Está en la página 1de 5

a 10 largo de la historia muchos se movilizaron y corrieron grandes

riesgos en cletnan(la de este tipo de régimcn y sus derechos y liberta-

des. Mås allå cle esperanzas a vcces mfticas sobre otros beneficios que
conllevarfa su logro, la demanda por csas libertades y derechos fue el

motor de las grandes movilizaciones que frecuentemente han precedido,


o acornpafiado, la inauguraci6n de la democracia. La quinta y 61tima
razbn también surge dc implicaciones empiricas y normativas. Los
datos de numerosas encuestas asi como de innumerables observacio-
nes sugieren que, sean cuales fueren los significados adicionales que
se adjudiquen al término, cuando hablan de "democracia" muchos
en muchos pafses incluyen ciertos derechos y libertades polfticas,
junto con elecciones que, a su juicio, son razonablemente limpias.
Es por esta raz6n que en el lenguaje corriente, en el de politicos y
periodistas, asi como de acuerdo con diversos textos académicos, la
existencia de esos atributos es suficiente para llamar "democråtico" a

un pafs. Esto implica tal connotaci6n normativa positiva que es una


sinécdoque; es decir, designa al todo, el pafs, con un atributo de una
de sus partes, el régimen.

1.4.La agencia y la apuesta instituciohalizada


Vimos que en un régimen democråtico cada votante dispone de por
10 menos de seis opciones de voto. Pero éste no es el finico derecho
atribuido por la democracia politica a sus ciudadanos. Cada uno tiene
ademås el derecho de intentar ser elegido. Que quiera o no ejercerlo
es irrelevante en relaci6n al hecho de que, al tener derecho cle ser

elegido/a, cada ciudadano/a dispone cle la autoridad potencial y la

enorme responsabilidad de participar en decisiones de gobierno vin-

La conclusibn a que Ilegan Klingeman y I-Iofferbcrt 1998: 23 en su estudio sobre


encucstas rcalizadas en palscs poscomunistas se aplica también a otras regiones: "En
1989 y 1991 los habitantcs dc los paises (le Europa central y oriental no tomaron
Ias callcs cn busca dc comida, sino dc libertad". Sobre Ia base de otro estudio que
examin6 un amplio banco de datos dc encuestas,Wc17.cI e Inglehart 1999 concluyen
que las "aspiraciones dc libertad*' son centrales para la mayorfa de los encuestados en
las nucvas democracias; ver cn el mismo sentido Rose y Mishler 1996.
O I Donne II
(Guillern10

culantcs sobrc cl territorio (lc un estado, incluyendo las que


la aplicacibn, 0 de aplicacibn, (lc la coerci6n ffsica.

dc las libertades que discutf en la secci6n


dc estos derechos y
taclores
preccdcnte son ciudadanos/as politicos. Por su parte, estos derechos
libertades definen al ciudadano/a como un agente. Esta es una definici6n

de base legal; esos derechos y libertades son asignados por el Sistema

legal de una democracia politica a todos los ciudadanos/ as que habitan

en el territorio delimitado por un estado, con algunas excepciones que


también son definidas legalmente. Esta asignaci6n se refiere a todos 10s
ciudadanos/as, independientemente de su condici6n social y de carac_
terfsticas adscriptivas, salvo su edad y nacionalidad. Agencia implica la

presunci6n de capacidad de tomar decisiones consideradas sUficiente- ill

mente razonables como para tener importantes consecuencias, tanto

en términos de la agregacibn de los votos como del ejercicio de cargos


litic

gubernamentales y/ o estatales. Los individuos pueden no ejercer tales 10

derechos y libertades, pero el sistema legal de un régimen democråtico


construye a todos como igualmente capaceOe ejercitamtanto -estos {I.lte

derechos y libertades como sus obligaciones correspondientes. Laatri-

buci6n legalmentexespaldada y universalista34 de la agenciaefectuada


por la democracia politica es absolutamente crucial, en si

mismo y por sus måltiples repercusiones, sobre las que volveré a 10 cor

largo de este libro.

Tal vez porque esta atribuci6n de la agencia se ha hecho tan co-


rriente en los pafses del Noroeste, tendemos a olvidar cuan reciente y

extraordinario es el logro por ella implicado. Vista desde este ångulo,


la democracia politica no surge de alg6n tipo de consenso, o elecci6n
individual, o contrato social, o proceso deliberativo; es resultado de

una apuesta institucionalizada. 'Por esta apuesta me refiero a que el

QYstema lega13S asigna a cada individuo ciertas libertades, derechos Y

Aunque pucde scr denominado un "universalismo acotado".Tal como veremos en


el capitulo lv cuando discuta Ia naci6n y sus referentes, cl mismo se limita a quienes
comparten el atributo de la ciudadanfa dentro del territorio delimitado por un cstadO'

En realidad, una afirmaci6n mås complicacia pero precisa diria "el sistema legal dc un
estado que alberga un régimen democråtico". vuelvo sobre esto en el capftuloV•
Capitulo J. El réginu:n detnocråtico (o democracia politica) y la ciudadania.

obligaciones, incluycndo los in)plicados por cl régimen democråtico.


Esa asignaci6n es Qlnivcrsalista: se espera que cada uno reconozca que,
con ciertas exccpciones detalladas por el propio sistema legal, todos
gozan de los misrnos derechos politicos, libertades y obligaciones que
cada uno tiene. éQué es la apuesta? Es que, en una democracia, cada
ego debe aceptar que cada ciudadano/a puede participar —con su
voto y eventualmente siendo elegido/a— en el acto, elecciones
limpias, que determina quién los gobernarå durante un tiempo.
Esta-esA1nai apuesta institucionalizada porque es impuesta a cada
40independientemente de suxoluntad: ego debe asumir el riesgo,

es decir aceptar la apuesta, aun cuando crea que permitir a ciertos


individuos votar o ser elegidos es riesgoso o un grave error.Æstæ
37
es la apuesta institucionalizada: ego debe correr ese riesgo porque
es sancionado y respaldado Pör el sistema legal de una democracia
politica. Insisto: ego puede objetar fuertemente que se concedan a
alter las mismas libertades y derechos a votar y ser elegido con los
que él cuenta; pero esto no estå librado a su discreci6n, es un hecho
legalmente institucionalizado. Por lugar de nacimiento o naciona-
Iidad, y en muchos sentidos por el s610 hecho de residir en un pais
determinado, ego y alter adquieren derechos y obligaciones tanto
con respecto al resto de los individuos como al estado.

Hemosporlo tantodescubjertootncarmcteristica-especificæde la
democraciæpolfticacontemporåneazes@finicoxégimenxesultante de
unaapuestæinstitucionalizada„universalista einclusiva.Todos los demås
regmenes, celebren o no elecciones, imponen algån tipo de restricci6n
a esta apuesta o la suprimen. Nuevos o viejos, mås allå de su momento
fundacional los regimenes democråticos son resultado de esta apuesta y
estån profundamente marcados por ella. Aunque en si misma la apuesta

Adcmås dc la salvedad introducida en la nota al pie 21 esta afirmacibn requiere

Otra: aunquc sea vålida para las libertades y derechos politicos, no 10 es en térmi-
nos de legislaci(3n civil y social promulgacla tenicndo en cuenta a diversos sectores
socialcs subordinados.
37
En cl capitulo siguientc veremos, sin embargo, que en los paises del Noroeste este
riesgo flic atcmperado por diversos mecanismos institucionales.

41
Guillerrno O'Donnell

no unplica obligacibn tnoral (le accptar un régimen democråtico

(leja dc ser una exigentc expectativa, entramada en el Sistema legal y

respaldada por cl estado.

Esta expectativa cstablccc paråmetros amplios, pero operativamente 10

importantcs, para la racionalidad individual: el (lesconocimiento, viola.

cibn o negacibn de los derechos y libertades que la apuesta asigna a alter


normalmente genera consccuencias negativas para quien asi procede

En las interacciones de cgo con alter, al menos en el åmbito delimitado


Ctla11t0
por elecciones limpias, es en principio en interés de ego reconocer
respetar los derechos de alter. Este interés puede ser robustecido por
descen
motivos altruistas o colectivos, pero en sf mismo implica la obligaci6n
sustentada legalmente de reconoccr a los demås como ciudadanos/as,
Ilevar a

portadores de derechos y libertades idénticos a los de ego. En el capitulo


VII veremos que, en un contexto social propicio, éste es el germen de
las redes dia16gicas que moldean una esfera påblica consistente en re-
dela na
conocimientos mutuos basados en la asignaci6n de derechos, libertades
por no]
y obligaciones a individuos construidos legalmente como ciudadanos/
satisfac
as-agentes.
(lltimo
Procedo ahora a enunciar dos puntos que son consecuencia de la

que es
discusi6n precedente. Uno es la definici6n de ciudadania politica como
explici
correlato individual del régimen democråtico. Esta consiste en
liberta

Individuos que cucntan con la asignaci6n legal de los derechos y obli-


danle
gaciones correspondicntes implicados por la apuesta democråtica; es
Indifi
decir, participar cn clecciones limpias, votar y ser elegido y tomar parte d

cn actividades afines, junto con algunas libertades concomitantes (tales

como las dc expresi6n, asociaci6n, acceso a libre informacibn y libre

movimicnto) neccsarias para el ejercicio efectivo cle esos derechos,

Esta definici6n me permite complementar la genérica de régimen


que ofrecf anteriormente. Uln régimen democråtico, ademås de las

caracterfsticas generales ya enunciadas, es uno en el que

38

Pero es un s61id0 punto de particla; (lejo la discusi6n de la jUstificacibn de la de-

42
Los ciudadanos/as ticncn derccho sancionado y rcspaldado legalmente de

participar cn clccciones limpias quc dccidcn, por mcdio de compctencia entre

partidos politicos u organizaciones cquivalcntcs, quiénes ocuparån los cargos

gubcrnamcntalcs mås altos en (al menos) cl nivel nacional, e intentar, si asi

10 dcscarcn, ser elcctos/as para y disfrutan, durantey entre dichas


esos cargos,

elcccioncs, de libertades politicas- concomitantes, tambiénsancionadas y res-

paldadas legalmcntc.

La condici6n de la ciudadanfa politica es compleja. Es adscriptiva, por


cuanto (salvo el caso de naturalizaci6n) corresponde a los individuos
por el mero hecho de haber nacido en un territorio (ius solis) o de una

descendencia (ius sanguinis). Es potencialmente empoderadora, por cuanto


Ios individuos pueden querer usar esos derechos y libertades a fin de
Ilevar a cabo una variedad de acciones. Es_limitadgmente universalista,

en-elsentido deque dentro de Im jurisdicci6n.deJ_estado s..sjgna en


a todos los adultos/as que cumplen con el criterio

dela nacionalidad. Es también una condicidnformal, pues es establecida


por normas legales que en su contenido, promulgaci6n y aplicaci6n
satisfacen criterios estipulados, a su vez, por otras normas legales. Por
filtimo, la ciudadan{a politica es påblica. Con esto quiero decir, primero,
que es resultado de leyes que deben cumplir exigencias cuidadosamente
explicitadas en cuanto a su publicidad y, segundo, que los derechos,
libertades y obligaciones que se asignan a cada ego implican (y deman-
dan legalmente) un sistema de reconocimientos mutuos entre todos los

individuos, independientemente de su posici6n social, como portadores


39
de esos derechos, libertades y obligaciones

1.5. un primer encuentro con el estado


un tema a recalcar es que con el anålisis precedente hemos ido mås
allå del régimen y nos hemos encontrado on elestado, en tres sentidos:
üpo} enessonciudadanos / as
politicos; promulga y respalda la asig-

39
Para discusibn mås extensa dc la ciudadanfa ver los capitulos IV y IX.

43

También podría gustarte