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GRUPO:6IQ11
Palabras clave:
Daño cerebral
Desde otra perspectiva, Ferrari32 refiere que las citocinas originadas por la
infección en la sangre periférica pueden asociarse a varias alteraciones
neurológicas, inclusive enfermedades neurodegenerativas como enfermedad de
Alzheimer, esclerosis múltiple y enfermedad de Parkinson, y exacerbar el daño
preexistente en el SNC. La inflamación sistémica ocasionada por el COVID-19
aumenta la permeabilidad de la barrera hematoencefálica y permite que el virus o
las citocinas y las células inmunitarias infectadas ingresen al SNC2. Se ha descrito
que el SARS-CoV-2 infecta de forma crónica a los astrocitos, los macrófagos y las
células gliales, que secretan citocinas proinflamatorias que incrementan los
efectos perjudiciales de la inflamación y lesiones cerebrales.
El agente causal
COVID-19 en México
. Se han reportado hasta ahora 4,220 fallecimientos por esta causa lo que aporta
una letalidad general del 10.5% . Nos encontramos aún en una fase de ascenso
en la curva de la epidemia, en cuanto a la incidencia en el número de casos, que
se espera llegue a su punto mas alto a mediados o finales de mayo, con un
descenso esperado en julio del 2020.
• Médicos (%) 47
• Enfermeras (%) 35
• Otros (%) 18
Fatiga
Fiebre
Haber tenido COVID-19 grave podría ser otro factor. Las personas que tuvieron
síntomas graves de COVID-19 suelen necesitar un tratamiento en la unidad de
cuidados intensivos de un hospital. Esto puede provocar una debilidad extrema y
el trastorno por estrés postraumático, que es una enfermedad mental
desencadenada por un acontecimiento aterrador.
¿CUÁLES SON LOS FACTORES DE RIESGO DEL SÍNDROME POS-COVID-
19?
Tan sencillo como decir que a mayor número de infecciones tengas por el virus o
sus variantes, mayor será tu probabilidad de presentar Covid Largo y de tener que
lidiar con las secuelas que deja. Un reciente estudio en Nature Medicine llamado
“Symptoms and risk factors for long COVID in non-hospitalized adults” refiere que
ya está bien reconocido que al menos el 10% de los individuos que enferman
desarrollarán síntomas más allá de las 4 a 12 semanas después de la infección.
Esta investigación plantea que 62 son los síntomas que se asociaron a la infección
por Sars-Cov-2, doce semanas o más, después de la infección, aunque 50 de
ellos fueron los que consolidó este reporte.
Fatiga (58%)
Tos (19%)
Sudor (17%)
Ansiedad (13%)
Depresión (12%)
Palpitaciones (11%)
ASTENIA
Debe tenerse en cuenta que la astenia es una sensación, pudiendo variar de una
persona a otra y carecemos de una prueba que confirme este diagnóstico. El sexo
femenino y las personas con un diagnóstico previo de depresión o tenían ansiedad
un mayor riesgo de sufrir fatiga. No obstante, su fisiopatología en pacientes que
han superado la COVID-19, así como sus posibles asociaciones y valores
predictores, deben investigarse en estudios longitudinales a largo plazo.
SECUELAS RESPIRATORIAS
Secuelas cardiológicas
Los participantes que se habían recuperado tuvieron una fracción de eyección del
ventrículo izquierdo más baja y en una proporción considerable se detectaron
valores altos de troponina T ultrasensible. El 78% de los pacientes con COVID-19
recuperados presentaban algún tipo de compromiso cardíaco observable en la
RMC, como miocarditis, cicatrización o realce pericárdico. Curiosamente, los
sujetos con COVID-19 oligosintomáticos tuvieron una inflamación miocárdica
similar al subgrupo hospitalizado, lo cual podría relacionarse con la edad de los
pacientes del estudio y la presencia más frecuente de factores de riesgo, así como
de lesiones previas silenciosas o no diagnosticadas.
Rajpal et al. demuestran, tras el seguimiento (11 a 53 días) de 26 deportistas
universitarios, signos de miocarditis activa en el 15% de ellos y en un 30%
adicional, fibrosis miocárdica aislada. Sin embargo, en otro grupo de 26 atletas de
élite que cursaron de forma mayoritariamente asintomática o leve la infección por
COVID-19 no han existido criterios para el diagnóstico de miocarditis activa por
RM después de uno o dos meses desde el diagnóstico, pudiéndose explicar los
hallazgos por la adaptación fisiológica al ejercicio (edema miocárdico aislado).
SECUELAS NEUROLOGICAS
Las disfunciones olfativa y/o gustativa son las manifestaciones neurológicas más
frecuentes tras la cefalea, con una prevalencia del 52,73% para la disfunción
olfativa y del 43,93% para la gustativa informada en un metaanálisis reciente . La
mayoría de los pacientes tiene una recuperación completa o casi completa un mes
después de la enfermedad aguda, aunque en algunos estudios, estos síntomas
persisten más tiempo. Nguyen et al., en un seguimiento a 125 pacientes,
constatan que el 68,1% recuperó el olfato y el 73% el gusto durante las primeras
seis semanas posteriores al inicio de los síntomas. Un total de 30 pacientes (24%)
informaron de la persistencia de anosmia/ageusia hasta siete meses después.
SECUELAS TROMBÓTICAS
adecuada toma de muestra de los casos para las pruebas que se describen en los
siguientes apartados.
Grave (IRAG).adecuada toma de muestra de los casos para las pruebas que se
describen en los siguientes apartados.
Las consecuencias del COVID-19 no son sólo físicas. Una investigación publicada
en la revista Neurología encontró que un tercio de los pacientes estudiados
presentaba síntomas de depresión o ansiedad, además de irritabilidad, insomnio y
problemas de memoria.
–Ahora soy más propensa a que mis niveles emocionales sean como una
montaña rusa; amanezco muy de malas o muy triste o con depresión.
Existen varias teorías que intentan explicar la capacidad del virus de afectar la
memoria y la concentración de algunos pacientes. De acuerdo con lo encontrado
en una investigación neurológica realizada en Ecuador, la razón podría estar en la
alta carga viral. El virus infecta al sistema nervioso a través de la mucosa en la
nariz, la sangre o terminales nerviosas. Mientras el sistema lucha por defenderse,
las neuronas se ven afectadas porque reciben menos energía: se “apagan”. Esto
podría ocasionar la confusión, la “niebla” en los procesos del pensamiento.
aparecer después de otras infecciones. Las personas con estos síntomas sin
normales. Los síntomas son similares a los que presentan las personas
otras infecciones. Las personas con estos síntomas sin causa aparente pueden
o el tratamiento adecuados.
Afecciones
síntomas que duran semanas, meses o incluso años después de tener COVID-
estos efectos, las personas que tuvieron COVID-19 pueden ser más propensas
tuvieron COVID-19.
El PICS se refiere a los efectos en la salud que pueden aparecer cuando una
persona está en una unidad de cuidados intensivos (UCI), y que pueden persistir
después de que la persona regrese a casa. Estos efectos pueden incluir debilidad
muscular, problemas para razonar y discernir, y síntomas de trastorno de estrés
postraumático (TEP), una reacción crónica a un evento muy estresante. Si bien el
PICS no se refiere específicamente a la infección por el SARS-CoV-2, puede
ocurrir y contribuir a la experiencia de la afección persistente al COVID-19 de una
persona. Para las personas que tiene el PICS después de un diagnóstico de
COVID-19, es difícil determinar si estos problemas de salud son causados por
haberse enfermado gravemente, por el virus o por una combinación de ambos.
Hay estudios que sugieren que las personas que contraen el COVID-19 después
de vacunarse tienen una tendencia más baja a notificar afecciones persistentes al
COVID-19 que las personas que no están vacunadas.
Los CDC, otras agencias federales y socios no federales están trabajando para
identificar otras medidas para que las personas puedan reducir el riesgo de tener
afecciones persistentes al COVID-19. Aprenda más sobre cómo protegerse y
proteger a los demás del COVID-19.
Hay estudios que sugieren que las personas que contraen el COVID-19 después
de vacunarse tienen una tendencia más baja a notificar afecciones persistentes al
COVID-19 que las personas que no están vacunadas.
Los CDC, otras agencias federales y socios no federales están trabajando para
identificar otras medidas para que las personas puedan reducir el riesgo de tener
afecciones persistentes al COVID-19. Aprenda más sobre cómo protegerse y
proteger a los demás del COVID-19.
Hay estudios que sugieren que las personas que contraen el COVID-19 después
de vacunarse tienen una tendencia más baja a notificar afecciones persistentes al
COVID-19 que las personas que no están vacunadas.
Los CDC, otras agencias federales y socios no federales están trabajando para
identificar otras medidas para que las personas puedan reducir el riesgo de tener
afecciones persistentes al COVID-19. Aprenda más sobre cómo protegerse y
proteger a los demás del COVID-19.
Vivir con COVID-19 persistente puede ser difícil, especialmente cuando no hay
respuestas o soluciones inmediatas.
Vivir con COVID-19 persistente puede ser difícil, especialmente cuando no hay
respuestas o soluciones inmediatas.
Vivir con COVID-19 persistente puede ser difícil, especialmente cuando no hay
respuestas o soluciones inmediatas.
Las personas que tienen afecciones persistentes al COVID-19 pueden atenderse
con un proveedor de atención médica para obtener un plan de control médico
personal que les ayude a mejorar los síntomas y su calidad de vida. Revise estos
consejos para prepararse para una cita con el proveedor de atención médica por
afecciones persistentes al COVID-19. Además, existen muchos grupos de apoyo
organizados que pueden ayudar a los pacientes y a sus cuidadores.
OBJETIVOS
HIPOTESIS
RESULTADOS
Parestesias palabras
Olores fantasmas
Encefalitis
Delirio
Psicosis
Epilepsia
Mioclonías
Alteraciones
oculomotoras Distonía
Vértigo
ANALISIS DE RESULTADOS
El National Institute for Health and Care Excellence (NICE) considera que los
términos “crónico” o “persistente” no son apropiados y se prefiere el uso de
“síndrome” porque refleja el “funcionamiento conjunto” del multisistema, por lo que
propone las siguientes definiciones:
BIBLIOGRAFIAS
Babiker A, Myers CW, Hill CE, Guarner J. SARS-CoV-2 Testing. Trials and
tribulations. Am J Clin Pathol 2020;April 12, doi.10.1093/ajcp/aquaa052 [ Links ]
Roden DM, Harrington RA, Poppas A, Russo AM. Considerations for drug
interactions in QTc in exploratory COVID-19 (Coronavirus disease 2019)
treatment. J Am Coll Cardiol 2020 April 10, doi.10.1016/j.jacc.2020.04.016 [ Links ]
Omer SB, Malani P, Del Río C. The COVID-19 Pandemic in the US. A clinical
update. J Am Med Assoc 2020 (April 6):doi.10.1001/jama.2020.5788 [ Links ]