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06 de febrero de 2024

WINNICOTT. EL PAPEL DE LA MADRE REAL: ILUSION,


SOSTEN, OBJETO TRANSICIONAL PRESENTACION
Bleichmar, N. y De Bleichmar
Paulina Bifano Beltrán
5626742553

En este capítulo del libro El Psicoanálisis después de Freud, Winnictott aborda la


importancia de la madre en proporcionar cuidados reales, al mismo tiempo que permite
ilusiones necesarias para el desarrollo emocional. Destaca la función crucial del objeto
transicional y cómo la madre, a través de su sostén y gradual presentación de la realidad,
contribuye al crecimiento emocional y la formación de la identidad del niño.

Para Winnicott un concepto central en su teoría del desarrollo emocional y la psicología del
niño es la importancia del medio ambiente, enfatiza que el ambiente en el que un niño crece
y se desarrolla, especialmente durante sus primeros años de vida, juega un papel crucial en
la formación de su personalidad y su capacidad para establecer relaciones saludables,
incluye no solo el entorno físico en el que vive el niño, sino también las interacciones
emocionales principalmente con la madre.

El concepto creado por Winnicott "sostenimiento"(holding) lo define como la capacidad de


la madre para brindar un entorno emocional estable. El buen sostén permite al bebé sentirse
seguro y apoyado, contribuyendo a la formación de un "verdadero self" en contraste con un
"falso self" protector.

Introduce la noción de "ilusión" como parte esencial del desarrollo. La madre crea un
entorno donde el bebé experimenta una sensación de seguridad y omnipotencia. Esta
ilusión inicial es necesaria para el crecimiento emocional y la construcción del self.

La creación de ilusiones por parte de la madre y la capacidad de sostén contribuyen a la


formación del "verdadero self" del niño. Este proceso implica una transición desde la
omnipotencia ilusoria hacia una comprensión más realista de sí mismo y del entorno.

El concepto del objeto transicional sirve como un puente entre el mundo interno y externo
del niño, facilitando la transición hacia la independencia emocional, son objetos como
mantas o peluches que el niño utiliza para desarrollar la capacidad de autoconsuelo y
seguridad, ayudándolo a lidiar con la separación. La madre desempeña un papel crucial al
presentar gradualmente la realidad al niño sin socavar su necesidad de ilusiones iniciales,
logra la discriminación entre lo que froma parte del propio cuerpo y lo que no.

El desarrollo emocional primitivo se refiere a las etapas iniciales del desarrollo emocional
de un individuo, donde la relación con el cuidador principal juega un papel crucial en la
formación de una base segura y estable para el crecimiento emocional posterior, y se da en
tres etapas:
- La integración y la personalización: los núcleos del yo están dispersos y el bebé
experimenta una unidad indiferenciada con su entorno. La madre desempeña un
papel crucial en ayudar al bebé a alcanzar la integración y la personalización.
- Adaptación a la realidad: Madre provee los elementos de la realidad y lo que libera
a la madre de ser perfecta es la comprensión del niño.
- Preinquietud o crueldad primitiva: el niño reconoce su individualidad y se adapta a
la realidad absorbiendo experiencias del mundo. También lidia con su agresividad
innata, protegiendo a la figura materna de sus impulsos destructivos. La madre,
además de ser objeto de agresión, proporciona amor y cuidado, lo que fortalece la
relación entre ambos y ayuda al niño a desarrollar responsabilidad sobre sus
acciones. Aunque es un paso importante en el desarrollo emocional, puede no
completarse totalmente durante la infancia.

Sugiere que la falta de comunicación en el análisis puede ser una forma saludable de
preservar el "ser verdadero". Propone dos tipos de incomunicación: la simple, que es un
descanso temporal y se retorna facilmente a la comunicación y la activa, que puede ser
problemática. Afirma que el replegamiento hacia los objetos internos puede ser saludable si
ayuda a preservar la identidad y establecer una comunicación auténtica. Este desarrollo
tiene sus raíces en la infancia, cuando el niño aprende a estar solo en presencia de otros sin
perder su identidad.

Se enfocó en comprender las enfermedades mentales, especialmente la psicosis y la


tendencia antisocial. Argumentó que los fallos ambientales afectan la formación del
verdadero self y el falso self, lo que tiene implicaciones en diversas patologías. En el caso
de la psicosis, atribuye la enfermedad al fracaso ambiental durante la fase de doble
dependencia. Respecto a la tendencia antisocial, la considera como una manifestación de
una inadaptación del medio ambiente durante la infancia.

Propone que durante el análisis, los pacientes pueden regresar a momentos tempranos de su
desarrollo emocional, reviviendo situaciones de fracaso ambiental que quedaron sin
resolver en la infancia. Este retorno, en un entorno seguro proporcionado por el analista,
permite al paciente experimentar y procesar estas emociones reprimidas. El analista debe
ser sensible y comprender las necesidades del paciente durante este proceso, lo que puede
conducir a una curación emocional significativa al proporcionar una segunda oportunidad
para el desarrollo emocional y la resolución de conflictos internos.

La regresión durante el análisis puede cambiar la manera en que entendemos la


transferencia. El paciente regresivo experimenta relaciones emocionales positivas como si
fueran actuales, y la capacidad del analista para adaptarse es clave para retomar el
desarrollo emocional interrumpido. Los fracasos en esta adaptación se convierten en
oportunidades para revisitar experiencias pasadas.

En cuanto al odio contratransferencial sugiere que en pacientes con graves dificultades para
concebir el amor, es esencial que el terapeuta pueda expresar sentimientos ambivalentes,
incluso de odio, de manera objetiva y justificada. Esta capacidad del terapeuta para mostrar
estos sentimientos puede ayudar al paciente a creer en el amor genuino del terapeuta hacia
él.
Bibliografía:
Bleichmar, N. y De Bleichmar, CL (1998). EL PAPEL DE LA MADRE REAL: ILUSION, SOSTEN,
OBJETO TRANSICIONAL PRESENTACION. El psicoanálisis después de Freud. (pp. 261-285) Paídos.

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