9 FRASES QUE AL INSTANTE NEUTRALIZARÁN A CUALQUIER GROSERO

Cuando alguien es grosero contigo, es muy tentador responderle del mismo modo. Sin embargo,
es posible responder a las preguntas sin tacto y a los comentarios inapropiados sin perder el control.
“GRACIAS”
La simple palabra “gracias“ tiene un efecto verdaderamente mágico. Diciendo ”gracias" en respuesta
a una grosería, le muestras a la otra persona que no estás enojado. La ira y la grosería son síntomas
de inmadurez y tú no eres así. Reconoce lo inadecuadas que son las palabras de tu interlocutor y evita
reaccionar mal a ellas.
“APRECIO TU PUNTO DE VISTA”
Esta frase demuestra que estás dispuesto a continuar la conversación si la otra persona la mantiene,
pero con respeto hacia ti. Si la tosquedad y rudeza continúa, entonces sigue los siguientes consejos.
“CREO QUE DEBEMOS DEJAR ESTA CONVERSACIÓN HASTA AQUÍ”
Cuando estás a punto de salirte de tus casillas y acabar diciendo cosas desagradables como respuesta a las
groserías (o peor todavía, llegar a las manos), termina la conversación. De esta manera no tendrás que
arrepentirte de haber dicho lo que te vino primero a la mente por causa de la ira. El grosero, a la próxima,
va a pensarlo dos veces antes de decir algo ofensivo.
“¿POR QUÉ ME DICES ESO? ¿QUÉ PRETENDES CONSEGUIR?”
Estas preguntas son especialmente eficaces cuando estás en un grupo de personas y una de ellas está
tratando de ponerte en una posición incómoda o sacarte de tus casillas. Viéndote a ti respirar
tranquilidad, seguridad y paz, el grosero se perderá y empezará a pensar en lo que acababa de decir
y por qué lo hizo. Gracias a esto, podrás llevar cualquier conversación a un debate maduro sobre el tema
que causa controversia.
“TUS PALABRAS ME OFENDEN”
Explícale a tu interlocutor qué, exactamente, no te gusta de sus palabras y aquello que, concretamente,
te ofende. De esta manera te protegerás de observaciones ásperas e inapropiadas en el futuro.
“TIENES RAZON”
A la mayoría de nosotros nos resulta difícil reconocer que el interlocutor tiene la razón. Si crees
que en las palabras de un grosero existe un poco de verdad, aunque dichas de una forma desagradable,
díselo. Lo más probable es que, con esto, se termine la conversación sin haber llegado a convertirse
en un conflicto.
“¿SIEMPRE ERES TAN NEGATIVO? ¿DISFRUTAS DICIENDO ESTAS COSAS TAN
DESAGRADABLES?”
A menudo, un grosero desconoce que dice cosas ofensivas. Cuando llamas su atención para que
reconsidere el modo en que suenan sus palabras, lo motivarás a pensar en la hostilidad que genera
en los demás y así comenzará a moderar todo lo que dice.
“TE QUIERO”
Usa esta frase sólo con tus seres queridos (amigos, padres, cónyuge) que se encontraron de repente
en un mal estado de ánimo y decidieron dar rienda suelta a su mal humor y descargarlo
en ti. Recuérdales que los amas. Verás que rápidamente la ira se irá desvaneciendo y girará
la conversación en una dirección más positiva.
SONRIE SINCERAMENTE
Una sonrisa sincera en respuesta a una grosería es una manera universal de poner en su lugar
a un grosero. Lo que menos espera es una reacción de este tipo. En el peor de los casos, se apresurará
a retirarse del lugar. En el mejor, comprenderá lo absurdo de su conducta, pedirá disculpas y se unirá
al momento de diversión.