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VIVIENDO SIN LÍMITES:

CÓMO ENTENDER
Y MANEJAR
LA FIBROMIALGIA

Por Javier Furman

S alud integrati va
La fibromialgia es una condición compleja que
afecta a hombres y mujeres por igual, alterando su
calidad de vida de manera significativa.

En este eBook, exploraremos qué es, cuáles son sus


síntomas, consecuencias y principales factores de
desarrollo, así como las posibles terapias y cuidados
que pueden proveerse para manejar esta condición.
¿Qué es la Fibromialgia?

De desconocido a reconocido. Antes, la fibromialgia era un enigma, sin


estudios diagnósticos claros. Hoy, se la entiende como una compleja
patología neuroinmune.

La fibromialgia es más que solo dolor. Es un trastorno complejo del sistema


nervioso central que afecta la forma en que el cerebro procesa el dolor,
amplificando las señales dolorosas. El dolor en la fibromialgia es constante y
abrumador. Es el síntoma más prominente y el más desafiante de manejar.
Además del dolor generalizado, los síntomas incluyen fatiga crónica,
problemas para dormir, rigidez matutina y dificultades cognitivas,
conocidas como "niebla cerebral".

La fibromialgia no solo afecta el cuerpo, sino que también tiene un impacto


significativo en la calidad de vida y la capacidad para llevar a cabo
actividades diarias. La fatiga extrema puede hacer que tareas
aparentemente simples sean agotadoras, afectando el rendimiento laboral
y las relaciones personales. La variabilidad en la intensidad del dolor y la
imprevisibilidad de los síntomas pueden generar frustración y dificultades
para planificar actividades cotidianas.

La fibromialgia a menudo se malinterpreta y es víctima de conceptos


erróneos. Algunos pueden percibir erróneamente la fibromialgia como una
afección "invisible" debido a la falta de síntomas externos evidentes. Este
estigma puede generar falta de comprensión y apoyo por parte de amigos,
familiares y, en ocasiones, incluso profesionales de la salud. Es fundamental
desterrar la idea de que el dolor y la fatiga son simplemente "imaginarios" y
reconocer la validez de la experiencia de quienes viven con fibromialgia.
La ciencia detrás
del dolor crónico

La fibromialgia está estrechamente relacionada con alteraciones en el


sistema nervioso central y en la forma en que el cuerpo procesa y percibe
el dolor. Se ha observado que las personas con fibromialgia tienen niveles
elevados de sustancias químicas del cerebro, como la sustancia P, que
amplifican las señales de dolor. Además, se ha identificado un desequilibrio
en neurotransmisores como la serotonina, que desempeña un papel clave
en la regulación del estado de ánimo, el sueño y la percepción del dolor.

En el nivel neurobiológico, los estudios de imágenes cerebrales han


revelado cambios en las áreas cerebrales responsables de la interpretación
del dolor, como la amígdala y la corteza prefrontal. Estas alteraciones
pueden llevar a una mayor sensibilidad al dolor, incluso ante estímulos que
normalmente no serían dolorosos.

Además, el fenómeno conocido como "wind-up" o "sensibilización central"


puede ocurrir en personas con fibromialgia. Esto implica un aumento en la
excitabilidad de las neuronas, lo que conduce a una amplificación de las
señales de dolor. Esta sensibilización central puede explicar por qué el dolor
puede extenderse a áreas del cuerpo que no están directamente
relacionadas con una lesión específica.

La respuesta del sistema inmunológico también está comprometida en la


fibromialgia. Se han observado niveles elevados de citoquinas
proinflamatorias, indicando un estado inflamatorio crónico en el cuerpo.
Este proceso puede contribuir al dolor y la fatiga persistentes que
caracterizan la condición.

La combinación de desregulaciones metabólicas y alteraciones


neurobiológicas crea un ambiente propicio para la experiencia del dolor
persistente en la fibromialgia. La percepción amplificada del dolor, junto
con la fatiga y otros síntomas, contribuye a la complejidad de la condición.
Por ejemplo, a menudo, conlleva depresión y angustia, no solo como
síntomas, sino como parte de su impacto en la estructura cerebral. A largo
plazo, los cambios profundos en el cerebro debido a la inflamación crónica,
afectan el estado emocional y la calidad de vida del paciente.
¿Cuáles son algunas causas
de la fibromialgia?

La fibromialgia es una patología multifactorial muy compleja, esta es la


razón por la cual sus causas han demorado tantos años en ser descifradas.
Es importante destacar que la interacción de estos factores puede variar de
una persona a otra, y algunos individuos pueden tener múltiples
desencadenantes. Las principales áreas de influencia incluyen:

Factores genéticos: Existe una predisposición genética en algunos casos


de fibromialgia. Se ha observado que la condición tiende a ocurrir en
familias, lo que sugiere la existencia de factores genéticos que podrían
aumentar la susceptibilidad.

Cambios en la respuesta al dolor: Las personas con fibromialgia parecen


tener una respuesta anormal al dolor, con una mayor sensibilidad a los
estímulos dolorosos. Este fenómeno, conocido como "sensibilización
central", implica cambios en el sistema nervioso central que amplifican
las señales de dolor.

Factores hormonales: Las fluctuaciones hormonales, especialmente en


relación con la serotonina, la dopamina y las hormonas del estrés,
podrían desempeñar un papel en la fibromialgia. Algunas mujeres
experimentan un aumento en los síntomas de fibromialgia durante
ciertos periodos hormonales, como la menopausia.

Infecciones y traumas físicos o emocionales: Algunas personas


desarrollan síntomas de fibromialgia después de eventos traumáticos,
como infecciones, lesiones físicas o situaciones emocionales estresantes.
Se cree que estos eventos pueden desencadenar o agravar la condición
en personas genéticamente susceptibles.

Trastornos del sueño: Problemas de sueño, como el síndrome de piernas


inquietas y la apnea del sueño, están asociados con la fibromialgia. La
falta de sueño reparador puede contribuir a la fatiga y la amplificación
del dolor.
Influencias ambientales: Factores externos, como el clima, la exposición
a toxinas y ciertos patrones alimentarios, pueden influir en la gravedad
de los síntomas de fibromialgia. Cambios en la temperatura, la humedad
y otros factores ambientales pueden afectar la percepción del dolor.

Estrés y trauma psicológico: El estrés crónico y el trauma emocional


pueden desempeñar un papel en el desarrollo de la fibromialgia. La
relación entre el sistema nervioso central y el sistema endocrino puede
influir en la regulación del dolor.

Desregulación del sistema nervioso autónomo: La fibromialgia se asocia


con una desregulación del sistema nervioso autónomo, que controla
funciones involuntarias como la frecuencia cardíaca, la presión arterial y
la digestión. Esta desregulación puede contribuir a los síntomas de la
condición.

Conexión intestino-cerebro: Los trastornos digestivos que provocan un


cambio en la microbiota y su consecuente permeabilidad intestinal es un
factor clave en el desarrollo y la magnificación de los síntomas en
fibromialgia, sobre todo el sobrecrecimiento de ciertos tipos específicos
de bacterias, hongos y parásitos.

Es importante destacar que no hay una única causa identificada, y la


fibromialgia generalmente se considera el resultado de una interacción
compleja entre factores genéticos, biológicos, psicológicos, ambientales
y metabólicos. Además, la investigación sobre la fibromialgia continúa, y
nuevas perspectivas sobre sus causas y tratamientos pueden surgir con
el tiempo.
Principales síntomas

• Dolores generalizados
• Sueño entrecortado
• Auto aislamiento
• Inestabilidad permanente
• Mareos
• Embotamiento
• Angustia, ansiedad, depresión

Métodos diagnósticos modernos

Algunos métodos utilizados para diagnosticar esta condición pueden ser:

• Fibrokit de pronacera:
Se trata de un kit avanzado que identifica biomarcadores específicos de
fibromialgia, analizando marcadores inflamatorios, hormonales y
neurotróficos.
• IRM Funcional:
Observa cambios cerebrales específicos asociados con la fibromialgia.
• Evaluación psicológica avanzada:
Incluye análisis de estrés y factores psicológicos mediante técnicas como la
neuroimagen para evaluar la respuesta cerebral al dolor.
• Pruebas genéticas:
Busca variaciones genéticas que puedan predisponer a la fibromialgia.
• Análisis de sangre para biomarcadores:
Detecta indicadores inflamatorios y otros biomarcadores clave.
¿Cómo tratar la fibromialgia?

Algunas terapias convencionales utilizadas para el tratamiento de esta


condición, son:

• Fisioterapia: se trata de ejercicios y técnicas fisioterapéuticas para mejorar


la movilidad y aliviar el dolor.
• Osteopatía: tratamiento manual para restaurar el equilibrio del cuerpo.
• Hidroterapia: uso de agua en los procesos de rehabilitación.
• Masoterapia: masajes terapéuticos para reducir el dolor y la tensión
muscular.
• Punción seca: tratamiento de puntos gatillo musculares para aliviar el
dolor.
• Yoga: combinación de posturas, respiración y meditación para mejorar la
flexibilidad y la fuerza.
• Pilates: ejercicios de bajo impacto para fortalecer el core y mejorar la
postura.
• Acupuntura y electroacupuntura: estimulación de puntos específicos
para aliviar el dolor.

Otras terapias son las conocidas como Biohacking, entre las cuales pueden
aplicarse:

• Neuromodulación NESA: sistema de biofeedback para mejorar la función


nerviosa.
• Estimulación transcraneal de corriente directa (tDCS): Modulación de la
actividad cerebral para aliviar el dolor.
• Cronoterapia: optimización de ciclos de sueño/vigilia y exposición a la luz.
• Suplementación personalizada: Regímenes de suplementos basados en
análisis genéticos y biomarcadores.
• Biofeedback: uso de dispositivos para mejorar la conciencia y control
sobre la salud.
• Terapia de flotación: sesiones en tanques de flotación para la relajación
profunda.
• Terapia de luz roja: uso de luz roja de baja intensidad para reducir la
inflamación y promover la curación.
¿Qué importancia tiene
la Alimentación en la Fibromialgia?
La relación entre la alimentación y la fibromialgia es un aspecto crucial y a
menudo subestimado en el manejo de esta compleja condición.
Al estar la fibromialgia asociada con un estado inflamatorio crónico en el
cuerpo, esta puede exacerbar los síntomas, incluido el dolor generalizado.
Al adoptar una dieta antiinflamatoria, es posible mitigar algunos de estos
efectos y mejorar la calidad de vida. A continuación te dejo cuatro
principios básicos que te ayudarán con esta condición:

Principios de una dieta antiinflamatoria


para la Fibromialgia
• Alimentos ricos en antioxidantes: Frutas y verduras coloridas, como
bayas, espinacas, coles, brócoli, ajo, cebolla, frutos rojos, cacao, entre otros
son ricas en antioxidantes que combaten la inflamación y protegen las
células del daño.

• Ácidos grasos omega-3: Pescados grasos, nueces y semillas de lino son


fuentes de ácidos grasos omega-3, conocidos por sus propiedades
antiinflamatorias.

• Fuentes de proteínas magras: Carnes magras, legumbres, tofu y quinoa


proporcionan proteínas esenciales sin añadir exceso de grasas saturadas
que pueden contribuir a la inflamación.

• Limitar azúcares y carbohidratos refinados: Reducir el consumo de


azúcares añadidos y carbohidratos refinados puede ayudar a estabilizar los
niveles de azúcar en la sangre y disminuir la respuesta inflamatoria.
Consejos prácticos para implementar
cambios en la dieta
Cambios graduales: realizar cambios graduales en la dieta permite una
transición más suave y ayuda a identificar qué alimentos afectan positiva o
negativamente los síntomas.

Hidratación: la hidratación adecuada es fundamental. Beber suficiente


agua ayuda a mantener el cuerpo en equilibrio y favorece la eliminación de
toxinas.

Consultar con un profesional de la salud: trabajar con un nutricionista o


dietista puede proporcionar orientación personalizada, asegurando que la
dieta cumpla con las necesidades nutricionales individuales.

Infusiones: algunas especies ideales para incorporar dentro de los hábitos


alimentarios, pueden ser:
• Cúrcuma (500 - 2000 mg): antiinflamatorio y analgésico.
• Jengibre: alivia el dolor muscular.
• Té verde: antioxidante y antiinflamatorio.
• Canela: reduce inflamación, mejora salud metabólica.
• Pimienta: mejora la absorción de nutrientes.
• Clavo: analgésico natural.
• Melisa y pasiflora: mejoran el sueño y reducen estrés.
• Espino blanco: ideal para la salud cardiovascular.
• Lavanda: favorece la relajación y el sueño.
• Azafrán: antidepresivo y analgésico.
Adicionar algunas suplementos contribuyen al tratamiento óptimo de la
fibromialgia, algunos que puedes incluir son:
• Magnesio (300-600 mg/DÍA): reduce el dolor y la rigidez.
• Omega 3 (EPA+DHA, 1-2g/día): antiinflamatorio, salud mental.
• Melena de león (1 g/día): beneficios cognitivos y nerviosos.
• Vitamina D (2000-8000 UI/día): salud ósea y muscular.
• CoQ10 (100-200 mg/día): energizante, reduce dolor.
• NAC (600 mg/día): antioxidante, mejora la fatiga.
• Melatonina (3-5 mg/día): Mejora el sueño.
• Vitamina C (1000 mg/día): antioxidante, repara tejidos.
• Vitamina B12 (metilcobalamina, 1000 mcg/día): salud nerviosa.
• Taurina (750 mg-1g/día): función cognitiva, ayuda en el manejo del dolor.
Hábitos que puedes incorporar
para evitar o tratar esta condición
Alimentación saludable: mantener una dieta equilibrada es esencial para la
recuperación.

• Dormir 8 horas: procurar un sueño reparador es fundamental para el


manejo del dolor.
• Ejercicio físico aeróbico: mejora la movilidad y reduce el dolor.
• Meditación: ayuda a la gestión del estrés y el dolor.
Terapias cuerpo-mente como la acupuntura contribuye al alivio del dolor
Contacto con la naturaleza y el sol, dos elementos fundamentales para la
salud mental y física.
• Hormesis: tomar duchas frías y saunas mejoran la circulación y la rigidez.
• Hipoxia controlada: ayuda al fortalecimiento corporal y manejo del dolor.
• Ayuno intermitente: contribuye a la flexibilidad metabólica y reduce la
inflamación.
• Gestión del estrés: realizar actividades como yoga, respiración profunda o
terapia cognitivo-conductual ayudan a gestionar de manera adecuada el
estrés.
Este eBook es solo el comienzo. Utiliza la información como
herramienta, busca apoyo médico y adopta hábitos
saludables. La prevención y el tratamiento van de la mano.

Que este recurso sea tu guía en la búsqueda de una vida


plena. Comparte el conocimiento, construye una red de
apoyo y avanza hacia un futuro lleno de bienestar para ti y
los tuyos.

Gracias por dedicarte a tu salud.

S alud int e grati va

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