Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Todos los ensayos que van a escribir como estudiantes, y en el resto de sus vidas, deben
contar con el formato básico que se explica a continuación. Aunque los contextos diferentes
exigen alteraciones, ustedes sólo deben desviarse por buenas razones. Como todas las
reglas gruesas, estas guías tienen propósitos útiles y no deben ser tratadas como leyes de
acero. Estas reglas continúan una tradición de los principios de la buena escritura y deben
ser combinadas con un conocimiento de gramática y ortografía y de un amplio vocabulario.
El formato que se describe es apropiado para un ensayo que aplica una teoría o una idea a
una cuestión particular. Otros tipos de ensayo, como de teoría pura o uno que envuelva
matemáticas o econometría, requieren de ajustes. Estas reglas buscan que usted piense
sobre el diseño y estructura de sus ensayos, sin que tenga que ver con sus argumentos o
contenidos. Los ensayos no se escriben espontáneamente, con contadas excepciones.
Transformar una buena idea en un buen ensayo es un proceso difícil. Un entendimiento
claro de lo que debe cumplir cada parte de su ensayo es esencial en el proceso de escritura.
La filosofía detrás de este formato es que los ensayos son a veces sus peores enemigos, que
su estructura y contenido impiden, en vez de contribuir, a que sus lectores entiendan su
mensaje principal. Esto es especialmente cierto en circunstancias en que la mayoría de los
lectores no leen los ensayos con cuidado. O sea su ensayo no va a ser leido por un
calificador cuidadoso, ya sea un asistente del profesor o un comité evaluador de una revista,
y usted debe hacer un esfuerzo por cautivarlo y captar su atención.
La primera regla para la escritura de los ensayos es, por lo tanto, la siguiente:
Los ensayos deben focalizarse en un tema principal. No intente enriquecer su ensayo con
muchas adiciones o ilustraciones. Los comentarios que pretendan sugerir implicaciones no
esenciales para el desarrollo de su tema central deben ser evitados. Es mejor tener un
ensayo útil enfocado en un tema estrecho que un ensayo rico en temas que será ignorado.
La estructura
Parte I: Introducción. Desde el punto de vista del diseño, la introducción al ensayo es una
de sus partes más importantes. Un lector que sea confundido por la introducción o que no
llegue a entender que el ensayo trata sobre un tema importante e interesante, seguramente
abandonará la lectura ahí mismo. Y si acaso tiene la voluntad para continuar leyendo, es
menos probable que entienda el mensaje central del ensayo. En consecuencia toda
introducción debe consistir de 4 partes:
Parte II. La teoría. Exprese la lógica básica de su enfoque, lo cual no requiere explicitar
alguna referencia al problema que motivó su trabajo. A veces ejemplos cortos o
lustraciones son útiles.
Los ensayos aplicados no deben desarrollar necesariamente toda una teoría. El propósito es
más bien desarrollar solo lo que se necesita para resolver el problema propuesto en la
introducción (la solución como tal se desarrolla en la próxima sección). Por lo tanto, esta
sección no debe contener todas las implicaciones del enfoque que usted ha derivado sino
solo aquellas requeridas para desarrollar el punto principal del ensayo. Aún si su teoría es
muy rica, sea parco en sus implicaciones adicionales o colaterales.
Parte IV. Conclusiones. Establezca el punto principal del ensayo. Esto puede hacerse en la
forma de pregunta y respuesta o en forma más simple en un corta discusión del problema y
su solución. "En este ensayo, hemos demostrado que...". Haga un sumario o síntesis de su
visión principal y por qué usted pudo hacer algo que ninguna persona previamente había
hecho. Usted puede también señalar algunas limitaciones de su argumento y de sus
implicaciones adicionales.