ACCIÓN ESTIMULADORA DE LAS BAJAS TEMPERATURAS PACHECO RODRÍGUEZ NELVA NO.

18 6°3
La acción de las bajas temperaturas provoca la disminución de la intensidad de las funciones vitales, por lo que
cuando las bajas temperaturas están actuando va disminuyendo la actividad. Siendo así, la acción estimuladora
del frío se presenta varios meses después de la actuación de las bajas temperaturas.
La acción del frío estimulador se manifiesta en tres aspectos; primero como la acción del termoperiodismo en
donde es importante el efecto estimulador de la alternancia de las temperaturas diurnas y nocturnas; después
como la interrupción de los letargos, ya que el frío actúa como agente estimulador favoreciendo la salida del
letargo de yemas y semillas; y por último como vernalización porque actúa como inducción a la floración por
acción del frío.
Se clasifica al letargo en dos, la latencia o falso letargo y el letargo verdadero o reposo.
En el falso letargo, la inhibición procede de causas externas ajenas a la yema o embrión, incluye estados de
quiescencia e inhibiciones por correlación en las yemas; en las semillas, dureza de tegumentos, insuficiencia de
madurez, inhibidores tegumentarios, etc. La inhibición por correlación induce la incapacidad para brotar las
yemas axilares o basales mientras esté la actividad de la yema terminal, por lo que, si se corta la yema terminal,
inicia la brotación de la yema en reposo. Las semillas en dormancia pueden germinar si se les realiza un
tratamiento mecánico (escarificado, inmersión en agua fría y caliente) o químico (inmersión en soluciones diluidas
de ácido sulfúrico). Sin embargo, hay semillas que no germinan por no tener la suficiente madurez o existen
inhibidores en el tegumento o endospermo como el ABA, la cumarina y diversos compuestos fenólicos.
La acción del frío (AF) solo se manifiesta solo el letargo verdadero permitiendo a las yemas que hayan recibido
cierta refrigeración, salir del letargo e iniciar su brotación o germinación. El frío ayuda a interrumpir el letargo,
pero no anularlo. A temperaturas >0°C se produce el efecto estimulador, >7°C hay una acción estimulante con un
efecto menos marcado. La acción del frío es acumulativa, por lo que la salida del letargo se produce después de
haberse superado un cierto tiempo de exposición al frío.
La AF se produce por la destrucción de sustancias inhibidoras permitiendo la acción de otras sustancias de
naturaleza estimuladora, ya que análisis efectuados sobre yemas que han soportado la acción del frío ponen de
manifiesto menor contenido en inhibidores del crecimiento. Se puede estimular también el crecimiento con la
aplicación de sustancias químicas como el IBA, APA, NAA, 2,4-D, que ejercen actividad hormonal.
Cada especie y variedad cultivada exige cierto tiempo de exposición a la acción de bajas temperaturas
estimuladoras, conocido como horas frío, período que la planta está sometida a su acción a temperaturas
inferiores de 7°C. Esto puede determinarse mediante un conteo directo del termógrafo o por fórmulas que
permiten estimar las HF a partir de datos meteorológicos. Existen diversos métodos, como Weinherger, Mota,
Crossa-Reynaud; mismos que tienen particularidades y se adaptan a zonas específicas.
Vernalización es el proceso fisiológico que permite a los vegetales, bajo la acción del frío, adquirir la aptitud para
formar ulteriormente sus flores, incluso algunas especies pueden vernalizarse en estado de semillas debido a
que desde ese estado son sensibles a la acción de bajas temperaturas. Existen otras en la que es ineficaz ya sea
en plántulas o plantas adultas.
En las especies monocárpicas vernalizables en semillas, al interrumpir la refrigeración vernalizante, las
temperaturas que actúan durante el reposo pueden ser temperaturas neutras (hasta 15-16°C) que no inducen
floración, pero tampoco son negativas al efecto de refrigeración anterior como en los cereales; y las temperaturas
devernalizantes (>18°C) que borran la acción de las bajas temperaturas sobre la inducción floral.
En el caso del centeno, éste y los demás cereales de invierno no exigen la refrigeración para reducir el período
vegetativo, además, estas especies presentan interés agrícolas en zonas con inviernos muy frío y primaveras
muy cortas.