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La reforma integral de la educación media superior (RIEMS) se sustenta en cuatro ejes, basados en
un paradigma de la educación.
Son desempeños terminales llamados competencias que articulan o ligan los diferentes tipos de
bachillerato en México.1
El bachillerato en México se inicia con la Escuela Nacional Preparatoria en 1867 y su objetivo sigue
siendo el formar personas para estudiar una licenciatura. En 1969 se forman Centros de
Bachillerato Tecnológico, Agropecuario, Industrial y del Mar, con el objetivo de preparar personas
para que se incorporen al campo laboral dentro de la especialidad estudiada. Para entonces el
bachillerato es terminal y propedéutico.2
Las empresas necesitaban profesionales o técnicos con habilidades específicas, las escuelas y el
mercado laboral estaba desfasado, vaya, desarticulado, por un lado, las escuelas enseñan algebra
y la industria necesita matemática aplicada.
Además, si un alumno cambia de residencia sus estudios no son revalidados y tiene que comenzar
de nuevo.
Ante este panorama nace en la industria el concepto “competencia”, que no es más que la
capacidad de saber hacer algo, conocer ese algo y tener la disposición para llevarlo a cabo. Las
competencias entran en la educación como un nuevo paradigma.
El MCC son las competencias que comparten todos los egresados de cualquier bachillerato, sea
tecnológico o propedéutico, y de esta manera los alumnos tienen los mismos saberes y
capacidades básicas (genéricas) y las escolares (disciplinares), independientemente del plan de
estudios.
Bibliografía
2. Hernández Cadenas, N.: "Los estudios de bachillerato en México, una propuesta positivista
", en Contribuciones a las Ciencias Sociales, abril 2012, www.eumed.net/rev/cccss/20/
Competencias básicas y disciplinares (RIEMS)
A finales del siglo pasado la educación queda desfasada del mercado laboral, los conocimientos no
son significativos en el trabajo, es decir, un egresado sabe mucho, pero no sabe hacer el trabajo.
En este contexto nace el paradigma educativo por competencias, que pretende darle un mayor
sentido a la educación dentro del campo laboral.
Las competencias básicas de la Riems se dividen en genéricas y disciplinares básicas y éstas son las
que comparten todos los egresados de bachillerato sin importar el tipo, plan de estudios o
ubicación geográfica.
Competencias genéricas
Son las competencias que tienen que actúan en la vida diaria del egresado. Para entender mejor
desglosaremos una competencia:
Un egresado de cualquier bachillerato deberá saber y poner en práctica estilos de vida saludable,
para lograr esto, los planes de estudio solo se deben acoplar a esta competencia genérica. Si en un
bachillerato existe una materia para la salud, seguramente dentro de esta activará la mencionada
competencia, en caso de un bachillerato tecnológico industrial, por ejemplo, se utilizará la materia
de biología para lograr que los graduandos la activen.
Debemos recordar que las competencias genéricas tienen atributos, que son otras competencias
que la forman. Po ejemplo, la competencia: “Elige y practica estilos de vida saludables” tiene los
siguientes:
Reconoce la actividad física como un medio para su desarrollo físico, mental y social.
Toma decisiones a partir de la valoración de las consecuencias de distintos hábitos de
consumo y conductas de riesgo.
Cultiva relaciones interpersonales que contribuyen a su desarrollo humano y el de quienes
lo rodean
Para poder elegir y practicar estilos de vida saludable debe tener estos atributos o competencias
específicas.
Estas competencias son las que comparten todos los egresados y tiene que ver con las disciplinas:
Matemáticas, ciencias experimentales, comunicación, filosofía y ciencias sociales. En vez de que
todos los bachilleres sepan resolver un problema de álgebra, deben:
Así todos los estudiantes independientemente de su plan de estudios deberán formular y resolver
problemas matemáticos, podria pensarse que es algo ambiguo, pero las competencias pueden
evaluarse y así saber si un bachiller tiene estas capacidades.
Finalmente debemos entender a las competencias como una nueva forma de pensar en la
educación, debemos activar las competencias genéricas y disciplinares básicas. Las competencias
disciplinares extendidas y profesionales se activan en los diferentes tipos de bachillerato.