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Detección y abordaje de

la violencia de género por


el personal sanitario

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Impreso en España
PRÓLOGO

LA SALA DE ESPERA

Miguel Lorente Acosta

No hay tiempo que perder, según los informes de Naciones Unidas y de la


Organización Mundial de la Salud, entre el 15 y el 76% de las mujeres ha sufrido
algún tipo de violencia de género a lo largo de su vida. La amplia extensión de
este problema podría ser suficiente para entender su gravedad, pero ésta no
reside sólo en su dimensión y en su significado, elementos éstos que por sí
solos revelan la realidad de uno de los problemas que hemos arrastrado por toda
la historia, y que en estos principios del siglo XXI aún no muestra de forma clara
su final. Su gravedad radica también en las graves consecuencias que origina,
tanto en las mujeres que la sufren de manera directa como en las sociedades
donde se produce. El impacto es directo y objetivo:

– Desde el punto de vista social, la violencia de género contribuye a la


repetición del ciclo de violencia y a su transmisión intergeneracional
como parte de las referencias culturales que la normalizan o contextua-
lizan. De hecho, es tres veces más probable que los niños expuestos a
la violencia de género ejerzan esta violencia en el futuro, que los niños
que han permanecido ajenos a este ambiente. Además, por el hecho de
vivir en esas circunstancias sufren toda una serie de alteraciones en su
desarrollo psico-madurativo y en las conductas que irán desarrollando en
las diferentes fases evolutivas a lo largo de sus vidas.

– Desde el punto de vista económico, según el informe de 2011 del World


Food Programme, “Empowering women: The frontline against hunger”,
los costes directos a nivel mundial destinados a abordar las consecuen-
cias que genera la violencia de género, y el costo que supone la pérdida
por lo que dejan de producir las mujeres víctimas de esta violencia, se
elevan a trillones de dólares.

– Pero también se producen importantes consecuencias sobre la salud.


Con independencia del daño físico y psicológico, y todas las alteraciones
crónicas que aparecen por vivir expuestas a esta violencia mantenida
en el tiempo, los últimos estudios de Naciones Unidas han puesto de
manifiesto consecuencias específicas sobre la salud sexual, la morbili-
dad materna, enfermedades de transmisión sexual, infecciones por VIH,
problemas neonatales y muertes prematuras de mujeres y niñas. En
este sentido, el proyecto “Objetivos del Milenio” de Naciones Unidas
concluye que la violencia de género mata e incapacita a tantas mujeres

Detección y abordaje de la violencia de género por el personal sanitario I


entre 15 y 44 años como el cáncer, y que los efectos son más graves que
los de los accidentes de tráfico y la malaria combinados.

El impacto es amplio y profundo, sin embargo, la respuesta política y social


no es proporcional, lo mismo que tampoco lo es la respuesta sanitaria ante los
graves efectos que produce sobre la salud. Lo fácil es pensar que el problema
es de otros (otros países, otros profesionales, otros momentos…), lo difícil es
entender por qué se piensa así y por qué no se actúa con más decisión ante un
problema social y de salud grave, tanto en lo general como en lo individual.

Pero no es momento de lamentaciones, sino de entender la situación, de


ver su significado y de hacernos responsables en su solución. Y en ésta, la sani-
dad tiene uno de los papeles más trascendentes.

El nivel de impregnación de la violencia de género, tal y como hemos visto,


es tan alto que necesitamos respuestas desde todos los ámbitos, también desde
la Sanidad. Pero la respuesta sanitaria, como apuntaba, es una de las más impor-
tantes al incidir de forma simultánea sobre el resultado y el origen de esta vio-
lencia. La respuesta clínica puede contribuir a abordar el tratamiento y la recupe-
ración de las mujeres que sufren esta violencia, así como la de los niños y niñas
expuestos a ella, pero también, algo que sólo se puede hacer desde la actuación
sanitaria, a detectar los casos que aún están envueltos por una normalidad cóm-
plice que tanto alimentan los violentos.

La violencia de género aún está lejos de nuestra conciencia y se mueve


por el mundo de las emociones que da lugar al rechazo y al dolor, pero que no
posiciona. La violencia de género todavía camina por los arrabales de ese conoci-
miento crítico necesario para ver lo que se esconde detrás de las apariencias, por
más capas que éstas intenten colocar entre la realidad y sus manifestaciones.
Por eso es más un problema social que profesional, pero quizás también por ello
desde lo profesional se pueda hacer mucho para cambiar las referencias socia-
les, al ser capaces de sortear los obstáculos donde se agota la reflexión general.

Cualquier profesional es antes un ciudadano o una ciudadana que comparte


las referencias culturales en las que convive con una posición más o menos
crítica o sintónica hacia ellas. La falta de formación facilita que la visión que se
obtiene de la realidad venga marcada por la concepción general que existe de
ella y de sus manifestaciones, y hoy por hoy la percepción que se tiene sobre la
violencia de género viene en gran parte definida por las referencias culturales, no
por los criterios que la ciencia ha desarrollado para abordar el problema.

Para cambiar la percepción de lo social a lo profesional y actuar frente a


los casos desde la responsabilidad, necesitamos conseguir dos objetivos: Por
un lado, romper con los mitos y los prejuicios que acompañan a la violencia de

II Detección y abordaje de la violencia de género por el personal sanitario


género, y por otro, dar referencias científicas para dirigir la respuesta profesional
hacia los objetivos comunes de la sanidad, que no son otros que conseguir el
mayor grado de bienestar en las personas y en la comunidad a través de la detec-
ción, el diagnóstico y el tratamiento del problema de salud que se nos presenta
como profesionales de la salud.

Puede parecer ambicioso, pero cuando un problema genera tanto daño y


tanto dolor como la violencia de género, más beneficios alcanzaremos al abor-
darlo. Con esa grandeza debemos dirigir nuestras actuaciones, pero también con
la sencillez que nace del compromiso y la responsabilidad, pues sin estos com-
ponentes el conocimiento será metabolizado por todos los referentes históricos
que aún hoy siguen justificando y contextualizando la violencia que sufren las
mujeres.

Este libro, “Detección y abordaje de la violencia de género por el personal


sanitario”, nace de la necesidad de llevar hasta cada una de las personas que
trabajan en la sanidad las referencias y el conocimiento para abordar la violencia
que sufren las mujeres en el seno de las relaciones de pareja. Actuar con pro-
fesionalidad exige hacerlo con responsabilidad, y ésta sólo se puede alcanzar
cuando la respuesta se dirige a resolver el problema en su manifestación y en
su significado. De nada valdría abordar las lesiones provocadas por la violencia
de género si no se conocen los efectos que el contexto que rodea a la mujer
ocasiona en su estado clínico, tanto para haber permitido que se llegue hasta la
situación abordada, como por las consecuencias que se pueden presentar una
vez que el caso ha sido identificado.

Las reticencias del profesional sanitario todavía son elevadas, lo cual, con
más frecuencia de la deseada, se traduce en una actitud distante y pasiva, casi
expectante para ver cómo evoluciona el caso sin intervenir directamente, algo
que se traduce en más violencia, pues no sólo son las agresiones las que dañan a
la mujer, sino el control mantenido que ejerce el agresor hacia ella. Los estudios
muestran que las mujeres maltratadas acuden con más frecuencia en demanda
de asistencia sanitaria, sin embargo la respuesta profesional se limita al trata-
miento de las cuestiones clínicas planteadas, y sólo en un porcentaje bajo de los
casos se va más allá de la sintomatología superficial referida por las pacientes.
Esta actitud pasiva y distante es producto de la interacción de diferentes facto-
res, pero en todos ellos influye el conocimiento escaso que existe sobre este
problema social y sanitario, lo cual contribuye, como decía, a que su espacio sea
ocupado por los mitos y prejuicios que existen sobre el mismo.

La responsabilidad del profesional sanitario es, por tanto, doble: Por un lado,
recuperar a las mujeres que sufren la violencia por parte de sus parejas a través
de la intervención clínica integral, y por otro, contribuir a la detección y a la pre-

Detección y abordaje de la violencia de género por el personal sanitario III


vención de nuevos casos. Y desde esa doble responsabilidad deben desarrollar
su profesionalidad.

La obra da las principales claves para conseguirlo, no tanto como proce-


dimientos o protocolos a seguir desde esa distancia que comentábamos, sino
desde el conocimiento y el compromiso que nace de la responsabilidad, pues
sólo desde estos elementos podremos adaptar la respuesta a las circunstancias
particulares de cada caso.

La sala de espera está llena, son muchas las mujeres que hoy acuden a los
servicios sanitarios, pero también está repleta de conocimiento. Ya no vale el
silencio ni la actitud expectante, hoy la solución está en la acción, sin más espera
ni dilación, y la acción desde el ámbito sanitario debe dar una respuesta clínica.
Ahora es tiempo de acometer esa tarea y de continuar trabajando para erradicar
la violencia de género y hacer de la sociedad un lugar más saludable.

Miguel Lorente Acosta


es médico forense y ha sido
Delegado del Gobierno para la
Violencia de Género de 2008 a 2011

IV Detección y abordaje de la violencia de género por el personal sanitario


Este manual está dedicado muy
especialmente
a todas las mujeres que puedan ser
protagonistas de este libro

Detección y abordaje de la violencia de género por el personal sanitario V


VI Detección y abordaje de la violencia de género por el personal sanitario
INTRODUCCIÓN
La presentación de este manual viene a dar contestación al mandato que
establece la Ley Orgánica 1/2004, de 28 de diciembre, de Medidas de Protección
Integral contra la Violencia de Género. Así, el Título I, denominado Medidas de
Sensibilización, Prevención y Detección, tiene un capítulo -el tercero- dedicado
exclusivamente al ámbito sanitario cuyo Artículo 15 llamado Sensibilización y
Formación establece el desarrollo programas de sensibilización y formación con-
tinuada del personal sanitario con el fin de mejorar e impulsar el diagnóstico
precoz, la asistencia y la rehabilitación de la mujer en las situaciones de violencia
de género a que se refiere esta Ley.

Sin lugar a dudas la medicina tiene un papel fundamental en el grave pro-


blema social de la violencia de género, no sólo en curar las heridas, sino en la
necesidad de poner en conocimiento de la autoridad judicial su existencia para
que se pueda actuar sobre este tipo de delitos.

No olvidemos que en la mayoría de los casos el personal sanitario son los


primeros profesionales a quienes recurren las mujeres maltratadas y son quie-
nes están en mejores condiciones para identificar el problema que afecta a un
12% de las mujeres españolas.

La violencia de género se ha convertido en un serio problema de salud


pública de graves consecuencias para la salud de las mujeres, tanto en la esfera
física (lesiones traumáticas, en ocasiones con resultado de muerte, infecciones
de transmisión sexual, problemas ginecológicos, embarazos no deseados, lesio-
nes en el feto o recién nacido y bajo peso al nacer, dolor pélvico crónico, hiper-
tensión, cefaleas, síndrome de intestino irritable o fibromialgia) como en la men-
tal (incremento de síntomas y cuadros clínicos de ansiedad, insomnio, depresión
clínica y trastorno de estrés postraumático).

El papel de los y de las profesionales de la salud en la prevención, detección


precoz y asistencia a las víctimas de la violencia de género es muy importante,
ya que está comprobado que las mujeres que sufren malos tratos utilizan los
servicios sanitarios con más frecuencia.

Así, la inclusión de preguntas específicas sobre el maltrato en la historia clí-


nica rutinaria (de la misma manera que se pregunta repetida y regularmente sobre
el hábito de fumar, el consumo de alcohol, el peso o el ejercicio físico) puede
resultar un método efectivo para la detección de casos de violencia doméstica.
Por otra parte, también sería necesario fomentar la declaración de los casos de
maltrato en los servicios de urgencias.

Detección y abordaje de la violencia de género por el personal sanitario VII


Además de contribuir a poner de manifiesto el problema a partir de la reco-
gida de datos, el personal sanitario puede aportar nuevos métodos de identifica-
ción de la violencia de género, promover la formación de profesionales y elaborar
guías de recursos especializados.

Finalmente, ante el conocimiento de la violencia deben responder lo más


eficazmente posible a las necesidades de las mujeres afectadas, informándoles
de la existencia de recursos específicos que respondan a sus necesidades.

Resulta muy relevante para las víctimas una simple información sobre la
existencia de servicios especializados y cómo contactar con ellos. A través de
estas recomendaciones, el personal sanitario puede ayudar a reducir el senti-
miento de aislamiento y estigmatización que sufren estas mujeres.

Dada la morbilidad y mortalidad asociada a la violencia de género, el abordaje


desde la salud pública debería contemplar como puntos importantes la integra-
ción de métodos de identificación dentro de la rutina en la atención sanitaria, ade-
más del trabajo interdisciplinar de diferentes profesionales, fomentar la creación
de registros específicos, la elaboración de protocolos y la formación de las y los
profesionales sanitarios.

Con este manual se pretende dar respuesta a las preguntas que pueda tener
el personal sanitario a la hora de diagnosticar y tratar con firmeza y seguridad la
violencia de género, ofrecer en todo momento orientaciones para la atención
integral (física, psicológica, emocional y social) a las mujeres mayores de 14 años
que la sufren y que acuden a un centro sanitario.

En suma, es una guía para sensibilizar a todo el personal sanitario, además


de a toda la población en general, sobre la violencia machista como un problema
de salud y para promover la capacitación de las mujeres que sufren maltrato en
el reconocimiento de su situación y búsqueda de soluciones.

En el siglo XXI la violencia contra las mujeres se sigue manifestando en


cualquier lugar del mundo, sólo por el mero hecho de pertenecer al sexo feme-
nino, sólo por ser mujer. La violencia contra las mujeres no sabe de culturas, de
clases sociales ni de etnias. Este escándalo cotidiano se manifiesta de diferentes
maneras y se produce en múltiples espacios, pero posee una raíz única: la discri-
minación universal que sufren las mujeres por el mero hecho de serlo.

La violencia contra las mujeres y las niñas se manifiesta de diferentes for-


mas: sufren violencia de sus parejas y ex parejas, son víctimas de trata de per-
sonas para comerciar con ellas como prostitutas, son blanco de violencia sexual,
se las somete a mutilación genital y a matrimonios forzosos, son objetos de
intercambio y trofeo en las guerras…

VIII Detección y abordaje de la violencia de género por el personal sanitario


Por todo ello, este tipo de violencia no se debe entender como un mero
conflicto en el ámbito doméstico consecuencia de la relación de pareja. Es, como
veremos, un grave problema público porque atenta a los más esenciales dere-
chos humanos.

Como se recoge en la última encuesta sobre la percepción de la violencia


de género realizada en el primer trimestre de 2011, el 87,8% de las personas
encuestadas dicen conocer la lacra de la violencia machista por la televisión. Muy
a menudo la información de estos sucesos a través de los medios de comunica-
ción es sesgada; en la mayoría de las noticias sobre el asesinato de una mujer se
termina diciendo “no había denuncia, no había petición de orden de alejamiento,
parecía un buen chico, nadie sabía nada…”, y se transmite así una imagen del
maltratador como persona ejemplar, amable dentro de la normalidad, lo que
demuestra que la sociedad mira hacia otro lado. El maltratador no se levanta un
día siéndolo de repente, su actitud es una estrategia que se va tejiendo día a día,
en muchas ocasiones desde la propia infancia.

Es muy importante que las personas que puedan estar en un momento


dado de su trayectoria profesional frente a las mujeres víctimas de violencia de
género tengan una sensibilización y formación lo más amplia posible. En la pre-
paración al empleo público de policías, jueces o personal sanitario se debe incluir
una buena formación sobre la prevención, detección y abordaje de la violencia
de género, formación que, entre otras cosas, evite la segunda victimización que
muy frecuentemente sufren estas mujeres, al hacerlas culpables de su situación,
situación que frecuentemente dura entre 10 y 12 años según datos del Ministe-
rio de Igualdad.

Quiero dar las gracias a Tina Castillo González, por aportar su tiempo y saber
en la redacción de este manual; a Aurelio Duque Valencia, médico de familia, por
compartir conmigo su experiencia y sensibilidad. Y gracias también a la Federa-
ción Estatal de Sanidad y Servicios Sociosanitarios de CCOO, especialmente a
Carles Diéguez de Jaureguízar, por confiar en mí para este importante proyecto.

Ángela Escribano Martínez

Detección y abordaje de la violencia de género por el personal sanitario IX


Este Manual ha sido elaborado para FYSA por:
Ángela Escribano Martínez
Máster en Género y Políticas de Igualdad por la Universidad de Valencia.
Diploma de Especialización Profesional Universitaria en Violencia de Género por
la Universidad de Valencia.
Docente acreditada por la EVES (Escuela Valenciana Estudios de la Salud) Con-
selleria de Sanitat. Valencia.

X Detección y abordaje de la violencia de género por el personal sanitario


ÍNDICE GENERAL

Unidad didáctica 1: Hablar de la violencia de género


1.1. Definiciones .............................................................................. 3
1.2. Algunas declaraciones sobre la violencia de género ................. 5
1.3. Descripción del problema.......................................................... 6
1.4. Magnitud de la violencia............................................................ 10
1.5. Prevalencia en el ámbito sanitario............................................. 16
1.6. Evaluación ................................................................................. 21

Unidad didáctica 2: Violencia de género.


Terminología y tipos
2.1. Terminología de la violencia....................................................... 27
2.1.1. Violencia de género / Violencia machista / violencia
sobre la mujer ........................................................... 27
2.1.2. Violencia doméstica ................................................... 29
2.2. Importancia de la visualización de la violencia de género .... 29
2.3. Tipos de violencia de género..................................................... 31
2.3.1. Violencia física............................................................ 31
2.3.2. Violencia psicológica .................................................. 32
2.3.3. Violencia sexual.......................................................... 32
2.3.4. Otros tipos de violencia ............................................. 34
2.3.5. Micromachismos o violencia invisible........................ 36
2.4. La pirámide de la violencia ........................................................ 38
2.5. Autoevaluación.......................................................................... 39

Unidad didáctica 3: La violencia de género como


instrumento de dominación y control
3.1. Origen de la violencia de género............................................... 45
3.2. El círculo de la violencia. Leonor Walker ................................... 47
3.3. La escalada de la violencia ........................................................ 52

Detección y abordaje de la violencia de género por el personal sanitario XI


3.4. Violencia directa, estructural y cultural...................................... 54
3.4.1. El modelo ecológico de la violencia .............................. 54
3.4.2. La rueda de poder y control.......................................... 55
3.4.3. La rueda de la igualdad ................................................ 56
3.5. Autoevaluación ......................................................................... 59

Unidad didáctica 4: Proceso social de la victimización


4.1. Victimización secundaria ........................................................... 65
4.2. Perfil del maltratador ................................................................ 66
4.3. Perfil de la víctima ..................................................................... 70
4.3.1. Razones de las mujeres maltratadas para no abando-
nar la violencia............................................................ 72
4.3.2. Otros obstáculos........................................................ 73
4.4. Factores que influyen en la aparición de la violencia de género 74
4.5. Autoevaluación.......................................................................... 77

Unidad didáctica 5: Normativa aplicable. Legislación


internacional y nacional
5.1. Antecedentes legislativos ......................................................... 83
5.2. Legislación internacional ........................................................... 88
5.3. Transposición internacional a la legislación española ................ 90
5.4. Legislación española sobre violencia de género ....................... 92
5.5. Autoevaluación.......................................................................... 101

Unidad didáctica 6: Dificultades en el proceso de la


violencia
6.1. Procesos que dificultan la comprensión del fenómeno de la
violencia de género y su identificación...................................... 107
6.2. Factores que influyen en la decisión de la mujer de romper la
relación...................................................................................... 108
6.3. Tipos de ruptura en la relación .................................................. 109
6.4. Mitos sobre la violencia de género ........................................... 110

XII Detección y abordaje de la violencia de género por el personal sanitario


6.5. Mitos sobre los hombres violentos........................................... 113
6.6. Mitos sobre las denuncias falsas .............................................. 115
6.7. La dispensa de declarar contra el cónyuge .............................. 117
6.8. Autoevaluación.......................................................................... 119

Unidad didáctica 7: La salud de las mujeres víctimas de


la violencia de género
7.1. Consecuencias de la violencia de género en la salud de las
mujeres ..................................................................................... 125
7.1.1. Consecuencias en la salud física .................................. 126
7.1.2. Consecuencias en la salud psíquica ............................. 127
7.1.3. Consecuencias durante el embarazo............................ 130
7.1.4. Disfunciones sexuales.................................................. 131
7.1.5. El modelo biomédico .................................................... 131
7.2. Consecuencias en la salud de hijos e hijas ............................... 134
7.3. Consecuencias en el personal sanitario ante la violencia de gé-
nero .......................................................................................... 142
7.4. Autoevaluación.......................................................................... 145

Unidad didáctica 8: Papel del personal sanitario ante el


maltrato
8.1. Oportunidad e importancia del personal sanitario ..................... 151
8.2. Funciones del personal sanitario ............................................... 153
8.3. Consecuencias del diagnóstico erróneo.................................... 158
8.4. Barreras para la identificación de la violencia ........................... 158
8.4.1. Barreras por parte de la mujer maltratada.................. 158
8.4.2. Barreras en las instituciones sanitarias ..................... 159
8.5. Recomendaciones para la prevención de la violencia de género
en el sistema sanitario .............................................................. 161
8.6. Autoevaluación.......................................................................... 163

Detección y abordaje de la violencia de género por el personal sanitario XIII


Unidad didáctica 9: Protocolo común para la actuación
sanitaria ante la violencia de género
9.1. ¿Por qué un protocolo? ............................................................. 169
9.2. Actuación en Atención Primaria ................................................ 170
9.3. Actuación de Atención Especializada ........................................ 172
9.4. Detección y evaluación. Algoritmo de actuación....................... 174
9.5. Autoevaluación ......................................................................... 177

Unidad didáctica 10: Indicadores y recomendaciones


ante la sospecha de maltrato
10.1. Indicadores de maltrato ............................................................ 183
10.1.1. Indicadores en los antecedentes de la mujer ............ 183
10.1.2. Indicadores en el momento de la consulta ................ 184
10.1.3. Indicadores en las lesiones ........................................ 186
10.2. Recomendaciones para la entrevista a la mujer ante sospecha
de maltrato ................................................................................ 187
10.2.1. Preguntas ante la sospecha ...................................... 188
10.2.2. Lo que NO debe hacer el personal sanitario ante la
sospecha de una mujer maltratada ............................ 190
10.3. Autoevaluación ......................................................................... 193

Unidad didáctica 11: Diagnóstico y tratamiento de la


violencia de género
11.1. Preguntas para determinar el tipo de violencia ......................... 199
11.2. Evaluación de la situación de violencia...................................... 200
11.3. Evaluación del riesgo de suicidio .............................................. 202
11.4. Tratamiento de la mujer víctima de violencia de género ........... 203
11.5. Asertividad en la atención a las mujeres maltratadas .............. 205
11.6. Algoritmo de intervención ante la violencia de género ............. 207
11.7. La metodología grupal y sus beneficios .................................... 208
11.8. Caso práctico............................................................................. 210
11.9. Autoevaluación.......................................................................... 213

XIV Detección y abordaje de la violencia de género por el personal sanitario


Unidad didáctica 12: Actuación ante las agresiones
sexuales
12.1. Actuación desde la medicina clínica y los servicios de urgen-
cias ............................................................................................ 219
12.2. Actuación desde la medicina forense ....................................... 222
12.3. Metodología general ................................................................ 222
12.3.1. Exploración ............................................................... 222
12.3.2. Atención y seguimiento ............................................ 224
12.4. Derivación de la paciente .......................................................... 226
12.5. Otro tipo de violación: la sumisión química............................... 227
12.6. Consecuencias psicológicas de la agresión sexual ................... 228
12.7. Recomendaciones para la recuperación ................................... 236
12.8. Autoevaluación ......................................................................... 239

Unidad didáctica 13: Registro de datos en la historia


clínica. Parte de lesiones
13.1. Razones para el registro ........................................................... 245
13.2. Qué y cómo registrar ................................................................ 247
13.3. Parte de lesiones e informe médico ........................................ 248
13.4. Caso práctico............................................................................. 253
13.5. Autoevaluación.......................................................................... 255

Unidad didáctica 14: Aspectos éticos y legales del


personal sanitario ante la víctima y el maltratador
14.1. Actuación legal del personal sanitario ....................................... 261
14.2. Evaluación de seguridad............................................................ 261
14.3. Aspectos éticos......................................................................... 263
14.4. Actuación ante el maltratador ................................................... 263
14.4.1. Programas de intervención con hombres que ejercen
la violencia ................................................................ 264
14.5. Autoevaluación.......................................................................... 267

Detección y abordaje de la violencia de género por el personal sanitario XV


Unidad didáctica 15: Derechos y protección de las
mujeres víctimas de la violencia de género. Situaciones
de especial vulnerabilidad
15.1. Derecho a denunciar ................................................................ 273
15.2. Orden de protección ................................................................ 273
15.3. Derecho a la información, derechos sociales, laborales y eco-
nómicos..................................................................................... 279
15.3.1. El derecho a la información........................................ 279
15.3.2. El derecho a la asistencia social integral .................... 279
15.3.3. El derecho a la asistencia jurídica gratuita ................. 280
15.3.4. Derechos laborales y de Seguridad Social ................. 281
15.3.5. Beneficios de carácter económico ............................ 282
15.4. Protección de víctimas de violencia de género ......................... 283
15.5. Mujeres de especial vulnerabilidad ........................................... 286
15.5.1. Protección de las mujeres inmigrantes víctimas de
violencia de género .................................................... 286
15.5.2. Mujeres con diversidad funcional y sensorial ............ 290
15.6. Autoevaluación.......................................................................... 297

Webgrafía .................................................................................................... 303

Bibliografía ................................................................................................... 307

ANEXO I (Normativa) ................................................................................... 311

ANEXO II (Glosario) ..................................................................................... 313

XVI Detección y abordaje de la violencia de género por el personal sanitario


Unidad didáctica 1: Hablar de la violencia de género

UNIDAD DIDÁCTICA 1
HABLAR DE LA VIOLENCIA DE GÉNERO

Autora:
Ángela Escribano Martínez

1.1. Definiciones
1.2. Algunas declaraciones sobre la violencia de género
1.3. Descripción del problema
1.4. Magnitud de la violencia
1.5. Prevalencia en el ámbito sanitario
1.6. Evaluación

Detección y abordaje de la violencia de género por el personal sanitario 1


Unidad didáctica 1: Hablar de la violencia de género

2 Detección y abordaje de la violencia de género por el personal sanitario


Unidad didáctica 1: Hablar de la violencia de género

En 1999 la Asamblea General de la ONU declaró el 25 de noviembre como


Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer. La fecha re-
cuerda el asesinato de las hermanas Mirabal, tres activistas políticas asesinadas
el 25 de noviembre de 1960 por la policía secreta del dictador Rafael Trujillo en
la República Dominicana. Sus cadáveres destrozados aparecieron en el fondo de
un precipicio. Para el movimiento popular y feminista de la República Dominicana
estas mujeres simbolizan históricamente la lucha y la resistencia.

1.1. Definiciones

La Convención sobre la Eliminación de todas las formas de Discri-


minación Contra la Mujer (CEDAW), en su recomendación general
nº 19, afirmaba en 1993:

“La violencia contra la mujer es una forma de discriminación que impide


gravemente el goce de derechos y libertades en pie de igualdad con el hombre”.

Esta definición incluye la violencia basada en el sexo, es decir, la violencia


dirigida contra la mujer porque es mujer o que le afecta en forma desproporcio-
nada. Incluye actos que infligen daños o sufrimientos de índole física, mental o
sexual, amenazas de cometer esos actos, coacción y otras formas de privación
de la libertad.

En la declaración final del II Congreso Mundial por los Derechos Humanos,


celebrado en Viena en 1993, gracias a la actuación de las delegadas participantes
se reconoció la violencia contra las mujeres en la esfera privada como una viola-
ción de los derechos humanos y se declaró que los derechos de las mujeres son
“parte inseparable, integral e inalienable de los derechos humanos universales”.

Detección y abordaje de la violencia de género por el personal sanitario 3


Unidad didáctica 1: Hablar de la violencia de género

Una de las definiciones más aceptadas es la de la Asamblea Gene-


ral de la ONU (Resolución 48/104, 20 de diciembre de 1993), cuya
declaración sobre la eliminación de la violencia contra la mujer
especifica:

“La violencia de género es (...) todo acto de violencia basado en el género


que tiene como resultado posible o real un daño físico, sexual o psicológico,
incluidas las amenazas, la coerción o la privación arbitraria de la libertad, ya sea
que ocurra en la vida pública o en la vida privada. (...) agrupa todas las formas
de violencia que se ejercen por parte del hombre sobre la mujer en función de
su rol de género: violencia sexual, tráfico de mujeres, explotación sexual, muti-
lación genital, etc. independientemente del tipo de relaciones interpersonales
que mantengan agresor y víctima, que pueden ser de tipo sentimental, laboral,
familiar, o inexistentes”.

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS) en 1998:

“La violencia es un fenómeno sumamente difuso y complejo cuya definición


no puede tener exactitud científica, ya que es una cuestión de apreciación de lo
que son comportamientos aceptables o inaceptables, o de lo que constituye un
daño, está influida por la cultura y sometida a una continua revisión a medida
que los valores y las normas sociales evolucionan. (…) la cultura desempeña un
papel fundamental, al establecer la frontera entre comportamientos aceptables
abusivos y definir la respuesta de la violencia”.

Según la declaración de la ONU de 1995 en Pekín, la violencia con-


tra las mujeres:

“Es una manifestación de las relaciones de poder históricamente desiguales


entre hombres y mujeres, que han conducido a la dominación de la mujer por
el hombre, la discriminación contra la mujer y a la interposición de obstáculos
contra su pleno desarrollo. La violencia contra la mujer a lo largo de su ciclo vital
dimana especialmente de pautas culturales, en particular de los efectos perjudi-
ciales de algunas prácticas tradicionales o consuetudinarias y de todos los actos
de extremismo relacionados con la raza, el sexo, el idioma o la religión que per-
petúan la condición inferior que se le asigna a la mujer en la familia, el lugar de
trabajo, la comunidad y la sociedad”.

Ley Integral contra la Violencia de Género LO 1/ 2004, de 28 de


Diciembre, Art 1:

“Es la manifestación de la discriminación, la situación de desigualdad y las


relaciones de poder de los hombres sobre las mujeres, se ejerce sobre éstas por

4 Detección y abordaje de la violencia de género por el personal sanitario


Unidad didáctica 1: Hablar de la violencia de género

parte de quienes sean o hayan estado ligados a ellas por relaciones similares de
afectividad, aun sin convivencia”.

Rosa María Peris Cervera. Directora del Instituto de la Mujer de


2004 a 2009.

“Esta forma de violencia es una construcción social y cultural, y no una con-


secuencia de la diferencia biológica de los sexos. Es violencia de género porque
es aquella que afecta a las mujeres por el solo hecho de serlo”

Remedios Martínez Verdú. Profesora Asociada del Dpto. Sociolo-


gía, Psicología Común y Didáctica, Universidad de Alicante.

“La violencia contra las mujeres está vinculada al desequilibrio en las rela-
ciones de poder entre los sexos en los ámbitos social, económico, religioso y
político, pese a todos los esfuerzos de las legislaciones en favor de la igualdad.
Constituye un atentado contra el derecho a la vida, a la seguridad, a la libertad, a
la dignidad y a la integridad física y psíquica de la víctima y todo ello supone, por
lo tanto, un obstáculo para el desarrollo de una sociedad democrática”

1.2. Algunas declaraciones sobre la violencia de género

Declaración de la ONU conmemorativa del Año Internacional de la


Mujer, 1980:

“La violencia contra la mujer es el crimen encubierto más numeroso del


mundo”.

Marcela Lagarde. Académica, antropóloga, investigadora. Catedrá-


tica de la Universidad Nacional Autónoma de México.

“Cada mujer tiene el derecho autoproclamado a tener derechos, recursos y


condiciones para desarrollarse y vivir en democracia. Cada mujer tiene el dere-
cho a vivir en libertad y a gozar de la vida”.

Eduardo Galeano. Escritor.

“El miedo de la mujer a la violencia del hombre es el espejo del miedo del
hombre a la mujer sin miedo”

Detección y abordaje de la violencia de género por el personal sanitario 5


Unidad didáctica 1: Hablar de la violencia de género

Miguel Lorente Acosta. Delegado del Gobierno para la Violencia de


Género de 2008 a 2011.

“A la indefensión se llega cuando se expone a la víctima a peligros físicos


y no se le advierte o ayuda a evitarlos, se la sobrecarga con trabajos, se la hace
pasar por torpe, descuidada, ignorante, etcétera; la falta de afecto unida a la repe-
tición y prolongación en el tiempo de actitudes despreciativas, acompañadas con
bruscos cambios del estado de ánimo del agresor sólo es comparable a algunas
torturas”

1.3. Descripción del problema


La violencia contra las mujeres y niñas constituye una vergüenza terrible
para la causa de los derechos humanos y una crisis de salud pública. En todo el
mundo las mujeres son con frecuencia víctimas de golpes y abusos sexuales a
manos de sus parejas, familiares, vecinos y desconocidos.

Las mujeres en los procesos armados

Ante la necesidad de proteger a las mujeres en las situaciones de guerra,


representantes de la Unión Europea y la OTAN se reunieron el 27 de enero de
2000 en una conferencia sobre Mujer, Paz y Seguridad. A la sede de la Comisión
Europea estaban convocados el secretario general de la OTAN, Anders Fogh
Rasmussen, y la alta representante para la política exterior de la UE, Catherine
Ashton. Asistieron también María Teresa Fernández de la Vega, vicepresidenta
de España, país que ostentaba en ese momento la presidencia europea de turno,
y la ex secretaria de estado estadounidense, Madeleine Albright.

Se trataba, pues, de una cita de alto nivel que sin embargo no ha contado
con una gran visibilidad. Ante unos 500 asistentes, los ponentes subrayaron la
necesidad de luchar contra la violencia sexual como arma de guerra y de integrar
a las mujeres en las negociaciones de paz y en los procesos de reconstrucción.
Así lo estipula la resolución del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas 1325
sobre ’Mujeres, Paz y Seguridad’. La 1325 fue aprobada el año 2000, en un
momento en el que se tomaba conciencia de la tragedia de la violencia sexual
sistemática en las guerras.

La resolución llama a los estados a proteger a las mujeres en situación de


conflicto, luchar contra la impunidad, formar a militares en cuestiones de género,
integrar a las mujeres en los diálogos de paz y aplicar el enfoque de género en
sus misiones de paz. Ya en la IV Conferencia Internacional de la Mujer, celebrada
en Pekín en 1995, se abordó con particular preocupación el uso de la violencia

6 Detección y abordaje de la violencia de género por el personal sanitario


Unidad didáctica 1: Hablar de la violencia de género

contra la mujer como arma de guerra y los efectos específicos que ésta tenía
sobre la vida de las mujeres.

Así, la violación se incluye como crimen de lesa humanidad en los Estatutos


de los Tribunales Especiales establecidos por el Consejo de Seguridad de las Na-
ciones Unidas para la antigua Yugoslavia y Ruanda. La Corte Penal Internacional,
por su parte, asumió en sus planteamientos la inclusión del género.

Los efectos que esto produce van mucho más allá de las contusiones, de los
huesos rotos e incluso de la muerte. Además de causarles sufrimiento físico, la
violencia tiene serias repercusiones sobre el bienestar psíquico de las mujeres,
su salud general, su salud sexual y reproductiva, y el bienestar y la seguridad de
sus familias y comunidades. El costo de la violencia contra las mujeres desde el
punto de vista humano es enorme, como también lo es desde el punto de vista
económico.

Repercusión económica de la violencia de género

El Consejo de Europa calculó el coste económico de la violencia de género en Es-


paña durante el año 2002 en 2.400 millones de euros, es decir un coste medio aproxi-
mado de 60 euros por habitante. Los principales gastos vienen determinados por el
absentismo laboral, la reducción de la productividad o los accidentes de trabajo (707
millones); el coste humano y emocional (628 millones); la atención social a menores
(590 millones); la asistencia jurídica (61 millones) y la asistencia sanitaria (371 millones).

Otros estudios cifran el coste económico del maltrato en la Comunidad Valen-


ciana en el año 2004 en 23.285.029,83 , sin contar el coste derivado del absentismo
laboral, la reducción de la productividad o los accidentes de trabajo, ni el coste humano

Detección y abordaje de la violencia de género por el personal sanitario 7


Unidad didáctica 1: Hablar de la violencia de género

y emocional (que son las partidas que soportan el mayor coste de la violencia). El coste
se distribuye del siguiente modo:

Coste sanidad pública: 13.606.307,70

Coste policial: 403.000,00

Coste administración justicia: 2.447.878,61

Coste ámbito social: 6.827.843,52

A estos gastos directos de atención a las víctimas de la violencia de género


habría que añadir los destinados a la formación de varios colectivos que se
enfrentan por primera vez con este problema, o que amplían y adaptan su forma-
ción previa. La formación del personal sanitario permitirá realizar un abordaje del
problema más eficiente y satisfactorio, beneficiando con ello tanto a las mujeres
como al sistema.

Existe además un grupo de costes de naturaleza incuantificable: el valor


asignado al dolor y al sufrimiento infligido a las mujeres, coste que recae úni-
camente sobre la víctima y sus hijos/as. Otras consecuencias sociales para las
víctimas son la falta de apoyo social que experimentan la mujeres debido a la
incomunicación y aislamiento del entorno, y la victimización secundaria a la que
se ven sometidas en muchos casos cuando se les culpa a ellas mismas de la
situación que sufren.

8 Detección y abordaje de la violencia de género por el personal sanitario


Unidad didáctica 1: Hablar de la violencia de género

Es necesario comprender las formas, el contexto y las consecuencias de


la violencia contra las mujeres con el fin de formular una respuesta similar a las
campañas de salud pública que se emprenden frente a otras crisis en la salud.

Por otra parte hay también una mayor necesidad de conocimiento y de desa-
rrollo de técnicas por parte de los profesionales de la salud con el fin de:

„ Identificar mejor a las víctimas o sobrevivientes y asegurarles una aten-


ción adecuada.

„ Remitir a las sobrevivientes de actos de violencia a los servicios de


apoyo apropiados.

„ Prestar una ayuda efectiva y adecuada a la necesidad de seguridad y


justicia de la mujer.

„ Cooperar con la eficacia con otros sectores de la sociedad para proteger


mejor a las mujeres y dar respuestas a sus necesidades.

„ Defender con mayor eficacia el derecho de las mujeres al más alto nivel
posible de atención de la salud.

Después de más de cinco lustros de Constitución y, en consecuencia, de


la proclamación de la igualdad entre hombres y mujeres como valor superior,
derecho fundamental y principio general, de la consagración del derecho a la no
discriminación por razón de sexo, así como del mandato dirigido a los poderes
públicos para que remuevan los obstáculos que impiden o dificultan la igualdad
real y efectiva, la realidad social nos demuestra que a las mujeres, la mitad de
la ciudadanía, les queda todavía un largo camino que recorrer para situarse en
posición de igualdad en relación con los hombres en cuanto al disfrute de los
derechos que les corresponden como ciudadanas.

Los obstáculos ante los que se enfrentan las mujeres para avanzar en esa
igualdad real y efectiva están directamente relacionados con las funciones esta-
blecidas por estereotipos que las sitúan en una posición de inferioridad, sumisión
o supeditación a los varones. La resistencia social al cambio de esas funciones
agrava las dificultades para que los derechos fundamentales jurídicamente reco-
nocidos sean ejercidos en igualdad de condiciones por hombres y mujeres. Y son
estos patrones de conducta socioculturales –la persistencia en la adjudicación de
tareas diferentes en función del sexo, basadas en un modelo de sociedad cuyas
normas perpetúan la inferioridad de las mujeres- los que, a su vez, continúan
alimentando la violencia de género.

Detección y abordaje de la violencia de género por el personal sanitario 9


Unidad didáctica 1: Hablar de la violencia de género

La violencia de género es la manifestación extrema de la desigualdad, la


evidencia de un déficit democrático y uno de los síntomas de la incompleta ciu-
dadanía de las mujeres. Y es además en el ámbito de las relaciones de pareja
donde esta ciudadanía incompleta tiene su máxima plasmación. En este espacio,
la magnitud del fenómeno violento cuestiona día a día los derechos fundamenta-
les de ciudadanía de muchas mujeres -derecho a la vida, a su integridad física y
psíquica, a su salud, a su dignidad y libertad-, que constituyen los valores invio-
lables de la persona sobre los que se fundamenta nuestro orden democrático.
Es pues obligación del Gobierno y del conjunto de los poderes autonómicos y
locales garantizar el total disfrute de los derechos fundamentales de las mujeres,
asegurando el pleno ejercicio de su condición de ciudadanas.

1.4. Magnitud de la violencia


„ Aproximadamente 1/3 de las mujeres en el mundo son víctimas de mal-
trato, violaciones y asesinatos

„ 1 de cada 3 mujeres sufre abusos a lo largo de su vida

„ El 70% de las mujeres asesinadas lo son por sus parejas o ex parejas

„ La violencia en la familia es la principal causa de muerte y discapacidad


entre las mujeres de 16 y 44 años

10 Detección y abordaje de la violencia de género por el personal sanitario


Unidad didáctica 1: Hablar de la violencia de género

„ Más de 2/3 de los actos violentos perpetrados contra las mujeres son
cometidos en el seno de la familia

„ El maltrato es la principal causa de la reducción de la calidad de vida,


daño y muerte para las mujeres

„ En España han muerto 71 mujeres a manos de su pareja o expareja en


2007; 70 en 2008, 72 en 2010 y 60 en 2011.

Una de las dificultades al analizar la magnitud y evolución de la violencia de


género es la heterogeneidad de los datos y la disparidad de las fuentes disponi-
bles, lo que evidencia la necesidad de contar con una colección de indicadores y
variables estadísticas sobre la que estructurar una base de datos sobre violencia
de género con el fin de disponer de un diagnóstico permanentemente actuali-
zado del fenómeno y poder adoptar medidas para atajarlo. Para ello en el Plan
Nacional de Sensibilización y Prevención de la Violencia de Género, aprobado por
Consejo de Ministros el 15 de diciembre de 2006, se contempla la determina-
ción de un conjunto de indicadores para el análisis de la magnitud del fenómeno
violento y su evolución.

Los indicadores definidos tienen en cuenta las distintas fuentes de datos,


los distintos formatos en los que pueden ser recogidos y su reflejo en la base de
datos para la que se crean y que debe ser diseñada, a su vez, para responder a
la estructura de los propios indicadores. De esta manera se contemplan indica-
dores provenientes de microdatos y otros procedentes de información sólo dis-
ponible de forma agregada. Igualmente se prevé disponer de datos de adminis-
traciones públicas y otros de encuestas e investigaciones. Algunos indicadores
se refieren a información que ya existe o que se espera conseguir a corto plazo,
mientras que otros se refieren a información deseable pero que de momento no
es posible ni fácil disponer.

El objetivo de los indicadores no sólo se refiere al análisis de la magnitud del


fenómeno violento, sino que pretende también evaluar el desarrollo de las medi-

Detección y abordaje de la violencia de género por el personal sanitario 11


Unidad didáctica 1: Hablar de la violencia de género

das adoptadas y los recursos existentes. Los indicadores referidos al “análisis y


magnitud de la violencia de género” se refieren no sólo a los específicos de la
violencia de género en los términos de la Ley Orgánica 1/2004, sino al contexto
más amplio de violencia y violencias en el ámbito intrafamiliar y doméstico que
se producen en nuestra sociedad.

Violencia de género intrafamiliar: magnitud del problema

(Fuente: Instituto de la Mujer: balance de la violencia de género en los seis


primeros meses de 2011 y datos de la Encuesta de opinión sobre la violencia de
género (agosto 2011)

Los resultados reflejan que la sociedad española rechaza de forma abruma-


dora la violencia contra las mujeres, ya que:

„ E
 l 91,2% de las personas encuestadas la considera “totalmente inacep-
table”.

„ P
 reocupa que el 1,4% de la población considere aceptable la violencia
de género “en algunas circunstancias”.

„ L
 as personas encuestadas afirman que las políticas para erradicar la vio-
lencia de género pasan principalmente por la educación (53,6%) y por el
aumento de la concienciación social (10,7%).

„ T
 odavía son muchas las personas que creen que la violencia se debe a
problemas psicológicos (72,5%) y al abuso de alcohol o drogas (53,7%).

„ S
 e confirma también que el 50% de las mujeres acudiría en primer lugar
a un familiar si sufriera violencia, en segundo lugar acudirían a las admi-
nistraciones (el 38,6% al juzgado, la policía o los servicios sociales).

„ Más del 67% considera que los recursos públicos de teleprotección y


las pulseras contra el maltrato mejoran la protección de las mujeres vícti-
mas de la violencia de género. En este sentido, los servicios de teleasis-
tencia cuentan con un número de usuarias a día de hoy de 9.479 (desde
2005 se han beneficiado 36.204 mujeres) y las pulseras contra el mal-
trato se han utilizado en 1.072 casos, de los cuales 693 están activos.

„ El 60% de la sociedad cree que las mujeres no denuncian por miedo y el
32% cree que las mujeres que no denuncian continúan con su agresor
por una dependencia emocional perversa.

12 Detección y abordaje de la violencia de género por el personal sanitario


Unidad didáctica 1: Hablar de la violencia de género

„ Por otro lado, el 88,4% de la población considera que el hecho de que


una mujer retire una denuncia no significa que ésta fuera falsa y el 64%
piensa que quienes alimentan el mito de las denuncias falsas contribu-
yen a que las mujeres sigan soportando violencia de género.

„ El 88% de la población manifiesta conocer la violencia de género a tra-


vés de los medios.

Bajan los homicidios, crecen las denuncias

El número de denuncias en el primer trimestre de 2011 (32.492) muestra


un incremento del 1,7% con respecto a los datos del último trimestre de 2010
(31.542). Estos datos suponen 361 denuncias diarias.

Hay que destacar que el 16,2% de las denuncias las realizan personas próxi-
mas a las mujeres maltratadas (familiares, amistades, vecinos), lo que demues-
tra que cada vez hay una mayor implicación de la sociedad al denunciar. De igual
forma hay que reseñar que el compromiso creciente de los profesionales sani-
tarios, ya que el número de denuncias a través del Parte de Lesiones supone ya
el 11,3% del total.

Otro dato en ascenso es el de las llamadas al 016, que también ha cre-


cido un 1,7% en los seis primeros meses del año 2011. En total, entre enero
y junio se han producido 33.176 llamadas, lo que supone de media 183 lla-
madas al día.

Según la Comisión de la ONU sobre la condición de las mujeres, al menos


una de cada tres mujeres en el mundo ha sufrido a lo largo de su vida un acto
violento de género (maltrato, violación, abuso, acoso…). Organismos internacio-
nales confirman que la violencia de género es la primera causa de muerte o inva-
lidez para las mujeres entre 15 y 44 años en todo el mundo, superando a otras
causas como el cáncer, la malaria o los accidentes de tráfico. La Unicef confirma
que una de cada cinco mujeres es víctima de una violencia específica; el Centro
Reina Sofía para el estudio de la violencia de género ubicado en la Comunidad
Valenciana calcula que entre 42 y 56 millones de víctimas sufren algún tipo de
violencia doméstica y que más de 5.000 mujeres mueren al año en Europa por
esta causa.

Víctimas durante el año 2011

(Datos de la Delegación de Gobierno para la Violencia de Género. Secretaría


de Estado para la Igualdad)

Detección y abordaje de la violencia de género por el personal sanitario 13


Unidad didáctica 1: Hablar de la violencia de género

Fuente: Delegación de Gobierno para la Violencia de Género 2011

14 Detección y abordaje de la violencia de género por el personal sanitario


Unidad didáctica 1: Hablar de la violencia de género

Fuente: Delegación de Gobierno para la Violencia de Género 2011

Detección y abordaje de la violencia de género por el personal sanitario 15


Unidad didáctica 1: Hablar de la violencia de género

1.5. Prevalencia en el ámbito sanitario


Muchos estudios sobre la violencia de género se realizan en el ámbito sani-
tario, tanto en los servicios de Atención Primaria como especializada, en los
servicios de Urgencias y en las consultas de Ginecología. La alta frecuencia de
estudios en este entorno se debe al mayor uso que realizan estas mujeres de
estos servicios.

Un estudio del año 2003 en tres comunidades autónomas (Andalucía,


Comunidad de Madrid y Comunidad Valenciana) mostró que el 32% de las muje-
res asistentes a las consultas de atención primaria habían sufrido algún tipo de
maltrato a lo largo de sus vidas, siendo este maltrato de tipo psicológico en un
30,8% de las pacientes, de tipo físico en un 14,3% y de tipo sexual en sus rela-
ciones sentimentales en un 8,9% de las pacientes; además en muchos de los
casos las mujeres experimentaban simultáneamente más de un tipo de maltrato.
El estudio indica también que un 17,8% de las mujeres sufrían malos tratos en
el momento de la investigación, de ellas el 16,9% sufrían maltrato psicológico,
5,4% físico y 3,7% sexual, dándose en muchos casos varios tipos de maltrato
simultáneamente.

Contestación de las mujeres sobre si han sufrido violencia de


género (VG)

Algún tipo de VG (actualidad) 17,8%

Física 5,4

Emocional 16,9

Sexual 3,7

Algún tipo de VG (alguna vez en la vida) 32,0%

Física 14,3

Emocional 30,8

Sexual 8,9

Otros estudios internacionales sobre la materia se centran en el ámbito de


los servicios de urgencias y calculan que las mujeres víctimas de malos tratos
pueden representar entre el 22% y el 35% de las que acuden a los servicios de
urgencias, y entre el 19% y el 30% de las atendidas por lesiones en este servicio.

16 Detección y abordaje de la violencia de género por el personal sanitario


Unidad didáctica 1: Hablar de la violencia de género

Esta prevalencia se debe a las secuelas que suelen dejar los malos tratos,
ya que más de la mitad de los ataques causan daño físico, llegando el 10% de
las víctimas a requerir hospitalización o tratamiento médico urgente. Además, el
75% de las mujeres identificadas como víctimas de malos tratos en las consultas
médicas volverán a sufrirlos en algún momento de sus vidas.

Entre los estudios más interesantes que ha realizado el Instituto de la Mujer


sobre violencia de género, encontramos la Macroencuesta sobre Violencia de
Género. El estudio, mediante la realización de encuestas a mujeres mayores de
18 años residentes en España, pretende cuantificar los actos violentos contra la
mujer en el ámbito doméstico, determinar la prevalencia del maltrato según las
características sociodemográficas de las mujeres y determinar las secuelas físi-
cas y psicológicas del maltrato. Hasta el momento se han realizado tres Macroen-
cuestas sobre violencia de género, la primera en el año 1999, la segunda en el
año 2002 y la tercera en el año 2006.

Para lograr sus objetivos la Macroencuesta distingue dos tipos de maltratos:

MALTRATO “TÉCNICO” (Tipo A): Mujeres que no se autoconsideran maltra-


tadas, pero que por sus respuestas dadas se puede considerar que han sufrido
situaciones de maltrato.

MALTRATO “DECLARADO” (Tipo B): Mujeres que reconocen haber sido


maltratadas durante el último año, autoclasificándose como maltratadas.

Tomando los datos del Informe de resultados de la III Macroencuesta sobre


la violencia contra las mujeres, 44 el 3.6% de las mujeres mayores de edad
residentes en España declaró haber sufrido malos tratos durante el último año,
por alguna de las personas que conviven en su hogar, o por su novio, aunque no
conviviese con la mujer (maltrato tipo B). Este porcentaje representaba 677.352
mujeres. Por otro lado, el 9.6% de las mujeres mayores de edad residentes en
España, fueron consideradas en la Macroencuesta como “técnicamente” mal-
tratadas (maltrato tipo A), lo que representaba 1.786.978 mujeres.

Macroencuesta de violencia de género 2011

Para establecer la magnitud de la violencia de género en España, el Instituto


de la Mujer promovió tres macroencuestas anteriores correspondientes a 1999,
2002 y 2006. La serie continúa con la de 2011 realizada en esta ocasión en cola-
boración con el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS).

A diferencia de las anteriores, elaboradas por teléfono, en esta ocasión las


entrevistas han sido presenciales, sobre una muestra de 8.000 mujeres mayores
de 18 años.

Detección y abordaje de la violencia de género por el personal sanitario 17


Unidad didáctica 1: Hablar de la violencia de género

La Macroencuesta sobre violencia de género 2011 realizada por la Delega-


ción del Gobierno para la Violencia de Género refleja un mayor posicionamiento
crítico por parte de las mujeres al reconocerse como víctimas e identificar com-
portamientos violentos, y un incremento significativo -el 85,7%- de aquellas que
salen de la violencia. Este porcentaje es el resultado de la diferencia entre aque-
llas mujeres que han sufrido violencia alguna vez en su vida pero no en el último
año. En la macroencuesta de 2006 eran el 4,2%, y en 2011 el porcentaje de las
que salen de ese entorno violento asciende hasta el 7,8%.

Los datos son los siguientes:

„ C
 asi 600.000 mujeres reconocen una situación de maltrato, una cifra que
responde a la mayor conciencia crítica e identificación de la violencia.

„ L
 a macroencuesta, realizada en esta ocasión a través de entrevistas pre-
senciales, mejora la metodología utilizada hasta el momento y ofrece un
diagnóstico más riguroso y certero de las dimensiones del problema.

„ 840.000 menores han estado expuestos a la violencia de género.

„ L
 a tasa de homicidios con respecto a las mujeres que han sufrido violen-
cia en los últimos años se reduce más del 33%.

Macroencuesta Extrapolación de
2011 datos

TOTAL MUJERES de
18 y más años según
100,0 19.767.943
Padrón Municipal
a 1 de enero de 2010

Maltrato de género NUNCA 89,2 17.633.005

Maltrato de género
10,8 2.134.938
alguna vez en la vida

* Maltrato de género
3,0 593.038
en el último año

* Maltrato de género
alguna vez en la vida 7,8 1.541.900
pero NO en el último año
Fuente: Instituto de la Mujer

18 Detección y abordaje de la violencia de género por el personal sanitario


Unidad didáctica 1: Hablar de la violencia de género

El 89,2% de las mujeres no ha sufrido maltrato nunca. Del 10,8% que han
sido víctimas alguna vez en su vida, el 3% lo ha sido en el último año. Estos
porcentajes equivalen a que en la actualidad casi 600.000 mujeres están en situa-
ción de maltrato de las 2.134.000 que lo han sufrido alguna vez en la vida. Y de
ellas, el 7,8%, es decir, 1.541.000, ha salido de esa situación. Esta circunstancia
es la que más se ha incrementado en los últimos años, concretamente un 85’7%
con respecto a 2006, lo cual indica la reacción de las mujeres y de la sociedad
para salir de la violencia.

El aumento de mujeres que reconocen ser o haber sido víctimas de violencia


de género responde a un mayor reconocimiento de las situaciones que constitu-
yen violencia de género como “paso necesario a la hora de tomar la decisión de
reaccionar a la violencia y denunciar”.

Porcentaje de
Macroencuesta Macroencuesta Macroencuesta Macroencuesta
variación
1999 2002 2006 2011
2006 - 2011

TOTAL MUJERES de
18 y más años según
100,0 100,0 100,0 100,0 -
Padrón Municipal
a 1 de enero de 2010

NUNCA
94,9 93,8 93,7 89,2 -4,8
Maltrato de género

Maltrato de género
5,1 6,2 6,3 10,8 71,4
alguna vez en la vida

* Maltrato de género
en el último año
2,2 2,3 2,1 3,0 42,9

* Maltrato de género
alguna vez en la vida 2,9 3,9 4,2 7,8 85,7
pero NO en el último año

Fuente: Instituto de la Mujer

Por otro lado, la tasa de homicidios con respecto a las mujeres que han
declarado ser maltratadas en el último año disminuye en un 33,27% en relación
con 2006. También se ha destacado que “los datos muestran que la sociedad
está cambiando, que esos cambios están reduciendo la violencia de género, y
que las políticas e iniciativas puestas en marcha están ayudando a la erradicación
de la violencia de género. Ahora más que nunca debemos continuar trabajando
desde la unidad”.

En ese sentido, otro de los datos recogidos en la macroencuesta refleja


la cantidad de víctimas que se decidieron a denunciar: entre las mujeres que
sufrieron maltrato y han salido de él, denunciaron un 26’6% y entre las que lo
sufren actualmente ese porcentaje asciende hasta el 29’7%. La comparación

Detección y abordaje de la violencia de género por el personal sanitario 19


Unidad didáctica 1: Hablar de la violencia de género

entre ambos datos indica que actualmente se denuncia más, aunque ha sido la
separación de su agresor la forma en que mayoritariamente han dejado atrás la
violencia.

En la macroencuesta se destaca el aumento de mujeres que han salido de la


violencia y apunta el mensaje de que “la violencia no es una cadena perpetua, la
violencia se supera, hay otras mujeres que lo han logrado, que lo están logrando.
Y ahora no tienen que hacerlo solas”.

Menores

La proporción de mujeres víctimas de violencia de género que tienen hijos


o hijas es del 77% y la media de hijos e hijas menores por mujer maltratada es
de 2. La macroencuesta extrapola los datos y cifra en 840.000 los menores que
han estado expuestos a la violencia en el último año y en 517.000 los hijos e hijas
que han sufrido agresiones físicas directas dentro de un contexto de violencia
de género.

Cuando usted sufrió maltrato


¿sus hijos/as menores de 18 años
Violencia padecieron directamente situaciones de
de violencia en algún momento?
género
TOTAL SÍ NO

Total 100 54,7 45,3

Sí en el último año 100 61,7 38,3

No en el último año 100 51,9 48,1

Fuente: Instituto de la Mujer

20 Detección y abordaje de la violencia de género por el personal sanitario

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