Grupo ISIMA

Plantel Chilpancingo

Materia: ESTRUCTURA
SOCIOECONÓMICA DE MÉXICO
MTRA. NOHEMÍ OCAMPO SÁNCHEZ

Trabajo: Análisis

Alumna: Edith Vázquez Miranda

Chilpancingo, Gro 10 marzo 2024

 INTRODUCCIÓN

Entendemos que las relaciones de clases son un componente fundamental en la

comprensión de las estructuras sociales y económicas en cualquier sociedad. Estas
relaciones delinean las formas en que los individuos y grupos interactúan dentro de
un sistema socioeconómico, definiendo roles, privilegios y acceso a recursos. Sin
embargo, para entender completamente las relaciones de clases, es crucial analizar
cómo se entrelazan con los modos de producción, es decir, los métodos y sistemas
a través de los cuales se organiza y lleva a cabo la producción de bienes y servicios
en una sociedad.

Desde los principios de la civilización, los humanos han adoptado distintos modos
de producción, desde la recolección y la caza hasta la agricultura, la industrialización
y más recientemente, la era de la información. Cada modo de producción ha
generado y mantenido relaciones de clases únicas que han influido profundamente
en la estructura social y económica de su tiempo.

El presente ensayo analiza la relación entre el desarrollo económico y las clases

sociales, tema muy complejo que ha sido objeto de debate en la teoría económica,
la sociología y otras disciplinas
.
Al entender esta relación dinámica, podemos obtener una visión más clara de las
injusticias y desigualdades arraigadas en nuestras estructuras sociales, así como
también de las posibilidades de transformación y cambio hacia sistemas más
equitativos y justos.
 CONTENIDO

El contenido principal del artículo “Relaciones de clases y modos de producción:

teoría y análisis” (Bajoit, 2014); muestra su enfoque sobre las sociedades en
términos de clases sociales y de modos de producción en el siglo pasado y que al
día de hoy han cambiado considerablemente.
Asimismo, es importante considerar que se debe abordar un aspecto central en la
sociología y la economía política, ofreciendo un entendimiento profundo de la
estructura y dinámica de las sociedades humanas.

Tomando en cuenta el contexto histórico, el análisis de las relaciones de clases y

los modos de producción tiene sus raíces en el pensamiento clásico de teóricos
como Karl Marx y Max Weber. Marx ( (Berlanga, 2023), en particular, desarrollaron
las polémicas teorías de la lucha de clases y la importancia de los modos de
producción en la configuración de la sociedad. Este contexto histórico es crucial
para comprender cómo estas ideas han evolucionado y se han adaptado a
diferentes contextos sociales y políticos a lo largo del tiempo y han tomado algunos
gobiernos los conceptos básicos no solo para un modelo económico, sino como una
forma de ejercer sus facultades como gobernantes.

Estos modelos económicos y políticos del Capitalismo y Comunismo aún siguen

vigentes en nuestra actualidad, —y que obligadamente siempre existirán— dando
pie a las clases sociales en las sociedades que producen más riquezas de las que
consumen. Y también el caso contrario de las riquezas que explota el Estado y limita
a sus ciudadanos.

Las clases sociales son los actores que realizan las tareas de producir, apropiarse
y gestionar la riqueza económica de las comunidades humanas. Por lo tanto, son
actores particularmente importantes ya que se preocupan de resolver el primero de
los grandes problemas vitales de la vida en común: tener suficientes bienes y
servicios para satisfacer todas las necesidades de una comunidad, cualquiera que
sea. Lamentablemente, esta actividad tan esencial, más que dar lugar en una
colaboración y un buen entendimiento, genera terribles conflictos, luchas
sangrientas entre clases sociales, profundas crisis sociales e incluso, revoluciones
políticas.

Por lo tanto, debe ser fundamental para cualquier comunidad que sepa quiénes son
las clases sociales que actúan en ella, cómo se produce allí la riqueza, quiénes se
apropian de ella y cómo se gestiona.

Las relaciones de clases describen cómo los individuos y grupos están organizados
en una sociedad en función de su relación con los medios de producción y sus roles
en el proceso de producción. Este análisis revela las divisiones de poder, privilegio
y acceso a recursos dentro de una sociedad y cómo estas divisiones influyen en la
vida de las personas.

Se entiende que los modos de producción se refieren a las formas en que se

organiza y lleva a cabo la producción de bienes y servicios en una sociedad. Desde
el feudalismo y el esclavismo hasta el capitalismo y más allá, cada modo de
producción tiene sus propias características y relaciones de clases específicas que
definen la estructura socioeconómica de la sociedad.

Tenemos que precisar también que, en ciertos casos, la necesidad vital y legítima
de la clase P puede haber sido creada por una manipulación psicológica de la clase
G. Esta última puede utilizar los recursos que posee para que la clase P le obedezca
y trabaje para enriquecerla (modo de producción del capitalismo neoliberal).

Si dos categorías sociales de individuos entran en relación aceptando estas

premisas, la práctica de sus intercambios los convertirá en una clase P y una clase
G. Cualquier relación de clases (o modo de producción) reúne dos actores (clase P
y clase G) cuya cooperación tiene como finalidad la producción, la apropiación y la
gestión de riqueza económica, y cada uno de estos actores aporta su contribución
a estos fines: la clase P producirá o generará bienes o servicios de los que se
apropiará la clase G; vendiendo o intercambiando estos bienes o servicios, la clase
G podrá, por un lado, remunerar el trabajo de la clase P y, por otro lado, tener un
excedente para cubrir sus otros costos (los costos de otros factores de producción)
y pagar su propia remuneración.

Sin embargo, esta relación siempre generará desigualdades entre ellos porque se
basa en una coacción: la clase P debe aceptar las condiciones de la clase G porque
de ella depende su supervivencia. Por lo tanto, la clase G ejercerá su dominación
sobre la clase P y las remuneraciones de ambos serán desiguales.

En cuanto al “Modo Comunista de Producción”: tenemos entendido que el modo de

producción de los bienes materiales basado en la propiedad comunista de todo el
pueblo sobre los medios de producción, en fuerzas productivas desarrolladas
omnilateralmente, que aseguran la abundancia de bienes de consumo y su
distribución según las necesidades.

El modo comunista de producción se va estableciendo en el proceso de la

edificación del socialismo y del comunismo, fases respectivamente inferiores y
superior de la sociedad comunista. La creación de fuerzas productivas altamente
desarrolladas, indispensables para obtener la abundancia de productos y pasar a la
aplicación del principio comunista de la distribución es inconcebible sin
transformaciones cualitativas de todos los factores materiales humanos de la
producción.

Ello significa, ante todo, construir la base material y técnica de la sociedad, basada
en el amplio establecimiento de procesos productivos automáticos en todas las
ramas de la economía nacional, con la consiguiente eliminación del trabajo manual,
poco productivo; significa alcanzar un rendimiento superior del trabajo social.

En consecuencia, para analizar cualquier modo de producción, sea el que sea y

saber cuáles son las clases sociales y qué se juega en sus relaciones.
En resumen, el tema "Relaciones de clases y modos de producción: teoría y
análisis" proporciona una base sólida para comprender la estructura y dinámica de
las sociedades humanas, así como para abordar las desigualdades sociales y
económicas que caracterizan muchas de estas sociedades. Su análisis crítico es
fundamental para promover un mayor entendimiento y una acción efectiva hacia la
justicia social y económica.

CONCLUSIÓN

Cuando las clases cambian, los modos de producción también cambian y, por lo
tanto, las luchas de clases y sus reivindicaciones también deben cambiar.
En un mundo donde las desigualdades de desarrollo siguen más à menos las
mismas que hace 70 años pero con la balanza inclinada más al modelo socialismo
(comunismo) que ejerce un control autoritario del Estado hacia sus gobernados.
Desde el momento en que una colectividad humana reposa sobre una "división
social del trabajo", ella comporta necesariamente clases sociales, relaciones de
clases y un modo de producción, sin los cuales no podría resolver el primer
problema vital de la vida colectiva (producir más de lo que consume) y no
sobreviviría. Concluyó diciendo que tanto el capitalismo como el socialismo
representan modelos económicos con enfoques y valores diferentes hacia la
propiedad, la distribución de recursos y el papel del Estado en la economía. Cada
uno tiene sus ventajas y desafíos, y la elección entre ellos a menudo depende de
las preferencias políticas, culturales y sociales de una sociedad en particular.

REFERENCIAS:
 (Bajoit, 2014)
 (Bank, 2018)
 (Berlanga, 2023)
 (Sánchez, 2022)