UNIVERSIDAD TECNICA DE MACHALA

Facultad de Ciencias Sociales

Carrera de Derecho

Comunicación académica

Docente:

Título: ¿Cómo se redacta correctamente una Tesis?

Nombre del autor

María Fernanda Pizanan Bermeo

Fecha

1 de Febrero del 2024

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Introducción

La tesis ha sido una temática arraigada en el contexto educativo a lo largo de varios

años. A pesar de la abundancia de tesis accesibles en bibliotecas, internet y otros recursos,
resulta sorprendente la escasez de obras que profundicen en la esencia de la correcta
elaboración de una tesis. En este vasto repositorio de conocimiento, la orientación sobre la
estructuración efectiva y el desarrollo de una tesis emerge como una necesidad eminente.

Este ensayo se embarca en la tarea de abordar este significativo asunto,

proporcionando no solo un análisis teórico, sino también una guía para aquellos que
emprenden el desafiante viaje académico. Los elementos esenciales, desde su cambiante
estructura, hasta su propósito, serán explorados, revelando los secretos para construir no solo
una tesis, sino una contribución valiosa al conocimiento académico en medio de un mar de
información.

En este extenso depósito de conocimiento, el objetivo es revelar las claves para

construir no solo una tesis, sino una contribución valiosa al panorama académico. Resaltando
la necesidad de trascender la simple formalidad, convirtiéndose en agentes activos en la
evolución del pensamiento y la sociedad. El ensayo aboga por la originalidad y la claridad
conceptual como impulsores esenciales para superar las expectativas académicas y generar un
impacto duradero en la comunidad y la sociedad en general.

Desarrollo

La redacción de tesis ha desempeñado un papel crucial en la consolidación y

transmisión del conocimiento a lo largo de la historia. Este formato ha sido empleado por la
humanidad como una herramienta para formalizar, compartir y preservar el saber acumulado.
A lo largo de su extensa historia, la tesis ha desarrollado una estructura o esqueleto que ha
experimentado cambios constantes, evidenciando así su naturaleza dinámica y su capacidad
para adoptar diversas formas a lo largo del tiempo. Esta dinámica se refleja en la flexibilidad
curricular, fundamental para los programas académicos, que también se manifiesta en la
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estructura de la tesis, la cual debe adaptarse a las cambiantes demandas académicas. (Ortiz,
2018, pág. 111).

Comprender la estructura y establecer los parámetros que abordará la tesis es crucial

al iniciar su redacción. Sin embargo, la verdadera importancia yace en el motivo y propósito
que el autor tiene al escribir su tesis. No se trata simplemente de plasmar palabras en papel;
por el contrario, en la escritura científica, es esencial "tener alguna observación nueva o idea
útil que comunicar a los demás" (Ramón, 1997, pág. 127). Es absurdo pretender escribir sin
contribuir positivamente a la cuestión en consideración. En este sentido, escribir una tesis va
más allá de la acción misma de redactar; implica tener una razón, una idea fundamentada que
se desea expresar y compartir con los demás, contribuyendo así al avance del conocimiento
en el área.

En el proceso de redacción, resulta sustancial comprender que la escritura va más allá

de la mera comunicación, puesto que, este es un proceso de exploración y desarrollo del
pensamiento, especialmente en una tesis, donde la revisión sistemática de la literatura juega
un papel crucial al garantizar la objetividad y replicabilidad del estudio (Serrano, 2014, pág.
101). Aunque este método establece una base sólida al analizar diversas fuentes, es
fundamental destacar la importancia de la originalidad en la escritura académica. Es decir, el
contenido de una tesis no debe limitarse a repetir información existente, sino aspirar a ofrecer
nuevas perspectivas y contribuciones al conocimiento.

La redacción de una tesis no es solo un acto académico, sino también un proceso de

comunicación efectiva. La habilidad para transmitir claramente las ideas es esencial para que
la tesis cumpla su propósito más allá de la academia. En este sentido, la elección del lenguaje,
la estructura y la claridad conceptual son elementos cruciales. La redacción debe ser accesible
para un público amplio, permitiendo que tanto expertos como personas no especializadas
comprendan la relevancia y el impacto de la investigación. La capacidad de traducir
conceptos complejos en un lenguaje comprensible no solo facilita la comprensión, sino que
también amplifica el alcance y la influencia de la tesis en la sociedad en general (Estupiñán &
Olave, 2021, pág. 140).
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Asimismo, la redacción de una tesis se convierte en una herramienta poderosa para la

promoción del cambio y la conciencia social. Los investigadores tienen la responsabilidad de
abordar problemas actuales y proponer soluciones basadas en evidencia. La tesis, como
medio de expresión, puede influir en políticas, cambiar percepciones y motivar acciones
concretas (Zapata, 2005, pág. 110). En este contexto, el proceso de redacción debe
trascender la simple presentación de datos y teorías, incorporando una narrativa persuasiva
que motive y genere inspiración, no solo dentro del ámbito académico, sino en un espectro
más amplio. La redacción, por lo tanto, se convierte en un vehículo para la movilización y el
cambio, transformando la investigación en una fuerza positiva y proactiva en la mejora del
entorno social.

Por último, la redacción de una tesis implica la habilidad de sintetizar información

compleja de manera coherente y persuasiva. La capacidad para destacar los hallazgos más
relevantes y presentar argumentos convincentes es crucial. En este sentido, la redacción debe
ser concisa pero impactante, capturando la esencia de la investigación sin perder la
profundidad conceptual. Esta destreza de síntesis no solo facilita la comprensión, sino que
también resalta la importancia y la originalidad del trabajo, contribuyendo así a su
reconocimiento en la comunidad académica y, en última instancia, en la sociedad.

Conclusión

Concluyendo, la redacción de una tesis no es simplemente un ejercicio, sino un

compromiso intelectual que requiere una profunda reflexión y una contribución significativa
al campo de estudio. Al abordar este desafío, es esencial que los estudiantes no solo se
centren en la estructura y los aspectos técnicos, sino que también busquen una motivación
intrínseca que impulse la investigación y la escritura. Una tesis bien elaborada no solo sigue
las normas, sino que también deja una marca única al aportar nuevas ideas y enriquecer el
conocimiento existente.

En última instancia, la redacción de una tesis se convierte en un acto valioso cuando

se entiende como una oportunidad para explorar, cuestionar y ampliar los límites del
conocimiento. No se trata solo de cumplir con un requisito, sino de convertirse en un agente
activo en la evolución del pensamiento. En este proceso, la originalidad y la innovación se
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convierten en elementos esenciales que elevan la calidad de la tesis, convirtiéndola en una

contribución auténtica y duradera al panorama. Así, la redacción de una tesis no solo se trata
de comunicar información, sino de forjar un legado intelectual que resuene en la comunidad y
aporte a la sociedad.
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Referencias

Estupiñán, M., & Olave, G. (2021). Redacción y publicación de artículos científicos: enfoque
discursivo. Ecoe Ediciones.
Ortiz, A. (2018). La configuración de la tesis doctoral. Su estructura, redacción, defensa y
publicación. Revista Latinoamericana de Estudios Educativos (Colombia), 14(2),
102-131.
Ramón, S. (1997). Reglas y consejos sobre investigación científica. Los tónicos de la
voluntad. Madrid, España: Centro Virtual Cervante.
Serrano, S. (2014). La lectura, la escritura y el pensamiento. A Función epistémica e
implicaciones pedagógicas. Lenguaje, 42(1), 97-124.
Zapata, O. (2005). Metodología de la investigación: Para elaborar tesis e investigaciones
socioeducativas. Editorial Pax México.