Está en la página 1de 7

Quinta Parte. Nuria Monfort: Memoria de aparecidos. 1933-1955.

Capítulo 1
Nuria conoció a Carax en el otoño de 1933, ella trabajaba de secretaria del editor Cabestany que
había comprado sus derechos para España, los libros no se vendían pero él los seguía publicando
ya que los financiaba Miquel Moliner. Ella no lo comento con nadie pero si fue a conocer a aquella
persona.

Este había heredado una gran fortuna que dilataba en obras culturales y benéficas y vivía en el
palacete de su padre. Llevaba una vida casi monacal, escribía artículos y columnas y también
realizaba traducciones. Rapido se hicieron amigos.

Cabestany la envío a renovar unos contratos a París y a recoger los manuscritos del último libro de
Carax “El ladrón de catedrales”. De ese modo lo conoció quedándose a dormir en su casa para
ahorrar costes, vivía solo con su gato en una buhardilla minúscula encima del local nocturno
dónde tocaba el piano, propiedades ambas de Irene Marceau que lo había recogido en la calle en
1921 después de haberse envenenado, esta mujer lo recogió, curo, protegió y le dio trabajo.

Iba para tres días pero estuvo semanas, estaba totalmente enamorado de él, un día él le enseño
una pluma estilográfica que desea que parece ser pertenecía a Víctor Hugo y se la compró para
regalársela con el dinero que se madre había estado ahorrando para comprarle el vestido de
novia, al salir de la tienda fue abordada por Irene que le pregunto se era la mujer que Julián
llevaba años esperando, en aquel momento comprendió que jamás sería de ella, hizo el amor con
él por última vez y aprovechando que él había salido, le dejo la pluma, recogió sus cosas y sin
despedirse se fue de París.

Capítulo 2
Tardó muchos días en visitar a Miquel, en el que continuaba viendo al único ser que le podía
informar de la relación de Julián y Penélope. Se había arruinado, su salud no era la mejor y sus
hermanos querían desahuciarlo del palacio al no poder mantenerlo siguiendo el testamento de su
padre. No sabia porqué, pero se hizo amante de Miquel sin quererlo y siendo consciente él de ello.
Un día le pregunto por la historia de los amantes, a pesar de ponerse como una fiera se la acabo
contando.

Jorge le contó un día muy asustado que su madre le había dicho a su padre que había sorprendido
a Julián y Penélope haciendo el amor, que estaba enloquecido, que había encerrado a su hermana
en su habitación, que esta estaba embarazada, que había despedido a su aya y mandado expulsar
a Julián del colegio. Por dicho motivo el día que se fue a París él sabia que se iba a ir sólo, no le
podía contar la verdad a su amigo.

Aldaya lo busco desesperado a través de la policía y culpó a Fortuny de su desaparición y este a su


mujer Sophie; nadie sospechaba de Miquel. A los pocos días Jorge acudió a verle, ya conocía la
razón del enloquecimiento de su padre, sabía que él había sido el que lo ayudo a desaparecer,
rompió su amistad con él y le amenazo de muerte si revelaba a alguien la historia.
A los pocos días Jorge le abordo otra vez, en esta ocasión le entrego una carta para Julián de
Penélope, en el que le contaba que se casaba y se olvidara de él. Miquel vio claramente que la
carta no la había escrito ella y no se la envío. Lo que si hacia era enviarle las cartas que Julián le
enviaba a Penélope.

Tuvo conocimiento de que Penélope –a través de una criada de la casa- le había escrito una carta a
Julián, y supuso que se la había al domicilio de sus padres, al presentarse se encontró que su
madre ya no vivía allí y que su padre no quería reconocer la existencia de su hijo. Una vecina le dio
la dirección de la madre, al enseñarle la carta que le dio Jorge, le contó la verdad. Julián y
Penélope eran hermanos.

Capítulo 3
Ricardo no veía en su hijo Jorge al sucesor de la saga y pensó en Julián, acudió a su rescate cuando
tenía 15 años y le dio educación e introdujo en su entorno, sin sospechar que a Julián lo único que
le interesaba era Penélope. Cuando su mujer le contó el suceso entre los hermanos, encerró a su
hija y preparo con el sombrerero un plan para enviar al culpable al ejercito, dónde moriría en un
accidente.

Su hija dio a luz el 26-09-1919 a un hijo cadáver y ella falleció desangrada encerrada en su
habitación al negarle el padre atenciones medicas. Fueron enterradas en el sótano de la casa y la
habitación vallada. Aquel día comenzó a morir Ricardo, Jorge beodo de culpa y vergüenza se lo
contó a Miquel que le envío a su amigo la carta que en teoría le escribió ella para que jamás
supiera la verdad.

La madre de Jorge falleció a los 2 años y él y su padre se embarcaron para la Argentina en 1926 al
consumarse la ruina económica y con documentación falsa. El padre que se fue en unas
condiciones físicas precarias se suicidio en el trayecto e hizo prometer a su hijo que mataría a
Julián.

Capítulo 4
A los diez años regreso a Barcelona en la ruina total y enfermo. Al llegar se encontró con Fumero,
al que pidió ayuda y le acogió en su casa. Este vivía miserablemente rodeado de insectos y los
únicos libros que tenía era los de Carax. A las pocas semanas y al encontrarse mejor se sinceró con
él, pidiéndole disculpas por el trato de adolescencia y contándole toda la historia, que le
interesaba especialmente en lo concerniente a Carax. Sabía que vivía en Paris por la información
recibida de la secretaria de la editorial a la que siguió hasta su casa en varias ocasiones y
disfrutaba pensando en el momento que lo iba a matar. Aunque lo pensó decidió que no era el
momento de matar a Jorge.

Capítulo 5
En 1934 los hermanos Moliner desahuciaron a Miquel que se fue a vivir a una lúgubre pensión, se
lo llevo a su casa y se casaron por lo civil sin decir nada a nadie, estaba arruinado y enfermo de
tuberculosis. Varios meses más tarde se presento en casa Jorge, quería saber dónde vivía Julián,
Miquel dijo no saber nada, y en la despedida les mando felicitaciones por la boda de parte de
Fumero.
Ella seguía trabajando en la editorial y al poco recibió carta de Julián, estaba acabando un nuevo
libro “La sombra del viento” que llego a finales de 1935. Un día al llegar a casa escucho discutir a
su esposo, escucho y al marchar el otro, le dijo que era Fumero, que venía a traer noticias de
Julián, se casaba con Irene Marceau.

A los pocos días fue Jorge, el que visitó la casa venía preso de cólera, Fumero le había envenenado
el alma, no le había dicho toda la verdad del casamiento y preparo a Jorge para que retara a duelo
a Carax, le facilito un arma defectuosa que al dispararse le estallaría la cara y le instruyo sobre las
mentiras que tenía que decir de su hermana. De esta forma sabía que Carax volvería y él lo
esperaría.

Capítulo 6
Julián volvió dos días antes de estallar la guerra civil, la situación en casa era muy mala, Miquel
estaba cada vez más enfermo, apenas trabajaba y había perdido gran parte de las colaboraciones.
La guerra estalló y con ella todas las calamidades. Recibieron una carta de Irene en la que relataba
que Julián había asesinado a Jorge en duelo y que antes de expirar este ya lo sabía la policía a
través de una llamada anónima, y que tuvo que huir perseguido por la policía.

Conociendo sus intenciones lo buscaron, primero en los alrededores de la casa de los Aldaya,
luego en el colegio San Gabriel dónde Fernando les dijo no saber nada pero que ya había recibido
la visita de Fumero, fueron a su casa paterna pero su padre se había encerrado en el local y
negaba tener hijo alguno.

Un día Miquel se presento con una botella de Oporto que le habían regalado en el diario como
recuerdo, ya no le podían publicar su columna. Bebieron y ella se emborracho al despertar vio una
nota de Miquel en la que vio claramente su despedida.

Capítulo 7
El jardinero de enfrente de la casa había avisado al diario de la presencia de una persona como por
la que se había interesado Miquel. Acudió en su búsqueda y en efecto lo encontró en la finca. La
alegría fue inmensa, le contó que se habían casado, él que no les quería comprometer y que había
estado en casa de su padre que lo recibió como a un verdadero hijo, y por dónde también había
pasado Fumero. Le contó a su padre el motivo de la vuelta: encontrar a Penélope Aldaya, este se
ofreció para buscarla pero su intento fue en vano, por eso se decidió él a ir en su búsqueda.
También que su madre estaba en Bogotá donde se había vuelto a casar.

Miquel no reparó en el camarero que llamaba por teléfono y al poco vio llegar a la policía, Julián
tenia un revolver, Miquel le pidió su documentación y se la cambio por la de él, cogió el revolver y
junto con el ejemplar de la “Sombra del Viento” se dirigió a ellos, mato a dos de ellos pero no le
dio tiempo con el tercero, que acabó con él cuando tenía 36 años.

Capítulo 8
Sacaron el cadáver de Miquel del bar y lo abandonaron en la calle doce horas después para no
involucrar a la policía, a la morgue llego dos días después.Localizaron a Fortuny que al comprobar
de quién se trataba lanzo alaridos que interpretaron como un reconocimiento de su hijo. Fumero
que había ido a ver a Julián, al encontrarse con Miquel sonrió y firmo el acta.
Ella recogió la llamada del funcionario de la morgue a la editorial y al sentirse mal se fue a casa, la
puerta estaba forzada y en su interior se encontraba Julián, con el que acabo haciendo el amor.

Capítulo 9
Al día siguiente él le echo en cara que sabía algo que no quería decirle y que iba a volver a la casa,
insistió en acompañarle no quería tener la pesadilla del día que se fue Miguel. Al acercarse a la
casa la identifico rápidamente por la descripción de su libro “La casa roja”.

Deambularon sin que encontrara nada, hasta que decidió bajar a las cocinas y demoler a
puñetazos un muro que escondía la puerta de la iglesia dónde descubrió las dos tumbas con los
nombres de Penélope y de su hijo David, con fecha 1919.

Capítulo 10
Se vino a bajo y comprobó en sus ojos el odio hacia ella y a Miquel por engañarle y hacia si mismo.
No quiso saber nada de ella, salio de la casa y desapareció, al llegar a su casa había una gran
humareda comprobando que él había estado allí, le había dejado la pluma que le había regalado
en Paría y quemado todos sus libros.

En la editorial Coubert había pasado con la intención de comprar todo el fondo editorial, el precio
pedido no le había convencido y ante la insistencia del hijo del editor en que lo buscase le contó
que esa persona no existía y que lo único que quería era saber dónde estaban guardados para
quemarlos. Por precaución cogió un ejemplar de cada libro y se los llevo a su padre al Cementerio.
Esa misma noche el almacén ardió por completo y los bomberos encontraron a un hombre casi
quemado por completo al que llevaron al hospital del mar.

Allí ella lo reconoció por los ojos, de milagro sobrevivió ante lo que decidió decir que era su marido
Miquel Moliner. Allí permaneció durante 12 meses en los que solo pronunció la palabra “déjame”.
La editora quebró a los dos meses del incendio y ella no encontró un nuevo trabajo.

Poco a poco se fue recuperando y cuando se vio al espejo solo pudo decir que se había convertido
en uno de sus personajes de ficción: Coubert. Ella no encontraba trabajo, malvendió todo lo que
tenía e incluso la pluma estilográfica. Un tiempo después él desaparecía por las noches y traía
dinero o joyas, le llego el rumor de un hombre que asaltaba las librerías y quemaba libros.
Posteriormente desaparecía días, semanas e incluso meses, recorrió Francia buscando sus libros
para quemarlos.

En una de sus ausencias ella se encontró con su padre que la reconoció y mantuvo una fluida
relación con él, a quién visitaba hasta que un día lo encontraron muerto sentado con las
fotografías de su mujer y de su hijo.

Capítulo 11
En 1945 ella comenzó a trabajar en una nueva editorial, propiedad de Pedro Sanmartí, hombre con
pocos escrúpulos que quiso aprovecharse de ella y que resulto ser amigo de Fumero. Allí encontró
ayuda en una compañera Mercedes que comprendió que algo pasaba entre ella y el inspector.
Intento cambiar varias veces de trabajo sin éxito e incluso en una de ellas avisaron a su jefe. Este la
llego a acusar de tortillera y la despidió. Sus compañeros pusieron dinero en señal de solidaridad.
Capítulo 12
Se dio cuenta que Caubert seguía vivo, a los cinco días la policía la detuvo y fue interrogada por la
muerte del editor, el mismo Fumero se encargó de ello jurando que no iba a parar hasta ver a los
dos muertos, ella primero y luego él pero antes le diría que su gran amor era su hermana.

Apenas lo veía y supo que volvía al caserón y que había sacado los sarcófagos, un tiempo después
lo empezó a ver en el cine, de dónde se iba antes de acabar las películas, fue cuando le comento
que existía otro libro en Barcelona, que lo tenía Daniel Sempere, que no se quería deshacer de él y
que le recordaba a él mismo.

Supo que él vivía en el caserón a dónde ella acudía. Él intento volver a escribir pero no lo
conseguía, le hablaba de Daniel a quién seguía continuamente, de su relación con Clara, con
Fermín, con Bea a quién el veía como una nueva Penélope, por eso cuando fue a su casa por
primera vez sabía bien de quién se trataba.

En la carta acaba reconociendo que morirá a manos de Fumero, que cada vez la tiene más cercada
y le ruega que no la olvide.

La Sombra del Viento. 1955.

Capítulo 1
Daniel acabo de leer el manuscrito al amanecer y se fue directo a casa de Bea en su búsqueda. Lo
recibió Tomás que le comunico que ella se había ido de casa, que sus padres y la policía la
buscaban, que la había dejado embarazada y después de sacudirle una buena paliza le volvió a
amenazar de muerte.

Capítulo 2
Malherido salió del edificio, a pesar de que el portero lo quería socorrer, y a los pocos metros fue
recogido por dos hombres en un coche, para su sorpresa eran Fermín y el relojero Federico que lo
llevaron donde se encontraban escondidos, lo socorrieron y le dieron cobijo. Al amanecer se
escapo.

Capítulo 3
Bien sabía dónde se escondía, acudió al viejo caserón y allí la encontró, ella pensó que era Julián,
que también vivía allí y aparte de hacerle compañía le daba comida, la cobijaba y le hablaba. Al
preguntarle dónde estaba, le dijo que en la biblioteca, que esperaba a un hombre al que él guiaría
cuando la fuera a buscar. Rápidamente escucho las pisadas de Fumero.
Capítulo 4
La dejó par ir a avisar a Carax, dando un rodeo llegó a la biblioteca, el policía le tendió una trampa
poniendo la foto de Carax y Penélope en una pared clavada con un cuchillo, cuando la fue a coger
le encañono para que lo llevara ante Julián.

Este apareció y comenzó a pelearse con el inspector, sonaron disparos y el inspector Palacios
acudió al rescate de su jefe cuando en peor momento se encontraba, a su orden le dio la pistola
con la que disparo, Daniel se cruzo en el camino y recibió el disparo a la vista de Bea. Julián siguió
peleándose con el inspector, pero reconvertido en Caubert, al que finalmente le dio muerte en el
exterior de la casa.

Daniel perdió el conocimiento y ante su vista pasaron sus seres queridos, su padre, Nuria, Fermín,
la Bernarda, Tomás y vio después de muchos años el rostro de su madre.

27 de Noviembre de 1955. Post Mortem.


Al cabo de ocho días recobró el conocimiento en el hospital, la bala se había colado entre dos
costillas y había salido al exterior. Recibió la visita de todos sus seres queridos, había estado velado
todo el tiempo por su padre, por Fermín que le había donado la sangre necesaria para vivir y de
Bea.

Estando solo recibió la visita de Julián que venía a despedirse y al que le regalo la pluma que
momentos antes le había traído su padre, por sus ojos supo que nunca conoció la verdad sobre
Penélope. Al despertar y preguntar a Bea por él le comento que había desaparecido cuando el
incidente en un reguero de sangre y que lo habían dado por muerto. La pluma ya no estaba en la
habitación.

Las aguas de marzo. 1956.


Daniel se caso con Bea, su padre al final le concedió su mano y acabo admitiéndolo en la familia,
Fermín lo organizó todo y convenció al cura de la necesidad de casarnos al negarse este al saber
que la novia acudía preñada a la iglesia. Emborracho al cura y este acabo leyendo un soneto de
Pablo Neruda.

Fermín le organizó una despedida de soltero el día anterior, se fueron a un club de alterne,
sacaron a una conocida de él y la llevaron al asilo a cumplir la promesa realizada en su día al
anciano. Allí supo que Jacinta había fallecido feliz después de recibir la visita de un tal Julián, y que
sus últimas palabras fue que se iba a su casa con Penélope.
Dramatis personae. 1966.
Su hijo cumple diez años, él lleva la librería con Bea que se encarga de las compras y los clientes,
su padre descansa en la casa. Fermín dejó la librería se caso con la Bernarda, tiene cuatro hijos y
sustituyo a Isaac de guardes del Cementerio. Tomás trabaja en Alemania, esta casado, tiene una
hija pero nunca viene a visitarles.

Barceló cerró la librería y les traspaso los fondos, viaja continuamente y montó una editorial para
reeditar las obras de Carax. Su sobrina se caso con el banquero pero se separo, tiene sus amantes,
y en ocasiones siguiendo el consejo de Bea acudió a visitarla. El inspector Palacios dejó el cuerpo y
le contó que la memoria de Fumero comenzaba a olvidarse incluso entre sus compañeros. El
palacete fue vendido y reconstruido para albergar oficinas.

Un día recibió un libro de París “El ángel de las brumas” enseguida lo reconoció, descubrió la
dedicatoria escrita con el trazo azul de su adorada pluma:

Para mi amigo Daniel, que me devolvió la voz y la pluma y para Beatriz, que nos devolvió a amos la
vida.

A los dos días un padre y un joven al amanecer se dirigen al Cementerio de los Libros Olvidados……

También podría gustarte