UNIVERSIDAD MARIANO GALVEZ DE GUATEMALA

FACULTAD DE ADMINISTRACIÓN DE EMPRESAS

ESCUELA DE ADMINISTRACIÓN DE EMPRESAS

PLAN: Sabatino
CURSO: Administración de Talento Humano
CATEDRÁTICA: Lic. Heidy Julissa Chan

TEMA:
Análisis los 7 hábitos de la gente altamente efectiva

ESTUDIANTE: CARNÉ:
Greycy Dayanna Ochoa Castellanos 0218-22-16759

Santa Elena, Flores, Petén, 15 de marzo 2024

 7 hábitos de la gente altamente efectiva
Los 7 hábitos de la gente altamente efectiva son los siguientes:

1. El hábito de la proactividad brinda la libertad de decidir cómo lidiar con las

cosas que nos suceden. Nos da el poder de actuar según nuestras propias ideas y
valores. Básicamente, es lo que nos hace únicos como seres humanos y nos
permite decir que tenemos el control de nuestra propia vida. Ser proactivo significa
hacer cambios desde adentro hacia afuera. Es decir, buscar ser diferente de
manera intencional para hacer un cambio positivo en lo que nos rodea: puedo ser
más ingenioso, más trabajador, más creativo, más amigable.

2. Comenzar con un fin en mente nos da un propósito en la vida. Cuando

tenemos una idea clara de lo que queremos lograr, nuestras acciones van
encaminadas hacia lo que realmente importa para nosotros. La idea de empezar
con un fin en mente se basa en que todo se crea dos veces. Primero, lo
imaginamos mentalmente y luego lo hacemos realidad físicamente.

3. Poner primero lo primero nos ayuda a escapar del estrés de lo urgente y nos
permite enfocarnos en las actividades que realmente dan sentido a nuestras vidas.
Se trata de disciplinarnos para llevar a cabo lo que verdaderamente importa, lo
cual nos ayuda a hacer realidad la visión que creamos en el hábito 2. Este
principio está relacionado con la gestión del tiempo y la vida en general. En
cualquier actividad humana, hay dos factores clave: urgente e importante. Lo
urgente requiere atención inmediata, es como un "¡Ahora!". Estas tareas son
generalmente visibles y nos presionan para actuar, a menudo satisfacen a otros y
pueden parecer agradables o divertidas. Sin embargo, muchas veces carecen de
importancia real. Por otro lado, lo importante se relaciona con los resultados y
contribuye a nuestra misión, valores y metas prioritarias.

4. Pensar en Ganar-Ganar nos ayuda a adoptar una mentalidad de abundancia

tanto en lo material como en lo espiritual, cuestionando la idea de que la vida es
un juego en el que, si uno gana, otro necesariamente pierde. En cualquier
interacción humana, hay 4 paradigmas principales:
 1) Ganar-Ganar
2) Ganar-Perder
3) Perder-Ganar
4) Perder-Perder

5. Buscar entender primero y ser entendido después Ponerse en los zapatos

del otro antes de hablar es la base del respeto mutuo. Todos queremos que nos
entiendan, ¿verdad? Este hábito es crucial para tener relaciones exitosas y llegar
a acuerdos donde todos ganen. Escuchar con empatía significa ver las cosas
desde la perspectiva del otro, entender cómo ve el mundo y qué siente.

6. Sinergizar se trata de apreciar las diferencias. Cuando combinamos ideas

distintas, creamos algo mucho mejor que cada idea por separado. Trabajar en
equipo y ser innovador son los resultados de esta habilidad. La sinergia es algo
natural; piensa en plantar dos vegetales juntos, sus raíces se mezclan y mejoran
el suelo, así las plantas crecen mejor. O unir dos trozos de madera que pueden
sostener más peso juntos que por separado. En resumen, el todo es más que la
suma de las partes. Sinergizar hace que uno más uno sean tres o incluso más.

7. Afilar la sierra es básicamente renovarnos en todos los aspectos: físicamente,

mentalmente y espiritualmente. Esto nos ayuda a equilibrar todas las partes de
nosotros mismos, lo que nos hace más efectivos en los distintos roles que
tenemos en la vida. Es como darnos un respiro y recargar las pilas para seguir
adelante con todo lo que hacemos.

Análisis
El párrafo nos habla sobre los 7 hábitos, que no son simples trucos o reglas
separadas. Más bien, son como un camino que seguimos para crecer y mejorar
personalmente y en nuestras relaciones con los demás. Nos llevan desde
depender de otros hasta ser independientes y luego a colaborar de forma efectiva
con los demás. El hábito 7 es clave: nos insta a tomarnos un tiempo para
cuidarnos a nosotros mismos, lo que nos permite hacer posible el resto de los
hábitos. Esto significa valorar y mejorar nuestro bienestar físico, mental y
espiritual. En resumen, se trata de cuidar de nosotros mismos para poder ser lo
mejor posible en todo lo que hacemos.

En las etapas iniciales de nuestras vidas, dependemos completamente de otros

para nuestra supervivencia. A medida que crecemos, desarrollamos habilidades
que nos permiten asumir gradualmente la responsabilidad de nuestras vidas.
Reconocemos la interdependencia en la naturaleza y en la sociedad. Las
personas dependientes confían en otros para satisfacer sus necesidades, mientras
que las independientes pueden actuar por sí mismas. Sin embargo, las personas
interdependientes entienden la importancia de colaborar con otros para lograr
resultados significativos. Los primeros tres hábitos nos ayudan a desarrollar el
autodominio y la independencia personal, mientras que los siguientes se centran
en habilidades de liderazgo y trabajo en equipo. Finalmente, el séptimo hábito nos
recuerda la importancia de mantener un equilibrio saludable en todas las áreas de
nuestra vida.