NOS TOCÓ LA PRIMITIVA

De Rafael Mendizábal

Juguete cómico en dos actos

y cuatro cuadros

Personajes (por orden de aparición):

PRIMITIVA: Pupila del Convento. ……………..VIOLETA

SOFÍA: Hermana de Primitiva. …………...AMALIA
CÁNDIDA: Tía de Sofía. …………………….…DUCHA
SONSOLES: Pupila de Sofía……………………..PAQUI
SOR CONCEPCIÓN:………………… ISABEL
SOR MARIA………………... PILAR
PEPE: Novio de Primitiva….. FÉLIX

LA ACCIÓN: En Madrid, en una vieja casa de barrio. Época actual.

DESCRIPCIÓN DEL ESCENARIO: Una buhardilla clásica, a la que da una escalera que se supone
da a la terraza. .

A ella, da la puerta de la calle de forma que se vea quien llegue, y la del dormitorio. Muebles
corrientes de familia obrera con detalles de mal gusto.

Al levantarse el telón, SONSOLES habla por teléfono. En la

habitación le espera un cliente.

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 PRIMER ACTO

Cuadro Primero

SONSOLES.- (al teléfono). Que no tía, que estoy muy bien…, claro que
trabajo de azafata…¿que qué hago?... atender a los señores, ¡mira que eres
mal pensada!... sí tía, guay del Paraguay…Pues hablo como se habla
aquí…. Que sí, que yo sé cuidarme…

VOZ.- (en off desde la habitación) ¡Sonsoleeeees!

SONSOLES.- ¡Ya voy! Tengo que dejarte tía, me llama un cliente para
que se lo enseñe todo. Chao (cuelga). Y ahora a ver si cortamos la oreja.

(Sonsoles entra en la habitación. Se les oye hablar)

CLIENTE.- Pues a mí esto de hacerlo a cachos me corta

SONSOLES.- No seas pesado. ¡Mierda!

CLIENTE.- ¿Y ahora qué pasa?

SONSOLES.- Que se me ha olvidado decirle a la tía que cuando hagan la

matanza me mande morcillas y chorizos.

CLIENTE.- ¿Pero cómo quieres que me inspire si tú solo piensas en

comer? ¿Y ahora qué haces?

(Se ha oído ruido de llaves y entra SOFÍA por la Puerta de la calle)

SONSOLES.- echar el pestillo, que me parece que llega Doña Sofía.

CLIENTE.- Menuda Doña está hecha esa.

(El gesto de Sofía es cansado. Trae la compra que va dejando encima de la

mesa. El tamaño de las bolsas indica modestia)

CLIENTE.- Estás hecha una sosa

(Sofía se ha acercado a la Puerta de la habitación y arriba el oído para

escuchar lo que dicen)

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SONSOLES.- Y por dos mil pelas qué quieres ¿una semana en el caribe
con la Preysler?

SOFÍA.- Y que le cante al oído Julio Iglesias, ¡no te joroba!. Hay que ver
qué tontos son los hombres.

CLIENTE.- ¡Venga mujer! Un poco más de marcha.

(suena el teléfono y Sofía lo descuelga con evidente falta de costumbre)

SOFÍA.- Ya está sonando el bicho ése. (contesta brusca) ¡Qué pasa!. ¿hay
alguien ahí?

CÁNDIDA.- (por el teléfono) Pues claro, a ver cuando te enteras que para
que suene en casa, alguien tiene que marcar el número en otro sitio.

SOFÍA.- Pues ya sabes que yo aún me creo que cuando suena una orquesta
es porque está dentro de la caja.

CÁNDIDA.- (por el teléfono) Claro, y si se oye un rugido es que están

Tarzán y el león jugando al tute. ¡Pero qué burra eres!

SOFÍA.- Pues perdona hija, todos no podemos estar ilustraos.

CÁNDIDA.- Bueno, te llamo para que no salgas de casa.

SOFÍA.- ¿Y cuándo salgo yo a esta hora? Si estoy siempre esclavizada

CÁNDIDA.- No empecemos con las quejas. Te lleva el cartero una carta

que ha llegado del pueblo.

SOFÍA.- ¿Y cuando llegue qué hago?

CÁNDIDA.- Firmas para que te la dé.

SOFÍA.- Y después qué, ¿la leo?

CÁNDIDA.- No, la metes en la nevera para tener las noticias frescas.

SOFÍA.- Estás tú muy chistosa, o sea que la leo

CÁNDIDA.- ¡pues claro, mujer! Y si es algo importante, me llamas. Yo en

cuando pueda, voy para casa.

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(Sofía cuelga el teléfono y se acerca decidida a la Puerta de la habitación
donde está el Cliente y Sonsoles. Llama fuerte)

SOFÍA.- A ver si salís de una vez

SONSOLES.- (en off) Venga, no fastidie

SOFÍA.- ¿Encima con humos?

SONSOLES.- ¡Váyase a hacer puñetas!!

SOFÍA.- Ahora veréis. (sale y golpea la puerta con fuerza)

SONSOLES.- (riéndose) Dele fuerte, que está echado el pestillo.

SOFÍA.- (sale a escena) Pues como no salgáis pronto, tiro la Puerta y os

saco a rastras.

CLIENTE.-(en off) Oiga, que tampoco es para ponerse así.

SOFÍA.- ¡Yo me pongo como quiero!, que para eso estoy en mi casa; y
venga, que como llegue mi tía y os encuentre, salimos todos en El Caso, y
todo por haceros un favor.

CLIENTE.- (en off) Qué favor ni que leches!, con lo que le pago a usted
por un rato, podia tirarme una semana en la pension.

SOFÍA.- Pero no te tirarías a la Sonsoles, que está como un tren.

SONSOLES .- (en off) Se agradece

SOFÍA.-¡ Así que arreando!

CLIENTE.- Es que yo en media hora, no puedo hacer nada.

SOFÍA.- Menos cuento. Que por mi reloj lleváis casi dos horas.

CLIENTE.- Pero es que ésta se ha tirado una hora hablando por teléfono.

SONSOLES.- ¡Chivato!

SOFÍA.- ¿En el teléfono?. ¡Mecaguen la leche!, ¡pues te lo cobro!, y

venga, al grano, que esto no es un Maratón.

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SONSOLES.- Pero mujer….

SOFÍA.- ¡Ni peros ni manzanos, tenéis media hora, que Cándida se planta
aquí a las seis en un tris tras.

(Sofía se dispone a guardar la comida. Al poco se oye el TIMBRE desde el

portal)

SOFÍA.-(sale Puerta) ¿Quién es?

CARTERO.- Le traigo una carta

SOFÍA.- Le abro.

(Vuelve a entrar y lleva CARTA en la mano. Una carta con muchos sellos.
Intenta leerla, pero sin gafas no puede. Finalmente llama a Sonsoles.)

SOFÍA.- ¡Sonsoles, Sonsoles!

SONSOLES.- ¿pero no había dicho que teníamos media hora?

SOFÍA.- Sal…. ¡Date prisa!!

(sale Sonsoles atándose la bata)

SONSOLES.- A ver, ¿qué tripa se le ha roto?

SOFÍA.- No te subleves, mujer. Es que ha llegado una carta y la ha traído

el cartero.

SONSOLES.- Y quién quería que la trajera, ¿el Guerrero del antifaz?

SOFIA.- Déjate de bromas que esto parece serio.

SONSOLES.- ¿y quién la manda?

SOFIA.- Todavía no lo sé. Pero mira la de sellos que trae.

SONSOLES.- Como que parece un cartón de bingo.

SOFÍA.- ¡Ahora caigo!. Eso es que la bruja del primero se ha dado cuenta
de que te alquilo la habitación y me ha denunciado al propietario. Mira a
ver de dónde viene.

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SONSOLES.- Es que yo en español leo muy mal, me dicen que soy
especialista en francés.

SOFÍA.- Una guarra es lo que tú eres!! Y la culpa de que haya recibido

esta carta, la tenéis tú, y ese cochino del cuarto. ¡Ay, Dios mío! De ésta,
nos meten en la cárcel.

SONSOLES.- No sea caguica, a ver si se cree que lo de alquilar

habitaciones lo hace usted sola.

SOFIA.- Pero es que las otras las alquilan para dormir

SONSOLES.- Pues si es por ayudar, echamos una cabezada.

SOFÍA.- ¿Encima cachonde0?

CLIENTE.- (en off) ¿se puede saber qué haces?

SONSOLES.- ¡Cállate ya! Pero oiga, ¿de verdad que su tía se cree que los
solomillos que se come salen del sueldo?

SOFÍA.- Como si fuera el Evangelio, lo malo es cuando me llaman sus

compañeras para preguntarme cómo me arreglo.

SONSOLES.- Eso es que su tía es cándida por partida doble.

SOFÍA.- (intenta leer). Lo de no tener gafas, es una faena, pero te prometo

que en cuanto me paguéis, me compro unas.
Con….con…. con…. Tiento. ¡No! Convento, pone convento. Convento de
arre….arre….arre…

SONSOLES.- Se va a caer del burro.

SOFÍA.- Ya está. Convento de arrecogidas de Marmolejo. ¡Viene de mi

pueblo!

SONSOLES.- Pues de un convento ya se sabe, para pedir algo.

SOFÍA.- Están listas.

(Mientras Sofía abre el sobre, suena el TIMBRE de la Puerta)

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SOFÍA.- Abre tú Sonsoles.

(Sofía intenta leer los pliegos mientras Sonsoles abre la Puerta. Aparecen
Sor Concepción y Sor María. Sin que se la vea, con ellas está Primitiva)

SONSOLES.- ¡Dios las ampare!! Adelante.

SOFÍA.- ¿Se puede saber qué pasa?

SOR CONCEPCIÓN.- ¿Doña Sofía Zamorano de Pérez?

SOFÍA.- Si señoras, Bueno, hermanas.

SOR CONCEPCIÓN.- Sor. Sor Concepción y Sor María, para servir a

Dios y a usted. ¿Podemos pasar?

SOFÍA.- No faltaba más. Pasen, pasen. ¿no quieren sentarse?

SOR MARÍA.- Muchas gracias, pero es que no venimos solas. (Va a la

Puerta) Ya puedes venir, hija.

(Entra Primitiva. Se sientan las tres)

(Sofía y Sonsoles se miran extrañadas)

SOFÍA.- ¿Quieren Vds tomar algo?

PRIMITIVA.- ¡Jamón!

SOFIA.- Pues jamón no sé si tengo en casa.

PRIMITIVA.- Hay un trozo en la cocina.

SOFÍA.- Miraré a ver.

SONSOLES.- Déjelo usted, si hay algo, yo lo traigo

PRIMITIVA.- Si puede ser, en tacos.

SOR CONCEPCIÓN.- ¡Hija, por Dios!!

SOFÍA.- Osea, que tienen apetito.

SOR MARÍA..- Es que con el traqueteo , usted ya sabe.

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SOFÍA.- Yo qué voy a saber. Comprenderá que a mi edad ya se me ha
olvidado.

PRIMITIVA.- Es que no es ese traqueteo, el nuestro es el del autobús.

SOFÍA.- Ah Bueno. Con ese hábito, ya me extrañaba a mi.

(Silencio tenso)

SOFÍA.- ¿Así que vienen de fuera?

SOR CONCEPCIÓN.- Pero, ¿es que no ha recibido nuestra carta?

SOFÍA.- Que yo sepa, no….¡la carta!!

SOR MARÍA.- Eso es, la carta. Precisamente veo que la tiene usted
encima de la mesa. La conozco por el sobre.

SOFÍA.- Pues ya ve usted. Recibirla sí la hemos recibido, pero para leerla

estoy esperando a que vuelva mi tía del trabajo, que tiene unos ojos de
lince, porque yo sin gafas la verdad es que no veo un pimiento.

SOR MARÍA.- O sea, que todavía no sabe nada.

SOFÍA.- Saber no sé a qué se refiere, pero nerviosa me están ustedes

poniendo muy nerviosa

SOR CONCEPCIÓN.- Tranquilícese, que no es nada malo. Pero ahora

comprendo este recibimiento tan frío, y más siendo hija de uno de nuestro
principales benefactores.

SOFÍA.- Pues si lo dice por mi padre, serán las únicas que consiguieron
sacarle algo.

SOR CONCEPCIÓN.- Su vinculación con nosotras era algo muy

especial.

SOR MARÍA.- Era un buen hombre, con sus pecadillos, pero un buen
hombre.

PRIMITIVA.- ¡Menudo pájaro que estaba hecho!

(Entra Sonsoles con la bandeja y el plato de jamón)

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SONSOLES.- Aquí está el jabugo.

PRIMITIVA.- (Lo prueba). ¿Jabugo? De cerdo y gracias. (sigue

comiendo)

SONSOLES.- (acercándose a Sofía). Ëstas deben ser Misioneras en

Etiopía, hay que ver la gazuza que traen.

SOFÍA.- Como estabas en la cocina, no te has enterado de lo que pasa. La

carta que llegó del pueblo, nos la habían mandado ellas.

SONSOLES.- Pues aquí aparte del jamón, no creo que puedan llevarse
nada.

PRIMITIVA.- Cría fama.

SOR MARÍA,. Tienes mucha razón, hija.

SOR CONCEPCIÓN.- Por una vez, somos nosotras las que venimos a
dejar.

SONSOLES.- De momento ya han dejado el plato vacío.

SOFÍA.- No seas así, Sonsoles. ¿No has oído que nos van a dar algo?.
Perdonen ustedes, pero ya se sabe cómo son las mujeres de ahora.

PRIMITIVA.- Claro que lo sabemos, unos pendones desorejados.

SONSOLES.- ¡Oye, tía! ¿Qué quieres, Guerra?

SOFÍA.- No riñais, Sonsoles, y deja que se expliquen.

SOR CONCEPCIÓN.- Bueno, pues ahora que hemos terminado el

tentempié…

PRIMITIVA.- ¿El tentempié? Querrá decir el tentesentao, porque en ese

plato no había ni cincuenta gramos.

SOR MARIA.- Contente, hija, contente. No olvidemos que éste es el seno

de una familia humilde.

SOFÍA.- Pobres pero honrados, hermana

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SOR CONCEPCIÓN.- Pues bien, Sor María y yo, somos las encargadas
en el convento de vigilar a las jóvenes que por una u otra causa, han sido
confiadas a nuestra custodia. Casi siempre pobres almas descarriadas.

SOFÍA.- ¡Ya!

PRIMITIVA.- Que traducido al Cristiano quiere decir ..”si te cogen dando

un tiento, terminas en el convento”

SONSOLES.- Tampoco hay que exagerar, ni que estuvieramos en la época

de las cavernas.

SOR MARÍA.- Nuestra visita a esta casa, guarda relación con nuestra
acompañante, a quien naturalmente no necesitamos presentarle.

SOFÍA.- Si usted lo dice……

SOR CONCEPCIÓN.- Pero cómo, ¿es que todavía no la ha reconocido?.

Aunque claro, han pasado tantos años… (a Primitiva) Ponte de pie, hija…
(Primitiva se pone se pie). Haga usted memoria.

SOFÍA.- La verdad, es que así al pronto…. Pero espere, usted…tú…. ¡¡Tú

eres la Higinia!!!

PRIMITIVA.- ¡Era!!!

SOR MARÍA.- Y sigue siéndolo. Lo que pasa que a fuerza de llevar años
en el convento, empezamos a llamarla Primitiva, y con Primitiva se ha
quedado.

SOFÍA.- Pero…. Qué cambiada estás…. Y qué crecida.

PRIMITIVA.- Si señora. Sobre todo a lo ancho.

SOFÍA.- ¿Pero quién lo iba a decir, con lo menudita que eras? O sea, que
ahora eres Primitiva.

SONSOLES.- Yo diría, prehistórica.

PRIMITIVA.- Ésta me parece que se la está buscando.

SOR CONCEPCIÓN.- En fin, quizá sea mejor que no haya leído la carta.
Así Podemos explicarlo personalmente.

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SOFÍA.- Pues ustedes dirán.

SOR MARÍA.- Antes que nada, darle el pésame por la muerte de su padre,
en nombre de toda la comunidad.

SOFÍA.- Se lo agradezco mucho, aunque casi no nos tratábamos.

SOR CONCEPCIÓN.- El caso es que su padre ha dejado una sustanciosa

herencia, aproximadamente unos veinte millones colocados en acciones.

SONSOLES.- ¡Ostras!

PRIMITIVA.- Para todo habrá

SOR MARÍA.- El señor notario, tiene un cofre con los resguardos de las
acciones, y como usted era su hija, pues qué quiere que le diga, que se lo ha
dejado todo.

SOFIA.- Ya ve cómo se olvida todo. (Se seca una lágrima)

SOR CONCEPCIÓN.- Claro, que con una condición.

SOFÍA.- (cambia de tono)¡Ya me extrañaba a mi!

SONSOLES.- Como que tenía que haber algún truco. Menudas son éstas
para que se les escape un duro.

SOR MARÍA.- No juzguen a la ligera. Lo único que pide su padre, es que

se haga cargo de Primitiva.

SOFÍA.- ¿Y qué hago con ella?

SONSOLES.- Mandarla a un circo

PRIMITIVA.- Y a ti a la luna, de la patada que te voy a dar.

SOFÍA.- Es que así , sin consultarlo con mi tia… yo no puedo decir nada.
Y como la casa es tan pequeña..

SOR CONCEPCIÓN.- Pues no se hable más. Veo que la presencia de

Primitiva, le ocasionaría problemas insalvables. Por tanto, nos volvemos al
convento, y aquí paz y después gloria. Vamos Primitiva.

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SOFÍA.- Pero oiga, ¿y los veinte millones?

SOR MARIA.- El asunto del dinero, tendrá que tratarlo con el señor
notario.

PRIMITIVA..- ¿y lo otro?

SOFIA.- ¿Es que hay algo más?

SOR CONCEPCIÓN.- Un asuntillo sin importancia. Vámonos.

PRIMITIVA.-¡Pues yo sin que se entere, no me voy!

SONSOLES.- ¡Aquí hay gato encerrado!

SOFÍA.- O lo dicen, o reviento.

PRIMITIVA.- Pues ahi va…… ¿A tí no te gustaría tener una hermana?

SOFIA.- No querrás decir….

PRIMITIVA.- Lo que te imaginas. Que soy tu hermana de padre.

SOR CONCEPCIÓN.- Por unos papeles que dejó su padre, se sabe que
Primitiva es fruto de una relación extraconyugal.

PRIMITIVA.- En las películas se dice un “flirt”

SONSOLES.- Vamos, que le puso los cuernos a su mujer.

PRIMITIVA.- Así que ya lo sabes. Soy tu hermana putativa

SONSOLES.- ¡Como yo!

PRIMITIVA.- No guapa, yo soy putativa de las otras.

SOFIA.- O sea, que mi padre…..

SOR MARIA.- Un amor prohibido. Primitiva es el fruto de un desliz. Por

eso su padre tuvo que dejarla en el torno

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PRIMITIVA.- (recita como en un romancero). Era una noche fría de
invierno, cuando una sombra se deslizó hasta el torno del convento, y en él
depositó una hermosa niña que con el tiempo crecería al amparo de las
monjitas. ¡Oh!, dijo Sor Crescencia al verla, ¡es como una rosa! La
llamaremos Higinia, que no tenía que ver nada con las flores, pero que era
el nombre de una prima carnal suya. Y así fué creciendo y creciendo……

SONSOLES.- Y engordando, y engordando…..

PRIMITIVA.- ¡Se acabó! (Primitiva coge del cuello a Sonsoles)

SOR MARIA
SOR CONCEPCIÓN.- ¡Por Dios, Primitiva!

SOFÍA.- ¡Que la va a dejar sin aire!

PRIMITIVA.- ¿Qué soy yo?

SONSOLES.- (casi sin poder respirar) Un fideo…..un fideo….

PRIMITIVA.- (la suelta). Así me gusta.

SONSOLES.- (Tomando aire). ¡Qué bruta!!

SOR CONCEPCIÓN.- Lo mejor será que nos vayamos cuanto antes. Y

que Dios me perdone por criticar al prójimo, pero ya se habrán dado cuenta
de que Primitiva es un poco rarita.

SOFIA.- Dios la perdonará , porque se ha quedado usted bastante corta.

SOR MARIA.- Pues bien, ya que estamos de acuerdo, nosotras nos vamos.

SOFIA.- ¿Y no podrían esperar a que viniera mi tía?

SOR CONCEPCIÓN.-Imposible, perderíamos el autobús. Primitiva,

despídete de tu hermana y de la señorita

PRIMITIVA.- ¡Pero qué señorita ni que niño muerto! ¡Ésta es una pájara!

SONSOLES.- A ver si ahora me cabreo yo. ¡Qué pasa!!

PRIMITIVA.- ¡El gato por su casa!

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PRIMITIVA.- ¡Una pájara! Y el que la espera en calzoncillos en el cuarto,
un pinta.

SOR CONCEPCION
SOR MARIA.- (se persignan)

PRIMITIVA.- Por lo menos, que no nos tomen por tontas.

SOR CONCEPCIÓN.- Perdónenla, pero cuando Primitiva sale del

convento, se pone muy nerviosa.

SOR MARIA.- Debe ser la falta de costumbre.

PRIMITIVA.- Que se cree usted eso. A mí lo que me pone nerviosa , es

ver los macizos que andan por la calle sin poder catarlos.

SOR CONCEPCION
SOR MARIA.- ¡Primitiva!

SONSOLES.- Mira la mosquita muerta. Ésta es de las que las mata

callando.

PRIMITIVA.-¡Cuidadito con lo que dices! Porque os doy a ti un

cabezazo , y al de los calzoncillos una patada en los cataplines que os
arreglo el cuerpo.

SOFÍA.- ¡Y dale con que tenemos un señor en calzoncillos!

CLIENTE.- (en off) ¿te queda mucho??

SOFÍA.- (nerviosa) Sonsoles, te has dejado la radio encendida

SONSOLES.- Voy a apagarla (sale de escena)

SOR CONCEPCIÓN.- Repórtate Primitiva, y coge la maleta que nos

vamos.

SOFIA.- Pero oiga, es que todavía no me ha dicho lo que va a pasar con el

dinero de mi padre.

SOR MARIA.- Eso tendrá que tratarlo con el señor notario y la Madre
Superiora.

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SOFÍA.- ¿Pero no esperan a mi tía?

SOR CONCEPCIÓN.- (saca un despertador grande)Nos queda una hora.

Podemos esperar si después nos llevan en taxi.

SOFIA.- Espere un momento que la llamo. (marca el número) ¿Doña

Cándida Zamorano? ¿Cándida? Sí, soy yo. Oye, que nos ha tocado la
Primitiva y no sé que hacer….. Cándida, Cándida…. Se ha cortado.

(Sale Sonsoles de la habitación arreglándose el pelo)

PRIMITIVA.- Cómo lo pasáis, ¿eh?

SONSOLES.- (haciendose la fina) No sé lo que quieres decir.

PRIMITIVA.- Que hay que ver lo que te ha costado desenchufar la radio,

como que estabais enchufando otra cosa,

SONSOLES.- Ya está bien de molestarme. Dígale usted algo, Sofía.

SOFÍA.- Aguanta hasta que llegue Cándida.

(Primitiva ha cogido la botella de anis y le pega un lingotazo)

SONSOLES.- ¡Que se bebe el anis!!

SOR CONCEPCIÓN.- ¿pero no es agua?

SOR MARIA.- Primitiva, apura que nos vamos.

SOFÍA.- ¡Encima no la anime!!

SOR MARIA.- Si quiero decir que apure el tiempo.

(Primitiva sigue bebiendo)

SOFÍA.- Pues yo no me conformo, porque si mi padre ha dicho que nos la

traigan, ¿a qué viene esa prisa por llevársela?

PRIMITIVA.- Como que menudo chollo soy

(Las Sor, cogen a PRIMITIVA del brazo para llevársela)

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PRIMITIVA.- Yo de volver al convento, nanay.

SOR CONCEPCION
SOR MARIA.- ¡Primitiva!

PRIMITIVA.- Ni Primitiva, ni Higinia. Lo que ustedes han oído.

SOR CONCEPCIÓN.- ¿Olvidas los días de paz y sosiego que has pasado
con nosotras?

PRIMITIVA.- Pues por eso lo digo, porque estoy hasta de tanta

tranquilidad. Yo lo que quiero, es probar el desenfreno.

SOR MARIA.- ¡Qué verguenza, Primitiva!

PRIMITIVA.- ¡Coño! La vergüenza es no haberlo probado todavía.

SOFÍA.- Pues si te quieres quedar aquí, lo tienes claro. O cantas la gallina

o te vuelves a cantar el Deo Gratias al convento.

PRIMITIVA.- Ya lo oyen, hermanas.

SOR CONCEPCIÓN.- Sin la autorización de la Madre Superiora,

nosotras no podemos decir nada

SOFIA.- Tampoco creo que sea para tanto.

PRIMITIVA.- Y para más. ¡Venga!, o lo dicen ustedes, o lo digo yo..

SOR MARÍA.- (Solemne) Está bien. Caiga sobre nosotras la

responsabilidad.

SOR CONCEPCIÓN.- (muy misteriosa) La Primitiva tiene

premoniciones.

(Sonsoles y Sofía se miran extrañadas)

SONSOLES.- Oiga, ¿y eso es muy contagioso?

SOFÍA.- Mire que mi tía es muy escrupulosa.

PRIMITIVA.- ¡Vaya acémilas!

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SOFIA.- Perdonen nuestra ignorancia, pero es que eso de las pre…. Pre,
Bueno, eso que han dicho, pues suena como a tener paperas a lo bestia.

PRIMITIVA.- Cómo se nota que son gañanes trasplantadas a la capital.

SONSOLES.- Y encima nos insulta.

SOFÍA.- Calla, que esto tiene miga. O sea, que no es una enfermedad.

SOR MARIA.- Desde luego que no.

SOFÍA.- Ni un defecto.

SOR CONCEPCIÓN.- Todavía menos. Según se mire, puede ser un don.

SONSOLES.- Eso mirao al derecho, ¿y al revés?

PRIMITIVA.- ¡Un chollo!

SOFIA.- ¡Ah!

SONSOLES.- Yo cada vez lo entiendo menos.

SOR CONCEPCIÓN.- Pues es muy sencillo. Decir que tiene

premoniciones, es decir que Primitiva adivina las cosas.

SONSOLES.- ¿Por eso sabia lo de de los calzoncillos!

PRIMITIVA.- ¿ven cómo tienen un tío Escondido?

SONSOLES.- Oye, ¿y no me lo puedes pegar a mi?

PRIMITIVA.- ·Eso se tiene o no se tiene. Yo cierro los ojos y empiezo a

ver las cosas.

SONSOLES.- A mí también me pasaba de pequeña, pero debía ser por el

hambre.

PRIMITIVA.- Se ve que cada una ve lo que le falta. Si te digo lo que se

me aparece a mí de vez en cuando….

SOR CONCEPCIÓN.- ¡No lo digas!

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PRIMITIVA.- Pero si les iba a hablar de San Justo.

SOR MARIA.- Por si acaso.

PRIMITIVA.- Es un Santo milagrosísimo,. Fijaos que con un Milagro,

dejó preñada a una de las arrecogidas.

SOR CONCEPCIÓN
SOR MARIA.- ¡Primitiva!!

PRIMITIVA.- Eso es lo que dijeron ustedes, aunque San Justo señalaba

siempre con el dedo al jardinero.

SOFIA.- Pues por si les sirve de algo, en la cocina tengo un calendario con
el Corazón de Jesús.

SOR CONCEPCIÓN.- (sarcástica) No creo yo que se pueda comparar.

PRIMITIVA.- Y para que veáis que es verdad todo lo que os hemos dicho,
el señor de la habitación lleva los calzoncillos de color rojo

SONSOLES.- Pues es verdad.

PRIMITIVA.- Y aquí en salva, sea la parte, lleva unas letras que dicen,
PSOE.

SONSOLES.- Se las bordé yo cuando le dieron el carnet.

SOR CONCEPCIÓN.- ¡Jesús lo que hay que oir! En calzoncillos y

encima rojo.

SOR MARIA.- no me lo puedo creer.

PRIMITIVA.- Pues yo si lo sé no vengo, pero así los lleva. Y ahora se

marcha por la Ventana

SOFÍA.- ¡Eso es para no pagarme! (Corre a la habitación) (en off)

¡Caradura!.....¡Guarro, aquí no se te ocurra volver!...(Vuelve a entrar)
(A Sonsoles)
Y tú ya me explicarás lo que hacías con un hombre en la habitación.

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PRIMITIVA.- Venga Sofía, no disimules, como si no supieras que le
estaba dando al kiki con la interfecta.

SOR CONCEPCIÓN.- ¡Primitiva! Yo no puedo permitir que te quedes en

una casa donde las visitas le dan al…. al…. Bueno, ¡a eso!

PRIMITIVA.- Usted disimule, hermana.

SOR MARIA.- ¿Que disimule? ¿Pero no dices que le estaban dando al

kiki?

PRIMITIVA.- Pues cerrando los ojos.

SOR CONCEPCIÓN.- (muy nerviosa) ¡Tengo que llamar al obispo!

PRIMITIVA.- ¿Ahora que se anima la cosa?, ¡ni se le ocurra!

SOR MARIA.- ¡Qué vergüenza!

PRIMITIVA.-Es que a ustedes todo les da vergüenza.

SOR MARÍA.- (interesada) Y….¿dices que iba en calzoncillos?

PRIMITIVA.- Como lo oye, y está como un tren.

SONSOLES.- Oye, mucho cuidadito con mis clientes

PRIMITIVA.- Por mí no te preocupes. Yo en cuanto empiece con los

hombres, los trataré como a los Kleenex. Usar y tirar.

SOR CONCEPCIÓN.- ¡Esto no puede seguir así! (a Sofia) ¿me permite

que use el teléfono?

SOFIA.- ¿para ponernos verdes? Ni hablar del peluquín.

SOR CONCEPCIÓN.- (agarrándola) Acompáñame Primitiva, llamaremos

desde una cabina.

PRIMITIVA.- (soltándose) Que se cree usted eso. Yo de aquí no me

muevo.

SOR CONCEPCIÓN.- Entonces iré yo sola. Sor María, vigílela.

(Sale de la casa)

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SONSOLES.- En cuanto ésta llame al Obispo, nos mandan la guardia civil.

PRIMITIVA.- Tampoco es para tanto. ¿ El de los calzoncillos es tu novio?

SONSOLES.- Uno de ellos.

PRIMITIVA.- Pues que no se te escape. Dentro de poco le van a hacer

Ministro.

SONSOLES.- ¿Ministro?, pero si no sabe hacer la o con un canuto.

PRIMITIVA.-Por eso lo van a hacer Ministro. Si fuera listo, se haría

ingeniero.

(Suena el TIMBRE de la Puerta)

SOFÍA.- Debe ser Cándida que viene por lo de la carta.

(Sale a abrir y entra Sor Concepción muy Digna)

SOR CONCEPCIÓN.- Como no quiero pecar de injusta, he decidido que

antes de llamar al señor Obispo, debo conocer a su tía

SOFÍA.- Eso me parece bien. Verá que es una bendita.

PRIMITIVA.- Y de alcohol ni una gota, ¿verdad?

SOFIA.- Pues un sorbito de vez en cuando.

PRIMITIVA.- Pues esta vez se ha bebido hasta la frasca. Ya podéis abrir

la puerta. (Tararea un pasodoble)

(Sofía sale a abrir y entra Cándida con una melopea considerable)

CÁNDIDA.- ¡Ave César! (canta y baila) (mira a su alrededor). Reunión de

pastores, oveja muerta.

PRIMITIVA.- Menuda curda trae

SOFÍA.- ¡Pero cómo vienes, madre mía!

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CÁNDIDA.- (señala a las monjas) Habéis invitado también a un
enterrador….(fijándose bien) … a no, dos. (canta y baila por lo bajo)

SOR CONCEPCIÓN
SOR MARIA.- ¡Ave María Purísima!

PRIMITIVA.- ¡Qué coñac lleva!

CÁNDIDA.- Champán, la curda es de champán……. (a Sofía) ¿para qué

las ha mandado el banco?

SOFÍA.- Pero, ¿qué banco?

CÁNDIDA.- Para que metamos la primitiva. ¡Un abrazo!!!!

PRIMITIVA.- Ten cuidado Sofía, que como te eche el aliento, te

emborracha.

CÁNDIDA.- ¡Sabes lo que le he dicho a mi jefa?

SOFÍA.- ¡Y cómo voy a saberlo si no estaba allí?

PRIMITIVA.- La ha llamada guarra.

CÁNDIDA.- Eso ha sido para empezar. Después la he llamado….

PRIMITIVA.- ¡Explotadora!

CÁNDIDA.- (mosqueada) Lo cuenta usted, o lo cuento yo.

PRIMITIVA.- Por mí, figúrese.

SOFIA.- ¿ Y por qué le has dicho eso?

CÁNDIDA.- Y ahora qué importa eso, Total, que la he puesto en su sitio.

PRIMITIVA.- Y ella a usted en la calle.

SOFÍA.- ¿que te han despedido?

CÁNDIDA.- Eso dicho por lo fino. (canta y baila) Pero, ¿es que crees que
iba a seguir trabajando teniendo el chollo de la primitiva?

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SOFÍA.- Es que lo de que la primitiva sea un chollo, está por ver.

CÁNDIDA.- Hay que fiarse de los bancos. Y mira cómo nos han mandado
a las relaciones públicas…(por Sonsoles y Primitiva)

SOFÍA.- Es que éstas no vienen de ningún banco

CÁNDIDA.- No me entero de nada.

PRIMITIVA.- Y más le vale.

SOFÍA.- y ¿cómo te vas a enterar si llevas una trompa como un piano?

CÁNDIDA.- ¡Y dale con la trompa! Ya he dicho que es una curda fina de

champán.

PRIMITIVA.- (a las monjas) Hermanas, el champán es lo que beben las

putiplistas.

SOR MARIA.- ¡Alabado sea Dios!

SOR CONCEPCIÓN.- ¡Jesús! Creo que me voy a marear

SOFÍA.- Pues suba a la terraza a que le dé el aire.

SONSOLES.- Por la escalerita. Acompáñela, hermana.

(salen las dos monjas)

SOFÍA.- Por lo menos traerás la liquidación

(Primitiva y Cándida se miran y les da un ataque de risa)

CÁNDIDA.- Mira que tiene guasa. Desde ahora a la carta, y de postre tarta
al whisky.

SOFÍA.- Pues es lo que faltaba, ¡maldita sea!

PRIMITIVA.- ahora viene lo Bueno.

SOFÍA.- Mira Cándida, avía y tengamos la fiesta en paz. ¿y el dinero?

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CÁNDIDA.- A ver si después de tocarnos doscientos millones, no puedo
invitar a mis compañeras.

SONSOLES.- ( a Sofía)Vaya día que lleva usted. Primero se va mi cliente

sin pagar….

CÁNDIDA.- ¿y qué tenía que pagar?

PRIMITIVA.- La dama por revolcarse con la Sonsoles.

CÁNDIDA.- ¡Dios mío! ¡Mi casa convertida en un burdel! (cambia tono)

Pero Bueno, te perdono porque la gente rica no riñe en público.

SOFÍA.- (con sorna) O sea, que nos ha tocado la primitiva….. somos ricas

CÁNDIDA.- Claro.

SOFÍA.- y ¿ésta quién es? (señala a Primitiva)

CÁNDIDA.- Así al pronto….. (la mira detenidamente). ¡Anda! ¡Pero si es

la Higinia!

SOFÍA.- y, ¿no te acuerdas cómo la llamaban?

CÁNDIDA.- Claro que me acuerdo…...Primi…Primi…¡Primitiva!

PRIMITIVA.- Para servir a Dios y a usted.

CÁNDIDA.- y , ¿qué hace aquí?

SOFÍA.- Pues que nos ha tocao.

CÁNDIDA.- (se da cuenta de todo). Agua….agua….agua (bebe anis)

PRIMITIVA.- No mezcle que es malo.

SOFÍA.- Deja que se ahogue.

(le dan aire para que se recupere)

CÁNDIDA.- (con un hilo de voz). Y yo llamé explotadora a Doña Claudia.

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SOFÍA.- ¿Pero cómo puedes pensar que a los pobres nos toca algo gordo?.
El reintegro y gracias

CÁNDIDA.- y ¿a qué han venido?

SOFÍA,- A tratar de la herencia de mi padre.

CÁNDIDA.- pero ¿es que nos ha dejado algo?

SOFÍA.- De momento nos ha dejado a la Primitiva, que encima es hermana

mía para que se quede con nosotras.

CÁNDIDA.- ¡Eso sí que no! En esta casa, no vivirá el fruto del pecado

(Asoman Sor Concepción y Sor María a tiempo de escucharles)

SOR CONCEPCIÓN.- Tiene usted razón.

SOFÍA.- Es que si nos la quedamos, igual nos dan veinte millones.

CÁNDIDA.- Una hermana, es una hermana.

PRIMITIVA.- No tiene cara ni ná

CÁNDIDA.- ( de repente) ¡Ven a mis brazos, sobrina! ( va a abrazarla)

PRIMITIVA.- ¡quita, quita!

SOR CONCEPCIÓN.- Pero ¿ustedes se han creido que vamos a dejar a

Primitiva en esta casa de lenocinio?

SOR MARIA.- Desde luego que no

(Sonsoles, Cándida y Sofía, se miran extrañadas)

CÁNDIDA.- y eso…¿qué es?

PRIMITIVA.- Una del convento dice que es un jolgorio de puterío

SOFÍA.- ¡Cuidadito con lo que dice!

CÁNDIDA.- Y nada de contrariar a aquel santo varón que fué mi

hermano. ¡Primitiva se queda con nosotras!

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SOR CONCEPCIÓN.- Que se cree usted eso. Primitiva se viene con
nosotras al convento ( la coge de un brazo para salir.)

SOFIA.- ¡ hermana, hermana mía ( la coge del otro brazo)

CÁNDIDA.- ¿no se le rompe el corazón?

(tiran cada una de un brazo, hasta que se cabrea Primitiva y se suelta de las
dos)

PRIMITIVA.- ¡Basta ya! Pero qué os habéis creído, ¿que soy un mueble?
Yo he venido aquí no porque lo dijera mi padre, sino porque quería conocer
mundo. Y porque estoy harta de ser la pobre Primitiva, y de que me tomen
por tonta cuando solo soy buena….

SOR CONCEPCION
SOR MARIA.- pero Primitiva….

PRIMITIVA.- ¡A callar todos! Yo lo que quiero es quedarme y que me

salga un novio.

SOR CONCEPCIÓN.- sin permiso del señor Obispo….

PRIMITIVA.- ¡Pues que le den morcilla a su ilustrísima!

(suena el TIMBRE de la Puerta)

CÁNDIDA.- ¿quién puede ser?

PRIMITIVA.- Quién va a ser… mi futuro novio… (Sonsoles sale a abrir

la Puerta)

PEPE.- (Vestido de taxista) Oiga doña Cándida. Que llevo esperando una
hora y el contador sigue corriendo..

(Mira a Primitiva y entre ellos se crea un ambiente de Encanto)

CÁNDIDA.- Se me había olvidado. Si no te importa, ven mañana y te

pago.

PEPE.- Por eso no se preocupe

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(Primitiva y Pepe se siguen mirando encantados)

CÁNDIDA.- (a Pepe) ¿te pasa algo?

PEPE.- (reaccionando) Ustedes perdonen y hasta mañana ( Hace mutis y

Primitiva le sigue al descansillo)

PRIMITIVA.- (fuera de escena ) Hasta mañana, Pepe.

PEPE.- ¡Digo!

PRIMITIVA.- (entra como alelada) ¿Lo veis? Ya hemos dado el primer

paso

FIN DEL PRIMER CUADRO

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 CUADRO SEGUNDO

CÁNDIDA.- Nos ha caído la mala suerte, Sofía.

SOFÍA.- Y que lo digas, pero, ¿qué habrá visto en ese cateto para
enamorarse?

CÁNDIDA.- Pues que es el primero que le ha hecho caso y eso que desde
que se conocen, no les han ocurrido más que desgracias.

(Entran las monjas con una maleta en la mano)

CÁNDIDA.- Y, ¿Vds. A dónde van?

SOR MARIA.- Al convento

SOR CONCEPCIÓN.- Con Primitiva enamorada, sobramos todos.

CÁNDIDA.- Lo que yo decía a Sofía, que a cuenta del garrulo de Pepe, ya

no adivina ni la hora.

SOR CONCEPCIÓN.- Si la hubieran conocido en sus buenos tiempos.

No había quiniela que se le escapara.

SOR MARIA.- Ya podia ganarle el Murcia al Madrid en casa, que

Primitiva, no perdía ripio.

SOFÍA.- Pues ahora ya ven. Entonces, ¿nos dejan?

SOR CONCEPCIÓN.- En el convento hacemos más falta que aquí.

SOFÍA.- Y, ¿no nos aconsejan nada?

SOR MARIA.- Que la dejen tranquila, también Primitiva tiene derecho a

la Felicidad.

SOR CONCEPCIÓN.- Ella es Buena y está contenta con Pepe.

Despídanse por nosotras.

CÁNDIDA.- Descuide, que se lo diremos.

SOR CONCEPCIÓN.-
SOR MARIA.- Queden con Dios

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(SALEN LAS MONJAS CON LA MALETA)

CÁNDIDA.- Ahí lo tienes, la Primitiva sin Pepe, un río de oro, pero a ver
quién se lo quita de la cabeza.

SOFÍA.- ¡Pues eso lo arreglo yo en un santiamén!...¡Sonsoles…Sonsoles!!!

(ENTRA SONSOLES CON UNA GRAN BARRIGA)

SONSOLES.- Vaya gritos

SOFIA.- Ven aquí. Tenemos que hablar

SONSOLES.- Usted dirá

SOFÍA.- Ya sabes que estoy muy preocupada con tu embarazo.

SONSOLES.- Pues anda que yo……

SOFÍA.- Te habrás enterado de lo que hacía antes Primitiva

SONSOLES.- Ella dice que cuidar los nabos.

SOFÍA.- Qué más hubiera querido ella. ¡Acertar una quiniela a la semana!

SONSOLES.- Quien la pillara.

CÁNDIDA.- Y a cuenta de Pepe, ya no acierta ni la hora.

SONSOLES.- Pero son felices.

SOFÍA.- Y comieron perdices, pero nosotras no nos comemos ni un rosco.

El caso es que tiene que dejar a Pepe.

SONSOLES.- Pues a ver quién se lo dice.

SOFIA.- Para eso tengo un plan. ¿ A ti quién te hizo la barriga?

SONSOLES.- El que ahora está de Ministro, creo, porque con el jaleo que
hubo aquel día….

SOFÍA.- Te equivocas, la barriga te la hizo Pepe.

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SONSOLES.-Pues sería de darme la mano, y no creo yo que…

CÁNDIDA.- Mira que eres lista, Sofi.

SOFÍA.- Tú solo tienes que decir que fué Pepe, y nosotras que lo vimos.

SONSOLES.- Y, ¿me tengo que casar con Pepe?

SOFÍA.- No mujer, pero cuando Primitiva se entere, Seguro que lo pone de

patitas en la calle, Ahora está con el taxi, pero en cuanto venga, se lo
decimos.

CÁNDIDA.- Eso dejádmelo a mí que me doy mucha maña.

SOFÍA.- Tú cuando te llamemos ya sabes lo que tienes que decir, y ahora

vete.

(Sonsoles hace mutis)

CÁNDIDA.- ¿Tú crees que lo hará?

SOFÍA.- ¿No ves cómo está de alelada?

(Vuelve a entrar Sonsoles)

SONSOLES.- He pensado que no me parece bien.

SOFÍA,- Es que a ti no tiene que parecerte ni bien ni mal. ¿O qué te

piensas?, en cuanto se case, Primitiva se da el piro, ¿y tú con quién te
quedas?

SONSOLES.- ¿Es que me van a echar?

SOFÍA.- No hija, pero aquí a la sopa boba no la come nadie, así que o
hacer lo que te he dicho, o llamo a tu tía para que venga a recogerte.

SONSOLES.- Mi tía se moriría del disgusto.

SOFÍA.- Pues entonces ya sabes.

(Sonsoles se va secándose una lágrima)

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SOFÍA.- Verás como ahora no falla… Le dejaremos una nota diciendo que
estamos tomando horchata, y cuando estén juntos, les sorprendemos.

(Escribe una nota)

CÁNDIDA.- Date prisa, me parece que la oigo llegar.

(Dejan la nota y salen de la sala. Entra PRIMITIVA, lleva una gorra de

taxista)

PRIMITIVA.- (Lee la nota). Estamos tomando horchata en la terraza de la

esquina….

(Suena el timbre del TELÉFONO)

PRIMITIVA.- Diga…. Sí, soy yo…no… no hay moros en la costa.. ¿Y

cómo quieres que esté! ¡muerta! O es que no sabes lo que cansa estar diez
horas al volante….. ¿De propinas?..Mil pesetas…. Ya sé que es mucho,
pero es que ahora les dejo que me echen la propina por el escote, y no veas
como pican…¡Encima cabréate!...Si lo hago todo por ti, mi vida… pues
sube. (Cuelga).
Y ahora la receta… primero quitar el polvo, quitar, no echar, Segundo
hacer la cena. Tercero, limpiar la nevera. ¡La madre que las parió!, yo
como una esclava y ellas tomando horchata.

(Suena el TIMBRE de la Puerta y Primitiva abre. Entra PEPE. Viene todo

vendado y con el brazo en cabestrillo).

PRIMITIVA.- Hay que ver cómo estás, Pepe. Pareces un Ecce Homo.

PEPE.- Y que quieres que le haga, mujer.

PRIMITIVA.- Y todo por mi culpa, porque el otro día no pude

contenerme y te puse la mano encima.

PEPE.- Pues mira el resultado, y encima para cabrearme me dices que te

echan los duros por el escote, y tú dejándote.

PRIMITIVA.- Por la cuenta que nos trae, a ver si acabamos de pagar el

taxi y termino con esta esclavitud. Mira que lista de cosas para hacer, y eso
después de agotar el kilometraje.

PEPE.- Ya te he dicho que te explotan

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PRIMITIVA.- Es mi sino, Pepe. Primero las monjas, y ahora mi familia.
Lo que pasa es que aquellas lo hacían para sacar dinero para el convento, y
éstas para ir al bingo a todas horas; pero… ven aquí, cuerpo mío, que
tenemos que hablar.

PEPE.- Pero solo hablar, que ya solo falta que se me caigan los dientes.

PRIMITIVA.- ¿Y qué culpa tengo yo de que cada vez que nos

achuchamos te ocurra una desgracia?..Ven, arrímate

PEPE.- Pero poco.

PRIMITIVA.- ¿Ves cómo te asustas? Comprenderás Pepe, que esto ni es

un noviazgo , ni es nada.

PEPE.- y, ¿cómo son los otros noviazgos?

PRIMITIVA.- Pues supongo que más animados, porque tú por lo soso, en

vez de Sevilla, pareces Astorga.

PEPE.- Si quieres, canto.

PRIMITIVA.- No, que a saber que es lo que cantarías. Lo que yo quiero es

que espabiles, y tener ese cuerpo que no se puede aguantar. Y si no, te
cambio por un paraguas.

PEPE.- Pues si quieres, te doy una fotografía, que con eso no creo que
haya peligro.

PRIMITIVA.- ¡Y un cuerno me vas a dar!

PEPE.- Además, tengo que decirte una cosa.

PRIMITIVA.- Buena o mala.

PEPE.- Yo creo que Buena. Es que ya solo nos falta pagar la mitad del
taxi.

PRIMITIVA.- Pues eso con seis meses más enseñando las domingas, lo
tenemos arreglado.

PEPE.- ¡Eso si que no!

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PRIMITIVA.- ¡Menos genios! Como se nota que tú no tienes que hacer la
casa después de conducir,

PEPE.- Pues por lo menos, que te echen las propinas desde lejos.

PRIMITIVA..- Eso, y que parezca el juego de la rana, ¡Celoso mío!

(Le va a abrazar y se le cae la escayola al pie)

PEPE.- ¡Ay, ay, ay!!!

PRIMITIVA.- Si es que no puede ser, Pepe. A este paso, el día que nos
acostemos, te llevan a la UVI.

PEPE.- (se va reponiendo) Es que ya solo me queda sano este dedo.

(Primitiva se lo besa y el dedo se le va quedando mustio)

PRIMITIVA.- (Dramática) Vete, Pepe, no sea que también se te caiga la

uña.

PEPE.- Qué duro es lo nuestro, Primitiva.

PRIMITIVA.- ¡Qué más quisiera yo que saber cómo es!

PEPE.- Adios, Primitiva.

PRIMITIVA.- Adiós, Pepe. Seguiremos queriéndonos a distancia hasta

que se nos termine el gafe.

(Aparecen CÁNDIDA y SOFÍA)

CÁNDIDA.- (muy dramática) ¡No te vayas, canalla!

PRIMITIVA.- Pero, ¿no estabais tomando horchata?

CÁNDIDA.- El deber es antes que el placer.

PEPE.- Y ésta, ¿qué dice?

CANDIDA.- Tú sabes bien por qué lo digo

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SOFÍA.- ¡Y tan bien que lo sabe!

PRIMITIVA.- Vosotras, en vez de horchata, le habéis pegado al pacharán.

PEPE.- ¡Digo!

CÁNDIDA.- Pues no digas tanto. ¿sabes quién es el padre del hijo de

Sonsoles?

PRIMITIVA.- El que se fué dejando el pufo.

SOFÍA.- Que te crees tu eso.

CÁNDIDA.- ¡Tú calla!. Qué equivocada que estás, Primitiva. Ese que tú
crees que te quiere, que es un hombre bueno…. ¡ése es el que violó a
Sonsoles!

SOFÍA.- Todavía me parece oir los gritos. No te lo dijimos por no darte un

disgusto.

PRIMITIVA.- ¡Vamos, anda!

CÁNDIDA.- Me duele que no creas a los de tu sangre.

PEPE.- Esta tía está loca.

CÁNDIDA.- De rabia es de lo que estoy loca.

SOFÍA.-Y de dolor, también de dolor.

CÁNDIDA.- Eso, y también de dolor.

SOFÍA.- Y si no nos crees, llama a Sonsoles.

PRIMITIVA.- No necesito llamar a nadie.

CÁNDIDA.- pero nosotras sí…..¡Sonsoles!

SONSOLES.- (entrando) Me llamo.

SOFÍA.- Pasa, querida, pasa. (se queda en una esquina)

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PRIMITIVA.- Déjame a mí. ¿Sabes lo que dicen estas liantas? Que Pepe
te violó y que lo que esperas es suyo.

CÁNDIDA.- No tengas miedo, que estamos aquí para protegerte.

(empujándola al centro)

SONSOLES.- (Avergonzada) Es verdad.

PEPE.- (Alucinando) Aquí todos se han vuelto locos.

SOFÍA.- Ahí tienes la verdad. Ya te he dicho que yo oí los gritos.

PRIMITIVA.- ¿pero qué has hecho, Pepe?

PEPE.- ¿Y tú las crees?

PRIMITIVA.- lo dicen todas

SONSOLES.- Es que yo…….

SOFÍA.- ¡Tú a callar! Bastante tienes con tu desgracia.

PRIMITIVA.- Vete, Pepe. Porque al fin y al cabo, lo nuestro más que un

noviazgo es una crónica de sucesos, pero no te perdono que lo hicieras en
mi casa.

PEPE.- Yo te juro que…..

PRIMITIVA.- No jures que es peor, Pepe. Es mejor que te vayas.

PEPE.- Adiós, Primi (hace MUTIS)

PRIMITIVA.- (solloza) hay quien nunca puede ser feliz.

SONSOLES.- Yo no he querido…..

SOFÍA.- (Se lleva a empujones a Sonsoles). Tú, a descansar y a

preocuparte del niño. (mutis de Sofía y Sonsoles)

CÁNDIDA.- Pronto olvidarás a ese golfo

PRIMITIVA.- ¡Cállese!

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CÁNDIDA.- Como quieras, pero solo lo hemos hecho por tu bien, porque
te queremos.

PRIMITIVA.- Pues hay amores que matan.

CÁNDIDA.- Te dejo sola….. (va a salir y se vuelve)

Y mira, casualmente al pasar por el estanco, he cogido unas quinielas, te las
dejo encima de la mesa por si se te ocurre algo.

(MUTIS DE CÁNDIDA)

PRIMITIVA.- (Habla consigo misma) Ya ves, Primi. Vas a tener que ser
mala a la fuerza, y reírte de los hombres y hacer todo el daño que puedas….
¡Pero qué digo!, si soy una infeliz que solo sé querer, aunque no me dejan.
Pero tú tranquila Primitiva. ¡Saldremos Adelante!

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 SEGUNDO ACTO
Cuadro tercero

(En escena PRIMITIVA Y SONSOLES. Ësta hace punto)

SONSOLES.- Dos al derecho, tres al revés, dos al derecho….tres al

revés…

PRIMITIVA.- (Quita el polvo) Vaya cantinela que te traes.

SONSOLES.- Ya ves, pero es que si no le hago la ropa al niño, ya me dirás

con qué le visto.

PRIMITIVA.- Estoy baldada. Ahora que no me ven, me sentaré un `poco.

(Se sienta al lado de Sonsoles y le toca la tripa) .Qué suerte tienes, hija. Y
más ahora que tener un niño sin estar casada no importa nada, porque antes
una mujer honrada era la que iba al matrimonio como iré yo, virgen hasta
de la oreja. Pero ahora lo único que tienes que hacer es no robar en El Corte
Inglés.

SONSOLES.- ¿Y tu hermana?

PRIMITIVA.- Han ido al notario a por el cofre. Como van a ser ricas,
cualquiera las aguanta

SONSOLES.- Pues conmigo no veas cómo están. Desde que te dije que lo
de Pepe era mentira, no hacen más que meterse conmigo.

PRIMITIVA.- Total para nada, Porque como no puedo olvidarle, sigo sin
acertar nada.

SONSOLES.- ¿ y de Pepe, sabes algo?

PRIMITIVA.- Solo que traspasó el taxi, y que desapareció de Madrid.

SONSOLES.- Menudo disgusto se llevaría el pobre.

PRIMITIVA.- A ti te he perdonado porque te engañaron, pero a ellas solo

las movía el egoísmo, no les importó nada el destrozar mi vida.

SONSOLES.- Pues a mí en cuanto puedan, Seguro que me echan, porque

tú eres su hermana, pero yo no soy ni de la familia.

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PRIMITIVA.- A esas las importa poco los parentescos.

SONSOLES.- Tú a malas, podrías volver al convento

PRIMITIVA.- Tampoco sé cómo me recibirían. Y más desde que por

quedarme les hice perder la herencia.

SONSOLES.- Total para que éstas se la gasten en el bingo.

PRIMITIVA.- Pues no les basta con nada. No veas la bronca que me

echaron ayer cuando vieron que tampoco había acertado la lotería. Como
que si estuviera en forma, acertaría donde está Pepe.

SONSOLES.- Lo que tienes que hacer es olvidarle.

PRIMITIVA.- ¡Eso nunca!

SONSOLES.- Si es que lo vuestro nació gafao.

PRIMITIVA.- Pero yo le quería, Sonsoles. Y aún le quiero, y de alguna

forma lo hubiéramos superado, pero después de lo que hice, cualquiera
sabe lo que piensa. Pero es igual. Yo sé que Pepe se acuerda de mí esté
donde esté.

(Suena el TIMBRE de la Puerta)

PRIMITIVA.- (abriendo la Puerta es PEPE, pero viene tan elegante que

Primitiva no le reconoce). Los señores no estan, y no necesitamos comprar
nada.
(Cierra la Puerta)

PRIMITIVA.- Que tio más guapo, Sonsoles! Y mira que son listos. Ahora
los vendedores parecen marqueses. (TIMBRE otra vez). Pero marqueses
pesados. (Vuelve a abrir la Puerta) ¡Ya le he dicho que los señores no
están!
(Cierra la Puerta. Pero se da cuenta, y abre otra vez)
Un momentito, pase usted aquí a la luz que le vea bien..que me da….. ¡Ay,
que me da! ¡Pepe!

PEPE.- Es que no me habías reconocido?

PRIMITIVA.- Es que me he quedado muda.

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PEPE.- A ver si ahora te van a empezar a ti las desgracias.
(Pepe ve a Sonsoles embarazadísima)
Hola Sonsoles..

SONSOLES.- Yo me voy a echar un rato. Así podeis hablar. (MUTIS)

PEPE.- Te debo una explicación.

PRIMITIVA.- Yo soy la que debo explicarme y pedirte perdón por no

haberte creído. Sonsoles me lo explicó todo. Te busqué, pero no pude
encontrarte.

PEPE.- Vendí el taxi.

PRIMITIVA.- Eso ya me lo dijeron.

PEPE.- Y me fuí a América.

PRIMITIVA.- Pues yo mira como me he quedado por tu culpa, en los

huesos….bueno, casi.

PEPE.- Yo te veo igual de guapa, y muy alegre

PRIMITIVA.- Tampoco querrías que me metiera a monja, aunque con lo

que has tardado, ya sería Superiora.

PEPE.- Lo de tardar en Volver ha sido por el tratamiento.

PRIMITIVA.- ¿El tratamiento de qué?

PEPE.- ¿Te acuerdas la última vez que me tocaste el dedo y se me dislocó?

PRIMITIVA.- ¡Cómo no voy a acordarme si era lo único que te tocaba!

PEPE.- Pues nada mas salir, se me cayó la uña.

PRIMITIVA.- Y fuiste a América a que te la pegaran. Tú en América y yo

buscándote por todos sitios.

PEPE.- Pero ¿tú crees que podíamos seguir así? Sin poder besarnos, sin
poder tocarnos, con las ganas que yo te tenía.

PRIMITIVA.- pues no se te notaba nada.

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PEPE.- Pero si es que soñaba contigo y me salía un flemón. Así que me
dije, vendo el taxi y me hago un tratamiento de sicosi.

PRIMITIVA.- y ¿eso qué es?

PEPE.- una cosa que te tumban en un sillón y se te pone un señor encima.

PRIMITIVA.- Eso es mariconeo, Pepe.

PEPE.- Que no mujer. Se te pone encima para preguntar.

PRIMITIVA.- ¿y qué te pregunta?

PEPE.- Que quién eres.

PRIMITIVA.- Pues para eso le das el carnet de identidad.

PEPE.- Es que a veces no eres el que piensas

PRIMITIVA.- Eso es porque se tiñen el pelo

PEPE.- Eso es porque te ven por dentro, y ahora sé porque nos pasaba lo
que nos pasaba.

PRIMITIVA.- ¿Y por qué era?

PEPE.- Porque te tenía miedo.

PRIMITIVA.- ¿a mi?

PEPE.- Eso dijo el medico

PRIMITIVA.- Y cuánto te cobraron por decirte eso.

PEPE.- Un millón.

PRIMITIVA.- Pues por un millón y en América, te podían haber dejado

como a Robert Redford

PEPE.- Pues si quieres te lo mando.

PRIMITIVA.- Y qué iba yo a hacer sin saber inglés. Pero por lo menos te
habrán curado

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PEPE.- Ahora lo vamos a ver. Dame un beso en la mejilla.

(Primitiva le da un beso)

¿lo ves? No pasa nada. Ahora tócame el muslo

(Primitiva le toca el muslo)

¿lo ves?, tampoco pasa nada.

PRIMITIVA.- Pero, ¿nada de nada?

PEPE.- Como lo oyes.

PRIMITIVA.- Ay Pepe. Que a ti eso del señor encima te ha cambiado

mucho

PEPE.- No seas mal pensada, mujer. Digo que no pasa nada de accidentes

PRIMITIVA.- Menos mal. Así que ahora a trabajar otra vez para comprar
otro taxi.

PEPE.- Y lo que haga falta.

PRIMITIVA.- ¡Ay, Pepe! Y yo que me quejaba de la vida. (se abrazan)

(suena al TIMBRE de la Puerta)

SOFIA.- (en off). Abre Primitiva, que somos nosotras

PRIMITIVA.- Métete ahí, y cuando te llame, sales. (sale a abrir)

SOFÍA.- Ya era hora, Seguro que estabas vagueando.

(entran CÁNDIDA Y SOFÍA. Cándida lleva cofre en la mano)

¿Y Sonsoles?

PRIMITIVA.- Descansando en su habitación.

CÁNDIDA.- Me parece que aquí la gente descansa más de la cuenta, y eso

se va a acabar.

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PRIMITIVA.- No lo dirá por mí, que no paro.

CÁNDIDA.- Lo digo por las dos.

PRIMITIVA.- Debería darle vergüenza decirme esas cosas. Pero si quiere

me voy.

SOFÍA.- ¿Y a dónde ibas a ir, desgraciada?

PRIMITIVA.- Mejor que aquí en cualquier sitio. Ya veo que tenéis el

cofre, así se os ve de satisfechas, pero no olvidéis que también era mi
padre.

CÁNDIDA.- Dejó instituido que todo fuera para nosotras

PRIMITIVA.- A condición de que me tuvierais como a una reina, y aquí

parezco la Cenicienta

SOFÍA.-cállate y Vete preparando la merienda.

PRIMITIVA.- ¿el té a la Española o a la inglesa?

SOFÍA.- y ¿qué diferencia hay?

PRIMITIVA.- A la Española con sopas, y a la inglesa con galletas.

CÁNDIDA.- Yo con galletas.

PRIMITIVA.- Las galletas se han terminado

SOFÍA.- ¿otra vez?

PRIMITIVA.- Es que no sabes lo poco que cunden cincuenta gramos.

Claro, que ahora con los veinte millones podréis traer setenta y cinco.

CÁNDIDA.- Para ser exactos veintitrés millones y todo en acciones.

PRIMITIVA.- Pues el café os lo vais a preparar vosotras.

SOFÍA.- ¡Descarada!

CÁNDIDA.- La culpa es tuya por consentirle todo

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SOFÍA.- Pues eso se ha terminado

PRIMITIVA.- En eso tienes razón (se acerca donde Pepe está Escondido)
¡Pepe, ya puedes salir!

(Pepe aparece y en un principio Cándida y Sofía no le reconocen)

SOFÍA.- Pero ¿tu ves?. Ahora se trae los hombres a casa

PEPE.- No se alteren ustedes.

CÁNDIDA Y SOFÍA.- ¡Pepe!

PEPE.- No tengan miedo que no soy rencoroso, y eso que Primitiva me lo

ha contado todo.

SOFIA.- Eres una desagradecida

PRIMITIVA.- ¿por qué? Encima que me hacéis trabajar como si fuera una
mula.

SOFÍA.- pues de nosotras olvídate.

PRIMITIVA.- ¿tú qué dices, Pepe?

PEPE.- Que cuando quieras nos casamos.

CÁNDIDA.- Cuando te deje, aquí no vuelvas. Te vas al convento.

PRIMITIVA.- Lo tendré en cuenta. Ahí os quedáis con vuestros millones

(Cuando van a salir, suena el TELEFONO)

CÁNDIDA.- ¿digame?....... es de la notaría….¿cómo?

(se le cae el teléfono y de desploma en la silla)

SOFÍA.- Pero, ¿qué te pasa?

CÁNDIDA.- El cofre…..

SOFÍA.- No te preocupes que está aquí

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CÁNDIDA.- El cofre…….

SOFÍA.- Y dale con el cofre

CÁNDIDA.- ¡Las acciones!

SOFÍA.- (sacando los papeles del cofre) Que si hija, que están aquí.

CÁNDIDA.- (con un hilo de voz) Leelos….

SOFÍA.- Aquí pone Ru….Ru…Ru…¡Rumasa!

(Primitiva se ríe a carcajadas)

PRIMITIVA.- Esas acciones no valen ni lo que el papel

SOFÍA.-Pero , ¿qué dices?

CÁNDIDA.- El notario dice que les podremos sacar diez mil pesetas…..

SOFÍA.- ¿Diez mil pesetas?

CÁNDIDA.- Y eso por lo alto.

(Aparece SONSOLES en el salón)

SONSOLES.- Que me parece que llega el niño.

PRIMITIVA.- Pues sí que has elegido un buen momento

CÁNDIDA.- ¡Aire! Que me den aire

SOFÍA.- ¡Anda y que te den morcilla! ¡Una ambulancia, llamad a una

ambulancia!

(La escena es cómica y de gran confusion. Primitiva mira a todos y dice😊

PRIMITIVA.- ¿Y para esto quería yo una familia? ¡La madre que os

parió!

FIN DEL CUADRO TERCERO.

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44