hermanas mayores, las suegras, las que están
constantemente instigando a las niñas, incluso desde muy pequeñas, a que no
coman tanto, a que dejen esto o lo otro, que si sube un kilo ya esta gorda y lo
muestran como algo negativo.

Lo dejó muy claro la presentadora estadounidense Jennifer Livingstone cuando

en octubre pasado, en un video que se volvió viral de inmediato, respondió a la
interpelación que le hizo un televidente que consideró que su sobrepeso era un
mal ejemplo para las niñas de la comunidad. Lo que mostró ese ataque, decía
Livingston, es que el verdadero problema no es el sobrepeso, sino la
intolerancia, el acoso al que son sometidos quienes están por fuera de
estándares sociales arbitrarios que determinan cuál debe ser el peso, el color
de la piel, o las preferencias sexuales de los individuos. Su mensaje fue
contundente: nadie tiene derecho a definir a las personas por los estereotipos
exteriores y es ese y no otro, el buen ejemplo que se debe dar a los niños.

Y la portada de la última edición de la revista Soho no hace más que

confirmarlo: “es nuestra manera de decir que no consideramos como único
motivo de celebración la belleza de medidas perfectas, si no todo lo contrario:
con la edición 150 queremos decir que para nosotros todas las medidas son
perfectas”. (Fucsia.com)

Y es que como se menciona uno de los factores cruciales es la cultura, ya que

es gracias a esta que cada uno genera su concepción de belleza de manera
individual y colectiva, ya que después de todo es la cultura la que hace que
determinemos qué es bello y qué feo y cuál estereotipo de belleza es el que hay
que seguir o aspirar; pero la realidad es que el factor que no se considera
general, como dicen en el artículo, que aquellos que están fuera de los
parámetros impuestos se ven como algo malo, feo o poco sano pero estar flaco
no es sinónimo de salud, tampoco de belleza y viceversa.

Así mismo, las revistas apelan a las gorditas en busca de la belleza "real": Las
publicaciones Glamour, de Estados Unidos, y la alemana Brigitte ya anunciaron
que a partir de ahora elegirán modelos más cercanas a la realidad. Si las
modelos esqueléticas parecen estar con los días contados, quiere decir que los
patrones de belleza del mundo editorial están en jaque. Lo sucedido con las
revistas Glamour, de Estados Unidos y la alemana Brigitte, es revelador y
promisorio: las publicaciones ya anunciaron que a partir de ahora elegirán
modelos más cercanas a la realidad. La revista Glamour traerá en su portada
de noviembre a siete modelos desnudas y con más kilos que los que dictan los
patrones de las pasarelas internacionales. La publicación estadounidense ya
había causado impacto en septiembre cuando publicó la foto de la modelo
Lizzie Miller, de 20 años, con una ostensible barriguita.

Brigitte, la revista femenina más popular de Alemania, también anunció que

dejará de exhibir modelos profesionales en sus páginas y que las sustituirá por
"mujeres comunes", como las que caminan por cualquier calle de Múnich. La
publicación se justifica asegurando que al mostrar aquellas modelos flaquísimas
terminó distanciándose de sus lectoras. En la Semana de la Moda de Milán, en
cambio, la aparición de modelos más rellenitas ya no es novedad. La
especialista de ropas de tallas grandes, Elena Miró, es uno de los clásicos de la
fiesta de la moda italiana con sus modelos "plus size". Y como para demostrar
que lo suyo va en serio, para su último desfile del 23 de septiembre, invitó
precisamente a Lizzie Miller, la modelo de la barriguita, a desfilar sus
creaciones. Miller, quien en las últimas semanas se cansó de recibir apoyos y
críticas por igual, no dudó en aceptar la invitación de la diseñadora española.
(La mañana de cordoba, 2010)

En este caso el artículo nos hace pensar por qué no lanzar pasarelas donde las
modelos sean de tallas superiores a la 4 o 6 donde se muestre justamente esto
una moda y belleza 100% real y no solo esto si no modelos de una estatura
más baja que la usual con el fin de simpatizar con las mujeres reales que
claramente, son mayoría. También desde la academia, los estudiantes en los
figurines se les permitan hacer como cada uno quiera, no como el común
denominador, que es estilizado, irreal, extremadamente delgado, al igual que
las colecciones que se realizan siempre que salgan a pasarela las tallas para
realizarla son 6 o 8, por qué no una talla 12, esto sería también importante para
cambiar este tipo de estereotipos que no son ni únicos, ni una ley que hay que
seguir.
Metodología

Metodología
Fases Objetivo
1 Investigación
Estudio de campo: Encuestas,
2 entrevistas.
Análisis resultados encuesta y
3 entrevista.
4 Desarrollo propuesta
mixto (cuantitativa y cualitati-
Tipo : va)

Encuesta

Proyecto: Creación de una marca de ropa femenina que rompa los esquemas
de belleza irreales y así contribuya a la disminución de desórdenes alimenticios.

Objetivo: Establecer cuál es el concepto que tienen las mujeres sobre los
estereotipos de belleza y si consideran que este afecta la percepción que tienen
sobre sí mismas.

1. ¿Sabe que es un estereotipo de belleza?

a. Si
b. No
2. ¿Cree que estos estereotipos de belleza son realistas?
a. Si
b. No
3. ¿Piensa que se deberían proponer estereotipos más "normales", que re-
flejen como es una mujer norma?
a. Si
b. No
4. ¿Piensa que este tipo de estereotipos irreales con medidas perfectas han
contribuido al aumento de desordenes alimenticios?
a. Si
b. No
5. Piensa que este tipo de estereotipos irreales con medidas perfectas , ge-
neran que las mujeres se sientan inseguras con su:
a. Cuerpo
b. Medidas
 c. Talla
d. Todas las anteriores
6. ¿Usted se considera bonita?
a. Si
Porque _________________________________________________________
b. No
Porque _________________________________________________________

7. ¿Piensa que tiene un autoestima alto pese a esta perfección irreal que se
muestra, vende y compra todos los días?
a. Si
b. No
8. ¿Considera que los medios de comunicación influyen en la manera como
ve y valora su cuerpo?
a. Si
b. No
9. ¿Cree que la moda y las tallas influencian en la manera como ve su
cuerpo?
a. Si
b. No
10. Si aumenta de talla esto le preocupa:
a. Mucho
b. Algo
c. Poco
d. Nada
Porque__________________________________________________________
11. ¿Tiene alguna dificultad al buscar sus prendas de vestir?
a. Si
b. No
c. A veces
12. ¿Considera que el diseño y ajuste que tienen las prendas varia de las ta-
llas más pequeñas a las más grandes, así sea el mismo?
a. Si
b. No
c. Ns/Nr
d. Algunas veces
Porque _________________________________________________________
13. ¿Considera que el diseño, confección y ajuste (patronaje) de las tallas
pequeñas es más minucioso, exacto y cuidadoso que el realizado con las
tallas más “grandes”?
a. Si
Porque _______________________________________________________
b. No
Porque _______________________________________________________
Responda en base a su respuesta anterior
14. ¿Cree que la falta de atención en el mercado de tallas grandes, y
mujeres reales con medidas normales es gracias a los estereotipos
impuestos por la moda?
a. Si
b. No
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