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La tabla periódica es una herramienta fundamental en el estudio de la química, ya que organiza los
elementos químicos de acuerdo con sus propiedades y características. Su historia se remonta al
siglo XIX, con contribuciones significativas de científicos como Dmitri Mendeléyev y Julius Lothar
Meyer, quienes desarrollaron versiones tempranas de la tabla. La estructura actual de la tabla
periódica refleja la organización de los elementos en grupos y periodos, lo que permite identificar
tendencias en las propiedades químicas. En este trabajo, exploraremos la historia de la tabla
periódica, destacando las contribuciones de sus creadores, analizaremos su estructura y nos
propondremos a comprender cómo esta herramienta es fundamental para el estudio de la química y
su relevancia en la ciencia moderna.
La tabla periódica
La tabla periódica es una disposición tabular de los elementos químicos, ordenados por su número
atómico, configuración electrónica y propiedades químicas recurrentes. Es generalmente aceptada y
utilizada en muchos campos de la ciencia, incluyendo la química, la física y la biología.
La tabla periódica fue desarrollada por primera vez por el químico ruso Dmitri Mendeleev en 1869.
Mendeleev ordenó los elementos conocidos en ese momento en filas y columnas, de acuerdo a sus
propiedades químicas. Dejó espacios vacíos para los elementos que aún no se habían descubierto, y
predijo sus propiedades basándose en las tendencias de los elementos vecinos.
La tabla periódica actual contiene 118 elementos, de los cuales 94 se encuentran en la naturaleza y
los 24 restantes han sido creados artificialmente. Los elementos están ordenados en 18 columnas
verticales, llamadas grupos, y 7 filas horizontales, llamadas períodos.
Los grupos están numerados del 1 al 18, de izquierda a derecha. Los elementos de un mismo grupo
tienen propiedades químicas similares. Por ejemplo, todos los elementos del grupo 1 son metales
alcalinos, todos los elementos del grupo 17 son halógenos, y todos los elementos del grupo 18 son
gases nobles.
Los períodos están numerados del 1 al 7, de arriba hacia abajo. Los elementos de un mismo período
tienen el mismo número de niveles de energía. Por ejemplo, todos los elementos del primer período
tienen un solo nivel de energía, todos los elementos del segundo período tienen dos niveles de
energía, y así sucesivamente.
Antecedentes de la tabla periódica
A medida que se fueron descubriendo los elementos químicos aparecía el problema de
ordenarlos y clasificarlos. Así pues, los antecedentes de la tabla periódica se basaron en un orden
establecido mediante las masas atómicas, con la carencia de no poder distinguir claramente las
diferencias y semejanzas entre aquellos elementos.
Las triadas de Döbereiner
Las tríadas de Döbereiner son un conjunto de tres elementos químicos que tienen
propiedades similares. Fueron descubiertas por el químico alemán Johann Wolfgang Döbereiner en
1817.
Döbereiner observó que, cuando se ordenan los elementos químicos según su masa atómica,
algunos de ellos forman tríadas en las que el elemento central tiene una masa atómica que es
aproximadamente la media de las masas atómicas de los otros dos elementos.
Por ejemplo, la tríada del cloro, el bromo y el yodo tiene las siguientes masas atómicas:
Cloro: 35,45 g/mol
Bromo: 79,90 g/mol
Yodo: 126,90 g/mol
La masa atómica del bromo es aproximadamente la media de las masas atómicas del cloro y
el yodo.
Döbereiner también observó que los elementos de una tríada tienen propiedades químicas
similares. Por ejemplo, el cloro, el bromo y el yodo son todos halógenos.
Las tríadas de Döbereiner fueron un importante avance en la comprensión de la estructura de
la tabla periódica. Demostraron que los elementos químicos no están dispuestos al azar, sino que
siguen un patrón.
Ley de las octavas de Newlands
Entre 1850 y 1865, fueron descubiertos nuevos elementos, haciéndose además grandes
avances en la determinación de los pesos atómicos, pudiendo darse valores más acertados y
precisos a los pesos atómicos de los elementos ya conocidos, y valores correctos a los recién
descubiertos.
Esta ley mostraba un orden de los elementos químicos, a los cuales, agrupaba por familias o
grupos, que compartían propiedades muy similares entre sí, y clasificados por periodos de ocho
elementos, en los cuales las propiedades iban cambiando progresivamente.
En 1865, el químico inglés John Alexander Reina Newlands, intentó solucionar el problema del
comportamiento periódico de los elementos, colocando los elementos más ligeros en orden creciente
según sus pesos atómicos de la siguiente manera:
Li Be B C N O F
Na Mg Al Si P S Cl
K Ca
Newlands se dio cuenta que el octavo elemento se asemejaba al primero, así como el noveno
era similar al segundo, etc. A esta observación se le llama, “Ley de las octavas de Newland”, en
honor al químico inglés.
Como cada ocho elementos, aparecía otro elemento de iguales propiedades, a Newlands se
le ocurrió hacer la comparación entre sus octavas, con las octavas musicales, observando que la
periodicidad de las octavas químicas, sugería una armonía como si de música se tratase. Dicha
comparación, a pesar de ser idílica y atractiva, carecía de validez alguna, pero fue por ella que a su
clasificación le dio el nombre de Octavas de Newlands.
Posteriormente se descubrió una familia de compuestos inertes, formada por el helio, neón,
argón, kriptón, y xenón, o lo que es lo mismo, el grupo de los gases nobles. Este descubrimiento
transformó a las octavas de Newlands, en novanas.
Criticas a las octavas de Newlands
Los esfuerzos de Newlands, supusieron un gran paso con buena dirección, en los que a
clasificación de elementos se refería, pero, sin embargo, pueden destacarse cuatro grandes críticas
a su esquema clasificatorio:
1. No existía un lugar indicado para los elementos recientemente descubiertos.
2. No tuvo mucha consideración con los pesos atómicos, ni siquiera realizó una estimación
aproximativa de los valores más probables.
3. Algunos elementos no encajaban en el esquema de Newlands, como por ejemplo, el cromo,
que quedaba mal posicionado bajo el aluminio, y el magnesio, que es un metal, venía
colocado bajo el fósforo que es un no metal, así como el hierro que tratándose de un metal, se
encontraba debajo del azufre (no metálico), así que tanto éstos, como otros elementos, no
encajaban de ninguna manera en el esquema.
4. Esta clasificación, o regla de ordenación, a partir del calcio en adelante, no se cumplía, por lo
que no fue destacada por la comunidad científica, la cual incluso se burló de dicha
clasificación, pero 23 años después, fue finalmente reconocida por la Royal Society,
otorgando a Newland la medalla Davy, que era la más alta condecoración dada por esta
sociedad.
Las tres primeras filas de la tabla de Newlands, en cuanto a puntos de ebullición y fusión, se
puede comparar a la tabla periódica actual.
Sistema de clasificación de Julius Lothar Meyer
El sistema de clasificación química de Julius Lothar Meyer es una tabla periódica temprana
desarrollada por el químico alemán Julius Lothar Meyer en 1864. Fue una de las primeras tablas
periódicas que organizó los elementos químicos según sus propiedades físicas y químicas.
La tabla de Meyer estaba organizada en filas y columnas, con los elementos agrupados según
su valencia. La valencia es el número de electrones que un átomo puede ganar o perder para formar
un enlace químico. Meyer también agrupó los elementos según su masa atómica.
La tabla de Meyer fue un importante avance en la comprensión de la estructura de los átomos
y la organización de los elementos químicos. Ayudó a sentar las bases para la tabla periódica
moderna, que fue desarrollada por Dmitri Mendeleev en 1869.
La tabla de Meyer es un recordatorio de la importancia de la organización y la clasificación en
la ciencia. Al organizar los elementos químicos según sus propiedades, Meyer pudo identificar
patrones y relaciones que ayudaron a comprender mejor la naturaleza de la materia.
Sistema de clasificación periódica de Mendeleev
La tabla periódica de los elementos es un sistema de organización de los elementos químicos.
Fue desarrollado por Dmitri Mendeleev en 1869, y desde entonces se ha convertido en una de las
herramientas más importantes de la química.
La tabla periódica está organizada en filas y columnas. Las filas se llaman períodos, y las
columnas se llaman grupos. Los elementos están ordenados en la tabla según su número atómico,
que es el número de protones en el núcleo del átomo.
La tabla periódica se puede utilizar para predecir las propiedades de los elementos. Por
ejemplo, los elementos que están en el mismo grupo tienen propiedades químicas similares. Esto se
debe a que los elementos en el mismo grupo tienen el mismo número de electrones de valencia, que
son los electrones en la capa más externa del átomo.
La tabla periódica también se puede utilizar para clasificar los elementos. Los elementos se
pueden clasificar en metales, no metales y metaloides. Los metales son elementos que son sólidos a
temperatura ambiente y tienen un brillo metálico. Los no metales son elementos que son gases a
temperatura ambiente o tienen un aspecto no metálico. Los metaloides son elementos que tienen
propiedades tanto de los metales como de los no metales.
Los periodos en la tabla periódica
Los periodos de la tabla periódica son las filas horizontales que van de izquierda a derecha en
la tabla. Hay un total de 7 periodos en la tabla periódica, numerados del 1 al 7. Cada periodo
representa un nivel de energía o capa electrónica en la estructura de los átomos de los elementos.
Los elementos del octavo período de la tabla periódica aún no se han descubierto en la naturaleza.
Los elementos de periodos superiores al séptimo, como el octavo, son elementos sintéticos que se
han producido en laboratorios y no se encuentran de forma natural en la Tierra.
Octavas de Newlands