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crisálida

« LA UC EN TIEMPOS DE CAMBIO »

[Rescate] Eduardo Frei Montalva — Mauricio Quilpatay Belmar — Camila Ponce Lara
José Joaquín Brunner Reid — Laura Mancilla Rubio — Carolina Guzmán Valenzuela &
Carlos Palma Amestoy — Claudio Alvarado Rojas — [Entrevista] Pedro Morandé Court

No 1 - OTOÑO 2022 | CONSEJERÍA SUPERIOR UC


Revista de debate, reflexión
y participación universitaria

Editor General
Cristóbal Karle Saavedra

Consejera Superior
Florencia Vildósola Andreani

Diseño y Diagramación Impresión


Fernanda Ortúzar Tornero Larrea Marca Digital

Fotografía 1a Edición
Nicolás Vargas Venegas Mayo, 2022
Índice
EDITORIAL 02 ARTÍCULO 36
Una cita con la historia Protección social, Universidad y rol del
— Florencia Vildósola Andreani Estado en la discusión constitucional
— Cristóbal Karle Saavedra — Laura Mancilla Rubio

RESCATE 04 ARTÍCULO 40
La Universidad, conciencia El rol de la investigación y la ciencia
social de la Nación en la nueva Constitución
— Eduardo Frei Montalva (1965) — Carolina Guzmán Valenzuela
— Carlos Palma Amestoy

ARTÍCULO 14
El rol de Derecho UC en la delimitación ARTÍCULO 46
constitucional de la vida política chilena Lo público es lo de todos
— Mauricio Quilpatay Belmar — Claudio Alvarado Rojas

ARTÍCULO 20 ENTREVISTA 52
Ciclos de movilizaciones en Contra las fantasías
el Chile contemporáneo — Pedro Morandé Court
— Camila Ponce Lara

CIERRE 68
ARTÍCULO 26 Invitación a la comunidad
Educación como libertad y derecho — Consejería Superior 2022
— José Joaquín Brunner Ried
EDITORIAL

Una cita con la historia


Florencia Vildósola Andreani
Estudiante de College Ciencias Sociales UC
con Major en Políticas Públicas y Derecho.
Consejera Superior 2022.

Cristóbal Karle Saavedra


Licenciado en Sociología UC. Estudiante
de Ciencia Política. Coordinador Político
de la Consejería Superior 2022.

Vivimos tiempos interesantes. En el más amplio actitud de un barrabrava, en la defensa irreflexiva de


sentido del término, que suele considerarse como la intereses corporativos o consignas malamente defini-
inexacta traducción de un antiguo proverbio chino, das en sus contornos. El proceso constituyente nos
este denota la imposibilidad de sentar cabeza y quedar ofrece la posibilidad de actuar e incidir sobre nuestro
al margen de los acontecimientos. Por el contrario, futuro, pero también de volver a pensar cómo enten-
ellos exigen el interés del colectivo, y por cierto tam- demos nuestro lugar en la sociedad, desde una pers-
bién del individuo. Sin descanso. Así hemos vivido la pectiva que nunca antes habíamos podido tener. No es
mayoría de las y los chilenos desde la primaveral tarde casual que los procesos de cambio histórico coincidan
del viernes 18 de octubre de 2019: obligadas y obliga- con momentos de ebullición intelectual. La gente co-
dos a prestar atención a lo que ocurre fuera de nues- mún, antes desafecta, comienza a interesarse. Escucha
tras paredes, ya que en ello parece jugarse buena parte argumentos, consignas y discursos, y desea saber más.
de nuestro propio devenir. Cada paso en falso, cada Quienes manteníamos inquietudes sin desarrollar co-
distracción, se presume como una oportunidad que el menzamos a plasmarlas, a trabajarlas.
azar o el adversario pueden derivar en contra de nues-
tros intereses. No hay tiempo para el descanso ni para Decía Paulo Freire, notable filósofo y pedagogo
la reflexión, la cual –nuevamente, se presume– habrá brasileño, que cualquier perspectiva de emancipación
de llegar una vez consolidada la “nueva normalidad”. requiere de combinar acción y reflexión. De la praxis
auténtica, fundamentada, no puramente mecánica.
El presente esfuerzo, que hemos llevado a cabo con Podríamos agregar al argumento de Freire que seme-
el equipo de la Consejería Superior 2022 y el desintere- jante imperativo no es susceptible de ser anulado por
sado aporte de personas cuyos nombres no alcanzamos decreto, ni de ser suspendido por la exigencia de las
a listar íntegramente en este reducido espacio, nace de circunstancias. Al contrario: son los momentos excep-
la convicción profunda de que, incluso en tiempos cionales en la historia aquellos que exigen más acción,
interesantes, la orientación reflexiva no es algo de lo pero también más reflexión.
que podamos prescindir, ni siquiera temporalmente.
Como una crisálida, debemos crear y mantener celosa- “Esta realidad, en sí misma, es funcionalmente do-
mente las condiciones para que el desarrollo histórico mesticadora. Liberarse de su fuerza, indudablemen-
pueda seguir el camino de la voluntad y salir, como te, exige la emersión de ella, la vuelta sobre ella. Es
una mariposa, a enfrentar las contradicciones que por esto por lo que sólo es posible hacerlo a través
ofrece la realidad actual. No podemos suponer que, de la praxis auténtica; que no es ni activismo ni ver-
una vez puesto en marcha un determinado proceso, balismo sino acción y reflexión.”
lo único que cabe es observar o participar en él con la

2 CRISÁLIDA
La patología de la acción política y social, podría- El texto del Presidente Eduardo Frei Montalva –a
mos decir, es el activismo: esforzarse por voltear la rea- la sazón el primer mandatario salido de nuestras au-
lidad sin dar la vuelta sobre ella, sin tomarla en cuenta las– presentado a continuación, rescatado, procede de
en su especificidad. Actuar bajo supuestos inamovi- aquel trabajo.
bles, abjurando de la responsabilidad cívica de poner-
los en tela de juicio, sea para entenderlos mejor o para Los autores de los artículos, que conforman la parte
convencerse de su opuesto. Por otro lado, la patología central de esta revista, son miembros de la comunidad
de la intelectualidad académica es el verbalismo. Ana- UC en diferentes grados. Hay estudiantes, académi-
lizar y estudiar el mundo sin transformarlo, como le cos, cuadros administrativos, egresados de pregrado
reprochaba Marx a los jóvenes hegelianos. Tomar pal- y posgrado, integrantes de núcleos de investigación.
co en la comodidad de la mera observación, mientras Hombres y mujeres. Jóvenes y viejos. Algunos iden-
los bárbaros ofrecen el espectáculo del mutuo lacera- tificados con la derecha política, otros con el centro
miento. Podría decirse que, en cierto modo, la vida y otros con la izquierda. Y es que somos así: diversos.
de los movimientos sociales y políticos también trans- Hablamos del vínculo entre nuestra Universidad y el
curre entre ambos polos. Después de todo, hay pocas proceso constituyente, y la realidad actual del país en
cosas más difíciles que congeniar acción y reflexión. un sentido más amplio. Desde el sistema educativo
(Brunner) hasta el rol de la ciencia y la investigación
Y sin embargo, hemos decidido intentarlo. La Con- (Guzmán), pasando por la autonomía universitaria
sejería Superior de la UC, cargo cuya responsabilidad (Alvarado) y los movimientos sociales (Ponce), sin
formal es la de representar al estudiantado en temas olvidar la protección social (Mancilla) ni el rol que
académicos e institucionales, guarda también un ex- nuestra propia institución ha jugado en la elaboración
traordinario potencial. Nuestra Universidad produ- del marco constitucional todavía vigente (Quilpatay).
ce toneladas de conocimiento, algunas de las cuales Como agasajo final, ofrecemos una entrevista en pro-
apenas logran asomarse a la luz pública. También fundidad con una de las personalidades intelectuales
produce liderazgos y cuadros intelectuales de excep- más importantes de las últimas décadas en nuestra
ción. Aunque en tiempos recientes lo haya hecho de Universidad: Pedro Morandé Court, decano de la Fa-
forma contraria a lo que algunos hubiésemos deseado cultad de Ciencias Sociales por más de quince años
–léase, la dictadura cívico-militar y la contrarrevolu- y galardonado recientemente como Doctor Scientiae
ción neoliberal–, es innegable que ha tenido un papel et Honoris Causa por la misma UC. Se esté o no de
transformador en la historia de Chile. Para estar a la acuerdo con sus planteamientos, ellos ofrecen una
altura de esa expectativa y de ese potencial, sabemos, base magistral para continuar y profundizar varios de
lo primero es convencerse de su necesidad. Este año, los debates más importantes de la actualidad.
hemos querido levantar en la Consejería Superior un
proyecto de acción y reflexión: simultáneamente po- Nuestro ímpetu no termina aquí. Más que una
lítico y académico, abierto al país y preocupado de la presentación o una sentencia, queremos plantear una
Universidad, en las calles y en los patios. Sería fácil invitación. Ser parte de una misma comunidad uni-
decir, como algunos, que queremos preocuparnos sólo versitaria nos reúne en torno a las ideas, y son ellas las
de la UC –porque lo que ocurre afuera no es asunto que debemos poner en el centro para generar nuevos
nuestro–, o solamente del país –ya que nuestra insti- vínculos y convertir a nuestra Universidad en aquello
tución, históricamente conservadora, no tiene vuelta que nunca debió dejar de ser: una institución cuyo
posible sobre ella–. Jugársela por buscar un equilibrio, corazón late al ritmo del país. De los grandes proce-
que reconocemos como ambivalente, es más difícil. sos sociales, de la historia misma. Pero sin perder de
vista nunca la acción, ni la reflexión, ni morigerar el
“Crisálida” es un proyecto colectivo y nuestra am- esfuerzo por el solo hecho de no haber elegido seguir
bición es que se convierta en un testimonio del invo- viviendo en tiempos interesantes.
lucramiento de la comunidad universitaria en tiempos
de cambio. El título del primer número, que ahora el
lector puede escudriñar, hace referencia a una publica-
ción de 1965 que se formulaba preguntas similares a
las nuestras: no olvidamos de dónde venimos.

OTOÑO 2022 3
La Universidad,
conciencia social
de la Nación
1
Eduardo Frei Montalva

La Universidad, conciencia social de la Nación. El título mismo


indica que la Universidad es parte de la Nación, pues para ser con-
ciencia se requiere integrar un sujeto.

Sé que es difícil hablar de Latinoamérica, porque siendo tan


iguales, en muchos aspectos somos diferentes y es peligroso caer en
generalizaciones; pero el análisis de lo que ocurre en cada pueblo
muestra algunas constantes fundamentales que lo definen.

La Universidad en este continente debe saber lo que en él ocurre,


de cuál es el mundo al que pertenece, que no es el mundo europeo;
que no es el mundo asiático, ni el mundo africano; es Latinoamé-
rica; con sus propias tradiciones, errores, virtudes y elementos. Por
eso nuestro primer esfuerzo ha de ser el reconocimiento de las di-
ferentes situaciones, que exigen muchas veces un juicio y métodos
diversos y, me atrevería a decir, una estrategia adecuada. Cualquier
tentativa de imponer criterios uniformes a situaciones distintas ha-
cen imposible o estéril todo diálogo.

1En VV.AA. (1965). La Universidad en tiempos de cambio.


Santiago: Editorial del Pacífico, pp. 41-58.

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I. DECISIONES QUE COMPROMETEN EL PORVENIR

Y el primer elemento de juicio consiste en recono- América Latina, que hizo una revolución política
cer el hecho de que en el Hemisferio se está llegando a comienzos del Siglo XIX, pero que conservó e hizo
a un punto en que se tomarán decisiones que com- aún más rígidas las estructuras de su vida económica
prometerán su futuro por un largo periodo histórico. y social, asiste hoy a un proceso masivo de revisión de
Este ha sido el continente, con excepciones que no esas condiciones al mismo tiempo que al más rápido
modifican la imagen, de “pronunciamientos” o “revo- traspaso en el mundo de poblaciones rurales a urba-
luciones”. nas, creando, entre otras consecuencias, los impresio-
Pero la verdad es que desde los años de la Indepen- nantes cinturones de subproletariado que aprisionan
dencia ésta es la primera vez que está afrontando, salvo sus ciudades y que constituyen un fenómeno nuevo y
y con reservas en el caso mejicano y plenamente en característico.
Cuba, una verdadera revolución. En estas naciones Este hemisferio se define por sus extremos contras-
está en juicio el régimen, no simplemente las personas. tes: frente a la ciudad con un centro esplendoroso, la
Asistimos al fin de una etapa histórica: es un sistema barriada miserable, y a pocos kilómetros un campesi-
de vida que se agota, que no puede subsistir; diría más, no que vive y trabaja como en épocas remotas; frente a
que no debe subsistir. la riqueza desproporcionada, la pobreza extrema, que
Hay una crisis de las instituciones, de los partidos; puede medirse entre un grupo social y otro por el peso
de las estructuras en que se funda la economía y las y estatura de los niños y por diferentes términos me-
relaciones sociales. dios de vida; por los que cuidan su grado de colesterol
Las gentes se hacen hoy preguntas fundamentales y los que defienden sus huesos del hambre; frente a la
sobre cuál será la mejor manera de organizar el porve- suntuosa ciudad universitaria, las desvencijadas escue-
nir, no de cómo salvar el pasado, porque saben que eso las rurales o el alto porcentaje de analfabetos.
sería inútil e imposible. El problema tiene así un ingrediente de angustia y
Por eso en todos los planos de la vida individual y de urgencia y, como ocurre cuando el mal se torna
social se disputa sobre cuáles serán las ideas que van a agudo y extremo, los remedios corrientes ya no surten
inspirar el cambio, que lo van a dirigir, en un proceso efecto. La clase media, y en especial el proletariado,
que exige una respuesta total. no se movilizan sólo por un porcentaje en el salario,
Y este proceso ha acumulado toda suerte de pre- ni se satisfacen con un reformismo tímido: plantean el
siones, que hacen cada día más difícil la aplicación de problema del poder; su participación en la dirección
métodos evolutivos en el sentido clásico. de la empresa, en la propiedad de la tierra y su acceso a
En América Latina se han prolongado por demasia- la cultura. El paso, en una palabra de una democracia
do tiempo feudalismos financieros y agrarios; se han formal, o restringida, a una democracia auténtica.
desconocido los derechos de las mayorías, en función Estamos pues, frente a una emergencia en que la
de minorías, con privilegios excesivos y paralizan- gente no sólo arriesga sus argumentos, sino su espíritu.
tes para el organismo social. Por eso asistimos a un La tensión que sacude y atraviesa el continente no
despertar brusco de aspiraciones contenidas. A esto es, por tanto, la superficial batalla por cambiar a los
se agregan: los inevitables efectos de una revolución hombres, sino la búsqueda de las ideas que inspiren
científico-técnica, que no encuentra su cauce adecua- la existencia personal y social y, en consecuencia, la
do en estructuras sociales envejecidas; el ejemplo de organicen.
los grandes movimientos que se operan en Asia y Áfri-
ca; el fin del colonialismo, y el fenómeno fundamen-
tal de nuestro tiempo, que es el explosivo crecimiento
demográfico.

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II. TOMA DE POSICIONES

Es por eso, que cada uno en su esfera está tomando Esto se hizo más evidente en la juventud que le
posiciones: las toman los sindicatos, las masas campe- dio a la Universidad su fisonomía. Ella tuvo su etapa
sinas, la juventud y los intelectuales. ¿Podría la Uni- romántica, y después una racionalista. Hoy la juven-
versidad quedar fuera de este cuadro que en muchos tud universitaria ha madurado dentro de esta misma
produce temor y en nosotros debe ser una incitación actitud rebelde. Por lo que he podido ver en algunos
y una esperanza? países latinoamericanos, se podría caracterizar por la
Yo creo que es imposible plantearse el problema de búsqueda de un cauce efectivo que realice su afán re-
la Universidad sin verla integrada en este proceso. Hay volucionario. En muchos hoy se concreta en dos lí-
países y épocas en que las diferentes instituciones pue- neas: la marxista y la cristiana.
den vivir con sosiego y desenvolverse dentro de misio- Hay menos palabras y más dureza en el juicio, y una
nes específicas. Hay otras en que no es posible hacer lo progresiva decepción ante lo establecido que se podría
específico, sin comprometerse en la tarea central que resumir en una gran desesperanza en los instrumen-
determinará el curso de todo el porvenir. tos democráticos tradicionales y en las instituciones
Dentro de este cuadro la Universidad representa vigentes; la pérdida de fe en las clases gobernantes; una
un factor esencial que puede, según los casos, contri- distinción entre lo que llaman democracia formal y
buir a crear las condiciones para el cambio necesario e real. Estamos en presencia de una juventud más exi-
irremediable, porque está entre las alternativas, si ese gente y más comprometida en una lucha no sólo por
cambio no es bien orientado, que ella llegue a ser sim- el poder político, sino por el predominio en las inte-
plemente el instrumento de un Estado que la use para ligencias.
sus fines. El triunfo, por ejemplo, del marxismo-leninismo
Como un avance se logró la fórmula de la autono- —no me refiero a socialismos democráticos de tipo
mía universitaria y la libertad académica para escapar europeo— implicaría no sólo un nuevo Gobierno,
así de la influencia directa de los gobiernos y sus órga- sino una nueva organización de la sociedad, en la cual
nos ejecutivos. la enseñanza en todas sus escalas y, por supuesto, en la
En muchos países constituyó una especie de baluar- universidad, sería un medio fundamental para impo-
te donde no podía llegar la intromisión del dictador de ner el régimen en la mente de varias generaciones. En
turno o del grupo político dominante. ese momento ya la autonomía sería una mera ficción.
Sin embargo, esa autonomía no significó una espe- La Universidad no puede aislarse de este proceso
cie de asepsia doctrinaria. Al revés, la Universidad en histórico; y en su medida podría ser un decisivo factor
la mayor parte de nuestros países se convirtió en un que lo oriente. ¿Está preparada para ello, o anda la
centro activo de luchas ideológicas y políticas, la ma- juventud por unos caminos y la Universidad por otros
yor parte de las veces con un sentido revolucionario. sin darle respuesta?
En el fondo la Universidad no pudo escapar al he- ¿Es sólo una máquina que produce profesionales
cho de que pertenece a todo el cuerpo social y que en que, al salir de la Universidad, se sienten frustrados?
ella se expresan todos sus problemas. Como ente au-
tónomo se defendió hasta dónde pudo y a veces bien
poco de la intervención política; pero en la práctica se
convirtió en un centro donde la inquietud se tradujo
en rebeldía.

6 CRISÁLIDA
III. LA UNIVERSIDAD Y EL PRIVILEGIO

En Latinoamérica la Universidad más que una con- La Universidad, por otra parte, tiene en nuestros
ciencia es un privilegio. Es un privilegio pertenecer a países una gran posibilidad de acción. El pueblo la
ella como maestro y más aún como alumno. mira con respeto. Piensa que está por encima del parti-
En nuestro país, que seguramente no es el que está dismo político; tiene admiración por el saber, y siente
peor, el 19 por ciento de la población es analfabeta. De que la juventud universitaria es limpia y generosa, en
100 niños que se matriculan en la escuela primaria un lo que no anda muy equivocada, porque en muchas
tercio la abandona en el paso del primero al segundo ocasiones ha puesto su pecho frente a los tiranos, ha
año y el tercio siguiente, hasta enterar el 66 por ciento develado injusticias y le ha proporcionado ideólogos.
de deserción, en el curso de la etapa primaria. En el ni- Por eso la Universidad es una fuerza social y una
vel secundario, de cada cien alumnos que comienzan gran reserva moral.
sólo terminan menos de 27. Podemos decir, entonces Si examinamos este capital imponderable desde es-
que de cada cien niños que nacen menos de uno llega tos solos ángulos, sería de importancia preguntarse en
a la Universidad y de esos sobrevivientes ni dos de los qué forma podría servir mejor a la comunidad.
cien son hijos de obreros o campesinos. En primer término llegar a ella debe ser la resultante
Por eso decimos que llegar es un gran privilegio que de una selección que no puede fundarse en privilegios
no se consigue en una amplia y justa selección, sino en clasistas, sino en el aprovechamiento de los recursos
el reducido grupo que puede aspirar a pertenecer a la humanos de cada nación, dando una oportunidad le-
Universidad, porque se lo permite el respaldo econó- gítima no sólo a los que tienen medios, sino y princi-
mico y la situación social de su familia. palmente a los que tienen méritos.
Este problema tiene una mayor incidencia en este La forma de conseguirlo es un problema de becas
hemisferio, al revés de lo que ocurre en Europa, donde o de otros procedimientos que pueden adoptarse de
hay otros elementos formadores de una cultura o de acuerdo con las modalidades de cada nación.
una capacitación técnica; aquí la casi única oportuni- Aun así los que resulten elegidos, por un procedi-
dad de adquirir una formación intelectual y profesio- miento u otro, tienen una deuda y una responsabili-
nal se reduce a la Universidad. dad, que es de ellos en el orden personal y que es de la
¿Existe conciencia entre los maestros y entre los Universidad como institución.
alumnos del inmenso privilegio y responsabilidad que
significa recibir una educación gratuita pagada por el
Estado como coronación de tanta ventaja?

OTOÑO 2022 7
IV. LA CONTRIBUCIÓN DE LA UNIVERSIDAD

¿Qué esperamos de ella los que queremos seguir vi- Sin el concurso decisivo de la Universidad esta labor
viendo en un régimen no totalitario, pluralista, y al será imposible.
mismo tiempo responder a la ansiedad creciente y jus- Naturalmente que otra función esencial de la Uni-
ta de nuestros pueblos que buscan el aprovechamiento versidad en estos países consiste no sólo en la investi-
de sus recursos y mejores niveles de vida como una gación científica, que por múltiples razones es limita-
condición para el ejercicio de la libertad? da, sino en mantener una corriente de información
La Universidad tiene una misión decisiva en diver- que permita, a los cuerpos profesionales y técnicos que
sos planos: Una será crear un campo neutral para in- prepara, aprovechar y seguir el avance de los conoci-
vestigar los hechos. Estos países tienen problemas de mientos que se elaboran en grandes centros científicos.
desarrollo económico, requieren descubrir su propia El gran riesgo de estas naciones es hoy la diferencia
realidad, explotar sus propias riquezas, conocer de una creciente que las separa de aquéllas más desarrolladas.
manera objetiva y real sus problemas. Hay un inmen- Hace 100 años la carreta norteamericana que avan-
so campo de investigación y estudio que debe sustraer- zaba hacia el Oeste no difería de la carreta que cons-
se a la agitación superficial, al debate intencionado, truían en nuestros campos nuestros artesanos. Hoy
y que puede abordarse en términos que podríamos algunos países copian la construcción de automóviles
llamar científicos. y por supuesto no pueden pensar en construir aviones
En nuestra América, por la extrema tensión en que supersónicos, ni lanzar proyectiles al espacio.
parece que siempre nos jugamos todo al control del Estas diferencias son reflejos de su grado de avan-
Poder, las instituciones intermedias con autoridad y ce en la investigación científica y de los recursos para
vida propia llevan una existencia condicionada y casi mantenerla.
siempre raquítica. Un ilustre uruguayo decía: “En La- La Universidad debe organizarse para proporcionar
tinoamérica la función política está hipertrofiada, es a estas naciones el caudal científico-técnico, pues de
exagerada con respecto a la exigüidad de los círculos otra manera la distancia entre ellas y los pueblos más
que deberían tener su propio desarrollo y su propio desarrollados será abismal y, en consecuencia, será
equilibrio”. cada vez más difícil toda asociación libre y pacífica,
Tal vez la Universidad se escape o pueda escaparse porque inevitablemente el atraso y la impotencia aca-
de esta ley, y ello puede ser trascendental. rrearán el odio.
Estos pueblos tienen anhelos y la mayor parte de sus No es suficiente, sin embargo, crear una élite re-
políticos, aspiraciones; pero son pocos los que saben presentativa de todo el pueblo, ni mantener una ade-
cuáles son los hechos y menos los que podrían pro- cuada fluencia e intercambio que permita transferir
poner soluciones racionalmente elaboradas a través de el conocimiento de los avances de la ciencia y formar
estudios en que se empleen los medios que proporcio- maestros y profesionales. Tampoco lo es que constitu-
nan hoy los conocimientos científico-técnicos. ya un centro donde sea posible examinar los hechos
El planteo de los problemas no es tarea de aficiona- y elaborar soluciones o planes que proporcionen una
dos ni de simples intenciones. En estas disciplinas se información técnica capaz de ser utilizada. Sería que-
requieren conocimientos y especialistas que la Univer- darse en un plano limitado, aun cuando sería un in-
sidad debe preparar. negable progreso.
En este campo podríamos señalar un aspecto que
nos parece esencial y es el de la planificación económi-
ca, capaz de hacer un inventario de los recursos y de
las posibilidades, indicar prioridades en las metas y en
las inversiones; fijar las tasas de crecimiento y orientar
y coordinar toda la actividad nacional para lograrlo.

8 CRISÁLIDA
V. LA MISIÓN CULTURAL

La Universidad tiene también una misión cultural. No me resisto a citar estas palabras que me escribie-
La ciencia y la técnica son elementos insustituibles ra hace años Gabriela Mistral:
siempre que las dirijan e inspiren hombres con una
concepción de la vida. De otro modo caeríamos en “Usted bien dice que somos países de repercusión.
una especie de tecnocracia que carece de porvenir. “A causa, amigo mío, de una educación que sólo
El ilustre Oppenheimer decía hace poco en Chile: ha desarrollado en los mozos una forma marginal de
“Quiero discutir algunos puntos, algunos problemas pensamiento.
o tesis acerca de la naturaleza de la ciencia y sus rela- “Debe seguir siendo muy grande nuestra quiebra de
ciones con la cultura. Debo hacer una advertencia: es imaginación para que no haya en nosotros una pizca
cierto, desde luego, y nos sentimos orgullosos de que de creación ni realista ni utópica que nos lleve a inten-
así sea, que la ciencia es internacional y una misma, tar alguna empresa criolla.
con pequeñas diferencias de énfasis, en China, en Ja- “Estarnos obligados a pensar que es la educación
pón, en Francia, en los Estados Unidos, en Rusia; pero quien mutila a nuestra juventud, porque la raza no
la cultura no es internacional. En verdad, yo soy de tiene amilanamientos y tampoco pereza...
aquellos que tienen la esperanza de que, en un cierto “Debemos confesar que la ‘América inocente’ del
sentido, nunca lo será del todo, de que la influencia de poeta romántico es una Ninfa Eco de cuerpo abolido,
nuestro pasado, de nuestra historia, que por distintas en carne de fantasma sin fuerza para el grito inicial.
causas y por referirse a pueblos diferentes son diferen- Y aquí la función no deriva del organismo, pues el
tes, se hará sentir y no se perderá en una homogenei- continente es una masa formidable; por eso mismo la
dad total”. invalidez para crear un módulo propio de vida da un
Nosotros esperamos que la Universidad sea capaz asombro que resbala a cólera. Tantos años de vivir una
de guardar, enriquecer y definir el patrimonio de cada vida americana, es decir, original; tanto énfasis como
nación para no caer en un mundo monocorde. el que corre por nuestros textos escolares de historia y
Es necesario, pues, que ella, “enseñe a cultivar los venir a parar en que no hallamos para salvarnos sino la
conocimientos humanos y afine por medio del ejerci- receta nazi o la fascista, o la comunistoide o la caver-
cio las facultades intelectuales del hombre”. naria, cualquiera menos la propia...
Nosotros en Latinoamérica tenemos una tradición, “Nosotros no resistimos el éxito en ningún campo.
una expresión propia. Tenemos también espacio físico Nos embriaga como alcohol de caña, arrebatándonos
y juventud. Esto también nos diferencia. Aquí hay to- la lucidez, nos evapora las flacas convicciones que te-
davía lugar para el hombre y, aun cuando nos vemos a nemos y acaba por apabullarnos enteramente. El exi-
veces un tanto blandos y cansados, en el fondo segui- tismo sudamericano es algo descomunal.
mos siendo un Continente joven, donde aún muchas “Me conozco muy bien su cara vulgar; la he visto
cosas son posibles, donde los caminos están menos en la condescendencia ante el dinero, ante el poder
rígidamente demarcados. estatal, ante la mediocridad personal afortunada. La
La Universidad debe impulsar la búsqueda de un victoria de tal o cual régimen nos convence como la
camino propio. Hasta ahora tal vez nuestro mayor de- macana con un golpe en la nuca y nos paraliza las fa-
fecto ha sido la carencia de autenticidad. Somos un cultades de reacción, entregándonos a cualquier capo-
poco un continente humano de aluvión. Nos ha resul- ral extranjero”.
tado más fácil copiar y vivimos como embobados en
lo que hacen otros para repetir con escasa originalidad
y sin reflexión las experiencias ajenas.
Alguien dijo que en el siglo XIX vivimos bajo la
influencia de la Revolución Francesa y en éste de la
Revolución Rusa.

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V. LA MISIÓN CULTURAL

No es que piense yo en un provincialismo hemis- En una palabra, es preciso corregir esta superficiali-
férico o negar la influencia universal de estos hechos; dad apresurada; superar la etapa del hombre orquesta
pero sí pienso que está llegando la hora de que nos que de todo sabe y opina, que pudo ser en el pasado
paremos sobre nuestros propios pies y pensemos con expresión de las condiciones que presentaba el medio,
nuestras cabezas, para poder buscar solución a lo nues- pero que hoy perturba.
tro y expresar algo que sea un aporte que, por autén- El pueblo está cansado de estos habladores, detrás
tico, tendrá valor. de los cuales está el vacío.
Para lograrlo se requiere esfuerzo. No se puede crear Sobre todo es necesario crear una jerarquía de va-
con ligereza. Se necesita un ambiente de serenidad, de lores que no tenga como meta el exitismo que apenas
reflexión continuada, de estudios desinteresados. alcanza para alimentar vanidades.

Los universitarios y la Universidad deben ser parte


fundamental en la tarea de promover el paso de una
sociedad burguesa y restringida a un nuevo tipo de
democracia, para nosotros un nuevo humanismo,
en que el trabajo alcance la plenitud de su destino.

Asistimos al fin de una etapa histórica: es un sistema


de vida que se agota, que no puede subsistir; diría
más, que no debe subsistir. Hay una crisis de las
instituciones, de los partidos; de las estructuras en
que se funda la economía y las relaciones sociales.

10 CRISÁLIDA
VI. LA FORMACIÓN DE DIRIGENTES

En una gran medida la frustración de estos pueblos Estudiamos el paso del feudo a los Estados Nacio-
se debe a una carencia de dirección. Es demasiado fre- nales; asistimos hoy al paso de los Estados a Comu-
cuente constatar cómo se expresan en grandes palabras nidades supranacionales que implican poder, extensos
los sufrimientos de las masas proletarias; pero también mercados, posibilidades de desarrollo y aprovecha-
es dramática la incapacidad para traducirlas en fórmu- miento de nuevas técnicas que exigen por los costos de
las concretas. su aplicación un basamento mucho más amplio que
De ahí también la quiebra moral de la fe pública, los estados nacionales.
pues en el período de alcanzar el Poder todo se prome- Pero donde la necesidad de aunar esta acción es más
te con la irresponsabilidad del que nada o poco sabe, evidente es en el campo universitario, porque hoy la
y cuando se llega, bruscamente se descubre que era investigación científica y la especialización técnica y
muy distinto hablar sobre los problemas que afron- la disposición de elementos indispensables para man-
tarlos. De ahí nacen muchas de esas contradicciones tener el ritmo del saber y los descubrimientos, no los
que son verdaderas traiciones que están corroyendo el pueden soportar sociedades reducidas.
fundamento moral de la convivencia. Nuestro horizonte está limitado por nuestros débi-
Está siendo hora de que la Universidad tome con- les cuerpos; la visión reducida a la reducida estatura de
ciencia social y proporcione ideas y cuadros de hom- nuestras preocupaciones locales.
bres responsables capaces de conocer y decir la verdad No se trata sólo de ampliar el mercado para com-
de una manera objetiva, capaces de elaborar y utilizar prar o vender cosas; no se trata sólo de permanecer en
fórmulas que no descansen en la intuición o en una la irremediable inferioridad de trabajar con métodos
ambición que se disfraza de “habilidad”. Este tipo de atrasados y maquinaria obsoleta, se trata de algo más
habilidades son las que nos han consumido y que de- profundo. De crear un ámbito humano que nos dé
ben ser reemplazadas por equipos que vayan más hon- mayor amplitud en la visión, que nos haga crecer y
do y no sean meros improvisadores. tener una voz en este mundo.
Esto es hoy imperativo, porque no estamos en tiem- Las Universidades deben formar un juicio claro;
po para seguir cometiendo errores. no podemos dar nivel de vida, ni podemos formar las
En estas condiciones, la Universidad podría ser un élites correspondientes, si nos quedamos atrás en esta
factor determinante para orientar los cambios inevita- marcha. Estamos ya atrasados y seguimos sólo en ver-
bles, para que no caigamos en un oscuro período de balismos que provocan náuseas.
violencia, que puede ser una alternativa, o prolongue- En este momento no sólo soportamos una especie
mos en muchas naciones el dispendio de energías y de succión económica, pues una espiral gigante chupa
reservas, que prolongan el sufrimiento de los pobres. hacia arriba la crema de nuestro esfuerzo económico,
La Universidad puede proporcionar las élites diri- sino, lo que es peor, una succión humana que nos arre-
gentes para este cruce histórico decisivo, dándoles una bata la flor de nuestras capacidades.
visión del mundo y de nuestra propia América. Los grandes centros urbanos han debilitado a las
Esta América tiene indudablemente que buscar una provincias a través de un centralismo desproporcio-
expresión; pero no la puede buscar aislada. nado. Hoy somos provincias que comienzan a enviar
Ya es un lugar común hablar de nuestra integración a los grandes centros del poder lo mejor que tienen,
económica, cuyos tímidos avances son descorazona- exportando además su capital básico que es el hombre
dores; pero hablamos poco de su integración política, bien dotado y en el cual, para formarlo, se invirtió un
porque desgraciadamente nos asusta cualquier paso costoso capital.
grande y vivimos cada vez más sumidos en la quere-
lla interna, alimentando recelos y desconfianzas que
agotan. Somos aficionados a las palabras altisonantes,
pero nos asustamos ante los hechos medulares.

OTOÑO 2022 11
VII. UN NUEVO ESPÍRITU

Esta gran concepción no va a realizarse a través de Nadie debiera superarnos en la audacia y el valor
mecanismos internacionales donde acuden los repre- para explorar en el campo teórico y de deducir la me-
sentantes de determinados sectores económicos que todología y las fórmulas de la acción.
vienen a defender sus intereses creados, que son siem- Los cristianos, muchas veces, descansando en la Fe,
pre los intereses del presente. En cambio, ésta es tarea no hemos elaborado suficientemente una filosofía de
de porvenir que necesariamente rompe con los inte- la acción, ni nuestros conceptos sobre la forma de las
reses establecidos. No olvidemos que la Comunidad nuevas Instituciones.
Europea se inició por decisiones políticas. Está en el Evangelio de San Juan que “en el Princi-
Y esto pueden entenderlo las Universidades y la ju- pio era el Verbo”.
ventud, que ella forme un nuevo espíritu. Es curioso y paradojal que sean otros los que en
Para cumplir esta alta misión la Universidad debiera cierta manera lo recordarán. Es de Lenin la frase: “Sin
tener una unidad interior. De hecho no la tiene. Vivi- teoría revolucionaria, no hay acción revolucionaria”.
mos en una sociedad plural y la Universidad lo refleja. La formación teórica no consiste en conocer docu-
Los diferentes grupos que comprende la vida uni- mentos y repetirlos. Se trata de un trabajo de reflexión,
versitaria tienen una distinta filosofía y en consecuen- de profundidad y de confrontación con la coyuntura
cia una diferente posición, y me parece que debiera histórica y la realidad americana. Es necesario enrique-
señalar cuál es la actitud de los Cristianos en la Uni- cer con nuestra propia creación el acervo doctrinario y
versidad y cómo la proyectan. no correr tras los hechos.
Es evidente que no deseamos una sociedad mono- Pero este esfuerzo teórico debe dar sentido a la ac-
lítica, ni una Universidad sometida. Reconocemos la ción. El Cristiano no sólo predica teorías. Las encarna.
existencia de una sociedad pluralista. Vengo de ver durante largos años en muchos cen-
Luchamos por que sean nuestras ideas las que pene- tros universitarios el peligro de un activismo sin sen-
tren o informen la nueva sociedad que está forjándose; tido por falta de doctrina, y a los que disfrazan su
pero rechazamos los métodos y la existencia de un es- incapacidad en una especie de bohemia revolucio-
tado totalitario y su reflejo en la Universidad. naria; pero también en otros he visto una especie de
No podemos pensar, ni actuar, sobre la base de que angelismo. Son esa especie de gentes que no quieren
nuestra Fe nos da derecho a una cierta pereza intelec- comprometerse; preciosistas intelectuales de manos
tual o a una superioridad automática. El compromi- limpias que no quieren amasar la vida y que terminan
so es alcanzar el más alto grado de eficiencia y pre- siempre en una especie de soberbia estéril. En ellos se
paración en la disciplina escogida. Pero también dar comprende la frase de Pascal “quien hace el ángel, hace
la respuesta y la doctrina que sustentamos. Esto no el demonio”.
significa el cómodo expediente de leer algunos textos,
o vivir de enunciados. Significa trabajar en el campo
teórico y práctico y mantener una vida que refleje las
convicciones.

12 CRISÁLIDA
VIII. INTEGRACIÓN EN LA VIDA

Nosotros queremos una Universidad integrada en Sin embargo, imponerla exigirá un mayor coraje
la vida y en el pueblo. Y eso significa aquí en América moral. Porque ésta no es tarea de ablandamiento ni de
que los universitarios y la Universidad deben ser parte compromisos. No puede serla. Es tarea de definición
fundamental en la tarea de promover el paso de una en el orden teórico y, lo que es más importante, en las
sociedad burguesa y restringida a un nuevo tipo de actitudes.
democracia, para nosotros un nuevo humanismo, en Es necesario desenmascarar la mentira que nos ro-
que el trabajo alcance la plenitud de su destino. dea y hacer un proceso que clasifique las ideas y las
En esta empresa la elaboración ideológica y el apro- palabras, que muchos distorsionan hasta convertirlas
vechamiento de los nuevos conocimientos son una de en caricaturas.
las expresiones más altas y eficaces del “Amor al próji- ¡Qué inmenso destino tiene la Universidad, sus
mo”, de ese prójimo al que es necesario dar condicio- maestros y su juventud!
nes de vida y de dignidad. En este gran cambio histórico deben estar presentes
En América tenemos nosotros una palabra que de- para estudiar y enseñar no sólo las lecciones abstractas
cir y debe ser de resolución y optimismo. Hay espacio de los que ignoran la vida, sino para abrir caminos y
y juventud. Y también otros elementos. construir una nueva sociedad.
Nosotros no estamos entre los pueblos con una ren- Su deber no es el mismo del político militante. Su
ta per cápita inferior a cincuenta dólares. Esos pueblos integración en el pueblo no significa desvirtuar ni con-
sueñan con llegar a los 350, 400 o más que tienen fundir sus funciones.
muchas de las naciones de este hemisferio. Yo diría, usando un pensamiento ajeno, que ella
Aquí, con todas las amenazas y a pesar de las dic- debe soportar el peso y la presión de las mayorías, pero
taduras, hay una tradición de libertad. La juventud que no se rinda nunca ante “la incurable facilidad del
universitaria y muchos maestros la han defendido y hombre para reunirse en torno a las simplificaciones
espero lo seguirán haciendo siempre. más burdas; desvirtuar las empresas más puras; buscar
Aquí ha existido una tradición republicana. Y en su interés por el camino más corto e inmediato”.
estas tierras, no es una casualidad, se organizó la vida La Universidad debe en este mundo, tan velozmente
social con un signo cristiano . cambiante, vivir el presente y fundamentalmente pre-
Tenemos pues, esos valores espirituales y esos recur- parar el porvenir, pues sólo se es libre por el ejercicio
sos materiales que nos permiten trabajar con grandes de los derechos y por el cumplimiento de la justicia.
ventajas. Por eso es que podemos pensar en que el paso Está escrito que “sólo la verdad nos hará libres” y en
de una sociedad a otra puede realizarse con métodos y las Universidades es necesario buscar con independen-
condiciones que expresen este sentido humanista. cia la verdad y decirla. Así, en definitiva, encontrará la
Para algunos la imagen de esta actitud no es tan mejor manera de ser la conciencia social de la Nación.
atractiva como aquella de la violencia desencadenada.

OTOÑO 2022 13
El rol de Derecho UC en la
delimitación constitucional
de la vida política chilena

Mauricio Quilpatay Belmar


Sociólogo UC y Magíster en Sociología UC. Doctor (c)
en Sociología, Universidad de Sydney. Investiga temas
sobre cultura, instituciones y teoría sociológica. Es
docente y académico de la UC.

14 CRISÁLIDA
I. Introducción II. Las “Reglas del Juego”

Hasta ahora, se ha caracterizado a la democracia Nuestra Constitución de 1980 tenía como meta
protegida y otros conceptos de la Constitución de establecer cuál sería la forma legítima de ciudada-
1980 como un conjunto de leyes y procedimien- nía, de vivir la vida de la comunidad política, las
tos que limitaban el ejercicio de la democracia. Por formas de hacer y ejercer la democracia. Básicamen-
ejemplo, el rol tutelar de las Fuerzas Armadas, la te, a través de la Constitución se establecieron las
inamovilidad de sus líderes, el sistema binominal, “reglas del juego” político de la sociedad chilena.
los senadores designados en el Congreso, entre
otros aspectos. No obstante, lo que se jugó en la Lo que estaba en juego era la forma de hacer po-
Constitución de 1980 no fue solamente esta serie lítica en el más amplio sentido. No solo en términos
de reglas para el sistema político y legal chileno. Se institucionales, esto es en cómo se vota, cómo se eli-
les ha prestado mucha menos atención a las aristas gen representantes y jefe de Estado. Más bien, hacer
sociopolíticas de esta democracia protegida. política refiere a cómo se es ciudadano y ciudadana,
cómo se ocupa el espacio público, y cómo ciertos
En lo que sigue presentaré el argumento de que aspectos de esa convivencia se expresan en nuestras
ciertas ideas y creencias movilizadas por integrantes vidas privadas. Refiere a cómo nos vinculamos con
de la Facultad de Derecho UC, puestas en práctica otros, a las formas que tenemos de entender las re-
por la Comisión Ortúzar, delimitaron las formas laciones comunitarias y asociaciones, cómo logra-
legítimas de hacer política, de ser ciudadano y ciu- mos y cómo incluso pensamos en nuestras metas
dadana, a través de la Constitución de 1980. Ar- personales y colectivas. Por ejemplo, las ollas co-
gumentar esto implica decir que, quizás, las leyes, munitarias que emergieron tras el estallido de la
procedimientos y regulaciones de la Constitución pandemia fueron una forma de resolver el hambre,
son de jerarquía menor que sus efectos sociopolí- un problema material y real. Estas representan una
ticos. Ciertamente las constituciones contemporá- forma colectiva de hacer política para solucionar un
neas configuran la división de los poderes del Esta- problema que podría haber sido individualizado.
do y establecen listas de derechos que ponen límites En suma, hacer política es más que la militancia en
entre otros aspectos legales e institucionales. Pero partidos o tener afinidad con ideas políticas. Polí-
las constituciones son más que eso. El principio de tica es además la forma de entendernos como so-
subsidiariedad, por ejemplo, no aparece menciona- ciedad, de relacionarnos entre nosotros y nosotras
do en el articulado. No obstante, a estas alturas es en términos de género, etnia, clase social, y un sin
innegable que la subsidiariedad es un concepto va- fin de características subjetivas y colectivas. Implica
lórico fundamental y estructurante de la Constitu- las maneras en las que como individuos elaboramos
ción y del así llamado “Orden Público Económico” nuestra subjetividad, en función del contexto social
(Fermandois Vöhringer, 2000). Por tanto, cabe pre- que nos circunda, que nos potencia y nos oprime.
guntarse qué otras ideas y creencias subyacen y ani-
man al texto constitucional que no aparecen explí-
citas en él, y cuáles son sus consecuencias políticas.

Entre los propósitos explícitos de la carta de 1980 estaba


servir a la reconfiguración de valores democráticos,
nacionalistas y redefinir el rol que le cabía a la
ciudadanía en la política y la economía del país.

OTOÑO 2022 15
La Constitución tiene mucho que decir sobre las La razón es que ninguno de esos conceptos pue-
formas de hacer política. Más precisamente, esta- den ser clarificados de manera sustantiva ni pue-
blece los límites de las formas legítimas de hacer po- den ser descritos a cabalidad. No es ese su sentido.
lítica y de las formas de habitar el espacio público y Gaete los utilizó para establecer límites a la subje-
privado. Entre los propósitos explícitos de la carta tividad y a las formas de interacción política de la
de 1980 estaba servir a la reconfiguración de valores ciudadanía. No importa tanto aquello a lo que los
democráticos, nacionalistas y redefinir el rol que le conceptos refieren, a qué cosas del mundo real o
cabía a la ciudadanía en la política y la economía del social apuntan. Lo relevante en la manera en que los
país. Dichos propósitos fueron dados por la Junta usó es que a través de ellos se establecen las maneras
Militar, que desde un comienzo justificó el golpe de legítimas de relaciones sociales. No está claro qué es
Estado como un acto moral que buscaba detener “la lo “propio” del “cuerpo social”, pero su propósito es
gravísima crisis social y moral por la que atraviesa estipular que hay cosas que los integrantes de dicho
el país” (Bando Nº 1, 1973). Esto muestra que, si cuerpo social pueden hacer y otras que no. El senti-
el problema hubiera sido meramente legal e insti- do de la forma en la que se usan estos conceptos es
tucional, una solución legal e institucional hubiera dibujar líneas de lo válido en el campo de juego, sin
bastado. Pero como el problema era político y mo- necesariamente establecer qué hay dentro de cada
ral, o sea, social, la solución que construyeron iba área o sector.
necesariamente a ser política y moral. Al tratar de
producir una nueva forma de vida y de democracia, Esta argumentación y este uso de conceptos in-
sus creadores convirtieron a la Constitución en un definidos o poco claros se observa también en las
instrumento para lograr dichas metas. Presentaré discusiones de la Comisión Ortúzar. Evidentemen-
algunos ejemplos. te los comisionados produjeron una serie de leyes,
reglas y procedimientos que componen la gran
El discurso inaugural de las IX Jornadas chilenas mayoría de la Constitución. Pero basta con prestar
de Derecho Público de 1979 fue emitido por el en- atención sobre todo al primer capítulo de la carta
tonces decano de la Facultad de Derecho de la Pon- y observar las discusiones que llevaron a su redac-
tificia Universidad Católica de Chile (en adelante, ción para comprender que el proyecto de la Cons-
PUC), Sergio Gaete. Este discurso es, básicamente, titución de 1980 es mucho más que leyes, reglas y
una apología del golpe de Estado en base a la no- procedimientos. Como indiqué, si el problema de
ción de poder constituyente. Para Gaete, el “rom- la Junta Militar hubiera sido legal, las razones dadas
pimiento” de una institucionalidad previa da pie a habrían sido principalmente basadas en argumentos
la creación de otro ordenamiento que se justifica en legales. Las soluciones también habrían sido prin-
el “imperativo de la convivencia social” (Gaete Ro- cipalmente legales, procedimentales o regulaciones
jas, 1979, p. 29). En su argumento establece que la institucionales. La preocupación tanto de la Junta
“institucionalidad” debe permitir al “conglomerado como de la Comisión Ortúzar era sobre todo de ca-
humano la obtención su bien común” (p. 29). Esto rácter moral, político, y por lo tanto ideológico. Lo
parece de sentido común, pero Gaete explica su sig- que estaba en juego era el establecimiento de las
nificado práctico. Para él, y para la Constitución de reglas del juego sobre qué es lo legítimo que puede
1980, se trata de que “el orden de la sociedad haga ser jugado en la esfera política.
posible lograr la perfección de sus miembros” (p.
29). Asimismo, la Junta Militar, en tanto represen- Los conceptos como “bien común” o “democracia
tante de un supuesto “Poder Constituyente Origi- protegida” deben entenderse así. De otro modo se
nario”, tiene como límites el “ser propio normal del les quita el carácter profundamente transformador
cuerpo social”, el “derecho natural” y el “Proyecto que tuvieron. Quitar los “cerrojos” (Atria Lemaitre,
Creador” (p. 30). La mayor parte de su argumenta- 2013) u otros elementos legales antidemocráticos
ción dice relación con fines morales, políticos, con (Suárez, 2009) no es suficiente porque el entramado
creencias religiosas mucho antes que con procedi- fundacional de la Constitución sigue presente e in-
mientos legales o leyes. fluye de formas que todavía debemos repasar.

16 CRISÁLIDA
Nos faltaría espacio para especificar los pormenores
de las discusiones de la Comisión en torno a estos
primeros artículos constitucionales. Basta argumen-
tar por ahora que la discusión sobre incluir el con-
cepto de bien común y otros “valores doctrinales”
en la redacción del artículo 1 fue uno de los pocos
puntos contenciosos en los años de trabajo de la
Comisión. Por una parte, los comisionados Evans y
Ovalle argumentaron que sólo leyes y procedimien-
tos debieran ser parte de una constitución. Esta po-
sición se sustentaba en que el principio que debía
animar a la constitución tenía que remitirse a lo
legal. Para ellos incluir el bien común era imponer
demasiado “pensamiento católico” (Ovalle, sesión
Por ejemplo, el concepto de “bien común” impone 46) lo que dejaría al texto “como imbuido de una
una forma de abordar las relaciones entre indivi- doctrina religiosa, lo que, obviamente, no puede
duos, Estado y otros actores sociales. Esto proviene ser” (Ovalle, sesión 46). Para el resto de los comi-
de su carácter marcadamente católico, tanto en la sionados la Constitución necesariamente debía in-
forma utilizada por Gaete como por los comisiona- cluir estos elementos “doctrinarios”. Su argumento
dos. El punto 65 de la encíclica Mater et Magistra principal era que debían considerar “el proceso que
dice que: sufrió el país durante el régimen marxista” (Lorca,
sesión 46). Este proceso para ellos fue el de cambios
“[...] se requiere, sin embargo, que los gobernan- políticos, morales y sociales. Para reiterar, su pro-
tes profesen un sano concepto del bien común. blema no fue el restablecer y mejorar el orden legal,
Este concepto abarca todo un conjunto de con- que pudo haber sido resuelto con la reforma de una
diciones sociales que permitan a los ciudadanos segunda vuelta en elecciones presidenciales o con el
el desarrollo expedito y pleno de su propia per- sistema binominal. De otro modo, no habría sido
fección.” (Juan XXIII, 1961) necesario tener esta discusión sobre el bien común
y los “valores doctrinarios”.
Es clara influencia directa del inciso 4 del artículo 1
de la actual Constitución: El problema que la Junta y la Comisión trataron
de resolver mediante la Constitución de 1980 fue
“El Estado está al servicio de la persona humana cómo asegurar el funcionamiento de la democracia,
y su finalidad es promover el bien común, para lo cómo conducir la vida política de la ciudadanía, y
cual debe contribuir a crear las condiciones so- cuáles tipos de ideas y creencias políticas debían ser
ciales que permitan a todos y a cada uno de los válidas y cuáles no. En suma, el problema era que
integrantes de la comunidad nacional su mayor debían proteger las formas legítimas de hacer y vivir
realización espiritual y material posible.” la dimensión política del ser humano.

OTOÑO 2022 17
III. ¿El Rol de la PUC?

La relación específica de la PUC con las ideas por cierto, esta debe realizarse en última instancia
y creencias de la Constitución de 1980 deberá ser por y en cada individuo en particular. Esta creen-
analizada empíricamente en trabajos más largos y cia en la realización espiritual significa que lo más
detallados que lo que permite esta reflexión de ca- importante es la preocupación por el individuo,
rácter exploratorio y preliminar. Por ahora me cen- que bajo el derecho natural acaba siendo la defen-
tré en mostrar un solo ejemplo hallado en el discur- sa irrestricta del derecho individual de propiedad
so del Decano de la Facultad, hacia fines de 1979. privada. Para esta forma de ver el mudo, el Estado
Este ejemplo, que bien podría discutirse como un debe configurarse “al servicio de la persona huma-
ejemplo menor y que no representa a la Facultad, na”: porque la persona es lo único que realmente
resalta que la preocupación subyacente tanto de existe. La sociedad, las comunidades, las relaciones
los comisionados como del entonces decano tiene sociales; incluso los cuerpos intermedios, son todos
que ver con la conformación de una subjetividad, vehículos para que el individuo alcance su propia
de una forma de ver y regular la vida política de la salvación. Para esta forma de considerar la vida en
ciudadanía. Pero a lo que parecen un par de situa- común y la política, la sociedad resulta ser un acci-
ciones anecdóticas se les suma otra, más reciente. dente del que los individuos pueden optar por des-
En un seminario organizado en el año 2020 por la prenderse. Bajo esta perspectiva los individuos pue-
Fundación Jaime Guzmán sobre el nuevo proceso den casi decidir cuándo salir o entrar a la sociedad.
constitucional, uno de los expositores perteneciente
a Derecho UC comentó sobre el bien común. Men- Aunque esta perspectiva parece de sentido co-
cionó que, tal como estaba formulado en la actual mún, no permite comprender a cabalidad a la so-
Constitución era vital para el “buen gobierno” y ciedad en su conjunto. Parece sensata porque efecti-
una “genialidad de la Constitución” que habría, en vamente lo que se aparece a la vista son individuos.
su opinión, tratar de mantener para la nueva consti- Uno no “ve” estructuras sociales, factores socioeco-
tución (Fundación Jaime Guzmán, 2022). nómicos o presiones culturales sobre la forma en
la que actuamos. Difícilmente uno ve las maneras
Con estos ejemplos se puede entender a qué en que somos coaccionados como individuos a
apuntan conceptos como los de bien común y la comportarnos de alguna u otra forma, ni cómo las
democracia protegida. Lo que se busca proteger no presiones sociales motivan y limitan nuestro com-
es solo una institucionalidad legal y procedimen- portamiento. Es precisamente esta relación indivi-
tal diseñada por los creadores de la Constitución duo–sociedad la que se está poniendo sobre la mesa
o sus deudos. Más bien, se trata de proteger una en la Convención Constitucional. De lo que se trata
forma específica de hacer democracia, de proteger es de la configuración de la sociedad, lo que Corde-
lo que esta forma de pensar considera las maneras ro (2019) llama la forma de la sociedad, o las mane-
legítimas de ser ciudadano y ciudadana. Las formas ras en las que la sociedad reflexiona sobre sí misma y
ilegítimas vendrían a ser alguna de las múltiples se crea una teoría de la sociedad a través de la cons-
configuraciones que pueden tomar los proyectos titución (Skapska, 2011). La forma de entender esta
comunitarios, colectivos, socialistas, comunistas, o relación para los allegados a las formas de pensar de
como se les quiera llamar a cualquier forma de or- la Comisión Ortúzar o de la Constitución de 1980
ganización sociopolítica que intente ir más allá del es de un individualismo que intenta pasar por una
individualismo. crítica al individualismo. No obstante, en su con-
ceptualización un tanto vetusta de cuño aristotélica,
Porque eso es lo que subyace al concepto de “bien tomista, hobbesiana, contractualista, y otros, revela
común” defendido por la Comisión, por el ex deca- una forma de pensar la vida social y política arrai-
no Gaete y por miembros de la Facultad de Dere- gada profundamente en una visión individual. Esto
cho UC. Como su preocupación es la salvación del ha tenido consecuencias nefastas para la vida en co-
alma humana bajo la guisa del “Proyecto Creador”, mún de chilenos y chilenas y, aún más, en relación
del “bien común” orientado al (modo particular de con el mundo físico que habitamos. En otras cosas,
entender) la realización espiritual y material, noble, esta forma específicamente católica de comprender

18 CRISÁLIDA
Lo que se busca proteger no es solo una institucionalidad
legal y procedimental diseñada por los creadores de la
Constitución o sus deudos, más bien (...) proteger lo que
esta forma de pensar considera las maneras legítimas
de ser cuidadano y ciudadana.

el bien común y al individuo es lo que está siendo


cuestionado en las discusiones de la Convención
por sus consecuencias observables. Bajo esta visión,
la democracia está protegida siempre que estos
principios subyacentes estén presentes y activos en Referencias
la cultura chilena y en la Constitución. Atria Lemaitre, F. (2013). La constitución tramposa.
Santiago: LOM Ediciones.
Más allá de calificar si esto es un desacierto o no, Cordero, R. (2019). Giving society a form: Constituent
el argumento de este texto fue mostrar que lo fun- moments and the force of concepts. Constella-
dacional de la Constitución de 1980 es su delimita- tions, 26(2), 194–207. https://doi.org/10.1111/1467-
ción de lo políticamente legítimo e ilegítimo. Que 8675.12405
a nociones como la de democracia protegida y bien Fermandois Vöhringer, A. (2000). El orden público
común, que aparentan una arista, les subyace una económico en la Constitución de 1980. Ius Publicum,
4, 63–78.
forma de constituir la política y la vida política de
la ciudadanía que no es inocente. Además, el tex- Fundación Jaime Guzmán (2022). Carlos Frontaura |
“Constitucionalismo chileno: ¿Fue la constitución de
to mostró algunos indicios de las posibles ideas y
1980 el quiebre de una tradición?”. Youtube. Disponi-
creencias compartidas por la facultad de Derecho ble en https://www.youtube.com/watch?v=tIg070qP-
UC a través del tiempo. Ambos puntos, el sentido lLI&t=3498s
de la Constitución y lo que en general se transmite Gaete Rojas, S. (1979). Discurso Inaugural IX Jornadas
en dicha facultad apuntan a que su rol tiene más Chilenas de Derecho Público. Revista Chilena de
que ver con la defensa y promoción de un estilo Derecho, 6(1-4), 27–35.
de vida política y moral antes que de ideas claras o Juan XXIII (1961). Mater et magistra [encíclica]. Dispo-
de regulaciones y procedimientos específicos. Con nible en http://www.vatican.va/content/john-xxiii/
esto en mente se puede entender que el actual pro- en/encyclicals/documents/hf_j-xxiii_enc_15051961_
mater.html
ceso de elaboración constitucional es la oportuni-
dad de la ciudadanía de repensar los límites de lo Skapska, G. (2011). From ’civil society’ to ’Europe’: A
sociological study on constitutionalism after commu-
políticamente posible y legítimo. Sobre todo, es la
nism. Leiden, Boston: Brill.
posibilidad de combatir la opresión y asegurar la
Suárez, C. (2009). La constitución celda o “straight-
posibilidad de la emancipación humana como fin
jacket constitution” y la dogmática constitucional.
de la comunidad política. Universum, 24, 248–271.

OTOÑO 2022 19
Ciclos de movilizaciones
en el Chile contemporáneo
De los movimientos estudiantiles de
la postdictadura al gobierno de Boric

Camila Ponce Lara


Socióloga UC y Doctora en Sociología, École des Hautes
Études en Sciences Sociales. Magíster en Política Com-
parada en Sciences-Po París. Actualmente es investiga-
dora posdoctoral y ha publicado diversos trabajos en
temáticas de movimientos sociales y activismo político.

Los ciclos de movimientos sociales no son li- a este movimiento, existieron movilizaciones que
neales en el tiempo ni tienen que desplegarse de fueron poco visibles durante la década de los 90,
manera sostenida imperiosamente. Tal como lo se- que buscaron democratizar la universidad y hacerla
ñala Melucci (1988), hay periodos de latencia en más democrática (Ponce, 2017). A comienzos del
un movimiento social en el cual este pareciera no siglo XXI, durante la postdictadura, el movimien-
existir, mientras que en otros momentos ellos en- to de estudiantes secundarios comenzó a hacer sus
tran en ebullición. Frente a los recientes sucesos y primeras apariciones, primero con el llamado Mo-
vertiginosas transformaciones sufridas en el Chile chilazo en el año 2001 y luego el Movimiento Pin-
reciente, parece que hay algunos hitos destacables. güino en el año 2006.
por lo cual en este artículo nos interesamos en co-
nectar estos eventos entre sí hasta el momento ac- Este artículo se interroga sobre las distintas movi-
tual. Sin embargo, hay muchos otros que parecieran lizaciones estudiantiles, precedentes al 2011 como
estar olvidados y es importante traerlos a la memo- también aquellas que vienen después, para poder
ria para poder comprender cómo se han cristalizado observar esta trayectoria y comprender vínculos y
las distintas demandas que hoy son parte de lo que conexiones con las recientes elecciones, como tam-
se busca materializar en la futura Constitución, y bién con la aprobación de una Convención Cons-
que antes se observó en las calles durante el llamado titucional que hoy escribe una nueva Constitución
estallido social. para Chile. A partir de fuentes secundarias, entre-
vistas previas e investigaciones realizadas con an-
El movimiento estudiantil de 2011 fue, sin lugar terioridad se realiza esta investigación de carácter
a dudas, el movimiento más masivo y visible des- cualitativa. Por lo cual, el objetivo principal busca
pués del regreso a la democracia (Silva, 2012) hasta analizar la trayectoria del movimiento estudiantil
ese momento. Sin embargo, es un movimiento que chileno, desde el 2001 hasta nuestros días, y su re-
también trae consigo una historia y una trayectoria lación con la aprobación del plebiscito en 2020 y las
que requiere ser mencionada. Efectivamente, previo recientes elecciones.

20 CRISÁLIDA
I. Movilizaciones precedentes al 2011

El primero de estos ciclos de movilizaciones re- comienzan siendo económicas y refieren principal-
presentó más bien un ensayo para los estudiantes mente a la gratuidad del Pase Escolar y de la Prueba
secundarios en términos de organización, convo- de Selección Universitaria (PSU).
catoria y negociación con el ejecutivo. Este mo-
vimiento surge, básicamente, por el escándalo del Este movimiento es mucho más masivo que los
aumento de los pases escolares que esta vez incorpo- anteriores y se observan una serie de liderazgos es-
raban por primera vez un chip y que los estudiantes tudiantiles multicolores, ya que los principales lí-
denominaron luego como “raspa-pase”, puesto que deres militan en diferentes juventudes partidarias o
en el reverso se encontraba el nombre de otro estu- agrupaciones de diversa tendencia política, prove-
diante tras rasparlo. Además de aquello, estos pases nientes de los liceos emblemáticos chilenos. Hoy,
eran más caros que las tarjetas tradicionales por su algunos de ellos aún están presentes en la política,
nueva tecnología; además, su instalación y entrega como es el caso de Karina Delfino, actual alcaldesa
fue muy lenta, lo que incomodó a los estudiantes y de Quinta Normal por el Partido Socialista. Por su
estimuló su pronta organización. Tal como lo señala parte, los universitarios apoyan al movimiento des-
una de sus voceras más conocidas, “los transpor- de afuera, aunque también tenían su propia agenda
tistas tendrán que responder por este fraude y el y movilizaciones programadas, tal como lo señala
gobierno, apoyar las investigaciones que se realicen uno de los líderes universitarios de ese momento:
por este caso” (Úrsula Schüler en Ponce, 2017). “No teníamos ninguna pista de que los pingüinos se
iban a levantar como se levantaron, después de eso
Con ello, los estudiantes no solo cuestionan la nos pasaron por encima […] creo que fue uno de
gestión de los pases escolares, sino este sistema de los éxitos de su movimiento al principio, su autono-
transportes y el educativo y su relación con los es- mía absoluta de cualquier tipo de influencia externa
tudiantes, evidenciando un problema que estaba […] influencia que incluía a la universitaria” (Pre-
completamente silenciado. Tal como se señala en sidente FEUC el año 2006 en Ponce, 2017). Por lo
investigaciones precedentes, más allá de los resul- tanto, y como se señala, no había una coordinación
tados en términos de negociación con el gobierno preexistente entre universitarios y secundarios, y
o de la masividad de las convocatorias realizadas cada grupo tenía sus propios objetivos y demandas.
por los estudiantes, estas movilizaciones son exi-
tosas porque instalan la necesidad de organizarse y A pesar de la relevancia de las movilizaciones pin-
de discutir problemáticas estudiantiles en consejos güinas, su visibilidad y los cambios que pudieron
de presidentes, en asambleas o colectivos (Ponce, generar en la agenda del gobierno de la presidenta
2017). Propósitos que serán la semilla para aquello Michelle Bachelet, los estudiantes no quedan con-
que vendrá más tarde. tentos con los resultados. Tal como lo señala una de
sus líderes, “teniendo a todo el parlamento conver-
El segundo momento, es el llamado Movimiento sando con nosotros, no pudimos amarrar un pro-
Pingüino en 2006, donde los estudiantes ya presen- yecto de ley, un decreto que se pudiese firmar para
tan formas de organización más compleja y conso- regularizar el sistema educacional” (Karina Delfino
lidan orgánicas surgidas durante el mochilazo como en Ponce, 2017). De este modo, continúan sus mo-
son diferentes colectivos y asambleas estudiantiles. vilizaciones el año siguiente, sobre todo en 2008,
De este modo, se realizan tomas y paros en diferen- sin la misma fuerza que en 2006. Dentro de las ac-
tes establecimientos educativos de distinto orden ciones realizadas por el gobierno para terminar con
-aunque principalmente públicos y emblemáticos-, las movilizaciones, se realizaron mesas negociadoras
además de muchas marchas en las principales ciu- donde participaron estudiantes, pero no sus princi-
dades del país para exigir principalmente el fin de la pales líderes, se redactó una nueva Ley General de
municipalización y la derogación de la LOCE (Ley la Educación luego de la derogación de la LOCE, y
Orgánica Constitucional de Educación), ambos se inició el debate sobre la desmunicipalización de
creados durante la dictadura. Aunque, las demandas la educación primaria y secundaria.

OTOÑO 2022 21
II. El movimiento de 2011
y su punto de inflexión

El año 2011, quienes lideran y convocan a masi- Muchos jóvenes que participan de estas movili-
vas protestas ya no son los estudiantes secundarios, zaciones ya habían participado previamente en las
sino los universitarios. Esta vez las movilizaciones protestas pingüinas del 2006, cuando eran estu-
alcanzan más de 400 mil personas en las calles, pa- diantes secundarios. Algunos investigadores señalan
ralizando la mayoría de las universidades del país, al que ellos pertenecen a una generación que perdió el
igual que más de 100 liceos bloqueados por los es- miedo a salir a las calles a manifestarse puesto que
tudiantes secundarios (Ponce y Miranda 2016). Las no nacieron durante la dictadura (Ouviña, 2012).
principales demandas de los estudiantes buscaban la Sin embargo, en este periodo los protagonistas son
gratuidad universal de la educación, fin al lucro en los universitarios, provenientes de las universidades
las instituciones de educación superior, educación tradicionales del país liderados por la CONFECH
de calidad y fin al endeudamiento, puesto que un (Confederación de Estudiantes de Chile), organi-
número importante de estudiantes tenía deudas mi- zación que agrupa a las Federaciones de las Uni-
llonarias con la banca. versidades tradicionales y más prestigiosas de Chile.
Aquí emergen varios líderes relevantes, donde des-
Además de aquello, destacan por su creatividad tacan en ese momento Camila Vallejo de la Juven-
dado que en las movilizaciones precedentes eran tud del Partido Comunista y Giorgio Jackson del
cuestionados por la violencia y los encapuchados movimiento político Nueva Acción Universitaria.
que destruían la propiedad privada. A partir de Gabriel Boric sería presidente de la FECH (Fede-
aquí, los estudiantes estratégicamente inauguran ración de la Universidad de Chile) el año siguien-
nuevas formas de acción colectiva, entre las cua- te y le ganaría la presidencia a Camila Vallejo, hoy
les destaca particularmente el flashmob que surge una de sus ministras más reconocidas. Aunque, por
en Estados Unidos para vender productos (Bedell, primera vez, se incluirían a otras universidades pri-
2003), pero en su variante chilena es mucho más vadas que son las más afectadas por el lucro en el
política y callejera. Gracias a esta forma de acción sistema educativo, como es el caso de la Universi-
colectiva creativa y no violenta, los estudiantes lo- dad Central (Crouchet, 2015) y, más tarde, la Uni-
gran llamar la atención de los medios de comunica- versidad del Mar.
ción y la ciudadanía, dando cuenta de sus demandas
(Ponce, 2017). Otros autores han señalado que este movimien-
to emerge gracias a la existencia de una ciudadanía
Estas acciones lúdicas e instantáneas tienen dis- mucho más exigente frente a condiciones de ma-
tinto orden y formas de organización, por ejem- lestar (Fernández, 2013) y que esto se genera, ade-
plo: el thriller por la educación cuenta con muchos más, por una gran crisis de legitimidad de las ins-
simbolismos sobre la educación de mercado y las tituciones, en particular del Estado (Garcés, 2013).
deudas y realizan varios ensayos; las corridas en for- Asimismo, otro factor a considerar refiere a la am-
ma de posta alrededor de la Moneda de 1800 horas pliación de la clase media (Fleet, 2011) dado a un
donde corrieron por meses sin respiro con muchísi- mayor acceso a la educación superior, puesto que
mos voluntarios; las instalaciones fuera del ministe- efectivamente esta es la generación que tiene ma-
rio de Educación o en la Plaza de Armas para hacer yor acceso a educarse en relación a sus predeceso-
críticas a las políticas del Ministro de Educación de res, que no tuvieron las mismas oportunidades. Por
adelantar las clases para terminar con las moviliza- otro lado, otros investigadores señalan que el movi-
ciones fueron bastante fugaces; o las performances miento estudiantil de 2011 marca un quiebre con el
instantáneas convocadas a través de redes sociales modelo neoliberal (Mayol, 2012). Ruptura que, por
como las besatones o genkidamas, donde creativa- tanto, no se observa como tal en ese momento. Más
mente remitieron al número 1800 (millones de dó- tarde, podemos observar un quiebre con el modelo,
lares) que era el dinero necesario para financiar la o al menos desde la perspectiva de la ciudadanía que
educación de 300 mil estudiantes en un año. se moviliza para condensarlo.

22 CRISÁLIDA
Un último factor para comprender el movimien- Tras el 2011 se realizaron movilizaciones de me-
to de 2011 refiere a quien lidera el gobierno en ese nor intensidad, visibilidad y convocatoria. Los lide-
momento. Que no es nada más ni nada menos que razgos siguientes no fueron superados por aquellos
Sebastián Piñera en su primer mandato, el primer de Giorgio Jackson o Camila Vallejo, ni tampoco
presidente de derecha que gobierna Chile durante la los estudiantes se vieron emplazados de la misma
postdictadura, y que en un momento se erige como manera con relación a las demandas educativas. En
una figura mucho más liberal que gran parte de los 2018, si bien se esbozaban algunas demandas refe-
políticos de su sector. Sin embargo, el ministro de ridas a la educación en un comienzo, ellas fueron
Educación, Joaquín Lavín representa a sectores más abordando otros aspectos referentes a cuestiones
conservadores, el eterno candidato de la derecha del feministas (Follegati, 2018). El carácter patriarcal
partido Unión Demócrata Independiente (UDI), de las instituciones pasó a ser el centro del debate
perteneciente al Opus Dei y fuertemente criticado como también la cultura del acoso sexual dentro y
por los estudiantes por sus nexos a sociedades anó- fuera de las aulas (Ponce, 2020). Las federaciones
nimas de la Universidad del Desarrollo. estudiantiles como organizaciones perdieron el rol
que tenían antaño y otras organizaciones –en este
Durante 2011, luego de todas las movilizaciones caso, de carácter feminista– se volvieron relevantes.
y la visibilidad de este movimiento, el gobierno de Las performances durante las protestas se volvieron
Sebastián Piñera debe rápidamente buscar solucio- muchísimo más visibles, como también el uso del
nes para las demandas exigidas por los estudiantes. cuerpo y la propia individualidad. Este movimiento
Sin embargo, cuando parecían tener todo a su favor, consiguió que varios profesores acusados de acoso
el movimiento estudiantil pierde fuerza por distin- fueran expulsados, como también la redacción de
tos acontecimientos locales y el desgaste propio que diferentes protocolos de género elaborados al inte-
conllevan las movilizaciones. Así es como, en 2012 rior de las instituciones educativas. Sin embargo,
tienen un rol muchísimo menos visible y protagóni- estas demandas siguen en curso, ya que es una pro-
co. Aún así, logran que varias de sus demandas sean blemática que hasta ese entonces estaba profunda-
acogidas por el ejecutivo. Tal es el caso del lucro mente normalizada y asumida en la sociedad.
que, si bien no se resuelve, comienza a ser discu-
tido y operacionalizado. Del mismo modo, la gra-
tuidad, como concepto también se discute y pasa a
ser abordada en 2016 con limitaciones, donde los
estudiantes pertenecientes al 50% más vulnerable
que postulan a una universidad acreditada tienen
derecho a una educación gratuita.

El movimiento estudiantil de 2011 fue, sin lugar a dudas,


el movimiento más masivo y visible después del regreso
a la democracia hasta ese momento. Sin embargo, es un
movimiento que también trae consigo una historia y
una trayectoria que requiere ser mencionada.

OTOÑO 2022 23
III. El estallido y el camino hacia
una nueva Constitución

En consecuencia, vemos que los ciclos de mo- Este intenso ciclo de protestas intenta concluirse
vilización van cristalizándose y tomando cada vez mediante el “Acuerdo por la Paz” en noviembre del
mayor robustez. Las demandas se van reforzando 2020. En esta coyuntura firman distintos partidos
en la década del 2010 y tienen su apogeo durante tanto de la coalición de gobierno como de la opo-
el 2019. Esta vez, son los estudiantes secundarios sición, y también participa el actual presidente Ga-
quienes inician las movilizaciones, mediante las briel Boric, quien en ese momento era diputado de
convocatorias para evadir masivamente el metro la República. Firma que en ese momento le costó la
como forma de protesta al aumento del boleto en salida de decenas de militantes de su partido Con-
30 pesos. La fuerte represión de los carabineros ha- vergencia Social, puesto que esta decisión no había
cia los estudiantes durante esa semana tuvo como sido consensuada previamente. El documento del
consecuencia las mayores movilizaciones nunca vis- acuerdo señalaba lo siguiente:
tas. Más de 2 millones de personas salieron a las ca-
lles, pero antes de esto fueron centenas de personas “Ante la grave crisis política y social del país,
que realizaron barricadas en las principales ciudades atendiendo la movilización ciudadana y el llama-
del país. Ese 18 de octubre se inicia el llamado esta- do formulado por el Presidente Sebastián Piñera,
llido social o #ChileDespertó. Tal como señalan las los partidos firmantes han abordado una salida
investigaciones del Observatorio de Conflictos de institucional cuyo objetivo es buscar la paz y la
COES, entre el 18 de octubre del 2019 y el 31 de justicia social […] se impulsará un Plebiscito en
diciembre del mismo año, más de 3.300 acciones de el mes de abril 2020 […] El órgano constituyente
protesta tuvieron lugar en Chile, además en los dos que en definitiva sea elegido por la ciudadanía
últimos meses y medio de 2019 hubo 44 acciones tendrá por único objeto redactar la nueva Cons-
de protesta por día (Somma et al. 2020). titución […] regirá en el momento de su promul-
gación y publicación derogándose orgánicamente
Las demandas de este estallido social reunieron la Constitución actual.” (Senado, 2019)
todas aquellas que habían sido exigidas a lo largo
del ciclo iniciado en 2011: NO + AFP o un siste- En este plebiscito realizado en octubre del 2020,
ma de pensiones digno, mejores salarios, un mejor los chilenos aprobaron una nueva Constitución con
sistema de salud, un mejor sistema de educación, un 78% de los votos válidamente emitidos, al igual
fin a la privatización del agua, fin a las zonas de sa- que una Convención Constitucional con un 79%
crificio, fin al patriarcado y la desmilitarización del igualmente. Constitución que en la actualidad está
Wallmapu. Sin embargo, todas estas exigencias pa- siendo redactada por los convencionales electos y
recían resumirse en una idea mayor: una vida digna, que debe ser aprobada por un plebiscito de salida
que parecía estar ausente en la vida de gran parte durante este año 2022.
de los chilenos. Razón por la cual la Plaza Italia,
epicentro de todas estas movilizaciones, fue colo-
quialmente rebautizada como Plaza de la Dignidad.

[...] los ciclos de movilización van cristalizándose y


tomando cada vez mayor robustez; las demandas se
van reforzando en la década del 2010 y tienen su
apogeo durante el 2019.

24 CRISÁLIDA
IV. Conclusiones

A pesar de aquello, ni la firma del Acuerdo por Consecuentemente, las movilizaciones están más
la Paz ni la redacción de una nueva Constitución presentes que nunca, aunque el nuevo presidente
implican que las demandas del movimiento hayan provenga de los activismos y en particular del mo-
desaparecido ni que el malestar deje de estar presen- vimiento estudiantil. Sin embargo, a los activistas
te en una parte importante de la sociedad chilena. de hoy poco les importa que los ministros más vi-
La pandemia del COVID-19 no ha hecho más que sibles del gobierno de Boric hayan sido los líderes
incrementar la crisis económica y las desigualdades más exitosos de la última década, como es el caso
sociales del país. También otros conflictos se han de Camila Vallejo y Giorgio Jackson. Actualmente,
agudizado, como es la violencia en la Araucanía y la las movilizaciones tienen otras características y los
crisis migratoria en la macrozona norte. liderazgos han dejado de tener el rol preponderante
que tenían antaño. Por lo cual este gobierno debe
buscar nuevas estrategias para poder lidiar con estos
activistas, que serán claves para el éxito o el fracaso
de crear una nueva forma de ejercer la política hoy
y así gobernar codo a codo con quienes deciden to-
marse las calles.

Referencias
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CLACSO. Año XIII (31): 13-20. Cohesión Social.

OTOÑO 2022 25
Educación como
libertad y derecho
El momento constitucional
de la educación en Chile

José Joaquín Brunner Ried


Ex alumno y académico UC. PhD en Sociología, Universi-
dad de Leiden. Fue Ministro de la Secretaría General de
Gobierno (Segegob) entre 1994 y 1998. Es considerado
uno de los principales expertos en educación del país.

I.

El presente ensayo es un recorrido por algunos La sección tercera aborda la relación entre familia
aspectos del debate en torno al derecho a la edu- y Estado como garantes del derecho a la educación
cación y la libertad de enseñanza que actualmente y la libertad de enseñanza, que es la forma como
tiene lugar en Chile1. En esta primera sección se re- aparece en la doctrina y los tratados internacio-
sume su contenido a la manera de una visión pano- nales a lo largo del siglo XX. Frente a este patrón
rámica de los principales argumentos desplegados a tan fuertemente acogido por las Constituciones
lo largo de las páginas siguientes. democráticas, se pregunta aquí, ¿por qué algunos
sectores políticos se oponen en Chile a consagrarlo
La sección segunda introduce nuestro enfoque constitucionalmente? Las razones son varias, pero
sobre el tema del debate en términos de las catego- infundadas, sostenemos. Y pasan por alto las serias
rías ideológicas en juego, considerando elementos consecuencias que para la democracia traería consi-
doctrinarios, históricos e institucionales. Postula- go el hecho de dislocar ese patrón. En efecto, elegir
mos que un triángulo de principios –derecho de el derecho a la educación en desmedro de la libertad
acceso, de libre elección y de la sociedad civil de de enseñanza uniformaría la educación en perjuicio
establecer y dirigir instituciones educacionales– se del pluralismo cultural y político de la sociedad, lo
halla en la base del pluralismo de valores propio de mismo que elegir la libertad en detrimento del dere-
las sociedades democráticas. Y que, por tanto, en el cho desintegraría la sociedad restándole viabilidad a
ámbito institucional, esta tríada debería estar incor- una cultura común en beneficio de la continua re-
porada en la Constitución, cubriendo desde la sala producción de las desigualdades de origen familiar.
cuna hasta la educación superior. De hecho, cabría
esperar que la Constitución chilena reconozca esta La sección cuarta pone sobre la balanza, por un
tríada de principios, a la vez que refuerce la autono- lado, la enorme importancia que la sociedad y sus
mía de las instituciones educativas y sus proyectos. grupos más activos atribuyen a la educación y, por
Por el contrario, oponer derecho a la educación y
libertad de enseñanza, educación estatal y privada, y 1 Una versión inicial de estas notas, aquí revisadas y editadas en
libertad de los padres para elegir y función primor- un solo texto, fue elaborada en columnas de opinión separadas
dial del Estado, desconoce el imperativo democráti- publicadas en el diario El Mercurio durante el período marzo de
co del pluralismo educacional. 2021 a marzo de 2022.

26 CRISÁLIDA
el otro lado, la escasa importancia que el actual e básicas de nuestra organización como sociedad;
intenso debate político-institucional otorga, en la nuestra Carta Fundamental. Este es un momento
práctica, a los desafíos que la educación enfrenta esencial en la educación y aprendizaje de los países.
en Chile y globalmente. Nos referimos a su papel Lo asumimos en condiciones que la mayoría eligió:
frente a las cuestiones de desigualdades socio-cul- sin romper con la actual Constitución, mediante
turales, el cambio climático, la Cuarta Revolución un plebiscito y con un diseño especial para elegir
Industrial y los embates que experimentan las de- a los convencionales constituyentes: representación
mocracias liberal-sociales –como forma de gobierno paritaria de género, listas de independientes expre-
pero además, y sobre todo, como forma de vida– en sivas del mundo social y sus movimientos, y escaños
varios países del mundo, Chile entre ellos. Nuestra reservados para los pueblos originarios. Al mismo
idea en este punto es que resulta razonable esperar tiempo, lo hacemos bajo circunstancias impuestas
que ahora, cuando el país ingresa a un nuevo ci- por la historia: estallido del 18-O, masiva mar-
clo político, renueva sus elites gobernantes y busca cha-protesta del 25-O y acuerdo nacional del 15-N.
fundar un orden constitucional para las próximas Pues bien: la Convención Constituyente, con todas
décadas, estos temas sean una parte importante de sus tensiones y riesgos de desborde, sus sesgos de re-
las preocupaciones de las autoridades de gobierno presentación ideológica, sus peculiaridades de com-
en el sector educacional. También de la Conven- portamiento y laberíntica división y organización
ción Constitucional, el Parlamento, las universi- del trabajo, se ha transformado en el símbolo de
dades, los gremios empresariales y del mundo del esta instancia intensamente educativa y de variados
trabajo. Efectivamente, el futuro del país, y no sólo aprendizajes que estamos viviendo. Su responsabi-
de nuestra educación, depende ahora crucialmente lidad incluye la de trazar el horizonte de nuestros
de las capacidades de aprendizaje colectivo que la procesos de educación formal –a nivel preescolar,
sociedad logre movilizar. escolar y superior– situándolos en un marco insti-
tucional y de orientaciones que reflejen los distintos
La última sección cierra este ensayo planteando diseños formativos que existen en la sociedad y la
el desafío educativo mayor que Chile tiene por de- obligación de que respondan al derecho de todos y a
lante. En efecto, vivimos la inédita experiencia de la libertad de cada familia e individuo. Es una ardua
un proceso colectivo de reelaboración de las normas tarea para un momento de encrucijada histórica.

La familia, primer ambiente de socialización de los hijos,


tiene la obligación primordial y el derecho preferente a
guiar la educación de las y los hijos. Ahí ellos adquieren y
desarrollan el lenguaje, las motivaciones y una mentalidad
que condicionará sus aprendizajes a lo largo de la vida.

OTOÑO 2022 27
II.

Las libertades esenciales de las personas –de ele- Desde el inicio de la República, lo público-edu-
gir, pensar, creer, expresarse y comportarse con au- cacional está conformado en Chile, igual como en
tonomía– son la más alta aspiración formativa ela- algunos países europeos –v.gr., Bélgica, España,
borada por la cultura moderna de Occidente. Sin Holanda– por esa mezcla heterogénea de elemen-
ser ideales privativos de una sola civilización, sin tos. En efecto, la legislación del naciente Estado or-
embargo florecen más comúnmente allí donde el dena a los conventos y monasterios fundar y man-
pluralismo, la diversidad y el disentimiento pueden tener escuelas primarias, que se entienden parte de
manifestarse sin temor a la represión, la inquisición, la educación pública. A mediados del siglo XIX ya
la cancelación, la censura. De hecho, estos ideales se habla de una instrucción primaria dada bajo su-
quedaron consagrados en la Declaración Universal pervisión del Estado, aunque no necesariamente
de Derechos Humanos. En el plano educacional in- provista por él.
volucran dos derechos fundamentales.
Desde temprano, asimismo, el Estado chileno
Por un lado, el derecho a la educación, cuyo ob- contribuye al financiamiento de la educación pri-
jeto es el pleno desarrollo de las capacidades perso- vada. La ley de instrucción secundaria y superior de
nales. Hoy es una base para el ejercicio de los demás 1874 va incluso más allá; reconoce derechamente la
derechos. Por otro lado, el derecho preferente de los libertad de enseñanza. Toda persona natural o jurí-
padres a escoger el tipo de educación que deben re- dica puede fundar establecimientos de instrucción
cibir sus hijos. Esto es, elegir los ideales formativos secundaria y superior y enseñar pública o privada-
que deben presidir los primeros años de socializa- mente cualquiera ciencia o arte.
ción de sus hijos, sobre todo en el plano de la moral
y la cultura. Uno y otro suponen una concepción Luego, la Constitución de 1925 consagra amplia-
pluralista de la sociedad, donde hay fines múltiples, mente la libertad de enseñanza, la que más adelante
valores en pugna y respuestas que compiten entre vendría a conjugarse bajo el principio del pluralis-
sí. Dentro de esta visión de mundo se anuda un mo. El pluralismo pasó a ser una bandera progresis-
tercer derecho a los dos anteriores: preferir, para ta. Como señaló el entonces senador Allende (1970)
los propios hijos o pupilos, escuelas distintas de las en su carta pública al presidente de la DC: “Si hay
creadas por las autoridades públicas, según expresa un ámbito de la vida nacional donde la plena vigen-
el Pacto Internacional de Derechos Económicos, cia del pluralismo debe manifestarse más concreta-
Sociales y Culturales. Este derecho incluye, como mente, éste es el de la educación y la cultura. En el
señala el mismo Pacto, la libertad de los particulares área educacional este principio debe imperar en la
para establecer y dirigir instituciones de enseñanza, estructura, sistemas de admisión, planes de estudio
que se ajusten a las normas mínimas que prescriba y confección de textos relativos a la enseñanza fiscal
el Estado. y particular”. Así quedó consagrado en la reforma
de garantías constitucionales de 1971.
Este triángulo de principios –acceso, libre elec-
ción y facultad de establecer y dirigir instituciones Este sistema pluralista, salvo durante la dictadura
educacionales– se halla en la base del pluralismo que lo sometió a un orden ideológico uniforme y
de valores, propio de las sociedades democráticas. autoritario, da cabida a un amplísimo espectro de
En el ámbito institucional, desde la sala cuna hasta valores y concepciones de mundo que coexisten
la educación superior en sus diversos niveles, esta en el seno de la sociedad: establecimientos laicos y
tríada debería por lo mismo estar incorporada a religiosos de diferentes orientaciones; de filosofías
la Constitución. Así lo reconoce la doctrina y ha como la masónica, de Steiner (Waldorf ), Montes-
ocurrido a lo largo de la historia independiente de sori y otras; de culturas de grupos inmigrantes –ale-
Chile, con diversos modos de aplicación práctica y manes, franceses, ingleses, italianos, árabes, judíos
en medio de una continua lucha ideológica donde y otros–; de espíritu pedagógico progresista o con-
se entrecruzan motivos religiosos, políticos, de clase servador; de modalidades científico-humanistas y
social, jerarquías de estatus y circulación de élites. técnico-vocacionales; de diversas concepciones del

28 CRISÁLIDA
mérito y la responsabilidad y, ahora último, tam- Nuestro sistema de provisión y financiamiento de
bién, con enfoque de interculturalidad. educación es por tanto mixto –estatal y no-estatal o
privado, descentralizado, con establecimientos au-
Tal variedad de visiones de mundo coexisten en tónomos, regulado y plural– sin que pueda reducir-
un sistema público y plural sostenido por colegios se ni a la lógica de un Estado docente napoleónico
de diferente tipo –estatal-ministeriales, municipa- (monopolio de provisión) ni de un mercado neo-
les, de servicios locales, corporaciones privadas edu- liberal. Insistir en tales figuras retóricas impide un
cacionales, fundaciones, asociaciones comunitarias debate serio de estos asuntos.
y gremiales–. Sin embargo, todos ellos se hallan
sujetos a un currículo común, un régimen de ad- Más bien, cabría esperar que la Constitución chi-
misión centralizado que procesa las preferencias de lena reconozca la tríada de principios que aseguran
los padres, un cuerpo docente regido por el mismo el pluralismo educacional, a la vez que refuerce la
estatuto profesional, exámenes reconocidos por el autonomía de las instituciones educativas y sus pro-
Estado y un sistema común de supervisión, finan- yectos. Oponer derecho a la educación y libertad de
ciamiento y evaluación. enseñanza; educación estatal y privada; y libertad de
los padres para elegir y función primordial del Esta-
do, desconoce 200 años de historia y el imperativo
democrático del pluralismo educacional.

OTOÑO 2022 29
III.

Ya lo señaló Jean Piaget, padre de la moder- También las constituciones de países democráti-
na psicología educacional, en un comentario a la cos adoptan este patrón. Por ejemplo, la de España
Declaración Universal de los Derechos Humanos proclama: “Todos tienen el derecho a la educación.
(Piaget, 1978). Lo que ésta reconoce, escribió, es Se reconoce la libertad de enseñanza”. Asimismo,
que el individuo no puede adquirir sus estructuras ellas reconocen la libertad que tienen las personas
mentales más esenciales, ni tampoco la lógica y la físicas y jurídicas para crear centros docentes, den-
moral, sin la aportación externa de un “ambiente tro del respeto a los principios constitucionales.
social de formación”, cuyos pilares fundamentales
son la familia y la escuela. Él habla de “dos esferas Enunciados similares se encuentran en otras
de influencia” indisociables e insustituibles que son constituciones como la alemana y la holandesa, por
“condición sine qua non para un desarrollo intelec- ejemplo, y en la de varios países latinoamericanos,
tual y afectivo completo” de niñas, niños y jóvenes. según analiza un reciente estudio del Centro de Po-
líticas Públicas UC (2021).
A pesar de las tensiones a que da lugar, este patrón
de dos esferas se halla presente en el desarrollo de la Entonces, frente a un patrón tan manifiesto y
doctrina y en los tratados internacionales suscritos consistente, ¿por qué algunos sectores políticos se
durante el siglo XX. La misma Declaración Univer- oponen a consagrarlo constitucionalmente en nues-
sal (1948) lo expresa de la siguiente forma: “Toda tro país?
persona tiene derecho a la educación”, mientras “los
padres tendrán derecho preferente a escoger el tipo Por lo pronto, porque piensan, equivocadamen-
de educación que habrá de darse a sus hijos”. te, que convendría acabar con dicho patrón para
que la educación quede completa y exclusivamente
Pocos años después, el Protocolo adicional del dentro de la esfera de influencia estatal. Para jus-
Convenio Europeo para la Protección de los Dere- tificar esta pretensión contraponen el derecho a la
chos Humanos y de las Libertades Fundamentales educación (el que sería progresista, de vocación so-
(1953), declara: “A nadie se le puede negar el dere- cial, carácter público, altruista, gratuito, orientado
cho a la educación. El Estado, en el ejercicio de las al bien común y se hallaría a cargo del Estado) con
funciones que asuma en el campo de la educación y la libertad de enseñanza (la que sería reaccionaria,
de la enseñanza, respetará el derecho de los padres a de vocación individual, carácter privado, egoísta,
asegurar esta educación y esta enseñanza conforme lucrativa y orientada a la propiedad y el empren-
a sus convicciones religiosas y filosóficas”. dimiento hallándose a cargo del mercado). Estas
caricaturas son, claro está, irracionales, arbitrarias
De igual manera, el Pacto Internacional de De- e infundadas; solo buscan desviar la vista de aquel
rechos Económicos, Sociales y Culturales consagra patrón que se desea remover.
este mismo patrón, agregando que nada de lo dis-
puesto en él puede entenderse “como una restric- En seguida, porque desconocen, o desearían
ción de la libertad de los particulares y entidades nunca hubiese existido, aquel patrón que ha esta-
para establecer y dirigir instituciones de enseñanza, do presente, conflictivamente, a lo largo de nuestra
a condición de que se respeten (…) las normas mí- historia, hasta encontrar un relativo balance entre
nimas que prescriba el Estado”. Más recientemente, derecho a la educación y libertad de enseñanza; en-
la Convención sobre Derechos del Niño vuelve a re- tre las esferas de influencia del Estado y la familia.
iterar este patrón junto con poner al día el lenguaje En esto consiste, precisamente, la naturaleza mixta
sobre fines de la educación. de nuestro sistema educacional, con una diversidad
de centros educativos que contribuye al pluralismo
cultural de la sociedad, que deberá expandirse ahora
hacia el reconocimiento de las culturas ancestrales.

30 CRISÁLIDA
IV.

Tercero, porque ciertos sectores del progresismo A pesar del intenso debate político y constitu-
aún no captan el mensaje de Gøsta Esping-Ander- cional sobre el futuro del país, la educación –cuya
sen, una de las principales figuras intelectuales de la centralidad nadie discute– recibe poca atención.
socialdemocracia y el Estado de bienestar nórdicos. Habitualmente, cuando se la menciona, es con un
En una entrevista reciente aparecida en Chile, ha estrecho prisma jurídico-administrativo (propiedad
vuelto a reiterar que “la base del desarrollo cogni- y control), o bien, desde la perspectiva de una ideo-
tivo se encuentra en las edades de 1 a 6 años. Si logía decimonónica que opone Estado y familia. Así
un niño recibe estímulos cognitivos insuficientes en viene ocurriendo a lo menos desde hace diez años.
este rango de edad, es muy difícil, o casi imposi-
ble, rectificarlo en edades posteriores […]. El apego Al contrario, a nivel global, el foco de discusión
efectivo a los padres es un requisito clave para el es el papel de la educación frente a un futuro que
desarrollo cognitivo posterior” (Pérez, 2021). Por lo se estima estará caracterizado por la persistencia y
mismo, la familia, primer ambiente de socialización acentuación de las desigualdades heredadas, el cam-
de los hijos, tiene la obligación primordial y el de- bio climático, la revolución tecnológica y el retro-
recho preferente a guiar la educación de las y los ceso democrático.
hijos. Ahí ellos adquieren y desarrollan el lenguaje,
las motivaciones y una mentalidad que condiciona- Efectivamente, ¿qué puede hacer la educación
rá sus aprendizajes a lo largo de la vida. frente a desigualdades heredadas? El nuevo gobier-
no de Boric– que suele presentarse como socialde-
Por último, se oponen porque no perciben las mócrata– podría hacer una contribución decisiva.
serias consecuencias que para la democracia traería Según Esping-Andersen, uno de los más represen-
consigo el hecho de dislocar el patrón que asocia de- tativos intelectuales de la socialdemocracia nórdi-
recho a la educación con libertad de enseñanza. En ca, la inversión en educación temprana de alta ca-
efecto, elegir a aquel en desmedro de ésta uniforma- lidad para todos los niños, especialmente aquellos
ría la educación en perjuicio del pluralismo cultural en situación de pobreza, “es una política que tiene
y político de la sociedad, lo mismo que elegir la una recompensa enorme. Es caro, y si es universal,
libertad en detrimento del derecho desintegraría la absorberá alrededor del 1,5% del PIB, pero es una
sociedad restándole viabilidad a una cultura común muy buena inversión” (Escobar, 2021). De hecho,
en beneficio de la continua reproducción de las des- hay consenso en que ésta es la única política que
igualdades de origen familiar. Mucho se juega, por puede interrumpir, o morigerar significativamente,
tanto, en la mantención de este patrón. el efecto de la cuna sobre la desigualdad (Brunner y
Ganga, 2017).

Un segundo asunto crítico para la educación es el


cambio climático. No resulta creíble pensar que ella
no será afectada por este cambio que hunde sus raí-
ces en un tipo humano —el del emprendedor fáus-
tico—un producto peculiar de la educación moder-
na (Berman, 1984). Sujetos dispuestos a apostar su
alma para obtener poder sobre la naturaleza y su
transformación. Y que se hallan en posesión de me-
dios de producción, transporte y comunicación tan
prodigiosos que, como se lee en Marx, semejan al
brujo impotente para dominar los espíritus subte-
rráneos que él mismo conjuró.

OTOÑO 2022 31
Un segundo asunto crítico para la educación es el A veces, se cree que esta nueva revolución indus-
cambio climático. No resulta creíble pensar que ella trial podría emanciparnos de los efectos de las ante-
no será afectada por este cambio que hunde sus raí- riores revoluciones fáusticas, devolviendo los equi-
ces en un tipo humano —el del emprendedor fáus- librios destruidos o perdidos. La educación sería la
tico—un producto peculiar de la educación moder- encargada de crear el nuevo tipo humano requerido
na (Berman, 1984). Sujetos dispuestos a apostar su por una sociedad global posfáustica. Mas, ¿quién
alma para obtener poder sobre la naturaleza y su asegura que esto sucederá? ¿Y qué conocimientos y
transformación. Y que se hallan en posesión de me- destrezas se necesitarán para vivir en un medio am-
dios de producción, transporte y comunicación tan biente íntegramente tecnologizado? ¿No será acaso
prodigiosos que, como se lee en Marx, semejan al un mundo todavía más complejo y mayor el desafío
brujo impotente para dominar los espíritus subte- para hacer sentido de la vida? ¿Podrán las tecnolo-
rráneos que él mismo conjuró. gías salvar el alma de las humanidades o la aprisio-
narán, definitivamente, en una ‘jaula de hierro’?
Formar ese tipo humano supuso infundir el
‘espíritu del capitalismo’ en la cultura económi- Lo cual nos lleva a un último nudo crítico: cómo
ca moderna, según constató Max Weber (2012) a conservar las libertades democráticas, los derechos
comienzos del siglo pasado. Esto es, una mentali- individuales y el pluralismo de las formas de vida en
dad adquisitiva, competitiva y orientada al cálcu- medio del incesante cambio tecnológico, de los frá-
lo. La cultura de la era industrial terminó incor- giles balances medioambientales y la lucha contra
porando así un potente vector de racionalización las desigualdades heredadas.
en el mundo, que crea una verdadera pulsión por
el crecimiento y el dominio de la naturaleza. Hoy estos valores están amenazados. Se supone
que la educación debe formar sujetos políticos au-
En cambio, actualmente, un documento de la tónomos, dotados de capacidad crítica y hermenéu-
UNESCO (2018) declara que debemos movernos tica, interesados en la participación y la delibera-
hacia una educación ecológicamente orientada, ción, dispuestos a convivir en un orden pluralista.
capaz de rebalancear nuestras formas de vida en ¿Es este un supuesto realista? ¿O la educación cívica
la tierra con la interdependencia de sus sistemas ha quedado en manos de nuevos profetas populis-
y límites. ¿Qué significan esos nuevos equilibrios tas, influencers, encuestólogos y opinólogos, cance-
para la filosofía de la educación? ¿Es posible dejar ladores de la disidencia, manipuladores de escánda-
atrás la figura del Fausto (de Goethe) y su com- los mediáticos y funcionarios del discurso oficial?
pulsión por el crecimiento? ¿Podría reducirse a
cero el desarrollo y retornar a sistemas simples, Ni la educación del ciudadano democrático,
menos diferenciados y de menor dinamismo crea- ni la preparación necesaria para hacer frente a las
tivo-destructivo? desigualdades heredadas, el cambio climático y la
revolución tecnológica están aseguradas en nuestra
Aquí, precisamente, entra en escena la Cuarta sociedad.
Revolución Industrial (Schwab, 2016), anuncia-
da como un nuevo capítulo del desarrollo huma- Resulta razonable esperar que ahora, cuando el
no. Suele describírsela como el advenimiento de país ingresa a un nuevo ciclo político, renueva sus
sistemas ciber-físicos que alteran la noción de lo elites gobernantes y busca fundar un orden constitu-
humano y su relación con las máquinas, creando cional para las próximas décadas, estos temas debe-
un nuevo ciclo tecnológico que incluye la edi- rían ser una parte importante de las preocupaciones
ción del genoma, inteligencia artificial, nuevos de las autoridades del gobierno en el sector educa-
materiales, armas biológicas, fuentes naturales de cional. También de la Convención Constitucional,
energía, salud digital, impresión 3D, internet de el Parlamento, las universidades, los gremios em-
las cosas y así por delante. presariales y del mundo del trabajo. Efectivamente,
el futuro del país, y no sólo de nuestra educación,
depende crucialmente de las capacidades de apren-
dizaje colectivo que la sociedad logre movilizar.

32 CRISÁLIDA
V.

Si miramos a nuestro alrededor desde una pers- un talante moderado, una visión programática re-
pectiva educacional y de aprendizaje descubrimos formulada, la conformación de equipos de jóvenes
rápidamente que –como sociedad– estamos en un profesionales prometedores, una sensibilidad al mo-
momento especialísimo. mento histórico, cierto pragmatismo y seguimien-
to de los ritos republicanos. Pero este curso recién
En efecto, enfrentamos la necesidad colectiva de comienza y las pruebas difíciles están por delante.
nuevos conocimientos, nuevas destrezas y nuevas
formas de vida y comportamiento para poder adap- Desde un ángulo distinto, vivimos la inédita
tarnos a los nuevos entornos. La pandemia por co- experiencia de un proceso colectivo de reelabora-
vid-19 es el mejor ejemplo de esa necesidad; mas no ción de las normas básicas de nuestra organización
la única. Por lo pronto, accede al gobierno de golpe como sociedad; nuestra Carta Fundamental. Este
–súbitamente, de una vez– una generación que ini- es siempre un momento esencial en la educación y
ció su educación formal en tiempos de democracia, aprendizaje de los países. Lo asumimos en condicio-
creció en medio de una sociedad de oportunidades nes que la mayoría eligió: sin romper con la actual
expansivas –aunque desiguales–, desarrolló una Constitución, mediante un plebiscito y con un di-
visión crítica del modelo de sociedad imperante y seño especial para elegir a los convencionales cons-
promete ahora enmendarlo. tituyentes: representación paritaria de género, listas
de independientes expresivas del mundo social y sus
Su élite, con abundantes estudios y experiencia movimientos, y escaños reservados para los pueblos
social de protesta, ha de vérselas ahora con la intrin- originarios. Al mismo tiempo, lo hacemos bajo cir-
cada administración del Estado y la gobernabilidad cunstancias impuestas por la historia: estallido del
del país. Debió aprender rápidamente a ajustar y re- 18 de octubre, masiva marcha–protesta del 25 de
finar su discurso. Y lo ha hecho. Lo que viene es más octubre y Acuerdo Nacional del 15 de noviembre.
exigente. Debe adquirir las habilidades del poder,
de la realpolitik, propias de la gestión. Y abando- Pues bien: la Convención Constitucional, con
nar toda esperanza de una revolución para asumir el todas sus tensiones y riesgos de desborde, sus sesgos
lento, arduo, gradual camino de las reformas, siem- de representación ideológica, sus peculiaridades de
pre limitado, insuficiente y de una épica modesta. comportamiento y laberíntica división y organiza-
ción del trabajo, se ha transformado en el símbolo
Reconozco que el emergente grupo gobernante y de este momento intensamente educativo y de va-
su líder han mostrado una positiva curva inicial de riados aprendizajes que estamos viviendo.
aprendizaje: una modulación del lenguaje político,

La Convención Constitucional, con todas sus tensiones y


riesgos de desborde, sus sesgos de representación ideológica,
sus peculiaridades de comportamiento y laberíntica división
y organización del trabajo, se ha transformado en el
símbolo de este momento intensamente educativo y
de variados aprendizajes que estamos viviendo.

OTOÑO 2022 33
Oponer derecho a la educación y libertad de enseñanza;
educación estatal y privada; y libertad de los padres
para elegir y función primordial del Estado, desconoce
200 años de historia y el imperativo democrático
del pluralismo educacional.

Sobre todo las élites tradicionales han (¿o he- Algo similar ocurre con las derechas que están
mos?) debido aceptar, de golpe también, que la forzadas a desprenderse –intelectual, ideológica y,
sociedad chilena –en virtud de su propia moderni- sobre todo, emocionalmente– de algunas de sus
zación y expansión productiva, tecnológica y sim- creencias más preciadas: la excepcionalidad históri-
bólica– ha devenido en un sistema muchísimo más ca chilena, la efectividad del autoritarismo, la justi-
complejo, diverso, entremezclado, heterogéneo y de ficación de la dictadura, la superioridad de clase y la
masivas aspiraciones y reclamaciones de bienestar y superdefensa del statu quo a través de mecanismos
derechos de lo que hasta aquí habíamos concebido y constitucionales, legislativos y de orden fáctico.
aceptado. Esto significa que la situación de poder y
las relaciones entre clases y grupos están en una fase Por último, la sociedad en su conjunto necesita
de profundos reacomodos. aprender a convivir de forma pluralista dentro de
una nueva institucionalidad, al mismo tiempo que
En estas circunstancias aparecen imperativos se adapta a los cambios del entorno internacional:
de aprendizaje por doquier. El empresariado está nueva geopolítica mundial (China y los valores asiá-
obligado a salir de su comfort zone y a hacerse car- ticos); Cuarta Revolución Industrial y sus impactos
go –por primera vez en medio siglo– de una plu- ciber-físicos, y el cambio climático y sus desastrosos
ralidad de nuevas visiones (post neoliberales) que efectos sobre la población y los países, para nom-
surgen dentro del capitalismo global: de bienestar brar solo tres.
socialdemócrata, buen vivir decolonizador, Estado
misional, valores asiáticos, matrices productivas al- Suele decirse que mientras mayores son los ries-
ternativas, crecimiento cero, etc. En breve, todo un gos generados y percibidos por una civilización,
nuevo currículum con asignaturas teóricas y prácti- más necesario se vuelve aprender y cambiar. Esto
cas que enseñar y aprender. Las escuelas de negocio vale no sólo para la educación formal impartida en
harían bien en atender. Lo mismo los programas de los colegios, sino también para las demás modali-
administración pública y ciencias políticas. dades no escolarizadas de educación y aprendizaje.
Sobre todo, la educación imprevista o aleatoria que
Los partidos del espectro de las izquierdas –es- resulta no planificadamente de múltiples activida-
pectro que se vuelve cada día más amplio y diverso– des e intercambios de la vida cotidiana, a través de
tendrán que aprender a competir entre sí, mientras una gran variedad de canales, eventos y situaciones.
renueven sus concepciones ideológicas y desapren- Esta educación es la que permite, en definitiva, que
den conocimientos, hábitos y destrezas adquiridos una sociedad aprenda, colectivamente, a enfrentar
durante las revoluciones del siglo XX. Ese pasado los descomunales desafíos que nuestra época y nues-
(socialismos reales) se encuentra en ruinas y al fren- tro país tienen por delante.
te no hay un horizonte que sustituya al gris, asfi-
xiante y totalitario sueño comunista.

34 CRISÁLIDA
Referencias
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Senador Allende. Santiago, 29 de septiembre de 1970.
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ping-Andersen y el Estado de bienestar: “Si Escan-
dinavia pudo permitírselo en los 50-60, Chile puede
permitírselo hoy”. La Tercera Sábado.
Habermas, J. (1981). Historia y crítica de la opinión
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bibliotecadigital.mineduc.cl/bitstream/hand-
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Schwab, K. (2016). The fourth industrial revolution.
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Weber, M. (2012). La ética protestante y el espíritu del
capitalismo. México: Fondo de Cultura Económica.

OTOÑO 2022 35
Protección social, Universidad
y rol del Estado en la discusión
constitucional

Laura Mancilla Rubio


Licenciada en Derecho y Abogada de la UC. Magíster
Conjunto en Procedimientos Parlamentarios y Técnica
Legislativa de la Universidad de Londres. Diplomado en
Representación Política de la Universidad Autónoma de
México. Fue Coordinadora General de la FEUC (2011) y
se desempeña como oficial asociada del programa IDEA.

La discusión constitucional que se está desarro- Además, dicho bienestar material es un elemento
llando actualmente interpela a la comunidad uni- necesario para el buen funcionamiento de las insti-
versitaria a pensar y aportar respecto de las bases tuciones políticas, para una buena convivencia so-
sociales que acordemos como país. Hoy existe una cial y para que la democracia pueda desenvolverse
oportunidad, en manos de la Convención Consti- de mejor forma.
tucional, de iniciar la reconfiguración de ciertas re-
laciones sociales, y del rol que juega el Estado y sus En la consagración de los derechos sociales que
instituciones, en un contexto de desconfianza hacia van configurando esta protección social, hay distin-
la política y las instituciones políticas que canalizan tos aspectos a considerar que complejizan la discu-
nuestras preferencias. Esta desconfianza es bastante sión y pueden generar resultados no previstos. La
generalizada en las democracias latinoamericanas, y consagración de los derechos sociales en las cons-
es un problema que no se limita a la región. tituciones es un fenómeno relativamente reciente,
desde la mitad del siglo XX en adelante. Es impor-
Por lo anterior, sentar las bases de un acuerdo tante relevar también que la necesidad de constitu-
social en que se incorporen principios de protección cionalizar estos derechos y la protección social está
social, lo que incluye las áreas como salud, pensio- íntimamente relacionada a la incapacidad de las
nes y educación, y que son necesarios no solo por su instituciones políticas de proveer estos derechos por
propia entidad sino también por los efectos concre- sus vías regulares (legislación y administración del
tos que pueden tener en el bienestar de las personas. Estado). Esta limitación está vinculada con el dise-
En general, y como es de esperar, en la mayoría de ño de las reglas de límite y división del poder tanto
los movimientos sociales que canalizan sus expecta- a nivel central como regional, en otras palabras, al
tivas hacia la adopción de una nueva constitución, diseño del régimen político y la descentralización.
hay una expectativa de mejoramiento de las condi- Quienes estén por un diseño de protección social
ciones económicas y sociales de las personas. Y esto escueto debieran, por contraparte, contemplar una
es algo que no puede olvidarse durante el diseño expresión de mayorías que dé cuenta de las necesi-
institucional de una reforma o nueva constitución. dades y expectativas materiales de la ciudadanía y

36 CRISÁLIDA
permita implementar las disposiciones constitucio-
nales eficazmente. El gran problema de la consti-
tución actual es que establece una cierta visión y
límites al rol del Estado y al contenido que debemos
entender por protección social, y además, limita la
expresión de las mayorías que podrían haber toma-
do medidas de corrección o adaptación a la evolu-
ción de las necesidades y expectativas de la sociedad.

Respecto de la actual discusión constitucional, la


dificultad se encuentra en que dichos derechos se
traduzcan en cambios en la provisión y exigibilidad
de ciertas prestaciones concretas al consagrar dicha
protección en un texto constitucional determinado.
En este sentido, el riesgo es que las intenciones de
los convencionales constituyentes se queden en eso,
por lo que no solo importa la redacción de estas
provisiones, sino también los mecanismos de res-
ponsabilización para que se concreten (¿a quién se
designa como principal responsable de la provisión
de estos derechos?, ¿tiene esa institución las capa-
cidades para proveer o garantizar la provisión de
derechos?, ¿cómo se puede “reclamar” su incumpli-
miento?). Esta discusión puede parecer secundaria,
de detalles, pero da cuenta del rol que se le da al
Estado y a sus distintos poderes en esta provisión.

Así, por ejemplo, los tratados internacionales de


Derechos Humanos dan cuenta de ciertos princi-
pios que se deben aplicar a la provisión y diseño de
políticas públicas relativas a estos derechos: realiza-
ción progresiva, de no regresividad, y obligaciones o
contenido mínimo. Refiere a que los Estados deben
intentar, de acuerdo a sus recursos, mejorar progre-
sivamente la provisión de los derechos en cuestión.
La norma contenida en la Convención Americana
de Derechos Humanos, relativa a los derechos eco-
nómicos, sociales y culturales, es muy ilustrativa:

“Artículo 26. Desarrollo progresivo. Los Estados


Partes se comprometen a adoptar providencias,
tanto a nivel interno como mediante la coope-
ración internacional, especialmente económica
y técnica, para lograr progresivamente la plena
efectividad de los derechos que se derivan de las
normas económicas, sociales y sobre educación,
ciencia y cultura [...] en la medida de los recur-
sos disponibles, por vía legislativa u otros medios
apropiados.”

OTOÑO 2022 37
La determinación del contenido específico de es- Probablemente, lo más razonable sea pensar en
tos derechos y su implementación, entonces, sería un diseño que diferencie entre ámbitos de los dere-
de responsabilidad de dos instituciones políticas chos, y que algunos queden entregados a una pro-
electas popularmente: de la Presidencia de la Re- tección concreta judicial, y de trámite rápido, en la
pública (poder ejecutivo), a través de sus potestades que las sentencias de los tribunales puedan ser apli-
administrativas y legislativas, y por tanto, de im- cadas de forma sencilla por las partes. Para esto, el
plementación, y del Congreso Nacional, a través de principio de obligaciones mínimas del Estado, tam-
sus funciones legislativas y de control de los actos bién derivado del Pacto Internacional de Derechos
de gobierno. Este desarrollo o cumplimiento de los Económicos, Sociales y Culturales, puede ser un
derechos sería progresivo, en base a las condiciones buen principio rector y diferenciador de los tipos
económicas y de desarrollo del país, y debería evi- de obligaciones y de protección que tienen distintos
tar cualquier retroceso en los avances ya alcanzados aspectos o contenidos de un derecho. Estas obliga-
en la provisión de los derechos. Esto genera que la ciones mínimas se refieren a asegurar la satisfacción
rendición de cuentas de estas autoridades, relativa de ese mínimo esencial de cada derecho; sería es-
al cumplimiento de estos derechos, se realice a tra- perable que un cambio constitucional tuviera estos
vés de elecciones periódicas (presidenciales y parla- mínimos en consideración al diseñar un sistema de
mentarias). Este diseño genera críticas por cuanto protección social. Y de la misma forma, aspectos
no hay una forma directa de exigir ciertos derechos más complejos y sujetos a diferencias políticas en
(ciertas áreas de estos, al menos). Esta crítica puede cuanto al grado de involucramiento de las personas
conllevar a un diseño y rol de los poderes públicos y el Estado, pueden quedar a la discusión pública, la
diferente. Así, otra postura plantea que los derechos función legislativa y administrativa, y a la rendición
deberían tener exigibilidad judicial directa, es decir, de cuentas electoral.
que ante cualquier vulneración a estos derechos se
pueda recurrir a los Tribunales de Justicia para que La determinación de qué aspectos son de resor-
ordenen la prestación o la detención de la vulne- te judicial y cuáles administrativos o legislativos es
ración concreta. Esto implicaría que sean jueces y importante no solo para efectos de la claridad sobre
juezas quienes determinen el contenido y el alcance las responsabilidades respectivas, las expectativas
concreto de los derechos. ciudadanas y las posibilidades materiales de cum-
plimiento, sino también para delinear qué tipo de
Esto nos plantea la pregunta respecto de quién Estado se construye a partir de estas obligaciones y
está llamado a darle contenido a estas materias tan responsabilidades.
relevantes para la convivencia y el bienestar, y tam-
bién releva el caso de cómo se hace responsables a En este sentido, es interesante profundizar en el
estas autoridades por esa labor. ¿Es a través de elec- rol que se le da al Estado, y a sus poderes o insti-
ciones, o a través de una carrera funcionaria que no tuciones principales, para actuar. La discusión de
tiene relación con la expresión de la voluntad de los principios y caracterización del Estado es relevante,
y las electores? Que la exigibilidad se realice me- pero lo es más aún cuando se delimitan las respon-
diante vías judiciales, por ejemplo, implica replicar sabilidades y expectativas que tiene la población
desigualdades que se dan a nivel del derecho, en lo respecto de su acción. En primer término, la evalua-
relativo al acceso a la justicia. ¿Pueden todas las per- ción realista de que se puede garantizar como pro-
sonas embarcarse en un proceso judicial para exigir visión pública es importante; un efecto indeseado y
sus derechos? Además, ¿estamos otorgando la deci- que ha existido en constituciones de la región es el
sión a un poder que no es el encargado de la pre- establecimiento de derechos y garantías que en la
visión presupuestaria y de otros efectos que dicha práctica no se pueden implementar. La distinción
provisión puede significar? Por último, otro proble- de objetivos o principios y garantías mínimas en
ma con este diseño se refiere a los efectos particu- este sentido es fundamental.
lares que tienen las decisiones judiciales (producen
efectos para el caso concreto y solo para quienes son
parte en el proceso), lo que es problemático con la
aspiración de igualdad en la provisión de derechos.

38 CRISÁLIDA
Una figura que es innovadora a este respecto, y Este riesgo no solamente se podría producir por
que se encuentra consagrada en distintos países son una deficiente o confusa redacción, sino también
los “defensores del pueblo”. Se constituye como por los acuerdos establecidos a nivel legal, institu-
una institución a la que pueden acudir las personas cional y presupuestarios que se deriven de la nueva
para que represente sus intereses en la prestación o configuración constitucional. Es deseable que dicha
eventual vulneración de ciertos derechos, y de esta configuración no solo refleje elementos esenciales
forma se subsana, en cierta medida, las diferencias del derecho y anhelados por la ciudadanía, sino que
que podrían existir en cuanto al acceso a la justicia. permitan efectivamente su desarrollo mediante po-
Dependiendo de las facultades que se otorgue a esta líticas públicas impulsadas tanto por el poder ejecu-
figura, puede subsanar o replicar el efecto limitado tivo como por el legislativo, y que tenga la flexibili-
de la solución judicial: efectos particulares de estas dad y apertura para adaptarse a nuevos escenarios y
medidas, como se mencionó anteriormente. alternativas que puedan presentarse en las próximas
décadas.
La consagración de los derechos sociales es un
tema ampliamente discutido, y cabe esperar que el De esta forma, es importante que la configuración
énfasis dentro de la discusión constitucional esté de los derechos y de la protección social dé cuenta
puesto en cómo el texto constitucional puede per- de las obligaciones que asume el Estado y permita
mitir la mejora en la provisión de derechos. Es por la determinación legal de el o los entes responsa-
esto que es fundamental reconocer y acordar los ele- bles de su realización y cumplimiento; vale decir,
mentos esenciales del sistema de protección social, es fundamental lograr claridad respecto de cuál será
cuáles de éstos sería necesario constitucionalizar, y el rol del poder legislativo, ejecutivo y judicial en el
cómo hacerlo. Es importante tener presente los ries- respeto y provisión del derecho en cuestión.
gos de una consagración meramente programática.

Hoy existe una oportunidad, en manos de la Convención


Constitucional, de iniciar la reconfiguración de ciertas
relaciones sociales y del rol que juega el Estado y
sus instituciones, en un contexto de desconfianza
hacia la política y las instituciones políticas que
canalizan nuestras preferencias.

OTOÑO 2022 39
El rol de la investigación y la
ciencia en la nueva Constitución

Carolina Guzmán Valenzuela


Psicóloga y Magíster en Psicología UC. Doctora en Edu-
cación, Universidad de Barcelona. Es investigadora del
Núcleo Milenio sobre Experiencias de los Estudiantes
de la Educación Superior en Chile y es académica de la
Universidad de Tarapacá.

Carlos Palma Amestoy


Sociólogo, Universidad de Chile. Doctor en Sociología,
Universidad de Bristol. Magíster en Problemas Sociales
de la Universidad de Granada. Estudia temas relativos
a educación superior, desigualdades y teoría social.

— Proyecto FONDECYT 1200533

40 CRISÁLIDA
I. Introducción

Formular una nueva Constitución, en los térmi- Hoy más que nunca, dada las diversas crisis que
nos en los que se ha establecido (con representa- enfrenta la humanidad en general, y el país en par-
ción paritaria de género, de los pueblos originarios ticular (climática, ecológica, sanitaria, de represen-
y de comunidades y organizaciones sociales más allá tación, por nombrar solo algunas), la ciencia y la
de la política formal) representa una oportunidad generación de conocimiento ocupan un rol primor-
hasta ahora única para Chile. La llamada “hoja en dial. Dar con un modelo mediante el cual Chile
blanco” nos invita a pensar y repensar qué quere- pueda sustentar el bienestar de su población, com-
mos como país y los términos y principios que nos batir la desigualdad, fortalecer la cohesión social y
orientarán en las próximas décadas. Sin duda, la ta- proteger su patrimonio social, cultural y natural,
rea es grande en un país dividido que busca recons- también pasa por darle a la ciencia un lugar central.
truirse y reorientarse para dar respuesta a demandas
sociales e inequidades acuciantes. En este contexto, La nueva Constitución, sin ser la llave mágica
hay un tema que no debería ser soslayado: el rol de que solucionará todos nuestros males, es sin duda
la ciencia, la investigación y los conocimientos en el un espacio ideal para comenzar a repensar los tér-
Chile del futuro. minos de la conversación (Mignolo, 2021) sobre
ciencia y políticas científicas en Chile. En lo que si-
Es verdad que la ciencia muchas veces tiene re- gue, revisaremos algunos antecedentes recientes que
sultados que no son inmediatamente visibles para enmarcan la discusión sobre ciencia e investigación
la ciudadanía o que se presentan en un lengua- en el país. Luego, brevemente, veremos cómo, hasta
je poco sencillo y alejado de la vida cotidiana de el momento, han sido abordados estos temas en el
las personas. Como resultado, hablar de ciencia e marco de la Convención Constitucional, y, por úl-
implementar políticas científicas han quedado ge- timo, delinearemos algunos desafíos.
neralmente relegados a un segundo o tercer plano
en la discusión política del día a día. Y aunque en
innumerables ocasiones, actores en posiciones de
toma de decisión han señalado la importancia de
incrementar el gasto en investigación y desarrollo,
en la práctica la aguja poco se ha movido como para
marcar un cambio sustantivo.

Dar con un modelo mediante el cual Chile pueda


sustentar el bienestar de su población, combatir la
desigualdad, fortalecer la cohesión social, cultural
y natural, también pasa por darle a la ciencia
un lugar central.

OTOÑO 2022 41
II. Antecedentes: El debate sobre
ciencia en el campo político

En las últimas décadas ha habido instancias, El año 2015, el gobierno al mando convocó la
con más o menos peso dentro del campo político, Comisión Presidencial “Ciencias para el Desarro-
en donde el rol de la ciencia y la investigación ha llo de Chile”. Con un objetivo acotado y un plazo
sido ampliamente discutido. Así, por ejemplo, con perentorio, se citaron diversos actores del mundo
el fin de reorientar y organizar el llamado “sistema académico, público y privado para reflexionar so-
nacional de innovación”, el año 2005 se conforma bre el lugar de las ciencias en el país y proponer
por primera vez el Consejo Nacional de Innovación una nueva estructura institucional. Aunque esta no
para la Competitividad. Centrado sobre todo en fue la primera comisión con este objetivo –el año
objetivos económicos, tales como mejorar la com- 2013 había sido convocada una Comisión Aseso-
petitividad y potenciar el crecimiento del país, y al ra Presidencial con un propósito similar– sí marca
alero de la retórica de la llamada Economía del Co- un camino para el reordenamiento del marco insti-
nocimiento (Godin, 2006), el Consejo en diversos tucional que regula, fomenta y orienta la ciencia e
momentos ha dado lineamientos estratégicos, sobre investigación en Chile. En efecto, el año 2018 fue
todo orientados a vincular la producción científica creado el Ministerio de Ciencia, Tecnología, Cono-
nacional con la industria y el mundo privado. cimiento e Innovación, al mismo tiempo que se dis-
pone la reestructuración de la Comisión Nacional
En efecto, el Consejo –recientemente nombrado de Investigación Científica y Tecnológica (CONI-
Consejo Nacional de Ciencia, Tecnología, Conoci- CYT), anteriormente dependiente del Ministerio
miento e Innovación para el Desarrollo– ha impul- de Educación, en la Agencia Nacional de Investiga-
sado diversas estrategias a lo largo de su existencia ción y Desarrollo (ANID), dependiente del nuevo
que buscan dar luz respecto a un nuevo modelo de Ministerio de Ciencia. Es de esperar que esta nue-
desarrollo para el país. Estas directrices han tendi- va plataforma institucional dé lugar a una mayor
do a estar permeadas por una mirada economicista, coordinación dentro del sistema científico nacional,
aunque también es cierto que, en los últimos años, permita implementar políticas públicas pensadas no
bajo la influencia de iniciativas como la Agenda solo en el corto, sino también en el mediano y largo
2030 para el Desarrollo Sostenible impulsada por plazo, y se preocupe de dar el valor que corresponde
la ONU, han cobrado mayor relevancia discursos a todas las disciplinas del conocimiento de manera
que incorporan las ideas de sustentabilidad y equi- equitativa.
dad. En todas estas estrategias, el desarrollo del sis-
tema científico nacional –con particular énfasis en
las llamadas ciencias duras dado su potencial para
vincularse con el sector productivo, de innovación
e impacto– ocupa un lugar fundamental. Aspectos
culturales y los vaivenes y desacuerdos propios del
campo político, no obstante, han hecho de esta ins-
tancia asesora un espacio con pocas posibilidades
prácticas de concretar sus propuestas que, general-
mente, están pensadas para el largo más que para el
corto plazo, a contrapelo de los tiempos de la esfera
política.

42 CRISÁLIDA
III. Estado de la Discusión: Ciencia, IV. Algunos desafíos para la
conocimiento e investigación en Constitución y más allá de
la Convención Constitucional la Constitución

Una buena noticia fue la creación de la Comi- Mientras la nueva Constitución, esperamos, defi-
sión Sistemas de Conocimientos, Culturas, Cien- nirá ciertos principios rectores relativos a la ciencia
cia, Tecnología, Artes y Patrimonio en el marco y la investigación, hay también una serie de aspec-
del debate constitucional. De aquí ha surgido una tos prácticos y desafíos en los que debemos pensar
propuesta –aún por consagrar– de un amplio arti- una vez establecidos dichos principios.
culado que, en lo referido a conocimiento, ciencia
e investigación, eleva el tema del conocimiento, los
saberes y la ciencia a rango constitucional. La pro- a. Financiamiento
puesta, a grandes rasgos, busca resguardar el dere- Uno de los desafíos fundamentales seguirá sien-
cho al conocimiento y a sus potenciales beneficios, do el del financiamiento de la ciencia y la investi-
así como la protección contra sus usos indebidos y gación. Sabido es que el gasto en investigación y
nocivos. También resguarda el derecho a la comuni- desarrollo en el país está muy por debajo de lo que
cación científica y le brinda al Estado diversas tareas gastan los países del llamado norte global. En efec-
y roles para asegurar los aspectos anteriores. Entre to, el gasto en I+D como porcentaje del PIB se ha
los temas que destacan, se encuentran: la libertad de mantenido, en la última década, en torno al 0,35%,
investigación; la equidad territorial y descentraliza- mientras que el promedio de la OCDE se encuentra
ción; la equidad de género; la promoción del acceso en torno al 2,4%. Aspectos como la libertad de in-
al conocimiento; el reconocimiento, resguardo y vestigación, la descentralización y territorialidad de
promoción de los conocimientos y ciencias de los la ciencia y la equidad de género dentro del campo
pueblos originarios y saberes ancestrales; y el fo- científico, entre otros, sin duda se ven afectados de
mento del vínculo virtuoso entre ciencia y bien co- una u otra forma por las restricciones presupuesta-
mún (también buen vivir). Otro aspecto interesan- rias del sector. Mientras que el gobierno entrante ha
te, es que en diversas ocasiones se habla de “sistemas señalado su intención de alcanzar el 1% de gasto en
de conocimiento”, lo que constituye, entendemos, I+D como porcentaje del PIB, será interesante ver
un reconocimiento de la existencia simultánea de cómo esto se materializa en un tiempo razonable y
una pluralidad de saberes y epistemes, igualmente en concordancia con los principios emanados de la
válidas y legítimas, que deben ser reconocidas, pro- eventual nueva carta fundamental.
tegidas y promocionadas.

Al momento de escribir esta reflexión, el marco b. Decolonización de la Ciencia


de la discusión está más o menos claro, mientras
que los principios y propuestas específicas deben Muchos son los llamados a decolonizar la ciencia
aún ser discutidas, aprobadas y armonizadas en un y el currículum en las universidades en regiones y
texto final. Pues bien, quedará abierto cómo estos países del sur global. Tal y como plantea de Sousa
principios normativos orientadores se materia- Santos en su libro “Epistemologías del Sur” (2014),
lizarán en la ley, en las políticas públicas y en las los problemas del norte global son muy distintos
prácticas institucionales e individuales del día a día. a los del sur global. Muchos de los problemas que
Situados en este punto, a continuación, quisiéra- afectan a este último están relacionados con un pa-
mos llamar la atención sobre algunos desafíos que sado colonial que ha generado gran inequidad. Esta
se presentan al respecto. inequidad no es solo económica, sino que también
cultural, social y epistémica.

OTOÑO 2022 43
El abordaje de estas problemáticas, que son es- plataformas de datos, por no contar con un fi-
pecíficas a nuestros contextos particulares en Lati- nanciamiento propio, presentan ciertas dificultades
noamérica y en Chile, pasa por entablar un diálogo y vaivenes que dependen de tales limitaciones pre-
entre las ciencias tradicionales y aquellos conoci- supuestarias. Se hace necesario que estas iniciativas
mientos, costumbres y prácticas que provienen de que permiten un acceso público y gratuito al cono-
nuestros pueblos originarios. Ésta es una tarea que cimiento se mantengan y potencien.
algunas iniciativas de decolonización en universida-
des chilenas ya están abordando. Queda, sin embar- Mucho más debe hacerse, sin embargo, en lo que
go, aún mucho por hacer. respecta al acceso público a los avances científicos y
tecnológicos por parte de todas y todos. Las univer-
La decolonización de la ciencia también pasa por sidades son aliadas naturales a la hora de producir
respetar, valorar y visibilizar los conocimientos, las ciencia y se hace necesaria una coordinación y un
prácticas y la ciencia que se produce desde el sur diálogo más estrecho entre éstas y los organismos
global. Chile es un país que destaca en términos gubernamentales encargados de las políticas cien-
de indicadores científicos a pesar de las restriccio- tíficas de manera de hacer llegar a la población el
nes financieras. La ciencia en Chile puede fortale- retorno equitativo de la producción científica.
cerse aún más si logramos potenciar la masa crítica
en las universidades y su diálogo con las políticas Otro elemento importante a considerar, y que
científicas. Este fortalecimiento permitirá hacernos crea tensiones a la hora de pensar en ciencia como
cargo de una manera cuidadosa de nuestro patrimo- bien público, guarda relación con ciertos sesgos.
nio social, cultural y natural. Desde ahí, se logrará Por ejemplo, se privilegian ciertos tipos de ciencias/
producir una ciencia que esté conectada con y al disciplinas sobre otras, se favorecen ciertos grupos
servicio de las necesidades sentidas de las diversas científicos en posiciones de poder en desmedro de
comunidades que forman parte del país. otros y se excluyen aquellas disciplinas que no tie-
nen impacto económico. Todos éstos constituyen
un desafío que, a modo general, provoca una invi-
c. Ciencia, Disciplinas, Acceso y Bien Común sibilización de las artes, las humanidades y algunas
Existe una discusión animada y actual acerca de disciplinas de las ciencias sociales. El desarrollo de
la ciencia y de qué manera ésta puede ser consi- una sociedad reflexiva, democrática y dialogante
derada (o no) un bien público, es decir como una también pasa por el acceso y la difusión del conoci-
actividad o conocimiento que produce beneficios miento de las ciencias sociales, artes y humanidades,
colectivos y al cual todas y todos tienen acceso. Esta pues todas ellas producen un enriquecimiento cul-
sola definición, sin embargo, deja fuera a quienes tural desde la diversidad, la crítica y la creatividad.
no cuentan con los conocimientos o habilidades
para comprender la ciencia y el lenguaje científico o d. Género
a quienes no pueden hacer uso de los beneficios de
la ciencia por falta de recursos económicos. Cabría Un desafío fundamental es enfrentar las des-
preguntarse entonces ¿cómo hacer que la ciencia sea igualdades de género en ciencia e investigación. Los
accesible para todas y todos? datos son claros. Veamos algunos ejemplos. Según
cifras publicadas por el Ministerio de Ciencia, Tec-
Latinoamérica ya ha avanzado con respecto a la nología, Conocimiento e Innovación, el año 2020
generación de conocimiento científico y su visibi- solo el 43,4% de la matrícula en programas de doc-
lización como un bien público. Por ejemplo, las torado en universidades chilenas correspondía a
plataformas SciELO, Latindex y Redalyc han con- mujeres. Asimismo, entre las personas dedicadas a
tribuido a posicionar y visibilizar el conocimiento la investigación en el país durante el año 2019, las
científico en Latinoamérica, especialmente en las mujeres representaban solo el 34,8%. Finalmente,
ciencias sociales y humanidades. Sin embargo, estas al examinar la distribución de las/los 50 autoras/es

44 CRISÁLIDA
IV. Reflexiones Finales

con mayor producción científica en el país según La discusión constitucional ha abierto la puerta
área del conocimiento el año 2021, en cada una és- para que materias relacionadas con ciencia e inves-
tas el porcentaje de autores es considerablemente tigación adquieran un rango constitucional. Los
mayor que el de autoras. Así, por ejemplo, solo un desafíos en el área son importantes, y muchos de
28% de las/los 50 autoras/es con mayor producción ellos se relacionan con aspectos culturales histórica-
científica en Humanidades y Artes fueron mujeres, mente arraigados en la sociedad. Es de esperar que
cifra que alcanza un 16% en Ciencias Sociales, un los términos y principios que promueva la nueva
10% en Ingeniería y Tecnología, y apenas un 8% en Constitución dé lugar a una plataforma que permi-
Ciencias Naturales. Las brechas son significativas y ta enfrentar los desafíos antes planteados. En cierto
se han mantenido a través del tiempo. El tema ha modo, los principios hasta ahora esbozados durante
adquirido especial relevancia en los últimos años y el proceso de deliberación van en dicha dirección,
poco a poco, a través de políticas de alcance na- y serán luego las leyes, políticas públicas y prácticas
cional e institucional, se han comenzado a tomar institucionales las que materializarán dichos linea-
medidas para ir reduciendo dichas diferencias. Sin mientos. Esperemos que este proceso permita posi-
duda, muchos de los desafíos en esta materia están cionar a la ciencia y los conocimientos en un lugar
vinculados a aspectos culturales y normativos que central para hacer frente a los múltiples problemáti-
toman tiempo cambiar. Es por ello que el hecho cas y desafíos que enfrenta el país.
de que la nueva Constitución considere principios
que promuevan la equidad de género en ciencia e
investigación es un paso trascendental.

Las universidades son aliadas naturales a la hora de


producir ciencia y se hace necesaria una coordinación
y un diálogo más estrecho entre éstas y los organismos
gubernamentales encargados de las políticas científicas
de manera de hacer llegar a la población el retorno
equitativo de la producción científica.

Referencias
Godin, B. (2006). The Knowledge-Based Economy:
Conceptual Framework or Buzzword? The Journal of
Technology Transfer, 31(1), 17–30.
Mignolo, W. (2021). The Politics of Decolonial Investiga-
tions. Duke University Press.
Santos, B. de S. (2014). Epistemologies of the South:
Justice Against Epistemicide. Paradigm.

OTOÑO 2022 45
Lo público es lo de todos

Claudio Alvarado Rojas


Licenciado en Derecho, Abogado y Magíster en Dere-
cho UC. Profesor Adjunto de la Facultad de Derecho
UC. Fue Secretario General de la FEUC (2008) y hoy
se desempeña como Director Ejecutivo del Instituto de
Estudios de la Sociedad (IES), además de ser columnista
de La Segunda y reconocido como líder de opinión en
diferentes medios de comunicación a nivel nacional.

46 CRISÁLIDA
En el marco de la acumulación de crisis política, Naturalmente, este panorama se agudizó en me-
sanitaria y económica de los últimos años, una de dio del debate acerca del aborto, sobre todo con-
las noticias más auspiciosas fue la notable efectivi- siderando la decisión de la UC y de otros centros
dad de CoronaVac. Con este fármaco, desarrollado médicos en orden a continuar defendiendo la vida
por el laboratorio Sinovac, se inmunizó a la gran del niño o niña que está por nacer. “Tiene todo el
mayoría de los chilenos durante la primera etapa de derecho a estar contra el aborto, pero que no pida
la vacunación masiva contra el COVID-19, dismi- recursos públicos para la PUC”, sentenció el enton-
nuyendo de manera significativa la posibilidad de ces diputado Gabriel Boric, criticando al Rector Ig-
morir o enfermarse gravemente en caso de conta- nacio Sánchez. La actitud del Rector era “violenta e
gio. Y si nuestro país pudo acceder a esta vacuna, inaceptable para una institución que recibe dinero
que nos ha permitido retomar en muchos aspectos público”, protestaba en Twitter el exdiputado Gior-
la vida anterior a la pandemia, fue en gran medida gio Jackson. “En cuanto a la defensa de la objeción
gracias a la colaboración entre la Universidad Cató- de conciencia institucional, ella es un total contra-
lica y Sinovac, cuyos derechos de suministro fueron sentido”, escribió alguna vez el académico y hoy
transferidos al Estado chileno. convencional Agustín Squella.

El dato no es trivial. Durante la última década Ya revisaremos hasta qué punto se sostienen esas
diversas voces movidas por un laicismo arcaico, un opiniones. Por ahora, conviene advertir que es esa
franco anti-pluralismo o simplemente una actitud misma universidad de naturaleza católica la que,
irreflexiva han querido negar a priori el rol públi- participando de la red pública de salud sin renun-
co de entidades como la Universidad Católica. La ciar a su identidad, sino más bien inspirada por ella
lógica que subyace a esta mirada de las cosas puede –por su compromiso con los más vulnerables–, po-
resumirse del modo siguiente: si nuestra esta casa sibilitó avanzar exitosamente en la vacunación. No
de estudios pretende participar del espacio público, exageramos al afirmar que este proceso se explica
debe renunciar a su ideario, y si quiere mantenerse por la cooperación de varios actores, con y sin fi-
fiel a su identidad, que se recluya en cuatro paredes. nes de lucro, estatales y particulares, nacionales y
extranjeros. En las líneas que siguen intentaremos
“Vivimos en un Estado laico, y a veces se nos olvi- mostrar, hasta donde es posible hacerlo en un texto
da”, decía el precandidato presidencial Alberto Ma- de esta naturaleza, por qué ese sentido de coope-
yol, cuando la UC rechazó una performance de or- ración y pluralidad es precisamente el sentido de
gasmo colectivo en sus instalaciones –para lo cual, lo público: lo de todos, incluidos los creyentes y
ciertamente, no se requiere ser creyente–. Poco a las instituciones con ideario. Para ello, en primer
poco habría que ir cortando los fondos públicos a la lugar, distinguiremos entre Estado y sociedad civil.
UC, sugirió Naschla Aburman, entonces Presiden- Luego, en segundo término, nos detendremos en
ta de la FEUC por la Nueva Acción Universitaria la pluralidad del espacio público, y en la objeción
(NAU). “No me cabe en la cabeza que les demos institucional como una expresión de ese fenómeno.
plata como Estado a colegios confesionales y a una Por último, concluiremos este recorrido indicando
universidad donde el Rector lo elige el Vaticano”, algunas reflexiones finales, que recoge planteamien-
afirmó el comunicador radial Freddy Stock. Los tos desarrollados más extensamente en un libro de
ejemplos podrían multiplicarse. reciente publicación (Alvarado, 2021).

OTOÑO 2022 47
I. Estado y Sociedad Civil

Concebir al Estado como sinónimo de la “socie- tatal que los ignora? ¿Cómo resguardar el pluralis-
dad políticamente organizada”, tal como sugieren mo social sin proteger las debidas atribuciones y
ciertos manuales de educación cívica o derecho competencias de las agrupaciones humanas, de ese
político, es impreciso o derechamente equivocado, amplio tejido social que configuramos con nuestros
según el caso. Alguna clase de organización política vínculos y en el que nos desplegamos a diario? Tras
ha existido al menos desde la polis de la antigua estas interrogantes, lo que está en juego es el respeto
Grecia; pero el Estado como tal no existe antes del y promoción de aquellos vínculos sociales que sos-
siglo XVI. Más importante aún, el Estado se dis- tienen la vida de las personas.
tingue de aquello que hoy denominamos sociedad
civil. No es el todo social –identificarlos fue la raíz Si lo anterior es plausible, se advierte sin dema-
del horror totalitario–, sino más bien su cabeza, lla- siada dificultad que el Estado se encuentra llamado
mada a servir, proteger y coordinar la vida común. a fortalecer, apoyar y respetar a la sociedad civil or-
Se trata de un “haz de instituciones”, de aquella ganizada; jamás a reemplazarla. Las manifestaciones
parte del cuerpo político encargada de la manten- típicas de este principio –de subsidiariedad o cola-
ción de la ley y el orden público, al decir de Jacques boración social– son tan diversas como relevantes.
Maritain (1984). Hablamos de reconocer a los grupos o asociaciones
intermedias, lo que impide reducir la vida social a
Desde el momento en que el Estado se diferencia la mera pugna (artificial) entre individuo y Estado.
de la sociedad, y desde que el aparato burocrático Hablamos asimismo de articular un aparato estatal
reúne tal poder en sus manos –el monopolio de la al servicio de la persona y, por tanto, de una vi-
violencia física legítima, según dijera Max Weber gorosa protección de las libertades de enseñanza y
(2012)–, resulta indispensable preguntarse cómo asociación, en la medida en que las libertades más
orientar del mejor modo posible las relaciones entre básicas o elementales –de conciencia, de religión, de
ambas esferas. Después de todo, ¿cómo articular en expresión– se cultivan típicamente junto a otros. Y
forma adecuada las relaciones entre el Estado y la hablamos también, en consecuencia, de un espacio
sociedad civil sin reconocer los justos títulos de esta público plural, que no se agota en el aparato buro-
última? ¿Qué límites podría aceptar un aparato es- crático o estatal. Veamos por qué.

La importancia de un régimen plural a la hora de pensar


estas interrogantes, es decir, de un régimen que reconozca
la dimensión pública de las entidades particulares y de la
sociedad civil, se entiende con relativa facilidad si volvemos
a considerar el proceso de vacunación masiva.

48 CRISÁLIDA
II. Lo Público y la Objeción
Institucional

Decíamos recién que aquí está en juego el modo alternativa, ¿qué queda de la pluralidad del espacio
de comprender el espacio público. Para algunos, público y de la libertad de las personas para perse-
como veíamos al comenzar este artículo, dicho es- guir fines compartidos? Si acaso es cierto que lo pú-
pacio pareciera identificarse con el aparato estatal o blico es común, ¿por qué habríamos de exigir a las
con quienes se someten estrictamente a sus reglas. asociaciones intermedias renunciar a sus principios
Esta mirada, sin embargo, tiende a configurar una distintivos a la hora de proveer bienes públicos? ¿No
esfera pública homogénea, que desconoce la plura- le estaríamos entregando al Estado un poder excesi-
lidad inherente a la sociedad civil y sus justos títulos vo para intervenir sobre el tejido social? Y, si el Es-
para participar en la provisión de bienes públicos. tado no agota la esfera pública, ¿por qué habríamos
Este era el trasfondo de la disputa sobre la objeción de suponer que dichas asociaciones deben asumir
de conciencia institucional. Revisarla someramente las estrictas lógicas burocráticas al momento de par-
ayuda a comprender la relación entre los límites del ticipar en esta esfera? ¿Qué ganamos uniformando a
Estado, la vitalidad de la sociedad civil y el papel tal punto el espacio público?
que, en justicia, cabe reconocerle a ella en la vida
pública. La importancia de un régimen plural a la hora de
pensar estas interrogantes, es decir, de un régimen
El contexto de este debate es la existencia de una que reconozca la dimensión pública de las entida-
ley (de “tres causales”) que garantiza como presta- des particulares y de la sociedad civil, se entiende
ción médica exigible los casos de aborto que regula. con relativa facilidad si volvemos a considerar el
Una vez aprobada esa ley, hay un tipo de institucio- proceso de vacunación masiva. Esta operación ha
nes (las propiamente estatales) que deberán otorgar sido dirigida por el Estado, pero involucra a una
esa prestación cuando se les requiera. Hay otra clase red descentralizada e integrada, apoyada en la coo-
de instituciones (las estrictamente privadas) que no peración público-particular. Y si bien la vacunación
tienen ningún problema a estos efectos, en la medi- es universal en términos socioeconómicos, se basa
da en que siempre pueden brindar las prestaciones en la prioridad de los más vulnerables. Por algo se
que deseen. Por ejemplo, un centro oftalmológico comenzó con los adultos mayores, y por algo generó
privado sólo ofrece atenciones de esa índole y no polémica la postergación momentánea de los enfer-
hay polémica al respecto. La pregunta era qué ocu- mos crónicos. No se trata de la habitual focalización
rre con aquellas instituciones, como la Universidad posdictadura, pero tampoco de una homogeneidad
Católica, que participa de la red pública de salud y, sin preferencias ni prelaciones: hay un elenco plu-
sin embargo, su ideario pugna con la práctica del ral de criterios e instituciones en juego a los que se
aborto. Ahí emerge precisamente la relevancia de la reconoce su pertinencia. Además, como ya dijimos
objeción institucional. previamente, en la llegada de CoronaVac a Chile la
Universidad Católica cumplió un rol fundamental,
En efecto, y tal como intentamos explicar en su al punto que el acuerdo con los chinos comenzó con
minuto junto a Daniel Mansuy, no existe ninguna un acercamiento de la UC; la misma casa de estu-
conexión necesaria entre la postura que se suscriba dios que –no lo olvidemos– algunos querían erradi-
respecto del aborto o del derecho a la salud, por un car de la red pública simplemente por mantenerse
lado, y la visión que se adopte en el debate sobre fiel a su ideario.
la objeción de conciencia institucional, por otro
(Alvarado y Mansuy, 2018). Para comprender este
punto, basta con tomarse en serio ciertas preguntas:
¿pueden las entidades particulares participar del es-
pacio público sin renunciar a su identidad? ¿O, más
bien, cabría pensar que, para hacerlo, deben nece-
sariamente renunciar a sus idearios y comportarse
como un ente estatal más? Si adoptamos la segunda

OTOÑO 2022 49
III. Reflexiones Finales

Una adecuada comprensión del papel de la so- Según hemos intentado mostrar en las líneas
ciedad civil en el ámbito público tiende a enfatizar anteriores, tras el reconocimiento del rol públi-
su complemento con otros criterios o directrices. co de entidades como la UC subyace una mirada
Por ejemplo, la dignidad de la persona humana, la que favorece un Estado al servicio de las personas
solidaridad y el bien común. Estas directrices, sin y las agrupaciones de la sociedad civil. Y esto no
embargo, son inseparables del reconocimiento de es secundario, considerando lo que está en juego
dicho papel. Después de todo, ¿cómo respetar la en estos debates. Es lo que explicaba la historiadora
dignidad personal sin facilitar la participación acti- e investigadora del IES Josefina Araos, en una co-
va en aquellas comunidades en las que típicamente mentada entrevista publicada alrededor de un año
cultivamos el conocimiento, la amistad, la expe- atrás (Hopenhayn, 2021). Ahí ella fijaba un crite-
riencia artística o religiosa y, en general, los bienes rio decisivo para la intervención del aparato esta-
humanos más significativos? ¿Cómo fomentar la tal, proponiendo “...que el Estado siempre asuma
preocupación por el bien de nuestros semejantes si que hay una cultura anterior a él, comunidades con
el Estado pretende sustituir nuestros vínculos per- historias y vínculos que debe tener en cuenta al in-
sonales por la fría e impersonal lógica del aparato tervenir. Para no pasarles por encima, pero también
burocrático? ¿Cómo favorecer la plenitud de todos para que sus políticas funcionen”.
y cada uno sin reconocer que el Estado se encuentra
al servicio de la persona y sus asociaciones, con todo Es, justamente, lo que sugieren tanto el debate
lo que esto implica? sobre la objeción institucional como la experiencia
de la vacunación.

Referencias
Alvarado, C. (2021). Tensión constituyente: Estado,
gobierno y derechos para el Chile postransición.
Santiago: Instituto de Estudios de la Sociedad.
Alvarado, C., & Mansuy, D. (7 de diciembre de 2018).
Sociedad civil y objeción institucional. El Mercurio,
7 de diciembre de 2018.
Hopenhayn, D. (10 de abril de 2021). Josefina Araos,
historiadora: ‘Nuestra clase política todavía define
al pueblo por lo que le falta, no por lo que es’. La
Tercera. Disponible en https://www.latercera.com/
la-tercera-domingo/noticia/josefina-araos-historia-
dora-nuestra-clase-politica-todavia-define-al-pue-
blo-por-lo-que-le-falta-no-por-lo-que-es/4HDS2OMP-
7FHSZKYAUDP5UIZVSU/
Maritain, J. (1984). El hombre y el Estado, capítulo I.
Buenos Aires: Club de Lectores.
Weber, M. (2012). El político y el científico. Madrid:
Alianza Editorial.

50 CRISÁLIDA
ENTREVISTA

por CRISTÓBAL KARLE SAAVEDRA

Pedro Morandé:
Contra las fantasías

Pedro Morandé Court

Sociólogo y Doctor Scientiae et Honoris Causa UC. Doctor en


Sociología, Universidad de Erlangen-Nürenberg. Fue nombrado
Profesor Auxiliar del Instituto de Sociología UC en 1971 y Profesor
Titular en 1981. Ha sido Prorrector (1990-1995) y Decano de la
Facultad de Ciencias Sociales (1995-2013) en nuestra Universidad,
además de ser integrante de la Academia Pontificia de Ciencias
Sociales y miembro numerario de la Academia de Ciencias Socia-
les, Políticas y Morales del Instituto de Chile.

Es especialista en temas de religiosidad popular, cultura y socie-


dad. Es autor de varios libros y es reconocido como uno de los
intelectuales más importantes del Chile actual, habiendo sido
candidato al Premio Nacional de Ciencias Sociales en múltiples
oportunidades. Carlos Peña lo definió como “el intelectual católico
más relevante del siglo XX chileno”.

52 CRISÁLIDA
— En un texto publicado en el año 1990, usted En cambio, por otro lado, la sabiduría es propia
escribe lo siguiente: “Estamos en presencia de un de la transmisión que se da entre profesores y estu-
verdadero cambio de paradigma para la compren- diantes. Es decir, entre el diálogo intergeneracional
sión del saber humano, y que las universidades, dentro del área del conocimiento, y esa sabiduría
debido a su inercia institucional, no logran toda- es muy personalizada dependiendo, digamos, de los
vía ponerse al día frente a este acontecimiento y profesores que se tienen y de los alumnos que se tie-
menos aún transformarlo en una nueva propuesta nen. Entonces, alguien puede estar muy al tanto de
de autoeducación”. Más de treinta años después, una materia, pero no tener sabiduría en el sentido
¿le parece que la situación ha cambiado? de no incorporar el sentido último de esa materia, o
el significado de por qué se escoge esa materia y no
Yo creo que, como en todas las preguntas, hay otra, y con qué criterio pedagógico. Eso, evidente-
que distinguir planos. Porque, efectivamente, desde mente, supone tener sabiduría. Acumular sabiduría.
el año 1990 hasta la fecha ha habido un cambio
muy profundo en la educación y básicamente diría La universidad tiene como misión equilibrar, o
yo vinculado al tema de la Internet y del uso de mezclar, ambos aspectos. El de la ciencia, por una
tecnología audiovisual. Yo, por ejemplo, recibí el parte, pero también el de la sabiduría. Y a mí me
primer computador personal el año 1994. Y creo parece, y esa es mi crítica a la situación de la época,
que al año siguiente, 1995, salió Internet por pri- que se ha acentuado más la dimensión de la cien-
mera vez al alcance de las personas. Entonces, eso cia y de la funcionalidad del saber, más que de la
ha producido una revolución enorme; ustedes lo sabiduría del saber. Era un tema que, para mi gene-
han experimentado en los últimos dos años, duran- ración, fue muy importante, porque nosotros par-
te la pandemia, de cómo han podido mantener la ticipamos –y yo personalmente– de la revolución
continuidad académica a través de programas como del ‘67…
Zoom y otros programas audiovisuales, digamos,
transmitidos por vía electrónica. Ese cambio, evi-
dentemente, ha impactado enormemente en la edu- — De la Reforma Universitaria.
cación. Pero a lo que yo me refería era a algo más
profundo que, en el fondo, tiene que ver -como ese Claro, de la Reforma. Uno de los aspectos cen-
mismo libro dice en varias partes- con la relación trales fue la introducción de la ciencia, pero en el
entre la ciencia y la sapiencia. Entre la ciencia y la contexto de la experiencia de la sabiduría. Y desde
sabiduría. Y la Universidad no puede vivir exclusi- entonces se ha acrecentado, por razones comercia-
vamente de la ciencia, como ha sido demostrado en les, por razones de todo tipo, la vida científica uni-
muchos países desarrollados del mundo, entre otros versitaria, digamos así, el positivismo de la ciencia,
en Alemania donde yo me doctoré, existe ciencia de en desmedro de la sabiduría. Te pongo un dato.
primer nivel fuera de la universidad. Por ejemplo, Cuando yo entré a estudiar, el año 1966, en la Uni-
en Alemania existe una cadena de centros que se lla- versidad Católica habían 6 mil estudiantes. Cuando
ma Max Planck, en honor del fundador de la física fui Prorrector, ya habían 12 mil estudiantes de pre-
cuántica, que se dedica a la más variada cantidad de grado. El doble. Pero, diríamos hoy, ¡nada! Porque
temas, a hacer investigación del más alto nivel, de hoy en día hay entre 25 y 30 mil. Entonces, eso su-
primera línea, pero que no es universitario. No da pone que la dimensión de la ciencia, de la instruc-
títulos universitarios. ción, del formateo de cursos, de la industrialización
del saber adquiere la primacía sobre la sabiduría que
supone formar personas, formar académicos, esta-
blecer un diálogo intergeneracional de formación,
y de esa manera crecer no sólo en cantidad, sino en
profundidad.

OTOÑO 2022 53
— En el mismo texto, usted señala que la universi- — ¿Sigue siendo posible todavía el ideal del stu-
dad contemporánea está en una “situación sin sa- dium, el ideal de la universidad medieval, de los
lida, puesto que se le pide que haga lo que no está orígenes del saber universitario?
en condiciones de hacer y los recursos que se le
asignan van destinados a incrementar aún más esta Creo que sigue siendo posible porque esa es la
imposibilidad”, en referencia a la exigencia social esencia de la universidad. La universidad tiene que
de tener a la universidad como “conciencia crítica acomodarse para tener un espacio interior para
de la sociedad” en circunstancias de que su contex- hacerlo. Por ejemplo, a mí me llamó mucho la
to le obliga a distribuir sus esfuerzos con arreglo a experiencia que nos narró Claudio Véliz, un gran
criterios técnicos y de sostenibilidad económica, lo científico social que vivió muchos años en Austra-
cual va inexorablemente en desmedro del arte y las lia y en Estados Unidos. Claudio nos decía que él
humanidades. Treinta años después, ¿seguimos en pertenecía, en la Universidad de Boston, a lo que
la misma situación sin salida? allá se llamó el “University College”: un colegio al
interior de la universidad, formado especialmente
Yo creo que seguimos, más intensamente que en la tradición medieval del saber y del diálogo con
en los años 1990, en una situación de profesiona- los estudiantes, donde podía venir gente de las más
lización de la enseñanza. Caso paradigmático en variadas disciplinas -desde la física, las matemáticas,
el sistema universitario -no sólo chileno, también la filosofía o la ciencia- a estudiar con los profeso-
en otros países- es lo que se ha llamado la “acre- res. En términos de la sabiduría que esos profesores
ditación”. Las universidades necesitan acreditar sus habían acumulado a lo largo de sus carreras. To-
programas ante comisiones de pares, normalmente talmente ajeno a la línea profesionalizante. Y eso
formadas bajo el amparo del Estado y organismos se ha logrado con dificultad, yo diría creciente, en
públicos, que deciden lo que la universidad le co- el último tiempo. Entonces, existen esos espacios.
rresponde enseñar adecuadamente, y qué materias Pero son escasos y, en parte, la universidad tiene
debe cumplir para que sus títulos sean reconocidos que descubrirlos y recrearlos en su propio interior.
por otras universidades iguales. O sea, un verdadero
imperialismo de la ciencia, dictado originalmente Personalmente, fue lo que yo traté de hacer cuan-
por Estados Unidos, pero al que se fueron aco- do se refundó la carrera de Sociología: no refundar
modando después diversos países tanto de Europa Sociología solamente como una disciplina positiva,
como de América Latina. No hablo de Asia, porque de encuestas y de acumulación de datos sociológi-
lo desconozco; lo mismo de África. cos, sino como un espacio interdisciplinario que te-
nía historia, derecho, matemáticas, economía, cien-
Entonces, vamos hacia una homogeneización cia política, fuera de propiamente sociología, de tal
industrial del saber. Y las universidades que tienen manera de formar una persona integral en el área
vocación particular, es decir, vocación de dedicarse de las ciencias humanas. Ustedes juzgarán ahora,
a una materia porque la consideran más relevante pero parece ser que ese programa tiene objeciones
o dedicarse a formar personas exclusivamente, son de muchos lados, incluyendo a los propios estu-
cada vez menores. Si hoy día los profesores se de- diantes, que quieren salir rápido de la universidad
dicaran nada más que a enseñar, lo más probable con un título profesional y no con una formación
es que serían todos reprobados. Se requiere, por lo intelectual sólida. Sea por presión al empleo, o por
menos, tener publicaciones ISI para ser considerado presión del ambiente de las otras universidades, se
siquiera en el ranking. Incluso pasa que, curiosa- hace cada vez más difícil conseguirlo.
mente -y me afecta a mí directamente como gene-
ración-, ya ni siquiera se considera útil ni científico
escribir libros, sino que nada más que artículos es-
tandarizados que puedan ser publicados en revistas
estandarizadas, de modo que hay esta suerte de as-
fixiamiento de la educación superior en todas partes
del mundo, y también en Chile. Y yo creo que es
más intenso y peor que en los años 90.

54 CRISÁLIDA
— La pandemia aceleró las tendencias hacia la — Una universidad remota, una universidad en lí-
tecnificación, no solamente en la universidad. Van nea, a través del computador, ¿en qué medida deja
más de dos años en que la gente no puede interac- de ser una universidad?
tuar como lo hacía antes. ¿Cuál es su evaluación
respecto de esto? Puede dejar de serlo en el sentido de estandarizar
todas las preguntas y respuestas de tal manera que
Que efectivamente existe, concuerdo en el diag- no hayan preguntas. Pero la tecnología no es así, y
nóstico. Pero el problema es que la tecnificación no es una cosa muy curiosa. El año 1996 le dieron el
va a sustituir nunca a la universidad; como ya de- Premio Cervantes a Google. ¿Cómo a una máquina
cía, como ha sucedido en otros países, les conviene le dan el premio de la Lengua, de la Lengua de Cer-
tener la dimensión técnica ajena a la universidad. vantes que tanto nos llega al corazón? Pero tiene esa
Para qué gastar el tiempo en formar personas, si lo lógica. Google lo que hace es buscar, no responder,
pueden hacer a través de máquinas, de robots, etcé- sino que busca y tiene un conjunto bastante grande
tera. Pero el ser humano necesita también pensar. Y de respuestas posibles. Google obliga a pensar, no a
eso no lo puede hacer la técnica. Les pongo el caso eliminar la pregunta, sino a especificar la pregunta,
de la gran revolución de las matemáticas, digamos, a volver a interrogar. Lo pongo como ejemplo de
del siglo XX, que es la teoría de las probabilidades cómo la tecnología puede ayudar mucho en la línea
y por lo tanto la estadística vinculada a las probabi- de la tradición universitaria, aunque ciertamente
lidades. Entender la teoría de las probabilidades es puede también transformarse en un manual para
algo muy difícil. Distinto es poner en práctica una hacer recetas de cocina, de reparación de automó-
fórmula determinada. Y mientras no se entienda la viles, qué se yo.
teoría de las probabilidades, no se sabe cómo inter-
pretar los resultados, porque lo propio que enseña
la teoría de las probabilidades es que las cosas tienen — La tecnificación de la universidad, ¿es un pro-
muchas lecturas. Hay una alta contingencia de res- ducto de su inserción en el mercado o ambos fenó-
puesta dependiendo de las formas que uno tiene de menos responden a procesos diferentes?
medir y de preguntar, y por lo tanto, detrás de cada
afirmación dura de los datos probabilísticos está la Creo que se retroalimentan. Evidentemente, el
afirmación “blanda” de la interpretación. Hay una mercado lo que hace es presentar productos, pre-
hermenéutica de los textos y de los números. Y eso sentar objetos que se pueden comprar para satis-
no se elimina con nada. Por eso, yo personalmente facer una necesidad determinada. Desde ese punto
–y siempre lo repetí en clases– soy muy partidario de vista, la universidad se ha transformado en un
de la visión que Heidegger desarrolló sobre la téc- mercado. Y también en un mercado de empleo: em-
nica, en su texto “La pregunta por la técnica” que presas van a la universidad a buscar a los propios
termina con esa frase maravillosa que yo tenía siem- egresados de la universidad para ofrecerles empleo,
pre como lema de mis cursos. “Preguntar es la de- y carrera dentro de sus empresas. Hay un mercado
voción del pensar”. Alguien que no tiene preguntas, bastante tecnificado y sofisticado que tiene que ver
no puede pensar. Y de lo que se trata, al lado de la con la universidad, pero al mercado no le pasa algo
tecnología, es de poder hacer preguntas, incluso la distinto a la universidad en el sentido que hablaba
misma tecnología. Porque, si no, no se entiende ni recién, de que el mercado -y las personas que utili-
siquiera lo que es la tecnología, ni menos se entien- zan el mercado- necesita interpretar. No cualquier
de el fundamento de la teoría de las probabilidades. producto es lo que aparece. No cualquier producto
satisface lo que se busca. Muchas veces no se dan
No está obsoleta en lo absoluto esta frase de Hei- cuenta de que lo que producen los medios audio-
degger, que resume cómo la técnica necesita deses- visuales, más que productos, son expectativas. Y la
peradamente de la inteligencia. Él habla de la física, universidad es muy sensible a las expectativas. De-
pero uno podría hablar en general de la tendencia pende de cuáles son las expectativas que se instalan
hermenéutica, de interrogarse acerca del significado sobre determinadas disciplinas, o sobre determina-
de la técnica, y de lo que uno hace para implemen- dos problemas, para que se genere conocimiento
tarla y solucionar –digamos– problemas técnicos. adecuado y útil a esas expectativas.

OTOÑO 2022 55
Pongo un caso reciente. Respecto al COVID-19, Entonces, la sociología comprometida en esa di-
incluso nuestra Universidad se asoció con una em- mensión, con un fundamento ideológico duro, se
presa china (Sinovac) para el estudio de las vacunas, acabó. Y lo que queda, sí, es una politización, pero
para ver si podían producirlas conjuntamente acá. con una ideología blanda. Una ideología que no es
O sea, una vacuna –o una enfermedad– genera una suficientemente materialista, que no es suficiente-
expectativa tal sobre la universidad que no es sólo mente nihilista, ni es suficientemente anarquista,
una expectativa técnica. O no sólo se puede respon- sino que es un poco de cada cosa. Aparecen temas
der técnicamente, adaptando cosas que se han pro- que no son del núcleo, de la base, sino de la superes-
ducido en otra parte, sino que obliga a hacer inves- tructura, orientando las conductas de las personas.
tigaciones propias. A investigar, que es una materia Creo que la universidad ha seguido esa tendencia de
esencial para el saber universitario. una politización laxa, abierta y muy plural. Abierta
a muchas hipótesis, y a muchos temas nuevos que
Entonces, el mercado y la tecnificación van de la van surgiendo, como surgió el tema ecologista o el
mano, pero también van de la mano en su límite. tema feminista, cruzando también las distintas ma-
No sólo en su realidad, sino en su límite, porque de- terias de la universidad. Pero en ningún caso po-
penden de la expectativa de terceros, y no sólo de lo niendo el cimiento de una ideología dura sobre la
que puede la técnica o el instrumento en sí mismo. que se puede construir. Y ese es, entonces, lo que
estamos viendo ahora: politización, pero liviana.

— Usted habla de la sociología comprometida.


¿Cómo ha visto durante los últimos años el desa- — En ese sentido, ¿usted considera que la univer-
rrollo de las ciencias sociales en general? ¿Hay una sidad tiene la capacidad de integrar estas distintas
tendencia a la repolitización de los estudios acadé- tendencias de politización, mucho más de lo que la
micos o estamos avanzando en la dirección contra- tuvo respecto del marxismo?
ria, de la positivización y tecnificación absoluta?
Sí y no, porque con el marxismo tenía la venta-
Es difícil contestar esa pregunta, porque habría ja de estar discutiendo con una postura sólida. En
que analizar las distintas áreas. No es homogéneo cambio, ahora no se sabe bien con quién se discute:
lo que ocurre. Evidentemente, la época de la socio- si se discute con imágenes, con mitos... o a veces
logía comprometida que me tocó vivir a mí en los también con realidades. Pero el ámbito de la fanta-
años ‘60, se acabó. Porque se acabaron las grandes sía ha marcado muy hondamente la visión de la rea-
ideologías, especialmente el marxismo. Yo mismo lidad que se tiene hoy en día. Y ahí es difícil hablar
lo puedo decir: durante mucho tiempo me dedi- para cualquier universidad, porque el supuesto de
qué a estudiar exhaustivamente el marxismo, pen- cualquier ciencia para hablar es el realismo, cual-
sando que la sociología podía tener respuestas por quiera sea la forma en la cual se defina el realismo:
ese lado. Pero los hechos políticos, y especialmente si es genético, materialista, pero algún realismo que
el término de la Guerra Fría y la caída del Muro, sea verificable. Con datos que sean verificables.
hicieron que las ideologías –y particularmente el
marxismo– cayeran estrepitosamente, porque no Hoy se tiende a suprimir o sustituir muy rápida-
tenían en cuenta el componente intelectual necesa- mente el realismo por la fantasía, y entonces sacar
rio en la organización social, sino que tenían la idea una postura nueva, aunque sea fantasiosa, pudiese
de explicar la sociedad desde el punto de vista eco- ser comunicativamente más rentable para quienes la
nómico, del desarrollo de las fuerzas productivas y sostienen que atenerse a la realidad. Y por eso, diga-
las relaciones sociales de producción. Descuidaron mos, la ciencia y la conciencia tienen que habérselas
todo aquello que llamaron “superestructura”, entre hoy en día no solamente con realidades, sino con
las cuales está toda la comunicación, y particular- grandes fantasías.
mente ahora la comunicación por vía electrónica.

OTOÑO 2022 57
“Hoy se tiende a suprimir o sustituir muy rápidamente el
realismo por la fantasía, y entonces sacar una postura nueva,
aunque sea fantasiosa, pudiese ser comunicativamente más
rentable para quienes la sostienen que atenerse a la realidad”

— ¿Cuáles son algunas de esas fantasías? importancia muy grande en Alemania. En Alemania
se decía “zurück zur Natur, aber mit dem Auto” (“De
Desde la aplicación de imágenes deportivas a la vuelta a la naturaleza, pero en automóvil”), que re-
realidad -se habla de “perder” o “ganar”, como si la fleja la tendencia a tomar un hecho duro como la
realidad fuese un deporte-, o la fantasía feminista, naturaleza y adaptarlo a la situación.
en el sentido de reivindicar una sociedad de puras
mujeres sin varones, o con muy poca incidencia de Pero yo diría que el grueso ha sido el mercado,
varones, cosa que desmienten las cifras demográ- que ha popularizado también -el mercado literario,
ficas. Y si hay algo que es duro en las sociedades, digamos- estas imágenes de la sociedad. En los años
desde el punto de vista de los datos, son las cifras 80, José Joaquín Brunner generó una gran polémica
demográficas, porque además tardan siglos en cam- al decir que la novela había derrotado a la sociología
biar. O el ejemplo de “ser los mejores de América latinoamericana, porque la novela hablaba más de
Latina”, los “más aventajados”, en fin: más imágenes sociología que la propia sociología. Y de filosofía.
narcisistas que realistas. Dicho de esa manera generó toda clase de reaccio-
nes negativas, pero estaba diciendo una verdad del
tamaño de una catedral. Pienso que García Már-
— A propósito de esta ideología “blanda” que us- quez nos ha dado una visión de la sociedad latinoa-
ted identifica, y de su trabajo sobre los paradigmas mericana mucho más auténtica que la que la noción
modernizantes de la sociología latinoamericana de las escuelas tecnológicas nos han dado. En ese
(desarrollista, marxista, neoliberal), ¿podría ha- sentido, no es una introducción del tipo CEPAL o
blarse de un nuevo paradigma introducido a la so- del tipo neomarxista, que estaban muy ligadas a go-
ciología, tal como lo fue la CEPAL o el marxismo? biernos concretos. La CEPAL la inventó las Nacio-
nes Unidas y Estados Unidos para tener un área de
Sí, yo creo que sí. Comenzó dentro del marxismo economistas y cientistas sociales en todos los países
a través del estudio de Gramsci, que se fijó mucho de América con visiones relativamente homogéneas
más en la superestructura. Lo mismo en Alemania: respecto a qué era la democracia, qué era la igualdad
Alfred Sohn-Rethel, a quien me tocó estudiar con social. En el caso del marxismo, bueno, muy vin-
su obra, en fin. Y en Estados Unidos, muy fuer- culado a Cuba y al Che Guevara en su intento por
temente. Yo diría -usando un nombre más irónico expandirse hacia Bolivia, primero, y luego a toda
que despectivo- es la boutique francesa. París es el la intelectualidad marxista, encabezada por los in-
centro internacional de la boutique, y de allí surgie- gleses y los norteamericanos. La influencia viene de
ron gran parte de estas tendencias más light. Pero afuera, sin duda. Pero no con la consistencia de una
uno lo encuentra, como digo, en todas partes: en escuela vinculada a gobiernos, sino más bien a la
Estados Unidos, en Alemania, en Italia, y natural- opinión pública, a Internet, a la vida social.
mente entre nosotros también. De hecho, los gran-
des movimientos -como el ecologista- tuvieron una

58 CRISÁLIDA
— Hay otro concepto importante en sus textos: que realizan. Yo, por ejemplo, cuando fui a estudiar
el sacrificio como categoría fundamental para en- mi doctorado en Alemania, el pasaje era tan caro
tender la sociedad y la identidad latinoamericana. que uno no podía hacer otro viaje adicional. No se
¿Dónde usted en el Chile actual observa expresio- podía ni llamar por teléfono por lo caro que era, si
nes de ese ethos, y de esa identidad formada en tor- es que se conseguía llamar a la casa. Hoy en día, con
no al sacrificio? los celulares, cualquiera habla desde donde quiere
sin ningún problema. El mercado ha disminuido
Tanto como ethos, no lo sé. La población sacri- bastante la idea misma de sacrificio. De hecho, toda
ficada es bastante amplia en América Latina, tiene la propaganda comercial de las grandes tiendas, de
que ver con las desigualdades sociales. En primer los viajes al Caribe, es eliminar el sacrificio.
lugar, diría yo, la tercera edad, y con todo el aban-
dono de los adultos mayores. En segundo lugar, los Ahora, el sacrificio como yo lo estudié, tenía un
desempleados. Ahí yo diría que lleva la delantera sentido mucho más profundo. Tenía que ver con
el mundo campesino. El mundo industrial surgió cómo la generación de una comunidad siempre sig-
como alternativa al mundo campesino, y práctica- nificaba que algunos tenían que asumir la responsa-
mente lo hizo desaparecer o lo obligó a industria- bilidad de esa comunidad. Ellos, entonces, eran los
lizarse. Y naturalmente, la mujer ha sido en la his- que asumían las cuotas de sacrificio que establecían
toria de América Latina, por 500 años- una fuente los gobernantes. Naturalmente, esto se hacía por
grande de sacrificio, tanto por ser la dueña de casa, el trabajo o el tributo. Y eso más o menos se ha
que lleva los hijos adelante, no sólo les da de comer mantenido, aunque también crecientemente -en las
sino que los educa y les permite desarrollarse. Ade- sociedades latinoamericanas donde se trabaja “en
más, con muy poca ayuda. negro”, informal- no están sometidas al tributo. Les
pongo el caso de los chilenos más pobres. Todos es-
Esos son los grupos objetivos. Ahora, ¿quiénes lo tamos obligados a pagar 19% de lo que compramos
reivindican desde el punto de vista del ethos? Yo di- en IVA. Y según le escuché a Ricardo Lagos, 46%
ría que sigue siendo lo mismo de siempre: el traba- del erario nacional se financiaba por el IVA, no por
jo, o el trabajador, que no lo remuneran de acuerdo Codelco ni las grandes contribuciones del salario
con su nivel de contribución o dedicación a la vida regular. Ese es un sacrificio sobre toda la población.
social. Y especialmente ahora, vinculado o sometido Sólo es comparable al caso de la inflación, especial-
-y eso es tal vez la novedad respecto a las generacio- mente cuando es muy alta. Allí se expropia a la po-
nes antiguas- al consumo de los grandes mercados. blación, se la obliga a hacer una cuota de sacrificio
En mi época no solamente no existía la televisión, ante la cual no pueden elegir nada. Habría que ver
sino tampoco existían productos de supermercado cómo el sacrificio ha ido variando en las distintas
que uno pudiese elegir. Uno iba a comprar al al- áreas y regiones, pero se mantiene esencialmente en
macén de la esquina y le daban las cosas a granel, el caso de la mujer, de la tercera edad, de los desem-
envueltas en un papel. No había ni peso, ni medi- pleados, aunque se la trata de aminorar a través del
das, ni menos identificación de los productos. De consumo. A través del mercado financiero.
ahí vienen las “docenas de a diez”: te echaban en la
mano una docena de duraznos, pero guardaban uno
y al contarlos posteriormente, eran diez. Todas esas
triquiñuelas existían por la falta de estandarización.
Hoy en día, en cambio, el supermercado hace que
la idea misma de sacrificio disminuya, y más bien
se hable de un aplazamiento del consumo, más que
una eliminación del consumo. Incluso, desde que
ingresaron los plásticos, las tarjetas de crédito, ya se
ha popularizado -o democratizado- la vida econó-
mica, y la noción de sacrificio se pierde. Una cosa
que me llama la atención al ver el comportamiento
de las generaciones jóvenes es la cantidad de viajes

OTOÑO 2022 59
— A propósito del problema de la desigualdad, — ¿Qué rol juega la Convención Constitucional
tan propio de América Latina y de Chile, ¿cómo en este momento histórico?
se conecta el estallido social, y el imaginario que
surge en torno al estallido social, con la idea de Difícil saber qué rol juega, o cuál va a jugar de-
sacrificio? pendiendo del producto del plebiscito de salida. Se
ve que hay una gran diversidad de opiniones. Y en
Yo no lo escuché nunca. No se trata de vincular ese sentido, no es muy distinto a lo que hablábamos
el estallido al sacrificio, sino que más bien el estalli- antes respecto de la ideología. Ya no hay una, dos
do trae un fenómeno muy propio de la sociedad de o tres ideologías duras: neoliberalismo, marxismo,
consumo: el abuso. El abuso de precios, el abuso en pensamiento cepaliano... sino que hay una gran
la falta de calidad de los productos, de la variedad. variedad de temas y un gran imaginario colectivo.
Eso uno lo vio en el caso de los pollos, de las farma- Por ejemplo, creer que a través de la Constitución
cias, de una manera muy sensible justamente para se puede garantizar la gratuidad en la salud o en
la tercera edad. Había una noción de abuso, pero la educación, o la ausencia total de contaminación
el abuso no es sacrificio. Puede serlo objetivamen- en el ambiente. Que todo eso lo pueda garantizar
te, pero no tiene la ideología del sacrificio como la una Constitución, todo el mundo sabe que no es
propia contribución que se pide a cada quien para verdad. Lo que hay, más bien, es la orquestación
el desarrollo de una comunidad, sino que es la dis- de historias y fantasías vinculadas a la realidad de
tribución unilateral de la carga en un determinado la sociedad, que se la tiene como refundación de la
grupo bajo determinadas condiciones. Eso sí que lo sociedad. Pero no van a refundar nada, porque la
noté en el caso del estallido social. Si hay una pala- fantasía no puede refundar la sociedad.
bra que a mí me quedó en todo, era abuso. Abuso
en el sentido de que no se recibía ningún bien a Yo pienso que, en una gran proporción, lo que
cambio de la contribución que hacían las personas. la Convención discute son temas irrelevantes para
la realidad. Como sociólogos, sabemos ya que la
En el caso del Metro, bueno, eso tiene que ver realidad no se gobierna sólo por las leyes ni prin-
también con la masificación y otros problemas rela- cipalmente por las leyes, sino que son muchos los
cionados, como la delincuencia. Faltaba seguridad, sistemas que concurren para fundar la realidad. En-
y las personas podían abusar legalmente a través de tre ellos obviamente está el sistema político, pero
la venta de sus productos. está el sistema económico, el sistema educacional,
el sistema cultural, de la salud, de la ciencia... La
sociedad, como dice Luhmann, es policéntrica. Y
al ser policéntrica, es muy difícil que una Constitu-
ción vaya a resolver problemas fundamentales.

“Lo que hay [en la Convención Constitucional], más bien,


es la orquestación de historias y fantasías vinculadas a la
realidad de la sociedad, que se la tiene como refundación
de la sociedad, pero no van a refundar nada, porque la
fantasía no puede refundar la sociedad”

60 CRISÁLIDA
Los abogados tienden a sobrevalorar el peso de — Respecto del texto constitucional, de acuerdo
las leyes. Todos piden que hayan más leyes, incre- con algunos intelectuales, parece ser que no es tan
mentar las leyes y colocar más sanciones, mientras importante el contenido del texto como sí lo es la
las cárceles están abarrotadas y las policías no pue- eficacia simbólica que pueda llegar a tener. Dicho
den controlar. Pasa a ser un edificio de naipes que de otra manera, su capacidad de producir legitimi-
cualquier soplido lo puede botar al suelo. dad. ¿Comparte usted esta apreciación? ¿Cómo la
proyecta?
Creo que la discusión sobre la Constitución tiene
mucho de este irrealismo, pero naturalmente cana- Yo no la comparto, porque la legitimidad tiene
liza la opinión y el descontento de varios grupos, y que ver, evidentemente, con los resultados. Si en
ciertamente también de generaciones. Se ve, tanto virtud de la norma, por ejemplo, se limita la educa-
en la conformación de la Convención como en el ción o el gasto público, o alguna cuestión esencial
electorado que votó, una presencia altísima de jóve- para el desarrollo y la satisfacción de las necesidades
nes. Ahora, ¿qué va a significar el voto de los jóve- de las personas, eso pierde legitimidad inmediata-
nes desde el punto de vista de su compromiso polí- mente. Algunos teóricos piensan en la legitimidad
tico? Nadie lo sabe. Hay muchos jóvenes que fueron de origen. Pero nosotros sabemos que eso no es así.
a votar motivados por razones circunstanciales, que Dejemos de lado la Constitución de 1980, porque
no tenían ninguna tradición de ir a votar ni les inte- fue promulgada por Pinochet. Pero la de 2005 fue
resaba, pero de repente les bajó esta posibilidad. Es firmada por Ricardo Lagos, señalando que se habían
una Convención que tiene efectos catárticos muy corregido las grandes desigualdades e injusticias de
fuertes, como diría un psicólogo. ¿Qué va a suceder la Constitución anterior. Sin embargo, nadie le dio
con ella a futuro? Nadie lo sabe, sea por el tenor pelota. Seguía siendo la Constitución de 1980, aun-
de lo que se apruebe o por cuán aplicable sea el que ya era otra y estaba firmada por otra persona.
tenor de lo que se apruebe. Porque, claro, uno pue-
de considerar muy razonable que todos tengamos el Estoy seguro de que aquí va a pasar lo mismo.
derecho a estar libres de contaminación, pero de ahí Si le toca firmarla a Boric, tendrá que firmar una
a que eso sea verdad -comenzando por las grandes Constitución muy parecida a las anteriores, porque
potencias económicas- hay un salto gigantesco. Un las constituciones no se inventan de la nada. Unas
salto mortal. Una cosa es la realidad, y otra es la se van apoyando en las otras, como la del 2005 en
fantasía. la de 1980, y la de 1980 en la de 1925, y así su-
cesivamente. Hay principios que, más o menos, se
Ahora, lo que más me preocupa a mí en los últi- mantienen. Se van reformulando o adecuando a las
mos veinte años desde el punto de vista de las con- circunstancias, pero se mantienen. Creo que tanto o
ductas -y allí los jóvenes son víctimas principales- más importante que el tema del origen –que puede
es el tema de la droga. Ya conocemos ejemplos de ser, evidentemente, una cuestión de mitología, de
países como Colombia y México, en que la droga se eso no cabe duda–, lo que a la gente le pesa es el
ha adueñado del país completo y ya no hay sistema resultado. En qué medida la Constitución ayuda o
alguno que pueda regularlo porque, desde luego, no a la convivencia entre los chilenos. Ahora estaba
[los narcotraficantes] tienen más armamento que viendo, por ejemplo, todo el tema de la salud. La
los propios Ejércitos. idea detrás es que la salud sea garantizada a todos
por el Estado, cosa que se mantiene en algunos paí-
ses, pero nosotros sabemos que el Estado en Chile
no da abasto. Es cosa de ver la propia pandemia. Por
lo tanto, pensar que todos podemos ser atendidos
por FONASA en un régimen único garantizado por
el Estado, es una quimera. Sabemos que eso no va
a ser así. Al final, lo que va a ocurrir es que los más
vulnerables, que necesitan atención con urgencia,
van a tener que pagarla de su bolsillo. Y si no pue-
den, tienen que morirse.

OTOÑO 2022 61
— Ha sido materia de comentario, también, el en primer lugar, Isla de Pascua estaba bastante le-
auge de los discursos indigenistas, que reivindican jos de Chile, es más bien polinésico. Que lo haya
un cierto latinoamericanismo pero que a la vez conquistado Chile no significa que la población de
parecen tener una orientación política más bien allá sea chilena ni haya tenido alguna relación con
libertaria, alejada de la concepción tradicional de Chile. Aún así, también son pocos. ¿Cómo vas a
América Latina. ¿Cómo evalúa usted este discur- equilibrar los distintos pueblos indígenas en un solo
so, que de pronto parece haberse tomado espacios indigenismo?
como la Convención?
Por ejemplo, se pedía que la Corte Suprema
En el caso del indigenismo, aparece claramente dictara resoluciones teniendo en cuenta el género.
una mitología que está alimentada por varios países, ¿Cómo va a ser eso? ¿Se va a tener en cuenta en
entre ellos de Norteamérica. Canadá, Estados Uni- el caso de los mapuche, o en el caso de la Isla de
dos y otros países de alta población indígena, como Pascua? La otra vez salió un fallo justamente sobre
México o Bolivia, buscan vender su modelo. En- la Isla de Pascua, en el sentido de que allá se estima
tonces, parece ser que hay una solución indigenista, que la violación no es un delito; y la Corte tuvo
o pro-indigenista, en distintas partes de América que decir que, al menos para el derecho chileno,
Latina. Yo tengo mis serias dudas de que en estos la violación es un delito. Que lo cometan en la Isla
países se haya logrado resolver el problema. En el de Pascua no quita el delito. Ahí tienes un caso.
caso de México, es cosa de ver lo que sucedió hace ¿Qué significa que la Corte decida con criterio indi-
años atrás en San Cristóbal de las Casas -un refugio genista, o pro-género, en territorios de los pueblos
indígena más o menos consolidado en que el Estado originarios? Detrás del indigenismo hay, evidente-
no fue capaz de resolver los problemas que allí se mente, un movimiento internacional que tiene sus
planteaban- para darse cuenta de lo difícil que es. raíces no en Chile, sino que afuera, y que tiene que
Y en el caso chileno, claro, se habla de los “pueblos ver con la solución que dieron otros pueblos donde
originarios” y de las etnias, así en plural. Pero no- -y esa sí es una tesis fuerte que yo he desarrollado
sotros sabemos que, a diferencia de los mapuches y sobre América Latina- no hubo mestizaje, ni se in-
los aimaras, todo el resto son pueblos ya extintos o tentó el mestizaje con los pueblos originarios, sino
en extinción. O sea, los kaweshkar... son pueblos que hubo imposición. Se los llevó a reducciones.
que ya prácticamente no existen como tales. Incluso En cambio, en toda la América hispana hubo mes-
en el caso de los mapuche, ya se ha producido un tizaje permanente, deliberado. Hay realidades po-
mestizaje impresionante. Hay un estudio muy inte- blacionales que son indesmentibles: hoy en día no
resante de la Universidad Católica sobre la compo- solamente hay mestizaje primitivo con los pueblos
sición étnica de La Florida, comparada con la gente originarios, sino que hay mestizaje entre los pueblos
de las islas del lago Budi -la zona más indígena, lo actuales. Nosotros nos hemos llenado de peruanos,
más puro-. Y resulta que más del 80% de la pobla- de venezolanos, de argentinos en el sur y, natural-
ción de La Florida son indígenas, son mapuches, mente, en todos lados se están produciendo hijos
aunque ninguno se va a definir como tal. entrecruzados de unos y otros.

El indigenismo tiene mucho que ver con la tra- Creo que en el mundo actual la tendencia no es
yectoria del mestizaje. Si se quiere hacer una discu- operar con cuotas, como piensan algunos políti-
sión sobre indigenismo de espaldas al mestizaje, o cos, sino que es lo contrario: superar la distinción
sin considerar el mestizaje, no tiene ningún destino. de cuotas, y superar las barreras que se mantienen
Y si se lo ve desde el punto de vista político, menos. como apartheid para segregar a la población. Pienso
A diferencia de lo que ocurrió en Perú, o en Méxi- que lo realista sería considerar al mestizaje como
co, los mapuche nunca salieron de la organización punto de referencia, y no a los pueblos originarios.
familística, de la sociedad segmentaria. Por lo tanto,
la posibilidad de que haya un gobierno mapuche es
cercana a cero. Lo que hay son familias mapuche:
cada pater familias gobierna su propia territoriali-
dad. El caso de Isla de Pascua es bastante pintoresco:

62 CRISÁLIDA
— La idea de plurinacionalidad, ¿le hace sentido? — La Universidad Católica ha levantado distintas
instancias de diálogo respecto al proceso consti-
No mucho. La Nación es una comunidad. Se ha- tuyente, pero aún así ha recibido críticas desde
bló de la Nación en Europa como aquella comuni- la izquierda y desde la derecha en torno a cierta
dad que era capaz de tener un Estado, que tenía un ausencia en el debate. Se dice que la Universidad
Estado. Y en el caso de nuestros pueblos originarios, no participa en el debate constitucional, que no se
ellos nunca han intentado tener un Estado. El único involucra en los procesos del país. ¿Qué opinión le
ejemplo raro fue el de Orélie Antoine. merece a usted esta polémica?

Todo depende de a qué se le llame Universidad.


— “El Rey de la Araucanía”... Si se le llama Universidad al Consejo Superior y la
Rectoría, me parece muy bien que tengan total pres-
Que fue un invento europeo. Se fue Orélie An- cindencia de lo que ocurre políticamente. El gran
toine y se acabó todo. Nunca ha habido pueblos riesgo que tiene el Rector, por ejemplo, sería que un
indígenas con Estado, como para hablar de Nación. Decano lo desmintiera y apareciera una Universi-
En otros países de América Latina, como es el caso dad dividida sobre aspectos que no le corresponden.
de Perú, el incario sí era capaz de cobrar tributo o Desde hace muchos años –a mí me tocó cuando
tenía indios mitayos que trabajaban como tributo era Prorrector– las autoridades superiores tenían
personal; pero entre nosotros, nunca hubo naciones prohibición de hablar a nombre de la Universidad.
vinculadas a Estados dentro del territorio. Ni en la Evidentemente, podía uno dar su opinión a título
época de la Colonia, ni ahora. Los levantamientos personal. Otra cosa es que se involucren grupos, y
de los mapuche como Lautaro no pueden entender- eso lo hemos tenido por montones. Por ejemplo,
se como Estado, ni como base de la constitución de con los Chicago Boys, en el caso de la Facultad de
un Estado. Ese no era el propósito. Entonces, no Economía y el modelo neoliberal, o ahora en el caso
veo qué agrega la plurinacionalidad a la Nación que de la vacuna del COVID, o en el caso de las Obras
tiene Estado, que es la chilena. Públicas, la sismología. En la ciencia política, con
gente hablando en contra del sistema D’Hondt, o
el parlamentarismo.

63
La Universidad debería ser muy viva en reaccio- y en otros, peor, como –para mi gusto– en el caso
nar ante los problemas y los temas que le interesan del Transantiago no lo hicieron bien. En fin. Uno
a la comunidad, pero como universitarios. No en de los responsables del Transantiago lo tenemos de
representación, porque un universitario no actúa en Ministro de Transportes ahora [risas]. Vamos a ver
representación. si lo hace mejor como Ministro que como profesor.

Y el tercer nivel, sin duda, tiene que ver con -ya


— En un sentido más amplio, ¿qué rol le cabe a la no tenemos nosotros canal de televisión ni nada
universidad ahora, y en particular a la Universidad de eso- tener, a través del Centro de Extensión, de
Católica, dentro de todos estos procesos de cam- seminarios, o de grupos de diálogo para colaborar
bio social? No sólo cambio político, sino cambio con el cambio político en condiciones de escucha
social, cultural, en general. recíproca. Esas son iniciativas valiosas, que pueden
ayudar a generar espacios para la sociedad. Ahora,
Creo que tiene los siguientes roles. Primero, en si uno tira raya para la suma, yo diría con bastante
la docencia: formar a la gente de pregrado. En eso seriedad que no hay ninguna otra universidad en
siempre he tenido la idea fija de que la tarea prin- el país que haya colaborado tanto como la Univer-
cipal de la Universidad es el pregrado, porque es la sidad Católica en disciplinas tan diversas como la
edad -entre 18 y 25 años- en que una persona se for- medicina, la economía, las políticas públicas; en te-
ma y establece su propio criterio de razonamiento. mas de la sociedad, en problemas actuales de la so-
No digo que ya elija una determinada postura, sino ciedad. Realmente ha hecho una colaboración. Al-
que sepa razonar. Que sepa verificar, comprobar ex- gunos la podrán estimar mala; todo el mundo tiene
periencias, preguntar e interpretar. Eso me parece derecho a opinar. Pero de que ha habido esfuerzos,
a mí que es una tarea ineludible, que no la pue- sí los ha habido.
den sustituir. Desde luego no la pueden sustituir
los colegios: el primer año universitario es casi de
reparación de la incapacidad del colegio de formar — No puedo dejar de preguntarle por una de las
adecuadamente a las personas. No lo pueden hacer normas que se aprobó hace poco en la Convención
otros grupos como las empresas, porque están inte- Constitucional, que tiene que ver con la posibi-
resadas en sus productos y no en la formación gene- lidad de autorizar el aborto libre. Parece ser que
ral de las personas. A mí me parece que la docencia esta es la última puñalada, después de veinte años
de pregrado es esencial. Distinto es la de posgrado, de leyes que han tendido a liberalizar el ámbito
donde uno puede abrirse a personas que vienen de de la cultura y la moral pública en Chile. Y esto
otras universidades u otras disciplinas complemen- coincide con un proceso más profundo: según la
tarias. No hay que formarlos, sino que hay que, más última Encuesta Bicentenario UC, el porcentaje
bien, tratar de satisfacer las necesidades de lo que de chilenos que se identifica como católico llega al
anda buscando. 43%, mientras que la gente que se considera atea
–o sin religión– está en el 37%, casi en el margen
Después, el segundo nivel es la investigación. de error. ¿Qué opinión le merece a usted esto, que
Creo que juega un papel esencial lo que la Universi- –al estilo de Peter Berger– podríamos llamar “se-
dad pueda investigar en materia de obras públicas, cularización de la conciencia” y “secularización de
médica, biológica, química, en todas las disciplinas. las instituciones”?
También en economía, en ciencias sociales. A modo
de ejemplo, que haya un Ministerio de Desarrollo Pienso que el ejemplo no es bueno. Respecto del
Social que no halle en la Universidad apoyo para aborto libre, se trata de un derecho humano esen-
proyectos de gobierno que mejoren la condición so- cial, que es el derecho a vivir. Si alguien está privado
cial sería vergonzoso. Por eso existen en la Univer- de ese derecho porque no ha nacido, es un crimen
sidad el Centro de Políticas Públicas, concursos de que atenta contra el derecho de las personas. Contra
políticas públicas, hay un gran movimiento de gen- la dignidad humana esencial. En ese sentido, creo
te interesada en los temas de debate nacional y que que [más allá de que] sea católico, judío, agnóstico,
interesan al país. Ahora, en algunos lo hacen mejor todos pueden expresarse en contra del aborto.

64 CRISÁLIDA
— ¿Qué ha pasado en Chile para que se haya llega- Entonces, que alguien diga que no cree es, por
do a aprobar una norma de esta naturaleza? decirlo menos, una opinión pasajera, temporal, que
va a estar sujeta a revisión muchas veces. Ahora, el
Creo que son grupos interesados. lado más político del asunto es que gente que dice
que es creyente no se identifica con ninguna igle-
sia en particular. Y eso, naturalmente, tiene que ver
— ¿Minoritarios? con muchos factores. Desde luego, vivimos noso-
tros la coyuntura de los curas pedófilos y el abuso
Minoritarios. Francamente. Y muy vinculados a sexual dentro de la Iglesia. Pero pudiese ser, tam-
las matrices internacionales. La industria del aborto bién, que hubieran otras razones, como el exceso de
es muy rentable en Europa, porque da origen a cé- un credo religioso sobre otro, o la diferencia relativa
lulas madre y productos biológicos de primer nivel, de un credo religioso sobre otro. Lo que es más im-
y finalmente a los desechos para hacer cremas para portante, creo yo, es la sustitución simbólica de lo
la piel, cosas por el estilo. Considerar al ser humano religioso a través de los medios de comunicación de
como un producto puramente biológico. Esa es una masas. En la religión se suele decir que el no creyen-
tendencia que viene dirigida por laboratorios inter- te es idólatra, es que ha sustituido al Dios en que
nacionales. No es algo que inventaron los chilenos. creía por otros dioses. Y esos otros dioses pueden ser
Los chilenos, normalmente en estas materias, son el dinero, la lujuria, o el poder. Evidentemente, hay
los últimos en inventar todo. Más bien, son los últi- gente que tiene una idolatría por el poder tal que la
mos en copiar todo, porque ni siquiera lo inventan. religión no le sirve. O una idolatría por la lujuria
[para la] que la religión no le sirve, no le estimula,
Tiene que ver con una defensa de la libertad se- salvo que le cause placer lo prohibido, el fetichismo
xual sin consecuencias, ante lo cual existen muchí- de lo prohibido. Son diferentes idolatrías. El que
simos otros métodos más eficientes y que no tocan dice no creer a secas no está diciendo la verdad de
la humanidad del que está por nacer. Entonces, no su ser, porque todos creen. El problema es en qué
se ve la razón –desde el punto de vista de la fecun- creen, en quién ponen una devoción incondiciona-
didad– de eso. Ahora, de que obliguen a la madre da. Hay gente que pone en el dinero una devoción
a tener el niño. No es la madre, sino que hasta el incondicionada, o en la política, creyendo que la
momento -aunque sea con banco de espermios- la política lo es todo. Y los partidos pasan a ser sus
generación de los seres humanos es de a dos, no de iglesias.
a uno. Y por lo tanto, ya es una acción relacional.
El argumento de que es un derecho de la madre Pero eso, en el fondo –como dice Peter Berger– es
sobre su cuerpo contradice los datos básicos de la secularización, pero no es disminución de lo reli-
biología. gioso, sino más bien un cambio de envase. Desde
ese punto de vista, no creo que la sociedad chilena
sea más atea o más agnóstica que lo que era en el
— Más allá del tema particular del aborto, ¿no pasado, ni tampoco más de lo que es cualquier país
considera usted que haya una crisis de religiosidad, actual con una industria tan productora de símbo-
o una crisis espiritual en Chile, a partir de estos los como es la industria de los medios audiovisua-
mismos números de la Encuesta Bicentenario? les. Entonces, más bien, creo que la pregunta que
hace la Encuesta Bicentenario debiera ser mucho
Yo creo poco en la Encuesta Bicentenario, porque más completa en relación a investigar quiénes son
la pregunta religiosa no puede ser una pregunta de los ídolos, los nuevos ídolos. A quiénes se les presta
opinión subjetiva. O sea, si usted se considera re- hoy una devoción incondicionada. Y ahí nos vamos
ligioso o no. Hay personas que son religiosas y ni a encontrar con un abanico de respuestas mucho
siquiera saben que son religiosas. Porque los educa- más realista.
ron así y después nunca más, y en un determinado
momento de la vida –qué se yo, experiencias límite,
como la muerte, el abandono, la soledad– les brota
la experiencia religiosa.

OTOÑO 2022 65
“Lo que le hace falta a la Iglesia –y le ha hecho siempre
falta– es reconocer su religiosidad popular, que es la
religiosidad que le ha dado origen y ha dado pábulo a
que surjan intelectuales. Pero la religiosidad no es un
invento de los intelectuales, sino que es netamente popular”

— ¿Considera usted que Chile esté en tránsito ha- En ese sentido, creo que no nos sirven mucho
cia un libertarianismo cultural del tipo norteame- las comparaciones, y más cabría atenernos a lo que
ricano o europeo, o se trata de una derivación de la nosotros somos.
identidad propia de Chile?

Yo creo, porque en eso uno no puede comparar — En un texto de principios de los años 1990, us-
las decisiones. En el caso norteamericano, es tal la ted escribe: “Lo que no se entierra adecuadamente,
cantidad de variables de tipo étnico, de tipo eco- tarde o temprano vuelve a aparecer en la superfi-
nómico, que no son comparables con la situación cie”. ¿A usted le parece que algo de esta naturaleza
nuestra. Por ejemplo, en Estados Unidos existe puede ocurrir con la Iglesia Católica, por ejemplo?
desde comienzos del siglo veinte una gran idolatría
por el automóvil. Nosotros aquí, claro, nos estamos Esa es una variante de la frase de Freud referida a la
subiendo a la cola del tren, porque el automóvil ha represión. La represión, decía él, siempre retorna.
pasado a ser un bien apetecido por todo el mundo. Siempre vuelve. Lo reprimido siempre vuelve. Eso
Pero la diferencia es que en Estados Unidos las au- es lo que nos ocurre también a nosotros, en el sen-
topistas tienen la capacidad de hacer circular a la tido de que existe una historia aparentemente ente-
gente. En cambio, los caminos en Chile hacen que, rrada. Si uno le pregunta a las personas por el con-
en cualquier pueblo mediano a la hora peak, ya no tenido de un libro de historia, dirán que no tienen
puedan circular los vehículos y sale casi más rápido idea. Uno de los autores más leídos en los últimos
andar en carreta o a caballo, por lo que demora re- años es un señor que se dedica a escribir historia:
correr la ciudad. Entonces, claro, aparentemente es Guillermo Parvex. Qué es eso sino desenterrar lo
la misma ideología del automóvil y de la libertad de enterrado. Hay algo en la cultura que naturalmente
tener un automóvil, pero en un caso la libertad es puede ir por ciclos. De repente, a todos les baja por
más real que en el otro. Esa es la diferencia. Y así va- leer a Gabriela Mistral, y después se les olvida, y
mos viendo con otros países, también. Que el efecto después lo vuelven a retomar. O a Neruda. Qué sé
de demostración de los medios de comunicación es yo. A gente como Neruda la acusan de cuestiones
universal, no cabe duda. Por lo menos no cabe duda sexuales, de abuso, cuando el tipo es un poeta: lo
para quienes tienen conexión a Internet, que ya es castigan por un lado, pero después van a terminar
la mayoría. Pero que las imágenes sean universales leyéndolo, tal como nosotros hemos leído al Qui-
es distinto. La Caperucita Roja puede leerse en di- jote de Cervantes. Entonces, lo reprimido siempre
ferentes idiomas y sigue siendo la misma historia, vuelve, retorna. Los muertos se desentierran. Y cla-
pero, ¿qué significa en cada lugar, en cada país? Es ro, eso depende del interés histórico que pueda ha-
algo extraordinariamente diferente. ber por determinada coyuntura.

66 CRISÁLIDA
— Hay una frase de Carlos Peña, en referencia a la Me tocó presentar un libro de Rocco Buttiglione,
Iglesia Católica pero que también podría aplicarse profesor y filósofo, discípulo de Augusto del Noce y
a nuestra Universidad o a quienes defienden la im- muy cercano a los tres últimos Papas -especialmente
portancia de la identidad católica, quienes “deben a Wojtyla, Juan Pablo II-, que se llama “Teología
escoger entre aferrarse a la verdad que dice ateso- del Pueblo”. Del Pueblo y la Cultura, dice. El tex-
rar, condenándose a la pérdida de influencia y a to viene prologado por el Papa, cosa absolutamente
ser un credo de minorías, por un lado, o mostrarse inédita, porque nunca los Papas prologan textos de
condescendiente con las convicciones espontáneas escritores. Yo no he visto en ningún filósofo ni a
de la cultura de masas relativizando la verdad que nadie que el Papa le prologue un texto. Y el Papa
dice poseer, por el otro.” ¿Qué opinión le merece? Francisco se lo prologa, porque, en el fondo, le llega
muy adentro esta tesis de la teología popular. Viene
La primera parte de la frase, estoy totalmente de los años 80 y 90, donde se desarrolla en América
de acuerdo. Cualquiera que tiene una convicción Latina -prácticamente desde la Conferencia Epis-
religiosa, o una experiencia religiosa, no la puede copal de Puebla hasta la Conferencia de Aparecida.
borrar de una plumada. Lo que yo agregaría, sí, es Y en Aparecida, Bergoglio jugó un papel muy im-
que no es un problema de falta de valentía o de portante porque fue el Cardenal que estaba a cargo
cobardía. No se puede hacer nomás. Nadie puede de la comisión redactora. Todos los papeles le llega-
negar que andamos de pie. Uno podría relativizar ban a él para la confección del texto definitivo. En
el contexto, pero en rigor eso es verdad. Ahora, no este libro se presenta, justamente, la idea de cómo
estoy totalmente de acuerdo en que el consumo de la teología del pueblo se desarrolla. Es como una
masas atente contra la religión. Existe algo que yo promesa de la Iglesia latinoamericana a la Iglesia
he estudiado mucho, que es la religiosidad popular. universal, de cómo a pesar de los abusos clericales
Es la verdadera religiosidad de base que tenemos o del clericalismo en general, lo que queda es un
todos nosotros. Todos crecimos en la religiosidad conjunto de personas que se convierte en su propia
popular. Quizás después tuvimos la posibilidad de fe al cristianismo y va ayudando a transmitirlo de
profundizar en una materia teológica, cristológica generación en generación, sea que los curas lo reco-
o mariológica, pero en principio somos todos hijos nozcan o no lo reconozcan.
de la religiosidad popular. Y en ese sentido, lo que
él llama la masa no es una masa no creyente, o que
se da vuelta la camiseta. No. La religiosidad popu- — El catolicismo no está condenado, entonces.
lar tiene también ritos muy fuertes, y tiene incluso
mitologías o partes de la ritualidad que se han man- ¡No! El catolicismo, contrariamente a lo que
tenido, como es el caso de los bailes o las vestimen- piensan los norteamericanos y los europeos, que
tas, las músicas de los bailes. Desde ese punto de viene hacia abajo... Están totalmente equivocados.
vista, creo que lo que le hace falta a la Iglesia -y le Que vean la historia de la Iglesia en América La-
ha hecho siempre falta- es reconocer su religiosidad tina en estos 500 años, soportando persecuciones,
popular, que es la religiosidad que le ha dado origen expulsiones, confiscaciones de territorio. Y la Igle-
y ha dado pábulo a que surjan intelectuales. Pero la sia vivió, no gracias a las órdenes sino gracias a los
religiosidad no es un invento de los intelectuales, propios cristianos. Las comunidades de creyentes.
sino que es netamente popular.

OTOÑO 2022 67
La Universidad es un espacio privilegiado para
observar la sociedad. Nos ofrece la alternativa úni-
ca e irreemplazable de participar de una comunidad
formada en torno a la producción, reproducción y
difusión del conocimiento. Nos reúne con perspecti-
vas diversas, inconmensurables y complementarias,
orientadas a hacer sentido de la realidad y colocar
sus interpretaciones en diálogo.

En un momento de cambio histórico, la reflexión


a muchas voces y a muchas manos cobra más im-
portancia que nunca. No basta con actuar dentro de
nuestras motivaciones y experiencias individuales.
Tenemos que estar preparadas y preparados para
confrontar nuestros prejuicios, nuestras ideas pre-
concebidas, aportar a la sociedad bajo la certeza de
que tenemos una responsabilidad histórica con su
conjunto.

Sea para observar, sea para discutir o analizar, sea


para actuar y transformar. La Universidad es un es-
pacio privilegiado. No lo desaprovechemos.

68 CRISÁLIDA
“Entretanto, estamos ya en la víspera. Recibamos todos los
influjos de vigor y de real ternura. Y a la aurora, armados de
una ardiente paciencia, entraremos en las espléndidas ciudades”

Arthur Rimbaud

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