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Universidad Tecnológica de Santiago

(UTESA)

PROFESOR:

RAFAEL ESPINOSA ACOSTA

Tema
Elementos de la Argumentación

SECCION
001

ASIGNATURA
ARGUMENTACION JURIDICA

TAREA

SUSTENTANTE: MATRICULA:

Anabely Adames Sánchez 2-12-4425


Víctor J. Feliz 3-14-4291
Heroína Lorenzo Moreno 1-10-4046
Francisca Alcántara Pérez 2-17-4002
Benelope Candelario 3-16-4338
Yeimi Alcántara 2-16-4269
1- Los elementos de la argumentación, en qué consisten la tesis, la demostración
y las conclusiones.

El objeto, la tesis, el cuerpo argumentativo y la conclusión son los elementos que


constituyen generalmente una argumentación.

1.- El objeto de la argumentación es el tema sobre el que se argumenta. Pueden serlo


la situación política actual, el tráfico de las ciudades, el examen de selectividad o el
incremento de la violencia urbana.

2.- Tesis. Es la idea fundamental en torno a la que se reflexiona; puede aparecer al


principio o al final del texto. Ha de presentarse clara y objetivamente. Puede encerrar
en sí varias ideas, aunque es aconsejable que no posea un número excesivo de ellas,
pues provocaría la confusión en el receptor y la defensa de la misma entrañaría
mayores dificultades.

3.- Cuerpo. Despliega la idea o ideas que se pretende demostrar desde dos
perspectivas: una de defensa de ellas, y otra de refutación contra previsibles
objeciones. Esta última actitud no es necesario que esté presente, pero sí la primera.
Consta, por tanto, de: Argumentos. Una vez expuesta la tesis, comienza el
razonamiento en sí, es decir, se van ofreciendo los argumentos para confirmarla o
rechazarla.

4.- Conclusión. El autor, en su demostración, reflexiona sobre el tema desde todos los
ángulos, hasta llegar al objetivo deseado, que se ofrece como conclusión, a menudo
anunciada al comienzo del escrito. Puede presentarse de varias formas: Afirmación de
una tesis. El contenido que desarrolla el autor se presta en su final a abstraer de los
datos o ejemplos aducidos una idea general, explicativa del problema o de los
fenómenos que se traten, la cual asume un rango de tesis. Con carácter sugeridor.
Este tipo de conclusiones se distinguen porque el escrito, si bien en el estadio final
recoge en síntesis la idea sustancial de la exposición, no llega a hacer como definitivo
su razonamiento o a completar su información. El autor apunta sugerencias para
futuros trabajos, abriendo caminos hacia otras perspectivas antes de poner punto final
a su propio texto.

No siempre somos capaces de producir buenos argumentos. A veces, recurrimos


consciente o inconscientemente a falsos argumentos o falacias. Con ellos podemos
convencer, persuadir o refutar fácilmente, pues son socialmente persuasivos. Los
falsos argumentos o falacias no siempre son intencionales. Muchas veces el hablante
los utiliza creyendo que está argumentando de manera correcta. Un falso argumento o
una falacia es una argumentación inválida con apariencia de válida.
2 Modelos de la argumentación informal y demostrativa.

Se le llama argumento informal aquella que no hace explicitas las reglas del
razonamiento y que utiliza un lenguaje ordinario, el lenguaje de la calle, un ejemplo
seria cuando comemos una torta en el descanso o mientras jugamos con nuestros
amigos videojuegos. Estos razonamientos son enunciados de una manera informal en
nuestra vida diaria.
Hay ocasiones en los que los argumentos requieren de una estructura muy precisa y
utilizan un lenguaje muy estructurado. Estos son los espacios donde se da la
argumentación formal.

 MODELO DE ARGUMENTACIÓN DEMOSTRATIVA.

Tiene como finalidad mostrar la tesis que se enuncia en un argumento y ha tenido gran
aceptación.

- Proposición que debe ser demostrada.

- Planteamiento de la cuestión.

- Enunciación de la tesis que se va a sostener.

- Proposición normativa de la que se partirá

-Para demostrar la tesis.

- Razón mediante la cual la tesis es inferida

-Del fundamento de la demostración.

3 -Los vicios de la argumentación, desarrollo del tema.

Cuando hacemos referencia a los vicios en la argumentación en general nos referimos


a las deficiencias o fallas que los respectivos argumentos presentados pueden
contener, ya sea de forma deliberada y/o accidental, que buscan obtener que sus tesis
ó discursos argumentales sean aceptados y acogidos.

Dentro de la forma de presentación de los vicios argumentales, diferencian su


presentación en tres formas distintas, esto es falacias, paralogismos y sofismas.
Existen ciertas dificultades para lograr una clasificación en lo que a los vicios de la
argumentación se refiere, debido a la gran cantidad que puede presentarse y a los
distintos ámbitos en los cuales pueden introducirse; los fallos argumentales son
escurridizos y ubicuos: un mismo error puede constituir varios sofismas a la vez.

FALACIA:
"Falacia" se usa cuando se pretende que un argumento tenga validez sin
realmente poseerla; aunque dicho argumento contenga algún elemento que nos puede
llevar a engaño si no estamos suficientemente atentos, y por ello, a pensar que es
válido. Muchas veces se usa a veces el término "falacia" como equivalente a
"sofisma". Es decir, en el sentido de "argumento aparente" o argumento que no es en
realidad un buen argumento. Una falacia, lo mismo que un sofisma, es una forma de
argumento no válida.
Definimos " falacia como todos aquellos argumentos aparentes introducidos en el
discurso que buscan engañar o inducir a un error al auditorio o parte contraria.

Por ejemplo: ¿No está usted de acuerdo con el procesamiento de Pinochet? ¿Es que
no le importan las cuatro mil víctimas mortales, ni el dolor de sus familias? Esto se
produce en cualquier conversación de una manera tan inconsciente que impide
considerarlo falaz. Consiste en distraer la atención del oponente y del auditorio hacia
un asunto colateral para disimular la debilidad de la propia posición.

Racionalidad y capacidad de análisis no pueden ser considerados atributos masculinos.


Equivale a conceder a los hombres una ventaja injustificada en las demandas de
empleo y en las promociones. ¿Qué es lo que se discute? Si la racionalidad es, o no,
un atributo masculino. Sin duda no lo es, pero lo que afirma nuestro ejemplo es que no
debe serlo, independientemente de que lo sea o no, porque acarrearía consecuencias
indeseables.

A continuación procuraremos enumerar las argumentaciones falaces más usuales:

A.1.- AMBIGÜEDAD: Son Falacias que proceden de la falta de precisión en los


términos usados en el lenguaje natural, es decir que pueden proceder de la
ambigüedad o vaguedad del mismo. Dentro de este ámbito, encontramos:

A.1.1.- Equívocos: Se produce cuando en un mismo argumento se emplean palabras


o frases en más de un sentido, como ocurre en este ejemplo con la palabra igual. Por
Ejemplo "Los sexos no son iguales, los derechos no pueden ser iguales". No se habla
de la misma igualdad a lo largo del argumento. Primero se emplea en su acepción de
identidad (biológica) y más tarde en su acepción jurídica (igualdad ante la ley). La
ambigüedad utiliza conceptos diferentes que comparten una expresión común. La
lengua está llena de vocablos polisémicos a los que cada uno puede dar un sentido
distinto.

A.1.2.- Composición: Se produce cuando atribuimos cosas a un conjunto que


solamente son ciertas en las partes. Por fuerza se trata de una orquesta magnífica
porque todos los profesores son extraordinarios. Los directores saben muy bien que no
es así. No se pueden trasladar las virtudes de los individuos al conjunto.

A.1.3.- División: Según la cual las partes disfrutan las propiedades del todo. Debe ser
muy buen jugador, porque está en un equipo magnífico.

b.- SOFISMAS:

Se da este nombre a la argumentación viciosa usada de mala fe, es decir, cuando


voluntariamente y con toda conciencia se quiere engañar usando argumentos
totalmente falaces.

En ocasiones se suele distinguir entre "sofisma" y "falacia" indicándose que mientras el


primero se caracteriza por ser "intencional", es decir, por ser el tipo de razonamiento
falso con el fin de derrotar y confundir al contrario; mientras que la segunda se
caracteriza por ser simplemente un "error" o "descuido" en el razonamiento.

Ejemplos: "La hipertensión arterial lesiona el riñón y la lesión renal produce


hipertensión arterial."

"Si te votan muchos puedes ganar, y si puedes ganar te votan muchos."

“Todos los perversos han de ser castigados en este mundo o en el otro. Hay perversos
que no son castigados en este mundo. Luego lo serán en el otro”. En la primera
premisa se da por supuesto algo que no está probado y que no todo el mundo acepta.
Lo que sirve de prueba en un argumento debe ser más claro y conocido que lo que se
quiere probar. Es preciso que la conclusión busque un apoyo que no se cuestione.

En cuanto al campo de aplicación de los sofismas, podemos dividirlos en dos ámbitos:

B.1.- Vicios in Voce: Son aquellos que se realizan generalmente en la palabra, es


decir que dependen del lenguaje utilizado. Dentro de esta tipología encontramos dos
bien diferenciados, ellos son la Homonimia y la Anfibología.

B.1.1.- Homonimia: En principio es la igualdad de nombre entre dos o más personas o


cosas. Puede constituir origen de errores y plantea no fáciles interpretaciones. Es decir
que se utilizan el significado equivoco o diverso que puede tener un término
incorporado al argumento, para desviar el asunto de la controversia, o afirmación que
sé está intentando sostener. Ejemplo: Toda luz puede apagarse. El intelecto es Luz. El
intelecto puede apagarse... Aquí se nota enseguida que hay cuatro términos "Luz" en
sentido propio, y "Luz" entendido metafóricamente. Por otra parte, en casos más sutiles
engaña; concretamente, en aquellos en los que los conceptos se designan con la
misma expresión y están emparentados, pudiéndose intercambiar uno por otro con
facilidad.”

B.1.2.- Anfibología: Palabra o sentencia que puede entenderse de dos o más modos.
Se da cuando se utiliza en forma totalmente equivoca una proposición o estructura
discursiva. Es decir que se habla de anfibología de una proposición o de un juicio
cuando posee un doble sentido, cuando revela una ambigüedad y es susceptible de un
uso equívoco.

b. 2.- Vicios ex Rebús: Son aquellos vicios que se cometen desde las cosas, que son
propiamente en las cosas.

c.- PARALOGISMOS:

Cuando hacemos referencia a los "paralogismos", decimos es un silogismo incorrecto.


Ahora bien, ese silogismo incorrecto ínclitamente no debe tener ninguna intención de
engañar. Se da el nombre de paralogismo a la argumentación viciosa o incorrecta,
usada de buena fe, es decir cuando no se tiene la intención de engañar.

d.- TIPOS DE FALACIA: FORMALES Y NO FORMALES

Las falacias no formales son razonamientos en los cuales lo que aportan las
premisas no es adecuado para justificar la conclusión a la que se quiere llegar. Se
quiere convencer no aportando buenas razones sino apelando a elementos no
pertinentes o, incluso, irracionales. Cuando las premisas son informaciones acertadas,
lo son, en todo caso, por una conclusión diferente a la que se pretende.
El ejemplo de falacia no formal: descalificamos la persona que argumenta en vez de
rebatir sus razones. La lista de falacias no formales es larga.

Las falacias formales son razonamientos no válidos pero que a menudo se aceptan
por su semejanza con formas válidas de razonamiento o inferencia. Se da un error que
pasa inadvertido. Así, por ejemplo, a partir de dos premisas como "Si llueve, cojo el
paraguas" y "Se da el caso que llueve", puedo concluir con validez formal que "Cojo el
paraguas". Ahora bien, de las dos premisas: "Si llueve, cojo el paraguas" y "Cojo el
paraguas", no puedo concluir con validez formal "Llueve": si he cogido el paraguas era
porque lo llevaba a arreglar.

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