El texto que has compartido aborda la relación entre la lógica y el lenguaje, destacando

cómo el lenguaje actúa como una herramienta para comunicar nuestros pensamientos y
procesos mentales. Se menciona que nuestras capacidades inferenciales y argumentativas
están estrechamente ligadas a nuestra competencia lingüística, ya que el razonamiento, la
deducción y la inferencia son actividades lingüísticas. En resumen, se enfatiza la
interdependencia entre la lógica y el lenguaje, destacando cómo el lenguaje permite
comunicar nuestros procesos mentales y cómo el análisis lógico del lenguaje es
fundamental para comprender su significado en profundidad.

1. Formalización: La lógica utiliza una estructura formal compuesta por símbolos y reglas
precisas para representar proposiciones, inferencias y argumentos.

2. Precisión: Los lenguajes lógicos buscan eliminar ambigüedades y ser altamente precisos
en la representación del razonamiento, lo que facilita el análisis y la evaluación de los
argumentos.

3. Reglas de inferencia: La lógica establece reglas claras para la inferencia válida, lo que
permite determinar si un argumento es lógicamente válido o no.

4. Simbología: Utiliza símbolos y conectores lógicos para representar proposiciones y

relaciones entre ellas, lo que facilita el análisis de las estructuras argumentativas.

El texto hace una distinción entre el lenguaje natural y el lenguaje artificial, centrándose en
la lógica como un lenguaje simbólico. Menciona que la lógica simbólica es un lenguaje
artificial que se utiliza específicamente para caracterizar la estructura lógica de otro
lenguaje, principalmente el lenguaje natural. A diferencia del lenguaje natural, el lenguaje
simbólico no se usa para hablar del mundo en general, sino para analizar la estructura
lógica de los razonamientos. Se compara este proceso de "matematización" de la lógica
con el desarrollo de un simbolismo propio, similar al de las matemáticas, para establecer
criterios formales que permitan determinar si un razonamiento es válido o no.
Se hace una distinción entre el lenguaje objeto y el metalenguaje. El lenguaje objeto se
refiere al lenguaje del que se quiere describir la estructura lógica, ya sea que esté hablando
de objetos materiales (como una mesa) o inmateriales (como el número tres). Por otro
lado, el metalenguaje es el lenguaje que utilizamos para hablar acerca de un signo o
elemento perteneciente al lenguaje objeto. En resumen, el metalenguaje se constituye
como un lenguaje que describe o analiza la estructura lógica de otro lenguaje, es decir, el
lenguaje objeto.

Las disciplinas semióticas, que son la sintaxis, semántica y pragmática. Estas disciplinas se
derivan de las relaciones entre el signo, el designatum y el usuario en el proceso semiótico.
La relación entre el signo y el designatum configura la dimensión semántica, la relación
entre los signos, los designata y los usuarios constituye la dimensión pragmática, y la
relación entre los signos entre sí forma la dimensión sintáctica. Estas disciplinas permiten
comprender el significado del discurso cotidiano y realizar análisis lógicos del lenguaje.