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SAE SAP
Curso: Dar y seguir instrucciones
ACTIVIDAD 1
COMO DAR Y SEGUIR INSTRUCCIONES
Comunicación verbal
1. Lea detenidamente las frases y escriba en la columna de la derecha una respuesta que
demuestre que está aplicando la escucha reflexiva. Tome como ejemplo el numeral 0.
0. En una capacitación: “ya repetí los pasos Es normal que te sientas frustrado, pero
varias veces y no logró el resultado” te lo vuelvo a explicar para que luego lo
vuelvas a intentar y logres el resultado
1. En una evaluación: “Creo que soy bueno con los
clientes. Lo que pasa es que no me gusta mucho el
trabajo administrativo”
GUSTAVO Y KAREN
Gustavo se irritó cuando Karen entró en la habitación y lo demostró. Karen sonrió, tentativamente.
“Gustavo, ¿puedo hablar contigo?”
Con un suspiro exasperado, Gustavo hizo un gesto hacia una silla y se echó hacia atrás, con los brazos
cruzados y los ojos en el reloj. “Adelante, es tu moneda de diez centavos”.
“Gustavo, estoy teniendo problemas para terminar mi trabajo a tiempo”. Karen miró sus manos
nerviosamente.
Gustavo inmediatamente se inclinó hacia adelante. “¿Por qué? Todos tenemos mucho trabajo por hacer
aquí. Nadie lo tiene fácil. No veo nada que le impida hacer su trabajo a tiempo. No es culpa de nadie
más si eres perezosa con tu trabajo”.
La cara de Karen decayó y parecía que iba a llorar. “Pero … no lo entiendes. Mi hijo, Tommy …”
—Interrumpió Gustavo—. Ahora estás fuera de lugar. Cuando te contraté, te dije que la familia no podía
interponerse en tu trabajo. Necesitas poner tu vida en orden. Si no lo hace, es posible que no tenga otra
oportunidad, al menos, no en esta empresa. Es su responsabilidad hacer su trabajo. Quizás si
encontraras un buen cuidador, Tommy no sería un problema”.
Sin nadie que la escuchara, Karen dejó la oficina y la empresa perdió a un empleado valioso.
El amigo
Al ver el estrés de su amiga, Jimena cerró su computadora portátil y dio la vuelta al escritorio. Cerrando
la puerta y ofreciendo una silla, Jimena se acomodó en otra silla cercana, frente a su amiga. Ella estaba
sonriente y atenta. “Mario, sabes que haré todo lo que pueda para ayudarte. Por favor, cuéntamelo
todo”.
Cuando Mario empezó a hablar, el rostro de Jimena estaba atento e interesado. Sus ojos miraban los de
él y sus expresiones seguían su historia, sonriendo cuando había un toque de humor, compasiva cuando
Mario parecía preocupado. De vez en cuando, ella interrumpía para comentar lo que parecía estar
transmitiendo.” Entonces, cuando estás con Marcia, ¿no estás seguro de qué pensar? ¿No puedes decir
cómo se siente realmente?”
Finalmente, Mario pudo hablar por sí mismo sobre su problema y nunca pidió el favor. Simplemente
necesitaba que alguien lo escuchara.
Preguntas
1. De las cuatro personas que aparecen en las historias, ¿quién utiliza la escucha reflexiva?