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LA PRIMERA LEY DE LA TERMODINÁMICA Y EL BALANCE DE

ENERGÍA EN SISTEMAS CERRADOS Y EN SISTEMAS DE FLUJO


ESTABLE.

Principio de la Termodinámica o Primera Ley de la Termodinámica, establece, que


la energía siempre se conserva, de tal modo que si en un sistema es capaz de
intercambiar energía, la energía disminuye, necesariamente aparecerá una
cantidad de energía equivalente en el entorno, ya que la energía no se crea ni se
destruye, sólo se transforma. El Primer Principio de la Termodinámica determina
cómo afectan los intercambios de calor, Q, y trabajo, W, a la energía global de un
sistema. En consecuencia se establece que la variación de la Energía interna de
un sistema es igual a la suma de la energía transferida en forma de calor y la
energía transferida en forma de trabajo.

∆ U =Q+W

Q = energía transferida en forma de calor.


W= energía transferida en forma de trabajo.

La energía interna de un sistema: Es la energía asociada a la estructura interna


del sistema, es decir, la suma de todas las energías contenidas en el mismo, como
la energía cinética de sus partículas individuales (núcleos, átomos, moléculas…
que pueden vibrar, rotar o incluso efectuar movimientos de traslación ) y la energía
potencial de éstas.
El valor absoluto de la energía interna de un sistema, U, se desconoce por su gran
complejidad, pero sí que podemos medir o determinar su variación, ΔU, cuando
pasa de un estado inicial a un estado final, ya que, como hemos dicho, la energía
interna es una función de estado y sólo depende de dichos estados inicial y final:
∆ U =U final−U inicial
El principio que rige los balances de energía es la ley de conservación de la
energía que establece que la energía no puede crearse ni destruirse (excepto en
procesos nucleares). Esta ley es también llamada primer principio de la
termodinámica. En la más general de sus formas, la primera ley dice que la
velocidad a la cual la energía (cinética + potencial + interna) es ingresada a un
sistema por un fluido, más la velocidad a la cual ingresa energía en forma de calor,
menos la velocidad a la cual la energía es transportada por el fluido fuera del
sistema, menos la velocidad a la cual el sistema realiza trabajo sobre los
alrededores, es igual a la velocidad a la cual la energía se acumula en el sistema.
Veamos su aplicación a un sistema cerrado.

Un sistema será abierto o cerrado según la masa pueda o no atravesar los límites
del mismo durante el período de tiempo en que se plantea el balance de energía.
El balance integral de un sistema cerrado debe ser planteado entre dos instantes
de tiempo. Como la energía no puede crearse ni destruirse, los términos de
generación o consumo no tienen sentido, llegando a:

Acumulación = entrada – salida

Cuando planteamos los balances de masa en un sistema cerrado los términos de


entrada y salida de materia se cancelaban ya que no había cruce de masa en las
fronteras del sistema. Sin embargo, en un sistema cerrado, la energía puede ser
transferida en los límites del sistema como calor o trabajo, por lo tanto, los
términos anteriores de entrada y salida no pueden eliminarse (sí se eliminan los
términos de entrada/salida de energía transportada por el fluido dentro o fuera del
sistema). Por lo expuesto, el balance integral de energía de un sistema cerrado
será:

Energía final del sistema - Energía inicial del sistema = Energía neta
transferida al sistema (entrada - salida)
Entonces:
Energía inicial del sistema = Ui + Eci + EPi.
Energía final del sistema = Uf + Ecf + EPf .
Energía transferida = Q +W.

Donde los subíndices i y f se refieren a los estados inicial o final del sistema, U,
Ek, Ep, Q y W representan energía interna, energía cinética, energía potencial,
calor transferido al sistema por los alrededores y trabajo realizado por los
alrededores sobre el sistema. Reagrupando llegamos a:

(Uf - Ui) + (Ecf – Eci) + (Epf - Epi) = Q + W

O si empleamos el símbolo Δ para significar (final - inicial):

ΔU + ΔEc + ΔEp = Q+W

La última ecuación es conocida como la Primera Ley de la Termodinámica para


sistemas cerrados. Para aplicar esta ecuación a un proceso cerrado deben
tenerse en cuenta las siguientes consideraciones;

1.- La energía interna de un sistema depende casi exclusivamente de su


composición química, estado de agregación (sólido, líquido o gas) y de la
temperatura del sistema material. Es independiente de la presión para gases
ideales y prácticamente independientes de la presión para líquidos y sólidos. Si no
hay cambios de temperatura, ni cambios de fase ni reacción química en el sistema
cerrado y si los cambios de presión son pequeños o menos de unas pocas
atmósferas, entonces ΔU ≈ 0.
2.- Si un sistema no se está acelerando (o retardando), ΔEc = 0. Si un sistema no
está ascendiendo ni cayendo, entonces ΔEp = 0.

3.- Si un sistema o sus alrededores están a la misma temperatura o el sistema


está perfectamente aislado, entonces Q = 0. Este proceso se denomina
adiabático.

4.- El trabajo efectuado por el sistema o sobre él, está acompañado de un


movimiento de los límites o contorno del sistema contra una fuerza (por ejemplo el
movimiento de un pistón o rotación de un eje o el paso de una corriente eléctrica o
radiación en el contorno). Si no hay partes móviles, ni corrientes eléctricas, ni
radiación en los límites del sistema, entonces tenemos W = 0.

Balance de energía para sistemas de flujo estable

Hay un importante número de dispositivos de ingeniería que, durante su


funcionamiento, pasan largos periodos bajo la misma condiciones de operaciones
de manera estable, por lo que se les considera dispositivos de flujo estable, el cual
es un proceso de carácter idealizado que nos permite entender el comportamiento
de operaciones de equipos como: bombas, compresores, ventiladores, toberas,
difusores, intercambiadores de calor, entre otros.
Flujo estable se define, entonces como: aquel proceso durante el cual un fluido
circula a través de un volumen de control de manera estable. Es decir, las
propiedades de los fluidos pueden cambiar de un punto a otro, pero en cualquier
punto permanecerán constantes durante todo el proceso. De modo que el
volumen, la masa y el contenido total energético del volumen de control
permanecen contantes durante el proceso de flujo estable.
Con base en esta definición, en un sistema de flujo estable, el trabajo de frontera

V vc=constante
es cero (puesto que el ) y la masa total o energía que entra el

volumen de control debe ser igual a la masa total o la energía que sale de este

mvo=constante Evc=constante
(puesto que y ).

Es posible expresar de manera general el balance de masa para un sistema de


flujo estable como:
entra=¿ ṁsale
ṁ¿

También, se puede definir para un sistema que puede tener múltiples entradas y
salidas del volumen de control:
n n

∑ ṁentra =∑ ṁsale
i=1 i=1

El balance de masa para un sistema con flujo estable se


expresa como:
entra=¿ ṁsale
ṁ¿

ρe V e A e dt= ρs V s A s dt

Dónde:
ρ : densidad.
V: velocidad promedio del fluido.
A: área de la sección trasversal.
ANALIZAR EL BALANCE DE ENERGÍA PARA SISTEMAS
CERRADOS Y DE FLUJO ESTABLE.

El análisis de los procesos de balance de energía de un sistema cerrado y de


flujo comienza con la selección de un volumen de control, en el cual se va a
realizar un balance de masa y energía, donde el volumen de control se expresa en
función de campos de propiedades, las interacciones de calor, de trabajo y de un
recuento de energía transportada de un sistema a otro. Una de las características
principales de los balances de energía es analizar la dirección de la transferencia
de calor y del trabajo, para así determinar la cantidad de energía interna del
sistema.

Pero cuando no se conocer la dirección hay que suponer las interacciones tanto
del trabajo como la del calor o del trabajo. Para tal caso, se puede suponer una
convención de signos de la termodinámica clásica que se resume en la siguiente
tabla.

Trabajo Trabajo Calor Calor


+ - + -
Hecho por el Entrada al sistema Endotérmico Exotérmico
sistema

Se dice que un sistema es abierto o cerrado dependiendo que exista o no


transferencia de masa a través de la frontera del sistema durante el período de
tiempo en que ocurre el balance de energía.

El sistema cerrado es una región de masa constante; se denomina masa de


control. A través de sus límites sólo se permite la transferencia de energía, pero
no de materia. La pared que rodea al sistema es impermeable. Por lo expuesto, el
balance integral de energía de un sistema cerrado será:

Energía final del sistema - Energía inicial del sistema = Energía neta transferida al
sistema
Energía final del Energía inicial del Energía transferida (U)
sistema = Uf + Ecf + Epf sistema = Ui + Eci + =Q+W
Epi

U = energía interna
Ec = energía cinética
Ep = energía potencial
Despejamos en la formula agrupando los subíndices.

(Uf - Ui) + (Ecf - Eci) + (Epf - Epi) = Q +W

Si utilizamos el símbolo  para indicar diferencia se tiene:


U + Ec + Ep = Q + W luego, U = Q + W

Donde U representa la acumulación de energía en el sistema asociada a la masa


y está compuesta por: energía interna (U), energía cinética y energía potencial (P).

Anteriormente se aplicó a sistemas cerrados la ecuación de balance de energía.


En esta sección ampliaremos el uso de esta ecuación para sistemas en los que
hay flujo de masa a través de sus fronteras. Existen dos formas en que se puede
dar este flujo de masa. La primera es para el llamado flujo estable y la segunda
flujo inestable o variable. El análisis de masa y energía de volúmenes de control
para la conservación de la masa nos dice que la masa no se crea ni se destruye,
sino que cambia de forma. El principio de conservación de la masa para un
sistema general de flujo estable con entradas y salidas múltiples se nos expresa:
n n

∑ ṁentra =∑ ṁsale
i=1 i=1
Esta expresa que la sumatoria de las tasas de masa que entran es igual a la
sumatoria de las tasas de masa que salen. Esta ecuación indica que la masa de
un sistema cambia cuando su energía cambia. Conclusión, si hay cambio de masa
y la misma, estrictamente, no se conserva ya que una pequeña porción de ella se
transforma en energía, mas esta porción es tan diminuta que es insignificante en
lo que a procesos de ingeniería concierne.

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