Está en la página 1de 14

República Bolivariana de Venezuela

Universidad Nacional Experimental


“Francisco de Miranda”
Área: Ciencias de la Salud
Programa: Medicina
Unidad Curricular: Morfofisiología III

Sistema vestibular

Docente de la cátedra: Realizado Por:

Dra. Durvin Marcano Br. Verónica Díaz C.I: 31196804

Br. Jilary Chasoy C.I: 31454986

Noviembre 2023

1
INDICE

INTRODUCCIÓN ............................................................................................... 3
DESARROLLO…………………………………………………………………...……4

1. Anatomía funcional del sistema vestibular ................................................ 4


1.1 Aspectos generales ................................................................................... 5
2. Estructura interna de los conductos semicirculares ................................ 5
2.1 Conductos semicirculares......................................................................... 8
2.2. Utrículo y sáculo………………………………………………………………...5
2.3 Neuroepitelio del aparato vestibular………………………………………….6

3. Organización funcional de las vías vestibulares…………………………….8

3.1 El nervio vestibular………………………………………………………………8

3.2 Las vías vestibulares……..……………………………………………………..8

3.3 Las neuronas vestibulares………………………………………..........…….10

4. Cuidado e higiene del sistema vestibular……………………………………10

CONCLUSIONES ............................................................................................ 12
BIBLIOGRAFIA ............................................................................................... 13
ANEXOS……………………………………………………………………………………………………….14

2
INTRODUCCIÓN

En el presente informe escrito se desarrolla la temática sobre el sistema


vestibular, la cual es una parte fundamental del sistema sensorial humano que
nos permite mantener el equilibrio y la orientación espacial; este sistema está
muy relacionado con el sistema auditivo.

Es importante destacar, que un buen equilibrio depende de la vista, de la


propiocepción tanto consciente como inconsciente, que nos informará de la
posición y del movimiento, y del aparato vestibular. El aparato vestibular se
encuentra inmerso en las estructuras óseas que envuelven el cerebro, por lo que
informa principalmente de la posición de la cabeza con relación a la fuerza
continua de la gravedad.

Además, el sistema vestibular, como veremos, a continuación, en el desarrollo


de esta investigación informa también de los desplazamientos lineales y
angulares de la cabeza que se producen cuando el individuo se desplaza por su
medio externo. En este informe, exploraremos la anatomía y las funciones del
sistema vestibular, así como la opinión de algunos autores, conclusiones y
recomendaciones para su cuidado e higiene.

3
1. Anatomía funcional del sistema vestibular

1.1 Aspectos generales

El sistema vestibular está presente en todos los grupos de vertebrados y desde


el punto de vista morfofuncional puede dividirse en dos órganos principales: los
órganos otolíticos y los conductos semicirculares. Los primeros que se
mencionan, constituidos por el sáculo y el utrículo, tienen como función el
mantenimiento de la posición de la cabeza y del cuerpo en el espacio.

En el mismo orden de ideas, los órganos otolíticos se impulsan principalmente


por la dirección y magnitud de la aceleración lineal de la cabeza, incluyendo la
producida por la fuerza de la gravedad. Por otra parte, Escudero y Delgado
(2006), amplían esta idea al expresar: “los conductos semicirculares están
formados, en la mayoría de los vertebrados, por tres conductos, más o menos
circulares, que se disponen en una formación casi ortogonal entre sí”.

En relación a lo anterior, los conductos mencionados detectan la aceleración


angular del movimiento producido por la rotación de la cabeza en cualquier plano
del espacio, lo que evidencia su gran versatilidad y precisión.

El sistema o aparato vestibular como también se le conoce es una estructura par


que se localiza en el oído interno, y constituye un laberinto óseo excavado en
el hueso temporal (Ver en anexos Fig. 1 A). La estructura del laberinto está
formado por los conductos semicirculares, que se cierran sobre un cuerpo central
que contiene al sáculo y al utrículo, y que se continúa con la cóclea y está
revestido en su interior por un epitelio denominado laberinto membranoso.

Asimismo, el sistema de conductos contiene la endolinfa, la cual baña las


distintas estructuras sensoriales o receptoras (Ver en anexos Fig. 1 B). El
laberinto membranoso no está en contacto directo con el hueso temporal, de
forma que existe entre ellos otra matriz líquida que se denomina perilinfa.

Cabe destacar, que ambos compartimientos cumplen, como se verá más


adelante, una importante función en la transducción mecanoquímica que tiene
lugar en la célula ciliada receptora.

4
2. Estructura interna de los conductos semicirculares
2.1 Conductos semicirculares

Los tres conductos semicirculares presentes en el aparato vestibular (anterior,


posterior y lateral) están orientados en las tres direcciones del espacio, son
estructuras anatómicas del sistema vestibular ubicadas en el oído interno.

En tal sentido, hay tres conductos semicirculares en cada oído: el conducto


semicircular anterior, el conducto semicircular posterior y el conducto
semicircular lateral, estos conductos están dispuestos en ángulos rectos entre sí
y desempeñan un papel crucial en la detección de los movimientos angulares de
la cabeza. Cada uno de los tres conductos semicirculares (anterior, posterior y
lateral) está orientado en un plano diferente para detectar movimientos en
diferentes direcciones.

Asimismo, cada conducto semicircular se origina y termina en el utrículo, tiene


una forma similar a un tubo, con una parte dilatada llamada ampolla en un
extremo y en el interior de cada conducto semicircular se encuentra un canal
lleno de líquido llamado endolinfa.

Realmente, en el utrículo existen cinco orificios en vez de seis, ya que los


conductos anterior y posterior se fusionan en uno de sus extremos antes de
desembocar en el mismo. Cada conducto se ensancha en uno de sus extremos
antes de entrar en el utrículo, constituyendo la ampolla, dentro de la ampolla hay
una cresta ampular, que es una estructura en forma de cresta cubierta de células
ciliadas.

Se destaca, que estos conductos proporcionan información vital al cerebro para


mantener el equilibrio, estabilizar la mirada y ajustar la postura y la musculatura
en respuesta a los movimientos.

2.2 Utrículo y sáculo.

Son dos estructuras del oído interno que forman parte del órgano otolítico,
también conocido como el sistema otolítico, estas estructuras son esenciales
para la detección de la posición y los cambios en la aceleración lineal de la
cabeza.

5
En tal sentido, el utrículo y el sáculo son dos estructuras en forma de saco que
se encuentran en el oído interno, junto a los conductos semicirculares. El utrículo
está ubicado en posición horizontal, mientras que el sáculo está orientado
verticalmente. Ambos contienen un líquido llamado endolinfa y están revestidos
por células sensoriales especializadas llamadas células ciliadas.

Dentro del utrículo y el sáculo hay estructuras llamadas máculas. Las máculas
son engrosamientos de la pared de estas estructuras y contienen otolitos, que
son cristales de carbonato de calcio conocidos como otoconias. Estas otoconias
son pequeñas partículas que están suspendidas en el gelatinoso material que
cubre las células ciliadas. (Vease en anexos Fig. 2ª, 2B, 2C Y 2D).

2.3 Neuroepitelio del aparato vestibular

El neuroepitelio del aparato vestibular consta de dos tipos de células


mecanorreceptoras ciliadas (Fig. 2 B). Las células de tipo I poseen un soma en
forma de botella y su núcleo se localiza en su porción basal. Las células de tipo
II son cilíndricas, con el núcleo en posición medial.

Cabe destacar, el neuroepitelio del aparato vestibular se refiere a la capa de


células sensoriales especializadas que se encuentran en el oído interno y son
responsables de detectar los estímulos relacionados con el equilibrio y la
orientación espacial.

Asimismo, el neuroepitelio vestibular se encuentra distribuido en diferentes


estructuras del oído interno, como el utrículo, el sáculo y los conductos
semicirculares. Estas estructuras contienen células ciliadas que son las
responsables de la detección de los estímulos.

Conforme a lo anterior, las células ciliadas del neuroepitelio vestibular están


cubiertas por estructuras microscópicas llamadas estereocilios, que son
prolongaciones en forma de pelos. Estos estereocilios están dispuestos en filas
ordenadas, siendo los más largos en un extremo y los más cortos en el otro.

El neuroepitelio del aparato vestibular es una capa de células sensoriales


especializadas responsables de detectar los estímulos relacionados con el
equilibrio y la orientación espacial.

6
2.4 Mecanismo de transducción.

El mecanismo de transducción del sistema vestibular se refiere al proceso


mediante el cual las células sensoriales del oído interno convierten los estímulos
mecánicos, como los movimientos de la cabeza, en señales eléctricas que
pueden ser interpretadas por el sistema nervioso central.

En el sistema vestibular, existen dos tipos principales de células


sensoriales involucradas en la transducción: las células ciliadas y las células
de soporte.

 Células ciliadas: Son las encargadas de la transducción del estímulo


mecánico en señales eléctricas. Estas células están presentes en el
neuroepitelio del utrículo, el sáculo y los conductos semicirculares. Cada
célula ciliada tiene un grupo de estereocilios en la superficie apical, que
son proyecciones en forma de pelos, y un cinocilio más largo llamado
estereocilio cinocilio.
 Células de soporte: Son células especializadas que rodean y sostienen a
las células ciliadas. Proporcionan soporte estructural y metabólico a las
células ciliadas, así como también están involucradas en la regulación del
entorno químico y mecánico de las células.

Conforme al párrafo anterior, las neuronas vestibulares primarias presentan una


descarga tónica que aumenta cuando los estereocilios se desplazan en dirección
al quinocilio, y que disminuye cuando el movimiento es en dirección opuesta.

Al respecto, Escudero y Delgado (2006), nos refieren que “esta respuesta se


debe a los mecanismos moleculares que ocurren en la célula receptora ciliada”,
aunque el mecanismo exacto de la transducción no se conoce totalmente, se
puede ofrecer una explicación razonable del proceso fisiológico que va desde la
deformación mecánica de la célula receptora hasta la producción de potenciales
de acción en la rama distal de la neurona vestibular primaria.

2.5 Propiedades mecánicas de las crestas ampulares.

Las crestas ampulares son estructuras sensoriales que se encuentran en los


conductos semicirculares del oído interno. Estas estructuras son responsables
de detectar los movimientos rotacionales de la cabeza y proporcionar
7
información sobre la velocidad y dirección de la rotación. La estructura de un
conducto semicircular se puede considerar idealmente como toroidal (se refiere
a una forma o estructura geométrica que presenta la forma de un toro), se incluye
como parte del conducto la porción correspondiente del utrículo en la que se
abre.

En el mismo orden de ideas, las crestas ampulares del oído interno tienen
propiedades mecánicas específicas que les permiten detectar y responder a los
movimientos rotacionales de la cabeza. Estas propiedades incluyen la
sensibilidad direccional, la masa y rigidez adecuadas, así como un mecanismo
de amplificación para asegurar la detección precisa de los estímulos
rotacionales.

3.Organización funcional de las vías vestibulares.

3.1 El nervio vestibular.

También conocido como nervio vestibulococlear o nervio auditivo, es uno de


los doce pares de nervios craneales que se originan en el tronco encefálico y se
extienden hacia el oído interno. Este nervio desempeña un papel fundamental
en la transmisión de la información sensorial relacionada con el equilibrio y la
audición y dentro de la funcionalidad de las vías vestibulares.

Cabe destacar, que el nervio vestibular se compone de dos partes principales: el


nervio vestibular superior y el nervio vestibular inferior. Estas dos ramas del
nervio vestibular se originan en diferentes áreas del oído interno y transmiten
información desde diferentes estructuras sensoriales.

Es importante resaltar, que el nervio vestibular es un componente importante del


sistema vestibular y es responsable de transmitir la información relacionada con
el equilibrio y la posición de la cabeza desde el oído interno hacia el sistema
nervioso central.

3.2 Las vías vestibulares.

Son el conjunto de estructuras y conexiones neuronales que transmiten la


información sensorial del sistema vestibular desde el oído interno hasta el

8
sistema nervioso central, específicamente hacia las áreas cerebrales
encargadas del procesamiento del equilibrio, la postura y la orientación espacial.

La organización funcional de las vías vestibulares puede dividirse en tres


principales componentes:

 Vías periféricas: Comienzan en las células ciliadas del neuroepitelio


vestibular en el oído interno. Estas células detectan los movimientos y
cambios de posición de la cabeza y generan señales eléctricas. Las fibras
nerviosas de las células ciliadas forman el nervio vestibular, que se divide
en dos ramas principales, el nervio vestibular superior y el nervio
vestibular inferior, que transmiten la información hacia el sistema nervioso
central.
 Núcleos vestibulares: Las fibras nerviosas del nervio vestibular se
proyectan hacia los núcleos vestibulares, que se encuentran en el tronco
encefálico. Hay cuatro núcleos vestibulares principales en cada lado del
cerebro: el núcleo vestibular superior, el núcleo vestibular inferior, el
núcleo vestibular medial y el núcleo vestibular lateral. Estos núcleos
reciben las señales vestibulares y tienen funciones importantes en la
integración y procesamiento de la información del equilibrio y la
orientación espacial.
 Vías centrales: Las fibras nerviosas de los núcleos vestibulares se
proyectan hacia diferentes estructuras del sistema nervioso central,
incluyendo el cerebelo, la médula espinal y los núcleos oculomotores.
Estas vías transmiten la información vestibular hacia áreas específicas del
cerebro involucradas en el control de la postura, el equilibrio y los
movimientos oculares.

Además de esta organización, las vías vestibulares se interconectan con otras


vías sensoriales y motoras para una integración completa de la información
sensorial y la generación de respuestas adecuadas. La organización funcional
de las vías vestibulares involucra las vías periféricas que transmiten la
información sensorial desde el oído interno, los núcleos vestibulares en el tronco
encefálico que procesan y transmiten la información, y las vías centrales que

9
llevan la información hacia áreas cerebrales específicas relacionadas con el
equilibrio, la postura y la orientación espacial.

3.3 Las neuronas vestibulares.

Son las células nerviosas especializadas que se encuentran en los núcleos


vestibulares del tronco encefálico. Estas neuronas son responsables de
transmitir la información sensorial del sistema vestibular hacia el sistema
nervioso central.

Es necesario destacar, que la actividad eléctrica de las neuronas vestibulares se


basa en el potencial de acción, que es una señal eléctrica generada por cambios
en la polaridad eléctrica a lo largo de la membrana celular de la neurona.

Vale acotar, que las neuronas vestibulares son estimuladas por las células
ciliadas del oído interno, que detectan los movimientos y cambios de posición de
la cabeza, se generan cambios en la despolarización de la membrana celular.
Estos cambios están mediados por la entrada de iones, como el potasio y el
calcio, a través de canales iónicos específicos en la membrana celular.

Asimismo, la actividad eléctrica de las neuronas vestibulares se caracteriza por


una serie de potenciales de acción que se generan en respuesta a los estímulos
vestibulares. Estos potenciales de acción son transmitidos a lo largo de las fibras
nerviosas del nervio vestibular y se propagan hacia los núcleos vestibulares en
el tronco encefálico.

Es por ello, que estos cambios generan potenciales de acción que se propagan
a lo largo de las fibras nerviosas hacia los núcleos vestibulares, contribuyendo a
la transmisión de la información sensorial relacionada con el equilibrio al sistema
nervioso central.

4. Cuidado e higiene del sistema vestibular.

El cuidado e higiene del sistema vestibular es importante para mantener su


función óptima. Aquí hay algunas pautas generales:

10
 Protege tus oídos: Evita la exposición excesiva a ruidos fuertes, como
música a alto volumen o maquinaria ruidosa. Usa protectores auditivos,
como tapones para los oídos o auriculares con cancelación de ruido, en
entornos ruidosos.
 Evita cambios bruscos de posición: Los movimientos rápidos o bruscos
de la cabeza pueden desencadenar síntomas de vértigo en personas con
trastornos vestibulares. Intenta realizar cambios de posición de forma
lenta y gradual.
 Mantén una postura adecuada: Una postura corporal adecuada ayuda a
mantener el equilibrio. Mantén la columna vertebral erguida y evita
encorvarte.
 Realiza ejercicios de equilibrio: Los ejercicios específicos de equilibrio
pueden fortalecer los músculos y mejorar la coordinación. Consulta con
un fisioterapeuta o un especialista en rehabilitación vestibular para
obtener recomendaciones sobre los ejercicios adecuados para ti.
 Evita el consumo excesivo de alcohol y tabaco: El alcohol y el tabaco
pueden afectar negativamente el sistema vestibular y aumentar el riesgo
de trastornos vestibulares.
 Descansa adecuadamente: El descanso y el sueño suficientes son
importantes para mantener una buena salud general, incluido el
funcionamiento óptimo del sistema vestibular.
 Controla el estrés: El estrés puede desencadenar o empeorar los
síntomas de los trastornos vestibulares. Busca formas de manejar el
estrés, como la práctica de técnicas de relajación, el ejercicio regular y
actividades que te brinden tranquilidad.

11
CONCLUSIONES

El sistema vestibular desempeña un papel crucial en el equilibrio y la orientación


espacial del cuerpo, además de detectar los cambios en la posición y el
movimiento de la cabeza, ayudando a mantener el equilibrio estático y dinámico.

Cuando el sistema vestibular funciona correctamente, proporciona información


precisa al cerebro sobre la posición y el movimiento del cuerpo. Sin embargo,
pueden ocurrir trastornos del sistema vestibular, que pueden tener efectos
significativos en el equilibrio y la coordinación. Es importante el cuidado e higiene
de este sistema para su buen funcionamiento.

Los trastornos del sistema vestibular pueden tener un impacto significativo en el


equilibrio y la coordinación, causando síntomas como vértigo y pérdida de
audición. El diagnóstico de estos trastornos se realiza a través de pruebas
clínicas y de función vestibular.

El tratamiento de los trastornos del sistema vestibular puede incluir


medicamentos, terapia de rehabilitación vestibular y ejercicios específicos. Es
importante buscar atención médica si experimentas síntomas relacionados con
el sistema vestibular, ya que un diagnóstico y tratamiento adecuados pueden
mejorar la calidad de vida y prevenir complicaciones.

12
BIBLIOGRAFÍA

• Bernal, J. G. V., Arias, A. A., & Montilla, C. A. (2011). FISIOLOGÍA DEL


SISTEMA VESTIBULAR. Libr virtual Form en ORL, 1-14.
• González, M. E., & García, J. M. D. (2006). Sistema estibular. HUMANA,
229. Disponible en:
https://d1wqtxts1xzle7.cloudfront.net/52208853/Fisiologia_Humana._-
Tresguerres.pdf?

13
ANEXOS

FIGURA 1

FIGURA 1 Localización anatómica del aparato vestibular. Representación esquemática del oído interno y
del laberinto óseo. B. Esquema ampliado del laberinto óseo que muestra la situación de las crestas
ampulares y otolíticas (zonas rayadas) en el laberinto membranoso (líneas discontinuas). TOMADO DE:
Bernal, J. G. V., Arias, A. A., & Montilla, C. A. (2011). FISIOLOGÍA DEL SISTEMA VESTIBULA

FIGURA 2

FIGURA 2 Estructura interna de la ampolla de los conductos semicirculares (A) y de la mácula


otolítica (B). Obsérvese en ambos casos la disposición de las células ciliadas, con los penachos
filiares embebidos en la matriz gelatinosa que constituye la cúpula, en el caso de la ampolla, y
el sostén del estatoconio, en el caso de las máculas del sáculo y del utrículo. C y D muestran los
planos de orientación de las máculas del sáculo y del utrículo, respectivamente.

14

También podría gustarte