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“Año del Fortalecimiento de la Soberanía Nacional”

TEMA: Resumen de los capítulos III, IV de la novela “El héroe


discreto” de Mario Vargas Llosa.

CURSO: Redacción de textos académicos.

PROFESOR: ESPINOZA, Ronald Antenor

ESTUDIANTE: Huarcahuaman Quispe, Isaías

AULA: AC2M34

CICLO: II

2022
CAPÍTULO III

Felícito Yanaqué, fue a saludar a Mabel, ese día fue viernes por la tardecer,
la señorita era su amante. Ese día Mabel lo esperaba con vestido, romántica y
dicharachera como de rutina. Ya se encontraban a punto de acostarse para
dormir de repente se percata el disgusto de Felicito, al instante le interrogo,
que es lo que le pasaba, y contesto que sentía un poco de malestar leve de
resfrió. Felicito se puso a vestirse y es ahí donde ahí Mabel descubrí que no
es un simple resfrió. Felicito le enseño la carta, y mientras leía Mabel se
mostraba con preocupación y le aconsejo a realizar una denuncia policial.
Felicito le termino de dar detalles de lo que estaba sucediendo, sobre la
policía y el consejo que le dio Adelaida. Él estaba agotado, luego de conversar
con Mabel, le dijo que descansaría en su casa, porque se sentía preocupado.
Cuando Felicito llega a su casa y abre la puerta encontró un documento
pegado, y se fue averiguar a unos infantes que jugaban cerca a su domicilio,
si habían visto alguna persona que dejo el sobre en la puerta, los niños no
dieron ninguna respuesta. En la carta nº 2 le escribieron diciendo a felicito
que había tomado una mala decisión de ir a la comisaria. Felicito se sentido
mas temeroso porque sabia hasta de su vida privada. Le dijo Felicito a Mabel
que este con mucho cuidado y le promete que no dejara que nada le pase.
Felicito nuevamente se acerca a la comisaria y es atendido por el capitán
Silva, y le dejo a Felicito que ya tenia conocimiento de su caso y estaba al
tanto se pasara algo y puede retirarse. Felicito se sintió ofendido por la
respuesta que le dieron y sentía un rencor contra los efectivos que contra los
que enviaron la carta de la arañita.
Cuando llego a su casa, Gertrudis, su mujer, le pregunto porqué tan
temprano de su llegada acaso cancelaron las cenas de todos los viernes.
Felicito en ese instante pensó que su esposa se había enterado de que
engañaba con Mabel, pero el pensaba que es imposible, pues nunca ella me
reprocho, y el solo le contesto que estaba un poco mal y quería descansar. Al
día siguiente en la mañana con sus mismas costumbres de siempre, mientras
practicaba su Qi Gong, escucho unos fuertes golpes en la puerta que le
interrumpieron su práctica. Felicito fue a abrir la puerta, creía que Saturnina
había madrugado, pero el piensa que ella nunca llega antes de las siete,
cuando abrió la puerta se quedo sorprendido al ver a Lucindo, el cieguito
estaba muy cansado, pero le conto que una persona le dijo que su oficina
esta ardiendo en fuego y llamé a bomberos y que tiene que ir de inmediato.
CAPÍTULO IV
La boda de Ismael y Armida duro muy breve y despoblado que Rigoberto y
Lucrecia recordaran, aunque tuvieron mas de unas sorpresas. La reunión
duro demasiado corto, el alcalde había leído muy breve las obligaciones y
deberes de los casados y cuando apenas finalizaba la ultima palabra los
testigos ya estaban firmando el registro. Al instante los asistentes se
congregaron en la iglesia escogida, Nuestra Señora del Carmen de la Legua.
La cura no demoro mas de veinte minutos en casar e impartir su bendición a
los casados. Luego de casarse, Ismael da un anuncio, que se ira de luna de
miel con Armida, Rigoberto queda sorprendido y preocupado, pues se
enteraría sus hijos y pedirían una explicación y los mas probable es que se la
pidieran a él.

Ismael le propuso viajar a Europa a Lucrecia, pero ella lo negó, pues le


contesto diciendo que primero se tenía solucionar el problema con Fonchito.
Cuando Fonchito llego del colegio, se hizo saber de la boda. Pero el no dio
dar mucha importancia a lo sucedido, escucho, mostro una sonrisa por
cortesía y se fue a su cuarto diciendo que tenía muchas tareas que resolver.
Al caer la noche Ismael y Lucrecia dialogaban como estarán pasando la luna
de miel entre los dos tortolos. Lucrecia le cuenta a Ismael que Armida era su
amiga de mucho tiempo y que ella había confesado de que quería ser la
señora de su hogar, ya que estaba cansado de ser empleada.

Lucrecia y Rigoberto al recordar en la noche de matrimonio de Ismael y


Armida, despertaron el deseo sexual entre ambos, luego de un rato
decidieron a dormir. Rigoberto se levanta en la madrugada y decide leer su
libro “Doktor Faustus” de Thomas Mann, para entretener sus pensamientos.

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