Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
LEY ORGÁNICA DE LA
LIBERTAD RELIGIOSA. ACUERDOS CON LA IGLESIA CATÓLICA. ACUERDOS DE COOPERACIÓN.
El joven Estado laico que nacía en España después de la Constitución de 1978 era consciente
de dos cosas:
− La existencia de una Iglesia Católica como confesión religiosa muy fuerte, que se había
visto favorecida por el llamado consenso constitucional (acuerdo de todos los partidos
políticos para llevar a cabo una constitución que contentase a todos los españoles). En
el artículo 16 se habían concedido ciertas prerrogativas a esta confesión religiosa.
Con respecto a la primera cuestión, el Estado no quería romper las relaciones con la Iglesia
Católica. Continuó la cooperación y sustituyó el viejo concordato franquista de 1953 por unos
acuerdos parciales sobre temas concretos para adaptar estas relaciones a la normativa
constitucional. Sin embargo, estos acuerdos se habían elaborado por parte de la Iglesia
Católica en paralelo a la Constitución, llegando incluso a aprobarse antes que ella. No obstante
se ratificaron después. La Constitución española se aprueba el 28 de diciembre de 1978 y el 3
de enero de 1979 se promulgan los acuerdos, para entenderse que estaban de acuerdo con la
Constitución. Sin embargo, estos acuerdos habían sido elaborados de forma ambigua o muy
general en alguno de sus contenidos para que precisamente no pudiese considerarse
inconstitucional. Estos contenidos ambiguos y problemáticos eran compatibles con la
Constitución desde un carácter transitorio (financiación y enseñanza).
Estos cuatro acuerdos en conjunto son como un concordato, pero tienen cada uno un valor
independiente y se votaron en las Cámaras de manera individual. Tienen una unidad moral
entre ellos.
Los planes educativos en los niveles de Educación Preescolar, de Educación General Básica
(EGB) y de Bachillerato Unificado Polivalente (BUP) y Grados de Formación Profesional
correspondientes a los alumnos de las mismas edades incluirán la enseñanza de la religión
católica en todos los Centros de educación, en condiciones equiparables a las demás disciplinas
fundamentales.
Por todo esto fue imposible que el resto de las religiones se pusieran a la altura de la Iglesia
Católica. Lo que sí lograron fue que todas las materias objeto de la relación entre ambos fue
objeto de regulación por parte del Estado. Pero, como contrapartida, esta regulación implicaba
un mayor control por parte del Estado.
Se caracterizan por:
− Adquieren personalidad jurídica: son sujetos religiosos reconocidos por el Estado.
− Dejan de estar sometidos al Derecho común y obtienen el derecho especial favorable
(Art. 2 LOLR).
Artículo segundo.
Uno. La libertad religiosa y de culto garantizada por la Constitución comprende, con la
consiguiente inmunidad de coacción, el derecho de toda persona a: a) Profesar las
creencias religiosas que libremente elija o no profesar ninguna; cambiar de
confesión o abandonar la que tenía; manifestar libremente sus propias creencias
religiosas o la ausencia de las mismas, o abstenerse de declarar sobre ellas.
b) Practicar los actos de culto y recibir asistencia religiosa de su propia confesión;
conmemorar sus festividades, celebrar sus ritos matrimoniales; recibir sepultura digna,
sin discriminación por motivos religiosos, y no ser obligado a practicar actos de culto o
a recibir asistencia religiosa contraria a sus convicciones personales. c) Recibir e
impartir enseñanza e información religiosa de toda índole, ya sea oralmente, por
escrito o por cualquier otro procedimiento; elegir para sí, y para los menores no
emancipados e incapacitados, bajo su dependencia, dentro y fuera del ámbito escolar,
la educación religiosa y moral que esté de acuerdo con sus propias convicciones.
d) Reunirse o manifestarse públicamente con fines religiosos y asociarse para
desarrollar comunitariamente sus actividades religiosas de conformidad con el
ordenamiento jurídico general y lo establecido en la presente Ley Orgánica.
Dos. Asimismo comprende el derecho de las Iglesias, Confesiones y Comunidades
religiosas a establecer lugares de culto o de reunión con fines religiosos, a designar y
formar a sus ministros, a divulgar y propagar su propio credo, y a mantener relaciones
con sus propias organizaciones o con otras confesiones religiosas, sea en territorio
nacional o en el extranjero.
Tres. Para la aplicación real y efectiva de estos derechos, los poderes públicos
adoptarán las medidas necesarias para facilitar la asistencia religiosa en los
establecimientos públicos, militares, hospitalarios, asistenciales, penitenciarios y otros
bajo su dependencia, así como la formación religiosa en centros docentes públicos.
− Los requisitos para poder inscribirse se encuentran en el Art. 5 LOLR, completados por
el Real Decreto de Funcionamiento de las Entidades Religiosas, de9 de noviembre de
1981, Art. 2.
Artículo quinto.
Tres. La cancelación de los asientos relativos a una determinada Entidad religiosa sólo
podrá llevarse a cabo a petición de sus órganos representativos o en cumplimiento de
sentencia judicial firme.
El Estado comprueba:
− Que está ante una asociación que nace con finalidad religiosa.
− Que esa asociación cumpla los requisitos propios de una confesión religiosa.
La decisión última la tiene el Ministerio de Justicia. Art. 4 RD. Si las confesiones religiosas
cumplen los requisitos del art. 5 de la Ley no se puede denegar la inscripción. Cuando el Estado
creía que se trataba de sectas religiosas (pseudo religiones, grupos destructivos), se denegaba
la inscripción (control previo).
Cuando no se cumple el requisito de fines religiosos (Art. 3.2 LOLR) también se deniega su
inscripción.
“Quedan fuera del ámbito de protección de la presente Ley las actividades, finalidades y
Entidades relacionadas con el estudio y experimentación de los fenómenos psíquicos o
parapsicológicos o la difusión de valores humanísticos o espiritualistas u otros fines análogos
ajenos a los religiosos.”
Artículo 2 RD:
− Credo: creencias a las que las personas se adhieren mediante la fe.
− Organización: estructura de la confesión para actuar en el tráfico jurídico.
− Culto: elemento que cohesiona a los fieles con su divinidad.
La regla general para la inscripción en el Registro de Entidades religiosas, quiebra para la Iglesia
Católica. Resolución de la Dirección General de Asuntos Religiosos de 11 marzo de 1982. Esto
sucede porque la Iglesia Católica es la única confesión con una regulación completa (Código
canónico).
Sin embargo, el notorio arraigo es un concepto jurídico indeterminado. Tuvo que ser
determinado por el Estado caso por caso. No se cuantifica el espacio, ni el tiempo. Solo se
decía que no era necesaria una configuración en términos absolutos, es decir, no era necesaria
que fuera establecida desde hace mucho tiempo en España y por todo el territorio. El número
de creyentes se tenía en cuenta y estaba determinado por:
− La complejidad orgánica de la confesión.
− Los problemas de adscripción de fieles.
− La poca facilidad que había existido en el derecho español para el desarrollo de las
confesiones.
Habrá que tener en cuenta, a juicio de la Comisión Asesora de Libertad religiosa, los siguientes
criterios para poner de manifiesto el arraigo de la confesión, la notoriedad de la existencia de
la identidad propia y diferenciada, la garantía de estabilidad y la garantía de permanencia hacia
el futuro:
− Historia de la confesión religiosa.
− Aportaciones a la formación institucional y cultural del Estado.
− Continuidad de la confesión en la historia.
− Previsión de su estabilidad futura.
− La implantación externa al propio Estado.
− Las dificultades de implantación en España.
En ningún caso se trata de dar privilegios a las confesiones religiosas, sino desarrollar el
derecho de libertad religiosa. También se puso de manifiesto que estos criterios no era preciso
que se dieran cumulativamente, es decir todos a la vez. Bastaba con que se diesen varios de
ellos.
El Estado, en relación a estos criterios, realizó una interpretación radical. Estableció muchas
trabas para las confesiones que pretendían alcanzar el notorio arraigo, sobre todo en el
concepto sociológico. Creó un concepto artificial del notorio arraigo en España y consideró que
solo tres religiones tenían notorio arraigo: protestantismo, judaísmo e islamismo. Les concedió
el notorio arraigo a estas religiones, en abstracto. Sin embargo, como la religión en abstracto
no es un sujeto jurídico, hubo que crear unas federaciones que agrupasen a estas religiones
como brazos jurídicos. Estas federaciones fueron las que se inscribieron en el Registro:
− Federación de Entidades Religiosas Evangélicas de España (FEREDE).
− Federación de Comunidades Israelitas (FCI).
− Comisión Islámica de España (CIE).
Otras entidades religiosas se añadieron a la FEREDE, porque así lo permitían sus estatutos.
Los acuerdos no se negociaron conjuntamente, ya que los islámicos estaban divididos entre:
− Federación Española de Entidades Religiosas Islámicas (FEERI), que recogía a los
chiitas.
− Unión de Comunidades Islámicas de España, que recogía a los sumitas.
Las negociaciones comenzaron con la FEREDE y con la FCI, ya que los islámicos tenían grandes
diferencias entre ellos. En febrero de 1990, ya estaban ultimados los pactos con los judíos y los
protestantes, aunque se decidió esperar al acuerdo con los musulmanes. El Consejo de Estado
obligó a modificar los artículos 10 y 13 (enseñanza y descanso sabático en la empresa privada).
− La enseñanza en centros privados concertados debía respetar el ideario del propio
centro.
− Respecto a judíos y adventistas del séptimo día (ninguno de ellos puede trabajar el
sábado), se planteó un problema respecto a la STC Margarita Costa (empleada de
limpieza que no quería trabajar en sábado).
Los acuerdos son prácticamente iguales. El de la CIE y FCI tienen 14 artículos, mientras que la
FEREDE, solo 12.
En estos dos artículos de diferencia se habla, tanto para musulmanes como para judíos, de:
− Matrimonio histórico.
− Productos alimenticios y cosméticos.
1. Normas de derecho común. Regulan normas que ya aparecen en la LOLR y otras normas.
2. Normas de derecho especial comunes . Ej.: la posibilidad de celebrar los ritos matrimoniales.
También son redundantes porque están contenidas en el artículo 2 de la LOLR.
3. Normas de derecho especial que reconocen derechos similares de carácter individual :
productos alimenticios y cosméticos. Son propias de cada creencia y sí son la esencia de los
acuerdos. Estas pequeñas diferencias son las que se justifican que cada creencia tuviese su
propio acuerdo.
Vemos que se tiende hacia una desigualdad que va en contra del artículo 14 sobre la base del
9.2 CE. Esto se entendió como una especie de paternalismo o sobreprotección del Estado
sobre ciertas religiones minoritarias.
Se puede decir, entonces, que se ha variado algo, o así lo parece, el notorio arraigo. No sean
vuelto a firmar acuerdos con confesiones religiosas minoritarias desde 1993, ni hay intención
de ello. La cooperación ya no es global. La CE obliga a cooperar, pero no especifica que deba
hacerse mediante acuerdos. El sentido de los acuerdos ha cambiado, ya no se conciben como
regulación de materia entre Estado y confesiones que culminan convirtiéndose en privilegios
para estas.
El conflicto de materia tampoco debe moverse siempre mediante acuerdo, sino que puede ser
una decisión unilateral del Estado que lleve a una solución. Los acuerdos dejan de ser normas
configuradoras del Estado español para convertirse en normas de gestión de intereses mutuos,
lo cual se acomoda mucho más al objetivo del estado laico que está plasmado en la CE,
debiendo contribuir a la plena realización del derecho de libertad de conciencia, en su visión
más personalista. Esta idea de concepto indeterminado de notorio arraigo se fue desarrollando
desde 1992 hasta aproximadamente 2015, año en el que se promulga el Real Decreto
593/2015, de 3 de julio que regula el notorio arraigo en España para dar una visión más exacta
sobre el mismo.
Es analizada en el mismo sitio y, de ser individualizada con identidad propia, sin confundirse
con ninguna otra, que tenga un domicilio y tenga una estructura, junto con los requisitos
mencionados del artículo 3 y 4 del Real
Decreto, se aprueba, dándole 10 días para subsanar posibles errores. El Ministro pide informe
a la Comisión
Asesora de Libertad Religiosa (no vinculante) y es quien dictamina la aceptación o no. Si a los 6
meses no se obtiene respuesta, el silencio administrativo es positivo: se entiende que se ha
otorgado el notorio arraigo. La cancelación del notorio arraigo opera de la misma forma y con
los mismos requisitos, habiendo perdido uno de ellos.
Los requisitos que la confesión ha de reunir son los siguientes (Art. 3 RD):
− Llevar inscrita en el Registro de Entidades Religiosas treinta años, salvo que la entidad
acredite un reconocimiento en el extranjero de, al menos, sesenta años de antigüedad
y lleve inscrita en el citado Registro durante un periodo de quince años.
− Acreditar su presencia en, al menos, diez Comunidades Autónomas y/o Ciudades de
Ceuta y Melilla.
− Tener cien inscripciones o anotaciones en el Registro de Entidades Religiosas, entre
entes inscribibles y lugares de culto, o un número inferior cuando se trate de
entidades o lugares de culto de especial relevancia por su actividad y número de
miembros.
− Contar con una estructura y representación adecuada y suficiente para su organización
a los efectos de la declaración de notorio arraigo.
− Acreditar su presencia y participación activa en la sociedad española.
Si antes del vencimiento del plazo la entidad solicitante manifiesta su decisión de no efectuar
alegaciones ni aportar nuevos documentos o justificaciones, se tendrá por realizado el
trámite.