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1.

Patología grupal: Se refiere a los comportamientos disfuncionales o anormales que


surgen en un grupo, como conflictos, disrupciones o dinámicas negativas1.

2. Influencia: Es el poder o autoridad que alguien tiene para afectar a otras personas o
intervenir en un asunto. También puede referirse a la capacidad de modificar las
creencias o conductas de alguien debido a la presión de un grupo2.

3. Conformismo: Es la actitud de aceptar sumisamente y con resignación cualquier


circunstancia injusta o adversa. Implica ajustarse a las normas y reglas del medio
social en el que se vive3.

4. Adaptación: Es la capacidad de los organismos para ajustarse a las condiciones


cambiantes de su entorno con el fin de sobrevivir y reproducirse. Puede
manifestarse a través de cambios morfológicos, fisiológicos o de comportamiento4.

5. Experimento de Asch: Fue realizado por Solomon Asch para estudiar la


conformidad en situaciones de grupo. Los participantes debían comparar líneas y
elegir la que consideraban igual a una línea de referencia. El experimento demostró
cómo las personas a menudo se conforman con la opinión de la mayoría, incluso si
es incorrecta5.

6. Obediencia: Es la disposición a seguir órdenes o instrucciones de una autoridad o


figura de poder, incluso si van en contra de la propia conciencia o valores5.

7. Cumplimiento: Se refiere a la tendencia de las personas a aceptar solicitudes o


peticiones, especialmente si provienen de alguien con autoridad o prestigio5.

8. Normas: Son reglas o estándares que guían el comportamiento de los individuos en


un grupo o sociedad. Pueden ser explícitas o implícitas5.

9. Autoridad: Es el poder o influencia que una persona o entidad tiene sobre otras.
Puede ser legítima (basada en roles o posiciones) o experta (debido al conocimiento
o habilidades de alguien)2.

10. Experimento de Milgram: Realizado por Stanley Milgram, investigó la obediencia


a la autoridad. Los participantes administraban supuestos choques eléctricos a otras
personas bajo la dirección de una autoridad, revelando la disposición de obedecer
incluso cuando causaba daño5.

PATOLOGIA GRUPAL

El texto trata sobre varios temas relacionados con la obediencia, la violencia grupal y la
influencia de la ideología en el comportamiento humano. Se examina cómo la obediencia
puede ser moldeada por la percepción de la autoridad como legítima y cómo esta
legitimidad está arraigada en una ideología que justifica las acciones del grupo. Se analiza
la desindividuación, que puede llevar a una pérdida de control y una mayor susceptibilidad
a la influencia del grupo, especialmente en situaciones donde se descuida la atención a las
personas como individuos.

Se explora el papel de la ideología en la construcción de la imagen del enemigo, que sirve


como justificación para la violencia y la represión dentro de los grupos extremistas. Estos
grupos tienden a deshumanizar a sus enemigos y mantienen una "mente cerrada", que
rechaza cualquier evidencia que contradiga sus creencias.

Es importante diferenciar entre los miembros de estos grupos y los individuos con
trastornos mentales, ya que estos últimos suelen mostrar un pensamiento perturbado
constante y no reciben una validación consensuada de sus creencias por parte del grupo.
Los extremistas pueden modificar sus creencias cuando cambian las circunstancias, lo que
demuestra una diferencia fundamental con los pacientes mentales.

El texto explora las similitudes entre el pensamiento de los miembros de grupos extremistas
y las personas que sufren de ilusiones paranoicas. Se destaca cómo ambos grupos centran
su atención en un enemigo percibido y en un complot en su contra, lo que les lleva a
mantener creencias extremas y persecutorias. Se mencionan ejemplos de acciones violentas
llevadas a cabo por estos grupos, como el atentado en Oklahoma en 1995, como resultado
de su convicción en la legitimidad de sus creencias y en la existencia de un enemigo que
amenaza sus objetivos. Se describe cómo tanto los pacientes paranoicos como los
miembros de grupos extremistas tienen una fe inquebrantable en sus creencias, que son
resistentes a cualquier evidencia que las contradiga. Además, se analiza cómo estas
creencias están asociadas con una mentalidad cerrada que rechaza cualquier información
que no se alinee con su visión del mundo. A pesar de las similitudes en el comportamiento,
se enfatiza la importancia de distinguir entre los dos grupos, señalando que los miembros
de grupos extremistas pueden mantener una apariencia normal en otras áreas de sus vidas y
ser capaces de modificar sus creencias en respuesta a cambios en su entorno, a diferencia de
los pacientes paranoicos, cuyas creencias suelen ser más rígidas y están vinculadas con una
perturbación mental más profunda.

El concepto de desindividuación implica varios aspectos:

 Falta de atención a las personas como individuos.


 Pérdida de control sobre la propia conducta.
 Inmersión dentro del grupo.
 Falta de atención a la propia conducta.

El capítulo V del libro "Introducción a la Psicología Social: Influencia, Conformidad y Obediencia -


Las Paradojas del Individuo Social", escrito por Joel Feliu y Samuel Lajeunesse y publicado por la
Editorial UOC, aborda temas fundamentales en psicología social relacionados con la influencia, la
conformidad y la obediencia.

En este capítulo, los autores exploran cómo los individuos pueden ser influenciados por el entorno
social en el que se encuentran. Se examinan los conceptos de influencia social, que implica la
capacidad de un individuo o grupo para afectar las actitudes, creencias y comportamientos de
otros. Además, se profundiza en el fenómeno de la conformidad, donde las personas tienden a
ajustar sus opiniones o comportamientos para adaptarse a las normas del grupo o sociedad en la
que se encuentran.

Uno de los puntos destacados del capítulo es el análisis del famoso experimento de Solomon Asch
sobre la conformidad, que reveló cómo las personas pueden ceder a la presión del grupo incluso
cuando saben que están en desacuerdo. También se aborda el tema de la obediencia a la
autoridad, utilizando el experimento clásico de Stanley Milgram como ejemplo, donde los
participantes mostraron una sorprendente disposición a seguir órdenes que contradecían sus
propios principios éticos.

En resumen, este capítulo ofrece una visión profunda de los mecanismos psicológicos detrás de la
influencia social, la conformidad y la obediencia, destacando las paradojas y complejidades del
comportamiento humano en el contexto social.

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