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Cómo Facebook se convirtió

en un cómplice de la censura
y de las agencias de
inteligencia de EEUU
hace 8 horas
https://sputniknews.lat/20240204/como-facebook-se-convirtio-en-un-complice-de-la-censura-y-de-las-agencias-de-
inteligencia-de-eeuu-1147977837.html

© AP Photo / Michael Dwyer

El 4 de febrero se cumplen 20 años del lanzamiento de


Facebook*. En veinte años, la compañía se ha convertido
en una importante herramienta de manipulación e
ingeniería social para las distintas fuerzas de los niveles
más altos de influencia. Sputnik contactó a un informante
para comprender la arquitectura del complejo de censura
de Facebook.
Lanzado formalmente el 4 de febrero de 2004, el futuro imperio de Mark
Zuckerberg comenzó como un modesto "directorio de información para
estudiantes universitarios". La plataforma inicial fue montada por el futuro
multimillonario estadounidense y varios de sus compañeros de
Harvard solo en unas dos semanas.
La empresa tardó solo cuatro años en superar a su rival Myspace para
convertirse en la plataforma de medios sociales número uno del mundo.
Veinte años después de su fundación, Meta, la empresa matriz de
Facebook, ha llegado a ser un gigante tecnológico, con más de 3.000
millones de usuarios activos mensuales en su servicio estrella y un
valor de mercado superior al billón de dólares.
A medida que se acercaba el 20 aniversario de la fundación de la
empresa, los medios empezaron a publicar una serie
de informes elogiosos sobre el pasado de Facebook, los
buenos momentos y sus ambiciosos planes inspirados en la ciencia
ficción, incluida la creación de inteligencia artificial general.
Sin embargo, bajo la superficie de todas estas impresionantes historias
se esconde una realidad más oscura de manipulación y programación
social, censura y francos intentos de controlar la narrativa por parte de
los gobiernos occidentales, las grandes empresas y las agencias de
inteligencia.
A medida que estadounidenses, europeos y otros ciudadanos del mundo
se registraban, se conectaban y ofrecían voluntariamente información
privada por la que las empresas y las agencias de inteligencia habrían
pagado una fortuna hace tan solo unas décadas, varias fuerzas
poderosas se dieron cuenta rápidamente de la importancia de recopilar y
manipular esta nueva forma de interacción humana.
"Está claro que las agencias de inteligencia de todo el mundo, no solo las
de EEUU, pueden utilizar Facebook en su beneficio", declaró a Sputnik
Ryan Hartwig, antes contratista de Facebook, ahora su denunciante y
coautor de Behind the Mask of Facebook: A Whistleblower's Shocking
Story of Big Tech Bias and Censorship.
"El Gobierno blanquea su censura a través de varias ONG e
instituciones en nombre del Gobierno estadounidense", indicó Hartwig,
señalando, en concreto, un informe de 2021 del Observatorio de Internet
de Stanford Combating Information Manipulation: A Playbook for
Elections and Beyond, en el que se describen claramente las
herramientas que utiliza la empresa para "eliminar la difusión de
información maligna" en las redes sociales.
Extracto del Centro de Ciberpolítica del Observatorio de Internet de Stanford sobre las
herramientas de que dispone Facebook para censurar contenidos.
© Sputnik

El autoproclamado Ministerio de la
Verdad
En su libro, escrito junto con el abogado Kent Heckenlivy, Hartwig relata
cómo, mientras trabajaba como moderador de contenidos en Facebook
en la década de 2010, fue testigo de la inquietante transformación de la
plataforma. Según él, después de las elecciones de 2016 Facebook se
estaba convirtiendo en una herramienta para suprimir
sistemáticamente las opiniones conservadoras y elevar las liberales,
así como para suprimir algunas formas de supuesta incitación al odio
mientras se amplificaban otras.
Igualmente, la censura del gigante de las redes sociales no solo afecta a
los conservadores, sino también a los grupos de izquierda no liberales
que critican al complejo militar-industrial estadounidense, al imperio
farmacéutico y a otras fuerzas de élite.
Entre los casos documentados de censura por parte de Facebook figuran
la supresión de críticas a la política de inmigración estadounidense y
europea, las políticas climáticas, las vacunas y los mandatos de
vacunación, las críticas a la propia Facebook y las peculiaridades de la
política exterior de EEUU. Las publicaciones sobre estas cuestiones en
ocasiones se eliminan directamente, pero con mayor frecuencia se
ocultan o se suprimen sin que los usuarios sean informados mediante el
complejo algoritmo de la plataforma, que no es de código abierto.

Captura de pantalla facilitada a Sputnik por Ryan Hartwig, moderador de contenidos de


Facebook convertido en denunciante, en la que se da instrucciones a los moderadores para
que ignoren las denuncias de usuarios que califican de incitación al odio la afirmación del
ahora expresentador de la CNN Don Lemon de que "los hombres blancos son la mayor
amenaza terrorista en este país".
© Foto : Cortesía de Ryan Hartwig
En 2021, el medio The Intercept obtuvo una amplia lista secreta de 100
páginas Personas y organizaciones peligrosas de Facebook que, aunque
estaba diseñada para atacar a extremistas, criminales y terroristas,
resultó incluir a una serie de grupos profundamente implicados en la
lucha contra los yihadistas en Oriente Medio, como Hizbulá, el
Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica de Irán (CGRI) y los hutíes
de Yemen.
Cientos de grupos de milicias armadas con sede en Estados Unidos
(cuyas actividades están protegidas por la Constitución de Estados
Unidos) también estaban en el punto de mira, al igual que una serie de
grupos partidarios de Trump mezclados con los de neonazis.

Lista interna de Facebook de 'Personas y organizaciones peligrosas' cuyo discurso puede


censurarse en las plataformas de la empresa en función de su afiliación.
© Foto : The Intercept / Facebook

En 2022, Facebook introdujo una serie de excepciones a sus normas


contra la incitación al odio para permitir a los usuarios publicar mensajes
explícitamente rusófobos, amenazar de muerte a funcionarios rusos,
utilizar un lenguaje deshumanizador para referirse a las tropas rusas e
incluso elogiar al regimiento neonazi Azov**, a pesar de que el gigante de
las redes sociales prohíbe los contenidos de ideología nazi y neonazi.
"Facebook manipula la opinión pública suprimiendo opiniones
impopulares o permitiendo excepciones noticiables para la gente que les
gusta", explicó Hartwig, señalando que esto se extiende no solo a
cuestiones de gran renombre, sino incluso a detalles extremadamente
minúsculos que rozan la psicopatía.
"Por ejemplo, crearon una norma específica para proteger a Greta
Thunberg de ser atacada o llamada Gretarded", recordó el exmoderador
de contenidos, refiriéndose a la activista climática.
"Normalmente, se permite llamar retrasados a personajes
públicos, incluso a personas jóvenes como Greta. Facebook hizo
una excepción para protegerla", declaró Hartwig.

Imagen facilitada por Ryan Hartwig, contratista de Facebook convertido en denunciante, que
muestra una directiva de la empresa que ordena a los moderadores de contenidos "eliminar
los casos de ataques dirigidos a Greta Thunberg."
© Foto : Cortesía de Ryan Hartwig

"Esto es realmente una guerra de quinta dimensión y, utilizando


Facebook, las agencias de espionaje pueden influir en la opinión pública
mucho más fácilmente que nunca", cree el denunciante.

Herramienta de manipulación
electoral
En 2020, preocupado por lo que consideraba una flagrante interferencia
en las próximas elecciones federales de EEUU, Hartwig se puso en
contacto con Project Veritas con imágenes de cámara oculta y otra
información que documentaba las sesgadas directivas de
moderación de contenidos de Facebook.
Así, intentó revelar exactamente cómo se podían eliminar o manipular
publicaciones relacionadas con un candidato y sus partidarios, en
violación directa de la política de la empresa sobre la protección de la
expresión política. Las observaciones de Hartwig han sido corroboradas
por otros denunciantes y filtraciones de información a lo largo de la última
década.
En concreto, en 2018 fue revelado que la consultora política Cambridge
Analytica, con sede en el Reino Unido, se dedicó a recopilar decenas
de millones de perfiles de Facebook en 2014 para posteriormente
dirigirles anuncios políticos personalizados, incluso durante la campaña
presidencial estadounidense de 2016. Informes
posteriores comunicaron que la empresa participó en operaciones
similares de recopilación y manipulación de votos en países de todo el
mundo, desde Kenia y Nigeria hasta Argentina, Venezuela, la India, el
Reino Unido y República Checa.
En una entrevista con Joe Rogan en 2022, Mark Zuckerberg admitió
explícitamente que Facebook había suprimido una de las noticias más
importantes del ciclo electoral de 2020. El medio The New York
Post publicó, en vísperas de la votación de noviembre, el artículo sobre
archivos en el ordenador portátil de Hunter Biden que contenían pruebas
de una trama de corrupción de pago por parte de la familia Biden.
Según el multimillonario estadounidense, el FBI ordenó a Facebook que
lo censurara .
"Básicamente, los antecedentes son que el FBI vino a nosotros, a
algunos miembros de nuestro equipo, y nos dijo: 'Oíd, para que lo sepáis,
deberíais estar en alerta máxima, pensamos que hubo mucha
propaganda rusa en las elecciones de 2016, y estamos sobre aviso de
que básicamente está a punto de haber algún tipo de vertido similar a
ese. Así que estén atentos'", recordó Zuckerberg.
"Si se nos informa de algo que puede ser desinformación, desinformación
importante, también tenemos un programa de verificación de hechos de
terceros, porque no queremos decidir qué es verdad y qué es mentira. Y
durante los, creo que fueron cinco o siete días, en los que básicamente
se determinó si era falso, la distribución en Facebook se redujo.
Básicamente el ranking y el newsfeed fue un poco menor, por lo que
menos gente lo vio de lo que lo habría visto de otro modo", añadió.
Hartwig señala un "ejemplo atroz" utilizado contra Venezuela, donde
"se hizo un llamamiento a las armas para ayudar a defender [al
presidente] Nicolás Maduro y Facebook eliminó la publicación porque [la
consideró] un 'llamamiento a la violencia'. Nicolás Maduro era el
presidente en ejercicio y Facebook no permitió que la gente utilizara las
redes sociales para defender a su propio país".

Captura de pantalla de Ryan Hartwig de la directiva a los moderadores de contenido de


Facebook en la que se les dice que eliminen un vídeo de un aliado de Maduro que llama a los
venezolanos a "defender la revolución con las armas."
© Foto : Cortesía de Ryan Hartwig

Un práctico asistente en materia de


golpes de Estado
Junto con la manipulación electoral, Facebook y otros recursos de las
redes sociales han sido vistos desde hace tiempo por los servicios de
inteligencia como una herramienta ideal para fomentar el malestar social
o incluso para derrocar Gobiernos. Aprendiendo de las experiencias
de violencia de la Primavera Árabe de 2011, las agencias de
inteligencia se dieron cuenta rápidamente del potencial de la nueva
tecnología para hacer avanzar los objetivos geopolíticos de sus naciones
en el extranjero.
En 2013, fue un post en Facebook de un periodista de la televisión liberal
ucraniana, enfadado por la decisión del Gobierno del expresidente
ucraniano Víctor Yanukóvich (2010-2014) de desechar los planes de
Kiev de firmar un acuerdo de asociación con la UE. Esto acabó
desencadenando los disturbios del Euromaidán, que culminaron con el
derrocamiento de las autoridades democráticamente elegidas de Ucrania
en febrero de 2014.
Los servicios de inteligencia occidentales intentaron repetir el proceso en
Irán a finales de 2022, cuando las violentas protestas desencadenadas
por la muerte de una joven iraní en circunstancias sospechosas fueron
orquestadas por un iraní-estadounidense. El empleado de Voice of
America y presunto agente de la CIA utilizó Facebook, Twitter e
Instagram* para organizar y radicalizar a los manifestantes.

En los inicios de la manipulación


fisiológica
Los intentos de control y manipulación de Facebook van más allá de la
censura y la interferencia electoral. En 2012, la compañía llevó a cabo un
experimento secreto de manipulación del estado de ánimo con el que
intentó alterar el estado emocional de unos 700.000 usuarios a través de
sus noticias.
El proyecto, cuya existencia no fue revelada hasta 2014 tras la
publicación de un artículo científico en Proceedings of the National
Academy of Sciences, descubrió que, al modificar las noticias de los
usuarios, Facebook podía influir en el contenido que publicaban, llevarles
a publicar respuestas y mensajes de estado más negativos, etc.
El controvertido estudio descubrió en última instancia "que los estados
emocionales pueden transferirse a otros por contagio emocional,
llevando a las personas a experimentar las mismas emociones sin que
sean conscientes de ello".
* Meta, la empresa matriz de Facebook e Instagram, está proscrita en
Rusia por extremista.
** prohibido en Rusia por extremista y terrorista

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