Nombre:

Wendy Perez Genao

Matricula:
100491051

Sección:
W09

Asignatura:
Psicología Diferencial

Maestra:
Lourdes D. Torres

Tema:
Ámbito de Estudio de la Psicología Diferencial
 Ámbito de Estudio de la Psicología Diferencial

Objeto de estudio de la psicología diferencia:

El objeto de la psicología diferencial es el estudio de la variabilidad en el
comportamiento observable de las personas y el estudio de aquellos procesos
psíquicos que subyacen a este comportamiento. De la misma forma que la
psicología básica estudia las leyes y procesos generales de la mente y de la
conducta, comunes a todos los individuos, la psicología diferencial estudia cómo
varían la conducta observable, los procesos cognitivos mentales que la
subyacen y la activación que la motiva. Por lo tanto, podemos señalar que la
psicología diferencial tiene como objetos principales la descripción, predicción y
explicación de la variabilidad intraindividual, interindividual e intergrupal en áreas
psicológicas relevantes, con respecto a su origen, manifestación y
funcionamiento.

como objeto de estudio de la psicología diferencial, tres aspectos distintos:

La conducta que englobaría las respuestas, el rendimiento y los

comportamientos observables (aspecto motor, verbal o fisiológico).
La organización mental que sería el componente mental que está detrás
de la conducta o que dirige la conducta (componente cognitivo).
La base energética, es decir, el componente energético o dinamizador del
comportamiento, opuesto al componente cognitivo (emoción o activación).

En concreto, la psicología diferencial comprende el estudio, el análisis, la

predicción y, en su caso, la modificación de las diferencias encontradas en
conductas y estas diferencias pueden ser de tres tipos:

Diferencias intraindividuales.
Diferencias interindividuales.
Diferencias intergrupales.
Diferencias intraindividuales:
Podemos hablar de diferencias intraindividuales cuando hacemos
comparaciones de un individuo consigo mismo; nos estamos refiriendo, pues, a
las diferencias existentes entre las características propias de un sujeto. La
persona no necesariamente es eficaz en todas y cada una de sus características
o, al contrario, no necesariamente es ineficaz en todas sus características, más
bien difiere en la eficacia o calidad en todo un conjunto de características.

Diferencias interindividuales:
El estudio de las diferencias interindividuales ha sido el principal objetivo de la
psicología diferencial y hace referencia al hecho natural de que distintos sujetos
de una misma población muestran un comportamiento diferente incluso cuando
comparten el mismo contexto espacial y temporal, de tal manera que cada uno
de ellos puede estar afectado en su comportamiento por sus propias
características personales (sus propias dimensiones de personalidad o sus
propias habilidades) o por las distintas formas de aprendizaje.

Diferencias intergrupales:
Cuando medimos cualquier rasgo psicológico en individuos pertenecientes a
distintos grupos (por sexo, por edad, por nivel social, por religión, por diferencias
en nivel de inteligencia.) y obtenemos que los individuos pertenecientes a un
grupo muestran parámetros distintos a los individuos de otros grupos, estamos
hablando de diferencias intergrupales y concluimos que los distintos grupos
muestran diferencias significativas en la variable que estamos midiendo.

El estudio de las diferencias individuales: lo idiográfico y lo nomotético:

El enfoque idiográfico:
Hace referencia al individuo y le entiende de una forma global (la personalidad
hay que entenderla dentro de cada individuo). Este enfoque emplea técnicas y
variables que son apropiadas para comprender el carácter único de la persona y
descubrir las disposiciones personales. Cuando hablamos de idiográfico,
estamos hablando de individualidad, que es una característica básica del
individuo; es decir, es una entidad única y esto hace que el estudio idiográfico
finalice en descripciones diferenciadoras, frecuentemente no generalizables de
los acontecimientos y sus consecuencias.

El enfoque nomotético:
Estudia grandes grupos de individuos para determinar la frecuencia con que
ocurren ciertos eventos y, a partir de esto, inferir rasgos comunes, variables
generales o principios universales. La normalidad a menudo es concebida como
aquella conducta que ocurre de manera más regular. Un estudio nomotético trata
de establecer de forma objetiva alguna ley universal que se pueda utilizar en las
ciencias.

A la psicología tradicionalmente se la considera idiográfica porque su discurso

describe modelos, hipótesis o estudios del comportamiento enfocados
solamente en las características particulares del individuo. Sin embargo, también
posee características nomotéticas, puesto que ha buscado generalizar leyes
universales en el comportamiento. En psicología diferencial, cuando se intenta
estudiar la personalidad ideográficamente, se emplea el constructo tipo, y
cuando se la intenta estudiar nomotéticamente, se utiliza el constructo rasgo. Así
pues, la psicología diferencial puede ser idiográfica o nomotética. En psicología
diferencial, lo individual no equivale a lo idiográfico, sino a un conjunto de rasgos
nomotéticos que se manifiestan en los diversos individuos; es decir, persigue
alcanzar el conocimiento idiográfico del individuo desde un acercamiento
metodológico nomotético.

Principales constructos en el estudio de las diferencias individuales: Para

aproximarnos al estudio de la psicología diferencial, conviene desarrollara que
los constructos que forman el núcleo principal sobre los que trabaja la psicología
diferencial. Dentro de estos constructos, conviene señalar, como principales, la
inteligencia, la personalidad que podríamos llamar integradores.
La inteligencia:
El estudio de la inteligencia fue, desde el principio, el principal constructo de
estudio de la psicología diferencial, aunque el interés por las diferencias
individuales en personalidad no se hizo esperar.
El campo de la inteligencia en psicología diferencial es amplísimo y, aunque no
hay una definición de inteligencia que sea comúnmente admitida por todos los
autores, ya que la inteligencia es un vocablo abierto, podemos referirnos a la
definición de inteligencia que hicieron cincuenta y seis expertos que señalan
que la inteligencia es una capacidad mental muy general que, entre otras
cosas, implica la aptitud para razonar, planificar, resolver problemas, pensar de
modo abstracto, comprender ideas complejas, aprender con rapidez y aprender
de la experiencia.

La personalidad:
La personalidad como ciencia se apoya en gran medida en observaciones que
puedan ser replicadas por otros observadores y en esfuerzos para formular
principios y leyes que puedan ser contrastados mediante una observación
posterior.

Conducta, hábito, rasgo, estado y tipo

La conducta:
Las conductas de los individuos dependen de las situaciones, pero a pesar de
que las situaciones determinan las conductas, la variabilidad interindividual de
estas conductas depende también de las características de los individuos que
las ejecutan.

Los hábitos: El concepto de hábito se forma por generalización de las

conductas. Hábito es un modo de conducta adquirida, es decir, una reacción
aprendida que supone la tendencia a repetir ya reproducir ciertas acciones o
actuar en la misma forma general bajo las mismas o similares circunstancias.
Los rasgos:
El rasgo es el concepto que mejor explica el principal fundamento de las
diferencias individuales y se puede considerar como agrupaciones más o
menos extensas de hábitos de conducta relacionados entre sí.

Los estados:
El estado es una característica de la personalidad transitoria, pasajera, que se
da en un momento determinado y, por tanto, resulta fugaz, temporal y efímero y
viene generado por el efecto causante de la situación y el efecto modulador de
las disposiciones del sujeto.

Los tipos:
El tipo psicológico es la primera aproximación al estudio clasificatorio de la
personalidad humana. Los filósofos y médicos griegos inventaron esta
categoría para clasificar a los sujetos basándose en su temperamento.

Podemos hacer dos clasificaciones de tipos:

• Tipos ideales:
son concepciones teóricas que se convierten en modelos, esquemas o
arquetipos, con el único objeto de servir como instrumentos clasificatorios con
los que ayudarnos a comprender a los individuos reales. Son clases o
categorías aisladas entre sí con las que poder clasificar de forma categorial a
los individuos.

• Tipos empíricos:
son categorías resultantes de la constatación empírica de ciertas dimensiones
que, organizadas, configuran una clasificación de la realidad de las diferencias
individuales, se utilizan variables cuantitativas como modo de catalogación de
los individuos. En este sentido, el concepto de tipo no es distinto del concepto
de rasgo.