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2023
Personajes:
Dorothy
Espantapájaros
Hombre/Mujer de Hojalata
León
Brujo Malo del Oeste
Glinda
Mago de Oz: Voz en Off
Narrador/a: Voz en Off
Libreto:
Adaptación libre de “El Mago de Oz” hecha por Abejas Theater
Escena 1
DIAPOSITIVA 1
DIAPOSITIVA 2
Narrador/a: Hace muchos años, cuando ninguno de nosotros había nacido, cuando no había televisión,
cuando no había tránsito en las calles o cuando no había contaminación, la gente contaba cuentos que les
ayudaban a tener hermosos sueños… Eran cuentos tan fantásticos como este. Dorothy vivía en medio de
las grandes praderas de Kansas con su tío Henry, su tía Emma y su perro Totó. Ella disfrutaba mucho correr
por el campo. Sus tíos siempre le advertían que no llegara tarde porque, cuando oscureciera, podría
perderse. Un día como cualquiera, salió a jugar con su perro y el tiempo se pasó volando…
DIAPOSITIVA 3
Dorothy: ¿Soy la única que se pregunta si se puede viajar más allá del arcoíris? Siempre soñé con traspasar
esos curiosos colores. Hay gente que busca felicidad, mientras que hay gente con ganas de viajar sobre el
arcoíris.
2. SOBRE EL ARCOÍRIS
Dorothy: ¡Uh! Es tarde y mis tíos seguros están muy preocupados. (En tono preocupado) Voy a ir a casa, el
cielo está cada vez más negro y parece que se acerca una tormenta.
Se cierra el telón. Al abrirse está la casa a un lado y Dorothy entra por el otro. Se escuchan ruidos de viento
fuerte aumentando gradualmente. Dorothy mira al cielo.
DIAPOSITIVA 4
3. VIENTO FUERTE
Dorothy corre y sale de escena por un costado… Su casa empieza a girar. Se cierra el telón.
Escena 2
DIAPOSITIVA 5
Narradora: El tornado llevó a Dorothy y su perro Totó a una tierra desconocida para ellos, llena de colores.
La casa finalmente aterriza, y Dorothy sale de ella. Glinda está a un lado de la casa, ríe y aplaude.
Dorothy: ¡Mi casa! ¿Dónde estoy? ¿Quién sos vos? ¿Qué es este lugar?
Glinda: Yo soy la Bruja buena del Norte, Glinda, y estás en el Reino de Oz. ¡Bienvenida! Estamos muy
afortunados de tenerte acá presente con nosotros.
Glinda: ¡Bienvenida a tu casa, por supuesto! El País de Oz te abre las puertas, y todos los habitantes de Oz
vamos a estar eternamente agradecidos por haber eliminado a la Bruja del Este con tu casa. ¡Sos muy
valiente!
Dorothy: ¡No! ¡Yo no soy valiente! Fue sin querer… yo no quería lastimarla. Glinda, ¿nos ayudas a volver a
casa? Mis tíos seguramente me extrañan y yo los extraño a ellos. Daría cualquier cosa por salir de acá
enseguida, pero… ¿cuál es el camino de vuelta a Kansas? No puedo volver de la forma en que vine.
Glinda: Acá te vamos a tratar como si estuvieras en casa. ¡Ésta es tu nueva casa!
Dorothy: Entiendo que estén muy agradecidos por haber eliminado sin querer a la Bruja del Este y que
quieran ser generosos y hospitalarios conmigo, pero yo ya tengo una casa. ¡Mis tíos me están esperando
muy preocupados! Ya le dije que no puedo volver como vine… necesito que me ayudes.
Glinda: Está bien, Dorothy. Es cierto que no podés volver de la forma en que viniste, pero siempre hay una
forma para todo. ¡Mi corona mágica debe tener la respuesta! (Se saca la corona y la escucha. Se la vuelve a
poner) Lo que tenés que hacer es ver al todopoderoso Mago de Oz, que vive en la Ciudad Esmeralda.
Glinda: Esperá... me olvidaba de algo. (Saca unos zapatos rojos de un costado del escenario) Tomá, estos
zapatos son mágicos y pueden ayudarte en tu aventura. ¡Vas a tener que caminar un montón! No debes
sacarte esos zapatos ni por un solo momento.
Narrador/a: Un ser extraño, vestido de negro, con un sombrero puntiagudo aparece para causar
problemas.
Entra lentamente el Brujo Malo del Oeste, del lado contrario al camino amarillo.
Brujo: No tan rápido, chiquitita. Esos zapatos son míos… ¡Me pertenecen a mí!
Dorothy: ¿Cómo?
Brujo: Mirá, nena, llevo toda la vida intentando conseguir esos zapatos y, ahora que mi hermana no los va
a necesitar, nadie va a impedir que los consiga.
Brujo: Tengo que irme. No te voy a sacar el ojo de encima… ¡Andate con cuidado! Ya sé quien sos y
quiénes te protegen, Dorothy. ¡No te vas a escapar!
Glinda: Él es así. En fin, ¡chau, Dorothy! Suerte en tu viaje, y mucho cuidado… tené consciencia de lo que
hacés… Este mundo tiene sus maravillas, pero también sus pesadillas…
Glinda desaparece por el camino de baldosas amarillas saliendo de escena. Dorothy mira a Totó,
confundida. Se preparan para la coreografía.
8. CAMINO AMARILLO
Escena 3
DIAPOSITIVA 6
Narradora: Luego de caminar por horas y horas siguiendo el camino amarillo, Dorothy se encuentra con
una inesperada sorpresa.
Espantapájaros colocado en su posición al fondo del escenario, colgado a un palo que lo fija al suelo y
enredado de una soga. Dorothy y Toto entran caminando por el camino amarillo. Dorothy tararea “Sobre el
Arcoíris”. De pronto, aparecen tres caminos distintos caminos y no saben por cuál ir.
Dorothy: (Hablándole a Totó) Lo único que me falta es que vos me hables, Totó.
Dorothy: (Se da vuelta, ve al Espantapájaros y se acerca a él) ¿Sos vos el que habla?
Espantapájaros: Sí, pero no puedo acordarme nada. Tengo la cabeza vacía; no tengo cerebro.
Espantapájaros: ¡Hola, Dorothy! Apenas me acuerdo de nada, no tengo cerebro, ni siquiera sé por qué
asusto a los pájaros que me gustan.
Espantapájaros: ¿Quién?
Dorothy: ¡Vos!
Espantapájaros: ¡Hooo-laa, Do-ro-thy! Apenas me acuerdo de nada, no tengo cerebro, ni siquiera sé por
qué asusto a los pájaros que me gustan.
Espantapájaros: ¿Quién?
Dorothy: ¡Vos!
Dorothy: (Al público) ¡Uf! Esto va a ser más difícil de lo que yo pensaba. Sin usar la cabeza no va a llegar a
nada la conversación. ¡Tiene que usar el cerebro!
Espantapájaros: (Entusiasmado al escuchar que Dorothy dijo “cerebro”) ¡Yo quiero un cerebro! ¡Yo quiero
un cerebro!
Al finalizar la canción el Espantapájaros y Dorothy regresan a sus lugares tras terminar la coreografía.
Espantapájaros: Dame una C. Dame una E. Dame una… ¿Cómo se escribe cerebro? Dame una C. Dame una
E. Dame una…
Dorothy: Voy a Ciudad Esmeralda a ver a un tal Mago de Oz. Él me va a ayudar a mí y a Totó a volver a casa
y puede ayudarte a vos a conseguir un cerebro, ¿o no? ¿Me acompañás?
Espantapájaros: ¡Sí! Yo quiero tener un cerebro como todo el mundo y que no me llaman tonto o necio.
Quiero un cerebro muy grande; ¡lleno de ideas geniales! Por favor, Dorothy, llevame con vos.
Escena 4
DIAPOSITIVA 7
Se abre el telón. Aparece la Mujer de Hojalata al fondo del escenario. Dorothy y el Espantapájaros entran a
escena por el camino amarillo.
Mujer de Hojalata: (En forma metálica y casi sin poder hablar) ¡Ayuda! Ayuda, por favor. Ayúdenme.
Dorothy y el Espantapájaros voltean y se encuentran con la Mujer de Hojalata. Ambos corren hacia ella.
Mujer de Hojalata: Sí, no puedo moverme; estoy oxidada. Por favor, busquen una aceitera… Debe estar
por acá.
Espantapájaros: (Empieza a buscar por el lugar hasta que encuentra la aceitera) ¡Acá está!
Mujer de Hojalata: Gracias, chicos. Por fin puedo moverme. (En tono triste) Yo era la novia del Brujo del
Oeste, pero me enamoré de un aldeano y dejé mi trabajo. El Brujo se enojó mucho, me robó el corazón y
después me tiró agua encima; y acá estoy, sin corazón y oxidada.
Al finalizar la canción el Espantapájaros y Dorothy regresan a sus lugares tras terminar la coreografía.
Mujer de Hojalata: ¡Sin corazón no siento nada! ¡No deseo nada de verdad! Quiero un corazón grande.
Lleno de amor, de cariño… (Canta) Un corazón de melón, de melón, melón, melón, melón, melón…
¡Corazón!
Dorothy: Está bien, está bien. Nosotros vamos a Ciudad Esmeralda a ver al Mago de Oz. Él me va a ayudar
a mí a volver a casa, va a conseguir un cerebro para él y puede conseguirte un corazón para vos. ¿Nos
acompañás?
Todos salen de escena por el camino amarillo, alegres y tomados de los brazos.
Escena 5
DIAPOSITIVA 8
Dorothy, el Espantapájaros y la Mujer de Hojalata entran a escena. El León está escondido detrás de una
planta/roca, queriendo asustar a los chicos.
León: (Viendo a Totó, burlándose) ¡Oh! Un perrito encantador… Grrrrrr. ¿Tenés miedo, ¿eh? Soy el rey de
la selva. El animal más poderoso y con más valor; el más fuerte, el más temido. ¡El más feroz!
14. LADRIDO DE PERRO
Dorothy: ¿Qué pasa? Totó es un buen perro, ¡no le podés hacer nada!
Dorothy: ¿Miedo?
Espantapájaros: (Burlándose) ¡Ay! Tiene miedo. ¡Un León que tiene miedo de un perrito!
Dorothy: ¡Bueno, che! No te podés reír así de nadie… vos no tenés cerebro. Si el León tiene miedo
tenemos que ayudarlo a ser valiente.
Mujer de Hojalata: Vamos, León, con fuerza y a ser valiente. ¡No tenga miedo! ¡Demostrá tu valor!
León: ¡Grrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrr!
Dorothy: ¡Uf! Con tan poca energía no vamos a llegar a ninguna parte. ¡Hay que ser más valiente!
León: ¡Yo quiero ser valiente! Soy el más cobarde; me dan miedo todos los peligros… ¡Yo quiero ser
valiente!
Escena 6
DIAPOSITIVA 9
Entran a escena por el camino amarillo. Antes de llegar al centro del escenario, Dorothy los detiene con las
manos.
Dorothy: ¡Un momento! Amigos, antes de seguir les tengo que advertir de un peligro.
Dorothy: Quiere sacarme los zapatos que me dio Glinda, pero yo los necesito para volver a casa.
Mujer de Hojalata: No sufras Dorothy, nadie te va a sacar esos zapatos. A mí ya me sacó una vez el
corazón y no voy a volver a dejar que robe nada ni a mí ni a nadie.
Espantapájaros: ¡Muy bien dicho, Hojalata! Ni siquiera ese brujo, ¿verdad León?
Escena 7
DIAPOSITIVA 10
Dorothy: ¡Ahí está la Ciudad Esmeralda! Por fin voy a poder volver a casa.
Dorothy y el León se acuestan a dormir. Se asoma el Brujo del Oeste, nadie lo ve hasta que habla.
Brujo: ¡Ja, ja, ja! Ahora sí que voy a poder recuperar los zapatos colorados.
Mujer de Hojalata: (Al Espantapájaros) ¡No! ¡La Bruja del Oeste los hechizó! Están hechos de carne y
hueso; por eso vos y yo seguimos despiertos.
Mujer de Hojalata: (Al Espantapájaros) ¡Los zapatos pesan un montón! No creo que podamos llevarlos…
¡Es imposible llevarlos!
Espantapájaros: (Asustado) Ahora que me doy cuenta… ¡no podemos luchar contra una bruja!
Espantapájaros: Ni… ¡Tengo una idea! ¡Agua! Tenemos que conseguir que llueva. El agua va a romper el
hechizo de la bruja, seguro. ¿Pero cómo hacer que llueva? (Piensa) ¡Ya está! Cantemos:
Empieza a llover.
18. LLUVIA
Dorothy y el León se despiertan lentamente, y la lluvia para.
Narradora: El Espantapájaros y la Mujer de Hojalata la arruinaron los planes del malvado Brujo del Oeste,
pero el no iba a rendirse tan fácilmente. Esta no va a ser la última vez que aparezca en esta aventura…
Espantapájaros: ¡Dorothy! ¡León! Se habían quedado dormidos, fue un truco del Brujo del Oeste. ¡Pero el
agua ha deshecho el hechizo!
Dorothy: La aceitera, rápido. La Mujer de Hojalata se volvió quedar dura. (La busca y la encuentra) Acá
está…
Mujer de Hojalata: En mis articulaciones… ¡en la boca! También en mis párpados, mis brazos, mis pies…
¡Qué bien! Muchas gracias.
Espantapájaros: Vamos, hay que llegar a Ciudad Esmeralda. ¡Estamos muy cerca!
Mujer de Hojalata: ¡Eh! ¿Pero qué me pasa? Todo me está dando vueltas.
Brujo: (En tono de falsa preocupación, burlándose) Tía Emma y Henry seguro están muy preocupados. ¡Oh!
¡Qué pena! Y el Espantapájaros no tiene cerebro. ¡Oh! Qué desgracia. Y la otra sin corazón… (Ríe) Vaya
desastre. ¡Vaya grupo de amigos!
Brujo: Está bien. Si no me los das a las buenas, va a ser a las malas.
21. TRUENOS
Brujo: Espectros y bestias furibundas; ¡Quedan todos invitados! ¡Traigan los zapatos colorados! (Silencio)
¡Están todos convocados! ¡Denme los zapatos deseados!
Brujo: ¿Qué?
El León le pega y el Brujo tambalea por el escenario. El León tira a el Brujo al piso y luchan todos contra el.
Todos arrastran a el Brujo desmayado fuera de escena.
Dorothy: ¡Muy bien! Sólo falta llegar a Ciudad Esmeralda y hablar con el Mago de Oz.
Dorothy: Supongo que habrá que seguir el camino hasta que lleguemos.
Escena 8
DIAPOSITIVA 11
Narradora: El malvado Brujo no volvió a cruzarse en su camino. Empezó a tener miedo de Dorothy y sus
amigos, por lo que prefirió que Dorothy se quedara con los zapatos. Las personas de Ciudad Esmeralda
recibieron a los amigos muy felices, y los llevaron hasta el castillo del gran Mago de Oz.
Se abre el telón dentro del palacio del Mago de Oz. Todos entran en escena corriendo.
Mago de Oz: ¡Yo soy El Mago de Oz! ¿Quiénes son y a qué vienen?
Dorothy: ¡Señor Mago! Soy Dorothy y vine junto con mis amigos a pedirte ayuda.
Mago de Oz: Todos pueden tener cerebro. Toda criatura que se arrastra por la tierra o se escurre por los
mares tiene cerebro. En mi tierra natal existen universidades, donde los hombres van a convertirse en
eruditos. Al salir de ahí… piensan en cosas grandes y profundas. Su cerebro es igual al tuyo, solo que ellos
tienen un diploma y vos no. ¡Pero en realidad nadie necesita un título de reconocimiento! Todos tenemos
un cerebro, y vos también.
Mago de Oz: Claro que sí. Estoy convencido de que vivir mucho y acumular experiencias es la única forma
de volverse sabio…
León: ¿Y qué pasa con mi valor? Sin él sólo sería un león cobarde.
Mago de Oz: Vos sos víctima de una confusión de ideas. Vivís bajo una fase de impresión… En fin, ya tenés
todo el valor que uno necesita.
León: ¿Seguro?
Mago de Oz: Sí, solo tenés que confiar más en vos… todos le tememos a algo, pero el valor consiste en
enfrentarlo.
León: Tal vez pueda afrontar los peligros, ¡pero siento mucho miedo!
Mago de Oz: ¡Está más que bien sentir miedo y temor! Eso nos permite pasar un obstáculo cada vez que lo
vencemos.
Mujer de Hojalata: ¡Jamás, nunca! Ellos son mis amigos y nunca los voy a olvidar.
Dorothy: Extraño tanto a mi familia, mis tíos, mis amigos, ¡mi casa! (Llora desconsoladamente)
Todos salen de escena mientras Dorothy reflexiona. De pronto, entra a escena Glinda.
Glinda: ¡Hola!
Dorothy: ¡Glinda!
Dorothy: Ah, los zapatos. Sí, claro. Me dijiste que los zapatos me ayudarían a volver a casa, pero…
Glinda: ¡Pero nada! Cerrá los ojos y repetí siete veces: “No hay lugar como el hogar”.
Dorothy: (Cierra los ojos y repite siete veces la frase) “No hay lugar como el hogar.” (Abre los ojos)
Glinda: Ahora da tres golpes con los zapatos. Uno. Dos. Tres.
Dorothy: ¡Ahora sí! Estoy empezando a sentir que vuelo… Infinitas gracias, Glinda.
Se cierra el telón.
Narradora: Y así fue como Dorothy vivió la mejor aventura de su vida. Fue feliz para siempre en su casa de
Kansas con Totó y sus tíos. ¡Ah! El Espantapájaros, el León y la Mujer de Hojalata también fueron muy
felices. Y cada noche, en sus sueños, Dorothy los veía de nuevo.