Introducción

La ética civil o ética cívica es la expresión de una sociedad pluralista en la cual

conviven personas y comunidades o grupos con diferentes concepciones sobre el
hombre y el mundo, lo cual implica diversidad de ideologías, creencias, posiciones
políticas, etc. En medio de esta diversidad dichas personas o grupos buscan
organizar sus vidas de forma autónoma, teniendo como horizonte su felicidad
personal y el bienestar social, reconociendo la capacidad de cada uno para
discernir entre lo bueno y lo malo, y tomar las decisiones que consideren más
acertadas. En palabras de la filósofa española Adela Cortina (2005), "la ética civil
es, en principio, la ética de los ciudadanos, es decir, la moral que los ciudadanos
de una sociedad pluralista han de encarnar para que en ella sea posible la
convivencia pacífica, dentro del respeto y la tolerancia por la concepciones del
mundo" (p.8).

Para facilitarle el estudio, este recurso está estructurado de forma organizada por
apartados que permiten la navegación al estudiante para su comprensión.

Contenido
La ética civil, también conocida como ética de mínimos, se fundamenta en lo
mínimo que puede ser exigido a cualquier ciudadano en una sociedad pluralista;
así, se busca consensuar unos mínimos básicos que permitan vivir
con0020condiciones de justicia. En este sentido, la ética civil está por encima de
razas, credos, ideologías, orientaciones sexuales y condiciones sociales, pues lo
que pretende es llegar a consensos entre los ciudadanos que conforman la
multiplicidad de grupos presentes en contextos específicos. Se pretende,
entonces, alcanzar un marco ético con pretensión de universalidad basado en la
comunicación, en el comprender, respetar y aplicar los derechos humanos, y
reconocer en cada ser humano un interlocutor válido para el diálogo. A
continuación se presentan las principales características de la Ética Civil.

Nacimiento de la Ética Civil

La ética civil surge en la Modernidad, entre los siglos XVI y XVII, bajo el
argumento de que todos los seres humanos podemos convivir a pesar de
nuestras diferencias, siempre y cuando tengamos unos valores y unas normas
mínimas comúnmente aceptadas. En esta época se da paso al pluralismo
social, caracterizado por proponer “la unidad dentro de la diversidad” que
implica que, una vez acordado un marco de valores que es aprobado por
todos, cada cual puede optar por lo que mejor le parezca para su propia
realización. Este pluralismo social permite el surgimiento del pluralismo moral
que posibilita el nacimiento de la ética cívica, la cual se configura como el
marco general para la aparición de las éticas aplicadas en las diferentes
profesiones.

Componentes de la Ética Civil

Teniendo como base los planteamientos de la filósofa española Adela Cortina,
se necesitan tres importantes elementos en una sociedad específica para que
se pueda implementar y desarrollar una ética cívica:

o Una ética de mínimos.

o Una ética de ciudadanos.

o Una ética de la modernidad.

Se explicará cada componente a continuación.
Una ética de mínimos
Hay dos tipos de sociedades. Las totalitarias, en las que un grupo impone sus
criterios de vida, ya sean religiosos, ideológicos o morales a la mayoría, y en
donde es muy difícil aceptar las diferencias, lo cual implica que quienes
piensen distinto del grupo que impone sus normas son discriminados o
perseguidos. Las pluralistas, en las que conviven diversas personas y grupos
que se proponen distintas éticas de máximos, pero ninguno intenta imponer su
ética a los demás, pues allí se media con el diálogo y el testimonio.

En las sociedades pluralistas opera una ética de mínimos, una ética racional,
que se trabaja sobre un conjunto de principios morales que permitan una
convivencia pacífica y democrática.
Una ética de ciudadanos
Es una ética de todos, no solo de dirigentes y dirigidos. No está a favor de la
discriminación ni promueve el rechazo de personas por razón de su condición
social, intelectual, económica o cultural. Los derechos y deberes son para
todos. Los ciudadanos se comprometen a no interferir en los proyectos de vida
y actuación de los demás ciudadanos respetando sus libertades (Principio de
no interferencia).

Una ética de la modernidad

La modernidad se caracteriza por el libre pensamiento, lo cual implica que
nadie puede imponer a otro sus ideas. Así, en la ética moderna predomina la
autonomía (autos= el mismo, nomos= ley), es decir, cada uno “se dicta su
propia ley”; cada uno debe decidir en qué pensar, en quién creer y qué hacer
con su vida
Contenidos mínimos de la Ética Civil
o Los valores de libertad, igualdad y solidaridad. La ética cívica
nace de la convicción de que los seres humanos somos ciudadanos
capaces de tomar decisiones de un modo moralmente autónomo, es
decir, libre y, por tanto, de tener un conocimiento suficientemente
acabado de lo que consideramos bueno y de cómo organizar la
convivencia sin necesidad de recurrir a autoridades impuestas. La
igualdad, entonces, significa lograr para todos iguales oportunidades
de desarrollar sus capacidades, corrigiendo las desigualdades
naturales y sociales, y ausencia de dominación de unos hombres por
otros, ya que todos son iguales. Recordemos que libertad e igualdad
fueron los dos primeros valores que acogió como suyos la Revolución
Francesa de 1789, de la que surgió la Declaración de los derechos
del hombre y del ciudadano. Estos dos valores, junto con la
solidaridad (o fraternidad) constituyen el contenido fundamental de la
ética cívica.
Contenidos mínimos de la Ética Civil
o Los derechos humanos. Según Hamburguer (2005) no deben ser
entendidos como “derechos legales” solamente sino también como
“derechos morales” porque, aunque fundamentan el derecho positivo,
no forman parte de él sino que pertenecen al ámbito de la moralidad.

o La tolerancia activa. La tolerancia pasiva implica una predisposición

a “no meterme en lo que no me importa” por comodidad. Por el
contrario, la tolerancia activa es “una predisposición a respetar los
proyectos ajenos aunque no los comparta".
Contenidos mínimos de la Ética Civil
o El diálogo. Se constituye como el mejor modo de conjugar dos
posiciones éticas que parecen difíciles de conciliar: el universalismo y
el respeto a la diferencia. El respeto a la diferencia es muy importante
porque sólo si reconocemos que la autonomía de cada hombre tiene
que ser universalmente respetada, podremos exigir que se respeten
sus peculiaridades, y la forma de hacerlo será a través de diálogos en
los que cada uno exprese tales peculiaridades desde la unidad que
supone saberse al menos mínimamente entendido y máximamente
respetado.
Funciones de la Ética Civil
Concluye Adela Cortina que los mínimos éticos son los que nos permiten,
además de llevar adelante una convivencia enriquecedora, realizar otras dos
tareas:
 1. Criticar por inmoral el comportamiento de personas e instituciones
que violan tales mínimos.

2. Diseñar desde un esfuerzo conjunto las instituciones y

organizaciones de nuestra sociedad, como es el caso de las
empresas. Porque, ¿cómo es posible criticar determinadas
actuaciones o crear organizaciones legitimadas socialmente, si no
hay convicciones morales compartidas desde las cuales hacerlo?
Para reflexionar
¿Por qué necesitamos una ética civil en Colombia? Hemos de constatar
que hay situaciones que nos indican que algo no está bien social y éticamente
en Colombia, pues aún estamos atravesados por la corrupción y el delito,
tenemos comunidades heridas por la violencia y con numerosas violaciones a
los derechos humanos, hay regiones con crisis de legitimidad política y de
gobernabilidad, y no superamos los niveles críticos de pobreza de gran parte
de la población.

Es claro que esta crisis ética no es solo de ahora sino que es resultado de
procesos históricos y tiene como base enormes causas de tipo estructural. Se
puede evidenciar que, a pesar de los esfuerzos, aún no se configuró un
espacio público en el que los distintos actores sociales puedan expresarse y
demandar respuestas a sus intereses particulares. Necesitamos, entonces,
desarrollar una cultura política (democrática) y una ética de lo público.

Pregúntate: En tu rol de ciudadano y parte activa de los procesos sociales,

¿qué papel tienes en la construcción de una Ética Civil para Colombia?

Conclusiones
1. Para construir y fundamentar una ética civil se necesita conocer
nuestros contextos, debilidades y luchas, pues como afirma Victoria
Camps, "hay que hacerlo con nuevos paradigmas, que no oculten la
escisión, el conflicto, los límites de la realidad, porque ellos, y no el
'bien', son el lugar y el objeto de la ética... En efecto, la ética que
necesitamos ha de partir del mal, es decir, de nuestras limitaciones y
contingencia, teniendo en cuenta que, por mucho que ansiemos la
salvación, no podemos ni, por otra parte, queremos transformarnos
hasta el punto de dejar de ser humanos" (García, 1997).
2. La ética civil sólo puede fundamentarse en la búsqueda del consenso, si
quiere ser verdaderamente una propuesta que incluya a todos los
miembros de la sociedad, sin importar las diferencias que nos definen y
los conflictos que siempre existirán.
3. La ética civil debe articular en su proceso de elaboración un momento
crítico capaz de develar las diversas alienaciones y juegos de poder
camuflados bajo los discursos de carácter universal.