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ESPECIALISTA : XXXX

EXPEDIENTE N° : XXXX-2019
ESCRITO N° :
CUADERNO : Principal
SUMILLA : Interpone recurso de
casación

SEÑOR PRESIDENTE DE LA SALA CIVIL PERMANENTE DE HUANCAYO – CORTE


SUPERIOR DE JUSTICIA DE JUNÍN:

(Nombre de la parte que interpone el recurso), en los seguidos contra ……………………..,


sobre (materia del proceso); a Usted atentamente digo:

Dentro del plazo legal, formulo RECURSO DE CASACIÓN contra la Sentencia de Vista N.° 409-
2023 contenida en la Resolución N.º 65, específicamente contra los extremos vinculados a los
puntos resolutivos 11 y 12 de la Sentencia de Vista.

En ese sentido, solicito revocar las decisiones objeto de casación, y reformándolas, se revoquen
ambos extremos impugnados, otorgándoseme la tenencia compartida de mi menor hija
conjuntamente con la madre (punto resolutivo 11), y dejando sin efecto las medidas impuestas en el
punto 12 de la parte resolutiva de la Sentencia de Vista.

Subordinadamente, solicito declarar la nulidad de la Sentencia de Vista, y se ordene al A Quo emitir


nueva decisión ajustada a Derecho.

I. ANTECEDENTES RELEVANTES

I.1. Como primera cuestión, debo precisar que en este recurso no se pretende revalorar pruebas
ni examinar criterios sobre hechos. Sin embargo, sí resulta necesario detallar los
antecedentes relevantes del caso a fin de entender el porqué de los agravios denunciados, y
especialmente el porqué de la necesidad de desarrollar doctrina jurisprudencial sobre las
cuestiones que se dilucidan en el presente recurso, pues ello resulta necesario a fin de
uniformizar la jurisprudencia en beneficio de los menores de edad que se encuentren
vinculados a algún proceso de familia.

1
I.2. Este proceso versa sobre tenencia y régimen de visitas y fue iniciado en octubre de 2019.
Respecto a la tenencia, existen pretensiones cruzadas, tanto la madre como mi persona
(padre) solicitamos la tenencia. Sin embargo, en mérito de lo dispuesto por la Ley N.°
31590 que modificó los artículos 81, 82, 83 y 84 del Código de los Niños y Adolescentes,
estableciendo que la tenencia compartida debe ser priorizada como regla por los jueces,
solicité en el curso del proceso disponer la tenencia compartida, en beneficio de nuestra
menor hija.

I.3. Durante los dos primeros años de proceso, la relación entre los progenitores fue ciertamente
compleja, situación que se acreditó mediante sendos medios de prueba. Además, desde la
etapa postulatoria, el padre alegó y presentó diversas pruebas 1 que permitían inferir la
alienación parental de la menor en contra del padre, motivo por el cual se ofreció y solicitó
en más de una oportunidad2 la realización de una pericia de alienación parental.
Lamentablemente, dicha pericia nunca se admitió, sin razón justificada.

I.4. Mediante Sentencia de primera instancia contenida en la Resolución N.° 56 del 05 de


diciembre de 2022, se resolvió declarar fundada la pretensión la madre, otorgando la
tenencia exclusiva, y se estableció un régimen de visitas progresivo. Así, se resolvió
textualmente lo siguiente:

2. Declaro FUNDADA, la demanda de reconocimiento de tenencia de hija


Briana Layli Zuñiga Vila interpuesta por DANNA ……… (Exp. Nº 10XXX-
2019), consecuentemente INFUNDADA la demanda solicitada por
RIGOBERTO ………… (Exp. Nº 26XXX-2019).
3. OTÓRGUESE la tenencia de la niña Briana …………….; a favor de su
madre DANNA ………….., debiendo brindar asertivamente las facilidades para
que la niña pueda relacionarse con el padre, bajo apercibimiento de variarse los
términos de la ejecución y el régimen de visitas ante el incumplimiento,
obstaculización y resistencia en aplicación del artículo 91 del Código de Niños y

1
Informes Interdisciplinarios Nro. 01, 03, 04, y 05-2020- Interdis./MJIVF/CSJJU/PJ; Informe
Interdisciplinario N° 129-2021-Interdis./CSJJU/PJ; Informe Interdisciplinario N°
007-2022-Interdis./CSJJU/PJ; Informe Interdisciplinario N° 014-2022-Interdis./CSJJU/PJ; Informe
Interdisciplinario N° 075-2022-Interdis./CSJJU/PJ y el Informe Interdisciplinario N°
104-2022-Interdis./CSJJU/PJ.
2
Esto se solicitó mediante escritos de fecha 18 de abril de 2022, 08 de agosto de 2022, 12 de septiembre de
2022, 19 de septiembre de 2022.

2
Adolescentes; sin perjuicio de la remisión de copias certificadas al Ministerio
Público para el ejercicio de sus atribuciones conforme a ley, en caso de
incumplimiento.
4. FÍJESE el Régimen de Visitas a favor del padre RIGOBERTO
………………., de manera progresiva conforme a lo establecido en el
considerando ocho de la presente.

I.5. Ante ello, el padre (mi persona) presentó recurso de apelación de sentencia únicamente
contra el extremo referido a la tenencia, solicitando como pretensión recursal, que se
revoque dicho extremo y se otorgue la tenencia compartida.

I.6. Respecto al régimen de visitas progresivo, la decisión del A Quo no fue impugnada, es más,
se solicitó la ejecución anticipada de la sentencia en el extremo del régimen de visitas
(según el considerando octavo de la sentencia de primera instancia), lo cual fue admitido
por el A Quo, formándose un cuaderno aparte (Cuaderno 10XXX-2019-XX-XXXX-JR-FC-
01). Dicho régimen de visitas progresivo se ha venido llevando a cabo de forma
satisfactoria, incluso mediante externamiento de la menor y con la participación de la
madre, siendo que incluso por pedido de mi menor hija, se han incrementado las horas de
visitas, todo lo cual consta en dicho cuaderno 55.

I.7. Producto del progreso del régimen de visitas que se viene ejecutando anticipadamente, la
relación entre la madre y el padre mejoró, todo esto en beneficio de la menor, quien también
tuvo ostensible mejora en la relación con ambos padres. Esto, desde el punto de vista
jurídico, acredita la naturaleza dinámica de las relaciones familiares, las cuales pueden ir
variando incluso durante el proceso, lo cual tiene repercusiones tanto en cuestiones
materiales como procesales (como la flexibilización de las normas procesales).

I.8. Tanto fue así que se han producido los siguientes hechos (que acreditan y corroboran la
naturaleza dinámica de las relaciones familiares) que constan en los actuados de dicho
Cuaderno 10XXX-2019-XX-XXXX-JR-FC-01, en donde conjuntamente con la madre de
mi menor hija (de común acuerdo) se han acordado y realizado las siguientes acciones:

- El cambio de colegio de nuestra hija, siendo que en la entrevista en la IEP INGENIERIA


del 07 de febrero de 2022, la madre ha manifestado estar a favor que se determine

3
judicialmente la tenencia compartida progresiva de la menor (documento que también
fue presentado como medio probatorio extemporáneo que la Sala Civil declaró
improcedente mediante Resolución N.° 64).
- Extender el horario del régimen de visitas dado en la sentencia de primera instancia,
ello porque la menor reclama mayor presencia de su padre.
- La mudanza de mi menor hija y su madre a un nuevo departamento, cuyos gastos de
implementación y alquiler está asumiendo al 100% el padre (mi persona).
- Contratar los servicios del comedor de la IEP INGENIERIA para que la menor consuma
su refrigerio, gastos al 100% asumidos por el padre.
- Clases de piano para la menor, gastos al 100% asumidos por el padre.
- Padre, madre y menor acuden a centros comerciales a comprar ropa para la menor, gastos
al 100% asumidos por el padre.
- Padre, madre y menor acuden al mercado a comprar víveres para la alimentación de la
menor, gastos al 100% asumidos por el padre.
- Padre, madre y menor acuden los viernes y sábados a diversos espacios recreativos,
(restaurantes, cines, juegos, circo, etc.) para la recreación de la menor, gastos al 100%
asumidos por el padre.
- Padre acude todos los sábados a colaborar con el lavado y planchado de ropa de la menor.
- Padre, madre y menor acuden a diversas actividades del nuevo colegio de la menor (taller
de basquet, olimpiadas, reuniones, dia de la madre, etc).
- Padre colabora de forma permanente con tareas escolares de la menor (forrado de
cuadernos, dibujos, caratulas, realización de exposiciones, etc).

I.9. Es por dicha razón que (ya ante la Sala Civil), en virtud de la flexibilización de las reglas
procesales en procesos de familia, de la naturaleza dinámica de las relaciones familiares, y
del Interés Superior del Niño, mediante escritos del 9 de marzo de 9 de mayo de 2023 ofrecí
las pruebas pertinentes que acreditaban ese cambio y mejora en la dinámica familiar,
incluso probando que la madre aceptó textualmente que se conceda la tenencia compartida
(hecho sucedido de forma posterior a la apelación).

I.10. Lamentablemente, bajo rígidas reglas de preclusión, la Sala Civil Permanente de Huancayo
emitió la Resolución N.° 64 de fecha 02 de junio de 2023, declarando improcedente dichos
nuevos medios de prueba que acreditaban la nueva situación familiar.

4
I.11. Luego de ello, la Sala Civil Permanente de Huancayo resolvió la apelación mediante
Sentencia contenida en la Resolución N.° 65 de fecha 19 de junio de 2023, confirmando el
extremo que dispuso la tenencia exclusiva a favor de la madre, pero también modificando el
régimen de visitas, pese a que éste venía ejecutándose anticipadamente de forma
satisfactoria, y sin que dicho extremo del régimen de visitas haya sido apelado por alguna
de las partes.

II. CAUSALES INVOCADAS

Conforme al numeral 1 del artículo 391 del Código Procesal Civil cumplo con señalar las
causales para interponer el presente Recurso de Casación:

II.1. Causales contenidas en los numerales 1 y 5 del artículo 388 del Código Procesal Civil, ya
que la Sentencia de Vista ha inaplicado y se ha apartado del principio y garantía de
flexibilización de los procesos en materia de familia, y se apartó de la decisión vinculante
establecida en el punto 1 de los precedentes vinculantes Tercer Pleno Casatorio Civil. Esto
pues el Ad Quem rechazó medios probatorios fundándose en reglas de preclusión,
desatendiendo así a la naturaleza dinámica de las relaciones familiares.

II.2. Causal contenida en el numeral 1 del artículo 388 del Código Procesal Civil, ya que la
Sentencia de Vista vulneró e inobservó el derecho fundamental a la prueba (garantía del
debido proceso) y el Interés Superior del Niño, al haber considerado que no resultaba
necesaria una pericia de alienación parental para emitir una decisión sobre tenencia pese a
haber sido ofrecida desde primera instancia, especialmente cuando la decisión se fundó
únicamente en la manifestación de la menor y desde el inicio se alegó y ofrecieron pruebas
sobre la existencia de alienación.

II.3. Causal contenida en el numeral 3 del artículo 388 del Código Procesal Civil, ya que la
Sentencia de vista ha interpretado erróneamente el artículo 81 y ha inaplicado el artículo 82
del Código de los Niños y Adolescentes, al afirmar que el dicho de la menor es
determinante e incuestionable para no disponer la tenencia compartida, y al no haber
tomado en consideración la conducta actual de los progenitores para la determinación de la
decisión sobre la tenencia.

5
II.4. Causales contenidas en los numerales 1 y 3 del artículo 388 del Código Procesal Civil, ya
que la Sentencia de Vista inaplicado el artículo 370 del Código Procesal Civil, y ha
inobservado el principio de prohibición de la reforma en peor, garantía constitucional que
forma parte del debido proceso (Cfr. Exp. N.º 0553-2005-HC/TC y Exp. N.° 03969-2012-
PHC/TC), regulado en el numeral 3 del artículo 139 de la Constitución Política del Perú; y
ha inobservado el derecho al contradictorio, derecho fundamental que también forma parte
del debido proceso.

Esto se ha producido, pues el Ad Quem, vía “integración”, varió el régimen de visitas en


perjuicio del apelante, esto pese a que dicho extremo no fue objeto de recurso de apelación,
y no se otorgó la posibilidad de argumentar al respecto, pues fue una decisión sorpresa.

II.5. Causales contenidas en los numerales 1 y 3 del artículo 388 del Código Procesal Civil, ya
que, la Sentencia de Vista prohibió ejercer mi derecho de opinión y de crítica a las
decisiones judiciales.

De ese modo, se inobservó mi derecho de opinión para criticar las decisiones judiciales,
garantizado en el numeral 20 del artículo 139 de la Constitución Política del Perú, y se
inaplicó el artículo 10 del Texto Único Ordenado de la Ley Orgánica del Poder Judicial.

III. REQUISITOS DE ADMISIBILIDAD

Conforme al numeral 2 del artículo 391 del Código Procesal Civil, cumplo con detallar el
cumplimiento de los requisitos de admisibilidad:

III.1. El presente recurso de casación es presentado ante la Sala Civil Permanente de Huancayo,
la cual emitió la Sentencia de Vista impugnada.

III.2. El presente recurso de casación es interpuesto dentro del plazo de diez (10) días hábiles de
notificada la Sentencia de Vista.

III.3. El presente recurso de casación es acompañado por el recibo de la tasa respectiva por
interposición de recurso de casación.

6
IV. PROCEDENCIA EXCEPCIONAL DEL RECURSO DE CASACIÓN PARA EL
DESARROLLO DE DOCTRINA JURISPRUDENCIAL (ART. 387 CPC): PUNTO
RESOLUTIVO 11 DE LA SENTENCIA DE VISTA QUE CONFIRMÓ LA DE
PRIMERA INSTANCIA EN LO REFERIDO A LA TENENCIA (CAUSALES A, B Y
C, DEL APARTADO V)

IV.1. Respecto del punto resolutivo 11 de la Sentencia de Vista, que confirmó la sentencia de
primera instancia, fundo la procedibilidad del presente recurso en el artículo 387 del Código
Procesal Civil, dado que existen tres (3) cuestiones dilucidadas en el presente proceso
respecto de las cuales resulta necesaria un pronunciamiento de la Corte Suprema para el
desarrollo de la doctrina jurisprudencial en cuestiones de familia, tanto sustanciales como
procesales.

IV.2. Cada cuestión es objeto de una causal del recurso (específicamente los literales A, B y C
del apartado V), por lo que deberá de analizarse cada una de éstas para efectos de
determinar la procedencia excepcional respecto del extremo de la Sentencia de Vista que
confirmó la de primera instancia.

IV.3. Sin perjuicio de ello, y conforme al numeral 5 del artículo 391 del Código Procesal Civil,
consigno puntualmente las razones que justifican el desarrollo de la doctrina jurisprudencial
que se pretende:

a. Como primera cuestión, es preciso resaltar que establecer doctrina jurisprudencial


sobre procesos judiciales de familia que involucren menores de edad resulta de especial
trascendencia, esto por la relevancia jurídica y social que implican los procesos de
familia, los cuales trascienden al ámbito jurídico e impactan directamente en el
desarrollo personal y emocional de niños y adolescentes. Esto especialmente en lo que
se refiere a los procesos de tenencia, régimen de visitas y alimentos.

b. Segundo, si bien se tiene el Tercer Pleno Casatorio Civil que estableció como
precedente vinculante el deber de los jueces de aplicar el principio de flexibilidad de las
reglas procesales en temas de familia, dicho Pleno versó sobre divorcio y sus
consecuencias patrimoniales.

7
Es decir, versó sobre una cuestión de familia, pero que no involucra a menores de edad,
por lo que resulta imprescindible el desarrollo jurisprudencial de dicho principio de
flexibilidad en el marco de un proceso de familia que involucre a menores de edad, esto
en garantía del respecto al Interés Superior del Niño.

De ese modo, se pretende el desarrollo de doctrina jurisprudencial respecto al principio


de flexibilización de las reglas procesales en los procesos de familia que involucren a
menores de edad, tal y como el proceso de tenencia, atendiendo especialmente a la
naturaleza dinámica de las relaciones familiares.

c. Tercero, en el marco de los procesos de tenencia, resulta preciso el desarrollo de


doctrina judicial respecto a los artículos 81 y 82 del Código de los Niños y
Adolescentes, que dispone como regla la tenencia compartida, y como excepción la
tenencia exclusiva, para lo cual debe tomarse en consideración la conducta de ambos
progenitores.

En efecto, resulta necesario establecer doctrina jurisprudencial referida a los criterios


que deben considerarse para no aplicar la tenencia compartida, especialmente cuando se
presenten: (i) situaciones de conflictividad entre la madre y el padre, y (ii) exista
alegación de alienación parental por una de las partes.

d. Cuarto, en relación con el punto anterior, resulta necesario establecer doctrina


jurisprudencial respecto a los criterios que deben considerarse para realizar una pericia
sobre alienación parental a efectos de emitir una decisión que efectivamente tutele al
menor de edad y garantice el Interés Superior del Niño. Ello pues una decisión fundada
en el solo dicho de la menor y si analizar todas las demás variables concurrentes puede
ser perjudicial para ésta, y por tanto vulnerar su Interés Superior del Niño.

IV.4. Finalmente, como se ha señalado, las cuestiones abordadas en el presente proceso, y sobre
las cuales se deberá emitirse una decisión de la Corte Suprema para el desarrollo de la
doctrina jurisprudencial, son las desarrolladas en los literales A, B y C del apartado V del
presente recurso.

8
V. REQUISITOS DE PROCEDENCIA RESPECTO DEL PUNTO RESOLUTIVO 12
DE LA SENTENCIA DE VISTA QUE INTEGRÓ ARBITRARIAMENTE LA DE
PRIMERA INSTANCIA (ART. 386 CPC) (CAUSALES D Y E DEL APARTADO V)

Como se evidencia de autos, en el punto 12 la Sentencia de Vista se integró la de primera


instancia, habiéndose modificado el régimen de visitas (que no fue objeto de apelación) y
otras situaciones jurídicas sin contradictorio y en violación del principio y garantía de
prohibición de reforma en peor.

De ese modo, conforme al artículo 386 del Código Procesal Civil, cumplo con acreditar los
requisitos de procedencia con específica referencia a las causales D y E del apartado V del
presente recurso:

V.1. El presente recurso de casación es interpuesto contra la Sentencia de Vista emitida por la
Sala Civil Permanente de Huancayo, la misma que, al ser emitido por un órgano de segunda
instancia le pone fin al presente proceso.

V.2. El presente recurso de casación es interpuesto contra una Sentencia de Vista en la que se
discute una pretensión que es inestimable en dinero.

V.3. El presente recurso de casación es interpuesto contra el extremo 12 de la Sentencia de Vista


emitida por la Sala Civil Permanente de Huancayo, en la cual se integra la decisión de
primera instancia, resolviendo lo siguiente:
(i) Modificó (en estricto, revocó y reformó) el régimen de visitas, que no fue objeto de
recurso de apelación.
(ii) Modificó (en estricto, revocó y reformó) mi situación jurídica como padre de la menor,
limitando la posibilidad de que pueda hacer valer mis derechos como padre ante el
centro educativo donde estudia mi menor hija.
(iii) Limitó mi derecho fundamental de opinión, específicamente mi derecho de crítica de
las decisiones judiciales.

V.4. El presente recurso de casación es interpuesto contra la Sentencia de Vista emitida por la
Sala Civil Permanente de Huancayo, la cual no es una sentencia anulatoria.

9
VI. FUNDAMENTOS DEL RECURSO DE CASACIÓN

Con la finalidad de cumplir con lo indicado en el numeral 1 del artículo 391 del Código
Procesal Civil, cumplimos con detallar la cada una de las causales invocadas.

A. Sobre el punto resolutivo 11 (tenencia): Causales contenidas en los numerales 1 y 5 del


artículo 388 del Código Procesal Civil, ya que la Sentencia de Vista ha inaplicado y se
ha apartado del principio y garantía de flexibilización de los procesos en materia de
familia, y se apartó de la decisión vinculante establecida en el punto 1 de los precedentes
vinculantes Tercer Pleno Casatorio Civil

a. Sobre esta causal, es preciso iniciar siendo enfático en afirmar que, en los procesos de
tenencia y régimen de visitas (así como alimentos), debe atenderse a la naturaleza
dinámica de las relaciones familiares, y flexibilizar el rígido principio de preclusión para
la admisión de pruebas. Los alcances de ello serán desarrollados en este punto.

b. Así, el Tercer Pleno Casatorio Civil estableció como precedente vinculante el deber de
todo juez de flexibilizar las reglas procesales en procesos de familia, incluidas las reglas
sobre preclusión. Así, la Corte Suprema estableció textualmente el siguiente presente:

10
c. De ese modo, ya la Corte Suprema en precedente vinculante estableció claramente que las
reglas rígidas de preclusión no resultan acordes con los procesos de familia, justamente
porque éstos involucran relaciones, en su mayoría, de naturaleza dinámica.

d. Esas reglas de preclusión establecidas en nuestro CPC son claramente rígidas e incluso
anacrónicas, tanto así que el Tercer Pleno Casatorio dio cuenta de ello, flexibilizándolas
por lo menos en casos de familia. Respecto a esas rígidas reglas preclusivas, la profesora
Eugenia Ariano ha señalado que nuestro sistema ha heredado del proceso común medieval
(solemnis ordo iudiciarius)3:

Como nosotros heredamos de España el “preclusivo” juicio ordinario, se nos


presenta (aun hoy en que el “juicio solemne y dispendioso” ha sido formalmente
eliminado) de lo más natural y consustancial al proceso mismo el que
necesariamente esté dividido en un conjunto de fases, las que a su vez deben
estar -también inexorablemente- conformadas por un conjunto de actos. A cada
fase un conjunto de actos. Cerrada la fase, se pasa a otra, no pudiéndose ya
realizar los actos correspondientes a la fase anterior. En suma, cuando se dice
“preclusión” se piensa, por un lado, en la división del proceso en fases y, por el
otro, en la consecuencia: la pérdida -para las partes- de la posibilidad de realizar
tal o cual acto por haber pasado el plazo previsto en la ley o por haberse ya
cerrado el estadio procesal respectivo.

e. Partiendo de ello, y atendiendo a la naturaleza dinámica de las relaciones familiares,


especialmente en las relaciones padre-hijos ¿Cuál es la única forma de tutelar
efectivamente el Interés Superior del Niño? Evidentemente es flexibilizando las normas de
preclusión en lo que a alegaciones, ofrecimiento, admisión y actuaciones de pruebas se
refiere.

f. Esto resulta evidente pues la única forma en la que el Juez puede valorar el cambio o
modificación en la dinámica familiar es a través de la alegación de una de las partes, y la
valoración de las pruebas de sustento, lo que requiere una actividad probatoria flexible
que se adecúe a dicha particular dinámica del proceso de familia que involucra a menores

3
ARIANO DEHO, Eugenia. Prueba y preclusión. Reflexiones sobre la constitucionalidad del proceso civil
peruano. En: Ius Et Veritas 23. PUCP. P. 73.

11
de edad. Esa opción ya fue tomara por la Corte Suprema en el Tercer Pleno Casatorio, y,
como bien se ha señalado, responde a una decisión que va más allá del formalismo legal:

Todo sistema de preclusiones implica no sólo una opción legislativa técnica sino
también ideológica, o sea de concepción del proceso y sus supremos principios,
pues al establecer el momento en que opera -para las partes- la preclusión de su
posibilidad de alegar y ofrecer pruebas, se podrían estar afectando supremas
garantías, aquellas sin las cuales se desmoronaría la esencia misma del proceso. 4

g. Ciertamente, si las relaciones familiares son dinámicas, ese dinamismo y cambio se


evidencia (en el marco de un proceso judicial) a través de las pruebas que las partes
puedan ofrecer, por lo que restringir su incorporación mediante un sistema de rígida
preclusión, ciertamente vulneraría el derecho de defensa 5 y la tutela del Interés Superior
del Niño. Todo esto, a la postre, iría en contra de la finalidad misma de los procesos de
familia que involucren a menores, puesto que implica desconocer

h. Yendo aún más allá, y esto deberá tenerse presente al momento de calificar el presente
recurso y resolver sobre fondo: en los procesos de familia que decidan sobre la dinámica
familiar (esto es: tenencia, alimentos y régimen de visitas) la estabilidad de las decisiones
judiciales no puede alcanzar su nivel máximo, es decir, de cosa juzgada -inmodificable-
(considerando a la cosa juzgada como máximo nivel de estabilidad).

i. Esto es así pues esto resultaría contradictorio con la finalidad misma que dichos procesos
buscan garantizar: tutelar el Interés Superior del Niño atendiendo a la naturaleza dinámica
de las relaciones familiares, que pueden variar incluso de forma posterior a la emisión de
una sentencia. Es decir, no debe siquiera precluir la posibilidad del padre o la madre, de
reabrir el debate ya discutido y sentenciado en un proceso, si es que ello obedece a un
cambio de circunstancias.

4
Ídem. P. 76.
5
Ídem. P. 81: “(…) el sistema de preclusiones en materia de alegación y de prueba consagrado por el
Código Procesal Civil de 1993 lesiona abiertamente ese derecho de defensa en cualquier estado del proceso
(tanto en primer como en segundo grado) que la Constitución (…) nos asegura a todos y lo que es peor
aumenta la posibilidad de la emisión de sentencias injustas.”

12
j. Es precisamente por dicha razón que se estableció en el Tercer Pleno Casatorio el deber de
flexibilizar las normas procesales en procesos de familia. Sin embargo, esa pretendida
tutela jurisdiccional quedaría incompleta si es que, flexibilizando las normas procesales,
se otorga una estabilidad inmutable a las decisiones judiciales.

k. Efectivamente, no se puede reconocer que las relaciones familiares son dinámicas y


pretender su tutela efectiva y adecuada, si es que se emite una decisión que se congela en
el tiempo o que decide sobre la base de una situación fáctica que ya cambió (de espalda a
la relación material) y que es inmutable.

l. Ciertamente esa situación de no otorgar una estabilidad inmutable a determinadas


decisiones es reconocida no sólo por nuestra práctica judicial y jurisprudencia, sino
también (tal vez sin quererlo así el legislador) por nuestro derecho positivo. El cambio de
circunstancia, por lo menos en procesos de alimentos, tenencia y régimen de visitas donde
intervienen menores de edad, priva de su eficacia negativa a las decisiones judiciales.

m. Es por ello que luego de un proceso de alimentos con una sentencia “firme” puede
solicitarse el aumento, reducción o prorrateo; en un proceso de régimen de visitas puede
variarse el contenido de la decisión final, o incluso en relación a la tenencia, puede
haberse emitido una sentencia y luego iniciarse un posterior proceso solicitando variar el
régimen de tenencia (cfr. art. 82 del Código de Niños y Adolescentes).

n. Esta situación, que se presenta en la práctica y que ha sido (implícitamente) reconocida


por el legislador, lamentablemente no ha sido desarrollada por la Corte Suprema, la que
no ha emitido decisiones que se refieran, técnicamente y bajo un análisis procesal, a la
estabilidad de las decisiones judiciales en materia de familia.

o. Por ese motivo, un pronunciamiento al respecto resulta ciertamente necesario a fin de


uniformizar dicha práctica judicial y así evitar decisiones judiciales (aisladas o no) que
puedan ampararse en un argumento de cosa juzgada para denegar una pretensión en estas
materias.

p. Ahondando más, ya la doctrina ha reconocido que no es posible hablar de inmutabilidad


de la cosa juzgada, pues incluso ésta puede ser rescindida vía un proceso de cosa juzgada

13
fraudulenta, y que algunos procesos, por la propia naturaleza de los derechos sustanciales
que tutelan, no tienen un grado inmutable de estabilidad 6. Es por ese motivo que ya la
doctrina discute la llamada teoría de las estabilidades procesales 7, en la cual incluso se
propone dejar de lado el término cosa juzgada.

q. A todo esto, la jurisprudencia no puede dar la espalda a este desarrollo en el derecho


procesal, anclándose en un paradigma del binomio cosa juzgada-inmutabilidad. La
jurisprudencia debe atender a que este desarrollo de la doctrina viene dándose a propósito
de garantizar una efectiva tutela de los derechos materiales, que es a la postre la finalidad
última del proceso8, una tutela no idónea no es una tutela efectiva, y todo mecanismo de
tutela debe adecuarse a la situación material.

r. Aún más, dado que tanto el legislador como la práctica judicial aceptan que en
determinados procesos de familia la estabilidad de las decisiones tiene un grado menor al
de cosa juzgada, no flexibilizar las reglas de preclusión importaría incurrir en un absurdo
en perjuicio únicamente de los menores y adolescentes.

s. Efectivamente ¿acaso debemos esperar a que acabe el proceso, respetando el rígido


sistema de preclusiones, para luego iniciar otro proceso alegando que las circunstancias
han cambiado? Evidentemente, no. Si las circunstancias han cambiado durante el
proceso las partes pueden ofrecer las pruebas que acrediten tal cambio (y jueces tienen el
deber de admitirlas), a fin de que el juez o la Sala emita una decisión ajustada a las
situaciones actuales y así tutelas de forma efectiva el Interés Superior del menor
involucrado, quien no puede esperar a un segundo proceso judicial (con todo el tiempo
que ello implica) para obtener una decisión ajustada a la situación actual.

t. Esto también se refuerza con la Casación N.° 2254-2006 LIMA, y en el Reglamento De


La Ley N.º 30466, Ley Que Establece Parámetros Y Garantías Procesales Para La

6
CAVANI, Renzo. Teoría impugnatoria. Recursos y revisión de la cosa juzgada en el proceso civil. Gaceta
Jurídica. Lima. 2018. P. 206.
7
Por todos: CABRAL, Antonio. Coisa julgada e preclusões dinâmicas- Entre continuidade, mudança e
transição de posições processuais estáveis. Jus Podivm, Salvador-Bahía. En el Perú, puede verse la tesis de
PAREJA MUJICA, Christian. La cosa juzgada y su “inmutabilidad”: problemas conceptuales y una
aproximación al estudio de un sistema de estabilidades procesales. PUCP. 2022. Disponible en:
https://tesis.pucp.edu.pe/
8
Priori Posada, G. Del Derecho de Acción a la efectiva Tutela Jurisdiccional de los Derechos. IUS ET
VERITAS, 24(49). 2014. P. 146-161.

14
Consideración Primordial Del Interés Superior Del Niño (Decreto Supremo N.º 002-2018-
MIMP) en donde se establece expresamente

Artículo 26.- Aplicación del interés superior del niño en el acceso y


administración de justicia
26.8 En el análisis para el interés superior del niño, las/los jueces especializados
gozan de facultades tuitivas para flexibilizar algunos principios y normas
procesales como los de iniciativa de parte, congruencia, formalidad,
eventualidad, preclusión, acumulación de pretensiones, en atención a la
naturaleza de los conflictos que debe solucionar, derivados de las relaciones
familiares y personales, de conformidad con lo dispuesto en los artículos 4 y 43
de la Constitución Política del Perú que reconoce, entre otros, la protección
especial de la niñez y la adolescencia.

u. Ante ello (considerando que incluso existe un reconocimiento legal de la flexibilización),


afirmar lo contrario no sólo implicaría caer en un absurdo formalismo, sino que iría en
contra de la finalidad misma que persigue esa flexibilización (o dosis de libertad procesal)
de las reglas preclusivas en temas de familia.

v. Dicho todo ello, en el presente caso se presentó un evidente cambio de circunstancias


cuando el proceso se encontraba en la Sala Superior. Dicho cambio de circunstancias
consistió en que la madre y el padre lograron un acercamiento en su relación de padres (no
sentimental) en beneficio de la menor, habiendo incluso la madre ha aceptado
expresamente que se otorgue la tenencia compartida y la hija manifestaba que quería pasar
más tiempo con su padre.

w. Todo esto se produjo a causa de que se solicitó la ejecución anticipada del régimen de
visitas progresivo establecido en el considerando octavo de la sentencia de primera
instancia por el a quo (ya que tal extremo de la decisión del A Quo no fue impugnada) lo
cual fue admitido por el A Quo, formándose un cuaderno aparte (Cuaderno 10XXX-2019-
XX-XXXX-JR-FC-01). Es así que mediante Resolución N° 01 de fecha de fecha 16 de
enero de 2023, dictada en dicho cuaderno 55, se inició con la ejecución anticipada del
régimen de visitas.

15
x. En el marco de dicho proceso de ejecución anticipada se han producido diversos avances
positivos en la dinámica familiar entre la madre de mi menor hija, así como entre mi
menor hija y mi persona, los que han sido conseguidos en buena medida por la
intervención del A Quo y las integrantes del equipo multidisciplinario a través de las
múltiples reuniones de trabajo y coordinación sostenidas desde enero de 2023 hasta la
fecha.

y. En este sentido, a través de tales diversas reuniones de trabajo y coordinación mantenidas


por ambas partes en el Primer Juzgado de Familia de Huancayo, la madre de mi menor
hija y mi persona hemos arribado y cumplido diversos acuerdos voluntarios, así como
hemos desarrollado diversas acciones en conjunto, todo ello en aras del interés superior de
nuestra menor hija.

z. Atendiendo a que las relaciones familiares por naturaleza con dinámicas y evolucionan en
el tiempo, estos hechos revelan de forma irrefutable la sustancial mejora en la dinámica
familiar desde el inicio del proceso (2019), ya que en la actualidad la madre de mi menor
hija y mi persona sí tenemos la capacidad de llegar a acuerdos conjuntamente y
mantenemos una relación de colaboración y comunicación en favor del bienestar y
dinámica familiar sana de nuestra hija.

aa. Es así que esta nueva situación familiar y cambio de circunstancias se puso en
conocimiento de la Sala Civil Permanente de Huancayo, y se ofrecieron las pruebas
pertinentes en calidad de medios probatorios extemporáneos, cuyo detalle sucinto es el
siguiente:

Escrito de fecha 09 de marzo de 2023:


- Anexo 1-A: El mérito del correo electrónico de fecha 04 de febrero de 2022, remitido
por el área de admisión de la Institución Educativa Ingeniería en donde se señala fecha
de “entrevista a los padres” para el 07 de febrero de 2023 a las 04:15 pm.
- Anexo 1-B: El mérito de la constancia de vacante de fecha 10 de febrero de 2023
emitida por el director de la Institución Educativa Ingeniería, que acredita que mi
menor hija es desde este año 2023 alumna de la institución educativa ingeniería.
- Anexo 1-C: El mérito de la copia cargo de la solicitud de fecha 07 de marzo de 2023
presentada por mi persona hacia el director de la Institución Educativa Ingeniería

16
solicitándole me brinde copia del documento que contiene la entrevista realizada por la
Lic. Maritza Aliaga (sub directora de primaria), de fecha 07 de febrero de 2023, la cual
fue parte del proceso de admisión de mi menor hija a la i.e. ingeniería.
- Anexo 1-D: El mérito de la copia documento “Ficha De Entevista Familiar Nivel
Primaria” de fecha 07 de febrero de 2023, suscrito por la Lic. Maritza Aliaga, por la
Sra. Danna ……………………. (madre de mi menor hija) y por mi persona, en donde
consta que ambos mantenemos una relación cordial y que estamos de acuerdo con
que se determine judicialmente la tenencia compartida progresiva de nuestra menor
hija.

Escrito de fecha 09 de mayo de 2023:


- Anexo 1-A: El mérito de la copia del contrato de alquiler de fecha 03 de mayo de 2023,
suscrito por la Sra. Isabel Felices Vargas y mi persona en donde se procede a arrendar
el departamento 703 ubicado en Jr. Cuzco N° 284, Provincia y distrito de Huancayo,
para el uso de mi menor hija y su madre; lo que acredita el avance de la relación
familiar.
- Anexo 1-B: El mérito de la copia de diversos comprobantes de pago de “Tienda Efe”,
“Oechsle”, “Sodimac Home Center” Y “Maestro Home Center” que acreditan la
implementación del departamento alquilado.
- Anexo 1-C: El mérito de comprobantes de pago de la cuota de ingreso, matrícula y
pensiones de la Institución Educativa Particular “Ingeniería”, así como del
concesionario del comedor de la Institución Educativa Particular “Ingeniería”
(Catering Impacto Perú).
- Anexo 1-D: El mérito de diversas fotografías de tareas escolares de mi menor hija en
las que he colaborado.
- Anexo 1-E: El mérito de la copia del documento de desistimiento de elevación de
actuaciones presentado con fecha 20 de abril de 2023 en el Caso Fiscal N.°
22XXXXXX-2022-XXXX-0 seguido ante la 4ta Fiscalía Provincial Penal de
Huancayo, en donde la madre de mi menor hija tenía la calidad de investigada.

bb. Sin embargo, aplicando la rigidez de las reglas preclusivas, e inobservando incluso el
Tercer Pleno Casatorio Civil, la Sala Civil Permanente de Huancayo emitió la
Resolución N.° 64 de fecha 02 de junio de 2023, en la cual declaró improcedentes dichos

17
medios probatorios, señalando sorprendentemente (e inobservando flagrantemente el
Tercer Pleno Casatorio), lo siguiente:

Sobre la oportunidad del Ofrecimiento de Pruebas


Cuarto: Sobre el particular, es necesario dejar establecido que el principio de
Oportunidad o Preclusión en materia probatoria es la regla general aplicable
en nuestro ordenamiento procesal, en consecuencia, es obligación de los
justiciables ofrecer sus medios probatorios en las etapas señaladas para este
efecto, en caso contrario los mismos no deberán ser admitidos por el juzgador.
El principio de preclusión, es explicado en palabras del maestro Alsina, de la
siguiente forma: “el paso de un estadio al siguiente supone la clausura del
anterior, de tal manera que los actos procesales cumplidos quedan firmes y
no pueden volverse sobre ellos. Esto es lo que constituye la preclusión: el
efecto que tiene un estadio procesal de clausurar el anterior”. En línea con lo
expuesto, las partes o terceros legitimados que pudiendo haber ofrecidos pruebas
en las etapas establecidas no lo hubiesen hecho, pagan su omisión quedando
impedidos de ofrecer esas pruebas más adelante; esta restricción se debe a que la
oportunidad para ofrecer pruebas tiene por fin mantener un proceso ordenado, e
impedir que una de las partes se vea sorprendida con medios probatorios que
haya podido reservar su contraparte para el último momento, evitándose además
la dilación del procedimiento y trasgresión a las normas del debido proceso.
(…)
Séptimo: De lo expuesto y lo actuado en el presente, podemos ver con claridad
que, si bien los documentos presentados por el demandante puedan o no referirse
a nuevos hechos y/o ser posteriores a la postulación del proceso, sin embargo,
dichas solicitudes no cumplen con los presupuestos establecidos en los artículos
374 y 429 del acotado código procesal civil, es decir, haber sido presentadas al
contestar la demanda o reconvenir o de ser el caso en el escrito de formulación
de apelación o en el de absolución de agravios, asimismo, debe tenerse en cuenta
que la etapa procesal correspondiente a la presentación de medios probatorios a
precluido y esta no puede ser interpuesta en cualquier etapa procesal del proceso
porque sino se estaría vulnerando el debido proceso y causando indefensión a las
partes procesales, hecho que no ha considerado el peticionante, por lo tanto, el

18
ofrecimiento de nuevos medios probatorios realizada por el demandado deben
ser rechazados, debiendo continuar el proceso conforme a su estado procesal
correspondiente.

cc. Es decir, el Ad Quem indicó que debió presentarse dichas pruebas con la apelación o en la
contestación de demanda, pese a que en ese momento dichos hechos aún no habían
sucedido, resolviendo en el 2023, sobre pruebas del año 2019. Para la Sala, la historia se
“congeló” en el tiempo.

dd. Pero no solo ello, se le solicitó a la Sala que, para mejor resolver de la presente causa,
valore la forma en cómo venía llevándose a cabo el régimen de visitas progresivo
mediante la revisión del cuaderno respectivo (cuaderno 10XXX-2019-XX), esto pues
acreditaba que la dinámica familiar había progresado en beneficio de mi hija, esto se
solicitó ante el Colegiado Superior mediante los escritos de fecha 13 de junio de 2023,
22 de junio de 2023 y 27 de junio de 2023, pedidos y solicitudes que obran en el
expediente principal.

ee. Lamentablemente, y pese a que ello forma parte del expediente (así sea un cuaderno
distinto al principal), mediante Resolución N.° 66 de fecha 28 de junio de 2023 y
Resolución N.° 67 de esa misma fecha, la Sala Superior pasó por alto dicha información
que resultaba extremadamente valiosa para tener clara la situación actual de la relación
familiar, situación que corrobora la inobservancia del Ad Quem de la flexibilización
procesal en temas de familia que involucren a menores de edad.

ff. Como resulta evidente de todo lo desarrollado, la Sala Superior ha inaplicado la regla de
flexibilización de las normas procesales en temas de familia, lo que se vuelve más grave
cuando estamos frente a un proceso de tenencia.

gg. Todo esto, ciertamente, repercute no sólo en la esfera jurídica del padre, sino también en
la de la menor, quien, en detrimento de su Interés Superior, se ha visto privada de una
decisión que sea acorde a las circunstancias y garantice su desenvolvimiento y
crecimiento personal, eso a causa de la imposición de rígidas reglas procesales, lo cual
de ninguna forma puede ser tolerado por esta Corte Suprema.

19
hh. Es por ese motivo que solicito a la Corte Suprema que admita el recurso por esta causal
extensamente desarrollada, y emita una decisión de fondo que genere doctrina
jurisprudencial, pues debe evitarse a toda costa la emisión de decisiones judiciales que
pongan por encima de los intereses del niño la aplicación de reglas procesales
medioevales.
B. Sobre el punto resolutivo 11 (tenencia): Causal contenida en el numeral 1 del artículo
388 del Código Procesal Civil, ya que la Sentencia de Vista vulneró e inobservó el
derecho fundamental a la prueba (garantía del debido proceso) y el Interés Superior del
Niño, al haber considerado que no resultaba necesaria una pericia de alienación
parental para emitir una decisión sobre tenencia, pese a haber sido ofrecida desde
primera instancia, especialmente cuando la decisión se fundó únicamente en la
manifestación de la menor y desde el inicio se alegó y ofrecieron pruebas sobre la
existencia de alienación.

a. Como primera cuestión, cabe dejar constancia que un juez no tiene el expertise para
determinar si existe o no alienación parental, pues para ello resulta necesaria una pericia con
el objetivo específico para determinar tal condición con un experto en la materia. Pese a ello,
en la Sentencia de Vista el Ad Quem señaló lo siguiente:

Octavo: Se advierte de los actuados en el presente proceso que el demandado ha


puesto principal énfasis en alegar la existencia de alienación parental por parte
de la demandante hacia su menor hija, lo que habría conllevado que demuestre
conductas de rechazo y temor hacia su padre, es así que de manera persistente ha
ofrecido como medio de prueba una evaluación psicológica que determine la
alienación parental del que era víctima la menor; sin embargo, dicho
planteamiento se enerva en este particular caso, pues advertimos que el rechazo
manifestado por la menor con relación a permanecer con su padre o compartir
momentos sin la presencia de su madre no devienen de una labor de desprestigio
que pudiera haber ejercido la demandante en perjuicio del demandado, o que sea
resultado de haber sido inducida a mostrar dicha actitud de rechazo o temor
frente al padre (…).

b. Al respecto, la Sala Suprema debe considerar que el juez debe valorar los medios probatorios
en su integridad (no pretendemos su valoración en esta instancia), a fin de determinar si

20
existe un mínimo indicio de que los dichos del menor puedan estar siendo influenciados por
la madre o el padre, especialmente atendiendo a la edad del menor y a si la menor vive con la
persona que es imputada de ser la causante de alienación.

c. En este caso particular, se tomó en consideración, sin más, el dicho de la menor en 3


documentos, pese a que existen al menos 9 informes que informan sobre la existencia de
indicios de alienación parental9 (respecto de los cuales no pretendemos su valoración, sino su
relevancia para la situación estructural que se denuncia). Sobre eso no se quiere decir que
mientras más documentos existan mayor peso probatorio se tiene.

d. Es importante señalar que debe tomarse en cuenta que la alienación parental constituye
maltrato infantil (por eso la relevancia de establecer doctrina jurisprudencial) según la Sala
Civil Permanente de la Corte Suprema de Justicia de la República a través de la Casación N°
2067-2010-CUSCO de fecha 26 de abril de 2012.

9
Informes Interdisciplinarios Nro. 01, 03, 04, y 05-2020- Interdis./MJIVF/CSJJU/PJ; Informe
Interdisciplinario N° 129-2021-Interdis./CSJJU/PJ; Informe Interdisciplinario N°
007-2022-Interdis./CSJJU/PJ; Informe Interdisciplinario N° 014-2022-Interdis./CSJJU/PJ; Informe
Interdisciplinario N° 075-2022-Interdis./CSJJU/PJ y el Informe Interdisciplinario N°
104-2022-Interdis./CSJJU/PJ.

21
e. Del mismo modo, según la sentencia emitida en el Exp. N.° 007XX-2013 por la Segunda
Sala Civil de la Corte Superior de Justicia de Ica el 13 de marzo de 2013, se define la
alienación parental de la siguiente manera:

f. En ese mismo sentido, en la Casación Nº 3767-2015-CUSCO, se estableció lo siguiente:

“Se concluye entonces que quien propicia el alejamiento del mismo de su madre es
el demandado; es decir, asume una conducta con predisposición para impedir que
la demandante se reúna con su hijo, lo que definitivamente debe tenerse en cuenta,
ya que es atentatorio al bienestar del menor por afectar su estabilidad emocional”

g. A mayor abundamiento, la alienación parental es una forma de violencia psicológica, ya que


la Ley N° 30364 define la violencia psicológica de la siguiente manera:

a) Violencia psicológica. Es la acción u omisión, tendiente a controlar o aislar


a la persona contra su voluntad, a humillarla, avergonzarla, insultarla,

22
estigmatizarla o estereotiparla, sin importar el tiempo que se requiera para su
recuperación.

h. A la luz de dicha jurisprudencia y normativa, se pretende señalar es que todo juez tiene el
deber de, ante el mínimo indicio de alienación parental (especialmente en un proceso de
tenencia y de régimen de visitas) valorar adecuadamente el dicho del menor, e incluso
disponer la pericia de alienación parental. Esto se debe hacer en beneficio del propio menor,
especialmente atendiendo a su edad y a las circunstancias del caso.

i. Así, por ejemplo, en este caso el Ad Quem refiere en la página 29 de la sentencia de segunda
instancia que en el Informe Psicológico N° 079-2019-Ps/CSJJU/PJ de fecha 29 de septiembre
de 2020 (es decir de casi 4 años de antigüedad) correspondiente a mi menor hija se señala
que: “Del relato de la niña no se evidencia indicadores (alienación parental”). Sin embargo,
en ese mismo Informe se consigna lo siguiente: ““me gustaría ver a mi papá, salir a pasear
con él pero no puedo porque mi mamá se va a molestar”10.

j. De ese modo, todo juzgador debe evaluar el acervo probatorio y cada documento en su
integridad, a fin de determinar si existe alguna posibilidad de alienación parental, en cuyo
caso debe ordenar la pericia respectiva, pues de lo contrario estaría vulnerando al menor
mismo, quien merece una especial protección especialmente de parte de loa judicatura.

k. Mas aún, y esto es espcialmente relevante, la propia Sala Civil, en la Resolución N.° 68 del
11 de julio de 2023 (que pareciera haber perdido toda imparcialidad y tener alguna rencilla
personal con el padre), señaló textualmente lo siguiente:

Quinto: Finalmente cuestiona señalando que, resulta inconcebible bajo los


esquemas mínimos de un Estado de Derecho se supedite el cumplimiento de
una sentencia a la voluntad de una niña de 7 años, quien por su edad carece a
todas luces de capacidad de razonamiento para elegir si quiere ver o no a
su padre.

l. Así, por ejemplo, en este caso existían dichos indicios, pues en los propios Informes del
Equipo Multidisciplinario a cargo del caso, se encuentran observaciones y conclusiones

10
Asimismo, en dicho Informe Psicológico también se concluye que existe por parte de mi menor hija
“predisposición a compartir tiempo con su padre.”

23
contundentes acerca de la existencia de indicios de alienación parental y posible
manipulación por parte de la madre en contra de la menor.

m. Incluso, estos Informes del Equipo Multidisciplinario fueron emitidos con posterioridad al
Informe Psicológico N° 079-2019-Ps/CSJJU/PJ de fecha 29 de septiembre de 2020, por lo
que a la luz de los mismos resultaba indispensable volver a practicar una nueva evaluación
psicológica para determinar si durante los años 2021 y 2022 fue sometida a alienación
parental11.

n. Como situación concomitante, en este caso el Ad Quem resolvió de forma contradictoria


respecto al contenido de la Carta N° 102-DCPA-H-2022 de fecha 16 de junio de 2022,
remitida por la Directora del CEP ANDINO (páginas 23 a 35 de la Sentencia de Segunda
Instancia), toda vez que en el Cuaderno 10XXX-2019-XX-XXXX-JR-FC-01, el propio Ad
Quem emitió el Auto de Vista N° 844-2022, contenido en la Resolución N° 14 de fecha dos
de noviembre de 2022, en donde en base a dicha misma Carta, revocó y reformó la
11
INFORME INTERDISCIPLINARIO N° 007-2022-INTERDISC./CSJJU/PJ DEL 28 DE ENERO DE
2022: “la niña percibe la rigidez por parte de la mamá al momento de tener contacto familiar con el padre”
(…) “la niña al momento de relacionarse con su padre y sus padres (abuelos) buscaba con la mirada la
anuencia de la mamá” (…)“se pudo observar poca espontaneidad y rigidez en la niña durante el desarrollo
del encuentro familiar, asimismo, se pudo observar la búsqueda de la aprobación por parte de la madre a las
acciones que quería realizar con el padre y con sus abuelos paternos.” “se ha evidenciado la búsqueda de
aprobación de la madre por parte de la niña a través de la mirada.” (…) “la niña ha evidenciado cambio de
actitud en el desarrollo del primer y segundo encuentro en relación a la espontaneidad y rigidez que mostró
ante la relación con el padre y los abuelos paternos” (…) “se sugiere que los encuentros familiares se den
exclusivamente entre la niña y el padre, sin la intervención de la madre”
INFORME INTERDISCIPLINARIO N° 014-2022- INTERDISC./CSJJU/PJ DE FECHA 04 DE MARZO
DE 2022: “la niña se muestra renuente a todo lo que el padre le sugiere que realicen” (… “)La niña ha
evidenciado cambios en la forma de cómo se interrelaciona con el padre.” (…) “Se ha evidenciado la búsqueda
de aprobación de la madre por parte de la niña a través de la mirada.” (…) “La niña interrumpe el desarrollo
del encuentro familiar con el padre bajo la excusa de querer corroborar que su mamá se encuentra en los
ambientes del módulo.” (…) “Se sugiere que la madre no permanezca dentro de los ambientes del módulo
durante el desarrollo del encuentro entre la niña y el padre.
INFORME INTERDISCIPLINARIO N° 075-2022-INTERDISC./CSJJU/PJ DE FECHA 01 DE JUNIO DE
2022: (…) “la niña evidencia conductas como frotarse constantemente las manos, intención de llorar y busca
con la mirada la aprobación de la madre” (…) “por momentos la niña se desenvuelve de forma espontánea con
el padre” (…) “se ha evidenciado que la madre refuerza las conductas de rechazo de la niña” (…) “la madre se
muestra renuente a permitir que la niña interactúa a solas con el padre” (...) “debido a las conductas que la
niña presenta y que la madre refuerza, no se cumple el objetivo de la sesión” (…) “la niña continúa con
conductas de rechazo hacia el padre y la búsqueda de aprobación de la madre” (…) “la madre se muestra
renuente a permitir que la niña interactúe a solas con el padre” (…), “la niña justifica rechazo hacia su padre
con los mismos argumentos de la sesión anterior, argumentos que no logra ubicar en el tiempo, y evidencia
dificultad para explicar porque manifiesta ese tipo de ideas” (…) “la niña continúa buscando la aprobación de
la madre a través de la madre a través de la mirada al momento de aceptar contacto con el padre” (…) “la
madre se muestra renuente a permitir que la niña interactúe a solas con el padre” (…) “se pudo observar que, a
pesar de las conductas de rechazo, se dan pequeños espacios de interacción y acercamiento afectivo entre la
niña y el padre”.

24
prohibición del A Quo de que mi persona ingrese al interior del Centro Educativo de mi
menor hija, situación que resulta incoherente con lo resuelto en la sentencia.

o. Asimismo, la actitud del Ad Quem resulta incoherente porque en tal a resolución del cuaderno
47 y en la la Carta N° 102-DCPA-H-2022 de fecha 16 de junio de 2022, remitida por la
Directora del CEP ANDINO, sí se habrían dado luces de haber entendido la posible
existencia de alienación parental que venía sufriendo mi menor hija por parte de su madre.

p. En efecto, el Ad Quem tampoco consideró adecuadamente la Carta del CEP ANDINO (con el
único afán de perjudicarme y atribuirme una serie de conductas falsas) pues omite toda
valoración a que en dicha carta se prueba lo siguiente:

 De acuerdo a la Carta N° 102-DCPA-H-2022 de fecha 16 de junio de 2022,


remitida por la Directora del CEP ANDINO, se advierte que mi persona y la

25
madre de mi menor hija, jamás hemos tenido ningún conflicto directo o indirecto
presenciado por mi menor hija, toda vez que siempre que nos hemos reunido con el
personal del CEP ANDINO, mi menor hija nunca ha estado en los mismos
ambientes que nosotros y que nunca mi persona ha agredido de ninguna
manera a su madre, ni tampoco la ha hecho llorar, por lo que resultaba
imposible que mi menor hija hubiera podido presenciar cualquier discusión
entre ambos.

 De acuerdo a la Carta N° 102-DCPA-H-2022 de fecha 16 de junio de 2022,


remitida por la Directora del CEP ANDINO, se advierte que existe un indicio de
manipulación o alienación parental hacia mi menor hija por parte de su madre, lo
que implicaría un expreso incumplimiento de una prohibición establecida en el
Auto de Vista N° 343-2022, ya que el Informe del CEP ANDINO dice: “se
observa de parte de la menor rechazo al papá, coge de la cintura a la mamá

26
fuertemente y no se desprende, la niña tiene fijación a la mirada de la madre”.
Es decir, se tiene que mi menor hija supedita su rechazo hacia mi persona por el
control que ejerce con su mirada de la madre.

 Todo ello pone en tela de juicio lo señalado en el Informe Psicológico N° 269-


2022-PS-CSJJU/PJ, por lo que resultaba de suma importancia efectuar una nueva
evaluación psicológica a mi menor hija para determinar la existencia de alienación
parental.

q. Como antecedente directo de este agravio se debe señalar que en mérito de la apelación de
interpuse en contra del régimen de visitas determinado por el A Quo en la Resolución N° 04
emitida en el en el cuaderno cautelar signado como Exp. N°10XXX-2019-XX-XXXX-JR-
FC-01, el Ad Quem emitió el Auto de Vista N° 343-2022, de fecha 06 de mayo de 2022, que
contiene la Resolución Cuatro, en donde estableció lo siguiente:

r. Es justamente la regla 2 (“El cumplimiento de las visitas debe darse respetando el


consentimiento de la menor”) la que creó un incentivo perverso para que la madre de mi
menor hija obstaculice el cumplimiento del régimen de visitas cautelar a través de
manipulación en su contra, siendo que se llegó al punto de volverlo de imposible el

27
cumplimiento habida cuenta de la probada manipulación que venía ejerciendo desde antes
la madre de mi menor hija en su contra y que está acreditada en los Informes del Equipo
Multidisciplinario detallados en el párrafo l), pie de página 10 del presente recurso.

s. Asimismo, a mayor inri, pese a que el propio Ad Quem estableció la regla 1 (“la
prohibición de los padres y familiares directos de brindar información negativa a la
menor respecto del uno al otro, así como de los familiares”) ni el A Quo ni el Ad Quem
hicieron efectivo el cumplimiento de evaluar psicológicamente que mi menor hija estaba
siendo sometida a alienación parental por parte de su madre.

t. Más aún, en línea con la causal alegada, el Ad Quem omite flagrantemente aplicar el
Protocolo De Participación Judicial Del Niño, Niña Y Adolescente Del Poder Judicial
(aprobado por R.A N° 228-2016-CE-PJ), pues no toma en cuenta que la toma de opinión de
mi menor hija de fecha 19 de enero de 2022 (la cual cita en las páginas 21 y 22 de la
sentencia de segunda instancia) no siguió el procedimiento ahí establecido, lo que representa
un vicio aún mayor que importa la necesidad de la Sala Suprema de establecer lineamientos
respecto a las situaciones en las cuales resulta necesaria una pericia de alienación parental.

u. El primer incumplimiento de tal protocolo en la toma de opinión de mi menor hija radicó en


que, previamente a su realización, el A Quo nunca ordenó que la menor fuera preparada por
el equipo multidisciplinario un día antes de la toma de opinión pese a que ello es deber del
juez según el referido Protocolo:

28
v. El segundo incumplimiento de tal protocolo se basó en que la toma de opinión de mi menor
hija fue realizada en el Despacho judicial del A Quo, y no en un ambiente amigable para la
menor, tal y como ordena dicho Protocolo:

w. Por ello es imprescindible tomar en cuenta la Casación N.° 1312-2020 CAJAMARCA, en se


señaló que “en los procesos de tenencia debe prevalecer el interés superior del niño pese a
la opinión manifestada por este”, por lo que en ese caso se estableció que “No se ha podido
establecer que el menor se encuentre en situación de vulnerabilidad, riesgo o abandono por
parte de su progenitora, no siendo suficiente que el menor refiera quiera vivir con su padre”.

x. Es decir, ya la Corte Suprema ha dado unos lineamientos jurisprudenciales preliminares


respecto a que el dicho del menor no es determinante, sin embargo, resulta necesario
establecer doctrina jurisprudencial al respecto, especialmente cuando ahora el artículo 81 del
Código de los Niños y Adolescentes establece la tenencia compartida como una regla, por lo
que disponer la tenencia exclusiva importará realizar una labor probatoria exhaustiva, en
beneficio exclusivo del menor.

y. Por ello, reiteramos que es necesario que a través del presente caso se establezca doctrina
jurisprudencial que determine y desarrolle que ante el mínimo indicio de alienación parental
en contra de un menor, todo juzgador está en la obligación de ordenar que se practique la
pericia psicológica correspondiente para comprobar o descartar tal maltrato infantil.

C. Sobre el punto resolutivo 11 (tenencia): Causal contenida en el numeral 3 del artículo


388 del Código Procesal Civil, ya que la Sentencia de vista ha interpretado
erróneamente el artículo 81 y ha inaplicado el artículo 82 del Código de los Niños y
Adolescentes, al afirmar que el dicho de la menor es determinante para no disponer la
tenencia compartida, y al no haber tomado en consideración la conducta de ambos
progenitores para la determinación de la decisión sobre la tenencia.

29
a. La sentencia del Colegiado Superior comete un error flagrante cuando reafirma que para
determinar una Tenencia Compartida Judicialmente se requiere “QUE ENTRE LOS PADRES
EXISTA UNA RELACIÓN DE COLABORACIÓN Y COORDINACIÓN CONSTANTE TODA
VEZ QUE SERÍA LA ÚNICA GARANTÍA PARA DESARROLLAR ARMONIOSAMENTE EL
CUIDADO Y DESARROLLO DEL MENOR”

b. Esto es inexacto, ya que bajo el enfoque de la Nueva Ley De Tenencia Compartida (Ley N°
31950), este requisito aplica a la tenencia compartida voluntaria, es decir la tenencia
compartida que se fija sin la necesidad de acudir ante un juez, en otras palabras, cuando
hay mutuo acuerdo o conciliación. justamente a falta de acuerdo, se recurre a la tenencia
compartida determinada de forma judicial.

c. De forma contraria a la norma, la Sala Superior afirma en las páginas 21 y 22 de la sentencia


de segunda instancia que “la consideración de la existencia de diversos procesos judiciales
y/o constataciones policiales es para poner en evidencia el alto grado de conflicto existente
entre los progenitores de la menor siendo este un indicador desfavorable para los fines de la
tenencia compartida que se pretende en el presente caso.”

d. Sin embargo, resulta de vital importancia remarcar que, bajo el enfoque del artículo 81 del
Código de los Niños y Adolescentes (en adelante, CNA), modificado por Ley N.° 31590, la
conflictividad no es causal para denegar la tenencia compartida, ya que no se incluye la
“conflictividad” como excepción para aplicar la tenencia compartida vía judicial.

e. De acuerdo a lo ya señalado, de acuerdo al artículo 81° del CNA, las únicas excepciones para
denegar la tenencia compartida son: i) que esta no sea posible y ii) que esta resulte perjudicial
para el interés superior del menor. Asimismo, de acuerdo al artículo 82 del CNA las
excepciones para la variación de la tenencia son: la alienación parental, obstruir la relación y
comunicación, no respetar acuerdos judiciales o de conciliación.

f. La sentencia de segunda instancia aplica de forma incorrecta el art. 81, ya que la Nueva Ley
de Tenencia Compartida (Ley N° 31590) sólo establece como excepción para su aplicación
que la tenencia compartida sea perjudicial para el menor y, en el presente caso, eso no se
cumple, ya que en ningún extremo de la sentencia se analizar si el padre o madre representa
un peligro para la niña.

30
g. Por tanto, la sentencia omite el hecho que, bajo el enfoque de la Nueva Ley de Tenencia
Compartida, y de acuerdo con el artículo 81° del CNA modificado por la misma, el juez
especializado deber otorgar, como primera opción, la tenencia compartida, dictando las
medidas necesarias para su cumplimiento.

h. Es evidente que toda pareja con hijos, que se separa y llega a un proceso de tenencia, es
porque no tiene una buena relación de colaboración y coordinación, de lo contrario no
acudiría a un juez para que decida la tenencia, sin embargo, eso no significa que la tenencia
compartida no sea aplicable.

i. La sentencia recurrida se aparta de la norma, sin contenido del factum del caso, por lo que no
es coherente con la reforma de la tenencia de la Ley N° 31950, supeditándola a un requisito
que la ley no se exige: “una relación de colaboración y coordinación constante”

j. Es decir, la nueva ley de tenencia compartida no incluye la “conflictividad” como una


excepción para aplicar la tenencia compartida vía judicial; las excepciones para la
variación de la tenencia son la alienación parental, obstruir la relación y comunicación, no
respetar acuerdos judiciales o de conciliación.

k. Es más, llama la atención que bajo esta lógica el Colegiado Superior evitó citar que en la
misma Exposición de Motivos del Proyecto de Ley N° 1096/2021-CR, el cual devino en la
Ley N.° 31950 (Exposición de motivos de la Ley de Tenencia Compartida) se señala que:

“NO OBSTANTE, Y AUN CUANDO EL ESTADO GARANTIZA EL MENCIONADO


DERECHO [A RELACIONARSE Y MANTENER EL VÍNCULO FAMILIAR],
EXISTEN OCASIONES EN LAS QUE UNO DE LOS PROGENITORES
OBSTACULIZA LAS RELACIONES FILIALES DE LOS HIJOS CON EL OTRO
PROGENITOR; EN CIERTOS CASOS TRANSFORMANDO LA CONCIENCIA DE
SUS MENORES MEDIANTE EL USO DE DIFERENTES ESTRATEGIAS, CON EL
OBJETO DE IMPEDIR, OBSTRUIR O DESTRUIR SUS VÍNCULOS. ESTA
CONDUCTA ES CONOCIDA COMO ALIENACIÓN PARENTAL, CONSIDERADA
POR ALGUNOS AUTORES COMO UNA DE LAS FORMAS MÁS SUTILES DE
MALTRATO INFANTIL” (P.3)

l. Todo esto ha sido omitido en el caso, habiéndose dictado una sentencia con una aplicación
flagrantemente errada de la norma sobre tenencia compartida.

31
m. Asimismo, sobre la indebida aplicación del artículo 82° del CNA resulta importante resaltar
que el Colegiado Superior desconoce que el A Quo reconoce expresamente en los puntos
quinto y sexto de la sentencia de primera instancia 12 la conducta obstruccionista de la madre
en el cumplimiento del régimen de visitas de mi menor hija, situación no considerada para la
aplicación de la norma.

n. Nuevamente, no se pretende una revaloración de las pruebas, sino se denuncia la inaplicación


de una norma (artículo 82 del CNA) a los hechos del caso, especialmente cuando la misma
Sala Superior ha señalado que la madre no permitía me manera injustificada la relación
entre nuestra menor hija y mi persona, situación que se corroboró con los Informes
Multidisciplinarios antes detallados.

D. Sobre el punto resolutivo 12 (régimen de visitas): Causales contenidas en los numerales


1 y 3 del artículo 388 del Código Procesal Civil, ya que la Sentencia de Vista inaplicado
el artículo 370 del Código Procesal Civil, y ha inobservado el principio de prohibición
de la reforma en peor, garantía constitucional que forma parte del debido proceso
(Cfr. Exp. N.º 0553-2005-HC/TC y Exp. N.° 03969-2012-PHC/TC), regulado en el
numeral 3 del artículo 139 de la Constitución Política del Perú; y ha inobservado el
derecho al contradictorio, derecho fundamental que también forma parte del debido
proceso.

a. Como se verifica de autos, en primera instancia se emitió una decisión referida al régimen
de visitas. Es más, existe incluso un cuaderno aparte en el cual se viene llevando a cabo
(bajo control judicial), un régimen de visitas progresivo, el cual ha venido siendo
ciertamente fructífero, dándose el externamiento incluso para que pueda ver y fortalecer la
relación con sus abuelos paternos.

b. Bajo dicho régimen de visitas no se estableció en ningún extremo que sólo podía visitar a
mi hija si es que ella manifestaba su voluntad de querer verme; esto pues justamente en
pro del desarrollo de la relación padre-hija, se estableció un régimen de visitas progresivo.

12
“(…) no es menos cierto que la madre presenta un conducta conflictiva de modo pasivo, mostrando
omisión y resistencia a que el padre se relacione o tenga contacto con la niña, al no brindar de manera
adecuada las facilidades para ello tal como se ha informado del Informe N.º 129-2021-Interdis./CSJJU/PJ
del año 2021 obrante a folios 1787, y los Informes interdisciplinarios Nº 007, 014, 075 y 104-2022-
Interdis./CSJJU/PJ del año en curso, corrientes a folios 2172, 2698, 3068, 3516 respectivamente”.

32
c. Es el caso que emitida la sentencia de primera instancia que decidió otorgar la tenencia
exclusiva a favor de la madre, presenté apelación de sentencia únicamente contra el
extremo referido a la tenencia. Por su parte, la contraparte no presentó ningún recurso de
apelación, por lo que estuvo de acuerdo con cualquier cuestión vinculada al régimen de
visitas.

d. Es el caso que, en una decisión “sorpresa” y sin previo contradictorio 13, la Sala Civil
Permanente de Huancayo emitió una decisión variando (strictu, revocando), el régimen de
visitas dado en primera instancia, y que incluso venía ejecutándose satisfactoriamente. En
dicha arbitraria decisión la Sala dispuso lo siguiente:

2. Las visitas, permanencia y externamiento, de ser el caso, deben darse con el


consentimiento de la menor, es así que, en caso de mostrar su negativa, por
ningún motivo debe producirse su externamiento.

3. La participación del padre en el centro educativo de la menor debe ser en


estricto cumplimiento a lo dispuesto en el régimen de visitas, por lo cual debe
abstenerse de realizar cualquier acción tendiente a reclamar algún derecho
vinculado a su paternidad ante las autoridades educativas, así como
involucrar a los compañeros de la menor o padres de familia, pues, cualquier
desavenencia debe recurrir al órgano jurisdiccional poniendo en conocimiento
del mismo, debiendo poner en sobre aviso cualquier situación que ponga en
riesgo el cumplimiento del régimen de visitas o hechos relacionados a éste. Así,
queda terminantemente prohibido hacerse reclamaciones personales.

e. Como es evidente, y se explica por sí mismo, la Sala Civil Permanente de Huancayo


emitió una decisión respecto al régimen de visitas, revocándolo y reformándolo, pese a
que el régimen de visitas no fue objeto del recurso de apelación. Esto lo hizo exigible en
el punto 12 de la parte resolutiva de la sentencia.

13
La garantía del derecho al contradictorio impide, justamente, la emisión de decisiones sorpresa. Así:
ZUFELATO, Camilo. La dimensión de la “prohibición de la decisión-sorpresa” a partir del principio de
contradicción en la experiencia brasileña y el nuevo Código Procesal Civil de 2015: Reflexiones de cara al
derecho peruano. En: Derecho PUCP. Revista de la Facultad de Derecho N.° 78. Lima. 2017. P. 21-42.

33
f. Esta situación claramente vulnera el principio-derecho de prohibición de reforma en peor,
el cual ha sido reconocido por el Tribunal Constitucional como un derecho fundamental
(Exp. N.º 0553-2005-HC/TC y Exp. N.° 03969-2012-PHC/TC), y que también ha sido
expresamente regulado en el artículo 370 del Código Procesal Civil, el que señala
textualmente que “El juez superior no puede modificar la resolución impugnada en
perjuicio del apelante”.

g. Así, lo referido al régimen de visitas no fue sometido a la decisión de la Sala Superior 14,
pues la prohibición de reforma en peor tiene directa vinculación con el brocardo tantum
devolutum quantum apellatum; es decir, el Ad Quem sólo puede conocer y resolver sobre
aquellas cuestiones que han sido objeto de recurso de apelación.

h. Ahora bien, es preciso señalar que esto se vuelve aún más grave cuando no se ha otorgado
la posibilidad del contradictorio. En efecto, si bien el CPC establece algunas excepciones
a dicha regla (que no aplican al caso), la reforma en peor podría proceder únicamente si es
que se le otorga contradictorio a la parte en cuyo perjuicio de dicta la sentencia de vista.
Reformar en peor sin contradictorio claramente importa vulnerar el principio en cuestión.

i. Lo que es más grave de todo es que mediante escrito presentado el 07 de julio de 2023
solicité la nulidad de la sentencia sobre dicho extremo que modificó sin más el régimen de
visitas, pese a todo los avances tenidos en la relación familiar. Sin embargo, mediante
Resolución N.° 68 del 11 de julio de 2023, la Sala Civil Permanente de Huancayo resolvió
declarar improcedente dicho pedido, señalando lo siguiente:

Tercero: (…)
6. El impugnante pretende cercenar estos derechos en contra de su hija, so
pretexto de fallo extrapetita y haberse incurrido en prohibición de reforma en
peor.
7. Debemos precisar que, el presente proceso es uno de familia, específicamente,
tenencia de menor, en el que se encuentran involucrados intereses y derechos de
una menor de edad, así debe quedar claro que no se está discutiendo temas

14
CAVANI, Renzo. Teoría impugnatoria. Recursos y revisión de la cosa juzgada en el proceso civil. Óp.
Cit.: “Esta dimensión responde a la pregunta ¿qué es sometido a la decisión del órgano resolutor? Respuesta:
solo lo impugnado por las partes. Aquí es donde cobra relevancia el famoso brocardo tantum devolutum
quantum apellatum. Salvando la desfasada idea de “devolución”, este brocardo alude a la idea de que el poder
de juzgar está restringido a lo que fuera apelado.”

34
patrimoniales, casos en los son de aplicación el cuestionamiento que hace el
nulidicente, en este proceso, no se ha decidido sobre un terreno, vehículo,
televisor u otros inmuebles o muebles, sino sobre la situación de una menor que
evidentemente sufre del proceder incomprensible de sus propios padres, de la
apoca consideración que tienen hacia su hija en los enfrentamientos
interpersonales.
(…)

j. Pero no solo ello, en esa misma resolución la Sala Civil, a mi entender y opinión, ha
mostrado su total ausencia de imparcialidad y ha mostrado rencillas o animadversión
contra mi persona, al haber señalado lo siguiente:

El criterio de que una niña de 7 años no sabe lo que quiere, en tema de sus
sentimientos, no resulta aceptable a la fecha ni jurídica ni socialmente, así es
precisos señalar, que las niñas y los niños tienen pleno razonamiento para poder
determinar respecto a sus sentimientos para con sus progenitores, pues, los
padres se ganan el respecto y amor de sus hijos, con el respeto, amor y
consideración que ellos muestran hacia sus hijos, así, si un padre es maltratador,
egocéntrico, desconsiderado y solo busca su propio bienestar por encima de los
demás, evidentemente no tendrá el amor de su prole y será rechazado. Para ello
no se requiere ser mayor de edad ni ser erudito en materia alguna.

k. Es decir, mediante la Resolución N.° 68 la Sala consideró que en un proceso de familia


podía violarse el derecho de defensa y al contradictorio, así como la prohibición de
reforma en peor ¡Pero no podían flexibilizarse las normas de preclusión!

l. Más aun, sin ninguna prueba y utilizando adjetivos que no son propios de la magistratura
(lo que demostraría una parcialidad y animadversión desproporcionada en contra mía),
señaló que soy maltratador, egocéntrico y desconsiderado (¿?), no sabemos sobre la base
de qué, ni por qué afirmó ello. Sin embargo, lo que queda claro de dicha Resolución N.°
68 es que la propia Sala acepta que vulneró mis derechos, y trató de justificar dicha
situación lanzando adjetivos calificativos en contra de mi persona.

35
m. Por las razones antes expuesta, y porque la decisión de la Sala Superior no sólo vulnera mi
derecho, sino también afecta directamente a mi menor hija al restringirle la posibilidad de
que pueda relacionarse a plenitud con su familia paterna, es que solicitamos que se admita
el presente recurso por dicha causal y se declare fundada en su oportunidad.

E. Sobre el punto resolutivo 12: Causales contenidas en los numerales 1 y 3 del artículo 388
del Código Procesal Civil, ya que, la Sentencia de Vista prohibió ejercer mi derecho de
opinión y de crítica a las decisiones judiciales, garantizado en el numeral 20 del artículo
139 de la Constitución Política del Perú, y se inaplicó el artículo 10 del Texto Único
Ordenado de la Ley Orgánica del Poder Judicial.

a. De forma sorprendente, y sin mayor sustento o explicación, la Sala Civil Permanente de


Huancayo incluyó un mandato (exigible al ser incorporado bajo el punto 12 de la parte
resolutiva), en el siguiente sentido:

1. La prohibición al padre de emitir cualquier tipo de comentario o divulgación


de las actuaciones derivadas del presente proceso u otros conflictos de carácter
judicial en que se encuentre inmersa la menor, ya sea por redes sociales u otros
medios de divulgación masiva en que se exponga a la menor.

b. ¿Acaso la Sala tiene algún temor de que su decisión se haga pública, especialmente de lo
que me tildó injustificadamente en la Resolución N.° 68?

c. No se sabe, pero es ciertamente intrigante que se haya establecido tal prohibición,


especialmente cuando se han denunciado vicios flagrantes, y cuando la Sala ha emitido
adjetivos calificativos en contra de mi persona, respecto de lo cual tomaré las acciones
pertinentes.

d. Más allá de eso, dicha decisión vulnera un derecho fundamental contenido en el numeral
20 del artículo 139 de la Constitución, según el cual todo ciudadano tiene derecho a
criticar las decisiones judiciales, independientemente de si éstas son definitivas o no.

36
e. Así también, se ha inaplicado el artículo 10 del Texto Único Ordenado de la Ley Orgánica
del Poder Judicial, que recoge en vía legal dicho derecho, que no es más que una
manifestación del derecho fundamental de opinión, base fundamental para un Estado
Democrático.

f. Por ello, habiéndose demostrado la flagrante vulneración al derecho de opinión como


derecho rector de un Estado Democrático, solicitamos admitir el recurso por esta causal, y
emitir una decisión de fondo oportunamente.

POR TANTO:
Solicito a usted, señor Presidente, elevar el presente recurso a la Corte Suprema de Justicia de la
República a la brevedad.

OTROSI DIGO: Para efectos del recurso de casación, fijo como domicilio procesal postal en
Lima (sede de la Corte Suprema) en la Casilla N.° XXXX del Ilustre Colegio de Abogados de
Lima (sede Miraflores), y modifico mi domicilio electrónico en la Casilla SINOE N° XXXX,
lugares a donde deberán dirigirse todas las notificaciones que emita la Corte Suprema.

Asimismo, como correo electrónico de dominio Gmail se señala XXXXXXXX@gmail.com y


como número telefónico el XXXXXXXX.

Lima, 20 de julio de 2023.

(Nombre del abogado(a)) (Nombre de la parte material que recurre)


CAL N° XXXXXX DNI N° XXXXXXXX

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