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2022

Daniela Campusano Varas


Psicopedagogía
30-5-2022
¿Existe realmente el TDAH?
¿Que entendemos por TDAH?

En primer lugar, el trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH) se le conoce como un
trastorno del neurodesarrollo, es decir, un conjunto de dificultades cognitivas que afectan la maduración
neurológica normal, siendo más frecuente en la niñez y esta puede perdurar hasta la etapa adulta. Este
trastorno es clasificado comúnmente como un trastorno de conducta en los niños, también algunos
estudios señalan que existen diferencias en el diagnostico según el género, ya que los niños suelen
presentar en mayor porcentaje esta alteración cognitivo-conductual.

¿Cuáles son los signos o síntomas del TDAH?

Los trastornos por déficit de atención e hiperactividad (TDAH) se pueden evidenciar mediante las
siguientes señales: Disminución de la atención, Impulsividad E Hiperactividad.

En realidad, es mucho más que un trastorno, es un síndrome de dimensiones enormes, que alcanza una
gran cantidad de facetas y se debería denominar “Síndrome de Déficit de Atención e Hiperactividad
(SDAHA) con mucha más propiedad que TDAH. (Pascual-Castroviejo, 2008)

Es normal que a los niños les cueste concentrarse y comportarse bien de vez en cuando. Sin embargo, los
niños con TDAH no van dejando atrás esas conductas a medida que crecen. Los síntomas continúan y
pueden provocar dificultades académicas, en su hogar o con los amigos (Información básica sobre el
TDAH, 2019b).

Un niño con TDAH puede presentar alguna o varias de las siguientes conductas: Fantasear mucho, olvidar
o perder cosas regularmente, moverse nerviosamente, hablar mucho, respetar turnos, entre otros.

Pese a que pueda existir sospecha clínica en niños de menos de 6 años el diagnóstico de TDAH requiere
haber superado esta edad. Además, es frecuente que el TDAH se reconozca en los niños cuando comienza
la educación primaria, coincidiendo con dificultades en el rendimiento escolar y la presentación de
disfunciones sociales (2018).

¿Cuáles son las posibles causas del TDAH?

Debido a la complejidad del TDAH, no puede identificarse una sola causa. Se considera que es un
trastorno heterogéneo con diferentes subtipos, resultado de las distintas combinaciones de diversos
factores de riesgo que actúan conjuntamente.
Se consideran factores ambientales del TDAH: los traumatismos craneoencefálicos en la infancia, las
infecciones del sistema nervioso central, la prematuridad, la encefalopatía hipóxico-isquémica, el bajo
peso al nacimiento o el consumo de tóxicos como el alcohol o el tabaco en el embarazo. El TDAH tiene
una heredabilidad del 76%. Algunos estudios han demostrado que los familiares de personas con TDAH
tienen un riesgo cinco veces mayor que las personas sin antecedentes familiares de este trastorno.
También es importante señalar que los resultados de investigaciones no respaldan las opiniones
populares de que el TDAH se origina por comer demasiada azúcar, ver demasiada televisión, por las
técnicas de crianza o por factores sociales y ambientales, como la pobreza o el caos familiar. (Información
básica sobre el TDAH, 2019)

Entonces ¿podemos asegurar que el TDAH es un trastorno real y no una invención para sacar provecho?

La respuesta es sí, independiente de los detractores de este trastorno, ya que se puede afirmar y
contrastar que la denominación de lo que hoy en día conocemos como «Trastorno por Déficit de Atención
e Hiperactividad» ha ido evolucionando según el síntoma al que se le ha dado mayor importancia en las
innumerables investigaciones científicas a través de más de 110 años. Esta condición ha obtenido varias
denominaciones durante los últimos años como: «Daño cerebral», «Daño Cerebral Mínimo» y «Disfunción
Cerebral Mínima».

La controversia en torno al TDAH mantiene dividida, sin sentido, a la comunidad científica, aunque la
corriente más contraria sea una pequeñísima parte de esta comunidad. Esta corriente argumenta que hay
una falta de evidencia científica en torno a «su diagnóstico», y que hay falta de unificación criterios y
herramientas fiables para realizarlo. Tampoco niegan radicalmente su uso. En definitiva, en todas sus
argumentaciones no encontramos que rechacen categóricamente la existencia del trastorno.
En muchas ocasiones se realiza un diagnóstico sin tener en cuenta los estilos educativos, familiares, los
trastornos de aprendizaje u otros trastornos, que provocan síntomas que fácilmente se pueden confundir
con los del TDAH. (Decir que el TDAH no existe es una irresponsabilidad y una temeridad., 2018)

Psicopedagogía y el tdah

Los niños con trastorno por déficit de atención/hiperactividad (TDAH) presentan alteraciones en los
mecanismos atencionales y en los procesos de control inhibitorio (impulsividad e hiperactividad), que
afectan de distinta manera a su rendimiento académico, socioemocional y conductual, por lo que es
fundamental la consideración de estrategias de intervención en el ámbito psicopedagógico que puedan
incidir de forma favorable en el curso evolutivo de los afectados.
Las fases de la intervención psicopedagógica deben abarcar tanto al niño como a la familia y el colegio. El
entrenamiento neurocognitivo se centra en el niño, basado en programas de entrenamiento de las
funciones ejecutivas y en las actuaciones sobre el ámbito académico, conductual y socioafectivo. Los
programas de modificación de conducta son complementarios y en muchas ocasiones mejoran el
comportamiento comprometido en los niños con TDAH. Las orientaciones psicopedagógicas en la escuela
deben considerarse necesarias para una intervención eficaz en el entorno académico. (Viguera Editores
S.L.U., 2013)

Es importante valorar el TDAH desde todas las dimensiones (social, cognitiva, comportamental, etc.),
además de indagar sobre los posibles trastornos comórbidos que aparezcan, para así poder planificar
una intervención más ajustada (tanto psicopedagógica como farmacológica).

La participación de la familia durante el proceso de evaluación y especialmente en la intervención


resulta absolutamente necesaria. Será por ello importante implicarles durante todo el proceso,
proporcionarles información en torno al trastorno, su conceptualización, su etiología, diagnóstico y
pronóstico, así como trabajar las expectativas.

Por lo que respecta al psicopedagogo, va a tener igualmente un papel preponderante en la evaluación y


tratamiento. Desde el contexto escolar obtendremos información significativa en torno a los aspectos
sociales (especialmente de interrelación), académicos (nivel de competencia curricular, estilos de
aprendizaje, nivel de atención, comportamiento/s disruptivos/s en el aula, etc.).

Por último, resaltar que es necesario derivar a todos los niños susceptibles de padecer un TDAH al
servicio de neuropediatría del hospital más cercano, con la finalidad de que estimen la conveniencia de
combinar, junto con la intervención psicopedagógica, tratamiento farmacológico. Hay que resaltar que
además del tratamiento de elección para el TDAH con psicoestimulante (normalmente metilfenidato),
existen otros tratamientos farmacológicos para estos niños.

La intervención psicopedagógica de los niños con TDAH debe contemplar la individualización del
tratamiento dentro de una metodología multidisciplinar, teniendo en cuenta todos los contextos en los
que se desarrolla el niño, su rendimiento cognitivo y las intervenciones farmacológicas apropiadas en
cada caso.

Bibliografía
Pascual-Castroviejo, I. (2008). Trastornos por déficit de atención e hiperactividad (TDAH). Asociación
Española de Pediatría y Sociedad Española de Neurología Pediátrica. Protocolos de Neurología, 12, 140-
150.

Félix Mateo, V. (2006). Recursos para el diagnóstico psicopedagógico del TDAH y comorbilidades.

Información básica sobre el TDAH. (2019b, agosto 15). Centers for Disease Control and
Prevention.https://www.cdc.gov/ncbddd/spanish/adhd/facts.html#:%7E:text=Es%20normal%20que%20a
%20los,hogar%20o%20con%20los%20amigos.

P. (2018, 29 septiembre). TRASTORNO DE DÉFICIT DE ATENCIÓN E HIPERACTIVIDAD (TDAH). Psicología en


Oaxaca. https://psicologaazalea.wordpress.com/2018/10/01/trastorno-de-deficit-de-atencion-e-
hiperactividad-tdah/

Decir que el TDAH no existe es una irresponsabilidad y una temeridad. (2018).


https://www.fundacioncadah.org/. https://www.fundacioncadah.org/web/noticia/decir-que-el-tdah-no-
existe-es-una-irresponsabilidad-y-una-temeridad.html

E., M., & S, J. (2017, 23 octubre). El TDAH, ¿fraude o realidad? Red Cenit. https://www.redcenit.com/el-
fraude-del-tdah/

P. (2018, 29 septiembre). TRASTORNO DE DÉFICIT DE ATENCIÓN E HIPERACTIVIDAD (TDAH). Psicología en


Oaxaca. https://psicologaazalea.wordpress.com/2018/10/01/trastorno-de-deficit-de-atencion-e-
hiperactividad-tdah/

C. (2019, 11 mayo). Comorbilidades del TDAH. CCADIP Oficial.


https://www.ccadip.com/post/comorbilidades-del-tdah

2022 Viguera Editores S.L.U. (2013, 6 septiembre). Intervención psicopedagógica en el trastorno por
déficit de atención/hiperactividad: Neurología.com. neurologia.com.
https://www.neurologia.com/articulo/2013290#:%7E:text=La%20intervenci%C3%B3n%20psicopedag
%C3%B3gica%20de%20los,farmacol%C3%B3gicas%20apropiadas%20en%20cada%20caso.

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