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ES N°5

Artística 1° año
Agosto
Trabajamos la imagen a partir de un texto disparador:
Instrucciones para llorar (Julio Cortázar)

Dejando de lado los motivos, atengámonos a la manera correcta de llorar,


entendiendo por esto un llanto que no ingrese en el escándalo, ni que
insulte a la sonrisa con su paralela y torpe semejanza. El llanto medio u
ordinario consiste en una contracción general del rostro y un sonido
espasmódico acompañado de lágrimas y mocos, estos últimos al final, pues
el llanto se acaba en el momento en que uno se suena enérgicamente. Para
llorar, dirija la imaginación hacia usted mismo, y si esto le resulta
imposible por haber contraído el hábito de creer en el mundo exterior,
piense en un pato cubierto de hormigas o en esos golfos del estrecho de
Magallanes en los que no entra nadie, nunca. Llegado el llanto, se tapará
con decoro el rostro usando ambas manos con la palma hacia adentro. Los
niños llorarán con la manga del saco contra la cara, y de preferencia en un
rincón del cuarto. Duración media del llanto, tres minutos.

En este relato el autor juega con la idea de crear un manual de instrucciones para realizar tareas
cotidianas, para las que normalmente no necesitaríamos explicación. Les propongo jugar un
poco nosotros también, incorporando el lenguaje visual para crear una campaña publicitaria.
1) Imaginen un producto muy simple y muy habitual (por ejemplo: agua de lluvia, barro,
alguna condición climática, una caja de cartón… lo que quieran).
2) Piensen y escriban en un borrador cuatro o cinco características destacables de ese
producto y realicen un boceto (dibujo simple, a lápiz) que sea representativo.
3) Diseñen un afiche publicitario con un eslogan que llame la atención y la foto o dibujo
del producto. Si quieren pueden pensar distintos tipos de publicaciones: una publicidad
para una revista, un cartel para poner en la calle, un flyer para subir a redes sociales,
video, podcast, etc.
Para crear la o las imágenes tengan en cuenta la relación Figura-Fondo (hay una presentación en
el classroom sobre el tema o pueden buscarlo ustedes mismos):
Figura simple - fondo simple,
figura simple-fondo complejo,
figura compleja-fondo simple,
figura compleja-fondo complejo.
Para la evaluación se tendrá en cuenta la realización de producciones acordes a la propuesta de
contenidos.
ESN°5

Artística 3°año
Agosto
Cajas escenográficas / maquetas
Actividad: se propone la creación de cajas escenográficas o maquetas que representen la idea
general o algún verso del poema “El aplazado” de Baldomero Fernández Moreno. Pueden
trabajar en forma individual o coordinar entre dos o tres alumnos para construir una obra
colaborativa. El trabajo consiste en:
1) Lectura comprensiva del poema para extraer las ideas y emociones que les despiertan.
2) Boceto (o borrador) de la obra.
3) Una o dos fotos de los pasos que realizaron en la construcción.
4) Presentación de la caja terminada.
Contenidos a trabajar:
Delimitación de los espacios interiores y exteriores (boceto a mano alzada, manejo de
programas utilizados en el campo del diseño y la maqueta, etcétera). Forma y tamaño de cada
uno de los espacios.
Estructuras en pequeños formatos: maquetas, cajas escenográficas. Conceptualización y uso
de la escala.
Para la evaluación se tendrá en cuenta la realización de producciones acordes a la propuesta de
contenidos.

“El Aplazado”
de Baldomero Fernández Moreno

De pronto, como un breve latigazo,

mi nombre, Friedt, estalló en el aula.

Yo me puse de pie, y un poco trémulo

avancé hacia la mesa, entre las bancas.

Era el examen último del curso

y al que tenía más miedo: la gramática.

Hice girar resuelto el bolillero.


Las dieciséis bolillas del programa

resonaron en él lúgubremente

y un eco levantaron en mi alma.

Extraje dos: adverbio y sustantivo.

Me dieron a elegir una de ambas

y elegí la segunda: “¿Y qué es el nombre?

dígame uno”. Y me asestó las gafas.

Sentí luego un sudor por todo el cuerpo,

se me puso la boca seca, amarga,

y comprendí, con un terror creciente

que yo del nombre no sabía nada.

Revolvía allá adentro, pero en vano,

me quedé en absoluto sin palabras.

Y empecé a ver la quinta en qué vivíamos:

el camino de arena, cierta planta,

el hermano pequeño, mi perrito,

el té con leche, el dulce de naranja,

¡qué alegría jugar a aquellas horas!

Y sonreía mientras recordaba.

“¡Pero señor – rugió una voz terrible –

el nombre sustantivo, una pavada!”

Torné a la realidad: sobre la mesa

los dedos de un señor tamborileaban,

cabeceaba blandamente el otro,

el tercero bebía de una taza.

Hacía gran calor.

Yo tengo un cara redonda, simple, colorada,

los ojos grises y los labios gruesos,

el pelo rubio, la sonrisa clara.

Yo quería jugar, no dar examen


darlo otro día, sí, por la mañana…

Se me nubló la vista de repente,

los profesores se me borroneaban,

adquirió el bolillero proporciones gigantescas, fantásticas,

oí como entre sueños: “Señor mío, puede sentarse…”

Y me llené de lágrimas.

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