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IMPORTANCIA DE LA AUTOESTIMA PARA LOS HIJOS

1. ¿Qué es la autoestima?
La autoestima se refiere a la valoración, percepción y apreciación que una
persona tiene de sí misma. Es la forma en la que nos vemos, nos aceptamos
y nos sentimos acerca de nosotros mismos.

2. Niveles de autoestima.
Los diferentes tipos de autoestima son la autoestima alta, la autoestima baja.

2.1 Alta autoestima.


Tener alta autoestima significa tener una valoración positiva y realista de
uno mismo, aceptando tanto las fortalezas como las debilidades y actuando
en consecuencia para alcanzar objetivos y mantener relaciones saludables.

2.2 Baja autoestima


Tener baja autoestima es tener una percepción negativa de uno mismo,
sentirse inferior a los demás y tener poca confianza en las propias
habilidades y capacidades.

3. Autoestima en la adolescencia.
Durante la adolescencia es habitual que los jóvenes presenten problemas de
autoestima. Es un periodo de crecimiento y desarrollo personal, la familia y
los medios de comunicación ejercen una fuerte influencia en la valoración
propia de cada individuo.
No se trata únicamente del valor que le da a la experiencia física, sino
también a las propias capacidades y habilidades
La autoestima que tenemos influirá en casi todo lo que uno hace, como por ejemplo en la
toma de decisiones, acciones, aspiraciones, gustos y muchas otras cosas que forman el
comportamiento, la felicidad y la vida de una persona.

 La ira, el resentimiento y los celos no cambian el corazón de otros, sólo cambia


el de uno mismo.
 Un diamante no empieza siendo una piedra preciosa pulida y brillante. Una vez
no fue nada especial, pero con suficiente presión y el tiempo, se convirtió en
algo espectacular. Yo soy ese diamante y tú eres ese diamante.
 No existe una cura mágica para hacer que todo lo que no te gusta desaparezca
para siempre. Sólo hay pequeños pasos hacia arriba; un día más tranquilo, una
risa inesperada, un espejo que ya no importa.

PREGUNTAS QUE DEBERÍAS HACER A TUS HIJOS


 De todas las cosas que estás aprendiendo, ¿cuáles son las que crees más
útiles para tu futuro?
Esta pregunta les hará reflexionar sobre el hecho de que algún día serán adultos.
Además, si aprenden a valorar lo que están aprendiendo, seguramente se sentirán
motivados para disfrutar aún más del cole.

 ¿Qué sabes hacer que podrías enseñar a otros?


Esta pregunta sin duda les hará sentirse importantes y se darán cuenta de las cosas
especiales que saben hacer, cultivando su auto estima. Pero también les hará pensar
que la vida no gira en torno a ellos, sino que en este mundo estamos todos y debemos
ayudarnos mutuamente.

 ¿Cuáles de tus amigos piensas que me gustará más y por qué?


Sabemos que los amigos son muy importantes y como dice el refrán, “dime con quien
andas y te diré quién eres,” es necesario que conozcas con quien juega y de quien se
rodea.

 ¿Qué de lo que haces te produce más felicidad?


Sea cual sea su respuesta, el tener que pensar en ello, les hará ver qué les produce más
sonrisas, risas y bienestar y si tienen tu apoyo, seguirán cultivando ese hobby o
actividad.
PAUTAS DE ACTUACIÓN PARA LOS PADRES
LA SEGURIDAD NACE DEL AMOR. El ambiente de amor en el hogar es el humus necesario
para que una persona crezca aprendiendo a confiar en sí misma.
NO BASTA QUERER A LOS HIJOS: ES NECESARIO QUE ELLOS SE SIENTAN QUERIDOS.
Porque el amor no se sobreentiende: necesitan oír, sentir y disfrutar de nuestras muestras de
afecto, aliento o reprobación; aun cuando las cosas estén bien hechas, hay que estimularlos.
Pero ¡cuidado! Si están mal, no debe adulárseles.
ES NECESARIO REVISAR NUESTRAS EXPECTATIVAS COMO PADRES. A veces, se nos
cuelan sentimientos no del todo limpios. Queremos cosas para nuestros hijos porque nosotros
no las pudimos tener, o deseamos que destaquen como primeros de clase para poder satisfacer
nuestra vanidad ante la sociedad.
DEBEMOS BUSCAR CAMPOS DE ÉXITO PARA NUESTRO HIJO/A DE MANERA QUE TENGA
FRECUENTE CONTACTO CON EL TRIUNFO. Todas las personas tenemos aspectos positivos,
cosas que sabemos hacer bien. Si tu hijo/a es un artista en trabajos manuales, no le restes
importancia recordándole su desaprobación en matemáticas. O si es servicial en las cosas de la
casa, no le recuerdes cada vez que te echa una mano que más le valdría tener el mismo empeño
en los estudios.
CUANDO LAS COSAS NO ESTÁN BIEN HECHAS HAY QUE DECIRLO. Pero, en cualquier
caso, critica la “falta” no la persona. Es muy distinto decir a un hijo “eres un inútil” a decirle
“eso no lo has hecho bien”:
TRAZA METAS ACCESIBLES A LAS POSIBILIDAES DE TU HIJO/A, DE MODO QUE
TENGA QUE LUCHAR PARA CONSEGUIRLAS. Pero no apuntes ni excesivamente alto ni
demasiado bajo. También aquí la política de los pequeños pasos llega lejos. Tampoco quieras
empezar a darle responsabilidad recién cuando llega a la mayoría de edad.
RESPONSABILIDAD Y LIBERTAD SON CONDICIONES NECESARIAS PARA IR CREANDO
PERSONAS MADURAS. Cuando triunfe, retírate discretamente de la escena sin recordarle el
porcentaje que en su mérito te corresponde; pero mantente cercano en los fracasos, para
poder ayudarle a reemprender la marcha.
QUE TUS ECHOS NO CONTRADIGAN TUS PALABRAS. Trata de ser coherente. Y si para ti
los hijos son lo más importante “pasa el tiempo” con ellos. Olvida todo lo que tienes entre manos
cuando quieren hablar contigo…Y no hagas como aquella madre que ante el dibujo que su joven
hija le mostraba con verdadera ilusión, le sonreía y plantaba dos besos sonoros a la vez que
echaba la hoja en el tacho de basura…Sé coherente en tus acciones y palabras.
NO EXAGERES LAS DIFICULTADES PARA EVITAR PELIGROS. Recuerda que ni el pánico
ente el fuego, ni la obsesión de peligro en el tránsito, ni el vagabundo de la vuelta, cuando se
exageran son buenos. Al contrario, se convierten para el adolescente en fuente de ansiedad.
DÉJALO CRECER: TAMPOCO LA EXCESIVA DEPENDENCIA AYUDA A FORMAR PERSONAS
MADURAS. El adolescente necesita establecer un grado de autonomía e identidad para asumir
los roles y responsabilidades de los adultos. Elegir su ropa, amigos, le ofrece una medida de lo
que puede hacer por sí mismo.
1. ¿Cuáles son los mayores temores que tengo al educar a mis
hijos?

2. ¿En qué forma contribuyo a desarrollar la autoestima en mis


hijos?

3. ¿Qué nivel de autoestima crees que tiene tu hijo?

Anoten una V o una F según consideren que la frase es verdadera o


falsa, Casi siempre mantengo el control de todo en mi hogar: Ordeno y si no
01 en los casilleros de la columna que corresponda.
se cumple,
¡Reflexionen amenazo.
bien!
Me preocupo solo porque mi hijo tenga los sentimientos apropiados.
02 Suelo decirle con frecuencia: “Si haces esto, te vas arrepentir…Te
puede pasar…”.
Trato de demostrar a mi hijo, todo lo que he aprendido a lo largo de la
03 vida. Le digo con frecuencia: “Cuando yo tenía tu edad…”, “¿De qué
sirve esta larga experiencia…?”
Doy soluciones a todas las necesidades de mi hijo. Resuelvo sus
04
problemas.
Pretendo probar que tengo la razón porque mi hijo, generalmente, está
05 errado. “Estás completamente equivocado”. “No piensas, ni actúas
con claridad”.
Cuando manifiesto a mi hijo que estoy en lo cierto, generalmente, lo
06 hago ridiculizándolo. Uso el apoyo, el sarcasmo, la ironía o los
chismes, quizá hasta lo humillo.
Adivino los comportamientos sin escuchar primero a mi hijo. “Te
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sientes así, porque todas tus actitudes son equivocadas”.
No doy importancia a los sentimientos de mi hijo y pretendo demostrar
08
que todo está bien, cuando en realidad no lo está.
09 Estoy seguro que levanto la autoestima de mi hijo.
10 Parece que no estoy elevando la autoestima de mi hijo.

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