Análisis de la encuesta (Preguntas cerradas)

Se realizo la encuesta a un grupo de 20 personas, teniendo como base las preguntas

generadas en la encuesta, se logró llevar a cabo el análisis de cada respuesta que a
continuación se presentan.

Imagen 1. Primera pregunta.

Se obtuvo como resultado que el 65% (13 personas) utilizan técnicas de manejo de
emociones algunas veces, esto indica que la mayoría de las personas encuestadas reconocen
la importancia de abordar sus emociones y están dispuestas a utilizar técnicas para hacerlo,
al menos en cierta medida. Esto podría interpretarse como una actitud positiva hacia el
autocuidado emocional.

El 25% (5 personas) nunca utiliza dichas técnicas esto podría indicar que algunas personas
en la encuesta pueden no estar conscientes de las técnicas de manejo de emociones o
pueden no considerarlas necesarias en su vida cotidiana.

El 10% (2 personas) aplica casi siempre técnicas para manejar sus emociones con estos
resultados se determinó que estas personas parecen tener un enfoque más activo y constante
en el manejo de sus emociones, lo que podría indicar un alto nivel de conciencia emocional
y habilidades para lidiar con sus sentimientos.
 Imagen 2. Segunda pregunta.

Se encontró que el 45% (9 personas) experimentan en su vida diaria alegría, esto sugiere
que la mayoría de las personas experimentan emociones positivas, lo que es un buen
indicador de bienestar emocional.

El 15% (3 personas) experimentan el sentimiento de estar esperanzados. Aunque es menos

común que la alegría, la presencia de esperanza es positiva y sugiere que algunas personas
tienen una actitud optimista hacia el futuro.

El 20% (4 personas) presentan disgusto. Esto indica que algunas personas encuestadas
pueden encontrarse en situaciones o experiencias que les causan disgusto en su vida diaria.

El 10% (2 personas) experimentan sentimiento de sorpresa en su vida diaria, sugiere que la

sorpresa es una emoción menos frecuente en comparación con la alegría o el disgusto.

El 5% de las personas informan que experimentan tristeza y el 5% también informan que

experimentan enojo en su vida diaria. Estas emociones negativas son menos comunes en la
encuesta, lo que es una señal positiva.
 Imagen 3. Tercera pregunta.

Se obtuvo que la estrategia o técnica más utilizada para reconocer las emociones propias
fue sobrepensar con 40% ( 8 personas), sobrepensar implica reflexionar profundamente
sobre las emociones y pensamientos, lo que puede ayudar a algunas personas a comprender
y reconocer mejor sus propias emociones. Sin embargo, es importante señalar que un
exceso puede ser contraproducente en algunos casos.

Seguidamente se encuentra la estrategia de la aceptación que fue escogida por el 25% (5

personas), esto puede implicar una mayor disposición a reconocer y experimentar las
emociones tal como son, sin juicio.

y también se logró identificar que las estrategias de meditación, no pensarlo y relajación

son menos utilizadas por las personas encuestadas, cada una elegida por el 10% de las
personas (2 de 20). Esto sugiere que un segmento más pequeño de la muestra recurre a
estas técnicas específicas para el reconocimiento de emociones.
 Imagen 4. Cuarta pregunta.

Se encontró que el 40% (8 personas) lidian el estrés buscando resolver el problema. Esta es
una estrategia proactiva y constructiva que implica abordar directamente las fuentes de
estrés. Puede ser una forma efectiva de manejar situaciones estresantes, especialmente
cuando es posible identificar y abordar las causas subyacentes del estrés.

El 30% (6 personas) combaten el estrés intentando calmarse. Esto sugiere que un segmento
significativo de las personas encuestadas reconoce la importancia de mantener la calma y
gestionar sus emociones cuando se enfrentan a situaciones estresantes. Estas personas
pueden recurrir a técnicas de relajación, respiración profunda u otras estrategias para
reducir el estrés.

El 20% (4 personas) guardan el estrés hasta que no pueden más. Esta estrategia puede ser
preocupante, ya que mantener el estrés sin abordarlo puede tener efectos negativos en la
salud mental y física a largo plazo.

El 10% (2 personas) estallan para lidiar con el estrés. Implica que algunas personas pueden
reaccionar al estrés con explosiones emocionales o comportamientos impulsivos. Esta
estrategia generalmente no es la más efectiva para manejar el estrés y puede tener
consecuencias negativas en las relaciones interpersonales.
 Imagen 5. Quinta pregunta.

En esta encuesta se obtuvo que el 85% (17 personas) piensan que el entorno laboral o
escolar influye en la forma de gestionar las emociones. Esto sugiere que la gran mayoría de
las personas en tu muestra considera que el contexto en el que se encuentran ya sea en el
trabajo o en la escuela, desempeña un papel significativo en cómo manejan sus emociones.
Esto puede estar relacionado con factores como la cultura organizacional, la dinámica de
grupo o la presión en el entorno laboral o escolar.

El 10% (2 personas) indican que no creen que el entorno laboral o escolar influya en la
forma en que gestionan sus emociones. Esto sugiere que hay algunas personas en la
encuesta que consideran que su capacidad para manejar emociones es independiente del
contexto en el que se encuentran. Puede ser interesante explorar más a fondo las razones
detrás de esta percepción.

El 5% (1 persona) piensa que tal vez el entorno laboral o escolar influye en su forma de
gestionar emociones. Esta respuesta indica cierta indecisión o ambigüedad en la percepción
de esta persona sobre la relación entre el entorno y la gestión emocional.