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CENTRO UNIVERSITARIO TECNOLOGICO

CEUTEC

ASIGNATURA: ADMINISTRACION I (SECCION 950)

DOCENTE: MARIA DEL SOCORRO MALDONADO

CASO MAYO CLINIC

PRESENTADO POR:
SERGIO RAUL VALDEZ 32321030
ALLAN RENIERY ARTEAGA 32321040
WENDY KAROLINA OSEGUERA 32311684
ANETH MICHEL BARRIENTOS 32311928

TEGUCIGALPA M.D.C., FRANCISCO MORAZÁN, HONDURAS, C.A.


Junio, 2023
LEY DEL TOPE

Tu liderazgo es el tope, el techo de tu organización. Tu negocio, iglesia, institución no se

elevará más allá del nivel que tu liderazgo permite. Si el liderazgo es fuerte, el techo es alto.

Por lo tanto, ampliar tu capacidad de liderazgo es una forma de elevar el nivel de esa

organización que lideras.

En todas partes podrás encontrar personas inteligentes, talentosas y exitosas cuyo desempeño

es limitado debido a las limitaciones de su liderazgo. Si deseas llegar lejos tu liderazgo debe

ser lo más alto posible.

LEY DE LA INFLUENCIA.

El liderazgo es la capacidad de influir en los otros. Quien no tenga posibilidades de ejercer

influencia, nunca podrá dirigir a otros.

La gente tiene conceptos erróneos acerca del liderazgo. Muchas veces oímos que alguien tiene

títulos impresionantes o una posición gerencial importante en una empresa, y damos por sentado

que esa persona es un líder. A veces es cierto. Otras no. Tengamos presente que el verdadero

liderazgo no puede ser otorgado, nombrado ni asignado. El verdadero liderazgo surge de la

capacidad para influir en los demás.


LEY DEL PROCESO.

El liderazgo se desarrolla con el tiempo, no se logra en un día. Si se centra en el fortalecimiento

de tu liderazgo, si se trabaja para que tus condiciones se incrementen, se lograra el objetivo.

Hay quienes dicen que se nace líder, y que con esas condiciones naturales alcanza. A esas

personas les decimos que es cierto que hay gente que nace con cierta capacidad natural para

dirigir, pero, en realidad, también es necesario desarrollar destrezas, la mayoría de las cuales

se aprende.

La capacidad de liderazgo no es estática. No importa en qué punto se comience a desarrollar,

con el esfuerzo constante se puede mejorar.

LEY DE LA NAVEGACION.

Cualquier persona puede conducir una nave, pero se necesita un líder para trazar el rumbo,

para establecer el camino más eficaz para llegar a destino.

Al igual que el de una nave, el líder de una organización tendrá siempre presente que otras

personas dependen de él y de su capacidad para la tarea. Sabrá que todos seguirán sus pasos

confiados en que sus decisiones serán las mejores. Cualquiera que sea la movida que haga, el

resto de su equipo la hará con él.

La ley de la navegación implica para el líder algunos principios: los navegantes aprenden de

las experiencias pasadas, escuchan a los demás miembros de su equipo, analizan las

condiciones antes de contraer compromisos, revisa su plan frecuentemente.


LEY DE LA ADICCION.

Esta ley implica que el éxito en el liderazgo no solamente es llegar lo más alto posible, si no

que llevar a otros consigo, Muchas personas ven el liderazgo de la misma forma en que ven el

éxito, tratando de llegar lo más lejos posible, escalar y lograr la

mejor posición debido a su talento. Pero, en contraste con el

pensamiento convencional, yo creo que lo más importante en el

liderazgo no es lo lejos que avancemos, sino lo que ayudemos a los

demás a avanzar, lo cual se logra sirviendo a los demás y

añadiendo valor a sus vidas. La interacción entre los líderes y los

seguidores es una relación, y todas las relaciones añaden o

sustraen algo de la vida de una persona. El líder tiene un impacto

positivo o negativo en las personas que dirige. ¿Cómo lo puede

saber? Por medio de una pregunta vital: ¿Está mejorando la

situación de las personas que lo siguen? Si no puede responder

afirmativamente a esta pregunta, ni dar evidencia que lo respalde,

entonces es alguien que resta valor a los demás.

LEY DEL TERRENO FIRME.

La confianza es la base para todo liderazgo efectivo. Es necesario generar confianza en los

demás para lograr influir en ellos. Por eso, el líder debe ser ejemplo de conocimiento en el área

a la que se dedica la organización, en los vínculos personales y en el carácter. El carácter

comunica constancia y estabilidad, potencial, respeto.


Todos los líderes eficaces conocen que la gente puede tolerar errores ligeros, pero si viola su

confianza, le será muy difícil recuperarla. El carácter hace posible la confianza, y la confianza

habilita el liderazgo. Esa es la ley del Terreno Firme.

LEY DEL RESPETO.

Los individuos no siguen a otros por casualidad, siguen a personas que son más fuertes que

ellos mismos, cuyo liderazgo respetan.

Hay muchas formas de medir el respeto de un seguidor al líder. Una de ellas es ver las

reacciones de las personas cuando un líder hace un cambio grande en la organización.

Observando las actitudes de aquellos a los que el cambio afecta, se podrá conocer qué tanto

respeto tiene a ese líder.


LEY DE LA INTUICION.

Esta ley es quizás la más difícil de entender, porque no está basada solo en los hechos, en lo

tangible, en lo que ocurre y se ve, sino en factores intangibles, como el instinto, la intuición.

La realidad muestra que la intuición, generalmente distingue a los líderes extraordinarios de los

que son simplemente buenos líderes. Se trata de una “intuición informada”, basada en los datos

de la realidad que el líder percibe. Con apoyo en esa información, su intuición le permite

evaluar todo con una habilidad típica del liderazgo.

La intuición hace que los líderes logren interpretar situaciones que no son visibles para los

demás. Así, reuniendo experiencia, datos de la realidad y capacidad técnica, se fortalece esa

intuición que permite al líder interpretar la realidad, las tendencias, los recursos, las personas y

hasta a sí mismo. Con esta poderosa herramienta, el líder logra resolver los problemas de su

organización.
LEY DEL MAGNETISMO.

Los buenos líderes siempre están en la mira de personas valiosas. En general, la ley del

Magnetismo establece que un líder atrae personas que son como él. Quien eres es a quien

atraes.

Si eres un líder empresarial y te concentras en analizar a tus seguidores, encontrarás más

similitudes entre ellos y tú, que diferencias. Recuerda que la buena calidad de tus seguidores

no depende de la empresa sino de ti, porque sólo atraes a quienes son como tú.
LEY DE LA CONEXIÓN.

Es esta una ley que se enmarca en el nivel comunicacional humano. Si quieres liderar, tienes

que tocar el corazón de aquellos en los que quieres influir. Podrás hacerlo a través del humor,

de la pasión, de la demostración de seguridad y esperanza. Sea cual sea el recurso que utilices,

el que más se adecue a tu personalidad, lo importante es que logres llegar a las emociones de

los demás. Tal como lo expresa Maxwell, el líder primero debe tocar el corazón de la gente

antes de pedirles la mano. El corazón es primero que la mente.

Esta conexión se dará en dos niveles: con cada individuo y con el gran grupo. La clave está en

tomar conciencia de que aunque formen parte del grupo con el que el líder se vincula

públicamente, es importante que establezca vínculos con las personas como individuos.

Si aspiras a ser un buen líder, debes aprender a construir puentes entre tú y las personas que

lideras.
LEY DEL CIRCULO INTIMO.

En toda organización existe un círculo íntimo, que deja atrás la antigua creencia en el liderazgo

en solitario. Por tanto, es importante que el líder conforme su círculo íntimo, en el que

integrará cinco tipos de personas.

1. Los que tienen valor potencial y se forman a sí mismos. 2. Los positivos, que levantan el

ánimo en la organización 3. Los que elevan al líder, que lo ayudan a mejorar. 4. Los que

forman a otros. 5. Los que forman personas que a su vez forman otras personas.

Ten presente que tu círculo íntimo no debe ser estático, debe permanecer en constante proceso

de mejora.
LA LEY DEL OTORGAMIENTO DE PODERES.

La asignación de poder, el empoderamiento, es una tarea inherente al buen líder. Sólo los

líderes seguros de sí mismos son capaces de dar poder a otros. Cuando un líder no puede o no

quiere otorgar poder a otras personas, la gente sentirá que no se le permite explotar su

verdadero potencial. Surgirán barreras que harán que esas personas abandonen la organización.

Hay líderes, que no son genuinos, a los que empoderar a otros produce temor. ¿A qué temen?

A que se prescinda de sus funciones, a que los otros a los que ha asignado poder superen su

nivel, al cambio. Estos son solamente líderes posicionales, líderes porque alguien los puso en

ese lugar, pero no son líderes genuinos y verdaderos.

Los líderes seguros confían en la gente y tienen la certeza de que su lugar seguirá siendo suyo

aunque impulse a otros.


LEY DE LA IMAGEN.

Las investigaciones indican que el 85% de los líderes llegaron a serlo impulsados por la

influencia de otro líder, por el impacto que líderes establecidos les han causando siendo sus

ejemplos.

Esto implica dos cosas. Por un lado, si eres líder estás influyendo en líderes potenciales,

generando el impulso a seguir tu modelo. Pero también este dato te dice que una buena

estrategia para mejorar tu capacidad de liderazgo es pasar tiempo con los mejores líderes que

puedas encontrar, observarlos, dialogar con ellos, conocer detalles de su desempeño.


LEY DEL APOYO.

Hay líderes que piensan que si la causa es lo suficientemente noble y buena, los demás lo

apoyarán y lo seguirán. Es un error. La gente sigue líderes, no causas, líderes meritorios que

promueven buenas causas. Primero apoyan al líder, después la visión del líder. Si el líder les

gusta y la visión no, seguirán con ese líder e intentarán cambiar su visión. Pero si no les gusta

el líder, aunque su visión sea la mejor, buscarán otro líder.

La credibilidad de la persona que ejerce el liderazgo es la base para que otros lo sigan. Si no

logra la credibilidad y la confianza de su gente, no importará cuán grande sea su visión, no

recibirá apoyo.
LEY DE LA VICTORIA.

Los líderes encuentran el camino para que el equipo gane. Para ellos es inaceptable la derrota,

por eso averiguan lo que hay que hacer para que la misión resulte victoriosa y van tras esa

victoria poniendo en juego todos sus recursos.

Un factor importante para logra la victoria es generar unidad de visión del equipo, visión que

los mantenga unidos siguiendo un plan común que todos conocen. La diversidad de destrezas

de los integrantes es otro factor primordial. Las organizaciones necesitan talentos diferentes. Y,

finalmente, el líder conocedor de los talentos particulares de cada integrante de su equipo

logrará explotar al máximo su potencia. Y obtendrá la victoria.


LEY DEL GRAN IMPULSO.

Generalmente, los líderes se enfrentan al desafío de generar cambios en la organización en la

que se desempeñan. Y para cambiar es necesario que la organización se mueva y progrese.

Es imposible el cambio y el progreso sin impulso. Y es imposible el impulso sin un líder. El

líder será el generador de este gran impulso que, con pequeñas acciones, logrará cambiar la

organización. Será él quien motive a los demás y los estimule en el camino que se ha

propuesto.

El impulso establece una gran diferencia en las organizaciones. En aquellas que no lo tienen,

aun las tareas más sencillas parecen problemas insuperables. Pero si el impulso está presente,

el futuro se muestra prometedor y los problemas se perciben como algo temporal.

Si eres líder y deseas hacer grandes cosas en tu organización, ten siempre presente el valor del

impulso. Será tu mejor aliado. Si logras desarrollarlo, podrás lograr todo lo que te propongas.
LEY DE LAS PRIORIDADES.

El líder entiende que es necesario establecer una escala de prioridades. Sea que se desempeñe

en una organización pequeña o una corporación muy grande, un buen líder analiza las acciones

a realizar y evalúa prioridades.

John C. Maxwel sugiere utilizar dos pautas. La primera es el Principio Pareto, que establece

que si concentras tu atención en las actividades que están en el veinte por ciento principal,

recibirás un retorno del ochenta por ciento de tu esfuerzo. La segunda es la de las tres “R”: 1.

Lo que se requiere de usted, 2. Lo que dará mayores retornos y 3. Lo que produce la

recompensa más grande.

En función de estas tres “R” el líder ordenará sus prioridades.


LEY DEL SACRIFICIO.

Los líderes exitosos deben mantener una actitud que demuestre sacrificio para dominar la

organización. Los líderes renuncian a muchas cosas para obtener oportunidades potenciales, y

ese sacrificio se vuelve una constante, un proceso continuo.

Los líderes que quieren avanzar, deben ceder para poder subir. Esto se aplica a todos, sea cual

sea su profesión. Y una vez arriba, seguirán cediendo y sacrificándose para mantenerse en su

lugar. Cuanto más alto llegue, cuanto más grande es el líder, tanto más deberá ceder. Esa es la

verdadera naturaleza del liderazgo.

El éxito en el liderazgo exige cambio y sacrificio continuos.


LEY DEL MOMENTO OPORTUNO.

Los grandes líderes reconocen que el “cuándo” es tan importante como “qué hacer” y “adónde

ir”.

La acción acertada en el momento equivocado, no será efectiva y provocará resistencia. La

acción equivocada en el momento adecuado será un error. La acción equivocada en el

momento equivocado conducirá a la organización al desastre. Solo tendrá éxito y resultará

efectiva la acción adecuada en el momento adecuado. De allí la importancia de la

sincronización entre ambos términos.


LA LEY DEL CRECIMIENTO EXPLOSIVO.

Esta ley establece que para sumar crecimiento, el líder debe dirigir seguidores, pero si lo que

desea es multiplicar buenos resultados, debe dirigir líderes.

¿Cómo funciona? Los líderes que forman seguidores ayudan a su organización a crecer a un

ritmo de una persona a la vez. En cambio, los líderes que forman líderes, multiplican su

crecimiento, pues con cada líder se forman también a todos los seguidores de ese líder. Los

resultados son claros: si añade diez seguidores tendrá el poder de diez personas, pero si forma

diez líderes, tendrá el poder de esos diez líderes multiplicado por todos los seguidores en los

que ellos influyan. Esa es la diferencia entre adición y multiplicación.

En síntesis: los líderes que forman líderes producen en sus organizaciones un efecto

multiplicador increíble que no se puede alcanzar de ninguna otra manera.


LA LEY DEL LEGADO.

El valor que perdura de un líder se mide por la sucesión. Los líderes que se preocupan por la

sucesión, y que anteponen los intereses de la organización a los suyos propios, la dirigen con

miras al futuro. Crean una cultura de liderazgo que asegura el éxito duradero.

Para lograrlo, estimulan el liderazgo en equipo. De este modo, cuando un líder debe dejar la

organización, siempre habrá un sucesor que haga lo que tiene que hacer y la empresa no

sufrirá.

El reconocimiento y la aplicación de esta ley no es frecuente entre los líderes, solo los mejores

la ponen en práctica entendiendo que parte de su tarea es preparar a la organización para

triunfar después de su salida.

Bibliografía
Editorial, S. (2016). LAS 21 LEYES IRREFUTABLES DEL LIDERAZGO, RESUMEN COMPLETO DEL
LIBRO.

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