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Bien Hecho
Comportamiento Organizacional.
Fecha: 26 de abril de 2016.
Resumen:
Su título hace referencia a la frase en ingles que se usa con las ballenas
asesinas (orcas) del Sea World, ¡Whale Done! hace referencia al proceso de
entrenamiento que reciben estas.
La novela inicia con las vacaciones de Wes Kingsley un directivo que tenía
problemas para causar mejor impacto en sus relaciones laborales y con su
familia, al ser persuadido de asistir al espectáculo de una ballena, Wes queda
asombrado al observar a estas increíbles ballenas saltar y hundirse en el agua,
e incluso llevando a sus entrenadores sobre el lomo, un hecho donde es
ímpetu hacerse la siguiente pregunta ¿Cómo las habían entrenado para
realizar semejantes hazañas y experimentar, además un placer tan evidente?.
Dave el hombre del espectáculo hizo saber a Wes que el verdadero entrenador
era Shamu la ballena, ¿me está queriendo diciendo que a usted lo entreno un
animal? - Pregunto Wes con incredibilidad.
Shamu es una de las orcas más grandes que viven en parques zoológicos. En
cuanto a quien entrena a quien, se lo diré de esta manera: cuando uno está
tratando con un animal que pesa más de 5000 kilos y no habla su idioma, es
preciso aprender mucho.
Shamu nos enseñó a ser pacientes; Shamu no iba a hacer nada que yo u otro
entrenador le pidiera sino cuando nos tuviera confianza. Lo único que hacemos
es cerciorarnos de que no pase hambre; luego nos metemos al agua y jugamos
con ella hasta que esté convencida de que no queremos hacerle ningún daño.
Toma mucho tiempo construir una relación de confianza y amistad con cada
una de las ballenas – comento Dave -. Esa confianza y amistad son la base del
espectáculo que usted acaba de ver.
Hasta este punto quedaba entendido por Wes que si no quiere alentar un
comportamiento inapropiado, no se debe gastar mucho tiempo en el, en vez de
eso la energía se debe redireccionar. Después del redireccionamiento, se debe
procurar detectar algo que hace bien para poder poner énfasis en eso y
recompensarlo con algo que le agrade.
Otro de los puntos importantes que Wes platico con Anne es que uno nunca
debe de dar respuestas, ¡Bien Hecho! De una forma mecánica. Si la gente
sospecha que las respuestas positivas no son sinceras, tómese el tiempo
necesario para demostrar lo contrario. Anticipe la reacción de su equipo y sea
honesto con ellos. Admita que ha sido demasiado negativo y que quiere
cambiar de actitud.
Con el tiempo cuando todo iba mejorando; Wes se dio cuenta de que había
hecho bien en no desistir al miedo que supondría un fracaso de la operación,
su familia funcionaba muy bien, habían transmitido a conocidos y amigos la
técnica del ¡Bien Hecho! Y habían contribuido en mejorar las relaciones de los
demás. Esas eran razones para sentirse orgulloso por un logro.
Me entristeció darme cuenta lo lejos que estoy de aplicar lo que dice este libro
en mi vida personal, ya que cuando dejamos de ser bebes y nuestros padres
ya no nos aplauden por cada cosa que hacemos, entramos en un proceso en el
que solo resalta lo negativo de las cosas.
Cuando tenga mis hijos, sé que voy tratar de que se porten bien, que sigan mis
instrucciones al pie de la letra y cuando cometan algo incorrecto llamarles la
atención para que corrijan sus errores, pero también tratare de aplaudirles cada
cosa buena que hagan sin importar que sea o qué edad tengan.