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 ¿Cuál es la mayor pérdida de tiempo de tu vida?

 A menudo, pasamos mucho tiempo mirando Instagram y viendo cortos de


YouTube, incluso cuando no tenemos un propósito específico para ello.
 A veces, nos encontramos charlando por teléfono durante períodos prolongados,
incluso cuando no hay mucho de qué hablar.
 Tendemos a insistir en los errores que hemos cometido en el pasado, pensando
excesivamente en ellos.
 A menudo nos preocupamos demasiado por el futuro, sin tomar ninguna medida
para mejorarlo.
 En cambio, de simplemente ignorar a las personas con las que no queremos
interactuar, a menudo pensamos demasiado en cómo hacerlo.
 De vez en cuando experimentamos un breve momento de vergüenza, pero luego
pasamos todo el día preocupándonos por lo que los demás podrían pensar de mí.
 Hay momentos en los que nos cuesta disfrutar pensando en lo que nos depara el
mañana.
 A veces nos involucramos en largas discusiones sobre asuntos triviales.
 Podemos sorprendernos hablando de personas imaginarias que en realidad no
existen.
 A veces damos demasiada importancia a las personas que no aprecian ni
respetan nuestro tiempo.

¿Un narcisista lee tu mente o simplemente está convencido?

Deberías entrar en su cabeza una vez en tu vida para experimentar las


sensaciones absurdas que un narcisista inconsciente experimenta todos los días.
Una vida orientada al control del entorno externo, cálculo obsesivo, pensamiento
excesivo continuo, exagerado e incesante.
Un narcisista patológico es el individuo más solitario del mundo, nunca
profundiza del todo en una relación, le da una determinada cantidad de tiempo a
cualquiera, esta vez en función de la importancia de la persona, con el plus de la
perversa tendencia a querer darse un tono y mandar para evitar ser arrollado por
otra persona.
Cuanto más continúa su vida inconsciente, más se encierra, se encierra cada vez
más, en un ejercicio maníaco hasta perder por completo la espontaneidad, cada
vez más androide y menos humana. Cuando llega a cierta edad, el cálculo
excesivo y la obsesión por el control lo convencen de que es un personaje
mesiánico con siniestras propiedades mesiánicas. Son los excesos del superyó
narcisista los que le dan estas creencias, sin embargo, en realidad el narcisista
patológico, siendo un tipo hipológico y dominado por el demonio de la más
absoluta arrogancia, está muy convencido de que conoce a fondo a "sus" gallinas
y que podrá moverlos y gestionarlos siempre, pero será precisamente su orgullo
más ciego el que lo manifieste a los ojos de los demás y suscite dudas en la
cabeza de quienes tratan con él. En efecto, mientras mantenga la guardia alta,
parecerá infalible en sus análisis, capaz de predecir sus movimientos, leer sus
estados de ánimo pero no creer que sean el resultado de quién sabe qué artificio,
sino que en realidad son el resultado de su cálculo obsesivo sobre todo
. Por eso parece que se trata más de una máquina que de un individuo y al final
nuestro narciso también se jacta de todo ello porque su sueño secreto y mal
disimulado es precisamente el de convertirse en un robot japonés como en los
dibujos animados cuando sea mayor. cuando veía televisión cuando era niño.

¿Por qué nos han hecho creer que no podemos ser inteligentes si en verdad con
el simple hecho de leer, escuchar, meditar, y tener pensamientos profundos nos
hacen crecer emocionalmente?

¿Es posible transformar nuestra realidad, si cambiamos nuestros pensamientos?

¿Cómo puedo dejar de sentir que perdí muchos tiempo de mi vida?

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