Cuestionario de Habilidades Sociales

Con este cuestionario evaluaremos tus habilidades sociales. A continuación se

mostrarán una serie de situaciones sociales de la vida cotidiana, en cada una de ellas se
muestran diferentes tipos de reacciones. Intenta responder con la situación que más se
acerque a cómo reaccionarías en esos casos, en la mayoría de ocasiones. Intenta pensar
en concepto general y no dejarte influir por las emociones o el ánimo del día en el que
rellenes el cuestionario.

1) Necesitas pedir una información, como por ejemplo qué camino seguir para
llegar a una calle determinada.

Sin pensarlo te diriges a la primera persona que encuentras y le preguntas algo

como ¿perdone, podría decirme por favor dónde se encuentra la calle X?, y le das las
gracias al acabar.
Piensas sobre cómo hacer para preguntarlo, pero finalmente te las arreglas por tu
cuenta y no le preguntas a nadie.
La idea de hacer la pregunta te pone tenso. Finalmente te decides a hacerlo pero te
sale poco natural, te sonrojas y supone un mal trago.
Te diriges a cualquier persona y sin previo aviso le dices ¿dónde está la calle X?

2) Necesitas pedir prestado un libro

La cuestión te incomoda, no sabes cómo hacerlo y finalmente compras el libro

aunque sea para hacer una breve consulta para evitar tener que pedirlo.
Sin ninguna dificultad te acercas a la persona idónea y le planteas. Creo que tienes
el libro X. ¿Te importaría prestármelo para hacer una consulta?
Piensas mucho sobre cómo hacerlo, y cuando finalmente te decides a hacerlo, das
muchas explicaciones acerca de para qué necesitas el libro, como justificándote.
Te acercas al dueño del libro y le dices. Déjame el libro X

3) A la hora de iniciar una conversación frívola sobre temas intrascendentes

Casi nunca lo haces, aunque te gustaría. Quizás pienses que lo que tú puedes decir,
no le interese a nadie.
Empiezas a hablar claramente y sin titubeos del tema que te interesa.
Lo haces en ocasiones, pero tras meditar previamente sobre qué decir y sintiéndote
tenso y ansioso.
Hablas casi todo el tiempo y con cualquier persona de lo que a ti te interesa.
4) Cuando te dicen "Me pareces una persona agradable"

Te sonrojas, miras hacia otro lado, te sientes incómodo, aunque intentas agradecer
el cumplido como puedes.
Estás incómodo y sonrojado. No contestas nada.
Con naturalidad contestas algo como, Gracias.
Respondes, Naturalmente, yo siempre soy el más simpático de todos, o algo similar.

5) Cuando se trata de mantener una conversación sobre temas banales

Acaparas la conversación sin apenas dejar que participen los demás. Interrumpes y
te pones nervioso si los demás te ignoran.
Generalmente no dices nada. Si estás solo con otra persona la conversación
fácilmente decae.
Participas activamente y con naturalidad en la conversación hablando y dejando
hablar.
Cuando hablas se te nota tenso, balbuceas y te sonrojas o te cuesta que te salgan las
palabras.

6) Cuando en una conversación te gustaría cambiar el tema y proponer uno nuevo

(por ejemplo la última película que has visto)

Piensas acerca de la mejor manera de hacerlo, y esperas una pausa para decir algo,
pero en la pausa al final no dices nada.
Esperas una pequeña pausa o un comentario relacionado con el tema de la película
y comentas, Por cierto ayer vi una película...
Interrumpes sin más a los demás y dices, Ayer vi una película fabulosa.
Tras mucho tiempo y esfuerzo haces referencia, en tono bajo y sin mirar a nadie, a
la película que viste ayer

7) Quieres invitar a una persona para ir al cine

Sin meditarlo ni titubeos le dices, Me gustaría que vinieras al cine conmigo, ¿qué te
parece?
Meditas acerca de la forma de hacerlo, pero no encuentras la forma y finalmente no
te atreves.
Te cuesta mucho dar el paso, le das muchos rodeos pero acabas proponiéndolo, no
sin tus dificultades.
Le dices, Tienes que venir al cine conmigo.
8) Hay alguna persona con la que te gustaría tener algo más de intimidad

No sabes cómo hacerlo, y no se te ocurre qué decir, así que lo dejas correr.
Cuentas algo personal sin dificultad, propiciando con discrección que la otra
persona también te explique algo íntimo.
Te pones ansioso y tenso, hablas muy bajito e igual te faltan las palabas.
La abordas directamente haciendo preguntas indiscretas.

9) Cuando una persona te habla de temas íntimos

La situación te violenta e incómoda, generalmente aguardas en silencio.

Sigues la conversación sin ningún problema, escuchas con interés y comentas con
naturalidad tu parecer.
Prefieres hablar de tus temas personales antes que los demás te cuenten los suyos.
Escuchas atentamente e intentas participar, pero te sale forzado o poco natural.

10) En temas espontáneos como explicar un chiste, hacer bromas, bailar...

Te comportas con naturalidad disfrutando de la situación.

Te preocupa más, el qué están pensando los otros, o no quedar en ridículo, que
disfrutar de la situación.
No participas con los demás.
Estás cómodo pero tiendes a, pasarte de la raya, en estas situaciones.