Acerca de este libro

Esta es una copia digital de un libro que, durante generaciones, se ha conservado en las estanterías de una biblioteca, hasta que Google ha decidido
escanearlo como parte de un proyecto que pretende que sea posible descubrir en línea libros de todo el mundo.
Ha sobrevivido tantos años como para que los derechos de autor hayan expirado y el libro pase a ser de dominio público. El que un libro sea de
dominio público significa que nunca ha estado protegido por derechos de autor, o bien que el período legal de estos derechos ya ha expirado. Es
posible que una misma obra sea de dominio público en unos países y, sin embargo, no lo sea en otros. Los libros de dominio público son nuestras
puertas hacia el pasado, suponen un patrimonio histórico, cultural y de conocimientos que, a menudo, resulta difícil de descubrir.
Todas las anotaciones, marcas y otras señales en los márgenes que estén presentes en el volumen original aparecerán también en este archivo como
testimonio del largo viaje que el libro ha recorrido desde el editor hasta la biblioteca y, finalmente, hasta usted.

Normas de uso

Google se enorgullece de poder colaborar con distintas bibliotecas para digitalizar los materiales de dominio público a fin de hacerlos accesibles
a todo el mundo. Los libros de dominio público son patrimonio de todos, nosotros somos sus humildes guardianes. No obstante, se trata de un
trabajo caro. Por este motivo, y para poder ofrecer este recurso, hemos tomado medidas para evitar que se produzca un abuso por parte de terceros
con fines comerciales, y hemos incluido restricciones técnicas sobre las solicitudes automatizadas.
Asimismo, le pedimos que:

+ Haga un uso exclusivamente no comercial de estos archivos Hemos diseñado la Búsqueda de libros de Google para el uso de particulares;
como tal, le pedimos que utilice estos archivos con fines personales, y no comerciales.
+ No envíe solicitudes automatizadas Por favor, no envíe solicitudes automatizadas de ningún tipo al sistema de Google. Si está llevando a
cabo una investigación sobre traducción automática, reconocimiento óptico de caracteres u otros campos para los que resulte útil disfrutar
de acceso a una gran cantidad de texto, por favor, envíenos un mensaje. Fomentamos el uso de materiales de dominio público con estos
propósitos y seguro que podremos ayudarle.
+ Conserve la atribución La filigrana de Google que verá en todos los archivos es fundamental para informar a los usuarios sobre este proyecto
y ayudarles a encontrar materiales adicionales en la Búsqueda de libros de Google. Por favor, no la elimine.
+ Manténgase siempre dentro de la legalidad Sea cual sea el uso que haga de estos materiales, recuerde que es responsable de asegurarse de
que todo lo que hace es legal. No dé por sentado que, por el hecho de que una obra se considere de dominio público para los usuarios de
los Estados Unidos, lo será también para los usuarios de otros países. La legislación sobre derechos de autor varía de un país a otro, y no
podemos facilitar información sobre si está permitido un uso específico de algún libro. Por favor, no suponga que la aparición de un libro en
nuestro programa significa que se puede utilizar de igual manera en todo el mundo. La responsabilidad ante la infracción de los derechos de
autor puede ser muy grave.

Acerca de la Búsqueda de libros de Google

El objetivo de Google consiste en organizar información procedente de todo el mundo y hacerla accesible y útil de forma universal. El programa de
Búsqueda de libros de Google ayuda a los lectores a descubrir los libros de todo el mundo a la vez que ayuda a autores y editores a llegar a nuevas
audiencias. Podrá realizar búsquedas en el texto completo de este libro en la web, en la página http://books.google.com
: biblioteca '
de catalvnya
 LA

3ETXSTA RELIGIOSA, FILOSÓFICA, POLÍTICA

POR

TOMO I. - ;

BARCELONA,

Imprenta de A. BRUÑI ,

Calle de la Litaría uto 24, nueva numeración.

1851.

i
Es propiedad del autor.

SITUACION DE ESPAÑA.
Sorre la negrura de la atmósfera tem
pestuosa donde retumba el trueno y serpea
el rayo, hay una region serena y apacible
iluminada por los resplandores del astro
del dia ; asi sobre la política de las pasio
nes está la política de la razon ; sobre los
intereses particulares y de momento, los
generales y duraderos ; sobre la insidiosa
mala fe, el candor de la sincera verdad. La
voz de esta, apenas se oye en España, ha
ce ya largos años ; lo mismo que pasa á
nuestros ojos no nos es permitido verlo co
mo es en sí ; se ponderan y exageran sin
mesura , el bien como el mal ; este desven
turado pais se ha convertido en sangrienta
liza donde se pelea sin piedad , ora echan
do mano de la fuerza , ora tendiendo ma
lignas asechanzas. Los combatientes estan
interesados en desfigurar la situacion pro
pia y la de sus adversarios ; á propósito le
vantan polvareda para ofuscarse recípro
camente la vista , y oscurecer la de los es
pectadores. ¿ Quién fue capaz de formarse
ideas justas y cabales sobre el partido y la
causa de D. Cárlos ateniéndose á los perió
dicos favorables á la Reina? ¿Y quién, al
contrario , pudo conocer los elementos que
se combinaron en pro de la Hija de Fer
nando , guiándose por la opinion de la Ga
ceta de Oñate? En la encarnizada lucha
trabada posteriormente entre las fraccio
nes del partido liberal , ¿cómo será dable
encontrar la verdad en medio de tan aca
loradas disputas , de tanta gritería , baldo
nes y denuestos ?
Pensamiento desconsolador , y que lo es
todavía mucho mas cuando contemplamos
el calor excesivo que en la actualidad van
tomando las pasiones ; sin embargo de no
hallarse en la arena partidos que, como es
bien sabido , cuentan en sus filas crecido
número de prosélitos : hablamos de los que
prefieren la monarquía pura , ó tal como
la ensayara Zea Bermudez , apellidada el
despotismo ilustrado , ó tal como la deseaban
los que siguieron la bandera de D. Cárlos.
Estos dos últimos partidos, se nos dirá,
son insignificantes , estan ya fuera de com
bate , son tan impotentes y nulos , que ni
en ellos deben pensar siquiera los que mi
litan bajo las nuevas enseñas. No sosten
dremos altercado sobre la exactitud de la
observacion contenida en esta réplica ; ha-
rémos notar sin embargo , que los prime
ros encuentran naturalmente simpatías en
no pocos gobiernos europeos , fundados en
el mismo principio y que se arreglan por
la misma pauta ; y en cuanto á los segun
dos , esa impotencia , esa nulidad , tenían
hace tres años una expresion que algo sig
nifica : numerosas bandas en casi todas las
provincias del reino , y ademas un ejército
de 15 mil hombres en Cataluña, otro de
2o mil en el bajo Aragon , y otro de 40 mil
en el norte. ¿Asi hemos perdido la memo
ria que no recordemos al Conde de España
haciendo frente al Baron de Meer , Cabre
ra á O'Donell , Maroto á Espartero ?
Fáltale á la España el conocimiento de
la verdad sobre sí misma ; y en las actua
les circunstancias este conocimiento le es
vital. La verdad es la vida de las socieda
des ; si es ejecutada , no importa tanto el
que no sea conocida ; un hombre sano dis
fruta de su salud sin advertirlo siquiera ;
pero si esa ejecucion no existe, el conoci
miento es indispensable; para aplicar el
remedio es necesario no ignorar el mal.
Cuando las sociedades se gobiernan tradi-
cionalmente , cuando lo que en ellas pre
valece no es la reflexion y la razon , sino
 el tino y el sentido comun que continuan
conservando lo que hallan establecido, en
tonces pueden pasar sin explícito conoci
miento de la verdadera situacion y de las
condiciones de su existencia ; pero cuando
destruido lo antiguo es menester edificar
de nuevo , cuando las leyes secundarias y
hasta la fundamental se han cambiado pro
fundamente , cuando ni unas ni otras por
perfectas que se supongan , no tienen sin
embargo la ventaja de haber pasado por el
crisol del tiempo, entonces se han conde
nado ellas mismas á una vida de continua
reflexion sobre sí propias, como el hombre
que abandonael modesto patrimonio desus
padres , para andar con atrevidas especu
laciones, en busca de mejor fortuna.
Bonald ha dicho : « despues de la revo-
cion francesa le falta á Europa otro escar
miento ; desgraciado el pueblo destinado á
dárselo. « Este ha sido la España ; asi el
pueblo mas monárquico de Europa , expia
mas cruelmente los excesos de la democra
cia. ¿Qué interes han podido tener los mo
narcas del norte en contemplar con tama
ña frialdad nuestros infortunios? quizás el
de escarmentar á sus subditos con el ejem
plo de nuestra desventura. La revolucion
francesa podia ser temible ; la nuestra nó ;
allí era Orestes agitado por las furias, blan
diendo á diestra y á siniestra el puñal par
ricida; aqui es un hombre que pálido y
convulso se agita entre agudos dolores,
despues que le han propinado el tósigo fu
nesto. Este ejemplo no es contagioso : los
espartanos hacían embriagar á un esclavo,
y lo exponían á la vista de sus hijos para
hacerles cobrar horror á la embriaguez.
En los bandos que se disputan la arena
hay hombres distinguidos: ¿quién lo duda?
los hay de buena fe ; ¿ quién lo niega ? pe
ro que son impotentes, quién no lo palpa?
Se achacan unos á otros la culpa, se echan
en cara flaquezas , imprevision , mala v o-
luntad, y hasta traicion y alevosía. Ven
cieron , y no disfrutan de la victoria ; en
el festin del triunfo hallaron el lecho de
tormento. Allí yacen ellos; con ellos la
nacion.
¿Dónde está esa felicidad que tan pom
posamente prometierais? «Mediaron, di
reis , obstáculos insuperables ; » pero , bien
podrémos replicar á los unos, ¿por qué
creasteis? y á los otros ¿por qué no lospre-
venisteis? «Nosotros no previmos» insisti
rán los primeros. « Nosotros no pudimos »
añadirán los segundos : sea asi , sírvaos es
to de excusa á los ojos de la posteridad, si por
excusa
Al notar
quereis
(pie lalaceguedad
nave zozobra,
y la impotencia.
todos de
mandan el áncora que despreciaron como
inútil en el momento de darse á la vela.
« La ley , exclaman , la ley ha de ser nues
tra divisa salvadora : la ley ha dejado de
imperar : de aqui dimanan nuestros males,
solo ella podrá remediarlos.» ¿Dónde está
la ley? ¿Qué habeis hecho de ella? ¿aho
ra, solo ahora advertís que la ley falta,
(pie la fuerza decide , que gobierna , que
amenaza señorear el porvenir, cuando ha
ce diez años que campea por nuestro des
venturado pais? ¿Pensais que la fuerza
existe tan solo en los campos de batalla, y
que es mas real y verdadera , y ejerce ac
cion mas eficaz y dañosa, cuando se ex
presa por el clarín del combate y estampi
do del cañon , que cuando se desahoga en
gritos amenazadores ó murmura con exi
gente descontento? ¿Os quejais de que fal
ta la nacionalidad? ¿Cuándo la ha habido
desde 1833? ¿Qué persona, qué partido
desde aquella época pudieron decir con
verdad , la nacion soy yo ? Os lamentais de
(pie las cuestiones de interes general se re
suelven con miras de conservacion en el
poder , y que por lo mismo se degrada
nuestra dignidad; ¿pero creeis que esta
política sea del todo nueva? ¿pensais que
se verifica otra cosa que la exageracion de
un principio, y que lo que estamos pre
senciando es mas que el término de una
degeneracion comenzada mucho antes? Go
biernos anteriores entraron en senderos pe
ligrosos, en pendientes rápidas; principió
el descenso , y la velocidad de los cuerpos
que bajan aumenta sin cesar. Perdiéronse
de vista los verdaderos principios de go
bierno, se adulteraron; y los gobiernos que
se han sucedido , han continuado degene
rando; que en tiempo de revolucion se ve
rifica de ellos muy rápidamente el mox da-
turos progeniem vitisiorem : de nosotros saldrán
hijos peores.
A nadie designamos ; no culpamos á na
die : solo hacemos notar como nos los
ofrece la misma experiencia. Compadecé-
monos de la suerte de los hombres que
con leales intenciones hayan tenido que
hacer frente á circunstancias terribles ;
no seremos nosotros quienes los juzgue
mos sin los debidos miramientos; pero la
verdad, la inexorable verdad, ¿nos permi
te acaso hacer traicion á nuestras convic
ciones?
 Cuando la Reina Cristina encargada del la Magestad , se publica la Constitucion
gobierno durante la enfermedad de su es blecimiento
tes
de 1812
por la, yparte
un
de general
que
las lelibertades
cupiera
celebrado
en públicas
poco
el esta
un -.
poso expidió el decreto de Amnistía , se
inauguró la nueva época , que no ha ter
minado aun ; en la apariencia no era mas muere desastrosamente á manos de la ale
que una amnistia , en la realidad era un ve ingratud.
cambio de política. Nadie necesitó explica Convócanse las Cortes constituyentes :
ciones para entenderlo asi ; sintióse un sa concluidos sus trabajos pasa el ejército por
cudimiento instantáneo, vivo, como se ex .Madrid , las sillas del ministerio tiemblan
perimenta en el momento de recibir la ac al ruido de los tambores y de las armas i
cion del fluido eléctrico. Cuáles debian ser desde Aravaca se le dirige una mirada de
las consecuencias de esta medida, no todos desagrado ; el ministerio cae.
k> preveian ; y menos quizás que nadie, la Las órdenes del ejército , la negociacio
Augusta Señora que la habia firmado ; pero nes apremiadoras, las mudanzas de perso
en confuso, instintivamente, se percibia nas y sistemas , los famosos comunicados ,
un nuevo porvenir , segun unos ; de hala las renuncias, los manifiestos, los pronun
güeñas esperanzas, segun otros, de tor- ciamientos , se fueron eslabonando con ter
nientas v calamidades. rible consecuencia ; el drama tocaba al fin
Con aquel decreto , y no se escandalicen de una de sus principales escenas : érase á
i lectores de lo que vamos á decir, mediados de octubre de 1840; alejábase
s dedel
haberlas
sentido leido
de nuestras pala- tristemente de las costas de Valencia una
por entero,
vela que se enderezaba á las playas estran-
con aquel decreto, repetimos, comenzó la geras: la Augusta Señora que años antes
política que resuelve las cuestiones de in abriera las puertas de la patria á millares
teres nacional en vista del interes del mo de proscritos, estaba proscrita.
mento , y con miras de conservacion de un Dónde está la ley ? repetirémos aquí ;
poder; en la amnistía pudo tener tanta ¿dónde la encontrais en todos los grandes
parte como se quiera , la magnánima ge cambios ocurridos desde 1833? Dirigid por
nerosidad de la augusta esposa de Fernan todas partes vuestras miradas, no la des
do; pero en el fondo, en los designios de cubrireis ; se os mostrará su palacio , la
los que aconsejaron semejante paso, fue un fuerza guarda sus puertas; penetrad en él,
contrato tácito con el partido liberal : te la ley está adentro; pero es un cuerpo exá
apoyo para que me sostengas : do nt des. nime; en su nombre se practícalo que ella
Asi lo entendieron los amnistiados , asi lo no dice: así en nombre de un rey que
indicaban las circunstancias, asi lo han espiró , ejecutan sus caprichos los atrevi
mostrado los sucesos. El manifiesto de Zea dos mandarines que afectan ser instrumen
Bermudez , despues de la muerte del Rey, tos de la voluntad soberana , cuando solo
fue una tentativa para rescindir el pacto; poseen y ocultan el cadáver del monarca.
las exposiciones de dos generales célebres Esta es la condicion de las revoluciones:
fueron la voz que reclamaba imperiosa su objeto es derribar lo existente por in
mente el cumplimiento de lo pactado : el justo, sustituir unas leyes á o'ras leyes,
Estatuto apareció. unas instituciones á otras instituciones ; la
En la prensa y en la tribuna resonaron reforma lo hace por medios legales , la re
los gritos de no basta : en mayo del año 35 volucion por la fuerza ; la influencia direc
el autor del Estatuto se veia asaltado por ta ó indirecta de la fuerza en la resolucion
los puñales de los asesinos á las puertas del de las cuestiones públicas , es la infalible
Estamento; en agosto habia levantamien señal de que ha principiado la revolucion.
tos y juntas en muchos puntos del reino : Comenzado el drama, necesario es que
en setiembre cae el Conde de Toreno , la continúe : solo puede caber la duda sobre
Reina cede, el Estatuto es declarado insu la duracion de los actos, lo terrible de las
ficiente ; su modificacion es prometida. A escenas y lo trágico del desenlace.
pocos meses , cuando se acerca la hora del En las revoluciones se asienta por prin
cumplimiento, las consecuencias de la pro cipio que el antiguo orden legal es ilegitimo,
mesa espantan ; se intenta neutralizarlas ; por estar en oposicion con el interes del
* nombra el ministerio Isturiz ; y en agos pueblo que es la suprema ley. Mas ó menos
to de 1836, se fuerzan las puertas del Pa explícitamente se proclama este principio ,
lacio , el motín penetra hasta la estancia de cuando se entra en un nuevo orden de co
 — 6
sas saltando por encima de las formas esta
blecidas ; no importa que quien dé el pa
so sea el pueblo ó el monarca , que quien
hace la aplicacion sea el consejo de un rey
ó una asamblea popular. Pedidles álos con
sejeros de Cristina al publicar el Estatuto ,
pedidselo á los tribunos de las Cortes cons
tituyentes ; ¿ por qué principios se dirigen?
os hablarán de las necesidades de la época,
de la precision de satisfacerlas ; los prime
ros os recordarán quizás las antiguas leyes
fundamentales : los segundos replicarán
tambien que la Constitucion de 1812 , en
cuya fuerza están reunidas, fue tambien
dada á los españoles , eomo una restaura
cion de las mismas leyes. El fondo de las
cosas es el mismo : ni siquiera se diferen
cian en el velo que las cubre ; solo que en
aquel caso es una reina quien lo tiende, en
el último es el pueblo.
Desde el momento que se ha dejado el
camino de la legalidad para seguir el de la
conveniencia , quedan sustituidas á la ley
la voluntad y la discrecion del hombre , y
flaquea por su base todo el sistema social ,
que toma por blanco de sus esfuerzos apar
tar del gobierno de la sociedad en cuanto
sea posible , todo lo que sea puramente
discrecional y arbitrario. Los acontecimien
tos van entonces siguiendo su curso inevi
table : el torrente se despeña de abismo en
abismo, basta que encontrando una llanu
ra , entra de nuevo en el hondo cauce , y
continúa en sosegada carrera.
Se imaginan algunos que la mayoría de
la Reina allanará todas las dificultades y
hará desaparecer como por encanto todas
las complicaciones que estan enmarañando
nuestra situacion. «Colocada, dicen ellos,
en manos de la Reina la direccion del go
bierno; libres ya de interinidades, y exen
tos del mal siempre grave, de empuñarlas
riendas del mando personas que solo le ejer
cen temporalmente, saldremos de una vez
de tanto desasosiego y zozobra, cesará la
incertidumbre , se verá mas claro el por
venir , y añadiéndose el casamiento de S. M.
con algun príncipe que traiga consigo ga
rantías de orden, de paz y de conciliacion,
veremos como se reunen en rededor del
trono los españoles de todas las opiniones ,
se echará un velo á las pasadas discordias,
se afianzarán las instituciones ahora vaci
lantes, se añudará la amistad con las po
tencias del Norte, y ocupando de nuevo la
España el lugar que en Europa le corres
ponde, asistiremos á la apertura de una
—
nueva era de prosperidad y bienandanza.>/
Estamos de acuerdo en que el adveni
miento de la mayor edad de la Reina es un
acontecimiento feliz que no podrá menos de
mejorar la situacion; convenimos en que la
prolongacion de la minoría de S. M. seria
una calamidad nacional cuyas fatales con
secuencias no se pueden calcular ; opina
mos que entonces se presentará una exce
lente oportunidad para comenzar una nueva
era, una de aquellas dichosas coyunturas
que distintas veces se han ofrecido y otras
tantas se han desaprovechado, cuando nó
empleado para agravar los males de la na
cion ; no dudamos que si la Providencia le
deparase á la Joven Soberana, consejeros
atinados, previsores, y "dotados sobre todo
de sana intencion y de la suficiente supe
rioridad para elevarse á la altura que re
clamará lo crítico de las circunstancias, no
fuera imposible el cerrar la cima de las re
voluciones y el llevar la nacion por buen
camino á que de propio impulsose abalan
za ; pero estamos tan escarmentados , son
tantas las esperanzas que repetidas veces se
han disipado, que no es extraño si al con
cebirlas halagüeñas para un determinado
tiempo, ocurren al espíritu consideraciones
tristes , que vengan , no dirémos á desva
necerlas , pero sí á enturbiarlas.
¿ Y quén es capaz de asegurar que los
sucesos se realizarán tales como algunos los
pronostican ? quién es capaz de decir que
nuestra complicadísima situacion se desen
marañará tan tranquilamente, por solo el
advenimiento dela mayor edad de la Reina?
Dejemos aparte la gravísima cuestion ven
tilada ya en la prensa periódica , hagamos
completa abstraccion de la situacion ente
ramente nueva en que por semejante suce
so nos encontraríamos colocados , prescin
damos de cuanto se roce con determinadas
personas , y no consideremos mas que ef
conjunto de las cosas con su complicacion,
con su complejidad: ¿créese por ventura-
que tan fácilmente abandonarán el campo
de la política las ambiciones rivales, los in
tereses encontrados, pudiendo todos contar
con poderosos medios de accion y de in
fluencia ? Difícil nos parece; y por mas
grande que sea nuestra confianza en la sen
satez de la nacion española , por mas segu
ros que estemos de la fuerza del sentimiento
monárquico en España y de los admira
bles efectos que está destinado á produ-
c ir , todavía nos queda la duda de que el
mero hecho de llegar á los catorce años la
 — 7
augusta Niña, haya de traer consigo rí--i li se antes, los que pueden presentarse en los
tados tan decisivos y satisfactorios. momentos críticos, los que pueden sobre
El casamiento de la Reina es otro de los venir despues.
sucesos en que se lijan todas las miradas y Concebimos muy bien que la simple pre
en que se fundan grandes esperanzas: y sencia de la Joven Soberana al frente del
necesario es confesar que segun como se Gobierno podrá mas para imponer respeto
verifique ese importante acontecimiento á las pasiones y partidos, que la de otras
podrá acarrearnos muchos beneficios y con personas sean cuales fueren sus calidades ;
tribuir poderosamenta á desenredar la si reconocemos muy bien que esta falta nada
tuacion , conduciendo los negocios á feliz puede suplirla ; pero conociendo lo fausto
desenlace. ¿Pero cuándo se verificará ese del momento en que cese la minoría de
casamiento ? Con quién ? Prevalecerá la po Isabel , no alcanzamos á creer que con es
lítica inglesa ó la francesa? ¿Qué parte to te dia nos haya de llegar el remedio de
marán en el negocio las potencias del Nor todos los males. Cuando nos figuramos á la
te? Hasta qué punto se pondrán de acuer Joven Reina en el acto de entrar en el ejer
do con la Francia, ó la Inglaterra, ó con cicio del mando, parécenos ver á una tier
ambas? el marido de la Reina qué política na niña empuñando el timon de una nave
ha de representar? Hé aqui un conjunto de que brega en furiosa tormenta : á sus pies
cuestiones todas graves, importantes, vi se abren á cada instante los abismos del
tales, y que sin embargo estan oscuras, Océano ; sobre su cabeza brama la tem
envueltas con cien velos, sin que ahora pestad ; la angustiada niña levanta sus ojos
sea dable aventurar una conjetura con al al cielo invocando á la Ettretiade los maret;
guna prababilidad de acierto. Pocos nego entonces unimos nuestros ruegos á sus rue
cios pueden ofrecerse de mayor interes y gos, y recordando que hay un Dios ampara
trascendencia para la nacion ; pocos tan ín dor de la inocencia, tranquilízase un tanto
tima é inmediatamente enlazados con la nuestro espíritu sobre los destinos de la au
resolucion de los grandes problemas que gusta Nieta de san Fernando.—J. B.
miramos pendientes; pocos sin embargo
en que la prensa periódica haya entrado
menos de lleno. Una que otra vez se han
adelantado algunas indicaciones, y hasta LA CIENCIA Y LA SOCIEDAD.
se han escrito discursos; pero considerada
la cuestion en todo su grandor , en su es
pinosa complejidad, la polémica está intac
ta. Ni aplaudimos ni censuramos esta con
ducta: solo la consignamos aquí, como un i.
indicio de la gravedad del negocio , pues
que en campo de suyo tan abierto y libre, Hombres hay que viven en lo pasado, y
se le trata con tal circunspeccion y reserva. los hay tambien que viven en el porvenir.
Y no se crea que esto dimane del temor Unos y otros condenan lo presente; aque
de arrostrar compromisos : otro asunto se llos ensalzan loque fué, estos lo que será;
ha presentado , y por cierto la prensa pe los primeros se consuelan con recuerdos,
riódica no ha manifestado pusilanimidad : los segundos con esperanzas; al fijar sus
no solo no ha tratado con timidez la cues miradas en lo futuro, los unos exhalan un
tion, pero ni siquiera haqnerido admitirla: gemido y entonan funerales endechas, los
«esto no es cuestionable, ha dicho, la mi otros saludan con himno entusiasta la au
noría de la Reina no debe ni puede prolon rora de un nuevo dia.
garse.» No nos afligen presentimientos tan tris
Quiera el cielo que no salgan fallidas tes, ni nos deslumbran ilusiones tan hala
tantas esperanzas como se tienen fundadas güeñas: la descendencia de Adan sigue su
en aquel dia , del cual ha bastado la idea penosa marcha sobre la tierra , segura de
de que pudiera aplazarse, para sembrar no encontrar aqui las perdidas mansiones
alarma tan viva y levantar un grito de re de Eden; pero tampoco nos parece que la
probacion tan unánime. Tambien partici sociedad haya de sumirse de nuevo en el
pamosrlasde ellas
cual :desearíamos
pero no nos, al
es considerar
dado ali- caos, y que su doliente seno baya de ser
entregado sin piedad al suplicio del buitre.
>ntecimientos que pueden acumular En pos de horrorosa tormenta, el Eterno
 — 8
hace resplandecer en las nubes el arco de
la esperanza.
Creemos que en esto como en muchas
otras cosas, hay no escasa exageracion de
una y otra parte; y no acertamos á ver
qué beneficios pueden resultar á la huma
nidad, ni de ser engañada con mentidas
promesas, ni espantada con tan formida
bles amenazas. De esta suerte, se enciende
en demasía el ardor de los unos, y se hiela
la sangre á los otros; é impulsada la socie
dad hácia puntos diferentes, pierde en la in-
certidumbre un tiempo precioso.
Contribuye no poco al aumento de la
confusion de semejantes ideas, la falta de
buena fe en algunos de los que en opuestos
sentidos militan; notándose que en las ra
zones alegadas, mas bien esfuerzan un ar
gumento, que no expresan una conviccion.
Triste condicion de las ideas en la época
actual, el verse convertidas en instrumento
de intereses, careciendo asi de la libertad
de campear en el terreno de la discusion,
con independencia é hidalguía. Si estos in
tereses, que toman á sueldo el pensamien
to , fueran generales, se extendiesen á lar
go trecho de duracion, no limitándose á
pequeño círculo de personas, ó á breve es
pacio de lugar y de tiempo, no seria el
daño de tanta monta; y aun sucediera casi
siempre, que el entendimiento luchando
por ellos, no se apartaría de su natural ob
jeto que es la verdad. Pero, desgraciada
mente acontece muy á menudo lo contrario:
las ideas se encuentran encerradas en un
miserable recinto, y se agitan y revuelven
en una atmósfera que las ahoga.
En la dilatada extension que han tomado
las discusiones por medio de la prensa en
Europa y América, complícanse á menudo
en un mismo punto las cuestiones religio
sas, filosóficas, políticas, legales y admi
nistrativas; resueltas de una manera favo
recen ó dañan á un partido, á un sistema,
á una institucion, quizás á una persona, y
esto basta para que se sepa de antemano
cómo las resolverán las inteligencias mili
tantes. Este es el efecto necesario de lo que
se apellida oposicion, y que se ha pretendi
do legitimar á los ojos de la filosofía como
elemento indispensable en los gobiernos
representativos. Si se hubiese dicho que
esto era un mal que no se podia evitar , y
que no deja de producir bienes, compen
sando así los daños que acarrea , hubiéra
mos comprendido muy bien esta explica
cion ; y dado caso de no hallarla satisfacto
ria, aldemenos
lejos que senos
entienda
pareciera
en razonable.
este sentido,
Pero
se
da por muy legítimo, ó al menos se mira
como excusable, el emplear el error como
arma de oposicion, y el combatirla verdad
misma, si con ella se escuda el adversario.
Doctrina funesta así á la ciencia como á la
moral; pues que despojada del falso apara
to con que se la cubre no es mas que la
canonizacion de la mala fe.
No desconocemos los beneficios traidos
por la prensa; admiramos como el que mas
ese conducto eléctrico, que en un momen
to comunica á un pueblo, á una nacion, al
mundo, los pensamientos de un hombre;
pero necesario es confesar que jamás se
verificó un abuso como el que de este me
dio están haciendo las naciones civilizadas.
La prensa es una nueva palabra, instantá
nea, general, duradera; y de ella sí que
podría afirmarse lo que tan malignamente
aplicaba Taillerand á la oral, diciendo: que
era concedida al hombre para disfrazar sus
-pensamientos.
Todo se da por bueno si favorece; todo
por malo si contraria: se juzga de una opi
nion, nó por su verdad intrínseca, sino por
su valor instrumental; hay una verdadera
acepcion de doctrinas como la hay á veces
de personas; asi como en estas se arrumba
el mérito para atender únicamente á la re
comendacion que llevan, ó al interés ó
afecto que inspiran, en aquellas se deja á
un lado la verdad , y solo se mira el uso á
que pueden servir. Es el principio utilita
rio aplicado á las ideas.
II.
Esta parcialidad se encuentra especial
mente en las cuestiones sociales, políticas
y administrativas, pero no están exentasde
ella las demás, por tener á menudo puntos
de contacto con las primeras. La nacion
que en esta materia ha ofrecido el princi
pal escándalo ha sido la Francia; escándalo
tanto mas funesto, cuanto las escuelas fran
cesas ejercen grande influjo, sobre todo en
el mediodía de Europa. Las revoluciones
religiosas y políticas de Alemania, de In
glaterra y demás paises del norte, aconte
cieron en épocas en que la prensa no habia
tomado ni de mucho el vuelo que hoy; ha
llábase limitada á obras de alguna exten
sion, y por consiguiente mas meditadas, y
donde podian tener menos parte las pasio
nes del momento. Verdad es que los folle
tos no eran cosa desconocida, y que con
tribuyeron tambien á la exaltacion de las
pasiones populares, y al favor de ciertas
miras; pero la prensa no habia conocido la
fuerza que podia adquirir con una accion
continua. El periodismo propiamente di
cho , no existia ; faltaba por tanto el princi
pal medio que ahora tiene la prensa de di
rigir todas las grandes cuestiones é influir
en todos los negocios.
La inteligencia por sí sola, no se habia
erigido en poder; este no era considerado
como legítimamente poseido, y mucho me
nos ejercido, si no estaba vinculado con
determinado rango social, con alguna ins
titucion respetable. Así , los primeros en
sayos del periodismo versaron sobre objetos
científicos y literarios, y se ocuparon en la
crítica de las obras que veian la luz públi
ca. Los artículos de costumbres fueron un
gran paso para acrecentar la accion é in
fluencia de los periódicos : con la crítica de
las costumbres, quedaban de hecho erigi
dos en censores de la sociedad ; un paso
mas, y se les venia á la mano la censura
de la política.
Cuando la revolucion de 1789, la Euro
pa habia sufrido ya el lento cambio, que
preparaba el ascendiente dela inteligencia,
considerada en sí misma, y con indepen
dencia de las clases é instituciones ; por cu
yo motivo, tan luego como se trabó la gi
gantesca lucha entre lo antiguo y lo nue
vo, apareció cual uno de los principales
contendientes la prensa periódica. Este
ejemplo influyó naturalmente en el resto
de Europa , y de América; particularmen
te en los paises sometidos á un régimen de
libertad política ; y en Inglaterra y en los
Estados Unidos , tomó bien pronto el na
ciente fenómeno dimensiones colosales. En
estos dos paises , la discusion ha podido
ejercitarse de otra manera que en Francia:
la Francia era un pais viejo en que se plan
teaba de repente un sistema nuevo ; la so
ciedad de los Estados Unidos , se levantó
por su independencia y libertad , y despues
de la victoria no se halló con opiniones
encontradas, ni intereses en pugna; la In
glaterra era un pais amaestrado ya en la
dura escuela de las revoluciones, disfruta
ba de un régimen nacido de ellas, y por
lo mismo tenia mas embotada la suscepti
bilidad , y menos anhelo de mudanzas.
En la revolucion inglesa descollaba el fa
natismo religioso, en la americana el sen
timiento de independencia nacional , en la
francesa preponderaba el filosofismo; es
tos caractéres no se han borrado todavía
de la frente de estas naciones. En las cues
tiones sociales y políticas de la Gran Bre
taña figura siempre en primer puesto la Ir
landa, esa gran víctima, terrible personi
ficacion de todas las víctimas de la perse
cucion religiosa ; la patria de Washington
se conmueve todavía al menor asomo de
prepotencia de su antigua dominadora ; en
Francia encontrareis aun en la sociedad ,
en las cámaras, en el poder, personificada
la filosofía en Lamennais, en Lamartine,
en Cousin. En este último pais, la filosofía
ha dañado á la política , pero en cambio la
política ha dañado á la filosofía : esta amal
gama ha hecho que la política participase
de la abstraccion teórica , y que la filosofía
se resintiese de la mezquina estrechez de
la práctica ; los sistemas puramente ideales
se apoderaron del gobierno , intereses de
momento pene'raron en la region de las
ideas.
Hé aqui una de las diferencias caracte
rísticas entre la Francia y la Alemania. En
esta la política es eminentemente práctica
y por tanto mas juiciosa; la filosofía es
eminentemente abstracta y por lo mismo
es mas concienzuda. Y adviértase que no
decimos sólida ni verdadera , sino' concienzu
da; porque las opiniones mas extravagan
tes se profesan á veces con la mayor buena
fe. Los filósofos alemanes no han cambia
do las instituciones sociales y políticas de
su pais, no han pasado del bufete al mi
nisterio , de la cátedra á la tribuna ; en
cerrados en sus gabinetes, sedientos de una
verdad que no han de encontrar porque la
buscan donde no está, se entregaron á pe
nosos estudios, á meditaciones profundas;
allí pasaron sus dias ofreciéndolos en holo
causto á la ciencia. Kant no salió nunca de
Konenisberg. Delos hombres que en Fran
cia figuran en los primeros puestos del es
tado no puede ciertamente decirse lo mis
mo. ¿Quién ignora lo que son ahora, y lo
que eran antes de la revolucion de 1830,
Cousin y Villemain , Thiers y Cuizot. La
revolucion debilitada por sus excesos y has
ta por sus triunfos , y vencida en fin por
la Santa Alianza en los años de 1814 y
1815, se disfrazó durante la restauracion
con el manto de la filosofía ; vino la nueva
era de 1830; las cátedras quedaron desier
tas, la revolucion no necesitaba su disfraz,
quitóse la máscara, tiró su manto. Encier-
ta época, M. Cousin que despues ha sido 10interroga
— ó acata en todas materias y bajo
ministro conservador, rodeado de sus dis todos los aspectos.
cípulos les leia en misterioso secreto las La intervencion popular en todo linage
paginas de los periódicos de la revolucion , de negocios , se ha hecho efectiva , bajo los
cual otro Sócrates bebióla cicuta; para pal gobiernos libres , como bajo los absolutos.
par la diferencia , no habiamos menester Todos nos ocupamos de todo; de palabra ó
que el filósofo frances tuviese la singular por escrito, pública ó privadamente , todo
humorada de hacer como hizo , la apolo se ventila, se somete á discusion, se aplau
gía de los jueces del filósofo griego. de ó censura ; y la influencia que de esta
Hubo un tiempo en que el genio andaba intervencion resulta , podrá ser mas ó me
con mucha frecuencia hermanado con la nos directa , mas ó menos pronta , mas ó
desdicha y la pobreza : Horacio y Virgilio menos visible , pero siempre es eficaz.
necesitaron un Mecenas; Cervantes y Shaks- Uno de los caractéres distintivos de los
peare vivieron y murieron pobres ; Tasso escritos de nuestra época es que el autor
sufrió la miseria ; Camoens mendigaba su se manifiesta ocupado , si nó afectado , de
sustento. Esto era una injusticia social ; pe los objetos que le rodean. Quizás no se ha
ro bajo cierto aspecto producía un gran ya reparado bastante en esta particulari
bien ; el camino de la inmortalidad no era dad , y asi no será fuera del caso hacerla
paralelo con el de las riquezas y de la am sensible , aclarando la observacion por me
bicion ; la ciencia era un medio mal segu dio de un cotejo. Recorred las obras de los
ro para amontonar tesoros ó escalar encum siglos anteriores , aun de los mas agitados
brados puestos ; y por esto mismo era mas y turbulentos : y vereis que los autores es
sólida, mas grave, mas paciente, y sobre criben con una calma envidiable , con una
todo mas cándida y sincera. abstraccion incomprensible. Será tal vez
durante las guerras entre los Señores y los
comunes , entre el feudalismo y la monar
III. quía , y sin embargo los escritos llevan el
sello de la tranquilidad mas sosegada. No
parece sino que el autor se trasladó á un
Si la codicia y la ambicion contaminan desierto , y que nada sabia de lo que en el
las ciencias , el febril ardor de la atmósfera mundo pasaba. Mientras arde elpais en vi
en que viven los hombres de la presente vas discordias y se derrama á torrentes la
época , las malea y extravía. Hasta los co sangre , ellos hablan calmosamente de po
razones bien nacidos, hasta aquellos hom lítica, y van á buscar los razones de los
bres de conviccion firme, intencion recta, hechos en las sociedades griega y romana.
y expresion osada é independiente , es casi ¿Era miedo.? ciertamente que nó; pues en
imposible que no se resientan de las pasio las crónicas nos refieren lo que está suce
nes de su tiempo, como el viviente del ele diendo , y no hay motivo para callar en un
mento en que respira. Antes, no solo esta caso lo que expresan en otro. Ademas,- que
ban la sociedad y la política separadas de antes de la invencion de la imprenta los es
la ciencia, sino que la misma ciencia se critos no alcanzaban tan fácilmente publicí-
hallaba distribuida en distintas clases que | dad , y muchos de los que actualmente dis
no se rozaban , que moraban en regiones frutamos , quizás á ella no los destinaba el
totalmente diferentes. ¿Qué tenían que ver autor. Estas razones no militan para des
con la jurisprudencia las ciencias natura pues de la invencion de la imprenta, en
les , ni la poesía con la organizacion social cuyo tiempo se verifica tambien en cierto
y política de los pueblos? En la actualidad, modo el mismo fenómeno ; pero tampoco
todo se toca , cuando no se confunde ; los es posible atribuir á miramientos ó temor
conocimientos han de ser universales ; una lo poco que se fijan los autores sobre lo que
obra completa sobre una ciencia particular en su alrededor acontece. En una obra pu
es poco menos que una enciclopedia. Los blicada en Alemania podíase decir de la
filósofos se elevan á la cumbre del gobier Italia todo lo que se quisiese ; y ni Isabel
no , los comerciantes llegan á ser hombres de Inglaterra , ni Felipe II de España , se
de estado, los médicos y los naturalistas hubieran cuidado mucho delo que se dije
tratan de metafísica, de moral, de religion, ra en su reino sobre la organizacion social
y los defensores de la religion y de la mo y política de los pueblos gobernados por el
ral han de abarcarlo todo , porque se los odiado rival.
 — 11
La causa pues de la diferencia que esta alguna ilustracion. En la actualidad, se
mos indicando , consiste en el espíritu de piensa sintiendo, se siente pensando, se
los tiempos , en que a la sazon se estudia amontona erudicion , pero se filosofa sobre
ban los libros , y nó la sociedad. Esta es ella ; se trata de filosofía , pero se la siem
ahora como una escena que se ejecutara en bra de erudicion ; el poeta razona como un
un salon cubierto de grandes espejos: todos filósofo; el filósofo canta como un poeta;
los actores tienen doble atencion directa ambos disertan como un erudito ; y este á
sobre lo que ejecutan , refleja sobre la mis su vez , suelta cuando le viene en gana el
ma ejecucion reproducida en el espejo. La fárrago de sus noticias , y os entretiene lar
observacion continua del hombre y de la go rato con narraciones de novelista, con
sociedad, enlodas sus partes, bajo todos observaciones filosóficas , ó con los armó
aspectos , en todas sus relaciones , hé aqui nicos acentos de un vate.
la señal característica del espíritu humano Lo que se verifica entre hombres forma
en este siglo. La poesía, la literatura, la dos, desciende tambien á los rudimentos
historia, las mismas ciencias naturales y de la educacion ; un niño aprende de una
exactas, las metafísicas, las religiosas y vez muchas cosas; y lejos de limitarse al
morales , todo se endereza á este punto , catecismo y al latin , estudia la geografía ,
todo converge hácia él, por distinto que la historia , la literatura, la poesía, la ideo
sea el objeto inmediato. logía , y recibe noticias de todo en diminu
Esto seria un bien de alta importancia , tas enciclopedias.
si las convicciones fuesen mas frecuentes y En ningun pais del mundo se puede no
robustas; porque el espíritu hallándose tar mejor esta diferencia , que en España.
afectado mas vivamente , se expresaría con En los demas , el mundo antiguo ha desa
mayor entonacion, empleando un acento parecido mucho tiempo ha, pero entre no
mas alto y penetrante ; pero desgraciada sotros es tan reciente su destruccion , y se
mente el escepticismo ha hecho estragos conservan todavía tantos desus restos, que
hasta en las materias mas graves y trascen es muy fácil hacer este cotejo. Para con
dentales; y un entendimiento escéptico , vencerse de esto es necesario salir de la re
es inseparable compañero de un corazon gion de los escritores , y descender á la so
seco. ¿Qué importa la sensibilidad masó ciedad ; porque muchos de los qne escri
menos delicada con que pueda haber fa ben , ó han recibido ya en un principio
vorecido la naturaleza? Dejad que algunos educacion é instruccion á la manera del si
desengaños hayan venido á marchitar las glo , ó conocedores de las necesidades de la
ilusiones, bien pronto vereis que desapa época , han cuidado de procurarse cono
rece esa sensibilidad natural , como de un cimientos que los elevasen al conveniente
frasco vacío , y expuesto al aire , se esca nivel , y se han acomodado á las nuevas
pan los restos del delicioso aroma. formas que, mas ó menos convenientes , se
han hecho no obstante indispensables.
Cuando se compara el mundo antiguo
IV. con el nuevo , no es menester , como al
gunos creerían quizás, ceñirse á los hom
bres de cierta edad , instituyendo la com
Comparando nuestro siglo con los pre paracion entre ancianosy jóvenes. Lo nue
cedentes, se echa de ver, que antes las fa vo y lo antiguo han marchado paralelos en
cultades del espíritu humano se ejercitaban tre nosotros por espacio de medio siglo;
y desarrollaban aisladamente ; ahora se con las alternativas de clandestinidad á que
desenvuelven con simultaneidad. Quien se recíprocamente
gun andaran losse respectivos
han condenado
tiempos
, se*-y
entregaba á la imaginacion , quien á los
sentimientos, quien cultivaba la razon, fortunas : y asi es que se han formado cre
quien la memoria ; pero acontecía con mu cido número de hombres en una y otra es
cha frecuencia, que el hombre ocupado en cuela, que ahora se encuentran caraá cara,
uno de estos objetos, conocía apenas otro y que asi se entienden entre sí , como allá
diferente. Los poetas, los literatos, los eru en los siglos medios entenderse pudieran
ditos, los filósofos, eran clases que tenian árabes y germanos.
entre sí poco contacto; y no se habia crea La fijeza de principios , la unidad de
do esa homogeneidad , que asemeja en miras, caracterizan á los alumnos de la es
' " ; , á todos los hombres de cuela antigua; la vaguedad de estas, y la
 — 12
movilidad de aquellos , distinguen á los de Estas consideraciones nos hacen desear
la escuela moderna ; en los unos prevale con ansia que cuantos toman parle en la
cen y dominan las creencias religiosas , las discusion de las cuestiones que motivan
máximas morales ; en los otros preponde nuestras desavenencias, procuren, en lo
ran los intereses materiales, el gusto por posible, abstenerse de irritar las pasiones,
una civilizacion brillante y seductora, la ocupándose de cosas , nó de personas , y
tendencia á cierto progreso social , vago , mostrando con lenguage cuerdo y mesura
indefmido , de que ellos mismos no alcan do , que se pugne lealmente por la causa
zan á darse razon. Los primeros se señalan de la v erdad , que no influye en el ánimo
por un raciocinio severo , pero seco , los el espíritu de resentimiento y de venganza.
segundos por una exposicion oratoria pero Defiéndanse en hora buena los sanos
inexacta; aquellos no comprenden la socie principios con aquel hidalgo calor, con
dad nueva, estos en cambio no conocen la aquella robusta entonacion que nacen de
antigua ; son pueblos que han plantado sus profundas convicciones , que inspira el in
tiendas en un mismo pais, pero que hablan teres de una causa noble ; no importa que
distinta lengua , vienen de regiones dife en el acento se deje conocer la indignacion
rentes , y se encaminan á region diferente de un pecho herido por el descaro de la
tambien. ¡Dichosos los hombres que cono mentira ó la impudencia de la injusticia ;
ciendo la lengua de ambos , puedan man lo aplaudimos con toda la efusion de nues
tener relaciones leales con unos y otros , tra alma , porque sabemos que el corazon
sirviéndoles primero de intérpretes y lue se ha dado al hombre para sentir, y que
go de conciliadores ! la religion y la razon declaran santa una
Los que pertenecen ála escuela antigua, indignacion que por tales motivos se con
están en posicion de principios de eterna cibe ; lo aplaudimos , porque tenemos fe
verdad ; los que se han inscrito en la mo en el triunfo de la verdad y de la justi
derna se han apoderado del movimiento cia , y no creemos que sean impotentes y
del siglo ; ¿por qué no podrían entenderse estériles las voces que en su defensa se le
y avenirse? Ni calre transaccion en mate vanten. Pero no olvidamos tampoco, que
rias de verdad , ni es posible detener el si la vehemencia no es el insulto , que la in
glo en medio de su veloz carrera ; pero ¿es dignacion no es la rabia , que una protesta
por ventura la verdad enemiga del movi enérgica é hidalga, no es el repugnante ahu-
miento , ni el movimiento incompatible con llido de ciega desesperacion. Solo á los dé
la verdad ? biles que en ella se agitan con impotente
El universo entero está entregado á un cólera , les es tolerable el estéril desahogo
movimiento incesante , á pesar de hallar de abrumar al adversario con indecorosos
se sometido á leyes constantes y fijas : el denuestos. El fuerte (pie está seguro de te
planeta que describe su órbita con la mis ner la razon de su parte, pronuncia algu
ma regularidad que la aguja de un péndu nas palabras firmes, pero mesuradas. Si no
lo , no deja de seguir su carrera con la ve producen efecto , con la mano puesta so
locidad del rayo. bre el corazon protesta ante Dios y los hom
Esta conciliacion , que es á no dudarlo bres de la injusticia que se le irroga, y se
una de las primeras necesidades de nuestra retira sosegado y calmoso , diciendo en su
época , y cuya satisfaccion presenta de cier interior: « mi hora sonará.»
to un complicadísimo problema que resol La verdad y la justicia no han menester
ver, puede sin embargo obtenerse á fuerza armas ignobles , ni los esfuerzos de un de
de trabajo, de perseverancia , y sobre todo lirante; en su propio seno lleven la segu
de buena fe. Mas ó menos , el problema ridad del triunfo , sumas, bien templado
está por resolver en todos los paises civili escudo es la santidad de su causa. No em
zados ; pero en España , es urgente , apre pañeis su lustre , escoltándolas con indigno
miador , porque no solo se refiere al por cortejo ; no creais robustecerlas dándoles
venir como en otras naciones , sino que se auxiliares villanos : nohagaisque se defien
liga íntimamente con la situacion actual , dan con armas vedadas; estas las asientan
se enlaza con los demas de interes presen mal . contaminan su mano, las degradan y
te, inmediato; y todo cuanto se haga para envilecen, como á caballeros hidalgos y va
aplazarle indefinidamente no es mas que pro lientes, las tretas de la alevosía ó el puñal
longar las angustias y dolores de un enfer del asesino. — J. B.
mo que sufre.
 — 13 —
tantos experimentos, de tanta observacion,
de tantas hipótesis, de tantos sistemas, no
se ha podido señalar un hecho, un solo
FRENOLOGÍA. hecho, en contradicion con la fe católica.
La incredulidad ha levantado con frecuen
cia la voz gritando alborozada : lo he encon
trado; mas bien pronto un exámen mas de
Nuestros lectores tienen ya noticia del tenido y mas profundo de la materia ha
curso de Frenología qué principiará en esta venido á desmentir al aplauso prematuro.
ciudad el din 7 de marzo, bajo la enseñan No ignoramos las inculpaciones que se
za de Don Mariano Cubi y Soler, como han dirigido á la ciencia frenológica , ta
y tambien de su obra titulada: Frenología, chándola de contraria á la religion y á los
ri sea filosofía del entendimiento humano mani sanos principios, inculpaciones de que se
festado por medio del cerebro , que dicho se hace cargo el Sr. Cubi cuando en su cita
ñor tiene prometida al público, y cuyo do prospecto nos dice(l) «Increíble pa-
prospecto ha salido ya á luz. A primera reze que la Frenolojía a cuyos prinzípios ,
vista , este asunto podría parecer de escasa ni la Iglesia ni la Inquisizion , en el tiem
importancia, limitado como le juzgarán po de su mayor rijidez se opusiéron , que
quizás algunos, á meras teorías científicas , la Frenolojía , digo , que prueba i demues
que no es dable desciendan á la práctica tra palpablemente, no solo la ecsistenzia
sino á manera de dixersion y entretenimien de Dios sino tambien que le es tan natural
to. Nosotros sin embargo miramos la cosa al hombre la religion como la sed, el amor,
de otro modo , opinando , que el negocio i demas instintos animales , haya sido ta
es sobrado grave para que no deban ocu chada de irrelijiosa. Pero desde que la voz
parse de él aquellas publicaciones , entre de los mas grandes teólogos , católicos i
cuyos objetos figura la observacion del des protestantes, se ha elevado indignada con
arrollo del espíritu humano, y muy par tra tamaña calúmnia ya no se cuestiona su
ticularmente la aplicacion que de una cien ortodójia. Véase, sino, con que ahinco i
cia quiera hacerse á la instruccion y edu animazion hablan en favor de lo moral i
cacion de los pueblos. relijioso de la Frenolojía el abate Frére el
Ante todo debemos advertir, que por abate De-Luca , el abate Restani , el pár
mas nueva que sea en este pais la pública roco Giacoma , i otros eminentísimos cató
enseñanza de la frenología que tanto ruido licos prelados, zelosos todos de que se
está metiendo años ha en los grandes cen mantengan puros é ilesos los dogmas de la
tros de la ciencia europea , no sonaremos iglesia católica. Lord Whately arzobispo
contra ella la alarma, ni diremos que la de Dublin dize tambien que las objeziones
Religion Católica cuya defensa es el prin morales i relijiosas hechas á la Frenolojía
cipal objeto de nuestra Revista , tenga na son del todo fútiles.»
da que temer de los hechos ideológicos y No recele el Sr. Cubi que le achaque
fisiológicos de cuya esposicion trata de ocu mos á su doctrina defectos que no tenga ,
parse el ¡lustrado profesor. Conocidas son ni le atribuyamos tendencias de que carez
nuestras convicciones, sabido es que la idea ca : la examinaremos con el detenimiento
dominante de los ensayos que hemos ofre que su importancia reclama, manifestando
cido al público, consiste en que la Religion nuestra humilde opinion con entereza y
Católica ganará tanto mas en estimacion , lealtad.
cuanto mas profundo sea el exámen á que Dos principios fundamentales asienta el
se la someta ; que no tiene ni manchas que Sr. Cubi constitutivos en su concepto de la
¡acuitar, ni errores que encubrir, para que ciencia frenológica. Es el primero , « que
se vea precisada á vivir en las sombras y á el alma , mente ó entendimiento humano
liuir el cuerpo al contacto de las ciencias.
Dios entregó el mundo á las disputas de los
hombres , y encomendó el depósito de la Í1) Transcribimos 'as palabras del Sr. Cubí
fe á la Iglesia ; siglos hace que la naturale con la misma ortografía que él ha creido deber em
za , la historia y la experiencia son consul plear. Estamos seguros de la verdad de la protesta
tadas sobre los grandes secretos de Dios, elde prurito
dicho Sr. cuando asegura que no la sigue por
del hombre , y de las relaciones que unen miento de de singularizarse , sino por el i'onvenci -
que es útil ; respetamos romo es debido
á l,i criatura con el Criador : despues de su opinion ; pero no nos es dable adoptarla.
obra por medio del zerebro.» El segundo 14 mente — en lo tocante al ejercicio de las fa
« que el alma posee diferentes facultades , cultades intelectuales. Sin embargo , para
las cuales ella manifiesta por medio de cor no confundir los límites de la filosofía es
respondientes órganos zerebrales. » piritualista y materialista , atribuyendo á
Que hay una relacion entre el entendi loquees puramente corpóreo, funciones
miento y el cerebro , que este es el centro que de ninguna manera pueden correspon-
de las sensaciones , que de su buena ó ma derle es menester fijar con exactitud el sen
la disposicion natural ó accidental , resultan tido de la palabra órgano , para que cuando
los mas variados fenómenos en el ejercicio se dice que el cerebro lo es del alma , no
de las facultades del alma , es una verdad se entienda que por él se ejercen de algu
que no consiente duda : como que está re na manera los actos del entendimiento ó
conocida por todos los filósofos antiguos y de la voluntad. Organo es el medio ó con
modernos, y atestiguada por la experien ducto por donde una cosa se comunica á
cia de cada dia. El delirio y la locura que otra, ó por el cual se ejerce alguna fun
<le tal suerte trastornan las funciones del cion ; asi la lengua será el órgano de la pa
alma , tienen su origen en afecciones cere labra, los ojos serán el órgano de la vision,
brales ; de estas dimanan tambien los sue el tímpano será el órgano del oido , en
ños mas ó menos variados, mas ó menos cuanto sirven estas partes del cuerpo para
extravagantes, habiendo podido notar cual ejercer aquellos actos que con los indicados
quiera lo mucho que en esta parte influyen nombres se designan. Pero con la mira de
la cantidad y calidad de los alimentos, y evitar la confusion de las ideas en un pun
todo cuanto comunica al cuerpo estas ó to de tanta importancia y trascendencia ,
aquellas disposiciones, capaces de afectar emitirémos algunas observaciones que bas
este órgano. Aun no suponiendo un tras tan en nuestro juicio á prevenir toda equi
torno tan completo como lo es el de una vocacion. El lector nos dispensará si nos
alienacion mental , ó un estado tan diverso elevamos á consideraciones puramente ideo
cual el sueño respecto de la vigilia , ¿quién lógicas y metafísicas, quizás no muy fáci
no ha notado la exaltacion de las faculta les de ser comprendidas perfectamente por
des del alma que se sigue á la inmutacion los no versados en tan espinosas materias ;
del cerebro causada por agentes acciden procuraremos no obstante espresarnos con
tales ? una botella de vino de champaña la mayor claridad y limpieza , acomodán
convierte quizás en animado hablador, fa donos á -la capacidad hasta de los menos
cundo , variado y chistoso , á un hombre inteligentes , en cuanto nos lo permita el
que pocos momentos antes se mostraba in objeto El instrumento
que nos proponemos
es el medio
dilucidar.
de que nos
diferente , taciturno y frio.
Los diversos sistemas psicológicos idea servimos para ejecutar alguna cosa : el pin
dos por las diferentes escuelas filosóficas , cel es el instrumento del pintor, como el
fueron excogitados con la mira de explicar cincel lo es del escultor y la pluma del es
la relacion entre el cuerpo y el alma, y muy cribiente. En este sentido el cerebro no es
particularmente entre esta y el cerebro. Él ni puede ser instrumento del alma en el
influjo físico, las causas ocasionales, la ar pensar ni en el querer. Si en este sentido
monía prestabilita , y las demas hipótesis se dijese que el cerebro , ú otra parte del
mas ó menos análogas á las sobredichas, cuerpo son instrumentos ú órganos del al
todas dimanan de la dificultad en que se ma, la espresion seria no solo inexacta sino
encontraron las varias escuelas para dar falsa ; porque entonces se daria á entender
razonada cuenta de una relacion , de una que el espíritu elabora sus pensamientos
comunicacion , de una recíproca influencia por medio del cerebro, que este contribu
tan ciertas como incomprensibles. ye inmediatamente á la formacion de aque
Asi pues ciñéndose como manifiesta ce llos : lo que daria por el pie á todo sistema
ñirse el indicado profesor á establecer este espiritualista .que estriba como sobre su ci
fenómeno generalmente reconocido, esta miento , en el siguiente principio : el pen
mos de acuerdo con él en que es un hecho samiento y la materia son cosas incompati
incuestionable. bles. En efecto, aquel es esencialmente
Bonald copiando á Pluton, ha dicho que simple ; esta esencialmente compuesta ;
« el hombrees una inteligencia servida por aquel supone por necesidad unidad del su
órganos » y entre estos sin duda debe con jeto que lo ejerce , esta es por necesidad
tarse como principal el cerebro , mayor- múltipla , porque en su misma naturaleza
 — 15 —
fntra el ser compuesta de muchas partes : alma, queda fuera de duda la diferencia
aquel existe en un ser que puede darse esencial entre espíritu y cuerpo, y nos ha
cuenta de sus actos á sí propio , que con llamos por consiguiente desembarazados
toda verdad y exactitud pueda decir yo , á para entrar de lleno en la cuestion frene-
pesar de todas las modificaciones que sufra lógica , ó sea en el exámen de los hechos ,
por la diferencia de sus facultades y la di cuyo conjunto unido á las consecuencias
versidad de sus actos ; cuando en aquella que de los mismos se sacan , se propone el
es imposible encontrar ese ser uno indivi ,i distinguido profesor ofrecernos como un
sible, único sujeto de las modificaciones II verdadero cuerpo de ciencia.
que experimenta ; pues lo que sufre una Si no comprendemos mal el sentido de
parte no lo sufre otra , y por lo mismo no las palabras del citado prospecto, coinciden
es dable concebir en la misma ese yo uno, con los principios que acabamos de sentar,
simple, indivisible, ideaque necesariamen por mas que no se expresen tal vez con la
te acompaña átodo ser que piensa ó quiere. rigurosa exactitud, y con todas las aclara
Esta es la razon profunda de los singu ciones que las acompañan en la explicacion
lares sistemas á que han apelado todos los que precede; porque no era este el objeto
grandes hombres para explicar el ministe que se proponía el Sr. Cubi , ni tampoco
rio indescifrable de la union del alma con hubieran tenido lugar en los estrechos lí
el cuerpo
, del, modo
de las con
relaciones que entre sí mites á que se propuso reducirse. Pero por
que recíprocamente
lo mismo que nos habla del alina que obra
se comunican y se afectan. Yreian el hecho, por medio del cerebro , que posee diferentes fa
lo palpaban en sí y en los demas, el fenó cultades , las cuales ella manifiesta por medio
meno de la accion del alma sobre el cuerpo de correspondientes árganos cerebrales , bien
y de este sobre aquella , se les ofrecía fuera se deja entender que en su opinion el alma
de duda; pero no era para ellos menos in es cosa distinta del cerebro; por consi
cuestionable la diferencia esencial de las guiente seria una injusticia achacarle lo que
naturalezas de estos dos seres , no acerta á otros frenologistas se ha achacado , que
ban á darse cuenta de la posibilidad de la confundían aquella con este , que redutfan
accion recíproca, no comprendían como lo las operaciones puramente intelectuales y
simple y lo compuesto pueden influir lo morales, á modificaciones y funciones de
uno sobre lo otro ; y por esto entregados á un órgano material , y que bajo pretexto de
profundas meditaciones, excogitaban siste aclarar fenómenos fisiológicos, daban un
mas quizás extravagantes y que provocaban golpe mortal al espiritualismo, destruíanla
la risa de los pocos versados en estas mate libertad humana, hacían imposible toda
rías. Los hombres migares no conocían moralidad, y resucitaban el hombre-má
toda la extension y la fuerza de la dificul quina de La-Metrie.
tad que los primeros se propusieron salvar, El segundo principio contiene dos partes,
y por lo mismo no apreciaban el mérito 1.a: que el alma posee diferentes faculta
del esfuerzo extraordinario indicado por la des. 2." : que estas facultades ella las ma
misma singularidad de las hipótesis. nifiesta por medio de correspondientes ór
Queda pues sentado que no hay incon ganos cerebrales. La primera es una ver
veniente en que se diga queelalma, mente dad fuera de duda : pues nadie ha negado
ó entendimiento, obra por medio del cere jamas, que aun cuando el alma sea una
bro como por su órgano, mientras con es sustancia simple é indivisible , posee no obs
tas expresiones se entienda que dadas cier tante variedad de facultades que se mani
tas operaciones del alma, resultan deter fiesten á cada paso, no solo en diferentes
minadas funciones del cerebro; y que afec individuos, sino tambien en cada uno de
tado el órgano de esta ó aquella manera ellos. Los ideólogos las han clasificado de
resultan estas ó aquellas impresiones en el diferentes maneras , unos las señalan en
alma. Y nótese bien, que no tratamos aqui mayor, otros en menor número; quien les
de explicar cómo se verifica , no de seña da este nombre, quien este otro; pero todos
lar preferencia á ningun sistema filosófico ; convienen en que las facultades son dife
y sí unicamente de dejar en su puesto el rentes: en que los actos por ellas ejercidos,
hecho fundamental de toda ciencia psicoló no son de una misma naturaleza, y no pue
gica , á saber , la imposibilidad de que el den de ninguna manera confundirse entre
pensamiento resida en la materia. De esta sí. En cuanto á la segunda parte , á saber ,
queda en salvo la espiritualidad del || que el alma manifiesta sus facultades por
medio de correspondientes órganos cere 16corpóreos
— para recibirlas diferentes sensa
brales, tampoco tiene dilicultad ; en cuan ciones, asi como para ejecutar sus volun
to expresa que el cerebro es órgano del al tades; ¿qué dificultad habrá pues en que
ma en el sentido arriba explicado. Esta es se verifique lo mismo por lo tocante al ce
la razon porque muchos filósofos han opi rebro? No cabe expresar estas ideas de una
nado que este órgano es la parte donde re manera mas clara y distinta de lo que hace
side el alma. nuestro insigne Huarte en su famosa obra
La diferencia de los frenologistas con res titulada Examen de ingenios publicada en
pecto á los demas fisiologistas , consiste en Madrid en 16G8, obra que asentó las bases
que estos miraban el cerebro como órgano del sistema frenológico , que se tradujo en
único, y no le distribuían en distintas par varias lenguas , y que goza todavía mucha
tes , que fuesen otros tantos órganos parti estimacion en los grandes centros de la
culares, de esta ó aquella facultad del es ciencia europea. «Estando, dice, el ani
píritu. Mirada la cuestion bajo este punto mal racional en el cuerpo, es imposible
de vista, se halla totalmente fuera del ter poder hacer obras contrarias y diferentes
reno de la metafísica , de la psicología y si para cada una no tienen su instrumento
hasta de la ideología ; y queda encerrada particular. Vese esto claramente en la fa
dentro de los límites de la ciencia fisioló cultad animal , la cual hace varias obras en
gica ; no debiendo resolverse por mero ra los sentidos exteriores , por tener cada uno
ciocinio , sino por la simple observacion de su particular compostura : una tiene los
los fenómenos. En efecto , todo está redu ojos , otra los oidos , otra el gusto , otra el
cido á saber , si en la realidad la experien olfato, y otra el tacto. Y si no fuera así ,
cia enseña , que exista una relacion entre no hubiera mas que un género de obras, ó
esta ó aquella facultad del alma , y esta ó todo fuera ver , ó gustar ó palpar ; porque
aquella parte del cerebro , que el mayor ó el instrumento determina y modifica la po
menor volúmen , ó la determinada confi tencia para una accion y no mas. De esto
guracion de dicha parte, está en cierta pro- manifiesto y claro que pasa en los sentidos
poflbion con la mayor ó menor fuerza ó exteriores, podremos colegir lo que hay
energía de la indicada facultad. Si vemos allá dentro en los interiores.» Sea cual fuere
presentar hechos debidamente observados el concepto que de la ciencia frenológica se
que asi lo comprueben , la frenología po forme , siempre es muy curioso que haya
drá merecer el nombre de ciencia ; y el sido cabalmente un español y del siglo 17,
paso que habrá hecho dar á los conocimien es decir de la época de nuestra decadencia,
tos humanos será , que asi como antes nos el que haya sentado con claridad y lisura
limitábamos á saber que el cerebro tomado los principios de una ciencia nueva; siendo
en complexo y en su totalidad era un ór al propio tiempo lamentable , que en este
gano del alma, ahora podremos añadir que caso se verifique lo que en tantos otros, de
este cerebro está compuesto de varías par que nuestra dejadez habitual haga que no
tes , siendo cada una de estas un órgano vindiquemos como podríamos las glorias
particular de la facultad respectiva. En esto nacionales , y que los golpes del genio que
no encontramos nada que repugne la espi en otros paises producen un efecto eléctrico,
ritualidad del alma ; dado que si en todos queden entre nosotros confundidos en la
tiempos se ha admitido que existia cierta oscuridad , y sean los estrangeros quienes
relacion entre el cerebro y las funciones de se aprovechen de lo que en España se ha
ella , sin que por esto pudiese inferirse que pensado ó inventado por primera vez.
perdían nada de su indivisibilidad , no ha No se crea sin embargo que pueda de
brá tampoco inconveniente en que ahora cirse con toda exactitud que Huarte fuese
se diga que el alma conservándose simple, el primero que asentó principios de que se
puede tener, con respecto á sus facultades, valen los frenólogos de nuestro tiempo:
ciertas relaciones con las diferentes partes quizás fue el único que consagró expresa
del cerebro. Este era compuesto antes, mente una obra á este objeto : pero se ha
como lo es ahora; si pues dicha composi llan esparcidas acá y acullá en autores an
cion no se oponía ála recíproca comunica tiguos proposiciones que indican con mas ó
cion de ambos, tampoco se opondrá en menos claridad que los conocimientos fre
adelante. La misma alma se vale de los ojos nológicos no eran del todo desconocidos;
para ver; de los oidos para oir; del pala aun pasando por alto los trabajos de Al-
dar para gustar; y de los demas órganos ; berto el Grande en el siglo xm, de Pieiro
 — 17 —
di Montagna á fmes del xv , de Ludovico fectis, et in bis quam in plantis.» (D. Th-
Dolci á mediados del xvi de que nos habla Q. 76 art. 5. ad. 3.)
el Sr. Cubi en su nombrado prospecto. Los La sabiduría y el discernimiento de estas
antiguos, comprendiendo en este número palabras son admirables; pero falta todavía
los que vivieron en los siglos medios y en citar otro pasage mas curioso en que se
los que inmediatamente los siguieron , que descubre con toda evidencia que el Santo
nosotros con demasiada generalidad ape Doctor tenia expreso conocimiento de las
llidamos de tinieblas é ignorancia ó de teorías frenológicas, y que otros ya enton
mucho atraso , sabian sobre materias de ces se hallaban en el mismo caso. Es nota
licadas algo mas de lo que comunmente ble la prudencia del Santo : refiere , pero
se cree ; y si bien no disponían de los mu no juzga , aplicando con su ejemplo el
chos medios que para aprender tenemos principio de que en tratándose de fenóme
nosotros á la mano , suplían sin embar nos naturales, antes de afirmar es preciso
go algun tanto esta falta con la asiduidad observar. Hablando de los sentidos interio
de sus trabajos y la profundidad de sus res, y señalando cierta facultad del alma
meditaciones. dice : « Por donde se llama razon particular,
En las obras de Santo Tomas se hallan á la cual le señalan los médicos determinado
preciosas observaciones sobre la relacion y órgano, á saber el centro dela cabeza.» «Unde
comunicacion que media entre el alma y el etiam dicitur ratio particularis cui medici
cuerpo; siendo de admirar que un escritor assignant determinatum organum, scilicet
del siglo xui pudiese alcanzar á expresarse media m partem capitis.» (D. Th, i. P. Q.
con tanta exactitud , con tan fmo discerni 78. art. 4).
miento , sobre hechos y fenómenos en ex Eliminada ya la dificultad que podría le
tremo complicados , que en apariencia de vantarse sobre la incompatibilidad de los
bian de ser indescifrables , atendido el principios frenológicos con la espiritualidad
atraso en que se hallaban las ciencias natu del alma , y demostrado que esta espiritua
rales. Los observadores modernos que lidad nada tiene que temer de la multipli
tantos elogios tributan á nuestro insigne cidad de los órganos que en el cerebro se
Huarte , por haber columbrado ya en el supongan, falta ahora determinar si en
siglo xvn los principios de una nueva cien realidad esta variedad de órganos existe; y
cia, oirán con gusto, á no dudarlo, las ademas cuales son las partes del cerebro
palabras del Santo que acabamos de citar ; donde se encuentran. Esta es la parte teó
y se quedarán agradablemente sorprendi rica de la ciencia , la que no obstante debe
dos, al ver con cuánto tino se espresaba estar fundada en una serie de hechos ob
sobre delicadísimas materias el humilde servados con la debida exactitud y referi
religioso del siglo xm. «El alma intelec dos con rigurosa verdad. Despues falta in
tual, dice, aunque por su esencia, sea vestigar, si es posible hacer una aplicacion
una, no obstante por su perfeccion es múl de estos principios deduciendo reglas prác
tipla en sus facultades. Y asi para las diver ticas para que con la simple inspeccion ó
gas operaciones necesita diversas disposiciones contacto de un cráneo , sea dable adivinar
en las partes del cuerpo á que se une. Y por cuáles son las facultades intectuales de que
esto vemos que hay mayor diversidad de partes está dotada la persona ; si es posible que
en los animales perfectos que en los imperfectos, se conozca cuáles son las disposiciones par
y en estos que en las plantas » ( Santo Tomas ticulares que la hacen apta para una cien
primera parte , Cuestion 76, artículo 5, en cia ó profesion; de tal suerte que sin ha
la respuesta al tercer argumento.) Hemos berla oido hablar sobre la materia , ni
procurado traducir con toda exactitud: pero ejecutar nada que pueda suministrar indi
deseosos de que el lector pueda examinar cios de su capacidad , se conjeture la exis
las expresiones del original, las transcri tencia de esta , y hasta se calculen sus
bimos aquí. «Et hoc competit anima; inte- grados con alguna aproximacion.
lectivae qua; quamvis sit una secundum Estamos esperando con ansiedad hechos
essentiam, tamen propter sui perfectionem que sin duda acumulará en crecido núme
est multiplex in virtute. Etideoad diversas ro el Sr. Cubi, en la obra que tiene anun
operationes indiget diversis dispositionibus ciada ; y deseamos sinceramente que sean
in partibus corporis cui unitur. Et propter de tal naturaleza que basten á disipar las
hoc Yidemus quod major estdiversitas par- dudas que suscitan todavía algunos sabios
tium in animalibus perfectis quam imper- contra la Frenología. Como las ciencias na-
tomo i. 2
 — 18
turales , á las que esta pertenece tambien , manera el camino para que pueda entrar
no deben estribar en meras hipótesis ó en en una esposiciou dilatada y profunda de
razones de analogía mas ó menos convin los principios y aplicaciones de la ciencia ,
centes , sino que han de apoyarse en he sin
ses,correr
de producir
tanto riesgo
en vez dealumnos
como en otros
instrui
pai-
chos observados con rigurosa exactitud ,
será menester que se nos pruebe con ellos : dos y sensatos , entusiastas superficiales y
primero, que el cerebro está distribuido en extravagantes. Como quiera , y reserván
cierto número de partes de las cuales cada donos volver otro dia sobre tan importante
una sirve para una funcion determinada; materia , le deseamos en Barcelona el mis
segundo , que se señale la localidad de las mo buen éxito que en Nueva-Orleans ; de
mismas , y la respectiva facultad del alma manera que los periódicos de esta capital
de que son instrumentos; tercero, que por puedan tributarle los mismos elogios que el
la simple inspeccion ó el contacto del crá titulado Pkajune y el Correo de la Luisiana.
neo se puede adivinarla existencia y el gra J. B.
do de dichas facultades ; cuarto, que se in
diquen con alguna precision las causas que
puedan inducir á error cuando se trate de
formar esta conjetura; quinto, que se expli LA PALABRA FILOSOFÍA.
que apoyándolo con hechos ciertos, cuál
es el desarrollo y modificaciones que de la
educacion , de la instruccion , de las ocu
paciones , del tenor general de la vida , ú
otras causas cualesquiera pueden resultar ; Palabras hay que todos pronuncian, que
sexto , que al ofrecerse las láminas que se pocos profundizan , que los mas entienden
ñalan donde se encuentran los asientos de con aquella inteligencia superficial , vaga ,
los órganos cerebrales, se indiquen las re lluctuante , que es lo que basta para que
glas que han presidido á la delineacion , ora circulen sin cesar como una moneda cono
se trate de las cabezas en general , ora de cida, de cuyo valor nadie duda, cuya ¡ey
las que se hayan desarrollado de una ma á punto fijo nadie determina. Tal es la pa
nera particular y notable , natural ó artifi labra filosofía ; esa palabra que ha invadido
cialmente. todos los objetos, que se ha desparramado
En breve , deseamos que el señor Cubi sobre todas las clases , que domina la lite
eleve la Frenología á toda la altura que re ratura, que se extiende á las bellas artes,
claman el mismo decoro y la dignidad de que predomina en las ciencias. Hubo un
la ciencia , no dejando ningun pretexto á tiempo en que se consideró la filosofía co
que se la pueda tachar de ilusion y charla mo una ciencia exclusiv a , del todo separa
tanismo. Deseamos que en lo tocante á la da de las demás, limitada á ciertos objetos,
práctica , ni se la quite nada de lo que le formando lo que se llama un cuerpo de
corresponde , ni se la atribuya lo que no le ciencia ; pero ahora y desde el siglo pasa
pertenece. La exageracion excita quizás un do , la filosofía no es un ramo de los huma
entusiasmo momentáneo; solo la verdad nos conocimientos , no es su raiz , no es su
produce un efecto duradero. El crédito de fruto , es un jugo precioso que se desliza
las ciencias debe fundarse en las conviccio suavemente por todas partes; y asi hay
nes arraigadas en el entendimiento , nó en filosofía científica, filosofía literaria, filoso
las lisonjas tributadas al amor propio, ó en fía artística , filosofía del mundo , filosofía
las frivolas puerilidades de una vana cu de todo. Y pues bien, ¿qué significa esta
riosidad. palabra, tomada en todo su vigor, en toda
La dilatada experiencia del ilustrado pro su exactitud , pero sin quitarle nada de su
fesor , le habrá enseñado sin duda , la ne generalidad, para que sea aplicable á tan
cesidad de inculcar á sus discípulos las tos y tan varíados objetos , de tan diferente
verdades que acabamos de indicar: pudien- naturaleza, de tan distintas formas, detan
do estar seguro que en España hay un fon ta diversidad de colores , de tanta grada
do de buen sentido para apreciar juiciosa cion de matices? Daremos una definicion
mente el mérito que en sus explicaciones fácil , sencilla , pero que en su sencillez lo
se encierre , asi como hay muy felices dis abrazará todo ; procuraremos que aqui se
posiciones para evitar los insinuados esco verifique el célebre dicho inscrito sobre la
llos; disposiciones que le allanarán sobre tumba de Boherave : Sigtllum veri simpUx ,
 — 19
«la sencillez es el carácter de la verdad.» á la contemplacion de una escena en las ta
La filosofía consiste en ver en cada objeto to blas ; es el sentimiento mismo de las pasio
do lo que en él hay , y sin mas de lo que hay. nes que agitan á los hombres en los varios
Hagamos la prueba , tomemos esa palabra tiempos y paises. Esto es la filosofía de la
en la acepcion que se acaba de lijar , y historia , porque asi se ven los objetos tales
hagásmosla recorrer todos los objetos á que como son y nó de otra manera ; porque no
aplicarse suele; y si se les ajusta perfecta es una simple narracion de guerras, de ba
mente, si basta un simple careo, digámoslo tallas, de nacimientos y muertes de prínci
asi , para que se conozcan y se unan , será pes, es decir, es algo mas que una relacion
señal evidente de que hemos dado en el descarnada que nada anima , nada pinta , á
blanco , de que hemos señalado el rasgo ca nada comunica vida y movimiento, hacien
racterístico de la verdadera filosofía. do que asistamos á las escenas históricas ,
Y ante todo es menester advertir , cuan nó con el interes de apasionados espectado
necesaria era la limitacion que muy de res , sino como curiosos frivolos que estan
propósito hemos añadido , y no mas de lo examinando un museo de estrañezas y pre
que hay ; porque asi como hay entendimien ciosidades.
tos cortos y oscuros que nada aciertan á ¿Qué es la filosofía en literatura? ¿es
ver y distinguir , los hay tambien , dema acaso ni el conocimiento ni la aplicacion de
siado vivaces y puntiagudos que en todo las reglas ? nó : es la razon de las mismas
cavilan , que todo lo aguzan , pareciéndose reglas, es el análisis combinado del enten
á las cabezas desvanecidas por algun acci dimiento y del corazon , es el estudio de
dente que pretenden ver centellas estando todo el hombre en sus relaciones con la ex
á oscuras , y estar mirando muchos y va presion. ¿Y por qué este conocimiento se
riados objetos cuando en realidad no ven denomina filosofía en literatura , y no se
nada. ¡ Oh ! y cuánto abunda en el mundo apellidan asi las reglas? porque las reglas
esa menguada filosofía ; de todo se habla , son nada sin la razon que las apoye , ó son
sobre todo se discurre , son fáciles las ila vagas generalidades que no se llegan bas
ciones , se sientan arbitrarios principios , y tante de cerca á los objetos , para que por
la pobre verdad sale tan mal parada , cual medio de ellas se pueda descubrir qué es lo
puede esperarse de haberse encomendado bueno ó lo malo.
su investigacion al mas temible de sus ad Llamamos filósofo á un hombre que sa
versarios : el charlatanismo. be dar á las cosas su verdadero valor, que
Hasta el verdadero talento , mayormente nada desquicia ni exagera, que imponien
el que raya en genio , corre no escaso pe do silencio á sus pasiones , y rechazando el
ligro de caer en este vicio. Llevado de la estímulo de los intereses , deslinda los ob
impetuosidad , que suele acompañarle , or jetos, aprecia sus diferencias, coteja sus
gulloso con el sentimiento de su fuerza, semejanzas, clasifícalo todo cual conviene,
precipitado por la misma facilidad que tie y lo deja en su verdadero lugar y punto de
ne en concebir, toma en manos los objetos, vista. Por la misma razon cuando hay un
juguetea con ellos como con cosa baladí , y hombre desprendido que se desentiende de
mas de una vez los desflora y los estropea. vaciedades , que se eleva sobre las procu-
Pero dadle un momento de reposo , haced paciones que ciegan al comun de los hom
que algo concentrado pueda fijar sobre el bres, obedeciendo nosotros á aquellas se
objeto su mirada de lince , y entonces el cretas convicciones que mas ó menos todos
objeto á sus ojos se vuelve cristalino , pe abrigamos de que en el mundo hay mucho
netra su corazon, desenvuelve todas las si de hueco y de vano , como para dar á en
nuosidades , y señalando con mano certera tender que aquel hombre no estima las co
el punto esencial , dice : vedle , ahí está. sas en mas ni en menos de lo que son , le
Pero hagamos una rápida reseña , de los llamamos afilosofado.
principales ramos á que se aplica la palabra Bastantes son estas breves indicaciones
filosofía. ¿Qué es lo que se llama filosofía para dar á conocer lo que se entiende por
de la historia ? es el verdadero conocimien filosofía: bastan para dar á conocer que no
to de los hombres y delas cosas; es la ojea hay filosofía donde no hay mas que pala
da penetrante sobre los acontecimientos en bras, que no hay filosofía donde solose en
todo su enlace y trabazon, en todo el en cuentran pensamientos atrevidos ó imáge
cadenamiento de los efectos y causas ; es la nes brillantes ; que solo hay filosofía donde
concepcion intuitiva de los hechos parecida hay verdad.
 — 20 —
En este sentido y no en otro, procurare viene, á no ser que les senalásemos dos
mos que nuestra Revista sea filosófica. puntos de reunion : el error y el vicio. Esto,
J. B. si bien muy verdadero y exacto , fuera sin
embargo demasiado general ; y no mostra
ría á punto fijo cuáles son los ¡ados de don
Bajo este título publicarémos en esta Re de puede dimanar el ataque. El error versa
PTCWEMíIÍC
sobre infinitos objetos; el vicio se ofrece
bajo innumerables formas. La verdad es una:
para encontrarla hay un camino ; quien se
aparta de él , toma un sendero extraviado;
y estos senderos no pueden reducirse á
vista una serie de trabajos que servir pue guarismo. La ley eterna es una ; quien se
dan á los defensores de la Religion en los desvia de lo que ella prescribe , entra en
combates que bajo diferentes aspectos y en la carrera del mal, y esa carrera es ancha,
distintas arenas, les aconteciere trabar con espaciosa, se subdivide en un sinnúmero
tra los enemigos del catolicismo. Cuidando de veredas ; en todas se marcha con placer
de que no sean inútiles á ninguna clase de y comodidad ; toman las mas variadas di
personas, procurarémos no obstante que se recciones , solo que al fin convergen y van
adapten de una manera particular á la si á parar á un mismo punto : la eterna per
tuacion en que se encuentra el clero: no dicion.
solamente con respecto á las lamentables Será pues necesario señalar determina
circunstancias de España , sino tambien por damente las principales clases de los ene
lo que toca al curso que en nuestro siglo migos de la Religion, por las diferentes
llevan las ideas. No pretendemos dar lec modificaciones con que se presenta el error
ciones al clero ; este no las necesita de nos y el vicio. Parécenos que estos son : los in
otros ; es demasiado su saber y su erudi crédulos, los indiferentes, los escépticos, y
cion , sobre todo en materias religiosas, los hereges. El herege dice: «yo creo lo
para que nos sea dable presumir que po que quiero; » escéptico: «no sé... dudo...
damos decirle algo de nuevo ; pero sucede qué sé yo. » El indiferente : « qué me im
á menudo que hasta los hombres mas ver porta;» el incrédulo: «no creo nada.»
sados en una ciencia hallan cierto placer en El herege pretende tener fe , pero la re
recordar lo que no ignoran , y en asistir á gla de esta fe es su razon ó su voluntad;
los esfuerzos leales de personas que procu no admite la autoridad que en estas mate
ran exponer y confirmar verdades, que rias debe decir ; ó comenta y explica la Bi
ellos por otra parte conocen á fondo. Qui blia , conforme le dictan sus luces natura
zás tambien podrá suceder de vez en cuan les, y le persuade su imaginaria inspiracion
do , que á ciertos eclesiásticos jóvenes , su privada, ó aplica á la Religion los sistemas
poca edad ú otras circunstancias, no les filosóficos; en uno y otro caso, sujeta los
hayan permitido ocuparse de la ciencia re dogmas á tribunal incompetente. Habla de
ligiosa con toda la extension y bajo los par fe, cuando esta no es concebible en no es
ticulares aspectos que reclama el empleo de tribando en la autoridad; pondera la fir
las nuevas armas que blanden contra la meza de sus creencias, cuando estas vacilan
Iglesia sus implacables enemigos; ¿por qué por sus cimientos y varían á cada paso;
seria inoportuno, el proporcionarles en bre pretende atenerse á la palabra de Dios,
ves páginas observaciones y noticias , que profanada por el orgullo y la extravagan
tal vez no podrían alcanzar sino á costa de cia ; se obstina en guiarse por los dictáme
mucho trabajo , y con la lectura de obras nes de una razon , flaca en extremo hasta
que la escasez de sus medios no les consen para las cosas naturales , cuanto mas para
tirá procurarse? Hé aquí nuestro plan. La comprender los inefables arcanos que el
abundancia de materias nos ha absorvido Altísimo en sus inescrutables designios ha
gran parte del presente número: asi por cubierto con cien velos.
hoy deberemos limitarnos no mas que á En los siglos anteriores al xvm, la Igle
trazar algunos lincamientos en que se ma sia si bien tuvo que combatir con todo
nifieste el sistema que nos proponemos se linage de enemigos, vióse precisada espe
guir. cialmente á luchar contra la heregía. Ata
La Religion tiene diferentes especies de cábanse á veces su divinidad , y los funda
enemigos ; seria difícil clasificarlos cual con mentos en que estriba su verdad incontes
 — -21 —
table; pero lo mas frecuente era impugnar se hallan en estado intelectual muy dife
este ó aquel dogma , ó con argumentos sa rente. Esto depende en buena parte de la
cados de la Sagrada Escritura, ó con ra instruccion, de la educacion, de la índole,
ciocinios suministrados por el sofismo filo y de cien otras circunstancias que modifi
sófico. Sabelio, Arrio , Macedonió , Pelagio, can ó afectan al espíritu que carece de fe.
en los primeros siglos; Abelardo, Berenga- Los escépticos son por lo comun hom
rio y otros en los medios; Lutero, Calvino, bres de algunas luces, que han meditado
y los innumerables heresiarcas de los tiem sobre materias graves, y que participan de
pos modernos, no negaron la divinidad del ese vértigo funesto de nuestra época, en
cristianismo, no miraron la religion como que nada se asienta con sólido fundamento,
cosa indiferente, no se pertrecharon en todo vacila, todo se. pone en cuestion, de
una duda general, no aplicaron á estas ma- todo se duda. El escepticismo religioso es
teriasel pirronismo de ciertos filósofos; sino en muchos como un ramo de un escepti
que enderezando sus tiros contra uno ó cismo universal: son escépticos en religion
muchos dogmas, se esforzaban en probar como lo son en filosofía, en política, y en
que la Iglesia habia errado; y cuando esta cuanto pertenece á los humanos conoci
les oponia su irrefragable autoridad, fun mientos.
dada en la Sagrada Escritura, apoyada en Los incrédulos propiamente tales, es de
la Tradicion, sancionada por los siglos, se cir, aquellos que no solo no tienen la fe.
deshacían de la dificultad de la manera que sino que la rechazan; que no solo dudan
mas les cumplía, prosiguiendo en su car si la Religion es verdadera, sino que opinan
rera de obstinacion y de cavilaciones. (pie es falsa, se distinguen de los escépti
Veíanse de vez en cuando indiferentes, in cos, en que el estado intelectual de los
crédulos, ó escépticos: pero generalmente unos es una mera negacion de creencias,
hablando, no era este el cáncer de la socie cuando la de los otros, es una oposicion
dad; los hombres sin religion y sin Dios formal , una verdadera enemistad en con
eran todavía excepciones monstruosas. tra de ellas. Los filósofos del siglo pasado
Desde el siglo pasado, sucede muy de eran verdaderos incrédulos; pues no solo
otra manera; la irreligion tiene abiertas no estaban adheridos á la fe , sino que la
sus cátedras; el indiferentismo es adoptado desechaban con desden, la odiaban, la
por muchos como un sistema cómodo para condenaban, esforzándose en estirparla de
disfrutar de los placeres de la vida , y aho los ánimos donde felizmente habia podido
gar los remordimientos; el escepticismo no conservarse. Algunos sabios de nuestra
se halla precisado á ocultarse bajo la ense época carecen de fe , pero esta carencia no
ña de esta ó aquella secta; dice abierta es un odio, nó una aversion; es una duda
mente: «dudo de todo;» asi como el in que quizás disimulan, y de la cual no po
crédulo ataca siempre que le place lo mas cas veces se lamentan los mismos que la
augusto de la Religion; y el indiferente sufren. Perdidos en el Océano de la incer-
confiesa sin reparo que no se cura de saber tidumbre y de la vaguedad, características
si todo cuanto se habla y escribe sobre esas del espíritu humano, preguntan á la vana
importantes materías es verdadero ó falso. ciencia del hombre , lo que ella no puede
Cuando se defiende la Religion es nece decirles; esperando de la criatura la ense
sario atender con mucho cuidado con qué ñanza que solo pudo dimanar del Criador.
clase de enemigos está trabada la lucha: Pero no dejan algunas veces de reconocer
porque bien claro es que han de ser muy la debilidad de sus teorías, la esterilidad
diferentes los argumentos de que se eche de su saber, la inutilidad de los esfuerzos
mano, y aun los mismos se han de emplear que hace el orgullo, para resolver con la
de muy distinta manera, segun las ideas, simple luz de la razon, los grandes proble
opiniones y errores de la persona que nos mas del origen y del destino de la huma
proponemos convencer ó confundir. Podrá nidad.
parecerles á algunos que los escépticos, in Los indiferentes son, propiamente ha
crédulos é indiferentes, pertenecen todos á blando, los escépticos é incrédulos prácticos:
una misma categoría; y sin embargo no es son, como lo espresa su mismo nombre,
así: pudiéndose notar con la observacion los que se empeñan en engañarse á sí mis
del mundo, que estas tres clases existen mos, diciendo que el examinar si la Reli
realmente; y aun que todas estén fuera de gion es divina ó nó , no es negocio de
la Religion distan mucho entre sí; y que l| importancia en que sea menester fijar la
 — 22 —
atencion. Aquí, como se v«, no hay un sin aquella ocasion aciaga, se hubiera tal
sistema filosófico, ni siquiera una doctrina, vez conservado intacta hasta el sepulcro.
sino una negacion absoluta de todo sistema El verdadero católico debe siempre tener
y de toda doctrina. Un necio qué me importa, presente que la fe es un don de Dios, que
decide las mayores cuestiones, resuelve los no se la produce en el espíritu de los otros
mas complicados problemas. Examinada á con meros raciocinios, que para un efecto
fondo esta manera de mirar las cosas, pue tamaño, es menester un prodigio de la
de reducirse á los términos siguientes: gracia; y asi no conviene tener excesiva
«quiero gozar, no quiero remordimientos; confianza en la fuerza de los argumentos
aprovecharé los instantes que me restan de presentados, andando adrede en busca del
vida; cuando suene la hora de mi fin, me enemigo. David derribó al gigante Goliat,
echaré con los ojos cerrados á ese abismo, pero fué obedeciéndo la inspiracion divina,
donde ignoro si me espera la nada ó un y despues que el orgulloso filisteo habia in
eterno castigo.» sultado repetidas veces los reales del pue
No nos es posible en la actualidad, por blo del Señor.
no permitirlo los límites del artículo, mos No ignoramos cuán anchuroso es el cam
trar prácticamente cuál es el modo mas á po de la discusion que á todo linage de
propósito para convencer ó rebatir á las materias otorga el espíritu de nuestros
cuatro clases de enemigos arriba enumera tiempos. En los paises mas civilizados se
das. Esto lo reservamos para los números escribe sin cesar sobre materias religiosas,
siguientes; bien que por de pronto nos per- se las sujeta á riguroso exámen bajo los
initirémos una observacion que nunca de mas variados aspectos. Lejos de nosotros
ben perder de vista losverdaderos católicos. el intentar que esta discusion se estreche,
Personas hay que llevadas de su ardiente y por cierto que no damos el ejemplo de
celo, y anhelando sacar el alma de sus retirar el cuerpo de la lucha ; solo hemos
prójimos de las tinieblas y ceguedad en querido indicar un abuso tanto mas peli
que la contemplan, provocan con facilidad groso, cuánto á él pueden arrojarse la pre
disputas, ó sobre la Religion en general, ó suncion y la ignorancia impulsadas por un
sobre alguno de sus puntos capitales; es celo indiscreto y á veces falso. La defensa
perando de esta suerte, hacer una conquista de las verdades de la Religion, figura entre
preciosa, y restituir al redil dela Iglesia las tareas mas santas que proponerse pueda
una oveja extraviada. Aplaudimos sincera un cristiano ; pero la claridad prescribe que
mente esa ardiente caridad, que no cabien se hermane la apología de la fe con las de
do en el pecho de quien la posee, se des bidas consideraciones á la preservacion de
ahoga comunicándose al exterior, saliendo las almas sencillas.
á la defensa de la Religion, y procurando Los sostenedores de la Religion tienen
atraer á la misma los que tuvieron la des de su parte las ventajas inseparables de una
dicha de abandonarla. Sin embargo la pru causa de justicia y de verdad; pero los ad
dencia aconseja abstenerse de entrar en versarios, poseen tambien en alto grado,
indiscretas cuestiones cuando el que se en el talento de adulterar los hechos, de em
carga de hacer la apología de la Religion, plear especiosos sofismas , y de cubrir con
ó de vindicar alguno de sus altos dogmas, velos seductores las doctrinas mas peligro
escasea de las luces necesarias para sacar sas y repugnantes. En una lucha de 18 si
airosa la causa de la verdad. La prudencia glos, se han amaestrado de una manera
dicta tambien, que en no mediando espe muy notable en el manejo de las armas
ranza de conseguir algun resultado ó algu que Ies son propias; y desgraciadamente
na otra causa legítima, no se entablen encuentran siempre en el hombre una dis
discusiones sobre materias de suyo tan de posicion favorable, un aliado natural, en
licadas; pues que á menudo puede suceder el orgullo, en el espíritu de novedad, y en
que sin alcanzar el efecto que se desea, se la perversidad de nuestras inclinaciones.
irrogue
cillas. Una
gravísimo
reflexionperjuicio
especiosa,
á lasuna capcio La fe es ahora, y ha sido en todos tiem
almassen-
pos un sacrificio; y un sacrificio es siem
sidad, un sofisma bien presentado, un pre costoso; pero lo es mucho mas
hecho mal esplicado, penetran á veces co en el siglo en que vivimos, cuando son
mo un relámpago ' en un entendimiento tantos y tan fuertes los incentivos que
desapercibido, y destruyen de un golpe la nos inclinan al escepticismo y á la in
fe que se habia recibido en la cuna, y que credulidad. Esa exageracion de las facul

lades del espíritu humano, ese prurito de
sujetarlo todo á riguroso examen, esa ar
raigada costumbre de trastornarlo todo,
hariendo que pronuncien sobre las mate
rias mas graves y delicadas jueces mal in
formados é incompetentes, esa nube de
sofismas, de calumnias, de imposturas de
todos géneros, con que los enemigos de la
Religion se esforzaron y se esfuerzan toda
vía en abrumarla: ese escepticismo, ese
indiferentismo que han cundido de una
manera tan lastimosa en la sociedad mo
derna; ese funesto conjunto, trae consigo
un inminente riesgo de extraviar el espíri
tu del fiel, si no procura fortalecerse con
esmero y ahinco contra los repetidos y ru
dos ataques que á cada instante se balla
precisado á sostener. Hubo un tiempo en
que bastaba aprender la enseñanza de la
Religion, ahora es indispensable poseer á
fondo la ciencia que nos demuestra los ci
mientos en que se apoya, (pie nos hace
capaces de dar razon de nuestra fe, en el
tribunal de la filosofía. Este es un hecho
cierto, innegable, patente; en vano inten
taríamos desconocerle; nuestra ceguera
produciría gravísimos daños á la causa de
la Religion, dejando de parte de sus ene
migos una superioridad que no les pode
mos permitir. No nos entreguemos ¡i peli
grosas novedades, pero si es necesario,
defendamos lo antiguo con razones nuevas;
la v erdad es una , pero los argumentos con
que se la puede defender son innumerables;
porque emanada del mismo Dios se enlaza
con todo cuanto existe en el cielo y en la
tierra ; y á mas de la revelacion , á mas de
la infalible palabra divina , hallamos en la
naturaleza, en la historia, en la filosofía,
bien templadas armas para aterrar á los
enemigos de la verdad. Los cielos cuentan
la gloria de Dios, y las obras de sus manos
las anuncia el firmamento; la criatura lle
va el sello del Criador; la incredulidad se
empeñó en hacerla mentir, pretendiendo
que diera testimonio contra la mano que la
(¡¡ó el ser; ella no ha podido ser tan ingra
ta, no ha podido negarse á sí propia. In
terroguémosla nosotros tamb'en, seguros
de que cuanto mas á fondo penetraremos
sus secretos, deseubrirémos mas y mas la
inefable armonía (pie enlaza la naturaleza
con la gracia, la razon con la fe, la histo
ria de la humanidad con la historia de la
Religion , el porvenir del humano linage con
tinos de la Iglesia católica.—J. B.
23
Y
1.
= Encumbro hasta las nubes mi frente
soberana ; mis plantas besan el mar : al ru
gir la tormenta , miro con desden alzarse
las olas embravecidas que se estrellan á mis
pies. La hermosa llanura de Barcino me
sirve de riquísima alfombra , y cuando el
mar en calma se tiende sosegado en su le
cho , los navegantes que se dirigen á la ori
lla , dirían que tengo mi asiento en estrado
de bruñido y resplandeciente cristal.
Al rayar la aurora, relumbran en mis
sienes los primeros destellos de su luz ; y
antes que el sol naciente convierta el mar
en un lago de fuego, me paga su tributo
esmaltándome de perlas y de oro.
lúi la oscuridad de la noche, me colum
bra el marinero cual gigantesca fantasma
(pie guarda las entradas dela tierra; ¡ guay
de quien se aproxime , no queriendo yo !
Orladas mis sienes de antiquísima mu
ralla , la llevo airosamente sobre mi cabe
za, como un antiguo conquistador su ca
pacete de hierro ; entregados al viento no
flotaran con tanta magestad sus penachos,
cual sobre mis soberbios baluartes el pabe
llon de Castilla.
I | bramido del trueno no es tan terrible
como mi voz ; mis saludos hacen temblar
la tierra, y retumban á lo lejos en la in
mensidad de la mar; cuantos vivientes hay
á largo trecho se estremecen y azoran; el
labrader suspende sus faenas y contempla
la llama y humareda de mis fuegos , cual
inflamado aliento que lanzara entre los mu
gidos de su cólera espantosa fiera.
II.
¿Veis la reina de Cataluña, la mas pre-
. ciosa joya de los monarcas iberos que yace
| á las orillas del mar, semejante á una ri
 — 24
quísima concha que las oleadas arrojaran á insultar mi llanto , y el alzarte erguido so
la playa? Es mi esclava. bre mí, cual buitre sobre su presa miran
= No soy tu esclava. do si respira aun , posible no creyera. Si á
= ¿No sabes que mientras yo quiero, dominacion extraña trasladado te hubiese
alegre y bulliciosa retozas á mis pies , cual traicion aleve , entonces y solo entonces ,
niña juguetona á los de su amo; y que en sospechara que tus fuegos pudieran con
alzando mi voz aterradora , no se estreme tra mí.
ce mas vivamente la endeble caña? En dia infausto, sacudiendo sobre mi
Si en dia de alborozo y gala retumba mi seno la fatal discordia su viperina cabelle
bramido sobre tu cabeza , tus edificios se ra , de sangre regó mis calles ; cegados de
conmueven, retiemblan tus cristales, tus insana cólera pelearon hermanos contra
doncellas palidecen, y el niño sobresaltado, hermanos , con la impetuosidad y bravura
corre lloroso y vacilante en busca del re que los terribles trances recordaran de las
gazo de su madre. huestes de Berwik. Si en la aciaga hora en
>=No soy tu esclava. que revolcándose en su sangre las infortu
= ¿No eres mi esclava? un dia , solo un nadas víctimas del popular corage clama
dia me indigné contra tí: ¿no lo recuerdas? ban venganza , llamado te creiste á socor
¿olvidaste aquellas horas en que mis bocas rerlas, continuaras vomitando el fuego que
formidables, rebramaban enfurecidas, der ya entonces comenzaste; viera yo armas
ramando sobre tí torrentes de fuego, é contra armas, furor contra furor. Pero
inundándote con espesa lluvia de hierro cuando amansada la popular tormenta ,
candente? quedaron mis calles desiertas , y solitarias
¿No eres mi esclava? ¿Tan en breve ol mis murallas ; cuando tantos de mis hijos
vidaste el estridor horrísono de los desco en atropellada fuga se esparcieran por la
munales proyectiles que yo te arrojaba, campiña, esperando con angustiosa impa
mas ligero que el niño al lanzar las piedras ciencia el desenlace de tan funesto drama ;
de su honda ? ¿ Olvidaste , cuando se alza cuando pacífica y sumisa franqueara yo mis
ban rapidos hasta la region de las nubes, y puertas, tendiendo á los sitiadores una ma
suspendidos sobre tu cabeza parecían bus no amiga ; cuando de la lealtad de mis pa
car la víctima, y blandían su inflamada co labras ofreciera tan seguro garante en me
la á manera de aciagos cometas? ¿Olvi diadores esclarecidos; cuando mi venerable
daste cuando descendían , veloces como el pastor llevaba enlazado con el báculo epis
rayo ; y el estrepitoso hundimiento de los copal el ramo de olivo; cuando en
techos, y el desplomarse de los edificios, y tonces, sobre mi desmantelada, indefensa,
el espantoso estallido al reventar saliendo casi desierta , vomitar fuego ! Nó , no
de las entrañas de la tierra ? era esto lo que les decia á los soldados su
¿ No eres mi esclava ? y bandada de tí corazon español; mas gustosos á una bre
midas palomas no se dispersan mas presto cha se arrojaran , que no asistir fríamente
al estallar el arma del cazador que tus hijos al incendio y ruina de infortunada ciudad.
al retronar mis cañones I Guardian de mi reposo, protector de
Esas fábricas que orgullosa levantas , os mis riquezas , te creia yo : y el lienzo ar
tentando tus tesoros y opulencia ; esos vis mado de cañones jamas me causara mella ,
tosos edificios donde preparas suntuosas y porque asestados tan solo los veia á cam
brillantes moradas, do pasar puedas las ho pos enemigos , si el pabellon britano aso
ras en que te embriagas de placer, reducir mar columbraba en lejano horizonte; si
las á pavesas está en mi mano : si me pla soberbio con los trofeos de las orillas del
ce, en breves instantes tu hermoso cielo Indo , y de las playas del Celeste Imperio,
cubrirse ha de la polvareda de las ruinas; parecía recordarme de Trafalgarlas aguas,
y envuelta en nube de humo, contempla de Gibraltar las almenas ; involuntaria mi
rán con espantolos paises comarcanos, que rada daba yo á tus murallas; y ensanchado
Barcino está ardiendo cual despreciable el corazon latia de contento , y me decia.
pajar. «tu defensa está allí.»
¿ Qué me importaran las bravas legiones
III. que del Pirene descender pudieran hasta
mis llanuras? cuando trabada en mis cam
= En paz y armonía, largos siglos vivié pos encarnizada lucha , tronará sobre sus
ramos ; y el cebarte en mi destrozo , y el cabezas el gigante de las cien bocas de fue
 — 25
go; despavoridos correrán á ampararse á || cuando se combate al adversario , es nece
sus trincheras, escondiendo su afrenta. sario no olvidar la indulgencia; pues que
Si orgulloso retumbar hicieras en festivo por nuestra parte , bien pronto nos vere
dia el aire estremecido, tu orgullo era mi mos precisados á pedírsela. Con estas re
orgullo; izaba ufana el estandarte de mis flexiones bastante damos á entender cuán
reyes , que alzando en mis naves á la vista enemigos somos del hablador empirismo ,
de extrañas velas parecía decirlas : « escu y de la panacea política ; en negocios tan
chad y temblad. arduos y espinosos, quien falla con tono
En mal hora deshojaste tan hermosa ilu demasiado magistral, quien pretende ha
sion ; en mal hora , á codiciosa envidia de ber descubierto soluciones generales , lla
extrangeros, cruel placer suministraste, nas y sencillas , es ó un alucinado ó un
con horrendo espectáculo de mi incendio y impostor.
ruina ; en mal hora , con fúnebres recuer ¿ Qué interes puede haber en ocultar la
dos enlazaste hasta el estampido de regia situacion crítica , complicadísima , muy di
gala. fícil de desenlazar, en que la España se
tampido
(Aciago,
ha aciago
de borrar!
recuerdo,
¿Sabes
quecuál
otro es?
es- || encuentra? ¿Por qué hacernos ilusiones,
esperando con excesivo candor , que el re
Vendrá un dia, vendrá un ansiado dia , en medio de nuestros males ha de llegar muy
que montará sobre el horizonte el sol mas pronto? ¿Por qué olvidar que necesitamos
esplendente y bello, hermosa aurora mati poder , y que sabemos apenas donde bus
zará el Oriente con delicados colores , y mi carlo ; que hemos menester círden , y no
pueblo apiñado sobre la muralla , esperará vemos donde afianzarlo ; que esindispensa-
ansioso que llegue á tu cumbre un rayo de ble la union nó facticia , no de coaliciones,
oro. Entonces , tronarás como el Etna en sino sincera , sólida , durable , y que igno
sus horas de corage , y al son de tus true ramos los medios de conseguirla; que exis
nos danzarán alborozados mis hijos con la te una ley fundamental , cuya infraccion ha
misma tranquilidad que el sencillo aldeano pasado á costumbre ; que es de urgente
al son de la rústica zampona. ¿Sabes lo necesidad el arreglo de los negocios ecle
que dirán tus truenos? dirán que ha sona siásticos de acuerdo con el Sumo Pontífice;
do la hora en que la Excelsa Hija de cien muy conveniente el restablecer las relacio
reyes se ha sentado bajo el dosel de San nes con las potencias del norte , y que por
Fernando. ahora ni de lo uno ni de lo otro existe la
Entonces desearas espesa nube que te menor esperanza? Y todo esto, dejando
ocultara á los ojos de la Reina ; entonces aparte la formacion de leyes orgánicas , el
cuando por vez primera la indignacion en ordenar y vigorizar la administracion , el
cienda el rostro de la inocente Magestad , desembrollar ya que no es dable remediar
temblarás medroso en su presencia, y le la hacienda , y cien y cien otros puntos se
dirás sumiso : « Señora , no fui yo.» cundarios, pero que no carecen de impor
tancia , cuando no fuera mas que por su
número y por la confusion en que se hallan?
El vicio radical de nuestra situacion es
la falta de poder ; y el origen de esta falta
HAS SOBRE LA S1TÜACI0\ DE ESPAÑA. es el no ser posible añadir de repente al
gunos años á la tierna edad de la Augusta
Huérfana que ocupa el trono de las Espa-
ñas. Dadle al problema todas las vueltas
No es muy difícil atacar las opiniones que quisiereis : la dificultad está aquí. La
agenas, pero si el sustentar las propias: inmensa mayoría de los españoles, desea
porque la razon humana es tan débil para ardientemente que los 20 meses que restan
edificar , como formidable ariete para des de la menor edad , fuesen 20 minutos; pe
truir. Esto se verifica en todos los ramos ro los hombres previsores desearían ade
del saber humano, y particularmente en mas, que la Reina que cumplirá los 14,
política ; porque sus problemas á mas de la cumpliera al mismo tiempo los 25. Un mo
muchedumbre de datos que han menester, narca de 25 años : hé aqui nuestra necesi
adolecen del inconveniente de cambiarlos dad ; necesidad triste porqué es urgente , y
á cada paso. Por lo mismo, si en algo ca sin embargo no puede ser satisfecha sino
be tolerancia , es de seguro en política : con la tarda lentitud del tiempo.
 | Lamentable condicion de las sociedades
humanas ! la monarquía hereditaria es el
sistema de transmision del poder preferi
ble á cuantos se han excogitado ; pero ado
lece del inconveniente gravísimo de las mi
norías. Períodos borrascosos por necesidad,
porque mientras duran , el principio mo
nárquico no subsiste sino por una saluda
ble liccion legal , suponiéndose ocupado el
trono (pie está vacante. Esta ficcion es sin
duda necesaria , es lo único posible en se
mejante caso, pero no basta para evitar á
las naciones larga serie de calamidades.
Sean estas cuales fueren , los pueblos las
han preferido al desbordamiento de las pa
siones que ambicionaran la corona ; por es
to colocan á las gradas del solio vacío la
cuna del tierno monarca. Sacrificio indis
pensable , pero doloroso ; porque estas épo
cas las atraviesan las naciones con mortales
padecimientos y angustias : la infancia de
los reyes es el tormento de los pueblos.
Un atinado enlace de la Joven Sobera
na , en que se combinasen de una manera
conveniente el interes político y el dinásti
co ; en que acertadas negociaciones allana
sen las dificultades presentes, y previniesen
las que podrán sobrevenir ; en que se real
zase el prestigio del trono y se acrecentara
su fuerza agrupando en su alrededor nue
vos intereses y simpatías; en que se cerra
se el cráter de las revoluciones, y no se
dejaran esperanzas á reacciones peligrosas
y violentas, ¿no seria un medio harto sen
cillo, y muy á propósito para llenar en al
guna manera el vacío que acabamos de in
dicar9 Medítenlo nuestros hombres de es
tado. No olv iden (pie esta es la primera
incógnita que ha de ser despejada.
En todas las combinaciones imaginables
ocurrirán gravísimos inconvenientes, obs
táculos difíciles de salvar, se columbrarán
consecuencias mas ó menos desagradables;
pero téngase presente que el estado de las
cosas es tal , que ya no puede tratarse de
bueno y de mejor , sino de malo y de me
nos malo. En semejante conflicto, el me
jor partido que se puede tomar, es aquel
en que menos se sacrifique nuestra nacio
nalidad é independencia, y por cuyo me
dio se consiga sacar el palacio de. nuestros
reyes de esa soledad pavorosa en que aho
ra se encuentra.
En este delicado negocio será bueno no
perder de vista , cuál fuera el enlace que
ofreciera mayores ventajas, y menos in
convenientes , para una contingencia , de
que nos preserve Dios , de morir la joven
Reina , y legarnos en un hijo suyo , otros
14 años de menoría y de regencias. El ca
so , se dirá , es remoto ; asi lo esperamos ,
contando en la bondad de la Providencia ;
pero no lo era mas ciertamente en 1829 ;
tampoco se recelaban entonces las series de
catástrofes y desastres que hemos sufrido ,
y estamos sufriendo todavía. En tales ma
terias, una imprevision de los hombres de
estado, la pagan los pueblos con torrentes
de sangre.
Aprendamos del vecino reino de Fran
cia a ser previsores y cautos; ya que tan
to hemos sufrido y sufrimos aun , ya que
tan costosas lecciones nos ofrece la expe
riencia propia, aprovechémonos algun tan
to de las que nos presentan las naciones
extranas, y procuremos escarmentaren
cabeza agena. Los hombres de la dinastía
de julio, é identificados con el nuevo or
den de casas creado por la revolucion de
1830 , descansaban sin zozobra , fiados en
la solidez de la obra de sus manos , viendo
la nueva dinastía asegurada en numerosa
familia , y considerando que la transicion
de un reinado á otro se verificaria de una
manera insensible , supuesto que el here
dero de la corona habia entrado ya en la
edad viril, y se formaba ya de mucho tiempo,
en el consejo de su anciano y experimen
tado padre. Miserable prevision humana !
Un caballo desbocado disipa en un momen
to tan halagüeñas esperanzas: el infortuna
do príncipe yace en el polvo del camino ,
privado de los sentidos que no ha de reco
brar. Pasan breves momentos, el Duque
de Orleans espiró ; y esa voz que se espar
ce con la celeridad del rayo por toda la
Francia , causa una sorpresa , un estupor
imposibles de describir : al lado de una
tumba, se descubría un abismo. Pero,
¿ qué se hizo pasado el primer instante de
asombro? alzóse en todos los ángulos de la
nacion, el grito de: «sálvese la monarquía»;
la regencia era ¡«mínente , y con la preci
pitacion del sobresalto se estableció la ley
de la regencia hereditaria. Asi se procuró
dar estabilidad y consistencia al trono, ha
ciendo que de su inmovilidad y fijeza par
ticipasen la institucion y las personas que
debian representarle. ¿No hubiera sido
mejor , que este caso se hubiese previsto
con la debida anticipacion , y que la nueva
ley no llevase el sello de las circunstancias,
ni se rozase con determinadas personas?
Supuesta la imprevision, no fué posible
 27
obrar Je otro ; pero llegada la oportuni la Francia , media en la actualidad otra cir
dad , ¿ seria imprudencia que de la manera cunstancia, cual es la situacion dela dinas
que se juzgase legal y conveniente, nos tía reinante y el estado intelectual , moral
previniésemos nosotros contra los azares y político de aquella sociedad.
que pueden ocurrir? El enlace de nuestra jóven' Soberana con
Hay ciertas cuestiones que la prensa de un príncipe de la casa de Orleans , nos ha
suyo tan libre y osada , no las aborda sin ría participar de las continuas zozobras de
embargo de frente , dejándolas en comple una dinastía que entronizada por la mano
to olvido , ó tocándolas con mucha reser de la revolucion sobre un antiquísimo so
va. Respetamos los motivos de semejante lio, vive desasosegada é inquieta entre
conducta, y nos guardaremos de decir, opuestos temores. En los salones del regio
que no medien en esto razones de pruden palacio se le aparecen las sombras de los
cia. Comprendemos que los partidos estan antiguos reyes , en las márgenes del Sena
en batalla, y que dominados del pensamiento resuena todavía el murmullo de la revolu
de ataque, cuidan principalmente de ases cion. Aquellos demandan lo perdido, esta
tar bien los tiros, y esgrimir sus armas exige el cumplimiento delo pactado; aque
con destreza y valentía. Parécenos no obs llos intimidan con la esperanza de una res
tante que al lado de la idea que apellida tauracion , esta amenaza sustituir la repú
remos negativa , seria útil conceder mas blica á una monarquía que se ha negado á
lugar á la positiva, y que al señalar con ser republicana.
generosa resolucion lo que no se quiere , Con el advenimiento de un príncipe fran
se formulase con mas precision lo que se ces , tomarían mas decidido ascendiente so
quiere. «No conviene, se nos contestará, bre nosotros, ideas que ya lo tienen en
suscitar embarazos, ni suministrar pretex demasía ; la anarquía intelectual y moral
tos ; hay cosas que es necesario aplazar : » de aquel pais, comunicándosenos mas de
en hora buena , y por esto no sindicamos lleno , acabara de disolver y adulterar los
vuestro proceder ; pero no olvideis al me buenos elementos que nos restan para nues
nos, que esos embarazos no dejarán de ser tra regeneracion. Se quitarían los Pirineos,
lo entonces , que esos pretextos se aprove y nosotros deseamos que los haya.
charán entonces tambien , no olvideis que El robustecimiento del poder es una de
los aplazamientos no son siempre los medios las primeras necesidades dela nacion; y no
mejores; que la indecision es fatal en todo, acertamos á concebir cómo puedan encon
y que se marcha con paso mas firme, cuan trarse hombres de buena fe , que ó desco
do se sabe á dónde se va. nozcan esta necesidad , ó se opongan á que
No descenderemos á pormenores ; pero se la satisfaga. El poder en España , es el
supuesto que hemos tocado este delicado trono; y hasta que se le afirme cual con
punto , observ aremos , que una de las prin viene, hasta que su accion esté desemba
cipales miras que-se han de tener presen razada de los obstáculos que les suscitan las
te* en el enlace de la Reina , es el no per fracciones, cuyas insaciables exigencias ha
mitir que se haga de suerte que pueda cen imposible todo gobierno, hasta que es
contribuir al aumento de la influencia de te se sienta fuerte para hacer el bien , y en
la Francia ni de la Inglaterra. Es evidente region bastante elevada para no hallarse
que seria muy danoso el ofrecer nuevas tan á menudo con tentacion de obrar mal ,
ocasiones y medios al gabinete de San Ja no saldremos jamas de esa incertidumbre,
mes para alcanzar ese predominio en todos de esa ansiedad , que nos tienen sumidos
nuestros negocios , que con tanto desem en un estado de desesperada agonía.
bozo codicia, pues en nuestro concepto De las urnas electorales esperan algunos
fuera tambien un error de funestas y tras el remedio de todas las dolencias, y el feliz
cendentales consecuencias , no diremos el desenlace de tan lamentable situacion. Le
conceder el mismo predominio á la políti jos está de nuestro ánimo el intento de re
ca de las Tullerías , pero ni siquiera una traer de ellas á los hombres de bien ; com
preponderancia notable. A mas de los in prendemos cuán importante es bajo todos
convenientes que siempre trae consigo la aspectos, que no se las deje abandonadas á
excesiva influencia de un gobierno extran- merced de la ciega ambicion y de pasiones
gero , á mas de lo que nos enseña la histo ruines; put.. pie si no fuere posible otra
ria sobre los fatales resultados que nos ha cosa , al menos se evitará el mal , ó no se
producido el constituirnos en satélites de permitirá que se consume sin enérgicas,
 protestas. Opinamos no obstante , que es 28vos —estremecimientos , ó explosiones estre
tos son remedios pasageros , que no llegan pitosas ? Verdad es que el desahogo debe
á la raiz del daño; y cuando vemos á cier de hacerse pesado á los gobernantes, pero
tas personas, cándidas en extremo, imagi algunos meses bastan para acostumbrarse
nándose que en las urnas electorales está á los apodos y caricaturas.
todo nuestro porvenir, parécenos contem En medio de nuestras revueltas, disfru
plar una de aquellas escenas supersticiosas tamos de otro beneficio que algunos atri
en que un iluso se entrega á sus combina buirán á causas políticas, cuando en reali
ciones de letras y de signos para adivinar dad dimana principalmente del espíritu de
los sucesos futuros. la época , de causas puramente sociales. A
Todavía no hemos visto unas Cortes que pesar de las molestias y persecuciones que
durasen todo el tiempo marcado por la ley; por sus opiniones políticas han sufrido no
el gobierno las ha despedido con mas ó pocas personas, nótase sin embargo la exis
menos cortesía, cuando ha visto que no tencia de causas que tienden á suavizarlas,
servían para el objeto que él intentaba ; y á quitarles aquella recrudecencia que tu
si alguna vez no ha sido el gobierno, la vieran en otros tiempos. Cométese una vio
revolucion ha cuidado de suplir la falta. lencia , pero desde luego se ve forzado á
¿Dónde está la omnipotencia parlamentaria? avergonzarse de ella el mismo perpetra
¿ dónde los efectos de la soberanía popular ? dor ; quien se entrega desatentado á la car
Si los cuerpos legisladores la representan , rera de los desmanes , se encuentra bien
¿ cómo es que perecen , ora á manos de un pronto con robustos diques que la mas im
ministerio , ora bajo los golpes de una in pudente audacia no se atreve á salvar. Si
surreccion? Los partidos trabajaron con bien se observa , no dimana este fenómeno
ahinco repetidas veces, para asegurarse ni de las formas políticas , ni de las calida
una mayoría que fuese la expresion de sus des personales de los que ejercen el go
ideas y realizara sus proyectos : un decreto bierno , sino del espíritu del siglo que tan
ó un motín desvanecieron todas las espe decididamente se inclina á la tolerancia , y
ranzas. Con afanes y sudores sin cuento , á desterrar de la sociedad el imperio de la
habian subido el enorme peñasco por una fuerza. Pasaron los tiempos en que esta era
rápida pendiente; ya tocaba á la cima, uno de los principales medios con que con
cuando escapándose de sus manos , rodó taran asi los individuos, como los pueblos
hasta el fondo del abismo. Es necesario co y los gobiernos , el bien tiene por instru
menzar de nuevo la dura faena. mentos la conviccion y la persuasion; el
La prerogativa de la votacion de los im mal se sirve dela astucia , dela impostura,
puestos, único freno de asegurada eficacia de amaños seductores , de palabras enga
que en el orden legal poseen los cuerpos ñosas. Hé aqui la razon porque se verifican
legisladores en todo gobierno representativo, mudanzas profundas, y hasta formidables
se ha hecho ilusoria en España , primero trastornos , sin que los individuos sufran lo
por los votos de confianza , segundo con la que en apariencia debieran sufrir, atenién
costumbre de cobrar las contribuciones no donos á lo que nos refiere la historia con
votadas : por manera que examinando á respecto á otros siglos , y á k> que nos
fondo la libertad positiva que nos queda muestra la experiencia , en la qne toca á
despues de tantos años de revolucion , con otras temporadas del nuestro. El estado
siste en la facultad de desahogarse en que social ha cambiado ; va modificándose cada
jas é invectivas, de palabra ó por escrito. dia ; en esto deben buscarse las cansas ; nó
La prensa es la personificacion de esta li en las regiones de la política.
bertad ; lo agudo de sus acentos indica bas De esta suerte van haciéndose menos te
tante que es el único desahogo. Se ha dicho mibles las reacciones que algunos recelan
infinitas veces que el gobierno trataba de para ciertas épocas de transicion. Sean cua
cerrar este respiradero; mucho dudamos les fueren las vicisitudes que puedan sobre
que con semejante paso se acreditase de venir r ningun partido , ninguna faccion ,
buen maquinista. En un artículo fulminan por mas osadía que se le suponga será ca
te se exhala con frecuencia la indignacion paz de dominar esta irresistible tendencia
mas acerba , y se consume una gran parte de nuestro siglo. La tolerancia está en la
de temible energía ; qué ventajas podría sociedad , y esta no se transforma con un
acarrear el concentrarlas , el forzarlas á re decreto : la tolerancia está en las costum
plegarse sobre sí mismas , y á producir vi- bres , y lo que está en las costumbres no
 29
ha menester que le comuniquen vigor las aquel poder, la conveniencia de la mayor
proclamaciones de la ley. ó menor latitud en las leyes orgánicas , y
De los partidos militantes , ocupan los otros puntos semejantes, estemos seguros
dos extremos el republicano y el modera que la revolucion continua todavía , que
do ; aquel dice abiertamente que no se ha estamos condenados á presenciar la lucha
lla satisfecho con las formas existentes, es de las pasiones , nó de la inteligencia , que
te protesta que las acepta, y que solo trata no asistimos á una discusion de donde bro
de acomodarlas á sus ideas por medio de ten destellos de luz , sino á un choque vio
las leyes orgánicas. Sus adversarios ponen lento que arroja chispas incendiarias.
en duda la sinceridad de esta protesta acha Entre tantos gobernantes que bajo dis
cándole segundas intenciones dirigidas á tintos pretextos han infringido la ley vigen
derribar la Constitucion de 1837, reempla te , ninguno lo ha hecho de una manera
zándola con el Estatuto , ú otra ley pareci grandiosa , que acarrease á la nacion resul
da. Dejaremos á los órganos de los di tados positivos y universales; ninguno que
ferentes partidos el cuidado de apoyar ó al reconvenirle por su infraccion pudiera
desvanecer la acusacion , que ni á unos ni decir como aquel romano. « Juro que he
á otros les faltan plumas amaestradas en la salvado la patria»; ninguno que concibiese
polémica política. Observaremos sin em un plan vasto, que lo realizase con energía
bargo , que dado caso de existir las supues y rapidez , allanando todos los obstáculos ,
tas intenciones, andaría muy errado quien superando todas las dificultades; ninguno
creyese , que con golpe semejante se ase que al presentarse ante el gran jurado dela
guraría para siempre el triunfo de ciertas nacion cargado con inmensa responsabilidad
ideas. En efecto, los mismos partidarios pudiera decir: «Señores, la política era un
que existen ahora existieran entonces tam caos, yo la he desembrollado; para ello he
bien , todos con pocas modificaciones em quebrantado la ley , es verdad ; si quereis
plearían idénticos medios que bajo el im mi cabeza , tomadla , que ahora ya no es
perio de la Constitucion , la nueva ley se necesaria , ni para salvar la patria , ni para
suspendiera como ahora siempre que nece afirmar la ley ; pero antes mirad mi obra ,
sario se creyese ; la lucha se trabaría como destruidla si os atreveis ; yo marcharé con
ahora en la prensa , en la tribuna , en las tento á la muerte , si vuestro corazon no os
urnas electorales; interminables disputas se dicta que en vez de un cadalso debeis le
suscitarian sobre las leyes de Ayuntamien vantarme una estatua.» — J. B.
tos , de Diputaciones provinciales, de mi
licia nacional; en breve estaríamos como
ahora en el terreno de la política , en ese LA SUERTE
círculo sin salida , en que tan inútilmente
se consumen infinitas fuerzas individuales , CATALUÑA. DE
en que tan estérilmente se gastan las del
poder y dela nacion. Diríase como en otros
tiempos se decia : «la nueva ley es no mas
que el cimiento; construyamos el edifi
cio ; » en vano se le iria alzando de conti
nuo; las exigencias no cesarían hasta que
la cumbre tocase al cielo.
Intentamos con esto significar, que si Ya es tiempo que Cataluña piense con
como le achacan sus adversarios , las miras seriedad y detencion en la suerte que le
de cierto partido se dirigiesen á un proyec está reservada; ya es tiempo que conocien
to semejante, mucho dudamos que alcan do á fondo su verdadera situacion mate
zase por este camino el objeto que se pro rial, intelectual, moral y política, excogite
pone. Es indispensable , urgente, salir del los medios á propósito para procurarse el
terreno dela política; mientras veamos que bienestar que en lotananza le sonríe, y
así el gobierno como las Córtes se ocupan precaverse de los males que en el porvenir
discusiones
de ella conarrumbadas
de
preferencia,
la prensa
las cuestiones
ymientras
de la tribuna,
de
en adlas ladelos individuos,
amenazan. de las
La suerte provincias
próspera y de
ó adversa
las naciones , está en las manos mismas de
y delegitimidad de este, ópara
mejoras positivas de II quien
do noshaquejamos
de disfrutarla
del infortunio
ó de sufrirla;
, ó noscuan-
feli-
 — 30 —
citamos por nuestra dicha, no hacemos por Con un cambio político la Inglaterra per
lo comun otra cosa , que inculpar ó alabar derá mucho de su influencia , y disminui
nuestra conducta. Los pueblos, del propio rán las probabilidades de que se nos sacri
modo que los individuos , son hijos de sus fique á sus exigencias con un golpe de
obras. mano ; esto lo conoce Cataluña , esto lo
Nuestra situacion es crítica , pero no de palpa todo el mundo; perono se crea tam
sesperada ; nuestros males son graves , pe poco, que en semejante circunstancia la
ro nó sin remedio; nuestros peligros son política inglesa se retire de la arena ; no se
muchos , pero nó tales , que sea imposible crea , ni que abandone sus proyectos , ni
precaverlos. Es un error el creer que ni que deje de trabajar con ahinco , con per
estos males, ni esos peligros, dimanen pre severancia en la realizacion de sus planes,
cisamente delas desgraciadas circunstancias Mal conoce la historia europea quien con
políticas en que la España se encuentra. tales esperanzas se deslumbre; mal com
Estas hacen mas difícil , mas peligrosa la prende la verdadera situacion de las cosas
crisis, pero no la producen; agravan los quien se halague con tan hermoso sueño.
males, aumentan la inminencia del peli Él poder de la (iran Bretaña es inmenso,
gro: pero sin ellas, existieran mas ó me su astucia proverbial , su constancia es un
nos,
El esa
estado
crisis,
excepcional
esos maleseny esos
que peligros.
se halla modelo, sus adelantos industriales, lasven-
tajas de su posicion, indisputables, sus ne
Cataluña con respecto á las demas provin cesidades apremiadoras : y este conjunto
cias , asi en lo tocante á la riqueza pública, basta y sobra para que del logro de sus pla
como en lo relativo á las ideas , costum nes no desista , haciendo si es necesario es
bres, hábitos é índole de los habitantes; la fuerzos hercúleos.
rivalidad de una nacion poderosa y astuta Fijos en España sus ojos , contempla un
en grado eminente , hé aquí las dos fuen pais de catorce millones de habitantes, que
tes de donde nacen nuestros males ; hé aqui en su mayor número no conocen la indus
lo que nos crea esa situacion penosa , que tria , y por lo mismo le salta á la vista que
no nos permite disfrutar el bien que posee hay en la Península un inmenso mercado
mos , ni entregarnos á las esperanzas hala donde puede desahogar algun tanto sus re
güeñas con que nos brindan mil y mil cir pletos almacenes. Dominante en Portugal ,
cunstancias á cual mas favorables. y señora de (übraltar, tiene dos excelentes
Ese estado escepcional no cesará en puntos de apoyo para el sostenimiento de
desapareciendo la actual situacion política ; su poder y realizacion de sus miras; re
ni es posible que cese , hasta que cambien suelta de un modo favorable la cuestion
las condiciones materiales de la sociedad mercantil , se hermanan admirablemente
inglesa, hasta que experimente completa sus intereses materiales y su ambicion po
mudanza buena parte del resto de las pro lítica : insensiblemente se convertirá la Pe
vincias de la monarquía española. Cuando nínsula entera en abyecta colonia , y los
la Inglaterra deje de estar sometida á la fa Pirineos abatidos por la política de Luis XIV,
tal alternativa de vender ó morir, entonces se levantarán masaltos todavía que en tiem
mas
renunciará
provincias
á su del
rivalidad
reino; no
cuando
encuentren
las de- po de Cárlos V y de Francisco I.
A vueltas de este porvenir tan halagüe
ventajas en surtirse de las manufacturas in ño, divisa como muy posible otro, que le
glesas , entonces se declararán en nuestro infunde los recelos mas vivos, que turba
favor y se opondrán con nosotros á los pro su sueño, que alarma su ambicion y asusta
yectos mercantiles de la (iran Bretaña. su codicia.
Esta es la verdad, pura, limpia, sin am Hay en el oriente de España una provin
bages , sin amaños ni lisonjas : persuádase cia , célebre por su gloriosa historia , temi
de ella Cataluña, no la pierda nunca de ble por el valor, la intrepidez y la constan
vista ; y tendrá no poco adelantado para el cia de sus hijos , nombrada en todas épocas
conocimiento de su situacion actual , y de por la infatigable laboriosidad de sus habi
la venidera. Viva segura de que existe una tantes. En brevísimo tiempo, se han levan
opinion en contra de sus intereses, que tado como por encanto en su populosa ca
tarde ó temprano se presentará tal cual es ; pital , cien y cien establecimientos fabriles,
viva segura, que ahora hay mucha adula se han puesto en circulacion cuantiosos ca
cion en el interes que por ella se muestra , pitales, el resto del principado participa del
porque se la necesita. movimiento; y en el mediodía de Europa
 — 31 —
se ha presentado el singular fenómeno, tan comenzado , y quiere llegar hasta la última
to mas notable cuanto mas aislado , de una extremidad para ver si en un momento de
provincia industriosa y floreciente semejan crisis se le brinda una conyuntura. Pero
te á las que admira el viagero en los paises estad seguros (pie si un dia llegase á con
del
prohibitivo
Norte. , Con
ha lapodido
proteccion
extenderse
del sistema vencerse de que
á los persuadiera
mercados de la costa y del interior de la
Península ; y la industria inglesa que se ha
encontrado con un rival que comenzaba á
hacerse respetar, ha conocido desde luego
la necesidad de abatirle. Si en vida le de
jara , si permitiese su prosperidad , ó sola
mente su conservacion hasta la época en
que la España sometida ¡i un gobierno en
trara de lleno en el camino de una admi
nistracion sabia y protectora , el fenómeno
ahora aislado podría tomar mayores dimen
siones : la industria es de suyo propagan
dista ; y los reinos de Aragon , de Valen
cia, de Murcia, de Andalucía, podrían
participar del peligroso contagio. Andando
el tiempo pudiera la propaganda industrial
extenderse hasta el territorio lusitano, y la
moderna Cartago encontrarse cual la anti
gua Roma en presencia de nuevos Viriatos.
La nacion que á este punto podría llegar,
mable
posee todavía
resto delasuna
preciosas
diademaAntillas,
hecha inesti-
peda
zos; excelente punto desde donde seria fá
cil abrir una vasta comunicacion comercial
con el continente americano, que para ma
yor infortunio de la Inglaterra, habla en
su mayor parte la misma lengua , y profe
sa la misma religion de los españoles. So
bre la costa de Africa se conservan todavía
algunas islas, que la Gran Bretaña conoce
lo que podrán ser con el tiempo , porque
sabe lo que fueran ahora si en sus manos
estuviesen ; y por fin , hasta allá en la ex
tremidad del Globo , á la vista de las pose
siones de la India, de los establecimientos
de la Nueva Holanda , y de las recientes
conquistas de la China, está mirando un
precioso grupo de islas que siglos hace es
peran que el gobierno español les dé im
pulso y fomento para convertirse en uno
de los mas brillantes florones de la corona
de Castilla.
Hé aquí loque está viendola Inglaterra,
lo que no olvida, lo que no olvidará mm
ia, sean cuales fueren los acontecimientos,
y por mas desfavorables alternativas que
esté condenada á sufrir en su influencia po
lítica sobre los negocios de España. Ha en
sayado el aliarse con la revolucion , hasta
ahora no ha conseguido completamente su
a perseverancia
ha errado
deque tal vezelaquí
camino,
ioniosise
Portugal, podría convenirle una política
conservadora ; cambiaría de rumbo con la
mayor serenidad , predicaría con entusias
mo en favor de los intereses, del lustre,
de la dignidad de la monarquía; y una vez
hecha esa modificacion en su política , se
anotaría como condicion necesaria en todas
las carteras ministeriales , y no bastarían á
cambiarla todas las vicisitudes y mudanzas
que podrían sobrevenir en la prepotencia
respectiva de los partidos que se disputan
el mando. De la propia suerte que Peel y
Wellington no se han avergonzado de seguir
con respecto á nosotros la política revolu
cionaria de lord Palmerston , no se desde
ñaría tampoco lord Palmerston de acomo
darse á la política conservadora del lord
Wellington y de Peel.
Queda pues en claro , que Cataluña si se
empeña en proseguir en su noble tarea de
adelantar en el camino de su prosperidad ,
ha de contar indispensablemente con un
poderoso rival , sin que pueda mecerse en
engañosas esperanzas de que un cambio
político sea una suficiente garantía con que
deba creerse segura contra tan temible ad
versario.
Por lo que toca al interés de otras pro
vincias que propenden mas ó menos al sis
tema de libertad comercial , y que por lo
mismo favorecen los designios de la Ingla
terra , tampoco es inconveniente que sea
dable remover con facilidad; con él lucha
rá la generacion actual , y probablemente
la venidera.
No se crean fácilmente los hábitos de
trabajo que en Cataluña poseemos , no se
improvisa una actividad como la que dis
tingue el Principado. El catalan avezado á
continuas faenas , acostumbrado á ser es
clavo de las tareas de su oficio desde el ra
yar del alba hasta horas despues de entrada
la noche , no concibe cómo puede vivirse
de otro modo ; no acierta á explicarse qué
género de vida es esa en que un hombre
no tiene quizás de que alimentarse ni ves
tirse , y sin embargo no piensa en mover
sus brazos, capaces de producir todo cuan
to necesita para ganar su subsistencia. Para
el catalan pobre, pan es sinónimo de tra-
y la miseria es sinónima de falta de
trabajo. Cuando su apurada situacion le
fuerza á pediros limosna ; si es viejo ó está
enfermo, os indica la causa que le impide
el procurarse el sustento ; si es jóven y go
za de salud, se excusa con la falta del
trabajo.
Pero esa manera de vivir que los cata
lanes no comprenden siquiera, la encuen
tran muy natural y muy agradable los que
la disfrutan; decidselo á uno de esos hom
bres que envueltos en su manta y con su
pañuelo en la cabeza , pasan las horas en
la ociosidad, decidselo que hay jóvenes,
viejos, niños, mugeres, que no descansan
durante el dia sino algunos instantes para
comer, y que sin embargo miran como la
mayor de sus calamidades el anuncio de
que el trabajo escasea ; tampoco os com
prenderán, tampoco trocarán su suerte
con esa otra que fuera para ellos un pesa
do castigo.
Además, es necesario no hacerse ilusio
nes: estamos ya tan acostumbrados á pon
derar el suelo de España cual si fuera un
paraiso, que nos imaginamos posible que
con un buen gobierno brotasen como por
ensalmo en todos los puntos la agricultura,
la industria y el comercio. Esto es un er
ror: esas obras requieren largos años, y
dilatadas comarcas existen en España don
de se necesitan siglos.
La administracion mas activa, mas ati
nada , que mas impulse y fomente el des
arrollo de la riqueza pública, ¿qué podrá
hacer sino con muchísimo tiempo , en aque
llos paises donde faltan dos elementos tan
indispensables, no solo para el bienestar
sino hasta para la súbsistencia, como son
el agua y el fuego? El agua se atrae con
los arbolados, y estos se fomentan con el
agua, es cierto; pero donde faltan el uno
y el otro, ¿qué remedio queda sino el tra
bajo y la constancia de los años que todo
lo superan? Para acometer ciertas empre
sas, es necesario contar con una poblacion
numerosa y activa; donde esta falta ¿cómo
se suple? Es indispensable el trascurso de
muchos años; es indispensable dirigir cual
conviene la educacion de los pueblos, por
que es indispensable en muchos lugares
comenzar en cierto modo la conquista de
la naturaleza misma.
La afluencia de los capitales á los puntos
en que ha de desplegarse la accion, es otra
de las condiciones imprescindibles para lle
var á cima las grandes empresas. Esos ca
pitales no acuden tampoco fácilmente; son
32desconfiados,
— suspicaces, y se dirigen de
mejor grado allí donde la experiencia de
muestra que se emplean con provecho. La
dificultad está en los primeros pasos; dados
estos, se aumenta la velocidad en propor
cion del adelanto, las fuerzas productivas
se multiplican de una manera asombrosa.
Cabalmente tenemos en España un in
conveniente gravísimo, que influye mas de
lo que se cree en paralizar nuestro desar
rollo, y en hacer inútiles los mejores de
seos. La vida de España está en las extre
midades; el centro está exánime, flaco,
frio, poco menos que muerto. Cataluña,
las provincias Vascongadas, Galicia, varios
puntos del mediodía, os ofrecen un movi
miento, una animacion de que no participa
el corazon de España. Londres es digna
capital de la Gran Bretaña, Paris de Fran
cia; en la actividad, en la vida de que re
bosan aquellas ciudades veis las indispen
sables condiciones de la cabeza de un gran
cuerpo. En Madrid, y en todos sus alre
dedores á larguísima distancia, nada en
contrais de semejante. Ni agricultura, ni
industria, ni comercio; á la primera ojeada
conocereis que allí hay una corte, que allí
se han amontonado inmensidad de emplea
dos, con sus oficinas, su orgullo tradicio
nal, su olvido del pais que gobiernan; os
convencereis de que es una conquista so
bre el desierto , como ha dicho un escritor
ingenioso, pero que esa conquista muy
propia para lisonjear la vanidad , de nada
sirve para fomentar la riqueza; os persua
direis de que aquel es un centro sin vida,
incapaz de dar impulso y direccion al mo
vimiento de un gran pueblo; y de que á
pesar de todas las teorías, de todos los
proyectos, es muy probable que si espera-
I mos de allá la vivificacion y fomento, ten
gamos que contentarnos con amontonar y
archivar volúmenes de decretos, órdenes,
instrucciones, circulares. «Loque es papel
el gobierno nos envia mucho,» decia con
admirable buen sentido un sencillo al
deano.
Las necesidades de un objeto se aprecian
mal por necesidad, en un pais donde no
existen; quien resuelve las cuestiones sin
tener á la vista los hechos, solo con la avi
da de expedientes, de cuyo contenido no
se ven de cerca ejemplos semejantes, an
dará siempre á tientas , siéndole el acierto
en extremo difícil. Véase lo que á todas las
naciones del mundo les sucede en el go-
|| bierno de sus colonias, y háganse las con

venientes aplicaciones en la proporcion de
bida.
Las consideraciones que acabamos de
exponer, todas fundadas en hechos de una
evidencia incontestable, indican á Cataluña
el camino que ha de seguir para conservar
lo que posee y adquirir lo que le falta.
Sin soñar en absurdos proyectos de in
dependencia, injustos en sí mismos, irrea
lizables por la situacion europea, insubsis
tentes por la propia razon , é infructuosos
además y dañosos en sus resultados; sin
ocuparse en fomentar un provincialismo
tieso, que se olvide de que el Principado
esa unido al resto de la monarquía ; sin
perder de vista que los catalanes son tam
bien españoles, y que de la prosperidad ó
de las desgracias nacionales les ha de ca
ber por necesidad muy notable parte ; sin
entregarse á vanas ilusiones de que sea po
sible quebrantar esa unidad nacional, co
menzada en el reinado de los Reyes católi
cos, continuada por Cárlos V y su dinastía,
llevada á cabo por la importacion de la po
lítica centralizadora de Luis XIV con el
advenimiento al trono de la casa de Bor-
bon, afirmada por el inmortal levantamien
to de 1808 y la guerra de la independencia,
desenvuelta' por el espíritu de la época , y
sancionada con los principios y sistemas de
las legislaciones y costumbres de las demás
naciones de Europa; sin extraviarse Cata
luña por ninguno de esos peligrosos cami
nos por los cuales seria muy posible que se
procurase perderla en algunas de las com
plicadas crisis que segun todas las aparien
cias estamos condenados á sufrir, puede
alimentar y fomentar cierto provincialismo
legítimo, prudente, juicioso, conciliable
con los grandes intereses de la nacion, y á
propósito para salvarla de los peligros que
la amenazan , de la misma manera que la
familia cuida de los intereses propios sin
faltar á las leyes, y sin perjudicar, antes
favoreciendo el bien del estado. En otro
número expondremos nuestras opiniones
sobre este particular; bástanos por hoy el
haber descrito la situacion de Cataluña, á
lo que nos parece con el lenguaje de la
verdad.—J. B.
tomo i.
33 —
fundados
ESTUDIOS
enHISTÓRICOS
la Religión.
La Religion es la verdadera filosofía de
la historia. Moises nos da las primeras no
ticias sobre la creacion y sobre la cuna del
linage humano; al propio tiempo que nos
ofrece la única clave para descifrar el gran
de enigma del hombre y del Universo.
Quitad la historia de Moises, privad á la
humana filosofía de las luces que la sumi
nistra aquella narracion sublime, y volveis
á sumergiros en el caos de los antiguos; la
eternidad del mundo, la incertidumbre y
las extravagancias sobre nuestro origen y
destino, el fatalismo, todos los errores, to
das las dudas, que trabajaron las escuelas
filosóficas de la Grecia y Roma y de cuan
tos pueblos carecieron del faro de la reve
lacion, vuelven á presentarse sobre la tier
ra, y hacen retroceder la ciencia y la
sociedad larga cadena de siglos.
¿Quereis seguras, breves, universales
fórmulas para resolver los grandes proble
mas de la hisloria de la humanidad? Leed
la narracion del inspirado por Dios, escu
chad al hombre sublime á quien fué con
cedido hablar con Jehovah en la cumbre
de Sinai.
Hay en la vida del humano linage un
hecho tan doloroso como incontestable: la
lucha del bien con el mal, la frecuente
preponderancia de este sobre aquel, así en
lo moral como en lo físico ; los horrendos
crímenes que manchan las páginas de la
historia de la prole de Adan , los indecibles
padecimientos á que se halla condenada.
¿Cuál es el origen de tan triste fenómeno ?
¿Cómo es compatible con la existencia de
un Dios infinitamente sabio y bondadoso?
La antigüedad creyó dar una explicacion
satisfactoria admitiendo bajo diferentes for
mas dos principios: uno autor del bien,
otro del mal. El dualismo de .Manes era
quizás una adulteracion de las tradiciones
sobre la caida del primer ángel, pero indi
caba tambien un esfuerzo para explicar el
enigma que nos presenta el mundo. Moises
asienta otro principio mas sencillo: pecado
y pena, es decir justicia. Con esto todo se
explica, sin esto nada. Es un misterio, pe-
3
 — ai
ro dichoso misterio que nos aclara tantos sion quien recibe la muerte de mano age-
misterios; dichosa oscuridad de donde sa na , que quien se la da con la propia? El
len raudales de luz. Abramos la historía, ángel colocado á la puerta del Paraíso,
recorramos sus páginas, conducidos por blandiendo la espada de fuego para que no
esa guia, que en su bondad nos enviara el volvieran allí los culpables proscritos, es al
mismo cielo. par de un hecho histórico, un formidable
emblema de que la humanidad mientras
viva sobre la tierra, halla vedado el cami
no de una completa felicidad. «Y hechó á
Adan , y colocó delante del Paraiso de las
delicias un querubin con tajante flamígera
Dios dijo al hombre: comerás el pan espada para guardar el camino del árbol
con el sudor de tu rostro; esta maldicion de la vida. «Ejecitque Adam, et collocavit
ha caido sobre la humanidad entera. Se ante paradisum voluptatis Cherubim, et'
guidla en todos los períodos de su existen flammeum gladium adque versatilem, ad
cia, en su frente descubrireis sin cesar el custodiendam viam ligni vita?.» (Genes, c.
angustioso sudor con que anda en busca 3. v. 24.)
de la dicha ; porque la dicha es lo que bus Poco sabemos de la vida de nuestros pa
ca el hombre, tras de la dicha se afana la dres en los primeros dias de su destierro:
sociedad; supuesto que ni aquel ni esta vi solos, errantes en la inmensidad de la tier
ven de solo pan. En vez de frutos le pro ra, rodeados de bestias feroces, de réptiles
duce la tierra espinas y abrojos; no alcanza y de insectos, faltos de vestido, de techos
jamás el bien , sino despues de haber apu donde guarecerse, escasos de medios para
rado hasta las heces el cáliz del mal. La proveer á las primeras necesidades, debian
mentémonos nosotros de los infortunios de de pasar una vida penosa, amargada mas
nuestra época, alzamos hasta el cielo un y mas con el punzante recuerdo de su di
grito de dolor por las privaciones que nos cha perdida. Bien se concibe cuán fácil
vemos forzados á sufrir , los males que he mente penetraría en sus corazones el mas
mos de tolerar, y los costosos sacrificios vivo arrepentimiento, logrando que les
con que compramos un momento de felici perdonase el Señor aquella falta que espia
dad ó siquiera de reposo. ¿Y qué fué de ron con siglos de padecimientos y de lágri
las generaciones que precedieron? ¿disfru mas. ¡ Cuántas veces volverían los ojos há-
taron quizás de blando sosiego, nadaron cia la region donde pasaron en la primitiva
en la opulencia y en los placeres, y vivie inocencia , momentos de bienandanza inde
ron como hermanos en amable paz y ar cible ! ¡ Cuántas veces les señalarían á sus
monía? ¿el siglo de oro fue para ellas una hijos y les contarían las dulzuras de aque
realidad, y los hermosos sueños de los lla morada venturosa, cuya memoria se ha
poetas encontraron existente entre las mis trasmitido de generacion en generacion,
mas el objeto de sus cantos sublimes? como los recuerdos de un sueño dorado !
Nó, no es así: apenas criado el hombre, Los primeros hijos de Adan y Eva de
á pocos momentos de disfrutar de inefable que nos habla el sagrado texto, nos pre
dicha en el jardín de Eden , surge á su la sentan tristemente la continuacion de la
do el infortunio como una negra sombra escena que comenzó á la sombra del árbol
que oscurece y mancha un bellísimo cua de la ciencia del bien y del mal : el crimen
dro. La madre de los humanos contempla y la pena , el fratricidio y la maldicion es
ba su hechicera hermosura en los cristales tampada en la frente del fratricida , quien
de la fuente deliciosa que con tan delicado anda errante por el mundo en busca de
pincel nos retrata el ciego de Albion, y te una muerte que para su tormento no en
nia ya á su espalda el infame réptil, ace cuentra. La primera ciudad de cuyo origen
chando malignamente el instante oportuno tenemos noticia, es fundada por el impío
de sorprender el candor y la inocencia. asesino de su hermano, por el mismo Cain:
Nuestros padres labraron su infortunio y el triste auspicio de la vivienda del hombre
nuestro; su caida fue voluntaria, y la pér que levantaban las manos teñidas con san
dida de su dicha se debió al extravío de su gre inocente: manos temblorosas todavía,
voluntad; mas ¿será por esto menos la por haber oido la maldicion del cielo pro
mentable, será- por esto menos sensible? vocada por el clamor de venganza que esta
¿acaso no es igualmente digno de compa sangre daba desde la tierra: la voz de la
 — 35
i de tu hermano clama á mí desde la tier cundidad, se marchita su hermosura; y el
ra. Voz sanffuinis fratris tui clainat ad me de hombre que antes del horroroso cataclismo
terra. era un proscrito ilustre á quien se permite
Corren los tiempos, la ciega prole de gozar de algunas comodidades en clima
Adan olvida los tremendos castigos que ha templado y bajo un cielo sereno y apacible,
Íiodido oir de la boca de los mismos que es en adelante un desterrado sobre cuya
os sufrieron: toda la carne corrompe su frente pesa toda la execracion de su cri
camino. Dios resuelve borrar al hombre de men , y que relegado á hórridos paises ar
la faz de la tierra; y salvado el justo Noé rastra una vida de miseria y de dolor, cuyo
con su familia, ábrense las cataratas del único consuelo es la esperanza de la muerte.
cielo, inúndase toda la faz del globo, pere Siguiendo á grandes pasos la historia de
ce todo viviente excepto las parejas encer la humanidad, hallamos por do quiera la
radas en el arca, y el agua se levanta quince traza lamentable que nos recuerda la de
codos mas alta que las mas encumbradas generacion primitiva: en todo la maldad,
montañas. en todo el delito, en todo la pena, en todo
De dos grandes justos nos habla con sin la tremenda huella de la expiacion á que
gular recomendacion el sagrado texto en está condenada la descendencia de Adan,
lo perteneciente á la primera época del en todo el no alcanzar la verdad sino des-
mundo: Henoch y Noé: ¡cosa notable! I pues de tropezar en mil errores, de no ob
Noé fué salvado prodigiosamente en el ar tener el bien sino despues de haber sufrido
ca : Henoch no apareció porque se lo llevó Dios. el mal; en todo la ley inflexible de no lle
Admirables hechos históricos que simboli gar á la perfeccion ni á la mejora, sino á
zan la justicia y la inocencia, salvándose á costa de las mas crueles fatigas.
duras penas de la maldad y castigo de las ¿Buscais el origen de los grandes impe
generaciones abandonadas á sus caminos rios? ¿pretendeis saber el curso que ya
de perversidad. desde un principio tomaron las pasiones,
Inagotable caudal de reflexiones suminis con respecto al gobierno de la sociedad?
tran al filósofo cristiano los primeros capí la sagrada Escritura os lo indica en breves
tulos del Génesis; ellos, y solo ellos, ras palabras. El hombre rebelde á Dios se hace
gan el velo que cubre el mundo, ellos y esclavo; sacudió el suave yugo de la divina
solo ellos, nos esplican los secretos de ley , y se encuentra sometido al imperio de
nuestra existencia, y aclaran los incom la fuerza. ('Chus engendró á Nemrod;este
prensibles misterios de la historia del géne comenzó á ser poderoso en la tierra. » ¿Sa
ro humano. beis cuáles son sus títulos? « Y era robusto
cazador en presencia del Señor. Por esto
salió el proverbio: como Ncmrod robusto
II. cazador en presencia del Señor. =Y el
principio de su reino fue Babilonia y Arach,
aF>El mundo
. ti: antiguo comenzó con el parai y Achad y Chalanne en la tierra de Sen-
naar. » «Porro Chus genuit Nemrod : ipse
so, siguió con una maldicion y acabó con coepit esse potens in terra.=Et erat robus-
el diluvio ; el mundo nuevo comienza con tus venator coram Domino. =Fuit auteni
la maldicion de Cham, continúa con la pricipium regni ejus Babylon, et Arach,
torre de Babel, y sigue con una intermi et Achad, et Chalanne in terra Sennaar. »
nable serie de calamidades y desastres has (Genes, c. 10., v. 8, 9 et 10.)
ta el dia en que llegado el fin del humano Al lado de esta sublime sencillez, allado
linage rodará la tierra por la inmensidad de esta narracion en cuya verdad y exacti
de los cielos como un globo hecho ascua. tud se compendia la historia de los grandes
Fijando la consideracion en el colosal he imperios, de los grandes conquistadores,
cho del diluvio, clave de la explicacion de de las guerras, de las vicisitudes que afli
grandes fenómenos terrestres, y padron gen á la triste humanidad ; ¡ cuán pequeño
eterno de la cólera de un Dios Todopode se nos presenta Rousseau con su pacto so
roso, asómbrase el espíritu y se sobrecoge cial, con sus vanas utopias tan distantes de
de un religioso pavor. | Qué trastorno mas la realidad, como contrarias al curso natu
espantoso resulta de aquella catastrofe en ral de las cosas! El hombre necesita vivir
el hombre y en cuanto le rodea ! la vida en sociedad, la existencia de esta es incompa
se abrevia, la naturaleza pierde de su fe tible con un desorden incesante, y el orden
 36 —
no puede concebirse sin un poder público ses, refiriéndonos el insensato proyecto de
que lo afirme y conserve; esto dicen la ra la torre de Babel. Los tiempos históricos,
zon y el buen sentido; pero al propio tiem como los heroicos, como los fabulosos, nos
po, la perversidad del corazon, la ambi muestran al linage humano dividido en in
cion desenfrenada, las pasiones ruines, numerables tribus, de las que se verificaba
abusan de todo cuanto hay sobre la tierra; que el prójimo no entendía la voz del prójimo;
y por lo mismo al formarse las sociedades, el origen comun estaba poco menos que
la fuerza debió de ser un elemento pre borrado, y los hombres que debieran vivir
ponderante, la autoridad pública debió de como hermanos, se hallan unos en vista de
ser á menudo usurpada con violencia, y los otros cual extrangerosen tierra conquis
Nemrod que fué poderoso porque era robusto tada; en violentos encuentros se disputan
cazador, es el tipo de cien y cien otros mas la presa,
rabia y que
mutuamente
no lo hicieran
se destrozan
bestias con
fe ,
usurpadores que fundarían sus derechos en
la pujanza de su brazo. roces.
Hállanse los hijos de Noé en crecido nú
mero en las llanuras de la tierra de Sen-
naar, y temerosos de que las aguas de un III.
nuevo diluvio inundasen otra vez la tierra,
propónense edificar una ciudad y en ella
una torre cuya cumbre toque al cielo. Asi Separado de su casa y parentela el hom
abrigan el designio de ilustrar su nombre, bre escogido de Dios para fundar un nuevo
y asegurarle eterna duracion antes que se pueblo donde se conservasen en toda su
dividan para andar ocupando el resto de la pureza las tradiciones primitivas, marcha
tierra. ¡Vanos consejos! como si Dios cu errante por la tierra de Canaan, y en ella
yo brazo todo poderoso inundó el mundo encuentra el hambre; huyendo de esta ca
como inunda el labrador su pequeño cam lamidad llega peregrinando á Egipto; ¿sa
po, levantando un ligero dique, no bastase beis cuáles son las costumbres de aquel
a inundar la nueva ciudad , y á cubrir la pais? el adulterio y el crimen. Cercano á
gigantesca torre, como antes sepultara Egipto dirígese Abrahan á Sara su esposa
quince codos debajo de las aguas la cúspide y le dice, «muger, conozco que eres bella,
de las montanas mas elevadas. y que al verte los egipcios dirán, «es su
Antes eran los hijos de Noé un solo pue esposa», y me matarán, y á tí te reserva
blo, hablaban una misma lengua, eran de rán. Di pues, te lo ruego, que eres mi
un mismo labio , segun la bella expresion hermana, para que en consideracion á tí
de la sagrada Escritura; el orgullo los cie se porten bien conmigo, y por tu gracia
ga, buscan con afan una vana inmortalidad; conserve yo la vida. «Y habiendo entrado
desde entonces se confunde su idioma , y en Egipto , vieron los egipcios que la mu
el hermano no entiende la palabra del her ger era de extremada hermosura, y los
mano, y se ven forzados á abandonar la cortesanos lo anunciaron á Faraon, y la
edificacion de la ciudad, y avergonzados alabaron en presencia de él y la muger fue
se separan y marchan dispersándose por la llevada á su palacio. » Asi ya desde la cuna
faz de la tierra. del mundo cuando al parecer debian reinar
Los eruditos han buscado en los idiomas en todas partes la sencillez y la inocencia,
actuales la huella de un idioma primitivo: el justo se veia precisado á encomendar en
¿puede conjeturarse si este continuó en manos de la divina Providencia la honra
alguna de las fracciones en que se dividió de su esposa, esperando que el Señor que
la descendencia de Noé? ¿Sábese si los ac le habia sacado de la casa de su padre,
tuales presentan seguros indicios de haber castigaría á Faraon antes que su virtuosa
salido de un tronco , y de ser otros tantos consorte fuera víctima de la violencia y de
dialectos de una lengua matriz? no nos la destemplanza.
atreveremos á resolverlo: solo haremos no Hechos semejantes, que esparcidos acá
tar que de la misma suerte que se hallan y acullá encontramos en el sagrado texto,
en todos los puntos del globo infalibles se son preciosos rasgos que nos pintan el es
ñales de un gran trastorno en la naturale píritu de la época, que nos hacen asistir á
za, asi se encuentran claras pruebas de que las escenas de injusticia , de violencia , de
el linage humano experimentó una confu- obscenidad á que estaría entregado el mun-
sion , cuya historia nos ha conservado Moi- || do en aquellos siglos que nosotros con poca
 reflexion podríamos creer de oro. Con lo 37 ruega— á Loth que se separe de él en obse
que se echa de ver cuan infundado es todo quio de la paz: «no haya te ruego, le di
lo que se imagina y tal vez se cree, sobre ce , rencillas entre yo y tu , y entre mis
la inocencia de las edades primitivas; y pastores y los tuyos, pues somos herma
cuan exagerados son los males que se su nos ; mira , á tus ojos está la tierra toda,
ponen nacidos del adelanto de la sociedad. apártate de mí, te lo suplico; si fueres há
Donde quiera que encontramos al hombre, cia la izquierda , yo tomare la derecha ,
hallamos el mal á su lado; si es culto lo si tu escogieres la derecha , yo marchare
practica con astucia, si es bárbaro lo ejerce hácia la izquierda. »
con violencia; si no quereis sufrir el bri ¿Qué encontramos en este pasage? nada
llante velo ocultando la corrupcion, fuerza menos que la historia de los sucesos que
os será resignaros á contemplar las asque desde el principio del mundo estan deso
rosas formas de feroz brutalidad. Todo lo lando la humanidad. No cabían en la tierra:
que dista de nosotros en espacio ó tiempo, hé aquí señalada con admirable concision
nos complacemos en pintarlo con hermosos y exactitud la causa de infinitas invasiones,
colores, en revestirlo de una belleza que usurpaciones, revoluciones, guerras, tras
no existe en la realidad : esto puede con tornos y catástrofes ¿ Por qué los fenicios
Íioesía
donarsese alalimenta
poeta, denóencantadores
al filósofo; sueños,
que la y los cartagineses buscan con tanto afan
nuevos paises donde establecerse, donde
a filosofía solo se nutre con austera ver enviar sus colonias, valiéndose de la fuerza
dad. Séale pues permitido al vate el ima cuando alcanzar no podían su objeto por
ginarse que no habia otras costumbres que medio de la astucia? porque no cabian en
las retratadas en la escena de las familias la tierra. ¿Cómo es que Roma naciente
patriarcales, cuando un anciano cubierto comienza su política de invasion y usurpa
de venerables canas narraba tranquilamente cion , ensayando sobre los pueblos comar
á sus hijos y nietos las tradiciones antiguas, canos, lo que despues ejecuta sobre el
bajo el aura apacible del caer de la tarde á mundo entero? porque sus habitantes no
la sombra de una palmera; pero el filósofo caben en la tierra ; porque faltos de lo ne-
no debe contentarse con vanas ilusiones, j cesario se ven precisados á proporcionár
dado que en cada objeto ha de ver lodo lo selo, convirtiéndose en guerras formales lo
que hay, y nada mas de lo que hay.Triste ne que en un principio eran altercados y riñas
cesidad por cierto la de contemplar las co sobre la pertenencia de algun objeto útil ó
sas en su negra realidad; pero no oh ide necesario á la vida. ¿Cuál fue la verdadera
mos que el error es tambien negro en su causa de la irrupcion de los bárbaros del
fondo por mas brillante que sea el velo norte? Preguntadlo á esos innumerables
que le encubre: recordemos que la verdad guerreros que rodeados de sus mugeres é
por amarga y dolorosa no deja de ser salu hijos, se adelantan hácia el mediodía en
dable. Las escuelas mas' peligrosas, ¿que busca de clima mas apacible y de regiones
son sino un tejido de bellas mentiras? mas feraces; preguntádselo, y os dirán
que las selvas del norte no les suministran
k, que han menester para su sustento , que
IV. en su extraordinaria multiplicacion han
consumido y agotado cuanto habia en su
pais natal ; que la necesidad , la imperiosa
Salido de la tierra de Egipto Abrahan necesidad , los fuerza á usurpar para esta
con su muger, con sus riquezas, con su blecerse , á pelear para comer : no cabian
sobrino Loth , se dirige hácia el austro, en la tierra.
llegando hasta el lugar donde fijara antes Hasta en los tiempos modernos , cuando
su tienda entre Bethel y Hay. La vida pas se ha llevado al mas alto punto el arte de
toril que ambas traian parece debia poner encubrirlo todo con hermosos disfraces,
los á cubierto de toda mala inteligencia y ¿qué se encuentra en el fondo de las cues
discordia, sin embargo no fué asi: los re tiones mas graves'? Dejando aparte otros
baños no cabian en el mismo pais, la riva ejemplos , la Inglaterra revuelve el mundo
lidad comienza, losamos siguen en bue con su diplomacia y lleva la desolacion y la
na armonía ; pero los pastores riñen , y muerte á las regiones mas remotas ; ¿ que-
conservar la fraternidad reis impedírselo? ¿buscais un medio segu
entre hermanos cumple, ro para disminuir la actividad de sus nego
 - 38 —
ciaciones , y la impetuosidad de sus armas? najes y cultos solo debidos á la Divinidad.
abridle fáciles y anchurosos mercados ; de Ah ! La historia del humano linage es
sahogad sus almacenes de Manchester y una espantosa tragedia ; y en el placer an
Liverpool; ved que pueda alimentar tantos gustioso que experimentamos al asistir á
millones de hombres que perecen de mise esos espectáculos en que brota la sangre
ria ; cambiad su situacion material , dadle del corazon á vista de grandes infortunios,
pan. Los ingleses tampoco caben en la hay un profundo secreto que abre anchu
tierra. roso campo á las meditaciones de una filo
sofía grave y sublime. ¿Cómo es que bus
camos con tanto afan ese placer que nos
atormenta ? ¿ por qué nos cebamos en esa
curiosidad que nos hace verter amargas lá
grimas, que nos hace suspirar y gemir tan
Imposible parece que en tan poco tiem sentidamente en presencia de infortunios
po transcurrido desde la horrible catástrofe fingidos cual pudieran hacerlo los verdade
con que Dios castigara los crímenes de la ros? sabeis por qué? porque en aquellos
humanidad , las costumbres hubiesen lle contrastes en que el temor lucha con la es
gado al exceso de infame depravacion que peranza , la dicha con la desgracia, la vida
vemos en las ciudades de Pentápolis. Aque con la muerte , el corazon nos dice queestá
lla tierra tan deliciosa que regada por las retratada nuestra existencia; los individuos
ondas del Jordan semejante el Paraíso del como los pueblos sienten en el fondo de su
Señor fue sepultada en un mar hediondo alma una voz que les clama: «esta es vues
despues de haber llovido sobre ella torren tra vida , esta es la condicion de vuestro
tes de fuego. La narracion que de este paso sobre la tierra ; llorad sobre el infor
acontecimiento nos hace la Sagrada Escri tunio , que el infortunio es vuestro patri
tura , como y tambien de las circunstancias monio.»
que le precedieron y las causas que lo mo La historia entera no es mas que una se
tivaron , es otro precioso documento para rie de terribles contrastes ; y nó precisa
formarnos una idea del infeliz estado en mente refiriéndonos á las épocas de la cor
que volvió á sumirse el mundo, salido ape rupcion de sociedades caducas, sino trasla
nas de las aguas del diluvio vengador. dándonos á su infancia , á los tiempos de
En el propio pais antes de ser víctima inocencia y candor , y fijando únicamente
de la horrorosa catástrofe, hallamos ya la nuestros ojos sobre aquellos admirables
guerra con sus matanzas , sus depredacio cuadros, de virtud, de santidad , favorecida
nes, sus manadas de cautivos. Los reye por el cielo con inefables prodigios , y pro
zuelos de Sennaar , de Ponto, de los Ela- puesta por el mismo Dios como modelo en
mitas, de las gentes, deSodoma, de Go- que aprender debieran las generaciones fu
morra , de Adama , de Seboin , de Bala y turas. Hasta allí donde al parecer no de
de Segor, encontrándose en el valle silves biéramos encontrar nada que repugnara á
tre que despues se llamó mar de sal , con nuestros ojos, que entristeciera nuestro co
sus pequeños ejércitos , eran tristes precur razon , tropezamos de continuo con esos
sores de los poderosos monarcas que en los horribles contrastes donde se pinta con vi
tiempos venideros habian de inundar el veza y elocuencia la ley de espiacion y de
mundo de sangre y de lágrimas. castigo á que vive sometida la infortunada
Si desaparece la guerra de ciudad con prole de Adan. ¿Veis al santo Patriarca se
tra ciudad, de familia contra familia, de parado de la casa de sus padres y conduci
hombre contra hombre , esa anarquía que do en su peregrinacion por la misma mano
desuela las mas retiradas comarcas, si se del Señor para fundar un pueblo escogido
crea un poder público capaz de mantener donde se conservaran las antiguas tradicio
el orden de una gran sociedad , es á expen nes y se perpetuara la esperanza de un Re
sas de los tesoros, de la sangre, de la li dentor? ¿veisle tranquilo en su tienda fija
bertad de los gobernados que sirven para da en aquellos paises que ha de ocupar un
entronizar orgullosos tiranos , que no con dia su descendencia, numerosa como las
tentos con un mando sin límites, con un estrellas del cielo y las arenas de la mar?
fausto escandaloso, se proponen hacerse ado ¿veisle favorecido del cielo con milagrosas
rar como dioses haciendo que se les levan visiones y conversando con los angeles y
ten estatuas y se les tributen los home II consolado con inefables promesas? á su
 — 39 —
vista arden las abominables ciudades que él y la infame Idolatría. Penetrad favorecido
con sus fervientes oraciones no ha podido pueblo hasta la tierra prometida , pero an
salvar, la negra humareda sube en densas tes j cuánta sangre, cuánto exterminio,
cohmas oscureciendo la luz del sol. Emble cuántos horrores sobre los pueblos culpa
ma terrible de la justicia divina obrando bles arrojados de un pais contaminado con
sobre el mundo al mismo tiempo que la sus abominaciones y sus crímenes !
bondad y misericordia. Al lado de Sara La civilizacion fenicia toma el camino de
está Agar , al lado del pacífico Isaac está Occidente difundiéndose por la Grecia , la
Ismael que plantará un diasus tiendas con Italia , la España y el Africa , y solo se con
tra las tiendas de sus hermanos , su mano sigue este resultado á fuerza de calamida
estará contra todos y las manos de todos contra des sufridas por los pueblos civilizadores :
él. Al lado de Jacob bendecido por su pa despues de veinte siglos , aun existia un
dre está Esad rugiendo de cólera como una monumento para recordar que los cananeos
fiera herida por la Hecha del cazador ; en fugitivos de la espada de Josué llegaron
un sueño misterioso descubre la escala que hasta las estremidades del Africa. Es muy
estribando en la tierra llega hasta el cielo ; probable que los antiquísimos viages de los
pero notadlo bien , esta vision se le pre fenicios á las costas de España dimanaron
senta reposando del cansancio del camino del mismo motivo, ó fueron á consecuen
mientras huye de la tierra de sus padres cia de la estrechez en que se hallaban esos
para salvarse de la venganza de su herma pueblos acosados por el de Israel, y preci
no. ¿ Os enterneceis al leer la historia del sados á ocupar una estrechísima zona á las
inocente José? en ella encontrais la cruel orillas del mar de Joppe, de Tiro y de
envidia que le roba á su anciano padre , le Sidon.
vende á los Ismaelitas y le envia á servir á Las letras importadas á Grecia por Cad-
tierras extrañas. La santidad del inocente mo procedente del mismo origen , recono
mancebo resplandece en oposicion con los cen quizás por causa de su peregrinacion
impúdicos deseos de una muger adúltera , las mismas catástrofes; los hombres arma
y su prodigiosa elevacion al lado del rey de dos que nos presenta la fábula nacidos de
Egipto comienza en las tinieblas de una cár los dientes sembrados por el fundador de
cel. Principia la historia del gran pueblo ; la colonia y degollándose unos á otros, son
la primera escena es la esclavitud , la opre un indicio de que los nuevos conquistado
sion mas terrible, el infanticidio. Moises ha res llegaran al pais acosados de infortunio
de presenciar en el desierto la misteriosa y sedientes de venganza.
zarza que arde y no se consume ; antes de Dejando aparte las narraciones de la Bi
apacentar las ovejas de Jetro en los campos blia , y las demas en que se ha mezclado
de Madian huye proscrito de Egipto, aban el espíritu de la fábula , si pasamos á tiem
dona el palacio de Faraon despues de ha pos mas cercanos que abren por decirlo así
ber dado muerte á un egipcio desapiadado las páginas de la historia profana , hallare
que maltrataba áun israelita. El pueblo sa mos consignado en todas ellas el mismo fe
le de la esclavitud ; pero su libertad es com nómeno que acabamos de indicar. Esta
prada á duro precio; la obstinacion de Fa época se inaugura con una inmensa calami
raon atrae sobre el infortunado Egipto la dad : el incendio de Troya. De manera que
divina venganza y hace que se derrame so los beneficios acarreados á la civilizacion
bre aquel pueblo como raudales de llama , por la comunicacion de los pueblos asiáti
la formidable copa de la indignacion del cos y europeos , los adelantos de la nave
Omnipotente. Pasa el pueblo de Israel el gacion fomentados por la necesidad del
mar rojo, y mientras las doncellas celebran transporte de numerosas expediciones ma
con cánticos y danzas los beneficios del rítimas , la perfeccion de las ciencias y de
Señor, las aguas del Eritreo estan cubier las artes , efecto natural de aquel gran mo
tas de carrozas , de caballos y de hombres vimiento comunicado á cien pueblos por
que luchan con una muerte que no podrán aquella especie de cruzada , el desarrollo de
evitar. La peregrinacion pór el desierto es la nacionalidad griega que debió de resul
una serie de favores y de castigos ; el maná tar de una guerra en que los reyes y los
y las serpientes venenosas ; las tablas de la pueblos del pais militaron en encarnizada y
ley y el degüello ejecutado por Moises ; los prolongadísima lucha bajo una misma ban
truenos y el fuego de la cumbre de Sinai , dera; todos estos beneficios, repetimos, se
la aparicion deJehovah y el becerro de oro compraron con torrentes de sangre, con la
 — 40
ruina de infinitas familias , con el destrozo razon, y la razon y la voluntad á Dios.
é incendio de una ciudad ilustre. Los bellos Quebrantóse el primer eslabon de esa ca
y sublimes cantos de Homero inspirados dena de oro, el hombre se rebeló contra
por aquellas horribles escenas no pueden Dios y las pasiones se levantaron contra la
pasar á nuestros ojos sin retratarnos á un razon , y el mundo entero se alzó y se puso
monarca anciano que besa las manos salpica- en combate con el hombre. Faltó la ley de
cadas con la sangre de su hijo. Singularidad armonía y la sucedió la ley de lucha; ley
notable, que la primera y quizás la mas que se presenta bajo mil formas diferentes
grande produccion del genio, reciba su segun lo son los objetos sobre que versa;
inspiracion de las pavesas de una inmensa ley de que no se exime ningun período de
ciudad, de la sangre de millares de va la vida ; á que está sujeta la infancia como
lientes. la adolescencia, la juventud como la vejez;
Fúndase en las costas de Africa una flo ley indeclinable al fuerte como al débil, al
reciente colonia que extiende sus conquis rico como al pobre, al magnate como al pe
tas al Norte, al Oriente y al Occidente, queño, al sabio como al ignorante, al mo
que envia sus velas comerciantes á las ex narca mas poderoso como al mas ínfimo de
pediciones mas atrevidas, que cuenta en sus vasallos.
tre sus hijos , audaces viageros precursores Échase de ver por ahí la profunda sabi
de la osadía de Colon y Magallanes , que duría y la verdad , entrañadas por el cris
disputa durante largos años el imperio del tianismo , por esa religion divina que en las
mundo á la orgullosa Roma, que al desa primeras palabras que dice al hombre le
parecer del número de las naciones nos intima la existencia de esta ley ; que la vi
ofrece á un Aníbal vencedor en Cannas, en da del hombre es una milicia sobre la tier
Transimeno, y asentando sus reales á la ra , que le predica incesantemente la vani
vista de Roma que tiembla al pronunciar dad de sus esfuerzos , para sustraerse á las
el nombre del invicto héroe : ¿sabeis áqué terribles consecuencias de la maldicion del
debe el origen esa fundacion gloriosa, Car- Criador ; que endereza todos sus trabajos á
tago
belo
panto, áque
desangrientas
los
porconquistadores
espacio
discordias
de siglos
del defue
orbe?
familia,
el Dé-
es- Jn restablecer por medio de la gracia la armo
nía perdida por la culpa ; que en la abne
gacion cristiana , en la sujecion de las pa
débelo á la sangre alevosamente derrama siones á una voluntad ilustrada por la razón
da por el puñal fratricida. y por la fe , y dirigida y movida por la gra
Asi vemos que ya en los mas remotos cia , en la sumision del entendimiento á la
tiempos la civilizacion y la cultura no se revelacion divina, en la conformidad de la
extienden , no se propagan sino á fuerza de voluntad humana á la voluntad de Dios ,
sangre, á fuerza de calamidades que hacen en ese admirable conjunto que nos presen
llorar torrentes de lágrimas á la triste hu ta realizado en sus grandes santos , mues
manidad ; asi vemos cuán terriblemente se tra el sublime tipo de lo que el hombre
cumple con todo el linage humano lo mis debe ser, de lo que fuera un dia antes que
mo que en el individuo se verifica , de co entrase el pecado en el mundo , y por el
mer el pan con el sudor de su rostro , de pecado la muerte. Tipo sublime, repeti
cultivar una tierra que en vez de frutos le mos, que nos trae á la memoria lo que
da abrojos y espinas, de no alcanzar mejo fuimos en Eden , pero con las señales de la
ra
costa
y perfeccion
de los mayores
en ningun
sufrimentos
género, desinolosá | tremenda espiacion , con la sangre que bro
ta de los golpes descargados por la cólera
trabajos mas arduos y constantes, de no divina : todo conforme al segundo Adan ,
disfrutar él propio de los bienes que pro al Hijo del hombre que cargado con nues
duce, sino de legarlos á sus hijos si se li tros pecados, y conducido á morir por la
mita á la esfera doméstica , ó de transmi salud de los hombres , se dirigió cual man
tirlos á las generaciones venideras si 6us so cordero á la cima del Gólgota á consu
tareas trascienden á los intereses públicos. mar la mas terrible de las expiaciones.
Terrible consecuencia del desorden in J. B.
troducido en el individuo y la sociedad por
la prevaricacion primera ; formidable resul
tado de la pérdida de aquella inefable ar
monía en que el inundo estaba sujeto al
hombre , las pasiones á la voluntad y á la
 — il
POLEMICA RELIGIOSA.
Disputas religiosas... con esta palabra pro
nunciada con énfasis, y con cierto aire de
indiferencia ó desprecio , se eluden á me
nudo gravísimas cuestiones, y se pasa por
encima de las materias mas dignas de ve
neracion y acatamiento; Disputas religio
sas— con esta expresion se desdeñan cier
tos hombres de atender siquiera á puntos
de la mas alta trascendencia , y relegan á
las escuelas delos teólogos, lo que hay demas
elevado é importante en la tierra y en el
cielo; Disputas religiosas... con esta fórmula
se pertrechan los que atormentados por los
remordimientos de su conciencia , se sien
ten llamados á examinar lo que ellos no
quisieran ni aun recordar; Dispulas religio
sas... con esta solucion tan sencilla, y so
bre todo tan cómoda , responden los ene
migos de la religion á los argumentos con
que los estrechan los hombres amantes de
la verdad , cual si fueran vanas sutilezas
las razones mas concluyentes ; Disputas re
ligiosas... con este maligno tema procuran
los incrédulos presentar como de poco va
ler todo lo que han dicho en pro de la re
ligion sus mas ilustres apologistas, é indi
car á los pueblos que nada les interesa
cuanto en este sentido se exponga; Disputas
religiosas... con esta frase cubren sus in
tenciones los gobiernos impios que procu
ran desvirtuar ó destruir la religion , y
desean persuadir á sus gobernados que las
intrusiones mas sacrilegas no son mas que
el ejercicio de una prerogativa del poder
para mezclarse en una cuestion de dogma ,
ni mas ni menos que si se tratase de resta
blecer el órden en una escuela de sofistas
que altercan sin entenderse ; Disputas reli
giosas... con este velo encubren su escepti
cismo ó impiedad aquellos falsos hombres
de estado , aquellos filósofos superiores que
desde su elevada cátedra fallan con tono
magistral y decisivo , sobre las creencias de
los pueblos como sobre juguetes de niños ;
que someten á su juicio todas las religio
nes , sin exceptuar ninguna ; es decir que
llaman á Dios á su tribunal , condenándole
ó absolviendole , trazándole el camino que
ha de seguir y los peligros que debe evitar,
señalando límites á la sabiduría infinita , y
cercenando el poder á la Omnipotencia.
No negamos que el hombre pueda caer
en abusos en las disputas religiosas como le
acontece en otras materias ; pero no pode
mos consentir que el abuso destierre el uso,
y que se gradúe como de poca importancia
lo que la tiene inmensa. En efecto; ¿de
qué se trata en las discusiones religiosas ?
¿El objeto de la controversia es acaso de
poca entidad , ó de pequeño interes para
los mortales? Entrad en estelinage de cues
tiones , acercaos siquiera al linde del pa
lenque donde se agitan , y lo primero que
se os ofrece es la existencia de Dios, la
creacion del hombre , su origen y destino ,
su felicidad ó desdicha , su inmortalidad ó
su nada. Quien sostenga pues que las dis
cusiones religiosas carecen de importancia,
que no merecen la pena que de ellas nos
ocupemos , sostiene tambien que nada im
porta saber, si Dios existe ó nó , si el mun
do es creado por un ser inteligente é infini
to ó si es efecto de la casualidad, si el
hombre tiene una alma espiritual ó si sus
pensamientos y voluntades son un simple
resultado de la organizacion , si hemos de
existir para siempre en otra vida ó si he
mos de hundirnos en la nada. Por cierto
que Dios, el hombre, la eternidad, son
cosas de que no podemos desentendernos
sin rayar en la demencia , sin negarnos á
nosotros mismos, sin abdicar nuestra incli
nacion vehemente, irresistible, que nos
fuerza á vivir ansiosos de nuestra propia
suerte, que nos impele á investigar lo
que somos, de dónde salimos, y á dónde
vamos.
Si álguien hubiese con el privilegio de
no morir, con entera seguridad de pasar en
la presente vida una existencia sin fin , en
este seria menos irracional el descuidar
completamente la averiguacion de estas
verdades , el contentarse con lo que es y
con lo que tiene, sin pensar en el ser de
quien lo ha recibido; pero nadie puede li
sonjearse de semejante seguridad ; hay al
contrariola certeza de un término cercano,
el sueño mas ligero no pasa mas presto que
nuestra existencia sobre la tierra. Sea cual
fuere el plazo mas ó menos dilatado que se
nos ha concedido, es indudable que dentro
un número muy reducido de años , no vi-
virémos aqui ; para nosotros estarán ya re
 — 12
sueltos prácticamente los formidables pro mentando con esperanzas de larga vida ,
blemas de nuestro destino : ó la nada , ó el apartamos la consideracion del riesgo que
fallo de un supremo Juez. Verdad tan pa corremos y procuramos distraernos con
vorosa, como cierta, como indeclinable: vanas ilusiones ; pero cuando una muerte
en vano nos esforzamos en olvidarla, en inminente nos avisa de la proximidad de
vano nos sustraemos á su memoria , en va nuestro fin , cuando nos hallamos al borde
no intentamos atenuar con fútiles reflexio del abismo á que hemos caminado desde el
nes todo lo que encierra de terrible, de principio de nuestra existencia , abocados á
espantoso : no hay medio , ó la nada ó el esa profunda sima que nos ha de tragar,
fallo de un supremo Juez. Cavílese cuanto entonces se presenta á nuestra vista con
se quiera; imagínense subterfugios, la ver toda claridad , con viva lucidez lo insensato
dad está ahí; no hay camino para eludirla; de nuestra negligencia; y mientras el frio
supuesto que existimos , nos es forzoso so sudor baña la frente del moribundo, le late
meternos á esta necesidad. Vendrá el dia sobresaltado el corazon con el horrible azar
en que nuestro cuerpo se disolverá, vendrá á que se abandona con ceguedad inconce
un momento en que se dirá , ga expiró , y bible , con el horrible azar aiyos resultados
entonces, en aquel instante mismo, se rea habrá experimentado dentro breves ins
lizará para nosotros uno de los extremos de tantes.
la formidable alternativa. Entonces si su El indiferentismo aplicado á la conducta
ponemos el imposible de ser reducido á la es insensato, pero erigido en sistema es
nada este ser que piensa , quiere y siente , absurdo ; porque si es el colmo de la in
si suponemos que no siendo mas que el re sensatez el marchar con los ojos vendados
sultado de la organizacion material , deje hácia un porvenir que no se conoce, es el
de existir tan pronto como la muerte lleve mayor de los absurdos el sustentar que se
á la materia la descomposicion , ya ni sen mejante proceder sea razonable. Y por ra-
tirá, ni querrá, ni pensará: un sueño pro zouable lo defienden cuantos se empeñan
fundo en que yacemos en la mas completa en persuadir que el hombre no debe curar
insensibilidad, puede apenas suministrar se de la religion , ni investigar si hay algu
nos una idea, de aquel no ser, de aquella na verdadera , ni cual esta sea ; sino pres
nada á que estaremos reducidos. Pero si al cindir de todas , ó acomodarse á la del
contrario existe un Dios premiador de la propio pais como cumpliendo con vana
virtud y castigador de la maldad , si nues ceremonia, y solo para no desagradar á
tra alma sobrevive al cuerpo y está desti aquellos con quienes se vive. ¡ La religion
nada á ser inmortal , entonces en aquel reducida á una mera formalidad de buena
mismo instante en que los allegados con crianza I es á cuanto puede llegar el extra
templarán afligidos nuestros restos , se ha vío de la razon.
brá presentado á nuestros ojos , en toda su Los pueblos , mas cuerdos que esa clase
desnudez , en todo su horror la tremenda de degenerados filósosos , han mirado las
verdad. A pocos pasos de nuestro lecho de cosas de otra manera : siempre y en todos
muerte estará ese hombre á quien no he los paises del orbe ha sido considerada la
mos querido escuchar , esos libros que he religion como el negocio de mas alta im
mos dejado de consultar; estos y aquel portancia ; y asi lo han manifestado no solo
hubieran disipado nuestras dudas, ó nos cuando han seguido el camino de la ver
habrían auxiliado para alcanzar aquella luz dad , sino tambien cuando se han perdido
que no falta jamas á los que la buscan con por los senderos del error. Las aberracio
voluntad sincera y decidida. Espanto causa nes de la supersticion , los excesos y los
el fijar la consideracion sobre aquel formi crímenes
gen. El sentimiento
del fanatismoreligioso
reconocen
extraviado,
este orí-
dable trance ; los cabellos se erizan , la san
gre se hiela en el corazon. exaltando peligrosamente la imaginacion
¿ Y no es esto lo que acontece á muchos del hombre , le ha cdnducido repetidas ve
indiferentes al mirar cercano el momento ces á las mayores atrocidades, ora vertien
fatal'? ¿no desfallecen la mayor parte de do inhumanamente la sangre en los campos
ellos , si es que la enfermedad no embarga de batalla, ora sacrificando sin piedad ásus
ó embota notablemente sus facultades men hermanos en horribles venganzas , ora in
tales? Mientras el peligro es remoto ó nos molando sobre los altares de los dioses al
lo parece , mientras el vigor de las fuerzas hombre mismo. Se ha dicho que no hay
ó la lozauía de la juventud nos estan ali guerras mas terribles que las de religion ;
 — 13 —
y es cierto que se distinguen de todas las tranquila, sin curarse de lo que pasa ó
demas por la impetuosidad con que se em pasar pueda allá en el otro mundo , y solo
prenden , la tenacidad con que se conti atenta á proporcionarse bienestar en el pre
núan , y lo horrible de las escenas que en sente , con el aumento de la riqueza mate
ellas se presencian. ¿Sabeis cuál es la cau rial y con el progreso de aquellas artes que
sa? Es que en mediando los intereses reli sirven á la comodidad y á los placeres. El
giosos siéntese el hombre impulsado por lo sucesivo desarrollo de la civilizacion y cul
mas fuerte y vivo que obrar puede sobre el tura ha arrumbado todo lo perteneciente á
corazon : la fortuna , la vida de sus seme la religion , como el hombre en la edad vi
jantes y hasta la propia, son nada á sus ril olvida los juegos de la infancia y los ar
ojos , desde que se trata de lo mas grande rebatos de la mocedad. » No negaremos
y augusto que haya en la tierra y en el que en Europa ha cundido el indiferentis
cielo. Los intereses terrenos son cosa des mo de una manera lastimosa; y cuando re
preciable en comparacion delos celestiales, petidas veces nos hemos lamentado de este
la materia desaparece en presencia del es hecho desconsolador, no procuraremos ate
píritu , la críatura delante del Criador , lo nuarle ahora , solo porque nos sale al paso
fmito delante de lo infmito , el tiempo en como una dificultad contra lo que estamos
vista de la eternidad. ¿Qué importan todas probando. Observaremos no obstante , que
las declamaciones contra un hecho induda hay una notable exageracion en lo que se
ble , universal , indestructible ? ¿ De qué afirma de la poca importancia que disfru
sirve el desahogarse en violentas invectivas tan en Europa las cuestiones religiosas , y
contra las preocupaciones, contra la ce que se equivocan las dimensiones del he
guera , contra la supersticion y el fanatis cho porque se le contempla bajo un punto
mo? ¿Qué signilica un cargo que se dirige de vista enteramente falso. Cuando se trata
contra la humanidad entera? Significa que de apreciar debidamente esta clase de he
se desconoce la verdad , porque la verdad chos que se refieren al entendimiento y
se desconoce cuando se protesta inútilmen voluntad del hombre , es necesario no per
te contra la naturaleza de las cosas; la ver der de vista el espíritu de la época , pues
dad se desconoce, cuando se lucha con pa segun este sea, la expresion de aquellos
labras contra hechos, cuando se quiere será muy diferente ; y por tanto se incurri
remediar con huecas peroratas lo que nace rá en gravísimas equivocaciones, atenién
del íntimo de nuestro corazon. Incúlquese dose á señales que si en un tiempo dado
en hora buena al humano linage la frater pudieran ser infalibles , en otro nada signi
nidad universal , predíquese á los hombres fican. Es cierto que quien estime la impor
la necesidad de recíproca indulgencia, in- tancia de la religion en nuestro siglo por
sístase sobre la conveniencia de sustituir la las guerras que ó por motivo ó bajo pretexto
conviccion y persuasion á las violencias, de ella se suscitan , encontrará que la reli
evitando de este modo la efusion de sangre, gion casi ha desaparecido de entre las na
y los sufrimientos inseparables del empleo ciones europeas ; pero si se advierte que la
de la fuerza ; pero reconózcase el origen de Europa en todos los negocios, por mas
donde dimana el mismo exceso , no se ol graves que sean , va apartándose cada dia
vide que la religion es una necesidad para mas del empleo de los medios violentos,
el hombre, procúrese satisfacerla propor si se observa que la discusion de la prensa
ciónandole la verdad y la virtud , para que ha sustituido á las vias de hecho , y las ne
en sus extravíos y frenesí no intente satis gociaciones diplomáticas á las guerras de
facerla
Nuestros
él propio
adversarios
con el distinguirán sin du nacion á nacion , se echará de ver desde
error y el crimen.
luego, que la sangre derramada por moti
da dos estados muy diferentes: el de la in vos ó pretextos religiosos, es malísimo ba
fancia de las sociedades y el de su edad rómetro para apreciar cual conviene la im
viril , de atraso y de civilizacion ; refiriendo portancia que disfruta la religion; y que si
al primero la importancia de las cuestiones á él debiéramos atenernos , seria menester
religiosas, y señalando como propia del se inferir que ni la industria , ni el comercio,
gundo la indiferencia por las mismas. «Ved ni el honor de las naciones, ni la libertad
esa Europa , nos dirán , ved esa Europa , de los pueblos, tienen tampoco importan
donde por espacio de largos siglos se ha cia en Europa , pues que nada de cuanto á
vertido á torrentes la sangre en guerras re estos objetos se refiere vemos que se re
ligiosas, vedla en la actualidad sosegada y suelva por medio de las armas.
 — 11 —
Fn la actualidad para apreciar debida pueden dedicarse con la seguridad ó la es
mente la importancia de un objeto á los peranza de interesar á un crecido número
ojos de la opinion pública, es necesario de lectores. Nada de esto sucede con res
atender al lugar que se le concede en las pecto á la religion : no solo disputan entre
discusiones de la prensa. Prescindiendo de sí los que la profesan diferente , sino que
circunstancias excepcionales en que los in los que no creen en ninguna , se ocupan
tereses de un partido , de una faccion , de aun con notable ahinco en combatir los ci
un reducido número de personas, dan á mientos de todas , y particularmente de la
ciertas cuestiones una importancia facticia cristiana. En Alemania y en Francia se
que en sí mismas estan lejos de merecer, presenta á la vista este doloroso fenómeno;
es la prensa un barómetro bastante seguro si bien es verdad que la escuela de Voltaire
para formarse idea aproximada del lugar propiamente dicha ha caido en gran des
que en el mundo ocupa , un objeto cual crédito , no faltan hombres que continúan
quiera ; especialmente si tratamos de obras á su manera la obra de impiedad , con mé
serias en cuya composicion y publicacion todos quizás menos repugnantes , pero por
influyen, menos que en las demas, las causas lo mismo tal vez mas peligrosos.
y circunstancias de momento. Asi la exten Queda pues asentado que las guerras re
ros
sionlogre
que este
en las
ó aquel
publicaciones
objeto, será,
de varios
por decirlo
gene- ligiosas subsisten todavía en nuestro siglo,
bien que con el carácter que les imprime
asi , la medida de la atencion que el públi el sello de la época; antes se peleaba, aho
co le dispensa. Si ateniéndonos á esta regla ra se discute.
tan sencilla como fundada en la misma na Hasta los mismos gobiernos en la apa
turaleza de las cosas, y en el espíritu del riencia tan tocados del indiferentismo, no
presente siglo , nos proponemos juzgar del viven tan olvidados de esta clase de, nego
ascendiente que sobre los ánimos ejercen cios como algunos podrían creer. Échese
las ideas religiosas , ballaremos que el in una ojeada por toda la Europa , y se verá
diferentismo por grande que sea , no lo es con toda evidencia la exactitud de esta ob
tanto sin embargo, como algunos indife servacion. En Inglaterra, nadie ignora el
rentes intentarían hacernos creer. Son in lugar preferente que ocupan los asuntos
numerables las obras que se dan a luz so religiosos , aun cuando no sea por otra
bre materias religiosas ; y si incluimos en causa que por la relacion que los une con
este catálogo las publicaciones periódicas, las grandes cuestiones pendientes entre el
será difícil que se nos señale otro asunto gobierno de la Gran Bretaña y la desgra
social, político, administrativo, industrial, ciada Irlanda. Pero no se crea que este sea
científico ni literario, eme ocupe por sí solo el único motivo que en Inglaterra da á las
igual número de páginas al que está reser cuestiones religiosas elevada importancia;
vado á los asuntos religiosos. el gobierno piensa en ellas porque el pue
Y es necesario advertir, que esta consi blo no las ha olvidado ; porque la nacion
deracion adquiere mayor peso si se obser inglesa adolece mas bien de una anarquía
va, que en el catálogo de las obras que de creencias , necesario efecto del protes
prueban la importancia que todavía disfru tantismo , que de una verdadera incredu
ta la religion , deben contarse no solo las lidad.
apologías sino tambien las impugnaciones. En Francia , la famosa cuestion sobre la
Esto que á primera vista parecería quizás libertad de la enseñanza , por mas que en
una paradoja , es sin embargo una verdad la superficie pudiera parecer
incontestable.
ataques
atencion,
es mas evidente
que
que contra
seCuanto
leque
supone
uneste
mas
objeto
vigor
llama
vivos
se
y mucho
fuerza,
dirigen,
son los
lay II religiosa
cisamente: yla
científica loadministrativa
mavor
que allíó semenor
mayor , es extension
extensio
en el de

las prerogativas del gobierno y de los

que se conoce mas la necesidad de abatirle y
destruirle. Loque es débil no vale la pena
de ser atacado, solo le corresponde el des
precio; lo que tiene en sí escasa entidad, no
se le dispensan los honores de una impug
nacion detenida y trabajosa; porque los es
píritus hallan otras materias en que espla
yarse con mas provecho y gloria , y á que
cuerpos científicos que de él dependen ; lo
que se agita es, si el clero ha de apoderar
se ó nó de la principal parte de la enseñan
za, si se han de multiplicaró nó en crecido
número los establecimientos donde predo
minen las creencias religiosas; es decir,
que la contienda está trabada entre los dis-
|| cípulos de Voltaire mas ó menos disfraza-
 — 45 —
dos que se empeñan en conservar sus usur que despues de la muerte pudiera aconte
paciones , y los verdaderos católicos que cernos; no hay valor cuando no hay ad
han acometido la generosa empresa de ar versario que vencer, sino una calamidad
rebatárselas , sacudiendo una esclavitud eterna que sufrir; no hay valor, cuando la
que en este punto se les fuerza á sufrir ba presencia y serenidad de espíritu se em
jo el mentido nombre de libertad. plean locamente contra un Dios todopode
Son recientes los ruidosos negocios que roso , cuya voz fecunda la nada , y hace
manifiesta la importancia que á ía religion estremecer las colunas del firmamento. El
conceden los gobiernos de Alemania. De valor , la fortaleza , el desprendimiento , la
jando aparte los católicos como y tambien abnegacion de sí mismo, son voces sin
los protestantes de escaso poder , nadie ha sentido cuando carecen de objeto , de espe
debido de olvidar el asunto del arzobispo ranza , cuando no reciben impulso ni sos
de Colonia. El sistema de conducta del go ten de ninguno de los resortes que dan
bierno prusiano con respecto á los católicos movimiento al corazon del hombre. Eter
es la mejor prueba de (pie se temen los nidad !... qué idea mas espantosa ! Eterni
progresos de esta religion , y que no se dad desgraciada I y sin gloria , sin fruto,
alarman menos fácilmente los ministros re sin esperanza ! ¡ Cómo quereis que el hom
formados de Berlín que los miembros de bre no palidezca con su solo recuerdo !
las iglesias establecidas de Londres y de I cómo quereis que aparte de ella sus ojos
Edimburgo. azorados, que duerma tranquilo sobre el
Por lo tocante al gobierno ruso, bien borde de un abismo , á cuyo fondo va en
sabido es que es tanto el empeño con que breve á rodar I Apagad la luz de su razon,
prosigue su obra impía de descatolizar á privadle de su amor propio , sufocad hasta
los subditos del grande imperio , apartán sus pasiones é instintos , es decir , destruid
dolos de la obediencia del Sumo Pontífice su naturaleza ; entonces y solo entonces le
y privándolos en cuanto le es posible de será posible conformarse con vuestra in
toda la comunicacion con la cátedra de san sensata indiferencia.—J. B.
Pedro , que hasta ha llegado al extremo de
arrojarse á medios muy impropios del es
píritu del siglo , desplegando un lujo y re
finamiento de persecucion religiosa que
recuerda aquellos desgraciados tiempos en
que el Señor se propusiera purificar su
Iglesia como el oro en el crisol.
Inferiremos de esto, que el indiferen
tismo por grande que sea y por mas exten Albion ! Albion ; de la torva frente som
dido que se halle , no ha logrado sin em breada con eterna bruma ! inhospitalarias
bargo que se olvide la religion , y que la fueron un dia tus ateridas costas ; arriban
tienen todavía muy presente los ignorantes do á ellas temblaba medroso el navegante
y los sabios, los pueblos y los gobiernos. arrebatado por brava tempestad. Hoy, se
Nos interesa demasiado de cerca para que ñora de los mares, temida de las naciones,
nos sea dable desterrarla de nuestra memo extiendes tu renombre y tu pujanza de
ria ; afecta sobrado nuestro estado presente Oriente á Occidente, de Aquilon al Sud.
y sobre todo nuestro porvenir, para que Mil y mil velas en tus puertos reposan,
alcancen su perverso intento los que se mil y mil despides á lejanas regiones , mil
empeñan en extirparla del corazon del in y mil te llegan conduciendo las riquezas de
dividuo , y en borrarla de las institucio nuevos mundos , los tesoros de cien pue
nes de la sociedad. En vano se despierta y blos que orgullosa dominas. Jamás pujanza
avisa el egoismo; ese egoismo piensa tam se igualara á tu pujanza , jamás altivez á
bien á menudo en lo que será mañana de ese tu altivez. Tiro, cuyas riquezas asombrada
idolo que adora , de ese yo á quien todo lo narra la docta antigüedad ; Cartago , la ri
sacrifica; ese egoismo conoce tambien la val de la soberbia Roma, la patria de Aní
insensatez de estrellarse contra hechos in bal, nada fueran en presencia de tí. Nunca
destructibles, de arriesgarse á ciegas á un sus naves llegaron á tus naves , nunca sus
azar que una vez resuelto no será posible obras á tus obras, nunca su imperio á tu
volver atrás. En vano se habla de valor, y imperio.
' pusilanimidad el temor de lo Babilonia , la ciudad de los jardines
 — 46
pendidos, de las inmensas murallas, de los dijera que su patria en tres siglos trasfor-
diques con cien puertas de bronce , com marse habia en humilde colonia del poder
parable apenas fuera con la populosa ciu britano ! | quién le dijera que en medio de
dad sentada á las márgenes del Támesis. tanto abatimiento, se apellidaría libertad,
Magestuoso templo , de la Roma cristiana y con desden se condenaran la ignorancia y
recuerda los prodigios con su magnífica fa fanatismo de aquella generacion gloriosa !
chada, sus altísimas torres, su soberbia Si en las márgenes del Sena tus exigen
cúpula. ¡ Oh dolor ! el cisma lo profana; cias triunfan , si tus amenazas amedrentan
con el nombre del Apóstol de las gentes en á la política modesta ( 1 ) de los hombres que
vano se intitula ; que el apóstol de verdad la gloria mancillan de Luis XIV y de Na
homenages del error no acepta. Westmins- poleon , si en Oriente tu pabellon prevalece
ter , de caprichosas laberes con indecible sobre el pabellon de San Luis, si cada dia
trabajo enriquecida , con sus atrevidas pi mas y mas eclipsas los recuerdos de Godo-
rámides, su viejo semblante, sus innume fredo y del Vencedor de las pirámides , no
rables capillas, sus antiquísimos sepulcros, es tuya la culpa ; pujanza y gloria buscan
recuerda al viagero lo que fuiste un dia, las naciones todas , pujanza y gloría buscas
cuando de Patricio y Agustín conservaras tu. No es tuya la culpa, si entronizada so
"/ intacta y pura la augusta enseñanza. ¿Quién bre las ruinas de las creencias de un gran
con asombro y estupor no contemplara la pueblo, bastarda filosofía no acierta á darle
línea de magníficos puentes que enlazan los actividad sin frenesí, ni sosiego sin mengua.
dos costados de la inmensa ciudad? ¿quién De Isabel de Castilla la gloriosa enseña, el
la cordillerra de palacios, de soberbios pabellon que triunfante paseára por mundos
monumentos que atestiguan el poder de desconocidos ; hallando el primero nuevos
un gran pueblo? ¿quién sus grandiosos rumbos para medir la redondez del globo,
parques, sus doks y sus inmensos astille que venciera en Pavía , en San Quintín , y
ros ? ¿ quién las velas sin número (pie cu en Lepanto , ¡ oh dolor ! tampoco en tu
bren las aguas del rio lleno un dia de in presencia desplegarse osa con ufana gallar
cultos cañaverales, ahora sulcado por día; tambien en tu presencia se humilla en
humeantes caños que cual flechas vertica las mismas costas de donde salieron un dia
les recorren el caudaloso cauce? ¿quién soberbias flotas para conquistar un mundo.
sin asombro atraviesa la prodigiosa arcada Tambien resuenan gritos de insensato al
subterránea , que en sus hombros sostiene borozo, si alguno de tus magnates con
la desmesurada mole de arrebatada cor premeditado intento suelta ambiguas pala
riente ? bras que interpretarse puedan en sentido
Poderosa Albion , ni tu suerte te envi propicio !... ¡ Ilustre sombra del gran Gon
dio , ni deseo tu ruina ; que si á la patria zalo, cuya fulminante espada aterró un
mia niales sin cuento acarrearle intentas, tiempo poderosos monarcas , insigne capi
si recordando el poder de la invencible ar tan cuyo nombre acata la Italia y venera la
mada te vengas sobre el imperio del gran Europa; inmortal Cortés vencedor de cien
monarca , no satisfecha con el auxilio que pueblos , que amontonabas provincias co
en hora aciaga te prestó la tempestad , nó mo el soldado las prendas de un rico botín;
á tí se encomendó nuestra defensa , nó á tí Pízarro , Alba , heroico mozo Vencedor de
nuestras glorias. Lepanto , sombras venerables que encum
Si el pabellon lusitano se abate sumiso brasteis un dia el renombre hispano hasta
en presencia del tuyo , si altiva y desdeño donde no llegaran jamas las fábulas de los
sa los destinos riges de la patria de Gama, héroes hijos de dioses; ved si sufrierais
no es tuya la culpa. Pujanza y gloria bus vosotros insulto á vuestra patria, ved si
can con afan las naciones todas , pujanza y mendigarais desdeñoso favor!...
gloria buscas tú ; baldon á quien preparara Todo pasó ; todo desapareció cual leve
ignominia tanta : baldon á quien la sufre. sueño que un momento embarga la encan
Óh ! quién evocara de la tumba al héroe tada fantasía ; y en pos de él no mas se en
ilustre que con tanto brio y osadía zarpara cuentra que triste realidad. ¿Y es tal nues
de las costas lusitanas , hacia las distantes tro destino que remedio no consienta, y
regiones donde nace el sol ! ¿ quién al do
blar el formidable cabo de las tormentas,
guardado por la gigantesca sombra inmor I t Evprcsion de Guizol en las últimas disi—
talizada por el genio de Camoens, le pre cusiones.
 — 47 —
que á ejemplo del infeliz lusitano, de colo ilustracion, de paz, de fraternidad los be
nia hasta el rango humilde hayamos de llos nombres á sus oidos sin cesar resue
bajar ! ¿ Legado de esclavitud y envileci nen; mentidos enviados, del Cristo augusta
miento trasmitirá á las generaciones veni mision fingiendo , inspiren desprecio de la
deras , la generacion que derrocara al Ven antigua creencia, odio á Roma. »
cedor de Europa , apellidando independen Pujanza y gloria buscan las naciones to
cia ? Nó , que la España conserva todavía das , pujanza y gloria buscas tú : mas no
hidalgos corazones donde el amor patrio se del error y de la mentira ignobles armas
alberga ; nó , que de Daoiz y de Velarde blandir debiera un gran pueblo ; la sangre
las ilustres sombras con semblante airado, que chorrea de impetuosa lanza ennoblece
con ademan fiero , turban el muelle des al guerrero , la que golea de puñal aleve
canso de ignoble servidumbre; nó, que de deja indeleble mancha. Cuando de lo alto
la invicta Zaragoza, de la inmortal Gerona brilla sobre tí prodigiosa estrella para ilu
los héroes, baldon y afrenta arrojaran so minarte de nuevo, cuando la sangre de los
bre nuestro rostro, cual torpe lodo sobre mártires que inhumana vertiste en mo
frente infame; nó, que la memoria se con mentos de furor horrible , clama al cielo,
serva todavía , de cuando medrosas las ar nó venganza, sino perdon y luz, las tinie
mas del poder britano amparo buscaban en blas que en tu horizonte se esclarecen no
>u^ nav es , á la v ista de las águilas france arrojes con mano impía sobre un pueblo
sas, mientras el denodado español peleaba fiel. Tu orgullo no alces contra el cielo,
solo, sin mas trinchera que su pecho, sin que hay un Dios vengador; nada pudieran
mas auxilio que su valor, sin mas sosten tus designios y esfuerzos contra la nave
que su constancia, uno contra mil. misteriosa protegida del Altísimo. Tambien
Allá en sus proyectos de insaciable am allá en remotos siglos , poderosas naciones
bicion el formidable coloso, buscando en con atentados sacrilegos la cólera provoca
nuestro infortunio el secreto de nuestras ran de Aquel , cuya omnipotente palabra
fuerzas, cual agorero en las entrañas de convierte en árida hondonada el cauce de
víctima palpitante , descubre el hondo los rios , y deja en seco el mar ; tambien
misterio , la mansion de la vida , y con contra el pueblo escogido la epresora mano
mano trémula de temor y de esperanza, extendieran, profanando el Santuario. ¿Sa
ansioso la señala y dice : « extirpémosla » bes cuál fué su suerte ? Abre los profetas,
« ella triunfó de la barbarie de los hijos y escucha á tus viageros que te narran
del Aquilon , y creó la gloriosa nacionali asombrados el pavoroso cumplimiento. '
dad que pereciera á orillas del Guadalete; ¿Dónde está Nínive, la ciudad de Senna-
ella conservada cual sacro fuego en la cue cherib, del orgulloso monarca, contra
va de Covadonga, inspiró y enardeció á los quien descendiera con vibrante espada el
ínclitos fundadores de una nueva monar Angel del Señor? Mas fueron sus negocian
quía acaudillados por Pelayo ; ella humilló tes que las estrellas del ciclo... Eran sus guar
en cien y cien combates la pujanza agare- das como langostas... no se halla el lugar
na, sostuvo una lucha de ocho siglos, donde estuvieron... La hermosa Nínive se
triunfó en Granada , y llevó hasta las cos ha tornado en soledad despoblada como un
tas de Africa el pendon castellano ; ella yermo. (Véanse los profetas Nahum, y
condujo á intrépidos marinos á playas des Sofonias. )
conocidas, abriendo nuevos mundos á la ¿Dónde está Babilonia, la gloria de los
, ivilizacion ; ella condujo á inmortales reinos , la ciudad de oro , el orgullo de to
guerreros á la conquista de inmensas re da la tierra , del gigantesco templo , del
giones , ella hizo formidable el nombre es alcázar murado, del lago igual á un mar?
pañol en todos los ángulos de Europa, ella Las espantosas profecías se han cumplido.
dispertó el leon dormido, y le hizo romper Destruiré el nombre de Babilonia y los
de un solo esfuerzo las cadenas con que le residuos. Será habitacion de aves de rapi
sujetara usurpacion extrangera , auxiliada ña, y mansion de dragones: una soledad,
* por traicion aleve; ella... extirpémosla, un pais árido, un desierto, una llanura
propinemos á ese pueblo incauto el violen rasa , enteramente desolada , pantanosa,
to tósigo á cuya accion no resiste la com llena de montones de escombros y ruinas.
plexion mas robusta. El Libro Santo que —Todo el que pasa por ella se queda ató
nuestras manos profanaran derramemos nito.
ignorante plebe; de La hez del cáliz no se ha agotado aun;
 — 48
el Señor indignado la derrama todavía so
bre los pueblos que provocan su indigna
cion todopoderosa; y si á expiacion tre
menda condenada está la triste Iberia , no LA FUERZA DEL PODER
insultes su llanto , su dolor no insultes , no
le arrebates ; cruel! su único consuelo, su
sola esperanza , la fe de sus mayores , la
esperanza
te ciñenen, saltar
Dios. pudiesen
Sonar pudiera para
sobre tu tier-tí la conservacion
LA MONARQUIA.
propú
una hora terrible, que aleje Dios, sonar
pudiera la terrible hora en que á discordia
sangrienta abandonada , tu seno desgarra
ran esos hijos cuyos andrajos no cubre tu
ostentoso lujo, cuya hambre no sacias, El poder que gobierna la sociedad ha de
nadando en la opulencia. ¡ Ay de tí el dia ser fuerte , porque en siendo débil tiraniza
en que el pueblo fiel cuya cerviz oprimes, ó conspira. Tiraniza, cuando se esfuerza
hace largos siglos, lance elgritodeiosto/... por hacerse obedecer; conspira, cuando
y se levante, y se presente á tus ojos, cual sufre en silencio la resistencia y el ultrage.
sangriento espectro, demandando vengan Augusto se siente fuerte , y su imperio es
za , ya que le negaste justicia I Ay de tí el suave; Tiberio se halla debil, y maquina
espantoso dia en que cien pueblos que te y oprime , de los monstruos que mancha
aborrecen en distantes regiones, contem ron el solio de los Césares , fueron los mas
plen la turbacion y el sobresalto pintados violentos é insuportables , los que oian ya
en tu frente por discordia intestina ! el dia cercano el ruido de los pretorianos que ve-
en que las tempestades no encadenadas por nian á degollarlos.
la mano omnipotente no dispersen ya las Recorred la historia, y encontrareis es
flotas que á tus orillas se enderecen ! Ay crita por do quiera con letras de sangre
de tí el dia en que esos pueblos heroicos esta importante verdad : \Ay de los pueblos
que impune molestas fiada en las ondas gobernados por un poder que ha de pensar en
que tai
ra, y medir sus fuerzas con las tuyas, bra Esta es la clave para explicar los incon
zo á brazo ! cebibles excesos á que se abandonan los
La patria de los Viriatos, de los Vascos, poderes revolucionarios y los despóticos ,
de los Pelayos, Guzmanes y Gonzalos, exis lina vez dado el primer paso en el camino
te aun ; doliente y abatida , espera tan solo de la tiranía : todos son tiránicos porque
aquel momento en que la Providencia lla son débiles ; y cuando los veais tocar a la
ma á los pueblos á nueva vida diciéndoles: demencia en sus medidas de tiranía , dad
« levantaos y marchad . » No en vano con por seguro que están por expirar. El mo
la altísima muralla del Pirene resguardo y ribundo mejor que nadie , augura su pró
defensa la otorgara el cielo contra invasion ximo finamiento. La Convencion presentía
extraña ; nó en vano los mares que la cir la dictadura. El temor aumenta la opre
cuyen le indican que ser debiera tu mas sion , y la opresion acrecienta el temor, la
temible rival ; nó en vano se conservan en impulsion es recíproca , y sigue la misma
la peña de Mauritania atalayas los soldados ley que el movimiento de un péndulo ; el
españoles , como esperando la seña de ar punto de elevacion está en el mismo nivel
rojarte de la opuesta fortaleza. Delirio! oh! que el punto del descenso; la oscilacion
delirio, nó!... Hay un gran pueblo, solo continúa , hasta que media la única causa
falta un grande hombre. ¿Ha nacido ^¿Na capaz de restablecer el aplomo: la justicia.
cerá ? Adoremos los arcanos del Eterno : y Estas reflexiones nos ocurrían meditando
no abandonemos el último consuelo de los sobre los misterios de la monarquía ; por
desgraciados : la esperanza.—J. B. que misterios tiene esa institucion maravi
llosa , como los tiene todo lo grande. « La
monarquía es el despotismo» ha dicho una
política superficial : ¿y por qué? «porque
el monarca dispone de inmenso poder , y
este poder es sobrado robusto y sólido, dado
que las leyes lo aseguran al soberano para
sí y para sus hijos.» Entonces no compren-
 deis la institucion, pues señalais por origen
de la tiranía de los reyes , las causas que
precisamente les impiden el ser tiranos.
¿Quereis un poder suspicaz? asentadle
sobre un terreno minado , donde oiga á
cada instante el golpe de la zapa que pre
para la mina. ¿Lo quereis violento, pre
sentadle enemigos que sin cesar le amena
cen. Quitad hasta la idea del peligro, y
tendreis la suavidad y la confianza.
La gravedad y trascendencia del asunto
exigen que se explane con toda la claridad
lo que debe entenderse por fuerza de un
poder ; pues son muy distintas las acepcio
nes de que esta expresion es susceptible.
La fuerza del poder consiste: 1.° en la
seguridad de su existencia : 2.° en los me
dios necesarios al cumplimiento de su ob
jeto legítimo. Supóngase un pais donde
llegue á establecerse y arraigarse una cons
titucion mal combinada , viciosa , que no
deje al poder bastantes medios para ejercer
sus funciones en pro del comun ; de suerte
que en el mantenimiento del orden públi
co , en la administracion , en la aplicacion
de las leyes civiles y criminales, en sus re
laciones con las potencias extrangeras , ca
rezca de los recursos que ha menester , y
no tenga una accion eficaz, expedita y
pronta , en este caso , será posible que el
poder disfrute del primero de los requisi
tos indicados : la seguridad propia ; pero
echará menos el segundo, y por tanto no
será fuerte , en la verdadera acepcion de la
palabra.
Asi , un rey de Esparta ó de Roma entre
los antiguos , un monarca de los tiempos
feudales en los siglos medios , un soberano
con una constitucion como la del año 12
entre los modernos, por mas que á causa
de los hábitos, de las costumbres, ó de
particulares circunstancias, alcanzaran to
da la seguridad que imaginarse pueda, no
fueran un poder fuerte. Un hombre falto
de alguno de los miembros mas precisos
para ejercer la profesion á que se dedica ,
disfrutará tal vez de buena salud , prome
tiendo largos años de vida, y quizás se ha
llará en circunstancias á propósito . para
continuar en su ocupacion todo el tiempo
que le agradare ; pero no dejará por ello
de ser incapaz de ejercer muchos actos, y
por consiguiente llenará de una manera
muy defectuosa el objeto de sus tareas.
No obstante es menester advertir que la
falta de los medios necesarios para cumplir
el poder su mision , tarde ó temprano le
tomo i.
acarrea la falta de la propia seguridad, ame
nazando su misma existencia: como el
homhre que no puede desempeñar cual
conviene el cargo que le incumbe , de gra
do ó por fuerza suele hallarse precisado á
abandonarle.
De aquí resulta un fenómeno constante
mente observado en todos los períodos de
la historia y bajo todas las formas de go
bierno , y es, que el poder que se halla sin
los medios necesarios al ejercicio de sus
atribuciones , trabaja sin cesar para procu
rárselos. Se dirige á su objeto por caminos
diferentes , segun la situacion en que se
halla ; sj abunda de accion material , em
plea la violencia ; si es rico , corrompe ; si
todo le falta, maquina villanameute como
el último de los conspiradores.
En vano le exigireis que obre de otra
manera ; esta es su posicion, esta la ley in
declinable de su naturaleza; ni las calidades
de las personas que ejerzan el poder serán
parte á evitarlo. Estas podrán quizás man
tenerse extrañas al soborno y á la intriga ,
podrán hasta odiar semejantes medios, pero
los emplearán por ellas los que están en su
alrededor , los que gozan con los goces del
poder, los que á la existencia de este tie
nen vinculada la existencia propia.
Contribuyen á dicho efecto dos causas :
1.* La natural inclinacion del hombre á la
2.
extension
a El instinto
y eficacia
de conservacion.
del mando que
La primera
ejerce:
no ha menester explicacion ni comentarios;
nó asi la segunda. Hemos observado que
la falta de los medios necesarios al cumpli
miento de las atribuciones del poder, com
promete tarde ó temprano su misma exis
tencia, y hé aqui por qué en sintiendo esta
falta los busca por todos los recursos que
tiene á la mano. La cuestion que en apa
riencia versa únicamente sobre los límites
de la esfera del mando , es en el fondo , y
para un tiempo mas ó menos cercano ,
cuestion de vida ó de muerte. Todo poder
que se encuentra en semejante situacion ,
conoce instintamente esta verdad , y obra
en consecuencia.
Gracia nos hace la candidez de ciertos
escritores que con la mayor seriedad del
mundo echan en cara á Luis XVI y á Fer
nando Vil el haber sido causa de que la
revolucion se desbocase, no resignándose
á la posicion que les habian creado las cir
cunstancias, no dándose por satisfechos
con las facultades señaladas por las respec
tivas constituciones : como si las condicio-
4
 — 50
nes de la existencia y de la accion de un sona ; y de un modo ú otro , mas ó menos
poder dependiesen de la simple voluntad poderoso , mas ó menos brillante , mas ó
de la persona que lo ejerce, como si el po menos benéfica , se presenta siempre que
der público no fuese mas bien una institu la hace necesaria el estado de la sociedad.
cion que un hombre ; como si esta institu Tres grandes dictadores nos ofrece la his
cion no estuviese sujeta á las leyes generales toria: César, Cromwel y Napoleon. En
de todo ser , que se esfuerza siempre en cuanto á César, no queda dificultad en la
procurarse lo que necesita para su exis aplicacion del principio asentado ; y por lo
tencia. perteneciente a los dos últimos , haremos
Casos hay , en que al parecer el hombre una observacion que lo dejará fuera de
es la institucion , y esta no es nada sin el duda. La Inglaterra desde la época del
hombre ; pero en la realidad no es asi : la Protector ha continuado en su estado nor
institucion existe , bien que de tal natura mal á pesar de algun trastorno pasagero ;
leza que necesita una personificacion , un y lo que es mas singular , hasta mediando
representante que no pueda dividirse ni un cambio violento de dinastía. Veinte y
compartirse. Entonces la institucion en ocho años hace que Napoleon fue vencido
provecho propio, se absorbe en el hombre, por útima vez y confinado á Santa Elena ;
se confunde con él , se vale de su prestigio, la Francia ha sufrido desde entonces re
habla por su boca , como los sacordotes del vueltas de momento, pero el desórden no
gentilismo se ocultaban tras el idolo y co ha podido prolongarse : y es notable que
municaban al pueblo los oráculos. habiendo realizado lo mismo que la Ingla
César vencedor de los galos, pasa el Ru- terra una mudanza dinástica en 1830, ha
bicon , ahuyenta á Pompeyo ; triunfa en continuado tranquila, se han hecho esfuer
Farsalia, y se levanta con el mando de la zos hercúleos para que la revolucion no
República: ¿creeis que en el dictador no hay siguiese su- carrera , y se ha conseguido.
mas que la persona del general victorioso? ¿Qué prueban estos hechos? en nuestro
Si así lo creyereis , recordad que la dicta juicio la consecuencia es muy sencilla;
dura era una institucion en Roma. Los su prueban que en tiempo de los dos dicta
cesos presentan sin duda otro aspecto , las dores ambas naciones habian ya tocado al
circunstancias son muy diferentes , pero el término de la revolucion , que esta habia
hecho es el mismo ; solo que los romanos consumido sus elementos, que no podía
mandados por el dictador Camilo , no eran continuar , que el orden se habia hecho una
los mismos romanos del dictador amante necesidad indeclinable ; y por lo tanto esos
de Cleopatra. dos grandes hombres .no fueron mas que la
Que la dictadura era necesaria , que Cé personificacion dé esta necesidad social ,
sar no era mas que su personificacion, que sirviendo con su brazo de hierro á que de
desapareciendo la persona la institucion una situacion se pasase á otra que parecía
debia continuar, los sucesos lo demostraron separada por un abismo.
hasta la evidencia. El puñal deHruto rasga Si la posesion de los medios necesarios
el pecho del dictador ; Antonio ofreciendo al cumplimiento de su objeto legítimo es
á los ojos del pueblo la túnica ensangren condicion indispensable para que un go
tada de la ilustre víctima , inaugura el bierno pueda llamarse fuerte, lo es todavía
triunvirato, es decir, la nueva dictadura mucho mas la seguridad de su existencia.
que no ha escogido todavía su represen Y no le basta esta seguridad , sino que es
tante , que no se atreve á identificarse con menester que las personas que lo ejercen ,
un solo hombre , que aguarda el curso de abriguen sobre esto una conviccion que los
los acontecimientos, que atormenta atroz deje á cubierto de todo linage de recelos.
mente á los romanos para hacerse mas ne La mayor calamidad que sobre un pais
cesaria, para conquistar la unidad. Bruto puede venir es un gobierno mal seguro,
y Casio mueren , Antonio es vencido , la que esté en continuo acecho contralos cons
antigua libertad perece para siempre , la piradores reales ó aparentes ; en tal caso
dictadura se organiza y perpetúa, se con es imposible que el gobierno no tienda mas
camente
vierte en en
imperio,
Augusto.y se inaugura magnifi- ó menos á la tiranía , porque quien se ve
atacado, natural es que se defienda. No le
Resulta pues , que la dictadura , es de bastan las leyes comunes que regularmente
cir, la institucion que mas parece confun hablando están fundadas en el supuesto de
dirse con un hombre , prescinde de la per que se respeta el principio del gobierno ;
 — 51 —
si algunas existen que prevengan el caso de
atentado contra este principio , están de
suyo mal deslindadas , se rozan en diferen
tes puntos con los demas ramos de legisla
cion; y el gobierno que ordinariamente
pone su atencion principal en cuidar de la
conservacion propia , se extralimita , se ex
cede , y comienza á caminar por una pen
diente en cuyo fondo se halla un abismo.
Cuando hablamosde los medios necesarios
al gobierno para ejercer las funciones que
le incumben , no entendemos limitarnos á
los puramente materiales, no juzgamos que
la fuerza de un poder se halle en propor
cion con la fuerza material de que dispone;
antes al contrario , la sobrada abundancia
de esta suele enflaquecerle conduciéndole
á la ruina. Un conquistador que acaba de
tomar por asalto una plaza , tiene en su
mano la vida y hacienda de los ciudadanos;
nada puede resistirle, su ley es su voluntad:
los medios materiales le sobran para opri
mir y vejar , dado que ha sido bastante
fuerte para derribar ó salvar las murallas ;
sin embargo nadie dirá que el gobierno
fundado sobre aquella base tenga verda
dera fuerza. Dejad que corra el tiempo ; y
así como un imperio que estriba en la jus
ticia y las leyes , resiste al embate de lar
gos siglos , el otro 1)0 será parte á durar
algunos años atravesando los mas insigni
ficantes sacudimientos. Una circunstancia
nueva, una combinacion imprevista , una
noticia que alarme al vencedor , que alien
te al vencido, vereis que rompen cual en
deble cana el cetro que creyérais de dia
mante.
En Turquía el soberano dispone á su vo
luntad de la vida de sus vasallos ; manda ,
y las cabezas caen como las espigas segadas
)r la hoz; no obstante allí el poder no es
rte, la mejor prueba de su debilidad
son las catástrofes que experimenta. Luis
XIV , jóven é inesperto , hallábase un dia
rodeado de sus cortesanos , y llegó á decir
que no conocía mejor gobierno que el es
tablecido entre los musulmanes. « Señor,
le respondió con hidalga entereza un mag
nate que se hallaba presente, tampoco
conozco yo pais donde los soberanos sean
degollados con mas frecuencia.»
Durante el imperio romano, el hombre
que ocupaba el solio disponía de innume
rables legiones, los pueblos se inclinaban
ante él ; le ofrecían sus homenages cual
hacerlo pudieran á una divinidad ; ¿pero
era la suerte de esos
del mundo ? Perecían casi todos á manos
de la soldadesca.
El secreto de la monarquía europea , es
decir , cristiana , consiste en que el sobe
rano aun en las monarquías absolutas, tie
ne limitado el poder por la moral, por las
costumbres, por la conciencia pública; dis
tinguiéndose de todas las monarquías de
los paises donde no ha reinado el cristia
nismo , en que entre estos la palabra mo
narca es sinónimo de déspota , y entre no
sotros significa un soberano que gobierna
con arreglo á las leyes.
Por estas consideraciones se echa de ver
cuan lastimosamente se falsea la historia
moderna cuando no se quiere reconocer
esta importante verdad, obstinándose en
no ver el poder limitado sino allí donde
existen asambleas que de continuo le vigi
lan y censuran. Por mas que se exagere el
poder ejercido por Felipe II, por Luis XIV
y Cárlos III , nadie que no carezca de sen
tido comun llegará á confundirle con el de
los déspotas de Oriente. Poco importa que
el freno no se vea si en realidad existe. En
este punto menester es confesar que los
adversarios del gobierno absoluto le han
tratado con mucha injusticia, cuando se
han empeñado en apellidarle con negros
nombres que en la realidad está muy lejos
de merecer. No pretendemos suscitar aquí
la cuestion agitada entre los publicistas so
bre las ventajas ó desventajas de estas ó
aquellas formas; pero opinamos que aun
los mas ardientes apologistas de un extre
mo no pueden dispensarse de hacer al
opuesto la justicia que le corresponda. Dí
gase enhorabuena que en el absolutismo
hay peligro de que el poder se extralimite
conculcando las leyes , y hasta sosténgase
si se quiere que la mejor forma de gobier
no es aquella en que se combina en el ma
yor grado posible el elemento democrático,
y si place , ofrézcase como el bello ideal
en esta materia la república donde domine
exclusivamente la democracia pura; pero
ensalzando un principio no se lleve tan allá
la intolerancia con los otros, que se les
niegue lo que no puede disputárseles en el
tribunal de la filosofía y de la historia.
Si bien se observa , la opresion dimana
mas bien del estado de las ideas y de las
costumbres, que nó de la forma del go
Íiredominan
bierno. En las porrepúblicas
cierto ni la
de monarquía
América no
ni
a aristocracia; no obstante el mas fiero
despotismo devasta con frecuencia aquellos
 — 52 -
desgraciados paises; y en época reciente que se patentiza en la felicidad de los re
hemos leido narraciones que nos han hecho sultados.
estremecer con la increible atrocidad de los El problema del poder público envuelve
hechos. ¿Qirién prefiriera vivir en las re tres partes : primera órden , segunda esta
públicas de América , si pudiese disfrutar bilidad , tercera hacer el mismo poder
de un gobierno como el de Austria ó el de bondadoso. Estas tres condiciones se hallan
Prusia? En la misma Inglaterra , la verda satisfechas en la institucion monárquica de
dera libertad no data del establecimiento una manera admirable. Para el manteni
de sus asambleas : existiendo estas la tira miento de órden se depositan en manos
nía mas cruel se ha entronizado mas de del Rey inmensos recursos ; para asegurar
una vez en la Gran Bretaña , y hasta en la estabilidad se cierra la puerta á la ambi
nuestros tiempos vemos á la Irlanda some cion asegurando el mando no solo al sobe
tida á dura esclavitud , no obstante las for rano , sino á toda su descendencia. Se qui
mas representativas del gobierno que la ta al poder su malignidad, y se le hace
domina. bondadoso, no dejándole expuesto á las
La monarquía hereditaria tal como exis pasiones comunes. ¿Qué codiciará quien
te en Europa , ni deja al hombre recelos, todo lo posee? ¿cómo tendrá cabida la en
ni peligros á la institucion , ni á la ambi vidia en el corazon del que es mirado poco
cion estímulo : por esto es tan suave su ac menos que como una divinidad? ¿es fácil
cion , tan benéfico su influjo , su conserva que conozca la venganza quien de nadie
cion tan preciosa para el sosiego y la recibe injurias , quien halla siempre á su
felicidad de los pueblos. El monarca es un encuentro la veneracion y el homenage?
hombre colocado en region superior á la ¿con quién alimentará rencorosas rivalida
de todos sus súbditos , aun los mas eleva des quien se halla constituido sobre todos,
dos por sus cualidades personales, 6 por mirando hasta á las clases mas altas de la
su nacimiento ; nada tiene que esperar ni sociedad , colocadas en grado muy inferior
que temer : su juez no se halla entre los al suyo , á larga distancia de su trono ?
mortales, está en el cielo. Desde que abre Hé aquí la razon por qué la historia y la
los ojos á la luz descubre la carrera de su experiencia de la Europa moderna en los
vida ; en vano avivaría sus deseos para en paises donde la monarquía ha estado plena
contrarles nuevos Qbjetos: autoridad, ho y sólidamente establecida , nos presentan á
nores, riquezas, placeres, todo se halla ya menudo soberanos débiles, pero pocos
al rededor de su cuna ; no se pregunta lo malvados. En efecto, la region en que
que vale , sino lo que es ; su mérito perso moran, la educacion que reciben, las ideas
nal, si alguno posee, es no solo estimado, en que se los imbuye, si algun inconve
sino encarecido , exagerado ; la lisonja niente tienen es el de enflaquecer su ca
cuida de hacerle creer que aun no habien rácter, el de desarrollar aquellas pasiones
do nacido en el régio alcázar fuera tambien que llevan al corazon la molicie , pero nó
digno de la corona; y los defectos mas evi la perversidad.
dentes y palpables , se cubren con cien ve No ignoramos las excepciones que de es
los para que no ofendan ó entristezcan al ta regla se nos pueden objetar ; pero lejos
mismo que de ellos adolece. de ser verdaderas excepciones, son mas
En pura teoría , nada mas absurdo que bien una confirmacion de la regla general.
una institucion semejante; en la práctica Casi todos los soberanos que se han distin
nada mas cuerdo: vano es luchar contra guido por su perversidad , ó han vivido en
los hechos pues los hechos están ahí. La medio de discordias intestinas , ó han sido
historia entera, la experiencia de cada dia, conquistadores. En uno y otro caso, el
deponen de esta verdad ; si la razon no la principio se verifica; porque en el primero
explica cual conviene, el buen sentido la el monarca se veia mal seguro , hallándose
comprende perfectamente. Pero no es en peligro , ó su persona , ó su dinastía , ó
exacto tampoco que la razon sea impotente la institucion misma; en el segundo, el so
á señalar las causas de este singular fenó berano se hallaba agitado por una pasion
meno ; si bien quizás no llegara á tanto, vehemente ; al lado del poder que gober
entregada á la mera especulacion , amaes naba habia el poder que invadía ; y por
trada empero con las lecciones de la prác tanto faltaba la condicion que hemos indi
tica, conviene en la prudencia que á esta cado Este
: elcarácter
soberanobenéfico
todavía de
deseaba.
la
preside, é indica los motivos del acierto
 — 53 —
hasta pudiera descubrirse en aquellos países cuerdo de que hay un poder superior al
donde reina el despotismo. La crueldad y doméstico , capaz si le place de intervenir
demas vicios que allí deslustran el poder en la querella y castigar al desmandado
soberano , no tanto dimanan del exceso de padre de familias. Los gefes inferiores que
los medios que en su mano tiene , cuanto gobiernan las provincias ó las ciudades , se
de las ideas y costumbres de la sociedad convertirán en otros tantos déspotas cuya
que gobierna. Falta en ella el verdadero tiranía será tanto mas dura é insoportable ,
conocimiento de la dignidad del hombre, cuanto no reconocerán á un superior , que
de las consideraciones que por solo este tí dada la oportunidad pueda hacerlos res
tulo le son debidas , de las verdaderas re ponsables de los daños que causen , de las
laciones de este con sus semejantes, se tie injusticias que irroguen , de las arbitrarie
nen ideas muy equivocadas sobre el origen dades que cometan. El extravío delas ideas
y objeto de toda autoridad. Cuando el so y de las costumbres se ofrecerá á la vista
berano maltrata á sus súbditos , cuando en toda su negrura y desnudez , echándose
abusa de su poder en contra de las vidas y de ver que no es el poder soberano quien
haciendas que debiera ser el primero en oprime á la sociedad , que no nacen de la
proteger y respetar, aplica en la esfera de soberanía los males que ella causa ; sino
su accion las mismas reglas que halla esta que de la sociedad misma corrompida y
blecidas en las demas clases de autoridad. degradada se levanta el pestilente aliento
En semejantes paises la potestad patria es que contamina el solio , y que cuando la
por lo comun excesiva y tiránica ; los hijos persona que le ocupa se entrega á la cruel
viven bajo el dominio del padre como el dad y otros excesos abominables, recibe de
esclavo del de su señor ; y la muger misma la misma sociedad que le rodea sus inspi
que nació para ser compañera del hombre, raciones perversas.
no es mas que una de sus esclavas. Se ig Esta es la causa porque natural y espon
noran los medios de conducir á los hom táneamente la monarquía europea se ha
bres por la razon y por las persuasiones ; hecho tan suave y benéfica , hasta en aque
solo se conoce como medio eficaz la fuer llos paises donde la falta de todo límite le
za; se la emplea en todo, y no se concibe gal parecía deber arrastrarla á los mayores
que un gobierno firme pueda ser otra cosa desmanes. Las ideas, las costumbres , las
que un mando violento. La obediencia del reglas de gobierno á que se amoldan los
subdito , no fundada en motivos superiores, monarcas , las reciben de la misma socie
le envilece y degrada : ó se somete tem dad gobernada : en ella domina la razon ,
blando como un animal doméstico al oir el prevalece la moral, levanta la conciencia
chasquido del látigo , ó se levanta como pública su voz imperiosa; y si el orgullo y
fiera
Para
indómita
comprender
y hace que
pedazos
no esá la dueño. el desvanecimiento se obstinan en guiar al
su monar
monarca por extraviados senderos , álzase
quía la causa de estos males, supóngase de todos los puntos del reino , de todas las
que en uno de estos desgraciados paises clases de la sociedad , un rumor sordo que
sometidos á un regimen brutal y envileci atestigua el descontento , que pone de ma
do, se introducen por un momento las for nifiesto el escándalo, que es mas eficaz pa
mas democráticas antes que se haya veri ra enfrenar al poder que las insurrecciones
ficado un cambio en las ideas y costumbres. y motines.
¿No veis á la primera ojeada convertirse Los demagogos se sonreirán quizás de
aquellos hombres en una infinidad de recí estas doctrinas con la sonrisa del despre
procos tiranos , que se oprimen y se ator cio; como quiera, nosotros les haremos
mentan segun prevalece la fuerza? El orden observar, que hasta en los gobiernos funda
público, este orden semejante entre ellos dos sobre las constituciones mas latas y po
al silencio de los sepulcros, pero que tal pulares , se asienta como principio indispu
como sea es muy preferible á los aullidos table la inviolabilidad, la irresponsabilidad
de una manada de fieras, deja en el mo del monarca , ó del que ejerce sus veces.
mento de existir , faltando el supremo po « Al rey, dicen acordes todos los publicistas
der que le sirve de centro y apoyo. Los constitucionales , solo es lícito atribuirle el
malos tratamientos que reciben la muger bien , nunca se le puede imputar el mal :
del marido , los hijos de los padres , y los constitucionalmente hablando , el monarca
esclavos de su señor , subirán á un punto es impecable.» ¿Y de dónde creeis que se
mas alto de crueldad, no mediando el re ha originado semejante teoría? ¿Os imagi
 — o
nais que es el producto de las combinacio
nes de los publicistas del equilibrio? Muy al
contrario : todos sus principios , todas sus
doctrinas , todas sus tendencias los guiaban
en direccion opuesta ; pero el buen sentido
europeo , los hábitos de largos siglos , las
lecciones de la historia, los escarmientos
de la experiencia , los han forzado en este
punto á negarse á sí mismos, rechazando
las consecuencias de la soberanía popular.
Jamas los hombres de la antigua escuela
se valieron de tantos circunloquios para
nombrar al Rey. «Persona sagrada» «pen
samiento irresponsable,» «voluntad supe
rior , » « region elevada sobre la esfera de
las pasiones , » y otras frases semejantes se
pronuncian de continuo en la tribuna y en
la prensa, esquivando en llamar al rey con
el nombre propio. Diríase que se trata de
una divinidad que los mortales no se atre
ven á tomar en boca temiendo profanarla.
Pues bien, todo esto no es mas que un sa
crificio , un doloroso sacrificio que ha hecho
la escuela democrática á las ideas antiguas :
todo esto no es mas que una proclamacion
de la impotencia de sus principios abando
nados á sus fuerzas ; todo esto es un plagio
del antiguo sistema , al mismo tiempo que
con tanta serenidad se le desacredita é in
sulta.
Se proclama como dogma indisputable
que el poder supremo es un simple man
datario , un mero delegado del pueblo ; y
sin embargo se declara desde luego que es
te poder de nada es responsable á su prin
cipal , á su delegante ; se recuerda con
mofa el derecho divino delos reyes, y no obs
tante, se los apellida inviolables , sagrados,
se los compara de continuo á una divini
dad , que no puede obrar mal , que solo es
capaz de ejercer el bien ; se establece como
única tabla de salvacion para la sociedad el
principio de eleccion , y á pesar de esto , es
rechazado este principio con respecto al po
der supremo , y se inculca sin cesar la ne
cesidad de la monarquía hereditaria ; nada
se quiere dejar al curso natural de las co
sas , todo se ha de arreglar con la discu
sion , todo se ha de practicar por la expresa
voluntad del hombre; y esto no embargan
te , cuanto se trata de lo mas importante
que ofrecerse pueda en los negocios de la
sociedad , se cierran los ojos , se huye de la
deliberacion , el hombre teme la razon y la
voluntad propias , se abandona á todos los
azares,
Hombrespara que
evitartan
la eleccion.
inconsideradamente
condenais todo lo antiguo , que creeis ha
ber iluminado el mundo, que os figurais á
la humanidad envuelta en densas tinieblas
hasta que vosotros las disipasteis con los vi
vos resplandores de la filosofía , no repro
bamos, nó, vuestra conducta, no os echa
mos en cara vuestra inconsecuencia para
que obreis de otro modo ; pero si tenemos
derecho á exigiros que mediteis algo mas
sobre vuestros principios, que no achaqueis
tan livianamente á fanatismo y apocamien
to , lo que anduviera guiado por profunda
sabiduría , que no os imagineis que la hu
manidad marchaba á la decadencia y envi
lecimiento si vosotros no hubieseis venido á
torcer su carrera. Si demandais tolerancia
para vuestras opiniones , dispensadla voso
tros á las agenas ; ya que no os avergonzais
de tomar de vuestros adversarios doctrinas
que repugnan á vuestros principios , al me
nos sed justos , decid de dónde las habeis
recibido. Confesad que entre las ruinas que
habeis amontonado, os hallais forzados á
conservar un pabellon para guareceros con
tra las tempestades que braman sobre vues
tras cabezas; engalanadle como os pluguie
re, pero no negueis que quien lo construyó
tan sólido , quien lo recamó con tan precio
sas labores , no fuisteis vosotros sino vues
tros padres. Este pabellon es la monarquía.
/. B.
MEDIOS
QUE DEBE EMPLEAR CATALUÑA
PARA
evitar su desgracia y acrecentar su prosperidad.
Dijimos en el número anterior que no
carecía el principado de Cataluña de me
dios para precaverse contra los peligros que
amenazan su industria, á causa de la riva
lidad inglesa , y de la oposicion de intere
ses que tiene hasta cierto punto con algu
nas delas otras provincias. Vamos. ahora
á indicar cuáles son en nuestro concepto
esos medios , deseando que las indicaciones
que emitamos, sean desenvueltas por hom
bres que con mayor caudal de conocimien
tos y de noticias puedan de ellas hacer las
debidas aplicaciones.
 — 55 —
Para mayor claridad esos medios los di pero los hombres que conocen la situacion
vidiremos en tres clases : materiales , mo de Europa, saben que en el sistema de pu
rales y políticos. blicidad reinante en todas partes, hay po
Medios materiales. Por de pronto paréce- cos de esos secretos que no puedan descu
nos que la prudencia aconseja , que no se brirse, ora sea por medio de libros, ora
aboquen de tal suerte los capitales á la in por los viages, observando é inquiriendo
dustria principalmente amenazada , que es con la debida actividad , y comunicando en
la algodonera , que faltas de ellos las de seguida el resultado con sinceridad y bue
mas , ó se debiliten en demasía ó no tomen na fe.
el desarrollo de que son susceptibles. Asi Los operarios de la Gran Bretaña se dis
se lograrán dos objetos : primero , el movi tinguen por su habilidad , pero no se crea
miento simultáneo y por decirlo asi parale que esto dependa de la particular disposi
lo de todos los ramos industriales. Esto po cion de aquellos naturales, sino que con
drá ser ventajoso á la industria en general , tribuye mucho á ello la buena enseñanza
la que estando desenvuelta en muy diferen con que se los prepara. A ejemplo del es
tes sentidos se hallará en contacto con ma tablecimiento para la instruccion de los ope
yor número de necesidades, y se abrirán rarios fundado en Glascow por el doctor
naturalmente nuevos y mas amplios mer Burbek, se han planteado otros en Lon
cados , siendo mas fácil el cerrar la puerta dres, Edimburgo. Manchester, Birmin-
á la importacion de los géneros extran ge- gham , Newcastle, Liverpool, Lancaster,
ros. Segundo : si un tratado de comercio ó y otros puntos : en ellos aprenden los arte
una reforma de aranceles, modificase de tal sanos los principios de Geometría , de Me
manera el sistema prohibitivo que la indus cánica , de Física , de Química , que luego
tria algodonera sufriese considerable que les sirven en extremo para adelantar y per
branto , no siendo este ramo mas que uno feccionarse en sus respectivas profesiones.
de tantos como florecieran en el pais , no ¿Porqué no se procura con mas ahinco que
seria el golpe tan ruinoso para el Principa estos ejemplos sean imitados entre nosotros?
do ; la novedad no produciría un desnivel ¿ por qué no se trabaja con mas asiduidad
tan sensible ; y afectadas por el daño me en que las operaciones delicadas cuyo acier
nos familias asi de fabricantes como de ope to y perfeccion depende de los conocimien
rarios , fuera mas fácil atenuar las malas tos químicos, no necesiten para su direccion
consecuencias y resarcir los perjuicios. operarios extrangeros? ¿por qué no se
Bajo este aspecto debiera Cataluña por proporcionan á un crecido número de indi
tarse con la precaucion de un capitalista avi viduos , de una manera fácil y acomodada,
sado , que no suele aventurar toda su for las luces necesarias para que las construc
tuna en un solo negocio por mas lucrativo ciones que demandan conocimientos geo
que se le presente ; mucho menos si tiene métricos y mecánicos no queden abando
fundados motivos para recelar que un gol nados al talento natural , que es como si
pe repentino no desbarate en un momento dijéramos á la casualidad? Reflexionen so
las mejores combinaciones. bre estas indicaciones los hombres que co
Ademas , tal vez debiera procurarse con nocen la verdadera situacion y las necesi
algun mayor cuidado , que la industria no dades de Cataluña ; y vean si no habría
fuera en Cataluña una mera importacion en este punto importantes reformas que
del estrangero , y que echase raices profun emprender y notables mejoras que in
das con el competente adelanto de los co tentar.
nocimientos relativos á dicho ramo. ¿La en No olvidemos que la industria no puede
señanza de las ciencias mecánicas y químicas decirse que esté hondamente arraigada en
está montada cual conviene para la propa un pais, hasta que los conocimientos desus
gacion de las luces necesarias al progreso habitantes se hallan en el conveniente mvel.
de las artes que de ellas dependen ? Mucho No basta que se traigan máquinas, que se
lo dudamos: y admirando como el quemas planteen establecimientos; es necesario cui
la destreza y laboriosidad de nuestros pai dar al mismo tiempo de que se vayan for
sanos , no podemos olvidar lo que ellos mis mando operarios aptos, directores capaces,
mos están diciendo á cada paso , cuando se para que dentro breves años, no nos vea
lamentan de que los extrangeros los aven mos ya precisados á recibir de los extran
tajan en muchos puntos. La gente sencilla geros esa clase de auxilios. Estos deseos
está hablando continuamente de secretos; no son arranques de orgullo nacional , son
 la verdadera expresion de las necesidades56 prendido
— como era de esperar el espíritu
de la industria. de asociacion ; antes al contrario , se nota
Tampoco creemos, á pesar del buen es que exceptuando la existencia de las corpo
tado en que se encuentre la agricultura ca raciones creadas por la ley, no se ha tenido
talana , que se halle saturada de capitales la idea de formar ni siquiera aquellas aso
hasta el punto de no poder invertirse en ciaciones que hubieran podido servir de di
ella crecidas sumas con señalado provecho. que á las codiciosas exigencias de la Ingla
La mayor parte de las aguas que bañan terra. Se han dirigido representaciones al
nuestro Principado descienden de las mon gobierno , ricas de noticias que aclaraban
tañas , y corren hasta el mar por el cauce la situacion industrial de Cataluña y forta
que les trazara la naturaleza. ¿ Quién no ve lecidas con razones que desconcertaron á
con cuánto beneficio podrían emplearse ca los enemigos del sistema prohibitivo ; esto
pitales cuantiosos en la construccion de ca es verdad , pero nosotros añadirémos , que
nales de riego , que trocasen en hermosas si una provincia de Inglaterra se hubiese
y feraces vegas , campos ahora estériles y hallado en situacion semejante á la que
agostados? Las solas llanuras de Urgel co aflige á Cataluña , si tan grandes intereses
locadas á breve distancia de poblaciones en y la subsistencia de tantos millares de fami
extremo florecientes y ricas, donde abun lias se hubiesen hallado amenazados por un
dan los capitales y se dirigen á empresas tratado con una potencia extrangera, no
llenas de peligros, son una evidente prue solo se hubiera practicado lo que aqui , si
ba de que las cosas no han seguido su curso no que por los medios legales se hubiera
natural , y que nos hemos entregado con formado una asociacion colosal ; y al mas
excesivo ardor al exclusivo fomento de un ligero rumor deque se trataba de proponer
ramo , sin curarnos cual conviene de otros, el bilí de abolicion del sistema restrictivo
que á mas de ser productivos, estuvieran á se habrían hallado el gobierno y el parla
cubierto de los tratados comerciales y de mento con una peticion apoyada por dos
las revisiones del arancel. cientas mil firmas.
Hemos recordado el canal de Urgel ci- El estado de las comunicaciones de lo
ñéndonos únicamente al de riego , no por interior del Principado dista mucho de ser
que sea lo único que hacerse pudiera en satisfactorio ; lo que produce retardo en el
este género , sino por su extremada impor movimiento , recargo en los trasportes , y
tancia , tan generalmente reconocida como por consiguiente una mayor dificultad de
constantemente descuidada. Asi por ejem que se aprovechen en ciertos lugares la ba
plo, ¿cómo es que el antiguo proyecto de ratura del jornal de los operarios, el me
conducir las aguas delTer por el centro de nor precio del terreno y de la construccion
la llanura de Vich , de manera que fecun de los establecimientos, los saltos de agua,
dando aquella hermosa comarca ofreciese y otras ventajas semejantes. De seguro que
oportunidad de construir establecimientos se nos dirá que estas empresas relativas á
fabriles cerca las murallas de la ciudad ca facilitar la comunicacion son en buena par
beza del partido , se ha quedado tan solo te de la incumbencia del gobierno supe
en proyecto , como casi todas las cosas de rior , y que al proponerse una provincia
España? Las demas provincias pueden se llevarlos á cabo, tropieza con un sinnúme
ñalar por excusa de descuidos semejantes la ro de inconvenientes y embarazos que aca
falta de capitales , la natural indolencia de ban por desalentar y fastidiar á cuantos en
los habitantes del pais, quienes no se apro ellas se comprometen. Peroá esto se puede
vecharían de los mismos beneficios que se replicar, que hace ya mucho tiempo que
les pondrían en las manos , y otras razones está acostumbrada Cataluña á hacer gran
por el mismo tenor mas ó menos sólidas y des cosas por sí misma , marchando por el
especiosas ; pero en Cataluña no existen por camino de la prosperidad , aumentando y
fortuna estas circunstancias desgraciadas; desarrollando su riqueza , sin que le sirva
solo puede atribuirse al proverbial desgo de mucho la direccion del gobierno : lo
bierno de España , y á cierto aislamiento propio pudiera hacerse en el caso dado ; y
mal entendido, que se opone á la forma si saliesen al encuentro graves dificultades,
cion de las grandes asociaciones , indispen paraLa las
mayor
empresas
perfeccion
arduasdees los
la constancia.
artefactos,
sables para esa clase de empresas.
Se ha importado entre nosotros el espí sobre todo en el ramo de la industria ame
ritu industrial y mercantil , pero no ha nazada , debe procurarse en Cataluña con
 — 57
especial ahinco ; pues que median en ello con su imperiosa necesidad de vender.
no solo los motivos generales que natural Otra ilusion no menos dañosa , fuera el
mente impulsan hácia dicha perfeccion , si imaginar que las provincias ahora inclina
no la precaucion prudente aconsejada por das á un tratado de comercio , se desviarán
las circunstancias. En efecto, es regular fácilmente de su propósito. Dos motivos las
que si podemos evitar un golpe de mano , estimulan : la oportunidad de comprar mas
que por mas que se diga no le será tan fá barato , y la esperanza de dar mejor salida
cil al actual gobierno el descargarlo, se á sus frutos. Lo que á esto objetan los ca
respetarán por algun tiempo los intereses talanes es ciertamente muy sólido ; se fun
de Cataluña , y se le dará el necesario pla da en la necesidad de los sacrificios recí
zo para prepararse á la competencia con procos , en lo funesto que seria para la
las mercancías inglesas. Ora sea que ese prosperidad de la nacion el destruir su na
plazo se conceda y señale expresamente, ciente industria y otrasrazones semejantes;
ora sea que la fluctuacion de las negocia pero todo esto tiene el inconveniente de no
ciones entabladas y por entablar , lo vaya ser tan fácil de comprender como la dife
por sí misma otorgando, fuera muy del rencia que vaya en precio y calidad de una
caso que los interesados en el asunto dieran vara de tejido catalan á otra de tejido in
por supuesto que ha comenzado ya , y se glés. En esto se debe fijar la atencion , no
aplicasen á introducir en la fabricacion to apartarla nunca de aquí ; combatir hechos
das las mejoras de que sea susceptible. Los con hechos: esta es la mejor lógica.
ingleses se han esforzado en persuadir en Medios políticos. En la exasperacion á que
España y en el extrangero , que su causa han llegado en España los partidos políti
era la de una nacion entera contra el mo cos , una de las miras que no debe perder
nopolio de un reducido número de fabri de vista el Principado, es el no constituirse
cantes ; y es menester , es indispensable , ciego instrumento de ninguno de ellos. La
que estos respondan con la evidencia delos fuerza de una causa , si ha de ser real y
resultados, demostrando en tiempo tan verdadera , si ha de extenderse á mas que
breve como posible fuere , que el beneficio ;i circunstancias de momento, debe radi
reportado del sistema protector lo han re carse en su justicia intrínseca , y apoyarse
compensado con usura á la nacion ; no tan para la propia defensa en los intereses que
solo ofreciéndole un modelo con el que se con ella están ligados. Cuando se la defien
amaestrasen las demás provincias, sino de solo como un medio de oposicion em
tambien surtiéndolas de lo necesario con pleado contra el que ó la ataca en realidad
abundancia, belleza y baratura. ó se presume que intenta atacarla , adolece
Lo hemos dicho y lo repetimos : la cues la defensa de un inconveniente gravísimo,
tion de los algodones ingleses se reprodu cual es , el no estar hecha de buena fé , y
cirá bajo mil formas si es menester, y ator por lo mismo el emplear contra el adver
mentará sin cesar la industria catalana , sario todo linage de armas. Deesta manera
hasta que esta pueda competir con su ri se mezclan las lícitas con las vedadas; y el
val, ó desaparezca. Vano es hacerse ilusio poco ó mucho efecto que estas últimas pue
nes en sentido opuesto ; el tiempo se en den producir, se compra bien caro con lo
cargaría de desvanecerlas, y la imprevision que aquellas pierden de su temple. Pasadas
y el descuido sufrirían duro castigo. Así, las circunstancias de momento, la causa
aun cuando se ofrecieran las circunstancias que indiscretamente se entregara en manos
mas satisfactorias, y en que se alcanzasen deí primero que se presentara á defender
las mayores seguridades, conviene no dor la , se halla de repente abandonada por
mir tranquilos ; es necesario, urgente, el muchos de los que mas valerosamente pe
prevenirse para nuevas complicaciones que learon en pro de la misma ; y quizás ellos
de un modo ú otro no dejarán de presen son los primeros en declarar , que los mo
tarse. Que prevalezcan los progresistas ó tivos de su anterior conducta no eran otros
los moderados , que triunfe el absolutismo que la necesidad y conveniencia de echar
ó la república, la Inglaterra no abandonará mano de todo cuanto era á propósito para
su puesto; allí estará con su refinada di abrumar y aterrar al comun enemigo. Las
plomacia , con su astucia proverbial , con razones que expuestas y sostenidas en el
su oro seductor , con su paciencia in terreno legítimo, jamás perdieran de su
cansable, y sobre todo con su excesiva fuerza y ascendiente , se hallan desvirtua
abundancia de artefactos y por tanto das con el recuerdo dela indigna compañía
 — 58 —
con que en otro tiempo se ofrecieran al nacional y dela independencia dela patria.
público ; y quizás se llegue á decir , que Pero estas circunstancias irán desaparecien
tambien se emplea entonces con mala fé do como sucede ya en la actualidad ; y pa
y como simple arma de oposicion , lo que sado el calor del momento , las cosas vol
en otro tiempo manejaran otras manos de verán á su curso regular , obedeciendo al
la misma manera y con idéntico objeto. impulso de sus motores naturales.
Sin que reprobemos el que se procure No intentamos mostrar á Cataluña el par
sacar partido de las oportunidades que va tido político á que le conviene inclinarse ,
yan ofreciendo las vicisitudes políticas, opi ni pretendemos indicarle que deba mante
namos que no es la causa de Cataluña de nerse agena á todos ellos ; esto fuera poco
tal naturaleza que haya menester identifi menos que imposible , y la dañaría en vez
carse con determinada bandería política ; y de favorecerla. Solo hemos dicho, que le
aun añadiremos, que semejante conducta importa no constituirse ciego instrumento
seria imprudente en extremo, á causa de de ninguno; significándole con esta expre
exponerse con ella la industria catalana á sion, el peligro que corre de ser explotada
los repentinos azares de pujanza y deca en diferentes sentidos, y de servir sin pro
dencia á que aquellas se hallan y se halla vecho propio á la ambicion de nacionales
rán expuestas por largo tiempo. y extrangeros. Cuando en momentos críti
Tanto dista de convenir á los intereses cos y de exasperacion oiga hablar de inde
de Cataluña el aislarlos en ningun sentido, pendencia , convénzase desde luego que se
que antes bien es de la mayor importancia trata de engañarla con esperanzas; imposi
quitarles ó disminuirles al menos , ese ca bles de realizar; cuando se le insinúe la
rácter de provincialismo que llevan en la conveniencia de levantar otro pabellon co
actualidad : es necesario nacionalizarlos por mo hiciera allá en los disturbios de 1640,
decirlo así , manifestando á las demás pro no dude que se la seduce astutamente para
vincias que lo que existe no es un mono hacerle cometer un acto de rebeldía que
polio sino un sistema de compensaciones mancillara su honor y que pagarían con
recíprocas; y que cediendo á las exigencias desprecio y desden los dueños de la enseña
de la Inglaterra , venderían por una como enarbolada ; cuando se le diga que es posi
didad y alivio pasageros, la independencia ble resucitar sus antiguos fueros , convocar
de la Península y el porvenir de su pros sus Cortes y obligar á los monarcas de Cas
peridad y grandeza. Es necesario demos tilla á que hagan pronunciar la antigua
trarles que bajo la solapada pretension de fórmula plau al Senyw Rey, crea, firmemen
un simple tratado de comercio ó de una te que se la brinda con ilusiones, incompa
modificacion de los aranceles , está oculta tibles con el espíritu del siglo y con nues
la resolucion de un inmenso problema , á tras propias costumbres ; y por fin cuando
saber : si la España á semejanza de Portu se intente persuadirla que el mejor modo
gal , se ha de convertir en humilde colonia de alcanzar justicia es la insurreccion y la
de la orgullosa reina de los mares; si nues violencia, rechace con indignacion las pér
tros negocios se han de decidir en el con fidas sugestiones, que quizás inducen al
sejo
san James;
de nuestros
si esereyes
(iibraltar
ó en elque
gabinete
nos está
de j| :n para gozarse en el feroz placer de
castigado con fuego y sangre,
insultando con sus murallas y las escuadras los pueblos como á los individuos, no
de su puerto , ha de ser mirado como otra los salvan los furiosos arrebatos de cólera ,
nueva capital , residencia de altivos seño con que ciegos de venganza se arrojan á la
res, dispuestos á forzarnos á la ejecucion violencia y al crimen ; sino la firmeza en
de su soberana voluntad con sus cañones y sostener con el correspondiente decoro los
bayonetas. intereses de su causa, y aquella inalterable
Ahora , merced á los desastrosos aconte constancia nacida de la profunda conviccion
cimientos que han pesado sobre esta infor de que la razon les asiste y de que tarde ó
tunada ciudad , se ha despertado el orgullo temprano llegará el dia de la justicia.
nacional en el resto de la Península ; y se CKConnell ha levantado la Irlanda de la
ha declarado en nuestro favor expresándo abyeccion en que yacia sumida , la ha co
se de una manera que alienta las esperan locado en imponente actitud , haciendo tem
zas del pais y honra singularmente el hi blar todos los gobiernos de la Gran Breta
dalgo corazon de los que sacrifican sus ña; y uno de los primeros pasos de su
propios intereses en las aras del pundonor grande obra fué el reprimir las violencias
 — 59
particulares, eüevitar losestériles alzamien Deja V. entrever algunos recelos de que
tos, y el presentar la causa nacional con mis respuestas sean sobrado dogmáticas y
los colores de que era digna. Bastan por decisivas ; haciéndome la caritativa adver
hoy estas indicaciones : otro dia continua tencia de que « es menester despojarse por
remos nuestra tarea , explicando los medios un momento de las convicciones propias , y
morales que en nuestro concepto debe em procurar que la discusion filosóhca se re
plear Cataluña para precaver su desgracia sienta todo lo menos posible de la invaria
y acrecentar su prosperidad. — /. B. ble fijeza de las doctrinas religiosas. » Aso
maba á mis labios la sonrisa al leer las pa
labras que acabo de transcribir, viendo
que de tal manera vivia V. equivocado so
POLÉHICA RELIGIOSA. bre la verdadera situacion de mi espíritu;
pues se figuraba hallarme tan dogmático en
filosofía como me habia encontrado en re
ligion. Paréceme que á fuerza de declamar
contra la esclavitud de entendimiento de
©. (1) los católicos, han logrado en buena parte
su dañado objeto los incrédulos y los pro
testantes, persuadiendo á los incautos de
que nuestra sumision á la autoridad de la
CARTA Á IN ESCÉPTICO EN MATERIAS DE Iglesia en materias de fe , quebranta de tal
RELIGION. suerte el vuelo del espíritu y anonada tan
completamente la libertad de examinar,
Mi estimado amigo : difícil tarea me ha hasta en los ramos no pertenecientes á la
deparado V. en su última, habiándome del religion , que somos incapaces de una filo
escepticismo: este es el problema de la sofía elevada é independiente. Asi tenemos
época, la cuestion capital, dominante, que por lo comun la desgracia , de que sin co
se levanta sobre todas las demás, cual en nocernos se nos juzgue, y sin oirnor se nos
tre tenues arbustos el encumbrado cipres. condene. La autoridad ejercida por la Igle
¿Qué pienso del escepticismo; qué con sia católica sobre el entendimiento de los
cepto formo de la situacion actual del es fieles , en nada cercena la libertad justa y
píritu humano tan tocado de esta enferme razonable que se expresa en aquellas pala
dad? ¿cuáles son los probables resultados bras del Sagrado Texto : entregó el mundo á
que ha de acarrear á la causa de la reli las disputas de los hombres.
gion ? todo esto quiere V. que le diga ; á Todavía me atreveré á añadir, que se
todas estas preguntas exige V. una respues guros los católicos de la verdad en los ne
ta cabal y satisfactoria ; añadiéndome , que gocios que mas les importan , pueden ocu
« quizás de esta manera se esclarezcan al parse de las cuestiones puramente filosóficas
gun tanto las tinieblas de su entendimiento, con ánimo mas tranquilo y sosegado , que
y se disponga á entrar de nuevo bajo el no los incrédulos y escépticos; mediando
imperio de la fe. » entre ellos la diferencia que va de un ob
servador que contempla los fenómenos ter
restres y celestes desde un lugar á cubierto
( 1 ) Deseoso el autor de esta Revista , de que de todo peligro , á otro que se halla preci
la Polémica Ileligio$a no adolezca de monotonía ni sado á verificarlo desde una frágil tabla
engendre fastidio, procura presentarla bajo dife
rentes formas , empleando algunas veces el estilo abandonada á la merced de las olas. ¿Cuán
epistolar, que de suyo se brinda 4 mayor variedad do entenderán los enemigos de la religion,
y soltura. Bien penetrado además , de lo grave y que la sumision á la autoridad legítima
espinoso de las materias que ha de ventilar, sobre
todo en la indicada Polémica ; y descando precaver nada tiene de servilismo, que el homenage
todo error ó desliz, que tan fáciles son en esta cla tributado á los dogmas revelados por Dios,
se de discusiones, avisa á cuantos le favorezcan no es torpe esclavitud , sino el mas noble
con su lectura , y muy especialmente á los señores ejercicio que hacer podamos de la libertad ?
eclesiásticos , que recibirá gustoso y agradecido las
advertencias que se le dirijan , encaminadas á rec Tambien los católicos examinamos, tam
tificar equivocaciones , á esclarecer pasages oscu bien dudamos , tambien nos engolfamos en
ros , ó A retractar errores , si alguna vez mcurrie el piélago de las investigaciones; pero no
re en ellos. Los que defiendan la religion católica dejamos la brújula de la mano , es decir la
no deben jamás perder de vista aquella máxima;
errare potero , haretieus non ero. fe ; porque asi en la luz del dia como en
 GO
las tinieblas de la noche , queremos saber descendiendo de sus celestiales excursiones
donde está el polo para dirigir cual convie se dignaban poner de nuevo sus piés sobre
ne nuestro rumbo. la tierra.
Habla V. de la flaqueza de nuestro espí La literatura , me decia yo á mí mismo,
ritu, de la incertidumbre de los conoci sus investigaciones sobre lo bello, lo subli
mientos humanos , de la necesidad de dis me , sobre el buen gusto , sobre las pasio
cutir con aquella modesta reserva inspirada nes, les suministrarán seguras reglas para
por el sentimiento de la propia debilidad; producir en el ánimo del oyente ó del lec
pues qué ? ¿ por ventura esas mismas re tor el efecto que se quiera; sus estudios
flexiones no son la mas elocuente apología sobre la lógica é ideología les darán un cla
de nuestra conducta ? ¿no es esto mismo lo rísimo conocimiento de las operaciones del
que estamos continuamente encareciendo, espíritu , y de la manera de Combinarlas y
cuando probamos y evidenciamos que es conducirlas para alcanzar la verdad en todo
útil , que es prudente , que es cuerdo , que linage de materias; las ciencias matemáti
es indispensable el vivir sometido á una cas y físicas , deben de rasgar el velo que
regla ? Supuesto que se ofrece la oportuni cubre los secretos de la naturaleza ; y la
dad , y que la buena fe exige que bablemos creacion entera con sus arcanos y maravi
con toda sinceridad y franqueza , debo ma llas se desplegará á los ojos de los sabios,
nifestarle, mi estimado amigo, que salvo como se desarrolla un raro y precioso lien
en materias religiosas, me inclino á creer zo á la vista de los favorecidos espectado
que no lleva V. tan adelante el escepticis res; la psicología los llevará á formarse
mo como este que V. se imaginaba tan una completa idea del alma humana, de
dogmático. su naturaleza, de sus relaciones con el
Hubo un tiempo en que el prestigio de cuerpo , del modo de ejercer sobre esta su
ciertos nombres , el deslumbramiento pro accion, y de recibir de él las varias impre
ducido por la radiante auréola que corona siones ; las ciencias morales , las sociales y
ba sus sienes , la ninguna experiencia del políticas , les ofrecerán en vasto cuadro la
mundo científico, y sobre todo el fuego admirable armonía del mundo moral , las
de la edad ávido de cebarse en algun pá leyes del progreso y perfeccion de la socie
bulo noble y seductor , me habian comu dad , las infalibles reglas para bien gober
nicado una viva fe en la ciencia, y me nar ; en una palabra , me imaginaba yo,
hacían saludar con el alborozo el dia afor que la ciencia era un talisman que obraba
tunado, en que introducirme pudiera en maravillas sin cuento , y que quien llegase
su templo para iniciarme en sus profundos á poseerla , se levantaba á inmensa altura
arcanos, siquiera como el último de sus sobre el vulgo de la triste humanidad. ¡Va
adeptos. Oh ! aquella era la mas hermosa na ilusion que bien pronto comenzó á mar
ilusion que halagar pudo el alma humana: chitarse , y que al fin se deshojó como flor
la vida de los sabios me parecía á mí la de secada por los ardores del estío !
un semi-dios sobre la tierra ; y recuerdo Cuanto mas dorados habian sido mis
(pie mas de una vez fijaba con infantil en sueños, y mayor por consiguiente mi avi
vidia mis ojos sobre un albergue que en dez de conocer lo que tenian de realidad,
cerraba un hombre mediano , que yo en tanto mas dura fué la leccion que recibi y
mi experiencia conceptuaba gigante. Pene mas temprana vino la hora de entender mi
trar los principios de todas las cosas, le engaño. Apenas entrado en aquellas asig
vantar el túpido velo que cubre los secretos naturas donde se ventilan algunas cuestio
de la naturaleza , levantarse á regiones su nes importantes, principió mi espíritu á
periores descúbriendo nuevos mundos que sentir una inquietud indefinible, á causa
se escapan á los ojos de los profanos , res de no hallarme bastante ilustrado por lo
pirar en una atmósfera de purísima luz, que leia ni lo que oia. Ahogaba en el fondo
donde el espíritu se despegara del cuerpo, de mi alma aquellos pensamientos que sur
adelantándose á gozar de las delicias de un gían incesantemente sin poderlo yo reme
nuevo porvenir; estos creia yo que eran diar ; y procuraba acallar mi descontento,
los beneficios que proporcionaba la ciencia, lisonjeándome con la esperanza de que para
nadando en esta felicidad contemplaba yo mas adelante me estaba reservado el que
á los sabios; viniendo por fin los aplausos darme enteramente satisfecho. « Será me
y la gloria que á porfía los rodeaban , á so nester , me decia yo , ver primero todo el
lazarlos en los breves momentos en que cuerpo de doctrina , de la cual no alcanzas
 — 61-
ahora mas que los primeros rudimentos ; y sion que sobre las ciencias me habia for
entonces á no dudarlo , encontrarás la luz mado. Estos desengaños habian preparado
y la certeza qup en la actualidad echas mi espíritu á una verdadera revolucion ; y
menos. aunque vacilando algunos momentos, al fin
Difícilmente hubiera podido persuadirme me decidí á pronunciarme contra los pode
á la sazon , que hombres cuya vida se ha res científicos, y alzando en mi entendi
bia consumido en ímprobos trabajos, y que miento una bandera , escribi en ella : abajo
con tal seguridad ofrecían al mundo el fru la autoridad científica.
to de sus sudores , hubiesen aprendido so Nada tenia yo para sustituir al poder
bre las pravísimas materias de que se ocu destruido , porque si esos respetables filó
pan , poco mas que el arte de hablar con sofos sabian poco sobre las altas cuestiones
facilidad en pro ó en contra de una opinion, cuya solucion andaba buscando , yo sabia
metiendo mucho ruido con palabras hue menos que ellos, pues que no sabia nada.
cas, y con discursos pomposos. Todas mis Ya puede V. imaginarse que no dejaría de
dificultades , todas mis dudas y escrúpulos, serme doloroso el consumar una revolucion
todo lo atribuía á mi inexperiencia , á mi semejante; y que á veces hasta me acusaba
torpeza en comprender el sentido de lo que de ingrato, cuando llevando la revolucion
me decian autores tan respetables: por cu hasta sus últimas consecuencias , forzaba á
yo motivo se apoderó de mi la idea de sa emigrar de mi espíritu personas tan respe
ber el arte de aprender. No se afanaron tables , como Platon , Aristóteles , Descar
tanto los antiguos químicos en pos de la pie tes , Malebranche , Leibnitz , Locke y Con
dra filosofal , ni los modernos publicistas dillac. La anarquía era el necesario resultado
en busca del equilibrio de los poderes , co de un paso semejante ; pero yo me resig
mo yo andando en zaga del arte maravillo naba gustoso á ella , antes que llamar nue
so : y Aristóteles , con sus infinitos secta vamente al gobierno de mi entendimiento
rios , y Raimundo Lulio , y Descartes , y á estos señores que asi me habian engaña
Malebranche , y Locke , y Condillac , y no do. Además , que habiendo probado ya el
sé cuantos menos notables , cuyos nombres placer de la libertad , no quería deslustrar
no recuerdo , no bastaban á satisfacer mi el triunfo, pasando por las horcas cau-
ardor. Quien me ocupaba y confundía dinas.
con las mil reglas sobre los silogismos, Apremiado mi espíritu por la sed de la
quien señalaba mayor importancia á los verdad , no podia quedar en un estado de
juicios y proposiciones, quien á la claridad completa inercia; y asi es que emprendí
y exactitud de la percepcion , quien me buscarla con mayor empeño , no pudiendo
abrumaba con preceptos sobre el método, creer que estuviera el hombre condenado
quien me llevaba de la mano á la investi a ignorarla , mientras vive en este mundo.
gacion del origen de las ideas , dejándome Sin duda creerá V. que un escepticismo
mas en oscuras que antes; en breve, no universal fué el inmediato resultado de mi
tardé en advertir que cada cual echaba por revolucion , y que concentrado dentro de
su camino favorito , y que á quien en se mí mismo , dudé de la existencia del mun
guirlos se empeñase le habian de volver la do que me rodeaba , dudé de la existencia
cabeza. de mi propio cuerpo , y que temeroso de
Estos señores directores del entendimien que no se me escapara toda existencia , y
to humano, dije para mi mismo, no se en que á manera de encantamiento me hallase
tienden entre sí: esto es la torre de Babel, reducido á la nada , me apresuré á asirme
en que cada cual habla su lengua; con del raciocinio de Descartes: yo pienso, luego
la diferencia de que allí el orgullo acarreó soy : ego cogito , ergo suni Pues nada de eso,
el castigo de la confusion , y aqui la confu mi estimado amigo; que si bien tenia algu
sion misma aumenta el orgullo, erigiéndo na aficion á la filosofía no estaba sin em
se cada cual en único legítimo maestro, y bargo fanatizado por el filósofo ; y sin re
pretendiendo que todos los demás no ofre flexionar mucho me convencí de que dudar
cen para el derecho de enseñanza sino títu de todo es carecer de lo mas precioso de la
los apócrifos. Al propio tiempo, iba notan razon humana , que es el sentido comun .
do que lo mismo con corta diferencia No me faltaba la noticia del axioma ó enti-
sucedía en los demás ramos del humano mema de Descartes , y de otras semejantes
saber ; con lo que entendí , que era nece proposiciones ó principios; pero siempre
sario, urgente, desterrar la hermosa ilu me pareció que tan cierto me ustaba de
 — 62 —
que existia como de que pensaba, como de del hombre , y cuando me parecía que la
que tenia cuerpo , como del movimiento, duda se iba apoderando de mí espíritu,
como de las impresiones de los sentidos, haciendo desaparecer de mis ojos el uni
como del mundo que me rodeaba ; y por verso entero, como desaparecen de la vista
consiguiente , reservándome fingir por al de los espectadores las mentirosas ilusiones
gunos momentos esa duda, para cuando el con que por algunos momentos los ha en
ocio y el humor lo consintieran , me quedé tretenido un hábil prestigiador , daba una
con todas las convicciones y creencias que mirada á la fe , y su solo recuerdo era bas
antes, salvo las llamadas filosóficas. Para tante á confortarme y alentarme.
estas fui , y he sido y seré inexorable : la Recorriendo las cuestiones , que cual in
filosofía proclama sin cesar el exámen , la sondables piélagos rodean los principios de
evidencia , la demostracion ; enhorabuena: la moral , examinando los incomprensibles
pero sepa al menos que cuando seamos problemas de la ideología y de la metafísi
hombres y no mas, nos arreglaremos en ca , echando una ojeada á los misterios de
nuestras convicciones cual á nosotros nos la historia y á los escrúpulos de la crítica,
cumpla, siguiendo las inspiraciones del contemplando la humanidad entera en su
buen sentido; pero en los ratos en que sea actual existencia y en los sombríos arcanos
mos filósofos , que para todo hombre son de su porvenir , deslizábanse á veces por
ratos muy breves, reclamaremos sin cesar mi entendimiento pensamientos aciagos,
el derecho de exámen , exigiremos eviden cual monstruos desconocidos que asoman
cia, pediremos demostracion seca. Quien su cabeza, asustando al viagero en una
reina en nombre de un principio, menes playa solitaria ; pero yo tenia fe en la Pro
ter es que se resigne á sufrir los desaca videncia, la Providencia me salvó. Hé aquí
tos que dimanar puedan de las consecuen como discurría para fortificar mi espíritu,
cias. dejando á la gracia que no dejara estériles
Claro es que en este naufragio universal mis débiles esfuerzos : « Si dejas de ser ca
de las convicciones filosóficas, no entraban tólico , no serás por cierto ni protestante ,
las religiosas : estas las habia adquirido por ni judío, ni musulman , ni idólatra; esta
otro camino , se presentaban á mi espíritu rás pues de golpe en el Deismo. Entonces
con otros títulos , y sobre todo se encami te hallarás con un Dios , pero no sabiendo
naban de suyo á dirigir la conducta, á ha nada sobre tu origen y tu destino, nada
cerme nó sabio sino bueno ; de consiguien sobre los incomprensibles misterios que por
te contra ellas no se irritó mi susceptibili experiencia ves y sientes en tí mismo y en
dad pirrónica. Todavía mas : tan lejos de II la humanidad entera , nada sobre la exis
que sintiera inclinacion á separarme de las tencia de premios y penas en otro mundo,
creencias que se me habian inspirado en la sobre la otra vida , sobre la inmortalidad
infancia , me convencí mas y mas de la ne del alma ; nada sobre los motivos que haya
cesidad , y hasta del interes propio que te podido tener la Providencia en condenar á
nia en no perderlas ; pues que comencé á sus criaturas á tantos sufrimentos sobre la
mirarlas como la única tabla de salvacion tierra, sin darles ninguna noticia que con
en este proceloso mar de las cavilaciones solarlas pudiera con la esperanza de otros
humanas. Acrecentóse el deseo de aferrar- destinos; nada entenderás de las grandes
me en la fe católica , cuando ocupándome catástrofes que con tanta frecuencia ha pa
algunos ratos , con espíritu de completa in decido , padece y andará padeciendo el hu
dependencia, en el exámen de las trascen mano linage; es decir que no hallarás la
dentales cuestiones que la filosofía se pro accion de la Providencia en ninguna parte,
pone resolver, me vi rodeado por todas no hallarás por consiguiente á Dios, por
partes de espesísimas tinieblas; sin que tanto dudarás de su existencia , si es que
descubriese mas luz que algunas ráfagas si no abraces decididamente el ateismo. Fuera
niestras , que sin alumbrar el camino , solo Dios del universo, el mundo es hijo del
servían para hacerme visible la profundi acaso , y el acaso es una palabra sin senti
dad de los abismos á cuyo borde se halla do, y la naturaleza un enigma, y el alma
ban mis plantas. humana una ilusion , y las relaciones mo
Por esto conservaba en el fondo de mi rales nada , y la moral una mentira. Con
alma la fe católica como un tesoro de ines secuencia lógica, necesaria, inflexible; tér
timable valor; por esto al encontrarme an mino fatal que no puede el hombre
gustiado en vista de la nada de la ciencia contemplar sin estremecerse , negro é in
 — 63 —
sondable abismo al cual no cabe abocarse desdo el momento en que la existencia está
sin espanto y horror. » en peligro, cuando vienen las enfermeda
Asi medía el camino que me era preciso des como heraldos de la muerte , á indicar
seguir , una vez apartado de la fe católica, nos que no está lejos el terrible trance,
si continuar intentara en el exámen filosó- cuando un riesgo imprevisto nos advierte
lico sacando consecuencias de los principios que estamos como colgantes de un hilo so
que yo propio hubiera sentado en el mo bre el abismo de la eternidad , entonces el
mento de la defeccion. A tanta insensatez escepticismo deja de ser satisfactorio; la
no quería yo llegar, no quería suicidarme mentida seguridad que poco antes nos pro
de tal suerte matando mi existencia inte porcionara , se trueca en incertidumbre
lectual y moral , apagando de un soplo la cruel, angustiosa, llena de remordimien
sola antorcha que alumbrarme podia en el tos, de sobresalto, de espanto. Entonces el
breve trecho de la vida. Asi me he queda escepticismo deja de ser cómodo, y pasa á
do con mucha desconfianza en la ciencia ser horroroso; y en su mortal postracion
del hombre , pero con profunda fe religio busca el hombre la luz y no la encuentra ,
sa : llámelo V. pusilanimidad ó como mas llama á la fe, y la fe no le responde; invo
le agradare; no creo sin embargo, que me ca á Dios , y Dios se hace sordo á sus tar
pese de la resolucion cuando me halle al días invocaciones.
borde de la tumba. Y para ser el escepticismo duro, cruel
Hay en las regiones de la ciencia como tormento del alma, no es necesario hallar
en los senderos de la práctica , ciertas re se en esos trances formidables en que el
glas de buen juicio y prudencia de que no hombre fija azorada su vista en las tinieblas
debe el hombre desviarse jamás. Todo lo de un incierto porvenir; en el curso ordi
que sea luchar con el grito de nuestro sen nario de la vida , en medio de los aconteci
tido íntimo, con la voz de la naturaleza mientos mas comunes , siente mil veces el
misma , para entregarse á vanas cavilacio hombre cual cae gota á gota sobre su co
nes , es ageno de la cordura , es contrario razon el veneno de la víbora que en su se
á los principios de la sana razon. Por esta no abriga. Momentos hay en que los place
causa , debe condenarse como insensato el res cansan , el mundo fastidia , la vida se
sistema de un escepticismo universal hasta hace pesada , la existencia se arrastra sobre
en las materias puramente filosóficas ; sin un tiempo que camina con lentitud pere
que por esto sea menester abrazar ciega zosa. Un tedio profundo se apodera del al
mente las opiniones de esta ó aquella es ma; un indecible malestar la aqueja y
cuela. Pero donde conviene particularmen atormenta. No son los pesares abrumado
te la sobriedad en el uso de la razon es en res destrozando el corazon, no es la triste
materias religiosas: porque siendo estas de za abatiendo el espíritu , y arrancándole
un órden muy elevado, y rozándose en dolorosos suspiros por medio de punzantes
muchos puntos con las torcidas inclinacio recuerdos: es una pasion que nada tiene de
nes del corazon , tan presto como la razon vivo, de agudo, es una languidez mortal,
empieza á cavilar y sutilizar en demasía, es un disgusto de cuanto nos circunda , es
se halla el hombre en un laberinto donde un penoso entorpecimiento de todas las fa
paga muy caro su presuncion y orgullo. cultades, como aquel desasosegado estupor
Quédase el entendimiento en un cansancio, que en ciertas dolencias anuncia crisis pe
en un abatimiento, en una postracion inde ligrosas. ¿A qué estoy yo en el mundo, se
cibles, desde que se ha levantado contra el dice el hombre á sí mismo ? ¿ Qué ventajas
cielo; como nos cuentan las historias de me trae el haber salido de la nada ? ¿ Qué
aquel brazo que en el momento de exten pierdo apartándome dela vista de una tier
derse á un objeto sagrado se sintió herido ra , para mí agostada , de un sol que para
de parálisis. m í no brilla ? El dia de hoy es insípido co
Singularidad notable ! el escepticismo mo el dia de ayer, y el dia de mañana lo
religioso sirve únicamente en medio de la será como el de hoy ; mi alma está sedien
dicha terrena, solo se alberga tranquila ta de gozar y no goza; ávida de dicha y no
mente en el hombre, cuando rebosando de la alcanza; consumiéndose como una an
salud y de vida, mira como eventualidad torcha que por falta de pábulo desfallece.
muv lejana el instante supremo , en que le ¿No ha sentido V. repetidas veces, mi es
-erá preciso al espíritu el despegarse del timado amigo , este tormento de los afortu
y pasar á otra vida. Pero nados del mundo , ese gusano roedor de los
 espíritus que se pretenden superiores? ¿ no 64de—tantos errores , y que de tal suerte se
asoma jamas en su pecho ese movimiento extravie sobre los puntos que mas intere
de desesperacion que se ofrece al hombre san? Esta dificultad no se limita á la per
como el único remedio á un mal tan inso mision divina con respecto á las sectas se
portable? Pues sepa V. que uno de sus mas paradas , sino que se extiende á las demas
funestos manantiales es el escepticismo, ese religiones ; y como estas han sido muchas
vacío del alma que la desasosiega y ator y extravagantes desde que el humano lina-
menta , esa ausencia espantosa de toda fe , ge se apartó de la pureza de las tradiciones
de toda esperanza, esaincertidumbre sobre primitivas, la objecion abarca la historia
Dios, sobre la naturaleza, origen y destino entera, y el pedir su solucion es nada me
del hombre. Vacío tanto mas sensible, nos que demandar la clave para explicar
cuanto recae en almas ejercitadas en el dis los arcanos que en tanta abundancia- se
curso por el estudio de las ciencias, exci ofrecen en la historia de los hijos de Adan.
tadas en todas sus facultades mentales por No es este asunto que se preste á ser
una literatura loca que solo se propone aclarado en pocas palabras, si aclaracion
producir efecto, aunque sean los sacudi llamarse puede lo que sobre tan profundo
mientos de la electricidad ó las convulsio misterio alcanza el débil hombre; como
nes del galvanismo; almas que sienten avi quiera, procuraré hacerlo en otra carta,
vadas y aguzadas todas las pasiones por un dado que la presente va tomando mas en
inundo sagaz que les habla en todos los sanche del que fuera menester.
idiomas y las conmueve de tan varias ma Manifestada tiene V. mi opinion sobre el
neras , echando mano de infinidad de re escepticismo religioso , y declarado tambien
cursos. cuál se aviene la fe católica con una pru
Hé aquí, mi estimado amigo, lo que dente desconfianza de los sistemas de los
pienso del escepticismo, lo que opino de filósofos. Muchos quizás no se avengan con
sus efectos sobre el espíritu humano. Le esta manera de mirarlas cosas; sin embar
considero como una de las plagas caracte go la experiencia demuestra que el espíritu
rísticas de la época , y uno de los mas ter se halla muy bien en este estado ; y que
ribles castigos que ha descargado Dios so cierto grado de escepticismo científico, ha
bre el humano linage. ce mas fácil y llevadera la fe religiosa. Si
¿ Cómo se puede remediar un mal tama en ella no me mantuviese la autoridad de
ño ? no lo sé ; pero sí que me atreveré á una Iglesia que lleva mas de 18 siglos de
decir que se pueden atajar algun tanto sus duracion, que tiene en confirmacion de su
progresos; y me inclino á esperar que así divinidad su misma conservacion al través
se hará, siquiera por el interés de la socie de tantos obstáculos, la sangre de innume
dad , por el buen orden y bienestar de la rables mártires, el cumplimiento de las
familia, por el reposo y sosiego del indivi profecías, infinitos milagros, la santidad
duo. El escepticismo no ha caido de repen de la doctrina , la elevacion de sus dogmas,
te sobrelos puebloscivilizados; es una gran- la pureza de su moral , su admirable ar
grena que ha cundido con lentitud; lenta monía con todo cuanto existe de bello , de
mente se ha de remediar tambien ; y seria grande, de sublime, los inefables benefi
uno de los mas estupendos prodigios de la cios que ha dispensado á la familia y á la
diestra del Omnipotente si para su curacion sociedad, el cambio fundamental que en
no fuera menester el trascurso de muchas pro de la humanidad ha realizado en todos
generaciones. los paises donde se ha establecido, y la de
Asi entenderá V., mi estimado amigo, gradacion, el envilecimiento que sin ex
que no me hago ilusiones sobre la verda cepcion veo reinando allí donde ella no do
dera situacion de las cosas ; y que flotando mina ; si no tuviera , digo , todo este
yo en medio de las olas sobre la tabla que imponente conjunto de motivos para con
me conducirá á salvamento , no pierdo de servarme adicto á la fe , haría un esfuerzo
vista el destrozo que en mis alrededores para no apartame de ella , cuando no fuera
existe , no olvido la funesta catástrofe que por otra razon , por no perder la tranqui
han sufrido los espíritus por un fatal con lidad de espíritu.
curso de circunstancias durante los tres úl Dé V. una ojeada en torno , mi estima
timos siglos. do amigo : no verá mas por do quiera que
¿Como permite Dios, me dice V. , que horribles escollos , regiones desiertas , pla-
ande fluctuando la humanidad en medio || yas inhospitalarias. Este es el único asilo
 para la triste humanidad ; arrójese quien 65al — templo, la misma les daba la señal de
quiera al furor de las olas, yo no dejaré desparramarse fuera de él , para que en
esta tierra bendita donde me colocó la Pro graves y dilatadas hileras recorriesen los
videncia. Si algun dia fatigado y rendido lugares públicos, invocandola misericordia
de luchar con las tempestades se aproxima del Señor del Universo, en ese inmenso
V. á las venturosas orillas, se tendrá por templo que anuncia de dia y de noche la
feliz si en algo puede favorecerle tendién gloria de su Criador , que tiene por antor
dole una mano auxiliadora este S. S. S. cha la lumbrera mayor, el Sol , y por bó
Q. B. S. M. — /. B. veda el firmamento. ¡ Qué bello , qué su
blime espectáculo , ofrecía entonces una
ciudad populosa I Allí se veia el niño lle-<
LA RELIGION vando en su tierna mano el cirio misterioso,
y pronunciando con labio balbuciente la
plegaria de perdon ; plegaria de inestima
BIT BARCELONA. ble valor, que tomada de la boca de la ino
cencia por la mano de un ángel , era pre
sentada ante el trono del Altísimo como el
Allá en tiempo de nuestros antepasados, mas agradable incienso que remontarse pu-
cuando la fe reinaba en los entendimien | diera de la mansion del mortal. Allí se
tos, y la esperanza en los corazones , cuan 1 veian las clases con sus distintivos , las cor-
do la sociedad entera se regia por la ense | poraciones , los gremios con sus enseñas ;
ñanza de la Iglesia católica , cuando el | las autoridades con sus insignias ; allí alter-
poder y el pueblo , el rico y el pobre , y la I naban el artesano con el letrado , el rico
ciencia y las artes demandaban a la Religion I con el jornalero , el noble con el plebeyo ;
sus inspiraciones sublimes , sus ilustrado allí se veian las órdenes religiosas con sus
res consejos, y sobre todo su proteccion variados hábitos, su paso ¿rave, su cantar
poderosa, cuando los sucesos prósperos eran solemne ; el jóven religioso, de los ojos mo- .
mirados como una gracia del cielo , y los destos, de semblante humilde, de las me
adversos como un justo castigo, cuando se jillas sonrosadas con pudor virginal; el an
veia presente á Diosen todas partes, desde ciano venerable , de la frente calva , de la
la cúpula del regio alcázar hasta lo mas re barba de nieve , del rostro surcado con
cóndito del humilde hogar doméstico ape largos años de austeridad y de penitencia ,
nas se encontraban un reino , una provin del cuerpo extenuado con dilatadas fatigas
cia , una ciudad en peligro de grave dano , en misiones, en estudios, en peregrinacio
ó sufrían alguna de tantas calamidades co nes por lejanos paises para ganar almas á
mo sin cesar afligen á la desgraciada prole Jesucristo; allí se veia el clero con sus ma
de Adan , todas las miradas se levantaban gestuosos ornamentos , su blanquísimo y
al cielo , todas las almas se encumbraban bordado lienzo, su seda recamada; allí por
sobre la region material y terrena , para fin el augusto tabernáculo, á cuya presen
implorar clemencia y alcanzar socorro. Los cia todas las frentes se inclinaban , se hin
templos se llenaban de fielesque suplicaban caban de rodillas, se herían los pechos con
con oracion fervorosa ; en los altares de los fervorosa compuncion.
santos resplandecían en abundancia cirios y ¿ Qué se ha hecho de aquella fe , que de
blandones, las imágenes se adornaban con tal suerte nos conservaba en presencia de
preciosas dádivas , el sacerdote recibia cuan Dios , que asi nos detenia con el temor del
tiosas ofrendas, celebrábase el augusto sa castigo, ó nos alentaba con la esperanza del
crificio con solemne pompa y magestad , los perdon? ¿Dónde están las piadosas costum
oradores sagrados predicaban con piadoso bres de nuestros mayores? perdon? ¿Quién
fuego la divina palabra, arrancando del clama misericordia en la adversidad? ¿quién
numeroso auditorio el grito de compuncion rinde gracias al Altísimo en la próspera suer
y de humildad, que lanzara en otro tiempo te ? ¿Se ha hecho atea nuestra sociedad ? ¿he
el Rey culpable en presencia del Profeta mos desterrado á Dios de nuestros corazones?
Nal han : pequé!.... ¿le consideramos relegado á los templos, co
La religion , la piedad , la fe , la espe mo aquellos idolosque tienen ojos y no ven,
ranza, no cabiendo en la casa del Señor, que tienen oidos y no oyen? Estas son las
inundaban las calles, las plazas, los paseos; reflexiones que ocurren al dar en torno de
la sonorosa campana convocaba á los fieles nosotros una mirada ; estos son los pensa-
tomo i. 5
 — fifi —
mientos que afligen el ánimo, inundándole donde en la apariencia debia la Religion
de un desconsuelo, de una amargura inex haber llegado a ser para el mayor núme
plicables. A primera v ista , contemplando ro , cosa de poco valer cuando no odiada ;
tan solo en la superficie la sociedad que nos Barcelona, repetimos, se ha vindicado úl
rodea , solo ocupada de sus adelantos fabri timamente de tan negro cargo, manifestan
les , de su movimiento mercantil , de su do á la faz de España y del mundo entero,
hambre de oro , de su sed de placeres , de que muchos de sus moradores no habian
su ostentoso lujo , de su disipacion , de su desterrado á Dios de su corazon , que con
vanidad científica y literaria , de su delirio servan fe en la Providencia ; manifestando
político, de su refinado egoismo, parece que las augustas creencias de los antepasa
que la Religion ha desaparecido de la faz dos se mantenían aun en el fondo de esa
de la. tierra, parece (pie empieza á cum populosa ciudad , en cuya superficie no se
plirse la terrible profecía sobre el enfria descubriera tal vez mas que incredulidad ó
miento de la caridad y la falta de fe, y que indiferencia ; revelándose de esta suerte la
se acercan aquellos dias que por demasiado misteriosa llama que se habia creido extin
formidables serán abreviados. Pero reco guida, porque sus resplandores no alum
brado el espíritu de su primera sorpresa , braban con tan hermoso brillo como en
calando mas hondo en el corazon de la so otros tiempos.
ciedad, siguiendo cuidadosamente los pasos El infortunio , el infortunio que levanta
de los que evangelizan la paz , observando el espíritu del hombre á meditaciones su
la conducta de los que no doblaron la ro blimes , que eleva el corazon á Dios como
dilla ante Baal , se reanima la confianza , se alzan involuntariamente los ojos y las
se disipan los excesivos temores , se calma manos, el infortunio que recuerda á los
el desazon y el desconsuelo, porque se individuos como á los pueblos, la vanidad
encuentra que todavía hay Dios sobre la de toda esperanza que no se funda en Dios,
tierra. el infortunio que demuestra lo que debe
Pensamiento dulce, consolador, que mi mos prometernos del afecto y de la gratitud
tiga en el ánimo fiel y piadoso el dolor cau de los hombres, el infortunio ha sido quien
sado por la vista de los estragos de la ha venido á dispertar el sentimiento reli
impiedad ; pero que desgraciadamente es gioso , á recordar la fe de nuestros padres,
necesario buscar en las sombras del san y á patentizar la necesidad de la Religion
tuario , ó en lo mas retirado del hogar do en todas las situaciones de la vida , y par
méstico , donde se oculta la virtud orando ticularmente entre los rigores de adversa
al Padre Celestial , en el aposeulo á puerta suerte.
cerrada, segun la enseñanza del Divino Dudaríamos todavía de la realidad de lo
Maestro. Solo de vez en cuando se com que hemos presenciado , recelaríamos que
place el Señor en hacer mas visible el cre nuestro buen deseo no abultase algun tanto
cido número de escogidos que se mantienen los objetos , temeríamos (pie la viveza de la
libres del contagio de la incredulidad y de impresion no nos la hiciera parecer como
las abominaciones del mundo ; y entonces mas repetida de lo que haya sido en la
lejos de continuar el espíritu en la postra realidad , si no tuviéramos á la vista un
cion y el abatimiento , se siente reanimado documento que no consiente réplica : la
con la agradable sorpresa que experimenta, relacion de las funciones religiosas que se
al ver (pie todavía puede decir: mayor es han celebrado en esta ciudad , en accion
el número de los que están de nuestra par de gracias por haberse dignado el Señor
te que de la contraria ; entonces adora hu libertar á muchos de sus habitantes de los
mildemente la omnipotencia del Señor que males que en las pasadas catástrofes ame
tan admirablemente preserva del naufragio nazaban á sus bienes y personas. Si estas
la combatida navecilla , y le rinde humilde funciones se hubiesen celebrado en otras
accion de gracias, porque su misericordia épocas, si viéramos aqui las insinuaciones
nos ha librado de ser consumidos. y excitaciones de los poderosos , si se des
Barcelona, donde en tiempos de infausta cubriera el mas remoto indicio de espíritu
memoria se presenciaron excesos que la de partido, no diéramosá estos datos tanta
pluma se resiste á trazar, donde el incendio importancia ; pero cuando vemos que son
de los templos y el degüello de los minis la espontánea expresion de la fe , cuando
tros del santuario , se verificaron en pre vemos en ellos la candida efusion de un
sencia de las autoridades y del pueblo, religioso agradecimiento á las bondades del
 — 67 —
Señor, cuando vemos que ni siquiera es Novenarios con música 2.
posible señalar como circunstancia que dis llosario con id. y sermon 1.
minuya su valor el apremiador agobio de Exposicion del SS. Sacramento por
los momentos de peligro , sino que se han espacio de 13 horas 1.
celebrado pasado este , en la mayor segu Cirios , los mas de media libra , y los
ridad , en la expansion de los ánimos que otros de una y de dos 1230.
acababan de salir de un terrible conflicto, Octavario al SS. Sacramento con ex
y hasta largo tiempo despues , cuando han posicion y sermon todos los dias.
podido ya debilitarse las impresiones que Esta funcion continúa hoy dia 5
produjeran las catástrofes, las miramos co de marzo y durará por tiempo in
mo una especie de barómetro que nos hace definido 1.
sensible la disposicion de los espíritus. Triduos á id. con id. é id. todos por
Consideramos este hecho como de mu tres d¡»s 1.
cha importancia para apreciar debidamente En muchas de las capillas de dicha
cuánto es todavía el poder de la Religion , iglesia, alumbran de continuo ci
hasta en aquellos puntos donde circunstan rios en abundancia , principalmen
cias calamitosas debian al parecer haberla te al Beato Oriol, Ntra. Sra. de
debilitado de tal manera , que quedase re los Dolores, San Antonio, Virgen
ducida á la nada ; por cuyo motivo , cree del Rosario, Concepcion y Santa Fi
mos hacer un bien á la santa causa de la lomena. Y se están aun preparando
verdad , y complacer al propio tiempo á algunas novenas para igual objeto.
nuestros lectores , ofreciéndoles la siguien
te relacion , que dice mas por sí sola que SANTA MARIA DEL PINO.
todos los discursos y encarecimientos.
En el dia 8 de enero , misa solemne
SOLI con exposicion del Santísimo Sa
cramento. Por la tarde ejercicios
espirituales , procesion , Te-Deum ,
bendicion y reserva de su D. M. . 1.
PIADOSOS CULTOS Cirios que quemaron durante dicha
funcion 264.
\vkliía\\) tu acción Se ^tacútn á MI (Divina Misas solemnes al Beato José Oriol
con 30 cirios 3.
ITLuaeAtaí¡ %tta. Sta. fa IDltaeti. Wiatta y A Santa Filomena con sermon por la
á oattoA íaitten ev. (ai Sij'etetitcn u-¡ (ai as ?c ía mañana, rosario y sermon por la
pettute ciudad, |v: 6a6cuc (tfitaSo £» jicfca tarde, quemando 60 cirios. ... 1.
ie tu p1.wiuiai }\uat)a¿ cuaiuiiVuVá | i |. A Ntra. Sra. de los Desamparados
con 40 cirios en cada uno 3.
PARROQUIAS. SANTOS JUSTO Y PASTOR
Desde la primera dominica de Ad
SANTA MARÍA DEL MAR. viento , á la ante-vigilia de Navi
dad , rogativas con exposicion del
Misas solemnes con Te-Deum ó salve SS. Sacramento por la tarde, que
al fin en los mas de ellos 42. Diamando cirios 16.
Id. con exposicion del SS. Sacra 1.° de enero, 13 horas con expo
mento y con toda iluminacion. . . 2. sicion de SS. Sacramento, misa
solemne con sermon. Por la tarde
ejercicios espirituales , sermon y
(1) Esta relacion solo llega hasta el día 3 de Te-Deum , alumbrando cirios. . . 124.
marzo. Debéinosla a la piadosa diligencia del Kdo.
D. Jaime Ros presbítero , religioso que fué del con En seguida el octavario con exposi
vento de Padres Dominicos de la presente ciudad , cion de su D.M., quemando cirios. 40.
quien se ha tomado la pena de recoger estas noti Dias de accion de gracias con sermon
cias y arreglarlas de la manera conveniente. Apro por la tarde, iluminando en dos de
vechamos esta ocasion para manifestarle nuestro
' su cristiana laboriosidad. ellos 22 cirios 11-
Luego despues un septenario á Ntra.
Sra. de los Dolores con el Slabal
cantado , sermon y corona cantada
tambien en uno de los 7 dias, que
mando cirios 10.
Concluido el septenario , se hará una
novena á San Antonio y otra á San
Vicente Ferrer con cirios 20.
SAN PEDRO DE LAS PUELLAS.
Misas solemnes en varios altares» con
regular iluminacion 13. Dia 14, otra id. á la Virgen del Re
Dia 8 de enero. 13 horas con expo
sicion del SS. Sacramento , con
solemne con música y Te-Deum.
Por la tarde , trisagio con música ,
quemando
cirios durante dicha funcion , 40.
Dia 22 enero. 13 horas con exposi
cion del Santísimo , misa solemne
y Te-Deum por la mañana , y ser
mon por la tarde, quemando cirios. 70.
Dia 19 febrero. 13 horas con expo
sicion del SSmo. , misa solemne y
cirios por la tarde, quemando 70. Dia 21 , otra id. á la Virgen del Re
sermon
SAN MIGUEL EN LA IGLESIA
DE LA MERCED.
Oficios matutinales 31.
Misas solemnes , una de ellas con ex
posicion y dos con sermon 22.
Quemaron en dichos oficios matuti
nales, cirios 40.
En los solemnes 105.
De continuo á la Virgen de la Merced. 20.
Dia 15 enero, 13 horas con exposi
cion del SS. Sacramento , misa so
lemne con música y sermon por la
mañana; trisagio, oracion y ser
mon por la tarde , quemando de
continuo durante el dia, cirios. . . 70.
Y en la misa y funcion de la tarde. . 304.
Reservado
monacilloselentonaron
SS. Sacramento,
la salve los
Otra misa solemne con sermon y ci
rios 80
Funciones por la tarde con exposi
cion de su D. M. , sermon en cada
dia , entre novena y triduos segui
dos, dias 20.
Quemando en todos ellos , cirios. . . 70. Dia 9. Misa solemne á la Divina Pas
SAN JAIME.
Dia 7 diciembre. Misa solemne á San
Rafael con cirios 18
Dia 8. Misa solemne á la Virgen del
Pilar con salve al fin ; cirios. ... 20
Dia 10, otra id. á la Virgen del Re
medio con salve , y cirios 12
Dia 11 , otra id. á la Virgen del Pilar
con salve, y cirios 30
Dia 12, otra id. á S. Antonio, con
cirios 14
medio con salve , y cirios 14
Dia 15, otra id. á la Virgen de los
Dolores con salve , y cirios 30
Dia 16, otra id. á la Virgen del Pilar,
con salve y Te-Deum, quemando
todo el dia cirios 50
Dia 19, otra id. á la misma con sal
ve , y cirios 12.
Dia 20 , otra id. á la Virgen del Re
medio con salve , y cirios 12.
Dia 21 , otra id. á la Virgen del Pi
lar, con salve y Te-Deum ; cirios. . 20
medio con salve , y cirios 30
Dia 26 , otra id. á id. con salve y Te-
Deum, quemando todo el dia cirios. 60
Dia 27, otra id. á la Divina Pastora
con salve , y cirios 20
Dia 29, otra id. á Jesus Nazareno;
cirios 16
Dia 31. Novenario á la SSma. Trini
dad con exposicion, misa solemne
y sermon por la mañana , y por la
sagio
tarde cantado,
ejercicios concluyendo
espirituales , con
y tri
las
letanías de los Santos.
Diaun8 dia
de enero.
por otro.
Te-Deum con sermon
En el mismo dia hubo exposicion de
S. D. M. por trece horas, velando
en todas ellas cuatro sacerdotes
ue iban entonando los himnos del
S Smo. , y ademas misa solemne
con sermon por la mañana , y Te-
Deum por la tarde , con cirios. . . 250
Rasgo de devocion.
Es de advertir que algunas buenas al
mas estuvieron perennes todas las
trece horas sin comer ni beber.
tora con salve , y cirios 20
Dia 10. Otra id. á la Virgen del Pi — 69Dia — 26, otra id. con exposicion y Te-
lar con salve, y cirios 43. Deum, y cirios 68.
Dia 12. Otra id. á San Antonio con Dia 27, otra id. con id., y cirios. . . 68.
cirios 14. Dia 28, otra id. con exposicion hasta
Dia 24 y 25. Misa solemne cada dia las 6 de la tarde , tres dias segui
con cirios dos, con cirios 68.
Se han cantado ademas muchas otras Dia 30, otra id. id., con cirios. . . . 28.
misas solemnes hasta el 5 de marzo. Dia 31 , otra id. con exposicion, y ci
rios 28.
SAN CUCUFATE. | Dia 1 y 2 de enero. Misa solemne
con cirios 68.
¡ Dia 6. 13 horas con exposicion, misa
Misas solemnes á varios santos de di solemne y completas, con cirios. . 340.
cha iglesia 0. Y en el resto del dia, cirios. . . 32.
Con cirios 20. j Además 3 misas solemnes con expo
Dia 5 de marzo. Trece horas con ex sicion, y cirios 20.
posicion , misa solemne , y sermon Oficios matutinales con regular ilu
mañana y tarde con cirios 56. minacion 3.
I Dia 22. Misa solemne con cirios. . . 70.
SANTA ANA. 20. Dia 23. Misa solemne con cirios. . . 70.
SAN JOSÉ.
Misa solemne con exposicion, y cirios. 30.
SAN PABLO. Cuatro misas solemnes á Ntra. Seño
ra del Cármen, con cirios 16.
Otra con cirios 30.
Misa solemne con exposicion , y otra Dia 19 de febrero. 13 horas con ex
sin exposicion á Ntra. Sra. del Car posicion, misa solemne y sermon
men , con cirios 20. con cirios 80.
SAN AGUSTIN. NUESTRA SEÑORA DEL CÁRMEN.

solemne con exposicion , sermon Dia 25 de diciembre. Dos misas so

mañana
cirios y tarde , y procesion , con 200.
Un octavario al SSmo. Sacramento
con exposicion , misa solemne , y
sermon todas las tardes, con cirios. 60.
BELEN.
Dia 15, misa solemne con música,
sermon mañana y tarde, con cirios. 350.
Misas solemnes á varios santos. ... 3.
SAN FRANCISCO DE PAULA.
lemnes y ejercicios por la tarde
con exposicion, y cirios 60.
Dia 26. Misa solemne y ejercicios por
la tarde con exposicion , y cirios. . 60.
Dial y 2 de enero. Otra id. con id., y
cirios 60.
IGLESIA DE SAN ANTONIO.
Dia 13 de diciembre. Misa solemne
con cirios 40.
CASA DE CARIDAD.

Dia 11 de diciembre. Misa solemne á A expensas de las hermanas. Misa so

San Francisco de Paula, con cirios. 24. lemne con música , y sermon por
Dia 19, otra id. á San Antonio , con la tarde , y cirios 100.
cirios , 10. A expensas de los hermanos, otraidem,
Dia 21 , otra id. á San Francisco de idem, id., y cirios 200.
Paula, con cirios 24.
 — 70
HOSPITAL.
Misa solemne á Santa Elena á ex
pensas de los hermanos; cirios. . . 50.
Otra id. á Ntra. Sra. de la Merced á
expensas de las hermanas, con ci
rios. . , 50.
Otra id. con exposicion y sermon por
la tarde; cirios 60.
CASA DE LA MISERICORDIA.
Otra id. con música y exposicion , y
por la tarde rosario con música ;
cirios 130.
Otra id. por tres dias consecutivos,
con sermon , trisagio y gozos can
tados por la niñas de dicha casa ; á
cuyas expensas y de las de las re
ligiosas sus directoras se hizo la
funcion, con cirios 130.
HOSPITAL DE PEREGRINOS
EN SANTA MARTA.
Otra id. á la Virgen deLRosario, con
cirios 26.
Dia 19 de febrero. Trece horas con
exposicion , misa solemne , y ejer
cicios espirituales, sermon y Te-
Deum por la tarde , con cirios. . . 39.
BEATERIO DE DOMINICAS.
Dia 8 de diciembre. Misa solemne con
exposicion , Te-Deum. y salve por la
mañana ; y ejercicios espirituales
con
por la
exposicion
tarde , con
y trisagio
cirios cantado 27.
Dia 18. Otra id. con menos el Te-
Deum; cirios 25.
Dia 26. Otra id. id. con cirios. . . . 26.
Dia 27. Otra id. id. con cirios. ... 31.
Dia 1 de enero. Otra id. con exposi
cion con
de, , y trisagio
cirios cantado por la tar- . 25.
Dia 6. Otra id. id. con cirios. . . . 25.
Dia 8. Otra id. id. con cirios. . . . 25.
Dia lo. Trece horas con exposicion ,
misa solemne, rosario y trisagio
cantado, sermon y letanías, con
cirios 31 .
Dia 22. Misa solemne á la Virgen del
Rosario, con cirios 22.
Dia 29 de enero. Misa solemne con
cirios 18.
NUESTRA SEÑORA DE LA
AYCDA.
Novenario á María SSma. con expo
sicion de S. D. M. , y cirios. . . 20.
Misas solemnes á Santo Tomás con
sermon y Te-Deutr , y á Ntra. Se
ñora de la Merced ; cirios 32.
Cuatro misas solemnes á San Antonio,
con cirios 20.
Otra id. á Santa Filomena, con ci
rios 20.
Otra id. á San Rafael , con cirios. . . 24.
Otra id. á Ntra. Sra. de la Guia,
con cirios 26.
Dia 22. Trece horas con exposicion y
misa solemne , y por la tarde rosa
rio cantado , trisagio , completas y
letanías, con cirios 37.
Habiendo algunas personas estado to
das las trece horas velando y sin
tomar alimento.
NUESTRA SEÑORA DE LOS
DOLORES.
Quince Misas solemnes , algunas con
Te-Deum, con cirios 40.
Dia 29 de enero. Solemne y devoto
septenario á la Virgen , con mucha
iluminacion , mayormente el últi
mo dia en que hubo exposicion de
S. D. M. , y sermon cada dia, con
cirios 160.
SAN JUAN DE JERUSALEN.
Despues de una larga serie de dias de
rogativas al SSmo. Sacramento con
exposicion de S. D. M. y misa so
lemne cada dia por la mañana y
completas por la tarde con 20 ci
rios ; ha seguido la misma funcion
por espacio de otros siete dias.
Dia 3 de febrero. Trece horas con ex
posicion , misa solemne , ejercicios
espirituales, Te-Deum y completas
al órgano, con cirios 46.
 — 71 —
güello de los religiosos, las profanaciones
Nota. de la casa del Señor , se encontrarán algu
nos libros impíos donde se ataca lo mus
El día 8 de enero quemaban en el santo y augusto que hay en la tierra y en
Santuario de Ntra. Sra. de la lio el cielo; entonces se levantará contra la
na Nova , pueblo de San Gervasio, generacion presente un grito de reproba
cirios 213. cion , se dirá que la incredulidad y la in
Y el dia 22 220. diferencia debian de reinar sin rivales,
cuando tan horrendos atentados se perpe
CATEDRAL. traban. Quizás se hallará entre nuestros
acusadores, alguna persona amiga de re
volver curiosidades antiguas, que habrá
En el trecenario acostumbrado de tropezado en algun polvoriento estante con
Santa Eulalia trece señoras paga un fragmento del presente número y satis
ron el aceite necesario para alum fecha con el descubrimiento inclinará los
brar durante el mismo 13 lámpa ánimos á ideas menos tristes, y atenuará
ras, ademas de las 5 que hay al los cargos que se nos hagan, diciendo:
rededor del sepulcro de dicha San « Me parece que se exageran un tanto la
ta, aumentando considerablemente perversidad de ideas y costumbres de aque
la cera que los devotos en accion lla época : yo tengo entre mis papeles un
de gracias iban ofreciendo todos trozo de un escrito que se publicó en Bar
los días. celona en 1843 por el cual se ve , que ha
Dia 24 de febrero. Misa solemne á biendo sido víctima esta ciudad de alguna
Santa Eulalia , rosario con música, terrible catástrofe, que yo calculo que se
y cirios 196. ria el bombardeo que sufrió en el reinado
Dia 26. Otra id., con cirios 70. de Isabel II durante la Regencia que en su
menor edad ejerció un general llamado
Espartero, que tenia ademas el título de
Creemos que la simple lectura del estado Duque de la Victoria, se celebraron mu
que antecede, basta para convencer con ! chísimas funciones religiosas en las diferen
cuánta verdad hemos afirmado , que la Re tes iglesias; de lo que infiero que no debia
ligion conserva todavía profundas raices en de estar tan perdida la fe como se quiere
esta populosa capital , y que estaban muy ponderar. » Y los curiosos leerán con gusto
lejos de haber alcanzado á extirparla los la parte que se haya conservado de la rela
esfuerzos de la impiedad y los desastres de cion , y sentirán un pesar al ver que la in
la revolucion. Hemos querido ser hasta mi juria de los tiempos haya destruido una
nuciosos en la relacion , porque deseamos parte de ella, y que no les sea dable el en
que no se nos pueda tachar de exagerados; terarse de todos los pormenores con la mis
y el mejor modo de disipar semejante car ma minuciosidad con que aquí se hallan
go , es presentar á la vista los datos que -f4 Bi: , '
prueban victoriosamente la verdad y exac
titud de las aserciones , y no dejan efugio
ni consienten réplica.
Los antiguos cronistas, al escribir la
narracion de algun suceso notable, solían
esmerarseen detallar particularidades, que
para los hombres de su tiempo debian de
pasar desapercibidas, y que sin embargo
la historia ha cuidado de aprovechar,
echando menos con dolor , que circunstan .i, .■ :!'. .
cias al parecer pequeñas no fuesen explica
das todavía con mayor detenimiento. De i t ; 11!i
aquí á algunos siglos , las generaciones ve
nideras leerán con asombro y espanto , los i-, ..• • .. .¡i|. .. ;n ..'A'- li.
trastornos , las catástrofes , los crímenes de •,!,*•.<.!; . .,' ,<'', -.'!.. i -l' icríu
que ha sido teatro esta capital. Se hallará ' |r*é»|i'í ' J.l.l- •' ll.ll! I'.'- '»•! I»•.•••,•
escrito el incendio de los templos , el de , i fji •;•!..•••-•!•.• '!., •.! ':• mí q ''.
 72 todo
— espíritu de parcialidad , y hasta los
sentimientos de antipatía, que por una ú
SITUACION otra causa se abriguen , con respecto á un
amistoso arreglo de los asuntos religiosos.
DEL CLERO ESPAÑOL, Cual sea la situacion del culto y clero en
España , nadie lo desconoce : todos los
partidos lo confiesan ; y acordes en el he
Y cho, solo discuerdan en el señalamiento
URGENTE NECESIDAD DE UN CONCORDATO. de sus causas. No se trata aqui de exami
nar cuáles sean estas, ni á cual de los par
tidos contendientes le quepa mayor ó me
nor parte de culpa ; esto nos empeñaría
en otras discusiones agenas de nuestro ob
Artículo i.° jeto, forzándonos ademas á inculpaciones
y cargos, que por justos, no dejan de ser
Vamos á ventilar una cuestion tan grave desagradables. En la actualidad, no tanto
como espinosa, y que no es posible resol conviene investigar las causas del mal ,
ver á gusto de todos los partidos, ni en como andar en busca de su remedio : dado
armonía con encontrados intereses ; tal es que no estarían en su lugar las discusiones
sin embargo la importancia de la materia, analíticas sobre la conducta de los partidos,
que nos obliga á prescindir de todo linaje cuando el mal se ha hecho tan grave , que
de consideraciones , abordando la dificultad no consiente perder un tiempo precioso que
sin rodeos , de frente , y esponiendo nues tanto se ha menester, para excogitar me
tro parecer con claridad y lisura. dios de atajar pronto su progreso. No son
Ademas , que la ocasion se brinda á es estos vanos temores, no son declamaciones
ta clase de escritos , .supuesto que la prensa infundadas, nó exageraciones de un celo
periódica comienza á manifestarse inclina asustadizo; son hechos reales, públicos,
da á encararse con las graves cuestiones notorios , lamentados por los hombres de
que envuelven un interes nacional ; y que todas opiniones , que se interesan en el por
por consiguiente dominan por su trascen venir de su patria.
dencia y magnitud aquellas otras, que no Los obispos van faltando en casi todas
se elevan sobre la estrecha esfera donde se las diócesis ; unos comen el pan de la emi
agitan los bandos. Sin que pretendamos gracion en tierra extrangera, otros su
juzgar la reciente coalicion de la prensa de cumben bajo el peso de sus años y acha
Madrid , ni la famosa declaracion que fue ques ; y si los negocios van siguiendo el
su resultado , observaremos , que sea cual mismo camino que ahora , no está lejos el
fuere la opinion que se forme sobre este plazo en que habrán desaparecido todos.
negocio, ora se vituperela conducta de los No es necesario entrar en pormenores para
asociados , ora se la encomie , no puede confirmar lo que se acaba de decir : basta
negarse que tamaño suceso es de mucha recordar los muchos años que lleva ya la
gravedad , y que en su fondo se trasluce interrupcion de las relaciones con la Santa
un vivo sentimiento de la alta importancia Sede, y la edad que suelen tener los nom
de ciertos problemas, que en plazo no muy brados cuando se los eleva á tan alto pues
distante deben resolverse en nuestro pais. to , y calcúlese con estos datos , cuál debe
Asi , cuando los escritores de opiniones tan ser la situacion del cuerpo episcopal en
diferentes se aunan para manifestar su sen España.
tir sobre puntos muy vitales en el terreno En las diócesis, donde por una ú otra
dela política, no será inoportuno arrojar causa se han suscitado dudas sobre la le
en el campo de la discusion el negocio del gitimidad de los gobernadores eclesiásticos,
concordato, supuesto que difícilmente cabe se ha introducido la turbacion de las con
encontrar otro que afecte mas profunda ciencias , de una manera lastimosa ; y con
mente los intereses del pais, en lo interior mas ó menos estrépito ha comenzado el
y en lo exterior. Las cosas han llegado á cisma. Y como quiera que las serias polé
tal extremo, que se ha hecho necesaria la micas que sobre esta gravísima materia se
union de todos los hombres de bien ; para han trabado en la prensa , no han permiti
sacarlas del mal [estado en que se hallan; do que nadie quedase ignorante de la cues
deponiendo en obsequio del bien público , tion que se agitaba , y de las consecuencias
 73 —
que envolvía , se ha creado una situacion de esta suerte con su atinado gobierno,
en extremo penosa , cuya terminacion urge una iglesia viuda, y en peligro de verse
sobre manera , cuando no fuese por otra desolada ; pero á su testimonio apelamos
causa , que por evitar á un gran número para que nos digan , si no han sentido mil
de personas la inquietud y las angustias de y mil veces pesada en demasía la carga que
espíritu. En aquellos paises donde falta la sobre sus hombros sustentaban , y si no han
libertad de discusion , donde nadie se atre ansiado otras tantas , la venida de un legí
ve á censurar por escrito las providencias timo pastor , de aquellos á quienes puso el
del gobierno , puede este arrojarse con me Espíritu Sanio por obispos para regir la iglesia
nos miramiento , á medidas que no estén de Dios.
en armonía con las ideas dominantes en Resulta de ahí que la instruccion ecle
el pais , y empeñarse con menos inconve siástica está descuidada , que la disciplina
nientes , en prolongar la situacion violenta se relaja, que muchos males quedan sin
que de ahí resultare : porque ahogada la remediar , que las pérdidas no se reparan,
discusion pública , y no dejando al pensa que solo se atiende á salir de los apuros de
miento otra expresion que la de palabra , momento, y que aquel admirable sistema
puede siempre contar con el engaño y el contenido en los sagrados cánones para el
adormecimiento de un considerable nú gobierno de las iglesias , se deja en su ma
mero de conciencias ; pero ¿ cómo lograr yor parte sin aplicacion, marchando las
esto , allí donde la prensa recuerda la mis providencias sin el debido plan y concierto,
ma idea , á todas horas , bajo todas las for sin la precisa unidad , á merced de las cir
mas , en todos los tonos y estilos ; ora cunstancias ; y si á esto se añade , la pro
asiéndose de una providencia del gobierno hibicion de conferir órdenes que lleva ya
supremo , ora de alguna medida de una mas de ocho años de duracion, espanto
autoridad subalterna, ora de la instruccion causa el considerar cuál podrá ser el estado
de un proceso , ora del fallo de una causa; de la Iglesia española en un tiempo no muy
y todo esto vivamente pintado con los co lejano.
lores que encontrar sabe el verdadero celo En vista de cuadro semejante , y que
religioso , y cuya fiel imitacion no se oculta nadie por cierto podrá tildar de exagera
á la destreza de los partidos políticos , in cion, pregúntase uno naturalmente, ¿cómo
teresados en aprovechar las armas de opo es posible salir de situacion tan penosa , y
sicion que les vienen á la mano. al propio tiempo tan funesta? Porque, bien
En aquellos obispados, donde por afor se echa' de ver que no se trata aqui de la
tunadas circunstancias no se ha podido sus subsistencia del clero, ni del mayor ó
citar ninguna duda sobre la legitimidad de menor esplendor del culto ; sino de la exis
la jurisdiccion , no se verifica un mal ta tencia de la religion misma , supuesto que
maño, pero viudas las iglesias de su pastor, no habrá religion sin Iglesia ; y la Iglesia
ó desterrado ó difunto, están muy lejos de española se endereza rápidamente , nó á la
hallarse en situación á propósito para que ruina, sino al anonadamiento. Sean cuales
Ja religion pueda progresar, ni aun con fueren los males que sobre una iglesia gra
servarse cual conviene, atendidas las difi viten , son empero mucho menos temibles,
cultades que tiene que superar; y los ene si esta no carece de medios para ir repa
migos con quienes se ve forzada á combatir. rando sus pérdidas; mas, cuando estos
La autoridad eclesiástica como todas las faltan , cuando la muerte va acabando con
otras, nunca puede ser ni tan respetada, los obispos y demas ministros inferiores ,
ni tan eficaz , en manos del que la ejerce sin que se llene de ninguna manera el va
interinamente , como del que la posee en cio, fácil es prever que ha de venir un dia
propiedad ; y además , el carácter episco- en que desaparezca todo.
cal imprime á los actos del gobierno de las Ya que acabamos de tocar este punto de
iglesias, un sello tan superior, que no bas la prohibicion de ordenar, no será fuera
tan á suplir esta falta , todo el celo y la del caso decir dos palabras sobre un nego
ciencia de los gobernadores eclesiásticos. cio que repetidas veces ha dado lugar á
Honor y prez á los hombres que penetra medidas ruidosas. El gobierno se ha que
dos de ía altura de su mision , y de lo crí jado de que sus disposiciones para impedir
tico de las circunstancias , han sabido con- la ordenacion de españoles en Roma , no
s con la debida prudencia , sin cejar son obedecidas; y ha mandado en conse
L i del deber , consolando cuencia que se tratase con rigor á los con-
 74 —
traventores. Si nos hubiésemos hallado en la nacion á tal estado , que conviene sobre
posicion á propósito para aconsejar al go manera evitar. Hasta aquí se ha mirado la
bierno , le hubiéramos recordado una re cuestion religiosa como una especie de
gla que nunca debe perder de vista la au apéndice de la política; dando por supues
toridad , á saber , que en viendo el que to que no se debe pensar siquiera en la po
manda muy tenazmente desobedecido al sibilidad de un arreglo de los negocios ecle
guno de sus mandatos, su deber le pres siásticos , hasta que se haya dado complete
cribe examinar si en las disposiciones deso cima á las dificultades que impiden la ca
bedecidas se encerraría algo , que estuviese bal solucion de las cuestiones interiores , y
en contradiccion con necesidades muy apre el restablecimiento de las relaciones in
miadoras, públicas ó privadas. Este exá- ternacionales. Menester es confesar, que
men suele conducir al descubrimiento de en este modo de mirar las cosas hay un.
las causas que motivan la desobediencia , é gran fondo de verdad y de prudencia;
inclina al legislador á echar mano de mo pero conviene tener presente , que se en
dificaciones , que devolviendo á las cosas cuentran á veces los pueblos en situacio
su curso ordinarío, eviten á las personas nes tan anómalas , que quien se proponga
situaciones violentas. Y dígannos de buena sacarlos
yan sumido
de algun
largosatolladero
años de revolucion
donde los y1ra-
de
fe los hombres imparciales y juiciosos , si
no es una tentacion bien difícil de resistir , disturbios , se halla forzado á discurrir me
la de marcharse á recibir órdenes en otra dios extraordinarios , desviándose de aque
parte , hallándose un jóven con la carrera llas reglas que servir pueden en casos di
terminada , en edad competente , y tenien ferentes.
do en su presencia vacíos los puestos que A quien se empeñe en sostener , que se
el nuevo ordenado pudiera ocupar. Los rá en adelante indispensable de todo punto
hombres de gobierno deben mirar las co el considerar unidas las cuestiones indica
sas , nó al través de la calurosa niebla de das , y que es en vano pensar en el arreglo
las pasiones , sino con razon fria , con es de la eclesiástica hasta que se haya llevado
píritu sosegado, con imparcialidad comple la política á solucion cabal y definitiva , le
ta , colocándose en cuanto cabe en el lugar haremos observar , que esta opinion por
de aquellos que deben obedecer , y pesan mas razonable que á primera vista se pre
do en fiel balanza los motivos que los im sente , adolece de un inconveniente graví
pulsan á cumplir la ley, ó los incitan á elu simo, cual es, el que deja en riesgo á la-
dirla. Dicta la prudencia que se abstenga Iglesia española de continuar larguísimo
la autoridad de ponerse en abierta lucha espacio en los males que la afligen ; apla
con inclinaciones muy fuertes, que no le zando para un tiempo quizás muy remoto
es dado destruir ni sofocar; mayormente, el cumplimiento de la única esperanza, que
cuando aquel que manda puede conducirse en su infortunio la alienta y conforta. En
con esta mesura , sin ofensa de la justicia , efecto , ¿ quién es capaz de decir cuando se
ni menoscabo de los intereses públicos. Pe resolverá completamente en España la
ro volvamos á nuestro intento. cuestion política? ¿quién sabe cuándo sal
Se hace tanto mas difícil el salir de la si dremos de esa incertidumbre , que tiene
tuacion que estamos lamentando cuanto en ansiedad á los hombres y en zozobra las
existe una íntima relacion entre la cuestion instituciones? ¿quién puede pronosticar
religiosa y la política ; y antes que se re cuándo entraremos en ese órden regular ,
suelva este, es poco menos que imposible fijo , en que veamos definitivamente seña
el terminar completamente aquella. No lada nuestra suerte sin oir á cada paso los
puede negarse la existencia de esta íntima clamores de los partidos , achacándose mu
relacion , y esta muy lejos de nuestro pro tuamente tramas y conspiraciones que tien
pósito el combatir una verdad , que por dan á cambios fundamentales en la ley po
desgracia salte á los ojos con demasiada lítica del estado? ¿cuándo será admitida la
evidencia ; permítasenos sin embargo indi España en el congreso de las naciones eu
car, que quizás no esté lejos la época en ropeas , saliendo de esa situacion de frial
que sea preciso meditar sériamente , si se dad con unas, y de antipatía y completo
ria posible excogitar algun medio para se aislamiento con respecto á otras? Sean
parar estes dos cuestiones; pues que con cuales fueren das vicisitudes que estémos
tinuando el empeño de considerarlas como condenados á sufrir, ¿será conveniente,
del todo inseparables , podríase conducir á || ni necesario, que todos los hombres que
 — 75 —
en el mando se vayan sucediendo , lleven faltan todavía dos años hasta que llegue el
como idea dominante la inseparabilidad de ansiado plazo de la mayoría de la Urina,
las cuestiones religiosa y política? esto es , que durante cerca de dos años
Tal debe ser en nuestro juicio , la opi continuará la Iglesia de España en el fatal
nion de muchos; nosotros empero, confe estado de miseria é incertidumbre, de pos
sando los sólidos fundamentos en que pue tracion y decaecimiento en que ahora se
den apoyarla, nos reservamos el derecho encuentra. Hasta cumplir el indicado tér
de dudar sobre el acierto y conveniencia mino es poco menos que imposible que se
de la misma. Y tales son las consecuencias añuden las relaciones con la corte de Ro
á que en nuestro entender puede ser por ma. ¿Y se ha reflexionado bastante lo que
ello conducida la religion en nuestra patria, representa este tiempo por mas breve que
que el corazon se nos apesadumbra al con parezca, cuando viene á reunirse á la sé-
siderar que siondo muchas las circunstan rie de calamitosos años trascurridos des
cias favorables á la indicada opinion , es te de 1834? ¿Ignórase que en casos seme
mible no se conforme á ella la conducta de jantes se cumple en cierto modo la ley del
los hombres que se irán sucediendo en el descenso de los cuerpos graves que bajan
gobierno. Como quiera , y por mas infruc con tanta mayor rapidez, cuanto mas dis
tuosas que recelemos hayan de ser nues tante se hallan del punto de partida y mas
tras palabras, las arrojamos en el campo cercanos al suelo?
de la discusion , asemejándonos al labrador El sentimiento religioso se ha desplega
que esparce la simiente en un terreno agos do y avivado en estos últimos tiempos de
tado y estéril , levantando los ojos al cielo, una manera consoladora , el espíritu de ir
y encomendando el resultado á la bondad religion ha perdido mucho de su fuerza ,
de la Providencia. Que en la mayor parte la antipatía contra el clero ha menguado
de los humanos negocios cábele aí hombre tan notablemente que el año 43 dista me
mas escasa influencia de la que él se ima dio siglo del 35; pero esto no hace que la
gina; Dios va conduciéndolos por senderos miseria eu que se le tiene sumido no con
ocultos á término donde no alcanza nues tinúe progresando , que el número de los
tra menguada prevision ; y sobre todo en ministros de la religion no se reduzca cada
tratándose de salvar la Iglesia católica , ó dia mas y mas, que los obispos no vayan
alguna parte considerable de su vasto pa faltando, que la instruccion eclesiástica no
trimonio, sabe el Divino Fundador echar esté desatendida , que la disciplina no su
mano de medios extraordinarios é impre fra lamentables quebrantos; en una pala
vistos, diciéndonos en seguida: «hombre bra , que la Iglesia de España no experi
de poca fe, porqué has dudado? Modica; fidei, mente sin cesar nuevas pérdidas, cuya
quare dubitasti? reparacion sea tal vez mas difícil de lo que
Pero volviendo al punto capital de la generalmente se piensa.
cuestion , y mirando las cosas bajo un as Sucede en estos asuntos que el mal acar
pecto puramente humano , estremece el reado por una funesta combinacion de cir
porvenir de la Iglesia española , si en cunstancias no se conoce en toda su exten
efecto no puede esperar remedio á sus ma sion y gravedad , hasta que se trata séria-
les, hasta el definitivo arreglo de los mu mentede remediarlo, hasta que se descubre,
chos y complicadísimos negocios pendien por decirlo así , la llaga , y se la ve en to
tes en el terreno de la política. Y á la ver da su profundidad é irritacion. Dia vendrá
dad , aun cuando sea muy posible que con en que la Providencia se apiade de noso
algunos acontecimientos imprevistos , ó tros; y entonces, cuando el celo y la inte
quizás por el natural curso de las cosas , ligencia de los obispos examinen la situa
se dé cumplida solucion á las muchas di cion de las respectivas diócesis, cuando
ficultades que actualmente nos abruman, acometan la empresa de curar radicalmen
y á otras no menores , que se columbran te los males causados á las iglesias respec
eu lontananza, no obstante, fuerza es con tivas por tantos años de guerra , de revo
venir , que la situacion de los negocios se lucion , y por ese estado de ansiedad y de
halla tan enmarañada, que es muy de te incertidumbre poco menos fatal que las
mer no queden frustradas esperanzas tan mismas persecuciones , y sobre todo por la
halagüeñas. dilatada viudez en (pie muchas de ellas se
Aun suponiendo que todo se realizará encuentran privadas de sus legítimos pre
tan prósperamente como esperan algunos, lados ; entonces se oirán en las pastorales
 — 76 —
dolorosos lamentos que nos harán estreme ocurrencias y mudanzas mas trascenden
cer , entonces se comprenderán los incalcu tales que de muchos años á esta parte pre
lables daños acarreados por la indefinida senciara la nacion : tan poco valen las pre
continuacion de situacion tan funesta. visiones del hombre !
Lo repetimos , aun dando por supuesto Con nadie disputaremos sobre lo mas ó
que existiese la seguridad de que en lle menos fundado de gratas esperanzas ; de
gando á la mayoría la Reina Isabel , el ar jaremos á los partidos que continúen me
reglo de todos los negocios así políticos co ciéndose en ellas , prometiendo á la nacion
mo religiosos se habia de presentar muy el siglo de oro, el dia que les sea dado po
llano y expedito, fuera un deber de los ner en planta su respectivo sistema , y des
hombres amantes de su patria el andar envolver sus medios de gobierno : por
preparando la opinion pública y disponer nuestra parte , seguiremos en las convic
el terreno de una manera conveniente, pa ciones que nos inclinan algun tanto á la
ra que en ofreciéndose la oportunidad sa desconfianza ; y sin perder la fe en el por
liese la Iglesia española del fatal estado en venir de la España , nos reservaremos el
que se halla. Es necesario no perder de juzgar á los hombres por sus obras, y álos
vista, que el arreglo de los asuntos ecle sistemas por sus resultados. Por lo demas,
siásticos , aun en el caso mas favorable , creemos que la época que estamos atrave
pudiera diferirse tres ó cuatro años ; por sando lo es de transicion, y por consiguien
que bien claro es , que llegada la Reina á te de malestar é incertidumbre, y los hom
mayor edad , será regular que transcurra bres que en ella viven , mucho harán si
un tiempo muy considerable desde el co atenúan en cuanto posible sea los males en
mienzo de las negociaciones hasta su ter lo presente , preparando á la generacion
minacion ; y mas todavía, hasta que sea venidera un tiempo mas venturoso. Deci
dable reducir á la práctica las medidas que mos esto para combatir la idea bastante
en ellas se acordaren. Esto se verificaria, generalizada , de reservar siempre para el
aun suponiendo que las negociaciones se dia de mañana el hacer el bien , y de per
entablarán al momento, seguirán sin obs der de esta suerte un tiempo precioso.
táculo y acabarán con felicidad , y que en Cuando duraba la guerra, el arreglo de la
la ejecucion no se encontrarán tropiezos de hacienda, de la administracion, de todo, se
ninguna clase. Siá tales resultados nos con guardaba para cuando viniese la paz , vino
ducen las suposiciones mas felices , vean la paz y nada se ha hecho. Ahora los mas gra
los juiciosos si no hay graves motivos para ves negocios se aplazan tambien para tiempos
alarmarse al considerar la presente situa mas tranquilos , en que hayamos salido de
cion y el porvenir de la Iglesia de España. interinidades ; sin reflexionar que atendida
¿ Pero se cumplirán suposiciones tan ha la situacion social y política de España y de
lagüeñas? Cuando la guerra civil estaba Europa, estas interinidades, ora bajo una
tocando á su término , no eran en escaso forma , ora bajo otra , podrán prolongarse
número los que opinaban que con ella ha medio siglo. Cuando se alcanzan tiempos
bian de acabar todos los males de la na tan agitados , es una ilusion el prometerse
cion. Los evidentes síntomas de un próxi completa bonanza y seguridad ; y menes
mo trastorno, los clarísimos anuncios pre ter es resignarse á trabajar en medio de
cursores de gravísimos acontecimientos, esa misma agitacion y de las vicisitudes ;
nada era bastante á sacarlos de su ilusion , como el navegante prosigue en sus tareas,
nada les abría los ojos ; no veian otro mal en medio de las alternativas de. la mar.
que la guerra , no acertaban á temer otro Inferiremos de esto, que siendo muy du
peligro que las contingencias de que ella dosa la completa solucion de las cuestio
se prolongase; todo lo demas eran peque nes políticas para de aquí á dos años ; si
ñas dificultades que muy fácilmente debian las eclesiásticas han de andar siempre iden
allanarse, melancólicos recelos de hombres tificadas con ellas , es bien posible que su
sombríos y suspicaces que la próxima bo termino se aplace para mucho mas adelan
nanza se encargaba de disipar bien pronto. te. Porque aun cuando se suponga que los
Los acontecimientos sin embargo se veri acontecimientos caminen por un cauce so
ficaron de otra manera : la guerra terminó, segado y ordinario, no vemos tampoco,
y sin mediar siquiera breve espacio que cómo las vicisitudes , ó al menos la incer
permitiese á los ánimos algunos momentos tidumbre política , hayan de encontrar su
de quietud y reposo, sobrevinieron las fin en la mayoría ni en el casamiento de la
 — 77 —
Reina. Verdad es, segun ya llevamos in guen mas ó menos abiertamente sus ins
dicado, que entonces se ofrecerá una nue tintos. Es necesario no perder de vista esta
va oportunidad , donde se combinarán mu observacion si se quieren apreciar en su
chas circunstancias para crear una situacion justo valor las palabras y las protestas.
enteramente nueva , y abrir una era que Impide no pocas veces el que lleguen á
no se parezca á las anteriores; pero des buen término las negociaciones de esta cla
graciadamente estamos ya acostumbrados se, nó precisamente la mala voluntad de
á ver esas oportunidades desaprovechadas, los hombres políticos que en ellas intervie
que si lo pasado hubiese deservirnos de luz nen , sino la preocupacion ó la mala fe de
para pronosticar lo venidero , escasas es aquellos á quienes consultan como inteli
peranzas deberíamos tener de alcanzar me gentes. Los hombres mas eminentes en po
jor ventura. Cuando uno recuerda los años lítica pueden ser muy medianos en historia
de 1810, 1814, 1833, 1840, difíciles con eclesiástica y en legislacion canónica ; y
servar ilusiones que luego crudos escar tienen no pocas veces la mala ventura , de
mientos se apresuran á desvanecer. ¿Quién dirigirse candidamente á personas que ellos
nos asegura que los consejeros de la Reina juzgan imparciales é ilustradas, entregán
dominarán las circunstancias, compren dose en sus manos quizá con buena fe, pe
diendo plenamente la situacion , y dándole ro que no deja por esto de ser altamente
un desenlace tranquilo y afortunado ? Pero, funesta á la religion y al estado. ¿Hubiera
habrá el marido de la Reina , se nos dirá ; Napoleon firmado el concordato, si reu
y nosotros responderemos que este marido niendo un consejo de hombres preocupa
sea cual fuere, será un mozo de pocos dos de lo que se llamaban las libertades de
años, quizá extrangero , y que por consi la Iglesia Galicana , y que celaban con mas
guiente , en lo que de sus prendas perso cuidado contra las pretensiones de la Cu
nales dependa , alcanzará á poco mas que ria , que contra las doctrinas de Lutero , ó
su Real Esposa que será una niña de 14 la filosofía de Voltaire ? es bien cierto que
años. nó. Lo propio sucederá á nuestros gober
Imaginándose enteramente desenlazada la nantes , sea cual fuere el color político á
situacion política , y suponiendo que por que pertenezcan : mientras intervengan en
uno ú otro medio se hubiese apoderado del el negocio hombres que sepan de memo
poder un partido que se muestre favorable ria para recitarlos á cada paso todos los
á un arreglo de los negocios eclesiásticos , motivos de queja que han tenido contra
todavía no estamos seguros de que el con Roma los reyes de España , desde Pelayo
cordato con Roma fuera el inmediato re hasta Isabel II , mientras los encargados
sultado de la nueva situacion. Lo que está de negociar reciban sus inspiraciones de
aconteciendo en Portugal es un anuncio de teólogos cavilosos, de canonistas tercos,
lo que podría suceder en España ; pues que quizás al discutirse los grandes intere
que nuestros vecinos á pesar de haber ven ses de la nacion saquen á plaza sus peque
cido la revolucion en el campo de la polí ños rencores, queriendo tambien poner en
tica , dan no obstante tantas largas al sus balanza los agravios que se imaginen ha
pirado arreglo , que hasta podrían haberse ber recibido ; mientras esto se verifique ,
concebido algunas sospechas sobre la sin los negocios con Roma no se arreglarán
ceridad de los deseos de aquel gobierno. jamas; á unas desavenencias seguirán otras,
No se nos oculta lo que se ha dicho de que y no se alcanzará otro resultado que enco
el Papa era muy exigente ; no sabemos nar los ánimos y aplazar indefinidamente
hasta donde llegan sus exigencias, porque un arreglo decisivo. Es menester grabar
no existen documentos oficiales que las ma profundamente en el ánimo , de que en se
nifiesten ; pero ciertamente que será difí mejantes circunstancias no se trata de dis
cil que el Nuncio exceda en este punto á putar sino de negociar , que no se trata
cierto empleado de aquel gobierno , cuyo de salir airoso en los escaños de una aca
voto tuvimos por casualidad algunos mo demia , sino de sacar una nacion de un es
mentos á la vista. El lenguaje y las obras tado sumamente peligroso , restituyendo á
de los partidos, son muy diferentes, se las conciencias la calma perdida , y extir
gun se hallan en la oposiciou ó en el go pando un vivo gérmen de discordias ci
bierno; en el primer caso, halagan cuanto viles.
puede auxiliarlos para subir al poder, en En vista de lo que está sucediendo en
el segundo recuerdan sus doctrinas, y si Portugal , y teniendo en cuenta otras con
sideraciones que no es oportuno exponer consiste : en la mayor inteligencia posible , po
aquí, abrigamos algun recelo de que aun ralidad
ra el mayor
posible
número
, paraposible;
el mayorennúmero
la mayor
posible;
mo-
cuando se suponga resuelta la cuestion po
lítica en un sentido favorable á lo que de en el mayor bienestar posible , para el mayor
sean las altas potencias de Europa , no fue número posible. La sociedad que descuida
ra tan seguro como algunos se figuran, el uno cualquiera de estos extremos falta á su
feliz desenlace de la cuestion eclesiástica. instituto y labra su propia ruina. La inte
Mucho nos engañamos si los manejos de la ligencia no está reñida con la moralidad ,
Inglaterra y las susceptibilidades de un mo y ambas pueden enlazarse con el bienes
narca del Norte , heridas por la reciente tar; en desapareciendo uno de ellos la so
alocucion del Sumo Pontífice , no se hacen ciedad está enferma, y para mas ó menos
sentir algun tanto en este negocio ; y ha tarde , su sosiego está en peligro.
cemos de antemano esta observacion para Sin la inteligencia falta la luz , y por
que no se extrañen las nuevas complica consiguiente el acierto en la direccion ; sin
ciones que impensadamente se podrían la moralidad , falta la ley , es decir la re
ofrecer. ¿Quién sabe cuál es la mano ocul gla; sin bienestar, hay descontento, desa
ta que impide la definitiva reconciliacion zon, inquietud , gérmenes de injusticia,
de Portugal con la Sede Apostólica? Esta violencias y trastornos.
misma mano, ¿no podría tambien dañar Recorriendo la historia á la luz de estos
nos á nosotros? ¿Seria imposible que exis principios echaríase de ver , que no pocos
tiese un plan de arrancar la Península en de los males que han afligido la humani
tera á la influencia de Roma , ora introdu dad , han tenido su origen en el descuido
ciendo abiertamente el cisma , ora procu del simultáneo fomento de uno de estos
rando el establecimiento de diferentes re bienes : y de que se promovía el uno , sin
ligiones, que aun cuando no encontrasen dar al otro el conveniente impulso. No es
ningun eco en la generalidad de la nacion, menester un profundo conocimiento de las
sirviesen á lo menos para quebrantar esa ciencias sociales y políticas para convencer
inestimable unidad que es tan precioso te se de la verdad y exactitud de estas obser
soro, hasta limitándonos al órden pura vaciones, basta el simple sentido comun,
mente social y político ? y una mediana atencion á lo que nos está
Lo hemos dicho y lo repetimos , consi enseñando la experiencia. Tomad un indi
deramos como poco menos que imposible viduo cualquiera, y suponed que en él se
el restablecimiento de las buenas relaciones haya desarrollado mucho la inteligencia ,
con Roma, hasta llegada la mayor edad de sin que al propio tiempo se haya arreglado
la Reina ; pero opinamos que es muy pru y fortalecido su espíritu con las creencias
dente y hasta necesario el preparar con religiosas y las máximas morales; ¿qué su
tiempo los ánimos para que entonces se ve cederá? es muy obvio : cuanto mayor sea
rifique el ansiado acuerdo con la mayor su inteligencia, mayores serán los recursos
prontitud posible. En otro artículo desen que sabrá excogitar para satisfacer sus pa
volveremos mas extensamente nuestras siones ; y por consiguiente , á igualdad de
ideas sobre tan grave é importante mate circunstancias , será mas perverso que otro
ria.—/. B. que no posea en tanto grado la inteligencia,
lmagináos ahora un individuo en quien la
moralidad se halle muy arraigada , pero
que esté falto de las luces necesarias para
MEDIOS MORALES el desempeño de las funciones de su pro
fesion ó estado : este individuo podrá ser
siisaaeia? pasadía sa íiusisab. tan apreciable, tan respetable como se quie
ra, por las buenas calidades de su corazon;
pero adolecerá del inconveniente de no
servir para el objeto á que está destinado :
no obrará mal , pero tampoco producirá
Explicando en otro lugar la verdadera bien , á no ser en la esfera de su persona ,
inteligencia de la palabra civiliMcion, y se y con relacion á aquellos actos para los
ñalando un tipo al que debiera encaminar cuales bastan la rectitud de intencion y los
se la sociedad para perfeccionarse mas y buenos deseos. Dad á un individuo la in
mas cada dia , dijimos que esta perfeccion teligencia ó la moralidad , pero de manera
 — 70
que lo falte el bienestar y quese hallo aco solo ninguna precaucion contra los peli
sado por imperiosas necesidades ; si poseo gros, ni remedio ó alivio en los males que
la inteligencia sola, estad seguros que echa de él se habrán originado.
rá mano de cualquier medio para procu Conviene pues sobre manera no limitar
rarse lo que necesita ; y si tiene la dicha la vista al orden puramente material , es
de hallar un freno en la moralidad , no de preciso extender mas allá la mirada , y ver
jará por esto de sentirse vivamente tenta si mientras es tiempo , nos seria dable pre
do do desviarse de sus reglas , y corre no servarnos de las calamidades que por se
poco peligro do sucumbir tarde ó tempra mejantes causas están sufriendo otras na
no. Si al contrario suponeis en un hombre ciones. La experiencia que nos ofrece la
el bienestar , faltándole empero la inteli Europa en aquellos paises donde mas se
gencia y ía moralidad , entonces vereis la han desarrollado los intereses materiales,
brutal estupidez que se entrega sin tasa á puede servirnos de mucho , recibiendo es
todo linage do placeres, que no levanta su carmiento en cabeza agena.
vista inas alto de lo que lo señalan sus go Generalmente hablando, puede decirse
ces; y que considera limitado el mundo que las sociedades modernas se ocupan con
entero al estrecho ámbito en que so revuel demasiado ahinco del desarrollo de la inte
ve su miserable egoismo. Aun cuando el ligencia y del bienestar material , sin aten
bienestar se considere unido con la inteli der cual conviene al fomento de la morali
gencia , es un germen de vicios y de mal- dad. Y aun no es exacto el decir que se
dados, si está separado de la moralidad. afanan por adquirir ese bienestar, enten
Disfraces astutos cubren entonces la cor diéndolo con relacio i al mayor número;
rupcion mas asquerosa ; pero el mal nada pues si bien se observa , lo que procuran es
pierde de su repugnante realidad, por mas producir, y miran como objeto secundario
que se le apellido con hermosos nombres , la saludable y equitativa distribucion de los
y se le oculte con velos brillantes. productos. No desconocemos los muchos
Fácil es inferir que los resultados que trabajos que han visto la luz pública en es
dan para un indiv iduo las combinaciones ar tos últimos tiempos para remediar un mal
riba indicadas, deben producirlos igual- de tanta gravedad y trascendencia; pero es
monte con respecto á la sociedad ; y que preciso confesar que el movimiento está
una vez conocida la direccion que a esta por ahora limitado en demasía á la
se comunica en uno y otro sentido , puéde de las ideas , que no ha descendido
se conjeturar el término á que será condu te á la práctica , y que las sociedades obe
cida. deciendo al funesto impulso que se les ha
Aplicando estos principios á Cataluña, comunicado, prosiguen en su peligrosa
claro es que no debe satisfacerse con el carrera.
empleo de los medios materiales, ni limi La Inglaterra y tambien la Francia nos
tarse á una prudente conducta en el orden dicen lo que será de nosotros , si conti
político; pues que ni uno ni otro de ambos nuando empeñado; en promover exclusiva
extremos llenan las condiciones requiridas mente la industria y el comercio , nos olvi
para la perfeccion de su estado social. El damos de comunicar al pueblo una ilustra
fomento de la agricultura , de la industria cion sana , fundada en principios religiosos
y del comercio, si bien no dejará de con y morales ; si no atendemos como es me
tribuir al desarrollo intelectual de los mo nester á la preparacion de combinaciones
radores del Principado, considerándole justas y oportunas, que sin atacar la pro
empero aisladamente , quedará circunscri piedad , sin herir ningun derecho , sin me
to á determinada esfera , servirá á lo mas noscabar intereses legítimos , no permitan
para aumentar algun tanto el bienestar que la clase pobre se sumerja en aquel es
material ; mas no conducirá por sí solo á la tado de abatimiento , postracion y misería,
mejora de las costumbres ; ni á extender y en que la contemplamos sumida en las na
afirmar la moralidad entre los pueblos. El ciones que se jactan do marchar ála cabeza
mismo adelanto creará nuevas necesidades, de la civilizacion , y particularmente en
ofrecerá complicaciones difíciles , presenta- aquella que se aventaja á las demas en ade
ra' problemas de escabrosa resolucion reía- lantos industriales.
tivos á la organizacion del trabajo , y á la Aun prescindiendo de los inconvenientes
justa y equitativa distribucion do sus pro II y peligros que semejante sil
ductos ; sin que por esto suministre por sí II es doloroso por cierto que los adelantos y
 prosperidad de la industria hayan de com
prarse con la miseria de infinidad de fami
lias. Desgraciado progreso de la sociedad
el que produce la desdicha de tan crecido
número de individuos ; triste aumento de
la poblacion si se aumenta proporcional-
mente el número de los infelices. A pesar
de toda la brillantez , de todo el oropel que
en los paises muy adelantados oculta el in
fortunio del mayor número , á pesar de la
prosperidad y poderío que ostentan esas
naciones, nosotros no concebimos la hu
manidad sin los hombres , no vemos ver
dadera prosperidad y ventura en aquella,
cuando estos viven sumidos en la postra
cion y abatimiento de la misería.
Afortunadamente no existe todavía entre
nosotros el pauperismo propiamente dicho:
el pais no está saturado de poblacion , y los
abundantes veneros de riqueza que nos res
tan aun por explotar, serán bastantes á
preservarnos de este mal durante largos
años. Si nos referimos á la generalidad de
las provincias del reino , dedicadas casi ex
clusivamente á la agricultura, claro es que
no encontraremos ni aun la posibilidad del
pauperismo moderno , hasta que comien
cen á tomar movimiento y á dar alguna
mayor importancia al desarrollo y aumen
to de la riqueza. No sucede empero asi con
respecto á Cataluña; y si bien es cierto que
el Principado participa todavía de ese des
ahogo en que vive la clase popular en Es
paña, es evidente tambien que andandolos
años se presentarán entre nosotros los mis
mos problemas sociales que agobian á otros
paises y amenazan comprometer su por
venir.
Ni será parte á librarnos de esta calami
dad la situacion excepcional en que nos en
contramos con respecto á las otras provin
cias de la monarquía; antes bien esta
circunstancia podría agravar el mal y difi
cultar su remedio. En Inglaterra notamos
que en ciertos distritos manufactureros se
experimentan á menudo la mayor carestía
y miseria, cuando otras comarcas distan
mucho de hallarse con necesidades tan
apremiadoras ; y hasta en Francia se echa
de ver, que en los departamentos del norte
donde ha progresado la industria , sufre la
clase pobre privaciones mucho mas duras
que la del mediodía, ocupada principal
mente en el cultivo de los campos. De la
propia suerte fuera muy posible, que
mientras las provincias del centro y norte
de España, y las de Andalucía, Valencia
80y Aragon
— se encontrasen á corta distancia
con los mismos medios que disfrutan aho
ra, hubiesen sobrevenido en Cataluña
complicaciones graves é infaustas que le
acarreasen la miseria que tan lastimosa
mente aflige á otros paises.
La España se ha quedado muy rezagada
en todo lo relativo al fomento de los inte
reses materiales y particularmente de la
industria; y si bien es verdad que semejante
atraso es bajo ciertos aspectos un mal , po
dríase fácilmente trocar en un bien ; pues
que de esta manera tendremos la oportu
nidad de observar lo que ha sucedido á los
que iban delante , y tomar , con tiempo,
las debidas precauciones. No cabe duda en
que la necesidad estimula y precisa á resol
ver los mas difíciles problemas , y que no
siempre es ventajoso para ocuparse cual
conviene de ellos , el mirar todavía muy
lejanos los peligros ; pero tambien es cierto
que los apuros y agobios extravian no po
cas veces el juicio , y hacen cometer las
mayores imprudencias. Además que el ser
tan lejanos los males indicados solo tiene
lugar por lo que toca al resto de España,
pero nó por lo relativo á Cataluña , pues
aquí van ya tomando las cosas el mismo
sesgo que en los demas paises. Por lo que
está sucediendo ahora , no es difícil calcu-
cular lo que sucederá en lo venidero cuan
do la gravedad del daño venga á exasperar
los ánimos, agriando las querellas presentes
y suscitando otras nuevas.
Los hombres que se interesan por el bien
estar y prosperidad de la industriosa Ca
taluña , aquellos que sin olvidar su título
de españoles , recuerdan con orgullo y pla
cer el de catalanes , es necesario que atien
dan con particular cuidado á los indicados
riesgos ; mayormente siendo muy probable
que en España no se verificará lo que en
otras naciones , á saber , que de la capital
salen los proyectos , los planes , los medios
de ejecucion para remediar ó atenuar esta
clase de males ; sino que es muy regular y
poco menos que cierto , que los catalanes
seremos entregados á nuestra propia suer
te, sin que haya siquiera quien nos acon
seje y dirija. Conviene no perder de vista
que Cataluña es la única provincia que
participa propiamente hablando del movi
miento industrial europeo : y asi solo en
ella se presentarán los nuevos problemas
sociales; nó en las demas, que á excepcion
de cierto movimiento febril y somero que
se observa en la estrecha esfera de la poli
 — 81
tica, continúan en todo lo domas como allá Es muy dañoso al tratarse de aplicar un
en el reinado de Carlos II. Cuando se pasa remedio , el no conocer debidamente el ca
de Cataluña al extrangero , nada se obser particular
rácter y la llamamos
extension del
muymal
especialmente
, y sobre la
va que no sea una especie de continuacion
de lo que aquí se ha visto. Diríase que el atencion de todos los interesados en este
víage se hace dentro una misma nacion, de asunto, amonestándolos de la necesidad en
una á otra provincia; pero al salir del que se encuentran de examinar á fondo la
Principado para lo interior de España , en situacion y relaciones de las dos clases : ri
tonces parece que en realidad se ha dejado co-- v pobres, amos y jornaleros. El error
la patria y se entra en paises extraños. arriba insinuado ha hecho que en ciertas
Desgraciadamente se ha introducido en ocasiones las miradas de unos y otros se fi
Cataluña el germen de funesta discordia, y jasen quizás demasiado en la arena política,
se ha presentado de esta suerte bajo aspec esperando que de la derrota ó victoria en
to muy difícil y en extremo desagradable, este palenque habia de resultar por preci
el problema de la organizacion del trabajo, sion Ia resolucion adversa ó favorable en
aun antes que lo apremiador de las necesi todo lo demás que se disputaba. No alter
dades nos pusiese en apuros semejantes á caremos sobre las ventajas ó desventajas
los que están sufriendo otros paises. A pe que á estos ó á aquellos traer pudiera este
sar de esta observacion no desconocemos la ó aquel sistema político ; no nos detendre
pravedad del mal, y conceptuamos que mos en señalar los yerros que en esta ma
quizás no siempre le han comprendido en teria se hayan cometido, ni tampoco que
toda su extension , aun los mismos que remos entrometernos en dar consejos á
mas han declamado contra él. Por de ninguno de los contendientes, sobre la lí
pronto se echa de ver, si se reflexiona so nea de conducta que les importa seguir;
bre el negocio con ánimo sosegado , con pero sí que nos permitiremos observar á
sinceridad y buena fe, que han andado unos y á otros, que no deben alimentar
muy errados los que han pretendido encer esperanzas de encontrar en el terreno de la
rar en la esfera política la cuestion que política la resolucion del problema, y que
aquí se agitaba. Verdad es que las circuns es menester buscarla en otra parte.
tancias en que se ha encontrado y se en Se nos dirá que en vano nos empeñaría
cuentra todavía la nacion, y la posicion ex mos en separar estas dos cuestiones, pues
cepcional de Cataluña, hacen excusable la to (¡lie es mas claro que la luz del dia
equivocacion indicada; pues que han dado haber corrido parejas repetidas veces, sir
márgen á que se confundiesen las ideas y viendo ora de lazo de fraternidad para
no pudieran deslindarse cual conviene dos unirse y formar alianzas mas ó menos du
órdenes de hechos, que á pesar de haber raderas , ora de palanca para conmover y
estado y estar todavía contiguos, son no de ariete para derribar. Por andar juntas
obstante del todo diferentes. dos cosas , no se infiere que sean una mis
Las revoluciones son para los pueblos ma ; ni que la existencia de la una tenga
una escuela de durísimos escarmientos, y con la otra necesario enlace. Las turbulen
así no pocas veces aprenden en ellas lo (pie cias y revoluciones políticas no siempre
de otra suerte hubiera sido difícil en crean los hechos que en ella se presentan;
señarles. Por desgracia es muy raro que la sucede á menudo que no hacen mas que
generacion que las atraviesa pueda aprove revelarlos, aumentarlos, irritarlos tal vez;
charse de la costosa leccion ; porque en pero tanto distan de ser aquellas las causas
vuelta en la polvareda de los disturbios y de estos , que antes al contrario estos son
aturdida con la gritería de los combatien las causas de aquellas. Asi por ejemplo,
tes, se le hace muy difícil el ver las cosas nos lamentamos del despilfarro de la admi
como son en sí, y mucho mas el poner en nistracion , del sinnúmero de empleados,
planta los consejos de la prudencia. Los de la infinidad de cesantes, achacando á la
hechos desfilan á sus ojos en tan confuso revolucion el habernos traído tan funesta
tropel , tan desfigurados por la exaltacion plaga : pero no advertimos que si bien esto
de las pasiones y los intereses de los parti es verdad hasta cierto punto, no lo es me
dos, que llega á serle tarea extremada nos que ese desgobierno , ese desorden ad
mente penosa el empeño de formar juicio ministrativo, esa muchedumbre de em
verdadero y cabal sobre lo mismo que está pleados han originado en buena parte las-
presenciando.
tomo i. revoluciones mismas , y son en la actuali-
G
 — 82
dad su pábulo principal , cuando no el úni recibe el temido golpe , si un tratado de
co. Quien confundiese el sistema adminis comercio ó una imprudente modificacion
trativo con el sistema político por haberlos del arancel , destruyen en un dia el fruto
visto siempre juntos durante nuestras dis de tantos sudores , y disipan el objeto de
cordias, se equivocaría lastimosamente tan halagüeñas esperanzas ; si en conse
cuando buscase el remedio de nuestra ad cuencia se halla Cataluña en apremiadora
ministracion en el terreno de la política. estrechez , en agobiador apuro , no sabien
De la propia suerte acontece en lo demás; do en que ocupar á millares de brazos, ni
siendo de advertir que en tiempo de dis cómo acudir al socorro de innumerables
cordias, se emplea para herir al enemigo familias condenadas á perecer de hambre,
lo que primero viene á la mano ; y es ne atravesaremos ' necesariamente una crisis
cesario distinguir siempre lo que hay de formidable que no nos dejará siquiera el
verdad en el fondo de las cosas , y lo mas I consuelo de su brevedad. Los capitales que
ó menos que se las exagera cuando se las no naufraguen se verán precisados á tomar
hace servir como arma de oposicion. Ni nueva direccion ó á esconderse volviendo
conviene dar excesiva importancia á la hi otra vez á las arcas ; pero el desgraciado
perbólica ponderacion de los partidos ó fac jornalero que no cuenta con otro recurso
ciones, ni es justo ni prudente despreciar que el trabajo de sus manos, que para
lo que sus quejas y reconvenciones encier sustentar su numerosa familia no tiene
ren de fundado y verdadero. otra auxilio que sus brazos, este infeliz no
No basta hacerse ilusiones achacando á podrá aguardar en calma el fruto que re
hombres turbulentos las conmociones popu sulte de las especulaciones que en adelante
lares, ni tampoco el atribuir á interesados se excogiten , no podrá suportar largo
designios de nacionales y extrangeros la tiempo la incertidumbre , las dilaciones,
discordia funestamente introducida; todo los sacrificios que exigirá la creacion de
esto podrá ser tanta verdad como se quie nuevas industrias ; al dia siguiente de fal
ra , pero quejas semejantes adolecen del in tarle el trabajo se hallará sin pan: y enton
conveniente de no ser mas que palabras, ces volviéndose á las clases ricas les dirá:
de no conducir á nada. . « mis hijos tienen hambre y yo tambien:
Si se examinan á fondo todas las revolu ni yo ni ellos debemos perecer. »
ciones , todas las turbulencias que nos pre Si al contrario la industria catalana se
senta la historia, notaremos que siempre salva, si atraviesa sin notable daño la cri
se ha verificado que algunas cabezas volcá sis que sufre y el riesgo que corre , si al
nicas y ambiciosas les daban el primer im canzando los capitales alguna mayor segu
pulso y les comunicaban movimiento y ridad , afianzándose algun tanto el órden
brio; que las naciones rivales ó enemigas, público, y presentando la generalidad de
interesadas en dividir para debilitar, se la nacion un aspecto lisonjero ó siquie
aprovechaban de las coyunturas y procura ra menos repugnante, llegamos á tener
ban atizar el fuego de la discordia. Pero un gobierno sabio y previsor, firme sin
¿cuál es el deber, cuál el interes, cuál la obstinacion , fuerte sin violencia , pru
necesidad de los que sufriendo el daño tra dente sin debilidad , si á favor de tal
tan de evitarle ó de atenuarle ? este deber, conjunto de circunstancias la industría ca
este interés, esta necesidad, son el buscar talana es protegida y fomentada cual con
con la detencion debida las causas interio viene, y se desarrolla y progresa en el alto
res del mal, aplicarle el conveniente reme grado de que todas las apariencias la mues
dio, que si radicalmente nq lo cura y ex tran susceptible, entonces la clase rica de
tirpa, al menos lo alivie y disminuya. Así, Cataluña y especialmente la de Barcelona,
y solo así, se neutralizan, se desbaratan podrá encontrarse en nuevos compromisos
las intrigas interiores y exteriores; así, y que le importa precaver á tiempo. Enton
solo asi , se remedian los males presentes y ces conjeturando lo que sucederá aquí por
se precaven los futuros. lo que en otros paises ha acontecido, con
La clase rica de Cataluña y particular el aumento de la industria crecerá la po
mente la de Barcelona , debe elevarse á la blacion, será mayor el número de los po
altura indicada en las observaciones que bres, y mas dura su pobreza. No es este el
preceden , considerando que su situacion lugar, ni cumple tampoco á nuestro pro
es mas crítica de lo que á primera vista pósito , de señalar las causas de tan doloro
pudiera parecer. Si la industria catalana so fenómemo; bástanos consignarle aquí
 — 83 —
para llamar la atencion de los interesados y tes juzgo que en la misma fuerza de dicha
convencerlos de la importancia de tomar dificultad podemos encontrar un nuevo in
las precauciones convenientes evitándose dicio de que nuestra creencia es" la única
males
¿Cuáles
de lason,
mayor
se nos
trascendencia.
preguntará esas pre verdadera.
Es cierto que la existencia de muchas
cauciones? ¿cutíles son los medios de que religiones es un mal gravísimo ; esto lo
puede echarse mano para lograr el deseado reconocemos los católicos mejor que nadie,
objeto? ¿cuál es la conducta que deben ob pues que somos los que sostenemos que no
servar los ricos con respecto á los pobres? hay mas que una religion verdadera , que
reservándonos para otro artículo el desen la fe en Jesucristo es necesaria para la eter
volver mas nuestras ideas, las formulare na salvacion , que es un absurdo el decir
mos por hoy en breves palabras : hacerlos que todas las religiones puedan ser igual
buenos , y hacerles bien.—/. B. mente agradables á Dios , y por fin los que
tal importancia damos á la unidad de la
enseñanza religiosa que consideramos como
una inmensa calamidad la alteracion de
POLÉMICA RELIGIOSA. uno cualquiera de nuestros dogmas. Por
donde se ve que no es mi ánimo atenuar
en lo mas mínimo la fuerza de la dificultad
ocultando la gravedad del mal en que es
CARTA SEGUNDA triba ; y que á mis ojos es mayor este daño
que no á los del mismo que me la ofrece,
Á UH ESCÉPTICO EN MATERIAS DE RELIGION. Nadie aventaja ni aun iguala álos católicos
en confesar lo inmenso de esa calamidad
del humano linage ; porque sus creencias
los precisan á mirarla como la mayor de
todas. Los que consideran como falsas to
MULTITUD DE RELIGIONES. das las religiones, los que se imaginan que
en cualquiera de ellas puede el hombre
Voy á pagar, mi querido amigo, la deu hacerse agradable á Dios y alcanzar la
da que en mi anterior contraje de respon eterna salud , los que profesando una reli
der á la dificultad que V. me proponía, gion que creen única verdadera , no profe
relativa á la permision de Dios , sobre tan san el principio de la caridad universal sin
tas y tan diferentes religiones. Este es uno distincion de razas , pueden contemplar con
de los argumentos que sin cesar reprodu menos dolor á esas aberraciones de la hu
cen los enemigos de la religion, y que sue manidad ; pero esto no es dado á los cató
len proponer con tal aire de seguridad y licos , para quienes no hay verdad ni salva
de triunfo, como si é1 solo bastara á echar cion fuera de la Iglesia , y que además
la por tierra. No se crea que trate yo de están obligados á mirar á todos los hom
desvanecer la dificultad , eludiendo el mi bres como hermanos, y desearles de lo ín
rarla caraá cara , ni de disminuir su fuerza timo del corazon que abran los ojos á la
presentándola cubierta con velos que la luz de la fe, y que entren en el camino de
encubran y disfracen ; muy al contrario , la salud eterna. Bien se echa de ver que
opino que el mejor modo de desatarla es no trato como suele decirse de huir el cuer
ofrecerla en toda su magnitud. Añadiré po á la dificultad , y que antes procuro
ademas , que no niego que haya en esto un pintarla con vivos colores. Ahora voy á
misterio profundo, que no me lisonjeo de examinar su valor , presentándola bajo un
señalar razones del todo satisfactorias en punto de vista, en que por desgracia no se
esclarecimiento de la objecion indicada ; la considera comunmente.
pues estoy íntimamente convencido de que Tienen los dialécticos un principio que
este es uno de los incomprensibles arcanos dice , quot nimis probat nildl probal ; lo
de la Providencia , que al hombre no le que prueba demasiado no prueba nada ; lo que
es dado penetrar. Me parece no obstante significa , que cuando un argumento cual
que les hace á muchos mas mella de la que quiera no solo concluye lo que nosotros
hacerles debiera ; y tan distante me hallo nos proponemos , sino tambien lo que á las
de creer que en nada destruya ni debilite claras es falso , de nada sirve para probar
la verdad de la Religion Católica , que an ni aun lo que nosotros intentamos. La ra
 — 8'i —
zon en que este principio se funda es muy la católica , lo mismo prueba contra la dp
clara : lo que conduce á un resultado falso, todas; tenemos pues que no solo viene al
ha de ser falso tambien ; luego por mas es suelo la nuestra ,sino cuantas existen y han
pecioso que sea un argumento, por mas existido. Ademas : si la dificultad que se
apariencias que tenga de solidez , por el levanta contra la permision de este mal
mismo hecho de llevarnos á una conse significa algo , es urda menos que una com
cuencia falsa , nos da una infalible señal pleta negacion de toda providencia, es de
de qué , ó entraña alguna falsedad en las cir la negacion de Dios, el ateismo. La
proposiciones de que se compone, ó algun razon es obvia : el mal de la multiplicidad
vicio de razonamiento en el enlace de las de religiones es innegable ; está á nuestra
mismas, y por tanto en la deduccion áque vista en la actualidad , y la historia entera
nos lleva. Si por ejemplo, me propongo es un irrefragable testimonio de que lo
demostrar que la suma de los ángulos de mismo ha sucedido desde tiempos muy re
de un triángulo es mayor que un recto, y motos; sí se pretende pues que la Provi
con mi demostracion pruebo que dicha su dencia no puede permitirlo , se pretende
ma es mayor que dos rectos , esta demos tambien que la Providencia no existe, es
tracion de nada servirá, porque con ella decir que no hay Dios.
pruebo demasiado , es decir, que es mayor Infiérese de aquí, que la permision de
que dos rectos, lo que no puede ser; y la muchedumbre de religiones, es una di
este resultado será para mí una infalible ficultad que embaraza al católico y al pro
señal de (pie hay un vacío en la demostra testante , al idólatra y al musulman , al
cion, y que no puedo aprovecharme de ella hombre que admite una religion cualquiera,
para probar nada. como al que no profesa ninguna , con tal
Otros ejemplos: si examinando un anti que no niegue la existencia de Dios. Por
guo manuscrito, pretendo desecharle como ejemplo: si se me presenta un mahometa
apócrifo , y señalo para ello una razon crí no con su Alcoran y su Profeta , preten
tica, de la que resulten condenados tam diendo que su religion es verdadera, y que
bien, códices cuya -autentidad no admita ha sido revelada por el mismo Dios, le
duda , claro es que debo apartarme de mi podré objetar el argumento y decirle: «si
razonamiento, seguro de que esta mal con tu creencia es verdadera, ¿cómo es que
cebido ; prueba demasiado y por lo mismo Dios permite tantas otras? si se engañan
no prueba nada. Si examinando la veraci mirerablemente los que viven en religion
dad de la narracion de un viagero , me diferente do la tuya, ¿.porqué permite Dios
empeño en que se ha dar fe á sus palabras que todos los demás pueblos del mundo
alegando razones de las que se infiriese que permanezcan privados de la luz? » A quien
es menester dar crédito á otras relaciones no niegue la existencia de Dios, imposible
conocidamente falsas ; mi manera de dis le ha de ser el no admitir su bondad y pro
currir seria mala tambien porque probaria videncia ; un Dios malo , un Dios que no
demasiado. cuida de la obra (pie él mismo ha críado ,
Perdone V. , mi querido amigo , si me es un absurdo que no tiene lugar en una
he detenido algun tanto en desenvolver es cabeza bien organizada ; y hasta me atre
te princiqio (pie en muchísimos casos sirve, veré á decir, que menos imposible se hace
y de que pienso hacer uso en la cuestion el concebir el ateismo en todo su horror y
que nos ocupa : y con esto entenderá V. negrura , que no la opinion que admite un
que no juzgo del todo inútiles las reglas Dios ciego, negligente y malo. Suponiendo
para bien discurrir, y que mi desconfianza pues la existencia de un Dios con bondad
en los filósofos no se extiende á todo lo que y providencia , queda en pié la misma di
se halla en la filosofía. ficultad arriba propuesta ; ¿ cómo es que
Apliquemos estos principios. Se nos ob permita que el humano linage , yerre tan
jeta á los católicos la multiplicidad de re lastimosamente en el negocio mas grave é
ligiones , como si á nosotros únicamente importante que es la religion ? Si se nos
embarazara la dificultad, como si todos los dijera que Dios se da por satisfecho de los
que profesan un culto , sea el que fuere , homenages de la criatura , sean cuales fue
no debiesen sobrellevar in solidtim todos ren las creencias que profese , y el culto
los inconvenientes que de ahí puedan re que le tribute la expresion de su gratitud
sultar. En efecto: si la multiplicidad de y acatamiento , entonces preguntaremos ,
religiones algo prueba contra la verdad de ¡j ¿ cómo es posible que á los ojos de un ser
 85 —
de infinita verdad , sean indiferentes la con dos hechos, cuya coexistencia nos pa
verdad y el error? ¿cómo es dable conce rece imposible, á nuestro juicio se exclu
bir que á los ojos de la santidad infinita yen, se regugnan : .pero ¿nos obstinamos
sean indiferentes la santidad y la abomina por esto en negar que los hechos existan ,
cion ? ¿ cómo es posible que un Dios infi cuando tenemos bastantes motivos para
nitamente sabio , infinitamente bueno , in darnos la competente certeza? De seguro
finitamente próvido , no hay cuidado de que nó. « Esto es para mí un misterio ,
proporcionar á sus criaturas algunos me decimos, no lo entiendo; me parece im
dios para alcanzar la verdad , para saber posible que asi sea , pero veo que asi es. »
cuál era el modo que le era agradable de En seguida , si la cosa vale la pena , bus
recibir los obsequios y las súplicas de los camos la razon secreta que nos explique el
mortales? Si las religiones solo tuviesen misterio ; pero si no damos con ella , no
entre sí diferencias muy ligeras, el absurdo por esto nos creemos con derecho de dese
de darlas todas por buenas , fuera menos char aquellos extremos, de cuya existen
repugnante ; pero recuérdese que casi to cia no podemos dudar, por mas que nos
das ellas están diametralmente opuestas en parezcan contradictorios.
puntos importantísimos , que las unas ad Por donde verá V., mi estimado amigo,
miten un solo Dios , y otras los adoran en que una inconcebible ceguera nos impide
crecido número ; que unas reconocen el á menudo , el emplear en el examen de las
libre albedrío del hombre , y otras lo dese verdades mas importantes, que son las re
chan , que unas asientan por uno de los ligiosas, aquellas reglas de prudencia de
principios fundamentales la creacion, y que nos valemos en los negocios mas co
otras se avienen con la eternidad de la ma munes; y rechazamos como ofensiva de
teria ; recórrase la enorme variedad de sus nuestra independencia y de la dignidad de
respectivos dogmas , de su moral , de su nuestra razon , aquella conducta que no
culto, y dígase si no es el mayor de los vacilamos en seguir á cada paso en la di
absurdos el suponer que Dios pueda darse reccion y arreglo de nuestros mas pequeños
por satisfecho con adoraciones tan contra asuntos. *
dictorias. Tan grabados tengo en mi ánimo estos
Vea V., mi estimado amigo, cuán bien principios enseñados por la buena lógica, y
se aplica á esta cuestion el principio dia por la mas sana prudencia , que me sirven
léctico que mas arriba he recordado ; y sobre manera en muchas otras dificultades
como una dificultad que algunos se empe pertenecientes á la religion , y no dejan
ñan en dirigir exclusivamente contra los que se perturbe mi espíritu á la vista de la
católicos, no les toca á ellos únicamente, oscuridad que en ellas descubro , y que en
sino á todos los hombres que profesan una mi debilidad no soy bastante á desvanecer.
religion , y aun á los puros deistas. ¿ Qué ¿Qué consideraciones mas espantosas que
debe hacerse en semejantes casos? ¿Cómo las sugeridas por la terrible dificultad de
se pueden obviar tamañas dificultades? Hé conciliar la libertad humana con los dog
aquí el camino que en mi concepto debe mas de la presencia y predistinacion ? Si el
seguir un hombre juicioso y prudente : hé hombre no atiende á mas que á la certeza
aqui la manera de discurrir mas conforme é infalibilidad de la presencia divina, qué
á razon : » El mal existe , es cierto ; pero dase sobrecogido de horror, erízansele los
la Providencia existe tambien, no es menos cabellos á la sola consideracion de la fijeza
cierto ; en apariencia son dos cosas que del destino , la sangre se le hiela en las
no pueden existir juntas ; pero supuesto venas al pensar que antes de nacer él ya
que tú sabes ciertamente que existen , esta sabia Dios cuál habia de ser su paradero ;
apariencia de contradiccion no te basta pero , tan luego como reflexiona un ins
para negar esa existencia; loque debes ha tante , sobreponiéndose al terror y á la de
cer pues es buscar el modo con que pueda sesperacion que se apoderaban de su alma,
desaparecer esta contradiccion ; y en caso encuentra abundantes motivos para sosi>-
de que no te sea posible , considerar que garse, halla aquí un misterio pavoroso, es
esta imposibilidad nace de la debilidad de verdad, pero que no le abate ni desalienta.
tus alcances.» a ¿Eres libre , se dice á sí mismo , para
Si bien se observa , en los negocios mas obrar el bien y el mal? sí, dudarlo no pue
comunes de la vida , hacemos á cada paso des, te lo enseña la fe, te lo dicta la razon;
un raciocinio semejante. Nos encontramos lo experimentas por un sentido íntimo , y

con experiencia tan clara , tan infalible ,
que no quedas mas cierto de tu existencia
que de tu libre albedrío. Luego nada im
porta que no comprendas cómo esta liber
tad se conciba con la presencia de Dios.»
«Este misterio que yo no comprendo,
¿debe alterar en algo mi conducta, vol
viéndome flojo para el bien , y poco cuida
doso de evitar el mal? ¿es prudente , es ló
gico el pensar que haga yo lo que quiera ,
siempre se verificará lo que Dios tiene pre
visto , y que por consiguiente son vanos
todos mis esfuerzos en seguir el camino de
la virtud? Nó. ¿Y por qué? porque lo que
prueba demasiado no prueba nada ; y si
este raciocinio valiera , se seguiría que
tampoco be de cuidar de mis negocios tem
porales , porque al fin no será de ellos mas
que de lo (pie Dios tiene previsto; que por
la misma razon , no he de comer para sus
tentarme , ni guarecerme de la intemperie,
ni andar con tiento al pasar por la orilla
de un precipicio , ni medicarme cuando me
halle indispuesto, ni retirarme cuando se
me viene encima un caballo desbocado, ni
salir de una casa que se está desplomando,
y cien y cien otras locuras por este jaez ;
es decir , que el atenerme á tal regla me
privaría de sentido comun , hasta de juicio,
haria de mí un loco rematado. Luego la
tal regla es falsa, luego de nada debe ser
virme, luego lo que he de hacer es dejarle
á Dios sus incomprensibles arcanos , y por
tarme yo como hombre recto , juicioso y
prudente.»
A esto vienen á parar muchas de las di
ficultades que contra la religion se propo
nen : miradas superficialmente ofrecen una
Imlumbra abrumadora ; examinadas de
cerca , al tocarlas con la vara de la razon
y del buen sentido, desaparecen cual vanas
fantasmas.
Veamos ahora si se puede encontrar la
razon de que Dios permita tal muchedum
bre de religiones , tal masa de informes
errores en el punto que mas interesa al hu
mano linage. La explicacion de este mis
terio , yo no alcanzo que pueda encontrarse
sino en otro misterio, en el dogma de la
Religion Católica sobre la prevaricacion y
consiguiente degeneracion de la descenden
cia de Adan. El pecado, y como su consi
guiente castigo , las tinieblas en el entendi
miento , la corrupcion en la voluntad; hé aqui
la fórmula para resolver el problema ; re
volved la historia , consultad la filosofía ;
nada os dirán que pueda ilustraros , si no
86 —
|| se atienen á este hecho misterioso, oscuro,
pero que como ha dicho Pascal , es menos
incomprensible al hombre que no lo es el
hombre sin él.
Esta es la única clave para descifrar el
enigma ; solo por ella alcanzamos á expli
car esas lamentables aberraciones dela ma
yor parte de la humanidad : no hay otro
medio de dar una explicacion plausible á
esta calamidad inmensa , como ni á tantas
otras que afligen la infortunada prole de
los primeros prevaricadores. El dogma es
incomprensible , es verdad ; pero atreveos
á desecharle , y el mundo se os convierte
en un caos, y la historia de la humanidad
no es mas que una serie de catástrofes sin
razon ni objeto, y la vida del individuo es
una cadena de miserias; y no encontrais
por do quiera sino el mal , y el mal sin
contrapeso , sin compensacion ; todas las
ideas de órden , de justicia , se confunden
en vuestra mente , y renegando de la crea
cion , acabais por negar á Dios.
Sentad al contrario este dogma como
piedra fundamental , el edificio se levanta
por sí mismo, vivísima luz esclarece la his
toria del género humano , divisais razones
profundas , adorables designios , allí donde
no viérais sino injusticia , ó acaso ; y la se
rie de los acontecimientos desde la creacion
hasta nuestros dias se desarrolla á vuestros
ojos , como un magnífico lienzo donde en
contrais las obras de una justicia inflexible,
y de una misericordia inagotable, combi
nadas y hermanadas bajo el inefable plan
trazado por la sabiduría infinita.
Si entonces me preguntais ¿ por qué tan
considerable porcion de la humanidad está
sentada en las tinieblas y sombras de la
muerte ; os diré que el primer padre quiso
ser como un Dios sabiendo el bien y el mal,
que su pecado se ha transmitido a toda su
descendencia, y que en justo castigo de
tanto orgullo está el género humano tocado
de ceguera. Esta calamidad, grande como
es, no necesita que se le señale otro ma
nantial que á todas las otras que nos afli
gen. Las terribles palabras que siguieron
al llamamiento de Adan cuando le dijo
Dios : o Adan dónde estás?» resuenan do-
lorosamente todavía despues de tantos si
glos ; y en todos los acontecimientos de la
historia, en todo el curso de la vida, siem
pre se trasluce el terrible fulgor de la es
pada de fuego , colocada á la entrada del
Paraíso. El sudor del rostro, la muerte, se os
ofrecerán por do quiera ; en ninguna parte
 — 87
notareis que las cosas sigan el camino or de vista, y por qué han debido escandali
dinario; siempre herirá vuestros ojos la zarse tanto los filósofos , de los dogmas de
formidable enseña del castigo y de la ex la religion que tan en armonía se encuen
piacion. tran con lo que nos estan diciendo los fas
Cuanto mas se medita sobre estas verda tos de todos los tiempos y la experiencia de
des mas profundas se las encuentra : in m- cada dia. La prevaricacion y degeneracion
dore vultos tui vesceris pane , comerás el pan del humano linage es el secreto para desei-
con el sudor de tu rostro , dijo Dios al pri cifrar los enigmas sobre la vida y los desti
mer padre ; y con este sudor lo come toda nos del hombre ; y si á esto se añade el
su descendencia. Recordad esa pena, y ha adorable misterio de la reparacion, com
ced las aplicaciones á cuantos objetos os prada con la sangre del Hijo de Dios, for
i , y no hallareis nada que de ella se ma el mas admirable conjunto que imagi
No vive el hombre de solo pan , sino narse pueda ; un tan sublime sistema , que
de toda palabra que procede de la boca de Dios; á la primera ojeada manifiesta su origen
no se verifica pues la terrible pena , solo divino. Nó , no pudo nacer de cabeza hu
con respecto al pedazo de pan que nos sus mana combinacion tan asombrosa; no pudo
tenta, sino en todo cuanto concierne á el espíritu finito idear un plan tan vasto,
nuestra perfeccion. En nada adelanta el tan estupendo, donde se trabaran de tal
hombre sin penosos trabajos, no llega ja suerte unos arcanos con otros arcanos, que
mas al punto que desea , sin muchos extra del fondo de su oscuridad pavorosa arrojan
víos que le fatigan ; en todo se realiza que rayos de vivísima luz para esclarecer y re
la tierra en vez de frutos le da espinas y solver todas las cuestiones que sobre el orí-
abrojos. ¿Ha de descubrir una verdad? no gen y destinos del hombre andaba haci
la alcanza sino despues de haber andado nando la filosofía.
largo tiempo tras extravagantes errores; Esto es lo principal que tenia que decirle
¿ha de perfeccionar un arte? cien y cien sobre las dificultades propuestas; ignoro si
inútiles tentativas fatigan á los que en ello V. quedará enteramente satisfecho; sea
se ocupan , y á buena dicha puede tenerse como fuere , lo que puedo asegurarle con
si recogen los nietos el fruto de lo que toda la sinceridad y conviccion de que soy
sembraron los abuelos. ¿Ha de mejorarse capaz , es que , en las obras de todos los
la organizacion social y política? sangrien filósofos desde Platon hasta Cousin , no ha
tas revoluciones preceden la deseada rege llará V. sobre este particular nada con que
neracion ; y á menudo , despues de prolon un espíritu sólido pueda contentarse , si no
gados padecimientos, se hallan los infelices está tomado de la religion. Ellos lo saben,
pueblos en un estado peor del en que antes y ellos propios lo confiesan. Una vez han
gemían. ¿Se ha de comunicar á un pueblo llegado á dudar de la divinidad del cristia
la civizacion ó cultura de otro? la inocula nismo , no saben de qué asirse : acumulan
cion se hace con hierro y fuego : genera sistemas sobre sistemas , palabras sobre pa
ciones enteras se sacrifican para alcanzar labras; si su espíritu no es de alto temple,
un resultado que no verán sino generacio abandonan la tarea de investigar, fastidia
nes muy distantes. No vereis al genio sin dos de no divisar en ningun confin del ho
grandes infortunios ; nó la gloria de un rizonte un rayo de luz ; y se abandonan al
pueblo sin torrentes de sangre y de lágri positivismo , ó en otros términos , procuran
mas ; nó el ejercicio de la virtud sin peno sacar partido de la vida disfrutando de las
sos sinsabores; nó el heroismo sin la perse comodidades y placeres. Si su alma es na
cucion; todo lo bello, lo grande, lo sublime, cida para la ciencia , si sedienta de verdad
no se alcanza sin dilatados sudores, ni se no quiere abandonar la tarea de buscarla,
conserva sin fatigosos trabajos; la ley del por grandes que sean las fatigas, y patente
castigo , de la expiacion , se muestra por la inutilidad de los esfuerzos, sufren du
todas partes de una manera terrible. Esta rante toda su vida , y acaban sus días con
es la historia del hombre y de la humani la duda en el entendimiento , y la tristeza
dad : historia dolorosa ciertamente , pero en el corazon.
incontestable , auténtica , escrita con letras En la actualidad , entusiasta como es V.
fatales donde quiera que los hijos de Adan de la filosofía, y admirador de ciertos nom
hayan fijado su planta. bres, no comprenderá fácilmente toda la
Yo no sé , mi estimado amigo , por qué verdad y exactitud de mis palabras ; pero
no ha llamado mas la atencion este punto dia vendrá, en que recuerde mis avisos aun
 — es
macho antes de que Manqueen su cabeza dito la iglesia establecida , y aumentándose
las canas. Nó , no necesitará V. que la tar las tendencias hácia el catolicismo. Sabido
día vejez cargada de escarmientos y desen es (pie el célebre doctor Pusey teólogo de
gaños, venga á abrirle los ojos: no sé si los Oxford, y sabio distinguido, ha dado el
abrirá V. para ver y abrazar la verdadera nombre á una escuela , que sin condenar
religion , pero si al menos para conocer la decididamente el anglicanismo le abre sin
futilidad de todos los sistemas filosóficos en cesar profundas heridas; asi como de otra
lo tocante al origen , v ida , y destino del parte va haciendo en cierto modo la apolo
hombre. ¿Qué mas? ni siquiera necesita gía de la Iglesia Católica, sin que se resuel
rá V. estudiarlos á fondo para quedarse va á entrar en su seno. Al laclo de Pusey
profundamente convencido de la impoten figura un escritor que se ha señalado sobre
cia del espíritu humano, abandonado á sus manera en promover el desarrollo de esas
propios recursos : en el vestíbulo mismo doctrinas que tanto se aproximan al catoli
del templo de la filosofía , encontrará la cismo; teólogo de la misma universidad, y
duda y el escepticismo; y penetrando en ejerciendo con sus escrito^ poderosa in
su santuario oirá el orgullo disputando so fluencia sobre el clero anglicano, se en
bre objetos de poca entidad , ocupándose cuentra en excelente posicion para servir
en juegos de palabras simbólicas é ininteli de instrumento á la Providencia , el dia
gibles , y procurando en cuanto le es posi (pie la infinita bondad de Dios se digne
ble ocultar su ignorancia , eludiendo con conducir de nuevo al redil las ovejas ex
una afectada pretericion las cuestiones que trañadas.
mas de cerca nos interesan , cuales son las Este doctor se llama .Newman , y acaba
relativas á Dios y al hombre. No se deje V. de ofrecer á la Inglaterra y á la Europa,
deslumbrar con los vanos títulos con que un espectáculo tan singular , que nos atre
se adornan los diferentes sistemas, ni se veríamos á decir que carece de ejemplo.
abandone á superticiosas creencias con res En un trabajo que tiene por título Lyra
pecto á los pretendidos misterios de la filo Apostólica habia llamado á la iglesia ro
sofía alemana, ni tomeV. por profundidad mana iglesia perdida; en una obra sobre los
de ciencia la oscuridad del lenguage. No Arríanos habia hablado de hapostasía papal;
olvidemos que la sencillez es el carácter de en otra titulada Trocís for lite Tintes decla
la verdad ; y que poco fia de sus descubri raba (pie Moma era herege, que habia apos
mientos quien no se atreve á presentarlos tatado en la época del Concilio de '1 rento,
á la luz del dia. listos tan ponderados filó (pie la comunion romana se habia lujado para
sofos, que rodeados de tinieblas viven co siempre con la cama del Anli-cvisto , que ha
mo trabajadores que estuviesen explotando bia sustituido la mentira á la verdad de Dios y
riquísimas minas en las entrañas de la tier que era menester huir de ella como de una peste.
ra, ¿por qué no nos manifiestan el oro Las expresiones que se acaban de leer no
puro que han recogido? Otro dia, si la las habia soltado el autor en sus mas re
oportunidad se brinda , entraremos de cientes publicaciones, dadas á luz con mas
nuevo en esta discusion ; entre tanto dis conocimiento de causa y con mas espíritu
ponga de su afectísimo.—J. B. de justicia en favor de la verdad. Sin em
bargo lo que habia dicho en los últimos
años en favor del catolicismo, no ha sido
bastante para apaciguar su conciencia con
EL DOCTOR NEWMARf, respecto á lo que se habia permitido en las
anteriores; y asi ha creido de su deber bor
EL PUSEISMO , rarlas de sus obras en cuanto le es posible,
destruyendo de esta suerte el mal efecto
Y I NA RETRACTACION EXTRAORDINARIA. (pie pudieron causar en el ánimo de los
lectores. Para esto ha apelado al medio
mas sencillo y expedito, y al mismo tiem
po muy honroso á la rectitud de sus inten
ciones, publicando en los periódicos una
Repetidas veces hemos llamado la aten solemne retractacion de cuanto habia dicho.
cion de nuestros lectores sobre la revolu Conócese (pie el doctor Newman sentia
cion religiosa que se está verificando en no leves escrúpulos al permitirse tan des
Inglaterra, cayendo mas y mas en descré templadas expresiones contra la Iglesia Ru
 mana
plica con
pasaba ; yenes
cándida
sucurioso
espíritu.
sencillez
el oirle
« Silocuando
me ex- |j influencia política, y Dios ha mantenido
quepreguntais
á lanos
sazon
tan separados estos extremos , que lejos de
aliarse han vivido enemistados. Se hubiera
cómo puede permitirse un simple indivi dicho que el cambio se habia verificado por
duo pensar y mucho menos publicar seme medio de sorpresa , que los ánimos no ha
jantes cosas , sobre una comunion tan anti bian podido prepararse , que el tiempo no
gua, tan extendida, y que ha producido habia madurado las cosas, y que por tanto
tantos santos, responderé con el mismo las nuevas convicciones se resentirían de la
lenguage de que me valia entonces para precipitacion con que habían sido concebi
mí mismo, cuando me decia: «las pala- das ; y Dios ha querido que el tiempo de
abras que yo publico no son mias, yo no mandado transcurriese en abundancia, que
« hago mas que seguir las opiniones de los despues de siglos de error y de fanática
«teólogos de mi iglesia, quienes sin excep- exaltacion , comenzase la saludable abun
« tuar ni aun los mas distinguidos y mas dancia, primero calmándose los ánimos,
«sabios, han hablado siempre contra Ro- ' cediendo de su primitiva irritacion, exami
« ma en términos extremadamente violen- nando con menos parcialidad é injusticia la
« tos; yo deseo adoptar su sistema; cuando causa de los catolicos, y llamando al tribu
«repito lo que ellos han dicho estoy en to- nal de una razon ilustrada las calumnias de
« da seguridad ; pues que en nuestra posi- que se los agobiaba; que en seguida se pa
«cion el abrazar sus miras es cosa poco sasen á investigar los motivos que se ha
« menos que necesaria. » bian tenido para separarse de la Iglesia Ro
« Tengo tambien , continúa el doctor mana , y que se palpase la sinrazon de un
Newman , razones para temer que esteJen- cisma que solo han podido sostener las im
guage pueda ser atribuido en gran parte á posturas de los interesados en prolongarle;
un caracter ardiente, y á la esperanza de y que en fin ora por abiertas conversiones,
ver mi conducta aprobada por personas ora por confesiones mas ó menos explícitas,
que respeto. Además, quería al mismo se anduviese propagando la doctrina católi
tiempo , ponerme á cubierto de la nota de ca , preparándose el afortunado dia en que
Uomaimmo. » segun la expresion de un grande escritor,
Las palabras que preceden no necesitan la Inglaterra se hará católica , y desecho
comentarios , mayormente cuando se sabe tambien el cisma de Oriente , la Europa
que este hombre no se ha convertido toda asistirá al Te-Deum que se cantará en San
vía al catolicismo; mientras hace estas con ta Sofía.
fesiones tan consoladoras , oirnosle que di- i Ved lo que está indicando la célebre uni
ce, que no entiende por esto retractarlo ' versidad de Oxford , lo que nos está dicien
que ha escrito en defensa de la iglesia an- ¡ do la escuela de Pusey , lo que nos está re
glicana. Tal vez nos engañamos, pero nos velando la notable retractacion del doctor
parece columbrar aquí algunos indicios de ' Newman. Las palabras, las ingenuas con
vastos designios de la Providencia. Los fesiones del distinguido escritor, nos hacen
enemigos del catolicismo siguiendo su acos asistir á una conversion sosegada , lenta , en
tumbrado sistema de difamacion y calum que la Providencia se complace en mani
nia, se empeñan en presentar los triunfos festar la transformacion que se va realizan
de la religion verdadera como resultado de do en los espíritus con el auxilio de las lu
sórdidas intrigas , ó efectos de un fanatis ces y de la gracia. En efecto : notamos en
mo desatentado. Si la Inglaterra se hubiese primer lugar, que el doctor Newman al
convertido repentinamente , hubiérase di- escribir sus invectivas contra la Iglesia Ca
cho á no dudarlo, que no mediaba el dedo tólica , al llamarla iglesia perdida , apósta
de Dios, que no debia atribuirse á la gracia ta, y de la cual era necesario huir como de
el prodigioso acontecimiento , sino que era la peste , siente ya en el fondo de su alma
necesario buscar su origen en miras y com una voz que está clamando contra tanta in
binaciones políticas , que con. mas ó menos justicia; puede apenas sosegar su espíritu
especiosidad se hubieran indicado desde agitado por un vivo remordimiento ; vién
luego, dejando al porvenir la aclaracion de dose precisado á apoyarle en la autoridad
lo demas que se habría supuesto oculto en de los hombres mas distinguidos de la iglesia
tre las sombras. La Providencia ha querido angüeana , (¡vienes al hablar de la iglesia caló-
que las cosas marchasen por otro sendero: tótica se han expresada con la mugar violencia.
se hubieran atribuido las conversiones á la Es decir que el doctor no se sentía ya con
 — 90 —
bastantes fuerzas para atacar por sí solo la que estan amenazando á la iglesia anglica-
Iglesia Romana , ya no estaba seguro de lo na. Se ha trabado ya una ardiente lucha
mismo que decia, sus convicciones eran sobre este punto ; y los escritos contra los
tan débiles que habian menester el sosten católicos y los puseistas se derraman con
de la autoridad agena. Además, ya no pro gran profusion para atajar la corriente
cedían de lo íntimo del alma , ya no eran de las sanas ideas , que de tal modo per
la expresion del pensamiento , eran un me turba el reposo de los discípulos del er
dio para congraciarse con las personas d ror. Entre los muchos folletos publica
quienes respetaba, y para precaver la tacha de dos últimamente, se nota uno que me
romanismo. Malo como era semejante pro rece ser copiado por lo que dice y por
ceder , anunciaba no obstante que la obs lo que deja entender. Lo insertamos tal
tinacion no tenia asiento en el ánimo del como lo hemos visto en periódicos extran-
escritor , que sus ojos comenzaban á abrir geros. « Miembros de la Iglesia : llamamos
se , que la luz de la verdad descendía del seriamente vuestra atencion sobre una con
cielo sobre su cabeza ; y que Dios al per fesion hecha recientemente con respecto al
mitir su estravío , no quería sin embargo verdadero objeto que se propone el partido
dejarle en aquella horrible tranquilidad, cismático , que de algun tiempo á esta par
que disfrutada en medio del mal , es señal te ha perturbado y dividido de una manera
funesta de que el nombre del culpable está tan lamentable la iglesia nacional. Este ma
borrado del Libro de la Vida. nifiesto se encuentra en el British Critic.
La retraccion que acaba de hacer el doc número 59, p. 45. Hélo aquí;:
tor Newman , de las proposiciones vertidas «Nosotros debemos separarnos mas y
contra la Iglesia Católica , tienen mas peso »mas de los principios, si tal nombre me-
en la actualidad , que si lo hubiese verifi »reeen, de la Reforma Inglesa.» «El que
cado despues de su conversion que con tan lee , entienda ; en vano se para la red á la
fundados motivos esperamos. Si un paso vista de las aves.»
semejante lo hubiese dado despues de abra Continúa el celo protestante recomen
zada decididamente la fe de la Iglesia Ro dando la circulacion de dicho folleto, el
mana , seria una consecuencia muy legíti que se halla de venta en todas las librerías
ma de su cambio de religion , y quizás no de Londres , á razon de un schelling cada
ofrecería tan abundante pábulo de serias cien ejemplares, para hacer frente de esta
reflexiones á los que estan observando la manera y á favor de la baratura, á las ten
marcha de los espíritus. Un hombre que tativas de los agitadores eclesiásticos , que no
se acabe de hacer católico , natural es que se avergüenzan de comer el pan de la iglesia
manifieste profundo respeto á la verdadera protestante mientras trabajan para arruinarla.
iglesia , y que repruebe lo que antes habia Manifestando finalmente en cuánto apuro
aprobado. Pero un protestante, que per se halla la causa del error, exclama el au
maneciendo todavía en su falsa secta , re tor del folleto : « Dios , en su misericordia ,
tracta lo que ha dicho contra la Iglesia Ca conserve entre nosotros la verdadera reli
tólica , y lo retracta de una manera pública gion protestante.»
y solemne , es el espectáculo mas raro que Échase de ver la indignacion con que se
en este género pueda ofrecerse , es una levantarán contra el Doctor Newman los
clarísima señal de que la verdad se va sostenedores del Anglicanismo , y que ago
abriendo paso al traves de todos los obstá tarán el diccionario de injurias de la ren
culos, y que la Providencia va adelantando corosa Reforma, para presentarle á los
su admirable obra por caminos incompren ojos del público con los mas negros colores.
sibles al hombre. Pero Dios , cuya gracia le ha dado fuerza
Y esta resolucion del doctor Newman es bastante para dar en el camino de- la ver
de tanta mas importancia, cuanto que dad un paso tan costoso, se la otorgará
atendida la situacion de espíritus en Ingla tambien para sufrir con resignacion los in
terra , no podrá menos de acarrearle un sultos que se le prodiguen , preparando po
diluvio de insultos y sarcasmos por parte co á poco su espíritu para que se decida de
de los protestantes, que vivamente alarma una vez á abrazar la fe de esta Santa Igle
dos del progreso del catolicismo en aquel sia , á cuyo seno el Señor le está llamando
pais, y de las buenas tendencias que se con tan patentes señales. Entrelos que par
manifiestan en la escuela puseista , claman ticipan de las ideas puseistas , la resolucion
con la mayor violencia contra los males del Doctor Newman ha encontrado muy
lisonjera acogida , y hasta se añade que ese
acto tan recomendable hallará bien pronto
imitadores. Ya que la infinita misericordia
sufre tan benignamente las dilaciones , y la
indecision de esas ovejas extraviadas, su
frámoslo tambien nosotros ; aguardemos con
paciencia el diade bendicion en que brilla
rá con toda claridad á sus ojos la luz divi
na , y entre tanto oremos por ellos , como
estan orando los católicos de aquel pais , y
de otras partes, para que el Señor se digne
consolar su Iglesia con la conversion de
tantos desgraciados, tanto mas dignos de
compasion , cuanto han nacido en un reino
envuelto en las tinieblas dej error, y donde
las preocupaciones contra la fe católica ha
bian echado mas profundas raices. No pre
guntemos por qué tarda tanto el cumpli
miento de nuestros deseos y esperanza :
¿qué es el hombre para pedir cuenta á
Dios?
La retractacion del Doctor Newman nos
ofrece un modelo que debieran imitar to
dos los católicos , que habiéndose deslizado
en algun error ó permitido expresiones mal
sonantes, han podido escandalizar á los
sencillos, poniendo quizás en peligro su fe,
ó disminuyendo el respeto que deben pro
fesar á la Iglesia. Si Newman, todavía pro
testante , que declara expresamente no ser
su ánimo el cambiar de comunion, reprue
ba de una manera pública y solemne las
expresiones vertidas contra la Iglesia Ro
mana , no porque esté ya adherido á ella ,
sino por conceptuar injustos los cargos que
le habia hecho , y calumniosas las califica
ciones con que la habia ofendido ; ¿ con
cuánta mas razon deberán los verdaderos
católicos proceder con mucho cuidado en
desfigurar la historia eclesiástica , desenca
denándose contra los sumos Pontífices y
contra la Sede Romana ó contra el cuerpo
del Episcopado en general? Por desgracia
no siempre se anda en estas materias con
el tiento debido , y libros existen de auto
res que se apellidan católicos, y á quienes
nosotros no negaremos tampoco este título
hasta que la Iglesia se lo haya tambien ne
gado , que se expresan con tanta desenvol
tura en estas materias, que difícilmente
pudiera creerse que fuera autor católico
quien no ha reparado en consignar seme
jantes palabras en sus escritos. Y no pre
tendemos por esto que al examinar la
historia de la Iglesia, se proceda con par
cialidad , ni se dispensen elogios á quien no
los merezca , ó se trate con excesiva indul
gencia al que de ella se haya hecho indigno
por su conducta; pero si es bien claro,
que al tratarse ciertos puntos delicados, no
asienta bien á un hombre que se apellida
hijo de la Iglesia , el desatarse en invectivas
contra este ó aquel Pontífice , esta ó aque
lla clase. Conviene recordar que sin faltar
en nada á la verdad histórica , sin torcer la
rectitud del juicio , y hasta sin escasear el
correspondiente vituperio de las malas ac
ciones , cabe emplear cierto lenguage en
que se trasluzcan á un mismo tiempo el
amor de la verdad y el celo de la justicia ,
hermanados con el cuidado de conservar el
decoro y buen nombre de la Iglesia ; cabe
emplear cierto lenguage en que se conozca
que al narrar los excesos , al exponerlos á
la reprobacion pública , se cumple con un
deber doloroso , como el hijo que se ve
precisado á confesar la ignominia de su pa
dre. Los que conocen estas materias juzga
rán si es oportuno lo que acabamos de in
dicar. El curso de los acontecimientos ha
puesto demasiado en clarolos resultados de
semejante conducta para que sea excusable
nadie que en adelante la siga. Hubo un
tiempo en que algunos católicos poco avi
sados, ó seducidos quizás por el prurito de
hablar con entera libertad manifestando un
espíritu superior á las preocupaciones vul
gares é inaccesible á la lisonja , pudieron
creer que no era mucho el daño que oca
sionaban , dando á luz escritos que sin re
paro habrían podido adoptar como suyos
los protestantes y los incrédulos. Pero en
la actualidad la situacion se ha aclarado de
tal manera, se ha manifestado con tanta
evidencia cuál era el blanco de los que
aplaudían estrepitosamente estas publica
ciones, que la falta de circunspeccion es un
verdadero delito á los ojos de Dios.
Es ya muy consolador para un ánimo
fiel y piadoso , el observar que se van con
venciendo de estas verdades todos los hom
bres de intenciones leales y sinceras. Fíjese
la atencion sobre el lenguage de los escri
tores católicos , y se notará que se van des-
|j viando del errado camino de insistir dema-
¡\ siado sobre ciertos puntos en los que le»
| parecía desahogar inocentemente su celo,
cuando en realidad contribuían al descré
dito de las instituciones mas augustas, y
por tanto dañaban gravísímamente los in
tereses de la fe católica. Antes de los hor
rorosos acontecimientos presenciados en re
voluciones recientes, habian llegado las
cosas á un punto escandaloso; siendo difícil
de concebir cómo se habia apoderado de
los ánimos tan funesto prurito de exagera
cion y maledicencia.
Es menester desenfrailarse ; si se decla
ma mucho contra los Papas al fin se ven
drán á suscitar dudas sobre la legitimidad
del Vicariato que ejercen ; si se habla ince
santemente contra sus pretendidas usurpa
ciones temporales y espirituales , al fin se
llegará á poner en cuestion su primado de
jurisdiccion y de honor. No ignoramos, lo
que á esto suele responderse , no descono
cemos que los vicios y las faltas de un Papa
nada tienen que ver con el pontificado;
pero tampoco se nos oculta que cuando las
cosas se llevan hasta cierto punto, hay dis
tinciones que es mas fácil hacerlas de pala
bra que de corazon , y que cuando nos
hayamos acostumbrado á mirará una serie
de hombres con aversion y desprecio, se
nos hará difícil el atacarlos como vicarios
de Jesucristo.
Cuando ocurra calificar los procedimien
tos de este ó aquel Papa , cuando sea me
nester designar y condenar un abuso que
en este ó aquel tiempo se hubiere introdu
cido , quien sienta que su pluma destila
amarga hiel, qfiien llevado por el celo in
discreto se exalte en demasía , y se deje
arrastrar á expresionesexageradas, recuer
de que un protestante nos ha dado el ejem
plo del respeto con que debe hablarse de la
Iglesia , y que no solo no ha tenido reparo
en desaprobar su anterior conducta, sino
que antes bien ha llegado á esponernos con
la mayor sencillez los motivos que le ha
cían obrar de aquella suerte , sin callar ni
aun aquellos en cuya ocultacion se intere
saba vivamente su amor propio. Al -refle
xionar sobre la elocuente y saludable re
flexion que resulta de hecho tan singular
como el que hemos consignado , ocúrrenos
naturalmente aquella profunda sentencia de
S. Agustín, á saber: que Dios es tan bue
no , que no permitiría el mal , si del mismo
mal no pudiera sacar un bien.
EL IIUERTO DE GETIISEMMÍ.
i.
Estaba la noche en la mitad de su car
rera : la luna despidiendo sus lúgubres res
plandores, parecía en la inmensidad de los
cielos la pálida antorcha de vasto panteon,
donde reposan los restos de un poderoso
monarca. Divisábanse acá y acullá en la
azulada bóveda algunas estrellas cuya vi
brante luz se eclipsaba de vez en cuando
con el brillo del astro nocturno ; la ciudad
de David , sus baluartes , sus encumbradas
torres, sus alcázares, su temido, presentá
banse confundidos en tenebroso grupo, cual
fúnebres espectros que en las sombras des
plegaran sus miembros de gigante. Los
metales heridos por los rayos de la luna,
relumbraban tal vez con algun reflejo , co
mo feble llamarada que se exhala de la lo
breguez de las tumbas, ó siniestro fulgor
de acero blandido en lastinieblas. Lasnguas
del Cedron murmullaban sordamente, y
los ecos del valle respondían al ruido : hu-
biérase dicho que los reyes enterrados allí
despedían algun lamento desde la hondura
de sus sepulcros.
11.
Con ala medrosa , leve airecillo osa sa
cudir apenas las ramas de los árboles; di-
vísanse tres hombres en un grupo , que
medio tendidos en el suelo, manifiestan
dificultad de mantenerse velando. ¿Qué
hacen allí? ¿son viageros extraviados á
quiénes sorprendiera la noche en medio de
su camino? ¿abrigaban quizás malvada in
tencion , acechando el momento oportuno
de satisfacer una venganza , ó de acometer
al desprevenido viandante? Mas allá, no
muy lejos, cuanto alcanza el breve trecho
de una piedra arrojada , descúbrese una
sombra inmóvil acercaos; veréisle en
humilde compostura, hincado de rodillas,
orando con fervorosa plegaria ; pintado en
su semblante el raudal de tristura y de do
lor que inunda su angustiado pecho : sil
 93 —
alma está triste hasta la muerte. Tiene á su fiero satélite que con desprecio y altivez le
vista el cáliz do rebosa la terrible justicia veda acercarse al Ajusticiado ! Marcha á
de un Dios indignado: el espíritu está pron morir, á padecer el último tormento; pero
to, pero la carne es flaca. Levanta al cielo ya conserva apenas la figura de hombre ;
sus ojos, y dirigiéndose al Padre Celestial, no tiene parte sana , desde la planta de los
con inefable ternura le dice : « Padre mio , pies hasta la coronilla de la cabeza. Le des
si es posible, pase de mí este cáliz; mas no nudan , dislocan sus huesos de manera que
se haga mi voluntad sino la tuya » asi dijo, pudieran contarse; echan la suerte sobre
y sumido otra vez en el silencio de la me sus vestidos , le retan á que descienda de
ditacion, apuraba ya en espíritu las acerbas la cruz y se salve
heces del cáliz mas terrible.
V.
III.
Pero ab! que no son únicamente los do
Entre tanto no olvida su amor á sus pre lores que va á sufrir su cuerpo lo que llena
dilectos discípulos : se levanta , se les acer hasta rebosar el terrible cáliz de amargura.
ca, y reconviniéndolos con dulce cariño, El porvenir preñado de infaustos sucesos,
Ies exhorta á que velen con él siquiera un negro como nube tempestuosa, prometien
momento : « una sola hora no pudisteis vi do todavía triunfos al infierno, merced ála
gilar conmigo? » Indulgente, se aparta el ceguera y perversidad del hombre, se des
mansísimo Cordero , los deja que disfruten pliega con toda claridad á los ojos de Jesus;
de reposo , mientras él para salvarlos tiene y la luz divina que penetra hasta lo mas
destrozado el corazon. Enderézase de nue hondo de aquella oscuridad , sirve á pre
vo al punto escogido , y comenzando otra sentar en toda su viveza la ingratitud y los
vez la sentida plegaria , invoca á su Padre crímenes que desperdiciarán para tantos y
Celestial para que aparte si es posible el tantos el infinito precio del -rescate pagado
formidable cáliz. Y otra vez se les acerca, con la sangre de un Dios.
y los encuentra tambien dormidos ; y de
jándolos, torna de nuevo á orar, para que
pase de él , si es posible , el amargo cáliz ; VI.
pero de tal manera, que no se haga su vo
luntad , sino la de su Eterno Padre. ¿Veis cuál destrozan la túnica inconsútil
las sacrilegas manos de un soberbio , que
con vano cavilar atenta contra el cielo,
IV. blasfemando de aquella Generacion que la
lengua del mortal no puede narrar, de aquel
Verbo (pie era ya en un principio , y esta
¡Qué pensares tan dolorosos ocupan su ba ante Dios, y era Dios, por quien se han
mente! ¡ qué agobio tan angustioso oprime hecho todas las cosas ? ¿ no veis como en
su pecho ! ¡ qué congojas de mortal agonía la astuta maraña se encuentra enredado el
despedazan su alma, pues copioso sudor mundo entero, y asombrado del error en
de sangre baña el sacro rostro y corre en que ha caido , se apesara y gime? ¿ no veis
arroyo hasta el suelo ! Ay ! que está viendo como beben el mortífero veneno numero
del (iólgota la horrorosa cumbre , y la sos pueblos llamados á la luz de la verdad,
afrentosa muerte del madero, y la burla preparando larga serie de desastres á la
del soldado , y el escarnio y feroz insulto Esposa del Cordero? De entre Jos escom
del desapiadado fariseo ! ay dolor ! y esta bros de escuelas pulverizadas renacen co
viendo tambien las angustias de una Madre mo pestíferos insectos los febriles delirios
amorosa, que sin alivio, sin consuelo, sin que en su fiera altivez apellidara el hombre
amparo, andará confundida entre las olea prodigios de concepcion vasta y elevada :
das del numeroso pueblo , oyendo los fu el Hijo de Dios padece y muere para ilu
riosos alaridos de una plebe sedienta de minar y salvar el mundo; y la vanidad, y
sangre ! De una Madre que está oyendo el el orgullo, y la ambicion se conjuran para
ruido de las armas y el sonar de las trom hacer inútiles tanta dignacion y miseri
petas, y sufriendo el brutal empujon del cordia !
 94 ble
— que te mire el alto cielo, sin darte si
quiera alivio en tanta pena , en angustia
VII. tanta, nó : que el amoroso ruego que ele
vaste al Padre Celestial, en cuyo seno fuis
te engendrado , subió ya hasta las gradas
Allá en la ilustre Bizancio , inmortaliza de su trono; de entre las nubes que acá y
da por Constantino, está mirando al hom acullá estan sembradas , se desgaja con
bre de perdicion que vano de su saber os portento un hermoso grupo que semeja la
tenta los dones que le otorgara el cielo. En peana del celeste mensagero. Debilísimos
la cátedra de almo templo, revestido con reflejos despide la vision maravillosa, y
pomposa magnificencia , enarbola el estan descúbrese melancólico y sombrío el ángel
darte del cisma , arrastrando gran tropel encargado de la mision tremenda. En su
de pueblos que extraviados por la señal semblante está pintada la tristeza; su mira
pérfida y deslumbradora, desoyen las amo da es respetuosa y de ternísimo amor ; toca
nestaciones y consejos que les dirige la Cá apenas al suelo, cuando hincada la rodilla,
tedra de la ciudad eterna. Oh ! ¡ quién se prosterna ante el Hijo del hombre, y
fuera capaz de concebir el profundo y agu abatida la frente , besa la tierra regada con
dísimo dolor que atormentaría el corazon el sudor de sangre. Ya despliega sus la
del Salvador del mundo , al contemplar tal bios; ya le habla; ¿qué le dice? Mortal,
cúmulo de males, al sentir en un momen no pretendas saberlo : retírate , mantente
to toda la fuerza del daño causado en el lejos... no oses escuchar las palabras que
trascurso de largos siglos ! ¡ quién mirara articula el mensagero divino, al proponer
con él , tanto orgullo , tanta blasfemia , se confortar al (pie criara al mensagero y
tanto error é insensatez , tanta ilusion y se el mundo — J. B.
duccion , tantos medios , tantos afanes y
fatigas, para perder millones de almas!
I quién considerara la vanidad , la disipa
cion , la corrupcion , el fraude , la violen
cia , la injusticia , los odios , las venganzas, SXTUACXOH
reinantes todavía entre los cristianos; ellos
que se glorian de no haberse apartado de DEL CLERO ESPAÑOL ,
los muros de Jerusalen militante para abra
zar las profanaciones de las gentes ! Y
URGENTE NECESIDAD DE CN CONCORDATO.
VIII.

Ay ! aparta tu vista , que bastante su Artículo 2.° y último.

friera ya tu pecho ; no los mires ; del Occi
dente desvia tus ojos ; no contemples cual
rompen con desprecio tus leyes mas sagra
das, cual despedazan de tu Esposa el seno,
cual , | ingratos ! olvidan hasta el ternísimo
recuerdo de amor que á los humanos de
jaste , en la víspera de tus tormentos y de
tu muerte. No contemples cual dispersan
tu rebaño lobos rapaces; cual el nombre
tuyo siembran entre hermanos discordia
horrible; cual á cien pueblos incautos el
mortal veneno propinan, preparando dias
de luto y llanto.
IX.
Abandonado á tanto padecer , ¿ es posi-
Dijimos en el numero anterior , que era
conveniente separar en cuanto posible fuese,
las cuestiones eclesiásticas de las políticas ;
y que era muy arriesgado el asentar por
inmutable base, la necesidad de aplazar la
resolucion de las primeras , hasta que las
segundas estuviesen decididas en todas sus
partes. Las razones que á esto nos inclinan
están ya expuestas; y reasumiéndolas en
dos palabras pueden reducirse á que no
existe una necesaria dependencia entre es
tas dos cuestiones; que las políticas podrian
prolongarse indefinidamente, y llevan visos
de no tocar todavía á su fm : que la misma
resolucion de las políticas no fuera una se
gura garantía de la satisfactoría resolucion
de las eclesiásticas ; que en esto podríamos
 — De
tener adversarios en lo interior , y recibir II poco ocupado de los intereses religiosos, lo
dañosas influencias de lo exterior. desea tambien , para asegurar la tranquili
Ha llegado el abatimiento del culto y dad de las conciencias, afianzar el órden
clero á un punto tan alarmante, es tal la público, y acabar de una vez con esa série
complicacion que se ha formado en los ne de altercados , que solo sirven á nutrir la
gocios eclesiásticos , son tantos y tan varios discordia, y á perpetuar el predominio de
y tan difíciles los asuntos que se han de ar pasiones y rencores que debieran haberse
reglar, que ya se ha hecho imposible salir olvidado para siempre.
de situacion tan apurada, sin mediar la • A los que juzguen que lo que estamos
autoridad pontificia, sin preceder un amis escribiendo son meras utopias, que solo
toso acuerdo con la Santa Sede. Mírese la tienen posible su realizacion en los deseos
cosa bajo el aspecto que se quiera, dése del escritor y en su anhelo para que la re
rienda suelta á la imaginacion, entregán ligion salga de la penosa situacion en que
dose á las suposiciones mas caprichosas , se encuentra , les recordaremos el ejemplo
prescíndase si place, de los intereses de la de América , donde las cuestiones políticas
religion misma , atendiendo tan solo á las se han separado de las eclesiásticas , donde
miras de conveniencia pública ; no hay á pesar de la anarquía de las guerras civi
tranquilidad posible para las conciencias, les y hasta de las pretensiones de los mo
ni seguras garantías de una paz sólida y narcas de Europa , se halla afianzada la
duradera , sin el restablecimiento de las re unidad católica, y en buen pie las relacio
laciones con la corte de Roma. Esto no es nes de los gobiernos con la cátedra de San
simplemente la expresion de los deseos- de Pedro. ¿Qué seria de la religion en Amé
un espíritu católico; es ademas, un pensa rica , si los asuntos eclesiásticos se hubiesen
miento social y político , cuya realizacion vinculado con las cuestiones interiores y
reclaman de consuno las necesidades mas exteriores , de manera que no se hubiesen
apremiadoras y urgentes que afligen nues restablecido las relaciones -con la Sede
tra desgraciada patria; pensamiento que ha Apostólica , hasta haberse decidido cuál ha
servido de guia á las naciones católicas bia de ser la forma de gobierno que en de
cuando han tratado de repararse de dilata finitiva debia prevalecer , cuál el partido
das catástrofes ; pensamiento que concebido que debia dominar, cuál el resultado de las
y ejecutado por Napoleon á pesar de los negociaciones con los gobiernos de Europa
murmullos de los Volterianos, y de otros al efecto de alcanzar el reconocimiento de
enemigos de la Santa Sede , sirvióle admi la independencia? Estas cuestiones no se
rablemente para restablecer y asegurar el han resuelto todavía completamente ; y si
orden en Francia , para calmar la irritacion á este paso hubiera debido caminar la cues
de los ánimos é inclinarlos á la concordia , tion eclesiastica , no estarían ahora las re
levantando de esta manera el robusto pe públicas de América, enviando á Roma sus
destal desde el que sojuzgó la revolucion , embajadores para alcanzar del Santo Padre
é impuso respeto á todas las potencias de colonias de misioneros , con la mira de fe
Europa. Tan pronto como se desvió de es cundar de nuevo aquella tierra que tiene
ta línea de conducta , empezó su decaden sed de verdad , y que no se la puede pro
cia. Si estose verificó en Francia, ¿qué no porcionar cual desea , por falta de operarios
sucederia en España , donde la religion ca que le suministren la divina palabra.
tólica se conserva todavía con tanta fuerza, No desconocemos que la situacion social
donde la inmensa mayoría no ha participa y política de España , por lo tocante á lo
do aun de las ideas impías? interior y exterior, es muy diferente de la
Es por consiguiente de la mayor impor de las repúblicas de América ; pero no por
tancia que todos los hombres amantes de esto deja de ser verdad, que es tal la com
su patría , aunen sus esfuerzos para que se plicacion de nuestros negocios, que bien
calme la irritacion que en este punto se posible seria que al fin se haga necesario
habia introducido ; haciendo de manera que prescindir aqui como se hizo allí , de las
los gobiernos , sean cuales fueren sus ideas cuestiones políticas en el arreglo de las
en política , vayan participando del mismo eclesiásticas.
espíritu que se observa en la sociedad ; el Preciso no es perder de vista que la re
cual consiste en que la inmensa mayoría de ligion católica tiene en España bastante vi
la nacion desea vivamente la reconciliacion gor para sostenerse por sí misma , sin que
con la silla de Roma , y el resto , aunque haya menester como auxiliares indispensa
 bles, las ideas y los intereses políticos de 96noce
— inmediatamente que no figuran como
ningun partido. La Providencia se ha dig principales, y que no pocas veces, no tie
nado manifestarlo de una manera admira nen mas que un valor aparente y facticio ,
ble; Dios se ha complacido en hacernos que les dan el interes y las miras de los
palpar, que para conservar su obra no ne partidos. Este fenómeno es muy natural :
cesitaba de nuestro débil concurso, que le la revolucion destructora por esencia se en
bastaba su omnipotencia. Véase lo que nos sañó contra todo loque presentaba cuerpo,
ensenan los acontecimientos que hemos y ofrecía algun cebo á las pasiones que ella
presenciado, y dígase si no ofrecen un cú representaba. En este caso se encontraba
mulo de graves rellexiones á un espíritu el clero : y asi es que fué la primera vícti
que contemple las cosas bajo un punto de ma del empuje revolucionario. Perolas cir
vista religioso. ¿Dónde están los auxilios cunstancias han variado completamente;
materiales con que haya podido contar la las comunidades religiosas han desapareci
Iglesia de España de muchos años á esta do , sus bienes se hallan en buena parte en
parte? ¿dónde el escudo humano que la manos de nuevos poseedores, y sus indi
haya cubierto contra los formidables golpes viduos andan dispersos , ó peregrinando en
que ha tenido que sufrir? ¿dónde el vali pais extrangero, ó viviendo en su patria en
miento de los partidos que le prometieron la oscuridad y en la miseria. El clero se
apoyo? Perdidos sus bienes, destruida su cular ha sufrido tambien dolorosos que
influencia política, contrariado su ascen brantos , no tan solo con la supresion del
diente sobre el pueblo, blanco de innume diezmo y con la incorporacion de sus pro
rables ataques, se ha encontrado sola, piedades al erario, sino tambien por el
abandonada á todo el rigor de su suerte, abatimiento á que le llevara el ascendiente
sin mas esperanza que la misericordia del de las nuevas ideas, el cambio del sistema
Dios, cuya fe proclamaba y cuya causa político, la falta de sus pastores, el decrc
defendía. Y sin embargo , á pesar de tanto mento del número de sus individuos, la
desamparo , á pesar de tantos enemigos , falta de medios para procurarse la instruc
no ha perecido; consérvase todavía en me cion correspondiente , la imposibilidad de
dio de la sociedad ; y sus mismos adversa repararse con nuevos ordenados, y los cien
rios se llenan de asombro al contemplar y cien contratiempos y humillaciones que
cual sale radiante y pura de en medio de ha tenido (pie sufrir durante los calamito
tan amargas tribulaciones. sos y turbulentos años que hemos atrave
Infiérese de lo dicho, que la fuerza dela sado. Ha resultado de aquí, que la revo
religion católica en España es muy supe lucion no ha visto ya en el clero, ni un
rior á la de todos los partidos políticos ; y enemigo que abatir, ni un opulento que
que ninguno de ellos puede gloriarse de despojar; y por lo mismo enderezando sus
que sin su apoyo y ausilio esté necesaria miras á otros puntos, á ellos ha dirigido
mente condenada á perecer. Con lo que se sus golpes cuando le ha sido posible, y sus
manifiesta mas claro , que no es tan extra dicterios y amenazas cuando para mas no
ña la idea (pie hemos emitido , de la sepa se ha sentido con fuerza.
racion de las cuestiones eclesiásticas y po Es digno de notarse el curso que en este
líticas , y de que las cosas pueden llegar á particular han seguido las ideas y los acon
tal extremo , que bajo una ú otra forma se tecimientos. Luego de la muerte del Rey,
haga preciso resignarse á adoptarla. al comenzar la guerra civil , cuando se te
Quizás sea mas hacedera esta separacion, mía que la generalidad del clero no se aba
de lo que algunos se figuran ; pues que es lanzase á la causa de D. Cárlos, y estaba
evidente que va realizando por sí mis muy reciente el antiguo orden de cosas,
ma , antes de que en ella hayan pensado mostraron cierta antipatía contra el clero
los hombres. Al principfode la revolucion, todos los matices mas ó menos subidos del
las cuestiones eclesiásticas eran el caballo partido liberal; creemos que nadie lo habrá
de batalla de los partidos; en todo entraba olvidado ; pero si alguien llevase á mal
el clero , en todo figuraban sus rentas , en nuestro aserto, le remitiremos á los perió
todo se mezclaban las desavenencias con dicos de la época y á los hechos del gobier
Roma; en la actualidad sucede muy de otra no y de sus subalternos. Arreciando la re
manera ; y si bien los mismos objetos se volucion , enardeciéndose la guerra, y pre
ofrecen á la vista todos los dias cuando se sentándose la situacion de una manera muy
abraza el conjunto de la situacion , se co- distinta de lo (pie se habia esperado , co
 — 97 —
menzó
partido á liberal
cejar ,una
y áparte
manifestar
considerable
simpatías
del I en las Cortes constituyentes se pronunció
por uno de los principales prohombres de
que antes no se le habían conocido. Andu este partido , un notable discurso en favor
vieron en aumento estas simpatías , á me de la unidad religiosa , que indicaba el nue
dida que la division entre los liberales se vo curso que iban tomando las ideas. Pos
hacia mas fecunda ; siguiendo en progresion teriormente , y dejando aparte la cuestion
ascendiente con notable rapidez , segun en de las propiedades en que la naturaleza del
sentido opuesto se desenvolvía con mas asunto debia ofrecer un carácter especial ,
fuerza el elemento revolucionario. No sa por mas esfuerzos que se hayan hecho no
bemos si se ha parado bastante la atencion se ha podido recabar que la revolucion
en este movimiento , que mas ó menos se propiamente dicha , escogiese al clero por
verifica y debe verificarse, en todos los blanco de sus ataques. Todo cuanto se ha
paises colocados en situaciones semejantes ; visto en esta parte ha sido facticio, no ha
pero á quien no recordare cuáles han sido sido popular, no ha participado de aquel
las sucesivas transformaciones que en esta calor que en un círculo mas ó menos ex
parte se han presenciado , le aconsejamos tenso se veia en el año 35 ; no parece sino
que recorra las sesiones de Córtes del año que la revolucion ha dicho : « los que quie
35 , 38 y 10. Tres épocas, en que dominó ren atizarme contra el clero , tratan de dis
el mismo partido, y en que por los mismos traerme ; yo me complazco en derribar al
ó por distintos órganos, pudo manifestar poderoso, y el clero ya no lo es.»
sus ideas, sus instintos, sus medios de go A este propósito es sumamente digno de
bierno. En el año 35, era poca la distancia observarse lo que sucedió con el proyecto
que separaba los dos partidos ; atrevíanse del Sr. Alonso. Prescindamos de cuál seria
apenas á confesar diferencia en las doctri la mira del Sr. ministro en arrojar en me
nas , ni divergencia en el objeto ; solo dis dio de la nacion esa tea incendiaria ; deje
putaban sobre los medios , la cuestion era mos aparte, si efectivamente abrigaba la
únicamente de oportunidad ; en el año 38 , idea de captarse popularidad, halagando
se habia alejado ya mucho mas; y en el las ideas revolucionarias , y mostrando que
año 40 difícilmente se hubiera podido se el gobierno se proponía marchar á la cabe
ñalarles algunos puntos en que estuvieran za del movimiento arrojándose de golpe á
de acuerdo. De donde ha resultado , que los últimos extremos en las materias mas
el partido conservador ha ido apartándose delicadas ; pero de cierto que si tal fué su
de la escuela , en que mas ó menos se ha intencion , halló un amargo desengaño , asi
bian formado sus principales individuos; en la prensa como en la tribuna. Donde no
hallándose por fin en tal situacion , que le encontró oposicion el malhadado proyecto,
jos de mostrar contra el clero ninguna an fué recibido con frialdad, con indiferencia;
tipatía , se ha declarado su ardiente defen y la mas suave leccion que alcanzó el des
sor, dejando entrever que no se desdeñaría acuerdo del ministro , fué el silencio. Este
de contraer con él una verdadera alianza. fenómeno es grave, gravísimo, sumamente
Por lo que toca al partido opuesto, abra significativo , pues que indica la situacion
zando en él todos los matices mas subidos de las ideas, y que toda tentativa de cisma
del partido liberal , tambien son notables no encontraría el apoyo que algunos creen,
las variaciones que ha ofrecido con respecto ni en el mismo elemento revolucionario.
al clero. En el año 35 , colocado á la ca Desde los acontecimientos del año 40, se
beza del arranque revolucionario, dirigía han presentado desembozadamente en la
sus esfuerzos contra la existencia del clero arena política los partidarios de una liber
regular, y contra las propiedades y el po tad mas lata , llegando hasta' el punto de
derío del secular; como que- en esto veia proponer la abolicion de la monarquía y el
un recuerdo de lo pasado , y un obstáculo establecimiento de la república ; pues bien,
á las innovaciones en el porvenir. En el esos nuevos campeones , á quienes de se
año 37 cuando destruidas ya las comunida guro no se puede aplicar el título de retró
des religiosas , y quebrantada la influencia grados, tampoco se han dirigido contra el
del clero secular , la revolucion triunfante clero , tampoco han mostrado particular
no veia delante de sí un adversario temi tendencia á envenenar las cuestiones reli
ble, contentábase con apoderarse de sus giosas.
propiedades , sin valerse ya de aquel sañu Esto demuestra la exactitud de lo que
do lenguaje que poco antes empleara. Ya hemos observado, de que naturalmente,
7
por el mismo peso de las cosas , va sepa 98 la—mendigan á los gobiernos, que no la ob
rándose la cuestion religiosa de la política ; tienen de los recursos materiales, pues que
y que los partidos y las personas conten se ven obligados á ejercer su accion en me
dientes se inclinan á mirar aquella , como dio de la pobreza y del abandono de la
agena á sus altercados y enconos. Y de es clase que las representa.
to
se nos
logrará
alegramos
que ningun
sobremanera
partido, porque
explote asi
la II Tan profundamente convencidos estamos
de estas verdades , y de que las ideas reli
influencia del clero, en provecho de inte giosas no deberán su triunfo á combinacio
reses mezquinos , y los ministros de la re nes políticas, que antes bien esperamos,
ligion podrán quedar en una posicion alta que si la lenta reaccion que decididamente
é independiente de que nunca deben des se ha manifestado en su favor, fuese secun
cender. El clero en Esparta no ha de per dada por una medida que tranquilizando
der nunca de vista esta verdad ; y sus de las conciencias, hiciese desaparecer de una
beres y hasta su interes exigen , que sordo vez todos los temores del cisma , proveyese
á los halagos como á las amenazas no se á las iglesias de pastores, fijase definitiva
prostituya jamás álas exigencias de ningun mente la suerte del clero , y restableciese
partido, que no se presente como instru en todos los puntos la buena armonía con
mento de ambiciones de ninguna clase. la corte de Roma, podría esta reaccion
Porque conviene no olvidar, que la influen aprovechar sobremanera para calmar la ir
cia del clero, aun caido como está, es mu ritacion política, conciliar los ánimos, y
cha, muy poderosa; y los partidos, que preparar un desenlace pacífico al gran dra
no carecen de sagacidad y prevision , no ma que estamos presenciando. Porque, no
ponen en olvido este elemento con la idea se curan los males de una nacion con gol
de aprovecharse cuando les sea útil ó ne pes de estado , no se cierra la sima de las
cesario. revoluciones con reacciones violentas, no
Importa tanto mas que el clero siga esta se cambia la situacion social de un pueblo
conducta , cuando disueltos en la guerra y con una intriga diplomática ó con un me
revolucion todos los partidos , han venido ditado protocolo , no se allanan como por
á parar en buena parteen facciones y pan encanto todos los obstáculos , ni se salvan
dillas, sin que se descubra ninguna que todos los inconvenientes, ni se sueltan to
pueda gloriarse de poseer un pensamiento das las dificultades con la mayoría de un
verdaderamente nacional , y que cuente monarca , ó con su casamiento ; el mal que
con los medios para realizarle. Pero con la tiene causas profundas, necesita duraderos
disolucion de los partidos no ha muerto la y eficaces remedios , lo que trae su origen
nacion ; conserva todavía en su seno un del estado social de un pueblo no se muda
fondo de vitalidad y energía; y observan por un simple cambio de personas.
do atentamente el curso de las ideas y de Encarados unos con otros los partidos ,
los acontecimientos, se nota que se va re | librándose reñida batalla en el campo dela
juveneciendo aun en medio de los desas discusion , no sin riesgo una que otra vez
tres, y de esc marasmo en que actualmente de llegar á las manos, no suelen expresar
se halla ; presentando no escasas esperan con toda franqueza sus principios y sus pro
zas de que volverá á recobrar un dia el yectos , porque están recelosos de (pie los
puesto que le corresponde en el congreso adversarios no tomen acta de las palabras,
de las naciones. sacando de ellas consecuencias que pudie
Las grandes ideas, que para su triunfo ran perjudicar la causa que respectivamen
no han menester sórdidos manejos, ni te defienden. Pero si fuera posible oirá los
mezquinos apoyos, deben reservarse pu prohombres de todos ellos, formulando ca
ras , intactas , sin descender al inmundo da cual su sistema de gobierno, y mani
fango de las pasiones, seguras de que la festando cándidamente la mayor ó menor
Providencia les tiene señalado en el porve confianza que del buen éxito alimentan , á
nir la hora en que hayan de brillar de buen seguro que no se encontraría ese tono
nuevo con todo su esplendor y hermosura. decisivo que parece indicar una inalterable
Y entre tanto no quedan estériles, obran certeza de los principios , y una firme se
todavía en el corazon de la generalidad de guridad de alcanzar felices resultados. To
los españoles, y su influencia es tanto mas dos andarian perplejos, vacilantes, todos
eficaz , cuanto se ve con toda claridad que participarían de esa incertidumbre , de esa
sacan de sí mismas toda la fuerza , que no ansiedad sobre el porvenir, que todo el
 99 —
mundo siente, aun cuando sean muchos charse alguna de nuestras indicaciones. Por
que no acierten á darse razon de sus causas. lo mismo que ofrecen algo de singular, te
No es la política la que ha de salvar la memos que con el tiempo no sea menester
religion; antes bien la religion ha de salvar apelar algun medio mas ó menos análogo
la política ; y bajo este supuesto deben ca á los aquí apuntados; pues que tan anóma
minar todos los hombres leales y concien la consideramos la situacion , tan negro el
zudos que de una ú otra manera pueden porvenir, que dudamos mucho que se des
influir en los destinos de la nacion. Cuando envuelva sin sucesos extraordinarios; y nos
los pueblos han llegado á la triste situacion quedaríamos agradablemente sorprendidos,
en que se encuentra el nuestro , es necesa si como esperan candidamente algunos, to
rio obrar sobre ellos por medios mas efica dos nuestros males se hubiesen de remediar
ces que los suministrados por la política. con el simple advenimiento de una época
Véase como es esta la senda que sigue la no muy lejana. No podemos participar de
parte mas escogida , la menos preocupada, opinion semejante , pero envidiamos la di
la menos corrompida , la juventud; véase cha de los que se deleitaren con ese her
como en su aficion al estudio , en su aleja moso sueño.
miento del bullicio político, en su templan No concluiremos este discurso sin insis
za precoz , está dando una leccion severa á tir en lo que de suyo está indicando su tí
los hombres que en edad mas provecta la tulo ; á saber , que para remediar los ma
están escandalizando con sus doctrinas di les de la Iglesia de España no hay otro
solventes , con sus máximas de desgobier remedio , que el restablecimiento de las
no , con sus odios , rencores y venganzas; buenas relaciones con la Santa Sede , que
véase como esta juventud se está preparan un Concórdalo. Tal es la complicacion delos
do en silencio para una nueva era que mas negocios , tales son las novedades ocurri
bien presiente, que prevé; y como aparta das , que el concordato es absolutamente
da de todos los partidos , ó mas bien des necesario; si álguien ha podido imaginar
preciándolos , les deja que se la apropien, se que hay otro camino para salir del mal
reservándose desmentirlos solemnemente el estado en que nos encontramos , se engaña
dia que se encuentre llamada á hablar y lastimosamente; y todo proyecto basado
obrar. sobre persuasion tan funesta conduciría la
Que los hombres sedientos de oro y de nacion á un abismo. No ignoramos del to
mando, continúen disputándose el poder do lo mucho que se ha disputado sobre las
cubriéndose con este ó aquel distintivo, modificaciones sufridas por la disciplina
que las pasiones políticas prosigan revol eclesiástica en el negocio de la confirma
viéndose en la arena que les es propia , tan cion de los obispos, no nos son enteramen
manchada ya con lodo y con sangre ; pero te desconocidas las cuestiones que sobre es
al menos que se extienda, que se genera te particular se han ventilado entre los
lice por la nacion la idea de que conviene, canonistas ; pero sea de esto lo que fuere,
de que urge pensar seriamente en separar no concederemos jamás , que pueda sobre
la cuestion religiosa de la política , de que venir una extrema necesidad que legitime
es altamente dañoso el mirar aquella como el proceder á dicha confirmacion sin la au
un apéndice de esta, y de que tan lejos es toridad pontificia. Esto lo consideramos
tá la primera de ser dominada por la se ilegal , injusto , subversivo de la disciplina
gunda , que antes bien ella prepondera so general de la Iglesia , atentatorio á los de
bre todas las demás, y su resolucion podría rechos de la supremacía de la Sede Apos
quizás conducir á un desenlace suave y tólica, y un medio seguro para dar princi
venturoso. pio al cisma y hacer de la iglesia española
Lo repetimos , alimentamos pocas espe una iglesia semejante á la anglicana. Y en
ranzas de que por ahora nuestras palabras efecto , cuando todas las naciones católicas
produzcan ningun fruto ; y tal es la situa del mundo reconocen en el Soberano Pon
cion de las cosas que estamos bien seguros tífice este derecho de confirmacion , cuan
de que es poco menos que imposible que do se ejerce aun en los paises donde man
los negocios sigan un curso diferente. Pero dan gobiernos de otras sectas, cuando sean
en el arrebatado torbellino que lleva re cuales fueren las discusiones que sobre
vueltos los acontecimientos , son tantas las gravísimos puntos han mediado entre los
situaciones que pueden presentarse, que soberanos y los Papas , al fin siempre se ha
quizás en alguna de ellas podría aprove | venido á parar en reconocer este derecho,
 — ion —
atajándote libre y expedito; ¿qué papel re lico á la sola idea de que pudiera intentar
presentaría una ¡silesia particular, que con se un paso tan criminal ; parécenos imposi
tra la disciplina de la Iglesia universal se ble que semejante medula ocurra como reali
propasase á darse obispos, haciéndolos con- zable á nadie que conozca medianamente la
lirmar por el metropolitano ó por otro, so situacion de España. En efecto, suponed
pretexto de extrema necesidad? Desde que se acomete la desatentada empresa,
entonces , ¿ qué vínculo le quedaría que la que se procede á la confirmacion de los
enlazase con la Santa Sede? ¿dónde esta obispos por medio de los metropolitanos.
ría la unidad? Una medida semejante, le En primer lugar, ¿cuáles serán los metro
jos de tranquilizar las conciencias , lejos de politanos que á tanto lleven su atrevimien
curar los males de la Iglesia , perturbaría to, que hasta tal punto prostituyan su
mas y mas las primeras , y agravaría é ir conciencia , que de tal suerte arrostren la
ritaría los segundos, arrojándonos de golpe fea responsabilidad en que incurren á los
á una sima de la que no saldríamos sin un ojos de Dios , de la Iglesia y de la nacion ?
milagro de la Providencia. Estaríamos ¿conoceis muchos metropolitanos, ni lo
abiertamente en el cisma; sí, en el cisma; que se llama obispos antiqidores , que á esto
y no bastarían á variar la naturaleza del se prestasen ? Difícil es penetrar en el co
hecho , ni en sí ni á los ojos de la genera razon de los hombres ; solo Dios sabe lo
lidad de los españoles, todos los recuerdos que alcanzarían á recabar las promesas ó
de antigua disciplina , todo el aparato doc las amenazas; pero nosotros tenemos la fir
trinal que tan fácil es ostentar en este lina- mísima conviccion de que fueran muy con
ge de materias. tados: y abrigamos la esperanza de que no
Al tratarse del arreglo de los negocios se hallaria ni uno solo. Sí, ni uno solo;
eclesiáslicos, y de las desavenencias con la porque sean cuales fueren las doctrinas
corle de Roma , han hablado algunos de particulares que profese este ó aquella per
necesidadeit extremas, de restablecimientos de sona, cuando se llegaria al caso de aplicar
la antigua disciplina , de confirmacion de los la , cuando se alzaria la voz del vicario de
obispos por el metropolitano , recordando he Jesucristo condenando el atentado y á los
chos intempestivos, y permitiéndose indi que de él se hiciesen cómplices, cuando de
caciones altamente dañosas. Lo hemos todos los ángulos de la nacion eminente
dicho y lo repetimos, no se trata de inves mente católica se levantaría un grito de
tigar cuáles son las modificaciones que so reprobacion y de horror, cuando la tota
bre puntos semejantes haya podido sufrir lidad del clero , fiel á sus deberes , se re
la disciplina de la Iglesia, sino de saber signaria al destierro antes que hacer trai
cuál es la actual de la que no es lícito des cion á su conciencia , entonces , no lo
viarse: no se trata de disputar sino de ne dudamos, tambien se sentiría detenida la
gociar ; no se trata de traer á colacion par mano preparada para consumar el sacrile
ticulares rencores ó, resentimientos en los gio, tambien el hombre extraviado cejaría
ue nada tiene que ver el público, sino de del camino de perdicion , y se reuniría de
scar
lizar los
las conciencias
medios á propósito
, y asegurar tran- nuevo al redil de la Iglesia , si es que por
para sobre
algunos momentos en su corazon se hubie
¡ases sólidas la paz de la nacion. Que no se apartado de ella.
o olviden los hombres que en adelante ha Pero, demos por supuesto que no se ve
yan de mediar en este gravísimo negocio; rificase de esta suerte, y que además hu
mientras no se eleven sobre esa esfera, biese algunos hombres bastante obcecados
que lo menos malo que tiene es ser mez para recibir la confirmacion de una mano
quina, nada se conseguirá, no será posible cismática; ¿qué sucederia? Cuando se pre
dar un paso en el camino de la reconcilia sentarían á las diócesis para regir una grey
cion deseada. que no les fuera encomendada por el Espí
Aun prescindiendo de los principios de ritu Santo ¿cómo los mirarían los pueblos?
dogma y de disciplina , aun dejando á par ¿cómo se acatarian sus disposiciones? ni
te el cisma , el evidente cisma , en que se los sacerdotes ni los fieles consentirían en
precipitaría la iglesia española si consintiese rendir obediencia á un intruso, que sin
la alteracion de la disciplina universal so mas mérito que su ambicion, ni mas títu
bre el negocio de la confirmacion de los los que los librados por potestades incom
obispos; aun olvidando por un momento la petentes, se sentaría en la cátedra episco
afliccion que acongoja á todo espíritu cató pal , siendo de continuo una manzana de
 — 1
discordia y una piedra de escándalo. Y 01mente — por sus guias, abraza la destruccion
acaeciendo lo mismo no tan solamente en baja el nombre de la reforma , y se entre
esta ó aquella diócesis , sino en casi todas ga á la licencia apellidando libertad. Gra
las de España , pues son ya muy pocas las cias á la infinita bondad del Todopoderoso,
que no cuentan ó difunto ó ausente su le esto no se verificaría en España ; y cuando
gítimo pastor, ¿quién no concibe el desor lo decimos, no hablamos con ánimo de li
den , la confusion , el caos que se introdu sonjear al clero , ni con la mira de alentar
ciría por todas partes? ¡cuánta turbacion le para las crisis que puedan sobrevenir;
de conciencias ! ¡ cuántos y cuán violentos consignamos un hecho generalmente reco
esfuerzos para sostener la desatentada me nocido , y que la desgracia de los tiempos
dida ! i cuántas delaciones , cuántos proce ha evidenciado hasta el mas alto punto,
sos , cuántas persecuciones , cuántos desas cubriendo de gloria á la iglesia de San
tres ! Vano fuera hablar de necesidades Leandro y de San Isidoro , consolando el
extremas , vano recordar la antigua disci corazon de todos los fieles del orbe católi
plina, vanos todos los preámbulos de los co , é infundiendo las mas legítimas espe
decretos en que se prescribiese la sumision ranzas de que todos los sufrimientos que
á los intrusos, vanas todas las pláticas y ha padecido esta escogida porcion de la
pastorales y discursos de estos para con sagrada grey , servirán para sacarla triun
vencer de su legitimidad; mil y mil plumas fante de todos sus enemigos, y prepararla
demostrarían la infraccion de los sagrados mas y mas para cumplir la divina mision
cánones , la subversion de la disciplina , el que le está encomendada.
quebrantamiento de la unidad ; mil y mil Convénzanse de estas verdades todos los
lenguas se emplearían pública ú oculta hombres públicos que fueren en adelante
mente en combatir el funesto error ; y el llamados al gobierno de la nacion, sean
pueblo español, católico por ideas, por cuales fueren sus opiniones políticas, y
costumbres , por hábitos ; este pueblo do hasta sus ideas religiosas , penetrándose de
tado por la Providencia de un admirable que este complicadísimo problema que
tino para discernir al lobo aun cuando se aqueja y abruma á la nacion española no
cubra la piel de oveja ; el pueblo , repeti tiene otra solucion posible que un concor
mos, dirigiéndose á los falsos pastores les dato. Y ya que desde luego se echa de
diría : « nosotros no sabemos de estas cosas ver el punto á que es necesario enderezar
tanto como vosotros ; pero lo que no pode se , conviene caminar hácia él con sinceri
mos ignorar es , que no os hemos visto en dad y buena fe , cuando se trate seriamen
trar por la puerta ; y quien por ella no en te de poner término á los males de nuestro
tra , es un ladron , segun la enseñanza del infortunado pais.
Divino Maestro. » Por de pronto , fuera de la mayor im
Hé aquí los resultados que sin duda al portancia , que todos los órganos de la opi
guna acarrearía el arrojarse á resolver las nion pública , sean cuales fueren sus dife
cuestiones eclesiásticas sin la intervencion rencias políticas , se pusiesen francamente
de la Santa Sede : hé aquí una perturba de acuerdo sobre este punto , asentando el
cion universal , profunda , duradera , á la concordato como una de las bases primor
que no seria dable ponerle término sino diales de los programas que vayan formu
volviendo las cosas á su estado primitivo. lando. Han llegado ya las cosas á tal extre
Porque en vano esperan algunos que se mo, son tantos los desengaños y escarmien
pudiese consolidar entre nosotros el esta tos que se han recogido, es tanto el
blecimiento cismático, formándose una cansancio que produce en los espíritus una
iglesia separada á manera de la de Ingla situacion tan penosa, es tan profunda la
terra ; los tiqmpos h&n cambiado , el vio conviccion que se han formado todos los
lentar las conciencias se ha hecho mas difí hombres pensadores de que los asuntos
cil , las circunstancias en que se encuentra eclesiásticos no pueden continuar en esta
la España en nada se parecen á las del rei lamentable interinidad , sin resultar daños
nado de Enrique VIII. Además, para mu de gravísima trascendencia, estan decidi
danzas de esta naturaleza es preciso contar da la reaccion que del modo mas natural y
eon la prevaricacion de una parte conside- espontáneo se está verificando en los áni
ble del clero ; solo de esta manera se con mos hácia las ideas religiosas, quesería
sigue arrastrar numerosos partidarios del II muy agradable á la inmensa mayoría, me-
pueblo incauto, que extraviado traidora- II jor diremos á la totalidad de la nacion , el
 — 102 —
nr medio de declaraciones francas,
terminantes, se manifestase la
lida voluntad de una reconciliacion con
la Santa Sede , cerrando de esta manera la
puerta á toda tentativa cismática. ¿Quién CATALUÑA.
puede tener interes á esa reconciliacion?
solo cabe suponer tan maligna voluntad en
quien se complazca en tiranizar las con
ciencias, en oprimir á un clero abatido y Consideraciones sorre la condicta qie
despojado , en ver como se desmoronan los deren orservar las clases ricas con
magníficos templos que nos legara la pie respecto á las porres.
dad de nuestros mayores, en detener el
torrente de las ideas de la generalidad de
la nacion, en falsear la libertad, en violen
tar el curso de los acontecimientos , en en
venenar todas las cuestiones esparciendo En el mundo social como en el físico ,
abundante semilla de agitacion estéril , de todo está ordenado admirablemente por la
discordia funesta. mano de la Providencia ; solo que , asi co
Nuestras palabras indican bastante que mo en esta reina una absoluta necesidad ,
no hablamos con designios interesados, ni por estar compuestos de seres que faltos de
con intento de secundar las miras de nin razon y por consiguiente de eleccion , obe
guna bandería política : el amor á la reli decen ciegamente al impulso de las leyes á
gion católica, el vivo deseo de que se con que están sometidos; en aquel, estando de
serve y prospere entre nosotros , el anhelo por medio el libre albedrío del hombre , se
de que se restablezcan la paz y la concor ha dejado al ejercicio de esta facultad una
dia entre los españoles, afianzándose sobre anchurosa esfera, donde pudiese obrar con
bases sólidas y duraderas, hé aquí los mo entero desembarazo, escogiendo el bien ó
tivos que nos han impulsado á dar á luz el mal , la vida ó la muerte. No marchan
estos artículos , hé aquí el norte que ha do el mundo á merced del acaso, sino ba
guiado nuestra pluma. Si de algo pudiese jo la direccion de aquella mano todopode
servir alguna de las indicaciones emitidas, rosa que se extiende de uno á otro extremo ,
rogamos á los aventajados escritores que se y lo dispone todo con suavidad, claro es que
distinguen en nuestra prensa , que procu la sociedad ha de estar regida por ciertas
ren desenvolverlas y aclararlas con 'mayor leyes , que establecidas por el mismo Cría
felicidad de la que á nosotros nos fuera da dor , sean independientes de la razon y de
do; entre tanto los invitamos á que secun la voluntad del hombre. Estas leyes pueden
den nuestras miras de reconciliacion, y ser quebrantadas; pues que Dios imponién
que no se avergüeneen , viviendo en la pa dolas no quiso despojarnos de la libertad ,
tria de Recaredo, de proclamar altamente y nos ha dejado lugar para tomar el cami
que la nacion española no ha olvidado to no que mas nos agradare ; pero tambien se
davía la sublime escena del Pontificado de ha reservado el restablecer el equilibrio
San (iregorio, y que desea presenciar otra perdido por la infraccion de la ley , casti
semejante en el de Gregorio XVI.—J. B. gando severamente al culpable, ora fuese
el individuo, ora una clase, ora la socie
dad entera.
Asi vemos, que de la propia suerte que
el individuo comienza esta misma vida á
experimentar las funestas consecuencias de
su mala conducta , ya echándose á perder
su salud, ya mancillándose su honor, ya
disipándose su fortuna , ya con los padeci
mientos del corazon , que vive atormenta
do de agudos remordimientos y angustiosa
pesadumbre; asi tambien la sociedad tan
pronto como se aparta del camino que le
señalaran la infinita sabiduría y la inagota
ble bondad del Criador , sufre desde luego
 — 103 —
la pena merecida : comenzando primero á tiendotodos los
todas
rangos
las eminencias,
sociales un verdadero
echando sobre
ni
sentir la inquietud , el desazon , los distur
bios pasageros; hasta que al iin si se em vel; por cuyo motivo, consérvanse á du
peña en volver de su extravío , en no tor ras penas leves vestigios de la antigua aris
nar al buen sendero , se llena la medida de tocracia, como trozos de vieja armadura
la indignacion del Altísimo, y la terrible que mas bien sirven de objeto á la curiosi
copa de Justicia Divina se derrama sobre dad de un arqueólogo , que á los usos del
las generaciones culpables como torrentes guerrero. Esto no embargante, existe to
de encendida lava. davía una verdadera aristocracia, que
Entre estas leyes impuestas por el Cria cuenta poco tiempo de duracion y funda
dor á la sociedad , figura una cierta, clara, las razones de su superioridad en otros tí
evidente , indeclinable , y es la obligacion tulos que su antecesora. Bien se deja en
de las clases poderosas de emplear en bien tender que hablamos de la industrial y
de las necesitadas, los medios de que dis mercantil, de la aristocracia del oro; cu
ponen. Ley inspirada poí la misma natu yos blasones se consideran tanto mas ilus
raleza , dictada por la razon , enseñada por tres cuanto mayores son los capitales de
el cristianismo, purificada, sancionada, que dispone , cuyos pergaminos son los bi
elevada á un orden superior por esa reli lletes de banco ; y que en vez de presentar
gion divina en la que toda la ley y los pro como los antiguos nobles un salon cubierto
fetas penden del umor de Dios sobre (odas las de armas y otras insignias que recordaran
cosas , y del amor profesado al prójimo como los hechos y hazañas de sus ascendientes
á nosotros mismos. Ley formulada en una pa como medida de la nobleza de la alcurnia,
labra sublime , que un mundo orgulloso y muestran cual decisivo título de hidalguía,
ciego se desdeña de emplear ; en una pa las grandes dimensiones de la caja de hier
labra cuyo alto significado en vano se in ro donde guardan el numerario.
tenta suplir con los nombres de humani Por la misma naturaleza de las cosas, y
dad y filantropía; en una palabra que abar especialmente por la organizacion de la so
ca lo terreno y lo celeste , que no cabe en ciedad actual , la existencia de dicha clase
los límites de la vida , que se extiende has es una verdadera necesidad, un hecho que
ta las regiones de la eternidad, que es dul no fueran parte á destruir los trastornos de
ce en rededor de la cuna , consoladora en cualquiera clase , cuanto menos las vanas
las angustias del lecho de muerte , que declamaciones. Aplicad los principios mas
atraviesa como brillante centella la lobre injustos, valéos de las teorías mas absur
guez de las tumbas, que une á los vivien das, ensayadlos sistemas mas insensatos,
tes con los finados , que enlaza la presente nivelad en consecuencia todas las fortunas
Jerusalen con la Jerusalen de la gloria , repartiendo entre los pobres los bienes de
que une á las generaciones presentes' con los ricos, estableciendo la mas completa
las pasadas y las venideras , que intenta dar igualdad; cuando esta se lograse, que lo
á todo el linage humano un solo corazon , grarla no es posible ni por un solo momen
una sola alma, sumergiéndole en un piélago to , cuando se realizase este delirio crimi
de luz y de amor en el seno del mismo nal , al dia siguiente, mejor diremos, á
Diosos ; esta palabra
palatira es la
la caridad.
caridad, pocas repartición , la
□cas horas de la reparticion, 1; igualdad
Recórrase la historia, consúltese la ex- hubiera desaparecido, existiera d> nuevo
periencia , y se echará de ver , que todas un monstruoso desnivel , la prodigalidad y
las clases que han alcanzado riqueza , co la codicia, la necesidad y la prudencia, el
modidades, honores, influencia y predo juego y otros v icios se encargáran de des
minio en los negocios de la sociedad , han truir bien presto la insensata igualdad ; las
recibido estas ventajas y prerogativas, co riquezas habrían cambiado dé manos, al
mo una especie de compensacion de los gunos de los antiguos ricos quedaran tal
beneficios á ella dispensados; y tan pronto vez pobres para siempre , asi como otros
como olvidaron las causas de su elevacion alcanzaran quizás en poco tiempo el resta
y el objeto á que esta debia servir , co blecimiento de su primera fortuna ; pero
menzaron á enflaquecerse y al fin pere hecha abstraccion de las personas , la si
cieron. tuacion de las cosas quedara en realidad la
Aqui , como en muchos otros puntos del misma ; entonces como ahora , habría po
mundo civilizado, el ascendiente y la pu bres y ricos.
janza del elemento popular han ido aba- Resulta de estas observaciones, que no
se ha de buscar el remedio de los males de 104niega
— , la religion no irrita á aquel , no le
la sociedad en descabelladas doctrinas que excita á la usurpacion y á la venganza ; pe
atacándola en sus fundamentos tienden á ro volviéndose al hombre de entrañas du
destruirla y hacerla imposible. Sean cua ras, le recuerda que su Señor y su Juez
les fueren las teorías con que las diferen está en los cielos , que hay un Dios ven
tes escuelas pretendan explicar el derecho gador que escucha hasta los deseos de los
de propiedad , y dejando aparte las modi pobres , que el clamor del desnudo , del
ficaciones que en su aplicacion hayan su hambriento , del enfermo que padece y es
frido ó puedan sufrir ; lo cierto es que este pira en el desamparo y la miseria, sube
derecho existe , que es inviolable, sagrado, hasta las gradas del trono del Altísimo; y
reconocido en todos tiempos y paises, fun que el Altísimo presta atento y bondadoso
dado en la ley natural , sancionado por la oido á los lamentos del infortunio , y se re
divina, consignado en todas las humanas, serva castigar en la otra vida los corazones
y reclamado por los mas caros intereses del desapiadados ; si es que ya en esta no hace
individuo y de la sociedad. Asi es que en sentir los efectos de su terrible cólera per
tratándose de mudanzas , de reformas , de mitiendo espantosas catástrofes.
innovaciones de cualquiera clase, es im La rivalidad entre las clases pobres y las
portante y muy necesario , el tener siem ricas, no es un hecho peculiar de nuestra
pre los ojos fijos en este precioso derecho, época , sino general á todos los tiempos y
no atacarle nunca , guardarse hasta de he paises; solo que en la actualidad la discor
rí ríe en la mas mínimo; que una vez pisa dia es mas ruidosa , á causa de la mayor
do el delicado linde, se encuentra una pen libertad que se disfruta para levantar el
diente rapidísima, en la que es muy difícil grito , exponiendo cada cual las sinrazones
sostenerse. é injusticias que en realidad sufre ó se
Pero la misma importancia del derecho imagina sufrir. Media ademas otra causa
de propiedad, es decir la misma altura del nacida de los mismos principios difundidos
trono en que se encumbra la justicia , ha en la presente época , en los que se inculca
ce mas patente la necesidad de que al lado continuamente la igualdad; no consintién
de esa diosa inflexible, tome su asiento otra dose que asome siquiera nada que pueda
mas dulce, mas amable, mas benéfica: la presentar alguna semejanza con las anti
caridad. Dios no ha criado el humano lina- guas clases. Es de aqui , (pie los pobres no
ge, no ha cubierto esa tierra que habita ven en los ricos, ni títulos de nacimiento,
mos de tantos objetos indispensables á nues ni prerogativas originadas de privilegios,
tra conservacion , y útiles á nuestras como ni un tenor de vida que ofrezca la idea de
didades y regalos, para que un reducido un apartamiento premeditado que impida
número se aproveche de estas ventajas, la mezcla de lo noble con lo plebeyo. El
sin ni aun pensar en el socorro de los in pobre no descubre entre él y el rico otra
fortunados á quienes adversa suerte colo diferencia que la del oro; extendiendo su
cara en posicion diferente. Los que poseen, vista por los distintos órdenes que forman
tienen un derecho de justicia á conservar la gerarquía social , salta á sus ojos que las
su propiedad ; pero tambien pesa sobre gradaciones que en ella existen dependen
ellos la rigurosa obligacion de cumplir aque únicamente del oro : y está seguro , que si
llos deberes que les impone el amor de sus mañana un golpe de próspera fortuna le
semejantes. proporcionase en abundancia ese precioso
La religion cristiana se ha adelantado de metal, pasaría de repente, sin preparacion,
muchos siglos á la filosofía en la proclama sin títulos de ninguna especie, de la clase
cion de la fraternidad universal ; y al paso mas inferior á la mas encumbrada. Esto
que se declaró siempre , y se declara toda engendra por necesidad en el ánimo de las
vía , y se declarará hasta la consumacion clases menesterosas un deseo ardiente de
de los siglos, contra todo atentado en que mejorar de fortuna , cierta envidia hacia
se violen los santos derechos de la justicia , las acomodadas; y faltando los motivos que
asi tambien , inculca incesantemente la en otro tiempo inspiraban respeto y Vene
obligacion en que están los ricos de hacer racion se originan fácilmente el desprecio,
participantes de sus bienes á los pobres, el rencor y el odio.
por medio de la caridad. Al infeliz y nece Cuando las clases superiores se hallan
sitado le dice: « Sufre con paciencia», al ri sostenidas en su respectiva posicion por el
co le dice : « Dá con largueza » si este se ascendiente de las ideas de una época , por
 — 105 —
la organizacion social, ó por el sistema po lando y protegiendo los proyectos y tenta
lítico , pueden por algun tiempo descuidar tivas que á este saludable objeto se enca
sus deberes con respecto á las inferiores , minasen. Porque no basta sojuzgar con la
sin verse amenazadas de inmediata ruina. fuerza de las armas ; es necesario ejercer
El reparo que las cubre suple por espacio ascendiente sobre los espíritus, convencien
mas ó menos dilitado , el vacío que deja su do el entendimiento , cautivando el cora
negligencia; pero no mediando estas cir zon , y obligándole á reconocer los bene
cunstancias, cuando las clases se hallan ficios, á fuerza de dispensarlos grandes y
unas en presencia de otras sin mediador, en crecido número.
sin valla que las separe , sin mas vínculo Pero si seria muy lisonjero que nuestros
que
.ses_ , eles formado por
11.losque
•indispensable
i? — respectivos intere-
i II gobernantes
'i . fijasen
i ' isobre estei_ particular
i i—1_ • . la'
procuren estre consideracion , dándole toda la importancia
char estos lazos, combinando y aliando sus que merece, fuéralo todavía mucho mas,
intereses, y promoviendo el espíritu de fra el ver que las clases interesadas en este
ternidad á fuerza de beneficios. asunto se adelantasen al mismo gobierno ,
Claro es que este impulso debe partir comenzando de propio movimiento la obra
principalmente de las ricas, puesto que de su salvacion. Cuanto dimana del gobier
ellas tienen á la mano los medios de darle: no , adolece del inconveniente de ser cosa
cuando las otras, faltas de recursos, y ata mandada ; y por tanto corre inminente
readas en procurarse el sustento de cada riesgo , que su ejecucion ande descuidada
dia, no tienen lugar comunmente de pen y floja , si es que no se olvida y abandona
sar en proyectos de mejora , y mucho me del todo. En Espana el desgobierno se ha
nos el poder de ejecutarlos. Fuera de de hecho ya tan habitual , y se ha mostrado
sear que los hombres inteligentes y honra tan de bulto á los ojos de los pueblos , que
dos que abriga esta capital , se ocupasen apenas se presentan una ley, un decreto,
detenidamente en examinar la verdadera orden , circular ó un mandato en la forma
situacion de las cosas , reflexionando si tal que se quiera, cuando ya se trata de arrum
vez no habría varios medios justos y suaves, barlos ó sC excogitan artificios para eludir
para hacer el bien á las clases pobres, pre los. Las palabras, reformas, mejoras y otras
viniendo desavenencias desagradables que de esta naturaleza , han llegado ya á ser
dañan asi á estas como a las ricas. miradas como fórmulas de estilo que en
No es poco el interes que en este punto los documentos públicos solo se emplean á
tiene todo gobierno que en algo estime la manera de expresiones de cortesía y de
felicidad , ó cuando menos la tranquilidad buen parecer. Es ya tan sabido el curso
pública. Las lamentables escisiones que se que entre nosotros siguen los negocios
han visto en esta capital , hubiéranse podi- relativos á promoveralguna mejora, que ya
de quizás evitar, saliendo al pasoá las cau nadie se deja deslumbrar con vanas pala
sas que las inoth aban ; siendo esto tanto bras y pomposas promesas. Salido el de
mas hacedero , cuanto que afortunadamen creto que habla de la mejora , adivínase
te las clases pobres , si bien sufrían algu desde luego que uno de sus artículos ha
nas privaciones, inseparable patrimonio de de ser el nombramiento de una comision
su posicion desgraciada , estaban empero compuesta de persotias ilustradas , juiciosas y
muy lejos de encontrarse sumisas en aque amantes del bien público , que en otro artícu
lla espantosa miseria que aflige á las de lo se encarga álas mismas que se dediquen
otros paises , no dejándoles mas que dos con actividad y celo al desempeño de su co
extremos: ó un estúpido embrutecimiento metido ; que en efecto la comision se reu
ó el furor de la desesperacion. Hasta aho nirá , que comenzará á recoger noticias , á
ra la Providencia nos ha librado de esta recibir informaciones, instruyendo el opor
horrible plaga ; y por lo mismo conviene tuno expediente ; que hasta se llegará tal
sobremanera aprovechar el tiempo en que vez á extender una memoria que dé cono
viviéndose con menos escasez y ahogo , se cimiento al gobierno de las diligencias prac
hallarán mas dispuestos los ánimos á escu ticadas ; pero sábese con no menos certeza,
char los consejos de la prudencia. Un go que al fin se atravesará de por medio al
bierno cuerdo y previsor debiera tomar la guna dificultad, que por ligera que sea,
iniciativa en este negocio, planteando por será obstáculo bastante á volver ilusorios
sí mismo los establecimientos é institucio los mejores proyectos, á desbaratar los
nes conducentes al deseado fin , y fomen- planes mas bien concertados , á inutilizar
 — 106 —
trabajos que quizás costaran largo estudio , han cambiado y mejorado de una manera
dilatada observacion , y penosas fatigas. asombrosa la faz del mundo; y la peregrina
Por esta causa fuera de desear que la escuela os oirá con muestras de adhesion y
clase rica de Cataluna, y especialmente la hasta de respeto, quizás llegará al punto
de tíarcclona, no esperase nada de nadie, de participar de vuestro entusiasmo, y re
y acometiese por sí misma la generosa em petirá las elocuentes palabras que ofreció
presa de adoptar aquellas medidas que su en homenaje al Hombre Dios el filósofo de
deber le dicta y su situacion le aconseja. Ginebra» Habladle de los beneficios dispen
Que no olvide la verdad que otro dia le sados á la humanidad por el cristianismo,
criben
de una de
vez
, y que
consuno
: su todavía
deberlay le
conducta
surepetiremos
interes que
le pres
mas
con y convendrá en que son indecibles, inmen-
sos,
den numerosas
i generaciones hace ya lar
respecto á los pobres debe observar: hacer gos siglos, es un tributo de justicia que no
los hítenos y hacerles bien. Hacerlos buenos, podían negarle : hasta si quereis se os per
procurando arraigar en las clases meneste mitirá hablar con elogio de la Iglesia Cató
rosas la moralidad ; y cuando de esta ha lica, refiriéndoos empero á determinadas
blamos, entendemos una moralidad sólida, épocas ; y ya que no se os escuche con pla
duradera , fundada en los principios reli cer, á lo menos se os dispensará el favor
giosos. Hacerles bien, manifestando en su de la tolerancia. Proseguid ponderando los
favor un espíritu de desprendimiento, ha destinos del cristianismo en los siglos veni
ciendo cuando la oportunidad se ofrezca , deros, y de la influencia que le está reser
los sacrificios (pie la caridad reclama, y vada en la suerte de la humanidad, tam
que la naturaleza misma nos inspira con la poco se rechazarán vuestras esperanzas;
compasion excitada en nuestros pechos á antes las veréis acogidas con ardor, y oiréis
la sola vista del infortunio. Ved que el po saludados
tes cánticoslosdenuevos
alborozadas
tiemposalbricias.
con forvVen
ion-
bre al pensar en vosotros recuerde el so
corro que le dispensasteis en la enfermedad, drá un dia, un afortunado dia , euque rei
los auxilios que le proporcionasteis para la narán señoras en el mundo, la fraternidad
educacion y colocacion de sus hijos , que y la caridad predicadas por el hijo del hom
palpe el interes que os tomais por el traba bre, ese bello pensamiento importado en
jador imposibilitado , por el huérfano des el mundo por Jesu-Cristo, inoculado por
valido , por el anciano á quien se quebran los apóstoles á la sociedad , propagado y ar
tan las fuerzas , y tarde ó temprano reco raigado con los sublimes ejemplos de los
gereis el fruto. Kn el mundo hay ingratos, primeros cristianos, y esterilizado despues,
pero la ingratitud no es la ley de la huma notadlo bien, esterilizado despues por la
nidad. — J. B. supersticion y el fanatismo , y explotado en
provecho de la ambicion, de la corrupcion
y de la holgazanería. ¿Comprendeis toda la
fuerza de estas palabras? ¿sabeis lo quecon
ellas indican esos filósofos que á su manera
UN CRISTIANISMO EXTRAÑO. se pretenden cristianos? hélo aqui.
Segun esa escuela, la humanidad pro
gresa siempre marchando sin desviarse há-
cia la perfeccion , que allá en lontananza
está envuelta en misteriosos destinos ; des
Hay en Europa una escuela absurda en tinos ignorados de todo el mundo excepto
sus principios, errónea en sus doctrinas, de algunos genios privilegiados á quienes
falaz y seductora en sus apariencias, que concediera el cielo en momentos de subli
se ha propuesto combatir el cristianismo á me inspiracion , asistir al inefable espectá
fuerza de apologías filosóficas, destruirle culo que ha de ofrecer la humanidad, lle
con incesantes reformas , y disiparle y ano gado el venturoso siglo en que pluguiere á
bladle
nadarledecon
Jesucristo
radicales, transformaciones.
bienhechor de la hu-
Ha U Providencia trocar en encantado paraiso
esa tierra de infortunio y de miseria. ¿No
imidad, regenerador de las sociedades, alcanzais todavía qué parte pueda caber al
structor de los antiguos errores, defen cristianismo en el simbólico sistema , y no
sor de la dignidad humana, y fundador de atinais qué lugar le está reservado allá
11 de doctrinas y hechos que cuando se descifre el misterioso enigma del
 107 —
porvenir de la humanidad? escuchad y y presentada al pueblo con indescifrables
aprended. enigmas, podria salir á la luz del sol; ape
E1 linage humano que se dirige á su des llidarse con su propio nombre, y pasear
lino por senderos incomprensibles , posee triunfante por la faz de la tierra.
un cierto caudal de civilizacion que se Necesitábase empero para la grande obra
transmiten fielmente unas á otras las gene un hombre extraordinario , que concibiese
raciones que pasan y desaparecen. Esa ci con viveza y fuerza la idea, que la formu
vilizacion , ese precioso depósito encierra lase , que se mostrase él propio como una
una idea que lo anima y vivifica, cual es la personificacion de la misma , y que antes
perfectibilidad , el progreso indefinido, el de descender al sepulcro acertase ¿cubrirla
presentimiento de sus destinos. Si no con ton misterioso velo que dejando entrever
cebis esas fatidicas palabras dignas de los su hermoso resplandor la salvase do la pro
antiguos oráculos, contentaos con haberlas fanacion de manos impuras. Hé aqui el
oido , con haber visto al filósofo semejante mote del enigma , hé aqui el secreto de esa
á la antigua sibila que con el cabello de funesta escuela. Segun ella, la religion no
sordenado , y los ojos desencajados , os cla es mas que la filosofía , Jesucristo no es
maba señalando azorada las sombras del mas que un hombre , los dogmas por él es
pavoroso santuario : Dios hé aqui el Dios ; tablecidos no son masque mudables formas
Deus ecce Deus. en que se envuelve la verdad , hasta el dia
Antes de la venida de Jesucristo se agi en que habiendo progresado bastante el
taba el humano linage en busca de una humano linage sea capaz de contemplarla
idea grande , de un pensamiento sublime cara á cara como la vista del águila los ra
que encerrase y compendiase lo pasado, yos del sol.
descifrara y mejorara lo presente , formu Desde el momento que en medio del
lara y fijara el porvenir. ¡ Cosa singular ! cristianismo se levanta una autoridad , esa
extraordinaria coincidencia ! Moyses y Ho autoridad evidentemente instituida por el
mero, Salomon y Sócrates, todos se afa Divino Fundador, se comete la mayor de
naban en pos del indicado pensamiento, las usurpaciones ; las heredas que en dife
rebullía en sus cabezas como un mal for rentes sentidos y bajo distintos nombres
mado embrion ; tenia ya la vida pero le fal surgen y se rebelan contra las pretensiones
taba el desarrollo competente, porque el de la Iglesia , son una protesta de la razon
género humano no se lo consentía. Las contra la fe , de la filosofía contra la reli
ideas eran tan groseras , las costumbres tan gion , de la legitimidad contra la usurpa
duras y feroces , los pueblos vivían en tan cion , de la libertad contra el despotismo.
to aislamiento , era tal la imperfeccion de Cuando al cabo de quince siglos alza su voz
las diferentes organizaciones sociales , tan un fraile apóstata en el corazon de Alema
extrañas é injustas las condiciones del po nia, y con labio profanado con escandaloso
der público , tan mal reconocidas y deslin sacrilegio, se llama apóstol del Señor, en
dadas las atribuciones del doméstico, tanto viado para convertir á las gentes, para des
en una palabra , el atraso de la verdadera truir a la Prostituta de Babilonia , para
civilizacion , que lanzada en medio del echar por el suelo una autoridad reconoci
mundo la sublime idea, de nadie fuera da durante quince siglos, ese apóstata, ese
comprendida , por todos menospreciada y seductor, es á los ojos de la funesta escue
conculcada , verificándose lo de las precio la un grande hombre , á pesar de todos sus
sas perlas arrojadas á los piés de animales vergonzosos extravíos. Los arrebatos de su
inmundos. cólera no son mas que el noble acento de
La antigua filosofía , á pesar de sus erro una indignacion justa , generosa , y santa ;
res, de sus extravagancias, de. sus absur sus esfuerzos para derrocar el poder tem
dos y lo que es todavía mas doloroso , de poral y espiritual del Romano Pontífice
sus infames doctrinas repugnantes á la sana corresponden á los vivos y ansiosos deseos
moral , trabajaba, si hemos de creer á la in que abriga la Europa entera ; la adultera
dicada escuela , en la promocion y fomento cion de los dogmas, la destruccion de toda
de los grandes intereses de la humanidad , disciplina, la relajacion de costumbres pre
en la vindicacion de los derechos del hom dicada en sus palabras y en sus ejemplos,
bre ; preparando asi la era venturosa en el vértigo fatal que introduce en Europa
que la verdad oculta entre las sombras, en todo lo perteneciente á las mas elevadas
solo conocida en tenebrosos conciliábulos , cuestiones religiosas, sociales y políticas,
 /

todo se ensalza con los mayores encomios, — 108familia, al individuo, si le calumniaron de

todo se pondera como un inmenso benefi la manera mas atroz , si le convirtieron en
cio dispensado á la humanidad. objeto de mofa con la mas indecente im
¿ Qué importan los dogmas , qué la dis pudencia , esto no quita que la escuela fi-
ciplina , qué la gerarquia ? Esto eran for losófico-cristiana, los reconozca como sus
mas gastadas en que se hallaba envuelta la ilustres progenitores, que les atribute ren
idea antigua , primitiva , que servir pudie didos homenages , que les obsequie con
ran qui/ás allá tn otros tiempos, pero que ni [ni 'lias muestras de reverencia , de respe
á la sazon era indispensable rasgar con to y gratitud , con que los buenos hijos
mano osada , dejando que se entretuvieran honran á sus padres.
con los despreciables fragmentos , el fana Hemos trazado con rápidas plumadas los
tismo y la ignorancia. Pasan dos siglos, los rasgos característicos de esa engañosa y
funestos principios se desenvuelven, se lle funesta escuela , de esa escuela que se ha
van hasta el extremo sus fatales consecuen empeñado en cubrirse con ciertas aparien
cias , la impiedad se erige en dogma , y cias de cristianismo, cuando hace ostentosa
arrojada la hipócrita máscara con que se gala de mostrarse heredera de todas las hc-
cubriera , niega abiertamente la divinidad regías, de todas las escuelas de impiedad
de la religion cristiana , declara absurdas con que ha luchado el cristianismo por es
sus augustas doctrinas, ridiculiza sus vene pacio de 18 siglos. ¿Quereis conocerla á
rables prácticas, y se esfuerza en hacer ob fondo? quereis una evidente señal de cua
jeto de befa y escarnio la santidad del sa les son sus intenciones? ¿ quereis saber el
cerdocio. Nada importa todo esto, á los blanco de sus tiros? esa misma escuela que
ojos de la escuela que nos está ocupando ; todo lo excusa , todo lo tolera , solo en un
la filosofía del siglo 18 con sus errores, con punto se muestra intolerante, en lo rela
sus blasfemias, con su olvido de la historia, tivo á la Iglesia Católica. A esta iglesia no
con su odio á todo lo antiguo , con su en se le concede treguas ni descanso ; fortuna
carnizamiento contra lo existente , bañada si se otorga que á pesar de su supersticion,
de la sangre que hiciera verter á torrentes su fanatismo, su corrupcion, produjo qui
en todos los puntos de Europa , goteando zás algunos bienes alla en los siglos bárba
todavía sus manos la inocente que derra ros ; pero en llegando á los modernos , en
mara con sus puñales y sus cadalsos , esa tratando del actual , en hablando del veni
filosofía que se presentara como reparadora dero , no menteis ni catolicismo , ni iglesia
de todos los males de la humanidad, mien católica tales como los entienden los verda
tras se hallaba reducida á la modesta man deros fieles; son nombres gastados que
sion de un gabinete , que se convirtió en nada expresan , nada significan ; sino es
feroz Medea tan pronto como pudo escalar algo de repugnante á la causa de la civili
la cumbre del mando , esa filosofía es tam zacion, á los intereses de la humanidad.
bien un inmenso beneficio dispensado á la El cristianismo, el único cristianismo que
sociedad y al individuo. Ella quebrantó las podrá servir para labrar el siglo de oro á
cadenas que aprisionaban el humano pen que se encamina el humano linage , es ese
samiento, ella derribó las barreras que se cristianismo indefinible , fluctuante , aéreo,
paraban unas clases de otras clases , que del modo que le han dejado el exámen
defendían la usurpacion de las poderosas, protestante y el análisis filosófico: ese cris
que servían para la opresion de los pobres, tianismo, esa religion inconcebible, que
que monopolizaban en manos de pocos el carece de dogma, es decir, de doctrinas,
fruto del trabajo de todos , que explotaban que no admite formas exteriores , es decir
en beneficio de los goces del fuerte los su que no consiente culto, que no necesita
dores y las penalidades del débil. Los ma ministros que enseñen y practiquen , dado
yores extravíos , los mas grandes excesos, que ella abdica toda enseñanza , y no pres
los mas horrendos crímenes , todo se excu cribe ninguna práctica.
sa , todo se disculpa , con inconcebible in Ocúltase bajo ese indigesto fárrago, bajo
dulgencia , en obsequio de la utilidad y ese tejido de absurdos é incoherencias , la
grandor de los resultados. Si los filósofos mas profunda hipocresía : es la impiedad ,
del siglo 18 desconocieron no solo la ver el indiferentismo, que llevados de un sen
dad, sino el mérito mismo del cristianismo, timiento egoista encubren con mentidos ve
si negaron que hubiese acarreado ningun los sus asquerosas formas , y procuran se
género de beneficios á la sociedad , a la ducir con vanas palabras á los pueblos in-
 — 100 —
cautos. Las creencias cristianas están toda tribunal de la sana filosofía. Sin embargo y
vía en el corazon de las naciones europeas, á pesar de que estas consideraciones po
y de cuantas han participado de su esplén drían dispensarnos de impugnarla, lo ha
dida civilizacion ; hasta los pueblos arras- remos á continuacion atacando sus dos
Irados por el cisma y la heregía , y arroja ideas capitales: primera, la transformacion
dos despues en un piélago de errores , de sucesiva que segun ella ha experimentado
dudas é incertidumbre, conservan en el el cristianismo : segunda , la necesidad de
fondo de su alma el sentimiento cristiano , que el catolicismo desaparezca por motivo
echan menos la verdad que perdieron en de su supuesta impotencia de satisfacer las
aciago dia, y con la Biblia en la mano re necesidades de la generacion presente y de
corren afanosos y sedientos aquellas páginas las venideras.
divinas, ininteligibles á sus ojos velados Para transformarse una cosa es menester
con las tinieblas del error. Eso lo ha com que exista : los Aristotélicos admitiendo las
prendido la escuela que estamos comba formas sustanciales suponían una materia
tiendo , y ha dicho para sí : «no hostilize- prima que las perdía ó adquiría ; experi
mos cara á cara el cristianismo , manifesté mentando de esta suerte las correspondien
monos sus ardientes defensores, no desa tes mudanzas. Si pues hay en el cristianis
provechemos la dura experiencia que nos mo algo que dura al traves de los siglos,
i del pasado siglo, que por pero que se transforma , es decir que mu
"ano, manifestado de una da de formas, les preguntaremos á los pre
manera prematura é imprudente, si bien tendidos filósofos exigiéndoles que nos res
logró deslumbrar por algunos momentos , pondan categóricamente á la pregunta :
se atrajo y se está atrayendo cada dia mas ¿en qué consiste eso que permanece y su
la execracion universal ; digamos que en el fre la mudanza de las formas? ¿qué se en
fondo del cristianismo hay verdad , distin tiende por estas formas? Consecuentes á
gamos entre ella y las formas que la cu sus principios que están en oposicion con
bren , afectemos tanto respeto por aquella los dogmas admitidos por la Iglesia católica,
como desprecio manifestamos por estas, nos dirán que esos mismos dogmas no son
inculquemos la necesidad de mudarlas se mas que puras formas, que lo son ahora
gun las circunstancias y los tiempos , ha como lo fueron siempre , y que las preten
blemos sin cesar de símbolos , de emble didas tradiciones no fueron mas que la
mas , de enigmas , de transformaciones , transmision de los enigmáticos emblemas
hagamos que en todo intervengan los arca con que se disfrazara la verdad. Entonces
nos del porvenir ; asi confundido y mez nos han de confesar, que los cristianos de
clado en inextrincable laberinto lo pasado , todos los tiempos que no miraron esos dog
lo presente y lo futuro, engañaremos á mas como formas enigmáticas , sino como
nuestro sabor á los pueblos; y cuando es positivas expresiones de la realidad, fueron
peren el nuevo cristianismo que cual otro ó engañados ó engañadores. Si lo primero,
fénix ha de renacer de las cenizas de la pira los cristianos no conocieron jamas el cris
que nosotros levantamos , se hallarán bas tianismo ; si lo segundo , fueron una turba
tante preparados para recibir sin rodeo, sin de miserables impostores, á quienes en
disfraz, nuestra enseñanza, que consiste en mala hora dispensais no merecidos enco
absoluta abdicacion de todo linage de creen mios. Léanse todos los documentos moder
cias, en completo escepticismo sobre el nos y antiguos , donde se declara la fe de
origen y los destinos del hombre, en un los cristianos, consúltense los anales de
culto de los intereses materiales, en la di aquellas épocas que tan afectadamente se
vinizacion del goce , en el entronizamiento califican de posesoras de la verdad primiti
del principio de utilidad privada; mas breve, va ; á cada paso se conocerá , se palpará,
en No
la ruina
es menester
de toda religion
mucha penetracion
y de toda moral.
para» que los hombres que hablan , que escriben
sobre los dogmas que las generaciones que
conocer lo que se abriga bajo el transpa los profesan, los héroes que por ellos sufren
rente velo ; y descubierta la falsedad hipó y mueren , todos á una entienden que esos
crita, deja de ser tan peligrosa para los que dogmas expresan la verdad , tocios miran
aman de veras la sinceridad. Una vez des como horrendo pecado la negacion ó la du -
enmascarada la escuela á que nos referi da , todos se estremecerian al oir que sus
mos, queda evidente su error y su mala creencias versan sobre cosas sujetas á re
fe; y por consiguiente, está juzgada en el formas y mudanzas.
 — 110 —
Además, ¿qué son ios dogmas de una propio tiempo lo que somos, de dónde ve
religion ? son sus doctrinas ; la que los tie nimos, á donde vamos. Si en esto caben
ne falsos tiene su enseñanza falsa ; y tanto alegorías , si cuanto , se propone en las
•dista de merecer el nombre de religion, creencias que á tales puntos se refieren
que con dificultad podrá vindicar el de es puede calificarse de emblemático y simbó
cuela. Al menos una escuela se apoya en lico , si nos es dado sospechar que aqui no
raciocinios, no fmge revelaciones, apellí se encierran mas que sublimes mentiras
dase hija del entendimiento , nó del cielo; para indicarnos una verdad terrena, que
si yerra , se equivoca y no engaña : pero el mundo hasta ahora no conoce, y que
una religion falsa es un tejido no solo de solo columbran ciertos filósofos; dígase que
errores sino de imposturas ; es un insulte por espacio de 18 siglos una considerable
dirigido á un tiempo contra Dios y los porcion de la humanidad ha sido víctima
hombres, pues que á estos los engaña abu del mas grosero engaño , añádase que to
sando sacrilegamente del nombre de la davía lo es ; y no se dispensen hipócritas
eterna verdad. Ni vale para excusar esa elogios al cristianismo , que en tal caso no
impostura el decir, que allí hay alegoría, fuera mas que un conjunto de extravagan
y que esta significa , mas no engaña ; ¿ qué cias sin objeto , de palabras sin sentido , de
será una alegoría que nadie entiende , de enigmas indescifrables , estériles , comple
la cual nadie sospecha que no sea la senci tamente estériles para producir la verdad.
lla exposicion de la realidad de las cosas? Al error no se añada el amaño , á la false
¿podrá merecer el título de tal, la alegoría dad la astucia seductora. Si no creeis en el
que no comprenden ni los ignorantes ni los cristianismo , si os empeñais en combatirle
sabios , ni los enseñados ni los que comu continuando la impía tarca de la escuela de
nican la enseñanza? Si versa sobre objetos Voltaire, no digais por lo menos que os
de escasa importancia , si el error de maes proponeis explicar lo que tan abiertamente
tros y discípulos se limitase á proposiciones negais, que intentais perfeccionar lo que
de poca entidad, de ninguna consecuencia, deseais destruir. Entonces si conquistais
entonces seria menos absurda la suposicion alumnos, sabrán al menos á qué atenerse;
que estamos impugnando; pero se trata y desde el momento en que abracen vues
nada menos que del mismo Dios de los au tras doctrinas no podrán ignorar que aban
gustos misterios que en cuanto al mísero donan su fe.
mortal le es dado entender, explican la « La moral cristiana , dirán esos filóso
Divina Naturaleza , las Personas , las rela fos , es lo único que se encuentra verdade
ciones de estas entre sí ; se trata nada me ro en las doctrinas de la religion ; esa
nos que del hombre , de su naturaleza , de moral pura , santa , sublime , es lo único
su origen, de su destino, de sus relaciones que conviene salvar; no debe á la humani
con Dios, de los medios que le han sido dad pesarle de haber vivido en piadosos
concedidos para alcanzar su fin; se trata de errores, si con estos ha podido adquirir
saber si existe una prevaricacion primitiva, tan inestimable tesoro. Esa moral se aviene
si de ella ha participado todo el humano con todas las creencias , con todas las orga
linage , si en efecto sufrimos ó nó la pena nizaciones sociales, con todas las formas
de un primer pecado , si hay ó nó una de políticas ; es elevada , ilustrada , tolerante,
generacion del estado en que Dios nos cria grande como el mundo, digna de seño
ra , si la Redencion es una verdad , si el rearle , digna de reinar sobre la familia,
Hijo de Dios se dignó descender por noso sobre la sociedad , digna de presidir á la
tros á la tierra para lavar nuestras man resolucion de los actuales problemas y de
chas, rescatarnos con su sangre, y abrir marchar al frente de las generaciones ve
nos las puertas del Paraiso : se trata de nideras , conduciéndolas al destino que les
saber si existen algunos conductos por los señalara la Providencia. » Oyense á cada
cuales se nos comuniquen los tesoros de la paso estos encomios tributados á la moral
gracia de la redencion ; en una palabra, en cristiana, hasta por los mas declarados
los dogmas se encierra lo mas grande y enemigos del cristianismo; pero ¿son sin
mas importante que el hombre puede ima ceras esas alabanzas? ¿salen del fondo del
ginar, lo que mas de cerca le interesa, lo corazon ? ¿No podrían á veces envolver un
que está íntimamente enlazado con su suer amaño , procurando adormecer con lison
te, aquello de que esta depende, aquello jas la víctima que se intenta sacrificar?
que no nos es dado ignorar , sin ignorar al ¿Es verdad que vuestro entusiasmo por la
 moral del Evangelio sea tanto como afec — 111mundo
— civilizado. Hace poco menos de un
tais? Si es así, ¿cómo no andan mas con siglo que vuestra filosofía reina allí con ili
formes con ella vuestras doctrinas? vosotros mitado imperio, allí vivieron y murieron,
divinizais la materia , el Evangelio la ano allí viven todavía vuestros grandes hom
nada ; vosotros predicais incesantemente el bres, allí ha resonado y resuena todavía
goce , el Evangelio el sufrimiento y la abs vuestra voz con mas elocuencia , con mas
tinencia ; vosotros excusais todos los extra seductor acento , que en ningun punto del
víos del corazon , el Evangelio ordena cir globo; allí habeis hecho en grande vues
cuncidarle con mano severa ; vosotros tros ensayos, allí lo que no alcanzarais con
ensalzais y excitais el orgullo, el Evangelio la persuasion lo conseguisteis con la fuerza
prescribe la humildad ; vosotros inculcais de las armas, allí vinieron las guillotinas
como base de la moral el amor propio , el en apoyo de los argumentos y el estruendo
egoismo , el principio de la utilidad priva del cañon en sosten del clamoreo de vues
da, el Evangelio prescribe la abnegacion, tra prensa, allí triunfásteis , y sin embargo,
el desasimiento de los intereses terrenos, dolor causa decirlo ¿qué habeis hecho de
el amor de Dios, el del prójimo, el sacri aquella sociedad ? ¿en qué habeis converti
ficio por el bien de sus semejantes ; voso do aquel gran pueblo? ¿quereis que levan
tros ridiculizais , ó al menos tachais de ex temos el velo que encubre la ignominia de
tremado rigor , la virtud sublime que nos vuestra obra? nó, no lo haremos; eonten-
hace vivir la vida de ángel , el Evangelio tarémonos con recordar un hecho que no
la aconseja como una de las ofrendas mas podreis contestarnos , que es público , que
agradables al Señor, como el incienso mas depone del modo mas concluyente contra
puro que alzarse pueda del humano cora vuestros sistemas: en Paris la tercera parte
zon¿Qué
hácia hay
las gradas
de semejante
del tronoentre vuestra de los niños que nacen no son de legítimo
del Eterno.
matrimonio.
moral y la del Evangelio? la de este for Id ahora y predicad la excelencia de
maba anacoretas, la vuestra forma sibari vuestra moral , decid si os place que está
tas ; la de este corrigió las costumbres del conforme con la del Evangelio; ¿creeis
mundo pagano, la vuestra corrompe las por ventura que las máximas de la moral
del mundo actual ; la de este desterró el se formulan en bandos de policía? ¿que la
egoismo para entronizar la caridad , la saludable vigilancia sobre las costumbres
vuestra protestando una fraternidad esté se ejerce bastante con los tribunales de
ril, produce en los hombres un horrible correccion? ¿creeis que la civilizacion es la
aislamiento, levantando en los corazones el cultura , que la perfeccion de las leyes es
mezquino ídolo del interes propio; la de el adelanto de las artes , que la sensatez y
este organizó la familia , santificó el matri el buen juicio son lo mismo que el progre
monio , la vuestra desordena la familia , y so do las ciencias, que la pureza de la con
relaja ó quebranta el lazo conyugal ; donde ducta consiste en la finura de los modales?
quiera que ha prevalecido la moral evan ¿Creeis que desaparece la corrupcion por
gélica , se ha verificado un cambio prodi solo cubrirla con velos resplandecientes?
gioso, desterrándose la corrupcion de entre No es esto lo que dicta la razon , no es
los fieles ; donde se ha introducido vuestra esto lo que enseña la religion cristiana;
filosofía , han degenerado las costumbres una y otra nos dicen en alta voz que para
de una manera lastimosa , distinguiéndose reformar el corazon del hombre y conser
en la perversidad , á proporcion de lo di var en él las mejoras, no bastan reglamen
fundidas que estaban vuestras doctrinas. tos , no bastan libros , no bastan declama
Ved , contemplad vuestra obra ; no os se ciones; sino que son necesarios medios
ñalaremos un punto oscuro , donde alegar vivos y eficaces que penetren en lo inte
pudierais que no ha penetrado en toda su rior , que ejerzan directamente su influen
plenitud el caudal de vuestras luces; no os cia sobre el entendimiento y la voluntad,
indicaremos un pueblo bárbaro del que os que enflaquezcan el ascendiente de las pa
sea dado decir que en su torpe grosería no siones, que quebranten su ímpetu y aba
comprende el sentido de vuestra enseñan tan su vuelo ! Para conseguir esos efectos
za ; queremos que fijéis vuestras miradas son indispensables motivos superiores á los
sobre la ciudad rica , populosa y florecien que se encuentran en la esfera terrena , son
te , emporio de las artes y de las ciencias, insuficientes los que se fundan en combi
orgullo de una gran nacion, capital del naciones del interes'privado, pues desde
el momento que este se entroniza , se con 112 vanta
juez
— desvanecida y orgullos» , se erige en
de todas las religiones , las presen be
cede á las pasiones rienda suelta. La razon el camino (pie deben seguir , les indica los
y la religion están acordes en que la sana escollos que deben evitar , pesa los grados
moral y la práctica de la virtud no se opo
nen al interes propio bien entendido ; pero que les quedan de fuerza y de vida , pro
sostienen al mismo tiempo que el ejercicio „ nostica
duracion
magistralmente el término de su
, decide que esta ha muerto ya,
de la virtud demanda , exige una y mil ve que aquella está en agonía , que la una ha
ces el sacrificio del placer de momento, de "menester cierta transformacion, que la
la utilidad presente, y tal vez de la utili otra es del todo inútil, que es necesario
dad de toda la vida ; sostienen que la mo
ral para ser firme , sólida , duradera , á la arrumbarla para que no entorpezca la ra
prueba de los ataques de las pasiones y de nuevo debajo de
pida marcha los pueblos. Nada hay
del sol , ha dicho con pro
la inconstancia de la humana flaqueza, de funda
be arrancar del cielo y dirigirse al cielo; nueva sabiduría
tampoco
el Sagrado Texto ; y no es
esa loca vanidad , ese inso
debe fijar sus miradas mas allá del sepul portable orgullo del espíritu humano. Tam
cro, debe salir del tiempo y extenderse á bien en otro tiempo condenó el cristiams
la eternidad ; no debe limitarse á la estre mo como absurdo , como criminal , como
cha esfera de la criatura , sino levantarse contrario á las leyes del imperio, como in
hasta las regiones infinitas donde mora el compatible con el orden público y la exis
Críador. Ved si es esta la enseñanza de preciable,tencia de la envilecedora,
sociedad, como
propiareligion
únicamente
dos-
Nuestros libros, si algo tiene de semejante
la tendencia de vuestras doctrinas; descen de miserables y esclavos; y sin embargo el
ded al examen de vuestros principios, pe cristianismo vió disipar á su presencia las
sad sus consecuencias , dad una mirada á escuelas filosóficas como ligera niebla toca
las aplicaciones que de ellas haceis ; jamas da de los rayos del sol; y se arraigó, y se
hablais sino de ¡a tierra , jamás hablais de propagó , y se apoderó del solio de los Cé
los destinos del hombre, sino ciiléndoos á sares , y resplandeció en el lábaro de los
esa vivienda pasagera, hablais siempre del señores del mundo, y sojuzgó y civilizó á
género humano , nunca del Dios que lo los bárbaros, y triunfó de los árabes y creó
crió y que lo llama á sí; y cuando una que la Europa moderna. Tambien en otro
otra vez mentais el nombre del Ser Supre tiempo el mismo orgullo con la Biblia en
mo , si una que otra vez pronunciais ó es
cribis Providencia , bien se conoce que tri la mano pretendía marcar la caida de la
(lindad eterna, el fin de la Catedra de San
butais un esteril homenage á una divinidad Pedro , con la misma precision y exactitud
que no ve ni oye, que se pasea por las al con que señalan los astrónomos el momen
turas del cielo sin considerar las cosas de la to de un eclipse; y no obstante esa Cátedra
tierra. Si una que otra vez recordais los permanece y vive , acatada por numerosos
destinos del hombre mas allá del sepulcro, pueblos, y la palabra del Divino Salvador
y la inmortalidad que nos espera en regio no se encuentra fallida. Tambien en el si
nes desconocidas , lo haceis de paso , solo glo anterior, en la época de la pujanza
para hermosear vuestras páginas, para dar filosófica del hombre de Ferney , se pro
realce á vuestra palabra , porque no igno nosticaba con tono de seguridad y de cer
rais que la tumba, la inmortalidad, la teza, que estaba por sonar la hora extrema
eternidad, encierran una sublime poesía y para la supersticion y el fanatismo : sonó sí
esmaltan y realzan cuanto tocan.
La filosofía anticristiana divaga perdida una hora terrible , pero no fué mas que la
por las vanas regiones de la duda y del es hora saliera
de persecucion , semejante á la que
de la urna del Eterno en los tiem
cepticismo , abrazada con mentidas som pos de los Nerones , de los Decios , de los
bras , brillantes de lejos , negras y repug Dioclecianos. Sonó la hora en que Dios
nantes de cerca; desásese á cada instante quiso probar á la Iglesia como el oro en el
de los brazos de una para correr en pos de crisol , para presentarla mas resplandecien
otra que la deslumbra, y á su turno la en te á los ojos de las naciones y sacarla vic
gaña. Varia sin cesar, continuamente se
transforma , y por lo mismo pretende que toriosa enemigos:
y triunfante de las manos de sus
cubierta de tanta mayor glo
todo se transforme y varie como ella ; por ria é inspirando interes tanto mas \i\o,
e>ln no conociendo su propia flaqueza, SU cuanto eran mas anchas y profundas las
impotencia para alcanzar la verdad , se le-
cicatrices recibidas el terrible com-
— 1 13
«que— nuestro Dios es injusto y cruel , que
bate.—/. B. daríamos convictos de no tener ninguno; la
Religion católica seria falsa por absurda ; y
como las demas religiones que tributan ho
menage á dioses imposibles , seria imposi
POLEMICA RELIGIOSA. ble tambien por ser atea.
Veamos pues en qué estriba el cargo con
que se intenta abrumarnos, exáminándolo
porEnpartes
primer
y sujetándolo
lugar, se nos
á riguroso
dice que
análisis.
Dios
¿si. «19B 83 LA m?]S0L7AS> SUS 8S ai!J2YA Ai.
e.VTOLieiíjo sesas la ©aevaaaa @íus no sea- no puede castigar al inocente , que muchos
€iBS (ALVACIOB 8»BO k L98 §31 PBOFSSAa LA hombres se encuentran en imposibilidad de
asusioa íXNSAMistA. conocer la verdad católica , y que por tan
to no deben ser condenados por esta falta
Combatido ya en los números anteriores de conocimiento. Esa dificultad que tan
el escepticismo religioso , y deshecha la di fuerte parece á primera vista , es sin em
ficultad que se objeta á la religion verda bargo de ningun valor ; pues que toda ella
dera fundándose en la pretendida imposi estriba en un falso supuesto , atribuyendo
bilidad de que Dios permita la existencia á los católicos una doctrina que no profe
de tantas otras, vamos ahora á examinar san , y que antes al contrario les está pro
la fuerza de otro argumento que es el hibido el profesarla. En efecto, no solo re
Aquiles de todos los incrédulos y escépti- conocen los católicos que seria injusto con
cos. Sin fe , decimos los católicos , no hay denar á un inocente , sino que ademas tie
salvacion ; en no perteneciendo á la Iglesia, nen por cierto que la infidelidad puramen
nadie puede entrar en el reino de los cie te negativa, no es pecado; esto es, que
los. Contra estas verdades levantan nues aquellos que carecen de fe , porque no tie
tros adversarios un sentido grito de repro nen conocimiento de la verdadera religion ,
bacion , achacándonos que presentamos á no son por esta falta culpables á los ojos de
Dios como un tirano que erige la ignoran Dios. Échase de ver que con esta sola obser
cia en crimen , y que se complace en casti vacion \ iene al suelo toda la dificultad que
gar la inocencia con eternos tormentos. En II se nos objeta : se nos dice que Dios es jus
verdad que si semejante cargo no careciese to , que no puede condenar al inocente ; y
de fundamento , bastaría él solo para der II nosotros convenimos que fuera una blasfe
ribar y anonadar nuestra religion conven mia afirmar lo contrario : se nos opone ,
ciéndola de falsa ; dado que no seria posi que quien ignora invenciblemente la reli
ble que fuese verdadera la que adorase un gion no puede ser castigado por esta igno
Dios cruel é injusto. La bondad y la justi rancia ; y nosotros estamos de acuerdo en
cia son atributos tan esenciales á la divini esta verdad , y condenamos á los que se
dad , van de tal modo embebidos en la idea atreven á decir que la infidelidad negativa
que de ella nos tenemos formada, que es un pecado. Se nos calumnia pues acha
quien intente separarlos destruye la idea cándonos errores que somos los primeros
misma de Dios. Hasta los discípulos de Ma en reprobar.
nes admitiendo dos principios , uno bueno, Para mayor inteligencia de lo arriba di
otro malo , han tributado en cierto modo cho , conviene distinguir la ignorancia de
un homenage á la verdad arriba indicada , una cosa, en vencible é invencible: nom
cuando al parecer la contrariaban con su bres por los cuales se expresa lo que ellos
errónea doctrina. Admiten un principio ya de suyo están indicando, á saber: la
causa de todo mal ; pero ¿ sabeis por qué ? ignorancia vencible es aquella que el hom
porque no conciben cómo el principio bue bre puede desterrar de su entendimiento
no, es decir Dios, puede causar el mal sea empleando la correspondiente diligencia ; y
del género que fuere ; porque confunden y la invencible es aquella que no esta en ma
adulteran las antiguas tradiciones del ángel no del hombre el evitarla. Cuando se falta
caido , obstinado en su perversidad , en ha al cumplimiento de un deber ignorado con
cer daño por todos los medios posibles , en ignorancia vencible , esta no escusa de la
oposicion , en insensata lucha con un Dios culpa ; de otra suerte fuera muy fácil elu
de infinita bondad é inefable amor. Asi, dir todas las obligaciones , privándose con
cuando los incrédulos llegasen á probarnos plena voluntad del conocimiento de ellas.
tomo i. 8
 — 11 1cen,
Este es un principio fundado en el derecho - no tendrán parte en la heredad celes
natural y reconocido por todas las leyes tial. Asentada esta verdad, de la queá nin
divinas y humanas: en ningun tiempo, en gun católico es lícito dudar, pasemos ahora
ningun pais, en ninguna sociedad, se ha al examen de lo que sucede á los que se
creido nunca que la ignorancia voluntaria hallan fuera del redil de la Iglesia. Para
de un deber eximiese de su cumplimiento , mayor claridad los distinguiremos en dos
ni excusase de la culpa al transgresor. grandes clases : 1 .", los que han llegado al
Al contrario , cuando la transgresion es uso de la razon , desarrollada lo bastante
de un precepto que involuntaria é invenci para hacerlos capaces de la deliberacion y
blemente se ignora , no es ni puede ser consentimiento, necesarios para cometer
culpable á los ojos de Dios. La razon de pecado grave , es decir digno de eterna
esto es muy sencilla : el pecado segun en condenacion. 2.a, los que llegan á dicho
sena San Agustín, ha de ser voluntario , de estado. Por loque toca á los primeros,
suerte que si no es volwUario ga no es pecado ; decimos, que no se condenarán por no ha
y esta voluntad no existe , ni aun puede ber profesado la fe ; se hallarán en el mis
concebirse, donde hay absoluta falta de co mo caso de los niños que fallecen sin bau
nocimiento, donde la adquisicion de este tismo ; los cuales si bien no disfrutan de la
no estuvo en la facultad del transgresor , gloria del cielo , tampoco sufren las penas
donde
ni
nida
omision,
la por
voluntad
consiguiente
en que
expresa
pueda
noósuponerse
hay
tácitamente
ningun
conte-
acto
, ni II del infierno. Cuál es el estado de estas al
mas en la otra vida , cuál será la suerte de
esa inmensa muchedumbre despues de la
como suele decirse en términos teológicos, resurreccion de los cuerpos, dónde vivi
formal ó virtualmente. rán , cómo correrá su existencia, esto Dios
Aplicando esta doctrina ála cuestion que no lo ha revelado ; espesas sombras encu
nos ocupa , diremos que es enteramente bren tales misterios solo conocidos del Al
cierto que el infiel que ignora la religion tísimo; por ellos nada puede objetarse con
cristiana con ignorancia invencible , no se tra la fe católica; pues que la fe nada nos
rá castigado de Dios por no haberla abra dice sobre los mismos, manteniéndose en
zado. Con esta asercion se desvanece en una prudente reserva. Establece sí, que no
primer lugar la dificultad que con tal aire gozarán de la vision beatífica, esto es, que
de triunfo proponen los incrédulos. Nó , el no verán á Dios cara á cara , que no goza
Dios de los cristianos no castiga al inocen rán de aquella inefable dicha de conocer
te. Nosotros creemos que nuestra religion intuitivamente la esencia divina; pero co
es la única verdadera , creemos que solo en mo este conocimiento , esta vision , son de
ella hay salvacion ; pero como al mismo todo punto sobrenaturales al hombre , per
tiempo nuestra fe nos enseña que Dios es teneciendo á un órden á que solo podemos
infinitamente justo, miramos como horren elevarnos porque el Señor se ha dignado
da blasfemia el decir que pueda imponer otorgárnoslo con inestimable dignacion , se
penas al que no es culpable, aun cuando sigue que el hombre que no alcance tanto
se trate del caso en que no se profese la beneficio por hallarse falto de las condicio
verdadera religion. nes señaladas por Dios como indispensa
« Pero entonces , se nos dirá , ¿ qué des bles , nada puede objetar á la justicia divi
tine sañalais á tantos desgraciados, que por na ; porque no es injusto quien deja de
no profesar la religion verdadera , no pue satisfacer lo que no debe; no cabe tampoco
den segun vosotros mismos entrar en el rei la queja de que haya mediado acepcion de
no de los cielos?» Esta es una nueva fase personas , pues que esta supone que se ha
e presenta la objecion ; la juzgamos de llan algunas injustamente postergadas , y
alta importancia que 'nos esforzaremos atendidas otras por sola la consideracion á
en presentar las ideas con la mayor clari títulos ilegítimos ó inconducentes; tampoco
dad y precision que alcanzar pudiéremos. el hombre tiene derecho á lamentarse de
En primer lugar, nos dice expresamente que se le haya aplicado una pena sin ha
el sagrado Texto que no se ha dado á los berla merecido , porque dejando aparte el
hombres otro nombre en que puedan sal castigo general que sufre el linage humano
varse sino el de Jesucristo; de lo que se in por la prevaricacion del primer padre, de
fiere, que no es posible entrar en el reino ¡a que son aplicaciones y consecuencias es
de los cielos, sino por la fe en el Mediador; tos daños, no hay aqui una pena especial
y que por
 — 118 —
plimiento de una condicion que el Eterno ha Entre nosotros , un niño no se considera
tenido á bien establecer , y de la cual nadie que haya llegado á este punto, aun cuan
será bastante temerario para pedirle cuenta. do se vea chispear su inteligencia en mu
Infiérese de lo dicho últimamente que chos de los actos que ejerce, y se trasluzca
una inmensa muchedumbre de individuos cierta especie de deliberacion que sus pa
que mueren sin haber profesado la Religion dres y maestros juzgan á veces necesario
católica, no quedan condenados á las penas reprender y corregir con severidad. Com
del infierno. Échase de ver que se com párese un niño de cuatro ó cinco años que
prenden en este número no solo todos los comienza á leer con bastante perfeccion ,
niños que fallecen entre los cristianos antes que sabe ya los rudimentos de la doctrina
de haber recibido el bautismo , sino tam cristiana , que responde atinadamente á las
bien los del universo entero. preguntas que se le hacen sobre sus obli
Ademas, surge aqui otra cuestion im gaciones con respecto á Dios, ásus padres,
portante , que segun se resuelva con mas á sus superiores de todas clases, á sus
ó menos latitud , puede ofrecer pábulo á iguales, á los dependientes de su familia,
reflexiones muy consoladoras. Pueblos hay sobre los premios y los castigos reservados
en muchas regiones del globo donde la in al hombre despues de esta vida segun haya
teligencia tiene un desarrollo escasísimo , sido buena ó mala su conducta ; compáre
donde aun atendiendo á la edad en que sele , repetimos , con uno de esos salvages
aquella se encuentra en el grado de mayor á que poco antes estábamos aludiendo , y
actividad y desenvolvimiento , es tan poco véase si fuera una paradoja el decir, que
el brillo que despide esa hermosa centella atendido el estado de embrutecimiento en
que nos asemeja á la divinidad , que de ahí que viven, para muchos de ellos llega muy
han tomado origen erradas teorías que su tarde el uso de la razon necesario para ha
ponen á aquellos hombres de especie dife cerse reos de culpa grave á los ojos de
rente é inferior, colocándolos en un grado Dios ; que el número de los que nosotros
intermedio entre nosotros y los brutos. apellidamos imbéciles y fatuos, sea quizás
Claro es que no puede admitirse esta supo entre ellos mucho mayor de lo que pudié
sicion sin destruirla verdad de la narracion ramos imaginar; y que por consiguiente es
del Génesis , y por tanto sin minar por su muy aventurado el determinar con alguna
misma base todo el edificio de la Religion precision , ni el número de los que entre
católica. En otro lugar, y cuando el orden ellos se condenan por la infidelidad, ni
de esta Polémica relifiiosa lo exija, demos cuando comienza para gran parte de los
traremos á la luz de la filosofía , y de la his mismos el uso completo de la razon , ni si
toría de la naturaleza , lo falso é infundado son muchos los que viven en tal estupidez
de dicha doctrina ; mas nó por esto nos es que no llegan jamas á disfrutarlo. Estas
dable poner en duda el hecho en que pre consideraciones son aplicables no solo por
tende apoyarse , á saber : el escasísimo de lo tocante á la falta del conocimiento de la
sarrollo que en aquellos desgraciados pue verdadera religion , sino tambien por lo
blos tiene la inteligencia, y la inmensa perteneciente á otras clases de pecados ;
distancia en que se halla el estado de su es porque es cierto que no puede cometerlo
píritu comparado al del nuestro. Cuando grave quien no tiene el correspondiente
toda la industria de algunos de ellos para uso de las facultades necesarias para deli
proporcionarse habitacion consiste en gua berar y consentir.
recerse debajo los árboles , doblando sus Ciñendonos empero al punto principal
ramas y fijándolas en el suelo ; cuando pa que consiste en la pena que pueda prove
ra procurarse alimento no alcanzan á mas nir de no profesar la religion verdadera ,
que á coger los frutos que espontáneamen claro es que tienen mas aplicacion las ob
te les ofrece la naturaleza , ó á tender em servaciones que se acaban de hacer ; dado
boscadas á los rinocerontes y elefantes, ma que es mas difícil que el hombre distinga
tándolos y haciendo secar su carne al sol , cuál es la verdadera religion , que no el co
á perseguir los avestruces, á recoger los nocer que es malo el robar, el matar, y el
enjambres de langostas arrojados por el cometer otros actos semejantes. De lo que
viento y á buscar los inmundos restos de inferiremos, que siendo tan escaso el de
los cocodrilos y caballos marinos; ¿cuál sarrollo de la inteligencia en los hombres
será el estado de su entendimiento con res de quienes estamos tratando, la infidelidad
pecto al orden intelectual y moral ? II puramente negativa y por consiguiente sin
 — llG —
culpa , tendrá lugar para gran número de mites á la omnipotencia de Dios , ni á su
ellos; y asi no hay motivo de achacarnos inagotable misericordia? ¿qué nos sabemos
que los condenamos siendo inocentes ; pues nosotros de la profundidad de sus insonda
que al contrario, somos los primeros en bles arcanos , y sobre los infinitos medios ,
afirmar que por este solo motivo, ni se que ocultos á nuestra vista , están patentes
condenan ni pueden condenarse. á sus ojos, para alcanzar objetos que en
Si se nos pregunta qué destino señalamos nuestra pequeñez consideramos inasequi
á aquellos hombres , la respuesta es muy bles? todos los teólogos están de acuerdo
sencilla. O llegaron al uso de la razon ó que un hombre que desee sinceramente re
nó; si no llegaron, están en el caso de los cibir el bautismo, puede salvarse y se salva
niños que mueren sin bautismo , de los en efecto , si mediando imposibilidad de ob
cuales afirmamos que no entrarán en el tener el objeto de su ardiente deseo, ofrece
reino de los cielos ; pero guardándonos de á Dios un corazon humillado y contrito.
establecer que por la simple culpa origi- Ahora bien ¿ qué derecho tenemos para ne-
ser
privados
nal ,entregados
únicadedeunque
ágran
eterno
están
bien,
infectos,
suplicio.
es decir
hayan
Estarán
de de
la |II ya
gar otorgado
que la infinita
este beneficio
misericordia
tal vez
de áDios ha-
número del que nosotros pensamos ? Estos
vision de Dios , pero hasta que punto les son secretos acerca de los cuales debemos
afligirá esta privacion , hasta qué punto se nosotros mantenernos en sobria y prudente
les hará sensible , cuál es la clase de vida reserva , sin arrojarnos á decir temeraria
que les está reservada á aquellas almas in mente en ningun sentido ; ya que el Señor
mortales , de qué manera existirán con sus no se ha dignado aclarárnoslos satisfacien
cuerpos por toda la eternidad , son cues do nuestra curiosidad. Comoquiera, bas
tiones que no resuelve el dogma católico , tante terribles son de suyo estos misterios;
sobre las cuales guarda la Iglesia un pru no procuremos aumentar el pavoroso hor
dente silencio, dejando libre campo a las ror que los circuye ; reconozcamos nuestra
opiniones y conjeturas. Si estos hombres ignorancia y flaqueza , y adoremos con hu
han alcanzado el uso de la razon , tal como mildad los designios del Altísimo.
se necesita para que sean capaces de ha Volviendo á la dificultad que á los cató
cerse reos de pecado grave á los ojos de licos se objeta, y reasumiendo en pocas
Dios; entonces, ó lo han cometido ó nó; si palabras lo dicho hasta aquí, establecere
lo primero, y continuan en la impenitencia mos algunos puntos de doctrina , que roga
hasta la muerte , por esto se condenarán , mos al lector no pierda nunca de vista,
y nó por haber dejado de profesar la reli siempre que se trate de esta grave é impor
gion verdadera , en el supuesto que no les tante materia.
haya sido dable el conocerla ; si no lo han 1.° Es falso que el dogma católico con
cometido, volvemos á un caso semejante dene á ningun inocente, por ningun título,
al anterior, solo que en este último supues por ningun motivo , bajo ningun pretexto.
to , por lo mismo de no obrar el mal , se Rechazamos como una calumníalo que nos
deja entender que de un modo ú otro el achacan nuestros enemigos , de que adora
individuo de que se trata practicará el mos á un Dios injusto y cruel. La justicia
bien, no omitiendo el cumplimiento de y la misericordia son atributos que recono
aquellos deberes cuya omision basta para cemos como inseparables de la idea de Dios;
constituir el mal. ¿Qué hará Dios con ese y que están manifestados de una manera
hombre? no lo sabemos á punto fijo. Es sublime en el augusto misterio de nuestra
conocido el célebre dicho de Santo Tomas redencion , donde un Dios con infinita mi
quien afirma que de un modo ú otro no sericordia muere para salvarnos, satisfa
dejaría Dios de iluminarle, aun cuando ciendo con su muerte á la infinita justicia.
fuera enviándole un ángel. Si esta ilumi 2.° Los infieles que no han tenido cono
nacion extraordinaria que expresa en gene cimiento de la Religion católica, no se con
ral el Santo Doctor por la mision de un denarán por el mero hecho de no haberla
ángel, se ha verificado pocas ó muchas profesado. Si cometen picados graves, por
veces, no es dado al mortal conocerlo: pe esto sufrirán el infierno , nó por la falta de
ro fuera tambien presuncion temeraria el una fe cuya existencia no hayan conocido.
decir que esto no se realiza nunca , ó que 3.° La infidelidad voluntaria es un peca
solo tiene lugar muy contadas veces. do gravísimo; pero está sujeto á las mis
¿ Quiénes somos nosotros para señalar lí- || mas condiciones generales de todos los de
miento,
>i deliberacion
decir que no
y consentimiento
existe sin conocí-
— 117| es —claro como la luz del dia que uno de
cion
que ypor arraigo
mas protestas
de tan funesto
que hayan
error ;hecho,
dado ||ellos
Porque
se ha
conviene
inclinado
no perder
excesivamente
de vista, áque
la
4.° La fe católica no determina á punto Gran Bretaña, mientras el otro ha mani
fijo , ni cuando llega para este ó aquel in festado demasiado sus simpatías en favor
dividuo el uso de la razon necesario para de la política francesa. Los términos que
cometer el pecado de infidelidad , ni señala empleamos son por cierto los mas comedi
con precision cuáles son las circunstancias dos que usarse pueden ; y hacémoslo de
en que el individuo ha de encontrarse para propósito , porque deseando esclarecer la
que pueda decirse que ha llegado el caso cuestion y no ensañar las pasiones, no
de hacerse reo del mismo. Estas son cues queremos , sea cual fuere nuestra opinion
tiones de moral práctica, agenasal dogma, sobre este asunto , echar en cara á ninguno
y susceptibles de varias modificaciones, por de los contendientes la dependencia , el
la misma variedad de las cosas. servilismo, el absoluto abandono del honor
5.° De lo dicho se infiere, que el dogma nacional, de que recíprocamente se acu
católico bien mirado , enseña una doctrina san. Y cuando esta conducta observamos,
que ningun hombre razonable puede dese no lo hacemos ciertamente para blasonar
char. No condena la infidelidad, sino cuan de una imparcialidad que tenga por objeto
do es voluntaria , y por consiguiente cul concillarse la benevolencia de ninguno de
pable; es decir que no aplica á este punto los adversarios; nuestras convicciones son
otro principio que el que tiene establecido conocidas; cuando se trata de decir la ver
en general, á saber, la responsabilidad que dad sabemos expresarnos sin rodeos , y de
el hombre por sus actos libres tiene á los cirla toda entera. Pero como en la materia
ojos de Dios. que nos ocupa , de la propia suerte que en
6.° Cuando no exista culpa en la infide tantas otras, nos parezca que ambos andu
lidad , por ser involuntaria , cuando por vieron desacertados , necesario se nos hace
otra parte el infiel no se haya hecho reo no ponernos del lado de ninguno de ellos.
de pecado grave á los ojos de Dios, enton La alianza con la Inglaterra está ya de
ces la fe católica no dice que el infiel será sacreditada hasta tal punto, y tiene en
entregado á las penas del infierno. De qué contra de sí tan fuerte antipatía en la in
manera obrará Dios en semejante caso, mensa mayoría de la nacion, que no es ne
permite que los teólogos lo conjeturen ; cesario esforzar mucho el discurso para
pero ella se abstiene de decirlo. convencer y persuadir, queá mas de inútil,
Meditad sobre esta doctrina , y ved si al- || nos es en extremo perjudicial y peligrosa.
encuentra en ella que no pueda su A excepcion de un número muy reducido
el exámen de la sana razon. — /. B. de hombres, que por tsus principios , ante
cedentes, ó particulares designios, mués-
transe decididos sostenedores de la influen
cia inglesa, la generalidad de España sin
ALIANZAS DE ESPAÑA. excepcion de ningun partido, se manifiesta
abiertamente contraria de toda alianza con
Inglaterra , y propende visiblemente á des
confiar de aquella potencia , aun cuando
no se mantengan con ella mas que las in
Artículo 1.° dispensables relaciones de buena armonía.
Y no es dificil descubrir la causa de seme
ALIANZA CON LA INGLATERRA. jante aversion , puesto que no es menester
un profundo conocimiento de la política y
de la diplomacia , para ver desde luego lo
que puede prometerse la Península de su
Se ha difundido i en España la intimidad con la Gran Bretaña.
dañosa persuasion de que Examinando la respectiva posicion delas
dos á tener alianza con la Francia ó con la dos naciones , échase de ver que no existe
Inglaterra. De los dos partidos que actual ningun vínculo que pueda mantenerlas
mente se disputan la arena , ninguno está unidas , y que todo cuanto en esta materia
exento de haber contribuido á la propaga se intentase , ha de ser por necesidad fac
ticio, y por consiguiente poco duradero.
la solidez y estabilidad de las alianzas no 118
márgenes
— del Guadalquivir y del Tajo.
depende de la voluntad de los gobiernos A pesar de tamaños inconvenientes, no
aliados; entran para mucho los pueblos, se podría llamar temeraria la tentativa de
y no es posible de ellos desentenderse , si acercar á las dos naciones, fomentando la
se ha de conseguir algo que ofrezca garan amistad y fraternidad entre los dos pue
tías de buenos resultados. blos, y preparando de esta suerte alianzas
Aplicando este principio á la alianza de sólidas y duraderas entre los dos gabinetes,
la España con la Inglaterra , notaremos á no mediar otras circunstancias que las
que no existe ninguna de las condiciones hacen de todo punto imposibles.
que en semejantes casos conducen á estre Nunca, durante la situacion actual de
char y fortificar los lazos que pudieran for de las dos naciones, podría ser la alianza
mar los gobiernos. de la España con la Inglaterra otra cosa
En primer lugar, los dos pueblos no que la sumision del gabinete de Madrid al
solo hablan idioma muy diferente, sino que gabinete de San James, que el sacrificio
tambien ha faltado entre ellos la comuni de nuestros intereses á los intereses de la
cacion precisa para difundir algun tanto la Gran Bretaña. Las compensaciones recí
¡Dteligencia de la lengua respectiva. Esto procas no serán otra cosa que velos mas ó
es no leve obstáculo para la buena amistad menos transparentes , para cubrir este sa
de pueblo á pueblo; obstáculo que no exis crificio de nuestro bienestar y prosperidad
te con la Francia por la propagacion de su á los intereses de la pretendida amiga.
idioma entre nosotros, originada de la me La razon de lo que se acaba de decir no
nor dificultad que de suyo presenta , de la es dificil de adivinar : existe una verdadera
mayor frecuencia de relaciones de unos oposicion de intereses entre las dos nacio
naturales con otros, y muy especialmente nes; el progreso de los unos será por nece
del predominio alcanzado en España por la sidad en menoscabo de los otros. No igno
literatura francesa desde que ocupara el ramos las hermosas utopias de la comunidad
trono la descendencia de Luis XIV. é identidad de intereses de todas las na
La religion profesada por los españoles ciones, nosotros sin negar que hay ciertos
es diferente de la que en Inglaterra do puntos generales en que efectivamente esta
mina ; mediando además la particular cir utilidad se enlaza y hermana, opinamos
cunstancia de las tradiciones poco favora que hay muchísimos otros en que se hallan
bles á la amistad que todavía conservan necesariamente encontrados; y por tanto
ambas naciones : no se han olvidado aun siendo indispensable la rivalidad, cada cual
los reinados de Felipe II , defensor acérri debe procurar sacar de su posicion el me
mo del catolicismo asi en España como en jor partido posible , promoviendo su con
el resto de Europa ; y el de Isabel , encar veniencia sin apartarse de la justicia. Tan
nizada perseguidora de la Religion Católica sencilla es la razon en que se funda la ver
en sus dominios , que afirmó además la dad de las observaciones que preceden ,
iglesia anglicana , y apoyó el potestantismo como lo es que están en oposicion los in
en los demás paises, cuanto le fué posible. tereses del vendedor y los del comprador ,
Las costumbres de las dos naciones no los de dos vendedores que concurren á un
tienen ningun punto de semejanza: al pi mismo mercado, los de dos aspirantes áun
sar el suelo de la Inglaterra, se conoce, se mismo empleo , los de dos ambiciones que
siente instintivamente esta diferencia pro tienen fija su mirada en un destino en que
funda. Como quiera que los dos pueblos ambas no pueden tener cabida á un mismo
han vivido en completo apartamiento el tiempo.
uno respecto del otro, no se encuentra La Inglaterra bajo el aspecto político y
ningun punto de contacto ni aproximacion; mercantil, está en oposicion con la España;
las leyes de los dos paises, el sistema de el aumento y desarrollo de los verdaderos
gobierno á que durante largo tiempo vivie intereses de la una , dañará por indeclina
ron sometidos, la ninguna analogía de su ble necesidad los de la otra. Dejemos apar
administracion, vienen á sancionar esta di te por un momento los mercantiles, por no
ferencia que otras causas de suyo harto repetir lo que mil y mil veces se ha dicho
poderosas tienen establecida , resultando ya , y miremos la cuestion bajo un punto
que asi se parecen en lo intelectual y en lo de vista de mayor extension y altura, y en
moral, ingleses y españoles, como las ne que no sea (íable sospechar interesad la
bulosas orillas del Támcsis á las
 — 119
(iran Bretaña que la nacion española se le de la influencia sobre un reino situado en
vante de la postracion en que yace , que posicion ventajosísima, para todas las ope
tome aliento y brio para ocupar de nue\o raciones políticas , militares y mercantiles
el rango que le corresponde entre las na que se intenten sobre el occidente de Eu
ciones europeas? ¿no es cierto, ciertísimo, ropa, Mediterráneo , y costas de Africa?
que nó ? Quien lo contrario pretenda , si de un reino , que entre los restos de su pa
quiere dar á su opinion tan solo un débil sada grandeza, conserva todavía grupos de
viso de probabilidad, necesario es que bor preciosas islas, muy bien situados para ser
re del mapa de la Península el importantí vir de escala en el tránsito de Europa á
simo punto de Gibraltar, en cuyas fortale América, al Africa y al Asia? ¿ qué será
zas ondea el pabellon británico; necesario tratándose de un punto como Gibraltar ,
es que haga desaparecer del mismo mapa llave del Mediterráneo , punto de apoyo
el v ecino reino de Portugal , casi reducido para operar sobre la Península , el Africa
á una simple colonia de Inglaterra, menes y el Atlántico? Nó; la astuta, la previsora
ter le será probar , que nada le importan á Inglaterra no es tan torpe, tan ciega, que
la Inglaterra tan preciosas joyas, ó que sus no vea lo que es mas claro que la luz del
hombres de estado serán tan imbéciles que dia ; á saber , que desde el instante que la
no prevean el peligro que las amenazaría, España volviese á su antiguo esplendor y
desde que la España recobrase su antigua poderío , desde el instante que el Leon de
pujanza ; menester le será probar que aun Castilla pudiese medir sus fuerzas con el
dado caso que no se hallara en la misma Leopardo britano, comenzaría la rivalidad,
situacion topográfica del pais, una razon siguiendo despues las hostilidades, hasta
poderosísima para formar de toda la Pe haber reconquistado lo que la naturaleza
nínsula una sola nacion , no es al menos la misma le está indicando como de su perte
influencia española la (pie por todos títulos nencia. Cuando lord Clarendon y sir Ro
debiera prevalecer en Portugal ; menester berto Peel , nos están halagando con sus
le será probar, que un reino que se sintie sentidas promesas del deseo que abrigan
se con fuerzas bastantes para arrostrar "e nuestra prosperidad , de nuestra dicha ,
grandes compromisos, no excogitaria todos de nuestra libertad é independencia ; re
los medios, no tantearía mil y mil combi flexionemos que los que hablan no son es
naciones, no emplearía cuantos recursos critores entusiastas , no son poetas de quie
tuviese á la mano, no andaría á caza de fa nes pueda suponerse (pie se mecen en
vorables coyunturas, para apoderarse nue doradas ilusiones, en sueños Cándidos y
vamente de Gibraltar, echando de la pro puros, en galanas utopias por el bien de la
pia casa ese centinela de vista. humanidad : reflexionemos que son hom
Aun cuando no mediaran otras causas bres de estado de la Gran Bretaña, encar
que engendrasen oposicion de intereses en gados de la defensa y fomento de los inte
tre ingleses y españoles, las indicadas fue reses de su pais , colocados á manera de
ran por cierto poderosas en demasía para atalayas para acechar cuanto puede favore
producirla fuerte , viva , intransigible. La cerle ó dañarle ; reflexionemos que son
historia y la experiencia enseñan de Con hombres que consagran su \ida entera á
suno, que motivos de muchísimo menos combinar, á negociar, á intrigar, á ma
valer ocasionan rivalidades inestinguibles, niobrar en pro de la prosperidad , de la
acarreando á menudo guerras sangrientas. grandeza , de la influencia y poderío de su
La posesion de una pequeñísima isla en lu patria ; fijemos entonces nuestras miradas
gares al parecer insignificantes , la demar sobre Portugal y Gibraltar , y de seguro
cacion mas ó menos escrupulosa de una (pie sin necesidad de otra consideracion, se
frontera, una fortaleza colocada en un disiparán en un momento las impresiones
punto de suyo poco influyente en las ope agradables, que causarnos pudieran las
raciones militares , un pedazo de tierra mas graves protestas, las mas ardientes
junto á una remotísima ensenada, el mayor expresiones de buen afecto y desinteresada
o menor ascendiente en los negocios del amistad.
gobierno de un pais situado á larguísima Si lo dicho hasta aquí basta y sobra para
distancia , y cien cien otras causas menos convencer de que la Inglaterra tiene un
poderosas , motivan los mayores esfuerzos interés poderoso en que la España no se le
de la diplomacia , y provocan estrepitosos vante del abatimiento en que yace, exis
* L rompimientos; ¿qué será pues tratándose ten todavía otras razones que llevan la ex-
presada verdad á una evidencia que no 120Imperio — celeste separados del resto del
consiente réplicas de ningun género. Hasta mundo durante treinta siglos, cayeron bajo
ahora nos hemos ceñido á considerar los los cañonazos de la armada inglesa; y los
intereses británicos y españoles , con rela mandarines que creyeran inexpugnables
cion á Europa ; pero extendiendo nuestras sus baluartes , viéronse obligados á pedir
miradas á la America y al Asia , encontra de rodillas la paz , y á pasar á bordo de las
remos no menos graves motivos de ince vencedoras naves , para firmar los tratados
sante rivalidad. que con altivo ademan les prescribiera el
¿Quién podrá persuadirse que sea con almirante.
veniente á la Inglaterra que la isla de Cuba El interes de la Gran Bretaña
esté bajo el dominio del gobierno español ? de tan señalado triunfo, consiste en
¿quién no ve que debe de encontrar en rar por todos los medios posibles esa nueva
esto un obstáculo, un estorbo, que de conquista , continuando las negociaciones ,
todos modos le importa remover ? Si no le y empleando de nuevo si menester fuere
es posible adquirir aquella preciosa colonia, las armas, para ir recabando cada dia con
por medio de negociaciones ó de un golpe cesiones mas ventajosas. Conviénele no de
de mano, ¿ nó seria para ella muy ven jar encomendado á la buena fe de los chi
tajosa la emancipacion , que produciendo nos el cumplimiento de los tratados; y asi
primero larga série de desastres y turbu es probable que discurrirá todos los medios
lencias, viniese á parar al fin á una inde imaginables para estar pronto á todo lina-
pendencia precaria, forzada á demandar ge de complicaciones que puedan ocurrir.
humildemente el acogerse á la sombra de Si bien para grangearse el renombre de
un alto protectorado ? no abriría de esta filantrópica, y adquirir el título que ambi
suerte la Inglaterra un nuevo desahogo ciona de protectora de la causa de la civili
para sus sobreabundantes productos? ¿ no zacion de la humanidad, aparenta procurar
mejoraría la situacion de sus colonias des que las ventajas que reporte se extiendan
truyendo la prosperidad de un rival temi tambien á los demas pueblos civilizados ,
ble? Las tentativas que se están haciendo esforzándose en acallar de esta suerte las
para arrebatarnos aquel inestimable tesoro, quejas y murmullos que de todas partes
los tenebrosos manejosque se emplean para se levantan contra su ambicion y codicia ;
provocar una insurreccion, cubriéndolos no dejará de cuidar que le quede la mayor
con el hermoso velo del amor de la huma parte del pingüe botin , y de vigilar caute
nidad , y aparentando un entusiasmo por losamente los pasos de cuantas naciones se
el bien, de sus semejantes que raya en la presenten en la nueva arena. El mismo
demencia , como hemos visto recientemen movimiento europeo que allá en Oriente
te en el ex-cónsul Turnbull , son la res se promoviere, no se olvidará de explotarlo
puesta mas decisiva que darse pueda á las en provecho de k los intereses propios; y
indicadas cuestiones; esto revela bien á mucho será si su diplomacia apoyada en
las claras, cuáles son en las Antillas los in las colosales posesiones de la India, y en
tereses de España y cuáles los de Ingla los ventajosos tratados de la China, no
terra. tiende á sus adversarios y rivales nuevas é
Volviendo al Oriente nuestros ojos , nos inextricables redes.
encontramos con el pabellon de la Gran En vista de esta posicion de la Gran
Bretaña flotando victorioso en los puertos Bretaña en los paises y mares de Oriente;
de la China, y descubrimos vivo movi ¿hállanse por ventura sus intereses herma
miento de sus diplomáticos y de sus emisa nados con los nuestros ? Aun cuando se su
rios, para aprovechar lo que tan felizmente ponga que no le conviene la posesion de
ha comenzado la suerte de las armas, y las islas Filipinas , y que prefiere dejarlas
explotar las riquezas de aquellos inmensos en nuestro poder á cargarse con los com
paises, cerrados hasta el presente á la am promisos de otra colonia, siempre es cierto
bicion y codicia de los europeos. Un ancho (lue no puede serle agradable que la na
porvenir extendiéndose en vasto horizonte cion que las posee , levante demasiado el
cuyos límites no alcanza la vista , se abre vuelo convirtiéndose en rival temible.
de par en pará la actividad, al febril ardor De la reseña que acabamos de presen
de esa gran nacion que no cabe en el tar , se deduce eon toda evidencia , que la
mundo. Las puertas de hierro que mantu Inglaterra tiene en todas partes sus intere
vieran á los innumerables habitantes del ses en oposicion con los nuestros ; resulta
 — 131 —
que es un absurdo el suponerle sinceros el logro del objeto ; pero cuando se trata
deseos de nuestra prosperidad , y que por del repartimiento de los beneficios obteni
tanto es preciso escuchar con la mayor dos, cábele al fuerte la parte principal
desconfianza sus protestas de amistad afec cuando nó la totalidad , por la sencilla y
tuosa, no hacer ningun caso de sus ardien convincente razon de que es fuerte. Por
tes votos por el fomento y desarrollo de mas que esto sea de una verdad incontes
nuestra riqueza , por el aumento de nues table, no se sigue que al débil le sea pro
tro bienestar, por el restablecimiento de vechoso el excitar contra si la animadver
nuestra independencia y poderío. En todas sion del fuerte ; la prudencia aconseja la
las alianzas que con ella hagamos, llevare línea de conducta que debe observarse ci
mos por necesidad la peor parte ; ella po frada en dos palabras: ni alianza ni ene
derosa se aprovechará de nuestra debilidad; mistad.
ella rica se aprovechará de nuestra pobre Basta tener una idea del inmenso pode
za ; ella codiciosa explotará nuestro suelo río de la Gran Bretaña para convencerse
todavía virgen ; ella previsora y astuta se de cuán imprudente fuera , ni provocar
aprovechará de nuestra imprevision; ella abiertamente su cólera con atrevidos des
activa se aprovechará de nuestra negligen manes, ni irritar su orgullo otorgando á
cia; ella interesada en nuestro abatimiento otra potencia cualquiera , no diremos deci
y postracion, procurará envolvernos mas y siva preponderancia , pero ni aun una pre
mas en la red que nos tiene tendida , y en dileccion demasiado marcada. La Inglaterra
la que están ya nuestros piés ; ella sagáz tiene á la mano muchos medios de dañar
conocedora de nuestro orgullo nacional, nos; y si bien estamos convencidos que en
disfrazará con brillantes y seductores velos todo evento los empleará porque asi cum
los progresos de su usurpacion, como el ple á sus intereses, opinamos no obstante
réptil que con mirada fascinadora va atra que no es poco lo que pueden contribuir la
yendo á su inflamada boca la cándida ave sagacidad y cordura del gobierno español,
cilla. en que ni se empleen en tanta abundancia
Cuando sostenemos los daños que nos esos medios , ni se active con tanto ahinco
traería toda alianza con la Inglaterra , y su eficacia. Desde el momento que el gabi
los peligros que consigo lleva su amistad nete de San James se convenza que el de
demasiado íntima , no es nuestro ánimo in las Tullerías predomina en el de Madrid,
ducir á que se ponga España en desacuer y que la política de Luis XIV se ha resta
do con aquella nacion, provocando su blecido abatiendo de nuevo los Pirineos,
enemistad y su odio. Muy al contrario, desde entonces será no solo nuestro rival,
creemos que semejante conducta seria im sino nuestro enemigo, tenaz, irreconcilia
prudente en extremo ; y hasta nos atreve ble : pues que su interes y hasta su honor
mos á indicar, que entre las faltas cometi no le permitirán contemplar sin indigna
das por el partido moderado en España, cion profunda un estado de cosas que tan
haya sido quizás una y no despreciable, el mal parados los dejara. En tal caso echaría
no observar con respecto á Inglaterra una mano de todos los medios imaginables para
conducta mas atinada y previsora. En efec perturbar nuestra tranquilidad en lo inte
to: si la amistad de aquella gran nacion no rior, para insurreccionar nuestras colonias,
nos es provechosa, tampoco nos es favora para destruir nuestra industria y comercio,
ble su enemistad , y asi fuera una impru apelando quizás á recursos que en las car
dencia en los hombres que dirigiesen los teras ministeriales deben de tener apunta
negocios del pais, el darle por causas livia dos sus hombres de estado , para sacarlos
nas , motivos de queja y descontento , y el á plaza en último extremo.
herir su susceptibilidad , inclinándose á fa ¿Qué interés podemos tener nosotros en
vor de otra nacion , que ella ha mirado prestarnos á servir de arena en la lucha de
siempre y mira todavía , cuando nó como dos poderosos rivales , en entregarnos co
enemiga, al menos como rival. mo un cordero á quien dos fieras que se
Al débil no le es regularmente muy pro disputaban la presa matan y descuartizan ?
vechosa la alianza con el fuerte, porque Si no nos conviene la alianza de la Ingla
acontece casi siempre lo que se significa en terra, ¿podrá sernos útil la de la Francia?
la famosa fábula que anda en boca de todo ¿será verdad que restableciendo la política
el mundo. Los escasos recursos de que el de Luis XIV, trabajemos por nuestra di
débil puede disponer , so aprovechan para cha, por nuestra prosperidad é indepen-
 — 122 —
riencia? ¿será verdad que ni en el estado abusa el su entendí -
pueda
normalsernos
ni en útil
situaciones
el constituirnos
extraordinarias,
en satéli miento , de de todas sus po
tencias y facultades, de sus sentidos, de su
tes de la política francesa? mucho lo duda cuerpo, de su fortuna, de su reputacion,
mos; ó mejor diremos, opinamos en sen de sus relaciones, de todo cuanto le rodea:
tido muy diverso. Creemos que por muchas porque no hay mal que no se consume
razones le importa á la España el no vivir abusando del bien : hasta el blandir aleve
en amistad demasiado íntima y exclusiva acero que desgarra un pecho inocente , es
con la Francia ; creemos que lejos de ser un abuso de la mano y de un metal ; ins
nos provechosa esta línea de conducta po trumentos preciosos que nos ha concedido
dría acarrearnos perjuicios de mucha cuen el Criador para labrar nuestra dicha.
ta ; y que fuera lo mas á propósito para Si bien se observa , la prensa no es mas
empeñarnos en una nueva serie de calami que una manera de hablar : es una especie
tosas consecuencias. Hemos manifestado de lengua que solo se diferencia de la co
nuestro pensamiento sobre la alianza ingle mun, en que suena mas alto, se hace oir
sa, y por cierto que no la hemos favoreci con mas rapidez y universalidad , y deja
do; pero debemos añadir, que poco falta consignado é indeleble para mucho tiem
si con igual aversion no miramos la france po, todo lo que dice. Es una perfeccion
sa. Tambien de esta opinamos , que bienes del órgano que nos ha dado la naturaleza;
no puede traérnoslos; males sí, y de mu es un suplemento á su debilidad , á su po
cha gravedad. El examen de la respectiva co alcance, á la breve duracion de sus so
situacion de las dos naciones , y los escar nidos; como lo es tambien la escritura,
mientos de la historia y de la experiencia como lo son todos los signos de que el
vendrán en confirmacion de lo que acaba hombre se ha valido para extender y con
mos de decir. servar su palabra ; no siendo otra cosa que
La demasiada extension que va tomando el mas perfecto entre estos signos , una
este artículo nos impide desenvolver estas manera mas perfecta de escribir y por tan
indicaciones en el presente número; haré- to de hablar. La imprenta es á la escritura
moslo en uno de los inmediatos , con la lo que son al dibujo el arte daguerreotípi-
extension y detenimiento que reclama la co, y todos los demás que tienen por ob
importancia de la materia.—J. B. jeto trasladar de un golpe al lienzo, al
papel ú otra tabla cualquiera, lo que la
mano del dibujante no ]
con mucha lentitud, y
partes.
Con estas observaciones se deja en claro
el mérito que encierran las declamaciones
que en pro y en contra de la prensa se es
La prensa comenzó dando á luz la Biblia, tán oyendo todos los dias : es un hecho co
y ha descendido hasta el lenguaje de las mo los demás que existen en el mundo; es
verduleras; como la música, la poesía, la un bien cuyo abuso constituye un mal ; si
pintura nacieron en los templos, y han ba por esta razon se intenta condenarla , con
jado hasta los burdeles y tabernas. Pero dénense la pintura, la escultura, la poesía,
de la propia suerte que los poetas ramplo la música; condénense todas las ciencias,
nes no desacreditan á Homero , Virgilio y todas las artes ; condénense el cuerpo del
Tasso , que las sonatas de un mal instru hombre , sus sentidos, su voluntad, su en
mento nada quitan á los acentos de Rossini tendimiento , su espíritu inmortal ; condé
y de Mozart, y los prodigios de Miguel nese todo cuanto hay mas respetable , mas
Angelo y de Rafael , nada pierden de su santo , mas augusto sobre la tierra ; pues
mérito sublime por existir mamarrachos que desgraciadamente el hombre de todo
en patios y esquinas ; tampoco debe caer abusa. Se habla de inconvenientes ; ¿y dón
en desprecio la prensa porque algunos la de no existen ? se lamentan los males ;
hayan desacreditado por sus desmanes y ¿ cuántas cosas hay que no los acarreen di
excesos. El abuso y el uso son cosas que no recta ó indirectamente , cuando no sea por
deben confundirse jamás ; si para destruir otra causa, por la manera con que de ellas
aquel se debiera prohibir este, apenas nos valemos? El lenguaje cuyo auxiliar es
nada sobre la tierra. ¿ De qué no la prensa , á la par de sus 1
 ¿no los produce tambien malos, y de — tras 123apreciar
— con mas pulso , con mas pruden
cendencia incalculable? ¿ han podido olvi cia , los efectos buenos y malos de la pren
darse los proverbios en que la sabiduría de sa ; no cabe mas moderacion en distinguir
la experiencia ha compendiado el bien y el el abuso del uso , y en reconocer en el des
mal que hace la lengua, segun el modo cubrimiento un gran beneficio de la Provi
con que la empleamos? dencia , á pesar de la manera dañosa con
Se habla mucho de esta lepra de las socie que de él se serv ia la malicia de algunos
dades modernas, de ese elemento disolvente, hombres.
usándose á cada paso expresiones semejan Recordamos con mucho placer las gra
tes. Reconocemos como el que mas, los ves sentencias de aquel Sumo Pontífice,
daños acarreados á las sociedades moder para que se vea que la cuestion de la pren
nas por ese instrumento terrible, por ese sa es ya muy antigua , para hacer notar
formidable agente, órgano del entendi que lo que han dicho posteriormente de
miento, é imagen de su inmensa actividad, mas grave y juicioso, los publicistas y le
de su fuerza espansiva , de su increible ra gisladores , lo habia compendiado en pocas
pidez; pero tampoco podemos echar en palabras mucho antes que ellos un Papa,
olvido los bienes de que le son deudoras y al mismo tiempo para evidenciar cuánta
las ciencias , las artes , la sociedad , la reli prudencia, cuánta prevision manifestaron
gion misma. Así miramos como un singu en este negocio los Romanos Pontífices. Es
lar favor del Cielo la sublime inspiracion por cierto muy curioso é interesante, el
que tantos beneficios nos trajera ; estando ver ahora como luchan con la agobiadora
de acuerdo sobre este particular con el dificultad los mismos que mirarán tal vez
gran Papa Leon X en el concilio de Letran como horrendos atentados contra la libertad hu
celebrado en 1515, cuando proponiéndose mana, las providencias de los Papas en que
remediar y precaver los males acarreados se procuraba contener el abuso de esta ar
por la prensa ya en aquella sazon, tributa ma terrible, poniéndole algunas limitacio
ba no obstante los mayores elogios al su nes , para que no se atacase la fe , no cor
blime descubrimiento , mirándole como un rompiese las costumbres, y respetase el de
favor particular del cielo : « ais imprimendi coro de las personas constituidas en digitidad.
lihros, temporibus polissimum nostris divino Ya en aquellos tiempos el mal era mucho
(avente numine, inventa, sen ancla el peipolita, y el peligro mayor; ya desde entonces la
plurima inortidibus aüulerit comnwda etc. Es cátedra de San Pedro , depositaría de la
notable que ya en aquella época, aunantes verdad , y vigilante atalaya de los inas sa
de la aparicion del protestantismo, y cuan grados intereses de las naciones, las amo
do el arte de imprimir estaba todavía tan nestaba de los riesgos que consigo traería
próximo á su cuna, se cometían notables y esta invencion en los siglos futuros. (1)
numerosos excosos, que la autoridad apos
tólica se ve precisada á reprimir. En di
versas partes se publicaban libros en idioma (1) Hemos prrseutado ya las sentencias del
latino y vulgar ; ga originales , ga traducidos citado Papa ; pero deseosos que los lectores se for
del griego , del hebreo , del arábigo, del caldeo, men clara idea dela prudencia , moderacion y pre
en los que se propagaban errores y perniciosos vision que encierra' elsu indicado documente
preámbulo.
dogmas , contrarios á la Religíim Cristiana ; y
lo que es todavía mas particular , se dirigían LEO X. IN CONCILIO LATERANENSI.
alai/ues contra las personas aun las mas conde Inter sollicitudines nostris humeris incumben-
coradas por su elevada dignidad; resultando de tes , perpeti cura rcvolvimus, ut errantes iu >iam
esto grandes errores en la fe , y en la vida y veritatis reducere , ipsosque lucri facere Dco, ( sua
originátulose repelidos escándalos, nobis cooperante gratia ) veleamus; hoc est quod
profectó desideranter exquirimus, ad id nostnc
i gravedad ensenaba ga la experiencia , y mentís sedulo destiuamus aflectuin, ac enVa illud
temiéndose para en adelante otros mayores. Ya studiosa diligencia vigilamus. Sané licel liltera-
entonces se recelaba que una invctwion salu rum peritia per librorum lectionem possit faeiliter
(d>lineri, ac ars imprimendi libros, temporibus
dable, destituida á la gloria de Dios, al robus potissimum nostris , divino favente numine, in
tecimiento de la fe , y á la propagacion de las venta seu aueta etperpolita, plurima morlalibus
buenas artes, tío sirviese para todo lo contrario, aüulerit commoda , cum parva impensa copia li
brorum máxima habealur , quibus ingenia ad lit-
daiiando á la salud de los fieles , haciendo cre terarum studia percommodi exerceri, el viri eru-
cer espinas junto con las semillas buenas, y Uiti in omni linguarum genere, prasserlirn autem
con la medicina. No cabe calholici, quibus f
 La accion de la imprenta se ha extendi
do á todos los órdenes , ha obrado en los
sentidos mas diferentes , no siendo posible
señalar ninguna institucion sobre la cual
no haya ejercido notable influencia. La re
ligion , la sociedad , la política , las cien
cias, la literatura, las bellas artes, todo se
ha resentido de la portentosa invencion;
todo tiene mucho que agradecerle, y no
poco de (pie acusarla. Mas por lo mismo
que la accion del nuevo agente era tan
universal y eficaz , que necesario es resig
narse á encontrar el bien al lado del mal:
el mismo sol que alumbra, fecunda y em
bellece la tierra , agosta con sus ardores las
campiñas, corrompe las lagunas, y levan
tando exhalaciones pestilentes, siembra la
desolacion y la muerte por extendidas co
marcas.
Mucho tiene que lamentarse' la religion,
pero en cambio, no poco de que alegrarse;
pues si bien es verdad que la imprenta ha
servido para difundir los errores, y prepa
rar esa era de incredulidad y escepticismo
que nosotros alcanzamos; tambien lo es,
que la ciencia religiosa se ha levantado á
un punto á que de otra manera le fuera
difícil llegar; y tpie la misma contradiccion
que ha sufrido la fe católica, ha hecho que
se demostrase la solidez de sus fundamen
tos con una evidencia , con un caudal de
erudicion y de saber , que sin el poderoso
vehículo de la imprenta quizás no se hu
biera logrado. Sin este auxiliar, ¿cómo
abundare affeetamus , farilií evadere posmnt , qui
etiam infideles .iriant el vnleant sacris institutis
inslruere , fideliumque eollegio , per dortrinam
christiana fidei salubriter aggregare : guia tamen
nuiltorum (inercia nostruin et sedis apostolica;
pulsavit audilimi , quo(l noinmlli luijus artis im-
primendi magistri , in diversis mundi partibus,
libros, tam Gra?ca, Hebraica1, Arabica' et Caldea?,
linguarum in latinum translatos, quam alios lati
no, ac vulgari sermone editos, errores etiam in
fide, ac perniciosa dogmata, etiam Religioni Chris-
tiana; contraria ,au! contra forman personarían ,
etiam dignilate fidgentium continentes , imprime
re, ac publicé, vendere pnesumunl, ex quorum
lectura non solum legentes non ediiieantur , sed
in mavimos potius tam in fide, guamin vata el
moribus prolabuntur errores , unde varia saspe
scandala I prout experientia rcrum magistra do-
ruit) exorta fuerunt et majara indies e.mriri for-
midantur. Nos itaque , ne id , quod ad Dei glo-
riam et fidei argumentum , ac bonarum artium
propagatiouem , salubriter cst inventum , in con-
trarium convertatur, ac Christifidelium saluti de-
trimentum parial, super librorum impressione
curam nostram habendam fore duximus , ne de
caitero cum bonis seminibus spiiia! coalescant vcl
mediciuis Tenena intermisceantur.
seria posible que disfrutásemos de esa mu
chedumbre de ediciones de la Biblia, he
breas, caldaicas, siríacas, griegas, y en
tantos otros idiomas? ¿cómo seria dable
que los sabios tuvieseri á la mano aquellos
riquísimos depósitos , que todos contribu
yen á manifestar la verdad de nuestra san
ta religion , su augusta antigüedad , y los
demás títulos que la acreditan de divina ?
¿y las innumerables paráfrasis, y las in
terpretaciones, y los comentarios, y tantos
trabajos como se han hecho sobre el Sagra
do Texto por los Santos Padres y Doctores
eclesiásticos, ¿cómo se hubieran podido
generalizar, y muchos de ellos, ni tal vez
conservar , sin el socorro de la imprenta?
¿y qué diremos de las ediciones de los con
cilios, de las obras delos Santos Padres, de
las decisiones pontificias, de los escritos de
los teólogos y canonistas, de los apologistas
de la religion que la han defendido á la luz
de las tradiciones , de la crítica , de la his
toria , de la cronología , de la filosofía , de
las ciencias naturales y exactas , que han
interrogado la inmensidad del cielo , han
preguntado á las entrañas de la tierra , han
sondeadolosmisterios de la metafísica, han
penetrado en la noche de los tiempos , han
evocado los antiguos pueblos, con sus le
gisladores, sus sabios, sus sacerdotes, y
ora recogiendo la preciosa verdad , ora se
ñalando la negrura del error , se han apro
vechado de todo para defender la augusta
religion del Crucificado, y desbaratar á sus
obstinados enemigos? Reflexionemos que
si la imprenta ha sido arma terrible cuando
la ha manejado el genio del mal , tambien
ha sido un beneficio inestimable en manos
de la Providencia. ¿Quién es capaz de cal
cular el daño acarreado por la propagacion
de los malos libros? ¿pero quién calculará
tampoco el bien producido por los buenos?
Extendiéronse las obras de Lutero, de Cal-
vino , de Melancton , de Teodo , de Beza,
de Ecolampadio , de Jurieu , pero á su vez
se difundieron de la propia suerte las de
los antiguos padres, las de Santo Tomas de
Aquino , de Melchor Cano , de Belarmino,
de Suarez , de Petavio , de Natal Alejan
dro, de Bossuet, y otros innumerables con
cuyos nombres se honra la causa de la ver
dad. En tiempos mas cercanos se han he
cho numerosas ediciones de las obras de
Voltaire y de los filósofos de su escuela;
pero ¿son pocas acaso las que se han pu
blicado tambien de los apologistas católi
cos ? Voltaire se propuso mostrar el cristia
 — 12o —
nismo como cosa oespreciable , ridicula, su falta de noticias , tal vez no tienen de él
enemiga de la ciencia , de las bellas artes, otro conocimiento que el haber oidohablar
é inconciliable con todo adelanto social; de no sé qué doctrinas sobre la potestad
Chateaubriand acometió la noble empresa temporal de los Papas. Si recordais el nom
de manifestar todo lo contrario; demos bre de Santo Tomas de Aquino , notareis
trando que la religion de Jesucristo está en desde luego que no lo reputan por bueno
inefable armonía con todo cuanto hay de para otra cosa que para alimentar la cu
grande, de sublime, de bello, de tierno; y riosidad de los escolásticos; y si citais al
preguntaremos nosotros; ¿qué obras se gun Santo Padre , conocereis que sin haber
han difundido mas ; las del filósofo de Fer- visto nunca sus obras, las miran tomo an
ney, ó las del Cantor de los Mártires? tiguallas , solo respetables por el tiempo
¿cuáles se han traducido á mayor número que sobre las mismas ha transcurrido. Asi,
de lenguas? en igual tiempo, ¿de cuáles imaginándose que los católicos viven en es
se han tirado y expendido mayor número trechísima esfera donde no se respira otro
de ejemplares ? esto lo saben los versados aire que el de los seminarios conciliares ó
en la bibliografía ; pero hasta cierto punto de los claustros, paréceles inconcebible que
no puede ignorarlo quien alcance siquiera haya todavía hombres ilustrados, que sos
á leer. Entrad en un gabinete, ora perte tengan ó aparenten sostener doctrinas que
nezca á un sabio , ora á una persona me caducaron para no rejuvenecer jamas.
dianamente instruida; recorred los estantes A los ojos de estos hombres, verdadera
de sus libros ; pocas veces encontraréis á mente preocupados por la impiedad, y
Voltaire, casi siempre á Chateaubriand. dignos de lástima por su ceguera, la im
Los que han dicho que la imprenta ha prenta fué la muerte de la Religion Católi
bia sido un golpe de muerte para la causa ca, y es en la actualidad y será en adelan
de la supersticion y del fanatismo , es decir te la mas segura garantía de que no podrá
segun ellos , para la causa de la Religion resucitar. Lejos de participar de semejan
Católica , se han mostrado bien poco cono tes temores, abrigamos la firme conviccion
cedores de la historia científica y literaria de que la misma imprenta será uno de los
de Europa desde la invencion de Guttem- medios de que Dios se servirá para hacer
berg. Sucédeles á no pocos de los adversa triunfar la religion verdadera , haciéndola
rios de la religion , que habiéndose forma reconquistar el terreno perdido; espera
do en un pequeño círculo de hombres y de mos, que asi como la Providencia ha he
libros, se imaginan que no existe otro cho ya que por este vehículo se esclare
mundo que aquel donde han vivido; ma ciesen admirablemente las mas profundas
nifestando á menudo tan crasa ignorancia cuestiones, y se diese solucion cabal á las
de lo que ha pasado y está pasando toda dificultades con que los enemigos de la re
vía fuera de los estrechos límites de la re ligion se proponían abrumarla, asi tambien
ligion en que se han encerrado , que bien hará en adelante , que en la profusion con
han menester la tolerancia de otros que han que se derraman los libros de todas clases ,
alcanzado mayor extension de noticias, y prevalezcan en número y en atractivo , los
mas elevacion de ideas. No les hableis á esos útiles y los saludables; y pues que atendi
hombres de tal ó cual ilustre apologista de do el curso ordinario de las cosas, no es
la religion , no les menteis los trabajos que dable impedir la circulacion del veneno ,
se están haciendo en este ó aquel sentido ; al menos se propinará en abundante canti
nada saben de cuanto les decís; paréceles dad el preservativo , con las sanas doctri
fallada
se
bienocupen
extraño
sin apelacion.
en que
defender
haya
Saben
una
todavía
elcausa
nombre
necios
quede
creian
Bos-
que |]., nes que forman el verdadero alimento de
los espíritus. No , nos asusta ese prodigioso
movimiento que en las sociedades moder
suet, pero quizás nunca abrieron sus obras; nas se despliega , y que se hace sentir par
conócenle porque han visto acá y acullá ticularmente en las producciones de la pren
que se habla del ilustre obispo de Meaux , sa; no nos asusta el ver sustituido ála fuerza
porque han oido apellidar su escuela , ó del hombre el vapor dando impulso al ad
porque en las obras de literatura le han mirable mecanismo que con rapidez instan
hallado en el catálogo de los oradores emi tánea lanza y fija sobre el papel las concep
nentes. ¿ Pronunciais el nombre de Belar- ciones del humano entendimiento, multi
mino? quizás ignoran hasta la existencia plicándolas en escasísimo tiempo de una
del insigne cardenal ; ó si á tanto no llega manera asombrosa ; aquellas máquinas que
 — 12G
estampan del mismo modo las revelaciones po que nosotros alcanzamos ; y por lo to
hechas por Dios al hombre , conservan las cante á los peligros del porvenir , dejemos
augustas tradiciones de los tiempos primi al Todopoderoso el cuidado de conservar
tivos, consignan los descubrimientos que su obra. ¿Dónde estábamos nosotros cuan
la historia y la filosofía están haciendo en do establecía los fundamentos de la tierra ,
pro de la causa de la verdad, reproducen cuando señalaba suslímites al mar, cuando
en abundancia los libros de educacion donde extendía el cielo como un magníficopabellon,
encuentra la niñez sanos principios que le y alumbraba la inmensidad del firmamento
enseñan la verdadera ley , la purísima mo con torrentes de luz salidos de la nada al
ral de Jesucristo , y cien y cien otros es imperio de su voz?
critos que bajo diferentes formas , en dis La Religion Católica no ha menester en
tintos aspectos , en variados estilos , en to volverse en tinieblas para conservar el le
das las lenguas , cuentan como los cielos gítimo ascendiente que le aseguran los tí
la gloria del Señor, y anuncian como el tulos celestiales que puede presentar ; ja
firmamento las obras de sus manos. mas ha esquivado la discusion , antes al
Es indigno de espíritus católicos el asus contrario , se ha esforzado en promoverla
tarse á la vista de semejante movimiento , por cuantos medios han estado á su alcan-
y el abrigar desmedidos temores con res ze. Siglos antes que apareciese la imprenta
pecto á las consecuencias de tan sorpren se habian escrito ya innumerables volúme
dente desarrollo : ya sabemos que la Igle nes sobre todos los puntosde la religion, y
sia Católica ha de durar hasta la consuma sobre los fundamentos en que estriba ; pe
cion de los siglos, que contra ella no pre ro menester es confesar que sin este des
valecerán las puertas del infierno , que asi cubrimiento no hubieran logrado los escri
lo tenemos prometido por aquel cuya pa tos antiguos la asombrosa propagacion que
labra no pasa sin cumplimiento , y que los obtienen ahora , ni habría sido dable tam
hechos han de venir á confirmar y demos poco multiplicar de la manera que se ha
trar verdadera , no podemos dudar ni un hecho en los tiempos modernos , las obras
momento de que tiene preparados los re de historia eclesiástica, de controversia
medios oportunos para curar el mal que dogmática , de teología escolástica , de crí
originarse pueda en circunstancias nuevas, tica, de filosofía, de ciencias naturales y
ni debemos desfallecer á la vista de los pe exactas, formando ese admirable conjunto
ligros, por mas insuperables que se ofrez de erudicion y sabiduría que nos han le
can á nuestra pequenez y debilidad. gado tantos insignes escritores , y del cual
Cuando el Divino Fundador de nuestra brota un raudal de vivísima luz , bastante
religion envió á los apóstoles á predicar el á convencer á todo hombre sensato de que
Evangelio por todo el Universo , no igno la Religion Católica es la única verdadera.
raba las revoluciones y mudanzas de que En todas épocas , y particularmente des
el mundo habia de ser teatro. Patente es pues de la invencion de la imprenta , se ha
taba á sus ojos cuanto habia de suceder en podido notar cuan diferente es la Religion
los siglos venideros; y veta ya el momento do de yJesucristo,
existen todavía,
de las demas
En estas,
quelahan
discusion
existí-
en que surgiera de la cabeza de Guttem-
berg la sublime invencion , y veia el pro religiosa no ha tenido jamas un desarrollo
fundo cambio que esto habia de producir, considerable. Obscuras en su origen , enig
el irresistible impulso que con esto habian máticas en sus expresiones , tortuosas en
de adquirir las ideas, y los abusos á que se su conducta , tiránicas en su gobierno , han
habian de arrojar la volúbilidad, laflaquezay tendido su férrea mano sobre la miserable
el orgullo del espíritu del hombre; veia los humanidad , condenándola á vivir en el
peligros que la fe estaba destinada á correr ilotismo, ó cegándola y corrompiéndola
en tantos entendimientos , y los naufragios con dar rienda suelta á las pasiones mas
que en muchos sufriría , y las pérdidas que vergonzosas. La luz era para ellas temible,
esto debia acarrear á su religion sacrosan porque obraba mal; y asi procuraban des
ta ; veia todo esto , y sin embargo dijo : Tú terrarla del espíritu de sus prosélitos, in
eres Pedro , y sobre esta piedra edificaré mi clinando al goce los corazones, y pegando
Iglesia , y las puertas del Infierno no prevale al polvo las frentes que debieran mirar al
cerán contra ella. Admiremos pues con hu Cielo. Muy al contrario nuestra augusta
milde reconocimiento su inefable dignacion religion : sin admitir el desatentado y fu
en salvar la combatida nave, hasta el tiem nesto principio de exámen , tal como lo en
 — 12
tienden los protestantes , pues que no le de buena fe , cuando el espíritu está guia
era posible sin negarse á sí misma faltando do por intenciones rectas y un sincero amor
á la institucion del Divino Fundador , ha á la verdad ; asi ha procedido siempre la
procurado no obstante que no cesase nun Iglesia Católica, y los que la han achacado
ca la discusion sobre las materias mas gra otra conducta , ó ignoraron su histeria, ó
ves, fomentando ella misma la fundacion y la calumniaron á sabiendas.
progresos de aquellos establecimientos , cu Uno de los mas notables efectos produ
yo objeto era la conservacion y el lustre de cidos en la sociedad por la imprenta , es el
losLejos
estudios
puesreligiosos.
de que sea justo decir que la haber dado al pensamiento una fuerza é
influjo , mucho mayores de los que disfru
imprenta ha sido para el catolicismo un tara en las épocas precedentes, ni era po
golpe de muerte por haber promovido con sible que disfrutase. En efecto, si bien es
mayor extension las controversias sobre las verdad que la inteligencia , como la prime
cuestiones mas importantes, puede afir ra facultad del hombre , ha ejercido siem
marse con el testimonio de los hechos, que pre sobre la sociedad una accion muy po
ese nuevo medio de propagacion secunda derosa, tambien es cierto que habia me
ba los designios de la Iglesia Católica ; sin nester vincularse con algunos intereses é
que valga lo que en contrario pudiera ale instituciones, para que pudiera producir
garse , fundándose en el lamentable abuso resultados de alguna trascendencia. Esto
que de él han hecho y hacen todavía , las último se verifica tambien ahora , pues que
falsas sectas, la incredudidad y las pasiones tambien ahora como antes las ideas nece
bastardas. Ya hemos visto cuán atinada sitan hacerse por decirlo asi palpables, y
mente se expresaba sobre este asunto el personificarse de suerte que la sociedad vea
Papa Leon X , al propio tiempo que se pro en ellas alguna cosa mas que la mera en
ponía reprimir los que ya en aquella época señanza de una escuela. Pero no puede ne
se introducían. Examínense las palabras del garse que con la imprenta han adquirido
citado Papa , y se echará de ver que no las ideas un conducto de expresion , por el
encierran vanas protestas contra los ade cual se ponen desde luego en contacto con
lantos del siglo, que la Cátedra de San Pe todas las pasiones é intereses que tengan
dro no forceja como le achacan sus calum con ellas alguna simpatía, y por tanto lle
niadores para detener el curso de la civili gan con mucha mas facilidad á formar un
zacion , que no se empeña en hacer que la cuerpo que las adopta como propias , que
humanidad vuelva atras , que no anatema- se constituye su representante , que les sir
temiza la obra del genio, ni condena las ve de brazo para obrar sobre la sociedad
nuevas alas que acaba de alcanzar la inte saliendo de los límites de meras teorías , y
ligencia. Se propone, sí, refrenar los ex que trabaja para afirmar y extender ins
cesos, precaver los grandes males que tituciones á propósito para realizarlas y es
amenazan á la religion y á la sociedad si no cudarlas .
se acude á tiempo, pero no confunde el uso De aqui ha resultado esa fuerza terrible
con el abuso , no desecha el bien por el so que en nuestro tiempo han adquirido las
lo peligro del mal, procura evitar este sin ideas, y el notable efecto quetodas produ
destruir aquel , y reconoce de la manera cen , aun cuando pertenezcan á aquel nú
mas clara y terminante que la invencion mero , que faltas de principios de vida es
de la imprenta ha sido un favor particular tán destinadas á pasar como ligera exhalacion
del Cielo, divino faventenumine; que de ella que brilla y desaparece. Asi tienen las so
pueden los hombres reportar grandes be ciedades modernas un nuevo poder que se
neficios, principalmente los sabios católicos combina con los demas , y que obra mas ó
de los cuales abunda la Iglesia Romana , menos á las claras, pero siempre con gran
et viri erudili in omni linguarumgenere , pra¡- de eficacia.
tertim aulem calholici quibus Sanctam Roma- Ni se crea que en aquellos paises donde
nam Ecclesiam abundare aflectamus, facüéeva- se ejerce una estricta vigilancia sobre la
dere possunt, que este descubrimiento habia imprenta, deje este de influir sobre las ideas
sido para la gloria de Dios , apoyo de la fe y hasta sobre el curso de los negocios. Su
y propagacion de las buenas artes, quod ad accion será oculta , lenta, indirecta ; habrá
Dei ghríam et fidei argumenlum ac bonarum menester mas tiempo para consumar sus
artium propagationcm salubriter est inventum. obras , pero nó por esto será menos real y
De esta suerte se habla cuando se procede efectiva. Algunas veces, cuando se extra
 — 128 —
vie de su legítimo objeto , el daño que le consignado el efecto que de todos modos
causen las trabas que lleve en su ejercicio, produce , y manifestar de esta manera la
lo compensará con los engañosos velos de pujanza que con ella ha conquistado el pen
que sabrá cubrirse , atrayéndose mas par samiento.
tidarios por lo mismo que en misteriosa re La opinion pública es una palabra de que
serva se ostentará como víctima de la per se abusa lastimosamente , sobre todo en
secucion, por haberse constituido defenso tiempo de revoluciones, haciéndola muchas
ra de la causa de la humanidad. veces consistir en la opinion de unos pocos,
En Francia, durante el siglo ivm, es que por engaño, pasiones ó intereses, sos
tuvo la imprenta sujeta á la censura ; y sin tienen doctrinas y sistemas que están en
embargo difícil fuera señalar una época en abierta oposicion con el pensamiento y el
que su accion hubiese sido mas terrible. deseo de la inmensa generalidad de aque
¿Qué importaban las prohibiciones de im llos cuyo nombre se usurpa. Pero no pue
primir ciertas obras, si por lo mismo que de negarse que en la realidad existe una
eran prohibidas se propagaban con mas verdadera opinion pública , y que no im
abundancia, y se leian con mayor avidez? pidiéndoselo la violencia , se da á conocer
Al estallar la revolucion de 1789, se pro tan á las claras, que tomándose para ob
clamó la libertad de la prensa ; pero los servarla el tiempo conveniente, no se la
miembros de la Asamblea constituyente no puede equivocar con la gritería y el ruido
habian por cierto necesitado esta libertad de las facciones y de los bandos. Entende
para adquirir aquel caudal de ideas sub mos por opinion pública la de la mayoría
versivas con las cuales destruyeron un tro de los hombres juiciosos ; y que ademas
no , derribaron todas las instituciones anti sean inteligentes en la materia sobre la que
guas, é inauguraron la nueva época que se deba formarla. Con la imprenta , al par
nosotros estamos presenciando. que se han facilitado medios de fingir la
En España , en el último tercio del siglo existencia de esta opinion , tambien se le
pasado , la imprenta estaba sometida tam han proporcionado conductos para mos
bien á vigilante censura , y esto no impidió trarse tal cual es , de manera que alcancen
que se nos inoculasen las ideas circulantes á encontrarla los hombres que la buscan
allende el Pirineo , que llegasen hasta las con sinceridad y buena fe.
gradas del trono , cerrasen sus avenidas á De aqui ha resultado que la intervencion
los acentos de la verdad , y preparasen las de la sociedad en los negocios que la inte
trabajosas agitaciones de que es víctima la resan , se ha hecho mas continua y eficaz ;
generacion actual. En tiempo de lo que se porque teniendo á la mano un órgano tan
llama la ominosa drcada, tambien es de no expedito para expresarse, le ha sido mas
tar el profundo cambio que en silencio se fácil ejercer su accion directa ó indirecta
verificaba , por medio de la lectura pública mente, segun las circunstancias del pais y
ó clandestina de libros nacionales y extran- las formas políticas establecidas en él. Aun
geros. En confirmacion de este aserto véa cuando no se suponga la imprenta libre ,
se lo que sucedió á la muerte de Fernando ; circulan siempre una muchedumbre de es
muchos de los antiguos adversarios de las critos en los cuales se manifiesta cual es la
ideas reinantes ó habian fallecido , ó co opinion pública sobre los mas graves nego
mían el pan de la emigracion en paises ex cios ; y ora se publiquen con permision del
traños ; esto no embargante, se hallaron gobierno, ora salgan á luz á pesar de sus
imbuidos en los nuevos sistemas, una mu prohibiciones, ponen en discusion el asun
chedumbre de jóvenes que no habian podi to deque se trata, ilustran los entendi
do aprenderlos en ninguna de las escuelas mientos , agitan los ánimos , y fuerzan el
públicas , y que por tanto debieron de ha poder á dejar los malos caminos en que tal
berlas bebido en libros, que leerían con vez se empeñara. Puede asegurarse que la
tanto mayor placer y con mas viva curiosi sola imprenta , considerada en sí , y pres
dad , por lo mismo que veian su contenido cindiendo de la latitud que se le concede
en oposicion con todo cuanto les rodeaba. en los paises regidos por un sistema cons
Lejos de nuestro ánimo la idea de que titucional , ha dado mayor impulso y des
no deba trabajarse por medios legítimos en arrollo á la intervencion popular que las
atajar los excesos de la prensa , en impe formas políticas mas liberales.
dirla que no acarree dañoá las sanas ideas, Estas llenan tanto mas cumplidamente el
y á la buena moral ; solo queremos dejar objeto de garantizar lo que se apellida U-
 12!) —
berlades públicas , cuanto mas expedito dejan cion de una infinidad de hechos difíciles de
el camino para desahogarse en quejas y reunir y mas todavía de clasificar y apre
protestas los intereses vulnerados ó las opi ciar debidamente, se contiene una parte
niones contrariadas. Cabalmente la impren verdadera y otra falsa : y la razon y la pru-
ta por su misma naturaleza es un medio | dencia aconsejan mantenerse en sobria re
seguro para lograr este fin ; mayormente serva, para no encarecer con demasiado
no dependiendo como no depende su exis entusiasmo , ni vituperar con excesiva acri
tencia de las combinaciones de esta ó aque tud. Por mas que se diga, la inteligencia
lla escuela , ni de las concesiones de un se ha elevado en los siglos modernos á una
Príncipe. Ella no es propiamente una ins altura á que no llegó jamás ni en los dias
titucion política, y por lo mismo no está mas nombrados de Grecia y Roma. La ad
sujeta á las mudanzas de todo cuanto á es miracion que naturalmente se profesa á to
te orden pertenece. Es una conquista de la do lo que está separado de nosotros por
industria , un arte de elaboracion de unos larga cadena de siglos , hace que nos incli
productos que siempre encontrarán salida ; nemos á considerar á los escritores de aque
y por tanto es un hecho social que los llos tiempos , como hombres de otra raza
hombres pueden modificar pero no des superior, á quienes es difícil y casi imposi
truir. ble igualar. Respetamos como el que mas
Los efectos que esta invencion ha produ el mérito de los antiguos , y nos lamenta
cido en la ciencia son incalculables, y es mos de lo mucho que se descuida su lectu
uno de los trascendentales el que ha vul ra , quizás por algunos de aquellos mismos
garizado el saber, extendiendo las luces que les tributan exagerados elogios; pero
verdaderas
mayor del que
ó falsas
antes
, álasunalcanzaba.
número mucho
Pres- | a decir verdad , al revolverlos una que otra
vez, no hemos acertado á descubrir en
cuidamos por ahora del beneficio ó daño ellos una sabiduría mayor de la que se ha
que bajo el aspecto de la profundidad ha visto en Europa en los últimos siglos: y
yan recibido por esta causa las ciencias, debemos añadir que el entendimiento hu
comprendiendo en este nombre todo linage mano nos parece mucho mas grande ahora
de conocimientos; pero en lo tocante á la de lo que era entonces Cuando esto deci
difusion , no puede negarse que la ha au mos, fijamos la vista en los mayores in
mentado considerablemente. Apenas conce genios de la antigüedad ; pensamos en
bimos nosotros cómo era posible adquirir Platon , en Aristóteles , en Ciceron , en
los ni aun medianos , por medio de los Séneca, en Tácito, y no exceptuamos la
simples manuscritos ; de suerte que cuando poesía , ni otro género de literatura ; opi
no tuviéramos otra prueba de la laboriosi nando que si bien bajo este ó aquel aspec
dad de los siglos anteriores, bastaríanos to, pudieron aventajar á los modernos,
recordar el crecido número que contaron estos en cambio los sobrepujan en tantos
de hombres eminentes en todos ramos , y sentidos, que la compensacion es sobre
la noticia de la popularidad que en algunas abundante , y el parangon no puede sos
épocas adquirieron cierta clase de conoci tenerse.
mientos. Como quiera es indudable que es No intentamos indicar por medio de las
tos debian limitarse á un número inmensa observaciones que preceden , que se deba
mente menor; y que si los antiguos pudiesen principalmente á la imprenta la superiori
presenciar la sobreabundancia de medios dad del entendimiento humano en los tiem
de que nosotros disfrutamos , lejos de ad pos modernos ; sabemos muy bien que la
mirarse de que los aventajemos en este ó causa primaria se encuentra en el cristia
aquel punto, se asombrarían de que en nismo, el cual dando ideas grandiosas,
todos nos les llevemos incomparable supe verdaderas y exactas , sobre Dios , sobre el
rioridad. hombre, y sobre la sociedad, ha generali
Hay entre los modernos el defecto , de zado esa sublimidad del pensamiento , que
que extendiéndonos á mucho , profundiza distingue á los pueblos que le profesan.
mos poco ; y no sin razon se nos achaca un Asi es de notar, que la superioridad de los
superficial ismo que nos permite hablar de modernos sobre los antiguos , se hace sen
todo, por escasa que sea nuestra inteligen tir especialmente en lo que concierne al
cia en la materia de que se trata. En esto , fondo de las cosas : con el solo catecismo
como en todas aquellas proposiciones gene se han hecho comunes entre el pueblo ideas
rales que expresan el resultado de la induc- || que se hubieran mirado como altas concep-
Toao i. 9
 130
ciones de recóndita filosofía ; y el entendi
miento de la generalidad de los hombres
ha llegado por decirlo asi á familiarizarse
con objetos cuya existencia no pudieron los POLEMICA RELIGIOSA.
antiguos ni aun sospechar. Pero recono
ciendo estas verdades no podemos negar la
parte que á la imprenta le ha cabido en el
desarrollo y propagacion de las ideas : lo CARTA TERCERA
que se prueba evidentemente con el asom
broso adelanto que hicieron todos los ra Á UN ESCÉPTICO EN MATERIAS DE RELIGION.
mos del saber, tan pronto como vino en su
apoyo ese poderoso agente.
De las reflexiones que preceden inferire
mos lo que ya desde un principio llevamos
indicado , á saber : que los excesos de la Mi querido amigo : cuando segun me in
prensa no deben exasperarnos hasta el pun dica V., en su última, veo que llegaremos
to de hacernos mirar con aversion el des á entablar una seria disputa sobre materias
cubrimiento en sí mismo; no perdiendo religiosas ; me ha llenado de indecible con
nunca de vista que son cosas muy diferen suelo la seguridad que me da V., de no
tes el uso y el abuso , y que por la exis haber llegado su extravío al extremo de
tencia del uno no debemos condenar el otro. poner en duda la existencia de Dios : esto
Pero, se nos dirá, ¿cómo será dable im allana sobremanera el camino á la discu
pedir este abuso? ¿qué medios hay para sion, pues que no es posible dar en ella un
sujetar á ese proteo que toma todas las for solo paso sin estar de acuerdo sobre esta
mas, que elude todos los golpes? problema verdad fundamental. Y nó sin motivo he
difícil , complicadísimo , que figura entre estequerido
particular
cerciorarme
profesaba
de las
V; ideas
pues que
que sobre
nun
tantos y tantos como abruman á las socie
dades modernas , y que no es ciertamente ca podré olvidar lo que me sucedió con otro
de los de menor importancia. Quizás otro escéptico, de quien sospechando yo si tal
dia nos ocupemos de esta gravísima mate vez hasta ponia en duda la existencia de
ria ; emitiendo nuestras convicciones con la Dios , ó si al menos no la concebia tal co
imparcialidad é independencia de que nos mo es menester , y dirigiéndole en conse
preciamos. Como una que otra vez podria cuencia algunas preguntas, me salió con
parecer severa nuestra opinion , deseosos una extraña ocurrencia que fuera chistosa
de que no se nos tache de partidarios de la á no ser sacrilega. Advirtiéndole yo que
esclavitud del pensamiento , y de enemigos ante toda discusion era necesario estar los
de la causa de la civilizacion , hemos tri dos de acuerdo sobre este punto , me res
butado gustosos el debido homenage al su pondió con la mayor serenidad que imagi
blime descubrimiento, cuyo recuerdo basta narse pueda : « me parece que podemos
para llenar de entusiasmo á todos los espí pasar adelante; porqueopino que es de po
ritus generosos y amantes de los progresos ca importancia el aclarar si Dios es una co
del entendimiento humano. — J. B. sa distinta de la naturaleza ó si es la misma
naturaleza.» ¡ A tanto llega la confusion de
ideas trastornadas por la impiedad ! y este
hombre por otra parte era de mas que me
diana instruccion , y de ingenio muy des
pejado !
Desde luego le doy á V. mil satisfaccio
nes por haberme atrevido á indicarle mis
recelos en este punto , bien que dificimente
me arrepiento desemejante conducta, por
que cuando menos ha producido un gran
bien, cual es, el que V. se explica sobre
este particular de tal modo, que revelando
mucho buen sentido, me hace concebir
iírandes esperanzas de que no serán estéri
les mis esfuerzos. Una y mil veces be leido
 — 131 —
aquellas juiciosas palabras de su apreciada, los demas. Sucede muy á menudo, que los
en las que espone el punto de vista bajo el impugnadores de esas doctrinas escogen por
cual considera esta importante verdad. Per blanco una de ellas, tomándola en com
mítame V. que se las reproduzca en la pleto aislamiento, y amontonando las difi
mia , y que le recomiende encarecidamen cultades que de suyo presenta , atendida la
te que no las olvide jamas. « Nunca me he flaqueza del entendimiento del hombre.
«devanado mucho los sesos en buscar «Esto es inconcebible, exclaman, la reli
» pruebas de la existencia de Dios : la his- gion que lo enseña no puede ser verdade
» toria , la física , la metafísica servirán pa- ra ; » como si los católicos dijésemos que los
» ra esta demostracion todo lo que se quie- misterios de nuestra religion están al alcan
»ra, pero yo confieso ingenuamente que ce del hombre ; como si no estuviéramos
«para mi conviccion no he menester tanto asegurando continuamente, que son muchas
» aparato científico. Saco la muestra de mi las verdades á cuya altura no puede ele
«faltriquera, y al contemplar su curioso varse nuestra limitada comprension.
» mecanismo, y su ordenado movimiento, Al leer ú oir la relacion de un fenómeno
» nadie seria capaz de persuadirme que to- ó suceso cualquiera , nos informamos ante
» do aquello se ha hecho por casualidad , todo de la inteligencia y veracidad del nar
» sin la inteligencia y el trabajo de un artí- rador ; y en estando bien asegurados por
»fice: el universo vale á no dudarlo, algo este lado, por mas extraña que la cosa
» mas que mi muestra , álguien pues debe contada nos parezca , no nos tomamos la li-
»de haberque lo haya fabricado. Los ateos libertad de desecharla. Antes que se hu
» me hablan de casualidad , de combinacio- biese dado la vuelta al mundo , pocos eran
» nes de átomos , de naturaleza , y de qué los que comprendían cómo era posible que
» sé yo cuantas cosas ; pero sea dicho con volviese por oriente la nave que habia da
» perdon de estos señores , todas estas pa- do la vela para occidente; pero, ¿bastaba
» labras carecen de sentido.» Nada tengo esto para resistirse á dar crédito á la nar
que advertir á quien con tanto pulso apre racion de Sebastian de lílcano , cuando aca
cia el valor de los dos sistemas ; estas pala baba de dar cima á la atrevida empresa del
bras tan sencillas como profundas , las esti infortunado Magallanes? Si levantándose
mo yo en mas que un tomo lleno de del sepulcro uno de nuestros mayores,
razones. oyera contar las maravillas de la industria
Pasando al punto de que me habla V. en los paises civilizados , ¿debería por ven
en su apreciada, comenzaré por decirle tura andar mirando detalladamente la rela
que me ha hecho gracia el que V. abra la cion que se le hace de las funciones de esta
discusion religiosa , atacando el dogma de ó aquella máquina , de los agentes que la
la eternidad de las penas. No esperaba yo impulsan , de los artefactos que produce ,
que acometiera V. tan pronto por este flan y desechar en seguida lo que á él le pare
co; y vaya dicho entre los dos, esta ano ciese incomprensible? Por cierto que nó:
malía me ha dado á entender que V. le ha y procediendo conforme á razon y á sana
cobrado al infierno un poquito de miedo. prudencia , lo que debiera hacer fuera ase
La cosa no es para menos ; y el negocio es gurarse dela veracidad de los testigos, exa
grave, urgente; de aqui á pocos años he minar si era posible que ellos hubiesen sido
mos de saber por experiencia propia lo que engañados, ó si podrían tener algun interes
hay sobre este particular , y dice V. muy en engañar , y cuando estuviese bien cier
bien , que «para los que se engañan en es- to de que no mediaba ninguna de estas cir
» ta materia , el chasco debe de ser pesado cunstancias , no podria sin temeridad , re
» en demasía.» husar el asenso á lo que se le refiriera , por
No tengo dificultad en abordar por este mas que á él le fuera inconcebible , y le
lado las cuestiones religiosas; pero no pue pareciese que pasaba los límites de la po
do menos de observar que no es este el sibilidad.
mejor método para dejarlas aclaradas cual De una manera semejante conviene pro
conviene. Las doctrinas católicas forman un ceder cuando se trata de materias religiosas:
conjunto tan trabado, y en que se nota tan lo que se debe examinar es , si existe ó nó
recíproca dependencia , que no se puede la revelacion , y si la Iglesia es ó nó depo
desechar una sin desecharlas todas ; y al sitaría de las verdades reveladas : en te
contrario, admitidos ciertos puntos capita niendo asentadas esta dos bases, ¿qué im
les, es imposible resistirse á la admision de porta (pie este ó aquel dogma se muestren
 122 —
mas ó menos plausibles ; que la razon se al ser infinito, esto reclama pues un casti
halle mas ó menos humillada , por no lle go en cierto modo infinito. En el órden de
gar á comprenderlos? ¿Existe la revela la justicia humana es mas ó menos crimi
cion? ¿Esta verdad es revelada? ¿Hay al nal el atentado, segun es la clase y la cate
gun juez competente para decidirlo? ¿Qué goría de la persona ofendida : ¿con qué
dice sobre el dogma en cuestion el indicado horror no es mirado el hijo que maltrata á
juez? He aqui el órden lógico de las ideas, sus padres? ¿qué circunstancia mas agra
hé aqui el órden lógico de las cuestiones , vante que la de ofender á una persona en
hé aqui la manera de ilustrarse sobre estas el acto mismo en que nos está dispensando
materias; lo demas es divagar, es exponer un beneficio? Pues bien, apliquense estas
se á perder tiempo en disputas que á nada ideas; adviértase que en la ofensa del hom
conducen. bre á Dios , hay la rebelion de la nada con
Lejos de mí el intento de huir por medio tra un ser infinito , hay la ingratitud del
cultad;
de estas pero
observaciones,
nunca habrá
el cuerpo
sido fuera del hijo con el padre, hay el desacato del súb
á la difi-
dito contra su supremo Señor , de una de
caso el emitirlas para que se tengan presen bil criatura contra el Soberano del cielo y
tes cuando sea menester. Voy al punto de tierra: ¡ cuántos motivos para afear la cul
la dificultad. Dice V. que «se le hace muy pa ! ¡ cuántos títulos para aumentar la se
» cuesta arriba el dar crédito á lo que nos veridad de la pena ! Por un simple acto
» están diciendo los predicadores sobre las contra la vida ó la propiedad de un indivi
» penas del infierno , y que repetidas veces duo , castiga la ley humana al reo con la
» ha oido cosas que de puro horribles raya- pena de muerte; es decir, con la mayor de
» ban en ridiculas.» Resérvome para mas las penas que sobre la tierra existen , es
allá el decirle á V. cosas curiosas sobre esos forzándose en cierto modo en aplicar un
horrores; por ahora, y no sabiendo á pun castigo infinito, pues que priva al ajusticia
to fijo cuáles son los motivos de queja que do de todos los bienes de la sociedad, para
tiene V. sobre el particular, me contentaré siempre; ¿por qué pues el Juez Supremo,
con advertir que nada tiene que ver el no podrá castigar tambien al culpable con
dogma católico, con esta ó aquella ocur penas que duren para siempre? Y nótese
rencia que haya podido venirle á un orador. bien , que la justicia humana no se satisface
Loque enseñala Iglesia es, que los que con el arrepentimiento ; consumado el cri
mueren en mal estado de conciencia , es decir men le sigue la pena , y no basta que el
en pecado grave , sufren un castigo que no ten criminal haya mudado de vida ; Dios pide
drá fin. Hé aqui el dogma ; lo demas que un corazon contrito y humillado ; no quie
puede decirse sobre el lugar de este casti re la muerte del pecador, sino que se con
go, sobre el grado y la calidad de las pe vierta y viva , y no descarga sobre el de
nas, no es de fe: pertenece á aquellos pun lincuente el golpe fatal , sin haberle puesto
tos sobre los que es lícito opinar en dife á la vista la vida y la muerte , sin haberle
rentes sentidos , sin apartarse de la fe dejado la eleccion , sin haberle ofrecido la
católica. Lo que sí sabemos , pues que la mano con cuya ayuda pudiera apartarse
Escritura lo dice expresamente, es, que del borde del precipicio. ¿A quien pues
estas penas serán horrorosas ; y bien ¿ para podrá culpar el hombre sino á sí mismo?
qué necesitamos saber lo demas? ¡ penas ¿Qué tienen de repugnante, ni de cruel
terribles y sin finí... no basta esta sola idea esas ideas? Fácil es alucinar á los incau
para dejarnos con escasa curiosidad sobre tos, pronunciando enfáticamente los nom
el resto de las cuestiones que aqui se pue bres de eternidad de penas, y de misericordia
dan ofrecer? infinita; pero examínese á fondo la mate
«¿Cómo es posible, dice V. , que un ria; atiéndase á todas las circunstancias que
Dios infmitamente misericordioso castigue la rodean , y se verán desaparecer como el
con tanto rigor? » ¿cómo es posible, con humo las dificultades que á primera vista
testaré yo, que un Dios infinitamente jus se habian ofrecido. El secreto de los sofis
to, no castigue con tanto rigor, despues de mas mas engañosos , consiste en el artificio
haber procurado llamarnos al camino de la de presentar los objetos no mas que por un
salvacion por los muchos medios que nos lado; de aproximar de golpe dos ideas, que
proporciona durante el curso de nuestra si parecen contradictorias , es porque no se
vida? Cuando el hombre ofende á Dios, la atiende á las intermedias que las enlazan y
criatura ultraja al Criador, el ser finito fácil observar, que los auto
 I
133 —
res mas célebres entre los enemigos de la prendimiento y elevacion , sino en cuanto
religion resuehen á menudo las cuestiones es un placer, un goce del alma. Asi nota
mas graves y complicadas , con una salida mos que no prevalece en la literatura la
ingeniosa, ó una reflexion sentimental. Ya imaginacion , ni tampoco el discurso , sino
se ve , como todas las cosas presentan tan el sentimiento en sus mas raros y extrava
diferentes aspectos, no es difícil á un inge gantes matices , llamando en su auxilio la
nio perspicaz coger dos puntos cuyo con razon y la fantasía, nó como amigos, sino
traste hiera vivamente el ánimo de los lec como dependientes. De donde resulta que
tores ; y si á esto se añade algo que pueda la filosofía se resiente tambien del mismo
interesar el corazon , no cuesta mucho tra defecto ; y que de su tribunal rara vez sa
bajo dar al traste en el ánimo de los incau len bien librados los austeros principios de
tos , con el sistema de doctrinas mas bien la moral eterna. Este sentimiento muelle
cimentado. se esfuerza en divinizar el goce, busca una
Ya que acabo de mentar el sentimenta excusa á todas las acciones perversas, cali
lismo, no puedo pasar por alto el abuso fica de deslices los delitos, de faltas las
que se hace de este Hnage de argumentos, caidas mas ignominiosas, de extravíos los
dirigiéndose al corazon en muchos casos, crímenes, procura desterrar del mundo to
en que solo se debe hablar al entendimien da idea severa, ahoga los remordimientos,
to. Asi en el asunto que nos está ocupan y ofrece al corazon humano un solo idolo,
do , ¿ cómo resiste un corazon sensible al el placer; una sola regla, el egoismo.
horrendo espectáculo de un infeliz conde Ya ve V., mi querido amigo, que la
nado á padecer para siempre ? Se ha dicho existencia del infierno no se aviene con
que los grandes pensamientos salen del co tanta indulgencia; pero el error de los
razon ; y en esto , como en todas las pro hombres no destruye la realidad de las co
posiciones demasiado generales hay una sas; si el infierno existia en tiempo de nues
parte de verdad y otra de falsedad; porque tros padres existe todavía en el nuestro; y
si bien es cierto que en muchas cosas es el en nada inmutan el hecho, ni la austeridad
sentimiento un excelente auxiliar para com de los pensamientos de los antepasados , ni
prender á fondo ciertas verdades , tambien la indulgencia y molicie de los nuestros.
lo es que no debe nunca tomársele por Cuando el hombre se separe de esta carne
principal guia , y que no se le ha de per mortal se encontrará en presencia del Su
mitir jamas que llegue á dominar los eter premo Juez , y allí no llevará por defensor
nos principios de la razon. Los derechos y el mundo. Estará solo, con su conciencia
deberes de padres é hijos , de marido y mu- desplegada , patente á los ojos de aquel , á
per , y todas las relaciones de familia , no cuya vista nada hay invisible, nada que
se comprenderán quizás tan perfectamente pueda ocultarse.
si analizados á la sola luz de una filosofía Estas reflexiones sobre la relacion entre
disecante , no se escuchan al propio tiempo el carácter del desarrollo del espíritu hu
las inspiraciones del corazon ; pero en cam mano en este siglo , y las ideas que han
bio, tambien se trastornarán los sanos prin cundido en contra de la eternidad de las
cipios de la moral , y se introducirá el des penas, son susceptibles de muchas aplica
orden en las familias, si prescindiendo de ciones á otras materias análogas. El hom
los severos dictámenes de la razon , solo bre ha creido poder cambiar y modificar
nos empeñamos en regirnos por lo que nos las leyes divinas, del modo que lo hace con
sugiere la volubilidad de nuestros afectos. la legislacion humana; y como que se ha
Mucho me engaño , si no se encuentra propuesto introducir en los fallos del Sobe
aquí uno de los mas fecundos manantiales rano Juez la misma suavidad que ha dado
de los errores de nuestra época. Si bien se á los de los jueces terrenos. Todo el siste
observa, el espíritu humano está atrave ma de legislacion criminal tiende clara
sando un período , que tiene por carácter mente á disminuir las penas, haciéndolas
distintivo el desarrollo simultáneo de todas menos aflictivas , despojándolas de todo lo
las facultades. Estas pierden quizá bajo que tienen de horroroso , y economizando
ciertos aspectos , absorviendo la una gran al hombre los padecimientos tanto como es
porcion de las fuerzas y energía que en posible. Mas ó menos, todos cuantos en es
otra situacion corresponderían á las otras; ta época vivimos , estamos afectados de esta
pero la que gana indudablemente es el sen suavidad : la pena de muerte , los azotes,
timiento ; nó en la parte que tiene de des todo cuanto trae consigo una idea horroro
sa ó aflictiva , es para nosotros insuporta-
ble ; y se necesitan todos los esfuerzos de
la filosofía , y todos los consejos de la pru
dencia , para que se conserven en los códi
gos criminales algunas penas rigurosas.
_,ejos de mí el oponerme á esta corriente:
y ojalá fuera este el dia en que la sociedad
no hubiese menester para su buen orden y
gobierno el hacer derramar sangre ni lá
grimas; pero quisiera tambien que no se
abusase de este exagerado sentimentalismo,
que se notase que no es todo filantropía lo
que bajo este velo se oculta, y que no se
perdiese de vista que la humanidad bien
entendida, es algo mas noble y elevado
que aquel sentimiento débil y egoista , que
no nos permite ver sufrir á los otros , por
que nuestra flaca organizacion nos hace
partícipes de los sufrimientos agenos. Tal
persona se desmaya á la vista de un desva
lido, y tiene las entrañas bastante duras
para no alargarle una pequeña limosna.
¿ Qué son en tal caso la sensibilidad y la
humanidad? la primera, un efecto de la
organizacion, la segunda puro egoismo.
Pero no mira Dios las cosas con los ojos
del hombre , ni están sometidos sus inmu
tables decretos á los caprichos de nuestra
enfermiza razon : y no cabe mayor olvido
de la idea que debemos formarnos de un
Ser eterno é infinito, que el empeñarnos
en que su voluntad se haya de acomodar á
nuestros insensatos deseos. Tan acostum
brado está el presente siglo á excusar el
crimen , á interesarse por el criminal , que
se olvida de la compasion que con título,
sin duda mas justo , es debida á la víctima;
y de buena gana dejaría á esta sin repara
cion de ninguna clase , con el solo objeto
de ahorrar á aquel los sufrimientos que
tiene merecidos. Táchese cuanto se quiera
de duro y cruel el dogma sobre la eterni
dad de penas , dígase que no puede conci-
liarse con la misericordia divina tan tre
mendo castigo ; nosotros responderemos,
que tampoco puede componerse con la di
vina Justicia ni con el buen orden del uni
verso, la falta de este castigo; diremos
que el mundo estaría encomendado al caso,
que en gran parte de sus acontecimientos
se descubriera la mas repugnante injusti
cia, si no hubiese un Dios terriblemente
vengador, que está esperando al culpable
mas allá del sepulcro, para pedirle cuenta
de su perversidad durante su peregrinacion
sobre la tierra.
Y qué? no vemos á cada paso ufana y
triunfante la injusticia, burlándose del
huérfano abandonado , del desvalido enfer
mo , del pobre andrajoso y hambriento , de
la desamparada viuda , é insultando con su
lujo y disipacion la miseria y demás cala
midades de esas infelices víctimas de sus
tropelías y despojos? ¿No contemplamos
con horror padres sin entrañas, que con su
conducta disipada , llenan de angustia la
familia de que Dios les ha hecho cabezas,
llevando al sepulcro á una consorte v irtuo
sa , dejando á sus hijos en la miseria , y no
transmitiéndoles otra herencia que el fu
nesto recuerdo y los dañosos resultados de
una vida escandalosa? No se encuentran á
veces hijos desnaturalizados , que insultan
cruelmente las canas de quien les diera el
ser, que lo abandonan en el infortunio,
que no le dirigen jamás una palabra de
consuelo , y que con su desarreglo y su in
solente petulancia abrevian los dias de una
afligida ancianidad? ¿No se hallan infames
seductores que despues de haber sorpren
dido el candor y mancillado la inocencia,
abandonan cruelmente á su víctima, entre
gándola á todos los horrores de la ignomi
nia y de la desesperacion ? La ambicion,
la perfidia, la traicion, el fraude, el adul
terio, la maledicencia, la calumnia y otros
vicios que tanta impunidadad disfrutan en
este mundo , donde tan poco alcanza la ac
cion de la justicia , donde son tantos los
medios de eludirla y sobornarla, ¿no han
de encontrar un Dios vengador que les ha
ga sentir todo el peso de su indignacion ?
¿ no ha de haber en el cielo quien escuche
los gemidos de la inocencia cuando deman
da venganza?
Que no es verdad , nó , que el culpable
experimente ya en esta vida todo lo bas
tante para el castigo de sus faltas; ator-
méntanle, sí, los remordimientos roedores,
agréganse las enfermedades que sus desar
reglos le han acarreado , abrúmanle las de
sastrosas consecuencias de su perversa con
ducta ; pero tampoco le faltan medios para
embotar algun tanto el punzante estímulo
de su conciencia , tampoco carece de arti
ficios para neutralizar los malos efectos de
sus bacanales, tampoco escasea de recursos
para salir airoso de los malos pasos á que
sus extravíos le conducen. Y además, ¿qué
son estos padecimientos del malvado en
comparacion de los que sufre tambien el
justo? Las enfermedades le abruman, la
pobreza le acosa , la maledicencia y la ca
lumnia le denigran, la injusticia le atrope
 — 135
Ha , la persecucion no le deja sosiego ; las me una idea clara y distinta de aquel ac
tribulaciones de espíritu se agregan tam to sublime en que Dios dijo : hágase la luí,
bien , y semejante al divino Maestro sufre y la luz fué heclía , siéntese mi entendimien
en esta v;da los tormentos, las angustias, to con cierta flaqueza , que no le permite
el oprobio de la cruz. Si su paciencia es comprender con toda perfeccion el tránsito
mucha , si acierta á resignarse como ver del no ser al ser. Estoy cierto, y V. conmi
dadero cristiano , hace algun tanto mas lle go, de la existencia de Dios, de su infini
vaderos sus padecimientos; pero no deja dad , eternidad , inmensidad, y demás atri
por esto de sentirlos, y á menudo mas du butos ; pero ¿ nos es dado acaso formarnos
ros de los que han caido sobre el hombre ideas bien claras de lo que por estos nom
manchado con cien crímenes. Sin las penas bres se expresa ? Es bien seguro que nó ; y
y los premios de la otra vida ¿dónde está lea V. todo cuanto han escrito sobre ello
la justicia? ¿dónde la Providencia? ¿dónde los mas esclarecidos teólogos y filósofos , y
el estímulo para la virtud , y el freno para echará de ver que, masó menos, ado
el vicio? lecían del mismo achaque que nosotros.
Pregúntame V. , mi estimado amigo, si Si quisiera dar mas amplitud á estas re
comprendo perfectamente, cuál es el ob flexiones , fácil me seria encontrar mil y
jeto que Dios se pueda proponer en prolon mil ejemplos de esta debilidad de nuestro
gar por toda la eternidad las penas de los entendimiento, hasta en las cosas físicas y
condenados ; y adelántase á contestar á la naturales ; pero esto me empeñaría en lar
razon que podría señalarse de que así se gas discusiones sobre las ciencias huma
satisface la divina Justicia , y se aparta á nas, alejándome del principal objeto.
los hombres del camino del vicio , con el Además , que no dudo bastará lo dicho,
temor de tan horrendo castigo. Dice V. para dejar sentado que no debe hacer me
por lo tocante al primer punto , « que ja lla en un espíritu sólido esa oscuridad de
más ha podido concebir la razon de tanto que están rodeados á nuestra vista algunos
rigor; y que aun cuando no deja de co objetos ; y que mientras sobre ellos poda
lumbrar la relacion que existe entre la mos adquirir por conducto seguro la com
eternidad de la pena , y la especie de infi petente certeza, no conviene abstenerse de
nidad de la ofensa por la cual se impone, prestar asenso por el solo asomo de algunas
sin embargo le queda todavía alguna oscu dificultades mas ó menos graves, mas ó
ridad que no acierta á disipar. » Muy erra menos embarazosas.
do anda V., mi apreciado amigo, si se No son muchas las materias en que pue
imagina que á todos los demás no les dan señalarse, en apoyo de la verdad, ra
sucede lo mismo; pues que sabido es, que zones mas satisfactorias que las arriba indi
el entendimiento humano se anubla , tan cadas en pro de la justicia de la eternidad
luego como toca en los umbrales de lo de las penas; sea cual fuere el concepto
infinito. De mí sabré decir, que tam que V. forme de mis reflexiones, al menos
poco concibo estas verdades con entera no podrá negarme que no son para despre
claridad ; y que por mas firme certeza ciadas por el simple obstáculo de una difi
que de ellas abrigue , no puedo lisonjear cultad , que mas bien se funda en un sen
me que se presenten á mi espíritu con timentalismo exagerado que en un raciocinio
aquella evidencia que las pertenecientes á sólido y convincente. Por tanto, solo me
un órden finito y puramente humano; pe resta recordarle , que no se trata de saber
ro lejos de que me desanime esta niebla, si nuestro entendimiento comprende ó nó
que procede al propio tiempo de la debili con toda claridad el dogma del infierno,
dad de nuestros alcances, y de la sublime sino de averiguar si en realidad este dog
naturaleza de los objetos, he considerado ma es verdadero, y si los fundamentos en
repetidas veces , que si por este motivo de que le apoyamos sus sostenedores tienen
biera negar mi asenso no podría prestarle las señales características que puedan con
tampoco á muchas otras verdades de lasque vencer de que realmente ha sido revelado
me seria imposible dudar, aunque á ello por Dios. ¿De qué nos serviría el compren
me esforzara. Estoy seguro de la creacion, derlo mas ó menos claramente , si tuviése
no solo por lo que me enseña la religion mos el tremendo infortunio de haberle de
revelada , sino tambien por lo que me dic sufrir?
ta la razon natural: y no obstante, cuando Por lo que toca al segundo punto que V.
medito sobre ella , cuando quiero formar indica en su apreciada , no estoy de acuer
 — 136 —
do en que una pena de duracion limitada, y sensible, se rigen por otros principios,
pudiese ejercer sobre el ánimo de los hom versan sobre mas altos objetos, y habitan
bres una impresion equivalente, y de idén por decirlo así en una region que de suyo
ticos resultados en cuanto al arreglo de la nada tiene que ver con todo cuanto existe
conducta. Pretende V. que en estando material y terreno. Sin desconocer empero
acompañada la pena de mucha duracion, ó la dignidad de estas facultades, ni la altura
de un tormento muy terrible , bastaría pa de la region en que moran , menester es
ra enfrenar las pasiones, poniéndose un confesar que es tal la influencia que sobre
límite á los malos deseos ; con cuya obser las mismas ejercen las otras de un orden
vacion se da por el pié á la razon que seña inferior , que á menudo las hacen descen
lamos los cristianos de que la existencia del der de su elevacion , y en vez de obedecer
infierno es una salvaguardia de la moral. las como á señoras, las reducen á la clase
Pero á mi me parece queV. no ha sondea de esclavas. Cuando las cosas no lleguen á
do lo suficiente este asunto ; y no ha repa este extremo , resulta al menos con dema
rado en que si bien es verdad que la idea siada frecuencia , que las facultades supe
del tormento nos espanta y aterra , cuando riores están sin funcionar , como adorme-
se ha de sufrir en esta vida, nos causa muy decidas; de suerte que el entendimiento
ligera impresion si se ha de reservar para columbra apenas como en oscura lontanan
la otra. Dos pruebas daré de esto, una es- za las verdades que forman su mas noble y
perimental , otra científica. principal objeto , y la voluntad no se diri
El dogma del purgatorio lleva cierta ge tampoco al suyo , sino con el mayor
mente una idea terrible; y asi los libros de descuido y flojedad. Hay un infierno que
devocion , como los predicadores , están temer, un cielo que esperar; pero todo es
pintando continuamente aquel lugar de ex to es en la otra vida , se reserva para una
piacion con los colores mas espantosos. Los época mas distante; son cosas que pertene
fieles lo creen asi , lo están oyendo sin ce cen á un orden enteramente distinto, á un
sar, oran por los parientes y amigos difun mundo nuevo , en el cual creemos firme
tos, que puedan estar detenidos en él; pe mente , pero del que no recibimos impre
ro hablando ingenuamente ¿es mucho el siones directas, de momento; y asi es que
miedo que se tiene al purgatorio ? por sí necesitamos hacer un esfuerzo de concen
solo, ¿fuera un dique bastante robusto tracion y reflexion para penetrarnos del in
para oponerse al ímpetu de las pasiones? menso interés que para nosotros tienen , y
Dígalo cada cual por experiencia propia; de que en su comparacion es nada todo
díganlo tambien por la agena, cuantos han cuanto nos rodea. Viene entretanto á herir
tenido ocasion de observarlo. Las penas nuestra imaginacion, á excitar nuestros
que para aquel lugar se nos anuncian son sentimientos algun objeto de la tierra, ora
terribles, es verdad; su duracion puede inspirándonos algun temor, ora halagán
ser mucha, es cierto; el alma no saldrá de donos con algun placer; el otro mundo de
allí hasta haber pagado el último cuadran saparece á nuestros ojos, como objetos que
te, no tiene duda; pero aquella tendrá fin, perdiéramos de vista en un remoto confin,
estamos seguros de gue no puede durar el entendimiento vuelve á entrar en su en
para siempre , y colocados en medio del torpecimiento , la voluntad en su langui
riesgo de largos padecimientos en la otra dez ; y si uno y otro se excitan de nuevo es
vida , y de la necesidad de suportar leves para contribuir al mayor desenvolvimiento
molestias en la presente, repetidas veces de las otras facultades.
preferimos aventurarnos á lo primero , pa El hombre se guia casi siempre por las
ra preservarnos de lo segundo. impresiones de momento ; sacrifica lo veni
De esto, que la experiencia nos está dero á lo presente; y cuando pesa en la
mostrando á cada paso , nos señala la ra balanza de su juicio las ventajas y los in
zon , las causas ; bastando para conocerlas convenientes que una accion le puede acar
una sencilla consideracion de la naturaleza rear, la distancia ó la proximidad de la
humana. Mientras vivimos en esta tierra, realizacion de estos inconvenientes y ven
se halla nuestro espíritu unido al cuerpo tajas es una de las circunstancias mas in
que. nos transmite sin cesar las impresiones fluyentes en su eleccion. ¿Cómo no ha de
de todo cuanto le rodea. Posee á la verdad suceder esto en lo tocante á los negocios de
nuestra alma algunas facultades que eleva la otra vida , si se verifica lo mismo con
das por naturaleza sobre todo lo corpóreo | respecto á los de la presente? ¿ No es inli
 — 137 —
nito el número de los que sacrifican las ri « Mucho me engaño , si en la pretendida
quezas , el honor , la salud , la vida , á un «justicia de un Dios inexorable, no setras-
placer de momento? y esto por qué? por « luce el sacerdote católico con su terque-
que el objeto que halaga está presente , y « dad inflexible.» Algo duro se muestra V.,
los males distantes; y el hombre se hace la mi estimado amigo , en el pasage que aca
ilusion de evitarlos, ó bien se resigna á su bo de insertar , y por mas sorpresa que le
frirlos , como quien se arroja á un precipi hayan de causar mis palabras, me atrevo á
cio con los ojos vendados. decirle que lejos de encontrarle filosófico
De esto se infiere no ser verdad lo que como acostumbra , le hallo aquí , primero
V. afirma, que bastase el temor de una muy inexacto, y despues en demasía lige
pena muy duradera para que produjese un ro. Inexacto, porque supone que el dogma
mismo ó semejante efecto , que la eterni de la eternidad de las penas, pertenece ex
dad del infierno. No es verdad ; antes al clusivamente á los católicos, cuando le
contrario, puede asegurarse que desde el profesan tambien los protestantes; ligero,
momento que se separase de la idea de las porque ha pretendido convertir en expre
penas la de eternidad , perderían la mayor sion del pensamiento dominante en el cris
parte de su horror, y quedarian reducidas tianismo un hecho generalmente creido por
á la misma línea que las del purgatorio. Si el humano linage.
los castigos de la otra vida han de produ El prurito , tan comun en nuestra época
cir un temor bastante á contenernos en hasta entre los escritores de primera nota ,
nuestras depravadas inclinaciones, han de de señalar una razon filosófica fundada en
tener un carácter formidable, espantoso, una observacion nueva y picante, le ha ex
que su mero recuerdo ofreciéndose de vez traviado á V. de una manera lastimosa ;
en cuando á nuestro espíritu , le produzca haciéndole perder de vista por un momen
un saludable estremecimiento que dure to lo que no ignoran cuantos saben media
aun en medio de la disipacion y distraccio namente la historia. En resumen , queria
nes de la vida, como el pavoroso sonido de V. significar que esto era una invencion de
sonoro metal que retiembla largo rato des los sacerdotes cristianos, bien que salvando
pues de recibido el golpe. su buena fe, con suponerlos víctimas de
á laNoobjeccion
pondré insinuada
fin á esta por
cartaVr.sin
, ycontestar una ilusion ; pero ¿cómo ha podido olvidar
de que que siglos antes de aparecer el cristianismo
en apariencia se halla muy satisfecho, por estaba la creencia del infierno generalmen
que segun dice , « si bien no es mas que te extendida y arraigada?
« una conjetura , no puede negársele que Algo satírico está V. con los « buenos
«es muy especiosa, muy filosófica, y qui- «frailes que «e complacen en asustar á n¡-
«zás no destituida de fundamento.» Expli »ños y mugeres con las horrendas descrip-
ca V. en seguida el sistema que tan en «ciones de tormentos fraguados en imagi-
gracia le ha caido, y que consiste en con «nacíones descompuestas y groseras , y que
siderar el dogma del infierno, como una «difícilmente puede suportar sin reirse ó
fórmula en que se expresa el pensamiento «sin fastidiarse un hombre de sana razon y
de intolerancia que preside á las doctrinas »de buen gusto. » Bien se conoce que quie
y conducta de la Iglesia católica. Permíta re V. hacer pagar caros á los pobres pre
me V. que transcriba sus propias palabras, dicadores los ratos que le llevaba al sermon
que de esta suerte no mediará el peligro su buena madre, y que sin duda hubiera V.
de una mala inteligencia : « Ya se ve : se empleado de mejor gana en sus juegos y
« queria sujetar el entendimiento y el co- entretenimientos; pero sea dicho sin ánimo
« razon del hombre ciñéndolos con un aro de ofender , y únicamente en defensa de la
« de hierro : faltaban en lo humano los me- verdad , da V. aqui un solemne tropiezo ,
« dios de realizarlo , y ha sido preciso ha- en que solo puede consolarle el tener mu
« cer intervenir la justicia de Dios. ¿ No se chos compañeros de infortunio , entre los
« podría sospechar que los ministros de la que se proponen burlarse con demasiada
«religion católica, quizás mas engañados ligereza de los dogmas y prácticas de nues
«que engañadores, han apelado al recurso tra religion. V. se rie de las exageraciones
«comun entre los poetas, de desenlazar de los frailes en esta materia , que se le ha
« una situacion complicada llamando en su cen insuportables por descabelladas y de
« auxilio algun Dios : ó hablando en térmi- mal gusto; pues bien , yo le emplazo á V.
« nos literarios , empleando la máquina ? á que me cite la descripcion que le parezca
 nias descabellada entre las que haya oido
de hora de un predicador , y me obligo á
presentarle otra sobre el mismo objeto que
no le irá en zaga á la primera, ni en lo feo,
ni en lo extra\agante , ni en lo horrible.
¿Y sabeVr. de quién serán esas descripcio
nes y rasgos? nada menos que de Virgilio,
de Dante, de Tasso, de Milton. No adver
tía V. que á la espalda del buen capuchino
á quien tan desapiadadamente acometía,
tropezase con una reserva tan respetable ,
en materias de razon y de buen gusto. Ave
ces la precipitacion en el juzgar nos es mas
dañosa que la misma ignorancia. Sucéde-
nos á menudo que despreciamos una ex
presion , en odio ó desprecio de la persona
que la dice ; expresion que nos pareciera
admirable, si la oyésemos en boca de otro
que nos inspirase mas respeto. Por esto de
cía graciosamente Montaigne que se diver
tía en sembrar en sus escritos las senten
cias de filósofos graves, sin nombrarlos;
con la mira de (pie sus lectores críticos cre
yendo habérselas solo con Montaigne, in
juriasen á Séneca , y dieran de narices so
bre Plutarco.
No es fácil decir á punto fijo la variedad
de horrores del infierno, pero lo cierto es
que asi cristianos como gentiles han conve
nido en mostrárnoslo con espantosos colo
res. Virgilio no era ni fraile, ni predicador,
ni cristiano , ni escaseaba de buen gusto , y
sin embargo difícil es reunir mas horrores
de los que nos presenta , no solo en el in
fierno , sino ya en el camino.
Vestibulum ante ipsum primisque in faucibus Orci,
Luclus ií ultrircs posuérc cubilia curas :
Pallenlesque hnbitant Morbi , trislisque Senectus,
Et Metus , & malcsuada Pames, pt Lurpis Egcstas,
Tcrribilcs usu forma; : Letomqne, Laborquc;
Tum consanguineus Leti Sopor , & mala mentis
Gandia, inortifcrumquc ad\erso in limine licllum
Ferrciquc Eumenidum thalami , & Discordia de-
( mens
Vipercum crinen> vittis innexa cruentis.
Multaquc prreterea varíarum monstra ferarum ,
Centauri in foribus stabulant , ScyHcqae biformes,
Et centum geminis Briarcus , ac bellua Lerna
Horrendum stridens flammisque armala Chima;ra:
Gorgones, Harpya;quc, & forma tricorporis timbra?.
Antes de llegar á la fatal mansion , nos
encontramos ya con cabelleras de víboras, con
hidras que rugen con lurrrible estridor, con
monstruos orinados de fuego, y juntos con los
gozos vedados , mala mentis gandía , el llanto
y los remordimientos vengadores , luctus et
ultrices curm.
Pero sigamos adelante, y el horror se
aumenta hasta el extremo.
Hine vía Tartarci qua; fert Achcrontis ad undas.
Turbidus hic carao vastaque voragine gurges
iEstuat , atque omnem Cocyto ernctat arenam.
Portitor has horrendus aquas & ilumina servat
Terribili sqnalore Charon : eni plurima meuto
Canities inculta jacet stant lumina flamma,
Sordidus ex humeris nodo dependet amictus.
Respicit jEncas subito ; sub rupe sinistra
Maraia lata videt , triplici circumdata nm.ru :
Oua' rapídus flammis ambit torrentibus amnis
Tartareus Phlegelon, lorquctquc sonancia saxa.
Porta adversa, ingens, solidoque adamante co-
{ lllliill.r.
Vix ut nulla virum , non ipsi excinderc ferro
Cotlicols valcant: stat ferrea turris ad auras:
Tisiphoneque sedens , palla succinta cruenta ,
Vestibulum insonmis senat noctesque diesqne.
Hinc exaudiri gemitus , & sieva sonare
Verbera : tum stridor ferri , tracta;quc cateme.
Gnossius tiacc Rhadamanthus babet durissima
( regna :
Castigatquc , auditque dolos : subigitqne fateri
Qax quis apud superos , furto hetatus inani ,
Distulit in seram commissa piacula mortem.
Continuó sontes ultrix accincta flagello
Tisiphonc quatit insultans : tnrvosque sinistra
Intentans angues, vocal agmina sa;\a sororum.
Tum demum horrísono stridentes cardrao sacra?
Panduntur porta;. Ccrnis custodia cualis
Vestíbulo sedeat? facics qua; limína serve!?
Quinquaginta atris immanis hiatibus llydra
Sa;vior intus habet sedem :
Ncenon & Tilyon Ierra; omniparentís alumnum
Cernere eral: per tota novem cuí jugera Corpus
Porrigitur ; rostroque immanis vultur obunco
I in mortale jecur lundens, feecundaque poenis
Viscera rimaturque epulis , habitatque sup alto
Pectore: nec Obris requics datur ulla renalis.
Quid memorcm Lapithas, Ixiona, Pirithoumque?
Quos super aira sílex jamjam lapsura , cadentique
Imminet assimílis. Lucent genialibus altis
Aurea fulera toris, epuliequc ante ora parala;
Regifico luxu : Furiarum maxima juxta
Accubat , & manibus prohibet contingcre mensas,
Exurgitquc facem atlollens , atque intonat ore.
Hic quibus invisi fratres , dum vita manchal,
Pulsatusve parens , & fraus innexa clicnti ;
Aut qui dmtíis solí incubuere repertis,
Nec partera posuerc suís , (nía; maxima turba est ;
Quique ob adulteríum c#si, quique arma secuti
Impía , uec veriti dominoruiu fallero dextras ;
Incluí ptt'uam cipectant. Nc qurerc doeeri
Quam pceuam , aut qua; forma virus fortunave ALIANZAS DE ESPAÑA.
( mersit.
Savum ingeas volvunt alíi , radiisque rotarum
Districti pendent : sedet aiternumquc sedebit
Infelix Theseus ; Phlegyasquc miserrimus omnes
Admonct , ct magna tcstatur vocc per umbras:
Discite justitíam moniti , & non temnere Divos. Artículo 2.°
Veodidit hicauro patriam,dominumquc potentem
Imposuit : flxit legos pretio atque refixit. ALIANZA CON LA FRANCIA.
Hic thalamum invasit natal vetítosque hymenreos.
Ausi omnes immane nefas , ausoque potiti.

Triples murallas bañadas con un rio de fue Cumpliendo lo que en el número ante
go , gemidos , ruido de azotes , estrepito de carior tenemos prometido, vamos á tratar de
denas , serpientes y la Hidra con cincuenta bo las ventajas ó inconvenientes que puede
cas, buitre que roe las entrañas, y otros ofrecernos la alianza francesa. Y para que
objetos semejantes : hé aqui lo que nos no se dé á nuestras palabras un sentido
presenta el poeta en la mansion , segun él que no tienen , advertirémos , que al re
mismo dice, de los defraudadores, adúlteros, chazar la indicada alianza , ni siquiera pen
mieles con sus padres , incestuosos, traidores ásamos en los hombres que actualmente em
su patria, y culpables de otros crímenes. puñan las riendas del gobierno en aquel
Mucho dudo que V. haya oido cosas mas pais y en el nuestro , y hacemos completa
horribles. Y como si no le bastara el es abstraccion del estado actual de las relacio
pantoso cuadro que acaba de pintar con nes del gabinete de Madrid con el de las
inimitable pincel , exclama : Tullerías. Colocamos la cuestion en terre
no mas anchuroso : cosas de suyo grandes
Non, mibisi liugu.T centumsint: oraque erntum. deben ser contempladas en un cuadro mas
Forrea vox, omnes scclcrum comprendere formas, extenso, en horizonte mas vasto; y se las
Omnia puenarum perrurrere nomina possim. desnaturaliza y mutila, cuando se tiene
(Eneid. L. G.J empeño
bito de las
en banderías
circunscribirlas
políticas
al estrecho
y de los ám
in -

Cien lenguas, cien bocas, férrea voz, no le tereses personales.

bastarían para nombrar siquiera la variedad
de penas de aquella mansion de horror !
Como quiera: dentro medio siglo la cues
tion del infierno estará prácticamente re
suelta para los dos: ruego al Cielo que lo
sea felizmente para ambos; pero si V. tie
ne la temeridad de aventurarse á lo que
pueda suceder, me quedaré llorando su fu
nesta ceguera , suplicando al Señor so dig
ne iluminarle antes no llegue el dia de la
ira , en que á la presencia del Juez Supre
mo , velarán su faz los ángeles tutelares no
sabiendo que alegar en descargo de V. pa
ra libertarle de la tremenda sentencia. M.
de su affmo.—J. B.
Parécenos que la cuestion quedará plan
teada en los términos convenientes, for
mulándola de la manera que sigue: ¿qué
bienes puede traernos la alianza francesa Y¿qué
males puede acarrearnos? Para mayor clari
dad procuraremos examinar por separado
los dos puntos; bien que se roza de tal ma
nera el uno con el otro , que no siempre
será fácil conservar el deslinde.
Qué bienes puede traernos la alianza
francesa ? volvemos los ojos á todas partes,
consideramoslos objetos bajo el aspecto re
ligioso , bajo el social , bajo el político , ba
jo el industrial y mercantil, divagamos por
todas las regiones, interrogamos la historia,
consultamos la experiencia, conjeturamos
sobre el porvenir; en ninguna parte, en
ningun sentido , acertamos á ver que pue
da sernos provechosa la alianza con la Fran
cia ; no descubrimos ninguna utilidad en
relaciones demasiado íntimas : solo encon
tramos que nos es conveniente el vivir ert
 — 140 —
paz con ella, con la buena armonía que de partidos; que ante todo sean españoles, y
suyo demanda la vecindad. únicamente zelosos del honor y de la inde-
Nuestra independencia para nada nece Ítendencia de su patria. Esta misma riva-
sita de la Francia ; dado que el espíritu del idad que existe entre la Francia y la In
siglo , la actual diplomacia , una posi glaterra , es un excelente elemento para
cion peninsular y en el último extremo de sostenernos en una posicion libre , desem
Europa , nos ponen á cubierto de todo ata barazada, propiamente española. Si solo
que de la ambicion extrangera. La Ingla tuviéramos á nuestras inmediaciones una
terra misma , ni piensa , ni pensar puede de las dos potencias , fuéranos muy difí
en atacar nuestra independencia , sino por cil, atendida nuestra desgraciada situacion,
medios indirectos, disfrazados, dirigiendo que no nos viéramos precisados á rendirle
con sus consejos y mandando con sus exi cierta especie de homenage. Pero ahora ,
gencias. Podría parecer á primera vista cada una de las fuerzas se hallaría neutrali
que para este objeto es necesaria la alianza zada por la contraria ; y cuando en un sis
francesa , pues que el contrapeso de esta tema existen dos de esta naturaleza , nada
destruiría la preponderancia del gabinete queda que hacer para mantenerlas en equi
de San James. Pero bien miradas las cosas librio , sino cuidar que la una se halle
no es esta la consecuencia que de ahí se siempre al encuentro de la otra. ¿Pensais
infiere : porque no seria dable lograr que que la Inglaterra se empeñaría fácilmente
desapareciese la preponderancia inglesa, en desavenencias con España que pudiesen
queriéndola matar con el ascendiente de la acarrearun rompimiento? ¿Peusais que en
francesa , sino otorgando á esta última un caso de enemistad con la Francia , viera el
desmedido valor ; lo que por necesidad nos gobierno de la Gran Bretaña que el gabi
acarrearía una dependencia indigna de una nete de las Tullerías toma con nosotros una
nacion grande y pundonorosa; por sacudir actitud amenazadora , sin ponerse mas ó
un yugo nos someteríamos á otro no me menos abiertamente de parte del de Ma
nos ignoble y pesado. drid? ¿Pensais que lo propio no sucediera
La política española tiene en esta parte á la Francia en caso de hallarse en situa
bien trazada la línea de conducta que le cion semejante? Claro es que repugnando
conviene seguir: mantener en equilibrio á los intereses de las dos potencias el que
las dos influencias rivales. Y cuando de es su rival alcanzase sobre la España ningun
te equilibrio hablamos, no entendemos triunfo decisivo que pudiese acarrear un
aconsejar una política vacilante entre los exceso de influencia , procuraría evitarlo
dos impulsos opuestos ,que ora se incline á por todos los medios posibles , apelando si
una parte , ora se abalance á la contraria , necesario fuese á la guerra.
convírtiendo la nacion en un campo de in Ambas naciones lo meditarían muy de
trigas , y el gobierno en miserable juguete tenidamente antes de empeñarse en una
de ambiciones extrangeras : empleamos la lucha con nosotros; pues que aun prescin
palabra equilibrio para significar aquella diendo del temor que mutuamente se ins
actitud independiente é hidalga que cum pirarían, la guerra de la independencia ha
ple á la monarquía de Isabel y de Felipe II, dejado profundos recuerdos que no hacen
de aquella actitud que escucha con pru muy agradable una tentativa de invasion.
dencia y cortesía los consejos agenos , pero El sembrar discordia, el promover intrigas
que los rechaza con desden tan luego como que no nos dejen nunca en sosiego , son co
toman el tono de la superioridad ; aquella sas muy hacederas, y que no cuestan mas
actitud que hace justicia á las reclamacio que el tiempo que en la tarea emplean los
nes fundadas en derecho, pero que res agentes, ó cuando mas algun sacrificio pe
ponde con generosa indignacion á exigen cuniario ; pero intentar una guerra es asun
cias injustas, y que venido el caso sabe ti to mas sério, en que no darian voto favo
rar la pluma y desenvainar la espada. rable, ni Wellington ni Soult. Empresa de
Y cuenta que semejante política no es ' que saliera mal parado el capitan del siglo,
un sueño dorado ; es muy realizable siem no es para acometida livianamente.
pre que tengamos al frente delos negocios, Aquella guerra inmortal reveló en los
verdaderos hombres de estado , que com españoles una energía y tenacidad qne no
prendan la verdadera situacion de las co se ha visto en ningun pueblo de Europa. Se
sas, y se emancipen completamente de las dirá tal vez que la nacion de ahora no es
influencias de las pandillas y hasta de los la de 1808, que los elementos constituti
 — 141 —
vos de nuestra robustez se han debilitado siete años, y poniendo de un lado todo es
mucho , que las discordias intestinas han tra píritu de parcialidad , contemplando con
bajado la nacion incapacitándola para gran los ojos de un extrangero la arena del com
des esfuerzos ; pero sin que pretendamos bate , échase de ver que difícilmente se en
poner en duda la parte de verdad que en es contraría pueblo en el mundo que ofrecie
tas observaciones se encierra , no nos pa ra por espacio de tantos años y en número
rece sin embargo que sean de tanto peso tan crecido , las escenas de heroico v alor ,
como algunos podrían creer. En primer lu- de inalterable fortaleza , de invicta cons
lar, no es exacto que nuestros elementos tancia, que se presenciaron entre nosotros.
de robustez hayan perecido en su mayor Olvidemos los actos de barbarie y de atro
parte ; existen todavía , pero dispersos , cidad inspirados por la sed de venganza }
desparramados , sin punto de apoyo ni reu por la frenética exaltacion de los partidos
nion , esperando para mostrarse y obrar, que atizaban álos combatientes; olvidemos
el que se adopte un sistema de política na aquellas catástrofes cuya memoria pasará
cional, grande, generosa, cual cumple al á la posteridad como negra mancha en las
decoro y prosperidad de tan ilustre monar páginas de nuestra historia; (pie á pesar de
quía. Y cuando de política nacional habla semejantes crueldades de que no está exen
mos , entendemos que quien ha de adop ta ninguna guerra civil , descubriremos en
tarla ha de ser un gobierno verdaderamente los principales sucesos de la formidable lu
nacional , que si propende mas ó menos á cha, un fondo de valor, de hidalguía y
las doctrinas de este ó aquel partido , no heroismo que recuerda los descendientes
en ser instrumento de ninguno de los vencedores de Pavía y de San Quintín.
nan>,noni deben
olvideque
tenerlosotra
hombres
guia que
quego-
las Estos hechos no han pasado sin fruto á
los ojos de la Europa; ella ha tenido el
reglas de justicia, y las miras de conve bárbaro placer de contemplarla sangrienta
niencia pública. En semejante estado de arena sin tomar ninguna medida para res
cosas, es evidente que se trabajaría sin tañar la sangre que corría en abundancia,
descanso en debilitar y extirpar si posible antes bien atizando á los combatientes ; pe
fuese , los gérmenes de discordia , en res ro no lo dudemos, en medio de su aparen
tablecer la nacionalidad , en avivar el es te indiferencia, se ha estremecido. En Na
píritu patriótico, en procurar que los par varra , en Aragon , en Cataluña , ha cono
tidos si continuasen en su existencia , tu cido todavía á los hijos de la nacion imper
vieran al menos el desprendimiento nece térrita, que sola, sin mas recursos que su
sario para acallar la voz del resentimiento valor, arrostró impávida la colosal pujan
y sacrificar sus particulares intereses en las za del capitan del siglo , que no dejó las
aras del bien comun, siempre que asi lo armas de la mano hasta verle derribado
reclamaran la independencia y el decoro de su solio. Asi , por mas que se nos haya
del pais. A este punto va dirigiéndose el motejado , ha conocido la Europa lo arries
espíritu de la inmensa mayoría del pueblo gado de una tentativa de invasion; y ni la
español, por mas que la fiebre política que Francia ni otra potencia cualquiera, se
le agita y perturba parezca indicar lo con atreverían á semejante paso , en viendo ,
trario. Si bien se observa esta fiebre está no diremos una union completa entre to
limitada á un círculo muy pequeño; la ge dos los españoles, sino tan solo una mayo
neralidad de los españoles no ha adolecido ría algo respetable decidida á oponer re
nunca del frenesí revolucionario, ni aun sistencia.
en las épocas en que este se presentaba Estas consideraciones dejan bien en cla
como mas extendido. Hasta aquellos mis ro que nuestra independencia no corre ries
mos que participaran de ilusiones , van go de recibir ataques de mano armada ; y
volviendo en sí; el escarmiento engen asi nada tenemos que recelar de la Fran
dra en los ánimos el desengaño, y con el cia ni de la Inglaterra; nipara sostenernos
desengaño viene la sensatez , que apre y nos es necesario mendigar el apoyo de
cia los hombres y las cosas en su justo ninguna de estas dos potencias. Todo lo
valor. cual adquirirá mayor fuerza si se advierte,
Tampoco es verdad que la energía de que el contrapeso de las grandes naciones
los españoles haya menguado desde 1808, del norte, contribuye sobre manera á po
hasta el punto que se quiere suponer. Re nernos á cubierto de todo ataque por par
la última guerra de los te de las naciones vecinas ; porque es claro
 142 —
que no pudieran consentir ni el desmem nuamente mezclada en todas las grandes
bramiento del territorio de la Península , cuestiones europeas, de resentirse y aun
ni la sujecion violenta del pabellon español participar vivamente de cualquiera agita
al de Francia ó Inglaterra , sin dar por el cion ó acontecimiento que tuviere lugar en
pié á la obra del equilibrio europeo , para las demas naciones, y de producir á su vez
cuyo sostenimiento se han hecho y se ha estremecimientos ó trastornos en las otras,
cen aun , tan costosos esfuerzos. cuando ella sufra alguna revolucion ó con
Supuesto que la alianza francesa de na siderable mudanza. Si otras circunstancias
da puede servirnos por lo que toca á la no mediaran , bastarían las indicadas para
conservacion de nuestra independencia, demostrar cuan imprudente fuera el man
que es lo que pudiera halagar algun tanto, tener relaciones demasiado íntimas con es
y hasta autorizar ciertos sacrificios, vea ta nacion : en tal caso nuestra conducta se
mos ahora si considerando la cuestion bajo asemejara á la de aquellos hombres indis
otro punto de vista será dable encontrar cretos que pudiendo vivir tranquilos en el
otros motivos que nos impelan á continuar seno de su familia , se entrometen en casa
la obra de Luis XIV. Se está diciendo á agena arrostrando disgustos y esponiéndose
cada paso que brilló en ella el genio de un á perjuicios.
gran rey ; y si mucho no nos engañamos , Las razones arriba expresadas, militan
esto equivale á significar que la Francia tambien con respecto al tiempo anterior á
salió muy gananciosa con la desaparicion la revolucion de 1789 , pero desde aquel
de los Pirineos. Mas como quiera que no colosal acontecimiento , y particularmente
sotros no debemos mirar las cosas bajo el desde la última de 1830 , son tantas y tan
punto de vista de la conveniencia francesa, graves las consideraciones que aconsejan
sino española , es necesario si á la alianza prudente cautela, que en presencia de ellas
se nos quiere inclinar , que se nos mues parecen de poca importancia las que aca
tren las ventajas que de la misma nos han bamos de exponer. Una dinastía nueva , y
resultado, manifestándonos por ahilas que con ella un orden de cosas enteramente
en adelante podrían resultar. Concíbese nuevo , traen siempre consigo complicacio
muy bien que á la Francia separada de la nes tan difíciles, pueden acarrear eventua
Inglaterra solo por un brazo de mar, fron lidades tan varias é imprevistas , que es
teriza al Norte y al Oriente con poderosas menester precaverse con mucho cuidado
naciones , expuesta á menudo á gravísimos contra sus consecuencias.
compromisos, y á conflictos arriesgados La Europa entera ha reconocido los he
por su misma posicion topográfica y por el chos que fueron el resultado de la revolu
estado de las relaciones de las potencias cion de julio ; pero semejante reconoci
europeas , puede interesarle el tener á sus miento no le ha impedido el mantenerse
espaldas un resguardo en la alianza de una en cierta actitud de prevencion y descon
nacion respetable , de carácter leal y gene fianza , cual si temiera , que de un mo
roso ; alianza que en ningun caso podrá mento á otro, no viniesen sucesos inespe
acarrearle daño , ni empeñarla en lances rados á dar á las cosas un sesgo peligroso.
desagradables , antes sí servirle de mucho Y no se crea que siga la Europa esta línea
en las eventualidades de un rompimiento de conducta por motivo de los mayores ó
con el resto de Europa. Pero no es asi por menores simpatías que conserve con la ra
lo tocante á España ; y recorriendo la his ma caida, ni porque dude de las miras pa
toria desde el entronizamiento de la casa cíficas y tendencias conservadoras de la
de Borbon , dudamos que pueda señalarse reinante; en cuanto á lo primero, pesa
un solo hecho en prueba de lo contrario. muy poco en la balanza de la política ac
La España se ha visto repetidas veces em tual de los gabinetes el interes de un indi
peñada en compromisos por motivo de la viduo ni de una familia , para que alcan
Francia ; el pacto de familia nos ha traido cen á recabar tanta consideracion, ni influ
gravísimos males que no han sido compen yan en él curso general de los aconteci
sados por ningun bien. mientos : y por lo que toca á lo segundo ,
Federico el grande decia , que si él se trece años de trabajos y de fatigas en con
hallase rey de Francia, no se dispararía en tener la revolucion , y de concesiones y de
Europa un solo cañonazo sin su permiso : ferencias á los deseos y susceptibilidades de
este pensamiento expresa la necesidad en los gobiernos extrangeros, son prueba na
que se halla aquella nacion de estar conti da inequívoca de que se tiene la voluntad
 — l't
de no permitir en cuanto posible sea , el la ocasion de obrar de otra manera ; y asi
desbordamiento de las ideas revoluciona se mantiene paciente en esta desagradable
rias, y que lejos de pensar en propaganda situacion , sacrificando los unos á las exi
nien resucitar cuestiones resueltas en 181 5, gencias ambiciosas delos otros, para sacri
solo se trata de no perder lo que posee, ficar luego á estos últimos á la ambicion de
añudando lo presente con lo pasado , y es los primeros. ¿Dudais tal vez de la verdad
forzándose en hacer mas y mas respetable y exactitud de lo que se acaba de decir? á
el hecho , haciendo en cuanto cabe olvidar la mano está un medio muy fácil de com
el origen. Infiérese de aquí, que la descon probarlo : contad los muchos ministerios
fianza que abriga la Europa , y tan visible que se suceden, y notad las pocas personas
se presenta ácada oportunidad que se ofre á que los cambios se reducen , y de quie
ce , nace de la misma naturaleza de las co nes procede la influencia.
sas, y de que la Francia está muy lejos de Este hecho revela otro nada lisonjero.
dar sólidas garantías de orden y estabilidad. Estos hombres algo representan , algun
Háblase continuamente de la extraordi motivo existe para que por espacio de tan
naria capacidad de Luis Felipe , de los in tos anos les esté encomendada la suerte de
mensos resultados de su habilidad y previ la Francia; esta situacion algo significa.
sion ; no negaremos al gefe de la nueva ¿Sabeis quiénes son esos hombres? exami
dinastía las eminentes calidades que le hon nadlo, y vereis loque pueden representar,
ran , ni pondremos en duda que la Francia y lo que representan en la realidad. Nos
le debe quizás el no haberse despenado ocuparemos de ellos algunos momentos,
hasta el fondo del abismo hácia donde em nó por lo que son en sí , sino por lo que
pezara á rodar con la revolucion de 1830, expresan , por lo que de este conocimiento
pero si no nos engañamos, los mismos elo podemos inferir para formarnos idea de la
gios tributados á Luis Felipe son un tristí situacion de la Francia ; que si considerar
simo indicio del mal estado social y político los debiéramos en su individualidad, y
en que debe de encontrarse la nacion que atendiendo á que sean estos ó aquellos
aquel monarca gobierna. En efecto : ¿por quienes en la actualidad ejerzan el mando,
qué se pondera tanto su talento? porque ya hemos dicho desde un principio , no ser
ha sostenido el orden : i desgraciado pueblo nuestro ánimo el limitar las miras á un ám
que para sostener el orden necesita un bito tan reducido. Ademas , cuando habla
hombre extraordinario ! mos de las notabilidades influyentes en los
Reflexionando sobrela línea de conducta destinos de aquel pais, no negamos que
seguida por Luis Felipe, notaremos que existan excepciones honrosas; solo trata
todo el secreto se reduce á lo que vulgar mos de los hombres en general , atendien
mente hablando, se llama tiray afloja. Hay do mas bien á la atmósfera en que viven ,
al rededor del trono dos docenas de hom que al pensamiento y voluntad de los indi
bres de principios mas ó menos parecidos , viduos.
pero que divergen un tanto en la aplica ¿Quiénes son esos hombres, que des
cion , como deben diverger por necesidad , de 1830 rigen los destinos de la Francia?
no cabiendo todos juntos en el ministerio. || ¿de dónde vienen? ¿á dónde van? ¿cuáles
Quien se arrima un poco mas ála derecha, son sus principios? ¿cuál la norma de su
quien se inclina un tanto á la izquierda, conducta? ¿cuáles sus lazos con lo pasado,
quien procura mantenerse equilibrado y sus miras sobre lo presente, sus trabajos
aplomado en el centro , quien no contento para las generaciones futuras? ¿represen
de su posicion , pasa de una á otra fila co tan un sistema estable , marchan á un blan
mo villano desertor, quien se coliga con co determinado , tienen sus ojos fijos á lo
opiniones las mas contrarias para el santo que en pos de ellos ha de venir? Descon
objeto de derribar un ministerio con la soladoras reflexiones se agolpan á la mente
piadosa intencion de ocupar las sillas va al proponerse las indicadas cuestiones; tris
cantes; estos hombres por circunstancias tes pensamientos se apoderan del alma al
particulares tienen en su mano los destinos considerar la terrible evidencia con que se
de la Francia ; el rey que los conoce y co manifiestan los funestos resultados acarrea
noce tambien la situacion propia y la del dos á una gran nacion por un siglo de im
pais que gobierna , cree que es necesario piedad, y medio siglo de ensayos revolu
contemporizar, sufrir, tolerar, hasta que á cionarios. Las bases sobre que se asienta
ól , ó á sus hijos, ó nietos, se les ofrezca toda sociedad son los principios religiosos v
 — 144 —
morales , las buenas ideas sobre el poder, cional , la independencia del pais , sus re
y las relaciones legítimas de este con los laciones con el extrangero , son cosas que
subditos. Ahora bien , ¿ qué piensan sobre el público no entiende , son palabras cuya
la religion los hombres que presiden á los interpretacion está exclusivamente sujeta al
destinos de la Francia? para ellos la indi juicio del gobierno y de sus dependientes.
ferencia es un progreso social , para ellos La opinion de este debe ser preferida siem
las naciones han dado un paso inmenso en pre , aun cuando lo contrario sea mas claro
la carrera de la civilizacion , cuando se ha que la luz del sol en el mediodia. Si la Fran
desterrado á Dios de la sociedad , cuando cia ha descendido del rango de nacion de
la ley se ha hecho atea. ¿Qué piensan so primer orden , si contempla humillado su
bre el poder? ¿viene de Dios, dimana de pabellon en España y en Siria, si los gabi
los hombros , se origina de la simple natu netes europeos resuelven las grandes cues
raleza de las cosas? ¿cuáles son las condi tiones sin el voto de la Francia , y á pesar
ciones de su legitimidad ? preguntádselo, y del voto de la Francia, si los comodoros
de todo os hablarán excepto de Dios: la ingleses ejecutan los acuerdos de la Euro-
voluntad del pueblo, la razon pública , la ex ra, asistiendolas flotas francesas á las ope
presion de los intereses procomunales, la nece raciones que destruyen el poder del prote
sidad social, y otros nombres semejantes, gido de la Francia, si en España no se
serán las respuestas que oireis ; y en el fon levanta el dedo sin preceder las insinuacio
do de todo, qué encontrais? nada mas que nes de lord Aberdeen , si no se hace caso
el simple reconocimiento de un hecho ; he de las reclamaciones de las Tullerías, has
cllo que tratan de modificar como mejor ta que en San James se ha dado la señal
les agrada , sobre todo de explotar cual me de que conviene una ligera contemporiza
jor cumple á sus miras é intereses , á su cion ; todo esto en nada se opone al honor,
sed de riquezas, á su ambicion desmedida. á la dignidad, al orgullo de la Francia: un
¿Dónde estan la filosofía, y la historia, y la elocuente discurso pronunciado por Guizot,
humanidad , y el honor de la Francia , y el or y unos cuantos artículos del Diario de los
gullo nacional, y el hermoso porvenir, y tantas Debates , bastan para curar el mal en su
bellas palabras con que durante quince raiz ; y si quedan todavía algunos incrédu
años se halagaban la razon y las pasiones , los que se obstinen en decir que la Francia
inspirándoles fuerte aversion á todo lo pre no ocupa el alto puesto en que la colocaran
sente , y preparando la explosion que ha Luis XIV y Napoleon , oigan el concluyen-
bia de volcar el antiguo poder, por el altí te argumento de los elogios que tributan á
simo motivo de que en él no tenian cabida cada instante en presencia de la Europa
algunos periodistas , unos cuantos profeso entera , los desinteresados ministros ingle
res, y cierto número de comerciantes y ses á la política modesta del gobierno frances.
banqueros? Cambiadas las condiciones de Hé aqui lo que son esos hombres, hé
los hombres , es un mal lo que antes era aqui las manos á que está encomendada la
un bien ; es un bien , y un bien necesario á suerte de la Francia , hé aqui la situacion
la conservacion de la sociedad , lo que an lamentable á que se halla conducida una
tes fuera un horrendo crimen. Antes la gran nacion, merced á los que derribando
prensa era la voz del pueblo , el eco de la todo lo existente sin edificar nada nuevo
nacion entera, el órgano de la razon pú que ofreciese suficientes garantías de esta
blica , la expresion de los intereses mas le bilidad y duracion, han dejado la sociedad
gítimos , el clamor de las necesidades mas como casa cimentada sobre la arena , ex
urgentes ; el poder que la desoyera se ha puesta á caer á la primera arremetida de
cia reo de alta traicion , digno de que se le los vientos.
arrojara con violencia é ignominia ; ahora Esos hombres gobiernan la Francia, por
es la prensa el alarido de las pasiones bas que en algun modo representan la Francia.
tardas , el grito de la ambicion chasqueada, Ellos son hijos de la revolucion , y discípu
el respiradero de las sociedades secretas que los mas ó menos encubiertos de "la escuela
solo se proponen provocar horrorosos tras filosófica del pasado siglo ; y la Francia tal
tornos; el poder que la desoye hace un acto como existe , es tambien hija de la revolu
de heroica firmeza , los hombres que se le cion , y formada tambien en buena parte
vantan á la altura conveniente sabiendo en la misma escuela ; ellos profesan odio á
despreciarla , son los únicos dignos del tí todo lo antiguo , y gran parte de la Fran
tulo de hpmbres de estado ; el honor na cia ha cambiado tambien de ideas y eos
 — 145
lumbres, apartándose del camino que si de una nacion , que por su posicion topo
guieran sus antepasados; ellos no se atre gráfica , y por sus revoluciones tan recien
ven á sacar todas las consecuencias de los tes, puede verle gravemente comprometi
principios que profesan , y la Francia tam do; ya sea por el curso ordinario de las
poco se atreve á hacerlo, tambien retroce cosas, ya por algun acontecimiento impre
de espantada á la vista del fantasma ater visto, que obrando, ó bien directamente
rador que amenaza arrebatarle su bienestar sobre la Francia , ó sobre el resto de Eu
material , destruyendo el orden público ; ropa , cambiase la presente situacion , é hi
ellos
sente desean
con lo enlazar
pasado,ensinapariencia
abjurar empero
lo pre-- ciese imposible la duracion de esc slalu quo
que tan penosamente se prolonga. La guer
sus erróneas doctrinas; la Francia se incli ra de los Estados-Unidos , la batalla de
na tambien á rehabilitar los siglos anterio Trafalgar , la espedicion del marques de la
res, en la literatura, en las ciencias, en Romana, son hechos que conviene no echar
las artes, á manera de distraccion y pasa en olvido.
tiempo , no concediéndoles empero sino un A pesar de la mucha sagacidad y pa
lugar muy secundario en las regiones del ciencia del monarca reinante , hemos visto
entendimiento , mas nó ascendiente sobre mas de una vez bastante cercano el peligro
el corazon ; ellos están inciertos , la Fran de un rompimiento ; estos peligros volve
cia está incierta : ellos fluctuan , la Francia rán á presentarse , porque están pendien
fluctua tambien ; ellos no piensan en el dia tes gravísimos negocios, cuya complicacion
de mañana porque los ocupa el dia de hoy; los puede acarrear. Supóngase que la lu
ellos descuidan la gloria nacional y se ocu cha se traba en las mágenes del Rhin, ya
pan principalmente de los intereses mate sea que la Francia quiera desbordarse, ya
riales, y en esto imitan á la Francia que sea que los ejércitos aliados intenten mar
trabajada y maleada por una filosofía irre char de nuevo sobre Paris; ¿cuáles serian
ligiosa , ha visto entronizar en su seno el para nosotros las consecuencias de seme
egoismo , que no conoce otros medios que jantes acontecimientos? claro es, que todo
el oro , ni otro fin que el goce. Nó , no dependería de la actitud que hubiésemos
tienen la culpa los gobernantes, si aquella tomado con respecto á la nacion vecina.
nacion desciende del alto puesto que le cor Si tuviésemos con ella alianzas , pactos de
responde. En trece años de paz, con un familia, ó relaciones demasiado íntimas por
gobierno representativo de tanta latitud, la un motivo cualquiera , se nos baria en ex
prensa libre, la guardia nacional, un nu tremo difícil, si nó imposible, conservar la
meroso ejército , con un monarca de alta neutralidad ; y nos halláramos precisados á
capacidad , no es posible que prevalezca una pelear por intereses que no fueran los nues
política que no esté adaptada á las circuns tros. Todos los recursos terrestres y marí
tancias del pais, no es dable que se sosten timos, los consumiríamos inúltimente con
gan en el poder unos hombres, si existen el desprendimiento que caracteriza el leal
otros que posean un sistema mejor , y que y generoso carácter de los españoles; y
al mismo tiempo sea realizable. La Francia ¿para qué? quizás para recoger en recom
sufre esa política , porque la merece. pensa la mas negra ingratitud.
Ahora bien . ¿qué ventajas puede acar Al contrario, si sabemos mantenernos
rearnos la íntima alianza con una nacion en la actitud que nos corresponde , si pro
que en tal estado se encuentre? ¿Qué fruto curamos conservar con la Francia las rela
debemos prometernos de la desaparicion de ciones de buena vecindad , sin otorgarle
los Pirineos? Es evidente que el único re empero ninguna influencia en nuestros ne
sultado probable, fuera el contraer com gocios, ni ligar nuestros intereses con los
promisos que podemos evitar muy bien , y suyos , entonces la neutralidad se nos haria
el de introducírsenos mas y mas la manía no solo posible , sino fácil , natural , y en
de gobernarnos á la francesa. Ambos ex cierto modo necesaria. Colocados á larga
tremos , nos serian sumamente dañosos ; distancia del campo de batalla , y á las es
afectando el uno nuestras relaciones inter paldas de la misma nacion que en tal caso
nacionales, y atacando el otro la organiza fuera ó invadida ó invasora , pudiéramos
cion social y política. señalar razones gravísimas que nos aconse
Por lo que toca á lo primero , claro es jarian el abstenernos de tomar parte en la
que pudiera traernos males de mucha tras contienda , y satisfacer de esta suerte á las
cendencia el ligar nuestro porvenir con el incitaciones que para empeñarnos en la lu-
tomo i. 10
 — m —
cha noscomunicacion
cuente dirigieran las de
demas
los potencias.
naturales deLa ra francesa sobre la española , y otras cau
posicion peninsular y en el último extremo sas análogas , reunidas á tradiciones y há
de Europa , si bien bajo ciertos aspectos bitos arraigados en nuestro suelo desde el
quizás no nos es favorable , puede no obs advenimiento de la casa de Uorbon , pre
tante servirnos mucho para observar esa disponen demasiado las cosas para hacer
conducta neutral (pie tanto nos interesa , y nos ciegos imitadores de la Francia , apli
para librarnos de que á los daños sufridos cando sin tino y discernimiento lo que allí
por tan dilatados trastornos, no se agrega vemos, sin reparar en la profunda diferen
sen nuevos conflictos traidos por las com cia que media entre nuestra civilizacion y
plicaciones que pueden sobrevenir , y que la del reino vecino.
á no dudarlo sobrevendrán en el continente. A primera vista el español que visita la
La España, si bien debe procurar alzar Francia y estudia su organizacion adminis
se de nuevo al rango que le corresponde trativa, quédase agradablemente sorpren
entre las grandes naciones, ha de guar dido al contemplarla admirable regularidad
darse con cuidado de tomar parte en los con que funciona aquella inmensa y com
negocios que no le interesan ; aun cuando plicada máquina que lleva el sello del ge
el recobro de su antiguo poderío le brin nio , y conserva todavía las señales de la
dase con oportunidades halagüeñas. Justo férrea mano que la construyó y le dio mo
era y muy natural , que la nacion que po vimiento. La centralizacion por la cual to
seia dilatadas provincias en Italia , y en el do sale de un punto, y converge al mismo,
norte de Europa , se hallase tambien mez es una de las calidades que mas deslum-
clada en todas las grandes cuestiones con lumbran al observador ; y como las ideas
tinentales , apoyando con respetables ejér de unidad y de orden ejercen tanto ascen
citos las negociaciones desus diplomáticos; diente sobre los espíritus capaces de abar
pero ceñidos como en la actualidad nos ha car grandes conjuntos , se pega fácilmente
llamos á nuestros límites naturales , y qui á los hombres de gobierno la manía de ar
zás con grandes ventajas para nuestro reglarlo todo conforme al Upo admirado.
sosiego y prosperidad ; ¿ por qué nos mez Asi se inclinan fácilmente á soñar muy ha
claríamos en las cuestiones europeas que cedero lo que es imposible , y á considerar
en nada afectan nuestros intereses? Enho como muy útil loque tal vezfuera dañoso.
rabuena que la Inglaterra, la Francia, el Dos naciones se distinguen en Europa
Austria , la Prusia , la Rusia, arrostren gra por la centralizacion y unidad administra
ves compromisos para hacer que prevalezcan tivas; la Francia y la Prusia; ambas suelen
su opinion y voluntad en la resolucion de ser citadas como modelos, sin advertir que
los negocios que forman el objeto de la di las dos han estado sometidas á condiciones
plomacia europea; no es de estrañar que excepcionales , que no se han verificado en
cada cual procure entrometerse en los asun ninguna otra , y en España menos que en
tos que le importan muy de cerca , en cuyo las demas. La Prusia es una fundacion mi
caso se encuentran las indicadas naciones; litar en un pais civilizado, como la Rusia
pero nosotros que nada tenemos que ver lo fué en un pais bárbaro ; siendo tal vez
con la Alemania, ni con la Polonia, ni con esta diferencia la que da tan distintos ca-
la Italia, ni con la Siria, ni con el Egipto, ractéres á Federico y á Pedro I. Es verdad
ni con la India, ¿no cometeríamos la ma que la Francia no se ha creado de esta
yor imprudencia si no procurásemos con suerte , y que su monarquía cuenta 14 si
servarnos en estricta neutralidad , y pre glos de duracion , pero esta larga cadena se
cavernos ya de antemano de compromisos ha roto; la. union de lo presente con lo pa
ulteriores , apartándonos en la actuali sado es solo aparente ; la Francia actual es
dad de alianzas y amistades que pudieran una nacion nueva. Con la inauguracion de
traérnoslos ? la asamblea constituyente se confundieron
Por lo que toca á los efectos que nos en indecible caos todos los elementos cons
produciría en lo interior una relacion de titutivos de la sociedad antigua , combinán
masiado íntima con la Francia , que ten dose para aumentar la confusion , los que
diese á asimilar las dos naciones , creemos se presentaban para formar la moderna.
que fueran tambien sumamente dañosos. Contrarios como eran, y enemigos irrecon
Por desgracia , la misma vecindad , la fre ciliables, incapaces por de pronto de tran
ambos paises, el ascendiente de la literatu- II sigir,
grienta.
trabóse
Fué una
necesario
lucha desapiadada
por decirloy san-
asi ,
 — 1 Í7haga
— preciso deshacer, consumiendo inútil
tomar en manos todos los elementos, y ar
rojarlos en un crisol paraqne- disueltos con mente recursos y malgastando un tiempo
el fuego se amalgamasen y llegasen á for precioso.
mar un todo. Esta es la obra de la Con Y á la verdad, ¿sería posible plantear
vencion. Bouapartc la recibió de sus manos en nuestro suelo una centralizacion seme
en bruto; pero fundida ya: todo su traba jante á la do Francia? ¿hállanse en España
jo consistió en pulirla y cincelarla. Napo las mismas condiciones que facilitaron y
leon pudo establecer lo que quiso , porque prepararon en el pais vecino , el estableci
nada ex istia de lo antiguo, ni era posible miento de aquel sistema? es evidente que
restaurarlo en su forma primitiva. El nue nó. La revolucion que pasó sobre aquel
vo edificio nunca se levanta con mas uni pais con terrible fuerza arrolladora , ha si
dad y regularidad de plan , que cuando el do entre nosotros un fenómeno débil , que
viejo se ha derribado hasta los cimientos. solo ha podido destruir á fuerza de largo
En situacion semejante, la centralizacion tiempo, mas bien con el auxilio de estre
es no solo posible , sino necesaria , so pena mecimientos repetidos , que no á impulso
de perecer lasociedad. Cuando los vínculos de rudos é irresistibles golpes. En Francia
sociales han desaparecido , natural es que la revolucion pudo obrar con fuerza propia,
se busque un medio de suplir su falta. La sin necesidad del trono, antes bien comen
administracion vigorosa y una , es entonces zó por derribarlo ; en España , la revolu
un poderoso recurso; asi como en los ejér cion ha sido débil , siempre que no se ha
citos se hace tanto mas indispensable la se guarecido á la sombra del mismo trono;
veridad de la disciplina , cuanto son mas cuando no se ha combinado con ella un in
numerosos, mas heterogéneos en sus par teres dinástico ha perecido en breve; solo
tes, cuanto mas expuestos están á la in ha podido alcanzar el triunfo cuando ha sa
fluencia de elementos disolventes, cuanto bido tomar el título de defensora del trono
mas críticas son las circunstancias que los de la excelsa Hija de cien reyes. ¿Qué es
rodean , haciendo mas peligrosa la insu una revolucion , que necesita obrar por
bordinacion. medio de reales órdenes?
Una de las diferencias capitales entre la Échase de ver por ahi que nuestro esta
España y la Francia , consiste en que allí do social y político es muy diferente del en
la fuerza se halla en el estado , aqui en la que se encontraba la Francia al salir de su
sociedad ; allí la administracion es lo prin colosal revolucion de 1780; y que por tan
cipal , aqui lo accesorio; allí casi podría de to fuera grave desacuerdo tomar por pauta
cirse que la sociedad se conserva interina lo que alli se hizo , cuando se trate de
mente por la fuerza de la administracion , plantear el nuevo sistema , que la lenta
aqui se conserva y se salva , apesar de la descomposicion del antiguo ha hecho en
ausencia de todo sistema administrativo. Si cierta manera indispensable.
fuera posible que la Francia se hallase al No abrigamos contra la Francia preven
gunos dias con una minoría, con una re ciones injustas; y nos parece muy agenode
gencia de breve plazo, con gobernantes la razon y de la imparcialidad , el rencor
desacreditados, y con el desorden total que que le profesan ciertos hombres ; de la pro
á nosotros nos aqueja , sumi ríase de repen pia suerte juzgaríamos si se tratase de otra
te en una nueva revolucion cuyas últimas nacion cualquiera , pues que no creemos
consecuencias no se divisan. que ningun pueblo en masa sea digno de
Con las observaciones que preceden , no aversion. Pero es preciso tener en cuenta
intentamos elogiar ni vituperar á ninguna una muchedumbre de circunstancias aten
de las dos naciones; sino hacer sentir la in diendo á los resultados que pueden produ
mensa distancia que las separa , y ofrecer cir, para inclinarse mas ó menos á deter
pábulo á la reflexion de los hombres pen minadas alianzas. Y como-queria que el
sadores, que con la mejor buena fé podrían estado político de la Francia nos parezca
creer factible lo que en la práctica encon poco satisfactorio , y mucho menos todavía
trarían irrealizable. Quisiéramos que apro el social, es de aqui que consideramos muy
vechándose lo bueno que haya en el pais dañoso para la España el que resucitando
vecino y que sea aplicable al nuestro , se una política que en la actualidad no podría
desterrase la peligrosa manía de pretender justificarse
can relaciones
por demasiado
ningun título,
íntimassecon
establcz-
aque "
que cosas tan diferentes se asimilen del to
do ; y que no se dieran pasos que luego se lla nacion. Ora procediesen estas del enlace
 — 148 —
de S. M. la Reina con un príncipe de la Isabel , de Carlos V, de Felipe II , le de
dinastía de Orleans, ora dimanasen sim seamos otra suerte; y por muchas quesean
plemente de un sistema político, las consi las dificultades que en la actualidad la ro
deraríamos siempre como nocivas ; y tanto dean , no miramos como imposible un gran
destructible.
mas , cuanto seTalfundasen
seria unen casamiento
un hecho in-
de dioso porvenir, nuestro único consuelo en
medio de tanto infortunio. Nó , no creemos
Isabel II con uno de los hijos del monarca que nuestra prosperidad dependa de alian
reinante. zas de ninguna clase, ni de imitaciones
Al parecer no faltan algunos que á esto rastreras; hay todavía en la nacion un fon
se inclinan , creyendo sin duda que con do -de vida , de fuerza , de energía , que
apoyo tan poderoso , y con las buenas cali explotado y dirigido cual conviene , puede
dades que se suponen á los candidatos, ob de nuevo levantarla al alto rango que le
tendríamos una prenda de estabilidad y de corresponde.
buen gobierno. Sin disputar ninguna de di Otras veces lo hemos dicho y lo repeti
chas calidades , de las que por decirlo de mos aqui : á esta sociedad no le faltan ele
paso , no fiamos mucho hasta que se hayan mentos de buen gobierno, tiénelos quizás
probado con la piedra de toque de la expe en tanta abundancia como cualquier otro
riencia , parece que los partidarios de se pueblo de Europa ; pero echa menos una
mejante enlace no han meditado bastante feliz combinacion de circunstancias en que
sobre sus resultados. pueda hallarse un punto donde se reunan
Ante todo , es muy probable y casi cier y armonizen los muchos elementos de bien
to , que no lo permitirían ni la Inglaterra que posee. Cuando esto se verifique , no se
ni las potencias del norte, y si por medios hará esperar mucho un gobierno verdade
imprevistos allanarse pudiera tamano obs ramente nacional. Hemos oido repetidas ve
táculo , lejos de alcanzar así un principio ces que en España es imposible un buen
de estabilidad lo tendríamos de incertidum- gobierno ; y que ese desorden en que hace
bre y vaivenes ; pues que se combinarían tantos años nos hallamos sumidos , es una
para producirlos , la rivalidad de la Ingla dolencia que no es dable remediar; desco
terra , y los riesgos á que está sujeta y lo nocemos los fundamentos en que se apoya
estará por mucho tiempo , la dinastía de esta opinion, pero nosparecc que entra en
Orleans. ella no poco de aquel abatimiento que pre
Si la intimidad de dichas relaciones es senta los objetos mas tristes de lo que son
tribase en la semejanza de conducta de am en la realidad. Entretanto, es de la mayor
bos gobiernos, la consideraríamos tan da importancia el nutrir y fomentar en los
ñosa como el principio en que se fundaría; ánimos , este presentimiento de tiempos
que para nuestra patria no deseamos un mas felices; conviene no atajar el vuelo
gobierno de miedo , que ni se atreva á ser que á ellos nos impulsa , haciendo mediar
revolucionario , ni á defender las grandes protectorados de ninguna clase. La Ingla
tradiciones nacionales , que se límite á un terra y la Francia , sean para nosotros una
reducido número de ambiciosos cuyas ha misma cosa : interesados extrangeros cuya
zañas consistan en derribar á sus rivales amistad no nos traerá ningun bien , y nos
por medio de intrigas, y cuyos grandes puede acarrear muchos males. No consin
pensamientos de estado consistan en com tamos en servir de campo , donde por me
binar una mayoría á fuerza de brindar con dio de intrigas, se disputen la preferencia.
los atractivos de que nunca están faltos los La arena desus rivalidades que la establez
que disponen de todos los recursos de una can en otro lugar ; y en lo que directamen
gran nacion ; que halague por una parte á te nos pertenezca , sostengamos nuestro
la religion de la mayoría de los goberna derecho con decoro, pero con dignidad y
dos, y sostenga de otra á los encarnizados firmeza. No olvidemos en todos los conflic
enemigos de la misma; que se apellide con tos que ofrecerse puedan , que las amena
servador porque conserva lo que hay, for zas de una ni de otra, de amenazas no han
mando gran porcion de estas exigencias, de pasar: que si pasasen , nunca se muestra
los empleos, los honores, las condecora mas grande el pueblo español que cuando
ciones, y sobre todo los pingües sueldos de pelea.—J. B.
unos cuantos hombres que se juegan la na
cion á dados, por valernos de la energica
expresion de Mirabeau. A la monarquía de
 149 —¿ lis saludable el aumento de la pobla
cion? no creemos que á esta pregunta pue
LA P0BLACI01T. da responderse sin hacer algunas distincio
nes. Si la poblacion nueva ha de escasear
del alimento necesario, si ha de carecer de
los medios para recibir la competente edu
cacion , y por consiguiente, si aumentán
dose la poblacion , deben aumentarse pro-
Artículo i.° porcionalmente la miseria y la inmoralidad,
es decir los males del cuerpo y los del es
píritu , entonces mejor será que no haya
tal incremento ; pues que hombres misera
La poblacion: hé aquí uno de los objetos bles y malos, mejor fuera que no hubieran
mas difíciles que ofrecerse puedan á la nacido, ya atendiendo al bien de la socie
ciencia. - ¿ Cuáles son las leyes de su au dad , ya al de esos mismos infelices, En lo
mento ó disminucion? ¿cuáles los efectos dicho, se hallan acordes la razon y la reli
que produce , segun el modo con que se gion ; pues que á una existencia que no
multiplica? hé aquí dos cuestiones á cual trae sino daño al mismo que la tiene y
mas interesantes, y que sin embargo están á los demás, es preferible la no exis
muy lejos de haber alcanzado una solucion tencia.
completa. Los economistas modernos se No es necesario elevarse á consideracio
han dividido en este punto como en tantos nes de alta filosofía, para comprender la
otros; asentando cada cual ciertos princi verdad de estas observaciones ; basta el
pios, á los que en su opinion estaban su simple buen sentido. ¿Qué dice un hombre
bordinadas la naturaleza y la sociedad. cuerdo al oir que trata de contraer matri
Antes de manifestar nuestras opiniones so monio un individuo pobre, y díscolo por
bre este punto , se hace necesario dar una añadidura? « Esto es aumentar el número
ojeada á alguno de estos sistemas, paraque de los desgraciados , es un germen de ma
conociendo los errores y equivocaciones de les para la sociedad; ¿qué provechos pue
los otros , sea mas fácil al tantear otro ca den resultar de que tenga hijos un infeliz
mino, encontrar la deseada verdad. que solo puede darles dos consejeros tan
L'n distinguido economista español, el pésimos, como son hambre y escándalo?»
Sr. D. Kamon de la Sagra, observa' con Resulta de esto, que no puede establecerse
mucha exactitud que se encuentran en esta en general que el aumento de la poblacion
materia dos opiniones directamente opues sea un bien ; pues que aun cuando no me
tas : la primera que cuenta entre sus de diaran otras consideraciones, las preceden
fensores á Montesquieu, Necker, Mirabeau, tes bastarían para convencer que en ciertos
Adam, Smith, Everett, Morel de Yhidé, casos es un mal, y mal gravísimo.
sostiene que la fuerza y riqueza de los es No siempre se verificará que el resultado
tados son proporcionales al aumento de la probable del aumento de la poblacion se
poblacion , por considerar á esta como un presente con tanta claridad y limpieza co
elemento productor. La otra que defien mo en la hipótesis anterior ; pero de pro
den Ortés, Ricci, Franklin , J. Stervart, pósito hemos escogido un extremo paraque
Arthur-Young, Towesend, Malthus, J. B. nos sirviese de norma, pudiendo graduar
Say , Ricardo , Destutt de Tracy , Droz, con respecto á él , lo mas ó menos bueno ó
Duchatcl, Blanqui, Sismondi, de Coux, malo (pie será el aumento de la poblacion,
(iodwin , consideran el aumento de la po segun tienda mas ó menos á producir aquel
blacion como un verdadero mal ; y asi le funesto efecto. Casos hay en que el resul
jos de buscar medios para acrecentarla in tado pernicioso no se palpará inmediata
definidamente , los excogitan para detener mente ; y entonces toca á la prudencia del
su excesivo desarrollo. De una y otra parte legislador, ó de aquellos que por cualquier
es posible que baya error , como suele título ejerzan influencia sobre la sociedad,
acontecer siempre que se trata de opinio el precaver á tiempo el daño ; no promo
nes extremas. Lo que importa es lijar el viendo imprudentemente un desarrollo pro
estado de la cuestion ; que segun como se gresivo, antes impidiéndolo por medios ra
la presenta , es tan sencilla que apenas ad cionales, legítimos, y sobre todo morales.
mite dificultad. Cuando por ejemplo , un pais agricultor
 — íoO —
se halla satnrado de poblacion sin que sea los medios de subsistencia , la poblacion ha
dable aumentar el producto de las tierras, crecido asombrosamente; pero no lo es
¿nó dicta la prudencia que se procure menos que en Irlanda donde el hambre
mantenerla estacionaria , si para ello hay devora anualmente millares de víctimas, la
algun medio? ¿no fuera insensato el em multiplicacion ha continuado de una mane
peño de aumentar el número de los hom ra notable, contribuyendo este fenómeno á
bres , para aumentar en la misma propor agravar los males que afligen aquel infor
cion el de los infelices? Hállase entonces la tunado pais. ¿Cómo es que la poblacion no
sociedad en el mismo , mismísimo caso de se haya disminuido basta nivelarse con los
una familia , que teniendo los recursos ne medios de subsistencia? Ni vale el replicar
cesarios para \ i\\r con decencia y comodi que estos medios existen , pero escasos y
dad , desease una desmedida multiplicacion groseros ; pues que á mas que esto es falso,
de sus individuos, hasta el punto de no como lo demuestran los que perecen de
sufragar para su subsistencia los medios de hambre, esta reflexion podria servir para
que dispone. No creemos que á verdades probar (pie en todos los paises del mundo
tan sencillas y tan claras pueda oponerse la poblacion ha de multiplicarse como en
nada sólido ni razonable siquiera. La natu 1rlanda , dado que no hay ninguno habita
raleza ofrece á la humanidad un magnífico do . del cual no pudiese decirse lo mismo.
banquete ; pero sujeto á ciertos límites , á Es necesario tambien observar , que al
ciertas condiciones ; si aumentamos indis tratarse de medios de subsistencia , no se
cretamente en este ó aquel punto el nú habla tan solo del alimento indispensable
mero de los convidados , nuestra será la para la precisa conserv acion ; sino que se
culpa cuando la escasez produzca efectos comprende en esta palabra, todo cuanto el
desagradables. individuó necesita, no solo para no morir
Infiérese de lo dicho, que no pudiendo se de miseria , sino para v ivir con algun
establecerse en tésis general que el aumen desahogo y comodidad. El vestido, la ha
to de la poblacion sea saludable ó dañoso, bitacion , los medios para curarse en las
pues que traerá bienes ó males segun la enfermedades , son cosas que la subsisten
.suerte que haya de caber á los nuevos in cia del hombre ha menester; y cuando es
dividuos, y los efectos que produzca sobre tas falten ó escaseen, no puede decirse con
los existentes anteriormente, lo que prin propiedad que tenga lo necesario para sub
cipalmente debe investigarse es cuales se sistir. Entre perecer de hambre ó andar
rán esta suerte y estos efectos , dado que desnudo , y el vivir cual conviene para
una vez resuelta la segunda cuestion , lo conservar la salud , las fuerzas y la ener
quedará tambien la primera. gía , hay una extensa escala en la cual se
Los economistas que como acabamos de hallan distribuidos los necesitados. Verdad
ver , no han sabido convenirse en lo con es que no puede señalarse á punto fijo,
cerniente á la utilidad ó á los perjuicios cuando llegan las privaciones al límite de
que acarrea el aumento de la poblacion, que no puedan pasar ; pero hay un cierto
tampoco han acertado hasta ahora , á se espacio en que la prudencia no se equivo
ñalar un principio que pudiese servirnos ca, cuando las conceptúa dañosas, colo
de regla segura para conocer la ley á que cando al que las padece en la clase de
están sometidos, ni ese aumento ni el de aquellos de quienes puede afirmarse que
crcmento. Se ha dicho repetidas veces que no tienen los medios de subsistencia.
la poblacion es proporcional con los medios El principio que estamos analizando,
de subsistencia; de lo que se inferiría que adolece del inconveniente de todos los de
donde estos abundan , debe aquella crecer masiado generales; en los que acontece
basta tocar el limite que los mismos le pres muy á menudo, que aun cuando parezcan
criben; y que en menguando estos, debe muy verdaderos , si se los considera en
tambien ella disminuirse hasta que se esta abstracto, al probarlos con la piedra de to
blezca el correspondiente equilibrio. que de la experiencia, resultan ó falsos del
A primera vista,. nada mas sencillo, ni todo, ó al menos muy inexactos. Escierto,
mas especioso que aquel principio; pero que si para determinar la ley que rige en
en la realidad no parece que pueda soste el aumento ó decremento de la poblacion,
nerse, al menos sin algunas limitaciones. atendemos tan solo á los medios de conser
Es "cierto, que en los Estados-Unidos don- varse, se presentará el indicado principio
do por largo tiempo han sobreabundado como indisputable; pero si reQeiiouauios,
 — lo
que no solo debe tenerse en cuenta la con 1dientes,
— no deja de poder conducir á re
servacion sino el número de los nacimien sultados generales. De la propia suerte que
tos, y que este depende de muchas causas para conocer bien la naturaleza de un
independientes de los mayores ó menores cuerpo es necesario descomponerle en sus
medios de subsistencia , echaremos de ver partes y elementos, asi en el estudio de la
que abundando de esos medios puede no sociedad es preciso no descuidar un riguro
verificarse un aumento tan grande como so análisis de los individuos y familias. Las
seria de esperar ; y que escaseando , es da leyes de la naturaleza suelen ser muy sen
ble que concurran otras circunstancias que cillas ; no pocas veces nos las hacemos in-
impidan al decremento el llegar al punto visibles, á fuerza de sutilizar y cavilar.
que seria menester, si cumplirse debiera la Este olvido ha extendido sus efectos no
proporcion contenida en dicho principio. tan solo por lo respectivo á la investigacion
La verdad de las observaciones que pre de la ley que rige en el aumento ó decrc
ceden puede demostrarse de varias mane mento de la poblacion , sino tambien en lo
ras : pero escogeremos los argumentos mas tocante á saber si aquel era siempre pro
sencillos, y por tanto mas convenientes. vechoso ó no. En efecto : para demostrar
Vemos á cada paso que familias pobres en las ventajas de una poblacion numerosa se
extremo, abundan de hijos, mientras otras ha dicho ; « Ved esa Francia , esa Inglater
que disfrutan de pingüe fortuna , ó no tie ra , donde los habitantes no caben en el
nen ninguno , ó los cuentan en número pais, cuan ricas y poderosas se ostentan.
muy reducido. Aqui se presenta un ejem Los talleres rebosan de operarios, los cam
plo muy obvio para evidenciar que es cuan pos abundan de labradores, á todas las
do menos inexacto el decir que el aumento carreras les sobran los hombres ; ¿ no es
de la poblacion sea proporcional con los esto una prueba evidente de que la prospe
medios de subsistencia; pues que cueste ridad y la ventura de un pais está en pro
caso no se hallan en razon directa, sino en porcion con el número de sus moradores?
inversa. Si se objetare que esto no sucede Suponed por un momento que á las indica
rá generalmente hablando, y que los efec das naciones, y á otras que se hallan en el
tos de una que otra excepcion quedarán mismo caso , les falta una parte de su po
compensados con el curso regular de la to blacion ; bien pronto veréis yermas las mas
talidad, responderemos dos cosas: 1." que hermosas campiñas, desiertos los estable
dudamos mucho de que esto sea una ex cimientos fabriles, escasas de concurrentes
cepcion rara, antes la creemos muy fre las profesiones todas; es decir que la socie
cuente; y que tal vez podria decirse que dad perderá su vida , el estado su nervio;
la excepcion está en el sentido contrario ; y cayendo rápidamente del alto punto de
2.° : que por mas general que sea la regla, esplendor y de pujanza en que ahora se
y aun cuando fueran no muy comunes las encuentran , vendrán á colocarse en el ni
excepciones, siempre deberían tenerse en vel de aquellas, donde la falta de hombres
cuenta para averiguar, cuales serán los ha producido de mucho antes los mismos
casos en que resultará fallido el principio; deplorables efectos.
pues que es evidente que suponiendo una Fácil es, y muy peligroso en semejantes
sociedad en que se reunan circunstancias materias , el confundir las causas con los
análogas á las que producen en una fami efectos, y viceversa; el suponer íntimas
lia el aumento en desproporcion con los relaciones entre fenómenos que en la rea
medios de subsistencia, se verificará de lidad 'no tienen ninguna ; y trastornar de
una manera semejante en aquella lo que tal modo las ideas, (pie bajo la apariencia
acontece en esta. de discursos los mejor trabados y mas exac
Quizás en estas materias el gusto de mi tos, no se viertan mas que palabras sin
rar las cosas en grande, calculando por los sentido. Esto se verifica sin duda en la plá
resultados que ofrecen las colecciones de tica que acabamos de suponer en boca de
muchos datos, datos siempre sospechosos los partidarios de una multiplicacion ilimi
de inexactitud, ha hecho que se descuidase tada, y sostenedores de que la fuerza y la
en demasía el análisis de lo que sucede en felicidad de las naciones están siempre en
cada familia ; lo que si bien mas sencillo y proporcion con el número de sus indivi
aislado, tiene en cambio la ventaja de ser duos. > v
mas susceptible de una observacion minu Por de pronto se padece en este caso una
ciosa ; y con las modificaciones correspon- equivocacion , confundiendo la sociedad
 152 —
con el estado : cosas de suyo muy diferen masen parte de la sociedad, y que por
tes. Bajo el nombre de sociedad entende consiguiente, el medir la desdicha de esta
mos el conjunto de los individuos que com por la que sufrían aquellos, es sacar la
ponen una nacion , considerándolos con sus cuestion de su propio terreno. Pero fácil
necesidades. La palabra estado, significa mente se conoce , que con esta réplica tan
una cosa muy distinta ; pues que haciendo lejos está de desvirtuarse lo que acabamos
abstraccion de la situacion intelectual , mo de establecer, que antes bien se confirma
ral y material de los individuos, expresa mas y mas. En efecto : por lo mismo que
propiamente hablando, la organizacion po no se consideraba á esos infelices como
lítica y administrativa, es decir, el conjun miembros de la sociedad , por lo mismo
to de medios de gobernar y administrar; ó que apesar de que trabajaban en provecho
en otros términos , estado significa la socie de ella , no participaban del fruto de sus
dad , no considerada en sí , sino en cuanto sudores, sino lo indispensable para que
funciona como un cuerpo moral, ora sea subsistiendo pudiesen derramarlos con mas
en sus relaciones con los mismos miem abundancia, por lo mismo que siendo hom
bros que la componen , ora con respecto á bres como los demás, iguales á ellos por
otras sociedades. las dotes de la naturaleza, eran no obstan
Asentada esta diferencia que nunca debe te equiparados con los brutos, por esto
perderse de vista, es claro que puede mismo repetimos, se hace mas patente que
acontecer muy bien que una sociedad con la sociedad era desgraciada por mas ven
siderada simplemente como tal, se halle turoso y pujante que se hallara el estado.
decadente y desgraciada, mientras sea prós Si por sociedad se ha de entender el con
pera y feliz, considerada como estado. Si junto de hombres que en ella viven, ¿có
el poder público tiene mucha fuerza, si el mo se podrá apellidarla feliz , mientras la
erario abunda de caudales, si el ejercito es mayor parte de estos arrastren una exis
numeroso , disciplinado y aguerrido , si las tencia agobiada con todo linage de infortu
leyes son robustas y respetadas , si el influ nio? Para disminuir la negrura del hecho
jo sobre las otras potencias es extenso , ar ¿bastará alegar que no se los contaba co
raigado y bien sostenido , el estado es sin mo miembros de la sociedad? ¿cambian los
duda alguna próspero y feliz; ¿pero sigue nombres la realidad de las cosas?
se de esto que la sociedad deba serlo en la Pero , no es solo la esclavitud lo que en
misma proporcion? Es cierto que nó: y en las antiguas civilizaciones hacia que á pe
apoyo de esta verdad están historia y la sar de la prosperidad del estado no pudiese
experiencia, llamarse feliz la sociedad. ¿Ignórase el en
En las civilizaciones antiguas, existieron vilecimiento en que se encontraban, los
estados que se hallaban en la ventajosa si que , aun cuando no gimiesen en la escla
tuacion que acabamos de describir : pres vitud , se veian en la necesidad de ejercer
cindiendo de los reinos de Oriente y de los oficios mecánicos? Aristóteles oráculo de la
de Egipto, ahí están, la Grecia, Cartago y filosofía pagana , y en cuyas obras se refle
lioma , y sin embargo de ninguna de aque ja todo el pensamiento que animaba las ci
llas naciones , aun refiriéndonos á las épo vilizaciones antiguas , considera como des
cas de mayor pujanza y ventura, se pudie preciables y viles las indicadas profesiones;
ra decir que la sociedad era próspera y fe y no etorga el título de ciudadano , sino á
liz. Sabido es que la base de la antigua or quien absteniéndose de ellas, puede dedi
ganizacion , era la esclavitud, y escediendo carse al cuidado de los negocios públicos.
asombrosamente el número de los esclavos Asi todo individuo que carecía de medios
al de los libres. Este solo hecho demuestra carde subsistencia
en cierto modo
, ó seal veia
título
precisado
de ciudadano,
á alnli-
que la mayor parte de los hombres que
formaban parte de aquellos estados, no al si es que se resolviese á ganar el sustento
canzaban las ventajas de que el todo dis con el trabajo de sus manos, ó á vivir
frutaba ; pues que no siendo considerados mendigando , ó á mover tumultos en la
ni siquiera como personas , sino como rosas, plaza pública, vendiendo su voto y sus
estaban excluidos no tan solamente del go pulmones á los ambiciosos.
ce de las comodidades y placeres sino tam Examínese á fondo las civilizaciones an
bien de los mas sencillos derechos, que tiguas, y se palpará, que aquellos grandes
' omo á hombres les pertenecían. Se dirá pueblos que han llenado el mundo con la
que estos esclavos no se entendía que for fama de su nombre , se reducen en reali
 — 133 _
sus
dad aordenes
un ,pequeño
órdenes- i una
una .nmensa
número que
inmensa muchedumbr,.
teniendo á II Ses
muchedumbre, se hapobres,
repetido
situacion
sobre laque
situacion de susc
ora con el título de esclavos, ora con el de dia mas, y que tarde ó temprano_ se agrava cada
es muy
plebeyos, se aprovechaba de sus trabajos y de temer que no le abra profundas, y qui
fatigas, explotando en propia y exclusiva zás incurables heridas.
utilidad los sudores y la sangre de aquellos Lo que de la Inglaterra se ha dicho po
infelices, ¡lumanum paucis vivit gemís, dijo dríase tambien aplicar á la Francia, bien
profundamente Julio César. que con las debidas modificaciones. Pero
(jin la nueva organizacion social intro dejando esta última nacion, ¿qué espectá
ducida por el cristianismo , con lentitud, culo no nos ofrece la Rusia, ese coloso que
pero con justicia y suavidad , se han reme amenaza en el porvenir la independencia
diado en parte esos males ; y si bien bajo
ciertos aspectos es todavía verdadera la de Europa? La sociedad, pobre, abatida,
esclava en buena parte ¿es por ventura ri
sentencia que acabamos de citar, no puede ca, floreciente, lozana como el estado? y
negarse que la suerte de la humanidad ha haciendo
mejorado en gran manera , y que participa la sociedadpor decirlo así la contraprueba;
española ¿es acaso tan infeliz'y
de las ventajas de la sociedad un número miserable como el estado? Luego los que
tan crecido que á los gentiles les hubiera para apreciar los efectos que el aumento
parecido fabuloso. Abolida la esclavitud, de la poblacion produce atienden tan solo
mejor distribuida la propiedad, organizado
sobre otras bases el trabajo, quitada la no á una de ellas, yerran.
Los límites de la Revista nos precisan á
ta de ignominia á las profesiones manuales, interrumpir nuestra tarea, que continuare
establecida y generalizada la beneficencia
pública , se ha mejorado considerablemente mos en los números siguientes.—/. B.
el estado de las clases mas numerosas; que
por mas que se ponderen sus males presen
ta, que repetidas veces hemos tambien POLÉMICA RELIGIOSA.
deplorado, es cierto que no salieran ga
nanciosas si cambiaran su suerte con la de
los esclavos de la antigüedad ó de los ne
gros de las colonias.
Esto no obstante, todavía se puede pal CARTA CUARTA
par con ejemplos de nuestra época la dife
rencia arriba indicada entre el estado y la
sociedad ; y naciones hay donde tan de bul Á CH ESCEPTICO EN MATERIAS DE RELIMO*.
to se presenta que casi es inútil indicarla.
Considerada como estado, ¿qué nacion hay
mas grande , mas poderosa , mas rica , mas
feliz que la Inglaterra? Sus soberbias flotas
cubren el Mediterráneo , el Atlántico, los FILOSOFIA DEL PORVEMH.
mares del Norte, el Pacífico, los de Orien
te; su pabellon es respetado y temido en Mi estimado amigo: mucho me compla
todos los puntos del globo ; sus dominios ce que me haya V. ofrecido la oportunidad
tienen una extension mayor que no alcan de manifestarle mi parecer, sobre la filoso
zaran los de la antigua Señora del mundo; fía que V. apellida del porvenir; que si bien
en una palabra, no se vio jamás entre las Y. la critica hasta motejarla, traslúcese no
naciones antiguas ni modernas, una poten obstante que no ha dejado de hacerle me
cia que por tan dilatado tiempo se sostu lla, mayormente en lo que ella dice sobro
viese en tan alto grado de pujanza ; dueña los destinos del Catolicismo. Llámala V. filo
de los mares, señora de inmensos territo sofia del porvenir; y en efecto, no cabe
rios, y prepotente en la mayor parte de nombre mas bien adaptado para calificar
los negocios que se agitan en los diversos esa ciencia estrambótica que sin resolver
continentes. Pero este aspecto tan grandio- nada, sin aclarar nada, solo se ocupa en
so, tan envidiable que nos ofrece la Ingla destruir y pulverizar, respondiendo enfáti
terra mirada como estado, ¿nos lo presen camente á todas las preguntas, á todas las
ta si la consideramos como sociedad ? No !! dificultades, á todas las exigencias, con la
es necesario insistir en lo (pie tantas veces ¡ palabra porvenir. A juicio de esta lilosafía,
 — 154 —
la humanidad ha errado siempre, yerra to la tierra. ¡ Desgraciados ! víctimas de un
davía actualmente; esta filosofía lo sabe, y destino infausto, no les es dado conceder á
al parecer es ella sola quien lo sabe ; tan su entendimiento todo el vuelo á donde lo
grave y magistral es el tono con que lo ensalzara su profética inspiracion, no les es
anuncia. Demandadle ¿dónde está la ver permitido desahogar su pecho con una ex
dad , cuándo será dado al hombre encon pansion humanitaria , y pegados á esa época
trarla? en el porvenir. Como se supone , to de barro, se encuentran forzados á vivir
das las religiones son falsas, todas son obra en espléndidos palacios , á ocupar elevadí-
de los hombres , un ardid para engañar á simos puestos desde donde puedan comen
las masas, un objeto de risa para los sabios, zar á dirigir acertadamente esta sociedad,
y muy particularmente para los profesores y no les queda otro consuelo que solazarse
de esa elevada filosofía, únicos que merez algunos momentos, cantando lo que su men
can tal nombre; ¿dónde estará pues la re te divisa y su corazon augura.
ligion verdadera? ¿cuándo podrán los Magnus ab iulcgro socclorum nascilur ordo ,
hombres profesarla? en el porvenir. Ningun Jam redil ct urgn.rcdeunt saturnia regna:
filósofo alcanzó á descifrar el enigma del
universo, de Dios, y del hombre; ¿ven Otcidet et sorpeus, ct falla* herba veneni
drá un dia afortunado en que se verifique Occidet :.Assyrium vulgo nascclur amomum.
el hallazgo de la deseada clave? en el porve
nir. La organizacion social y política se ha Molli paulatim flavcscet campus arista ,
de cambiar radicalmente, se ignora lo que Incultisque rubens pendebit sentibus uva ,
se ha de sustituir á lo que actualmente Et dura; quercus sudabuut roscida mella.
existe; ¿quién nos ilustrará para resolver
acertadamente tan espinoso problema? el Non rastros patietur humus , non v inca falcem ;
porvenir. Las masas populares sufren atroz Robustas quoque jam taurisjuga solvet arator.
mente en los paises mas cultos, la desnu N'ec varios discet mentiri lana colores:
dez, el hambre, la mas repugnante mise Ipse sed in pratis aries jara suave rubenti
ria, contrastan de una manera escandalosa Murice, jam croceo mutabit vellera luto ,
con el lujo y los goces de los potentados, Spontc sua sandyx paseentes vestid agnos.
y la vita bona de los filósofos: ¿de dónde Talia sa;cla suis dUerunt currite fusis
saldrá el remedio para situacion tan angus Concordes stabili iatorum numine parca;.
tiosa? del porvenir. El porvenir para la his No les pregunte V. , mi estimado amigo,
toria , el porvenir para la religion , el por cómo han descubierto tantos prodigios,
venir para la literatura , el porvenir para quién les ha revelado tan admirables arca
la ciencia, el porvenir para la política, el nos: sobre todo no les exija V. pruebas de
porvenir para la sociedad , el porvenir para lo que asientan , ni tratándolos cual si fue
la miseria, el porvenir para sí mismo, el ran adocenados pensadores, se atreva V.á
porvenir para lo presente, el porvenir para lo requerirles para que demuestren lo que
pasado, el porvenir para todo. Panacea de to afirman. Estas son cosas, que mas bien se
das las dolencias , satisfaccion de todos los presienten que no se conocen; tienen algo de
deseos, cumplimiento de todas las esperan poético, de aéreo; son previsiones envuel
zas, realizacion de todos los sueños; siglo de tas en figuras simbólicas ; y quien con esto
oro cuyos radiantes albores , ocultos á los ojos no se satisface, es indigno de la filosofía, la
de los profanos, solo se revelan á algunos llama del genio no ha tocado su frente, no
espíritus que alcanzaron el inefable privile ha brotado en su espíritu la inspiracion
gio de leer escrito en letras divinas la his creadora. Por lo demas, ¿quién no ve al
toria del porvenir. Por esto le saludan con gunas señales de esa transformacion mara
alborozo , por esto se abalanzan á él como villosa ? No todos alcanzan á preverla con
niño á los brazos de la madre que le acari tanta claridad como aquellos á quienes ha
cia ; por esto atraviesan con irónica sonrisa sido revelada en misteriosas apariciones;
por en medio de este siglo que no los com pero á nadie pueden ocultarse los infalibles
prende, por esto vivirían gustosos la vida síntomas que anuncian una próxima y uni
de los desprendidos filósofos de la Grecia, versal mudanza.
y se retirarían del mundo á guisa de ana
coretas , si no fuera necesaria su presencia Aspicc convexo uulautcm pondere mundum ,
para anunciar la verdad, si pudiesen pres Tcrrasque traetusqucmariscoeluinquc profunduni:
cindir de la mision que han recibido sobre Aspice , venturo lecteutur ut orauia sajelo.
 155 —
Menester es confesar, que el expediente cia;» (1) se dará un paso agigantado en la
ideado por estos filósofos no es lerdo, y que carrera de la perfeccion social , cuando las
ademas tiene la indecible ventaja de ser masas sean bastante ilustradas ; para con
muy cómodo. Maldito el provecho que sa templar la verdad en toda su pureza, cara
caron los que se propusieron arreglar el á cara , sin necesidad de los símbolos y en
mundo presente ; lo que conviene es endo volturas que solo convienen á la flaqueza
sarlo todo al porvenir, que al buen paga de inteligencias limitadas. Inútil es decir
dor no le duelen prendas. Sócrates con su que no convengo yo con M. JoulVroy, en
manto rasgado, y luego con su cicuta, tan peregrina definicion , y que por consi
Diógenes con su tonel , y su arena abrasa guiente tampoco puedo admitir las deduc
da , Heráclito con sus lágrimas , y Demó- ciones á que ella se brinda. No creo pues
crito con su risa, no entendían una palabra que jamas puedan dirigirse bien las masas
en achaque de filosofía. Burlarse de lo pa ( y en esta palabra masas , comprendo la so
sado, gozar de lo presente, y alucinar á ciedad entera), sin la inlluencia de la reli
todo el mundo con la esperanza de un be gion ; y que tan absurdo me parece el que
llo porvenir : hé aquí la fórmula mas ca la filosofía llegue nunca á llenar el vacío
bal que se encontrara jamas para evitarse ocupando su puesto, como el que la reli
disgustos y salir airoso de todo linage de gion sea una produccion espontánea de las
compromisos. ¿Y si el porvenir no corres ideas de las masas.
ponde á los pronósticos? objetarán algunos En este siglo de análisis filosófico -histó
escrupulosos. Medrados estamos, si hemos rico , seria muy curiosa la demostracion en
de darnos pena por lo que sucederá : el ne que se produjesen los datos fehacientes ,
gocio consiente largas, el plazo que toma de que el cristianismo fué el producto es
mos no es breve, y para no aventurar na pontáneo de las masas. ¿De qué masas sa
da lo dejamos indefinido; siempre podre lió el Evangelio? eran las judías ó las idó
mos solicitar una nueva dilacion, y si ál- latras? Si de las primeras, ¿cómo es que
guien de nosotros hasta se adelanta á fijar los acérrimos defensores de la ley de Moi
tiempo, no tengais cuidado que no debe ses fuesen los capitales enemigos de Jesu
de ser tan olvidadizo que no recuerde aque cristo? ¿Dónde hay un solo hecho, una so
llo de la palabra , un leve indicio , de que Jesus
No temais , señor mio , aprendiese de los judíos su sublime ense
Respondió el charlatan, pues yo me rio. ñanza? ¿No es al contrario patente que las
¿En diez años de plazo que tenemos , palabras del Divino Maestro eran recibidas
El Rey, el asno ó yo no moriremos? como enteramente nuevas, y que llenaban
de asombro y estupor á cuantos le oian ,
Hecha la debida justicia á la filosofía del escandalizándoselos unos de la novedad,
porvenir, réstame el mitantem pondere mtin- y acogiéndolas otros con transportes de ad
dum, quiero decir, la gravísima complica miracion , y con entusiasta acatamiento?
cion de los problemas que pesan sobre la 1 Hombres ciegos ! Si habeis leido el ser
sociedad , y ver hasta qué punto tienen mon sobre la montaña , si habeis reparado
fundamento los filósofos para hablarnos de jamas en aquel raudal de sabiduría y de
las trascendentales mudanzas que las futu amor, que Huye de los labios de un Hom
ras generaciones están destinadas á presen bre (pie no habia aprendido las letras, de
ciar. Por de contado, muchos de estos dan cidnos : ¿dónde estaban las doctrinas que
por supuesto que no se verificarán estos en él se vierten? Desparramadas nos diréis
cambios bajo la influencia de la religion ; en medio del pueblo; pero dejando á par
que al contrario esta va perdiendo terreno, te la convincente reflexion que se acaba de
y que una de las principales condiciones indicar, ¿qué prueba señalais para asentir
de la renovacion del mundo, ha de ser el tan extraña paradoja? ¿Mentaréis por ven
sustituir á ella la filosofía. Ya se ve, como tura la filosofía de la época? pero, ¿acaso
en sentir de ciertos hombres las religiones, sois únicamente vosotros los que de ella
y particularmente el cristianismo , no son teneis conocimiento ? ¿ creeis que se ha per
otra cosa que « una produccion espontánea dido en el mundo, la historia científica
de las ideas de las masas , abriéndose paso
y encarnándose cuando son maduras, en
una imaginacion exaltada, á menudo alu '1 .InníTroY, l-orcion snhw d destino tiuinn-
cinada por la revelacion que ella anun uo , recudida cu sus primeras Misceláneas.
 — 156 —
contemporánea? Ademas, que ni siquiera sofos, y á sus menguados maestros y dis
otorgais á la religion este honor de nacer cípulos, se les habia metido en la cabeza
de la filosofía ; la haceis brotar de la cabe que es infinito el munero de tontos , y que
za de las masas ! Recuérdese pues para no quien deseaba ser sabio , ó menos tonto ,
olvidarse jamas, que la religion mas admi debia andar cuidadoso en no dejarse conta
rada hasta de sus propios enemigos, por minar demasiado de la atmósfera del vulgo,
la sabiduría y santidad de que rebosa , fué y hasta contando por vulgo á tantos como
un producto espontáneo de las ideas de las se eximen de este dictado, por mas legíti
masas del tiempo de Tiberio y de Herodes. mos títulos que justifiquen su pertenencia
¡ Lo ridículo compite con lo sacrilego ! á la misma clase. Ignoraban estos buenos
Hasta ahora se habia creido que las ma señores, que ora sea para idear un sistema
sas estaban en posesion de la ignorancia, de filosofía, ora para inventar una religion,
que la presuncion en materia de grandes es necesario mezclarse entre las masas , nó
pensamientos , estaba en favor de algunos precisamente para observarlas , en sus ex
genios privilegiados, y que de estos debia travíos, en sus errores, en sus pasiones,
derramarse sobre aquellas la luz de que en sus caprichos, y estudiar asi los resortes
necesitaban. Ahora sabremos que esta luz del espíritu humano , y aprender á dirigir
preexiste en ellas , y nó como quiera , sino le, que esto ya lo sabiamos de muy anti
preparada para ejercer sus efectos , como guo ; sino para ver las ideas que en ellas
fruta madura , y que cuando un hombre germinan, para seguirlas en su crecimien
extraordinario surge de en medio de la to y desarrollo, y en notando que están
muchedumbre, á esta muchedumbre debe maduras, aprovechar el momento crítico,
todo cuanto piensa , y todo cuanto hace. formularlas, haciendo que se encamen, y
Sin duda que ni aun á los ojos de sus ene presentar luego el resultado á las mismas
migos será el cristianismo menos admira masas asombradas , diciéndoles : « hé aqui
ble que los mas elevados sistemas filosófi un presente del cielo.»
cos ; de lo que podremos inferir que estos Pobres masas ! Y no sabrán que adoran
habrán de tener el mismo origen. En efec un ídolo que ellas han fabricado; que co
to: la religion no es en tal caso inas que men cual maná bajado del cielo , la misma
una filosofía disfrazada con símbolos y enig fruta que de ellas ha nacido ; y de tal ma
mas ; de suerte que la invencion de aque nera , que para ofrecérsela el mentido im
lla tiene sobre esta una dificultad particu postor, apenas ha tenido ningun trabajo,
lar, que consiste en excogitar acertadamente solo el de cogerla , pues que ya estaba ma
los velos con que se ha de cubrir. Po dura.
dremos pues afirmar sin riesgo de equivo Si los católicos nos hubiéramos permiti
carnos, que la filosofía de Sócrates, de do tamanas paradojas, si nos hubiéramos
Platon , de Aristóteles , de Bacon , de Des atrevido á emitir semejantes aserciones,
cartes, de Malebranche, de Leibnitz, no contrarias á la buena filosofía , en oposi
era otra cosa que una produccion espon cion con la historia , repugnantes al senti
tánea de las masas ; y cosa rara ! tambien do comun, sin pruebas de ninguna clase,
habrá de caber la misma suerte á la tan sin indicios los mas leves, sin el mas remoto
ponderada de Kant , Hegel , Cousin , y del fundamento para apoyar la conjetura; si
mismo Jouffroy. mal hallados con el lenguaje ordinario,
Bien baya quien tales descubrimientos hubiéramos echado mano de expresiones
nos proporciona , quien revela con tan es simbólicas , haciendo encarnar ideas, y con
tupenda sagacidad el camino que se ha de la peregrina ocurrencia de aplicarles la me
seguir para llegar á la mas alta sabiduría. táfora de maduras, ofreciendo de esta ma
Oh ! cuan errado andaba Descartes cuando nera un estrambótico contraste, todos los
se condenaba á tan dilatadas meditaciones, diccionarios de la sátira no hubieran sufra
comenzando ya desde el colegio , á obtener gado los apodos necesarios para cubrir de
la dispensa de no madrugar demasiado , y burla semejante atentado contra la filosofía
fomentar asi con el suave calor , la fuerza y el buen gusto. Juzgue V. , mi estimado
de la contemplacion á que se abandonaba I amigo , entre nuestros adversarios y noso
muy tonto era Malebranche que pasaba sus tros; y juzguen con V. todos los hombres
dias en el mayor retiro , sepultado en su de sana razon.
gabinete, y cerrajas las ventanas para que Infiero de lo (pie acabo de exponer, que
la luz no le distrajese ! A estos pobres filó es una pura quimera la profecía de algu
 — 157 —
nos filósofos de nuestra época de que el || nos de que vaya durando el catolicismo,
cristianismo esté destinado á morir, y de estará muy á mano la satisfactoria respues
que haya de recoger su herencia esa filoso ta de que, «esto ya lo habia pronosticado
fía , de que todos hablan , sin decirnos en M. Cousin ; » y cuando pasados los tres
qué consiste. En este punto, paréceme as cientos años , al expirar el plazo fatal , se
tuta y todavía mas cómoda , la conducta vea que el catolicismo no muere por ina
de M. Cousin , fundada en los motivos que nicion , y que le queda todavía alimento ;
nos ha revelado M. Pedro Leroux en un entonces ya nadie se ha de acordar de M.
mímero de la Revista independiente. El pa- Cousin, cuanto menos de su profecía.
sage es curioso, y merece la pena de co En lo moral como en lo físico, el pri
piarle. «Hace ya muchos años, dice M. mer síntoma de estar tocado de muerte un
Leroux, que conversando con M. Cousin ser cualquiera , es no crecer , no producir;
sobre su apología, nó de Sócrates, sino la cercana extincion de la vida se muestra
de los jueces de Sócrates, extraña parado siempre por la falta del desarrollo y de la
ja escrita á lo que parece para hacer una accion del ser que muere. Sécanse al árbol
mueca á Platon y á Jenofonte , le echába sus hojas, se le marchitan las llores, no le
mos en cara este acto irracional que mirá nace el fruto ; al animal se le retira el ca
bamos como un crimen de le;a filosofía. lor, sus facultades funcionan con lentitud,
Interrumpióse M. Cousin en su respuesta , su obrar es lánguido, su fecundidad cesa.
para preguntarnos: ¿cuánto tiempo os pa Observad el mundo intelectual y moral, y
rece que á la religion de nuestro pais le notaréis los mismos fenómenos. Cuando un
queda de vida? — No es esta la cuestion, sistema filosófico caduca , pierde su accion
le dije yo , trátase de la filosofía , de la ver propagandista ; lejos de aumentarse el nú
dad ; jamas los filósofos hubieran hecho na mero de sus prosélitos se disminuye: no se
da bueno , si en vista de la realidad , se hace nueva aplicacion de sus doctrinas, se
hubiesen interrogado de esta suerte para arrumban las que se han hecho , todo se
saberlo que debian hacer. — Yo, replicó prepara para hacerle caer en desprecio , y
M. Cousin , creo que el catolicismo tiene luego en olvido. Una legislacion próxima á
todavía alimento para trescientos años, (en perecer , es con frecuencia desobedecida,
a encore pourtrois cents ansdans le ventre.) sus propios sostenedores no se atreven á
en consecuencia , me quito humildemente hacer uso de ella ; no se extiende á otros
el sombrero en presencia del catolicismo , pueblos , es ya un cuerpo exánime á quien
y continúo la filosofía.» solo faltan los honores de la sepultura. Lo
Hubo un tiempo en que cundió entrelos propio sucede con las instituciones, sean
protestantes la manía de anunciar la caida del órden que fueren , y por mas que ha
del catolicismo , fijando con tanta precision ya sido su importancia. La muerte que les
la época , como pueden hacerlo los astró amenaza de cerca , se manifiesta por sínto
nomos con un eclipse, ó el paso de un co mas infalibles. Recórrase la historia ente
meta. Seguros de la prediccion, la prego ra , fíjese la vista en todas las instituciones
naban con gran ruido ; pero las cuentas sociales y políticas, que por una ú otra
debían de estar mal ajustadas, que la épo causa hayan adolecido de achaque mortal ,
ca fatal llegaba, y el pronóstico no se cum y se verá que en los últimos períodos de su
plía. Esos profetas eraná veces sobrado in existencia, se parecían á aquellos edificios
discretos; pues se atrevian á señalar un ruinosos , de los cuales huyen á toda prisa
plazo breve, cuyo trascurso no era bastan los habitantes para no ser sepultados en
te á que se hubiese olvidado el anuncio. sus escombros.
M. Cousin recordaría sin duda estos chas Nada de esto se verifica con el catolicis
cos proféticos, y no queriendo llevar las mo. Arraigado en España, Portugal, Ita
cosas á un extremo á guisa de buen conser lia , Francia , Bélgica , Austria , en varios
vador, y proponiéndose por otra parte evi paises de Alemania , en Polonia , en Irlan
tar la luirla de ser desmentido, escogió un da, con dilatados dominios en la América,
medio término, entre los siglos (le los siglos progresando en Inglaterra, en los Rstados-
de los ralolicos , y el corto espacio de los Unidos, desplegando vivisima actividad en
profetas protestantes, y le otorgó al cato las misiones de Oriente y Occidente , di
licismo un plazo de trescientos años. De fundiendo de nuevo en distintas regiones
esta manera , cuando en todo el presente los institutos religiosos, sosteniendo vigo
siglo , y en el siguiente , se admiren algu- rosamente sus derechos , ora con enérgicas
 — 158
protestas , ora arrostrando la persecucion , males de nuestro tiempo, es por la sencilla
defendiendo sus doctrinas con grande apa razon de que siempre la enfermedad pre
rato de saber y de elocuencia en los prin sente es la peor.
cipales centros de inteligencia del mundo Cuantos desean comprender algun tanto
civilizado, contando entre sus discípulos la historia del cristianismo , y no escanda
hombres esclarecidos , que no les van en lizarse á cada paso por los acontecimientos
zaga á los de otra secta cualquiera , ¿ dón adversos que en tanta abundancia nos ofre
de están los síntomas de una muerte cer ce , no deben jamás perder de vista que la
cana ? ¿ dónde las señales que indican la religion de Jesucristo lo es de sufrimientos,
caducidad? de contrariedades, de persecuciones, es
Ya preveo, mi estimado amigo, la difi una religion de sacrificio, que se inauguró
cultad que me va V. á objetar; y por si no sobre la tierra con la inmolacion del Cor
le ocurriese, yo mismo cuidaré de presen dero sin mancilla. Todo lo que á ella per
tarla sin quitarle nada de su fuerza. Si tan tenece lleva este formidable sello : el Bau
ta es la vida entrañada en el catolicismo , tista precursor, es decapitado, y su cabeza
si tan claras y evidentes son las señales con sirve de presente en una orgía para abrevar
que se muestra ; ¿por qué estais lamentán de sangre una horrible venganza; los após
doos de los males ([110 afligen á la Iglesia toles sufren el martirio en las diversas paTtes
en este siglo? ¿por qué se recuerdan á ca del mundo; y viene tras ellos una muche
da paso aquellos dias de gloria , que alcan dumbre que nadie puede contar, de todas
zara en épocas mas felices? A esto respon lenguas, tribus, naciones, condiciones, eda
deré en primer lugar, que yo no he dicho des, sexos, que sufren los tormentos y la
que el catolicismo no haya sufrido grandes muerte por la fe, y lavan sus estolas en la
quebrantos; sino que únicamente he soste sangre del Cordero. ¿Os desalientan las apos-
nido que en su situacion actual no se des tasías que estais presenciando , los errores
cubrían anuncios de muerte. Estas dos que pululan , el extravío de tantos que ó
aserciones son muy diferentes , nada tiene por interes ó por verguenza, ó por otras pa
que ver la una con la otra. Esta contesta siones, niegan al divino Maestro? ¿pero ol
cion basta y sobra , para desv anecer la di vidais acaso , la traicion de Judas , y la
ficultad propuesta ; pero á mayor abunda negacion de S. Pedro?
miento me permitiré añadir , que tambien Vemos, es cierto, muchedumbre de sec
suele' haber alguna exageracion de los ac tas separadas, vemos cual se asestan con
tuales males de la Iglesia , en comparacion tra la Iglesia los tiros del sofisma y de la
de los que sufrió en otros siglos. La deca calumnia , pero ¿es esto otra cosa que una
dencia de la fe y de las costumbres , es á repeticion de lo que ha sucedido en todos
menudo ponderada en demasía, no solo los siglos desde su fundacion ? En el pri
por los enemigos de la Iglesia , sino tam mero , brotan como inmundos insectos las
bien por sus hijos mas predilectos. Estos inmorales heregíasde Simon, Cerinto, Me-
por celo, y por un santo pesar, aquellos nandro, Ebion , Saturnino, Basílides, y
por espíritu de maledicencia y por un se Nicolao. En el segundo aparecen los Gnós
creto placer de anunciar el desmoronamien ticos, Valentinianos, Orfitas, Archontieos,
to de lo que desean v er arruinado , todos Cavanos, Helcési tas, Encratitas, Marcio-
contribuyen áque suenen muy alto los ayes nistas , Montanistas y otros. En el tercero
en que se lamentan los males de la época, encontramos los sectarios de Praxeas, de
y á que los hombres ignorantes ó poco ad Sabelio , de Paulo de Samosata , de Nova
vertidos, se imaginen, que comparado con to , de Manes ; de suerte que mientras la
los antiguos tiempos el catolicismo ha pa Iglesia tenia contra sí los potros , los caba
sado á ser un reino pacífico, rico, podero lletes, la cuchilla, las hogueras, y todo li-
so, floreciente, una miserable comarca, nage de horrendos suplicios ; veia salir de
entregada á un reducido número de mora su propio seno hijos ingratos que le despe
dores , víctimas de la degradacion y de la dazaban las entrañas, corrompiendo la pu
anarquía. reza de la moral y del dogma , levantando
Con perdon de los que asi opinan , y pa cátedra contra cátedra , y propalando cual
ra consuelo de los que desearían ver en la doctrinas emanadas del cielo, los sueños
Iglesia un cuadro mas halagüeño, diréque de la ilusion y de la impostura.
no es esto lo que enseña la historia ; y que Y ¿ qué diremos de los siglos siguientes ?
cuando tan sentidamente se lamentan los Se habla de la paz de Constantino , se pon
 189
deran las ventajas que de ella resultaron á losobia hecho
pruritoeldeArrianismo
disputa de, los
el ciego
emperadores
y caví-
la Iglesia ; es cierto ; pero no lo es menos
que aquella paz filé á menudo interrumpi de Oriente, y el espíritu de resistencia ála
da , con frecuencia muy amargada , y que autoridad que se desenvuelve en diferentes
el Divino Esposo no le dejó olvidar un mo heregías. i Cuántos concilios ! Cuántas de
mento que estaba en tierra de peregrina cisiones de los papas! Cuántos escritos de
cion , que era militante , y que no le era varones eminentes por su santidad y sabi
dado disfrutar aqui bajo de la calma y feli duría I Cuántos vaivenes en los pueblos so
cidad que le están reservadas, para cuando metidos á la Iglesia ! Cuántas oscilaciones
la Jerusalen de este mundo esté absorvida en la fe ! ¿Dónde está esa calma que algu
en la celestial. En el mismo siglo que la nos echan menos; ese predominio no dis
cruz se enarboló sobre el trono de los Cé putado , esa envidiable bonanza en (pie se
sares, experimentó la Iglesia tantos sinsa imaginan la barquilla de S. Pedro, surcan
bores, que difícilmente se los causaran mas do un mar sosegado y tranquilo?
dolorosos los rigores de la persecucion. De esta suerte , y con varia pero siem
¿Quién ignora la turbacion y desastres pre agitada fortuna , se llegó al siglo x ; en
acarreados por los cismas de los Donatistos, él no hubo heregías, pero en cambio habia
Melecianos , y Luciferianos? Las iglesias de una profunda ignorancia madre de la cor
Africa, de Egipto, de Asia, vieron erigido rupcion , que á su vez engendra tambien
altar contra altar, divididos escandalosa los mas detestables errores : « a?ternam ti-
mente los fieles , hecba pedazos la túnica muere sa'enla noctem.» Tomaron cuerpo
inconsútil de Jesucristo. Y ¿qué será si re entonces las violencias de los príncipes sa
cordamos las muchas heregías que á la sa lidos de la barbarie, entronizóse el feuda
zon se levantaran , y particularmente las de lismo , siguió la lucha de los pueblos con
Arrio y Macedonio? Penosas son en nues tra los señores, y de estos entre sí, y con
tra época las tareas de aquellos á quienes los reyes; brotando de ese caos, nuevas
puso el Espíritu Santo para regir la Iglesia heregías con un carácter mas práctico, mas
de Dios ; pero penosas eran tambien las de invasor, mas amenazador que las antiguas.
los obispos que formaban los concilios de No necesito recordarle á V., mi estimado
Nicea y Constantinopla. Y no faltaban tam amigo , los nombres de los que ora con las
bien emperadores que afligían la Iglesia , armas, ora con la pluma, ora con la pre
extralimitándose de sus facultades , y en dicacion, se desencadenaron contrala Igle
trometiéndose en los negocios puramente sia ; la historia de estos errores y contien
eclesiásticos ; y habia tambien un Juliano das es inseparable de la de Europa; solo
apóstata que se complacía en abatirla y hu diré que la aparicion del protestantismo, si
millarla , y habia tambien escritores vene bien fué una catástrofe de imponderables
nosos que derramaban por todas partes sus consecuencias , no fué sin embargo un he
funestas doctrinas : y los apologistas de la cho del todo nuevo , sino que tomó un ca
religion se veian "precisados á trabajar sin rácter peculiar á causa de la época en que
descanso , á multiplicarse por decirlo asi , nació.
para hacer frente á los muchos puntos que Grandes males tiene (pie llorar actual
reclamaban el auxilio de su saber y de su mente la Iglesia ; pero mucho dudo que
elocuencia en defensa de la religion. San sean iguales á los del siglo decimosexto y
Atanasio , S. Cirilo , S. Basilio , los dos siguiente; ni en errores, ni en desastres,
(iregorios, S. Epifanio, S. Ambrosio, San parece que nada dejaban (pie desear al ge
Agustín -, S. Gerónimo , S. Juan Crisósto- nio del mal. Por lo -que toca al siglo pasa
mo, y otras lumbreras de aquel siglo, re do , está demasiado cerca de nosotros para
cuerdan los empeñados combates que á la que sea necesario mentarle siquiera ; baste
sazon sostuvo la verdad contra el error, recordar, que se abrió con las disputas y
supuesto que para alcanzarla inmortal vic la terquedad del jansenismo , y se cerró
toria se empeñaron en la lucha tantos gi- dignamente, con la Constitucion del clero,
y las persecuciones de la Convencion.
sigue luego la irrupcion de los Bárbaros, No me he propuesto hacer ni un ligero
y la Iglesia lejos de disfrutar la época bo bosquejo de las contrariedades que en todos
nancible que parecía necesitar para su des tiempos ha sufrido la Iglesia, para que pu
canso , se encuentra entre la ferocidad de diesen compararse con las que padece en
los invasores, los estragos que en ellos ha el nuestro : y sí únicamente echar acá v
 — 160
acullá algunas plumadas, que al menos re el bien; pero ¿qué fruto sacaría de consti
cordasen los principales acontecimientos tuirse en única excepcion sobre la tierra?
que tan trabajosa y gloriosa á la vez , nos Víctima de las malas artes y de las pasio
presentan su historia. Con esto desearía nes de sus semejantes , fuera un estéril
que se consolasen los fieles que con excesi holocausto ofrecido en las aras de la vir
va afliccion contemplan los males de nues tud , de esa diosa que de tan antiguo aban
tra época, reflexionando que no es tan donó para no volverlas á ver las moradas
cierto como ellos quizás se imaginan , que sublunares. ¿ No es verdad , mi estimado
este sea el tiempo en que Dios ha permiti amigo, que asi hablan los hombres inmo
do que campease con mas audacia el poder rales, que tienen bastante conocimiento
del príncipe de las tinieblas. Al menos por para reflexionar un poco sobre su estado,
mi parte , abrigo sobre este particular creando una especie de filosofía que les
fuertes dudas, que se ofrecerán á cualquie sirva de comodín contra los remordimien
ra que repase con atencion los anales ecle tos de su conciencia ? Aplique V. á la in
siásticos. credulidad loque acabo de decir, y hallará
Ateniéndonos á lo sucedido, durante el una perfecta analogía. Habla el incrédulo
siglo pasado y el presente, se me dirá que con hombres que comparten sus errores,
en Francia la fe ha perdido mucho, y se echan una ojeada sobre el estado de las
me recordará que lo propio acontece en creencias, y como cada cual recuerda ha
Portugal, España é Italia; pero yo replica berse hallado con otros de la misma opi
ré, que tambien ha crecido en Irlanda, nion , cuando menos sus maestros ó discí
que ha ganado mucho en Inglaterra y Es pulos , llevan todos su contingente de
cocia ; y sin empeñarme en discusiones incredulidad observada en distintos lugares,
sobre la exactitud de la compensacion , ob é infieren sin -vacilar , que la induccion es
servaré que la Iglesia ha conquistado en cumplida , que todos los votos están reco
nuestra época una ventaja inmensa , cual gidos, que la fe no tiene un solo partida
es, que entre los paises mas civilizados y rio, y está condenada irremisiblemente,
cultos, no hay ninguno donde se la mire desterrada para siempre del mundo. Fula
con hostilidad perseguidora. Y no se me no, dicen, aparenta creer, pero es hipo
cite en contrario el ejemplo de la Rusia, ni cresía; Zutano lo linge por interes, Men-
un extravío pasagero del gobierno de Pru- guano por no contristar á una madre, á
sia , ni las anomalías de otros paises ; la una esposa devotas ; por lo demas , todos
causa de la religion parece mas bella cuan los hombres que piensan están acordes en
do se enlaza con los recuerdos de naciona este punto, el hecho es tan cierto que se
lidad de un pueblo desgraciado ; y la Igle halla fuera de discusion.
sia se presenta mas hermosa y lozana, Con esta seguridad he oido hablar, estos
cuando tiene por perseguidores el raquitis discursos he oido hacer ; pero yo que no
mo en política, y la nulidad en filosofía. podía olvidar lo que he visto con mis ojos,
Calculan algunos incrédulos la decaden yo que tampoco habia descuidado observar
cia de la fe , por lo que observan en las y recoger hechos sobre la misma materia ,
personas de su trato ; y como estas son á no podia resignarme á abdicar mis opi
menudo de las mismas ideas, deducen que niones , y á suponer errados todos mis cál
la incredulidad es el estado normal de los culos. Ademas, encontraba tambien otro
entendimientos. Acontece en este punto lo motivo para no dar mucha importancia á
mismo que en los relativos á costumbres. las inducciones de mi adversario , sin apa
El inmeral halla la inmoralidad en todas riencias de contradecirle, daba á la con
partes : no hay para él un hombre honra versacion un giro que indicarme pudiera
do, una muger honesta, un magistrado las fuentes donde habia bebido ese profun
íntegro, un comerciante de buena fe; la do conocimiento del mundo, el teatro don
perfidia , la corrupcion , el soborno reinan de habia hecho sus observaciones sobre el
en todas las almas ; y si bien reparais en su estado actual de las creencias. Desde luego
manera de discurrir , sus propios vicios no echaba de ver, que de las personas y cir
son mas que el resultado de la profunda cuios á que se referia , aun cuando él no
conviccion de que es enteramente imposi me lo hubiera dicho, ála legua hubiera yo
ble el ejercicio de la virtud . No le faltan , sospechado que no abundaban de fe; si en
ni excelente índole , ni buenos deseos , ni que de antemano no me constaba lo mismo
la fuerza de ánimo necesaria para practicar que él me estaba revelando. Hablábale en-
 161 —
tonces de otra sociedad como suele decirse, pero me inclino á pensar que esta transicion
de otros hombres , de otras reuniones; no lejos de ser característica de nuestra época,
tenia noticia de ellos, no estaban en su es en cierto modo general á toda la histo
cuerda. Traia la conversacion al movimien ria de la humanidad; porque es evidente
to religioso de este ó de aquel pais , pro que el género humano está pasando conti
nunciaba el nombre de un autor distinguido nuamente de un estado á otro. La perfec
en esta materia ; recordábale un pasage tibilidad indefinida de que nos están ha
interesante de una obra escogida , á esta blando sin cesar los filósofas del porvenir , es
literatura no se habia dedicado mucho ; si tambien asunto sobre el cual abrigo yo mis
quiera por amor p¿'opio, afectaba tener de dudas ; asi como sobre lo que dan por su
esto algunos conocimientos , bien que con puesto y enteramente incuestionable, de
la modestia de no manifestarlos ; pero yo que la humanidad aun aqui en la tierra ,
pan mis adentros infería, que aquel hom adelanta siempre hácia la perfeccion , ha
bre hablaba de lo que no sabia, que en sus ciendo sin cesar nuevas conquistas. El es
cálculos deducía de lo particular lo univer cepticismo filosófico de que como le dije en
sal , y que todo su aparato de observacion una de mis anteriores , estoy algo tocado ,
sobre el estado de las creencias se reducía hace que al oir enunciar alguna proposicion
á noticias de que no carece ninguna per demasiado general, no me deje alucinar ni
sona entendida. por la celebridad ni el tono magistral de
Ni la sociedad , mi estimado amigo, está quien la emite; y que en uso de mi inde
toda en las capitales , ni las capitales se for pendencia , examine si el acreditado maes
man exclusivamente de un determinado sucedido tro podríacon
haberse
la transicion
equivocad
actualEstome
, y con ha
la
número de reuniones , por mas que estas
sean á menudo las mas presumidas y pre marcha continua de las sociedades, y con
tensiosas ; necesario es extender la vista al las mudanzas que para lo venidero se nos
go mas allá, cuando se quiere formar juicio pronostican ; sobre todos estos puntos le di
sobre el estado de las creencias. No sucede ré mis opiniones en otra (pie pienso escri
con ellas lo que con el movimiento político birle otro dia. Ahora no puedo hacerlo; ya
ó mercantil. Estos se limitan á círculos por por no alargar demasiado la presente, ya
lo comun muy estrechos; y para juzgar de porque «non tantum est otii. » Queda de
su situacion y tendencias , basta regular V. su afTmo.—J. B.
mente colocarse en algunos de los centros
en cuyo torno se verifican. En negocios de
religion es muy de otra manera ; sus rami ESTUDIOS FRENOLOGICOS.
ficaciones son inmensas, sus raices calan
hasta las entrañas de la sociedad ; la sober
bia capital como la miserable aldea , no se
eximen de su influjo ; y asi es harto arries
gado el juzgar de ellas por lo que se ha
notado en círculos reducidos. Artíci i.o i.°
Pero ya esta carta va tomando mas en
sanche del que conviene; y asi resumiendo
mis ideas, din'' que lo que V. llama tan
acertadamente la filosofía del porvenir , es En el primer número de esta
una de tantas quimeras como sueña el es- ocupamos de la ciencia frenolo
. píritu humano ; que ningun problema re relaciones con la espiritualidad
suelve , que nada nos dice sobre las altas estableciendo algunos principios para pre
cuestioues que se propone ventilar ; que caver que los poco versados en estas deli
sus pronósticos no llevan camino de cum cadas materias, incurriesen en equivoca
plirse, y el Catolicismo no presenta señales ciones sobre un punto de tan elevada im
de muerte ni caducidad. Por lo tocante á portancia , por afectar muy de cerca uno
las profundas mudanzas que en sentir de de los principales fundamentos de la reli
esos filósofos se han de verificar en la so gion , cuales, la distincion entre el espíritu
ciedad , convengo con ellos ; pero no creo y el cuerpo. Explicamos allí cómo pudiera
que sea de la manera que los mismos se entenderse en un sentido razonable y nada
figuran. No tengo dificultad en reconocer dañoso , la doctrina que establece que el
imos en una época de transicion; talma posee diferentes facultades, las cuales
tumo i. 11
 — 162 —
ella manifiesta por medio de correspondien bre obra ejercitando sus facultades , pero
tes órganos cerebrales ; y con esta ocasion no produce el mismo principio de su ac
expusimos tambien, cual era la acepcion cion , pues que esta supone la existencia
legítima que podia darse á la proposicion de aquel. Es cierto que ora consideremos
en que se asienta que el alma , mente ó en las facultades del alma como identificadas
tendimiento , obra por medio del cerebro ; con su esencia , ora admitamos que son co
aduciendo autoridades respetables , asi en sa distinta , la razon y la experiencia nos
el órden religioso , como en el puramente están diciendo que no podemos dárnoslas
filosófico. Ofrecimos entonces á nuestros lec á nosotros mismos ; lo que en ellas pode
tores el volver otro dia á la discusion de es mos hacer es avivarlas, perfeccionarlas y
te asunto; y si bien hubiéramos deseado pulirlas, nada mas. Todo cuanto en este
hacerlo cuando se hubiese publicado una sentido hacemos , supone un cierto fondo
obra mas extensa cuyo prospecto ha visto de la naturaleza que nos ha sido otorgado
ya el público, no obstante con la mira de gratuitamente por el Criador, y que si no
que no nos veamos precisados á dilatar de nos hubiera sido concedido, tan lejos estu
masiado el cumplimiento de lo que tenemos viéramos de poderlo producir, que ni si
prometido , entraremos hoy en amplio exa quiera alcanzaríamos á formarnosde él una
men de la materia. Es tal su importancia, idea.
y tan graves y delicados los puntos á que El segundo principio es : el cerebro es el
se refiere , que habiéndose ventilado exten órgano del alma ó mente. Como en el dis
samente en esta capital, en ocasion muy curso citado nos detuvimos en explicar el
reciente, no podemos permitir que las gra sentido en quedebia tomarse esta proposi
ves cuestiones que de ella surgen , pasen cion , si se quería evitar el que se le dieran
desapercibidas y sin las correspondientes acepciones peligrosas, bástanos transcribir
aclaraciones. aqui lo que entonces decíamos.
Seis principios asienta el Sr. Cubi , apo «Que hay una relacion entre el entendi
yándose en la autoridad de Gall , y mirán miento y el cerebro , que este es el centro
dolos como la base de todo la ciencia fre de las sensaciones, quede su buena ó mala
nológica. disposicion natural ó accidental , resultan
1.° Las facultades ó potencias del alma, los mas variados fenómenos en el ejercicio
rjon innatas. de las facultades del alma , es una verdad
2.° El cerebro es el órgano del alma ó que no consiente duda ; como que está re
mente. conocida por todos los filósofos antiguus y
3.° El cerebro es múltiplo; esto es, el modernos , y atestiguada por la experiencia
cerebro es un compuesto ó agregado de va de cada dia. El delirio y la locura que de
rios órganos por medio de los cuales mani tal suerte trastornan las funciones del al
fiesta el alma sus varias facultades. ma, tienen su origen en afecciones cere
4.° El tamaño de un órgano cerebral , brales ; de estas dimanan tambien los sue
siendo lodo lo (lemas igual, es una medida ños mas ó menos variados, mas ó menos
positiva de su potencia mental. extravagantes, habiendo podido notar cual
5.° El tamaño y forma del cerebro es, quiera lo mucho que en esta parte influyen
con rara excepcion , idéntico al tamaño y la cantidad y calidad de los alimentos, y
forma de la superficie externa de la cabeza. todo cuanto comunica al cuerpo estas ó
6.° Toda facultad del alma tiene su len- aquellas disposiciones, capaces de afectar
guage especial; esto es, todo órgano cere este órgano. Aun no suponiendo un tras
bral , cuando se halla predominantemente torno tan completo como lo es el de una
activo, produce un movimiento, expresion, alienacion mental , ó un estado tan diverso
gesto ó actitud , que se llama su lenguage cual el sueño respecto de la vigilia, ¿quién
especial ó natural, ( Manual de Frenología ). no ha notado la exaltacion de las facultades
Antes de pasar á otras consideraciones, del alma que se sigue á la inmutacion del
examinaremos rápidamente estos seis prin cerebro causada por agentes accidentales ?
cipios, ó axiomas, ó como se quiera lla una botella de vino de champaña convierte
marlos. El primero es: las facultades ó po quizás en animado hablador, facundo, va
tencias del alma son innatas. En esto nos riado y chistoso , á un hombre que pocos
hallamos de acuerdo con el Sr. Cubi; y momentos antes se mostraba indiferente ,
creemos que en el mismo caso se encuen taciturno y frio.
tran todas las escuelas filosóficas. El hom »Los diversos sistemas psicológicos idea
 — 163 —
dos por las diferentes escuelas filosóficas , cel es el instrumento del pintor , como el
fueron excogitados con la mira de explicar cincel lo es del escultor y la pluma del es
la relacion entre el cuerpo y el alma , y cribiente. En este sentido el cerebro no es
muy particularmente entre esta y el cere ni puede ser instrumento del alma en el
bro. El influjo físico , las causas ocasiona pensar ni en el tjuerer. Si en este sentido
les, la armonía prestabilita , y las demas se dijese que el cerebro ú otra parte del
hipótesis mas ó menos análogas á las so cuerpo son instrumentos ú órganos del al
bredichas , todas dimanan de la dificultad ma, la expresion seria no solo inexacta
en que se encontraron las varias escuelas sino falsa ; porque entonces se daría á en
para dar razonada cuenta de una relacion , tender que el espíritu elabora sus pensa
de una comunicacion , de una recíproca in mientos por medio del cerebro , que este
fluencia , tan ciertas como incomprensibles. contribuye inmediatamente á la formacion
«Asi puesciñéndose como manifiesta ce de aquellos ; lo que daría por el pie á todo
ñirse el indicado profesor á establecer este sistema espiritualista que estriba como so
fenómeno generalmente reconocido, esta bre su cimiento, en el siguiente principio :
mos de acuerdo con él en que es un hecho el pensamiento y la materia son cosas in
incuestionable. compatibles. En efecto , aquel es esencial
«Bonald copiando á Platon, ha dicho mente simple, esta esencialmente compues
que « el hombre es una inteligencia servida ta ; aquel supone por necesidad unidad del
por órganos » y entre estos sin duda debe sugeto que lo ejerce, esta es por necesidad
contarse como principal el cerebro, mayor múltipla, porque en su misma naturaleza
mente en lo tocante ál ejercicio de las fa entra el ser compuesta de muchas partes ;
cultades intelectuales. Sin embargo , para aquel existe en un ser que puede darse
no confundir los límites de la filosofía espi cuenta de sus actos á sí propio , que con
ritualista y materialista , atribuyendo á lo toda verdad y exactitud pueda decir yo , á
que es puramente corpóreo, funciones que pesar de todas las modificaciones que sufra
de ninguna manera pueden corresponderle, por la diferencia de sus facultades y la di
es menester fijar con exactitud el sentido versidad de sus actos ; cuando en esta es
dela palabra órgano, para que cuando se imposible encontrar ese ser uno , indivisi
dice que el cerebro lo es del alma , no se ble, único sugeto delas modificaciones que
entienda que por él se ejercen de alguna experimenta ; pues lo que sufre una parte
manera los,actos del entendimiento ó de la no lo sufre otra, y por lo mismo no es da
voluntad. Órgano es el medio ó conducto ble concebir en la misma ese yo uno , sim
por donde una cosa se comunica á otra , ó ple, indivisible, idea que necesariamente
por el cual se ejerce alguna funcion ; asi la acompaña á todo ser que piensa ó quiere.
lengua será el órgano de la palabra, los «Esta es la razon profunda delos singu
ojos serán el órgano de la vision , el tímpa lares sistemas á que han apelado todos los
no será el órgano del oido, en cuanto sir grandes hombres para explicar el misterio
ven estas partes del cuerpo para ejercer indescifrable de la union del alma con el
aquellos actos que con los indicados nom cuerpo, de las relaciones que entre sí tie
bres se designan. Pero con la mira de evi nen , del modo con que recíprocamente se
tar la confusion de las ideas en un punto comunican y se afectan. Veian el hecho, lo
de tanta importancia y trascendencia , emi palpaban en sí y en los demas, el fenóme
tiremos algunas observaciones que bastan no de la accion del alma sobre el cuerpo y
en nuestro juicio á prevenir toda equivo de este sobre aquella , se les ofrecía fuera
cacion. El lector nos dispensará si nos ele de duda ; pero no era para ellos menos in
vamos á consideraciones puramente ideoló cuestionable la diferencia esencial de las
gicas y metafísicas , quizás no muy fáciles naturalezas de estos dos seres, no acerta
¿le ser comprendidas perfectamente por los ban á darse cuenta de la posibilidad de la
no versadosen tan espinosas materias; pro accion recíproca , no comprendían como lo
curaremos no obstante expresarnos con la simple y lo compuesto pueden influir lo
mayor claridad y limpieza, acomodándonos uno sobre lo otro; y por esto, entregados
á la capacidad hasta de los menos inteli á profundas meditaciones, excogitaban sis
gentes , en cuanto nos lo permita el objeto temas quizás extravagantes y que provoca
que nos proponemos dilucidar. ban la risa de los poco versados en estas
« El instrumento es el medio de que nos materias. Los hombres vulgares no cono
servimos para ejecutar alguna cosa; el pin cían toda la extension y la fuerza de la di
 16í —
ficultad que los primeros se propusieron las inteligencias, y la asombrosa variedad
salvar ; y por lo mismo no apreciaban el que en ellas se descubre, no tan solo por
mérito del esfuerzo extraordinario, indica lo relativo á sus grados de alcance y de
do por la misma singularidad de las hi fuerza , sino tambien por lo tocante á su
pótesis. capacidad y disposicion para estos ó aque
« Queda pues sentado que no hay incon llos objetos. Hombres hay , y los conoce el
veniente en que se diga que el alma, mente que esto escribe , de talento felicísimo en
ó entendimiento, obra por medio del cere cas todoy lomorales
que concierne
, y que ásinlas embargo
ciencias pulid-
lo po
bro como por su órgano , mientras con es
tas expresiones se entienda que dadas ciertas seen muy escaso en tratándose de las natu
operaciones del alma, resultan determina rales y exactas. Hasta ciñéndonos á un solo
das funciones del cerebro ; y que afectado género se observa una variedad singular
el órgano de esta ó aquella manera, resul cuando se desciende á las especies. ¿Quién
tan estas ó aquellas impresiones en el alma . no diria por ejemplo , que uno que posea
Y nótese bien, que no tratamos aquí de feliz disposicion para una parte de las ma
explicar cómo esto se verifica, ni de seña temáticas debe poserla igual para todas?
lar preferencia á ningun sistema filosófico; no obstante la experiencia está demostran
y si únicamente de dejar en su puesto el do que no es asi ; y concretándonos á la
hecho fundamental de toda ciencia psicoló aritmética universal, se encuentra que unos
gica, á saber, la imposibilidad de que el tienen muy buenas disposiciones para la
pensamiento resida en la materia. De esta numérica y no tanto ni de mucho para la
suerte queda en salvo la espiritualidad del algebráica , mientras otros se familiarizan
alma , queda fuera de duda la diferencia sin ningun trabajo con laespresion abstrac
esencial entre espíritu y cuerpo , y nos ha ta del álgebra, y se sienten embarazados
llamos por consiguiente desembarazados con la concreta minuciosidad de los núme
para entrar de lleno en la cuestion freno ros. Si comparamos la aritmética universal
lógica , ó sea en el examen de los hechos con la geometría, la diferencia se hace mu
cuyo conjunto unido á las consecuencias cho mas sensible ; sucediendo á veces que
que de los mismos se sacan , se propone una persona sobresaliente en uno de dichos
el distinguido profesor ofrecernos como ramos, no pase en otro de mediana.
un verdadero cuerpo de ciencia. » ( Véase En el trato comun de la vida es fácil
pág. 15). observar esta misma variedad, ora se pon
El tercer principio es: el cerebro es múl gan en cotejo personas de cortos alcances,
tiplo ; esto es , el cerebro es un compuesto ora se comparen hombres de conocido ta
ó agregado de varios órganos por medio de lento. Aun cuando e>tén acordes en sus
los cuales manifiesta el alma sus varias fa principios, y hayan recibido una educacion
cultades. En esta proposicion se contienen muy parecida , es sin embargo tan diferen
dos aserciones : multiplicidad de órganos te su modo de mirar las cosas, que se
del cerebro , y variedad de las facultades muestra elarísimamente la diferencia de
del alma. Examinemoslas por separado. En facultades de que están dotados. Quien
cuanto á la variedad de facultades, la ex penetra hasta el corazon de los objetos,
periencia propia y la agena nos la dejan complaciéndose en desentrañarlos, en ana
fuera de duda, aun refiriéndonos á un mis lizarlos hasta en sus mas recónditos plie
mo individuo; que si se trata de diferentes gues; quien saca luego deducciones, aten
personas, entonces el fenómeno se presen diendo menos á la solidez de los principios
ta tan de bulto que no consiente réplica ni ó á la verdad de los hechos, que á lascon-
necesita explicacion. Y esto no se verifica rirse;
secuencias
quienque
se de
entretiene
los mismos en minuciosida
pueden infe-,
solamente con respecto á las facultades cu
ya variedad está fundada en la misma di des , agenas quizás del punto principal ,
ferencia de su naturaleza, como por ejem mientras otro que las descuida , se ocupa
plo el entendimiento y la voluntad; sino especialmente del conjunto de las cosas ,
que es muy fácil observarlo hasta en aque dirigiéndose como suele decirse al blanco
llas que perteneciendo á un mismo orden de la dificultad; quien práctico y positivo,
debieran al parecer presentarnos , sino prescinde de todo linage de abstracciones
completa uniformidad , al menos mucha aplicando su atencion á los objetos tales
analogía. Asi, es sobremanera curioso el como son en sí; quien eleva al instante su
notar los diferentes caractéres que ofrecen pensamiento sobre lo que tiene á la vista .
 — 165 —
y pasa á reflexiones generales que hacen || acto de sentir sino tambien el de observar.
perder á la cuestion su aislamiento , y la Pero ¿cómo se deslinda en tal caso lo (pie
levantan á la region científica : en una pa toca al sentido y lo que corresponde al
labra , son tantas y tan variadas las grada pensamiento? ¿quién podrá decir si la re
ciones que ofrecen los ingenios, que quien flexion y la observacion se ejecutan por un
las haya observado , se habrá convencido mismo órgano , aun cuando á causa de las
de cuan difícil es, no diremos contarlas circunstancias indicadas, se note alguna di
pero ni aun clasificarlas. Asi opinamos que ferencia exterior que podría hacer sospe
la palabra talento es lo mas vago que darse char distinta localidad en las funciones?
pueda; y estamos en la profunda convic Los sentidos tienen órganos diferentes,
cion de que seria de la mayor importancia y en esto puede fundarse un argumento de
para los adelantos de las ciencias, literatu analogía para probar que lo mismo ha de
ra , industria , y de todo cuanto ocupa el suceder en lo tocante á las operaciones ín
humano entendimiento, el atender algo timas del alma. Sin negar lo plausible que
mas de lo que comunmente se hace, á las es el argumento indicado, parécenos no
disposiciones particulares con que el Autor obstante que pueden dársele dos respues
de la naturaleza ha favorecido á cada indi tas. Es la primera, que las razones de ana
viduo. Se abandonan ciegamente los hom logía por sí solas valen muy poco ; necesi
bres á la carrera que les viene á la mano ; tando para que alcancen consistencia ,
sin pensar que quizás se echa á perder un observaciones que manifiesten que es un
talento superior, que consume toda su vida hecho lo que se tomaba como una hipóte
en trabajar con escaso fruto en un ramo sis. El motivo de la debilidad de esta clase
para al cual no habia nacido. de argumentos no es difícil de conocer: es
Por mas cierta (pie sea la multiplicidad triban en la semejanza , y como esta sea
de las facultades del alma, y por consi una idea que siempre trae consigo alguna
guiente muy verdadera y exacta una de vaguedad, mayormente cuando se trata de
las partes de la proposicion que estamos fenómenos complicados, resulta muy á
examinando, no parece que lo sea en igual menudo que se juzga equivocadamente del
grado la segunda. Y si bien este punto no uno por el empeño de colocarlo en la mis
pertenece propiamente á nuestro objeto, ma clase del otro , que á pesar de algunas
diremos dos palabras sobre él ; no preten apariencias, pertenece á un orden muy di
diendo decidir la cuestion, sino manifes ferente. Tal vez no será fácil señalar esta
tando nuestras dudas, en uso del derecho diferencia ; pero aun cuando no la veamos
que la prensa adquiere sobre lo (pie se su no quedamos exentos de la obligacion de
jeta á la discusion pública. En cosas pura mantenernos en prudente desconfianza , so
mente naturales , nos guardaremos de de bre la verdad y exactitud de lo que se nos
cir imposible, á no tener para ello fuertes probare con argumentos de pura analogía.
motivos; ¿qué no sabemos de los caminos Si empero aconteciere descubrir esta dife
incomprensibles del Criador y del infinito rencia , entonces sube de punto la necesi
alcance de su omnipotencia? pero esto no dad de estar prevenidos contra la ilusion.
nos dispensa de proceder con la debida cir No nos lisonjeamos de haberla encontrado
cunspeccion aconsejada por la sana lógica; en el caso presente ; pero sí que nos atre
y de que al tratarse de dar asenso á una veremos á presentar una observacion que
doctrina no nos demos por satisfechos , has podría hacer sospechar que la naturaleza
ta verla apoyada en observaciones impar ha tenido razones particulares para multi
ciales, numerosas y ajustadas. Se ha dicho plicar los órganos de los sentidos , las que
que « nuestra conciencia nos hace sentir no existen con respecto al que sirve á las
que observamos con la parte inferior , y funciones íntimas del alma. Esta será la
reflexionamos con la superior de la frente:» segunda respuesta que al argumento de
¿quién es capaz de fijar esta clase de fenó analogía vamos á dar.
menos? es verdad que cuando para la ob Sea cual fuere la teoría quese adopte para
servacion necesitamos ejercer el sentido de la explicacion de los fenómenos que nues
la vista , parece que hasta el pensamiento tros sentidos ofrecen , resulta indudable
se agolpa por decirlo asi , sobre la parte que los órganos que sirven para el ejerci
cercana á los ojos, y que los movimientos cio de la funcion que apellidamos sentir,
que en aquella region se notan, podrían reciben inmediatamente sus impresiones de
indicar que en ella se verifica no solo el los cuerpos que los rodean. De este hecho
 — 1f>C>
tan
rentes
palpable
las impresiones
se infiere , que siendo dife- Sr. Cubi afirma que si el cerebro fuese uno
que se habian de y simple y nó múltiplo y complexo como
recibir , debian serlo tambien los órganos es , una parte seria absolutamente igual á
afectados ; por manera que á los frenoló las demás ; esto no es verdad , porque la
gicos se les puede hacer aquí una reflexion discrepancia entre los frenologistas y sus
nada despreciable , á saber , que la dife adversarios, no está en que estos nieguen
rente construccion de los órganos puede y aquellos afirmen la diferencia de perfec
haber sido motivada no tan solo por la fun cion que puede existir y existe en la totali
cion que se habia de ejercer , sino tambien dad ó en determinada porcion de cerebro;
por la impresion que se habia de recibir. sino en que los unos le suponen compuesto
Y como es bien claro que la luz, que el de partes, de las cuales cada una es un
sonido , que los olores y cuanto afecta los órgano destinado á una funcion particular,
sentidos externos , son cosas entre sí muy lo que niegan los otros. Resulta de aquí
distintas , aun considerándolas prescindien que los anti-frenologistas cuando establez
do de sus relaciones con todo ser viviente, can que el cerebro es órgano único , no se
y mirándolas tan solo como meros cuerpos verán precisados á conceder que los cere
ó movimientos corpóreos, salta á la vista bros hayan de ser iguales absolutamente,
que en la naturaleza misma de las cosas se ni en su totalidad , ni en sus partes ; de la
encuentra la razon de la multiplicidad de propia suerte que por ser ogano único el
los órganos de los sentidos externos. Ahora del paladar no se infiere la igualdad de to
bien: cuando se trata de las funciones in dos los paladares. Es necesario llamar la
ternas, ¿existen las mismas causas para atencion sobre las equivocaciones á que
que debamos suponer una multiplicidad podrían inducir las palabras «no y simple;
semejante? ¿En el ejercicio de estas se re es cierto que los seres simples en todo el
ciben por ventura impresiones de los cuer rigor de la expresion, es decir no compues
pos externos directa é inmediatamente? Es tos de partes , siendo de una misma espe
cierto que nó , y por tanto queda desde cie, serán iguales entre sí, en cuanto á su
luego evidente una disparidad , que si no esencia; pero la unidad y simplicidad del
destruye de raiz la analogía, al menos la cerebro no pertenecen á esta clase , pues
hace muy dudosa. es bien patente que el cerebro es una cosa
En prueba de que el cerebro es multi extensa, compuesta, y que por tanto no se
forme Se citan tambien los ejemplos de le puede llamar simple , sino en sentido
Vito Manyiamele, que resuelve intuitivamente muy impropio ; es decir , en cuanto se le
los mas intrincados problemas de Aritmetica, supondría órgano único y no formado de
de Lope de Vega que escribía buenos versos á otros destinados cada uno á su funcion res
los cinco años de edad , de Gall que á los seis pectiva.
ga formaba raciocinios acertados sobre el ca Nadie niega que no existiese diferencia
rácter de las personas , de Mozart que á los entre el cerebro de Mangiamele y el de
cuatro ya locaba admirablemente el violin ; « si Lope de Vega, asi como es indudable tam
el cerebro, continua el citado escritor, fue bien be deque
asemejarse
el de los alhombres
de aquellos
vulgares
prodigios
node-
se uno y simple, y nó múltiplo y complexo
como es, una parte seria absolutamente de la naturaleza. Cremos que hasta ahora
igual á las demás partes; y por consiguien ha estado de acuerdo todo el mundo en di
te Mangiamele debiera ser tan maravilloso chas verdades ; mas de esto no se infiere la
poeta como es aritmético ; y vice-versa variedad de órganos , sino la mayor ó me
Lope de Vega tan asombroso aritmético nor perfeccion de uno mismo. Pero enton
como era poeta , lo que dista mucho de la ces se nos replicará, ¿cómo es que Man
realidad. Igual observacion puede hacerse giamele no era tan maravilloso poeta como
respecto á cuantos están dotados de ingenio aritmético, y Lope de Vega tan asombroso
especial y particular. La pujanza maravi aritmético como poeta? Si el órgano es
llosa que alcanzaron los sabios jesuítas, fué uno, y la perfeccion es grande en ambos
resultado de haber cimentado la educacion ¿por qué no producía los mismos efectos?
que daban sobre este tercer principio fre ¿Pero por ventura, responderemos noso
nológico.» ( Man. de Fren.) tros , la perfeccion no puede entenderse en
Parecenos que estos hechos, si bien no muchos sentidos? acaso comparados los ór
tables por muchas razones, no prueban sin ganos únicos de dos personas ¿no puede
embargo lo que se propone el escritor. El suceder que bajo cierto aspecto cada cual
 — 167 —
lo tenga de mayor perfeccion? ¿de dos pa encuentre y encontrarse ntrarse puede nuestro ce
ladares muy delicados no acontece con fre rebro, ni hasta qué punto será dable que
cuencia que el uno es mas propio para hallándose en buena disposicion para un
cierta clase de sabores? Si esto se verifica órden de funciones, esté impedido para el
en el órgano de un sentido externo , sin ejercicio de otras. Pero sea como fuere, no
que por esto se infiera la multiplicidad, es difícil concebir que este fenómeno puede
¿quién sabe lo que podrá acontecer , tra muy bien acontecer. Lo haremos sensible
tándose de los que sirven para las opera con algunos ejemplos. El órgano del pala
ciones interiores? dar es único , y no obstante vemos á cada
«El soñar, dice el Sr. Cubí, es inexpli paso, que conservando las funciones vita
cable sin suponer múltiplo el cerebro. Si les, tiene trastornadas las sensitivas; y una
esta viscera fuese una y simple, debiera cosa semejante se observa en los demás
estar ó toda despierta ó toda dormida á la sentidos.
vez; en cuyo caso el soñar se desconociera. Aplicando al cerebro estas observaciones,
Suponiéndola múltipla, ya no es ningun inferiremos que es muy posible y hasta pro
misterio ; porque los órganos de la razon bable , que acontezca con respecto á él un fe
pueden estar, ven realidad están dormi nómeno semejante. Atendidos los inconve
dos, cuando los de la imaginacion eslán nientes que consigo trae el sistema en que
despiertos, que es lo que en efecto consti se pretende explicar las impresiones del
tuye el soñar. » Este argumento, á la ver cerebro suponiéndolas como una especie de
dad muy especioso, tampoco parece cen- huellan que correspondan á las varias sen
clu vente del todo. Para que lo fuese, seria saciones é ideas , parece mas conforme á
necesario demostrar que no es posible que razon el decir que solo consisten en movi
una viscera esté afectada de tal suerte que mientos y vibraciones, que modificándose
resulte incapaz de una determinada fun de infinitas maneras llenan el objeto que
cion, mientras al propio tiempo pueda ser les ha destinado el Criador de servir para
vir para otra. Una observacion muy senci las muchas funciones cuyo auxilio necesita
lla arrojará abundante luz sobre la presente el alma cuando ejerce las suyas. En esta
materia. El cerebro de un hombre sumido hipótesis, es claro que podra muy bien
en un profundo letargo no está por cierto suceder que el cerebro esté dormido para
destituido de toda funcion , pues que una cosa y despierto para otra ; porque no
ejerce cuando menos las necesarias para la hay inconveniente en que se halle afectado
conservacion de la vida. En tal caso, el de tal manera , que sea capaz de ejercer
individuo no tiene despierto el cerebro lo ciertos movimientos y vibraciones que cor
bastante para pensar ni imaginar, y sin responden por ejemplo á la imaginacion, y
embargo lo conserva con la accion necesa no lo sea con respecto á movimientos y vi
ría para vivir: luego no es imposible lo braciones que se refieren á un órden dife
que hemos dicho de que una misma viscera rente.
se halle afectada de tal manera, que estan El cuarto principio es el siguiente : el
do despierta ó en actividad para ciertas tamaño de un órgano cerebral , siendo lodo lo
funciones, esté dormida ó en inaccion con demás igual, es una medida positiva de su po
respecto á otras. tencia mental. « Este principio, continúa el
La misma respuesta puede darse á los Sr. Cubi, es en sí mismo evidente. De dos
argumentos que se fundan en la existencia listones de madera aquel tendrá mas fuerza
de « la manía y de heridas parciales y afec que mas grande sea. Por supuesto, si uno
ciones cerebrales en que solo se ven afec de los listones es de pino y el otro de roble,
tadas algunas potencias del alma, quedan el tamaño ya no puede servir de norma de
do las demás en un estado de completa comparacion respecto á fuerza. Por esto
salud. » nunca debe perderse de vista el siendo lodo
Hasta ahora nadie ha podido explicar sa lo demás igual, cuando se quiere que el ta
tisfactoriamente el modo con que es afecta maño sea la medida del poder. » Si supo
do el cerebro á consecuencia de las impre nemos que dos cerebros son en todo igua
siones de los sentidos y de las operaciones les excepto en el tamaño, de suerte que en
del alma ; ni tampoco cómo se verifica que perfeccion y delicadeza el uno no aventaje
dichas impresiones lleguen á esta por con al otro, parece en realidad que podrá in
ducto de aquel ; asi no podemos tampoco ferirse que el mayor es un indicio de po
determinar los diferentes estados en que se tencia mental mas grande , sobre todo si
 1G8
tenemos presente lo que se observa en el del gusto sea proporcional con el tamaño
del hombre comparado con el de los bru de la lengua? parece que nó; y ni el mis
tos animales. Esto , sin embargo , no lo ve mo (iall indica semejante idea, pues que
mos evidente sino probable ; porque igno solo habla de la que está cubierta de ma
ramos si podrian venir casos en que un milas nerviosas y prominentes , lo que na
tamaño excesivo diese lugar á ciertas afec da tiene que ver con el tamaño del órgano.
ciones mas ó menos constantes que impi No sabemos lo que habrá de cierto en que
diesen el buen ejercicio de las facultades unas narices grandes y bien abiertas anun
del alma. Pero la principal dificultad la te cien un olfato exquisito: pero aun cuando
nemos en aquellas palabras que restringen esto sea así, ¿(pié paridad hay entre las
la generalidad de la proposicion , siendo lo narices y el cerebro ? En cuanto á lo que
do lo demás igual; porque nos parece impo se añade de que un pecho elevado y abo
sible el determinar cuándo se verificara ó vedado nos hace deducir que los pulmones
nó semejante condicion. Aun concediendo son voluminosos , y que la respiracion es
que el tamaño y forma del cerebro, sea libre; asi como al contrario, un pecho pe
con rara excepcion , identico al tamaño y queño, hendido y estrecho indica pulmo
forma de la superficie externa de la cabe nes chicos y una respiracion difícil , nada
za ; es claro que la inspeccion de un cráneo tenemos que objetar; pero desde luego
solo puede darnos conocimiento del tama ocurre que el argumento no es concluyen-
ño ; pero de ninguna manera nos indicará te ; porque si bien es claro que el aire
si todo lo demás es igual ó nó. ¿Quién es circulará con mas desembarazo en propor
capaz de conocer el conjunto de circuns cion de la magnitud de los conductos que
tancias de que depende la mayor ó menor atraviesa , tambien lo es que no se trata
perfeccion de un cerebro ? y debiendo ser aqui del tamaño del órgano precisamente,
estas tan delicadas, ¿qué indicios externos sino de su mayor ó menor perfeccion ; y
pueden existir que nos conduzcan á adivi no creemos que ni aun ateniéndonos á los
narlas? Si por la inspeccion de una cabeza pulmones, pueda asegurarse que la per
no podemos inferir otra cosa relativamente feccion sea proporcional á la magnitud.
al cerebro que su tamaño y configuracion, El quinto principio es : el tamaño y for
resulta evidente que aun dada como indis ma del cerebro es, con rara escepcion,
putable la verdad de dicho principio, no idéntico al tamaño y forma de la superficie
puede servirnos de guia para conjeturar las externa de la cabeza. Sobre este nada te
facultades mentales. Los ejemplos aducidos nemos que observar , por cuanto hemos
porGall tampoco prueban lo que se propo emitido ya nuestra opinion sobre las con
ne. No nos opondremos á lo que dice el secuencias que podrian inferirse del mismo,
Sr. Cubi « que una lengua cubierta de ma aun en el caso en que se le suponga indis
milas nerviosas y prominentes, conduce á putable, y no se levante contra él ninguna
colegir con certidumbre que el sentido del dificultad, de las que quizás podrían levan
gusto es mas delicado ; que narices grandes tar los peritos en la materia. Lo propio
y bien abiertas anuncian un olfato esquisi- diremos del sexto , pues tambien nos halla
to; que un pecho elevado y abovedado nos mos de acuerdo con el Sr. Cubi en que las
hace deducir que los pulmones son volu facultades del alma cuando están predomi
minosos, y que la respiracion es libre; que nantemente activas, tienen su lenguage
al contrario un pecho pequeño, hendido y especial ó natural , mayormente si se trata
estrecho , indica pulmones chicos y una de las que tienen relacion con las pasiones;
respiracion difícil; que la anatomía com pues en cuanto á las demás, el principio
parada nos enseña que en todos los anima debiera quizás modificarse ; ¿ cuál será el
les, mientras sean de mas fuertes y grue lenguage especial y natural de aquellas fa
sos nervios tanto mas finos son sus sentidos» cultades que tienen por objeto ideas abs
pero tampoco se disipan con estos hechos tractas ?
las dudas que llevamos expresadas. En pri Por lo que toca á pronosticar las facul
mer lugar salta á los ojos, que no es lo tades mentales, ateniéndose á la simple
mismo observar la lengua, ó el cerebro; inspeccion de la superficie exterior del
aquella la tenemos á la vista, y no se halla cráneo , parece que , aun suponiendo ver
como este , encajonada y oculta en el ro daderos los principios frenológicos , es ope
busto receptáculo dispuesto por la natura racion sujeta á muchas equivocaciones. El
leza. Además ¿podria decirse queel sentido mismo Sr. Cubi confiesa ingenuamente que
 — 169 —
son trascendentales los efectos que produce sigue que el tamaño sea una medida exac
el temperamento sobre el tamaño cerebral; ta ; pues aqui no se trata de comparar los
que una cabeza proporcionalmente chica, órganos de una misma persona sino los de
pero que esté bajo el influjo de un tempe diferentes. Expliquémonos con mas clari
ramento nervioso sanguíneo , muy activo, dad , hasta admitiendo hipótesis favorables
manifiesta mas actividad y fuerza mentales, á la opinion contraria. Supondremos dos
que otra .proporcionalmente grande, embo individuos de los cuales el uno tenga el
tadas sus funciones por la demasiada grasa temperamento linfático y el otro nervioso;
de un prepotente temperamento linfático, si damos que el temperamento es igual en
ó de un temperamento general poco activo; todos los órganos de cada uno de ellos , y
de lo que inferiremos que cuando se exa que el efecto que produce con respecto ála
mina una cabeza es preciso no atender actividad es idéntico , resultará que si en
únicamente al tamaño de los órganos sino el primero, el órgano del cálculo numérico
tambien al temperamento de la persona ; y por ejemplo , ateniéndonos solo al tamaño,
como los temperamentos aunque en general es como 4 , y el efecto causado por el tem
reducidos á pocas clases son sin embar peramento es como 3, la actividad del ór
go variables en gran manera, combinán gano vendrá expresada por el producto de
dose de mil modos el nervioso, el sanguí los dos factores, y por consiguiente será
neo, el bilioso, y el linfático , y siendo igual á 12. Entonces si examinamos otro
infmitas las graduaciones de todos, y las órgano cualquiera del mismo individuo,
proporciones en que respectivamente pue por ejemplo la localidad, si el tamaño nos
den encontrarse , resulta que dado el ta da 5, estribando en la misma hipótesis de
maño de un órgano , será muy aventurado la igualdad de la influencia del tempera
el determinar la facultad mental á que mento expresada por el factor 3, la activi
corresponde. Preciso es hacer justicia á la dad total estará representada por el pro
ingenuidad del Sr. Cubi en este punto, ducto de o por 3 , o sea 15 ; y asi sucesiva
pues que confiesa sin ningun rodeo que mente se irian determinando las demás
« conviene mucho formarse idea cabal y facultades; pero cuando pasemos al exa
completa del influjo favorable ó desfavora men de la cabeza del otro individuo, ya no
ble del temperamento ; de lo contrario se nos servirán para nada las suposiciones an
cometerán errores crasos al querer pronos teriores; entonces habrán cambiado los dos
ticar carácter y disposiciones mentales por datos del problema; será preciso atender á
el examen de la externa superficie de la nuevos tamaños, yá nuevo temperamento,
cabeza. » (Manual ile Frenólmfia páy. SO.) y asi aun suponiendo que en el primero lo
Esta observacion del Sr. Cubi levanta una hubiésemos hecho con la precision que se
gravísima dificultad contra los pronósticos ha dicho, lo que es mas fácil de imaginar
sobre las facultades mentales , formados que de ejecutar, ¿cómo podría verificarse
por el examen del cráneo ; porque siendo en el otro? Nada importaría que se dijese
indispensable atender al temperamento, es que en cada uno todos los órganos tienen
claro que el simple tamaño no es para el un mismo temperamento; pues que tratan
acierto una guia segura. do de diferentes individuos , lo que al uno
No se escapó al Sr. Cubi esta consecuen se aplica podrá no ser aplicable al otro. Asi
cia , y asi conociendo el uso que de su con pues segun esta doctrina siempre será pre
fesion pudiera hacerse, trató de prevenir ciso atender á lo menos , á dos cosas : al
la objecion añadiendo : « que como el tem tamaño y al temperamento, y combinar
peramento sea el que fuere, es idéntico en acertadamente la respectiva influencia ; ope
todos los órganos cuyo conjunto forma el racion que segun parece , no ha de ser na
cerebro, su tamaño es casi siempre una me da fácil.
dida exacta de la potencia mental que ma Contra la indicada prevencion del Sr.
nifiestan, i> Pero esta prevencion del Sr. Cubi milita además otra razon nada despre
Cubí no basta a desvanecer la dificultad ; y ciable. Dada la igualdad de temperamento
esto por a arias razones. Aun siendo idén en todos los órganos de una misma cabeza,
tico el temperamento en todos los órganos ¿es bien cierto que la influencia de este sea
que forman el conjunto del cerebro, podrá igual tambien sobre todos ellos, de suerte
resultar que la actividad que les comuni que pueda estar expresada por un factor
que sea igual, comparados entre sí los de constante como mas arriba suponíamos?
de una misma cabeza , mas de esto no se Esto es lo que se nos debería probar. Per
 170
sonas conoce el que esto escribe, en quie
nes se nota para muchas funciones una
inaccion, una especie de postracion, que
quizás dimanen del temperamento linfático
que en ellas predomina ; y sin embargo
para otras muestran una facilidad , una vi
veza que contrastan de una manera singu
lar con la apatía de las primeras. Esto, ¿no
liodria indicar que ciertos órganos se re
sienten mas del temperamento que otros?
y entonces ¿cómo será posible graduar es
tas diferencias? Es muy natural que el
temperamento influya tambien sobre los
órganos de los sentidos externos , pero no
lo es tanto que esta influencia sea igual para
todos. ¿ Quién no ve por ejemplo , lo mu
cho que va de la vista al oido, y lo muy
diferentes que deben de ser las causas que
contribuyan á la perfeccion respectiva? ¿y
qué diremos comparando estos dos sentidos
con el del paladar, el olfato y el tacto?
¿por qué no podrá suceder lo mismo con
respecto á los órganos internos? Si real
mente existiesen los dos órganos de la ali-
mentividad y de la sublimidad; ¿no es muy
probable que las causas que los modifica
rían serian de órden muy distinto? En el
caso de influir al mismo tiempo sobre am
bos una misma causa, ¿no puede conjetu
rarse que este influjo obraría sobre el uno
de muy diferente manera que sobre el otro?
¿no podría tambien acontecer que lo que
para aquel fuese favorable, para este fuese
dañoso? Vemos á cada paso que cierta dis
posicion del cuerpo desarrolla ciertas facul
tades, mientras embota ó adormece las
otras; lo que se verifica accidentalmente,
¿ por qué no podrá suceder por ley cons
tante?
Y cuando esto decimos, no pretendemos
establecer nuestra opinion sobre ninguno
de estos extremos ; desde un principio he
mos confesado nuestra incompetencia para
el fallo, y asi solo nos proponemos apuntar
las dificultades que nos van ocurriendo,
deseosos de que una discusion mas abun
dante deje en su puesto la verdad.
Además, que el mismo Sr. Cubi convie
ne expresamente en que es muy difícil el
pronóstico , cuando despues de haber sos
tenido que el tamaño y forma del cerebro
es con rara excepcion idéntica al tamaño y
forma de la superficie externa de la cabeza,
restringe de tal suerte el principio que ha
ce nacer la mayor incertidumbre sobre las
probabilidades de acierto del arte en que
dicho señor se ejercita. Sus palabras son
las siguientes : « Pero no siempre se desar
rolla el cráneo de manera que se haga tan
patente á la vista el crece ó desenvolvi
miento extraordinario de uno ó mas órga
nos cerebrales. Las fibras que los constitu
yen , pueden adquirir mayor vigor, bis venas y
arterias que las reponen mas ensanche y acti
vidad, sin necesitar mayor espacio para obrar,
ó con solo adelgazar el cráneo por la parte in
terior, sin que á la vista se haga inmedia-
mente muy perceptible : bien asi como la
textura de una pierna, que se vuelve coi»
el bien dirigido y continuado ejercicio, mas
apretada, mas compacta, mas fuerte, sin
que de golpe lo perciban los sentidos. »
(Ib. p. 20.)
Aqui tenemos que el Sr. Cubi confiesa
dos cosas á cual mas notables : 1 .a que en
ciertos casos la fuerza de un órgano puede
no depender del tamaño sino del mayor
vigor de las libras que lo constituyen , y
del mayor ensanche y actividad de las ve
nas y arterias que lo reponen. Luego al
menos en estos casos el tamaño es un signo
falible. Lo que sucede en estos ¿por qué
no podrá suceder en otros y otros? ¿por
qué se ha de suponer que el fenómeno sea
extraordinario? ¿no vemos á cada paso que
la fuerza de los miembros y de los órganos
que tenemos á la vista no es proporcional
con el tamaño de los mismos? ¿No es ley
general de todos los seres corpóreos , que
su actividad y demás calidades no depen
den precisamente de su magnitud , sino
tambien de la clase de partes y elementos
que los forman , y de la manera con que
aquellas y estos se arreglan y combinan? 2.a
que el cráneo puede adelgazarse por la
parte interior, dejando mayor espacio á los
órganos, sin que en la exterior se haga
sentir el aumento. Otra prueba de que la
configuracion del cráneo puede conducir
nos á equivocacion , si por ella queremos
pronosticar las facultades del alma.
El Sr. Cubi trata al parecer de disminuir
el mal efecto que pudiera producir una
confesion tan terminante , continuando :
« Digo de golpe ; porque á poco que se
examine, deben percibirlo; puesto que una
pierna , ó una cabeza , ú otro órgano cual
quiera , si se ejercitan mucho , tienen otra
apariencia y son mas calientes al tacto por
la mas rápida circulacion de sangre que
hay en ellos, que una pierna, una cabeza
ú otro órgano cualquiera , que se mantie
nen inactivos. » No negaremos que una
parte muy ejercitada adquiere mayor fuer
 — 171 —
za, y que hasta presenta señales que no la todo el edificio de la Frenología? Si en los
dejan equivocar con otra que se mantenga casos mas notables y característicos, donde
inactiva ; como vemos á cada paso compa no caben ilusiones sobre la mayor ó menor
rando las manos que solo manejan libros ó fuerza de una facultad , la naturaleza nos
plumas , con las que se ocupan en faenas muestra que no hay proporcion entre dicha
penosas. Pero fácilmente se echa de ver fuerza y el tamaño del órgano cerebral , ni
que lo que puede conocerse muy bien con ninguna de las favorables circunstancias
respecto á miembros , cuya contextura in que pueden modificarlo , ¿ cómo podremos
terior se presenta á la vista y al tacto, solo estar satisfechos con los principios estable
cubierta con endeble cutis, no es ni siquie cidos? Esto, se nos dirá, son raras excep
ra posible tratándose de órganos metidos ciones; pero ¿quién nos lo asegura? ¿quién
dentro de una cavidad tan robusta y tan sabe si se repiten con tanta frecuencia , que
bien forrada como es el cráneo. No queda lleguen á formar una regla ? ¿ cabalmente las
rá pues otro medio que el mayor ó menor leyes frenológicas salen fallidas, en los casos
calor que se observe en la parte ; pero i, en que mas de bulto debieran presentarse ?
¿quién no ve á cuántas y cuán varias cau I Pero oigamos de nuevo al Sr. Cubi. « Se
sas puede estar sujeto este fenómeno y cuán cuentan casos milagrosos de memoria ver
difícil es apreciar por este medio el desar bal , yo he conocido varios. A ninguno de
rollo de los órganos internos? En hora bue estos portentos les he hallado ni el órgano cor
na que una cabeza muy caliente indique el respondiente cerebral, ni las circunstancias
estado de viva accion en que se hallen las modificativas , tan prodigiosamente desarrolla
funciones cerebrales; mas ¿qué sacaremos das, como debieron haber sido, á no mediar
de aquí para formar juicio sobre el estado por aquella portentosa retentiva, alguna
habitual de las mismas , ni sobre la mayor otra causa ó condicion auxiliar , que aun
ó menor extensión de las facultades men desconocemos. Walter Scott jamás se olvi
tales? daba de lo que habia una vez oido. Cuenta
El mismo Sr. Cubi, tratando de las con Lockart, su biógrafo, que el caballero
diciones desconocidas, viene á confirmar lo Hogg se le presentó un dia con mucha pe
mismo que estamos diciendo. « Nótanse á sadumbre, por haber perdido un poema
veces fenómenos de prodigiosa , sana acti que hacia algun tiempo habia compuesto.
vidad , especialmente en los órganos de la Consolóle Walter Scott diciéndole que creia
region superciliar , cuyas causas no pueden poderle ser útil en recobrarlo ; y en efecto
hallarse ni en su tamaño, ni en ninguna de las á pesar de que no lo habia oido mas que
favorables circunstancias que pueden modifi una sola vez en su vida , lo dictó entero á
carlo. Comparado por ejemplo el tamaño su mismo autor quien lo habia olvidado.
del órgano del cálculo de Vito Mangiamele « Para tamaña retentiva » confiesa franca
con el de otra persona que lo tenga nor mente Combe « no tenemos ninguna señal ex
malmente desarrollado , lo consideraremos terna ; si bien depende indudablemente de
algo grande, sí, pero de ninguna manera alguna condicion especial del cerebro. »
se presentará tan desmedido como debiera Nuevos motivos para aumentar las dudas
esperarse de su milagroso y sobrehumano sobre los principios frenológicos. Y nótese
vigor y rapidísima actividad. Blaise Pascal bien , que hablando el Sr. Cubi de los ca
es otro singular fenómeno. A los once años sos milagrosos de memoría verbal , dice
encerrado en un cuarto sin que jamás hu que el órgano correspondiente cerebral ni
biese saludado á la geometría, inventó casi las circunstancias modificativas, tan prodi
todas las proposiciones de Euclides, y á los giosamente desarrolladas como debieron
diez y seis ya habia escrito una obra esce- haber sido , no lo ha hallado en ninguno de
lente sobre secciones cónicas. Bellini , Pa estos portentos. Esta confesion que honra
ganini y Rossini , no tienen al parecer los mucho la ingenuidad del Sr. Cubi, pues
órganos, ni las favorables circunstancias que da una prueba de que no repara en
conocidas, de cuya combinacion nace la dar armas á sus adversarios, cuando lo
música , mas desarrollados que otras per exige la verdad , ataca los fundamentos de
sonas , las cuales despues de haber pasado la Frenología ; porque nos inclina á creer
toda su vida estudiando aquella noble arte, que debe de ser una ley bastante general,
nunca llegaron á ser mas que buenos com el que los principios de esta ciencia no son
positores ó ejecutores. » ¿Puede darse ar aplicables cuando se trata de facultades ex
gumento mas fuerte para hacer bambolear traordinarias.
 — 172 —
« El presentarse de vez en cuando estos De lo que acaba de esponerse , continúa
casos milagrosos , dice el Sr. Cuhí, en na el escritor , no es difícil deducir que existe
da afectan ni la utilidad , ni los principios la posibilidad de pronosticar fuerza mental
de la Frenología. Nunca se ofrecen donde por el volúmen , configuracion y aparien
no existe un desarrollo mas que regular, y cia de la cabeza. Porque, si se sabe que el
casi siempre grande de los órganos cere cerebro es la máquina que mueve el alma
brales, y de las circunstancias favorable para manifestarse; si se sabe que las varias
mente modificativas, de que les supone facultades del alma se manifiestan por me
depender la Frenología, y de que en gran dio de varias partes constitutivas del cere
parte realmente dependen. » No podemos bro ; si se sabe que el tamaño de un órga
convenir en la opinion del citado escritor; no es una indicacion segura por lo comun
y para que se vea la razon en que estriba de su fuerza mental , y si por fin se sabe
mos, preguntaremos ¿cuál es el principio que lo mismo es ver ó palpar la superficie
fundamental de la Frenología? Si no nos externa de la cabeza , para juzgar de la
engañamos,
compuesto deconsiste
muchosenórganos,
suponer con
el cerebro
cierta U forma
mo cerebro, salta del
y volumen á loscerebro
ojos que segun
, que el
proporcion entre el tamaño de estos y las el tamaño de un órgano cerebral , exami
facultades mentales; es asi que segun vo nado en el esterior de la cabeza , asi será
sotros mismos una experiencia constante la fuerza mental que él sea capaz de ma
atestigua que esta proporcion no existe en nifestar.» Respetamos las convicciones del
los casos en que precisamente debiera ha Sr. Cubi en punto á la certeza de la cien
cerse mas sensible, luego tenemos grandes cia frenológica , pero quizás en este pasage
motivos para recelar que los principios fre se abandona demasiado á su entusiasmo,
nológicos no están fundados en la naturaleza. pues que hasta tal punto lleva la seguridad
Parécenos que si en esta materia se han de los pronósticos que se formen por el me
de hacer experimentos que puedan condu ro examen de la superficie externa de la
cir á resultados verdaderamente científicos, cabeza. Creemos que las dificultades que
conviene que se escojan objetos en (pie las acabamos de presentar, si no son bastantes
cualidades sean algo singulares; del con para destruir esta certeza , al menos pue
trario hay el riesgo de no determinar bien den hacerla vacilar algun tanto; y sea cual
ningun fenómeno. En efecto : supongamos fuere el juicio que sobre las mismas se for
que para examinar el órgano del cálculo me, al menos será preciso convenir en que
numérico se eligen cabezas comunes donde no son para despreciadas.
esta facultad no tiene mas que un desarra- Y todavía conviene no olvidar , que al
11o ordinario; será imposible adelantar na suscitar dudas sobre los principios frenoló
da. En primer lugar, ni el mismo que la gicos nos hemos ceñido á la teoría propia
posee , es capaz de darse cuenta á sí mismo, mente dicha; y no hemos descendido al
de la graduacion mas ó menos alta que exámen de su práctica , sino relativamente
disfruta. Sabrá que aprendió con mas ó á un solo órgano comparado con su cor
menos facilidad , que calcula de la propia respondiente potencia. Pero las dificultades
manera ; pero ¿quién es capaz de formarse propuestas adquieren mucha mayor fuerza,
ideas exactas sobre esos mas ó menos? En si se tienen en consideracion las complica
segundo lugar , es necesario atender al ciones que por necesidad ha de traer consi
tiempo gastado en aprender , al empleado go el exámen de muchos órganos á la vez,
en ejercitarse , la clase de operaciones en infiriendo por su tamaño la facultad del al
que se ha verificado la práctica, y á las ma que indican.
circunstancias de vida , de fortuna , de ca Para no confundir las ideas , agrupando
rácter , que pueden haber avivado ó debi muchas de un golpe , hemos supuesto que
litado la atencion ; es preciso pesarlo todo, el tamaño de un órgano podia examinarse
combinarlo , compararlo , y viendo final tal como era en sí; suposicion que permi
mente la destreza adquirida , cotejarla con tíamos, pero que estamos muy lejos de
el tamaño del órgano. ¿ Quién es capaz de aceptar , y sobre la cual vamos ahora á de-
prometerse ni mediano acierto, teniendo eir nuestra opinion. Cuando se examina un
que llevar en cuenta tantos y tan diferen órgano por medio del cráneo, aun cuando
tes datos , á no ser que se trate de fenóme se suponga, que la configuracion exterior
nos muy marcados, y que ofrezcan, por de corresponda exactamente á la interior, no
cirlo asi, abultado cuerpo á la observacion ? no podrá inferirse quese haya determinado.
el tamaño del que ocupa la localidad exa
minada. Para que esto pudiera inferirse
con certeza , seria necesario saber si á mas
de la parte del cerebro contenida en la con
cavidad indicadapor la convexidad, no hay
otra que se prolonga hácia lo interior , en
esta ó aquella direccion , aumentándose asi
el tamaño del mismo órgano. Aclararemos
nuestra idea con un ejemplo. Supongamos
que examinando el órgano de la destructi
vidad , hallamos una convexidad en el crá
neo, que nos presenta un volúmen de me
dia pulgada cúbica; en la hipótesis de que
la parte interior corresponde exactamente
á la exterior , deduciremos que existe un
órgano del mismo volúmen. Pero como no
sabemos que este órgano acabe allí , á no
ser que supongamos tambien que todos es
tén tan limitados á las concavidades del
cráneo, como si pasasen planos secantes
que les impidiesen extenderse por la parte
de dentro, resultará que tendremos muy
poco adelantado cuando conozcamos la par
te indicada por la convexidad exterior.
Es evidente que asi el cerebro como to
das sus partes , no son una mera superficie
sino un volúmen ; y que cuanto mas múl
tiplo se le suponga , tanto mas difícil se ha
rá el determinar la porcion que de dicho
volúmen corresponde á cada uno de los
órganos. Considerando el cerebro como ór
gano único seria el exámen mucho mas sen
cillo ; y si el tamaño debiese indicar las fa
cultades mentales, los pronósticos estuvie
ran menos sujetos á error. Asi por ejemplo,
si diésemos que midiendo las dimensiones
de un cráneo nos resultasen N. pulgadas
cúbicas, para el volúmen del mismo, el
valor de N. expresaría tambien el volúmen
del cerebro ; y como en tal caso no tuvié
ramos que distribuir esta cantidad entre los
demas órganos, solo podríamos incurrir en
la equivocacion que proviniese de la poca
exactitud de la medida de las dimensiones,
ó de la falta de correspondencia que hu
biese entre lo interior y lo exterior de la
cabeza. Pero suponiendo múltiplo el cere
bro , cuando tengamos su volúmen total ,
nada habremos adelantado para determi
nar la fuerza respectiva de los órganos ;
porque el valor del volúmen expresado
por N. , será menester distribuirlo entre
muchos; siendo evidente que semejante
distribucion puede hacerse con mas ó me
nos igualdad y de infmitas maneras.
Para los que gusten profundizar mas la
materia , y formarse ideas precisas y exac
tas , presentaremos la dificultad , valiéndo
nos de términos geométricos. Supongamos
que examinando la superficie, hallemos que
un órgano ocupa un casco ó casquete esfé
rico de unas dimensiones cualesquiera; ¿co
nocemos por esto el tamaño del órgano ?
ciertamente que nó : porque no sabemos si
está limitado precisamente al segmento es
férico , ó si extendiéndose por lo interior ,
se aproxima mas ó menos á un sector esfé
rico , ó se prolonga en configuraciones ir
regulares. Y como es evidente que si esto
se verifica será mucho mayor el tamaño,
resulta que en no teniendo observaciones
que nos demuestren cuál es la configura
cion de cada uno de los órganos, cuanto se
diga sobre el volúmen respectivo estará tan
destituido de fundamento , como si por la
superficie de un casquete esférico preten
diésemos averiguar el volúmen que corres
ponde á porciones heterogéneas de una es
fera , no sabiendo si por lo parte interior se
limitan al segmento, ó si llegan á formar
sectores , ó conos truncados , ó si tomar
otras formas regulares ó irregulares.
Cuenta el Sr. Cubi 59 órganos , corres
pondientes á otras tantas facultades del al
ma ; y como es probable que no se hayan
descubierto todos, debemos inferir que en
caso de que el cerebro fuese múltiplo, exis
tirían otros que no conocemos , y que nos
iría revelando la experiencia. Reflexione el
lector si ha de ser poca la dificultad de des
lindar los unos de los otros tratándose de
una superficie tari reducida como es nues
tro cráneo ; que si á esto añade las prece
dentes consideraciones que se refieren á la
configuracion interior , á las ramificaciones
con que pueden enlazarse , particularmen
te los que ocupan lugares inmediatos, echa
rá de ver la necesidad de mantenerse en
prudente reserva , siguiendo la regla que
debe siempre guiar á quien se ocupe del
estudio de la naturaleza, no prestar fácil
mente asenso , hasta verse obligado á ello
por el número y certeza de las observacio
nes, y por la exactitud de los raciocinios
que manifiesten la legitimidad de las con
secuencias.
Pues bien, se nos dirá ¿pensais r,ue la
Frenología es una teoría destituida de todo
fundamento? ¿Opinais que no es mas que
un sueño de algunos entusiastas? Creeis
que todos los hechos que esponen , que to
das las razones que aducen , son puras fal
sedades y quimeras? No decimos tanto:
insiguiendo en nuestro sistema de respetar
 — 171 —
las convicciones agenas, nos hemos abste encontrara en qué ocuparse. Hablando el
nido de calificaciones duras , y hemos ha Sr. Cubí de la filosofía de Descartes , dice
blado de las personas con el debido decoro. que si la Frenología no hubiese hecho mas
Mas diremos : si se nos pregunta si estamos que ahorrar en lo sucesivo el precioso
convencidos que el cerebro sea órgano úni tiempo que ingenios privilegiados emplea
co , responderemos que en nuestra opinion rían en fútiles especulaciones de esta clase
este es todavía un secreto de la naturale todavía seria acreedora á las alabanzas que
za ; si se nos pregunta , si juzgamos impo se le tributan; creemos que el Sr. Cnbi ha
sible la multiplicidad de los órganos cere ce á la Frenología un honor que no le cor
brales , responderemos que nó : pues de la responde , pues no ignora dicho Sr. que no
propia suerte que todos estamos acordes es Gall quien ha desterrado los sistemas
en que el cerebro es órgano del alma , en hipotéticos. Como quiera , conviene guar
tendiendo esta expresion en el sentido ar darse de ellos, y en tratando de establecer
riba explicado, tampoco es lícito negar que proposiciones en materia de ciencias natura
Dios en vez de darle uno solo , podría ha les , lo que importan son hechos, y no mas
ber formado el cerebro compuesto de va que hechos. Esta es nuestra opinion, la mis
rias partes de tal manera que cada una ma que manifestamos ya en el primer ar
ejerciese su funcion peculiar ; si se nos pre tículo cuando decíamos : «Como las ciencias
gunta si creemos que bajo este aspecto na naturales, á las que esta pertenece tam
da tenga que hacerla ciencia, y que la ob bien, no deben estribar en meras hipótesis
servacion de las cabezas se haya de descui ó en razones de analogía mas ó menos con
dar como cosa enteramente inútil y vana , vincentes, sino que han de apoyarse en he
responderemos que nó ; porque es induda chos observados con rigurosa exactitud,
ble la relacion entre el cerebro y las ope será menester primero : que se nos pruebe
raciones del alma , y porque la simple vis que el cerebro está distribuido en cierto
ta de las testas de los talentos extraordina número de partes de las cuales cada una
rios , está indicando que hay aqui algo que sirve para una funcion determinada; se
estudiar. ¿Quién no ha reparado en la es gundo , que se señale la localidad de las
paciosa frente de casi todos los hombres mismas, y la respectiva facultad del alma
célebres por su elevada capacidad ? Las se de que son instrumentos ; tercero , que se
ñales que nos da la inteligencia ¿por qué nos muestre que por la simple inspeccion
no podrían dárnoslas otras facultados? ó contacto del cráneo se puede adivinar la
Esta confesion está manifestando que es existencia y el grado de dichas facultades ;
cribimos con imparcialidad , con buena fe , cuarto, que se indiquen con alguna preci
deseosos de que la verdad brote radiante y sion las causas que puedan inducir á error
pura del mismo choque de las discusiones. cuando se trate de formar esta conjetura ;
Pero por lo mismo que este fin guia nues quinto, que se explique apoyándola con
tra pluma , somos enemigos de la exagera hechos ciertos, cuál es el desarrollo y mo
cion , y no podemos consentir que pase por dificaciones que de la educacion , de la ins
cosa cierta lo que es muy dudoso , y que truccion , de las ocupaciones, del tenor ge
se dé por fallada la causa cuando pende to neral de la vida, ú otras causas cualesquiera
davía en el tribunal de la razon. pueden resultar; sexto, que al ofrecerse
¿Quién negará que la observacion de las las láminas que señalan donde se encuen
fisonomías no pueda servir en algunos ca tran los asientos de los órganos cere
sos
des para
personales?
conjeturar
Nadie
sobre
ignora
algunas
lo mucho
cualida
que brales , se indiquen las reglas que han pre
sidido á la delincacion : ora se trate de las
se ha escrito sobre este particular; como y cabezas en general , ora de las que se ha
tambien que la demasiada importancia que yan desarrollado de una manera particular
que se quiso dar á este arte , contribuyó á y notable , natural ó artificialmente. »
su descrédito. Somos amigos de la verdad, Por lo tocante al modo con que debe ha
y por lo mismo no lo somos de la exage cerse uso de la ciencia , repetiremos tam
racion : que la exageracion mata las doc bien aqui lo que dijimos allí. « En breve ,
trinas como los partidos. deseamos que el Sr. Cubi eleve la Freno-
Nó alas , sino plomo : máxima que no nos gía á toda la altura que reclaman el mis
cansaremos de repetir, porque jamas la tie mo decoro y la dignidad de la ciencia, no
ne demasiado inculcada el espíritu huma dejando ningun pretexto á que se la pueda
no. Si Bacon volviese al mundo todavía tachar de ilusion y charlatanismo. Desea
mos que en lo tocante á la práctica , ni se
le quite nada de lo que le corresponde , ni
se la atribuya lo que no le pertenece. La
exageracion excita quizás un entusiasmo
momentáneo ; solo la verdad produce un
efecto duradero. El crédito de las ciencias
debe fundarse en las convicciones arraiga
das en el entendimiento , nó en las lisonjas
tributadas al amor propio , ó en las frivo
lasOtro
puerilidades
dia nos ocuparemos
de una vanade curiosidad.»
la Frenolo
gía en sus relaciones con la Religion y la
moral. Procuraremos aclarar las ideas pa
ra que los incautos no incurran en errores
peligrosos. Ni disimularemos la verdad , ni
reprenderemos sin motivo : porque desea
mos que nuestros escritos lleven el doble
sello , de la austeridad de la razon , y de la
imparcialidad de la justicia. — J. B.
POLÉMICA RELIGIOSA.
CARTA QUINTA
Á UN KSCÉPTICO EN MATERIAS DE RELIGION.
LA SANGRE DE LOS MÁRTIRES.
Ya veo, mi estimado amigo, que me ha de
ser muy difícil realizar el pensamiento que
en un principio me proponía , de dar cier
to orden á la discusion religiosa que íbamos
entablando, encerrándola en un cauce del
cual no pudiese salir, sin perjuicio de di
rigirla por paises amenos, y permitiéndole
tortuosidades caprichosas , que le quitasen
la apariencia de la regularidad escolástica ,
y diesen á la materia un aspecto agradable
y entretenido. Inútiles son todos mis cona
tos para hacerle entrar en este plan ; pues
segun parece , le gusta mas el tratar pun
tos inconexos , divagando como abeja en
tre flores. Aun cuando conozco muy bien
los inconvenientes de este sistema de con
ducta, y si mal no me acuerdo, se los lle
vo ya indicados en una de mis anteriores,
preciso se me hace el seguirle á V. por el
camino que le place señalarme , para que
no le venga á V. á la mente que trato de
esquivar cuestiones delicadas, y que en
volviendo á mi contrincante en una nube
de autoridades y de raciocinios teológicos ,
me propongo ocultar puntos flacos apar
tando de ellos el peligro de un ataque. Sin
embargo esta necesidad fuera para mí mas
desconsoladora, si V. no se sirviese adver
tirme que « no carece del conocimiento de
las mejores obras que se han escrito en de
fensa de la Religion , y que reservándose
estudiarlas para cuando haya mas tiempo
y paciencia , solo intenta en la actualidad
aclarar por via de recreo y esparcimiento
algunos puntos difíciles, como quien quita
la broza que impide la entrada á un cami
no anchuroso.»
A decir verdad , no me desagrada que
V. haya traido la discusion sobre el punto
de la sangre de los mártires , pues es asunto
sobre el cual hay mucho que decir , y en
el que tarde ó temprano hubiéramos tenido
que entrar , si la controversia hubiese se
guido el curso que yo deseaba. Esta sangre
es á no dudarlo , uno de los argumentos
mas firmes en apoyo de la verdad de nues
tra santa Religion , y asi el examinar las
razones que los cristianos podemos alegar
en defensa de nuestra fe, ó como suele de
cirse, los motivos de credibilidad, tampoco
hubiera yo olvidado el presentarle á V. ese
prodigio, en que personas de todas edades,
sexos y condiciones, mueren con heroica
fortaleza , por no profanarse ni con un solo
acto , que no estuviese conforme con la fe
del Crucificado.
Pero antes de hablar yo , quiero que ha
ble V. ; y asi para no confundir las ideas ,
y con la mira de que ni uno ni otro olvi
demos el verdadera estado de la cuestion ,
y de que por consiguiente la respuesta pue
da ser mas cabal y Ajustada , reproduciré
lo que me dice V. en su apreciada. « Res
peto como el que mas la fortaleza de ánimo
donde quiera que la encuentro ; y confieso
ingenuamente que el heroismo del sufri
miento es á mis ojos mucho mas sublime
que el heroismo del combate. Con esto le
ahorraré á V. no poco trabajo , pues que
asi conocerá desde luego, que no tiene ne
cesidad de fatigarse en ponderarme ni el
número de los mártires, ni sus atroces tor
mentos, ni su invicta constancia, ni tam
poco en excitar mi entusiasmo , poniéndo
me delante de los ojos, caducos ancianos,
débiles mugeres , tiernos niños, marchando
impávidos á morir por su fe. Dudo mucho
que en esta parte me exceda V. en senti
mientos de respeto y admiracion; asi como
 — 176
no tiene V.que recelar que mi escepticismo tra hechos mas claros que la luz del dia ?
llegue hasta levantar dudas sobre la in Solo la ciudad de Roma es un argumento
mensa muchedumbre de dichos mártires ; irrefragable en confirmacion de la inmensa
no me agrada aguzar mi ingenio para com muchedumbre de los mártires. Se ha dicho
batir hechos de tan probada verdad. Mis que los subterráneos de la ciudad eterna
impotentes negaciones no borrarían por eran un gran sepulcro : ¡ digna peana de la
cierto las páginas de la historia. Pero de Cátedra de San Pedro ! «Vimos, en la ciu
jando aparte , y confesando expresamente dad de Rómulo, decía Prudencio, innume
la verdad del hecho , no puedo convenir en rables cenizas de Santos ; si preguntas , ó
que puedan sacarse de él las consecuencias Valeriano , por las inscripciones de los tú
que VV. los cristianos pretenden ; porque mulos y los nombres de las víctimas , difí
es bien sabido que el entusiasmo por una cil se hace el responderte : | tan grande es
idea puede producir semejantes efectos ; y el número de los justos sacrificados por el
en cuanto á la propagacion delas creencias furor impío de Roma idólatra ! Hay en
cristianas que resultó de la persecucion , muchos sepulcros algunas letras que nos
bien sabe V. que el secreto de prosperar indican el nombre del mártir ó contienen
una causa es el hallarse contrariada , com breve alabanza ; pero hay mármoles mudos
batida , el poderse presentar sus defenso que encierran silenciosa muchedumbre , y
res con honrosas cicatrices que acrediten que solo significan el número. ¡ Cuántos
profundas convicciones, é invicta constan cúmulos de cadáveres sin ningun nombre !
cia en sustentarlas.» No he querido cerce Acuérdome que en solo un lugar vi las re
narle á V. ninguna parte de su argumento, liquias de sesenta , cuyos nombres solo co
ni escatimarle en lo mas mínimo el valor noce Cristo.»
de la dificultad ; pero tambien me ha de
permitir que me extienda en la solucion de Innumeros cineres sanctorum Romula in urbe
la misma , cual reclama la importancia de Vidimus , o Christo Valeriano saccr
la materia. Incisos tumulis títulos; et singula qua;ris
Ante todo, acepto de buena ganala con Nomina? Difficilc est , ut replicare queam ,
fesion de que el número de nuestros már Tantos justorum populos furor impius hausit
tires es asombroso , no siéndolo menos las Quum colcret patrios Troya Roma Deos ,
circunstancias de su martirio, ora se atienda Plurima litterulis signata scpulcra loquuntur
á los tormentos , ora á las personas que lo Martyris aut nomen , aut epigramma aliquod ,
sufren. Y cuando la acepto con gusto, es Sunt et muta tamen tacitas claudentia turbas
solamente por la complacencia que me cau Marmora , que solum significant numerum ,
Quanta virum jaceant congestis corpora aeervis
sa , el ver que V. no trata de empeñarse Nosse licet, quorum nomina nulla legas,
en combatir hechos de tan probada verdad; Sexaginta illic defossas mole sub una
pero nó porque sea esta una confesion á Reliquias memiui me didicisse hominum ,
que yo no pudiese obligar ámi adversario: Quorum solus habet comperta vocabula Christus.
para lograr mi objeto no hubiera debido
hacer mas que abrir las páginas de la his Así hablaba en el siglo cuarto este insig
toria ; y como observa V. muy bien, esas ne español; por donde se echa de ver, que
páginas no se borran con impotentes negacio ya en aquellos tiempos causaban los sub
nes. Las actas de los mártires no son devo terráneos de Roma la profunda y religiosa
tas leyendas, inventadas para nutrir la admiracion que producen en los viageros
piedad de los fieles , son documentos que de nuestra época . Diez persecuciones cuenta
han pasado por el crisol de la crítica mas la Iglesia bajo los emperadores gentiles ,
severa. Ruinart, Mabillon, Natal Alejandro, que son los de Neron, Domiciano, Trajano,
Fleuri, Tillcmon, Papebroche , Holstenio, Antonino Vero , Severo , Maximino , De-
y otros críticos por cierto nada sospechosos cio , Valeriano , Auleriano , y Diocleciano ;
de excesiva credulidad , y cuya inmensa en todas se cometieron horrendas atrocida
erudicion y refinado discernimiento les ase des; y es necesario tener en cuenta que no
guran completa competencia, hubieran ve se limitaba la persecucion á pocos puntos ,
nido en mi ayuda, si V. no hubiese tenido sino que se extendía por todo el ámbito del
la prudente precaucion de abstenerse de imperio. Espanto causa el leer en los auto-
una contienda, en la que no hubiera lleva tores contemporáneos las tremendas esce
do ventaja , á pesar de toda la brillantez de nas que ofrecía á cada paso la crueldad de
su talento: ¿qué valen los raciocinios con los perseguidores luchando con la firmeza
de los mártires: jamas religion alguna se
vió sometida á tan dura prueba, jamas se
mostró con mas evidencia la humanidad
elevada á una altura inmensamente supe
rior á sus fuerzas.
El entusiasmo por una idea dice V. que
puede producir semejantes efectos: esta
dificultad exige una respuesta detenida. No
negamos nosotros que no puedan venir ca
sos en que una persona se exalte de tal
suerte por una idea, afecto, ó interes, que
sea capaz de sacrificar su existencia : los
ejemplos no fueran difíciles de encontrar en
la historia de los tiempos pasados, y no
faltan tampoco en los nuestros. Pero no se
trata aqui de saber hasta dónde pueden lle
gar la fuerza y energía moral de este ó
aquel individuo, vivamente poseido de un
objeto; no se intenta disputar la posibilidad
de dar gustoso la vida por él , y hasta de
sufrir atroces tormentos; la fuerza de nues
tro argumento no consiste en semejantes
aserciones desmentidas por la razon y la
historia ; lo que decimos nosotros es , que
atendida la humana flaqueza, no es posible
sin particularísima asistencia del cielo, que
por espacio de tres siglos, en todos los
puntos del orbe conocido , se hayan encon
trado en tan asombroso número personas
de todas edades , sexos y condiciones , que
hayan perdido alegres su hacienda , su ho
nor á los ojos del mundo, y acabado final
mente su vida entre los tormentos mas
crueles , solo por no querer abandonar la
fe del Crucificado ; esto decimos, y á quien
nos contradiga , le exigiremos que nos
muestre en los fastos de la humanidad un
ejemplo semejante; no contentándonos con
este ó aquel ejemplo aislado , le pediremos
que nos los presente á millares de millares
como podemos presentarlos nosotros; y se
guros de que no le ha de ser posible , cree
remos estar en nuestro derecho cuando
afirmemos , que nuestra religion tiene un
carácter de que están destituidas las otras.
Me dice V. «que todo pais ha tenido sus
mártires, pues mártires pueden apellidarse
los que mueren por la independencia de su
patria , sacrificando generosamente su exis
tencia á la felicidad de sus compatricios; y
que sin embargo no se ha creido nunca
que para semejantes actos fuese necesaria
una gracia especial del cielo.» Esta obser
vacion , mi estimado amigo , me hace sos
pechar que V. no ha meditado mucho so
bre el corazon humano , en sus relaciones
con los sacrificios, pues que de tal manera
tomo i.
confunde las ideas , y no distingue cuáles
son los que se nos hacen mas costosos. ¿No
ha pensado V. nunca en lo que va de valor
á fortaleza , en la inmensa distancia que
media entre acometer con denuedo un pe
ligro ó esperarle con calma , entre arros
trar un riesgo pasagero, y tolerar resigna-
damente una larga cadena de trabajos y
tormentos? Los hombres capaces de lo pri
mero son en número muy crecido ; pero
son muy contados los que alcanzan á lo se
gundo. La razon lo convence : la historia
y la experiencia lo atestiguan.
Es bien sabido que uno de los principa
les resortes que hacen mover al hombre ,
cuando obra en el orden puramente natu
ral, son las pasiones; sin ellas, el corazon
está frio ; la razon combina , pero el brazo
no ejecuta. Y cuando de pasiones hablo, no
me refiero tan solo á inclinaciones malas,
niá mov imientos del ánimo hasta tal punto
exaltado, que pierda de vista los principios
de la sana razon , y los consejos de la pru
dencia. Bajo el nombre de pasiones, com
prendo tambien todos los sentimientos le
gítimos y generosos , todas las afecciones
del alma, aun las mas tranquilas y templa
das ; con tal que no pertenezcan al órden
de la pura razon , y á los actos de voluntad
que solo dimanan de aquella; comprendo
todos los impulsos espontáneos que nos
llevan á un objeto como instintivamente,
prescindiendo de la direccion del entendi
miento; en una palabra, y para expresar
me en lenguage menos exacto , pero mas
llano y quizás mas acomodado al comun de
los espíritus ; por pasiones entiendo , todo
lo que suele llamarse movimientos del
corazon.
Sabemos por la experiencia propia y la
agena, que cuando estos movimientos exis
ten , nos hallamos mas dispuestos á obrar
en el sentido en que ellos nos impulsan ; y
que cuando faltan , por mas profundas que
sean nuestras convicciones , y firme y de
cidida la voluntad , estamos tocados de una
debilidad , de una indolencia , que necesi
tamos hacer grande esfuerzo para vencer
las , si la accion de que se trata se opone
en algo á nuestras inclinaciones naturales.
Supónganse dos hombres igualmente per
suadidos del mérito de la beneficencia , en
igualdad de medios para ejercerla, en
idéntica oportunidad para practicarla ; pero
de tal suerte que el uno esté dotado de un
corazon bondadoso y compasivo, mientras
el otro lo tenga naturalmente frio. La par-
12
 — i
te superior del alma , es decir la razon y 78su— valor el aprecio y la admiracion de cuan
la voluntad , se hallan en el mismo estado tos le contemplan. Entonces vemos desple
en el primero que en el segundo ; y sin gados , el amor de la patria , el de la glo
embargo ¿quién no ve que para aquel será ria, la ambicion halagada con el premio,
un verdadero placer el desprendimiento obrando todos á la vez sobre un ánimo
con que socorra el infortunio de sus herma exaltado por lo crítico de las circunstancias,
nos , y que para este será un sacrificio ? El por la presencia de un riesgo inminente,
uno tendrá una pasion , sentimiento , mo estando además el cuerpo en la disposicion
vimiento del corazon , ó llámese como se mas favorable para mantener en viva acti
quiera , que le impulsa á la beneficencia; vidad y efervescencia las pasiones , con la
padecerá si no hace bien , la miseria del agitacion y el calor de la refriega. En ca
prójimo se le ha comunicado en cierto mo sos semejantes , hay una verdadera lucha
do , porque dejando intacta su fortuna y su de inclinaciones contra inclinaciones; y na
salud, le hace compartir el sufrimiento del tural es que prevalezcan aquellas que es
desgraciado; cuando le dispense el auxilio, tando mas en armonía con la situacion, son
experimentará un desahogo , recobrará el mas á propósito para estar en movimiento,
bienestar perdido, renacerá en su alma la influir sobre la voluntad , y sufocar las de
tranquilidad disipándose la angustia ; per más que tiendan á parar ó moderar el im
cibirá la dulce satisfaccion de haber cum pulso.
plido un deber , que sentía como una ne Estas observaciones manifiestan cómo se
cesidad en el fondo de su alma. Nada de verifica que muchos hombres desprecien la
esto se verificará en el hombre de corazon vida en defensa de una causa; y nó porqne
frio , por mas recta que sea su razon , por deba entenderse que para llegar á este
mas ajustada que á ella conserve la volun punto sea preciso que el ánimo se encuen
tad. Si socorre al infeliz , será obrando tre en la exaltacion que acabo de describir;
conforme le dicta su conciencia ; pero obe pueden venir circunstancias en que sin ha
deciendo los preceptos de esta , no sentirá cerse tan sensible el fenómeno, se verifique
aquella expansion, aquella ternura que de una manera mas ó menos semejante.
inunda de gozo y de placer un corazon Asi , un jóven que se halla empeñado en
compasivo; antes al contrario, se verá pre uno de los lances que se apellidan de honor,
cisado á luchar con la dificultad , que mas no está en el mismo caso de un militar en
ó menos siempre trae consigo , el despren el campo de batalla ; sin embargo , y por
dernos
Este de
ejemplo
lo propio
hacepara
sensible,
darlo yá por
los otros.
decir mas que en apariencia la situacion se mues
tra muy distinta , no lo es tanto en la rea
lo asi , palpable , la poderosa influencia lidad si la examinamos en sus relaciones
que sobre nuestros actos ejercen las incli con las causas que impelen al desprecio de
naciones del corazon. De esto inferiré que la vida. Una preocupacion funestísima,
cuando nos encontramos en situaciones en pero que por esto no deja de estar arraiga
que una pasion cualquiera está vivamente da en muchos espíritus, le hace creer, que
desarrollada y activa , no es extraño que si no acepta el duelo que se le ofrece , ó si
preponderando sobre las demás , y hasta él á su vez no desafía á su adversario , se
sobre el instinto natural de la propia con gun es la ofensa recibida , se cubre de ig
servacion , llegue al punto de hacernos nominia y baldon , y no podrá presentarse
acometer arduas empresas y arrostrar los á la sociedad sin la deshonrosa nota de co
mayores peligros. Asi , un militar que se barde. En el hombre constituido en esta
halla en el campo de batalla , á la vista de alternativa , no vemos ciertamente tan de
sus compañeros de armas testigos de su bulto los motivos que le impulsan á arros
valor ó de su cobardía , enardecido con el trar el peligro , como los hemos visto en el
aparato guerrero , con el son de las músi soldado ; no se nos muestra tan patente la
cas marciales , de los tambores y clarines, agitacion del ánimo fiiictuante entre el te
sediento de venganza contra un enemigo mor y la esperanza , entre el amor de la
que está diezmando á sus inmediaciones á vida y el del honor ; pero no deja por esto
sus amigos y compañeros, no debe parecer de existir la lucha, y tan viva quizás como
tan extraño que con denodado ímpetu se existir puede en el campo de batalla. Por
arroje á la muerto gloriosa ; mayormente mas vanidad que entre muchas veces en el
conservando como conserva siempre alguna sentido de la palabra honor , no puede ne
esperanza de evitarla , y conquistando con garse que ejerce sobre nuestro ánimo una
 179 —
influencia tan viva , tan mágica , que ni la el argumento que nosotros sacamos de
salud , ni la fortuna producen en nuestro nuestros mártires. Los héroes de que esta
espíritu un efecto tan fuerte é instantáneo. mos hablando son muy contados, los nues
Dejando á parte el exámen de las causas, tros son innumerables; los héroes eran por
consigno aqui el hecho , para manifestar lo comun hombres formados, endurecidos
que en el caso supuesto hay tambien una con los trabajos de la guerra, agrandado
verdadera exaltacion de ánimo, una pasion su espíritu con la intervencion en los nego
fuerte que sojuzga las demás, sometiéndo cios públicos , ávidos de gloría , colocados
las á su tiránico imperio , y arrastrando el en circunstancias críticas , en que el peli
corazon dominado, hasta el deplorable ex gro de la patria daba vuelo á su entusias
tremo de exponer la vida como cosa li mo , energía á su denuedo ; entre los már
viana. tires se ven ancianos, mugeres, niños,
Creo, mi estimado amigo, que las obser hombres de las condiciones mas humildes,
vaciones que acabo de emitir son bastantes que no habian ocupado jamás puestos dis
para que se distinga el valor de la fortale tinguidos, y que por tanto no habian podi
za , y para que resalte cuán diversas cosas do adquirir aquel fiero orgullo, que siendo
son el acometer intrépido un peligro por una de las pasiones mas poderosas de nues
inminente que se ofrezca , y el sufrir con tro corazon , nos comunica á veces una fir
inalterable calma los mayores tormentos, meza de que sin él no fuéramos capaces.
marchando sereno á una muerte segura, Para formarnos una idea del mérito de
inevitable , erizada de los padecimientos los mártires acerquémonos á uno de aque
mas atroces. En el primer caso, vemos llos ilustres presos , tan desgraciados á los
unas pasiones contra otras, vemos el ánimo ojos del mundo , tan felices en Jesucristo.
sostenido por mil motivos que le impulsan, Su nombre no se sabe , su categoría es os
y que al mismo tiempo le distraen de lo cura; ¿por qué se halla detenido? porque
que pudiera apartarle de dar cima á la em cree que un Hombre que murió ajusticiado
presa. Padecimientos, ó no los hay, ó son en la Palestina , es Hijo de Dios, y verda
muy breves, ó compensados con alternati dero Dios, que tomó nuestra naturaleza
vas ó esperanza de recreo, de placeres, de para satisfacer por nuestras deudas á la
gloría. En el segundo, vemos la razon y la justicia del Eterno Padre. ¿Qué vemos en
voluntad luchando con todas las pasiones, su alrededor ? el desprecio ó la compasion,
vemos al hombre superior en oposicion con ó el ódio de cuantos le contemplan ; unos
el hombre inferior ; aquel pertrechado con la le miran como insensato , otros le califican
idea del deber , con la esperanza de un de fanático , estos le apellidan iluso , aque
grande objeto; este con todos los atracti llos le achacan los mas feos crímenes. Ni
vos , todas las amenazas , todos los temo un rayo de gloria mundana , ni un consue
res , todas las vicisitudes que se agitan en lo sobre la tierra. No busqueis en su situa
esa region tempestuosa , que no sabiendo cion nada que pueda confortarle, haciendo
cómo apellidarla , le damos el nombre de que su naturaleza obre por reaccion contra
corazon . los males que le abruman. Todas sus pasio
No intento decir con esto, que no pueda nes se hallan amortiguadas con el abati
hallarse en el orden puramente natural, un miento y postracion á que está reducido el
desprendimiento asombroso , ni que en to cuerpo; y si el orgullo quisiese levantar su
dos los actos que denominamos heroicos frente , nada ve en torno de sí que pueda
deba suponerse una gracia sobrenatural; halagarle ni sostenerle. ¿Qué semejanza se
semejante asistencia no la tuvieron cierta encuentra entre el héroe de la Religion y
mente los gentiles , ni tantos otros héroes los héroes del mundo?
pertenecientes á falsas sectas ; sin embargo Se me dirá que la esperanza de una vida
encontramos en ellos rasgos sorprendentes mejor les hacia llevaderos los padecimien
que nos entusiasman y admiran. Régulo tos y agradable la muerte ; es cierto , y es
volviendo á Cartago despues de haber dado to no lo negamos los cristianos; pero cabal
un consejo que le habia de costar la vida, mente en la misma resolucion de sacrificar
Scévola con la mano en el brasero , y otros á lo futuro todo lo presente , de sobrepo
rasgos que nos ofrece la historia antigua, nerse á todas las inclinaciones naturales,
son en verdad indicios evidentes de lo que de menospreciar todo cuanto los rodeaba y
puede ejecutar el hombre abandonado á y hasta su propia existencia , en esta reso
sus fuerzas naturales; pero no destruyen lucion, repito, se descubre la accion sobre
 — 180 —
natural de la gracia divina; pues que á durando su Religion muy corto tiempo,
tanto no alcanza la flaqueza humana aban entonces no fuera tan contrario á razon el
donada á sus propias fuerzas. Ya en otra decir, que se introdujo entre ellos cierta
de mis anteriores hice notar que el hom exaltacion de ánimo, y que se fué comuni
bre propende por naturaleza á dejarse lle cando de unos á otros. Pero , ¡ por todo el
var de las impresiones de momento, y que mundo y por espacio de tres siglos, y siem
todo lo que mira en lontananza , sea bien pre la misma fortaleza , y siempre la mis
ó mal, tiene para él escaso interes. Esto lo ma constancia! Reflexione V., mi estimado
estamos palpando por desgracia en buena amigo, sobre esta última observacion, que
parte de los cristianos , que creyendo las ella sola basta para disipar todas las difi
terribles verdades de nuestra Religion , vi cultades.
ven tan olvidados de ellas, cual hacerlo Paso ahora al otro punto indicado en la
pudieran los gentiles. Por esta causa, el apreciada de V. relativo á la fuerza que
ver que un número tan asombroso de per puede tener el argumento fundado en la
sonas de todas edades , sexos y condiciones, rápida propagacion del cristianismo , á pe
se hace superior á esta debilidad de nues sar de la horrible persecucion á que por
tra naturaleza , contrariando sus inclinacio tanto tiempo estuvo sujeto. Dice V. que ya
nes con decision tan heroica, es preciso es cosa sabida que el mejor medio de ha
reconocer que hay aquí algo que se levan cer prosperar una causa, y difundir una
ta sobre la region natural , algo en que el doctrina, es emplear contra ellas la violen
Omnipotente se complace en manifestar de cia; pues desde el momento que sus defen
cuanto es capaz lo débil cuando su brazo sores llevan en sus frentes la auréola del
todopoderoso se propone hacerlo fuerte. sufrimiento , excitan la admiracion y entu
No sé , mi estimado amigo , si estas re siasmo en cuantos los contemplan , y arras
flexiones le habrán convencido plenamente; tran un mayor número de prosélitos. Mas
pero atendido su buen juicio , me atrevo á de una vez he meditado sobre esto que V.
esperar que si. No puedo persuadirme que y otros afirman sobre la fuerza propagado
su claro entendimiento no vea la inmensa ra entrañada por la persecucion ; y confieso
diferencia que va de nuestros mártires á ingenuamente, que ora haya escuchado los
los héroes del mundo , sean del orden que dictámenes de la filosofía, ora me haya
fueren ; V. .no ignora la historia ; recapa atenido á las lecciones de la historia, jamás
cite cuanto ha leido, y ño encontrará nada he podido persuadirme de que fuese un
que á tamaño prodigio sea comparable. buen medio de apoyar una causa el perse
¿Qué causas naturales puede V. imaginar guirla á sangre y fuego.
para explicarle? El entusiasmo? pero un En esta parte hay mucha confusion de
sentimiento tan pasagero, ¿cómo es dable ideas y de hechos , que es necesario acla
que se sostenga por espacio de tres siglos ? rar. Para lograrlo propondré separada
cómo puede propagarse por todo el mundo mente algunas cuestiones de cuya resolu
conocido? ¿La gloria humana? pero tantos cion depende el formar acertado juicio
que perecían sin dejar ni siquiera su nom sobre la principal que se examina. ¿Es
bre , ¿ cómo podrá decirse que muriesen verdad que la vista de la persecucion excite
por la gloria? ¿Y qué clase de gloría será entusiasmo ó interés en favor del persegui
esta que asi atrae al fogoso jóven como al do? A esta pregunta no se puede respon
caduco anciano, á la matrona como á la der sin distinguir. O el perseguido es con
doncella , al adulto como al niño , al sabio siderado
en el primer
comocaso
inocente
, sí ; en, óelcomo
segundo
culpable:
, nó. •
como al ignorante, al rico como al pobre,
al magnate como al mendigo? Pongámonos Lo mas que podrá inspirar será compasion,
de buena fe , y será preciso reconocer que pero esta nada tiene que ver con el entu
por mas poderoso que sea sobre nuestro siasmo, ni el interes de que se trata. En lo
corazon el ascendiente de la gloria, no al que acabo de asentar no cabe duda ; y de
canzó jamás á producir un efecto tan gran ello se infiere , que cuando se afirma en
de , tan universal , en situaciones y perso general que la persecucion honra, que
nas tan diferentes ; pongámonos de buena ilustra , que excita simpatías , se dice una
fe , y descubriremos aqui el dedo de Dios. verdad si se habla del que es mirado como
Si los cristianos hubiesen sido pocos , y inocente , y solo con respecto á los que le
habitado todos en paises muy vecinos, vi consideran como tal; solo á los ojos de es
viendo sujetos á las mismas influencias y tos es un verdadero perseguido ; á los de
 — 181 —
umento este carác era su consuelo, solo Dios era su esperan
ter , no es una víctima de la persecucion, za; solo Dios era su sosten en aquellos ter
sino un objeto de la 'vindicta pública. Re ribles momentos en que luchando con el
sulta de lo dicho, que si en un pais se sus mundo, y consigo mismos, arrostraban
cita una persecucion contra una causa ó impávidos la muerte por confesar la fe del
una doctrina , si estas son consideradas co Crucificado. No bastan para semejantes
mo justas y santas, los que por ellas sufran prodigios las causas naturales , no bastan
serán respetados y admirados; pero si son los esfuerzos de la débil humanidad ; á
reputadas falsas, injustas, contrarias al quien no se contente con semejantes razo
bien comun , entonces el castigo de los cri nes le opondremos el famoso dilema : ó es
minales lejos de excitar semejante admira taban sostenidos milagrosamente por el
cion y respeto, inspirará á lo mas senti cielo , ó no lo estaban ; si lo primero , en
mientos de estéril compasion en favor de tonces os hallais de acuerdo con nosotros;
los que se supongan ilusos, ó como suele si lo segundo, os diremos que este es el
decirse, engañados de buena fe. mayor de los milagros , el hacer sin mila
No se hallaban por cierto los mártires gro cosas tan milagrosas.
cristianos en situacion favorable , en nin Inferiremos de esto, que la constancia
guno de los sentidos que acabo de indicar. de los mártires no pudo estar sostenida por
Profesando una religion diametralmente el placer de excitar admiracion y entusias
opuesta á todas las recibidas en la genera mo; y asi viene al suelo lo que pudiera de
lidad de los pueblos , predicando que el cirse que los honores de la persecucion
culto tributado á los dioses reinantes no era ilustrando á las víctimas, contribuían á
mas que criminal idolatría , apartándose de destruir ¿Es cierto
el objeto
que el
queperseguir
se proponía
una . doctrina
las diversiones de los gentiles como de abo
minaciones nefandas , eran mirados con sea buen medio para propagarla? La pre
aversion , con odio , con execracion ; se los gunta se presenta ya algo extraña á prime
abrumaba de calumnias, se los consideraba ra vista ; sin embargo esto es lo que se dice
como enemigos del resto de los hombres, á cada paso , contradiciendo abiertamente
como perturbadores de la sociedad ; y para la filosofía y la historia. Si se afirmase que
hacerles apurar las heces del cáliz , se les la verdad se abre paso al través de la per
achacaba que en la celebracion de sus mis secucion , el aserto seria muy diferente;
terios cometían horrendos crímenes. Nadie pero pretender que la persecucion misma
ignora el frenesí con que se pedia la san haya de ser un vehículo, es un absurdo; á
gre de los confesores de Jesucristo: los cris no suponer que de este vehículo se sirva
tianos á las fieras, los cristianos al fuego: este para sus altos fines la infinita sabiduría del
era el grito que se levantaba por todos los Todopoderoso.
ángulos del mundo. Cubiertos de insultos, El hombre ama naturalmente el bienes
de befa y de escarnio , mientras espiraban tar , tiene un fuerte apego á la vida , un
entre los tormentos mas atroces , teníase á grande horror á la muerte ; luego los tor
gran dicha si en las tinieblas podían salir mentos y el patíbulo son poderosos resor
de sus lóbregas moradas algunos hermanos tes para apartarle de una causa que le ex
que diesen sepultura al mutilado cadáver ponga al riesgo de sufrirlos. Me habla V.,
entregado por pasto á los brutos carnice mi estimado amigo, de «la belleza del su
ros. Ahora , al contemplarlos sobre los al frimiento, de la brillante auréola que cir
tares , al oir que se les entonan himnos de cunda las sienes de la víctima que marcha
alabanza , al saber que ciñen en el cielo la serena á ofrecerse en holocausto ; » todo
inmarcesible corona cuyos resplandores se esto es verdad, pero temo mucho que no
reflejan en los cultos que se les tributan en sea muy á propósito para influir sobre la
la tierra , cuéstanos trabajo el concebir to generalidad de los hombres ; temo mucho
do el horror de la situacion en que se ha [ que en la práctica no se ha de presentar la
llaban , en los formidables trances de sus cosa tan encantadora y atractiva como se
tormentos y muerte. Nó, no veian en tor nos muestra en los libros. Y no me eche
no de sí ese respeto , esa admiracion que ¡I V. en cara que tengo el corazon poco sen-
nosotros ahora les ofrecemos ; veian sí el 1 sible , que no comprendo toda la sublimi
odio , el insulto , la calumnia , y lo que dad de las acciones heroicas ; la siento y la
quizás es mas doloroso para el corazon hu ; comprendo muy bien ; pero tratándose do
mano, la burla y el desprecio. Solo Dios ' examinar la realidad, y nó las ficciones, se
 — 182 —
íiíe hace preciso atenerme á lo que estoy desplegó mucho rigor , veo que se encon
viendo en las páginas de la historia , y me tró atajada en sus progresos hasta extin
están ensenando ías lecciones de la expe guirse casi del todo. Una de las religiones
riencia. ¿Cuántos son los hombres genero que mas extension han alcanzado, fué sin
sos que sacrifican su bienestar , su fortuna duda la de Mahoma ; y por cierto que sus
y su vida , por la causa de la verdad y de progresos no se debieron á la persecucion ,
la justicia? Son ahora, y fueron en todos sino á las armas con que arrolló á sus ad
tiempos, muy pocos; y la misma admira versarios , y á los halagos con que arrastró
cion que nos inspiran es una prueba evi gran número de prosélitos. Cuando las
dente de que tan heroica fortaleza no es el guerras religiosas del mediodía de la Fran
patrimonio comun de la humanidad. ¿Quie cia en tiempo de los Albigenses, tampoco
re V. partidarios? Distribuya honores, pro veo que estos sectarios medrasen con la
digue riquezas , abreve de placeres ; que si contrariedad ; muy al reves , fuéronse dis
no tiene otra cosa que palmas de martirio, minuyendo cada dia hasta llegar á un esta
bien pronto verá desaparecer los prosélitos do de postracion y casi aniquilamiento.
y los amigos, bien pronto se quedará V. Me dirá V. que el protestantismo cundió
con pocos rivales que le disputen la auréola y se arraigó á pesar de todos los contra
de una vida de padecimientos, y de una tiempos que tuvo que sufrir ; y que asi co
muerte afrentosa. mo la llamada reforma se extendió á pesar
A decir verdad , no creia yo que debie de las persecusiones , no es extraño que
se hallarme en la precision de recordarle á aconteciese lo propio con respecto al cris
V. estas verdades, que por tristes, no de tianismo. Yo no sé dónde han encontrado
jan de ser verdades; imaginábame que W. estas tremendas contrariedades y per
siendo V. escéptico debia de ser algo mas secuciones sufridas por la malhadada re
positivo; y que viviendo en épocas de vici forma; no parece sino que estamos hablan
situdes, habría aprendido á conocer mejor do de las épocas de los geroglíficos , pues
á los hombres, y á formarse ideas mas que de tal manera se trastornan los hechos,
exactas sobre las inclinaciones de nuestro y se hacen comparaciones absurdas.
corazon. Echemos una ojeada sobre la historia de
El buen sentido de la humanidad ha re los primeros tiempos del protestantismo , y
chazado en todos tiempos esa invencion veremos que estuvo muy distante de de
filosófica de las ventajas de la persecucion : ber sus progresos á las ponderadas perse
los tiranos se han engañado algunas veces cuciones. En Alemania, desde el momen
abusando desmedidamente del hierro y del to de su aparicion , contó de su parte mu
aban
ego ; guiados
pero endemedio
una idea
de sus
verdadera, an- chos y muy poderosos sostenedores : entre
excesos cual
ellos varios príncipes que lo manifestaron
es, que para destruir una causa ó sufocar abiertamente, ora protegiendo por varios
una doctrina , es un excelente medio el medios la difusión y el arraigo de las nue
erizarlas de peligros y de males para cuan vas doctrinas , ora apelando á las armas ,
tos intenten seguirlas. Yo ando buscando cuando creyeron llegado el caso de emplear
en la historia los buenos efectos de la per la violencia. Lo que en Alemania, aconte
secucion en pro de la cosa perseguida ; y ció á poca diferencia en los demas paises
no los encuentro. Hallo una excepcion en del continente, mas ómenos infestados por
el cristianismo, pero esto mismo me lleva el protestantismo ; sin exceptuar la Francia,
á pensar que la causa de la excepcion está donde es bien sabido que á mas de los pa
en la omnipotencia de Dios. El apedrea tronos que encontró en las clases elevadas,
miento de San Estéban inauguró una era pudo contar durante mucho tiempo , con
de triunfos, abriendo el glorioso catálogo uno que valia para todos : Enrique IV. No
de los mártires cristianos ; pero la cicuta es menester recordar la historia de Enri
de Sócrates no veo que les inspirase á los que VIII de Inglaterra; nadie ignora de
filósofos el deseo de morir: la prudencia ga cuáles medios echó mano este violento mo
nó mucho terreno ; Platon al anunciar cier narca, para propagar y arraigar el cisma
tas verdades delicadas cuida de cubrirlas á que le lanzara su ciega pasion ; y el sis
con cien velos. tema de este perseguidor continuó en los
Pasando á tiempos posteriores , observo reinados siguientes, con igual sino con ma
el mismo fenómeno : asi por ejemplo la sec- yor recrudescencia.
la de los Priscilianistas contra la cual se A poco de haber nacido el protcstantis
 — 183
mo ya tenia en su favor grandes ejércitos , decirse de Portugal y de Italia; por mane
poderosos príncipes , naciones enteras ; ra que el protestantismo no llegó á conser
¿qué punto de comparacion hay entre la varse en ninguno de los paises en que se
propagacion de la llamada reforma y la de vió precisado á arrostrar una contrariedad
la Religion cristiana? Si no le faltaron al sostenida. Donde se trató seriamente de
gunos que se sacrificaron por ella , recuer extirparle , fué extirpado ; presentando un
de que en esto no sucedió sino lo mismo contraste notable con el Catolicismo , que
que se verifica en todas las causas civiles : aun en los reinos donde sufrió mayores
siempre de uno y otro lado se ven fogosos quebrantos se ha conservado siempre, sin
partidarios que ó mueren peleando en el que sus perseguidores hayan alcanzado á
campo de batalla , ó tienen bastante alien lograr su completa desaparicion. En con
to para arrostrar los cadalsos. firmacion de esta verdad recuérdese lo su
Figurémonos que por espacio de tres si cedido en la Gran Bretaña.
glos hubiese debido luchar con las horri Yo no sé, mi estimado amigo, qué es lo
bles persecuciones de que fué víctima el que puede responderse á las razones que
cristianismo: ¿dónde estaría actualmente? acabo de exponer; paréceme que despues
¿Quereis saberlo? observad lo acontecido de haberlas leido, se le habrá presentado
en los paises donde se le reprimió con ma á V. algo mas robusto el argumento que
no fuerte. En Francia , tuvo diferentes al se funda en la sangre de los mártires. Exa
ternativas de indulgencia y de rigor, pero mine V. con detencion é imparcialidad es
tan pronto como se emplearon contra él las te grande hecho que hace a la vez horro
medidas severas con alguna perseverancia, rosas y sublimes las primeras página; de la
fué debilitándose, casi hasta llegar á desa historia de la Iglesia ; y no dudo que verá
parecer. ¿A qué estaba reducido algun en él algo de maravilloso, que no es posi
tiempo despues de la revocacion del Edicto ble explicar por causas naturales. Creo ha
de Nantes? Jamás ha podido reponerse de ber desvanecido las dificultades que le im
los golpes que le descargó Luis XIV ; sien pedían á V el dar á nuestro argumento to
do de notar que aun en la actualidad, des da la importancia que se merece. Como
pues de tantos años de tolerancia , es to quiera, estoy seguro de que no podrá V.
davía muy insignificante. En aquel pais , echarme en cara que haya esquivado el
la inmensa mayoría está dividida entre el tratar la cuestion bajo todos los aspectos ,
Catolicismo y la incredulidad. ni procurando disminuir en lo mas mínimo
Lo sucedido en España , puede darnos la fuerza de la dificultad, para no hallarme
una idea de la fortaleza del protestantismo en la precision de deshacerla. Si no he po
para hacer frente á la persecucion. Sabido dido avenirme con ideas que daba V. por
es que á mediados del siglo xvi habia al recibidas , tampoco me he tomado la liber
canzado bastantes prosélitos, siendo tanto tad de rechazarlas, sin aducir las razones
mas peligrosos, cuanto pertenecían á cate en que me apoyaba. Tratando uno con es-
gorías distinguidas. La Inquisicion sosteni cépticos, es preciso no mostrarse crédulo
da y alentada por Felipe II , desplegó con en demasía; y por consiguiente conviene
tra los sectarios el rigor que nadie ignora : no aceptar sin examinar, aun cuando sea
al cabo de poco , ya no se hablaba de par necesario contradecir autoridades filosóficas
tidarios de las nuevas doctrinas. ¿ Era esta que pasan por respetables. Mucho desearía
la conducta de los primeros cristianos? que pudiésemos continuar discutiendo so
¿Abandonaban tan fácilmente el terremo bre los motivos de credibilidad ; pero aten
donde habian logrado hacer algunas con dido el curso que va tomando la polémica,
quistas? Dígalo el mundo entero, dígalo no sé si despues de haber andado V. pri
especialmente esta misma España , regada mero por el infierno, y despues por los ca
y fecundada con la sangre de tantos már dalsos de los mártires , otro dia se me plan
tires. Nada vale el alegar el rigor de la In tará de un vuelo entre los conciertos de los
quisicion ; este rigor no podia por cierto querubines. Entre tanto, vea V. en qué
compararse con el empleado por los pro puede complacerle este S. S. S.—J. B.
cónsules del imperio; por mas horribles Á
que se quieran pintar las penas aplicadas á
los hereges , no se las encontrará semejan
tes á las que sufriera San Vicente.
Lo que se ha dicho de España , puede
 — 184 —
rústico lo habrá dicho todo, resolviendo
con las primeras respuestas , las cuestiones
sobre las ventajas ó desventajas del aumen
LA FOBLACIOU. to de la poblacion ; y estableciendo con las
segundas, el principio de que este aumento
se verifica hasta llegar al nivel de los me- '
dios de subsistencia , y que desgraciamente
por lo comun lo excede, produciendo ca
lamidades y miseria. Por lo mismo no nos
Artícelo 2.° cansaremos de inculcar que es preciso que
la ciencia , sobre todo cuando se trate de
estas materias, no se desentienda de ese
buen sentido, tanto mas digno deque se le
Dijimos en el artículo anterior que en escuche con respeto , cuanto no se ha for
estas materias, el prurito de mirar las co mado en la engañosa region de la filosofía
sas en grande , calculando por lo que re sino en el terreno de la práctica , con los
sulta de las colecciones de muchos datos , hechos á la vista , sin vanidad , con buena
ha hecho que se descuidase el exámen de fe , con aquel deseo del acierto que lleva
loque sucede en cada familia. Esto último, consigo el hombre en los negocios que le
si bien mas sencillo y aislado, tiene en cam interesan de cerca.
bio la ventaja de ser mas susceptible de Aprovechándonos de estas indicaciones,
una observacion minuciosa ; y con las mo ensayemos en este artículo el exámen de la
dificaciones correspondientes, no deja de importante cuestion que nos ocupa , sin
poder conducir á resultados generales. Cree descuidar empero las luces que nos ofrezca
mos tambien, que el deslumbramiento pro la observacion científica.
ducido por el oropel científico acarrea fre Ante todo, propongámonos resolver el
cuentemente el olvido ó el desprecio de las primer problema que aqui se presenta so
lecciones que nos da la simple prudencia : bre las ventajas ó inconvenientes del au
esa prudencia preferible muy á menudo á mento de la poblacion. Para hacerlo con
las concepciones de la razon. toda claridad hagamos diferentes suposicio
Si bien se observa con tanto discurrir y nes. Trasladémonos al hogar de una fami
calcular , al fin los economistas han venido lia muy pobre, que alcance con dificultad
á conformarse con lo que en todas épocas á proporcionarse los indispensables medios
ha estado diciendo el buen sentido de la de subsistencia. ¿Le conviene el aumento
humanidad. Preguntad al hombre mas ru de sus individuos? Para saberlo, veamos
do si conviene que se aumente la poblacion, lo que le sucederá en caso que este aumen
y desde luego os dirá, que segun, cómo y to se verifique. Por de pronto es evidente
de qué manera. ¿Estais en un pais donde que crecerá el número de los consumido
hay muchos terrenos que beneficiar y ca res, quedando estacionaria la produccion,
pitales que emplear? desde luego os res si es que no disminuye. Un niño necesita
ponderá que sí , que faltan brazos , que si durante muchos años cuidados asiduos,
no pueden salir del pais es menester atraer que absorven una parte del tiempo que las
los de fuera ; es decir , os aconsejará la in personas útiles gastarian en producir, lo
migracion. ¿Os hallais en una tierra estéril, que hace que sea en esta línea lo que se
¿exhausta, ó saturada de hombres? Sin llama una cantidad negativa ; y por tanto
vacilar os dirá , lo que sobra son brazos, ¿qué lejos de traer ningun provecho material á
haremos de la gente si la que hay no puede vi la familia , le acarreará perjuicio. Es claro
vir? Todavía mas : continuad preguntán que no es fácil señalar ni siquiera con algu
dole sobre las demas condiciones del pro na aproximacion á cuánto ascenderá el
blema de la poblacion , y veréis como tiempo perdido, ó en otros términos, cuán
acierta tan bien como el mas sabio econo to trabajo habrán impedido los cuidados
mista. — ¿Hay mucha gente en estas co que se deben prodigarle; pero es cierto que
marcas? — Mucha: ¿no ve V. que como esta pérdida existe , y que no es de poca
es terreno de mucho pan? — ¿En consideracion.
tal otro pais no debe de haber tanta? — Alléganse á esto los gastos de manuten
Hay poca : pero aun hay demasiado; como cion y educacion , lo que cuando el niña
la tierra no produce Hé aquí que el llega á la edad en que puede empezar el
 trabajo, subo á una cantidad mayor de lo
que quizás comunmente se cree. El tierno
amor de los padres á sus hijos no permite
que se noten los continuos sacrificios que se
están haciendo ; pero no deja por ello de
existir la realidad con todas sus consecuen
cias. En los hospicios del reino de los Paises-
Bajos todos los gastos de un niño desde el
nacimiento hasta la edad de doce ó diez y
seis años se calculó que ascendían á 1110
pesetas. Para tomar un número redondo
lijémoslo á 1000 pesetas, y tendremos que
una familia que haya tenido que sostener
cuatro por ejemplo, habrá invertido un ca
pital de 4000 pesetas ó sean 16000 reales :
capital que para una familia pobre es de
mucha consideracion, y de cuya existencia
ó déficit están pendientes las fortunas de
esta categoría.
Supongamos en dos situaciones diferen
tes la familia en cuestion : una en que no
hubiese tenido mas que dos hijos; otra en
que le hayan cabido seis. Es evidente que
asi para los padres como para los hijos, se
rá mucho mas ventajosa la primera situa
cion ; pues que los 16000 rs. que habrían
servido para la manutencion de los cuatro,
habrán refluido sobre los dos, sirviendo al
propio tiempo para que los padres vivieran
con mas desahogo.
Estas reflexiones fundadas en datos tan
sencillos y tan claros, manifiestan hasta la
evidencia, que en el caso de existir en can
tidad muy limitada los medios de subsisten
cia , lejos de ser saludable el aumento de
la poblacion , es perjudicial á los preexis
tentes y á los nuevamente nacidos.
Se alegará quizás en contra de lo dicho,
el que si bien por algun tiempo se verifica
que este aumento es una carga, se com
pensan despues estos daños con la mayor
produccion que se alcanza , tan pronto co
mo llegado el niño á la edad de trabajar,
no solo gana lo necesario para su subsisten
cia , sí que tambien reintegra á sus padres
de los sacrificios que por él han arrostrado.
Es necesario observar, que cuando llega
un niño á la edad en que puede ganar su
sustento , adquiere desde luego mayores
necesidades, en las que se invierte lo que
podría sobrar si se tratase únicamente de
atender á los medios mas indispensables de
subsistencia. Sin que sea menester mucho
cálculo basta dar una ojeada á lo que está
pasando continuamente á nuestros alrede
dores para convencernos de cuán ficticia es
la pretendida compensacion. ¿Quércis sa
ber lo que hay en esto de verdad? no ape
leis al juicio de los economistas ; pregun
tádselo á los padres de familia.
Sin embargo, si por guarismos se quiere
resolver la cuestion tampoco rehusaremos
el considerarla bajo este aspecto. Y para
que no se diga que exageramos tomarémos
por base del cálculo las suposiciones que
menos puedan favorecernos: dividiremos la
edad de un niño de doce años entres perío
dos , desde el nacimiento hasta cumplir los
cuatro, despues hasta las ocho, y final
mente hasta los doce. Demos que en los
primeros cuatro años, todos los gastos
acarreados á la familia no excedan de
200 rs. al año, lo que da para cada dia po
co mas que la insignificante cantidad de
medio real. Nadie dirá que el presupuesto
sea desmedido , pues al contrario parece
cierto , que contando alimento , vestido ,
gastos de enfermedades, pérdida de tiem
po y por consiguiente de trabajo, la indi
cada cantidad es insuficiente, aun supo
niendo no mas que aquellos cuidados que
se dispensan á la infancia en las familias
mas miserables. En esta hipótesis tendre
mos que al llegar el niño á los cuatro años
habrá consumido 800 reales.
En los cuatro sucesivos es claro que los
gastos crecen considerablemente; y aun
cuando no sea fácil determinará cuánto as
cienden, ni la proporcion en que se aumen
tan, por depender de mil circunstancias
diferentes, creemos no obstante que no se
nos tachará de exagerados, si suponemos
que llegan á 400 rs. al año , lo que da pa
ra cada dia poco mas de un real.
En este caso desde los cuatro á los ocho
habrá consumido el niño 1000 reales.
Por razones análogas podremos suponer
que el niño en el tiempo transcurrido des
de los ocho á los doce necesita para su ma
nutencion y demas necesidades , poco mas
de un real y medio al dia , lo que importa
anualmente unos 600 reales ; asi en los úl
timos cuatro años habrá consumido 2400 rs.
Reuniendo estas cantidades resultará :
Primer período del nacimiento OasTOs.
hasta cumplir 4 años. . . 800 rs.
Segundo período de 4 á 8. . 1600 »
Tercer período de 8 á 12. . . 2400 »
Total. . . 4800 »
No es regular que nadie sospeche exa
geracion en este cálculo; pues que muy ai
 — 186 —
contrario, segun todas las apariencias no Resulta pues que cuando un individuo
llega ni de mucho al presupuesto indispen perteneciente á la clase menesterosa llega
sable , aun cubriendo las atenciones con la á la edad de los veinte y cinco años, si tra
mayor estrechez y mezquindad; siendode no ta de contraer matrimonio, su existencia
tar que no iguala al de los hospicios del reino deja en la familia ó en la sociedad un vacío
de los Paises-Bajos. Como quiera, no in que representa el valor de 5000 reales;
sistiremos mucho sobreeste particular, por vacío que probablemente no llenará de
que los raciocinios que en esto fundaremos, biendo atender álos gastos que le imponen
pueden muy bien prescindir de la mayor ó las necesidades de su nuevo estado.
menor aproximacion , estando seguros de Ademas, infiérese de lo dicho, que cuan
que generalmente hablando , la hipótesis do un pais se encuentra escaso de recursos,
peca mas bien por defecto que por exceso. el aumento de la poblacion no hace mas
Tenemos pues, que el niiío al cumplir que acrecentar su miseria. Figurémonos
los doce habrá gastado 4800 rs. ; desde los que los nuevos nacidos estén en mucha des
doce á los diez y seis, puede suponerse que proporcion con los que mueren; al cabo de
ocupándolos en aprendizage gana su ali algunos años ¿qué llaga mas profunda no
mento: y tomamos por tipo esta ganancia se abrirá á la prosperidad pública teniendo
porque sirve algunas veces de regla en la riqueza total un déficit tan grande como
nuestro pais. Entonces no entran en cuen es el que resulta de la multiplicacion de
ta ni el vestido , ni las enfermedades ni los 5000 rs. por el número de individuos
otros gastos que nunca faltan , y que redu que hayan llegado á mayor edad? Ni vale
ciéndolos á su menor expresion siempre pa el decir que el trabajo de estos aumentará
sarán de 200 reales ; con lo que al encon sucesivamente la misma riqueza , porque
trarse el niño en los diez y seis tendrá con en cambio los nuevos matrimonios con sus
traida una deuda que excederá de 5000 rs. hijos irán consumiendo el producto , y dando
En semejante edad, aun suponiendo las sucesivamente la desproporcion que por ne
circunstancias mas ventajosas, el jornal no tencia
cesidaddehemos
los consumidores
visto que resultaimproductivos.
de laexis-
será crecido ; y casi puede darse por seguro
que durante los dos ó tres años sucesivos En esta materia se padece una equivo
será muy escaso el ahorro que podrá ha cacion por suponerse con harta facilidad
cerse ; mayormente teniendo en cuenta que que para producir bastan las brazos, cuan
el alimento ha de ser mas abundante y de do al contrario sucede muy á menudo que
mejor calidad , y que es preciso que el son los brazos lo que mas abunda, y que
trage sea cuando menos decente. lo que falta son capitales y demas circuns
Por ahora no hemos encontrado medio tancias favorables á la creacion y aumento
de compensacion, ni sabemos cómo podrán de la riqueza. Echemos una ojeada sobre
amortizarse los 5000 rs. lo que acontece á la generalidad de las fa
No faltando el trabajo y siendo regulares milias pobres, y nos convenceremos de es
los salarios, puede en algunos lugares el ta verdad. Vemos á cada paso que asi en
jornalero ahorrar una parte del fruto de su la agricultura como en la industria, hay
sudor; pero entra luego la edad de las pa familias donde tres ó cuatro individuos ro
siones , apodérase del ánimo el deseo de bustos alcanzan á duras penas á procurarse
lucir: á proporcion que cesan las privacio los indispensables medios de subsistencia ;
nes y la estrechez del tiempo anterior cre ¿son brazos por ventura lo que echan me
cen las necesidades, multiplícanse los ca nos? es cierto que nó : loque les hace falta
prichos, de suerte que generalmente ha es la oportunidad de emplearlos con el ca
blando no hace poco el trabajador si alcanza pital necesario para fecundar sus sudores ,
á nivelar los gastos con los ingresos. Esta es un mercado donde puedan vender lo
es la historia de los primeros veinte y cin poco que han producido. Hé aqui en pe
co años de todo jóven perteneciente á la queño lo que en la sociedad se verifica en
dase pobre, estoes la pura verdad, esto grande : el hombre está condenado á comer
enseña la experiencia y estamos seguros de el pan con el sudor de su rostro , y para
alcanzar en este punto el asenso de todos mayor infortunio le acontece muy á menu
los hombres juiciosos. Mas que nadie pu do , que se ve precisado á derramarlo so
diera la clase pobre confirmar la verdad y bre un terreno que en vez de trigo solo le
exactitud de estos cálculos , poniéndonos á produce El aumento
abrojosdey laespinas.
poblacion en un paU
la vista su triste experiencia.
 — 187 —
donde escaseen los medios de subsistencia competente , todo el incremento que resul
produce resultados tan dolorosos como aca te en la estadística dela poblacion, no será
bamos de ver ; y esto se verifica aun no un signo de riqueza ni de fuerza , sino la
llevando en cuenta una de las condiciones expresion de una nueva necesidad , que no
que mas aumentan la infelicidad , contri lleva consigo ningun medio de satisfacerse.
precedente
buyendo a destruir
ha estribado
la riqueza.
en el supuesto de II Por estos motivos es indispensable aten
El cálculo
der no solo al número sino tambien á la
que los nacidos llegan á mayor edad, y clase de la poblacion , pues de otra suerte
que por tanto la sociedad si no consigue estaríamos tan en oscuras con respecto á
otra cosa, al menos adquiere brazos que los resultados que puede producir, como si
podrá emplear cuando la oportunidad se le sabiendo que en una familia hay seis per
brinde. Pero desgraciadamente no se cum sonas, ignorásemos si son aptas todas para
ple semejante condicion con tanta genera trabajar, ó si son niños y ancianos.
lidad como pudiera creerse; porque la mi Y no se crea que en esta materia se ha
seria produciendo sus naturales efectos, llen las diferentes edades en una razon fija ,
acrecienta el número de las enfermedades, de manera que en conociendo los indivi
las que no pudiendo ser atendidas de la duos de una , pueda sacarse por regla de
manera conveniente, aumentan la mortan proporcion cuántas existen de la otra , ni
dad de los nacidos, sepultándose con ellos siquiera con alguna aproximacion ; como
todo el capital invertido en su manuten son tantas las causas que modifican las con
cion. En tal caso, aun suponiendo que la diciones de la vida , y que pueden influir
vida de los nacidos se prolonga mas ó me en el número de los nacimientos y muer
nos, aproximándose á la edad en que se tes , conócese desde luego que no hay en
rian útiles para el trabajo , tendremos que este punto una ley constante , y que en los
todo el aumento de la poblacion será un varios paises debe de observarse muy no
verdadero daño: pues que al fin no condu table diferencia. Asi es en efecto , y los
cirá á mas que á multiplicar gastos , que datos recogidos por los economistas han
serán tanto mayores cuanto el consumidor venido á confirmar las conjeturas de la
improductivo
Se comprenderán
haya vivido
mas mas
fácilmente estas razon. Sería conveniente que distribuidas
largo tiempo.
las edades en una escala de muchos gra
verdades , si ateniéndonos al sistema que dos, se estableciesen con alguna aproxi
estamos siguiendo las consideramos con macion las relaciones en que se encuen
respecto á una familia. Es evidente que lo tran ; pero dado que un trabajo semejante
que á esta conviene en caso de baber teni para hacerse con alguna perfeccion exige
do muchos hijos , es que lleguen á mayor no poco tiempo , será preciso contentarnos
edad , porque si mueren antes , no queda con lo que poseemos.
rá ni siquiera la esperanza de que se cu Se han formado estados comparativos
bran los gastos dela manutencion. De esto entre los individuos de mas de cinco años,
se infiere que si en un pais se verifica el y los que no han llegado á esta edad , y
aumento de la poblacion de tal suerte , que por ellos se ecba de ver la enorme diferen
solamente crezca el número de los niños , cia de la relacion en los diferentes paises.
sin que suceda lo mismo con respecto á los No deja de ser curioso el que damos á con
adultos por fallecer aquellos antes de llegar tinuacion.
á mayor edad , semejante incremento lejos Individuos Individuos
de producir ningun bien solo le acarreará (lo mimos de mas
DE 5 AÑOS. di 5 AÑOS.
perjuicios. El aumento de los hombres
puede compensar el déficit que su manu tiran Bretaña (1821). 4,241 5,758,5(1)
tencion ocasiona, proporcionando brazos Irlanda (1821). . . . 4,108 5,895,5
aplicables al trabajo, ó á otros destinos del
servicio público, que aun cuando no lleven (1) Por si este cuaderno parare a manos de al
aquel nombre contribuyen al logro del gun lector que no conociese el sistema decimal,
mismo objeto : es decir que la compensa advertiremos para facilitarle la inteligencia, que
este 8 y los demas guarismos que le corresponden
cion se verifica , ó aumentando directa en la misma coluna, á la derecha de la segunda
mente la produccion , ó supliendo á los coma , son quebrados decimales que pueden res
que se ocupan en aumentarla. Por lo que, des pectivamente expresarse por '/« , V» , '/» , cantida
que, como veremos despucs, casi pueden des
si damos que gran parte de los nuevos na preciarse, ruando se trata de buscar la relacion,
cidos mueren antes de llegar á la edad que es lo que conviene averiguar.
 — 188
Inglaterra (1821). . . 3,891 6,105,8
Inglaterra y Pais de
Gales (1813 á 1830). 3,908 6,092,2 ESTUDIOS FRENOLÓGICOS.
Francia (antes de 1789). 3,121 6,879
Bélgica (1829) 3,332 6,668
Suecia (1820) 3,211 6,782
Estados-Unidos (1830). 4,498 5,500,2
Buscando ahora la razon en que están
los individuos de dichos paises, y expre Artícelo 2.°
sándola tambien por decimales, nos da la
siguiente tabla
Gran Bretaña (1821) 1,36
Irlanda (1821) 1,43 Achaque es y muy antiguo , el deseo de
Inglaterra (1821) 1,57 conocer, las disposiciones intelectuales y
Inglaterra y pais de Gales morales del hombre , guiándose por seña
(1813 á 1830) 1,56 les exteriores : lo que no es de extrañar,
Francia (antes de 1789). . . 2,20 porque siendo la curiosidad una de nues
Bélgica (1829) 2,00 tras inclinaciones mas vivas, natural es
Suecia (1820) 2,11 que se investigue con empeño, qué es lo
De
Estados-Unidos
la tabla anterior
(1830).
resulta...
, que 1,22
en los que se encierra en ese interior que con
tantos velos se encubre. Aristóteles , Aulo
paises donde en las épocas respectivas era Gelio, Ciceron y otros escritores antiguos,
mayor el número de los individuos que pa nos hablan de los fisonomistas y astrólogos
saban de 5 años, son la Francia, la Bélgi de su tiempo ; y el pobre Sócrates á quien
ca y la Suecia , figurando en el extremo parece que los adivinos profesaban enemi
opuesto la Gran Bretaña y los Estados Uni ga, se vió tratado de necio por un tal
dos. En 1789 la Francia contaba 25 millo Zopiro á quien se le antojó regalarle este
nes de habitantes, y en la actualidad cuen dictado, porque diz que tenia la parte an
ta mas de 34 millones ; pero seria un error terior del cuello muy carnuda.
el pensar que la fuerza de su poblacion es Teniendo presente sin duda aquello de
té ahora con respecto á dicha época en la El mentir de las estrellas
razon de 34 á 25 , pues antes seria preciso Es muy seguro mentir,
investigar la razon en que se hallan los se dieron muchos á pronosticar por lo que
adultos con relacion á los niños; y como de sf arrojaban los astros , suponiendo no
es muy probable que la diferencia estaria sé qué relaciones entre ellos y nuestras in
en favor del tiempo de 1789, no resultaría clinaciones naturales ; y para contrariar es
ni de mucho lo que á primera vista arro te peligroso error, que podia conducir al
jarian los números donde se hiciese abs fatalisino, se dijo aquella profunda senten
traccion de clasificaciones. cia sapiens dominabitur astris. Contra la va
En todo pais donde se ha verificado muy nidad de semejantes supersticiones, nos
recientemente un rápido aumento de la po previno la Sagrada Escritura condenando
blacion debe ser por necesidad muy creci de la manera mas explícita y terminante
do el número de los niños y jóvenes; lo las insensatas prácticas de los gentiles , con
que vemos confirmado con los ejemplos de respecto á pronosticar por medio de los as
Inglaterra y de los Estados-Unidos ; asi co tros , aquellos acontecimientos que depen
mo debe ser comparativamente mucho ma den de la libre voluntad del hombre.
yor el de los adultos , en las naciones que Las historias antiguas y modernas están
no hayan tenido este rápido aumento ; lo llenas de relaciones en que se echa de ver
que acontece en las que han continuado con cuánto ahinco se ha procurado en to
sometidas á circunstancias regulares por dos tiempos excogitar expedientes para
no haber tenido ninguna revolucion indus aventurar pronósticos sobre los actos de
trial ni social. Con el mismo sistema de ob nuestra voluntad ; pero ha sucedido con
servacion , ño perdiendo de vista los datos harta frecuencia que la realidad ha venido
recogidos por la ciencia económica , conti á disipar las vanas predicciones de la preo
nuaremos otro dia el exámen de tan im cupacion ó de la mala fe. Ya entre los
portante materia. — J. B. mismos gentiles habian caido en mucho
descrédito estas artes ; y cuéntase que ea
 — 189
Roma no podían los agoreros mirarse re jese el materialismo ; ahora nos proponemos
cíprocamente sin reirse. « ¡Cuántos y cuán cerrar la puerta al fatalismo.
tos arúspices tuve yo I decía donosamente Oigamos primero al Sr. Cubi. « Son las
Plauto; si me prometen bien, llega muy facultades impulsativas i afectivas unos
tarde; si mal, lo tengo luego encima.» instintos ziegos, que nos impelen i conmue
ven. Su atribuzion no es perzibir o dar co-
He heu quam ego habui hariolos aruspices, nozimiento de los objetos esternos ni de sus
qui si quid boni promittunt , pro spisso evenit, relaziones , sino produzir una tendénzia o
id quod malí promittunt , pra;sentiarum est. propension házia una aczion determinada ,
Estos hechos nos indican la viva inclina i una conmozion o afecto correspondiente
cion que se abriga en el corazon humano al resultado de la misma aczion. La filoje-
de buscar por medios extraordinarios el nitura , por ejemplo , produze una pro
conocimiento de las cosas ocultas, por lo pension a estar en la compañía de criatu
cual es de la mayor importancia aclarar ras , i un afecto al mismo tiempo que lia-
bien las ideas sobre todos los puntos que II mamos « amor de hijos; » que corresponde
quierl linage
pu?dan *tenerde1 pronósticos.
algunas —i .. : Auncon
relaciones cual1 II ali resultado
en nues i. i de
i aquella
II- propension
t _ satisfe
i' r
cha. (Manual de Frenología, pág. 25,)
tros tiempos, estamos viendo que el vulgo La experiencia de lo que sentimos en el
se deja alucinar fácilmente, cuando el que fondo de nuestra alma , nos está diciendo
augura sabe hacerlo con sagacidad; no siendo que en realidad tenemos ciertos movimien
raro que algunas personas busquen por ca tos interiores de que no podemos darnos
minos tenebrosos y extravagantes, noticias completa razon , sin que sepamos de ellos
y previsiones á que el hombre no puede otra cosa sino que son unos impulsos que
alcanzar por sus propias fuerzas. nos llevan á buscar un objeto ó á huir de
Por lo que dijimos al fin del artículo an él, aun antes de que hayamos reflexionado.
terior , se deja conocer , que no considera ¿Quién no se ha encontrado de repente
mos como del todo inútil el estudio y la con la presencia de una persona amada ,
observacion sobre la configuracion del de un padre, de un hijo, de un her
cráneo en sus relaciones con el tamaño del mano , de un amigo , y no ha tenido in
cerebro, y con las facultades del alma: voluntariamente los brazos para estrecharle
pero en materias tan delicadas conviene no contra su corazon? ¿Quién ignora el he
olvidar que es muy fácil que se traspasen chizo instantáneo con que obra sobre un
los límites debidos , y que salvando los de pecho juvenil una pasion fascinadora ?
la ciencia , se entre en el terreno de la ilu ¿ Quién al verse acometido , no se ha colo
sion. Por esto hemos indicado la raiz del cado instintivamente en actitud de defensa,
mal ; pues que una vez conocido su origen ó apelado á la fuga? Que si hablar quisié
se hace mas fácil atajarle. ramos de los apetitos puramente animales ,
Propuestas ya las dificultades que se ofre y exclusivamente dirigidos á la conserva
cen con respecto á la proporcion del ta cion del individuo ó de la especie, se hace
maño de las partes del cráneo con las po mas sensible si cabe , la existencia de estos
tencias del alma, nadanos queda que decir instintos. Sin que hayamos menester refle
sobre este particular; porque lo que se lleva xion, el hambre nos inclina al alimento
aplicado á la parte intelectual , puede de que tenemos á la vista , y la sed nos hace
cirse tambien de la moral ; y militará en tender la mano á la copa en que ondea el
pro ó en contra de esta lo que milite en licor con que podemos apagarla.
pro ó en contra de aquella. Asi , no tenemos inconveniente en confe
Sin embargo, como la cuestion puede sar la existencia de esas facultades impulsa-
ser mirada bajo distintos puntos de vista , tivas y afectivas, ó instintos ciegos, ó como se
y ademas es mucha la trascendencia de todo quiera apellidarlos; y aun creemos que na
cuanto concierne á relaciones morales, die podrá oponer reparos á una verdad que
bueno será que examinemos la Frenología todo el mundo conoce , y á cada paso se
con respecto á la moral ; no sea que desli ñala. « Las pasiones son ciegas y « los ape
zándose equivocaciones peligrosas sufra titos deben ser gobernados por la razon , si
menoscabo alguno de los grandes principios no queremos asemejarnos á los brutos » y
sin los cuales no puede vivir ni la sociedad otras expresiones por el mismo tenor , se
ni el individuo. En su lugar procuramos oyen continuamente hasta en boca de los
evitar que la mala inteligencia no introdu- mas ignorantes.
 190 —
Pero no podemos estar de acuerdo con confundir cosas que pertenecen á un orden
el Sr. Cubi en lo que afirma á continua muy distinto. Preséntase de improviso á
cion , y nos parece que ó este señor se ex nuestros ojos un infeliz que nos tiende
presa con inexactitud ó que su doctrina en la mano en actitud de suplicante; nues
traña errores muy graves. «Las facultades tro corazon se siente herido, y ó bus
impulsativas, dice, son: unas, animales, camos desde luego el medio de socor
i otras, relijioso-morales. Las facultades rerle , ó tratamos de apartarle de nuestra
animales no deséan sino una satisfaezion vista para no padecer. En esta afeccion
puramente egoista o individual , i momen que experimentamos hay dos cosas que
tánea. Las facultades relijioso-morales, deslindar : la impresion primitiva , doloro-
deséan una satisfaezion que tambien se re sa, que nos hace compartir en algun modo
fiere al bien ajeno o al tiempo futuro , o a el sufrimiento del desgraciado, sin que nos
ámbos. Las primeras residen en la parte sea posible evitarlo ; y en esto no hay pro
inferior de la cabeza desde las sienes házia piamente hablando ni religion ni moral, es
atras , i las segundas , en la parte superior una sensacion como las demas, y cuya
de la cabeza , segun se ve marcado en la mayor ó menor viveza depende de la or
figura que está en frente de la portada. ganizacion y otras circunstancias , mas ó
Los órganos limítrofes partizipan mas o me menos conocidas. Con aquel sufrimiento
nos de la naturaleza moral i animal, segun que experimentamos á la vista del infortu
su posizíon relativa. Entre los impulsos nio , nace en nuestro pecho el deseo de
animales i los relijioso-morales, esto es, socorrer; socorriendo nos sentimos aliviados,
entre el deséo de mirar esclusivamente desahogados , el corazon late dulcemente ,
para sí en el momento actual , i el deséo y asoman á nuestros ojos lágrimas de apa
de mirar prinzipalmente para otros i lo fu cible ternura. Hé aqui otra inclinacion na
turo , hai en el hombre una constante lu tural , que puede denominarse moral y
cha mental. Si sobrepujan esclusivamente religiosa , porque nos impulsa á llenar un
los primeros impulsos, es el hombre abso deber que nos prescriben la religion y la
lutamente egoista, obra solo para sus inte moral; pero que no será verdaderamente
reses i fines individuales; si sobrepujan ab digna de tal nombre , hasta que obre diri
solutamente los morales, se olvida de sí el gida por la razon y gobernada por la libre
hombre , i no obra mas que para el inte voluntad. Creemos que esta será la mente
res ajeno. En uno y otro caso se obra mal , del Sr. Cubi; y en tal caso lejos de dirigir
i se sufre el irremisible condigno castigo. un ataque á su doctrina, no habremos he
Ambas rejiones deben obrar simultánea cho mas que aclararla.
mente, preponderando la relijiosa-moral Nadie ha negado nunca la existencia de
dirijida por un couozimiento positivo de estos sentimientos naturalmente buenos;
resultados, que lo subministra el intelecto nadie puede dudar que la inefable bondad
perzeptivo i rcflecsivo bien intelijenziado. del Criador nos ha favorecido con ellos
Solo en este último modo de obrar se zifra para que nos sirviesen de impulso en el ca
la relijion , la virtud i la moral , lo demas mino de la virtud , para que nos guiasen ,
es debilidad, vizio o crimen.» (Ibid.) recordándonos la senda del deber , cuando
Como son muchas las ideas contenidas I nos empeñemos en abandonarla. Vive el
en este pasage será conveniente examinar rico en medio del lujo , de la disipacion y
las por separado. En primer lugar parece de los placeres, consumiendo lastimosa
muy impropio , por no calificarlo de otra mente una fortuna que bien empleada, lle
manera, el poner las facultades religioso- varía el alivio y consuelo á centenares de
morales en la clase de los instintos ciegos ; familias; al ostentarse ufano y rozagante
esto cuando menos exigia una aclaracion con soberbio ademan y costosos aderezos ,
de que no se debia prescindir. Si se hubie le sale inopinadamente al encuentro un
se dicho que nuestra alma abriga natural infeliz cubierto de andrajos y transido de
mente sentimientos que pueden apellidarse miseria , haciendo resonar á sus oidos un
religiosos y morales por el objeto á que se penetrante plañido ; el semblante del rico
enderezan , hubiérase dicho lo mismo que se demuda, y muestra que el corazon pa
tal vez desearía significar él Sr. Cubi; pero dece ; ¿negamos nosotros este sentimiento
la expresion habria sido mas propia , y so natural , instantáneo? nó : antes deci
bre todo mas acomodada á la capacidad del mos (pie es la voz de la misma natura
comun de los lectores , no permitiéndoles leza , que obedeciendo al precepto del
 191 —
Criador lo dice : «cumple con tu deber, ó que puede estar muy acorde con la reli
sufre.» gion y la moral, y hasta ser un riguroso
Estableceel Sr. Cubi una diferencia muy precepto, de que al hombre no le sea lícito
notable entre las facultades animales y las dispensarse? Él instinto de apartarnos de
religioso-morales, la cual consiste en que un inminente peligro de la vida , ¿ no lleva
aquellas no desean sino una satisfaccion pura al hombre á un acto á que le obligaría
mente egoísta, individual y momentánea , yes- tambien la razon , si mediase el tiempo de
tas desean una satisfaccion que también se reflexionar? Y sin embargo, entonces no
refiere al bien ageno, ó al tiempo futuro, ó á se trata ni de bien ageno, ni de tiempo fu
ambos. Si no nos engañamos , esta misma turo. En la inclinacion á comer ó como la
distincion está indicando que tan pronto llama el señor Cubi, la alimentividad , se
como obran estas facultades en lo que verifica lo mismo, que en el deseo de con
tienen de instintivo se les agregan algunos servarse ó conservalividad , y por cierto que
actos de la razon y voluntad. En efecto : si tan obligatorio es á los ojos de la religion
asi no fuese, ¿cómo seria dable concebir y de la moral , el apartarse de debajo de
que tuviesen por blanco el bien ageno , ó un edificio que se desploma , ó el comer
el tiempo futuro , de tal suerte que entra cuando es necesario para conservar la vida,
sen ya en algun modo en el órden de la como el dar limosna al pobre que se halla
religion y de la moral ? Tanta verdad es lo en la necesidad mas extrema.
que acabamos de decir , que si la doctrina Si bien se observa , no hay instinto ó
del Sr. Cubi no se modificase con este sentimiento en el hombre que no pueda
correctivo, se seguiría de ella que tambien servir para el bien como para el mal, segun
los brutos tienen instintos religioso-morales. el uso que de él se haga; y por tanto lejos
La razon de esta consecuencia está en que de calificar á estos ó aquellos de religioso-
tambien los brutos están dotados de ciertos morales , hablaremos mas exactamente di
instintos, que miran al bien ageno ó al ciendo, que en sí son indiferentes, pero
tiempo futuro : por lo que si estas circuns que sus actos son buenos ó malos segun se
tancias bastasen para constituir el carácter conforman ó nó con la razon , ó lo que es
religioso-moral , tambien lo disfrutarían lo mismo con la ley eterna. ¿Qué cosa mas
algunos instintos de los brutos. Entre los moral á primera vista que la compasion? y
animales , la madre que da la leche ó de sin embargo en ciertos casos el escuchar
comer á sus pequeñitos , no busca el bien sus inspiraciones podría ser una infraccion
propio, sino el ageno; asi como clave que de las leyes , un atentado contra la socie
forma su nido no mira al tiempo presente, dad. ¿Qué diríamos de un juez que decla
sino al futuro. rase inocentes á los grandes criminales, por
No hay pues religion ni moral propia compadecerse del mal que les irrogaría con
mente dichas en los instintos, en cuanto se la aplicacion de la pena? La acometividad,
consideran con abstraccion de todo acto de que pudiera comprenderse en el nombre
razon y de voluntad ; y si se quiere darles de ira , ó en el de alguno de sus efectos ,
tal nombre, es preciso no confundir las podrá llevar al crimen ó al heroismo segun
ideas, no atribuyéndoselo en otro sentido, las circunstancias que la acompañen. El
sino en cuanto son una especie de aguijo soldado que cumpliendo con su deher aco
nes y auxiliares que para obrar el bien nos mete decididamente al enemigo arrostran
ha otorgado el Criador. do todo linage de peligros, ejerce un acto
Todavía, á pesar de estas aclaraciones y de acometividad, virtuoso y heroico. El
correctivos, parécenos que resulta muy mismo soldado arrojándose con espada en
inexacta la doctrina que estamos examinan mano sobre el compañero de quien se cree
do ; y no podemos convenir en que estén ofendido , ejerce un acto de acometividad
bien calificados ni designados los instintos criminal , digno de ser castigado por las le
religioso-morales diciendo que son los que yes divinas y humanas. La filogenitura , ó
miran al bien ageno , ó al tiempo futuro ó amor de los hijos , puedo ser tambien vir
á ambos. ¿Por qué se honra con el dictado tuosa ó culpable segun la manera con que
de religioso-morales tan soloá los instintos se la pone en práctica. Si conduce á cuidar
que reunen estas circunstancias? ¿Por ven bien de la manutencion y educacion de los
tura no existen otros que no mirando di hijos, es digna de alabanza; pero si los
rectamente al bien ageno ni al tiempo fu echa á perder con desmedidas considera
turo , se enderezan no obstante á un objeto ciones , si permite ó causa que se desarro
 lien sus inclinaciones malas , y que vegeten
en la ignorancia , entonces es merecedora
de duro vituperio.
Do esto se infiere con toda evidencia ,
que hay cuando menos mucha inexactitud
en la clasificacion del Sr. Cubi , y que la
denominacion de religioso -moral, está apli
cada con impropiedad. Supuesta la inteli
gencia y el libre albedrío, es moral todo lo
que se conforma con la ley eterna , es in
moral todo lo que se opone á ella : hé aqui
en breves palabras cuanto puede decirse
en esta materia; lo demas es divagar apar
tándose de lo que enseña la sana filosofía y
de lo que nos está dictando el sentido co
mun del humano linage. Sin inteligencia
no es posible concebir moral , y por esto
no se la encuentra en los brutos : cuando
el hombre obra sin el uso de ella , no obra
como hombre , sus actos no podrán nunca
ser considerados como morales. Todas las
inclinaciones son buenas y por tanto mo
rales , si de ellas usamos bien , si no les
permitimos que nos impulsen á ejercer ac
tos contrarios á la ley eterna , si las em
pleamos para mayor cumplimiento de nues
tros deberes; todas son malas, é inmorales,
si dejándoles cual caballo sin freno , con
sentimos que nos arrastren al olvido de
nuestras obligaciones y á la infraccion de
la ley.
Nunca se percibe mejor la inexactitud
de una definicion fundamental , que á me
dida que se van desarrollando las doctrinas
que en la misma estriban , haciéndose de
ellas algunas aplicaciones : entonces se ex
perimenta el vacío ó el error que no se
habia conocido á primera vista ; como acon
tece con los instrumentos mal construidos
que engañan quizás con su hermosura ,
pero que ponen de manifiesto sus defectos
tan pronto como se los usa. Esto se verifi
ca cabalmente en la definicion del Sr. Cubi:
mirada superficialmente es muy especiosa ,
encierra un no sé qué de filosófico que
deslumbra y seduce; pero examinada á
fondo se descubre que lo interior no cor
responde con la superficie. Vamos á pro
barlo.
Explicando el citado escritor la lucha de
inclinaciones que siente el hombre, dice
que esta es constante entre los impulsos
animales y los religioso-morales, esto es
entre el deseo de mirar exclusivameute para sí
en el momento actttul , y el deseo de mirar
principalmente para otros y lo futuro. Haga
mos resaltar toda la falsedad que aqui se
encierra recordando un ejemplo doloroso y
harto frecuente. Hállase un hombre con
una pistola en la mano, y se siente inclina
do á dispararla contra su frente; el instinto
de conservacion le detiene , y hasta , pres
cindiendo de toda idea de la otra vida , le
retrae de su atentado, le aconseja que mire
exclusivamente para sí en aquel momento:
¿ por ventura son inmorales en este caso
las inspiraciones del instinto? ¿Dejando de
mirar por sí en aquel momento , no ejercería
un acto muy malo?
« Si sobrepujan exclusivamente los pri
meros impulsos (los animales) , continúa el
escritor, es el hombre absolutamente egois
ta , obra solo para sus intereses y fines in
dividuales; si sobrepujan absolutamente los
morales , se olvida de sí el hombre , y no
obra mas que para el ínteres ageno. En
uno y otro caso se obra mal , y se sufre el ir
remisible castigo.» Hé aqui la chocante
consecuencia á que se halla conducido el
Sr. Cubi por la mala definicion de los tér
minos. Siempre se ha creido y se cree to
davía , que el absoluto predominio de la
parte moral , hacia el hombre bueno , per
fecto; pero segun se acaba de ver, la pre
ponderancia absoluta de los instintos mo
rales, hace tambien que el hombre obre
mal, que sea digno de irremisible castigo.
¿Querrá significar el Sr.Cubi que el hom
bre llegue á ser malo obrando muy bien?
Estamos seguros que no ; pero antes habia
asentado que los instintos religioso-morales
eran los que miraban al bien ageno y al
tiempo futuro, y como es evidente que por
este camino podemos obrar mal, pues te
nemos tambien rigurosos deberes que cum
plir con respecto á nosotros mismos y al
tiempo presente, resulta que tomada la
moralidad en sentido tan impropio , podia
un hombre hacerse inmoral á fuerza de ser
moral. Expresion absurda á no ser que se
hablase con aquella discreta indulgencia
que empleaba el Papa Inocencio XII cuan
do despues de haber condenado la obra del
inmortal Fenelon decia , que el piadoso ar
zobispo habia pecado por un exceso de amor de
Dios.
La belleza y sublimidad de las acciones
que suponen gran desprendimiento de sí
mismo , resplandecen sin duda en primera
línea cuando se trata de apreciar acciones
morales ; pero esto no autoriza para tras
tornar las ideas basta tal punto , que no se
vea moral sino alli donde el hombre piensa
para los otros ó para el tiempo futuro. De
 — 193
bemos amar á los domas, pero tampoco na, sino que nos indica el camino de la
estamos obligados á olvidarnos de nosotros perfeccion , que consiste en desprenderse
mismos ; y esto es tanta verdad , que la ley de sí mismo , en negarse á sí mismo , en
de Dios al prescribirnos el amor del próji abrazar la cruz y seguir á Jesucristo. ¿ Quién
mo, nos dice que lo amemos como á nos no recuerda los muchos pasages del Evan
otros mismos : sicut te ipsum. gelio donde se inculca tan sublime doctri
No creemos que pueda sostenerse sin na? ¿Quién ignora que la vida de los Após
restriccion lo que asienta el Sr. Cubi de toles y de todos los Santos fué una imitacion
que el hombre obre mal cuando no obra del ejemplo que les dió el divino Maestro ,
sino para el intercs ageno; porque semejante siendo el primero en practicar lo que enseñaba ?
doctrina pudiera conducirnos hasta el ex Dice el Sr. Cubi que en uno y otro caso ,
tremo de condenar aquellas vidas heroicas ora prevalezcan exclusivamente los instin
que se consagraron enteras al servicio y tos animales , ora los morales, se obra mal,
consuelo de la humanidad. ¿Y quién á y se sufre el irremisible castigo. ¿De qué
tanto se atreviera? ¿quién no pronuncia castigo hablais , cuando son los morales los
con respeto los nombres de aquellos Santos, que predominan? ¿Os referís tal vez á la
que fijo su corazon en el cielo, se miraban extenuacion y á las enfermedades del cuer
á sí mismos como una víctima que se debia po ? En tal caso , si no hay mas que una
sacrificar en provecho de sus hermanos? sobreabundancia de moral, el resultado
El cimiento de la Religion cristiana, el dañoso al cuerpo será un mal físico , mas
augusto misterio de nuestra redencion, nó un castigo. Si tuvierais á la vista una
¿no es por ventura un acto de sublime Hermana de la Caridad con el semblante
desprendimiento, de negacion de sí mis flaco y demudado, por haber pasado mu
mo , para entregarse sin reserva á los tor chas noches á la cabecera de un enfermo ,
mentos y á la muerte ? ¿osaríais pensar en castigo descargado por
Resulta pues que el error contenido en el Criador sobre aquella heroica y angelical
la definicion del Sr. Cubi, ora le lleva á criatura? Lejos de hablar de pena habla
trastornar la verdadera idea de la moral , ríais sin duda de altas recompensas , y por
no condecorando con este nombre sino vuestra parte se las ofreciérais ya , tribu
aquellas inclinaciones que tienden al bien tándole la expresion de vuestra admiracion
de los otros ó al tiempo futuro , ora le con y entusiasmo. Que si se nos dijese que la
duce á condenar (sin intencion, sin'duda,) naturaleza contrariada y trastornada en sus
aquellas vidas que se consagran enteras al funciones , reclama sus derechos , haciendo
interes ageno. Pero se nos dirá, esos hom sufrir al imprudente que atenta á la armo
bres de heroico desprendimiento tambien nía de sus leyes , entonces responderemos
miraban en algun modo para sí mismos , que no hay culpa y por consiguiente ni
pues obraban con la esperanza de alcanzar castigo, cuando se quebranta la armonía de
el galardon en la morada de los Santos; la naturaleza en fuerza de otra armonía
mas esta réplica en nada obsta álas dificul superior, que es á la primera lo que el es
tades objetadas á la doctrina del Sr. Cubi ; píritu al cuerpo, lo que el cielo á la tierra.
porque este escritor cuando habla de mirar Si bien se observa , la admirable armo
para si, se refiere á los instintos animales, nía de la creacion se sostiene con esos apa
egoístas, que solo tienden á objetos presen rentes trastornos que subordinados al plan
tes ; luego segun , él los hombres que no del Supremo Hacedor contribuyen á la per
los hayan satisfecho , que los hayan com feccion y hermosura del Universo. Pierden
batido mientras vivieron sobre "la tierra, su vida las plantas , y esta pérdida sirve á
que murieron segun la carne para vivir so conservar la de los animales; de estos, al
lo en espíritu , se excedieron dejando pre gunos se sustentan con la destruccion de
valecer únicamente los instintos morales , los demas; y el hombre para su alimento
y por lo mismo obraron mal. Esto es un er y otros usos , se ve precisado á dar la
ror, grave, gravísimo, porque destruye muerte á los brutos y a los vegetales. Asi
nada menos que el espíritu de perfeccion , no hay falta de armonía, no hay culpa,
aparta á los hombres de la práctica de las no hay merecimiento de pena ; cuando un
virtudes austeras, se opone directamente ser que por su naturaleza está destinado á
al Evangelio que no se contenta con impo sacrificarse por otro ser , cumple el objeto
nernos los preceptos cuyo cumplimiento que le ha señalado el Criador; y por con
nos es necesario para alcanzar la vida eter- siguiente cuando los instintos animales se
TOMO I. 13
 comprimen y hasta se ahogan en obsequio al cuerpo por querer caminar mas á prisa
de grandes fines morales, no hay desorden, en el camino de la virtud ! ¡ dichosa abre
no hay falta , no hay nada que castigar ; viacion de la vida , la que nos hace entrar
hay sí un desprendimiento loable , una ab mas pronto en la mansion de los justos ! A
negacion sublime , que lejos de que me los hombres de caridad ardiente que sacri
rezcan ser calificadas de mal, deben al con ficaron sus vidas por el bien de sus seme
trario ser miradas como un bien; y bien jantes , la religion los coloca sobre los alta
muy raro , que dispensa Dios á los hom res, la humanidad agradecida les consagra
bres privilegiados á quienes se propone monumentos y les erige estatuas.
distinguir del comun de los mortales. A pesar de la inexactitud de su defini
Es esto tan cierto , es tan conforme á la cion, el Sr. Cubi ha tributado un home-
sana razon , y á los sentimientos del cora nage á nuestra doctrina. A los instintos que
zon humano, que tan pronto como se ofre solo miran al interes propio y presente, los
ce á nuestra vista un fenómeno semejante , apellida animales ; á los que tienden al age-
le admiramos, le contemplamos con entu no ó futuro, los denomina morales; esto
siasmo; y el solo pensamiento de conde como hemos visto ya , es inexacto y hasta
narle, nos pareciera una profanacion sa falso; pero ¿qué es lo que ha dado ocasion
crilega. al error? es sin duda, el carácter de subli
En todos los pueblos de la tierra se ha me moralidad , que consigo lleva la abne
reconocido esta verdad , porque en todos gacion y el desprendimiento.
se ha rodeado de veneracion y acatamiento No creemos que el Sr. Cubi tenga nada
la austeridad de la vida , la práctica de las que objetar á lo que acabamos de exponer;
virtudes mas contrarias á las inclinaciones esperamos que abundará en los mismos
de nuestra naturaleza. Recorred las pági principios ; porque no podemos persuadir
nas de la historia, atended á las lecciones nos que profese doctrinas que tiendan á
de la experiencia , prestad oido á las voces quebrantar el vuelo del espíritu, y á sufo
mas íntimas del alma , y en todas partes car los mas nobles sentimientos del co
hallareis la misma enseñanza de que el razon.
hombre moral es aquel que domina los ins Otro dia proseguiremos nuestra tarea,
tintos animales , el que los sojuzga de tal escribiendo sobre la Frenología el tercero
suerte que nada les consiente de contrario y último artículo.—/. B.
á la ley eterna ; y que el hombre perfecto,
el hombre por excelencia , es aquel que
llega á sufocar esos instintos hasta tal pun
to , que se olvida de su cuerpo , y solo
piensa en el cumplimiento de sus deberes,
en sacrificarse por Dios y por sus hermanos.
Y entonces se nos dirá, ¿cómo se cum
plen los deberes que cada cual tiene consi
go mismo? ¿cómo? muy sencilla es la
respuesta. La historia está llena de vidas
consagradas al culto de Dios y al servicio
de la humanidad , y que sin embargo no
duraron monos que las del comun de los
hombres. Y es que el ardor de la caridad
no destruye la prudencia; ni el secreto de
conservar la salud y alargar la vida . está
en la satisfaccion de los instintos animales.
Casos hay ciertamente en que el hom
bre entregado á los impulsos de virtudes
superiores quebranta su salud y abrevia su
vida ; pero recuérdese que no hay profe
sion , no hay ocupacion de ninguna clase
en que no pueda suceder lo mismo. Domi
nado el hombre por un vehemente deseo,
no siempre advierte que se daña á sí pro
pio ; pero , dichoso daño el que se acarrea

No siendoPOLEMICA
fácil proporcionarse
RELIGIOSA.
ejemplares de un
eserilo sobre el Celibato del Clero Católico , pu
blicado por el autor de esta Revista en 1839, y
sabiéndose que algunos Srcs. suscritores desea
rían su lectura , se inserta á continuacion , tal
como en aquella época salió á luz en el periódico
de Madrid , que había publicado una especie de
programa invitando á discutir la importante
cuestion sobre las ventajas religiosas , morales y
políticas de dicho celibato.
REFLEXIONES
SOBRE
EL CELIBATO DEL CLERO CATOLICO
EN PARANGON
CON LA FACULTAD DE CONTRAER DE
LOS PROTESTANTES.
Alzado en Alemania el grito de revolu
cion religiosa, proclamada la libertad de
conciencia , hollada la autoridad del sumo
Pontífice , niveladas las gerarquías , y que
brantados enteramente todos los lazos de la
disciplina eclesiástica, fácil era prever que,
abandonadas las pasiones á la merced de
sus violentos impulsos , sacudirían desde
luego el molesto freno de una santa auste
ridad, y que no serian parte á contener sus
arrebatos las consideraciones de puro mi
ramiento. Asi fué en efecto ; y el hombre
que se habia puesto al frente de la preten
dida reforma no tardó en dar tan escanda
loso ejemplo , consumando con impudente
osadía el nefando atentado de un doble sa
crilegio. ¡ Baldon eterno para la enseña del
error y del cisma , que desde el momento
de enarbolarse se viera ya rodeada del as
queroso cortejo de la corrupcion y del
escándalo ! Desbordáronse sin freno las pa
siones, quitáronse la máscara hipócrita con
que se habian encubierto , y tratóse de eri
gir en doctrina lo que no habia sido mas
que un crimen. Tal es la condicion del
hombre : las pasiones le arrastran hasta el
fango de la corrupcion y de la miseria;
vuelto en sí se avergüenza de su ignomi
nia ; y entonces el orgullo , siempre fecun
do en recursos para disculpar un extravío,
llamando en su auxilio las cavilaciones de
una razon veleidosa y flexible , improvisa
un sistema, crea una doctrina, esforzán
dose de esta manera en sustraer la afrenta
del culpable á la severa y penetrante mira
da de la virtud y del buen sentido.
A la luz de estas reflexiones , que pre
sentan en toda su desnudez el verdadero
origen del matrimonio de los ministros pro
testantes , debiera de parecer extraño que
se haya querido parangonar semejante mi
seria con la veneranda austeridad del clero
católico. Infiérese tambien de aquí , que á
la supresion del celibato entre los ministros
protestantes no presidió ningun pensamien
to de reforma religiosa , moral ni política;
sino que todo fué obra del desenfreno de
las pasiones, un efecto muy natural de la
relajacion que debia de introducirse entre
los reformados, una vez sacudido el yugo
de la autoridad ; siendo despues muy con
secuente el que declamasen con furor con
tra el celibato de) Clero católico , por la
misma razon que las aguas de una avenida
impetuosa se embravecen contra el robusto
dique que las embaraza en su precipitada
corriente.
Tal vez no sea por demás el haber pre
sentado estas reflexiones antes de entrar de
lleno en la materia ; no fuera que ciertos
miopes, que sobre la palabra de adocenados
escritores, están acostumbrados á mirar la
reforma protestante como un pensamiento
generoso y fecundo , que derramó sobro la
Europa un inagotable raudal de preciosos
beneficios , hubieran tambien sospechado
en el matrimonio de los ministros protes
tantes alguna idea sublime y misteriosa,
que envolvía en su seno el germen de gran
des mejoras religiosas, inoralos y políticas.
Pero entremos en materia: ¿El celibato
del Clero ( prescindiendo de las leyes canó
nicas y civiles) es mas conducente, política,
moral y religiosamente al bien de la sociedad,
que la facultad de contraer de los protestantes?
El sacerdote ¿quién es? ¿cuál es su ca
rácter? ¿cuáles son sus funciones? ¿cuál su
mision sobre la tierra? Es un medianero
entre Dios y los hombres, un encargado
de ofrecer al Dios de Magestad el sacrificio
y el incienso , de elevar al trono de la infi
nita Misericordia las oraciones de los mor
tales, de aplacar la cólera de la Divina
Justicia provocada por el crimen , y de re
 — 190 —
cibir de la mano del Eterno las prendas de nes religiosas, se estudia á la vez algun
sus inagotables bondades , para derramar arcano del corazon del hombre. Un instin
las en seguida sobre la tierra como un rocío to , una tradicion , ó sea lo que fuere , ha
de consuelo y esperanza. Contempladle al bia enseñado al linage humano la existencia
ejercer las funciones de su augusto minis de una estrecha relacion entre la continen
terio: rodeado de un pueblo numeroso que cia y las funciones religiosas ; los antiguos
humilla compungido su frente ante la ma- pueblos del Asia , los egipcios , los griegos,
gestad del Santo de los Santos, revestido los romanos, los chinos, hasta los sectarios
de un ropage misterioso , en pié sobre la de Mahoma , los moradores del Nuevo
grada del altar resplandeciente, envuelto Continente , en una palabra , cuantos pue
en la nube aromática que se eleva de sus blos antiguos y modernos nos han dejado
manos hácia el trono del Eterno, articu algun recuerdo de sus usos y costumbres,
lan sus labios una palabra de oracion , en todos han manifestado un misterioso acata
tona con augusta magestad un himno al miento ante esa sublime virtud , todos han
Dios de Sabaot , levanta con sus manos la convenido en mirarla como un aroma pre
Hostia de salud , y presenta á la adoricion cioso, sin cuya exquisita fragancia no po
del pueblo al Cordero sin mancilla que dían ser agradables al Eterno las ofrendas
borra los pecados del mundo. ¿No eleva presentadas ante su trono por la mano de
vuestra alma aquel espectáculo sublime? los mortales. Este es un hecho universal,
¿ no os sentis penetrados de un sentimiento constante, atestiguado por la historia de
religioso que os humilla ante el Señor de todos los pueblos , tiempos y paises ; y sin
Magestad , y á la vez os inspira un profun duda que por esta causa, y en obsequio
do respeto á la dignidad del ministro? ¿no de la brevedad á que debe circunscribirse
os place distinguir en el semblante del sa este discurso , se me permitirá el omitir la
cerdote los rasgos de santa austeridad, muchedumbre de citas con que podria lle
figurándoos un corazon inundado de ben narlo, aun contando con un caudal de eru
diciones celestiales , puro como el rayo de dicion mucho menos que mediano.
la luz , fragante como el aroma del incien Ahora bien: ¿qué enseña este hecho?
so? ¿Sí? pues introducid en el cuadro á la ¿prueba algo en favor de las ventajas reli
muger , haced que se os ofrezcan los lazos giosas y morales del celibato del Clero cató
de amor que unen al ministro con hermo lico ? Si estuviese aun en su auge la funesta
sura pasajera ; y desde aquel momento el costumbre introducida por los sofistas del
cuadro desaparece , el sacerdote se abate, siglo xviii de ventilar las cuestiones reli
su dignidad se humilla, su gravedad se giosas , morales y políticas á la sola luz de
amengua, su austeridad se relaja: y en especiosas teorías, y prescindiendo comple
aquellos mismos ojos en que poco antes tamente de la realidad de los hechos , sin
contemplabais conmovidos el divino fuego duda que mi pregunta podria contar con
de un amor celeste , descubrireis un viso resueltas y numerosas negativas ; y tal vez
de liviana languidez , un reflejo de la lla por haber tenido el linage humano seme
ma mundanal que el esposo abriga en su jante conviccion , se le prodigaran los apo
pecho. dos de iluso é ignorante. Pero felizmente
Que no debe tacharse , nó , semejante para esa clase de estudios , las ideas se han
razonamiento de idealismo poético, ni ape modificado algun tanto ; y aunque sea la
llidarse vana declamacion sustituida á la mentable que no esté extendida y arraigada
solidez del raciocinio , cuando se ajusta cual debiera la importante verdad de que
exactamente con la experiencia de cada para conocer la religion , la moral y la po
dia,con los sentimientos mas indelebles del lítica , y para deslindar las profundas y de
alma , con las grandes lecciones de la his licadas relaciones que las enlazan entre sí
toria, y con el pensar del linage humano. y con el corazon del hombre , no basta so
Es preciso confesarlo : la religion cristiana ñar en un gabinete , sino que es preciso,
conoce profundamente el corazon humano, indispensable, escuchar, consultar, anali
sus pliegues mas secretos, sus relaciones zar las grandes lecciones de la historia y
mas delicadas, sus instintos mas misterio del tiempo ; sin embargo , tambien se ha
sos: todo lo tiene previsto, todo calculado, de confesar que la frivola escuela del siglo
todo sujeto á una combinacion profunda, xviii caduca rápidamente con sus teorías,
de manera que bien podria asegurarse que, sus abstracciones y sus nombres; y que
estudiando una cualquiera de las institucio empieza á propagarse la saludable convic
 — 197 —
ciou de que fuera vano empeño buscar res apellidados filósofos , que se preciaban
aquel linage de conocimientos por medio de observadores imparciales, y con cuya
de las cavilaciones de los filósofos; á Ia regla de vida nada tenia que ver el celibato
manera que nadie estudia ya el mundo fí del Clero? ¡ Ah! No es difícil atinarlo; es
sico apoyándose en los sistemas de Descar que en él veían un muro de bronce contra
tes, ó en las teorías de BulTon. la corrupcion de costumbres del Clero , un
Dable será pues alegar con firme con baluarte de la pureza de la moral y de la
fianza en pro de las ventajas religiosas y severidad de la disciplina , un elemento de
morales del celibato del Clero católico , las respeto y veneracion hácia el sacerdocio,
convicciones y sentimientos del linage hu un abundante manantial de ventajas reli
mano , y el presentar en consecuencia esa giosas y morales para todos los pueblos que
institucion veneranda como la realizacion cobija en su seno la Esposa de Jesucristo.
de una idea sublime , de un sentimiento
misterioso , que anteriormente al estableci
miento del cristianismo , se hallaban ya di II.
fundidos por todo el ámbito de la tierra.
; Cómo es posible que se haya echado en Pero ¿ cuál es el origen , cuál el funda
cara al catolicismo el haber pensado y sen mento de esa íntima relacion que existe
tido con respecto á la continencia , lo mis entre la continencia y el ministerio religio
ino que de antemano j>ensaran y sintieran so? Reflexionemos sobre ello un momento.
todos los pueblos del orbe ! ¡ El haber eri Por mas que las pasiones del hombre ten
gido en ley universal y constante lo que gan entre sí muchos puntos de semejanza
antes era un sentimiento vago y confuso, en su origen, tendencia y desarrollo , di
expresado en diferentes formas por mil le fieren sin embargo en gran manera, nó
yes, usos y costumbres! Estaba reservado precisamente por la naturaleza de las ac
al catolicismo el acometer tamaña empre ciones á que inducen , sino por el modo
sa , y el conducirla á cabo con aquella dig particular y característico con que afecta
nidad y sabiduría que corresponde á la re cada una el corazon , por aquella fisono
ligion de Jesucristo. El celibato del Clero mía , digámoslo asi , que cada una comu
católico es lo que debia ser la continencia nica al hombre; resultando de aqui que
en manos de una religion divina ; una con aun en igual grado de culpabilidad de las
tinencia austera, sin la barbarie con que la acciones, es muy diferente el aspecto con
afeaban algunos sacerdotes del paganismo, que se presenta á sus semejantes el hom
libre de toda supersticion , pura de toda bre que de ellas se halla dominado , y de
mancha , elevada á una esfera sobrehuma consiguiente que es muy diverso el influjo
na, y sellada con aquel carácter de santi que sobre ellos puede ejercer en la varie
dad y pureza, que forma el distintivo de dad de posiciones sociales en que pueda
las instituciones católicas. ¿Con qué osadía colocarle su destino. Unas elevan el ánimo,
se ha notado como un lunar del catolicis- otras le abaten ; esta comunica al espíritu
las perlasde mas
sus mas
preciosas
bellos que
adornos,
esmaltan su vigor y energía , aquella le enerva y enfla
una de
quece ; tal ensancha el corazon y enardece
auréola brillante? Que en contra del celi su fuego , tal otra le apoca , le estrecha , y
bato del Clero católico declamaran los co como que ahoga todo gérmen de senti
rifeos de la reforma , que declamen aun mientos generosos ; en una palabra , todas
hoy dia sus discípulos los ministros , nada presentan caractéres tan distintos , cuanto
tiene de extraño ; los primeros debian de es su número , su combinacion , sus rela
esforzarse para encubrir los vergonzosos ciones y circunstancias. No seria difícil el
motivos de su apostasía , y procurar escu hacer de esta verdad numerosas aplicacio
darse en algun modo contra la picante sá nes , y tal vez no dejaría de ser interesante
tira que con tanto desenfado les dirigiera un cuadro en que se viera, con respecto al
Erasmo ; y los segundos , porque es muy individuo y á la sociedad , el complicado
natural que miren con aversion y aborre juego de tan varios y poderosos resortes.
cimiento esa austera institucion del catoli Mas como quiera que el solo bosquejo de
cismo, que es y será siempre su reprension semejante trabajo excedería los límites á
mas elocuente , y su condenacion mas se- que debe ceñirse este discurso , será pre
i ; pero ¿qué podian encontrar en el ciso contentarse con un solo punto de vista
esos declamado y comparacion , con cuyo medio , á mas
 — 198 —
de llenarse lo principal del objeto , no se ductoresylas funciones religiosas. ¿Yqué?
traspasarán
Funestas como
los lindes
son áprefijados
la moral aly felicidad
escrito. ¿hay acaso algo en el mundo que demande
mas elevacion de ideas , mayor pureza de
del individuo, y fatales no pocas veces al corazon, mas gravedad de carácter, y mas
sosiego y bienestar de la sociedad , la am circunspeccion , dignidad y rectitud en to
bicion y el anhelo de la gloria, ejercen no da clase de procedimientos?
obstante sobre el corazon del hombre un Pero bien , se me dirá , si el sacerdote
mágico influjo, que agranda sus ideas, en fuera un ángel, si en su pecho no hirvieran
sancha sus planes , multiplica su actividad las pasiones como en el pecho de los demás
y osadía , é inspirándole á menudo gran hombres, estaría muy puesto en su lugar
diosos proyectos, le hace capaz de sostener cuanto se acaba de aducir en favor' del ce
los trabajos mas penosos, y de acometer libato ; pero el sacerdote es un hombre , y
impávido las mas arriesgadas empresas. El si no dais al fuego de sus pasiones un res
amor , fiebre ardorosa cuando carece del piradero legitimo , provocaréis una explo
objeto amado, pueril cuando le posee, frá sion criminal, cuando creeréis haberle le
gil y mudable como la hermosura que ido vantado al nivel de la perfeccion , le veréis
latra , inspira al corazon del hombre la precipitarse por la carrera de la corrupcion
veleidad y la inconstancia , debilita su vi y del escándalo. Objecion especiosa sin du
gor, afloja su energía, y absorviendo en da por imitar el circunspecto lenguaje de
liviano sueño todas las potencias, echa á la prudencia y buen sentido ; pero que es
perder con frecuencia el mas exquisito muy fácil disipar con abundantes y robus
temple de alma. El hombre que trabaja tas reflexiones, y que sobre todo se desva
por adquirir un nombre ilustre, ó que nece en humo con el concluyente testimo
"ndose
umbre paso
se esfuerza
por entre
por ocupar
la oscura un mu-
alto nio de los hechos.
Si el matrimonio del Clero fuera un sa
no , marcha tal vez por el sendero de ludable y preciso desahogo, si el celibato
la violencia y del crimen , y deja en pos de católico fuera una compresion imprudente
sí un reguero de sangre y de lágrimas : es y peligrosa , obrando de continuo estas dos
verdad ; pero hácelo al menos con la cer causas , la primera sobre el Clero protes
viz erguida , con el orgullo en la frente, tante, y la segunda sobre el católico; se
afligiendo á las personas juiciosas con el habría establecido entre la conducta de
amargo pesar de ver extraviadas de un ambos un terrible desnivel , quedando in
modo lamentable grandes calidades dignas calculable ventaja á favor de los ministros
de mejor objeto , é inspirando á los demás protestantes. Ahora bien ¿ existe el desni
hombres ora la admiracion y entusiasmo, vel! Sí, y muy grande; pero es todo á fa
tal vez el terror y el odio ; mas nó la bur vor del Clero católico. Díganlo si no cuan
ladora sonrisa , no la indiferencia y el des tos hayan viajado por los paises protestan
precio. El amante, olvidado de sí mismo, tes , ellos que habrán sido testigos oculares
sin mas objeto que su idolo , sin mas dicha de la poca estimacion en que son tenidos
que el placer, se arrastra con abatimiento por sus pueblos, de la indiferencia y hasta
y languidez á merced de los caprichos de desprecio con que son mirados en todas
la belleza que adora ; y como que prefiere partes: y dígalo ese respeto, esa venera
á cuanto hay de brillante, grande y esti cion con que es obsequiado por los católi
mable sobre la tierra los hechiceros hala cos el Clero católico ; y "eso á pesar de los
gos de oscuridad voluptuosa , solo ofrece á inauditos esfuerzos que de un siglo «á esta
sus semejantes la imágen de la abyeccion y parte se están empleando á porfía por des
debilidad ; solo les inspira una compasion conceptuarle y envilecerle. Aun hay mas,
estéril, si no es que con sus gemebundos y sobre este hecho , aunque muy sabido,
planidos no provoque de vez en cuando la llamo muy particularmente la atencion de
picante sátira del gracejo , o la penetrante mis lectores. Cuando la terrible explosion
malignidad de mirada burlona. Y hé aquí de la revolucion francesa dispersó por toda
la causa por qué están reñidos con esa pa Europa á los ministros católicos , una por
sion muelle y enervante todos aquellos cion considerable de ellos buscaron en In
cargos cuyos objetos sean algo de arduo, glaterra un asilo contra el furor que los
de grave é importante: hé aquí por qué ha perseguía en su patria. No era seguramen
sido necesario levantar una robusta valla, te la Inglaterra un pais en que se hubiese
un muro de bronce entre sus halagos se- || calumniado á medias al Clero católico ; pre
 — 199
sentáronse allí los sacerdotes emigrados : caces, á desahogos, á condescendencias
¿y que sucedió? Sucedió lo que sucederá funestas : y , en medio de la impotencia y
siempre cuando las declamaciones se suje nulidad de sus medios, culpan de vana te
ten á la piedra de toque delos hechos : ad meridad las severas disposiciones de una
miraron los ingleses la santa gravedad , la legislacion sabia y profunda. ¿Quiérese
intachable pureza de aquellos sacerdotes una confirmacion de la ligereza con que se
que habian visto retratados con tan negros ha echado en cara al catolicismo la auste
colores; y, á pesar de la extrema suspi ridad de sus instituciones en materia del
cacia de los habitantes de aquel pais con celibato? Recordaré pues un hecho recien
respecto á los célibes, se estableció en fa te, público, ruidoso, ya que por su es
vor de los sacerdotes católicos la honrosa trecha relacion con la materia que nos ocu
excepcion de franquearles libre entrada en pa no podría omitirse sin dejar un conside
las casas , y de permitirles con entera con rable vacío. ¿Qué no se habia dicho, cuánto
fianza la comunicacion con las esposas y las no se habia declamado antes de la revolu
bijas. ¿Dónde están pues los funestos re cion francesa sobre la austeridad de vida
sultados del celibato del Clero católico, de las vírgenes consagradas á Dios , de las
cuando en paisextrangero á lasola vista de pretendidas víctimas del claustro? Estalló
sus virtudes , se disipan preocupaciones tan la revolucion , cayeron de repente al suelo
arraigadas, se acallan resentimientos tan las puertas de los pretendidos calabozos ;
inveterados y nutridos , y se tranquiliza ¿y qué sucedió? Dígalo la nacion francesa:
completamente la delicada suspicacia desus cuando muchas se hallaban todavía en la
mayores adversarios? edad lozana , en que la naturaleza no ha
perdido aun su hermosura , las ilusiones su
brillo , y el placer sus hechizos, ¿viéronse
III. acaso aquellos oseándolos que con tanta im
pudencia se prometieran la impiedad y la
malicia? Fieles á la santidad de sus votos ,
Cuando las cuestiones se sacan de su ver sordas á las seducciones de un mundo que
dadero terreno se miran bajo un punto de las brindara con la dorada copa , retroce
vista falso; y cuando en la resolucion de un den horrorizadas á la sola vista del peligro,
problema se hace abstraccion de ciertos y cubriendo sus rostros virginales con el
datos que están por necesidad embebidos velo misterioso , corren á llorar en soledad
en su naturaleza , en vez de dar en el blan los extravíos de aquella generacion delin
co de la cuestion , no se hace otra cosa que cuente. Pero ¿á qué citar paises extraños?
derramar vaciedades y desaciertos. El ce En España ¿no hemos visto nosotros á esas
libato del Clero católico cuenta por princi vírgenes heroicas arrostrar generosamente
pales adversarios á aquella clase de filóso la estrechez , y hasta la miseria , antes que
fos que no conocen otra basa de la moral abandonar aquel asilo de soledad y de pe
que el inferes privado, y que desprecian nosas privaciones? ¿No las hemos visto
como vana ilusion á cuantos otros agentes conservarse en sus retiros corriendo gra
se quiera atribuir influjo sobre el corazon vísimos peligros sus vidas inocentes, cuan
humano. Mirados bajo este punto de vista do desde la oscuridad de los ángulos del
la sociedad y el individuo , reguladas por claustro oian la confusa gritería de los ase
esta norma las conductas privadas, basadas sinos : veian el siniestro reflejo de la tea in
sobre este cimiento las leyes, sin mas in cendiaria , y llegaba hasta sus oidos el es
flujo sobre el corazon que los alicientes de truendo de los aceros homicidas? ¿Dónde
Jos goces materiales , ó el temor de penas está pues la opresion , dónde la violencia ,
pasageras , sin mas freno para la violencia dónde la imprevision del catolicismo , dón
de las pasiones que los consejos de una ra de los funestos resultados de sus institucio
zon estéril y helada , ó la flaca contextura nes severas?
de una legislacion, obra de combinaciones Cuando se quieren examinar las leyes
puramente humanas , en teniendo que lu mas santas y sublimes al traves de un pris
char con aquellas pasiones que por la na ma ennegrecido por la corrupcion y los pla
turaleza de la mayor parte de sus extravíos ceres ; cuando no se cuenta con otros me
están fuera del alcance de las leyes del hom dios de accion sobre el corazon del hombre
bre , si no dan por imposible el contenerlas, que el aliciente de los goces voluptuosos,
apelan á vanos paliativos, á remedios inefi ó el temor de padeceres momentáneos , na-
 — 200
da extraño es que no se comprenda una de su seno. Es esto tan cierto, que aun
1).
palabra de esa profunda legislacion , gran cuando se supusiera abolido el celibato del
diosa en su plan , prudente en sus detalles, Clero , en floreciendo algun tanto la reli
fuerte sin violencia , suave sin relajacion , gion, volvería á presentarse desde luego
sólida , estable y permanente para resistir bajo la forma de costumbre venerable; per
á los embates de las pasiones y trastornos , maneciera mas ó menos en aquel estado ,
como á la accion roedora de los siglos. pero puede asegurarse que al cabo de cier
La religion de Jesucristo , como emana to tiempo se colocaría de nuevo en la es
da del seno de aquel en cuyas manos están fera de las leyes.
los corazones de los mortales , se dirige en Desenvolvamos este pensamiento. Cuan
derechura al corazon , le ocupa , le ablan do una institucion tiene en sí misma un
da , le señorea ; y como ejerce sobre todos poderoso elemento de vida la comunica sin
sus resortes un impulso inmenso , le impe cesar á cuantos gérmenes se abrigan en su
ra sin vacilar las acciones mas difíciles , le seno , y si tal vez deja á la accion de largo
exige los sacrificios mas árduos y penosos ; tiempo el desenvolverlos completamente ,
y si tal vez trata de condescender algun no obstante , si la institucion matriz es bas
tanto á la flaca condicion del hombre , no tante robusta , nunca deja de llevarlos á
es doblegándose al gusto de las pasiones , completa sazon y desarrollo. Distinguese
nó relajando la severidad de sus leyes , ni muy particularmente por este carácter Fa
amancillando la pureza de su doctrina , si religion católica, la que, aun mirada bajo
no que tiene á ra mano una infinidad de un punto de vista meramente humano , es
recursos con que endulza las mas agrias sin disputa la obra mas robusta que se ha
austeridades, siembra flores celestiales en visto sobre la tierra. Asi es que cuantos
los mas ásperos caminos , é inunda las an elementos lleva en su seno , tarde ó tem
gustias del corazon con balsámicos lenitivos prano llega á desenvolverlos , sin que pue
de amor , de consuelo y esperanza. Enla dan jamas impedírselo , ni los planes y pa
zando el tiempo con la eternidad , la vida siones de los hombres , ni la confusion y
con la muerte , las sonrisas de la cuna con el trastorno de los siglos. Como el espíritu
el llanto del sepulcro ; sorprendiendo al de esa religion divina es de sublime eleva
hombre en medio de su frivola alegría y cion á Dios , y por consiguiente de com
de sus placeres livianos, vierte en la copa pleta abstraccion de las afecciones terrenas,
de los goces una gota de saludable amar tiene por su misma naturaleza una fuerte
gura, levanta el engañoso velo que encu tendencia á la vida continente ; y si bien
bre la nada de las cosas humanas , recuer ha dejado el ejercicio de esta virtud en los
da de continuo al mortal la eternidad de su límites de puro consejo , la ha siempre dis
destino , mostrándole con severa mano el tinguido con particular predileccion , y mi
P'a.
olvo¡ Cadena
de su ser
misteriosa
y la lobreguez
que une tum- rándola como una de las pellas azuzenas
de lala tierra
que orlan la hermosa frente de la perfec
con el cielo ! ¡ Digna obra de la omnipo cion cristiana. Y es muy de nojar , que
tente palabra que crió la luz , que estable siempre , por do quiera que esa hija del
ció la armonía del firmamento, y que asen cielo haya fijado su pisada , se ha visto
tó sobre su basa los cimientos de la tierra ! brotar esa virtud como una flor olorosa
que naciera al solo contacto de su planta ,
y que marcara con aromáticos perfumes el
IV. sendero de su huella vivificante. Nada han
podido contra su accion poderosa, ni la
corrupcion mas arraigada , ni el clima mas
Cuantos han impugnado el celibato del rebelde ; por manera que allí mismo se ad
Clero católico se han manifestado muy li miraron los mas inauditos ejemplos de aus
geros en el estudio de la religion , y mos tera continencia , en donde se habian com
trado conocer muy poco su verdadero es binado mas eficaces causas para la molicie
píritu y sus mas naturales y espontáneas del corazon, y la corrupcion de costumbres.
tendencias. A no ser asi, habrían confesa Asentada esta verdad de hecho, pregun
do al menos que el catolicismo en el esta taré ahora : si era posible que el clero , esa
blecimiento del celibato del Clero ha sido porcion predilecta y escogida , que por ra
muy consecuente , y que ha planteado una zon de su augusto ministerio debia de sentir
institucion que no podía menos de brotar mas de cerca todo linage de influencias re-
 201 —
ligiosas, pudiera desentenderse de esa ten Sojuzgado el corazon del esposo por las
dencia tan marcada que manifestaba el cris gracias de su amable compañera , embele
tianismo, y si no era imposible que con tan sado con las caricias de los hijos de su co
irresistible impulso dejasen de enlazarse de razon; lleno de ilusion y esperanzas por sus
un modo inseparable la continencia y el disposiciones precoces , y de temores y re
sacerdocio. ¿Cómo era dable que se ocul celos por su suerte venidera , siente que se
tara á la Iglesia la estrecha relacion que las despiertan en su pecho una muchedumbre
unia , que desconociera lo que demandaba de afectos tan tiernos y solícitos, como
de sus ministros el espíritu de la religion , fuertes é irresistibles ; pero todos aislados ,
y que no aprovechara este medio tan obvio, concentrados en la esfera de su familia ,
tan natural y edificante de presentar á los todos convergentes , por decirlo asi , en la
fieles una muestra viva , universal y dura direccion del bienestar y felicidad de su
dera , para que á su imitacion pudieran esposa y de sus hijos. Sus necesidades se
ellos arreglar y modelar su conducta ? ¿ No aumentan , sus afanes se multiplican , co
hubiera sido bien extraño, bien irregular, bra á los intereses materiales un apego in
y de consiguiente poco duradero , el que creible; y mientras absorven su atencion
se hubieran visto entre el comun de los fie las ocurrencias de lo presente, atormentan
les, numerosos ejemplos de continencia á la vez su ánimo con inquietudes y zozo
edificante , mientras que se hubieran en bras los azares del porvenir. Nada mas á
tregado á las ilusiones del placer los sacer propósito para corroborar estas aserciones
dotes, ellos que estaban encargados de ofre que las siguientes notables palabras del
cer á Dios las oraciones y virtudes de sus doctor King , ministro de la reforma pro
hermanos, de dirigirlos por el camino testante: «No fué poca desgracia (dice)
de la perfeccion , y de- preservarlos de para la causa del cristianismo en Ingla
los amaños y asechanzas de la antigua terra el permiso concedido á nuestro Clero
serpiente ? Con un corazon plagado de de contraer matrimonio cuando la reforma
afecciones voluptuosas , con una fantasía nos separó del papismo, porque ha suce
sembrada de imágenes seductoras, y disi dido precisamente lo que debia necesaria
pada por recuerdos livianos, ¿cómo hu mente suceder , y lo que se deberia haber
bieran comprendido el lenguage puro y ce previsto. Desde aquella época nuestros ecle
lestial de una virgen cristiana? ¿Cómo hu siásticos no han pensado mas que en sus mu
bieran podido elevarse ála necesaria altura yeres y en sus hijos. » Estas palabras no
para dirigirla con saludables consejos, pa necesitan comentarios : y ellas dicen de un
ra confortar su corazon inocente combatido modo elocuente la elevada prudencia del
por recios embates, afligido con amargas catolicismo en vedar el matrimonio al
tribulaciones y angustias? Y si miramos al Clero , cuyos bienes deben destinarse par
sacerdote como depositario de los secretos ticularmente á saciar el hambre del pobre,
mas sagrados del corazon; cuando se hu á cubrir la desnudez del mendigo , al so
biera postrado á sus piés un cristiano hu corro de la estrechez de la viuda, y al
millado que acababa de mancillar su ino amparo de la horfandad desvalida : ellas
cencia con un dezliz de la debilidad huma dicen si hubiera sido prudente el embara
na ; cuando se hubiera dispuesto para co zar al Clero con las atenciones siempre cre
municar
era mas caro
al sacerdote
que su misma
aquel secreto
vida , ¡ cuál
que se
le cientes de la esposa y de los hijos, para
que á este solo recuerdo se helara su co
hubiera angustiado su pecho, cual se hu razon , y se cerrara su mano.
bieran anudado en la garganta sus palabras Que si miramos el celibato del Clero en
al pensar en la curiosidad y ligereza de la cuanto le deja con aquella independencia ,
muger, dueña de aquel corazon que iba á con aquella fortaleza de ánimo, con aquel
recibir el depósito de tan delicada con temple elevado , vigoroso y enérgico que
fianza ! requieren las grandes acciones y las em
Subirá de punto la importancia de las presas arriesgadas , encontraremos mucho
ventajas que consigo lleva el celibato del masque admirar en los profundos designios
Clero católico , si se considera que el minis de la Iglesia Católica. Una vez enlazado el
tro de la religion debe ser todo para todos, hombre con los vínculos conyugales , mira
y que uno de los mayores embarazos para la conservacion de su existencia como una
cumplir este destino hubieran sido cierta condicion indispensable para la felicidad de
mente los lazos del matrimonio. su familia; y aun cuando quepan en su
 — 202
pecho sentimientos nobles y elevados , aun su esposa , del llanto de sus hijos , que tal
cuando palpite de entusiasmo su corazon á vez en aquel mismo momento lloran en tor
la vista de una empresa arriesgada, gene no de la desolada madre la ausencia de un
rosa y heroica, al pensaren el desconsuelo padre á quien no volverán á ver , y de un
de su esposa , en la horfandad de sus hijos, padre que va en busca de una muerte os
siente relajarse aquel esfuerzo varonil que cura, sin testigo siquiera, sin consuelo ni
se desplegara en su pecho en un momento gloria? No extrañemos pues la incompara
de arrebato , y tiembla pavoroso á la vista ble distancia de los resultados de las misio
de los azares y peligros. Yhé aqui porqué nes protestantes al fruto de las misiones
entre los católicos , y solo entre los católi católicas; pues que, ámas de la esterilidad
cos de ambos sexos que profesan la vida que será siempre el patrimonio de las igle
continente, se ha visioesa no interrumpida sias separadas del fecundo seno de la Iglesia,
serie de personas dedicadas al consuelo y tienen los misioneros protestantes la gran
alivio de la humanidad doliente en los hos desventaja de presentarse en las misiones
pitales , en esos admirables establecimien rodeados de sus . esposas y de sus hijos,
tos hijos exclusivos de la caridad cristiana , ocupados antes de empezar sus tareas en
en esas moradas de dolor en que quedan proporcionar cómoda vivienda ásu familia;
sepultadas en el olvido tantas acciones he y con tamaños antecedentes, bien se les ha
roicas, porque la muerte viene á cerrar los de alcanzar á los infieles , que aquellos
labios del agradecimiento , y el mundo no hombres tienen tambien sus aficiones y sus
se digna siquiera dirigir su altanera vista apegos terrenos ; y á buen seguro que tam
hácia aquellas mansiones de dolor, de mi poco encontrarán entre ellos ningun émulo
serias y lamentos. Hé aquí por qué solo del gran Javier , ni celosos imitadores de
entre los católicos se han visto verdaderas los mártires del Japon.
misiones dignas deeste nombre; solo entre Allégase á cuanto se ha dicho en pro de
los católicos se han visto aquellos ejemplos las ventajas del celibato del Clero , que no
de inalterable fortaleza, de heroico valor y solo las empresas arriesgadas y heroicas se
generoso desprendimiento, en que hom avienen muy mal con el estado del matri
bres criados entre las comodidades y sua monio , sino tambien todo linage de tareas
vidad de costumbres de las naciones ci muy asiduas y de trabajos muy penosos, al
vilizadas, se despiden para siempre de su paso que se hermanan admirablemente con
patria , de sus amigos y familia para atra el estado del celibato eclesiástico. Basta ha
vesar la inmensidad de los mares, y se ber reflexionado muy ligeramente sobre el
pultarse en seguida entre los laberintos de renacimiento y progresos de las letras,
desiertos inmensos , en busca de un hom para conocer los inestimables beneficios de
bre á quien no conocen, y que en el exceso que la sociedad le es deudora. Sin él no
de su degradacion y barbarie , pagará con hubiera tenido la Europa en medio de la
una muerte cruel y horrorosa el celo cari confusion de los siglos bárbaros aquellas
tativo que le llevaba el bienestar sobre la reuniones de hombres que en el silencio de
tierra , y la eterna felicidad despues de la sus claustros se ocupaban infatigables en
muerte. conservar , copiar , ordenar el precioso de
Figuraos ahora á un misionero protes pósito de los manuscritos antiguos, amon
tante embarazado con el vínculo conyugal; tonando un inmenso caudal de materiales
al abordar una playa lejana y desconocida, científicos que pudieran aprovecharse en
teniendo á la vista la inmensidad de un de tiempos mas felices para derramar una rá
sierto , sin divisar en ninguna parte la mas faga de luz sobre las tinieblas que envol
leve seña de la mano del hombre , rodeado vían la Europa. Sin él no se hubieran visto
de las colosales producciones de la natura aquellos portentos de laboriosidad, aque
leza, que en medio de una soledad sublime llas bibliotecas vivas de costosa erudicion
y de un silencio imponente, desplega ásus que se admiraron en Europa al renaci
ojos una magestad aterradora ; si al trepar miento de las letras , y cuya mayor parte
por fragosos barrancos y entrecortadas ma pertenecían al estado eclesiástico.
lezas, oye el destemplado aullido dela hor Aun hay mas : cuando al decaer rápida
da salvage, ¿creeis acaso que tendrá valor mente la grandeza del imperio romano,
para dirigirse á su encuentro, cuando en caducaban tambien á igual paso todo linage
aquel instante no podrá menos de asaltarle de conocimientos ¿quién sostuvo el brillo
el angustioso recuerdo de las lágrimas de de las letras y la dignidad del saber, sino
 — 203 —
aquellos
va dicho lagrandes hombres
poderosa llamados
influencia que ssobre
por esta moralidad debe tener el celibato del
nosotros los Padres de la Iglesia? ¿Y ¡Yno Clero ; prescindirémos sin embargo de es
eran ellos los que mientras llenaban el tas consideraciones, no sea que se diga que
mundo con la fama de su sabiduría, le huimos el cuerpo de la lucha que nos es
edificaban con sus virtudes eminentes y con pera en un terreno material y positivo. El
la estricta observancia de una continencia celibato del Clero ( dicen nuestros adversa
severa ? rios) es altamente nocivo al bien de la so
Y adelantando un paso mas en aquella ciedad , porque , disminuyendo el número
época : ya estaba completamente derribado delos matrimonios, es por su naturaleza
el imperio romano, y los bárbaros del contrario al aumento de la poblaciou. Hé
Norte hollaban con su robusta planta la aquí su Aquiles; veamos sin embargo si
enervada cerviz de los señores del mundo ; tendrá tal vez algo de flaco y vulnerable.
ya flotaba sobre las ruinas de los antiguos Por de pronto salta á los ojos que la obje
palacios una tienda salvage cubierta de pol-- cion estriba en el supuesto de que el au
vo , y salpicada de sangre ; ya estaban se mento de poblacion es proporcional al nú
pultados entre montones de escombros y mero de matrimonios ; pero este supuesto
cenizas los monumentos del antiguo saber, es falso , y juzgado como tal por los mas
y en medio de tanta confusion y tinieblas , adelantados conocimientos de la ciencia
inevitable resultado de tan espantoso tras económica ; luego carece de solidez cuanto
torno , cuando tan difícil debia de ser el se edifica sobre semejante cimiento. Por
procurarse cualquiera clase de conocimien mas que no sea ahora posible el desenvol
tos, aun vemos con admiracion cual res ver la materia con aquella extension que
plandecían por su vasto saber un número demandan su gravedad é importancia , será
considerable de eclesiásticos ilustres, que no obstante preciso el dar por lo menos
sacando dela austeridad de sus costumbres una ojeada á sus principales puntos de vis
una infatigable laboriosidad y un elevado ta , ya que serán bastantes pocas palabras
temple de alma, habian sabido crearse una para que allí reciban mayor descalabro los
posicion tan alta como difícil y aislada , enemigos del celibato del Clero, donde se
conservándose en pié como robustas co habian prometido mas cumplido triunfo.
lumnas de un edificio derribado, como lu Como para aumentarse la poblacion no
minosas antorchas que brillasen entre las basta el que sea mayor el número de naci
densas tinieblas de un espacio inmenso. dos , sino que es necesario que lleguen es
tos á sazon completa , y esto no puede ve
rificarse en careciendo de los medios de
V.clase de reflexiones, proveer á sus necesidades, resulta de aquí
Pero basta ya de esa
que , cuando el número de matrimonios , y
por consiguiente el de los nacidos , no esté
es necesario acercarse al fin del escrito ; en proporcion con los medios de subsis
que la sobrada extension que va tomando tencia ; fallecerá el excedente de la pro
recuerda de continuo la estrechez de los porcion ; permanecerá la poblacion estacio
lindes prefijados en el programa. Bajemos naria, y aun al cabo de cierto tiempo podrá
ahora á un terreno mas llano y mas al gus retrogradar de un modo considerable , por
to de nuestro siglo: no huyamos de una las funestas consecuencias que debe de lle
arena en que rato ha quenosestarán aguar var consigo el supuesto desnivel entre los
dando nuestros adversarios, esperanzados medios de subsistencia , y los individuos
quizá de abrirnos herida de muerte. Bien que han de consumirlos. Es ya una verdad
se les alcanzará á los lectores que vamos á reconocida por los economistas que la po
ventilar el punto en sus relaciones con el blacion es siempre proporcional á los me
aumento de la poblacion , y tal vez esperen dios de subsistencia ; y Destutt de Tracy
ya con impaciencia el ver cómo se sincera afirma resueltamente que están de acuerdo
el celibato del Clero de los terribles cargos sobre el particular todos los que han me
que se le han hecho en tan delicada mate ditado y profundizado completamente esta
ria. Por mas que sea bien conocido el sa materia. Es muy digno de observarse que
ludable influjo que ejerce sobre el aumento al linage humano , lo mismo que á las de-
de la poblacion la moralidad del pueblo , y mas especies que se multiplican por repro
por mas que se desprenda de cuanto se lle duccion , no es nunca la falta de gérmenes
lo que se opone á su aumento , sino la es-
 — 204
casez de medios para conservarlos, nutrir es el origen de todas nuestras miserias.
los y llevarlos hasta el último término de Destutt de Tracy coincide enteramente con
sazon y desarrollo. Infiriéndose de todo el parecer de Malthus , y despues de haber
esto que para aumentar la poblacion nunca observado con el citado escritor que, aun
deben dirigirse los esfuerzos á multiplicar considerada la poblacion con respecto á la
los matrimonios, sino únicamente á que fuerza, no aumenta la de los gobiernos que
abunden los medios para proveer á las ne la favorecen , porque no pudiendo mante
cesidades de los nacidos ; pues en este caso nerse mas hombres que los que permite la
es bien seguro que crecerá rápidamente la cantidad de los medios de subsistencia , no
poblacion hasta ponerse al nivel de los me se hace mas con aumentar los nacidos que
dios de subsistencia. No quiero omitir una aumentar á proporcion las muertes prema
reflexion que me ocurre con respecto á los turas , y el número de niños con respecto
que juzgan el aumento de la poblacion al de los adultos, debilitándose de esta
proporcional al número de matrimonios, y manera la poblacion á proporcion de su
es que me parecen comparables al que tra número, concluye con las siguientes pala
tase de evaluar los productos de varias po bras : « Así pues es una verdad demostrada
sesiones agrícolas no atendiendo á la ferti que el interes del hombre, mírese como se
lidad y naturaleza de las tierras, ni á los quiera , consiste en disminuir los efectos de
medios del labrador para cultivarlas , sino su fecundidad.»
únicamente al número de las fincas y á la Infiérese de aqui que existe una fuerte
extension de su terreno. Hé aqui á qué se tendencia á elevarse la poblacion sobre el
reducen en último punto tantas declama nivel de los medios de subsistencia , y que
ciones ; hé aqui lo que valen examinadas á seru una prenda de seguridad para los es
la luz de la razon ilustrada con el analisis tados y de felicidad para los pueblos , una
de los hechos. institucion, que hermanando la pureza de
Para que se vea mas y mas la profunda la moral con los intereses sociales , fuera
sabiduría con que está concebida la ley del una fuerza reprimente de aquella tendencia
celibato del Clero , y para desvanecer mas peligrosa, un preservativo contra aquel fu
completamente la tacha de anti-social con nesto desnivel que podria llevar consigo
que se ha querido afearla , será bien , antes tan aciagos resultados. Ahora bien, todo
de terminar la materia , llamar la atencion cuanto haya de provechoso, de posible , de
de los lectores sobre un punto de vista en aplicable en esta idea , ¿ no está realizado
que se presenta la cuestion bajo un aspecto de un modo admirable en el celibato ecle
tan hermoso como importante. Demos de siástico , y combinadas las miras religiosas
barato que el celibato del Clero pudiera y morales con los intereses sociales y polí
mirarse como una fuerza reprimente del ticos? Díganlo la buena fe , la imparciali
aumento de la poblacion , ¿ será por esto dad y el buen sentido.
una institucion nociva á la sociedad? No Reflexionando Malthus sobre la alta im
seré yo quien me encargue de responder á portancia de una restriccion moral que neu
la pregunta , ni será ninguno de cuantos tralice suavemente el progreso de aquel
por profesar este estado podríamos tal vez peligroso aumento, y confesando la difi
ser tachados de preocupacion y parciali cultad que hay en encontrarla, no se acuer
dad ; será el protestante Malthus , será el da del celibato del Clero, y apela al esta
filósofo Destutt de Tracy , dos economis blecimiento de ciertas escuelas morales,
tas cuyas simpatías es bien seguro que no en que se instruya al pueblo sobre este
estaban á favor del celibato del Clero. punto : si no ocurriera desde luego el de
Malthus, es decir, el escritor que ha sagradable pensamiento del lamentable in
tratado con mas tino, profundidad y maes flujo que ejercen sobre las ideas de los hom
tría el punto de la poblacion , observa que, bres mas eminentes , y mas tal vez sobre
aun en el caso mas favorable para su au sus palabras y escritos, las miserables preo
mento, se halla este con respecto á la mul cupaciones de secta , seria cosa risible por
tiplicacion de los medios de subsistencia en cierto el ver que á la pasion mas violenta
razon de dos proporciones , la una geomé é indomable del hombre, y cuyo desarro
trica , la otra aritmética ; sentando en con llo se verifica cabalmente en la edad de la
secuencia que la poblacion es siempre tan inexperiencia y desacuerdo, se le opone
grande como puede ser, habida razon de por un hombre como Malthus el endeble
los medios de subsistencia , y que su exceso freno de ciertas escuelas morales.

VI.
Siempre que uno examina alguna de
esas grandes instituciones levantadas por
la religion cristiana con tan sabia construc
cion , y sobre tan robustos cimientos ,
cuando las mira atravesar inmutables los
trastornos y revoluciones de tantos siglos ,
sosteniendo de continuo los recios embates
de cuantas pasiones se agitan en el corazon
humano , se siente sobrecogido de un reli
gioso estupor, y brotan á porfía en el áni
mo las reflexiones mas graves , al par de
los sentimientos de una veneracion pro
funda. ¿Quién no recuerda los encarniza
dos ataques de que ha sido objeto el celi
bato eclesiástico? Seguros sus adversarios
de arrancar numerosos aplausos , supuesto
que hablan en pro de las pasiones , mane
jando una materia que por su elevada es
fera no presenta sus mas hermosos puntos
de vista á los ojos del comun de los lecto
res , y que por la profunda sabiduría con
que se halla concebida tiene sus delicadas
relaciones fuera del alcance de una obser
vacion superficial y pasagera ; ofrecíaseles
ancho campo para esgrimir sus armas fa
voritas : la declamacion y el sofisma. In
dignacion causa y desprecio el oir de la
boca de Rousseau que «. para saber lo que
debe pensarse con respecto á la ley del ce
libato eclesiástico , basta considerar que si
ella se generalizase destruiría el linage hu
mano ; » como quien dijera que es muy
perjudicial la agricultura , porque si todos
los hombres se dedicasen al cultivo de la
tierra al fin vendrían á perderse todas las
otras profesiones. Cuando un escritor se
atreve á estampar semejantes raciocinios,
es bien seguro que cuenta mucho con la
estupidez
Pero ¡ vanos
ó condescendencia
esfuerzos ! lasdeverdades
sus lectores.
re
ligiosas que se habian señoreado del mun
do á pesar de los violentos esfuerzos y de la
obstinada resistencia de las potestades de
la tierra, no eran para destruidas aun cuan
do se levantara en contra de ellas el adver
sario mas poderoso y temible : el orgullo
del saber. Al vivo y disolvente fuego del
crisol de las ciencias no resisten jamas las
mal trabadas partes del error y de la men
tira; pero, impotente ese fuego cuando se
aplica sobre la verdad , solo sirve para au
mentar su brillo y hermosura , y para que
se eche de ver mas y mas la solidez de su
masa y la compacta trabazon de su estruc
tura inalterable. Asi es como se halla sobre
el horizonte la religion católica, bella y ra
diante á pesar de la obstinada avilantez con
que sus enemigos se han empeñado en
ofuscarla , asi es como fija aun las miradas
de todos los observadores como un rayo de
luz consoladora, como un astro de ventu
ra anuncio de halagüeñas esperanzas. Cir
cula, es verdad, circula por todas las so
ciedades civilizadas la duda , ese gérmen
de muerte inoculado en sus venas por plu
mas engañosas y aleves; pero nótase al me
nos una tendencia al exámen de las gran
des cuestiones religiosas y sociales : nótase
que la religion es de nuevo el objeto de
profundos estudios , y que en torno de esa
virgen bajada del cielo se apiñan presurosos
un número considerable de observadores
para admirar su amabilidad y hermosura,
ya que no para tributarle el homenage de
la fe y los obsequios del corazon. ¿Y quién
dijera que no sea esto un'preludio de mas
venturoso porvenir para la religion, que,
emanada del seno de lasluces, inunda con
la luz de sus rayos á cuantos se detienen
á contemplarla? ¡ Ah ! abandonémonos un
momento á tan gratas esperanzas, que pa
rece que embalsaman el corazon endulzan
do la amargura de tan acerbas desdichas.
J. B.
¿Y DESPUES*
I.
Los sucesos se precipitan, el desenlace
se acerca, ¿el dedo misterioso habrá escri
to en la pared las palabras fatidicas? Mien
tras los vencedores entonan ya el himno
del triunfo , y los pueblos se entregan al
entusiasmo y alborozo, necesario es dar
una mirada al porvenir, preguntando, ¿y
despucs? Porque despues de haber derriba
do , es necesario construir ; despues de re
movidos los obstáculos , y limpiado el ter
reno , es indispensable levantar un edificio
sólido, regular, acomodado á su objeto; y
que de aqui á poco tiempo no se vea la na
cion en la triste necesidad de derribarle
tambien. Que semejantes derribos salen
 — 20G —
muy caros; y una nacion no puede subsis
tir en medio de tan crueles alternativas.
La administracion se disloca y trastorna 111.
lastimosamente, la hacienda se dilapida, la
disciplina militar se relaja, el pueblo se Todavía existe el trono: ¿Cómo se ha
acostumbra á la insurreccion , la autoridad salvado ?
se envilece , las ambiciones se desplegan, Tal vez los huracanes se desencadenan y
y con el tiempo... ¡ Ah! las fronteras y las barren los bosques de pinos y de encinas;
playas españolas han oido un doloroso adios la lluvia cae á torrentes , los riachuelos se
de "tantos y tan diferentes proscritos I .. . En convierten en rios, y los rios en mares, las
el curso de las revoluciones el • observador comarcas se inundan, los viejos castillos
filósofo descubre un fatal encadenamiento bambolean , y la vivienda del labrador es
de sucesos formidables ; el hombre religio arrebatada por la corriente como pequeña
so una serie de expiaciones tremendas: góndola que el pescador se olvidara de
¿habremos llegado al último eslabon? Dios amarrar á la orilla ; una cuna va flotando
no nos ha revelado sus arcanos. sobre las aguas , y en aquella cuna hay un
niño que duerme tan tranquilo como en el
regazo de su madre. Asi al fijar la vista so
II. bre las tormentas de la revolucion españo
la, nos hemos figurado á la inocente Isabel,
respetada por las borrascas , mecida por la
Un viajero que abandonó hace muchos tempestad.
años el pacífico techo de la casa paterna, Poesía !... Oh! poesía, séalo; pero en
sufre una larga cadena de vicisitudes é in esa poesía se abriga un hecho histórico y
fortunios ; con malos encuentros en la tier social de la mas alta importancia , en esa
ra y tempestades en la mar, salva con tra poesía viene expresado el fenómeno que
bajo su existencia, merced a su complexion revela uno de los principios que pueden
robusta , á su constancia invencible , á su reorganizar la España ; en esa poesía se
intrepidez : pero acabando de superar los manifiesta uno de los mas poderosos senti
peligros de la mas desecha tormenta , se mientos que se albergan en el corazon de
halla arrojado sobre una playa solitaria; los españoles; en esa poesía está la clave de
allí despues de haber recogido á duras pe la situacion , nuestra estrella política ; quien
nas algunos restos de su antigua fortuna, la pierda de vista sumirá el pais en nuevos
se concentra , medita , echa una ojeada abismos ; quien se guie por ella, lo salvará.
sobre los caprichos de su suerte , recorre Se lo habiamos dicho , y no lo escucha
con plácida melancolía los azares de su vi ron ; asi lo esperábamos , porque bien sa
da , acabando por preguntarse , ¿y ahora? biamos que «cuando las pasiones rugen
\ Cuántos cambios , cuántos trastornos con feroz bravura , cuando los partidos se
desde la muerte de Fernando ! La Monar disputan la arena con tanto encarnizamien
quía pura, el Estatuto, la Constitucion de to , difícil es que puedan hacerse escuchar
1812 , la Constitucion de 1837 , dos regen ni siquiera oir, los templados acentos de la
cias , diversos sistemas , innumerables mi razon y de la imparcialidad.» Mas, ¿qué
nisterios... Se ha destruido todo lo antiguo: importaba? lo que convenía era decir la
¿dónde están las creaciones nuevas? ¿Se verdad ; las palabras desoidas tenían un se
ha mejorado la administracion del reino ni guro garante que debia justificarlas: el
de las colonias? ¿ha dado un paso nuestra tiempo. Para acertar no siempre es necesa
hacienda? ¿se gloria de un adelanto la ins rio ser profeta : fundad vuestras conviccio
truccion pública? ¿Y continuaríamos en nes sobre principios eternos , y sea vuestra
tanta mezquindad de pensamiento , en tan lengua el órgano fiel de vuestro espíritu:
ta nulidad de ejecucion? Hay un gran pue este es un talisman muy sencillo , pero se
blo que solo espera una voz , para levan guro.
tarse y hacer prodigios reconquistando su
primitivo grandor ; pero esta voz le ha fal IV.
tado , anda errante , sin guia. ¿Quién se lo
dará ? A los tribunos de los pasados tiempos,
á los paladines de la libertad , se les apare
ció una vision aterradora. Han salido cor
 — 207 —
riendo de la mansion sombría. Azorados, tará allí donde podamos vivir con indepen
fuera de sí , gritando : lo vimos , lo vimos ! dencia. » Tambien ahora se ha dicho: «in
Hé aqui lo que refieren. AI hombre á quién cendiaremos vuestras riquezas, arrasa remos
levantaran hasta la cumbre del poder , al vuestra capital ; » y el entusiasmo ha res
hombre á quien desposaran con la diosa li pondido: «pegad fuego á las mechas, ¡qué
bertad, le sorprendieron que habia destro tardais ! » ¡Dios salve el pais, Dios
zado á su consorte. Rodeado de los miem salve á la Reina ! »
bros palpitantes de la víctima, desgarrando
hojas del pacto que se creyera sagrado, re
voloteaban sobre su cabeza genios maléfi VI.
cos , que es fama le fueron enviados de la
region de las nieblas. Inquieto, agitado,
atormentado por un pensamiento terrible, Todos saben ahora lo que no quieren;
cuentan que estaba acechando con ávida y pocos sabed bien lo que quieren ; en lo
devorante mirada, el regio dosel á cuya primero no hay discordancia , en lo segun
sombra dormia la inocencia. Recuerdan do sí : pero en el fondo de todos los espíri
que son españoles; se horrorizan al ver tus honrados y sinceros se agita un deseo
que el sangriento espectro les hace algunas que presentado bajo mil formas , y revesti
señas como invitándoles á ser cómplices en do de diferentes colores, viene á parar á
la obra nefanda : entonces se estremecen, una misma cosa : á la satisfaccion de una
dan un grito , y qué grito ? Dios salve la li necesidad que todo el mundo siente, aun
bertad, Dios salve la Constitucion?.... Nó.... que no se la esplique : gobierno.
Dios salve el pais , Dios. salve á la Reina ! ¿ Sabeis lo que significa la situacion ac
Antes hablábais como hombres de par tual? os alucinais mucho si pensais que hay
tido, entonces hablásteis como.españoles: entusiasmo por estas ó aquellas personas,
la nacion oyó el grito, no se curó de quién que hay predileccion por uno ú otro siste
lo daba. «¿Oís? dijo; nos venden á los es- ma ; la situacion actual , esa agitacion que
trangeros, la Reina está en peligro , corra con tanta fuerza tiende á derribar lo exis
mos; Dios salve el pais, Dios salve á la tente , es la expresion del profundo males
Reina I » El leon de Bailen ha sacudido su tar en que la nacion se encuentra , es la
melena , y el viento de las bonanzas y del condenacion de todos los ensayos que se
cielo sereno no disipa mas pronto la huella han hecho hasta aquí. Hombres apellida
de la tempestad. dos de gobierno , á vosotros os tocaba en
¡ Qué cuadro para los corazones genero señar á la nacion su camino , pero ella ha
sos ! ¡ qué leccion para los hombres polí tenido que enseñároslo á vosotros : ¿ qué ?
ticos ! ¿os atrevereis á negarlo, ni á dudarlo si
quiera? Ved ahí la prueba. Hasta ahora
habiais adoptado nombres exclusivos, os
habiais envanecido con ellos cual con no
bles blasones; y la nacion acaba de decir:
« no quiero mas dictados propios, no quie
Hemos visto muchos alzamientos ; pero ro otro que el de espaíwles » el mas lato
¿quién se atreverá á decir, « yo he visto que se habia oido hasta aquí, era el de li
otro como el presente?» ¿(juién habrá berales. Cotejad y juzgad.
visto mezclados, confundidos, al hombre «Pero nosotros, diréis, hemos levantado
de las ciudades con el hombre de los cam esta bandera de reconciliacion , y la nacion
pos, al morador de las campiñas feraces acogiéndola con entusiasmo, ha sido diri
cod el habitante de las hórridas montañas? gida por nosotros : » no es verdad ; antes
Solo se vió tamaño entusiasmo en la in que vosotros enarboláseis la enseña, el
mortal lucha contra el capitan del siglo ; y hermoso nombre de reconciliacion estaba
es que entonces se gritó tambien : ¡ nos ar escrito en todos los corazones generosos,
rebatan la independencia! ¡ nos han robado se albergaba en todos los entendimientos
el rey ! Tambien entonces se decia : « tala pensadores , y se agitaba en el seno de las
remos vuestros campos, destruiremos vues masas haciéndolas mas dóciles y suaves,
tros hogares ; » «¡qué importa! contestaba como el aura benéfica que aplaca y extien
el genoroso español : nuestros hogares es de sobre el lecho las olas alborotadas. En
tán en nuestro corazon ; nuestra patria es una revolucion reciente , que quizás no es
 — 208 —
té bien juzgada , se notó este fenómeno de beben , danzan , en la mas perfecta armo
un modo admirable. La sangre habia cor nía ; ¿sabeis lo que vale tanta cordialidad?
rido en abundancia , los enemigos estaban un momento despues , cada cual vuelve á
á la vista , las intrigas contra el movimien estar en su puesto; en toda la línea resuena
to eran mas claras que la luz del dia; todo un récio quién vive! y el fuego se rompe, y
al parecer debia contribuir á exasperar los la refriega se empeña , y la batalla se hace
ánimos, á irritar los enconos, á crear una general, y los mismos hombres que se
situacion suspicaz y perseguidora; y sin abrazaban , se disparan con encarnizamien
embargo solo se habló de españolismo, de to el plomo mortífero , ó se pasan á cuchi
reconciliacion, de union: comparad el no llo. Fiaos en apariencias.
viembre de 1842, con el noviembre de 1841 .
VIH.
VIL
Es preciso no perder de vista que en la
actualidad (téngase presente que no habla
No nos hacemos ilusiones con la palabra mos de la nacion sino de los partidos ) hay
reconciliacion; creemos que expresa un sen coalicion, lo que es muy diferente de fusion;
timiento hermoso , un pensamiento de alta los coligados pueden tener muy bien largas
política , pero no un sistema de gobierno; cuentas que liquidar; el reservarlas para
y quien la adopte por bandera diciendo despues, no es lo mismo que darlas por
que basta predicar la fraternidad para hacer saldadas.
una obra maestra de política , bien puede « ¿Pero, no veis se nos dirá, que activi
asegurarse que ó procede de mala fe, ó dad está desplegando la coalicion? ¿os pa
que vive en las poéticas regiones de la fan rece que ha trabajado poco? » No por cier
tasía. to ; ¿ mas no veis de que se trataba ? ¿ no
El exclusivismo es aborrecido, los parti veis que clase de trabajo es el que os alu
dos son detestados por su perversidad ó cina? Muy torpe fuera, ó muy corto de
despreciados por su impotencia ; los nom vista , quién creyese que van á levantar al
bres con que procuraban engalanarse á sí gun grande edificio los cuerpos de ingenie
propiós ó denigrar á sus adversarios , van ros , de zapadores , y de artilleros , cuando
cayendo en desuso , son mirados como en construyen baterías.
seña gastada por el tiempo , y manchada
además con polvo y sangre ; pero no deja IX.
por esto de existir la diferencia de opinio
nes , la oposicion de intereses ; y estos y Si quereis comprender á fondo una si
aquellas saldrán de nuevo á la arena tan tuacion , examinad tambien á fondo el es
pronto como hayan derribado al que miran tado de las opiniones, indagad todavía mas
como enemigo comun. De aquí la necesi á fondo, que intereses juegan, y cual es su
dad de pensar en el porvenir , de no fiar la posicion respectiva ; atended en fin á los
reconciliacion á sentimientos que por ge medios de que disponen los campos opues
nerosos, no dejan de amortiguarse tan tos; juzgad por los datos que sobre estos
pronto como desaparecen las circunstancias extremos recojais : lo demás son bellas pa
que los inflaman. Conviene excogitar un labras , que el tiempo cuida de desmentir
sistema que ofrezca garantías de proteccion con hechos bien feos. Esto es triste , des
á todo lo bueno , á todo lo legítimo ; con consolador; pero la realidad suele serlo
viene aprovechar los primeros momentos, tanto! Por lo demás, si alguien gustare
porque la ocasion pasa como un relámpa de correr sin tino por un camino hermosa
go. Los hombres políticos no deben confiar mente tapizado , es un deber advertirle el
en esas reconciliaciones de teatro , que se abismo que pueden encontrar sus piés. Las
ejecutan entre los aplausos de una entusias víctimas iban al sacrificio coronadas de
mada asamblea, los brindis de un banque flores.
te , y las orquestas de un festín. Hállanse
tal vez frente á frente ejércitos enemigos;
algunos soldados salen de las opuestas filas,
se adelantan unos hácia otros , se saludan, Hay en España un hombre que durante
se estrechan la mano , se abrazan , comen, el curso de la revolucion ha representado
 209 —
un papel singular. Siempre en las Córtes,
siempre en los círculos políticos, siempre
en las filas ó á la cabeza de partidos ruido
sos. Se han sucedido innumerables minis
terios, se han librado para escalarlos reñi
das batallas , ora en el parlamento , ora en
las calles y plazas; una secretaría del Des
pacho ha sido el bello sueño de todas las
ambiciones; varias oportunidades se han
ofrecido á este hombre para sentarse en
una de las codiciadas sillas , que mas de
una vez hubiera podido ser la de la presi
dencia. A pesar de todo, este hombre no
ha querido ser ministro. ¿Será por no
abandonar el puesto de tribuno ? nó : pues
ha sabido resignarse á perder la populari
dad , á eclipsarse por algun tiempo , no
haciendo resonar su voz sino de vez en
cuando, como para impedir que la posicion
de sus rivales no prescribiese. ¿ Será por
que desprecie los puestos elevados , y no
quiera percibir nada del erario ? nó : largo
espacio ha estado ocupando uno , en el
cual el brillo de la categoría compite con
«1 emolumento del sueldo.
Se ha dicho que este hombre está dotado
de un gran talento; es bien posible que asi.
sea , y nos inclinamos á otorgaselo ; no por
sus discursos parlamentarios, en los que
aun juzgando favorablemente , no le cono
cemos superioridad con respecto á muchos
otros ; no por su táctica en las negociacio
nes, pues no sabemos que hasta ahora haya
llevado á cabo ninguna que merezca la pe
na de anotarse en los fastos diplomáticos;
no por la voz y fama pública, pues sabe
mos que en materias de reputacion , sobre
todo por breve tiempo , no faltan numero
sos ejemplos de usurpaciones : talento po
lítico se lo reconocemos en no haber que
rido ser ministro. Siéndolo , es preciso go
bernar; y cuando el gobernar es muy difícil,
el descrédito es inminente. Este será sin du
zaga
da el : pensamiento
habrá dicho dominante
para sí: « tienes
del Sr.reputa
Oló
cion de hombre de gobierno ; el mejor
medio de conservarla , es no ponerla á
prueba.» El penetrarse de la verdadera si
tuacion de las cosas, el conocerla con cla
ridad, con limpieza, es uno de los caracte
res distintivos del talento : estas calidades
las ha manifestado el Sr. Olózaga en su
obstinado alejamiento de las sillas ministe
riales: si semejante conducta es una señal
de franqueza y desprendimiento, esta es
otra cuestion.
[derribar en España, suele ser muy
tomo i.
fácil : pero no lo es tanto el acertar en el
momento oportuno. El Sr. Olózaga no ca
rece de tacto en esta parte: en ciertas oca
siones su aparicion en la escena ha tenido
algo de fatidico. Todos sabemos la historia
de los años pasados: cuando ahora dió el
famoso grito: jDios salve el pais, Dios sal
ve á la Urina I , Espartero y sus amigos
debieron de comprender perfectamente lo
que aquello significaba.
En los dias de crisis se dijo que Olózaga
era el hombre de la situacion ; y su nom
bre andaba siempre al lado del de Lopez:
seria curioso saber los pormenores de la
negociacion entre los caudillos de las frac
ciones del Congreso. Como quiera , siem
pre es muy notable que un ministerio
Lopez-Caballero encontrase un ardiente
defensor en el Sr. Olózaga. ¿Seria posible
que en las entrevistas con Espartero se
hubiese convencido de que el ministerio
debia ser de breve duracion , y que el pro
grama no tendría mas efecto que el de una
gran palanca ?
Se entenderá mejor la- verdadera posi
cion del Sr. Olózaga , si se observa que el
Sr. Sancho, quien en las filas del progreso
comparte con él la nombradía de hombre
de gobierno, ha seguido una línea de con
ducta bastante parecida. La oposicion siem
pre, el ministerio nunca. La presidencia
del consejo para D. Antonio Gonzalez ú
otro cualquiera; las embajadas de Londres
y de París, para Sancho y Olózaga. Esta
conducta es sagaz y sobre todo muy cómo
da ; pero los hombres de todos los partidos
deberían saber tambien á qué atenerse.
Nuevas complicaciones sobrevendrán, para
las que conviene estar en guarda. « Seño
res embajadores , seria menester decirles,
ó gobernad ó dejad gobernar; el criticares
muy fácil; el ejecutar no tanto; aquello de
Talleyrand : Servidor fiel, pero reservándose
el derecho de mudar al amo, no queremos
qué se aclimate en España.
XI.
Se habla mucho del despotismo, de la ti
ranía de Espartero , se pinta con fuertes
colores la opresion en que gemia el pueblo;
se habla de infracciones de la Constitucion,
de ataques á la libertad de imprenta , de
planes ambiciosos, de designios encubier
tos, de venta de las colonias, de sacrificio
14
 — 210 —
de la industria : cuando venga la historia rio Mendizabal-Becerra , resignarse á no
con su calmosa imparcialidad , buscando cobrar contribuciones , abolir los derechos
una calificacion con que caracterizar la de puertas, y acabar con la prensa de la
época de la Regencia única , no hallará en oposicion , no admitiendo al franqueo ; todo
la figura de Espartero aquellos rasgos ter este conjunto es incomprensible, parece un
ribles pero grandes, que suelen distinguir absurdo. Algun periódico ministerial habló
á los hombres de fortuna que se apellidan de gobierno á caballo ; mejor hubiera dicho
déspotas y tiranos. El carácter dominante de en cama.
la Regencia única no ha sido la tiranía,
sino la impotencia gubernativa. Nada de osa
día , nada de arrojo ; el valor que segun XII.
es fama tenia Espartero como soldado , no
lo ha tenido como gobernante.
A esta impotencia gubernativa deberá Hace diez años que todos nuestros go
Espartero su caida ; y en el peligro inmi biernos adolecen del mismo mal : la impo
nente en que se halla de verse precisado á tencia. Todos han caido bajo el dictado de
buscar un asilo en pais estrangero , puede tiránicos; y en realidad mas bien podían
agradecer su desgracia á los hombres que llamarse é'biles. Yes cierto que tiranizaban
le han rodeado en su fortuna. Consejeros en pequeño, que oprimían á su modo, que
hay escelentes para ayudar á subir al po á veces hasta hacian un esfuerzo algo alar
der ; pues para esto basta intrigar ; logrado mante: pero todo era facticio. Sentían que
el objeto es necesario gobernar: cosas por se andaban muriendo de languidez, y era
cierto muy diferentes. muy natural que se irritasen algun poco
El espíritu de pandilla lleva consigo la contra los que les entonaban el canto fúne
impotencia gubernativa ; y esta impotencia bre , y con mofa y sarcasmo les mostraban
fomenta á su vez el espíritu de pandilla. la tumba. Del mismo modo perecerán en
Quien no gobierna no tiene ni tener puede adelante todos los gobiernos que imiten se
el apoyo de la nacion : el instinto de con mejante conducta. Si en vez de colocarse á
servacion propia hace buscar ese apoyo que la cabeza de la nacion , se hacen gefes de
se echa menos; y de aqui el pandillage partidos, si en vez de apellidar vagos nom
que es una compañía de seguros mutuos: bres, no invocan la ley y la justicia; si en
la fórmula del contrato es : « apóyame , y vez de fomentar ambiciones halagando ser
te dejaré hacer. » Pacto sencillo , pero pe vilmente al primero que ofrece apoyo, no
ligroso. trazan con mano fuerte un círculo del cual
Dicen que en España todo ha de ser no permitan á nadie salir, y en el que se
anómalo ; y ciertamente que lo ha sido encierren ellos mismos; si en vez de con
hasta el extremo la Regencia única. Cree tar con propios actos merecedores de la
mos que este período es realmente origi aprobacion y del aplauso , cuentan con la
nal , al menos no es conocido el tipo. Ün fidelidad y decision de este ó aquel gene
general que por un conjunto de circunstan ral , con el respeto que impone tal ó cual
cias afortunadas logra colocarse á la cabeza fortaleza , con el auxilio parlamentario de
de una gran nacion , contando con medios este ó aquel orador , perecerán como sus
tan poderosos como supone el haber lanza antecesores, perecerán bajo la execracion
do á tierras estrangeras á la Gobernadora y el desprecio público.
del Reino, Viuda del Rey, y madre de la
Reina; este general repetimos, inaugurarla
época de su mando con un ministerio que se XIII.
presenta á las Córtes diciendo que quiere go
bernar con ellas y solo con ellas, sufriendo en
seguida repetidas humillaciones , hasta que Imagínanse algunos que el medio de
al fin no dándose por entendido, se le dijo: prevenir los levantamientos, y perpetuarse
« anda que no te queremos ; » este general en el poder es lisonjear á los pueblos con
continuar con paliativos, como prolongan palabras blandas, humildes, que mas bien
do las horas de la agonía ; y por fin , en el que órdenes parezcan súplicas. Grave
momento crítico, decisivo, al sonar la hora error : los pueblos no sufren el ser opri
de la insurreccion , dar golpes de estado midos ; pero tampoco quieren un gobierno
tan estupendos como nombrar su ministe que les hable de rodillas: las humillaciones
 — 211 —
rastreras , los hacen creer que hay traicion
y perfidia ; y cuando nó , piensan con razon
que es incapaz de mandar quien no abriga XIV.
el sentimiento de la dignidad propia.
«Pertrechémonosen el terreno de la ley,
dicen otros; con la ley seremos fuertes, sin Se habla mucho de la Constitucion ver
la ley caeremos.» Esto es una verdad , pe dad; si esto significa algo, expresará sin
ro susceptible de sentido mezquino, mise duda , cumplimiento exacto de Jo que la Cons
rable, que lejos de producir la salvacion titucion prescribe. Mas como quiera que aho
causará la ruina. Hablais sin duda de la ley ra se distingue entre la letra y el espíritu de
fundamental ; y bien , hemos visto caer la ley fundamental , y entre el texto y las
gobiernos que la respetaron ; mas diremos, prácticas, como ademas se ha dicho, que
ninguno ha caido por haber faltado á su le dentro la Constitucion sí puede perder el pais ,
tra. «Pero faltaron á su espíritu.» ¿cuál es y como se ha establecido por principio que
este espíritu ? el respetar las mayorías ; las mayorías pueden ser facticias , si la cosa
Cristina fué echada por haberse conforma no se remedia , lleva camino de hacerse
do á la voluntad de las mayorías parla mas difícil el acierto que el descifrar los
mentarias ; Espartero es derribado por ha enigmas del esfinge.
berlas desoido ; ¿ á qué se reducen pues las Si os apartais de la letra de la ley se os
mayorías? ¿Sabéis cuál será el gobierno dirá que la infringís ; si os ateneis estricta
que las tendrá en su favor, nó facticias, nó mente á sus palabras, se os achacará que
aparentes, nó prontas á caer al primer gol cumpliéndola la falseais ; ¿cómo será po
pe ? Será el que se apoye en principios é sible gobernar? Aclaremoslas ideas, ate
intereses verdaderamente nacionales, que niéndonos á los últimos sucesos.
arregle la administracion , que saque del Supongamos que en las últimas eleccio
caos la hacienda, que afiance el orden, nes el ministerio hubiese llevado la mejor
que afirme el poder, cerrando para siem parte; logrando una mayoría tan indulgen
pre el cráter de las revoluciones. Mientras te que lo hubiese absuelto del bombardeo,
todos los destinos de la nacion estén á mer de la erogacion de los doce millones , y de
ced de un corto número de hombres que las demas medidas arbitrarias; viniendo
distribuidos en las capitales puedan con fa por fin á declarar solemnemente, que el
cilidad ponerse de acuerdo para promover gabinete merecía la confianza de las Cór-
nuevas insurrecciones , mientras la masa tes , y que aquellos hombres eran los ver
de la nacion sea mirada con desden , trata daderos salvadores de la patria. El gefe del
da como ilota , vedándosele de diferentes Estado conformándose con el voto de los
maneras el tomar parte en los negocios que cuerpos legisladores y conservando á su la
le interesan, y esto, cuando se pronuncian do á los ministros , hubiera seguido las
incesantemente las palabras libertad, igual prácticas parlamentarias , observado la ley
dad; mientras no se procure que entren de las mayorías, y atenidose rigurosamen
como elemento de gobierno, opiniones ra te á la Constitucion. Supongamos ademas
zonables é intereses legítimos, que hasta que mientras ministros y diputados se ha
aqui han llevado un sello de condenacion brían dado recíprocamente gracias y enho
inapelable, por la sencilla razon de que rabuenas, algunos hombres de cabeza ar
esta política era necesaria para sostener y diente y corazon audaz, se hubiesen pre
fomentar el exclusivismo ; mientras , repe sentado á Cataluña y dando el grito de
timos , se siga esta deplorable línea de con alarma , hubiesen levantado una nueva
ducta , los gobiernos caerán ; ó combatidos bandera : á pesar de las mayorías y de las
por la voluntad nacional , ó abandonados prácticas, ¿os parece si habrían encontrado
por ella. En el primer caso el levantamien simpatías ? creemos* firmemente que las
to será poderoso por su fuerza intrínseca ; mismas que ahora ; y estará con nosotros
en el segundo , lo será por no haber quien quien conozca la opinion del pais. ¿Qué
lo contrareste. En ambas suposiciones, significa esto? una cosa muy sencilla. Sig
el resultado será fatal para los gober nifica que sobre las mayorías, sobre las
nantes. prácticas , sobre la Constitucion , está la
evidencia de los hechos.
Hagamos la contraprueba. Demos que
un congreso corrompido y. un ministerio
apoyado por él, ambos dominados por pa
siones ignobles, y vendidos al oro extran
pero, se hubiesen propuesto sacrificar nues
tras colonias á la ambicion inglesa ; demos
que Espartero resistiéndose á tamaña vileza
hubiese disuelto las Cortes , pero que por
un fatal concurso de circunstancias hubiese
prevalecido la intriga, presentándose de
nuevo en los escaños del congreso los mis
mos hombres apoyando con el mismo ca
lor á los ministros traidores. Si entonces
Espartero dejándose de rodeos y contem
placiones hubiese disuelto de nuevo las
Córtes, y dispersado con una compañía de
granaderos á los diputados renitentes; si
levantando su voz hubiese dicho al pais:
«se me quiere forzar áser traidor, se quie
re que venda á los extrangeros la indepen
dencia de la nacion; los traidores abusando
de la Constitucion se han parapetado en
ella, yo no he tenido otro medio de salvar
la patria que pasar por encima de la ley ;
¿pensais que el pais se hubiera sublevado
para castigar semejante acto de dictadura?
Es evidente que nó: y porqué? por la mis
ma razon arriba indicada; porque sobre las
leyes escritas, y las prácticas mas arraiga
das, están la conveniencia pública, y los
principios de eterna justicia.
«Entonces, ¿qué se habrá hecho dela
legalidad?» no lo sabemos; tiempo hace que
la estamos buscando ; apenas descubrimos
su huella en ninguna parte : al parecer ha
brá seguido el camino de Astrea. En los
tiempos que corren es gracioso oir que se
habla de legalidad. Van ya largos años que
la situacion es extraordinaria, y bajo mil
formas diferentes , á la sombra de distintos
velos , siempre las cuestiones vienen á de
cidirse en el terreno de las medidas ex
cepcionales. La excepcion se ha elevado á
regla. Ni es probable que salgamos de se
mejante estado tan pronto como fuera de
desear. Bermudez cayó legalmente , mer
ced á indicaciones que podian hacerse res
petar ; Martínez de la Rosa sucumbió bajo
la legalidad de los amagos de levantamien
to , y de las insinuaciones del puñal ; To-
reno fué derribado con la legalidad de la
insurreccion ; Isturiz en fuerza de la lega
lidad, tuvo que salvarse disfrazado de cor
reo ; y con él vino á tierra el Estatuto re
visado y por revisar ; Mendizabal dejó
legalmente su silla , porque los sables le
hicieron una seña desagradable ; Castro se
embarcó legalmente por una significativa
renuncia apoyada por cien mil bayonetas ;
y dejando cien otros incidentes que se han
visto en el gran drama , á la hora en que
escribimos estas líneas , estarán sobre Ma
drid los ejércitos pronunciados ; si Espar
tero no ha tomado el camino de la emigra
cion , estará tambien allí con el resto de
sus fuerzas , y se probará la legalidad con
lo certero de las descargas , y lo recio de
los sablazos.
Asombro nos causaba la candidez de
ciertos hombres que consideraban posible
un desenlace legal y tranquilo. No fuera
poca fortuna que á tanto alcanzase la situa
cion venidera. Van ya nueve años que la
España está en revolucion ; las revolucio
nes para cambiar la organizacion del pais ,
comienzan saliendo del terreno de la ley, y
ninguna termina en el terreno de la ley.
Ahí está la historia. ¿Queréis columbrar
el porvenir? dad una ojeada sobre ese sue
lo volcanizado ; y recordad que la Excelsa
Huérfana que ocupa el trono no llega to
davía á los 13 años.
ESTUDIOS FRENOLOGICOS.
Artículo tercero y último.
En el artículo anterior indicamos que la
Frenología , segun como se la explicase ,
podia conducir al fatalismo; vamos ahora á
desenvolver aquella indicacion , procuran
do aclarar las ideas, y dejando en su pues
to la verdad.
Dicen los frenologistas que el hombre
está dotado de diferentes propensiones , in
clinaciones, instintos ó llámense como se
quiera ; que á cada una de estas facultades
corresponde un órgano cerebral , y que del
tamaño y demas calidades de este depen
den la mayor ó menor energía de aquellas.
Cuando asientan la diversidad de inclina
ciones, nada afirman los frenologistas en
que no estén de acuerdo , no diremos las
escuelas filosóficas, sino el linage humano.
Escuchad al padre de familia mas sencillo
y mas rudo, y le oiréis que hablando de
sus hijos os dice : « este es de un genio
pronto y ardiente , que por una friolera se
irrita ; » « aquel es terco , que no sabemos
cómo regirle , ni desviarle de sus temas ; »
 213 —
«ese otro es dócil, blando como una cera , Los hombres dominados de una idea
se deja llevar como uno quiere.» Quien se suelen echar á perder lo que podría encer
queja de que tiene un niño atolondrado, rarse en ella de verdad ó utilidad , exage
quien se congratula de que el suyo es so rándola , y haciéndola por lo mismo inad
segado y quieto ; quien se lamenta de que misible. Forman un sistema , y todo ha de
en tierna edad ya se descubren los gérme caber en él :
nes de vicios funestos, que podrán perder
al individuo y quizás cubrir de afrenta á la Cual refiere la fama de un tirano
familia ; quien se complace en hacer notar Que á su bárbaro lecho de tormento
cómo despuntan ya en un corazon infantil Ajustaba por fuerza el cuerpo humano.
los pimpollos de virtudes generosas y bellas.
No hay pues aqui nada que combatir, ni Disimúlenos el Sr. Cubi si le decimos
tienen los frenologistas nada que probar : francamente que ha caido en este defecto :
los hombres nacen con inclinaciones muy defecto de que no hablaríamos siquiera si
varias, que influyen mucho sobre el curso en ello no se interesasen los principios fun
de su vida. La instruccion y la educacion damentales de la sociedad. ¿Quién por
fundadas en la religion y en la moral , son ejemplo podrá sufrir que ponderando la
las que han de corregir lo malo, y fomen fuerza de la organizacion , se llegue al ex
tar y perfeccionar lo bueno. En esto nos tremo de afirmar que la costumbre de quitar
hallamos de acuerdo; y con -nosotros el la vida á los que cometen actos de violencia es
mundo entero. La Frenología no puede inmoral á la par que injusta? Sabemos lo que
lisonjearse de haber decubierto estas ver se ha dicho sobre la abolicion de la pena
dades, sin ponerse en ridiculo por su va de muerte , sabemos lo que se ha trabajado
nidad. y se trabaja para suavizar la legislacion
Ademas, que á dichas inclinaciones cor penal , sabemos lo muy conveniente que es
respondan órganos diferentes , que haya el procurar que los encerrados en cárceles
cierta relacion entre aquellas y estos, que y presidios no se desmoralicen mas , y la
existan ó nó ciertas señales para conjeturar necesidad de hacer de manera que la pena
en este punto, nada tienen que ver con sirva al propio tiempo de escarmiento á los
ello la religion y la moral , como no tienen demas y de correccion y enmienda al que
que ver en las opiniones de los que fundan la sufre ; pero de aqui á declarar inmoral é
la diferencia de inclinaciones é índoles en injusta y en oposicion directa á lo que clara
las diversas clases de temperamento; atri mente se ve ser la voluntad delSupremo Legis
buyendo á este la melancolía , á aquel la lador, la costumbre de quitar la vida á los que
alegre vivacidad ; á uno la ira , á otro la cometen actos de violencia , ni aun de encerrar
pacífica calma , y otras cosas por este te los en cárceles y presidios , hay una distancia
nor. Cuestiones semejantes pertenecen á inmensa que no se puede salvar, sin atacar
las ciencias puramente filosóficas ; cada cual la moral , sin combatir todas las legislacio
puede abundar en su sentido , sin herir los nes que han existido inclusa la de los israe
principios religiosos y morales. Pero desde litas , sin ponerse en abierta contradiccion
el momento que la Frenología nos quiera con la misma Biblia , con esa Biblia que
explicar los fenómenos del orden moral y manifiesta acatar el Sr. Cubi y en la cual
religioso como simples resultados de la or pretende apoyarse una que otra vez.
ganizacion, desde el momento que nos Pero dirá el Sr. Cubi , « yo hablo del
quiera explicar la vida entera del hombre caso en que la destructividad está enferma
como el simple efecto de las combinaciones ó muy pervertida; » pero bien ; ¿hablais del
de las partes del cerebro, desde aquel mo hombre en sano juicio ó del hombre loco?
mento será la frenología contraria á la sana si del primero , queda en pié la objecion ;
razon , á la experiencia , á la historia , á la si del segundo, ninguna legislacion lleva al
religion y á la moral , destructora de todos suplicio á los dementes. Es cierto que al
los cimientos de la sociedad , opuesta á lo principio habla de la destructividad enfer
que nos dicta el sentido íntimo , repugnan ma ó muy pervertida , y por consiguiente se
te á la dignidad humana , merecedora de podria entender que se refiere tan solo á un
que la rechacen todos cuantos abrigaren Iestado de exaltacion cerebral que ó consti
en su pecho el noble sentimiento del gran tuya la demencia , ó esté muy próxima á
dor de su naturaleza , de la altura de su ella ; pero luego arrastrado por su pensa
origen y de la elevacion de su destino. miento dominante se expresa en general
 — 214 —
con las palabras que acabamos de citar, Si algo de verdad se encerrase en la Fre
hasta adelantarse á decir que «ha visitado nología seria la multiplicidad de órganos
presidios , cárceles , penitenciarías en todas cerebrales correspondientes á otras tantas
las naciones del mundo civilizado , y ape facultades y propensiones , siendo la utili
nas ha hallado en cada cien presos convictos , dad que podría reportar , un conocimiento
uno solo de cuyo crimen real ó imputado no Ub- conjetural de la disposiciones intelectuales
viese la culpa la misma sociedad , por su des y morales otorgadas por la naturaleza á
gobierno y voluntario moral desquiciamiento.» cada individuo. Es claro que nada de esto
Todos cuantos se interesan en los progresos
de la religion y dela moral se lamentan de
mientos
que no sean
en que
massefavorecidos
las fomentalos
; pero
establecí
¿ qué
combatir, insertamos por entero el pasage á que
tiene que ver esto con descargar tan lige ferma nos referimos. «Cuando la destructividad está en
, dice el Sr. Cubí, o es mui pervertida , pro-
ramente de la culpa al individuo, y acha duze una acziou ecsaltada , i entónzes no se respi
carla toda á la sociedad? ¿puede avenirse ran sino muertes , asesinatos i destruezion , ni se
semejante doctrina ni con el libre albedrío profieren mas que raaldiziones, blasfemias i terri
bles desatinos. Muchos han sufrido un castigo
del hombre, ni con la seguridad pública? infamante en un patíbulo poralgunacto produzido
Asi podrá el criminal marchar al patíbulo a causa del estado anormal de este órgano. Mien
con la frente erguida diciendo á la socie tras dure la inmoral a la par que injusta costum
dad : « yo soy inocente, el verdadero cul bre de quitar la vida n los que cometen actos de
violénzia , 0 de enzerrarlos en cárzelcs i presidios
pable eres tú ; yo no soy mas que una víc donde todavía se desmoralizan mas, en vez de co
tima , á quien con refinada crueldad , haces locarlos en instituziones represivas, educativas,
expiar tu propio crimen.» i curativas ; haziéndoles produzir un valor igual o
Tan penetrado está el Sr. Cubi de que hallarámayor al que consumen , la lejislazion criminal se
en un lamentable estado de atrazo , i en
la culpa de los criminales debe recaer sobre oposizion directa a lo que claramente se ve ser la
la sociedad, hasta tal punto hace pesar so voluntad del Supremo Lcjislador. Los inútiles mi
bre ella la responsabilidad de los delitos, tos llones , que hoi se gastau en levantar monumen
, que deberían caer en desuso , despucs de los
que llega á afirmar que está en manos de descubrimientos frenolójicos , sobrarían para es-
la misma el evitarlos todos. «Los inútiles tablezer instituziones correctivas i educativas, cuyo
millones, dice, que hoy se gastan en le sosten nada costaria al crário nazional , i desterra
rían de una vez i para siempre hasta el nombre de
vantar monumentos que deberían caer en crimen. Yo he visitado presidios, cárzcles peni-
desuso , despues de los descubrimientos freno tenziárias en todas las naziones del mundo zivili-
lógicos, sobrarían para establecer institucio zado , i apenas he hallado en cada zien presos con
nes correctivas y educativas, cuyo sosten victos, uno solo de cuyo crimen, real o imputado,
no tuviese la culpa la misma soziedad, porsu des
nada costaría al erario nacional , y dester gobierno i voluntario moral desquiziamiento. ¿Has
rarían de una vez y para siempre hasta el nom ta cuando, hasta cuaudo creerán los lejisladores
bre del crimen.» ¿A tanto alcanzar pueden hombre que pueden hacer leyes para el gobierno moral del
sin conocer ui estudiar su naturaleza?
los descubrimientos frenológicos? ¿Se ha olvi jislador
Jamas podrá militarrepetirse
solo considera
bastante
al hombre
que ahora
como
, el una
le-
dado el Sr. Cubi de que el corazon del hom
bre está inclinado al mal desde su adolescencia? máquina de destruir , el lcjislador economista , co
mo una máquina que es tanto mas perfectamente
i Hasta tal punto desconoce la naturaleza organizada enanto mas produze i menos consume,
ll umana? Al leer semejantes expresiones, el lcjislador despótico, como una máquina de pasiva
nos sentimos inclinados á recordarle aque obediénzia , el lcjislador cortesano , como una má
llas palabras que le decia Demodoco á su quina de disimular i engañar; pero la realidad del
hecho es , que el hombre es una criatura animal ,
hija, cuando «en los dias de invierno, apo rclijiosa-moral c intelectual , quien , aunque debe
yada en una coluna se ocupaba en hilar á constantemente activar sus pasiones sin queja-
la luz de una lámpara resplandeciente. «O mas salgan del dominio de la razon y la moral,
hija de Epícaris , temamos la exageracion que queestá sujeta a vezes, por la ignoráuzia de la soziedad
no ha sabido o querido dirijir bien su edu-
destruye el buen sentido : pidamos á Minerva cazion o colocarla en el própio lugar donde la te
que nos conceda la razon que formará en nía Dios destinada , a lo que se llama crimen. To
nosotros aquella moderacion, hermana de la da lejislaziou cuyas tendciizias no conduzcan a
hazer las pasiones del hombre mas poléntes i enér-
verdad, sin la cual todo es mentira (1).» jicas, sus sentimientos relij ¡oso-morales mas fuer
tes i vigorosos para que puedan siempre dominar
a las pasiones, y el intelecto mas ilustrado, para
guiar todas las poténzias mentales a los fines de
(1) Para que en ningun caso sea dado tachar salisfaezion i dicha porque fueren creadas, es una
nos de que alteramos ó truncamos el texto del lejislazion imperfecta. » ( Manual de Frenología,
autor, fingiendo adversarios á quienes podamos pan. 18. )
 — 215
llegaría á mas que á ilustrar sobre el modo le parece que asienta principios favorables
con que se debiera instruir y educar á los á la religion , la hiere sin advertirlo.
hombres segun su índole y capacidad ; pe Pondera mucho el Sr. Cubí los benefi
ro no desaparecieran la ignorancia y las cios que la frenología ha dispensado á la
malas inclinaciones, no seria dable satisfa religion , probando que el hombre está do
cer todas las necesidades; por tanto que tado de una tendencia i/mata á adorar; sin
darían los gérmenes de vicio y de cri duda que al decir estose habrá olvidado de
men , que mientras viva el hombre sobre que hace ya mas de diez y seis siglos que
la tierra, se podrán debilitar mas nó des proponiéndose Tertuliano expresar la ine
truir. fable armonía que existe entre la religion y
Dése á la instruccion y educacion moral el alma , dijo que esta era naturalmente cris
y religiosa toda la importancia quesequie- tiana; y que mucho antes Ciceron y Platon
ra , nadie nos excede en encarecerla ; pero y todos los filósofos de la antigüedad , ha
no debemos olvidar que sus saludables lec bian reconocido que los hombres tenían
ciones encontrarán siempre grandes obstá sentimientos naturales que los impulsaban
culos con que luchar, y que por mas puras á la adoracion de un Ser Supremo. Al tra
y elevadas que se las suponga, su aplica ves de los estravíos de la supersticion y de
cion dependerá del libre aíbedrio, de esa las groseras falsedades y ridiculeces de la
noble facultad de que el hombre tan á me idolatría , no hay quien no descubra una
nudo abusa. idea verdadera pero adulterada y desfigu
Si directa ó indirectamente se ataca el rada , una inclinacion buena pero perverti
libre albedrío, si atribuyendo sobrada in da ; si esto nos ha enseñado la Frenología ,
fluencia á los órganos cerebrales , se esta nada nuevo nos ha enseñado. ¿Qué añade
blece la existencia de propensiones irresis á la realidad del hecho, bajo su aspecto
tibles , la buena moral se destruye , la moral y religioso, el que se nos diga que
sociedad peligra , la dignidad del hombre en tal ó cual lugar de la cabeza hay un ór
desaparece. Nada importa que se diga que gano que corresponde á estas facultades
en tales casos el individuo esta tocado de que nos inclinan á reconocer y adorar al
una especie de demencia ; porque en ex Criador?
tendiendo esta enfermedad mas allá de los Establece el Sr. Cubi diferentes grados
límites que le señalan la razon y él sentido de veneracion , ó como él la defme , propen
comun del humano linage , se viene á pa sion religioso-moral á obrar con deferencia ,
rar al fatalismo orgánico, sean cuales fueren sumision ó respeto hacia nuestros semejantes, á
los nombres con que se le revista. En tal obedecer á los que tienen autoridad , y adorar
caso los asesinos de profesion estarán toca un supremo Hacedor. Del tamaño y demas
dos de la demencia que procederá de la calidades del órgano cerebral hace depen
preponderancia del órgano de la destructi der el que esta veneracion sea grande ó
vidad; los rateros, y los salteadores de ca pequeña, llamándola devocion, cuando se
minos , de la demencia que dimanará del halla en vigorosa actividad. Nadie desconoce
órgano de la adguisividad ; los licenciosos, las equivocaciones á que puede prestarse
de la que resultará del órgano de la axuili- una explicacion semejante. Segun ella , la
vidad; los glotones y borrachos de la que reverencia que tributamos á Dios , nace de
nacerá del órgano de la alimenlividad ; y asi un órgano , que del mismo modo nos incli
andaremos excusando todos los crímenes , na á respetar á nuestros semejantes; la di
declararemos injustas todas las leyes pena ferencia está en que el órgano se halle en
les, se convertirán los hombres en máqui un grado mas ó menos alto de la escala.
nas , que si funcionan mal , será porque se La misma conciencia se reduce á una
ha desarreglado alguna rueda. ¿A qué cas funcion orgánica ; los remordimientos no
tigar una máquina ? solo se debe tratar de son el resultado natural de las malas accio
componerla. nes , son una funcion de un órgano que se
Ese fatalismo que estamos combatiendo apellida concienciosidad ; y el Sr. Cubi se
se derrama por diferentes partes de la cien- adelanta á decir, que nada es mas erróneo
cía frenológica ; y se lo haremos notar al que la idea de que todo el mundo padece re
Sr. Cubi con tanta mayor confianza , cuan mordimientos despucs de haber cometido una
to nos inclinamos á creer que dicho señor accion mala. Hasta aqui se habia creido que
quizás no haya reparado en ese veneno que esos remordimientos eran el gusano roedor
se va filtrando en su doctrina. Asi, cuando del corazon de los mayores criminales , las
 21fi
furias que los perseguían de dia y de no cíales en épocas determinadas, lo cual ex
che, sin otorgarles tregua ni permitirles plica las guerras políticas y las religiosas ,
descanso ; en adelante habremos de decir , los tiempos de escepticismo, de fanatismo,
que los hombres faltos ó escasos de cierto y de verdadero espíritu religioso , el ensal
órgano , pueden arrojarse á los mas horri zamiento y derribo de personas determina
bles delitos sin que padezca su alma des das , las opiniones ya en favor ya en contra
pues de haberlos cometido. ¿Quién os ha do de una
se explica
misma institucion.»
por los órganos;Está visto:
lo hemos
to^
asegurado que haya hombres que no sien
ten remordimiento, despues de haber obra dicho y lo repetimos, se quiere hacer de la
do mal? los grandes criminales ¿os han Frenología el lecho de Procusto.
abierto su corazon? ¿Ignorais por ventura Seria curioso el investigar la diferencia
que todos cuantos han cambiado de vida , que va de las cabezas de ahora á las de los
han confesado unánimes que habian reco siglos medios ; siendo nuestra época de du
brado la tranquilidad , que sentían en el da y escepticismo , y aquella de fe apasio
fondo de su alma un placer indecible , que nada y viva. Por cierto, que si tanto valen
habian alcanzado una felicidad descono los órganos hasta en materias religiosas,
cida? los de veneracion y de maravillosidad de
Si tanta influencia se atribuye á los ór ben de haber sufrido una disminucion con
ganos , no siendo posible que estos sufran siderable : si entonces eran tamaños como
notable alteracion en muy breve tiempo, una nuez , no serán ahora como una al
¿cómo será dado explicar las mudanzas, mendra.
ora lentas, ora súbitas, que estamos vien Hablando el citado escritor de la indivi
do á cada paso, ya en bien, ya en mal? dualidad ó sea facultad intelectual que percibe
¿cómo es que el nombre que ayer era re aquella cualidad de los objetos que los separa
ligioso se ha hecho hoy incrédulo , el que unos de otros , dando á cada uno de ellos una
poco tiempo antes era devoto , ha pasado existencia particular , única , aislada , indivi
despues á ser un impío que se burla de dual; explica el origen de las visiones de un
todo dogma y de todo culto? Y al contra modo alarmante, nó tan solo para los cató
rio: ¿no se ha visto y no se está viendo licos , sino tambien para cuantos acatan las
todavía , que hombres que han pasado lar narraciones de la Biblia. Despues de haber
go tiempo en la incredulidad y en el liber- observado cómo se concretan las ideas abstrac
tinage , se mudan de repente , abrazan la tas , cómo se crean imágenes que no se apar
religion , lloran sus extravíos , y pasan qui tan de lo verosímil, ó que corresponden á un
zás á expiarlos con una vida de penitencia estado de adelanto realizable , despues de ha
en las soledades del claustro? ¿quién se ber dicho que la virtud , la belleza , la espe
atrevería á explicar esos fenómenos , apli ranza , son sentidos abstractos , impulsos ciegos
cando los dedos á esta ó aquella parte de la á que las facultades intelectuales movidas ó ins
cabeza? piradas por la idealidad, la sublimidad, dan
« La maravillosidad, dice el Sr. Cubi , que una bella y sublime existencia individual , ma
es la realizacion de y consiguiente creencia en terial y positiva, continúa : « estas pocas ob
lo nuevo, lo grande, lo sobrenatural , lo miste servaciones explican el hecho real y ver
rioso, lo extraordinario, lo incomprensible; dadero de que podemos tener y hay quien
añadiendo que la maravillosidadpone al lumbre en efecto ha tenido visiones. » Dejemos
en relacion con cuanto el intelecto no puede aparte la incalificable proposicion, que
comprender , que realiza los misterios que Dios cuenta la virtud, la belleza, la esperanza
no ha querido revelar á su razon , y que sin entre los impulsos ciegos , y parémonos tan
embargo existen ; que por ella cree el hombre solo en la manera peregrina de explicar las
lo que no puede probarse , ó cugas pruebas no visiones. Al parecer, no serán estas otra
puede comprender.» ¡Tambien un órgano cosa que un simple efecto de los órganos:
para la fe ! ¿qué significa el realizar misterios pues que las observaciones que solo versan
que Dios no ha querido revelar á la razon? sobre ellos , explican el hecho real y verdade
¿ cómo será que el hombre crea hoy y no ro de que podemos tenerlas, y hay quien en
crea mañana , y que hoy tenga fe viva y efecto las ha tenido. Podríamos tolerar muy
ardiente el que ayer se mofaba de ella? bien , que se disputase sobre la mayor ó
« Hay en el hombre , dice el Sr. Cubi, y menor autenticidad de visiones particulares
por lo tanto en la sociedad una natural al | de esta ó aquella persona virtuosa, y que
tendencia á excitar y aplacar órganos espe se atribuyese á una imaginacion exaltada
 — 217 —
lo que parecía efecto de la revelacion divi conozcamos la hermosa índole de algunas
na : semejantes cuestiones son del dominio almas privilegiadas, que con su candidez na
de la crítica, y la misma Iglesia nos enseña tiva y sus inclinaciones rectas, parecen des
con su ejemplo, á no entregarnos impru tinadas de una manera particular á recibir,
dentemente á una credulidad excesiva. Pe los favores del cielo ; no negamos nosotros
ro pretender explicar por meros principios estas verdades ; no decimos que el Criador
frenológicos todo linage de visiones , con en sus profundos designios no disponga de
tarlas entre las funciones de un órgano, una manera privilegiada la naturaleza que
sin hacer ninguna excepcion, es cosa que intenta inundar con los raudales de su gra
no debiera hacerse , siquiera por respeto á cia ; no decimos que por ejemplo el alma
la Biblia que con tan terminantes palabras de santa Teresa no fuera naturalmente mas
nos refiere muchos prodigios de esta clase. hermosa , no estuviera enriquecida de mas
Las visiones de los Apóstoles , de los Pro preciosos dones naturales que la de Jorge
fetas, de los Patriarcas del antiguo testa Sand; en una palabra, no nos proponemos
mento , ¿deberán explicarse por el órgano limitar en ningun sentido la omnipotencia
de la maravillosidad? quien lo tuviese co del Criador ; pero no luchando con la evi
mo Isai, Jeremías, Ezequiel ó Daniel, dencia de los hechos naturales, sean los
¿ disfrutaría tambien de las mismas visio que fueren , no podemos consentir que la
nes de que ellos disfrutaron ? Para saber si Religion y la moral se conviertan en fenó
un hombre será favorecido del cielo con menos físicos, es decir, que se las destruya
misteriosas apariciones, ¿será preciso exa por su base.
minar su cabeza para conocer hasta qué Sobre todo recelamos mucho que la
punto está desarrollada su maravillosidad 1 exageracion del poder de los órganos no
O bien , todo cuanto se nos refiere en el conduzca á la negacion del libre albedrío,
sagrado texto sobre estas materias, ¿deberá y que caiga de esta suerte toda religion,
ser considerado como la simple narracion toda moral, toda ley, toda sociedad. Asi
de meras ilusiones, que solo tenían de real temblamos por estos sagrados objetos cuan
y efectivo el ser uno de tantos fenómenos do despues de lo notado mas arriba, vemos
de la naturaleza? No podemos creer que á que el señor Cubi dice sin rodeos : « La
tal extremo quiera llegar el Sr. Cubi , ma demencia, el vicio, el pecado, las impro
yormente cuando en su Manual protesta piedades de toda clase, son hijas de la accion
tan á menudo de su afecto á la Religion, de algun órgano ú órganos, al cual la vo
empeñándose además en persuadir, que luntad ó intelecto no puede poner coto ó
entre esta y las doctrinas frenológicas existe freno, ya por debilidad, ya por ignorancia,
una íntima ahanza. Pero, esto no nos dis ya por enfermedad del órgano afectado. »
pensa de hacer notar las funestas conse (Ibid.pág. 72.)
cuencias de su doctrina, si no se la entien Reasumiremos en breves palabras lo di
de con las debidas restricciones; porque cho hasta aquí. En primer lugar: ¡a espiri
con buena intencion se confunden á veces tualidad del alma, dogma de la religion y
lastimosamente las ideas , se destruyen las teorema filosófico , debe quedar á cubierto
creencias, y se introducen errores de gran de todo ataque. Nada prueba contra ella la
multiplicidad de órganos cerebrales que
No reprobamos que se encarezca que la intenta demostrar la Frenología. La expe
ieligion es en cierto modo natural al hom riencia enseña que existe una relacion en
bre ; al contrario consideramos muy salu tre el cerebro y algunas funciones de nues
dable que se hagan resaltar las sorpren tro espíritu. Que este órgano sea uno ó
dentes armonías que existen entre el mundo múltiplo , nada tiene que ver ni con la na
de la naturaleza y el mundo de la gracia; turaleza del alma , ni con el carácter de sus
obras inmortales se han escrito bajo este operaciones. No se pierdan nunca de vista
punto de vista; y cada día están saliendo á estas ideas; distíngase bien entre el órgano
la luz pública en todos los paises, innume y el ser que se sirve de él, entre el cuerpo
rables escritos que tienden al mismo obje y el espíritu; en lo demás queda espedito el
to ; pero guardémonos de hacer de la reli camino al raciocinio y á la observacion,
gion un simple juego de sentimientos sin que tengan de que quejarse ni la reli
naturales ; de impulsos ciegos, nacidos de la gion ni la psicología.
disposicion mas ó menos favorable de estos En segundo lugar, es necesario respetar
ó aquellos órganos. En hora buena que re delicadamente la existencia del libre albe
 — 218 —
drio. Admítanse diferentes inclinaciones, El hombre puede en diferentes paises en
distribuyaselas en tantas clases como se contrarse degradado , mas no deja por eso
quiera; señálese la causa de esta diferencia de ser hombre. Cuando suene la hora se
en los órganos, en el temperamento, ó ñalada en los arcanos de la Providencia,
expliquese por otro sistema que plazca no lo dudeis, levantará al cielo su frente,
imaginar : todo esto poco importa : sobre diciendo con nobleza : « yo tambien fui
semejantes puntos se ha disputado siempre; criado por Dios y para gozar de Dios ; mi
si por medio de sus observaciones la Fre destino en la tierra es un viage de breve
nología puede suministrarnos mas luces de duracion, mi fin es Dios en las inmensida
las que se han tenido hasta ahora se lo des de la eternidad. »
agradeceremos. Establézcase que hay hom Advertimos esto porque sabemos que el
bres que tienen fuerte propension á deter Sr. Cubi ha dicho que ciertos misioneros
minados v icios; pero no se llegue al extre hablando de pueblos cuyo nombre no re
mo de suponerles imposibilidad de resistir; cordamos, habian afirmado que era imposi
á no ser que estén en la imbecilidad , ó en ble cristianizarlos antes de civilizarlos; nos
la demencia. Encarguese á la sociedad la otros creemos al contrario , que el orden
instruccion y educacion moral y religio es inverso , y que el medio mas seguro pa
sa , encarézcase la conveniencia de atender ra introducir en un pueblo la civilizacion es
á la capacidad y á la índole de cada indivi hacerle cristiano; si se nos contradice, ahí
duo; añádase si se quiere, que la Frenolo están la filosofía y la historia que vienen
gía puede suministrar luces para conjeturar en nuestro apoyo. Por lo que toca al dicho
ó pronosticar las disposiciones naturales; de los expresados misioneros , preguntare
échese en cara con generosa libertad á los mos si eran católicos, ó si pertenecían á
gobiernos y á la sociedad , el descuido de alguna de las sectas separadas; en este úl
la instruccion y de la educacion , permi timo caso no respondemos nada , porque
tiendo el desarrollo de las inclinaciones entre los disidentes hay tantas opiniones
perversas ; pero , por un celo excesivo no como cabezas ; pero si eran católicos , exi
se llegue hasta el punto de disculpar al giremos las pruebas del hecho , y hasta
criminal , no se le suponga sometido á una que se produzcan no daremos fe á seme
necesidad orgánica, no se diga que no pudo jante relacion. El Sr. Cubi no lo habrá oida
resistir á la propension , no se ensanche de boca de los mismos misioneros , su bue
tanto el número de los dementes que la na fe habrá sido engañada. Que si se nos
mayor parte de los hombres culpables de demostrase que realmente uno ó mas mi
un delito puedan alegar el descargo de que sioneros católicos han soltado semejante
al cometer un acto criminal obraban por expresion; tampoco se concluye nada con
necesidad, estaban faltos de razon. tra esta doctrina. Jamás los católicos han
Asiéntese si place, que entre las razas dicho que este ó aquel misionero particu
humanas hay diferencias notables, hijas de lar fuesen infalibles.
la accion del tiempo , de los climas , ó de Jesucristo al enviar á sus Apóstoles á
otras causas; dígase que unas están dotadas predicar el Evangelio, no les previno que
de mayor inteligencia que otras ; afírmese mirasen si los pueblos eran civilizados ó
que las semillas naturales de virtud ó de nó; no les encargó que examinasen la for
vicio, se hallan en mas actividad en estas ma de las cabezas para ver si los órganos
que en aquellas : lo que sucede entre los de la Religion estaban desarrollados ó nó;
individuos de una nacion y aun de una fa sino que les dijo que fuesen por todo el uni
milia, no negaremos que acontezca ó acon verso, que enseñasen á todas las aentes, que
tecer pueda, entre razas diferentes. Lo que predicasen el Evangelio á toda criatura , que
haya en esto de verdad ha de decirlo la bautizasen , sin distincion de razas , en nom
observacion. Pero no se condenen á vivir bre del Padre, y del Hijo y del Espíritu Santo.
en la estupidez y en el embrutecimiento á La Iglesia católica no ha olvidado nunca
ninguna de las ramas que por mas que se esta sublime doctrina. Cuando la" codicia y
diferencien en la actualidad , sabemos que la crueldad han querido suponer á los ne
Íirocedieron todas de un mismo tronco. La gros ó á los indios como de una especie in
uz de la razon , el libre albedrío son pa ferior, como de una raza destinada a serv ir
trimonio de la humanidad entera; son fa á las demás , « nó , nó , ha respondido la
cultades del alma que Dios nos comunicó al Iglesia , esto no es verdad , esto es una in-
inspirar en nuestros rostros el soplo de vida. fa mia ; todos los hombres son iguales ante
Dios, todos son hermanos en Jesucristo,
por todos vertió la sangre el Salvador en la
cima del Calvario; los desgraciados que vi
ven en las tinieblas y en las sombras de la
muerte, son por esto mismo mas dignos de
que la caridad cristiana redoble su solicitud
y su celo para llevarles las luces de la fe,
y con ellas el sentimiento de su dignidad.»
Que no lo olvide el Sr. Cubi : estas son las
doctrinas verdaderamente generosas; los
que por codicia ú otros motivos están inte
resados en que continúe el infame tráfico
de los negros y el embrutecimiento de otras
razas, pueden sostener lo contrario; los
cristianos, los verdaderos amantes de la
humanidad , nó.
La idea de Dios, y los eternos principios
de la moral , son de todos los tiempos y de
todos los climas : donde hay hombres , allí
están , porque allí ha llegado el soplo del
Criador, allí ha hecho descender la luz pa
ra que pudiera ser reconocida su augusta
imagen. ¿Qué importan contra esta verdad
algunos tristes ejemplos de embrutecimien
to y degradacion? ¿Qué importan esas
hordas que al paracer han caido del rango
de hombre para colocarse entre los brutos?
Nada ; porque tambien en otros tiempos y
en otros paises andaban otros hombres con
el entendimiento en tinieblas y el corazon
en el polvo; compadecióse de ellos el cielo,
iluminólos con un rayo de sus inefables
resplandores , y de en medio del caos salió
de repente un mundo lleno de orden , de
regularidad y hermosura. Nó, no debemos
atrevernos jamás á decir « estos hombres
son incapaces de la religion cristiana : en
ellos no tienen cabida ideas tan sublimes
como en la misma se encierran : » no olvi
demos que la sublimidad de la religion está
hermanada con la sencillez; grande con los
grandes, sabe en cierto modo hacerse pe
queña con los pequeños. El que dijo de los
niños, dejadlos venir i mí, de ellos es el reino
de los cielos, se complace en acomodarse á
todas las inteligencias, no se desdeña de
hablar con lenguage que comprendan los
mas rudos é ignorantes. No busqueis pues
si el órgano está muy desarrollado, si será
capaz de recibir estas ó aquellas impresio
nes ; recordad que el Todopoderoso sabrá
suscitar de las mismas piedras hijos de Abrahan;
no digais : « el alimento es demasiado fuer
te, esos hombres no podrán digerirlo.»
Dios hará que el pan de los adultos , sea
leche para los niños.— J. B.
POLÉMICA HEÜGIOSA.
CARTA SEXTA
Á UN ESCÉPTICO EN MATERIAS DE RELIGION.
Mi apreciado amigo : si no tuviera otras
pruebas de la verdad que se encierra en
aquella doctrina de los católicos , de que la
fe es un don de Dios, no me inclinaría poco
á tenerla por cierta la experiencia de lo
que he visto en V. y otro; que han tenido
la desgracia de apartarse de la fe de sus
mayores. Disputan , escuchan , al parecer
con docilidad , hacen concebir las mayores
esperanzas de que van á rendirse á la evi
dencia de los argumentos con que se los
apremia , pero al fin salen con un frío qué
sé yo, que hiela la sangre, y disipa de un
golpe todas las ilusiones del fiel que estaba
anhelando el momento de ver entrar en el
redil la oveja extraviada. Asi lo haceV. en
su última : nada tiene que objetarme á lo
que he dicho sobre la Sangre de los Márti
res, confiesa que ninguna religion puede
presentar un argumento semejante , mani
fiéstase satisfecho del contenido de mis an
teriores con respecto á los varios puntos
que formaban el objeto de sus dudas; y
cuando me saltaba el corazon de alegría
pensando que iba V. á decidirse, no diré á
entrar de nuevo en el número de los cre
yentes , pero sí á engolfarse mas y mas en
la discusion con el deseo de hallar definiti
vamente la verdad , me encuentro con la
desolante cláusula que me ha llenado de
una profunda tristeza. «¿Qué nos sabemos
nosotros , dice con un abatimiento que me-
penetra el corazon , qué nos sabemos nos
otros? ¡El hombre es tan poca cosa !.....
volvemos la vista en rededor y no vemos
mas que tinieblas. ¿Quién sabe dónde está
la verdad? ¿quién sabe lo que será con el
tiempo de esa fe, de esa Iglesia que V. cree
que ha de durar hasta la consumacion de
los siglos? Yo no desprecio la religion , veo-
que el Catolicismo es un hecho tan grande
que no acierto á explicarle por causas or
 dinarias; V. apela á la historia, V. me220transiciones,
— de época critica, y de no sé
apremia á que le cite algo de semejante; cuántas cosas por este tenor. Dicho le ten
ya le he dicho otras veces que no me agra go que le seguiré por donde á V. le plu
da atrincherarme en impotentes negativas, guiere; si hoy no le gusta que tratemos de
que no me gusta resistirme á la evidencia dogmas, los dejaremos á un lado; y toda
de los hechos; pero ¿qué quiere V. que le vez que me habla de transicion , de transi
diga? no puedo creer. Estoy contemplando cion le hablaré yo.
la sociedad actual , y me parece que su in Díjele á V. en una de mis anteriores que
quietud está dando indicios de que el mun no creia característico de nuestra época la
do se halla en vísperas de acontecimientos transicion , y que esta habia sido comun á
colosales; con una revolucion intelectual y todos los siglos; por lo que no puedo con
moral debe inaugurarse indudablemente la venir en que bajo este concepto se verifi
nueva era, y entonces quizás se aclare un que ahora algo que con mas ó menos se
tanto ese negro horizonte donde nada se mejanza no se haya verificado siempre.
descubre sino error é incertidumbre. Deje Pero cuando esto afirmo, hablo principal
mos que trascurra esa época de transicion, mente de los pueblos que se mueven en
que tal vez nuevos tiempos nos descifrarán uno ú otro sentido, nó de aquellos que he
el enigma. » lados en medio de su carrera, permanecen
En medio de mi afliccion , no crea V. , fijos como estátuas al traves de la corriente
mi estimado amigo , que yo extrañe seme de los siglos. Si á estos exceptuamos, y
jante lenguaje; no es V. el primero de dirigimos á los demas nuestras miradas,
quien lo he oido ; pero permítame cuando veremos en primer lugar , que los griegos
menos que le haga advertir , que con sus y romanos vivieron en perpetua transicion.
palabras á nada responde, nada prueba, Nada tiene que ver el siglo de Dracon con
nada alirma, nada niega; no hace masque el de Solon , ni el de este con el de Alci-
desahogarse estérilmente pintando con po biades; y ni á uno ni otro se parecen el de
cas palabras el verdadero estado de su es Alejandro y el de Demetrio. Y sin embar
píritu. Tiene á la vista la verdad y no se go estos siglos estaban muy cercanos unos
siente con fuerza para abrazarla ; se aba de otros, lo que nos indica que la sociedad
lanza hácia ella un momento , y luego de griega pasaba incesantemente de un estado
jándose caer desfallecido, dice «no puedo». á otro muy diferente. No es muy largo el
Entonces habla V. de ese porvenir de que espacio transcurrido- entre Bruto que arro
V. mismo se reia en una de sus anteriores, jó á Tarquino y Bruto matador de César;
habla de esa transicion que no sabe en qué pero véase cuántas y cuán variadas fases
consiste; duda, fluctúa, aguarda para mas presenta el estado social y político de los
allá el resolverse, lo aplaza para los tiem Romanos. Observaciones análogas podrían
pos futuros, para esos tiempos , ay ! en hacerse con respecto á otros pueblos anti
qué V. habrá ya dejado de existir !... Tris guos; y aun por lo tocante á los que lla
te consuelo ! Engañosa esperanza ! mamos inmóviles, es menester no olvidar,
Pero si V. desfallece, mi querido amigo, que nos son pocos conocidos, que su histo
no debo yo desfallecer; Dios ha comenzado ria íntima , la que nos retrataría sus ideas
la obra , él la acabará ; yo tengo un dulce religiosas , sus costumbres domésticas , su
presentimiento de que V. no morirá en organizacion social, su legislacion, ha que
brazos del escepticismo. V. dice que desea dado en la mayor parte oculta á nuestros
de corazon encontrar la verdad ; persevere ojos, sepultada en los escombros de los
V. en su propósito ; yo confio que no de tiempos , sin que hayamos adquirido ape
jará de mostrársela el que vertió su sangre nas otras noticias que las transmitidas por
por V. en la cima del Calvario. historiadores extrangeros , que nunca pu
Bien se deja conocer que no estará V. dieron tener del verdadero estado de aque
muy dispuesto para recibir una contesta llos pueblos, mas que un conocimiento
cion que verse principalmente sobre asun muy superficial y ligero. La ciencia moder
tos puramente religiosos; el escepticismo na se esfuerza en suplir este defecto , pero
del siglo ha vuelto á ejercer su ascendiente ¿cuán difícil no es acertar en la verdad, á
sobre V. de una manera lastimosa , y sa tanta distancia de épocas , en lenguas tan
liendo de golpe del terreno de la discusion poco parecidas , en ideas y costumbres tan
se ha echado á divagar por las regiones del desemejantes? Como quiera, todavía puede
socialismo y del porvenir, hablándome de afirmarse que dichos pueblos han estado
 221
muy distantes de hallarse en completa in imaginará que le referís cuentos de hadas,
movilidad ; y que además de lo que sobre y que no le hablais de veras , ó que no es-
los mismos nos manifiestan las escasas no tais en sano juicio. ¿Qué mas? No es ne
ticias que de ellos poseemos , la simple re cesario que las metamorfosis sociales las
flexion sobre la naturaleza de las cosas es tomeis tan de lejos, para que parezcan in
bastante para inducirnos á conjeturar que creibles ; á esos nobles del tiempo de Cár-
los cambios y modificaciones han sido en los V y de Francisco 1 , á esos descendien
mayor número de lo que sabemos , y de tes de los antiguos señores, que van
mayor importancia de la que nosotros cal trocando ya la independencia de sus ante
culamos ; y que por tanto se ha verificado pasados en heroica fidelidad á sus reyes,
tambien entre los mismos el hallarse á me que se van trasladando de los campos á las
nudo en estado de transicion: capitales , y caminan rápidamente á pasar
Pero dejando los pueblos antiguos ó poco de guerreros á cortesanos, anunciadles que
conocidos , y pasando á los modernos á dentro tres siglos no serán ellos los que
contar desde la aparicion del cristianismo, ocupen los altos puestos del estado, los que
salta á los ojos el cambio y las modicacio- guien los ejércitos á la victoria , los que
nes que incesantemente han experimenta ejerzan las funciones de la magistratura, y
do ; sin que sea dable pronosticar ninguna que su voto en los grandes negocios no será
mudanza á la sociedad actual , que no se considerado como de mas valer que el de
haya realizado equivalente ó mayor en las los descendientes de esos plebeyos que rie
anteriores. Aun cuando diéramos por su gan con su sudor las tierras , que ejercen
puesto que se han de cumplir las mas exa los oficios humildes, y que reunidos en
geradas predicciones de algunos socialistas, modestos gremios, parecen contentarse con
y poner en ejecucion los planes que nos la posicion social que les ha cabido despues
parecen mas descabellados , no fuera mas de las guerras de sus antepasados los Co
diferente del actual el estado social nuevo, munes ; y bien puede asegurarse que esos
del que lo son los varios por donde han pa nobles no os comprenderan , que no cree
sado los pueblos cristianos. rán nada de cuanto les pronosticais ; y por
Si los hombres que vivían cuando la es mas que os esforceis en mostrarles las se
clavitud era general , y se la consideraba ñales que ya bien claras se divisan nó en
como una condicion indispensable en toda mucha lontananza, pensarán que tomais
sociedad bien organizada , hubiesen oido por una realidad las ilusiones de vuestra
hablar de un estado semejante al que dis fantasía.
frutan los pueblos europeos, no habrían Trasladaos á la Europa de los siglos XI
acertado á concebir ni cómo podia mante y XII , á la Europa de Suger y de san
nerse el órden público , ni distribuirse el Bernardo, y anunciad á los hombres de
trabajo , ni proporcionarse comodidades y aquella época , que los ricos monasterios,
placeres á las clases ricas ; en una palabra, las opulentas abadías que compiten en es
creyeran imposible que sociedades tan nu plendor y magnificencia con los castillos de
merosas pudiesen subsistir faltándoles esa los señores feudales , desaparecerán con el
base , para ellos tan necesaria é imprescin tiempo , y que en épocas no muy remotas
dible. Decid á un señor feudal encastillado no quedarán de ellos mas que algunas rui
en su fortaleza , que vendrá un dia en que nas, objeto de la curiosidad de los arqueó
todos sus títulos serán menospreciados, en logos , que ese clero cuya influencia en to
que su nombre y el de todos los de su cla dos los negocios es inmensa , y cuyo poder
se caerá en olvido, en que sus descendien y riquezas no ceden á los de otra clase
tes andarán confundidos en medio de los cualquiera , se verá limitado al rerinto de
descendientes de esos vasallos pobres y des los templos , despojado de sus privilegios,
validos que mira con orgulloso desden, privado de sus bienes , escatimados sus de
sumisos y humillados al pié de sus alme rechos á la enseñanza , considerado el mi
nas , decidle que ese mismo pueblo se le nistro de la Religion en la categoría del
vantará contra él , y peleará por largo mas humilde ciudadano, si es que todavía
tiempo , y triunfará , y llegará á ser rico, no se le rebaja de este nivel , negándole lo
poderoso , influyente , eclipsando todo el que á todos se concede; anunciadles repito
esplendor de sus señores, y llenando el esa mudanza, y vereis como la dan por
mundo con la fama de sus hechos; decid imposible, como no conciben su realizacion
selo, y os escuchará con asombro, y se á no ser suponiendo que la invasion snrra
 22-2
cena ha conseguido sojuzgar el poder cris Carlo-Magno con la Francia de Napoleon,
tiano, ó que nuevas hordas de pueblos la de San Luis con la de Luis Felipe. ¿ Se
desconocidos se han derramado por la Eu quiere imaginar una nueva organizacion
ropa , y cambiado su faz. No alcanzarán á del trabajo , sujetando á otras reglas al ope
concebir que sin irrupciones de pueblos rario y al capitalista , atlerando notable
bárbaros , sin conquista de sarracenos , an mente sus relaciones , y variando las bases
tes bien despues de su completa derrota , actuales sobre la reparticion de los produc
se llegase por el simple curso de las ideas tos? Comparad al colono de ahora con el
y de los acontecimientos, á producir cam vasallo del señor feudal , al jornalero de
bios tan profundos en la sociedad. nuestros tiempos con el esclavo de los tiem
Todas las revoluciones que pueden so pos antiguos. ¿La industria y el comercio,
brevenir, al fin no podrán llevar á otro re deben estar en el porvenir sujetos á nwvM
sultado que á alterar la posicion y relacio leyes que alterarán la organizacion interior
nes de los individuos y de las clases. de los pueblos y sus relaciones en lo exte
Supónganse las mudanzas que se quieran, rior? Abrid nuestros códigos de comercio,
y difícilmente se imaginará ninguna ni con datl una ojeada á nuestros usos y costum
respecto á la propiedad , ni á la organiza bres sobre este particular, y cotejadlo todo
cion del trabajo , ni á la distribucion de con lo que estaba en práctica entre nues
sus productos, ni á la condicion domés tros mayores. Por vasta que sea la escala
tica , ni al rango social , ni á la influencia en que estos ramos se desenvuelvan , por
política, que sea de mas importancia y mayor pujanza y poderío que lleguen á ad
magnitud que las verificadas en los tiempos quirir, ¿distarán mas del estado actual que
que nos han precedido. La transicion ha el que dista este del en que se encontraban
existido antes como existe ahora ; las nacio cuando la Iglesia en sus concilios atendía
nes europeas han pasado incesantemente paternalmente á la proteccion del naciente
por diferentes estados , ó dejando comple tráfico mercantil? Las poderosas compañías
tamente el que tenian , ó modificándole de comerciales de Francia, de Bélgica, do
mil maneras hasta transformarle en otro Alemania , de Inglaterra , de los Estados-
que en nada se le parecía. Unidos ¿ no le parece á V. que distan algo
Yo desearía , mi estimado amigo , que de aquellas carabanas de mercaderes, cu
V. anduviese haciendo suposiciones hasta ya seguridad en los caminos podían afian
las mas arbitrarias y caprichosas , y las co zar á duras penas las excomuniones de la
tejase con los hechos históricos que nadie Iglesia? No le parece á V. que en esto ha
ignora; y estoy seguro que se quedaría V. habido no pequeña transicion'.'
convencido de la verdad de lo que acabo ¿Y qué no podríamos decir, si atendié
de 'establecer. ¿Se quiere suponer que las ramos á las mudanzas sociales y políticas,
clases menesterosas saldrán del abatimiento á la diversidad de posiciones que respecti
en que se hallan , acercándose mucho á las vamente han perdido ó conquistado las di
medias, y aun á las superiores? Véase sí ferentes clases? Un abismo tan profundo
los jornaleros de ahora , distan mas de sus nos separa de nuestros antepasados , que si
dueños, que los esclavos de sus amos, y ellos se levantaran del sepulcro, nada com
los vasallos de sus señores ; es cierto que prenderían de loque estamos presenciando.
nó ; y sin embargo , ni rastro queda en ¿Dónde está el poder del feudalismo, de
Europa de la antigua esclavitud , y solo se la nobleza y del clero? ¿Qué se hicieron las
conservan leves vestigios del vasallage, y prerogativas, los privilegios, los honores
los descendientes de los que vivían some que disfrutaban ? ¿En qué se parecen los
tidos á estas condiciones, se hallan en la tronos de ahora á los tronos de entonces?
misma categoría que los nietos de aquellos ¿Qué tienen de semejante nuestras formas
que un día se vieran colocados á inmensa de gobierno con las antiguas? ¿Qué nues
distancia, asi por lo tocante á riquezas, tra administracion? ¿qué nuestros sistemas
como á honores , consideraciones , y todo de hacienda? ¿qué nuestras guerras, y
linage de distincion y poderío, ¿Se quiere nuestra diplomacia? Pensamos de otra ma
suponer que la propiedad sufrirá modifica nera , sentimos de otra manera , obramos
ciones profundas, que su distribucion es de otra manera , vivimos de otra manera ;
tará sometida á leyes muy diferentes? com nuestra condicion asi particular como pú
párense los siglos medios con el nuestro, blica se ha cambiado tan completamente .
parangónese por ejemplo, la Francia de que para comprender lo que fué, nos ve
mos precisados á hacer un esfuerzo de ima
ginacion, laque sin embargo solo es bastan
te para ofrecernos cuadros muy imperfec
tos y descoloridos. ¿ Por qué nos parecen
tan poéticos aquellos tiempos, mi esti
mado amigo? ¿por qué figuran tanto en
nuestra literatura? porque distan inmensa
mente
Quiero
delayorealidad
inferir que
de aqui
tenemos
, queá lacuando
vista.
se nosanunrian grandes mudanzas en la or
ganizacion de los pueblos , no debemos re
sistirnos á creerlas por la sola razon de que
nos parezcan muy extrañas; porque si bien
se observa , la sociedad actual no dista me
nos de las anteriores de lo que distaría de
la presente la venidera , en las varias com
binaciones que se pueden concebir y ensa
yar. La instabilidad es uno de los caracté-
res distintivos de las cosas humanas; y
poco ha reflexionado sobre la naturaleza del
hombre, poco se ha aprovechado de las
lecciones de la historia y de la experiencia,
quien pronostica demasiada duracion á lo
que de suyo es tan flaco y deleznable. Que
la sociedad esté bajo un poder revolucio
nario ó conservador , que se procure im
pulsarla ó detenerla, ella varia siempre,
pasa sin cesar de un estado á otro, ora
mejor, ora peor.
Esta alternativa entre mejor y peor, me
lleva, mi querido amigo, á otra cuestion,
á que segun se deja entender es V. un po
co aficionado , como no puede menos de
serlo , atendido el espíritu de nuestra épo
ca. Dícese á cada paso , que el progreso es
la ley de las sociedades; que no se desvian
jamas de ella, y que en medio de las mas
terribles revoluciones y catástrofes camina
la humanidad hácia un destino, que no sa
biéndose cuál es, se tiene cuidado de en
volverle con un velo dorado. No seré yo
quien desaliente el movimiento de la hu
manidad , disipando lisonjeras esperanzas ;
bien que tampoco puedo consentir que se
establezca con demasiada generalidad y sin
las correspondientes aclaraciones , una pro
posicion que segun como se entiende, se
halla en contradiccion con la filosofía , la
historia y la experiencia.
Es muy frecuente hablar de perfeccion ,
de perfectibilidad, de ley de progreso, sin
distinguir nada, sin fijar nada; sin expre
sar si se trata de las sociedades tomadas en
particular ó en conjunto; es decir sin de
terminar si la ley cuya existencia se afirma,
rige en toda sociedad , ó tan solamente es
propia del género humano, considerado
con abstraccion de esta ó aquella de sus
partes. A los que digan que el progreso
hácia la perfeccion es la ley constante de
toda sociedad , yo me atreveré á pregun
tarles, ¿cuál es el progreso que se descu
bre en el norte de Africa , en las costas de
Asia, comparado su estado actual con el
que tenían cuando nos daban hombres co
mo Tertuliano, san Cipriano, san Agustín,
Filon, Josefo, Orígenes, san Clemente,
y otros que seria largo enumerar?
Esto no tiene réplica ; asi como por otra
parte nada prueba contra los que afirman
que si bien esta ó aquella sociedad decae,
la humanidad progresa , que la civilizacion
transmigra , que unos pueblos adquieren
lo que otros pierden , y que de esta suerte
existe una verdadera compensacion. Asi
por ejemplo en el caso presente , se ha re
sarcido é indemnizado la humanidad desus
pérdidas en Africa y en Asia , con el in
menso desarrollo que ha logrado en Euro
pa y América ; pues si se contaran los mi
llones de hombres que viven actualmente
bajo un régimen civilizado, seria incompa
rablemente mayor el número á lo que era
entonces ; y si se añaden las ventajas que
la civilizacion moderna lleva á la antigua ,
no solo por traer consigo un mayor y mas
perfecto desarrollo intelectual y moral, si
no tambien por ofrecer mayor suma de co
modidades materiales, y disminuir sobre
manera los males que afligen á la tristo
humanidad , será tanta y tan palpable la
diferencia que no será posible siquiera es
tablecer un razonable parangon.
Confieso , mi estimado amigo , que estas
reflexiones son de gran peso ; y que á mi
juicio deciden la cuestion, bajo el punto
de vista histórico , considerando en masa
la humanidad , y habida razon de las com
pensaciones arriba indicadas: por manera
que tengo por demostrado que la humani
dad ha progresado siempre , que su estado
fué mejor en los siglos medios que durante
la civilizacion antigua , y que actualmente
se aventaja en mucho á la de todos los tiem
pos anteriores.
¿Cómo , me dirá V. , es posible olvidar
la confusion y las calamidades de la época
de la irrupcion , y la tenebrosa ignorancia,
la asquerosa corrupcion que la siguieron ?
¿ Podrémos decir que la humanidad del
tiempo de Atila era comparable con la del
siglo de Augusto? Yo creo sin embargo que
esto, tan falso y absurdo á primera vista,
es rigurosamente verdadero, y ademas sus
 — 221 —
ceptible de una demostracion tan cabal, todo es vicio , prostitucion , lisonja ; perez-
que nada deje que desear. La difusion de ca pues todo , diria quién desde entonces
las verdaderas ideas sobre Dios, el hom pudiera extender sus miradas á los tiempos
bre , y la sociedad , y las relaciones que futuros ; haya guerra , pero guerra regene
entre sí tienen , la propagacion de la civi radora que ha de cambiar la faz del mun
lizacion á un sinnúmero de pueblos que do , llamando á la civilizacion cristiana cien
antes vivían en la mas abyecta barbarie , y cien pueblos bárbaros , destronando á la
la abolicion de la esclavitud , la extension opresora del orbe , y dando principio á las
á la generalidad de los hombres del goce grandes naciones que nos asombrarán con
de los derechos de hombre , esto se anda sus adelantos y poderío; haya calamida
ba realizando en la época deque tratamos, des públicas, que al menos no serán ni tan
y nada de esto se realizaba en el siglo de afrentosas como esa esclavitud que pesa so
Augusto ; con perdon pues , de los manes bre el mayor número de los individuos, que
de Virgilio y Horacio, opto desde luego por forman la sociedad antigua , y se andará
los tiempos apellidados bárbaros. preparando la era dichosa, en que para
¿Se sonríe V. de la paradoja, mi esti disfrutar de los derechos de ciudadano bas
mado amigo? ¿Imagínase tal vez que ni tará ser hombre ; perezcan , nada importa,
yo mismo creo lo que acabo de decir? Pues las ciencias y las bellas artes , si están re
viva V. seguro que hablo de todas veras, servados á los siglos venideros genios pro
y que mis palabras son la expresion de con digiosos como Tasso, Milton y Chateau
vicciones profundas. Ya le indicaba en una briand, Miguel Angelo y Rafael, Descartes,
de mis anteriores, que en ciertas materias, Bossuet y Leibnitz ; hágase tnzas esa civi
quizás no llevaba V. tan lejos como yo , el lizacion falsa , esa cultura raquítica que
espíritu de exámen, y que estaba media sancionan el monopolio de las ventajas so
namente tocado de escepticismo ; esto pro ciales , y cedan su puesto á otra civiliza
duce que en cuanto se me alcanza , no me cion y cultura mas grandiosas, mas esplén
dejo deslumbrar por nombres , ni por opi didas, y sobre todo mas justas y equitati
niones recibidas ; y por mas seguridad con vas, que llamen á la participacion de ellas
que oiga afirmar una cosa, me ocurre desde un mayor número de individuos, abriendo
luego un ¿quién sabe?— que me pone des las puertas para que puedan disfrutarlas
confiado y meditabundo. A pesar detodo, todos , en cuanto lo consienta la naturale
paréceme que difícilmente me absolverá V. za del hombre , y de los objetos sobre los
de la blasfemia que acabo de proferir con cuales ejerce su actividad.
tra el siglo de Augusto ; y asi menester será En pos de la irrupcion y undulaciones
alegar descargos. Escúchelos V. sin pre de los pueblos bárbaros , vino el feudalis
vencion , que al fin , no fuera extraño que mo ; sistema social y político contra el cual
se conformase con mi modo de opinar. podrá decirse todo lo que se quiera , pero
Y á la verdad , deslumbradores son los que indudablemente fué un verdadero pro
rayos de la ciencia , hechiceros los cantos greso, supuesto que erigiéndose por decirlo
de la poesía , seductor el brillo de las ar asi , en soberanía la propiedad territorial ,
tes ; pero si nada de esto sirve para el bien se asentaba un principio que modifica
de la humanidad , si únicamente se limita do y corregido con el trascurso del tiem
á realzar el esplendor , y acrecentar y avi po, podia servir mucho para la organiza
var los placeres de unos pocos que moran cion de las sociedades modernas. Hahia
en opulentos palacios , comiendo del sudor desorden , opresion , vejaciones , males sin
del pueblo , disipando los tesoros que se cuento , es verdad ; pero al menos se co
han amontonado de las provincias estru menzaba á establecer un sistema, se daba
jándolas con la mayor crueldad, ¿qué gana asiento á los pueblos vencedores , se arrai
en ello el humano linage? ¿Esta civiliza gaba el amor á la vida agrícola y el respeto
cion y cultura son acaso mas que bellas á la propiedad, se desarrollaba el espíritu
mentiras ? Hay paz , pero esta paz es el si de familia ; y las inclinaciones del cora
lencio de los oprimidos ; hay goces, pero zon encontrando objetos mas estables y apa
son los go ees de unos pocos , y la abyecion cibles se hacían por nececidad menos tur
de todos; hay ciencias, bellas artes, pero bulentas , se preparaban á la tranquilidad
postradas á los piés del poderoso , no lle y á la dulzura. Malos como eran los tiem
nan su mision que es mejorar la condicion pos de los siglos XII y XIII, ¿quién no los
intelectual, moral y material del hombre; prefiriera á los que siguieron despues de
 — -225 —
la Nadie
disolucion
negará
del imperio
que hastade principios
Carlomagno del? cimientos , que cuenta en todas regiones
asombrosos genios, y que bajo el aspecto
siglo XVl las sociedades europeas andaban de la religion y de la moral puede ofrecer
mejorándose rápidamente; por manera un san Ignacio de Loyola , un san Francis
que no verificándose en ningun otro punto co de Sales , un san Vicente de Paul , y
del globo decadencia notable, ya que los cien y cien otros de heroicas virtudes que
demas pueblos puede decirse que en gene realizaron sobre la tierra la vida de los án
ral permanecieron estacionarios, todavía geles, no puede quejarse que sea poco fa
debemos confesar que el linage humano vorecido de la Providencia, no puede la
progresaba. Los grandes descubrimientos mentarse en medio de sus revoluciones
que tuvieron lugar en el siglo XV hacían materiales y morales, de que le haya ca
esperar que en el XVl se inauguraría una bido mayor parte en el infortunio, de la
era de prosperidad y ventura que rebo que caber suele en todas partes á la des
sando en Europa , se derramaran por todas graciada humanidad.
las regiones de la tierra. Desgraciadamente Esta última consideracion , mi estimado
el cisma de Lutero vino á desvanecer en amigo, me lleva á examinar cuál esla cau
buena parte tan halagüeñas esperanzas, y sa de este desazon quede continuo nos ator
las calamidades que han caido sobre la Eu menta á los europeos, y á cuantos han parti
ropa durante los tres últimos siglos, podrían cipado de nuestra civilizacion. A oirnos cual
hacernos dudar de la proposicion que lle nos quejamos de la suerte, cual afeamos
vamos establecida. nuestra situacion presente , cual ennegre
Como quiera, aun llevando en cuenta cemos el porvenir, diríase que suportamos
los males acarreados por los cismas reli mayor suma de males que ningun pueblo
giosos, y la incredulidad é indiferentismo de la tierra ; y aun comparándonos con
que han
rece que sido
pueda
su negarse
consecuencia
que la, humanidad
no me pa- ||.. nuestros antepasados , parecería que fueron
mucho mas dichosos. Nunca hablaron ellos
en general haya carecido de la compensa tanto de transicion , de necesidad de nuevas
cion arriba indicada. Tomando las cosas en organizaciones , de insuficeucki de lodo cuanto
su raiz , es decir desde que Lutero y sus existe, nunca anunciaron como nosotros
secuaces dividieron en dos la gran familia esa epoca que ha de venir realizando el si
europea, debe considerarse que las suce glo de oro, so pena de hundirse el mundo
sivas conquistas que ha ido haciendo el ca en un caos, precediendo una conflagracion
tolicismo en las Indias orientales y occiden espantosa.
tales, resarcen quizás con ventaja, las Cada época ha sufrido sus males , y ha
pérdidas que en Europa ha sufrido la uni tenido mas ó menos cercanas mudanzas
dad de la fe. Si á esto añadimos que allí profundas; cada época se ha encontrado
donde no se ha establecido la Religion Ca con necesidades ó del todo desatendidas, ó
tólica, al menos se han propagado algunas mal satisfechas ; cada época ha llevado en
luces del cristianismo por medio de una ú su seno un gérmen de muerte para lo exis
otra de las sectas disidentes , lo que tal co tente que debia ceder su puesto á lo que se
mo sea siempre es muy preferible á la ido adelantaba con el porvenir. Añadiré ade
latría y embrutecimiento en que estaban mas, que dudo mucho que los tiempos
sumidos aquellos paises , si atendemos á los presentes deban en nada posponerse á los
progresos que allí mismo han tenido el des pasados , considerando los pueblos civiliza
arrollo intelectual , moral y material del dos en general , y prescindiendo de doloro-
individuo y de la sociedad , resultará que sas excepciones que por necesidad deberán
aun dando á la historia de los tres últimos ser pasageras ; y me inclino á creer , que
siglos en Europa los mas negros colores , no son mayores nuestros males, sino que
la humanidad no ha perdido , antes se ha se abultan en gran manera por dos moti
lla recompensada con usura. vos: 1.° porque reflexionamos demasiado
Y no es verdad tampoco que la Provi sobre ellos; semejantes al enfermo que
dencia haya de tal suerte castigado el or aguza sus dolencias haciéndolas objeto con
gullo europeo en los tres últimos siglos, tinuo de sus pensamientos y palabras : 2.°
que al propio tiempo no haya derramado á causa de que tenemos mayor libertad para
sobre nosotros un raudal de inestimables quejarnos, asi de viva voz como por escrito;
beneficios. El pais donde nacieron hombres añadiéndose ademas que la prensa , no siem
tan eminentes en todos los ramos de cono- pre con recta intencion, lo exagera todo.
TO.MO i. 15
 — 220 —
Se habla por ejemplo de pauperismo ; gamos por un momento que en las reduci
convengo en que es una llaga dolorosa y das poblaciones que acá y acullá se anda
que merece llamar la atencion de todos los ban formando, y que conquistaban tan
nombres amantes de la humanidad ; pero trabajosamente su independencia , hubie
lo que desearía saberes, qué resultado nos sen hallado por ensalmo las prensas de
daria el mismo asunto , si lo examináse París y de Lóndres, y aprendiendo tam
mos con respecto á los tiempos que nos bien de repente los pueblos á leer, se hubiesen
precedieron. ¿Qué mayor, y mas doloro hallado con infinitos escritos donde se narra
so pauperismo que la antigua esclavitud? sen y pintasen con los colores que suponer
ni en el número de los infelices, ni en el se dejan, las violencias, las injusticias, el
grado de su infelicidad, ¿es comparable destemplado lujo de los señores, y la opre
aquel estado con el de las clases inferiores sion , la miseria , las calamidades de los
de nuestra época? Ya sé que algunos se vasallos; ¿no os parece que el cuadro
han adelantado á decir que la suerte de los resultaria negro, que un clamor gene
esclavos negros es preferible á la de nues ral se levantaria de los cuatro ángulos de
tros jornaleros ; no negaré que si se consi la tierra, pidiendo venganza? ¿no os pare
deran no mas que algunos extremos excep ce que se pondría tambien de acuerdo to
cionales , asi en el bien como en el mal , si do el mundo en que jamas fueron mayo
se toma un esclavo negro , á quien le ha res los males de la humanidad , que jamas
ya cabido un amo racional, prudente, com fué mas urgente aplicarle un remedio,
pasivo , que se guie por las inspiraciones que jamas fué mas necesario , mas inmi
de la sana razon y de la caridad cristiana , nente una profunda mudanza en la orga
y se le compara con algunos de los jorna nizacion social.
leros mas desgraciados , se podrá sostener Volvamos la medalla , y miremos su re
quizás el parangon ; pero hablando en ge verso : imaginémonos , que en nuestro si
neral , y poniendo de una parte la masa de glo callan de repente la prensa y la tribu
los esclavos negros, y de otra la de los jor na , que se desvia de la política la atencion
naleros europeos, ¿será preferible la suer pública , que no se piensa en las cuestiones
te de aquellos á la de estos? ¿podrá ni si sobre la organizacion social , que los amos
quiera comparársele? no lo creo; y aun se ocupan únicamente de sus negocios, los
ruando no fuera dable señalar hechos po jornaleros de su trabajo , que nadie cuida
sitivos , que por cierto no faltan , bastaría de contar cuántos pobres hay en Inglater
la simple consideracion de la naturaleza de ra, en Francia y los demas paises, que no
las cosas, para no quedar indeciso el juicio. circulan las narraciones de los padecimien
Cuando abolida la esclavitud en Europa tos de las clases menesterosas , con el cál
le sucedió el feudalismo, durando largos culo de las onzas de pan ó de patatas que
siglos con mas ó menos pretensiones, no tocan al infeliz trabajador y á sus hijos, y
creo tampoco que la clase pobre se hallase con la descripcion de la triste y mugrienta
en mejor estado del en que actualmente se habitacion en que se ve precisado á alber '
encuentra : léase la historia de aquellos garse, y que con todo siguiese como aho
tiempos, y no quedará sobre esto ninguna ra el movimiento de la industria , y se
duda. Figurémonos por un momento que ocupasen los mismos brazos , y fuesen los
las innumerables legiones de folletistas , pe mismos salarios , y el mismo el precio de
riodistas y escritores de obras que actual los alimentos y vestidos, ¿no es claro que
mente inundan los paises civilizados, hu nuestro estado social no se mostraria con
biesen aparecido de repente en medio del tan negros colores, ni veríamos tan ame
feudalismo, que hubiesen podido recorrer nazador el porvenir?
el castillo del orgulloso señor , examinando Véase pues, mi estimado amigo, con
sus cómodos aposentos , su lujoso aparato; cuánta razon he dicho, que nuestros males
que le hubiesen visto salir á una partida eran mayores porque pensábamos dema
de caza , con sus briosos caballos , sus siado en ellos , porque hay mil medios y
gallardos escuderos, sus innumerables per motivos de recordarlos, de exagerarlos, y
ros, insultando con la riqueza de los ade porque el estado actual de la civilizacion
rezos la miseria y la desnudez de sus va lleva necesariamente consigo el acto refle-
sallos; que hubiesen presenciado las injustas xo de ocuparse de sí misma. Y no crea V.
exigencias, las arbitrariedades , la crueldad que yo esté mal avenido con que se dé la
con que vejaban á sus súbditos ; y supon conveniente publicidad á los sufrimientos
 — 227
del pobre, nique desee que se imponga modificó, se cambió de mil maneras; y sin
silencio á la clase que sufre para que no embargo la religion permaneciendo la mis
cause siquiera el padecimiento de algunas ma sin prestarse a ninguna de aquellas
molestias y zozobras á la clase que goza ; transacciones que la destruirían por su ba
solo he querido indicar un carácter de nues se , ha podido y sabido acomodarse á lo
tra época, senalandola razon de que parezca que demandaban la diversidad de tiempos
tener otras particularidades, que se le atri y de circunstancias ; sin hacer traicion á la
buyen como propias, no obstante de serle verdad no ha perdido de vista el curso de
comunes con todas lasque la han precedido. las ideas ; sin sacrificar á las pasiones la
Que por lo4ocante á las simpatías en favor santidad de la moral ha tenido en cuenta
de la clase menesterosa á nadie cedo : y res las mudanzas de los hábitos y de las cos
petando como es debido la propiedad y de tumbres; sin alterar su organizacion inte
mas legítimas ventajas de las clases altas , rior en lo que tiene de inalterable y de
no dejo de conocer la sinrazon y la injus eterno , ha creado infinita variedad de ins
ticia
Mequeá
inclino
menudo
á creerlasque
deslustra
si V. no
y las
ha daña.
adop tituciones acomodadas á las necesidades de
los pueblos sometidos á su fe.
tado mis opiniones en todas sus partes, al ¿Ignora V. estos hechos, mi estimado
menos convendrá en que no son para des amigo? ¿hay en ellos algo que consienta
atendidas, supuestos los argumentos en que ni disputa siquiera? Deje V. pues esas pa
las he apoyado ; y estoy seguro de que en labras vanas que nada significan, que solo
adelante se parará V. algo mas en el ver sirven á nutrir con vagas generalidades ese
dadero sentido de la palabra transicion , y fatal estado de duda y de escepticismo que
no le dará tanta importancia como antes le es la verdadera agonía del espíritu. Bien
concedía. Ciertamente no alcanzo cómo se conoce V. que no aborrezco el progreso de
ha podido meter tanto ruido con estas y la sociedad, que lo miro como un benefi
otras expresiones semejantes , cuando bien cio de la Providencia , que no soy pesimis
analizadas no se encuentra que signifiquen ta , ni me complazco en condenar todo
otra cosa que la instabilidad en las cosas cuanto existe y todo cuanto se columbra
humanas; instabilidad cuyo conocimiento en el porvenir; pero deseo que se distinga
no data ciertamente de los tiempos mo lo bueno de lo malo, la verdad del error,
dernos. lo sólido de lo fútil ; deseo hacer lo que
Asi , tampoco concibo cómo se atreven Vds. los escépticos nos exigen , y que sin
algunos á pronosticar la muerte del Cato embargo no practican : examinar con buena
licismo, fundándose en que el nuevo esta fe, juzgar con imparcialidad. Queda de V. S.
do á que van á pasar las sociedades , no affmo. Q. B. S. M.—J. B.
podrá consentir ni los dogmas ni las formas
de esta Religion divina ; como si el mundo
hubiese permanecido durante xvin siglos
sin ninguna clase de mudanza ; como si la
fe y las augustas instituciones que nos dejó
Jesucristo, necesitasen para conservarsele
las obras del hombre.
¿ Acaso la organizacion social del primer
siglo del cristianismo , no era muy diferen
te de la del tiempo de Teodosio el grande?
¿ Acaso la Europa de los bárbaros se pare
cía en nadaá la Europa del imperio? ¿ Aca
so la época del feudalismo se asemejaba á « ¿Cómo hemos podido llegar á tamaño
los trastornos de la irrupcion de las hordas estado de desconcierto y desorden? ¿por
del Norte, ni la prepotencia de los barones qué no tenemos gobierno » preguntan al
á la pujanza de la monarquía ? ¿ Acaso el gunos ; « cómo no hemos llegado todavía á
siglo de Francisco primero , fué el siglo de un estado peor? ¿cómo hemos tenido ni
Luis catorce , ni este el de Luis Felipe ? sombra de gobierno?» debiera preguntar
Verificáronse en ese espacio de xvin siglos, se. Minoría , guerra de sucesion , revolucion :
revoluciones colosales, pasaron sobre la cada uno de estos males basta por sí solo
sociedad europea vicisitudes innumerables, para trastornar una sociedad. ¿Qué no ha
la vida pública y privada de los pueblos se bia de resultar de los tres reunidos?
 — 228 —
La sola ininoria de Carlos II llevó unta el trono , cuerpo á cuerpo , habría sucum
dos los pacatos tiempos del último período bido : porque el trono es nacional , la revo
de la dinastía.austríaca ; la sola guerra de lucion nó.
sucesion inundó de sangre la Península al Cuando la revolucion ha conocido sus
entronizarse la rama borbónica; la sola re verdaderos intereses , y la debilidad de sus
volucion nos trajo la lucha civil y la inva fuerzas , se ha colocado siempre á la som
sion extrangera en 1823; nada pues mas bra del trono. Necesitaba un escudo, y en
natural que los males sin cuento que he este escudo esculpió los blasones de la mo
mos sufrido , ya que la Providencia quiso narquía.
que se combinasen y obrasen á un tiempo
sobre nuestra patria tres elementos, todos II.
tan poderosos para trastornar.
En la minoría , el trono está desocupado ; Alguna vez hemos pensado , si nos hu
bajo sus doseles está la regia cuna. Las fun biera dañado mas que una revolucion mo
ciones del monarca las ejercen otros ; pero nárquica , un monarca revolucionario. Op
cabalmente la fuerza del poder monárquico tamos por la primera , porque al mal no le
está vinculada principalmente á la misma deseamos jamas un elemento de pujanza.
persona del monarca. El monarca es ina Un monarca rev olucionario que con las mo
movible , la regencia no lo es ; la monar dificaciones del espíritu dela época, se hu
quía es perpetua , la regencia es temporal ; biese arrojado por el sendero de Enri
el monarca obra en nombre propio , la re que VIII ó del emperador José, quizás nos
gencia en nombre ageno. La autoridad es hubiera perdido para siempre. Recuérden
débil porque es emanada, no sale inmedia se ciertos períodos críticos del tiempo de
tamente del origen ; y la ambicion no tiene Carlos III y de Cárlos IV. El desorden de
cerradas las puertas porque hay eventualidad la revolucion destruye pero nada edifica ,
de cambio en el poder supremo , y por ni bueno ni malo , y trae en pos de sí el
consiguiente existen e.iperamm de usurpar peor enemigo : un incurable descrédito ;
lo. Durante el funesto período, experimen pero la accion ordenada , regular , firme ,
ta la nacion los males de una monarquía con que funciona la monarquía , derriba de
electiva. La ley que en Francia acaba de un golpe , y edifica en un instante : ¡ ay
declarar hereditaria la regencia, encierra de los pueblos , si el derribo y la construc
un pensamiento de bien alta política. cion están dirigidos por el genio del mal !
La (Iuerra de sucesion supone cuestionable En adelante , ¿qué podria suceder ! Las
el derecho , y encomienda la decision á los circunstancias han cambiado : si en una de
trances de las armas. Mientras dura la las infinitas combinaciones que es dado
sangrienta lid , se levanta trono contra tro imaginar se apoderasen del trono influen
no; no existe pues la unidad, está privada cias maléficas , su accion seria nociva , pero
la monarquía de su carácter esencial ; que nó omnipotente. Hace ya muchos años que
dando en cierto modo aplazada su existen los buenos principios están acostumbrados
cia para cuando se ha decidido la lucha. á no deber su salvacion á nadie. Su fuerza
La revolucion ataca el principio mismo del propia, intrínseca, esencial, está en ejer
gobierno, porque tiende á cambiar las for cicio ; no hay poder sobre la tierra que
mas políticas, y la organizacion social. Por pueda esclavizarlos , y mucho menos des
naturaleza es enemiga del poder, se esfuer truirlos. Sin embargo, conviene que sus
za sin cesar en enflaquecerle, porque su fin defensores no estén desapercibidos : la Es
es derribarle. Relaja todos los vínculos con paña es un campamento en desorden , don
que está formada la sociedad , porque son de cada cual guarda lo suyo como mejor
un obstáculo á sus designios; y el poder puede , y no escrupuliza mucho en tomar
supremo es el objeto de sus iras, por el lo ageno : no tomemos nada de nadie , pe
doble motivo de ser poder, y de servir de ro velemos en torno del arca sania.
centro y ñudo á la organizacion social que
se intenta destruir.
En la última época , la revolucion hu 111.
biera sido impotente, como lo fué en las
anteriores , á rio haberla secundado la mi
noría y la guerra de sucesion. Siempre que La guerra de sucesion cesó, la minoría
se hubiese empeñado en una lucha contra se acerca á su fin , la revolucion ha llegado
 2-29 —
al término de su carrera, porque desgra fiel ; donde antes colgaba una linda jaula
ciadamente ha logrado su objeto , en cuan con un pájaro de pintados colores, y de
to le era posihle; ¿qué es lo que puede melodioso canto , asomaba la facha del bu
impedir el establecimiento de un gobierno? ho , con su pico corvo , y sus plumas en
Lo iremos diciendo en el presente artículo, forma de orejas ; por las ventanas donde se
y en los venideros. recostara en otro tiempo una gallarda ma
¿ Cómo sabeis que la revolucion ha lle trona ó hermosa doncella , sacaban de im
gado á su término? porque no vemos en proviso la cabeza el zorro, el oso, el tigre ;
pié nada de lo que ella queria destruir, es- y en los lugares en que jugueteara con bu
cepto las cosas indestructibles. Estamos lliciosa alegría la candorosa niñez , silvaba
sentados en medio de ruinas , esto nos ga la horrible sierpe , mostrando su lengua de
rantiza de que no nos engañamos. sangre y sus ojos de llama.
Despues de lo que se ha hecho , todo lo « Por respeto á los manes delos antiguos
que en adelante se apellide revolucion no señores, dijo el viajero, es preciso que
merecerá tal nombre. Será el designio de desaparezca tanto horror ; es preciso quitar
impedir que se quiten los escombros, que esas ruinas, y construir un edificio.» Y es
se despeje el terreno , y se levante un edi fama que difundiéndose esa voz por todo el
ficio. Para ciertos actos , es muy convenien ámbito de las ruinas , las fieras , las alima
te tener á la mano montones de polvo para ñas , los réptiles , y las aves nocturnas , te
oscurecer la atmósfera y privar la luz. miendo perder su habitacion se helaron de
En una vasta llanura, entrecortada por espanto ; cada cual á su manera dió un gri
suaves colinas, existia en otros tiempos un to horrible ; y el silbido , y el rugido , y el
magnifico edificio que levantaba hasta las ahullido , y el chirrido , resonando todo á
nubes su gallarda cúpula y sus torres gi un tiempo, resultó un ruido fatidico y
gantescas. La amenidad del pais, la fera aterrador.
cidad de los campos , la hermosura del cie
lo, el despejo del horizonte , parecían decir
que allí no podía faltar la vivienda del hom IV.
bre. Sin embargo , el tiempo que lodo lo
destruye, habia desmoronado el edificio,
consumido sus techos, desmantelado sus Una señal bastante segura de que las re
tos.
paredes
Aquí, minado
un enorme
y destrozado
paredon que cimien- i voluciones se aproximan á su fin , es cuan
sus amenaza
do los tribunos se convierten en cortesanos,
desplomarse de un momento á otro, allí y los agitadores muestran pretension de
una bóveda cuyos estribos se van cayendo parecer hombres de gobierno.
á pedazos; arcos aislados, colunas que no Cuando la revolucion invocala legalidad,
sostienen nada; grandes aberturas en los es un indicio de que el enemigo está fuera
parages antes cerrados, montones de es de combate , y de que es tiempo ya de tra
combros sobre el lugar de las antiguas entra tar del reparto y seguridad del botín. En
das; descomunales boquerones en el suelo, tonces vienen de molde los hechos consuma
todo confusion y desorden , todo ruinas. dos; y como suele decirse, se consolida la
El hombre no vive en aquellas estan situacion. En tiempos revueltos es necesario
cias, pero la habitacion no está desierta. no contentarse con saber y entender el Dic
Los zorros , los jacales , las hienas , los ti cionario de la Academia.
gres , todas las alimañas y fieras del desier Se ha clamado mucho contra un cente
to han hallado allí su cueva; las sabandi nar de ancianos y hombres de mediana
jas, los dragones, y todo linage de reptiles edad , porque se han mostrado tercos sos
encuentran cómoda guarida en las nume tenedores de las leyes hechas por ellos , y
rosas y profundas hendiduras ; y los bui de la situacion , tambien creada por ellos
tres , las lechuzas , los murciélagos tienen como se supone. «Vosotros, les decían sus
su nido en los restos de las torres y al adversarios, vosotros los antiguos tribunos,
menas. los fogossos antagonistas de la monarquía ,
Un viagero recorría silencioso los alrede los autores de la revolucion , los padres de
dores de las ruinas, y contemplaba con la Constitucion del año 12 , los incorrupti
dolor aquel cuadro de destruccion. Reso bles enemigos de las camarillas cortesanas ,
naba el rugido del tigre en el mismo lugar los hombres del pueblo, delas eternas pon
donde antes se oyera el ladrido del perro deraciones de sus derechos, vosotros os
 — 230 —
habeis prostituido á los caprichos de un po (i Nacion Española , esos hombres que ape
der nuevo, obra de vuestras manos, que llidan libertad y te prometen el siglo de oro,
ni brilla con la llama del genio , ni resplan te engañan. Susdoctrinas son las ensayadas
dece con el reflejo de un gran nombre, ó en Francia ; mira lo que estas han produ
de recuerdos históricos, y en cuyo porve cido alli, é infiere lo que producirán aqui.
nir no hay mas que oscuridad. ¿Y preferís Se quiere derribar un idolo para colocarse
una mirada lisonjera ó una sonrisa de ese en su lugar ; el incienso que te forzarán á
poder , al clamor de los pueblos , al voto rendirle , te será repugnante , y las ofren
de los parlamentos , al grito unánime de la das que te obligarán á presentarle te sal
prensa? ¿Habeis cambiado de principios, drán muy caras. La ambicion y la codicia
modificado vuestras creencias políticas, di se cubren con el manto de la libertad y de
sipado vuestras ilusiones, secado vuestro la economía ; no les prestes oidos , que el
corazon ? ¡ Qué mudanza tan inesperada ! tiempo vendría á castigar tu imprudencia
Antes las sociedades patrióticas , ahora los ron dolorosos escarmientos.» Y bien, ¿qué
salones diplomáticos; antes desprecio de la decían aquellos escritores que no se haya
aristocracia , ahora insaciable sed de conde dicho ahora? ¿qué fué la prensa de enton
coraciones y títulos ; antes al pasar por de ces, en comparacion dela prensa de ahora?
lante del regio alcázar le mirábais con alti Los hombres son los mismos , hasta llevan
vo desden y con ojo centelleante , ahora el apellido de la época, se llaman doceañis-
habeis ocupado todas las antesalas de las tas ; entonces hablaba la prevision , ahora
reales estancias, y vestís la librea de los habla la experiencia ¡ Cuán amargos
cortesanos , y os dejais arrastrar en sober desengaños traen consigo las revoluciones!
bias carrozas ; antes hacíais gala de vuestra Hombres que estudiais su historia ; no os
pobreza , blasonábais de espartano desinte fieis de los libros , escritos en buena parte
rés, á fuer de pechos generosos no ansia por los autores ó los cómplices del mal ;
bais otro fin , no os impulsaba otro móvil atended á los hechos , y á nada mas que á
que la prosperidad , y sobre todo , sobre los hechos; mirad lo quehabia, ved loque
todo , la libertad , la idolatrada hbertad de hay ; mirad lo que eran los revolucionarios
vuestra oprimida y gemebunda patria ; antes de la revolucion , mirad lo que son
ahora , ¡ oh pensamiento desconsolador ! ahora : el esplendor ha sucedido á la obs
habeis aceptado pingües sueldos, en retri curidad , la opulencia á la pobreza : hé
bucion de vuestros servicios, y habeis des aqui descifrado el enigma.
vanecido de un golpe el mas bello de los
encantos: habeis cometido una profanacion
sacrilega ; habeis colocado el oro junto al
entusiasmo » Esto les dicen sus adver
sarios , de los cuales no pocos fueron sus
amigos y auxiliares. Los comentarios y las «Todas las reputaciones se gastan, ex
consecuencias no son difíciles de alcanzar, claman ciertos hombres , es imposible go
no sabemos si lo siguiente podrá servir pa bernar; la capacidad mas aventajada, la
ra nada. probidad mas incorruptible, son inútiles;
En tiempo de las Constituyentes de 1812, porque á poco tiempo de figurar , caen en
y de la inauguracion de la escuela revolu el mayor descrédito. Esas revoluciones son
cionaria y volteriana en nuestro suelo, sa un monstruo que se lo traga todo : no sa
lieron á defenderla religion y la monarquía biendo que devorar consumen reputacio
algunos escritores , haciéndolo cada cual nes.» No tenemos costumbre de apadrinar
como mejor entendía , distinguiéndose uno la causa de la revolucion , ni tampoco sole
que otro por casualidades mas ó menos re mos encarecer la facilidad de gobierno , pe
levantes, pero abundando los mas de doc ro en esta parte no podemos sufrir que á la
trina y raciocinio. A parte la exaltacion de revolucion se le achaquen nuevos delitos ;
los ánimos, muy natural en el primer mo bastantes ha cometido que no consienten
mento de la lucha , y atendidas las insolen disputa ; no la calumniemos. Nuestra opi
tes provocaciones de los amantes de nove nion en este punto podrá parecer pere
dades , prescindiendo ademas de los manejos grina : como quiera no la tenemos por
y venganzas de los partidos, lo que decían desacertada. La revolucion no gasta las re
los mas aventajados adalides de aquella putaciones, loque hace es ponerlas á prue
lucha podia formularse en estos términos : ba; y esto es cosa muy diferente. Nos in
 251
dinamos á que la opinion pública lejos de ya para él el fallo de la historia. Varias
ser injusta ni severa , ha sido y es todavía cualidades se disputan á Martínez de la Rosa ;
demasiado indulgente. Hay capacidades que pero ¿quién pone en cuestion su honradez
no pueden conservarsu alta nombradla sino y su elocuencia parlamentaria? Quién nie
manteniéndose en misteriosas sombras. En ga á Galiano su ímpetu, álsturiz su firme
dándoles de lleno la luz, el prestigio desa za , á Lopez- su fogosa facilidad , á Toreno
parece. ¿Quién tiene la culpa? Hay vir su hábil travesura ! A Córdova y Zumala-
tudes hipócritas, hay probidades que no sir cárregui , quién los desconoce !
ven para la hora de la tentacion ; el cebo Todas las caricaturas del mundo no des
brinda , el peligro amenaza ; la probidad truyen un hecho; todos los artículos de
sucumbe; ¿quién tiene la culpa? Las revo fondo no lo crean. ¿Qué pudieran las ca
luciones sacuden , y agitan la sociedad ; el ricaturas contra Napoleon , á la vista del
mal campea , el bien se ve precisado á de orden público restablecido , de la adminis
fenderse; se forman diferentes bandos, se tracion organizada, y de las banderas to
ofrecen situaciones difíciles , la lucha se madas al enemigo? ¿qué valían los artícu
enciende , y en ella es preciso mostrar el los de un periódico ministerial , para real
temple de la espada , el corte de la pluma, zar el prestigio de Espartero? Se le ha
el tino gubernativo , la prevision política , llamado ilustre, invicto, honrado, patriota,
la firmeza de carácter , la energía de la vo modesto , desinteresado , y de esto cada cual
luntad, la elevacion de sentimientos, los ha creido lo que le pareciera bien ; pero
quilates de la honradez : se hacen traspa no se le ha llamado grande hombre , hombre
rentes los entendimientos y los corazones; de genio ; él propio nos ha dicho en un re
¿ quién tiene la culpa si son pocos los que ciente manifiesto , que no ambicionaba tal
salen airosos de la dura prueba? título , que no lo merecía ; ¡ Tanta es la
¿Cuántos son los hombres eminentes, ni fuerza de un hecho evidente !
aun distinguidos, á quienes la opinion pú Si todo el mundo supiera que sois un
blica no haga justicia ? Pocos son los que defraudador de los caudales públicos ¿de
reunen muchas cualidades sobresalientes, qué os sirve tener asalariados dos ó tres
cada cual está dotado de las suyas; y en escritores para que os llamen sin cesar,
estas el público no es tan injusto como se honrado, puro, desinteresado, hasta el fas
quiere suponer. Lo que hace es distinguir, tidio?
clasificar, otorgar lo merecido, y negar lo Todo se ridiculiza , y se hace objeto de
que se pretende sin razon. Acabamos de desprecio á un hombre quizás muy respe
atravesar una guerra civil , y estamos atra table , es verdad ; pero esto no afecta la re
vesando disturbios políticos: y sin embargo putacion tanto como se pudiera creer. A
recórrase el catálogo de los hombres que un político eminente que haya probado con
se han señalado por sus talentos, por su hechos su elevado talento , ¿ qué le impor
honradez, por su carácter, ó por otras ta que un papel sin firma le diga cuatro
cualidades buenas ó malas , en cualquiera desvergüenzas sacando á plaza su enorme
de los partidos, y se hallará que la verda nariz, su joroba, la corvatura de sus pier
dera opinion pública está fijada sobre su nas, su calva, pantuflas y leviton? El mun
mérito. En ciertas cualidades hay discre do está lleno de piernas derechas y de figu
pancia ; pero es de temer que en tal caso ras airosas y elegantes, en las que nadie
no serán ellas muy aventajadas. Cuando el piensa ; Talleyrand era cojo y dominaba la
sol brilla todos lo ven; aun aquellos á quie diplomacia europea.
nes ofende. En épocas turbulentas, si se llega de un
n Mas , ¿ no sabeis lo que suele decirse , modo ú otroá inutilizar poruna temporada
que la justicia no la hacen los contempo los talentos de hombres capaces de salvar
ráneos , sino la posteridad ? » Es cierto ; el pais , el interes público es lo que sufre ;
pero en tiempos de revolucion , la posteri la reputacion si es sólida, queda intacta.
dad se adelanta , los años son siglos , las Cuando se examina la conducta de un ge
generaciones viven muchas vidas, y antes neral desgraciado , se atiende al número y
que las notabilidades desciendan al sepulcro, clase
tuacion
de en
tropas
que de
se encontraba
que disponía; ,cuando
y á launsi
suele llegar para ellas el fallo dela historia.
¿Qué se ha hecho la divinidad de un famo nave no ha podido salvarse, no siempre s
so diputado de las constituyentes de Cádiz? achaca Ahorael se
naufragio
abre unaá lanuova
impericia
era ; del
vanpiloto
á po
y este diputado vive aun ; pero ha llegado
 — 232
nerse á prueba ciertos hombres ; seria bien gobierno espantoso, un desquiciamiento ad
posible que tuviésemos gran consumo de ministrativo que da vahidos; y descuella
reputaciones. finalmente, como un fantasma aterrador,
esa hacienda, que para mayor infortunio
acaba de salir de nuevo de las manos de
VI. Mendizabal.
Bien se echa de ver que no disminuimos
los obstáculos que hay para bien gobernar,
Los ejércitos pronunciados acaban de y que los pintamos con sus verdaderos co
entrar triunfantes en Madrid. ¿Cuál es la lores ; los hombres de la situacion no po
situacion de la capital de la monarquía? Es- drán quejarse de que no les suministremos
tan allí mezclados los generales de octubre excusas para los errores que puedan come
con los tribunos de 1840. Muy en breve ter ; pero en cambio les diremos tambien
estarán en movimiento todos los elementos los elementos favorables con que cuentan ,
políticos que se agitan en la Península : si que serán sus cargos, si con ellos no salvan
no se crea pronto y muy pronto un gobier el pais y á la Reina.
no fuerte, comenzará la discordia y segui Hay un gran pueblo entusiasta de la mo
rá la anarquía. ¿Cómo puede crearse este narquía, firmemente adherido á la Religion
gobierno? Es necesario un centro; y cen de sus padres , amante del órden y de la
tro no hay otro que la augusta Huérfana, justicia, sediento de paz y estabilidad, ene
esa Huérfana que se arrebata sucesivamen migo de teorías , despreciador de los char
te la fuerza armada ! — esa Huérfana que latanes, amaestrado con larga y costosa
en la Granja se ha visto asaltada por sar experiencia ; hay un pais abundante de re
gentos y entregada á manos de la revolu cursos, hay innumerables veneros de ri
cion ; que se ha visto arrebatada de los queza por explotar, hay muchas rentas que
brazos de su Madre por el general de los beneficiar; hay una situacion topográfica
ejércitos reunidos ; que en octubre ha oido que brinda á la independencia , y hay un
las descargas en las escaleras y salones de carácter fiero y brioso para hacerla respe
palacio ; y que al resonar los vítores de los tar; ¿qué falta pues? Falta una cosa muy
que acaban de libertarla , á las órdenes de sencilla , y sin embargo difícil ; falta que los
Azpiroz yNarvaez, ignora lo que hay, tiem hombres que se coloquen á la cabeza de la
bla , llora y pregunta , si efectivamente gri nacion se convenzan de su fuerza si se apo
tan Viva la Reina ! Hombres de la situa yan en los elementos de bien , y que no se
cion , reflexionad sobre lo que os dicen estos crean forzados á tener contemplaciones á
hechos ; y si sois hombres de estado , acre los elementos del mal ; falta que acierten á
ditadlo de una vez. mostrarse como protectores de las grandes
Se necesita un gobierno fuerte , no nos ideas nacionales, que de esta manera exci
cansaremos de repetirlo; sin él, tendremos ten el interes de la inmensa mayoría del
arbitrariedad con pretexto de orden , li pueblo español ; de ese pueblo que hace
cencia con nombre de libertad. No bastan anos está esperando que un verdadero go
reconciliaciones entusiastas, no bastan abra bierno le llame en su auxilio, para hundir
zos; los individuos ni los pueblos no viven en el polvo á esas pandillasque le atormen
de escenas de teatro ; los síntomas que es tan , le despojan , y por añadidura le in
tamos viendo , nos indican la gravedad de sultan.
un Lamalsusceptibilidad
que en vanosey trataría
los intereses
de encubrir,
de In Ved lo que ha sucedido , y conjeturad lo
que sucederá. Habeis clamado ¡El pais y la
glaterra han quedado heridos, la vanidad Reina están en peligro ! y el pueblo español
y la ambicion de la Francia se habrán dis se ha levantado como un solo hombre, y
pertado , los pretendientes á la mano de la os ha dicho : « ¿ dónde están los enemigos
Reina se pondrán en movimiento ; los par del pais y de la Reina?» Se los señalasteis;
tidos temerosos de perder demasiado en la un instante despues va no existían.
transaccion , suscitarán cuestiones sobre Ias El pueblo español , ese pueblo que no
cláusulas del contrato; quien posee no sabe sino pelear y vencer, se retirará con
querrá desasirse, y quien no tiene deseará la generosa confianza que abrigan los pe
adquirir; hay la cuestion dela mayoría, la chos nobles y valientes ; despues de haber
del reconocimiento de las potencias del disipado con un soplo á vuestros adversa
Norte, los negocios de Homa; hay un des rios os dejará hacer ; muy desleales é
 — 233 —
ingratos fuerais si la eni no saldrémos jamas de estados de sitio, de
No ignora la nacion que la medidas dictadas por la salud del pueblo ; y
extraordinaria , que en medio de la insur este mal será irremediable, porque su raiz
reccion desaparece la legalidad ; y que no no estará en los hombres sino en las cosas.
puede reclamarla estricta en los momentos Colocad en el gobierno á hombres de opi
críticos de la victoria ; cuando ha quedado niones templadas, y de intenciones rectas y
una Reina menor de edad, sin regencia, pacíficas; si su poder es débil, ó serán
sin ministerio nombrado por los trámites echados de sus puestos, ó abdicando sus
legales ; por lo mismo no os pedirá cuenta opiniones, y olvidando sus hábitos, se con
de si habeis puesto ó nó el pié sobre el lin vertirán en opresores.
de de la ley , sino de si habeis salvado el
pais ónó. Salvadle y no temais: el paisque
sufre tantos estados de sitio , tanías medidas VIII.
de salvacion pública , tantos velos echados sobre
la estatua de la ley, tolerará sin duda que le
salveis , sea ó nó en el terreno de la estric Salgamos del terreno de la política , que
ta legalidad; deesa legalidad que años hace está volcanizado; mientras permitais que se
ha desaparecido, que todos invocan y que revuelva , temblará el suelo bajo vuestras
nadie observa. Las revoluciones comienzan plantas. Siempre se habla de Constitucion ,
saliendo del terreno de la ley, y ninguna termi siempre de leyes orgánicas , siempre de go
na en el terreno de la ley; se empieza cla bierno y oposicion , siempre de sistemas
mando por las garantías legales, y se acaba políticos ; nunca de buena administracion ,
por hacer necesario un poder discrecional. de arreglo de hacienda, de instruccion pú
¿Qué importa que lo ejerzan las juntas ó blica; siempre del instrumento, nunca del
los militares, las convenciones ó los dicta artefacto. Olvidase que las formas políticas
dores? Si en tanto abuso como se ha hecho son un medio , y se las considera como fin ;
en España del poder discrecional, se halla mejor dirémos, se aparenta considerarlas
se quien lo empleara en salvar la patria, á como tal; porque en el fondo de las cosas,
buen seguro que en lugar de la Roca Tar- en la realidad , patente ya á los ojos de todo
peya, le esperaría el Capitolio. el mundo , lo que obra , lo que remueve ,
lo que agita y perturba , son la ambicion y
la codicia; y tal vez, y sin tal vez, mas la
va. codicia que la ambicion.
Un hombre que tenia inmensos caudales,
no sabiendo en qué emplearlos, dio en la
Si no se quiere un gobierno fuerte , si se tarea de hacerse fabricante. A costa de mu
oponen obstáculos á su establecimiento so chos sacrificios adquirió una máquina , que
pretexto de combatir la tiranía , tendremos en su concepto era lo mas admirable que
á centenares los tiranos ; porque lo hemos imaginarse pudiera. Fuerza motriz muy po
dicho y lo repetimos : lo» gobiernos opre derosa , combinaciones ingeniosas y elegan
sores no son los fuertes sino los débiles. El tes, mucho tino del constructor en acomo
fuerte puede marchar á la luz del dia , no darla al objeto para hacerla elaborar en
ha menester las maquinaciones tenebrosas ; abundancia productos los mas exquisitos,
no necesita medidas violentas , porque cuen todo este conjunto tenia embelesado al due
ta con la debida fuerza para hacer observar ño , y le hacia esperar que los capitales in
las leyes; no es suspicaz ni perseguidor vertidos en la compra , estarían muy bien
porque puede despreciará sus enemigos, empleados; y no se arrepentía de haber
estando seguro como está de anonadarlos si dejado vacías sus arcas. Rodeado de amigos
se atreven á levantar la cabeza. Esto ense que le felicitaban por su adquisicion , em
ñan la razon , la experiencia , la historia ; briagado de gozo y desvanecido de orgullo,
que DO lo pierdan de vista todos los hom se felicitaba á sí propio por el acierto de su
bres amantes de su patria ; nuestra necesi plan ; y ya solo pensaba en buscar un hom
dad urgente, apremiadora, es un poder bre de habilidad y confianza para encargar
fuerte; sin él no hay esperanza de salva le de la direccion de la máquina. Aquí fué
cion, sin él sufriremos la mas bastarda y la donde tropezó el buen especulador. Direc
mas estéril de las tiranías, que es la im tores encontraba muchos, pero bueno nin
puesta por las pandillas y facciones; sin él, guno. Se allanaba y nivelaba el terreno, se
 234 —
mudaban los operarios, se hacían continuas
reformas, la máquina no funcionaba. Los
directores renunciaban , ó el dueño los des
pedía ; la máquina no funcionaba. Quien
luchaba con un inconveniente , quien se LA FOBLACIOIT.
excusaba con otro; pero ninguno se olvida
ba de decir que la envidia no podia perdo
nar la introduccion dela máquina . y que
por mil medios tenebrososy pérfidos procu
raba embarazar su movimiento para que no Artícilo 3.°
diese productos. Seis años habian trascurrido
y todavía el pobre fabricante, sin haber vis
to un producto, estaba arreglando la má
quina; los gastos eran muchos, loseuidadcs
sin cuento , la desesperacion estaba en su Afírmase comunmente que el aumento
colmo. Consultaba un diaáunode sus ami de la poblacion se verifica en progresion
gos, y este compadecido de su situacion y geométrica : esta proposicion asentada en
viendo la trama infernal de que era víctima general no significa nada ; porque el valor
el desgraciado capitalista, le dijo: «si la de la progresion depende de la razon
máquina funciona, los efectos fabricados de de la misma, y varía con ella en una
berán salir con regularidad ; los gastos esta escala infinita. Si formamos una en que el
rán sujetos á cálculo si nó riguroso, al menos primer término sea 1 y la razon 2, tendre
aproximado ; y los salarios asi del director mos la siguiente: 1:2:4:8: 16: 32: etc.;
como de los operarios , serán fijos. Ahora pero si la razon es 10 , resultará esta otra:
todo es arbitrario: ¿quién puede saber lo 1: 10: 100: 1000: 10000: 100000 etc.
que cuesta una reforma en la máquina , y etc. ; donde siendo uno mismo el primer
sobre todo el desbaratar los manejos de los término , nos encontramos ya en el sexto
que intentan seducir á los operarios, y qui con una diferencia tan enorme como va
zás se proponen destruirla? ¿Quién examina de 32 á 100000. Sea cual fuere la razon
si los que se melen á directores ó á refor que se señale á la progresion , cuéstanos
madores, están adornados de los conoci trabajo el creer que en esta materia pueda
mientos suficientes para el desempeño de su establecerse nada fijo : porque son tantas
tarea? Todos se apellidan maquinistas, to las causas que en ella se combinan , y de
dos tienen su voto, y lo que es peor, todos ben de existir tantas otras cuyo concurso
cobran su salario. Estableced una regla muy no nos es conocido , que muchas veces re
sencilla : nadie percibirá un maravedí hasta solveremos el problema faltándonos datos
que la máquina funcione; y al dia siguien muy esenciales. La emigracion y la inmi
te , ó la máquina funcionará ú os habreis gracion pueden fácilmente sujetarse á cál
quedado libre de directores y maquinistas.» culo; pero ¿quién verifica lo mismo con
Dicen que se puso en planta el consejo y el respecto á los medios de subsistencia , y la
pobre capitalista se vio libre de trampas. accion del clima é influencia de las leyes y
En tan delicada materia conviene no fiar costumbres del pais? Estos son datos suje
se de colores, ni pretextos, ni apariencias tos á mil y mil modificaciones por su mis
las mas inocentes; que comodecia Cervan ma naturaleza ; y además , el primero y ef
tes :« de todo hay en el mundo ; y esto de último cambian muy á menudo , hasta con
la hambre, tal vez hace arrojarlos ingenios respecto á un mismo pueblo.
á cosas que no están en el mapa.» Así, para apreciar el verdadero estado
Cuando las revoluciones están en el pe de los medios de subsistencia , y el influjo
ríodo de caducidad, loque se llama pasiones que su abundancia ó escasez puede ejercer
políticas , no suelen-ser mas que pasiones par sobre la poblacion , es necesario atender al
ticulares. — J. B. estado de la riqueza del pais , á la manera
con que se halla distribuida , y á las nece
sidades del pueblo que es objeto del exá-
men. De poco serviría el saber la suma
total de la riqueza , si se ignorase el modo
con que está repartida ; porque seria posi
ble que de dos paises donde los productos
 — 235 —
de la tierra fuesen muy desiguales, abun animales, que para vivir han menester un
dasen mas los medios de subsistencia en determinado grado de latitud ; se multiplica
aquel cuyos productos fuesen menores. en el Norte como en el Sur , en los hielos
Esto que á primera vista podría parecer del Polo como en los ardores del Trópico;
una paradoja , es sin embargo una verdad porque el Criador que ha hecho al hombre
muy sencilla. Demos que en el pais A sean señor de la tierra , no ha querido quitarle
mayores los productos que en el pais B; si la libertad de establecerse donde mejor le
en este último son repartidos de una ma agradara.
nera mas equitativa , sin arrendatarios que La influencia de la legislacion y de las
estrujen , sin amos que exijan mas de lo costumbres no es menos difícil de apreciar;
razonable y justo , cuando en aquel los su bastando para convencerse de ello, dar una
dores del infeliz labrador van á parar á ojeada sobre los objetos que abarcan. Con
manos improductivas, para ser luego con sidérese que podrán ejercer influjo sobrela
sumidos lejos de la tierra , claro es que con poblacion no solo las leyes económicas , si
mucho menos productos vivirán los natu no tambien las políticas; y añadiéndose á
rales con mas holganza, y por consiguiente esto que las costumbres no se han de mirar
propiamente hablando , los medios de sub únicamente con relacion á la moral, y que
sistencia serán mayores. Aun supuesta la bajo otros aspectos podrán tambien contri
igualdad de medios de subsistencia será buir al aumento ó á la disminucion, se in
muy diferente el efecto que producirá so fiere que son muchos y muy varios los
bre la poblacion , segun las necesidades de puntos de vista que la cuestion puede pre
los habitantes. Los pueblos son como los sentar.
individuos: unos son mas delicados, otros Volviendo á la progresion geométrica
mas sufridos ; lo que para unos es suficien que algunos aseguraron ser la ley del au
cia para otros es escasez ; lo que para unos mento de la poblacion , dudamos mucho
es una comodidad, para otros es necesidad que se pueda apoyar semejante opinion en
imprescindible. sólidos fundamentos. ¿Dónde están las ra
La accion del clima no será tampoco tan zones que la sostienen , ni los datos que la
uniforme y constante como se pudiera confirman?
creer: porque es evidente que segun sea Ya hemos dicho que los que hablan de
la naturaleza del cultivo, y la mayor ó progresion geométrica nada significan , por
menor policía sanitaria , se pondrán ó re que las hay tan varias, cuantas son sus ra
moverán causas favorables ó contrarias al zones; ó lo que es lo mismo, cuantos son
aumento de la poblacion , con respecto al los valores por los cuales se multiplican los
número de los nacimientos y al de los términos de la progresion. Pero ni aun su
muertos. La experiencia nos enseña que á poniendo establecida una razon fija, lo que
veces la desecacion de un terreno pantanoso es muy difícil , tampoco queda bien claro
produce efectos admirables sobre la salud lo que se expresa con el aumento en pro
de una comarca antes enfermiza ; y que gresion geométrica: por que entonces será
hábitos de mayor limpieza , y algunas pre necesario saber el número de años á que se
cauciones en la cualidad de los alimentos, refiere la progresion , pues llegaremos á
hacen desaparecer rebeldes dolencias que resultados muy diferentes, segun este nú
eran miradas como propias del clima. Asi mero sea mas ó menos grande. Asi, admitien
el determinar la accion de este sobre el do la progresion geométrica 1:2: 4: 8: 16: ú
aumento de la poblacion ha de ser por ne otra cualquiera, es claro que si los términos
cesidad un problema sujeto á una muche expresados se distribuyen en períodos de
dumbre de datos, todos muy variables; 10 años , por manera que el cumplimiento
porque siempre será muy difícil el discer de cada término se realice en este espacio,
nir hasta qué punto provienen directamen será el resultado mucho mas favorable á la
te de la accion del clima los efectos buenos poblacion, que si se los distribuyese en pe
ó malos, que se experimentan. Además, ríodos de 20 años , ú otro mayor. Siendo
estamos viendo que ciertas comarcas antes los períodos de 10 años, al fin de un siglo,
muy pobladas , se hallan en la actualidad estaríamos en el término décimo de la pro
casi desiertas; y al contrario, otras que gresion, ó sea 512; cuando si fuesen de 20
en tiempos anteriores escaseaban de pobla nos hallaríamos en el quinto ó sea 16.
cion, abundan ahora de ella. La raza hu Se ha dicho, que el aumento de la po
mana no es como la de ciertas plantas y blación y el de los medios de subsistencia,
 — 236 —
están entre sí como dos propresiones geo vendría representada por 100. De aqui se
métrica y aritmética , expresándose el au ha pretendido inferir, que conocida la ley
mento de la poblacion por la geométrica, del aumento, podemos conocer la suma de
y el de los medios de subsistencia por la los obstáculos y vice-versa; porque no será
aritmética. Si esto fuese verdad , tomando menester mas sino representar por un núme
por razon de la geométrica el número 2, y ro , uno cualquiera de los términos , y for
para la aritmética el 1, tendríamos: mar su cuadrado ó sacar su raiz cuadrada,
Aumento de la poblacion.. . 1:2:4:8:18:32:65: segun sea la cantidad que se trate de ave
Ue los medios de subsistencia 1.2.3.4. 8. 6. 7. riguar. ¿La velocidad con que la poblacion
Pero si tomamos el 2 para ambos , nos tiende á aumentarse, es ti? la suma de los
dará: obstáculos será 36. ¿La suma de los obs
táculos es 49? la velocidad será 7. Todo
Aumento de la poblacion.. . 1:2: 4:8:lfi:3>:fi4: esto
De los medios de subsistencia 1.3.8.7. 9.11.13. escrito es ; muy
quizáshermoso
no lo sea
, muy
tanto sencillo
para practi
para .
Si tomásemos por razon el número 3, cado.
los resultados serian todavía mas dife Sean cuales fueren los datos y combina
rentes. ciones en que se funde semejante proposi
Aumento de la poblaciou. . . 1:3: 9 27:81:243:
10. 13. 16. cion, datos y combinaciones que, sea dicho
Ue los medios de subsistencia. 1.4.7 de paso, deben ser mirados con mucha
Es evidente que los resultados pueden desconfianza, échase de ver á la primera
variar hasta lo infmito, segun la razon que ojeada, que se encierra en la pretendida
se elija, y segun sea para ambas progre ley un vicio radical que ninguna modifica
siones una misma ó nó. cion es bastante á corregir. Distínguensc
¿Cómo se determinan estas condiciones? en ella dos cantidades que en rigor no pue
Creemos que por lo que la ciencia ha podi den distinguirse : la tendencia al aumento,
do adelantar basta el presente, debería y la resistencia que se le opone. En efecto,
mantenerse en prudente reserva , esperan la tendencia al aumento no es ni puede ser
do el acopio de mayor número de datos, y una cantidad fija, independiente de toda
que á la luz de estos hubiese podido adqui otra , porque estando necesariamente enla
rir mayor vigor el raciocinio. Se ha queri zada con las circunstancias favorables ó
do aplicar el cálculo al problema de la po contrarias , no se la puede suponer en ac
blacion : pero es de temer que en el ensayo cion con una fuerza propia y aislada. Uno
no alternen con demasiada frecuencia las de los obstáculos mas visibles al aumento,
hipótesis con la realidad. Es bien sabido es la falta de medios de subsistencia , asi
que al cálculo se le hace producir el resul como uno de sus mejores auxiliares es la
tado que se quiere , con tal que al calcula abundancia de dichos medios; luego cuan
faltando
dor se leesta
permita
, ó convenciéndola
una suposicionde ; pero
arbitra
en \ do se considere la tendencia al aumento no
se puede prescindir de la abundancia ó es
ria , el edificio viene al suelo. casez , pues que esta escasez ó abundancia
Mr. Quetelct pretende haber descubierto entrarán como factores ó de otra manera,
que la resistencia ó la suma de los obstá en la formacion de la cantidad expresiva
culos que se oponen al desarrollo de la po de la indicada tendencia.
blacion , se halla representada por el cua Si damos que el aumento sea 8, ¿cuánta
drado de la velocidad con que ella tiende á será la tendencia al aumento? si es el mismo
aumentarse. Notable fuera que la ley que 8, entonces no es necesario excogitar se
en el mundo físico rige con respecto á la mejantes leyes, porque siendo la tendencia
resistencia de los medios por los cuales igual al aumento , sabido este, se conocerá
atraviesan los cuerpos en movimiento, tambien aquella. Será pues necesario de
se observase tambien en el movimiento de cir, que el aumento será menor que la
la poblacion ; pero la hermosura de una tendencia , por estar la accion de esta de
analogía no responde de su verdad. bilitada por la resistencia de los obstáculos;
Segun la ley indicada , tendríamos , que y en tal caso nos hallaremos con la dificul
si en un pais la tendencia al aumento de la tad de haber de determinar el valor de la
poblacion fuese como 5 , la suma de los tendencia. Pero como no la podemos cono-
obstáculos
suponiendo
fuese como vendría
otro
10 , lapais
suma
expresada
donde
de loslapor 25; y || de
obstáculos
tendencia cer ápriori,
cir síque
arrojan habremos
habremos
las tablas de
de tropezarapelar
con ála
estadísticas , lo
es que
de
 — 23
el
valor de la tendencia, sin saber hasta qué
punto se combinan en formar semejante
aumento
Este será
, laun
tendencia
problemay los
de obstáculos.
los que se ape
llidan indeterminados , en que para deter
minar una incógnita es necesario suponer
valores á las demás. Asi el número 8 , ex
presion del aumento, podrá haber dimana
do de infinitas combinaciones. Para no
complicar mas la cuestion y presentarla
bajo un punto de vista al alcance de todas
las inteligencias, haremos patente esta ver
dad , valiéndonos únicamente de cantida
des positivas y negativas combinadas tan
solo por via de adicion ó sustraccion ; por
que aun cuando no sea este el modo con
que se combinen , en nada obsta á lo que
nos proponemos; pues las combinaciones
por multiplicacion ó division harían el pro
blema mas complicado , lo que favorecería
á nuestro intento. Demos que la tendencia
sea 12 y la suma de los obstáculos 4 , re
sultará 12 — 4 = 8; si suponemos que la
tendencia sea 16, y la resistencia 8 , ten
dremos 16 — 8 = 8; si damos que la ten
dencia sea 30 y la resistencia igual á 22,
resultará 30 — 22 = 8. Es evidente que
por el mismo tenor se podrían formar infi
nitas combinaciones; luego teniendo el 8 y
sabiendo que ha provenido de una combi
nacion de valores opuestos , ó sea de tenden
cias y obstáculos, no podremos conocer el
uno, sin que hayamos determinado los otros.
Todavía mas: si se quiere suponer la es
presada tendencia como un valor indepen
diente de los obstáculos , se la podrá tam
bien mirar como independiente de las
causas auxiliares; entonces será preciso
atender al concurso de las circunstancias
favorables y contrarias, lo que aumentará
la complicacion del problema.
Ya prevemos que se nos dirá que la ten
dencia no es una cantidad abstracta , sino
que está formada de la reunion de las cau
sas favorables al aumento ; pero en este
caso se ve todavía con mas claridad, con
cuánta razon afirmamos que hay aqui con
fusion de ideas. Porque las circunstancias
favorables reducidas á espresion muy pe-
á ser contrarias, ó en otros
la ausencia ó la disminucion de
las mismas es un verdadero obstáculo ; asi
los medios de subsistencia en cantidad cre
cida son circunstancia favorable , la esca
sez de los misinos es circunstancia contra
ria. Luego es cierto lo que hemos afirmado
de que la tendencia no puede considerarse
aislada de los obstáculos , pues que estos
entran por necesidad cuando se trata de
fijar el valor de aquella.
Solo en un caso podríamos suponer in
dependíente esta tendencia, á saber, si en
la naturaleza existiese una ley fija que pu
diese tomarse por tipo , pues entonces refi
riéndonos á (illa tendríamos para el cálculo
una base. Pero esta ley no existe , ni exis
tir puede ; dado que tampoco prescinde la
naturaleza de las circunstancias que rodean
al ser que se ha de multiplicar. El proble
ma de la poblacion no recibe su complica
cion extremada del estado social; ora viva
el hombre en sociedad culta ó bárbara, ora
divague por los bosques en hordas salva-
ges, á manera de los brutos, siempre re
sultará muy difícil el determinar la ley del
aumento de la poblacion, ó mejor diremos,
siempre será este un problema en que en
trarán muchas variables cuya determina
cion dependerá de mil y mil circunstancias
locales, sobre las que es muy arriesgado
establecer una proposicion general.
No se nos diga que el fenómeno del
mundo físico al cual se refiere la analogía
incluye tambien variedad de circunstan
cias, las que si bien deben tenerse presen
tes cuando se trata de un caso particular,
no impiden que pueda asentarse un verda
dero teorema científico. Cuando se dice
que la resistencia de los medios está espre
sada por el cuadrado de la velocidad de los
cuerpos que los atraviesan , es cierto que
la aplicacion de la regla general dependerá
de la diversidad de dichos medios y de la
velocidad de los cuerpos; pero es evidente
que esta velocidad y esos medios son cosas
enteramente distintas, independientes, que
nada tienen que ver la una con la otra , si
no cuando se encuentran en accion combi
nada sus fuerzas respectiv as. El cuerpo que
atraviesa un medio luchando con la resis
tencia que este le opone , ha salido de un
punto con una velocidad propia y que solo
dependía del impulso ó de la atraccion que
se la ha comunicado. Cuando esta veloci
dad lucha con la resistencia del medio,
cha con fuerza propia ; y lo que de (
pierde á causa del obstáculo, lo tenia inde
pendientemente del medio por el cual atra
viesa. Hé aquí reducida á pocas palabras la
dificultad que estamos esponiendo. En el
fenómeno físico hay una fuerza primitiva,
fija, sometida á una ley; en el fenómeno
social , nó.
 — 238 —
Al proponer estas objeciones no lo hace- porque el problema no encierra bastantes
; por el prurito de suscitar dudas, ni de datos para llegar al descubrimiento de la
apartarnos de la opinion de los otros , sino incógnita ó incógnitas que se buscan. En
espresando nuestras íntimas convicciones y tal caso , el que mejor resuelve el proble
con el deseo del adelanto de la ciencia. Es ma es el que dice, que no se puede re
preciso no perder de vista , que la econo solver.
mía política por mas importancia que se la I Y cómo se quiere que nos demos por
quiera dar, no ha salido todavía de la edad satisfechos de lo que se afirma sobre la po
infantil. En lo que tiene de ciencia propia blacion , cuando los datos escasean , los que
mente dicha, es invencion muy moderna; se tienen son mal seguros , y por otra parte
y no es regular que á este ramo del huma conducen á resultados muy diferentes del
no saber la haya cabido mejor suerte que que pretenden los mismos que nos los ofre
á los demás, los que para dar algunos pa cen? Ya que á números se apela, apele
sos hácia la perfeccion han tenido que es mos tambien á números, y veamos qué es
perar largos siglos. Échese una ojeada por lo que de los mismos se infiere.
el horizonte de las ciencias, y se verá con Examinando el curso que ha seguido la
firmada de una manera patente esta obser poblacion en Inglaterra durante 130 años
vacion : solo á fuerza de sudores y afanes hé aquí el estado que resulta :
va conquistando el hombre sus progresos;
en rededor de él se halla la verdad , pero ANOS. POBLACION.
no acierta á encontrarla sino despues de
haber abrazado una y mil veces el fantas 1700 5.13-1,510
ma del error. Diríase que la naturaleza se 1710 5.066,337
complace en ocultarle sus secretos , en cu 1720 5.315.351
brirlos con cien velos , en encerrarlos con 1730 5.687,993
cien llaves: justo castigo de haber prestado 1740 5.829,705
oidos á la palabra de orgullo : sereis como 1750 6.039,681
dioses , sabiendo el bien y el mal. 1760 6.179,730
Las lisonjas tributadas á la ciencia pro 1770 7.227,586
ducen un efecto semejante á las que se dis 1780 7.811,827
pensan al hombre ; lo que es muy natural, 1790 8.510,738
porque en último resultado el hombre mis 1800 9.187,176
mo es quien las recibe. Si al presentarse 1810 10.107,556
un principio se le abraza desde luego como 1820 11.957,565
cierto y evidente , el que lo presenta no se 1830 13.810,751
tomará la pena de examinarlo de nuevo; y
pasará como cosa averiguada y que no con Basta echar una ojeada sobre el estado
siente disputa , lo que en realidad es un que precede, para ver que no existen , ni
aserto arbitrario. Si al ofrecerse un racio por asomo, las pretendidas progresiones
cinio se le admite por ligereza como una aritmética ó geométrica. En el primer de
demostracion inconcusa, el que lo habrá cenio la poblacion disminuye, en el segun
formado no cuidará de someter á exámen do vuelve á crecer, recobrando lo que ha
las proposiciones que contiene, ni el enlace bia perdido, y escediendo en cantidad
de las mismas; y tal vez el sofisma mus bastante considerable de lo que era al prin
grosero quedará reconocido por argumento cipio del primero. Por manera que durante
indestructible. Los enemigos de la ciencia medio siglo no se aumenta la poblacion mas
no son los que no admiten sino con mucha que de unas 900 mil almas, y esto sin nin
dificultad los principios y las deducciones; guna regla fija. 50 años se necesitaron para
antes al contrario , ellos contribuyen tanto dicha cantidad, cuando notumos que en los
mas al progreso de las mismas, cuanto mas 20 siguientes el aumento fue de cerca de
escrupuloso es el rigor con que las obligan 1.200,000 almas, creciendo considerable
á caminar
Cuando sobre
se trataundeterreno
resolver
firme seguro. mente en los decenios sucesivos , pero sin
uny proble
que tampoco se descubra en el aumento
ma , no siempre conviene engolfarse desde ninguna regla constante.
luego en cálculos complicados; un ojo es- Desearíamos que se nos manifestase ve
perimentado descubre quizás á la primera rificada aquí ninguna de las leyes que se
mirada, que todos los cálculos son inútiles, establecen; y supuesto que se tiene el au
mento , se sacase la suma de los obstáculos economista mucho que saber , pues nece
que á él se oponían. sita varias clasificaciones cuyo conocimien
Hé aquí otro estado curioso sobre los to no les es tan necesario á los gobernan
Estados-Unidos. tes, y además ha menester el cotejo de
unas épocas con otras , para que no le su
aSos. ceda el tomar por regla lo que tal vez sea
una rara excepcion ?
1780 2.051,000 Asi por lo tocante á la poblacion como
1790 3.929,326 con respecto á todo lo demás , es preciso
1800 5.306,035 que la economía política se resigne por
1810 7.239,703 ahora al puesto que le corresponde. Toda
1820 9.654,415 vía no han pasado sobre ella los siglos , to
1825 10.438,000 davía sus trabajos no han sido fecundados
con el sudor de largas generaciones de
Es asombroso el aumento de poblacion hombres ilustres. Ella tiene además otro
que arroja el estado precedente ; pero es inconveniente , cual es, el necesitar el au
fácil observar que el desarrollo no sigue xilio de los gobiernos ; porque cuanto me
tampoco una ley constante. En el primer jor organizada se halle la administracion
decenio cuasi se duplica la poblacion ; en pública , tanto mas fácil le será el adquirir
el segundo , si bien no deja de ser mucho los datos sobre que esta ciencia debe ci
el aumento , no lo es ya tanto como en el mentarse.
anterior ; y mucho menos lo es en los si Y no basta que estos datos se recojan en
guientes. En tan pocos años no vemos nin dos ó tres naciones ; es preciso que la ex
guna regla fija; ¿qué seria pues si pudié periencia se haga en muchos y varios luga
semos observar el fenómeno por espacio de res, que la vida y la reproduccion sean ob
algunos siglos? servadas bajos condiciones muy diferentes;
A mas de todas las dificultades propues porque de otra suerte se corre peligro de
tas contra las reglas generales , y las pro tomar por regla lo que no es mas que ex
posiciones gratuitas , media en estas mate cepcion. Esto es difícil, penoso, desconso
rias una poderosísima , la que no diremos lador ; es cierto ; pero tal es la ley de la
que deba desalentar, pero sí inspirar suma humanidad : en la carrera de las ciencias,
desconfianza á los amantes de la verdad. se siembra hoy , pero el fruto no se recoge
De ello quisiéramos que se persuadiesen hasta pasados muchos siglos.—J. B.
profundamente los aficionados á la ciencia,
para resignarse mas fácilmente al papel de
meros investigadores , y á preparar mate
riales con los que en los siglos venideros POLEUICA RELIGIOSA.
pueda levantarse el edificio de que algunos
pretenden ser desde ahora los arquitectos.
Hablamos de la dificultad de recoger los
datos, siquiera con alguna aproximacion,
condicion imprescindible si se quiere dar
un paso seguro. EXISTENCIA DE DIOS.
Desgraciadamente, hay muy favorable
disposicion para aceptar como positivos y
exactos, todos los que se ofrecen por un
conducto cualquiera, porque con esto que
da salvada una de las tareas mas penosas y Cada dia nos estamos dirigiendo á loses-
prolijas, y el autor se pone á cubierto en cépticos; justo es que pensemos tambien
la conciencia de los demás , y tal vez en la en los incrédulos. Y nó porque los argu
suya propia, cerrando los ojos, y desva mentos con que son combatidos los prime
neciendo asi los escrúpulos que pudieran ros no militen contra los segundos; supues
ocurrir. ¿ Quién ignora lo difíciles que son to que unos y otros carecen de fe; sino
semejantes operaciones? ¿Y quién no vo porque distinguiendo como distinguimos
que cuando un gobierno habrá llenado va entre el estado de sus espíritus , conviene ,
su principal objeto que es saber á cuánto segun se disputa con estos ó aquellos, pre
se eleva la poblacion , todavía le queda al sentar reflexiones diferentes, ó al menos
 — 240
ofrecerlas bajo diversa forma. Al abrir en del hombre , será preciso detenerse en i
el primer número de esta Revista la Polé punto. Desgraciadamente, en nuestros tiem
mica Religiosa , los clasificamos de esta ma pos es preciso probar, hasta aquellas ver
nera: «El escéptico dice; no sé... dudo... dades , que por ciertas y evidentes no de
qué sé yo » «El incrédulo dice: «no bieran entrar en el terreno de las disputas;
creo nada » cuidando luego de desenvolver como todo se contradice, todo necesita
con alguna latitud el significado de estas pruebas.
fórmulas (1). \ amos ahora á examinar ese Los que niegan la existencia de Dios ,
orgulloso dicho; vamos á demostrar con no pueden haber abrazado semejante doc
toda evidencia en una série de artículos , trina arrastrada por la fuerza de la autori
que ese « no creo nada » que tan satisfe dad agena; contra ellos está el linage hu
chos pronuncian ciertos hombres es el col mano. Por lo mismo debieran al parecer
mo de una frivola vanidad que no se her estar apoyados en razones poderosas , ya
mana muy bien con la ciencia , ni siquiera que se creen con derecho de aislarse de
con el sentido comun. todos los demas hombres , negando lo que
Si dijerais que dudais, si dijerais que estos han admitido, ¿Y qué razones son
vuestro espíritu disipado por el escepticis esas? son la negacion de todas, son el caos
mo de la época , y distraido con las ilusio en las ideas, el anonadamiento de la inte
nes de un mundo seductor, siente un des ligencia. Si para convencerse de que hay
caecimiento, una postracion que no le un Dios fuese necesario penetrar los mis
permiten levantarse á la altura necesaria terios de la naturaleza, ahondar en las pro
para creer, sabríamos lo que significais: fundidades
nocimientosdel
históricos
cálculo,y filosóficos,
poseer extensosco-
no seria
sabríamos que sin que la religion sea ver
dadera, tampoco afirmais que sea falsa; tan extraño que la pereza de examinar , ó
fuerais como soldados que habiendo aban la incapacidad de comprender , llegasen á
donado su bandera, no tienen bastante tanto extravío ; pero cuando basta levantar
avilantez para declararse en rebeldía y se los ojos al cielo para conocer al Criador
contentan con andar errantes; mostraríais del firmamento , cuando la tierra con sus
en la incertidumbre de vuestros pasos que innumerables maravillas nos está presen
recelais haberos extraviado, y que abrigais tando á cada paso de mil maneras diferen
algun deseo de tornar al verdadero cami tes , á cuál mas elaras y mas obvias , la
no. Pero cuando proferís el orgulloso « no mano del Supremo Haceder, el profesar el
creo nada » dais á entender algo mas que ateismo es un abuso lamentable de las fa
la ausencia de la fe ; calificais de falsa la cultades intelectuales y morales ; mejor di
eterna verdad ; y los dogmas mas veneran remos , es empeñarse en embotarlas todas,
dos é inconcusos los mirais como cuentos á en dejarlas sin uso , para que no vean al
propósito para divertir la infancia, como que está en todas partes , y en quien vivi
antiguas leyendas salidas de imaginaciones mos , nos movemos y somos.
exaltadas y enfermizas. Este suele ser el Como quiera no nos contentaremos di
comentario con que ampliais vuestra seca ciendo que es cierta , que es evidente la
negativa. verdad que sustentamos; procuraremos de
mostrar que lo es. En cuanto nos sea po
sible hablaremos al alcance de todas las
I. inteligencias; sin dispensarnos jamas del
rigor dialéctico ; pero si alguna v cz nos en
golfamos en cierta clase de argumentos que
Es imposible entablar discusion religiosa no todos comprendan ; recuérdese que los
de ninguna clase, sin tener antes asentada ateos han preguntado al cielo y á la tierra
la existencia de Dios ; porque sin Dios no de todas las maneras imaginables , para
hay religion , y cuanto sobre ella pudiera arrancarles una respuesta que negase al
decirse no fuera mas que una série de ne Criador.
cedades y absurdos. Temerosos pues de
que los queno creennada, cuenten tambien II.
la existencia de Dios entre las invenciones
Si Dios no existe , el universo y cuanto
hay en él ha sido hecho por casualidad : es
{ 1 ) Véanse las páginas 20 y siguientes. decir sin designio, sin plan, sin inteligen-
 — 241
Todo está sujeto á una fatalidad ciega, que estribar , no les es posible levantar e\
que no es nada , que no significa nada. De edificio de su ruinoso sistema.
nada se puede dar razon; y cuando nos pa El acaso es nada , y por lo mismo es tan
rezca ver en alguna parte dos seres ó dos incapaz de ordenar como impotente para
fenómenos que se enlazan admirablemente, crear. Quitad á los ateos el primer obstá
que manifiestan tener relaciones íntimas , culo que es el de la creacion , dejadles su
que el uno se enderece al otro , deberemos poner que la materia existe , que es eterna
afirmar que todo aquello es casual, que no y necesaria , á pesar de que es evidente
hay orden , que no hay dirección á un fin, mente finita y accidental , y que por tanto
que es asi porque es asi. ¿Existe el mun ha debido ser criada ; no les opongais por
do ? = ciertamente — y por qué? y para un instante otras dificultades que las que
qȎ? = Nohay respuesta. Los astros re resultan de la imposibilidad de ordenar sin
corren sus órbitas con asombrosa regulari inteligencia ; y veréis que á pesar de ta
dad; la observacion y el cálculo demues maña concesion , nada adelantan.
tran que sus movimientos están sometidos Es general el convencimiento de que la
á leyes constantes de que no se han des palabra acaso , aplicada á la formacion del
viado jamas , ¿ quién les ha señalado esa mundo nada significa; sin embarco creemos
marcha ? ¿ quién ha establecido esas leyes ? que puede desenvolverse esta verdad hasta
—'Nadie; la misma naturaleza. = Qué es tal punto , puédese demostrar con tal evi
la naturaleza? *— El conjunto de todos los dencia lo absurdo del sistema que preten
seres = Entonces los mismos astros son los de, ordenado el mundo de una manera
que se han dado sus leyes; ¿tenían acaso fortuita , puede hacerse sentir y palpar de
inteligencia? = Nó. = Estando destituidos tal suerie la necesidad que aquí se oculta ,
de conocimiento ¿ cómo ha sido posible que que no sea posible pensar en ella sin in
se diesen leyes tan admirables, y que se dignacion ó desprecio.
pusiesen de acuerdo de una manera tan Para verificarlo echaremos mano de las
asombrosa ? ciencias matemáticas , acomodándolas á la
Suponieado el Universo tan ordenado capacidad de toda clase de lectores. Tome
como le admiramos , salido del caos , será mos por ejemplo el sistema planetario don
preciso que haya llegado al estado en que de los cuerpos son pocos ; y veamos como
ahora se encuentra pasando antes por mu se pueden arreglar por una simple casua
chas otras combinaciones. Como no hay lidad los doce cuerpos que los astrónomos
ninguna razon porque ciertos átomos hayan apellidan planetas : el Sol , Mercurio , Ve
debido unirse entre sí con preferencia á nus, Marte, Júpiter, Saturno, Tierra,
otros , ni colocarse de suerte que diesen Urano, Ceres, Palas, Juno y Vesta. Bien
por resultado esta ó aquella configuracion , se echa de ver que no es poco el trabajo
ni distribuirse en porciones que formasen que ahorramos al ateo que se proponga
cuerpo situado á tal ó cual distancia, si arreglar el mundo por medio de combina
jios trasladamos á las épocas que precedie ciones fortúitas, cuando le concedemos ya
ron la de un mundo arreglado , es indis no solo la materia en desorden , sino que
pensable imaginar una confusion espantosa, le entregamos los cuerpos formados; y
en que agitándose toda la masa de la ma cuerpos como el Sol , la Tierra , Júpiter y
teria en la inmensidad de un espacio tene los demas , en cuya construccion es cierto
broso, andaban los átomos revueltos en que no le faltaría que hacer , si los hubiese
torbellinos , sin mas orden que la falta de de formar él propio con el solo auxilio del
todo orden , sin mas ley que la ausencia de acaso. Pero esta concesion redundará en
toda ley. Que sin la direccion de la inteli pro de la verdad ; porque manifestado con
gencia , haya podido formarse de esta suer evidencia el absurdo de las combinaciones
te el universo , es cosa Un absurda que á casuales , con respecto á lo fácil , crecerá
la primera ojeada se descubre la monstruo de punto la fuerza de la demostracion ,
sa imposibilidad , no diremos con las refle cuando se pase á lo dificil. (1)
xiones de la sana razon , sino con las su
gestiones del sentido comun. Por manera, ( 1 ) El argumento que objetamos á los incré
que aun dando por supuesta la existencia dulos no es nuevo ; pero quizas lo podremos pre
de la materia sin haber precedido la accion sentar con mayor desarrollo y claridad de lo que
han hecho algunos otros. Por lo demas, ni los
del Criador, es decir, concediendo gratuita modernos deben lisongearse de haberlo inventado;
mente á los ateos un punto de apoyo en pues que se halla en Ciceron el siguiente notabili-
tomo i. 16
 — 242 —
Demos en primer lugar que para acer de la totalidad de las letras. Pero no que
tar en la verdadera combinacion de que remos que el lector se quede con la idea
resultase la armonía que estamos presen 1 confusa de la dificultad que habría en acer
ciando, no fuese necesario considerarlos tar en la verdadera colocacion ; y asi le
ni en el espacio , ni siquiera en un plano , pondremos á la vista el número de las per
sino que el arreglo hubiese de limitarse á mutaciones que pudieran hacerse , mayor
colocarlos con cierto orden en una línea sin duda de loque él se imagina. En obse
recta. Es decir que el ordenador los tuvie quio de la importante verdad que nos pro
se ya formados tales cuales son , sin otro ponemos demostrar creemos que nos será
cuidado que encontrar el orden en que ha permitido aducir aqui algunas luces mate
bian de colocarse. O mas claro ; expresa máticas. Los ateos no reparan en llamar
remos los doce cuerpos por las doce ma en su auxilio todas las ciencias; los que
yusculas siguientes : defendemos la existencia de Dios no debe
A, B, C, D, E, F, G, H, I, J,K, L, mos ser de peor condicion.
y supondremos que toda la habilidad del Si tenemos dos letras por permutar A ,
artífice debiese limitarse á descubrir cierta B; es evidente que las podremos colocar
situacion respectiva de las mayúsculas, de dos maneras : A , B ; y B , A. Luego el
estando empero colocadas siempre en línea número de permutaciones que podremos
recta, hacer será 2. Si las letras son tres A , B ,
Salta á los ojos que asi como empieza la C ; podremos colocar la A al principio , en
línea por : A , B , C , D , podría empezar medio y al fin. Poniéndola al principió,
por A , C , B , D , por A , C , D , B , por nos dará las dos combinaciones siguientes:
A, B, D, C, por B, A, C, D, por C, A, A,B, C,
B, D, y asi sucesivamente, y que lo pro A, C, B,
pio acontece con respecto á la disposicion Puesta en medio , colocando al principio
la B resultará :
B, A, C,
simo pasage. « ¿.Cómo podré menos de admirarme Colocando al principio la C , tendremos:
» de que haya quien se persuada que ciertos cuer-
» por sólidos é indivisibles , se mueven por su fuer- C, A, B,
» za y gravedad , y que de su concurso fortuito se Poniendo al fin la A , si tomamos por
» ha formado un mundo tan adornado y hermoso? primera la B, nos dará:
>> Quien se imagina que esto es posible , pa réceme
«que del mismo modo diría que arrojando á la B, C,A,
» ventura por el suelo Innumerables caractéres de Tomando por primera la C , resulta :
» oro, ú otra materia, que representasen las veinte C, B, A,
» y una letras , pudieran caer ordenados de tal suer- De esto inferiremos que las combiciones
»te que resultasen formados los Anales de Ennio:
» yo dudo que la casualidad llegase á darnos un serán :
» solo verso. » « Hic ego non mirer esse quemquam A, B, C,
»qui sibi persuadeat corpora quxdam solida atque A, C, B,
» individua vi et gravitate ferri, mundumque cffi-
»ci ornatissimum , et pulcherrimum ex eorum B, A, C,
• corporum concursionc fortuita? Hoc qui existi- C, A, B,
«matfleri potuisse, non intelligo cur non idem B, C, A,
• putet si innumerabiles unius et viginte forma; C, B, A,
» íitterarum vel aurea; vel quales libet , aliquo con-
»jiciantur, posse ex his in terram excusis annales Con dos letras teníamos dos combinacio
» Ennii , ut deinceps legi possint cffici. Quod nes- nes , con tres tenemos seis : es decir que
»cio an neinuno quidem versu possit tantum va- asi como antes era 2 ó bien 2X1. ahora
»lere fortuna. » (Cíe. De Nat. líeor. II. ) Si bien
se observa , este argumento es dictado por el sim será 6 ó lo que es lo mismo : 3 X 2 X i-
ple sentido comun : no es patrimonio de los filóso Si nos dan á permutar 4 letras , A , B ,
fos, está al alcance de todas las inteligencias , es C , D , es claro que dejando la A , al prin
propiedad del linage humano. Lo que puede ha
cerse de nuevo es presentarle con claridad , con cipio, podemos disponer de seis maneras
viveza, sujetando por decirlo asi a riguroso calculo las tres restantes B, C, D, observando la
la inmensidad del absurdo en que caen los ateos regla del caso anterior. En seguida si po
cuando pretenden que el mundo ha sido formado
por casualidad. Esto es lo que nos proponemos nemos al principio la B, las restantes A,
ejecutar. C , D , podrán ordenarse de seis maneras ,
Los caractéres de oro , ú otra materia ; forma; : de las que ninguna se confundirá con las
Iitterarum vel aurea , vel quales libet , de que ha tres primitivas. De la propia suerte toman
bla Ciceron; ¿podrían haber inspirado la inven
cion de la imprenta? es posible, y no falta quien do por primeras la C, ó D, nos darán cada
lo ha dicho. una seis diferentes colocaciones ; y asi re
 243 —
soltará un total de 24 combinaciones ó 4 X de las negras. Entregando pues el evento
0,04X3X2X1. á la suerte, podríase apostar con igual pro
Continuando el mismo raciocinio es fácil babilidad por una y etra parte. Pero si de
alcanzar que con cinco letras A , B , C, D, las 100 bolas las 75 fuesen negras y las 25
E, poniendo cada una de ellas al principio, blancas, la probabilidad de sacar una blanca
tendremos 2'l combinaciones con las cuatro disminuiría : estando la de las negras con
restantes, ó sean en todo 5 veces 24. El respecto á la de las bláneas como 75 á 25.
resultado pues vendrá espresado por 5 X De esto se deduce que si tomamos un que
24=5X4X3X'2X1- brado cuyo denominador sea el número de
Observando la ley que siguen estos fac la totalidad de los casos, y el numerador
tores inferimos; que expresando por m el el de los favorables , expresará exactamente
número de las letras, el de las permuta la probabilidad buscada. Asi en los dos
ciones se expresará por(m-l ) (m-2) (m-3) ejemplos anteriores tendríamos en el pri
ím-4) 3X2X1; ó en otros tér mero 50/100 para las blancas como para
minos: si el número de las letras es por las negras; y en el segundo; 75/100 en
ejemplo 100 , el número de las permuta favor de las negras , y 25/100 en favor de
ciones será igual al producto que resulte las blancas.
de la siguiente multiplicacion : 100 X 99 Aplicando esta doctrina al objeto prin
X 98 X 97 X 96 X 95 X 3 X 2 cipal resultará , que la probabilidad de
xi. acertar en la verdadera combinacion estará
Aplicando esta teoría al caso que nos expresado por este quebrado 1/479001600,
ocupa resulta que las colocaciones de que cantidad tan pequeña que en ella no se po
en solo una línea recta son susceptibles los dría fundar ninguna conjetura razonable;
doce planetas, expresados por las doce ma por manera quequien apostase que no sal
yúsculas, son : dría , la combinacion deseada , tendría
12XHX10X9X8X7X6X 479001600 veces mas de probabilidad en
5X4X3X2X1, que ejecutando su favor, que quien apostase que saldría.
la operacion da ; 479001600. Y fuera de temer que se estuviese hacien
Quien pues hubiese de encontrar una do la prueba por los siglos de los siglos sin
combinacion determinada , se hallaría en obtenerse el resultado apetecido.
el mismo caso del que hubiese de sacar Hasta aquí hemos supuesto que la colo
una bola determinada, de una urna en que cacion de los cuerpos fuese en una línea
el número de estas fuese: 479001600. Los recta sin relacion á ningun espacio ni plano,
jugadores de lotería saben por experiencia lo que simplificaba mucho el poblema:
cuan difícil es que les caiga la suerte, aun pero como es evidente que los cuerpos no
no siendo mas que de 2o ó 30 mil el nú están en disposicion semejante , veámos
mero de los billetes y habiendo muchos ahora las nuevas complicaciones que con
centenares de suertes ; ¿qué sería pues si sigo traerían las otras condiciones que ne
estas quedasen reducidas á una sola, siendo cesariamente van envueltas en la cuestion.
el de los billetes de 479001600 ? Para proceder gradualmente, supondremos
Para hscer sentir mas vivamente lo im todavía que los doce cuerpos se hallan en
probable que fuera el acertaren el número una línea recta, pero de manera que esta
deseado, ó en la combinacion sobredicha, línea despues de ordenados en ella los cuer
pediremos prestadas algunas luces á la pos , ha de tener una posicion determinada
Teoría de las probabilidades. Cuando se quie en el mismo plano. Entonces la dificultad
re conjeturar el grado de probabilidad que de dar por casualidad en la verdadera po
tiene un suceso casual, se atiende al nú sicion , crece hasta un punto á que la ima
mero total de los eventos posibles, y en ginacion no alcanza. Demostracion. Si su
seguida se llevan en cuenta los favorables ponemos que los cuerpos están en un plano
y los contrarios; deduciendo de la compa elíptico , y que el extremo de la recta en
racion de unos con otros, la conjetura que que se hallan los cuerpos se confunde con
se trata de formar. Asi , suponiendo en el centro de la elipse, es evidente que to
una urna cien bolas, de las cuales cincuenta mando dicha recta como radio se la podrá
sean blancos y cincuenta negras, la proba hacer girar en torno, obteniendo infinidad
bilidad seria igual , con respecto á sacar de posiciones diferentes, medidas por el
blanca ó negra ; porque el número total es ángulo que formará la recta con uno cual
100; y el número de las blancas igual al quiera de los ejes de la elipse. Y como ade
 2M —
nías es evidente que podremos tomar por nar; imposible! absurdo ! Y es que el Cria
centro del movimiento de rotacion uno dor nos ha otorgado la intuicion de ciertas
cualquiera de los puntos del eje mayor ó verdades, no queriendo que hubiésemos
menor ú otro de los infinitos que se con menester el andarlas buscando por medio
tienen dentro la superficie encerrada en la de dilatados raciocinios. Sin embargo, ¡do
curva, tendremos que para encontrar al lor causa el decirlo ! Todavía es necesario
acaso una posicion determinada deberíamos insistir en probar lo que el Autor de la na
divagar entre una infinidad de combinacio turaleza ha querido que viésemos y sintié
nes de las que fuera imposible salir. Si semos como una iluminacion instantánea;
pues la probabilidad venia antes expresada todavía hay quien hace fuerza á su propia
por un quebrado tan insignificante como razon, á los sentimientos mas íntimos, para
1/479001600 entonces lo seria poruna can hacerlos deponer contra la existencia del
tidad infinitamente menor. La razon es que se os ha otorgado.
clara : el caso favorable fuera uno , es decir Para completar la demostracion prece
una posicion determinada , y por tanto el dente , la presentaremos de manera que
numerador del quebrado fuera el mismo ; sin mediar esfuerzo de razon ni de imagi
y como la totalidad de los casos posibles nacion , alcancen á comprenderla las inte
sería tanto mayor cuanto serian las posi ligencias mas limitadas. Supóngase un
ciones posibles de la línea en el plano; re vasto campo donde se hallen colocados doce
sultaría que habríamos de multiplicar el blancos con su numeracion respectiva , y
denominador por una serie de cantidades que allí son llevados de la mano doce tira
infinitamente grandes: lo que daria un que dores con los ojos vendados, teniendo cada
brado infinitamente pequeño; ó bien una uno su número correspondiente á uno de
cantidad igual á cero. los blancos. ¿ No seria el mayor de los des
Todavía mas : aqui suponemos los cuer propósitos el creer posible que disparando
pos colocados en una línea recta, es asi todos á la ventura , el tiro de cada cual
que no lo están ; luego se añaden las difi fuese á dar por casualidad en el número
cultades que consigo trae el acertar en el que le corresponde? ¿quién no ve que es
Íwlígono que ha de resultar de la union de mas que probable que repitiendo los dis
os puntos en los que pueden suponerse co paros por espacio de siglos no se llegaría á
locados respectivamente los cuerpos. Agre obtener que cabalmente , á un mismo tiem
guese á todo esto , que los cuerpos no es po , el tirador de número 1 acertase en su
tán en un mismo plano sino en el espacio, blanco de número 1 , el de 2 en el número
y la imaginacion se pierde en calcular lo 2, y asi sucesivamente? Reflexiónese ahora
difícil del acierto. En efecto: sobre la difi que no se trata de un campo de algunos
cultad de la línea y del plano , vienen en centenares de varas, sino de un espacio de
tonces las infinitas posiciones que asi el millones de leguas, y dedúzcase la impo
plano como la línea pueden ocupar en un sibilidad de arreglar en él doce cuerpos, en
espacio. Para concebirlo , imaginemos que una combinacion determinada, sin mas au
el plano gira al rededor de una recta : es xilio que el ciego acaso.
evidente que las posiciones que puede tomar Las observaciones presentadas hasta
son infinitas; pues son tantas cuantos son aqui , bastan y sobran para demostrar lo
los ángulos que es dable hacerle formar que nos hemos propuesto; sin embargo
con otro plano que se halle fijo, los que son todavía queremos llevar á mas alto punto
infinitos. Considérese entonces que la recta la evidencia de la verdad. Toda la fuerza
que serviria de eje de rotacion puede estar del argumento presentado estribaba en que
colocada tambien en infinitas posiciones, y se hubiese de encontrar en el espacio una
resultará una serie de nuevos factores, por determinada combinacion de doce cuerpos,
los cuales multiplicado el denominador del siquiera por un solo instante ; y sin que se
quebrado que ya lo teníamos infinitamente supusiese que habian de continuar en la
pequeño, si cabe disminuirá todavía. misma , ó bien en un movimiento arregla
Hé aqui reducida á cálculo riguroso la do sometido á reglas fijas , lo que cierta
misma verdad que á todos los hombres está mente es todavía mas difícil de alcanzarse
dictando el sentido comun ; hé aqui la ra por una simple casualidad. Dando pues
zon porque al proponerse semejantes efec que la deseada combinacion se encontrase,
tos de la casualidad á un hombre sano de entonces preguntaremos: ¿por qué los
juicio, exclama desde luego, sin reflexio cuerpos habian de continuar en ella , y lo
 —
que es aun mas admirable, prosiguiendo
en un movimiento perenne, sin desviarse
jamás de una ley fija y constante? ¿Al
acaso, al ciego acaso, á esa palabra que
nada significa , deberán atribuirse tambien
las admirables leyes que rigen el movi
miento del universo? En viendo una com
binacion por ligera que sea , un artefacto
por sencillo que se presente , preguntamos
instintivamente, sin reflexionar, ¿quién lo
ha hecho? ¿quién lo ha inventado? La casua
lidad no se ofrece siquiera á nuestra men
te, como un recurso para explicar la causa
del artefacto : porque la casualidad es na
da, y la nada no produce nada. Donde hay
un ser, hay razon suficiente de su existen
cia, donde hay artefacto hay artífice, don
de hay combinacion hay inteligencia.
¡Casualidad, un mundo donde se descu
bren por todas partes cálculo y Geometría!
¡ Casualidad , unos movimientos sujetos á
la ley de la razon directa de las masas , é
inversa del cuadrado de las distancias !
¡ Casualidad las revoluciones de los plane
tas, describiendo los radios vectores áreas
proporcionales á los tiempos I ¡Casualidad,
el que los cuadrados de los tiempos de las
revoluciones de los planetas sean entre sí
como los cubos de los ejes mayores de sus
órbitas ! Asómbranos la vista de un plane
tario en que el ingenio del hombre haya
llegado á representar el movimiento de un
sistema; ¿y no reconoceremos inteligen
cia, no veremos la mano de la sabiduría
infinita al levantar los ojos al planetario
real y verdadero, con sus cuerpos de colo
sales dimensiones, recorriendo órbitas in
mensas, con velocidad inconcebible, con
precision rigurosa?
Acabamos de ver que el solo arreglo del
sistema planetario es un palpable absurdo,
si se le encomienda á la casualidad : y sin
embargo este sistema con todo su grandor,
es nada comparado con el universo. Las
estrellas fijas observadas hasta el presente
no bajan de cien millones; y para formarse
alguna idea de esta inmensidad basta re
cordar que segun los cálculos astronómi
cos, distan de nosotros lo que la imagina
cion no puede concebir. Observadas con
telescopios que aumentan hasta 200 veces
el tamaño del objeto , no se nota diferen
cia en su magnitud , y solo se presentan
como puntos luminosos: ¿cuánta no será
una distancia sobre la cual nada significa
el que se la haga doscientas veces menor?
¿Que serán aquellos cuerpos? ¿serán cen
tros de otros tantos sistemas planetarios
semejantes al en que vivimos? ¿Qué habrá
en aquellas regiones en que los soles son á
nuestros ojos y á nuestros instrumentos,
puntos casi invisibles , donde las distancias
de millones de leguas, se convierten en
espacios de pocas pulgadas? El entendi
miento se abruma bajo el peso de tanta in
mensidad : la imaginacion se fatiga , y el
espíritu se abate y anonada bajo la omni
potencia del Autor de tantas maravillas.
J. B.
CARTA SEPTIMA.
Á UN BSCÉPTICO EN MATERIAS DK RELIGION.
Mi estimado amigo : mucho me compla
ce lo que V. se sirve insinuarme en su úl
tima de que si bien mis reflexiones no han
podido decidirle todavía á salir de esa pos
tracion de espíritu que se llama escepticis
mo, al menos han logrado convencerle de
un hecho que V. consideraba poco menos
que imposible; esto es, que fuese dable
aliar la fe católica con la indulgente y com
pasiva tolerancia con respecto á los que
profesan otra diferente, ó no tienen nin
guna. Bien se conoce que V. , á pesar de
haber sido educado en el catolicismo, se
ha dejado imbuir demasiado en las preo
cupaciones de los ímpios y de algunos
protestantes , que se han empeñado en
pintarnos como furias salidas del averno
que únicamente respiramos fuego y san
gre. V. me da las gracias porque « sufro
con paciente calma, las dudas, la incerti-
dumbre , las variaciones de su espíritu » :
en esto no hago mas que cumplir con mi
deber , obrando conforme á lo que prescri
be nuestra sacrosanta religion ; la cual da
tan alta importancia á la salvacion de una
alma , que si toda una vida se consagrase
á la conversion de una sola, y esto se con
siguiese , debieran tenerse por bien em
pleados los trabajos mas penosos.
Mis profundas convicciones, ó hablando
mas cristianamente, la gracia del Señor,
me tienen firmemente adherido á la fe ca
tólica ; pero esto no me impide el conocer
un poco el estado actual de las ideas, y la
diferencia de situaciones en que se encuen
tran los espíritus. Un cscéptico me inspira
una viva compasion , porque desgraciada
mente son muchas en los tiempos que cor
ren , las causas que pueden conducir á la
pérdida de la fe; y asi es que al encontrar
me con alguno de esos infortunados, no
digo nunca con orgullo non sum sicut unus
ex istia, « no soy como uno de estos». El
verdadero fiel que está profundamente pe
netrado de la gracia que Dios le dispensa,
conservándole adherido á la Religion Cató
lica , lejos de ensoberbecerse ha de levan
tar humildemente el corazon á Dios , ex
clamando de todas veras : Domine, propitius
esto tnihi peccatori ; « Señor, tened miseri
cordia de este pecador. »
Acuérdome que al seguir mi curso de
Teología , se explicaban la cátedra aque
lla doctrina de que la fe es un don de Dios;
y que no bastan para ella, ni los milagros,
ni las profecías, ni otras pruebas que de
muestran claramente la verdad de nuestra
religion , sino que además de los motivos
de credibilidad, se necesita la gracia del
cielo ; á mas de los argumentos dirigidos
al entendimiento , es menester una pia mo
cion de la voluntad, pia motio voluntatis ; y
confieso ingenuamente, que nunca entendí
bien semejante doctrina , y que para com
prenderla me fué necesario dejar aquellas
mansiones donde no se respiraba sino fe,
y hallarme en situaciones muy varias y en
contacto con toda clase de hombres. En
tonces conocí perfectamente, sentí con
mucha viveza , cuan grande es el beneficio
que dispensa Dios á los verdaderos fieles,
y cuán dignos de lástima son aquellos que
en apoyo de su fe solo reclaman el auxilio
de los motivos de credibilidad ; solo invo
can la ciencia y se olvidan de la gracia.
Repetidas veces me ha sucedido encontrar
me con hombres, que á mi parecer, veian
como yo las razones que militan en favor
de nuestra religion; y sin embargo yo creia,
y ellos nó; ¿de dónde esto? me pregunta
ba á mí mismo : y no sabia darme otra ra
zon , sino exclamar : misericordia Domini
guia non sumus consumpti.
Con este preámbulo conocerá V. , mi
querido amigo , que sus dudas no han de
bido cogerme de improviso , ni ocasioná-
dome aquel estremecimiento que natural
mente me causaran si no hubiese tenido á
la vista las reflexiones que preceden ; bien
que de paso me permitirá V. que no aprue
be Ja dura invectiva á que se abandona
contra las personas intolerantes. ¿ Sabe V.
que en sus palabras se hace culpable de in
tolerancia? y que un hombre no llega á ser
perfectamente tolerante sino cuando tolera
la misma intolerancia? Pongámonos por
Dios de buena fe, y no miremos las cosas
con espíritu de parcialidad. Me hace V. el
favor de decirme que « ya me conceptuaba
con bastante conocimiento del mundo , pa
ra no imitar el ejemplo de aquellas perso
nas que no pueden suportar la menor pala
bra contra su fe, y que constituyéndose
desde luego los heraldos de la divina justi
cia , no aciertan sino á mentar la hora de
la muerte, el infierno, y que acaban por
romper bruscamente con quien ha tenido
la imprudencia ó poca cautela , de fran
quearles su espíritu, » Refiéreme V. la his
torieta de aquel buen eclesiástico que antes
le distinguía á V. con particulares mues
tras de aprecio y de amistad, y que se
horrorizó de tal suerte al saber que trataba
con un incrédulo que fué preciso cortar
toda clase de relaciones, Paréceme , mi
querido amigo, que en las propias palabras
de V. encuentro yo la apología de la per
sona á quien tanto V. inculpa; y á los ojos
de quien mire las cosas con verdadera im
parcialidad no se le hará tan extraña seme
jante conducta. «Era, dice V. mismo, un
jóven de conducta irreprensible, de cos
tumbres severas, de un celo ardiente ; pero
tenia la desgracia de no haber tratado ja
más sino con personas devotas , de no ha
ber manejado otros libros que los del semi
nario , y apenas le parecía posible que cir
culasen en el mundo otras doctrinas, que
las que se le habian enseñado por espacio
de algunos años en el colegio de donde
acababa de salir. Tuve la imprudencia
de responder con una burlona sonrisa á
una de sus observaciones sobre un punto
delicado , y desde entonces quedé perdido
sin remedio en su opinion. » Y bi8h , V. se
queja en sustancia , de que aquel jóven no
tuviese hábitos de tolerancia ; ¿dónde que
ría V. que los hubiese aprendido? El espí
ritu de aquel hombre, ¿podia estar dis
puesto para el ataque, que contra sus creen
cias se permitió su contrincante , con la
significativa sonrisa? ¿No es demasiado
exigente quien pide serenidad á un hom
bre que quizás por primera vez, mira com
batido ó despreciado lo que él considera
como mas santo y augusto?
Es grave desacuerdo y además una so
lemne injusticia, el inculpar la conducta de
quien guiado por un entendimiento con
vencido y un corazón recto , se porta cual
 — 247 —
por necesidad debe portarse , atendida la dernos, siendo ton opuestas nuestras ideas,
educacion é instruccion que ha recibido, y y habiendo sido tan diferente nuestro tenor
las circunstancias que le han rodeado en de vida , es bien posible que dicha dificul
todo el curso de su vida. Nuestro espíritu tad exista ; sin embargo por lo que á mí
se forma y se modifica bajo la influencia de toca no alcanzo á verla. ¿Creería V. que
mil causas, y á ellas es preciso atender, hasta llego á comprender muy bien , esa
cuando se quiere formar exacto juicio so situacion de espíritu en que se fluctúa en
bre la situacion en que se encuentra , y el tre la verdad y el error, en que el espíritu
sendero que probablemente haya de seguir. sediento de verdad se encuentra sumido en
Lo demás es empeñarse en violentar las la desesperacion por la impotencia de en
cosas, sacándolas de su quicio. ¿Pretende contrarla? Imagínanse algunos que la fe
ría V. que un misionero encanecido en su está reñida con un claro conocimiento de
santa carrera, tenga el mismo modo de las dificultades que contra ella pueden ofre
los objetos que cuando salió de los cerse al espíritu ; y que es imposible creer
T ¿no fuera esta una pretension desde el momento que en él penetran las
extrana? es cierto que sí; pues no menos razones que en otros producen la duda; no
lo seria el exigirle ya en su primera juven es asi, mi querido amigo: hombres hay
tud el mismo comportamiento que le han que creen de todas veras, que humillan su
enseñado largos años de trabajos apostóli entendimiento en obsequio de la fe con la
cos en lejanos y variados paises. misma docilidad que hacerlo puede el mas
Es poco menos que imposible sin larga sencillo de los fieles, y que sin embargo
práctica del mundo, saber colocarse en el comprenden perfectamente lo que pasa en
puesto de los otros, haciéndose cargo de el alma del incrédulo, y que asisten por
las razones que los impelen á pensar ú obrar decirlo asi á sus actos interiores, como si
de esta ó aquella manera; y es mucho mas los estuvieran presenciando.
difícil en materias religiosas, refiriéndose Es una ilusion el pensar que no se puede
estas á lo que hay de mas íntimo en el alma tener idea clara de un estado sin haber pa
del hombre: cuando estamos vivamente sado por él , y que no alcanza á compren
poseidos de una idea, se nos hace inconce der un cierto orden de ideas y de senti
bible que los demás puedan mirar con in mientos sino quien haya participado de
diferencia lo que nosotros contemplamos ellos. Si asi fuese , ¿ dónde estarían los es
como lo mas importante en esta vida y en critores capaces de inventar en literatura?
la venidera. Por cuyo motivo, no hay Mucho se siente que no se consiente ; y
asunto que mas á propósito sea para exal cuando no se llega á sentir , hay la imagi
tar el ánimo ; y es de aqui que las guerras nacion que en muchos casos suple por el
que se han hecho á título de religion , han sentimiento. Nosotros los cristianos pode
sido siempre muy obstinadas y sangrientas. mos traer á este propósito las tentaciones,
Quisiera yo que de estas reflexiones se pe materia que si á V. no le parece muy filo
netrasen , los que á roso y velloso , como sófica , no dejará de interesarle su aplica
suele decirse, hablan contra la intoleran cion. Leemos en las vidas de los Santos,
cia ; pues que de esta suerte no sucediera que Dios permitía que les asaltase el demo
tan á menudo que hombres en extremo in nio con pensamientos y deseos tan contra
tolerantes en todo lo que concierne á la rios á las virtudes que ellos con mas ardor
religion , no quieran sufrir la intolerancia practicaban , que les era necesario llamar
con que á su vez les corresponden las per en su auxilio toda su confianza en la mise
sonas religiosas. ricordia divina para no creerse abandona
Bien comprenderá V. , mi querido ami dos del cielo , y culpables de los mismos
go , que no deseo yo prevalerme de estas pecados que mas detestaban en el fondo de
reflexiones para mostrarme intolerante; su alma. Cuando tan violenta era la aco
pues que si me he extendido algun tanto metida que les hacia concebir temores de
sobre el particular ha sido con la idea de haber sucumbido , cuando tan vivas eran
desvanecer la prevencion con que por al las imágenes con que á su fantasía se pre
gunos es mirada la intolerancia de ciertas sentaban los objetos malos, que á pesar de
gentes, resultando que se estiman en me la aversion que les profesaban , se los ha
nos personas V.pordeotra
la parte
dificultad dignas de cían tomar como una realidad , bien se
muy de
| concibe que no dejarían aquellas santas al
lí mas de comprender el estado de un hom
 — 2Í8
bre que se hallase enconchado en los mis sus discípulos; asiles enseña que para creer
mos vicios. Esto que allá , en los primeros no basta haber estudiado la religion , sino
años de su edad, habrá V. leido en alguno que es necesaria la gracia del Espíritu San
de aquellos libros que no debian de esca to. Mucho fuera de desear quede esta ver
sear en el colegio , le hará conocer como dad se convenciesen los que se imaginan
nosotros que ni por asomo podemos lison que no hay aquí otra cosa que una mera-
jearnos de sautos , habremos sentido una y cuestion de ciencia , y que para nada en
mil veces germinar en nuestra alma algu tran las bondades del Altísimo. ¿Sabe V. ,
nas de las innumerables miserias intelec mi querido amigo, lo primero que debe
tuales y morales de que adolece la triste hacer un católico cnando le viene á la ma
humanidad ; y que siendo una de estas el no algun incrédulo en cuya conversion se
escepticismo, fuera muy raro que no se proponga trabajar? Cree V. sin duda que
hubiese presentado á las puertas de nues se han de revolver los apologistas de la re
tra alma como huésped de mal agüero. ligion , recorrer los apuntes propios sobre
Cerradas las conserva el verdadero fiel , y las materias mas graves , consultar sabios
ayudado de los;auxilios de la gracia , desa de primer orden , en una palabra , pertre
fía á todas las potestades del infierno á que charse de argumentos como un soldado de
las rompan si pueden ; pero acontece en armas. Conviene en verdad , no descuidar
tonces lo que nos dice el apóstol San Pe el prevenirse para loque en la diseusion se
dro: «anda dando vueltas el diablo como pueda ofrecer; pero ante todo, antes de
leon rugiente buscando á quien devorar. » exponer las razones al incrédulo, loque
Créalo V. , mi estimado amigo : resistiéndo debe hacerse es orar por él. Dígame V.,
le fuertemente con k fe, no ha podido mor ¿ quién ha hecho mas conversiones , los sa
dernos , pero conocemos bien su rugido. bios , ó los santos ? San Francisco de Sales
Sobre todo en el siglo en que vivimos , no compuso ninguna obra que bajo el as
es poco menos que imposible que esto no pecto de la polémica se llegue á la Historia
suceda á los hombres que por una ú otra de las variaciones de Bossuet; y yo dudo
causa se hallan en contacto con él. Ora cae sin embargo que las conversiones á que es
en las manos un libro lleno de razones es ta obra dio lugar, á pesar de ser tantas,
peciosas y de reflexiones picantes ; ora se alcancen ni de mucho á las que se debie
oyen en la conversacion algunas observa ron á la angélica uncion del santo Obispo
ciones en apariencia juiciosas y atinadas , y de Ginebra.
que á primera vista parece que hacen va Por ahí puede V. conocer, mi querido
cilar los sólidos cimientos sobre que des amigo , que no las ha con lo que suele lla
cansa la verdad; tal vez se fatiga el espíritu marse un disputador, ni un ergotista ; y que
y se siente como sobrecogido por una es por mas que aprecie en su justo valor la
pecie de tedio , desfalleciendo algunos mo ciencia , y particularmente la eclesiástica ,
mentos en la continua lucha que se ve for tengo muy grabada en el fondo del alma la
zado á sostener contra infinitos errores; tal saludable verdad, de que los caminos de
vez al dar una ojeada sobre la falta de fe Dios son incomprensibles al hombre, de
que se nota en el mundo, sobre la muche que es vano confiar en la ciencia sola , y
dumbre de religiones, sobrelos secretos de que algo mas que ella seneeesita para con
la naturaleza, sobre la nada del hombre, servar y restaurar la fe.
sobre las tinieblas de lo pasado, y los arca Pedia V. tolerancia y tolerancia le ofrez
nos de lo venidero , desfilan por la mente co , la mas amplia que encontró jamas en
pensamientos terribles. Angustiosos instan hombre alguno; se arredraba V. por la di
tes en que el corazon se inunda de cruel ficultad que habia de mediar en entender
amargura, en que un negro velo parece nos; y no dudo que con mis aclaraciones
tenderse sobre cuanto nos rodea , en que se le habrá desvanecido semejante recelo ;
el espíritu agobiado por el aciago fantasma como no temo tampoco que se figure V.
que le abruma, no sabe á dónde volverse, en adelante que le haya yo de salir al pa
ni le queda otro recurso que levantar los so , con lo que apellida , argumentos valede
ojos al cielo, y clamar : Domine, salva nos , ros para personas ya convencidas , y sutilezas
perimus. «Señor, salvadnos, que pare de escuela. Si V. pues se sirve continuar
cemos.» proponiéndome las principales dificultades
Asi permite el Señor que sean aprobados que le impiden volver á la Religion que
U»s suyos , y hace mas meritoria la fe de comienza á echar menos , á los pocos años.
de perdida , yo procuraré responderle como
mejor alcanzare ; pero sin pretender ningu
na palma si quedare V. satisfecho, ni dar
me por bochornado si continuare en su in
credulidad.
Cuando se combate contra los enemigos
de la Religion , que solo buscan medios de
atacarla , valiéndose de cuanto Jes sugiere
la astucia y la mala fe , entonces la disputa
puede tomar el carácter de un combate en
regla ; pero cuando tiene uno la fortuna de
encontrarse con hombres que si bien han
tenido la desgracia de perder la fe , desean
no obstante volver á ella , y buscan de co
razon los motivos que puedan conducirlos
á la misma , entonces el hacer alarde de la
ciencia , el mostrar espíritu de disputa , el
pretender el laurel del vencimiento , es un
insoportable abuso de los dones de Dios,
es un completo olvido de los caminos que
segun nos ha manifestado , se complace el
Señor en seguir , es sacar á plaza el orgu
llo , es decir, el enemigo declarado de toda
bien , y el mas grave obstáculo para que
puedan aprovecharse las mas felices dispo
siciones.
Si se hace de la disputa religiosa un
asunto de amor propio, ¿cómo podemos
prometernos que la gracia del Señor fecun
dará nuestras palabras? Los apóstoles con
virtieron el mundo , y eran unos pobres
pescadores ; pero no confiaban en la sabi
duría humana , ni en la elocuencia apren
dida en las escuelas, sino en la omnipoten
cia de aquel que dijo : « hágase la luz , y la
luz fué hecha.» Bien comprenderá V. que
no por esto desprecio la ciencia ; el mejor
medio de conservarla y ennoblecerla es se
ñalarle sus límites no permitiéndole el des
vanecimiento del orgullo.
Esa impotencia para creer de que V. se
lamenta no debe confundirse con la imposi
bilidad; es una llaqueza, una postracion de
espíritu, que desaparecerá el dia que el
Señor le pluguiere decir al paralitico: « Le
vántate, y camina por el sendero de la
verdad.»
Entretanto yo oraré por V. ; y si bien el
estado de su espíritu no es muy á propósito
para hacer lo mismo, sin embargo todavía
me atreveré á decirle , que ore V. , que
invoque al Dios de sus padres, cuyo santo
na
nombre
, y queaprendió
le suplique
á pronunciar
le conceda
desde
llegar
la cu-,
al
conocimiento de la verdad. Quizás, oh
pensamiento de horror I quizás pensará Y.
¿ cómo puedo llamar á Dios , si en ciertos
momentos, abatido por el escepticismo,
hasta siento flaquear mi única conviccion,
y no estoy bien seguro ni de su existen
cia? No importa : haga V. un esfuerzo
para invocarle; él se le aparecerá, yo se lo
aseguro : imite V. al hombre que habiendo
caido en una profunda sima , no sabiendo
si es capaz de oirle persona humana , es
fuerza no obstante la voz clamando auxilio.
Cuente V. con el entrañable afecta, y la
consideracion de este S. S. S., que B.S.M.
/. B.
CONSIDERACIONES
filosófico-polí ticas.
i.
Sin unidad no hay concierto, sin con
cierto no hay orden , y sin órden no pue
den subsistir el mundo físico ni el moral.
Estas son verdades inconcusas, eternas,
aplicables á la sociedad como al individuo.
¿Qué es la virtud? un órden, un concier
to , subordinados á la grande unidad , á la
ley eterna, á Dios. ¿Qué es la ciencia? un
órden , un concierto , dependientes de la
unidad , del principio generador de los co
nocimientos. Cada ciencia en particular se
asienta sobre una verdad que le sirve de
base; y estas verdades fundamentales exa
minadas en su origen , se halla que con
vergen todas hácia otra que es como el
punto fijo en que está afianzado el primer
eslabon dela cadena. ¿Qué es la salud? un
órden, un concierto, dependientes de la
unidad , que armoniza las funciones y las
hace contribuir á un mismo objeto , cada
cual á su modo. ¿Qué es este universo que
nos admira y asombra ? Es el órden , el
concierto, sometidos á la unidad. Suponed
que la unidad desaparece; el concierto y
el órden dejan de existir ; y el universo se
convierte en caos.
Todos los seres , asi que se apartan de la
unidad á que están sometidos , pierden en
cierto modo su naturaleza ; porque esta no
consiste precisamente en la esencia que los
constituye, sino que abarca todas las facul
tades cuyo ejercicio forma el complemento
 — -250
del mismo ser, y le hace alcanzar el objeto ideas relativas al órden moral , ya sea per
á que está destinado. El hombre demente , mitiendo que se derribe el poder sin susti
es ciertamente un hombre ; pero le falta el tuirle otro que le reemplace completamen
uso de la razon , y asi de poco le sirve el te, se siente fuera de su quicio, le falta la
tener esa noble facultad radicada en su al unidad que armonizaba todas sus partes, y
ma. El díscolo, el perverso es hombre; se agita tambien entre mortales agonías á
tiene el libre ejercicio de su entendimiento la manera del individuo atacado de crueles
y voluntad; pero abusando delas potencias padecimientos. Tal vez se levanta con fuer
que le ha otorgado el Criador, y desvián zas extraordinarias y arrolla cuanto en
dose de su lin , es un hombre incompleto , cuentra á su paso ; pero un instante des
que trunca , por decirlo asi , su propia na pues yace de nuevo en el lecho de dolor,
turaleza,
Por estaprivándola
causa todosdesuparte
los seres mas
que bella.
exis lánguida, abatida, moribunda, escuchando
con ávida confianza las palabras halagüeñas
ten fuera del orden que les corresponde , que se le dirigen para hacerla creer (pie
que han dejado de estar sometidos á la uni saldrá presto de tan infeliz estado , que la
dad, se hallan en situacion violenta , y for aguardan dias venturosos en no lejano por
cejan por volver á su estado normal. En el venir. ¿Qué valen los paliativos si la raiz
mundo físico, el cuerpo separado de su del mal queda intacta? ¿esperais crear un
centro , tiende sin cesar hácia él ; abando poder fuerte? sí ó nó? Ahí está la dificul
nado á sí mismo , marcha rápidamente á tad; en no superándola será inútil cuanto
buscarlo; detenido por un obstáculo cual se haga.
quiera, lucha por vencerle: con el choque, A los políticos entendidos debe de cau
si antes estaba en movimiento ; con la pre sarles espanto esa falta de unidad que se
sion , si se ha conseguido detenerle. ¿Qué nota en España : hablase mucho contra los
busca ese aire, que se agita con tanta vio siglos pasados ; y esos siglos sin embarco
lencia , que se convierte en huracan y ar nos salvan todavía en la actualidad : que si
rasa los bosques , destruye los edificios , y ellos no hubiesen formado ese espíritu de
siembra el espanto por dilatadas comarcas? rectitud , de justicia y cordura , ese apego
su ley , su regla , su unidad , el equilibrio. á la monarquía que distingue á la inmensa
¿Qué buscan esas olas alboratados que bra mayoría del pueblo español , despues de
man furiosas contra la roca inmóvil , que atravesar una revolucion cien veces mas
tragan cual leve paja la grandiosa nave? terrible que la presente , correríamos á hun
su ley, su regla, su unidad, el equilibrio. dirnos en un abismo sin fondo.
¿Qué tiene ese hombre que palido y con
vulsivo se agita entre tormentos atroces?
un pequeño órgano se ha desarreglado; le III.
ha faltado la armonía de las funciones , la
unidad ; y el desgraciado invoca la muerte
como un alivio á sus crueles dolores, pre La Europa se agitó durante muchos si
fiere la no existencia á una existencia de glos , buscando esa armonía que se afianza
sordenada. ¿Qué mal experimenta ese otro en la unidad. Entregados los elementos so
de la frente torva, y del mirar inquieto, ciales á su propio impulso se revolvían en
que lleva pintado en su semblante el sello tenebroso caos; pero tan luego como se
de la maldicion , que anda errante por la establecieron centros con gran fuerza , en
faz de la tierra sin encontrar consuelo ni torno de los cuales se arregló el movimien
descanso? Se ha apartado del orden, ha to , nacieron los diferentes sistemas que
perdido de vista la unidad de su regla , ha forman el hermoso y variado conjunto de
cometido un crimen. El remordimiento co las naciones europeas.
mienza ya el castigo que la Justicia divina Un inmenso continente que en los tiem
consumará. pos modernos ha venido acrecentando el
número de los pueblos civilizados, se halla
actualmente dividido en dos partes, sujetas
II. á condicion muy diferente. En la una reina
el órden, es atacado el gobierno, y las ideas
étrointereses
que lossociales
enlaza han
y armoniza.
constituidoAllí
un cen-"
hay
Tan pronto como la sociedad se aparta
de su regla , ya sea dejando extraviar las prosperidad y poderío. En la otra la i
quía campea , los gobiernos — 251 —¿Qué seria actualmente la España sin
hojas de los árboles , las formas políticas trono hereditario, sin esa institucion que
son monstruosos embriones , á los que no neutraliza tan poderosamente los elementos
se concede el tiempo necesario para desar de mal , á pesar de que las circunstancias
rollarse , y manifestar con la experiencia si no le han dejado apenas otra accion que la
es posible ó nó que se conviertan en un vi fuerza moral de sus recuerdos y esperan
viente de organizacion regular, y miem zas? Viéramos reproducidas las tristes es
bros proporcionados. No hay orden, no cenas de nuestras colonias de América,
hay unidad; allí hay infortunio, descaeci donde pasa continuamente el poder de unas
miento , postracion. manos á otras, sin que alcance á fijarse ni
Presentamos este cotejo porque tambien robustecerse en ninguna.
contribuye á demostrar lo que nos hemos
propuesto ; pero no intentamos comunicar
á nuestros lectores, entusiasmo por las for V.
mas políticas de los Estados-Unidos. Seme
jante entusiasmo mal puede trasmitirlo
quien no lo siente. Ni aprobamos ni re Ya que hemos hablado de la unidad ha
probamos ; nos abstenemos de juzgar ; solo blemos un poco dela libertad. El uso conti
nos permitiremos una observacion que con- nuo que se está haciendo de esta palabra
viene
nacionnose dejar
compone
en olvido.
de muchos
La siglos
vida ;dequien
una inclina naturalmente á meditar sobre su
sentido.
juzgue de un sistema político por los efec Alguna vez hemos pensado sobre la rea
tos que produce durante setenta años, se lizacion que la libertad tiene en todos los
parece á quien ponderara las ventajas de un seres; y á decir verdad, no la hemos en
régimen con respecto á un individuo , por contrado en ninguna parte sino con muchas
haberle sido saludable una corta tempora é indeclinables limitaciones.
da. Ademas: ¿quién sabe si se atribuye Echemos una ojeada sobre el mundo
equivocadamente al sistema político lo que material : todo está sujeto á reglas fijas.
ha dimanado de causas muy diferentes? Los astros de inmensa mole como los áto
Es probable que se incurre en este error ; mos mas imperceptibles se hallan someti
quizás podrían señalarse razones que apo dos á leyes constantes delas que no pueden
yarían esta sospecha ; de todos modos el desviarse. En el reino vegetal no es menos
tiempo será el juez mas competente. Lo evidente el encadenamiento de los seres ,
que ahora sucede ya , es un indicio de lo no es menos sensible la falla de libertad. Las
que podrá acontecer en el trascurso de un plantas han menester el calor del sol , los
siglo. rayos de la luz , la humedad del rocío , el
agua de las lluvias, el oreo de los vientos;
y no pocas el asiduo cultivo dela mano del
IV. hombre. En su nacimiento, en su auge y
desarrollo, en su conservacion , están de
pendientes de la tierra , de la atmósfera y
Las naciones que han estado sometidas del cielo. Se ponen lozanas, ostentan vis
á la unidad de la monarquía hereditaria por tosos colores, producen sabrosos frutos,
espacio de mucho tiempo, presentan un exhalan suavísimos aromas; pero todo á
fenómeno digno de notarse : al través de condicion de estar sometidos á una regla ,
las revoluciones mas profundas , conservan de carecer de libertad.
la fuerza de reorganizarse sin perder ni me Los animales nacen , crecen , se repro
noscabar su independencia. Casi todos los ducen y mueren , siempre con sujecion á
reinos de Europa muestran de bulto esta las leyes de su respectiva naturaleza. Su
verdad : la Francia y la Inglaterra ofrecen existencia está ligada con las reglas que le
ejemplos recientes; y segun todas las apa prescriben la organizacion, los alimentos,
riencias la España está destinada á ofrecer el clima , y todo cuanto la afecta. Conser
lo tambien. La Constitucion de Polonia era van la salud bajo la condicion de vivir so
una excepcion por tener adoptado el siste metidos á las leyes naturales ; cuando de
ma electivo ; la Polonia sufrió revoluciones ellas se desvian . primero sufren , y si se
no tan grandes como las de otros paises , y obstinan, mueren.
no obstante pereció en ellas. Elevándonos á la region de las criaturas
 - 252 —
racionales eucontramos la libertad de albe- imponen innumerables obligaciones resfriif-
drío , hallamos que no están sometidos los giendo de mil modos su libertad. Dejemos
actos de la voluntad ni á la violencia ni á aparte al infeliz jornalero encadenado á su
ninguna necesidad interior; pero fuera de trabajo desde que el sol nace hasta que se
este círculo ¿qué significa para el hombre pone ; al dueño de establecimientos agríco
la libertad ? Examinémoslo con alguna de las , industriales ó comerciales , esclavizado
tencion. La libertad tomada en su sentido todo el dia por la vigilancia que reclaman
mas general , es la ausencia de obstáculos la conservacion y prosperidad de sus inte
ó trabas que impidan ó restrinjan el ejerci reses ; al militar constreñido por las severas
cio de alguna facultad. Veamos si son po leyes de la ordenanza , abdicando á cada
cos esos obstáculos y esas trabas, que ó paso su voluntad para obedecer los manda
embargan completamente el uso de nues tos de sus gefes, renunciando á sus como
tras facultades, ó las limitan de mil mane didades y placeres en cumplimiento de sus
ras diferentes. obligaciones; al facultativo llamado á todas
Luego de nacido el hombre , ¿ cuál es su horas al socorro dela humanidad doliente;
libertad? La frágil contextura de su cuerpo al eclesiástico abandonando su familia para
recien formado mantiene en inaccion todas ir á ocupar el puesto que le señalan sus
sus facultades intelectuales y morales , y superiores, dejando sus ocupaciones mas
permite escaso ejercicio á las sensitivas ; en gratas ó el descanso de la noche, para tras
cuanto á la satisfaccion de sus primeras ne ladarse junto al lecho del dolor y recibir el
cesidades , no tiene en sí propio otro re último suspiro del moribundo. Conside
curso sino el que le ha otorgado la próbida rando no mas que aquella clase de hombres
naturaleza para excitar la ternura y la com que por su fortuna ó particular profesion
pasion de cuantos le rodean : el llanto. pueden pasar la vida con mas ensanche y
Adelantando en edad, continúa sometido desahogo ; ; cuántas limitaciones no sufre
á infmitas necesidades; la libertad es para su libertad ! El estado de los negocios do
él una palabra vana. Habiendo adquirido mésticos, las relaciones de familia, la ín
la fuerza necesaria para tomarse los ali dole y el carácter de los padres, de la es
mentos, carece de inteligencia y robustez posa, de los hijos, la influencia que sobre
para proporcionárselos. Vive pues depen su situacion ejercen las vicisitudes políticas,
diente de sus padres durante muchos anos, las leyes y costumbres del pais en que mo
y sin el auxilio ageno perecería. Sin luces ra , y cien otras causas que directa ó indi
en su espíritu , sin la enseñanza de la ex rectamente le afectan , todo contribuye á
periencia , ha menester que se las comuni restringir su libertad.
quen otras personas ; de ellas depende en
su instruccion y educacion : el libertarse de
semejante dependencia fuera para él, sinó VI.
nimo de ignorancia, inmoralidad y estupi
dez. Dejadle libre , no contrarieis en nada
sus inclinaciones , permitid que se entregue Los pueblos que se dice que la disfrutan
á sus arrebatos , no le preciseis á resistir á mas amplia,, viven no obstante rodeados de
la pereza forzándole á dedicarse al estudio tantas circunstancias que la coartan , que
ó á otras tareas, y experimentaréis los do apenas puede decirse en qué se diferencian
lorosos frutos que le producirá la libertad. de otros que se cuentan sumidos en la es
Veréisle crecer cual los brutos animales, clavitud. ¿ Se libra nadie de contribuciones?
con violentos instintos , con inclinaciones se libra de las vejaciones de la policía? se
torcidas; no empleando el escaso desarro libra de las leyes que arreglan las profesio
llo de su razon , sino para excogitar medios nes agrícolas, industriales, comerciales ó
de satisfacer sus pasiones desarregladas. científicas ? Dónde está pues su libertad ?
¿Dónde está la libertad del hombre En qué lleva ventaja á los que están priva
cuando llega á la edad de la razon , ha dos de ella? Comparad un francés con un
ciéndose capaz de dirigirse á sí mismo , y prusiano ó austríaco, cotejad las restric
de ser útil a sus semejantes? Ademas de la ciones que á la libertad de cada cual im
precisa dependencia en que se halla con ponen las leyes del respectivo pais y ha
respecto á las necesidades inseparables de llaréis que la diferencia no es tanta como
la vida , se encuentra encajonado por de algunos se imaginan.
cirlo asi en un estado y profesion , que le El francés se cree libre , porque nombra
 — -25.' -
formacion
representantes
de las leyes
que ytoman parte en la to de la voluntad general , ¿ por qué asen
en el señalamien
taron esa voluntad como unica fuente de
to de las contribuciones ; se cree libre por todo poder? Si algunos de entre ellos de
que todas las mañanas al levantarse , en cían que no siendo dable ni justo que la ley
cuentra en su bufete un papel donde se leen fuese .la expresion de dicha voluntad , de
dilatados discursos , en que se atacan con bia representar la razon pública; ¿cómo es
virulencia ó se ridiculizan sin miramiento , que la consultan en un círculo tan reduci
losExaminemos
actos ó las personas
imparcialmente á qué se do? ¿con qué derecho excluyen un sin nú
de los gobernantes.
mero de capacidades, de esas capacidades
reduce tan decantada libertad. El derecho que ellos un tiempo ensalzaron hasta el ex
de nombrar sus representantes no compete tremo , y á cuyo orden pertenecían , osten
propiamente á la nacion francesa , sino á tando ufanos ese título para fundar la pre
un número tan reducido , que puede con tension de tomar parte en los negocios
siderársele en la misma categoría de las públicos , y combatir á las clases privile
antiguas clases privilegiadas. Mas de trein giadas? Inconsecuencia chocante ! clama
ta y tres millones de habitantes cuenta ron contra todo linage de privilegios,
aquel reino , y el derecho electoral está tronaron contra todas las desigualdades,
limitado á unos doscientos mil ; por mane condenaron la antigua organizacion por in
ra que para cada ciento y sesenta y cinco justa , por contraria á derechos sagrados ,
franceses, hay un solo individuo revestido por degradante de la humana naturaleza ,
de este derecho, quedando privados de él por sostenedora de barreras que impedían
los ciento y sesenta y cuatro restantes. De la completa mezcla , la confusion , la iden
los doscientos mil electores es preciso cer tificacion de todas las clases en una sola
cenar
usará una
de su
parte
derecho
muy considerable
por imposibilidad
que noó que debia apellidarse pueblo; y sin embargo
ían pronto como realizaron sus sistemas,
falta de voluntad ; con lo cual resultarán empezaron renegando de la decantada
compuestos los colegios electorales de una igualdad , escarneciendo la adulada sobe
porcion tan escasa , que será casi nula con ranía , estableciendo distinciones entre cla
respecto á la totalidad de los moradores. ses y clases, creando verdaderos privile
¿A qué se reduce pues con respecto á la gios. «Pero se nos dirá, ¿creeis que era
mayoría do la nacion , la libertad fundada posible obrar de otra manera? ¿creeis que
en el derecho electoral ? era realizable el sufragio universal? ¿po
Los ardientes partidarios de la democra díamos poner en planta nuestras doctrinas
cia hacen resaltar con vivos colores esa en toda su extension sin desencadenar so
decepcion con que se encubre un sistema bre la tierra las mas tremendas tempesta
falseado por su base ; y de esta manera es des?» Nó; pero confesad al menos que sois
parcen el descontento y la indignacion en el inconsecuentes, confesad que vuestras de
pueblo, el cual se queja de que se le en clamaciones eran arietes para derribar, no
gaña. Bien se deja entender que no somos enseñanza para construir ; confesad que
partidarios del sufragio universal , y que cuando los pueblos os echan en cara que
no creemos que en Europa pueda ensan les habeis engañado, que cuando os exigen
charse sin gravísimos peligros la arena don el cumplimiento de vuestras promesas, y
de por desgracia luchan las opiniones , los colocados á su frente los tribunos os llaman
intereses y las pasiones con doloroso en apóstatas , y os amenazan ron haceros cor
carnizamiento ; pero menester es confesar rer la suerte que vosotros deparásteis á
que los hombres que se han apoderado del vuestros antecesores , nada podeis respon
gobierno de la sociedad despues de haberla derles que no deje en descubierto , ó in
conmovido hasta sus cimientos , no admi signe
Hé mala
aqui una
fe , ódeveleidosa
las causasinconsecuencia.
mas radicales
ten las consecuencias de los principios que
ellos mismos establecieron. Si creian irrea de la inquietud que atormenta las socieda
lizable el ejercicio de la soberanía popular, des modernas : los principios se extienden
¿por qué la proclamaron ? ¿porqué ensal mas allá de los hechos; cada vez (,ue estos
zaron en teoría lo que rechazan en la prác se comparan con aquellos se palpa la con
tica? Si anatematizaron la dictadura guber tradiccion : este es el fruto de la exagera
nativa ¿por qué la entronizaron tan pronto cion v del error.
como pudieron ser ellos los gobernantes?
Si era imposible que la ley fuese el produc
 — 251 —
el brillo de los conocimientos manifestados
por un escritor, imaginándose no menos
VII. equivocadamente que las luces en un ramo
arguyen una ciencia universal, ó que el
talento teórico es lo mismo que el tino
En esta clase de materías, la libertad, si práctico; quien prefiere la incorruptible
ha de ser digna de tal nombre, ha de su honradez, no advirtiendo que esta puede
poner dirigido por la razon el ejercicio de muy bien aliarse con un natural candoroso
los derechos otorgados por la ley , ha de que sea fácilmente víctima de la solapada
suponer que no existe coaccion física ni perfidia , y que no siempre excluye la de
moral , y que no median otras trabas que bilidad de carácter que confunde la pru
las que consigo lleva la obligacion de bacer dencia con la pusilánime timidez , y toma
buen uso de sus facultades, tomando por á veces por cuerda contemporizacion la re
única regla la justicia, por único norte la prehensible condescendencia que raya en
conveniencia pública. Con tan hermosos fea complicidad ; quien se alucina con la
colores se presenta ciertamente el derecho hoja de servicios de un hombre encanecido
electoral en los libros que tratan delas teo en una carrera respetable ; sin reflexionar
rías constitucionales ; pero ¿qué hay de to que el arte de la formacion de las leyes no
do esto en la realidad? No hablemos de debe aprenderse en el reducido ámbito de
aquellos paises donde la ley enmudece y una profesion , y que hay muchos indivi
solo campea la fuerza : donde se infringen duos que han consumido largos años sir
sin miramiento de ninguna clase asi las le viendo quizás muy bien ála causa pública,
yes fundamentales como las secundarias : sin haber por esto adquirido las dotes que
que en tan aciaga situacion el derecho elec constituyen un buen legislador. ¿Cómo
toral no existe ; esta palabra es un sarcasmo quereis que en medio de este laberinto eli
cruel con que insulta á los pueblos la im ja con tino y discernimiento , el hombre
pudente desfachatez de las facciones ; es un que no llega ni de mucho á la mediana
instrumento de que estas se valen para altura en que están los candidatos entre los
realizar sus dañados intentos , establecien cuales ha de escoger ?
do la mas insuportable de las tiranías , que Para esto se nos dirá , la opinion pública
es la ejercida en nombre de la ley. Limi es ilustrada por la prensa periódica ; para
támonos á la coaccion moral , á la que di esto se pesan los méritos y calidades de los
mana de las amenazas ó amagos del poder, pretendientes; y ya que no sea dable acer
ó de aquellos que tienen probabilidades de tar siempre en el verdadero punto , por lo
alcanzarlo ; á esta clase de coaccion que no menos existen probabilidades de hacerlo
falta en ningun pais, y que es inevitable con alguna aproximacion. Pero es muy fá
atendida la condicion humana , y los pro cil pulverizar esta réplica. Segun las teo
cedimientos que están en uso para lo que rías modernas , y atendido el mismo curso
se llama explorar la voluntad de los pue natural de las cosas , en la prensa como en
blos. ¿Quién osará decir que el resultado el parlamento, existen siempre dos cam
de las urnas la expresa genúinamente ? pos : el del ministerio y el de la oposicion.
cuando se verifica la eleccion, todos los En todos los asuntos , sea cual fuere su
partidos se achacan recíprocamente intrigas gravedad y carácter, está siempre conocida
y cohechos ; y en estando concluida puede de antemano la opinion de los contendien
asegurarse que todos la darán por nula, tes. Para los ministeriales, el ministerio es
excepto el que la habrá ganado. impecable , para los de la oposicion el mi
Al mayor número de los electores les nisterio está desatentado , es imposible que
falta el conocimiento necesario para llenar acierte en nada ; y cuando se trate de con
debidamente su objeto. Trátase de elegir jeturar sobre sus actos futuros, el yerro es
nada menos que un legislador; y si de es indudable ; solo cabe la dificultad en si será
tos hay pocos , tampoco son muchos los ca mas ó menos dañoso , mas ó menos dispa
paces de distinguirle entre la multitud de ratado. Llega el tiempo de las elecciones ;
candidatos. Quien se deja preocupar por el ¿ deseais saber cuáles son á los ojos de la
don de la palabra , creyendo muy equivo prensa sostenedora del ministerio , los hom
cadamente que el que lo posee ha de ser teresados
bres mas sabios
y puros
, mas
, loscuerdos
hombres, mas
que desin
labra -
por necesidad muy entendido en la forma
cion de las leyes ; quien se deslumbra con rán, á no dudarlo, la felicidad pública?
 — 253 —
los que probablemente otorgado, ocurren todavía nuevos incon
volarán en favor del ministerio; aquellos venientes que desvirtúan mas y mas el va
son , no lo dudeis ; y con este dato ; bien lor del derecho electoral. Si esto lia de ser
podeis ahorraros el trabajo de leer los pe algo mas que un nombre sin sentido , es
riódicos ministeriales. ¿Queréis saber cuá menester que los diputados representen ó
les son los Arístides, los Catones, los Ci la voluntad pública ó la razon ; esto es que
cerones que os presentará la oposicion t sus actos ó sean la liel e-presion de lo que
ved quienes son los que la componen ó los es realmente la voluntad de sus comitentes
que por sus antecedentes y compromisos ó al menos lo que debiera ser, si se con
es probable que la refuerzen ; sabido esto , sultasen los dictámenes de la justicia y de
podeis tambien ahorraros el trabajo de ul la conveniencia. Ora tomemos por base el
teriores
Es necesario no haber visto nunca de falso principio de Rousseau, de que la ley
investigaciones.
es el producto de la voluntad general ; ora
cerca esas cosas para ignorar que se mien adoptemos el de otros que la miran como
te sin pudor, que se calumnia sin mira el resultado de la razon pública ; siempre
miento , que se adula con bajeza ; es nece encontraremos que el derecho electoral tan
sario no tener otras ideas que las miserables atropellado y desvirtuado ya en su mismo
vulgaridades de ciertos libros para ignorar origen , sufre nuevos y considerables que
que el medio mas seguro para no acertar brantos.
en la eleccion es el dar importancia , ni Las leyes formadas por los representan-
aun mediano crédito, á lo que escriben ter de la nacion no pueden ser la expre
plumas interesadas. sion de la voluntad general , por dos razo
Generalmente hablando, toman parte en nes muy sencillas.: 1.* porque esta voluntad
las
desean
elecciones
serlo : en
muchos
tal caso
empleados,
la influencia del no existe con respecto al mayor número
ó que
de casos: 2.* porque cuando existe es muy
gobierno no conoce límites ; y esta influen dificil si no imposible el conocerla. Gran
cia sirve no para hacer que formen parte parte de las leyes versan sobre materias
de la representacion nacional los mas vir en que el público no entiende : no cabe
tuosos y entendidos, sino los mas decididos pues voluntad , no habiendo conocimiento
defensores del sistema que á los ministros de lo que se ha de querer.
les plugo adoptar, y de cuya ejecucion gra Es tambien muy difícil que lasleyes sean
vita tal vez una buena parte de responsa la expresion de la razon pública arreglada
bilidad sobre los mismos candidatos. Es por los principios de justicia , y dirigida por
verdad que la influencia del gobierno está miras de utilidad general. No sabemos la
neutralizada un tanto , y no pocas veces suerte que en los siglos venideros está pre
vencida por la de los partidos que aspiran parada á las formas políticas que rigen una
á serlo ; pero en este caso lo que se hace gran parte de las naciones cultas; pero sí
no es destruir la corrupcion , sino multi creemos que la experiencia mas cuerda que
plicarla. Esta corrupcion ha llegado en In las teorías , introducirá reformas muy tras
glaterra á un extremo escandaloso ; y alli cendentales en lo concerniente á explorar
no ejerce el gobierno una influencia tan la voluntad de los pueblos, y á recoger el
grande como suele acontecer en los paises voto de la razon pública. Los sistemas
no acostumbrados al sistema representativo. electorales de nuestra época tienen el gra
La ignorancia y la malicia falsean pues biciones
vísimo inconveniente
existentesy crear
de aguijon
de conlinn
por su base el derecho electoral ; la liber
tad política por 6l expresada , pesa en la blos nuevas;
, y de
de exponerlos
llevar agitada
á cada
lavidadel
pasoá ser víc
balanza de la razon mucho menos de lo
que se cree. Las cuestiones sobre esta gra timas de intereses y pasiones particulares
vísima materia, son uno de los objetos que que cia pública;
nada tienen
de estar
que ver
cimentados
con la conxenien-
sobre ba
mas debieran llamar la atencion delos pen
sadores. Cuando se trata de leyes electora ses que con facilidad pueden ser falseadas;
les se procede por rutina , y esta rutina es de estar sujetos á una movilidad continua,
funesta. incompatible con el sosiego y bienestar del
VUL pais; de ser demasiado elásticos para pres
tarse ora á servir de instrumento á los de
Nombrados los representantes, al poner signios perturbadores de ambiciosos tribu
en ejercicio las facultades que se les han nos, ora á revestir de un carácter legal y
 — 250 —
popular, medidas arbitrarias é injustas. Con que estos interviniesen en el i
los sistemas modernos la anarquía vive so una ú otra manera.
metida á regla , la tiranía se ejerce por me Esta consideracion es
dios de leyes. porque
gura al cuerpo
manifiesta
de que
la t
Como quiera, apreciemos las cosas en su
justo valor, y no les atribuyamos mas mé cion mas ó menos directa en la
rito del que encierran. Resignados con los de los impuestos , no trae su origen de las
males é inconvenientes que siempre traen doctrinas revolucionarias , sino de los mis
consigo las instituciones humanas, procu mos elementos constitutivos de las socieda
remos mejorarlas en cuanto cabe , sin ol des modernas. Por cuyo motivo , conviene
vidar que el tiempo es un factor indispen andar con tiento en destruir este principio;
sable á todos los productos que salen de la por mas que en la práctica por razon del
mano del hombre ; y que sin su concurso , modo con que se le aplica , dé lugar á gra
no es dable edificar nada sólido y duradero. vísimos inconvenientes, que á menudo son
Pero la misma prudencia que nos aconseja mayores que las ventajas.
miramiento y circunspeccion siempre que Es mas claro que la luz del dia, que con
se trata de mudar ó innovar, nos prescribe los sistemas electorales vigentes , y las cos
tambien el deber de no preocuparnos en tumbres que se apellidan constitucionales y
favor de lo que poseemos , de no dejarnos parlamentarias, no reportan los pueblos los
llevar del entusiasmo que inspiran bellas beneficios que debieran prometerse de aquel
apariencias , de penetrar en el fondo de las principio ; es hasta imposible que puedan
cosas para examinar su íntima naturaleza. alcanzarlo por los caminos seguidos hasta
aqui. Una de las ocupaciones mas privile
giadas de las asambleas deliberantes debie
IX. ran ser los negocios de hacienda ; y estos
son los mas descuidados. ¿Se habla de
asuntos políticos? las sesiones están muy
Los límites á que debemos ceñirnos, nos concurridas; largos y acalorados debates se
precisan á contentarnos con las indicacio empeñan , en que toman parte muchos ora
nes que preceden , obligándonos á pasar al dores , haciendo ostentacion de su saber, y
decantado punto de la votacion de los im- luciendo las galas de su elocuencia; ¿pero
, puestos. Y para que no se crea que esti llega la época del exámen de los presu
mamos en poco derecho tan precioso, nos puestos ? la discusion esfria, descolorida,
apresuramos á declarar , que lejos de abri lánguida ; las comisiones presentan su dic
gar semejante opinion , estamos convenci tamen por cumplir con la rutina ; y si una
dos de que regularizado y ejercido cual que otra vez los oradores se enardecen , es
conviene , es una de las mejores garantías porque alguna de las cantidades se roza con
de la prosperidad de los pueblos , y un fre las pasiones ó intereses dela esfera política.
no muy saludable para la codicia , la pro ¿ Cuáles son las causas de esta frialdad é
digalidad y las dilapidaciones de los gobier indiferencia en materia tan importante? no
nos malos. Cuando otras razones no nos es difícil adivinarlas : la completa ignoran
impulsaran á opinar en este sentido, incli cia en el asunto sujetado á discusion , y el
náramos á ello el observar , que nuestros escaso interes que en él pueden tomar los
antepasados tan famosos por su reposada que deben dilucidarlo. De los hombres que
cordura , establecieron y conservaron este figurar suelen en las candidaturas ¿cuáles
derecho, como el paladion delas libertades son los que poseen conocimientos profun
públicas y la mas segura prenda del res dos, prácticos, atinados, en negocios de
peto debido á la propiedad. En las leyes de hacienda? Esta ciencia tan exigente en ma
Cataluña , de Aragon , de Valencia , de teria de datos , no es posible que se con
Castilla ó mejor diremos en las de toda quiste el agrado de esos hombres públicos
Europa , se encuentra consignado este pre que con tanta facilidad se improvisan en
cioso derecho de una manera mas ó menos nuestro siglo de oro. Para formar un gefe
explícita ; pudiendo asegurarse que uno de político, un ministro de tribunal supremo,
los mas bellos distintivos de la civilizacion un embajador , ó un secretario del despa
europea fué el que ya desde se cuna tendió cho ¿de qué sirve esta ciencia? Para seme
á precaver que el poder público no dispu jantes cargos , basta el arte de estender un
siese de h hacienda de los ciudadanos , sin programa con soltura y desembarazo sobre
 257 —
el tema que ofrezcan las circunstancias, legisladores en tantas secciones cuantas son
basta el talento de pronunciar en las Córtes las provincias representadas. Entonces apli
un discurso bueno ó malo, en pro ó en cando la rc^la de que para cuidar de un
contra de un ministro; pero de nada sirven patrimonio es necesario conocerle, sabien
los conocimientos sobre las desagradables do en que consisten sus productos y sus
materias rentísticas , que no ofrecen atrac cargos , se debería obligar á cada diputado
tivo sino cuando toca el turno de percibir á estender en el término de veinte y cuatro
el pingüe contingente. Además , que si el horas, á guisa de opositor á cátedra ó ca-
hombre público raya muy alto en la cate nongía, un informe que continiese la des
goría política , de manera que el no tomar cripcion del pais por él representado , en
parte en alguna de las discusiones haya de que se detallase cuál es su riqueza agrícola,
servirle de mengua y desdoro, bástale ocu industrial ó mercantil , cuáles son los nom
parse breves ratos en la lectura de alguna bres de las contribuciones directas ó indi
obra de economía política, buscando los rectas que suporta , cuáles las bases que
capítulos en que se trate de la produccion por ley ó costumbre se adoptan en los re
y distribucion de las riquezas , y los otros partimientos, cuáles los males que los pue
en que se ventila directamente el asunto de blos lamentan , cuáles las reformas locales
las contribuciones, para quedar desde lue que podrían hacerse , cuál el estado de los
go habilitado , si fuere menester desatarse principales caminos , canales y demás me
en una estupenda improvisacion, ó escribir dios de comunicacion ó de cultivo , cuál el
el magnífico preámbulo de un dictámen. de la instruccion y educacion, cuál el esta
Que si en apurado caso llegase la notabili do de los establecimientos de beneficencia,
dad política á verse encargada de la forma los males ó inconvenientes de que adolecen
cion de un ministerio, encontrados los cua y los remedios mas oportunos para neutra
tro individuos que serán como satélites del lizarlos ó curarlos , cuáles los sistemas que
afortunado presidente, no faltará tiempo se practican y los fondos con que se man
para buscar entre los antiguos empleados tienen ; en una palabra , debería someterse
del ramo , ó los agiotistas y jugadores de al diputado á un exámen que pusiese de
bolsa , alguna medianía que se prestará manifiesto si posee ó nó los conocimientos
dócil á todas las voluntades de sus colegas, necesarios para votar , si nó con mucha
y que contentándose por lo que toca á los probabilidad de acierto , al menos con me
asuntos de su incumbencia con dar rutina diano conocimiento de causa. Estendidos
rio curso á los espedientes, no saldrá de su los espresados documentos, firmados por
somnolencia habitual , sino cuando se trate sus respectivos autores , deberian sujetarse
de discurrir arbitrios para satisfacer nece á la censura del público por medio de la
sidades urgentes : arbitrios que á pesar de imprenta. Parécenos que el resultado seria
sus distintas formas y variados nombres, gracioso, y que el mayor número manifes
todos se reducen al arte vulgar y funesto taria que nada entienden de lo que han de
de los dilapidadores de la hacienda pública arreglar.
ó privada : sacrificar el porvenir á lo pre Los pueblos salieran sin duda mas ga
sente ; hipotecar por una cantidad mezqui nanciosos, si en gobernarlos se empleara
na , productos cien veces mayores. menos ciencia y mas buen sentido , menos
Es cosa de ver la facilidad con que una teoría y mas observacion práctica. ¡ Cuán
provincia nombra por su representante á tos y cuántos asertos pasan por indudables
quien tal vez no pisó nunca el terreno cu en un Congreso de legisladores que un
yos intereses está encargado de proteger; hombre sencillo pero experimentado , mi
lástima causa, y á veces congoja y despe raria como solemnes despropósitos ! ¡ Cuán
cho, el mirar entregadas á manos de un tos proyectos, llenos al parecer de ciencia
miserable aventurero , las riquezas de mi y discrecion , resultan sueños irrealizables
llares de familias , con la libre facultad de cuando se trata de ponerlos en planta ! ¿ y
dar su voto sobre las cargas que deben im qué medios se practican para precaver que
ponérseles. los cuerpos legislativos no se compongan
Hemos pensado alguna vez que seria un de esos hombres que tienen la funesta faci
buen medio para evidenciar los defectos de lidad de hablar de repente sobre todas las
las leyes electorales el practicar , si fuese materias, y cuya ignorancia es tanto mas
posible, la operacion siguiente. Reunidas peligrosa cuanto se oculta bajo el oropel de
|as Cortes podríanse dividir los cuerpos co- la ciencia ? Observad los resultados y fácil-
TOMO I. 17
 — 258
mente conjeturaréis cuál debe de ser el sis reunan mas causas para preparar nuevas
tema que á ellos nos conduce. desventuras en lo venidero?
Desde 1810 lleva la España 17 años de Es cierto que las épocas de revolucion son
gobierno representativo; ¿cuál es el fruto? las mas estrepitosas, es verdad que los da
En los 9 años trascurridos desde 1834 , en ños producidos por ella , se hacen sentir
cuyo tiempo no se ha interrumpido nunca, con gran fuerza , se ofrecen de bulto á los
las Córtes han presentado una arena donde ojos de todos , se hacen palpables á todas
han luchado sin tregua ni descanso las las manos: no hay familia que no llore
pasiones políticas ; pero la instruccion pú sensibles pérdidas, ora de fortuna, ora de
blica , la educacion , los sistemas de bene personas queridas que perecieron en los
ficencia, la administracion, la hacienda, vaivenes de los disturbios civiles ó en las
los códigos, todo está intacto, todo yace sangrientas refriegas de fratricidas luchas;
en el mas profundo desorden. ¿Qué suce no hay clase, no hay interes, no hay opi
derá en adelante ? continuarán las recrimi nion que no haya sufrido contradicciones,
naciones, la desconfianza, la irascibilidad persecuciones, desastres; no hay pueblo
de los partidos , la perfidia y las turbulen que no haya presenciado escandalosas es
cias de las fracciones? ¿Nos atreverémos cenas, y tal vez dolorosas catástrofes: cual
á deshojar la bella ilusion que abrigan las furibunda Medea la revolucion anda espar
almas candidas é inexpertas, las que ni ciendo en todas direcciones los miembros
preven el mal futuro ni recuerdan el pasa de sus propios hijos ; y experimentan sus
do , por ser tan fuerte y vivo el impulso furores tanto sus amigos como sus enemi
que las inclina al bien ? gos: los despojos, la proscripcion y el ca
Creemos que á las naciones como á los dalso , no respetan clase ni persona.
individuos no se les daña haciéndoles cono Por esta causa al salir los pueblos de esa
cer su verdadera situacion; no se remedian época turbulenta y azarosa, al entrar en un
los males si se ignora que existen ; no se régimen legal, al ver establecido un gobier
los precave si no se teme que vengan. no templado y suave, abominan del tiempo
Quien escribe para el público debe decir pasado , detestan hasta el nombre de lo
siempre la verdad por dura que sea; y que tantos males les acarreara , no alcan
cuando no le sea posible, condénese al zan á comprender cómo bajo un sistema
silencio antes que permitirse el engañar á regular, sometido á las leyes, bonancible,
los pueblos.—J. B. sosegado y tranquilo, sea dable que sufran
mayores quebrantos que durante la revo
lucion ; y sin embargo nada hay mas cierto:
las revoluciones de los pueblos son enfer
TODAVIA IIAY TIEMPOS PEORES medades agudas que consigo traen exalta
QUE LOS DE REVOLUCION. cion, fiebre, delirio, pero toda enfermedad
proviene de causas que afectaron y desar
reglaron la organizacion , y acontece muy
Estraña paradoja les parecerá á no po á menudo que un errado plan de convale
cos , proposicion tan peregrina ; recio se cencia al paso que aparenta restablecer la
les hará de creer , que la revolucion , hija salud y las fuerzas, mina sordamente la
de la corrupcion y del error , terrible per existencia del enfermo conduciéndole á la
sonificacion de la fuerza levantada contra muerte por halagüeños caminos.
la ley , no traiga consigo el peor de los Si , este es el peligro que amenaza á los
tiempos, y que no sea su época la mas ca pueblos despues de la revolucion , este es
lamitosa que pasar pueda sobre una socie el mal que ha caido y pesa todavía sobre
dad. Ella destruye todo lo existente, amon la Francia, este es el mal que se colum
tona escombros y ruinas, retaja los vínculos bra en el porvenir de la agitada España,
sociales y domésticos , rompe los lazos po este es el mal que difícilmente evitaremos,
líticos, acostumbra á la insurreccion, mina si no cuidamos de ponernos luego en vigi
la disciplina de los ejércitos, esparce abun lante guarda.
dante semilla de inmoralidad, sume á los No es para una nacion el mayor de los
pueblos en el caos mas espantoso; ¿pueden infortunios el que por algun tiempo se vier
acaso darse mayores males? ¿es posible ta en los campos de batalla la sangre de sus
concebir otro tiempo en que los pueblos hijos : despues de guerras formidables que
sufran mayores calamidades, y en que se diezmaron la juventud , levántanse á veces
 •250 —
los pueblos con mayores fuerzas , con mas ficada por la aquiescencia de todos los pue
vigor y lozanía. Asi el adalid que ha toma blos.
do parte en cien batallas , que ha derrama Grandes son los infortunios que acaba
do á menudo su sangre en peligrosas re mos de indicar; entráñense en ellos irri
friegas, blande el acero con tanto mas brio tantes injusticias, escándalos feos y repug
y energía cuanto mayores son las cicatrices nantes, inmoralidades asquerosas, vilezas,
de la mano que lo empuña y del brazo que manejos, corrupcion y todo lo mas detes
lo esgrime. table que abortar puede sobre la tierra el
No es tampoco el mayor infortunio de genio del mal; pero sobre estos infortunios
una nacion , el que haya venido al suelo hay todavía otros mayores , sobre tan ter -
un sistema político, y que desmontada é ribles males hay otros todavía mas terribles.
inutilizada la antigua máquina del estado, Y son esos males , cuando la vida intelec
sea preciso echar mano de otra mas adap tual y moral de los pueblos es atacada en
iada á las circunstancias , mas propia para su misma raiz , cuando en medio de las de
el objeto á que se destina ; Dios no ha de licias de la paz , de la prosperidad de los
jado tan infecunda la sociedad que no sea intereses materiales, y de la engañosa ilu
capaz de gobernarse sino por un medio y sion producida por un facticio aumento de
bajo un sistema ; la razon , la historia y la las fuerzas del estado, se destruyen las
experiencia nos están enseñando, que sal creencias religiosas , se estravian las ideas
vos los principios tutelares de que en nin morales, se enervan los ánimos con volup
guna situacion se desentiende impunemen tuosos goces , se nutre un desmedido orgu
te la humanidad , son varias las combina llo, se fomenta la vanidad, aflojándose de
ciones que pueden idearse para establecer esta suerte todos los lazos sociales y domés
un gobierno que afiance el orden , proteja ticos, entronizando el culto de los intereses
los intereses públicos , y labre la prosperi materíales, divinizando el vicio con la pros
dad y ventura de los pueblos. titucion de las bellas artes , sustituyendo á
No es para una nacion el mayor de los la virtud el egoismo, á los sentimientos
infortunios, el que en medio de las revuel nobles y elevados la mezquindad y villanía
tas y azares de una época tormentosa de pasiones astutas y rastreras.
hayan salido gravemente vulnerados respe Es muy temible que terminada la desas
tables intereses materiales ; ni que algunos trosa revolucion que nos agita y atormenta,
de estos hayan sido destruidos en su totali entremos en una era que se apellidará de
dad. En la vida, en las fuerzas de las na regeneracion , en la cual se mostrará de
ciones, entran ciertamente los intereses una parte recelosa esquivez con respecto á
materiales ; pero rara vez acontece que la las doctrinas demasiado populares, y de
pérdida ó la desaparicion de algunos de otra mucha prevencion contra las reaccio
ellos acarreen la ruina de la sociedad. Esta nes que tiendan á resucitar los principios y
como el individuo , no vive de solo pan ; si sistemas antiguos. La alianza del orden con
no satisface sus necesidades materiales de la libertad será la bella fórmula en que se
una manera , acude á ellas de otra ; el an compendiará el pensamiento dominante:
tiguo vacío se llena con algun medio de nada de anarquía, se dirá, nada de exage
nueva invencion ; el tiempo cuida de reve raciones democráticas , nada tampoco de des
lar los defectos del sistema que se ha sus potismo, nada de supersticion, nada de preten
tituido al anterior ; la esperiencia va amaes siones fanáticas. Fuerza en el gobierno, vigor
trando en su manejo , hasta que al fin se en la administracion , centralizacion de to
llega á desenvolver y regularizar lo que en dos los ramos ; pero libertad en las ideas,
un principio se presentaba cual embrion indulgencia en las costumbres. Vigilante
informe y monstruoso. La misma injusticia inspeccion sobre la enseñanza , pero com
oe las antiguas destrucciones va borrándo pleta tolerancia y disimulo en todo lo que
se de la memoria á medida que el tiempo dimane de excesivo celo por la ilustracion
trascurre ; las avenencias y las transaccio- y el adelanto. Proteccion á la Iglesia, pero
ciones van legitimando mas ó menos el proteccion desconfiada , suspicaz , que se
nuevo orden de cosas; hasta que vienen los alarme fácilmente por la firmeza de un pár
siglos con su prescripcion, con aquella roco ó la pastoral de un prelado ; protec
prescripcion que no necesita de la autori cion que haga respetar los templos , pero
dad de las leyes , sino que está dictada por que procure encerrar en ellos la religion,
el buen sentido del humano linage y justi de suerte que no salga de allí, y no alean
 — 260 —
ce á ejercer influencia sobre la sociedad; aborrece á un estado que detesta. Malo co
permision de defender el dogma y la mo mo es el sistema seguido en Francia , qui
ral contra sus enemigos, pero dignidad y zás sea ahora el único posible, porque du
severidad contra los que se atrevan á reve damos que tuviese probabilidad de triunfo
lar malas tendencias del gobierno , pésimo ni mucho menos de duracion , cuanto ten
influjo de altos magistrados, aviesas miras diese por medios violentos á dar ascendiente
de un plan de instruccion , abusos de pro y preponderancia á las sanas doctrinas; pe
fesores que propinen funestas doctrinas á ro aquí tan lejos estamos de hallarnos en
la juventud. Asi con pocos años de paz y tan deplorable situacion , que muy al con
de órden se cambiarán radicalmente las trario , si algo ha de encontrar poderosa
ideas, se modificará el carácter nacional, resistencia , y dar tal vez lugar á choques
y la España adelantada y culta conservará y conflictos , será el intento de plantear en
apenas un recuerdo de lo que fuera en nuestro suelo el sistema francés.
tiempo de nuestros antepasados. Y cuando esto decimos, no se nos oculta
Es menester no hacerse ilusiones, es que en una nacion vieja, y que por añadi
preciso no haber visto las cosas y tener es dura ha sido trabajada por largos años de
caso conocimiento de los hombres, para no guerra extrangera é intestina , y por inter
columbrar que nos amenaza tan triste por minable serie de revueltas, debe de haber
venir ; es necesario no haber observado la mucho que reformar, que corregir y orde
influencia que de un siglo á esta parte ha nar ; no se nos oculta que el siglo xix es
ejercido la Francia sobre nosotros, para no muy diferente de los anteriores, que es
conjeturar la que andara ejerciendo en lo otra la situacion de Europa , que no es el
venidero : y á nadie se oculta que el siste mismo el curso de las ideas, que se han
ma de gobierno que acabamos de describir, variado sobremanera las costumbres, y que
es el que prevalece entre nuestros vecinos. por fin el pueblo español de hoy no es el
Hay empero entre la Francia y la España de Felipe II , ni tampoco el de Cárlos III,
una diferencia profunda, y es, que el in ni aun el de 1808; sabemos que el tiempo
dicado sistema es allí la expresion bastante ha ejercido tambien sobre nosotros , su in
fiel de la sociedad , cuando aqui fuera una fluencia modificadora , que no han pasado
importacion exótica que se hallaría en en vano las revoluciones, que no han cir
abierta oposicion con las ideas, las costum culado sin producir su fruto los libros mo
bres, los hábitos de la inmensa mayoría de dernos, que no han dejado de afectar el
la nacion. Allí la sociedad es escéptica, carácter nacional la prensa y la tribuna , y
aquí es católica ; allí están volcanizadas que por fin el aliento del siglo que se nos
muchas cabezas con las teorías democráü7 está comunicando incesantemente por infi
cas , aquí conservan todavía profundo ar nitos conductos ha descompuesto en parte
raigo los principios monárquicos; allí las la fuerte contextura que dieran á la nacion
costumbres han sido afectadas y modifica sus instituciones antiguas; nada de esto ig
das en sentido popular por una revolucion noramos ; y por lo mismo estamos muy
imponente y aterradora, que á vuelta de lejos de soñar en tiempos que pasaron ya;
injusticias, de crímenes y catástrofes, trajo conocemos que hay nuevas necesidades y
al fin la gloria militar y la organizacion que es preciso satisfacerlas ; que hay nue
administrativa , aquí una revolucion mise vos males por ahora indestructibles que es
rable y raquítica , inaugurada con intrigas preciso tolerar; pero creemos que una con
y desmanes , continuada con despreciables ducta prudente y templada , que procure
motines, sostenida en su término por un armonizarlo todo del mejor modo posible,
poder militar incalificable, ha producido nada tiene que ver con un sistema funesto,
una fuerte reaccion en los espíritus, ha he intolerante con el bien , indulgente con el
cho desertar de la nueva bandera á muchos mal , con un sistema en que para nada se
incautos que en ella se afiliaran de buena aprovecharían los restos de nuestra antigua
fe; resultando que la generalidad de los civilizacion, en la cual, digan lo que quie
hombres honrados , y no pequeña parte de ran la ignorancia y la mala fe , no deja de
los mas entendidos , contemplan ora con encontrarse mucho de útil y de admirable.
indignacion, ora con desdeñosa sonrisa, El empeño de fundir de nuevo la nacion
esas impotentes tentativas, esos estériles entera como arrojándola en un crisol, ha
ensayos, con que se obstinan algunos en perdido y desacreditado á la revolucion , y
conducir la nacion por caminos que ella perderá y desacreditará á cuantos se obsti
 — 261 —
nen en tan errada conducta. Si quien la paña al verdadero saber; y que en ofre
adoptase fuese un gobierno regular , esta ciéndose la oportunidad , puedan dar á sus
blecido sólidamente, y que por un concur adversarios lecciones severas, mostrándoles
so de circunstancias contase con muchos que tambien se hallan los buenos á la altu
elementos de fuerzas, seria su accion mu ra de los conocimientos de la época ; que
cho mas dañosa que no la de la revolucion; cuando aprueban , no es por una deferen
pero tambien abrigamos la esperanza de cia ciega , ni por una parcialidad interesa
que se estrellaría .contra los obstáculos que da ; que cuando condenan , no es por falta
en abundancia le suscitaran las creencias de conocimiento de causa, no es por igno
religiosas y las costumbres públicas, apo rancia, no es por rencorosa malicia, sino á
yadas y robustecidas por ese buen sentido impulsos de convicciones profundas , á la
que es uno de los caractéres que distinguen luz de abundante doctrina. De esta suerte
á esta gran nacion. Sin embargo, bueno es se ha de conquistar un puesto aventajado
que todos los hombres de sanas ideas , de en la opinion pública; de esta suerte se han
intencion recta y de corazon honrado y de rechazar las calumnias de los enemigos,
amantes de -su patria, estén prevenidos con y desvanecer las preocupaciones de los ilu
tra el riesgo que acabamos de indicar ; es sos ; asi , y solo asi , se alcanza influencia
preciso que los elementos de bien que tan quiere
legítimaelenderecho
los negocios
de amonestar
públicos á, los
se ad-
go '
to abundan en nuestro suelo, se pongan en
vivo movimiento , que se acerquen y com bernantes con decorosa firmeza ; asi , y solo
binen acertadamente para formar una masa asi, se logra que en circunstancias críticas,
compacta , en torno de la cual se agrupen en momentos peligrosos, preste atento oido
todas las fuerzas para resistir á su debido la nacion á una voz independiente que cla
tiempo y en el terreno de la justicia y de ma por el bien público , que señala los es
la ley , á los ataques que disfrazado de mil collos en que corre á zozobrar la nave del
maneras no dejará de dirigirnos el genio estado ; asi , y solo asi , se obtiene que un
del mal. grito de Alerta dado con imponente osadía,
La instruccion y la educacion son los dos pare el brazo levantado ya y pronto á des
ramos que conviene no perder nunca de cargar el golpe , y haga retroceder á los
vista para no permitir que el impuro alien gobernantes que se empeñaran en caminos
to de la corrupcion y del error estravie de perdicion.—J. B.
entendimientos desprevenidos , y mancille
corazones inocentes. Conviene mantenerse
en vigilante guarda contra las innovaciones,
que si fueren malas , serán tanto mas da POLEMICA IíELIGIOSA.
ñosas , cuanto mas fuerte sea el gobierno
que las introduzca y mas regular y ordena
da la accion con que se las plantee y fo
mente.
Este cuidado y vigilancia imponen obli
gaciones gloriosas, pero pesadas; porque EXISTENCIA DE DIOS.
los que se propongan resistir al mal , es
necesario que conozcan el bien; y nó el
bien en su aislamiento, en su naturaleza
absoluta é independiente , en su generali En el número anterior demostramos la
dad abstracta y vaga; sino en su forma imposibilidad de arreglarse por el mero
aplicable á las circunstancias , adaptada á acaso el sistema planetario ; y de consiguien
las necesidades de la época , acomodada al te con mayor razon el del universo. Con
espíritu del siglo , en armonía con las cos riguroso cálculo se puso de manifiesto, que
tumbres dominantes ; conviene no dejar á no solo era absurda semejante suposicion
los adversarios el pretexto de que se trata tratándose de un movimiento ordenado
de combatir la ilustracion y el adelanto por continuo , sino tambien con respecto á una
medio de declamaciones ignorantes y faná colocacion momentanea. Pero al esforzar
ticas , conviene que los sostenedores de la aquel argumento, estribamos siempre en
Religion y de los sanos principios en mate la hipótesis de que los cuerpos celestes es
rias políticas , se presenten á los ojos del taban ya formados , habiéndose reunido
público con el prestigio que siempre acom los átomos para constituir aquellas masas
enormes. Asi, absurdo como era el supues es de 1,853,116,0*2,049,079,468,459 va
to de la ordenada combinacion casual , no ras cúbicas, que evaluado en pies nos da
lo era tanto sin embargo cual se presenta 50,034,133,145,045,145,048,393 pies cú
rá si abandonamos aquella hipótesis que bicos.
por un momento permitíamos á nuestros Demos que la tierra se hubiese de for
adversarios, pero que no dejaba de ser mar de pequeñas masas, cuyo volúmen
enteramente arbitraria. En efecto: ¿qué fuesen un pie cúbico; ¿no se pierdela ima
razon existe para suponer por ejemplo las ginacion al pretender orden , concierto, en
partículas que forman el cuerpo celeste queese número de cuerpos abandonados á la
apellidamos Saturno reunidas ya en una casualidad? y qué será si la evaluacion se
sola masa, ¿la formaron desde toda la eter hace en pulgadas y luego en líneas y pun
nidad ó nú? ¿qué razon puede imaginarse tos, y asi en cantidades menores multipli
para apoyar esta sentencia ? Se hablará de cando los valores que resulten por el cubo
necesidad , será asi porque es asi ; es decir
de los antecedentes ?
se afirmará gratuitamente la existencia de Despues del número inmenso de partes
un hecho que en nada puede afianzarse. que nos darían esas multiplicaciones suce
Movidos sin duda por esta reflexion los de sivas, todavía no habríamos hecho nada;
fensores del acaso , han sostenido que el porque estarian intactas las demas conside
universo habia pasado por una infinidad raciones físicas que demuestran la estupen
de transformaciones ; y de una ú otra ma da divisibilidad de la materia. Un grano de
nera admitieron el caos primitivo, supo almizcle llenará de olor un dilatado espa
niendo entregados todos los átomos á un cio, durante mucho tiempo; en todos los
movimiento ciego, necesario, perenne has puntos existirán moléculas de aquel cuer
ta encontrar la conveniente situacion , laspo , pues donde quiera que se sitúe el órga
leyes de armonía que en la actualidad ve no que recibe sus impresiones se siente afec
mos dominar sobre la materia. tado ; y no obstante el grano de almizcle
Claro es , que si la probabilidad de si no habrá tenido disminucion sensible; tan
tuarse los cuerpos en la combinacion cor ta es la divisibilidad á que han llegado sus
respondiente no existia, ó mas bien, si era
partes. Suponed una division semejante
infinitamente grande la probabilidad en en el globo de la tierra ; ¿ podría expresar
contrario , será si cabe mas infinita esta úl
se en guarismos el número que resultara ?
tima, cuando no supongamos formadas ya arrojad ahora todas aquellas partículas en
las masas; porque entonces los objetos la inmensidad del caos, hacedlas mover
combinables serán en un número infinita por el tenebroso espacio, sin mas guia que
mente mayor, y de consiguiente la teoría la casualidad , ¿ os atreveréis á esperar or
de las combinaciones y de las probabilida den y concierto ?
des arrojará nuevos torrentes de luz , ha Adviértase ahora, que este cálculo está
ciendo mas sensible y palpable el absurdo fundado en el solo supuesto de arreglar las
qne se ven precisados á devorar los que no partículas de la tierra; ¿y qué es esta en
admiten la existencia de Dios. en comparacion del universo? Calcúlase
El lector recordará el punto de eviden que la masa del sol es 329,630 veces ma
cia á que llegó la demostracion del absur yor que la de la tierra ; añadid á esto la
do, suponiendo la combinacion de solos masa de todos los planetas , de todos los co
doce cuerpos; ¿qué será si los descompo metas , con todos sus satélites , la de todas
nemos en partes, y recordamos los experi las estrellas fijas , la de los otros cuerpos
mentos que nos manifiestan la inconcebi que no conocemos, y que vamos descu
ble divisibilidad de la materia? ¿si atendebriendo cada dia , la de la luz desparrama
mos á las razones que la prueban tan da por todo el universo , y la de los demas
grande , hasta el punto de que algunos flúidos que divagan por la inmensidad del
sostienen que es infinita ? espacio ; imaginadlo todo descompuesto ,
raciones
Tomemosgeodésicas
por ejemplo
manifiestan
la tierra;
quelasesope
un
reducido á átomos, mezclado, confundido,
nadando en la inmensidad ; ¿ quién se atre
esferoide en que el eje mayor ó sea el diá verá á pedir órden á ese desorden elevado
metro del Ecuador es de 15.254,598 varas, á una potencia infinita? El espíritu se aba
y el eje menor ó la distancia de polo á po te al fijar la mirada sobre semejante caos ;
lo; de 15.209,063 varas. Aplicando el cál la cabeza se desvanece al contemplar aque
culo , resulta que el volumen de la tierra lla espantosa imagen de la confusion que
nos figuramos en la eterna noche del
averno.
Los ateos nos objetarán que existiendo
en medio del caos una ley necesaria que
llevaba á los cuerpos á una combinacion
armónica habia de brotar el orden del se
no del desorden . La materia , dirán ellos ,
está sujeta á las leyes constantes é invaria
bles, como nos lo está mostrando la expe
riencia ; luego entregándola al movimien
to , vendría á parar á una combinacion de
terminada , donde resaltarían el órden y la
armonía. Pero, en primer lugar, ¿quién
estableció esas leyes? sin Dios, sin inteli
gencia , habremos de confesar que son una
necesidad; es decir afirmaremos gratuita
mente un hecho que es de la mayor tras
cendencia. Cuanto mas poderosas se su
pongan esas leyes para hacer salir el órden
del desorden , tanto mas estan clamando
que quien las ha establecido estaba dotado
de inteligencia. En todas las observaciones
hechas hasta aquí sobre la materia , nunca
se ha notado otra cosa que indiferencia pa
ra el reposo como para el movimiento. So
metida á ciertas reglas que apellidamos con
distintos nombres , pierde la direccion que
aquellas le comunican , y aumenta ó dis
minuye la velocidad que de las mismas re
cibe , si nuevos motores la impulsan , ó al
gunos obstáculos la detienen. La asercion
pues que atribuye á su íntima naturaleza
la propiedad de unas leyes altamente geo
métricas , es el mayor de los absurdos. Pe
ro demos á los ateos, que existiesen esas
leyes anteriormente á la máquina del uni
verso, demos que los átomos revolviéndose
en la inmensidad del espacio hubiesen es
tado sometidos á esa necesidad ciega , orí-
gen de un órden tan admirable; ¿será po
sible que con ellas se hubiese formado el
mundo? Newton que conocía ciertamente
las dichas leyes mejor que todos los ateos,
confiesa con ingenuidad , que si bien ellas
bastan para dar razon del movimiento del
universo una vez formado, no son suficien
tes empero para explicar su formacion. Sa
bido es que el ilustre geómetra se humilla
ba al descubrir el dedo omnipotente en
aquellas maravillas que su genio contem
plaba tan de cerca ; no consideraba los mo
vimientos delos astros como efectos de un a
mera casualidad , sino que señalando las
reglas á que estaban sometidos se abstenía
de decir cuál era la causa; pero si no en
traba en cuestiones metafísicas sobre la
naturaleza de la misma, reconocía que fue
ran cuales fuesen las causas secundarias,
al fin era preciso llegar á una primera, á
una inteligencia infinita , á un poder sin
límites, á Dios.
Una de las leyes que se consideran como
fundamentales, es la que se llama de atrac
cion ó gravitacion universal. Sabido es que
esta obra en razon directa de las masas é
inversa del cuadrado de las distancias ; y
que de esta suerte se explican los movi
mientos de los cuerpos celestes ; no siendo
las famosas leyes de Keplero masque apli
caciones ó consecuencias del principio uni
versal. Admitida la verdad de este, tal
como suelen establecerle los físicos , y sin
descender á ninguna de las cuestiones que
en diferentes tiempos han dividido las es
cuelas, observarémos que suponiendo el
mundo entregado al caos es imposible que
de él saliera por la mera fuerza de la gra
vitacion. Para que esta obrase de manera
que pudiera producir órden y armonía, se»
ria preciso suponer esta armonía y este ór
den en las masas y en las distancias ; por
que de otra suerte no habria probabilidad
de que saliese un mundo tan ordenado cual
el que tenemos á la vista , sino una de las
infinitas monstruosidades que podemos ima
ginar. ¿Quién nos ha dicho que debieran
formarse nunca masas compactas? ¿cómo
sabemos que se establecerían determinados
centros en torno de los cuales comenzaran
á verificarse las revoluciones que dieran al
fin por resultado ordenados sistemas? Al
Sol ó á las materias de que está formado ,
¿quién los constituyó centro de los movi
mientos de los átomos que componen los
otros planetas? Antes que las fuerzas cen
trípeta y centrífuga se combinasen para
producir el movimiento elíptico, ¿por qué
no se precipitaron los cuerpos al centro de
atraccion, ó escapándose por la tangente
no anduvieron corriendo á inmensa distan
cia ? Para que pueda existir la ley es nece
sario que existan los términos de la propor
cion que la anuncia ; es necesario suponer
que estan determinadas las distancias y las
masas ; en faltando esta condicion , tan le
jos estuviera la ley de ser un elemento de
armonía , que antes bien lo fuera de nuevo
desórden. Atraccion en todos sentidos , cen
tro en todas partes; es decir en ninguna:
todo desórden , todo confusion.
Suponiendo existente la fuerza de la
atraccion universal antes de ordenarse el
mundo y de formarse los grandes cuerpos
de que se compone , mediaban obstáculos
 — 264 —
para que esta ley pudiese producir nada dotado de razon como de un glorioso dis
ordenado. Sabido es, que á mas de la di tintivo, forceje hasta tal punto para dester
cha atraccion , la experiencia ha manifes rar del universo la razon suprema. ¿En tan
tado que hay otra que por analogía se ape poco estimais la inteligencia que asi odieis
llida atraccion molecular, mas conocida ge el nombre de ella euando se trata de orde
neralmente con el nombre de afinidad. Asi nar el mundo ? Os envaneceis de la vues
como la primera obra á largas distancias , tra , la mostrais como blason de nobleza ,
esta ejerce su accion á distancias insensi encareceis su alcance y se exalta vuestro
bles , cuando los cuerpos estan en contacto orgullo á la sola idea de que se pretende
ó en mucha proximidad. Estando todos los rebajar alguno de sus quilates; ¿y no ad
átomos que componen la máquina del uni mitiréis una inteligencia de donde haya di
verso, desparramados por la inmensidad manado la vuestra , y que haya dado or
del espacio , claro es que andarían de mil den y concierto á esa máquina que os asom
maneras diferentes , revueltos y confusos, bra con su grandor y sus maravillas?
de modo que la accion de la afinidad pu Si no existieran otros motivos para con
diese desarrollarse en varios sentidos. vencer que la naturaleza del hombre ha
¿Quién es capaz de calcular las modifica sufrido algun quebranto, el cual la ha re
ciones que las fuerzas de la atraccion mo bajado de su dignidad primitiva, y ha os
lecular causarían sobre los efectos de la curecido la mente, y torcido la voluntad,
universal ? Ahora formadas ya las masas no bastarían sin duda á probarlo , los inconce
es posible que las leyes de la afinidad des bibles extravíos á que se abandona nuestro
concierten el mundo , porque estando li espíritu. Se escribe la historia de las na
mitada su accion á distancias muy peque ciones , se pintan sus revoluciones y sus
ñas, se halla por decirlo asi aprisionada. guerras, en las que vemos retratada cier
Pero cuando este obstáculo no existía, tamente la miseria y la iniquidad del hom
cuando divagando sueltos los átomos esta bre; pero quizás en ninguna parte se pre
ba lleno el mundo de una mole informe de sente tan negro el cuadro , como en la his
fluidos de naturaleza muy diferente , claro toria del espíritu , es decir, delas ciencias.
es que debian resultar infinitas combinacio En esa region sublime , donde al parecer
nes que modificasen los efectos de la gravi debiera reinar señora la cuerda sabiduría ,
tacion universal. donde las pasiones no debieran tener en
Concebirémos fácilmente la variedad de trada ni ser toleradas en los alrededores,
resultados á que esta concurrencia de cau para que no contaminasen la atmósfera con
sas podia dar lugar , si advertimos que las su apestado aliento ; allí campean tambien
leyes de la afinidad estan de suyo sujetas á la locura , el orgullo , la ciega presuncion ,
muchas alteraciones. En efecto : la expe manifestando al hombre en toda su des
riencia ha manifestado que para determi nudez, llenando de cruel amargura á quien
nar con alguna exactitud sus resultados , es creyera que habia de encontrar álos sabios
preciso atender nada menos que á siete cir á manera de coros de ángeles. Pero nunca,
cunstancias. 1.a: cantidad relativa de los nunca como en el pasado siglo se vió al ge
cuerpos que se ponen en contacto. 2.a: si nio del mal insultar con tanta impudencia
los cuerpos son simples ó compuestos. 3.a: al buen sentido de la humanidad ; nunca
cohesion que entre sí tienen. 4.a: grado se le vió con tan perversos designios, cu
de calor á que se hallan expuestos. 5.a : bierto con las ínfulas de la ciencia para ex
cantidad y calidad del fluido eléctrico que traviar á los incautos ; nunca se vió tama
contienen. 0.a: peso específico de las mis ño esfuerzo para reducir á sistema la irre
mas. 7.a : presion que sufren. Andando los ligion , estableciéndola sobre su dignabase:
cuerpos revueltos, entregados al mero el ateismo.
acaso, es evidente que se cambiarían á ca La naturaleza , las fuerzas superiores , las
da paso las indicadas circunstancias , de lo leyes necesarias, la sucesiva transformacion de
que resultaria una confusion que no es ne los seres , y cien otras palabras semejantes
cesario ponderar. fueron adoptadas como motes del enigma;
Estrañeza causa, por no decir indigna ellas no expresaban nada, es cierto; pero
cion , el ver que se echa mano de tamaños envolvían las ideas en misteriosa oscuri
despropósitos para eludir las inconcusas ra dad, hacían que el sencillo lector no ad
zones con (fue se demuestra la existencia virtiese toda la absurdidad de las hipótesis,
de l)ios; imposible parece que el hombre sobre que se intentaba cimentar el sistema:
y quizás se le hacia creer que era científi
ca una explicacion que no estribaba sino
en una palabra empleada con la mas insig
ne mala fe. Las matemáticas, los conoci
mientos físicos , habian dado grandes pasos.
Se explicaban muchos fenómenos de una INSCRIPCION
manera si nó satisfactoria á lo menos plau
sible ; y todo esto se empleaba para aluci
nar á los ignorantes , haciéndoles creer que
la cadena de las causas terminaba en la re
gion de la materia. ¡Ingratos! el haber
adelantado en el conocimiento de la criatu
ra, ¿no debia elevaros hácia el Criador? RECIEN DESCUBIERTA EN EL CONGOST, Y CO
— J. B. PIADA POR DOS CURIOSOS INVESTIGADORES
DE ANTIGUALLAS. OFRECE UN ENSAYO DE
SU INTERPRETACION SUJETÁNDOLE A LA
ANTIGÜEDADES- CENSURA DE LOS MISMOS COPIANTES Y DE
MÁS INTELIGENTES DlEGO LORPU.

Con mucho placer insertamos el siguien

te documento : porque tenemos satisfaccion
cumplida cada vez que podemos contribuir IMP CAES 0 SSÍb
á realzaren algo el lustre de nuestra patria.
Felicitamos á los Sres. Subirana y Cerdá C- TRAIANO CIO
por su hallazgo , y nos atrevemos á exor-
tarlos á que continúen dedicándose á una PIO FELICI INV C
clase de tareas tan útiles como descuida
das. Sabemos que dichos señores no pier
den de vista este negocio ; con respecto á T0- AVC- DAC
las luces históricas que de aqui podrían re
sultar, nos reserv amos hablar de nuevo de MAX PONT
este interesante asunto, cuando podamos
hacerlo con mayor caudal de datos. MAX OTRIBPOT
Nuestros lectores descifrarán con poca
dificultad el anagrama del Sr. Don Diego
Lorpli; reconociendo en él al insigne anti ÍTTT PP COS ÍTT PRO
cuario D. Jaime Ripoll, canónigo dela
iglesia Catedral de Vich, uno de esos hom COS- ET QHEREN
bres que honran el pais en que nacen , á
pesar de que su extremada modestia los in NIO- ET RVS C O "
duzca á envolverse en la oscuridad. Tenien
do alguna noticia de los muchos trabajos MESSIO DECIO
del Sr. Ripoll , nos lamentamos de que los
conserve ocultos en su bufete, y siempre
tememos no queden perdidos para la his COS ET 0\
toría preciosos apuntes que pudieran ilus
trarla. (1). HOSTIL

(1) Al corregir las pruebas de este pliego, he

mos sabido el fallecimiento del señor Ripoll ; el
clero ha perdido un individuo ejemplar por sus Descubrióse la presente lápida en febre-
virtudes , y la ciencia arqueológica uno de sus mas
ilustres profesores. de 1842 abriéndose los cimientos para
construir una calera en frente de la casa ó
quinta propia de la casa de Terrés de la MAXimo.
Caio
PIO,
TO,
IMPeralori
TRAIA.NO
AVGusto,
FELICI.,
CAESari
PONTiíici
INVIC
DACico
deCIO
Quinto
, moSSIO
Garriga , sita á igual distancia de la villa
de Centellas y pueblo de Ayguafreda , lla
mada el molino de las Canas, al pie y jun
to á la actual carretera de Barcelona á
Vich. Examináronla y copiaron por prime MAXimo , Priucipi Optimo , TRIBunilix
ra vez los diligentes anticuarios D. José POTestatisIüT(Quartt'im), Patri Patria;, COnSuli
Subirana, farmacéutico, y D. José Cerda, TTT (tertiúm) PRO
vecinos ambos de la misma villa de Cente COoSuli: ET Quinto HEREN
llas. Tiene la lápida unos cinco palmos de NIo ETRVSCO,
longitud. COnSuli:
MESSIO, etDECIO
Quinto VALenti
Suponiendo bien copiada la incripcion,
deben enmendarse los defectos del graba HOSTILiano messio decio....
dor y del tiempo. En la primera línea en
vez de la O debe ponerse Q. Luego debe Estendida asi la inscripcion podrá tradu
anteponerse la M que está encima y entre cirse de este modo : (Memoria erigida) al
la I y la O , y añadirse una E. En la se Emperador Cesar Quinto Messio, Cayo,
gunda línea debe llenarse el vacío y poner Trajano, Decio, Pio, Feliz, Invicto, Au
se DE. En la tercera falta la I. En la sexta gusto, Dáccio, Máximo, Pontífice Máximo,
falta la P. En la penúltima debe leerse Q Príncipe óptimo , condecorado con la po
y no O , luego Val. y en la última añadir testad tribunicia cuatro veces , padre de la
se ILIANO al Hostil. Messio Decio. patria, cónsul por tres veces, procónsul : y
Con estas correcciones y añadiduras de a Quinto Herenio Etrusco Messio Decio.
las cuales no hay una siquiera que no esté El referido Lorpli concluye con estas
apoyada en otras inscripciones publicadas palabras :
por nuestro Finestres , Masdeu , Grutero A esta interpretacion en caso que merez
ete. , podrá leerse entera la inscripcion en ca la aprobacion de los eruditos, se segui
esta conformidad : rán unas notas y observaciones.
 — 267 —
ÍNDICE
DE LAS
MATERIAS CONTENIDAS EN EL TOMO PRIMERO.
PAO.S
Situacion de España. Dos políticas. Dificul
tad de encontrar lo verdad. Los partidos.
El despotismo ilustrado. La Ucina y don
Cirios. La revolucion francesa y la espa
ñola. La ausencia de la ley. Breve reseña,
de los principales acontecimientos des
de 1833 hasta 1840. Mayoría y enlace de
la Reina. Destino delsabcl segunda
La Ciencia y la Sociedad. Hombres de lo pa
sado y hombres del porvenir. Destinos de
la sociedad. Falta de buena fe en las dis
cusiones. La prensa. La oposicion. La re
volucion de 1789. La inteligencia por sí
sola erigida en poder. Caractércs de las re
voluciones inglesa , americana y francesa.
La Francia y la Alemania ; diferencia en
tre sus filósofos. El genio y la pobreza.
Intervencion popular en todo linage de ne
gocios. Carácter distintivo de los escritos
de nuestra época. Cotejo de estos con los
antiguos. Desarrollo simultaneo de las fa
cultades del espíritu humano. Parangon de
dos escuelas. .
Frenología Exámen de los principios funda
mentales asentados por el SrCubi. Aclara
ciones sobre las relaciones entre el ce
rebro y el alma. Notable pasage de Santo
Tomas
La palabra filosofía. Su verdadero signifi
cado. En qué consiste la verdadera filo
sofía. El charlatanismo. El talento y el ge
nio. El verdadero filósofo
Polémica religiosa. Objeto y plan de este
trabajo. Los dos enemigos capitales de la
religion , el error y el vicio. Los incrédu
los , los indiferentes los escéplicos , los hc-
reges. Carácter distintivo de todos esos
PACI
enemigos de la verdad. Prudencia que se
debe observar en las discusiones religiosas.
Los sostenedores de la religion y sus ene
migos 20
Vn castillo y una ciudad. O sea diálogo entre
Monjulch y Barcelona 23
Mas sobre la situacion de España. La tole
3 rancia política. Lo crítico de nuestra situa
cion. Falla de poder. Necesidad de esta
blecerlo. Las minorías. El enlace de la
Reina. Posibilidad de un caso funesto que
se debiera precaver. Ley de regencia en
Francia. Inconvenientes del enlace de nues
tra soberana con un príncipe de la casa de
Orlcans. Las urnas electorales. La omni
potencia parlamentaria. La soberanía po
pular. La suerte que ha cabido á nuestras
Cortes. La votacion de los impuestos. La
prensa. La tolerancia que se va introdu
ciendo en lo sociedad. El partido moderado
y el republicano. Urgencia de salir del ter
reno de la política. Una gloriosa infraccion
7 de la ley 25
La suerte de Cataluña. Crítica situacion del
Principado. Peligros y esperanzas. La
Inglaterra. Sus miras con respecto á Cata-
luna y España. Las demas provincias de
13 la Península , y sus relaciones con Cataluña.
La capital de la monarquía. Daños que
acarrea el que esta sea Madrid. Pérfidos
amaños de que debe preservarse Cataluña. 2*
18 Estudios históricos fundados en la religion.
La religion es la verdadera filosofía de la
historia. Moyses. Maldicion primitiva. El
Paraiso. Los hijos de Adan y Eva. Henoch.
Noé. Nemrod. Su poderío. Observacion so
bre el origen de muchos gobiernos. La tor
 — 208 —
PAfi.S
re de Babel. Abrahan y Sara eo Egipto.
Los siglos de oro. Abrahan y Loth. Admi
rable sentido de la expresion : no cabían
en la tierra. Aplicaciones a los fenicios ,
cartagineses, romanos, bárbaros del Nor
te, y sociedades modernas. Pentápolis. La
historia del humano linage, es una espan
tosa tragedia. Reflexiones sobre el angus
tioso placer que esperimentamos asistiendo
á espectáculos dolorosos. Terribles con
trastes de la historia. Hechos históricos de
la mas remola antigüedad. Consideracio
nes filosófico-religiosas. La humanidad y
el Calvario
Polémica religiosa. El Indiferentismo. Dis
putas religiosas. Sentidos malignos que se
dan á esta palabra. Elevada importancia de
las disputas religiosas. La muerte y la eter
nidad. Kl indiferentismo es insensato y ad-
surdo. Les pueblos mas cuerdos que ciertos
filósofos. Sentimiento religioso. Guerras de
religion. Supersticion. Fanatismo. Vani
dad de ciertas declamaciones contra la hu
manidad entera. La Europa actual y el in
diferentismo. Pruebas de la importancia
que tiene todavía la religion en Europa.
Reflexiones sobre el insensato egoismo de
los indiferentistas. .
Albion. San Pablo. Wcstminster. El Tun-
ncl. El Támesis. La patria de Gama. La
política modesta de las orillas del Sena.
España. Sus recuerdos y sus destinos. Pro
yectos de Inglaterra. Su porvenir
La fuerza del poder y la monarquía. La de-
bdidad del poder es un manantial de tira
nía. Principio importante escrito con letras
de sangre en todas las páginas de la histo
ria. La monarquía y el despotismo. En qué
consiste la fuerza del poder. Reyes de Es
parta , de Roma , de los tiempos feudales.
Tendencias naturales del poder. La candi
dez de ciertos escritores cuando juzgan á
Luis XVI y á Femando VII. La dictadura.
Cesar y Camilo. Antonio y Augusto.
Cromwel y Napoleon. La monarquía eu
ropea. Felipe II. Luis XIV. Cárlos III.
Las repúblicas de América. El absolutis
mo de Austria y de Prusia. La opresion
dimana mas bien del estado de las ideas y
costumbres que de la forma de gobierno.
Reflexiones sobre la monarquía hereditaria.
Tres partes que envuelve el problema del
poder público. Observacion sobre los de
fectos de los monarcas modernos. La mo
narquía. Oriente. Contradicciones de los
demagogos modernos. El derecho divino.
La eleccion. Apóstrofe á los hombres que
condenan todo lo antiguo
Medios que debe emplear Cataluña para evi
tar su desgracia y acrecentar su prosperi
dad. Medios materiales. Observaciones
sobre la buena inversion de los capitales.
Observaciones sobre la enseñanza de las
ciencias mecánicas y químicas. Sistema de
Inglaterra en la instruccion de los opera
rios. La agricultura catalana. Canales de
riego. Espíritu industrial y mercantil del
Principado. Estado de sus comunicaciones
interiores. Necesidad de perfeccionar las
manufacturas. La cuestion de los algodo
nes ingleses es independiente de la política.
PÁG.S
Medios políticos. Prudente conducta que
debe observar Cataluña. Cuánto debe guar
darse de constituirse ciego instrumento de
ningun partido. De qué manera se salvan
los individuos y los pueblos Si
Polémica religiosa. Escepticismo. Carta á
un esciptico en materias de religion. Pro
testa del autor de esta Revista. Cuestiones
importantes sobre el escepticismo. Carác
ter de la autoridad ejercida por la Iglesia
católica. La fe y la libertad de pensar. Va
no prestigio de las ciencias. Un pronuncia
miento científico. Naufragio de las convic
33 ciones filosóficas. Sistema para aliar cierto
escepticismo filosófico con la fe católica. El
escepticismo y la muerte. El escepticismo
origen de un tedio insuportable. Es una de
las plagas características de la época. Mo
tivos de la permision divina. La fe contri
buye á la tranquilidad de espíritu 8'J
La Religion en Barcelona. Costumbres an
ticuas. La religion se conserva todavía do
mmante en los corazones. Estado delos so
lemnes y piadosos cultus celebrados en ac
cion de gracias á Su Div ¡na Magestad , á
Nuestra Señora la Virgen María y á varios
santos, en las diferentes iglesias de la ciu
dad de Barcelona, por haberse librado los
fieles de las desgracias consecuentes al
bombardeo del dia3de diciembre de 1 842.
Lo que dirá la posteridad al leer este do
cumento •>.,
Situacion del clero español y urgente necesi
dad de un concordato : articulo I Grave
dad é importancia del asunto. Oportunidad
de su exámen. Triste situacion del culto y
clero en España. Falta deobispos. Turba
cion de las conciencias por motivo de la
ilegitimidad de alguuas juridicciones. Los
gobernadores eclesiásticos no llenan ni pue
den llenar el vacío que deja la falla deobis
pos. Descuido de la instruccion eclesiásti
ca. Relajacion de la disciplina. La religion
en peligro. El gobierno y los ordenados en
Roma. Exámen de las relaciones entre la
cuestion religiosa y la política. Necesidad
de separar estas dos cuestiones en cuanto
sea posible. Ineonvenientesque resultan de
mirarlas como inseparables. La mayoría
de la reina y el arreglo de los negocios
eclesiásticos. Fundados temores de que se
presenten nuevos obstáculos. Ejemplos de
Portugal. Aviso á los hombres políticos so
bre las personas de quienes deben guar
darse en estos negocios. Influencias extran
jeras que pueden retardar un arreglo de
finitivo "2
48 Medios morales que debe emplear Cataluña
para evitar su desgracia y promover su
felicidad. En qué consiste la civilizacion.
Inteligencia , moralidady bienestar. Apli
cacion al individuo , y á la sociedad. Cata
luña no debe contentarse con producir. De
be escarmentar en cabeza a^eua. Estado
esccpcional del Principado. Excesiva im
portancia que se ha dado « la política. Es
necesario atender á la cuestion social. De
ber é intercs de la clase rica de Cataluña ,
y particularmente de la de Barcelona. La
conducta que ha de observar con respecto
á las clases pobres 78
 — 2GÍ) —
PÁC.S I!
Polémica religiosa. Carta segunda á un es-
céptico en materias de religion. Multitud
de religiones. Profundo misterio que aquí
se envuelve. Los católicos reconocen y la
mentan este daño mucho mas que todos los
sectarios. Explicacion del principio " quod
nimis prnhat nihil probat » , lo que prueba
demasiado no prueba nada. Aplicacion de
este principio a la dificultad presente, líe
nlas de prudencia que conviene no perder
do vista. .Motivos de la permision divina.
Fatales consecuencias d I pecado del pri
explicacion
mer padre. de Impotenc
los misterios
ia de ladellilosoffa
hombre. en . la. 83
El doctor Kewman , el Puseismo , y una re
tractacion extraordinaria. Narracion cu
riosa y edificante. Admirables designios de
la Providencia. Leccion severa para algu
nos escritores católicos 88
El Huerto de Gelhsemani. Meditaciones re
ligiosas 92
Situacion del clero español y urgente necesi
dad de un concordato. Articulo segundo y
último. .Necesidad de la intervencion de la
Santa Sede para el arreglo de los negocios
eclesiásticos. Napoleon. La América. Arrai
go del catolicismo en España. Posibilidad
de separar la cuestion eclesiástica de la po
lítica. Fases de la revolucion con respecto
á la Iglesia. Actual situacion de los parti
dos. Proyecto de Alonso. Conducta que de
be observ ar el clero. La religion para sal
varse no necesita de la política. Funesta
doctrina la que pretende legitimar la con
firmacion de los obispos sin la autoridad
pontificia. Reflexiones sobre una insinua
cion alarmante, llcsultados que daria su
aplicacion 91
Cataluña. Consideraciones sobre la conduc
ta que deben observar las clases ricas con
respecto á las pobres. Orden admirable es
tablecido por la Providencia. Ley de cari
dad. .Nueva organizacion social. La aristo
cracia del oro. Absurdo de los proyectos de
completa igualdad. Cómo entiende el cris
tianismo la fraternidad universal. La riva
lidad entre las clases pobres y las ricas es
un hecho muy antiguo. Circunstancias que
la distinguen en la epoca presente. Deberes
de las clases ricas. Escisiones de Barcelona.
Lo que podemos esperar del Gobierno. Los
ricos con respecto a los pobres deben ob
yservar
hacerles
la regla
bien siguiente: hacerlos buenos '02
Vn cristianismo extraño. Descripcion de una
escuela funesta. El modo con que esta es
cuela explica el origen y progresos de to
das las religiones. Su manera de conside
rar el cristianismo. Infalible señal de cuáles
son las intenciones de dicha escuela : su
odio ti la iglesia católica. Las transforma
ciones. Impugnacion de los errores sobre
la pretendida transformacion del cristia
nismo 106
Polémica religiosa. Solucion de la dificultad
que se objeta al catolicismo sobre la doc
trina que no concede salt acion sino ú los
que profesan la religion verdadera 113
Alianzas de España. Articulo i.° Alianza
con la Inglaterra. Los partidos y las alian
zas. Descredito de la alianza inglesa. Los
pág.s
gobiernos y los pueblos con respecto á las
alianzas. No existe ninguna de las condi
ciones necesarias para estrechary fortilicar
los lazos que pudieran formar los gobier
nos. La ninguna analogía del idioma. La
diferencia de religion. La diversidad de cos
tumbres. Oposicion de intereses. Portugal.
Gibraltar. Las Antillas y las Filipinas.
Nuestra alianza seria provechosa á la In
glaterra ; dañosa á nosotros. No conviene
tampoco irritarla , atrayendose su enemis
tad. Es impolítico manifestarnos inclinados
á la Francia, excitando los celos de la Gran
lírctaña 117
La Prensa. El uso y el abuso. La prensa es
una nueva lengua. Palabras notables de
Leon X. Universal influencia de la prensa.
Sus relaciones con la religion y con la im
piedad. Ignorancia de muchos incrédulos.
Bienes que resultan de la prensa. Es nece
sario confiar en Dios. La discusion y la re
ligion. Observaciones sobre el texto citado
del papa Leon X. Prevision y prudencia
del Sumo Pontífice. Fuerza que el pensa
miento ha adquirido por medio de la pren
sa. Hechos históricos. La opinion pública.
Influencia de la prensa en arraigar, forta
lecer y extender la intervencion popular en
los negocios públicos. Los antiguos y los
modernos : excelencia de estos sobre aque
llos. Influencia del cristianismo en el de
sarrollo del espíritu humano 122
Polémica religiosa. Carta tercera á un es-
ct'ptico en materias de religion. Sencilla
demostracion de la existencia de Dios Eter
nidad de las penas del infierno. Errado mé
todo que suelen seguir en las disputas los
enemigos de la religion. Método que debie
ra observarse. Dogma de la Iglesia sobre
la eternidad de las penas. La misericordia
no excluye la justicia. El sentimentalismo.
Abuso que de él se hace. Reflexion sobre
su influencia en los errores de nuestra épo
ca. Aplicacion al dogma de la eternidad de
la penas. Bazoncs naturales que apoyan el
dogma. Imposibilidad de comprender los
misterios. Nuestra ignorancia hasta en las
cosas naturales. La duracion eterna y la
temporal. El purgatorio. Observaciones so
bre un carácter distintivo del hombre en
esta vida ron respecto á las cosas futuras.
Necesidad de una impresion aterradora. La
explicacion filosófica. Los frailes y los poe
tas. Magnifico pasage de Virgilio ISO
Alianza de España. Articulo 2.« Alianza
con la Francia. Qué bienes puede traernos
la alianza francesa , qué males puede acar
rearnos? nuestra independencia para nada
necesita de la Francia. Conducta que debe
seguir el gabinete espanol con respecto á la
Francia é Inglaterra. Equilibrio en que de
ben ser mantenidos las dos influencias ri
vales. Energía del pueblo español. Necesi
dad de fomentar el espíritu nacional. Lo
que indica la última guerra de los siete
años. Leccion que se ha dado á la Europa.
Contrapeso de las grandes naciones del
Norte para contener á la li anchi i- Ingla
terra.
paña conConducta
respectoqueá debe
la politica
observgeneral
ar la F;s-
de
Europa. La Francia despucs de la revolu-

PAG.S
cion de julio. Luis Felipe. Su mérito , su
sistema. Carácter de los hombres que do
minan en Francia. La Francia los sufre
porque los merece. Daños que nos han pro
ducido las alianzas con la Francia. Vento-
josa posicion de España para seguir la po
lítica que le conviene, que es la de neutra
lidad. Consideraciones sobre los daños que
nos produciría en lo interior una relacion
demasiado intima con la Francia. Su cen
tralizacion y administracion. Federico. Pe
dro el Grande. Napoleon. Diferencia capi
tal cutre la Francia y la España. Inconve
nientes del planteo de una centralizacion
semejante A la de Francia. No conviene el
enlace de la Reina con un principe de la
dinastía de Orleans. Es posible establecer
en España un gobierno nacional
La poblacion. Artículo 1.° Dificultad de la
materia. Variedad de opiniones sobre el
aumento de la poblacion. Se lija el estado
de la cuestion. Dictamen del sentido co
mun. Ignorancia con respecto á la ley del
aumento y decrcmento. Examínase si la
poblacion es proporcional con los medios
de subsistencia. Irlanda. Francia. Inglater
ra. La sociedad y el estado. Conviene no
confundir el significado de estas palabras.
Aclaraciones históricas de este punto. Ci
vilizacion de oriente, Egipto, Grecia , Car-
tago , Roma. Naciones modernas
Polémica religiosa. Carta cuarta á un ex
céptico en materias de religion. Filosofía
del
y retrato
porvenir.
de losDescripcion
que la profesan.
de estaPasage
filosofía
de .
Virgilio. Mr. Joffroy. El cristianismo y las
masas. Mr. Cousin. Pasage notable de Mr.
Pedro Lcroux , sobre las convicciones de
Mr. Cousin. Profecía de Mr. Cousin. El
catolicismo no está amenazado de muerte.
En los cuatro ángulos del universo está
dando señales que acreditan su vida y vi
gor. Observaciones sobre la decadencia de
la fe y Me las costumbres. Combátese el
error de los que pretenden desalentar con
la exageracion de semejante decadencia.
Reseña histórica de los grandes niales que
en todas épocas ha sufrido la Iglesia. Su
estado actual no es tan desconsolador co
mo algunos creen. Cómo calculan los in
crédulos la decadencia de la fe. Conviene no
confundir la sociedad con las capitales , ni
estas con algunos círculos muy reducidos.
La transicion y la perfectibilidad
Estudios frenólogicos. Articulo i." Examí-
nanse los seis principios asentados por él
Sr. Cubi en su manual de Frenología.
Observaciones sobre los pronósticos freno
lógicos. Algunas dudas sobre este arte
Polémica religiosa. Carta quinta á un es-
céptico en materias de religion, lja sangre
de los mártires. Asiéntase el hecho histó
rico. Se propone una dificultad contra la
fuerza de este argumento. Pasage de Pru
dencio. Lo que puede el entusiasmo por
una idea. Reflexiones sobre la exaltacion de
ánimo segun las causas de que procede y
«I objeto á que se dirige. La guerra. El
duelo. El valor y la fortaleza. Régulo y
Scévola. Los mártires. Situacion horrible
en que se encontraban. La persecucion y
— 270 —
el entusiasmo. Disípase un error muy en-
ñoso. El perseguir una doctrina no es buen
medio para propagarla. Pruebas tomadas
de la filosofía y de la historia. Cotejo entre
la propagacion del cristianismo y la del
protestantismo 173
La poblacion. Articulo 2.° El problema del
aumento de la poblacion sometido al fallo
de uu rústico. Cálculos del déficit que los
nacidos producen en la sociedad. Sobran
brazos, faltan medios. Estados compara
tivos catre los individuos de mas de cinco
años , y los que no han llegado á esta edad. 1KS
Estudios frenológicos. Artículo 2." Zopiro y
Sócrates. Plauto y los adivinos. El mate
rialismo y el fatalismo son dos escollos en
que puede tropezar la Frenología. Examí
133 nase la doctrina del Sr. Cubi sobre las fa
cultades impulsativas y afectativas ó sea
instintos ciegos. Observaciones filosóficas y
morales sobre esta matería ,ss
Polémica religiosa. Reflexiones sobre el celi
bato del clero católico en parangon con la
facultad de contraer de los protestantes.
Origen del matrimonio de los ministros
protestantes. Fíjase el estado de la cuestion.
Idea del sacerdote. El sacerdocio y la mu-
ger. La religion cristiana y el corazon hu
mano. Tradiciones y costumbres univer
sales que manifiestan la estrecha relacion
149 entre la continencia y las funciones reli
giosas. Filosofía del siglo xvm. Su carác
ter, su decadencia. El celibato y los filoso-
fos incrédulos. Fundamento de la íntima
relacion cutre la continencia y el ministe
rio religioso. Diversos caractéres de las pa
siones. La ambicion. El amor. El matri
monio considerado como un medio de
precaver grandes males. Combátese el ar
gumento que algunos pretenden fundar en
esta consideracion. Cotejo del clero protes
tante con el católico. Los sacerdotes cató
licos franceses en Inglaterra. Las religio
sas francesas y las españolas. La incredu
lidad y las pasiones. De qué manera la
religion de Jesucristo señorea el corazon.
Si el celibato desapareciese , al cabo de
cierto tiempo volvería á renacer y se colo
caría de nuevo en la esfera de las leyes. El
celibato y el espíritu de la religion cristia
na. Importancia del celibato para el des
empeño de ciertas funciones muy delicadas
del ministerio católico. El sacerdocio con
153 siderado en sus relaciones con los afectos
de un padre de familia. Notable confesion
del Doctor King, ministro protestante. El
celibato en sus relaciones con la poblacion.
Errores sobre este punto. Se demuestra
161 que el celibato del clero católico no es da
noso á la poblacion. Esperanzas consola
doras para almas cristianas IM
l Y despues? Efectos de los pronunciamien
tos. El náufrago. Cambios frecuentes que
ha sufrido la nacion española. El trono
respetado por las borrascas revolucionarias.
Secreto para profetizar en político. Los tri
bunos y el poder que fue su obra. Las
sombras siniestras acechando al regio do
sel. Mágico efecto del grito Dios salve al
pais , Dios salve a la Reina. Carácter del
pronunciamiento de junio de 18S3. Loque

PAG.S
significa la situacion actual. Quita tiene el
mérito de la bandera de españolismo, de
reconciliacion y union. Lo que la reconci
liacion vale en política. La coalicion y la
fusion. Cómo se conoce una situacion Oló-
zaga y Sancho. Carácter de la regencia úni
ca. Anomalías de Espartero. El llamado
gobierno á caballo debiera llamarse gobier
no en cama. Los gobiernos en Espana son
mas bien débiles que tiránicos. Fuerza de
la ley. Constitucion verdad. Mayorías y
prácticas parlamentarias. La legalidad. El
porvenir
Estudios frenológicos : articulo tercero y úl
timo. La frenología y el fatalismo. Se exa
minan las doctrinas del Sr. Cubí sobre el
libre albedrío, la veneracion , concieociosi-
dad , maravillosidad , individualidad , vi
siones y otros puntos importantes
Polémica religiosa. Carta sexta á un excép
tico en materias de religion Ija transicion
social. Postracion de un espíritu escéplico.
Examínase si la transicion es característica
de nuestra época. Pruebas históricas de
que es general á todos los tiempos. Exami
nase si el progreso es la ley de las socie
dades. Admítese este principio pero con al
guna restriccion. La civilizacion antigua y
moderna. Nuestros males no son tantos co
mo los de otros tiempos. Causas que con
tribuyen á abultarlos. El cristianismo nada
tiene que temer de las transaciones sociales. 219
Miscelánea. Causas de las desgracias de Es
paña. Minoría. Guerra de sucesion , revo
lucion. La revolucion monárquica y el
monarca revolucionario. El arca santa.
Obstáculos que impiden el establecimiento
de un gobierno. Ruinas alegóricas. Los
tribunos cortesanos , y los agitadores hom
bres de gobierno. Los hombres del año 12
y sus adversarios. La prensa conservadora
de la época presente comparada con la
prensa religioso-monárquica del año 12.
La revolucion no gasta reputaciones, las
pone á prueba. Situacion de Madrid des
pucs de la entrada de los ejércitos pronun
ciados. Reflexiones dirigidas á los hombres
de la situacion. Necesidad de un gobierno
fuerte. Riesgos inseparables del terreno de
la política. El capitalista y la máquina.
Defmicion de las pasiones políticas
La poblacion : articulo 3. La progresion
aritmética y la geométrica. Reflexiones so
bre estas leyes aplicadas al aumento de los
medios de subsistencia y de la poblacion.
Examínase la ley que pretende haber de
mostrado Mr. Quetclet
Polémica religiosa. Existencia de Dios. Los
ateos. El universo y el acaso. Demuéstrase
por la teoría de las combinaciones y pro
babilidades, la imposibilidad de arreglar
el solo sistema planetario por el simple
acaso. Cálculo y geometría que se observan
en toda la naturaleza
Carta séptima á un escéplico en materias de
religion. I.n tolerancia. La gracia y la fe.
Doctrina católica sobre la fe. Historieta de
un eclesiástico. Observaciones sobre la in-
. tolerancia de ciertos hombres. Injusticia é
intolerancia de los incrédulos. Manifiéstase
que un fiel puede tener ¡dea clara del cs-
— 271 —
tado del espíritu de un incrédulo. Lo que
debe hacer un católico antes de disputar con
un incrédulo. En las disputas religiosas es
necesario guardarse del orgullo 245
Consideraciones filosófico-politicas. La uni
dad. Sus aplicaciones al órden moral , al
científico , al físico , al social. Considera
cion sobre la causa del malestar de España.
Centralizacion de las naciones europeas.
Cotejo entre las antiguas colonias españo
las y los Estados-Unidos. Fenómeno que
ofrecen las naciones que han estado some
203 tidas á la unidad de la monarquía heredi
taria. Lo que fuera España sin esta insti
tucion. La libertad. Mal uso que se hace
de esta palabra. En el mundo material no
hay libertad. Todo está sujeto á reglas fijas.
Aplicaciones. El hombre tiene libertad de
212 albedrio, pero sus actos encuentran mu
chos obstáculos que los limitan. Aplicacio
nes. Limitaciones procedentes de la natu
raleza , del estado , de la posicion social ,
de las leyes y costumbres del pais. La liber
tad en el órden político. La que disfrutan
las naciones que se apellidan libres. La
Francia. Derecho electoral falseado en su
base. Lo que objetan los ardientes partida
rios de la democracia. El sufragio univer
sal. La soberanía popular. Las capacidades.
Inconsecuencia de los demagogos trocados
en conservadores. Ejercicio del derecho
electoral. Al mayor número de los electores
les falta el conocimiento necesario. Causas
de su alucinamiento. Influencia de la pren
sa sobre las elecciones. Los ministeriales
y la oposicion. Inflencia de los empleados
en las elecciones. Lo que sucede cuando el
gobierno es vencido. Dificultad de formar
debidamente las leyes. La voluntad gene
ral. La razon pública. Consideraciones so
bre estos estremos. Defectos de los sistemas
electorales vigentes Votacion de los im
puestos. Observaciones sobre este derecho.
Ignorancia de los legisladores en materias
de hacienda. Lo que son muchos candida
tos. Como se forman los hombres públicos.
Cuan poco se cuida de nombrar buenos
representantes. Lo que se debiera hacer
para apreciar lo que valen. Lo que ha su
cedido en España desde 1810. Tristes pre
227 sagios. Conclusion 249
Torfai'io hay tiempospeores que los de revo
lucion. Estrañeza de esta paradoja. Efectos
de la revolucion. Las épocas de revolucion
son las mas estrepitosas. Lo que hacen los
pueblos al salir de ellas. Errado sistema
23 i que suele seguirse en la convalescencia.
Peligro que amenaza á la España. El der
ramamiento de sangre no es para una na
cion el mayor de los infortunios. No lo es
tampoco la ruina de un sistema político, ni
la pérdida ó desaparicion de algunos inte
reses materiales. Fórmulas peligrosas. Su
239 funesta aplicacion. Como se ha de comba
tir el mal. Daños que resultan cuando la
vida intelectual y moral de los pueblos es
atacada en su misma raiz. Mal sistema que
tal vez se intentará plantear. Analosias en
tre la España y la Francia. Relaciones del
estado con la Iglesia. Como se ha de cono
cer y defender el bien. Es preciso estar al

pis.a
uivel de los conwimientos de la época. Lo
que deben hace* los hombres de doctrinas
sanas í intencion recta. Como deben pre
pararse para la lucha. Como se adquiere el
derecho de amonestar y contener á los go
bernantes ai 288
Polémica religiosa. Existencia de Dios. Ab
surdo que resulta de suponer ordenada por
el acaso la combinacion de los astros. Nue
vas razones que lo hacen mas y mas evi
dente. Divisibilidad de la materia. Imposi
bilidad de que el orden naciese del caos.
Leyes que rigen los cuerpos del universo.
Con ellas do pudo formarse el Mundo.
Opinion de Newton. Consideraciones sobre
la atraccion universal. Existieudo el caos ,
nada podia para crear el orden la ley de
atraccion que obra en razon directas de las
FIN DEL TOMO PRIMERO.
272 —
PÁG.S
masas é inversa del cuadrado de las distan
cias. Combinacion de la atraccion univer
sal con la molecular ó sea la afmidad. Com
plicaciones que esta última acarreaba para
que no pudiese ordenarse en caos. Ceguera
de los ateos. Esto indica la caida de especie
humana. Consideraciones sobre la historia
de las ciencias. Lo que fué la filosofía del
siglo pasado 2G1
Antigüedades. Inscripcion romano imperial
recien descubierta en el Congost y copiada
por dos curiosos investigadores de anti
guallas. Ofrece un ensayo de su interpre
tacion sujetándole a la censura de los mis
mos copiantes y demas inteligentes Diego
Lorpli 268
Indice de las materias contenidas en el tomo
primero 267
 LA

HE71STA RELIGIOSA, FILOSÓFICA , POLÍTICA

Pon

TOMO II. - [j¿A3-^8i.V

BARCELONA,

Imprenta de A. HHUS1 .

Galle de la . Librelería núm. 24 . nueva Humeradoi

1851.
Es propiedad del autor.

ESPARTERO.
Artículo i.°
Cayó Espartero ; y con su caida , entra
mos en una nueva fase de la revolucion,
fase que por desgracia no ha terminado
aun. Inciertos y perdidos en la confusion
que nos envuelve desde la muerte de Fer
nando, consolámonos los españoles con
maldecir el banco de arena , ó el puntia
gudo escollo, cuya proximidad puso en in
minente riesgo á la combatida nave ; olvi
dando los nuevos peligros que vamos á
correr, solo fijamos la vista en el que aca
bamos de evitar.
Las proscripciones y emigraciones se su
ceden con espantosa rapidez; pocos recuer
dan el dia de ayer , para conjeturar sobre
el dia de mañana; parece que una venda
fatal tiene cubiertos los ojos de los que
figuran en la escena política , para que no
vean la cadena que los arrastra á la sima
donde sus antecesores se hundieron. Es
partero que habia empujado á Don Carlos
hasta la frontera de Francia , y acompaña
do á la Reina Madre al embarcadero de
Valencia , no pensaba que estuviese tan
cerca su precipitada fuga hácia el navio
Malabar.
Al empuñar las riendas del gobierno,
todavía le era posible á Espartero hacer
olvidar los medios de que echara mano pa
ra encumbrarse; que las naciones como los
individuos, inclínanse fácilmente á disimu
lar lo reprensible en obsequio de lo bene
ficioso. O no comprendió su posicion , ó
quizás se aventuró á comprometerla con la
esperanza de elevarla. Cuando alejándose
de las playas españolas estaba apenas reco
brado del temor que le infundieran los gi-
netes de Concha y veia centelleando en la
orilla las vencedoras espadas, sin duda
que debió de recordar tristemente su desa
tentada conducta, y dar una mirada de in
dignacion á los miserables consejeros, que
por espacio de cinco años habian turbado
la nacion , urdiendo las pérfidas intrigas
que al fin habian de llegar á desenlace tan
desastroso y humillante. No insultamos al
infortunio; solo indicamos su origen ; cuan
do los culpables están sometidos á solemne
expiacion , los miramos bajo la mano de la
justicia divina; allí cesa la accion del hom
bre. Pero la historia y la filosofía tienen sus
derechos; aquella narra los sucesos, esta
los examina.
Espartero carece de grandor personal;
pero su nombre está vinculado con gran
des acontecimientos; por cuyo motivo ocu
pará un lugar en la historia. Esto es para
él una desgracia. La gloria no es sinónimo
de fama. Quien ha figurado en los sucesos
y mostrádose indigno de su posicion , no
aparece en los cuadros históricos sino como
expuesto á la censura pública.
CALIDADES PERSONALES DE ESPARTERO.
Se ha echado en cara á Espartero su na
cimiento humilde ; á los ojos de la razon,
 esto no significa nada. Al contrario , si el momento las desgracias y riesgos pasados,
ex-regente hubiese manifestado con sus con el recuerdo de la negrura de las nubes,
obras , que la fortuna no le habia elevado de la aterradora calma que precedió la tor
sin merecerlo ; la misma oscuridad de la menta, del deslumbrante resplandor de \os
cuna fuera un bello timbre de su gloria. relámpagos, del vivo estallido de los truenos,
¿De
curnia?
quéPara
le sirvealimbécilellustredesual-
qué necesita un grande hom de su estrepitoso y prolongado retumbar .
¿ Era valiente ? no le negaremos esta ca
bre los títulos de sus mayores? La nobleza lidad ; pero tampoco nos resolvemos á otor
que no está sostenida por las cualidades gársela sin hacer alguna distincion. Si de
personales del que la posee es un nombre su valor hubiésemos de juzgar por su con
vano ; los méritos de nuestros antepasados ducta en la noche del 7 de octubre, y
no son nuestros ; y solo se nos aplicarán, durante los dos meses del pronunciamiento
si los imitamos. El hombre de humilde cu que le ha derribado , menester es confesar
na que se eleva á encumbrados puestos, que el fallo no le seria favorable. A decir
por solas sus prendas, será tanto mas digno verdad , hacemos poco caso de las cargas á
. de loa , cuanto no ha tenido en su apoyo, la cabeza de la escolia , y de uno que otro
ni el favor que dispensa el mundo á los acto de arrojo ; lo principal de los sucesos
bástagos de ilustre prosapia , ni los medios lo sabiamos por conducto del mismo inte
de instruccion y educacion que proporcio resado: ¿Qué pensaremos de los partes des
nan las grandes riquezas ; en tal caso , la pues de haber visto los manifiestos?
humildad del nacimiento mas bien debiera Nada decidimos sobre el particular; á
ser excusa de algunas faltas que cargo para los gefes que le vieron de cerca cuando su
agravarlas. balterno , y á los subalternos que pudieron
La vida privada de Espartero ha sido observarlo cuando gefe , toca el apreciar su
atacada tambien ; señalándose el medio po valor ; actos aislados , y en circunstancias
co decoroso con que habia mejorado su muy críticas, no revelan la existencia de
fortuna. No sabiendo hasta qué punto sea una calidad. La piedra mas comun arroja
esto verdad nos abstendremos de comenta tal vez alguna chispa , si se la hiere con
rios ; mayormente cuando la historia y la viveza. Los muros de Valencia y Sevilla le
experiencia nos enseñan que los que me presentaron hermosa ocasion para mostrar
dran en el torbellino de las revoluciones y su arrojo ; y cuando Narvaez marchando
en el estrépito de los combates, no siem sobre Madrid , y Concha persiguiéndole
pre se distinguen por una conducta muy hasta la orilla del mar , no dispertaron en
ajustada. Como los hombres públicos son su alma el antiguo valor , lícito es sospe
juzgados por lo que hacen en público, si char , que no debió de ser tanto como se
Espartero hubiese merecido bien de la nos quiso dar á entender en pomposas re
patria , poco se cuidaran la generacion laciones.
presente ni las venideras , de su aficion al Quizás no seria aventurado decir, que
juego. Desgraciadamente, tanto los con Espartero tenia el valor de un soldado, que
temporáneos como la posteridad suelen ser no le faltaba el suficiente arrojo para echar
indulgentes en demasía con los que llevan se sobre la boca de un canon , y que sin
á cabo empresas grandes , por mas que embargo carecía del valor propio de gene
sean injustas y desastrosas. ¿No vemos otor ral , y mucho mas de quien se halla al
gado el título de héroes á los devastadores frente de una nacion de catorce millones.
de la tierra? Pocos recuerdan la severa Estos dos valores nada tienen de semejante;
pero exacta sentencia de San Agustín: el primero está en la sangre, en el cora
« faltando la justicia , ¿ qué son los reinos zon ; el segundo , es inseparable del senti
sino grandes latrocinios?» Mucho menos miento de la propia capacidad , de la ojea
se repara en los vicios particulares ; no em da vasta y penetrante que comprende la
bargante que estos vicios son á menudo el situacion , que ve los medios mas á propó
origen de faltas de gobierno y de calami sito para dominarla. Al soldado intrépido
dades públicas. Pero el hombre resiste con que marcha sin alterarse á una muerte
dificultad al prestigio de lo grande y esplen segura, elevadlo de repente á un puesto
doroso; la misma tempestad que tala los importante: dudará, vacilará, consultará;
campos, y pone en peligro las vidas, es poco antes no conocía el miedo, pero aho
contada con pavoroso entusiasmo por las ra lo sentirá por primera vez , para sí y
víctimas de su furor. Olvidanse por un para sus subordinados.
 El hombre cuya capacidad es inferior á
su posicion , no sabe qué hacerse en ella;
y por lo mismo es indeciso, irresoluto, tí
mido. Si es general en gefe, maniobrará
de suerte que no pueda comprometerse á
trances peligrosos , mientras á esto no le
obligue la indeclinable fuerza de circuns
tancias imperiosas; si se halla al frente del
poder, tomará por pensamientos de gobier
no los recursos de la intriga. La luz del dia
le será aborrecible; necesitará ocultar su
miseria en la oscuridad ; dejará que las co
sas vayan siguiendo su curso; y no sintién
dose con fuerzas propias , lo esperará todo
de los favores de la fortuna. En ofrecién
dose una crisis complicada no acertará á
obrar en ningun sentido , se quedará co
mo atontado : parecerá cobarde , y mas bien
será indeciso.
La escasez de talentos de Espartero no
ofrece la duda que su valor : es negocio
que ha pasado, por decirlo asi, á estado
de cosa juzgada. A pesar de su elevacion,
no se ha remontado nunca la fama de su
capacidad ; cuando general la manifestó
limitada ; pero la nulidad del regente ha
dejado muy atrás la cortedad del caudillo.
Tanta era la evidencia del hecho, que lo
han reconocido sus mismos partidarios : y
si bien es probable que durante la prospe
ridad se alegrarian de esta circunstancia
que les facilitaba el hacer servir de instru
mento yjuguete al mismo á quien afectaban
acatar; no lo es menos que en los momen
tos de apuro se llenarían de despecho al
ver que tan lastimosamente representaba
su papel el malaventurado protagonista.
Cuantos han hablado con Espartero, con
fiesan que no han visto en él sino un hom
bre muy comun : y esto debe de ser ver
dad , supuesto que no pudo deslumbrar á
los observadores , ni el prestigio de la ele
vacion , ni el grandor de los recuerdos. Es
cierto que para juzgar á un personage no
siempre es suficiente una entrevista ; pero
si no basta para calificar con exactitud , al
menos hace vislumbrar. Sobre todo en mo
mentos críticos, en circunstancias solemnes,
el talento brilla , ó cuando menos chispea.
En este suelo clásico de generosidad y
desprendimiento , las calidades del corazón
pueden suplir en buena parte los defectos
de la cabeza ; desgraciadamente la peque
nez de alcances de Espartero, tenia un
digno compañero en la estrechez y dureza
de su corazon. De bronce nos dijo que lo
tenia , en uno de sus últimos manifiestos;
5 y—de bronce lo ha mostrado , nó para ar -
rostrar el peligro, sino para causar fría
mente el daño. La palabra perdon no la
acertaron á pronunciar sus labios. ¿Qué
sentimientos se abrigarían en el pecho de
quien fusila á su gallardo compañero de
armas, y despues de ocho días de la insur
reccion, cuando los arranques de cólera
debian estar ya sufocados por la conmise
racion, avivada con los recuerdos de la
amistad y de los servicios? Ligera, ligera
por cierto ha sido la expiacion de quien
pudo hacerse sordo á las súplicas de todo
Madrid , á la mediacion de los mismos ad
versarios del infortunado general, que he
ridos y desde el lecho de muerte implora
ban clemencia I
Los bombardeos de Barcelona y Sevilla
han venido á manifestar , que quien tan
inhumanamente sacrificaba á los indivi
duos, sabia con no menos crueldad, des
truir los pueblos en masa.
ESPARTERO GENERAL. 'f
Espartero escaló la regencia sin méritos
para obtenerla , ni capacidad para desem
peñarla ; y asi no es de extrañar que ade
lantase en su carrera con ma¿ rapidez de
lo que era justo. Si carecía de talentos,
poseia el arte de intrigar, la calma nece
saria para esperar el curso de los aconteci
mientos , y el secreto de explotar en su fa
vor los merecimientos agenos. Hasta que
llegó al mando en gefe del ejército no sa
bemos que manifestase en ninguna ocasion
las prendas de un gran general. Si unas
veces fué afortunado, otras experimentó
dolorosos reveses. Se le dispensaron con
frecuencia lisongeros elogios, mas en esto
corrió parejas con los demás gefes , á quie
nes asi el general como el gobierno no es
caseaban las recomendaciones y los pre
mios. Tal era la situacion de los negocios
públicos, tanto era el tiento que convenia
emplear con la mira de que el enemigo no
pasase de la igualdad á la preponderancia,
que ambos partidos beligerantes aprove
chaban con afan todo cuanto podia servir
les, y se afanaban en crear reputaciones,
por mas que no debieran durar sino muy
escaso tiempo. De estas han quedado en
pié las adquiridas con justicia, indemni
zándolas la opinion pública de los desdenes
de la ingratitud y de los sufrimientos del
 — 6 —
infortunio; pirro, cuántas y cuántas otras || la pérdida de tantos valientes , y derrama
se han hundido en el polvo para no levan ba lágrimas sobre su tumba , y que la
tarse jamás ! nacion conmovida y angustiada, celebró
Una de las principales operaciones que solemnes exequias por los que habian pere
se encomendaron á Espartero antes de ob cido en la sangrienta batalla. Tanta efusion
tener el mando en gefe , fué la persecucion de sangre, indica bastante claro que la vic
de Gomez : pero Guuiez atravesó el reino toria se debió mas bien al tenaz arrojo del
de Asturias , penetró en Galicia , ocupó soldado que á la pericia del caudillo. El título
poblaciones importantes, revolvió sobre de Conde de Lueluma fuera sin duda mas
Castilla, y cuando acabábamos de leer glorioso, si recordase hábiles combinacio
pomposos partes en que se suponía que la nes y maniobras , que hubiesen ahorrado
division expedicionaria habia sufrido fuertes llanto y luto á millares de familias.
descalabros, la vimos internarse hasta el cora No puede negarse que en aquella memo
zon de España, destruir completamente la co rable batalla se llevaron á cabo operaciones
luna de Lopez en Jadraque, marchar en di muy osadas; pero leyendo con atencion el
reccion de Yralencia, y con aliento bastante parte dado por el mismo Espartero, en
para pasearse por Andalucía y Extremadu contramos que la gloria que resulta de las
ra, á pesar del desastre de Villarobledo. principales maniobras, no corresponde al
El general Espartero habia á la sazon cai general en gefe. Oráa , el baron de Meer
do enfermo, y entregado el mando á Alaix; y otros, habian merecido tanto y mas que
pero los resultados de la campaña , indica él , ser agraciados con el título de Conde
ban que no fué muy bien principiada. Ig de Luchana. Al comenzar las difíciles y
noramos si la enfermedad seria muy grave; arriesgadas operaciones para el paso del
pero lo cierto es que vino muy á tiempo. rio y restablecimiento del puente , no las
Con ella logró Espartero dos objetos : pre dirigía Espartero sino Oráa (1). Es preciso
caver los peligros de mala fortuna que afli
gió á otros generales durante las correrías
de la expedicion carlista , y hallarse á las (1) «Los reconocimientos que habia practi
inmediaciones del cuartel general para ocu cado varias veces á costa de acciones formales so
par el mando que dejaba vacante el malo bre las lineas enemigas a la derecha é izquierda
grado Córdoba. del Nervion, formando pílenles para los diferentes
pasos del ejército , me convencieron de que el res
A poco de ascendido á general en gefe tablecimiento del de Luchana era el único, aunque
fuéle propicia la fortuna en el levantamien- arriesgado, medio de salvar á la heroica Bilbao yá
miento del sitio de Bilbao : pero es de no su bizarra guarnicion. Para ello acampé última
mente en la llanura de Aliaga y en los montes de
tar que habiendo comenzado el fuego á las Aspe y Arriaga á la derecha del expresado rio,
cuatro de la tarde , no se presentó Espar empleando alguuos dias y venciendo infinitas difi
tero en el campo de batalla hasta cerca la cultades para conducir la artillería y establecer las
una de la madrugada ; pues que se ballaba balerías inglesas y españolas que habian de prote
ger tan atrevida operacion.
imposibilitado de hacerlo á causa de alguna n El señalado 24 dispuse que la brigada del co
indisposicion. No se halló pues en la refrie da ronel
en D.
Scstao
Baudilio
pasaseMayol
la riaque
de Galindo
se hallaba
por acautona-
un puente
ga en los momentos de mas porfiado com de pontones , que estableció con admirable pronti
bate , cuando convenía desplegar el plan de tud frente del Desierto la marina Real inglesa, au
operaciones, y quebrantar el brio de las xiliando tambien á esla fuerza con media batería
fuerzas sitiadoras. Ofreció la batalla de Lu- de lomo servida por indhiduos de la misma na
chana , una de aquellas escenas de valor y cion. La úrden que tuvo , fué de situarse en la al
tura que da frente á la desembocadura de la ria de
constancia que caracterizan al soldado es Azua , y de colocar tiradores en la torre arruinada
pañol : españoles peleaban de una y otra de Luchana y en las casas que están cerca de la
ria de Burceña. El objeto era llamar la atencion
parte , y fué necesario todo el furor de los del enemigo por la izquierda del Nervion para que
elementos para que el sol no los encontrase disminuyese las fuerzas que tenia sobre las líneas
todavía en encarnizada lucha. ¿Hasta qué de mi proyectado ataque, y para que al mismo
punto influyeron en la victoria el valor y tiempo protegiese el paso de la expedicion que ha
bía dispuesto a fin de echar el puente de Luchana.
la habilidad del general de la Reina? Lo Difícil y temeraria empresa, a la vista del enemigo
ignoramos: solo sí diremos, que aquellos que se hallaba fortificado a la parle opuesta de la
laureles fueron horriblemente costosos, de cortadura de un arco del puente de mas de io pies
que la sangre corrió con espantosa abun tas diámetro; posesionado de varias casas inmedia
á él , y colocado en zanjas y parapetos diestra
dancia, que al dia siguiente, el general mente establecidos, con la proteccion de una bale
vencedor sentía amargado el triunfo por ría á 30 pasos sobre el camino , y de otra cu la
no perder de vista tan notable circunstan Desembarcados los cazadores en la orilla
cia para no privar de su gloria al respeta opuesta , y dueños de las posiciones ene
ble general , á quien en los últimos tiem migas, se rehabilitó el puente, pasaron al
pos le hemos visto alejado del suelo patrio, otro lado las tropas de la Reina, con órden
destinándole á un mando que no parecía de apoderarse del monte de San Pablo;
muy á propósito para su quebrantada salud quien las conducía á la sazon era el baron
y edad muy avanzada. de Meer (1).
Formidable era el trance en que las ocho Encarnizóse entonces la refriega; la san
compañías de cazadores se embarcaron en gre corría á torrentes en ambas filas ; pero
lanchas para saltar en la orilla enemiga; las tropas de la reina se hallaron en tan
fueron necesarios actos del mayor arrojo; grave conflicto que solo pudieron salvarse
y á la vista de un adversario á quien por con la decision y pericia de los que las
cierto no faltaban la inteligencia y el valor; mandaban. En el prolongado y sangriento
mas no era tampoco Espartero, ni quien choque recibió el baron de Meer una heri
ejecutaba ni quien dirigia (1). da que le forzó á retirarse del campo (2).
Las maniobras continuaban , el fuego y
la furia de los elementos diezmaban horri
falda del monte de Cabras. Pero yo contaba con blemente el ejército ; eran mas de las doce
carse
soldadospor intrépidos
salvar á sus
quecompañeros
ardían en deseo
de armas
de sacrili-
, y no de la noche ; y el general en gefe no se
dudé el acometerla fiando su direccion al general habia presentado todavía. Estamos seguros
ü. Marcelino Oráa, gefe de la plana mayor ge
neral de este ejército, por hallarme yo enfermo. »
( Gac. de Madrid del 23 enero de 1837). Eicmo. Sr. , todos los que realizaron el atrevido
asalto; pero lo merece particularmente el capitan
( 1 ) »Ocho de fragata D. Francisco Armero , quien á pesar de
tinadas para lacompañías de cazadores
atrevida empresa: la 1.afueron
y 2.a desdel hallarse herido fué el primero que puso el pié so
primer regimiento de la Guardia Real: la 1.* y 2.* bre la batería enemiga , apoderándose de una de
del de Soria : la 1.' y 2.a del de lior bou ; estas seis sus piezas. » (Id.)
de la 2.a division: la del tener batallon de Zara
goza, y la del segundo del í.° ligero. Tambien fué ( 1 ) « Agravado por mis males en aquella tar
destinado al embarque el teniente de artillería don de , continuó dirigiendo las operaciones el general
Manuel Alvarez Maldonado con algunos artilleros Oráa. Los materiales para el puente estaban pre
para serwr las piqzas que se contaba tomar al ene venidos. Nuestros activos ingenieros lo formaron
migo, como asi lo verificó. Esta valiente columna prontamente y con solidez. Los marineros ingleses,
de cazadores al mando del comandante del regi dirigidos por su digno comandante D. Guillermo
miento infantería de Soria D. Sebastian Llibarre- Lapidge , formaron otro de pontones con admira
na, y del de Zaragoza 1). Francisco Jurado, muer ble celeridad , en tanto que rl primer batallon de
tos gloriosamente, debían a las cuatro de la tarde Soria marchaba embarcado en refuerzo de los ca
embarcarse en lanchas para saltar en la orilla ene zadores. Las mismas lauchas que los habían con
miga , apoderarse de sus obras y proteger la reha ducido tuvieron que volver para llevareste batallon.
bilitacion del puente. En el momento de la ejecu Y el general baron de Meer, comandante general
cion se pronunció de una manera espantosa el de la bizarra 2.a division , pudo , á beneficio de
temporal que ya reinaba. La nieve y el granizo, aquellos habilitados pasos, trasladarla al otro
acompañado del huracan, bastaban para intimidar lado de la ria con orden de apoderarse del monte
el espíritu mas fuerte. Nuestros cazadores, su de S. Pablo.» (Id.)
periores á todo , dieron las primeras muestras
de su ardimiento ron frecuentes vi>as y aclama (2) «Los enemigos, habiendo vuelto de su
ciones precursoras de la victoria. Magcstuoso fué sorpresa , y reforzados considerablemente, descen
el acto de zarpar las lanchas guiadas y escoltadas dieron de la eminente cordillera de Banderas, lo
pot las trincaduras de la marina nacional al man mando posicion en los parapetos y otros puntos,
do del brigadier D. Manuel de Cañas , y de su se dominando la altura que habían ganado nuestras
gundo el brigadier I). José Morales. En el mismo tropas. La batalla se empeñó entonces con encar
instante redoblaron el fuego todas nuestras bate nizamiento. Una batería enemiga , colocada sobre
rías, y los tiradores de la derecha é izquierda del el flanco derecho á retaguardia de las fuerzas re
Ncrvion. En breve se situaron las trincaduras en beldes . causaba estragos en las nuestras. A pecho
disposicion de proteger con sus fuegos el desem descubierto recibían nuestros valientes el hierro y
barco de nuestros valientes . que arrostrando el de ri plomo. Las cargas á la bayoneta fueron repeti
fusilería, y despreciando el de cañon, saltaron das de una y otra parte : pero ni los enemigos pu
animosamente en tierra vitoreando entusiasmados dieron ser desalojados , in la valiente 2.a division
á la Reina y á la libertad. pudo ser lanzada del cerro , cuya defensa fué en
« Aterrado el enemigo con tanto arrojo, y sor comendada á su heroico esfuerzo. Centenares de
prendido con tan inesperado ataque, fué de cortos heridos llenaron los hospitales de sangre: el cam
momentos su resistencia , dando lugar con su fuga po estaba sembrado de cadá\ eres . y en el sangrien
á que los bizarros cazadores se posesionasen de las to , en el prolongado choque , habia sido ya herido
fortificaciones del puente . de los parapetos (le las el general baron deMeer, y posteriorinentecontuso
casas inmediatas y de las baterías del camino y el brigadier!). Froilan Mendez Vigo, que había
monte de Cabras. Dignos dd mayor elogio son, quedado maiidando la division. » ( Id.)
 — 8 —
que se lo impedían sus males agravados en
aquella tarde; pero sea como fuere, la
historia no debe olvidar que habiendo du
rado once horas la accion , no se encontró
Espartero en el campo sino por espacio de
tres y media ; y que por bn al darse las
cargas á la bayoneta que decidieron la vic
toria, si Espartero conducía una coluna,
marchaba al frente de la otra el general
Oráa(l).
Extenuado el ejército con aquella costosa
victoria permaneció inactivo en Bilbao por
espacio de tres meses; hasta que se movió
( 1 ) « Sin embargo del estado en que me baila
ba , temiendo que un revés malograse las ventajas
obtenidas por la tarde , di orden al general D. Ra
fael Ceballos Escalera
rápidamente al punto, del
paracombate
que hiciese
la 1.amarchar
brigada
de su division , y que siguiese él al mismo con la
otra : mandando tambien un ayudante de campo á
runir lauchas , pasarlas al Desierto y seguir en
busca de la brigada Mayol , con orden de que de
jando solo un batallon en las posiciones , pasase
con los otros dos al lugar del combate , atravesan
do la, ría de Galinde por el puente de pontones , y
la de Bilbao en las lanchas , pues el temporal ha
bía deshecho el gran puente de quechemarines.
Pero no pudiendo resistir al deseo de imponerme
personalmente del estado de la batalla, éimpaciente
por las horas de continuado fuego, monté á caba
llo entre doce y una de ta noche, y me presenté en
la altura de S. Pablo en ocasion en que fué conve
niente y necesaria mi presencia. Defendía la posi
cion el coronel D. Antonio. Valderrama , coman
dante de la Guardia Real de infantería , con un
valor admirable , despucs de las sensibles bajas
que habia sufrido la brillante 2.' division que en
tonces estaba á su cargo. El fuego continuo algun
tiempo produciendo los mismos estragos, porque
la mucha nieve hacia percibir los objetos ; mas
habiendo llegado la brigada del valiente coronel
Minuisír , en virtud de la orden que df al general
Escalera , determiné atacar decididamente al ene
migo para ganar la cordillera de Banderas , y apo
derarme de los parapetos y de su batería. Merece
dor es dicho coronel de la gratitud de la patria por
la serenidad con que se condujo formando los
cuerpos despues del paso de un terrible desfilade
ro. El soldado al escuchar mi voz , cobró nuevo
aliento; sus aclamaciones fueron el augur del mas
completo triunfo , y puesto á la cabeza de la pri
mera columna , wrifieñndolo á la de otra el gene
ral Orúu , se diá la mas brillante carga (i la ba
yoneta, siguiendo las aclamaciones de entusiasmo
acompañadas del paso de ataque , arrollando al
enemigo hasta ln culminante altura , y lanzándolo
en desorden por el descenso de la parte opuesta,
en direccion de los pucbLs de Azua , Hcrandio y
Derio , quedando en nuestro poder la batería que
tenían en la cúspide. Desde entonces todo cedió al
esfuerzo de estas bizarras tropas que instantánea
mente se hicieron dueñas del punto fortificado de
Banderas. Once horas duró tan sangrienta lucha,
la mayr.r parte de ellas de noche, con un frio in
soportable , y sin que la nieve cesase de caer cu.
tal abundancia , que sepultó muchos de los cadá
veres , asi nuestros como enemigos. » (Id.)
hácia el centro de las provincias para la
famosa combinacion de los tres cuerpos
que atacando á un tiempo por tres puntos
diferentes , debia preparar un golpe decisi
vo. No fuera justo acusar á Espartero del
mal éxito de un plan, que si bien podía ser
realizable tratándose de atacar un simple
ejército , era en extremo descabellado te
niendo que habérselas con uno que estaba
apoyado por el pais. Pero desde luego salta
á los ojos que el general en gefe no debia
emprender semejante operacion ; y que por
mas vivas que fuesen las instancias con que
le apremiase el gobierno para emprender
un ataque decisivo, era de suobKgacioD
resistirse á cometer tamaña imprudencia,
presentando si hubiese sido necesaria Ta
renuncia de su puesto , antes que empe
ñarse en una combinacion que fué muy
desastrosa para el ejército invasor, y que
todavía hubiera podido serlo mucho mas.
Ora Espartero concibiese el plan , ora lo
adoptase concebido por otros, manifestó
bien á las claras que no conocía el carácter
de aquella guerra ; y si penetrado de sus
inconvenientes se prestó á ejecutarlo, no
mostró la firmeza que en semejantes cir
cunstancias debe tener un general en gefe.
El que lo era del ejército del norte , podía
siempre contar con mucha consideracion
de parte del gabinete de Madrid , por mo
tivo de la alta importancia que habia toma
do la lucha en Navarra y Provincias Vas
congadas : siempre que el general hubiese
manifestado que una operacion era muy
arriesgada , y que con ella se iba á com
prometer la eausa , es bien seguro que las
instancias habrían cesado , ó hubieran per
dido de su tono imperativo. En todo caso,
los deberes de un general en gefe son de
una esfera superior á los de un subalterno;
entre la obediencia ciega y la resistencia
abierta , se le ofrece siempre un medio de
coroso
cion á :lossacrificar
deberes los
delatractivos
honor. de la ambi-t
La dura leccion que se acababa de reci
bir hizo que se cambiase el plan de opera
ciones , y que abandonando la idea de los
ataques combinados, se adaptase el sistema
de reunir la mayor parte de las fuerzas , y
dirigirlas de un golpe sobre un punto im
portante. Resolvióse pues el ataque de la lí
nea de Hernani. Pero es de notar que si
bien Espartero se apoderó de ella sin mu
cho trabajo, fué por coincidir su operacion
con la salida de la expedicion de D. Cár-
los ; con lo cual quedaba la línea , si n(S
abandonada , al menos muy desguarnecida.
Como quiera , formaremos concepto so
bre la imprevision con que por aquel tiem
po eran dirigidas las operaciones , conside
rando que cabalmente se emprendía un
ataque contra el norte de las provincias, al
mismo tiempo que el enemigo con nume
roso y escogido ejército se encaminaba hácia
el alto Aragon , amenazando dar un golpe
decisivo á Cataluña, que á la sazon se ha
llaba muy desmantelada. Si la prudencia y
habilidad del baron de Meer auxiliadas con
el arrojo del general Leon , no hubieran
quebrantado algun tanto el ímpetu del
ejército carlista en los campos de Gra , si
en el centro de Cataluña se hubiesen repe
tido las escenas de Huesca y Barbastro, en
pocos dias habría caido en poder de Don
Carlos la mayor parte del Principado; y el
ejército que despues de la batalla de Gra,
del hambre de Solsona , y del reves de
Chiva, conservó todavía bastantes fuerzas
para hacer frente á las de Oráa, Espartero
yBuerens, derrotar cumplidamente á este,
y marchar sobre la Capital, es probable
que no se hubiera detenido con débiles ta
pias si saliendo de Cataluña victorioso y
bien abastecido , hubiese podido marchar
en derechura hácia Madrid.
Por cierto que no son necesarios conoci
mientos militares para entender que no
convenia entretenerse en operaciones se
cundarias, cuando el enemigo estaba pre
parándose á intentarlas decisivas. Se hu
bieran prevenido gravísimos riesgos, y
evitado considerables pérdidas, si al aco
meter D. Carlos su empresa se hubiesen ha
llado las tropas de la Reina ocupando los
puntos convenientes para recibir con ven
taja al ejército invasor. Fué preciso mar
char á ocuparlos á toda prisa , segun lo
demandaba la urgencia del peligro, y lo
permitían las circunstancias: corriendo en
tre tanto el trono de Isabel tan terribles
azares, que no se alcanza cómo de ellos
salió bien parado, sino atendiendo á la mala
direccion que presidió á los negocios de D.
Carlos desde la muerte de Zumalacárregui.
Es curioso observar la conducta de Es
partero en aquella campaña : fuese plan,
fuese casualidad , lo cierto es que nunca
tuvo con el ejército expedicionario una ba
talla formal, lribarren , Meer, Oráa, Bue-
rens , todos midieron sus fuerzas con el
enemigo , con buena ó mala fortuna : solo
Espartero, general en gefe, y llevando á
sus inmediatas órdenes tropas escogidas, l
maniobró de tal manera que no se vió
nunca empeñado en un lance decisivo. Di-
ráse que el enemigo le huía el cuerpo;
pero cuando atravesó por el centro de la
Península , no parece que debiera de ser
tan difícil precisarle á pelear; y lo que lo
graron los subalternos no habia de ser im
posible al gefe. Además , que un ejército
tan numeroso, y que amenaza la Capital
de la monarquía, no se escurre y desbanda
á manera de pelotones de somaten. ¿Seria
aventurado sospechar que Espartero siguien
do su sistema favorito , dejó para los otros
los compromisos y riesgos, reservándose
recoger el fruto si es que llegara á sazon ?
Para aclarar estas dudas, veamos lo que nos
indican los acontecimientos sucesivos.
Vueltos á las provincias del norte los
ejércitos beligerantes, castiga Espartero los
asesinatos de Sarsfiel y Escalera. Aquellas
escenas, á la par grandiosas y terribles,
contribuyeron de una manera muy parti
cular al realce de su nombre, restablecien
do y afirmando la disciplina tan relajada
por las revueltas civiles y las mismas cir
cunstancias de la guerra. Con tan justa
severidad se afianzó en su puesto el gene
ral en gefe, y labró la mayor parte de su
afortunado porvenir. Mas , no se empaña
el elogio, por haberse enlazado en la ac
ción aplaudida los intereses de quien lo
merece, con los derechos de la justicia, y
con la conveniencia pública.
En adelante redújose el plan de campaña
de Espartero á mantenerse en la defensiva,
cubriendo la línea de fortificaciones que
circuían el pais enemigo , y esperando que
alguna nueva tentativa de invasion llevase
á las fuerzas de D. Cárlos á operar en ter
reno para ellas menos ventajoso. Este sis
tema de guerra, si bien fastidioso y estéril,
era el único posible , atendido el espíritu y
la posicion del pais, los numerosos y aguer
ridos batallones que lo defendían ; pero
adoptándole Espartero no hizo mas que
seguir lo que le habia enseñado el general
Córdova , con la práctica y por escrito. La
experiencia de la guerra con los franceses,
la del año 22 , y sobre todo los desastrosos
principios de la presente , estaban confir
mando la opinion del ilustre caudillo; pero
leida su famosa Memoria, adquirían los
hechos tal grado de evidencia , que era
preciso cerrase los ojos quien quisiese resis
tir á la fuerza de la verdad. Si el ejército
de la Reina se hubiese desv iado de este sis
tema hubiéraiise repetido las escenas delas
 Amczcuas , y quizás fueran todavía mas 10sobre — la corte que tan ciegamente se había
calamitosas; porque si bien estaba mejor entregado en sus manos. Elevado al minis
organizado y disciplinado que en tiempo de terio el general Alaix , íntimo allegado de
Valdés, en cambio, los batallones de Don Espartero, fué una especie de inaugura
Carlos eran mas numerosos, contaban con cion del poder del general en gefe. Cabal
mas fortificaciones y otros medios de de mente el nuevo ministro se encargó de su
fensa , habian adquirido la conviccion de alto puesto, inmediatamente despues de
que ocupaban posiciones inexpugnables , y haber sufrido un encuentro desgraciado:
habrían sabido aprovechar mejor la victo esta circunstancia , que por cierto no era
ria que no se hizo en aquella desastrosa muy favorable al prestigio del secretario
retirada. El mismo Zuuialacárregui no es del despacho , no podia ser desagradable á
tuvo á la sazon bastante penetrado de la quien lo hacía nombrar; cuanto menos bri
fuerza propia , y de la debilidad de su ene llase la persona de Alaix , tanto mas resal
migo. taba la preponderancia de quien lo en
Despues de larga inaccion , solo inter viara.
rumpida por sucesos decscasa importancia, Nada diremos del mérito de las acciones
hiciéronse grandes preparativos para dar do Ramales y (iuardamino ; á ellas debió
otro golpe decisivo, que inclinara un tanto la Espartero el título de Duque de la Victo
balanza á favor del ejercito de la Reina. ria; observaremos no obstante, que no ha
Estella, Morella y Solsona, debian ser ata bian transcurrido dos meses desde los fusi
cadas á un tiempo. Solsona fué tomada por lamientos de Estella , y que á la vuelta de
el haron de Meer; Oráa sufrió un descala tres, el gefe del ejército enemigo se entre
bro en el asalto de Morella, y se vió preci gó á Espartero , con todos los batallones
sado á retirarse; Espartero que tan gran que le fué posible reunir. Entre tales suce
des y ruidosos preparativos habia hecho sos, no asienta muy bien el título deDiu|ue
para atacar á Estella , no atacó. De esta de la Victoria. Como quiera , seria de de
suerte quedó desvirtuado el general del sear que el general Maroto que tan escaso
ejército de Aragon y Valencia, cuya repu fruto reportó de las negociaciones, fran
tacion militar podia servir de estorbo al del quease los secretos de su cartera á los que
norte ; y no corrió escaso riesgo de la mis intentasen escribir la historia. Es sensible
ma suerte el de Cataluña , cuya fama ¡ba que un acontecimiento tan trascendental
creciendo hasta un punto que debia de in como el de Vergara , esté envuelto todavía
fundir recelos á la ambicion desapoderada. en densa oscuridad ; Maroto llegó al tér
Los dos generales que operaron , no mino de su carrera militar y política el día
contaban con fuerzas. y recursos bastantes que se abrazó con Espartero, y á este le
para acometer sus respectivas empresas; cupo la misma suerte al embarcarse en el
las acometieron sin embargo , uno con puerto de Santa María ; perteneciendo am
próspera, otro con adversa fortuna; ¿por bos personages á la historia, fuera muy del
qué no desempeñó Espartero la parte que caso que vieran la luz documentos que no
le cabia? ¿no fuera lícito sospechar que podrían menos de ilustrarla. Las revelacio
entonces como antes trató de eludir com nes de Aviraneta podrían aclararse con las
promisos, manteniéndose en expectativa, y de Maroto. No sabemos si la política inglesa
no poniendo en peligro ese mando que tan tendrá interés en que se guarde el secreto;
caro le era, y que tan ambiciosos proyec pero en tal caso existe un nuevo motivo
tos le inspiraba ? para avivar la curiosidad.
Además , que no fué pequeño triunfo el Luego del abrazo de Vergara , comenzó
deshacerse de un general tan entendido el puritanismo constitucional de Espartero;
como Oráa , y cuya severa probidad no in desde entonces , ya no fué el general que
fundiría muchas esperanzas de que con el celoso del orden público felicita al gobierno
tiempo secundase designios villanos. Por lo por haber dado un golpe anticonstitucional
tocante al baron de Meer , bien pronto de al Guirigay; (1) es un parlamentario rígido
bia llegarle su turno ; y entonces Esparte
ro, cuya imperativa influencia habría he
cho ya desaparecer el ejército de reserva ( 1 ) Insertamos á continuacion el siguiente no
comenzado á organizar por Narvaez, que table documento en el cual no escasea Espartero
las mas duras calificaciones al mismo partido á
daba sin rivales temibles , tínico dueño de quien luego aduló con tanta afectacion. Extraña
la situacion , pudiendo ensayar sus fuerzas coincidencia ; la comunicacion es de fecha 18 (le
 — il
que nada quiere hacer sin el consen tes liberales. Un abrazo en Vergara termi
timiento de las Córtes , es un fiel obser nó una era ; un abrazo en las Cortes inau
vador de los principios liberales, aun cuan guro otra ; el primer abrazo arrojó de la
do por ellos debiera encenderse de nuevo Península á don Carlos : el segundo abrazo
la (¡uerra ; la Constitucion y nada mas que señalaba á Cristina el camino de Valencia;
la Constitucion ; el héroe de las cien batallas, ¡ cosa notable ! fervientes reconciliaciones,
en el momento de hallarse en el apogeo de nuevos abrazos, condujeron á Espartero á
su prestigio y poderío , se siente acometido bordo del Malabar!...
de los escrúpulos constitucionales de una Nuestros lectores no habrán olvidado
manera tan delicada y ejemplar , que deja que en octubre de 1831) , tuvo lugar en las
edificados y confundidos á los mas ardien- Cortes una escena tan ruidosa como tierna.

juliode 1839; en 18 de Julio de 1840, tuvieron Europa que reconoció sus derechos y los ventajas
lugar los acontecimientos de Barcelona. del gobierno representativo , ha sido constante
mente presa de la esclavitud; y las transicioucs
Oficio que pasó el general en (jefe del ejército del favorables que como auréola de su felicidad, se
¿Varíe al señor ministro de la Guerra, felicitan han reproducido eu el siglo presente, fueron com
do al gobierno por la energía que desplegó al batidas para volver al depresivo estado que impri
suspender la publicacion del periódico exaltado me el despotismo.
Ll Guirigay. Las opiniones se dividen , queriendo cada cual
Excmo. Sr. : Habiendo llegado á mi noticia que segun su prisma de observacion señalar las causas
el gobierno de S. M. acordó se suspendiese la pu eselusivas de la perdida libertad ; pero yo encuen
blicacion del periódico titulado el Guirigay, á con tro en esa misma division una esencialísima que
secuencia de haberse atrevido sus redactores a di puede hasta cu el día hacer se malogren tantos sa
rigir infames y bajas injurias á la augusta ltcina crificios y sangre vertida por consolidar nuestras
Gobernadora , procuré la adquisicion del número instituciones. La esperiencia de clásicos errores no
de dicho periódico que contenia tan inaudito ul- basemdo de maestra ; y ni aun el terrible desen
trage , y su lectura ha producido cu mi ánimo la gaño de que algun periódico como el Zurriago, de
justa indignacion que no puede menos de cscitar triste recuerdo , era el instrumento asalariado para
tan escandaloso desacato. encender la discordia y entronizar el despotismo,
Yo faltaría , Excmo. Sr. , a "no de mis primeros sirve de leccion para alzar un grito unánime que
deberes, si cu esta ocasion guardase silencio y no repruebe y proscriba á todo el que pronuncie el
elevase mi voz para hacer participe de mis senti desórden con escritos incendiarios y toda máxima
mientos al gobierno de S. M. , al ejército y al pú que perjudique en lo mas minimo al pronto y se
blico. Mi manifestacion sera franca y sincera, aun guro triunfo de la causa que defendemos.
cuando los perversos que se complacen en la ruina Si fueran necesarias pruebas para convencer del
de esta desventurada patria , quieran atribuir tor daño que la ocasionan los escritos alarmantes y
cidas intenciones y bastardos liues , á lo que es un calumniosos , bastaría el examen de los boletines
celo puro y deseo ardiente de su prosperidad. rebeldes, atestados de copias de lo mucho que
La mayoría de los españoles que desea ver afian publican algunos periódicos poco circunspectos ó
zada la Constitucion que nos rige , y con ella el , guiados del espíritu de partido. Pero lo que no po
trouo legitimo de Isabel 11 , deplorará como yo esa dia concebirse ni esperarse , era el remarcable es
desgarra
pandilla,
perniciosayque
licencia
escarnece
escudada
, ese
hasta
desenfreno
de lalo libertad
mas sagrado
de de
la imprenta,
miserable
con sus ¡1 cándalo de verse públicamente ultrajada la sagrada
é inv iolable persona de la Reina Gobernadora; y si
el gobierno , en las criticas circunstancias en que
furibundos ataques, emponzoñadas máximas, y se encuentra la nacion no hubiese prescindido de
anárquicas contestaciones. Esa despreciable frac consideraciones que podrían tener lugar eu un es
cion de hombres inmorales que proclamándose tado normal , atajando el escándalo que compro
defensores
gar íi sus reprobados
del pueblo liues
, todo, ylosumirlo
atropcllau en para
mayores
Me- 1 metía el órden y precipitaba la causa , habría á mi
modo de \er , comprendido mal sus deberes , res
desgracias , no puede tener otra mas justa califica pecto de la dignidad de la corona v las facultades
ciosamente
cion que la de
aparenta
traidoradefender,
á la noble
lisiacausa
claseque
de hom-
malí- \| que le concede el art. io de la Constitucion ju
rada.
hres sin títulos que recomienden sus personas, sin Como general en gefe de este ejército , creo con
propiedad que asegure la buena fe de sus exagera veniente fe ¡citar tan oportuna determinacion, y no
das máximas, sin compromisos, y sin virtudes ; au'uturo nada asegurando á V. E. que estos son
reconocidas por hechos consumados , quieren ar los sentimientos de todos los individuos que están
rastrar y someter á su tiránico juno, á la masa á mis órdenes, tan dispuestos á combatir á los re
general de los españoles que sostienen el Estado ó beldes, como á tcida clase de enemigos de la Cons
cia.
le defienden,
La libertadesponiendo
de escribirtodos
y delos
publicar
dias su las
existen-
ideas ! titucion y del trono legitimo de Isabel II , sea la
que quiera la máscara con que se encubran. Díg
debe protegerse, cuando no perjudica á la salud nese V. E. admitir esta espresion pura y sincera
de la patria. A esta salud deben ceder todas las de mis sentimientos , que hago pública . por creer
consideraciones; y las leyes por mas justas y con- ¡ asi contribuyo al bien de mi patria y de mi Heina.
venientes que se crejeran al recibir su sancion, i Dios guarde" .'i V. B. muchos años. Cuartel general
tienen que quedar de hecho suspendidas cuando el de .Vmurrio IH de julio de I83U. Excmo. 9r.=
bien
La de
nacioD
la patria
española,
lo reclama.
tal vez la primera de la culta ¡ El duque de la Victoria. — Excmo. Sr. Secretario
de listado y del Despacho de la Guerra.
Pronunció el Sr. Olózaga un largo discurso
en que manifestó algunas sospechas sobre
el ministerio, no solo por el modo con que
se habia formado, sino tambien por la con
ducta que observaba. Mediaron contesta
ciones, acaloróse el debate; pero al fin,
merced á declaraciones conciliadoras y
amistosas, se abrazaron el Sr. Olózaga y
el Sr. Alaix , imitando en seguida el ejem
plo los demás diputados y ministros en
medio de los aplausos de las galerías. Los
mismos que se abrazaban no sabian lo que
significaba aquel abrazo. El poder militar
cada dia mas pujante, y que amenazaba
invadirlo todo, se aliaba entonces con un
partido á quien antes tratara con la dureza
que acabamos de ver. Esto auguraba á- la
infeliz España males sin cuento. Con no
menos gracia que verdad dijo á la sazon el
festivo Abenamar , hablando de la que él
apellida escena tierna y lagrimosa.
Lloraban los diputados,
Lloraban las galerías,
Lloró la mesa y los bancos,
Lloró del trono la silla.
Los
Y lloraban
por
taquígrafos
llorarlas, toda
cuartillas
lloraban
España,
A su tiempo lloraría.
Pacificadas completamente las provincias
del norte, la opinion pública creia estar ya
viendo al general de los ejércitos reunidos,
cual se arrojaba con la velocidad del rayo
sobre Cabrera , y en seguida sobre el Con
de de España; aprovechando la terrible
impresion que en las fuerzas carlistas de
Aragon y Cataluña acababan de producir
los colosales sucesos del norte. Por mas
fuerte que se quiera suponer á Cabrera en
castillado en Morella y Cantavieja ; ¿quién
podia pensar que se emplearían ocho me
ses en desalojarle del pais? ¡ Y cuánto apa
rato ! i cuántos preparativos para el sitio !
Las cartas del cuartel general , y el Mani
fiesto del Mas de las Matas , bien claro in
dicaban que Espartero no perdia el tiempo;
y que su inaccion militar ocultaba la acti
vidad de las intrigas , que debían comenzar
á desembozarse en Barcelona para llegar al
triste desenlace de las playas de Valencia.
Ignoramos si hay algo de verdad en lo
que se ha dicho sobre inteligencia entre
Espartero y Cabrera ; no ha faltado quien
sospechara que este último habia cedido á
las proposiciones del general enemigo, y
que su paso por Cataluña no fué sino para
llevarse á Francia los batallones de Cata
luña. Sea como fuere, no deseamos que se
nos achaque que nos hemos propuesto re
bajar en todos los acontecimientos el mérito
de
formar
Espartero;
el juicioy sobre
asi nos
aquellos
abstendremos
hechos , no
de
teniendo á la vista datos suficientes. La
enfermedad de Cabrera sobrevino tambien
en ocasion muy oportuna para los designios
del afortunado gefe de los ejércitos reuni
dos; y la conducta observada en Berga por
el caudillo carlista fué cuando menos , al
gun tanto misteriosa. Para abandonar la
plaza y marchar precipitadamente al ex-
trangero al presentarse las guerrillas del
enemigo, no necesitaba Cabrera hacer á
sus subordinados tan animosas promesas, y
divertirlos con festivas y bulliciosas demos
traciones. Fuese conviccion de la inutilidad
de la resistencia , fuese otro el motivo , lo
cierto es que los sucesos manifestaron que
Cabrera al atravesar el Ebro no tenia in
tencion de pelear mas. Nada sucedió que
pudiera hacerle cambiar de plan; porque
la fuga de Segarra , general de los carlis
tas de Cataluña , mas bien le dejaba el ter
reno despejado que no se lo embarazaba.
La prueba mas clara de que podia contar
con la decision de todos los batallones cata
lanes , la tenia en que el caudillo que me
ditaba proyectos de transaccion tuvo que
escaparse solo, sin poder llevar consigo, ni
una escolta de cuatro caballos , y con gra
vísimo riesgo de la vida. Añádase á esto
que Espartero le dejó libre á Cabrera el
paso del Ebro , no obstante de que al pare
cer le interesaba cerrárselo , para impedir
su reunion con las fuerzas de Cataluña;
mayormente cuando tomados los fuertes,
le era muy fácil destruirlo en pocos dias,
contando como contaba con un ejército tan
imponente , y teniendo en su apoyo el ir
resistible curso de tantos y tan prósperos
acontecimientos. Nos abstenemos de juz
gar; pero consignamos los hechos por si
pueden arrojar alguna luz.
La lentitud de operaciones que tan be
neficiosa fué á Espartero , podia ser muy
fatal á la causa de la Reina; porque no ha
biendo desistido D. Cárlos de su pretension,
antes continuando con empeño en alentar
á sus defensores, podia acontecer muy
bien que se encendiese de nuevo la guerra
civil en las provincias donde se habia lo
grado sufocarla , y se aplazara para mucho
mas tarde su decisiva terminacion. Es ¡n
dudable qiie con los sucesos de las provin 13 po—á todo linage de conjeturas , y que no
cias del norte , la causa carlista habia su faltan indicios que abonan la opinion in
frido una pérdida irreparable; pero tambien dicada.
lo es, que las fuerzas de Aragon y Cata Los gobiernos representativos , tales co
luña no eran para despreciadas; y que si mo los concibió y planteó la filosofía políti
se hubiesen visto apoyadas por una nueva ca del siglo xvm, estan basados sobre la
insurreccion en Navarra , por poco consi desconfianza , garantidos por la division ,
derable que hubiera sido, se habría hecho vivificados por la oposicion y sostenidos
muy difícil el hacerles abandonar el cam por la lucha. La constitucion francesa,
po. La fuerza moral del suceso de Verga - obra de la Asamblea constituyente, y la de
ra , que en setiembre de 1839 era irresisti Cádiz de 1812, son convincente prueba de
ble, habia perdido ya mucho en febrero de esta verdad. La razon y la experiencia han
1840; y sabido es que en todas las guerras, hecho patentes los males que acarrea un
mayormente en las civiles , la fuerza moral gobierno de esta naturaleza, y han acon
es a menudo mas decisiva que la realidad sejado algunas reformas de mucha consi
de los hechos. Mas de 30 batallones le que deracion; sin embargo, no era posible ob
daban todavía á D. Cárlos despues de la viar todos los inconvenientes , ya que no se
defeccion de Maroto ; y sin embargo no quería condenar su origen.
resistió á la aterradora fuerza moral de ta La creacion de un cuerpo legislativo me
maño acontecimiento ; pero es bien seguro diador, y el veto absoluto concedido al mo
que si en la primavera de 1840 , se hubie narca, son los dos sacrificios principales
sen visto de nuevo en campaña una docena que el espíritu democrático ha consentido
de batallones navarros, habrían cobrado en imponerse, quizás en obsequio de su
tal ánimo los defensores de este príncipe, propia conservacion. Los nuevos hechos
que la guerra civil no habría terminado han traido nuevas teorías , ó mejor diremos
aquel año. Las mismas circunstancias que han modificado las anteriores ; se ha con
se miran como muy difíciles en la caida de denado la desconfianza como principio de
una causa , cuando en ella ha empezado á gobierno, y se ha reconocido como una
cundir el desaliento , son consideradas co necesidad la armonía de los poderes. La
mo muy ventajosas en los momentos de es omnipotencia de la asamblea popular se ha
peranza. Asi, quien debia salvar el trono neutralizado con la existencia del alto cuer
de Isabel lo exponía con su lentitud á nue po colegislador y el veto absoluto; creyén
vos y gravísimos peligros.—/. B. dose que de esta manera se establecería un
equilibrio para que no preponderasen ni el
despotismo ni la anarquía.
En la actualidad , es sobremanera cu
ESTUDIOS POLÍTICOS. riosa é instructiva la observacion del curso
de las doctrinas y de los hechos; siendo de
notar como cada cual de los elementos com
binados guarda sus instintos naturales, y
propende hácia el punto á que ellos le im
Artícelo 1." pulsan. Con nuevas teorías , intérpretes y
aclaratorias de las leyes fundamentales , se
EL ALTO CUERPO COLEGISLADOR. les ponen á estas apéndices de mucha tras
cendencia ; y con el pretexto de ilustrar la
letra y realizar su espíritu , se falsea el tex
No ha faltado quien opinase que los go to, y se contradice su mente.
biernos representativos eran una transicion La fuerza absorvente de las asambleas
de la monarquía absoluta á la república. únicas, se ha mostrado tan de bulto en to
Poco aficionados á pronósticos, y muy des das las revoluciones , que á su vista retro
confiados de la prevision del hombre, no cedieron espantados los mas ardientes demó
hacemos' mucho caso de cuanto se nos cratas: «cerremos, dijeron, esa horrenda
anuncia para los tiempos futuros , aun sima, que se nos tragaría á nosotros mis
cuando los heraldos del porvenir sean mos.» Los elementos de la única fueron
Chateaubriand ó Lamennais. Como quiera, relegados al cuerpo popular, y este ha con
no puede negarse que los modernos siste servado las tendencias de sus principios
mas de gobierno presentan anchuroso r.im- constitutivos. Su fuerza absorvente no es
 — lí
lanta , pero existe aun ; es todavía muy hombre nada crea ; arregla , ordena , usa ,
poderosa, va cada dia en aumento; y bajo pero los seres preexisten á su accion , él no
una apariencia de legalidad entra insensi puede producirlos. Se aprovecha de la cor
blemente en el terreno de los procedimien riente de los vientos , de los saltos de agua,
tos discrecionales y arbitrarios. Inculcando de la violencia del fuego , de la elasticidad
máximas que no estan ni en la letra ni en del vaporyde cien otros agentes; los apli
la mente, ni en el espíritu de las constitu ca dirigiéndolos, combinándolos, modifi
ciones , invade el dominio de los otros po cándolos de mil maneras ; pero es preciso
deres, y se erige en verdadero y único so que existan de antemano , porque la inteli
berano. Ya ha desaparecido en ciertos dic gencia y la fuerza humana no alcanzarían á
cionarios la soberanía del monarca , como dar la existencia al menor de ellos. Lo pro
la soberanía de todos los poderes reunidos; pio se verifica en el orden social. Este tie
ya no hay mas que la soberanía parlamenta ne tambien sus agentes, sus fuerzas que al
ria , que para realzar el prestigio ennoble hombre le es dado reunir y dirigir, mas no
ciendo el timbre , se denomina omnipoten crear. Su simple voluntad nada produce;
cia; y esta omnipotencia ó soberanía parla y cuando se obstina en hacerlo, en vano
mentaria, no es mas en último análisis que se cansa en decir , hágase , que la cosa no
la soberanía y omnipotencia del cuerpo popular. queda hecha. Los poderes políticos, si han
Por de pronto , salta á los ojos la impo de ser dignos de este nombre, deben serla
tencia á que se va reduciendo el alto cuer expresion de los poderes sociales; de tal
po colegislador , siendo notable que se ve manera que las constituciones no han de
rifica este fenómeno no solo en aquellos hacer mas que llamarlos á ocupar el pues
paises donde se le ha sujetado á los vaive to que les corresponde , á ejercer con re
nes y mudanzas electorales , sino tambien gularidad y buen orden la accion que an
allí donde la constitucion le asegura perpe tes ejercían sobre la sociedad. Inteligencia,
tua estabilidad. En Francia los pares son moralidad, fuerza, hé aqui lo que gobierna
nombrados por el Rey y su dignidad es vi el mundo ; hé aqui los verdaderos poderes
talicia ; y sin embargo es evidente lo escaso sociales; donde aquellas se encuentran , allí
de la influencia que ejerce la Cámara alta se hallan estos; las instituciones políticas
en los negocios del estado. Es sabido, que deben reunirlos y organizarlos, haciéndo
al ventilarse una cuestion de importancia , los mas fuertes con la union , haciéndolos
se piensa muy poco en la opinion y voto de mas provechosos con la convergencia hácia
los pares; la vida y la muerte, asi para los un mismo punto: la felicidad pública. La
ministerios , como para los sistemas de go inteligencia concibe y ordena; la moral
bierno , solo vienen de la Cámara de los justifica; la fuerza ejecuta, y defiende;
diputados: lo que ella sostiene dura; lo aplicad estos tres elementos á la adminis
que ella hiere cae. Este es un hecho reco tracion del estado, y tendréis excelentes
nocido por la opinion pública, señalado por instituciones políticas. Mas para esto será
la prensa , lamentado en la tribuna ; pero preciso que los busquéis allí donde estan ,
la voz de los ilustres inválidos que piden que no os imagineis que os es dado produ
un lugar en las filas del combate nada pue cirlos con una plumada ; que si olvidareis
de contra la fuerza de las cosas. esta verdad , bien pronto se os presentará
Inútil es indicar lo que en España suce de Los
bulto
que
enhan
el curso
confeccionado
de los acontecimientos.
las leyes fun
de ; basta decir que recientemente un sim
ple decreto del gobierno provisional echó damentales, no siempre han tenido á la
por tierra el Senado entero, á pesar del vista estas doctrinas enseñadas por la razon
artículo 19 de la Constitucion ; y este he y confirmadas por 'a historia ; han creido
cho tan trascendental á los ojos de la ley, que bastaba la palabra del legislador para
se consideró de tan escasa importancia real, improvisar un poder; pero la experiencia
que la nacion no atendió á esta infraccion , ha venido á demostrar (pie no es lo mismo
mas de lo que hubiera atendido al enluci un poder legal , que un poder efectivo.
miento ó pintura del local de las sesiones. Asi , en las constituciones modernas hay-
Por las pruebas que una institucion sufre , dos partes enteramente distintas, sin la
manifiesta lo que es. intencion y contra la voluntad de los mis
Semejante fenómeno no se ve en Ingla mos que ías formaron : una fundamental ,
terra : ¿ Cuál es la causa de la diferencia ? otra reglamentaria. En vano se ha dado á
En la sociedad como en la naturaleza , el todos los artículos un mismo carácter, y en
 — 1
vano se les ha fortalecido con idéntica san despues, pasará á la sancion tteal lo que
cion : lo que expresa poderes sociales pre los diputados aprobaren definitivamente.»
existentes á la ley, es verdaderamente fun Hé aqui descartado el voto del alto cuerpo
damental ; lo demas es fundamental de colegislador en el negocio de mas impor
nombre,
En Inglaterra
reglamentario
la mas deleve modificacion tancia; héle aqui despojado del escudo de
hecho.
las asambleas legislativas : la votacion de
en la cámara de los lores seria un negocio los impuestos. Este veto, única arma legal
de la mayor trascendencia ; el bilí que lo que existe en los gobiernos representativos
anunciara pondría en movimiento todo el para enfrenar eficazmente al gobierno , es
mundo político. La abolicion de la cámara, te veto se le quita al Senado. Esto equiva
ó la mudanza de todos sus individuos , fue le á decir: no eres un poder, sino un
ra una revolucion profunda ; ningun go consejo.
bierno podría ejecutarla, ningun hombre Infiérese de lo dicho, que en las consti
de estado imaginarla ; solo una serie de ex tuciones modernas no se ha salvado tanto
traordinarios acontecimientos desenvuelta como se cree el gravísimo inconveniente
en largo espacio de años , serian bastantes de hallarse frente á frente y sin interme
á prepararla. En España acaba de reali dio , el poder real y el popular. Si bien se
zarlo un gobierno provisional , sin causar observa , loque se ha hecho es, sujetar las
á la nacion el mas leve sacudimiento, casi deliberaciones á mayor lentitud, á fórmu
sin llamar la atencion pública. ¿De dónde las que permitan ganar tiempo ; mas no se
tamaña diferencia? Es que la cámara de ha creado un verdadero poder , un media
los lores es un poder social , el Senado no dor eficaz , que en trances apurados sea
es mas que un poder político ; la cámara bastante á evitar un conflicto.
de los lores tiene una existencia propia , el Ya prevemos la dificultad que se nos va
Senado no existe sino por la ley ; la cámara á objetar , y asi le saldremos al encuentro.
de los lores es una institucion hija de la «Vuestra proposicion, se nos dirá, está en
naturaleza de las cosas , el Senado es obra oposicion abierta con la experiencia. El
de la voluntad de los hombres ; y por esto cuerpo intermedio produce excelentes efec
la cámara de los lores es verdaderamente tos; y para convencerse de esta verdad ,
fundamental , y no se atrev iera á atacarla basta para comparar lo que sucede ahora ,
el ministerio mas audaz; el Senado es fun con lo que sucedía antes que él existiese.
damental en la ley, pero reglamentario en Así en Francia como en España , se ha vis
la realidad ; y asi un ministerio lo maneja , to que las asambleas únicas , esclavizaban
altera ó destruye , como formalidad de re ó devoraban al gobierno; eran un mons
glamento. truo á cuya presencia temblaba el poder
El artículo 13 de la Constitucion dice: real ; el monarca no tenía otro recurso que
« Las Cortes se componen de dos cuerpos optar entre la mas servil condescendencia
colegisladorcs , iguales en faculiades : el Se ó la muerte. En comenzando la lucha en
nado y el Congreso de los Diputados.» La tre el Rey y la Asamblea, comenzaban
igualdad de facultades está consignada en tambien las amenazas y los insultos de la
la Ley fundamental ; pero esta Ley no es plebe; como no habia quien pudiese inter
bastante á igualar el poder de los dos cuer ponerse entre poderes de tan distinto orí-
pos. La igualdad de facultades significa gen y naturaleza, el combate era siempre
igualdad de atribuciones legales, mas nó funesto para uno de los lidiadores. ¿Cómo
igualdad de fuerza : en circunstancias ordi es que ahora no vemos semejante escán
narias, y solo en negocio; de poca impor dalo? Mirad lo que en Francia acontece, y
tancia , se verificará la igualdad ; en asun no cerreis los ojos á una diferencia que
tos de monta , la diferencia se hará pal tambien se presenta muy de bulto en Es
pable. paña.» Esta objecion no deja de ser espe
Tanta es la fuerza de las cosas, que la ciosa; mas no será difícil evidenciar que es
misma Constitucion que consigna de una un mero sofisma. Se ve un efecto, y se le
manera tan expresa la dicha igualdad , la señala por causa lo que en realidad no lo
destruye en el artículo 37 , que dice asi : es. Se dice : « Antes no existia este fenó
« Las leyes sobre contribuciones y crédito meno, ahora sí; antes no habia la Cámara
público se presentarán primero al Congreso intermedia ; luego á ella son debidos los
de los Diputados ; y si en el Senado sufrie resultados obtenidos.» Por coexistir dos
ren alguna alteracion que aquel no admita cosas, no se infiere que la una produzca la
 — 10 —
la aparicion de un cometa coincide |í desconocían la religion , la sociedad y 4
tal vez con una calamidad pública; y no hombre. Algo indicamos tambien de nues
obstante, solo al vulgo preocupado le es tra opinion sobre el error de los que creen
lícito el poner en duda la completa inocen destruido para siempre lo que tiene reser
cia de aquel cuerpo celeste. vado un ancho porvenir; mas como quiera
Los demas artículos que han de tener que entonces hablamos en general , y que
cabida en este número no nos dejan el lu el carácter de la obra exigía mas bien in
gar que necesitamos para la debida expla vestigaciones históricas que pronósticos y
nacion de los hechos y de las ideas sobre conjeturas ; todavía nos queda mucho que
este punto importante, desvaneciendo la decir bajo este aspecto , mayormente apli-
artículo
objecion i.°
queprocuraremos
acabamos de presentar.
señalar las En cauel | cándolo con mestra España.
Segun el juicio que cada cual forma sobre
sas que dan un curso mas sosegado y pa la suerte de las obras de la revolucion , di-
cífico á las deliberaciones de las asambleas. vidense las opiniones en lo tocante al por
Bien que entre tanto desearíamos que se venir de las comunidades religiosas. Los
nos indicase un ejemplar, un solo ejem que esperan ó temen una restauracion mas
plar, en que la mediacion del alto cuerpo ó menos cumplida, miran como una de sus
colegislador haya evitado un conflicto in consecuencias el restablecimiento de las
minente. Cuando el cuerpo popular ha mismas; y los que se prometen ó temen
querido la caida de un ministerio, ó el mi que la revolucion será invencible en sus
nisterio ha caido , ó ha sido necesario ape efectos, y que no es posible deshacer lo
lar á la disolucion; y en general puede que ella ha consumado, consideran como
asegurarse que no se ha conocido otro me cosa muy difícil, y poco menos que con
dio para impedir el completo triunfo de la tradictoria, el renacimiento de lo que mu
voluntad de dicha asamblea : es decir , que rió á mano airada, y de una manera tan
ó se ha hecho lo que ella queria , ó ha de estrepitosa. No compartimos el parecer de
jado de existir. ¿Dónde está la mediacion? unos ni de otros; en nuestro juicio, volve
Lo propio que en España ha sucedido en rán á brotar en el suelo español las comu
Francia : ahí está la historia desde la época nidades religiosas bajo una ú otra forma; y
de la restauracion.—J. B. este hecho que se está verificando en todos
los paises, aun los mas trabajados por los
huracanes de la revolucion , se realizará en
la católica España con mayor extension ,
grandor y prontitud que en otras partes,
tan luego como cese el dominio de la fuer
za, y se establezca y consolide un gobierno.
DE LAS Y cuando de gobierno hablamos, prescin
COMUNIDADES RELIGIOSAS EN ESPAÑA. dimos de la forma; solo nos referimos á una
situacion regular, que ofrezca algunas ga
rantías de orden , y que no consienta que
se atropello la libertad individual como se
ha hecho hasta aqui , ora por los desmanes
Artícci.o 1.* de asalariada plebe , ora por el despotismo
de gobiernos que oprimían y tiranizaban
apellidando libertad y ley.
El origen , naturaleza y objeto de las Suponiendo sancionadas las destruccio
comunidades religiosas, lo examinamos ex nes de la revolucion , y consolidadas m
tensamente en otro lugar. (1) Allí quedó obras y que el gobierno regular que en
demostrado á la luz de la filosofía y de la tiempo mas ó menos lejano se establezca,
historia, que los incredulos y los protes sea nacido de los poderes y de las formas
tantes al condenar estos santos institutos creadas por ella , todavía creemos que re
nacerán las comunidades religiosas, sin
designio por parte de dicho gobierno , sin
(1) Véase el tomo tercero de la obra que publicó que les dispense ninguna clase de protec
el autor titulada : El Protestantismo comparado cion ; antes al contrario, á pesar de la des
ron el catolicismo en sus relaciones con la civiliza confianza con que las mirará, de los em
cion europea; desde el eapiluln 38 hasta el M, am
bos inclusive. barazos que les suscitará , y hasta de cierta
resistencia que los opondrá; todo siguiendo 17vos,
— cuida de presentarlos bajo el aspecto
las inclinaciones y los instintos de la madre mas negro , mas asqueroso , mas desconso
que le habrá dado el ser, y le habrá criado lador y desesperante. Al mozo de 25 años
en su seno. Todo gobierno nacido de una le cubre la cabeza de canas, y nolas canas
revolucion , adolece un tanto de achaques que anuncian prudencia y reposado juicio ,
y zelos revolucionarios. Tal es la naturale sino las que abrigan suspicaz desconfianza ,
za de las cosas. desprecio de los demas hombres , tedio de
¿Cuál será la forma de las comunidades la vida , mundo sin ilusiones , recuerdos
religiosas que aparecerán en España? Difí punzantes, tinieblas sin un rayo de luz,
cil es decirlo , si en esta forma vienen com males sin remedio, dolores sin consuelo,
prendidos los nombres, los trages y los porvenir sin esperanza. Entregarse á nue
pormenores de la regla ; pero si la palabra vos goces es inútil para distraer el entendi
se toma en acepcion mas elevada , si se tra miento y minorar la pesadumbre del cora
ta únicamente del objeto á que se destina zon : los resortes estan gastados, el alma
rán y de aqui se intenta deducir su ca está rendida y floja; solo una nueva vida
rácter distintivo , entonces es mas fácil podría remozarla. La embriaguez del de
responderá la pregunta, aventurándose á leite , y el encenegamiento en sus mas re
conjeturas no destituidas de fundamento. pugnantes lodazales , solo produce una
Recordaremos aqui lo que expusimos y tregua de momento : como el ebrio que
demostramos extensamente en el lugar ahoga sus pesares con vino , se halla al dis
arriba citado; á saber, que las comunida pertar á la mañana siguiente, con la triste
des religiosas eran un producto espontáneo realidad , cara á cara con su infortunio.
de la misma religion ; que en su esencia A este desgraciado , el mundo le dice
eran idénticas , bien que su forma sufría « suicidate » ; la religion le clama : « aban
modificaciones acomodadas á las circuns dona un mundo que te abandona; retírate,
tancias de lugar y tiempo , sobre todo al llora tus extravíos en penitente soledad , y
objeto peculiar y característico á que cada encontrarás el camino del cielo, cuyas dul
cual se destinaba. Probamos tambien que zuras comenzarás á sentir ya en medio de
la historia enseñaba , que dichas comuni las austeridades de la tierra.» El mundo
dades habian tomado siempre una forma impío y cruel se mofa de sus propias vícti
conveniente para satisfacer grandes necesi mas, las abandona á todo el horror de su
dades de la religion y de la sociedad. suerte despues que ellas le han sacrificado
Asentados estos principios tenemos la clave su honor, su salud y su fortuna. « Ya que
para adivinar el porvenir. no sirves para tomar parte en mis orgías ,
En primer lugar es cierto que los insti ahí está el mar que te tragará de muy bue
tutos religiosos renacerán , allí donde se na gana , y me ahorrará la molestia de oir
conserve ía religion : y como en España tus plañidos; ahí está un elevado picacho,
fuera insensato el proyecto de extirparla, una altísima torre de donde puedes der
bien podemos asegurar que la causa produ rumbarte á tus anchuras; ahí estan los pu
cirá su natural efecto, mas ó menos tarde. ñales, ahí el veneno, ahí el dogal , ahi las
Dos grandes necesidades aquejan á la armas de fuego: y si eres cobarde, si note
sociedad actual : un ietiro para los fasti atreves á ver la muerte bajo formas terri
diados del mundo , y un freno para la ple bles , tiéndete sobre elegante y mullido so
be. La sed de goces que devora á la gene fá, cúbrete de tus mejores vestidos , respira
racion de nuestro siglo, acarrea mas pronto delicados perfumes , lee brillantes páginas
que en otros el cansancio, el tedio , el has de un libro aterciopelado, y aguarda que
tío de gozar; el espíritu se abate y se pos el humo del carbon cierre tus ojos para no
tra despues de haberse fatigado en pos de abrirlos jamas. En los momentos de sopo
mentidas ilusiones ; y para colmo de deses roso delirio, murmulla todavía un nombre
peracion viene á secarlo todo, á deshojarlo querido , y halágate con la grata esperanza
todo , una literatura que á lo inmoral é in de que al amanecer de mañana, cien y cien
mundo reune el defecto que no se le acha hojas publicarán tu trágica muerte, y pe
ca , y que sin embargo es de los mayores dirán al lector una lágrima para tus ce
de que adolece: el no tener entrañas. Dis nizas.»
minuye el bien , exagera el mal ; finge sin La religion tiene mas misericordia , la
pudor cuando no le sufraga la realidad ; y religion no deja nunca sin esperanza : e1
cuando esta se la brinda con hechos positi- error y el vicio , la mentira y el crimen ,
TOiUU II. 2
 — 18
no carecen de perdon, mientras el culpa no ; en el proceloso mar en que viven su
ble vive sobre la tierra. Levantar los ojos midas las generaciones presentes , ojos
al cielo y decir compungido : pequé, basta cansados de buscar una playa donde se en
para lavar las mayores iniquidades. La pos cuentre reposo y consuelo se vuelven á la
tracion de espíritu, los malos hábitos, las religion y la miran con esperanza y cariño.
llagas mas rebeldes, todo cede á la eficacia Se ha sondeado el corazon humano despues
de los remedios que el Señor confió á su de quitada la Religion , se le ha revuelto
Iglesia. El arrepentido puede salvarse en en todos sentidos , se ha pretendido descu
todas partes; pero si se resuelve al acto brir su fondo, pero cuantos se han abocado
heróico de abandonar el mundo , si pasa á la tenebrosa sima han oido una voz dolo
los umbrales del claustro colocándose allí á rida que pedia un Dios. El genio del mal
esperar la hora señalada para descender al lo conoce y no se olvida de tomar sus pre
sepulcro , entonces su corazon se siente cauciones. « Es necesario ir con tiento en
aliviado , descargado completamente del eso de institutos y monasterios esa ju
peso que le agobiaba ; un nuevo soplo de ventud ardiente , poco satisfecha de sí y
vida ha reanimado su rostro, el cielo brilla fatigada del mundo , se lanzaría con afan á
con nueva luz , y la existencia que se creia ellos , ansiosa de saborear las impresiones
próxima á extinguirse se siente robusta y religiosas.» Estas palabras se las dijo al que
briosa, con aliento para avanzar con rapi esto escribe un extrangero de distinguido
dez en los senderos de la virtud. merito y no vulgar categoría; y el que lo
Estos recursos valen por cierto algo mas escuchaba tomó acta de confesion tan explí
que el suicidio ; de esta manera se ahorra cita y franca ; porque en ella venia expre
al desgraciado una catástrofe , á las fami - sado un pensamiento que compendiaba to
lias un desconsuelo , una perdida á la so do un sistema.
ciedad ; y cuando la soledad del claustro Digan lo que quieran los enemigos de la
no ofreciera otras ventajas , no seria para religion se conservan todavía profunda
olvidada á los ojos de ningun hombre com mente grabados en el corazon de los espa
pasivo. En todos tiempos han necesitado ñoles los sentimientos cristianos; todavía
de este retiro las almas afligidas que en oimos á cada paso recordar con entusiasmo
medio de sus tribulaciones sintieron que mezclado de dolor, las visitas que se hicie
descendía para ellas una inspiracion subli ron á los monasterios de la Cartuja y de la
me y consoladora; pero tal es la situacion Trapa; todavía notamos que se echa menos
de los espíritus , tal el desarrollo simultáneo el sabroso dia que se disfrutó en una de
de todos las facultades del alma , tal el va aquellas sublimes soledades. El canto de
cío que experimentan los corazones gran los monges , los resonantes ecos de silen
des , que si de aqui á algun tiempo se le ciosos corredores , el mugido de los bos
vanta en los desiertos una mansion sombría, ques cercanos , el vibrante y grave sonido
donde se establezcan la austeridad y la de la misteriosa campana, el aspecto vene
oracion, será objeto de viva curiosidad rable de un anciano encanecido en la pe
para esa juventud ardiente que busca un nitencia , el angelical semblante de un
pábulo á sus Sentimientos de llama, y no compungido novicio, la frente serena de
faltarán algunos que trocarán los placeres la edad viril, anunciando un corazon brio
de Roma por el silencio y los rigores de la so sojuzgado por la gracia , y una con
gruta de Belen. ciencia sin mancha ni remordimiento , son
En España mas que en otras partes, se objetos que todavía no se han olvidado ; y
verificarían estas admirables transformacio mas de una vez se enciende la indignacion
nes , que el mundo no comprende , y que en los pechos generosos al pensar que á tan
solo la religion explica ; porque en este santas mansiones se atreviese la impiedad
suelo clásico de fe y de piedad , la revolu con sus puñales y sus teas.
cion no ha podido ahogar la semilla pre Establecimientos de grande abstraccion,
ciosa ; no ha hecho mas que cubrirla con de mucha austeridad , donde se reuniesen
escombros ; pero allí se conserva abundan hombres llamados por Dios para resucitar
te y viva para producir copiosos frutos el la vida de los primitivos monges , encon
dia que el sol de la gracia la hiera con sus trarían en el pais las mayores simpatías; no
rayos fecundantes. Mas no se crea que esto habrían menester el apoyo del gobierno
nos pertenezca exclusivamente, tambien en porque se lo suministraría con mucho gus
otros paises se observa el mismo fenóme to la piedad de los pueblos. Y esto se veri
Picará tan pronto como el gobierno alee una
prohibicion que tan visiblemente se opone
á la libertad que tiene cada individuo de
entregarse al género de vida que considera
mas conveniente para servicio y gloria de
Dios y santificacion de su alma. Si se ad
mite sin contradiccion que el gobierno ca
rece de facultades para impedir que se
reunan algunos individuos en una empresa
industrial ó mercantil , si se deja á los ciu
dadanos en completa libertad para fijar su
residencia donde mejor les agradare , si
nadie ha pensado en vedar que se edifiquen
casas en poblado ó en desierto , mientras
no se dañe á la propiedad de nadie , y que
en ellas vivan una ó mas familias del modo
que creyeren mas conveniente, con tal que
ni la moral ni los intereses públicos ó par
ticulares no sufran perjuicio; ¿con qué de
recho se prohibirá que se reunan en la
soledad algunos hombres para orar y ejer
citarse en prácticas de devocion y de peni
tencia? Mientras no ataquen la propiedad
agena, ¿qué os importa que vivan de la
limosna ó del trabajo de sus manos? Bien
necesario es que la impiedad haya trastor
nado lastimosamente las ideas introducien
do las preocupaciones mas chocantes é in
justas, cuando se hace necesario insistir
sobre verdades tan claras, tan evidentes,
tan sencillas.
Que la codicia se cebe en pingües patri
monios , y procure por todos los medios
posibles apoderarse de ellos y conservarlos,
lo concebimos muy bien ; que el gobierno
arrebatado por el torbellino de la revolu
cion y cegado por el frenesí de la impiedad,
se arroje á pasos injustos y se preste á ser
vir de instrumento á pasiones ignobles,
tampoco nos es incomprensible ; pero que
pasado el calor de los primeros momentos,
y establecido un gobierno regular, se in
tentase proseguir en un sistema de suspica
cia y desconfianza , desconocidas en todas
las naciones católicas y hasta en las protes
tantes , que bajo el nombre de libertad se
quisiese continuar oprimiendo las concien
cias, no dejando respiradero á las creen
cias de la nacion , esto fuera una aberra
cion incalificable , un despotismo irracional,
una vejacion sin motivo ni pretexto, un
insulto hecho á la Religion de los españo
les, un empeño de prolongar un estado
violento y por consiguiente poco durable.
La voz de los hijos de San Ignacio y de
Santo Domingo de (inzuian , resuena en
las catedrales de la Francia, con gloria de
19la —religion y con provecho de los fieles y
de los incrédulos. Cuando se anuncia un
sermon de Ravignan ó de Lacordaire, acu
de al templo una inmensa muchedumbre
que no bastan á contener las mas espacio
sas basílicas. En aquella misma capital
donde fueron calumniados los institutos re
ligiosos durante largos años, de la manera
mas escandalosa, allí donde se firmaron
los decretos de su proscripcion, allí se pre
sentan los individuos de las odiadas religio
nes, atrayendo con el encanto de su elo
cuencia, convenciendo con la fuerza desus
razones , dominando y arrastrando con el
fuego y la energía de su palabra. A oirlos
acuden las primeras notabilidades de la
Francia , mezclados con una juventud que
siente la imperiosa necesidad de llenar el
vacío que en su espíritu dejara la irreligion;
allí acuden para oir y admirar á hombres
cuya vida y palabras son la mas elocuente
protesta contra las pérfidas calumnias de
una filosofía, que despues de haberse man
chado con las mas crueles injusticias no dejó
sobre la tierra mas que escepticismo y de
sesperacion. En vano se alarman los volte
rianos, en vano levantan su voz, en vano
se oponen á que triunfe la causa de la ver
dad : Dios ha soplado sobre la tierra , y la
faz de la tierra será renovada. El espíritu
del mal nada puede contra el Todopodero
so: la Francia ha visto ya ruidosas y
admirables conversiones, y las está viendo
todavía , el claustro le quita al mundo re
putaciones ilustres; que el Señor de las
misericordias no se ha olvidado de que la
patria de Voltaire fue tambien la patria de
San Luis.
En la protestante Inglaterra , en aquel
reino donde se conserva todavía dominan
te el cisma de Enrique VIII, renacen tam
bien las comunidades religiosas: en Lon
dres mismo estan los Jesuítas, esos Jesuí
tas cuyo solo nombre exaltaba en otros
tiempos, la cólera del gobierno inglés, y
levantaba la persecusion. Otros institutos
van estableciéndose de nuevo en aquel pais;
y numerosos conventos de mugeres estan
edificándolo con sus virtudes, y con su celo
en educar á la infancia y en consolar al in
fortunio.
¿ Por qué no se ha de verificar tambien
lo mismo entre nosotros , en la patria de
Santo Domingo , de San Ignacio de Loyo-
la, de Santa Teresa de Jesus, y de tantos
insignes fundadores? ¿Por qué el pueblo
católico por excelencia se ha de ver privado
 — 20 —
de lo que disfrutan los pueblos protestan pasado para conjeturar sobre el porvenir.
tes? ¿ Por qué ha de continuar ese abismo Pero despues que la revolucion perdien
que nos separa de nuestros mayores , que do sus formas de osadía aterradora se ha
ultraja nuestras creencias , marchita nues mostrado en toda su desnudez, dejando
tros mas hermosos recuerdos, y nos pre expuestas á la vergüenza pública todas las
senta á los ojos del mundo como avergon miserias que en su seno abrigaba ; despues
zados de nuestra religion , de nuestras que la nacion escandalizada ha visto la sed
tradiciones, de que pertenecemos á la na de mando , la mezquina codicia , y todas
cion que se adquirió un renombre inmor las pasiones rastreras que se ocultaban bajo
tal por la adhesion á la fe y á las santas los pomposos nombres de libertad , de igual
prácticas é instituciones de la Iglesia Cató dad , de regeneracion social ; despues que
lica? ha visto el mas destemplado orgullo , la
Que no es verdad , nó , que tal sea la mas despreciable vanidad , la mas asquero
voluntad de la nacion : que no es verdad, sa impudencia, campeando en altas regio
nó , que tal desee , ni aun consienta la in nes , gloriarse de sus flaquezas y de sus
mensa mayoría de los españoles; nó; el maldades , exigir á los presentes el apotéo-
pueblo español no ha quemado los conven sis y á la posteridad un renombre inmor
tos ni degollado á los religiosos; el pueblo tal ; despues que la nacion eminentemente
español no se ha hecho cómplice de tama juiciosa, sesuda, amante de la verdad y de
ñas iniquidades ; el pueblo español las ha la virtud , ha visto que de tal suerte se di
visto con dolor, con profunda pesadumbre, vinizaban á sí mismos la mentira y el cri
sin poder evitarlo; porque desgraciada men ; desde entonces el desengaño mas
mente la historia y la experiencia enseñan, cruel se ha apoderado hasta de los mas ne
que en tiempos agitados y turbulentos lo cios ; desde entonces han vuelto á renacer
que domina no es la voluntad de los pue mas vivos, mas fuertes los sentimientos
blos, sino las facciones mas inmorales, que en su pecho ocultaba la nacion ; desde
compuestas de cuanto la sociedad abriga de entonces no ha podido contener la indigna
mas abyecto y dañino. cion que ahogaba á duras penas, y recor
El mismo curso de la revolucion ha ve dando con mas cariño la augusta religion
nido aclarando los hechos, desmintiendo objeto de tan sacrilegas profanaciones, ha
las calumnias, manifestando lo siniestro de vertido lágrimas de dolor sobre institucio
las intenciones , descifrando el misterio de nes augustas quederribaraunamanoimpía.
tanta declamacion contra los cuantiosos Estos desengaños no serán estériles ; es
bienes , contra la relajacion de los frailes, tos escarmientos producirán sus resultados.
dejando sin máscara á los hombres que mas Sucesos hemos visto de inmensa trascen
se distinguieron por su celo destructor. dencia, que por cierto la revolucion no los
¿Dónde estan los bienes de las comunida preveia ; pues bien , otros vendrán con el
des religiosas? ¿Qué provecho ha sacado tiempo que consumarán la obra de salvará
de ellos la nacion española? ¿Qué contri este gran pueblo, que despues de diez años
buciones se han disminuido? ¿Qué ramos de sufrimiento tiene ciertamente indispu
de riqueza se han vivificado? ¿Qué necesi table derecho á decir: basta.
dades se han satisfecho? ¿Qué deudas se No nos hacemos ilusiones con exageradas
han extinguido? ¿Qué infortunios se han esperanzas, no desconocemos del todo la
consolado? La nacion lo ve, lo palpa; la situacion de las cosas , no se nos ocultan
realidad se le presenta de una manera tan los obstáculos que ha de encontrar el bien
cruel que de ella no podría apartar los ojos y los poderosos auxiliares con que cuenta
aun cuando quisiera. Despues de tantas el mal ; sabemos que una revolucion que
promesas , despues de tan lisongeras espe ha campeado tan largos años en un pais.
ranzas como se pretendía inspirarle , al fin deja huellas profundas y daños irrepara
ha presenciado lo que ella temia ; solo sabe bles; pero todavía no hemos podido aban
una cosa , una sola cosa : los bienes no donar la esperanza de que llegará por fin
existen , se han improvisado grandes for un día de justicia , de que la obra de ini
tunas, y los religiosos mendigan. quidad encontrará adversarios que le hagan
Y cuenta , que la nacion no ha sido en frente con dignidad, con recta intencion,
gañada; lo que ha sucedido, ella ya lo con firmeza , con intrepidez , cual cumple
preveia ; porque desgraciadamente bastan á verdaderos españoles ; y cuando esto su -
te la habia amaestrado la experiencia de lo ceda , triunfará la causa de la razon y de

la religion , porque hallará universal y de
cidido apoyo en la inmensa mayoría de los
españoles, fatigados de asistir á tan lamen
tables
Cuando
escenas
la religion
de escándalo
quedey ,mentira.
no diremos
triunfante, pero al menos libre de las ca
denas que en diferentes sentidos la estre
chan y oprimen, cuando esten restableci
das las relaciones con el Padre comun de
los fieles , cuando las iglesias no hayan de
llorar la ausencia de sus pastores, cuando
se permita á la fe y á la caridad hacer las
obras que les inspire el cielo , entonces,
renacerán de una ú otra manera las comu
nidades religiosas; entonces, ó en las ciu
dades ó en los desiertos se establecerán
reuniones de hombres, que practiquen con
vida austera y santa los -consejos del Evan
gelio , y levanten al Señor un corazon ar
diente y puro , rogando por la conversion
de aquellos que con mas furor los persi
guieron.—J. B.
POLEMICA RELIGIOSA.
CARTA OCTAVA
Á UN ESCÉPTICO EN MATEIUAS DE BEMGION.
Mucho me alegro, mi estimado amigo ,
de que nada tengan que ver con V. los ar
gumentos que aducir suelen los apologistas
de la Religion contra los defensores del ma
terialismo y de la ciega casualidad , y no
puedo menos de felicitarle por «hallarse ya,
como me dice en su apreciada, radicalmen
te curado de su aficion á los libros donde
se enseñan las doctrinas de Volney y de
La Mettrie.» A decir verdad, no esperaba
menos del claro talento y noble corazon
de V. ; pues no concibo como en poseyen
do semejantes cualidades sea posible leer
por entero obras de esta clase. Yo de mi
sabré decirle , que las encuentro tan faltas
de solidez como abundantes de mala fe ; y
que lejos de apartarme de la Religion me
afirman mas y mas en ella ; los convulsivos
esfuerzos del error impotente , dan una idea
me permitirá
grande deV. laque le advierta
verdad.• Sin embargo
del error,
21
en que incurre , cuando dispensa tan pom
posos elogios á los nuevos espiritualistas
alemanesy franceses; pues nada menos les
atribuye que el ser los restauradores de las
buenas doctrinas devolviendo á la humani
dad los títulos de que la despojara la filo
sofía volteriana. Cada época tiene sus opi
niones y expresiones de buen tono : ahora
no podría uno pertenecer á la escuela del
siglo XVIII, aun cuando lo quisiese: es
preciso hablar del espiritualismo de Kant,
Fichte , Schelling , Hegel , Cousin ; y des-
hechar el sensualismo de Destutt-Tracy ,
Cabanis, Condillac, y Locke; sino se quie
re pasar plaza de rezagado en materia de
conocimientos filosóficos. Enhorabuena que
no se profese ninguna religion, pero es in
dispensable tener siempre en beca el sen
timiento religioso , los destinos de la humani
dad, y hasta no escrupulizar de vez en
cuando en pronunciar las palabras , Dios
y Providencia. Hablando ingenuamente ,
cuando he leido en su apreciada de V. los
nombres que acabo de recordar , no he po
dido convencerme de que V. se hubiese
devanado mucho los sesos en el estudio de
altas y abstrusas cuestiones metafísicas;
mas bien me inclinaría á creer que sus ideas
sobre el particular habrán sido cogidas al
vuelo en los periódicos, sin haberse toma
do mucha pena en aclararlas y analizarlas.
No le culpo á V. por esto , pues al fin sus
opiniones como de un simple particular ,
no ejercerán influencia sobre el público ;
que si se tratase de un escritor que debe
siempre saber lo que recomienda ó censu
ra, entonces me tomaria la libertad de amo
nestarle que anduviese mas recatado en sus
deseos de introducirnos innovaciones que
podrán sernos muy dañosas.
¿Sabe V. lo que es la filosofía alemana?
Tiene V. noticia de sus tendencias, y has-
de sus expresas doctrinas sobre Dios y el
hombre? ¿Cree V . que el abismo á donde
conduce es mucho menos profundo que el
de la escuela de Voltaire? ¿Piensa V. por
ventura que Schelling y Hegel son legíti
mos sucesores de su compatriota Leibnitz ,
de ese grande hombre, que segun la ex
presion de Fontenelle conducía de frente
todas las ciencias, y que á pesar de lo que
puede objetarse contra algunos de sus sis
temas, abrigaba no obstante tan altas ideas
sobre la religion , y tantas simpatías por la
católica?
¡i¡ chaLainfluencia
filosofía de
en Leibnitz
Alemania, ha yejercido
á él semu
de-
be en parte, que no se introdujeran allí los
sistemas materialistas de la escuela france
sa del siglo pasado. Sea cual fuere el con
cepto que se forme de sus sistemas , no
puede negarse que al paso que revelaban
un genio eminente , contribuían á elevar
el espíritu, á darle una viva conciencia de
su grandor , y de que no podia de ningun
modo confundirse con la materia. Que si
se le echa en cara su extremado idealismo,
responderemos que este ha sido el achaque
de los mas altos pensadores , desde Platon
hasta Bonald.
Para Leibnitz no era Dios el alma de la
naturaleza , ó la naturaleza misma , como
sustentan algunos filósofos modernos ; sino
un ser infinitamente sabio , poderoso , per
fecto en todos sentidos ; el panteismo que
tan lastimosamente ha extraviado en los
últimos tiempos á ciertos pensadores ale
manes, era en concepto de Leibnitz un sis
tema absurdo. E1 alma humana , tampoco
la consideraba el ilustre filósofo como una
especie de modificacion del gran ser que
todo lo absorve y con todo se identifica,
como opinan los panteistas ; sino una sus
tancia espiritual , esencialmente distinta de
la materia , asi como infinitamente distante
del Criador que le ha dado la existencia.
Sabido es que impugnó victoriosamente
el sistema de Spinosa , y que en tratándose
de Dios y de la inmortalidad del alma , los
principios de la moral , y los premios y cas
tigos de la otra vida , no podía sufrir que
el espíritu del error esparciese sus tinieblas
sobre tan sagrados objetos. « No puede du
darse, escribia á Molano, que el sapientí
simo y poderosísimo gobernador del uni
verso tiene destinados premios para los
buenos y castigos para los malos, y que
esto lo ejecuta en la vida futura , ya que
en la presente quedan impunes muchas ac
ciones malas, y muchas buenas sin recom
pensa. » Este leuguage no es por cierto el
de los modernos panteistas, y por él se
echa de ver que los filósofos alemanes al
resucitar el sistema de Spinosa , se han
desviado de las huellas de su ilustre ante
cesor. No ignoro que los escritores alema
nes á quienes aludo, conservan todavía la
abstraccion y el sentimentalismo propios de
su nacion , y que no participan de la lige
reza y trivialidad que ha caracterizado á
los incrédulos de la escuela francesa ; pero
es preciso no olvidar que el sentimiento no
basta cuando no está enlazado con la con
viccion , y que el corazon ejerce muy mal
sus funciones , cuando estas son contrarias
al impulso de la cabeza.
Además, que si la Alemania continúa
en sus ideas impías , al fm se resentirá de
ellas el carácter ; y el sentimiento religioso
ya muy debilitado por el protestantismo,
vendrá á extinguirse en manos de la impie
dad. Disfrácese como se quiera la doctrina
del panteismo, entraña la negacion de
Dios ; es el ateismo puro , solo que toma
otro nombre. Si todo es Dios , y Dios es
todo , Dios será nada ; lo único que existirá
será la naturaleza con su materia , y sus
leyes , y sus agentes de diversos órdenes;
todo lo cual lo admiten muy bien los ateos
sin que por esto entiendan que han abju
rado su sistema. Si la criatura piensa que
es una parte del mismo Dios, ó Dios mis
mo , por el mismo hecho niega la existen
cia de un Dios que le sea superior y pueda
pedirle cuenta de sus obras ; la divinidad
será para él un nombre vano , y podrá ad
herirse al dicho del aleman que al levan
tarse de un banquete exclamaba , « todos
somos dioses que hemos comido muy bien.»
La religiosidad de Leibnitz era por cier
to mas sólida y profunda. Véase como des
envuelve sus ideas en el lugar arriba citado.
« El olvidar en esta vida el cuidado de la
venidera, que está inseparablemente unida
con la divina Providencia , y el contentarse
con cierto inferior grado de derecho natu
ral que tambien pueda tenerlo un ateo , es
mutilar la ciencia en sus mas bellas parles , y
destruir muchas buenas acciones. ¿Quién
correrá el peligro de su fortuna, dignidad
y vida, por sus amigos, por su patria, por
la república , ni por la justicia y la virtud,
si arruinados los demás, él puede continuar
viviendo entre los honores y la opulencia?
Porque el posponer los bienes verdaderos
y positivos , á la inmortalidad del nombre,
á la fama postuma, es decir á un rumor
del cual nada nos llegaría, ¿no fuera una
virtud de un brillo bien falso ? »
No me propongo examinar todas las opi
niones de los filósofos alemanes , ni deslin
dar hasta que punto sean admisibles; solo
me limitaré á hacer resaltar algunos de sus
errores principales, citando al autor que
las haya inventado ó prohijado , y sin pre
tender que caiga la responsabilidad sobre
los pensadores de dicha nacion que no si
gan la misma senda.
Kant no llevó tan adelante sus errores
con respecto á Dios, al hombre, y al uni
verso , como lo han hecho alguuos de sus
 23 —
sucesores; pero menester es confesar, que las dañosas consecuencias á que puede con
intentando promover una especie de reac ducir semejante doctrina, no son estas mas
cion contra la filosofía sensualista, dejó tan peligrosas, é inmediatamente destructoras
en descubierto las principales verdades, de toda religion y moral que las de Schelling,
que nada le tiene que agradecer la filosofía quien no obstante todos los velos con que
verdadera con respecto á la conservacion encubre su sistema, al fin viene á parar al
de ellas. En efecto: quien afirma que las panteismo de Spinosa. Poco me importa
pruebas metafísicas en defensa de la inmor que en la escuela de Schelling se me hable
talidad del alma, de la libertad del hom de cualidades íntimas que no perecerán
bre, y de la duracion del mundo le pare cuando yo muera, sino que volverán á en
cen de igual peso que las que militan en trar en el vasto seno de la naturaleza;
contra , no es muy á propósito para dejar cuando al propio tiempo se me añade que
bien establecidas esas verdades sin las que el individuo, es decir el ser particular, el
serán un nombre vano todas las religiones. alma, se anonada. Poco me importa que
Enhorabuena que demos mucha importan se me hable de espiritualismo y que se con
cia al sentimiento , y á las inspiraciones de dene el materialismo , si al fin no se me
la conciencia, que conozcamos la debilidad consuela con el pensamiento de la inmor
de nuestro raciocinio, y no exageremos talidad , si en último resultado se me dice
sus alcances; pero conviene tambien guar que esta inmortalidad es una quimera, y
darnos de destruirle, de no matar la razon que si algo queda de mí despues de la di
á fuerza de desconfiar de ella , extinguien solucion del cuerpo, no será yo mismo que
do asi esa antorcha que nos ha dado el pienso y quiero , sino ciertas calidades que
Criador, y que es un hermoso destello de no só lo que son , y que poco me han de
la Divinidad. importar cuando yo no exista.
Sucede á veces, mi apreciado amigo, No falta quien ha dicho que Aristóteles
que la abnegacion de la razon no proviene habia dejado algo oscuros ciertos pasages
de humildad , sino de un excesivo orgullo, do de sus
lugar
obras,
á interpretaciones
con la mira dediversas,
que ofrecicn-
diesen
de un exagerado sentimiento de superiori
dad que se desdeña de examinar , y que pie á sus discípulos para defenderle contra
cree suficiente mirar para ver , sin necesi sus adversarios. Sea lo que fuere de seme
dad de discurrir. No me encontrará V. en jante conjetura, es preciso convenir en que
el número de aquellos que en todo apelan los filósofos alemanes han dejado muy atras
al raciocinio , y que nada conceden al sen en esta parte al filósofo de Estagira ; pues
timiento, nada á aquellas súbitas inspira han sabido envolver en tan espesa nube sus
ciones que nacen en el fondo de nuestra ideas, que ni aun los iniciados en el secre
alma sin que nosotros mismos sepamos de to han podido lisongearse de penetrar sus
donde nos han venido; conozco, y se lo he profundidades. « En sus tratados de meta
dicho á V. mil veces, que nuestra razones física , dice madama Stael hablando de
débil en extremo , que es excesivamente Kant , toma las palabras como cifras y les
cavilosa, que todo lo prueba, que todo lo da el valor que le acomoda; sin pararse en
combate ; pero de aqui á negarle su voto el que tienen por el uso.» Lo mismo pue
en las altas cuestiones de metafísica, y des de afirmarse delos mas famosos filósofos de
echarla como incompetente para discernir la misma nacion ; nadie ignora el misterio
en ellas, entre la verdad y el error, hay so lenguage de Fichte y de Schelling, y
unaSi distancia
Kant llevó
inmensa.
la sobriedad
Est modus
de in razon por lo tocante á Hegel, él mismo ha dicho:
la rebus.
« no hay mas que un hombre que me haya
hasta un extremo reprehensible señalán comprendido» y temiendo sin duda que es
dole límites estrechos en demasía , no fal to era ya demasiado, añadió, «y ni aun
taron otros que exageraron las fuerzas de este me ha comprendido.»
la misma pretendiendo explicar con su sola Bien podrá suceder que V. se fatigue ,
ayuda el universo entero. Sabido es que si le presento algunas muestras de esta filo
Fichte se entregó á un idealismo tan extra sofía tan ponderada ; pero creo muy del
vagante que dándolo todo al alma, llega caso arrostrar el ligero inconveniente , pues
por decirlo asi al anonadamiento de todos de esta manera lograré que V. no se deje
los objetos exteriores; su sistema conduce engañar fácilmente por encomiadores que
á la negacion de la existencia de todo ensalzan lo que no comprenden. No dudo
cuanto no sea el yo que piensa. A pesar de que V. está ya en la conviccion de que los
 — 24 —
filósofos alemanes se pasean por un mundo convencido de que esa nueva filosofía que
imaginario, y que quien forme empeño de tanto se nos pondera , no es mas que la
seguirlos es menester que se despoje de repeticion de los sueños en que se ha me
todo lo que se parece á los pensamientos cido en todos tiempos el espíritu humano ,
comunes ; pero yo creo poderle demostrar siempre que en la embriaguez de su orgu
algo mas; yo creo poderle demostrar que llo se ha desviado delos principios de eter
no basta el desentenderse de los pensa na verdad.
mientos comunes, sino el olvidarse hasta Afortunadamente, hay en España un
del sentido comun. Si encuentra V. la pa fondo de buen sentido que no permite la
labra demasiado dura, no me culpe de te introduccion y mucho menos el arraigo de
merario hasta haberme oido ; entre tanto , esas monstruosas opiniones , que tan fácil y
no olvide V. que tratamos de hombres que benévola acogida encuentran en otros pai
han manifestado un soberano desprecio de ses; y por este motivo no es tan temible
todo lo que no era ellos , que han preten que los errores de que estoy hablando cau
dido enseñar á la humanidad á manera de sen entre nosotros los males que en otras
infalibles oráculos , y que bajo apariencias partes han producido. Pero en cambio te
misteriosas y enfáticas han llevado su or nemos , que habiéndose descuidado mucho
gullo mucho mas allá que todos los filósofos en España los estudios filosóficos , y siendo
antiguos y modernos. muy pocos los que se hallan al nivel del es
Hegel , este hombre , á quien segun afir tado actual de la ciencia , seria fácil que sin
ma él mismo, nadie comprendió, nos ase advertirlo los hombres de sana doctrina y
gura que ha fijado los principios , arreglado recta intencion , "se apoderasen de la ense
el sistema , y determinado el límite de toda ñanza innovadores alucinados, que extra
filosofía . Él lo ha descubierto todo : despues viasen á la incauta juventud. Digo esto,
de él nada queda por descubrir; la huma porque me temo que á otros suceda lo que
nidad no debe hacer mas que desarrollar segun veo le estaba sucediendo á V. , de
las teorías del sublime filósofo, y aplicarlas creer que las modernas escuelas alemanas
á todos los ramos de los conocimientos. Es y francesas , caminaban nada menos que á
to no fuera tan intolerable , si se tratase de la restauracion de un esplritualismo puro ,
objetos de escasa importancia , si Hegel no cual lo tenían nuestros mayores , y cual lo
llamara á su tribunal al hombre , á la hu profesan todavía los verdaderos cristianos
manidad , á todas las religiones , á Dios y los filósofos juiciosos.
mismo, y no fallase sobre todo con indeci De las demas cartas que pienso escribir-
ble orgullo. « Hegel , ha dicho Lerminier, .. le á V. sobre este objeto, sacará V. otro
se glorifica en sí mismo; se sienta como I provecho, cuales, el formarse ideas algo
árbitro supremo entre Sócrates y Jesucris mas claras, de las que debe de tener ahora,
to; toma al cristianismo bajo su protec sobre una cuestion importantísima que agi
cion , y parece que piensa que si Dios ha ta en la actualidad á la Francia y llama la
criado el mundo, Hegel lo ha compren atencion de Europa ; hablo de las desave
dido (1).» nencias suscitadas entre el clero frances y
Estas soberbias pretensiones las encon la Universidad. Sea cual fuere el juicio
trará V. en otros filosófos , y no escasean que V. forme sobrela mayoró menor tem
de ellas los franceses que han bebido en las planza con que haya ventilado la cuestion
mismas fuentes y cuyos nombres se nos ci este ó aquel periódico , y sobre las medidas
tan á veces con misterioso énfasis. Asi creo que hayan creido conveniente adoptar al
que no será perdido el tiempo que se em gunos obispos , al menos se quedará V.
plee en dar una idea de esos delirios, que convencido de que los católicos del vecino
tal nombre merecen , por mas que se en remo no se alarman sin razon, que hay aquí
vanezcan con las ínfulas de la ciencia. Co algo mas de lo que pos quieren dar á en
mo esta carta va tomando demasiada ex tender algunos ; que lo que en el fondo se
tension , no me es posible presentarle á V. agita es algo mas que la ambicion del cle
los comprobantes de las aserciones emitidas: ro, pues estan envueltas en el negocio gra
pero lo haré sin falta en las inmediatas. No vísimas cuestiones de doctrina. Con esto se
dudo que V. se quedará profundamente me ofrecerá excelente oportunidad de ma
nifestarle á V. cuan poco caso debe hacerse
de esos fallos magistrales que se leen á ca
(I) Áudeládu Bhin T.2. da paso sobre los asuntos de mas importan
cia , y con cuanta injusticia acusan algunos
la intolerancia del Clero , cuando son ellos
los verdaderos intolerantes. Hombres hay
que en tratándose de negocios de religion ,
ó no beben sino en determinadas fuentes ,
ó no consultan mas que sus arraigadas
preocupaciones. Ya que no puedo esperar
de V. mucho celo religioso, á lomenos me
prometo la imparcialidad. Entretanto vi
va V. seguro del afecto de este S. S. S. ,
J. B.
Artículo 2.°
ESPARTERO AMBICIONANDO LA REGENCIA.
Fuéronsele redondeando á Espartero los
negocios de tal manera que en el momen
to de concluir la guerra civil , se halló con
unas Cortes insultadas por la prensa y el
populacho, con un ministerio heterogéneo,
mas bien tolerado que no sostenido por los
cuerpos colegisladores , con las reales per
sonas á larga distancia de Madrid , puestas
á discrecion del general de los ejércitos
reunidos , en un lugar donde se habian dis
pertado y avivado todos los elementos que
podian contrariar á la Augusta Goberna
dora , y en el cual se hallaba falta de per
sonas que en tan críticos momentos pudie
ran aconsejarla.
Barcelona , ciudad rica y populosa , cé
lebre por su floreciente industría , cuenta
en su seno una escogida porcion de hom
bres distinguidos por sus conocimientos;
pero como ciudad subalterna y principal
mente dedicada á las tareas fabriles, escasea
de elemento político ; porque si bien se ha
hecho famosa por sus frecuentes revueltas,
efecto de diferentes causas que no es opor
tuno explicar , esto prueba lo mismo que
acabamos de decir, supuesto que la mayor
parte de ellas se han realizado contra la
voluntad de la mayoría de la poblacion.
Lo que indica que esta carece de la habili
dad necesaría para lograr que prevalezcan
en el orden político , los elementos que de
cierto dominan en el social. De aqui ha di
manado que Barcelona se hallase en una
situacion anómala que no han podido com
prender los que no la hayan estudiado de
cerca; habiéndose visto caer en gravísimas
equivocaciones no solo al general Seoane ,
sino tambien á otros jueces mas competen
tes.
Conocida es la discordancia en que se
hallaban el gobierno de Castro y el cuartel
general ; no siéndolo menos las duras de
mostraciones que la Beina Gobernadora
habia tenido que suportar procedentes de
aquellos que simpatizaban con las opiniones
afectadas por Espartero. Si en algunos la
oposicion al gobierno procedía de particular
aficion á un sistema mas lato y de la creen
cia de que se habia infringido la Constitu
cion y se abrigaban planes contra la exis
tencia de ella , en Espartero dimanaba de
ambiciosos designios ; designios que se ma
nifestaron desde luego con toda evidencia ,
y que últimamente habian llegado á tal
extremo, que han provocado la mas explí
cita reprobacion de parte de los mismos
,que mas contribuyeron á encumbrarle.
La entrada de Espartero en Barcelona
el dia 13 de julio de 1840, reveló á todos
los hombres observadores lo que podia es
perarse del desinteres y abnegacion del que
deseaba retirarse á descansar en el hogar
doméstico , contentándose con ejercer las
modestas funciones de alcalde de un pue
blo de segundo órden : los generales que
nada ambicionan no se complacen en reci
bir una estrepitosa ovacion, cuyo clamoreo
debia afligir á la angustiada Señora , que
habia tenido que devorar una serie de pe
nosas humillaciones.
Marchaba el ostentoso general, con el
brillante y numeroso séquito de su estado
mayor y escolta, recogiendo con avidez
las aclamaciones de la incauta multitud.
Adelantábase buen trecho á su acompaña
miento, y estrechado su caballo por el con
siderable número de jornaleros que se ha
bian apiñado al rededor, podia apenas andar
siendo levantado en alto en brazos de los
circunstantes. Alífera de ver como olvida
do de su dignidad se dejaba manosear por
los mismos hombres á quienes dos años
despues , fusilaba bárbaramente en la ex
planada , despues de haber incendiado las
fábricas en que se libraba la subsistencia de
aquellos desgraciados. Con extraños y afa
nosos gestos dirigíase el general á los bal
cones atestados de curiosos; y como que
les suplicaba contribuyesen tambien por su
 parte al brillo y solemnidad de la ovacion.
Bien pudo advertir que no toda Barcelona
estaba alucinada ; y en la severidad de mu
chos rostros bien debió de leer, que en
presencia de una Señora -y de una Reina ,
no era esta la conducta propia de un mili
tar y de un caballero.
«La tranquilidad, dijo, no será turbada
por nada ni por nadie » y el dia siguiente
de su entrada se ponía ya en ruidoso desa
cuerdo con la Reina Gobernadora , y pre
sentaba una renuncia que significaba pro
nunciamiento. En la noche del 18 de julio ,
estando él dentro de Barcelona, él, que
acaudillaba un ejército de cien mil hom
bres , él , que tenia á la sazon en el casco
de la ciudad y en sus cercanías fuerzas
muy numerosas, él, que para sostener el
orden estaba apoyado por la milicia obra
del Baron de Meer , á su presencia , bajo
los balcones de su alojamiento , estalló un
motin que clamaba : Viva Espartero, Abajo
el Ministerio. Estos hechos son públicos,
notorios, en ellos no cabe discrepancia pa
ra amigos ni enemigos del movimiento; co-
nócenlos , asi los que estaban en Barcelo
na, como los que se hallaban á larga dis
tancia. Ellos bastan para formar concepto
sobre el origen y el objeto de la asonada :
ni consienten réplica, ni necesitan comen
tario.
Pero si los hechos son evidentes y pal
pables para todo el mundo, ofreciéronse
no obstante con mas feos colores á los ojos
de los que pudieron presenciarlos : en ob
sequio del ejército cuyo buen nombre no
alcanzan á mancillar los extravíos de algu
nos pocos, en obsequio del ejército, repe
timos, conviene correr un velo, que cubra
lo que cubrir no pudieron las tinieblas de
aquella noche. Nó, no culpemos al pueblo,
no culpemos al ayuntamiento, no culpemos
á los clubs; que no descargue Espartero su
responsabilidad sobre ninguna persona, so
bre ninguna corporacion , sobre ninguna
sociedad secreta, sobre ningun partido: los
hechos hablan; el impulso partió del pun
to á que debian confluir los provechos del
movimiento. Que no habia pensamiento
fijo, ni voluntad decidida, ni resolucion
tomada , sino en el cuartel general , lo prue
ba un hecho que nadie puede contradecir :
de todas las asonadas de alguna gravedad ,
que se han verificado en Barcelona des
de 1834 , ninguna hubo menos numerosa
que la de la noche del 18 de julio. Espar
tero no habrá olvidado sin duda que ha
llándose en Palacio hablando con la Reina
Gobernadora sobre los medios de sosegar
el alboroto , poco faltó si el reducido nú
mero no desapareció completamente, mar
chándose cada cual por su lado , y dejando
sin objeto ni pretexto la mision del general
tribuno. Ademas, ¿quién de cuantos nos
hallábamos en esta capital ignora una mul
titud de vergonzosos pormenores?
Cayó el ministerio, como no podía me
nos de suceder : y desde entonces quedo
Espartero enteramente dueño de la situa
cion. Algunos ilusos que no se imaginaban
que la cuestion fuese todavía de regencia,
fácilmente podían echar de ver que desde
el 18 de julio , ti verdadero regente no era
ya Cristina, sino el general de los ejércitos
reunidos. Ya (pie de ¡lusos hablamos , pre
ciso es fijar un momento la atencion en el
ministerio Castro , y en el partido que se
hallaba amenazado de muerte. ¿ Veiau la
tempestad que estaba pronto á descargar
sobre sus cabezas? Parece (pie asi debia de
ser , supuesto que no se necesitaba prever,
sino ver. Y siendo asi, ¿qué precauciones
se tomaron? Sancionáronse los famosos de
cretos despues de la entrada de Espartero :
lo que prueba una de dos cosas : ó que ef
ministerio se lisonjeó con la idea de que el
general no abrigaba ulteriores designios , lo
que habria sido incomprensible ceguera ; ó
bien, que se tenian esperanzas de contras
tar la resistencia. Esto último parecían in
dicar unas palabras que se dijo haber pro
ferido el ministro Castro: «ya sabemos que
el cuartel general está en contra — » pues
entonces ¿con qué contais para neutralizar
su poderosa influencia ? ¿Teneis combinado
algun plan con alguno de los generales su
balternos, de gran prestigio en el ejército,
y de cuya decision y lealtad no podeis du
dar? ¿Estais prevenidos para el caso de
una renuncia? ¿Qué instrucciones habeis
comunicado á esos caudillos que mandan
numerosas
tero porquetropas
abrigan
, queelnosentir
temen á 7
propia superioridad , que reprueL
conducta rastrera y desleal, que son capa
ces de hacerle frente en todo evento , que
aun en los últimos extremos ofrecen sus es
padas á la Reina , que un año despues se
levantan en las Provincias y en Madrid ,
corriendo intrépidos á una muerte segura?
Si la situacion os pareció desesperada ¿ por
qué la arrostrasteis? ¿Temíais los pronun
ciamientos? ¿Pero no veis que á pesar de
la asonada de Barcelona, no estalló el mo-
 v ¡miento en Madrid hasta el primero—de 27 —Si el ministerio estuvo en inaccion no
setiembre, y que sus caudillos andaban in mostró tampoco mucha energía el partido
ciertos y desalentados , viendo la reserva que servia de blanco al ataque. Vio con in
del que queriendo incitarlos no se atrevía quietud y zozobra la salida de las Reales
á declararse abiertamente, siguiendo su Personas, estuvo mirando como se desple
favorito sistema de dejar hacer, y de ex gaban los ambiciosos proyectos del general
plotar en provecho propio y sin riesgo , los en gefe , y con los brazos cruzados asistió
compromisos y peligros agenos? (1) ¿No al desenlace del trágico drama , no permi
veis que si no tiene bastante grandeza de tiéndose otros actos que algunas sentidas
alma para resignarse al cumplimiento de quejas á manera de consuelo y desahogo.
sus deberes, carece de la osadía necesaria «La prudencia, se dirá, aconsejaba esta
para quebrantarlos sin rebozo, y consumar conducta ; no convenia irritar al enemigo ,
su atentado? Quizás nos engañemos ; pero precipitando los acontecimientos con indis
estamos en la conviccion de que un golpe cretas provocaciones.» Dado que de pru
atrevido decidiera entonces la cuestion , dencia carece seestatrata,
virtud
y quecuando
tan á i
cayendo el ambicioso general con tanta
mengua como ha sucumbido el regente. vista tormentas políticas, diremo
Ahora estaba mas desacreditado, es cierto; humilde parecer sobre esta delicada
faltábale el apoyo de muchos que entonces ría. Las revueltas y sacudimientos que
le eran afectos , es verdad ; pero en cam tienden á destruir el órden existente, los
bio era ya un poder establecido , siempre dividimos en dos clases : unos que proce
muy difícil de derribar ; habia creado inte den de las pasiones populares conmovidas
reses que se identificaban con los suyos ; y exaltadas, otras que dimanan de un plan
existían clubs organizados que le sostenían premeditado. En lo tocante á las primeras
por todos los medios imaginables ; cuando importa no llevar la firmeza hasta el extre
entonces empuñaban las riendas del mando mo , es necesario á veces que en los mo
la Viuda del Rey y la Madre de la Reina, mentos críticos y de grande efervescencia ,
ocupaban muchos de los puestos importan la autoridad disimule , tolere , ceje un tan
tes resueltos defensores del sistema estable to, y á veces hasta será muy prudente
cido ; y por fin la masa del partido progre que desista de sus intentos. La razon de
sista estaba muy lejos de hallarse formal esto es muy sencilla. La obstinada resisten
mente comprometida , y no pensaba todavía cia provoca mayor ímpetu; cuando al con
eu quitar la regencia á la excelsa Señora trarío sí se deja pasar el primer arranque,
que la habia obtenido durante siete años. el calor mengua, los ánimos se calman,
Hubiéralo pensado mucho Espartero antes los amotinados se fatigan de la asonada , los
de declararse en abierta insurreccion; y negocios particulares llaman de nuevo y
entre los expresos mandatos de la Reina distraen á una gran parte de los subleva
Gobernadora , y los manifiestos del general dos, y lo que hoy es un borrascoso tumul
en gefe, el ejército habría escogido sin du to, dispuesto á lanzarse á los mayores ex
da el camino de la lealtad y del honor. ,— cesos, y arrostrar todo linage de peligros,
será mañana un pueblo sosegado, tranqui
(1) La conducta de Espartero fue tan tímida, lo , que reconocerá su sinrazon , ó deman
que al estallar el pronunciamiento de Madrid , to dará por medios pacíficos lo que entiende
davía ignoraban los sublevados cuáles eran á punto que es un derecho, que se someterá gus
fijo las intenciones del General. El comunicado de
Linage , los sucesos de ltarcelona y otros bechos toso al consejo de varones prudentes , y
nada equívocos, no dejaban duda de que Espartero los acatará
magistrados.
de nuevoTalesla ley
solian
y laser
autoridad
las asonade
se decidía por los pronunciados; sin embargo , él
continuaba cr su sistema favorito de cautelosa re
serva , y se absteuia de dar pasos que pudieran das que ocurrían en tiempo del antiguo
comprometerle en demasía. Véase en prueba de sistema; y en que los gobernantes y aun
esta verdad lo que decía en las Cortes el Sr. Corti los mismos reyes en persona , no se desde
na en la sesion del S.
« Yo contribuí , como he indicado antes, á la re ñaban de acomodar su conducta á la regla
volucion de primero de setiembre; yo estuve en que hemos indicado.
una junta de los comandantes de la milicia de Pero cuando se trata , nó de pasiones si
Madrid á que fui citado , y los comandantes de la no de designios concebidos con toda la cal
milicia no solo no estaban de acuerdo con el du ma dela fria razon, y que se van poniendo
que de la Victoria
me escuchan , me
sinodesmientan
que ignoraban completa
mente cuál era, que
su opinion. Algunossí pueden.»
señores que || do
en los
planta
tumultos
con maquiavélicas
populares nointrigas;
son mascuan-
que
un fantasma con que se intenta amedren
tar; cuando el movimiento no presenta
ninguno de aquellos caractéres con que se
da á conocer la imponente oleada de la
verdadera multitud, entonces el disimular,
el callar, es favorecerlos designios del ene
migo ; el cejar es alentarle á que prosiga
con mas osadía su intento hasta conseguir
la victoria. Ninguna manifestacion departe
del gobierno ni de las Cortes , hubiera lle
vado mas allá los acontecimientos que á un
cambio de regencia, y universal destitu
cion de empleados; no deseaba mas el am
bicioso general que elevarse al mando su-
Íiremo, y asegurarse en él colocando en
os destinos públicos á los interesados en
sostenerlo.
Se creyó que convenia abandonar el
campo sin pelear; pero confiésese al menos
que á consecuencia de aquel paso la nacion
Y el trono han corrido en el último período
funestos azares ; si la nacion no se ha visto
entregada á dura tiranía , si el trono no ha
sucumbido , débese á la hidalguía y denue
do que caracterizan al pueblo español, dé
bese al profundo arraigo del sentimiento
monárquico, débese al escaso talento del
hombre afortunado, que no ha sabido com
prender su posicion , y explotar para su
ensalzamiento y gloria los muchos elemen
tos de que podia disponer.
Respetamos como el que mas los senti
mientos de abnegacion y desinteres ; pero
lo que es una virtud en los simples parti
culares , puede á veces ser culpable debili
dad en los hombres públicos: quien ha
contribuido á crear situaciones nuevas , y
desea mandar cuando vengan las épocas
bonancibles, es menester que eche el pe
cho al agua si se presentan borrascosas (1).
(1) Cuando esto decimos , no intentamos echar
la culpa á todos los hombres del nombrado parti
do ; sabemos que algunos se portaron con una in
trepidez muy digna de alabanza ; pero no debieron
de hacerlo todos asi , ya que S. M. la Reina Cris
tina en su manifiesto de Marsella de 8 de noviem
bre de 1840 , al paso que hizo justicia á los prime
ros se permitió con respecto á los otros una indica
cion bastante grave.
«Mi constancia en resistir lo que no me permi
tían aceptar ni mis deberes ni mis juramentos , ni
los mas caros intereses de la monarquía , ha traido
sobre esta flaca muger que hoy os dirige su voz ,
un tesoro de tribulaciones tal que no pueden ex
presarlo los vocablos de ninguna lengua humana.
Bien lo recordaréis , españoles : yo he llevado mi
infortunio de ciudad en ciudad , recogiendo la befa
y el baldon por el camino, porque Dios por uno de
sus decretos que son para los hombres un arcano,
A propósito de los acontecimientos del
año 40 bien merece un recuerdo la política
observada
habia permitido
por que
el gabinete
la iniquidad
inglés.
y la Termina-
ingratitud
prevalecieran. Por esto sin duda se habían alen
tado los pocos que me aborrecían , hasta el punto
di escarnecerme ; y se habían acobardado los mu
chos que me amaban , hasta el punto de no ofre
cerme , en Ikstimonio de su amor , sino un com
pasivo silencio. Algunos hubo que me ofrecieron,
su espada ; pero no acepté su oferta , prefiriendo
yo ser sola mártir á verme condenada un día a leer
un nuevo martirologio de la lealtad española. Pu
de encender la guerra civil ; pero no debia encen
derla la que acababa de daros una paz como la
apetecía su corazon , paz cimentada en el olvido de
lo pasado : por eso se apartaron de pensamiento
tan horrible mis ojos maternales, diciendome á mi
propia , que cuando los hijos son ingratos , debe
una madre padecer basta morir ; pero no debe en
cender la guerra entre sus hijos.»
El Sr. Martínez de la Rosa en su discurso de 11
del corriente diciembre, hablaba sobre este asunto
en los términos siguientes :
«Si en una ocasion señalada no acudimos en de
fensa del trono, cuando vefamos venir los peligros
que le amenazaban , no fue por falta de prevision
ni por falta de aliento ; nuestro respeto religioso al
trono fue quien nos ató las manos y nos entregó
como víctimas ante un soldado ingrato que no se
presentó como un ambicioso audaz, i la luz del
dia , uó ; se arrastró lisonjero por las gradas del
trono , para mirarlo despucs con ojos codiciosos.
No faltó prevision : y puesto que se han citado he
chos para hacer cada cual su apología , yo voy a
citar uno que hace años le tengo pesando sobre mi
alma. El año de 1838 , cuando el ministerio del
Sr. conde de Ofelia , empezó el general Espartero á
quererse entrometer en la admniistracion del Es
tado; empezó A mostrar enemiga contra dos mi
nistros que hoy se sientan en estos bancos. S. M.
se sirvió consultar al ministerio amenazado , á at-
Sunas personas del nuevo que pudiera formarse, y
otras que tenían la honra de ser consejeros ho
norarios de Estado . Entré yo en este número ; y
con la franqueza que acostumbro , ¡'porque nunca
adulo á los poderosos ni soy cortesano en los pa
lacios ni en las plazas), vote que se mantuviera el
ministerio ; porque yo no reconocía mas regla para
que un gabinete se retirara, sino la voluntad de
S. M. y las mayorías parlamentarias. Voté por que
al general Espartero por los medios convenientes ,
se le hicieran concebir estas ideas sin herir su sus
ceptibilidad ; pero que si hacia dimision , y aun
cuando sublevara el ejército se le admitiera ;' por
que para mí habia una cosa superior á todo , y
la dignidad y el decoro de la potestad real Y dije
Reina no
mas; arrojara
obrar por
asi , laes lo
ventana
mismolaquecorona de . su
si S. M la
Augusta Hija... Esta fue la expresion de que me
valí: díganlo los señores que me oyeron, que todos
viven , menos uno . »
Nos complacemos en hacer la debida justicia é
la firmeza manifestada por el ilustre diputado; oja
la que en 1840 todos los hombres que veían claro
el porvenir se hubiesen resuelto á hacerle frente
ron
ocasion
la generosa
el Sr. Martínez
osadfa que de lola hizo
Rosa.enEsla probable
indicada '¡ij<
^3
qne no hubiéramos tenido que pasar tres aoos Un, * *
funestos. .' . . ' r'k
 da la guerra civil, creyó la Inglaterra que 29 —
era llegado el momento de dar un golpe tero , explayándose en sus comunicaciones
decisivo para asegurar su influencia en la respectivas , en consideraciones políticas
Península. Desesperanzada de alcanzarlo que no eran ciertamente de aquel lugar.
mientras ocupase la regencia la Viuda de Allí se le dice á Espartero que la Reina de
Fernando, resolvió trabar alianza con el la (iran Bretaña aprecia y aprueba su con
Soldado de fortuna; haciéndole servir á un ducta; que el gobierno de S. M. B. con
tiempo para derribar á la Augusta Gober templa con admiracion su carrera militar y
nadora y destruir la influencia francesa. política; que su nombre es pronunciado
No concebian los ministros ingleses que su siempre con elogio en aquel pais, que en
protegido estuviese tan escaso de las dotes todas sus acciones públicas se reconocen los
necesarias para representar su papel; y por frutos de un súbdito liel , de un patriota
lo mismo debieron de considerarle seguro verdadero , de un buen caballero y de un
en el mando durante la minoría de la Reina; general tan hábil como distinguido ; y que
previendo ademas, que al cumplir los ca con aquel acto la Reina Victoria se propo
torce años la augusta Niña , no faltarían nía nada menos que confirmar la buena in
pretextos para prolongar la regencia , si es teligencia entre dos naciones que deben
que acontecimientos imprevistos no hubie quererse y respetarse (1).
sen ya levantado mas alto al que debia ser
virles de instrumento. Solo asi puede ex
plicarse la proteccion que le dispensaran , J&5i£¡?£ de.Suss«»l Duque de la Victoria
favoreciéndole con altas consideraciones al - Palacio de Kensmgton 11 de agosto de iSin
mismo tiempo que la Europa presenciaba fa ReiUnqaUd;TaH^ÍCudn0 recibiuo ideaosVe S? M
con escándalo las escenas de Barcelona.
Dejemos á parte los numerosos indicios que ^ ac ia -uran i^ruz de la muy hon
manifiestan la mano de la Inglaterra en el rosa orden militar del Baño , en prueba de su au
encumbramiento de Espartero; hechos hay de su aprobacion porvuestra
gusto aprecio hácia persona como tambien
la leal conducta que habeis
que no necesitan comentarios , siendo uno mostrado hácia vuestra Soberana S. M. C , y por
de los mas notables el haber sido condeco haberos consagrado enteramente á vuestra Patria,
rado con la gran cruz de la orden militar me apresuro , con placer extremo , á ejecutar esta
del Baño, cabalmente en los momentos comision tan honrosa como agradable para mí , en
calidad de Gran Maestre interino. No puedo me
críticos en que hallándose en abierto desa nos , Sr. Duque , de aprovecharme de una coyun
cuerdo con S. M. la Reina Gobernadora, tura tan agradable para manifestará V. E. mi ma
parecía natural que la Inglaterra esperase con yor consideracion, como tambien la admiracion
al menos el desenlace de los acontecimien carrera que el Gobierno de S M. B. mira vuestra
tanto militar como política. Vuestro nom
tos. Elmotin de Barcelona tuvo lugar en Í8 bre siempre se pronuncia con elogio en este pais ,
de julio, y las comunicaciones del duque donde se cree reconocer en todas vuestras acciones
de Sussex, y de lord Palmerston son del 11 un públicas (que son bien numerosas) los frutos de
súbdito fiel , de uu patriota verdadero , de un
de agosto; es decir, que cuando toda la b'ien caballero y de un General tan hábil como
prensa de España y de Europa se ocupaba distinguido. Habeis combatido, Sr. Duque, por el
Trono de España , por la Constitucion que habeis
de las ocurrencias de la Capital del Princi jurado defender y por la libertad de vuestro pais;
pado, y de los síntomas por cierto bien en fin habeis combatido para conquistar la paz in
nlarmantes, que se notaban en el resto de terior, y por este medio habeis contribuido á ase
la Península , cuando este era el principal gurar la Paz general de Europa, y creo , como lo
deseo , que lo habeis conseguido con una lucha tan
negocio que llamaba la atencion de la polí importante como gloriosa —Con esta conviccion y
tica ™.- l;1s gravísimas consecuencias que animada de los sentimientos mas amistosos hácia
8. AI. In Reina Isabel, como tambieu hácia la na
i menos de traer , entonces echa la cion
i su voto en la balanza , haciendo vía á española, la Reina Victoria de Inglaterra en
V. E. el cordon distinguido ( que yo tengo el
| ambicioso una manifestacion en placer de trasmitiros) creyendo por este acto de su
90 lisonjera, que le asegurase del be benevolencia , conferir áun General distinguido, á
un buen patriota , confirmar la buena inteligencia
ato de una gran potencia, y que por entre
tanto le animase á proseguir con mas brio rerse, dos naciones que deben respetarse y que
y añadir por este medio un nuevo lustre á
• n la rn rrera comenzada. la orden militar de su pais, que cuenta ya tantos
La -¡unificacion política de este paso no hombres distinguidos en el numero de sus miem
podía ser mas explícita; tanto el duque de bros , haciendo inscribir en su libro el nombre del
Ñjwex como lord Palmerston tuvieron buen votos mas lasinceros
Duque de Victoria y de Morella. — Haciendo los
por vuestra felicidad y gloria ,
i iiA-A^y fjf. hacérselo entender asi á Espar- como tambien ñor la conservncinn para dela los
salud
intere-
v de
 — 30 —
Vean nuestros lectores si todo esto dicho El gabinete frances fiel á su sistema de
en Inglaterra cuando se tenia ya allí per socorrer á sus aliados con solas simpatías ,
fecto conocimiento de los sucesos, y se ha apresuróse á combatir la política inglesa ,
bia podido meditar sobre ellos, véase si manifestando cariñoso afecto al poder que
prueba que el ensalzamiento de Espartero expiraba. Vino el embajador, llegó á Bar
era muy del agrado del gabinete de San celona en el acto que arrastraban por las
James. calles el ensangrentado cadáver de Balmes,
Se nos objetará que la comunicacion de colocóse al lado de la Reina, siguióla á Va
lord John Russell es de fecha 16 de julio , lencia , y asistió al triste desenlace que con
y por consiguiente anterior dios sucesos de sardónica sonrisa contempló gozosa su rival
Barcelona ; pero á esto responderemos : 1 la Inglaterra. El embajador frances vino á
no damos importancia á la condecoracion llevar el duelo de la causa por la cual se
sino á los términos con que fue comunica interesaba. Ahora que el pueblo español ha
da, y estos términos eran del 11 de agos triunfado solo , enteramente solo, no fal
to. 2." La comunicacion del lord John tará algun ministro de allende el Pirineo,
Russell aunque sea del 16 de julio, no de que hable de previsiones cumplidas y qui
bió de ser trasmitida desde luego; pues es zás de firmeza y energía que estaban en
, notable que la contestacion de Espartero reserva por si hubiese sonado la hora del
es del 25 de agosto; y coincidiendo esta peligro : bien podrá ser asi ; mas como en
fecha con la de las contestaciones al duque estas materias cada cual tiene el derecho
de Sussex y á lord Palmerston , es proba de opinar como mejor le agradare, nos in
ble que todos los pliegos no saldrían de clinamos á creer que si Espartero no hu
Londres hasta despues del 11 de agosto. biese contado con otros enemigos que el
Lord Palmerston se muestra muy celoso gobierno frances , si no hubiese tenido que
de que la España siga una política indepen habérselas con un pueblo como el español,
diente y española; y todos recordamos que habría podido establecer en la Península el
en el lema adoptado por las juntas y por el sistema del Dey de Argel , sin que los es
mismo Espartero figuraba la independencia pañoles recibieran mas auxilio que los des
?meional (1). venturados polacos : simpatías en los discur-

ses de vuestra Soberana como preciosos para vues
tra valerosa nacion ; y deseando podais gozar por
muchos años de esta prueba pública del alto apre
cio en que la Reina de Inglaterra tiene vuestros
servicios ; como igualmente de todas las distincio
nes con que os ha honrado vuestra misma Sobe
rana (con aclamacion general de vuestros com
patriotas) , distinciones que no solamente habeis
merecido sino ganado ; tengo el placer de ofrecer
me , señor Duque , de V. E. , el mas apasionado
y sincero admirador y amigo. — Augusto Federico,
Duque de Sussex.
( 1 ) El lord Palmerston al Duque de la Victoria.
^Oficinas de Negocios c\trangcros 11 de agosto
de 18iO.=Sr. Duque. = Hallándose los reglamen
tos de la Órden del Baño anejos al ministerio del
lord John Russell , corresponde á él y no á mí el
comunicaros que S. M. se ha dignado conferiros
aquella muy honrosa y distinguida Órden. Pero
me ha cabido en suerte , como encargado de la di
reccion delas relaciones extrangeras de Inglaterra,
participar oficialmente de las transacciones en el
curso de las cuales habeis prestado tan grandes
servicios y adquirido la elevada reputacion que han
inclinado á S. M. á desear que vuestro nombre se
añadiese .'i la lista delos hombres eminentes á quie
nes se ha conferido la Órden del Baño : y creo por
lo tanto que consideraréis muy natural que os di
rija algunos renglones para manifestar el placer
(píeme causa el motivo que conduce al coronel
Wilde á Barcelona. = Mis deseos han sido que la
influencia de Inglaterra se extendiese i ayudar al
pueblo español en los esfuerzos que ha hecho por
conseguir constitucionalmente su felicidad domés
tica como tambien la prosperidad nacional ; he de
seado ver a España ocupar el nuevo lugar que la
corresponde entre las primeras potencias de Euro
pa y seguir una política independiente y española ;
porque estoy persuadido que el poder y la prospe
ridad de España constitucional serán un elemento
mas de seguridad para la paz general de Europa ,
y deben contribuir á promover el progreso de la
civilizacion por todo el mundo. -=> Estoy igualmen
te convencido de que á medida que los verdaderos
intereses de la España dirijan su política , deben
estrecharse mas los vínculos que la unen con la
Inglaterra , porque nuestros dos paises se hallan
ligados por intereses recíprocos tan importantis
como numerosos. = Con la mas cordial satisfaccicn
por lo tanto, he visto el triunfo completo y final
de
molamecausa
regocijo
de S.deM.quela se
Reina
me Isabel
haya proporcionado
;ypor lo m\<-
esta ocasion de ofreceros, Sr. Duque, las expre
siones de mi aprecio hacia la persona de V. E. ;
pues que por vuestra perseverancia en las dificul
tades mas extraordinarias, por la pericia y tino de
vuestros planes, por el acierto y valor que habeis
mostrado al ejecutarlos, y sobre todo por vuestra
moderacion y generosidad en la victoria, habeis
contribuido tan poderosamente al logro de un re
sultado tan grandecomo glorioso. = Tengo la hon
ra de ser, Sr. Duque, vuestro muy li
= Palmerston , ministrode Negocios r
 — 31 -
sos de apertura de las cámaras , afectuosos Esta presidencia que levantaba á Espar
recuerdos en los discursos de contestacion. tero á una esfera superior á la de ministro,
Que la nacion y el gobierno no olviden es era una especie de corregencia disfrazada ;
tas verdades ; en lo sucesivo puede sernos
muyComoútil era
su recuerdo.
imposible que previese Espar
tero la resolucion de la Reina Gobernado todos recargados por exorbitantes pechos y contri
buciones , los que dependen del estado, y las in
ra , y no siendo prudente , ni tampoco muy felices viudas y huérfanos sin percibir su legítimo
conforme con la timidez que le distingue , haber, no hay persona que no tenga motivos de
el aventurarse á un golpe atrevido , tuvo queja , y de desconfiar de esas ostentosas y femen
tidas promesas, con que se procura artificiosa
la idea de colocarse al lado de S. M. des mente persuadirnos de que va íi ser feliz nuestra
pues de haberla hecho pasar por una serie futura suerte , cuando solo ellos son los únicos que
de humillaciones ; y ya fuera con el título te medran y progresan. Semejante conducta por par
de corregente ya con el de Presidente sin masdeque los gobernantes, no ha servido hasta ahora
para desconceptuar la apreciable forma
cartera , andar socavando y desmoronando del gobierno representativo, que en realidad no ha
el poder que le hacia sombra, hasta que el existido hasta al presente en España , ni es posible
curso de los acontecimientos le deparase cutivo que exista mientras se consienta que el poder eje
sea en manos de los ministros un comodín
ocasion oportuna para obtener el mando que solo tenga valor en el juego de sus intereses ó
supremo, sin asociado de ninguna clase. afecciones particulares.
Las indicaciones que comenzaron á circu «Conviene tambien tener presente que ya son
lar con respecto á la necesidad de nombrar acá mas los vicios y abusos establecidos desde el año 3 í
, que los que nos habían dejado el príncipe de
corregentes anunciaban con claridad bas la Paz y el inmoral é ignorante Calomarde , y que
tante el proyecto que meditaba ; siendo aquel sufrió los golpes del látigo de un calesero
muy notable que mucho antes del decreto escaparse valenciano en Aranjuez , y este se vió precisado a
vestido de fraile francisco. Recuerden
de la Reina en que nombraba á Espartero tambien los que han ejercido y pretenden ejercer
presidente del consejo ministros, mandan despóticamente algun ministerio , que ya han co
do que no se encargase de ningun despa graciones mido por dos veces el pande lágrimas en sus emi
cho en particular, se imprimió en Zaragoza comieron ,loshabiendo sido aun mas amargo el que
que no desampararon su patria, y
un folleto que proponia esta medida , como permanecieron bajo el férreo yugo del gobierno
muy conducente para salvar la libertad y absoluto , cuyo recuerdo , no dudamos , convence
el pais (1). rá á todos , que es forzoso procediendo de buena
fe convenir en que no es posible que bajo tanto
desórden y desconcierto, en que no solo no se cas
tiga el crimen sino que se ve distinguido y conde
corado en las mismas personas que lo cometieron,
(i ) El notable folleto á que aludimos se titula : pueda estar segura y seguir su curso la nave del
Manifestacion declamatoria contra el despotismo estado.
ministerial , é indicacion del medio de contenerle. » Asi es que hace seis años que en vez de avan
No lleva nombre de autor , y al fio de él se encuen zar en su viage ha retrocedido, alejándose siempre
tra : Zaragoza. Imprenta de D. F. A. M. y del punto de su destino , consumiendo en él entre
C. 1840. Está escrito con grandes apariencias de tanto sus víveres y el aparejo de su maniobra.
espíritu de imparcialidad ; el estilo es muy sose Deteriorada en todos conceptos está expuesta á su
gado ; pero el autor se propone nada menos que cumbir al menor temporal de que no podrá liber
desacreditar á todos los nombres públicos y á todos tarla el piloto , porque aterrorizado este con la ma
los partidos ; cita porcion de hechos singulares , la fe de sus marineros , desconfia de la exactitud y
pretende tener datos seguros en que apoyarlos, y se puntualidad en sus maniobras , que dejan de ordi
refiere mas de una vez á lo que consta en las se nario y cuando mas se necesita su trabajo para
cretarlas de estado. Despucs de haber hecho una atender á la pesca ó al despacho del contrabando ,
reseña de los ministerios que se han sucedido des bajo cuya tácita condicion parece que entraron al
de 1834, achacándoles á lodos gravísimos cargos, servicio de este buque.
concluye proponiendo un remedio peregrino que «Dejemos la alegoría. Cuando se trata de dar
consistía en la creacion de una nueva magistratu fuerza y vigor á la corona , es mas útil y eficaz la
ra cuyo carácter y tendencias adivinarán fácilmen indicacion delos medios positivos que la vacía elo
te nuestros lectores. Trascribiremos el final de cuencia de un discurso fraseológico. Los hechos
dicho folleto , porque atendida la época en que sa siempre convencen mas que las palabras ; asi ve
lió a luz lo consideramos de algun intercs. mos que habiéndose empleado estas con artimaña
» Fíjese ahora pues detenidamente la considera para persuadir á los españoles que seríamos felices
cion sobre los efectos y consecuencias que ha pro bajo el Estatuto, despucs bajo la Constitucion , y
ducido el despotismo y arbitrariedad ministerial, últimamente bajo el programa de paz, órden y
ejercida con tanto desprecio de las pueblos , de to justicia, creemos mas en los males y desgracias
das las clases y con descrédito y mengua de las que se nos han causado y que hemos sufrido por
respetables prerogativas de la corona, y se verá que la inobservancia de estas leyes y principios , que
el descontento de los primeros va llegando ft su en los bienes y ventajas con tama seguridad ofre
colmo, que casi no hay clase ni persona que no se cidas, sin que hasta ahora hayamos visto una sola
halle por algun concepto agraviada, los españoles realizada.
no podremos decir si en este paso cedió la
Reina á insinuaciones que directa ó indi
rectamente procediesen del interesado ; pe
ro lo cierto es que con él abdicó parte de
la regencia. No debia contentarse empero
el ambicioso soldado con tamaño allana-
namiento; los acontecimientos se habian
adelantado mucho ; la ambicion podía lle
var mas allá sus esperanzas. Marcha á Ma
drid , organizase el ministerio , la infortu
nada Reina se ve agobiada con nuevas
exigencias, conoce que se la quiere hacer
representar un papel que acabe de humi-
• El mal , como se ha observado , no consiste en
las leyes y sí únicamente en los infractores de ellas,
y en los abusos y demasías de los gobernantes ,
empleados y encargados de su proteccion y defen
sa , como lo han presenciado y experimentado los
mismos pueblos , á los cuales ya es tiempo de pre
sentarles la esperanza de algun consuelo , que uo
quede solo en palabras , y si que lo reciban tan
real y verdaderamente como ansiosamente ape
tecen.
» Un gobierno justo que cumpla y haga ejecutar
estrictamente la Constitucion y las leyes , un go
bierno enérgico y vigoroso que dé el sabio y pru
dente movimiento que necesitan todas las ruedas
de esta gran máquina, y por ultimo un gobierno
inexorable y severo , que contenga con mano fuer
te la ambicion y petulancia de esa inmunda y cor
rompida chusma que tanto tiempo hace se está en
riqueciendo á costa de la nacion. Ué aquí , hon
rados compatriotas, el único arbitrio que nos queda
para ahuyentar esa densa nube de males y des
gracias que todo hombre sensato ve venir sobre
nuestras cabezas. Los que hasta aqui hemos tole
rado con tanta resignacion y sufrimiento , todos
han provenido, como queda demostrado, del abuso
que en el espacio de seis años han hecho casi to
dos los ministros , de la conlianza con que los ha
bia honrado la corona : autorizados con tan respe
table nombre, han dispuesto de todo de un modo
tan injusto y tan inmoral como por desgracia he
mos visto confirmado en estos últimos dias, coa
el doble pesar de haber visto tambieu á la mayoría
del Congreso oponerse á los justos clamores de la
minoría que con sobrada razon pretendía que las
Córtes entrasen en el conocimiento de tanto de
sorden.
«Urgente es, pues , libertar á la nacion toda de
un estado tan degradante en que tantos millones
de individuos se ven sometidos al capricho de seis
hombres que de ordinario no han sido los mas
buenos ni los mas capaces de gobernarnos: tén
ganse siempre distantes del trono y de la interven
cion en el alto gobierno á las personas que han
señalado su vida pública con semejantes defectos.
» Para que S. M. la Reina Gobernadora pueda
realizar unas medidas tan justas y de las cuales
penden la salvacion de España y la seguridad del
trono de su excelsa hija , necesita poner al frente
de los ministros un individuo de alta categoría ,
de acreditada propiedad , y que en los distintos
gobiernos y cargos que haya desempeñado , sus
providencias siempre hayan llevado consigo el se
llo de la razon y la justicia , y manifestado en la
administracion de esta , conocimientos sobresa -
liarla y abatirla ; y en tan angustioso apuro
prefiere resignarse al doloroso sacrificio de
abandonar el mando , de separarse de sus
hijas, entregando el sagrado depósito á
manos de la ingratitud; pero dirigiendo á
la nacion sentidas palabras para que no es
tuviese desprevenida la lealtad.
| Qué conducta mas fea y miserable la
observada por Espartero en el curso de
este negocio ! Ni un pensamiento grande ,
ni un paso atrevido, ni un compromiso
arrostrado de frente, una renuncia, un mo
tín en las tinieblas de la noche , una série
líentes en la milicia , en la política y economía ,
sin haberse adherido nunca á los principios de
partido alguno , y cumplido siempre exactamente
las órdenes del supremo gobierno sin haber faltado
nunca á la Constitucion ni á las leyes. Un hombre
de tales circunstancias y adornado de tantas virtu
des, es el único que puede cooperar con la Reina
Gobernadora á sacarnos del gran conflicto y peligro
á que nos ha (raido la desenfrenada inmoralidad
é ignorancia de cien ministros que hasta ahora han
desgobernado la España en esta tercera época
constitucional.
» S M. la Reina Gobernadora en uso de su ré-
gia autoridad , y alta prerogativa puede elegir y
nombrar á este personage presidente del consejo
de ministros sin despacho de secretarla alguna.
¡ » Autorizado únicamente para le direccion y go
bierno de esa primera corporacion del estado obli
gará á sus individuos á que cada uno dé exacta
cuenta de sus respectivos negocios al consejo , y
acordados por votos queden estos registrados en
su correspondiente libro para que confrontada des
pues con ellos la resolucion que obtenga de S. M .
el ministro proponente , pueda conocer si este ha
procedido en justicia ó abusado de la confianza de
la corona. Advertida la Reina por el presidente de
alguna falta notable cometida por alguno de los
mmistros no solo deberá despedirlo sino sujetarlo
á ser juzgado por el tribunal competente.
» El presidente que indicamos tiene la gran ven
taja de conocer á htuchos españoles de mérito , y
conocimientos de quienes tanto necesita el servicio
público entregado en el dia á manos ineptas y al
gunas impuras. Sola la ocupacion de tan utiles
brazos cerrará la puerta á la intriga , y borrará la
idea del influjo de la camarilla en la resolucion de
asuntos de intereses pecuniarios y propuestas de
altos empleos, cosa que tiene irritada sobre mane
ra la opinion pública.
» Resta solo ahora buscar y llamar á un. hombre
que tanto interesa á la nacion y al trono. El vive y
existe lleno de reputacion y gloria adquirida con
sus buenas acciones y servicios ; proporcionósele
pues la ocasion de continuar estos en favor de uua
patria que tanto los necesita y reclama.
» El gobierno constitucional de la Reina Gober
nadora fortificado y vigorizado con un medio tan
sencillo es el único del cual podemos esperar el
remedio de los males pasados, evitar las desgra
cias con que nos afiruma el pretendido Consejo de
Estado que compuesto como es natural de algunos
ex-ministros ó individuos de la aristocracia , solo
aspiran al goce de grandes sueldos y á uncirnos al
carro de su dominante despotismo.»
Je oscuras intrigas en dos meses de inac
cion en Barcelona, un escandaloso mani
fiesto despues que los pronunciados de Ma
drid habian dado ya la cara , excitaciones
á la insubordinacion militar en cuanto po
día serle favorable ; pero siempre timidez ,
siempre irresolucion , siempre embozo ; en
todo pequeñez de espíritu , mezquindad de
sentimientos ; en todo la infraccion del de
ber sin la imponente audacia que distinguir
suele á los hombres de genio que ambicio
nan el mando de la república.
Él , ó sus menguados consejeros , ha
brían leido en alguna parte que para esca
lar el poder en tiempos revueltos, es ne
cesario grangearse popularidad , vociferar
las libertades públicas, hacerse el defensor
delos oprimidos, clamar contra los des
manes de los gobernantes , anatematizar la
tiranía y ocultar profundamente el deseo
de mando; y hacíalo así, pero ¿de qué
manera? como actor de comedia, repi
tiendo eternamente las palabras de soldado
español, patria, libertad, siempre con la
misma combinacion , siempre con los mis
mos términos , sin un pensamiento nuevo ,
sin una inspiracion feliz, sin un rasgo que
mereciera referirse , sin nada que pudiera
producir entusiasmo, ni siquiera excitar
ínteres.
Llegado á Madrid , presidente del minis-'
terio-regencia , regente ya en la realidad ,
cruza de nuevo los brazos, y á trueque de
no aventurar lo adquirido, y de no com
prometer su porvenir, satisface todo linage
de pasiones é intereses que le ofrezcan
apoyo , deja que continúe el desgobierno ,
que cunda la anarquía ; y cuando tomar
debiera con mano firme el timon del esta
do , abandona la combatida nave á merced
de las olas, sin comprender le que su nue
va posicion reclamaba, lo que exigen su
ínteres y su gloria. No tardó la prensa en
pagarle con la misma moneda que á la
Augusta Proscrita ; pero él se resigna fle
máticamente á su destino , y como expues
to á la vergüenza pública consiente que se
le prodiguen los mas bajos denuestos, y
que con cien y cien extravagantes carica
turas se le haga objeto de desprecio y bur
la. No obran asi los dictadores, no fue esta
la conducta de Cromwel y Napoleon. Ya
que con inconcebible necedad traducíais
literalmente los discursos del Capitan del
siglo , debiais tambien estudiar los prime
ros pasos de su consulado. ¿Era el respeto
á la ley lo que os detenia ? No ; que bien
TOMO II.
supisteis pisarla cuando os luvo cuenta; lo
que os detenia era el sentimiento de vues-
tra debilidad, ese sentimiento que no aban
dona jamas á los hombres pequeños, por
grande que sea su vanidad y orgullo , era
que no sabiais que hacer en la posicion á
que os acababais de encumbrar , era que
confundisteis el fiero orgullo del mando
con las delicias y la vanidad de espléndidos
salones, era que tomabais la rastrera li
sonja por la respetuosa obediencia , que
imaginabais que el incienso de vuestros
servidores era el acatamiento de la nacion ;
erais bastante pequeño para ser vano y
fastuoso, mas no erais bastante grande
para abrigar una ambicion elevada. Por
esto , no imitabais á los hombres insignes
que solían distinguirse por la sencillez y
desaliño del trage ; necesitabais el ostentoso
uniforme, las cruces, las condecoraciones;
porque una voz secreta os decia en el fon
do del alma , que no podíais medrar por
lo que valíais, sino por lo que deslumbra
seis. Ah ! ¿quién os engañó para que no os
retiraseis á tiempo, para que al concluir la
guerra no entráseis en la vida privada?
Llevarais al hogar doméstico el recuerdo
de Luchana y Vergara , dijérase que ha
biais puesto fin á una guerra de siete años,
y que en el apogeo de vuestro poderío,
habiais sido bastante generoso y desintere
sado para abandonar el terreno de la am
bicion , para presentar caballerosamente á
vuestra Reina una espada vencedora , para
resignar un mando en que acaudillabais á
cien mil combatientes ; y en obsequio de
vuestra hidalguía los contemporáneos y la
posteridad, quizás os expidieran títulos que
estabais lejos de merecer.
La travesura del intrigante nada tiene
de comun con el talento del hombre de
estado; aquella no escaseaba en la camari
lla de Espartero, y quizás hasta cierto pun
to la poseia tambien él mismo ; pero la
capacidad política fue cosa desconocida pa
ra él y sus consejeros. Cuando la famosa
disputa sobre la conveniencia de nombrar
regencia única ó trina , Espartero que vió
i, tomar á la discusion un aspecto grave en
demasía , y que por medios honrosos nada
habia sabido hacer para que se sintiese la
necesidad de dejarle mandar solo, acudió
al peligro apelando álos recursos que tenia
de costumbre : un comunicado cuya letra
afectaba sumision y desprendimiento, pero
cuyo sentido envolvía una grave amenaza.
!| Asi despues de seis meses en que habia po-
3
 — 34
(Iido merecer y obtener sin contradiccion comprendió loque valia y podía, haciendo
la regencia única , por un medio digno y su ambicion estéril nos trajo dos años de
glorioso, cual era gobernar, no supo alcan malestar, de terribles insurrecciones, y se
zarla de otra manera que intrigando; pues preparó Cuandoel un
camino
historiador
de vergonzoso
desee caracterizar
destierro.
como intriga debe figurar tambien el insi
dioso comunicado que incluía el amago de en breves palabras la regencia única , dirá:
la solapada renuncia. Cuando Cromwel «nombrado regente el general Espartero,
amenazaba, lo hacia cerrando el parla estuvo muchos dias sin saber como organi
mento , haciendo despejar la sala de sesio zar un ministerio ; y al fin salió con el
nes ; cuando Napoleon amenazaba , lo hacia nombramiento de seis hombres medianos
á la cabeza de sus granaderos, y obligan cuyo único pensamiento de gobierno fue
do á los diputados á buscar los caminos presentarse humildemente á las Córtes na
mas cortos para evacuar el local de las de cidas de la revolucion implorando apoyo.»
liberaciones y salvarse con la fuga. Y el lector entendido que tales principios
No negaremos que la posicion de los par verá en un militar regente, cerrará buena
tidarios de la regencia trina , fuese a la mente el libro , dando por leida la historia
sazon un tanto peligrosa; cierto prestigio de su mando , y adivinando sin dificultad
mas bien de los acontecimientos que de los el desenlace del Puerto de Santa María.
actos , rodeaba todavía al candidato de la J. B.
única ; pero mucho dudamos que si sus
adversarios tuvieran mas union y firmeza ,
se hubiese él aventurado á un golpe deci
sivo. Quizás ya en mayo de 1841 se habría ESTUDIOS POLÍTICOS.
manifestado en toda su pobreza el hombre
de Albacete.
Como quiera , fue nombrado Espartero
regente único , y la necesidad de gobierno,
de orden , inspiraba todavía á no pocos la Artículo 2.°
lisongera esperanza de que llegado al codi
ciado puesto el ambicioso soldado, procu EL ALTO CUERPO COLEGISLADOR.
raría inaugurar una era que hiciese olvidar
su origen , y comenzase á labrar la ventura
de esta nacion infortunada. ¡ Vanas ilusio Comparando la Constitucion de 1837
nes que las calidades personales del regente con la de 1812 , salta á los ojos la mayor
no debian ya permitir, y que sus primeros altura en que aquella ha colocado al Bey,
pasos vinieron bien pronto á disipar. ¡ Qué y lo mucho que ha cercenado de las facul
ocasion mas bella para adquirir glorioso tades de las Córtes : y aqui se halla una de
renombre ! No era necesario ni alto genio las causas de la diferencia que ofrece el
militar ni político , ni administrativo ; bas curso de las sesiones de la asamblea popu
taban talento claro, intencion leal y carác lar , nó en el cuerpo intermedio. El poder
ter justiciero y firme. Todos los partidos real no se halla tan combatido , porque se
tenían un profundo sentimiento de su de halla en mayor elevacion, donde no alcan
bilidad ; el carlista acababa de perder cuan zan tan fácilmente los tiros; y además, sí
to poseia; el moderado era víctima del llega el caso de combate, pelea con mas
pronunciamiento ; y el progresista llaman ventajas que no antes , por la sencilla ra
do en su auxilio al gefe de los ejércitos se zon de que se le ha dado mas fuerza.
habia creado una posicion que no le per El artículo 26 de la Constitucion de 1837
mitía rebelarse contra su protector. Una dice: «Las Córtes se reunen todos los años.
palabra que hubiese indicado el conoci Corresponde al Rey convocarlas, suspender y
miento de las verdaderas necesidades de la cerrar sus sesiones y disolver el Congreso de
nacion, y sincero deseo de satisfacerlas, un Diputados ; pero con la obligacion , en este
acto en que se hubiese manifestado energía último caso , de convocar otras Córtes , y
y teson , fueran entonces mas que suficien reunirías dentro de tres meses. »
tes para rodear al poder de inmenso pres Estas facultades , que tan poderosas ar
tigio , y grangearle las mayores simpatías. mas son en mano del Monarca , no se las
Para desgracia de España y mengua pro otorgaba la de 1812. Hé aqui algunos de
pia , no conoció Espartero su posicion , no sus artículos :
 - 35 —
104. « Se juntarán las Córtes todos los i/ue por ningun mntivn pueda diferirse para
años en la capital del reino, en edificio otro. Las mismas formalidades se observa
destinado á este solo objeto. » Nada tenia rán para el acto de cerrarse las Córtes. »
que ver el Rey con la convocatoria , y has (Art. 121).
ta el lugar de las deliberaciones quedaba El Rey no abria pues ni cerraba las Cór
en cierto modo á la eleccion de las Córtes. tes , asistía únicamente á estos actos , pero
«Cuando tuvieren por conveniente trasla su presencia no era de autoridad , sino de
darse á otro lugar podrán hacerlo con tal formalidad, era el primero de los convida
que sea á pueblo , que no diste de la Capi dos , nada mas. Que asistiese ó dejase de
tal mas que doce leguas, y que convengan asistir, que quisiese ó no quisiese (¡110 las
en la traslacion las dos terceras partes de Córtes se abrieran , todo se realizaba de la
los diputados presentes. » (Art. 105). misma manera , ni su voluntad ni su pre
El tiempo en que debian principiar las sencia podían nada.
sesiones asi como la duracion , no dependía Si el Rey juzgaba conveniente la reunion
de la voluntad del Rey. « Las sesiones de de Córtes extraordinarias , no era él quien
las Córtes en cada año durarán tres meses debia convocarlas , sino la Diputacion per
consecutivos, dando principio el dia pri manente. «La Diputacion permanente de
mero del mes de marzo. » (Art. 106). Córtes las convocará ( extraordinarias ) con
Si al Rey le interesaba aprovecharse de señalamiento de dia en los tres casos si
alguna oportunidad favorable , prorogando guientes.
algunos meses las sesiones , tampoco podía
hacerlo. « Las Córtes podrán prorogar sus Tercero : Cuando en circunstancias críti
sesiones cuando mas por otro mes en solos cas y por negocios árduos tuviere el Rey
dos casos; primero, á peticion del Rey; por conveniente que se congreguen , y lo
segundo si las Córtes lo creyeren necesario participare asi á la Diputacion permanente
por una resolucion de las dos terceras par de Córtes. » (Art. 162).
tes de los diputados. » (Art. 107). Como si no bastaran todavía estas, y
Teníanse las juntas preparatorias en los otras muchas precauciones para encadenar
dias prescritos por la ley; celebrábase la la potestad real , se añadió : « Las restric
última el dia 25 de febrero , dia en que ciones de la autoridad del Rey son las si
prestaban los diputados el juramento y ele guientes :
gían presidente, vice-presidente y cuatro Primera: «No puede el Rey impedir
secretarios; con lo que (dice el art. 118) bajo ningun pretexto la celebracion de las
«se tendrán por constituidas y formadas Córtes en las épocas y casos señalados por
las Córtes. » la Constitucion , ni suspenderlas ni disolver
Por donde se echa de ver que la solemne las , ni en manera alguna embarazar sus
apertura á la cual debia asistir el Monarca, sesiones y deliberaciones. Los que aconse
no era mas que una mera ceremonia, pues jaren ó auxiliasen en cualquiera tentativa
se entendían constituidas y formadas las para estos actos , son declarados traidores,
Córtes, antes que ella se verificase. Los y serán perseguidos como tales. » (Art. 172).
artículos siguientes dan una idea de lo que Hasta en el ejercicio de las facultades que
era para este efecto la autoridad del Rey. la Constitucion le otorgaba se hallaba el
« Se nombrará en el mismo dia (25 de fe Rey ligado por el Consejo de Estado , que
brero) una diputacion de veinte y dos indi á su vez era tambien hechura de las Córtes.
viduos, y dos de los secretarios, para que « El Consejo de Estado es el único conse
pase á dar parte al Rey de hallarse consti jo del Rey, que oirá su dictámen en los
tuidas las Córtes, y del presidente que han asuntos graves y gubernativos, y señalada
elegido, á fin de que manifieste si asistirá mente para dar ó negar la sancion á las le
á la apertura de las Córtes, que se celebra yes , declarar la guerra y hacer los trata
rá el dia primero de marzo. » (Art. 119). dos. » (Art. 236).
«Si el Rey se hallase fuera de la Capital, Y ¿ cómo se formaba ese Consejo ? « To
se le hará esta participacion por escrito, dos los consejeros de Estado serán nombra
y el Rey contestará del mismo modo. » dos por el Rey á propuesta de las Córtes. »
(Art. 120). (Art. 233).
« El Rey asistirá por sí mismo á la aper ¿Cómo se gobernaba el Consejo? «El
tura de las Córtes, y si tuviere impedimen Rey formará un reglamento para el gobier
to, lo hará el presidente el dia señalado sin no del Consejo de Estado , oyendo previa
 — 36
mente al mismo ; y se presentará á las Cor Constitucion es muy lata , tambien es muy
tes para sn aprobacion. » ( Art. 238 ). elástica ; y sin quebrantarla en un ápice,
¿ Podía el Rey deshacerse de consejeros es dable hacer en el Senado mejoras de
que no fuesen de su agrado ? « Los conse importancia. La ley fundamental asienta el
jeros de Estado no podrán ser removidos principio de eleccion , y asi no es posible
sin causa justificada ante el tribunal Supre hacer la dignidad hereditaria ni vitalicia,
mo de Justicia. » (Art. 239). como en otros reinos ; pero al menos seria
De suerte que la potestad real estaba re conveniente aprovechar la latitud que per
sidenciada por el ministerio responsable, miten las bases establecidas por ella, y
por el Consejo de Estado , por las Córtes, desenvolverlas del modo conveniente , con
y la Diputacion permanente. la reforma de la ley electoral. Las calida
Añádase á todo lo dicho , el veto abso des que la Constitucion exige para ser Se
luto que la Constitucion de 1837 concede nador están contenidas en su artículo 17,
al Rey, y tendremos evidenciado que no es que dice : « Para ser Senador se requiere
la existencia del cuerpo intermedio loque ser español, mayor de cuarenta años, y
hace menos los graves conflictos entre las tener los medios de suhsistencia y las demás
Córtes y el monarca , sino la diferente dis- circunstancias que determine la ley electoral.»
"bucion de facultades que se ha hecho en Las últimas palabras del artículo dan pié
nstitucion vigente. Si suponemos que á que se haga mucho mas difícil la entrada
;iste solo el Congreso de diputados , cual en el Senado , y se logre una reunion de
lo arregla la Constitucion de 1837, tam hombres que á mas de su importancia le
poco será posible que los conflictos sean gal , la tenga real y efectiva ; haciéndose
tan peligrosos y frecuentes. que el Senado represente un conjunto de
Hay todavía otra reflexion que hacer, la luces, moralidad y fuerza, que le haga
cual manifiesta la sinrazon de los que atri mas respetable de lo que ha sido hasta
buyen á la prevision y eficacia de la ley, aqui. Y no se crea que desconozcamos los
lo que solo dimana de las circunstancias. inconvenientes que en esto se atraviesan,
Comparar la presente época con la de 1820, y la suma dificultad de alcanzar el resulta
es confundir lastimosamente los tiempos y do apetecido , sean cuales fueren los me
las cosas. Entonces , la revolucion era jó dios que se adopten ; pero cuando existen
ven , ahora es caduca ; entonces no habia los males, preciso es trabajar en atenuar
podido satisfacer todavía sus pasiones avie los, ya que no sea posible destruirlos.
sas, ahora casi no le queda que desear; La ley electoral formada por las Córtes
entonces, habia en el trono una persona constituyentes , se resiente como es natu
que por necesidad era su enemiga , hasta ral , de su origen democrático ; y asi es que
ahora han ocupado el mando supremo, las calidades para ser Senador se señalaron
primero la Reina viuda que inauguró el de tal suerte , que se rodeó esta elevada
sistema representativo , despues Espartero, dignidad de las menores restricciones posi
hechura de la revolucion misma ; entonces bles. El artículo 50 dice asi: «Para ser
veia á la Europa en actitud amenazadora Senador se requiere además poseer una
llevando á vanguardia los ejércitos france renta propia ó un sueldo de 30000 reales
ses, ahora nó; ahora se halla triunfante vellon al año, ó pagar 3000 reales vellon
despues de siete años de lucha , y durante anuales de contribucion por subsidio de
esta, vióse siempre con el apoyo de la comercio.
Francia é Inglaterra. La situacion es pues « Solo servirán para este objeto los suel
muy diferente, su carácter no puede ser el dos de los empleos que no pueden perder
mismo. El atribuir determinados efectos á se sino por causa legalmente probada, y
tal ó cual institucion , cuando hay tantas los que con arreglo á las leyes vigentes se
otras concausas que pueden haberlas pro disfruten ó haya derecho de obtener por
ducido , es raciocinar con mucho desa retiro, jubilacion ó cesantía.
cierto. « La renta propia , el sueldo y la contri
No intentamos significar con esto que el bucion podrán acumularse para completar
alto cuerpo colegislador sea inútil , pero sí la suma necesaria , en cuyo caso cada real
nos proponemos indicar la necesidad de de contribucion , equivaldrá á 10 de renta
organizarle por medio de la ley electoral, ó sueldo.
de manera que pueda llenar mejor el obje- Treinta mil reales de renta es cantid
¡ instituto. En esta parte, si bien la suficiente para vivir c
 — 37
para dar al que la posee mucha importan chos que le diesen el derecho á la percep
cia á los ojos del pais, ni asegurarle la cion del sueldo, ó con otros medios que
conveniente influencia para que su voto se creyesen convenientes; pero debiera es
imponga el respeto que imponer debieran tablecerse que nunca pudiesen tenerse por
los que se emiten en el alto cuerpo cole válidas las actas, si no estuviesen acompa
gislador. No obstante, siendo esta renta ñadas de los documentos justificativos.
propia, fuera al menos una garantía de Esta restriccion produciría un gran bien,
independencia; pero computándose tam cual fuera el de obligar indirectamente á
bien el sueldo, y pudiéndose acumular pa los pueblos á elegir personas conocidas en
ra completar la suma necesaria , la renta el pais: pues que se haria muy difícil echar
propia , el sueldo y la contribucion , resul mano de otros, atendido que la justifica
ta ensanchada de tal manera la categoría cion de la renta ante un colegio electoral
de los elegibles , que segun las circunstan donde el elegido careciese de relaciones,
cias , y los amaños de los partidos , el Se mucho retardo y embarazos. De
nado podrá ser lo que se quiera. esta suerte, sin contravenir al artículo 19
Añadamos á esto , que no hay quien va de la Constitucion que dice : « todos los es-
ya á examinar con detenimiento si los ele ioles en quienes concurran estas calida-
gidos reunen ó nó los treinta mil reales, y pueden ser propuestos para Senadores
se verá que la ley electoral deja libre la por cualquier provincia de la monarquía »
entrada al Senado, sin que exista apenas se daria á la eleccion un rumbo acertado,
garantía de que no ocuparán tan elevado se evitaría el nombramiento de personas
puesto sugetos indignos. de quienes no tiene mas noticia ki gene
Ya (pie el fijar los medios de subsisten ralidad de los electores, que el haberlos
cia y demás circunstancias que han de con visto figurar en una lista confeccionada á
currir en el Senador pertenece á la ley elec veces por cuatro intrigantes , y el cargo de
toral, con esta se podrían remediar en parte legislador no corriera los azares de caer en
los inconvenientes indicados , no conten manos de quien rechazado del pais donde
tándose con una renta de treinta mil rea está conocida su ineptitud , ó sus malas
les , no dejando que se acumulase esta con partes , anda á caza del puesto de Senador
el sueldo, y además exigiendo la compe haciéndose incluir en listas de provincias
tente justificacion documentada, la que de lejanas, donde no ha llegado la fama de sn
biera acompañar las actas so pena de nu nulidad ó fechorías.
lidad. El artículo 17 de la Constitucion deja á
La renta propia no debiera bajar de se la ley electoral el determinar no solo los
senta mil reales al año; y si se quisiese medios de subsistencia que ha de disfrutar
permitir que en algun modo se acumulase el tancias;
Senador,
y esta
sinoúltima
tambien
expresion
las demás
da circuns-
lugar á
con el sueldo , fuera bueno exigir que el
sueldo fuera de empleo que no pueda per muchas combinaciones que restrinjan mas
derse sino por causa legalmente probada; y mas el círculo de los elegibles para la
y que en todo caso la renta propia ascen dignidad senatorial.
diese á cuarenta mil reales. Asi de una ¿Cuáles serán las demás circunstancias que
parte se franquearían las puertas del Sena convenga exigir? Claro es que estas si han
do á empleados de alta categoría, y de otro de ser adaptadas al objeto , deben conside
se tuviera una garantía de que el Senador rarse como un signo de inteligencia , pro
no es un aventurero , y que no carece de bidad , ascendiente sobre sus compatriotas,
motivos para interesarse en el bien del independencia del gobierno y de los parti
pais. dos, y de ánimo ageno de miras interesa
Para obviar engaños, y guardarse de das 6 torcidas. La dificultad está en encon
hombres de fortuna improvisada, seria trar este signo, y de manera que no pueda
tambien muy importante que de dicha ren ser equívoco. Merced á los vaivenes de la
ta , al menos los treinta mil reales estuvie revolucion , ha subido tan de punto la di
sen radicados en predios rústicos ó urbanos. ficultad indicada, que ni aun pueden servir
El Senador debería estar obligado á pro las condiciones exigidas en el Estatuto Real,
bar su renta, con las escrituras dearriendo para la dignidad de procer. Algunas de
ó de contratos , con la exhibicion de los ellas , abrirán la puerta del Senado á per-
recibos de las contribuciones, con la pre sonages , que por cierto no abundan en las
sentacion de los nombramientos y despa calidades necesarias para sentarse con pro
vecho en los escaños del alto cuerpo cole
gislador. Sabido es que á mas de los arzo
bispos, obispos, grandes de España, y
títulos de Castilla, debia constar el Esta
mento de proceres « de un número inde
terminado de españoles, elevados en digni
dad é ilustres por sus servicios en las varias
carreras, y que fuesen ó hubiesen sido se
cretarios del Despacho , procuradores del
Reino, consejeros de Estado, embajadores
ó ministros plenipotenciarios , generales de
nales
mar ósupremos.»
de tierra, óCiertamente
ministros deque
losentribu-,
tiem
pos ordinarios estas circunstancias ofrecen
no insignificante garantía ; pero en la ac
tualidad , cuando la revolucion ha llevado
arrastrando por el súclo las mas altas dig
nidades, cuando las insignias mas distin
guidas se han visto profanadas , cuando la
intriga, la inmoralidad y la impudencia,
han ocupado el puesto del mérito y de la
virtud, ¿qué garantizan algunas de las
condiciones expresadas? El haber sido se
cretario del Despacho, ¿es signo por ven
tura de calidades eminentes , ni distingui
das , ni buenas , cuando han sido tantas las
mudanzas ministeriales , y con tal ligereza
se ha procedido á los nombramientos, y
con tan indignos medios se han escalado
las sillas? ¿Pudiera ser un título de orgu
llo el haber sido ministro en semejantes
épocas , cuando se ha deslustrado de tal
manera aquel puesto , que apenas brindara
á la ambicion, si no excitase la codicia? Y
¿qué diremos de la mayor parte de las
otras condiciones ? Ah ! ¿ por qué recordar
lo que han visto nuestros ojos? ¿por qué
citar nombres propios , y agraviar asi los
manes de los españoles , que en los tribu
nales, en el consejo, en el campo de bata
lla, dieron un dia lustre á su patria, legan
do á la posteridad la fama inmortal de sus
talentos, de sus virtudes, y hazañas?
El título de arzobispo ú obispo electo no
debería bastar para ser Senador ; la confir
macion debiera ser circunstancia indispen
sable. El confirmado ofrece las garantías
suficientes, el simplemente electo, nó; an
tes bien podrá suceder mas de una vez,
que llev ado de miras ambiciosas ó afectado
por resentimientos particulares, vaya á dis
traer la atencion del Senado, y á escanda
lizar al público con discusiones perniciosas.
El ser grande de España ni título de
Castilla, tampoco pueden ser calidades bas
tantes para ser elegible. Hay blasones muy
ilustres por cierto , pero estos ya reunirán
la renta necesaria, y para nada habrán
menester excepcion.
En cuanto á las demás circunstancias,
quizás podrían excogitarse combinaciones
en que fuera conveniente tenerlas presen
tes; sin embargo parece que seria mejor
no hacer en favor de ellas ninguna excep
cion por lo tocante á la renta exigida. En
tonces se nos objetará, no aprovechareis
las luces de muchos hombres que se han
distinguido en sus carreras, y que sin em
bargo no han alcanzado la renta señalada:
pero á esto responderemos , que estos
hombres serán en escaso número, que
además les quedan abiertos mil caminos
para servir al Estado, en las secretarías del
Despacho, en los tribunales supremos, en
las embajadas , en los mandos importantes,
en los consejos ; todo lo cual equivale sin
duda al peso que su voto podria tener en
el Senado. Por el temor de excluir á un
hombre ilustre , no se debe franquear la
puerta á los aventureros; y además, si en
tre los excluidos hay alguno que pueda ser
de provecho á la patria, ya quedan indica
dos los medios de no alejarle sin destino.
Sea cual fuera la opinion que se adopte
sobre las circunstancias que la Ley electo
ral deba exigir de un Senador, creemos
que todos los hombres amantes del bien de
su patria, estarán de acuerdo en que la
institucion del Senado demanda mas séria
atencion de la que se le ha dispensado has
ta ahora , que si ha de llenar los altos fines
á que se la destina, es preciso que por me
dio de una buena Ley electoral se impida
la entrada en aquel recinto á la ineptitud
y perversidad , que es necesario que los
elementos que formen el alto cuerpo, sean
de suyo poderes sociales antes de serlo le
gales ; que representen la inteligencia , la
moralidad y la fuerza del pais , que figu
ren con dignidad entre el Trono y el Con
greso, para que de esta suerte la institu
cion sea algo mas que una forma regla
mentaria, y tenga de fundamental algo
mas que el nombre.—/. B.
i
i

DE LAS
COMUNIDADES RELIGIOSAS EN ESPAÑA.
Artíci lo 2.°
Dado que vivimos en un siglo de posi
tivismo material, pos permitiremos una
observacion sobre las ocupaciones á que
podrían dedicarse con provecho propio y
ventaja del público los nuevos solitarios.
No creemos que los cestos, las telas grose
ras, y otros artefactos sencillos y de poco
valor , en cuya fabricacion se ocupaban los
monges de Oriente, sean á propósito en
nuestros tiempos sino para hermosear poé
ticos recuerdos de una vida inocente. Las
ocupaciones no solo deben encaminarse á
no dejar el espíritu en ocio , distrayéndole-
de los pensamientos malos y apartándole de
entretenimientos dañosos, sino que es pre
ciso procurar en cuanto cabe , que el tra
bajo mental ó material sea verdaderamente
útil, que produzca resultados positivos, y
que cuando menos satisfaga con su fruto el
tiempo y las fuerzas que en él se invir
tieren.
Por estos motivos, dejamos para los uto
pistas el empeño de emplear á los monges
en los trabajos manuales á que en otros
tiempos se dedicaron. Atendido el desarro
llo que ha tomado la industria , y la exten
sion y perfeccion de la maquinaria, tam
poco conceptuamos posible que se imitara
á aquellos monges mas ingeniosos que se
gun nos refiere Paladio, ejercían toda clase
de oficios. Sabido es que la organizacion
social antigua en nada se parece á la mo
derna; lo que entonces pudiera ser muy
útil al público, y hasta ganancioso á los
que en su retiro se ocupaban en estelinage
de tareas , no seria mas en la actualidad
que un mero pasatiempo, sin esperanza de
que fuera recompensado el trabajo , á no
ser que se le quisiese extender en una es
cala que comprometiese el sosiego de los
cenobitas , y rebajase el santo decoro con
que deben ofrecerse á los ojos del público.
pues
I'arece
de laspues
prácticas
que eldetiempo
su instituto
sobrante
, lectu
des
ra de las Sagradas Escrituras , y estudios
sobre la Religion , no podrían ocuparlo de
una manera mas agradable, mas útil, y al
propio tiempo mas decorosa , que dedicán
dose á aquella clase de ciencias naturales
que no necesitando de costosos instrumen
tos, ni continuo contacto con el inundo, se
avienen con la paz de los campos, y la abs
traccion de la soledad. La agricultura,
horticultura , selvicultura , la química en
sus aplicaciones á los sobredichos ramos,
la botánica en sus partes mas acomodadas
al clima y demás circunstancias del lugar,
la geología en sus relaciones con el pais de
la residencia, podrían llenar útil y agrada
blemente los intervalos de la oracion y de
los estudios sagrados. Estas ocupaciones
procurando á las ciencias muchos adelan
tos, concillarian á los monges aquella esti
macion y aprecio que unidos á la venera
cion inspirada por una vida pura y austera,
arrancan del corazon del hombre aquel
sentimiento que mas se aproxima á la ado
racion ; pues en él se combinan el agrade
cimiento de un beneficio, el reconocimiento
de alta sabiduría , y la admiracion por la
práctica de virtudes heroicas.
Inglaterra es uno de los paises donde
mas adelante se han llevado los progresos
de la agricultura ; y sin embargo los mon
ges benedictinos establecidos allí, han lo
grado distinguirse por sus mejoras en este
ramo. Esos religiosos que al beneficio de
la enseñanza reunen el del perfecciona
miento material, han comprendido el espí
ritu del siglo, conociendo cuáli importante
era manifestarle con hechos palpables que
la religion no estaba reñida con el adelanto
de los pueblos en ningun género ; y que
semejante á su Divino Maestro, mientras
va caminando hácia el cielo, sabe/wwor ha
ciendo bien sobre la tierra. Perlransiit bene-
faciendo.
Los modernos, tan ansiosos del progreso
científico, han descuidado en demasía el
poderoso auxiliar que en ciertas materias
podrían encontrar en los monasterios. Lo
sucedido en los siglos bárbaros, en la épo
ca del renacimiento, y aun mucho tiempo
despues, hubiera debido servir de leccion
para en adelante. Sabido es que el no in
terrumpido encadenamiento de observacio
nes es el mejor medio para hacer progre
sar las ciencias naturales , y que á ellas
puede aplicarse tambien en algun modo el
 — 40
principio de la division del trabajo. ¿A qué continúan desenvolviéndose cada dia con
grado de exactitud y delicadeza no puede la nueva luz que suministran los experi
llevar sus experimentos un hombre que en mentos sucesivos.
ellos se ocupa por espacio de medio siglo, Si se replica que cabalmente las ciencias
sin mas distraccion que el murmullo de los de observacion son las que habian sufrido
vientos y de los bosques, sin mas escenas mas atraso en los últimos tiempos, adver
que llamen su atencion que los campos y tiremos que donde esto se habia verificado,
el firmamento? ¿un hombre que se ocupa no existia la observacion propiamente di
porque á ello le impelen la necesidad de cha; y que la física era tratada por un
evitar el tedio , de huir de los malos pen método puramente especulativo , no adu
samientos , y la obligacion que le imponen ciéndose los hechos sino como una especie
las reglas de su instituto? Y cuando los de ejemplos para ilustrar la doctrina de
años han consumido su existencia , cuando antemano establecida. En efecto: basta te
su vista percibe mal los objetos , y sus ma ner alguna noticia del sistema que domi
nos trémulas no sostienen con seguridad y naba en estas materias para no ignorar que
pulso los instrumentos que le sirven para consistía en una serie de principios y de
interrogar á la naturaleza , aquel hombre ducciones, que encerraban mucho de abs
no va á descender todo entero al sepulcro; tracto y puramente metafísico. Arreglada
largos años antes que se corte el hilo de de este modo la enseñanza , claro es qne
sus dias, se habrán formado á su lado ella inclinaba de suyo á prescindir de la
aventajados discípulos que estarán en pose observacion de la naturaleza ; y añadién
sion de sus manuscritos y apuntes, que dose á esto el descuido del estudio de las
habrán recogido de su boca todo el caudal matemáticas , se hacia hasta imposible dar
de observaciones recogido en una dilatada un paso adelante , supuesto que la natura
vida , que le habrán asistido en las opera leza toda es eminentemente matemática.
ciones, que con él habrán practicado los ex Pero es evidente que los estudios que ahora
perimentos , que habrán heredado sus re se principiasen no se parecerian á los ante
laciones con los sabios seglares , que podrán riores, que estos se hallarían cimentados
sustituir completamente á su difunto maes sobre la observacion , y que no teniendo
tro. El espíritu de conservacion y perpe punto de contacto con los antiguos méto
tuidad que distingue á estas corporaciones dos , comenzarían poniéndose desde luego
se comunicará á la ciencia ; y las naturales al nivel de los últimos adelantos. Una vez
perpetuadas sin interrupcion , son las cien establecida la observacion como primer
cias en progreso, dado que este consiste elemento científico, es ya imposible no
principalmente en el acumulamiento que proseguir en ella ; la ciencia podrá estar
se hace de las adquisiciones presentes con mas ó menos descuidada segun la mayor
la herencia de las pasadas. ó menor asiduidad de observacion y deduc
Contra estas reflexiones se objetará tal cion de los que en ella se ocupen ; pero no
vez que el mismo espíritu tradicional y es dable volver á las puras teorías y con
conservador que distingue á esta clase de vertir en meramente especulativo é hipo
corporaciones seria un obstáculo á sus pro tético lo que se ha cimentado sobre el tes
gresos en las ciencias naturales; alegándo timonio de los hechos.
se para robustecer la objecion el ejemplo Además , que fuera desconocer lastimo
de lo sucedido en los últimos tiempos. Mu samente la historia de las ciencias natura
cho tiempo habia que estaban desterradas les y exactas el decir que las comunidades
de las escuelas filosóficas cierta clase de religiosas no han contribuido poderosamen
opiniones, y se las ve todavía sostenidas y te á sus progresos ; pretendiendo que el
defendidas con vigor en los claustros ; ya espíritu conservador que las distingue hace
nadie en el mundo se acordaba de las doc que se aferren obstinadamente á las opi
trinas arístotélicas, y aun servían de libro niones antiguas , no cuidando de los ade
de texto en algunos institutos religiosos, lantos que en dichos ramos van haciendo
los autores mas aferrados á ellas. Esta di los sabios del siglo.
ficultad, que no deja de ser algo grave, Cabalmente el primer impulso que en
quedará desvanecida si se advierte que Europa recibieron las ciencias naturales y
tratando de las ciencias de observacion no exactas les vino de un monge que reunien
existe el riesgo de estacionarse como en las do los conocimientos de los árabes , á los
otras ; porque ó pierden su naturaleza , ó || restos que pudo hallar en los paises i

nos , abrió en el siglo X , en este mismo
siglo que no sin razon se apellida de hier
ro , cátedras de matemáticas , de geografía
y astronomía. Ya entenderán nuestros lec
tores , que hablamos del famoso Gerberto,
que despues fué Papa con el nombre de
Silvestre II. El ingenioso cenobita constru
yó con sus propias manos dos esferas, para
hacer sensibles á sus alumnos las verdades
astronómicas. En la una estaban señalados
los polos, los solsticios, los equinoccios, y
además todos los círculos con los signos
de las constelaciones del Zodíaco; de ma
nera que se ofreciesen á la vista los fenó
menos del movimiento diurno anuo del sol,
explicándose de esta suerte su orto y ocaso,
y la variedad de las estaciones. En la otra,
estaban figuradas las estrellas por medio
hilos de alambre y de hierro; orientándose
la esfera con una abertura por la cual se
podia fácilmente ver el polo celeste. La
construccion era tan á propósito para la
enseñanza, que uno de sus contemporá
neos nos dice que bastaba la explicacion de
un signo para que sin maestro comprendie
sen todo lo demás, las personas no versa
das en astronomía.
Escribió tambien una obra sobre geo
metría , que aun en la actualidad y no obs
tante los adelantos de ocho siglos, no deja
de ser interesante. Como era tanta la igno
rancia de aquella época, y en tan reducido
número los que conocían las cuatro reglas
de la aritmética , hizo construir un tablero
donde con caractéres formados adrede, ex
plicaba las operaciones de multiplicar y
dividir, hablando á un mismo tiempo al
entendimiento y á los ojos.
Tanto se aventajaba á su siglo el saber
de este hombre singular, que sus enemigos
le calumniaron suponiéndole entregado á
la magia. De este y otros cargos le vindica
el aleman Hock en la obra que acaba de
publicar , titulada : Historia del Papa Silves
tre II y de su siglo. Por ella se ve que si
bien este hombre insigne no estuvo exento
de faltas, no dejó de ser la lumbrera de su
tiempo , y uno de aquellos genios extraor
dinarios que mas contribuyen á impulsar la
humanidad en la carrera del adelanto*
En el siglo XIII vemos que otro religioso
adquiere altísima fama en materia de co
nocimientos naturales , hasta llegar el vul
go á atribuirle invenciones maravillosas.
Hablamos de Alberto Magno. Por cierto
que no serán muchos ahora los que den
crédito á la construccion de la famosa cu
lIbeza
— de metal que respondía de repente á
todo linage de cuestiones ; ni tampoco que
el buen religioso cambiase el invierno en
estío , un dia que habia convidado á comer
á Guillelmo conde de Holanda y rey de los
romanos; pero estas fábulas prueban la re
putacion de aquel á quien se atribuyen,
indicando que debia de ser mucha la ven
taja que llevaba á los hombres de su
tiempo.
En el propio siglo florecía en Inglaterra
el insigne franciscano Roger Baron, tan
célebre por sus conocimientos en las cien
cias naturales , y por este motivo acusado
de magia ; de cuyo cargo se vindicó com
pletamente. Hizo los mayores adelantos en
matemáticas, astronomía, óptica, química,
llenando de asombro á sus contemporá
neos, y mereciendo por esta razon el título
de Doctor admirable. Parece imposible que
en el siglo XIII se llevasen tan adelante los
progresos científicos ; bastará decir que Ba-
con propuso ya al Papa Clemente IV la
reforma del calendario , y que si bien no
conoció los anteojos, los telescopios y mi
croscopios tales como ahora los disfruta
mos , no obstante preparó el camino á ul
teriores descubrimientos , con sus trabajos
sobre la refraccion de la luz , sobre los vi
drios y espejos esféricos, sobre el tamaño
aparente de los objetos, y otros puntos
análogos. En un tiempo en que estaba tan
descuidada la observacion , hizo ya notar
que ella era necesaria si se quería progre
sar en las ciencias; adelantándose asi á in-
|| dicar lo que tres siglos despues habia de
reducir á sistema su célebre compatriota el
otro Bacon de Verulamio.
Fácil seria recordar nombres ilustres que
nos presentan la santidad del claustro reu
nida con gran copia de conocimientos en
las ciencias naturales y exactas ; pero pa
sándolos por alto citaremos al famoso Ca-
valieri , quien preparó el camino al descu
brimiento del cálculo infmitesimal. No in
tentamos ni aun remotamente, disminuir
la gloria de Newton y Leibnitz ; pero no
fuera nada extraño que los trabajos del
sabio Jesuato, italiano, hubiesen contribuido
á inspirar aquel pensamiento sublime, eter
no monumento erigido á la gloria del en
tendimiento del hombre , y que tan vigo
rosamente empujó á la ciencia en el camino
de regiones desconocidas.
Los comentarios de las obras de New ton,
de esas obras que por su profundidad no
estaban al alcance de la mayor parte de los
 — 42 —
ores de la ciencia , sabido es que sa blando de monges nuevamente establecí-
lieron de las celdas de dos padres mínimos, dos, y que por lo mismo estarían faltos de
tan famosos por su saber como por su mo los archivos y bibliotecas que abundaban
destia : La Sueur y Jacquier. Asi el Comen en los antiguos monasterios; sin este auxi
tario ¡sobre los principios de Newton como el lio es imposible dar un paso; y por lo mis
Tratado de cálculo integral, lo compusieron mo seria confundir los tiempos y las cir
estos dos religiosos , trabajando cada cual cunstancias, el pretender que se empeñasen
lo que creia conveniente, cotejándolo en eh semejantes tareas. Si se nos replica que
seguida , y confundiendo el fruto de sus los monges podrían aprovecharse de losar-
tareas, de manera que los lectores no pu chivos y bibliotecas que existiesen en los
dieron saber la parte que á cada uno cor paises comarcanos, responderemos: i.°
respondía. Ambos compusieron por entero que no siempre se ofrecería esta oportuni
el Comentario sobre Newton; mas no sabe dad; 2.°, que aun cuando se presentase,
mos á cuál de los dos pertenece lo princi difícilmente fuera de tal naturaleza que
pal del merito. suministrase pábulo á trabajos de alguna
Estos gloriosos recuerdos debieran bastar extension ; 3.° que para aprovecharla seria
para que no cause ninguna extraíieza que menester que los monges dejasen la sole
presentemos como muy acomodado á la dad , que pasasen temporadas en casas par
vida solitaria el estudio de las ciencias na ticulares, ya en el campo, ya en los pue
turales , y no demos mayor importancia á blos, ya en las ciudades, lo que acarrearía
otra clase de tareas mas análogas á las tra distraccion, relajara la disciplina , hacien
diciones de los monasterios, pero no mas do descender á ios solitarios de la altura
adaptadas á la gravedad de su instituto. En mística en que deben mantenerse sobre el
los siglos bárbaros, se nos dirá, se ocupa resto de los hombres.
ron los monges en la traslacion y conserva Es importante , es necesario que los
cion de los manuscritos mas preciosos; monges que nuevamente se establezcan,
posteriormente contribuyeron de una ma procuren vivir en la mayor abstraccion y
nera muy particular al renacimiento y des soledad , que muestren á los ojos del mun
arrollo de las letras; y por fin en la época do un vivo ejemplo de la mas acendrada
de la crítica , cuando se acometió con mas virtud , y le recuerden los edificantes mo
empeño la ilustracion de lo que antes amon delos de los tiempos primitivos. La incre
tonara la erudicion indigesta , se señalaron dulidad ha procurado deslustrar por todos
por sus inmensos trabajos en esta clase de los medios imaginables esta clase de insti
estudios, haciendo competir la extension tuciones; y una de las artes de que con
con la profundidad y la exactitud. ¿Por mas éxito se ha valido, es el achacarles
qué pues no podrían continuar ahora en que habian degenerado , que en ellas esta
sus antiguas tareas? ¿Por qué los monges ba olvidada la regla de los santos fundado
del siglo xix no se dedicarían como sus res , encareciendo adrede la austeridad de
ilustres predecesores á la aclaracion y per estos últimos, para exagerar con el con
feccionamiento
profana? ¿Por qué de lanohistoria
revolverían tambieny | traste la relajacion de los contemporáneos.
eclesiástica
Por este motivo , y supuesto que los ene
los archivos donde están enterradas tantas migos de la Religion clavarían ávidamente
preciosidades , donde yace por decirlo asi los ojos sobre los nuevos monasterios con
la vida política y doméstica de nuestros as el deseo de descubrir en ellos miras mun
cendientes, que tan olvidada han dejado danales , conviene que se tenga presente el
hasta aquí los historiadores, no cuidando dicho del Apóstol : Ab omni specie mali abs-
sino de conservarnos nombres de príncipes tinete vos; absteneos de toda apariencia de mal.
y reyes, pintarnos sangrientas batallas y No basta que las acciones no sean pecami
otras cosas por este tenor , que poco ó nada nosas : es preciso andar con tal miramiento
nos enseñan sobre la vida íntima de los y cautela que ni la malicia mas refinada
pueblos; sobre esa vida que tanto nos agra encuentre una rendija por donde herir con
da ver descrita , y á cuyo análisis nos im su envenenado aguijon. Fuera competen
pele el espíritu investigador y filosófico de cias ni rivalidades de ninguna clase con el
nuestra época? clero secular , y mucho menos con los pár
Especiosas como son estas reflexiones, rocos vecinos : fuera toda pretension que
quedarán destituidas de todo peso , si se ni de lejos pueda excitar sospechas de mi
considera que en este artículo estamos ha ras interesadas ó de complacencia de i
 — 43
Í>ropio: fuera todo lo que pueda lisonjear posible fijar sobre las mismas la vista, sin
a vanidad : fuera todo cuanto contribuya oir el cántico de armonía que se dirige sin
á suavizar la austeridad de la vida : fuera cesar del cielo á la tierra., ¿Qué magníficos
lo que disminuya aquella sobriedad en el pasages no se hallan en la Sagrada Escri
trató que impide el intimarse demasiado tura sobre las maravillas de la creacion ?
con las familias , es preciso que cuando se ¿ Quién no recuerda el lenguage con que
lleguen al monasterio los seglares, quede el Espíritu Divino hacia hablar al Profeta
con su solo aspecto edificada la piedad, Rey , conduciéndole como por la mano á
confortada la fe, confundida la increduli admirar los portentos de aquel que asentó
dad y forzada á exclamar como los magos la tierra sobre sus bases, que señaló sus
de Egipto : Digitus Dei est hic : aquí hay el lindes al mar, que extendió como un pa
dedo de Dios. bellon la inmensidad del firmamento ? Dig
A estos santos fines no perjudicaría la na pues y muy digna fuera de la vida reli
ocupacion que arriba hemos aconsejado; giosa la ocupacion de los monges en el
de la propia manera que el trabajo manual estudio de las ciencias naturales; mas de
no rebajaba el- decoro de los monges pri una vez les sucediera , que despues de ha
mitivos. El estudio de las ciencias natura ber adorado á Dios en el silencio de la ora
les , y los experimentos análogos , sustitui cion , continuarían deshaciéndose en lágri
ría dicho trabajo , de un modo acomodado mas de gratitud y de amor, al encontrarse
al espíritu de la época y mas útil á la hu de nuevo con su sabiduría y bondad en los
manidad. Si al visitar los curiosos ó los arcanos de la naturaleza.
devotos la solitaria mansion, sorprendiesen Además que estas tareas á la vez espe
á un cenobita con una flor en la mano des culativas y prácticas traen la doble ventaja
componiéndola, examinándola á la luz de la de ocupar al mismo tiempo el espíritu y el
ciencia ; á otro disecando un insecto para cuerpo, no consintiendo la ociosidad bajo
formar parte de un museo escogido; áotro la apariencia del trabajo. Un hombre pue
en la cima ó pendiente de una escabrosa de pasar largas horas en su bufete , con el
montaña excavando la tierra para estudiar libro abierto delante de sus ojos, teniendo
la naturaleza de las capas formadas por los el espíritu sumamente distraido y disipado.
siglos ; á otro en el corazon de un espeso El jóven que á hora determinada ha de re
bosque observando las leyes del desarrollo citar un trozo ó dar cuenta de él , mani
de un árbol creciente , ó las de decadencia fiesta la mayor ó menor distraccion que ha
de otro que cuenta siglos de duracion ; na padecido en su aposento; pero ¿cómo sa
da perdería ciertamente de su crédito la berlo , tratándose de quien no está ya so
vida monástica ; antes al contrario, la con metido á semejante obligacion , y que se
sideracion de que aquellos hombres apar retira á su gabinete sin mas testigos que su
tados del mundo emplean tan últimamente conciencia? El trabajo puramente manual
el tiempo , que los intervalos que les dejan no está tampoco destituido de inconvenien
la oracion , los ejercicios de penitencia y el tes ; y por mas que digan los afectados en-
estudio de las cosas sagradas, los invierten comiadores de todo lo antiguo, no creemos
en la observacion de la naturaleza, procu que generalmente hablando fuese útil su
rando reconocer en sus obras al Criador á restablecimiento. Con bastante extension
quien sirven , y descubrir verdades prove expusimos mas arriba esta materia ; y por
chosas á sus semejantes, realzaría mas la lo concerniente á la edificacion espiritual
sublimidad y belleza del instituto , y con de los que le practican , advertiremos , que
tribuiría á desvanecer la preocupacion de siendo muchos los que no son á propósito
que la Religion sea enemiga de las ciencias, para la construccion de artefactos ingenio
dado que se las veria estrecharse y solazar sos , seria menester dedicarlos á cosas de
se tan amistosamente en el silencio de la mera rutina, las que si bien ocupan las
soledad. manos tienen en cambio la desventaja de
Hay en la contemplacion de la natura dejar ocioso el espíritu. ¿No os parece mas
leza algo de sublime, algo que inspira sen bello, mas digno, mas propio para gran-
timientos religiosos. La augusta mano del gear respeto á los monges y acatamiento á
Criador se descubre tan visiblemente en la Religion , el que un cenobita fuese visi
todas sus obras, resplandecen de tal mane tado en el momento de ocuparse en la re
ra en ellas su sabiduría y su poder , que á solucion de arduos problemas matemáticos
no estar cegado por impio orgullo , es im y físicos , en operaciones curiosas y delica
 das, que lio si se 1e encontrase pulien 44espíritu— universal que absorve , que identi
do unos mimbres, ó tejiendo un cesto? fica en sí todos los espíritus particulares?
J. B. ¿no es esto la proclamacion pura y simple
de un panteismo espiritualista? ¿no es esto
afirmar que Dios es todos los espíritus y
que todos los espíritus son Dios? ¿qué el
POLEMICA RELIGIOSA. pensamiento, el alma de cada hombre, no
es mas que una modificacion del Ser único
en el cual todos se confunden é identifican ?
Pero oigamos de nuevo el filósofo aleman ,
por ver si.acaso no habríamos comprendido
bastante bien el sentido de sus palabras.
CARTA NONA « Esta conciencia, continua Hegel , se halla
primero envuelta en un mero sentimiento
Á UN ESCEPTICO EN MATERIAS DE RELIGION. cuya expresion es el culto : en seguida la
conciencia se desenvuelve , Dios pasa á ser
objeto , y de aqui nacen las mitologías y
Mi estimado amigo : en la carta anterior todo lo que se llama la parte positiva de la
le manifesté á V. mi opinion poco favora religion; pero detenerse en este segundo
ble, á la moderna filosofía alemana, aven estadio donde el Dios del universo es ado
turándome á calificarla con una severidad rado en el mármol de Fidias , donde Jesu
que V. quizás debió de reputar excesiva. cristo no es mas que un personage históri
Este atrevimiento tratándose de hombres co, seria mentir contra el espíritu.»
que han adquirido mucha celebridad , y cu « En la religion los pueblos deponen sus
yas palabras son escuchadas por algunos ideas sobre la esencia del mundo y las re
cual si salieran de boca de oráculos infali laciones que con esta tiene la humanidad.
bles , me impone el deber de probar lo que El ser absoluto es aqui el objeto de su con
allí dije , y hacerlo de manera que no con ciencia ; hay otra mas allá que ellos se re
sienta replica. Bien se acordará V. de mis presentan , ora con los atributos de la bon
quejas sobre la doctrina de dichos filósofos dad , ora con los del terror. Esta oposicion
con respecto al panteismo , y que los acu no existe en el recogimiento de la oracion
saba de resucitar los errores de Spinosa , y en el culto : y el hombre se eleva á la
bien que envueltos en formas misteriosas union con el Ser divino. Pero el Ser divino
de un lenguage simbólico y enfático ; es la razon en sí y para si, la substancia uni
este cargo es el que voy á justificar con versal concreta , la religion es la obra de la ra
respecto á Hegel. zon que se revela.» Quizás extrañará V. que
Segun este filósofo, la religion es el el filósofo aleman se anduviera en tantos
« producto del sentimiento ó de la concien rodeos para venirnos á decir que la reli
cia que el espíritu tiene de su origen , de gion no es mas que una ulterior manifes
su naturaleza divina , de su identidad con tacion de la razon , que el Ser divino , el
el espíritu universal.» Podríamos dudar Ser objeto religioso y del culto , es decir
del verdadero sentido de aquella expresion Dios , no es mas que la razon misma , bien
su naturaleza divina, si anduviese sola , pues que en si y para sió bien la substancia uni
que siendo nuestra alma criada á imágen y versal concreta ; yo no sé si estará V. muy
semejanza de Dios , y distinguiéndose por versado en estas materias, para compren
su elevacion sobre todos los seres corpó der la gerigonza de un ser que es en si y
reos, dable seria pensar que Hegel solo para sí, que es la razon humana y que por
trataba de recordar la nobleza y dignidad añadidura es la substancia universal con
de nuestro espíritu fundando el sentimien creta. Sea como fuere procuraré darle á V.
to religioso en la conciencia que tenemos alguna explicacion del sentido que envuel
de que nuestro origen , nuestra naturaleza ven las enigmáticas palabras de nuestro
y destino, son muy superiores á ese peda metafísico.
zo de barro que envuelve nuestra alma que Para la inteligencia de esto debe V. ad
la embaraza y agrava. Pero el filósofo ale vertir que segun Hegel , el mundo entero
man tuvo cuidado de explanar sus ideas no es mas que la evolucion de la idea , y
añadiendo que nuestro espíritu era idéntico que segun el grado en que se encuentra la
con el espíritu universal. ¿Quién es este expresada evolucion , se dice que los :
 — 45 —
son en sí; y cuando esta ha llegado á mayor || fundirlo todo en el monstruoso panteismo,
progreso , se dice que los seres son para sí. comienza por dar á las palabras una signi
Me preguntará V. ¿qué es la idea? En dic ficacion inusitada y extravagante. Yo de
tamen de Hegel no es otra cosa que «la ar searía que se me explicase , que necesidad
moniosa unidad de este conjunto universal hay de tantos rodeos para llegar á decir
que se desarrolla eternamente » « todo lo nos , que en el mundo no hay mas que un
que existe , añade , no entraña verdad sino ser , o una substancia , que esta sufre di
en cuanto es la idea que ha pasado al esta ferentes modificaciones , y que todo cuanto
do de existencia, porque la idea es la rea existe no es mas que uno de los accidentes
lidad verdadera y absoluta.» Y no crea V. del conjunto universal que sin cesar se
que con semejante definicion se nos quiera transforma. Este es ciertamente el pensa
expresar la inteligencia divina , ó bien la miento de Hegel , esto indican sus miste
infinita esencia del Criador en la cual está riosas palabras; y ó tienen este sentido, ó
representado desde toda la eternidad , todo ninguno.
lo existente y todo lo posible ; nada de es La distincion de ser en sí y ser para si,
to: cuando Hegel habla de la armoniosa fórmulas con que expresa el filósofo las
unidad se refiere á este conjunto universal evoluciones de la idea , creo que tampoco
que tiene un desarrollo eterno , es decir al entrañan ningun sentido peculiar que pue
mundo mismo que va tomando diferentes da ilustrar en algo los arcanos de la natu
formas y modificándose de varias maneras. raleza. La virtualidad, la potencia, distin
« Para comprender, dice, lo que es esta evo tas de la realidad y actualidad, tampoco
lucion por la cual la idea se produce y aca son cosas nuevas en lo que significan de
ba , es preciso distinguir dos estados : el razonable. Todos sabiamos antes que nos
primero es conocido con el nombre de dis lo revelase Hegel , que el niño que acaba
posicion , virtualidad , potencia , y yo le de nacer tiene la razon virtual , mas no ac
llamo ser en si; el segundo es la actualidad, tual , es decir que su naturaleza desarro
la realidad , ó lo que yo apellido ser para llada con la edad alcanzará el uso de la
si. E1 niño que nace tiene la razon virtual- razon , uso que actualmente no posee. Si
mente , en gérmen , mas no posee todavía Hegel quiere apellidar á lo primero ser en
la posibilidad real de la razon. Es razona sí, y á lo segundo ser para sí, no hay in
ble en sí, pero no llega á serlo para sí, si conveniente en admitir estas expresiones ,
no á medida que se desenvuelve. Todo es si no es la ninguna necesidad que tenemos
fuerzo para conocer y saber , toda accion , de emplear las nuevas , cuando las antiguas
no tiene otro objeto que sacar á luz lo que no les ceden ni en concision ni en exacti
está oculto, qué realizar ó actualizar loque tud. Ser ó estar en potencia llamaban los
existe virtualmente , de objetivar lo que es antiguos aquel estado en que un objeto no
en sí, de desenvolver lo que existe en habia llegado á la realidad de la cosa , pe
gérmen. ro podia llegar á ella;- tomándose la pala
« Llegar á la existencia es sufrir un cam bra potencia en diferentes sentidos , segun
bio , y sin embargo quedar él mismo ; ved era la posibilidad y disposicion que habia
por ejemplo como la encina sale de la be para llegar al acto. Si la realidad se verifi
llota ; prodúcense cosas muy diversas ; pero caba , si lo que antes era posible se conver
todo estaba encerrado ya en el gérmen tía en existente, ó si el ser adquiría aquella
aunque invisible é idealmente.» para lo cual tenia disposicion , ó bien ejer
Pasaré por alto las muchas y graves citaba una facultad que antes tenia sin
consideraciones que podrían hacerse sobre obrar , entonces se decía que la potencia
el peregrino significado que da el filósofo estaba reducida al acto. Asi para servirnos
aleman á la palabra idea. Seles habia ocur del mismo ejemplo de Hegel , el niño tenia
rido á los autores de sistemas ideológicos, el uso de razon en potencia , el adulto en
el excogitar varios para explicar el misterio acto ; aun mas y hablando con mayor pre
del pensamiento , dando tambien diferentes cision , el mismo adulto cuando piensa está
acepciones á la palabra idea ; pero decir que en acto , cuando duerme está en potencia
esta es « la armoniosa unidad del conjunto de pensar.
universal que se desarrolla eternamente » Dice Hegel que todo esfuerzo para cono
ó en términos mas claros , llamar idea á la cer y saber , y hasta toda accion no tiene
naturaleza misma , creo que solo podia ve otro objeto que sacar á luz lo que está ocul
nir á la mente de quien proponiéndose con to, realizar ó actualizar lo que es virtual
 — 46
mente : esto necesita comentaríos : es ver que pasa de un estado á otro adquiriendo
dad que el esfuerzo para conocer y saber una nueva forma, una nueva existencia,
tiende á hacernos presente y ponernos en como lo hacen los vegetales salidos del ger
claro , lo que para nosotros está ú oscuro men , es compuesto ; porque no es dable
ó enteramente oculto ; pero no lo es que concebir esa mudanza sucesiva sin acom
toda accion no tenga otro objeto que reali pañarle la idea de partes. Podemos muy
zar ó actualizar lo que es virtualmente. No bien admitir que una substancia entera
puede negarse que en el orden de la natu mente simple ejerza actos muy diferentes,
raleza hay un desarrollo continuo en que y reciba impresiones muy varias; pues
unos seres salen de otros como la encina de que todas estas modificaciones pueden rea
la bellota ; pero los hay tambien cuya esen lizarse sin alterar su naturaleza , como en
cia se opone á que hayan dimanado de otro efecto lo estamos experimentando á cada
cualquiera , á no ser que hayan pasado paso con respecto á nuestro espíritu ; pero
instantáneamente de la no existencia á la afirmar que la substancia misma no es mas
existencia , es decir sin haber sido criados. que otra transformada y desenvuelta , es
« Llegar á la existencia , dice Hegel , es asentar que esta substancia consta de par
sufrir un cambio, y sin embargo quedar lo tes, maneras.
que se pueden combinar de distintas
mismo : » esta proposicion asentada en ge
neral destruye toda idea de creacion , pues La dificultad de atacar semejantes
que no existe esta , cuando no se pasa de rios proviene de que esos nuevos filósofos
la nada al ser. Si llegar á la existencia no han tenido la ocurrencia de adoptar un
es mas que sufrir una mudanza y quedar lenguage tan extraño y enigmático , que
el mismo , tendremos que cuando el uni siempre está uno en la duda de si ha dado
verso comenzó á existir no fue porque hu ó nó en el verdadero sentido del autor. Asi
biese sido críado por Dios, sino porque ve en el caso que nos ocupa, si Hegel hubiese
rificándose una gran transformacion en la dicho sencillamente que en el mundo no
materia preexistente, resultó ese conjunto hay mas que un ser, una substancia, que
que nos asombra con su inmensidad, y nos comprende en sí todo el conjunto de cuan
encanta con su belleza y armonía. Seme to existe , añadiendo que lo que á nosotros
jante suposicion nos lleva en derechura á nos parecen seres ó substancias particula
la eternidad del mundo , al caos de los an res, no son otra cosa que modificaciones de
tiguos, á todos los absurdos sobre el origen la substancia única que todo lo absorve,
de las cosas , que las luces del cristianismo sabríamos que tenemos á la vista un pro
habian desterrado de la tierra. fesor del panteismo, y al combatirle no
Extraño es que filósofos que se glorian vacilaríamos sobre cuáles son los mejores
de altamente espiritualistas, que manifies argumentos para demostrar la falsedad del
tan despreciar el materialismo frances del monstruoso sistema. Pero ¿cómo quiere V.
siglo pasado , lo establezcan tan lisa y lla habérselas con un hombre que empieza
namente combatiendo la espiritualidad , la hablándole de idea , de armoniosa unidad ,
inmortalidad , y el origen divino de nues de conjunto que se desarrolla eternamente,
tra alma. Si cuando esta comienza á existir de idea que es la realidad misma, de evo
no hay mas que la mudanza de un ser, á luciones, de ser en sí y para sí, de tránsi
la manera que la encina es lo contenido en tos de virtualidad á la actualidad , todo pa
la bellota , bien que desenvuelto y trans ra venir á parar á que el universo entero
formado, podremos inferir que el alma no es mas que un desarrollo sucesivo , sa-
brota del fecundo seno de la naturaleza lo liéndole al fin con el estupendo descubri
propio que los gérmenes materiales ; será miento de que un niño al nacer tiene la
un producto mas ó menos sutil , mas ó me razon virtualmente, mas que no la posee
nos activo , mas ó menos depurado , pero actualizada , y que la encina ha salido de
no será mas que el ser que ya antes exis una bellota?
tia, que la planta salida dela semilla. Esta Los ramos, dice Hegel, las hojas, las
doctrina es esencialmente materialista , sin flores , el fruto de una misma planta , pro
que basten á sincerarla de tan grave cargo ceden cada una para si , mientras que la
todos los misterios y enigmas del nuevo idea interior determina esta sucesion. ¿Sa
lenguage filosófico. Lo que es simple, lo bría V. decirme lo que debe de ser el que
que es indivisible, no puede ser el resul los ramos, las hojas, las flores, el fruto
tado de la transformacion de otro ser; lo procedan para sí, ni cuál podrá ser el sig
 — ra
nificado de la idea interior , aplicada á las Riéranse ciertamente Newton y Leibnitz
plantas? ¿supone Hegel que dentro de la de pretension tan extraña; riéranse todos
naturaleza hay un ser inteligente y próvi los físicos modernos, acordes en que no
do , que lo ve todo , que lo arregla todo , hay otro medio para llegar al conocimiento
queriendo llamar idea el pensamiento de de las leyes de la naturaleza que la obser
este ser, distinguiéndole empero de la ma vacion ; pero Hegel les respondería con la
teria? entonces vendrá á parar á la idea de mayor seriedad , que no siendo las leyes
Dios , porque tambien decimos nosotros del mundo físico otra cosa que las de nues
que Dios está en todos los seres , en todas tro espíritu, bien que objetivadas , es muy
partes , viéndolo todo , ordenándolo todo , posible pasar del conocimiento de estas al
conservándolo todo, presidiendo á ese mag de aquellas. Ciertamente que debiera de
nífico desarrollo que de continuo se está encontrarse algo embarazado el filósofo ale
obrando en la naturaleza conforme á las man , si se le exigiese una explicacion clara
leyes establecidas por el Criador. Mas nos y precisa , sobre esas leyes de nuestro es
otros afirmamos que el Autor de tantas píritu que son al propio tiempo leyes de la
maravillas existia desde toda la eternidad , naturaleza. Curioso seria ver indicada la
antes que nada existiese fuera de él ; y ley de nuestro espíritu que aplicada al
ahora conserva , mueve, vivifica el mun mundo corpóreo se convierte en atraccion
do, nó como el alma al cuerpo, sino de universal , ejercida en razon directa de las
una manera independiente, libre, sin estar masas é inversa del cuadrado de las distan
ligado con su criatura , sino obrando por cias; á que se reducen las leyes de afinidad
medio de su voluntad omnipotente , y re cuando al dejar de ser objetivadas , quedan
pitiendo á cada paso lo que con tan subli simplemente leyes de nuestra alma. Los
me pincelada nos describió Moises : hágase poetas, los oradores, los filósofos habian
la luz, y la luz fue hecha. Pero el dar á la descubierto ya muchas analogías entre el
naturaleza una idea interior, atada por de mundo moral y el físico ; analogías que
cirlo asi con los seres corpóreos , es afirmar aprovechadas por el ingenio , y embelleci
que el mundo es un ser animado, que fun das con los colores de fecunda imaginacion,
ciona del propio modo que nuestro cuerpo sirven admirablemente para comparar de
vivificado por el alma; lo que si anda continuo unos con otros , órdenes de seres
acompañado de la confusion del espíritu muy diferentes, animando, variando y
con la materia , si se supone que la exis hermoseando el estilo ; pero estaba reser
tencia de los seres espirituales y corporales vado á Hegel, el no contentarse con sim
no es mas que un desarrollo simultáneo del ples comparaciones , el establecer completa
admirable conjunto, forma el panteismo identidad , de suerte que la observacion
puro, tal como lo concibiera Spinosa. dejase de sernos necesaria para penetrar
Quizás no creia V., mi apreciado amigo, los arcanos de la naturaleza , bastándonos
que á tal extremo llegara la filosofía mo meditar sobre las leyes de nuestro espíritu,
derna delos indignos sucesores deLeibnitz; es decir abstraernos de todo cuanto nos
mas por esto he creido conveniente pre rodea ,' y en segunda objetivar las leyes des
sentarle á V. los mismos textos del ponde cubiertas , quedando de esta manera de
rado filósofo, para que se convenciera á un mostradas á priori todas las que rigen el
tiempo de que la ensalzada superioridad se cielo y la tierra.
reduce á resucitar errores antiguos, bien Creerá V. sin duda , que sin fundamen
cpie cubiertos con nombres extravagantes : to me estoy chanceando á costa del filósofo
Interminable seria esta carta, y estoy se aleman y que trato de dar á la discusion
guro que se le haria á V. algo pesada , si este giro , sin cuidar de la verdadera men
me propusiera mostrarle ni aun en resu te de Hegel , y solo atendiendo á que es
men todas las paradojas á que fue condu preciso amenizar algun tanto materias tan
cido Hegel por su enigmático sistema. Na ingratas de puro abstrusas. Pues debe V.
da le diré á V. del desarrollo de la idea en saber que no estoy combatiendo un gigan
la esfera Inyica, de la razon impersonal , y te fantástico que yo haya tenido la humo
otras cosas por este tenor ; quiero limitar rada de crear para partirle de un tajo ; las
me á decirle dos palabras sobre la peregri paradojas que acabo de impugnar las sos-
na esperanza que abrigaba el filósofo de tenia Hegel con la seriedad de un aleman ;
que por medio de su teoría era dable de y no tengo yo la culpa si el negocio es ex
terminar ápriorí las leyes del mundo físico. travagante con sus ribetes de ridículo. Pro
 — 48 —
púsose nada menos qtie construir con el
auxilio de sus sistema todas las ciencias na
turales; y en sus obras encontrará V. apli
caciones á la mecánica, á la física, á la
geología , las que pretende fundar en sus (*).
teorías metafísicas. Verdad es que el cielo
no se cuidaba mucho de las profecías del
filósofo y que alguna vez le dejó muy mal
parado ; pues que habiendo tenido la ocur
rencia de demostrar á priori que entre Artículo 3.°
Marte y Júpiter no podia haber otro plane
ta , nos vino cabalmente en el mismo año ESPARTERO Y LA DICTADURA.
el célebre astrónomo Piazzi descubriendo á
Céres , que como V. no ignora , tiene su
asiento allí donde segun la demostracion
de Hegel, no podia tener cabida ningun Ya que hemos llegado á la época de la
planeta. Regencia única, conviene hacer alto en esa
Quien á tanto se atrevía no es extra importante fase de la vida pública de Es
ño que se permitiese motejar al inmortal partero, en ese momento crítico que deci
Newton hasta de una manera poco deco dió de su porvenir ; y que mostró la cum
rosa. A pesar de tamaño orgullo , es cierto plida medida de sus alcances. Comparemos
que la posteridad no aprobaría que se es lo que hizo con lo que pudo y debió hacer.
cribiera sobre el sepulcro del metafísico En primer lugar : ¿érale posible imitar
aleman lo que con tanta razon se halla en á César, Cromwel ó Napoleon? Estamos
el del astrónomo ingles : « sibi gratulentur convencidos que nó : las circunstancias en
mortales tale tantumque extitise humani que él se hallaba eran muy diferentes ; ni
generis decus. » el genio de esos hombres le hubiera basta
Llegó á tal punto la manía de Hegel so do para semejante empresa. Con lo cual se
bre este particular, que su admirador Link comprenderá que no le exigimos cosas ir
no pudo menos de decir: «afliccion causa realizables; y que al censurar su conducta,
el ver de que manera habla nuestro autor no nos complacemos en achacarle cargos
de los objetos pertenecientes al dominio de infundados , mostrándole como inferior á
las ciencias naturales , de la astronomía y su posicion por haber dejado de ejecutar
de las matemáticas , y sin embargo él gus lo que conceptuamos imposible.
ta de hablar sobre esto , y lo hace siempre Todas las grandes revoluciones nos pre
con tono tan magistral y tan amargo , que sentan un desenlace bastante análogo : des
le daria á uso risa , si reirse pudiera al ver pues de larga temporada de anarquía viene
á un hombre como él , extraviarse de un el despotismo; ora para establecerse defi
modo tan lastimoso. Este mal de Hegel nitivamente en el pais , ora para servir de
empeoraba en la última época de su vida , transicion á un régimen templado y suave.
y hasta se enojaba contra los que no se de Así los miembros dislocados ó rotos , para
cidían á admirarle. » recobrar su movimiento natural , necesitan
Bien se habrá convencido V., mi aprecia estar sujetos muchos dias con apretada li
do amigo, de que no sin razon me habia gadura. Las lecciones de la razon y de la
mostrado algo severo sobre la moderna filo historia hacían creer que la revolucion es
sofía alemana ; ciertamente que no necesita pañola no podria eximirse de esta ley ; y al
comentarios la doctrina que acabo de exa ver en 1840 encumbrarse al mando supre
minar , para que se vean no solo su tenden mo al gefe de la fuerza armada, natural
cia y espíritu, sino lo que es en sí, en rea mente debió de ocurrir el pensamiento de
lidad. Espero volver otro dia sobre este que íbamos á entraren el período del vigor
punto, y entre tanto viva V. seguro del
afecto de este su amigo y S. S.—J. B. .
(1) Para mayor comodidad de los lectores , y me
jor orden de las materias , seguirán sin interrup
cion los artículos sobre Espartero. El Editor ad
vierte que no permitiré que nadie los reimprima :
y contra quien lo intente , se valdrá de los medios
que le concede la ley.
 — 49 —
gubernativo. De aquí dimanó, que á pesar verdadera restriccion. Habrá tal vez pode
de los antecedentes que debian desvanecer rosa privanza, mas nó dictadura. Solo des
la ilusion, todavía la opinion pública se pues del suplicio de Carlos I ocupó el puesto
mantuvo algunos momentos en inquieta supremo el Protector ; y cuando Napoleon
expectativa; primero, despues de la abdi alcanzó el poder soberano habia caido en
cacion de Valencia ; y en seguida , despues un cadalso la cabeza de Luis XVI , y pros
del nombramiento de la regencia única. critos vagaban por tierras extrañas todos
Lo que acontecería , nadie se atrevía á los príncipes de la real familia. Mientras
pronosticarlo; pero muchos eran los que una nacion ha sido bastante juiciosa para
creyeron que tomarían los acontecimientos conservar siquiera un tierno vastago de la
un rumbo muy diferente. Los nombres de sangre de sus monarcas, no ha sonado to
Cesar, Cromwel y Napoleon salían invo davía la hora fatal en que hecho imposible
luntariamente de algunas bocas; no obs el imperio de la ley , se hace necesario el
tante la inmensa desemejanza que se palpa imperio del hombre.
ba entre aquellos personages y nuestro Disolucion social y política que impida el es
protagonista. tablecimiento de un gobierno regular por los
Ya llevamos indicado que le fuera im trámites ordinarios. Estudiando la época en
posible á Espartero establecer una verda que se entronizó en Roma la dictadura,
dera dictadura ; y vamos á, demostrarlo á échase de ver que aquella república no te
la luz de la historia. Si mucho no nos he nia otro medio de salvacion que echarse en
mos engañado en el estudio de esta , nece- brazos de un soldado. La anarquía de las
sítanse para el efecto cuatro condiciones : ideas, la corrupcion de las costumbres, el
i.a ausencia del representante de la legiti desbordamiento delas ambiciones, la ve
midad; 2.a disolucion social y política, que nalidad de las masas, habian desmontado
impida el establecimiento y sosten de un II é inutilizado completamente la máquina
gobierno regular por los trámites ordina política. Era imposible que continuase fun
rios ; 3.a que la nacion donde el fenómeno cionando ; y los mismos acontecimientos ,
se verifica, ó se halle en completo aisla con su irresistible tendencia al despotismo ,
miento con respecto á las naciones extran- manifestaban que habia llegado á ser nece
geras, ó en posicion militar muy podero sario. Solo era preciso regularizarlo , pues
sa; 4.a genio guerrero y político en la de hecho ya existia ; al menos dándole es
persona del dictador. tabilidad y fijeza , se podia conseguir que
Ausencia del representante dela legitimidad. fuera menos violento y perseguidor. Lo
El poder dictatorial propiamente dicho, que en tiempos anteriores era una necesi
expresa la absorcion de todos los poderes , dad pasagera , habia pasado á ser una ne
la suspension de todas las leyes, un go cesidad permanente : antes se establecía
bierno eminentemente discrecional. Los tí una dictadura temporal, ahora debia ser
tulos populares con que suele disfrazarse perpetua.
solo sirven á ensanchar los límites de sus Él profundo sacudimiento que recibiera
facultades; personificacion de esa formida I la nacion inglesa con las innovaciones reli-
ble soberanía que no se ejerce sino movien " giosas , el espíritu revolucionario que le
do tempestades , que no habla sino con el comunicó el despotismo no menos revolu
bramido del trueno , no tolera resistencia , cionario de Enrique VIII , cambiando pro
ni consiente restricciones ; á sus ojos la ley fundamente la organizacion social sin mas
es una palabra vana , un pedazo de papel , ley que su capricho , sin mas regla que la
no conoce mas ley , ni se acomoda á otra llamada salud del pueblo y salvacion del
regla , que á lo que apellida la salud del estado, el fanatismo de secta promovido
pueblo. «¿Porqué no tomasteis el título por el furor de leer é interpretar la Biblia
de rey, y os contentasteis con el de pro con solas las luces del espíritu privado, ha
tector?» le preguntaron un dia á Cromwel : bian hundido á la nacion inglesa en un
« porque , respondió , todo el mundo sabe abismo de que le era imposible salir. Vol
hasta dónde se extienden las facultades de cado el trono , decapitado el monarca , flo
un rey , y nadie sabe hasta dónde llegan taba la infortunada sociedad á merced de
las de un protector,» Una potestad discre la locura y del crimen ; y en medio de sus
cional, que no reconoce límites, difícilmen tremendas calamidades, no veia medio de
te puede existir teniendo á su lado la legi restañar la sangre que corría á torrentes ,
timidad : la sola presencia de esta es una y de lograr que cesase el insensato afan de
tomo n. 4
 — 50 —
derribar todavía mas, cuando por todas ra, no podrá llenar su mision; porque la
partes estaba el terreno cubierto de ruinas. legitimidad y legalidad que no tiene, ha
Los partidos políticos nacidos en el seno de menester suplirla mostrándose á los ojos de
la revolucion , pregonaban cada cual por los pueblos con aterradora fuerza , con im
su lado , la seguridad de los remedios con ponente grandor. Y el gobierno no es res
que se proponían curar el daño ; pero tan petado en el extrangero si no lo es la na
pronto como ensayaban su obra , sentía la cion ; si esta no es independiente , no lo
nacion, y sentían ellos propios, su com será tampoco el gobierno. La España, y
pleta impotencia. Allí, como en todas par ¿por qué ocultarlo? la España no se halla
tes, eran demasiado débiles para gobernar; en esta situacion, ni se hallaba tampoco al
siendo demasiado fuertes para hacer impo terminar la guerra civil. Eran demasiado
sible que otros gobernasen. Solo del exceso escandalosas nuestras discordias intestinas,
del mal debia nacer el remedio : la socie eran demasiado públicos los apuros del era
dad no podía perecer ; sus intereses estaban rio, demasiado palpable nuestra desorga
sin amparo, no habia quien los defendiese ; nizacion política y administrativa, dema
ansiaban por una proteccion , por mas ne siado chocante la completa falta de marina
gro que fuera su origen y duras sus condi en una posicion peninsular , para que pu
ciones. Un hombre de vasta capacidad , de diéramos lisonjearnos de no estar mas ó
corazon osado , de brazo de hierro, le ofre menos sometidos á influencias extrañas.
ció esta proteccion , la sociedad no vaciló Ademas, ¿cómo era dable blasonar de in
en aceptar, y encumbróse el Protector. dependencia, cuando tan recientemente pe
En pos de un siglo de corrupcion corte learan en nuestro suelo legiones inglesas ,
sana y de doctrinas anárquicas é impías , francesas y portuguesas? ¿cuando el go
desencadenóse sobre la Francia la revolu bierno habia solicitado repetidas veces la
cion mas colosal que presenciara el mundo. cooperacion? ¿cuando en las cámaras de
El trono habia venido al suelo con estrepi Francia servia de eterno tema á los deba
toso fracaso ; la diadema y el cetro estaban tes parlamentarios , y hasta de caballo de
salpicados con la sangre de la real familia I batalla á los partidos, la cuestion de si se
y eran pisoteados por desenfrenada plebe. habia de intervenir ó nó en España ? Lle
Fundábanse de continuo nuevas institucio gada la nacion á tan doloroso abatimiento,
nes, alzábanse al mando supremo nuevos ¿podíamos pensar en una de aquellas gran
hombres; pero todo temblaba en el mo des dictaduras en que un soldado , terrible
mento de levantarse, todo se hundía un personificacion de un pueblo poderoso , ha
instante despues. La anarquía en lo inte ce temblar el mundo con la fama de su
rior, el enemigo en lasfronteras; imposible nombre?
la paz, peligrosa la guerra ; anhelo de or Vano es prometerse la independencia
den, y manía revolucionaria; la postracion contando con la neutralidad de los vecinos:
que sigue al delirio , y la inquietud de la la no intervencion es una palabra vana ; la
fiebre ; hé aqui la situacion de la Francia diplomacia la emplea , nó para expresar lo
despues de diez años de revolucion. Un que genuinamente significa , sino para dar
soldado de genio y fortuna que se habia á entender que ella quiere sustituirse á la
inmortalizado en las campañas de Italia , guerra , que con negociaciones y protoco-
que habia paseado su gloriosa nombradla I los pretende suplir las batallas campales.
por los arenales de la Siria y los márgenes Por lo demás, nadie deja de procurar in
del Nilo hasta el pie de las gigantescas pi tervenir en aquello que le interesa; y fuera
rámides, se le presenta y le dice: «yo te muy singular que este interés no existiese
daré orden y gloria ; tú me darás tus hijos tratándose de una nacion envuelta en dis
y tu libertad » y la Francia le dió sus hi turbios civiles, los cuales segun sea su des
jos , y humilló su cerviz ; y el general Bo- enlace , pueden traer resultados de la ma
naparte fue desde luego primer cónsul , y yor trascendencia. En circunstancias críti
en seguida emperador. cas, es para los individuos la mejor garantía
Que la nacion donde se entroniza la dictadu de independencia, la firmeza de carácter
ra , ó se halle en completo aislamiento con res apoyada por la riqueza ; para los estados,
pecto á las naciones extranjeras ; ó en posicion lo es un espíritu nacional , fiero y brioso,
militar muy poderosa. La independencia de que cuenta con grandes recursos, y temi
un gobierno es condicion indispensable pa ble pujanza.
ra su prestigio ; si esta le falta á la dictadu Genio guerrero y político en la persona del
 — 51
dictador. La dictadura solo puede ejercerla deslumbrante y fascinador , legitima en
un militar: la inteligencia y el carácter por cierto modo la usurpacion , y encubre la
sí solos , son insuficientes para dominar si negrura de la tiranía con el esplendente
tuaciones difíciles ; es necesaria una espa manto de la gloria. Los pueblos no se re
da. El brazo sin cabeza es fuerza brutal; signan á la obediencia de un poder ilegíti
pero la cabeza sin brazo es puro pensa mo y arbitrario sino bajo condiciones que
miento ; y en el mundo no reina el pensa los indemnicen de la injusticia , y no lle
miento solo. Cuando los mas ardientes ven consigo el baldon de la ignominia ; y
partidarios de la revolucion abogaban por esta indemnizacion no puede encontrarse
la regencia trina , andaban guiados por un cuando el poder no es capaz de grandes y
instinto muy certero; pues que no querien provechosos pensamientos que suplan la
do un poder demasiado fuerte , y no sién ausencia de la ley ; y esta ignominia exis
doles posible excluir el elemento militar, tiera, si la completa abdicacion de la liber
trataban al menos de mezclarle con otros tad , si la sumision á una potestad discre
que le templasen y enflaqueciesen ; pero cional no estuviese acompañada del grandor
cuando perdida la votacion , y precisados á que á la nacion comunica el tener á su
dar sus sufragios á una persona sola , favo frente un héroe insigne, si los pueblos pre
recían en crecido número á Arguelles, con cisados por decirlo asi á someterse á la or
este acto que pudiera creerse de desespe denanza no creyeran militar bajo una en
racion y despique, manifestaron admira seña vencedora.
blemente el instinto revolucionario : la re La gloria militar deslumbra; pero nunca
volucion buscaba un servidor, nó un amo. el mando del ejército debe confundirse con
Mas la revolucion temiendo á Espartero, la magistratura suprema ; la organizacion
le hacia demasiado honor; el secreto de política de un pais , jamas puede tener por
destruir su fuerza consistía en ponerla á base la ordenanza militar. Por cuyo motivo,
prueba : no pocos abogados formados en el á mas del genio guerrero , ha menester el
retiro de su bufete habrían mostrado mas dictador, el genio político; calidad rara,
energía y teson , que el hombre criado en que en pocos se encuentra, y que difícil
la crudeza de los campamentos y los peli mente se aviene con los talentos y las in
gros de las batallas. clinaciones de un soldado. En un pais tra
La espada es necesaria , mas nó bastante bajado por las revoluciones, una capacidad
para llenar las funciones de la dictadura. comun no basta para gobernar ; por
Es preciso genio militar , pensamiento or todos los medios ordinarios se han I
ganizador al aprestar los ejércitos á la pe inútiles ; todos los resortes están gastados;
lea , eléctrico al conducirlos al combate, la máquina está desmontada , y rotas bue
penetrante , vivo , certero , en el momento na parte de sus piezas ; es necesaria una
decisivo para la victoria. El entusiasmo del ojeada vasta , penetrante , que abarque el
soldado, aquel entusiasmo que le hace conjunto , que alcance al conocimiento de
marchar á la muerte vitoreando al caudillo cada una de sus partes, que se interne
que le guia , que nace de la ilimitada con hasta el corazon de la sociedad , para que
fianza en las aventajadas cualidades del descubriendo el mal en su raiz se aplique á
gefe, inspira una ciega obediencia á sus ella el remedio. Destruido el gobierno an
mandatos, coloca á este en una situacion tiguo y subvertido el orden legal , conti
prepotente y dominadora, le hace temible núa por algun tiempo el frenesí revolucio
á los enemigos interiores y exteriores, le nario, y por de pronto no todos sienten
concilía el respeto y admiracion de sus con como conviene , la necesidad de llenar el
ciudadanos, colocándole en la altura con hondo vacío. Pero las calamidades públi
veniente para que pueda ejercer sin rivales cas, los desastres continuados, las asonadas
la suprema magistratura. Una dilatada car sin término , la inquietud y desasosiego en
rera militar llena de honrosos servicios, que la sociedad se agita , hacen entender á
una conducta sin mancha , largo tiempo de no tardar, que es preciso, indispensable,
obtener elevados puestos en el ejército , no crear un poder, establecer un gobierno.
son suficientes á formar una reputacion Entonces acuden en tropel los empiristas
apta para la dictadura : es necesaria incon con sus remedios seguros , sus formas lega
testable superioridad sobre todos losdernás les, su milagrosa panacea, los años pasan,
gefes militares , es necesario el genio pro los males se aumentan , la nacion se des
piamente dicho , el genio que con su brillo engaña , el descontento crece ; y desvane
cidas las ilusiones, y aburridos los ánimos, Jamás se desperdició mas bella ocasion
la nacion se entrega sin reserva en manos para labrarse con facilidad un nombre ilus
del primero que le ofrece garantías de or tre ; jamás se malogró mejor oportunidad
den y estabilidad. Entonces ha sonado la de conservar y ensanchar la gloria ganada
hora de la dictadura; los pueblos la acep anteriormente , y de darle una apariencia
tan aunque sea ilegítima , y hasta previen de grandor y solidéz de que en realidad
do que ella á su vez será tambien transito carecía ; jamás se reunieron mas estrecha
ria ; dichosos si en tan aciagas circunstancias mente los intereses de una nacion y de un
pueden dar en una combinacion feliz donde hombre, si este hubiese sabido enfrenar
se encuentre la fuerza en manos de la legi su desmesurada ambicion, y consagrarse
timidad al bien y sosiego de su patria. Lleno de
En España, en 1840, el trono habia riquezas, de honores y condecoraciones,
perdido de su pujanza y esplendor, mas ocupando el primer puesto de la milicia
no habia caido ; habia dosorganizacion so española , lisonjeado por los partidos , tra
cial y política , mas nó disolucion ; el esta tado con la mayor consideracion por la
blecimiento de un gobierno regular por los misma Reina ; ¿ qué mas podia desear el
trámites ordinarios , era difícil , mas nó soldado de fortuna? ¿Acaso era pequeña
imposible ; la nacion ni se hallaba en com satisfaccion para un pecho noble, la de
pleto aislamiento con respecto á las extran- afianzar el órden público, intimidar las
geras , ni era muy poderosa ; y sobre todo, facciones, poner coto á las exigencias de
el hombre que se halló en oportunidad de los partidos, sostener y afirmar el trono, y
dominar la situacion, carecía enteramente contribuir eficazmente á la inauguracion
de genio militar y político. Por esto fue de una era de reorganizacion y de verda
imposible la dictadura ; por esto no se ve dero gobierno ? La lealtad, los sentimien
rificó en España lo que en Francia é In tos generosos , los mas sagrados deberes ,
glaterra. sus propios intereses , todo se combinaba
Si Espartero hubiese comprendido su para indicar á Espartero el camino que de
posicion, si hubiese conocido bien el límite bia seguir; todo le amonestaba para que
de sus fuerzas, y tenido bastante grandeza se pusiese en guarda contra los dañosos
de alma para someterse á lo que reclama consejos de sus aduladores , contra las pe
ban sus deberes ; cabiale todavía un papel ligrosas inspiraciones de la ambicion propia.
bello , decoroso , brillante ; una especie de No era capaz de elevarse á tanta altura
dictadura que cubriera de lustre su perso el que sin estremecerse hacia conducir al
na , realzara el esplendor de la diadema , y II suplicio á sus mas bravos camaradas : ave
restituyera el sosiego á la nacion . Toda vez níase mejor con sus ideas y sentimientos el
que el trono no estaba vacante , y que es | oficio de conspirador; y encumbrado al
taba ocupado por una huérfana de pocos mando supremo creyó todavía que gober
años , podíase colocar á su lado como su nar era conspirar. Sus mas ardientes de
adalid mas decidido y pundonoroso. Sin fensores de otro tiempo, los hombres que
descender á la arena de los partidos, podia mas contribuyeron á ensalzarle, estos mis
imponerles respeto á todos; aquella espada mos nos han dicho lo que encontraron en
cuyo temple respetaban no pocos, podia su idolo ; ellos nos han hecho espantosas
sin desenvainarse prestar á la Reina y al revelaciones al propio tiempo que levan
pais importantes servicios. Se necesitaba tándose contra él, lo echaban al suelo, y lo
fortalecer el trono , y él llevaba á su alre hacian pedazos. Que no lo olviden los milita
dedor un ejército de cien mil hombres, res pundonorosos ; todavía hay leyes que
que desembarazado de las atenciones de la escudar y una Huérfana inocente que de
guerra , se podia convertir en defensor de fender ; la pequenez de Espartero ha deja
las leyes; y Las facciones anárquicas se hu do todavía lugar á que aparezcan en la es
bieran anonadado , y el órden hubiera re cena figuras grandiosas y brillantes; las
nacido , y quizás sin nuevos disturbios re- ambiciones legítimas tienen abierto un her
cobrárase la nacion de tantos quebrantos y moso campo donde el deber anda herma
desastres. Entonces Espartero representara nado con la gloria ; la turbacion de los
el papel que mas entusiasmo excita entre tiempos no dejará de brindar con oportu
los españoles ; el de un soldado leal á una nas ocasionesá los pechos generosos.—/. B.
Reina niña, el de un caballero que defien
de á una Augusta Señora.
 — 53
" como se expresaba en su famoso manifiesto
de Madrid del 2 de noviembre de 1840.
» A nadie parecía ya posible que la na
cion se salvase de la red en que la tenian
envuelta los enemigos de sus derechos:
ocupados tenian todos los resortes y medios
de gobierno : dominando exclusivamente
en los cuerpos legislativos por medio de
LA REGENCIA PROVtStONAL, mayorías facticias artificiosamente combi
nadas ; entregados los ministerios á ciegos
EN SUS RELACIONES CON LOS PARTIDOS, CON esclavos suyos; y lo que era aun mas triste,
seducido y enconado á fuerza de sugestio
EL TRONO Y LA NACION. nes insidiosas el poder supremo del Estado.
Ya los españoles veian venir el momento
de repetirse el escándalo del año 14 ; y por
descanso de siete años de fatigas y de com
Artículo 4." bates , y por recompensa á su constancia ,
á su fidelidad y servicios, contemplábanse
atados otra vez al yugo de la servidumbre
merDespues
pensamiento
del triunfo
que debie ocurrir, elnopridi- con loslazosformadosporsu misma lealtad.
de setiembre,
» Pero al ver amenazada de muerte la
remos á un hombre de genio extraordina Constitucion en que la España tenia cifrada
rio , pero ni siquiera de talento mediana la estabilidad de su fortuna , el pueblo de
mente previsor, era el de hacer olvidarlos Madrid esclamó denodadamente : Eso mi, y
sucesos anteriores, tender sobre ellos un se arrojó á la arena para defender ileso el
velo, logrando de esta suerte ocultar su depósito de su libertad : Eso nó , repitieron
ilegitimidad , y sobre todo preparar los las provincias y el ejército respondiendo
ánimos á la reconciliacion y á la calma. bizarramente á aquel noble llamamiento :
Este sistema debia comenzar á plantearlo y á una voz los españoles todos que aman
el presidente de la Regencia provisional , y ía paz , el decoro y el bien de su país dije
llevarlo á cabo el regente único. ron resueltamente Eso nó. Puestos asi de
Veamos como se llenó este objeto. El una parte la ley fundamental con la nacion
primer acto de la Regencia provisional fue entera al rededor; y de la otra el gobierno
una serie de recriminaciones las mas duras, con sus consejos y proyectos infelices , el
una tea de discordia arrojada en medio de gobierno se estremeció de verse solo , y
la nacion , para que las pasiones ya tan en abandonando el campo que ya no podia
cendidas, se inflamasen todavía mas, y mantener, dejó á la nacion libre y á la
llegasen al colmo de la exasperacion y del Constitucion vencedora.»
furor. Cuando se debia procurar la reconcilia
Ya que se habia derrocado á un partido cion de los partidos , se echa un guante al
numeroso, que contaba en su seno reputa derribado, se le declara perjuro, se le pre
ciones ilustres, ya que los vencidos se ha- cisa á salir á la palestra , ya que nó con las
llabanála sazon bajo la mano de las juntas, armas, al menos para defenderse de las
ó escondidos, ó buscando un asilo en pai imputaciones que le hace el mismo gobier
ses extrangeros, natural parecía que el go no. ¿Cómo quería Espartero conservar su
bierno supremo los tratase con alguna con dignidad si empezaba calumniando, hasta
sideracion é indulgencia, ó disminuyendo el punto de precisar á los agraviados á que
la gravedad de los cargos que se les diri le desmintiesen con una ruidosa protesta (1)?
gían, ó salvando la intencion si se querían
condenar los actos. La Regencia provisional,
á cuya cabeza se hallaba Espartero , y que
estaba personificada en el gefe de los ejér MANIFESTACION.
citos , tomó el camino directamente opues (1) «Los que suscriben, mdividuos que han
to; buscó las palabras mas duras para aña sido del ultimo Congreso de diputados , y que han
dir afliccion al afligido , para hacer mas acostumbrado a votar con su mayoría , no habian
creido hasta ahora oportuno contestar a los diver
humillante su derrota , para concitar con sos cargos y acusaciones , que les han dirigido al
tra él las pasiones revolucionarias. Véase gunas juntas y corporaciones populares cu !
 54 —
Hasta el mismo Bonaparte se ocupó en
los primeros dias de su gobierno de anudar
las relaciones con las demas potencias;
Espartero comenzó dirigiéndoles una ame
naza tan innecesaria como impotente.
«Las naciones todas, decia la Regencia,
respetan á un pueblo que despues de ha
berse dado una ley fundamental , sabe sos
tenerla contra las oscilaciones é inquietudes
de dentro, y está resuelta á repeler armada
y unida en masa los amagos y las amenazas
de afuera.»
Nada hay en aquel malaventurado es
crito que pudiese excitar el entusiasmo ni
aun las simpatías de los españoles; porque
si bien se hace en él un recuerdo de la glo
riosa guerra de la independencia , se hiere
vivamente la susceptibilidad monárquica
de este gran pueblo , que ya que sabe su
frir eon sensata longanimidad las flaquezas
de sus reyes, no puede menos de llevar
muy á mal que se remuevan y se expongan
al ludibrio público , cenizas augustas. La
severidad de la historia impone al escritor
deberes penosos, obligándole á consignar
hechos que caen como negra mancha sobre
cuciones y manifiestos. Seguros con el testimonio
de su conciencia , y mirando aquellas acusaciones
ó como desahogos del espíritu de partido, ó como
recursos y medios necesarios de propia justifica
cion , aguardaban tranquilos el juicio del pais y el
fallo imparcial de la posteridad. Pero han creido
ahora de su obligacion romper el silencio , al ver
' que el consejo de ministros , que ha hombrado
S. M. la augusta Reina Doña María Cristina de
Borbon, y con arreglo al art. 88 de la Constitucion
gobierna provisionalmente el reino hasta el nom
bramiento de la Regencia , ha estampado en un
manifiesto , que ha dirigido á los españoles , las
cláusulas siguientes :
« A nadie parecia ya posible que la nacion se
» salvase de la red en que la teman envuelta los
» enemigos de sus derechos: ocupados tenían to-
» dos los resortes y medios de gobierno ; dnminan-
»do exclusivamente en los cuerpos legislativos por
«medio de mayorías facticias artificiosamente com-
» binadas; entregados los ministerios á ciegos es-
» clavos suyos , y lo que es aun mas triste , sedu-
» cido y enconado el poder supremo del Estado.
» Ya los españoles veian venir el momento de re-
» petirsc el escándalo del año XIV , y por descanso
»de siete años de fatigas y de combates, y por
» recompensa á su constancia , á su fidelidad y ser-
» vicios, contemplábanse atados otra vez al yugo
»de la servidumbre con los lazos formados por su
» mioma lealtad. »
» Las acusaciones en este párrafo contenidas son
graves. Lo son en sí mismas: y lo son por emanar
del gobierno , que á nombre de S. M. la Reina es
tá rigiendo la monarquía. Los que suscriben de-
rlaran bajo su honor , por lo que á ellos toca , que
son de todo punto falsas ; y creen que no deben
permilir que su silencio pueda cu. ningun tiempo
el rostro de elevados personages; pero
nunca, jamas, fue lícito á un gobierno su
premo hablando á la nacion , recordar las
escenas lamentables que deslustraron un
dia el regio alcázar. ¡ Qué intencion condu
cía la pluma del autor del manifiesto cuan
do decia :
«Treinta y tres años ha que en estos
mismos dias se dió la señalalas agitaciones
que nos combaten con el desorden y las
pasiones que hervían en la familia real ,
antes ocultas en los lares domésticos , y es
tallando entonces de pronto y manifestán
dose al público con una violencia y un es-
cándolo nunca vistos entre nosotros. El
heredero del trono acusado de parricida
por su padre: el monarca destronado cinco
meses despues por su hijo!» , ,
Colocados á las gradas del trono , ejercien
do el poder en nombre de la Augusta Hija
de cien reyes, ¿ era conveniente, era de
coroso , era siquiera tolerable que recorda
rais el desorden y pasiones que hervían en la
familia real, y las violencias y escándolos
nunca vistos? ¿Tan poco respetonos inspi
raba la Augusta Huérfana , que en su pre-
alegarse como prueba de unas aserciones, que- no»
se fundan en innguna otra. Por lo mismo protestan
ante los colegios electorales que los han nombra
do , protestan ante la nacion , y protestan á la faz
del mundo entero contra semejantes imputaciones;
seguros de que ni el consejo de ministros , ni na
die , ni ahora , ni nunca , podrá presentar la mas
ligera prueba de tan graves romo gratuitas é in
concebibles acusaciones. Madrid 6 de noviembre
de 1840.
Pablo Ayala y ¡loria , ex-diputado por Jaen.
Mariano Roca Togores, ex-diputado por Murcia.
Diego Lopez Ballesteros , ex-diputado por Ponte
vedra. Pedro Jos-i Pidal, ex-diputado por Oviedo.
J. El duque de Gor , ex-diputado por Granada.
Alejandro Mon, ex-diputado por Oviedo. Juan
Pablo Rived, ex-diputado por Navarra. Ramon
Lopez Vasquez , ex-diputado por Pontevedra.
Juan Palarea, ex-diputado por Murcia. Floren
cio García Goyena, ex-diputado por Navarra.
José Muñoz de San Pedro, ex-diputado por Cá-
ccres. Francisco Tomes Hevia, ex-diputado por
Oviedo. Francisco García Hidalgo, ex-diputado
por Almería. Rafael Diaz Arguelles, ex-diputado
por Oviedo. Rufino García Carrasco, ex-diputada
por Cáccres. Juan Modesto de la Mola, ex-dipu
tado por Albacete. Diego de Alvear, ex-diputado
por Córdoba. Joaquín Eugenio de Castro, ex-di
putado por Orense. Diego Medrano , ex-diputado
por Ciudad Real. Gregorio Perez Aloe , ex-dipu
tado por Radajoz. Luis Armero, ex-diputado por
Pontevedra. Francisco Curado , ex-diputado por
Jaen. Miguel Jóvende Salas, ex-diputado porCa-
narias. Antonio de los Rios , ex-diputado por Cór
doba. Juan Fernandez del Pino, ex-diputado por
Málaga. »
 y ejerciendo sus veces, le echasen 55logró
— contentar á estas, y ademas se pre
en cara que su padre destronó á su abuelo, sentó de tan mal aspecto el nuevo gobierno
y que fue por este , acusado de parricida 1 á los ojos de la inmensa mayoría de los es
¿No os habiais cebado bastante con el in pañoles, que ya se hacia muy difícil reha
fortunio de la esposa , que debieseis pre bilitarlo para lo sucesivo en el tribunal de
sentar al mundo á su difunto esposo , como la opinion pública.
el mayor de los criminales? No, no era El Vice-gerente de la Nunciatura Apos
este ciertamente el camino para conciliaros tólica D. José Ramírez de A reí lano, no
la benevolencia del pueblo español , que en pudo mirar con indiferencia los atentados
grado tan eminente posee las dotes de amor cometidos por las juntas contra las cosas y
á sus reyes , de respeto y generosa hidal las personas eclesiásticas: y en cumplimen
guía con todo línage de infortunios. to de su deber dirigió con fecha 5 de no
viembre de 1840 una atenta comunicacion
al Excmo. Sr. Secretario del Despacho del
Estado, en que sr lamentaba en términos
ESPARTERO Y LA RELIGION. sentidos pero muy mesurados, de que la
Junta de Madrid hubiese suspendido á don
NEGOCIO DEL VICE-GBRENTB DE LA Manuel Ribote, D. Julian Pinera y D. Fé
NUNCIATURA. lix José Reinoso, jueces del Tribunal de la
Rota , á D. Antonio Ramirez de Arellano
de Abrcviador interino, y aun al mismo
comunicante , de la fiscalía de la Nuncia
La nueva situacion le ofrecía á Espartero tura; bien que hacia notar el Sr. Vice
una excelente oportunidad para atraerse gerente que en cuanto á esto último , no
muchos partidarios ; supuesto que habien habia podido surtir efecto la providencia
do tanto que reparar y ordenar , bastábale de la Junta , porque hacia 21 meses que él
dedicarse á un punto cualquiera de estas habia cesado en el ejercicio de las funcio
reparaciones y arreglos, para que desde nes de fiscal , por ser estas incompatibles
luego se hubiese creido que trataba de con las de la Vice-gerencia, añadiendo que
inaugurar una era de gobierno. Hasta se le las desempeñaba D. José Manuel Gallego,
hubiera disimulado cierta timidez é irreso ministro honorario del Tribunal dela Rota.
lucion en acometer la gloriosa empresa , Las razones alegadas por el señor de Are-
atribuyéndolo á consideraciones que la fuer llano no tienen réplica : siendo ademas re
za de las circunstancias le imponía con res parable que procuró salvar la buena fe de
pecto á la revolucion , y á la política pre la misma Junta atribuyendo su providencia
visora y cuerda que andaba preparando á que no estaría enterada del modo y forma
lentamente el camino para llegar al punto con que existia en estos reinos el mencio
deseado. nado tribunal.
La exacerbacion á que habian sido con «La Junta sin duda al dictar una medi
ducidas las cuestiones religiosas porlas de da semejante, dice la citada comunicacion ,
sacertadas é injustas medidas de los gobier debió creer de buena fe que estaba sujeta
nos anteriores , y sobre todo por los atro- á sus determinaciones civiles , porque nada
pellamientos y desmanes á que se habian tiene de extraño que no supiesen los indi
arrojado las juntas en el pronunciamiento viduos que la componen que el Tribunal de
de setiembre, brindaban al Gefe del nuevo, la Rota existe en estos reinos y en la capi
gobierno con hermosísima ocasion para que tal de la monarquía en virtud de una ley
sin ladearse á ningun partido , ni infringir canónica. En efecto, un breve de nuestro
la Constitucion , sin que se le pudiese ta santísimo Padre Clemente X , de feliz re
char de reaccion , se atrajese las simpatías cordacion , su fecha 26 de marzo de 1771,
de todos los hombres religiosos, y mere le creó muto propio. Los jueces que le han
ciese la aprobacion y asentimiento de los de componer nosonde nombramiento real:
sensatos , cualesquiera que fueran sus opi se reservó S. S. hacerlo á presentacion del
niones sobre tan graves materias. Creyóse Rey de España , como tambien se reservó
que tomando el camino directamente las plazas de Asesor, Auditor del Nuncio,
opuesto se afianzaba la situacion creada por de Fiscal de la Nunciatura y de la Rota , y
el pronunciamiento , lisonjeando las pasio- .. la de Abreviador , recayendo en personas
nes revolucionarias; y en realidad no se II que sean del agrado y aceptacion de S. M
 — 5G
Como de nombramiento de S. S. , y del el órden que Dios ha establecido para go"
rango que ocupan en el orden gerárquieo bernarla ; pues que establecer sus minis
de la Iglesia son inamovibles, no pueden tros, destituirlos ó suspenderlos, con causa,
reemplazarse por la potestad civil, y vacan es potestad que la compete exclusivamente.
solo por muerte , ascenso , renuncia ó de El subordinar la potestad de los pastores,
posicion canónica, que no puede efectuarse jueces y demas ministros en cuanto á su
legalmente sin formacion de causa , y por ejercicio y sus funciones á la potestad tem
sentencia que merezca ejecucion. poral, es lo mismo que no reconocerla.
«El tribunal es apostólico : sus jueces lo V. E. no ignora que se ha tomado un ca
son igualmente : ejercen la autoridad pon mino intransitable, en el que los hombres
tificia : conocen de causas puramente ecle verdaderamente católicos estan persuadi
siásticas : en nada se mezclan en las atri dos que la Regencia le reparará librando á
buciones civiles , y no tienen influencia los fieles del cisma en que indefectible
alguna en el orden político. Es muy im mente se caería , si se intentase que se ca
portante que desempeñen sus cargos para minase por él ; porque los beneficios todos
que no padezca retraso la pronta adminis que estan conferidos con título perpetuo
tracion de justicia; pues ha quedado uno por medio de la colacion que se dió á los
en cada sala de las dos que componen el agraciados, no pueden ser suspensos ni
Tribunal ; y me prometo de la rectitud de destituidos sino por sus legítimos obispos,
V. E. que elevándolo á conocimiento de y con formación de causa , sin que mien
la Regencia del reino se dictará la oportuna tras vivan , no mediando esta , puedan re
medida para que se levante la suspension cibir otros mision alguna legítima. Es muy
y concurran todos los individuos al exacto clara la materia para que me detenga en
desempeño de sus respectivos cargos.» alegar razones : estan al alcance de la Re
Estas palabras son la mejor contestacion gencia , y por lo mismo confio en su cato
al tremendo dictámen de los fiscales D.José licismo y me prometo una contestacion
Alonso y D. Joaquín María Lopez, que pro satisfactoria, tributando entre tanto.á S. E.
vocó la consulta del Tribunal Supremo de los respetos de la mas alta consideracion.»
Justicia de 26 de diciembre de 1840, con Si no hubiesen pesado en el ánimo de
forme al cual la Regencia Provisional del la Regencia las razones canónicas alegadas
Reino expidió el decreto de 29 del propio por el Vice-gerente , debia cuando menos
mes y año , de que nos ocuparemos mas por motivos de humanidad , atender á re
abajo. clamaciones tan justas ; pero obraba en las
Cumplidos los deberes que le imponía la altas regiones del poder un espíritu mez
Vice-gerencianopudo el señor de Arellano quino y revolucionario, y así se prefirió
abstenerse de hacer al ministro una come hacer negocio ruidoso y emplear como tea
dida reclamacion contra los destierros, de discordia, lo mismo que servir pudiera
confinamientos y deposiciones que se habian para calmar los ánimos y tranquilizar las
permitido varias Juntas. conciencias. Apresurábase el gobierno á
» Yo quisiera, dice, dispensarme de an adoptar todo cuanto podia herir la suscep
gustiar mas el corazon católico de V. E. tibilidad religiosa de los españoles ; pues
con los hechos á que han avanzado otras que en los primeros momentos de su esta
Juntas , porque no tocan inmediatamente blecimiento en la capital , cuando al pare
al ministerio del cargo de V. E. ; pero esta cer debian llamarle la atencion tantos y tan
Vice-gerencía no tiene otro conducto para .graves negocios, se ocupaba no obstante
entenderse con la Regencia del reino. La en tomar bajo su proteccion á un goberna
de Cáceres ha desterrado y confinado á su dor eclesiástico , ',ue habia emitido en actos
propio R. obispo; las de Granada, la Co judiciales proposiciones que el cabildo de
ruña, Málaga, Ciudad-Real y otros han la Catedral habia creido dignas de censura,
depuesto al Dean , Dignidades , Canónigos y denunciándolas en consecuencia á la au
de las santas iglesias, de las colegiatas, toridad eclesiástica por redolentes et sapientes
curas y demas ministros del Santuario . y haeresim. La Regencia provisional , no obs
han puesto otros en su lugar. Si estos he» tante hallarse encausado dicho señor, man
ches fuesen de los que pudieran tolerarse dó por conducto de la Secretaría de Gracia
y llorarse en secreto , callaría ; pero es y Justicia , que se encargase del gobierno
harto obvio á V. E. que se ha invadido el eclesiástico ; lo que movió otra comunica
territorio de la Iglesia, y se ha trastornado ción del Sr. D. José Ramírez de Arellano
 «

de fecha 20 del propio mes, donde exponía— 57 competencia de la potestad civil , ya tam
con el debido comedimiento las razones bien por la situacion particular en que se
que imposibilitaban al pretendido goberna hallaba el Arzobispado (1).
dor para que pudiese encargarse del go Como un desacierto conduce á otro, se
bierno de la diócesis (1 ). habia empeorado en pocos días la situacion
Tan desatentadamente se habia empe de la Regencia con respecto á los negocios
ñado la Regencia provisional en llevar á eclesiásticos. Asi es que cuando en 5 de no
cabo su malhadado sistema , que al pare viembre podia hacer un acto de justicia y
cer andaba buscando todos los medios de de humanidad, sin verse precisada á revocar
perturbar las conciencias. Con fecha 14 del sus propios decretos y solo atendiendo á las
mismo noviembre expidióse un decreto por reclamaciones del Vice-gerente para que
la Secretaría de la Gobernacion, estable se reparasen los desmanes de las juntas ;
ciendo 24 parroquias en la corte , y acom ahora por las comunicaciones de 17 y de 20
pañando el acto innovador con doctrinas de noviembre se ve mas y mas estrechada
anti-católicas, ó cuando menos susceptibles por el Sr. Ramírez de Arellano, y en la al
de muy mal sentido. Así lo evidenció el ternativa de retroceder ó lanzarse á un es
mismo Vice-gerente en otra comunicacion candaloso rompimiento. No era difícil adivi
que con fecha de 17 del mismo mes, diri nar que se adoptaría el último extremo,
gió alExcmo. Sr. primer Secretario de Es dado que se andaba á caza de ocasiones en
tado y del Despacho , en la cual probaba que se pudiera lucir el lujo de persecucion
que el mencionado decreto era contrario á religiosa. No se hizo esperarmucho la mal
los sagrados cánones: y que de ninguna hadada resolucion; pues que al dia siguien
podia surtir efecto , ya por la in- te de la comunicacion del Sr. Ramírez de

(1 ) « VlCE-GERENCIA DELA NUNCIATURA APOS ( 1 ) »VlCE-GERENCIA DE LA NDNXIATl HA APOS

TÓLICA. «= Excmo. Sr. : El decreto de la Regencia
provisional del reino expedido por la Secretaria de
Gracia y Justicia en 1.° del corriente para que
1). Valentín Ortigosa se encargue del gobierno ecle
siástico del obispado de Málaga , no puede surtir
otro efecto canónico que turbar las conciencias de
aquellos fieles , hacer nulos todos sus actos, y cau
sar males espirituales sin cuento en aquel territo
rio. D. Valentín Ortigosa no tiene mision ni puede
recibirla para gobernar la diócesis de Málaga, por
que lo prohiben los sagrados cánones y las deter
minaciones pontificias. La diócesis de Málaga tiene
un Vicario capitular canónicamente electo , y la
Iglesia no permite que otro se intruse obstinada
mente sin que experimente su reprobacion. Ha
emitido en actos judiciales proposiciones que el
Cabildo de Málaga ha creido que no estan exentas
de censura , y las ha denunciado á la autoridad
eclesiástica en concepto de tenerlas por redolentes
ei sapientes hwresim. Está encausado por lo mis
mo, y censuradas eu su contra segun tengo enten
dido ; no es posible pues que se admita como doc
tor y maestro al que no enseña doctrina pura seguu
entiende el que tiene en si radicalmente la juris
diccion en Sede Vacante. Son demasiado públicos
los antecedentes en esta linea de 1). Valentín Orti
gosa , y la prensa periódica se ha ocupado de ellos
con repeticion. Me parece que no pueden ser des
conocidos á los individuos que componen la Re
gencia , y por lo mismo me prometo de su sabidu
ría que lo tomarán en consideracion , y acordarán
la correspondiente medida para que no ejerza acto
alguno en un territorio para el que no se halla en
viado por la Iglesia, única que puede dar juris
diccion en las materias de su competencia. «= Dios
guarde á V. E. muchos años. Madrid 20 de no
viembre de 1840. — Excmo. Sr. = José Ramirez
de Arellano. -= Excmo. Sr. primer Secretario de
Estado y del Despacho.»
TÓLICA. «= Excmo. Sr.«=El decreto de la Regencia
provisional del reino expedido por la Secretarla de
la Gobernacion en 14 del corriente estableciendo
24 parroquias en esta corte, por estar persuadido
de que el asunto de divisiones territoriales en lo
eclesiástico es de disciplina externa y de la legítima
competencia de la potestad civil, me impone el de
ber como Vice- gerente de la Nunciatura apostólica
en estos Reinos, de hacer presente á V. E. para
que se sirva elevarlo á conocimiento de la Regen
cia del Reino , que esta proposicion puede ser sus
ceptible de diversos sentidos, pues si solo abraza
la facultad de hacer presente á los RR. Obispos lo
conveniente que será distribuir de este ú otro modo
el territorio parroquial dejando á su autoridad la
determinacion que couceptúe necesaria conforme
á lo prescrito por los sagrados cánones, es cierta
y está fuera del alcance de toda censura; pero si en
ella se quiere dará entender que la disciphna exte
rior de la Iglesia es de la competencia legítima de
la potestad civil , de modo que esta pueda mudar
la y establecerla como mejor la pareciere , es doc
trina que está condenada, y no es lícito á los cató
licos profesarla.
°La demarcacion de las parroquias de esta capi
tal está hecha por la autoridad eclesiástica como
de su competencia; las de todas las diócesis del
reino lo estan por sus RR. Obispos como objeto de
de su jurisdiccion , y á estos atribuye el Concilio
de Trento la autoridad de variarla.
«Jesucristo al tiempo que instituyó su Iglesia
concedió á los Apostóles y á sus sucesores una po
testad independiente de toda otra , que ha sido
reconocida unánimemente por todos los Padres con
Osio y San Atanasio , cuando previnieron á los
Emperadores que no se mezclasen en los asuntos
eclesiásticos.
«La division de los partidos para la jurisdiccion
civil de ningun modo sirve de regla para lijar la
 — 58 —
Arellano relativa á D. Valentín Ortigosa, propuso á la Regencia fas medidas que se
se notició al Vice-gerente en términos se adoptaron en el decreto de 29 de diciem
cos y desabridos, que la Regencia provi bre , llevando todavía mas allá que los fis
sional del Reino habia acordado pasar el cales la animosidad contra el Vice-gerente.
negocio al Tribunal Supremo de Justicia, Estos al proponer el estrañamiento del Rei
previniendo á dicho Sr. que no se le admi no y ocupacion de temporalidades , lo ha
tiría ninguna otra comumcacion hasta que cían con cierta timidez, indicando que qui
oido el Tribunal se tomase la resolucion zás seria bastante que se le reprendiera y
conveniente ( 1 ). desaprobara su conducta en términos enér
Cuando la Regencia provisional deter gicos y conminatorios , haciéndole entender
minó dar este paso, lo hizo sin duda con que se le impondrían aquellas penas si por
prevision de todo lo que habia de suceder; cualquiera medio ó concepto volviese á im
siendo notable, que no se pasaron al Tribu pugnar las resoluciones del gobierno ; mas
nal Supremo todas las comunicaciones del el Tribunal propuso á secas que el Sr. Ra
Vice-gerente, sino la relativa al negocio mírez de Arellano fuese estrañado de estos
del Sr. D. Valentín Ortigosa , como de reinos y ocupadas sus temporalidades. La
seando concentrar la atencion sobre lo que Regencia adoptó en todas sus partes la con
podia dar lugar á mas amplias considera sulta del Tribunal Supremo, y en su conse
ciones en el dictámen fiscal , con respecto á cuencia expidió el famoso decreto en que
á gravísimos puntos de dogma y disci se mandaba cesar al Sr. de Arellano en la
plina. Vice-gerencia , se aprobaba en todas sus
El negocio tuvo el lamentable resultado partes el dictámen del Tribunal en lo rela
que desde un principio era fácil prever ; tivo al asunto del Sr. D. Valentín Ortigosa,
opinaron los fiscales como se supone, con se mandaba cerrar la Nunciatura, se dispo
tra la conducta del Vice-gerente , calificán nía que cesase el Tribunal de la Rota, y en
dola con los términos mas duros , no sal fin se estrañaba de estos reinos á D. José
vando siquiera su intencion , y hasta acha Ramírez de Arellano , ocupando y re
cándole mala fe y hostilidad bastante evidente teniendo sus rentas eclesiásticas, y los
al gobierno ó sea á la Regencia. El Tribuual sueldos y obvenciones que recibia del esta
de conformidad con sus fiscales , y adop do , y cualquiera otras temporalidades que
tando las razones en que estos se fundaban como eclesiástico le correspondieran (1).

extension y limites de la jurisdiccion eclesiástica :
dice S. Ignacio I que do se ha teñido por conve
niente que la Iglesia de Dios se sujete á las mu
danzas mtroducidas por necesidad en el gobierno
civil , pues que los honores y divisiones cclesiásti-
ticas no dependen de las que tenga á bien estable
cer el Emperador por sus intereses.
»En la actualidad en este Arzobispado nada pue -
de hacerse aun por la autori dad eclesiástica , por
que se halla vacante la Silla ; y segun prescribe el
Concilio de Trento citado , en este estado nada
puede innovarse.
«El infrascrito se promete de la bondad de V. E.
que influirá en el áinmo dela Regencia provisional
del Reino para que se aclare en favor de la potes
tad de la Iglesia el verdadero sentido de la propo
sicion citada ; y que se mande que se espere á que
se llene la Silla para tratar asunto tan importante
cual corresponde , que no dudo será conforme á
los deseos del Gobierno. = Dios guarde á V. E.
muchos años. Madrid 17 de noviembre de 1840.—
Excmo. Sr.= José Ramírez de Arellano.=Excmo.
Sr. primer Secretario de Estado y del Despacho-»
(1) »Ilmo. Sr. : La Regencia provisional del
Reino ha acordado pasar al Tribunal Supremo de
Justicia la comunicacion de V. S. I. de fecha de
ayer , juntamente con el expediente relativo á la
autorizacion de V. S. 1. para ejercer la Vice-geren
cia , á fin de que dé su dictámen; resolviendo ade
mas que hasta que oido el Tribunal se tome la
resolucion conveniente, no se admita ninguna otra
comunicacion de V. S. I. Lo que de orden de la
misma Regencia digo á V. S. I. , para su conoci
miento. = Dios etc. = Palacio 21 de noviembre de
1840. = Al Vice-gerente de la Nunciatura apos
tólica.»
( 1 ) « Atendiendo á los sólidos fundamentos de
la consulta del Tribunal Supremo de Justicia , de
26 del actual , la Regencia provisional del Reino
á nombre y en la menor edad de S. M. la Reina
Doña Isabel II viene en decretar :
1.° «Se declara insubsistente, y en caso ne
cesario ~se revoca el asentimiento regio para que
D. José Ramírez de Arellano despachase los ne
gocios de la Nunciatura apostólica en estos Reinos.
2.° Cesará inmediatamente este sugeto en la
Vice-gerencia, y se declara que aunque hubiese
tenido una personalidad legal, no se reconocería
en él el derecho de oficiar al Gobierno en los tér
minos en que lo hizo por sus comunicaciones dcS,
17 y 20 de noviembre último.
3.° « Se aprueba en todas sus partes el dictámen
del referido Tribunal Supremo de Justicia en lo
relativo á la órden comunicada por el Ministerio
de Gracia y Justicia en 1.° del citado mes, y á lo
demas concerniente al asunto del R. Obispo electo
de Málaga D. Valentín Ortigosa con las preven
ciones y protestas que propone dicho Tribunal.
 Las disposiciones contenidas en el men
cionado decreto se efectuaron del modo mas
pronto y ruidoso que decirse pueda. Es
hasta ridículo ver aquella ostentacion de
actividad y energía para estrañar al Vice
gerente de la Nunciatura , cual si se trata
se de una persona cuya presencia en la ca
pital pudiera comprometer por instantes la
tranquilidad de la nacion. Despues que he
mos visto tanta humillacion ante las exi
gencias y desmanes de la Gran Bretaña,
tantas vergonzosas transacciones con los
motines, tanta impotencia, tanta indecision
y timidez á la vista de graves peligros, es
curioso recordar la firmeza y valentía de que
se hacia gala para un elesiástico indefenso.
Sin demora debia nombrarse un gefe que
que se hiciese cargo y respondiera de la
persona del Sr. Ramírez de Arellano , y
que con la fuerza de un subalterno y vein
te caballos del ejército le condujese á la
frontera , y en el entretanto que se prepa
raba para emprender la marcha el gefe
nombrado por el Capitan General , debia
quedar encargado de la custodia del Sr. Ra
mírez de Arellano el sargento mayor de la
plaza , quien debia hacer la entrega del
mismo al citado gefe. La órden es comu
nicada el 31 de diciembre, y el Sr. de Are-
llano salia de Madrid á las seis de la ma
ñana del dia primero de enero. Hay en es-
4.° » Se procederá á cerrar la Nunciatura y se
dispondrá que cese el Tribunal de la Kola , po
niéndose en segura custodia todos sus papeles ,
archivos y efectos; y recogiéndose tos breves de 11
y li de marzo de 1839 que conferian ciertas facul
tades al Ramírez de Arellano , en las cuales cesa ,
pero sin que por ello se cause perjuicio á los actos
ya consumados en favor de terceros.
8.0 ic El Tribunal Supremo de Justicia , previa
la instruccion del oportuno cxpedieute, consultará
lo que se le ofrezca y parezca para que ninguno de
los negocios pertenecientes al Tribunal de la Ilota
sufra retraso , ni falten á los españoles las gracias
que concedían los muy reverendos Nuncios, y por
los citados breves Ramírez de Arellano, sin nece
sidad de acudir a Roma , lo cual evacuará el Tri
bunal Supremo como lo requiere la urgencia é
importancia del asunto.
Y 6.° « Se procederá sin dilacion á extrañar de
estos Reinos al D. José Ramírez de Arellano, ocu
pando y reteniendo sus rentas eclesiásticas, los
sueldos y obvenciones que recibía del Estado , y
cualquiera otras temporalidades que le correspon
dan como eclesiástico, pero sin comprender en la
ocupacion sus bienes propios, patrimoniales ó ad
quiridos por otro título , de cualquiera clase que
se*n. Tendrcislo entendido , y dispondréis lo ne
cesario á su cumplimiento. = El Duque de la Vic
toria , Presidente. =. Palacio á 29 de diciembre
de 1SíU.-= A D. Joaquiu María de l'crrcr. »
tos sucesos tanta pequenez, que ni siquiera
merecen que los califiquemos de injustos
y crueles.
CONDUCTA DE ESPARTERO CON EL PAPA.
Tan temeraria conducta no podia menos
de producir frutos muy amargos. En efec
to ; Su Santidad cuyo animo altamente afli
gido por los excesos de la revolucion du
rante seis años estaba siguiendo con ansio
sa mirada el curso que iban á tomar los
negocios una vez concluida la guerra civil,
se alarmó nó sin justísimo motivo , al ver
la marcha anti-religiosa y perseguidora em
prendida por la Regencia provisional. Se
mejante conducta debia causar tanta ma
yor extrañeza , infundiendo recelos de ul
teriores designios, cuanto que el gobierno
obraba de propio impulso, sin que pudiese
alegar la escusa de que le andaban empu
jando las oleadas de la revolucion. Esta, si
bien exigente en otros puntos, se mostraba
con bastante indiferencia en lo tocante á
negocios eclesiásticos ; por manera que en
las Cortes que fueron el producto del pro-
nunciamento de setiembre, recibió posterior
mente el Sr. Alonso una lección muy dura ,
por querer arrojarse al planteo de un sistema
cismático. El Sumo Pontífice creyó llegado
el caso de levantar su voz para que el si
lencio no se atribuyera á debilidad ó aquies
cencia; y en el Consistorio secreto de 1.° de
marzo de 1841 dirigió álos cardenales una
sentida alocucion en que se lamentaba de
la dilatada serie de atentados que se habian
cometido y se estaban cometiendo en Es
paña contra los derechos de la Iglesia. Fi
guraban entre los agravios de que se que
jaba el Santo Padre el reciente extraña
miento del Sr. Ramírez de Arellano, Vice
gerente de la Nunciatura , y demas provi
dencias sobre el Tribunal de la Rota : todo
lo cual calificaba el Papa de violacion ma
nifiesta de su jurisdiccion sagrada y apos
tólica, ejercida sin obstáculo en España
desde los primeros tiempos de la Iglesia.
Publicada la alocucion de Su Santidad
preciso es confesar que el gobierno habi»
recibido una herida profunda ; pues que no»
solo se habia perdido toda esperanza de
que durante su administracion se restable
ciesen las relaciones amistosas con la corte
de Roma , si que tambien las desavenen
cias habian llegado á un punto de tal gra
vedad y acritud, que era muy temible no
viniésemos á parar á un escandaloso rom-
 — 60 —
pimiento. Este era el primer resultado de violenta invectiva en que el gobierno y la
la conducta ilegal , injusta é impolítica del nacion española se ven acerbamente acu
gobierno presidido por Espartero : la na sados de perseguidores de la Iglesia , de
cion que tenia derecho á exigir de quien la sospechosos en la fe , y como amenazados
habia revuelto para apoderarse del mando, de ser excluidos del gremio de la cristian
que al menos la gobernase conforme á sus dad, si no vuelven sobre sí.» Esta insigne
verdaderos intereses , veia con dolor que falsedad que bien fuera merecedora de ca
se la llevaba á un cisma religioso , expo lificacion mas severa , está desmentida por
niéndola á una discordia intestina que po las palabras de la alocucion del Santo Pa
día encender de nuevo la guerra civil. dre. No es verdad que se amenace con cen
Ya que la Regencia habia provocado el suras á los autores de los hechos ; se les
golpe , estaba en su interes , el que procu recuerda sí que estas existen para los per
rase atenuar sus efectos , por medio de una petradores de semejantes atentados , que se
conducta digna y mesurada. Pero muy al incurren ipso facto en fuerza de lo preveni
contrario ; creyo remediarlo todo publican do en las constituciones apostólicas y en
do el famoso maniiiesto de 30 de julio de los decretos de los concilios ecuménicos.
1841 firmado por el ministro de Gracia y Mas el Sumo Pontífice se abstiene de con
Justicia D. José Alonso, donde se prodigan minar, y hasta tiene la dignacion de diri
á la Curia Romana los mayores denuestos, girse á los mismos que le insultan , baldán
y se le achacan al Sumo Pontífice segun doles un lenguage tierno, sentido, digno
das intenciones, que ni tenían cabida en el del Sumo Sacerdote y del Padre comun
ánimo de Su Santidad , ni se hallaban en de los fieles. « En cuanto á los autores de
la letra ni en el espíritu de la alocucion estos hechos, dice, que se glorian en el
impugnada. nombre de hijos de la Iglesia católica, les
Fiel la pandilla dominante á su sistema invitamos y suplicamos en el Señor, que
favorito de convertir en cuestiones de par abran sus ojos hácia las heridas hechas á
tido y en elementos de discordia , los ne esta Madre bienhechora : y que se acuer
gocios mas grandes , se empeñó en dar á den sobre todo de las censuras y de las pe
entender que la alocucion del Sumo Pon nas espirituales que las constituciones após-
tífice debia considerarse « como una declara tólicas y los decretos de los concilios ecu
cion de guerra contra la reina Isabel II , ménicos imponen ipso facía á los invasores
contraía seguridad pública, y contra la de los derechos de la Iglesia ; que cada uno
Constitucion del Estado ; como un mani de ellos tenga piedad de su alma , presa
fiesto en favor del vencido y expulsado con lazos invisibles , y que piensen que el
Pretendiente , y una provocacion escanda juicio es mas duro contra los que mandan
losa de cisma, de discordia, de desorden si consideran seriamente que hay una pre
y de rebelion.» Imaginóse el gobierno que suncion poderosa en el mismo juicio, si
con tan crueles invectivas lograría intere alguno de ellos llega á morir lejos de la co
sar en su favor la mayoría del pueblo es munion y preces de la comunidad y co
pañol ; como si este no hubiese leido con mercio religioso.» ¿Dónde está la amena
sus propios ojos la alocucion de Su Santi za, donde está la acerba acusacion de per
dad , en la cual se tenia sumo cuidado de seguidores de la Iglesia , de sospechosos
separar la cuestion religiosa, de la política: en la fe? ¿Cómo se atrevió el gobierno á
de manera que tratándose de los eclesiásti asentar que el Sumo Pontífice hubiese di
cos expulsados de España , se advierte ex rigido una violenta invectiva á la nacion
presamente que algunos lo habian sido , española cuando le hacia justicia del modo
« nó porque hubiesen tomado parte en la mas terminante? «tambien alabamos igual
querella civil con uno ú otro partido , sino mente , dice , al pueblo católico , cuya in
porque defendieron valerosamente la cau mensa mayoría persiste en su antiguo res
sa de la Iglesia contra las pretensiones del peto hácia los obispos , y pastores de menos
gobierno . » dignidad canónicamente instituidos, y esta
Deseosa la Regencia de acriminar de to mos esperanzados que el Señor , rico siem
dos modos al Sumo Pontífice , se dejó lle pre de misericordia, mirará su viña con
var hasta el extremo de atribuirle no solo ojos propicios.» Lejos el gobierno de imitar
intenciones sino expresiones que jamas figu semejante lenguage , lejos de buscar pa
raron en la alocucion mencionada , dicien labras que suavizasen algun tanto la dureza
do que el manifiesto « era en realidad una del sentido , anduvo en busca de las mas.
 fuertes que le fue posible encontrar; como— 61 españoles,
— decirle que se declaran contra
si le tardase el dia en que pudiera arrojar- él todas las opiniones , todos los partidos,
se á un rompimiento definitivo. Allí se ha- todos los individuos , á menos que per-
bla de « tea incendiaria arrojada por el pa-
pa tenezcan al intercs mas vil ó á la supers
dre comun de los fieles sobre el no bien ticion mas inmunda! Quien á tanto se atre
apagado incendio, para que no deje de 'ver vía no es extraño que recordara con ma
ter sangre el pueblo cristiano ;» allí se dice ligno placer las palabras del Rey de Castilla
que « por fortuna no estamos ya en los Juan II, al verse reconvenido por la pri
tiempos de odiosa memoria en que á un sion de un prelado; no esestraño que pro
amago del Vaticano temblaban los tronos curase recopilar en pocas palabras todas
y se agitaban las naciones;» allí se califica las desavenencias que mediaron entre los
ía conducta del Papa de « dura é injusta Papas y los Reyes de España, desde Fer
mente obstinada;» allí se recuerda «la nando el Católico hasta Isabel II.
eterna disputa entre el sacerdocio y el im Si los intereses de la Religion y el res
perio sobre lo temporal de la Iglesia , la peto debido al Sumo Pontífice , no bastaban
contienda inacabable entre las pretensiones á detener á la Regencia provisional, por lo
de la Curia Romana y las regalías de los menos debiera ser mas circunspecta en dar
príncipes » añadiendo que « de las quejas otros pasos que la presentasen como poco
que acumula Su Santidad en su escrito no cuidadosa de los intereses de la civilizacion
hay una sola en verdad donde no traspire y de la humanidad ; debiera no obrar de
esta idea , no hay una sola donde no vaya tal suerte que desterrase de España aque
envuelta la intencion de una mejora , de llas saludables instituciones , que se hallan
una usurpacion eclesiástica, sobre la auto establecidas en casi todos los paises del
ridad civil » allí niega el gobierno que el mundo, sin exceptuar los protestantes. Pe
Sumo Pontífice haya ejercido en España su ro tal era el encono con que procedía la
jurisdiccion sagrada y apostólica desde los Regencia , tanto el ahinco de mortificar de
primeros tiempos de la Iglesia , allí se ase todis maneras á los católicos, que no qui
gura que «nunca como ahora se atrepe so ni aun tolerar que disfrutasen , lo que
llaron con tan poco miramiento los fueros no se les niega bajo ningun gobierno me
y facultades de la potestad temporal, ni se dianamente civilizado. Saben nuestros lec
ha hecho insulto mayor á las regalías siem tores que con la mira de favorecer las mi
pre reconocidas de la España y de sus mo siones católicas difundidas por toda la faz
narcas;» allí se insulta hasta de un modo de la tierra , se ha formado de algunos
grosero al Sumo Pontífice, preguntando años á esta parte la asociacion que se titu
cuál es el origen de esta repentina y desu la : Obra de la propagacion de la fe. Extraña
sada confianza en la Curia Romana , si es esta piadosa asociacion á todo cuanto no
por ventura la situacion de nuestras cosas sea contribuir con limosnas al socorro de
públicas la que le da tales brios, y espera las necesidades de las misiones, parece que
que aun cuando no encuentre eco que la no debia inspirar recelos de ninguna clase
ayude , esta reclamacion orgullosa pasará á la Regencia provisional , mayormente
cuando menos sin notarse ó sin vindicarse cuando el centro de la asociacion no está
por medio del conflicto ruidoso de los par en Roma , que es lo que podia alarmar á
tidos;» allí tomando un tono indigno de la quien con tal dureza trataba al Sumo Pon
persona á quien se dirige y que asienta tífice. Sin embargo , y á pesar de tan par
muy mal en boca de un gobierno , se aña ticulares circunstancias , no quedó tranqui
de : « engáñase mucho el Santo Padre si la la susceptibilidad del Sr. Becerra ; era
asi lo piensa ; y esté seguro de que no ha preciso aprovechar todas las ocasiones y
brá opinion , no habrá partido , no habrá pretextos para herir la religiosidad de los
individuo, á menos que pertenezca al in españoles; y la Regencia provisional quiso
tercs mas vil ó á la supersticion mas inmunda, valerse de la que se le presentaba. España
que no ayude y sostenga á la reina doña habia sido uno de los últimos paises cató
Isabel II y á su gobierno , contra esta inau licos donde se habia introducido la obra di-
dita agresion.» ¡Qué olvido mas lamenta la propagacion de la fe; pero la piadosa ins
ble de todaslas leyes del decoro ! hablando titucion comenzaba á ser conocida, y al
con un soberano , con el Sumo Sacerdote , parecer llevaba señales de extenderse y ar
con la cabeza de la Iglesia católica , con el raigarse. La Regencia acudió al peligro c
gefe de la religion profesada por todos los la firmeza y energía que se dejíi "
 — 62 —
saliendo á luz una severa circular que las leyes á que se refiere eran para otros
acompañada de un prólogo harto significa casos y otros tiempos. Lo que no miraban
tivo, y no muy favorable á los directores con recelo los gobiernos protestantes, no
'de la asociacion , mandaba que no se con parece que debiera causarlos á un gobier
sintiese ni tolerase en España la sociedad de no católico; y si tan escrupulosa era la Re
la Propagacion de la fe (1). gencia para que se observasen las leyes,
No sabemos qué escándalos y bullicios po podía mandar que los asociados pidiesen la
día producir la obra de la Propagacion de autorizacion de cuya falta se queja. Pero
la fe ; y no debia olvidar la Regencia que no era esto lo que se quena ; no era el celo
de la observancia de las leyes lo que dicta
ba la circular; y asi es que los artículos se
( i ) « Las leyes del reino prohiben expresamente extendieron mucho mas allá que el mismo
que se establezcan y toleren cofradías, congre prólogo en que se los motivaba. Se desea
gaciones , juntas ó sociedades de cualquier deno ba que la asociacion desapareciese , para
minacion ni aun con pretextos espirituales y pia
dosos , sin que preceda la autorizacion y consenti no renacer jamas, y asi se la prohibió ter
miento del gobierno encargado de evitar escándalos, minantemente sin ninguna clase de limita
bullicios y otros males y daños en los pueblos. ciones ; se ofrecía ademas la oportunidad
Tambien prohiben las leyes , que los extranjeros
bagan cuestaciones ni pidan limosnas en España , de zaherir á la Junta directiva , y ocasion
cualquiera que sea el objeto , sin obtener previa tan bella no debia malograrse , ya que se
mente real licencia. Sin embargo , es ya un hecho trataba de una cosa francesa, y el ministro
averiguado que se ha introducido en España una tenia la pueril complacencia de decir que
asociacion con el título dela Propagacion dela Fe,
que nacida en Lion de Francia , y teniendo allí su el « término inmediato de la asociacion , era
junta directiva , ha encontrado apoyo y proteccion sacar datero á los espaftoks para enviarlo á
en algunos eclesiásticos españoles y en otras per
sonas que por su influjo y relaciones llevan en pos Francia, o
de si á las clases sencillas y candorosas. Aun ha Asi comprendían estos hombres sus de
habido algun prelado , que llevado de un celo in beres; asi obraba la Regencia personifica
discreto , y no teniendo en cuenta las considera da en su presidente Espartero ; asi enten
ciones debidas á la potestad temporal , ha precin-
dido enteramente de lo que mandan las leyes , y día este hombre el labrarla prosperidad de
ha dirigido sus exhortaciones por escritos impresos la nacion, y abrir para si un porvenir de
y en actos públicos para que sus diocesanos se ventura y gloria.
mscriban en la sociedad mencionada. El objeto de
esta institucion en su último término podrá ser
santo y laudable ; pero en su término inmediato PROYECTOS CISMÁTICOS.
no es otro que el de sacar dinero á los españoles
para enviarlo á Francia , sin darles en los negocios Las vejaciones, losatropellamientos, las
de la sociedad otra parte ni intervencion que la de cas
contribuir con las limosnas. Considerándolo todo ruidosas de todas
causas
categorías
contra personas
, no eraneclesiásti
mas que-
con la meditacion que exige su importancia , y en
el deber de hacer que se cumplan y ejecuten las aplicaciones particulares del sistema gene
disposiciones legales, ha resuelto la Regencia pro ral adoptado por el gobierno; sin embargo,
visional del reino.
i.» « Que no se consienta ni tolere en España la todavía se abstenía este de adoptar provi
referida sociedad de la Propagacion de la Fe. dencias universales, que pudiesen conducir
2.o « Que las autoridades asi civiles como ecle inmediatamente al cisma ; y á decir verdad,
siásticas impidan su existencia, sus reuniones y quedaba alguna esperanza para cuando
comunicaciones.
3.° «Que impidan tambien la introduccion y fuese nombrado regente único el general
circulacion de sus escritos y papeles. Espartero. «Quizás, se decían á sí mismos
4.° « Que los jueces y alcaldes procedan á ocu
par y remitir al ministerio de Gracia y Justicia los hombres de sanas intenciones y de juicio
todos los relativos á la sociedad en cualquier parte sosegado y cuerdo; quizás en habiendo lle
que se hallen. gado al encumbrado puesto que su ambi
8.a « Que del mismo modo ocupen , embarguen cion anhela , el soldado de fortuna conocerá
y depositen cualesquiera fondos ó caudales que sus propios intereses , y en obsequio de
puedan descubrir pertenecientes á aquella , dando
cuenta al mismo ministerio. ellos procurará que amaine esta tempestad
6.° « Que las audiencias y gefes políticos , segun que ahora se mueve sin motivo ni pretexto.
sus respectivas atribuciones, cuiden y dispongan Quizás en la actualidad , simple presidente
lo conveniente para que todo lo referido se cumpla de la Regencia provisional , juzga necesario
y ejecute como corresponde.
« De orden de la Regencia provisional lo digo contemporizar , halagar algun tanto las
á V. para su inteligencia y cumplimiento en la par pasiones revolucionarías, con la mira de
te que le toca. Dios guarde á V. muchos anos. que no le salgan al paso temerosas de una
Madrid 19 de abril de 18f t. »=, Alvaro Gomez.
— Sr reaccion , y le impidan levantarse al mando
 63 -
supremo. Quizás, cuando lo ocupe sin com Disertacion sobre el poder de los Reyes españo
pañeros ni rivales, adoptará una nueva les en la division de obispados, publicada por
política mas conforme con las ideas y sen Llorente en 1810, dedicada al rey José y
timientos de la inmensa mayoría de los es escrita « para preparar y disponer la fácil
pañoles , mas propia para cimentar y dar y gustosa ejecucion de sus reales decretos»
consistencia al poder , para hacerle respe siendo de notar que los fiscales llevan toda
table á los ojos de nacionales y extrange- vía mas allá sus doctrinas que no lo habia
ros.» Vanas ilusiones! tan pronto como el hecho el bien conocido Llorente ; que por
ministerio del regente único tomó en boca cierto no escrupulizaba mucho en punto á
el clero, le lastimó con palabras harto des ortodojia. En el citado informe se atrevían
comedidas: aseguraba con la fórmula acos los fiscales á establecer « que Jesucristo
tumbrada que procuraría atender ásu sub ciñó la potestad de su Iglesia dentro de los
sistencia , pero al propio tiempo se tomaba estrechos límites de lo espiritual , interno y
la libertad de amenazarle con severidad , mental , dijo que su reino no era de este
para el caso que se olvidase del cumpli mundo , mandó dar al César lo que era del
miento de sus deberes. Asi se expresaba el César , y él mismo dió una prueba de esta
Presidente del consejo de ministros al pre obediencia pagando los tributos de su capi
sentar á las Córtes su programa de gobierno. tacion y la de San Pedro. » Estas palabras
Proteccion absoluta para todas las clases ; que son poco menos que una copia entera
para el clero proteccion condicional ; ó como mente literal de las que se hallan en Llo
si dijéramos: en una mano el pan, en otra rente , no estan siquiera explicadas en el
el palo. sentido que lo hace este escritor cuando
Graves síntomas indicaban bastante claro añade que « la potestad espiritual , interna
que el gobierno se proponía dar un golpe y mental de la Iglesia incluye la de todos
atrevido , tan pronto como se le ofreciese la los actos externos sin los cuales faltaría su
oportunidad. Conocíase que Espartero no ejercicio ; que el gobernar espiritualmente
habia comprendido su posicion, que no tra la Iglesia comprende la facultad de congre
taba de ahogar las ideas revolucionarias , garse los obispos , y establecer reglas para
sino de fomentarlas en cuanto no amena gobernar, sin contradiccion á las leyes ci
zasen su poder de una manera inmediata y viles que no se opongan al dogma y buena
directa; que muy al contrario intentaba moral. »E1 Tribunal Supremo en la con
remover todos los elementos de discordia y sulta motivada porel informe de los fiscales,
anarquía , para que en medio de la confu se atrevió á decir « que el patronato uni
sion pudiere él continuar con mas desem versal en las iglesias de España que tienen
barazo la obra , de llevar á cabo los ambi nuestros Reyes, no le tienen por concesio
ciosos designios que meditaba. Echábase nes ó privilegios de la corte de Roma, sino
de ver, que durante el período de la re por otros títulos á la par que gloriosos, in
gencia , hasta la época en que debiera pro dependientes de todo origen. » No lo en
longarse la minoría de la Reina , se habia tendía asi Felipe II , quien por cierto no
propuesto reducir todo su sistema político era poco celoso de las regalías , cuando en
á la fórmula siguiente : « sostenedme , y la ley 4.\ tít. 17, lib. 1.° de la Novísima
haced lo que querais. » Pero todavía que Recopilacion decía qne era patron de las
daba alguna duda de si llevaría tan lejos su iglesias de estos reinos por derecho y anti
desatiento en los asuntos religiosos y su gua costumbre y justos títulos, y concesiones
encono contra la Iglesia , que se atreviera apostólicas.
á tomar la iniciativa para arrojar la nacion Todavía estos indicios no eran bastantes
á un abismo insondable , haciéndola abrazar para que se pudiese asegurar que Esparte
sin rodeos ni disimulo el cisma con respecto ro abrigase expresament? el designio de
al Sumo Pontífice. hacer de la Iglesia de España una iglesia
Ya en el dictámen fiscal sobre el nego protestante. Él tuvo buen cuidado de no
cio del Vice-gerente D. José Ramírez de dejarnos en la incertidumbre sobre este
Arellano, se notaban expresiones muy alar particular : asi es que cuando se creyó ase
mantes que revelaban con bastante clari gurado en el mando , es decir despues de la
dad los designios que se abrigaban en ele victoria conseguida sobre los sublevados de
vadas regiones. En otro dictamen que se octubre , y despues de apaciguada la revo
publicó en la Gaceta de4de enero de 1841 lucion de Barcelona , dirigió sus tareas al
se halla nada menos que un extracto de la premeditado intento. El primer paso que se
 61 —
dió en el negocio fue el proyecto de ley nocido Explica en ladespues
Iglesia ácomo
su manera
dogma el católico
origen?
sobre jurisdiccion eclesiástica , leido por el
Sr. ministro de Gracia y Justicia D. José de la jurisdiccion eclesiástica en lo tocante
Alonso , en la sesion del 31 de diciembre á negocios temporales, resolviendo con rá
en el Congreso de diputados. Increible pa pidas plumadas , cuestiones gravísimas ; y
recía que á tanto llegase la audacia del pasando á la jurisdiccion sobre causas pu
Ministro , bien que al someter á la delibe ramente espirituales, falsea lastimosamente
racion del Congreso el proyecto mencio la historia de España , afirmando que la
nado , nos advierte que lo hace con la autoridad del Romano Pontífice no tuvo
competente autorizacion del Regente del Reino, ejercicio entre nosotros por espacio de mu
y del consejo de ministros. Este malhadado chos siglos ; y establece con el mayor de
proyecto era digno precursor del otro que senfado que la potestad civil está en su
se presentó á las Cortes por el mismo mi derecho haciendo de los tribunales eclesiás
nistro en 20 de enero de 1842 , donde se ticos privilegiados loque bien le pareciere;
proclamaba el cisma de la manera mas otorgándole nada menos que la facultudde
escandalosa. Bien valen la pena estos dos alterar la actual disciplina de la Iglesia ,
proyectos de que nos ocupemos un tanto de volviendo á la que en sentir del ministro
su examen , pues que de él resultará de se En reconocía
cuanto yá observaba
la parte dispositiva
en otros tiempos.
es tanto
mostrado hasta la evidencia, que Espartero
tenia el designio de abolir la religion cató el atrevimiento del Sr. Alonso , resuelve
lica en España ; y que si no introdujo el con tanta ligereza los negocios mas graves,
Protestantismo en la Península fue porqué concentra de tal modo en las manos de la
no pudo ; porque aquella planta maligna potestad civil, la jurisdiccion eclesiástica,
no encuentra donde arraigarse en este que basta la simple lectura de los artículos
suelo clásico de fe católica ; porque la Pro del proyecto para convencerse de que á los
videncia que vela sobre los destinos de esta ojos del gobierno nada era la autoridad del
nacion desventurada , no quiso que á tal Sumo Pontífice, nada los cánones,
extremo llegase nuestra cadena de infor los concordatos ( 1 ). »
tunios.
Dos partes contiene el proyecto de 31 de
diciembre: la expositiva y la dispositiva:
en ambas se descubre bien á las claras, cuál juicios (11 «Artículo 1.» No habrá en España para los
eclesiásticos otra jurisdiccion que la ordi
es el espíritu que guia la pluma de su autor. naria de los diocesauos, con las apelaciones á los
En la exposicion comienza el Sr. Alonso superiores inmediatos, segun los cánones de la
asentando (pie en los obispos reside esen Iglesia española.
Art. 2." «La nacion no consiente por lo mismo
cialmente la plenitud del sacerdocio cris cuencia los juiciosse terminarán
eclesiásticosestos
peregrinos
en las ,provincias
y en su o
tiano ; dejando entender con bastante cla
ridad , que en un principio todos los obis tropolitanas de España.
pos eran iguales, y que ninguno entre ellos ciaArt. que3."
á instancia
«La nacion
del renuncia
señor Keyal privili
D. Cárlos
obtenía el primado de honor y jurisdiccion. le dispensaron por el breve de2(>de marzo del77i;
« Sucesores de los apóstoles , dice , tienen T por consecuencia queda aliolido el Tribunal de la
la misma potestad que á los últimos comu Rota de la Nunciatura apostolica de estos reinos.
Art. 4.° «Renuncia igualmente la nacion el pri
nicó el Divino Fundador de la Iglesia , cuan vilegio obtenido por el señor Rey don Cárlos I de que
do les trasmitio el Espíritu Santo , los en los nuncios de Su Santidad en estos reinos ejercie
vió del mismo modo que habia sido envia sen jurisdiccion; y por consiguiente queda abolida
do por su Padre, les concedió la facultad estaArt. en la Nunciatura española.
5." «La nacion no permite que continúe la
de atar y desatar, y los constituyó vicarios jurisdiccion eclesiástica privilegiada de las órdenes
suyos, pastores y rectores de su Iglesia. militares; y en su consecuencia quedan abolidos el
Asi es como se estableció en esta un solo Junta Tribunal especial de las Ordenes, el de la Real
apostólica, el de las Asambleas de San Juan
obispado,
mente tieneenuna el parte.
que cada
» uno solidaría- de Jerusalen y las vicarías subalternas de este y de
aquel , asi como las de los prioratos de las mismas
« Siglos pasaron antes que la Iglesia intro órdenes.
dujera otra gerarquia diferente , que sin em Art. B.° «La administracion de las iglesias del
territorio de las órdenes militares, y la jurisdiccion
bargo no menguaba la potestad de los obispos ; » eclesiástica en el mismo , quedan agregadas á las
¿Dónde está la autoridad del Sumo Pontí diocesanos en que aquel territorio está respectiva
fice? ¿dónde está el primado de San Pedro mente enclavado.
Art. 7.° «No reconoce la nacion las reservas de
y de sus sucesores, constantemente reco Espolios y Vacantes de las prel is del reino rii
 - 65 —
Parecía imposible llevar mas allá él en- | de San Pedro ; pero el fíohierno se rescr-
••ono
la España
contradeUoma
la comunion
y el deseo
con de
la separar
cátedra adelantado
vaba dar ,todavía
cual fue
por consiguiente la Colecturía general de aquellos
ramos, ni las abusivas comisiones de la reverenda
Cámara Apostólica, que para la recaudacion delos
Espolios y Vacantes se conferian antes del estable
cimiento de dicha Colecturía , que por lo tanto
queda suprimida.
Art. 8." «Tampoco consiente la nacion exencion
de los obispados de Oviedo y Leon, ni su preten
dida inmediata dependencia de la Silla Apostólica:
en su consecuencia tendrán la misma dependencia
de los metropolitanos en cuyas provincias estan
anclavados por los demas sufragáneos con arreglo
á los cánónes.
Art. 9.° «Del mismo modo no puede consentir
la nacion que continúen los tribunales contenciosos
de los conservadores eclesiásticos, ni los llamados
de la Visita eclesiástica ; y en su consecuencia ce
sarán todos los de esta clase que hoy existan en
cualquiera diócesis.
Art. 10. «Los prelados desempeñarán guberna
tivamente el cargo pastoral de la visita de las igle
sias de sus diócesis respectivas , bien por si , bien
por visitadores delegados suyos, circunscribiéndose
los unos y los otros á lo que sea puramente espi
ritual y eclesiástico.
Art. 1 1 . « En su consecuencia ni los obispos ni
los visitadores podrán exigir la presentacion de
testamentos ni de otras cualesquiera disposiciones
de esta clase , como abusivamente se ha ejecutado
hasta aquf : pero podrán tomar noticias privadas
acerca del cumplimiento de las cargas de misas ú
otras puramente eclesiásticas , y oliciar al juez se
taren
cular omision
competenteen los
paraherederos
que lo haga
, legatarios
efectivo ósi cua
uo-
lesquiera
Art. 12.otras
«Se personas
suprime áelquienes
vicariatocorrespondiere.
general de los
ejércitos nacionales: loscapellanes de los regimien
tos serán los párrocos de esta feligresía: las causas
eclesiásticas que ocurran corresponden al conoci
miento del diocesano en cayo territorio se halle el
regimiento , con las apelaciones al superior in
mediato.
Art. 13. «Queda suprimido el tribunal conten
cioso de cruzada , pero ilesa al comisario general
la autoridad gobernativa del ramo : de las causas
tocantes á la hacienda de las bulas y composicio
nes particulares y cuentas de ellas conocerán los
jueces de primera instancia de la hacienda pública,
con las apelaciones á los tribunales superiores res
pectivos.
Art. 14. «Desde la publicacion de esta ley la
Iglesia de España solo ejercerá jurisdiccion con
tenciosa en las causas espirituales ó puramente
eclesiásticas.
Art. 18. «Para evitar todo motivo de duda se
declara que las causas de que trata el articulo an
terior son las siguientes : » Art. 24. « Contra la sentencia dada en segunda
1.' Las de heregía ó error en el dogma , con tal
que2.ahaya
Laspertinacia.
relativas á los sacramentos , sin entro
meterse en la parte de contrato civil que tiene el
de matrimonio.
3." Las de correccion y castigo de delitos pura
mente eclesiásticos cometidos por personas tam
bieu eclesiásticas.
Art. 16. «En las causas enumeradas en el
articulo anterior solo podrán imponerse penas ís-
TOMO II.
otrola paso
exposicion
muchoy pro-
mas
pirituales, que son las únicas propias de la potes
tad eclesiástica , de ningun modo las que sean
temporales.
Art. 17. «Se abstendrán los prelados de publi
car censuras y excomunioues sin préi ¡a formacion
de causa y audiencia del interesado por los trámi
tes canónicos y legales: y solo en los casos sugetos
á su jurisdiccion espiritual ó puramente eclesiás
tica; y mas particularmente se abstendrán de de
cretar entredichos que perturban la tranquilidad
y quietud de los pueblos*
Art. 18. «Los abusos ó excesos en conocer y
en la observancia de los concilios , los del modo ,
y de no otorgar las apelacioues que sean proce
dentes , y cuantos otros se cometen en el ejercicio
de la jurisdiccion eclesiástica , se reprimirán por
medio de los respectivos recursos de fuerza en los '
tribunales superiores nacionales del distrito en que
resida el prelado que los cometiere, ó en el supre
mo respecto de los de la corte , los cuales ademas
de la facultad de alzar las fuerzas , la tendrán para
corregir los excesos por medio de apercibimientos,
coudeuacion de costas , multas y hasta extraña
miento del reino y ocupacion de temporalidades
segun la gravedad del asunto.
Art. 19 « Los abusos en el ejercicio de la potes
tad espiritual que sean públicos y salgan de la es
fera de reservados , en que no quepa recurso de
fuerza, se reprimirán por el de proteccion.
Art. 20. « Los diocesanos ó sus provisores no
podrán proceder á formacion de causa por obras ,
escritos ó papeles que se suponga contener errores
acerca del dogma , sm que primero sean calificados
por el sínodo diocesano y oido el autor , á quien
para la defensa de su obra , escrito ó papel se le
entregará la censura , y despues de amonestado
para que deponga su error , si no hubiere contes
tado satisfactoriamente , persista en aquel.
Art. 21. «La degradacion, consignacion y libre
enlrcga de los eclesiásticos condenados por delitos
comunes en los tribunales seculares , la acordarán
y ejecutarán los respectivos diocesanos á simple
requirimiento de aquellos por medio de oficio
acompañado de testimonio de la sentencia ejecu
toriada, sin entrometerse á examinar la causa ni
& formarla sobre este particular.
Art. 22. « La jurisdiccion eclesiástica , reducida
segun queda á sus términos propios , se ejercerá
en España con arreglo á los cánones en primera
instancia por los obispos ó sus provisores, y en
segunda por los metropolitanos ó los suyos.
Art. 23. « Las apelaciones de las causas de que
conocieren en primera instancia los metropolita
nos en su diócesis propia , se admitirán para el
metropolitano de la provincia eclesiástica mas in
mediata.
instancia por el metropolitano solo cabe :
1.° « La revision en el concilio provincial de
aquellos juicios que segun los cánones puedan
tratarse en él.
2.° El recurso de proteccion en los tribunales
reales.
Art. 23. « Los tribunales eclesiásticos se arre
glarán en los trámites de las causas á los prescri
tos por las leyes , y á su tiempo por los códigos ;
y en la exaccion de derechos á los aranceles de los
5
 — 66 —
yecto de ley presentados á las Cortes por el corte de Roma , pasando en seguida á so
Sr. ministro de Gracia y Justicia en la sesion meter el proyecto cismático á la delibera
de 20 de enero de 1842. Allí para negar el cion de las Córles: advirtiendo ademas, que
primado del Papa no se anda el gobierno para el efecto se halla auíoriuido por S. A.
con rodeos y disimulo , sino que asienta el Regente del Reino. En él quedan descono
expresamente que « la potestad de atar y cidas y resistidas las reservas apostólicas,
desatar concedida á los apóstoles, lo fue prohibida toda la correspondencia que se
igualmente á los sucesores de estos, los dirigía á obtener de la Curía romana gracias,
obispos; que enviados aquellos por el mundo indultos , dispensas , y concesiones eclesiás
á predicar el Evangelio, ejercitaron plena ticas de cualquiera clase que sean ; se pro
mente sin reservas ni restricciones aquella hibe acudir á Roma en solicitud de dispen
misma potestad , que sin contar con el prima sas de impedimentos; se prescribe á los
do de Roma no solo los apóstoles sino tam M. RR. arzobispos y RR. obispos que dis
bien sus discípulos elevados al obispado pensen por sí ó por sus vicarios ínterin el
decidían en materias de fe, dispensaban en codigo civil regularízalos impedimentos,
lo que se presentaba necesario, y crea sarlos y determina
y el modo
la autoridad
; se declara
queque
hadedispen-
la nacion
ban obispos que para ejercer su potestad no
necesitaron obtener de Roma ni la confir no consiente la reserva introducida de con
macion ni las bulas que la acreditasen; que firmar en Roma y expedir bulas á los pre
Roma halagada con las doctrinas de las lados presentados para las iglesias de España
falsas decretales se arrogó las facultades y sus dominios ; se impone la pena de ex
espirituales concedidas como á él á sus trañamiento del reino y ocupacion de tem
coepíscopos : » sigue despues una serie de poralidades al eclesiástico presentado que
violentas invectivas contra la corte de Roma intentare su confirmacion en Roma ó la
amontonando las vulgaridades que se en expedicion de bulas, ó al metropolitano
cuentran en aigunos libros , y pasando des que gestionase para obtener el palio; se
pues á hablar directamente del actual Pon suprimen las agencias de preces a Roma ,
tífice y expresándose en los términos mas establecidas en aquella corte y en Madrid ;
duros, afirma que la España no tiene otro se derogan todas las leyes contrarias y se
medio para salvar su honor é independen renuncian todas las concesiones hechas á la
cia , que corlar toda comunicacion con la nacion por la Silla apostólica , y se ame
naza la pena de extrañamiento del reino ,
y ocupacion de temporalidades, á los pre
lados que se negasen al cumplimiento de
tribunales seculares : y se usará en aquellos tam
bien el papel sellado , exceptuándose únicamente lo dispuesto en aquella ley. Como si no
los que esten situados en provincias que por las bastasen tantos desmanes, como si no fuera
leyes tengan exencion espresa de usarlo. suficiente el haber desconocido de una ma
Art. 26. « Los pleitos pendientes en los tribu
nales que por esta ley quedan suprimidos, y que nera tan escandalosa la autoridad del Sumo
versen sobre materias que por la misma no que Pontífice, no parece sino que se trató de
dan atribuidas á los tribunales eclesiásticos , se insultarle y escarnecerle , estampando en
pasarán para su continuacion , si pendieren en el artículo 11 , lo siguiente : «Respetando
primera mstancia , á los jueces seculares de esta
que sean competentes , y los que en segunda á los en el Sumo Pontífice la calidad de centro
tribunales superiores de la misma clase. de la Iglesia» ¿que centro de unidad era
Art. '27. « Las causas pendientes en la Rota'al el Papa una vez planteado el proyecto del
tiempo en que fue cerrado este tribunal de orden
de la Regencia provisional , pertenecientes segun gobierno? nada le quedaba que hacer con
esta ley al conocimiento de los tribunales eclesiás respecto á la Iglesia de España ; su auto
ticos, si pendieren en instancia de apelacion de ridad resultaba tan nula como pudiera ser
sentencia pronunciada por los diocesanos hasta lo en la de Inglaterra ( 1 ).
aqui exentos de Oviedo y de Leon , se remitirán al
metropolitano de Santiago.
ii Si en grado de segunda ó de tercera ó ulterior
apelacion, ya sean de aquellas diócesis, ya de otras, (1 ) Art. 1.° ii La nacion española no reconoce
pasará al metropolitano mas vecino 6 próximo al y en su consecuencia resiste las reservas que se
de !a diócesis en que respectivamente se hubieron han atribuido á la Silla apostólica con mengua de
principiado las causas; y con la sentencia de aquel la potestad de los obispos , bajo cuyo título se ha
quedarán ejecutoriadas , salvo los recursos preser tenido y tiene hostilmente desatendida la Iglesia
vados en el art. 2i. de España en sus mas importantes necesidades.
Art. 28. «Quedan derogadas todas las leyes que Art. 2.° ii Se prohibe toda correspondencia que
sean contrarias á esta. Madrid 30 de diciembre se dirija á obtener de la Curia romana gracias , in
de 1841. — José Alonso. dultos, dispensas y concesiones eclesiásticas de
 — 67 —
Espartero que al parecer se habia pro esplendor, y reponer al clero en la catego
puesta remedar á Napoleon no debiera ha ría correspondiente á su elevada clase, que
ber olvidado cuál fue la conducta de este, arrostrando todos los obstáculos, despre
ya desde los primeros momentos de empu ciando los murmullos asi de los impíos co
ñar las riendas del mando. La idea domi mo de los refractarios y descontentos, trató
nante del primer cónsul fue anudar las re de afianzar su dominacion sobre la anchu
laciones con la corte de Roma , no obstante rosa basa que debian prepararle el resta
las muchas dificultades de todos géneros blecimiento de las relaciones con la corte
que era preciso superar , antes de obtener de Roma y consecuente solucion de las in
el resultado que deseaba. En aquella na mensas dilicultades amontonadas por la di
cion habian tomado mucho arraigo las ideas latada serie de espantosos trastornos. Tan
de la escuela de Voltaire, que combinadas acertada fue en este punto la política de
con las del Jansenismo y del Galicanismo , Bonaparte , que á pesar de haber seguido
formaban un conjunto capaz de arredrar á una línea de conducta muy diferente en los
hombres menos atrevidos que Bonaparte. tiempos sucesivos , jamas se arrepintió de
Mas era tan profundo el convencimiento haber dado aquellos primeros pasos, que
que este habia adquirido de que para or tanto contribuyeron á su propio engrande
ganizar y cimentar un poder era indispen cimiento calmando la ansiedad de los áni
sable abrir de nuevo los templos , levantar mos , tranquilizando las conciencias , y ha
del suelo los altares, restituir al culto su ciendo que la religion con su influencia

cualquiera clase que sean, y los contraventores
serán irremisiblemente castigados con las penas
señaladas en la ley 1.' , tit. 13, libro 1.° de la No
vísima Recopilacion.
Art. 3.° « Los breves, rescriptos , bulas y cua
lesquiera otras letras ó despachos de la Curia ro
mana .que sin haber sido solicitadas directamente
desde España vinieren á personas residentes en
este reino , no solo no podrán ser cumplidas , eje
cutadas ni usadas , pero ni aun retenidas en poder
de las personas á quienes viniesen , por mas tiem
po que el de 24 horas , que se señalan de término
para entregarlas á la autoridad superior política ,
á fin de que las remita al gobierno. Toda infrac
cion á lo dispuesto en este articulo será asimismo
castigada con las penas establecidas en el anterior.
Art. 4.° « Se prohibe acudir á Roma en solicitud
de dispensas de impedimentos , y no se dará curso
á ninguna solicitud de esta clase.
Art. S.° « Por ahora , y mientras que en el có-
dico civil se hace la debida distincion entre el con
trato y el sacramento del matrimonio , se regula
rizan los impedimentos y determina la autoridad
que ha de dispensarlos y el modo ; los M. RR. ar
zobispos y RR. obispos de España usarán por s( ó
sus vicarios de las facultades que les competen
para dispensar, siguiendo la conducta en este pun
to observada por prelados predecesores suyos , y
arreglándose en ello á lo ordenado en el concilio
de 1 rento, que dispone que rara vez y siempre
gratuitamente se dispense.
Art. 6.° « Por ningun titulo ni bajo ningun con
cepto volverá á enviarse de España ni por cuenta
de España dinero alguno á Roma directa ni indi
rectamente con destino á aquella corte y su curia
por motivos religiosos , bajo la pena de perder con
otro tanto lo que se envie , si fuere aprehendido ,
ó de pagar una multa del doble de lo enviado , y
de sufrir ademas el castigo que corresponda con
arreglo á la citada ley 1.° , tu. 13, libro 1.° de la
Novísima Recopilacion.
Art. 7.° « En ningun tiempo se admitirá en Es
paña nuncio ó legado de S. S . con facultades para
conceder dispensas ni gracias , aunque sean gra
tuitas: las facultades que se les concedieren á este
fin serán retenidas cuando presentaren sus bulas
al pase.
Art. 8." «La nacion no consiente la reserva in
troducida de confirmar en Roma y expedir bulas
á los prelados presentados para las iglesias de
España y sus dominios ; debiendo arreglarse este
punto á lo dispuesto en el cánon (i del Concilio 12
de Toledo , y á la mas pura disciplina de la Iglesia
de España.
Art. 9.° El eclesiástico presentado para alguna
de dichas iglesias que intentare su confirmacion
en Roma , o la expedicion de bulas tanto para esta
cuanto los metropolitanos para obtener el palio ,
y los que las obtuvieren subrepticiamente , serán
extrañados del reino y sus temporalidades ocu
padas.
Art. 10 « Las mismas penas expresadas en el
artículo anterior será aplicadas á los prelados que
se negaren al cumplimiento de lo dispuesto en es
ta ley.
Art. ll.« Respetando en el Sumo Pontífice la
calidad de centro de unidad de la Iglesia , tendrán
curso todas las comunicaciones que terminen á
puntos de esta naturaleza ; pero deberán dirigirse
todas por conducto del gobierno , el cual las exa
minará para calificar las que sean de esta clase ;
las que no pertenecieren á ellas , serán retenidas.
Art. 12. « Quedan suprimidas las agencias de
Preces á Roma , establecidas en aquella corte y en
la de Madrid.
Art. 13. n Se derogan todas las leyes , renuncia
la nacion todas las concesiones hechas á su favor
por la Silla apostólica . y no consiente las reservas
contrarias á lo que en esta ley se establece y de
termina.
Art. 14. « Se expedirán las oportunas circulares
á los muy RR. arzobispos y RR. obispos del reino
para que cumplan con lo dispuesto en esta ley , y
cooperen con la mayor eficacia á que se conserve
la tranquilidad de las conciencias entresus respec
tivos diocesanos, y les hagan conocer la justicia y
necesidad con que las Cortes y el Gobierno han
tenido que tomar estas disposiciones.
Madrid 20 de enero de 1852. = José Alonso.

benéfica y suave remediase loque remediar
no podia la débil mano del hombre. «Nun
ca se ha arrepentido Bonaparte , se lee en
las Memoiias de Napoleon escritas en Santa
Elena, de haber celebrado el concordato
de 1801 ; y las palabras que se le atribu
yen con este motivo son falsas; no ha dicho
jamas que el concordato era la falta mas
grave que hubiese cometido durante su
reinado.» Sabido es que Napoleon amaes
trado por la experiencia , y tal vez exaspe
rado por los infortunios, desaprobaba en
su desgracia algunos de los actos de su po
lítica de la época de la fortuna ; mas por lo
tocante al restablecimiento de las relacio
nes con la corte de Roma y arreglo de los
asuntos eclesiásticos , nunca le pesó de ha
ber echado mano de los medios de conci
liacion , chocando con el encono del viejo
liberalismo y de los Jansenistas , eternos
enemigos de la paz de la Iglesia.
Muy diferente era la situacion de Espa
ña. Entre nosotros ni estaban arraigadas
las doctrinas de Voltaire , ni tenían los Jan
senistas hombres de gran valía , ni se con
taban entre los individuos del clero muchos
que se distinguiesen por sus doctrinas con
trarías á la reconciliacion con la Sede
Apostólica. La inmensa mayoría del pue
blo español anhelaba vivamente el arreglo
de los negocios eclesiásticos ; y tan lejos es
taba de pensar en proyectos de cisma, que
al oir mentar este nombre funesto , se es
tremecía mas que si le hubiera amenazado
otra calamidad cualquiera. Hasta los mis
mos que tomaron un dia mas ó menos par
te en el empuje del carro de la revolucion ,
que promovieron la persecucion del clero
secular , y la destruccion del regular , que
mas declamaron contra los bienes de la
Iglesia instando con impaciencia para que
se los incorporase al erario público , esta
ban ya fatigados de su propia obra. Satis
fecha su codicia , calmadas sus pasiones , ó
escarmentada su inexperiencia , suspiraban
por una nueva era de paz y tranquilidad ;
y ya que algunos de entre ellos quisiesen
continuar apartados de la fe de sus padres,
deseaban al menos que no se perturbasen
las conciencias de los que la habian con
servado. Por manera, que quien ála sazon
se hubiese propuesto restablecer la relacio
nes con Roma , apenas hubiera encontrado
resistencia que vencer por parte de la na
cion; muy al revés, esta le habría ayuda
do y animado en la empresa , aplaudiendo
con gozo y alegría los esfuerzos que á tal
68
objeto se dirigieran , y contribuyendo á re
mover los obstáculos que pudiesen entor
pecer el pronto y feliz desenlace.
La popularidad de Espartero habría su
bido á un punto difícil de describir, se ha
brían olvidado las circunstancias que le
favorecían , para atribuir el buen resultado
a la rectitud de sus intenciones, á la habi
lidad de su política , á la firmeza de su ca
rácter. En un pueblo como el español todo
lo que se asienta sobre la anchurosa basa
de la religion, adquiere una estabilidad y
robustez en que se estrellan los esfuerzos
de los hombres. Bastábale al Regente ha
cerles creer á los españoles que una vez
satisfecha su ambicion de mando , se propo
nía ejercer sus altas funciones cual cumplía
al primer magistrado de España, bastábale
probarles con algun acto positivo que de
seaba sinceramente reparar los daños cau
sados á la religion por los anteriores go
biernos , para que se hubiesen excitado en
su favor las simpatías de un inmenso nú
mero, y el entusiasmo de no pocos. En
tonces nada tuviera que temer del partido
á quien habia derribado para encumbrarse ;
porque este partido no tenia fuerza , sino
en cuanto se hacia el centinela avanzado de
los intereses religiosos, el campeon celoso
de los sentimientos nacionales. Asi es de
observar que la prensa que mas vivamente
combatía al nuevo poder , tomaba por fre
cuente tema de sus fulminantes discur
sos los proyectos ó los actos del gobierno,
ofensivos de la religion. Y era porque
que conocía que asi tocaba una cuerda que
vibra fácilmente en los corazones españo
les, que el secreto para hacer al poder
guerra á muerte, para presentarle á los
ojos de la nacion cual monstruo aborrecible
y detestable , era ofrecerle meditando de
signios impíos. Desdeque se arraigó el con
vencimiento de que efectivamente el go
bierno de Espartero se proponía separar á
la nacion de la unidad con la Sede Apostó
lica, desde que se le hizo notar que la serie
de vejaciones y ultrages contra los minis
tros del santuario, indicaban de una ma
nera nada equívoca que el poder intentaba
que desapareciese de España la religion , ó
que al menos de católica se trocase en pro
testante, desde entonces se hizo ya imposi
ble que continuase por mucho tiempo la
dominacion del soldado de fortuna ; porque
es imposible que un hombre continue ri
giendo los destinos de un gran pueblo ,
cuando este pueblo considera al Supremo
 69 —
gobernante con la frente herida por el venera.
anatema. to , se atrae el odio de la inmensa mayoría
Y ya que la oportunidad se ofrece, no de la nacion; Bonaparte aeatado en Fran
será malo recordar al partido que tan cru cia y temido por la Europa , se apresura á
da guerra le hizo al caido Regente, no será echar mano de la religion para restablecer
malo recordarle ahora que se halla dueño el órden y afianzar su propio porvenir. Y
de la situacion , las terribles lecciones que lo consiguió en efecto , porque como dice
ha podido aprender con el infortunio de su de Pradt , de todos los actos de Napoleon
adversario : no será malo recordárselas pa fue el concordato el que mas le concilió el
ra que no olvide jamas lo que vale la reli afecto de los pueblos , pues que era el que
gion á los ojos de los españoles, que no mas adelantaba en el camino de la civiliza
olvide jamas que las armas que con tanto cion ; y se hallaban los ánimos altamente
éxito esgrimiera contra su enemigo, se vol ofendidos por considerar la falta de reli
verán indefectiblemente contra todos los gion como cosa irracional é injusta.» «Pre
gobiernos que se obstinen en dejar á la re veia , dice Botta en su Historia de Italia ,
ligion en el lastimoso estado de abatimien que asi como la paz con los reyes seria pa
to , á que la han conducido en España la ra él un medio excelente de acrecentar su
turbacion de los tiempos , el furor de la re poderío, fuera mayor todavía la paz con la
volucion , y la mala fe de muchos gober Iglesia ; cuando despues llegó á su noticia
nantes. En medio de la dicha importa no que el cardenal Chiaramonti habia sido ele
olvidar el infortunio ; siquiera por interes vado á la silla de Roma , concibió mayores
propio , es preciso muchas veces hacer el esperanzas porque conocía que estaba do
bien : mejor será si este es hijo de las con tado de piedad sincera, y que por tanto se
vicciones y de la rectitud de la voluntad ; ria mas fácil hacerle concurrir á sus desig
pero sea como fuere , si la nacion experi nios.» Estas lecciones no debia olvidarlas
mentara buenos resultados, bendeciría la Espartero ; pero desgraciadamente toda su
mano que se los proporcionase sin cuidarse carrera nos ha estado demostrando que no
mucho de la intencion que la dirigía. podia recordarlas, porque carecía de capa
Pero volvamos á la comparacion del pri cidad para aprenderlas. —/. B.
mer cónsul con el Regente único.
Es curioso cotejar la conducta de Espar
tero con la de Bonaparte vencedor de
Europa. Espartero decia por boca de su
ministro Alonso « la nacion no consiente la
reserva introducida de confirmar en Roma SOBRE LA. CONDUCTA DE ESPARTERO.
y expedir bulas á los prelados presentados
para las iglesias de España y sus dominios;
debiendo arreglarse este punto á lo dis
puesto en el cánon 6 del concilio 12 de
Toledo y á la mas pura disciplina de la Artículo 5.°
iglesia de España (proyecto de ley 21 ene
ro, art. 8). El art. 4.° del Concordato de
cia : «El primer cónsul nombrará en el A poco de entronizado Espartero, se
término de tres meses despues de publicada echó de ver que ni tenia arrojo bastante
la bula de Su Santidad , á los arzobispados para aliarse francamente con la revolucion
y obispados de la nueva demarcacion. Su y marchar á su cabeza , ni suficiente osadía
Santidad conferirá la institucion canónica se para romper con ella y ahogarla de un
gun las formas que se observaban respecto golpe. El partido progresista , reducido co
de Francia antes de la mudanza acaecida á mo era , parecióle sin embargo demasiado
su gobierno.» «Los nombramientos conti grande; no habia menester tanto espacio;
nuaba el art. 5 , para los obispados que va viviente de escasas dimensiones y de poco
caren en lo sucesivo , se harán igualmente movimiento , bastábale un elemento de pe
por el primer cónsul , y la Santa Sede dará queña extension. Para un cetáceo' colosal
la institucion canónica con arreglo al artículo no es suficiente el Mediterráneo , necesita
anterior.» el Océano ; para el pececillo una mezquina
Por manera, que Espartero débil , insul balsa equivale á un mar.
ta y ultraja ; Bonaparte fuerte , respeta y II Ya que no quería ni sabia ponerse al
 70
frente de la nacion , al menos debia esfor
zarse en acaudillar un partido ; al menos
debia rodearse de los hombres mas distin
guidos é influyentes, y tantear si era posi
ble , el modo de establecer un gobierno. Ni
á esto alcanzar pudo , incapaz para ser gefe
de un partido, se convirtió en centro de
pandilla. Y qué pandilla ! no parece sino
que estuvo discurriendo de qué manera
podia desacreditarse mas cumplidamente,
y hacerse odioso á la nacion. Los hom
bres de Ayacucho, y los incorregibles del
año 12 ; los primeros , emblema de nues
tro abatimiento nacional , y los segundos
de nuestra anarquía. ¿Asi comprendíais la
gloria militar y política? Primer magistra
do de la nacion ¿ estos eran los títulos que
le presentabais para que os juzgase digno
del mando ? A los descendientes de Hernan
Cortés y Pizarro , ¿ queríais halagarlos con
recuerdos de derrotas? al pueblo de la re
ligion y de la lealtad ¿ creiais halagarle con
las personificaciones de la anarquía políti
ca, y doctrinas volterianas?
Es cosa digna de notarse , y que segura
mente no carece de misterio, la tenacidad
con que se aferró el Regente á su desastroso
sistema; al parecer debia convenirle exci
tar en su favor las simpatías nacionales,
borrando el recuerdo de su encumbramien
to , dispertando los sentimientos religiosos
y monárquicos , haciéndose el campeon del
orden público y de las doctrinas organiza
doras, y procurando rodearse de los hom
bres mas cuerdos é influyentes ; pero nada
de esto ; no daba un paso que no llevase el
sello de una mezquindad rencorosa, no
desplegaba sus labios sino para herir la re
ligiosidad española, para avivar los odios
políticos, y presentarse como la bandera
del viejo liberalismo, tan profundamente
despreciada por todos los hombres de claro
talento, tan aborrecido por los corazones
rectos y generosos.
Hemos dicho que semejante conducta no
carecía de misterio , y nos lo hace sospe
char la reflexion de que solo se necesitaba
sentido comun para conocer que era erra
da, si no se hubiese creido conveniente
seguirla, á causa de que se debió de consi
derarla eomo la úniea á propósito para lo
grar el fin apetecido. Con deseos de prolon
gar la minoría , y con ulteriores designios
para despues de terminada la prolongacion,
no consideró político la camarilla de Es
partero remover y poner en accion los sen
timientos nacionales; porque entraban en
estos sentimientos un vivo apego á la mo
narquía , y un tierno afecto á los vastagos
de la real familia ; sentimientos que en la
situacion presente subian á mas alto punto,
por estar interesada la caballerosidad espa
ñola á la vista de la debilidad del sexo, de
la horfandad y dela inocencia. ¿Con quién
podia aliarse mejor quien abrigase sinies
tros planes , que con los declarados y per
sonales enemigos del Padre de la Augusta
Niña, con los que odian profundamente la
dinastía, con los que profesan terrible aver
sion á todos los recuerdos monárquicos , los
que llaman baldon á nuestra gloria, los que
en los prodigios del Escorial no ven mas
que un padron de ignominia levantado por
el despotismo y la supersticion ?
El odio á la religion de los españoles, el
rencor y la insolencia contra el Padre co
mún de los fieles , eran consecuencias del
mismo principio; los que profanaban las
regias moradas, los que habian logrado
volverlas casi desiertas , los que tal vez se
gozaran en el cruel pensamiento de verlas
un dia completamente deshabitadas , obra
ban muy acertadamente en mostrarse re
celosos contra los hombres de fe religiosa :
estos hombres no sirven para traidores.
El desvío, la desconfianza, el temor,
con que eran miradas todas las personas
notables por su saber, virtudes, ó elevada
posicion , es tambien uno de los cargos ca
racterísticos de la Regencia única. Solo los
gigantes pueden presentarse sin recelo de
que nadie levante mas que ellos ; el pigmeo
que ocupaba la suprema magistratura se
helaba de espanto de pensar que en el con
sejo ó en el campo podia encontrarse con
hombres aventajados.
Tanta mezquindad y malicia excitó hasta
un punto difícil de pintar la indignacion
pública ; porque en este pais donde como
ha dicho un distinguido escritor, los hom
bres son todo corazon , nada cautiva tanto
los ánimos como la lealtad y la hidalguía ;
nada los irrita tanto eomo la perfidia y los
manejos innobles. Solo asi puede explicarse
aquel antielotan universal, tan vivo, tan-
impaciente que se apoderó de la nacion , de
ver la caida de un hombre que habia esca
lado un inmerecido puesto , para mengua
propia y desventura de España. Los mis
mos que le habian elevado le habrían des
biese
poseidoofrecido
de muyunbuena
medio
gana
para
, si derrocarle
se les hn-
sin exponerse á que se apoderaran de la si
tuacion sus adversarios políticos. Los parti
 — 71 —
dos necesitan un punto de apoyo, y él se que era incapaz de sentirlas; asi es que fu
lo prestaba, aunque muy malo; su regen sila, deporta, destituye, cebándose con in
cia era una bandera de que se servían , nó creible saña en los infortunados que no
porque la estimasen , sino por carecer de pudieron fugarse. Pero la sangre de las
otra. víctimas cayó sobre su cabeza : el pueblo y
Cuando estalló la insurreccion de octu el ejército al mirarle, viéronle manchado
bre , el partido que le sostenía pudo con con la sangre de sus mejores amigos: y es
vencerse de lo poco que valia Espartero , to nunca lo olvidan loscorazones generosos.
ni aun para defenderse á sí mismo , cuanto Son tan negras la ingratitud v la cruel
menos para servir á nadie de escudo. ¿Qué dad!...
medidas supo adoptar para prevenir el gol Tan inexorable como se mostró con los
pe ? ¿Qué rasgo de valor personal se le vió vencidos, se manifestó débil con la revolu
en los momentos críticos? Rodeado de cion donde quiera que levantabala cabeza;
guardias, encastillado en una casa erizada y si en momentos críticos se le escaparon
de cañones, dejóque trascurriera la noche, expresiones severas, bien pronto tuvo cui
y que la suerte que tan propicia se le mos dado de enmendarlas con su conducta. La
traba siempre , le trajese tambien entonces clave de su política con respecto á los per
un desenlace favorable. ¿No llamó traido turbadores del órden público fue: indul
res y regicidas á los que invadieron el real gencia completa para cuantos no ataquen
palacio? Pues él que de lealtad blasonaba, mi permanencia en el poder; castigo sin
debia acudir al punto amenazado, y arros misericordia á quien atentare contra mi re
trar todo linage de peligros, antes que gencia. Viéronse disturbios y desmanes es
permitir que por largas horas estuviesen candalosos en diferentes lugares ; esto nada
peleando en las escaleras del regio alcázar importaba ; pero hay quien se atreve á de
los pretendidos traidores? Cuando ya la in cir abajo Espartero, el poder rugia de cóle
surreccion se hallaba completamente des ra, estaba en peligro de que le arrebatasen
baratada , cuando los principales caudillos la presa, y él no quería soltarla.
estaban fuera de Madrid buscando su salva- Recobrado del susto el general Esparte
cion.en la fuga, cuando la luz del dia per ro, y creyéndose asegurado en el mando,
mitía ver bien claros los objetos y no con continuó en su malhadado sistema con in
sentía emboscadas , nada menos que á las corregible obstinacion. Desgobierno en el
seis de la mañana, enfonces se dejó ver pais, humillaciones en el extrangero; hé
Espartero y fue á presentarse á las excelsas aquí compendiada su política.
Huérfanas. Esta no era la conducta de un Ya hemos visto que imaginándose sin
caballero que se hubiese propuesto defen duda que habia llegado la oportunidad
der á una Reina niña. de dar un golpe decisivo, y con la maligna
Sucumbieron los sublevados de octubre, idea de halagar todas las pasiones rencoro
nó por la habilidad y energía del Regente , sas, autorizó el famoso proyecto de Alonso
sino por habérseles desbaratado los planes, sobre asuntos eclesiásticos , proclamando el
cosa muy peligrosa siempre en tan arries cisma de la manera mas abierta y escanda
gadas empresas : de cien conspiraciones las losa. ¿ Pensaba tal vez el desatentado He-
noventa y nueve pueden calcularse desgra gente que su menguado prestigio alcanza
ciadas. La victoria tan fácilmente alcanza ría á donde alcanzó el poder de Enrique
da por Espartero, proporcionóle ocasion VIH , y que su autoridad saliera bien pa
oportunísima para afianzar su dominacion : rada de tan.arriesgado trance? Para fortu
mostrándose generoso con los vencidos se na suya y bien dela nacion, el descabellado
captara la benevolencia del público, y die proyecto encontró en todas partes la aco
ra realce al prestigio de su persona ; abrien gida que merecía ; los hombres religiosos
do un tanto los ojos para conocer la errada lo rechazaron por cismático , los políticos
senda en que se habia empeñado , hiciera por trastornador, y hasta los mas ardieutes
concebir esperanzas de un mejor porvenir. revolucionarios lo miraron con desden ,
Despues de una derrota tan completa , los como contrario por su intolerancia al es
partidarios del vencido se inclinan fácil píritu del siglo. El hombre llamado por las
mente á transigir con el vencedor; y miran circunstancias á reorganizar la sociedad ,
como arranques de generosidad las conce extinguir odios, reconciliar los ánimos y
siones mas insignificantes. Espartero no era tranquilizar las conciencias , lanzaba con
capaz de comprender estas verdades , por mano impía una tea incendiaria , y pedia á
 — 72 —
las Cortes que le autorizasen para violentar de mucho antes los periódicos habian to
las creencias de la inmensa mayoría de los mado de su cuenta á Espartero; los graves
españoles!.... Incapaz é indolente en el lanzándole fulminantes anatemas , y los sa
gobierno, proponíase manifestar una ener tíricos exponiendo al público su pequenez
gía facticia oprimiendo á los débiles, y y haciéndole objeto de ludibrio; pero en las
castigando á los inocentes. Olvidándose de Cortes , y en los círculos políticos á la sa
las funciones de la Suprema Magistratura, zon influyentes, todavía era respetada su
solicitaba autorizacion para perseguir; y persona , todavía se echaba mano de la
mientras se postraba á los pies del gabinete distincion entre los ministros y el poder
de San James y esperaba sumiso las órde irresponsable. Débil reparo para cubrir al
nes de la aristocracia inglesa, hubiérase Regente, y que el curso de los sucesos ha
empeñado de buena gana en un ruidoso bia de remover bien pronto: el sistema
cisma para hacer ridículo alarde de fuerza político no era de los ministros, era de
é independencia. La revolucion misma fue Espartero ; era la expresion de su persona,
mas cuerda y generosa (pie él ; manifestán la medida de su capacidad , el indicio de
dole con ademan severo, que si bien habia sus ulteriores proyectos. Por eso , cuando
destruido al clero regular y despojado y la coalicion derribó al ministerio Gonzalez
abatido al secular, no quería encarnizarse nada obtuvo sino escarnio y befa ; no se
con los vencidos, hasta el punto de entre quería el gobierno de una pandilla , y no
garlos á manos de un perseguidor , por el parece los medios
sino mas
que el
á propósito
poder anduvo
para buscando
que esta
delito de continuar fieles al dictamen de su
conciencia. pandilla resultase mas dominadora, con mas
De molde le viniera á Espartero el de exclusivismo, con mas aislamiento de to
sastroso cisma para llevar adelante sus de dos los partidos, convirtiendo el centro del
signios. Entonces hubiera tenido abun gobierno en un verdadero cuartel general.
dante cosecha de enemigos de la libertad que Entonces empezaron á ver claro hasta los
combatir, de encubiertos conspiradores que mas alucinados , entonces conocieron, pal
castigar; entonces habría podido desarro paron , que elevando á Espartero á la re
llar en toda su amplitud el maquiavélico gencia habian hecho gobierno el foco de
sistema de fingir tramas agenas para ocul intrigas del Mas de las Matas : entonces ,
tar las propias. El episcopado, todo el clero preciso es hacerles esta justicia , entonces
con rarísimas excepciones, habrían podido se avergonzaron de su obra , entonces re
ser tratados de desobedientes y refractarios; trocedieron, protestando á la faz de la na
y un inmenso número de españoles habría cion que su intento no habia sido sujetarla
participado mas ó menos de la sangrienta á tamaña ignom.inia.
tiranía de los procónsules del dictador. Li No embargante la oposicion que cada dia
bertad , ley , reacciones , inquisicion , D. Car se presentaba mas grave, el poder cobraba
los , la Curia Romana , todas estas palabras aliento y brío , mostrándose menos come
resonaran incesantemente para encubrir dido y recatado de lo que era de esperar ,
medidas arbitrarias y crueles; la bastarda atendida su natural timidez. No le faltaban
firmeza de carácter que ordena y ejecuta ni órganos en la prensa , ni sostenedores
destierros, fusilamientos, y bombardeos, en la tribuna; y ambos manifestaban una
habría campado á sus anchuras; y entre osadía que bien anunciaba un próximo y
tanto se ocultara la debilidad que se humi estrepitoso rompimiento. Al pensar en los
lla ante la altivez de los motines, y que peligros que podrían amenazarle, recorre
marcha á escape hácia las orillas del mar , ría Espartero las listas de los afiliados, re
sin volver la cara al enemigo que viene con cordaría el tiento con que se habia proce
espada en mano. dido en la distribucion de los empleos para
Entretanto el prestigio del Hegente an que recayesen en personas de confianza, la
daba perdiendo cada dia; y su poder se completa seguridad que se podia tener en
encaminaba á la ruina guiado por su nuli los que ocupaban los destinos mas impor
dad jamas desmentida; y que se confirmaba tantes : reflexionaría sobre la dificultad de
á cada paso, con algun solemne desacierto. que ni por un momento llegasen á coligarse,
Cundia visiblemente en las filas del progre republicanos , progresistas descontentos ,
so la division , empeñándose unos en sos moderados y carlistas ; pensaria en las des
tener semejante sistema , y arrojándole tituciones y sustituciones que habia ejecu-
otros á combatirle con energía y calor. Ya 1 tado en el ejército, desde octubre de 1841;
 — 73 —
yhecho el enterarse
con tamaños de las
medios sesudas amones-
, auxiliados por la el reflexionar al
influencia y el apoyo de una nacion pode gun tanto sobre las aterradoras
rosa, debia de parecerle que sus enemigos, del Heraldo y del Sol , y hasta el
ó no se atreverían á moverse , ó si tanto vez en cuando algunas caricaturas de La
osaran sufrirían el condigno castigo. ¡Vana Posdata''. La infatuacion es el peligro inmi
ilusion en que vivir suelen cuantos habitan nente para los hombres que se han levan
dorados techos, respirando el perfume de tado con rapidez á puestos muy encum
las lisonjas ! ¡ Vana ilusion que menos que brados ; el mejor modo de precaverla es
nadie debia abrigar Espartero, que salido mortificar con frecuencia el amor propio.
del pueblo y educado en los campamentos, J. B.
podia conocer otros medios para alcanzar la
verdad , de los que acostumbran las perso
nas criadas en el regio alcazar!
No damos exagerada importancia á los
clamores de la prensa ; sabemos que á me ESFAR.TEB.O.
nudo respiran en ella la cólera de los par
tidos , la saña de las facciones , y hasta el
mezquino rencor ó interesadas miras delos
particulares : pero hay ciertos casos en que
es tanta la unanimidad , en que es tanto el
clamoreo, en que abandonan á un gobierno Aktícilo C.
hasta los mas decididos defensores, que en
tonces preciso es reflexionar sobre este
hecho ; preciso es investigar si la voz de la
prensa no podría ser el eco de la indigna
cion pública. Esto le acontecía á Espartero:
en la capital como en las provincias, la EPí NOVIEMBRE Y DE 1842.
prensa se habia desencadenado contra él ;
ya se creia dispensada de todo linage de
consideraciones y miramientos; y el jurado
absolviendo los mas vivos ataques contra la
persona del primer magistrado de la Na
cion , declaraba con sus fallos que la irres La situacion se iba empeorando por mo
ponsabilidad habia desaparecido. mentos, el descontento se hacia mas vivo
Pero cosa extraña ! este hombre apenas y se expresaba de una manera harto signi
sabia nada de cuanto se decia contra él , ni ficativa ; la prensa bramaba de cólera , los
aun en los periódicos de Madrid ; asi unos partidos se removían; se comunicaban, se
con la mira de evitarle disgustos y enojos , ponían de acuerdo para aprestarse á una
y otros tal vez con interesados designios , batalla que mas ó menos decisiva , se habia
le ocultaban la verdad : le dejaban caminar hecho ya inevitable. Espartero habia arro
á su ruina con los ojos vendados, hasta que jado el guante , y la nacion lo recogió.
el clamor de la nacion entera le puso sobre Erase á principios de noviembre de 1842,
sí y le hizo mirar en su alrededor , para no y encontrábase la ciudad de Barcelona en
ver ya mas que el abismo en donde se iba aquel estado de agitacion y zozobra en que
á hundir. Triste condicion de los que ocu tan á menudo ha solido hallarse esta pobla
pan puesto elevado I les es sobremanera cion infortunada. Asuntos municipales de
dificil el saber la verdad ; contribuyendo á una parte y cuestiones políticas por otra ,
ocultársela los mismos en quienes deposi tenían divididos y enconados los ánimos
tan su mayor confianza. Contaba un íntimo hasta un punto difícil de expresar; el len-
allegado de Buena Vista que cierta persona guage de la prensa estaba indicando bien
que en la actualidad comparte el infortunio á las claras que el encono rayaba en exas
del caido , procuraba recoger de antemano peracion , y que bien pronto la discucion
todos los periódicos, y cuando el Regente se entablaría en las calles y plazas. El par
pedia alguno para leer; se excusaba de tido que á la sazon bullía , y que hacia
traérselo , alegando extravío ú otro pre cara al gobierno, era el mas extremado en
texto cualquiera. ¿Tanto daño le hubiera principios democráticos: la república era
encomiada sin rodeos, la insurreccion ex-
citada sin reboso ( i). La inmensa mayoría se ponia del lado del gobierno. May al con
de Barcelona no simpatizaba por cierto con trario, le odiaba profundamente por su
las doctrinas republicanas; pero tampoco sistema político, por su deferencia á los ex-

(1) Para formarse una idea del lenguage de la amalgamar la fuerza popular con la del ejército flet
prensa léase el siguiente plan de revolucion queal pueblo.
publicaba cada dia El Republicano. » A los caudillos que le dirijan solo debe obede
cerlos mientras dure la insurreccion , y fusilarlos
si quieren dejar en ejercicio alguna autoridad del
PLAN DE REVOLUCION. régimen actual.
• Inmediatamente despucs del triunfo en cada
«Cuando el pueblo quiera conquistar sus dere pueblo se nombran á pluralidad de votos tres sim
chos debe empuñar en masa las armas al grito de ples administradores, uno de ellos presidente , que
; viva la República ! absorvan toda la autoridad : en las grandes pobla
ciones estos publican un estado de los demas fun
ENTONCES SERÁ OCASION DECANTAR EN CATALUÑA. cionarios locales indispensables ; y á los dos dias-
convocan al pueblo para su nombramiento : si tra
LoJacanó
la campana
ja retronasona , taren de ejercer por sf este acto de soberanía , se
les fusila , y se eligen otros.
Anetn , anem , republicans , anem .' »A los ocho días debe reunirse nuevamente el
A la victoria anetn I pueblo para la eleccion de los representantes en el
Congreso Constituyente, y á estos se les libran
I. poderes en que se diga : «Discutiréis y formularéis
una Constitucion Republicana bajo las siguientes
Ja es arribat lo dia bases : la nacion única soberana : todos los ciuda
Que ipoble tan volia : danos iguales en derechos : todas las leyes sujetas
Fugiu , tirans , lo poblé vol ser rey. a la sancion del pueblo sin discusion y revocables
Ja la campana sona. . . . todos los funcionarios elegidos por el pueblo , res
ponsables y amovibles : la república debe asegu
II. rar un tratamiento á todos sus funcionarios, edu
cacion y trabajo ó lo necesario para vivir á lodos
Isi bandera adorada los Ciudadanos. Dentro de tres meses debe estar
Que jau allí empolvada , terminado el proyecto de Constitucion y presenta
Correm , germans , al aire euarbolem ! do á la sancion del pueblo.»
Ja la campana
ra. VL
Mireula que es galana La milicia y lo clero
La ensenya ciutadana. No tinga mes que un fuero:
Que llibertat nos promet si la alsem. Lo poble sois de una y altres es lo rey.
"Ja la campana. .. . Ja la campana
IV. VII.
Lo garrot , la escopeta , Los públichs funcionaris
La fais y la forqueta No tingan amos varis :
i Oh Catalans ! ab valor empuñern ! Dcpengan tots del popular congrés.
Ja la campana Ja la campana
» Debe dar muerte a todos los que hagan armas VIII.
contra él.
» Debe aniquilar ó inutilizar todo lo que conser Los ganduls que s' mantenen
ve algun poder ageno de su voluntad , ó sea todo Del poble y luego 1' venen
lo que depende del actual sistema , como son las Morin , cremats , sino pau no tindrém.
Cortes, ei trono, los ministerios, los tribunales , en Ja la campana
una palabra , todos los funcionarios públicos.
IX.
Y los que tras ells vinguian
La Cort y la noblesa , Bo será que entes tingan
L' orgull de la riquesa . Que son criats , no senyors de la grey.
Caigan de un cop fins al nostre nibell. Ja la campana
Ja la campana
X.
' Debe atacar no mas que á los hombres del po
der, y evitar los actos de venganza personal : es Un sol pago directo
indigno de la magestad del pueblo atacar á los in Y un sol ram gue I' colecte
defensos de los partidos vencidos. Tothnm de allí será pagat com den.
° Debe apoderarse de todas las plazas fuertes , y Ja la campana
trangeros, por sus designios de sacrificar
la industria catalana ; y para colmar la me
dida y acrecentar el peligro, le despreciaba
por su impotencia. En crisis tan formida
ble , á la víspera de una tempestad horro
rosa , cuando era necesario exquisito tacto
político, estaban al frente de Barcelona
Van-halen y Gutierrez. Increible parece
que las autoridades no viesen todo lo gra
ve é inminente del peligro ; increible pa
rece que ellos solos no vieran lo que todo
el mundo palpaba ; increible parece que el
general encargado de conservar el orden
se mantuviese tranquilo con la esperanza
de dominar con facilidad cualquiera tenta
tiva de rebelion política. Hé aqui no obs
tante , cómo explica su modo de mirar las
cosas el general Van-halen en su Diario
razonado de los acontecimientos que tuvieron
lugar en Barcelona. Despues de haber dicho
cuatro palabras sobre lo que él juzga ver
daderas causas dela insurrecion, continúa:
« Todo esto y aun mucho mas que seria
largo referir , fue con destreza puesto en
juego para que produjese lo que despues se
vió. Pero ceñido yo á las funciones de mi
mando, bien marcadas por las instituciones
y leyes que nos rigen , veia marchar la re
volucion , sin serme dado impedir los actos
que la preparaban ; si bien con la franque
za que me es propia confesaré que la mis
ma odiosidad y division de partidos, cuyos
fines parecían tan opuestos, me hizo creer
que ninguno por sí solo seria bastante fuer
te para hacer una revolucion imponente ;
no pudo ocurrirme jamas que depusiesen
sus odios inveterados uniéndose estrecha
mente para hacer una guerra asesina y trai-
XI.
Que paguia qui té renda
O be alguna prebenda :
Lo qui no té tampoc deu pagar res.
Ja la campana
XII.
Lo delme , la gabella ,
Lo dret de la portella ,
No , jorualers may més no pagarém.
Ja la campana
» El pueblo permanece con las armas en la ma taban posesionados de los puestos, cuando
no, pronto á servirse de ellas si sus mandatarios no se habian construido barricadas, cuan
no respetan aquellos principios. — De este modo do la masa del pueblo estaba completamen
el pueblo por sí mismo puede hacer la revolucion ,
sin dejarla en manos de corifeos ambiciosos que le te pasiva, esperando el desenlace de un
estafen como los de setiembre y solo aseguren su drama cuyo principio no comprendía, en
dominacion. » — A. T.
dora á unas tropas modelo de virtudes, y
que por tantos años á costa de inmensos
peligros, fatigas y de todo género de sacri
ficios , habian trabajado para dar á la na
cion las instituciones que nos rigen y que
deben hacer su prosperidad y grandeza.
»Conocia la historia, y no olvidaba la de
los acontecimientos de Barcelona , y resto
de Cataluña desde 1638 al 1040 , pero me
parecía imposible que pudiesen reproducir
se pasados dos siglos, en que tantas razo
nes de conveniencia recíproca debían estre
char los lazos fraternales entre todos los
habitantes de la nacion española. En esta
conviccion reposaba tranquilo, lisonjeándo
me dominaría con facilidad , cualquiera
tentativa de rebelion por causa política ;
pues á la fuerza del ejército contaba se le
uniese la de todos los hombres honrados de
los demas partidos ; con tanta mas razon
cuanto que rígido observador de la Consti
tucion y de las leyes que de ella emanan ,
cuando llegase á emplear la fuerza seria en
completa observancia de ellas , y nunca el
agresor ni el provocador. Incapaz de perfi
dia y de traicion , nunca las creo en nadie
mientras no las veo demostradas; pero re
pito y repetiré mil veces , que jamas espe
raba la conducta observada en los dias 14,
15 y 16 por la mayoría inmensa de una
poblacion de 160,000 almas como es la de
Barcelona, en cuyo obsequio en el largo
período de mi mando he hecho cuanto ha
estado á mi alcance para contribuir á su
bien y prosperidad.»
Llegó el anochecer del 13 de noviem
bre ; una insignificante pendencia se con
virtió en amagos de asonada. La noche fue
inquieta , las autoridades estaban en alar
ma , la ciudad en zozobra ; pero al ver al
día siguiente la conducta de Van-halen y
Gutierrez, al ver que los grupos se au
mentaban, que se construían barricadas,
que se amontonaban rápidamente los ele
mentos de trastorno , los recelos se troca
ron en serios temores; no cabia dudado
que amenaza un grave conflicto.
Sin haberlo presenciado es imposible
concebir el desaliento con que procedió á
la sazon el Capitan General. Cuando los
grupos eran insignificantes, cuando no es
tonces la autoridad militar se mantuvo en
 inaccion , mirando al enemigo que se reu 76fueron
— hostilizadas desde las casas , el tiro
nía , se organizaba , se parapetaba , y que teo resonaba en diferentes puntos de la ca
sin ambages ni disimulo retaba al combate. pital; los muertos y heridos eran ya en
Solo en la mañana del 15, cuando las co número considerable; Van-halen se amila
sas presentaban ya un carácter muy gra- nó. Al cabo de pocas horas cesó el fuego ,
% e , cuando la insurreccion tomaba ya un replegáronse las tropas , y tomando brio la
aspecto algo imponente, bien que no tanto insurrecion que se creyó ya vencedora ,
como se imaginó Van-halen , cuando era aprovechóse de la agitacion de los ánimos,
menester andar con mucho tiento en dis del odio general contra el gobierno , y la
parar, entonces el Capitan General des ligera chispa se convirtió en incendio es
plegó ostentosamente sus fuerzas , y mar pantoso.
chó con sus batallones, escuadrones y En la tarde del 15 y mañana del 16 era
baterías, á deshacer lo que pocas horas difícil concebir lo que habia sucedido y es
antes no hubiera resistido á una compañía taba sucediendo en Barcelona. Nadie sabia
de granaderos (1). á punto fijo por qué ni para qué ; pero lo
El estruendo de las descargas y el esta cierto es que la ciudad y sus alrededores
llido de los cañones anunciaron á la ciudad estaban levantados en masa ; que las tro
consternada el principio de la refriega : con pas estaban encerradas en los fuertes , y
fundamento ó sin él , corrieron voces alar que el gobierno no tenia una sola voz en
mantes que acaloraron los ánimos y dieron su favor. Jamas se vió un movimiento mas
al combate cierta popularidad. Las tropas rápido, mas simultáneo , mas imponente;

(1) Hé aquí el parte que el Capitan General
daba al Gobierno coa Techa del 14. En él se halla
una relacion de los primeros pasos del levanta
miento , y se echa de ver cuán mal prejuzgaba los
sucesos que habian de sobrevenir el 18.
«Ejército de Cataluña. = E. M. = Excroo. Sr.
«=Hacc algunos dias que se anunciaba un alboro
to, para él que debían aprovechar la primera
coyuntura favorable , ya fuese con pretexto del em
barque del tabaco de la suprimida fábrica , ya por
oponerse á la quinta , y tamWn hicieron correr
voces de que el gobierno había impuesto una con
tribucion para reedificar la Ciudadela. Al anoche
cer de ayer , entrando por la puerta del Angel el
considerable número de gente que acostumbra á
salir á las inmediaciones de la plaza los dias festi
vos , trataron algunos paisanos de introducir vino
de contrabando aprovechando la confusion que
produce en la puerta la muchedumbre; un indi
viduo del resguardo detuvo á uno de los contra
bandistas , quien resistiéndose se puso á luchar
con él , por lo que tuvo que acudir la guardia á su
socorro , y queriendo otros paisanos proteger al
contrabandista , tuvo la guardia que hacerlo al
resguardo , de lo que lomaron pretexto algunos
promovedores de desórdenes para llevar á cabo el
alboroto premeditado ; tiraron algunas piedras á
la guardia ; y esta sin hacer uso desus armas des
pejó el frente del puesto , y mandó un soldado á
dar parte á la plaza, pero al atravesar este un gru
po se le echaron encima , y tuvo que meterse en la
Suardia de prevencion del 8.° batallon de M. N.
onde fue protegido. = Sabedor de esta ocurren
cia , mande reforzar aquella guardia , y el Sr. Gefe
Político tomando fuerza del regimiento de Guada-
lajara marchó á la plaza dela Constitucion , donde
nie dió aviso el Alcalde constitucional de que se
habian reunido en grupos como unas 300 á 400
personas de todas clases , y algunas con armas ,
pidiendo que se constituyese en sesion el Ayunta-
tamiento. El Gefe Político me pidió 80 caballos ,
los que le mandé inmediatamente, asi como dis
puse desde luego poner la guarnicion sobre las
armas. Al entrar aquella autoridad con 70 hom
bres y un ayudante mío en la referida plaza , se
oyó un tiro , por lo que mandó cargar las armas ,
á cuya órden se dispersaron los grupos. Poco des
pucs supe que en el cuartel del 3." dela M. N. que
es de los republicanos , se reunieron tumultuaria
mente varios individuos de dicho batallon , y que
habían arrestado á algunos oficiales , sargentos y
soldados que se dirigían á sus cuarteles , ó iban á
quitándoles
llevar á sus las
oficiales
armaslayórden
teniéndoles
de concurrir
como rehenes
á ellos,
o prisioneros, dirigiéndoles espresiones que solo
á la mucha disciplina de los cuerpos de este ejér
cito se debe el que no se sigan mas desagradables
consecuencias. A poco tiempo sin embargo los
soltaron , y habiendo marchado á dicho cuartel el
Gefe Político , prendió á unos cuantos nacionales
que habian quedado en él, contra los que se
sigue causa, asi como contra los redactores del
Republicano, y varias personas sospechosas que
se habian reunido en la redaccion de aquel pe
riódico , donde encontró tambien armas y mu
niciones, algunas de la M. V y otras prohi
bidas , de todo lo que es consiguiente dará cuenta
al Gobierno. = Las tropas permanecieron sobrelas
armas hasta las seis de la madrugada , en que solo
quedaron retenes en todos los cuarteles. = A las
once recibí los oficios del Gefe Político , cuyas co
pias son adjuntas, asi como de los que le he diri
gido (números 2, 3, 4, 8 y 6) : he vuelto á poner
la guarnicion sobre las armas, y espero el resul
tado de las disposiciones de la autoridad civil para
obrar en consecuencia. = No ha ocurrido otra no
vedad ni creo que llegue á alterarse el órden de
un modo que comprometa gravemente la tranqui
lidad pública , pero si esto se verificase , puedo
asegurar á V. E. que haré respetar las leyes y el
gobierno , y quedarán de tal modo escarmentados
los alborotadores, que no volverán á reproducirse
los desórdenes. = Dios guarde á V. É. muchos
años. Barcelona 14 de noviembre de 1842= Exce
lentísimo señor Secretario de Estado y del Despa
cho de la Guerra.
 la poblacion estaba convertida en un cam autoridad tuvo la humorada de hablar de
pamento ; ciudadanos por otra parte muy carlistas y de clero que tocaba á rebato ; la
pacíficos , se hallaban en actitud de recibir inocentada es perdonable; es de aquellas
á balazos al enemigo, si se aventuraba á que por ridiculas no dañan.
una tentativa ; y el ensayo de arrojar los ¿Tratábase de restaurar la regencia de
muebles por la ventana estropeando impu Cristina? asi lo dijeron tambien los que
nemente á los agresores , habia corrido de amalgamaban á D.Cárlos con la república.
boca en boca , siendo muy crecido el nú Esto no necesita comentarios. Sin embar
mero de los resueltos á emplear este me go , consúltense los documentos de la épo
dio de defensa. Nadie pensaba en Mon- ca , véanse las opiniones y antecedentes de
juich! (1). los hombres que estaban al frente del mo
¿Era republicano el movimiento? Basta vimiento, y se echará de ver que la cons
conocer á Barcelona para convencerse de piracion Cristina no tenia mucha mayor ve
que su inmensa mayoría estaba muy lejos rosimilitud que la carlista. Ademas, que
de prohijar semejantes ideas. Que la ciudad no indagamos aqui cuáles fuesen las miras
se levantase en favor de la república es un de los que comenzaron el levantamiento ,
absurdo que no merece refutacion. Cierta aumentado
sino que buscamos
considerablemente,
el pensamiento
pidieronque
se sus
ani-

(1 J Hemos visto el parte del 14; el del 18, de

muestra cuán errado anduvo en su conducta el
general Van-baleo.
"Ejército de Cataluña. •= E. M. = Excmo. Sr.
= Por el correo de ayer di á V. E. conocimiento
de lo que sabia ocurría hasta aquella hora , con
respecto á la tranquilidad pública, la cual cada vez
se fue alterando considerablemente, reuniéndose
en la plaza de San Jaime y otros puntos de la ciu
dad los diez batallones dela M. N. , y muchos que
no le pertenecían ; por lo que pasé á la habitacion
del Gefe Político , donde tambien acudieron los
alcaldes y comandantes de aquella llamados por
él , para prestarle cuanto apoyo estuviese á mi
alcance ; á eso de las diez de la noche dieron parte
todos los comandantes de haberse retirado á sus
rasas la mayor parte de sus respectivas fuerzas,
que ya habían construido barricadas en todos los
alrededores de la plaza de la Constitucion. Mas
sin embargo , de todos los mismos batallones , sin
querer obedecer a sus comandantes, quedó una
gran parte de la fuerza en la plaza de San Jaime é
inmediaciones : cuyo número no puede calcularse
por estar ocupadas las casas. A las siete de la ma
nana de hoy, perdidas todas las esperanzas de que
los sublevados obedeciesen á las autoridades civi
les , fue indispensable emplear la fuerza , atacando
á la plaza de San Jaime en tres direcciones con la
fuerza disponible de los regimientos de Zamora ,
Sa boy a y Guadalajara , y la artillería ; pero encon
trando una resistencia que no era de esperar , y
saliendo de todas las casas y azoteas que podían
ofendernos en todas direcciones un nutrido fuego ,
acompañando á él arrojarnos cuanto tenian á la
mano ya preparado , todos los esfuerzos del valor
mas decidido no tuvieron otro resultado que el
aproximarnos hasta las primeras casas que daban
•i Cali , haciendo én ellas unos 120 prisioneros , y
en la direccion opuesta hasta la plazuela del An
gel , sufriendo por ello pérdidas de consideracion
en oficiales y tropa , pidiéndome los coroneles de
los cuerpos dichos , refuerzos que no podía darles,
porque la única reserva que me quedaba eran
unos 200 hombres del regimiento de Almansa que
en la Rambla, con la caballería hacían frente al
ataque que se nos hacia por todas las calles que
dan á ella , y desde edificios de la misma : en esta
situacion los reunidos en la plaza , que se habian
pendiese el fuego , dando mil protestas deque acto
continuo se restituirían á sus casas , ofrecimiento
que las circunstancias me obligaron a aceptar, mas
no cumplieron ninguno de ellos, encontrándose en
una anarquía espantosa , y a fm de ver si era po
sible conseguir no se repitiesen las hostilidades,
reuní mis fuerzas en su punto de partida ; pero
como estas llevaban dos días con sus noches de
estar sobre las armas sin el menor descanso hom
bres y caballos , y viendo que la insurreccion era
general , aun cuando no se hacia fuego mas que
en alguno que otro punto distante , donde escala
ban la muralla por diferentes parages batallones
y gente armada de los pueblos de las inmediacio
nes, reuní las tropas en la Ciudadela , Atarazanas
y cuartel de Estudios , reforzando á Monjuich ,
despucs de treinta mil ofrecimientos de que todos
entrarían en el órden : mas esto lejos de cumplirse,
ha continuado el fuego sin interrupcion al frente
de esta Ciudadela , pero solo de algunos tiradores
cubiertos eu las casas, sin tener con quien enten
derme en la ciudad , porque el Gcfe Político está
aqui , y algunos alcaldes en Atarazanas. La fuerza
que tengo en esta Ciudadela no pasa de 1,300 hom
bres á que tengo que dar de comer mañana , > si
guiendo el estado de hostilidad en que se halla el
pueblo no espero lograr víveres de él. El provincial
de Salamanca acaba de llegar á estas inmediacio
nes, y le he prevenido lo conveniente para que
entre en la madrugada de mañana con los víveres
que pueda reunir. = Nada ha dejado que desear el
comportamiento de las tropas y su admirable dis
ciplina , siendo por lo mismo mas sensible que sus
esfuerzos y la sangre que se ha derramado , no
haya producido el feliz resultado que seria de de
sear. — He pasado comunicacion á los comandan
tes generales de las provincias para que, reunien
do todas las fuerzas que tengan despucs de dejar
cubiertas las plazas, acudan á estas inmediaciones.
— No sé cómo se presentará el dia de mañana : pe
ro haré cuanto pueda por sacar el mejor partido
posible de esta situacion. — Dios guarde a V. E.
muchos años. Ciudadela de Barcelona 18 de no
viembre de 1842. — Excmo. Sr. = EI conde de
Peracamps. = Excmo. Sr. Secretario de Estado y
del Despacho de la Guerra.
 78
inaba é impulsaba á la mayoría de la po tonces los mismos que ahora. El mismo es
blacion; y en este sentido puede afirmarse píritu de tolerancia, el mismo grito de
con entera seguridad , que el movimiento union , la misma tendencia á coligar los
no fue cristino por la sencilla razon de que partidos contra el enemigo comun. Y es
nadie soñaba entonces en proclamar á I que el pueblo, nó el pueblo facticio, sino
Cristina. el verdadero pueblo español , habia resuel
Se ha tenido por cierto que el instinto to ya la cuestion mucho antes que no lo
de conservacion y de defensa de la propie hicieran la prensa y las Córtes. No son la
dad que se creyó amenazada , habia puesto prensa y las Cortes quien ha guiado á la
sobre las armas á Barcelona, y dado al nacion ; la nacion es quien ha guiado á las
movimiento una popularidad que sin esta Córtes yá la prensa. Antes que los periódi
circunstancia no hubiera alcanzado. Es de cos se coligasen , antes que en el Congreso
cir, que se ha supuesto que la cuestion fue se levantara el grito de alarma , la nacion
principalmente social, mas nó política. Ja habia tomado ya su partido. A los ojos de
mas hemos podido convencernos de esta la España el poder de Espartero era cadu
asercion ; jamas hemos podido aceptar co co , y sobre caduco dañoso ; inútil para to
mo satisfactoria una explicacion semejante. do lo bueno , eterno obstáculo á toda me
Es bien posible , y se ha dado como segu jora , núcleo de elementos nocivos , semilla
ro, que uno que otro soldado cometiese de inextinguibles discordias ; altamente pe
desmanes al entrar en las casas situadas en ligroso para la independencia del pais y la
el lugar de la refriega ; pero dudamos mu seguridad del trono. La nacion se reia ya
cho que la generalidad de la poblacion lle de la inocente candidez de los que siendo
gase á temer seriamente que se la entrega enemigos de la situacion, esperaban no
se al saqueo. obstante que se desenlazaría por los trámi
Las quintas , los algodones , las disputas tes legales. Los pueblos estan dotados de
sobre intereses locales , bastaban para po admirables instintos, y el verdadero pueblo
pularizar el movimiento ; pero en el fondo español se distingue muy ventajosamente
de los espíritus, en el entendimiento de los por esta calidad , sobre todo en las grandes
previsores , y en el corazon de los sencillos crisis. Ya en 1808, cuando no pocos delos
se abrigaba otra cosa ; lo que para unos era que leian los periódicos nacionales y ex-
una conjetura, era para otros una espe trangeros, y que estaban al corriente de la
ranza instintiva. Habia un deseo inexplica situacion de Europa , miraban como insen
ble de deshacerse del poder que pesaba so sata la resistencia al poder de Napoleon , el
bre la nacion; todo lo que tendía á este pueblo que no sabia tanto, se arrojó á la
blanco , todo lo que dejaba entrever la po palestra á impulsos de su lealtad y de su
sibilidad de que contribuyese á derribar á brio; el resultado manifestó de parte de
Espartero ; todo era acogido con avidez , quién estaba la prevision. Ahora, cuando
aplaudido con entusiasmo. La prensa que en los altos círculos todavía se hacían com
combatía á Espartero era la expresion de binaciones ministeriales, y se preparaban
la opinion pública ; esta prensa no se cuidó batallas de urnas ; la nacion estaba viendo
mucho de analizar el origen del alzamien que todo era inútil, y que lo importante
to , solo atendió al fruto que de él se podía era salir al campo y emplazar con las ar
sacar. Pues bien : lo mismo mismísimo mas Lamentamos
en la mano como
al soldado
el quede mas
Buena-Vista.
la sangre
aconteció en Barcelona : se creyó que qui
zás existirían combinaciones al intento, que de los soldados que obedientes á la voz de
en otros puntos estallarían insurrecciones sus gefes, perecieron en las calles y en las
semejantes; y la esperanza pública adivi plazas , defendiendo la causa del gobierno.
naba ya en noviembre loque debia suceder Muchos de aquellos pundonorosos militares
en junio. Todo estaba indicando que un reconocieran lo propio que los paisanos, el
poder tan desacreditado no resistiría á la origen ilegítimo y las menguadas calidades
prueba de un pronunciamiento de algunas del poder que empuñaba las riendas del
ciudades importantes. ¿Quién no recuerda estado ; mas no eran ellos quienes debian
la viva ansiedad con que se aguardaban los levantar el grito , cuando á la sazon no exis
correos? Para quien haya visto de cerca los tia otra bandera á la cual pudieran acogerse.
últimos acontecimientos que han derribado No es verdad que Barcelona los odiase , no
á Espartero, es indudable que el pensa es verdad que hubie sen resucitado en toda
miento, el instinto del público, eran en su viveza lasantigu s antipatías entre cata
 - 79 —
lanes y castellanos ; si algun soldado solo luntario individuo de cuerpos Trancos ó de
caia en manos del paisanage, no era atro otro que tenga una denominacion cualquie
pellado; y hasta los heridos eran tratados ra ; él propio correrá á alistarse para servir
con compasivo miramiento durante el ca bajo la bandera levantada , hasta sufrirá
lor de la refriega. Es cierto que los paisa que le sujeteis á cierta disciplina , que le
nos se balian con encarnizamiento; fue po lleveis á paises distantes del suyo , que lo
sible que uno que otro se abandonase á conduzcais á los mayores peligros; haced
excesos hijos de un furor momentáneo; de él lo que querais , mientras os guardeis
mas tan pronto como se hallaban cara á de llamarle quinto , de decirle que le ha
cara con los soldados sin armas; tan pronto caido la suerte de soldado. Al oir estas pa
como no veian en ellos un defensor de Es labras se indignan y se amotinan ó huyen
partero ó un satélite de Zurbano , los tra los mozos , lloran de desesperacion y des
taban con la mas afectuosa cordialidad. consuelo las madres y hermanas , los an
Ya que hemos mentado un nombre pro cianos recuerdan orgullosos que esto jamas
pio, que en aquellos dias era de execracion, se hizo en Cataluita, que te mismos Reyes no
y que volvió á serlo en el pronunciamiento pudieron nunca lograrlo, y añaden que esto no
de junio, no será fuera del caso decir sobre se debe consentir : y asi hablan hombres car
él cuatro palabras. Creemos que la llegada gados quizás de heridas en la guerra de la
del general Zurbano á Barcelona no tendría independencia, de la Constitucion de 1820,
otro objeto como am ina el Sr. Van-halen, y de los últimos 7 años. Esto será un mal
que pasar á Tarragona para inspeccionar tan grave como se quiera, pero es un hecho
las aduanas y el resguardo , y que serian positivo; la quinta es impopular tanto en
voces alarmantes y difundidas adrede por las ciudades como en los campos ; tales son
los autores de la revolucion, lasque circu las ideas y costumbres del pais, que quien
laron sobre la quinta, fusilamientos, y resista al gobierno por motivo de la quinta
otras cosas semejantes. No dudamos que encuentra por todas partes simpatías y
Zurbano estaba á la sazon en actitud ino apoyo.
fensiva y que no habia recibido del gobierno Juzguese ahora de la indignacion que
la mision que el público suponía ; sin em habia de producir la noticia de que se tra
bargo nos atreveremos á preguntar al señor taba de ejecutar la quinta, y de que el eje
Van-halen , si no fue altamente impolítico cutor era Zurbano. Estamos profundamente
que en circunstancias tan críticas , y en que convencidos de que si los hombres que se
los ánimos andaban tan suspicaces y exas pusieron al frente del movimiento hubiesen
perados, se presentase en la capital el sabido presentar á todo el principado de
hombre cuyo sistema de gobernar se habia Cataluña estas dos ideas, con toda claridad
hecho tan famoso, durante sus correrías en y viveza, removiendo con ellas el descon
las provincias del norte, su mando en Bil tento y el encono que se abrigaba en el
bao despues de los sucesos de octubre , y corazon de la inmensa mayoría del pueblo,
muy particularmente en la montaña de bastaban ellas solas para levantar el prin
Cataluña y en la provincia de Gerona. Se cipado y consumar en noviembne lo que se
hablaba á la sazon de realizar la quinta , llevó á cabo en junio. Porque preciso es
cuyo solo nombre basta para exaltar á los confesarlo, Zurbano habia comprendido
catalanes: y en el momento que se suponía muy mal el carácter de los catalanes; el
decisivo, se presenta Zurbano, y se difunde sistema de los palos y fusilamientos, prueba
rápidamente la voz de que él viene para muy mal entre nosotros: no estan acostum
obligar á los mozos á meter la mano en el brados los catalanes á besar la mano que
cántaro. los azota ; cuando se les tiene el pie sobre
Es preciso haber vivido en este pais lar la cerviz y se los sujeta amarrados con ca
go tiempo, para conocer todo el efecto que denas de hierro , ya que no pueden hacer
clebia de producir semejante noticia. Al otra cosa echan sobre el opresor una mirada
catalan nada le unporta tomar las armas, fulminante. ¡ Ay de él I el dia que se rom-
batirse en las calles y en los campos , con Í>a la cadena ; los hombres insultados en
sumir largos años de su juventud en medio as montañas y forzados por algun tiempo
de las fatigas militares; en una palabra á comprimir su indignacion y despecho,
nada le importa ser soldado, con tal que sabrán presentarse en las alturas del Bruch
no se le fuerce á serlo, y no se le apellide con el gorro encarnado ; y aquellos pobres
con este nombre. Será migueletc , será vo aldeanos que anduvieron maniatados por
 — SO-
las cárceles y asistieran á horrorosos supli primero con arrojo y en seguida retándole
cios de sus hermanos , empuñarán briosos al combate , cuando las tropas se andaban
el fusil , disputarán á palmos el terreno á replegando ramo el leon herido y acosado
las tropas mas escogidas , y con una mala por el cazador; todavía recordamos el es
escopeta tendrán bastante arrojo para en trépito atronador que no cesaba de noche
cararse con la mas aventajada Janza. ni de dia , y el ruido de los tambores , y el
Ya que el general Van-halen afirma que sonar de los clarines , y el galope de los ca
no ignoraba la historia de Cataluña , no ballos, y la gritería de la multitud, y los
debia tampoco desconocer el carácter de los alaridos de los que en todas direcciones
catalanes. Por amor á la conservacion del construían barricadas, y el estrépito de las
orden debia avisar al general Zurbano que descargas , y el retumbar de los cañones ;
ó no entrase en Barcelona, ó saliese cuanto todo dominado, enardecido, electrizado,
antes ; tenerle á su lado durante las horas || por el fragoroso resonar de innumerables
del combate , era dar pábulo á las voces campanas. Sobrevenía á veces un momento
que por desgracia habian cundido demasia de silencio; el corazon se abría á la espe
do entre el vulgo; era dejar que se creyese ranza de que españoles cesaban de comba
que la llegada de Zurbano tenia un objeto tir con españoles, y hermanos con herma
particular para Barcelona, que él era quien nos; pero un instante despues se rompía
debia encargarse de sujetar la ciudad , si mas vivo el fuego , y resonaban de nuevo
intentaba oponerse á las disposiciones del las campanas, y con mas fuerza, y con
gobierno. mas brio , y mas aprisa , como llamando á
Llama al general Van-halen al levanta las armas para un peligro decisivo, como
miento de Barcelona la rebelion mas infame, diciendo que era indispensable vencer ó
injusta y traidora , de que hay ejemplo en morir en la demanda. Y otra vez paraban
la historia ; y sin embargo afirma en otros un instante y otra vez volvían á resonar ,
lugares de su Diario Razonado que tomó comunicando á los corazones enardecimien
parte en ella la inmensa mayoría de la po to y furor. Y cuando entre todas las de la
blacion ; lo que debiera hacerle considerar capital descollabala voz hondamente atrona
que una ciudad de ciento sesenta mil almas dora de la Tomasa , parecía que uno estaba
no es probable que se arroje en masa á una oyendo el clamoreo de un gigante que acau
infamia , á una injusticia , á una traicion dillando numerosas huestes las animara á la
inauditas; debia hacerle entender que cau pelea.
sas muy graves habian promovido irritacion Nó, no es extraño que el general Van-
muy fuerte-; que se abrigaba en el fondo halen se amilanase , no es extraño que no
de los espíritus un pensamiento político mas viera otro medio de salvacion que reple
ó menos determinado , pero bastante á le garse á los fuertes , y luego abandonarlos ;
vantar la indignacion por mucho tiempo no es extraño que en lo sucesivo no conci
comprimida, y arrojar el guante al hombre biese posible otro plan para sujetar á Bar
de funesta memoria que habiendo comen celona, que la barbaridad de un bombar
zado su ensalzamiento por medio de un te deo ; no es extraño , nó , porque debe de
nebroso motin , gobernaba la nacion con resonar aun en sus oidos aquel formidable
tanta flojedad y desacierto. campaneo que ayudado de los alarídos de
Juzguese lo que se quiera de la insurrec la muchedumbre , y del fuego que salia de
cion de Barcelona y alrededores, califíque- todas direcciones , era por cierto capaz de
sela de justa ó de injusta , de noble ó de intimidar á hombres mas resueltos que quien
infame , de leal ó de traidora , lo cierto es á la sazon se hallaba al frente del ejército
que fue un acontecimiento de colosales di de Cataluña. Mucha razon tenia el Sr. Van-
mensiones ; y que si no tiene ejemplo en halen en haber aflojado algun tanto en su
la historia como dice el Sr. Van-halen , en altivez despues de haber presenciado escena
lo infame, y en lo injusto, tampoco tiene tan terrible. Asi es que al verse encerrado
muchos en lo imponente y aterrador. To en la Ciudadela ya no se avergonzaba de
davía recordamos con profunda emocion dirigirse á la Jimia de gobierno de Barcelona
aquellos dos dias de conflagracion espantosa; invitándola á una transaccion en términos
todavía recordamos el aspecto formidable amistosos y hasta humildes (1).
de una ciudad de ciento sesenta mil habi
tantes , encastillados en las calles y en las (1) Ejército de Cataluña. — E. M. — Cien vidas
casas , haciendo frente al ejército, peleando que tu viera habría dado ron gusto antes de que
 — 81
Un carácter notable presenta la revolu su penetracion le sugiriera en tan críticas
cion de noviembre y es una generosidad circunstancias (1).
por parte del pueblo , y una suavidad de En aquel documento no se trasluce to
lenguage y de accion de los que se coloca davía el blanco de la insurreccion , no se
ron á la frente, que contrasta de una ma trata sino de organizarla , para darle con
nera singular con el espíritu perseguidor y sistencia : las tropas ocupaban aun gran
sanguinario , que con harta frecuencia he parte de la ciudad : la poblacion estaba
mos tenido que lamentar en otras. Ni un conmovida , pero nó bastante resuelta para
acto de crueldad, ni una palabra dirigida á que pudiera contarse de seguro con su apo
enconar los ánimos salía de la boca de los yo ; y asi debió de creer prudente el señor
caudillos del movimiento ; union de todos Carsy no soltar todo su pensamiento para
los partidos, sin esceptuar ninguno, sin no asustar á los tímidos y poner en guarda
zaherir á ninguno : este era el lema del le á los enemigos.
vantamiento. Constituida ya la Junta el dia 16 no se
En el mismo dia 15, un instante despues aventuró tampoco á ningun programa po
de haber cesado el fuego , se publicó una lítico, contentóse con lamentarse de que la
alocucion de D. Juan Manuel Carsy dirigi autoridad local hubiese abandonado su pues
da á la Milicia Nacional para que nombrando to , con ponderar la necesidad de union y
cada cuerpo un representante se constitu constancia, y con dar algunas disposiciones
yese una junta que dictara las mas enérgi relativas á la organizacion del levantamien-
cas medidas y proporcionase cuantos bienes

(1) Ciudadanos: Valientes nacionales : cata

tuviera lugar el acontecimiento que afligirá el co
razon de cuantos merezcan el nombre de liberales
españoles.
pliendo cuanto
Nadaofrecí
he omitido
cuando sepor
suspendió
mi parteel fuego;
cum~
yo conozco muy bien que en estado semejante es
difícil impedir hagan fuego aquellos que no desean
la paz entre los que tantos sacrificios han hecho
unidos para defender la Constitucion , la Reina
Isabel 11 , y la Regencia que la representacion na
cional se ha dado ; pero es preciso poner término
á una situacion tan critica que amenaza los mayo
res males á la poblacion mas rica é industriosa de
España ; á cuyo fin me encontrarán siempre dis
puesto cuantos en Rarcclona deseen el triunfo de
nuestra causa: para ello es preciso nos entenda
mos , empezando por suspender loda hostilidad y
esos continuos tiros sin otro objeto que mantener
la alarma. Decidido como lo estoy con todos mis
subordinados á cumplir con los deberes que nues
tros juramentos nos imponen, cuando se nos obli
gue a ello , si esto no sucede pronto , olvidando lo
pasado , juntos estaremos dispuestos á combatir
por la libertad mas expuesta que nunca , cuando
no manda la ley , ni existe el orden. Nombre la
autoridad que mas influjo ejerza ahora en la ciudad
los comisionados que elija , para que nos ponga
mos de acuerdo , como lo espero de españoles lea
les , y todos á la vez haremos un gran servicio á la
patria. —Los que batiéndose fueron hechos prisio
neros en las casas que defendían , han sido tratados
del modo con que se conducen siempre los verda
deros liberales, y se conservaron en donde mas
seguridad propia tenían ; y hubieran sido puestos
ya en libertad si , como se me ofreció , hubiese ce
sado el fuego por parte de los habitantes. En fin ,
todo se arreglará desde el momento que nos en
tendamos, lo que para bien de la poblacion urge
sea cuanto antes.—Dios guarde á esa Junta mu
chos años. Cindadela de Barcelona 13 de nouem-
brede 1842.—El conde de Peracamps.—A la Junta
de gobierno de Barcelona.
TOMO II,
lanes todos : la hora es llegada de combatir á los
tiranos que bajo el férreo yugo militar intentan
esclavizarnos.
Con toda la emocion del placer , he visto prestar,
esponiendo vuestras vidas , los mayores sacrificios
en favor de nuestra nacional independencia : si, os
he visto llenos del mayor entusiasmo , briosos ,
lanzaros al fuego de los que alucinados por gefes
tan déspotas, como tiranos, quisieron hollar vues
tros mas sagrados derechos. Nó , no les dictaba su
corazon el hostilizaros; una mano de hierro les
impuso tan infernal y abominable crimen. Puesto
que mostrado habeis que quereis ser libres , lo
seréis á pesar de un gobierno imbécil que aniquila
vuestra industria , menoscaba vuestros intereses ,
y trata por fin de sumiros en la mas precaria y
lastimera situacion , en la mas degradante miseria.
Una sola sea vuestra divida : hacer respetar el
buen nombre catalau : union y fraternidad sea
vuestro lema , y no os guien , hermanos mios , las
seductoras palabras de la refinada ambicion de
unos , y la perfidia y maledicencia de otros.
Guiado de las mas sanas intenciones he creido
oportuno dirigirme en estos momentos á los bata
llones , escuadron , zapadores y artillería de Mili
cia nacional, para que sirviéndose nombrar un
representante por eleccion en cada uno de ellos,
se constituyan en Junta , dicten las mas enérgicas
medidas y os proporcionen cuantos medios su pene
tracion les sugiera en estas críticas circunstancias.
Al momento , no hay duda , sentiréis las mejo
ras. Vosotros los que abandonando una triste sub
sistencia que os produce quizás un miserable
jornal , habeis preferido quedaros sin pan antes
que sucumbir á infernales maquinaciones, sois
dignos de todo elogio , habeis despreciado la muer
te con bizarría , justo es quedeis indemnizados de
vuestras fatigas y penalidades. No dudeis levantará
su enérgica voz en vuestro apoyo , vuestro herma
no y compañero de armas.
Barcelona 15 de noviembre de 1842. = Juan
Manuel Carsy.
6
to , y á la conservacion del orden en lo m
terior de la ciudad ( 1 ).
Por mas reserva que se notase en los que
debian expresar el pensamiento de la in
surreccion, todos cuantos conocían la ver
dadera situacion de los espíritus , apre
ciando debidamente la gravedad de la crisis
echaban de ver que era de todo punto im
posible parar el carro de la revolucion que
(1) « Catalanes. La Junta popular directiva
provisional , os dirige la palabra con la emocion
que es consiguiente eu la grave crisis en que nos
encontramos por las viles maquinaciones de la
tiranta.
» Union y constancia es lo que principalmente
os encarece esta Junta ; union y constancia salvará
el bajel que ha estado á pique de naufragar.
» La autoridad local elegida por el pueblo para
su apoyo , su sosten , y su salvaguardia nos ha
abandonado : no seguiremos nosotros tan indigno
ejemplo : á vuestro frente estamos prontos á morir
antes que hacer traicion á la confianza que hemos
merecido.
» Los jornaleros que con tanto desprendimiento
han acudido á poner freno á la arbitrariedad , dan
do pruebas inequívocas de cordura y sensatez , se
rán sin demora socorridos.
» Ademas movida de intercs por los nacionales
que han salvado la libertad con peligro desu vida,
la Junta popular directiva tomará desde luego las
disposiciones necesarias para que no quede la mi
licia en el estado de desorganizacion en que se
encuentra ahora ; y al efecto autoriza á cada ba
tallon para que elija un representante que esponga
las reformas que crea conducentes para la comple
ta organizacion de dicha fuerza y la mayor satis
faccion de todos sus individuos.
«Ciudadanos; valientes y entusiastas nacionales:
toda vez que á vuestro valor y á vuestros esfuerzos
se debe la salvacion de Barcelona , la Junta direc
tiva de las fuerzas reunidas de todo el pueblo para
sostener la tranquilidad y el orden que tan cum
plidamente sabeis guardar, se ve en la precision
de mandar lo siguiente.
1.* «Todos los comandantes de M. N.sc presen
tarán inmediatamente á recibir órdenes de esta
Junta popular.
2.° «Asimismo lo verificarán los alcaldes de
barrio y dependientes de la Municipalidad y Al
caldía.
3." »Las personas que se sorprenda robando ó
cometiendo cualquier otro exceso.óquede convicto
de algun feo crimen , se le aplicará sumariamente
todo el rigor de. la ley
t.° «Interin la Junta dicta otras providencias,
todos los gefes y oficiales de Milicia Nacional de
tendrán á cuantos ciudadanos , que sin pertenecer
á la misma , se hallen armados y sueltos por las
calles sin ocupar punto alguno , y los destinarán á
donde crean mas conveniente.
S.o y último. »E| que contravenga a los artículos
precedentes será puesto a disposicion de la Junta.»
Barcelona 16 de noviembre de 1842.= El presi
dente, Juan Manuel Carsy —Fernando Abella.
— Ramon Cartro. — Antonio Brunet. — Jaime
Vidal i/ Gual. — Bernardo Xinxola. — Benito
fíarriga. — José PraU—Jaime Giral, secretario.
tan vehemente impulso acababa de recibir.
Era imposible que el levantamiento fuera
cual fuese su origen y las intenciones de los
promovedores, y hasta aun cuando se su
pusiera que fue un incendio enteramente
casual, era imposible , repetimos, que el
levantamiento no tomase un color político ,
y que no se tratase de derribar al gobierna
de todos odiado. Asi es notable lo mucho
que habia adelantado el negocio el día 17
con respecto al 16, pues que en una nueva
proclama de la Junta se declaraba ya Cata
luña independiente con respecto á la corte,
basta que se restableciera un gobierno justo,
protector , libre é independiente, con na
cionalidad , honor é inteligencia (1).
(1) «Catalanes. Los individuos que forman la
Junta , hasta ahora provisional , colocada á vues
tro frente, desearían retirarse al seno de sus fami
lias pasado ya el momento del peligro ; pero el
clamor general se lo impide, obligándola á cons
tituirse en Junta Central de gobierno que reasu
mirá todo poder y se dirigirá á los pueblos y
provincias de Cataluña sujetándose á las bases si-
uicutes , estando prontos á retirarse sus ¡adivi
nos á la menor indicacion del pueblo.
BASES .
1 .' «Union y puro españolismo entre todos los
catalanes libres , entre los españoles todos que
amen sinceramente la libertad , el bien positivo, el
honor de su país , y que odien la tiranía y la perfi
dia del poder que ha conducido á la Nacion al es
tado mas deplorable , ruinoso y degradante , sin
admitir entre nosotros la distincion de ningun
matiz político ó fraccion , con tal que pertenezca á
la gran comunion liberal española.
2.a «Independencia de Cataluña , con respecto i
la corte, hasta que se restablezca un gobierno justo,
protector, libre é independiente , con nacionali
dad , honor é inteligencia ; uniéndonos estrecha
mente á todos los pueblos y provincias de España
uc sepan proclamar y conquistar esta misma in-
epencia , imitando nuestro heróico ejemplo.
3.' «Como consecuencia material de las bases
3ue anteceden , proteccion franca y justa á la in-
ustria española , al comercio, á la agricultura . á
todas las clases laboriosas y productivas : arreglo
en la administracion , justicia para todos sin dis
tincion de clases ni categorías. Integridad y orden,
para justificar ante la Europa entera la pureza de
vuestras intenciones, la nacionalidad y la grandeza
de sentimientos que os animan é inflaman al aco
meter tan ardua empresa , digna de un pueblo Un
laborioso y libre como valiente, intrépido é inven
cible , tan generoso como honrado.
«Estas son las bases generales que abrazan los
mas ardientes deseos del gran pueblo catalan. Para
llevarlas á cabo , deseosa la Junta de rodearse de
personas de luces y prestigio, nombrará inmedia
tamente otra Junta auxiliar consultiva , cuyos
nombres se publicarán desde luego. La Junta pro
visional cree de buena fe en su íntima conviccion
ser fiel intérprete de vuestros sentimientos , y roo
 — 83
Que la Junta no se proponía arrojarse á guas, se pensó en negociaciones; y el en
medidas sanguinarias y expoliadoras, ámas tusiasmo se amortiguó , comenzó á cundir
de haberlo evidenciado sus actos, lo indi el desaliento, y la ciudad de Barcelona del
caban ya desde entonces el lenguage de dia 19 ya no era la ciudad del 16.
que se valia, y sobre todo el proyecto anun En aquella fecha se publicó la proclama
ciado de rodearse de personas de luces y de la Junta en que se decia expresamente
prestigio, nombrando inmediatamente una abajo Espartero y su gobierno ; ya era tarde ;
Junta nusiliar consultiva , cuyos nombres este grito debia levantarse el mismo dia 16,
debian publicarse desde luego. Ya que la ó no levantarse nunca. Si se temia asustar
situacion era eminentemente revoluciona á los medrosos, presentándoles un compro
ria, creemos que no fue un paso muy acer miso demasiado grave, no era seguramente
tado el proyecto de una Junta consultiva; buen sistema el aguardar á ofrecérselo
mayormente cuando el curso de los aconte cuando habia comenzado ya á cundir el
cimientos manifestó que no era este un de miedo ( 1 ).
signio premeditado , y que no se podia con
tar con unidad de pensamiento entre la
Junta de gobiernoyla consultiva. Los mo
mentos eran críticos, era indispensable, (1) «CATALANEs^La ansiedad publica está cla
urgente , aprovechar el tiempo , obrar con mando y hasta exigiendo de esta Junta una mani
rapidez y energía , sostener el entusiasmo festacion franca y sincera del objeto á que se diri
de la capital y alrededores, acosar al gene gen nuestros esfuerzos y sacrificios. Justa es la
demanda y vamos á revelaros con toda la pureza
ral Van-halen , provocar mas y mas un le de nuestros sentimientos , el lema ó la divisa que
vantamiento en masa , aislar a Monjuich , desde este momento inscribimos en la bandera que
propagar el incendio á lo restante del prin enarbolamos, á cuya benéfica sombra no habrá un
solo liberal español que no abjure para siempre las
cipado, en una palabra hacer que ni por un miserables disidencias de partido , y que con la fe
momento se durmiese la insurreccion sobre y el entusiasmo que inspira el sagrado nombre de
la victoria, sino que marchase siempre libertad y justicia vacile en estrechar esc lazo que
ha de afianzar nuestra independencia . nuestra
adelante, no dejando que cesasen ni el mo prosperidad y nuestra gloria.
vimiento , ni el fuego , ni el toque de re «Union entre todos los liberales: abajo Espartero
bato. No se hizo, no se comprendió toda la y su gobierno : Cortes constituyentes : en caso de
gravedad del peligro ; se consintieron tre Regencia , mas de uno : en caso de entace de la
reina Isabel II, con español : Justicia y proteccion
á la industria nacional. Este es el lema de la ban
dera que tremolamos , y en su triunfo está cifrada
la salvacion de España.
la decision y cooperacion activa de todas las perso »La Junta no cree necesario esponer las razones
nas que sin distincion de color político puedan públicas en las que se encierran sus deseos y es
ayudarla desde este instante á completar la gran peranzas , porque públicas son por desgracia para
diosa empresa que habeis comenzado con una glo todas las clases del pueblo español , las perfidias
ria que ni la maledicencia ni la vil impostura po del poder , nuestra visible y ruinosa decadencia,
drán oscurecer jamas, cuando los hechos hablan, los amagos de tiranía, y sobre todo ese descontento
y vuestra conducta os justifica ante los pueblos li universal , ese clamor que resuena en todos los
bres : aunque en medio del triunfo honroso que ángulos de la Península contra las tenebrosas mal
habeis alcanzado es lamentable la sangre preciosa, dades de un fatal y abominable desgobierno. Li
sangre de valientes españoles , en cuya efusion es bertad, ley, y buen régimen admiinstrativo que
pantosa no aparece mas que el impulso abominable remos: y en tan noble demanda , por tan sagrados
de un gobierno imbécil y corrompido , ó mas bien objetos, con denuedo y constancia combatiremos
de un maléfico desgobierno que se ha atraído la hasta morir.
publica execracion. ° ; Esforzados catalanes ! Valiente y libre ejér
»Union, valientes catalanes! union fraternal en cito ! | Españoles todos los que odiais la tiranía !
tre todos los españoles libres. Las tropas del ejér unios con la confianza y firmeza de corazones li
cito que permanecen en la capital admiten nuestra bres, y abrazad el pendon que enarbolamos , en el
causa y estan convenidos con esta Junta previas que está escrita la mas lisongera esperanza de ese
las formalidades del caso : mirad como hermanos pueblo tantas veces sacrificado y tantas veces ven
á esos leales gefes , oficiales y soldados. Entero y dido. Venzamos el destino de la fatalidad que
absoluto olvido de lo pasado, confiad en el éxito preside, las calamidades de nuestro pais, y consoli
feliz de vuestra santa causa , la causa del pueblo , demos de una vez la paz , el reposo , la justicia
de la nacion entera , que no tardará en seguir pública , la libertad , la suerte de las clases labo
vuestro ejemplo imitando vuestro asombroso va riosas y el engrandecimiento de esta desventurada
lor.» nacion.»
dente,
Barcelona
Juan 17Manuel
de noviembre
Carsy. — de Fernando
1Sí2.— El Alpresi- || Barcelona 19 de noviembre de 18i2. —El presi-
|| dente, Juan Manuel Carsy. — Fernando Abella.
— Ramon Carlro. — Antonio Brunel. — J, — Ramon Cartro. — Antonio Brunet. — Jaime
Vidal y GuaL Bernardo Xinxola. — Vidal y Gual. — Bernardo Xinxola. — Benito
Garriga.—Josi Prats.—Jaime Giral , secretario. II Garriga.—José Prats.—Jaime Giral, secretario.
 — 84
Los sucesos marchaban con rapidez en sumamente crítica , hubiese procurado in
sentido favorable al general Van-halen; ya timidar la ciudad con amenazas de bom
tenia abastecido áMonjuich, yapodia cuan bardeo , con la mira de que la generalidad
do bien le pareciese , dar un dia de llanto de sus habitantes , deseosos de salvar sus
y luto á una ciudad de ciento sesenta mil vidas é intereses, interpusieran su media
almas , y que encerraba ademas inmensos cion con los caudillos del movimiento para
intereses. Preciso es hacer justicia á Espar llegar á una transaccion razonable que
tero : la idea de bombardear la ciudad no sin desdoro del gefe de las armas , librase
salió de su cabeza ; fue invencion exclusiva la poblacion de tan espantosa catástrofe. Es
del general Van-halen, pges que el dia 20 tamos íntimamente convencidos de que las
de noviembre cuando el gobierno de Ma amenazas eran suficientes para matarla in
drid no habia tenido el tiempo suficiente surreccion ; y que si se llegó á realizarlas
para trazarle la linea de conducta , ni aun fue por un lujo de crueldad tan innecesario
para contestarle á las comunicaciones en que como incomprensible.
le noticiaba el resultado de la insurreccion, Para evidenciar mas y mas estas verdades,
ya se dirigía á la Diputacion provincial en sigamos el curso de los acontecimientos.
estos términos : Tan pronto como circuló por la ciudad
«En vista de todo lo dicho, ruego áV.E. la noticia de que el general Van-halen es
contribuya por cuantos medios esten á su taba resuelto á bombardearla si no se efec
alcance á fin que se restablezca el orden , tuaba la rendicion , se apoderó de la mayo
pues que no debiendo dar tiempo á que se ría de los habitantes un terror tal, que
realicen mis temores expresados sobre los contrastaba vivamente con el entusiasmo y
carlistas en todas las provincias deCataluña, denuedo que se manifestaran cuatro dias
me veré forzado á hostilizar esa ciudad antes. Desde aquel momento la revolucion
hasta someterla ála obediencia al gobierno quedó muerta , porque muere una revolu
nacional , por mas sensible que sea á mi cion tan pronto como retrocede ó vacila ; y
corazon, aun cuando sus habitantes que un vaciló y retrocedió la de Barcelona porque
dia me llamaron héroe y á quienes siempre he se halló sin las simpatías y apoyo que an
procurado el mayor bien , me merezcan la teriormente le dieran tanto brio y osadía.
mayor compasion ; pero la salud de la patria Viéndose que eran serias las amenazas
puede exigirme este sacrificio , y los que del Capitan Ceneral comenzó la mediacion
ecados me obligueu á ello , habrán lle de los cónsules extrangeros, lo que si bien
lo los deseos, tanto de los que quieren infundía alguna esperanza tambien indicaba
volvernos al absolutismo , como de aque la gravedad del peligro (í).
llos que se proponen la destruccion de nues
tra industria ; pues una vez roto el fuego, ( 1 ) ii Consulado Británico de Barcelona. —20 de
no cesará hasta obtener la sumision de los noviembre de 1842. — Los subditos ingleses que
que quieran continuar en rebeldía, y el in ma.bailan se bajo mi proteccion estan en grande alar
Creo de mi deber bajo el carácter de cónsul
cendio , y la destruccion de fábricas y edi pedir á V. E. , segun las leyes de las naciones ,
ficios que son consiguientes.» me dé aviso para que se retiren , si V. £. piensa
Y mas abajo anadia palabrasque deseára sitiar, atacar ó bombardear esta ciudad. —Tengo el
mos no hubiesen salido de la boca de quien mienlos honor de ser de V. E. con los mas altos sentimien-
vuestro obediente servidor. — Juan Story
mandaba un ejército español: «por masque Penleaze — A. S. E. el conde de Peracamps, Ca
repugne á mi corazon , si se me obliga á pitan General del principado de Cataluña. »
á ello , estoy decidido á hacer quemar á los lona « Consulado de Francia en Cataluña. — Barce
20 de noviembre de 1842. — Señor Capitan
enemigos dela Reina Isabel II, de la Cons General. — En el caso de que las hostilidades ha
titucion y de la Regencia que la represen yan de principiar , y por lasque tenga que comen
tacion eligió entre las llamas de la ciudad.» zar un bombardeo, suplicoá V. E. se sirva manifes
Desgraciadamente no eran las palabras á lin desustarme intenciones en los termines convenientes
preservar la vida de los numerosos fran
del Sr. Van-halen una simple amenaza, ceses que residen en Barcelona. = Yo espero que
sino la expresion de un firme propósito que esta suplica no será negada al agente de la Francia,
á su tiempo comenzó á realizar, y que si de y ai que ha tenido la fortuna de poner al abrigo
lodo peligro la familia de V. E. , asi como la
no llevó enteramente á cabo , no fue por del Sr. Gobernador comandante general , y la del
falta de voluntad , sino porque se lo impi señor Gefe Político. —- Sírvase V. E. aceptar , señor
jado
dieron
ra que delas
hallándose
Barcelona,
circunstancias.
el
y colocado
capitan
Nadageneral
en
extraño fue- PI.. Capitan General , las nuevas pruebas de mi alta
situacion
arro-
consideracion. — El cónsul de Francia. = Ferd.
Lesseps. — Excmo. Sr. Capitan General de Cata
luña. »
 85
Las contestaciones del Sr. Van-halen á
los cónsules de Francia é Inglaterra, no
eran nada á propósito para tranquilizar la
ciudad ; pues el General afirmaba en ellas,
que no podia garantir si haría ó nó fuego ,
ni tampoco anunciarlo con anticipacion á
los cónsules, cuando fuese á romperlo con
tra la plaza ; añadiendo que estaba decidi
do á hacerlo sin dilacion , en caso que los
sublevados no se sometiesen á las leyes y
al legítimo gobierno en muy corto tiempo ;
previniendo que si estos no se hallaban dis
puestos á aceptar dentro de pocas horas las
proposiciones que habia hecho por medio
de la Excma. Diputacion, reclamasen los
extrangeros el permiso de evacuar la ciu
dad , verificándolo lo mas pronto posible.
Estas comunicaciones son del 21 , y por
ellas se echa de ver que el General cobra-
ha aliento y osadía en proporcion que los
sublevados iban cejando (1).
Por momentos se aumentaban la zozobra
y espanto en la infortunada ciudad : cuan
tos podian se apresuraban á huir de una
mansion que de un instante á otro corría
peligro de convertirse en un campo de de
vastacion y de horror ; la mquietad estaba
pintada en todos los semblantes, y si bien
no faltaban algunos que abrigaban la espe
ranza de que no existia el verdadero desig-
(1) Ejército de Cataluña. — E. M. — Yo no pue
do garantir á V. S. si haré ó nó fuego , y menos
anunciarle con anticipacion si voy á romperlo con
tra la plaza , pues estoy decidido á hacerlo sin di
lacion , no sometiéndose los sublevados á las leyes
y al legitimo gobierno en muy corto tiempo , pues
los carlistas han empezado á sacar la cabeza , ar
mándose los indultados en Vich y sus inmedia
ciones que han quedado sin tropas; y solo al pa
triotismo del Ayuntamiento y M. N dela misma
ciudad se ha debido el que sean desarmados y
puestos en prision. V. 8. dentro de la plaza , puede
conocer si estan dispuestos á aceptar dentro de po
cas horas las proposiciones que he hecho por medio
de la Excma. Diputacion: en caso contrario puede
reclamar el permiso para que la evacuen todos los
subditos de su nacion ; procurando que lo hagan
lo mas pronto posible. — Acompaño á V. S. las
alocuciones que he dirigido al pais y al ejército, y
luego que se imprima mi correspondencia con la
Diputacion Provincial , las piezas justificativas ,
la proclama y bando del Ayuntamiento y M. N. de
Vich , se lo facilitaré á fin de que quede conven
cido , asi como el mundo entero , de que nada he
omitido para evitar mas desastres. = Dios guarde
á V. S. muchos años. Cuartel general de Sans, 21
de noviembre de 1842. = El conde de Peracamps.
=Sr. cónsul de Inglaterra en Barcelona. »
«Ejército de Cataluña. = E. M.=Yo no puedo
garantir á V. 8. si haré ó nó fuego y menos anun
ciarle con anticipacion si voy á romperlo contra la
nio del bombardeo , y que solo se trataba
de amedrentar, el mayor número no pres
taba crédito á estas palabras consoladoras ,
como dominado por un presentimiento de
la catástrofe que habia de realizarse en bre
ves dias. Y tenian sobrada razon los que
abrigaban estos temores, los que se prome
tían poco de la humanidad del General. Su
propósito era serio, firme, y asi lo mani
festaba en las comunicaciones dirigidas al
gobierno , las cuales no habiendo de ser
leidas por los sublevados , no contenían va
nas amenazas sino la fiel expresion de lo
que el General intentaba : « estoy decidido
á hacer cuanto he anunciado á la Diputa
cion Provincial y á los cónsules, decía en
su parte del 21 de noviembre, pero no
puedo fijar el momento en que romperé el
fuego contra la plaza ; pues resistiéndoseme
como es natural , el hacer la ruina de esta
hermosa y rica ciudad, piensodarle un par
de dias para que resuelvan defmitivamente
su rendicion , si antes no ocurriese el me
nor acto hostil por su parte, ó supiese ha
bia estallado algun motin en otro punto del
interior, en cuyo caso , á fin de sofocar es
to lo mas pronto posible , dándoles pocas
horas de término , romperé el fuego que
no cesará hasta obtener la sumision mas
completa; pues para que la tranquilidad
plaza , pues estoy decidido a hacerlo sin dilacion ,
no sometiéndose los sublevados á las leyes y al
legítimo gobierno en muy corto tiempo , pues los
carlistas han empezado A sacar la cabeza , armán
dose los Indultados en Vich y sus inmediaciones ,
que han quedado sin tropas ; y solo al patriotismo
del Ayuntamiento y M. N. de la misma ciudad se
ha debido el que sean desarmados y puestos en
prision. V. S. dentro de ln plaza puede conocer si
estan dispuestos á aceptar dentro de poras horas
las proposiciones que he hecho por medio de la
Excma. Diputacion ; en raso contrario puede re
clamar el permiso para que la ev acuen todos los
súbditos de su nacion , procurando que lo hagan
lo mas pronto posible. — Va he manifestado áV. S.
mi gratitud por cuanto ha hecho para salvar á mis
hijas y otras señoras de las manos de los subleva
dos, que tuvieron la osadía de arrancarlas á viva
fuerza bajo el pabellon franccs ; estas las repito ,
lo mismo que al comandante Gatier , que tanto se
desvela por su cuidado. — Acompaño á V. S. las
alocuciones que he dirigido al pais y al ejército ,
y luego que se imprima mi correspondencia ron la
Diputacion Provincial, las piezas justificativas ,
la proclama y bando del Ayuntamiento y M.N. de
Vich , se lo facilitaré á fin de que quede convenci
do . asi como el mundo entero , de que nada he
omitido para evitar mas desastres. — Dios guarde
h V. S. muchos años. Cuartel general de Sans, 21
de noviembre de 1842.— El Conde de Peracamps.
"Sr. cónsul de Francia en Barcelona. »
 — 86 —
esté bien asegurada en Barcelona, y mu de riesgo.
tranquilidad, ni se atajaba el inminente
cho mas despues de haber sabido por ex
periencia lo que vale un pueblo cuando Los directores del movimiento no com
quiere hostilizar la guarnicion , ó esta ha prendieron su posicion ; todo se hizo á me
de ser muy numerosa , ó no puede haber dias ; el General se fue envalentonando , y
un solo habitante armado, hasta que se lo que es mas sensible , no se pudo evitar
acostumbre al uso de la verdadera li la espantosa catástrofe.
bertad.» El dia 20 de noviembre se publicaron
Y es notable que el General abrigase los nombres de los señores que debian com
designios tan terribles, cuando él misma poner la Junta consultiva ; y en la alocu
confesaba que no era obra del momento cion que precedía á la expresada lista, ma
acceder á sus exigencias, aun cuando se nifestaba la Junta Central de gobierno , su
hubiese querido de buena fe. «Conozco propósito de llevar adelante la revolucion
que en el estado de Barcelona , decia en el del 15 de noviembre (1).
parte arriba citado, aun cuando de buena Mientras la Junta de gobierno manifes
fe ( cosa que jamas podría esperar de los taba al público que la Junta consultiva ha
que han dirigido y ejecutado esta revolu bia sido creada para vencer , la Diputacion
cion) quisiesen haeer lo que ofrece la Di provincial comunicaba al general Van-
putacion provincial, no es obra del mo
mento, mas sin embargo , mas dilacion en
romper el fuego de las 48 horas que me
propongo, la creería excesiva, y asi maña (1 ) «Catalanes. Hé aquí la lista de los Sres.
na por la mañana advertiré que si á las Consultores que elegidos por los electores de cuar
teles , y cuyos nombres , esculpidos con letras de
doce del dia siguiente no está completa oro , legaremos á la posteridad . han de formar
mente sometida la ciudad , en aquella hora nuestra sabia .justa y fraternal Junta consultiva.
romperé el faegO , y no cesará hasta con » Ya nos lanzamos sin temor á la arriesgada
seguirlo.» empresa que motivó nuestra decision y patriotis
mo. Sí : sus sabias lecciones , sus sanos consejos ,
Si conocíais que le era imposible á la nos conducirán , no hay duda , á nuestra salvacion
ciudad el someterse desde luego, aun cuan y prosperidad. Seguros podemos decir , si bien la
do hubiese querido de buena fe , ¿ con qué mentando laslatristes víctimas, TRIUNFAMOS.
principios de justicia y de humanidad os Promovimos revolucion del QUINCE DE NO
VIEMBRE ! y si nuestras débiles fuerzas nos hi
atrevíais á sumir en llanto y lutoá una po cieron vacilar en obtener un feliz resultado , dire
blacion de ciento sesenta mil almas , y á mos con orgullo : « con el apoyo , con las luces de
destruir é incendiar incalculables intereses? nuestra Junta consultiva , alcanzarnosla victoria.»
¡ Qué mayor gloria , qué mayor dicha que juntos
Supuesta la actitud que habia tomado el cenir los laureles ! : !
Capitan General y el desaliento y postra » Oid la expresion del pensamiento barcelonés.
cion que habian cundido por la ciudad, era quer »1. 1). JoséXifré, propietario. 2 D. José Malu-
preciso optar entre dos medios : ó tratar propietario , abogado y propietario. 3 D. Jaime Badia ,
y comerciante. 4 D. Francisco Viñas ,
seriamente de una transaccion, apresuran propietario y comerciante. 5 D. Agustín Yañez,
do cuanto fuese posible un desenlace pací catedrático de farmacia. 6 D. Tomas Coma, co
fico, ó crear una situacion enteramente tario. merciante y fabricante. 7 D. Juan Agell , propie
8 D. Juan Monserdá , mercader. 5> El briga
revolucionaria , saltar por encima de todas dier Moreno de la Peña , militar. 10 D. Juan Tomas
las consideraciones y miramientos , romper Alfaro, magistrado. 11 D. Valentín Llozer, ma
todas las negociaciones , mandar bajo seve gistrado y. propietario. 12 D. Juan Güell, comer
ciante. 13 D. Pablo Torrens y Miralda, comer
ras penas que nadie se atreviese á comu ciante. 14 I) Valentín Esparó , fabricante y pro
nicar con el enemigo , retándole al propio pietario. 15 D. Manuel Torres y Serramalera ,
tiempo para que comenzase el fuego cuan comerciante. 16 D. Macario Codoñet, mercader y
to antes, provocándole á ello con el toqne propietario. 17 El marques de Lió. 18 D. Vicente
Zulucta, arquitecto. 19 D. Ignacio Sanpons, abo
de rebato. Este último medio era sin duda gado y propietario. 20 D. ElcodoroMorata, militar.
terrible ; de un momento á otro podia po 21 D. Bernardo Muntadas , fabricante y propieta
ner la ciudad en espantoso conflicto ; pero 23 rio. 22 D. Nicolás Tous, fabricante y propietario.
D. Pedro Terrada , médico y propietario. 2*
los acontecimientos habian llegado á una D. Jaime Codina , farmacéutico. 23 Ü. Salvador
crisis en que era preciso resolverse por la Arolas , mercader. »
paz ó por la guerra; y esto sin vacilar, por Barcelona 20 de noviembre de 1842. — El pre
que nada habia peor que la prolongacion — sidente, Juan Manuel Carsy. — Fernando Abeüa.
Ramon Cartro. — Antonio Brunet. — Jaime
de aquel estado de agonía en que ni se al Vidal y Gval. — Bernardo Xinxola. — Benito
canzaba ni alcanzarse podia un momento Garríga.— José i»raíí— Jaime Giral,í
 halen que la misma Junta habia sido nom 87 —Es bien extraño que la Junta toda vez
brada para transigir , como se infiere evi que se habia erigido en gobierno, permi
dentemente de la comunicacion que le tiese comunicaciones continuas entre la
dirigía con la misma fecha del 20. Era de Diputacion y el Capitan General ; y que
todo punto imposible que triunfase ni mar
chase , una revolucion que consentía á su
lado un poder que hablaba de transaccio binado relizmeute para la eleccion de las i
nes con el gefe de las fuerzas sitiadoras. mas notables que representando á todas las opi
Creemos que en esto mediaban intenciones niones é intereses , se ocupasen en los medios de
leales y miras .filantrópicas; mas por esto conciliar el restablecimiento del orden con el dere
no es menos claro que con un sistema tan quejas cho que asiste á la poblacion para manifestar sus
y necesidades, formando una junta que
indeciso y vacilante, solose conseguía com debe instalarse mañana con In denominacion de
plicar mas y mas la situacion , no adelan auxiliar consultiva. = Sus nombres continuados en
tándose mucho para llegar á un desenlace eldeladjunto impreso, son la prueba mas relevante
buen espíritu público de esta hermosa cuanto
pacífico, y haciendo entender al General desgraciada capital , cuyos habitantes en medio y
que la ciudad , de altiva é impetuosa , ha despues de las últimas lamentables escenas han
bia pasado á medrosa y suplicante. La acreditado de un modo positivo , no solo el mas
Junta de gobierno ¿quería transigir ó nó? za y grado alto de civilizacion y cultura , sino la noble
generosidad de sus sentimientos , tratando á
Si lo primero , era preciso ponerse franca los prisioneros con la mayor fraternidad y deján
mente de acuerdo con la Junta consultiva dolos en la misma libertad que á los demas ciuda
y con la Diputacion provincial , ocuparse danos. -= Estas circunstancias, cuya realidad no
puede esconderse á V. E. como testigo ocular de
en calmar los ánimos, y tomar las medidas ¡os sucesos, y la consideracion de los graudes in
mas conducentes para preparar la solucion tereses que encierra esta vasta poblacion , alejan
definitiva. Si lo segundo, entonces no de de todo pecho sensible el funesto presentimiento
bía permitir que la Diputacion se dirigiese de que pueda verificarse la amenaza de someterla
á la obediencia del poder central por cuantos me
al Capitan General con proposiciones pací dios permite en otras situaciones el derecho terri
ficas, antes debia intimarle que ó tomase ble de la guerra. No consiste la ciencia del gobier
parte directa en la revolucion , ó que se no en el simple aparato y ejercicio de la fuerza
material contra los pueblos que con razon ó sin
retirase. Atenerse en un término medio ella intentan desobedecer á las autoridades cons
era prolongar la agonía de la ciudad , sin tituidas. Un examen filosófico de las causas con
probabilidad de alcanzar ningun resultado; duce naturalmente al hallazgo de los remedios; y
porque bien podía conocerse que en la si de estos el mejor sin duda es seguir con calma y
prudencia el curso de los acontecimientos ; á fin
tuación en que se encontraba el general de procurarles una solucion suave , tranquila y
Van-halen no bastarían á cambiar su reso honrosa a todos sus autores. Grande es el paso
que se ha dado con el nombramiento de tantos
lucion las representaciones y súplicas de la ciudadanos respetables por su saber, arraigo, pro
Diputacion provincial. ¿Qué concepto de bidad y civismo. La Diputacion espera que con él
bió de formar de la situacion de la ciudad se allanarán muchas dificultades , facilitándose la
el gefe delas fuerzas sitiadoras, cuando de consecuencia de un pronto y feliz desentace , ob
una parte leia la proclama de una junta de jeto comun de los votos de V. E. y de todo espa
ñol que anhe'c por la prosperidad y ventura de su
gobierno animando á los habitantes con la patria. Tanto por esta causa como porque al efecto
esperanza de triunfo , y de otra se hallaba continúa la Diputacion practicando todos los me
con las amistosas representaciones de la dios que se hallan á su alcance en la reducida es
fera de su autoridad y posicion que ocupa , le es
Diputacion , y con la súplica de que no imposible dar á V. B. por ahora una contestacion
ensordeciera á los gritos de la humanidad , tan satisfactoria y general como hubiera apetecido,
asegurándole que se trataba de los medios situacion pero no duda que V. E. se hará cargo de la triste
de conciliar el restablecimiento del orden laboriosa en que se ven todas las clases de esta
y culta ciudad', en nombre de las cuales,
con el derecho que asiste á la poblacion , de la humanidad y de la patria á cuyo grito jamas
para manifestar sus quejas y necesidades ; V. E. ha ensordecido, no puede menos de reco
y se le lisonjeaba con la esperanza de que mendarle las vidas y fortunas de esta escogida
porcion de sus representados, con la esperanza de
instalada la Junta consultiva , se allanarían encontrar en el filantrópico corazon de V. E. la
muchas dificultades , facilitándose un pron mas favorable acogida. — Dios guarde áV. E. mu
to y feliz desenlace (i)? chos años. Barcelona 30 de noviembre de 18V2. —
Excmo. Sr. — El presidente accidental , José Pas
cual.—José Borrcll. — Manuel Torrents. — Félix
Ribas. — Manuel Cabanellas. — Antonio Giberga.
(1) «Diputacion provincial de Barcelona. — José Llacayo. — Manuel l'ers. — José Vergés.
Excmo. Sr. = Antes de recibirse el oficio de V. E. — Manuel Torrents. — Francisco Soler, secreta
de hoy , el instinto de sensatez de este vecindario , rio. — Excmo. Sr. Capitan General de este distrito
} la intencion de la Junta popular, se habían coiu- militar. »
 88 —
asi consintiese que en el recinto por ella personas que aunque sin armas la mayor
dominado, se desconociese abiertamente su parte , se conocía las acababan de tener en
autoridad, perdiendo de esta manera la la lucha , asi como se veia en sus semblan
fuerza y energía, únicas condiciones que tes el odio á las tropas ; y que entre estas
en tales casos pueden sacar airoso á quien gentes se encontraban con aire de satisfac
se ha empeñado en una crisis extraordina cion , infinidad de personas pertenecientes
ria. Sin embargo , las comunicaciones con á los partidos moderado y hasta carlista.
tinuaron cadadia mas activas, y los parla Como suponemos que S. E. no estaría en
mentos del General dirigidos á la Diputacion aquella tarde con ánimo muy tranquilo,
entraban y salían á cada momento, aumen para andar mirando si los semblantes eran
tando considerablemente la alarma , y ha de exaltado, moderado ó carlista, y que
ciendo cundirla desconfianza de la victoria, por otra parte atendida su posicion , no era
cuando se veia que se estaba tratando de natural que conociese personalmente á es
composicion amistosa. Sabedor el General tas gentes , nos inclinamos á creer que los
Van-halen del efecto que producían en la emisarios le informarían mal , pues no po
ciudad sus continuas y terribles amenazas , demos persuadirnos que S. E. faltase á la
proseguía menudeándolas y tomando por verdad. Como quiera, lo cierto es que la
instantes una actitud mas imponente: «me ciudad de Barcelona en masa, vió con sus
proponía , dice él mismo , que la alarma ojos si eran ó nó los carlistas los que hosti
continua en que los tenia por temor de las lizaron á las tropas ; y hasta se puede aña
bombas aumentase el número de sus ene dir que para quien conozca el espíritu de
migos , haciendo de este modo mas difícil la poblacion , y las particulares circunstan
el que aprovechando la abundancia de ele cias en que se encontraba al estallar la in
mentos que habia en Barcelona se organi surreccion de noviembre , será tan extraña
zasen de tal modo que hubiesen podido la imputacion hecha por el Sr. Van-halen
hacer mucho mas larga la resistencia ; » y á los carlistas , que no merecerá la pena de
lo conseguía en efecto , pues que la insur ser refutada y desmentida , de puro ex
reccion iba perdiendo por instantes su con travagante y ridicula. Pues que ¿no sabe
cepto y prestigio. Pocos eran los que espe mos todos qué opiniones profesaban los que
raban que se obtendría algun resultado; rompieron el fuego contra la tropa , los que
los deseosos de la paz , ansiaban por una lo continuaron, los que se pusieron al fren
capitulacion pronta ; y los que anhelaban te del movimiento?
que se derribase de aquella vez á Espartero, En cuanto á los moderados, á quienes
contemplaban con dolor aquella prolonga no escasea el Sr. Van-halen las acrimina
cion de un estado indefinible , que tenia á ciones, bien puede asegurarse que no le
la ciudad en intolerables angustias, y que hostilizaron , que no fueron ellos quienes
al fin no debia producir otro efecto que comenzaron el levantamiento , ni quienes
acarrearle una catástrofe.» le sostuvieron por algunos días. Las perso
Dirigiéndose el General al pueblo de nas mas conocidas é influyentes de dicho
Sans se colocaba en posicion mas ventajosa, partido , pertenecen casi todas á las clases
y mas á propósito para amenazar de cerca mas acomodadas, y tienen por consiguien
la ciudad , y aumentar si cabia su zozobra te , poca aficion á los disturbios. Mucho
y alarma. Establecido en dicho punto di menos son á propósito para empuñar el fu
rigió con fecha 21 de noviembre , otra co sil y batirse con la tropa en las calles y en
municacion á la Diputacion provincial , las plazas. En sobreviniendo una crisis , su
repitiendo sus acostumbradas amenazas, primer paso suele ser , poner en salvo sus
haciéndolo de una manera muy apremian familias, retirar sus intereses, y abandonar
te, fundado en que la union de los carlis la ciudad amenazada. En aquellas circuns
tas, republicanos y moderados para des tancias en que la insurreccion dominaba
truir la Constitucion y el gobierno existente, dentro , el General intimidaba desde fuera,
no podia dar otro resultado que conducir y en que el canon de Monjuich podía tro
nos al espantoso absolutismo. No sabemos nar de un momento á otro , bien seguro
dónde veia el general Van-halen á los car podia estar el gefe delas fuerzas sitiadoras,
listas hostilizándole ya dentro de la ciudad, que los moderados de Barcelona no forma
ya en el resto del Principado. En la misma ban proyectos de resistencia : unos habían
tarde del 15, nos dice S. E. que concur salido ya , otros trabajaban por salir.
rieron á la Rambla un gran número de La situacion del General era cada día
 — 89 —
mas -ventajosa ; las comunicaciones de la desenlace pacífico , la seguridad de que la
Diputacion eran mas explícitas en favor de Diputacion auxiliada por las luces , sensa
un arreglo amistoso ; siendo notable que tez y patriotismo de las personas influyen
con fecha del 21 decia esta corporacion que tes nombradas por el pueblo, procuraba
desde el momento que se reunió por man secundar los deseos del General para poner
dato de la Junta Popular y Directiva , co término á aquella situacion tan violenta, se
noció la necesidad de calmar la efervescen obtuvo de este un pequeño plazo, bien que
cia de las pasiones y disponer los ánimos acompañado con la amenaza de quesi el 24
al restablecimiento del órden , y que para al amanecer la ciudad por sí misma no ha
el logro de este patriótico objeto no habia bia restablecido el órden, y dado las ga
perdonado ni perdonaba medio alguno. Es rantías necesarías que no dejasen motivo á
tas palabras tan conciliadoras las acompa- desconfiar del cumplimiento de sus ofertas,
ba la Diputacion con poderosas reflexiones se rompería el fuego hasta conseguir su
para impedir que no se llevase á cabo el sumision (1).
horroroso intento de bombardear la ciu Es imposible describir el terroroso efec
dad (i). to que produjo en la ciudad la difusion de
Con el oportuno recuerdo de la conduc esta noticia. Estaba ya lijado el dia para la
ta que observaron los franceses en el ase horrible catástrofe , estaba señalada la hora,
dio de 1823, la consideracion de que no ya no era posible impedirlo, sino prestán-
era posible llegar de repente á un cambio
tan absoluto en la opinion para obtener un
(1) «Ejército de Cataluña. = E. M. — Excmo.
Sr. = Despucs de cuanto tengo dicho á esa Excma .
Diputacion Provincial , nada me queda que aña
cion(1)Provnicial
o EjércitodedeBarcelona.
Cataluña.=Excmo.
— E, M. = Diputa- dirle. Nadie me gana en sentimientos de humani
Sr.=Des-
dad , ni en intercs por esa hermosa y desgraciada
de el momento que la Diputacion se reunió por poblacion , pero la salud de la patria y el sosteni
mandato expreso de la Junta Popular y Directiva, miento del Trono de Isabel II , de la Constitucion
conoció la necesidad de calmar la efervescencia de que hemos jurado y de la Regencia, me impone el
las pasiones y disponer los ánimos al restableci sagrado deber de someter la ciudad al órden legal.
miento del orden. A este patriótico objeto no ha He hecho mas de lo que estaba á mi alcance para
perdonado ella , ni perdona medio alguno , y con evitarle males : mi deseo es conseguirlo sin mas
el mismo ha tenido el honor de dirigirse á V. E. desgracias, y si fuesen sinceros los que dirigen los
en varias comunicaciones. La Diputacion no des acontecimientos de Barcelona nada mas fácil que
confia de llegar auxiliada de las luces , sensatez y lograrlo. — El sacrificio de un pueblo que asi lo
patriotismo de las personas influyentes nombradas quiere es preferente á la suerte de toda una na
por el pueblo , á un término tan apetecido de to cion : lo que ha hecho Barcelona es reprobado por
dos los hombres honrados; pero V. E. conocedor todo ella , incluso el resto del Principado, probán
de las revoluciones y del corazon humano , debe dolo en parte el manifiesto que acaba de publi
considerar que un cambio tan absoluto no puede carse en Tarragona, el del Ayuntamiento de Vich,
ser repentino sino obra de la conviccion , que para y cuantos datos recibo de todos los demas puntos
formarse necesita algun tiempo. Se hace preciso , del Principado; desde Zaragoza se me han ofrecido
pues, que V. E evite aquellas medidas extremas todos los recursos de Aragon para apoyar nuestros
autorizadas por el derecho de la guerra en ciertas juramentos; por lo tanto me haría hasta criminal,
ocasiones, y particularmente en guerras extran si omitiese los medios que tengo á mi alcance para
jeras : pero reprobadas por la humanidad y por el reducir á la obediencia a los autores de tantas des
ínteres nacional , y jamas puestas en práctica en gracias. Asi, pues, anuncio á esa corporacion,
casos como el nuestro en las naciones cultas, sien que si para el jueves 24 al amanecer, esa ciudad
do esto tan positivo que en el año de 1823 á pesar por sí misma no ha restablecido el órden , y dado
de ser extrangeros los que asediaban esta bella , las garantías necesarias que no dejen motivo á
rica y populosa ciudad, no llegaron al extremo fa desconfiar del cumplimiento de sus ofertas, se
tal de arrojar contra ella proyectiles destructores. romperá el fuego hasta conseguir su sumision :
— Si por estas cortas , pero poderosas reflexiones , entonces, los que hayan podido impedir desastres
no se resuelve V. E. á obrar segun los deseos que que yo deploro mas que nadie, serán responsables
la misma Diputacion deja manifestados , la Euro- de ellos ante la ley , ante Dios y ante el mundo
ra entera ahora , y á su tiempo la historia im par entero. — No pido olra cosa al pueblo de Barcelo
cial , juzgarán á V. E. y decidiran á quien fue de na , que la fidelidad á sus juramentos.
bido el éxito feliz ó desgraciado ne los aconteci »Sc me ha dicho desde el primer momento que
mientos. = Con lo que se contesta al oficio de estos eran sus mismos deseos ; y á una porcion de
V. E. de hoy. = Dios guardeá V. E. muchos años. personas influyentes de Barcelona en estos acon
Barcelona
— José Borrcll
21 de. —
noviembre
José Pascual.
de 1842.
— Francisco
— Excmo.Bo-
Sr. tecimientos no les esdado dictar leyes á la nacion:
estas se hacen en las Córtes y por todos sus repre
higas. — Félix Bibas. — Manuel Pers. — José Ver- sentantes , de otro modo no hay sociedad posible.
gés. — Manuel Cabanellas — Manuel Torrents.— = Dios guarde á V. E. muchos años. Cuartel Ge
José Llacayo. — Antonio Gibcrga. — Francisco So neral de San Feliu de Llobregat 22 de noviembre
ler , secretario. — Excmo. Sr. Capitan General de de 1842. — El conde de Peracamps. — Excma. Di
este distrito. » putacion Proviucial de Barcelona. »
 dose á una condicion , que en tan breve
tiempo no era dado realizar. La consterna
cion, el espanto, tenían embargados los
ánimos, mayormente siendo tantos los obs
táculos que encontraban los que deseaban
abandonar la ciudad.
El insistir el (ieneral en su malhadado
propósito, la repeticion incesante de la
cruel amenaza , si bien producía el efecto
de desaliento y postracion en la mayoría
de los habitantes, tambien comenzaba á
irritar algunos ánimos, llevándolos al furor
de la desesperacion. Ya hemos visto cuan
amistosas eran las comunicaciones de la
Diputacion provincial, cuán comedido el
lenguage con que se dirigía á un hombre
que ciego de cólera, se obstinaba en no es
cuchar los consejos de la prudencia y de la
humanidad. Levantaba la indignacion el
pecho al ver que un General que mandaba
fuerzas españolas se iba á arrojar al inau
dito atentado de reducir á cenizas una de
las mas ricas y mas bellas ciudades españo
las. Asi es que la misma Diputacion no
pudo menos de cambiar su lenguage, diri
giéndose al General con tono mas firme
que no lo habia hecho hasta entonces , ha
ciéndole sentir lo inhumano y horrible de
la medida que se proponía consumar. Acto
bárbaro é insensato apellidaba la Diputa
cion al bombardeo ; amenazando que la
execracion del mundo civilizado y la de la
imparcial historia aguardaban indefectible ||
mente á los que por un ciego frenesí ó fu
nesto rencor, habrían aconsejado ó dis
puesto semejante barbarie , y que sobre sus
cabezas caería de gota en gota la sangre de
las víctimas inocentes sacrificadas á su ven
ganza é inmoralidad (1).
(1) Núm. 3. Diputacion provincial de Barcelo
na. — Excmo. Sr. — En los varios escritos que la
Diputacion ha tenido el honor de dirigir á V. E.
sobre la situacion actual de Barcelona , ha procu
rado inculcarle que todos los principios de sana
política . los sagrados derechos de la humanidad ,
y el ejemplo mismo de uno de los instrumentos de
que se valió la Santa Alianza para la reduccion de
esta plaza al gobierno absoluto, condenaban los
espantosos medios que V. E. parecía dispuesto á
adoptar , hasta haber vuelto las cosas al ser y es
tado en que se hallaban antes del 13 de este mes.
El bombardeo de una ciudad , acaso la mas pre
ciosa joya de la nacion española , seria un acto tan
bárbaro é insensato ( fuerza es ya decirlo asi ) que
la Diputacion, cualquier hombre nacido con un
corazon recto y sensible, se resistiera á creerlo,
si V. E. en su oficio de hoy no anunciase de nuc-
próximo,ejecucion
despreciando
, y precisamente
el juicio de para
los contempo-
el jueves
El deseo de salvar las vidas y haciendas
de sus respectivos súbditos, animado y avi
vado por la compasion que inpiraba la in
fortunada ciudad , motivó la famosa reclama
cion de los cónsules extrangeros residentes
en Barcelona , en que demandaban mas
tiempo; procurando juntamente inclinar el
ánimo del General á que no se decidiera á
consumar una catástrofe que como decían
los cónsules era espantosa é inaudita.
Aquella comunicacion que era una so
lemne protesta de la civilizacion europea
contra un acto bárbaro que la afligía y des
lustraba, nada pudo obtener del Sr. Van-
halen. «Resoluciones de esta naturaleza,
decía contestando á los cónsules, me es
muy duro tomarlas , pero como ellas son
producidas por la conviccion y por el de
ber , una vez anunciadas jamas me vuelvo
atrás , si por parte del enemigo no se dan
ráncos y f"e la imparcial posteridad. Este cuerpo
provincial se halla ya en el caso de traer la cues
tion á su verdadero terreno , y de indicar á V. E.
el único medio tal vez posible de facilitar su deco
roso término. Nacida de una lucha entro el pueblo
y sus autoridades, que no lograron domiuar la si
tuacion , contando con fuerzas y recursos de que
esta Diputacion carece, ha venido al punto de no
poderse determinar pacifica y honrosamente, sino
con la intervencion de personas extrañas a los
acontecimientos. Pensar que un pueblo sublevado
quiera tratar nm los mismos hombres de quienes
ha recibido verdaderos ó supuestos agravios , es
desconocer las revoluciones y la Índole del corazon
humano. Por otra parte , abiertas estan las Cortes,
en dond ' el gobierno no podrá menos de sufrir
enérgicas y merecidas interpelaciones. Negocio de
tanto bulto bien debiera ser consultado por V. E. Y.
¿qué ministro querrá tomar sobre sus hombros la
responsabilidad del bombardeo de Barcelona? Ya
que V. E. tiene prevenido á este cuerpo provincial
que no se valga de la mediacion de los señores
cónsules , significando que los extrangeros no pue
den abrigar sentimientos de benevolencia hária
nuestra patria , séale lícito manifestar que el pen
samiento de anonadar á esta bella , rica é indus
triosa capital , solo puede ser sugestion delos mis
mos extrangeros interesados en la ruina de nuestras
fábricas , y de cuyos perversos designios se haría
V. E. instrumento. Pero la Diputacion repite que
la execracion del mundo civilizado , y la de la im
parcial historia aguarda indefectiblemente á los que
por un ciego frenesi ó un funesto rencor habrán
aconsejado o dispuesto semejante barbarie , y que
sobre sus cabezas caerá de gota en gota la sangre
de las víctimas inocentes sacrificadas á su vengan
za é inmoralidad. = Dios puardeáV. E. muchos
años. Barcelona 22de noviembre de 18V2. Excmo.
Sr.=EI precidente accidental. José Pascual.^
Félix liibas.— Manuel Cabanellas — José Bor-
rell. - - Manuel Torrents. — Francisco Bohigas.-=
José Vergés. = Antonio Giberga. = Manuel Tor
II rente.—
Capitan Francisco
General deSoltr,
este distrito.
secretario. = EcTimo. Sr.
 — 91 —
suficientes garantías que llagan conocer la hubiera meditado mucho antes de resol
sinceridad de sus ofertas.» Sin embargo es verse á dar la orden fatal; y que si á tanto
de sospechar que el General no estaba á la llegara, conservando aun algunos elemen
sazon tan animoso y resuelto como aparen tos de vida la insurreccion de Barcelona ,
taba , pues que cuando de uua parte decia quizás se reanimara con la exjisperacion , y
á los consules que no le era posible revocar combinándose la irritacion que en todo el
su resolucion, y que las personas que qui principado debia producir el bombardeo,
siesen salir con sus efectos preciosos bien tal vez se promoviera el levantamiento que
podían hacerlo en barcos de cruz remolca amenazó con tan graves síntomas en la tar
dos por los tres vapores en el tiempo que de del 3 de diciembre, y que contribuyó
quedaba hasta mañana al ser de día, se no poco á que Espartero mandase cesar el
ablandó algun tanto con las palabras fuer fuego apresurándose á penetrar en la ciu
tes y enérgicas que le dirigió la Diputa dad. Mucho dudamos que lo hubiese pasa
cion , como se echa de ver por el tono do bien el general Van-halen , si el bom
conciliatorio y suave que emplea en su co bardeo comenzara al amanecer del dia 24 :
municacion de fecha 23 de noviembre ( 1 ). sus fuerzas eran pocas , su prestigio ningu
Es verdad que con la misma fecha se no ; hallábanse todavía al frente de la in
dirigió á la Diputacion procurando since surreccion los gefes del movimiento; la
rarse delos cargos que esta le habia hecho, milicia nacional no estaba ni de mucho tan
y disculpando su conducta para el caso que desorganizada como el dia 3 de diciembre;
hubiese de realizar el bombardeo. Mas á en el casco de la ciudad habia muchos mas
pesar de todo se echa de ver que habia ce hombres capaces de empuñar las armas,
jado en vista de la actitud resuelta que no se habian verificado aun las reacciones
acababa de tomar la Diputacion , pues que interiores que se encaminaban á una tran
para no romper el fuego ya no exigía que saccion; y sobre todo, se abrigaba todavía
se le rindiese desde luego la ciudad , sino no poca esperanza de que el levantamiento
únicamente que se permitiese la salida ;i seria secundado en otros puntos de Espa
todos los gefes y oficiales que capitularon, ña ; no existia ni de lejos la conviccion do-
ó fueron cogidos en sus casas y alojamien lorosa y desesperante, de que Barcelona
tos, con sus armas, equipo y cuanto les quedaba enteramente sola , desamparada ,
perteneciese , como y tambien á los demas abandonada á todo el horror de su infausta
militares y empleados de los otros ramos suerte.
que quisiesen verificarlo. La situacion del General , su conducta y
Esta conducta despues de tan perento su lenguage , todo contribuía á persuadir
rias intimaciones mdicaba bastante claro, que si se le hubiese echado el guante para
que si toda vez que no se quería capitular el dia 24, si se le hubiese negado lo que
por de pronto, no se hubiese manifestado exigía de que se permitiese salir á todos
tanto temor á las bombas, y se hubiese to los gefes y oficiales que capitularon ó fue
mado una actitud imponente y amenaza ron cogidos en sus casas y alojamientos, y
dora, es probable que el gefe enemigo lo á los demas militares y empleados , no se
hubiera atrevido á romper el fuego.
Desde el momento que cediera , que va
cilara ante la imponente actitud tomada de
(1) «Num. i. Ejército de Cataluña. = E. M. = nuevo por la revolucion , estaba irremisi
Excmo. Sr. = Para conocimiento de esa Diputa blemente perdido : dando un paso atrás
cion , y el de todos los hombres que en Barcelona
pueden influir para evitar los desastres que ame hubiera encontrado un abismo.
nazan , le acompaño un ejemplar del manifiesto de La Junta creyó conveniente ceder á las
la Diputacion Provincial de Tarragona; y original, exigencias , haciendo que la Diputacio»
para que no quede la menor duda , la comunica pudiese contestar al General de una ma
cion que acabo de recibir de la de Lérida. Ahórre
me esa hermosa poblacion el grande sacrificio que nera satisfactoria (1).
la patria y mi deber me exigen ; concluyamos con
abrazarnos como hermanos, asegurando para lo
sucesivo la paz en Barcelona de un modo estable ,
cosa que tanto necesita para su riqueza , aumento
de su industria y fomento del comercio. — Dios (1) « \úm. 0. Diputacion Provincial de Barce
guarde á V. E. muchos años. —Cuartel geueral de lona.— Excmo. Sr. — La Diputacion Provincial
San Felio de Llobregat 23 de noviembre de 1842. tan luego como se ha enterado de los dos oficios
— El conde de Peracamps. — Excma. Diputacion que V. E. se ha servido pasarla con fecha de hoyr
Provincial de Barcelona. || ha enviado uua comision de su seno a la Juuta po-
 Bien pronto se pudo conocer el mal efec
to producido por semejante conducta, pues
que el lenguage del General en su comuni
cacion de fecha 23 de noviembre , se hacia
mucho mas exigente que en la anterior,
queriendo que salieran de la ciudad hasta
los sargentos, cabos, soldados, tambores
y cornetas; alegando que este era el senti
do de su primera comunicacion , pero que
al poner en limpio el borrador se habia
omitido la palabra tropa. Este olvido esbien
notable en documentos que naturalmente
debieron de copiarse con mucho cuidado ;
siendo mas extraño que cabalmente el des
cuido recayese sobre la palabra tropa , es
decir, sobre la que convenia callar por de
pronto, para tantear primero el ánimo de
la Junta, y ver si se prestaba á la exigen
cia de la salida de los gefes, con la idea de
exigirle luego que soltase tambien la tropa.
Se habia conocido ya que las bombas ha
cían miedo ; y asi es que empleando un
lenguage,altanero y resuelto, decía el señor
Van-halen : «prevengo por última vez,
que si para las doce del día de mañana, no
se hallan incorporados en este ejército to
dos sus individuos existentes en Barcelona,
en la forma que llevo referida, mas cuan
tos empleados por el gobierno quieran sa
lir de la plaza , á esa misma hora infalible
mente se romperá' el fuego.»
Parécenos que teniendo en frente un ge
neral que recorría al medio de alegar que
pular directiva , para que en vista de lo manifesta
do por V. E. resolviera lo que esta Diputacion po
dría contestar con certeza y seguridad , y ha teuido
la satisfacion de saber que la Junta había dado
hasta ahora pasaporte á cuantos gefes, oficiales,
empleados y demas dependientes del ejército lo han
solicitado conforme á las capitulaciones ; y que iba
á publicar un bando para que acudieran á pedirlo
los restantes , tanto capitulados , como nó, depen
dientes del gobierno , que libremente quieran salir
de esta ciudad , seguros de que se les librará para
donde apetezcan. La Diputacion se lisonjea de ha
ber contribuido tan directamente al logro de los
deseos de V. E. en esta parte, y está pronta , co
mo tiene indicado , á cooperar en lo que pueda á
cuanto convenga al feliz desentace de tan tristes
acontecimientos. Con lo cual contesta esta Dipu
tacion á sus dos citados oficios , reservándose ha
cerlo sobre ciertos extremos del último recibido
que la han afectado sensiblemente. Dios guarde
a V. E. muchos años.' Barcelona 23 de noviembre
de 1842. — Excmo. Sr. — El presidente acciden
tal , José Pascual. — Félix Ribas. — José Borrell.
— Manuel Cabanellas. — Antonio Giberga. — Ma
nuel Torrents — Francisco Bohigas. — José Ver-
gés. — Manuel Torrents. —Francisco Soler, secre
tario. — Excmo. Sr. Capitan General de este dis
trito militar.»
se habia omitido al poner en limpio el bor
rador la palabra mas capital que este com
prendía , y que logrado parte de su objeto
continuaba en sus exigencias y amenazas,
hubiera sido mejor no amedrentarse tanto
por la infalibilidad dela hora, y reflexionar
que la salvacion de la ciudad no estribaba
en ceder el terreno á medida que el ene
migo avanzaba , sino ó en resolverse fran
camente á capitular, ó en prepararse para
vigorosa defensa. Muy al contrario , el se
cretario de la Diputacion le escribia con
premura al General, suplicándole por Dios,
que suspendiese siquiera por una hora dar
la seña para el bombardeo ( 1 ) y en segui
da se le contestaba de la manera mas sa
tisfactoria prestándose á todas las condicio
nes que se habia servido imponer (2).
Lástima daba el curso que iban siguiendo
las negociaciones: primero se exige la sali
da de los militares , despues la de la tropa ;
y por fin se quiere que esta vaya á reunirse
al ejército sitiador con armas, vestuario y
equipo. Para quien no desease capitular al
instante , era ya humillarse en demasía el
prestarse á tamañas exigencias; y asi es
que se acordó tomar una resolucion defini
tiva en una reunion de alcaldes de barrio ,
(1) « Xúm. 3. Diputacion Provincial de Barce
lona. = Mi apreciado General : Le ruego por Dios
tenga la bondad de suspender siquiera poruna ho
ra dar la seña para el bombardeo , pues se está
acabando de convenir en los medios de darnos el
fraternal abrazo que con V. E. deseamos. Creo
quedará V. E. satisfecho de lo que espero comuni
carle antes de una hora que pasare á esa quizá
acompañado. = Suyo, Francisco Soler. = Son las
diez y media de la mañana del 24.»
(2¡ nNúm. i. Diputacion Provincial de Barce
lona. =Excmo. Sr. = Hasta las ocho de esta ma
ñana no se ha podido hacer presente á la Junta
popular directiva el oficio de V. E. recibido á las
once y media de la noche pasada , y de que fue con
ductor el secretario de esta Diputacion , pues en
aquella hora no se hallaba reunida dicha Junta, la
cual acaba de asegurar áeste cuerpo provincial que
hace desde luego extensivo el adjunto aviso á todas
las clases de tropa que V. E. enumera , entregán
doles pase libre juntos ú individualmente para sa
lir de esta ciudad , por si quieren reunirse al ejér
cito del digno mando de V. E. La Diputacion ha
dado este nuevo paso en obsequio á esta desgracia
da poblacion y á los vivos deseos que la impulsan
para evitar la ruina de la industria del pais y los
terribles males que amenazan al vecindario. Dios
guarde á V. E. muchos años. Barcelona 2* de no
viembre de 1842. = Excmo. Sr. = Francisco Bo
higas. — José Borrell. — Manuel Torrents. — Ma
nuel Cabanellas. — Félix Ribas. — José Vergés. —
Francisco Soler, secretario. - Excmo. Sr. Capitan
General de este distrito.
 comandantes de la milicia nacional , comi 93 —Ya era tarde : la Junta. habia perdido su
sion municipal é individuos dela Junta, en fuerza ; ya no le era posible dominar la si
la que se adoptó el término medio de per tuacion; sus manifestaciones eran leidas
mitir la salida de la tropa , pero sin armas, con frialdad y desconfianza ; sus animosas
conforme á lo estipulado ; y con ellas , en protestas de que queria combatir y espera
el caso de que no se hostilizase la ciudad y ba triunfar, eran ya apreciadas en su justo
se evacuase Monjuich por las tropas del valor : quien habia dejado incorporar al
ejército.
Entre tanto se habia constituido ya al
lado del General una comision de Barcelo » Una de las primeras deliberaciones de la Junta
na que mediaba en las negociaciones; lo fue la de no hacer uso de fondos sino para las ne
que era un paso muy adelantado supuesto cesidades pereutorias , y aun asi con la mas deli
que indicaba el mal estado en que se halla cada circunspeccion y fiscalizacion.
» Los ciudadanos á quienes una voz seductora
ba la poblacion. En los dias 24 y 2o de haya podido resfriar, deben persuadirse de que to
noviembre incorporó el General á su ejér das estas maquinaciones son urdidas por la astu
cito nada menos que 8 gefes , 46 oficiales , despecho cia y por los deseos de adquirir una gloria que , en
de sus autores, se ha eclipsado para
y ademas 2590 de la cíase de tropa , los siempre.
cuales si bien desarmados, daban mucha "Ciudadanos: vuestros laureles son inmarcesi
fuerza moral al ejército sitiador , pues que bles. El ejército contempla con admiracion vues
eran una prueba patente de que la Junta tras acciones. Nunca habeis dado pruebas de ma
yor valor. Con esta virtud conseguiremos el triunfo
se iba plegando poco á poco á todas las de nuestra causa enlazada Intimamente con la pros
exigencias del gefe enemigo. peridad de la industria española y de la catalana
La paciencia no obstante se iba acabando que forma su mayor parte , sino de todas las que
por su suelo ó posicion corresponden a cada una
por momentos; la exasperacion de los su de las provincias que componen este hermoso pais,
blevados crecía por instantes ; y cual si se cuya riqueza os querian arrebatar para beneficio
arrepintiesen de haber cedido tanto, inten de los ambiciosos extraugeros. Estos votos unidos
taban al parecer reanimar el entusiasmo consecuencias con la consolidacion del trono de Isabel II , con sus
emanadas del voto de unas Cortes
que se habia apagado para no enmendarse constituyentes, son losquc ha proclamado la Jun
mas. Conocióse por fin que los numerosos ta , destruyendo la arbitrariedad y los abusos de
parlamentos enviados por el General que un» poder Ucticio.
La Junta no os ha dado conocimiento de las
bloqueaba la plaza, eran ardides para es comunicaciones recibidas por los parlamentos , por
parcir rumores de consternacion. Eldia 2o que no los ha recibido directamente y porque el
dio muestras la Junta de haber compren gefe que las oculta la verdad , rehusa reconocerla.
dido un tanto lo crítico y peligroso de su Excma. Ellas han sido transmitidas no obstante por la
Diputacion , y las contestaciones ban sido
situacion ; conoció que los enemigos del dictadas por los sentimientos de la Junta. Este ge
movimiento la iban minando á toda prisa , fe que se muestra tan exigente de lejos demuestra
que se trabajaba en desacreditarla por to su situacion contemplando esta ciudad desde un
campo que hace palpable nuestro glorioso triunfo.
dos los medios posibles; y asi procuró neu » La Junta que siente la sangre que pueda der
tralizar el golpe , publicando un manifiesto ramarse de cualquiera que sea y que desea evitar
en que se decidía por fin á arrostrar el desgracias , advierte á los dueños de las rasas de
bombardeo , y en que se mostraba el pro puerta de calle , que en el caso que la obstinacion
llegase en el extremo (loque no esperamos), de
pósito de llevar á cabo la empresa comen dirigir bombas , abran las puertas para que se re
zada (1). fugien los que pasen , ó de lo contrario se veria en
la necesidad de hacerlas abrir.
» Fuerza numerosa de caballería é infantería se
está organizando, descansad tranquilos , muy lue
go habrá la correspondiente caballería aguerrida,
(1) 'Ciudadanos : Los enemigos de la patria, que con los diez mil hombres que empuñan las ar
de la noble causa nacional de que hemos levanta mas podrán formar una division capaz de hostili
do la enseña , discurren todos los ardides para zar y batir á los que mal aconsejados osasen com
abatir el laudable orgullo que es la consecuencia batir la justa y noble causa de los pueblos, á cuyo
de la victoria. Ellos hacen circular voces vagas , frente se halla gloriosamente la culta Barcelona
falsas, suposiciones que ni han sido imaginadas, objeto de la codicia extrangera y muro donde se
y llegan al extremo de hacer acreditar como un estrellan los tiranos.»
hecho, el soborno de que se ha valido la Junta Patria y libertad. Barcelona 23 de noviembre
para inclinar al gefe de las fuerzas enemigas a evi de 1842. — El presidente , Juan Manuel Carsu.
tar un bombardeo ala ciudad. — Fernando AoeUa. — Ramon Cartro. —Antonio
» Sabed pues, ciudadanos, que (odas estas voces Brunet. — Jaime Vidal y Gttal. — Bernardo Xin-
son pretestos para* adormeceros y sumiros en la xola. — Benito Garriga. — Jaime Giral. — Por
apatía, cuando os admira el mundo entero por .i disposicion de la Junta , Bernardo Xinxola , sc-
vuestro valor y cordura. II cretario.
'ejercito enemigo 2600 prisioneros, mal
podia persuadir que estaba resuelta á sos
tenerse con fundadas esperanzas de triunfo.
En la noche del 27 al 28 se manifestó la
reaccion contra la Junta. A la una y media
de la madrugada se presentó al general
Van-halen como dice el mismo en un parte
al gobierno , el comandante de un batallon
de la milicia nacional , manifestándole en
nombre de una gran parte de la misma ,
que quedaba toda formada , decidida á des
hacerse de la Junta y la pillería que la sos-
tenia , para de este modo prestar su sumi
sion al gobierno. Bien parece que con estas
noticias y otras que iba recibiendo de con
tinuo , podia darse por satisfecho el Gene •
ral ; supuesto que era ya evidente que la
entrega de la plaza no podia hacerse espe
rar mucho. A pesar de todo dió la órden
para que se rompiese el fuego ; y ya esta
ban las mechas encendidas, ya las tenían
los artilleros en la mano para disparar,
cuando mandó que se suspendiese la ejecu
cion, temeroso de que la reaccion que se
habia pronunciado en favor del gobierno ,
no se malograse si el bombardeo prin
cipiaba.
En efecto , no cabia ya duda de que la
Junta de Gobierno habia desaparecido ; de
que los partidarios de la capitulacion eran
dueños de la ciudad, y de que la entrada
de las tropas se facilitaría cuanto antes. La
Junta habia sido derribada de una manera
violenta , y era ya imposible que volviese
á apoderarse de la situacion , á no mediar
sucesos imprevistos y nada verosímiles
Van-halen tenia noticia de todo lo ocurri
do hasta los últimos pormenores, como se
echa de ver por la relacion circunstanciada
que recibió de los sucesos de la tarde
del 27, en la cual se le detallaban de tal
manera las medidas tomadas contra la Jun
ta , que ya le era imposible dudar de que
se procedía de buena fe (1).
( 1 ) » Núm. 8. Ayer 27 A las cuatro de la tarde
se reunieron los batallones nacionales , y nombra
ron dos comisionados cada uno: hecho el nom
bramiento , se presentaron en las Casas Consisto
riales , intimando á la Junta que cesase ; pero esta
se resistió amenazando de muerte á las comisiones
apoyada por unos <>o hombres republicanos , ar
mados He puñales y pistolas. En vista de esto , se
trasladaron & Capuchinos donde existe el principal
<le caballería , habiendo en la Rambla una gran
parte de la Milicia formada , cuyos comandantes
t'staban reunidos ya en el propio local con dichas
comisiones , y todas las puertas de la ciudad, mu-
Asi las cosas , se andaba trabajando con
actividad para llegar á la capitulacion de
seada: solo faltaba saber quién se encarga
ría de entablar y dirigir las negociaciones,
opinando unos que debia llamarse de nuevo
á la Junta consultiva, siendo otros de pa
recer que se formase otra nueva á causa de
haber desaparecido casi todos los individuos
de aquella, mientras otros creian que lo
mas expedito era que la Diputacion pro
vincial se encargase por sí sola de terminar
el negocio. Al fin se acordó que la comision
de la Milicia nacional y alcaldes de barrio
nombrasen una nueva Junta compuesta de
21 indivividuos , quienes debian dar cima
al desenlace de la espinosa situacion en que
se encontraba la ciudad (t).
ralla , Ciudadela y Atarazanas guarnecidas por la
misma Milicia. En este estado se llamó á Carsy ,
quien á presencia de la Milicia formada preguntó
¿que querían? y respondiendo que allí estaban las
comisiones para manifestarlo , se avistó con ellas ,
las cuales hicieron presente que la voluntad del
pueblo y de la Milicia era que se retirase la Junta
y se pasase el nombramiento de otra compuesta
de personas de prestigio para que con la Diputa
cion Provincial , alcaldes de barrio y comandantes
de Milicia , resolviese lo mas conveniente para la
ciudad.
» Carsy pidió media hora de tiempo para trasla
darlo á la Junta ; pero conociendo que esta tregua
podia ser un ardid para burlar el proyecto que se
tenia formado , y reunir entre tanto fuerzas de su
partido , se tomaron las avenidas de la plaza de
San Jaime por los nacionales , y á fln no malograr
la ocasion penetró en la casa de la Ciudad una
compañía de zapadores con las comisiones ; y al
entrar en el Salon de Ciento en donde se hallaban
reunidos los individuos de la Junta , algunos del
nuevo Ayuntamiento, y varios republicanos, fue
ron acometidos por estos con sables y puñales;
mas al ver dicha compañía de zapadores á la bayo
neta se intimidaron , arrojaron las armas y pre
tendieron fugarse , verificándolo los de la Junta , a
escepcion de parte de ella que está presa en la
actualidad. Forman la representacion de la ciudad
y milicia las comisiones y alcaldes de barrio , cor
riendo en armonía con la Diputacion Provincial ,
á fin de arreglar definitivamente el negocio y en
trada de las tropas de la manera que lo exige el
buen nombre del pueblo y pacifico comportamien
to delos propietarios, quienes en estos días han
lamentado las desgracias ocurridas, temiéndolas
mayores si hubiesen permanecido en el poder los
sublevados. Todas las torres de las iglesias estan
tomadas por personas de coufianza para impedir
que algun osad-, toque á rebato. La ciudad sigue
muy tranquila , y hay fuertes retenes de naciona
les con objeto de evitar todo desorden , esperaudo
por momentos la entrada de las tropas. »
(1) «Núm. 1. Comision deM. N. y de alcaldes
de barrio de la ciudad de Barcelona. — Excmo. Sr.
— Esta comision consecuente á la comunicacion
que ha dirigido á V. E. esta mañana, ha procura

ESPARTERO
DELANTE DE BARCELONA.
Llegó por fin Espartero al campo del
ejército bloqueador; Espartero, que tanto
se habia hecho esperar , y que por cierto
en su lento viage de Madrid á Barcelona se
olvidó de vulnr para ahogar la insurreccion.
Preciso es que nos detengamos un instante
en examinar su torpe conducta en aquellas
circunstancias , que de tal suerte le brinda
ban con excelente oportunidad para reha
bilitarse algun tanto en la opinion pública.
do reunir la Junta consultiva Sin poderlo conse
guir á pesar de haberlo procurado por cuantos
medios hau estado á su alcance. En esta situacion,
y viendo que era preciso nombrar inmediatamente
una Junta de gobierno, ha recibido una comision
de cada uno de los cuerpos de M. N. , y en union
con ellas acaba de formarla, eligiendo al efecto
veinte y un individuos cuyos nombres tiene el ho
nor deacompañaráV. E. con la adjunta alocucion.
En este concepto , esta comision espera que V. E.
se servirá dirigirse desde ahora á ia citada Junta
que ha de instalarse manana á las diez de ella.
Dios guarde á V. E. muchos años. »
Rarcelooa 28 de noviembre de 1842. — El pre
sidente, Ramon Ncgrcvernis. — Por acuerdo de la
comision, el vocal secretario, JoséSerra. — Extmo.
Sr. D. Antonio Van-halen , conde de Pcracamps.
«Barceloneses: Las comisiones de los bata
llones de M. N., y los alcaldes de barrio en repre
sentacion de esta ciudad , acaban de elegir veinte
y un individuos para formar la Junta de gobierno
que ha de dirigirnos en la crisis en que nos ha
llamos.
» Solo el deseo del acierto ha animado á las co
misiones y representantes , al hacer este nombra
miento. Ojalá se vean cumplidos sus votos , que
son los de la salvacion del país , la defensa de las
libertades patrias, y la prosperidad de los habi
tantes de esta populosa capital.
» Ué aqui la lista de los señores que han de
componer la Junta de gobierno. — Sr. Baron de
Mildá. D. Salvador Bonaplata , fabricante y pro
pietario. D. Domingo Scrra . fabricante y propie
tario. D. Valentín Esparó, fabricante y propietario.
1). Sebastian Martí, abogado. D. Agustín Yañez,
farmacéutico
ta, abogado. D.y catedrático.
Manuel Gibert,
D. Cayetano
abogado yUm
propie
imi
tario. D. Nicolás Tous, fabricante, D. Salvador
Arolas, mercader. I). Juan Monserdá , tendero.
D. José 'forres y Riera, comerciante. D. Juan
Manuel Carsv. V>. Manuel Senillosa , hacendado.
I). Joaquín Gomez , militar. D. José Armenter ,
físico. Sr. Obispo. D. Juan de Zafont , abate de
San Pablo. D. Bartolomé Comas, comerciante.
D. José Ventosa , abogado. D. Pedro Nolasco Vi
ves , abogado. »
Barcelona 28 de noviembre de 18i2. — El presi
dente, Ramon Ncgrevernis. — Por acuerdo de la
comision , el vocal secretario , José Scrra.
Los gefesdel movimiento se habinn fugado,
la llamada Patulea habia sido desarmada,
hallábanse al frente de Barcelona hombres
que inspiraban la mayor confianza y de cu
yas intenciones pacíficas y leales no dudaba
el mismo general Van -halen , como lo ase
gura en su comunicacion de fecha 29 de
noviembre. En semejante situacion, ¿cuál
era la conducta que debia observar un Re-
gente? ¿debia ocultarse, hacerse invisible
á todas las comisiones que salian de la ciu
dad sitiada para tratar de capitulacion?
¿debia no escuchar á los hombres de cuya
adhesion no le cabia duda , ni á respetables
eclesiásticos , ni al venerable Obispo que
solicitaba una audiencia, para interceder
por su rebaño? ¿qué representa ese ser
misterioso que á nadie quiere ver ni escu
char , que niega lo que otorgan todos los
gefes que se hallan sitiando una plaza , que
no quiere conceder lo que concedieron
siempre los mas altos Reyes y Emperado
res? Los caudillos de las hordas bárbaras
que en tiempos antiguos inundaron la Eu
ropa , prestaban gustosos atento oido á las
súplicas de un Obispo , de un eclesiástico ,
de un monge ; y su brazo de hierro presto
á descargar el terrible golpe, se dejaba
desarmar por las palabras de un enviado
del Señor que le demandaba paz y perdon;
y Espartero , hijo del pueblo , hombre que
ayer formaba en humilde rango del ejército,
que acaba de ser elevado al mando supremo
por una revolucion ; Espartero hallándose
al frente de la nacion española , en el siglo
XIX, á la vista de la Europa y del mundo,
se encastilla en su alojamiento de Sarriá , y
allí se aisla de cuantos pudieran darle con
sejos de humanidad y de prudencia; allí se
establece como un genio maléfico cuya voz
no han de oir los pueblos sino en el ins
tante de mandar el incendio y ruinas. ¡Ahí
la Providencia habia permitido que se ce
gase á la vista de los muros de aquella
misma ciudad donde comenzara á desplegar
los proyectos de su ambicion desapoderada;
allí, tal vez agobiado por terribles remor
dimientos, echaría una ojeada á su con
ducta de julio de 1840; allí le interrumpi
rían el sueño la imágen de una Beina pros
crita y las ensangrentadas sombras de Leon
y de sus compañeros de infortunio; y por
esto cayó en una estupidez inexplicable, no
viendolo que todo el mundo palpaba , no
conociendo cuál era su deber y su propio
interes , no advirtiendo que su desatentada
conducta , si bien podía dar algunas horas
 — % —
de luto á la infortunada capital del princi mos probado que sus amenazas en los pri
pado, tambien debia por necesidad condu meros dias del bloqueo de Barcelona , an
cirlo á él á indefectible y estrepitosa caida. daban acompañadas del firme propósito de
¡ Cuan fácil le fuera presentarse con dig Soner en obra aquella horrenda atrocidad,
nidad y hasta con severidad , alcanzando el las por lo tocante á su ejecucion , estamos
mismo resultado ! debiera escuchar perso convencidos que no es tanta su culpa como
nalmente á los comisionados de Barcelona , él propio se ha querido echar ; y que tanto
reprender con lenguage firme y mesurado dista de ser verdad lo que él afirma de que
la conducta de la ciudad , intimarles que se la llegada del gobierno no alteró las atribu
rindiesen dentro un breve plazo; y ya que ciones de su mando , que si el Regente no
se le ofrecía la entrada aprovechar la oca hubiese llegado al cuartel general no se hu
sion, colocarse á la cabeza de sus numero biera llevado á cabo la terrible medida. Sí,
sos batallones, penetrar en la ciudad, pu el Begente y solo el Regente, es el princi
blicar una amnistía exceptuando á los gefes pal responsable del bombardeo de Barce
del motinsi le hubiese parecido convenien lona. Van-halen no fue mas que un simple
te, desarmar en seguida la Milicia nacional, instrumento que obedeció hasta con cierta
enterarse por sí mismo de las causas del repugnancia, que prefirió manchar su car
desorden , atender á las quejas que contra rera con aquel acto de crueldad , á desa
esta ó aquella autoridad le hubiese dirigido gradar á un hombre que al cabo de 18 dias
la poblacion representada por personas le habia de tratar con tanto desden , di-
ilustres, templar la justicia con la clemen ciéndole con sequedad en su decreto de
cia, arreglarlo todo, reorganizarlo todo, y Sarriá de 21 de diciembre que habia tenido
en seguida dirigir ála nacion un manifiesto á bien relevarle de los cargos de Capitan
en que le anunciase la feliz terminacion del General del 2.° distrito y general en gefede
levantamiento de Barcelona , sin derrama Cataluña, sin ni siquiera honrarle con la
miento de sangre, ni de lágrimas, en que acostumbrada forma de que estaba satisfe
se amenazase á los revoltosos que en un cho de su lealtad y buenos servicios.
punto cualquiera tratasen de alterar el ór- Para convencerse de que el Sr. Van-
den , en que se mostrase el firme propósito halen no es tan culpable dela ejecucion del
de mantenerle á toda costa , marchando sin bombardeo como él mismo nos ha querido
ladearse á derecha ni izquierda por solo el dar á entender , basta una ligera reseña de
camino de la ley. Entonces se realzara su lo acontecido desde el dia 29 de noviembre
prestigio , entonces se diera á la España y hasta el 3 de diciembre , y de las negocia
á la Europa una alta idea de lo que valia ciones que mediaron al efecto de tantear si
Espartero; pues que su sola presencia habia seria posible obtener una capitulacion que
bastado para terminar de un soplo una in evitara la catástrofe.
surreccion tan imponente ; entonces no ca
yera sobre su cabeza el anatema que le
fulminaron los hombres de todos los parti ULTIMAS NEGOCIACIONES.
dos; entonces no se convencieran sus ad
versarios de que á quien no empleaba otros
medios que hierro y fuego , se le debia tam La Junta elegida el dia 27 de noviembre
bien combatir con fuego y hierro. no pudo continuar por falta de individuos;
Dícenos el general Van-halen que la lle asi es que en la noche del 29 al 30 fue nom-
gada del Gobierno en nada alteró las atri nombrada otra que se instaló desde luego,
buciones del mando de que se hallaba y se ocupó de los medios de poner pronto
revestido , ni la mas libre direccion de las término á la violenta situacion en que se
operaciones; y que antes al contrario le encontraba la ciudad ; los Sres. que la
proporcionaba la satisfaccion de oir cons componían eran los siguientes : presidente.
tantemente la aprobacion de cuanto habia Baron de Maldá , D. Salvador Arolas, Don
hecho y seguía naciendo. Creemos que es José Armenter, D.Juan de Zafont, D.José
inexacta esta asercion , y quien la establece Torres y Uiera, D. José Soler y Matas;
se daña á sí propio gratuitamente , cargan D. José Llacayo, D. Antonio Giberga,y el
do con responsabilidad que no le pertenece vocal secretarío D. Laureano Figuerola.
del todo. Ya hemos visto mas arriba que el En prueba de que la nueva Junta desea
mérito del pensamiento del bombardeo es ba vivamente la terminacion pacífica de la
realmente debido al Sr. Van-halen , y he crisis, hay un hecho que no consiente re.
 -97-1
plica, cual es que desde los primeros General ; ni aun cuando hubiese podido ,
momentos de su instalacion procuró que no le pareció decoroso apoderarse de la
se retirase D. Juan Manuel Carsy, quien persona de Carsy ; porque en efecto, seme
no obstante los últimos acontecimientos jante proceder habría sido indigno de hom
habia sido nombrado para formar parte bres generosos. Y asi es que procurando
de ella. Negáronse los demas individuos á convencer al parlamentario de las razones
ser miembros de una Junta en que el señor que la asistían , para no acceder á las exi
Carsy tomara parte, creyendo que habien gencias del Sr. Van-halen , procuró ganar
do sido él quien habia estado á la cabeza algunos momentos, que era lo que impor
del movimiento, bastaba su nombre para taba en situacion tan angustiosa y apre
imposibilitar
Tan prontoun como
amistoso
se arreglo.
hubo establecido miante.
Deseosa empero de preparar el desenlace
dicha Junta, encontróse con un parlamen pacífico, y de ofrecer al General prendas
tario del Capitan General que le exigía, que seguras de lealtad y buena fe, se ocupó
como primera muestra de intenciones pací desde luego del desarme de la fuerza que
ficas debia permitirse la ocupacion del podia oponerse á la capitulacion, publicando
fuerte de Atarazanas, indicando que se ase en el mismo dia 30 un bando en que se
gurasen las personas de los autores princi mandaba que entregasen las armas todas
pales
No de
pudola
la insurreccion
Junta satisfacer
(1). los deseos del las personas que las hubiesen tomado desde
el 14 del mismo mes, en adelante (1).

(1) « Ejército de Cataluña. — E. M. — Son las ocasionado con su conducta y maquinaciones ; en

seis de la mañana , y cuando tanto interesa á esa
ciudad el poner térmmo á la situacion espantosa
en que se encuentra , evitando de este modo los
desastres que la amenazan , aun no he recibido la
contestacion terminante y decisiva , segun pedí á
esa nueva Junta en mi escrito de ayer mañana ,
siendo asi que á las dos de la tarde ya estaba cons
tituida : por lo tanto y teniendo sobradas pruebas
de que los que se llaman republicanos se han uni
do á los partidarios del Estatuto , y solo esperan
la llegada ( si es que no estan ya en Barcelona ) de
los mismos caudillos que se pronunciaron en octu
bre del año anterior , para levantar su bandera ;
prevengo á Vds. me den con el oficial portador una
contestacion terminante , y si esta se dirige al tér
mino pacífico como prueba de que sus sentimientos
son verdaderos, y para apoyar los mismos deseos
de la Junta , y á cuantos individuos en Barcelona
quieran sostener la fidelidad á sus juramentos,
me manifestarán Vds. su conformidad í que ocupe
el fuerte de Atarazanas la fuerza que yo destine á
él ; tomando por su parte todas las medidas con
venientes para evitar que individuo alguno haga
el menor acto de hostilidad , pues en este easo , en
unas cuantas horas de fuego seria arrasada la ciu
dad. A las diez en punto debo tener la contesta
cion á esta comunicacion , y de no acceder para
esta hora á cuanto tengo exigido ', y á la inmediata
ocupacion de Atarazanas , como primera garantía
de la disposicion á poner término pacífico á tantos
desastres, en cumplimiento de mis deberes y de
las órdenes de S. A. el Regente del Reino , que
me han sido comunicadas por el Ministerio de la
Guerra , me veré en la sensible necesidad de rom
per el fuego acto continuo. Los autores principales
de los males que afligen á la mayoría inmensa de
Barcelona , no pueden quedar impunes : esa Jun
ta , y cuantos de corazon sean fieles á la Reina , a
la Constitucion , y á la Regencia establecida por la
misma , deben conocerlos y asegurar sus personas
para que sufran el castigo que las leyes les impo
nen por tanta sangre como han hecho derramar,
y por la horrorosa é injusta insurreccion que han
TOMO II.
este número entran cuantos componían la Junta
que se titulaba directiva , cuya bandera me es bien
conocida , habiendo interceptado una carta de su
presidente Carsy á un individuo de la Junta re
volucionaria que se formó en Gerona , y que fue
disuclta á las pocas horas por la lealtad de. la
M. N. y habitantes de aquella ciudad. S. A. Serma.
el Regente del reino llegó ayer tarde á mi cuartel
general , donde ha establecido el suyo , habiendo
revistado antes en medio del mayor entusiasmo á
todas las tropas que encontró en el transito , y á
las acontonadasen Sansy la Bordela. — Dios guar
de a Vds. muchos años. Cuartel general de, Esplu-
gas de Llobregat 30 de noviembre de 1842. — El
conde de Pcracamps. — A la titulada Junta de
gobierno de Barcelona. »
(1) "Bando. Constituida la Junta de gobierno
de esta ciudad , debe ante todo adoptar medidas
que aseguren la tranquilidad interior de Barcelona
y den á todos sus habitantes la garantía de que
pueden permanecer tranquilos en el ñogar domés
tico. Por tanto viene en decretar :
Artículo l.° «Todas las personas que desde el
dia 14 del corriente en adelante hayan tomado las
armas, las entregarán inmediatamente en el cuar
tel de Atarazanas á la persona designada por la
Junta. El que deje de cumplir esta disposicion será
castigado con todo el rigor de la ley.
Art. 2.° » Se exceptúan únicamente de la dispo
sicion anterior las personas que hayan merecido
la confianza de los señores Alcaldes de barrio.
» Art. 3." El término para entregar las armas
queda fijado desde las tres hasta las cinco horas de
esta tarde.
» Art. 4.° Será tambien castigada severamente
toda persona que bajo cualquier pretexto trate de
perturbar el órden. Barcelona 30 de noviembre
de 1842. — El presidente , Baron de Maldá. — Sal
vador
— JoséArolas.
Armenter.
— José
— Juan
Soler de
y Matas.
Zafont.——José
José Puig.
Tor
res y Riera. — José Llacayo. — Antonio Giberga.
— Laureano Figuerola , vocal secretario. »
7
 98
Salieron de la ciudad D. Juan de Zalunt, quilizar la ciudad en lo tocante á la política
1). Antonio Giberga , D. José Solery Matas que se proponía seguir el gobierno. En
y D. Laureano Figuerola que componían cuanto á Gutierrez, hé aquí cómo se ex
la comision de la Junta que debia conferen presan los individuos de la
ciar con el general Van-halen y con el mis Reseña Histórica : « todavía era
mo Regente. No cabia exigir mejor garantía cabe, mas unánime y compacto el anatema
de sinceros deseos de transaccion que el popular contra el gefe político Gutierrez.
bando que acababa de publirar la Junta, y A su carácter arrebatado, á su brutal igno
que se estaba ejecutando en todas sus par rancia, atribuía todo el vecindario los in
les, mientras la expresada comision andaba mensos males que sufria, y no podia per
en busca del Capitan General. En la lleseiia donar á la persona que en vez de dispersar
Histórica publicada por los individuos de la y neutralizar los elementos de desorden ,
expresada Junta, se refiere que el gefe de habia servido de mecha incendiaria para
E. M. D. N. Martinez con quien conferen que se combinaran y estallaran.»
ciaron los comisionados antes de avistarse La negativa con respecto á estas propo
con el Sr. Van-halen, les manifestó que no siciones indicaba bastante claro que el go
serian bien acogidas las proposiciones de bierno no trataba de calmar las pasiones, y
que las tropas que guarneciesen Barcelona (pie no le importaba nada el provocar de
no fuesen las mismas que la ocupaban antes, nuevo la efervecencia popular. El bombar
y que no entrasen en la ciudad el general deo era tal vez una medida decretada ,
Zurbano ni el Gefe Político. No parece que quizás era preciso llevarla á cabo de todos
fueran humillantes para el gobierno seme modos ; y por esto convenia presentar de
jantes proposiciones; dado (pie mas bien mal aspecto el negocio, infundir temores de
que como condiciones de capitulacion , se terribles castigos para que la desesperacion
las debia considerar como miras de pruden sucediese al abatimiento delos espíritus,
cia : mayormente en lo que tocaba á la apresurándose la hora en que tronar pudiese
entrada de Zurbano y de Gutierrez. La el canon de Monjuich.
exasperacion de los ánimos contra aquel El Sr. Van-halen afirma en su Diario
General habia llegado á un punto difícil de Razonado que sus justas observaciones no
describir ; y bien claro es que no era persuadieron el ánimo de los comisionados
fácil desarraigar la creencia que tenia que insistían en su opinion de que la Milicia
el vulgo de que toda la dureza , toda conservara las armas ; tomándose la liber
la crueldad, venia de Zurbano. El pueblo tad de decir lo siguiente: « me propusieron
se acordaba apenas de Van-halen en los que sin decir desde luego mi resolucion de
días del levantamiento : solo pensaba en desarmar la milicia , permitiese que esta
Zurbano, solo nombraba á Zurbano; en su formase para recibir á S. A. y á las tropas
concepto Zurbano era quien dirigía las tro en la ciudad , y que luego pasando
pas para hostilizarle, quien quería saquear ocho días , se procediese al desarme ;
la ciudad , quien estaba encargado de veri que les contesté que su proposicion era i
ficar la quinta, quien debia subirá Mon- agena de mi franco modo de proceder, y
juich para realizar el bombardeo , quien que parecía una felonía el verificar el de
debia encargarse del mando de Barcelona sarme despues de haberles dado la mas
para castigar á los revoltosos; en una pala mínima esperanza de que no loharía. » Pero
bra, Zurbano lo hacia todo, Zurbano lo estas palabras del Sr. Van-halen son re
era todo. En esto podia haber todo la fal chazadas vivamente, y desmentidas de la
sedad , toda la inverosimilitud , toda la ri manera mas explícita por los señores de la
diculez (pie se quiera; pero supuesto que comision. « La verdad, dicen, puesta en
el pueblo lo imaginaba asi, ¿era por ven sus términos precisos y no contradictorios
tura tan impolítico (pie se hubiese mandado con la garantía que se pedia en la proposi
al general Zurbano que no entrase en Bar cion segunda , era : desde luego que pudiéra
celona hasta pasado el tiempo necesario mos asegurar á los nacionales que conservarían
para calmar los ánimos, y desvanecer los fo.« armas , saldría la Milicia á recibirá S. A.,
rumores que circulaban sin fundamento? formaría pabellones en el glacis y paseo de
Semejante medida , ¿era acaso humillacion Gracia; se abrazarían con los soldados los na
del gobierno , ni desaire del General que cionales y entrarían en la ciudad interpolados
era objeto de ella? Todo el mundo hubiera los batallones. Los comisionados y demas miem
visto aquí una providencia dirigida á tran bros de la Junta se ofrecían en rehenes, mar
 — 99
chando al frente del ejército para ser fusilados Barcelona con inexorable dureza , con cruel
al menor desacato que se cometiera , y final dad inaudita. El general Rodil se habia
mente , que verificada la entrada y tranquiliza constituido el intérprete de los sentimien
que
do el sevecindario
atribuíansobre
al ejército,
las siniestras intencionesy tos del Regente ; y asi comenzó por no
la Diputacion
recibir á los comisionados, por hacerlos
Ayuntamiento dentro ocho ó quince dios proce aguardar en medio de la calle durante las
dieran á la organizacion de la Milicia. Si esto altas horas de la noche , como nos refieren
no se realizaba , los comisionados manifestaban ellos mismos. Vueltos á la ciudad , comu
que la Juntase retiraría, porque no tenia fuerza nicaron á la Junta el resultado de su co
física ni moral para hacerse obedecer de otra metido, convocando para las ocho de la
suerte; los ánimos se irritarían, la desconfianza misma mañana á todos los Sres. alcaldes de
contra el yobierno renacería violentamente y la barrio y comandantes de la Milicia para
ciudad
al par queiba ádeser
lospresa
ataques
de la anarquía interior , II¡ resolver lo que debia hacerse en situacion
exteriores.
tan aflictiva.
Semejantes proposiciones no eran cierta
mente para despreciadas ; y asi es que el
general Van-halen resolvió consultarlas
con el gobierno del Regente , pidiendo á Nos compadecemos profundamente de la
este audiencia en nombre de la comision. angustiosa posicion de cuantos debian dar
Esta audiencia fue negada; solo el ministro su voto en tan formidable trance. Una ciu
dio la contestacion é instrucciones reducidas dad de ciento sesenta mil almas , la capital
á que Barcelona se rindiera á discrecion , y del principado de Cataluña, la industriosa,
que solo asi podia contar con la clemencia la beHa , la rica Barcelona , podia conver
del gobierno. tirse de un momento á otro en una pira
Entre tanto llegó ála comision la noticia en fúnebre,
tan angustiosos
en un monton
lances,
de ruinas
cuando!....
no Ah
hay!
de que los batallones de tiradores y el pe
loton de provinciales de caballería habian consuelo sobre la tierra , cuando no hay
entregado las armas, que todos los oficiales que esperar en los hombres, cuando en es
de dichos cuerpos estaban ya embarcados ; tos solo se encuentra crueldad inexorable ;
en una palabra, que el bando estaba en el mortal levanta los ojos al cielo , invoca
ejecucion en todas sus partes. Tan plausible al Dios de justicia y de bondad ; para apla
nueva que manifestaba bien á las claras la car su cólera anda en busca de sus minis
actitud pacífica de la ciudad , sorprendió al tros á quienes ruega tambien para que in
general Van-halen , quien segun se lee en terpongan con los poderosos obstinados, su
la citada Reseña Histórica pronunció estas mediacion augusta. Nadie habia podido
terminantes palabras: «Esto ha cambiado de convencer al ministro, nadie habia podido
aspecto. » Desde entonces pareció decidido lograr una audiencia del Regente, los in
el Sr. Van-halen á terminar en breve la dividuos de la reunion se volvían en todas
crisis ; se prestó á acompañar los comisio direcciones para encontrar un medio de
nados á avistarse con el presidente del Con evitar la catástrofe. Hallábase todavía en
sejo
mismo de ministros
coche desde, anduvo
Esplugascon, ellos
y platicaba
en un .. la ciudad el venerable obispo ; presentóse
su imágen á los individuos de la reunion ,
con ellos de tal manera que sus palabras no pareciéndoles que si la comision volvía al
dejaban duda de que consideraba ya termi cuartel general con el respetable acompa
nado el negocio. Asi les hablaba de asuntos ñamiento de las canas y de las virtudes del
que solo podian tener lugar dando por Prelado, era imposible que no se enterne
finida la crisis, y les decia amistosamente cieran los corazones mas empedernidos.
que tendrían que preparar alojamiento pa Espartero no habia querido ceder á los
ra el Duque , como lo refieren los señores ruegos de los hombres ; pero se le presen
de la Junta en la Reseña Histórica ya men taba un ministro de un Dios de paz y de
cionada. Sin embargo el Sr. Van-halen se amor , un pastor que suplicaba por su re
engañaba lastimosamente ; ignoraba que el baño , un sucesor de los apóstoles , un en
Gefe del Estado , el que debia dar ejemplo viado del cielo, que hablaba á un hombre
de miras elevadas y conciliadoras , el que poderoso , en nombre de un Dios omnipo
debia complacerse en señalar su carrera tente. Ceder á los ruegos de un obispo, no
pública con rasgos de política y generosi- era transigir , no era humillarse ; era pres
dad, se proponía tratar á la infortunada tar el tributo de homenage á la religion
 — 100 —
que amparaba á la humanidad , era en no olvideis á los valientes que perecieron
grandecerse á los ojos de la España , de la poco dias ha en las calles y en las plazas ,
Europa , del mundo entero. Cuando la fa defendiendo el orden y las leyes.» ¡Qué
ma hubiera publicado que el Regente se espectáculo mas bello! ¡qué escena mas
hallaba á la cabeza de un ejército numeroso digna y mas grandiosa ! entonces los ami
delante los muros de una ciudad subleva gos de Espartero hubieran dicho á sus ad
da , cuando se hubiera dicho que el dicta versarios: « ¿veis al hombre á quien que
dor irritado tenia á su disposicion una for ríais derribar , á quien insultabais y escar
taleza inexpugnable , que en breve tiempo necíais ; veis como sabe sostener la altura
podia arrasar la ciudad ; cuando se hubiera de su posicion ? ¿ veis al hombre á quien
dicho que indignado por los desmanes de achacabais que se humillaba ante los moti
la insurreccion , por la sangre de los solda nes , como sabe refrenarlos con mano fuer
dos vertida en las calles, no habia querido te , como sabe ser inexorable con los re
ni escuchar a nadie , ni creer á nadie , que voltosos? ¿no comprendeis su tacto político
solo quería sumision completa , rendicion y su religiosa generosidad , en no dejarse
sin ningun género de condiciones , que se ablandar por las súplicas de nadie , y en
proponía castigar con mano fuerte á los re condescender luego que le habla el vene
beldes para asegurar de una vez el imperio rable Prelado ? .( Vanas ilusienes ! vanas
de la ley; la España y la Europa hubieran ilusiones , que los hechos desmintieron de
dicho : hé aqui un carácter firme hasta la una manera atroz , que nos dolemos que
obstinacion que sabe hacer respetar la au no se convirtieran en realidades, para bien
toridad que las Córtes depositaron en sus de España , para salvacion de Barcelona ,
manos: la suerte de Barcelona es triste, es para gloria de Espartero. Sí , y nos duele
espantosa; pero Espartero presenta algo de profundamente, porque ya que los diez
tiránico y cruel que envuelve por lomenos años de revolucion habian turbado el suelo
cierta apariencia de grandor terrible ; la de la infeliz España , ya que una cadena
suerte de Barcelona es bien triste, ¿qué de miserias , de crímenes y desastres , ha
será de Barcelona? Pero un momento des bian inundado de amargura nuestra des
pues la fama hubiera publicado una nueva venturada patria, agradáranos sobre ma
consoladora expresándose en estos térmi nera que en el desenlace del formidable
nos : « ya las mechas de Monjuich ardían drama se hubiese presentado una figura
en las manos de los artilleros, ya el ejér digna , gigantesca , que con su grandor
cito estaba sobre las armas , ya el Regente nos indemnizara de tanta mezquindad y
á caballo , á la cabeza de sus soldados, da pequeñez ; porque cuando trazamos con
ba las disposiciones para atacar al mismo severa mano los tristes rasgos de la fisono
tiempo la ciudad , ya echaba una mirada mía del ex-Regente, no lo hacemos con
fulminante sobre aquellos muros en que secreta complacencia , sino con el vivo pe
ondeara poco antes el lema de abajo Espar sar de que en la persona del soldado de
tero y su yolderno, ya parecía que estaba ce fortuna, nonos deparasela Providencia un
bándose en el cadaver de su víctima , que hombre grande.
pisaba su ensangrentada cerviz con orgu- Ni los comisionados ni el obispo pudie
llosa planta ; cuando hé aqui que salen de ron v er al Regente , ni obtener del minis
nuevo los embajadores de la ciudad, acom tro una palabra consoladora; rogaba el
pañados del venerable anciano que viene á obispo , rogaban con él otras personas res
interceder por sus ovejas descarriadas. So petables ; y el presidente del Consejo nada
licita hablar con el Regente, y la audiencia sabia responderles , sino la España toda , la
le es otorgada ; pronuncia las palabras de Europa entera nos está mirando ; nadp puede
paz y de perdon, y el semblante airado se concedirse ; sumision completa , rendirse á dis
calma , y sus palabras se ablandan , y du crecion Sí, razon teneis, la España to
dando un momento y resistiendo todavía , da , la Europa entera os está mirando, ab
cesan las amenazas , y envaina su espada , sorta, pasmada, al ver que españoles, vais
y responde por fin al Prelado suplicante : á incendiar la mas bella ciudad española;
« nó por los hombres , sino por Dios , en sí , razon teneis , la España toda , la Euro
cuyo nombre me hablais, concedo perdon pa entera os estan mirando; y esas pala
y paz ; idos al templo á dar gracias al To bras salidas de vuestra boca en un sentido
dopoderoso , rogad por el sosiego de Bar que por decoro nos abstenemos de calificar,
celona , por la tranquilidad de España ; y entrañan para vos y para el hombre á quien
 101
servís algo de fatidico y terrible; la España Estando las cosas en situacion tan deses
toda os está mirando , para lanzar sobre el perada, todavía trabajaba la Junta, todavía
Regente su anatema tan pronto como esta trabajaban de acuerdo con ella muchos
lle el canon de Monjuich. Gefe de la na ciudadanos , aconsejando una sumision com-
cion , vais á destruir una de sus mas pre
ciosas joyas; dice bien vuestro ministro, la
España toda os está mirando y se estan tacion Provincial y Ayuntamiento organizaban la
fuerza ciudadana conforme á reglamento. S. E. con
dando tambien todos los españoles una mi sultó estas bases con el Gobierno de S. M. ; y
rada de inteligencia , para concertarse , pa manifestó que por las instrucciones que acababa
ra prestarse al combate, para levantarse de recibir no podia tampoco admitirlas y nos co
municó el siguiente escrito.
todos juntos como un solo hombre, para
haceros huir de Madrid , para empujaros « Que únicamente como medio que garantice el
hasta las playas gaditanas, para lanzaros deseo de someterse á la ley, debe llevarse inme
con espada en mano á un navio extrange- diatamente á efecto el depósito en Atarazanas de
todas las armas sacadas de aquel parque, tomadas
ro; para deciros en viéndoos ya en salvo: delos cuerpos y que han sido entregadas á la II. N.
idos , no queremos derramar vuestra san desde octubre de 18í0 hasta el dia , permitiendo
gre, no queremos entregarnos á la ven la ocupacion de dicho punto de Atarazanas para
hacerse cargo del armamento y demas efectos de
ganza; idos, que vuestro castigo sea el guerra tomados de los almacenes y de las tropas
recuerdo de las llamas de Barcelona y Se que capitularon: Que los promovedores y direc
villa , que nuestra venganza sean los re tores principales de la insurreccion serán castiga
mordimientos que roerán vuestro pecho, dos con arreglo á las leyes; que los habitantes de
Barcelona sometiéndose al Gobierno podrán contar
allá bajo las tinieblas dela sombría Albion. con su clemencia , no debiendo dudar de la disci
plina de las tropas , que no solo respetarán la pro
piedad de todos los habitantes, sino que la defen
deran igualmente que las persouas segun lu han
Kli BOMBARDEO. hecho siempre.
»>Que no se admitirá mas contestacion que la
Pero sigamos el hilo de la historia. Vol ejecucion en todas sus partesele cuanlo va expues
vieron los comisionados á Barcelona, y en horas. to , ó la negativa en el término de vemte y cuatro
»
cumplimiento de su deber pusieron en co « Como la Junta nada podia resolveí por si , lla
nocimiento del público el verdadero estado mó á su seno á los señores comandantes de bata
de las cosas , y los trámites que habia se tado llon y alcaldes de barrio para enterarles del resul
de sus operaciones, y explorar la voluntad
guido el negocio. Con fecha 1.° de diciem general á fin de saber si se adherían ó nó á las
bre, publicó un manifiesto donde en breves condiciones del citado escrito. Discutida detenida
palabras refiere la historia, y el resultado mente la cuestion presentándola con toda verdad
de los pasos que acababa de dar para la ydesinesta hacerse ilusion alguna , se resolvió en sesion
mañana , que otra vez se presentara al
salvacion de Barcelona ( 1 ). cuartel general la misma comision de la Junta ,
acompañada de 8. E. el señor Obispo , á quien se
suplicó se dignara dar este paso en bien de una
ciudad tan importante. La comision si bien con
(1) «Barceloneses. La Junta que vosotros desconfianza no ha vacilado en ver por segunda
elegisteis os debe una manifestacion franca y sin vez no solo al conde de Pcracamps, sino que tam
cera de todos sus actos , dirigidos únicamente á bien dirigirse al presidente del Consejil de minis
terminar la situacion crítica en que la ciudad se tros. El resultado ha sido insistir en las mismas
encuentra. Apenas instalada en el dia de ayer pro proposiciones que habia manifestado anterior
curó ponerse en comunicacion con el Excmo. señor mente.
Capitan general l). Antonio Van-halen , y propo » Sabida esta resolucion , el único deber de la
nerle las bases de un arreglo , bases que aunque Junta es comunicarla al pueblo de Barcelona para
solamente presentadas de palabra , se reducian á que la Milicia ciudadana , representada por sus
correr un velo sobre los hechos que han pasado , comandantes, y cl vecindario entero por (os seño
que la M. N. continuara tal como estaba el dia 14 res alcaldes de barrio , manifiesten á la Junta si se
de noviembre , y que se tuviera toda la considera someten á las órdenes del Gobierno de S. M. para
cion posible con los oficiales y soldados del ejército que pueda asi comunicársele.
que hubiesen contribuido á aquellos hechos. » En el caso contrario la Junta cesa de hecho ,
» Viendo que no podían ser admitidas , formali porque no ha podido realizar su cometido, y debe
zó la comision enviada al cuartel general otras mas manifestar que el Gobierno ha indicado que desde
sencillas y que reasumieran los principales puntos luego va á empezar las hostilidades contra la ciudad.
en que creia deber insistir, tales son: Primera. »La Junta se abstiene de todo comentario: Bar
Que la ciudad de Barcelona y su vecindario no celona entera está interesada y olla debe decidir de
sufriría castigo alguno por los hechos que han pa - su suerte. — Barcelona 1.» dp diciembre de 1842.
sado , promovidos por los enemigos de su prospe — Juan de Zafont. — José Soler y Matas. — José
ridad: Segunda. Que los milicianos nacionales que Armenter. — Antonio Giberga. —José Puig. — Sal
tenían las armas antes del 14 de noviembre ultimo vador Arolas. = Laureano Figuerola , vocal secre
las conservarían , mientras que la, l'Ácjua. Dipu- tario. » ,
 — 102
pleta , que previniese la horrorosa catás nadie obedecía, como que intentaba I
trofe. Eran las doce del dia : cuando los una actitud imponente , y llamaba á las
ánimos se inclinaban ya á someterse á la armas, y mandaba formar barricadas, y
exigencia del gobierno, cuando eran muy amenazaba con pena de muerte á los que
pocos los que trataban de resistencia, ruan se negasen á acudir en el momento del pe
do habia fundadas esperanzas de que se ligro , y publicaba otras providencias seme
allanarían todas las dificultades , entró en jantes, que bien se podían comparar á las
la ciudad un oficial parlamentario llevando últimas convulsiones de un moribundo-.
el ultimatum del Capitan General , cuyo Todavía salió otra vez de la ciudad el
contenido terriblemente amenazador , fue venerable obispo para ver si era posible de
conocido por la poblacion muy antes que tener el golpe ; el ilustre prelado se pre
el pliego fuese entregado al secretario de la sentó al alojamiento del Regente, pidió
Junta. Prescindiremos de quién fue el in audiencia , y le fue negada.
discreto ó malicioso que en circunstancias Llegó la noche que parecía cubierta con
tan críticas difundió la alarma ; sea como doble velo : las tinieblas aumentaban el
fuere, consignamos este hecho por lo que horror en que estaba sumida la ciudad ; de
pueda valer; advirtiendo que la Junta en un momento á otro aguardábamos que tro
su lleseña Histórica lo hace notar como cosa nara el cañon de Monjuich, y que empeza
muy significativa ; no sabemos si con datos ran á caer los proyectiles que por espacio
particulares, ó bien por mera sospecha de tantos dias estaban como suspendidos
fundada en la extrañeza del caso ; debién sobre nuestras cabezas. Amanece, y el
dose añadir que el contenido del ultimatum bombardeo no ha comenzado aun ; la espe
se supo literalmente , como se expresa en la ranza volvía á renacer ; el sol no se levan
mencionada Reseña. taba claro y despejado sobre el bello hori
Entonces comenzó el terrible estado de zonte de Barcelona, como que el ánimo
indignacion, de furor y anarquía, en que se resistía á creer que el astro del dia hu
se vió sumida la ciudad por espacio de lar biese de presenciar la horrenda catástrofe.
gas horas. Inútil fue la voz de los pruden ¡Qué espectáculo tan desgarrador presen
tes, ya nadie escuchaba á los que aconse taba la infortunada ciudad , en las horas
jaban sumision completa : era sumamente que precedieron al primer estallido ! Casi
peligroso pronunciar esta palabra , porque todas las puertas estaban cerradas, las ca
la desesperacion y el despecho señoreaban lles desiertas; solo las cruzaban de vez en
los ánimos, cegándolos con espantoso fre cuando algunos paisanos con su canana y
nesí. Suena de nuevo la campana de reba fusil ; algunos hombres que conducían en
to, el ruido de cornetas y tambores atruena fermos á lugar seguro , alguna madre que
la ciudad , las turbas desbandadas corren pálida y llorosa iba á ocultar sus hijos de
en todas direcciones pidiendo armas, alen bajo una bóveda ; algun ministro del altar
tándose unos á otros, bramando de rabia que iba á ofrecer el sacrificio de paz y de
contra el Regente y el General sitiador. amor, suplicando al Omnipotente para que
Doloroso es recordarlas escenas de aquella detuviera el cruel propósito de un hombre
tarde ; nó porque aquellos desventurados desatentado. Pasaban las horas y el cañon
derramasen ni una gota de sangre, nó no tronaba; Barcelona se parecía á un ajus
porque atropellasen las casas particulares , ticiado á quien se prolongan las angustias
ni insultasen á los transeuntes, sino porque del cadalso , haciéndole aguardar mientras
es siempre cosa horrible ver á una pobla se preparan á su vista los instrumentos del
cion como Barcelona, en manos de fuerzas suplicio. Todos cuantos podían ver el for
abandonadas á sí mismas, sin una autori midable castillo, todos lijaban en él su mi
dad , sin un gefe, sin un director siquiera. rada ; como el infeliz que va á espirar en
La milicia nacional ya no existia ; no hu el patíbulo, no aparta losojos del verdugo.
biera sido posible reunir cien hombres con Sonó por fin la hora fatal , tronó el ca
alguna apariencia de organizacion ; no ha ñon, zumbó el proyectil , y el estrépito
bia mas que grupos, individuos sueltos, del derribo de los edificios, no dejó duda
que no sabian qué hacerse ni á dónde acu que la catástrofe comenzaba. Levantóse en
dir, aun cuando muchos de ellos no rehu muchos puntos de la ciudad una confusa
saban arrostrar el peligro. Formóse una gritería , un fatidico alarido ; en unos de
nueva Junta de la manera que se deja su espanto y horror , en otros de rabia y des
poner; dió esta algunas providencias que pecho saludando al primer mensagero de
 103
incendio y devastacion. Pero un momento de que Narvaez, ó Concha ú otro general
despues, sobrevino un silencio profundo, afamado acababan de llegar á la ciudad, y
cual si Barcelona hubiese dejado de existir. de encargarse del mando , y que recorría
Es imposible formarse idea de lo que esta los puntos de la muralla. Una chispa elec
ba sucediendo ; es imposible concebir toda trica arrojada sobre un monton de pólvora
la barbaridad , todo lo gratuito y volunta no hubiera producido un efecto mas vivo
rio de aquella atroz medida , á no haber esta é instantáneo • los hombres mas pacíficos
do dentro de la ciudad en aquel formidable hubieran corrido á las armas , y hubieran
trance ; á no haber recorrido sus calles du clamado que se los condujese al encuentro
rante las aciagas horas. Espartero se com del bárbaro que tan impunemente incen
placía en bombear una ciudad abandonada, diaba sus hogares. Porque era cruel, era
donde apenas existían enemigos á quienes atroz , era desesperante , el pasar las ho
combatir, donde no habia un gefe obstinado ras con los brazos cruzados , oyendo un
á quien fuese preciso doblegar. Itastabadar estallido y otro estallido , un zumbido y
una ojeada en todas direcciones, para con otro zumbido , y un estruendo y otro es
vencerse de que nadie mandaba : ningun truendo ; y ver que unos edificios se des
mediode defensa; ningun resguardo contra plomaban y que se incendiaban otros, y
los proyectiles ; todas las puertas cerradas ; que se estremecian todos ; era desesperan
ninguna proteccion para socorro de los te el estar aguardando el momento fatal en
transeuntes; nadie podia contar sino con sí que el proyectil caería envolviéndonos en
mismo , porque faltaba la autoridad tutelar las ruinas de la habitacion sin poder resis
que en semejantes casos disminuye las des tir, sin saber á dónde atacar, viendo de
gracias, y hace menos horrible el infortu una parte una montaña inexpugnable vo
nio. Y suerte que todavía hubo quien pro mitando hierro y fuego, y de otra al hom
videnció para acudir á los incendios que bre feroz que contemplaba con cruel sonrisa
tan pronto se presentaron y que con tal ra su obra de devastacion y de luto.
pidez se propagaban ; pero tal era la situa
cion de la chillad , tal la falta de medios y
prevenciones, que si al dia siguiente hu
biese continuado el bombardeo , es proba
ble que sufriera Barcelona un espantoso in RINDESE BARCELONA,
cendio
Pero que
nó , lanoborrara
era posible
del mapa
(pie continuasen
de España.
Y ENTRAN LAS TROPAS;
las bombas otro dia ; á muchas leguas al
rededor se oia el estruendo del canon , la MARCHA £1. REGBMTK V SE VUELVE Á
sangre de los catalanes herviaen sus venas; MADRID.
los pueblos se conmovían ; la compasion
excitaba el furor y la rabia , contra el au
tor de tamaña catástrofe. Si Van-halen no
mandara suspender el fuego , si no apro
vechara el primer momento de penetrar Rindióse la ciudad, entraron las tropas;
en la ciudad , quizás un somaten general mas parecía imposible que el Regente que
anunciara el momento de una conflagra habia venido en persona á sojuzgarla , se
cion espantosa , y la crueldad obcecada ha volviese á la capital de la monarquía sin
bría experimentado lo que puede la cólera haber visto con sus ojos las desgracias que
de los catalanes tan indignamente provoca acababa de causar. Hízolo asi no obstante;
da. Mas diremos, Barcelona se rindió, siguiendo una línea de conduca tenebrosa ,
abrió las puertas á las tropas, nó precisa suspicaz, indescifrable, se mantuvo encas
mente por los proyectiles de Monjuich , si tillado en Sarriá , sin que los barceloneses
no por hallarse sin un caudillo que la alen supieran de su existencia , sino por algun
tase y dirigiese ; por ver que aquella re decreto que los afligía. Sin hablar á Barce
sistencia era estéril , sin ni aun remota lona , sin hablar á Cataluña , sin hablar á
esperanza de algun resultado. No sabemos la nacion , y despues de tan graves y tan
lo que le habría sucedido si en aquella tar dolorosos acontecimientes emprende su ca
de hubiese desembarcado alguno de los mino de Valencia, silencioso , mudo, como
caudillos que llegaron en junio á las costas avergonzado de lo que acababa de hacer,
de Valencia ; si se hubiese difundido la voz y llevando en su corazon un punzante re
 — 104
mordimiento, y presintiendo quizás su Atocha , no obstante la concurrencia atraida
propia ruina, corre á distraerse pasando por la curiosidad y la hermosura del dia , no
por debajo de los arcos de carton , que á pudo el bombardeador de Barcelona reca
despecho del pueblo de \ alencia le ha pre bar algunos vivas de la multitud. Solo uno
parado uno de sus mas humildes servido que otro muchacho daba de vez en cuando
res. Espera una ovacion , saluda á los cir algunas voces, que el Begente se apresu
cunstantes, se esfuerza en inspirarles en raba á contestar con amables saludos , es
tusiasmo ; vanos esfuerzos ! los valencianos peranzando de que siquiera por cortesía le
veian á la espalda del Recente la llama de habia de dirigir algunos vítores el pueblo
los edificios de Barcelona. Cuando el grito de la heroica Villa. Todo fue en vano: la
de los desgraciados hacia estremecer á la multitud se mantuvo silenciosa y sombría,
nacion entera mal podia ser vitoreado por y fuerza le fue al Regente cesar en sus sa
hombres generosos el que tan gratuita ludos y trocar su semblante risueño en as
mente habia querido ser la causa de tantas pecto grave y disgustado. « ¡ Qué contras
calamidades. te tan significativo, decia á la sazon un pe
El agudo grito de indignacion y de hor riódico, presentanla entrada que ayer hizo
ror, levantado en los cuatro ángulos de el Regente del reino , y la que en octubre
la nacion al difundirse la noticia de la ca de 1810 hizo el duque de la Victoria ! si
tástrofe de Barcelona, fue la señal de alar este personage que hoy rige los destinos
ma para derribar un poder que afeaba la de España comprendiera y diese todo su
legitimidad de su origen con la negrura de valor á las causas que producen tan gran
su conducta. Desde entonces ni paz ni tre de diferencia , quizá cambiaría de rumbo
te
guacrecido
; desertaron
númerode de
las banderas
sus antiguos
del Regen-
defen la nave del Estado , y cesarían en gran
parte los males que nos afligen.» Tan fria
sores; todos los partidos estaban acordes acogida , tan chocante diferencia entre la
en que era preciso aventurar una batalla entrada de 1840 y la de 1843, revelaban
decisiva, ó para derribar á un poder in con bastante claridad , que el Begente es
corregible ó para forzarle á entrar en un taba desconceptuado aun entre los mismos
sendero menos indigno de la nacion. progresistas; los que no querían ya lison
Entre tanto, cegado Espartero de una jear á un hombre que tenia contra sí el
manera incomprensible , como que se es anatema de la nacion.
forzaba en exasperar mas y mas la indig
nacion pública con la arbitrariedad de sus SE PREPARA LA RESISTENCIA.
medidas , habia impuesto á Barcelona la
escandalosa erogacion de doce millones , y Por aquellos tiempos corria muy válida
se empeñaba en llevar á cabo la injusta la voz de que el gobierno prescindiendo de
exaccion , á pesar de la resistencia que en los trámites constitucionales se proponía
contraba en la ciudad. De esta suerte pro celebrar con la Inglaterra un tratado de
vocando á cada momento escenas desagra comercio, y daba mas robustez á dicha no
dables y hasta peligrosas , dando lugar á ticia, la conducta que se acababa de ob
reclamaciones de las corporaciones popu servar con Barcelona. La prensa indepen
lares y de otras que se interesaban en el diente justamente alarmada, y deseosa tal
negocio, ocasionando que la prensa se ocu vez de aprovechar la oportunidad que se
pase de continuo de tamaña injusticia é ile le ofrecía , publicó una protesta contra
galidad , prestaba motivo á que le abando cualquier tratado de comercio con la In
nasen hasta les puritanos constitucionales, glaterra , que no se hiciese con arreglo á
y á que pusiesen el grito en el cielo los la Constitucion , y que no fuese ratificado
que se gozaban ya en la próxima ruina del por las Cortes con plena liberiad de deliberar
odiado enemigo. !/ resolver. Lostérminosde la manifestacion
A su vuelta en Madrid , encontró una indicaban la mayor desconfianza, y dejaban
acogida fría y desdeñosa, á pesar de los entrever temores de nuevas y funestas ar
amigos que por diferentes causas se habia bitrariedades (1 ).
grangeado en la corte : tanta era la fuerza
de los acontecimientos, que no fue posible ( 1 ) DECLARACION DE LA IMPRENTA
no diremos excitar el entusiasmo , mas ni INDEPENDIENTE.
siquiera la apariencia de la mas ligera sim « En et estado de dependencia
patía. Habiendo entrado por la puerta de constituido el t
 — 105 —
do
tarse
Ya
deante
no
un lemodo
unas
era posible
Córtes
tan escandaloso,
que
al gobierno
habia desaira-
obrando
presen- || llegue
la Reina
de una manera diametralmente opuesta á
las indicaciones que le habian hecho los
comisionados del Congreso. Asi ya nadie
dudaba de que serian disueltas cuanto antes,
como
Conocía
en efecto
á la sazon
lo fueron
Espartero
el dia3 lade impre
enero.
sion irritante que habian producido las vo
ces de que trataba de prolongar la minoría
de la Reina. Asi es que en ofreciéndosele
la ocasion procuraba convencer de que no
abrigaba tales intenciones , y que tan pron
to como llegase el momento de cumplir
S. M. los 14 años, dejaría de ser Regente
y entregaría á S. M. las riendas del Esta
do. Asi lo aseguraba en el discurso con
que contestó á la felicitacion de los gefes y
oficiales de la Milicia Nacional de Madrid
el dia de los Santos Reyes. Hacia sin em
bargo estas protestas en tales términos ,
que bien dejaba conocer que con el tiempo
sobrevendrían nuevos peligros para el trono
y la Constitucion que le obligarían á salir de
nuevo del hogar doméstico cuyo reposo
anhelaba con tanto ardor. «Yo soy Gefe
de Estado, decia , Regente del reino por
la voluntad nacional , durante la menor
edad de nuestra Augusta Reina : veinte y
dos meses faltan , señores, para que S. M.
llegue á la mayor edad , porque la Consti
tucion de 37, esa bandera que yo he sellado
con mi sangre , marca la mayor edad de
no de la Oran Brclaña ; y en vista de la próvinia
ruina que amenaza á nuestra industria , y del pe
ligro de que una cuestion tan ardua y de tan irre
parable trascendencia como la de un tratado de
comercio con la Inglaterra , se resuelva sin ningu
na garantía de acierto, y acabe de convertirse en
una cuestion de fuerza y de influencia eUraña , la
imprenta independiente guiada por un sentimien
to de nacionalidad , y fiel a su deber de prevenir y
resistir dentro de los límites de la ley, todos los
actos arbitrarios y funestos que puedan decretarse
por el gobierno actual, se considera obligada á ha
cer la siguiente declaracion :
» La imprenta independiente protesta de la ma
nera mas solemne y enérgica contra la celebracion
de cualquier tratado de comercio con la Inglater
ra , que no se haga con arreglo a la Constitucion y
que do sea ratificado por las Cortes con plena li
bertad de deliberar y resolver. »
.Madrid 2 de enero de 1843.— El Eco del Co
merrio. — El Heraldo. — El Peninsular. — El
Castellano. — La Posdata. — El Católiro. — El
Corresponsal. — Guindilla. — Ixi Revista de Ma
drid. — La Revista de España y del Eslranfiero.
— El Reparador. — El Sol. — El Pabellon Es
aquel
á los
momento,
14 añosdejo
, ydetan
ser pronto
Regente.como
Mi
corazon, señores, me anuncia que enton
ces podré decir : « Señora , tengo la gloria
de entregar á V. M. una nacion grande, in
dependiente, tan grande. Señora, que no so
lamente es respetada por las demos naciones
estrangeras , sino que es temida tambien.»
« Esto me dice mi corazon y creo no me
engañará. Para conseguirlo, cuento con
los esfuerzos de mis compatriotas. ¡ Dicho
so yo si asi sucede ! Entonces al entregar
las riendas del Estado á S. M. , me retira
ré al hogar doméstico : me confundiré en
tre mis compatriotas y nada me quedará
que desear. Pero si desde el rincon de mi
casa viere que peligraba el trono ó esa
Constitucion que todos hemos jurado , vol
veré en su defensa , presentaré este pecho de
diamante ante nuestros enemigos y sacrificaré
la
millibertad
veces la, el
vida,
tronosi de
es necesario,
Doña IsubelporII salear
y h
Constitucion que nos rige. »
Estas últimas palabras erau profunda
mente maliciosas : « me retiraré » decia ,
pero al propio tiempo anunciaba peligros,
que le harían necesario , y que podrían dar
lugar á repetir las escenas de Barcelona en
julio de 1840, cuando el General en Ccfe
de los ejércitos reunidos mov ido por el en
tusiasmo de la libertad, preparó á la Augus
ta Gobernadora el camino de la emigracion
y allanó para sí el de la Regencia única.
Es decir, que si la Reina hubiese cumpli
do los 14 años sin que hubiese sido expul
sado el Regente , al otro dia de expirado
el término fatal para la ambicion desapo
derada , hubiera estallado un motín de
mandando que con uno ú otro título se
encargase otra vez del mando Espartero,
por ser este el único medio de salvar la Cons
titucion de la monarquía.
De mal agüero era para un poder tan
débil y desacreditado el aspecto que aca
baba de tomar la nacion entera , preparán
dose para las elecciones , de las que habia
de resultar un fallo de muerte. Los mani
fiestos menudeaban , los programas eran
muchos: y en todos dominaba la idea de
poner freno á las demasías del poder , 6
impedirle que no consumase una usurpa
cion que el instinto popular pronosticaba .
La comision central del partido monárqui
co constitucional se dirigía á los electores,
nó con el deseo de prevalecer por en
tonces, sino con la mira de conseguir una
II representacion suficiente en el parlamento,
 — 106
por sostener sus principios en la época ne sucesos posteriores al pronunciamiento de
bulosa que se aproximaba , y para contrares- setiembre, tales como los concebian los
tar y desvanecer al lado de hombres leales, comisionados ; y en ella se encuentra la
y cualesquiera que fuesen sus disidencias condenacion mas terminante de la con
en puntos subalternos, las maquinaciones ducta de Espartero; en ella se echa de ver
encaminadas á trastornar él orden le^al y que el Regente no habia logrado con
para hacerse escuchar en caso necesario tentar á los hombres de uno ni otro parti
de la nacion , á quien toca volver por sus do ; y que con todas sus demostraciones
intereses, ó por los intereses del trono, que de tribuno , no habia podido eximirse de
tambien son los suyos, si por suerte los la tacha de enemigo de la soberanía popu
v iese comprometidos ó amenazados. Con se lar. «Los mismos hombres, dice el mani
mejantes palabras no podia caberle duda á fiesto, que poco antes proclamaban el prin
la nacion de que se la amonestaba para cipio de la soberanía nacional en todo tiem
que estuviese prevenida en la época crítica po y circunstancias, entonces no vacilaron
de la mayoría de la Reina; sin embargose en negarlo ó eludirlo ; y los pueblos con
formulaba el pensamiento de la comision esta primera aunque dura leccion , pudie
en Nada
términos
extraño
todavíaeramas
queclaros
los hombres
y precisos (1)
del. ron convencerse de que cuando creian ha
ber trabajado por las doctrinas, no habian
partido monárquico constitucional abriga hecho otra cosa que levantar personas. » Cla
sen semejantes recelos con respecto á la fu ro es que esta indicacion hería al Regente,
tura conducta del Regente, y procurasen sin que bastase la protesta de que no se
infundirlos á la nacion , si no hubiese ha quería traer á la escena á una persona sa
bido mas que la autoridad de los gefes de grada , ni colocarla al alcance de la discu
un partido irreconciliable enemigo de Es sion y de la censura. Todavía nos duele
partero ; pero si lo es que los caudillos de que se estampase en un manifiesto la es-
los progresistas se expresasen bien que no presion de persona sagrada hablando de Es
con tanta dureza, de una manera >i cabe partero; creemos que aun suponiendo la
mas significativa. El manifiesto publicado irresponsabilidad , no debia hacerse uso de
en Madrid el dia 20 de enero, firmado por una voz que álo mas solo es aplicable á un
D. Joaquín María Lopez y sus demas com verdadero monarca: como quiera, al tra
pañeros de comision , es uno de los docu ves , de esta lisonja se descubría la verdad;
mentos mas curiosos que se han publicado la comision narraba los acontecimientos,
en esta época. Allí hay una reseña de los y estos no eran nada favorables para per
suadir del puritanismo constitucional del
Cefe del Estado (1).
( 1) » Los candidatos de este partido serán con
tribuyentes al pago y sostenimiento de las cargas
públicas , hombres de probidad , de saber , de le
galidad , y de acreditado amor á la patria y al no (1) «Nombrada á poco la nueva regencia, se
ble vastago de nuestros reyes , que es su personi - empezó faltando 6 todas las reglas parlamentarias
ficariou y la esperanza de su porvenir. en la elecciou de su primer ministerio. Repelidas
» Y la div isa de los electores reunidos en Madrid, y acaloradas cuestiones en el cuerpo popular ,
que la comision propone á la aceptacion de todos habían hecho conocer bien el espíritu que en él
sus amigos politicos, será bien explícita. dominaba : mas cuando se escogieron individuos
« Constitucion de 1837 , franca y religiosamente de su seno para llevarlos de los bancos de ta dis
• observada ; firme resistencia á toda infraccion de cusion á la silla ministerial , no se sacaron de los
uella ó á toda modificacion que prive á los espa que pertenecían á la opinion triunfadora , sino que
ñoles del derecho que han adquirido, 4 que reine se buscaron entre los que mas notablemente ha
»la excelsa i inocente Dona Isabel II al cumplirse bían sido vencidos en aquella asamblea.
>> la edad de sus catorce años ; é independencia del " Y no se pretenda que otro fue el espíritu que
» país de cualquier indujo extrangero , que tienda dominó en la reunion de ambos cuerpos sobre la
» á menoscabar su decoro, ó .'i perturbar la tran- resolucion decisiva : aquella reunion limitada por
» quila consolidacion de sus instituciones, ó con- la ley al ceñido acto á que se contrajo , ni deter
»trariar el desarrollo de su industria y la concilia- minó la fisonomía del pensamiento legislativo, ni
»cion de los recíprocos intereses materiales de pudo llevarse en la significacion de su acuerdo mas
°todas las provincias, cual corresponde entre allá del punto aislado é improrncablc á que ter
» hermanos. » minantemente había de reducirse. No imitarán
Madrid 17 de enero de 18i3. — El marques de aquí los que suscriben el peligroso ejemplo que
Casa-Irujo. — Francisco Javier Istúriz. — Manuel tuntas veces han dado los inadvertidos órganos del
de la Rivaberrera. — Pedro Pida). — José María poder , presentando en escena á una persona sa
Alvarcz Pestajia. — Alejandro Olivan.— Juan José grada , y colocándola al alcance de la discusion y
García Carrasco. — Antonio de los Ilios Rosas. — de la censura. Fieles á sus doctrinas, miran al
Luis José Sartorius. poder supremo del Estado muy sobre el nivel de
 — 107 —
No escaseaba la comision las mas duras destinas de préstamos y anticipaciones, y
calificaciones á la fraccion del partido pro cuanto se puede echar sobre el rostro de
gresista que habia continuado sosteniendo un partido para convencerle de injusto ,
y ayudando la política del Regente ; «aqui de ilegal y sobre todo de inconsecuente,
empieza, dice, la lastimosa crónica de que todo se lo echa la comision progresista á
todo hemos sido espectadores ó víctimas: los hombres que fueron un dia sus amigos
aqui empiezan las aberraciones que el par y hermanos (1).
tido verdaderamente progresista rechaza y Pasa en seguida la comision á examinar
condena para que jamas se le acuse de
contemplacion, ni menos de complicidad.
Él sirve á la causa de las ideas y en ella á ( 1 ) » i Y han parado aqui por ventura las con
la causa del pueblo, y nú á las miras de tradicciones de los que militaron bajo la bandera
engrandecimientos personales, trátese de 'del progreso, hasta que la desconocieron y nega
ron en el humo de su elevacion ? Si echamos una
amigos ó de enemigos. Aliados suyos serán mirada sobre sus actos, hallaremos que los que
siempre los que defiendanla libertad y trabajen con tanto empeño sostuvieron los fueros é inde
por los adelantamientos y mejoras sociales ; los pendencia de las municipalidades presentaron des
pucs á la deliberacion legislativa un proyecto de
que bajo el mentido nombre de progresistas ley de diputaciones mas depresivo é inconstitucio
quieran el poder para si, la esclavitud, la de nal que el de ayuntamientos , que dicidió el alza
gradacion y la miseria para el pueblo , no as miento de 1.° de setiembre. Hallaremos que ios
piren á otro bautismo que al de desertores y que repetían la palabra mágica de economía y ar
reglo en la administracion, se han opuesto despucs
apóstatas. » á rostro firme á las reformas acordadas por las
Continúa la comision quejándose altamen Córtes, despreciando su poder , continuando tri
te de los estados de sitio y demas infraccio suprimido bunales, oficinas y dependencias que se habían
, y pagando de imprevistos, sin atrasos
nes de la Constitucion , echando en cara á ni descuentos, lo que antes se pagaba del presu
los amigos de Espartero la inconsecuencia puesto, con notable retardo y deducciones: halla
en que incurrían , practicando ó apoyando remos que los que proclamaban como el paladion
lo que condenaran en otro tiempo. de la libertad y el freno de las arbitrariedades la
facultad del Congreso en votar los presupuestos ,
Él proyecto de ley de diputaciones, la despues se han mofado de esc paladion y han roto
oposicion á las reformas acordadas por las ese freno suspendiendo y disolviendo la represen
Córtes, la continuacion de tribunales, ofi tacion nacional , sin cuidarse para nada de aquella
autorizacion que creyeron suplir con su voluntad
cinas y dependencias que se habian supri omnipotente: hallaremos que los que hacían alar
mido , la suspension y disolucion de la de de nuestra independencia , han venido despucs
representacion nacional, el cobro de contri álascomprometerla presentándola en el mercado de
especulaciones europeas , nó de otro modo que
buciones
la discusionno, como
autorizadas,
lo está sobre
las lacontratas
esfera de laclan-
res como se presenta una mercancía : hallaremos que
los que en 18Í0, fundados en la Constitucion que
hoy rige , predicaban á los pueblos desde la tribu
na la resistencia al pago de contribuciones no vo
ponsabilidad : y hacen recaer sus observaciones en tadas por las Córtes en medio del peligro de la
los ministros que aconsejan , y que debieran ser , guerra civil que hacia urgente la necesidad de los
aunque no lo son , responsables por su consejo. sacrificios, ahora en el seno de la paz apremian con
» Pasando el poder á las manos de los ministros, dureza al pago de unos impuestos que no cuentan
se envolvieron estos en su obcecacion , y en la con la autorizacion legal , porque el gobierno ha
esterilidad de sus concepciones. El campo de las dispersado el poder público que debió acordarla ; y
ideas se convirtió en un terreno fangoso en que asi se obra , siu recordar siquiera que los nombres
lucharon las ambiciones individuales ; el exclusi estampados en la votacion en que se consignó
vismo y el egoismo se pusieron á la orden del dia ; aquella resistencia son la condenacion mas inde
y encerrándose el gobierno en el reducido círculo clinable de la conducta que hoy se sigue : hallare
de pocos y fai orecidos adeptos , consagró el acta de mos por último, que los que levantabau el grito
desheredacion para la nacion entera, respecto á hasta al cielo contra las contratas de préstamos y
los bienes y ventajas que le dabau derecho á recla anticipaciones engendradas eu la clandestinidad ,
mar el dogma de la igualdad ante la ley y sus despucs han redoblado esos mismos contratos tan
sacrificios. Los que asi esplotaron y monopolizaron oscuramente tejidos , y acaso con mas perjuicio»
el alzamiento mas desinteresado y noble, aeaso sin para el erario , que debe sentir su enorme peso.
haber concurrido á él , construyeron sobre el mag El partido progresista condena estas deplorables
nífico edificio que acababa de levantar el pais la inconsecuencias ; niega como producto de sus doc
mansion de su poderío ; y desde aquella altura no trinas unos hechos tan inconciliables con ellas;
miraron al cimiento sino para tacharlo de irregu por eso merece á sus adversarios el nombre de in
lar y tosco, y tal vez para escupirlo. No es estraño, quieto y perturbador. Nada le importa : abrazado-
pues, que aquel acontecimiento haya sido el blan con sus convicciones , no inciensa jamás á los fal
co de las acriminaciones de sus adversarios , cuan sos ídolos , no transige con sui convicciones, y oyer
do se ha visto tambien negado ó escarnecido por en calma que se le acuse de que no deja gobernar,
los mismos que le debieron su importancia y de cuando sabe que loque no permite en su línea,
lacion. » es despotizar. »
 — 108 —
la conducta del gobierno en los sucesos de tan á propósito para exasperar los ánimos ,
Barcelona condenando de la manera mas recopilaba en pocas palabras las terribles
explícita y terminante la ilegalidad y cruel acusaciones con el lenguage apasionado y
dad con que se habia procedido. Obsérvase enérgico que nos revela la mano de uno de
todavía el deseo de distinguir algun tanto los principales tribunos de la revolucion.
el ministerio y el poder irresponsable , mas «Se nos dice que hay Constitucion , excla
á pesar de todo , tal es el sentido de las ma, y la Constitucion se ha convertido en
palabras, y tan graves las indicaciones que una medida elástica que se acomoda á los
se hacen , que quien leyese el párrafo á designios de los que con ella encubren y
que nos referimos , por cierto que no ha excusan su arbitrariedad. Se nos dice que
de pensar que los tiros se dirigen á Rodil (1). hay seguridad personal , y se prodigan los
Concluye por fin la comision exhortando estados de sitio , los encarcelamientos, los
íí los electores áque se preparen ala luclia; destierros y las persecuciones. Se nos dice
en la cual, segun dice, no puede esperarse que hay respeto por los cuerpos deliberan
del gobierno, ni moralidad, ni justicia; y tes, y se les suspende y disuelve cuando lo
sí únicamente que tratará de falsear en las difícil de nuestra situacion hacia mas indis
elecciones el voto público, acusándole de que pensables sus trabajos y su concurrencia.
nada le importaba que se desmoralizase el Se nos dice que hay milicia nacional , á
pueblo enseñando Ja humilde deferencia de quien está encargada la conservacion delos
los esclavos ó el tráfico vil de su conciencia; derechos y garantías, y la milicia es desa
y afirmando que lo que el poder quería, era tendida en todas partes , y desarmada en
triunfar, y que el pais entero se inclinase muchas por la sola voluntad de los que la
para levantar sobre sus hombros el sistema aborrecen porquela temen. Senos diceque
que lo arruinaba y los hombres que lo des rige el dogma santo de la igualdad ante la
preciaban. ley, y la nacion toda es la herencia de una
Trazado un cuadro tan lamentable, y familia favorecida y privilegiada. Se nos
dice que este es un sistema en que está
abierta la puerta al mérito y á la virtud,
sistema de capacidades y de desarrollo , y
1 " Pronunciado un grito de alzamiento en la el mérito y la virtud son postergados, cuan
capital del antiguo Principado, emporio de nues do nó perseguidos , en tanto que parece
tro comercio y centro de nuestra industria , grito
que sin duda contribuyeron en gran manera íi buscarse de propósito por lo comun para
producir los repetidos desmanes del régimen que los destinos públicos las mediocridades mas
que allf se ejercia ; el gobierno acudió á sofocarlo , insignificantes ó las nulidades mas com
aconsejando que fuera á presidir una catástrofe al
que, imagen de la divinidad en la nacion , solo pletas.
debe dejarse ver como un genio tutelar y benéfico. «Se nos dice que se trabaja por la dicha
El congreso de los diputados, que seguramente y prosperidad del pueblo, y el pueblo paga
conocia lo inconstitucional de este divorcio entre hoy tal vez mas. y sufre mas que cuando
el poder real y parte del ejecutivo , no menos que
lo inconciliable con los principios en el aventurado la guerra civil , llevada á toda su pujanza
paso de rebajar hasta la esfera de accion al que en y encrudecimiento , reclamaba inmensas
el lugar que ocupa es irresponsable y sagrado, al exacciones y costosos sacrificios, en tanto
paso que presentó esta justa idea en una proposi
cion que quedó sin discutir , ofreció al gobierno la que se patrocinan y perpetúan los abusos,
cooperacion mas franca y leal , aunque con la cláu negándose á las economías que debieran
sula cipresa de que se obrase dentro del círculo aliviar la suerte de los contribuyentes.»
de la ley ; y el poder , como si quisiera hacer alar Para que no pudiese dudarse de que el
de de desmedida arrogancia , como si quisiera dar
en cara con aire de escarnio á la representacion partido progresista abrigaba los mismos te
nacional , ha declarado estados de sitio , ha im mores que el resto de la nacion con res
puesto y cobrado por sí pesados tributos , arro pecto á los designios de prolongar la mi
gándose atribuciones judiciales en la aplicacion noría , concluye ya la comision exhortando
de las penas, y ha consumado con sus ilegales
disposiciones en el triunfo , los irreparables daños á sostener la Constitucion en toda su pu
que antes produjeran sus bombas en el furor de reza , en la mas escrupulosa y rígida obser
la hostilidad. Sin miramiento alguno á su palabra,
solemnemente empeñada, de que la suspencien en vancia , asi como el trono de Isabel II al cual
las tareas legislativas solo duraría el tiempo que deben servir de escudo todos los pechos leales ,
durasen aquellas circunstancias, ha concluido por y la regencia del Duque de la Victoria hasta
acallar la voz de los representantes del pais , para el momento mismo en que termine la mi
que este no pudiera oir la verdad de labios inde
pendientes á travcs del ero de ciegas parcialida noridad.
des , y de los arrullos de la lisonja. » Llegadas las cosas á este extremo ,
 — 109 —
rificado un rompimiento tan estrepitoso la mas perfecta imparcialidad y con la mas
entre el Regente y lo mas granado del par pura buena fe. ¿ Qué puedo yo desear ?
tido progresista , quedaba el poder sin nin decia; lo que podeis desear es bien sencillo:
guna clase de apoyo ; dado que por nulo es lo mismo que deseais, lo mismo que os
podia considerarse el que recibia de la clien imputan los partidos todos : deseais la pro
tela que se habia creado, y de algunos longacion de la minoría ; deseais continuar
ilusos que se le conservaban adictos por con uno ú otro título en ese mando que
antiguos recuerdos. A pesar del aliento que tanto os halaga; deseais que de un modoú
procuraba ostentar en todos sus actos y otro se os libre de volverá la vida privada/
palabras, conocíase no obstante que no se porque veis con toda claridad que en lle
ocultaba del todo la terrible tempestad que gando aquel término fatal , no os será po
bramaba sobre su cabeza. Volvíase en to sible sustraeros á los efectos de la indigna
das direcciones clamando auxilio ; esforzá cion pública que contra vos habeis conci
base en desacreditar á sus enemigos, en tado. En vano protestais que mantendréis
mostrar como criminal y nefanda la liga que ileso el trono constitucional de Isabel II , y
contra él acababan de formar todos los que depondréis á sus pies la autoridad que
partidos ; trabajaba en desunirlos, evocando ejerceis en su nombre en el punto mismo
los recuerdos de las pasadas discordias , y que lo dispone la ley fundamental : la na
tamaba de vez en cuando un tono amena cion está justamente alarmada , y su des
zador , probando si le seria posible intimi confianza y sus temores no bastarán á disi
dar á los que desesperaba de seducir. parlos las palabras de un manifiesto. La na
Parecióles á los hombres de la situacion cion no ha olvidado todavía que tambien
que un manifiesto firmado por el mismo protestabais en otro tiempo que luego de
Regente podría producir un efecto muy terminada la guerra civil os iríais á disfru
•ventajoso para influir en las próximas elec tar en el hogar doméstico las dulzuras de
ciones ; y asi no repararon en hacerle des la vida privada! que vuestra ambicion que
cender al rango de un ministro de la Go daría satisfecha si en un pueblo de segundo
bernacion ó deungefe político, exhortando orden vuestros conciudadanos os dispensa
á los electores á que no se dejasen engañar sen la confianza de nombraros alcalde ; y
por los enemigos de la libertad. Respiran en ahora os ve levantado á la primera magis
aquel mal aventurado documento el mismo tratura , ejerciendo las funciones de Rey ,
encono, el mismo rencor de todos los otros y recuerda que os opusisteis á que se os
que salieron de la boca de aquel funesto diesen compañeros en la Regencia. La na
poder. Comienza por tratar de una recon cion no ha olvidado que en 1840 protesta
ciliacion entre los progresistas ; entre los bais hasta el fastidio que queríais defender
vencedores de setiembre como él los llama; de á todo trance la Constitucion de 1857 , el
quienes se lamenta que se hayan dividido trono de Isabel II , y la regencia de su
estando tan acordes en los grandes objetos Augusta Madre , y que sin embargo pro
políticos , bien que tan extraña y lastimosa vocasteis motines contra esta Augusta Se
mente hostiles en puntos secundarios de ñora , la desamparasteis en la época de los
administracion y de orden. Recuerda con pronunciamientos hallándoos á la cabeza de
maligna complacencia los alevosos intentos un ejército de cien mil hombres, os negas
de los que en octubre atentaron el sagrado teis á obedecerla cuando os mandó que
del Regio Alcázar; y cual si no estuviese marchaseis á sofocar la sublevacion de Ma
satisfecha todavía su venganza con la sangre drid, permitisteis que se la ultrajara del
del infortunado Leon , menta la temeridad modo mas villano, y que por fin consumas
y el sacrilegio de los ejecutores de tan abomi teis vuestra obra exigiéndole cosas á que
nable designio , y hace memoria de su ruina no podia acceder sin degradarse , y la obli
¡/oprobio. Atribuye despues el levantamieuto gasteis á separarse de sus excelsas Hijas ;
y todos los sucesos de Barcelona á los hom la condenasteis al mas duro ostracismo y
bres del partido derribado en setiembre, ocupasteis su lugar , sin consideracion nin
procurando de esta manera encubrir sus guna á los deberes que os imponía vuestra
atentados achacándolos á las víctimas. situacion, y á los sentimientos de un sol
Pero lo que fuera ridiculo , si no se pre dado fiel , de un español leal , y de un ca
sentara demasiado lamentable, es el pom ballero pundonoroso. ¿Cómo podíais pues
poso elogio que escribe de su persona, para esperar que vuestras palabras fuesen creidas,
convencer que sus consejos son dados con cuando eran recientes los hechos que ius
 — 110 —
piraban desconfianza? Si no habiais respe
tado á la Augusta Madre; ¿era de creer
que respetaríais á su excelsa Hija, huérfana
de 13 años, que no contaba con otro am
paro que el amor y la hidalguía del pueblo
español? No se os creia porque vuestras
palabras estaban desmentidas por vuestros
hechos ; la misma frecuencia con que os
defendías de la imputacion , mostraba bas Artícxlo 7.°
tante claro que lo que apellidabais calumnia
era un grave cargo áque vos mismo dabais SUS INTENCIONES Y CAIDA.
elevada importancia ; y que temíais efecti
vamente (pie la nacion desconfiaba de la
lealtad de vuestros designios.
el Regente, manifestando la se- Repetidas veces nos hemos propuesto la
' abrigaba de triunfar de todos cuestion de sí efectivamente abrigaba Es -
, y «esta seguridad, españoles, partero torcidos designios, para cuando
no nace de una vana confianza en llegara el caso de terminar su regencia ,
mi fuerza , en mi acierto , en mi fortuna . conformeá lo prevenido en la Constitucion.
No, ¿qué soy yo solo sin vosotros? pero A decir verdad , no damos mucha impor
por el raudal de los acontecimientos que tancia á lo que pudo afirmarse ó indicarse
no ha estado á la mano de nadie ni dirigir en este ó aquel periódico, ni á las voces
ni contener, yo he venido á ser en algun que hicieron circular los enemigos del
modo el representante de aquella opinion Regente, ni tampoco á las insinuaciones
y voluntad popular (pie hace 30 años se mas ó menos significativas que se creyeron
levantó á defender su honor y su indepen facultados á emitir los autores de ciertos
dencia contra la agresion espantosa de Na - manifiestos. Por desgracia, sabemos que el
paleon y á despecho del abandono de sus prin espíritu de partido ciega con harta frecuen
cipes y del desaliento y tristes auspicios de cia á los hombres de una manera incom
los políticos, pudo mas que aquel coloso.-> prensible , haciéndoles ver objetos que no
Complaceos en hora buena en recordará la existen en realidad , ó cuando menos des
nacion el abandono desus príncipes , como ya figurándoselos de un modo lastimoso ; no
otra vez le recordasteis los escándalos de la siendo tampoco muy raro el que arrastra
Real familia ; pero vivid seguro (pie la na dos por este mismo espíritu , se arrojen
cion se sonríe de lástima, al ver que os ha por el camino de la mala fe y de la calum
ceis
tad el
popular
representante
que triunfó
de ladeopinion
Napoleon
y volun^
en la nia. Asi es, que si no obraran en contra
de Espartero otros cargos que los que aca
inmortal guerra de la independencia ; vivid bamos de indicar, bastarían apenas para
seguro que la nacion lejos de mirar en vos fundar una sospecha. Todos los personages
la personificacion sublime de los héroes de colocados en elevada situacion , sobre todo
Baylen , Zaragoza y Gerona , presiente ya en épocas tan agitadas y turbulentas como
las pobres escenas de Albacete y del Puerto las que trabajan á nuestra infortunada pa
de Santa María. — /. B. tria, son el objeto de envenenados tiros
que les dispara el odio , la envidia y todo
linage de pasiones. Por estos motivos cree
mos que la cuestion no se ha de resolver
por lo que de sí arroja el dictámen de la
llamada opinion pública que tan fácil es su
poner y falsear, sino por lo que de suyo
ofrece la situacion en que el Regente se
encontraba , y por lo que nos dejaran co
lumbrar sus propios actos.
En primer lugar , es cierto que algunos
de los órganos de Buena-Vista se permi
tieron indicaciones mas ó menos esplícitas
sobre prolongacion de minoría ; indicacio
nes que alarmaron sobre manera á la pren
 — 11
sa de la oposicion, y que inspiraron serios 1vista
— ni en su interes, ni en su gloria, ni
temores y suspicaz desconfianza á cuantos en su porvenir cuando se atravesaba la ra
se gloriaban de amor y fidelidad al augusto zon , la justicia ó la conveniencia pública $
Vastago de la Real prosapia. No es menes si suponeis que Espartero estaba dotado de
ter recordar aqui las discusiones que con suficiente elevacion de ánimo, de temple
este objeto se suscitaron , y las declaracio bastante alto y virtuoso para sacrificarse en
nes que con apremiante urgencia se exigie las aras del bien comun , para ofrecerse en
ron de los que se babian adelantado á in holocausto á sus deberes, entonces será
sinuaciones, que si no eran maliciosas, muy cierto, será evidente que era negra
eran por lo mismo mucho mas impruden calumnia cuanto dijeron sus adversarios.
tes. Es de suponer que niel Regente ni sus Mas recordad que estais haciendo vuestras
consejeros debian ignorar que numerosos suposiciones tratándose de un hombre que
adversarios no los perdían de vista ; que no dejó pasar una sola ocasion de encum
seguían con ojo vigilante todos sus pasos , brarse sin aprovecharla con avidez; que no
y que estaban preparados á asirse de cuan vaciló en condenar al ostracismo á la au
to pudiera dañar al poder aborrecido, y gusta Princesa que tanto le habia favore
presentarle á los ojos de la nacion como cido ; que permitió que sus compañeros de
conspirador contra la autoridad de la Reina. armas comiesen el amargo pan de la emi
Esta consideracion demuestra cuan natural gracion; que no reparó en llevar al cadalso
era que se procediese con mucho tiento en á los que se propusieron derribarle , sin
todo lo que pudiese prestar asa á los ene que pudieran apartarle de su propósito los
migos ; y asi es que las indicaciones que se ruegos y las lágrimas de todo linage de
permitían los órganos de Buena-Vista , eran personas; de un hombre cuyas protestas
mucho mas significativas, y nó sinrazon de abnegacion y desprendimiento merecían
eran miradas como tanteos para explorar tanto menos crédito , cuanto se veian des
la disposicion de los ánimos , y ver hasta mentidas
patente. Podréis
por sus obras
otorgarle
de una manera tan
qué punto encontrarían resistencia los pro cierto grado de honradez , de buena place
inten
yectos que tendiesen á prolongar el poder
de Espartero. Verdad es que á esto se nos cion, deseos de conciliar el bien público
puede responder que muchas veces aun en con su propio esplendor y grandeza ; pero
las publicaciones mas autorizadas se desliza concederle virtud heroica, esa virtud que
la pluma del escritor, arrastrado por sus tan rara es entre los humanos , esto fuera
opiniones particulares, ó por su celo des ya demasiado : esto fuera contradecir el
medido en favor del sistema ó persona á buen sentido y establecer una paradoja que
quienes se propone defender. Sin embargo, ni refutacion mereciera. Ahora bien; esta
preciso es confesar que no se inclina fácil virtud y nada menos (pie ella , necesitaba
mente el ánimo á suponer deslices de esta Espartero para no abrigar proyectos de
clase en el asunto que nos ocupa, ya por prolongar la minoría y hacer durar su do
ser el negocio demasiado grave, en cuyo minacion todo el tiempo que le fuese posi
manejo debieron de andar con mucho cui ble. Un hombre que tiene que estar entre
dado los escritores, ya porque despues de el poder supremo y el destierro, virtud
diez años de revolucion es el entusiasmo heroica necesita para decidirse por lo se
cosa muy rara -; ya tambien por la conocida gundo : en este caso se hallaba Espartero,
organizacion en que estaba el partido sos lo que bastaba para inspirarle ambiciosos
tenedor del Regente. designios. Si no los tenia al principio debió
Como quiera prescindiremos de todas de conseguirlos despues. Atendida la hu
estas consideraciones, y reduciremos la mana llaqueza y la crítica situacion en que
cuestion á un punto de vista muy sencillo él se encontraba, era imposible que no
resolviéndolo con un dilema que á nuestro brotasen en su mente; era imposible que
juicio no deja salida. ¿Era Espartero hom no lisonjeasen su amor propio , que no ha
bre de virtud heroica, sí ó nó? En el pri lagasen su corazon , haciéndole concebir
mer caso, claro es que no se le pueden esperanzas de salir airoso de la terrible al
suponer intenciones perversas, ni miras ternativa.
ambiciosas, ni aun poco delicadas. Si su ¿Qué suerte le esperaba á Espartero si
poneis que Espartero si' olvidaba comple al cumplir la Reina los catorce años hubie
tamente de sí mismo para no pensar sino se dejado el poder y entrado en la condi
en el bien de su patria; que no fijaba la cion privada? Es evidente que con la ma
 — 112 —
yoda de Isabel corría peligro de perder su Regencia ó la emigracion. Si se nos
preponderancia el partido en cuyas manos que él no preveia tan dura alternativa , se
se habia encomendado el Regente. Deci nos dará una nueva prueba de la escasez
mos que corría peligro, para que puedan de sus talentos; mas como quiera que se
convenir en la asercion los hombres de to nos haga difícil de conceder que á tan poco
das las opiniones; pues en nuestro concepto alcanzase su cortedad , se nos hace tambien
no solo existia este peligro , sino que era recio de creer que estuviese efectivamente
absolutamente cierto que faltándole al par resuelto á dejar la Regencia en el momen
tido indicado el apoyo de Espartero , por to que la Reina llegase á los catorce años ,
inevitable necesidad debia caer ó en pro y que no se agitasen en su mente designios
fundo abatimiento, ó cuando menos ser formulados con mas ó menos precision , de
apartado de las inmediaciones del trono. Y prolongar la minoría bajo una ú otra
preguntaremos ahora : Espartero que se forma.
habia colocado á la cabeza de los progre Laméntanse algunos de que la caida de
sistas en 1840; Espartero que habia go Espartero fuese debida á un pronunciamen-
bernado la España por espacio de cuatro to , y miran el de junio como una calami
años teniendo desterrada á la Reina Madre dad pública , supuesto que por mas odioso
y á sus adictos podia permanecer en Ma que fuese el poder, su derribo no valia la
drid ni en otro punto de la Península, pena de un desquiciamiento universal , su
cuando la escelsa Huérfana cediendo á los puesto que conforme á lo prescrito en las
impulsos mas naturales del corazon , lla leyes, debia espirar en tan breve plazo.
mase á su lado á su augusta Madre y vi Nosotros miramos la cosa bajo un punto
niesen con ella los proscriptos que por ne de vista muy diferente : creemos que con
cesidad debian de abrigar vivos recelos el pronunciamiento de junio no sufrió la
sobre la futura conducta del ex-Regente , nacion una calamidad mas ; y que única
ya que nó sentimientos de exasperacion y mente le vino por adelantado lo que debió
venganza? Atendamos á lo que ha sucedi experimentar en octubre de 1844 , y quizás
do, y calculemos lo que habría debido su con menos probabilidades de próspera for
ceder. Cayó Espartero coligándose los par tuna. Jamas pudimos convenir en que la
tidos con mas ó menos buena fe ; pero situacion creada en setiembre pudiera des
siempre de tal modo que tuvieron el tiem hacerse por medios pacíficos y legales. Se
po necesario para templar su encono du habia apelado á las armas , y solo las ar
rante la refriega en que lucharon contra el mas podían resolver el negocio. El ejército
enemigo comun; y sin embargo apenas y los pronunciamientos habian encumbra
conseguida la victoria, maldecimos, aun do á Espartero ; solo los pronunciamientos
antes de haberla conseguido , comenzó la y el ejército podían derribarle. Esta es la
desconfianza , entró la division , se forma verdad ; esto es lo que de sí arrojan los
ron nuevos bandos, hasta que al fin han hechos; esto, es lo que han venido á con
llegado al estrepitoso rompimiento, á la firmar los acontecimientos sucesivos : todo
excesiva irritacion que estamos presencian lo demas son palabras sin sentido que si se
do ¿Qué habría sucedido pues si los parti quiere honrarlas mas de lo que merecen
dos no hubiesen tenido siquiera esa ocasion se las deberá apellidar poesía política. Ya
de aproximarse lentamente, de cobrarse que acabamos dementar el pronunciamien
sus prohombres aquella simpatía que cuan to de junio echemos una ojeada sobre sus
do menos por algunos instantes dan siem causas, principio y desarrollo, poniendo
pre los peligros comunes? Claro es que la fin de esta manera a la reseña que nos pro
excision no hubiera venido poco á poco, pusimos escribir de la vida militar y políti
sino que presentándose de improviso debia ca de Espartero, conduciéndole hasta el
por necesidad , por imprescindible necesi navio Malabar donde pudo embarcarse pa
dad , trabarse la lucha , invocando unos á ra fortuna propia y decoro de sus mis
Espartero tomándole por punto de apoyo , mos adversarios que no tuvieron ocasion
y mirándole otros como el enemigo mas de ejercer un acto de venganza.
temible, como la bandera que convenia Ya hemos visto en el artículo anterior
rasgar y hacer trizas, para que se disper el rompimiento que se habia verificado en
saran los que pudieran reunirse á su som tre el Regente y lo mas granado del parti
bra. Es evidente pues , que Espartero do progresista. Apenas es dado concebir
debia optar entre la prolongacion de la cómo no vió aquel, ni vieron los prohom
 — 113
Itrcs de setiembre el abismo á que se enca de despojarle del poder y arrojarle á paises
misaba declarándose en abierta pugna. Tal extraños. Esto veia la nacion , y si al co
era la situacion , tal la manera con que se menzar el pronunciamiento solo se aclama
lo liabia creado y continuado, que en 1843 ba el ministerio Lopez, fue porque era
era ley necesaria de su existencia la union preciso alzar una bandera que se opusiese
entre el Regente y el partido progresista. al gobierno de Madrid , y ademas porque
El apoyo que se dispensaban era recíproco; siendo incierto el resultado, no todos te
ni aquel podia pasar sin el de este , ni este nían resolucion bastante para arrostrar sus
sin el de aquel : desde el momento en que últimas consecuencias. Podríase tambien
los progresistas llamaron en su auxilio á añadir que en el comienzo de la insurrec
los demas partidos , la caida de Espartero cion no se dijo en muchos lugares abajo
era inevitable, y en pos de Espartero debia Espartero, porque sus partidarios, mas ó
caer por necesidad el partido progresista. menos embozados , no permitían que se lle
Preciso era no conocer la España para no vasen las cosas al último estremo , temien
convencerse de estas verdades , y la con do perder la preponderancia que habian ob
ducta que observaron el Regente y los ge- tenido desde 18-40. Porque no todos fueron
fes del progreso , indica que se equivoca tan ciegos que no previesen lo que podían
ban sobrelos elementosde su propiafuerza; alcanzar aun los menos avisados, y asi es
que se lisonjeaban con simpatías de que es que apenas se levantó el primer grito se
taban enteramente faltos ; que no estendie traslució que muchos retrocedían de es
ron su mirada mas allá del pequeño círcu panto, que temían colocarse en la rápida
lo en que se habian encerrado ; que decían pendiente donde sabian que no les era po
« la nacion somos nosotros , fuera de noso sible detenerse á su arbitrio ; y bien segu
tros no hay nada. » Y sin embargo habia ro es, que si muchos hubiesen previsto el
mucho ; y mucho que no esperaba sino la curso de los acontecimientos durante el
primera oportunidad de declararse, primero mes de junio observaran muy diferente
contra unos , despues contra otros , arro conducta en abril y mayo.
jándolos á todos del poder y hundiéndolos Cabalmente el héroe de la situacion en
á todos para mucho tiempo , y quizás pa sus discursos últimamente pronunciados en
ra siempre. las Córtes , se ha dejado llevar á revela
A la sazon anduvo en boga el famoso ciones curiosas. El Sr. Lopez nos ha dicho
programa del ministerio Lopez, y no fal que consideraba como una calamidad pú
taban almas candidas que se lisonjeaban de blica el que los moderades se apoderasen
que el caballo de batalla , el punto de la del mando , que miraba como una necesi
cuestion , estaba realmente en si habia de dad , si es que habia de hacerse la felicidad
prevalecer ó nó el programa del nuevo ga de España, el que los progresistas conti
binete, en si habian de presidir el consejo nuasen en él; que en su famoso programa
Lopez, Gonzalez, ó Rodil. Union de todos no se proponía cambiar radicalmente la si
los españoles , habia clamado el ministerio tuacion , sino darle mas regularidad , soli
Lopez; amnistía para todos los proscriptos; dez y ensanche ; que aun despues de su
y estas palabras encontraron la mas ardien caida no entraba en sus miras el pronun-
te acogida en todos los corazones. Pero ciamento; que no contribuyó al desenlace
¿qué veia la nacion en pos del programa? de la crisis, y que al subir al poder, des
¿Qué significaba la union? ¿Qué esperan pues de los sucesos de Torrejon de Ardoz,
zas hacia concebir la vuelta de los emigra no hizo mas que aceptar la situacion tal
dos ? Veia la nacion el principio de una como la encontró , y como la habian crea
nueva era; ensanchábase su pecho con la do los acontecimientos , mas bien que los
idea de que quizás se iba á crear una si hombres. Las palabras del Sr. Lopez pro
tuacion menos estrecha y exclusiva ; veia nunciadas en época en que no debia de te
que la entradade los enemigos jurados del mer la irritacion del caido magnate , mani
ominoso poder constituía á este en una po fiestan bien á las claras que los prohombres
sicion menos ventajosa ; veia que en lle del partido progresista cuando se pusieron
gando el momento crítico de la mayoría de en desacuerdo con el Regente, no se ima
la Reina serian en mucho mayor número ginaron que la complicacion pudiese llegar
los que defendieran al Trono contra los á un desenlace tan estremado. Para ellos
ambiciosos proyectos del soldado de fortu las desavenencias eran , por decirlo asi ,
na, si es que antes no se ofreciera ocasion entre miembros de una misma familia , y
TOMO II. 8
 — 114 —
quizás hasta llegaron á lisonjearse de que colocado á la cabeza del movimiento se hu
amedrentado Espartero por los primeros biera visto en terrible apuro , á no venir
síntomas de insurreccion , cejaría entre celona.
en su auxilio los acontecimientos de Bar-
gándose resignadarrtente en brazos de sus
antiguos amigos que se proponían castigar Mas de diez y ocho dias trascurrieron
le, mas nó perderle. desde el pronunciamento de Málaga hasta
Sea como fuere , si existieron esos cálcu los de Valencia y Barcelona ; si Espartero
los , la nacion cuidó bien pronto de demos lograra sofocar lo de Andalucía , le sobra
trarlos fallidos. Comenzado el movimiento ba tiempo para deshacer lo de Reus , ase
en Málaga , propagóse á Granada y otros gurar mejor Valencia y la capital del Prin
puntos ; y si bien no se habia levantado cipado; mayormenteteniendo enMonjuich
aun el grito de abajo Espartero , la nacion y en la Cindadela gefes decididos á guar
en masa estaba esperando el momento en darle fidelidad. No es esto decir que ni aun
que una voz osada se atreviera á ello para desplegando mucha energía, y obrando con
agolparse en torno de la nueva bandera. estremada rapidez , tuviese seguridad de
Primero en Reus y despues en Valencia apagar el incendio , pero es indudable que
se proclamó la mayoría de la Reina, lo que las probabilidades en su favor no eran po
equivalía á decir que la Regencia habia cas, y que no podia tomar mas errado ca
terminado , y desde aquel instante la pa mino que el de la inaccion y espectativa.
labra Ministerio Lopez , no fue mas que una Esta política de mañas é intrigas le habia
palabra vana: nadie recordaba el progra salido muy bien contra D. Cárlos, contra
ma del gabinete caido sino en cuanto ha la Reina Madre, contra el partido dela Re
bia podido servir de punto de partida para gencia trina , y tambien contra los suble
derribar al poder de todos odiado. vados de octubre. Pero esta vez las cir
Levantada la bandera de insurreccion , cunstancias eran diferentes; existia una
era ya muy difícil que resistiese Esparte coalicion , si bien poco sincera , bastante
ro á los embates de tantos y tan poderosos fuerte para comenzar el movimiento; y una
elementos como se habian reunido contra vez hubiese prendido el fuego en el mon
él ; sin embargo menester es confesar que ton de combustibles , era de temer que no
manifestando desde los principios mayor alcanzarían á apagarlo los sordos manejos
actividad y energía , quizás le fuera de su desacreditada camarilla.
dado conjurar la espantosa tormenta. El Hasta el dia 21 de junio no se decidió á
recuerdo del mal éxito de las conspiracio salir de la capital , es decir que abandonó
nes de octubre, y el haberse malogrado el centro cuando los sucesos iban afectan
los esfuerzos de los sublevados de Barcelo- do todos los puntos de la circunferencia :
na , obraban sobre los espíritus abatiéndo y por consiguiente era preciso mantenerse
los á la vista de esc hombre , á quien hasta en él para conservar el prestigio del poder
entonces le habia bastado entregarse en y dar mayor rapidez y viveza á los movi
brazos de la fortuna para salir airoso de las mientos que se emprendieron contra los
situaciones mas arriesgadas. « Hay muchos pronunciados.
elementos contra él, decíanlas gentes; pe Con fecha 14 del propio mes habia diri
ro es tan afortunado....» Asi es, que si á gido á la Nacion un manifiesto que mas
la primera noticia del movimiento de Má bien podia apellidarse defensa. No se pre
laga acude en posta el Regente presentán senta en él con la dignidad que cumple
dose en pocas horas delante de los muros al gefe de una nacion de catorce millo
de la ciudad sublevada, se hubiera sofoca nes, sino con la humildad de un reo que
do indudablemente la insurreccion de An citado á un tribunal procura desarmar á
dalucía , dado que la vimos retroceder mas sus jueces con palabras blandas y seducto
de una vez, espantada de sí misma. ras. Como pidiendo licencia para hablar ,
El pronunciamiento de Reus era de su « ¿ guardaré , dice , por mas tiempo el si
yo mas grave á causa de haberse procla lencio ? ¿ No es deber mio levantar mi voz
mado sin rebozo la mayoría de la Reina ; y oponer simples hechos á los tiros alevo
pero la incertidumbre que trabajaba los áni sos que contra mí asesta la calumnia ? Con
mos no permitía que las simpatías se tro este deber, aunque penoso, cumpliré, espa
casen en decidido apoyo , como se echó de ñoles; penoso, aunque siento como siempre
ver cuando dirigiéndose Zurbano contra la satisfaccion de hablar á mis conciuda-
dicha villa la tomó, y el gefe que se habia dadanos. » Despues de un exordio tan lán
 — 115 —
guido comienza su apología á guisa de ar so que sucediese asi , dado que nada se de
ticulista que se propone defender una mala cia en él que pudiese apartar á la nacion
causa. Recuerda el juramento de observar del propósito de apoyar á los pronuncia
la Constitucion que prestó en el seno de dos, ni tampoco contenía aquel lenguage
las Cortes , y de consagrar toda su existen- firme y amenazador que revela las fuerzas
cio á la observancia de las leyes , y promo y la osadía de quien lo usa. Los aconteci
cion de cuantas medidas pudiesen influir mientos marchaban con tal rapidez que ya
en la felicidad y prosperidad del Estado. no era posible dejar de resolverse á una
«Este juramento, exclama, que á presen medida decisiva. Asi es que el Regente se
cia de la España entera presté con toda la determinó á dejar la capital publicando an
efusion de una alma conmovida , fue des tes de su salida otros varios manifiestos.
de entonces el norte de mi conducta , el Conócese en ellos la mira de anudar las re
que guió mis pasos por esta senda difícil y laciones de amistad con el partido progre
espinosa, donde me condujeron los desti sista, apelando, como él dice, al gran
nos.» Tomando en seguida un aire com partido liberal que marchaba por la senda
pungido y humilde continúa : « Jamas la de la legalidad. « Hoy os juro del modo
he infringido , españoles ; ante vosotros , á mas solemne , decia , hollar con pie firme
la faz de todo el mundo puedo protestar , cuantos obstáculos se opongan á la liber
dar los mas altos testimonios de que jamas tad , á la grandeza, á la gloria de esta na
la idea de su violacion ocupó un momento mi cion tan digna de ser feliz y venturosa.»
cabeza.» Que no la habia infringido, decir «Yo salgo á ponerme á vuestro frente,
lo podia con mas ó menos visos de verdad; exclamaba dirigiéndose á los soldados, á la
pero añadir que podia dar los mas altos cabeza de unas tropas que siempre llevé á
testimonios de que jamas la violacion de la victoria. Ella coronará tambien esta vez
ella habia ocupado un momento su cabeza , es el noble cuanto sensible sacrificio que ofre
llevar las cosas á una exageracion que ra cemos en las aras de la patria ; y cuando
ya en ridiculeza. Hasta los santos mas abra los pueblos respondan , como todos respon
sados en el amor de Dios han tenido un derán á mi voz, protegidos por vuestro
momento ocupada la cabeza de la tentacion esfuerzo , huirán despavoridas las pandillas
de ofenderle ; y á Espartero no le ocurrió que han procurado esclavizarnos.» Veamos
nunca el pensamiento de infringir la Cons cuáles serán las proezas de ese hombre que
titucion, cuando tantos otros españoles han tan animoso marcha á sofocar la insurrec
tenido vivos deseos de hacerla trizas. Este cion y que asegura que « existe todavía un
es un puritanismo constitucional capaz de corazon de bronce que sirva de escudo á los
edificar á los mas celosos liberales; mayor buenos y salve las instituciones conquista
mente si se considera que quien se expre das con la sangre del ejército y los sacrifi
sa en estos términos es un hombre educa cios de los pueblos.» ¿Volará hácia el nor
do en los campamentos y entrelos peligros te? ¿Se dirigirá con la velocidad del rayo
de las batallas. ¿De qué servia todo eso sobre Andalucía? ¿Se arrojará impetuosa
para sofocar el pronunciamiento? mente sobre Valencia , ó se plantará en
Prosigue el Regente ponderando la fide pocas horas en Zaragoza para obrar desde
lidad con que en todos tiempos ha obser allí sobre Navarra y Cataluña? Nada de
vado la Constitucion , descendiendo á dis eso : sale de Madrid ; se endereza pausada
cusiones que mas bien asentarían en un mente hácia Albacete, y allí se para. Llé
artículo de periódico que no en un mani gale entre tanto la noticia de que han
fiesto del gefe del Estado. « En la Consti desembarcado en Valencia , Narvaez , Pe-
tucion me apoyo , . decia , y con su escudo zuela , Concha y otros gefes emigrados ;
impenetrable estoy cubierto ; » olvidando diríase que esta nueva le ha llenado de es
que cuando la cuestion estaba en el terreno tupor y helado de sangre; ni tiene aliento
de los hechos, cuando en todos los ángulos para pasar adelante, ni se resuelve á re
de la Península resonaba el grito de alar troceder sobre Madrid , ni se determina á
ma , era la Constitucion un escudo muy marchar hácia la capital de Aragon donde
débil en caso de que efectivamente se opu le esperaban numerosos partidarios, ni á
siese ella á la caida del Regente ; un escu impulsar las operaciones del brigadier Enna
do de papel que bien pronto se rasga. Ique está operando sobre Teruel. Madrid se
Ningun efecto produjeron las palabras le conservó adicto ; Cádiz se resiste á todo
del maniiiesto de 14 de junio ; y era preci pronunciamiento ; en muchos puntos im
 — 116 —
portantes ondea todavía su bandera; tiene comprometido á sostenerle debian de abri
aun á sus órdenes una division escocida ; gar mucho corage y despecho cuando le
Seoane y Zurbano se hallaban al frente de veian desperdiciar todos los elementos de
fuerzas respetables ; Monjuich domina y triunfo, dejando que viniese el golpe sin
amenaza á Barcelona ; la importante plaza levantar la mano para detenerle.
de Lérida está ocupada por sus tropas y es Entre tanto los pronunciamientos se
su punto de apoyo para obrar sobre Aragon multiplicaban tomando un carácter mas
ó Cataluña; la division comienza á intro amenazador y sobre todo mas fijo : el grito
ducirse entre los pronunciados; no todos de abajo Espartero resonaba ya en todas
levantan una misma enseña, algunos rece partes; ya habia desaparecido aquella timi
lan ya de los resultados que puede acarrear dez é irresolucion que á los principios se
el levantamiento ; en medio del inminente notaran : faltaba un hombre que con ímpe
peligro que corre la Regencia son todavía tu y arrojo acometiese la empresa de deci
muchos y muy poderosos los elementos con dir la contienda; este hombre existia, y
que puede contar. ¿Dónde está Espartero? desde el año 38 Espartero habia conocido
Deberá de estar en los puntos mas avanza que tenia en él un rival temible. Los suce
dos, á la cabeza de las columnas que se sos justificaron su prevision.
hallen en posicion mas arriesgada. El pue Al parecer era una indiscrecion el que
blo, la milicia, el ejército, deberán de Narvaez saliese de Valencia , pues que de
verle, de oirle por todas partes, acudien jaba desprovista una plaza importante ,
do á todas las necesidades , arrostrando to amenazada por el Regente en persona , y
dos los peligros , volando al combate , en no podia llevar consigo sino fuerzas muy
busca de una muerte gloriosa. Nada de eso: escasas para hacer frente á las multiplica
Espartero no se ve , ha desaparecido de la das necesidades que llamaban su atencion.
escena ; cual si no se tratase de su interes Un gefe menos activo hubiera dicho que
y de su persona, permanece inactivo en un primero convenia asegurar la ciudad cuyo
pueblo de escasa importancia , y deja que pronunciamiento habia tomado tanta im
cundan los pronunciamientos, y que las portancia por su carácter y tendencia ; que
Juntas organicen sus fuerzas, y que se pon era preciso reorganizar las fuerzas pronun
gan en comunicacion , y que se le vaya ciadas, y examinar hasta qué punto se po
cercando en todas direcciones sin quedarle dia depositar en ellas la confianza ; que era
apenas punto por donde salir. ¿Dónde está indispensable ponerse en combinacion con
Espartero? preguntan las gentes. ¿Se ha las demas Juntas de España , con los cau
presentado delante de Valencia? Nó: está dillos de las fuerzas que operaban en varios
en Albacete. ¿Acude á socorrer á Zurbano? puntos, y andar con mucho tiento en lan
Nó: continúa en Albacete. ¿Marcha al en zarse á una empresa , que si llegara á des
cuentro de Narvaez que ha salido en di graciarse podia malograr el pronuncia
reccion de Teruel ? Nó : prosigue en Alba miento. Narvaez comprendió su verdadera
cete. ¿Retrocede al menos para cubrir la situacion : vió las cosas tales como eran en
capital , y hacer allá una resistencia deses sí; comprendió que en crisis semejantes la
perada , pelear con denuedo y vencer ó victoria es de aquel que obra con mas ra
morir? Nó : todavía en Albacete. Preciso pidez y osadía ; que cuando se tiene en
era que sus enemigos cobrasen ánimo , y presencia á un enemigo que solo confia en
que sus partidarios desmayasen , viendo tan la lenta accion de intrigas subterráneas, es
incomprensible conducta en un hombre que preciso no perder tiempo , no dejarle que
acababa de prometer triunfos sin cuento, pueda minar el terreno , y atravesar veloz
de asegurar que estaba resuelto á hollar mente el paso peligroso antes que la mina
con planta firme la cabeza de la insurrec pueda reventar. Sale de Valencia ; marcha
cion y oponer un corazon de bronce á los ti sobre Teruel ; ahuyenta á Enna ; revuelve
ros de sus adversarios. Casi toda la España sobre Calatayud ; desde allí dice que mar
está pronunciada contra Espartero , y Es cha sobre Madrid : fija el dia en que se
partero prosigue en Albacete. Ya que no hallará á las puertas de la Capital , y como
su propio interes ni su gloria ni la defensa lo promete lo realiza. Encuentra resisten
de sus amigos, al menos debia impulsarle á cia : primero halaga , despues amenaza de
obrar con mas decision la vergüenza de re una manera terrible; entre tanto siente á
presentar tan triste papel á los ojos de la sus espaldas el ruido de un ejército nume
Europa entera. Los hombres que se habian roso que viene en socorro de los sitiados :
 — 117 —
dice que va á vencerle ; le sale al encuen
tro en Torrejon de Ardoz , le acomete , le
envuelve , le fascina á fuerza de arrojo y
de palabras ardientes ; le incorpora al suyo CONSIDERACIONES
que era mucho menor, y marcha con los
dos reunidos sobre la Capital que le abre SOBRE
sus puertas y recibe la ley del vencedor.
¿Dónde está Espartero? Cuando Seoane y LA APOLOGÍA CATÓLICA DE LAS OBSERVA
Zurbano vuelan á libertar á Madrid por en CIONES PACÍFICAS DEL In STRÍSIMO SEÑOR
medio de una línea de pueblos pronuncia ARZOBISPO DE PALMIRA DON FÉLIX AMAT,
dos , cuando los hombres mas señalados por SOBRE LA POTESTAD ECLESIÁSTICA Y SIS
su adhesion al Regente no han tenido re RELACIONES CON LA CIVIL.
paro en encerrarse en la Capital y arros
trar las consecuencias de un desenlace que
podia ser muy trágico ¿ no debia Espartero
acudir con su division y colocado á la ca
beza de sus amigos pelear hasta el último El Illmo. Sr. D. Félix Torres y Amat,
trance y correr con ellos una misma suer obispo de Astorga, ha dado á luz en Madrid
te? ¿No es probable que Narvaez se hubie un escrito titulado « Apología católica de las
ra visto en compromiso muy arriesgado , observaciones pacificas del Illmo. Sr. arwbispo
si al encararse con la division Seoane y de Palmira sobre la potestad eclesiástica y sus
Zurbano hubiese tenido á su espalda al relaciones con la civil, aumentada con algunos
mismo Espartero con todas las fuerzas que documentos relativos á la doctrina de dichas
á la sazon se hallaban en Madrid , aumenta observaciones , y en defensa y explicacion de la
das y sostenidas con el numeroso y brillan pastoral del Obispo de Astorga de ü de agosto
te ejército que se llevó el Regente á An de 1 842. » Para que se comprendan los
dalucía? motivos que tiene el que escribe estas lí
Mientras sucumbió la Capital se hallaba neas para dar á sus Consideraciones el orden
este delante de los muros de Sevilla cer que verá el lector , conviene advertir que
rando con un bombardeo tan cruel como la Apología á que ellas se refieren comienza
estéril , su triste é incomprensible carrera. por la introduccion dela obra del Illmo. se
La ciudad de San Fernando tuvo el aliento ñor Obispo de Astorga; continúa por la pu
de defenderse el tiempo preciso para que blicacion del espediente dictado por el señor
pudiese llegar la noticia de que la Reina Amat á su secretario poco antes de morir,
estaba en poder de los pronunciados. Esta al que sigue la vindicacion que del mismo
nueva produjo su efecto de una manera Sr. Amat han hecho sus albaceasá causa de
instantánea. Espartero levanta el sitio, y un escrito publicado en Barcelona sobre la
huye presuroso hácia las orillas del mar pastoral del Illmo. Sr. D. Félix Torres Amat
pudiendo apenas salvarse de la espada de de 6 de agosto de 1842 ; y termina en fin
Concha. Allá abandonando á los gefes y á con una explicacion de dicha pastoral que
las tropas que le siguieron hasta el último dirigida á todos los fieles católicos, nos dice
momento se embarca , pide asilo á un na el Illmo. Sr. Obispo que desea que sirva pa
vio ingles, y desde su bordo contempla las ra que no se confundan los dogmas de la fe
costas de esa patria á la que perturbara con con las opiniones de los hombres. Al autor
su ambicion y afligiera con su desgobierno; de estas Consideraciones le parece conve
sin que él alcanzase aquella gloria que hu niente seguir paso á paso las partes de dicha
biera merecido, si comprendiendo su si Apología , emitiendo sobre cada una de
tuacion hubiese sabido hermanar el interes ellas su humilde opinion.
propio con la conveniencia pública.—J. B. Al tomar la pluma para emprender este
trabajo, nos sentíamos con alguna tenta
cion de retraernos de ello, porque reflexio
nábamos que nos habiamos de encontrar
repetidas veces en abierta oposicion con el
Illmo. Sr. Obispo de Astorga, en quien
respetamos, como es debido, el alto carác
ter de prelado de la Iglesia , realzado ade
mas con el lustre que consigo llevan el sa
 — 118 —
bcr y las canas. Pero al propio tiempo se la defensa propia (1). Dice el Sr. Obispo
nos ocurría, que no era conveniente dejar de Astorga en el lugar citado, que habien
pasar desapercibido un escrito de un Obis do sido públicas las observaciones pacíficas
po espanol, que se pone en desacuerdo con
la Sede Apostólica , ó si se quiere con la (1 ) Con fecha 9 de octubre de 1843 hice publi
Curia Romana. La prensa religiosa , puesta car por los periódicos nacionales el artículo si
como vigilante atalaya contra los errores y guiente :
« Señores redactores del Corresponsal : y muy se
equivocaciones de todos géneros pertene ñores mios- Ya que en el número 1528 (29 de se
cientes á su objeto, tiene un deber de exa tiembre) de su periódico cuidaron Vds. de avisar al
minar documentos de esta clase ; mayor público que el Santo Padre habia aprobado la pro
hibicion de mi pastoral del 6 de agosto de 1842, es
mente cuandose trata de asuntos de tamaña pero que los redactores de ese y otros periódicos no
gravedad , de juicios pronunciados en Roma me negarán la publicacion del siguiente articulo ,
contra obras que versan sobre materias de aque es como el prólogo de los documentos que voy
imprimir para la evidente Apología que de ellos
la mas alta importancia ; y muy particular resulta en defensa de mi tio el Arzobispo de Pal-
mente, mediando la circunstancia en ex mira, y de su sobrino el obispo de Astorga.
tremo notable, de haber sido prohibida precipitar« Desde el borde del sepulcro en que me van á
ya los años, los males físicos sus inse
tambien la Pastoral en que eran defendidas parables compañeros, y los dolorosos sentimientos
las obras expresadas, y donde se ventila nacidos de la solicitud pastoral , agravados hasta
ban gravísimos puntos de moral y de disci el extremo por los mismos que debieran aliviarlos
plina eclesiástica con aplicacion á los asun por caridad , aunque no fuera por otros motivos ,
estoy oyendo la voz de Dios que me dice por boca
tos de España. Creimos, pues, que la causa de Salomon : « Curam habe de bono nomine;» y
de la verdad debia pesar mas en nuestro si esto lo dice á todo hombre ¿con cuánta mas ra
ánimo que todas las consideraciones huma zon á un Obispo, á un sucesor de los Apóstoles,
puesto por el Espíritu Santo para regir uoa por
nas. Mas no es de recelar que al impugnar cion del rebaño del Señor? El eco de tan saludable
el escrito á que nos referimos, nos olvide sentencia se repite con mayor claridad en la carta
mos nunca delos miramientos debidos á un de San Pablo, que dice á su discipulo Timoteo:
Oportet Epiícopum sine crimine esse sicut Dei
prelado de la Iglesia, ni que al aludir al dispensatorem » Estoy muy lejos de creerme con
Ulmo. Sr. D. Félix Amat, arzobispo de Pal- la perfeccion que desea el Apóstol.
mira, perdamos de vista que se trata de « Desgraciadamente sé por experiencia que por
un hombre que estuvo colocado en alta medad elevado que se vea el hombre , está sujeto á enfer
dignidad ; que ocupó un puesto distinguido buena yfe áy error : pero tambien sé que cuando con
corazon sincero pide que se le corrija
en la república de las ciencias y de las le si ha pecado , ó se haga ver el error en que ha
tras , y que por fin ha dejado ya la man caido , es contra equidad y justicia condenarle sin
sion de la tierra para presentarse ante el oirle , y mucho mas contra la caridad cristiana ,
especialmente si se trata de pastores del rebaño
Supremo Juez á cuyos ojos estan patentes del Señor. Hasta los sabios del paganismo cono
los mas recónditos secretos del humano co cieron esta verdad , y es para mí muy creíble que
por haberla declarado en mi Pastoral del 6 de
razon. No sacrificaremos un ápice de nues agosto de 1842 , ha tenido la desgracia de ser co
tras convicciones, hablaremos con la liber locada en el Indice Romano , como lo fueron las
tad que cumple á quien defiende la santa obras del Arzobispo de Palmira ; porque en ella
causa de la verdad ; mas procuraremos que este,manifestaba la irregular conducta observada ron
en nuestro lenguage resalten la considera por tantos títulos digno demás considera
cion , cuyo honor es mas aprcciable para mí que
cion al mérito , respeto á la dignidad epis el mio propio.
copal , paz á los sepulcros. « Sufrí en silencio y ofrecí á Dios en sacrificio el
ataque bmsco y destemplado de un anónimo, que
hollando la ley de la caridad cristiana y sin aten
der á los males que podía producir su folleto, le
publicó y extendió prodigamente entre mis ovejas,
§1- hiriendo al pastor para desconceptuarle y privar de
la fuerza á su palabra ; pero ¿callaré ahora que veo
puesta en el índice Romano mi pastoral con apro
bacion de Su Santidad? Persuadido á que para esto
Comienza el Ulmo. Sr. Obispo de Astorga no puede haber habido otro motivo que el insi
nuado , se me pone en la necesidad de hacer ma
su introduccion recordando , que con fe nifiestos los hechos que ocurrieron publicando los
cha 9 de octubre de 1843 , hizo publicar en documentos que obran en mi poder. Si alguno me
los periódicos nacionales un comunicado , acusare de imprudente , si censurare mi conducta
en que despues de varios considerandos de sumen esta parte , responderé con el Apóstol ; Factus
insipieni ; vos me coegistis. Casi estoy hecho
clara que se le ha puesto en la necesidad un mentecato con tanto alabarme ; mas vosotros
de hablar, ya para la vindicacion de su tio me habeis forzado á serlo. — Félix , Obispo d«
el Arzobispo de Palmira , ya tambien para II Astorga.
 119 —
(le su tio en 1818 precedidas del apéndice que Luis \ VIH enviaba cien mil soldados
de las cartas de lrénico dadas á luz en el á quitarnos de España la Constitucion , ó
año anterior, han transcurrido veinte y gobierno representativo, » y que el « gran
cuatro años sin que ningun obispo ó prela- pecado , el grande error del pacífico y mo
lado de la Iglesia de España haya encon destísimo Sr. Amat para con los hombres
trado en ellas error alguno contra la fe y intolerantes y exclusivos no es otro sino el
buenas costumbres; sucediendo lo mismo seguir la doctrina de los Santos Padres y
en Francia, Alemania y otros paises, y singularmente de su maestro el Angélico
sobre todo en la misma Italia , en donde Doctor Santo Tomas ; el no ser un fanático
especialmente en Roma, continúa S. S. 1., aljsolulista , ni en lo civil , ni en lo eclesiás
no podían ser bien recibidas algunas opi tico ; el ser discípulo del gran Bossuet ; el
niones del Sr. Amat, como contrarias al estar persuadido con Santo Tomas de que
gobierno absoluto que allí domina.» La el mejor gobierno civil es el que participa
proposicion á que se adelanta el Sr. Obispo del monárquico , del aristocrático y del de
de Astorga nos parece destituida de funda mocrático.» «Héaquí, continúa, porqué
mento , dado que le es imposible saber lo las perniciosas influencias de enemigos del
que en ella afirma. ¿Quién ha dichoque difunto Sr. Arzobispo lograron por sorpresa
ningun obispo de España , de Francia , de que la Congregacion del Indice prohibiese
nia , de Italia , no hayan encontrado I en 1824 las Observaciones pacíficas, sin decir
ira error contra la fe y buenas costum- nada antes al autor que aun vivia: y últi
_ j en las Observaciones pacificas del señor mamente ha prohibido del mismo modo el
Arzobispo de Palmira? La prueba de que Diseño de la Iglesia , escrito para servir de
la asercion es verdadera la encontrará sin resúmen de las Observaciones , y de instruc
duda S. S. I. en que los obispos no han cion á los jóvenes eclesiásticos y demas fie
manifestado su opinion contra la obra de su les en general. » Repetimos que nos duele
tio; pero á esto tenemos dos réplicas que que el Sr. Obispo de Astorga se haya per
hacer: 1.a la prohibicion de las Observacio mitido semejantes espresiones , cuando no
nes pacificas la publicaron varios prelados puede ignorar el sumo cuidado , el pulso y
de España , lo que indica que nada tenían detenimiento con que se hacen prohibicio
que oponer á ella ; , y si bien es verdad que nes semejantes; cuando no puede ignorar
esto no indica suficientemente que ellos hu que la obra de su tio el Sr. Arzobispo de
biesen encontrado errores contra la fe ó las Palmira fue prohibida por el SSmo. Padre
buenas costumbres , favorece muy poco á Leon XII en la Sagrada Congregacion de
la obra prohibida y hace dudar de que sea Cardenales tenida en su presencia en el pa
exacta la proposicion del Sr. Obispo de As- lacio Apostólico del Vaticano en 2C de
torga. Por el mismo hecho de publicar la marzo de 1825, en que aprobó y mandó
prohibicion se adherían al juicio de la Sede publicar el decreto que contra la obra ex
Apostólica y presentaban á los fieles como presada habia formado la misma Congrega
peligrosa la lectura de la obra del Sr. Ar cion en 6 de setiembre de 1824, llenándose
zobispo de Palmira : 2." los Obispos no ha ademas todas las formalidades que en tales
blaron porque Roma habia hablado ya : casos se acostumbran ; duélenos que el
supuesto que en 1824 la Congregacion del Sr. Obispo haya presentado á la Sede Apos
Indice habia prohibido las Observaciones pa tólica como juguete de agenas pasiones
cíficas. El silencio de los obispos nada políticas, de los intereses de gobierno, de
prueba, pues, en favor de la obra prohi las influencias de los enemigos del difunto
bida , del contrario seria menester decir Sr. Arzobispo, hasta el punto de pretender
que todas las obras de esta clase se hallan que el error de este no es otro sino el seguir
en el mismo caso , siendo bien sabido que doctrinas de Santo Tomas y de los Santos
una vezprohibida en Roma una publicacion Padres. Jamas se debiera permitir un Obis
cualquiera , manifiestan los obispos su ad po espresiones tan fuertes, tratándose dela
hesion con su silencio ó aquiescencia , sin Cabeza de la Iglesia. Ni vale el decir que
que se crean obligados á publicar que ha no se habla del Papa, sino de los que le han
yan encontrado en ella este ó aquel error engañado; porque al fin el Papa fue quien
contra la fe y buenas costumbres. aprobó, quien mandó publicar la prohibi
Duélenos que el señor Obispo de Astorga cion : el Papa fue quien advirtió á los fieles
al hablar de la mencionada prohibicion que la obra era peligrosa ; y si vale el efu-
haya dicho que fue « precisamente al tiempo !', giede distinguir entre el Papa y sus conse
 — 120 —
jeros, de decirque aunque el Papa lo haya tanta mezquindad de miras, y si quizás no
hecho es que le han engañado , asentare se le recibirá como descargo suficiente , el
mos en las materias eclesiásticas el funesto que haya echado la culpa del acto sobrelos
principio de las revoluciones políticas, en consejeros que sorprendieron el ánimo del
que se desobedecen y se desprecian las ór Sumo Pontífice. Ya que él mismo nos está
denes del Rey , en que se hace hasta la diciendo que oye la voz de Dios que le ha
guerra á su gobierno, alegando que se trata bla por boca de Salomon con aquellas pa
delos actos de los ministros, no dela labras «Curam imbe de bono nomine» recuerde
persona del Monarca. No ignoramos loque que el buen nombre de un Obispo, de un
han escrito sobre este punto diferentes au sucesor de los Apóstoles, de un hombre
tores; no hemos olvidado los dictámenes puesto por el Espíritu Santo para regir una
de los fiscales de nuestros antiguos consejos; porcion del rebaño del Señor , consiste en
no se nos ocultan las desavenencias que ha gran parte en sostener celosamente la unidad
habido entre los Reyes y los Papas , las de la Iglesia , en no dañarla en ningun sen
distinciones quese han hecho entrela Curia tido , en no prestar ocasion á que se siem
Romana y el Papa, y hasta entre el Papa bre la zizaña , á que se introduzca la des
y la Sede Apostólica; y hacemos estos re confianza, á que los fieles conciban aversion
cuerdos para que en contradiccion á lo que á la Sede Apostólica , centro de unidad , á
acabamos de observar no se nos objete que la madre de todas las Iglesias, á la columea
conocemos mas que las falsas decretales, que y firmamento de verdad , á la piedra sobre
estamos preocupados por las máximas ultra la cual edificó Jesucristo la Iglesia contra
montanas, que exageramos ciegamente las la que , segun expresion del Divino funda
prerogativas del Primado Pontificio, y que dor, no prevalecerán las puertas del in
somos partidarios del fanatismo absolutista fierno.
en lo civil, como en lo eclesiástico. Hace Insiste mucho el Sr. Obispo de Astorga
mos aquí abstraccion de todo linage de en que es contra toda justicia y equidad el
cuestiones legales y canónicas; no nos pro condenar á uno sin oirle , queriendo pon
ponemos señalar el límite de las atribucio derar con estas palabras la razon que le
nes de las dos potestades ; no queremos asiste para quejarse de las prohibiciones
absolutamente entrar en disputas sobre las que se han hecho de las obras de su tío el
competencias que hayan podido mediar Arzobispo de Palmira, y de su última Pas
entre los Obispos y los Papas; solo roga toral. Pero debia recordar que es muy di
mos al Obispo de Astorga que reflexione ferente el caso, cuando se pronuncia un
si es prudente, si es justo, que un Prelado | juicio contra las personas, ó solo contra los
á la faz del mundo , en circunstancias tan escritos ; cuando el fallo recae únicamente
críticas , tan desconsoladoras como las en sobre estos no es precisa que sean oidos los
que se encuentra la Iglesia de España , en autores : todas las explicaciones que estos
época tan agitada y turbulenta en que los pudieran dar recaen sobre su propia inten
intereses ilegítimos se mancomunan con el cion , sobre el sentido que daban á las pa
espíritu de error para difamar á la Santa labras; mas no mudan un ápice en la obra,
Sede , la presente nada menos que como los términos quedan con el mismo signifi
instrumento de miras humanas, de ven cado , las proposiciones no se alteran , el
ganzas personales , en puntos de tan alta encadenamiento de ellas es el mismo. Todo
trascendencia. Ponga el Sr. Obispo de As- lo que el autor pudiera decir se reduce á lo
torga la mano sobre su corazon ; y ya que siguiente : « lo que yo quería expresar era
él mismo nos dice que habla desde el borde esto; » y el fallo no recae sobre lo que el
del sepulcro en que le vah ya á precipitar autor queria expresar , sino únicamente
los años , los males físicos sus inseparables sobre lo que ha expresado en la realidad.
compañeros y los dolorosos sentimientos Condenada la obra , si el autor no persiste
nacidos de la solicitud pastoral ; ya que él en su obstinacion, queda salvo, intacto su
mismo nos repite en otro lugar, que está honor , pues que siempre tiene el recurso
próximo á acabar los dias de su- peregrina de decir : «yo no intentaba expresar tal
cion sobre la tierra , reflexione , medite, si cosa , solo me proponía significar tal otra ;»
al presentarse ante el tribunal de Dios po ó bien, « yo pensaba efectivamente en este
drá serle favorable á los ojos de Jesucristo, sentido , pero ignoraba que esta opinion
el haber presentado al Vicario de este sobre fuese un error,» En el primer caso lo mas
la tierra obrando con tamaña injusticia, con que resulta es que el autor no acertó á e\-
 — 121
plícar su mente con bastante claridad ; que de prudencia , y que si no dejamos alguna
ó no empleó los debidos términos , ó no los latitud á la discrecion del censor , y sobre
coordinó de la manera conveuiente ; y en todo si nos empeñamos en suponerle falta
el segundo solo se deduce que el autor se de ilustracion y cegado por la parcialidad ,
equivocó con ignorancia involuntaria, y abriremos ancha puerta para recusar todos
ambas cosas no dañan ciertamente , ni al los juicios y dar por nulas todas las pro
honor, ni á la reputacion de sabiduría, ni hibiciones.
á las buenas intenciones del escritor ; á no Hubiéramos deseado queellllmo. Señor
ser que queramos desentendernos de las Obispo de Artorga hubiese andado con mas
flaquezas á que está sometida la mísera tiento en adelantar « que el error de su tio
humanidad. consistía en no ser un fanático absolutista
Estas reflexiones demuestran hasta la ni en lo civil , ni en lo eclesiástico » y que
evidencia que no hay injusticia en este modo no se hubiese empeñado en ver cierto mis
de proceder : y disipan la ilusion que cau terio en la coincidencia de prohibirse las
sar pudiera, á los incautos el oir que en Observaciones pacificas algun tiempo despues
. Roma se condena sin oir. No se condenan de la invasion francesa del año 23. No sa
los autores, sino sus obras; y con el objeto bemos hasta qué punto era el Sr. Arzobispo
de dar á conocer y hacer concebir con toda de Palmira amigo del gobierno mixto de
claridad la justicia de este procedimiento , monárquico , aristocrático y democrático ,
propondremos un ejemplo muy usual , que segun nos asegura el Sr. Obispo deAstorga;
ocurreá cada paso. Para juzgar del mérito, pero lo cierto es que en la misma Apología
del carácter , de los defectos de un arte católica que estamos examinando , se en
facto, de un escrito, de un producto cual cuentran pasages en que el difunto Sr. Ar
quiera del ingenio humano , ¿ por ventura zobispo manifiesta su satisfaccion por el
preguntamos , cuál ha sido la intencion del restablecimiento de Fernando VH en la
autor? Nó ; lo que miramos es lo que ha plenitud de sus derechos. En el documento
hecho, nó lo que ha querido hacer. Tra tercero que se halla en la página 10, y que
tándose, pues, del juicio de una obra, lo contiene la adicion primera á la carta nona
que conviene mirar es lo contenido en ella, y última á Irénico , se lee el siguiente no
nó lo que queria poner en la misma el tabilísimo pasage :
autor. «1. La necesidad tan inculcada en las
El mismo Benedicto XIV , cuya sabidu Cartas y en las Observaciones de que en Es
ría , prudencia y moderacion son de todos paña se traten con espíritu de paz y de ca
conocidas , en su Constitucion Sollicita ac ridad las disputas sobre Potestad eclesiás
provida, dice expresamente «quede ningun tica , tanto las relativas á la Potestad civil
modo se han de reprobar las prohibiciones como las interiores ó propias de su misma
de los libros que se han hecho sin haber gerarquía, es ahora tanto ó mas justa y
antes oido á los autores , mayormente ha necesaria que nunca por las particulares
biéndose de suponer que todo cuanto el circunstancias en que nos hallamos. Todos
autor hubiera podido alegar en favor del los que nos gloriamos de ser españoles y de
libro, lo han bien conocido y ponderado los ser católicos debemos manifestarnos agra
censores y jueces.» Verdad es que el autor decidos á la infinita bondad de la Divina
no pocas veces podría manifestar con sus Providencia , á la cual debemos el habernos
aclaraciones que en su intencion no hay aparecido el iris de la paz, el respirarse ya
error en el lugar en que otros le suponen , comunmente en la Península el aire suave
y que atendido el hilo del discurso las pro de la pública tranquilidad , y el hallarnos
posiciones queá algunos les parecen dignas todos indudablemente constituidos bajo el
de censura son susceptibles de mejor sen legítimo gobierno de la antigua monarquía
tido. Mas por lo mismo que para compren hereditaria española , que nuestro augusto
der la mente del autor no basta el examen soberano I). Fernando Vil heredó de sus
detenido de censores ilustrados é imparcia abuelos , y es monarquía católica desde los
les, es de presumir que hay en el texto tiempos de Kecaredo. No perdamos nunca
cuando menos alguna oscuridad , que se de vista que tan singular beneficio nos le
presta á varias interpretaciones. Se nos hizo la Divina Providencia, principalmente
opondrá que con esta teoría pueden prohi por medio del justo y benéfico corazon de
birse todas las obras que se quieran ; pero nuestro mismo Soberano; pero tambien con
siempre es cierto que esta es una cuesiion el auxilio del ejército pacífico enviado por

«
 — 122 —
el rey de Francia de acuerdo con los demas se habría de proceder contra el Arzobispo
soberanos de Europa. Esta sola considera á quien podian resultar perjuicios suma
cion nos deja libres de todo miedo de vernos mente trascendentales , pues que las dos
otra vez dominados de alguna faccion de potestades eclesiástica y civil se hallaban
partido que se apodere delas cosas públicas, igualmente empeñadas en este negocio ; en
y en general del monstruo de la anarquía.» cuya consecuencia le manifestaba el Nuncio
Aquí se echa de ver que no miraba con que Su Santidad estaba dispuesto á usar de
malos ojos ni el restablecimiento de la mo toda la lenidad y dulzura apostólica, si
narquía absoluta, ni la entrada del ejercito S. I. enviaba una retractacion lisa y llana
frances. de sus errores para que se publicase por
En el mismo lugar, página 18, se expresa medio de la imprenta. A esta Carla del
en estos términos : Nuncio contestó el Sr. Arzobispo de manera
»De lo dicho hasta aquí esfácil sacar una no muy satisfactoria, incluyendo ademas
sencilla consecuencia que quisiera grabar un largo escrito en que exponía sus doctri
en los corazones de los españoles eclesiás nas y sus temores. No se dió por satisfecho
ticos y seglares, militares y paisanos, de el Nuncio con la contestacion del Sr. Arzo
todo sexo , edad ó profesion , desde los mas bispo, diciéndole sin rodeos que bajo el
sabios á los mas ignorantes , desde los mas solapado manto de preservar á los fieles
ricos á los mas pobres, y desde los que ha contra los ataques de los pretendidos filóso
bitan en las capitales hasta los carboneros fos de propósito recuerda especies que aun
y pastores que no salen de los montes ó que se aparenta combatirlas se dirigen á
desiertos; á saber: Son ahora indignos de lla infundir recelos contra los objetos que abra
marse españoles ó cat ¡lieos , / .° los que ga se za : manifiéstale que el impreso que le ha
descuidan de dar continuas gracias á la Divina enviado en testimonio de sus actuales sen
Providencia por el beneficio que nos ha heclw timientos le ha alarmado mucho, y que
de restablecernos bajo el dominio de la antigua lejos de mirarle como un buen presagio lo
monarquía hereditaria española.» reconoce como una prueba de la firme ad
Juzgue ahora el lector si el Sr. Obispo hesion del Arzobispo á sus erróneos prin
de Astorga tratando de justificar á su tio, y cipios. El Nuncio de S. Santidad se indigna
de presentarle como víctima de las pasiones sobre manera porque el Sr. Amat llama
políticas, ha andado con mucho acierto protestante al Conde de Maistre , llegando
suponiéndole opiniones favorables á los á expresarse en estos términos: «V. S. I. ,
gobiernos mixtos, y enemigo del restable le diré con dolor , parece ser sumamente
cimiento de la monarquía absoluta ; á no ignorante , ó un atroz calumniador : lo
ser que conceda que su tio en estos pasages primero si no sabe lo que todo el mundo
hacia traicion á sus opiniones. conoce , que el piadosísimo Maistre era ca
Inserta el Sr. Obispo de Astorga el expe tólico, y muy buen católico, y ojalá lo
diente sobre la retractacion de las Observa fuésemos tanto nosotros ; y si no ha podido
ciones pacíficas y sus apéndices , publicados en reconocer esta verdad por la lectura de su
nombre de D. Macario Padua Melalo que el obra sobre el Papa , caso que en efecto la
Sr. Nuncio Apostólico exigió del Sr. Arzobispo haya tenido en sus manos y meditado: lo
de Palmira su autor. En la relacion de lo segundo si á pesar de saber todo esto se ha
ocurrido en este negocio se halla que con servido por su fin particular acriminarle de
fecha de 21 de abril de 1824 el Excmo. se protestante, y todavía de algo peor á los
ñor D. Santiago Giustiniani, Nuncio de S. S. ojosLamentas?
de los crédulos
muchoqueel no
Sr. loObispo
entienden.»
de que
en Madrid , por encargo de S. S. escribió
al Arzobispo de Palmira que en su obra el Nuncio de Su Santidad se valiese de ex
titulada Observaciones pacíficas publicada en presiones tan duras , que en efecto lo son ,
nombre de 1>. Macario Padua Melato y en las de que « parece ser sumamente igno
los apéndices de ella se trataba de justificar rante , ó un atroz calumniador » Prescin
todos los extravíos de las Cortes, y de diremos de si era ó nó conveniente que el
alentar á los novadores á completar la obra Nuncio emplease semejantes expresiones;
de iniquidad que tenian empezada; que Su pero no podemos menos de observar que
Santidad mandó ála Sagrada Congregacion el Arzobispo de Palmira hablaba del conde
del índice que se ocupase detenidamente de Maistre en términos que no podian es
de la obra para calificarla con la debida so perarse de un hombre tan versado en la
lemnidad, y que concluido este primer paso lectura , y á quien por consiguiente debemos

«
 — 123
suponer muy diestro en alcanzar el verda teológicas «no son otra cosa que unas ver
dero sentido de una doctrina. dades generales manifestadas y divinizadas
No tanto el honor del conde de Maistre, en el orden religioso de tal manera, que no
como el interes de la verdad , nos obliga á se podría combatir é impugnar ninguna de
detenernos en la aclaracion de las doctrinas ellas, sin atacar una ley eterna del mundo.»
del conde de Maistre, que tantos recelos Asienta en seguida que « la infalibilidad
le inspiraban al Sr. Arzobispo de Palmira , en el órden espiritual y la soberanía en el
y que con tanta dureza las calificaba. Crece temporal , son voces perfectamente sinó
la importancia de este asunto si se considera nimas.»
rémos queHablando
hubiéramos
con franqueza,
deseado queconfesa-
tratán
que semejantes expresiones no se le esca
paron al señor Amat en un momento de dose de una materia tan grave , el Conde
inadvertencia ; sino que procedían de una no se hubiese expresado de una manera
opinion fija , opinion que con mas ó menos tan absoluta ; pero al propio tiempo que
claridad ha reproducido su sobrino el Obispo echamos de menos algo de aquel rigor que
de Astorga , si no hemos comprendido mal siempre falta á los que no se han dedicado
las alusiones y el sentido de una de sus an por profesion á los estudios teológicos , no
teriores pastorales. podemos negar que las ulteriores explica
Parece imposible que se haya podido ciones, y sobre todo lo que resulta del con
decir que el conde de Maistre en su obra junto de la obra , nos satisface cumplida
titulada del Papa ha querido fundar un cris mente ; y que á lo mas puede necesitar este
tianismo nuevo , y destruir la doctrina de capítulo alguna nota aclaratoria , como la
la infalibilidad dela Iglesia. Para que nues que le pusieron los autores de la Biblioteca
tros lectores se convenzan de la verdad y de Religion en su edicion de Madrid de 1828.
exactitud de nuestra asercion analizaremos Expliquemos ahora cómo entiende el
rápidamente la teoría del Sr. Conde, des conde de Maistre que la infalibilidad en el
vaneciendo las objeciones que se le pueden órden espiritual y la soberanía en el tem
hacer, y demostrando hasta la evidencia poral, son voces sinónimas. « Una y otra,
que su intencion era recta , su doctrina dice él mismo, expresan ó significan aquel
pura , asi como sincera y profunda su su alto poder que los domina á todos, del cual
mision ála autoridad de la Iglesia Católica. todos los demas se derivan , que gobierna
En el capítulo primero de su famosa obra y no es gobernado , que juzga y no es juz
del Papa , titulado dela infalibilidad, advierte gado.»
que se ha dicho ya tanto sobre esta infali Se habia dicho que la infalibilidad del
bilidad considerada teológicamente , que Papa era una cosa monstruosa , inaudita ,
seria difícil añadir nuevos argumentosa los una nueva invencion de la lisonja destitui
que se han acumulado ya por los defenso da de todo fundamento , y contraria á la
res de esta alta prerogativa para apoyarla sana razon ; y el conde de Maistre hace no
en autoridades irrefragables y desembarazarla tar con admirable profundidad , que en la
de los fantasmas con que los enemigos del infalibilidad del Pontífice hay la aplicacion
Cristianismo y de la Unidad han procurado de un principio general á todas las socieda
rodearla, con la esperanza de hacerla por des, pues que en todas se halla una auto
lo menos odiosa , si no podían conseguir ridad suprema de cuyo fallo no es lícito
aun otra cosa peor. » En estas palabas del apelar. El conde de Maistre ha venido á
conde de Maistre hallamos desvanecidas de hacer este argumento : ó podeis apelar de
antemano todas las dificultades que se le la autoridad del Papa, ó no; si lo primero,
podrían objetar, á causa de que proponién la Iglesia Católica está constituida de una
dose despues hacer plausible esta verdad manera mas imperfecta que todas la socie
religiosa , apela á consideraciones sacadas dades puramente humanas , pues que en
del orden político. Cuando hace esto último ellas hay una autoridad suprema de cuyo
el expresado escritor, no deja de recono juicio no se puede apelar ; si lo segundo ,
cer que haya argumentos fundados en au entonces reconoceis la infalibilidad. Aquí
toridades irrefragables ; ya que él mismo lo se puede hacer una objecion, cuales, que
acaba de confesar de una manera tan ex cuando se asienta por principio que en las
plícita y terminante en el principio del ca sociedades humanas debe haber una auto
pítulo. Cuanto expone en seguida se dirige ridad suprema cuyo fallo sea definitivo,
á presentar como plausible una verdad re no entendemos decir que este fallo no pue
ligiosa , observando que muchas verdades da estar sometido á error , que haya de
 124 —
contener siempre la verdad , y que si le asi ; dado que de otra manera estaría en
reconocemos como verdadero es por una tregada la sociedad á continua incertidum-
especie de ficcion legal , á causa de que si bre , del mismo modo que se ha inventado
la cosa juzgada no se tuviese por verdade el derecho de prescripcion para que los po
ra serian interminables los juicios, y todos seedores no estuviesen en perenne ansiedad
los negocios estarían sometidos á una serie y temores de perder sus propiedades. Mas
de apelaciones sin fin. Claro es que si la ¿quién no ve que esto no es suficiente tra
infalibilidad del Papa se entendiese sola tándose de creencias? Para creer es preci
mente en este sentido , seria una infalibili so un asenso firme , interior , y no basta el
dad puramente humana , y á la cual nos silencio , ni tampoco la hipócrita sumision
someteríamos, no porque estuviésemos con hija únicamente del deseo de poner fin á
vencidos de que no puede engañarnos , si las disputas.
no únicamente por amor de la paz, y para Para convencerse de cuán falsa era la
poner término álas disputas. Mas no lo en imputacion de protestantismo hecha al con
tiende asi el conde de Maistre , ni ninguno de de Maistre por el Sr. Arzobispo de Pal-
de los que defienden la infalibilidad ponti mira, basta abrir su obra titulada del Papa:
ficia. En efecto , por lo mismo que se tra pues en todas partes se encuentra el mas
ta de la definicion de un dogma, es decir, vivo entusiasmo por la Iglesia Católica Apos
de saber si una cosa es ó no es , ó si es de tólica Romana, el mas ferviente celo por
tal ó cual manera , es evidente que quien vindicar el honor de la Santa Sede , la mas
sostiene que el Papaes infalible, no sostie profunda conviccion de que Jesucristo está
ne una infalibilidad á la manera de los tri con ella'; en todas partes dirige fuertes ar
bunales puramente humanos ; puesque en gumentos contra los protestantes, contra
tender la cuestion en tal sentido seria caer los griegos cismáticos y cuantos se han se
en un miserable juego de palabras. Enton parado de la unidad de la Cátedra de San
ces el fiel que se sujetase á la decision del Pedro.
Papa podria decir: « yo reconozco que es Por lo tocante á la retractacion exigida
te hombre puede haberse engañado como por el Sr. Nuncio, resulta de la misma
otro cualquiera ; mas para acabar con las correspondencia publicada por el Sr. Obis-
disputas me someto á su juicio suponién bo de Astorga , que el Sr. Arzobispo de
dole infalible.» Semejante sumision seria Palmira no tenia intencion de hacerla. En
hipócrita, esencialmente opuesta á las con sus cartas se ve que se proponía ganar tiem
diciones que se necesitan para tener verda- po; y que involucrando el asunto de su re
ra fe , pues que esta no existe ni puede tractacion con otras cuestiones que nada
existir cuando no estamos enteramente se tenían que ver con ella , estaba muy dis
guros de que ni se nos engaña , ni se nos tante de imitar la humildad y docilidad de
puede engañar. Fenelon que él mismo nos recomienda, y
Cuando un negocio que ha pasado por á quien nos asegura que se proponía por
diferentes grados de apelacion , ha llegado modelo hasta llegar á decir que excederia
al tribunal supremo del Estado , los litigan al ilustre Sr. Arzobispo dé Cambray.
tes estan obligados á someterse ála decision En las notas á los indicados documentos
que recaiga , sin que les sea permitido el se lee una advertencia en que se dice , que
apelar de nuevo. Entonces el que ha per se publican algunas de las que el secreta
dido la causa , y que se creia con la razon rio de cámara del difunto Sr. Arzobispo
y la justicia de su parte, puede decir: «yo atestigua que en los últimos dias de la vi
me someto al fallo del tribunal : no me da iba apuntando el Sr. Amat. En una de
opongo , ni puedo oponerme á la ejecucion estas parece traslucirse la intencion de en
de la sentencia , mas por esto no qnedo volver en este asunto al Sr. Veyan, obispo
obligado á abjurar mi opinion de que la de Vich. La buena memoria que ha deja
justicia me asistía. Los jueces engañados ó do en nuestro pais este venerable Prelado,
sobornados han fallado contra mí, pero no nos obliga á detenernos un instante en el
han alterado ni la naturaleza del negocio , examen de lo que pudo haber en este asun
ni las disposiciones del derecho.» Esto bas to. Se nos dice en el expresado lugar que
ta para el buen orden de la sociedad ; con el Sr. Veyan luego que oyó de la boca del
esto se logra poner fin á los juicios , y de Sr. Amat el plan de la obra en que estaba
consiguiente se ha llenado el objeto que se trabajando , y los principios que le guiaban,
proponen los legisladores al establecerlo le animó extraordinariamente á que la He
 — 125 —
vara á cabo , diciéndole : « No tenemos en palabras de otro con tanta exactitud en la
español ninguna obra de este género , y asi memoria, es poco menos que imposible; y
es que clérigos y frailes andan á oscuras en esto de prestar á un difunto palabras, fra
esta materia. Y tanto ó mas que el clero ses, y hasta un discurso entero, por corto
la necesitan los abogados y los magistra que sea , es asunto muy delicado.
dos.» Permítanos el señor Obispo de As- Publica tambien el Sr. Obispo de Astorga
torga, que le digamos que no parece con una carta del Excmo. Sr. Arzobispo de Ti
veniente sacar á luz en letra de molde las ro, Nuncio Apostólico , en contestacion á
conversaciones familiares de un Prelado so otra que le habia dirigido el Sr. Amat, en-
bre tan grave materia ; mayormente ha viándole un ejemplar de sus Observaciones.
biendo este muerto ya hace veinte y nueve Pero la espresada carta del Nuncio no prue
años, y por consiguiente no pudiendo ser ba nada de loque al parecer se intenta. Se
corregida ó enmendada la variacion que reduce á dar al Arzobispo las gracias por su
por olvido ó descuido involuntario se intro fineza , añadiéndole que cuando pueda ha
dujese en sus palabras. Nadie ignora cuan llar algun momento libre para leerlas lo ve
difícil es referir al pie de la letra lo que ha rificará , nó con intencion de buscar ó des
dicho otro en el decurso de una conversa cubrir faltas , sino á fin de admirar bellezas
cion. Pero supongamos que el Sr. Veyan y la sana doctrina que S. 1. habrá vertido.
hubiese dicho sin faltar un ápice lo que se Mírense como se quiera estas palabras no
supone, ¿qué prueba esto en favor de las se hallará en ellas otra cosa que un cum
Observaciones pacificas ? Nada absolutamen plimiento , que una fórmula de atencion ,
te. Claro es que hablándole el Sr. Amat al pero de ninguna manera un juicio de la
Sr. Veyan de que se proponía escribir una obra, ya que el mismo Sr. Nuncio dice que
obra en que se deslindasen las atribuciones no ha podido leerla.
de la potestad civil y de la eclesiástica, era Hablando en la página 54 de lo ocurrido
natural que le dijese, siquiera por cortesía, con el Sr. Obispo de Barcelona , cuenta el
que en esto podia hacer un servicio impor de Astorga que aquel se le escusó por lo
tante á la Iglesia y al Estado ; que faltaba que habia hecho contra el Sr. Amat pro
una obra buena en este género; que im hibiendo todos los tomos de Observaciones
portaba que los clérigos se instruyesen á pacificas , y despues de recordar que el
fondo en estas materias; ni fuera nada ex Illmo. Sr. Sichar debia su eleccion para
traño , que celoso como era de que estos aquella mitra al Sr. Amat , dice : o le con
fueran sabios , se lamentase de que algunos té que un Eminentísimo y sabio Prelado á
no poseian los conocimientos que él desea quien impugnó el Sr. Amat con solidez y
ba. Todo esto es muy natural, muy con decoro la opinion de que la confirmacion
forme al orden regular de las cosas ; pero de los Obispos es del Romano Pontífice, nó
no comprometen el juicio del señor Veyan por ley disciplinal de la Iglesia sino por de
en pro de la obra. En asuntos de esta cla recho divino , me aseguró por dos veces
se el título y hasta la exposicion del plan , distintas que desde que salieron á luz las
no bastan á dar una idea cumplida de lo Observaciones pacíficas las mandó comprar;
que ella será ; todo depende de la ejecu que habia leido los dos tomos; y que le
cion ; y por mas que el autor hable de lo habian parecido muy sólidos los fundamen
que intenta hacer, son suficientes algunas tos en que se apoyaba. Respetamos la pa
reticencias ó expresiones ambiguas para de labra del Sr. Obispo de Astorga : no duda
jar frustradas las esperanzas hasta de los mos de su veracidad , pero salvo todo el
mas avisados. Lo propio decimos de lo de- respeto debido á su persona , nos es permi
mas que nos refiere el Sr. Obispo de As- tido dudar de que las opiniones del Emo.
torga haberle dicho un día el mismo señor Sr. á quien se refiere , fuesen las mismas
Veyan exhortándole á que excitara á su tio que las de su tio; y que por consiguiente
á que llevase á cabo la tarea comenzada. encontrase sólidos en toda la propiedad de
Creemos que hubiera sido mas convenien la palabra, los fundamentos en que se
te que el Sr. Obispo de Astorga, caso de apoyaban las Observaciones pacíficas. Todos
t|uerer publicar las palabras del Sr. Veyan, sabemos lo que valen esta especie de es
se hubiese contentado con expresar su sen presiones generales. Se le pide á una perso
tido ; y nó empeñarse en insertarlas como na el juicio sobre una obra que está muy
copiadas de un texto que se tiene á la vis distante de aprobar; pero deseoso de no
ta. Porque repetimos que el conservar las desagradar al sugeto que hace la pregun
 126
ta, le responde en términos generales , eva desvanecido y nó en su cabal discernimien
sivos, huyendo del punto de la dificultad, to , para hacerle retractar de alguna cosa
elogiando lo que haya de laudable y dejan contra el dictámen de su conciencia : en tal
do lo digno de reprension ó censura para caso, dijo, lo desmentiréis. Incomprensible
mejor oportunidad. ¿Quién ignora el diá parece que el Sr. Obispo de Astorga nos
logo que en semejantes casos suele enta haya referido este hecho en un escrito en
blarse? « Vamos Sr. D. N. ¿Qué le parece que pretende dejar bien sentadas la modes
á V. de tal obra ? = Cabalmente estos dias tia , la humildad , la sumision del difunto
me hallo tan ocupado y — = Pero bien á la autoridad Pontificia. Lo confesamos
¿no ha leido V. nada de ella? = ¡ Oh ! sí, francamente : estas palabras nos hacen es
le he dado varias ojeadas, no he podido tremecer , desearíamos que el Sr. Obispo
formarme idea cabal ; necesito mas tiem de Astorga no las hubiese entregado á la
po , pero ya veo que este señor ha puesto prensa , y mas aun que su tio no las hubie
aqui mucho trabajo. = Y ¿qué le parece se pronunciado. ¿ Cómo se ha podido com
á V. de sus doctrinas? = En cuanto á doc parar á Fenelon á un hombre tan aferrado
trinas ¿Qué quiere V. que le diga?.... á su propio parecer , que con tanto cuida
Se ha escrito tanto sobre esto.... Pero no do precave el peligro de que pudiese salir
puede negarse que el autor tiene mucho á luz una retractacion suya? Ni basta el
talento y erudicion , y que ataca á sus ad decir que él hablaba de retractacion que
versarios
leido V. tal
de pasage?=
una maneraCabalmente
terrible. = ¿ Ha
= fuese contra el dictámen de su conciencia ;
porque es evidente que lo mismo pudieran
Sabe V. lo que he leido tales reflexiones alegar los obstinados en los mas graves
que me han parecido muy sólidas : trata la errores En efecto : jamas hubo herege al
materia de una manera que me ha gus guno que no dijese que no estaba conven
tado.» cido de sus doctrinas , y que al exigirse la
De suerte que el pobre censor acosado retractacion , no respondiese que no podía
en todas direcciones se salva como puede , hacerla por ser contrario al dictámen de su
y deja á otros que den un fallo que él no conciencia. Nó : no es así como procedió
tiene necesidad de dar, y que le pondría Fenelon : no es Fenelon el modelo que te
en compromisos que no le agradan. nia ante sus ojos el Sr. Arzobispo de Pal-
Por loque acabamos de decir se echa de mira. En vano se nos dice que estaba dis
ver que nada valen los testimonios alega puesto á imitarle y aun á excederle : nada
dos con la mira, segun parece, de dar pueden las palabras contra la evidencia de
cierta importancia á las Observaciones pací los hechos. El inmortal Arzobispo de Cam-
ficas , y convencer á los lectores de que en bray no solo se retractó , sino que lo hizo
Roma se ha prohibido una obra de sanas en circunstancias muy diferentes y mucho
doctrinas y mérito sobresaliente. No es es mas aflictivas y duras, delas en que se en
te el lugar de entrar en discusion sobre contraba el Arzobispo de Palmira. No se
ella ; ni es tal el objeto que nos propusi trataba de una obra que no habia sufrido
mos al tomar la pluma para escribir algu impugnaciones, sino de un libro que habia
nas consideraciones que se nos ocurrieron llamado la atencion de la Francia y de la
al leer la mencionada Apología. ¿Cuáles Europa ; y en que Fenelon tenia por rival
el objeto del Sr. Obispo de Astorga? Si nada menos que al mismo Bossuet. Agita
vindicar la obra prohibida, muy mal cami da en Francia la cuestion , y exaltados los
no ha tomado amontonando documentos ánimos de una manera increible , fue por
donde nada se encuentra que la justifique, fin el negocio llevado á Roma , deseando
ni que aun llegue á dar una idea de la ambas partes oir el fallo de la Sede Apos
misma. Si vindicar la memoria de su tio el tólica. Inocencio XII que á la sazon se ha
Sr. Arzobispo de Palmira , por cierto que llaba gobernando la Iglesia , encargó el
tememos mucho no la haya dejado mal pa exámen preparatorio á diez teólogos de los
rada. Ya hemos dicho que de su cor mas distinguidos, los cuales despues de
respondencia con el Nuncio de S. S. se ocho meses de trabajo se dividieron en opi
desprende á las claras que no queria re niones. Cinco eran de parecer que el libro
tractarse ; y tan fija tenia esta idea que ma debia ser condenado ; los otros cinco soste
nifestó á su sobrino D. Juan Amat y á su nían que la doctrina era ortodoja.
secretario temores de que alguno quisiese Fue preciso pues revisar de nuevo el li
tal vez valerse de los ratos en que estaba I bro , examinar á fondo la cuestión que no
 — 127 —
habian alcanzado á resolver diez hombres grosas en la práctica, y aun respectiva
consumados en la ciencia teológica, y para mente erróneas.
este objeto se estableció una Junta de Car Habia llegado el momento decisivo en
denales, la cual despues de veinte y una que debia verse si la sumision que el Ar
conferencias nada decidió. El Sumo Pon zobispo habia prometido , se verificaría ó
tífice anhelando dar cima á tan arduo asun no. Luis XIV , cual si hubiese querido
to que tenia en espectativa al mundo cató apesarar mas el ánimo del afligido Prelado,
lico, formó otra congregacion compuesta procuró que la publicacion y aceptacion del
de lo mas escogido que se conocía en Roma, Breve de Su Santidad, se hiciese con todas
la que despues de cincuenta y dos confe las solemnidades imaginables, é intimó con
rencias resolvió por fin que habia proposi este objeto á todos los Metropolitanos que
ciones dignas de censura , y las designó.- congregasen sin tardanza á sus sufragáneos
Durante estos trabajos en que se gasta para aceptar solemnemente la decision pon
ron diez y ocho meses, pues que se cele tificia. Y qué hizo Fenelon en semejantes
braron todavía otras muchas conferencias circunstancias? ¿Acaso pidió explicaciones?
para tratar del modo con que debia hacerse ¿Por ventura distinguió entre las veinte y
la censura, los adversarios de Fenelon le tres proposiciones condenadas en particu
achacaban que con sus mañas é intrigas lar, y la condenacion del libro en general?
procuraba retardar el golpe que le amena ¿ Recurrió á la distincion entre el hecho y
zaba. Era esta una negra calumnia desti el derecho? ¿se valió de alguno de aquellos
tuida de todo fundamento, y diametral- efugios que tan fácilmente inventan la va
mente opuesta al carácter de Fenelon de nidad y el orgullo, cuando no quieren in
suyo cándido, ingenuo, enemigo de oscu molarse en las aras del deber? Nada de
ros manejos. Fácil es comprender cuanto eso ; haciéndose superior á las calumnias y
afectarían el ánimo del ilustre Prelado se á la befa de sus enemigos, sobreponiéndose
mejantes imputaciones ; pues por mas vir á sí mismo con admirable humildad y en
tuoso que se le suponga , natural era que tereza , prohibió á sus amigos que le de
su
te al
delicada
ver quesensibilidad
se le presentaba los ojos del fendiesen , condenó su propio libro, é hizo
sufrieseá agudamen
un edicto sobre él , subiendo él mismo al
público como un miserable intrigante. pulpito para publicarle. Héle aquí : « En
cia
que
Atendida
, exasperado
se precipitara
la humana
Fenelon
enflaqueza
el con
camino
tanta
era deinjusti-
la
temer fin libro
re- II el
Padre, carísimos hermanos
elintitulado
Papa ha , nuestro
,condenado
Explicaciones Santo
por deunlasBreve
mu

sistencia, si llegase el caso que la Sede
Apostólica condenase sus escritos.
Dcbiasele presentar al ¡lustre Arzobispo
una tristísima perspectiva cuando conside
raba el gozo, la alegría en que rebosarían
sus adversarios, al verle humillado y pre
cisado á retractarse. El amor propio que
siempre retoña por mas que la virtud se
empeñe en sofocarle , se sublevaría terri
blemente con la idea de tamaño abatimien
to, y le aconsejaría que se pusiese á la ca
beza de un partido numeroso, que con
gusto se hubiera afiliado bajo la bandera
de un hombre tan eminente.
Por fin se dió la sentencia el dia 12 de
marzo de 1699.' El Papa condenó el libro
titulado Máximas de los Santos en general ,
y veinte y tres proposiciones en particular.
En el decreto se añade que la lectura de
dicho libro podría inducir á los fieles á
errores ya condenados , y en cuanto á las
veinte y tres proposiciones se dice, que
son temerarias, escandalosas, mal sonan
tes, ofensivas de los oidos piadosos, peli-
ximas de los Santos, con veinte y tres pro
posiciones sacadas de él. Nos conformamos
con este Breve, asi en cuanto al texto del
libro , como en cuanto á las veinte y tres
proposiciones absoluta y sencillamente , y
sin ninguna sombra de restriccion. Con to
do nuestro corazon os exhortamos á una su
mision semejante y á una docilidad ilimita
da ; no sea que se altere insensiblemente la
sencillez de la obediencia que se debe á la
Santa Sede, dela cual queremos, medían
te la gracia de Dios , daros ejemplo hasta
el último instante de nuestra vida. No per
mita Dios que jamas se hable de mí , sino
para acordarse que un pastor creyó deber
ser tan dócil como la última oveja del re
baño , y que no puso ningun límite á su
sumision. »
I Cuán grande se presenta Fenelon ven
ciéndose á sí mismo de una manera tan
asombrosa ! ¡ Cuánto no hubiera crecido el
nombre del señor Amat, si hubiese imita
do tan sublime ejemplo, si despojándose
de «u amor propio se hubiese sometido lisa
 — 128 —
y llanamente á la decision pontificia , si le mo en efecto se hizo , expidiendo á conse
jos de eludir la cuestion , como lo hace en cuencia Luis XIV un decreto en que lo
su; cartas al Nuncio, se hubiese prestado mandaba. Asi se porta la verdadera humil
dócilmente á lo que de él reclamaban su dad : este es el camino, el honroso camino
deber y su misma gloria ! ¿ No quería que que resta á los que voluntariamente ó in
se le dijesen todos los errores en que in voluntariamente han caido en error ; y ya
curriera? ¿No era esta la súplica (pie diri que no se quiera llevar á tan alto punto la
gia á varios prelados? ¿ No protestaba de su humildad como lo hizo Fenelon allanándo
profunda sumision á la Sede Apostólica? se á mas de lo que se le exigía , debe todo
¿ Por qué , pues, sabiendo el juicio de esta, escritor católico someterse tan presto como
se resistía á la retractacion , y temía que la Sede Apostólica haya pronunciado su
no se la arrancasen en un momento de sor fallo. « Mi mision , decia el arzobispo de
presa , advertía del peligro á sus parientes Cambray á M. Ramsay , no fue un rasgo
y pronunciaba aquel « lo desmentiréis » que de política , ni un silencio respetuoso , sino
debieran haber ocultado cuidadosamente un acto interior de obediencia á solo Dios
los amantes de su buena memoria ? Y es que habla por la Cabeza de la Iglesia. Se
de notar que con semejante retractacion gun los principios de los católicos, he mi
no tenia que devorar el Sr. Arzobispo de rado la sentencia de la Santa Sede y delos
Palmira la humillacion á que se vió conde obispos como una expresion de la voluntad
nado el de Cambray. El Sr. Amat habia suprema, y como un eco de la voz divina.
publicado sus Observaciones pacíficas , pero No me he detenido en las pasiones, en las
no se habian levantado sobre ellas disputas preocupaciones, ni en lasdísputas que pre
ruidosas; no tenia rivales como Bossuet; cedieron mi condenacion. Oí que me ha
no se habia estado en espectatíva del fallo blaban como á Job de en medio del torbe
de Roma por espacio de diez y ocho meses; llino, y que me decían: ¿quién es el que
nadie hubiera pensado en la condenacion mezcla sentencias con discursos inconside
de la obra sino para ensalzar la humildad rados? Y respondo de lo íntimo de mi co
del Autor. Entonces se hubieran desvane razon : n pues he hablado indiscretamente
cido hasta las mas ligeras sospechas contra sellaré mis labios y callaré.» Desde enton
la rectitud de sus intenciones y la sinceri ces he mirado con desprecio los vanos efu
dad de sus palabras ; entonces se hubieran gios de la cuestion del hecho y del dere-
disipado de un soplo todas las prevenciones recho, he aceptado mi condenacion sin
contra el respetable Prelado; entonces se restriccion alguna , y no he querido ni de
hubiera podido decir : « el oro ha sido pro bido obrar de otro modo.» ¿Fue esta la
hado en el crisol, y del crisol ha salido mas conducta del Arzobispo de Palmira?
puro y brillante. » Continúa la Apología copiando un inter
Despues de una sumision tan completa rogatorio que en 1833 sufrió D. Félix
como acabamos de ver , todavía sufrió Fe- Torres Amat, electo obispo de Astorga, de
nelon nuevas humillaciones. Sabido es que parte del Eminentísimo Sr. cardenal Tibe-
hasta se puso en duda la sinceridad de tan ri , Pbro. - Nuncio de S. S., por suponérse
explícitas palabras , y en un Concilio pro le defensor de las doctrinas de su difunto
vincial celebrado por él mismo para la tío el Illmo. Sr. D. Félix Amat, arzobispo
aceptacion solemne del Breve , uno de sus de Palmira , sobre cuyo documento no
sufragáneos , el Obispo de Saint Omer, se queremos extendernos, como ni tampoco
atrevió á echarle en cara que en el edicto sobre las notas que le acompañan , por
no expresaba que se conformase de corazon parecernos que sí alguna observacion nota
á la condenacion de su obra , llegando á ble pudiera hacerse sobre ello , es de las
proponer que se suprimiesen todos los es que hemos emitido anteriormente. Por el
critos que el Arzobispo habia publicado en mismo motivo pasamos por alto la Vindica
su defensa, los cuales no habian sido pro cion del Sr. D. Félix Amat hecha por sus
hibidos en Roma. Pero llegó á tanto la hu albaccas testamentarios contra el escrito
mildad del Arzobispo, que no solo sufrió que se publicó en Barcelona , titulado :
benignamente la exageracion de su sufra « Algunas sérias reflexiones sobre la carta
gáneo , sino que apoyando la propuesta , pastoral dellllmo. Sr. D. Félix Amat, obis
procuró que la Asamblea suplicase al Rey po de Astorga, de 6 de agosto de 1812, por
que se suprimiesen todos los escritos publi B. J. C. » Al autor de dicho escrito, in
cados en defensa de la obra prohibida , co cumbe el responder á la expresada Vindi
 — 129
cacion; nosotros nada tenemos que ver con ¡ Jamás un Prelado de la Iglesia debiera
ella. Pasaremos pues, á la última parte de emplear un lenguage que usan tan á me
la Apología que contiene la explicacion que nudo los mas encarnizados enemigos de la
da á su pastoral de 6 de agosto de 1842 el Religion ! Añade el Sr. Obispo, que no
Obispo de Astorga. puede callar porque en conciencia no pue
de mostrarse sordo á la voz del Profeta que
le dice, Clama ne cesses; no era esta la voz
que oia Fenelon despues de haber sido con
denada su obra ; muy al contrario , le pa
Sentimos en el alma , que el Venerable reció segun él mismo nos refiere , que oyó
Prelado, próximo, como él mismo nos di que le hablaban como á Job, en medio del
ce , á dar cuenta de sus acciones ante el torbellino, diciéndole : «¿Quién es el que
Supremo Juez, haya preferido levantar mezcla sentencias con discursos inconside
su voz contra la prohibicion de su pastoral rados?» Y él respondió de lo íntimo de su
á una sumision humilde, que tanto hubie corazon: «pues he hablado indiscretamen
ra honrado su carácter de obispo, su saber te, sellaré mis labios y callaré.»
y sus canas. ¿Cómo es posible que el res Cuánto mejor obrara el Sr. Obispo de
petable anciano no haya tenido quien le Astorga imitando tan alto ejemplo, que no
advirtiese de que solo podia servir para arrojándose á una defensa que con el tiem
turbar la conciencia delos fieles el arrojar po podria conducirle á un abismo , que no
se un obispo á suponer que la prohibicion tachando á sus enemigos de « vanidad , de
hecha en Roma puede ser efecto de una soberbia , de hipocresía , de falso celo y
« aleve impostura , de un terrenal apego á demas estímulos de la triple concupiscen
intereses perecederos » y que el ánimo del cia , » que no exaltándose hasta tal punto
vicario de Jesucristo haya sido sorprendido por la expresada prohibicion , que dice
por los enemigos del autor de la Pastoral « que para castigo de nuestras culpas pa
hasta inducirle á que obrase «contra loque rece llegado el tiempo en que los hombres
era de esperar de su augusta mision como no pueden sufrir la sana doctrina , sino (pie te
Cabeza de ministerio sagrado, y que miras niendo una comezon extremada de oir doctri
temporales ó apasionados consejos hayan nas que lisonjeen sus pasiones recurrirán á
logrado poner en boca del Santo Padre la una caterva de doctores propios para satisfacer
aprobacion de la censura?» ¿Qué efecto sus desordenados deseos (2.° Tim. í ). »
puede producir en el ánimo de los fieles el Tan aferrado se muestra á su Pastoral ,
ver á un Obispo declamando contra lo que que afirma que despues de haber meditado
él apellida « intrigas de curiales cortesanos, mucho sobre el contenido de ella, invocan
que piensan que la piedad en una grangeria, y do fervorosamente las luces del Padre de
hablar contra la imponderable ceguedad toda ciencia , y consultado con varios pre
con que dice que oscurecen el verdadero lados y muchos varones piadosos y doctos,
esplendor del Solio Pontificio, con tal de no ha podido encontrar ni un solo pensa
saciar antiguos rencores, deprimen y ul miento , ni una sola frase , ni una sola palabra
trajan el episcopado á trueque de sostener siquiera que ofrezca fundado motivo para
arraigados abusos, con pretexto de un bri aquel severo procedimiento : todo lo atri
llo que juzgan necesario, y encienden la buye al ultramontanismo mas avanzado é
tea de la discordia entre los cristianos alar intolerante.
mando sus conciencias , si asi logran con Defiende en seguida con calor su doctri
servar una dominacion mundana?» ¿Qué na de que la pérdida de los bienes tempo
mas pueden decir los mas encarnizados rales del clero español , es una consecuen
enemigos dela Curia de Moma? Ah ! el co cia de las nuevas opiniones políticas que el
razon se aflige al ver que un Obispo excla gobierno habia adaptado; insiste en la ca
ma que « tales son los efectos del fanatismo, lificacion de mera opinion política , y sostiene
de la supersticion, que con la intolerancia el supremo derecho de la potestad civil
de un celo , que no es segun la ciencia , para dar semejante paso. Sean cuales fue
abren la puerta y preparan el camino al ren las doctrinas de S. 1. sobre los bienes
fanatismo de la impiedad. » Nunca, jamas temporales de la Iglesia, parécenos que
debiera permitirse un Obispo expresiones debia abstenerse de calificar de mera opinion
semejantes; lo decimos con dolor, pero es política la que sostiene el derecho del des-
TOMO II.en obsequio de la verdad. pojo.
preciso decirio
 130 —
Advierte el Sr. Obispo que el Domo clero español era una consecuencia de las
Fundador de nuestra Santa Religion no es nuevas opiniones políticas que el gobierno
tableció su reino sobre los caducos bienes habia adaptado ; y proponiéndose sostener
de este mundo, ni vino á fundar una do la calificacion de mera opinimi política como
minacion como la de los reyes delas nacio dice literalmente en la Apología, prueba
nes, ni aun rogado quiso mezclarse en su sentencia diciendo que no es de fe que
juzgar temporales diferencias. Cita con este el clero posea por derecho divino sus bie
objeto varios textos de los Evangelistas, nes. Aun cuando no hubiese mas que un
asegura que la tradicion constante ha veni derecho meramente humano ¿ por ventura
do enseñando esta misma doctrina , y aña no es un error suponer que se le puede
de « ser bien seguro que no se producirá atacar? Las leyes civiles constituyen un
un solo documento auténtico de las sagra derecho meramente humano, y sin embar
das letras, venerable antigüedad , ó deci go la doctrina que afirmase que es lícito in
siones de la Iglesia , donde resulte ser fringirlas no podria ser calificada de mera
dogma de fe , que por derecho divino po opjnion política , sino de error gravísimo.
sea el clero sus bienes , ni que al arreba Porque, y rogamos al Sr. Obispo que
társelos con justicia ó sin ella, sea con atienda á lo que vamos á decir , es de de
pública utilidad ó sea con daño , se haya recho divino que se ha de dar á cada uno
atacado por esta medida á la esencia de la lo que es suyo. Se ve , pues , que el origen
Religion. » Parécenos que el Sr. Obispo de divino de la propiedad es cosa muy dife
Astorga no toca en el verdadero punto de rente del derecho divino que sanciona la
la dificultad , y que traslada la cuestion á obligacion de respetarla : quien usurpa una
un terreno muy diferente del en que debe cosa aun cuando no sea adquirida sino por
agitarse. Al leer sus palabras, diríase que derecho meramente humarto , no deja por
solo se disputa si es dogma de fe que el esto de infringir la ley divina.
clero posea por derecho divino sus bienes, Demos , pues, por supuesto que el clero
y si el arrebatárselos es contra la esencia poseyese aun bienes por un derecho pura
de la Religion ó nó. Sin embargo es bien sea mente unahumano;
mera opinion
¿quiénpolítica
podrá afirmar
la que sos
que
claro que no se trata de esto, y si única
mente de saber si la doctrina que establece tenga el derecho de despojarle? Ademas
el derecho del despojo puede ser calificada ¿cómo ha podido olvidar el Sr. Obispo las
de mera opinion política ó nó. Una cosa es leyes de la Iglesia sobreeste punto? ¿cómo
preguntar si es de fe que el clero posea por ha podido prescindir de ellas de tal modo
derecho divino sus bienes , y otra es el in que no las ha recordado siquiera? ¿Tan
vestigar si es lícito ó no el despojarle de poco pesan en su ánimo las decisiones con
ellos. Estas dos cuestiones son muy dife ciliares y pontificias que contienen la doc
rentes; porque para verificarse que el des trina de la Iglesia sobre este punto? ¿ Será
pojo de un propietario es ilícito , no es me tal vez necesario apelar á las fakas decreta
nester probar que dicho propietario posea les? Nos seria muy fácil aducir innumera
sus bienes por derecho divino. ¿Acaso un bles textos que manifiestan cuál es la ense
particular cualquiera posee por derecho ñanza de la Iglesia en esta parte , pero nos
divino el dinero que lleva en la bolsa? Y contentaremos con un texto , que por cier
no obstante quién dirá que el arrebatárselo to el Sr. Obispo no podrá recusar; es nada
no sea un atentado? Aplicando á este ejem menos que del Concilio de Trento en la
plo el raciocinio del Sr. Obispo de Astorga sesion 22, capítulo 11, de Reformatione. «Si
se pudiera decir que el ladron que ha te quem Clericorum, vel Laicorum, quacum-
nido la humorada de vaciar la bolsa de su que is dignitate , etiam Imperiali , ant
prójimo, lo ha hecho por una mera opinion fiegali pra?fulgeat, in tanto m malorum
particular ; y cuando se objetase que ¿ có omnium radix cupiditas oceupaverit , ut
mo es posible calificar de mera opinion , la alicujus Ecclesia?, seu cujusvis snecularis
de que puede quitarse el dinero al prójimo? vel regularis beneficii , Montium Pietatis ,
se podría responder que no es de fe que aliorumque piorum locorumjurisdictiones,
este poseyese su dinero por derecho divino. bona,census, aejura, etiam feudalia., et
Y no se diga que nos chanceamos, pues la emphiteutica , fructus, emolumenta , seu
identidad del raciocinio no puede ser ma quascumque obventiones , qua? in minis-
yor. El Sr. Obispo de Astorga habia diche trorum , et pauperum necessitates convertí
que la pérdida de los bienes temporales del debent; per se, vel alios vi, vel
 — 131 —
Clericorum
incusso , seuautetiam
Lnicorum
per suppositas personas |j este detestable fraude y usurpacion, ó con
, seu quacumque
sintiese en ella , quede sujeto á las mismas
arte, aut quocumque qua?sito colore, in penas , y ademas de esto privado de cua
proprios usus convertere , illosque usurpa lesquiera beneficios, inhábil para obtener
re prasumpserit , seu impedire, ne ab iis, cualquiera otro , y suspenso á voluntad de
ad quos jure pertinent, percipíantur ; is su Obispo del ejercicio desus órdenes, aun
anathcmati tamdiu subjaeeat , quamdiu ju- despues de estar absuelto, y haber satisfe
risdictiones , bona, res, jura, fructus, et cho enteramente, o
redditus, quos occupaverit, velqui adeum La otra cuestion que el Sr. Obispo de
quoniodocumque, etiam ex donatione sup- Astorga pretende confundir con la princi
posite persona; , pervenerint , Ecclesise , pal es, si el arrebatar al clero sus bienes
ejusque administratori , sive beneficiato in ataca la esencia de la Religion ó no. En
tegré restituerit, ac deindeá Romano Pon primer lugar observaremos que la palabra
tífice absolutionem obtinuerit. Ouód si ejus- esencia es muy vaga, porque cada cual la
dem Ecclesise patronus fuerit; etiam jure entenderá á su modo. Si se entiende por
patrouatus, ultra prmdictas peenas, eo ipso esencia de la Religion el conjunto de sus
privatus existat. Clericus vero qui nefande dogmas , claro es que la mano que despoja
fraudis et usurpationis hujusmodi fabrica- sus ministros no destruye por esto las ver
tor , seu consentiens fuerit , iisdem pcenis dades eternas que Dios nos ha revelado;
subjaeeat; necnon qiusbu scumque beneficiis él no cuida de decidir, sino de usurpar:
privatus sit, et ad qua?cumque alia bene porque sean cuales fueren los errores del
ficia inhabilis efliciatur; et á suorum Or- que acomete la injusta empresa , no se tra
dinum executione , etiam postintegram sa- ta aquí de saber lo que piensa , sino lo que
tisfactionem et absolutionem sui Ordinarii hace; de la propia suerte que quien usurpa
arbitrio suspendatur. • lo que pertenece á un particular, no por
« Si la codicia , raiz de todos los males , esto manifiesta estar convencido de que
llegare á dominar en tanto grado á cual tenga derecho de hacerlo; las mas veces
quiera clérigo ó lego distinguido con cual obramos mal protestando nuestra concien
quiera dignidad que sea, aun la Imperial cia en alta voz contra el acto que ejerce
ó Keal, que presumiere invertir en su pro mos. Si en la palabra esencia hacemos en
pio uso, y usurpar por sí, ó por otros, con trar | disciplina de la Iglesia, y en esta
violencia, ó infundiendo terror, ó valién última comprendemos todas las leyes que
dose tambien de personas supuestas, ecle esta ha establecido, preciso es confesar que
siásticas ó seculares , ó con cualquiera otro con el despojo del clero la disciplina habrá
artificio , color ó pretexto , la jurisdiccion , sido atacada infringiéndose abiertamente
bienes, censos y derechos sean feudales ó las leyes eclesiásticas sobre este punto. Nos
enfitéuticos , los frutos, emolumentos ó abstendremos de aducir otras pruebas;
cualesquiera obvenciones de alguna iglesia, bástanos el decreto del Concilio de Trento
ó de cualquiera beneficio secular ó regular que acabamos de insertar.
de montes de piedad ó de otros lugares Pasa el Sr. Obispo á desenvolver y apo
piadosos, que deben invertirse en socorrer yar su doctrina sobre los derechos que
las necesidades de los ministros y pobres ; atribuye á la potestad suprema civil con
ó presumiere estorbar que los perciban las respecto á los bienes eclesiásticos , y asien
personas á quienes de derecho pertenecen; ta « que la potestad civil de un Estado tie
quede sujeto á la excomunion por todo el ne un derecho indisputable á dictar las
tiempo que no restituya enteramente á la leyes que en su juicio reclame la salud pú
iglesia, y á su administrador ó beneficiado blica sobrelas propiedades existentes en sus
las jurisdicciones, bienes, efectos, dere dominios , ora pertenezcan ellas á particu
chos, frutos y rentas que haya ocupado, lares , ora á corporaciones , ya sean estas
ó que de cualquier modo hayan entrado civiles, ya sean eclesiásticas,» y añade
en su poder ; aun por donacion de persona «que cuando los depositarios del poder
supuesta , y ademas de esto haya obtenido supremo de una nacion soberana é inde
la absolucion del Romano Pontífice. Y si pendiente como la nuestra, han creido que
fuere patrono de la misma iglesia quede la razon y el buen órden social pedian que
tambien por el mismo hecho privado del se pusieran en circulacion las propiedades
derecho de patronato , ademas de las penas afectas al Estado eclesiástico y acumuladas
mencionadas. El elerico que fuese autor de en iglesias y monasterios, podrán haberse
 — 132
equivocado pagando en esto un tributo á
Ia flaqueza humana ; pero el decir que esta ... mu!!.: '¡.i' ' ■ i- ■.i;'x i,, f;
doctrina y las disposiciones que en su con §1i1.
secuencia han tomado los cuerpos colegis • fqHK\\ wpolli .'n'iHn/fio) nmi 'v'tiqtmt
ladores y el gobierno, son por solo esto otros
tantos errores contra la fe católica , es eri No sabemos por qué el Sr. Obispo insiste*
gir en dogma una opinion por autoridad tanto en que cuando la caridad lo exige , se
' privada , amenguar los legítimos derechos de suponen sin valor todas las leyes humanas.
la soberanía temporal, y acusar indebida Conocidas son las doctrinas de los teólogos
mente de hereges á sus -depositarios y re sobre este punto : hay obligacion de obe
presentantes. » Dejemos á parte todo lo decer á la potestad civil cuando no maud»
relativo á los errores contra la fe católica , cosas malas ; pero la dificultad estará en
sobre lo cual hemos hablado ya mas arriba, deslindar como se debe entender esta ma
y detengámonos algun tanto en el exámen licia , y áque casos debe aplicarse. Hubiera
de estos legítimos derechos que supone el sido de desear que se esclareciese algun
Sr. Obispo de Astorga. A decir verdad el tanto la doctrina aquella de que « se debe
principio en que los apoya sirve de poco obedecer á los poderes públicos conforme á
para probar lo que intenta ; porque aun las máximas de la Santa Escritura , siempre
cuando se suponga que la autoridad civil que lo mandado por las potestades civil ó
tenga derecho para legislar sobre todos los eclesiástica no fuese contra algun manda
bienes existentes en sus dominios, no se miento de la ley de Djos. » Dice el señor
inferirá de eso que pueda lícitamente pri Obispo que dirigió estos consejos á sus dio
var de ellos á sus duenos. Si el raciocinio cesanos en las árduas y delicadas cuestiones
del Sr. Obispo de Astorga tuviese alguna eclesiásticas , que un celo no siempre discreto
fuerza vendrían al suelo todos los derechos luí suscitado en esta rpoca. Recelamos que
de propiedad , y el poder supremo civil bajo este principio de moral no puedan
quedaría erigido en dueño de todos los abrigarse culpables deferencias á la potestad
bienes de sus subditos. Podríamos decir : civil. En prueba de que no tememos sin
el gobierno tiene la facultad de legislar so fundamento vamos á aclarar nuestra opinion
bre los bienes de la nobleza ; luego puede con algunos casos prácticos. Supongamos
apoderarse de ellos : tiene la facultad de siástico
que el gobierno
Sede vacante,
mandaqueá nombre
un cabildo
para ecle-
go '
legislar sobre los bienes muebles é inmue
bles de los demas ciudadanos; luego puede bernador de la diócesis á una persona de
declararlos todos bienes nacionales, j A terminada. ¿ Podrá el cabildo obedecer la
dónde iríamos á parar con semejante doc orden del gobierno? Nosotros creemos que
trina ! Estamos seguros de que el Sr. Obis no ; y segun la doctrina del Sr. Obispo
po de Astorga rechazará tan terribles con parece que sí. Segun este señor se debe
secuencias ; sin embargo , á esto conduce obediencia á la potestad suprema civil en no
el extender á otros casos el método de ra atravesándose mandamiento de la ley de
ciocinar que él ha establecido para el pre- Dios; en este caso no existe tal manda
miento , pues lo que hay es una ley ecle
Nos permitirá tambien S. S. I. que le siástica: luego tendríamos que el cabildo
hagamos observar el triste aislamiento en podría y debería obedecer.
que se encuentra cuando se empeña en Supongamos otro caso en que el gobierno
sostener lo que él apellida legítimos derechos civil se entromete en la demarcacion delas
de la soberanía temporal. ¿Han seguido, por diócesis y manda al clero y al pueblo que
ventura, esta conducíalos demas Obispos? se conformen á sus decisiones; ¿se le de
¿ Acaso no han manifestado sus opiniones berá obedecer segun la doctrina del señor
en sentido contrario representando algunos Obispo? Parece que sí ¡porque no se opon
de ellos al (Jobierno con mucha dignidad y dría á ello un mandamiento de la ley de
energía ? Tratándose de un Episcopado tan Dios, sino los cánones de la Iglesia. Verdad
sabio , tan virtuoso , tan desprendido como es que se nos podrá objetar que en este caso
el español , no es nada consolador para un habría la nulidad de jurisdiccion, y que por
Obispo el hallarse solo , en asunto de tama consiguiente no podrían darse por válidos
ña importancia. los actos que adoleciesen de este vicio ra
dical , pero tendríamos al menos que en
todo cuanto se pudiese referirá ley positiva
 — 133
de la Iglesia , ya sea dando la jurisdiccion, hu
ya anulándola en tal ó cual supuesto , se eos y Arelados encausados y condenados si
debería considerar la ley como de ningun hubiesen podido adoptar la doctrina de que
valor, y por tanto se abriría ancha puerta debian obedecer, en no llegando la maldad
para que el pueblo, el clero y los obispos del gobierno á las extremidades de exigir
se acomodasen á todo. Para hacer sentirla los horrorosos sacrilegios que pone por
fuerza de estas observaciones presentaremos ejemplo el Sr. Obispo de Astorga.
otro ejemplo. Admíranos algun tanto el ardor con que
Demos que el gobierno se hubiese em emprendeS. S.l. la defensa de los cuerpos
peñado en quitar todas las reservas ponti colegisladores y del gobierno con respecto
ficias conminando con terribles penas á los á los asuntos eclesiásticos cuando dice : »la
que se opusiesen á su voluntad ; ¿se le de certeza es en efecto,
y catolicidad
una de todo lo expuesto
bería obediencia ? Segun el Sr. Obispo ánada miras siniestras contra
deje
calumnia
ladefe ser
de
, el, lacomo
a tribuir
Iglesia
lo
parece que sí; porque la reserva pontificia
no es un mandamiento de la ley de Dios ,
es una ley eclesiástica, y por lo misino no todas las leyes y órdenes sobre asuntos ecle
impediría que se debiese prestar obediencia siásticos dadas en esta época por los cuerpos
al gobierno. colegisladores y el gobierno de nuestra
Otro ejemplo: Demos que á un gobierno cara patria : calumnia hija si nó de un co
se le hubiese ocurrido quitarnos la obliga razon malvado, de una ignorancia grosera:
cion de oir misa en los dias festivos , de calumnia fomentada tiempo hace por espa
ayunar en la cuaresma , de abstenernos de ñoles bastardos, que de consuno con los
ciertos manjares en tal ó cual tiempo. Claro enemigos de nuestros glorias , se esfuerzan
es que cada uno en su casa hubiera podido en oscurecerla brillantez de nuestro carác
hacer de la peregrina dispensa el uso que ter religioso , y en alarmar las conciencias
bien le habria parecido, segun la mayor ó de los sencillos, para encender de nuevo
menor anchura de su conciencia; pero pre latea mal apagada de la discordia.» No
guntaremos si el pueblo, si el clero, si los extrañaríamos que el Sr. Obispo recomen
obispos habrían tambien estado obligados dase la templanza en las censuras que se
áofrecer
menos
obedecer
en
peligro.
losal casos
gobierno
Segun
que
el en
Sr.
hubiesen
esta
Obispo
parte
podido
parece
, al . I nerno ,
compren Lpie podrían obrar
en ello motivos de caridad , y el temor de
que sí , pues que no se opouia á ello un exasperar en demasía los ánimos acarrean
mandamiento de la ley de Dios, sino un do mayores conflictos. Pero lo que se nos
precepto eclesiástico; y asi un fiel convida hace e xtraño es que califique de atroi ca
do á uno de esos festines que tanto abun otras denominaciones
de grosera igiujrancia
por este
, y tenor,
tache con la
dan en nuestros tiempos, habria podido
comer carne hasta en viernes de cuaresma, opinion de aquellos que atribuyen á miras
si por allá hubiese andado algun depen siniestras contra la fe de la Iglesia las leyes
diente de la autoridad. y órdenes del gobierno sobre asuntos ecle
Lo diremos francamente: nosotros en siásticos dadas en esta época. Verdad osque
tendemos la obligacion de obedecer á las el Sr. Obispo intercala la palabra todas y
potestades civiles en sentido muy diferente. la pone en letra cursiva, para templar al
Creemos que es lícito decirles no quiero ni gun tanto la acritud de lo que va á decir,
puedo obedeceros en muchos casos que no y dejarse esta restriccion para el caso en que
sean tan apurados cual los supone el señor se le reconvenga por semejantes expresio
Obispo, como de que se nospidiese la inob nes. Mas cualquiera que lea el pasage verá
tico
servancia
como testimonio
de un mandamiento
de apostas•a
divino
ó desprecio
ó eelésias-
de en él una ardiente defensa del gobierno y
de los cuerpos colegisladores en lo tocante
la religion inmaculada de Jesucristo, o que se á los negocios eclesiásticos, asi como una
nos exigiese que pisásemos la imagen del Sal acérrima acusacion de todos los que se
vador ó la Sagrada Eucaristía etc. etc. Si solo opongan á tales innovaciones. Los Becerras,
para estos extremos estuviese reservada la los Alonsos y cuantos han afligido la Iglesia
desobediencia , muy desahogada seria la española, si se hubiesen propuesto arrojar
posicion del pueblo cristiano , del clero y negras manchas sobre los quf combatían
críticas circunstancias
de los obispos aun en ; por
mediocierto
deque
lasnomas
se |j sus
brasproyectos,
mas duras que
no habrían
las empfeadas
encontrado
por S. pala-
S. 1.
 — m
En tan breves líneas se halla la inculpacion «autor católico que sea de buena fama y
de atroces calumniadores, de ignorantes «nombre esclarecido, ya por otros libros
groseros, si no de corazones malvados, de »que haya dado á luz, ya tal vez por el
españoles bastardos, de conjurados con los «mismo que se va á examinar, y sea coo-
enemigos de nuestras glorias, de perturba «veniente su prohibicion , téngase muy
dores de las conciencias, de atizadores de «presente la costumbre ya de antiguo ob-
la discordia civil. ¡ Cuán doloroso es ver á «servada , de prohibir el libro añadiendo la
un Prelado de la Iglesia exaltarse hasta tal «cláusula de hasta que se corrija, ó hasta que
punto! Y para qué? Para ponerse del ase le expurgue : pero siempre que esto
lado de hombres, cuyos actos han merecido «pueda tener lugar, y noobste algun grave
la reprobacion dela Santa Sede, la de todo «inconveniente para hacerlo así en el caso
el Episcopado español , la del clero , la de «de que se trate. Añadida empero á la pro-
todos los partidos, exceptuando aquellos «hibieion dicha cláusula, aun entonces no
pocos hombres que se han complacido en «se publique desde luego el decreto, como
ver escenas tan crueles y escandalosas. «que suspendiéndose su publicacion, deberá
- «antes tratarse el asunto con el autor, ó
' «con cualquiera otro que haga sus veces,
§ IV. «indicándole lo que hubiese de borrarse,
«mudarse ó corregirse. Y si nadie compa-
«reciese en representacion del autor de él,
Vuelve el Sr. Obispo de Astorga á la »ó él que le representa resistiese á hacerla
prohibicion de las Observaciones pacíficas «correccion impuesta , pasado el tiempo
acharándola á miserables intrigas y defen «correspondiente expidase el decreto. »
diendo el haberla recomendado á sus dio (Bened. XIV , Constituc. cit. , § 9).
cesanos como obra llena de saludables Aquí habla Benedicto XIV de aquellas
máximas para nuestra situacion actual. Aña obras que se han de prohibir con la cláusula
de que algunas de dichas intrigas « resaltan hasta que se corrija, ó hasta que se le expurgue;
muy de bidto en la correspondencia del y el Pontífice preveia muy bien que podrían
autor con el Sr. Nuncio, la cual dice que por ocurrir casos en que esto no fuese posible,
decoro de algunos altos funcionarios de como por ejemplo , si una obra estuviese
Roma dejóde publicar en la vida del señor llena de errores en todas sus partes, ó bien
Arzobispo Amat, pero que la publica ahora el espíritu general que en ella reinase fuese
ya que desgraciadamente le ha puesto en propio á inducir en error ó escandalizar á
(a necesidad de hacerlo el manifiesto empeño los fieles; pues que añade la restriccion,
de desacreditar á dicho Prelado y á cuan «pero siempre (pie esto pueda tener lugar,
tos siguen su sólida y sana doctrina que con y no obste algun grave inconveniente para
afan se procura ahuyentar de nuestros hacerlo así en el caso de que se trata. «Pre
Seminarios y Colegios, y hasta de las Uni guntaremos ahora ¿se hallaban en este caso
versidades. » Hemos leido la corresponden las Observaciones pacificas? Creemos que nó,
cia publicada , y no hemos acertado á ver pues que no sabemos que á la prohibicion
las miserables intrigas que tanto se nos pon se añadiese la cláusula hasta que se le ex
deran; lo quesí hemos visto es queel señor purgue. La prueba de que la expresada bula
Arzobispo no tenia muchas ganas de re no favorece mucho el intento del Sr. Obis
tractarse, y esto no daña al buen nombre po de Astorga se halla en el siguiente pár
de algunos altos funcionarios de Roma, y rafo en que lamentándose de que el Papa
favorece muy poco al difunto Arzobispo. no reprobase absolutamente las prohibicio
Para demostrar lo anti-canónko é ilegalde nes hechas sin citacion de parte, dice:
la prohibicion y tranquilizar completamente « Quien quiera que sepa el ascendiente de
la conciencia de los que no conociendo á la Curia y Corte Romana , devota en gran
fondo esta clase de materias diesen la obra manera del sistema inquisitorial, sobre los
por bien prohibida, traslada algunos perío Pontífices de las mas sanas intenciones , no
dos de la Constitucion Sollicita ac prouulaáv estrañará que la Santidad de Bencdicto XIV
Benedicto XIV ; y de ellos intenta inferir no se atreviera ó. condenar expresamente una
lo que ciertamente no se infiere. Hé aqui práctica tan poco conforme con lo que dicta
las palabras del Pontífice tales como se leen la equidad y aun el derecho natural de la
en la expresada Apologfa. defensa , y (pie adujese para cohonestarla
« Siempre que se trata de un libro de
 — 135 —
bre. » Lástima causa el ver que el Sr. Obis un término pacífico en todas nuestras fu
po , dominado por la idea de defender su nestas divisiones, y de una sólida concordia
Pastoral y las obras de su tio , pasa por en de la católica España con la cabeza visible
cima de cuanto encuentra que sea obstáculo, de lá Iglesia, han podido acaso lastimar la
no escaseando á los que él llama sus ene exquisita susceptibilidad de los modernos
migos , las mas denigrantes calificaciones. disciplinistas romanos, y que ellos las ha
Pero apenas es dable contener la indigna brán hecho aparecer á los ojos de Su San
cion al oirle presentará los Pontífices como tidad como hijas de un espíritu hostil , dia-
dominados por el espíritu de lo que él ape metralmente opuesto al de paz y caridad
llida sistema inquisitorial , y decirnos que que las animaba ; y añade: .(pero cualquiera
un Papa tan virtuoso y tan sabio como Be que sea la interpretacion que la ignorancia
nedicto XIV, no se atrevió á condenar ex ó la malicia les haya podido dar , no es un
presamente una práctica tan poco conforme arcano , y sí mas bien un hecho público ,
con loque dicta la equidad y aun el derecho constante y de notoriedad histórica , que
natural de la defensa, y que adujo para nuestra España fue de las últimas naciones
cohonestarla razones no muy dignas de su cristianas que sufrieron en su Episcopado
esclarecido nombre. ¿Cómo ha podido des el despojo de su antigua disciplina , como
lizarse el Sr. Obispo de Astorga hasta un es de igual notoriedad la forma en que se
extremo tan deplorable? ¿Cómo ha podido confirmaban los Obispos, y se terminaban
presentarnos á un Papa tan grande como dentro de sus respectivas provincias muchas
Benedicto XIV, haciendo traicion á su con de las causas que con el nombre de mayores
ciencia , no atreviéndose á decidirse por la se introdujeron con ocasion de las falsas
equidad y por el derecho natural de defensa, decretales isidoríanas. » Parécenos que en
y abusando de su talento en busca de ra este lugar incurre el Sr. Obispo en el mismo
zones que cohonestasen la injusticia? ¿Sabe defecto de raciocinio que le hemos notado
el Sr. Obispo de Astorga de quién habla ? ya en otra parte ; á saber : el cambiar en
Lo sabe de cierto , y no puede ignorar que teramente el estado de la cuestion , supo
ha tomado en boca un nombre esclarecido; niendo que esta versa sobre un punto que
uno de los mas bellos ornamentos del sa nada tiene que ver con ella.
cerdocio católico ; uno de sus mas ilustres En efecto , no se trata de saber cuáles
Obispos; uno de los Papas mas eminentes ; han sido las mudanzas que se hayan intro
uno de los sabios mas distinguidos de los ducido en la disciplina con respecto á la
tiempos modernos; uno de los Pontífices confirmacion de los Obispos, ni dela in
mas virtuosos que ilustraron la cátedra de fluencia que sobre esto hayan podido ejer
San Pedro ; un hombre cuyas altas calida cer las falsas decretales : no es esto lo que
des respetaron los protestantes mismos, y se ventila , sino que únicamente se debe
de cuya presencia y conversacion salían en examinar si es digno de censura el que un
tusiasmados los que tenian la dicha de ha Obispo español y cabalmente en el año 18-42,
blarle. haya dicho « que no habría felizmente la
extrema hecesidad de valernos , ni una sola
§ V. vez, para tener Obispos, de la disciplina
general observada en nuestra España hasta
el siglo XIV de acudir por las confirmacio
Despues de haber hablado del pase que nes al Metropolitano ó á veces al Primado
se necesita en España para que puedan pu de Toledo ó Tarragona, ó al Obispo anti
blicarse esta clase de prohibiciones, continúa quior. » En estas palabras se trasluce la opi
defendiendo su Pastoral del cargo que se le nion de que puede llegar un caso de extre
pudiera hacer por haber dicho en ella que ma necesidad en que podamos dispensarnos
«no habría felizmente la extrema necesidad de acudir á Roma para la confirmacion de
de valernos ni una sola vez para tener obis los Obispos , pudiendo contentarnos con la
pos , de la disciplina general observada en autoridad del Metropolitano ó del Primado
nuestra España hasta el siglo XIV de acu de Toledo ó de Tarragona , ó del Obispo
dir por las confirmaciones al Metropolitano, antiquior. ¿Qué tienen que ver con esto las
ó á veces al Primado de Toledo ó de Tarra mudanzas que hayan ocurrido en la disci
gona ó al Obispo antiquior. » Dice el señor plina con respecto á dicho punto? La disci
Obispo que estas palabras dictadas por el plina universal de la Iglesia no puede ser
sincero deseo que le animaba y le anima de I modificada por ninguna iglesia particular ¡
 — 136 —
jo de todas las cuestiones da , 1 1 magis eisdem locis utilis atque
que se quieran entablar sobre el modo con a esse videbitur; ita tamen, ut
que antiguamente se hacia la confirmacion deinde hoc examen, seu, inquisitio
de los Obispos, no puede la Iglesia de Es de persona promovenda perfecta fuerit, ea
paña ni otra cualquiera, cambiar la disci in instrumentum publicum redacta , cum
plina umversalmente establecida, por la toto testimonio , ac professione fidei ab eo
cual la confirmacion de los Obispos está re facta ; quamprimúm ad Sanctissimun Ro-
servada al Sumo Pontífice: todo cuanto se manum Pontificem omninó" transmitatur :
hiciera en este sentido seria nulo y de nin ut ipse Sumirías Pontifex, plena totius negotü.
gun valor. Los Obispos no siendo confir ai' personarían riotitia habita , pro gregis Do-
mados por la Santa Sede serian intrusos; minici commodo de Mis, siidonei per examen,
su autoridad no podria ser reconocida por sen per impiisitionem factam reperti fuerint ,
ningun fiel; serian lobos y nó pastores , que edeisis possit utilius providere. Omnes vero
dando las infelices iglesias entregadas á los inquisitiones , informationes , testimonia, ac
horrores de un cisma. Esta disciplina uni probationes qoa?cumque de promovendi
versal de (pie estamos hablando sea cual qualitatibus, et ecclesia? statu á quibuscum-
fuere el origen (pie quiera atribuirle el que , etiam in Romana Curia habita?, per
Sr. Obispo de Astorga , está expresamente cardinalem, qui relationem facturus erit in
reconocida y sancionada por el Concilio de Consistorio, et alios tres Cardinales diligen
Trento; venia sesion 24, cap. de Re- tes examineotur ; ac relatio ipsa Cardinalis
formatione , indica con bastante claridad el relatoris , et trium Cardinalium subscrip-
Concilio hablando de la creacion de los tione roboretur; in qua ipsi singuli quatuor
Obispos y Cardenales, que los que inter Cardinales afiirment , se adhibita accurata
vienen en el nombramiento de ellos tienen diligentia , invenisse promovendos qualita
este derecho de la Sede Apostólica. tibus á jure, et ab hac sancta Synodo re-
« Omnes vero , et singulos , qui ad pro- quisitis, preditos ; ac certo existimare sub
motionem prajficiendorum , quodcumque periculo salutis a'terna; idoneos esse, qui
jus , quacumque ratione, a Sede Apostolica Ecclesiis praMiciantur : ita ut relatione in
habent, aut alioquin operam suam precstant, uno Consistorio facta, quó maturius interéa
nihil
innovando
in iis ,pro
hortatur
pra?senti
et monet
temporum
etc ratione
» de ipsa inquisitione cognosci possit, in aliud
Consistorium judicium difl'eratur; nisi aliud
» Y exhorta y amonesta á todos , yá cada Beatissimn Pontifici videbitur expedire.»
uno de los (pie gozan por la Sede Apostólica « Y por cuanto para tomar informes de
de algún derecho, con cualquier fundamento todas las circunstancias mencionadas, y el
que sea , para hacer la promocion de los grave y correspondiente testimonio de per
ipie hayan de elegir, ó contribuyen de otro sonas sabias y piadosas , no se puede dar
cualquier modo á ella etc..» para todas partes una razon uniforme por
Despues individualizando las diligencias la v ariedad de naciones , pueblos y costum
que han de practicarse para hacer buenos bres ; manda el Santo Concilio , que en el
nombramientos, quiere (pie todo se someta Sínodo provincial que debe celebrar el Me
al juicio de la Sede Apostolica, y por fin tropolitano, se prescriba en cualesquiera
concluido el negocio , quiere que el Sumo lugares y provincias, el método peculiar
Pontífice, en vista de las noticias que se le de hacer el exámen, ó averiguacion ó in
ofrezcan , provea á las Iglesias en beneficio formacion que pareciere ser mas útil y con
de la (irey del Señor. Véase como habla el veniente á los mismos lugares ; el mümo
Concilio en el mismo lugar ya citado. que ha de sel' aprobado á arbitrio del Santísi
« Quoníam vero insumendo de pra?dictis mo Pontífice Romano: con la condicion no
omnibus qualitatibus gravi , idoneoque ho- obstante que luego que se finalice este exi
norum , et doctorum virorum testimonio, men ó informe de la persona que ha de ser
non uniformis ratio ubique ex nationum, promovida se forme de ello un instrumen
populorum , ac morum varietate potest ad- to público , con el testimonio entero , y con
hiberi ; mandat Sancta Synodus, ut in pro- la profesion de fe hecha por el mismo elec
vinciali Synodo, per Metropolitauum ha- to , y se envie en toda ¡
benda, prescribatur quibusque locis, et mano, mayor diligencia
para (pie tomando
al San Su Santidad ple
provinciis propria examinis, seu inquisitio-
nis, aut instructionis facienda? forma, Sanc- no conocimiento de todo el ne¡.
tissimi Rouiani Pontificia arbitrio approban- las personas pueda proveer con I
 — 137 —
en beneficio de la grey del Se confirmacion de los Obispos sin contar con
ñor, si hallase ser idóneos los nombrados el Papa? La extrema necesidad. «Hace
en virtud del informe, y averiguaciones muchos años, decían, que est.m interrum
hechas. Mas todas estas averiguaciones, in pidas nuestras relaciones con la Corte de
formaciones, testimonios y pruebas, cua Roma : muchas iglesias se hallan viudas de
lesquiera quesean, sobre las circunstancias sus pastores : semejante estado no puede
del que ha de ser promovido, y del estado continuar sin que resulten gravísimos da
de la Iglesia hechas por cualesquiera per ños; » é inferían de aquí que habia llega
sonas que sean, aun en la Curia Romana, do el caso de extrema necesidad , y que
se han de examinar con diligencia por el por consiguiente era lícito apartarse de la
Cardenal que ha de hacer la relacion en el disciplina universal y contentarle con recur
consistorio y por otros tres Cardenales. Y rir al Metropolitano, ó al Primado, ó al
esta misma relacion se ha de corroborar Obispo antiquior.
con las firmas del Cardenal ponente , y de otivo la Cor
los otros tres Cardenales , los que han de te de Roma por la gravísima indicacion he
asegurar en ella cada uno de por sí, que cha por el Sr. Obispo de Astorga ; debió
habiendo hecho exactas diligencias, han suponer que cuando un Prelado se aven
hallado que las personas que han de ser turaba á estampar semejantes palabras en
promovidas, tienen las calidades requeri una Pastoral , debia de haberlas meditado
das por el derecho, y por este Santo Con mucho, y por consiguiente debían de ser
cilio, y que ciertamenie juzgan so la pena la expresion de convicciones ó designios. Y
de eterna condenacion , que son capaces de empleamos la palabra desiiInios, porque no
desempeñar el gobierno delas iglesias áque siendo una Pastoral un tratado de cánones,
se les destina : y esto en tales términos, que no se ventilan en ella puntos de doctrina á
hecha la relacion en un consistorio, se di la manera que se hace en las escuelas, si
fiera el juicio á otro ; para que entre tanto no que en tales escritos todo tiene un ca
se pueda tomar conocimiento con mayor rácter eminentemente práctico , de aplica
madurez de la misma informacion ; á no cion inmediata, pues que no es regular que
parecer conveniente otra comí al Samo Pontiftce. » el Pastor se ocupe de apacentar sus ovejas
Se nos objetará tal vez que el Sr. Obis dándoles un pasto de que no hayan de
po habla del caso de extrema necesidad, al hacer uso, antes es probable que las ilus
cual no deben aplicarse las leyes tre sobre los casos que pueden ocurrir in
y si se recuerda que S. S. 1. ha dicándoles la conducta que deben observar.
el principio de que en atravesándose la ca Consolámonos con la idea de que el se
ridad desaparecen las leyes humanas , des ñor Obispo de Astorga no abrigaba en
envolviéndole de una manera muy lata, esta parte intenciones dañadas : quere
resultará que quizás opinaba tambien que mos persuadirnos que en un momento de
siendo en su concepto la confirmacion de irreflexion escribió aquellas malhadadas
los Obispos por el Papa de derecho ecle palabras, no reparando bastante en las in
siástico, se podia en casos de extrema ne terpretaciones á que ofrecían lugar , y al
cesidad prescindir de esta ley y atenerse á alcance funesto que ya de suyo tenían. Pe
las prácticas antiguas. No pueden tener ro ya que S. S. 1. se ha incomodado tanto
otro sentido las indicadas palabras de la por la censura desu Pastoral, y no encuen
Pastoral , pues que si el Sr. Obispo de As- tra ni una palabra, ni ana frase que haya
torga hubiese creido que segun derecho no podido merecer este severo juicio , le roga
podia nunca v enir semejante necesidad , no remos que se olvide por un momento que
habria dicho que esperaba que no vendría. se trata de su persona, y que él es llama
Para comprender el abistno á donde nos do á emitir su fallo sobre las mismas ex
conduce semejante doctrina basta atender presiones pronunciadas por otro Obispo en
á las siguientes preguntas. ¿Cuáles este otro reino. Suponga, por ejemplo, que
caso de extrema necesidad? ¿A quién cor hay un pais que por espacio de largos años
responde determinarlo? Desearíamos saber ha estado sufriendolos males de una guer
cómo se responde á una cualquiera de es ra civil y de una revolucion ; que durante
tas dos cuestiones sin abrir ancha puerta al este tiempo se ha desencadenado el espíri
cisma. tu del error y atacado en todas direcciones
en ¿Qué
España es lo
pretendían
que alegaban
que selospasase
pocos áquela || el dogma cismáticas
doctrinas y disciplinay di'revla Iglesia; que las
 — 138 —
llegado repetidas veces ala cumbre del po esteseria negocio.
su parecer
No sidudamos
se le consultase
que miraría
sobre
las
der , y agitando con funesto vértigo á los
supremos gobernantes, los han precipitado cosas bajo el mismo punto de vista que se
por caminos que conducen al cisma ; su habian mirado en Roma , y que si no daba
ponga que las relaciones de aquel Reino por maliciosa la indicacion del Prelado, á
con la Santa Sede han estado interrumpi lo menos no dejaría de calificarla con algu
das por largo tiempo, y lo estan todavía, na severidad.
y que en época no muy distante el Sumo Creemos haber presentado la cuestion
Pontífice ha levantado la voz quejándose tal como se debia presentar : para resolver
de los desmanes de la potestad civil contra la apelamos á la rectitud del mismo Señor
la autoridad y los derechos de la Iglesia , Obispo de Astorga ; á él le deseamos por
y que el gobierno lejos de procurar la re juez en su propia causa ; no dudamos que
conciliacion ha contestado á la alocucion si reflexiona bien sobre lo que acabamos de
pontificia en términos duros, insultantes y decir, se reprenderá á sí mismo en su con
amenazadores. Suponga ademas que se han ciencia. Por lo demas, repetimos que nos
concebido varios proyectos para trastornar complacemos en no suponer malicia en
completamente la disciplina de la Iglesia, aquellas palabras; creemos que si hubiese
y romper los vínculos que la unen con la llegado el caso de arrojarse el gobierno á
Cátedra de San Pedro, y que estos proyec una medida semejante , el Sr. Obispo de
tos no solo han salido de la pluma de es Astorga no se habría olvidado ni por un
critores particulares, sino que han dima momento de sus deberes, y que se habría
nado del mismo gobierno , y han sido so verificado lo que anunciábamos en otra par
metidos á la discusion y aprobacion de los te cuando tratando de este mismo negocio,
cuerpos colegisladores. Suponga que en despues de aludir á las palabras del Señor
circunstancias tan críticas y alarmantes un Obispo de Astorga , bien que sin nombrar
Obispo individuo del alto cuerpo colegisla le, decíamos: «Al tratarse del arreglo de
dor , personage que está en íntimas rela los negocios eclesiásticos, y de las desave
ciones con los primeros funcionarios del nencias de la Corte de Roma , han hablado
Estado , un hombre anciano , encanecido algunos de necesidades extremas, de restable
en la carrera de las ciencias y de las letras, cimiento de la antigua disciplina, de confirma
y á quien por tanto se le debe suponer muy cion de los obispos por el metropolitano , recor
cauto y mesurado en cuanto escribe para dando hechos intempestivos , y permitién
el público, y muy sagaz para prever todo dose indicaciones altamente dañosas. Lo
el alcance de una indicacion en gravísimas hemos dicho y lo repetimos, no se trata de
materias ; suponga , repetimos, que este investigar cuáles son las modificaciones que
Prelado en quien se reúnen tantas circuns sobre puntos semejantes haya podido sufrir
tancias , y hallándose en la misma capital la disciplina de la Iglesia, sino de saber
de aquel reino, dirige á sus diocesanos una cuál es la actual, dela que no es lícito des
Pastoral en que defiende al gobierno contra viarse : no se trata de traer á colacion par
los que le atacan por sus medidas en los ticulares rencores ó resentimientos en los
asuntos eclesiásticos, en que se lamenta en que nada tiene que ver el público , sino de
sentidas palabras de que en Roma se haya buscar los medios á propósito para tranqui
prohibido una obra de su tio á quien ma lizar las conciencias , y asegurar sobre ba
nifiesta el mas encarecido amor. Suponga ses sólidas la paz de la nacion. Que no lo
por fin que en esta misma Pastoral , donde olv iden los hombres que en adelante hayan
se hallan tantos indicios de que su autor de mediar en este gravísimo negocio; mien
estaba resentido de la conducta de Roma, tras no se eleven sobre esa esfera , que lo
llega á indicar que puede venir un caso de menos malo que tiene es el ser mezquina ,
necesidad extrema en que sea lícito pres nada se conseguirá , no será posible dar un
cindir de la confirmacion de los Obispos paso en el camino de la reconciliacion
hecha por el Sumo Pontífice : ¿ no le pa deseada.
recería que semejantes palabras no fueron «Aun prescindiendo de los principios de
pronunciadas al acaso? ¿No concebiría al dogma y de disciplina, aun dejando aparte
gun temor de que expresaban algun desig el cisma, el evidente cisma en que se preci
nio de mucha gravedad y de trascendenta pitaría la Iglesia española si consintiese la
les consecuencias? Examine S. S. I. todas alteracion de la disciplina univ ersal sobre el
las circunstancias de este caso , y vea cuál negocio de la confirmacion de los obispos ;

I
 — 139
por un momento la afliccion se sentaría en la cátedra episcopal , siendo
acongoja á todo espíritu católico á la de continuo una manzana de discordia y
sola idea de que pudiera intentarse un pa una piedra de escándalo. Y acaeciendo lo
so tan criminal; parécenos imposible que mismo no tan solamente en esta ó aquella
semejante medida ocurra como realizable á diócesis, sino en casi todas las de España,
nadie que conozca medianamente la situa pues son ya muy pocas las que no cuentan
cion de España. En efecto, suponed que ó difunto ó ausente su legítimo pastor,
se acomete la desatentada empresa , que ¿quién no concibe el desorden, la confu
se procede á la confirmacion de los obis sion , el caos que se introduciría por todas
pos por medio de los metropolitanos. En partes? i cuánta turbacion de conciencias !
primer lugar, ¿cuáles serán los metropo ¡ cuántos y cuán violentos esfuerzos para
litanos que á tanto lleven su atrevimiento , sostener la desatentada medida ! ¡ cuántas
que hasta tal punto prostituyan su con delaciones , cuántos procesos . cuántas per
ciencia, que de tal suerte arrostren la fea secuciones, cuántos desastres ! Vano fuera
responsabilidad en que incurren á los ojos hablar de necesidades extremas , vano recor
de Dios, de la Iglesia y de la nacion? ¿co dar la antigua disciplina , vanos todos los
noceis muebos metropolitanos, ni lo que preámbulos de los decretos en que se pres
se llama ohupos antiqttiores , que á esto se cribiese la sumision á los intrusos; vanas
prestasen? Difícil es penetraren el corazon todas las pláticas y pastorales y discursos
de los hombres; solo Dios sabe lo que al de estos para convencer de su legitimidad ;
canzarían á recabar las promesas ó las mil y mil plumas demostrarían la infrac
amenazas; pero nosotros tenemos la firmí cion de los sagrados cánones , la subversion
sima conviccion de que fueran muy conta de la disciplina , el quebrantamiento de la
dos : y abrigamos la esperanza de que no unidad; mil y mil lenguas se emplearían
se hallaría ni uno solo. Sí , ni uno solo ; pública ú ocultamente en combatir el fu
porque sean cuales fueren las doctrinas nesto error; y el pueblo español, católico
particulares que profese esta ó aquella per por ideas , por costumbres , por hábitos ;
sona , cuando se llegaría al caso de apli este pueblo dotado por la Providencia de
carla, cuando se alzaría la voz del vi un admirable tino para discernir al lobo
cario de Jesucristo condenando el atentado aun cuando se cubra con la piel de oveja :
y á los que de él se hiciesen cómplices, el pueblo, repetimos, dirigiéndose á los
cuando de todos los ángulos de la nacion falsos pastores les diría ; « nosotros no sa
eminentemente católica se levantaría un bemos de estas cosas tanto como vosotros ;
grito de reprobacion y de horror, cuando pero lo que no podemos ignorar es, que no
la totalidad del clero, fiel á sus deberes, os hemos visto entrar por la puerta ; y
se resignaría al destierro antes que hacer quien por ella no entra, es un ladron, se
traicion á su conciencia , entonces , no lo gun la enseñanza del Divino Maestro.»
dudamos , tambien se sentiria detenida la Despues de estas aclaraciones échase de
mano preparada para consumar el sacrile ver quede nada sirve loque añade el señor
gio, tambien el hombre, extraviado cejaría Obispo de Astorga sobre lo que dijo el se
del camino de perdicion , y se reuniría de ñor Arzobispo de Granada en el Concilio
nuevo al redil de la Iglesia , si es que por losde
residencia
Trento
ebispos,relativamente
por
ni derecho
lo que decía
divino,
á la elautoridad
yObispo
la ley de
algunos momentos en su corazon se hubie
se Hartado de ella.
« Pero , demos por supuesto que no se (¡uadix , ni el teólogo Fray Pedro de Soto
verificase de esta suerte, y que ademas y otras especies por este tenor ; pues aue
hubiese algunos hombres bastante obceca repetimos que no se trata aqui de ventilar
dos para recibir la confirmacion de una cuestiones canónicas , sino de calificar las
mano cismática; ¿qué sucedería? Cuando expresiones vertidas en la Pastoral, consi
se presentarían álas diócesis para regir una derándolas tales como son en sí , con rela
grey que no les fuera encomendada por el cion á las circunstancias en que se escri
Espíritu Santo ¿cómo los mirarían los pue bieron , y á los resultados á que podían
blos? ¿cómo se acatarían sus disposiciones? conducir.
ni los sacerdotes ni los fieles consentirían en Mirada la cosa bajo este punto de vista
rendir obediencia aun intruso, que sin mas difícilmente podrá persuadir el Sr. Obispo
mérito que su ambicion, ni mas títulos que de Astorga que la razon esté de su parte :
los librados por potestades incompetentes , creemos que c
 — 140 —
conseguirlo , pondrá su causa de peor senista , decia en sus reflexiones acerca del
mencionado hecho, entre otras cosas lo si
Concluida la tarea de defenderse del guiente : «¿Qué diria Inocencio Xll que
modo que acabamos de ver tocante á las «para prevenir los escándalos y discordias
citadas expresiones de su Pastoral, conti «que desgarraban la paz de la Iglesia, pro-
núa el Sr. Obispo diciendo : « Pero es en «hibió expresamente (en 1694) (1) que
vano que yo me fatigue buscando los pre «ninguno fuese infamado con el nombre
textos que hayan servido para sorprender «y acusacion vaga de Jansenista, mien-
el ánimo de nuestro Santísimo Padre , in «tras no -constase legítimamente que era
duciéndole á acceder á que se impusiese á «sospechoso de sostener alguna de las cin-
mi Pastoral su no merecido anatema. Si el »co proposiciones de Jansenio?.... Yo qui-
hecho es cierto, como me inclina á creerlo «siera saber qué es lo que entienden por
mi larga experiencia del mundo y lo ocur «Jansenismo los que profieren esta pala-
rido con el virtuoso Arzobispo de Palmira, «bra hasta ahora no sé mas sino que
es para mí muy probable que mis enemi «solo es Jansenista el que sostiene alguna
gos, enemigos tambien de la verdad, por «de las cinco proposiciones de Jansenio ; y
que combate victoriosamente los abusos, «sé tambien que se calumnia con este nom-
me habrán presentado á los ojos del Sumo «bre etc.»
Pontífice con la calificacion de Jansenista. Estamos de acuerdo con S. S. I. en que
¡ Jansenista ! ! palabra con que frecuente - es menester andar con mucho tiento en
mente procuran zeherir é infamar, á falta culpar á nadie de Jansenista, sin tener pa
de razones con que combatir y vencer en ra ello pruebas muy decisivas. Sin embar
buena lid ; acusacion vaga y gastada con go, toda vez que á S. S. 1. no le consta
que gratuitamente se ha visto calificará los que la citada Pastoral haya sido prohibida
mas eminentes defensores de la verdad é de tal suerte que haya caido sobre su autor
impugnadores de los abusos ; palabra con la nota de Jansenismo, parécenosque aten
que los interesados defensores de una reli dida la gravedad y circunspeccion con que
gion que ellos quisieran hacer elástica, as debe expresarse un Prelado en todas oca
piran á desvirtuar la sana doctrina , asi siones, y muy particularmente tratándose
como á lastimar la honra del que acatado y de tan delicadas materias y nadamenos que
sosteniendo como de fe solo aquello que es de en una Apología de un escrito prohibido
fe , tolera como opinable todo lo que aun en Roma, hubiera sido mejor no tocar este
está libremente entregado á las disputas de punto, y no excitaren el ánimo de los lec
los hombres; palabra que con punible pro tores sencillos , ideas que tal vez no se les
fusion aplicada , se ha hecho servir para ocurrieran. Por lo tocante á la nota de Jan
denigrar á piadosos y sabios Obispos, que senismo , es cierto que es muy fea , y que
combatiendo con cristiana valentía la am incurre en grave responsabilidad quien la
bicion, la avaricia, la hipocresía, los dos achaca á una persona inocente. Por lo mis
fanatismos y demas bastardas pasiones , tan mo concebiríamos muy bien que el Autor
to mas peligrosas y funestas, cuanto se de la Apología se manifestase afligido y has
acogen á region mas elevada, reprenden, rue ta indignado , en caso de que se le hubiese
gan , exhortan con toda paciencia y doctrina impuesto semejante tacha hallándose él
(2.a Tim. 4.) : siguiendo constantes las san exento de ella. Pero ¿á qué viene defen
tas inspiraciones de la verdadera caridad , derse de lo que no se le ha acusado, segun
pacifica , modesta , dócil, no ligera ni precipi él mismo nos dice, pues que todas sus pa
tada en juzgar í Jac. 3.). labras no expresan mas que una mera con
« Terminaré la explicacion que de mi jetura? ¿A qué viene la excusa cuando no
Pastoral llevo hecha , con lo que sobre el sabe que exista el cargo?
último punto de prodigarse en estos tiem Con terrible dureza trata S. S. I. á los
pos la calificacion de Jansenismo escribia el que se atreven á denigrar á otros con la
erudito D. José Nicolas de Azara, embaja nota de Jansenismo; y en verdad que muy
dor de España cerca la corte de Roma justamente son reprendidos los que tal ha
en 1777; el cual lamentándose del hecho cen faltando á las leyes de la caridad cris-
escandaloso ocurrido en la congregacion
habida en 28 de enero, sobrela calificacion
del venerable Obispo Sr. Palafox , á quien di V. Amat , Uist. Eclcs. . lib. XVI , cap. I. .
algunos consultores tacharon de herege Jan oúm. 33.
 — 141 —
tiana. Como quiera, no es exacto que negocios eclesiásticos. Lo que se apellida
siempre que se da el nombre de Jansenista proteccion real, explicada por estos hombres
á algunos qae no defienden las cinco pro se convierte en supremacía ; la Tiara desa
posiciones de Jansenio , sea con el objeto parece en presencia de la Corona , y el Bá
• de desvirtuar la sana doctrina , ni de lastimar culo Pastoral no tiene mas fuerza de la que
la honra del que acatando y sosteniendo como le viene del Cetro. Si el soplo de las revo
de fe solo aquello que es de fe , tolera como luciones ha derribado el Trono, ó le ha
opinable todo lo que aun está libremente entre rebajado mucho de su altura ; si se han
gado á las disputas delos hombres. S. S. I. no formado asambleas turbulentas que absor-
puede ignorar que algunos á quienes se ha viendo todos los poderes dan la ley al mo
dado el nombre de jansenistas, si no lo narca val pueblo en nombre de la libertad,
merecían en todo el rigor dela palabra por esos mismos hombres que eran realistas
no habérseles probado que defendiesen nin ayer, serán demagogos hoy ; sus principios
guna de las proposiciones de Jansenio , al serán bastante elásticos para prestarse á
menos eran dignos de censura y reprension una metamorfosis tan monstruosa ; la om
por el conjunto de doctrinas que sustenta nipotencia del Rey se habrá trocado en
ban relativamente á puntos muy graves de soberanía popular.
disciplina, delos cuales algunos se rozaban S. S. I. sabe muy bien que las revolu
con el dogma ó le pertenecían directamen ciones de Francia y otros puises, nos han
te; y ademas por cierto espíritu de oposi ofrecido tristes ejemplos que comprueban
cion á la Sede Apostólica; por cierto pru la verdad y exactitud de estas descripcio
rito de criticar incesantemente la conducta nes, y contra el testimonio de los hechos
delos Papas; por cierta pasion á eternas nada valen las palabras ni las apariencias.
declamaciones contra la Curia Romana ; Que esos mismos hombres se hayan cu
por su resistencia , mas 6 menos encubier bierto con el velo de la mansedumbre y de
ta, á las decisiones pontificias; por su aver la caridad cristiana ; que hayan protestado
sion á la presente disciplina, y sus afecta de su respeto y acatamiento á la Sede Apos
dos elogios de la antigua ; y en fin, por un tólica; que hayan afectado encarecido amor
sistema de doctrinas tan acomodado á las á la antigua disciplina; que hayan procu
exigencias de los innovadores, que con el rado presentarse á los ojos de los pueblos
auxilio de ellas se puede hacer de las cosas con suma austeridad ; que se hayan hecho
eclesiásticas y de la Iglesia misma, todo lo extremamente difíciles en la administracion
que se quiera. del sacramento de la Penitencia y de la
S. S. I. cuyos conocimienlos son tan vas Eucaristía ; que se hayan empeñado en en
tos , cuya lectura ha sido tan extensa y va señar una moral tan estricta que haya pa
riada , y cuyo trato de mundo le ha dado recido á los hombres una carga insoporta
á conocer mucho los hombres y las cosas, ble ; que hayan declamado de continuo
no habrá podido menos de notar que hay contra la relajacion de los casuistas, y que
ciertos escritores que siguen constantemen se hayan levantado á sí mismos el testimo
te las reglas que vamos á indicar. ¿ Se trata nio de ser los únicos maestros de la doctri
de una competencia entre el Papa y el na sana , y de la moral pura , los únicos
Concilio universal? ellos estan en favor del intérpretes fieles del Evangelio , los únicos
Concilio contra el Papa. ¿Se trata de una que enseñan la religion de Jesucristo lim
competencia entre los Obispos y el Clero pia de toda mancha de fanatismo y supers
inferior? ellos estan en favor del Clero y ticion ; todo esto podrá servir para engañar
contra los Obispos. ¿Se trata de una com á los incautos; pero los hombres prudentes
petencia entre la potestad civil y la ecle no dejarán de comparar las palabras con
siástica ? ellos estan en favor de la potestad las obras, las doctrinas nuevas con la en
civil y contra la potestad eclesiástica. Eso señanza de la Iglesia ; no dejarán de con
en materias de religion. Por lo tocante á la siderar el abismo á que conduce semejante
política la conducta de estos hombres , si sistema , y recordando aquellas reglas del
se hallan en ocasion de figurar, que no Evangelio de que no se ha de creer á todo
suelen esquivarla , es la siguiente. ¿ Reina espíritu , de que se ha de conocer el árbol
un monarca absoluto? no tienen escrúpulo por sus frutos, de que es menester guar
en sostener con calor la monarquía, en darse de los que se nos presentan con piel
adular al Soberano, en exagerar sus facul de oveja é interiormente son lobos rapaces,
tades, sobre todo en cuanto concierne á conocerán la hipocresía y la perfidia que se
 — 1
ciendo
oculta caso
bajo de
hermosas
los vanos
palabras,
pensamientos
y no ha-
de f42do —este se le quejó de que se hubiese pro
hibido un escrito suyo. Su Santidad le hizo
los hombres, se atendrán á lo que les dice ver que cada Soberano prohibia lo que
la Iglesia , columna y firmamento do ver creia contrario á las regalías de sus esta
dad , á lo que les enseña el Vicario de Je dos, y que no tenia otra causal la prohibi
sucristo encargado de apacentarla grey del cion de su escrito, f Vida de Muratori etc.
Señor, y dejando que soplen los vientos Biografía universal etc. ) Porque todos los go
y se levanten las tempestades , y bramen biernos tienen el derecho esencial é imprescrip
las olas del Océano, dormirán tranquilos tible de impedir cuanto creen sinceramente que
en la navecilla de San Pedro. puede perjudicar al bien ó felicidad tempo
No disputaremos sobre el nombre que ral de sus subditos. » En la Apología dice
deba darse á esa clase de hombres de quie lo siguiente : « A ellos y á todos encareci
nes estamos hablando ; no insistiremos en damente encargo que no pierdan de vista
que se les deba llamar jansenistas; lo que la advertencia que en dicha mi Pastoral ha
sí diremos es, que el dictado que les cor cia , de distinguir siempre con el mayor
responde de rigorosa justicia no puede ser cuidado « la sagrada persona del Primado
nada lisonjero; y absteniéndonos de deter »de la Iglesia, y su autoridad espiritual
minarla, advertiremos que para expresar » que Jesucristo dejó á San Pedro y á sus
su procedimiento y calificarlo debidamente, » sucesores , y es un dogma de fe en la
no faltan duras palabras en el diccionario » Iglesia Católica , de la de Rey ó autoridad
de todas las lenguas. » tempoi-al de Rorna , en la que Su Santidad
Volviendo ála prohibicion de la Pastoral » como Soberano está enlazado y casi de-
observaremos que sea cual fuere el juicio » pendiente de otras potencias poderosas,
del Sr. Obispo de Astorga , parece que de «que podrían hacerle mucho daño con-
biera haberse abstenido de recomendar de » quistándole sus Estados Pontificios ó par-
nuevo con tanto encarecimiento la lectura »te de ellos.» Asi pues la autoridad política
de ella , siquiera por respeto al Sumo Pon del Soberano temporal de Roma y Estados
tífice. A pesar de esto notamos con dolor Pontificios, puede muy bien prohibir la
que la recomienda de un modo particular , circulacion en sus dominios de obras que
que procura calmar las conciencias que aun contra la mente de sus autores perju
habrían podido alarmarse dentro y fuera diquen de cualquier modo al sistema de
de su Diócesis , llegando á decir que « pos gobierno adoptado, sin que por esto se en
trado en la presencia del Señor Crucificado, tienda calificada su doctrina bajo el concepto
le ruega fervorosamente no permita que el eclesiástico y religioso. »
mal espíritu se apodere de ninguno de ellos so En vista de estas palabras preguntaremos
pretexto de la mencionada prohibicion. » si el Sr. Obispo considera la prohibicion de
Reproduce en el propio lugar un argu las Observaciones pacificas como un acto de
mento que ya propuso en su Pastoral , pa un Soberano que en uso del derecho esencial
ra persuadir que la prohibicion indicada é imprescriplil/le impide que circule cuanto
carece absolutamente de valor. No quere cree sinceramente iIue puede perjudicar al bien
mos dejar sin respuesta las observaciones ó felicidad temporal de sus stíbditos , ó como
del Sr. Obispo sobre este punto ; y como una prohibicion bajo el aspecto doctrinal ,
nos parece que cae en una contradiccion tocante á materias religiosas y morales. Si
manifiesta , la haremos notar , para que re lo primero, no tienede quequejarse, pues
salten los inconvenientes que consigo trae que él mismo confiesa que la autoridad po
e! empeño de defender una mala causa. En lítica del Soberano temporal de Roma y
su Pastoral habia dicho lo siguiente : « la Estados pontificios « puede muy bien pro
prohibicion de varias obras se ha hecho por hibir la circulacion en sus dominios de
miras políticas en Roma contra los decretos obras que aun contra la mente de sus au
de los Concilios, Bulas, Breves pontificios, tores perjudiquen de cualquier modo al
recibidos por la Iglesia universal , especial sistema de gobierno adoptado.» Si lo en
mente la del sabio Benedicto XIV: Sollicita tiende como una prohibicion bajo el con
ac provida, condenándose sin expresar nin cepto eclesiástico y religioso , entonces no
guna causa, ni designarla heregíaó error, viene al caso la distincion que recomienda
porque se condenan tales escritos. Sabida á sus diocesanos entre el Sumo Pontífice y
es la respuesta que dió este gran Pontífice el Rey de Roma , ni cuanto habia dicho en
á su amigo el célebre Luis Muratori cnan- su Pastoral sobre este particular, segun
 - 143 —
mas arriba llevamos copiado. Este argu tacion del Sr. Arzobispo de Palmira. Si así
mento no tiene réplica : no sabemos lo que no fuese , imposible seria que se arrojase á
podría contestar á esta reflexion el Sr. Obis publicar escritos de tanta consecuencia po
po de Astorga. Lo pondremos mas breve y niéndose en desacuerdo de un modo tan
mas claro ; ó el que prohibió es el Papa ó ruidoso con la Sede Apostólica ; imposible
el Rey de Roma ; si el Rey, no hableis del fuera que con tanto ahinco recomendase á
Papa, si es el Papa, no hableis del Rey. sus diocesanos la lectura de lo que se ha
sin embargo así en la Pastoral como en prohibido en Roma , y que no atendiese al
la Apología se habla de todo á un tiempo , escándalo que puede producir en los fieles
y todo se mezcla y se confunde , y de todo el ver á un Obispo que aconseja como muy
se quiere sacar partido para acriminar á la bueno y muy santo , lo que en Roma se
Corte de Roma , y dejar en buen puesto los declara peligroso y malo. Yes lo peor, que
escritos prohibidos. Ya que hemos tocado á fuerza de empeñarse en dejar á su Sr. tio
este punto , y que en la expresada Apología en buen lugar, y con el anhelo de publicar
se hace referencia algunas veces al opúscu documentos que le justifiquen , y le adquie
lo publicado en Barcelona en 1842 con el ran mayor reputacion , le daña mas y mas
título de « Algunas serias reflexiones de con su celo , dando á conocer documentos
J. C. sobre la carta pastoral del Illmo. se que si el Arzobispo de Palmira viviese en
ñor
torgaD.,»Félix
pareceTorres
que S.Amat
S. 1. debiera
Obispo hacerse
de As- la actualidad , tal vez desearia que se con
servasen ocultos en su bufete. Sirva de
cargo de las observaciones que le hace el ejemplo la carta que se inserta al fin de la
Sr. J. C. en el párrafo 6.° y despues en Apología , suscrita en 16 de junio de 1821
el 8.° para demostrar que la prohibicion de en Sanpedor. El Sr. Obispo de Astorga le
las Observaciones pacificas fue muy diferente da tanta importancia á esta carta , que se
de la del libro de Muratori. En los citados apresura á suplir el olvido involuntario que
lugares se explica con bastante claridad y habia sufrido dejando de insertarla en la
solidez la presente materia ; y si el señor página XL\ II al fin de la nota , y la añade
Obispo de Astorga hubiese tenido algo que como complemento, segun dice, para dar
responder, podria haberlo hecho, en vez mas á conocer el espíritu y carácter de conci
de insistir de nuevo en lo que habia asen liacion y mansedumbre del Illmo. Sr. Arzobis
tado en la expresada Pastoral. Allí se dis po de Palmira á la par que su penetracion po
tinguen las dos maneras con que se hacen lítica.
las prohibiciones de las obras , y se refiere Cabalmente no se descubre en este do
anotando las fechas , el curso que siguió la cumento ninguna de las dotes indicadas; y
prohibicion de las Observaciones pacificas. por lo tocante á la penetracion política ,
En puntos tan graves no deben dejarse sin menester es confesar que segun resulta de
respuesta observaciones y argumentos co la expresada carta , no manifestó mucha el
mo los que hace el Sr. J. C, mayormente Sr. Arzobispo. No dejaremos sin prueba lo
si en prueba se aducen hechos que no pu- que acabamos de afirmar.
diendo ser desmentidos , inclinarán preci No es un indicio de un espíritu demasia
samente el juicio de los lectores en favor do conciliador el cargo que en la misma
de la impugnacion y contra el Sr. Obispo carta hace el Sr. Amat al autor de la obra
de Astorga y su tío el Arzobispo de Palmi- titulada del Papa, que él á la sazon atribuía
ra. Si es verdad lo que afirma el Sr. J. C. á M. Bonald , bien que despues supo
¿ á qué viene insistir sobre las prohibiciones que era del conde de Maistre. «En esta
hechas en uso meramente de la soberanía obra, dice, disgusta la confusion con que
temporal? Y si no lo es ¿cómo- no se ha desde el capítulo 1.° se habla de la infalibi
rectificado el error? lidad como si no fuera mas que la suprema
Lo diremos francamente por mas que cía que tienen los monarcas de soberanía
nos duela , el Sr. Arzobispo de Astorga se absoluta sobre sus tribunales de justicia y
manifiesta en todo este negocio muy domi generales de ejército. Confusion de ideas
nado por el entrañable amor que profesa á ahora muy deseada por aquellos italianos
su Sr. tio , y esa afeccion de familia le ha que quieren á lo menos que el Papa sea en
conducido á extremos á que sin duda no la Iglesia un soberano absoluto, como lo son
habría llegado, si su corazon no se afligiese en sus dominios los dos Emperadores sania
profundamente á la sola idea de que puede mente aliados en la confesion de los miste
ser mancillada en lo mas mínimo la repu rios de la Trinidad y Encarnacion. Con to
 — 144 —
iamos los dos tomos Du Pape por || la sociedad. La Iglesia nada mas exige que
Minchas de las noticias y reflexiones que las otras soberanías aunque tenga sobre
incluyen.» Bien que mas arriba hemos de ellas una superioridad inmensa ; pues que en
mostrado la injusticia de semejante acusa estas la infalibilidad es humanametUe suputó
cion , todavía se hace preciso insistir algun la, y en ella está divinamente prometida. »
tanto sobre esta materia, yaque segun pa Estas palabras del ilustre Conde son la me
rece, hay un decidido empeño en mancillar jor respuesta que puede darse á las acusa-
una reputacion tan bien sentada como es la saciones del Sr. Amat, y confesaremos
del conde de Maistre. Indúcenos á esto el francamente que no comprendemos cómo
deseo de vindicar el buen nombre de los habiendo leido la obra no se desengañó de
católicos (pie tan favorablemente han aco su preocupacion , y mucho menos alcanza
gido la obra del Conde; porque es bien mos todavía cómo el Sr. Obispo de Astorga
sabido que no solo fue bien recibida en se empeña en reproducir una especie mil
Francia donde se dió á luz , sino que ha veces combatida , y que para honor de su
corrido y corre con mucho crédito en Es tío debiera desear que se olvidase. ¿Cree
paña, y hasta en Italia, donde segun pa el Sr. Obispo de Astorga, que sea muy
rece era tenida en gran concepto ya en la favorable al buen nombre de su lio , el pu
época de las contestaciones entre el señor blicar de nuevo lo que habia dado ya á luz
Arzobispo de Palmira y el Nuncio de Su en la Vida del ¡limo. Sr. Amat , sobre el jui
Santidad, pues que este, segun hemos cio comparativo entre la obra del conde de
visto, ya escribiendo al Arzobispo en Ma Maistre y la de M. Baston? ¿Cree que los
drid con fecha 5 de mayo de 182Í , le de hombres de sanas ideas leerán con gusto la
cía : «sin que yo entre en un examen pro otra carta al Dr. Garcías fecha en i\ de
lijo que no me pertenece, ni quiero hacer, setiembre de 1824, y por tanto escrita des
me basta decir á V. S. f. la falsedad que pues de sus contestaciones con el Nuncio
dice en orden al célebre Maistre para de de Su Santidad? (1 ) El Sr. Obispo de As-
sacreditarle , por el gran pecado de haber torga al comunicarnos estas noticias se ol
defendido el Primado del Papa , sin duda vidó sin duda de quién era ese Mr. Baston,
segun su dictamen , á sugestion del de y de que atendidas las circunstancias en
monio. que se ha encontrado la España, no era
»V. S. 1. , lo diré con dolor , parece ser
sumamente ignoranle ó un atroz calumnia
dor ; lo primero si no sabe todo lo que el
mundo conoce, que el piadosísimo Maistre ( 1 ) 347. V poco antes de su muerte , en carta
era católico y muy buen católico, y ojalá de 24 de setiembre de 182 f , decin al Dr. Garcías :
«Amigo estimadísimo: Recibo los dos tomos de
lo fuésemos tanto nosotros, y si no ha po i> Baston y la brochure pequciía intitulada Qtici-
dido reconocer esta verdad por la lectura »ques reflexions etc. á la cual veo que Baston res-
de su obra sobre el Papa, caso que en efec »de» ponde en una adicion al tomo segundo. La obra
este sabio parece demasiado larga; pero es
to la haya tenido en sus manos y meditado. »sin duda un tapaboca completo á loa ove coa
Lo secundo , si á pesar de saber todo esto » artificios y por medios Indignos de hombres de
se ha servido por su fin particular acrimi " buena fe, y aun mas de todo verdadero cristiano,
^alaban una obra como la del C.onde-Le-Maistrc,
narle de protestante , y todavía de algo » en que es menester hacerse mucha violencia para
peor , á los ojos de los crédulos que no lo » no creerla mas una burla de la Religion divina
entienden, i; »de Cristo crucificado, que una defen-adela auto-
bridad del Papa. Al conde le tengo por católico >
A pesar de todo esto se publica como un »por hombre de bien, pues dicen que lo era nitro -
documento curioso una carta donde se con » nos que pudieron conocerle personalmente: pero
tienen imputaciones desnudas de todo fun " tampoco dudo que era un iluso de los que el
damento. Para desvanecerlas mas y mas »de » P. Bufficr llamaba lums parciales ; ó un fauátii o
los mas idólatras de su propio dictamen
insertaremos las mismas palabras del conde » imaginacion. Si el tomo segundo es conocido en
de Maistre en el lib. 1.°, cap. 19. «Todo «España, hará mucha sensacion la advertencia del
nos reduce á las grandes verdades estable " principio : pues se pasmaría V. si supiese la vio-
cidas. No puede haber sociedad humana »»como ¡encía con que por acá se han expedido ju-í ordrei.
las de que habla Baston, y como sr Na
sin gobierno, ni gobiernosin soberanía, ni «procedido para que la obra Du Pape, ja tradu-
soberanía sin infalibilidad ; privilegio tan ucida en español , fuese tenida por de autor ittsjpi-
absolutamente necesario, (pie es forzoso "«ni rado , y nadie se atreviese ni á hablar contra clin .
suponerlo aun en las soberanías temporales "biená dejar de mirarla como la única que declara
la Potestad pontificia.» (Vida del
(donde no le hay) so pena de ver (¡¡suelta Sr. Amat, pág. 'MI ) •> ( Apología , pág. XI/
 - 145 —
muy prudente recordar el nombre del im Véase por quién se interesaba el Sr. Ar
pugnador del conde de Maistre. zobispo de Palmira ; el lector juzgará. En
Deseosos de que el público forme sobre tre tanto , no podemos menos de repetir
este negocio un juicio completo , y de que que en vano se ha formado el empeño de
cada cual pueda apreciar debidamente las desacreditar al conde de Maistre , ora acu
opiniones del Sr. Arzobispo de Palmira, sándole de protestante , ora tachándole de
recordaremos que el Sr. Baston fue un sa iluso : el insigne escritor es respetado por
cerdote cismático , que no tuvo reparo en todos los hombres capaces de apreciar su
menospreciar la autoridad Pontificia y los mérito , aun cuando no profesen sus ideas ;
sagrados cánones. La mayor parte de nues
tros lectores habrán visto ya loque de este
Sr. Abate se lee en el tomo lo de la Bi za del Emperador. Para las Órdenes de Navidad
blioteca de la Religion en la Advertencia pá de 1813 auunció que solo él firmaría las dimisorias
para los ordenados ; y estos fieles á Dios quisieron
gina XVIII ; no obstante para los que de mas bien no ordenarse que servirse de ellas. Sabe
ello no tengan noticia , lo insertamos en la dor de que se hacían secretamente oraciones por
adjunta nota (1). la paz de la Iglesia y del Estado , las prohibió bajo
penas canónicas en enero de 1814. Dondequiera
hablaba del Papa con desprecio, y llegó á decir que
aun cuando oyese de su misma boca que anulaba
( 1 ) « Mr. Baston , eclesiástico de Ruan , es el los actos de jurisdiccion de los Obispos nombra
autor de unas Reclamaciones por la Iglesia de dos, no haría estimacion de ello, pues la Iglesia
Francia, y la verdad contralaobra de Mr. Mais de Francia estaba en derecho de proveerá sus nece
tre. Coa qué verdad esten formadas , puede cono sidades. En febrero de 1 81 i, cerró el Seminario por
cerlo todo hombre imparcial que tenga alguna idea que sus alumnos no eran de sus sentimientos, sin
de los sentimientos ulcerados que tenia Mr. baston que sirviesen representaciones ; y por nías que los
contra la Santa Sede al tiempo de escribirlas. Este jóvenes seminaristas, para cuya salida se protestaba
eclesiástico, que se habia dado á conocer en su la falta de fondos, pidiesen el permanecer aunque
diócesis por sus sentimientos cristianos al estallar solo les diesen á comer pan seco , y el superior
la revolucion , y que aun combatió la Constitucion hiciese ver que habia provision para muchos me
Civil del Clero en varios opúsculos , y mereció por ses. La restauracion que se siguió inmediatamente
ello ser deportado como los demas eclesiásticos, no podía ser de su agrado: y aprovechando enton
de vuelta a Francia no conservó la misma repu ces el Cabildo tan buena oportunidad , le revocó
tacion que antes habia obtenido. Habiendo acom sus poderes el 11 de junio , y lo comunicó á la
pañado el 1811 al Cardenal Cambaceres, Arzobispo diócesis, donde excitó una alegria general. Retiróse
que era entonces de Ruan , á Paris, cuando este entonces á Saint-Laurent, cerca tic Pontaudemer,
fue al Concilio que habia de celebrar Buonaparte . al seno de su familia , contando con el crédito del
este quedó muy satisfecho del Abate Baston , y le Canciller , para obtener su vuelta á Seez ; pero las
ofreció el Obispado de Seez , cuyo Obispo habia noticias tomadas de su conducta en el tiempo de
incurrido en su desgracia , y habia sido desterrado su administracion , frustraron sus proyectos. En
á Nantes, y aun forzado á dar su dimision. Cuan este retiro compuso una exposicion ó memoria
do el déspota despucs de haber arrastrado preso al justificativa de su conducta; y el 1821 publicó
santo Pio VII á Fontainebleau quiso nombrar va otro folleto bajo el título de Solucion de una cues
rios Obispos , puso de nuevo los ojos en el Abate tion de derecho canónico , en el cual defiende la
Baston para la misma Silla ; mas como el Papa se causa de la administracion capitular de los Obis
negase a dar las bulas á los nombrados por su per pos nombrados, quejándose delos Papas, hablan
seguidor , trató de que se supliese á ello, haciendo do de su encaprichamiento , de ultramontismo ,
que los Cabildos nombrasen como vicarios gober vituperando abiertamente la conducta de Pío VII ,
nadores á los nombrados obispos. El Cabildo de y hablando del perseguidor de la Iglesia con una
Seez, en virtud de órden del Ministro de los Cul atencion y respeto notables. La ilusion de este
tos , por redimir la vejacion , le nombró en union hombre era tal , que miraba como una injusticia
de los dos gobernadores que ya tenia; pero Baston que clamaba al Ciclo , que Luis XVIII no hubiese
obró en todo por si solo , dando dimisorias, y ejer ratificado la eleccion que habia hecho de él Buona
ciendo toda la jurisdiccion sin consultar siquiera parte. En este mismo retiro, y el mismo año de
á sus colegas. El Cabildo al ver esto consultó se 1821 , se publicaron sus Reclamaciones por la
cretamente á Su Santidad por medio de un ecle Iglesia de Francia yporla verdad contra la obra
siástico que pudo introducirse en Fontainebleau , de Mr. Maistre ; pero la simple narracion de los
y oyó del Santo Padre que el Cabildo no habia sucesos que hemos referido basta para formar idea
podido dar los poderes al Abate Baston : que los del espíritu en que estan concebidas. ¿Quépodia
actos de jurisdiccion ejercidos por este eran nulos, esperar una obra escrita á favor del Papa de un ene
y lo mismo las dispensas de matrimonio que con migo tan acalorado de la Santa Sede? Incansable
cedia en los grados prohibidos , bajo protesto de en su ociosidad forzada , publicó el 1823 el Anti
una gracia particular. Extendida esta noticia en la doto contra los errores y reputacion del Ensayo
diócesis , la mayor parte del Clero rehusó comuni sobre la Indiferencia de La-Mennais, y otres va
car con él : pero él continuó atribuyéndose los ho rios folletos. Al fin . perdida toda esperanza de
nores del Obispado: aun mas, escribió una Me ocupar ninguna de las Sillas, y vuelto á Ruan ,
moria contra las Observaciones de Muzarell sobre murió con resignacion el 20 de setiembre de 1823,
la institucion canónica de los Obispos , en donde de 83 años de edad. A vista de esto nada tenemos
despucs de citar varias autoridades de Jansenistas, que decir de tal antagonista. V Ami de la Reli
amenazaba íi los que se le oponían con la vengan- gion, n. 1283. «
TOMO II. 10
 — 146 —
y nadie que haya leido sus obras puede po muy en secreto en un momento de expan
ner en duda que estaba adherido de todo sion y de confianza , y probablemente con
corazon á la Iglesia católica. Por lo tocan añadiduras y restricciones que presentarían
te á la rectitud de sus intenciones , resalta la cosa bajo un aspecto muy diferente del
tan vivamente en todas las páginas de sus que se nos quiere dar á entender. Y no se
escritos, que desearíamos se abandonase el diga que hablamos con demasiada dureza ;
empeño de dejarle mal parado en la opinion pues que no concebimos que pueda em
de los lectores. plearse lenguage mas templado cuando ve
. En la misma carta nos dice el Sr. Amat mos que se nos quiere persuadir que eran
que sus Observaciones pacíficas gustaron al partidarios de las Observaciones pacificas
Sr. Arias Arzobispo de Valencia, residente hombres notoriamente conocidos por su
entonces en Perpiñan. Extráñalo S. S. I. aversion á la doctrina que en ellas se con
asegurando que le parece imposible ; y tam tiene. Ademas que si vale mucho el honor
bien lo extrañarán nuestros lectores cuan del Sr. Arzobispo de Palmira , no vale me
do vean lo que se añude á renglon seguido nos el del Sr. Inguanzo, del Sr. Veyan,
« que si aquel buen Señor y ciertos herma- del Sr. Arias á quienes se quiere atribuir
» nos suyos hubiesen obrado segun las ideas una especie de complicidad , suponiéndoles
» de las Observaciones y del Apéndice sobre adictos á las doctrinas de una obra conde
» la distincion é independencia mutua de nada en Roma.
«las dos potestades, y losfines y los medios En las palabras que acabamos de copiar
» propios de cada una , y sobrelas máximas se descubre claramente cuáles eran las in
«que di(S Jesucristo á la Iglesia para con- tenciones y las doctrinas del Sr. Arzobispo
»ducirse bien con toda suerte de gobiernos de Palmira , y por cierto que hubiera cum
«civiles, protectores ó perseguidores, hu- plido mejor a su buen nombre que no se
» hieran sido menos dolorosas las reformas, nos hubiesen recordado bajo su propia fir
» hijas de la miseria general que obliga á ma. Notamos con dolor que la opinion del
» los que mandan á buscar recursos por Sr. Arzobispo era que en la actualidad
«medios violentos; lloveríamos á personas nada valían las Bulas de inmunidades, pues
» respetables resistiendo á las providencias que reprende á las personas que en aquella
» del gobierno sobre lo temporal en fuerza época resistían á las providencias del go
» de Bulas de inmunidades , como si estu- bierno sobre lo temporal en fuerza de Bulas
» viésemos en tiempos tranquilos y en los de inmunidades, como si estuviésemos en tiem
» siglos pasados ; ni se veria el gobierno pos tranquilos y en los siglos pasados. Notamos
«precisado á tomar providencias severas tambien que legitima las providencias seve
» que aborrece ; ni tendríamos que temer ras que el gobierno tomaba , pues que dice
» los horrores á que nos exponen los Vi - que se veia precisado á tomar providencias se
«nuesas, los Merinos y semejantes cabezas veras que aborrece. Por lo que toca á los
«atolondradas, que tal vez sin pensarlo horrores de que habla con respecto á los
» son meros instrumentos de los enemigos Vinuesas y Merinos, llamándolos cabezas
» de la tranquilidad , buen órden y prospe- atolondradas , mejor hubiera sido que no se
» ridad de España en la situacion actual ; publicasen estas palabras de un Arzobispo
» figurándose que solo con disturbios inte- tratándose de un sacerdote asesinado atroz
» riores podrán lograr la mudanza de algu- mente en la cárcel y á quien se aplastó la
» nos puntos que les disgustan en, nuestra cabeza á martillazos.
«Constitucion y leyes que van haciéndose.» Pasemos á la prevision política. Decia el
Véase pues, si es extraño que el señor Sr. Arzobispo de Palmira que se lograría
Arias á quien vemos culpado de que no fácilmente la mudanza que conviniese,
procedía con el debido miramiento , y de guardando con fidelidad y sentando bien la
que el olvido de las máximas contenidas en Constitucion de 1812. A decir verdad , es
las observaciones le hacia sufrir el destier tas solas palabras bastan á indicar que no
ro , gustase de esta obra que con la prácti calaba muy hondo en materias políticas ;
ca reprobaba. Ya mas arriba llevamos in porque es bien sabido que todos los publi
dicado cómo se entiende muchas veces eso cistas estan de acuerdo en que es imposible
de gustar de una obra ; y repetiremos aqui sentar bien y guardar fielmente la Consti
lo que indicamos en el propio lugar, de tucion de 1812, á causa de que lleva en
que no parece conveniente entregar á la su seno elementos de muerte , y de que es
luz pública juicios , que quizá se emitieron impracticable. Se nos dirá que este error
 — 147 —
no es tanto de extrañar en aquella época , estaba muy distante de haber llegado a!
cuando una experiencia dolorosa no habia punto extremo de la crisis, y que en lucha
producido los desengaños que ahora : mas con el Rey , en lucha con la nobleza , con
á esto responderemos que á mediados de el clero y con el mismo pueblo , no le era
1821 todos los hombres de buena fe y de dable prolongar su existencia sino en medio
comprension política , habian tenido ya el de convulsiones y excesos. Creemos poder
tiempo suficiente para conocer los vicios de dispensarnos de hacer resaltar mas y mas
la ponderada Constitucion , y ademas un la imprevision política del Sr. Arzobispo de
hombre tan instruido y tan aficionado á la Palmira , pues que en el estado actual de
lectura como el Sr. Arzobispo de Palmira , las ideas no solo los hombres sabios, sino
no debia participar de las ilusiones de los aun los medianamente entendidos, no ve
políticos adocenados . cuando los mas céle rán en las palabras citadas sino una humil
bres publicistas de Europa habian conde de vulgaridad, solo disculpable por la sere
nado la Constitucion de la Asamblea cons na candidez con que viene enunciada.
tituyente, de la cual era la nuestra una Asi se echa de ver que no ha andado con
miserable copia. En el reino vecino ya na mucho acierto el Sr. Obispo de Astorga
die se hubiera atrevido á sostener las teo comunicándonos la expresada carta como
rías constitucionales en que se fundaba el una prueba de la penetracion política de su
código del año 12 ; y asi es que hasta el tío ; pero lo que hay aquí mas sensible es
partido que hacia la oposicion al gobierno que con esta publicacion se ha puesto al
de Luis XVIII, se preciaba de haber apro Sr. Arzobispo de Palmira en chocante con
vechado las lecciones de la experiencia y tradiccion consigo mismo. En efecto: en la
sustentaba las doctrina» que se lian realiza citada carta notamos que el Sr. Amat era
do en las cartas modernas , corrigiendo no un constitucional en todo el rigor de la pa
tablemente los desvarios que salieron delas labra ; que tenia viva fe en los resultados
cabezas de los filósofos franceses , que pa del nuevo código , y que de él se prometía
saron del silencio de su retiro á la reforma nada menos que la ventura de España. Y
y gobierno de la sociedad. ciertamente que esto no se aviene con lo
Es peregrina la idea que emite el señor que decia en 1824 de que todos los que se
Arzobispo de Palmira, cuando aventurán gloriaban de ser españoles y de ser católicos de
dose á un pronóstico político dice: «No bían manifestarse agradecidos á la infinita bon
conoce á España quien no conozca , que dad de la Divina Providencia por haberse res
cesando desde este año el clero alto y la tablecido en España ta antigua monarquía
nobleza de ser objeto de envidia y de odio, hereditaria española , que nuestro Augusto So
desde el nombramiento segundo, futuro de berano D. Fernando V1l heredó de sus abuelos;
diputados ( sino es en el primero) ha de cuando se felicitaba de que lo hubiésemos
resultar un congreso cuya notable mayoría logrado con el auxilio del ejército pacifico
no ceda ála Cámara de diputados de Fran enviado por el Rey de Francia de acuerdo con
cia ni en celo por la Religion, ni en horror los deinas soberanos de Europa, despues que
ála democracia, ni en amor á una mo en la mencionada carta se habia burlado
narquía bien montada con la justa mode de los dos Emperadores santamente aliados,
racion , y con la fuerza necesaria para ha y por fin , no era muy consecuente cuando
cerse amar y obedecer.» Lo que se conoce lleno de entusiasmo por el restablecimien
muy bien es, que el Sr. Arzobispo de Palmira to de Fernando en la plenitud de sus de
no conocía la España , ni la revolucion , ni rechos deseaba grabar en los corazones de los
se le alcanzaba mucho de achaque de polí españoles eclesiásticos y seglares, militares y
tica. Prescindamos del cruel desengaño que de todo sexo , edad ó profesion , desde
ofrecieron los acontecimientos, y dígasenos mas sabios d los mas ignorantes , desde los
si en la situacion en que se encontraba la mas ricos á los mas pobres , y desde los que
España en junio de 1821 , no era una can habitan en las capitales hasta los carboneros y
didez bien poco previsora el lisonjearse con pastores que no salen de los montes y desier
los hermosos sueños con que se consolaba tos , la verdad de que eran indignos (le llamar
la ancianidad del Sr. Arzobispo. Habia ol se españoles ó católicos los que se descuidasen
vidado sin duda , que las revoluciones tie de dar continuas gracias á la Divina Provi
nen un período ascendente , ó al menos no dencia por el beneficio que nos habia hecho de
veia lo que era mas claro que la luz del || restablecernos bajo el dominio de la antigua mo-
sol, i saber : que la revolucion española II narquía hereditaria española. » Triste papel
representa sin duda el Sr. Arzobispo con la
fragante contradiccion desemejantes pasa-
ges; mas no tenemos nosotros la culpa de
que asi suceda : su sobrino el Sr. Obispo
de Astorga , es quien ha cuidado de expo
nerlo á los ojos del público. Haciéndolo
notar, haciendo ver que un dia hablaba en
un sentido y otro dia en otro , conforme
habian variado las circunstancias, desem
peñamos una tarea poco grata , pero cum
plimos al propio tiempo con un deber , su
puesto que hemos acometido la empresa
de manifestar la sinrazon con que procede
el Sr. Obispo de Astorga al tratar con tan
to rigor á todos los que no prestan home-
nage á la persona y á los escritos de su se
ñor tio , sin reparar en hacer graves cargos
á la Curia Romana, quesean cuales fueren
las palabras con que los disfrace, vienen al
fin á recaer sobre la Sede Apostólica.
Tiempo es ya de poner fin á estas Consi-
deracioni's sobre la Apología ; y lo haremos
añadiendo algunas breves reflexiones, que
emitimos sin la idea de ofender en lo mas
mínimo al Sr. Obispo de Astorga. Creemos
que para su propio honor y para el de su
tio el Sr. Arzobispo de Palmira, hubiera
sido mucho mejor abstenerse de publicar
un escrito semejante, en el cual se descu
bre á cada paso el afecto de familia , que
por mas respetable que sea, no debe nun
ca figurar en asuntos de tamaña importan
cia. Mucho dudamos que con la Apología,
se haya adquirido el Sr. Obispo nuevos
partidarios; y estamos convencidos de que
no ha hecho mas que justificar los proce
dimientos de Roma de los que tanto se la
menta. A quien no estuviere en datos so
bre el particular, debiera bastarle la lectu
ra de la misma Apología , para persuadirse
de la sinrazon del Sr. Obispo en este nego
cio; y en verdad que miradas las cosas ba
jo este punto de vista, casi podríamos decir
que ha sido una fortuna que se publicase,
dado que ha suministrado abundantes ar
mas para combatir lo mismo que en ella se
trata de defender.
Si esta Apología fuese tambien censurada,
¿qué conducta observaría el Sr. Obispo de
Astorga? Doloroso nos es decirlo; pero
segun todas las apariencias no está dispues
to á ofrecer un ejemplo de docilidad. Si
algo valiese nuestra voz á los oidos de
S. S. I. , nos atreveríamos á suplicarle que
no perturbe los días de su ancianidad po
niéndose en desacuerdo con la Santa Sede ;
que no olvide que es un Prelado de la
Iglesia , y que por lo mismo debe dar á sus
ovejas el ejemplo de sumision y acatamien
to al Vicario de Jesucristo; que recuerde
no ser bastantes las protestas de adhesion
y veneracion , sino que es menester atesti
guarlo con las obras; que jamas sabrá pre
valecer la palabra de un Obispo contra la
autoridad del Sucesor de San Pedro ; y que
por fin , tratándose de gravísimos puntos
doctrinales, es muy poco edificante el ha
blar de manejos y de intrigas de la Curia
Romana. Ya que tanto nos habla de Fene-
lon , fuera de desear que se lo propusiese
por modelo. — J. B.
PORVENÍR
DE LAS
COMUNIDADES RELIGIOSAS EN ESPAÑA.
'
;
ARTÍCULO 3.°
"""
La vida religiosa destinada únicamente
á la oracion y á la penitencia en el retiro
de la soledad , es conveniente para ofrecer
un asilo á la inocencia , al arrepentimiento
y al infortunio; y bajo dicho aspecto, es
de desear que se restablezca en España.
Pero no es este el único punto de vista des
de el cual queremos mirarlos institutos re
ligiosos ; algo vemos en ellos ademas de su
santidad y sublime poesía ; en nuestro jui
cio está íntimamente enlazado con los mis
mos el porvenir de la sociedad.
Basada la civilizacion moderna sobre la
libertad universal, y atacando la esclavitud
en las colonias despues de haberla abolido
en Europa , tiene que arrostrar los incon
venientes que consigo trae este inmenso
beneficio, y resignarse á satisfacer las ne
cesidades que la nueva condicion ha engen
drado. Los antiguos reconocían la esclavi
tud como un elemento social indispensable,
presintiendo la dificultad de gobernar un
número muy crecido de hombres , los cua
les disfrutasen todos de la libertad civil :
apelaron k un expediente muy sencillo :
privar de dicha libertad al mayor número;
y con el sudor de estos infelices vivir y go
zar los libres. La Religion cristiana no con
denó la esclavitud , no atacó los derechos
compasion
adquiridos;unpero estado
miróque tan mal desagrado
se avie
— y149 11 cesarios
— para su servicio. Asi el pobre que
da entregado á sus propios recursos, y no
ne con la dignidad humana, y que tan fuer consistiendo estos en otra cosa que en el tra -
tes obstáculos oponen al desarrollo intelec bajo , cuando carezca de él es víctima de
tual y moral del desgraciado á quien cabe la miseria. Un sistema semejante mirado
la infausta suerte. Resultó de esto que la bajo un punto de vista meramente econó
esclavitud anduvo desapareciendo á medi mico, no puede menos de traer gravísimos
da que el cristianismo tomó extension y ar inconvenientes; porque supone mucha so
raigo ; y todavía en nuestros tiempos esta breabundancia de medios de subsistencia
mos viendo que el espíritu de esa religion con los cuales se provea á las necesidades
de fraternidad y de amor , va procurando de los pobres. El trabajo ha de ser constan-
que cese en las colonias esta degradante té, y ademas retribuido lo suficiente para
condicion levantando enérgicamente su voz que el salario alcance á la manutencion del
el Padre de los fieles contra los que se ocu jornalero y su familia : dos condiciones su
panLaenclaseel infame
de los tráfico
proletarios
de loshanegros
sucedido
(1). jetas á infinitas eventualidades , y que ve
mos faltar á cada paso , quedando reduci
á los esclavos; mediando entre ellos la di dos á la miseria mas espantosa, los que del
ferencia que estos recibian de sus amos ali cumplimiento de ellas tienen ¡iendiente su
mento , vestido , abrigo y demas cosas ne subsistencia.
cesarias para la vida asi en el estado de Pero la Religion cristiana , de la cual ha
salud como de enfermedad , y aquellos se dimanado la presente organizacion en lo
lo han de procurar ellos mismos con el tra que tiene de ventajosoá la humanidad, no
bajo de sus manos , ó recibirlo de la cari considera las cosas bajo el aspecto pura
dad pública. El amo que poseia algunos mente material ; á sus ojos el hombre es
centenares de esclavos, y en los cuales con algo mas que una máquina para elaborar;
sistía una buena parte de su riqueza , debia y la sociedad no se limita á una simple
cuidar por ínteres propio de la conserva combinacion de consumos y productos. El
cion de ellos , de la misma manera que hombre es criado á imagén y semejanza de
atendía á la de sus ganados. Asi quedaba Dios , destinado á una felicidad sin término
la sociedad libre de este cargo, el cual gra ,| en la otra vida ; todos los hijos de Adan son
dividual
vitaba exclusivamente
de los propietarios,
sobre el interes
siendo inde- [| hermanos por haber procedido de un mis
mo tronco-, y sobre todo por tener todos
notar que en la parte de semejanza que un mismo Criador , un mismo Redentor ,
tuvieron las sociedades antiguas con las y un mismo fin que es la bienaventuranza
modernas, en abrigar en su seno pobres eterna. De estos principios nacen una serie
no esclavos, se dejaban sentir males pare de obligaciones, asi para el individuo co
cidos á los nuestros. Bien conocidos son los mo para la sociedad ; aquel no puede per
graves apuros en que se encontraron Ate mitir que sus hermanos padezcan hambre,
nas y Roma en presencia de una plebe se ni sed, ni desabrigo; y en cuanto cabe en
diciosa y hambrienta que se creia con de sus alcances debe socorrerlos en las necesi
recho
Libre á ser
de la
mantenida
esclavituddella erario
clase proletaria
público. dades. La limosna es una verdadera obli
gacion ; á ello no le forzarán los tribunales
vese precisada á luchar con las dificultades de la tierra; pero, si la olvida, sabe que de
de su situacion al par que disfruta de sus tal omision le pedirá cuenta el Soberano
ventajas; los ricos no tienen interes direc Juez en el dia del juicio. Sobre la sociedad
to é inmediato en proveer á la subsisten- pesan tambien deberes no menos graves y
cía de un determinado número de indivi rigurosos. La suerte de los desgraciados no
duos; bástales que en tal tiempo y lugar puede quedar abandonada á las vicisitudes
correspondiente no les falten los brazos ne- de la circulacion de la riqueza : el legisla -
dor está obligado á. tener previstos los ca
sos extraordinarios- en que pueden sobreve
( i ) Para formarse idea de la influencia de la reserva nir calamidades públicas , y á guardar en
Religion cristiana en la abolicion de la esclavitud , los medios de desvirtuarlos ó ate
y de la conducta observada por la Iglesia católica nuarlos ; y en cuanto á los males ordina -
sobre este particular , véase el tomo 1 , de la obra ríos que son como el patrimonio de la hu
titulada , El Protestantismo comparado con el
catolicismo en sus relaciones con la civilizacion manidad , debe tener planteado un sistema
europea , per el autor de esta Revista. de socorros , ora fijos , ora intermitentes ,
 150 —
que sostengan al pobre en su penuria y lo desorden , vastísimas llanuras , gigantescas
alivien en su enfermedad. montañas, caudalosos ríos, y sonorosas
De esta manera la libertad no trae con cascadas.
sigo el abandono del necesitado á sus propios Uno de los objetos en que la increduli
recursos ; pues que el interes del dueño en dad se ha mostrado mas ciega y rencorosa,
favor de su esclavo queda sustituido por la son, á no dudarlo, en instituciones reli
desinteresada solicitud de la caridad. giosas. No ha visto, ó no ha querido ver,
El malestar que siente la sociedad de que ellas habian servido en todo tiempo
nuestra época , á pesar del inmenso desar para satisfacer grandes necesidades no solo
rollo de la riqueza y de las indisputables religiosas sino sociales y políticas ; y que
mejoras que en muchos ramos se han ob en nuestra época no se debia desaprove
tenido , proviene de que la civilizacion se char un elemento que bien dirigido podia
ha desviado en parte del principio que le remediar ó disminuir muchos males. Afor
dio nacimiento y progreso. El -elemento tunadamente el mundo , á pesar de toda
religioso es y ha sido siempre necesario á su distraccion y desvanecimiento, es toda
toda sociedad ; pero la europea lo ha me vía mas cuerdo que ciertos filósofos que
nester de una manera especial , porque no pretenden guiarle; y vemos que no obstan
estando cimentada sobre la fuerza , antes al te todas las declamaciones, todos los ma
contrario , teniendo una decidida propen nejos, y lo que es mas, todas las violen
sion á excluirla mas y mas cada dia , re cias contra las instituciones religiosas, las
quiere mayor abundancia de influencia acoge presurosa cuando se trata de instruir,
moral, la que no existe sin la Religion. La moralizar ó consolar. En los paises mas
incredulidad y la indiferencia han extravia cultos, y donde mas extension y arraigo
do los entendimientos, el principio utilita tomaron las preocupaciones irreligiosas,
rio ha establecido el egoismo en los cora allí vemos que los pobres miran con pre
zones ; y una sociedad destinada á presentar dileccion y cariño á los hermanos de la doc
el mas bello conjunto de estabilidad , bien trina cristiana , que se desvelan en comuni
estar y esplendor , siéntese herida en sus carles una instruccion fundada sobre la fe
entrañas por enfermedades que le amena de la Iglesia ; al paso que los enfermos ben
zan con los mas graves peligros. El árbol dicen la religion que les envia las hermanas
habia crecido hermoso y lozano, y levan de la Caridad para cuidarlos, aliviarlos y
taba ya orgullosa su frente coronada de ra consolarlos en el lecho del dolor.
mos , de flores y de fruto ; « esa tierra , di ¿No decisque el dinero es el agente uni
jeron algunos insensatos , fue muy buena versal , que el oro es el talisman para obrar
paralos primeros años del árbol, pero aho los mayores prodigios? pues abrid vuestras
ra ya no la necesita ; trasplantémosle á la arcas, derramad á manos llenas vuestros
bará
que nosotros
nuestro íngenio
le hemoslopreparado allí aca- m tesoros , y ved si con todos ellos llegaréis
que habia; comen
á formar una hermana de la Caridad. La
zado la naturaleza.» I dulzura, la paciencia, la constancia, que
Con tan extrañas preocupaciones no se distinguen á esas mugeres admirables lle
ha echado de ver la utilidad que podía re nas del espíritu de Dios y señoreadas por
sultar de las venerandas instituciones que el fuego de la caridad no pueden nacer de
nos legaron los antiguos ; todo lo que no motivos puramente humanos. La razon y
estaba pautado sobre la mezquina regula la experiencia estan de acuerdo en ense
ridad de concepciones menguadas y pre ñarnos esta verdad ; por mas que los ene
suntuosas ha sido condenado como dañoso, migos de la Religion se hayan empeñado
ó despreciado como vana superfluidad. Esos en hacernos creer que realmente puede
filósofos que asi reprueban lo que no com existir un desprendimiento sublime en hom
prenden , y que de tal manera se empeñan bres que no piensan en Dios, ni esperan
en vaciar el universo entero en el molde nada de la vida futura. No negaremos que
de su pensamiento , se parecen á un jardi un individuo dominado por una fuerte pa
nero que envanecido con la compasada re sion , ó arrebatado por un impulso de no
gularidad de las tablas , senderos y surtido ble generosidad, se olvida a veces de su
res de su vergel de un centenar de toesas propio interes y hasta de sn vida, en ob
cuadradas blasfemase contra el Supremo sequio de alguno de sus semejantes; mas
Hacedor por haber distribuido con subli si bien se observa , en el fondo de aquel
me prodigalidad y en aparente y magnífico || desprendimiento se descubre ó el amor de.
 — 151 —
la gloria , ola ceguera que resulta de algun so de tanta consecuencia ! Mira en torno
afecto muy fuerte ; en fin se encuentra el de sí , y nada halla sobre la tierra que sea
apego á s! propio , cuando á primera vista capaz de aliviar su afliccion ; y si fija los
no se descubriera mas que absoluta abne ojos sobre el porvenir, ¿qué es lo que le
gacion. está reservado? \ Ah ! al salir de aquella
Pero demos que efectivamente lleguen triste y solitaria mansion ha de sepultarse
algunos individuos á poseer el desprendi en un hospital para toda la vida. Ya no
miento de que se trata , y que sean capa hay para ella esperanzade descanso: al la
ces de ofrecerse en holocausto por el bien do del enfermo y del moribundo, ha de
de los demás , prescindiendo de la gloria agotar la copa de amargura , sufriendo in
que de ello les resulte y de cualquiera pa cesantemente la vista de las miserias de la
sion que los mueva; este fenómeno tan sin humanidad , y arrostrando los actos mas
gular y extraordinario , ¿podrá jamas ge penosos y repugnantes. Asquerosas llagas,
neralizarse ? La feliz disposicion de esas al dolencias pestilentes , groserías de los ne
mas naturalmente generosas y desinteresa cesitados, ingratitud de los mismos á quie
das ¿es por ventura el tipo de la humani nes está socorriendo, los dias sin reposo,
dad , ni siquiera de un pequeño número de las noches con escaso sueño , y el dia de
hombres ? ¿ Sobre ese cimiento tan estre hoy como el dia de ayer, y el de mañana
cho podrá levantarse nada grande? Rasgos como el de hoy, y siempre privaciones,
de esta naturaleza dependen de un momen siempre molestias, siempre servicios peno
to de entusiasmo , y el entusiasmo es cosa sos, siempre la presencia de objetos aflic
tan pasagera que no conviene contar con tivos, siempre al oido pendrantes ayes,
él sino para resultados momentáneos. El siempre gemidos , siempre el estertor del
corazon humano de suyo tan flaco y sobre moribundo, siempre el horror de la muer
todo tan inconstante, ha menester algo te : este es su porvenir , esto es lo que la
mas que sus propios impulsos para prose espera hasta los umbrales del sepulcro.
guir largos años en una carrera de penali Reunid toda la filosofia humana, apurad
dades , de mortificacion , de humillaciones los mas nobles sentimientos del corazon , y
de todo género , sin esperanza de recibir ved si de todos podeis exprimir una gota
sobre
Fijemos
la tierra
un momento
la mas ligera
nuestra
recompensa.
considera de consuelo para esta inocente criatura ,
que ¿ola en su retiro está pensando en lo
cion sobre una hermana de la Caridad. En que fue y en lo queserá. Nó: no hay fuer
la flor de sus dias, en la primavera dela vi zas humanas que puedan llevar adelante
da, cuando la belleza esmalta su semblante, una resolucion tan sublime; no hay pecho,
cuando las rosas de la juventud hermosean de tan alto temple que no desfallezca en
su tez , cuando sus ojos centellean con el presencia de tan terrible perspectiva ; solo
fuego de la adolescencia , cuando el mun la Religion es capaz de inspirarían heroieo
do la brinda con un porvenir de ilusion y desprendimiento ; solo Dios «s capaz de
de placeres, abandonalos brazos de sus pa obrar ese continuado prodigio.
dres , da el último á Dios á su tierna ma Si la humanidad doliente ha de ser so
dre , se separa para siempre de sus parien corrida con tierno cuidado, con solicitud
tes, desus amigos, deja el cielo que la y con amor , preciso es encomendarla á la
vio nacer, el pais sembrado de los dulces caridad cristiana. ¡Fiaos en la filantropía,
recuerdos de la infancia , para marcharse que en el fondo de ella os encontraréis con
á tierras lejanas, á vivir entre personas un cálculo mezquino sobre el salario ! |Y
desconocidas, entrando en una casa donde desgraciado el enfermo, pobre y desvalido,
no se respira sino austeridad y penitencia. á quien se asiste por sola la esperanza del
Falta de todas las comodidades de la vida , interes I La administracion mas severa no
rodeada de privaciones, sola con su cora será capaz de endulzar el lenguage y los
zon y con su Dios, recuerda con triste emo modales de los servidores ; si á fuerza de
cion, tal vez con amargas lágrimas, el rigor se consigue la puntualidad , no se ob
amor y las caricias de una madre que á la tendrán jamás la ternura y el amor.
sazon llora con inconsolable llanto la pér La misma caridad cristiana obrando ais
dida de una hija querida de quien se ha ladamente sobre los corazones , dista mu
separado para siempre. ; Qué angustias no cho de producir los mismos efectos que
sufrirá en el fondo de su alma aquella tier cuando vive sometida á la severidad de un
na niña , que acaba" de resolverse á un pa I instituto religioso. Entonces no es el indi
 — 152 —
viduo quien obra, sino la misma institu miento de sus deberes se hallan abandona
cion; y la institucion es una persona su das á sus malos instintos, sin mas freno
blime, que no muere, no se altera, no que el temor de la vindicta pública ; hay
sufre las vicisitudes que combaten las al esas mugeres que comienzan la carrera de
mas mas' virtuosas, sino que haciéndose sus debilidades en los establecimientos fa
superior á todas las pasiones , á todos los briles y acaban por sumirse en la corrup
deseos , á todas las miras mundanas , atra cion mas asquerosa ; hay esa infancia de
viesa impasible por entre las miserias de quien nadie cuida , en quien nadie piensa ,
la tierra sin mas norma que la ley de ca que solo oye la obscenidad y la blasfemia,
ridad, sin mas esperanza que el cielo, sin que asiste á menudo á escenas de escán
mas objeto que Dios. Ese espíritu que ani dalo , que divaga por los lugares público
ma á la institucion se comunica en cierto entregada á sí misma , creciendo en años y
modo á las personas que la componen ; y en perversidad , para continuar una vida
por esto las vemos obrar de una manera inmoral , y tal vez cargada de crímenes.
tan extraordinaria que desconcierta todas Estas necesidades son grandes; es urgente
las combinaciones dela prudencia humana. atender á ellas; en el estado actual de la
Lo que acabamos de describir no es una sociedad es muy peligroso olvidarlas. El
ficcion poética, es un objeto real y verda extravío de las ideas, la corrupcion de cos
dero , que existe entre nosotros , que le po tumbres y el enflaquecimiento del ascen
demos ver cuando bien nos parezca , y cu diente religioso han hecho la situacion mu
yos benéficos efectos experimentan á cada cho mas crítica ; lo que antes se llenaba
paso la enfermedad y la miseria. Reflexio mas ó menos cumplidamente, ahora ha
nen sobre ello los hombres que con insen quedado totalmente desatendido; véase,
sata precipitacion condenan todos los insti pues, si no será conveniente que se per
tutos religiosos; vean si no hayaqui mucho mita , que se proteja el establecimiento de
de qué asombrarse , aun prescindiendo de aquellos institutos religiosos que seaná pro
toda creencia religiosa , y considerando los pósito para satisfacer tamañas necesidades:
objetos bajo un punto de vista de filosofía interésanseen ello la Religion, la humani
y de humanidad. dad , la política , el porvenir del orden so
Se nos dirá que hemos presentado adre cial y hasta la prosperidad material de los
de un instituto bello y sublime, y contra pueblos. No olvidemos que en España no
el cual nada puede objetar quien no esté hay otro medio eficaz de influir sobre el
destituido de todo sentimiento de amor há- mayor número que la Religion católica : no
cia sus semejantes. Pero obsérvese que lo olvidemos que esta Religion, dejándola
que hemos tratado de hacer, es, poner en obrar con libertad é independencia, posee
salvo el principio combatido, demostrar [ el secreto de excogitar los medios mas con
hasta la evidencia que la Religion alcanza á ducentes para satisfacer las necesidades de
un punto á que no se acercarán jamas los cada época ; no olvidemos que cuando la
mayores esfuerzos humanos, hacer palpa irrupcion de los bárbaros hizo necesarias
ble que en los institutos religiosos las vir grandes asociaciones que conservasen los
tudes multiplican sus fuerzas, y por con restos de la civilizacion antigua, y prepa
siguiente evidenciar que era una impre rasen y fomentasen el desarrollo de la mo
vision suma , una crueldad , un delito de derna , se vieron en el seno de Europa in
lesa humanidad el condenar todo instituto numerables monasterios que conservaban
religioso , el oponerse sin distincion á que el depósito de las ciencias y de las artes ;
ellos renazcan , cuando nó para otro obje recordemos que cuando las incesantes guer
to , al menos para acudir á las necesidades ras con los musulmanes y sus frecuentes
que tan en descubierto se hallan en las so incursiones sobre las costas de los cristia
ciedades modernas. Porque conviene no ol nos, aumentaron lastimosamente el núme
vidar que no son solamente los enfermos ro de los cautivos , nacieron en la Iglesia
los verdaderamente necesitados; hay esa católica órdenes redentoras, cuyos indivi
muchedumbre de pobres á quienes las \i- duos se consagraban á la piadosa obra de
cisitudes de la industria amontona frecuen libertar á sus hermanos, ofreciéndose si era
temente en las calles y en las plazas pidien menester ellos mismos en lugardel cautivo
do un bocado de pan para sus numerosaas á quien se proponían redimir. Traigamos á
familias; hay esas clases trabajadoras (pie le la memoria que cuando el descubrir
sin instruccion , sin educacion , sin conocí del nuevo mundo reclamó
 la fero-
— 153| espaciosas
— calles y delos soberbios palacios,
cidad de las conquistas , iluminasen á los lo debe á que se ha fijado en ella la corte.
pueblos que estaban sentados en las som Suponed que esta se traslada á Sevilla ó á
bras del error , y los condujesen á una ge Lisboa, y desde luego Madrid desaparece
neracion que los asemejara á los europeos , del mapa de España. Sucederle ha lo pro
allí acudieron los institutos religiosos con pio que á Toledo , cuyo grandor está solo
la cruz en la mano, predicando fraternidad en los recuerdos, cuya magnificencia vive
y paz, en tierras donde no se conocían si únicamente en los monumentos religiosos.
no el horror de la guerra y la ignominia de No se verifica esto con Barcelona , la cual
la esclavitud. Dejemos, pues, obrar al ca no necesita de la corte , no ha menester el
tolicismo en plena libertad ; dejemos que brillo postizo ; ni para ser rica y populosa
la enseria de la redencion se levante en to requiere que vivan en ella los grandes
dos los puntos donde la caridad quiera magnates. Siglos han pasado desde que
plantearla ; y no dudemos que las necesi desaparecieron de la misma los antiguos
dades que abruman á la sociedad moderna condes ; muchas de las familias de la mas
quedarán satisfechas en cuanto lo permite alta nobleza se han amontonado en la capi
la misera condicion humana en esta tierra tal de la monarquía , mas por eso Barcelo
de infortunio : lo que podemos obtener de na no ha decaido ; antes al contrario , á un
una ' lo demandemos álos ensanche ha debido
J. B.
y luchando con las fortificaciones que la
constriñen y ahogan , no teniendo lugar en
la tierra se ha levantado por los aires con
sus altísimas casas.
BARCELONA. nada
Y ¿de
puede
dónde
contener?
dimanaDe
este
su desarrollo
magnífica que
po
sicion topográfica , de que está situada en
Artícixo 1. terreno feraz, en clima suave, bajo un cie
lo hermoso y encantador, al lado de la
Francia , no lejos de Italia, á las inmedia
ciones de las Baleares, en frente del Afri
ca , sirviendo de punto de comunicacion
entre todas las poblaciones de la costa del
mediterráneo, y todo esto con habitantes
SOBRE LAS CAUSAS DE SU PROSPERIDAD, de suyo laboriosos y activos, y siendo ca
Y REFUTACION DE ALGUNAS PREOCUPACIONES. beza de Cataluña , nombrada en
tes por su constancia, por su t
por su perseverante sufrimiento en todo lo
concerniente á la agricultura y á la indus
tria. Por esta causa, nadaban podido para
La ciudad de Barcelona es digna de lla abatirla en los tiempos antiguos ni moder
mar la atencion , no solo por la importan nos, los terribles desastres de que ha sido
cia que en sí tiene, sino tambien por loque víctima. Muchas otras poblaciones vemos
puede influir en los destinos de España. Y cuya prosperidad no puede resistir á un si
cuando estodecimos, estamos muy lejosde tio, á un incendio y otros contratiempos
exagerar; pues que siendo la capital del de esta clase ; mas en Barcelona nada pue
Principado la segunda poblacion de la mo den las calamidades públicas para contener
narquía si solo atendemos al número de el desarrollo de la industria y comercio. A
sus habitantes , tal vez podremos conside principios de este siglo se halló durante seis
rarla como la primera, si nos paramos en años en poder de un ejército extrangero ,
los elementos de prosperidad que en sí pro ausentes buena parte de sus moradores ,
pia entraña ; elementos que desarrollados dispersos ú ocultos sus capitales, incomu
á la sombra de circunstancias favorables nicada con el resto de la provincia , y so
por espacio de veinte y cinco años, podrían metida á suspicaz vigilancia de la policía
convertirla en una de las mas populosas y francesa, que no sin razon veia en cada
florecientes ciudades de Europa. ciudadano un enemigo, y que estaba te-
En efecto, si Madrid es la villa de las continuamente que do
 — 154 —
conspiraciones contra el tirano que la opri tener abiertas xanas casas , que necesita
mía. Colocad en situacion semejante á otras numerosos corresponsales ? fija su habita
ciudades , y será imposible que se levanten cion en Barcelona, allí forma sus grandes
jamás de la postracion en que habrán cai almacenes, allí coloca el centro de todo su
do. Los capitales separados de ella por es movimiento mercantil. De aquí dimana
pacio de tantos anos habrán tomado otra que los artefactos mas cumplidos y elegan
direccion; naturalmente se habrán formado tes salen precisamente dela capital; y aña
otros centros de comercio rivales ya de la diéndose á esto la preocupacion de que lo
capital antigua ; los conductos del movi fabricado en Barcelona es mejor que lo del
miento industrial y mercantil se habrán resto de la provincia , resulta que las po
obstruido y estropeado con el desuso; y ya blaciones subalternas viven como esclavas
será poco menos que imposible resucitar de aquella , siéndoles imposible competir
aquel movimiento , indicio seguro de la con ella en ningun ramo.
plenitud de la vida. Mas esto acontecerá » Si Barcelona no ejerciese esa especie
tratándose de poblaciones que deban su ri de soberanía industrial y mercantil , si los
queza y prosperidad á circunstancias tran elementos de riqueza se hallasen desparra
sitorias , y no puede verilicarse en Barce mados por toda la provincia, si Beus,
lona por haberla favorecido la naturaleza Igualada, Manresa, Yich , Berga, Olot,
con tal conjunto de ventajas que difícil (ierona , fuesen otros tantos centros de ac
mente
El general
se reunen
Seoane,
en otraenciudad
momentos
del mundo.
de in tividad y movimiento, capaces de compe
tir con la capital , y que dejándole cierta
dignacion contra la capital del Principado superioridad no se viesen precisadas á pos
que no se le habia mostrado afecta en de trarse á sus pies, parece que la vida indus
masía , afirmó que para el bien de Catalu trial y mercantil estaría mejor distribuida,
ña y de España era preciso cortar el brío que la riqueza pudiera ser mayor, y que la
y debilitar las fuerzas de la turbulenta ciu prosperidad de Cataluña alcanzaría con ello
dad ; ó como él decia , era urgente , indis grandes creces.»
pensable, aplicarle sangrías que la curasen No puede negarse que á primera vista
de la plétora que estaba padeciendo. De no sean especiosas las reflexiones aducidas;
jando aparte el aspecto político, del cual y no serán pocos los que al verlas propues
no queremos ocuparnos por ahora , obser tas, se dejen convencer plenamente de que
varemos que quizás algunos de entre los en realidad el proyecto de Seoane envolvía
mismos catalanes sean de parecer que no una idea justa, prudente y en extremo
andaba tan desacertado el eeneral Seoane económica. A pesar de todo, no podemos
cuando se proponía dispersar y desparra creer que haya en todo esto una palabra
mar por el Principado los elementos indus de verdad ; y vamos á señalar las razones
triales y mercantiles que se hallan agolpa en que estriba nuestra opinion.
dos en la capital. Escuchemos primero las Ante todo presentaremos una observa
razones que nos presentan los partidarios cion muy sencilla, pero que basta por sí
de semejante opinion , y examinemos en sola á desvanecer esos castillos aéreos. En
seguida cuál es el peso de ellas en la ba política , en administracion y en todo lo
lanza de la economía política. «Todo lo concerniente á la práctica, no debe lla
absorve Barcelona, dicen esos hombres, marse verdadero lo que es inaplicable; por
poblacion, dinero, capitales de toda cla que desde el momento que una teoría no
se, inteligencia; todo se reune allí; resul se puede realizar, es señal de que está en
tando de esto que se enervan las fuerzas lucha con la misma naturaleza de las cosas,
del resto del Principado, que las demas y que por tanto no es verdadera con rela
poblaciones no pueden medrar y que no cion á ellas. Ahora bien, ¿es posible dis
hay la debida proporcion entre la cabeza y minuir la pujanza de Barcelona de suerte
los miembros. Observad lo que sucede en que lo que esta pierda lo ganen las demas
todos los ramos. ¿Hay un artesano de dis poblaciones ? Creemos que nó , y para de
posiciones aventajadas? se traslada -á Bar mostrarlo echaremos mano de varias supo
celona : ¿hay un fabricante que ha aumen siciones. Demos que se impulsa de una
tado mucho sus capitales ó perfeccionado manera extraordinaria el ramo de los ca
sus productos? se establece en Barcelona: minos y canales para dar movimiento á lo>
¿hay un comerciante que ha dado mucha interior del Principado, y hacer que parti
extension á sus negocios, que ha logrado cipe algun tanto de las ventajas que á Bar
 — 155 —
celona produce el ser puerto de mar y la cado, acrecentará su riqueza , y por lo tan
confluencia de las principales carreteras. to la proporcion no se habrá cambiado. -Ai .
Entonces será mas fácil conducir á las po Hágase la suposicion quese quiera, áno
blaciones de segundo orden las materias ser que se apele á medidas brutales que
primeras, y extraer de sus fábricas los repugnan á la civilizacion, á la humani
productos elaborados conduciéndolos con dad, y que no podrían menos de estar en
mas rapidez y baratura á los mercados que lucha con la equidad y la justicia , y que
ofrezcan esperanzado despacho; ¿pero qué ademas serian irrealizables, siempre ten
habremos ganado con esto para disminuir dremos que todo cuanto se escogite para
la preponderancia de Barcelona sobre las disminuir la preponderancia de Barcelona,
demas ciudades? Si estas se aprovechan ha de ser esforzándose en crear en otras
del beneficio dela mayor comunicacion , se partes de Cataluña nuevos centros de in
aprovechará tambien ella ; y con la mayor dustria y de comercio ; de estos centros se
facilidad y menor precio de los transportes aprovechará siempre la capital para dar
podrá establecer en todos los puntos del mas movimiento á sus fábricas, vaciar sus
Principado grandes almacenes de todos almacenes, atraer numerario y proporcio
géneros con lo cual proporcionará mas tra narse las materias que necesite.
bajo á sus fábricas y mas actividad y vida Parécenos que es falso lo que afirman
á su comercio. Las poblaciones de segundo algunos de que las grandes capitales absor-
orden se habrán mejorado , habrán crecido ven á las poblaciones de segundo orden y
en número de habitantes, y dado impulso que les quitan sus elementos de prosperi
á su industria y tráfico ; pero en mayor dad y riqueza. Fácil es decir por ejemplo
proporcion se habrá mejorado ella, su que Barcelona no deja que Reus, Iguala
puesto que abundando mas de inteligencia da, Manresa , Berga, Vich, Gerona y otras
y de capitales, habrá explotado con mas poblaciones de segundo órden se levanten
fruto las ventajas del aumento de las co á mayor altura de la que han alcanzado
municaciones. hasta ahora; mas en esto se comete un
Supongamos que para disminuir el mo error que consiste en considerar lo que son
vimiento mercantil de Barcelona, se quiere estas poblaciones existiendo Barcelona, sin
hacer menos concurrido su puerto, habili atender á lo que serian si ella no existiese,
tando otro cualquiera que pareciese conve ó no fuera tan pujante. Para hacer sentir
niente , proyecto que si no nos engañamos la fuerza de esta reflexion nos dirigiremos
era uno delos escogitadosy propuestos por á los mismos que al parecer podrían inte
el general Seoane. En primer lugar las resarse en el cambio , y les preguntaremos
embarcaciones mercantiles no acuden al si desearían que Barcelona no fuese mas
puerto de Barcelona por las comodidades que una poblacion de treinta ó cuarenta
marítimas que este les ofrezca , sino por la mil almas , con una riqueza proporcionada
oportunidad que allí encuentran para sus á este número. Estamos seguros que si re
compras ó ventas. Habilitad un puerto , flexionan un momento retrocederán á la
imaginad que reune muchas mas comodi vista de semejante suposicion , y de que
dades que el de Barcelona, ¿improvisaréis tendrán desde luego un vivo presentimien
allí una ciudad con sus almacenes, sus fá to, una prevision muy clara del daño que
bricas, su numerosa poblacion , sus posa habrían de sufrir en vez delas ventajas que
das, sus cafés, sus teatros y todo cuanto se prometieran. ¿Dónde estarían los gran
puede desearse para las necesidades y pla des capitales para la formacion de los al
ceres de la vida, y las conveniencias de las macenes de las materias primeras necesa
especulaciones mercantiles ? Ciertamente rias al movimiento de las fábricas ; para
que nó. La nueva poblacion se irá quizás hacer frente á los cuantiosos adelantos que
aumentando; mas para esto necesita el se han menester en un comercio organiza
trascurso de muchos años , y teniendo que do en anchurosa escala , como es indispen
luchar con otra ciudad rival y poderosa sable cuando se ha de dar salida á pro
que tiene interes en conservar su pre ductos muy abundantes; para traer del
ponderancia , y que redoblará su actividad, extrangero las invenciones sin cuyo cono
aun cuando no fuera por otra causa, por cimiento y planteo seria imposible colocar
motivos de emulacion , resultará que apro se al nivel de la época , y sostener la com
vechándose esta del mismo movimiento que petencia en los mercados ? ¿ Dónde se
se dispierta en el punto nuevamente vivifi podrían formar las sociedades opulentas
 que para vivir necesitan centros populosos,
llenos de vida , de actividad y de movi
miento ? En una palabra , si suponemos
que la capital desfallece participirán del
desfallecimiento las demas poblaciones;
experimentando desde luego que lo que
ellas creyeran que las enervaba con su
fuerza absorvente, era la cabeza , el cora
zon , que hacían circular por ellas la san
gre , y que faltando este recurso quedaban
condenadas á la languidez y á la muerte.
Nos convenceremos mas y mas de la so
lidez de estas razones si atendemos á loque
sucede en todos los demas paises : donde
hay mas industria y comercio, allí hay ca
pitales mas populosas ; y recíprocamente,
donde estas existen , allí se nota mas vida ,
mas movimiento industrial y mercantil ,
(pie se extiende en círculos concéntricos al
rededor dela gran ciudad, disminuyéndose
á proporcion de la mayor distancia , hasta
extinguirse en la extremidad del radio. Os
hallais todavía á muchas leguas de una de
esas grandes ciudades y todo os anuncia
que os aproximais á ella. La convergencia
de los grandes caminos, el tráfico de todos
géneros, la mayor animacion, regularidad
y belleza que presentan las poblaciones, el
mayor aseo de los trages, la mejor cultura
de los campos ; en una palabra , un estado
mas ventajoso de todo cuanto sirve á las
comodidades de la vida os indica la exis
tencia y cercanía de uno de esos grandes
centros de riqueza y circulacion.
De aquí se infiere que si las capitales ab-
sorven , tambien comunican , y probable
mente con usura; porque si es verdad,
como indudablemente lo es, que la asocia
cion es un manantial fecundo de adelantos
de todas clases , verificándose esta asocia
cion en las grandes capitales en escala mu
cho mayor que en ciudades pequeñas, es
evidente que no hay solo en ellas una fuer
za que absorve ; sino que hay otra mucho
mayor que produce. Como ademas esta
produccion tiene grandes necesidades que
satisfacer, asi por lo tocante á las materias
primeras que le sirven de base , como por
lo relativo á sus procedimientos y á la es-
pendicion de sus productos, resulta que
muchísimos géneros encuentran salida que
no la encontrarían en otra parte; que mu
chos brazos hallan ocupacion que de otra
suerte se verian precisados á permanecer
inactivos; y que muchas atenciones se
pueden cubrir con facilidad y baratu
ra cuando á no existir las capitales seria
preciso renunciar á ello. Ademas que
la declamacion contra las grandes ciudades
es del género de aquellas que luchan con
hechos indestructibles, y que por lo mismo
son impropias de personas reflexivas , que
despreciando lo inútil miren únicamente á
lo que puede acarrear provecho. Desdeque
la civilizacion moderna ha tomado grande
incremento, se ha visto una tendencia mar
cada al acumulamiento en las poblaciones.
Los señores descendieron de sus castillos
feudales, y se establecieron en las ciuda
des subalternas : de estas pasaron á las ca
pitales de provincia , de donde se traslada
ron á la corte. El curso seguido por los
dueños de la riqueza territorial ha sido
imitado por todos los poseedores de otra
cualquiera , y asi la misma naturaleza de
las cosas ha creado esos centros que cada
dia tienden á engrandecerse mas y mas.
Decis que Londres disminuye las demas
ciudades de Inglaterra , asi como Paris las
de Francia , sin advertir que á la sombra
de aquellas poblaciones colosales se han
formado y se conservan otras, que serían
dignas capitales de otros reinos. Si Lon
dres no existiese quizás no existirían Man
ches! er y Liverpool ; asi como desapare
ciendo Paris menguarian Lion y otras
ciudades de la Francia.. En un pais donde
las poblaciones sean pequeñas , la que reu
ne trescientas ó cuatrocientas mil almas
parece ya muy grande. En Inglaterra don
de la capital encierra uamillon y medio de
habitantes, una ciudad de cuatrocientas
mil almas pertenece á una categoría subal
terna. Y es que el grandor es cosa relati
va , asi como la pequeñez : un hombre de
estatura regular es un gigante al lado de
un pigmeo, y un pigmeo al lado de un
gigante. — /. B.
SOBRE LA
'
INSTRUCCION DEL CLERO.
—-~—
Los sagrados dogmas de la Religion per
manecen siempre los mismos, siempre inal
terables ; porque siendo verdades reveladas
por Dios no pueden estar sujetos á mudan
za. Pero las formas bajo las cuales pueden.
 151
presentarse en sus relaciones con el hom ro es que si se ha de obrar sobre los espí
bre , con la sociedad y la naturaleza , son ritus con suavidad y eficacia , ha de ser
muy varias; y de aquí es que vemos ex adaptándose á ellos, y tomando, por de
planada la doctrina de la Iglesia de dife cirlo asi , su carácter é inclinaciones. Obs
rentes modos, segun han sido diferentes tinarse en hablar á los hombres de hoy,
los tiempos y las circunstancias. A esta va como se hablaba á los de los siglos medios,
riedad han contribuido dos causas : el esta seria ó desconocer completamente la natu
do de los pueblos á quienes se habia de raleza humana, ó empeñarse en inútil lu
enseñar, y la clase de enemigos con quie cha con la realidad de las cosas.
nes era preciso combatir. Los apóstoles y Cuando se trata de defender la verdad ,
sus inmediatos sucesores hablaban un len es preciso pelearen el terreno donde el ad
guage distinto del que usaban los misio versario coloca la cuestion , si no queremos
neros que se proponían convertir á los que se nos llame amigos de las tinieblas y
bárbaros del norte ; los jesuítas predica del exclusivismo , y se diga que no somos
ban á sus neófitos del Paraguay en estilo capaces de sostener ventajosamente la lid ,
muy diferente del de Bossuet, Massi- sino en el palenque que nosotros mismos
llon y Bourdaloue ; y al lenguage de unos hemos escogido , preparándole adrede con
ni otros no se parece el que oimos de Ra- estudiadas ventajas que garanticen el triun
vignan y Lacordaire. En la polémica con fo de nuestra doctrina. Estos adversarios
los enemigos de la Iglesia notamos la mis emplean tambien diferentes medios de ata
ma variedad. Hay diferencia muy palpable que , segun la variedad de tiempos y cir
entre las obras de San Gerónimo y de San cunstancias ; y esto lo hacen , nó tan solo
Agustín, y las de estos Santos Padres y las con premeditacion de un plan , sino tam
de Santo Tomas; entre las de Belarmino y bien porque afectados del espíritu del siglo
las de los doctores- de los siglos medios , en que viven , echan mano con preferencia
entre las de Bossuet y las de Belarmino; y de aquella clase de argumentos que mas
entre las de los apologistas mas modernos se adaptan al estado intelectual de su
y los de los siglos que precedieron. tiempo.
Segun es diferente el estado intelectual De estas consideraciones inferimos la in
y moral de los pueblos es necesario hablar dispensable necesidad de que los conoci
les otro lenguage; lo que es muy fácil al mientos del Clero se hallen al nivel de la
hombre civilizado, es inasequible al bárba época, para que la causa del error no
ro ; lo que para el sabio es muy llano, es cuente con recursos de que escasee la
inaccesible al hombre rudo. Hasta entre los verdad. Es preciso que los ministros de la
pueblos civilizados es muy extensa la escala Religion se penetren de toda la gravedad é
en que se hallan distribuidos ; y segun sea importancia de este deber , y de cuán ne
el desarrollo intelectual y moral á que ha cesario es que viviendo separados del siglo
yan llegado, será preciso ofrecerles las por la pureza de la vida y la austeridad de
ideas bajo distintas formas, y excitar de costumbres, no permanezcan inmóviles en
diferente manera sus sentimientos. ¿No es medio de la marcha que en sus alrededo
tamos palpando esta verdad en el recinto res se verifica. Es menester grabar profun
de una misma poblacion? ¿No experimen damente en el ánimo, que no es inconcilia
tamos que un discurso muy acomodado pa ble la luz del entendimiento con la rectitud
ra un auditorio escogido, será totalmente del corazon , que la ciencia no está reñida
desproporcionado para la generalidad del con la virtud , y que los eclesiásticos pue
pueblo? Expresiones que repugnan á aquel den muy bien tener la vista fija sobre el
son muy agradables á este ; y rasgos que progreso intelectual , sin dejarse contagiar
al segundo le arrancarán abundantes lágri de la corrupcion que á veces acompaña los
mas dejarán frio al primero , y quizás le adelantos.
moverán á desprecio ó risa. El hombre encargado de enseñar á los
Si esto se verifica entre los habitantes de demás las verdades mas importantes, no
una misma ciudad, cuyasideas, sentimien debe quedarse rezagado en ningun sentido ;
tos y costumbres han estado en perenne asi como debe servirles de modelo en la
comunicacion, y que por necesidad han pureza de la vida , así debe tambien em
debido afectarse recíprocamente, ¿qué no puñar el cetro de la inteligencia ; porque
sucederá con generaciones apartadas unas es preciso confesar que la reunion de la
de otras á la distancia de largos siglos? Cla santidad , de la sabiduría y del sacerdocio ,
 158 —
forma un conjunto tan sublime, que á su subsistencia. Quizás nos engañemos , ¡
ascendiente no pueden resistir hasta los es en nuestro concepto pocas prebendas de
píritus mas incrédulos. Obsérvese lo que biera haber que brindasen con mas emolu
acontece en el mundo , y se notará que mentos y comodidades que las cátedras aun
donde quiera que existe esta admirable de los mas pequeños seminarios; porque en
reunion de circunstancias, allí se dirigen no siendo asi nadie quiere consagrarse á un
los homenages del público ; y hasta los mas trabajo tan asiduo y penoso , es mirada la
dominados por preocupaciones contrarias á enseñanza como accesorio de otro destino
la Religion , ó tributan un obsequio á la cualquiera, y á la primera oportunidad que
persona , ó permanecen en respetuoso si se ofrece aprovecha el profesor la ocasion
lencio. Cuando, los vándalos entraron en de salir de un estado tan precario. De esta
Hipona atacaron los restos de San A-gustin manera , cuando un jóven ha empezado á
que acababa de fallecer : cuando ocupaba formarse y á manejar las materias con sol
la Silla de Cambray el inmortal Fenelon , tura y desembarazo, abandona el puesto
los gefes de los ejércitos se impusieron el que en adelante habría ocupado con fruto,
deber de respetar el territorio del ilustre y es sustituido por un inexperto , que va á
prelado. ensayar sus limitados conocimientos por es
Como los individuos del Clero, por ra pacio de pocos años , para seguir á su vez
zon de su instituto han de vivir apartados el camino de su antecesor cuando su capa
del mundo , mayormente mientras se estan cidad comience á extenderse y adquiera
formando en los seminarios, corren el pe mas habilidad y tacto para hacer adelantar
ligro de acostumbrarse á un orden de á sus discípulos.
ideas, sentimientos y hábitos, que nada Pocos son los hombres á propósito para
tengan de semejante con lo que prevalece enseñar bien ; y aun los que han recibido
y domina en la sociedad que los rodea. Es de la naturaleza este don precioso , no lo
te inconveniente , nacido de la misma na emplean con acierto sino despues de mucha
turaleza de las cosas , solo puede obviarse observacion sobre el efecto que produce á
teniendo montados los sistemas de instruc los diferentes métodos. Es tanta la variedad
cion con tal arte , que los jóvenes al propio de los talentos , es tal la diversidad de las
tiempo que se penetren del espíritu del materias, se reunen en torno de una misma
Evangelio para arreglar á él sus costum cátedra alumnos de índoles tan distintas,
bres, conozcan tambien el espíritu del si que solo á fuerza de un tacto exquisito que
glo para dirigir acertadamente á los que por necesidad ha de ser el fruto de dilatada
viven en medio de él. Y no se crea que un experiencia , - puede un profesor presentar
sistema semejante sea de todo punto impo sus ideas de tal manera que no excedan la
sible : es difícil , sí , no lo negamos ; pero capacidad de los de alcance limitado y no
con buena intencion , con firme voluntad y fastidien á los de comprension aventajada.
perseverancia se superan los mayores obs Es preciso coordinar los pensamientos de tal
táculos y se da cima á las mas arduas em suerte , que mientras sean para los de corto
presas. No opinamos que este resultado de talento como una cartilla que les sirva de
ba obtenerse siempre por medio de largas modelo, sean tambien fecunda semilla para
disertaciones; hay cosas que mas bien se los que esten dotados de una capacidad vas
sienten que no se entienden ; y quizás ta , y se sientan inclinados á meditar por sí
un rasgo, una anécdota, una reflexion mismos los objetos de la enseñanza .
oportuna, un cuadro de costumbres, en Las ciencias eclesiásticas presentan bajo
señan mas sobre el espíritu del siglo que este punto de vista terribles dificultades ;
un abultado volúmen. cuando se las quiere presentar de manera
Dos cosas deben contribuir al logro del que , sin perder nada de su verdad y gra
objeto indicado : los profesores, y los li vedad , pueden ofrecerse á los ojos del pú
bros ; y sobre unos y otros conviene fijar blico sin causar extrañeza , antes llamando
la atencion excogiendo los mas acomodados la atencion por su dignidad y lustre, se
al intento. Por loque toca álos profesores, encuentran tales embarazos que solo puede
es ciertamente lamentable que las cátedras deshacerse de ellos una mano muy ejerci
de los seminarios estén dotadas tan infeliz tada. Entre varias razones que quizás po
mente , que no solo no se las pueda mirar drían señalarse, es en nuestro concepto una
como término de carrera , pero ni ainv po de las principales el que los estudios ecle
mo un medio transitorio para ganarse la siásticos si han de ser sólidos y profundos .
ha 11 de hacerse no solo con los libros mo
dernos, sino con los antiguos. Asi por
ejemplo, quien ha de poseer perfectamen
te la teología no ha de contentarse con lo
que se ha escrito en los últimos tiempos.
La Sagrada Biblia , los Santos Padres , las
obras de los teólogos escolásticos , hasta las
escritas con mal latin y pésimo gusto , han
de ocuparle largas horas; y asi es que está
en peligro de acostumbrarse á vivir en otro
siglo, con hombres muy diferentes, dando
á sus ideas una direccion que nada tiene
que ver con la que generalmente reciben
los de los educados en medio del bullicio
del mundo.
Cuando la Religion dominaba completa
mente la sociedad , y la tenia por decirlo
asi , bajo su tutela , cuando la clase ecle
siástica era la primera en todos los órde
nes, ejerciendo bajo distintas formas un
poder político, y poseyendo la preeminen
cia en las ciencias y en las letras ; formado
un alumno en los seminarios adquiría allí
mismo en cierto modo el espíritu del siglo.
La literatura, la filosofía y las facultades
mayores á que se dedicaba en el colegio,
eran las mismas que se estudiaban en las
universidades y demás establecimientos pú
blicos. Ahora introducido el divorcio entre
la política y la Religion , esparcido por la
sociedad el escepticismo , habiendo desapa
recido la aficion á las ciencias eclesiásticas
y cundido cierto desvío por todo loque tie
ne visos de disertacion de escuela , resulta
que el jóven que sale de un seminario don
de no se hayan tenido en consideracion es
tos hechos se encuentra con un mundo,
que ni le comprende , ni es comprendido
por él ; con unos sabios que hablan otra
lengua , y que nada entienden del idioma
de los sabios de otras épocas, único que
conoce el recien venido ; si ataca á algun
adversario , parte de principios que el otro
no admite ; y si es atacado y se defiende ,
contesta en términos quizás profundamen
te sabios, pero cuyo sentido el contrincante
no alcanza , por ser aquella la primera vez
que los oye. De manera que puede muy
bien ocurrir que un jóven de talento muy
claro , de dilatada instruccion y profundo
saber, se encuentre embarazado en la po
lémica con un ignorante , nó por falta de
excelentes armas, sino pomo tenerlas aco
modadas al uso del dia.
Por estas razones es de la mayor nece
sidad que cuantos toman parte en la direc
cion de los establecimientos de enseñanza
eclesiástica , procuren por todos los medios
posibles que la instruccion y la ciencia , sin
perder nada de su exactitud y solidez , sin
contagiarse de esa especie de disipacion y
vaguedad , que es uno de los achaques de
que adolecen los acontecimientos de nues
tra época, la misma ciencia, repetimos,
de San Agustín, de Slo. Tomas, de Belar-
mino, de Suarez , de Melchor Cano, se
revista á los ojos del mundo con el trago
que requiere el espíritu de nuestros tiem
pos; es preciso que la exposicion de las
mismas ideas se haga de diferente manera;
que el hilo de los raciocinios se conduzca
con nuevos métodos ; que las fuentes de
argumentacion , cuando se haya de apelar
á la razon natural, sean adaptadas al gusto
científico dominante. Este gusto será, si se
quiere, caprichoso, insustancial, inferior
al que prevaleciera en otros siglos; pero
sea lo que fuere , no está en nuestra mano
el destruirle : es un hecho , y aun cuando
no se le apruebe, es necesario conocer que
existe, y obrar conforme á las nuevas con
diciones que él nos impone. Protestar con
tra él , empeñarse en no tenerle en cuenta,
proceder como si no existiese , es luchar
contra la fuerza delas cosas, es condenar
se á vivir en el aislamiento, es privarse de
los medios de accion sobre la sociedad , es
no querer emplear en defensa de la Reli
gion, armas que pueden servirle mucho,
es olvidarse de la conducta que siguieron
en todos tiempos los doctores de la Iglesia,
cuando aplicaron tambien al orden cientí
fico aquella regla del Apóstol, de hacerse
todo para todos para ganarlos á todos. — J. fí.
EL SOCIALISMO.
_„_
Artícilo 1.°
El Socialismo, ó bien aquella escuela
que se propone destruir el orden social exis
tente, constituirlo sobre nuevas bases y ar
reglarlo con diferente norma , es objeto
digno de la meditacion de todos los hom
bres pensadores y amantes de la humani
dad. Porque se equivocaría grandemente
quien considerase á estos novadores como
despreciables fanáticos que víctimas de una
 — 160 —
ilusion exagerada por el orgullo, pasan y ranza Ahora
de el
mejor
pensamiento
vida mas no
allásedel
contenta
sepulcro.
con
desaparecen sin dejar tras sí ninguna hue
lla. Es cierto que ni se han planteado ni permanecer oculto en el bufete del sabio :
pueden plantearse los sistemas que ellos teniendo á la vista la experiencia de la rea
propalan ; que sus doctrinas se mantienen lizacion de otrosque le parecen mas arduos,
por ahora, y probablemente se mantendrán apenas concebido forceja por descender al
por mucho tiempo, en la esfera de simples terreno de la práctica. Borrados los límites
teorías ; mas la semilla que ellos arrojan al de la verdad y del error , de la justicia é
acaso se deposita en tierra que la recoge injusticia, se encuentra detenido por leves
con avidez , quizás para fecundarla el dia rayas que separan lo conveniente de lo da
que la Providencia quiera desencadenar ñoso, tiradas muchas de ellas por los mis
sobre el mundo desconocidos y espantosos mos hombres que destruyeron ayer, y que
trastornos. proclaman como de eterna duracion la obra
Que las ilusiones de esa escuela no son que han levantado hoy sobre las ruinas de
para despreciadas , lo indica la repeticion lo que nos legaron los siglos. Entonces el
de sus apariciones en diferentes'tiempos y pensamiento concebido con fuerza, ardien
paises , y el que el mal éxito de los pro te como la matriz donde se ha formado ,
yectos del innovador no desalienta á los que lleno de energía y brio como la cabeza en
intentan sucederle ó imitarle. Hay empero que se agita, indígnase contra la resisten
en la actualidad una circunstancia notable, cia que le oponen otros pensamientos, que
y que no deja de ser alarmante. En todas cuando mas mira como sus iguales, y como
épocas se han visto hombres que soñaban que les dice «¿quiénes sois vosotros para
una nueva república , fundada sobre prin decirme , no pasarás dt aqui, como el Cria
cipios muy diferentes de los en que estri dor á las olas de la mar? Vuestros títulos
baba la sociedad en que vivían. Pero estos se fundan en que llegasteis ayer y yo he
filósofos no salian por lo comun de la esfe llegado hoy: para vosotros no prescribió
ra de tales ; contentábanse con meditar en lo antiguo que contaba su existencia por
el retiro de su gabinete , con pasearse en siglos, ¿y quereis que prescriba lo vuestro
espíritu por mundos imaginarios; y lo mas que no tiene de duracion mas que un dia?
á que se atrevían era escribir un libro, que Ya que vosotros lo habeis ensayado, de
mas bien publicaban como obra de instruc jadme que yo ensaye tambien; ya que ha
cion y pasatiempo, que nó como proyecto beis reconstituido la sociedad del modo que
realizable. No ha sucedido asi en nuestro bien os ha parecido, dejadme que yo la
siglo, pues que los reformadores no han reconstituya tambien como mejor me agra
querido resignarse al papel de utopistas, dare. Si vosotros invocasteis la humanidad,
sino que empeñados en hacer aplicaciones yola invoco tambien: si proclamasteis la
de sus ideas se han erigido en fundadores y libertad , yo la proclamo tambien : si tro
directores de una sociedad nueva , entera nasteis contra la desigualdad, yo trueno
mente calcada sobre los principios que ellos contra ella tambien ; si condenasteis como
excogitasen. injusto todo lo existente, injusto lo declaro
Examinando este fenómeno en sí, é in yo tambien , y como tal lo condeno , inclu
vestigando las causas de tamaña diferencia, so lo que vosotros habeis añadido. Vosotros
las encontraremos en el inmenso desarrollo invocasteis la humanidad para hacerla par
que en todos sentidos ha tenido el espíritu ticipante de los derechos políticos , y lla
de libertad ; en esas tendencias democráti mando al rededor de las urnas electorales
cas que forman uno de los caractéres de á un número muy reducido le habeis dicho:
nuestra época ; en esa excentricidad de los « conténtate con esto, y cree sobre nuestra
entendimientos que carecen de toda idea palabra que ejerces la soberanía; » yo llamo
fija que pueda servirles de polo ; en ese á la humanidad , nó para que asista á com
vuelo de los sentimientos y de la fantasía binaciones artificiosas que ni sacian su ham
que se complacen en salir del mundo real bre , ni apagan su sed , ni cubren su des
y en divagar por regiones imaginarias; en nudez , ni lisonjean siquiera su orgullo , ya
ese profundo malestar, en esa inquietud que á la mayor parte de los hombres los
febril que trabaja los ánimos y mucho mas privais de este derecho ; yo la llamo á la
á los hombres de genio, despues que se han comunidad de bienes , á la participacion de
hundido en ellos las creencias religiosas, y II goces positivos . á disfrutar una felicidad
se ha arrebatado al triste mortal espe I) hasta aqui desconocida, con la satisfaccion
de todas las necesidades , de todas lus pa
siones, de todos los caprichos. Vosotros
proclamais una libertad que no exime al
pobre de la dependencia del rico, que en
cadena al criado á los pies de su amo, que
deja al mendigo tiritando de frio á las puer
tas del palacio del poderoso , mientras este
se embriaga de placer en sus brillantes y
voluptuosos festines ; yo proclamo una li
bertad que no consiente diferencia de po
bres ni de ricos , y que por lo mismo no
deja á unos esclavos de otros ; vuestra
igualdad es una igualdad mentida , porque
deja la espléndida morada del magnate in
sultando la asquerosa mansion del infeliz ,
y el trage ostentoso del rico al lado de los
andrajos del necesitado; yo sostengo que
no hay igualdad mientras se conserve desi
gualdad tan repugnante ; yo no quiero que
la impetuosa carroza donde briosos caballos
lujosamente enjaezados, arrastran á un
mozo en la flor de sus dias, atropelle al
anciano desvalido , que trémulo y falto de
fuerzas puede apenas sostenerse apoyado en
su baston ; yo quiero que uno mismo sea
el trage de todos, igual la habitacion, igual
la satisfaccion de las necesidades , igual el
goce de los placeres; no quiero que del
sudor de muchos se alimenten y gocen los
pocos; quiero que los productos del traba
jo se distribuyan en porciones equitativas ;
no quiero que resulten inmensas ventajas
al capitalista , no reportando al pobre tra
bajador mas que un miserable salario : esto
es igualdad: esto es libertad : aqui está la
verdadera tabla de los derechos : estos son
los verdaderos intereses del linage humano:
k) demas son groseras mentiras. » Esto dice
el pensamiento de hoy al pensamiento de
ayer ; esto es natural que le diga , una vez
desatendidos los principios de justicia y re
conocidos únicamente los de conveniencia ,
apreciada conforme al juicio del mas fuer
te. Un abismo invoca otro abismo ; y esto
indica la necesidad de conservar intactos los
principios eternos, tutelares de las socie
dades , sin los cuales el mundo se conver
tiría en un caos.
Al hombre que considera la sociedad
desprovisto de las luces de la Beligion cris
tiana , no estragamos que le asalten dudas
terribles sobre la justicia y la conveniencia
de la organizacion existente y de la pasada,
y que se abandone á osados pensamientos
encaminados á trastornarlo todo, para en
sayar otros sistemas, flumanum paucis vivit
gemís , el linage humano es patrimonio de po-
TOMO II.
eos, dijo un escritor antiguo; y esta repug
nante asercion que tan exactamente se ve
rificaba en las sociedades gentiles no deja
aun en la actualidad de ser verdadera bajo
muchos aspectos. Antes del cristianismo la
esclavitud tenia igualados con los brutos á
un número inmenso de hombres. En el de
recho romano , que se ha apellidado la
razon escrita , los esclavos no eran consi
derados como hombres, sino como cosas,
y poseyendo el dueño el formidable poder
de vida y muerte, un infeliz era arrojado
á las murenas por haber roto un vaso. Si
perecía asesinado un amo eran conducidos
al patíbulo todos sus esclavos , aun cuando
fueran á centenares; despues de haber ser
vido á fomentar la vanidad , á sostener el
lujo, á satisfacer todos los caprichos del
difunto durante su vida, se vertia la sangre
de todos por la mera sospecha de que uno
de ellos se hubiese arrojado á cometer un
crimen , á que quizás le impulsara la de
sesperacion provocada con un tratamiento
cruel. ¡ Cuántas generaciones de esos infe
lices han pasado sobre la tierra viviendo en
la mayor abyeccion , en medio de las ma
yores fatigas, sufriendo las mas duras pri
vaciones , soportando penosísimos trabajos !
¡ Cuántos suspiros que nadie escuchara ,
cuántas lágrimas que nadie enjugó, cuán
tas aflicciones que nadie pensó en consolar !
Ved lo que sucede en las Colonias con los
infelices negros , á pesar de la influencia
del cristianismo , de la suavidad de las cos
tumbres , del progreso de la civilizacion y
cultura , y conjeturad lo que seria del hu
mano linage , dominando en casi todo el
universo un sistema tan degradante y de
sastroso.
A mas de los esclavos existían tambien
numerosos pobres , resultado de la eman
cipacion ó de otras causas. Esas clases inun
daban las plazas públicas de Atenas y de
Roma , y vendiendo su voto á los podero
sos eran un perenne elemento de disturbios
y revoluciones. Tambien de ellas se verifi
caba que vivían para pocos, que á pocos
pertenecían como un patrimonio; pues que
esta suerte cabe al desgraciado que para
adquirir los medios de subsistencia se ve
precisado á ser instrumento de las miras ó
de los caprichos agenos. Para esas turbas
era indiferente que la forma de gobierno
fuera mas ó menos libre. ¿Qué le im
porta al- pobre el ganar su sustento obe
deciendo silenciosamente las órdenes de
quien lo paga ú obedecerlas tambien vo-
11
 — 16
eeando por su mandato en una plaza pú mal , de grandor y de pequeñez , de ele
blica ? vacion y de vileza, de felicidad y de des
No puede negarse que con la extension dicha, de goce y de dolor que se nota por
y arraigo del cristianismo se mejoró asom todas partes, en todas las edades, en todos
brosamente el estado de las clases mas nu los sexos y condiciones; no es dable con
merosas, pues que desde luego los esclavos cebir cómo sin una caida de que haya su
fueron tratados con mas dulzura , los po frido todo el humano linage , este vive
bres socorridos con mas solicitud y gene sobre la tierra tan colmado de infortunio.
rosidad ; y añadiéndose á esto que por Al contrario , si nos atenemos á lo que nos
distintos medios se fué realizando la eman enseña la augusta religion del Crucificado,
cipacion y se anduvieron fundando estable si recordamos que el hombre no salió de
cimientos de beneficencia para todo género las manos del Supremo Hacedor tal como
de necesidades, resultó que el infeliz des ahora se encuentra , sino con la luz en el
valido no se halló en aquel espantoso entendimiento , la rectitud en el corazon ,
abandono en que le dejara la crueldad inundada de gracias su alma, colmado su
de las costumbres paganas. Largos siglos cuerpo de bienestar , rodeado de prosperi
ha continuado la religion sus obras en favor dad y de ventura , con las pasiones sujetas
de la humanidad ; largos siglos se ha me á la voluntad , la voluntad sometida á la
ditado y trabajado para hacer el infortunio razon y todo el hombre sujeto á Dios; si
menos general y menos duro; sin embargo no olvidamos que el pecado destruyó esta
menester es confesar que el aspecto de la hermosa obra , y que indignado el Señor
sociedad dista mucho de ser satisfactario, contra su criatura le dijo que moriría , que
que todavía ofenden desigualdades mons comería el pan con el sudor de su rostro y
truosas, que todavía entristece el corazon que la tierra le produciría espinas y abro
la presencia de horribles calamidades, to jos; si tenemos presente esa admirable
davía vemos la risa al lado del llanto , el historia donde se contiene la clave para
placer al lado del dolor, el lujo escarne descifrar el enigma del mundo , entonces
ciendo la desnudez, la prodigalidad mas nada de lo que vemos nos asombra : en la
escandalosa insultando á la miseria agobiada serie de los acontecimientos aflictivos que
de privaciones. se nos ofrezca , contemplamos la mano de
Y quien considere estos objetos en su la Providencia conduciéndolo todo á sus
aislamiento , solo fijándose en lo que ofre altos designios, y no nos atrevemos á blas
cen de aflictivo y repugnante ; quien á la femar Por contra
esto habiamos
los arcanos
dichodelenOmnipotente.
otro lugar y
vista de ellos no pueda levantar los ojos al
cielo y no medite sobre el origen y destino repetimos aquí , que la Religion es la ver
del hombre ; quien no posea la clave mis dadera filosofía de la historia ; porque sin
teriosa que explica estos incomprensibles esta lumbrera no hay ideas fijas, no hay
arcanos señalando la causa de tantos males principios seguros en ninguna parte: el
en una degeneracion primitiva; quien aban hombre vacila, duda, avanza, retrocede,
donado á las luces de su flaca razon y á los camina incierto y al acaso ; aun cuando su
impulsos de un corazon sensible contempla razon natural le enseña muchas verdades ,
el mal sin compensacion , el sufrimiento siente no obstante un vacío, experimenta
sin esperanza de consuelo , la maldad sin la necesidad de un punto de apoyo mas
temor de castigo, el placer sin la amargura firme , de algo que le corrobore en su lan
del remordimiento , nada extraño es que guidez, que le fije en su paso fluctuante,
proteste contra semejante desigualdad, que que le aliente y sostenga cuando desfallece.
se indigne contra lo que él apellida cho ¿Quién no ha probado mil veces ese estado
cante injusticia , que clame por el remedio indefinible del alma cuando se abandona á
de tantos males, y que prefiera el trastor meditar sobre los profundos arcanos del
no del mundo á la continuacion de las ca universo, dejando á un lado la enseña nza
lamidades presentes. de la Religion? ¿Quién no se ha retirado
No nos cansaremos de repetirlo : sin las de esas regiones de vaguedad y de tinie
luces de la revelacion , el hombre , la so blas con aquella postracion y abatimiento
ciedad, el universo entero, son un misterio que resultan de grandes esfuerzos para
incomprensible; sin ese faro que esclarece alcanzar lo imposible? ¿Quién no se ha
las tinieblas , no es dable explicar el con- convencido por esta triste experiencia de
juuto de verdad y de error , de bien y de que son tímidos los pensamientos del mortal,
 — 163 —
de que son inciertas nuestras providencias?
Cuando la Religion no nos proporcionara
otras ventajas que la fijeza de principios
con cuyo auxilio resolvemos sin trabajo los
mas difíciles problemas sobre el origen y ALGUNAS REFLEXIO\ES
destino de la humanidad, debiéramos estar
le agradecidos por un beneficio que á un SOBRE IiA V IDA Y LA
mismo tiempo que nos comunica la luz influencia de los Párrocos
de la ciencia , tranquiliza nuestros espíritus
en medio del infortunio, infundiéndoles la Rurales.
resignacion y la esperanza.
Considerada la humanidad desde el pun
to de vista en que nos coloca la Religion ,
vemos un magnífico conjunto con todas sus La vida del párroco rural ofrece los mas
partes , con todas sus relaciones , con todos singulares contrastes , segun el modo con
sus lunares y bellezas ; en ella , todo viene que se la considere ; vida que se presta á
del cielo y va á parar al cielo ; el bien di lo prosaico y á lo poético , ¡í lo vulgar y á
mana de la misericordia infinita; los sufri lo sublime , á lo ingrato y á lo bello , vida
mientos son castigos; la ignorancia es la á propósito para embotar las facultades del
pena que ha seguido al orgtdlo del saber ; alma ó desenvolverlas de una manera sin
la muerte es el resultado de haber querido gular; vida que conduce á pasar los dias en
el hombre ser igual á Dios; y la vida llena medio de la inaccion y del tedio, ó á em
de afanes, de trabajos y miserias, es el plearlos en asiduos y placenteros trabajos ;
fruto de haber tenido en poco otra vida so vida que puede fomentar en el corazon el
segada, placentera, feliz, encantada con seco egoismo , ó inspirarle las virtudes mas
los hechizos de la inocencia. Los desgra puras y de mayor desprendimiento; vida
ciados que carecen de estas luces ó se obs en una palabra , que puede hacer del sa
tinan en despreciarlas, no ven en el hom cerdote un personage inútil para todo ex
bre otra cosa que un ser que lucha cepto las funciones del sagrado ministerio ,
incesantemente consigo mismo , lleno de ó un ángel tutelar de sus feligreses , no so
necesidades que no puede satisfacer, de lo en lo tocante á la salvacion delas almas,
pasiones que no le es dable saciar, de ca sino tambien en lo relativo á la paz domés
prichos que no le es permitido contentar ; tica y á la prosperidad de las familias.
ansioso de saber y sumido en la ignoran Fácil es convencerse de la exactitud de
cia, sediento de felicidad y abrumado de las observaciones que preceden , si se para
desdichas: por esto claman como insensa un momento la atencion en la posicion sin
tos contra la sociedad entera , blasfeman gular en que el párroco rural se encuentra.
contra la bondad divina, ó le atribuyen Solo, sin mas sociedad que las personas
falsos designios ; viven en las tinieblas del de su servicio , pasa el dia entero sin mas
error en todos sentidos ; divagan por espa bullicio que el canto del gallo , el gemido
cios imaginarios; andan de continuo tras de la paloma , el arrullo de la tórtola y los
mentidas sombras que se les desvanecen ladridos del perro. De vez en cuando el ta
como humo en el momento de estrecharlas ñido dela campana le anunciael nacimien
en sus brazos, y no alcanzan otro resulta to del sol , la hora del medio dia ó la veni
do de sus trabajos que las estériles satisfac da de la noche. Si dejando por algunos
ciones de la vanidad y del orgullo. — B. instantes su habitacion , sale á espaciarse
por los alrededores , no encuentra otra so
ciedad que la de los rústicos aldeanos ocu
pados en sus duras faenas ; y estos disper
sos acá y acullá , unos cavando la tierra ,
otros recogiendo los frutos, y todos sin in -
terrumpirse en sus tareas mas que el mo -
mento necesario para saludar al párroco ó
contestarle á las preguntas que les dirige.
En medio de las arboledas dispuestas sin
órden ni concierto en las llanuras , colinas
y montañas, oye el murmullo de la fuente
 1G4 —
cercana, el ruido delos vientos que azotan aprendido en las escuelas ; en tal caso sus
las selvas y el estrépito de la cascada que potencias se embotan , su corazon se enfria
se despeña de encumbrado risco. Ora es y endurece , sus afecciones ó desaparecen
llamado para bautizar un niño y presenciar del todo , ó se limitan á determinados obje
la alegría de una familia alborozada ; ora tos : la Religion no se le presenta en su
se le ruega con urgencia que acuda presu grandor y hermosura , en su inmensa fe
roso á administrar los santos sacramentos cundidad para producir bienes de todos
al moribundo : hoy bendice á dos jóvenes géneros, sino como un conjunto de deberes
esposos orando al cielo para que derrame penosos que está obligado á soportar por
sobre ellos los raudales de su gracia , ha razon de su estado , y que no podría aban
ciéndolos primero felices en la tierra y con donar sin perder al propio tiempo los me
duciéndolos despues ála morada de la glo dios de subsistencia ; entonces los lazos que
ria ; y mañana se encontrará tal vez al lado le unen con los fieles son únicamente los
de uno de los cónyuges para consolarle de que dependen por necesidad de las funcio
la pérdida del otro, arrebatado por muerte nes del sagrado ministerio ; mas por su
temprana ; ahora está experimentando las parte nada les ofrece que pueda inspirarles
mas gratas impresiones gozándose en con agradecimiento, veneracion y amor. A este
templar la cándida inocencia de un niño á párroco tal vez no se le podrá achacar que
quien enseñalos rudimientos dela doctrina falte á los deberes de su ministerio; pero
cristiana , y dentro breves instantes se afli es bien cierto que se halla muy distante de
girá su ánimo con la narracion de un hor alcanzar en toda su plenitud el objeto de
rendo crimen cometido en el término de su mision ; es una persona pública debida
su parroquia; ahora se complace en exhor mente autorizada para ejercer sus funcio
tar un alma virtuosa para que adelante mas nes , mas esta persona considerada en
y mas en el camino de la perfeccion á que particular, y haciendo abstraccion de su
Dios la ha llamado, y luego se verá preci sagrado carácter , no es como debiera ser
sado á reprender con severidad al adúltero la luz de los ignorantes, el consuelo de Ios
que escandaliza á toda la comarca , al ju afligidos, el socorro de las necesidades, el
gador que disipa los bienes de sus hijos, al protector de los desvalidos , el mediador en
usurero que chupa la sangre del pobre. todas las discordias , el promovedor de la
¡ Qué contrastes mas singulares ! ¡ qué felicidad de sussúbditos, el padre, el maes
variedad de impresiones, á cual mas á pro tro de cuantos estan encomendados á su
pósito para conmover y sacudir el espíritu! solicitud.
Suponed que el párroco no penetrándose Con esa figura que acabamos de trazar,
lo suficiente de la altura de su mision , que nada tiene de bello y atractivo , y que
ejerce los actos de su ministerio con frial solo es respetable por su augusto carácter
dad , con indiferencia, á manera de rutina; y por las elevadas funciones que ejerce,
suponed que aquella vida solitaria de que contrasta agradablemente la figura de un
disfruta, no la aprovecha para nada, y que párroco que no solo conozca y cumpla con
pasa los dias en la inaccion y en el ocio ; los deberes de que no puede eximirse , sino
suponed que despues de haber cumplido que penetrado de la altura de su destino,
con los deberes de que le es imposible pres comprendiendo á fondo las ventajas de su
cindir, ya no piensa mas en sus feligreses, estado, sabe aprovechar los abundantes
no se interesa con celo por el bien espiri medios con que él le brinda para ilustrar
tual de ellos, y olvida totalmente que pueda su entendimiento, purificar su voluntad,
contribuir en algo á su felicidad temporal ; ennoblecer su corazon llenando perfecta
suponed , que seguro ya de su subsistencia mente los deberes de su cargo , y no olvi
considerándose en el termino dela carrera, dando que á mas de los que pueden ape
y no sintiéndose estimulado por la esperan llidarse rigorosos é imprescindibles , hay
za de mejorar de suerte, se ocupa muy otros que si no son tan sagrados , no dejan
poco de los libros , se contenta con revol de ocupar un lugar distinguido; y ademas
ver de vez en cuando algun compendio de procura portarse de tal suerte , que hacien
moral en ofreciéndose un caso nuevo y do á su fieles el bien en abundancia, se
difícil ; suponed que ni lee la Sagrada Es concilie su gratitud , les inspire un afecto
critura , ni la historia eclesiástica , ni se filial , y recabe de ellos no solo aquel res
dedica á ningun ramo de conocimientos, y peto que se merece por el carácter de que
va perdiendo por grados lo que habia está revestido , sino tambien aquella afee-
 — 165 —
tuosa veneracion
cionario que acompaña
, sin participar siempre
de los muchos ade-á |J lantos que se han hecho en otros paises , y
los hombres de virtud sublime , que consa particularmente en Alemania é Inglaterra.
gran celosamente su vida en beneficio de No estando generalizado entre nosotros el
sus semejantes. leer y escribir , hallándose muchas parro
Asi la Iglesia como el Estado tienen el quias rurales donde los que poseen este
mayor interes en que los párrocos corres arte son en número muy reducido , y de
pondan dignamente al objeto de su mision. suyo poco aficionados á ejercitarle, carece
Por lo tocante á la primera , no hay difi mos de los medios de propagacion tan co
cultad en ello, puesque nunca pueden ser munes en otras partes , donde por conduc
le indiferentes la santidad de sus ministros, to de los periódicos destinados á objetos
la conservacion de la fe , la pureza de las particulares, se difunden hasta las últimas
costumbres y la salvacion de las almas. Y clases del pueblo los conocimientos é in
si la vida del párroco no es ejemplar, sino venciones concernientes á cada ramo. ¿Qué
es digno modelo á los ojos de los fieles ; si recurso queda pues, para hacer llegar has
no se porta con ellos con el amor y la soli ta los mas oscuros rincones de la Península
citud paternales que nacen de un corazon noticias preciosas que quizás podrían pro
inflamado de la caridad , podrá el hombre ducir resultados muy ventajosos? ¿Os val
enemigo sembrar la zizaña , haciendo notar dréis del Alcalde, que se muda con tanta
los defectos de aquel que debe edificar á frecuencia, que quizás es un pequeño tira
los demas, le será mas fácil relajar las cos no para los que no participan de sus opi
tumbres , hacer que vacile la fe de los pue niones políticas, que estará tal vez desa
blos , y echar á perder las almas que Jesu creditado hasta tal punto que una cosa será
cristo redimió con su sangre. rechazada , solo por salir de su boca? ¿ Os
En cuanto al Estado, no cabe duda que dirigiréis al propietario mas distinguido,
no se ha comprendido bastante la impor que muchas veces no se sabe cuál es , que
tancia de los párrocos, y que se ha descui á menudo no reside en el pais sino breves
dado con esto un medio de civilizacion tan temporadas, que quizás adolece de los mis
to massólida, mas pura y saludable, cuanto mos inconvenientes que hemos notado en
se hubiera hallado íntimamente enlazado el Alcalde? Hay un hombre en cada par
con la Religion cristiana. Los párrocos son roquia que no sale de ella ni de dia ni de
un excelente vehículo para hacer el bien á noche , que no tiene en ella relaciones de
los pueblos : no hay mejora que ellos no parentesco, que está exento y aun inhibido
pudiesen introducir, no hay adelanto á que de tomar parte en el gobierno civil , que
no pudiesen contribuir, no hay daño que por su carácter es superior á cuantos viven
no pudiesen remediar , no hay abuso que en ella, que por su posicion es indepen
no pudiesen contrariar. Mas para esto seria diente de los bandos que se formen , que
preciso que el gobierno, poniéndose de no mucre nunca , porque en falleciendo el
acuerdo con la Iglesia , procurase que los individuo hay otro al instante que le reem
párrocos abundasen de los conocimientos plaza en todas sus funciones y facultades ;
y medios necesarios para lograr el objeto ; una persona , en una palabra , de quien no
mientras se dejen los seminarios sin dota necesitais saber el nombre y apellido , por
cion para la enseñanza, mientras se des que se llama hoy como se llamaba ayer ,
cuide el proveer de la debida subsistencia como se llamaba en el siglo pasado , como
á los laboriosos operarios que suportan el se llamará en el venidero : esta persona es
peso del dia y del calor, mientras se permita el Cura Párroco; á esta persona podeis re
que el pastor se vea precisado á mendigar mitir lo que sea conveniente, seguros de
de sus ovejas el preciso sustento , no será que llegará á su término , y por su con
dable pensar en las mejoras importantes ducto será comunicado á los que en ello se
que podrían hacerse y que conducirían so interesen. En vez de perturbar á los pue
bre manera al desarrollo de la prosperidad blos con eternas circulares , con alocucio
pública. nes , con proclamas , con manifiestos , con
Pasando por alto otras muchas indicacio toda clase de papeles atestados de pasiones
nes, nos contentaremos con las siguientes. y de miserias ; enviad á todos los párrocos
Generalmente hablando , todo lo relativo á de tiempo en tiempo , una breve reseña de
la cultura de las tierras y cria de los gana las mejoras que se hayan hecho en todos
dos, se halla en España enteramente esta los ramos de agricultura , de selvicultura ,
cria de ganados y demas que pueda con-
tribuir á la prosperidad del pais; encar- I rizar con las preocupaciones de los pueblos
gadles que por los medios que crean con ó plegarse á sus exigencias. Por lo mismo
tenientes y decorosos, procuren la circu hemos indicado ya, que serian menester
lacion de aquellas noticias, mayormente algunos años , que sería indispensable que
las que puedan tener aplicacion mas inme quien trabajase en esta grande obra fuese
diata á la tierra donde residen , y sin nue un gobierno que mereciese la confianza del
vos gastos, sin mucho aparato de cátedras, clero y del pueblo. Siendo asi , y marchan
las tendréis abiertas en todo el ámbito del do al objeto, despacio, y por grados, em
reino. pleando medidas indirectas y á cierta dis
falta
es Nos
casi
unalamentamos
imposible
buena estadística
formarla
á cada ;paso
, conocemos
y de que con
nos j1 tancia unas de otras , no dudamos que al
fin se llegaría á obtener el resultado ape
tecido.
muy poca exactitud el número á que se Los límites de este artículo no nos per
eleva la poblacion, ignoramos cuál es la miten extendernos mas sobre las muchas
masa total de la riqueza del pais; sabiendo ventajas que podria acarrear al Estado la
todavía mueho menos si atendemos á sus cooperacion de ios párrocos ; y nos hemos
diferentes clasificaciones , y nos propone ceñido á indicar dos puntos de los cuales
mos señalar lo que á cada cual de ellas' el uno afecta directa é inmediatamente la
corresponde. E1 gobierno está imposibilita prosperidad pública, y el otro el sistema
do de formar dicha estadística , ya por falta de administracion.
de buenos dependientes, ya porque los Fácil seria hacer otras aplicaciones, pero
pueblos no tendrían confianza en los exa en estas materias basta llamar la atencion
minadores de oficio, y les ocultarían los sobre un ramo , para que desde luego se
datos mas preciosos. ¿ Quién puede llevar ocurra la extension á los otros. Deseamos
á cabo esta difícil empresa ? Dando algunos tanto mas que la civilizacion se propague
años de tiempo , y suponiendo establecido por conducto de los párrocos, cuanto que
un gobierno que merezca la confianza del asi se evitaría en lo posible , que con los
clero, nadie mejor que los párrocos pueden adelantos de las naciones extrangeras , no
lograr tan importante y arduo objeto. El se nos importasen la incredulidad y la cor
número de los moradores , lo saben estos á rupcion. — J. D.
punto fijo en muchas partes, á poca dife
rencia en todas ; la distribucion en las dife
rentes edades, sexos y condiciones les es
muy fácil saberla, con solo fijar la atencion
sobre el particular ; los productos del pais POLEMICA RELIGIOSA.
los conocen perfectamente, ya porque vi
ven de ellos , ya tambien porque estan en
continuo contacto con hombres cuya con
versacion versa incesantemente sobre esta
materia ; la renta total de las posesiones y CARTA DÉCIMA
sus diferentes procedencias , no se les ocul
tan tampoco por las mismas razones que i UN ESCÉPTICO EN MATERIAS DE RELIGION.
acabamos de indicar ; y en la parte que
pudiese caberles duda, les seria muy fácil
disiparla con algun tiempo de observacion
y de curiosidad en preguntar; por manera Mi estimado amigo: voyá pagar el resto
que todo cuanto se necesita para formar de la deuda que hace muchos dias tengo
una estadística completa se podría adquirir contraida, de hacerle á V. una breve rese
fácilmente , si los párrocos contribuyesen á ña de cierta escuela filosófica , que nacida
proporcionar estas noticias. en Alemania y difundida por la Francia ,
No se crea que para el logro de este ob causa los mayores estragos á la Religion ,
jeto mirásemos conveniente una circular en y tiende á comprometer gravemente el
que asi se previniera ; porque desde el mo porvenir de la ciencia. Bien recordará V.
mento que los párrocos quedasen constitui lo que dije en mis anteriores sobre la filo
dos de Real orden agentes del gobierno , sofía alemana que tan abiertamente profesa
lucharían con los inconvenientes que los el panteismo , por mas que de vez en cuan
demas , y se verían precisados á contempo do quiera euvolverse cu formas enigmáticas.
 — 167 —
hablando en lenguage ininteligible de Dios, Leamos las palabras de su Curso de 1818,
del hombre y de la naturaleza. Esta acu pág. 55 , y por ellas echaremos de ver que
sacion procuré fundarla en pasages del mis el fondo de su filosofía era el mismo que
mo filósofo contra quien la dirigía ; y creo hemos hecho notar en la escuela alemana.
que no le habrá quedado á V. ninguna du « El ser absoluto , dice , conteniendo en su
da de que la imputacion no era calumnio seno el yo y no yo finito , y formando por
sa. Quizás le será difícil á V. persuadirse decirlo asi el fondo idéntico de todas las cosas,
que iguales cargos puedan hacerse á la es uno y muchos ú un tiempo , uno por la sus
cuela francesa que sigue las huellas de M. tancia, muchos por los fenómenos, seapa-
Cousin ; porque habiendo oido repetidas rece asimismo en la conciencia humana.»
veces las invectivas de los universitarios « No puede haber mas que ww sustan
contra la intolerancia del clero, se habrá V. cia , añade en la página 139, la sustancia
imaginado que la filosofía del gefe del eclec de la verdad ó la suprema inteligencia.
ticismo es inocente en todas sus partes ; y Dios es el ser único- y universal f pág. 274) ;
que solo cabe apellidarla impía en hombres Dios es la sustancia universal , cuyas ideas
que se alarmen , nó por error, sino por la absolutas componen la sola manifestacion
sola luz de la razon, y se empeñen en con accesible á la inteligencia del hombre (pá
denar el entendimiento humano á eterna gina 390); Dios no es mas que la verdad
inmovilidad yá la mas estúpida ignorancia. en su esencia (pág. 128); no es otra cosa
No me costará mucho trabajo sacarle á que el mismo bien , el orden moral tomado
V. de este error, y demostrarle hasta la suslancialmente » (obras de Platon, tomo 1.°,
última evidencia, que no sin razon levanta argumento del Euthypbron, pág. 3.). «No
la voz el clero frances contra el veneno que sabemos de Dios otra cosa , sino que exis
se procura ofrecer á los jóvenes en copa te , y que se manifiesta á nosotros por la
de oro. verdad absoluta» (Curso de 1818, pági
En primer lugar debe V. saber (rue ya na 140). « La materia, tal como se la de
en 1819 ensenaba M. Cousin que no habia fine vulgarmente, no existe; pues que por
demostracion de la existencia y de los atri lo comun se la mira como una masa iner
butos de Dios , ni esperimental , ni de otra te, sin organizacion y sin regla, cuando en
clase. Es cierto que al propio tiempo afir realidad está penetrada de u-n espíritu que
maba que la existencia de Dios es una ver la sostiene y ordena : ella no es, pues,
dad superior á todas las otras y hasta á los otra cosa que el reflejo visible del espíritu
principios que se llaman axiomas ; mas no invisible : el mismo ser que vive en nosotros
deja de añadir lo siguiente : « Sea cual fue vive en ella: est Deus in nobis : est Deus in
re la opinion que se adopte sobre el parti rebus » (pág. 205). «Estudiad la natura
cular , queda establecido que ni la expe leza , elevaos á las leyes que la rigen y que
riencia sola , ni la experiencia ayudada del hacen de ella una ventad viviente, una
raciocinio, no puede alcanzar la existencia verdad que se ha hecho activa sensible: en
de los atributos esenciales de Dios. » ¿De una palabra Dios en la materia. Profundizad
qué servia el decir que la existencia de pues la naturaleza ; cuanto mas os pene
Dios es una verdad superior á todas las traréis de sus leyes , mas os acercaréis al
otras , si luego se la combatía por sus ci espíritu divino que la anima. Estudiad so
mientos, asegurando que la razon no podía bre todo la humanidad, pues que ella es
alcanzarla , y declarando por consiguiente todavía mas santa que la naturaleza , por
vana ilusion la creencia en que estuvieron que estando animada de Dios como esta ,
los filósofos de que habian conseguido por lo conoce asi , mientras la naturaleza lo
medio de las criaturas elevarse al conoci ignora : abarcad el conjunto de las ciencias
miento del Criador? ¿No podríamos supo físicas y de las morales: separad los princi
ner que en 1819 no se atrevía M. Cousin á pios que ellas encierran ; poneos en pre
manifestar su pensamiento todo entero; y sencia de estas verdades : referidlas al ser
que asi tributaba aparentes homenages á la infinito que es su origen y sosten , y ha
verdad para poder continuar minándola sin bréis conocido con respecto á Dios todo lo
alarmar demasiado á los que no se hubieran que de él nos es dado conocer en los estrechos
podido resignar á la enseñanza del panteis límites de nuestra inteligencia finita » ( pá
mo? Bien pronto se convencerá V. de que gina 141-142).
esta conjetura no está destituida de fun Si V. reflexiona sobre estos pasages de
damento. | M. Cousin, mejor diré , con solo que V.
 — 1 G8cipíos
— como el de la razon suficiente ó el de
atienda al sentido literal y obvio de algu
nas de sus proposiciones, verá V. el pan causalidad, hubiese formado desde luego uu
teismo cubierto con un velo muy traspa todo al que llamara Dios. No se trata de
rente. Segun M. Cousin no puede haber adorar un nombre, Dios,' sino de encerrar
mas que una substancia : Dios es el ser en este título el mayor número de verda
único y universal , el ser absoluto es uno des posible ; pues que la verdad es la ma
por la sustancia , y muchos por los fenó nifestacion de Dios» (pág. 141). «Cuando
menos: el hombre no es mas que una par habeis concebido una verdad como idea,
ticipacion de ese ser absoluto , pues que el dice en otro lugar, concebid que ella existe,
ser que contiene en sí el yo y el noyo finito, y asi la unís á la sustancia : el que concibe
y que forma por decirlo asi el fondo idéntico la verdad, concibe pues la sustancia, sea que
de todas las cosas , se aparece á sí mismo él lo sepa ó que lo ignore Para saber si
en la conciencia humana. Si estudiamos la alguno cree en Dios , yo le preguntaría si cree
naturaleza , si nos penetramos de sus leyes en la verdad, de donde se sigue que la teo
nos acercaremos al espíritu divino que la logía natural no es mas que la ontología ,
anima , pues que ella no es mas que una y que la ontología está en la psychologfa.
verdad viviente , una verdad que luí pasado á La verdadera religion no es mas que esta pala
ser activa sensible: en una palabra , Dios en bra añadida á la idea de la verdad, ella esa
la materia. Todo lo que podemos saber de (pág. 385).
Dios, lo conocemos poniéndonos en pre Bien claro se echa dever que el Dios de
sencia de los principios de las ciencias físi M. Cousin no es el Dios de los cristianos ;
cas y morales , y refiriéndolos al ser infini pues que no es otra cosa segun él , que la
to que es su origen y su sosten. Para que naturaleza misma, el conjunto de las leyes
no nos quedase duda de que M. Cousin no que la rigen , bastando conocer una cual
entendía estas palabras en sentido que pu quiera de ellas ó una verdad sea la que
diese ser aceptado por hombres que admi fuere , para eximirse de la nota de ateo.
ten la existencia de Dios como distinto de Creer en Dios, segun M. Cousin , es creer
la naturaleza , tuvo buen cuidado el autor en la verdad ; la teología natural no es mas
de explicarse mas en otro lugar, revelando que la ciencia de los seres en abstracto ; y
todo el fondo de su sistema : hé aqui sus la Religion no es otra cosa que una pala
palabras: «Dios cuenta tantos adoradores bra , añadida á esta verdad ; con esta teo
cuantos son los hombres que piensan; pues ría tenemos proclamado sin rodeos el pan -
que no es posible pensar sin admitir algu teismo : segun ella Dios es todo , y todo es
na verdad , aunque no fuese mas que una Dios : es decir, que el ser infinitamente
sola» (ib. pág. 128). Hé aqui segun M. perfecto esencialmente distinto de la natu
Cousin reducida la adoracion de Dios al raleza , será una quimera; pues que no hay
conocimiento de una verdad cualquiera ; otro ser que la naturaleza misma : todo
así por ejemplo, quien conozca un princi cuanto existe, todo será fenómenos de la
pio de matemáticas , sean cuales fueren su sustancia universal, de ese ser único que
ignorancia ó sus errores sobre todos los todo loabsorve, que todo lo identifica de
demas puntos naturales y sobrenaturales , sí mismo, que es á un tiempo espíritu y
este tal será un adorador de Dios. De esta materia , que es activo é inerte , que ha
suerte no es posible que haya ateos ; pues existido siempre y siempre existirá ; y por
que como todo hombre admitirá cuando consiguiente no hay creacion , y todas las
menos su propia existencia, ya admite una trasformaciones que vemos en el universo,
verdad , y por consiguiente adora á Dios. no son otra cosa que diferentes fases de un
M. Cousin vió que esta consecuencia nacía ser único que se modifica de varías ma
de su doctrina, y lejos de rechazarla la neras.
abrazó y la consignó en sus escritos. Hé No crea V., mi estimado amigo, que
aquí cómo se expresa sobre el particular. estas doctrinas de M. Cousin con respecto
« No hay ateos; el que hubiese estudiado á Dios, fuesen vertidas como al acaso, sin
todas las leyes de la física y de la química, estar enlazadas con otros principios que los
aun cuando no resumiese su saber bajo la sostuviesen. Muy al contrario, ellas son las
denominacion de verdad divina ó de Dios, consecuencias del principio fundamental de
seria no obstante mas religioso , ó sí se los panteistas sobre la sustancia : hé aqui
quiere, sabría mas sobre Dios que otro que cómo la define en sus Fragmentos filosóficos
despues de haber recorrido dos ó tres prin- (tomo 1.°, pág. 312, de la 3.* edicion): «La
 — 169 —
sustancia
fuera de sí,es relativamente
aquello que no á lasupone
existencia.»
nada ¡| si es absolutamente indivisible en sí, es
incomprensible; y su incomprensibilidad es
Tenemos, pues, que la sustancia ha de para nosotros su destruccion. Incomprensible
ser única , ya que en su esencia excluye la como fórmula y en la escuela , Dios es cla
coexistencia de otros seres : luego todo ro en el mundo que le manifiesta , y para
cuanto existe , fmito ó iníinito, no puede el alma que le posee y le siente : estando
ser
seresmas
quequea nosotros
una sustancia
nos parecen
única : luego
distintos
los en todas partes vuelve en algun modo á si
mismo en la candencia del hombre, del cual
no son en realidad otra cosa que modifica él constituye indirectamente el mecanismo
ciones del ser universal, único que todo lo y la triplicidad fenomenal por el rellejo de
identifica en sí. Estos corolarios no asustan su propia virtud y de la triplicidad sustan
á M. Cousin , antes bien los adopta como cial , de la cual él es la identidad absoluta.»
la única doctrina razonable. « Una sustan (Tomo 1.°, prefacio de la 1.a edicion, pá-
cia absoluta , dice , debe ser única para ser na 76. )
absoluta Las sustancias relativas des Despues de una declaracion tan termi-
truyen la idea misma de sustancia; y sus ! nante , no creo, mi estimado amigo, que
tancias finitas que suponen fuera de ellas pueda V. dudar de la mente del filósofo;
otra sustancia con la cual se ligan , se pa y sean cuales fueren las declaraciones de
recen muchoá fenómenos» (pág.63). «La cristianismo que en otras partes haya he
sustancia de las verdades absolutas; dicuen cho M. Cousin, convendrá V. con nosotros
otro lugar , es necesariamente absoluta ; y en que se las debe mirar como una especie
si es absoluta es tambien minea, porque si de cumplimientos que dispensa á la Reli
no es única se puede buscar alguna cosa gion dominante , y nó como la expresion
que exista fuera de ella , y entonces se si de la fe , ni siquiera de sanas convicciones
gue que ella no es mas que un fenómeno filosóficas. Yo por lo menos no alcanzo
relativamente á este nuevo ser , el cual si cómo puede profesarse" mas abiertamente
se dejaba sospechar que fuera de él existia el panteismo, que diciendo claramente que
tambien alguna cosa , perdería á su vez la Dios es uno y muchos, eternidad y tiempo,
naturaleza de ser , y no fuera mas que un espacio y número, esencia y vida , indivi
fenómeno. El círculo es infinito ; ó no hay sibilidad y totalidad , principio , fin y me
sustancia, ó no hay mas que una» (pá dio, en la cumbre de los seres y en su
gina 312). grado mas humilde, infinito y finito á un
No cabe profesar con mas claridad el mismo tiempo, y á un mismo tiempo Dios,
principio fundamental de los panteistas; naturaleza y humanidad , compendiando el
solo faltaba saber si M. Cousin admitía en pensamiento en estas inequívocas palabras:
toda su extension la doctrina de la escuela « Si Dios no es todo , es nada. »
de Espinosa. Desgraciadamente encontra Asentados semejantes principios, bien se
mos un pasage donde formula su pensa deja suponer que las doctrinas morales de
miento de la manera mas explícita que M. Cousin no serán muy conformes á la
imaginarse puede , diciendo : « El Dios de Religion cristiana; pues que la profesion
la conciencia no es un Dios abstracto , un del panteismo trae consigo el anonada '
Rey solitario, relegado mas allá de la crea miento de la libertad humana. Porque es
cion sobre el trono desierto de una eterni evidente que siendo el hombre , segun las
dad silenciosa , y de una existencia absolu doctrinas panteistas, un mero accidente de
ta que se parece á la misma nada. Es un la sustancia única , todo cuanto ól piense ,
Dios á un tiempo verdadero y real, á un quiera ó haga , serán modificaciones de la
tiempo sustancia y causa, siempre sustan sustancia universal; por lo mismo desapa
cia y siempre causa ; no siendo sustancia , rece la libertad del individuo , ya que este
sino en cuanto es causa , y causa sino en cuan no tiene una existencia distinta y propia ,
to es sustancia : es decir , siendo causa abso y cuanto en él se encierra pertenece al ser
luta , uno y muchos , eternidad y tiempo , es único que le absorve. Asi es que M. Cousin
pacio y número, esencia y vida, indivisibilidad no tiene reparo en decir : el hombre no es
y totalidad , principio , fin y medio , á la cum libre de una manera absoluta, porque esta
bre del ser y en su mas humilde grado , infinito fuerza de que está dotado, una vez caida
y finito á un tiempo, triple en fin, es decir, en el espacio y en el tiempo , pierde de su
á un mismo tiempo Dios, naturaleza y hu carácter ilimitado y absoluto » (Introduccion
manidad. En efecto si Dios no es todo, es nada, general al Curso de 1820, pág. 66 y 67).
 — 170 —
En otro lugar explicando lo que es la li trinas del cristianismo. V. que no tiene
bertad dice : « Un ser es libre cuando lleva en interes en ver las cosas al reves de lo que
sí mismo el principio de sus actos , cuando en son , no podrá concebir cómo un hombre
el ejercicio de su fuerza solo obedece á sus pro grave se atreve á consignar en sus obras
pias leyes » (Curso de 1818, pág. 40 j. De semejantes palabras, despues de haber ma
suerte que segun este filósofo, para ser nifestado en escritos anteriores cuál era su
libre no es necesario tener la eleccion entre modo de pensar sobre las verdades á que
obrar y no obrar , ó entre obrar esto ó rinde en el citado pasage tan humilde aca
aquello, sino que es suficiente el tener en tamiento. Esta extrañeza se le desvane
sí misino el principio de sus actos, y no cerá á V. algun tanto, cuando sepa que
obedecer mas que á sus propias leyes. Asi M. Cousin no admite, como él dice, la ti
el bruto que tiene en sí mismo el principio ranta del principio absoluto de que jamás es li
desusados, el demente, el imbécil, en cito engañar, y que en su opinion hay
una palabra , todos los seres que tienen en engaños inocentes, los hay útiles y hasta obli
sí mismos el principio de su accion , serán gatorios » ( Traduccion de Platon , t. 4 , pági
tan libres como el hombre en sano juicio y na 276-277). Quien de tal modo niega á
en la plenitud del conocimiento. Dios su naturaleza, y al hombre su libre
La revelacion íntima , y hasta todas las albedrío , no es mucho que no escrupulice
religiones , quedan reducidas á la nada con en legitimar la mentira ; lo singular es que
las teorías de M. Cousin; y en vano es que él se haya podido hacer la ilusion de que
este filósofo se empeñe en sostener que sus semejante engaño en lo tocante á sus doc
doctrinas no estan reñidas con el cristia trinas, habia de alucinar á nadie. Estan
nismo. Despues de haber leido los anterio vivo el contraste, ó mejor diremos la con
res pasages, ciertamente encontrará V. muy tradiccion entre unos y otros pasages , que
peregrino el lenguage de M. Cousin cuan para no verla seria preciso cerrar los ojos á
do se atreve á decir lo siguiente en el pre lo que es mas claro que la luz del dia.
facio de sus Fragmentos : « ¿ Qué puede Con esta breve reseña habrá formado V.
haber entre mí y la escuela teológica? ¿Por concepto de lo que son esos sistemas filosó
ventura soy yo un enemigo del cristianis ficos, en los cuales suponía V. tendencias
mo y de la Iglesia? En los muchos cursos espiritualistas muy sanas, y hasta muy
que he hecho y libros que he escrito, ¿pué conformes con la enseñanza del cristianis
dese acaso encontrar una sola palabra que mo. Asi habrá podido rectificar , ó mejor
se aparte del respeto debido á las cosas sa diré , variar la opinion que habia formado
gradas? Que se me cite una sola dudosa ó sobre el clero católico de Francia , imagi
ligera, y la retiro, la repruebo como in nándose que sus clamores contra el veneno
digna de un filósofo. ¿ Será tal vez que sin de alguno de los gefes de la Universidad .
quererlo , ni saberlo yo , la filosofía que eran declamaciones fanáticas, nacidas úni
enseño haga vacilar la fe cristiana? Esto camente del espíritu de tolerancia , y del
seria mas peligroso, y al mismo tiempo empeño de encerrar el entendimiento hu
menos criminal , porque no siempre es or- mano en los límites prescritos por el antojo
todojo quien quiere serlo. Veamos cuál es de los eclesiásticos. Ahora para en adelante
el dogma que mi teoría pone en peligro. me tomaré' la libertad de advertirle á V. ,
¿ Es el del Verbo , el de la Trinidad , ú otro que cuando lea en alguna de nuestras pu
cualquiera? Dígase, pruébese ó ensáyese blicaciones científicas y literarias fallos ma
de probarlo : esta será cuando menos una gistrales sobre este linage de materias , no
discusion seria y verdaderamente teológica: se deje V. sorprender fácilmente por el to
yo la acepto de antemano , y la solicito. » | no de seguridad con que se expresa el es
Ya ve V. , mi estimado amigo , que critor ; que las mas veces lejos de enterar
M. Cousin entiende la Religion cristiana de se á fondo del estado de la cuestion , no
un modo bien singular; pues que despues hace mas que traducir al pie dela letra las
de haber profesado el panteismo, es decir, palabras de algun periódico de allende los
despues de haber destruido la idea funda Pirineos. Y como quiera que los que mas
mental de toda verdadera religion, que es en boga andan en ciertas regiones no son
la de un Dios esencialmente distinto de la los mas adictos á las doctrinas católicas,
naturaleza , todavía está empeñado en pa acontece que el fallo emitido con aire de
sar plaza de verdadero fiel ; y no quiere imparcialidad y de pleno conocimiento de
que se diga que se ha desviado de las doc causa , es copia literal de una de las par-
 — 171 —
que
mado
tes,
la filosofía
hubiera
sinlaque
pena
deel
alegado
Schelling
escritor
de escuchar
la español
,otra.
Hegellos
Pero
,seydescargos
haya
basta
Cousin
to-
de, n|| que
pues que si mucho no me engaño, debe
de estar V. medianamente fatigado con la
sustancia universal y las trasformaciones , y los
fenómenos , y el ser único que se revela á sí
mismo en la conciencia humana y semejantes
abstracciones que campean allá en la alta
concepcion de esos filósofos que se levan
tan á inmensa altura sobre el resto de la
humanidad, olvidándose en su atrevido
vuelo de llevar consigo las nociones del
sentido comun. Nosotros que á tanto no
alcanzamos, cuidaremos de no desviarnos
hasta tal punto de los senderos trazados
por una razon juiciosa; sin que nos impor
te mucho el que se nos diga que recibimos
la inspiracion de musa pedestre . Entre tanto
vea V. en qué puede complacerle este su
atento servidor Q. B. S. M.— /. B.
BARCELONA.
ARTICULO 2.°
LA CUESTION DEL DERRIBO DE
MI RALLAS Y FORTALEZAS,
EXAMINADA BAJO EL PUNTO DE VISTA MILITAR
Y POLÍTICO.
¿Conviénele á Barcelona continuar cer
cada de sus murallas y dominada por los
fuertes? Bajo el aspecto político'y económi
co, aconseja la prudencia que se destruyan
aquellas y estos. Considerando á Barcelona,
nó por lo que es en sí , sino como una de
las principales ciudades de la monarquía ,
¿ un derribo semejante acarrearía daños á
la nacion ole produciría ventajas? Hé aquí
unas cuestiones de la mayor gravedad y
cuya resolucion no es tan fácil como á pri
mera vista pudiera parecer.
Sea cual fuere la opinion que sobre di
chos extremos se adopte, no puede negar
se que militan por ambos lados razones de
peso, de manera que no deberán ser ta
chados de imprudentes y ligeros , ni los 1
tinuacion
opinendelporestado
la conveniencia
presente , de
ni la
los con-
que
sostengan lo contrario. Y cuando esto de
cimos dejamos á parte lo relativo á un en
sanche parcial , que se logra derribando un
lienzo de las murallas para construirle lue
go á mayor distancia ; porque si bien se
mira semejante mudanza no altera el fon
do de las cosas; pues que por ella no deja
ría Barcelona de ser una plaza de armas ,
y por consiguiente de estar sometida á to
das las eventualidades que consigo trae es
ta circunstancia.
Para alcanzar la verdad en esta materia
hagamos la siguiente suposicion. Demos
que sobreviene una invacion extrangera , y
veamos lo que acontece ó acontecerá pro
bablemente, segun sea Barcelona plaza de
armas ó ciudad abierta. Por de pronto,
nuestro ejército tendrá en la capital un ex
celente punto de apoyo, buenos hospitales,
ricos almacenes, arsenal, depósito para
quintos y prisioneros, recursos de todas
clases para abastecer las tropas asi en ar
tículos de guerra y boca , como en prendas
de vestuario y en útiles para todo linage
de maniobras. Si las armas españolas son
inferiores á las extrangeras , de modo que
no puedan hacerlas frente en campo raso,
apoyadas sobre la capital serán quizás bas
tantes á imponerle respeto : dando el tiem
po necesario para que el gobierno de la na
cion desplegue su actividad y envíe los
socorros necesarios á fin de que las fuerzas
enemigas no queden dueñas de la mas be
lla parte del litoral del Principado. Si algu
na de nuestras divisiones sufre un descala
bro en el Panadés , en el Valles ó en la
marina, podrán los restos encerrarse en
Barcelona, rehacerse del desastre, reor
ganizarse y reclutarse de nuevo , y salir
otra vez al campo á vengar el recibido ul
tra ge.
Si la guerra se hace tambien en el mar;
si nuestra armada salida de la postracion
en que yace, puede luchar con la enemi
ga , si nó con superioridad , á lo menos sin
mucha desventaja , las aguas de Barcelona
defendidas por Monjuich , y teniendo á sus
espaldas las Atarazanas , laCiudadela yuna
ciudad populosa circuida por robustas mu
rallas , podrán ser la base de las maniobras
de nuestros almirantes, y un refugio en
los reveses de la guerra y en los desastres
ocasionados por el furor de los elementos.
Las naves que hayan sufrido averías po
drán reponerse de ellascon toda seguridad;
 — m —
los nos
tíjs marinos y soldados
favorecían enfermos
á nosotros serán aco á él. Ya no es dable esperar la termina
le favorecen
gidos en los hospitales ; las provisiones que cion de la guerra por medio de un golpe
se necesiten , se hallarán en abundancia en de mano ; ya no es posible conseguir que
los almacenes de la capital ; en una pala desaparezca de repente de nuestro suelo el
bra , el provecho que de Barcelona podrán enemigo con ningun triunfo por cabal v de
sacar nuestras escuadras será incalculable cisivo que sea ; siempre le queda una plaza
tanto si suponemos adversa como próspera importante donde guarecerse; los restos
la fortuna. de sus divisiones podrán encerrarse en la
Ademas , conservándose en favor del go gran ciudad , y allí reorganizarse de nue
bierno la capital del Principado, todo lo vo ó esperar que les vengan auxilios por
que se encuentre amenazado en un punto mar ó por tierra. Las tropas españolas se
cualquiera de este, sean personas, sean presentarán en el llano de Barcelona , el
preciosidades ó efectos de alguna impor paisanagc les proporcionará toda clase de
tancia , podrá trasladarse á ella , y contar recursos , y se ofrecerá á pelear á su lado
allí con un refugio seguro. De esta mane para coger el último fruto de la victoria :
ra se formará naturalmente un núcleo com pero, ¿de qué sirven el valor y el entu
puesto de lo mas granado que haya en siasmo de los soldados y de los paisanos, á
Cataluña, en inteligencia y riqueza, se acu la vista de las altísimas murallas en que
mularán en la ciudad los tesoros y los gé está encerrado el enemigo, defendido por
neros de todas clases, resultando de esto cien bocas de fuego y apoyado por la Ciu-
que en los apuros que ofrecerse puedan dadela y Monjuich , que siembran á largo
habrá recursos abundantes para acudir á trecho el espanto y la muerte? Si Barcelo
todas las necesidades, y hombres de sufi na no fuera entonces una plaza de armas,
ciente capacidad para emplearlos y dirigir si solo estuviese resguardada por débil ta
los en provecho de la patria. pia , si anchurosos paseos, espaciosas calles,
Sean cuales fueren los triunfos que al dilatados jardines franqueasen mil puertas
cance en este ó en aquel punto el ejército para penetrar en la ciudad , las tropas ven
invasor , todas las miradas se dirigirán á cedoras en el campo de batalla acometerían
Barcelona , que se conserva todavía , que á las vencidas, forzarían sus trincheras, se
encierra en sus muros una guarnicion nu introducirían por las calles, y con la ayu
merosa , que tiene en sus alrededores di da de los paisanos recien venidos y de los
visiones respetables, que es el centro de habitantes, obligarían á capitular al ejér
muchos movimientos que se extienden á cito enemigo , y decidieran quizás de la
largas horas de distancia , y que por con suerte de la guerra.
siguiente será capaz ella sola de reparar Estando Barcelona tal como lo acabamos
todas las pérdidas, por poco que la fortu de suponer, es cierto que un descalabro de
na sonría á los generales españoles, por un cuerpo de operaciones español podría
poco que el gobierno de la nacion cuide de entregarla desde luego á manos del ene
auxiliar á Cataluña enviando algunos re migo; pero entonces ¿qué resultaría? So
fuerzos para que las operaciones puedan lo podría conservarla mientras tuviese la
emprenderse en mayor escala y conducirse superioridad en el campo; porque en lle
con mas brio y osadía. gando á perder esta, forzoso le seria aban
No puede negarse que estas razones son donar una posicion tan poco segura. Jamas
de algun peso, y que serian convincentes, para él seria prudente el permanecer en
si en contra no militaran otras : que si no una ciudad abierta y enemiga , no tenien
las destruyen al menos las neutralizan. En do muchas fuerzas para sojuzgarla , y re
efecto , podrá muy bien suceder que por sistir al propio tiempo á las divisiones es
una traicion caiga desde un principio la im pañolas que pudiesen presentarse en el lla
portante ciudad en manos del enemigo ; no ; resultando de esto , que no le seria
suposicion nada gratuita, porque desgra dable aprovecharse por largo tiempo de los
ciadamente tenemos de ella una experien recursos de la capital no teniendo estacio
cia bien reciente. Siendo Barcelona plaza nado en ella un cuerpo respetable. Muy al
fuerte , el enemigo tomará todas las pre contrario nuestras tropas sacarian de la ciu
cauciones imaginables para asegurar su dad todos los recursos que quisiesen en el
conservacion , y entonces tenemos el re momento de alejarse el enemigo de sus in
verso de la medalla ; las ventajas que an- mediaciones; y hasta suponiéndole posesio
nado de ella ¿no fuera imposible .impedir
que el celo de los paisanos no burlase con
ingeniosos ardides la vigilancia de los cen
tinelas? Recuérdese lo que ha sucedido en
las guerras anteriores á pesar de estar
ceñida la ciudad por altísimas murallas , y
se inferirá lo que sucedería , suponiéndola
abierta por todos lados , ó cuando mas ro
deada por tapias bajas y endebles.
Siendo Barcelona ciudad abierta , el ma
yor daño que puede suceder caso de una
invasion extrangera , es el apoderarse de
ella el enemigo ; y esto , si bien se consi
dera , atendidas las costumbres actuales y
el carácter de las guerras, es de bien poca
importancia. Una ciudad populosa puede
ser ocupada por un ejército enemigo sin
sufrir mas daño del que experimentaría si
entrase en ella uno del pais; porque sabido
es que han caido en desuso aquellas veja
ciones y atropellamientos que tan comunes
eran en otros siglos. Los ejércitos observan
extricta disciplina , no viven sobre la tier
ra invadida, sino que llevando consigo la
correspondiente administracion cuentan
con los fondos necesarios para proporcio
narse los recursos que hayan menester. Es
verdad que esta regla tendrá sus excepcio
nes ; pero estas no pasarán mas allá de un
préstamo forzoso mas ó menos crecido , de
cierta cantidad de raciones, de suministros
de varias clases : cargas todas de que cier
tamente no se eximiera la poblacion , si en
vez del ejército enemigo tuviera dentro de
sus muros el de su gobierno. Los edificios,
los capitales de todos géneros , las perso
nas, todo es escrupulosamente respetado
cuando el enemigo entra en una poblacion
que no le ha hecho resistencia ; resistencia
que cuasi nunca se verifica cuando la ciu
dad no es plaza de armas y encierra en su
seno crecido número de habitantes y cuan
tiosos intereses.
Muy al contrario sucede si la poblacion
es una plaza fuerte de alguna importancia.
Amigos y enemigos tienen fijas en ella las
miradas, para conquistarla si nola poseen,
y defenderla si la ocupan. Una vigilancia
suspicaz, una dominacion puramente mi
litar, continuos sobresaltos, vejaciones de
todas clases , son las consecuencias necesa
rias de semejante situacion; resultando
que la industria se paraliza , que el comer
cio desfallece , las familias acomodadas se
retiran , los capitales se esconden , la mise
ria cunde, y lo que poco antes era un flo
rido vergel se convierte en un campo de
desolacion y de luto. Y ¿qué diremos cuan
do llega el caso de un bloqueo ó de un si
tio, de un ataque decidido ó de un bom
bardeo? ¿quién es capaz de calcular los
daños que se acarrean en tales ocasiones á
una ciudad industrial y mercantil? Ya sea
que los que ocupan la plaza sean amigos ó
enemigos, las calamidades públicas son
grandes ; y aun cuando no lleguen los hor
rores de la guerra á la última estremidad ,
siempre sobrevienen los males que acaba
mos de describir. Pero ¿cuál es la ciudad
fuerte de alguna importancia, que se pre
serva de tamaños desastres, por poco que
se prolongue la lucha? Y entonces ¿qué
ventajas contrapesan los inconvenientes de
les fábricas destruidas , de los géneros mal
baratados, de la ruina de innumerables fa
milias? Mirada la cosa bajo el punto de
vista de la humanidad y aun del ínteres
nacional, ¿cuáles son las ventajas militares
bastantes á indemnizar perjuicios de tanta
monta?
Atendida la posicion de Barcelona , con
servándose plaza fuerte, es imposible que
desde el principio de una guerra extrange
ra no fuese el blanco de las dos partes be
ligerantes. Y una ciudad de ciento sesenta
mil almas, ¿cómo sufre, no diremos un
sitio , pero ni un bloqueo de algunos dias?
Es bien seguro que á la primera noticia de
la aproximacion del ejército que se propu
siera atacarla , veríamos repetida la triste
escena que hemos presenciado en los dis
turbios y desastres de los últimos tiempos.
La inmensa mayoría de la poblacion des
parramada por los alrededores, sufriendo
los
miendo
ricoslaperjuicios
clase media
considerables
su modesta , fortuna,
consu- '
y el pobre padeciendo las privaciones mas
crueles.
Bien ponderadas las razones que prece
den , difícilmente se inclina la balanza en
favor de la opinion que defiende la utilidad
de las fortificaciones para el caso de una
guerra extrangera. Antes de pasar al exá-
men de otros puntos , someteremos á la
consideracion de los inteligentes el siguien
te dilema. En la suposicion expresada, ó
nuestro ejército se mantendrá en superio
ridad sobre el del enemigo ó nó : si lo pri
mero , conservará Barcelona , aun cuando
no sea plaza de armas : si lo segundo , es
preciso exponer la capital á todos los ma
les de un bloqueo y á todos los peligros y
desastres de un sitio ; y esto segundo es
tan duro tratándose de una poblacion tan
numerosa y tan industrial y mercantil, que
 - 174 -
con dificultad se nos hará creer que el re forzará á la mayoría de los habitantes á la
signarse a ello sea ni político , ni humano. fuga , dejando a la poblacion abandonada
Veamos ahora qué aspecto presenta la á un puñado de revoltosos.
cuestion de las fortificaciones, considerán Ésta ventaja es grande sin duda ; mas al
dola con relacion al mantenimiento del or lado de ella se presentan gravísimos incon
den, único objeto razonable que pueden venientes. La causa del orden puede apo
tener, si se supone que no son útiles para yarse en los fuertes; pero ¿quién nos ha
el caso de una guerra extrangera. dicho que estos mismos fuertes no puedan
Desde luego salta á la vista que no en ser un dia el apoyo de la revolucion ? No
tra para nada en la discusion presente to siempre se encontrarán al frente de la pro
do lo relativo á las murallas, porque es vincia y de la ciudad gefes leales, entendi
bien seguro queen caso de estallar una in dos y celosos ; puede muy bien suceder
surreccion , ó se la sofoca al instante , ó que nos quepa alguna vez un general ne
bien queda dueña del recinto de la ciudad. gligente ¿traidor; y entonces si estalla una
Es imposible que se sostengan en sus pues insurreccion militar, y en la Cindadela ó
tos las tropas distribuidas en pequeños gru en Monjuich se levanta la bandera de re
pos en los cuerpos de guardia , que pue - belion pueden resultar para Barcelona y
den ser hostilizados por el paisanage desde aun para toda la España los mas graves
las bocas calles y los edificios inmediatos. compromisos.
Si esto no lo indicara la simple vista del Antes que al general Van-halen se le
lugar, bastaría á dejarlo fuera de duda lo ocurriera el bombardear una ciudad de
acontecido en todas las insurrecciones. ciento sesenta mil almas , á fin de que cun
Cuando la tropa no ha podido prevalecer diendo en ella el espanto y el desorden se
en el centro de la poblacion ha tenido viesen obligados los que la guarnecían á
que abandonarla toda , retirándose á los someterse á las exigencias del dueño del
fuertes, y recogiendo si posible le ha sido, fuerte , esta idea era tan atroz que jamas
las partidas que ocupabanla muralla. Des les vino á la mente á los moradores de la
de esta nada pueden hacer las tropas du capital del Principado el que pudiesen ver
rante la refriega en lo interior; ya por ser se sometidos á tan dura prueba ; y hasta
en escaso número , ya tambien porque sus creemos que cuantos ocuparan posicion tan
fuegos no pueden ofenderá los que manio ventajosa y dominante, debian de desechar
bran en el corazon de la ciudad. como pensamiento diabólico el aprovechar
Queda pues la cuestion reducida á si se de ella de un modo tan inhumano. Pe
conviene ó nó conservar algunos fuertes ro desde que se ha visto el efecto que pro
que dominen la poblacion. Cuestion grave, duce medida tan cruel, y coán fácilmente
delicada , sumamente espinosa que el go se obtiene el despoblar la ciudad haciendo
bierno debiera meditar mucho antes de re entrar en capitulaciones á los que perma
solverla , pero que tal vez venga un dia en necen en ella , natural es que á todos los
que sea preciso ventilarla detenidamente. malvados, á todos los hombres de corazon
La gran ventaja que resulta al gobierno de duro
ca desde
comoluego
lo sonel lostraidores
bombardeo ,como
se lesofrez-
medio
la existencia de los fuertes es que los re
voltosos no pueden prometerse un triunfo el mas expedito para obligar á la ciudad á
decisivo, aun cuando por un fatal conjun que se someta á lo que dela misma se exige.
to de circunstancias logren desalojar de la Ahora bien : nadie podrá negarnos que
ciudad á las tropas. Porque en tal caso es en los agitados tiempos que estamos atra
tas se replegan sobre Atarazanas , la Ciu- vesando , en medio de tantos vaivenes y
dadela y Monjuich ; se rehacen del desca trastornos como afligen á este desgraciado
labro que hayan sufrido ; se reponen del pais, en vista de tanto espíritu de insubor
espanto que les infundiera el alzamiento dinacion , de tantas defecciones y rebelio
popular ; se mantienen en acecho para nes como hemos presenciado , está muy
aprovecharse de una coyuntura favorable, bien en los límites de lo posible que el go
y sobre todo tienen á la mano el terrible bierno en un momento de descuido , ó víc
recurso de sembrar la confusion y el desór- tima de un pérfido manejo , reemplace á
den amenazando con el bombardeo. A es los gefes fieles encargados de la custodia
ta prueba no puede resirtir una ciudad po del fuerte , con otros desleales y vendidos
pulosa como Barcelona ; quien sea dueño á facciones inicuas y trastornadoras. Si al
de los fuertes ó la precisará á transigir, ó traidor le es dado seducir la parte de la
 — 173 —
guarnicion que necesita para poner en eje tion de gobierno á simple cuestion de fuer
cucion sus intentos, podrá despertar Bar za ; pero todos los hombres que tengan:
celona viendo levantada sobre su cabeza con nir
miras
un
el elevadas
solo
caso pensamiento
en yque
humanas
se apele
de, que
seá horrorizarán
recursos
pueda ve-;
tan )
una bandera rebelde, y hallarse desde lue
go con la amenaza de que , si no cede á las
condiciones que le imponen los sublevados, atroces. ¿Se ha calculado bastante la exe
va á sufrir inmediatamente los horrores de cracion que pesa sobre un gobierno que
un bombardeo. se arroje á bombardear una ciudad como
¿Qué sucedería entonces, por mas fiel, Barcelona ? ¿ Se ha meditado lo suficiente
por mas decidido y enérgico que fuese el sobre las consecuencias de una crueldad
capitan general que se hallase al frente del que de suyo pone de mal aspecto la causa
Principado? Por de pronto cundiría por la de los gobernantes , y da visos de razon y
ciudad la horrorosa alarma , se cerrarían justicia á la de los sublevados? ¿No se re
las fábricas, comenzaría la emigracion, se cuerda la profunda herida que recibió el
sacarían á fuera los géneros de mas valor poder de Espartero con las bombas arroja
y los muebles mas preciosos : en una pala das sobre Barcelona el dia 3 de diciembre?
bra , se repetirían las tristes escenas de no ¿Se ha olvidado que desde aquel instante
viembre de 1842 y de jumo de 1843. En se notaron síntomas tan alarmantes y ame
tre tanto los conspiradores que se hallasen nazadores , que hicieron presagiar la caida
en la ciudad trabajarían por acrecentar la del Regente ? De lo que resulta que á un
alarma abultando el peligro, y ponderaran gobierno regular y legítimo no le aprove
la necesidad de entrar en conferencias con chan tanto como á la rebelion los mismos
los rebeldes para evitar mayores desgra medios de reducir á su enemigo; pues
cias. Asi podrían combinarse bajo la capa mientras aquel tendrá que respetar las con
de la humanidad los elementos de desor sideraciones de prudencia y humanidad , y
den , interesar en su favor la poblacion te asi se guardará de apelar á recursos crue
merosa de sufrir una catástrofe , y aprove les, ó no lo hará hasta el último extremo,
char un momento oportuno que les hiciese los sublevados no se pararán por tamaños
dueños de la ciudad entera. Y la capital inconvenientes, valiéndose para el triunfo
del Principado decidida por una causa , te de todo cuanto se les ofrezca.
niendo á su favor los fuertes que la domi ¿Qué gobierno que se estime á sí mismo se
nan , tiene poderosa influencia sobre toda atreverá á pronunciar la palabra bombardeo,
Cataluña , y pesa mucho en la balanza de tratándose de una ciudad como Barcelona?
España. Nó : no son esos los medios con que se
Imaginémonos que lo acontecido en Ali gobierna en el siglo en que vivimos: estas
cante y Cartagena se hubiese realizado en monstruosidades que hemos presenciado en
Barcelona , estando en pro de los rebeldes los últimos dos años , son excesos á que se
la Cindadela y Monjuich; ¿hubiera sido ha lanzado el frenesí de la revolucion en
tan fácil dominarlos como en las sobredi sus últimas agonías, como queriendo evi
chas plazas? Ciertamente que nó: porque denciar á los españoles que despues de ha
Barcelona abunda de medios de que ellas ber desorganizado la sociedad no era ca
carecen , porque á Barcelona le bastan al paz de gobernarla sino con hierro y fuego,
gunos dias de suspension de trabajo para jamas los monarcas apellidados déspotas se
que queden sin pan muchos millares de valieron de medios tan crueles para domi
brazos , ofreciéndose á una Junta revolu nar un motín ; jamas abusaron de su auto
cionaria la oportunidad de entregarles las ridad hasta el punto de envolver en la rui
armas y de presentar en torno de sus mu na de pocos culpables, las fortunas y las
ros una fuerza imponente por numerosa. vidas de millares de inocentes. Nó: no son
Se nos dirá que estos medios de domi estos los medios en que debe afianzarse un
nar la poblacion por los fuertes es mas gobierno; si hace la felicidad de los pue
probable que favorezcan al gobierno que blos gobernándolos con sabiduría , sua
nó á los rebeldes ; porque siendo aquel el vidad y justicia , tendrá en su apoyo á la
poseedor habitual de las fortalezas , es mu nacion entera; y entonces si en este ó aquel
cho mayor la probabilidad que obra en fa punto un puñado de díscolos levanta la ca
vor de él , que no la que está de parte de beza , fácil le será sofocarla revolucion con
la rebelión. No negaremos que esta obser la ayuda de la fuerza armada, y la coope
vacion es muy fundada reduciendo la cues racion de la inmensa mayoría de los pue
 — 1
blos. Al contrario, si en vez de gobernar 70con—hierro y fuego, bastará la accion regular
con arreglo á las leyes y con miras de uti y suave de las leyes, y no será menester
lidad pública, el poder solo trata de ex presentar álos ojos de la culta Europa nun
plotar la nacion en provecho de unos po ca vistas escenas de escándalo y horror.
cos , se levantará contra él la indignacion De las consideraciones que preceden es
general , y tarde ó temprano estallará la fácil inferir que no está destituida de funda
insurreccion , sin que basten á prevenirla mento la opinion de que no fuera dañoso ni
ni á dominarla los mas inexpugnables cas traería peligros al órden público, el derribo
tillos. ¿Deque le sirvió á Espartero el con de las murallas que ciñen á Barcelona, y has
servar Monjuich ? ¿ Evitó por ventura que ta el de las fortalezas que la dominan ; sin
el descontento popular estallase en la ciu embargo en materias de tanta gravedad á
dad con demostraciones estrepitosas, obli importancia , en que un yerro puede traer
gando á la guarnicion á pronunciarse á consigo resultados tan trascendentales, d
fuerza de abrazos? Y despues que Monjuich gobierno que deba resolverse á una medida
se quedó enteramente solo ¿qué logró el decisiva , es preciso que proceda con la ma
teniente de Espartero con sus amenazas de yor circunspeccion y miramiento. Si algun
bombardear la ciudad? Nada, sino cansar día llegase el caso de ventilarse seriamente
inmensos daños á la industria y al comer el negocio , seria conveniente oir á los mi
cio,
chas perjudicando
familias , y sumir
gravísimamente
en la miseriaá ámu-
las litares inteligentes en la materia , para que
ilustrasen al gobierno sobre las ventajas que
clases trabajadoras; sin que por esto se de pudieran traer las fortificaciones de Barce
tuviese la marcha del pronunciamiento ge lona en caso de una guerra extrangera ; se
neral , antes exasperándose los ánimos y ria indispensable oir á las autoridades civi
arreciando las pasiones contra el causador les que por su larga residencia en la capital
de tantas calamidades. del Principado hubiesen tenido ocasion de
Desgraciado el gobierno á quien se le ha meditar repetidas veces sobre este negocio,
de ocurrir siquiera un recurso tan extre á la vista de los mismos hechos que se les
mado para conservar á los pueblos en la andaban ofreciendo; y sobre todo de la
obediencia ; señal es que no acierta á lle mayor importancia oir á la ciudad misma,
nar el objeto de su destino , y que adolece á los propietarios , á los fabricantes , á los
de algun vicio radical , á cuya curacion se comerciantes, á los artesanos; esplorar, en
ria harto mejor atender, que nó á llenar una palabra, por diferentes medios, laopi-
los almacenes de proyectiles para destruir ninion y la voluntad de todas las clases,
ciudades populosas y florecientes. siquiera para saber á qué parte se inclinaría
Procúrese que la inmensa mayoría del el instinto de la propia conservacion , que
pueblo no tenga motivos para vivir descon no pocas veces es muy feliz y certero.
tenta y desazonada ; foméntense los intere Solo despues de un prolijo y desintere
ses cuyo desarrollo y prosperidad le pro sado examen se debiera tomar una resolu
porciona medios de subsistencia y de bien cion definitiva ; porque el destruir obras de
estar; no se entreguen armas á quien no tanto valor, y cuya construccion creyó con
ofrezca la mas segura garantía de que no veniente la sabiduría de los siglos pasados,
hará mal uso de ellas ; vigilese sobre las es acto á que es preciso proceder con mu
elecciones para el nombramiento de las cha cautela.
corporaciones populares , evitándoseel que No obstante , si despues de sometida la
por sorpresa ó violencia, no se pongan á cuestion á juicioso exámen , resultase que
la cabeza de las poblaciones aventureros el bien que dimanará de la destruccion es
inmorales que medran en medio de los vacion mayor ,queparécenos
el que seque
obtiene
seria con
un laescrúpulo
con-ei-
trastronos ; empléense para regir las pro
vincias subalternos de acreditada lealtad y indigno de hombres de gobierno el detenerse
de firmeza de carácter ; y entre tanto vá- en la ejecucion por no echará perder, como
yase preparando lentamente la reparacion suele decirse, una obra de tanto coste. Las
de los males causados por las tormentas fortificaciones no son monumentos artísti
revolucionarias ; trabájese en que la mora cos : son objetos de utilidad ; ó aprovechan
lidad se propague entre las clases mas nu ó embarazan : este es el punto de vista bajo
merosas haciendo que se conserve y au del cual deben ser consideradas; lo deina»
mente el ascendiente de la Religion ; y con es un apego á lo existente que no justifican
este sistema no será necesario gobernar las miras de elevada política.
 — 177 —
Por lo tocante á las ventajas que repor cendentales y funestas á que puede condu
taría Barcelona del derribo de las murallas cir la propagacion de tan graves errores.
y de los fuertes, respectivamente al desar Mas como quiera que en el lugar citado ha
rollo desus intereses materiales, es cosa tan blamos en general , y no nos era posible
evidente que podemos abstenernos de ocu descender á pormenores, ni sobre los escri
parnos en demostrarla ; baste decir que tos de los socialistas, ni sobre los ensayos
atendida su situacion topográfica, la blan á que se han aventurado , lo haremos en
dura de su clima , la belleza de sus alrede los artículos sucesivos comenzando en el
dores, el espíritu industrial y mercantil de presente por el que sin duda es mas digno
sus habitantes, es probable que ensanchán de llamar la atencion, aun cuando su nom
dose de repente la ciudad se uniría desde bre sea entre nosotros menos conocido que
luego con Gracia , y en seguida con otros el de Saint-Simon y de Fourier.
pueblos vecinos, convirtiéndose en el espa Roberto Owen es á un tiempo teórico y
cio de veinte y cinco años en una delas ca práctico ; distinguiéndose de los demas re
pitales mas extendidas y mas vistosas de formadores en que estos comenzaron por
Europa. ¿Le está reservado este porvenir? escogitar teorías que luego se proponían po
Creemos que sí , porque la cuestion de las ner en planta, y él principió por obrar; y
murallas está ya casi resuelta. Derribada una de sus mismas obras recibió la inspiracion
parte de ellas y estropeada otra , es urgente de su teoría. Sin duda que esta es altamente
el proceder á su reparacion ó al ensanche : errada , extremamente dañosa y disolvente;
lo primero es difícil se realice; y cuando se mas por lo mismo que sale de la boca de un
haya convenido en ensanchar, será tam hombre práctico, y que si bien ha caido en
bien muy difícil que en el nuevo recinto se la manía de escribir mucho , no puede ne
levante una fortilicacion en regla. Se co gársele que ha pasado gran parte de su vida
menzará por levantar interinamente unas en el ensayo de sus doctrinas , estas son
tapias, y se aplazará para tiempo indefmido mucho mas peligrosas dado que son mas á
la construccion de la nueva muralla. propósito para seducir en este siglo que
Entre tanto los edificios irán ganando tanto se precia de amante de los hechos.
terreno, se alzarán otras fábricas al lado de Roberto Owen comienza por declarar
las existentes, los intereses industriales fo errados y dañosos todos los sistemas socia
mentados cada dia mas, se atreverán á ma les que han existido hasta el dia de hoy.
yores exigencias, asi la ciudad como los En su célebre Manifiesto publicado en Lón-
alrededores interpondrán su poderosa me dres el 2 de febrero de 1810 , estampa sin
diacion para que no se realice el proyecto rodeo ni embozo que el sistema de socie
de encerrar de nuevo la poblacion con otra dad que ha prevalecido hasta nuestros días
línea de fortificaciones, hasta que al fin se tiene su origen en nociones imaginarias sa
abandonará semejante idea y se dejará que lidas de un estado primitivo, grosero é
las cosas sigan su curso natural y poco me inexperto del espíritu humano ; añadiendo
nos que necesario. — J. B. en seguida que « todas las circunstancias
exteriores que rigen el mundo , son obra
del hombre, y se resienten de estas nocio
nes primitivas é imperfectas.» Mucha osa
EL SOCIALISMO día es necesaría para condenar tan decisi
vamente todo lo que ha existido y existe ;
y revela ciertamente un orgullo desmesu
rado, la pretension de dar ála sociedad una
organizacion nueva y enteramente satisfac
Artíci lo 2.° toria, cuando se supone que se la encuen
tra envuelta en un caos, de que no le ha
TEORIAS DE, ROBERTO OWEN. sido posible salir en todos los siglos ante
riores. Mil veces se ha dicho que la orga
nizacion social era susceptible de grandes
Espusimos en el artículo anterior el orí- mejoras; que habia muchos bienes que
gen de las doctrinas trastornadoras de la so producir y males que remediar ; que la ig
ciedad que habian aparecido en este siglo. norancia , la malicia y las pasiones de los
Allí fijamos su carácter é indicamos su ten hombres alteraban la armonía que reinar
dencia ; advirtiendo las consecuencias tras- 11 debiera en el mundo , y que rrn muy im-
TOVO II. 12
portante el neutralizar por todos los medios
posibles esa funesta influencia , en cuanto
cabe, atendida la mísera condicion de la
prole de Adan. Pero Owen no se limitaba
á deplorar los males que nadie niega, y
antes de proponer el sistema con el cual
intenta regenerar la sociedad , quiere de
jar asentado que basta él nada bueno se
babia hecho, y que no se tenían sino no
ciones imaginarias salidas de un estado de
grosería é inexperiencia.
Segun Owen los hechos prueban de una
manera evidente á quien observe y refle
xione, que esas nociones primitivas y gro
seras son erróneas de un modo lamentable;
y que en las edades precedentes, las cua
les pueden ser justamente llamadas el pe
ríodo irracional de la existencia humana , el
hombre ha sido engañado con respecto á
su propia naturaleza , y conducido á ser el
el mas imperfecto é inconsecuente de todos
los seres. Esta expresion del periodo irra
cional de la existencia humana es sobre ma
nera peregrina; mayormente cuando vere
mos en lo sucesivo queeljuezque se atreve
á pronunciar un fallo tan severo establece
doctrinas degradantes que sin duda acar
rearían un período irracional de la existen
cia humana, si posible fuera que llegasen
á realizarse.
Y ¿en qué funda el orgulloso filósofo
esta condenacion en que envuelve á la hu
manidad entera? ¿Ha descubierto por ven
tura al^un hecho desconocido? ¿Ha levan
tado el velo que cubriera algun arcano , ó
puede alegar alguna cosa de que no tuvie
ran noticia los que hasta aqui han medita
do sobre el destino del humano linage? Nó
ciertamente : solo que segun él la historia
de la raza humana demuestra invencible
mente el estado grosero del espíritu hu
mano, y cada una de sus páginas contribuye
á establecer con pormenores lo insensa
to é irracional de su tendencia. ¿Asi se
borran de una plumada los siglos de Peri
eles, de Augusto, de Leon X, deLuisXIV?
¿ Asi se desprecian las glorias del presente,
declarando al espíritu humano grosero, in
sensato é irracional , cuando se imaginaba
poder lisonjearse de su desarrollo, adelan
tos y espléndida cultura? «Esta historia,
dice Owen, ha sido una serie de guerras,
de pillage, de degüellos, de divisiones in
terminables, de mutua oposicion á un es
tado de paz y de felicidad ; un largo perío
do en el cual cada uno ha estado en lucha
con todos y todos con cada uno ; principio
de conducta admirablemente calculado pa
ra producir la menor prosperidad y la ma
yor miseria posible.» En estas palabras del
reformador hallamos el origen de sus ex
travíos , origen que consignamos ya en el
artículo precedente : la vista de las calami
dades que han afligido y afligen al género
h u mano.
Si bien se observa este es el punto de
partida de todos los errores en esta mate
ria; hombres que no profesan ningun prin
cipio de religion , que no llevan en cuenta
las tradiciones antiguas, que no hacen caso
de las creencias de los pueblos sobre la
existencia de un trastorno primitivo , lijan
su mirada sobre la triste condicion que ca
be á los hombres en esta tierra de infortu
nio. ¿Dónde está la justicia, preguntan
entonces ? ¿ Dónde la equidad? ¿Cómo es
que esa débil criatura haya de ser víctima
de tantos padecimientos? Y faltos de la luz
de la fe , empeñados en no aclarar su filo
sofía con los resplandores que la revelacion
puede prestarles , aun cuando no la acata
ran como obra divina , se pierden en sus
vanos pensamientos, los unos negando á
Dios , los otros blasfemando de la Provi
dencia , estos acusando á la humanidad en
tera, aquellos echando la culpa á la supers
ticion y al fanatismo; en una palabra,
divagando en todos sentidos en busca de una
verdad, que si la buscasen con corazon
recto é intencion pura, la encontrarían
consignada en la enseñanza del cristianismo.
Que se agiten en insensatas teorías , que
excogiten extravagantes sistemas, solo la
Religion cristiana ha dado la clave para ex
plicar los misterios del hombre y de la hu
manidad : no hay otro fundamento que el
que ella ha puesto , no solo para levantar
el edificio religioso, pero ni siquiera para
formar un cuerpo de ciencia. El hombre
sin la luz de la revelacion es un caos ; y si
se resiste á creer los misterios porque le
son incomprensibles , no advierte que se
priva de la comprension de uno de ellos,
el mas importante y mas allegado, nada
menos que él mismo.
Es bien extraño que Owen declare gro
sero el espíritu humano en todos los siglos
y bajo todos los sistemas que nos han pre
cedido , afirmando que el principio de con
ducta de la humanidad fue el estar en lu
cha cada uno contra todos, y todos contra
cada uno; sin recordar siquiera las máxi
mas de caridad y fraternidad tan inculca
dos por el cristianismo. Si Owen se hubie-
 179 —
se limitado á decir que las pasiones oponen Owen se habrá verificado en nuestra natu
gravísimos obstáculos á la realizacion de raleza una mudanza tan profunda , será
esas máximas, y se hubiese lamentado de tal el milagro de la creacion de un nuevo
la ceguedad y malicia de los hombres en espíritu y de una nueva voluntad , que no
no querer escucharlos, impidiendo asi el solo seremos racionales , consecuentes y ob
que la tierra se convierta en un paraiso, servantes de una conducta juiciosa , sino
habrían estado de acuerdo con él todos los que no podremos menos de hacerlo asi ,
cristianos, y hubieran convenido en que pues que todos seremos llevados á ellos con
era de la mayor importancia el trabajar de necesidad irresistible. Jamas hombre alguno
contmuo para el planteo de instituciones prometiera mas beneficios á la humani
donde los preceptos y consejos del Evan dad ; jamas se ofreciera á esta mas lisonje
gelio tengan una realizacion efectiva en ra perspectiva ; jamas se pronunciaran pa
beneficio de los necesitados y en consuelo labras que pudiesen embriagarnos de igual
de los infelices. Pero condenar todo lo que gozo y esperanza , si desgraciadamente la
ha existido y existe sin excepcion alguna , misma exageracion no nos pusiese de bulto
afirmarque todaslas instituciones son ema el engaño , sí no viéramos que se nos quie
naciones directas de los errores primitivos re regenerar, y se comienza por despojar
groseros y graves de nuestros antepasados, nos de nuestro libre albedrío , pretendien
tratar de una manera tan insultante todos do conducirnos al bien por una necesidad
los principios y sistemas que hasta el pre irresistible.
sente han regido las sociedades , no era muy Y no se crea que Owen hable conjetu
á propósito para atraerse prosélitos entre rando , y no con entera seguridad de los
las personas sensatas, antes sí muy condu resultados del sistema que se propone rea
cente á irritar los ánimos, cuando no por lizar : él abrirá al hombre los ojos sobre la
otra razon , siquiera por lo lastimado que degradacion presente y pasada de la razon
debia sentirse el amor propio de cuantos humana, sobrela demencia y absurdidad
tomaron parte en las instituciones que tan de nuestras instituciones, sobrela imperio
altamente se despreciaban. sa necesidad en que nos hallamos de reem
En lugar de un sistema de ignorancia || plazarlas con otras basadas sobre hechos
niñez
profunda,
á ser que
irracional
fuerza, al
inconsecuente
hombre desde
é insu || comunes y en armonía con nuestra natura
| leza. Por lo tocante á las dudas que pudie
competente para juzgar sus errores mas ran ocurrir sobre esas instituciones , sobre
notables, tanto en su espíritu como en su los hechos conocidos y la armonía con
conducta , asegúranos Owen que va á pro nuestra naturaleza , hay señales tan carac
poner á todos los pueblos del globo otro terísticas que con ellas todo hombre puede
sistema social, enteramente nuevo , funda distinguir Cuando lase verdad
haya realizado
del error.el prodigioso
do sobre los principios nacidos de los he
chos invariables, y en perfecta armonía con sistema , se pondrá fin á la ignorancia hu
las leyes de la naturaleza : sistema en que mana, se detendrán los progresos del pau
cada uno adquirirá la asistencia de todos , perismo, se le imposibilitará de volver á
y todos la asistencia de cada uno; princi presentarse , se destruirán las diversas su
pio admirablemente calculado para produ persticiones que reinan sobre el globo y se
cir la mayor prosperidad y la menor mise || alejarán las causas que hasta aquí han in-
ria posible. vidido á los hombres ya en hechos ya en
Este sistema opuesto totalmente al pasa intencion , y se alcanzará una abundancia
do y al actual , realizará sobre lo tierra los inagotable de todo lo necesario á la vida y
mayores prodigios; pues que creará un á los placeres; la penosa tarea de produc
nuevo espíritu y una nueva voluntad en todo el tor que tantos sudores nos cuesta se nos
género humano, y nos conducirá á todos por hará mas agradable y mas fácil.
una necesidad irresistible á ser consecuen Y por ventura ¿ será necesario esperar
tes , racionales, sanos de juicio, y pru muchos siglos para disfrutar de resultados
dentes en la conducta. Hasta aquí se ha tan halagüeños? ¿El sistema de Owen se
bia tenido como una inmensa ventaja el parecerá tal vez á todos los grandes pensa
allanar á los honrbres el camino de la vir mientos que han producido á la humanidad
tud, el lograr que, usando bien de su li algun beneficio de importancia, los cuales
bre albedrío , observasen una conducta jui han necesitado mucho tiempo para desar
ciosa y prudente ; mas con el sistema de rollar los provechosos gérmenes que en
 — 180 —
cerraban en su seno, arraigándose con menor daño á los intereses morales y ma
lentitud , como suele hacerlo todo lo que teriales de nadie , sin hacer experimentar
hade durar por espacio muy dilatado? la menor desazon , antes causando á todos
Nada de eso : M. Owen conocía muy bien satisfaccion y beneficios, y esto sin excep
que para herir vivamente las imaginacio cion alguna de paises ni lugares, es lo que
nes y arrastrar numerosos prosélitos, con se llama un sistema completo , es el descu
venia no aplazar para mucho tiempo des brimiento de la piedra filosofal, es dar un
pues el coger el fruto de lo que se sembrase: mentís á lo que suele decirse de que en es
asi es que no tiene reparo en asegurar que ta tierra malaventurada andan los prove
su sistema , ya desde el primer año de su chos revueltos con los daños, los goces con
adopcion, producirá sobre la tierra mas los dolores , la risa con el llanto ; es resol
bienestar , mas comodidades y mas mora ver cumplidamente el problema social,
lidad , que no nos ha traido el antiguo en con una perfeccion que jamas pudiera ca
tantos siglos como lleva de existencia, y ber en la mas poética fantasía. La huma
que no podrá traernos jamas. nidad debe regocijarse con la esperanza de
Creerán los lectores que una mudanza ese tiempo bienaventurado ; solo los aman
tan radical no podrá efectuarse sin revolu tes de lo melancólico, los aficionados á la
ciones sangrientas; que será preciso inun tragedia , los que se complacen en dramas
dar el mundo en un piélago de sangre y que hacen derramar abundantes lágrimas,
de lágrimas, para que salga mas radiante entristeciendo dulcemente el corazon, tie
y puro, mas lleno de prosperidad y ven nen que quejarse del sistema de Owen.
tura ; que á la manera de las revoluciones Con la creacion del nuevo espíritu y de la
que se han visto hasta ahora, la humani nueva voluntad , se cegarán algunas fuen
dad no alcanzará el bien , sino soportando tes de literatura y de artes: desde entonces
grandes males ; que . no tendrá la dicha no se conocerá mas que lo bello y lo agra
sino despues de haber agotado la copa del dable , nada que cause horror , nada que
infortunio; que no llegará á la tierra de hiera los sentimientos, nada que pueda
promision sino despues de haber divagado perturbar aquella paz, aquella tranquili
largos años por los arenales del desierto. dad, aquella apacible bonanza de que dis
Nada de eso tampoco : el sistema de M. frutará el humano linage. El siglo de oro
Owen , segun nos asegura el misino , efec de los antiguos poetas nada tiene que ver
tuará todas estas reformas tan radicales con con lo que se nos promete seriamente des-
calma , con tranquilidad , gradualmente y ,Ie Londres en 18Í0 : los manantiales de
bajo el imperio de un órden tal , que na leche, los árboles sudando sabrosa miel, el
die tendrá que sufrir el menor perjuicio en corderillo jugueteando con el leon, la hie
sus intereses morales y materiales ; antes na llevando sobre sus espaldas al tierno ni
al contrario , en todo lugar y en todo pais, ño , los campos abriendo su fecundo seno
todos "los hombres experimentarán con la para regalarnos con toda especie de frutos,
mudanza una satisfaccion y un beneficio. hechizando nuestra vista con varios y ex
Ciertamente que no se le puede exigir quisitos colores, y recreando nuestro olfa
mas al bondadoso reformador : cambiar la to con apacibles y exquisitos aromas, pue
faz del mundo, destruyendo radicalmente den dar apenas una escasa idea de lo que
el sistema que le gobierna y sustituyéndo será el mundo cuando se resuelva á escu
le otro enteramente nuevo: crear un nue char las palabras y aceptar los favores con
vo espíritu , una nueva voluntad ; condu que le brinda el fabricante ingles.
cir á todos los hombres á la razon , á la Un punto quedaba capaz de turbar los
observancia de una conducta juiciosa; ex ánimos y de retraerlos de prestar oido á
tirpar todos los gérmenes de division, ha los consejos de Owen , y era el haber dicho
cer que todos vivamos en amable paz y que con su sistema se destruirían las diver
fraternidad, desterrar la ignorancia, y ahu sas supersticiones que reinaban sobre el
yentar el pauperismo , haciendo imposible globo. Las conciencias tenían sin duda de
su vuelta; adquirir á todosla asistencia de que alarmase viendo que tan sin rodeos se
cada uno, y á cada uno la asistencia de to condenaban todos los sistemas antiguos,
dos, y para colmo de dicha, atraer sobre en los cuales iban envueltas todas las reli
la tierra inagotable abundancia de todo lo giones. En esta parte no le es posible a
necesario á la vida y á los placeres , y con M. Owen dar explicaciones cumplidamente
seguir tal cúmulo de bienes sin causar el jj satisfactorias , á no
 — 181 —
que
darhumanidad
la por
antesel de
pieéláideas
hubo
su propia
razonables.
quienobra
tuviese
admitiendo
Como
sobre
él de
racional
los mas
, estan
sabios,
prontos
mas prácticos
á sufrir el, mas
examen
ex-
en los cuatro ramos esencia-
estriba
ricion elenespíritu
el supuesto
humano
de que
ha hasta
vividosuenapa-
un || ?s de la vida humana, que son: 1.° la
produccion delas riquezas: 2.° la distribu
estado grosero é irracional , no le es dado cion de ellas: 3.° la formacion del carácter
reconocer que ninguno de los fundadores humano desde la niñez: 4.° el estableci
de las religiones hubiese acertado en el miento de un gobierno local y general.
verdadero sistema , asi es que no puede El inventor se lisonjea de que se apro
transigir en lo tocante á la necesidad de xima la época dela realizacion de sus gran
destruir lentamente todas las supersticiones des designios, de la destruccion entera y
que dominan en el globo. Mas con la mira pacífica del inmoral sistema que ha regido
de que no se alarmasen los tímidos rece hasta ahora, y cree ver una señal que anun
lando que no sobrevinieran violencias y cia la cercanía de la innovacion , en la cons
persecuciones, asegura M. Owen que por ternacion de los hombres que se imaginan
consideracion á los errores del antiguo es tener un interes material en la conserva
tado social y no herir de ninguna manera cion del antiguo estado de cosas. Segun él,
las conciencias , el nuevo sistema arreglará esto indica que ha sonado la hora de la
las cosas de tal suerte que las viejas supers transformacion : la atencion de los pueblos
ticiones de cada pueblo mueran de muerte se siente llamada hacia tan importante ob
natural , lográndose esto con los menores jeto, y dirigen sus miradas á esa felicidad
inconvenientes posibles para los individuos en que se interesan los presentes y los ve
que las profesan , y con el mayor respeto á nideros.
las flaquezas humanas. Por lo demas aña ¿Cuál será el sistema tan maravilloso,
de, que siendolos dos sistemas enteramen al cual prodiga su autor tan entusiastas
te distintos, es claro no ser posible la fu elogios? ¿cuáles serán los medios que se
sion entre ellos , ni aun en el período en propone emplear para conseguir tan estu
que el uno absorverá el otro. El nuevo , pendos resultados? ¿Le ha sido revelada
como que estará basado sobre la verdad no quizás la naturaleza del espirito humano
admitirá decepciones en la vida pública ni de una manera desconocida hasta el pre
privada , ni entre los individuos ni entre sente? ¿Ha penetrado los arcanos del co
ios pueblos; dejando al viejo, ue está fun razon descubriendo resortes de que no se
dado sobre el error , el que se defienda con tenia idea para obrar sobre él y producir
la ayuda de sutilezas y mentiras. efectosque nadie pudiera prometerse ? Dig
El fundador del nuevo sistema ofrece na es ciertamente de examinarse esta cues
una garantía de que puede realizar lo que tion , digno es el sistema de Owen de ser
promete , en que pasó el primer período sometido á discusion rigurosa , mayormen
de su vida ocupado en la industria, en que te en la parte tocante á fas teorías , con las
es un hombre de negocios , de orden y de cuales intenta corregir las ideas que segun
experiencia, y que las instituciones que ha él habian sido hasta aqui falsas y groseras,
excogitado fundadas sobrelos principios de teniendo el espíritu humano en un estado
nuestra naturaleza y en armonía con ellos, irracional del que salian como de la caja
le han sido inspiradas por el conocimiento de Pandora los males que han afligido la>
práctico de las cosas. tierra. — /. B.
No teme el autor de tantas maravillas las
dificultades que puedan ofrecerle los hom
bres inteligentes en la materia ; pues que
afirma que sus instituciones nuevas , á pe
sar de la extraordinaria combinacion que
encierran, organizando las cosasde mane
ra que toda la raza humana reciba en pre
mio de su trabajo ventajas cien veces mas
grandes que las proporcionadas por el an
tiguo sistema á ningun individuo, esos pla
nes inauditos hasta el dia de hoy, esascom-
binaciones que deben formar un nuevo
mundo moral y dar al hombre un carácter
de un espíritu distinto del cuerpo, han de-182bido — establecer por necesidad que el hom
bre era un compuesto de organizacion ori
ginal y de influencias exteriores ; pues
quitada el alma como distinta del cuerpo ,
EL SOCIALISMO. claro es que solo queda este con su organi
zacion natural , ó si se quiere llamarla ori
ginal, y con las modificaciones que esta
organizacion reciba de las influencias que
Artículo 3.° la rodean. En tal caso es cierto que los
sentimientos y las convicciones y todos los
actos del hombre serian el resultado de
CONTINUA LA EXPOSICION combinaciones puramente materiales; y
que este por consiguiente no seria respon
DE LAS sable de cuanto quisiese ú obrase, dado
que carecería enteramente de libertad , y
TEORÍAS DE OWEN. estaría llevado al ejercicio de sus facultades
con la misma fuerza irresistible que los
cuerpos abandonados á sí mismos se preci
pitan hácia el centro de gravedad.
El hombre, segun Owen, es un com Espanto causa que una teoría con la cual
puesto de organizacion original y de influencias se pretende arreglar el mundo, se inaugu
exteriores , de las cuales resultan los senti re con tan tristes auspicios como son la ne
mientos y convicciones,- manantiales de gacion del espíritu del hombre , la negacion
nuestros actos. No siendo el hombre dueño de su libertad , la negacion de su responsa
de modificar su organizacion ni las circuns bilidad , la proclamacion solemne de que
tancias que le rodean, se sigue, que asilos no somos mas que un puñado de materia
sentimientos como las convicciones , como organizada , y de que todos nuestros pen
los actos que de ahí dimanan , son hechos samientos, nuestras voluntades, nuestros
forzosos, necesarios, contra los cuales él actos, no son mas que funciones necesarias
no puede nada ; los sufre , no los arregla ; sobre las cuales nada tenemos que ver, na
están fuera del alcance de su consentimien da podemos ; no siéndonos dado otra cosa
to ; de suerte que el individuo se ve preci que entregarnos á sus impulsos como el
sado á recibir ideas exactas ó falsas, sin que péndulo á sus oscilaciones. Espanto causa
pueda desear las primeras ni desechar las el reflexionar lo que seria el mundo si lle
segundas. Su carácter es un hecho acci gase á dominar tan funesta doctrina : no
dental, independiente de él; y su volun solo se destruirían las ideas de virtud y de
tad resultado de convicciones y de senti vicio, que ni siquiera son concebibles en
mientos esclavos, no tiene ni espontaneidad, faltando la libertad ; no solo desaparecerian
ni libertad. De donde resulta que siendo el las nociones de bien y de mal moral que
hombre juguete á un tiempo de su organi fueran absurdas, si se las aplicase á la ma
zacion que él no ha arreglado, y delas cir teria organizada ; no solo desaparecerian
cunstancias de su educacion que no está en todas las esperanzas y hasta los pensamien
su mano combatir , seria la mas chocante tos de una vida futura , sino que hasta la
injusticia el declararle responsable de las presente perdería de una vez todo lo que
palabras ó de los actos , á los cuales se halla tiene de bello y de sublime.
empujado por un concurso de necesidades ine ¿Qué son las ideas, si se supone que no
xorables. tienen su asiento en un espíritu inmortal,
No debia M. Owen ofrecernos con tan y que no son mas que el producto de la
pomposas palabras el desarrollo de una organizacion de la materia? Los sentimien
teoría que nada tiene de nuevo , que es un tos mas puros, mas hermosos, mas eleva
miserable plagio dela escuela materialista, dos ¿en qué se convierten desde el mo
que no añade ni una sola idea luminosa á mento qne llegásemos á figurárnoslos á
lo que dijeron en todos tiempos y paises manera de funciones de un órgano corpó
los que formaron el insensato empeño de reo? El hombre entero pierde su íntima
rebajar al hombre hasta el nivel de las naturaleza , no es á nuestros ojos nada de
plantas. Los que han negado la existencia lo que era antes, desde que le considera
mos sin mérito ni desmérito , sin virtud ni
 — 183 —
libre
vicio ,albedrío,
sin responsabilidad
sin alma. Entonces
de sus actos,
va nosin
es n| so La
una criatura á imágen y semejanza de Dios,
ya no tiene altos destinos á que llegar, ya
no tiene arduas empresas que acometer:
mísera porcion de materia organizada , par
te imperceptible de ese universo en medio
del cual se encuentra arrojado , sin saber
por quién ni para qué, hállase condenado
á sufrir las duras condiciones de su exis
tencia , arrastrándose como vil gusano so
bre ese monton de polvo que se le ha se
ñalado por morada. Sometido á las leyes
de inexorable necesidad , nada puede ha
jorarla
cer, ni ; para
sus mudar
acciones,
su suerte,
su voluntad,
ni para me-
sus
pensamientos, sus sentimientos, sls instin
tos, todo cuanto es y todo cuanto tiene,
todo depende de la organizacion que le ha
cabido en suerte, y de las circunstancias
que le han rodeado. Si ejerce un acto que
le parezca virtuoso, y que deje en el fondo
de su alma la purísima satisfaccion de ha
ber cumplido con su deber, hade desechar
aquella idea que tanto le halaga, como va
na ilusion contraria á la verdadera filoso
fía : ya que el acto que le pareciera vir
tuoso , no es mas que un producto de su
organizacion material , no ha contraido
ningun mérito ejerciéndole, no ha cum
plido con ningun deber, porque es un ab
surdo hablar de deberes y de méritos,
aplicándolo á operaciones que dimanan de
la organizacion de la materia.
La humanidad , si por desgracia pudiese
llegar á tener un solo dia estas horribles
convicciones , se sentiría degradada de re
pente : su frente se abatiría al suelo como
la de los brutos, el corazon cesaría de latir
con nobleza , apagárase la luz del entendi
miento, relajárase la energía de la volun
tad , y abandonado el hombre á los ins
tintos mas brutales abdicaría el hermoso
título de rey de la creacion.
Pero en vano es que la ceguera del or
gullo se empeño obstinadamente en exco
gitar extravagantes sistemas para destruir
lo indestructible. El sentimiento de la li
bertad está en el fondo de nuestra concien
cia ; en vano intentaríamos sofocarle; una
voz interior nos clama que somos libres ;
antes de obrar experimentamos que pode
mos dejar de obrar ; cuando hacemos una
cosa , sentimos que podríamos hacer otra ;
y si alguna vez nos proponemos ejercer
adrede el libre albedrío , hallamos que no
.tiene límites, desde el acto mas juicio-
hasta
responsabilidad
el mas extravagante
de nuestros
y ridiculo-
artos es
eudente en igual grado. Cuando hemos
obrado bien , sentimos un placer indecible,
emanado de una aprobacion interior de lo
que acabamos de ejecutar : la accion vir
tuosa deja en nuestra alma una impresion
en extremo agradable , como la flor que al
abrir su capullo exhala un suavísimo aro
ma. Al contrario, cuando nos hemos apar
tado de nuestro deber , cuando hemos co
metido una accion fea , ó hemos dejado de
ejercer otra á que estábamos obligados , el
remordimiento brota al instante en el fon
|| do de nuestro corazon : una vozíntima que
sale de lo mas recóndito de nuestra alma
nos reprende con lenguage severo; en va
no nos excusamos á los ojos de los demas ,
en vano apelamos á efugios para disculpar
nos en nuestra propia conciencia , en vano
huimos de nosotros mismos para no escu
char esa voz que nos importuna y aflige ;
ella nos persigue en medio de nuestras
distracciones , de nuestros placeres , de
nuestra disipacion insensata ; ella nos per
sigue de dia y de noche , en la vigilia y en
el sueño, en la salud y en la enfermedad ,
en la dicha y en el infortunio, y de conti
nuo nos dice : « has obrado mal.»
Pero sigamos á M. Owen en sus desa
tentadas teorías. La felicidad, segun él, la
verdadera felicidad, producto de la educacion
y de la salud, consiste en el deseo de au
mentar los goces de nuestros semejantes y
de enriquecer los conocimientos humanos,
en la asociacion con seres simpáticos , en
la ausencia de la supersticion, en la bene
volencia , en la caridad , en el culto de la
verdad, en el uso completo de la libertad
individual. ¿O"1'' significa ese conjunto de
palabras, cuando vienen en pos de los fu
nestos principios que acabamos de comba
tir? ¿Qué es la benevolencia, (pié es la
caridad en seres cuya naturaleza no es mas
que un poco de materia organizada? ¿ Qué
será el culto dela verdad , qué el uso com
pleto de la libertad individual , si esta li
bertad no existe , si todos los actos del
hombre son producto de irresistible necesi
dad ? Asi se procura encubrir la pobreza y
falsedad de las ideas con nombres pompo
sos y brillantes; asi se quiere alucinar á los
incautos amontonando expresiones que ca
recen de sentido en la teoría á que se apli
can. Siendo tan grosero, tan errado, tan
'malo, todo lo que ha existido hasta aqui
¿cómo es (pie les usurpais á los antiguos
sistemas sus ideas y hasta sus palabras? todo
de semejante
del gobierno.
sistema?
¿Cuál
Nadaserá
menos
la religión
que la
¿Quién os ha enseñado á pronunciar la be
nevolencia , la caridad , el culto de la ver religion de la caridad, religion que se mues
dad , el uso de la libertad individual, sino tra muy reservada sobre todo lo que exce
ese mismo sistema á quien ingratos despre de nuestros conocimientos, pero que sin
ciais? i Ah ! es que en el vuestro os seria embargo admite un Dios criador, eterno ,
preciso forjar un nuevo idioma, idioma que infinito. Es de sospechar que esta profe
si expresase exactamente vuestras doctri sion de fe es una vana fórmula, un hipó
nas seria un cúmulo de absurdidades y de crita homenage tributado á la creencia de
gradacion , que no os atreveríais á ofrecer la generalidad de los hombres , que se lle
á los ojos de ningun hombre que no hubie narían de horror si seles predicase el ateis
se perdido totalmente el sentimiento de la mo puro. Asi es que cuando se trata de
dignidad propia. Asi cuando hablais de ca rendir culto á este Dios, críador eterno é
ridad , del deseo del bien de los semejan infinito , el fundador del sistema racional,
tes, estas palabras tan bellas en el antiguo no establece otra adoracion que estaley ins
sistema , ó no significan nada en el vues tintiva que ordena al hombre el vivir conforme
tro , ó significan ideas repugnantes y des á los impulsos de su naturaleza , y alcanzar el
consoladoras. fin de su existencia. Este fin es la práctica
Segun vuestras doctrinas, el hombre que de la benevolencia mutua , y el deseo sin
tiene benevolencia, y que la realiza con cesar creciente de hacerse felices los unos
actos benéficos, no practica nada noble, á los otros, sin distincion de raza, de san
nada laudable, no merece que el favoreci gre ni de color. La religion es la inquisi
do le agradezca los favores, pues que ha ción de la verdad , el estudio de los hechos
ciendo el bien ejecuta lo que no puede y de las circunstancias que producen el
menos de ejecutar ; obedece á una necesi bien y el mal : amarse , gobernarse bien , vi
dad irresistible, obra lo mismo que la llu vir felizmente , hé aqui lo que es agradable á
via que por el impulso de su gravedad cae Dios. De una teoría materíalista, natural
sobre una tierra agostada y la humedece y era que descendiese una moral tambien
fertiliza. Analizad bien estas ideas: formad materialista ; natural era que despues de
conforme á ellas vuestro diccionario, y haber hecho consistir al hombre en una
atreveos á estampar en él las palabras de organizacion material , no se hablase de
beneficencia y caridad. — /. B. premios ni castigos en la otra vida , no se
mentasen las esperanzas y los temores que
llegan mas allá del sepulcro. Si el hombre
no era mas que un puñado de polvo , era
muy justo que se le dejase pegado al pol
EL SOCIALISMO. vo , que no se le hablase de porvenir des
pues de la muerte , ya que esta muerte no
era otra cosa que un soplo que desbarataba
esa organizacion endeble.
La ciencia del gobierno , en el sistema
Artículo 4.° de M. Owen , consiste en fijar sobre bases
racionales la naturaleza del hombre y las
condiciones requeridas para la dicha; asi
CONTINÚA EL EXÁMEN un gobierno racional debe proclamar desde
luego la libertad absoluta de la conciencia,
DE LAS la abolicion detoda recompensa y de toda pena,
origen de nuestras desigualdades sociales, en
TEORÍAS DE ROBERTO OWEN. fin la completa irresponsabilidad del individuo ,
ya que se le supone esclavo de sus actos.
En el sistema del reformador, si el hom
bre obra mal , no lo debemos achacar á él,
Segun M. Owen la ciencia social abraza sino á las circunstancias fatales de que está
el conocimiento de las leyes de la natura rodeado. Un culpable no es masque un en
leza , la teoría mas exacta de la produccion fermo , y si su enfermedad llega á ser peli
y de la distribucion de las riquezas , el per grosa para los demas, ábrase un hospital
feccionamiento de la humauidad , y el mé para las moralidades dolientes. Cuando las
 — 185
circunstancias que rodean al hombre sean culpa; cuando al segundo, totalmente des
tales que no le inspiren sino bien , las en tituido de la razon, se le consideraba como
fermedades de esta clase serán muy raras ; un bruto que obedecía á instintos ciegos ,
y cuando se ofrezcan , el gobierno racional cuya mala tendencia no comprendía, y cu
proveerá d ellas por medio de un Charenlon ó yo impulso no le era posible resistir. Pero
de un Bedlam. declarar de una vez que todos los hombres
El principio con que se destruye la liber se hallan en este último caso, es proclamar
tad humana , y por consiguiente toda clase la demencia universal; y el humanolinage
de responsabilidad , trae por precision con tiene indisputable derecho á rechazar este
sigo la doctrina de que el culpable es un ultrage Con tan
sobrela
bella frente
teoría del
bienque
se deja
se lo arroja.
enten
enfermo , y nó otra cosa. En efecto , si su
ponemos que las acciones del hombre no der lo que seria la sociedad ideada por
dimanan del libre albedrio, sino de impul Owen ; los hombres seguros de que no ha
sos naturales á los que sea imposible resis bian de recibir premio ni castigo no ten
tir, tendremos que el ladron , el homicida drían ni estímulo para el bien , ni freno
y todo linage de criminales , no cometerán para el mal ; el que se le antojase robar las
sus atentados con verdadera deliberacion , alhajas de su compañero , asesinar á su
y sí solo obedeciendo á una ley de su na amigo, violentar áuna doncella, incendiar
turaleza. De tal suerte que quien clava el una casa, ó perpetrar otros actos semejan
puñal en el seno de su hermano ó de su tes, estaba cierto que cuando mas se 1c
padre, no hace mas que seguir el impulso consideraría como un enfermo atacado de
á que le lleva su organizacion particular inclinacion al robo , al asesinato , á la vio
atendidas las circunstancias que le rodean ; lacion ó al incendio; y como quiera que
y no estará mas en su mano el no arrojarse absteniéndose de cometer con frecuencia
á semejantes actos, que el experimentar dichos atentados podría persuadir fácil
una impresion dolorosa si recibe una con mente que su enfermedad no es peligrosa ,
tusion ú otro daño en un miembro de su y que el exceso á que ha llegado no ha si
cuerpo. do mas que un accidente pasagero , hasta
Parece imposible queá la faz del mundo le seria dable evitar que se le encerrase
civilizado se propalen doctrinas, queá mas por mucho tiempo en un Charenton ó en
de estar en abierta oposicion con el sentido un Bedlam.
íntimo , con el grito de la conciencia , con Sin embargo, y á pesar de tamaña evi
el consentimiento del género humano , con dencia de los pésimos resultados que con
las leyes y costumbres de todos los paises, sigo traerian tan desolantes doctrinas, M.
tienden a desencadenar de tal suerte las Owen se lisonjea de que con ellas se podría
pasiones y abrir la puerta á todos los deli crear un paraiso sobre la tierra, y organi
tos ; y lo singular es que una doctrina que zar una sociedad donde los hombres se
ha sido en todas épocas la ensena de sectas convirtiesen en ángeles. El principio de es
pervertidas se nos presente como una in ta sociedad debiera ser la vida comun , en la
vencion maravillosa , como indefectible pa que trabajando cada individuo segun sus
nacea para curar todos los males de la medios é industria , estuviese provisto de
humanidad, como fecundo semillero de cuanto hubiese menester. En la comuni
prosperidad y ventura. dad , la educacion debiera ser la misma
En todos tiempos se ha reconocido que para todos, invariable, uniforme, dirigida
de los hombres los unos son mas inclinados de tal suerte que no hiciera nacer sino sen
al bien ó al mal que los otros: la diferencia timientos verdaderos y libres en su emision,
de índoles y caractéres es cosa ya tan co conformes sobre todo á las leyes evidentes de
nocida y tan generalizada , que en todos nuestra naturaleza. Bajo tales condiciones , y
los idiomas se encuentran palabras que ex con la ayuda de estas circunstancias , la
plican esta diversidad; pero el buen sentido propiedad individual llegaría d ser inútil ; y la
del humano linage ha distinguido siempre igualdad perfecta , la comunidad absoluta ,
entre una inclinacion masó menos decidida fueran las solas reglas posibles de la so
hácia un género de actos y la verdadera ciedad.
demencia. En el que adolecía de la prime M. Owen cree que en seguida se podrán
ra , aun cuando le fuera difícil abstenerse ■i1 abolir todos los signos de riqueza personal;
deellos, ,sey reconocía
meterlos por lo tanto
la libertad
se le imputaban
de no co y que la comunidad reemplazará á la fami
lia. Cada una de estas comunidades cons
 186
tará de dos ó tres mil individuos que se debieran imitar los demas. Aquel era el
dedicarán á industrias combinadas, agrí hombre por excelencia : aquel habia mos
colas y fabriles; de manera que puedan trado en todo su grandor la dignidad hu
satisfacer á sus necesidades mas esenciales. mana : aquel habia usado noblemente de
Las diversas comunidades se enlazarán en su razon y de su voluntad : aquel habia
tre sí y formarán un congreso; en cada co correspondido á los designios del Supremo
munidad no habrá masque una (Ierarquía que Hacedor, cuando formándole á imágen y
será la de las funciones, y esta dependerá dela semejanza suya , quiso que la conducta de
edad. Hasta los quince años el individuo re esta elevada criatura no fuese regida por
cibirá educacion , pero en pasando de ellos los ciegos instintos á que obedecen los bru
entrará en el orden de los trabajadores; los tos, sino por la razon destello de la divini
agentes mas activos de la produccion serán dad, hermosísima luz que nos manifiesta el
los jóvenes de veinte á veinte y cinco anos; bien y el mal, que nos guia por el sendero
los de veinte y cinco á treinta, cuidarán de de la vida sin que nos fuerce á seguirle,
la distribucion y conservacion de la riqueza dejando en nuestra mano el que si nos pla
social ; los hombres de treinta á cuarenta ce escojamos el de la perdicion y de la
tendrán el cargo de cuidar del movimiento muerte. De esta doctrina sublime, único
interior de la comunidad ; y los de cuaren dogma del hombre, brotaban las ideas de
ta á sesenta arreglarán las relaciones de es virtud, de cumplimiento de los deberes; la
ta con las otras de los alrededores ; y por abnegacion , el desprendimiento, la pacien
fin un consejo de gobierno presidirá á este cia en los trabajos, la fortaleza en las ad
conjunto material, intelectual y moral. versidades, la serenidad en las tribulacio
Hasta ahora se habia creido que era su nes, la heroica resignacion á perder todos
mamente peligroso soltar el freno á las pa los bienes y hasta la salud y la vida , antes
siones ; y en todos los paises del mundo , que empañar la conciencia con un acto re
bajo todas las formas de gobierno , bajo to prensible. En una palabra , con el antiguo
das las religiones, bajo todos los sistemas sistema se concibe la humanidad con todo
filosóficos que no estuviesen fallos de senti lo que tiene de bello, de sublime y de
do comun, se habia conceptuado como de grande; el hombre, si bien sujeto á defec
indeclinable necesidad el reprimir esos im tos y miserias, es todavía una criatura no
pulsos ciegos que tienden á una satisfaccion ble, que lleva en su frente el sello que le
momentánea, que miran á lo presente, sin imprimiera el Criador; su felicidad no está
dar una ojeada al porvenir; que nos llevan en los goces de la tierra , su destino final
á un objeto sin pensar en el resultado que no se halla en este mundo, es un ilustre
su goce nos puede acarrear, que nos indu proscripto que alejado de su patria pasa al
cen á llenar el deseo sin atender á las con gunos dias de luto y de dolor en este valle
sideraciones de decoro , de deber, ni á na de infortunio, pero que en el fondo de su
da de cuanto se encierra en el nombre de corazon abriga la esperanza de volver á su
moralidad. La represion habia sido juzgada tierra natal y de disfrutar la inefable dicha
como indispensable, porque la experiencia que allá le está reservada. Hijo del cielo se
está manifestando que si damos rienda suel dirige hacia el cielo ; si se aparta de este
ta á esos impulsos, nos degradan , nos en camino es por un estravío lamentable del
vilecen , nos igualan con los brutos, acaban cual le remuerde la conciencia : criado pa
con todas nuestras riquezas , cou nuestra ra gozar de Dios , no se satisface su cora
salud y hasta con la existencia misma. La zon con los placeres de la tierra ; y sin
facultad que tiene el hombre de resistir á tiendo en medio de ellos un hondo vacío ,
estos impulsos, la libertad que posee de un malestar .i nesplicable, conoce que solo
contrariarlos, habia sido considerada siem le es dado alcanzar la felicidad en la vida
pre como una de sus dotes características , futura, cuando le será concedido unirse
como uno de los beneficios con que le fa con su Criador sumergiéndose en un pié
voreciera el Criador levantándole sobre la lago de amor y de luz.
esfera delos irracionales. Quien hallándose Toda esta belleza, toda esta sublimidad,
tentado por una pasion vehemente , que le son vanas ilusiones segun el sistema de
inducía á un acto criminal , hacia un es Owen ; todas estas virtudes de abnegacion,
fuerzo para dominarla y seguir el camino de desprendimiento , de resignacion , de
de la virtud , era mirado como un héroe, fortaleza, de heroica resistencia á todo li-
era propuesto como sublime modelo que nage de pasiones , todo ese conjunto que
 187 —
nos revela nuestra dignidad , y cuyo solo los intereses délos individuos, declarándo
nombre nos conforta y agranda , todo esto se en abierta lucha no engendren primero
desaparece desde que se nos niega la liber el desórden, y no produzcan luego el tras
tad , se nos declara que obedecemos á im torno y el caos; asi se concibe la vida co
pulsos irresistibles, se nos incita á que de mun , porque los intereses individuales de
jemos de forcejar contra ellos , á que nos saparecen , las pasiones se amortiguan y se
abandonemos sin reserva á esos instintos comprimen, todo está regido por un pen
que nos llevan á gozar hoy sin pensar en samiento comun , todo está absorvido por
el dia de mañana , desde que se pretende un pensamiento comun , todo subordinado
hacernos creer que asi viviremos conforme al santo fin que se propusiera el Fundador,
á las leyes de nuestra naturaleza , que asi todo gobernado por una voluntad á la cual
no romperemos la armonía de la creacion , es un deber sagrado el obedecer.
que asi nos haremos agradables á Dios , Pero dejad en pie los intereses indivi
rindiéndole el único culto que le es debido. duales, dejad las pasiones en todo su vigor
Para todos los hombres que sientan latir y energía, abandonad ese conjuntode fuer
en su pecho un corazon noble, estas doc zas á sus impulsos naturales, y veréis co
trinas dejan de ser peligrosas de puro ofen mo se chocan vivamente, como se destru
sivas a la dignidad humana; porque el dé yen unas á otras, sin producir esa armonía
bil mortal, si bien su jeto á muchas miserias, con que se lisonjeaba el soñador reformista.
no abdica con facilidad los nobles títulos de Ahogado el sentimiento individual, ab
su origen; y en rhedio de su decaimiento sorvido el hombre en la comunidad , que
se asemeja á los hijos de ilustre prosapia daría el alma sin resorte y por consiguien
que en medio de su abatimiento se compla te vegetara en la inaccion á no tener en sí
cen en recordar lo distinguido de su cuna , misma motivos superiores que le comuni
y en hacer notar que conservan todavía el caran movimiento. ¿Creeis por ventura
lenguage y los modales que cumplen á su que ese religioso á quien veis desprendido
hidalgo nacimiento. Nó : la humanidad no de todo interes propio , de toda voluntad
vuelve la vista hácia ese porvenir con que propia , dejándose manejar por otro como
le brinda M. Owen; si viera que se acerca, un cadáver , creeis por ventura , que no
lejos de abalanzarse hacia él lanzaría un abriga en el íntimo de su corazon un fondo
grito de horror; como el infeliz que vivien de vida, de energía, que hace llevaderos
do en la luz del dia , se le intima que va á los trabajos, agradables las mas penosas
ser sepultado en una cárcel tenebrosa. tareas, fáciles las mas arduas empresas?
Si tal es el sistema de Owen considerado En su semblante, en sus modales, en sus
bajo el aspecto de dignidad y de moralidad, palabras, no descubrís al individuo, noveis
no es mas lisonjero por lo tocante á los re sino al miembro de la sociedad á que per
sultados económicos. Establece la vida co tenece ; pero penetrad en su alma , oidle
mun cimentándola sobre la espansion de cuando derrama en la expansion de la
todas las pasiones, y cabalmente ese géne amistad ó en las efusiones del entusiasmo
ro de vida es insostenible sin la represion el fuego santo que lleva escondido en su
de ellas. En el cristianismo se ha visto rea pecho; allí notaréisque al desprendimiento
lizada de una manera sublime; pero ¿có de los bienes de la tierra ha sucedido un
mo? basándola sobre la abnegacion, sobre inmenso deseo de los bienes celestiales,
el desprendimiento, sobre la mortificacion que al amor mundanal ha sucedido el amor
de la carne, sobre la abdicacion de la pro divino , que á los placeres sensuales han su
pia voluntad , ofreciéndose el individuo en cedido los dulcísimos gocesde amar á Dios,
holocausto, ya sea como víctima de peni de amar á sus semejantes , de ofrecer su
tencia en la soledad del retiro , ya consa vida en helocausto para complacer al Señor
grándose todo entero al socorro de los ne y hacer la felicidad de los prójimos.
cesitados, al consuelo de los afligidos, al ¿Dónde están esos móviles en la sociedad
rescate de los cautivos, á la instruccion de excogitada por Owen? Allí se pretende que
la infancia , á la conversion de los pecado desaparezca tambien el individuo, que de
res, á la propagacion de la fe del Crucifi saparezca la familia, que todo se absorva
cado entre los pueblos sentados en las ti en la comunidad ; ¿pero cómo? por un re
nieblas y sombras de la muerte. finamiento de egoismo, por un refinamien
Asi se concibe la vida comun , asi se to del sentimiento individual, perdiendo
concibe la posibilidad de que las pasiones , todo temor de que pueda faltar lo necesaria
 — 188 —
para la subsistencia , con la seguridad de punto imposible , sino en que para prepa
que los trabajos de los demas socios pro rarlos se comienza echándolos á perder,
veerán con abundancia á cuanto sea me destruyendo el sentimiento de la propia
nester hasta para los placeres de la vida , dignidad , negando la libertad , la respon
sea cual fuere el grado dela intensidad con sabilidad , la conciencia , anonadando á to
que él se dedique á la tarea que le cor do el hombre moral , desenvolviendo todas
responde. las pasiones , inspirando amor á los goces ,
¿Cuál seria la consecuencia natural de un persuadiendo de que nuestro mas alto des
estado semejante? La pereza , la indolencia tino es pasar aquí en la tierra una vida
mas cumplida, el abandono á los malos agradable y placentera ; en una palabra ,
instintos , á todo linage de pasiones , pu- quitando todos los estímulos que pueden-
diendo asegurarse que en el breve tiempo conducir al bien, quebrantando todos los
que durar debiera una sociedad de esta frenos que pueden retraer del mal , y de
clase, habría la mas repugnante injusticia jando al hombre abandonado al ímpetu de
en la distribucion de los productos, pues sus pasiones, sin norte, sin guia, como ba
que los muchos perezosos y malos se apro jel desmantelado en medio de ks tempes
vecharían de los sudores de los pocos labo tades del Océano.
riosos y buenos. Esta breve reseña analítica que acaba
El ensayo hecho por el mismo Owen en mos de hacer de las doctrinas de Owen , es
la América debiera haberle enseñado estas una confirmacion de lo que hemos sentado
verdades. Lo acontecido en New-Harmony al principio, de que los hombres que con
no es un caso excepcional , sino un ejemplo templan la sociedad , prescindiendo de las
de lo que por necesidad se verificaria en luces de la Religion cristiana , se estravian
todos tiempos y paises. M. Owen empeña lastimosamente , no solo en lo que toca at
do en no reconocer los vicios radicales de origen de nuestros males , sino tambien en
su sistema , achaca el mal éxito de su ten lo relativo á sus remedios ; son pésimos
tativa á los elementos de que se componía filósofos cuando se proponen explicar las
su colonia ; mas no advierte que el mismo causas del malestar del linage humano, y
mal que se halló en ella se encontraría en muy miserables hombres de gobierno cuan
todas las otras en grado mas ó menos in do intentan destruir la organizacion exis
tenso ; y que si bien suponiendo una reu tente y reemplazarla con otra nueva que
nion de hombres mas inteligentes y mori allá en sus sueños excogitaran. — J. B.
gerados los inconvenientes no serían por de
pronto tan graves, el maligno gérmen se
desarrollaría á la sombra de la misma ins
titucion , y lejos de mejorarse los indivi
duos de que constaría la humanidad , se BARCELONA.
irían maleando cada dia mas, hasta parar
á un estado que les imposibilitaría de con
tinuar reunidos.
El quejarse de los hombres, de su mala Artícci.o 3.°
índole , de su falta de instruccion y educa
cion, de sus perversas inclinaciones, desus
hábitos viciosos , es empeñarse en resolver
el problema, sin contar con uno de sus da SE DESVANECE UN ERROR
tos mas esenciales ; porque precisamente
en todas las reformas en que se trata de SOBRE LAS
plantear una nueva organizacion social , es
menester contar con los hombres tales co
mo son en sí , nó como nosotros deseára
mos que fuesen.
Aun cuando el sistema de Owen fuese
muy racional y muy justo, bastaría que Despi bs de habernos ocupado de la par
exigiese una preparacion imposible para te material de Barcelona, justo es que lije
que debiera ser mirado como una utopia mos nuestra atencion en la política , social
irrealizable. Mas no está el mal en exigir y moral. Desde luego salta á los ojos que
una preparacion en los espíritus de todo esta ciudad se halla en circunstancias muy
 — 189
nivelador de con
excepcionales los monarcas
respecto ádelasCastilla
demas para
po guos fueros, y la aficion á las leyes que de
blaciones importantes de España. Basta pa largos años cayeron en desuso, y por con
sar de ella á Zaragoza, Valencia, Granada, siguiente en olvido.
Sevilla ó Madrid, para palpar la diferencia. Asi es que en todas las revueltas que he
Al verla con sus numerosas fábricas , sus mos sufrido desde 1808, se ha visto uni
repletos almacenes, sus magníficas tiendas, formidad admirable asi en el bien como en
sus elegantes edificios ; al notar los hábitos el mal en las que han agitado puntos los
de aseo en todas las clases ; al observar el mas distantes , y que nada habian tenido
espíritu de trabajo y de adelanto que las de comun en idioma, en leyes y en cos
domina , diríase que Barcelona no pertene tumbres. Cataluña no ha sido una excep
ce á España, sino que es una importacion cion de esta regla ; y si Barcelona se ha
que se nos ha hecho de Bélgica ó de In desviado algun tanto dela misma, no ha
glaterra, célebres por las calidades que sido por espíritu de provincialismo propia
acabamos de enumerar. Nada se encuentra mente dicho , sino por efecto de otras cau
en ella que no contraste vivamente con la sas que nada tenian que ver con los anti
dejadez , la ociosidad , el desaseo que ofen guos fueros del Principado.
den en otras poblaciones de la Península : Una de las señales mas evidentes de que
todo allí es orden , regularidad , y cuanto las excepciones que ha presentado Barcelona
indica un pueblo muy adelantado en los no eran efecto del provincialismo , está en
ramos industrial y mercantil , y que hace el mismo carácter de los trastornos que re
cada dia nuevos esfuerzos para progresar petidas veces la han perturbado. General
mas y mas en su prosperidad. mente hablando los movimientos de esta
Durante la revolucion que nos aflige des ciudad se han verificado en pro de la revo
de 1833, ha representado Barcelona un lucion , lo que no hubiera podido suceder
papel muy diverso del de las otras ciuda de esta manera , si los elementos que la
des , ya sea entrando de lleno en las ideas agitaban hubiesen sido restos del antiguo
revolucionarias, ya sea contrariándolas con provincialismo. En tal caso, mas bien des
mas energía que en otros puntos : esto no collara el afecto á las ideas y costumbres
carece de causas que conviene examinar. de nuestros padres , que nó el entusiasmo
Es claro que una ciudad que se hallaba por las que se nos habian importado de
en situacion diversa de las otras en lo rela nuevo : y lejos de que Barcelona fuera el
tivo á la organizacion social , debia ofrecer foco de la revolucion se hubiera unido á la
en la parte política particularidades carac causa que mas sostenedores encontraba en
terísticas; pues como quiera que las nuevas los habitantes de la montaña. Para quien
ideas se introduzcan y arraiguen mas ó me haya visto de cerca las cosas , y tenido
nos en un pais y produzcan efectos varios, ocasion de observar la profunda mudanza
segun la disposicion en que encuentran á que ha experimentado Barcelona desde
los pueblos, es evidente que siendo la 1808, ni refutacion merece siquiera la opi
situacion de Barcelona enteramente excep nion de que las revueltas de que con tanta
cional, excepciones debieron tambien re frecuencia ha sido víctima , hayan dima
sultar al presentarse en España las innova nado de espíritu de provincialismo, de
ciones políticas. pensamientos de independencia, de invete
Ante todo debemos advertir que como rados odios contra Castilla , de deseo del
es ya bien conocido por otros escritos que restablecimiento de los antiguos fueros , de
llevamos publicados , estamos muy distan tendencia decidida á recobrar lo que le ha
tes de la opinion de aquellos que sostienen bian arrebato lentamente los monarcas , y
que el espíritu de provincialismo propia muy en particular Felipe V despues de la
mente dicho vive todavía en Cataluña ; y guerra de sucesion.
que esto es el origen de las diferencias po- Estas son conjeturas que oidas en el ex-
líticasque en la misma se observan, cuando trangero, ó bien en la otra extremidad de
se la compara con las demas provincias del España, pueden hacer alguna ilusion, á causa
reino. El principado de Cataluña, asi como de que miradas las cosas desde lejos no care
el resto de España , excepto Navarra y las cen de visos de verdad. En efecto, quien no
Provincias Vascongadas, se ha encontrado haya observado de cerca el origen y el curso
sometido durante mucho tiempo al poder de los acontecimientos , ni conocido el es
niveiauor ue ios monarcas ue Luiua |jdiei lauu tado ai;iuai
actual uc
de ia¡>
las mean
ideas yj wowímw.
costumbres
~« -de
que puedan conservar el apego á los anti- Barcelona , ni adquirido noticia de los re
 190 —
sortes que en los últimos tiempos se han dose fácilmente
al gritoá separarse
levantado de
en élotras
, orapartes,
; ora
empleado para conmoverla, convendrá fá
cilmente en que está lleno de solidez y poniéndose denodadamente á la cabeza de
exactitud el discurso siguiente: « El prin los pronunciamientos, y siempre figurando
cipado do Cataluña disfrutaba en tiempos en todos como uno de los centros mas ac
no muy remotos un conjunto de fueros, tivos , mas enaltados de propaganda revo
privilegios y libertades, que le aseguraban lucionaria. Estos elementos que preponde
una organizacion social y política muy di raban en Cataluña , natural era que se
ferente de la del resto de España. Ese pue hiciesen sentir con mas fuerza en la capital;
blo se habia manifestado en todas épocas y de aquí es que por necesidad ha debido
celosísimo defensor de sus leyes y costum ser esta un foco de insurrecciones contra el
bres, no teniendo reparo en hacer frente á gobierno de Madrid , haciéndose sobre ma
los mismos reyes, en hablarles con tono nera difícil el sujetarla á un órden regular
altanero , y hasta en resistirles con las ar y estable, que por mas beneficioso que le
mas en la mano, si alguna vez se propasa fuera, se halla en abierta oposicion con sus
ban á infracciones de lo que habian jurado inclinaciones mas fuertes y arraigadas. De
en las Córtes catalanas en el acto de su re este modo se explican los fenómenos que
conocimiento. La historia nos ofrece abun han podido causar estrañeza á la Europa ,
dantes pruebas del calor , del entusiasmo, que habrán parecido anomalías extravagan
de la tenacidad con (pie se defendían en el tes, sin embargo de que eran efectos nece
Principado los antiguos fueros y libertades, sariosHé aqui
de la unas
mismareflexiones
naturalezaque de estampadas
las cosas. »
bastandola guerra de 1640 para darnos una
idea del punto á que podía llegar la exas en un periódico extrangero , parecerían
peracion delos catalanes, cuando veian ata fundadas y juiciosas, y que reunirían tales
cado ó amenazado lo que amaban mas que apariencias de verdad, tal acompañamiento
sus haciendas y sus vidas. Sojuzgados por de datos históricos, tal analogía de los su
las armas de Castilla, sometidos á condicio cesos antiguos con los modernos , tal enca
nes duras, no perdieron sin embargo su denamiento de los hecfHW presentes con los
aficion á lo que habian poseido durante lar pasados , que no dejarían de convencer á
gos siglos, y continuaron disfrutándolo mas muchos de los que hasta teniendo preten
ó menos segun les permitían las circunstan siones de imparciales, desinteresados y pro
cias. Así es que al sobrevenir la guerra de fundos examinadores del origen , carácter y
sucesion á principios del siglo pasado, se tendencias de los acontecimientos, prestan
desplegó en Cataluña el espíritu de provin crédito á lo que les dice un escritor cual
cialismo tan vivo, tan osado, tan enérgico quiera, y se dejan sorprender por sofismas,
como en las épocas anteriores , echándose que conducen á resultados diametralmente
de ver que ni los desastres de la guerra de opuestos de los que descubre quien , no
1640, ni la compresion que habian sufrido fiándose en la autoridad agena, observa por
despues, ni las precauciones tomadas suce sí mismo las cosas con el debido deteni
sivamente por el gobierno de Madrid, ha miento. Y á la verdad ¿no puede decirse
bian producido el efecto deseado para amal que el precedente discurso abunda de apa
gamarlos y confundirlos en la unidad de la riencias de solidad? Ciertamente; pero en
monarquía. la realidad, analizado en presencia de los
«Si bien es verdad que Felipe V destruyó hechos ¿es por ventura otra cosa que una
de una vez casi todos sus fueros, y que mezcla informe de proposiciones falsas y
desde su elevacion al trono cayó en desuso verdaderas, una amalgama de hechos posi
la celebracion de Cortes , no obstante el tivos con hechos supuestos; una serie de
Principado se avenía mal con semejante si raciocinios donde á lo mejor se corta el hilo
tuacion , y mordía el freno que se le habia cuya continuacion es menester para probar
impuesto en nombre de la victoria. Este aquello de que se trata ; un cuadro donde
freno se ha roto al introducirse en España se desfiguran totalmente las ideas y cos
la revolucion, y Cataluña aprovechando esta tumbres actuales, pasando por alto las cau
coyuntura tan favorable, ha soñado de sas que las han formado tales como se
nuevo en su independencia , ha sentido hallan al presente, y que por lo mismo hace
despertarse en el fondo de su corazon sus concebir una opinion enteramente equivo
inveterados
.... odios contra —
el ngobierno
— de Cas- i cada
' " á" quien se pague
|—o de apariencias
"I de
tilla; y de aquí es el haberse prestado tan | verdad y buen juicio? No cabe duda.
 191 —
Para convencer mas y mas de lo que aca y por orgullo en cuanto croia que afectaba
bamos de decir , presentaremos algunas mas ó menos directamente sus intereses, é
reflexiones que desvanecen totalmente los induciéndola á prescindir del partido á que
argumentos que se aducen en pro del su pudieran inclinarse las demas provincias de
puesto provincialismo, y que manifiestan España. Mas si reflexionamos sobre aquella
el vicio de los raciocinios en apariencia tan guerra veremos que la contienda estaba nó
concluyentes. entre la monarquía y los fueros, sino entre
No puede negarse que Cataluña disfru dos dinastías rivales, y por lo mismo el
taba aun en el siglo diez y siete, de fueros, pensamiento dominante de los catalanes no
privilegios y libertades que le daban una era á la sazon la defensa de sus antiguas
organizacion social y política especial, y que libertades, sino la de una rama á la cual
estando muy en oposicion con el sistema creían asistida de mejor derecho , y que
que regia en otros puntos de España, no tenia á su favor el ser la que habia reinado
le permitía amalgamarse con los demas pue en España desde la madre de Cárlos V ,
blos bajo el cetro de los monarcas de Cas D * Juana la Loca. Por manera que este
tilla. En situacion masó menos análoga, se hecho, mas bien indicaria que los catalanes
ballaban Valencia, Aragon , Navarra y las comenzaban á avenirse mejor con la mo
Provincias Vascongadas. Pero es indudable narquía castellana, supuesto que arrostra
tambien que desde el reinado de Fernando ban tan costosos sacrificios por defender la
é Isabel anduviéronse quebrantando las re rama austríaca que hasta entonces habia
sistencias que oponían las provincias á la ocupado el trono. Lo que adquiere tanto
unidad de la monarquía , y que ora por mas peso si se recuerda que en 1702 Fe
medios violentos, ora por suaves, ora por lipe II habia reunido Córtes en Barcelona y
desuso , los reyes procuraban enflaquecer jurado los fueros y privilegios conforme á
y disminuir esa muchedumbre de fueros y la antigua costumbre , lo que parece debia
privilegios, que á cada paso salían al en tranquilizará los catalanes sobre la conducta
cuentro á la accion del poder central , no que en adelante observaría el monarca re
dejándole obrar con desembarazo y soltura. cien venido.
Por lo tocante al Principado , ya se echó de Como quiera, lo cierto es que el Princi
ver por el mal éxito de la insurreccion de pado tomó un empeño muy decidido en fa
1C40 , que no le era dable conservar de sus vor de Cárlos de Austria , y que por efecto
antiguos fueros sino aquello que tuviesen á de la victoria de la casa de Borbon se halló
bien tolerarle los reyes de Castilla. En los Cataluña sometida á la dura condicion de
sesenta años que transcurrieron desde aque los pueblos conquistados. Ya por este mo
lla época hasta el advenimiento de la di tivo, ya por la política centralizados que
nastía de Borbon , fueron depereciendo nuestros monarcas heredaron de Luis XIV,
continuamente las antiguas leyes de Cata y que se avenia mejor con las tendencias y
luña, no solo por efecto de la postracion las necesidades dela época , desaparecieron
en que debió caer despues de haber hecho completamente los antiguos fueros; y la
esfuerzos tan colosales como estériles para antes libre é independiente Cataluña, que
defenderlas y conservarlas, sino tambien por espacio de muchos siglos habia formado
porque no pudo menos de participar Cata una nacion aparte aun contando el tiempo
luña de aquel marasmo en que se sumer en que habia estado unida á la corona de
gió la nacion entera durante los últimos Castilla , se vió reducida por el fundador de
años de Felipe IV y el tristemente célebre la dinastía de Borbon á la misma línea de
reinado de Carlos II. las provincias sobre las cuales habia pasado
Al principiar la guerra de sucesion entre ya el poder nivelador de los reyes.
la casa de Borbon y la de Austria , parece El provincialismo , que venia enflaque
que todavía se desplegó en Cataluña el es ciéndose de mucho tiempo atrás, no pudo
píritu de provincialismo de una manera resistir á tan duro golpe, y los restos que
bastante fuerte para hacerle representar un de él pudieron quedar en las tradiciones y
papel importante en la encarnizada con costumbres del pais, fueron desvaneciéndose
tienda. No negaremos que una delas causas durante el siglo XVIII. A fines del mismo
que sostuvieron la energía catalana en aque se habia verificado en el centro de Europa
lla prolongada y desastrosa lucha fuera ese una revolucion colosal que afectó mas ó
espíritu de provincialismo que hacia de ella menos á las demas naciones; y si bien la
una nacion aparte, interesándola por honor España generalmente hablando rechazó de
 — 192 —
todo corazon las funestas innovaciones que en estos últimos años para disipar un error
en el reino vecino se habian ensayado en el que se halla en tan fragante contradicccion
orden religioso, social y político, no obs con los hechos, ó no permitirle siquiera que
tante no dejó de sentirse entre nosotros el naciese: bastaba reflexionar quiénes eran los
sacudimiento que era consiguiente , hallán hombres de la revolucion, cuál la bandera
donos tan inmediatos al cráter del volcan que en ella se levantaba, cuáles las ramifi
que arrojaba en todas direcciones espanto caciones que comunmente tenia con otros
sos torrentes de encendida lava. Desde en puntos de la Península, para deducir desde
tonces las ideas tomaron otra direccion , ya luego que los motines no eran producto de
sea que se encaminasen por el sendero re nada de lo antiguo, que eran un achaque
volucionario , ya que se aprestasen á la de enteramente nuevo , que era una dolencia
fensa para defender la antigua organizacion de un miembro que pertenecía á un cuer
religiosa y política po atacado de grave enfermedad y que por
A un sacudimiento de esta naturaleza no consiguiente participaba de la mala dispo
podían sobrevivir los gérmenes amortigua sicion y corrompidos humores que afecta
dos de provincialismo : ya no se trata de ban mas ó menos á todos los otros miem
esta ó aquella práctica , reducida á una ó á bros.
muy pocas ciudades , de esta ó aquella ley Ya hemos reconocido desde un principio
vigente en un pais muy limitado, de este que Barcelona se hallaba en un estado ex
ó aquel privilegio concedido á determinadas cepcional, y que por efecto de esto el daño
corporaciones. La cuestion se habia colocado fue mucho mayor , y los síntomas mucho
mas alto : estaban en peligro la religion , la mas alarmantes; pero sostenemos al mismo
monarquía , la antigua sociedad en masa, tiempo que esto no dimanaba del provin
con sus creencias, sus costumbres, sus le cialismo propiamente dicho, que las causas
yes , sus instituciones ; se habia declarado del mal no eran antiguas sino muy moder
la guerra á todo lo existente , no para in nas , y que empeñarse en discurrir de otra
troducir livianas reformas, sino para des manera es buscar muy lejos un origen que
truirlo del todo y levantar sobre sus ruinas se encuentra á las inmediaciones del obser
un edificio enteramente nuevo. Claro esque vador.
en semejante crisis debió de olvidarse lo Conviene no olvidar estas verdades, por
accesorio para pensar en lo principal ; y asi que de este olvido podrían dimanar errores
es que desde aquella época data una direc de grave trascendencia en la conducta del
cion de ideas que en nada se parece á la gobierno , que tal vez cree ser conducente
antigua; notándose en el pensamiento hasta trabajar en que desapareciese un fenómeno
de los mismos conservadores , mas ampli que es una sombra vana , que no existe en
tud, mas universalidad, y tomando todas realidad. Pensando descargar golpes sobre
las cuestiones un interes cosmopólito que el provincialismo seria de temer que no los
n o solo no puede circunscribirse á una pro descargase sobre la provincia. Por lo to
vincia ó.á una nacion, sino que abarca al cante á la explicacion de las causas que
género humano. crearon para Barcelona una situacion ex
Con esta revolucionen las ideas, que afec cepcional, nos reservamos señalarlas en
tó profundamente las costumbres, acabaron otro artículo.—J. B.
de disiparse los restos de localidad en Cata
luña, si algunos quedaban en la memoria de
sus moradores: en la memoria decimos,
porque para quien conozca el estado actual
del Principado es indudable que la inmensa
mayoría del pueblo , ni recuerdos conserva
de las instituciones políticas que formaban
el orgullo de sus mayores.
Creemos haber desvanecido completamen
te esas vulgaridades que se han propalado
en España y en el extrangero sobre el su
puesto espíritu de provincia y proyectos de
independencia abrigados por los catalanes.
Debiera haber bastado atender al origen y
al carácter de las revoluciones de Barcelona
 193En—deduciendo este resultado, observará
que nada se le dice de nuevo sobre lo que
le enseñaran sus filósofos del siglo pasado.
Desdeñará, pues, esta filosofía que se ape
POLEMICA RELIGIOSA. llida nueva como un plagio de otra enve
jecida y caduca, y entonces será preciso
andar en busca de otros manantiales de
ilusion, para dar pábulo, siquiera por al
gun tiempo , á la curiosidad de las escuelas
CARTA UNDÉCIMA y á la vanidad de los maestros. Esta es la
historia del entendimiento humano , mi
k UN ESCKPTICO EN MATERIAS DE RELIGION querido amigo; recorra V. sus páginas, y
notará desde luego que el fenómeno que
| nosotros presenciamos es la reproduccion
" de lo mismo que vieron los siglos anterio
Mi estimado amigo : tengo particular res. No es poco el provecho que de aquí
complacencia en que su apreciada de V. sacan los hombres religiosos, pues que con
me exima ahora para siempre de hablarle templando la versatilidad del entendimien
de la filosofía alemana y de la francesa que to humano comprenden mucho mejor la
es una imitacion de ella. Ya tenia un pre necesidad de una guia en medio de los ex
sentimiento de que su juicio de V. natural travíos é ilusiones.
mente recto , amante de la verdad y ene Casi me ha sorprendido el argumento
migo de abstracciones no habia de avenirse que V. me propone contra la verdad fe
muy bien con ese lenguage simbólico y nuestra Religion , fundándose en que con
esos pensamientos fantásticos con que esos trariamos con nuestras doctrinas uno delos
buenos alemanes han engalanado la filoso sentimientos mas indelebles y al propio
fía sin duda en los ratos de ocio que les tiempo mas inocentes que se abrigan en
habrá proporcionado en abundancia su cli nuestro pecho : el amor propio. Me han
ma de escarchas y de niebla. Estraña V. hecho gracia las cláusulas en que V. des
con razon que esta filosofía haya podido envuelve sus ideas ; las razones en que las
cundir en Francia donde los espíritus pro apoya , ciertamente serian muy fuertes si
penden mas bien al extremo opuesto, es no estribasen en una suposicion falsa y por
decir, á un positivismo sensual y materia lo mismo no fueran como edificios sin ci
lista. Yo creo que esto ha sido una especie miento. « Yo no sé, dice V. en su aprecia
de necesidad , supuesto que habiéndose da , qué espíritu misantrópico reina entre
desacreditado tan completamente la filoso los católicos que todo lo cubre de negra
fía volteriana , érales preciso á los que tristeza. Vds. no quieren que se hable de
querían echarla de filósofos, cubrirse con nada terreno ; no permiten que se piense
un manto mas grande y magestuoso ; y como en las cosas de este mundo, anonadan, por
quiera que no tenían ganas de seguir á los decirlo así , el universo entero , y cuando
buenos escritores que les habian precedido lo tienen sacrificado todo á su tétrico siste
en su mismo pais , menester fue dirigir las ma , cuando han logrado dejar al hombre
miradas allende del Rhin y traer con gran aislado en espantosa soledad , quieren que
de ostentacion en medio de un pueblo ca- él se revuelva contra sí propio, que se nie
Íirichoso y novelero los sistemas de Sche- gue , que se anonade tambien á sí mismo ,
ling y Hegel , como portentosos inventos que se despoje de sus sentimientos mas ín
que hubiesen hecho progresar de una ma timos , que se aborrezca , haciendo un es
nera admirable al ingenio humano. Por lo fuerzo cruel contra los mas vivos instintos
demas, si he de decir francamente lo que de su naturaleza. ¡ Pues qué! ¿Dios Cria
pienso , opino que el genio frances no se dor será contrario de Dios Salvador ? Dios
acomodará bien con la filosofía alemana, que nos ha comunicado el amor de nosotros
que descubrirá lo que hay en su fondo , á mismos, que lo ha escrito en nuestras almas
saber , el panteismo ; y que sin detenerse con caracteres indelebles, ese mismo Dios
mucho en sutilizar y cavilar sobre la sus cuando obra como dicen Vds. en el orden
tancia universal y única llegará pronto á la de la gracia ¿se complacerá en obrar con
última consecuencia que es el puro ateismo tra sí mismo como autor de la naturaleza ?
sin los ambages de palabras misteriosas. Estas son cosas que yo no he podido com-
TOMO II. 13
 191 —
prender nunca ; y difícil se me hace el Es falso que la Religion nos prohiba el
creer que V. consiga disiparme las tinieblas amarnos á nosotros mismos; y tan falso es,
que en esta parte me impiden conocer la que antes al contrario uno de sus preceptos
verdad. Bien se me alcanza que V. se me fundamentales es este mismo amor. Para
ha de descolgar con un elocuente sermon convencerle á V. no necesito mas que el
sobre la miseria y la iniquidad del hombre: catecismo. Creo que no se le habrá olvida
sobre los justos motivos que tenemos para do todavía aquello de que debemos amar
profesarnos un odio santo; pero desde luego al prójimo como á nosotros mismos, en lo
le prevengo á V. que esa santidad yo no cual está consignado de la manera mas ex
puedo desearla, que por mas débil y vano y plícita el precepto del amor que cada cual
malo que me conozca, yo no puedo menos debe profesarse á sí propio. Este amor se
de quererme , y que comparando mi nada da por modelo del que debemos tener á los
con la elevacion de los querubines, mas prójimos : y claro es que el precepto seria
aficion me siento , mas amor a mi mengua contradictorio si se nos prohibiese ese mis
do ser , que nó hácia aquellas elevadas in mo amor que ha de servir de dechado y
teligencias que diz que rayan muy alto allá como de norma para arreglar el que debe
en las gerarquías celestiales. » El tono de mos profesar á los demas.
seguridad con que V. se expresa, me hace ¿Sabe V. que aquel principio que corre
entender que tiene V. aquí algo mas que muy válido en el mundo de que la caridad
dudas , pues segun parece abriga verdade bien ordenada comienza por sí mismo, está
ras convicciones; y no lo extraño, supues expresamente consignado en todos los tra
to que estriba V. en un principio falso, tados teológicos que se han escrito sobre la
que lo da por cierto , y sobre él levanta el caridad? En ellos se explica el órden que
edificio de sus discursos. Algunas palabras esta debe seguir segun son diferentes las
que habrá leido V. en ciertos libros místi relaciones con los objetos á que se extien -
cos las ha tomado V. al pie de la letra ; y de , y siendo el primero y principal Dios ,
de aqui el achacar á la Religion doctrinas el segundo somos nosotros mismos.
que ella no profesa. Por de pronto ya ve V. que quedan de -
¿Quién le ha dicho á V. que el cristia baratados todos sus raciocinios , ya que he
nismo condena el amor propio , entendien negado redondamente el principio en que
do esta condenacion en un sentido riguroso? estribaban , aduciendo en pro de mi nega
Hé aqui el vacío que ha dejado V. en sus cion pruebas tan claras y sencillas que V.
raciocinios : no se ha cuidado de asegurar no podrá desechar; sin embargo quiero
se bien del principio en que los apoyaba , ampliar mas y mas mis ideas sobre este
y asi creyendo construir sobre base sólida , punto , haciendo de ellas aplicaciones que
ha formado como suele decirse un castillo le dejen á V. cumplidamente satisfecho.
en el aire. No es la primera vez que esto Otra vez volveremos al catecismo : en él
le acontece á la Religion , pues sucede muy se nos dice que el hombre es criado para
á menudo que para combatirla se forman amar y servir á Dios en esta vida y gozar
fantasmas, y contra ellos se pelea llamán lo en la eterna bienaventuranza. Ahora
dolos hijos de la Religion, cuando esta na bien : todos nuestros actos tienen por fin :
da tiene que ver con las creaciones del pen Dios y nuestra felicidad eterna. ¿ Quien de
samiento del mismo que la ataca. No quiero sea ser eternamente feliz , no se ama á sí
yo decir que V. haya procedido en esta mismo? ¿Quien tiene la obligacion de tra
parte de mala fe ; estoy seguro que padece bajar toda su vida para alcanzar esta feli
una equivocacion la cual reconocerá tan cidad , no tiene la obligacion tambien de
pronto como yo se la ponga de manifiesto ; amarse muchísimo á sí mismo? ó mejor
y esto me lisonjeo de poder lograrlo á pesar diré , ¿ estas dos obligaciones no se refun
de lo que V. dice de que ha de ser difícil den en una sola? El cristiano tiene por
disipar las tinieblas que le impiden el co dogma de fe que esta vida es un tránsito
nocimiento de la verdad. Por lo que toca para la otra ; si desprecia lo terreno, si no
á descolgarme con el elocuente sermon so hace caso de las vanidades del mundo, es
bre la miseria y la maldad del hombre me porque todo es pasagero , todo es nada en
parece que debiera V. vivir tranquilo, cuan comparacion de la dicha que tiene prome
do hartas pruebas le tengo dadas de que no tida , para despues de su muerte si procu
soy aficionado á declamaciones de ninguna ra merecerla con sus buenas obras:
clase. Pero vamos al punto de la dificultad. I bienes, su salud, su vida, su honra, todo

J
 — 195 —
i antes que empañar su con á lo qne hay en nosotros de malo, ya sean
ciencia con un solo acto que le cerrara las actos ó hábitos pecaminosos, ya sea ciertas
puertas del cielo; pero en esta abnegacion, inclinaciones que tienden á apartarnos del
en ese desprendimiento de sí mismo queda camino de la ley de Dios; pero de ninguna
salvo el amor propio bien ordenado , pues manera debemos ni podemos aborrecer
se desprecia lo poco para alcanzar lo mu nuestra naturaleza en lo que tiene de bue
cho , se abandona lo terrenal para obtener no , en lo que es obra de Dios ; antes al
lo celeste , se deja lo temporal para ganar contrario debemos amarla, y la prueba de
lo eterno. Por manera que bien examina que es asi es que debemos aborrecer el mal
das las doctrinas cristianas, se encuentra que haya en ella , y aborrecer el mal de
que hermanan y armonizan de una manera una cosa es desear su bien , es amarla.
admirable el amor de Dios, el de sí mismo Ya sabe V. , mi estimado amigo, quede
y el del prójimo ; y por consiguiente es de las reglas dadas para la conducta de los
todo punto falso que esta inclinacion natu cristianos, unas son preceptos, otras con
ral que nos lleva á amarnos á nosotros sejos ; la observancia de las primeras es ne
mismos quede destruida por la Religion ; cesaria para la eterna salvacion , la de las
es rectificada , bien ordenada , purificada segundas contribuye á hacernos perfectos
de las manchas que la afean , preservada en esta vida , y á merecernos mas alto gra
de los extravíos que pudieran perderla, do de gloria en la venidera ; mas no nos
dirigida al supremo fin, infinitamente santo, obliga de tal suerte que si lo omitimos nos
infinitamente bueno , que es Dios. hagamos
ca á la conducta
reos de con
culpa.
respecto
Esto mismo
al amor
seapli-
pro
¿ Como se entiende , pues , esa muerte
del amor propio de que están hablando los pio : por los preceptos estamos obligados á
autores místicos? se entiende la extirpacion abstenernos de toda infraccion de la ley de
de los vicios , el refrenar las pasiones , el Dios, por mas que á ello nos impulsen
guardarnos del orgullo ; en una palabra el nuestros apetitos desordenados, asi como
cuidar de que el amor del hombre sensual debemos sacrificar el placer que nos resul
no dañe al hombre moral ; es hacer que ta de la satisfaccion de las pasiones, cuan
prevalezca lo superior sobre lo inferior ; no do se trate de ejercer un acto expresamente
es matar el amor sino hacerle obrar en un mandado en la ley divina : á sofocar de esta
sentido conforme á la ley eterna y alta manera el amor propio todos estamos obli
mente provechoso á nosotros mismos: quien gados ; si no lo hacemos asi , tenemos por
se abstiene de una comida á la que se sien dogma que no bos será otorgada la vida
te incitado por su apetito , si lo hace con eterna , antes sí un castigo que no tendrá
el fin de evitarse el daño que de ella teme, fm. Pero hay ciertas abstinencias, ciertas
¿podrá decirse por ventura que no-seame, mortificaciones de los sentidos , que no en
que se aborrezca á sí propio ? Se dirá con tran en el órden de los preceptos , y perte
mucha verdad que se priva de un gusto , necen solo al de los consejos. Estas mortifi
pero esta privacion dimana del mismo afec caciones las vemos practicadas con mas ó
to que tiene á la conservacion de la salud , menos rigor por las personas que desean
y por lo mismo procede de este mismo caminar hácia la perfeccion , y en algunos
amor propio bien entendido, que le indure santos hallamos la austeridad conducida á
á sacrificar lo menos á lo mas , y no le per tan alto punto que nos asombra y aterra.
mite dañarse la salud por complacer el ape Mas en estos mismos santos no estaba aho
tito del momento. Con este ejemplo tan gado el amor bien entendido de sí mismos:
sencillo , y que presenciamos todos los dias se entregaban sin tasa á la penitencia , ya
sin que nos cause ninguna extrañeza , se para purificarse cumplidamente de sus fal
explican fácilmente las relaciones de las tas, ya tambien para hacerse mas agrada
doctrinas cristianas con el amor propio, no bles al Señor ofreciéndole en holocausto
siendo necesario mas que extender el mis sus sentidos, su cuerpo , todo cuanto tenían
mo principio á objetos elevados, y consi y todo cuanto eran ; pero estos hombres
derar que la norma que ha dirigido una extraordinarios ¿ se olvidaban por ventura
accion particular es la misma con que se de sí mismos? Se olvidaban sí del hombre
ordena toda la conducta del cristiano. sensual , ó mejor diremos , le tenían decla
« i Pues cómo se dice que nos aborrez rada guerra á muerte , abatiéndole , ator
camos á nosotros mismos? » Ese aborreci mentándole cuanto les era posible ; pero la
miento no se refiere ni puede referirse sino razon de esto se encuentra en que le mira
 — 196 —
han como enemigo del hombre espiritual , es admirable , sublime , en que es superior
como enemigo temible, altamente peligro á la de todos los legisladores antiguos y mo
so , de quien no convenia fiarse ni un solo dernos , en que se halla en íntima armonía
instante, á quien no se podia soltar la ca con la luz de la razón , con los mas nobles
dena del cuello sin el riesgo inminente de y bellos sentimientos que se albergan en
que se levantara contra su dueño que es el nuestra alma , en que es la única digna de
espíritu, y le redujese á esclavitud. Pero la reinar sobre la humanidad y de dirigir los
salvacion de su alma, la felicidad eterna en destinos del mundo ; de suerte que cuando
la otra vida, tanto distaban de olvidarla entregados á sus vanos pensamientos forjan
aquellos ilustres penitentes, que antes bien allá en su mente cristianismos reformados
suspiraban incesantemente por ella ; ansia ó religiones totalmente nuevas, todos adop
ban vivamente que Dios les librase de este tan como modelo de su moral lo ensenado
cuerpo que lo agravaba ; asi es que el ma en el Evangelio , y aun cuando quizás en
yor de sus deseos, era disolverse y estar el fondo de su corazon profesen con res
con Cristo. La vision de Dios, la union con pecto á la moral misma , doctrinas degra
Dios en lazos de inefable amor , era el ob dantes y altamente funestas , no se atreven
jeto de • sus esperanzas, de sus ardientes por lo comun á exponerlas en público, y
deseos , de sus continuos gemidos ; asi es se deshacen en elocuentes elogios de la dul
que no puede decirse que se aborreciesen zura, de la santidad, de la elevacion delas
á sí mismos en toda la propiedad de la pa máximas
Se hallará
salidas
V. de
pues
la boca
en grave
de Jesu-Cristo.
conflicto,
labra ; sino que se amaban con amor mas
bien entendido que el resto de los mor si se propone dirigir sus ataques sobre este
tales. punto; y asi es que me atreveré á darle
Con las consideraciones que preceden creo un consejo que bien lo han menester la
que se habrá convencido V. de que estri mayor parte de los que inculpan á la Re
baba en una suposicion falsa, y de que si ligion , y es , que al juzgar alguno de sus
intenta continuar sus ataques contra la Re dogmas ó máximas no se deje V. llevar de
ligion considerándola como contraria al esa ligereza que falla sobre los objetos de
amor propio , le será preciso argumentar la mayor importancia, sin haberse tomado
sobre otros principios. En efecto, desvane la pena de examinarlos con la debida aten
cido completamente el error en que V. vi cion : y que reflexione que lo que han creí
vía de que la Religion cristiana nos prohi do y enseñado y practicado tantos hombres
be amarnos á nosotros mismos , y probado eminentes en talento y sabiduría , sin duda
hasta la última evidencia que no solo no debe de estar muy fundado, y no es fácil
nos lo prohibe, sino (pie muy al contrario que venga al suelo con cuatro observacio
nos lo manda; solo le resta á V. un cami nes, que por ingeniosas, no dejan de ser
no que es probar que la Religion entiende extremadamente fútiles. Créame V. : cuan
de una manera equivocada el amor propio, do se le ocurran argumentos de esta clase
y que proponiéndose dirigirle y purificarle, que con tanta facilidad le parecen derribar
le sofoca y le mata. ¿Pero sabe V. en qué alguna verdad religiosa , suspenda V. el
terreno se habrá colocado entonces la cues juicio; no se precipite; medite, o lea ó
tion? ¿Sabe V. que considerada bajo este consulte; que bien pronto echará de ver
punto de vista nada tiene que ver con lo que el invencible Aquiles no tiene mas
que estábamos discutiendo hasta aqui , y fuerza que la que le suministra una supo
que se trata nada menos que de examinar sicion falsa, ó un raciocinio mal trabado.
si los preceptos y consejos del Evangelio No dudo que se habrá V. convencido, de
son justos, son santos, son prudentes? No que si con el tiempo se resuelve á volver
creo que V. se atreva á entablar disputa al seno de la Religion podrá V. amarse á
sobre una verdad generalmente reconocida sí mismo. Entre tanto viva V. seguro del
hasta por los mas violentos enemigos del afecto de este su S. S. y amigo. — /. B.
cristianismo. Ellos niegan sus dogmas , se
burlan de sus ceremonias, se rien de su
gerarquía, desprecian su autoridad , la con
sideran como un mero sistema filosófico
despojándolo de todo carácter sobrenatural
y divino; pero en llegando á su moral,
todos estan acordes en que es pura, eri que
 — 197 —
nos ofrece á la vista ; pero bien podremos
dispensarnos de semejante tarea, cuando
cada cual podrá por sí mismo asegurarse
de ello, harto mejor de lo que pudiéramos
BARCELONA. enseñárselo nosotros con dilatados escritos:
basta dar una mirada á un punto donde se
haya desarrollado mucho la industria y el
comercio , y volver en seguida los ojos há-
ARTICULO 4.° cia otro donde no se haya verificado esta
circunstancia, aun suponiendo igualdad en
el número de la poblacion y en el desarro
RAPIDA OJEADA llo de la prosperidad respectiva. El pueblo
industrial y mercantil contrasta tan viva
SOBRE LAS REVUELTAS DE BARCELONA mente con el agrícola, que la diferencia se
DESDE 1833 , Y EXAMEN DE SIS presenta demasiado de bulto para que sea
preciso buscarla , ni aun posible el dejar de
CAUSAS. verla.
Claro es , pues , que hallándose Barcelo
na en estas circuntancias, y rcuniéndolas
en mas alto punto que otra ciudad cual
Situada Barcelona á las orillas del mar, quiera de la Península , debió ser una de
á las inmediaciones de Francia , y siendo las poblaciones quemas pronta y vivamen
ademas un punto muy visitado por toda te se resintieron del espíritu disolvente del
clase de extrangeros, natural es que parti siglo.
cipase mas que otras poblaciones de España Para mayor desgracia permanecieron los
de la influencia de las ideas y costumbres franceses en ella durante la guerra de la
que habian adquirido mucha pujanza y ex independencia ; y si bien es verdad que
tension en otros paises de Europa , y par muchos de sus habitantes abandonaron sus
ticularmente en el reino vecino. Hallándose hogares para correr los peligros y partici
ademas esta ciudad muy adelantada en in par de las glorias de la causa nacional ,
dustria y comercio, y sintiéndose con irre tambien es cierto que no todos pudierou
sistible "tendencia á progresar mas y mas hacerlo asi , y que quedaron huellas que no
en dichos ramos á causa del conjunto de fue fácil borrar. Desde 1814 á 1820 anda
circunstancias favorables que en otro lugar ba cundiendo el daño de las ideas innova
hemos señalado , debió suceder que entra doras en toda la Península , porque aquel
se mas fácilmente en el movimiento que gobierno ni era poderoso á impedir el mal,
arrebata á los demas pueblos, supuesto que ni hábil para dirigir el movimiento que tan
en la industria y en el comercio hay no so vivamente se habia declarado hacia un ór-
lo la fabricacion y transporte de los efectos den de cosas diferente. Asi es que cuando
manufacturados, sino que tambien sirven en 1820 se proclamó la Constitucion se
de vehículo para la circulacion y propaga echó de ver que se habian propngado bas
cion de las ideas y costumbres. tante en Barcelona las ideas revoluciona
La experiencia de todos los tiempos ha rias, realizándose allí escenas que no es
enseñado que los pueblos industriales y menester recordar porque son demasiado
mercantiles se contagian presto con las recientes para que hayan podido olvidarse.
enfermedades morales de los otros, que En aquella época ya no sucedió en la
renuncian con menos trabajo á sus tradi capital del Principado lo que en otras po
ciones y á sus hábitos ; que el sello de su blaciones importantes de España , donde
nacionalidad se altera con el roce conti la mayoría se decidió abiertamente por el
nuo , y que situados á veces á muy poca antiguo órden de cosas , sufriendo á duras
distancia de comarcas no sometidas á se penas la opresion en que la tenían las fac
mejante influencia , son tan diferentes de ciones apoyadas en el centro del gobierno ,
los moradores de ellas que los hombres pa pero manifestándose con estrépito y alga
recen de paises y de siglos muy distantes. zara tan pronto como el ejército frances
Fácil seria aducir muchos ejemplos histó vino en socorro de Fernando VII para res
ricos de esta verdad, y comprobarla ade tablecer la monarquía absoluta. En Barce
mas con la experiencia que a cada paso se lona aun despues de la entrada de los fran
 — 198
ceses, el partido realista no pudo hacer é inspiró serias reflexiones á cuantos nc»
demostraciones públicas que indicasen po teniendo bastante valor para retroceder en>
pularidad , y tuvo que resignarse á obrar el camino del mal , conservaban empero la
de oficio , á causa de que la mayoría de la honradez necesaria para no poder consti
poblacion estaba en sentido contrario á la tuirse defensores de atentados que escanda
situacion creada por la victoria de los rea lizaban á la culta Europa, y lastimaban
listas. todos los sentimientos de humanidad. Des
La compresion que sufrió la opinion pú de entonces comenzó la desercion de las
blica en aquella ciudad durante los diez banderas salpicadas con sangre inocente.
años , contribuyó mas bien al aumento de La revolucion continuó su estrepitosa car
las ideas innovadoras que nó á su disminu rera con sus instintos feroces , sus pasiones
cion : y para formar concepto del estado de insaciables, su inestinguible sed de oro y
los ánimos en 1832 es suficiente recordar de maldad. Pero en cambio resultó que la
el frenético entusiasmo con que fue recibi dura leccion habia escarmentado á muchos,
do el general Llauder; el furor conque fue que cada dia iba escarmentando á otros, y
arrojado el Conde de España , y la alegría que asi dispersándose en diferentes direc
sin tasa á que se entregaba la capital á ca ciones los antes ardientes partidarios de la
da paso que daba el gobierno hácia un ór- enseña revolucionaria, se fueron creando
den de cosas que prometiera la caida del los elementos que á no tardar constituyeron
sistema absoluto y la inauguracion del re un nuevo partido.
presentativo. Cuando nó las convicciones, el interes
. La reforma , ó sea la revolucion , era en propio habia de traer semejante transfor
aquella época popular en Barcelona ; no macion ; pues todos los que no deseaban
era solo la hez del pueblo la que tomaba medrar en las revueltas, y sí conservar sus
parte en el bullicio, eran tambien las cla fortunas y sus vidas, debian pensar seria
ses acomodadas , eran las personas mas ri- mente en poner algun dique que los res
eas, asi de la clase de propietarios como guardara contra ese torrente devastador ,
pertenecientes á la industria y al comercio. cuya impetuosa avenida habian provocado
Los literatos y todas las profesiones cientí ellos mismos.
ficas participaban generalmente del movi Esta es la ley de todas las revoluciones ;
miento; por manera que si bien en la siendo de notar que un período semejante
ciudad habia no pocos que miraban con se vió tambien en la francesa, con la dife
desconfianza el giro que iban tomando las rencia de los nombres y con la diversidad
cosas y auguraban desgracias para el por de circunstancias, que por necesidad acar
venir, no obstante se veian precisados á reaban á los partidos modificaciones muy
ocultar sus temores en el fondo de su pe trascendentales.
cho, y no se atrevían á manifestar su opi Asi como Barcelona se habia encontrado
nion sino en las expansiones de la amistad en situacion excepcional que la hacia mas
y de la confianza. adicta á la revolucion , asi tambien cuando
Cuando sobrevinieron los desastres de comenzó á formarse en ella el partido con
1835, el incendio delos conventos, el ase servador, se halló en circunstancias muy
sinato del general Basa , el furor contra el diferentes de las de otras capitales de Es
general Llauder , poco antes objeto de tan paña. En estas, la masa delas clases bajas,
solemne ovacion , y el desbordamiento uni ó no se habia interesado en la cuestion po
versal de las ideas y pasiones revoluciona lítica , ó habia mostrado simpatías en favor
rias, todavía era mucha la popularidad que de la causa de D. Cárlos ; por lo que acon
disfrutaban en Barcelona las medidas ex teció que el partido liberal no sintió tan
tremadas; y no son pocos los que actual pronto los efectos de la division intestina,
mente se avergüenzan de haberse compla ni la urgente necesidad de que los que se
cido en el fondo de su corazon en los habian puesto á la cabeza de la revolucion
horribles crímenes de aquellos dias de in tratasen de enfrenarla para conservar sus
fausta memoria, ya que de una manera haciendas y sus vidas. En ningun punto de
mas ó menos directa no contribuyeran á España se hallaba esa masa totalmente dis
consumarlos. puesta á favor de las ideas revolucionarias
Sin embargo preciso es confesar que el como en Barcelona ; en ninguna parte era
horror de aquellos dias aterró á los tími tan fácil que los tribunos se viesen rodea
dos, desengañó á los sencillos é incautos dos de un pueblo numeroso que secundar»
sus designios; en ningun punto existían á
mas de las clases inferiores, esa muche
dumbre de artesanos que alucinados tam
bien por las ideas revolucionarias , favore
cían mas ó menos directamente la propaga
cion y los efectos de lo que, andando el
tiempo, les habia de costar tantas pérdidas,
tanto malestar y sobresaltos.
De aqui resultó que la fraccion del par
tido liberal que se propuso resistir al tor
rente devastador, en vez de ser mirado
como debia , es decir , como un conjunto
de hombres que con el desengaño de lo pa
sado y el temor del porvenir, habian senti
do la necesidad de modificar sus opiniones
y templar su conducta, fue considerado
como una reunion de aristócratas traidores
á la causa que antes abrazaran y defendie
ran , enemigos del pueblo , hostiles á toda
reforma , y que solo habian intentado con
tribuir á los primeros disturbios para satis
facer designios particulares , abandonando
en seguida á los azares de la suerte al cre
cido número de ciudadanos que en pos de
ellos se habia comprometido.
El acaloramiento producido por los de
sastres de la guerra civil, los estrepitosos
excesos á que en todas partes se entregaba
la revolucion, el desbocamiento de la pren
sa , la debilidad del gobierno supremo , y
cuantas causas contribuyen á exaltar los
ánimos y desencadenar las pasiones, obra
ban de una manera muy particular sobre
Barcelona, motivando el que la division
entre las dos fracciones del partido liberal
fuese cada día mas marcada é incapaz de
avenimiento. Para comprender los agigan
tados pasos que en la capital del Principa
do habian dado las ideas conservadoras,
basta recordar el cambio realizado en ella
por el Baron de Meer en 1837 con el de
sarme total de la Milicia , y su reorganiza
cion mas adaptada á la conservacion del
órden público. Semejante paso que pudo
darse en octubre de 1837 , y que mereció
la aprobacion y sincera adhesion de lo mas
distinguido de la capital, hubiera sido poco
menos que imposible en 1835, aun cuando
supusiéramos que hubiese tratado de reali
zarla otro general de firmeza y energía de
carácter iguales á las que distinguen al
mencionado gefe. En 1835 la revolucion
era todavía muy popular, contaba no solo
con el apoyo de las clases mas numerosas ,
sino tambien de las medias, y de no escasa
porcion de las altas ; asi fue estéril é impo
tente la decision del infortunado Basa , que
sin duda no estuvo escaso de valor y osa
día, ya que se atrevió á arrostrar con ta
mana serenidad el puñal de los asesinos.
El desarme de la Milicia hecho por el
Baron de Meer, la organizacion de la nue
va, la situacion política de la ciudad, y
demas medidas que siguieron á aquellos ac
tos , hicieron que la fraccion que no quería
cejar en el camino revolucionario se irri
tase mas y mas, y procurase derribar á sus
adversarios por cuantos medios estaban á
su alcance. Ya en mayo del propio año se
habia trabado en las calles sangrienta lu
cha entre los sostenedores de la autoridad
y los perturbadores del órden público ; ha
bia corrido la sangre, y la discordia sellada
con sangre es mucho mas difícil de apa
ciguar.
Desde entonces ya no hubo otro medio
para entenderse que apelar unos y otros á
las armas ; bien que todos los esfuerzos de
los revolucionarios no produjeron ningun
resultado hasta que encontrando algun apo
yo en el gobierno de Madrid dominado ya
por Espartero, consiguieron la caida del
Baron de Meer, y prepararon la victoria
que tan cumplida les proporcionó el Gene
ral en gefe de los ejércitos reunidos con el
auxilio de cien mil bayonetas.
El mas completo exclusivismo , la into
lerancia, la dureza en las palabras, la exa
geracion en la conducta, las personalidades
mas repugnantes, los insultos mas crueles,
las amenazas continuas, las persecuciones,
constituyeron el estado habitual de Barce
lona despues de 1840; enardeciéndose mas
y mas las pasiones al primer amago que
inspirara recelos á los amigos de aquel ór^
den de cosas, y provocándose movimientos
cuyo tremendo carácter y espantosas ten
dencias no es necesario recordar.
Asi la contemplaban asombradas las de-
mas poblaciones de España , no compren
diendo cómo era posible aquella exaspera
cion que ellas no conocían. Y era que la
revolucion habia corrido en Barcelona sus
fases con mas rapidez que en los otros pun
tos de la Península, por lo mismo que ha
bia comenzado allí con mas ímpetu, de-
sarrollúdose en mayor escala y obrado con
mas brío ; y era que Barcelona, víctima de
los mayores males , habia sentido mas
pronto la necesidad de remediarlos ; y era
que para Barcelona habia sonado mucho
antes que para otras ciudades, la hora del
desengaño y del arrepentimiento : la revo
lucion se sentia débil , y por esto veia pe
 — 200 —
ligros en todas partes, y se hacia mas vio to ¿Deá lasdónde
personas
la diferencia?
y á lasdeque
propiedades.
en 1841
lenta y cruel.
Tenemos una prueba de esto en que el los que promovían la revolucion para sos
pronunciamiento de julio de 1840 en favor tener á Espartero se llenaban de espanto al
de Espartero, anduvo ya muy escaso de echar una mirada en derredor, al encon
popularidad, sin que se lograse excitar el trarse destituidos de simpatías populares
entusiasmo , ni interesar siquiera en favor y amenazados por adversarios poderosos,
del nuevo poder con la victoria conseguida cuando no fuera por otra causa , por su
en setiembre y octubre, cuando imitando excesivo número. La Junta de noviembre
los demas pueblos de la Península el movi de 1842, si bien veia en muchos frialdad y
miento de Barcelona , se logró condenar á desconfianza, si bien notaba que no eran
la emigracion á la Reina Madre, y ensalzar pocos los que temian que el pronuncia
al mando supremo al soldado de fortuna. miento se malograse, acarreándoseá la ciu
La impopularidad de que estamos ha dad desgracias estériles, no obstante obser
blando, se manifestó bien claramente en vaba que la inmensa mayoría de la poblacion
aquellos días de funesta memoria, bastan participaba del pensamiento dominante del
do para convencerse de los enemigos que levantamiento que era la caida de Esparte
tenia en Barcelona la situacion creada en ro ; y asi es que pudo obrar con desemba
1.° de setiembre, el atender á la conducta razo , sin temor de ser contrariada por la
observada por la Junta revolucionaria de mayoría de los ciudadanos que deseaban
octubre de 1841, cuando la insurreccion vivamente que se derribase el poder tan
de O'Donell en la ciudadela de Pamplona profundamente aborrecido. Esta es la cau
y las otras que le sucedieron en diferentes sa porque la Junta observó una conducta
puntos, revelaron el peligro en que se ha tan mesurada , no permitiéndose atropella-
llaban tanto el poder del Regente, como el mientos de ninguna clase.
predominio de aquellos que con é1 habian El pronunciamiento de junio acabó de
identificado su causa. No es posible que se evidenciar la ninguna simpatía que tenían
lleve á tan alto punto la exageracion y la en Barcelona , Espartero y la situacion po
violencia á no sentirse quien la ejerce pro lítica por él representada y sostenida. Las
fundamente débil. El que es fuerte, el que bombas de diciembre no habian ahogado la
se ve rodeado de las simpatías populares , exasperacion popular; antes al contrario,
el que cuenta con el apoyo de la mayoría la habian llevado á mas alto punto, hacien
de los ciudadanos influyentes, no ha me do que se preparase á estallar con mas tre
nester abandonarse á tales extremos , que menda explosion á la primera oportunidad
si á veces producen un efecto momentáneo que la brindara con algunas esperanzas de
contribuyen sobremanera al descrédito del triunfo.
partido en cuyo nombre y favor se está El desesperado esfuerzo de los partida-
obrando. ríos de la revolucion de cosas durante la
En los acontecimientos de noviembre insurreccion centralista, no alcanzó á reca-
de 1842 se presentó tan de bulto la indica ber que la mayoría de Barcelona se intere
da verdad , que era imposible dejar de co sase en su favor. La emigracion masasom-
nocerla á no empeñarse en cerrar los ojos brosa que se viera jamas, probó que la
á la luz. En 1841 se pretendía legitimar ó opinion habia sufrido un cambio profundo,
disculpar la marcha adoptada por la Junta, y que era imposible hacerla volver atrás
con la necesidad que habia de defender la para tomar parte en motines y trastornos.
Regencia de Espartero y la situacion crea Y no sirve el alegar que todavía se encon
da por el pronunciamiento de setiembre. traron algunos miles de brazos que toma
En 1842 se hizo el movimiento contra Es ron las armas en defensa de la bandera
partero , desaparecieron de la escena mu levantada el dia 2 de setiembre, que se
chos de los hombres que figuraran en las sostuvieron firmes por espacio de tres me
revoluciones de otras épocas, y la Junta ses, y no se rindieron al General Sanz an
creada á consecuencia delos sucesos del 15 tes de haber visto que el movimiento no
de noviembre á pesar de estar compuesta era imitado en las demas provincias, y que
de personas de poca categoría , y algunas era sofocado en todas partes donde llegó á
de ellas enteramente desconocidas del pú estallar ; pues que en una ciudad tan po
blico , pudo observar una conducta suma pulosa donde se hallan en tan crecido nú
mente templada é inofensiva con respec mero las familias que quedan sin pan en el
 — 201 —
instruccionque
momento primaria. Si esta
se cierran las sefábricas,
halla arre-
es , si presiden á la misma la Religion y la
imposible que la necesidad no obligue á moral , resultarán los hombres mas instrui
muchos á tomar parte en una causa que les dos y menos viciosos, porque la generali
es del todo indiferente. Añádase á esto que dad de ellos no se forma con el estudio de
en tales casos acuden al punto de la insur elevadas ciencias , ni está destinada á car
reccion una multitud de aventureros de reras literarias , sino que viviendo en una
fuera, deseosos de aprovecharse de los condicion modesta conservan en el resto de
disturbios , y se tendrá sencilla y fácilmen sus dias lo que se les ha enseñado en la
te explicado por qué se pudo formar un primera edad , sin que tengan ocasiou de
cuerpo suficiente para cubrir las murallas, añadir al caudal de sus luces otra cosa que
y hacer desde allí frente á las tropas de los las lecciones de la experiencia.
alrededores. Ademas , si no olvidamos que Es mas difícil de lo que á primera vista
en el sinnúmero de familias emigradas se pudiera parecer el que los maestros sean á
contaban muchísimos de la clase de jorna propósito para desempeñar su mision. Quien
leros, si tenemos en cuenta que los ene no haya examinado las cosas de cerca fá
migos de aquella revolucion salieron desde cilmente se persuadirá que el enseñar áleer
luego de la ciudad á esperar el desenlace y escribir, el dar algunas nociones elemen
de los acontecimientos, en vez de impedir tales de la Religion y de la moral , el ins
su desarrollo , resultará mas claro que la truir en los rudimientos de la aritmética y
luz del dia que el movimiento era altamen otras cosas por este tenor, son tareas al al
te impopular, y que si nació y pudo me cance de cualquiera , y que basta una dili
drar por algun tiempo poniendo en alarma gencia regular para adquirir maestros ex
á la nacion , todo fue debido á ciertas cau celentes. Sin embargo , la esperiencia está
sas que no es oportuno examinar y que con mostrando todos los dias que lejos de ser
el tiempo señalará la historia. asi se tropieza con muchas dificultades , y
De estas consideraciones se infiere cuál que el fruto que de las escuelas se saca no
es el estado actual de Barcelona, y cuáles es ni de mucho el que fuera de desear.
las causas que lo han producido. El órden El enseñar á un niño exige mas laborio
tiene allí numerosos partidarios ; mejor di sidad, mas tino y discrecion del que co
remos, la poblacion en masa está en favor munmente poseen los destinados á esta
de él; pudiendo asegurarse, que mientras carrera. No acudiendo á escuelas donde
haya al frente del Principado autoridades ellos puedan formarse antes de tomar sobre
civiles y militares de intencion recta y ca sí el cargo de formar á los demas , proce
rácter firme , no se turbará la tranquilidad den frecuentemente á la ventura , siguien
pública y se hará imposible la repeticion do cada cual el método que le parece mas
de las escenas que por espacio de tantos bien , ó que mejor se adapta á sus ideas y
años han escandalizado á la España y á la carácter. De lo que resulta que se convier
Europa. ten muchas escuelas en lugares de reunion
Con la nueva situacion han nacido nue de niños donde se llora , se grita , se lee ,
vas necesidades á que es preciso atender , se escribe ; donde todo se hace menos
si se desea cuidar no solo de lo presente aprender.
sino tambiem precaverse contra los riesgos Aun cuando el maestro no tuviese mas
del porvenir. De esto nos ocuparemos en que un niño de que ocuparse fuérale me
otro artículo. — J. B. nester ser muy discreto y entendido para
hacerle progresar sin perder tiempo. ¿Qué
será, pues, habiendo muchos, tal vez has
INSTRUCCION PRIMARIA. ta centenares á cargo de un maestro y un
ayudante? ¿Cuánto cuidado, cuánto meto
do , cuánto tacto y paciencia no les será
preciso emplear si quieren enseñar de ma
nera que se aprovechen asi los mas aven
Uno de los primeros cuidados que han tajados como los de menores alcances ; asi
de ocupar á los gobernantes, y á todos los los de índole apacible y dócil, como los
que teniendo alguna influencia directa ó tercos y obstinados ; asi los de atencion y
indirecta sobre la sociedad se interesan por laboriosidad , como los distraidos y pere
el bien de sus semejantes, es sin duda la zosos ?
En nuestro juicio una de las cosas que

no debe olvidar nunca el maestro de ins
truccion primaria es (pie la infancia se dis
tingue por dos calidades muy notables, y
que segun como se proceda con respecto á
ellas los resultados serán muy provechosos
ó muy estériles, muy buenos ó muy ma
los. Éstas calidades son: 1.a facilidad de
recibir loda clase de impresiones: 2.a difi
cultad de comprender muchas cosas á un
tiempo. El niño puede compararse á una
tabla rasa cubierta con una capa de pasta
muy blanda donde es suficiente tocar muy
ligeramente para que quede la huella del
cuerpo que la ha tocado ; puede de otro
lado compararse con un frasco de cuello
muy angosto que si se le quiere llenar de
una vez el licor se derrama y apenas entran
en él algunas gotas, cuando al contrario
si se hubiese andado despacio en la opera
cion se hubiera podido llenar del todo sin
perder el licor que á él se destinaba.
Estas dos calidades si las tuvieran pre
sentes continuamente los maestros podrían
adelantar mucho mas en la enseñanza y
producir mejores efectos en el corazon de
los niños. La facilidad con que estos reci
ben toda clase de impresiones hace ante
todo indispensable el mas escrupuloso
cuidado en las doctrinas y en los hechos
concernientes á la Religion y á la moral.
La esperiencia de cada dia nos está ense
ñando que el hombre se resiente toda su
vida de las impresiones recibidas en la
primera infancia , y si nos fuera dable
seguir el hilo de muchas vidas encontra
ríamos un asombroso encadenamiento que
conduce al individuo por la carrera del
vicio ó de la virtud , del crimen ó del he
roismo, y cuyo primer eslabon arranca de
los ejemplos que se ofrecieron á sus ojos,
ó de las palabras que oyeron en la escuela
ó en el hogar doméstico. Quo semelest im
buía recens servabit odorem testa din , habia
dicho el poeta , y esta imágen que expresa
una verdad importante debiera recordarnos
la delicada solicitud con que es necesario
evitar que no entre en el tierno vaso licor
venenoso ó corrompido para que no con
serve mientras exista el mal olor con que
se le haya infectado.
Fuera de desear que los maestros de
primera educacion no solo profesasen prin
cipios religiosos y morales , sino que tam
bien los pusiesen en práctica, esdecir, que
seria menester buscar para estos destinos
hombres sinceramente morigerados, porque
de otra suerte no es posible que los niños
202
no presencien repetidas veces escenas que
los escandalicen. Quien no está adherido
de corazon á las creencias religiosas podrá
aparentar religiosidad por interes propio ,
por consideracion á los demas , y quizá»
hasta por el deseo de que los otros, sobre
todo los de tierna edad, no se aparten de
la fe que él tiene perdida. Mas como la
verdad es el estado normal del hombre, y
la ficcion continuada no es posible, resulta
que á lo mejor se olvidan esta clase de ac
tores de que estan representando su papel,
y hablan ú obran conforme á sus erradas
doctrinas. El niño que casi siempre tiene
fija la vista sobre sus superiores, que reco
ge con avidez las palabras que ellos pro
nuncian tal vez sin advertir lo que dicen .
que observa todos los actos de las personas
que ejercen sobre él alguna autoridad, y
que ademas tiene una fuerte inclinacion á
referir todo lo que oye y á imitar lo que
ve, considera como de poca importancia lo
que ha llegado á notar que es reputado
como de escaso valer por aquellos á quienes
respeta; asi como venera profundamente
lo que ha visto venerado por las personas
que le gobiernan. Una expresion, un gesto
que se le escapará al maestro en el acto de
enseñar la doctrina cristiana ó la práctica
de algun acto religioso , bastará quizás para
hacer brotar en aquellas almas tiernas un
pensamiento maligno que despues se con
vertirá en duda ó en desenvuelta impiedad.
En vano procurará estar sobre sí, quien
ha de aparentar continuamente fe que no
tiene, y veneracion y acatamiento á obje
tos que desprecia ; en vano para encubrir
el estado de su conciencia afectará tal vez
un celo y entusiasmo que está muy lejos
de experimentar ; en la misma exageracion
de sus palabras y acciones dará que sospe
char á los alumnos dotados de alguna pe
netracion ; si esto no acontece , vendrá un
momento de descuido que se hará notar
tanto mas cuanto será mas vivo el con
traste.
Por estas razones seria de desear que la
primera educacion no estuviese únicamente
á cargo de personas que no tengan en ello
otro objeto que el ganar su subsistencia ;
porque el interes, sí bien es muy sagaz
para proporcionar recursos al individuo que
por él se mueve, pudlendo por cierto tiem
po comunicar actividad y hasta apariencias
de celo , no obstante es flojo cuando cesan
de correr peligro los bienes materiales que
forman su objeto , y difílmente se hace ca
 — 203 —
paz de practicar un sistema por tiempo una vida relajada. Semejante daño no se
muy dilatado si esto exige sacrificios algo experimenta si el individuo pertenece á un
penosos. Y estos sacrificios los exigen cier instituto religioso ; porque sometido á una
tamente las tareas de la primera educacion, regla invariable, sujeto á la voluntad del
pues no cabe oficio mas molesto y que de superior , vigilado por sus propios compa
mande mas asiduidad y paciencia, á no ser ñeros, se ve en la necesidad de observar
el cuidado de los enfermos. En Francia y una conducta arreglada, aun cuando á ello
otros paises se ha conocido esta verdad , y no le impulsase el deber de la conciencia.
asi es que se protegen y fomentan aquellos El niño se acostumbra desde su mas tierna
institutos religiosos que tienen por objeto edad á considerar el oficio del maestro como
la educacion é instruccion de los niños po una cosa hermanada con la Religion, apren
bres. La clase menesterosa es la que mas de á un mismo tiempo lo que interesa sa
necesita este auxilio , porque escaseando ber segun la carrera á que se destina , y se
de recursos para estimular el interes indi va ejercitando en las santas prácticas que
vidual de los maestros, le es preciso enviar despues le quedan como otros tantos hábi
á sus hijos á la escuela sin poderles pro tos de los cuales ó no se desprende nunca ,
porcionar ninguno de aquellos medios de ó no se olvida de tal suerte que le sea difí
que en tales casos acostumbran valerse las cil volver á ellos cuando ha pasado el her
familias acomodadas. vor de la inexperta mocedad.
Se ha reconocido ya generalmente que La otra calidad de los niños, á saber,
los hospitales no pueden ser bien atendidos la dificultad de comprender muchas cosas
no estando encomendados á la caridad per á un tiempo , indica cuán necesario es que
sonificada en alguna institucion religiosa ; se emplee en la enseñanza un método su
se ha reconocido que el interes del salario mamente sencillo , pues que jamas se cui
es insuficiente para ejercer sobre el corazon dará lo bastante de remover los obstáculos
aquel influjo constante y eficaz que es in I que detienen la marcha de una inteligencia
dispensable para someterse á un tenor de que da los primeros pasos.
vida fatigoso y repugnante; se ha recono Generalmente hablando parécenos que
cido que la abnegacion que para esto se ha se cultiva demasiado la memoria de los ni
menester no puede dimanar de considera ños y se cuida poco de desarrollar su com
ciones puramente mundanas , sino que es prension. Se los acostumbra á decorar mu
indispensable que nazca de la Beligion que chas páginas de una tirada , se los hace
tan decididamente señorea todos los resor estudiar para este efecto largas horas , se
tes del corazon humano. La instruccion pri estimula su amor propio con la emulacion,
maria es ciertamente una de esas tareas con la esperanza de premio ó el temor de
fatigosas y repugnantes, y por esto vemos castigo , para que no falte ni una sola síla
que el catolicismo sumamente próvido para ba á la leccion que han de recitar, y entre
acudirá todas las necesidades, no olvidó tanto no se procura despertar su inteligen
fundar institutos cuyo objeto fuese la edu cia y se la deja ociosa y atontada.
cacion é instruccion de los niños de laclase í Cuántos son los niños que os dirán el
pobre. catecismo de un extremo á otro , y no obs
En el estado actual de la sociedad es tante son incapaces de explicar con acierto
tanto mas indispensable valerse de este re el sentido de una sola línea? En prueba de
curso, cuanto que es sumamente difícil esto , desviaos en las preguntas del orden
encontrar el número suficiente de maestros en que las han encontrado en el libro,
que con la correspondiente idoneidad reu servios de otras palabras precisándolos de
nan las creencias religiosas y una conducta esta suerte á mudar tambien ellos las su
moral y ajustada. Tal es el vértigo de las yas , y notaréis que á una pregunta le apli
ideas, tal la corrupcion de costumbres, tal can una respuesta enteramente disparatada,
la disipacion que lleva distraidos los ánimos tomada al acaso de otro lugar del catecis
de la juventud , que es sumamente peligro mo , dando asi á entender que recitan por
so , que quien está ( ncargado de ilustrar el pura rutina , y que se ha llenado de pala
entendimiento y formar el corazon de la bras su imaginacion , mas nó de ideas su
infancia , emprenda quizás muchas veces entendimiento.
esta augusta tarea , despues de haber he ¿ Créese por ventura que los niños á la
cho alarde de incredulidad y escepticismo edad de ocho ó nueve años, no son capa
y de haberse entregado á los excesos de ces de formarse ideas claras y exactas de
 — 204 —
muchos objetos , con tal que les ¡sean pre | que se entiende bien difícilmente se borra
sentados con la sencillez y buen orden cor de la memoria; lo que se sabe literalmente
respondientes? ¿Por qué al propio tiempo sin comprender el sentido, es poco menos
que se les hace decorar el catecismo , no que imposible el retenerlo; ademas que aun
se les podría presentar en pocas palabras y cuando se retenga , ¿ qué vale el estar la
en pequeño número de lecciones la histo cabeza llena de palabras y vacía de ideas?
ria de la Religion , y obligarlos á referirla Lo que acabamos de decir con respecto
ellos mismos, prescindiendo de los térmi á la enseñanza del catecismo y de los ele
nos del libro que les sirviese de texto? No mentos de la historia de la Religion puede
se nos diga que esto es imposible , porque extenderse á todos los objetos en que se ins
á cada paso oimos á un niño refiriendo his truya á los niños ; el ejercicio de su inteli
torietas pertenecientes , ó á él , ó á sus gencia sobre lo mismo que han aprendido
compañeros, ó á su familia, ó á otra cono de memoria debiera extenderse á k>s princi
cida, ó al pueblo en que vive; cada dialos pios de buena crianza, á las reglas de arit
estamos oyendo que narran con admirable mética , á las de leer y escribir ; en una
puntualidad y quizás con notable viveza y palabra , átodo aquello en que se les ocupa.
colorido , lo que oyeron contar de las apa Mas esto debiera hacerse no olvidando
riciones de un muerto , de los secretos de nunca lo quemas arriba hemos hecho notar
una bruja , ó las travesuras de un duende sobre la dificultad que experimentan los
¿por qué, pues, no se les podría enseñará niños en comprender muchas cosas á un
conocer el encadenamiento de la historia tiempo ; fuera preciso tener sumo cuidado
de la Religion , de suerte que empezando en presentarles las cosas por partes , y coa
desde la creacion del mundo reuniesen en orden á propósito para auxiliar la inteligen
breve cuadro la caida del hombre , el di cia y la memoria. No se crea por esto que
luvio universal, la vocacion de Abraham, con dicha sencillez sea incompatible la exac
la historia de Moises, los prodigios de la titud de las ideas , antes al contrario , de
salida de Egipto , la peregrinacion por el esta exactitud son compañeras naturales la
desierto , la entrada en la tierra de promi sencillez y la claridad. Cuanto mas exacta
sión y los principales acontecimientos del es la idea que expresa un objeto , cuanto
pueblo escogido, haciendo notar su origen, mas exacta es una palabra que expresa una
los medios admirables de que Dios se valia idea, tanto mayor es la claridad de una y
para hacerle conducir á su destino , el ob otra. La confusion lleva consigo la oscuri
jeto que se propuso Dios en la vocacion del dad ; lo que está mal deslindado jamas se
primer Patriarca , lo que figuraba el pueblo presenta bien claro.
de Israel con su religion , sus leyes y sus El entender no solo las cosas sino tam
costumbres , el íntimo enlace que todo te bien la razon de ellas, se juzga comunmente
nia con la venida del Salvador , como se tarea superior á la comprension de los ni
pasó de la ley antigua á la ley nueva , fun ños , y esto acarrea que no se les enseñe la
dándose la Iglesia católica en que felizmen razon de nada de lo que practican ó apren
te vivimos , y finalmente todo cuanto se den ; bien que á decir verdad esta errada
refiere á la debida inteligencia de los dog costumbre tambien proviene en gran parte
mas y de la moral de nuestra Religion sa de la ignorancia de los maestros. ¿Qué in
crosanta ? Todas estas cosas las aprende el conveniente habría , por ejemplo , en que
niño de memoria , pero las recita sin saber al enseñar los principios de aritmética se
lo que dice, y por consiguiente no las sabe. procurase hacer comprender á los niños con
Para que pudiera afirmarse que las ha apren observaciones claras y sencillas la razon de
dido realmente, seria menester que fue la regla que practican? Semejante descuido
se capaz de referir una parte cualquiera de produce el fastidio que naturalmente en
esta historia , no necesitando valerse de las gendran tareas en que se procede del todo
mismas palabras que halló en el libro, si á oscuras, y hace ademas que se olvide con
no empleando otras que le ocurriesen como tanta facilidad lo que se ha aprendido con
lo verifica cuando refiere sucesos que no mucho trabajo. Ateniéndonos al mismo
ha aprendido por rutina , sino porque los punto que hemos indicado , todos sabemos
ha Con
oidoeste
contar
trabajo
ó lossehalograría
visto porprecaver el lo que comunmente suele decirse , de que
sí mismo.
nada se olvida con tanta prontitud como la
olvido que tan fácilmente destruye el fruto aritmética; y no es raro ver muchachos que-
de los sudores de maestros y discípulos ; lo habian adelantado bastante en ella , y que
 — 205 —
sin embargo ni aun recuerflan las cuatro aquel modo estaría bien asentada la regla,
reglas fundamentales. Y esto ¿por qué? ú os responderá afirmativamente, ó al me
Porque se les ha enseñado la rutina de la nos si no cae en este error advirtiéndole la
numeracion sin hacerles notar las razones simple inspeccion de la figura el trastorno
que explican su hermoso mecanismo; se de la colocacion , no acertará á señalar la
les ha enseñado á practicar las reglas de razon de esta diferencia, siéndole preciso
sumar, restar, multiplicar y dividir sin ex contentarse con decir que en la escuela no
plicarles por qué los datos se colocan de esta lo enseñan asi.
ó de aquella manera , por qué se hacen con Todos sabemos por experiencia la con
ellos estas ó aquellas operaciones. De suerte fusion que noscausó en nuestra tierna edad
que en no teniendo el niño una memoria la multiplicacion y division de los números
tal que pueda retener exactamente todas denominados. No podía uno formarse idea
las reglas, que es felicidad poco comun, no de lo que venia á ser aquello de multipli
sabe á dónde volverse tan pronto como ha car varas, y piés, y pulgadas por pesos
perdido de vista los casos en que se ejercitó fuertes, reales y marvedises; aquella com
en la escuela. binacion de cantidades tan disparatadas que
No es verdad que la aritmética si llega á nada tenían que ver entre sí dejaba el en
comprenderse , no solo su práctica , sino tendimiento sumamente confuso; y si bien
tambien la razon de sus reglas, sea tan fá || se aprendía maquinalmente la regla se ol
cil de olvidarse como ordinariamente se vidaba tan pronto como se dejaba de prac
cree ; al contrario , sus principios son tan ticarla. No sucedería asi teniéndose el cui
claros, las consecuencias que de estos di dado de dar una idea bien clara de lo que
manan son tan sencillas en sí y tan eviden son los números denominados , y del moti
temente enlazadas con los axiomas, que vo por que se los combina en diferentes
una vez se haya fijado la atencion sobre es operaciones para obtener resultados de que
tos objetos y se haya ilustrado la inteligen á cado paso necesitamos en los negocios
cia con algunas aplicaciones á ejemplos va comunes de la vida. Con el tiempo la ex
riados , se clavan fuertemente en la memo periencia va enseñando la razon de estas
ria las reglas principales, y si alguna vez reglas , y asi es que los que se ejercitan
se olvidan basta una ligera reflexion de mucho en las mismas, al fin adquieren
quien las ha de emplear para que se re con el uso el conocimiento que han menes
nueven desde luego. ter para no equivocarse groseramente apli
Aclararemos esta materia con algunos cando á un caso la regla que corresponde
ejemplos sumamente sencillos. Notamos á á otro totalmente diverso. No obstante no
cada paso que un niño á quien se propone dejan de cometerse graves errores, y ade
un problema de sumar ó restar en que los mas siempre hay el inconveniente de ser
sumandos ó los términos de sustraccion preciso que pasen años hasta que se adquie
contengan un número desigual de guaris re dicho conocimiento , cuando si se obser
mos , si no se la escribimos en el orden va un buen método es muy fácil que los
conveniente , se equivoca con mucha faci niños al salir de la escuela no necesiten es
lidad colocando los guarismos de distintos perar mas para resolver con acierto los ca
órdenes en una misma columna. ¿De qué sos que se les vayan presentando.
dimana ese error? Dimana de que en su ¿Qué confusion no producen en el en
cabeza hay la mayor confusion de ideas, ó tendimiento del niño las reglas de los que
mejor diremos, no hay ninguna idea sobre brados? No es raro oir á personas nas adultas
el motivo por el cual el primer guarismo que jamas han podido comprender dichas
de la derecha que expresa las unidades se reglas, que se les olvidan muy fácilmente,
ha de colocar debajo del otro guarismo de y que en ofreciéndoseles una cuenta don
la derecha que expresa cantidades de un de entren quebrados ya no saben cómo sa
mismo órden. De suerte que si en un caso lir del paso , y que tienen que valerse del
en que uno de los sumandos contenga tres auxilio de un amigo.
guarismos y el otro dos, haceis que las de Y es por ventura que la inteligencia de
cenas del uno caigan debajo de las cente los quebrados sea tan difícil como suele de
nas del otro , y las unidades debajo de las cirse? Ciertamente que nó: ocupaos en ex
decenas , de manera que los guarismos de plicar bien su naturaleza, fijad luego las
ambos formen columna , nó á la derecha , ideas sobre lo que expresan el numerador
sino á la izquierda , y le preguntais si de y el denominador , asentad los principios
 — 20C —
en que se funda la variacion que el quebra Pocas materias hay que exijan tan seve
do sufre por las alteraciones de uno cual ra vigilancia de parte de las autoridades
quiera de sus dos términos , y entonces no como la instruccion primaria. Conviene
costará trabajo , ni aun á las inteligencias emplear todos los medios á propósito para
mas medianas, el comprender la razon de procurarse buenos maestros; pero es pre
todas las reglas que se dan para las opera ciso no contentarse con poseerlos , es me
ciones sucesivas. nester cuidar de que asegurados en sus des
Con estos ejemplos se echa de ver que el tinos no se entreguen á la indolencia per
secreto de ahorrar tiempo y fatiga , no es diendo el público los frutos que pudiera
adelantar mucho de una vez haciendo prac sacar de su idoneidad. Esta carrera es de
ticar al niño crecido número de reglas en suyo tan pesada , se halla en esfera de tan
pocos dias, para que mil veces vuelva so poca consideracion social , es tan modesta
bre ellas y otras mil no las entienda. Esta la gloria que acarrea y tan escasos los re
mos persuadidos que si se trabajase algo cursos que proporciona, que es muy fácil
mas en el desarrollo de la inteligencia de que los que á ella se dedican aflojen en
los niños , no recargando demasiado su me breve del primitivo ardor con que la- em
moria , sin dejar por esto de ejercitarla lo prendieron , si no temen continuamente el
suficiente, se obtendrían resultados mu ojo vigilante de la autoridad ó de las co
cho mas sólidos y provechosos. Una inteli misiones que la representan, si no saben
gencia desarrollada á tiempo produce me que á mas de las visitas ordinarías y de pu
jores frutos , no solo porque le queda mas ra solemnidad , puede ser sorprendido por
espacio en el brevísimo trecho de vida que otras en que se inquiera diligentemente
nos ha sido otorgado, sino tambien por cuál es el estado de la escuela , y se obser
que desenvolviéndose sus facultades inte ve minuciosamente hasta qué punto llega
lectuales al par que las físicas, se evita el el celo del maestro y si procura realmente
inconveniente de que las pasiones absorvan el adelanto de los discípulos , ó si solo tra
la razon , y con el crecimiento del cuerpo ta de cubrir su responsabilidad con el me
permanezca como adormecida y sepultada nor trabajo posible.
el alma. En España no faltan leyes, no faltan
'" Es cierto que asi para el espíritu como instituciones para todo ; la desgracia está
para el cuerpo no conviene una precocidad en que aquellas no se observan , y estas se
excesiva , y que es menester en la educa quedan sin obrar, amortiguadas, adorme
cion de la niñez recordar aquella máxima cidas, sin producir ningun resultado hasta
de que el tiempo no respeta nada de aque que su inutilidad las hace caer en desuso,
llo en que no ha tenido parte; pero esta y el desuso acarrea el olvido. Lástima
consideracion muy fundada y prudente en causa que cuando en otros paises se ha
nada se opone al desarrollo suave y opor llevado tan adelante el importantísimo ra
tuno que estamos aconsejando. Deseamos mo de la instruccion primaría haya es
únicamente que se destierren de las escue tado entre nosotros tan descuidada , sea
las esos métodos rutinarios en que todo se tan reducido el número de las escuelas y
hace maquinalmente ,.en que el niño en estas disten mucho de llegar á la perfec
cajonado como una pieza en un gran cuer cion en que las tienen otras naciones. Y no
po sufre la compresion que le fastidia de es que nos falten medios para obtener lo
sus tareas sin reportar ni de mucho el de mismo que ellas han obtenido , sino que
bido provecho. Queremos que las escuelas por efecto de un fatal concurso de circuns
de instruccion primaria al paso que sirvan tancias , y tambien por esa especie de pe
para comunicará los niños las nociones pro reza habitual que se ha hecho hereditaria,
pias de su edad sean tambien un semillero no hemos cuidado de mejorar los métodos,
de ideas mas aventajadas y de orden supe ni de informarnos siquiera delos adelantos
rior, nó precisamente porque estas se las en nuestros vecinos, y sobre todo, no he
deban enseñar los maestros, sino por lo mos pensado en aprovechar los muchos re
que pueden contribuir con métodos opor cursos de que disponíamos para el efecto ,
tunos á desenvolver aquellas tiernas inteli si hubiésemos acertado á dar la competen
gencias que esperan para desplegarse el te direccion á fondos é instituciones que
cnlor de otra inteligencia mas formada, co podían fecundar el pais haciendo su propio
mo la flor que abre su capullo al tocarla bien , y asegurando su conservacion y
los rayos del sol. mejora.
 En la actualidad no puede negarse que
se ha despertado en España un vivo movi
miento que lleva losespíritus hácia un por
— 207 —BARCELONA.
venir mas animado y brillante. Sean cuales
fueren las causas que lo hayan producido,
lo cierto es que existe, y lo que conviene
es explotarlo en beneficio de la ilustracion,
de la moralidad y del bienestar. Si el go
bierno impulsa vivamente el planteo de ARTÍCULO 5."
escuelas de instruccion primaria , y las me
joras de las existentes, encontrará sin du
da apoyo y eficaz cooperacion en el pais CONSIDERACIONES GENERALES
que se va convenciendo cada día mas de SOBRE LOS EFECTOS DEL DESARROLLO DE
que por una parte conviene salir de la agi LA INDUSTRIA EN LAS SOCIEDADES
tacion revolucionaria entrando en el cami MODERNAS.
no de los adelantos útiles, y de otra es in
dispensable satisfacer las exigencias del es
píritu del siglo poniéndonos al nivel de las
demas naciones , si queremos labrar nues Si las complicaciones que han hecho su
tra prosperidad interior y ocupar en el mamente difícil la posicion de Barcelona
congreso europeo el rango que nos per en los últimos años se hubiese limitado al
tenece. órden meramente político, fueran bastan
Mas al propio tiempo que aplaudimos te á remediar el daño medidas puramente
este progreso tambien deseamos que se políticas ; mas como quiera que no ha su
procure aliarle íntimamente con la Religion cedido asi , y que por motivo del desarro
y la moral , para evitar las consecuencias llo industrial y mercantil , se han presen
desconsoladoras que estamos presenciando tado en mayor ó menor escala algunos de
en otros paises donde el aumento de la ins los problemas que abruman á las demas
truccion ha llevado consigo el aumento de naciones que se hallan en este caso , ha
la inmoralidad , donde en la estadística de resultado que afectándose el órden social,
la corrupcion y del crimen figuran en nú la herida que ha recibido la tranquilidad
mero mucho mayor los instrnidos que los pública ha sido mas grave , y los elemen
ignorantes. Triste luz del entendimiento la tos de discordia pueden contar con mas
que solo sirve para la perversidad del co larga duracion, dado que su vida y su fuer
razon. Preferimos la Cándida sencillez her za estriba en la misma organizacion indus
moseada con la virtud á la instruccion trial que no es posible destruir y no muy
prostituida al vicio. — J. B. fácil de modificar.
La discusion entre los fabricantes y tra
bajadores que tan ruidosamente estalló en
ciertas épocas , es síntoma mas alarmante
á los ojos de todo hombre pensador, y que
conozca las tendencias de semejante fenó
meno, que los mayores disturbios promo
vidos con intento ó pretesto de obtener
mayor grado de libertad. En efecto; ob
servándose el mismo hecho con mas ó me
nos semejanza en los demas paises donde
la industria se ha desarrollado, claro es
que seria un error atribuirle á causas pu
ramente locales, y no ver en él un resulta
do del aumento mismo de la industria.
Las innumerables obras que se han pu
blicado y continúan publicándose en Fran
cia, en Alemania, en Bélgica, en Inglater
ra y en los Estados-Unidos sobre lo que se
apellida la organizacion del trabajo, los ge
nerosos esfuerzos que estan haciendo los
 208 —
escritores amantes de la humanidad para favorables ó adversas á que con respecto á
resolver el difícil problema queaqui se en aquel punto está sometida la humanidad.
vuelve , los desatentados proyectos á cuya La ciencia que produce un mal mezclado
esplanacion se han arrojado cabezas des con el bien que acarrea , está obligada ,
cabelladas, la atencion que dispensan á es por decirlo asi , á trabajar incesantemente
te negocio los gobiernos mas ilustrados , las en remediarlo , depurando el beneficio de
ruidosas crisis que de vez en cuando sobre los elementos malignos que en alguna ma
vienen perturbando el orden público, son nera le hacen dañoso. De la propia suerte
datos que prueban hasta la evidencia que que el médico inventor de un específico
la organizacion de la industria tal como para curar una enfermedad atiende cuida
ahora se halla en .Europa , deja todavía dosamente , no solo á los buenos efectos si
mucho que desear y ofrece gravísimos in no tambien á los malos, y se ocupa no me
convenientes que en muchos casos hacen nos en atenuar estos que en aumentar
nacer la duda de si hubiera sido mas pro aquellos.
vechoso á la humanidad y al buen órden de Uno de los inconvenientes mas graves
las sociedades, que el mencionado desar que se han ofrecido para que pudiese lo
rollo no hubiese sido tan repentino. grarse cumplidamente el saludable objeto
Reflexionando sobre las causas de este de que hablamos, ha sido el que el desar
mal salta desde luego á los ojos que una rollo de la industria y el adelanto de la
de ellas es el que se han descubierto los ciencia económica han coincidido con esa
medios de producir y acrecentarse esta pro época de enflaquecimiento de las ideas re
duccion indefinidamente, sin que al propio ligiosas y morales , y han tenido que mar
tiempo se haya encontrado el arte de char al lado del materialismo ó del escep
hacer la distribucion de los productos de ticismo. Desde el momento que el hombre
la manera conveniente , ni haberse estable es considerado como un simple producto
cido un sistema capaz de hacer frente á las de la naturaleza , sin diferencia de los de-
apremiadoras necesidades que consigo trae mas, sino por una organizacion mas per
una multiplicacion excesiva, ó al menos de fecta y delicada, no es extraño que en tra
ponerle coto previniendo el incremento tando de él con respecto al trabajo se le
desmesurado sin lastimar la razon , la jus mire como una máquina que conviene ma
ticia, la moral, ni la conveniencia pública. nejar del modo mas útil , sin que sea pre
La economía política, muy adelantada ciso atender á su conservacion, sino por el
como ciencia puramente material , lo está beneficio que de ella se espera ó por el da
muy poco como social. Ha desenvuelto ño que de su pérdida se teme. Muy al con
magníficas teorías sobre el modo con que trario , cuando se considera al hombre co-
se producen las riquezas y sobre la manera modotadode un espíritu inmortal y creado
con que tienden á distribuirse, pero estas para destinos mas altos de los que caben
riquezas las ha mirado como un simple sobre la tierra , cuando el cuerpo , y todo
producto de la inteligencia y de la fuerza, lo que á él pertenece , es considerado con
sin la debida relacion al hombre de quien sujecion á los intereses del alma, entonces
dimana y á cuyo bienestar y felicidad de no se piensa jamas en los adelantos mate
ben destinarse. No negaremos que para riales sin que ocurran al propio tiempo los
crear la ciencia económica y levantarla á intelectuales y morales reclamando parti
la altura reclamada por su importancia , cipacion y preferencia, y oponiéndose si
sea menester por razones de buen mé es necesario, al mismo progreso material
todo separar las consideraciones sociales en lo que tenga de inmoral ó de envilece
de las materiales; mas tambien es induda dor del espíritu.
ble que aquellas deben ser el complemen Apenas hay escritor de nota que se ha
to de estas, y que el ocuparse mucho ya ocupado de semejantes materias de al
de las segundas sin pensar en las pri gunos años á esta parte , que no convenga
meras seria formar un cuerpo de doctrina en la necesidad de ensanchar la esfera de
estéril para el bien de la humanidad , y la ciencia económica , dedicándose no solo
muy incompleto bajo el aspecto científico. al estudio de la produccion y distribucion
Nada de cuanto se refiere al hombre de las riquezas bajo el punto de vista pu
puede decirse suficientemente desenvuelto ramente material, sino tambien extendien
hasta que abarca las relaciones físicas y do la mirada á lo que reclaman esas nece
morales, y atiende á todas las condiciones sidades de la triste humanidad condenada
 — 209 —
al parecer á ver aumentar su miseria á modidades para emprender sus tareas , y
proporcion que se multiplican sus títulos fijarse en el terreno sin desvío ni repug
de esplendor y gloria ; todos convienen en nancia.
que es preciso poner coto á esa degrada El escritor despues de haber desarrolla
cion de los espíritus que tan de bulto se do su plan, en cuya exposicion se conoce
presenta allí donde no se piensa en otra que ha estudiado á fondo la materia , con
cosa que en producir riquezas, esa es cluye con una exclamacion que nos pare
pantosa inmoralidad que se desenvuelve ció revelar el espíritu elevado de donde
en los grandes centros manufactureros, salia, y la gravedad del mal cuya vista la
afeando su brillo y hermosura como una arrancaba: ¡ Inglateira á tus bajeles ; leván
Haga
venA gallardo
pesar
asquerosa
dey apuesto.
esa
en eltendencia de un jó- tate y cumple los destinos de la Providencia!». . .
semblanteconsoladora
Es ciertamente un espectáculo descon
solador el que ofrece una gran nacion que
que cada dia va dominando mas y mas en se ha encumbrado al mas alto punto del
el órden científico, no se experimentan los grandor y poderío , agobiada con el peso
saludables efectos que son de desear , y mismo de su prosperidad material , y ame
el mal lejos de disminuirse se desarrolla nazada de espantosos trastornos , si no acu
con alarmante rapidez. La Inglaterra que, de al remedio de los males que esta situa
á las necesidades que consigo trae un desar cion le acarrea. Es ciertamente desconso
rollo de la industria tan asombroso como lador y que inspira reflexiones profundas y
el suyo , reune la circunstancia de una or aflictivas sobre los destinos de la humani
ganizacion social muy á propósito para dad en esta tierra de infortunio , el asistir
acrecentarlas, siente mas que otro pueblo á la desolante escena de un gran pueblo
del mundo ese dolor, esacongoja, por de que se ve precisado á abandonar sus hoga
cirlo asi, que no le consiente disfrutar tran res y á marchar en busca de nuevos paises
quila de su deslumbrante prosperidad , ni para encontrar un bocado de pan con que
gozarse placentera en el aspecto de sus satisfacer el hambre , y un pedazo de lien
máquinas y de sus vapores , cada dia mas zo para cubrir la desnudez. Concíbese fá
activos, mas numerosos, mas fecundos en cilmente que las hordas de los bárbaros
toda clase de manufacturas. multiplicadas sin tasa en los bosques del
Todos sus hombres de Estado , todos sus norte , y careciendo de la inteligencia ne
publicistas, todos' sus filósofos siguen con cesaria para aumentar la produccion de lo
ansiosa mirada el progreso de este mal , y medios de subsistencia proporcionalmente
se afanan en excogitar medios para atajarle. á las nuevas necesidades , abandonaran sus
£1 sistema que mas en boga se halla en la nieves y escarchas y se arrojasen sobre el
actualidad , y que mas probabilidades tie mediodía en busca de climas mas feraces
ne de ser ejecutado , es el de la coloniza donde encontrar pudieran el alimento que
cion en grande escala , desahogándose de no alcanzaban á suministrarles sus enma
esta suerte al pais del exceso de poblacion rañadas selvas ; pero no hubiera sido crei
que le abruma, y proporcionándose la in ble á no verlo como lo estamos viendo,
dustria nuevos desagües donde pueda des que numerosos generaciones nacidas en un'
cargarse algun tanto de la sobreabundancia pais altamente civilizado , en un pais don
de sus productos. No hace mucho tiempo de los medios de multiplicar los produetos
que un escritor distinguido de la Gran de la naturaleza y del arte han sido lleva
Bretaña y hombre práctico en los negocios, dos á la mayor perfeccion , se viesen for
ha publicado un extenso trabajo sobre este zados por extrema necesidad á tomar la
particular , no contentándose con vagas dura resolucion de abandonar el suelo de
generalidades , sino detallando el plan con la patria.
que se debería ejecutar el proyecto de co Opinan algunos que planteándose otros
lonizacion, calculando los gastos que con sistemas en que no solo se atienda á la pro
sigo traería á proporcion de la escala en duccion de las riquezas sino tambien á su
que se realizase , los beneficios materiales distribucion mas universal y equitativa , se
que desde luego se podrían reportar de los alcanzará mejorar de tal suerte la condi
nuevos establecimientos, explicando los cion de la humanidad que desaparezcan
medios preparatorios de que se debiera totalmente la carestía y miseria que ahora
echar mano para que los recien llegados á la estan afligiendo. No dudamos que pue
la colonia no se encontrasen faltos de co- den introducirse importantes mejoras, asi
TOMO II. 14
 — 210 —
en la organizacion del trabajo , como en la duetos de la industria , con lo cual el pobre
creacion de establecimientos destinados á con menos medios que antes alcanza á pro
acudir al socorro de los necesitados ; pero curarse lo que ha menester. Dicho fenó
creemos que en esta vida no es posible lle meno lo estamos palpando en la revolucion
gar á una perfeccion en que se obvien to que ha hecho en los trages la industria
dos los inconvenientes y remedien todos algodonera suministrando medios de ves
los males. Pobres tendréis siempre con voso tirse con mas comodidad , elegancia y ba
tros, dijo el Divino Fundador de nuestra ratura de lo que jamas habría podido suce
Religion sacrosanta , y esta profecía se ha der con el uso exclusivo del lino , seda y
cumplido hasta ahora , y se cumplirá en lana. Ademas Ja perfeccion delas máquinas
el porvenir. multiplica tambien las clases de industria;
Debemos ciertamente procurar que se asi es que de medio siglo á esta parte se
disminuya tanto como posible sea el número cuentan muchas especies de ella que antes
delos infortunados, debemos trabajar en no existían ; de lo que resulta que los bra
que la desgracia que sea inavitable sea me zos que por una parte deja ociosos los em
nos dura y esté mas rodeada de alivio y plea de otra , bastando para gozar de esta
consuelo; pero no conviene que nos haga compensacion el que se tenga el debido
mos ilusiones lisonjeándonos con esperanzas cuidado de que las mudanzas no sean de
que no se han de realizar. Posible fuera masiado repentinas, preparándose lenta y
que corriendo en pos de vanas sombras suavemente la traslacion á otro destino de
descuidásemos la realidad , y que haciendo los brazos que el nuevo invento va á dejar
esfuerzos estériles para improvisar mejoras desocupados. Confesamos que estas reflexio
insubsistentes, atrasásemos con la injusti nes atenúan en nuestro juicio la fuerza de
cia ó la imprudencia lo mismo que nos pro la dificultad; y que si otra no se pudiese
pusiéramos acelerar. objetar á las máquinas, no distaríamos de
En nuestro concepto, la naturaleza tle la creer que con la experiencia se llegara á
industria tal como ahora existe, tiende por remediar el nial , compensándose por un
necesidad al aumento de los pobres. Por lado lo quese hubiese perdido por otro. Asi
que, si no nos engañamos, á la produccion las causas que hacen que el aumento delas
de este triste efecto contribuyen dos causas: máquinas contribuya por necesidad al au
1.a la acumulacion de la riqueza en pocas mento de los pobres, nos parecen ser las
manos, ó sea la desigualdad de la distribu dos que arriba hemos señalado. Expondre
cion : 2.a la facilidad de multiplicarse la mos brevemente los motivos en que se funda
poblacion ; y estas dos causas acompañan el nuestra opinion.
estado actual de la industria. No será difícil Acumulacion de la riqueza, ó sea mayor
probarlo. desigualdad en la distribucion de los productos.
Lo primero que en esta materia se ocurre En el estado actual de la industria de los
es que sustituida á la accion del hombre la ramos en que han llegado las máquinas i
fuerza de las máquinas, y elevadas la cons una gran perfeccion, se han hecho impo
truccion y uso de estas á la perfeccion en sibles los establecimientos pequeños. El solo
que las vemos y en la que andan progre planteo de un vapor exige mayores desem
sando, se sigue que la industria se ha limi bolsos que el de muchas fábricas donde
tado por necesidad ála accion de los agentes poco antes se trabajaban , bien que con me
inanimados, y que por lo mismo ha inutili nos perfeccion , l.as mismas manufacturas.
zado en parte, y va inutilizando cada dia Quien conciba , pues , semejante idea , es
mas la accion humana. Esto produce natu preciso que cuente con crecidos capitales,
ralmente la disminucion del trabajo, y por y que quien no reuna esta última circuns
consiguiente del único medio de subsisten tancia no pueda ni siquiera pensar en ta
cia en que está librada la vida de los pobres. maña empresa. De esto resulta que el númerw
Este argumento que se ha producido ya de los amos hade ser mucho mas limitado;
muchas veces y que á cada paso se oye re y como quiera que los dueños de las fábri
petir, nu es el mas fuerte que hacerse pue cas han de percibir el interes del capital
de, ni es tal su solidez y exactitud que no invertido , la parte que se conceptúe nece
sea dable contestar á él con muchas apa saría para indemnizarlos del riesgo, y el
riencias de verdad. En efecto, si las má valor que represente la inteligencia y el
quinas reemplazan la accion- del hombre, trabajo qut empleen en el planteo y direc
en cambio perfeccionan y abaratan los pro- || ciou de la fábrica , tenemos que siendo ere-
 cido el capital , no escaso el riesgo mucho
- 211
|| lo—cual hace que la perfeccion dela indus
el trabajo de la direccion , y combinándose tria cree una porcion de grandes centros
estas tres circunstancias en una persona , absorventes que por necesidad contribuyen
hay tres factores que elevan el producto, es á que se aumentela desigualdad de la ri
decir , la parte que corresponde al dueño , queza.
á una cantidad muy alta. Añádase á esto Y á la verdad ¿ qué representan unos
que el dueño no siempre se satisface con la cuantos socios interesados en cada estable
ganancia que justa y equitativamente le per cimiento en comparacion dela muchedum
tenece , que no pocas veces procura explo bre que queda excluida del beneficio? Ade
rar su situacion del mejor modo que puede mas que esta clase de empresas sonde suyo
sin atender á ninguna consideracion de mo tan importantes que á ellas no se aventu
ralidad, y que solo se propone aumentar ran con facilidad los capitalistas pequeños;
rápidamente su fortuna aun cuando sea á y asi es que estas sociedades suelen estar
expensas del sudor de sus semejantes; y formadas de hombres muy ricos que desti
tendremos que esa fuerza absorvente se le nan á aquel punto lo sobrante que no les
vanta á un grado inconcebible atrayendo á ha sido posible emplear en objetos exclusi
sí la mayor parte de los productos y dejando vamente propios. Asi resulta que el benefi
al pobre no mas que lo indispensable á fin cio tiende naturalmente hácia los capitalis
de que no le falten las fuerzas para conti tas mas poderosos y por tantose enderezan
nuar en el trabajo. Y como ya fiemos hecho necesariamente á producir el triste efecto
notar que el sistema de las gratules máqui que llevamos indicado.
nas estrecha el número de los que pueden La facilidad de multiplicarse la poblacion.
figurar como dueños, tenemos que por ne La estadística enseña que en las clases ma
cesidad ese gran desarrollo de la industria nufactureras la multiplicacion se verifica
crea poderosos focos absorventes que se en grado mucho mayor que en las agríco
enderezan á aumentar la desigualdad de las las. En cualquier punto donde se establecen
riquezas. Este fenómeno que las razones fábricas , se nota desde luego el aumento
aducidas dejan fuera de duda, se confirma de la poblacion , y en algunas partes se
con la experiencia que nos ofrecen lospaises verifica este fenómeno con una rapidez
manufactureros donde al lado de la miseria sorprendente. Las causas de este no son
mas repugnante y desconsoladora , se le difíciles de adivinar. El labrador para fun
vantan lascolosales fortunas que dejan muy dar su familia ha menester casa propia ó
atrás las de los mayores propietarios terri arrendada , tierras mas ómenos extendi
toriales. das y un capital mas ó menos cuantioso
A esto se nos dirá que los grandes esta para procurarse los animales é instrumentos
blecimientos manufactureros no pertenecen que necesita para el cultivo de sus campos.
por lo comun á un solo individuo, sino que Nada de esto se improvisa ; es preciso em
toman parte en ellos una porcion de capi plear á veces largo tiempo para adquirirlo,
talistas , ya sea que se forme una verdadera de lo que resulta que en las clases agríco
sociedad , ya sea que encargándose uno solo las no es ni de mucho tan fácil la multipli
á su cuenta y riesgo, se obligue á satisfacer cacion de los matrimonios, que estos se
un interés fijo por los fondos que se le ha realizan en edad mas adelantada, y que los
yan proporcionado. Asi se consigue que el no favorecidos con las circunstancias indis
beneficio no sea todo en favor de una sola pensables para establecerse, ó difieren mu
persona , y se impide que no se acumulen cho mas el matrimonio ó no lo contraen
demasiado las riquezas. No negaremos el nunca. En las clases industriales sucede
hecho que se nos acaba de objetar , y que todo lo contrario El joven de diez y siete
si él no existiese la acumulacion seria mucho años se halla á menudo en la misma situa
mas rápida y la desigualdad de la distribu cion en que el trabajador de cincuenta ; su
cion harto mas chocante ; pero esto solo capital son sus brazos; la casa para habitar
prueba que pueden hacerse suposiciones en la encontrará hoy mismo en proporcion al
que el mal seria mucho mayor, masnóque dinero de que pueda disponer segun sea su
ya en la actualidad no sea grave en extre salario ; en cuanto á las eventualidades del
mo. Siempre resulta cierto que los estable porvenir que pudieran retraerle de cargar
cimientos en donde se fija la propiedad son con nuevas obligaciones , sabe que jorna
en menor niímero á proporcion del de los lero es hoy , y jornalero ha de ser toda su
habitantes y de la escala de los productos, | vida ; que los mismos medios de que dispo-
 212 —
ne actualmente serán los de que disponga
despues de algunos años ; y por lo que toca
al peligro en que se halla de que le falte el
trabajo y que por lo mismo no tenga con POLEMICA RELIGIOSA.
que alimentar á su familia , es un peligro
comun á todos los de su clase , sea cual
fuere su edad , y por tanto no le retrae de CARTA DUODÉCIMA
contraer matrimonio. Asi vemos que los
enlaces se verifican en edad muy temprana, A UN ESCKPTICO EN MATERIAS DE RELIGION.
con extremada ligereza , y con tanta mayor
facilidad cuanto son menores los negocios
que se han de arreglar y los intereses que
se han de combinar ó transigir. Atiéndese EL EVANGELIO Y LAS PASIONES.
únicamente al impulso de la naturaleza , y
añadiéndose que la mayor proximidad de
los sexos enciende las pasiones , y la inmo Mí estimado amigo : el método que va
ralidad les quita todo freno, se origina una siguiendo V. en la discusion epistolar que
multiplicacion desmesurada á cuya rapidez hemos entablado, me va manifestando una
no puede alcanzar el consiguiente aumento verdad , que si bien ya la tenia conocida
de los productos que se necesitan para pro me la hace V. mucho masevidente: hablo
veer de medios de subsistencia. De aqui el de la poca fijeza y exactitud en la moral de
pauperismo , plaga cruel de las sociedades que adolecen generalmente los que no es-
modernas , y que amarga terriblemente el tan fundados sobre el sólido cimiento de la
placer que causala vista de su pujante pros Religion. Con mucha verdad se ha dicho
peridad y prodigiosos adelantos. que la moral sin dogma era justicia sin tri
De las consideraciones que preceden se bunales. Oyéseles áVV. ponderar y ensal
infiere con toda evidencia que el desarrollo zar con entusiasmo la sublime doctrina de
industrial que se está verificando se enca Jesu-Cristo en todo lo concerniente á la
mina á la creacion de una nueva aristocra conducta del arreglo del hombre; confiesan
cia , donde resalte la desigualdad de una que nada hay superior ni igual entre los
manera harto mas chocante que en la de filósofos antiguos y modernos; reconocen
los tiempos antiguos. AI rededor de los que nada hay que añadir ni quitar; todo
castillos feudales vivían los infelices vasallos esto con una sinceridad y una expresion de
sumidos en la pobreza y miseria , contem buena fe , que no le dejan á uno duda de
plando el esplendente lujo y los voluptuosos que si rechazan los dogmas de la Religion
regalos de que rebosaba la morada de su cristiana al menos abrazan como conviccion
señor; y devoraban en silenciola amargura filosófica la moral que ella nos enseña.
de que siendo el fruto de sus sudores lo Cuando hé aqui que á lo mejor, hablando
que alimentaba la riqueza del castillo , les de puntos de alta importancia , se disparan
cabia á ellos no mas que lo indispensable de improviso con la exposicion de una doc
para no perecer de hambre, y lo que reci trina que no puede concillarse con la mo
bian andaba todavía acibarado no pocas ral del Evangelio, pues que se halla en
veces con el desprecio y la ignominia. Ahora abierta oposicion con lo que ella prescribe.
en rededor de un establecimiento fabril, Asi me ha sucedido con la última de V. ,
que por su extension y magnificencia se en la cual despues de resignarse á abando
aventaja en mucho á los castillos feudales , nar la trinchera en que se habia hecho
moran tambien un crecido número de in fuerte pretendiendo que nuestra Religion
felices, que apenas alcanzan á ganar el sus se empeñaba en luchar con lo mas íntimo
tento necesario. Trabajando quizás todo el de la naturaleza , con prohibir como cosa
dia en manufacturar las telas mas exquisi mala el amor propio, me viene modifican
tas andan cubiertos de harapos que no les do su argumento , pero en realidad propo
guardan del rigor de la intemperie; y al niéndose un objeto semejante.
salir de una sala inmensa destinada al tra Dice V. que está de acuerdo conmigo en
bajo, van á sepultarse durante la noche en que la Religion no destruye, sino que rec
un subterráneo húmedo y mal sano , donde tifica el amor propio , y no tiene V incon
los esperan el llanto de su mu per y de sus veniente en reconocer que las objeciones
tiernos hijos. — J. B. de su carta anterior estribaban en un su-
 — 215 —
puesto falso. No obstante, deseando no \\ doctrinas de V. Extravagante asercion h
abandonar el terreno sin combatir, se em de parecer esta que acabo de emitir , y no -
peña V. en sostener que la manera con obstante me lisonjeo de pederla apoya» con
que la Religion rectifica el amor propio es tales razones que se vea V. precisado á sus
demasiado dura , y contraria por demas á cribir á mi dictámen.
los instintos de la naturaleza. Aqui tiene su Ya que V. parece aficionada al estudio
aplicacion lo que le estaba diciendo poco del corazon, me atreveré á preguntarle , si
antes, á saber , que los hombres irreligio en el supuesto de haberse de prohibir un
sos caen con frecuencia en una contradic acto, es mas difícil alcanzar la obediencia
cion patente , alabando de una parte la mo prohibiendo tambien el deseo , ó dejándole
ral de Jesu-Cristo y atacándola por otra campear libremente. Tengo por seguro que
sin consideracion ni miramiento. V. perte es harto mas fácil lograr que el hombre
nece al número de aquellos que se glorian evite aquello que no puede ni desear, que
de reconocer la santidad de la moral evan no el que siéndole permitido el deseo haya
gélica , y sin embargo no tienen reparo en de abstenerse de la obra. Se ha dicho muy
condenarla por lo que prescribe con res bien que del pensamiento á la ejecucion va
pecto á las pasiones. Y ¿sabe V. que el tan poca distancia como de la cabeza al
declarar una moral mala, ó inútil, ó ina brazo, y la experiencia está enseñando to
plicable en lo relativo á las pasiones , es dos los dias que quien ha concebido deseos
condenarla poco menos que en su totalidad? vehementes de poseer un objeto , deja con
¿No ha advertido V. que la mayor parte mucha dificultad , de emplear los medios
de los preceptos de la moral se rozan con para lograrlo. Cabalmente en la materia de
el arreglo y represion de las pasiones? Si que estamos tratando se ciega de tal modo
pues la del Evangelio no sirve para ellas la razon , y preponderan de tal suerte las
¿para qué servirá? pasiones , que el que se deja arrastrar por
Afirma V. que los preceptos evangélicos ellas se degrada y embrutece, olvidando
son duros en demasía, por oponerse á irre lastimosamente su honor, sus bienes, su
sistibles instintos de la naturaleza; y por lo salud y hasta su vida. Y con una pasion
que toca á alguno de sus consejos , se ade semejante , ¿ cree V. que la prudencia acon
lanta V. á decir que difílmente se le per seja permitir el deseo y prohibir la ejecu
suadirá que sean conformes á la razon y á cion ? Afirma V. sin vacilar que es dura la
la prudencia. Asienta V. por principio que prohibicion que se estiende al deseo , sin
el secreto de dirigir las pasiones es dejarles advertir que solo en el sistema de V. hay
respiradero para evitar la explosion , aña la verdadera crueldad , pues que se pone
diendo que el olvido de esta máxima es uno al hombre en el tormento de Tántalo ha
de los defectos capitales de que adolece la ciendo correr á las inmediaciones de sus
moral del Evangelio. No lleva V. á mal sedientos labios, aguas frescas y cristalinas
que se declaren culpables los actos que in que no se le permite probar. Reflexione V.
ducirían la perturbacion en las familias , y maduramente sobre estas observaciones y
aun aquellos que tienden á multiplicar la se convencerá que la verdadera dureza es
poblacion encargando á la caridad pública tá en la moral de V. y nó en la del Evan
el fruto de la incontinencia ; pero no puede gelio; que en la de V. bajo la apariencia
persuadirse que el rigor se haya de llevar de indulgente suavidad se pone en verda
hasta el punto de prohibir el mismo pen dera tortura al corazon ; y que en la del
samiento, declarando culpable á los ojos de Evangelio con una severidad prudente y
Dios aquel que admitiera la liviandad en oportuna se procura á las almas virtuosas
su corazon , por mas que se abstenga de la tranquilidad y la calma. El hombre que
lodo cuanto repugne á la naturaleza 6 pue sabe no serle lícito deleitarse ni siquiera en
da acarrear algun daño á la familia y á la un pensamiento malo, lo rechaza con fuer
sociedad. Dejando apartela discusion áque za desde el momento que se- le ocurre, y
bajo muchos aspectos podría dar lugar la asi no da lugar á que 1a pasion se exalte y
objecion de V. , y ciñéndonos al punto de le eiegue ; el que creyese no caber pecado
vista de la prudencia que es el que V. en sino en la ejecucion procuraría complacer
carece principalmente , sostengo que la mo las inclinaciones dela naturaleza, engañán
ral del Evangelio es tan profundamente sa dose á sí mismo con la esperanza de que el
bia y cuerda en su pretendida dureza , que placer del pensamiento y del deseo no le
seria mucho mas dura si se amoldase á las arrastraría hasta cometer el acto; peco des-
 — 2Í
de el momento que la razon y la voluntad 4vierte— al hombre que no comience á per
hubiesen abdicado su soberanía, aun cuan der el dominio sobre sí mismo, porque qui
do fuese con la condicion expresa de que zás no le seria fácil encadenar las pasiones*
no se les habia de llevar mas allá de lo que una vez hubiese llegado á soltarlas.
permitieran los deberes, fuérales imposible Sucede con el individuo lo propio que
contener las pasiones turbulentas que en con la sociedad : si el poder supremo, cuyo
greidas con la primera concesion no cede cargo es gobernar , principia á ceder á las
rían hasta satisfacerse cumplidamente. exigencias de los que deben obedecer, es
Una diferencia capital existe entre la Re tas van cada dia en aumento, la autoridad
ligion cristiana y los filósofos que bajo dis se degrada á proporcion que pierde terre
tintos nombres la combaten : aquella asien no, hasta que al fin se llega á una comple
ta por principio que es preciso atajar las ta anarquía ó se apela á una reaccion vio
pasiones en su cuna, creyendo que será lenta para recobrar lo perdido y restablecer
tanto mas fácil dirigirlas ó sujetarlas cuanto derechos que jamasse debieran haber abdi
mas incremento se les haya dejado tomar, cado. Las leyes de orden tienen una ana
mientras estos se conducen por la regla de logía singular, aun en sus aplicaciones a
que conviene permitir que las pasiones, cosas de naturaleza muy diferente; pudiera
aun las de tendencias mas aviesas, se de decirse que es una misma ley sin mas mo
senvuelvan hasta cierto punto, en el cual dificaciones que las absolutamente indis
afirman que es necesario detenerlas. Y ¡co pensables para atender á la especie del su-
sa notable I asi se portan los filósofos que geto que por ellas se ha de regir.
no disponen de otros medios para dominar He dicho que cuanto acababa de afirmar
el corazon que estériles discursos cuya im sobre la pasion voluptuosa era tambien
potencia se manifiesta siempre que se ha aplicable á las demas; y voy á hacérselo
llan en lucha con una pasion algo ve sentirá Y. atacándole por la parte mas sensi
hemente; y la Religion obra en sentido ble que es la de filantropía, ya que Yds. los
contrario, ella que abunda de medios efica filósofos no pueden tolerar que se ponga
císimos para obrar sobre el entendimiento en duda su ardiente amor á la humanidad.
y la voluntad, y señorear al hombre ente Estan Vds. encareciendo continuamente el
ro. La Religion fundada por el mismo Dios precepto de fraternidad universal, que se
se atiene á una regla prudente, estimando gun la Religion de Jesucristo enlaza á todos
mas la precaucion del mal, que noel tener los hombres como miembros de una misma
que remediarlo, procurando curarlo cuan familia. Infiérese de dicho mandamiento la
do es pequeño por ahorrar la dificultad de prohibicion de no dañar al prójimo , y se
hacerlo cuando sea grande; y el débil mor gun nuestros principios no solo no podemos
tal se atreve á soltar el dique á las aguas dañarle, pero ni aun tener este deseo; por
afirmando que conviene dejarlas correr li manera que pecamos con solo complacer
bres, y que basta el que cuando lleguen al nos en nuestro corazon en un pensamiento
límite que él les prefija se les diga : « de de venganza.
aqui no pasaréis, y aqui quebrantaréis el Ahora bien , aplicando al caso presentí'
orgullo de vuestras olas.» la teoría de V. resultará que debe conde
Yo no sé si se habrá convencido V. , mi narse por sobrado dura la moral cristiana
estimado amigo, con las razones que acabo en esta parte , y para seguir los consejos
de alegar en defensa dela morai del Evan de una suave prudencia será preciso con
gelio y en contra del sistema filosófico. Co tentarse con declarar que es malo el come
mo quiera , no podrá V. negarme que ter un acto que dañe á nuestros hermanos,
estas consideraciones no son para despre pero no lo es el deseo , si nos limitamos á
ciadas , dado que se fundan en la misma él. Asi la bella fraternidad de Yds. se po
naturaleza del hombre y en loque nos está drá expresar de esta suerte: «Hombres,
enseñando la experiencia de todos los dias. no os causeis daño ni de obra , ni de pala
Lo que hemos aplicado á la pasion mas bra , porque con esto faltaríais á las reglas
turbulenta y peligrosa de las que afligen á de la sana moral, y ofenderíais al Dios que
los míseros humanos , puede decirse de to os ha criado , nó para que os perjudiqueis
das las demas , bien que de ella se verifica mutuamente, sino para que vivais en pací
de una manera particular aquello de no fica armonía. Hasta aqui llega la obliga
hay mas remedio que la fuga. Sentencia cion , pero en entrando en el santuario ch?
profundamente sabia y prudente, que ad- I vuestro interior sois dueños de desear á lo*
 — 215 —
hombres todo el mal que os plu haciendo bien al prójimo, mas. no deseán
guiere , seguros de que con ello no come doselo. Y ¿sabe V. á dónde nos conduce
teréis ninguna falta , pues que Dios no es este principio? ¿Sabe V. que nada menos
tan duro que haya querido no solo prohi se logra con él que destruir de un golpe
bir los hechos, sino tambien el pensamien esa fraternidad universal tan encarecida
to y eldeseo.» ¿No le parece á V. que el por la filantropía de los filósofos? ¿Qué es
precepto dela caridad, de la fraternidad el amor que se limita á los actos exterio
universal , es cosa curiosa y peregrina si res? ¿Es verdadero amorelque no está en
le explicamos de esta manera? Y sin em el corazon? ¿No esto lo mismo que nos está
bargo es evidente quede esta suerte lo ex indicando el lenguage cuando distingue en
plica V., no habiendo yo hecho otra cosa tre la beneficencia y la benevolencia , es
que reunir las partes del sistema para (pie decir , entre hacer el bien , y el desearlo ?
se notara mas vivamente el contraste. Asi la primera como la segunda, ¿no son
El vicio radical de dicho sistema es po virtudes muy loables? Quien no puede ser
ner en desacuerdo lo interior con lo exte benéfico por faltarle los medios necesarios,
rior, es suponer que conviene limitar las ¿ no es muy laudable que sea benévolo, es
obligaciones morales á los actos externos, to es, que tenga deseos de hacer el bien,
es establecer una especie de moral civil ya que no le sea posible realizarlo ? Quien
que en último análisis vendría á parar á hace el bien ¿no lo desea antes de ponerlo
una jurisprudencia puramente humana, sin en práctica ? Es decir, el hombre benéfico
otro objeto que impedir el que se pertur ¿no es antes benévolo? ¿y no es benéfico
base la tranquilidad pública. A este resul por lo mismo que es benévolo ? Yo no sé
tado cqiiducen las doctrinas de V. ; y nada si V. mirará las cosas bajo este punto de
extraño es que asi sea , puesto que es muy vista, pero de mí sabré decirle que consi
natural que en desterrando áDios del mun dero tan enlazados el deseo y el acto que se
do, ó no admitiendo religion alguna, es me presentan como cosas de un mismo ór-
decir, quitando la influencia divina sobrelos den, y como que la una es complemento
actos del hombre, queden estos considerados de la otra. Mas diré limitándome á la be
en el orden puramente eterno, y no tengan neficencia ;. cuando me figuro á un hombre
importancia á los ojos del filósofo sino en que hace el bien por un motivo cualquiera,
cuanto son capaces de producir algun bien pero que al mismo tiempo no abriga en su
exterior ó de causar algun mal. Quitando corazon un afectuoso deseo que le impulsa
Vds. á Dios, ó lo que viene á parar á lo á estos actos, es decir; cuando veo la be
mismo, destruyendo la Religion, destruyen neficencia separada de la benevolencia , ó
tambien la conciencia, destruyen al hombre no concibo allí un acto de virtud , ó por lo
interior, y reducen toda la moral á una com menos la encuentro manca , despojada de
binacion de utilidades bien calculadas. los mas bellos adornos que la hacían agra
Estas consecuencias le serán á V. desa dable y encantadora.
gradables, y no me cabe duda que hará Ya ve V., mi querido amigo, que la
un esfuerzo por rechazarlas ; mas para evi Religion cristiana no anda tan desacertada
tar disputas le ruego á V. que vuelva á en entrometerse en los actos internos , en
seguir el hilo del raciocinio que me ha estender sus mandamientos y prohibiciones
conducido á ellas, pues estoy cierto que hasta con respecto á lo mas recóndito que
haciéndolo asi con imparcialidad y buena ejecutamos en el fondo de la conciencia ; y
fe, no podrá menos de reconocer que mispa que el tacharla de dura por este procedi
labras nada tienen de falso ni hiperbólico. miento , es dar por el pie no solo á la mo
Entre tanto , y para hacerle sentir mas ral religiosa sino tambien á la enseñada por
y mas los errores é inconvenientes de la la luz de la razon. Asi se enlazan las cosas
doctrina que V. abraza con tanta seguridad, que parecen mas distantes ; asi se encade
voy á hacer una aplicacion de ella al mis nan las verdades con tan estrecha intimi
mo precepto de fraternidad , nó conside dad , que quien se atreve á negar una , se
rado en su parte prohibitiva , sino en la ve forzado á desechar muchas otras, que
preceptiva. Dando por sentado que el mal él tal vez respeta y venera con toda sin
está únicamente en los actos externos, de ceridad y acatamiento. De estas considera
beremos convenir tambien en que la bon ciones desearía yo que sacase V. una con
dad de las acciones estará tambien en lo secuencia qiie le he indicado ya varias
exterior: asi ejerceremos un acto laudable || veces , y que no me cansaré de repetirle ,
 — 216 —
y es la importancia de que al examinar las el bienestar y consuelo de aquellos en ca
cuestiones religiosas no nos empeñemos en yo favor se hacen , y que antes al contra
aislarlas demasiado , pues que corremos rio los extravian y corrompen de una ma
peligro de mutilar la verdad, y una verdad nera lastimosa. » « Qué? se podría replicar
mutilada es un error. Los incrédulos y los imitando el propio tono, ¿sereis tan crue
escépticos incurren casi siempre en este de les que permitais arrimar á los labios se
fecto ; toman un dogma , un precepto mo- | dientos el fresco y sabroso licor, y no con
ral, una práctica, una ceremonia de la sintais probarlo? ¿Seréis tan crueles que
Religion, la separan de todo lo demas, la solteis la rienda á la pasion en las regiones
analizan prescindiendo de todas las relacio interiores y no le dejeis un desahogo en lo
nes que tiene con otros dogmas, preceptos, exterior? ¿Seréis tan crueles que desenca
prácticas ó ceremonias; no miran el objeto deneis las tempestades en el fondo del co
sino por un lado , y de esta manera consi razon , que allí conserveis á este agitado y
guen que la ceremonia parezca ridicula , combatido por todos lados, sin dejar que
que la práctica sea irracional, que el pre el desahogo le alivie de sus penas , y que
cepto sea cruel , que el dogma sea absurdo. extendiéndose la borrasca se haga menos
No hay orden de verdades que no venga al intensa y dolorosa? O cerrad enteramente
suelo si de este modo se las examina ; por la puerta al daño, ó permitidle el remedio:
que entonces no se las considera como son no pongais de tal suerte en lucha al hom
en sí , sino como las ha arreglado allá en bre interior con el exterior, al corazon coa
su mente el antojo del filósofo. En tal caso las obras; ya que de humanos os preciais ,
se crean fantasmas que no existen, se huye procurad que no sea tan cruel vuestra men
el cuerpo á los verdaderos enemigos para tida indulgencia. »
pelear con otros imaginarios , con lo cual Por lo que toca al otro punto de si Dios
es poco peligroso el entrar en la lucha par puede indignarse por los actos interiores de
tiendo de un tajo descomunales jayanes. su criatura: «Qué? podríamos decir, si
En la parte moral, mayormente en lo relaciones hay entre Dios y el hombre , si
que tiene mas íntimas relaciones con los el Criador no ha abandonado á su criatura,
sentimientos mas dulces y seductores , no si la mira todavía como digno objeto de sus
es difícil alucinar á los incautos ofreciéndo cuidados ¿ no es claro , no es evidente que
les como una expansion inocente lo que es el entendimiento y la voluntad , es decir ,
un veneno mortífero. Asi por ejemplo, en lo mas precioso que hay en el hombre , lo
la dificultad que V. me propone en su apre que le hace capaz de conocer y amar á su
ciada ¿qué cosa mas conforme á los ins Hacedor , lo que le ensalza sobre los bru
tintos de la naturaleza , á los mas suaves tos , lo que le levanta á una esfera que le
impulsos del corazon que la doctrina por constituye rey de la creacion , no es aque
V. sustentada? « Qué? decia V. , ¿ no bas llo, repetiremos, lo que debe suponerse
ta prohibir los actos , que podrían producir que es objeto de la solicitud del Supremo
malos resultados á la sociedad, á la familia, Hacedor, y que no atiende á los actos ex
ó al individuo , que sea preciso penetrar teriores sino en cuanto emanan del santua
hasta lo interior del alma y allí complacer rio de la conciencia donde se complace en
se en atormentar el corazon , obligándole á ser conocido, amado y adorado? ¿Qué es
abstenerse hasta de aquellas exhalaciones , el hombre si prescindimos de su interior?
que mas bien que crímenes deberán ser á ¿Qué es la moral si no la aplicamos al en
los ojos de Dios inocentes desahogos de la tendimiento y á la voluntad? ¿Es fundada,
naturaleza ? Mientras el mal no se consume es razonable siquiera , una doctrina que
¿á quién daña el deseo? ¿Es posible que aparentando sobreabundancia de sentimien
el Criador pueda ofenderse de los actos mas tos de humanidad , y blasonando de digni
inofensivos de su criatura?» Hé aquí lo que dad é independencia , mata tan desapiada
se apellidan golpes sentimentales , y que damente al hombre en lo que tiene de mas
son argumentos decisivos para las almas independiente y mas digno?
candorosas y ardientes, que estan ansiosas Persuádase V. , mi querido amigo , de
de una doctrina que escuse sus debilidades, que no hay verdad , no hay dignidad en
aflojando algun tanto la austeridad de la nada de lo que se opone á la Religion ; que
moral que aprendieron en el catecismo, lo que á primera vista parece mas noble y
Pero hé aqui tambien lo que se llaman so generoso es en realidad bajo y degradante;
fismas peligrosos que á nada conducen para y á propósito de sentimientos filantrópicos,
 guárdese V. de esas inspiraciones repenti trabajadores; los amos, lejos de esplotarlas
nas que se le ofrecerán como argumentos en beneficio propio , deben cuidar mucho
decisivos , y que examinados á la luz de la de manifestar con sus palabras y sus obras,
Religion y hasta de la sana filosofía, no que cuando levantaban la voz en favor del
son mas que raciocinios infundados , ó bien orden , era con el designio de disfrutar sus
que estribando sobre principios erróneos fortunas y de mejorarlas por medios legí
conducen á establecer el predominio del timos y humanos, haciendo el bien del
cuerpo sobre el espíritu , y á desencadenar trabajador y consultando á un mismo tiem
sobre la tierra las pasiones voluptuosas. po sus propios intereses. Es preciso no ol
Interin vea V. en que puede complacerle vidar que una conducta dura y desapiadada
este su amigo y S. S. — /. B. sembraría en las clases pobres el odio con
tra las ricas, y produciría encono y rencor
contra las autoridades sostenedoras de la
tranquilidad pública , pues que fueran mi
radas sin culpa suya como cómplices del
BARCELONA. daño que se hiciera sufrir á los trabajado
res á la sombra del régimen vigente.
Ya hace mucho tiempo que dirigiéndo
nos á los ricos de Barcelona compendiába
ARTÍCULO 6.° mos en pocas palabras la conducta que
debian observar con respecto á los pobres :
hacerlos buenos y hacerles bien. Hacerlos bue
REIAGIONES nos , esto es , trabajar por todos los medios
posibles en que se extendiese y arraigase
SOBRE la moralidad ; hacerles bien , es decir , ma
nifestar en su favor sentimientos de huma
FABRICANTES Y TRABAJADORES. nidad , desprendimiento en los casos en
que el trabajador se hall? en algun agobio,
y por otra parte seguir un sistema templa
do y razonable , que arregle de tal modo
Las calamidades que hemos descrito en las relaciones que ño salga dañada la jus
el artículo anterior no afligen todavía á ticia ni aun la equidad ; y que antes al
Cataluña. Á pesar de que es mucho ya su contrario se conozca que el dueño se presta
desarrollo industrial , y de que ha comen sin dificultad á algunos sacrificios , que
zado ya á establecerse en él las máquinas siendo compatibles con la conservacion y
de última invencion , todavía el pais puede aumento de su fortuna , aligeren algun
alimentar la poblacion que contiene ; toda tanto la situacion del pobre que , por mas
vía los jornales estan pagados suficiente buena que se la suponga , es siempre harto
mente para que el trabajador pueda vivir desgraciada.
con algun desahogo; todavía no existe des Lo que decíamos en aquella época , cuan
nivel entre el valor de los medios de sub do los amos no encontraban en la autoridad
sistencia y el salario , y por lo mismo no todo el apoyo que hubieran deseado , se lo
experimentamos los males que estan su repetiremos ahora con mucha mas claridad;
friendo otros paises. Si una que otra vez porque acostumbramos guardar el lengua-
se presentan estos inconvenientes es por ge severo para el tiempo de la prosperidad
breve tiempo y en reducido espacio , mas de aquel á quien nos dirigimos, ynosagra-
bien como síntomas que indican la aproxi da emplearlo mesurado y suave cuando se
macion de una enfermedad , que no su ver encuentra en situacion desventajosa ó aho
dadera existencia. gada. En nuestro concepto el medio eficaz
Los fabricantes de Cataluña se encuen de oponerse á los inconvenientes que para
tran , pues , en situacion mas ventajosa que los amos puedan traer las asociaciones de
los de Francia , Bélgica é Inglaterra ; y la los operarios os salir al encuentro de las
razon , la moral , la humanidad , y su pro necesidades á cuya satisfaccion se las des
pio interes exigen que no la dejen sin pro tina. Sin duda que lo mas sencillo y mas
vecho. En la actualidad las circunstancias breve es echar mano de la fuerza , resistir
políticas favorecen la causa del orden y no con el auxilio de ella á cuanto directa ó in
permiten desmanes de ningun género á los directamente se encamine á imponer con
 — 218
diciones á los amos, no parar la atencion versacion de caudales y sometida por fin á
siquiera en las causas que produzcan la reglas que hagan imposible ningun desper
inquietud y el mal estar, y empeñarse en dicio, ya por la variedad y carácter de los
no ver los males ó en no remediarlos des que en ello intervienen , ya tambien por la
pues de vistos;pero la razon y la experien publicidad á que en tiempos prefijados de
cia ensenan que semejante sistema es poco bieran someterse los administradores con
á propósito para consolidar una situacion , la rendicion de cuentas que manifiesten los
y qué lejos de extirpar los gérmenes de ingresos' y salidas de la caja.
discordia no hace mas que multiplicarlos y Es evidente que por este medio puede
avivarlos. lograrse todo lo que se podría esperar de
Las asociaciones en los trabajadores, su una asociacion : cuando esta carezca de ob
poniendo que estén destituidas de todo ca jeto nadie pensará en establecerla: si á al
rácter político , lo que es absolutamente guno se le ocurre este pensamiento encon
indispensable si no se quiere que peligre trará muy pocos (pie quieran tomar parte
continuamente la tranquilidad pública, pue en él ; y si uno y otro se verificare , el go
den proponerse dos objetos: 1.° el socorro bierno podrá decir con razon : « no quiero
mutuo en sus necesidades : 2." la combina que os asocies , pues estando ya cumplido
cion para evitar que los amos no rebajen el objeto que decís proponer, sospecho que
demasiado los jornales, ó no extiendan ex abrigais segundas intenciones cuya realiza
cesivamente el trabajo, Por lo tocante á lo cion puedo y debo impedir. »
primero el mejor medio de destruir seme De lo dicho se infiere la necesidad de
jantes asociaciones es dejarlas sin objeto ; y que todos los que tienen algo que perder
esto ¿cómo se logra? Haciendo que el tra procuren que la institucion de la caja de
bajador esté seguro del socorro el dia que ahorros se arraigue en el pais, que inspire
por falta de trabajo ó por enfermedad, no confianza á todas las clases , y que sobre
pueda ganar su subsistencia. Y cuando esto todo los pobres se aficionen á deponer en
decimos no queremos significar que este ella lo que hayan podido reunir despues de
socorro se lo dén los amos, bien que siem satisfechas las atenciones imprescindibles.
pre les aconsejaremos la beneficencia por Es preciso no olvidar que esta es una ins
los infelices, sino que les proporcionen por titucion naciente , que como tal es flaca ; y
medio de las instituciones convenientes el por lo mismo conviene rodearla de todo el
logro de lo mismo que intentaban con la prestigio que ha menester para grangearse
asociacion. En cada socio se imponía el sa crédito , é infundir seguridad á los intere
crificio de contribuir con una cantidad de sados.
terminada , y con la suma que se recogía No es tan fácil obviar el segundo incon
se formaba el fondo para sufragar á las ne veniente, es decir, el que losamos no au
cesidades; ¿por qué no se ha de obtener menten demasiado el trabajo, ó no limiten
el mismo resultado con las cajas de ahor el salario mas de lo que es justo; ó bien
ros? El trabajador cuando hallara la debi que los trabajadores no se entreguen á exi
da seguridad no solo de la conservacion de gencias injustas. Las oscilaciones de la in
lo que hubiese entregado en depósito, sino dustria son tantas que no es posible asentar
tambien del reembolso, con mas los inte una regla general en esta materia ; y ade
reses que se reputen justos y proporciona do
mas,queel esderecho
precisodeandar
propiedad
con mucho
estan i
dos, mas querrá naturalmente entenderse
con la caja de ahorros , que nó con otra en tocar áél, aun cuando sea con
asociacion cualquiera. Por de pronto expe de humanidad ó de conveniencia pública.
rimentará la ventaja de no haber de dis Parécenos no obstante que no es tan ardua
traerse de sus trabajos ó diversiones para la tarea que sea necesario desistir de aco
acudir á juntas en este ó aquel dia ; no meterla : si no se remediase todo el daño
tendrá necesidad de indisponerse con na al menos se evitaría una parte ; y á pro
die, por dar el voto á esta ó aquella per porcion que la experiencia andaría mos
sona , ú opinar en contra de lo que se in trando las ventajas y los inconvenientes,
tentase ejecutar. En la caja de ahorros verá se podrían introducir las mejoras compati
una institucion no solo autorizada sino pro bles con la justicia y aconsejadas por la
tegida por el gobierno , dirigida por per prudencia. Nos permitiremos algunas indi
sonas cuya independencia y probidad las caciones generales que puedan dar alguna
pondrá á cubierto de toda sospecha de mal luz sobre este particular.
 — 219 —
La relacion entre el trabajo y el salario tosamente las cuestiones que se ofrecieran
depende en gran parte del estado de la in sin que pudiera ejercer ninguna coaccion
dustria , porque cuanto mayor sea el be sobre los que no quisieran someterse á su
neficio que esta produzca al fabricante tan fallo. Esle tribunal procediendo sobre un re
to mas crecido podrá ser el salario. Ademas, glamento que podría formarse previamen
cuanto mayor sea el número de los traba te, y compuesto de individuos elegidos por
jadores menguará el valor del jornal , por los mismos interesados con arreglo á las
la sencilla razon de que la arftmdancia bases que se creyeran prudentes, debiera
acarrea baratura. Segun sean mas ó me estar presidido por la autoridad , nó para
nos altos los precios de subsistencia, y so que le comunicase fuerza coactiva, sino
bre todo de los alimentos de primera ne con el fin de que le diese prestigio , y has
cesidad , podrá el trabajador 'vivir con ta pudiera hacerle respetar , si por los des
diferente salario , bastándole en un tiempo manes de los litigantes se viera alguna vez
lo que en otro seria insuficiente. De estas en compromiso.
consideraciones resulta la dificultad de es El sistema de eleccion de los individuos
tablecer una regla general , y las oscilacio que deberían, componer dicho tribunal y el
nes á que está sujeto el valor del salario reglamento á que habría de conformarse
independientemente de la voluntad de fa en, sus procedimientos, seria menester que
bricantes y trabajadores, pues que la va fuesen objeto de detenida meditacion ; bien
riacion proviene de la misma naturaleza de que como se estarían palpando las ventajas
las cosas. Mas no puede negarse que del y los inconvenientes, no serian irremedia
conjunto de las expresadas circunstancias bles los errores cometidos en el acto del
y de otras que deben tenerse presentes planteo , pues que sucesivamente se po
atendiendo á las necesidades y costumbres drían hacer las enmiendas y mejoras acon
del pais , nace el que por ciertas tempora sejadas por la experiencia.
das se fije una relacion entre el trabajo y La base de eleccion podría ser de varías
el salario. Claro es que cuando una condi maneras, pero siempre se habría de salvar
cion de los trabajadores fuese geqeral , su el principio de que los interesados tuviesen
misma generalidad indicaría que el daño parte en ella. Sin embargo , debieran to
no dimana de la mala voluntad de los fa marse las oportunas precauciones para que
bricantes, sino del mismo estado de la in do se introdujesen los abusos de que son
dustria. Pero si uno ó pocos fabricantes se tan susceptibles semejantes actos , y no se
apartan de la regla á que los domas se con corriese el peligro de turbarse por ellos la
forman , lícito es sospechar que tratan de tranquilidad pública. Quizás podría adop
oprimir á los trabajadores, aprovechándo tarse el sistema de que en cada estableci
se del sudor del pobre sin atender á lo que miento fabril de un número de trabajadores
reclaman la justicia y la humanidad. ¿Cómo que se fijase , se eligiese un compromisario
hacerle entrar en razon ? Difícil es ejecu reuniéndose con los electores de dicha fá
tarlo por medios obligatorios, pues que en brica los de otras de menor número situa
todo caso siempre tiene el recurso de.decir, das á poca distancia, para lo cual podría
que le precisan á observar esta conducta dividirse la ciudad en distritos. La eleccion
circunstancias particulares que no debe re debiera verificarse sin admitirse discusiones
velar á nadie, y añadir que no conoce ni de ninguna clase , y hacerse de manera que
en los trabajadores , ni en los otros fabri distribuyéndose en muchas horas, no lle
cantes , ni en el gobierno , el derecho de gase á reunirse nunca un número conside
arreglarle los intereses de su casa ; y que rable. .Como estas elecciones debieran ser
asi como él es dueño de despedir á losope- por precision turbulentas en caso de ser
rarios siempre que lo crea conveniente, concurridas, quizás podría establecerse que
tambien pueden estos despedirle á él si se no tomasen parte en ella sino los que lle
conceptúan perjudicados. Esto en rigorosa gasen á cierta edad, pues que asi se logra
justicia ; mas como todos los hombres esti ría el doble objeto de que los electores no*
man en algo su buena reputacion , y no les fuesen en número tan crecido y por otra
agrade ocupar un lugar desventajoso entre parte menos propensos á excederse del que
los de su misma clase, no dudarnos que son por lo comun los jóvenes inexpertos.
surtiría buenos efectos un tribunal de paz, En cuanto á los fabricantes, claro es que
que compuesto de fabricantes y trabajado siendo mucho menor su número el sistema
res estuviese encargado de resolver amis electoral ofrecería muchos menos inconve
nientes; por lo que nos abstendremos de
descender á pormenores que mas bien sen
tarían en un reglamento que en un artícu
lo de una Revista.
Fácilmente se alcanzará que asi los fa
bricantes como los trabajadores estarían
interesados en elegir personas de inteligen
cia y probidad , pues que unos y otros pon
drían en manos de ellos una autoridad con
ciliadora, que si bien no tendría derecho
de obligar á la ejecucion de sus fallos, fue
ra no obstante atendida en muchos casos ,
siquiera por consideracion á los mismos
que la habrian constituido.
Los trabajadores debieran disfrutar el
derecho de nombrar para sentarse en el
tribunal de paz á las personas que bien les
pareciese , sin distincion de ninguna clase ;
porque hasta que hubiesen cobrado con
fianza en la nueva institucion las restriccio
nes que limitasen el círculo de los elegibles
serian miradas por ellos como insidiosas y
encaminadas únicamente á que el tribunal
estuviese todo compuesto de ricos. Deján
doles la latitud que desearan , es probable
que si nó desde luego, al menos despues de
alguna experiencia procurarían ellos mismos
buscar personas acomodadas que tuviesen
garantías de acierto en su inteligencia y
práctica en esta clase de materias , y que
ademas por la independencia de su posicion
no fueran sospechosos de cohecho.
Repetimos que conviene pensar sería
mente en este negocio; que conviene disi
par la odiosidad entre pobres y ricos; que
conviene no fiarse en situaciones pasage-
ras ; que la ciudad debe pensar en consti
tuirse por sí misma en tal estado que si en
el porvenir le caben en suerte autoridades
menos firmes y bien intencionadas, si el
pais vuelve á encontrarse envuelto en tur
bulencias políticas, sea posible evitar los
desastres de que en los últimos años ha si
do víctima Barcelona. No olvidemos que
la situacion de España está muy lejos de
ser satisfactoria, que el horizonte está muy
lejos de presentarse bien claro: no lo es
peremos todo del gobierno ; contemos con
nuestros esfuerzos ; que de abandonarnos
hoy á excesiva confianza podríamos arre
pentirnos mañana.
POLEMICA RELIGIOSA.
CARTA DÉCIMOTERCIA
L UN ESCÉPTICO EN MATERIAS DE RELEGION-
Mi estimado amigo : Ya veo yo que es
empeño inútil el de obligarle á V. á un»
discusion seguida sobre los dogmas de la
Religion y los principios en que se fundan,
pues que fiel á su sistema de no atenerse
á ningun sistema , y guardando inviolable
mente la regla de su método , que es no
observar ninguno , revolotea como marípo
sa de flor en flor , de suerte que- cuando le
creia uno engolfado en alguna cuestion ca
pital y decidido á continuar por largo tiem
po el ataque empezado contra uno de los
puntos de las murallas de la ciudad santa,
levanta de improviso los reales, se aposen
ta en otro campo , y desde aVlí- amenaza
abrir nueva brecha esperando que yo acu
da á defender el punto atacado , para lue
go dirigirse á otra parte y fatigarse inútil
mente sin obtener el resultado que deseo.
Pero digo mal cuando afirmo que me he
fatigado inútilmente ; porque si bien es
verdad que no me ha sido posible hasta
ahora apartarle á V. de su error, porque
se ha resistido siempre á sujetarse al tra
bajo de una discusion sostenida con el de
bido orden y encadenamiento, me lisonjeo
no obstante de que habré logrado devane-
cerle á V. algunas preocupaciones, que sin
duda le habrian obstruido el paso en el
camino de la fe , si es que algun dia ilus
trado su entendimiento por inspiraciones
superiores , movido su corazon por la gra
cia del Señor , se resuelve á emprenderle
con seriedad , rompiendo las trabas que le
detienen , y saliendo del infeliz estado en
que se encuentra , en que espero no le ha
de sorprender la hora de la muerte.
Disimulándome V. el preámbulo que
quizás calificará de inoportuno y que yo
considero como inoportunidad saludable,
voy á responder á las dificultades que me
propone sobre una de las virtudes mas eo
 — 221
carecidas por la Religion cristiana. Alégre de los místicos mas afamados. Paréceme
me en gran manera de que hayamos salido que el dilema no es tan perfecto que no
de las disputas que eran objeto de la carta deje salida ; antes creo que ni será preciso
anterior ; porque si bien versaba sobre devorar absurdos , ni tampoco entregarse
asunto muy trascendental y de altísima im al repugnante oficio del ama de D. Quijo
portancia , la materia era de suyo tan de te, y del cura de su lugar.
licada y vidriosa , que es preciso andar V. que se precia de caballeroso, creo
siempre midiendo las palabras y en busca que no estará reñido con Santa Teresa de
de expresiones, que dejando traslucir la Jesus, á quien si reputa por ilusa, al me
verdad cubran con tupido velo cuanto pu nos no podrá dejar de tributarle el mereci
diera ofender las buenas costumbres y las do elogio por sus eminentes virtudes, por
delicadas consideraciones debidas al pudor. su alma Cándida , su bellísimo corazon , su
Al fin la humildad es cosa sobre la cual es talento claro y penetrante , y su pluma tan
lícito hablar sin rodeos, no habiendo el pe amable como subhme. A esta Santa ya sa
ligro de que una palabra poco mesurada be V. que algo se le alcanzaba de achaque
haga salir los colores al rostro. de virtudes cristianas, y que con lo mucho
Algo volteriano está V. cuando habla de que habia meditado y leido , y consultado
la virtud de la humildad, y le aplica iró ademas con hombres sabios, ó como ella
nicamente el dictado de sublime que los dice, grandes letrados, debia de saber en
cristianos nos complacemos en tributarla. qué consistía la humanidad , y cómo era
Segun parece, se ha formado V. ideas muy entendida, y explicada esta virtud en el
equivocadas sobre la naturaleza de dicha seno de la Iglesia Católica. Y ¿cree V. que
virtud , pues que llega á asegurar que por la Santa pensaba que para ser humilde era
mas que lo desease le seria imposible el ser preciso comenzar engañándose á sí propia.
humilde á la manera que lo exigen los li Apostaría yo que V. no acierta en la defi
bros de mística , por la sencilla razon de || nicion que da de la humildad ; defmicion
que no cree permitido el engañarse á sí admirable, y que, preciso me es decirlo ,
mismo , y de que aun cuando se esforzase parece excogitada á propósito para contes
en ello tampoco le seria dable conseguirlo. tar á las dificultades de V. Refiere la Santa
Gana de reir me ha dado el que V. se ima que no comprendía por qué la humildad
gine haberme propuesto una dificultad in- era tan agradable á Dios, y que discurrien
soluble con aquello de que no le es posible do un dia sobre este punto alcanzó que era
persuadirse
los hombres que
, pues
sea que
el mas
está estúpido
viendo tantos
entre j| asi , porque la humildad es la verdad. Ya
ve V. que no se trata de engaño , y que
otros que evidentemente no poseen los po tan distante está de obligarnos á él la hu
cos ó muchos conocimientos que á V. le mildad , que antes bien con ella disipamos
han proporcionado la educacion y la ins el engaño ; porque su mérito mas sólido ,
truccion , ni tampoco que sea el mas per el título por el cual es agradable á Dios , es
verso entre los mortales , supuesto que ni el ser verdad.
roba , ni asesina , ni comete otros actos á Desenvolveré en pocas palabras esa her
que se arrojan algunos de sus semejantes ; mosa sentencia de Santa Teresa de Jesus ;
y que sin embargo , si escuchamos la doc y no necesitaré mas que esta luminosa ob
trina de los místicos , esta es la perfeccion servacion de la Santa para hacerle com
de la humildad y á ella llegaron los Santos prender á V. lo que es la humildad, en sus
mas distinguidos , mas adelantados en esta relaciones con nosotros mismos , con Dios
virtud. No tengo tampoco inconveniente y con el prójimo.
en que V. no se encuentre de humor para ¿Está en oposicion con la virtud de la
andarse, como dice, por esas calles ha humildad el que conozcamos las buenas
ciendo del loco con el fin de que los demas dotes naturales ó sobrenaturales con que
le desprecien , y tener asi ocasion de ejer Dios nos ha favorecido? Nó, antes al con
cer la humildad ; pero lo que extraño es trario , revuelva V. todas las obras de los
que tales argumentos los repute V. por teólogos escolásticos y místicos, y á todos
invencibles, y que cante de antemano la los encontrará de acuerdo en que dicha
victoria, intimándome que ó es preciso tra virtud no se opone á semejante conoci
gar los absurdos que de estas máximas y miento. Quien experimenta á cada paso
ejemplos resultan , ó condenar las vidas de que comprende con mucha facilidad cnan
grandes 8antos y echar al fuego las obras to lee ú oye, que le basta fijar su medita
 — 222 —
eían sobre las cuestiones mas ahstrusas pa distinguido, cuanto mas claro sea el enten-
ra que se le presenten desde luego claras y dimiento para conocer el bien y el mal ,
despejadas , no hay inconveniente en que tanta mas estrecha cuenta deberá dar .1
se halle interiormente convencido de que Dios que tal suerte le ha hecho objeto de
Dios le ha dispensado este señalado favor ; su bondadosa munificencia. Quien tenga
mas diremos, le es imposible dejar de abri virtudes no hay inconveniente en que lo
gar esta conviccion que tiene por objeto un reconozca asi, confesando al propio tiempo
hecho que está presente á su ánimo y de que son debidas á particular gracia del cie
que le asegura su conciencia propia , como lo ; que si no comete las maldades á que so
(pie es una serie de actos que acompañan arrojan otros hombres es porque Dios le
de continuo su existencia, que constituyen tiene de su mano ; que si hace el bien y
su vida intelectual, aquella vida íntima de evita el mal por medio de la gracia, esta
que estamos tan ciertos como de la existen gracia le ha sido concedida por Dios ; que
cia de nuestro cuerpo. ¿Podrá V. figurarse si por su misma índole está inclinado á
que Santo Tomas estuviese persuadido de ciertos actos virtuosos, causándole horror
que era tan ignorante como los legos de su los vicios opuestos , esa índole le ha venido
convento? San Agustín ¿era posible (pie tambien de Dios; en una palabra, tiene
creyese que conocía tan poco la ciencia de motivo para estar contento , mas nó para
la Religion como el último del pueblo á engreirse, supuesto quesería injusto atri
quien la explicaba? San Gerónimo que tan buyéndose lo que no le pertenece y de
aventajados conocimientos poseia en las fraudando á Dios la gloria que le corres
lenguas sabias , y en cuanto es menester ponde.
para interpretar atinadamente la Sagrada Oiga V. sobre este particular al gran
Escritura, ¿dirémos que en su interior no Santo, al hombre que tan alto se levantó
estaba penetrado de que poseia mas (pie en todas las virtudes cristianas, especial
medianamente el griego y el hebreo, y de mente en la de la humildad ; á San Fran
que sus investigaciones con que se remon cisco de Sales, y vea V. como no solocon-
taba hasta los fuertes ile la erudicion ha viene en que es lícito reconocer los bienes
bian sido del todo infructuosas? Nó; no que nosotros tenemos, sino tambien en que
dicen los cristianos tales disparates. Una es permitido y muchas veces saludable, el
virtud tan sólida , tan hermosa , tan agra lijar sobre ellos la atencion , el pararse de
dable á los ojos de Dios no puede exigir de tenidamente á considerarlos.
nosotros tamañas extravagancias; no puede «Pero tú desearás, Filotea , que te con
exigir que cerremos los ojos para no ver lo duzca mas adelante en la humildad ; por
que es mas claro que la luz del dia. que lo que de ella hasta aquí he tratado,
Bien entendida la humildad trae consigo mas parece sabiduría que humildad. Paso
el claro conocimiento de lo que somos, sin pues adelante : muchos no quieren ni se
añadir ni quitar nada; quien tenga sabidu atreven á pensar y considerar en particular
ría puede interiormente reconocerlo asi , las gracias y mercedes que Dios les ha he
pero debe al propio tiempo confesar que la cho , temerosos de dar en la vanagloria y
ha recibido de Dios, y que á Dios se debe complacencia , en lo cual ciertamente se
el honor y la gloria. Debe reconocer tam engañan : porque como dice el grande
bien que esta sabiduría si bien levanta mu Doctor Angélico, el verdadero medio de
cho mas su entendimiento que el de los llegar al amor de Dios es la consideracion
ignorantes , ó de los menos sabios que él , de sus beneficios , porque cuanto mas los
le deja sin embargo muy inferior á los de- conociéremos, tanto mas le amaremos; y
mas sabios que se le aventajan en extension como los beneficios particulares mueven
y profundidad. Debe al propio tiempo con mas particularmente que los comunes; asi
siderar que esta sabiduría no le da derecho tambien deben ser considerados mas aten
para despreciar á nadie, pues que tenién tamente. Es cierto que nada nos puede hu
dola por especial beneficio de Dios, de la millar tanto delante de la misericordia de
misma manera la hubieran poseido los otros Dios como la muchedumbre de sus benefi
si el Criador se hubiese dignado otorgárse cios : ni nada nos puede humillar tanto de
la. Debe considerar que este privilegio no lante de su justicia como la multitud de
le exime de las flaquezas y miserias á que nuestras maldades. Consideremos loque ha
está sometida la humanidad , y que cuanto hecho por nosotros , y lo que nosotros he
mas sean los favores con que Dios le haya II mos hecho contra él , y como consideramos
 — 223 —
por menudo nuestros pecados , considere mujeres mas perdidas, cuando le consta
mos asi por menudo sus gracias. No hay ba muy bien la pureza de su cuerpo y al
que temer que el conocimiento de lo que ma , cuando sabia los inefables beneficio*
ha puesto en nosotros nos desvanezca , con con que el Señor la estaba favoreciendo?
tal que atendamos á esta verdad, que cuan Claro es que nó. Mas diré, ¿Debemos su
to hay bueno en nosotros, no es nuestro. poner que se creyese con un solo pecado
¿Los mulos, dime, dejan de ser torpes y mortal en la conciencia? Es cierto que nó;
hediondas bestias porque estén cargados de pues del contrario no se hubiera atrevido
muebles preciosos y olores de príncipes? á recibir el augusto Sacramento del Altar,
¿Qué tenemos nosotros bueno, que no ha que sin embargo recibia con tanta frecuen
yamos recibido? Y si lo hemos recibido por cia y con tales éxtasis de gratitud y de
qué nos queremos ensoberbecer? (Ad. amor. Ahora bien: la Santa no ignoraba
Cor. 4, 7.) Al contrario, la viva conside que en el mundo habia muchas personas
racion de las mercedes recibidas nos hace culpables de pecados graves y gravísimos á
humildes, porque el conocimiento engen los ojos de Dios, ella era la primera en de
dra el reconocimiento; pero si viendo los plorarlo y en rogar al cielo que se dignase
beneficios que Dios nos ha hecho nos lle mirar á aquellos desgraciados con ojos de
gase á inquietar cualquiera suerte de vani misericordia, luego cuando aseguraba que
dad , el remedio infalible será recurrir á la era la muger mas pecadora de la tierra no
consideracion de nuestras ingratitudes, de podia entenderlo en un sentido rigoroso
nuestras imperfecciones y de nuestras mi tal como V. parece quererlo interpretar.
serias. Si consideramos lo que hacíamos ¿Qué significaba, pues? hélo aquí muy
cuando Dios no estaba con nosotros, cono sencillamente. Asistamos á una de las es
ceremos que lo que hacemos cuando nos cenas que se representaban en su espíritu,
acompaña no es de nuestra industria ni de y comprenderemos perfectamente el senti
nuestra cosecha. Alegrarémonos verdade- do de las palabras que son para V. piedra
mente y regocijarémonos porque tenemos de escándalo. Puesta en presencia de Dios
algun bien; pero glorificaremos solo á Dios con fe viva, con caridad ardiente, con el
como autor de él. Asi la Santísima Virgen corazon contrito y humillado , examinaría
confesó que Dios obró cosas grandes ; pero los recónditos pliegues de su corazon , y
esto fue por humillarse y engrandecer á observaría de vez en cuando algunas lige
Dios: Mi alma, dice, engrandece al Señor, ras imperfecciones que no habian sido con
porque ha hecho en mí cosas grandes. sumidas todavía por el fuego del divino
(Luc. i, 46, 49.) (San Francisco de Sales, amor ; recordaría tambien los tiempos pa
introduccion á la vida devota, parte 3.a, sados en los que, no obstante de ser ya
cap o.°) muy virtuosa, no habia entrado de lleno
No cabe testimonio mas concluyente en en el camino sublime que la condujo á la
favor de la doctrina que andaba exponien altura de santidad que hacia de ella un án
do; ya ve \ . que no se trata de engañarse gel sobre la tierra. Se ofrecerían á su me
á sí mismo, sino de conocer las cosas tales moria las faltas leves en que habia incur
como son en sí. «Entonces, me objetará V., rido, la poca prontitud en seguir las ins
I cómo es que los grandes Santos digan á piraciones del cielo, y comparado todo con
l>oca llena que sou los mayores pecadores los beneficios naturales y sobrenaturales de
del mundo, que son indignos de que la que el Señor la habia llenado . y medido
tierra los sostenga , que son los mas ingra todo con su viva fe, con su inflamada ca
tos entre los hombres? » Entienda V. el ridad , con aquella íntima presencia de
verdadero sentido de estas palabras; ad Dios que la tenia fuera de esta vida mor
vierta que andan acompañadas de un sen tal, y la hacia morar en regiones superio
timiento de profunda compuncion ; que son res, veria en toda su negrura, la fealdad
pronunciadas en momentos en que el espí del pecado aun venial , consideraría la in
ritu se anonada en presencia del Criador ; gratitud de que se hiciera culpable no pres
y echará V. de ver que son susceptibles de tándose desde luego con mucho mas ardor
interpretacion muy razonable. Aclarémos del que lo hiciera á los llamamientos del
lo con un ejemplo. Cuando Santa Teresa Señor; y entonces puesta en parangon la
de Jesus decia que era la mayor pecadora santidad de su alma con la santidad divina,
de la tierra ¿ deberemos pensar que ella s<i ingratitud con los beneficios de Dios, su
creyese ser culpable de los delitos de las amor con el amor que Dios le manifesta
 — 224 —
ba , se anonadaría en presencia del Altísi lle , y que lo reconozcamos francamente ,
mo , perderia de vista el bien que en sí te tributándole el debido homenage , sin el
nia , y fijos únicamente los ojos en su de mezquino temor de que pueda salir perju
bilidad y miseria, exclamaría que era la mas dicada nuestra gloria.
pecadora entre las mugeres , que era la Ya que acabo de pronunciar la palabra
mas ingrata entre todas las criaturas. ¿Qué gloria, desearía saber si V. lleva tambien
encuentra V. aqui de irracional y de falso? á mal que la humildad no nos permita sa
¿ Se atreverá V. á condenar la expansion borearnos en las alabanzas de los hombres
de un corazon humilde que anonadado en y nos inspire sentimientos superiores á ese
presencia del Señor reconoce sus defectos, humo que desvanece á tantas cabezas. Si
y considerándolos con toda viveza , excla asi fuere , como no lo dudo , me bastará
ma, que son los mayores pecados del mun una reflexion para convencerle á V. de su
do? ¿No ve V. aqui mas bien la expresion error. ¿Le parece á V. bien todo lo que
de una caridad ardiente , que palabras de hace al hombre mas grande? Creo que no
engaño ? tendrá reparo en decirme que sí. Pues
Si quisiera valerme de un lenguage afi bien , el mismo mundo mira como un hé
losofado , le diría á V. que la humildad roe á aquel que haciendo acciones dignas
cristiana es lo mas á propósito para formar de alabanza , no se para en ella , la menos
verdaderos filósofos ; si es que la verdade precia, y al sentir el fragante aroma pasa
ra filosofía ha de consistir en hacernos ver sin detenerse , con la cabeza llena de pen
las cosas tales como son en sí, sin añadir samientos elevados, con el corazon henchi
ni quitar nada. La humildad no nos apo do de sentimientos generosos; el mundo,
ca, porque no nos prohibe el conocimien pues , hace justicia á los despreciadores de
to de las buenas dotes que poseamos, solo la vanidad humana , es decir, á los que
nos obliga á recordar que las hemos reci practican actos de verdadera humildad :
bido de Dios , y este recuerdo lejos de aba no quiera V. ser menos justo que el mun
tir nuestro espíritu lo alienta, lejos de do. ¿Desea V. una contraprueba delo que
debilitar nuestras fuerzas las robustece , por acabo de decir? Héla aqui : los que no son
que teniendo presente cuál es el manan humildes buscan la alabanza; y sabe V. lo
tial de donde nos ha venido el bien, sabe que se adquieren , tan pronto como se tras
mos que recurriendo á la misma fuente con luce su afan? El ridículo y la burla. Cuan
viva fe y rectitud de intencion , manarán do deseamos parecer bien á los ojos del
de nuevo copiosos raudales para satisfacer mundo, si no somos humildes en reali
nos en todo lo que necesitemos. La hu dad , lo aparentamos ; porque en lo exte
mildad nos hace conocer el bien que po rior damos á entender que no hacemos ca
seemos, pero no nos deja olvidar nuestros so de la alabanza ; y si se nos tributa , la
males , nuestras flaquezas y miserias ; nos resistimos diciendo que es inmerecida.
permite conocer el grandor, la dignidad Vea V. , mi estimado amigo, cuan sabia,
de nuestra naturaleza y los favores de la cuán noble , cuán sublime es la Religion
gracia , pero no consiente que exageremos cristiana , pues en la virtud que tanto aba
nada , no consiente que nos atribuyamos timiento parece traer consigo, está encerra
loque no tenemos, ó que teniéndolo nos do el secreto de adquirir gloria sólida aun
olvidemos de quien lo hemos recibido. La entre los hombres: estos la ofrecen gustosos
humildad , pues , con respecto á Dios nos á quien la merece y no la busca; pero des
inspira el reconocimiento y la gratitud , precian y ridiculizan al que la solicita.
nos hace sentir nuestra pequenez en pre Tanta es la fuerza de las cosas que la mis
sencia del Ser infmito. ma soberbia para saciar su sed de gloria
Con respecto á nuestros prójimos, la se ve precisada á negarse á sí misma , á
humildad no nos permite exaltarnos sobre cubrirse con el manto de la humildad ; asi
ellos exigiendo preeminencias que no nos se verifica aun en la tierra aquella senten
corresponden ; nos hace afables en el tra cia de la Sagrada Escritura : « Quien se
to , porque haciéndonos conocer nuestras exalta será humillado , y quien se humilla
flaquezas nos vuelve compasivos para con será exaltado.»
las que sufren Jos demas , y conservando Basta por hoy de humildad ; creo que
nuestro corazon exento de envidia que siem con lo dicho hasta aqui se quedará A7, bien
pre acompaña ála soberbia, hace que res convencido de que para ser verdaderamen
petemos el mérito dondequiera que se ha te humilde conforme al espíritu de la Re
ligion cristiana, no necesita V. ni andarse | ocupemos delo que dijo y de lo que pensó,
haciendo el loco por las calles , ni creer supuesto que á un hombre de esta clase
que es digno de ser llevado á presidio ó al debemos considerarle como profundamen
cadalso, ni tampoco que no tiene mas co te instruido en la ciencia de la Religion , é
nocimientos de ciencias y literatura que el incapaz de ponerse en desacuerdo con las
que no sabe deletrear. Si alguna vez en doctrinas de la Iglesia.
cuentra V. en las vidas delos Santos algun Importa tanto mas el examinar las ideas
hecho que no pueda V. explicar por las re de Tomas Moro cuanto que los enemigos
glas arriba establecidas , recuerde V. que de la verdad podrían aprovecharse de su
nosotros no tenemos inconveniente en de nombre para dar á entender que conde
cir que hay cosas que son mas bien para nando las doctrinas de algunos innovado
admiradas que para imitadas; y ademas, res, condenamos tambien las de uno de los
no quiera V. juzgar por consideraciones ornamentos mas brillantes de la Iglesia
mundanas, lo que marcha por caminos católica.
desconocidos al comun delos mortales. Es Creemos poder demostrar que las opi
to es lo que nosotros llamamos misterios y niones de Tomas Moro nada tienen de co
prodigios de la gracia ; y que Vds. los filó mun con las de Saint-Simon, Fourrier ú
sofos apellidaran exaltacion y exageracion Owen , y que si bien habría mucho que
del sentimiento religioso. Entre tanto espe decir sobre algunos pasages de su obra , se
ra ocasiones de complacerle á V. este su conoce no obstante que aun cuando supo
afectísimo y S. S. — J. B. ne que prescinde de la Religion cristiana ,
no perdía de vista la luz que de ella podía
recibir en la resolucion de los intrincados
problemas que se le iban ofreciendo.
EL SOCIALISMO. La publicacion de la famosa Utopia de
Tomas Moro á principios del siglo XVI,
es un fenómeno que indica á las claras el
movimiento de los espíritus en dicha época;
Artículo 5.° y que demuestra cuán falsamente han afir
mado Iqs protestantes y los incrédulos, que
sin la revolucion religiosa promovida por
LA UTOPIA DE TOMAS MORO. Lutero el entendimiento humano hubiera
permanecido en las tinieblas y en la escla
vitud. En este notabilísimo escrito se echan
Entre los filósofos que se han distingui de ver miras tan elevadas, sentimientos
do en la Europa moderna por sus ideas re tan generosos, tal deseo de mejorarla suer
formadoras de la sociedad, figura un nom te del humano linage , que es asombroso
bre ilustre en los anales de la Iglesia y en el que un hombre de aquellos tiempos vie
los fastos del humano linage ; ya que ilus ra con tanta claridad los altos problemas
tres son en todos tiempos y paises la sabi sociales y se arrojase á emitir sus ideas con
duría, la virtud y el heroismo. Hablamos tanta libertad.
de Tomas Moro , de ese gran canciller de Ya desde entonces condenaba el ilustre
Inglaterra que selló con su sangre genero cancilleren susescritos, asila vagancia co
sa su adhesion á la fe, y que se atrevió á mo el exceso del trabajo á que estan alter
resistir á la tiranía de Enrique VIII ante nativamente sujetos los pobres de nuestro
poniendo los deberes de su conciencia á su tiempo. Está á cargo de los magistrados si-
fortuna , á los atractivos de su alta catego fograntos, decia, cuidar y reconocer que
ría y á su propia existencia. Quien marcha no haya vagamundos , sino que cada uno
impávido al cadalso por no hacer traicion esté cuidadosamente ocupado en su minis
á la causa de Dios; quien obedece primero terio. No comienzan su labor muy de ma
á este que á los hombres , ofreciendo su ñana, ni trabajan continuamente hasta muy
vida en un patíbulo, si al mismo tiempo ha entrada la noche , ni se fatigan con ince
hablado sobre la sociedad manifestando sante molestia como las bestias, porque es
ideas nuevas , planes de reforma que afec infelicidad mas que de esclavos la de los
tarían profundamente los sistemas actuales, que perpetuamente han de estar trabajan
y mucho mas hubieran afectado los que do , como sucede á los que viven fuera de
regian en su tiempo , bien merece que nos Utopia.
TOMO II. 15
 - 226 —
Señalaba uno de los medios mas á pro tores costarán : y sin acordarse de tamaño
pósito para aumentar la riqueza , y tener beneficio , cuando estos se hallan en nece
la abundancia de todas las cosas para las sidad, despues de haber pasado largos años
necesidades y comodidades de la vida , el con graves enfermedades , los recompensa
que no hubiese en la sociedad muchos bra dejándoles morir en extrema pobreza. Y
zos improductivos que consumiesen el fru ¿ qué diremos de los ricos que se quedan
to del trabajo de los laboriosos. Quejábase con el salario de los pobres, no solamente
de que casi todas las mugeres y otras mu con violacion y engaño , sino también con
chas clases permaneciesen en la ociosidad , el pretesto de las leyes? Asi, lo que antes
y de que fuera tan reducido el número de parecía injusto como era el no retribuir á
los que se ocupaban en la produccion de los que habian hecho algun bien y servicio
las cosas necesarias, añadiendo, que si los á la república , se escusa con el estableci
que se emplean en artes inútiles y los hol miento de leyes nuevas , disfrazando con
gazanes que pasan sus dias en el ocio y en el nombre de justicíala ingratitud y la per
la flojedad , se ocuparan en obras de pro versidad. Estas invenciones de los ricos , so
vecho , poco tiempo bastara para abundar color del bien público se convierten en le
de todas las cosas necesarias a la subsisten yes ; los hombres dañinos se reparten entre
cia y al regalo. « En otras repúblicas, de ellos con insaciable codicia , las cosas que
cía , aunque sean prósperas y florecientes debian proveer á la subsistencia de todos.
y nadie terna morirse de hambre, procu
ran no obstante mas sus comodidades par « Revolved en vuestro ánimo lo que su
ticulares que la conveniencia pública.» cede en un año estéril en que millares de
personas mueren de hambre ; llanamente
« ¿Atreveráse alguno á comparar la equi me atreveré á afirmar , que si al fin de
dad de otra gente con la igualdad de la re aquella carestía se manifestasen los grane
pública de Utopia? ¿Qué justicia es esa que ros de los ricos se hallaría tanto trigo que
un noble ó un plebeyo usurero , ú otro que repartido entre los infelices, ni uno solo
ó no se emplea en nada , ó cuyos servicios hubiera perecido de necesidad. Fácilmente
son poco necesarios , se adquiera con la pudiera haberse proveido al sustento de
ociosidad el vivir con esplendor y regalo , todos , si el dinero inventado para nuestro
y un esclavo, un hombre del campo, ó un bien no hubiese servido á estorbar el re
oficial que trabajando de dia y de noche medio ,de los males. No me cabe duda de
con tal fatiga que no pudiera tolerarla un que tambien los ricos sienten y entienden
bruto, gane escasamente el alimento que asi estas cosas , y que no ignoran cuanto
se proporcionan con menos incomodidad mejor fuera la condicion en que no se ca
los animales, que ni andan tan cansados, reciese de nada necesario, librándose de
ni los atormenta el temor de que pueda innumerables daños, que no el vivir ellos
faltarles lo que necesitan? Al infeliz jorna con riquezas tan abundantes y muchas su-
lero lo escaso de su trabajo y el recuerdo perfluas. Yo tengo por cierto que el respe
de que ha de pasar la vejez en la pobreza to debido á la autoridad de Jesu-Cristo, el
leaguijonea y aflige: el salario estan tenue cual con su sabiduría y bondad pudo acon
que apenas le basta para el sustento , y asi sejar aquello que era mejor, hubiera so
no le es posible ahorrar algun caudal que metido el mundo á estas leyes, si no se hu
le ayude á pasar dias menos desgraciados , biera opuesto la soberbia que no estima en-
cuando la ancianidad haya quebrantado tanto los bienes propios como los agenos
sus fuerzas. ¿Por ventura no es ingrata é deleitándose en afligir á los pobres.». . .
injusta aquella república que desperdicia
grandes dádivas y caudales en los que se « Esta quisiera ser tenida por diosa, aun
llaman nobles, en los artífices de cosas va cuando no hubiese miserables en el mun
nas , en los bufones , en los inventores de do á quienes pudiera mandar , y de quie
deleites superfluos, y en otros objetos por nes pudiera triunfar resplandeciendo con
este tenor, no mirando con la debida be las desdichas agenas, y haciendo alarde de
nignidad y solicitud á los agricultores y ar su poder y riquezas , con lo cual aflige y
tesanos , sin los cuales no puede conser aumenta la miseria y la necesidad.»
varse la repúblira? Desagradecida, abusa Por lo tocante á lo organizacion de su
de los trabajos que pudieran serle de pro república vamos á dar una idea á los lec
vecho, olvidando los afanes que á sus au tores , que sin duda se complacerán en las
 — 227
miras grandiosas, y sentimientos apacibles tores de la labranza avisan á los magistra
de aquella alma tan hermosa y elevada. dos del número de brazos que se han me
Mas no esperen encontrar aqui los proyec nester, los que saliendo de la ciudad un
tos inmorales de Saint Simon, Fourrier ú dia sereno , dan cima á la faena en pocas
Owen ; muy al contrario el insigne canci horas, poniendo el grano á cubierto de to
ller , al paso que se proponía presentar el do contratiempo.
bosquejo de una nueva república en nada Todos los años eligen un magistrado
parecida á las existentes , respetaba sin em para cada treinta familias: en su lengua
bargo los eternos principios de la moral ; antigua le llamaron Sifogranto, y en la
y lejos de soltar la rienda á las pasiones , y moderna Filarco. Estos filarcos estan some
de esparcir la semilla de todos los vicios tidos de diez en diez á otro magistrado
como lo han hecho los innovadores de nues superior , que antiguamente apellidaban
tros tiempos, solo trataba de hacer mas fe Tranivoro, y ahora Protofilarco. Los sifo-
lices á los hombres refrenando sus malas grantos son en número de doscientos , y
inclinaciones y llevándolos por el camino prestan juramento de que elegirán en vo
de la virtud. tacion secreta por príncipe áuno de cuatro
En la isla de Utopia tiene cincuenta y que propusiere el pueblo , y al que ellos
cuatro ciudades, todas iguales en idioma, juzgaren mas conveniente. La dignidad
leyes é institucioues, y construidas bajo un de príncipe es vitalicia , á menos que no
mismo plan. Las mas cercanas estan á vein venga en sospecha de que quiere tiranizar
te y cuatro mil pasos; pero ninguna tan el Estado. Los tranivoros consultan con
apartada de las otras que un peon no pu el príncipe cada tres dias, á no ocurrir
diese andar el camino en una jornada. La algun negocio que exija se junten con mas
capital se llama Amauroto , está sentada en frecuencia . y no toman ninguna determi
medio de la isla , y á ella concurren cada nacion sin que la hayan discutido tres dias
año tres ciudadanos expertos y ancianos de antes: á veces se tratan tambien los nego
las ciudades subalternas. cios en las juntas generales de toda la isla.
Ninguna ciudad tiene de término mas de Es costumbre en el senado el no entablar
veinte mil pasos en contorno , excepto las discusion sobre un asunto el primer dia
que estan mas desviadas, exigiéndolo asi que se le propone ; evitándose de esta ma
la situacion en que se encuentran con res nera el que cada cual se arroje á decir in
pecto á otras. Los labradores se consideran consideradamente lo primero que se le
mas bien como usufructuarios que como ocurre, y que despues se obstine en defen
señores de las tierras. Cada familia rústi der su dictámen , mas bien por vergüenza
ca consta á lo menos de cuarenta personas de abandonarlo , que por miras de utilidad
á quienes se les señala un padre y ma pública
dre de familia de adelantada edad y cos No se permiten juegos de dados , y solo
tumbres venerables : formándose con cada usan dos muy parecidos al ajedrez ; el uno
treinta cortijos una especie de distrito que es una batalla en que los de una parte des
tiene designado su geíe. pojan á los de la opuesta , y el otro tiene
Los ciudadanos salen sucesivamente al un objeto altamente moral , pues que es
campo para ocuparse de la labranza, y cada una especie de escuadron en que los vicios
año vuelven á la ciudad veinte individuos pelean contra las virtudes, y se opone cada
de cada una de las familias agrícolas , des vicio á la virtud correspondiente ; trabán
pues de haber residido dos años en las al dose entre los dos la lucha , y manifestán
querías. Mas no queda por esto ningun dose en Ios medios que emplean lo que da
vacío , porque salen otros tantos de la ciu en realidad el triunfo á la virtud sobre el
dad para reemplazarlos. Asi logran que na vicio , y los ardides con que aquella se de
die ignore el arte de labrar los campos, que fiende de los ataques de este.
todos se acostumbren á la fatiga de estos Las ciudades se componen de familias ,
trabajos , dejando al propio tiempo en li los hijos y los nietos viven bajo el gobierno
bertad de continuar dedicados á la agricul y obedienca del mas anciano , á no ser que
tura á los que gusten de ella. Todos los la mucha edad le haya enflaquecido la ra
instrumentos de labranza los suminisrra el zon, que en tal caso le sucede el inmedia
magistrado de la ciudad , sin que le cuesten to Si alguna familia está falta de indivi
nada al que los recibe. Y es de notar que duos , se los prestan las otras. Cuando la
en llegando el tiempo de la siega los direc II poblacion se multiplica demasiado , envían
 el sobrante á otras ciudades donde escasee;
y si toda la isla rebosa de gente fundan
colonias en las tierras inmediatas.
Cada ciudad se divide en cuatro cuarte
les, y en medio de cada uno de estos hay
una plaza donde se hallan todos los produc
tos de la tierra y de las artes. Todo padre
de familias se lleva lo que necesita para sí
y los suyos, sin dar dinero ni otra recom
pensa. Las reses muertas las ponen en lu
gar donde se puedan lavar bien : y es
notable que no permiten que ningun ciuda
dano se ocupe en degollar, desollar ni cor
tar, porque temen que con esta costumbre
no se vuelvan crueles é inhumanos, per
diéndose poco á poco el horror á estos ac
tos , que siempre encierran algo de atroz y
repugnante. Asi es que solo los esclavos
estan encargados de estas ocupaciones.
Los ciudadanos tienen mesa comun , y
es curioso el sistema que se sigue en estos
banquetes. Cada barrio tiene unas salas
públicas donde inoran los sifograntos , y á
cada uno de estos se le señalan treinta fa
milias , acomodándose quince de ellas á
cada lado de la mesa. A horas señaladas los
despenseros acuden á la plaza para pro
veerse de lo necesario , bien que es preciso
que aguarden á que el despensero del hos
pital haya tomado lo que haya menester
para las necesidades y regalo de los en
fermos.
En cada ciudad hay cuatro hospitales
públicos; estan á las inmediaciones de ella,
pero fuera de las murallas ; son tan gran
des, que al verlos cualquiera diria que el
edificio es un pueblo. La buena disposicion
de las salas , la abundante provision de todo
lo necesario , la solicitud y caridad del ser
vicio, la asistencia de médicos doctos , en
una palabra , la reunion de cuantas cir
cunstancias se pueden desear, hace que los
enfermos quieran mas pasar á ellos que no
continuar en su propia casa.
En llegando labora de comer ó de cenar
las familias son llamadas á son de trompeta;
y si algunos quieren llevarse alguna refac
cion de la plaza á su casa , nadie se lo pro
hibe porque conceptúan que quien lo hace
es porque lo necesita.
La asistencia en las comidas públicas no
es obligatoria , pero nadie se escusa de
acudir : porque consideran que es cosa
indecente el comer aparte , y ademas ,
porque en las salas comunes que llaman
tinelos , encuentran manjares tan abun
dantes y regalados que difícilmente los
podrían disfrutar en sus casas. Durante la
comida se lee un breve rato algun escrito
moral ; pero teniendo el cuidado de que no
llegue á causar fastidio. Despues de la lec
tura los ancianos suscitan conversaciones
agradables , y procuran que hablen los
mancebos , para que abriéndose estos mas
francamente con la libertad de la mesa,
se echa de ver cuáles son su índole y dis
posiciones. No se crea sin embargo que sea
permitida la licencia, antes al contrario,
estan tomadas todas las precauciones para
evitar los excesos. En la mesa principal si
tuada á la cabecera de la sala , está el
sifogranto con su muger, á su inmediacion
dos de los mas ancianos , y van siguiendo
mezclados los de diferentes edades , de
suerte que los mozos no puedan decir ni
hacer cosa que no lo vea alguno de edad
provecta ; lográndose de esta manera que el
respeto y autoridad de los mayores evite
los excesos á que podrían entregarse los
jóvenes, si no tuviesen testigos que pusie
ran coto á su fogosidad y destemplanza.
Cuidan de tal manera que la sed del oro
no corrompa los corazones , que han pro
curado hacer que cayera en desprecio este
metal , asi como la plata , con la extrañeza
de fabricar de barro y vidrio las vajillas, y
destinando los metales preciosos á los usos
mas inmundos. De oro y de plata labran
los grillos y cadenas para prision y castigo
de los esclavos. Los zarcillos de las orejas ,
los anillos y cabestrillos de oro, son marcas
de ignominia.
En cuanto á los diamantes, carbunclos
y todo linage de perlas, solo los.hacen ser
vir para engalanar á los niños; pero en
llegando estos á mayor edad, se avergüen
zan de esas preciosidades , y las dejan como
juguetes impropios. Asi es que cuando los
embajadores de Anemolio fueron allá re
camados de oro, adornados de sortijas y
cadenas de gran precio , los utopianos los
miraban como esclavos, y los niños al ver
los pasar tocaban á sus madres y les decían
«madre, madre, ved ese simple que usa
perlas y joyas como si fuera niño. » Los
embajadores llegaron al fin á conocer la
extrañeza que causaban á los utopianos y
dejaron su primitivo engreimiento. Mara
villábanse los de Utopia , dice aquí Tomas
Moro con notable dignidad , que hubiese
algun hombre euerdo á quien entretenga el
deleite del vano resplandor de una piedre-
cilla , pudiendo mirar la hermosura y be
lleza de los astros, y sobre todo del sol; de
que hubiese hombre tan Tano que se ima
ginase mas noble porque viste de paño mas
delgado y costoso, cuando es cierto que la
mas delgada lana tuvo su principio y se
crió en la oveja : tambien se maravillaban
que en todas partes se haga tanta estima
cion de cosa tan inútil como de su natura
leza es el oro , y de que le aprecien hasta
tal punto que el mismo hombre á cuyo ser
vicio está destinado el metal, sea estimado
en menos que él , de suerte que hay per
sona tan pesada como el plomo , y que no
tiene mas sentido que un tronco , que á la
necedad reune la maldad , y sin embargo
tiene por esclavos á otros sabios y honra
dos , solo porque á él le cupo en suerte el
tener gran cantidad de escudos A mas
de esto se maravillan y abominan de la lo
cura de aquellos que á los que conocen
ricos, aun cuando no les deban nada, ni
esten ligados con ellos por ninguna obliga
cion , solo por ser ricos los honran tanto
que no falta sino que los veneren como á
dioses; y esto conociéndolos tan escasos,
miserables y avarientos, hasta saber con
certeza que de tan grandes tesoros no les
han de socorrer con un maravedí,»—/. B.
EL SOCIALISMO
Artíci lo 6.°
LA UTOPIA DE TOMAS MOHO.
( Conclusion ).
No hace consistir Tomas Moro la felici
dad del hombre en la satisfaccion de las
pasiones , como lo han hecho los novado
res irreligiosos; no prescinde dela inmor
talidad del alma y de los premios y castigos
que le estan reservados en la otra vida :
explicando los principios de la filosofía mo
ral entre los utopianos, afirma que los
fundamentos de ella son que el alma es
inmortal , nacida por la bondad de Dios
para ser feliz , y que á la virtud y al vicio
les está reservado el premio ó el castigo.
Combate con mucha solidez el principio
que pretende afianzar la moral sin ningun
freno , por lo que se espera ó despues teme
de esta vida , diciendo : Seguir las dificul
tades y esperanzas de la virtud , no solo
huyendo de lo suave de la vida sino volun
tariamente abrazando y sufriendo pesares ,
cuando de ello no se espera ningun fruto ,
afirman los utopianos ser locura ; porque si
despues de acabada la vida no se consigue
premio ¿de qué sirve el haberla pasado
miserablemente?
Definen la virtud diciendo que consiste en
vivir segun la ley natural, y que para solo
esto fuimos criados por Dios , siguiendo el
verdadero camino, aquel que conforma sus
apetitos á la razon. Finalmente enseñan
que esta misma razon inflama á los hombres
en el amor y veneracion de Dios , á quien
somos deudores del ser que tenemos, y de
que seamos capaces de alcanzar la dicha.
Se ha inculpado al autor de la Utopia
por haber presentado á su isla imaginaria
poseyendo esclavos , extrañándose algunos
de que no desterrase este uso tan poco
conforme con la suavidad de costumbres
que se proponía retratar; mayormente,
cuando en su tiempo ya el cristianismo ha
bia llevado las cosas á tal punto que en casi
toda la Europa se habia efectuado la eman
cipacion , y se mejoraba señaladamente el
sistema feudal. No obstante, si se lee con
reflexion el capítulo donde el ilustre can
ciller trata de los esclavos , se verá , que
asi en cuanto al origen de ellos , como por
lo tocante al modo de tratarlos , la esclavi
tud en la isla de Utopia es de tal clase que
apenas desdora el pais en que se halla es
tablecida.
En primer lugar dice que los utopianos
no reducen ála esclavitud á los prisioneros
de guerra, ni aun á aquellos que la comen
zaron. Ese estado degradante tampoco se
trasmite en Utopia de padres á hijos, y no
compran á ninguno que esté en servidum
bre en otras naciones. De esta suerte cie
gan los tres manantiales de esclavitud que
son la guerra, el nacimiento y la venta. ¿A
quiénes pues , tienen por esclavos ? A los
que han sido condenados á ello por algun
delito, sea que este castigo se les haya im
puesto en la misma isla , sea que , perte
neciendo á otro pais , hayan sufrido en él
la misma pena. Asi, estos esclavos, mas
bien deben ser considerados como conde
nados á presidio ; por lo cual los tienen en
prisiones, tratándolos con dureza, ocupán
dolos continuamente en trabajar para que
de esta suerte expien sus crímenes. Hállase
 — 230 —
allí, diee, otra sneríe de servidumbre que Utopia sino por el adulterio ú otra molesd'3
es cuando algun extrangeropobrcy de baja insufrible; bien que añade que para este
condicion , elige él mismo someterse á ser efecto se necesita permiso del senado , y
vir. A los de esta calidad los tratan benig que este lo otorga con mucha dificultad ,
namente y los tienen por poco menos que para que no se conciba fácilmente la espe
ciudadanos, excepto que Ies cargan algo ranza de apartarse de su cónyuge. Aquí
mas de trabajo; pero si alguno quiere mar es menester advertir que se trata de un
charse , lo que sucede raras veces , no le pueblo donde no ha llegado la luz del cris
detienen contra su voluntad, ni lo despiden tianismo , con lo cual se disipará la estra
sin galardon. ñeza que esta costumbre pudiera causar. .
Un lunar se encuentra en dicha obra re E1 adulterio es castigado con penas se
lativa al suicidio, pues que refiere una cos veras ; y basta la provocacion á la lujuria
tumbre de los utopianos que de ningun para hacerse reo del castigo; pareciéndoles,
modo se puede excusar. Despues de haber dice, que la voluntad determinada á pecar,
dicho que los enfermos son asistidos con aun cuando no llegue á efectuarlo, no debe
gran caridad, y que no se deja sin emplear quedar impune.
ningun medio que pueda contribuir al res Es curioso ver á un eseritor de principios
tablecimiento de la salud, dice, que si al del siglo XVI , cuando el espíritu militar
tienen
guno padece
conversando
enfermedad
con él prolija,
y aligeran
le cuanto
entre- | se hallaba todavía en mucho auge, cual
pinta la guerra como cosa indigna de hom
pueden sus padecimientos ; mas , que si la bres , cual se esfuerza en persuadir que es
enfermedad es incurable, y continuamente falsa la gloria que en ella se adquiere , di
dolorosa, los sacerdotes y el magistrado ciendo que los utopianos , lejos de consi
confortan al paciente, procurando persua derarla como verdadera gloria , la reputan
dirle que , supuesto que ya se halla inepto por grande infamia. Es notable lo que re
para los oficios de la vida , molesto á los fiere de los habitantes de Utopia , quienes
demas y pesado á sí mismo, no quiera ali no apelan á las armas sino en caso de ex
mentar la maligna enfermedad, y que an trema necesidad ; esto es , para defender
tes bien no dude en morir, ó quitándose él sus tierras, ó vengar graves injurias, ó
propio la vida , ó dejándose matar. Claro acudir al socorro de sus amigos; siendo
es que esta doctrina es insostenible en buena particular el que emprendan la. guerra mas
moral ; y si bien Tomas Moro solo la pre airadamente que nunca , para exigir satis
senta como una costumbre de una república faccion de los agravios sufridos por los ne
que no existe, creemos que hubiera hecho gociantes en paises extraños. En pocas obras
mejor en no ofrecer á los lectores semejante de aquel tiempo se encontrará, que uno de
ficcion , que puede infundir sospechas de los principales motivos de hacer la guerra
si él creia tal vez , que esta clase de suici sea el vengar ofensas que se hayan hecho
dios, eran permitidos. Si asi opinó, padeció á viageros particulares , que recorrían los
un error , sin duda involuntario ; ya que paises extrangeros para hacer su negocio.
al fin de su vida manifestó tanto heroismo La suavidad que se ha introducido en la
en defensa de la verdad , arrostrando por guerra en los últimos tiempos, la augura
no abandonarla los horrores de un suplicio. ba ya Tomas Moro. No saquean, dice, ni
En cuanto al suicidio perpetrado sin el talan la tierra del enemigo, ni ponen fuego
consentimiento de los sacerdotes y del ma á los sembrados, antes procuran con e!
gistrado, aun cuando mediare.enfermedad, mayor cuidado posible que no se echen es
dice que los utopianos lo consideran como tos á perder hollándolos los peones y los
un crimen, pues no dan sepultura al cuerpo caballos ; pues considera que tambien pue
del culpable y le arrojan á una laguna. den servir para su provecho. No ofenden
Las mugeres no disfrutan en Utopia la á nadie que vaya desarmado , si no es es
libertad que quieren concederles los re pía; amparan las ciudades que se les rin
formadores irreligiosos. Hállase estable den, y no saquean las conquistadas, ex
cida en aquel pais la monogamia , y si al ceptuando Tas casas de aquellos que querían
guno antes del matrimonio comete algun impedir la rendicion , á cuyos dueños qui
acto deshonesto, queda perpetuamente pri tan la vida reduciendo álos demas á escla
vado de contraerle , y es castigado ademas vitud.
con gravísimas penas. Por lo tocante al Supone que en Utopia hay varías reli
divorcio, dice que no puede tener lugar en giones, adorando unos el sol, otros la luna,
 — 23t —
otros las estrellas errantes, otros á hombres acaba de espirar. Conceptúan que seme
insignes en virtud ; pero la mayor parte y jante conmemoracion estimula á los vivien
mas sabia , dice , no reverencia ninguna de tes, y es un culto muy agradable á los di
estas cosas; antes juzga que hay una divi funtos; pues creen que estos se hallan
nidad oculta, eterna,- inmensa, inefable, presentes á dichas pláticas , pensando que
la cual con su poder, mas nó con dimen no serian felices si no pudiesen ir donde les
sion corpórea, se extiende por todo el uni pluguiera, y que fueran ingratos si no de
verso. A ese Dios le llaman padre: de él seasen volver á ver á sus amigos con quie
reconocen que vienen todas las cosas; á él nes se hallaban unidos en vida con recíproco
le miran como causa de todos los aumentos amor. Opinan que en los muertos no se
y mudanzas: á él le reconocen como fin de disminuye la caridad, sino que mas bien
todo cuanto existe , y solo á él le rinden se aumenta; y así es que se figuran que
honores divinos. Los demas, bien que ado andan entre los vivos; y con su auxilio
ran cosas diversas, concuerdan tambien en acometen ardientemente todolinagede em
que hay un sumo Dios criador de todas las presas. Esta presencia de los difuntos los
cosas, y que todas las conserva con su pro induce tambien á guardarse de co*as malas
videncia. aun en secreto.
La tolerancia religiosa es una de las cos Por la breve reseña que acabo de pre
tumbres de Utopia: bien que no se permite sentar sobre la Utopia de Tomas Moro se
á nadie el sostener que las almas mueren echa de ver la distancia que va de sus doc
con los cuerpos , que no hay premios y trinas (aun cuando supone una -república
castigos en la otra vida, y que el mundo es enf|ue no se conocela verdadera Religion),
gobernado por el acaso. Los que á tal ex á las monstruosidades de aquellos que no
tremo de error llegaren , son tenidos por viendo en el hombre mas que cuerpo y
peores que los brutos; no se los cuenta en pasiones , prescinden de todo principio re
el número de los ciudadanos, creyendo que ligioso y moral , desprecian la tradicion de
nada puede esperarse de ellos, y que antes los siglos, y no atienden en la reorganiza
bien es de suponer que despreciarán las cion de la sociedad, sino á las inspiraciones
buenas costumbres y las instituciones mas de su orgullo. Es preciso desengañarse: esta
respetables. No los admiten á los honores , diferencia existirá siempre entre el filósofo
ni les. dan ningun puesto en la república, religioso y el impío: por mas que aquel se
antes los consideran como ineptos para todo. abandone á los sueños de su imaginacion,
Este es el único castigo que les aplican ; por mas que dé rienda suelta á la inventiva
les prohiben ademas el disputar sobre esto, de su ingenio , siempre resultarán mucho
especialmente en presencia del vulgo; y ex mas razonables sus sistemas , siempre se
hortan á los sacerdotes á que conferencien echará de ver que el uno anda sin guia , á
con ellos , esperando que semejante locura merced de sus caprichos , mientras el otro
deberá ser vencida por la razon. procede ilustrado por una antorcha sobre
Tienen en grande estima la felicidad de natural que no le deja extraviar completa
las almas en la otra vida : no lloran á los mente, aun cuando á él parezca que cami
muertos , y miran como agüero muy malo na conducido tan solo por la luz de la
si alguno teme el dejar la vida , conside razon. — J. B.
rando que este temor puede dimanar del
mal estado de la conciencia, y porque ade
mas opinan , que no es agradable á Dios el
que no corramos voluntariamente hácia él
cuando se digna llamarnos. Si ven morir
á alguno de esta manera se entristecen
mucho , lo entierran sin pompa , y ruegan
á Dios que perdone aquella flaqueza. Al
que muere con alegría y buena esperanza,
no le lloran : encomiendan su alma á Dios
y le hacen las exequias con gozo. Levantan
una gran columna donde esculpen las ala
banzas del difunto , y en volviendo á sus
casas relatan las virtudes que le adornaban,
recomendando la muerte placentera en que
 232 — Difícil es concebir , á no haberlo proba
do por experiencia, la claridad, la distin
cion , la exactitud que de este exámen re
ciben las ideas ; pues el exámen y análisis
VERDADERA IDEA DEL VALOR, de las palabras, es 'al mismo tiempo un
exámen y análisis de las ideas. Hállase por
Ó REFLEXIONES lo comun en las palabras muy generales la
expresion de alguna idea matriz donde van
SOBRE EL ORIGEN, NATURALEZA Y á tomar su origen todas las otras; y cues
VARIEDADES BE LOS PRECIOS. tiones hay en que determinada esta con to
da precision , se aclaran , se ordenan , se
eslabonan con una facilidad admirable las
demas : sintiendo entonces el entendimien
to toda la extension y fuerza de aquel prin
cipio: svIillum veri simplex ; la sencillez es
el carácter de la verdad.
Valor : hé aqui una de aquellas palabras A no seguir este camino , apenas es po
que todo el mundo usa , que nadie deter sible entrar jamas en un conocimiento pro
mina, y en cuya aplicacion es tanto mas fundo de las cosas : y se corre mucho ries
difícil el acierto cuanto mayor es la igno go de edificar aéreos sistemas , en vez de
rancia de su verdadero sentido, y la inad establecer sólidas verdades. Tomamos por
vertencia con que se la emplea. No se ha lo comun las ideas científicas de las defini
observado bastante una muy notable par ciones que encontramos en los autores: un
ticularidad que á cada paso ofrece el len nombre respetable, un tono magistral y
guado, y es, que á pesar de que parezca decisivo, una deslumbrante claridad, una
abandonado al capricho, á la ignorancia, á apariencia de análisis, una falsa limpieza
la inadvertencia, y en fin á cuanto es á pro de lenguage, son bastantes á dar por el
pósito para echarle á perder del todo, ó al suelo con nuestro espíritu de despreocupa
menos para quitarle toda presuncion de cion y de independencia , y adoptamos cie
exactitud ; tiene sin embargo las mas de las gamente la falsa explicacion de una idea ,
veces un admirable fondo de buen sentido sobre la cual se cimenta no pocas veces to
y no pocas de finísimo discernimiento. So do un sistema científico ; si el uso comun
bre todo cuando se trate de aquellas pala contraría nuestra acepcion le rechazamos
bras que son por decirlo asi , la moneda como infundado y poco razonable; y cuan
mas corriente de la sociedad , á causa de do notamos que A pesar de nuestra filoso
sus enlaces y puntos de contacto con todo fía va siguiendo el mundo su ordinario cur
linage de objetos, hállase depositado en so sin alterar su lenguage , nos quejamos
ellos ese buen sentido , esa razon tan exac de la rutina , de la preocupacion , de queá
ta y profunda , como sencilla y exenta de nuestro ver estan plagados todos los demas
cavilaciones , que el Autor de la naturaleza hombres.
se ha complacido en derramar sobre las so Errado el principal punto de vista, es
ciedades de un modo tan general, tan sa imposible que todo cuanto tiene relacion
bio y oportuno , como poco apreciado. con él , no se nos presente alterado , des
En tratándose de señalar el verdadero figurado y confundido; y como por lo co
sentido de una palabra , determinando á mun nos cuesta tanto trabajo el despren
punto fijo los lindes de su extension ; y los dernos de nuestras concepciones, mayor
objetos y relaciones á que se destina , es mente si hemos llegado á persuadirnos de
menester tomar esta palabra , sola , aislada que hay en ellas algo de nuevo é impor
de cuanto pueda oscurecer ó confundir su tante; doblegamos el principio sentado has
significado : empezar examinando el senti ta que se ajuste á todas las proposiciones
do mas usual en sus aplicaciones mas na secundarías, y á cuantas aplicaciones que
turales y sencillas, observar luego las de- remos excogitar.
mas, y haciéndolo de esta manera, se Previas estas consideraciones entremos
descubre casi siempre una fina gradacion en la explicacion de la palabra que forma
de significaciones, muy variadas sí, pero el objeto del presente discurso.
enlazadas en su tronco por una ramifica El valor de una cosa es susceptible de
cion espontánea. aumento ó disminucion , escomparable con.
 — 233 —
el de otras, y este aumento ó disminucion miembros. Este ejemplo, bastante por sí
de los valores , y la Telacion que se conoce solo á sugerir muchos otros , prueba hasta
por medio de la comparacion , son cosas la evidencia la necesidad que tenemos de
que pueden estimarse mas ó menos apro un punto de comparacion para formar jui
ximadamente; pues que tal estimacion la cio de un objeto en que se aprecie la can
hacemos á cada paso en todos nuestros pla tidad; y hé aqui por qué siempre que que
nes y proyectos , en todos nuestros contra remos fijar las ideas, andamos en busca de
tos , y puede decirse que casi en todas una medida.
nuestras acciones. Para formar juicio apre ¿Y cuál podemos escoger para apreciar
ciativo de un objeto , necesitamos siempre el valor de las cosas ? antes es necesario
escoger un punto de comparacion ; sin él saber qué es valor. Destutt-Traci ha dicbo
es imposible que podamos establecer nada que la medida del valor de las cosas era el
con respecto á una cosa. Es esto tan indis trabajo que costaba , y como el trabajo de
pensable como poco advertido ; y para ha bia tambien tener su valor, ha añadido que
cerlo conocer y sentir, observaremos que el trabajo tiene dos valores : uno natural y
este punto de comparacion le llevamos de necesario y de consiguiente fijo en cuanto
continuo con nosotros mismos en todos los lo consiente la naturaleza de la cosa , otro
juicios que formamos, variando estos y las convencional , eventual y variable. Para
palabras que los expresan , en variando el explicar en qué consiste el primero , obser
punto de comparacion á que se refieren. va que todo ser animado empleado en el
Algunos ejemplos harán palpables el senti trabajo , darante este , tiene que satisfacer
do y verdad de estas reflexiones. algunas necesidades ; si ellas no se satisfa
Para darnos á entender mejor, asenta cen, el trabajo cesará ; de consiguiente su
remos antes dos proposiciones que parecen trabajo representa la suma de los medios
paradoja , y son las siguientes : Nada hay necesarios para satisfacerla ; y esta suma es
grande sino lo infinito , nada hay pequeño sino la medida natural y necesaria del valor del
la nada ; todo es grande excepto la nada , todo trabajo. El segundo valor es la utilidad que
es pequeño excepto lo infinito. No trato de produce el trabajo. Estas ideas que se pre
apelar á sutilezas, y si únicamente al sen sentan tan claras, tan limpias y analíticas,
tido comun, ni lenguage mas usual, mas parece que nada dejan que desear ; asi es
vulgar. Un enorme peñasco es muy gran mirando solo la corteza de los objetos ; pe
de: y cuándo? y cómo? cuando se le com ro profundizando mas sobre el particular
paran las piedras que hay en torno de él ; se verá hasta la evidencia que Destutt-Tra
pero considerada la extensa cordillera de ci se equivocó completamente. No quiero
montañas en que se halla engastado , el decir que no haya en sus ideas algo digno
peñasco se convierte en una cosa pequeña; de notarse , y que no columbrara por lo
y si calculais la longitud , la elevacion ó la menos el buen camino , pero no pasó de
masa de las montañas, no repararéis si aqui ; y asi es que tomando un sendero
quiera en él; lo despreciaréis como cantidad errado, confundió verdades preciosas con
insignificante. Si se calcula la mole de la errores y hasta con absurdos.
tierra , entonces las inmensas cordilleras se Observando el significado usual , y aun
convierten en un átomo; á su vez queda el etimológico de la palabra valor, notare
el globo reducido á una cantidad muy pe mos, que en ella y en todas cuantas ó pro
queña si se compara con el espacio encer ceden de la misma ó dimanan de comun
rado en el sistema planetario ; y el mismo raiz, se halla siempre envuelta con esta 6
sistema planetario no es masque un punto aquella forma , la idea de provecho , utili
Un
si sereducido
consideraestanque
la inmensidad nada en || dad , aptitud, poder para alguna cosa. Exa
de aguadeles Universo.
mínese su significacion en el origen latino,
parangon con el Océano ; y es muy gran y considérese luego el mismo en nuestra
de si se toma por punto de comparacion lengua. «Esovale, eso novale, no vale
una pequeñísima gota de flúido : esta gota para nada , mas me vale , valimiento , vá
de flúido es un mar de grande extension lido, inválido, hombre de valer, valiente,
para los insectos que solo se descubren con valeroso,» hé aqui la misma raiz estendi
el auxilio de finísimo microscopio , y estos da á cosas de órdenes bien diferentes, y
imperceptibles insectos tienen una gran siempre encerrada en ella la idea de utili
mole , si se comparan con las pequeñísimas dad, provecho, aptitud, poder para algu
partes que entran en la formacion de sus na cosa : es decir relacion de un medio á
 — 234 —
i un fin , enlace de este con aquel. do autor, cayó en un error tan notable.
Esta idea se presenta por de pronto va Y cuenta que esta es una de las ideas mas
ga , tal vez confusa , y sin embargo es pre fundamentales de la economía política, y
ciosa , llena de luz; es tosca, solo falta será difícil caminar sin tropiezo en no te
desbastarla. El análisis en que voy á entrar, niendo por guia una clara inteligencia de
me conducirá á la proposicion siguiente: este punto.
El valor de una cosa es su utilidad. Entien Cuán diferente sea eltvite del valor y por
do aqui por utilidad la aptitud de la cosa consiguiente cuán falso el decir que el va
para satisfacer nuestras necesidades ; y en lor natural y necesario de todas las cosas y
la palabra necesidades encierro las natura del trabajo , sea lo que cuesten , no lo ha
les, las facticias, las verdaderas, las aparen de decir la ciencia , sino el lenguage co
tes, las grandes, las pequeñas, compren mun, vulgar, el buen sentido de cualquier
diendo por consiguiente entre ellas, las hombre, el instinto de uu niño.
comodidades, gustos, placeres, capri Hé aqui una cosa que me cuesta mucho y
chos ete. no vale nada ; dice muy naturalmente cual
Para poner la cuestion en el terreno mas quiera que haya empleado infructuosamen
sencillo, pregunto ¿cómo apreciamos el te su trabajo ó dinero ; y sin embargo en
valor de los alimentos? ¿Qué cosas entran habiendo mucho trabajo debería haber mu
en consideracion para determinar nuestro cho valor necesario y natural, si nos atuvié
juicio? La sanidad, el sabor, el olor, su ramos á las definiciones del nombrado eco
vista, todo en relacion con nuestra utilidad. nomista. Imposible parece asentar una
Dos individuos han de hacer un cambio de proposicion que esté en contradiccion mas
ellos; ¿qué mirarán? la salud, la edad, manifiesta con las nociones mas sencillas,
el gusto, el capricho y otras cosas seme con el lenguage mas usual y vulgarizado.
jantes. Se ha de juzgar cuál de dos comi Seguiríase de aqui que el trabajo de un
das
rá? se¿á aventaja
lo que acabo
á otrade; ¿ decir
á quéó seá atende
lo que• hombre que hubiese ideado ó hecho una
máquina de que pudiera reportar grandes
cuesta ? Si el que ha cuidado de aparejar beneficios , tendría igual valor natural y
la, hubiese desempeñado mal su tarea, necesario que el trabajo de otro que se hu
expendiendo una suma considerable, gran biera ocupado el mismo tiempo con igual
des fatigas y trabajos, y la comida no fue fatiga é iguales gastos en construir un arte
se tan útil como otra menos costosa , ¿po facto de despreciable Importancia.
dría pretender la preferencia del valor de ¿Qué es riqueza? Todo lo que es á pro
la suya , alegando sus trabajos y dispen pósito para satisfacer nuestras necesidades;
dios? Y sin embargo segun Destutt-Traci asi lo dice el mismo autor ; el mas rico es
el valor natural y necesario de la comida el que tiene cosas de mas valor, luego la
seria el trabajo que cuesta; idea falsa , ab medida del valor depende de la utilidad.
surda, rechazada por el buen sentido, y Es cierto que un ser animado tiene nece
que sacada del terreno científico , y arro sidades y que estas se han de satisfacer du
jada en medio de alegres convidados no rante el trabajo ; es cierto que los medios
podría menos de sufrir satírico gracejo. necesarios para ello , ó han de ser produc
Fácil seria aplicar las mismas considera to del mismo trabajo ó se ha de llenar de
ciones á los vestidos , y á cuanto está suje otra manera el vacío; pero ¿qué tiene que
to á evaluacion ; pero cualquiera alcanzará ver esto para constituir el valor de la cosa
la extension de que es susceptible la apli trabajada ni del trabajo? Dígaseque es una
cacion de estas ideas. En este punto el er condicion precisa si hade durar el trabajo,
ror fundamental está en confundir el coste el satisfacer las necesidades del ser anima
con el valor ; palabras que significan ideas do que trabaja , si se quiere que continúe
muy diferentes; ideas que a veces andan el trabajo , y se dirá una verdad clara y
en proporcion , á veces en suma discrepan sencilla ; pero si se pasa á medir el valor
cia : ideas que en la complicacion de las de las cosas por la suma de estas necesida
relaciones sociales , tienen á menudo cierta des , se dirá una cosa falsísima , y que po
delicada dependencia , la cual puede traer dría muy bien calificarse con términos mas
consigo gran confusion y dar lugar á equi duros.
vocaciones capitales; y seguramente que No negaremos que en algunos casos el
por no haber andado bastante curioso ó coste del trabajo contribuya al aumento del
bastante atinado en deslindarlas el indica valor de la cosa ; pert) es accidental
 — 235 —
pre y nunca depende de aqui el verdadero jeto para satisfacerla , tanto mas será el va
valor de ella. lor de él : por manera que podría decirse
Para poner en claro tan complicada ma hablando matemáticamente, que el valor
teria , recordaremos lo que llevamos ya está en razon compuesta de la directa de
asentado , á saber : que la medida única la importancia , de la necesidad , y de su
del valor de una cosa , es la utilidad que urgencia , y de la inversa de la abundancia
proporciona; y extendiendo y aplicando do los medios de satisfacerla.
esta defmicion quedará todo en un punto Atendida la naturaleza de las cosas en
de vista luminoso. general , y la de la sociedad , es evidente
Si la utilidad es la única medida del valor que estos factores , importancia , urgencia
de una cosa, ¿cómo es que vale mas una y abundancia de medios, estarán sujetos á
piedra preciosa que un pedazo de pan , que muchas variaciones; y que ademas habien
un cómodo vestido, tal vez que una salu do de apreciarse estos factores en resulta
dable y grata vivienda? No es difícil expli do final por el juicio de los hombres , re-
carlo ; siendo el valor de una cosa su uti sentiránse por precision del clima , de la
lidad, ó aptitud para satisfacer nuestras estacion , del estado de la sociedad , de las
necesidades, cuanta mas precisa sea para disposiciones particulares , de ciertas clases
la satisfaccion de ellas tanto mas valor ten é individuos, y de la veleidad, de los ca
drá ; débese considerar tambien , que si el prichos , de las modas , y de mil otras cir
n limero de estos medios aumenta , se dis cunstancias imposibles de enumerar en su
minuye la necesidad de cualquiera de ellos totalidad , pero muy fáciles de notar para
en particular ; porque pudiéndose esco ensartar de ellas, si necesario fuere , una
ger entre muchos no es indispensable nin larga cadena. Y hé aqui lo que sucede pun
guno. Y hé aqui por qué hay una depen tualmente , porque asi debe suceder.
dencia necesaria, una proporcion entre el Vamos ahora á ver si es dable poner en
aumento y disminucion del valor, y la ca igual grado de claridad la relacion que hay
restía y abundancia de una cosa. Un peda entre el coste y el valor. Es innegable que
zo de pan tiene poco valor , pero es porque se han de satisfacer las necesidades del ser
tiene relacion necesaria con la sasisfaccion animado que se emplea en un trabajo ; y
de nuestras necesidades, porque hay mu fácilmente se alcanza que esto ha de influir
cha abundancia de pan ; pero estrechad el en el coste. Para deslindar bien las ideas
círculo de la abundancia, y crece rápida observaré que esta verdad , palpable como
mente el valor , hasta llegar á un grado es, está sin embargo mal presentada; pues
cualquiera; fenómeno que se verifica en se ofrece como un principio general lo que
tiempo de carestía , y que se hace mas pal no es mas que la aplicacion á un caso par
pable en todos géneros entre las calamida ticular. Necesario es mantener al jornale
des de la guerra en una plaza acosada por ro , pero necesario es tambien mantener al
muy prolongado asedio. Entonces podrá buey que arrastra el arado , al mulo que
valer un pan una onza de oro , diez , diez hace girar una palanca , al caballo que ti
mil si el hambre llega á su máximo ; y por ra de un coche ; asi como es necesario tam
qué? porque seaumenta la relacion que tie bien reparar la parte que se va consumien
ne aquel pan con la satisfacciun de la pri do ó menoscabando de una máquina , cu
mera necesidad ; el valor del oro entonces brir, digámoslo asi, las necesidades de la
decae rápidamente, y puede llegará redu máquina. Por manera que si bien se obser
cirse á la nada; y ¿porqué? porque pasa á va, generalizando esta verdad, diremos que
ser inútil , porque no sirve no vale para sa para que se pueda trabajar es menester con
tisfacer nuestras necesidades ; y si algun va servar el instrumento, ó hablando con mas.
lor le queda es por la eventualidad que generalidad y exactitud , para que continúe
hay, de que pasado el asedio, podrá ser la produccion del efecto es menester conservar
útil , podrá valer para el propio objeto. la causa. Mirada bajo este aspecto la pro
De todo lo asentado hasta aqui se dedu posicion se presenta mas limpia , mas clara
ce que el valor de un objeto consiste en la y sencilla ; crúzase con menos embarazos y
dependencia que de dicho objeto tiene la consideraciones determinadas, es suscepti
satisfaccion de nuestras necesidades ; y por ble de aplicacion mas fácil y estensa, se
consiguiente cuanto mas capital sea esta ne presta mejor á las observaciones, y hacien
cesidad, y cuanto mas urgente; y ademas do entrar el trabajo del hombre en la lí
cuanto mas preciso sea en particular el ob nea de las otras causas, simplifica mucho la
 — 236 —
cuestion y evita errores y equivocaciones. sidadesNecesítase
de unalpais
año, ,una
paracierta
cubrircantidad
las i de
Pero no basta esto para dar á las ideas
toda la claridad de que necesitan y son sus tejidos, de esta ó aquella clase. Suponga
ceptibles ; sino que se ha de observar ade mos para mayor sencillez que toda 1a ela
mas, que no es suficiente atender á la con boracion se haya de hacer en el mismo pais.
servacion de una causa , sino que es preci ¿ Qué sucederá ? Es necesario procurarse
so proporcionársela , si no se la tiene á la las primeras materias, prepararlas, fabri
mano , y en muchos casos es preciso hasta carlas, y ponerlas en estado y lugar en que
producirla. Erraríase por tantosi no se lle estén á disposicion del comprador, que las
vaba en cuenta el coste que esto puede traer necesita. ¿Qué es lo que ha de satisfacer
consigo; y se prescindiría en la ciencia, de el comprador , para que pueda proporcio
consideraciones de que el hombre mas ru narse la porcion de tejido que necesita ?
do no se olvida en la práctica. Necesítanse Todo cuanto ha costado el ponerle la tela
animales para el transporte, v. g. , y no en la mano; y ¿por qué? porque si no se
solo es preciso atender á la conservacion puede atender á todo lo que se necesita
de ellos , sino que es menester cuidar de para que tenga á la mano la materia pri
su reproduccion ; de manera que en últi mera, la materia primera no se tendrá; si
mo resultado todos los gastos que ha oca no se puede atender á todo lo que se ne
sionado la cria , es necesario que de un cesita para la construccion , conservacion y
modo ú otro figuren en el cálculo. Necesí movimiento de las máquinas que sirven á
tase agua para el movimiento de una má la fabricacion , y al arreglo , conduccion y
quina , no está inmediata , es necesario colocacion de las piezas, las piezas no se
conducirla de cierta distancia , esto oca hallarán en la tienda ó almacen , y el que
sionará gastos que han de entrar en la cuenta. necesita el tejido no le encontrará cuando
Si ha de haber efecto es necesario que lo busque. Es preciso pues que se someta
exista la causa , que esta se aplique y ade el comprador á pagar la cuota que le cor
mas que se conserve: hé aqui lisa y breve responde para cubrir todo esto ; y desde
mente espresado lo que hay en la materia: entonces correrá de su cuenta , en propor
pasemos adelante. cion á su gasto , la cria y manutencion de
No es menos evidente que quien ha de todos los animales que en ello se emplean,
aprovecharse' del efecto es menester que deberá pagar tambien sus arreos, deberá
cuide de la produccion , aplicacion y conser alimentar á los jornaleros y á sus familias,
vacion de la causa; ó que al menos reinte cubriendo al menos sus mas precisas nece
gre al que cuida de ello. Y no tratamos de sidades, deberá tambien contribuir á con
la cosa bajo el aspecto de equidad y justi servar y engrandecer un poquito ó tal vez
cia , porque , como se ha podido notar , de mucho la cómoda vivienda de los fabrican
propósito hemos prescincido de toda clase tes , deberá mantener en arreglado aseo y
de consideraciones morales; hablamos de comodidad á sus familias, deberá costear
la necesidad entrañada por la misma natu el lujo y los caprichos del comerciante que
raleza física de las cosas. Porque bien claro abarca en grande las empresas, y deberá
es que quien necesita pan y ni quiere cui mantener, al menos en modesta decencia,
dar de labrar la tierra, de sembrar, cul al artista que ha construido las máquinas:
tivar y recoger el grano , ni moler el trigo, no podrá olvidarse tampoco del contingen
ni amasar la harina , ni cocer el pan ; si se te que le toca para que el sabio que ha su
empeña ademas en no querer satisfacer á ministrado la idea no sufra algun desvane
otros que por é1 se tomarían esa pena , se cimiento , de puro ayunar, y se vea por
ha de quedar sin comer , y de buen ó mal consiguiente obligado á cesar en su prove
grado se verá precisado á entrar en razon chosa tarea .
acosado por el hambre. ¿ Pero todas estas consideraciones no cons'
Seiltadas estas verdades que de puro tituyen el valor en su mismo coste? No : y pa~
sencillas y fundadas en la esperiencia coti ra palparlo supongamos que se presenta en
diana , apenas pueden apellidarse teoría, el mercado una remesa de géneros de igual
descendamos á la piedra de toque de la perfeccion, pero á menor precio, por ra
aplicacion ; asi percibiremos mas claramen zon del mayor adelanto de la fabricacion
te la fecundidad y verdad de ellas , viendo de los nuevos competidores; desde luego
como se hermanan con lo que á cada paso los primeros tendrán que acomodarse al
nos ofrece el trato comun de la sociedad. precio de los segundos ,
der nada; y sin embargo el género les H cia saludable. Los tres asientan como prin
cuesta á ellos lo mismo ; pero ni á sus pro cipio fundamental de sus teorías la libertad
pios ojos tendrá el mismo valor ; y dirán de las pasiones; ó mejor diremos su satis
naturalmente : esta competencia nos cuesta faccion , condenando no solo las augustas
tanto de pérdida. Y ¿por qué? porque ellos doctrinas del Evangelio , sino tambien las
entonces ya no son necesarios, las necesi de los mas distinguidos filósofos de la an
dades se pueden satisfacer de otra manera tigüedad. Aquel célebre dicho susline el
menos costosa , y todo, el mundo se reiria , obstine , que tan profunda sabiduría encier
si debiendo hacerse una paga en género , ra , es rechazado como insensato y nocivo
pretendiese uno de ellos contarlo al antiguo por los modernos reformadores : el sufri
precio, solo porque á él le cuesta lo mismo miento y la abstinencia es segun ellos una
que antes. Otro ejemplo : hay una grande infraccion de las leyes de la naturaleza , es
escasez de tela de tal clase , que tendrá tal obrar contra los designios del Criador ; es
calidad , supongamos un excelente y difícil romper la armonía del Universo , que de
color : hay un tintorero que por casualidad biera resultar de la ilimitada expansion de
descubre un ingrediente muy barato , que I todos los sentimientos, de la completa sa
con aplicacion muy sencilla produce per tisfaccion de todas las pasiones. Luis Key-
fectamente el deseado color. ¿Cuánto valen baut en su obra titulada Estudios sobre los
sus telas? como las otras: ¿cuánto le cues reformadores contemporáneos, conviene en
tan? casi nada : luego no hay necesaria co que esta libertad concedida á todo linage
nexion entre lo que cuesta una cosa y lo de inclinaciones, es altamente destructiva
que vale. Hay un artista que con la mayor , de toda moral y funesta al bienestar de la
facilidad ejecuta maravillas: ¿cuánto valen? |sociedad : pero entre tanto se permite decir
es claro que tanto y mas que las obras de que el cristianismo habia llevado demasia
los otros; ¿y cuánto le cuestan á él? nada: do lejos la lucha entre la razon y las pasio
un juego, un pasatiempo. Pero se nos dirá: nes, convirtiendo el desinteres en ascetismo
si no le cuestan á él , ya cuestan á los com ¡y martirizando el cuerpo sin provecho del
pradores, y aqui está el valor: ¡qué aber alma ; bien que añade que hallando esta
racion ! ¿Por qué lo pagas tan caro, com ! exageracion su correctivo en nuestros mis-
prador? — Porque es muy bueno y lo vale. ¡ mos instintos , no exponía la humanidad á
— ¿Veis como el coste es hijo del valor, y una decadencia. Esta observacion nos pre-
como existe el valor antes del coste? — Oh! { senta la Religion cristiana exagerando el
no es que lo valga , sino que él exige esto. ¡principio de la resistencia de la parte su-
— Pues ¿ por qué lo pagas? ¿ por qué no te I perior á la inferior , y por consiguiente en
vas con otro? — Porque no lo ballo tan señando una doctrina falsa, porque la ver
bueno. — Es decir que si lo tenias ya no lo dad exagerada deja de ser verdad. No
cambiarías con los otros. — Cierto. — Pues ¡ podemos, pues, permitir que pase sin ser
entonces cuando dices mas bueno quieres i refutada semejante afirmacion , la cual no
decir que ya de suyo vale mas ; pues que tiene otro fundamento que el poco conoci-
para hacer el cambio pedirías una com I miento del carácter y tendencia de la mo
pensacion. — J. B. ral evangélica.
Para la mteligencia de lo que vamos á
explicar conviene tener presente la dife
rencia entre los preceptos y los consejos ;
EL SOCIALISMO. aquellos obligan á todo cristiano , estos rió;
la observancia de los primeros es necesaria
para alcanzar la vida eterna , la de los se
gundos lo es únicamente para llegar á la
perfeccion '• si quieres entrar en la vida ,
Artículo 7." dijo Jesucristo, observa los mandamientos;
si quieres ser perfecto , vete , vende todo
lo que tienes y dalo á los pobres y sigueme.
Reflexionando sobre el origen , natu En los mandamientos , es decir , en la ley
raleza y efectos de los sistemas excogitados que obliga á los cristianos, está contenido
po r Saint-Simon, Fourier y Owen se echa el de amor
robar,dedeDios
matar, de infamar,
, el del prójimo , de come-
la prohi
de ver la sin razon con que algunos han bicion de tomar el nombre de Dios en vano,
atribuido á tanianos delirios alguna influen-
 — 238 —
ter adulterio. ¿Hay aquí por ventura pre de la maldad como y tambien para ofrecer
ceptos atormentadores de los cuales se pue á Dios un sacrificio en espiacion de place
da con verdad decir que nos martirizan? res culpables. Léanse las vidas de los san
Los mandamientos que por su parte ha aña tos mas señalados por su penitente austeri
dido la Iglesia, como el asistir ciertos dias dad , y se verá que todos sus deseos se
al santo sacrificio de la misa , el abstenerse encaminaban á preservarse del pecado, á
en otros de estos ó aquellos alimentos, el purificar mas y mas su espíritu y hacerle
disponer las comidas de esta ó aquella ma avanzar en el sendero de la perfeccion , y
nera , pero todo de suerte que no dañe á que para ello procuraban desasirse de todo
la salud ni perjudique notablemente nues lo terreno , olvidándolo todo , desprecián
tros intereses: estos preceptos, repetimos, dolo todo , no recordando otra cosa sino
tan suaves y llevaderos, ¿pueden por ven que tenían una alma que salvar y un Dios
tura calificarse de martirio? Es cierto que á quien amar y servir.
el cristiano debe mantenerse puro no solo La penitencia tan lejos estaba de ser inú
en obras, sino tambien en palabras y pen til á las almas, que antes bien era un va
samientos; es cierto que debe procurar lladar contra las tentaciones del mundo , la
ajnstar su vida entera á la ley divina , sin astucia del demonio y las seducciones de la
desviarse de ella por consideraciones mun carne : con ella se sufocaban las pasiones
danas; pero , ¿no es esto mismo lo que nos que pegan el corazon á la tierra , se desen
está prescribiendo hasta la razon natural? volvían, elevaban y purificaban los senti
la filosofía puramente humana , ¿ no nos mientos que levantan el espíritu á Dios, se
enseña tambien que no hay buena moral avivaba la fe, se sostenía la esperanza, se
en el acto que se opone á la ley de Dios, inflamaba la caridad, y adquiría el espíritu
que es reprensible lo que está en contra aquella fuerza y energía que le hacían ca
diccion con la ley eterna ? Y hasta ahora paz de resistir todos los ímpetus de la car
nadie ha dicho que por este motivo la filo ne, y de pasar sobre la tierra una vida de
sofía exagere : nadie ha pensado en tratarla ángel.
de verdugo de nuestro cuerpo. Las moles Por mas que sea agradable á Dios este
tias que por esta causa se ocasionan á este, género de virtud en que se sacrifica ente
son muy ligeras; y sj se comparan la salud ramente el cuerpo al espíritu para ofrecer
y el bienestar que resultan do una conduc luego el alma á Dios limpia , sin mancha
ta moral, con las enfermedades y otros ma de ninguna clase , purificada de todas las
les que dimanan del desenfreno de las pa afecciones terrenales; es claro que Jesucris
siones, bien se puede afirmar, que aun to al establecer sobre la tierra su ley san
bajo el aspecto puramente material y aten tísima, y al dar á los hombres sus consejos
diendo únicamente á las ventajas corpora sublimes, preveia que serian pocos los que
les , sale muy gananciosa la virtud , y paga lo dejasen todo sin reservarse nada , y le si
muy caros el vicio los goces de algunos mo guiesen á él por el camino de tan dura aus
mentos. teridad , entregándose á todas las privacio
Demostrado ya que no hay tal martirio , nes que les habia recomendado como el
tratándose de la observancia de solos los mas alto grado de santidad á que podían
preceptos, veamos lo que sucede con los llegar. Es claro que preveia la debilidad del
consejos. Es indudable que en ellos está mayor número de los hombres , y que por
contenida la represion de las inclinaciones tanto sabia tambien que seria incompara
mas fuertes y seductoras, la abstinencia de blemente mayor el de los cristianos que se
los placeres mas vivos, el sufrimiento de contentarían con observar los preceptos,
padecimientos muy duros, la resignacion á que no el de los que seguirían los consejos;
las humillaciones mas repugnantes, y que es claro que sabia que aun entre los mis
bajo este concepto puede decirse que son mos fervientes imitadores de la vida de do
un verdadero martirio del cuerpo y tam lor, de ignominia y abstraccion que pasó
bien del corazon. Pero no es verdad que sobre la tierra , serian muy pocos los que
este martirio sea sin provecho del alma ; pusieran en planta dichos consejos con la
antes este provecho es uno de los principa severidad , fortaleza y santo heroismo de
les objetos; pues que si el cuerpo es ator que algunos cristianos que veneramos so
mentado , no lo es por un odio ciego é ir bre los altares nos han ofrecido ejemplo.
racional, sino para que no se levante contra Mas diremos; algunos de sus consejos fue
el espíritu y no le arrastre por el camino ron dados evidentemente con esta previ-
 239 —
sion , pues que es cierto que no quería sendero de la perfeccion evangélica, sino
Jesucristo que el mundo dejase de multi
plicarse , y por lo mismo cuando aconseja
de
habia
ba la
losvirginidad
de
fieles
ser tomado
Hasta
entendia
lapor
vida
eíque
comun
mayor
su consejo
que
número
hano antes de en
cían los discípulos al principio , dejó de ser
posible como práctica universal , tan pron
to como la Iglesia se estendió considerable
mente. ¿Quién se atrevería en la actualidad
á proponer que los fieles en todas las par
tes del mundo viviesen bajo semejante re
gla? ¿Cabe por ventura imaginar, siendo
tanta la extension de la Iglesia, tan nume
rosos sus hijos , tan complicadas las nece
sidades de estos , tan varias y discordes las
relaciones que entre sí tienen , tan diferen
tes los climas, las leyes, los usos y cos
tumbres; cabe imaginar, repetimos, el que
todos vendan cuanto tengan y lo lleven á
los pies de un apóstol para hacer un fondo
comun del cual se sustenten todos los her
manos?
Teniendo presentes estas consideraciones,
se echa de ver con toda claridad que el
martirio del cuerpo por medio de la peni
tencia , esa abstraccion del espíritu que le
levanta sobre todas las cosas mundanales ,
que no le deja darlas una mirada sino para
despreciarlas y abandonarlas, aquel des
prendimiento que no se reserva nada para
sí , y que todo lo espera de la limosna , ó
mejor diremos del cuidado de la Providen
cia ; («as virtudes que admiramos en los
Pablos , en los Antonios, en los Hilariones,
en los Franciscos, en los Domingos, en los
Cayetanos, en los Ignacios y otros santos
eminentes , debieron ser como modelos ra
rísimos que conservasen en la tierra el fue
go sagrado , que perpetuasen la imitacion
de la vida de Jesucristo entre la tibieza de
los cristianos , como allá en la antigüedad
vemos que de vez en cuando enviaba el
Señor sus profetas para recordar al pueblo
de Israel el beneficio de haberle sacado de
la tierra de Egipto y de la casa de esclavi
tud y anunciarle la venida de aquel que
habia de ser la esperanza de las gentes.
Jesucristo al establecer su Iglesia sacrosan
ta, no olvidó ni olvidar pudo en su infinita
sabiduría , que eran hombres los que la
habian de componer , sujetos á muchas mi
serias , con el entendimiento ofuscado , la
voluntad torcida y el corazon inclinado al
mal desde la adolescencia; no pudo olvidar
solo
que separa hacerloselandar
necesitaba poder por
de suel gracia,
estrecho
no
tambien para encaminarlos por las vias de
una moral pura , apartándolos de la cor
rupcion
queque estaba
viniese la sumido
plenitud el
de universo
los tiem
pos, y hacer que se decidiesen á tomar
sobre sus hombros un yugo suave y una
carga ligera.
Luego el achacar á la Religion cristiana
el que exagera la virtud del desprendimien
to , el suponer que haya de ser corregida
por la fuerza de los instintos y de las pa
siones , es no comprenderla , es prescindir
de las miras del Divino Fundador de la
Iglesia , es suponer que él se lisonjeó con
esperanzas irrealizables, es decir, que des
conoció la humanidad y que se empeñó en
sujetarla á condiciones incompatibles con
su existencia ; es sobre todo desconocer que
esa misma alteza de perfeccion predicada
por Jesucristo puede muy bien existir se
gun las circunstancias , sin ese martirio del
cuerpo que nos asombra en algunos santos
penitentes , bastando para ello una circun
cision de corazon con la cual se arranquen
todas las afecciones mundanas y se le pu
rifique en el crisol del amor de Dios ; es
desconocer que con esa alteza de perfeccion
es conciliable el cuidado de los negocios
humanos , si á ello es llamada la persona
por razon de su estado , y que puede ser
muy agradable á Dios una vida en que ha
ya pocas horas disponibles para la oracion,
en que no sea dable entregarse á grandes
austeridades; es no recordar aquella má
xima que está escrita en el sagrado texto y
practicada por los santos de que la caridad
se hace toda para todos para ganarlos á to
dos. La Religion cristiana , pues , no nece
sita del correctivo de las pasiones ; esto es
trastornar monstruosamente las ideas ; ella
es quien debe corregirlas, y en la parte en
que puede decirse que la embarazaban y
resisten, no hay falta de prevision en el Di
vino Fundador que todo lo hizo con núme
ro , peso y medida.
Los sistemas de los modernos reforma
dores estableciendo un principio diametral-
mente opuesto al de la moral de Jesucristo,
han asentado por basa de sus teorías insen
satas el que la felicidad del individuo y de
la sociedad dependían del ilimitado desar
rollo de todas las pasiones. Jesucristo en
señó que la mayor altura de perfeccion es
taba en desasirse de todo para seguirle por
i, el
mancamino
que eldelmáximum
cielo , y los
del novadores
bien está en
afir-
la
 — 240
satisfaccion de todas las pasiones , en pe ¿ Puédese , por ventura, imaginar algo su
garse á la tierra como un réptil inmundo , perior á su enseúanza, con respecto á Dios
sin levantar jamas la cabeza para dar una y al hombre ? El origen y destino del hu
mirada á las regiones de la inmortalidad. mano linage, ¿puede excogitarse mal alto
La tierra es un destierro, dijo Jesucristo: de lo que nos le presentan los dogmas del
la tierra es nuestra patria , dicen ellos : la cristianismo? Tocante á la moral ¿cabe en
vida es un viage , dijo Jesucristo ; la vida contrar nada mas puro, mas sencillo y su
es nuestro término , dicen ellos : el goce blime que el compendiar toda la ley y los
material es dañoso al espíritu , dijo Jesu profetas en el amor de Dios y del prójimo?
cristo ; el goce material santifica el espíri J. B.
tu , dicen ellos : aprended de mí que soy
manso y humilde de corazon , dijo Jesu
cristo ; dad rienda suelta á la ira y al or
gullo , dicen ellos : santificaos haciendo pe LAS SOCIEDADES BIBLICAS
nitencia , dijo Jesucristo ; .santificaos en el
placer , dicen ellos.
Los hombres teniendo ála vista esos mo ENCICLICA DEL. PAPA.
delos de sublime austeridad y heroico des
prendimiento, oyendo sin cesar la predica
cion de los preceptos mas puros , y consejos
mas elevados , todavía se pierden lastimo Tonos los periódicos religiosos asi nacio
samente por el camino del vicio y de la nales como estrangeros, han dado lugar
maldad , arrastrados por la violencia de las en sus colunas á la Encíclica, de Su Santi
pasiones, ¿qué será, pues, si en lugar de dad contra las sociedades biblicas, y asi
proponerles semejantes ejemplos y de im mal pudiéramos nosotros dispensarnos de
buirles en tales preceptos y consejos, se imitar este ejemplo , en una publicacion
comienza por quitar el freno á todas las destinada á la defensa de la Iglesia católica
pasiones, por estimular la sed de los goces, y de los mas altos intereses de la sociedad.
por excitar mas y mas esa inquietud febril Antes de insertarle emitiremos algunas ob
que lleva al hombre de placer en placer, servaciones que nos ha sugerido su lectura.
aun á riesgo de perder su fortuna , su ho El Protestantismo proclamando el derecho
nor y su misma existencia ? de exámen hasta en materias dogmáticas , y
Diez y ocho siglos han transcurrido des la inspiracion privada en la inteligencia de
de la aparicion del cristianismo : esta Reli la Sagrada Escritura , estableció principios
gion santa se ha encontrado en tnedio de disolventes que tarde ó temprano habian
pueblos de diferentes leyes, "usos y costum de acabar con la Religion entre todos los
bres, de diverso grado de civilizacion y que los profesasen sinceramente, y fuesen
cultura, desde la infancia hasta la decrepi ademas bastante lógicos para deducir sus
tud, y sin embargo ha sido suficiente para últimas consecuencias. Dejando á parte el
todas las necesidades , ha podido hacer ade derecho de exámen en cuanto expresa una
lantar á los atrasados , y detener al borde cosa distinta de la inspiracion particular,
del precipicio á los que se hallaban en él , nos atendremos únicamente á esta, por es
y esto sin abandonar sus dogmas, sin apar tar mas inmediatamente enlazada con el
tarse de su moral , sin renunciar las prác objeto que nos ocupa.
ticas y ceremonias de su culto; ha sabido Solo apelando á las contradicciones del
acomodarse á la variedad de las circunstan espíritu humano, y á la ceguera en que cae
cias, sin que en ninguna de ellas haya da cuando se deja dominar por las pasiones ó
do pruebas de impotencia ó imprevision. el fanatismo de secta , es posible explicar
¿Porqué hemos de creer, pues, qué no cómo se ha podido sostener seriamente que
será capaz de hacer lo mismo ahora, cuan era útil y saludable poner la Biblia en ma
do el progreso de las artes y de las ciencias nos de todo el mundo, sin notas ni comen
ha modificado profundamente las socieda tarios ; añadiendo que le bastaba al cristia
des modernas , creando necesidades que no atender á la luz interior que le seria
anteriormente no existieran ? Una Religion comunicada de lo alto, para comprender
que es toda luz , toda verdad , toda amor, perfectamente cuanto está contenido en
¿cómo seria incompatible con ningun ade aquel piélago de insondables arcanos. Para
lantamiento y perfeccion del estado social ? decir esto es necesario no haber meditado
 — m
jamas sobre la Biblia , ó mas bien no ha fuertes, cuando se atraviesa el interes de
berla leido nunca ; y sin embargo han de nuestra alma , debiendo anteponer la sal
fendido y defienden semejante error hom vacion eterna ó la honra , á la hacienda y
bres que se han ocupado mucho tiempo en aun á la misma vida. Pero á un hombre á
su estudio. Repetidas veces se ha echado quien se ha hecho creer que no necesita el
en cara á los protestantes la profunda divi ausilio de nadie para entender perfecta
sion que entre ellos habia producido la mal mente la Escritura , y cuya fantasía se ha
hadada doctrina de la inspiracion privada , exaltado con la persuasion de que lleva en
probándoseles que aun con respecto á las su interior una luz divina que le aclarará
palabras mas claras y sencillas del sagrado todos los misterios y allanará todas las di
texto, habian sido muchas y muy varias ficultades, ¿quién le quita que extraviado
las interpretaciones dadas por las iglesias por semejante error y arrastrado por un
disidentes. Mas prescindiendo de esta refle loco fanatismo , no se considere obligado á
xion fundada en un hecho que los adver atentar contra sí propio , apoyándose en las
sarios no pueden negar ni tampoco explicar palabras del sagrado texto , tomadas al pie
de una manera satisfactoria , basta dar una de la letra, de una manera insensata?
ojeada á los Profetas, á los Salmos, al Los teólogos explican en un sentido ver
Apocalipsis , para convencerse de que solo dadero y juicioso aquellas palabras de Jesu
es dable alcanzar algun tanto su inteligen cristo non jurare, omnino ; pero no falta quien
cia , á quien posea mucho caudal de ins las ha entendido de tal suerte que no quiere
truccion, y que ademas tenga á la vista jurar ni aun en los tribunales, en ningun
algunas reglas fijas que solo pueden encon caso y por ningun motivo.
trarse en una autoridad infalible , conser Aquel pasage tan consolador en que Je
vadora de las tradiciones de los antiguos sucristo nos recuerda el cuidado de la Pro
tiempos, é ilustrada por el mismo Dios, videncia, hasta con las aves del cielo y los
cual es la Iglesia católica. lirios y el heno del campo , para inspirar
Hasta los libros historiales no dejan de nos confianza en la bondad divina , quitán
presentar con frecuencia dificultades gra donos aquella exagerada solicitud que per
vísimas; y por lo tocante á los morales que turba nuestra tranquilidad y nos arrebata
son los que al parecer debieran siempre aquella paz interior que es uno de los en
tener un sentido liso y llano, no es verdad cantos de la vida cristiana, ¿no podría ser
que estén acomodados en todas sus partes tambien interpretado en un sentido falso ,
á la inteligencia del vulgo , de manera que creyéndose el hombre dispensado de tra
este no necesite ninguna explicacion para bajar para ganar su sustento, y autorizado
no caer en gravísimos errores. ¿Qué cosa á descuidar los medios de proveer á su
mas sencilla que el sermon de la montañal subsistencia, lisonjeándose con la esperan
y sin embargo, ¿no hay algunos pasages za de que el Señor le alimentaria y vestiría
que leidos poruna persona indiscreta , pue como á las aves yá las plantas, cometiendo
den prestarle ocasion para entregarse á ex asi el pecado que se llama tentar á Dios?
travagancias y hasta á crímenes? Sabido es Es cierto que el cristiano debe estar ani
que no han faltado algunos insensatos que mado de un espíritu de paz, que debe evi
no han vacilado en mutilarse por una exa tar en cuanto posible sea los litigios, los
geracion y mala inteligencia de las doctri cuales siempre acarrean desazones, y no
nas religiosas ; y sin embargo estos hombres pocas veces perjudican á la caridad frater
de corazon entusiasta y cabeza calenturien nal. Pero ¿no exageraría esta doctrina
ta, se apoyarían tal vez en aquellas pala quien dijese que se han de tomar siempre
bras de Jesucristo en que nos dice que si al pie de la letra aquellas palabras de Je
nuestro ojo derecho nos escandaliza, nos lo sucristo, de que entreguemos hasta la capa
quitemos y- lo arrojemos ; y que tomismo á aquel que quiere llevarnos á juicio para
hagamos con nuestra mano derecha cor quitarnos la túnica? ¿Se deberá dejar álos
tándola y echándola , si nos sirviere de es cristianos sin defensa alguna, y se los obli
cándalo ; porque es mejor (pie uno de los gará á entregar todo lo que tienen al pri
miembros perezca que no el que todo el mero que venga suscitándoles un pleito?
cuerpo vaya al infierno. Claro es que se Si á tamaños errores pudiera dar oca
mejante doctrina debe entenderse de la ne sion un trozo tan sencillo de la Sagrada
cesidad de apartarnos de los objetos mas Escritura como es el sermon de la montaña ,
queridos y de quebrantar los lazos mas || ¿qué será si hablamos de otros pasages, de
tomo u. 16
 — 242
los cuales se verifica de una manera parti dejado alucinar por mentidas protestas de
cular lo que decia San Pedro de las Epís amor á la Religion y de celo por el bien de
tolas de San Pablo, de que hay en ellas la humanidad, en que generalmente no es
algunas cosas difíciles de entender, que los casean los encargados de propagar la lectu
ignorantes y los que no tienen fijeza inter ra de la Biblia en lengua vulgar sin notas
pretan en mal sentido , asi como las demas ni comentarios. Ya no son autores particu
escrituras , para su propia perdicion ? lares los que culpan á las sociedades bibli
A pesar de los palpables inconvenientes cas de haber falsificado el sagrado texto,
y gravísimos daños que trae semejante sis- es el mismo Sumo Pontífice quien lo ase
lema , los protestantes no solo no han re gura.
trocedido á la vista de los precipicios á que Quien se fie pues de semejantes libros no
con él conducían á sus propias sectas, sino puede ya alegar excusa ninguna ; el encar
que han organizado las sociedades biblicas, gado por el mismo Jesucristo de apacentar
las que disponiendo de medios colosales y las orejas y los corderos es quien nos avisa
haciendo extraordinarios esfuerzos dignos de que el pasto es venenoso. — B.
de mejor causa, procuran difundir la Biblia
por toda la redondez del globo , de manera
que llegue hasta las últimas clases , convir
tiendo en gérmen de errores y corrupcion, CARTA ENCICLICA
esas páginas enviadas del cielo para luz de DB NUESTRO SANTÍSIMO PADRE EL PAPA
los entendimientos y santificacion de las GREGORIO XVI Á TODOS LOS PATRIAR
almas. CAS , PRIMADOS , ARZOBISPOS Y
Afortunadamente, la esterilidad de que OBISPOS.
adolecen todas las sectas separadas de la
Iglesia católica hace que el daño no sea tan
grave como hubiera sido si el Protestantis
mo entrañara aquella fuerza de propaga
cion que solo se encuentra en el seno dcla A nuestros venerables hermanos los patriarcas ,
verdad ; mas no ha dejado por esto de pro primados, arzobispos y obispas.
ducir males de suma trascendencia , y no GREGORIO XVI , PAPA.
deja de amenazar con otros todavía mayo Venerables hermanos, salud y bendicion
res. Tamaños peligros no podían ocultarse apostólica.
á la cátedra de San Pedro, que iluminada Entre las principales maquinaciones que
por el Espíritu Santo manifiesta una sabi en nuestros dias ponen en juego los here-
duría y prevision superiores á las fuerzas ges de diferentes denominaciones contra los
de la flaqueza humana. Asi es que hace ya que profesan la verdad católica para hacer
mucho tiempo que varios Papas han com les perder la santidad de la fe, no tienen
batido las sociedades biblicas ; y el actual ciertamente el último lugar las sociedades
Sumo Pontífice Gregorio XVI las condena biblicas que, fundadas primero en Ingla
en su Carta Encíclica dirigida últimamente terra, han ido estendiéndose por todas par
á todos los Patriarcas, Primados, Arzobis tes, y formando como un ejército las vemos
pos y Obispos. Este documento es notable conspirar á que se publiquen infinidad de
no solo por la suprema autoridad de que ejemplares de los libros santos traducidos
procede , sino tambien por las noticias his en todas lenguas, á esparcirlos sin distin-
tóricas que contiene, y por la abundancia
de doctrina , solidez y buen juicio con que Venerabüibus Fratribus patriarchis , primati-
se manifiesta el pésimo origen y funestísi bus , archiepiscopis et episcopis.
mo objeto de las sociedades biblicas, y los Gregorius PP. xvi.
amaños de que se valen para perturbar las Venerabilcs Frates , salntcm et apoMolicam be-
sociedades políticas , al propio tiempo que nedictionem.
calumnian y combaten á la Iglesia católica. Inter pra;cipuas machiuationes quibus nostra
No dudamos que la voz del Supremo dian hac a?tate Acalholiri diversorum oominum insi
cultoribas Catholica? veritatis, eorumque
Pastor excitará mas y mas la vigilancia de animos a sanctitate Fidei avertere connituntor,
los obispos , y de todo el clero , en un haud ultimum tenent locum Societates. Bíblica1 .
asunto tan importante; (pie la palabra del quas in Anglia primum instituías , ar. loDge hine
Vicario de Jesucristo desengañará comple lateque didusas. facto veluti apmine in id conspi
rare conspicimus , ut Divinaron! Scripturanmi
tamente á todos los fieles que se hubiesen libros vulgaribus quibusque linguis interpretalos
 — 243 -
cion alguna entre los cristianos y los infie Iglesia, fue ya comun álos heropes el arte
les, y á inducir á todos á que los lean sin de repudiar la tradicion y la autoridad de
necesidad de guia ni intérprete alguno. Por la Iglesia, y alterar con su mano las escri
manera que, como ya en su tiempo lamen turas ó corromper su sentido en su interpre
taba S. Gerónimo , el arte de entender las tacion. Ni ignorais tampoco de cuánto cui
sagradas escrituras se hace ya comun á la dado y saber se necesita para trasladar
habladora vieja, al anciano chocho, al pala fielmente á otra lengua las palabras del
brero sofista y á todos de cualquier condicion Señor, siendo por lo tanto lo mas fácil del
que sean con tal que sepan leer, y lo que mundo que en esas multiplicadas versiones
es aun mas absurdo y casi inaudito, ni aun hechas por las sociedades biblicas , se co
al pueblo infiel se le niega esa comun inte metan multitud de errores por la impru
ligencia de los divinos libros. dencia ó mala fe de tantos intérpretes ;
Pero vosotros , venerables hermanos , no errores que por largo espacio de tiempo los
podeis ignorar cuál sea la tendencia de to tiene ocultos en daño de muchos la misma
dos estos esfuerzos de las sociedades bibli multitud y variedad de las traducciones.
cas, y sabeis muy bien que el príncipe de Nada empero les importa á esas sociedades
los apóstoles, San Pedro, despues de ala el que los que lean esas versiones de la Bi
bar en las sagradas letras las epístolas de blia incurran en estos ó en aquellos erro
San Pablo, nos advierte que hay en ellas res: loque les importa es, que los que lean
algunas cosas difíciles de entender, que los se vayan poco á poco acostumbrando á ar
ignorantes y los que no tienen fijeza interpretan rogarse ásí propios el juzgar del sentido de
en mal sentido asi como las demas escrituras , las Escrituras , á despreciar las tradiciones
para su propia perdicion : y añade en segui divinas de los PP. conservadas en la Iglesia
da : vosotros pues , hermanos , que ya sabeis católica y á repudiar hasta la autoridad
esto , estad sobre aviso , no sea que , engañados docente de la misma Iglesia.
por ' los errores de los insensatos , decaigais de A este fin los individuos de esas socieda
vuestra firmeza. Debe seros pues evidente des biblicas no cesan de calumniar á la
que ya desde los primeros tiempos de lu Iglesia y á esta Santa Sede como si de mu-
permagno edant cxemplaríum uumero , eosquo Ín opus sit ad transferenda fideliter in aliam linguam
ter Christianos juxta atque infideles nullo delcclueloquia Domini; ut nihilproinde facilins contmgat
disscminent, et horuni quemlibet ad illos nullo quam in eorumdem versionibus per Soctetates
duce legendos alliiiant. lia igitur, quodsuojam Bíblicas mulliplicatis gravissimi ex tul interprctum
temporc lamentaba tur Hieronymus ( ¡ ) , ct gárru vel imprudentia, vel fraude iuscrantur errores,
la anuí , et deliro seni , el sophistce verboso , et
quos ipsa porro illarum mullitudo et varietas diu
universis, si modo legere norial , cujusque condi- occultal in perniciem mullorum. Ipsarum tamen
tionis hominibus communem faciunt arteni Scrip- Sorietatum parum aut nihíl omnino interest , si
turarum sine magistro intelligendarum : immo , nomines Biblia illa vulgaribus sermonibus inter
quod longe absurdissimum , peneque inaudituiu pretala lecturi in alios potíus quam alíos errores
est, ne ipsas quidem infidelium plebes ab ejus- dilabantur ; dummodo assucscant paulatim ad li-
modi intelligentia; communione excludunt. berum de Scripturarum seusu judicium sibime-
Sed vos quidem minime lalet , venerabiles Fra tipsis víndicaudum , atque ad contemnendas Tra-
tes, quorsum hec Socictatum earumdem moli- ditiones divinas ex Patrum doctrina in Ecclesia
mina pertineant. Probe enim uostis consignatum Catholica custoditas , ipsumque Ecclesia; magis-
in sacris ipsis Litteris monitum Petri Apostolo- terium repudiaudum.
rum Principis, qui post laudalas Pauli Epístolas, Hunc in finem Biblici iidem Soeii ecclesiam Sane-
tamque hanc Petri Sedem calumniari non cessant,
esse ait in illis quaidam di/ficilia intellectu, qum
quasi a pluribus jam sajeulis fidelem populum á
i'ndocíi , el instabiles depravant , sicut el caleras
Scripturas, ad suam ipsorum perditionem: sta- Sacrarum Scripturarum cognitione arcere conetur;
timque adjicit : Koj igitur, fratres , preascientesquum lamen plurima evstent cademque luculen-
cuslodite , ne insxpientium errore traductis exci- tissima documenta singularis studii , quo recen-
datis á propia firmitate ( 2 ). Hine et perspectum tioribus Summi Pontífices, coeterique illorum duo-
vobis est vela prima Christiani nominis ,Ttate hanctu Catholicí Antistiles usi sunt, ut Catholieorum
fuisse propriam ha;rcticorum artem , ut repudiato gentes ad Dei eloquia scripta et tradita impensius
erudirentur. Quo in primis pertinent decreta Tri-
verbo Dei tradito , et Ecclesia! Catholica; auctorí-
tate rejecta , scripturas aut man» interpolarent , dentina; Synodi , quibus nedum Episcopis nianda-
tum est, ut Sacras Scripturas divinamque Legem
aut sensus exposilione interverterent ( 3 ). Ncc de-
nique ignoratis quanta vel diligentia vel sapientiafrequentius per ttioecesim annuntiandam ciira-
rent (4 ) , sed ampliata insuper l.ateranensis f)on-
cilii (3; iustitutionc , provisum , ut in sinsulis
( i ) Epis. ad Paulimtm , § 7 , qum est Epísto
la lili. Tom. I. Op. S Hieran, edil. Valtarsii. ( 4 1 Sess. 24. c. 4 , de Ref.
(2) 2 Petri lll , 16, 17. (8) Cornil. Lateran. anni 121o, su*, lnnocen-
( 3 ) TertuUianus , lib de Prxscriptionibus ad- tio í11 , cap. II .quod incorpus juris relatum est,
rersus hwrelicos , c. 37 , 38. cap. 4 de Magistris.

>
clios siglos ya se esforzara por prohibir al en el concilio romano del año 1725, al cual
pueblo fiel el conocimiento de las Sagradas nuestro predecesor de feliz recordacion,
Escrituras , cuando antes bien existen mu Benedicto XIII, convocó no solamente los
chas é irrefragables pruebas del celo singu obispos
bien á muchos
de la provincia
arzobispos,
romana
obispos
, sino
y demas
tam~
lar con que aun en estos últimos tiempos
han procurado los sumos Pontífices, y bajo ordinarios de los lugares que dependen in
la direccion de estos los demas prelados ca mediatamente de la Santa Sede. Ademas el
tólicos , que reciban los fieles católicos co mismo Sumo Pontífice en unas letras apos
nocimiento mas estenso de la palabra de tólicas dirigidas particularmente á la Italia
Dios escrita y no escrita. No á otro objeto é islas adyacentes, estableció algunas otras
tienden en primer lugar los decretos del cosas para este mismo fin. Por último, ve
concilio Tridentino en los que no solo se nerables hermanos, vosotros mismos que
encarga á los obispos el que procuren sean de tiempo en tiempo soléis dar cuenta á la
explicadas en sus diócesis con mas frecuen Santa Sede del estado de las cosas sagradas
cia las sagradas escrituras y la divina ley, sino en cada diócesis , sabeis muy bien por las
que ademas, ampliando lo establecido en el repetidas respuestas queá vuestros antece
concilio de Letran, se manda que en todas sores , .y aun á vosotros mismos ha dado
las Iglesias catedrales ó colegiatas de las nuestra congregacion del concilio, cuan
ciudades y de los pueblos principales, ha grato es á esta Santa Sede y como acos
ya una prebenda teologal que se ha de con tumbra dar el parabien á los obispos que
ferir precisamente á sugetos capaces de es tienen provistas dichas prebendas en suge
poner é interpretar las sagradas escrituras. tos idóneos que desempeñen bien sn oficio,
Y respecto á la ereccion de esta prebenda y cuan solícita es al mismo tiempo en esci
con arreglo al concilio de Trento y á las tar y fomentar su celo pastoral si todavía
esplicaciones ó lecciones públicas que un se nota en esto alguna falta.
canónigo teólogo debia dar «1 clero y a los Por lo que hace á las traducciones de la
fieles , se ha tratado de ello posteriormente Biblia en lengua vulgar , hace ya muchos
en muchos sínodos provinciales, y tambien siglos que los obispos han tenido en muchas
Ecclesiisscu Cothcdralibusseu Colleniatis Urhium consnevistis , en responsis per nostram Congrega-
iosigniorumquc Oppidorum non deesset Theolo- tionem Concilii ad Dcressores vestros aut ad vos
galis Prebenda, eademque confcrreluromnino pcr- ipsos iterum iterumque datis. perspeetum est,
sonis idoneisSacra; Scriplüra; euponendiP et inter- quemadmodum Sancta cadem Sedes et gratulan
pretandn- (6). De ipsa postmodum Thcologali Pra; Episcopis soleat si Pra;bendalos Theologos ha-
benda ad Tridontina; ¡Ilius sanctionis normam beant in publicis sacrarum Litlcrarum lectionibus
constitui'nda , el de lectioüibus a canonico Theo- munere suo benc fungentes , ut uumqusm inter
logo ad Clerum atque eliam ad populum puhlice mitta! excitare atque adjuvare pastorales illorum
babendis actnm est in plurimis Synodis Provin- curas, si alicubi res adbuc ex sententia non su-
cialibns ¡7), necnon in Humano Concilio anni cesserit.
1723 (8) in quod Benedictos xiu fcl. iec. Prreces- Oterum ad translata in vulgares linguas Biblia
sor noster nedum sueros Antistites Romana; Pro quod attinet , multis jam abhinc sspculis contige-
vincia; , sed plures eliain ex Arehieniscopis , Epis- rat, ut diversis in locis sacri Antistites 1najorc
copís, caHcrisqne locorum ordinariis SancUc huic interdum vigilnntin uti debuerint, ubi versiones
Sedi pullo medio suhditis convocaverat (9). Idem hujusmodi aut in occultis lectitari conveoticulis ,
pr.Tlerea Sammus Pontifex eumdein in finem non- aut per Ha;reticos impensius diflundi animadver-
nulla constituit in Apostolicis Litteris, quas pro terent. Atque hue spectant monita , et cauliones
Ilalia nominatim Insulisque adjacentibusdedit ( ' 0). adhibita; ab Inocentio III glor. mera. Dccessore
Vobis denique, \enerahiles Frates, qui de condi- nostro circa laicorum mulierumque co?tus sub
tione sacrarum rerum in cujusque Dinecesi ad Se- pietatis obtentu, cllegendarum Scripturarum can
dem Apostolicam statis lemporibus referre ( II) sa secreto habitos in Mclensi Dinecesi (12): nec
□on et peculiares vulgarium Bibliorum interdic-
tiones ,quas stvetn Galliis paulo post (13), sive in
(fi) Tritl. Sess. 5, c. 1. de Ref.
(7) In Concil. Merliol. I. an. 1365, par. I.
til. 3 de Pr.-eb Theol. = Medio! V. an. 1379,
par. III , tit. 5 qua; ad Bencficior. collal. attin.= A7K. Quod Sancta Sardicensis Synodus. IX Sal.
Aquensi , an. 1383, (tt.de Canonicis , = eí aliis Decemb. 1740. ( Tom. 1 , Bullar. ejusdem Pontif..
plurib. et ex instructione , quee exstat in Append. ad dict.
(8) Tit i , cap. fi seqq. tom. 1.)
(9) In Litteris indictionis Concúii 21 decem- ( 12 ) In tribus Litteris datis ad Metenses, atque
bris 1724. ad illorum Episcopum et capitul., nec non ad
(10) Comt. Pastoralis Officii, XIV Kalend. Abbates Cislerciensem , Morimundensem , et de
junii , an. 1725. Crista, quo> sunt Epist. 141, 142, lib. II, et
(11) Ex Conitit. Sixti'V. Romanus Ponti- Epist. 233 , lib III , in Edif. Balutii.
fex. .V/// Kal. Jan. An. 1383 el Const. Benet, ( 13 ) In Concil. Tolosano, anni 1229, can. 14.
 — 245 —
partes que redoblar su vigilancia , cuando de la piedad. Y esta regla , restringida nias
sabian que aquellas versiones se leian en luego despues á causa dela constante astu
secretos conventículos , ó eran esparcidas cia de los hereges, fue finalmente interpre
con profusion por los hereges, siendo este tada por Benedicto XIV que declaró ser
el motivo de los avisos y precauciones pres permitida la lectura de las traducciones de
critas por nuestro antecesor de gloriosa la Biblia que se publicaran con la aprobacion
memoria, Inocencio 111, acerca de ciertas de la Snnta Sede , ó con anotaciones ó notas to
renniones de hombres y de mugeres que , madas de los SS. PP. de la Iglesia , ó de los
con pretesto de piedad y de leer las Sagra intérpretes doctos y católicos.
das Escrituras, se celebraban en la diócesis Entre tanto no faltaron nuevos sectarios
de Metz ; y de las particulares prohibicio de la escuela de Jansenio que . imitando el
nes de las biblias en lengua vulgar que ve lenguage de los luteranos y calvinistas, no
mos se hicieron poco despues en Francia y se avergonzaron de censurar esta pruden
antes del siglo XVI en España. Mas no era tísima disposicion de la Iglesia y de la silla
esto bastante , y fue menester adoptar nue apostólica. Segun ellos, á todos y á cada
vas providencias cuando los luteranos y uno de los fieles , en todas partes y en to
calvinistas, atreviéndose á combatir con dos tiempos, era útil y aun necesaria la lec
una casi increible multitud de errores la tura de la Biblia, y por lo tanto ninguna
doctrina inalterable de la fe, nada omitían autoridad podia prohibirsela. Semejante au
para engañar á los fieles con perversas es dacia de los jansenistas fue vigorosamente
piraciones delas sagradas letras y con nue condenada en las solemnes decisiones que
vas traducciones, á cuya multiplicacion y con aplauso del orbe católico dieron contra
rapidísima propagacion contribuyó muy sus doctrinas dos sumos pontífices de feliz
poderosamente la reciente invencion de la recordacion , Clemente XI en la constitu
imprenta. Asi que en las reglas que redac cion Unigenitas del año 1713 y Pio VI en
taron los PP. designados por el concilio de su constitucion , Auctorem fidei de 1791.
Trento, que aprobó Pio IV nuestro prede Asi pues mucho tiempo antes que se es
cesor , de feliz recordacion , y que estan tablecieran las sociedades biblicas , estaban
insertas al principio del índice de libros ya prevenidos los fieles por los menciona
prohibidos, se manda espresamento que la dos decretos contra la mala fe de los here
lectura de la Biblia en lengua vulgar solo ges, disfrazada con el especioso celo de
se permita á aquellos á quienes se juzgue propagar y generalizar el reconocimiento
pueda aprovechar para el aumento de la fe y delas sagradas letras. Sin embargo Pio Vil,
Hiüpaniis ante sarculum XVI (lí) latas mveni- sionum , qua; nb Apostolica Sede approbatce , aut
mns. Sed ampliorc postmodum providentia opus cum annotationibus desumptis ex santis Ecclcsias
fuit , rum Lutcrani Cahinianiquc Acatholici, in- Patribus vel ex doclis Cntholicisque Vires editan
commutabilcm Fidei doctrinam incredibili prope fucrint (17).
errorum varietatc oppupnarc ansí, nihil intenta- .Non defuere interim noviex Jansenii schola *rc-
tum relinquehant ut fldelinm mentes deciperent tarii , qui hanc Ecclcsire Sedisquc Apostolicas
perversis explicationibus sacrarum Litterarum , prudentissimam neconomiam mutuato a Luteranis
edilisque per suos asseclas no\¡s illarum in popu Calvinianisque stylo reprehendere non sunt veriti,
lare™ sermonem interpretationibus; quarum qui- quasi Scripturarum leclio unicuiqui fidelium ae-
dem excmplis multiplieandis, et cittissime divul- ncri onmi temporc, atque ubique locorum utilis
gandis inventar nuper typographicffi artis prarsidio et necessaria esset , atque ideo nemini posset
juvabantnr. Itaque iisiu regulis, qua; ii Patrlbus aucloritati ulla interdici. Hanc vero jansenianorum
á Tridentina Synodo deleclis conscripta? , et a audaciam graviori censura reprehensain hauemús
Pío IV fr-l. mem. Pra?decessorc nostro ( 15 ) appro- m solemnibus judiciis, qua; toto plaudente catlio-
bata; , Indiciquc librorum prohibitorum prcpmiss.e lico Orbe contra illorum doctrinas lulerunt bini
sunt , generali sanrtione statutum legitur , ut Bi ree. mem. Summi Pontífices, uimirum C.le-
blia vulgari sermone edita non aliis permitterentur mens XI in Constilutione Unigenitus anni 1713
nisi quinos illorum lectio ad fidei algue pietalis 18 '., et Pius VI in Constit'. Auctorem Fidei
augmentum profulura judicarctur [16). Haiceidem anni 179* (19).
repula; , nova subinde proptir perseverantes hir- Ita ¡g¡tur ahtequam instituerentur Soeietates
reticorum raudes cautione ronstricta;, ea demum Bíblica- . jandudum in commemoratis Ecclesia;
auctnritate Benedicti XIV adjerta declaratio est , decretis fldeles prremuniti fucreut adversus harre-
ut permissa porro habeatur lectio vulgarium ver-
( 17 ) In Addition , ad. dict. Regid. IV , ex de
(14) Ex testimonio Cardinalis Pacerco in Con creto Congregalionis Inditis 17 jiinii 1737.
cilio Tridentino ( apud Pallavicimim , Storia del (18) In proscriplione propositionum Quesnelli
Concil. di Trento , lib. VI , cap. 12. ) á num 79 ad 83.
(18) In Constit. Domiuici Gregis2i martü 156Í. (19) In damnatione Proposil. Pseudo-Synodi
( 10 ) In ReguUs Indices III et IV. Pistoriensis , número 67.
 — 216 —
de gloriosa memoria , nuestro predecesor, cesores , no os habeis descuidado en amo
viendo que esas sociedades nacidas en su nestar á vuestra católica grey, siempre que
tiempo iban en aumento , no dejó de opo ha sido necesario, para que se precavan de
nerse á sus intentos ya por sus nuncios las asechanzas que les urdían los socios bi
apostólicos, ya con las cartas y decretos pu blicos. Y el Señor ha bendecido este celo
blicados por diferentes congregaciones de de los obispos , unido á la solicitud de esta
cardenales de la S. I. R , ya en íin en sus Santa Sede, pues advertidos por él muchos
dos letras pontificias dirigidas á los arzobis católicos incautos que fomentaban impru
pos de Gnesne y de MohiloíT. Posterior dentemente las sociedades biblicas , se han
mente Leon XII, nuestro predecesor de retraido de ellas, y el pueblo fiel ha per
feliz recordacion, combatió los esfuerzos de manecido casi enteramente preservado del
las mencionadas sociedades biblicas en su contagio que le amenazaba.
carta encíclica , dirigida á todos los prela Consolábanse sin embargo los sectarios
dos del orbe católico en 5 de mayo de 1824, biblicos con la esperanza de alcanzar gran
y lo mismo hizo nuevamente Pio VIII en renombre si con la lectura de sus biblias en
su encíclica de 24 de mayo de 1829. Nos lengua vulgar esparcidas en un sinnúmero
finalmente que les hemos sucedido aunque de ejemplares por sus misioneros y agen
con meritos muy inferiores, no hemos de tes , y hasta repartiéndolas por fuerza á los
jado de dedicar á este mismo fin nuestra que no las querían , llegaban á lograr que
solicitud apostólica, y entre otras cosas los infieles hicieran una profesion cual
hemos cuidado de recordar á los fieles quiera del nombre cristiano; pero no es
las reglas antes establecidas acerca de dado propagar el nombre cristiano á los
las traducciones de la Biblia en lengua hombres que pretenden hacerlo fuera de
vulgar las reglas establecidas por el mismo Jesu-
citaros
Y debemos,
muy mucho
venerables
porque
hermanos,
escitados feli-
por cristo; asi que nada consiguieron sino po-
ncr nuevos obstáculos á los sacerdotes ca
vuestra piedad y prudencia y apoyados por tólicos, que enviados en aquellas regiones
las mencionadas cartas de nuestros prede- por la Santa Sede, no perdonaban medio
ticorum frauden> in specíoso illo divinas Htteras Est autení cur vobis summopere gratulemur,
mi communcm usuin diOundendi studio latentcm. venerabilcs Kratrcs, quod excitati nielate pruden-
Piusaulcm VH glor. rcc. Pra;cessor noster, gui tiaque vestraetsupradictis Decessorum nostrorum
sorietatcs ipsassuo tempore ortas magnis invalcs- lilteris confirmati haudquaquam neglexistis com-
cerc auctibus comperit, haud sane abstinuitop- monere ubi opus fuit catholicas oves , ut ab insi-
poncrc se illarum conatibus Umi per Apostolicos diis caverent , qu«e sibi h Biblicis Sociis strueban-
suos nuntios , tum per Epístolas et per decreta ii tur. Ex hisce autem Episcoporum studiis cum
divcrsis cardenalium S. R. E. Congregationibus Suprema; hujus Petri Sedis sollicitudine conspi-
edita ('20], tum suis duabus Pontifieiis Lilteris rantibus, benedicente Domino factum est, ut
quas ad Gncsuenscm (21 ) , atque ad Mohilovien- incauti qui lam Catholici homines, qui Biblicis
sem (22) archiepiscopos debit. Subinde Leo XII Socictatibus ¡mprudenter favebant , perspecta su-
fel. mem. Dcccssor noster, ipsa illa Biblicorum hinde fraude, ad eisdem reces--criut , el reliquus
sociorum molimiua persecutus est in Encycliclis fidelium populus immunis ferme a contagione
litteris ad omnes eatholici Orbis Antistites dalis permanscrit, qua; inde mili imminebat.
die li inaii an. 1824 , idque ipsum denuo fecit Ea iutcrim spe tenebantur Sectarii Biblici , ut
novissimus fel. item. record. Pn-rcessor noster maenam seconsequnturos laudem uon ambigerent
Pius VIH in Encyclica Epístola edita die 21 maii ex Iufidelibus ad Christiani nomiuis professioDem
an. 1829. Nos tau'dem , qui racritis longe imparí- uteumque inducendis perlectionem sacrorum Co-
bus in hujus locum successimus, baud sane pr;e- dicum vulgari ipsorum lingua editorum , qoos
termisinms enmdem m fincm Apostolicam solli- ingcnti plane excmplaríum copia missionariis. sea
citudincm nostram impendere, atque inter alia excursoribus á se destinatis , per illorum regiones
curavimus, ut sancita; olim de, vulgaribns scrip- distribuí, ac vel nolentibus, obtrudi curabant.
turarum translationibus regula; in fidelium me- Sed hominibus Christiauum monien prreter regu
moriam revocarentur ( 23). las a Christo ipso instilutas propagare conantibus
nibil pene ex senteutia contigit, nisi quod notuere
interdum nova creare impedimenta Catholicis Sa-
(20) Imprimís per Epistolam Congregationis cerdotibus , qui ad gentes ipsas ex Sancta; bujus
Propaganda Fidel ad vicarios apostolicos Persia, Sedis missione pergenies nullis , parcebant labo-
Armenia!, aliarumqne Orientis Regionum dalam ribus, ut pra;dicationc verbi Dei, Sacramento-
3 angustí 1816, et per Úecretum de omnibus hu- ruroque administratione novos Ecclesia? Olios pa-
jusmodi versionibus editum á Cong. Indicis 2 ) rerent , parati etiam pro illorum salute atque ¡D
junii 1817. testimonium Fidei sanguinem suum ínter exqui
(21 ) Die i junii 181(i. sita qua que tormenta profunden'.
(22) Die 4 septembris 18l0. Jam vero inter sertarios illossua iia cxpectatione
(23) In monito adjecto ad Decretum Congre frustralos, et perdolenti recogitantes animo in
gationis indicis 7 januarii 1830. genien! pecunia; vim bactenus erogatam suis Bi
 — 247
ni fatiga para engendrar nuevos hijos á la preponderancia , sino mas bien en algunos
Iglesia con la predicacion de la palabra de restos de la antigua dominacion romana,
Dios y la administracion de los sacramen conservados por la potestad , usurpadora
tos, dispuestos ademas á derramar hasta la como ellos la llaman , de nuestros predece
última gota de su sangre en los mas crue sores. Asi pues , resueltos á dotar á todos
les tormentos por la salvacion de ellos y en los pueblos con la libertad de conciencia ó
testimonio de la fe. mas bien del error, de donde como de su
Empero entre estos sectarios, defrauda fuente nazca tambien la libertad pública
dos en sus esperanzas y despechados al con con el incremento de la pública prosperi-
siderar
gastado las
en publicar
sumas cuantiosas
sus Biblias que
y el ningun
habian dad, segun ellos la entienden, se persua-
den no conseguirán nada si antes no ade
fruto que habian obtenido , ha habido al lantan algo entre los romanos é italianos ,
gunos que han dispuesto sus maquinacio de cuya autoridad y trabajos se valdrán
nes de un modo nuevo , proponiéndose luego muy mucho para realizar sus planes
atacar principalmente y desde luego á los en las demas naciones. Y esto piensan con
Geles de Italia , y aun á los de nuestra mis seguirlo fácilmente aprovechándose de la
ma ciudad. Sabemos en efecto por datos y multitud de italianos que viven fuera de
noticias que hemos recibido , que en el año Italia esparcidos en diversos países y por
próximo pasado se reunieron en Nueva York toda la tierra , y que regresan luego á su
(América) muchas personas de diversas sec patria en no corto número; á no pocos de
tas y establecieron el dia antes de los idus los cuales ó por su gusto impregnados en
de junio ( 12) una sociedad con el título de esas nuevas doctrinas, ó corrompidos en
Alianza cristiana , que piensan acrecentar sus costumbres, ó agobiados de la miseria,
con nuevos adeptos y aun con el auxilio de los atraigan sin dificultad á inscribirse en
los que ya lo sean de otras sociedades, cu la sociedad ó al menos á venderla sus ser
yo objeto comun sea difundir entre los ro vicios por el precio que estipulen. A este
manos y demas habitantes de Italia el es fin pues, trataron con todo empeño de bus
píritu de libertad religiosa, ó mas bien el car por do quiera estos agentes para intro
insensato indiferentismo en materias de Re ducir aqui y hacer pasar secretamente á
ligion. Porque confiesan que desde hace manos de los fieles multitud de Biblias fal
muchos siglos pesan tanto en la balanza del sificadas y traducidas en lengua vulgar , y
mundo las instituciones de Roma y de Ita asimismo que se distribuyan igualmente
lia , que nada de grande se ha hecho en el otros malísimos libros y folíetos con los que
orbe sin que haya tenido su principio en puedan debilitar en el ánimo de sus lecto
esta ciudad madre, si bien no reconocen en res la obediencia á la Iglesia y á esta Santa
la silla de S. Pedro, establecida aqui por Sede, compuestos dichos libros por los mis
disposicion del Señor, el origen de esta mos italianos ó traducidos luego de autores

bliis edendis nulloque fructu divulgandis, inventi
oaper aliqai suat, qui machinaliones suas novo
quodam ordine disposucrunt ad Italorum potissi-
mum , Dostraxnic ipsius Crbis civium animos
prima veluti aggressione appetendns. Scilicet ex
acceptis modo ountiis documentisque compertum
habemus , plores homines diversarum sectarum
Neo-Eboraciin America protimo anuo convenisse,
pridieque Idus jimias inivisse novam societatem
Ftederis Cristiani nomine nuncupatam , ct aliis
porro atque aliis ex omni «ente sodalibus, seu
constitutis in rjnsdem auxilíum sodalitiis ampli-
firandam ; quorum commime cum ipsis consilium
sit, nt religiosam libertatem seu potius vesanmn
indifTerentiíc super religione studium Romanis
Ilalisque ceteris inrandant. Fatenturenim vero a
pluribus retro ssculis tantnm obique ponderis
babuisse Romane Italsque gentis instituía, ut
nil magnum in orbe proscesserit , quin factum
fucrit ab alma hac Urbe principium quod quidem
non ex constituía heic , disponente Domino , su
prema Petri Sede, sed ex quibusdam antiquas
Romanorum dominationis reliquiis , in usurpala ,
ut dictitaut , a Decessoribus nostrls poteslate per-
■nanentibus. derivatum volunt. Quarc cuín sta-
tutuiri illis sit , populos universos consrientia! sen
potius erroris libertate dolare, ex qua , veluti e
suo fonte politica ctiam libertas eum publica! ad
ipsorum sensum prosperitatis incremento dima-
net; nihil tamen sibi posse videntur, nisi primum
apud Italos Romanosque crves aliquid profecerint,
eorum deinceps aucloritate atque studiis penes
reliquas gentes magnopere usuri. Atque id facile
se assequuturos confidunt, cum tot ubique terra-
rum Itali sint diversis in locis degentes , indeque
in patriam haut levi numero rcmeantes; quorum
non paucos vel noyarum reruni studio sua jam
sponte incensos , vel corruptos moribus , aut ino
pia afiliaos nullo ferc negotio ad nnmen Socielati
dandum , vel saltem ad suam operam pretio illi
vendendum alliciant. lio igitur curas suas conver-
terunt, ut horum manibus undique conquisitis
vulgaria corruptaque Biblia huc advehantur et in
manus fidelium claueulum ingerantur itemque ut
distribuantnr una simul pessimi alii lihri , lihelli-
que ad mentem legentium ad Kcclesia! sancta'que
hujus Sedis obsequio abalienandam , Italoru.ni
eorumdem opc compositi , aut iu patrium sermo-
estrangeros á nuestro patrio idioma. Entre
estos libros se cuenta principalmente la
Historia de la reforma escrita por Merle
d'Aubigné y las Memorias sobre la reforma
en Italia por Juan Cric. Por lo demas de
qué clase sean todos estos libros, podrá co
legirse fácilmente con solo saber que segun
los estatutos de la sociedad , en las asam
bleas particulares ó comisiones encargadas
de la eleccion de libros, no ha de haber ni
aun dos individuos que sean de una misma
secta religiosa.
Tan luego como á Nos llegaron estas no
ticias no pudimos menos de contristarnos
sobre manera al considerarlos peligros que
no ya en lugares distantes de esta ciudad,
sino cerca del centro mismo de la unidad
católica estan preparando á nuestra santísi
ma Religion esos sectarios. Porque si bien
no puede temerse falte jamas la silla de
S. Pedro en la que Cristo Señor nuestro
puso el fundamento de su Iglesia, no por
eso debemos dejar de defender su autori
dad ; y por otra parte la dignidad misma
de nuestro supremo apostolado nos recuer
da la estrechísima cuenta que el Divino
Príncipe de los pastores nos ha de pedir
por la zizaña que crezca en el campo del
Señor si es que fue sembrada alguna por
el hombre enemigo mientras Nos dormía
mos, y tambien por la sangre de las ovejas
confiadas á nuestro cuidado y que por nues
tra culpa pereciesen.
Por tanto , habiendo consultado á algu
nos cardenales de la S. R. I., y meditado
ncm translati ex aliis auctoribus; ínter quos líis-
toriam reformalinnis a Merle d' Aubigné cons-
criptam, et Memorabilia super reformalione apud
Italos Joannis Cric pracipue desiguant. Ca>terum
de toto hoc librornm genere, quale futurum sil
vel ex eo intelligi potest, quod Societalis statuto
prascriptum ferturcirca peculiares Sodalium quo-
rum.dani coetus Librorum delectui destínalos vi-
dclicet ut numquam in hos ne duo quidem anuís
religiosa' seda! V'iri conveniant.
H¡ec ut primum relata ad nos sunt , non potui-
mns equidem non contristari graviter in ronside-
ratione periculi , quod neduni per remota ad Urbe
loca . sed propc ipsum Catholica; unitalis centrum
incolumitati Rcligionis sanctissimje a sectariis pa-
rari coguovirous. Quamvis epim timendum rnini-
me sit ne delieiat umquuiu Vetri Sedes , in qua
iuexpugnahile Eeclesiasutpnnidamentum a Cristo
Domino positum est, non ideo lamen eessare nos
licct ab illius auctoritate.tueuda ; ct ipso insuper
Suprcmt Apostolatus officio admonemur severis-
sima! ralionis , quam reposect a nobis dirimís
Pasloruni Princeps ob succrcscentia in Dominico
Agro zizaoia , si qua; ad iuimico homine nobis
dormieutibus superseminata fuerint , atque ob
creditarum ovium sanguinem qua; nostra hic cul
pa perierint.
con toda madurez el negocio, hemos de
terminado de acuerdo con ellos, escribiros
á todos vosotros, venerables hermanos,
esta carta en la que con autoridad apostó
lica condenamos de nuevo todas las men
cionadas sociedades biblicas condenadas ya
por nuestros antecesores; y ademas por
una decision de nuestro supremo apostola
do, reprobamos asimismo y nominutim y
condenamos la nueva citada sociedad de la
Alianza cristiana fundada el año último en
Nueva York y todas las demas sociedades
semejantes que ó se le hayan agregado ya
ó en lo sucesivo se le agreguen. Entiendan
pues todos que cometen un gravísimo cri
men contra Dios y contra su Iglesia , cuan
tos se inscriban en alguna de esas socieda
des ó les presten su apoyo ó las favorezcau
y fomenten de cualquiera manera que sea.
Confirmamos ademas y renovamos con au
toridad apostólica las mencionadas reglas,
tiempo ha establecidas acerca de la publi
cacion, propagacion, lectura y conservacion
de los libros de la Sagrada Escritura, tra
ducidos en lengua vulgar; y respecto de
las obras de otro cualquier autor, recorda
mos á todos que del>e estarse á las reglas
generales y decretos de nuestros predece
sores que se hallan al principio del índice
de libros prohibidos; debiendo abstenerse
de leer no solamente los libros que en el
mismo índice se designan nominatim, sino
tambien todos los demas de que se habla
en las susodichas reglas generales.
A vosotros pues, venerables hermanos,
Itaque nonullis S. R. E, Cardinalibus in eon-
silium adhibilis, ac tota reí rausa graviter matu-
reque perpensa , ex eorum quoque sententia deli-
beravimus hanc ad Vos omnes dare Epistolam,
Venerabiles Fratres, qua et cunetas supradictas
Socictates Bliblieas dnduni a nostris Decessoribus
reprobalas Apostolica rursus sui'loritate rondem-
namus; et nostri pariter Supremi Apostolatus
judicio reprobamus nominatim et condemnamus
memoratam novam sncietatem Christiani Fcederit
superiore anuo Nco-Ehoraci constitntam , et alia
cjusdem generis sodalitia si qua; jani ci accesserint
aul in posterum arcedent. Hinc notum omnibus
sit gravtssimi coram Deo et Erctesia criminis reos
fore ¡líos omnes, qui alicui earumdem Soeielatum
dare Domen, aut operam suam rommodare sru
quomodoc umque lavere pra'sumpserint. Conlir-
mamus insuper et innovamus Auctoritate Apos
tolica super memoratas prescriptioues jamdiu edi
tas super editione, divulgalinne, lectione et rcteo-
tione librorum sacra Scriptura' in vulgares liuguas
translatorum : de aliis vero cujusque Scriploris
operibus in communeni notitiam revocatum vo-
lumus, standum esse generalibus Regulis el Oe-
cessorum noslrorum Decretis, qua; Indici prohi-
bitorum Librorum proposita habentur; atque
adeo non ab iis tantuni Libris ravendum esse qui
como llamados á tener una parte en nues
tra solicitud , os recomendamos eficazmen
te en el Señor que segun lo permitan ó
aconsejen las circunstancias de los tiempos
y de los lugares, hagais saber y expliqueis
á los pueblos confiados á vuestra solicitud
pastoral los decretos apostólicos y esta
nuestra decision , y que procureis apartará
las ovejas fielesdeesa mencionada sociedad
de la Alianza cristiana y demas sus ausilia-
res , asi como tambien de las sociedades
biblicas y aun de toda comunicacion con
ellas. En consecuencia á vosotros toca ar
rancar de mano de los fieles, asi las Biblias
traducidas en lengua vulgar contra los so
bredichos decretos de los Romanos Pontí
fices como los demas libros proscriptos ó
perjudiciales , y procurar por lo tanto que
con vuestra autoridad y amonestaciones se
instruyan los fieles de cuál es el pasto saludable
de que deban alimentarse y cuál el mortífero de
que deban huir. Entre tanto dedicaos uno y
otro dia , venerables hermanos , á la pre
dicacion de la divina palabra , bien por vo
sotros mismos , bien por todos los que tie
nen en vuestra diócesis la cura de almas,
y por los demas eclesiásticos aptos para este
cargo ; y vigilar especialmente á los que
estan encargados de enseñar públicamente
la Sagrada Escritura , para que desempe
ñen su encargo con toda solicitud y segun
la capacidad de los oyentes , y que bajo
ningun pretexto se atrevan á interpretar y
nominalim in cumdem Indicrm rclali sunt , sed
ab alüs etiani, de quibus iu comniemoralis gcue-
ralibus pra'scriptionibus agitur.
Vobis autem , Venerabilcs Fratres , utpote in
nostra; solliciüidinis parten) vocatis, loimnenda-
mus in Domino vehementer, ut Apostolicum ju-
dicium , et mandata Ii.tc oostra concreditis pasto-
rali procurationi vestro: populis annunticlis et
explicetis pro oco et tempore, fídelrsque oves ¡i
prsdicta Societate Feederis Chrisliani, ca-terisque
eidem auxiliantibus , nec non ab nliis Biblicis So-
cietatibus. atque ab omni cum iliis communica-
tionc avertere connitamini. Juxta ha;c vestrum
quoque erit tum Biblia in vulgarcm linguam con
versa qus contra supradictas Komauorum Ponti-
licum sanctiones calila fuerint, tum alios qnos-
cumque proscriptos damnososve libros c lidelium
manibus ev,ellcre , atque adeo providerc ut fideles
ipsi monitis elaucloritate vestra edoceantur qund
pabuii genus sibi salutare , quod noxium ac mor-
tiferum ducere debeant (24). Intcrim instale quo-
tidie magis, Venerabiles Fratres, pnedicationi
verbi Dei tum per Vosipsos, tum per singulos
(24) Ex mandato Leonis XII, edite una
cum Decreto Congregationis Ivdicis 20 mar
ta 1823.
explicar las divinas letras contra la tradi
cion de los SS. PP. y el sentir de la Igle
sia. Finalmente , asi como es propio del
buen pastor no solo defender y apacentar
á las ovejas que se van con él , sino tam
bien á las que de él se alejan, asi tambien es
del vuestro y de nuestro cargo, encaminar
todos nuestros esfuerzos á que cuantos se
hayan dejado seducir de dichos sectarios ó
de los propagadores de malos libros, conoz
can mediante la divina gracia su pecado y
traten de expiarle con una saludable peni
tencia. Ni aun deben eximirse de la misma
solicitud pastoral sus seductores y aun los
mismos principales maestros de la impie
dad , pues si bien su iniquidad es mayor,
no por eso debemos omitir medio alguno
de procurar su salvacion.
Por lo demas, venerables hermanos, en
cargamos una vigilancia mas exquisita y
peculiar contra las asechanzas y tentativas
de los socios de la Alianza cristiana , á los
que de vuestro Orden gobiernan las iglesias
de Italia ó de otros puntos donde con mas
frecuencia concurren italianos , sobre todo
en los paises vecinos de Italia ó donde hay
grandes mercados y puertos , desde donde
es mas frecuente el paso á Italia ; porque
siendo ese el medio con que intentan llevar
á cabo sus intentos los sectarios, á él deben
dirigirse los esfuerzos de los obispos, espe
cialmente de dichos lugares para que, en
union con los nuestros y con el ausilio de
in cujusqueDioccesianimarum Curatores,a!iosque
Viros Ecclcsiaslicos ci rnuneri idoneos; atque ad-
vigilate impensius super illos pra;sertim, qui des-
tinati sunt lectionibus Sacra! Scriplura publire
habendis, ut oMicio suo ad audicntium captum
diligcoter (imgantur , et sub millo umquam ob
ten tu divinas ipsas Litteras contra Valruni tradi-
lionem aut prater Ecclcsi.-e Catholice sensum in
terpretari et explicare audeant. Deniquesicut boni
Pastoris proprium est uon modo tueri atque con
trire adhrcrcutes sibi oves , sed eas ctiam . qua, in
longiuqua recesserint, qurrrere ac. revocare ad
ovile; ila et Vestri Nostrique muneris erit omnes
pastoralis stmlii nervos co ítem intendere , ut qui-
cumque ab hujusniodi Sectariis, noxiorunique.
Librorum propagatoribus seduii se passi siut,
gravitatem peccati sui per Dei gratiam agnoscant,
et salutaris pirnitentia; remediis espiare sntagant :
nec vero abjiciendi sunt ab eodem sacerdotalis
sollii itudinis studio seductores illorum , praeipui-
qi'e ipsi impietatis magislri ; quorum etsi major
iuiquitas sil , non tamen abslinere dehemus ab
eorum sal ute, quibus poterimus viis et modiis,
impensius procuranda.
Crelcrum, Venerabiles Frates, contra insidias
et molimina Sociorum Foxleris Chrisliani pecu-
liarem et aerioreni imprimís vigilantiam exposci-
nius ab iis ex veslro Ordiuc, Lcclesias regunt
in Italia sitas, aut alüs in locis ubi Itali sa;pius
 Dios, trabajemos en desbaratar todas sus comendemos nnestra causa y la de todo el
maquinaciones. rebaño y de su Iglesia, invocando tambien
No dudamos que nuestra solicitud y la la piadosísima intercesion de San Pedro,
vuestra será auxiliada por la potestad civil, príncipe de los apóstoles, y la de los de-
especialmente por los príncipes de Italia, mas santos, principalmente la de la Biena
ya por su aventajado celo por la conserva venturada Virgen María á quien se ha dado
cion de la Religion católica , ya porque á destruir todas las heregías en el orbe
su prevision no debe ocultarse que interesa todo.
muy mucho al bien público que no se de Por último, en testimonio de nuestra
sarrollen los planes mencionados de los ardentísima caridad os damos, venerables
sectarios, pues es constante, y lo confirma hermanos y demas clero y fieles confiados
la experiencia de los pasados tiempos , que ét vuestro cuidado , os damos con todo el
el camino mas llano, el medio mas fácil de afecto de nuestro corazon la bendicion apos
retraer á los pueblos de la obediencia y fi tólica.
delidad á sus príncipes, es el indiferentis Dado en San Pedro de Roma el dia si
mo religioso propasado con el nombre de guiente de las nonas de mayo (8) del año
libertad religiosa. Y esto ciertamente no 1844, el XIV de nuestro pontificado. =
lo disimulan los nuevos socios de la AUanm
cristiana, los cuales aunque digan son ex Grbgorio Papa xvi.
traños á toda incitacion á guerra y sedicio
nes, confiesan sin embargo que de dejar á una simul manus noslras ad Deum , Venerabiles
todos y á cada cual indistintamente el de Fratres, eiqne nostram, lotiusque gregis, et Ec-
recho de interpretar á su arbitrio la sagra clesi.-e suas causam omni , qua possumus , fervida-
da Biblia , y de difundir asi en Italia esa rum precum humilitate commendemus : invocala
etiam deprecatione piissima Petri Apostulorum
omnímoda libertad de conciencia como ellos Principis, aliorumque Sanctorum, ac prassertim
llaman , resultará naturalmente como tina Bcatissimn Virginis Marín , cui datum est cune
forzosa consecuencia la libertad política de tas luercses interimere in universo mundo.
la Italia. Ad extremum , nostraj pignus ardentissime ca-
ritnlis Apostolicam Benodictioncm Vobis omni
Mas lo que ante todo importa es, vene bus, Venerabiles Fralrcs, ct concreditis cune
rables hermanos , que levantemos junta vestras Clericis, laicisque fidelibus eflbso cordis
mente nuestras manos á Dios y que con las afleetu peramanter impertimur.
Datum Roma; apud S. Pctrum postridie Nonas
mas fervientes y humildes súplicas le re- Man mdcccxliv Pontiflcatus Noslri Anno der—
quarto.
Gregorius pp. xvi.
versantur, maxime autem ¡o Italia! coafiiriis, aut
ubicumque emporia portusque cxtant, unde fre-
quentior in Italam commeatus est. Cum enim Scc-
tariis ipsis propositum sil inibi ad efTectum addu-
cere consilia sua , hinc et Episcopos potissimum
eorumdem l.ocorum alacri ronstantique studio
Nobisenm allaborare oportet illorum machinatio-
nibus adjuvante Domino , dissipandis.
Has autem riostras vestrasque curas adjutum
iri non dubitamus preesidio Civilium Potestatum ,
imprimís Potentissimorum Italia! Principum tum
pro singulari suo studio Kcligionis Catholicn con
servando), tum quod ipsorum prudentiam mínimo
fugit publica» ctiam rci interesse plurimum , ut su-
pradicta Sectariorum molimina iu irritum ca-
d.ml. Constat enitn, diuturnoque superiorum teni-
porum experimento comprobatum est, populis a
fidelitate atque obedienlia erga suos Principes rc-
trahendis non aliam esse planiorem viam , quam
indiflerentiam in RcligioDis negotio a Sectaríis
sub religiosa* Libertatis nomine propagatam. At
que id ne dissimulant quidem novi ílli Sodales
Faderis Christianit qui licet sesc alíenos profl-
teantur íi civilibus seditionibus concitandis ; ex
vindícalo lamen uuicuique de plebe Blbliorum
interpretandorum arbitrio, difTusaquc ita in Ita-
lorum gentem omnímoda quam vocant libertate
ronscientis polilicam pariter Italist libertatem sna
veluti s|ionte consequuturam fatentur.
Quod vero primum et maximum est, levemus
 — 251 —
siones , inspirando otras temor por sus
convulsivos sacudimientos ; que la autori
dad pública participando de los mismos,
SOBRE LA REVISTA ya estimula y fomenta , ya reprime y sofo
ca ; que la proteccion lo mismo que la re
LOS INTERESES MATERIALES Y MORALES presion no son siempre la consecuencia de
un plan premeditado de sabio progreso,
DEL SR. D. RAMON DE LA SAGRA. cuya direccion debería estarle encomenda
da; que las contradicciones ofrecidas por
la versatilidad de las tendencias son igual
mente funestas para el prestigio del poder
I y la ventura de los pueblos; pero nunca
ARTICULO 1.° hemos podido entender lo que quiere sig
nificar el Sr. de la Sagra cuando á renglon
En una publicacion que tiene por objeto seguido , queriendo dar cuenta del estado
la sociedad , que lleva por título este mis de su entendimiento , dice « meditando so
mo nombre, y en la cual se han examina bre estos fenómenos el redactor del futuro
do extensamente las doctrinas de algunos periódico llegó al estado de no tener opi
de los principales socialistas modernos , niones sino principios en política. Sabe ó ig
justo es dar una ojeada á la Revista de los nora , pero no cree ni duda. » ,
intereses materiales y morales que está dando Llámansc principios en una ciencia aque
á luz en Madrid el Sr. D. Ramon de la Sa llas verdades fundamentales sobre las que
gra , y que él apellida periódico de doctrinas se sienta todo el edificio científico. Estas
progresivas en favor de la humanidad. generalmente son pocas, tal vez una sola;
Desde luego convendremos en que es y aun cuando se cuenten algunas, por lo
muy útil difundir en España la aficioná esa comun pueden reducirse á otra que les sir
clase de estudios , y felicitamos al Sr. de la ve de basa. De esta regla no puede excep
Sagra por las curiosas noticias que propor tuarse la ciencia política ; y si el Sr. de la
ciona con respecto á la estadística de otros Sagra solo tiene en ella principios, si no se
paises , por los esfuerzos que hace para re tratase de un hombre tan laborioso y en
coger datos sobre la de España , y por los tendido, casi pudiera creerse que no ha
cuadros que nos ofrece del triste estado so meditado mucho sobre la oscuridad de esta
cial de algunas naciones que no han sabido ciencia.
conciliar el bienestar del mayor número En efecto , ¿ qué son las opiniones ? son
con el desarrollo industrial y mercantil y aquellas convicciones en pro ó en contra de
la pujanza política. Mas por mucho respeto una doctrina, que si bien se apoyan en ra
que nos inspire la persona del Sr. de la Sa zones plausibles, no excluyen del ánimo
gra , y por mas que aplaudamos su labo todo recelo de error, á causa de que mili
riosidad, no podremos prescindir de hacer tan por la parte opuesta otras no despre
le algunas observaciones sobre los artículos ciables, y que no carecen de peso á los
que él llama doctrinales , ó sea de discusion y ojos de una persona juiciosa. El Sr. de la
manifestacion de principios. Sagra dice que en política no tiene opinio
Es verdad lo que asienta el Sr. de la nes; lo que ha de significar que sus con
Sagra en el primer artículo de su Revista vicciones han adquirido una completa
que las sociedades modernas se hallan en certeza , que no abriga ningun temor de
un período de agitacion progresiva del cual equivocarse, que nada valen en su concep
participan mas ó menos las instituciones y to las razones en que estriban los que pien
los gobiernos; y que desgraciadamente no san de una manera diferente. Esto apenas
se descubre aun, que la tendencia de estos podemos creerlo de una persona tan enten
corresponda á las necesidades urgentes de dida que no puede ignorar cuan varios y
aquellas; que se percibe en la marcha de difíciles son los senderos por los cuales mar
los pueblos mas energía que uniformidad , cha la ciencia política ; que no puede igno
y que lo mismo pudiera decirse de las doc rar cuán profundamente se hallan divididos
trinas de los reformadores; que por esta los autores que han hablado de semejante
causa la vida social resulta tan vaga é ir materia , cuánto discrepan entre sí en pun
regular como activa y animada; recomen tos de la mayor importancia los primeros
dándose unas veces por sus nobles impul hombres de estado.
 Tampoco comprendemos aquellas otras
palabrassaAe ó ignora, pero no cree ni duda;
y confesamos ingenuamente que no atina
mos cómo puede hallarse en tal situacion
el entendimiento de un hombre que haya
estudiado , meditado y observado , como lo
ha hecho ciertamente el Sr. de la Sagra.
¿Que es dudar? es estar el entendimiento
indeciso entre dos proposiciones , ya sea
por la igualdad de razones que militan en
favor de ambas, ya porque en pro de una
ni de otra no se presenta ningun motivo
bastante á obtener al asenso. El Sr. de la
Sagra habrá reflexionado algunas veces so
bre la teoría de las formas políticas y su
aplicacion á diferentes pueblos ; y es impo
sible que no haya vacilado entre la conve
niencia de estas, la oportunidad de aque
llas, la relacion entre un estado social de
^una nacion y la clase de gobierno bajo que
vivia, ó que se trataba de imponerle; es
imposible que la España, la Italia, la Ale
mania, la Rusia, y demas paises del Norte,
la Francia, la Inglaterra, las repúblicas de
América no le hayan ofrecido numerosos
problemas en que habia motivos de dudar.
Cuando habrá encontrado razones iguales
en pro y en contra de una opinion , qué
habrá hecho sino mantener suspenso el jui
cio á manera de balanza en el fiel ? y esto
es cabalmente lo que se llama diular.
Uno de los discursos con que inaugura
su publicacion el Sr. de la Sagra es el que
lleva por título: del principio de la autoridad.
En él, entre algunas pinceladas líeles sobre
el decaimiento de las creencias religiosas,
se nota bastante exageracion , mucha ine
xactitud y algunos errores. «Hubo un tiem
po, dice el Sr. de la Sagra, no muy dis
tante aun de la época presente , en el cual
secreia que la autoridad suprema emanaba
de la Divinidad. En este sublime atributo
estribaba su prestigio , que cuando era
ejercido para el mando de las naciones,
fue revestido de riqueza y magnificencia
como dotes inherentes al respeto y ve
neracion que inspiraba
«El prestigio pues que tenia la autoridad
era inherente á ella y emanaba solo y es-
clusivamente de su origen div ino. . . »
« Claro es que con tal sancion religiosa
la obediencia resultaba infalible ; y si la debi
lidad humana ó la severidad de la ley y
de los preceptos daban origen al delito ó al
pecado , ambos habian de ser expiados ir
remisiblemente, no mediando la miseri
cordia de Dios, ó en esta vida ó en la
futura. Pero en ningun caso era concebible
la rebelion voluntaria contra los mandatos
de la autoridad , y mucho menos la discusion
sobre ellos. El negarlos se huhiera reputado
acto de demencia; el ponerlos en duda, acto de
sacrilegio. El principio de la autoridad re
posando en una creencia, era artículo de fe
religiosa; y por lo tanto comprendía en si
mismo los infalibles efectos de la obedien
cia ciega, de la sumision profunda, del
respeto y de la veneracion (pág. 13 y 14).»
En estos pasages hay verdad y hay error.
Es cierto que se creia que la autoridad su
prema emanaba de la Divinidad, y lo creen
aun todos los cristianos; pues está espresa-
mente consignado en la Escritura que no
hay potestad que no venga de Dios; es
cierto que esta sancion religiosa de la au
toridad la rodeaba de mucho prestigio y le
grangeaba de parte de los pueblos sumision,
obediencia y acatamiento; pero es inexacto
que en ningun caso fuese concebible la re
belion voluntaria contra los mandatos dela
autoridad, y mucho menos la discusion
sobre ellos; es falso que la obediencia re
sultase siempre infalUAe ; y es intolerable
exageracion el decir que el negar los man
datos de la autoridad se hubiera reputado
acto de demencia, el ponerlos en duda acto
de sacrilegio.
Como no podríamos fácilmente persua
dirnos que el Sr. de la Sagra hable de los
tiempos antiguos sin haber estudiado su
historia y sus doctrinas, nos inclinamos á
creer que al decir esto se olvidó de lo que
habia leido , y empeñado en el contraste
entre una época de fe y otra de increduli
dad , recargó excesivamente el cuadro, y
dió una existencia real á seres q,ue solo
existían en su mente. De otra manera no
hubiera podido caer en semejantes exage
raciones, confundir tan lastimosamente la
sumision á la autoridad política con la sumi
sion á la autoridad religiosa, no distinguien
do entrelos diferentes caracteres que se se
ñalaban á la una y á la otra , dimanados
» del origen , objeto y facultades que á cada
uno se atribuían , ni tampoco entre la va
riedad de actos de cada una de ellas, y las.
gradaciones que se conocían y se enseña
ban públicamente, relativas á las obliga
ciones que de los diferentes mandatos re
sultaban. A no olvidar lo muchísimo que
se ha escrito sobre el principio de autori
dad aun en los siglos medios, las doctrinas
sumamente latas que en este punto se de
fendían por los teólogos mas aventajados,.
 253 —
aun en aquellas épocas en que estaba mas comunicacion entre las clases representa
robusta y pujante la influencia de la Igle das por distintos cuerpos y entre todas ollas
sia , a no haber olvidado lo que ensenaban y la autoridad suprema que las gobernaba;
los teólogos y los juristas sobre el origen, todo se examinaba , todo se discutía ; los
objeto y calidades de las leyes , sobre los pueblos alegaban sus lueros , las clases sus
casos en que se debia obedecerlas, y los en privilegios, el poder sus prerogatívas ; se
que se podia y aun debia desobedecerlas , protestaba contra lo opuesto á la razon y á
sobre su justicia ó injusticia , sobre su con la justicia ; unas veces estas protestas de
veniencia ó sus daños, sobre los derechos tenían á la autoridad en su camino , otras
y deberes de los pueblos , sobre las recí la obstinacion de esta provocaba insurrec
procas obligaciones entre estos y los sobe ciones abiertas : ora se terminaban los dis
ranos, no hubieran podido pintar á la Eu turbios con transacciones, ora con la der
ropa antigua como un conjunto de nacio rota de uno de los contendientes, tal vez
nes de ilotas que no se atrevían á pensar con la intervencion del Sumo Pontífice;
para examinar los actos de ninguna autori pero jamas, en ningun tiempo antes de la
dad , que vivían abatidos con el entendi revolucion religiosa del siglo XVI , en que
miento en tinieblas y la frente en el polvo, se proclamó la mal llamada libertad del pen
sin hacer otra cosa que ponerse de rodillas samiento, ha existido esa época que nos
para escuchar los mandatos de la autori pinta el Sr. de la Sagra en que el princi
dad , obedeciéndolos ciegamente ; no hu pio de justicia ó de razon suprema residie
biera podido decir que » de esta manera se en la autoridad de tal suerte que todos
fueron gobernados los pueblos y las fami sus actos fuesen calificados de esencialmen
lias durante siglos , bajo un régimen absolu te justos. ¡ Qué error! si los límites de un
to , fundado en la fe y nó en la fuerza , y artículo nos lo permitieran aduciríamos
de consiguiente constituyendo un despotis abundantes pruebas de loque estamos afir
mo aceptado voluntariamente como ley mando; mas diremos, con solo acudir á
providencial y nó como institucion huma una biblioteca cualquiera, con solo esten
na ; que bajo esta creencia , el principio de der la mano á los estantes donde se vieran
justicia ó de razon supi-ema residía también en libros viejos, podríamos indicar numerosos
la autoridad , y en todos los actos emanados de pasage¿, tratados enteros, grandes volú
ella; que como tales los acataban y obede menes , que serian la mas terminante refu
cían los pueblos y los individuos, bien fue tacion de lo que con tanta seguridad esta-
sen favorables ó contrarios á sus intereses blace el Sr. de la Sagra.
particulares; que el origen superior de don Y cuenta que no nos causan ninguna es
de se suponían emanados, los calificaba de trañeza las equivocaciones de este escritor,
esencialmente justos , y la. humana razon ce á quien por otra parte apreciamos y respe
día humilde ante esta manifestacion de un tamos como se merece; son tantos los com
poder incomprensible fpág. 14 y 15).» pañeros que en esta parte tiene , asi en Es
Resulta de lo establecido por el Sr. de paña como enelextrangero!...Es indecible
la Sagra que antiguamente vivieron los la ligereza con que se juzgan los siglos an
pueblos y las familias bajo un régimen ab teriores al XVI , mayormente en lo que to
soluto, bajo un despotismo aceptado volun ca á las doctrinas. Hay sobre el particular
tariamente, sin examinar nada, sin discu ideas tan extrañas , son tan crasas las equi
tir nada. La autoridad decía mando, y los vocaciones , que á no haberlo visto de cer
pueblos inclinando la cabeza contestaban ca cotejando lo que se dice con la realidad
obedecemos. No parece sino que no existen de los hechos , no es posible concebir có
en la historia los recuerdos de las Cór mo se dejan llevar hasta tal extremo hom
tes de Castilla , de Navarra , de Aragon , bres de incuestionable talento y acreditada
de Valencia , de Cataluña , de los Estados laboriosidad. Por un conjunto de circuns
de Francia , de los de Alemania y otros tancias que no es oportuno explicar ahora,
paises del Norte, y de Inglaterra; no pa hay en el fondo de la ciencia europea , en
rece sino que se ha perdido la memoria de lo que tiene de mas popular y brillante ,
las repúblicas de Génova , Pisa, Venecia, cierto fondo de errores que se han hecho
Florencia ; no parece sino que distan mu como hereditarios, y se admiten como ver
chísimos siglos de nosotros aquellos tiem dades inconcusas. La causa de esto se ha
pos en que la Europa entera disfrutaba de lla principalmente en que muchos de los
instituciones en que habia una incesante hombres que mas figuran en el mundo
 251 —
científico y literario, cuando se trata de gresos del espíritu humano , con respecto
ciertas materias no consultan sino una cla á las cuestiones mas interesantes dela cien
se de libros, que por lo comun no estan cia política.
sobrantes de exactitud é imparcialidad. Co La profunda conviccion que de mucho
mo el acudir á las fuentes donde podrían tiempo atras abrigamos sobre la ignoran-
informarse completamente, es cosa agena cía y ligereza de que nos hemos lamenta
de sus ocupaciones ordinarias, y los estu do, nos inspiró la idea de un trabajo bas
dios que se verían precisados á hacer son tante extenso que disipase los errores sobre
poco conformes á su gusto , prefieren va este particular , el cual forma parte de la
lerse de libros que ó les extractan las doc obra que dimos á luz titulada El Protestan
trinas en trozos incompletos si nó trunca tismo comparado con el Catolicismo en sus re
dos adrede, ó les dan cuenta á su modo, laciones con la civilizacion europea. La mitad
ofreciéndoles nó el sistema del autor de del tomo tercero y gran parte del cuarto,
quien tratan , tal como este lo concibió y tienen por objeto dar ideas claras y preci
explicó , sino alterado y desfigurado , tal sas sobre el derecho divino , sobre el origen
como á ellos les ha venido en talante. del poder , sobre sus facultades y objeto ,
La mucha aficion á las ciencias sociales dilucidando estos puntos y manifestando
y políticas que se ha desplegado en el siglo las equivocaciones que en ellos se han pa
anterior y en el presente, ha hecho que se decido , por el prurito de hablar de cosas
hablase frecuentemente de las doctrinas de que no se conocían, lo que acarreaba que
los católicos sobre el origen del poder , su se achacasen á todos los bscritores católi
objeto y facultades. Hablando de estas ma cos, doctrinas que ellos jamas habian pro
terias sin consultar directamente las obras fesado. Allí estan los pasages de S. Juan
de los principales escritores que cuenta la Crisóstomo, de S. Agustín, de Santo To
vocaciones
Iglesia , eragravísimas,
natural que como
se padeciesen equise' más deAquino, deBelarmino, de Suarez,
en efecto
del venerable Palafox, del PadreMarquez,
han padecido. | Cuánto no se ha dicho y del Padre Mariana , del Padre Fray Juan
desbarrado sobre el principio del derecho di de Santa María, de San Liguoriy de otros
vino ! ¡ cuánto sobre el despotismo ensenado teólogos ilustres , allí se patentiza con ar
por los católicos , y cuan pocos son los que gumentos irrecusables fundados en los tex
han estudiado á fondo esas materias pasan tos mismos de los autores, cuan equivoca
do muchas horas en la lectura de nuestros damente han sido juzgados estos, y con
teólogos ! Los que mas se habrán inter cuánta injusticia los han tratado la igno
nado en estas investigaciones habrán creido rancia ó mala fe.
haber hecho lo bastante consultandola Po Esto en cuanto á la política : por lo to
lítica sagrada de Bossuet , la Teoría del po cante al desarrollo intelectual , á la lucha
der del vizconde deBonald , y las obras del de la razon con la autoridad, al pretendi
conde de Maislre ; y sin embargo á pesar do estorbo que esta ponia á aquella y otros
del profundo respeto que tributamos á es puntos análogos que tambien indica el Se
tos autores, y de la admiracion que nos ñor de la Sagra , bien que someramente,
inspiran , todavía nos atreveremos á decir inclinándose á las falsas opiniones que por
que despues de leidos y conocidos á fondo desgracia se han vulgarizado , merced á las
todos sus trabajos, aun resta mucho que causas arriba señaladas , tambien demos
aprender en política en los escritos de Be- tramos en el mismo lugar, con el convin
larmino, deSuarez, de Cayetano, de San cente testimonio de los hechos, que habia
to Tomás deAquino,y de muchísimos otros mucho de inexacto y errado en los juicios
teólogos insignes. Mas diremos , no solo que sobre aquellas épocas han emitido al
resta mucho que aprender, sino que es gunos escritores cuya Hombradía parece
imposible formarse ideas exactas sobre la haberles asegurado el derecho de afirmar
marcha de la ciencia política en Europa y sin probar. — /. B.
sus relaciones con la historia de los gran
des acontecimientos, sin estudiar las obras
de los teólogos; los cuales por estar escri
tas en el estilo y lenguage de su tiempo ,
no dejan de contener un inestimable cau
dal de sabiduría y de contribuir en gran
manera á completar el cuadro de los pro
 255 — No podía escogerse trabajo mas á pro
pósito para un ensayo del talento poético ;
porque en él se habia de palpar si el tra
LITERATURA. ductor sabia mostrarse poeta comprendien
do al poeta ; si tenia el sentimiento de la
religiosa ternura que respira El Crucifijo:
si acertaba á espresar el sublime lenguage
del Angel de la tierra despucs de la destruccion
del globo, y hacernos oir el acento de la
OBRAS Desesperacion en la boca del mortal que
blasfema de la Providencia.
DI El Crucifijo que por el doble título de su
nombre y de su mérito, ocupa dignamen
D. JUAN MANUEL DE BERR10ZABAL te el pimer lugar entre las composiciones
traducidas, está vertido al español con sua
MARQUES DE CASA JARA. vísima uncion , y con aquella belleza grave
y melancólica , que tan bien asienta á los
recuerdos que escita un Crucifijo , recogido
del seno de una persona querida que aca
En este siglo de escepticismo é indife ba de espirar.
rencia , en cuyo torbellino perece tan las
timosamente la fe de muchosjóvenes , víc ¡ Imágen de mi Dios, heredamiento
timas de la inesperiencia y del irreflexivo De precio el mas subido ,
amor á la novedad que acompañan la pri Que de su yerto labio be recogido
mavera de la vida , es sumamente grato y Con su final adios y último aliento,
consolador encontrarse con uno que reu Símbolo para mí dos veces santo !
niendo á sus cortos años esclarecidos títu ¡Ay cuántos mi quebranto
los , pingüe fortuna , entusiasmo por las be Con encendido lloro
llas letras y dilatados viages, no se haya Ha bañado tus pies, que amante adoro;
dejado contaminar por el emponzoñado Desde el sacro momento
aliento de la época , y antes bien conserve En que á mis manos trémulas pasaste
en sus escritos y en su corazon , las creen Desde el seno de mártir inocente,
cias en todo su vigor , la piedad en toda su Estando tu aun caliente
ternura. Tal nos parece el distinguido es Con su postrer suspiro que guardaste !
critor D. Juan Manuel de Berriozabal , Fugitivo esplendor aun relumbraba
marques de casa Jara ; y tal les ha de pa En sus lánguidos ojos de dulzura ;
recer á cuantos se hayan saboreado en la El sacerdote anciai.o murmuraba
lectura de sus obras. No se desdeña el Se Del dichoso morir el suave canto
ñor de Berriozabal de escribir en prosa , y De celestial encanto,
aun de ocuparse en traducciones que pue Semejante al arrullo de ternura
dan ser útiles á la religion , pero su aficion Con que adormece maternal cariño
favorita es la poesía: ha nacido poeta, Al regalado niño.
compuso versos desde su niñez , v compo De su esperanza pia
niendo versos descenderá al sepulcro. De En su frente la huella se veia ;
muy temprana edad habia ya traducido al En su rostro bañado
gunas composiciones de Lamartine que dió De insólita hermosura
despues á luz en 1839, mereciendo su tra Pasagero dolor hubo estampado
bajo tanto aceptacion que fue luego reim Su gracia y el donoso desaliño ,
preso en París, y tambien en otro lugar Su magestad la muerte grave y pura.
que no nombraremos, donde se atacó el
derecho de propiedad del autor y lo que Del funerario lecho
quizás le fue mas doloroso , estropeándole Un Lánguidamente
brazo le pendia
el otro
; sobre el pecho
lastimosamente muchos versos, tina tra
duccion semejante era ardua empresa para Plegado parecía
un mozo de pocos años , pero es menester Que aun con abrazo estrecho
confesar que el Sr. de Berriozabal no se La dulce imágen de Jesus ceñia.
mostró inferior á su empeño. Su labio se entreabría
Para estrecharle aun ; su ánima empero Y tu globo espumante
Entre los santos ósculos ya habia Pacíficas mecieron.
Veloz desaparecido , ¡ Sobre tu tierna frente que aun nacia ,
Cual perfume ligero, La
Conluna
mas, grata
el sol dulzura
brillaban á porfía !
Que la llama devora aun no encendido.
Todo en su boca frígida dormía, Que tu risueña aurora ,
Los inquietos latidos Y mas que el medio dia
Del corazon callaban ; Resplandeciente y pura
Sus párpados rendidos La mirada de Dios centelladora
Al sueño sepulcral medio caidos De la vida inmortal aun te vestía.
Apenas ver dejaban ¿Cuál es tu destino?... ¡ En su semilla aho-
Sus ojos de tinieblas circuidos. De cuantos seres inmortales lleno ( gados
Debiera estar tu seno !
En el Himno del Angel de la tierra despucs ¿Do estan? ¿Es cierto? ¿Es ya ceniza fria
de la destruccion del glolm , abandona el poe Lo que en la eternidad vivir debia?
ta ese sentimiento de blanda y melancólica
ternura y deja que hable la divina sombra Acongójase el pecho al recorrer las ter
que no viendo en la tierra ribles páginas de La Desesperacion , y al en
contrarnos con La respuesta de la Providen
Mas que cenizas, míseros despojos cia, parécenos que dispertamos de un en
De un lucero difunto, sueño infernal en la aurora de un hermoso
Mas que un hueso de fruta pestilente, dia. Difícil parecía que en el corazon tier
Que ha ya roido del gusano el diente, namente religioso del jóven traductor se
se espresa con aquel acento de sublime do hallase una cuerda que vibrase tan recio,
lor que cumple á un querub, que abando y que con tan bronco sonido imitase el len-
na el lucero confiado un día á su guarda , guage de los condenados; lenguage que
y que no habiendo podido evitar su des penetra hasta el fondo del alma , y que de
truccion , acata los decretos del Eterno ; jaría en ella una impresion funesta , sí lue
go
El despues
hijo de laque
nada la existencia
Y el vuelo remontando
Desde lejos sacude de sus alas Ha maldecido
El polvo vil , y aun otra vez se inclina no hablase el Supremo Hacedor defendien
Para tornarle á ver do él propio su causa , y no aterrase á su
La sorpresa del ángel, al mirar al globo débil criatura que blasfemaba lo que no
reducido á un monton de ceniza fria está comprendía , diciéndole
espresado con suma maestría ; Lamartine Y Para
yo ser
la eiernidad
justo tú tienes un dia
hizo un esfuerzo para levantarse á la altu
ra del celeste espíritu ; y el jóven tra La traduccion de El Hombre á Lord Bij-
ductor español no se quedó rezagado en ron, es tambien propia del terrible genio á
el atrevido arranque : el mismo Herrera quien va dirigida: la siguiente muestra da
no desdeñaría por cierto el siguiente pa- rá á nuestros lectores una idea del desem
sage. peño del traductor
; Y qué ! ¿ tú eres tierra inanimada , ¡ Tú , cuyo nombre verdadero el mundo
Tú eres la que yo vía Ignora todavía, misterioso
¡ Ay Dios ! aun no hay un dia , Espíritu , mortal , demonio ó ángel ,
Alanzarte inflamada Cualesquier cosa que tú seas , Byron ,
Del dedo de Jehbvá como centella , Genio bueno ó fatal , de tus conciertos
DeV amor y la vida La armonía frenética me agrada ;
En la hoguera encendida? Y
Como
de los
mevientos
agradaelelferoz
estallar
rugido
del rayo
Con ruboroso velo
Admiracion y envidia á toda estrella Cuando juntan su voz en las tormentas
Cubrió la faz. Tu descendiste al cielo, De los torrentes al estruendo sordo!
Y los astros saltaron Tú
Es tu
dominio
moradael lóbrega
horror. laAguila
noche,
adusta ,
Al punto que te vieron ,
Y las olas de azul apaciguaron De los desiertos orgullosa reina ,
Bajo tu peso su bullir bramante , Asi rehuye los floridos prados ;
Solo le agradan como á tí , las rocas , 257extension
— y grandeza de su plan , por sus
Que
Y queel elinvierno
rayo partió
nevoso
; solo
ha encanecido
le placen , imágenes altas y atrevidas , y finalmente
por su exquisito sabor de mística y de san
Solitarias riberas , que el naufragio tidad. Empero este grandioso monumento
De sus despojos pálidos sembrara , de gloria para su autor , quedó sepultado
O sanguinosos campos que ennegrecen entre indignas cenizas en esa vandálica
Los
Y mientras
deplorables
ponerestos
el nidodelentre
combate
las flores
: inundacion del mal gusto, en que los Gón-
goras , es decir , los Alaricos y Atilas de la
Cabe
Ella
Y en salva
el parlero
declive
la horrible
de
arroyo
los de
agrios
Filomena
Athosmontes
cumbre
; , , española poesía , redujeron á escombros el
lloreciente imperio de las letras. Este ame
nísimo campo asolado con tal barbarie se
Viendo á sus plantas insondable abismo , vio en breve cubierto de malezas , las cua
El
De rudo
palpitantes
nido impávido
miembros coloca
rodeada,
; les por mas de una centuria hicieron olvi
dar las muchas preciosidades que bajo de
De ásperas rocas, donde verdinegra aquellas ruinas se hallaban soterradas. En
Gotea sin cesar caliente sangre, aquel tiempo fue moda vivir á oscuras. Sa
Baña su pecho de inhumano gozo bido es que la aurora que disipó- tan omi
Con los chirridos lúgubres que arroja nosas tinieblas, fue la aparicion admirable
La desvalida presa que sus garras de Luzan , Cadalso, Moratin , Melendez y
Oprimen
Y que
en jubilosa
aun, ahogan
viva
magestad
devora
, hieren
su
se atroz
aduerme
, descuartizan
pico ; , otros beneméritos ingenios, cuyos nombres
pronunciamos de pocos años á esta parte
con poco respeto , con ingratitud : olvida
Mecida en alas de la gran tormenta. mos lo que les debemos: olvidamos que no
Semejante al pirata de los aires es lo mismo conquistar un reino que apro
Eres , ó Byron ; del despecho insano vecharse de las conquistas de nuestros
Son tu mas dulce música los gritos : predecesores : deslumbrados con los relum
Tu espectáculo el mal , y tu infelice brantes vuelos de algunas águilas extran-
Víctima el hombre. Cual Satan tus ojos geras las seguimos con peligro de abrasar
Han medido el averno; allí tu alma , nos en los rayos del sol , apartando la vista
Al sumergirse , á la esperanza ha dicho del gracioso y apacible revoloteo del colo
Un adios eternal. rín de Batilo..
Quien tan felizmente se habia ensayado « Nadie ignora que con la restauracion
en traducciones semejantes , bien podia del buen gusto salieron del olvido en que
acometer empresas de mayor entidad ; y el yacían algunos de los muchísimos buenos
Sr. de Berriozabal se sintió ya con fuerzas poetas del siglo de oro de la lengua caste
para poner la mano en la recomposicion ó llana : todos se afanaron por estudiar la
renovacion de un poema épico. Hablamos docta y castiza antigüedad del idioma y las
de la Cristiada de Hojeda, publicada por el bellezas de su poesía en los autores que
jóven poeta con el título de Nueva Cristiada. habia ultrajado la generacion anterior ; los
La rapidez con que vamos examinando las impresores los desagraviaron haciendo de
obras del Sr. de Berriozabal , no nos per ellos nuevas ediciones ; diéronse á luz di
mite entrar en cuestiones acerca las venta versas colecciones , que si bien carecían
jas, inconvenientes y dificultades de seme del gusto, orden y delicadeza para elegir
jante trabajo ; en el prefacio de su obra la que en ellas echan de menos los maestros
ha tocado el Sr. de Berriozabal , y creemos del arte , presentaban el oro como sale de
que para dar ideas claras sobre el particu la mina , entremezclado con otras materias
lar nada mas á propósito que sus mismas no tan dignas de estima ni de valor tan su
palabras. bido. Pero aun dormia Hojeda en el polvo
«El Padre maestro Fray Diego de Ho del olvido , ni era llegado el tiempo de su
jeda , dominico de Lima , hallándose de resurreccion ; los restauradores de la buena
regente de los estudios de su convento, poesía estaban demasiado ocupados en can
compuso en los primeros años del siglo diez tar amorcillos profanos , y al otro lado del
y siete , un poema , divino por su objeto , Pirineo recibia Voltaire el incienso de los
por la admirable maestría de su extructu- ilusos. En otras naciones, principalmente
ra , por la inmensa erudicion que encierra, en Alemania , agitaba la inspiracion de Dios
por la elevacion de sus pensamientos , por los ardorosos pechos de los vates ; pero la
la ardentía poética de sus afectos , por la Francia estaba de por medio. Las modas
TOMO II. 17
 — 258 —
de esta nacion vecina tarde ó temprano de su carácter divino aquel raudal de amar
suelen venir á España : aquella se ha le guras y dolores que vierte sobre él la per
vantado del abismo de la impiedad que es versidad humana. Asi el cielo, la tierra,
una tumba hedionda , ha visto que era in los ángeles , los demonios , Dios y los hom
mundo el trage del cinismo y ya lo arroja bres todo está en movimiento, todo en ac
avergonzada para adornarse del antiguo cion en este magnífico espectáculo , donde
timbre de muy cristiana : es dicha de su la pompa y brillantez de las descripciones,
suelo que en él se estén dando un ósculo la belleza general de los versos y del estilo
de paz la religion y las letras. Ya se deja corresponden casi siempre á la grandeza de
entender que el siglo en que vivimos á pe la intencion y de los pensamientos» Hasta
sar de las tempestades que corre la nave aqui el Sr. Quintana.
del Estado , es mas favorable que el pasado Quien lea este magnífico bosquejo, se
á la reaparicion del grande Hojeda. El he admirará sin duda de que la Cristiada no
cho lo confirma. En mil ochocientos trein sea el poema mas célebre del mundo, ó al
ta y tres publicó D. Manuel José Quintana menos atribuirá su oscuridad á una causa
una coleccion de los mejores trozos de nues grave y misteriosa ; pero el mencionado
tros poemas heroicos é insertó en ella diez crítico desenvuelve este enigma , haciendo
y siete fragmentos de la Cristiada , y en el una larga enumeracion de los defectos que
discurso crítico que los precede leemos en cometió el grande Hojeda al ejecutar el
tre otras cosas lo siguiente : « La parte so plan que habia ideado con tan prodigiosa
brenatural de estos poemas, ó llámese má perfeccion ; enumeracion que me abstengo
quina , que como condicion épica es, segun de copiar, porque los aficionados pueden
la opinion general un accesorio preciso en verla en el autor que he- citado como el
ellos, era en la Cristiada la esencia verda único que ha hablado de esto.
dera de su argumento , puesto que en ella «Quisiera yo que no fuesen tan raros
•todo es maravilloso y divino. Su enlace, como son los ejemplares de la antigua Cris
pues , y su oportunidad , no era por lo tiada , pues teniéndola á la vista se me po
mismo tan difícil aqui como en las fábulas dría disculpar y aun agradecer el atrevi
puramente humanas, aunque era á la ver miento de haber derribado con ardor y con
dad mucho mas arduo su desempeño. Pero brio juvenil aquel viejo y desmedido edifi
no hay duda en que está grandemente con cio, que yacía en la soledad y el abandono,
cebida en la Cristiada esta alta composicion para edificar sobre sus mismos cimientos y
en que los hombres, sin saber lo que ha con el oro hallado entre sus ruinas, otro
cen , persiguen , atormentan y ajustician á nuevo palacio mas hermoso para el Rey de
su Salvador; en que los espíritus infernales los Cielos. Pudiera haber hecho del todo
inciertos al principio del gran acto que se mia la gloria de esta nueva fábrica cons
prepara , dudan , averiguan , despues tra truyéndola con el caudal de ideas y con el
tan de impedirlo por medio de equidad y plan ageno; pero ¿á qué fin aumentar el
de blandura, y desengañados al fin y furio número de los plagiarios ocultos que, en
sos de no poderlo estorbar, acrecientan galanados con robos se avergüenzan de de
hasta un punto sobrenatural la rabia y cruel cir « esto no es mio ? » Tan lejos estoy de
dad de los sayones como en venganza de la semejante ratería , que mi anhelo de en
mengua que van á padecer , mientras que grandecer la memoria de Hojeda ha raya
los, moradores del cielo conmovidos á un do en un entusiasmo no estéril ni infecundo
tiempo de dolor , de horror y de maravilla sino eficaz y activo, para con nueva loza
por lo que se consiente á los hombres con nía levantarle de su sepulcro , y generoso
el Hijo de su Hacedor , bajan y suben de para cederle las flores con que he retejido
la tierra al cielo, del cielo á la tierra á su la corona de su inmortalidad.
ministrar aqui consuelos, allí esperanzas, « Diré pues lo que he hecho para lograr
mas allá firmeza y resignacion , y algunas lo. Copiar en miniatura su cuadro gigan
veces terror y espanto , ya que no se les tesco. He dado mas vida á las fisonomías,
permiten ni la defensa ni el castigo. Dios rápido movimiento á las figuras , y á la ac
en lo alto, inmoble en sus decretos, lle cion mas calor , mas variedad , mas ener
vando á cabo la obra acordada en sumente gía, mas vuelo. ¿Cómo? conservando en
para beneficio de los hombres , y su Hijo lo posible el grandioso plan del antiguo
en la tierra prestándose al sacrificio y su poema, sus ideas, y hasta sus versos cuan
friendo con toda la magestad y constancia do son buenos ó pueden convenir á las
 259 —
nuevas dimensiones del mio; creando imá fallo sobre las cuestiones literarias que aqui
genes nuevas; retocando y avivando las podrían ofrecerse , nos contentaremos con
antiguas; suprimiendo todo lo frio, todo lo haeer notar algunas de las muchas precio
difuso, todo lo insípido; poniendo de mi sidades que se encierran en la Ntieva Crü-
caudal las pinturas del infierno y los episo tiada.
dios de Pedro y de los milagros contenidos Otros poetas españoles se han ocupado
en el canto segundo, quitando algunos otros en revestir de formas sensibles á los siete
que con su excesiva monotonía hacían muy pecados mortales , presentándoles en per
pesada su lectura , á pesar de sus grandes sonificaciones á propósito para espresar sus
bellezas de primer órden , corrigiendo en deformidades características; pero mucho
su mayor parte la versificacion ó haciéndo dudamos que en esta parte se haya escrito
la de nuevo. A esto di el título de compen nada superior á las magníficas pinceladas
dio cuando en 1837 publiqué en París el del Sr. de Berriozabal , al pintarnos á Je
fruto de mi tarea , y envié aquella edicion sus en el huerto de Getsemaní con la mis
algo incorrecta á mi pais ardientemente teriosa vestidura de las siete fajas.
amado, la América meridional. La Cristia- Con pavoroso manto el firmamento
da habia nacido en el Perú , y despues de La Y connocheronco
melancólica
zumbido el cubría
vago viento
mas de dos siglos volvía á presentarse re
juvenecida por un hijo de aquella religiosa Y Enlúgubre
la celesteclamor
bóveda de gemía
sentimiento
,
república ; y asi era justicia que á ella vol
viese lo que por derecho le pertenecía. Aun el monte mas duro despedía ,
Algunos ejemplares traidos á España úni Cuando Y en ondas á Getsemaní
de doloresJesusse anegaba.
llegaba ,
camente por regalarlos á varios amigos y
no pocos que se repartieron en Francia y I Ah , que de pecador tragedia triste
en Italia , han grangeado á Hojeda una En Y defigura
sus culpas
de todos unarepresenta
ropa viste,
porcion de admiradores , poetas y no poe
tas , cuyos elogios no era de esperar que se Tejida en maldicion y vil afrenta !
prodigasen á un trabajo, que si bien se ha Ser Intrépido
por ella
vistióla
arrojadoy noenresiste
la tormenta :
bía acometido con el hervorcillo que abrasa
las venas del hombre en la fogosa y entu La Y culpa
vestidura
gravesiete
cadafajas
cualtiene
contiene.
siasta edad de 22 años, no podia prometer
la cordura ni discrecion necesarias para po Libre En la Soberbia
primera, grave
está laymagestosa
empinada ,
ner la mano sin nota de temeridad en un
argumento épico. Pero aquí se ha verifi En ancha silla de márfil preciosa ,
cado aquella tan sabida sentencia : Audaces Con regir pompa de ambicion, sentada.
fortuna juvat ; por lo cual me he resuelto á Ciñe su adusta frente nebulosa
dar al público esta edicion mejorada con Y Aurea
para
su erguida
corona
su altivez
garganta
de humo
el mundocollar
vil tiznada,
esrico
chico.
,
los adelantamientos consiguientes que ha
cerse suelen en la juventud y con las ob
servaciones que de varias personas he po DeLa tristes
insaciable
ojos y, coraje
tenaz , hambriento,
seca Avaricia ,
dido oir y recoger en estos cuatro años. En
literatura y en moral soy de parecer que De oro cercada y llena de codicia ,
nadie tiene motivo de avergonzarse por dar Abre cien bocas, tiende manos ciento.
á sus obras toda la perfeccion posible , cor Con aquellas da paz á la injusticia,
rigiéndolas una y mil veces. Sé que los Con estas de su bien busca el aumento ;
frutos de nativa hermosura tienen la belle De Y ensangre
la ropade elpequeños
lugar segundo
se mantiene,
tiene.
za de Eva antes de su pecado; pero tam
bien arrebatan mi imaginacion el maniquco Los treinta escudos con que al ciego Judas
disoluto hecho doctor de la Iglesia , y la Por la sangre de Cristo gratifican ,
muger impúdica hecha ángel de los desier Estan pintados , y con lenguas mudas
tos ; Agustín y María la Egipciaca trasfor- Su nefanda maldad alli publican.
mados por su correccion y enmienda de I O buen Dios ! ¿Que á pagar por él acudas
carbones de iniquidad en soles esplendoro I Ay ! con tus venas que tu amor esplican ?
sos de inmaculada justicia. Apliquese esta ¿ Y él que te venda por tan bajo precio ?
idea á las producciones del ingenio y se la I ElEntre altísimo
lascivos
Dios fuegos
en tal abrasada
desprecio, !
verá
Dejando
confirmada
pues al
enjuicio
la presente.
de los »lectores el
Como el incendio de alquitran terrible.
En la tercera parte dibujada
Se mira la Lujuria incorregible :
Ostentando su faz desvergonzada,
Y
Sualtivo
mano cuello
carnicera
, con, vientre
inmundahorrible
boca
A la encendida juventud provoca.
Con arrugada frente y secos labios ,
Y
Lanzando
de
conlalasboca
manos
chispas
horrísonos
prometiendo
de sus agravios
turbiosenojos
ojos
, fragoso estrépito de las bóvedas del Averno.
Entre Süas, Pompeyos, Judios, Fabios,
Guerras, victorias, armas y despojos,
Está la Ira fatal de brazo fuerte ;
Voces da , piedras tira , sangre vierte.
Y Una
diversos
mesamanjares
riquísimaadornada,
, de flores
Cercando estan valientes comedores
De gesto ufano y vida regalada.
Preciosos vinos , árabes olores
Rodean
Que en los
á laricos
Gulapalacios
destemplada
de los reyes
Impone torpes ó brutales leyes.
Sirven de rubias y tendidas hebras
A la Envidia de aspecto formidable ,
Ensortijadas hórridas culebras ,
Que le ciñen el cuello abominable.
Torva los hierros ve , mira las quiebras
De la gente en virtudes admirable ,
E imperceptibles faltas desentierra
Queel hombrefrágil, aunquejusto, encierra.
El postrero lugar ocupa ociosa.
Lánguida la Pereza en torpe lecho ,
AllÍ en calientes sábanas reposa
Puestas las manos en el muelle pecho ;
Allí sueña , allí duerme lagañosa,
La
Y aunque
noche prolongando
despierte al retemblar
sin provecho
la ;tierra,
Luego los ojos nuevamente cierra.
Sentimos que el Sr. de Berriozabal cui
dase hasta tal punto dela fuerza dela imá-
gen en la descripcion de la Pereza, que se
dejase llevar hasta el mal gusto , permi
tiéndose el vocablo lagañosa; lunar que re
salta tanto mas cuanto que se tropieza con
él , despues de haber admirado lo magnífi
co de la versificacion y de la poesía. Per
mítanos el ilustre autor tamaña severidad ;
bien sabe que en asuntos de crítica , si los
trabajos han de ser concienzudos , es pre
ciso dejar aparte las consideraciones de la
amistad.
El congreso de los espíritus infernales es
tambien un pasage lleno de poesía. Des
pues de tantas descripciones como se han
hecho de la region de tinieblas , y de sus
terribles moradores, parecía difícil escri
bir nada que pudiese llamar la atencion;
sin embargo el autor déla Nueva Cristiada,
ha encontrado en su imaginacion abun
dantes recursos para hacer su cuadro in
teresante, realzando ademas la fuerza y brio
del pensamiento con una versificacion tan
soberbia que hace resonar á nuestros oidos eI
Del monarca infernal el furor sube
Recelando que Cristo sea el Verbo :
Torbellino;a la de incendios nube
Mas le devora el corazon protervo :
La frente impía del infiel querube
Surcan mas rayos y el dolor acerbo
Desgarrándolas vierte en sus entrañas
Todo el raudal de sus atroces sañas.
Una torre de sierpes y alacranes
Sobre sus ígneas crines se encarama ;
En sus oidos zumban huracanes
De alarido eternal que ronco brama ;
A sus plantas revientan cien volcanes ;
Le anega mar de hiel , betun y llama;
Con lanzas de diamante agudas ciento
Está clavado al monte del tormento.
Con la tartárea trompa hondisonante
Sus rugidoras iras sempiternas ,
Estremeciendo , en son horripilante
Las pavorosas , lóbregas cavernas
Llaman al escuadron centellante,
Que de las claras bóvedas supernas
Cayó rodando á la mansion de llanto,
Do le horroriza perdurable espanto.
La hondísima region de la tiniebla
Un mar de sangre espumajosa inunda ;
La retronante bóveda de niebla
Fuego devastador llueve iracunda :
Muchedumbre de crímenes la puebla ;
La
Y demuerte
la eternidad
con suslabrazos
pesadumbre,
la circunda:
Forma su férreo muro y su techumbre.
De Luzbel acento soberano
De espíritus se junta el bando fiero :
Blandiendo un rayo en su vibrante mano
El altivo dragon llega primero
Que
Y el por
que Jove
Apoloadoró
fingióse
ciegopalabrero,
el romano;
Segundo viene envuelto en lumbre roja
Que cual sol infernal chispas arroja.
Y el que sañudo presidió á la guerra ,
Llevando
Y á cuyo el
carro
mástil
retembló
de un bajel
la tierra
por , lanza ,
Con ignívomos ojos de venganza,
Que al mas robusto corazon aterra ,
Y
Yaeldel
queoscuro
culto
Chiprerey
exigió
adoró
llega
depor
álaladoncella.
Venus
estanzabella,
:
 Tambien el diligente mensagero, Y al
á los
vulgo
otros
adulador
soplad soberbia
que en Salen
altivamora
,• , * , "
Que falso padre fue de la elocuencia ,
Alado en pies estuvo allí ligero, Lisonja
Al puntoinfame
aquellay horrífica
abyecciony nociva.»
traidora
Solemne ostentador de antigua ciencia !
Espíritu en delirios lisonjero , Alada multitud se lanzó activa ,
Y
Gran
el que
pintor
áfingió
sus
de hijos
fantástica
frenardevoro
el mar
apariencia;
tirano,
insano. Y
Llevando
en vivo alinfierno
Salvador
convirtió
sañosa laguerra
tierra.
DeElfantasmas
aire con la
asombros
opaca luz
ofuscaron
cubrieron
, ,
PorY Dios
el orotenido
vil que
, y presidió
en crisolalforjado
becerro
,
Con mentiras las almas perturbaron
Efecto pertinaz del loco yerro De engaños los espíritus hinchieron :
Del pueblo de Israel desatinado, Entre
Y en lala gente
ruda plebe
mas noble
se mezclaron
se ingirieron
, ,
Y
El de
orobuey
antiguo
el aspecto
convertido
conservado,
en hierro,
Derramando do quier iras, furores,
Bajó dando bramidos pavorosos Cual lava los volcanes tronadores.
Con los dos de Samaría fabulosos. A mas de las obras indicadas tiene el
Ni los dioses en Méjico temidos Sr. de Berriozabal otras varias: entre ellas
De aquel horrendo cónclave faltaron , la traduccion de un poemita italiano de
De humana sangre bárbara teñidos Angel Mazza , titulado María al, pié de la
En que siempre sedientos se empaparon : Cvkz, que ha publicado á continuacion de
Ni del Perú los idolos fingidos las poesías de Lamartine , la de la historia
Que en lucientes culebras se mostraron : de la milagrosa conversion del Sr. Ratis-
Ni Eponamon, indómito guerrero, bonne y del Judaismo á la Religion Católi
Deidad altiva de Arauco fiero. ca , escrita en frances por el Sr. Baron de
Junto el Senado con solemne pompa , Bussieres, y la de la Historia compendiada
La boca , que parece catacumba , de la Religion escrita en frances por Carlos
Abre el tremendo rey : cual son de trompa, Francisco Lhomond. Inútil es decir que en
Cual airado huracan su aullido zumba : estos trabajos no se ha mostrado inferior á
Tormenta atroz que en trueno bronco rompa, sí mismo. La Historia compendiada de la Re
No con fragor tan hórrido retumba , ligion v a precedida de algunos discursos del
Ni terremoto que en tronante guerra traductor, donde se encuentran pasages,
Derrumba montes y desgarra tierra. verdaderos modelos por las magestuosas
« ¡ Príncipes, dice, torcedor agudo galas del estilo y la pureza y correccion del
Hoy masque nunca me traspasa el pecho! lenguage. Tambien es notable su Manual de
Que[óCristo
Y dolor!sea¡ó eldolor!
Verboque
¡aylodees mí
sospecho.
! dudo;los devotos de María , que contiene oraciones y
ejercicios piadosos en honra de la Santísima
I¡ Ay de Luzbel!
Luzbel ! ¡ay ¡ aydedeLuzbel!
Luzbel ¿Deshecho
sañudo ! Virgen á los cuales estan concedidas indulgen
cias por los sumos Pontífices , noticias y do
Será mi imperio? ¿Cerrará mis puertas cumentos de dichas indulgencias ; y meditacio
Estando al hombre las del Cielo abiertas? nes para todos los dios del mes sobre las
« ¡Mas ay!... ¡Deliro ¡...Buscaré camino perfecciones de su corazon , traducidas del ita
De
Y notad
saber silaesverdad:
humanoid óluego
si es divino
todos liano : y algunas poesías originales en loor de la
misma Señora. En un siglo en que tanto
Por estos nuevos y terribles modos. campean la incredulidad y el indiferentis
Si el tronco de Dios escelso vino mo , no se avergüenza el Sr. de Berrioza
Al cieno vil de los terrestres lodos , bal de manifestarse cristiano , y cristiano
Probado con deshonra y con violencia piadoso , que profesa la mas tierna devo
Inhumana y atroz, tendrá paciencia. cion á la Virgen , y se complace en ofre
«Volad , y por caminos diferentes cerle las producciones de su talento.
Afrentas procuradle nunca vistas, El Recreo poético religioso , es una peque
Rudas mofas , oprobios indecentes , ña coleccion de poesías dedicada á las her
A que tú , Cristo, con valor resistas. manas decaridad. «¿Y cómoseria posible,
Juntad soberbios pechos insolentes, les dice el autor, que yo os negase estos
Manos y almas guerreras y malquistas. pocos versos que se me han pedido para
Id
Y haced
presto que
, furias
sufradelcarnicero
estigio lago
estrago.
, vuestro inocente recreo? Justo es que en
medio de vuestros cuidados c incesantes
»A los unos envidia mordedora ocupaciones tengais algun pequeño desa
 — 262
hogo; pero aun este dispuso vuestro fun En la acerba despedida?
dador San Vicente de Paul que se espiri Entonces cuando á mis ojos
tualizase por decirlo asi, alimentando el Para siempre el mundo huia ,
divino fuego de vuestros corazones, eon De su fuga me burlaba
diversos cantarcillos en alabanza de Dios y Con apacible sonrisa,
de sus santos. Para tan piadoso objeto he Pues nunca me enamoraron
formado esta coleccioncita de miniatura, Sus
Y enmentirosas
aquella feliz
delicias
hora ;
cuyas composiciones son todas de verso
corto y de una sencillez parecida al bellísi A mi inocencia tranquila
mo candor de vuestras almas. » Fue el morir un dulce sueño r
Para dar una idea del género y estilo de Que en el seno yo adormida
estas composiciones trasladamos á conti De mi celestial esposo ,
nuacion algunas muestras. Sea la primera Gozaba
¡ Ay de de
mí sus
solocaricias.
el dejarte ,
la en que resuenan los tiernos gemidos de
una niña, dirigidos ásu madre, donde hay Érame, madre querida,
pasages de una delicadeza admirable. Una espada irresistible
Que el corazon me partía !
Reclinada yo en tus brazos ,
EL ALMA DEL PURGATORIO. Mi ya lánguida pupila
Afanosa aun te buscaba
Cuando el alma ya salía.
En tu semblante lloroso
Asi con flébiles voces En tí solo estaba fijo ,
Desde el purgatorio grita Cuando se apagó por siempre
Un ánima sin consuelo Su centella fugitiva.
A su madre olvidadiza. Para tí , madre adorada ,
; A y madre, madre adorada r Fue toda mi breve vida ,
Dulce amor del alma mia t Y
Para
el afan
tí mi de
último
mi agonía.
aliento
¿Tan presto me has olvidado*
Y me abandonas cautiva ? Hizo
Exhalé
á la deidad
el almapropicia
y al punto
j Cautiva estoy en ?a carcel
Del purgatorio sombría , Cubriéndome con su manto
Pidiéndote me socorras La escelsa Virgen María.
En tan horrenda desdicha L ; Eternamente en mis labios
Un torbellino de fuego 0 Providencia divina,
Furiosamente me agita , Resonará
Porque entuflor
alabanza
aun no, marchita,
El tormento es mi vestido
Es el llanto mi bebida. Me cogiste para el cielo
Empero el dolor mas vivo- Sentenciándome benigna
Es carecer de la vista A este fuego purgativo
De aquel Dios de mis amores Que á los justos purifica !
Que ejeree en mf su justicia. Ya mi candida inocencia
Este mi esposo divino El cielo coronaría,
Por mi libertad suspira , Mas por tí, querida madre,
Mas el romper las cadenas No me he visto toda limpia,
Es cargo que á tí confia. fPor tu culpa he descendido
Él en tus manos ba puesta A esta prision encendida ;
La salvacion de tu hija. Que aunque leve y diminuta
¿Y asi tú me desamparas Ño entra en el cielo mancilla !
Ni mis dofores alivias? ¡Tu ejemplo, tú eres la causa
¿ Y dónde están las promesas De
Y pudiendo
que prisionera
tú librarme
gima !
Que de no olvidarme hacías,
Cuando en mi lecho de muerte ¿Ni mi tormentos mitigas?
Llorándome dolorida, 1 No rezas por mi descanso
Con el ardor de tus besos Ni un padre nuestro ! ¿Tan fria
Mi tez pálida encendías Eres con la que te amaba
Dándome en ellos el alma Mas , mucho mas que á su vida ?
¿No sali de tus entrañas?
¿ No fue
soy elparte
néctar
de tídemisma
tus pechos
? ,
Madre, mi primer bebida?
En mi niñez inocente
Ya graciosa, ya festiva
¿No fui tu dulce embeleso?
Yo era toda tu alegría ,
Para templar tus pesares
Los ojos a mí volvías ,
Y al lanzarme yo en tus brazos
Ahuyentábanse tus cuitas.
Tú
Yo en
me tuamabas
amor tiernamente
me enloquecía.
: Porque te eran aflictivas
¿Y dónde tu amor es ido?
¿Qué se han hecho tus caricias?
¿No eres tú la que llorabas
Si por pisar una espina
Alguna gota de sangre
Mi tierna planta vertía ?
No eres tu la que en mi auxilio
Volabas despavorida
Si en algun leve fracaso
Te llamaba.asustadiza?
¿ No eres tú la que velabas
Un mes y otro noches frias
Arrullándome amorosa
Cuando calentura tibia
Que lenta me devorara
En la angustia te sumía?
¿ Y ahora indolente me dejas
Abrasarme en llama viva?
¿ O tu pecho se ha mudado
En
Y nosuponerte
eres ya compasiva
tal cosa ?
¡ Grave injuria se te haría !
iNó, madre, note has mudado!
Sí,
I Túlosiempre
dice la serás
ternura
la misma !
Con que á mis hermanas cuidas
El cariño que las tienes ,
El amor con que las mimas.
Bien merecen tus desvelos
Mis amables hermanitas.
¿ Mas yo infeliz he dejado ,
Ellas,
He dejado
cualde
yo,sernotupadecen
hija ?
Y gozan de tus caricias.
j Ay de mí ! ¡ qué desconsuelo I
¡ Solo esta triste cautiva
No merece una mirada
De tus ojos ; madre mia !
No yo asi contigo. El cielo
Sabe con qué ansia tan viva
Con incesantes suspiros
Ruego
Y el fuego
á Dios
conque
quetetebendiga.
amaba
263 — En la tierra peregrina ,
Ha crecido en esta cárcel
Que á compasion no te escita.
I Ay cuántas veces , hay cuántas
Al verme tan dolorida
Mi ángel custodio volaba,
Por sí á piedad te movía ,
A contarte mis dolores
Cuando
Y desechabas
estabaslosmas
sueños
dormida ,
Que mis penas te decían.,
Juzgándolos sombras vanas
Teniéndolas por abortos
De alterada fantasía !
Cuando á esta prision de fuego
Me vi súbito caida
Esperé que sin demora
Tú de aquí me sacarías
Exhalándote en plegarias
Tan tiernas, tan encendidas
Al Dios de misericordia
Como las que yo le hacia
Pidiéndole
Y sus amantes
por heridas
su muerte
Que te consolara , ó madre ,
Esperaba
¿Te acuerdas?
en tu en
cariño
mi agonía.
I Ay esperanza perdida !
¡ Desengaño y nó esperanza !
I Ilusion fue concebirla !
I Ay de mí desventurada 1
I Oye , madre , madre mia ,
Este clamor de gemido
Que el desamparo me inspira?
Yo olvido, yo te perdono
Esa indolente apatía ,
Mas penetre en tus entrañas
El eco de mi desdicha ,
Y finalmente se muevan
A socorrerme con misas.
No te exijo que empuñando
Una gruesa disciplina
Te ensangrientes las espaldas
Por abrirme al cíelo vía.
Solo pido que te acuerdes
De las penas de tu hijita
Y por mi alivio á los pobres
Dés alguna limosnilla
De los frutos y las rentas
De aquella envidiada finca
Que mi papá me dejara
Y en mi muerte te hizo rica.
Acuérdate que hace un lustro
Que no me das la comida.
( i Otro tanto hace que gimo
En esa mazmorra umbría ! )
Acuérdate que hace un lustro 264 — Y es mio cuanto le pida ,
Que
Y queportodos
mi no
tustedesvelos
fatigas Su riqueza y poderío ,
Su inmensa sabiduría ,
Se llevan mis hermanitas. Su inmensa misericordia ,
Haz tambien , te lo suplico, Su providencia infinita.
Que ellas por su hermana pidan, Todo
Y paracon
tí ,mi
madre
Dios mia
lo puedo
,
Que riieguen por mí á la Virgen ,
Que
¡ Ay ,oye
tal con
vez gusto
ya no áselasacuerdan
niñas. Todo para tí lo pido ,
Aunque insensible me olvidas.
Que
Y suslallantos
cuna les
acallaba
mecia ¿Y
Y corresponderme
no han de ablandarse
finas nunca
Como que era mayorcita ! Esas entrañas de madre
Yo desde aqui me desvivo En que yo fui concebida?
Por su salud , por su dicha ,
Porque no pierdan el lustre Los niños , es tambien otra poesía de un
De su inocencia nativa. género sumamente sencillo y delicado : el
Por ellas son mis suspiros, corazon del poeta se exhala en ternísimos
Mis
Y por
plegarias
tí, madre
repetidas,
adorada, versos, como la flor de la mañana en sua
vísimos aromos.
Por
A Dios
tí con
pidosanta
que porfía
en su ,cielo
Te dé su gloria divina. los serbos»
Te la dará dulce madre ,
Pues como á esposa afligida
No puede negarme nada
Su ternura compasiva , El amor entrañable
Nada de cuanto le pido Que tienes á los niños ,
Para mi cara familia, Aunque no lo dijeras,
Mientras nada obtener puedo Se conoce, Dios mio.
Que sea para mí misma. ¿ De dónde ha de venirles
¿Qué soláz, que suave encanto Sino de tí el hechizo
No es pensar que en mi desdicha Con que del mundo entero
Te soy mil veces mas útil Se roban el cariño ?
Que cuando feliz vivía? Derramas en sus frentes
Si hubiese Dios dilatado El prodigioso rio
De mi existencia los dias, De tu gracia divina
¡ Ay I tal vez no pocos de ellos En el santo bautismo.
Te hubieran sido de acíbar. Les envias un ángel
¡ Ah ! quien sabe si un esposo Que es un primer amigo ,
Ingrato me tocaría, Para que haga las veces
Que con amargos disgustos De tu amor infinito.
Te
Y áenvenenara
fuerza de sinsabores
la vida , Y el hombre mas adusto
Sonriese festivo
Te
Yo abriera
en un mundo
la tumba
de inconstancia
impía ! , Y respira dulzura
Cuando se acerca á un niño.
De
Y seductores
ingratitud engaños,
y perfidia Nadie me lo ha contado
Pues mil veces lo he visto
La
Y
Ayaunque
obligacion
! tal vezenolvidaría
tudeamor
quererte.
derretida Sin ir lejos: la prueba
La tengo yo en mi mismo.
Señor, ¿por qué negarlo?
Constante fuera en ser tuya ; Soy seco y desabrido,
¿De cuánto te serviría Tanto que á muchas gentes
Una
Contra
muger
el enojo
desvalida....?
del cielo . Con mí insulsez fastidio.
[ Sin embargo en mi pecho
Mas ahora en el purgatorio Cuanto amor á los niños
Aunque víctima y cautiva , Encendiste y fomentas
Tengo á mi Dios por esposo , Con tu soplo divino !
 No hay en el mundo nada
Tan amable y tan lindo ,
Tan gracioso y tan dulce
Como un tierno milito.
Por eso nos pintaban
En los tiempos antiguos
Al amor los poetas
En figura de niño.
Y á los ángeles ponen
Aun hoy por eso mismo
Pintores
En formaydepoetas
unos niños.
Y á ellos mismos les damos
Lo
El nombre
son por la
de inocencia
angelitos ;
De que los has vestido.
Ni la muger conoce
El que abriga escondido
Tesoro de ternura
Hasta que tiene un niño :
Entonces se descubre
En el gran regocijo
Que le causa la vista
De su recien nacido;
Y Los
su mortal
dolorespeligro,
del parto
Y
Entonces
los echalosenbendice
olvido.
Tú , Señor, tú le has dado
Ese anhelo tan vivo
De consagrarse entera
Al bienestar del niño.
Tú haces hervir su pecho
En néctar exquisito.
Que dulcemente fluya
A la boca del niño :
Néctar del todo ageno
Al humano artificio
Que
Y acalla
vivifica
el ayy del
nutre
niño.
Que
El santo
grande
al Sacramento
amor hizo
Lo instituíste sabio
Para bien de los niños.
¡ Ellos son la corona
De los esposos finos !
¡ Ellos el dulce blanco
De sus tiernos suspiros !
Ay I los tristes casados
Que carecen de niños
Sienten dentro del alma
Un inmenso vacío.
A y ! si teme la esposa
El furor del marido,
I Cuánto , cuanto le duele
El^no tener un niño !
¡ Ay ! ve que otras dichosas
265 — El varonil rugido
Acallan , colocando
Entre los dos al niño !
Hasta la misma muerte
Se envidia al infantillo ,
Pues volar á tu seno
Es la muerte del niño
¡ O Dios , si yo pudiera
Por medio de un prodigio
Aunque es cosa inaudita
Volverme otra vez niño !
Mas lo que yo no puedo
Tú lo hiciste , Dios mio ,
Por robarnos el alma
Con las gracias de niño.
¿Dónde hay mayor delicia
Que verte pequeñito
En brazos de tu madre
O gracioso Dios niño?
Posteriormente ha publicado el Sr. de
Berriozabal varias composiciones sueltas en
prosa y en verso, todas de poca extension,
y relativas á objetos religiosos. Despues de
haber tributado al distinguido escritor los
elogios merecidos , justo es que nos deten
gamos un momento en examinar, si la di
reccion que ha dado últimamente á sus ta
lentos poéticos es la mas acertada para
llenar las esperanzas que en sus primeros
años hiciera concebir. Desde luego con
vendremos en que jamas se emplea mejor
la poesía , jamas versa sobre objetos mas
propios , que cuando se ocupa en asuntos
de Religion. La poesía, asi como la música
y la pintura, nació en los templos, y para
los templos debe reservar sus acentos mas
bellos y sublimes. Asi es que aplaudimos
que el Sr. de Berriozabal dedique su talen
to poético y su extremada facilidad de ver
sificar á los asuntos de Religion y piedad ,
desafiando con santa osadía la sonrisa del
incrédulo. Sin embargo, opinamos que sin
dejar de ocuparse en tan dignos objetos,
antes al contrario, al mismo tiempo que se
ocupase en ellos , podría hacer en el géne
ro y estilo de sus trabajos algunas modifi
caciones , con las que tal vez con mas ra
pidez y derechura , podría llegar al mismo
fin que se propone, que es: contribuir al
triunfo de la Keligion , y á la propagacion
del espíritu de piedad.
Por un conjunto de causas que seria ino
portuno enumerar, hay en este siglo un
hecho que se podrá calificar de distintas
maneras , pero que es imposible descono
cer ; hablamos de cierta tibieza, de cierta
 — 266 —
indiferencia , de cierto sabor filosófico , que se deje conocer que en su formacion ó
le encuentra aun en muchas personas que conservacion se han tenido presentes las
profesan sinceramente las creencias reli doctrinas del siglo; es indispensable que
giosas. La atmósfera en que vivimos nos esos afectos no procedan de un corazon ai¿
contagia de tal suerte, que se pegan sin lado, por tierno, por delicado que sea;
advertirlo muchos de los males de que ella sino que salgan de un corazon que aun
está impregnada; y asi es que al mismo cuando se mantenga íntegro y puro, deje
tiempo que ciertos hombres rechazan la entrever que se ha conservado asi , á pesar
impiedad, y no quieren de ninguna mane de haber sufrido el soplo disolvente de la
ra abandonar la fe de sus padres, son sin época.
embargo tan flacos cuando se trata de ha Desearíamos pues que el Sr. de Berrio-
cer frente á la incredulidad , que ni aun se zabal , sin disminuir en nada su piadoso
atreven á manifestar su fe, sino revistién fervor y tierno ascetismo , aprovechase las
dola con el manto de las convicciones filo bellas cualidades de su talento poético , de
sóficas. Esto ha producido, que las dis dicándose á trabajar en el sentido indicado,
cusiones religiosas no sean aceptables á é imprimiendo á sus composiciones un sello
muchas personas, si no llevan un carácter filosófico , que se hermanase con la pureza
eminentemente filosófico, y que ponga á de la doctrina y la santidad de los afectos;
las buenas doctrinas al abrigo de los tiros quisiéramos que sus composiciones no sir
de la impiedad , suministrando armas para viesen tan solo de pábulo á la devocion de
que la filosofía pueda á su vez ser rechaza las almas piadosas, sino que el tibio, el in
da con otra filosofía. Esto será un mal tan crédulo, el indiferente, encontrasen eo
grave como se quiera , pero es un hecho ellas, pensamientos fuertes que escitasen
positivo, evidente, palpable, y del que vivamente su atencion , y los convidasen á
conviene no desentenderse, cuando se es meditar, afectos enérgicos, que sacudiendo
cribe en defensa de la Religion. hondamente su corazon , hiciesen resonar
Claro es que si tal sucede en las graves á sus oidos el zumbido de una eternidad
discusiones religiosas, mucho mas se habrá que viene , en pos de un tiempo que pasa ;
de verificar en la literatura; la cual diri quisiéramos que al encontrarse los hombres
giéndose en buena parte á la fantasía y al sin fe, con un escritor que la tiene tan vi
corazon , puede prescindir mucho menos va, los hombres sin amor ni esperanza,
de la disposicion en que se hallan asi aque suelos
con quien
y dulzuras
canta tan
de hermosamente
un alma que espera
loscon-y
lla como este, por la influencia del espíritu
del siglo. Dejamos á parte las obras que ama , sintiesen que el poeta al fijar sus mi
sean propiamente de piedad , en las que es radas en el cielo no se olvida de las mise
preciso andar con sumo tiento aun cuando rias de la tierra , que las conoce , que parti
se trate de las innovaciones mas pequeñas ; cipa de ellas, que las compadece vivamente
pues que estas no se comprenden comun que al despedirse para unas regiones de paz
mente bajo el nombre de literarias , ya que y bienandanza , dice un tierno adios á los
pertenecen áun orden superior, y merecen desgraciados que ciegos de orgullo , ó en
dictados mas graves y augustos. Pero las flaquecidos por otras pasiones, continúan
obras que sean propiamente de literatura arrastrándose por este suelo de infortunio ,
religiosa , no alcanzarán en este siglo mu esperando con insensata indiferencia la for
cha nombradía , ni podrán ejercer grande midable hora en que un Dios indignado
influencia en los espíritus , si no llevan ese venga á pedirles cuenta , de haber vivido
barniz filosófico de que hemos hablado ; si largos años, sin cuidarse de conocer su
el escritor no muestra á menudo que cono origen , de haber mirado cual se avanzaba
ce y siente profundamente el siglo en que hácia ellos la muerte , sin preguntar lo que
vive. Ese conocimiento y ese sentimiento habia mas allá del sepulcro.
sean en hora buena para reprobar y con Y no cabe decir que cada escritor tiene
denar, pero es preciso que existan , es ne su talento particular, y que es inútil y aun
cesario que resalten en todas las páginas de dañoso el empeño de dislocarle : el Sr. de
la obra ; su ausencia es un vacío que con Berriozabal no carece de las dotes necesa
nada se llena. No basta expresar conviccio rias para emprender la carrera que le he
nes profundas, no basta derramar en abun mos indicado; que de ellas no puede care
dancia los afectos; es necesario que esas cer quien ha traducido tan magníficamente
convicciones se presenten de tal suerte que algunas delas poesías de Lamartine, quien
 — 267 —
sabe imitar tan atinadamente el lenguage la sociedad males de la mayor trascenden
de todas las ideas y sentimientos; quien sa cia y le estan preparando otros quizás mas
be encontrar palabras, para el Angela\ apar terribles, parécenos sin embargo que hay
tarse del Globo destruido , para la Soledad , cierta exageracion en algunas pinceladas , y
para la Desesperacion , para Lord Byron. que mirada la humanidad desde la altura
Nos hemos atrevido á dirigir al Sr. de en que se coloca el escritor, cae este en al
Berriozabal esta amistosa excitacion , nó guna inexactitud , atribuyéndole sistemas
precisamente por atender á su gloria lite que está muy lejos de haber abrazado.
raria, sino porque consideramos que con el Nada mas especioso á primera vista que
mal sesgo que va tomando la literatura, el modo con que desenvuelve la teoría de
con las infinitas traducciones de que se las mayorías , pintándola como cosa de orí-
inunda la España , urge sobre manera que gen moderno, debida únicamente á la rui
los amigos de la Religion y de la moral , na del principio de la autoridad, y aceptada
salgan al palenque con armas bien templa por los pueblos como única tabla para sal
das, y procuren atajar el daño que se está varse del naufragio ; pero en la realidad ,
haciendo á las creencias de la nacion , y la ¿se han verificado las cosas tales como las
brecha que se está abriendo á las costum describe el Sr. de la Sagra? ¿la humani
bres. Aquise puede aplicar muy bien aque dad , aun considerada en su parte mas pro
llo de que la mies es mucha , y los opera gresiva , está sometida á la formidable ley
rios son pocos; y ciertamente que el Sr. de señalada por el citado escritor? Nosotros,
Berriozabal con su gusto severo y acrisola bien que en todas estas materias profesa
do, su instruccion vasta y variada, su cas mos principios mas severos que los suyos,
tellano puro y castizo , su estilo correcto , no vemos los objetos tan negros como él
su versificacion hermosa y fácil , su corazon los pinta ; á nuestros ojos el cuadro es tris
delicado, y su fantasía galana y brillante, te, desconsolador, mas no desesperante.
seria uno de los que aventajadamente pu Para juzgar con acierto y no alterar en
dieran contribuir á una obra en que se in nada las opiniones agenas, en lo que so
teresa la Religion , se interesa la patria , se mos delicados hasta el escrúpulo , mayor
interesala gloria literaria del pais, si he mente cuando tratamos de rebatirlas , co-
mos de ser algo mas que miserables imita piarémos el pasage á que nos referimos.
dores de los extrangeros, si no hemos de * Desde que los hombres conocieron que
contentarnos con prostituir la dignidad y entre ellos faltaba ya la base del respeto á
magestuosa gracia de nuestra lengua , cu la autoridad fundada en la creencia, y lue
briendo con sus galas los monstruosos en go que hubieron debatido las distintas má
gendros que nos vienen de allende el Pi ximas producidas por la libre inteligencia,
rineo. — /. B. debieron llegar al punto final de hacerse
esta pregunta: ¿Quién tiene razon entre
los que dicen si y los que dicen nó? — An
tiguamente, la autoridad hubiera decidido,
DE LOS SOBRE
|NTERESES LA MATERIALES
REVISTA 'Y MORALES porque la autoridad era representante de la
Razon suprema ; pero destruida la autori
dad , no quedaba mas que la fuerza , re
curriendo al combate las fuerzas represen
DEL SR. D. RAMON DE LA SAGRA. tantes de opiniones contrarias, resultando-
de esto que la razon correspondería al mas
poderoso. Esta lógica era absurda, y no.
obstante reinó exclusivamente en el mun
do y reina todavía. Sin embargo, su impe
Artículo 2.° rio se ha debilitado, por el efecto mismo-
de las consecuencias monstruosas á que
En el artículo titulado del principio de la daba lugar, el conceder la razon solo al
toberania nacional , pinta el Sr. de la Sagra mas fuerte. Pero entre tanto no se ha dad»
con negros colores los funestos resultados aun una solucion racional y conveniente al
de la ruina del principio de la autoridad. problema sentado. ¿Quién tiene razon , los
Conviniendo con el mencionado escritor en que dicen que si ó los que dicen que no? 6
que las doctrinas disolventes proclamadas en otros términos: ¿Quién será juez entre
en los tres últimos siglos , han acarreado á los unos y los otros?
 — 268 —
« No existiendo una Autoridad á quien por supuesto que en ella reside tambien el
acudir; no habiéndose descubierto el ca criterio para conocer de qué parte está la
rácter peculiar, innegable, convincente de razon en lo concerniente al bien públi(:o;
la razon; reconociendo como absurdo el y como en ella está concentrado todo el
tribunal de la fuerza, ¿á dónde recurrir? mando , la expresion de su voluntad cons
— A la opinion del mayor número, res tituye lo necesario para dar fuerza de ley
pondió una \oz mas sonora y retumbante á lo que se supone reconocido como con
que racional y convincente í estará allí don ducente al bien público , y en este sentido
de se hallen la mitad mas una de las opi debe entenderse aquel principio de dere
niones. Sobre esta nueva base se fundó el cho : quod Pnncipi placuit legis habet vigorem;
edificio del pacto social moderno, y en ella la voluntad del Principe hace la ley.
estriban todas las constituciones de los pue Cuando la autoridad no reside en una
blos libres. » persona sola , sino en una corporaciou mas
Apenas hubo asentado el Sr. de la Sagra ó menos numerosa , á ella corresponde el
su doctrina sobre las mayorías , sintió la conocer lo que conviene al bien público y
flaqueza de los principios en que estribaba el mandarlo; pero como la misma á su vez
su opinion y la evidente repugnancia en necesita conocer su propio pensamiento y
que estaba con la historia de todos lostiem- su voluntad , claro es que siendo iguales
pos y paises. Asi es, que luego se hace sus miembros, no tiene otro medio que
cargo de lo que se le podría objetar por al apelar al principio de las mayorías, y dar
gunos, á saber, que la resolucion por vo por supuesto que se entenderá por bueno
tos y la sumision de las minorías al dicta y bien mandado lo que reuniere en su fa
men de las mayorías, existia ya antes de vor mayor número de votos; ya sea que
haberse demolido la base de la autoridad adopte sin excepcion el sistema de mitad
fundada en el derecho divino, puesto que mas uno , ya sea que para asegurar mejor
fue ejercida por todos los pueblos de la en algunos casos el acierto , exija las dos
tierra. Aunque el Sr. de la Sacra mira esta terceras partes ó las tres cuartas ú otras
objecion como grave solo en la apariencia , proporciones semejantes. Por manera que
nosotros creemos que lo es en la realidad , en saliendo del sistema de una autoridad
sin que basten á desvanecerla las reflexio absoluta residente en una sola persona , ya
nes que á continuacion añade el citado es no hay otro medio de gobernar que el de
critor las mayorías. Poned dos personas de auto
Considerando todas las fases de la huma ridad igual; en caso de discordia no hay
nidad , se echa de ver que han existido en medio de resolver , sino sometiéndose al
todos tiempos y paises los dos principios , fallo de un tercero; poned tres, no hay
el de las mayorías y el de la autoridad ; otro medio que adoptar el voto de dos
ora solos y exclusivos, ora combinados en contra uno.
diferentes proporciones. La causa de esto Es cierto lo que suele decirse de que los
se halla en la naturaleza misma de las co votos deben pesarse y nó contarse; porque
sas. Para el mando se necesitan razon y es claro que vale mas el de una persona
voluntad; la razon ha menester un criterio, entendida y juiciosa , que el de mil igno
la voluntad una expresion , y ambas cosas rantes y atolondrados; pero, ¿quién será
se han buscado siempre como se buscan el encargado de pesar los votos? Contarlos
ahora en la autoridad sola de una persona, es muy sencillo , mas pesarlos solo puede
ó en la mayoría sola , ó en ambas á un hacerlo quien tenlra una autoridad decisi
tiempo. Se trata de saber si una medida va , quien pueda decir « quiero que se siga
conduce ó nó al bien público , hé aqui el el dictamen de los menos contra el de los
problema de todas las leyes, el cual se ha mas, porque encuentro mas razonable y
resuelto de la misma manera con pocas mo mas justo el de aquellos que el de estos. »
dificaciones, en los tiempos antiguos y mo El Sr. de la Sagra observa que antes de
dernos. En las antiguas repúblicas, el fallo la ruina del principio de la autoridad los
en muchos negocios pertenecía á las mayo objetos sometidos á la decision del \ oto no
rías , en las modernas acontece lo mismo ; eran de la naturaleza de los á que se refie
en las antiguas monarquías la decisiun cor re , como dice que tendrá ocasion de de
respondía al Rey, y en las modernas el Rey mostrarlo detenidamente ; y añade ademas
es quien decide. Donde está reconocido el que aun sobre los que entonces se resolvían
principio de la autoridad absoluta , se da por votacion tenia un derecho de examen
 y de anulacion la autoridad suprema y — por 269cados
— y mas instruidos? en la misma Fran
esto se hallaba exactamente calificada con cia , donde la poblacion se eleva á treinta y
este título. Hubiera sido de desear que el cinco millones, ¿espresan la mayoría nu
Sr. de la Sagra nos dijera de qué pueblos mérica doscientos mil electores? en ningun
habla , y á qué tiempos hace referencia ; pais donde se halla establecido el gobierno
porque asi en los tiempos antiguos como en representativo, y hasta el republicano ¿exis
los modernos, vemos sometidos al fallo de te el sufragio universal en toda la extension
las mayorías negocios de la mayor impor de la palabra , aun dejando las mugeres y
tancia; las haciendas, las vidas de los ciu los menores de edad? Esto indica que para
dadanos, y todos los intereses de la socie decidirse entre los que tienen razon y los
dad. Tampoco es cierto , generalmente que no la tienen, entre el sí y el no, la hu
hablando, que existiese siempre esa auto manidad está muy lejos de adoptar ciega
ridad suprema con derecho de examen y de mente el principio de las mayorías; pues
anulacion ; pues que sobre el particular ha aun en el caso de valerse de semejante cri
habido mucha variedad segun las leyes, terio, procura buscar garantías de educa
usos
Noy creemos,
costumbresendeconsecuencia,
los diferentesquesea
paises. cion , de instruccion , de moralidad ; ó en
otros términos procura petar los votos y no
exacto que en el dia la esencial diferencia contarlos.
con el sistema antiguo esté en que la soberanía No se trata de saber aquí hasta qué pun
de la mayoría se sustituyó integramente en el to haya contradiccion entre el principio de
lugar que ocupaba la autoridad, de modo que la soberanía del pueblo , que tan á menu
no hay apelacion contra las resoluciones de di do se proclama, y las aplicaciones que de
cha mayoría ; de suerte que la razon social , la él se hacen ; bástanos consignar el hecho
sancion de los actos , la calificacion de lo justo para hacer palpable que es tanta la fuerza
ó de lo injusto , este representada por la opinion de las cosas que obliga á ser inconsecuen
de la mitad mas uno , de los delegados del pue tes á los misinos que profesan principios
blo; en esta parte, parécenos que el Sr. de erróneos; y que afortunadamente hay en
la Sagra cae en exageracion pintando el las sociedades un cierto fondo de buen sen
estado de los sociedades modernas algo mas tido , que mas ó menos cumplidamente ,
triste de lo que es en la realidad. Sabido es un correctivo contra la exageracion ó la
es , y en bastantes escritos lo tenemos con falsedad de las teorías.
signado , que estamos muy lejos de hallar Reconoce el Sr. de la Sagra que algunos
nos satisfechos de la direccion que van célebres publicistas han apreciado debida
siguiendo las ideas y los hechos ; pero tam mente el mérito del sistema de mayorías ,
poco creemos que sea conveniente recargar manifestando los inconvenientes de que ado
ni ennegrecer el cuadro, y en esta parte lece , pero añade que no por esto deja de
nos guian dos ideas: primera el respeto regir las naciones mas avanzadas en políti
debido á la verdad ; segunda el que asi ca. La falsedad de esta asercion la acaba
para los individuos como para los pueblos, mos de demostrar con hechos indudables.
opinamos que contribuye mucho a poner Resumiremos en pocas palabras nuestro
los en mal estado el hacerles creer que ya pensamiento: si el distinguido escritor de
se hallan en él. quien estamos hablando quiere manifestar
Echamos una ojeada sobre el mundo en los males que ha traido el enflaquecimien
tero , y no vemos realizado ni de mucho lo to del principio de la autoridad , si quiere
que afirma el Sr. de la Sagra. ¡ Cuántos y demostrar la falsedad del principio de la
cuántos pueblos , aun de los mas adelanta soberanía del pueblo y la imposibilidad en
dos en la carrera de la civilizacion , no es que se hallan de plantearle los mismos que
tan sometidos al fallo de las mayorías ! le proclaman y defienden con mas ardor ,
Hasta en aquellos en que puede decirse nos tendrá á su lado; pero si se empeña en
que estas dominan , el principio se halla afirmar que la humanidad en su parte mas
tan falseado que puede decirse que no exis adelantada y culta ha adoptado el princi
te. En Inglaterra , ¿ prevalece por ventura pio de las mayorías, reconociéndolas como
el voto de la mitad mas uno? ¿Tienen de único criterio de lo justo y de lo injusto , de
recho de tomar parte en los negocios del suerte que la opinion de la mitad mas uno
Estado todos los ingleses? ¿las cámaras es sea la razon social , la sancion de todos los
presan el voto de la mayoría del pais, ó actos , esto se lo negamos. Tenemos mas fe
únicamente el de los mas ricos, mejor edu- en el porvenir de la humanidad , mas con-
 — 270 —
fianza en su buen sentido , mas esperanza altas , algunas de las cuales son sumamen
en la Providencia ; si quiere hacer sensible te trascendentales y hasta terribles, haya
la farsa que se está representando por mu hombres que estando convencidos de la ver
chos que se apellidan defensores de los de dad de ellas, ó las contraríen con su con
rechos y de la libertad del pueblo, si quie ducta , ó vivan haciendo poquísimo uso de
re señalar los defectos de que adolecen las mismas. Añade V. que concibe muy
varias formas que se proclaman como pa bien la religion de un S. Gerónimo , de un
nacea de los males de la sociedad , nos S. Benito, de un S. Pedro de Alcántara,
tendrá tambien á su lado ; pero nos ha de de un S. Juan de la Cruz , es decir hom
permitir que aun en esas mismas formas , bres penetrados profundamente de la nada
y en medio de la insuficiencia y de la va de las cosas terrenas , de la importancia de
nidad de los hombres descubramos ese mis la eternidad , y por consiguiente desasidos
mo buen sentido de la humanidad que los de todo lo mundano , muertos á todo cuan
fuerza á falsear sus principios, que los obli to los rodea, y atentos únicamente á la
ga á una saludable inconsecuencia. En los gloria de Dios y á la salvacion de sus almas
mismos paises donde se ha predicado la li y á las de sus prójimos ; pero que no com
bertad mas lata , donde se ha proclamado prende en primer lugar la religion de los
la soberanía popular, donde se ha procu viciosos, esto es, de hombres que viven
rado plantear con mas rigor el sistema de convencidos de la eternidad de las penas
las mayorías, ¿no vemos cámaras interme del infierno, y no obstante como que hacen
dias, hereditarias ó vitalicias? ¿no existe todo lo posible para hundirse en él; que no
el veto absoluto de los monarcas? ¿qué son comprende la religion de otros que sin em
estas cosas sino correctivos del sistema de bargo de no estar entregados al vicio , de
las mayorías? ¿qué son sino un indicio evi jan correr sus dias con cierta indiferencia,
dente de que se adopta un principio que sin afanarse mucho por lo que pueda venir
luego es necesario falsear? — J. B. despues de la muerte, ni aun de aquellos
que practicando la virtud lo hacen con
cierta tibieza, no mostrándose continua
mente poseidos de la idea de que muy en
POLEMICA RELIGIOSA. breve van á encontrarse ó con una dicha
sin fin ó condenados para siempre á horri
bles suplicios. Segun parece, esto le escan
daliza á V. y hasta puede contribuirá man
tenerle separado de la Religion : pues que
CARTA DÉCIMOCUARTA si nos atenemos á este modo de mirar las
cosas no hay medio entre ser escéptico ó
i UN ESCÉPTICO EN MATERIAS DE RELIGION. anacoreta.
En primer lugar, se me ocurre una re
flexion que no quiero dejar de consignar
a.qui , y es : la variedad y contradiccion de
Mi estimado amigo: Casi me inclinaría á los argumentos con que es atacada la Re
creer que empieza V.á no encontrarse muy ligion , y lo descontentadizos que con ello
bien en su escepticismo religioso , pues que se muestran los escépticos é indiferentes.
al parecer se avergüenza de él , no que ¿ Hay una persona muy cristiana , muy de
riendo confesar que se halla en esta parte vota que pasa los dias en la oracion y en la
en situacion muy diferente de la de muchos penitencia , que mira todas las cosas del
otros, á quienes V. con buena intencion mundo como transitorias y livianas, que
sin duda, pero con mucha injusticia, les se manifiesta profundamente poseida de la
achaca las mismas ideas. No podía yo figu nada de todo lo terreno , que con sus pa
rarme que le causase á V. tanta novedad labras y sus acciones muestra bien claro
la conducta de muchos cristianos , por ma que no se apartan jamas de su mente. Dios
nera que llegase á suponer que ó fingen y la eternidad ? entonces se dice que la Re
hipócritamente estar adheridos á la Reli ligion es esencialmente apocadora , que es
gion , ó cuando menos la profesan sin en trecha las ideas , que encoge el corazon ,
tender de ella una palabra. Dice V. que que hace á los hombres misántropos, que
no alcanza á comprender cómo es posible i: los inutiliza y que por tanto solo sirve para
que enseñando la Religion doctrinas tan I frailes y monjas. Hasta se llega algunas
 271 —
veces á dar consejos de prudencia , recor teriora sequor. Veo lo mejor, me gusta;
dando que si se procurase presentar la Re pero sigo lo peor. No hago el bien que
ligion bajo un aspecto jovial y afable , no quiero sino el mal que aborrezco. Non
se apartarían de ella tantos hombres que quod volo bonum hoc ago sed quod odi
si bien se sienten inclinados á seguirla , no malum illud facio. Hablamos con un juga
pueden consentir á tornarse tristes, taci dor y la conversacion llega á girar sobre el
turnos, andándose cabizbajos y cuellituer- vicio que le domina ; un predicador en el
tos, por esas calles é iglesias; y héte ahí pulpito no se expresará con mas energía
que si hay otros hombres que á pesar de contra los males acarreados por el juego.
tamente
ser profundamente
penetradosreligiosos,
de las terribles
de estar al- | « ¡ Qué pasion mas funesta ! le oiréis decir,
verda
siempre inquietud , siempre desasosiego y
des de la fe y quizás muy dedicados á la turbacion, siempre incertidumbre y zozo
práctica de virtudes austeras , se muestran bra ; ahora nadando en la abundancia , no
no obstante con rostro sereno y apacible , sabiendo que hacerse del oro , un momen
conversacion alegre y festiva , no dejando to despues todo se ha perdido , es preciso
entrever que se agite en su mente el for pedir prestado á los amigos, ó empeñar
midable pensamiento del infierno , entonces una fmca, ó enagenar una prenda, ó exco
se objeta lo estraño , lo inconcebible de se gitar algun expediente desastroso para pro
mejante proceder, y se echa menos la con porcionarse siquiera una pequeña cantidad
ducta de aquellos otros que poco antes eran con que probar fortuna de nuevo. Si per-
objeto de reprension y tal vez de desprecio deis , os hallais en la desesperacion , si ga
y burla. De suerte que si la Religion llora, nais os veis forzado á presenciar la deses
se quejan VV. de que llora; si rie, de que peracion de los otros, á sufocar tal vez los
rie ; y si se mantiene sosegada y calmosa sentimientos de compasion que brotan en
la acusan de indiferente. Dueno es hacer vuestro pecho , disfrazándolos y encubrién
en
ellas
notar
evidencia
yasemejantes
sea por
la sinrazon
haber
contradicciones
meditado
de los que
poco
quecaen
dejan
sobre
en IIu dolos con chanzas y algazara. ¡ Qué mo
mentos mas crueles al salir de la casa de
juego , al recordar que habeis labrado qui
los objetos de que hablan , ya por dejarse zás el infortunio de vuestra familia ó de la
arrastrar del prurito de hacer cargos á la de vuestros amigos, al pensar que ibais con
Religion , echando mano de todo linage de la esperanza de mejorar vuestra posicion ;
argumentos. y tal vez de rico que erais habeis pasado á
Pero vamos derechamente al punto ca la mas estrecha pobreza. No es posible con
pital de la dificultad , y veamos si es posi cebir cómo hay hombres que se abandonen
ble contestar satisfactoriamente á las obje á ese vicio detestable : el jugador es un
ciones de V. ¿Cómo es posible que un verdadero loco que va corriendo continua
hombre religioso sea vicioso? esta es si no mente.tras de una ilusion á pesar de estar
me engaño la principal dificultad que V. convencido de que es ilusion y no mas , de
presenta, y me ha de permitir V. que le haberlo esperimentado una y mil veces en
diga con toda ingenuidad, que muestra sí y en los otros. En un joven en el acto de
muy escaso conocimiento del corazon hu salir de la casa de sus padres , un desliz nn
mano quien propone seriamente una obje esta parte es disculpable hasta cierto punto;
cion semejante. La vida entera de la ma en un hombre de alguna experiencia, el
yor parte de los hombres es un tejido de vicio carece de excusa. » ¿Ha oido V. , mi
esas contradicciones. que V. no alcanza á querido amigo , á ese moralista tan juicio
explicarse; si debiéramos dar alguna im so , tan severo , tan inexorable con los ju
portancia á dicha objecion nada menos re gadores? pues vea V. , apenas ha concluido
sultaría sino exigir que todos los hombres su santa plática , quizás mientras está pero
arreglasen su conducta á sus ideas , y que rando , saca inquietamente su reloj ó pre
quien abrigase una conviccion , obrara gunta á los circunstantes qué hora tienen ,
siempre en consecuencia de ella. ¿Y cuán y ¿sabe V. para qué? es qu'; el tiempo de
do, y dónde ha existido un proceder seme la cita está cercano, que la mesita cubierta
jante? ¿no estamos viendo todos los dias de paño está esperando , y los compañeros
que aun prescindiendo de las ideas religio se hallan ya colocados en sus asientos res
sas se verifica aquello de conocer el hom pectivos , y barajando con impaciencia , y
bre el bien, de probarle, y sin embargo maldiciendo al perezoso y tardío; y su po
ejecutar el mal? Video tneliora proboque de bre corazon salta de gozo al pensar que en
 — 2'
breves instantes \a á comenzar la tarea , y 72ha—enredado á él mismo en una amistad
los montones de dinero irán girando rápi peligrosa: la hacienda, la fama, la salud,
damente en derredor; ahora en frente de hasta su misma vida , iodo lo está sacrifi
uno de los actores , luego de otro , en se cando á su idolo; ¿ha perdido por esto sus
guida de otro, hasta que al fin en las altas antiguas convicciones? ¿la variacion de
lloras de la noche se concluirá la funcion , conducta es efecto de un cambio de ideas?
quedando por supuesto vencedor el mora nada de eso; piensa como antes, no se ha
lista y completamente vengado de sus des desviado un ápice de sus convicciones pri
calabros de ayer. Por lo menos, él asi lo mitivas, solo las ha puesto á un lado. A
espera ; y tan pronto como ha puesto fin los parientes, á los amigos que le amones
al sermon, se levanta, toma el sombrero y tan, que le recuerdan sus propias palabras,
ocha á correr rabiando por la poca puntua que le hacen los cargos que él mismo di
lidad. ¿Qué le parece á V. de semejante rigía á los demas , que le excitan á que
contradiccion ? Oh ! se me replicará , este tome los consejos que él poco antes diera
hombre era un hipócrita , decía lo que no á los otros , á todos contesta : « sí , cierto,
pensaba?» Es falso, hablaba con la con tiene V. razon , ya , con el tiempo
viccion mas profunda , y los circunstantes pero
si no eran jugadores, no eran capaces de Es decir que no hay falta de luz en el
comprender toda la viveza con que él sen entendimiento sino extravío en el corazon;
tía lo que expresaba. En prueba de esto, está seguro que la dorada copa contiene
suponed que tiene un hijo , un hermano veneno , pero en su ardor febril se la acer
menor, un amigo, una persona cualquiera ca á sus labios, con el riesgo, con la cer
por la cual se interese: él le aconsejará que teza de perecer.
no juegue y lo hará con todas las veras de Recorra V. todos los vicios, fije su aten
su corazon ; si tiene autoridad para ello se cion sobre todas las pasiones y echará V.
lo prohibirá severamente, cuando nó, se lo de ver esta contradiccion de que voy hablan
rogará con encarecimiento , y si puede ha do. Son pocos, poquísimos los hombres que
blar con entera franqueza exclamará con desconocen el mal que se hacen , los daños
acento de dolor: «creed á un hombre ex que se acarrean con su propia conducta , y
perimentado ; este vicio ha hecho y está sin embargo ¡ cuán difícil es la enmienda !
haciendo mi infortunio ¡ ay de mí ! y siem De donde resulta no ser nada extraño que
pre temo que me llevará á la perdicion. » una persona profundamente convencida de
El desgraciado no deja de conocer el mal la verdad de la Religion , obre contra lo
que se hace á sí propio , no deja de conocer que ella prescribe , y no es prueba de que
su temeridad, su locura; se la echa encara no crea lo que dice el no ponerlo él mismo
una y mil veces , asi en los momentos de en práctica.
calma y buen juicio , como en los de- furor Si V. hubiese leido obras de moral y de
y desesperacion; pero no tiene bastante mística , ó conversado con hombres expe
fuerza de ánimo para resistir al impulso de rimentados en la direccion de las concien
su inclinacion arraigada y acrecentada con cias , sabría la triste y angustiosa situacion
el hábito, para conformar sus onras con sus en que se encuentran á menudo muchas
palabras, con sus convicciones mas pro almas , y la paciencia que han menester los
fundas. confesores para sufrir y alentar á esos des
Quiére V. otro ejemplo? fácil seria amon graciados que proponen dejar el vicio, que
tonarlos hasta lo infinito. Hay un hombre lloran amargamente sus culpas, que tiem
de fortuna respetable , de reputacion sin blan por el eterno castigo á que se hacen
tacha que disfruta en el seno de su familia acreedores, que á fuerza de consejos, de
de toda la dicha que pueda desear ; su ins amonestaciones, de remedios y preocupa
truccion , su moralidad y hasta su misma ciones de todas clases, llegan quizás á re
educacion culta y esmerada le hacen con sistir por algun tiempo á su funesta incli
templar con lástima los extravíos de otros; nacion , y sin embargo reinciden y vuelven
no concibe cómo consienten en sacrificar á los pies del confesor y al cabo de algun
sus bienes á una pasion liviana , en manci tiempo tornan á reincidir, padeciendo de
llar por ella su nombre, en hacerse el ob esta suerte congojas mortales , hasta que
jeto de desprecio y ludibrio de cuantos los mas fortalecidos por la gracia alcanzan á
conocen ; sin embargo trascurrido algun mantenerse firmes disfrutando asi una vida
tiempo, una ocasion, un trato frecuentele sosegada y tranquila.
 — 273 —
Claro es, que si no es imposible, antes gocios, satisfacen sus pasiones ó caprichos,
sucede con mucha frecuencia , que quien forman continuamente grandes proyectos ,
profesa una religion pura y severa , viva en una palabra viven tan distraidos, tan
en el vicio y en l*relajacion , no es tampo olvidados de su última hora, tan sin pen
co incomprensible el que otros no sumidos sar en lo que podrá venir despues , que
en semejante miseria se porten no obstan por lo tocante á la moralidad con respecto
te con cierta tibieza y frialdad , á pesar de al mayor número, podría decirse que el
que en su entendimiento se hallen las creen efecto de la Religion es poco menos que
cias religiosas muy solidadas, muy firmes nulo.» Para dejarle á V. convencido de
y hasta vivas y ardorosas. Son tantas las cuán falso es el hecho que V. asienta con
causas que pueden producir y conservar tanta seguridad , basta recordar la profun
un estado semejante que seria enojosa ta da mudanza qne produjo en las costumbres
rea enumerarlas. Baste decir, que incon públicas la propagacion del cristianismo;
secuencias y contradicciones se hallan á pues este solo recuerdo pone fuera de du
cada paso en toda la vida del hombre ; que da que la enseñanza de la Religion no es
le afectan de tal modo las cosas presentes inútil para modificar la conducta de los
que por'lo comun olvida las pasadas y fu hombres, y que antes al contrario, es muy
turas ; que estando dotado de inteligencia eficaz y el único medio del cual es dado
y voluntad , no obstante sufre tambien á prometerse resultados felices y duraderos.
menudo la tiranía de las pasiones que le Tambien ahora como entonces, cuidan los
arrastran por caminos de perdicion, aun hombres de sus negocios y tienen pasiones,
conociéndolo él mismo. líos ejemplos adu y se divierten , y viven distraidos y disipa
cidos y las consideraciones que los ilustran, dos; pero ¡ qué diferencia entre las cos
creo que serán suficientes para dejarle á V. tumbres antiguas y las modernas ! Si lo
convencido de cuán infundadamente ata consintiesen los límites de una carta , po
caba V. la Religion, y que si semejante dis dría aducir mil y mil comprobantes de lo
curso tuviese alguna fuerza probaria que que acabo de establecer manifestando con
muchos no tienen principios morales , pues cuanta verdad se ha dicho que se cometían
que obran contra ellos ; que muchos son entonces mas delitos en un año que ahora
hasta el extremo ignorantes con respecto en medio siglo. Recuerde V. las doctrinas
á lo que conviene á su salud , á mis in de los primeros filósofos de la antigüedad
tereses y honor , porque los perjudican á sobre el infanticidio, doctrinas que se ver
cada paso con sus actos; que el que come tían con una serenidad para nosotros incon
con exceso no conoce que le ha de dañar , cebible , y que revela el funesto estado de
que quien bebe con destemplanza no sos la moralidad de aquellas sociedades; re
pecha que el vino sea capaz de embria cuerde V. los vicios nefandos tan genera
gar, y asi raciocinando por el mismo te les á la razon y que entre nosotros estan
nor , seria preciso afirmar en general que cubiertos de baldon y de infamia : recuer
los hombres están faltos de muchos cono de V. lo que era la muger entre los paga
cimientos, que poseen sin duda alguna. nos y lo que es en los pueblos formados
Digamos que el hombre es inconstante, in por la Religion cristiana; y entonces echa
consecuente , que le afectan demasiado las rá V. de ver cuántos son los beneficios que
cosas presentes, para que sepa conciliar el ha dispensado al mundo el cristianismo en
interes ó el gusto del momento con la fe lo tocante á la mejora de las costumbres ;
licidad venidera , y estará explicado todo entonces comprenderá V. cuán errado es
de una manera cabal y satisfactoria , y sin el decir que la Religion influye poco en la
suponerle mas ignorante de lo que es en conducta de los hombres.
realidad. Sucédenos con mucha frecuencia , cuan
Otra equivocacion de mucha trascenden do tratamos de apreciar el bien producido
cia padece V. sobre el particular y es, el que por una institucion, que nos paramos úni
segun indica su apreciada , opina que la camente en los resultados positivos y pal
Religion produce muy poco efecto en pables , prescindiendo de otros que podría
la conducta de los hombres ; pues que mos llamar negativos, y que sin embargo
tanto los creyentes como los incrédulos, no son menos reales, menos importantes
suelen vivir como si no tuviesen nada que que aquellos. Atendemos al bien que hace
esperar ni temer despues de la muerte. y nó al mal que evita, cuando para calcu
« Los hombres, dice V. , cuidan desus ne- lar la fuerza y la índole de ella, no dehe-
TOMO II. 18
 274 —
riamos pararnos menos en lo último que su deber? ¿cree \. que le ha de estar
en lo primero. narrando cuantas veces las ideas religiosas
Como la ausencia de un mal , que sin le han retraido de cometer un mal, ó han
aquella institucion hubiera existido, ya es hecho que le cometiera mucho menor ?
de suyo un gran beneficio ; y es preciso Una prueba evidente de los muchos de
agradecer á ella el haberle evitado, y con fectos que producen en la conducta de los
tar este efecto como la produccion de un hombres las ideas religiosas y de lo presen
bien. Para hacer debidamente este cálculo tes que estan en su memoria , aun cuando
conviene suponer que la institucion no parecen haberlas descuidado del todo , es
exista y ver lo que en tal caso sucedería. la rapidez instantánea con que se les ofre
Asi, á quien negase la utilidad de los tri cen , tan luego como se hallan en peligro
bunales de justicia , ó pretendiese rebajar de la vida. Casi puede decirse que se des
su importancia no habría otro método mas plegan en un mismo momento el instinto
a propósito para convencerle , que el que- de la conservacion y el sentimiento reli
acabo de indicar. Si los tribunales de jus gioso.
ticia, se le podría decir, os parecen de Como obra el instinto de la conservacion
poca utilidad , suponed que se quitan ; y sobre el curso general de los actos de nues
que el ratero , el ladron, el asesino , el fal tra vida? Si bien se observa, estamos cui
sario, el incendiario y toda la ralea de mal dando incesantemente de conservarnos sin
vados , no tienen que temer otra cosa sino pensar en ello; hacemos de continuo, actos
la resistencia ó la venganza desus víctimas. que tienden á este fin y sin embargo no
Desde luego la sociedad se convertirá en un reparamos en ellos. ¿Cual es la causa ? es
caos, los unos se armarán contra los otros, que todo cuanto se liga muy íntimamente
los criminales se adelantarán mucho mas con la vida del hombre esta sin cesar pre
en su carrera de iniquidad, multiplicándose sente á sus ojos : no lo mira , p ero lo vé ;
el número de ellos de una manera espan lo piensa sin pensar que lo piense. Lo que
tosa. ¿Quién evita todo esto? ciertamente se dice de la vida material puede afirmarse
los tribunales; y el evitar este mal, es sin de la vida del alma; hay un conjunto de
duda producir un gran bien. ideas de razon , de justicia, de equidad, de
Suponga V. pues, que la Religion no decoro, que vagan de continuo por nuestra
existe, que no se nos da desde niños nin mente, ejerciendo incesante influencia en
guna idea de la otra vida , ni de Dios , ni todos nuestros actos. Ocurre una mentira
de nuestros deberes, ¿qué sucedería? todos y la conciencia dice : esto es indigno de un
seríamos profundamente inmorales, y asi hombre ; y la palabra que iba á ser pro
el individuo como la sociedad caminarian nunciada es detenida por ese sentimiento
rápidamente hácia la degradacion mas ab de moralidad y decoro. Se habla de una
yecta. Y sin embargo ateniéndonos al ar persona con quien se tiene enemistad; viene
gumento de V. , se podría objetar : ya que la tentacion de rebajar su mérito , ó reve
cuidamos de nuestros negocios, y vivimos lar una de sus faltas , ó quizás de calum
distraidos pensando poco ó nada en nues niarla ; y la conciencia dice : esto no lo hace
tros deberes , en la otra vida, en Dios; ¿de un hombre de bien , esto es una venganza;
qué nos aprovecha el haber sido instruidos y el enemigo calla. Hay la oportunidad de
en estos puntos , el haber recibido una edu defraudar sin que nadie lo sepa, sin que el
cacion en que senos inculcaban de continuo honor pueda correr ningun peligro , y sin
dichas verdades? Ya ve V. que presentada embargo no se defrauda; ¿quién lo impide?
la cuestion bajo este aspecto no es posible la voz de la conciencia. Hay la tentacion
sostener la solucion que V. pretende darle, de abusar de la confianza de un amigo ha
y claro es que si este método de argumen ciendo traicion á sus secretos , y espetán
tar flaquea en el caso presente, no será dolos en provecho propio, y sin embargo
muy firme en los otros. la traicion no se consuma, aun cuando el
Quién le ha dicho á V. que ese hombre amigo víctima de ella no pudiese ni siquiera
tan distraido, tan disipado, no piensa en la sospecharlá; ¿quién lo impide? la concien
religion que profesa? ¿cree V. que le ha cia. Estas aplicaciones que podrían exten
de estar revelando de continuo, lo que derse indefinidamente, muestran bien á las
pasa en lo íntimo de su corazon , cuando claras que el hombre sin advertirlo obedece
tiene á la vista un cebo que estimula sus muchísimas veces al grito de la conciencia,
pasiones , poniéndole en riesgo de faltar á || y que aun cuando no piensa, ó no cree
 — 27
pensar en ella, ni en Dios, no obstante
obran en su ánimo esas ideas y le impul
san , y le detienen ; y le hacen retroceder
y variar de camino , y modificar continua
mente su conducta en todos los instantes
de su vida.
Si esto se verifica aun tratándose de los
mismos incrédulos ¿qué sucederá con res
pecto á los hombres sinceramente religio
sos? A los ojos del mundo podrá parecer
que ellos se olvidan completamente de sus
creencias , que de nada les sirve la fe en
verdades grandes y terribles , que el cielo,
el infierno , la eternidad solo se ofrecen á
su mente como ideas abstractas , sin rela
cion alguna con la práctica ; pero ellos sa
ben muy bien que la eternidad , y el cielo
y el infierno se les presentan en el acto de
querer obrar mal , que ora los apartan del
camino de la iniquidad , ora los detienen
para que no anden por él con tanta preci
pitacion ; ellos saben que despues de ha
berse abandonado al impulso de sus pasio
nes, experimentan remordimientos quelos
atormentan atrozmente y que los hacen
arrepentir de haberse desviado del sendero
de la virtud. No hay cristiano que no espe-
rimente esta influencia de la Religion: si es
realmente cristiano, es decir, si cree en
las verdades religiosas, sufre repetidas ve
ces el castigo de sus malas obras ó disfruta
el galardon delas buenas. Esta pena ó este
premio , los siente en lo íntimo de su con
ciencia ; y el recuerdo de lo que ha gozado
en un caso ó padecido en otro , contribuye
á menudo á que no se permita extravíos
contra lo que le prescriben sus deberes.
No dudo que con estas reflexiones se que
dará V. convencido de que es un errer con
trario á la razon , á la historia y á la expe
riencia, loque V. afirma de quelaReligion
influye poco en la conducta de los hombres.
Es cierto que los que la profesan no siem
pre se portan como debieran, es cierto que
encontrará V. hombres que tienen fe, y sin
embargo son muy malos ; pero no es menos
cierto que en general la conducta de las
personas religiosas es incomparablemente
mejor que la de los incrédulos. ¿Cuántas
ha conocido V. que no profesando ninguna
religion observen una conducta de todo
punto irreprensible? Y cuando esto digo
no hablo de cometer delitos de los cuales
nos apartan cierto horror natural, el temor
de la justicia, y el deseo de conservar la
reputacion : no hablo de cierta inmoralidad
asquerosa y repugnante de la cual retraen
el honor , el decoro , y hasta cierta delica
deza degusto, fruto de la buena educacion;
hablo de aquella moralidad severa que rige
todos los actos de la vida de un hombre, y
no le permite desviarse del camino del de
ber, aun cuando en ello no se interesen,
ni la honra , ni los miramientos de socie
dad , ni se opongan otras consideraciones
que las inspiradas por una sana moral. Me
dirá V. que conoce á ciertos hombres que
á pesar de ser irreligiosos, son incapaces
de defraudar , de hacer traicion á la amis
tad y que hasta observan una conducta que
si no es tan rigurosa como yo deseara, está
muy lejos de la disipacion y quizás de la
liviandad ; será posible que V. conozca á
incrédulos que sean tales como V. los pinta,
será posible que por educacion, por honor,
por decoro , por esa luz interior que Dios
nos ha dado y que no alcanzamos á extin
guir con insensatos esfuerzos , ajusten su
conducta una y mil veces á la ley del de
ber cuando no se atraviesa algun poderoso
motivo que los impulsa en sentido contra
rio ; pero no ponga V. á esos mismos hom
bres á prueba de una tentacion violenta.
A ese que no cree en nada , ni aun en
Dios , y á quien supone V. tan probo , tan
incapaz de cometer un fraude, redúzcale
V. á la miseria , figúreselo luchando entre
el apremio de grandes necesidades y la ten
tacion de echar mano de una cantidad
agena , pudiendo hacerlo de manera que
nada pierda su reputacion de hombre de
bien; ¿qué hará? V. podrá creer lo que
quiera; yo por mi parte no le fiaría mi di
nero; y me atrevería á aconsejar á V. que
tampoco le fiara el suyo.
V. , mi apreciado amigo, hallándose en
una posicion ventajosa, y sin otras tenta
ciones de hacer mal que las ofrecidas por
las ilusiones de la juventud , no conoce á
fondo lo que es esa probidad que no se
apoya en la Religion. V. no conoce cuán
frágil, cuán quebradiza es esa honradez que
á los ojos del mundo se presenta con tanto
alarde de firmeza á incorruptíbilidad ; fál-
tanle todavía algunos desengaños que reco
gerá V. muy en breve cuando rasgándose
ese velo tan hermoso con que el mundo se
presenta á nuestros ojos en la primavera de
la vida, comience á ver las cosas y los hom
bres tales como son en sí ; cuando entre en
la edad de los negocios, y vea la complica
cion de circunstancias que en ellos se ofre
cen , y asista á esa lucha de pasiones <-
intereses que tan á menudo coloca al hom
bre en posiciones críticas y hasta angustio
sas, en que el cumplimiento del deber es
un sacrificio y á veces un heroismo. Enton
ces comprenderá V. la necesidad de un
freno poderoso , de un freno que sea algo
mas que consideraciones puramente terre
nas. Entretanto queda de V. su afectísimo
y S. S. Q. B. S. M. — /. B.
PENSAMIENTOS SOBRE LITERATURA ,
FILOSOFÍA, POLÍTICA Y RELIGION.
La ciencia es una antorcha que suele ser
vir para ver la existencia de abismos, no
para penetrar su fondo.
No está la dificultad en conocer sino en
advertir.
Buenas son las instituciones , pero se las
falsea ; lo mas precioso de ellas es un buen
escudo.
Entendemos mas por^ intuicion que por
discurso : la intuicion clara y viva es el ca
rácter del genio.
Tomamos la osadía por señal de fuerza ,
por eso nos amilana.
Hay sabios de profesion , y los hay de
genio ; asi sucede en todo.
Pensamiento, imagen , sentimiento, sen
sacion , cosas muy distintas en sí y en sus
objetos; pero andan á veces en delicado
contacto , y se toma la una por la otra.—-
«Pensamiento desleído. » Héaqui una ima í
gen exacta y bella ; mas me gusta el ingre
diente solo.
Hay genio de entendimiento , como de
fantasía y sensibilidad ; no siempre andan
juntos.
Un genio se inclinará al sistema de las
ideas innatas.
Se habla mucho de equilibros políticos :
equilibrio no le hay donde hay movimiento.
Hay muchos aficionados á la música , y
pocos músicos : lo mismo sucede con res
pecto á la poesía.
En las bellas letras y artes , hay mucho
de natural ; pero de convencional hay mas
de lo que creemos.
Muchos no quieren fe, ni aun en Reli
gion , y la fe abunda tanto, aunenlas cien
cias !
Hay bastantes cabezas que son libros y
hasta bibliotecas ; pero pocas inteligencias.
Los que han puesto á sus obras el nom
bre de personages célebres , conocían bien
al hombre.
Quien extrañe los delirios del reinado de
la Diosa Razon, poco ha estudiado el carác
ter de la razon humana.
El comun de los hombres entiende tanto
en política , en guerra y otras cosas seme
jantes , como en el cálculo infinitesimal ;
pero en este se usa un lenguage peculiar,
y nó usual , y en aquellas ciencias nó. Es
ta es una de las causas de que todos ha
blen de lo primero y nó de lo segundo.
A la razon la daña no pocas veces el sen
timiento, y muchísimas otras le hace gran
falta.
Por todas partes hay belleza, armonía:
el caso está en percibirla. Nuestro corazon
es un magnífico instrumento ; solo que se
ha de afinar y tocar.
Un genio de imaginacion es como la na
turaleza , produce sus bellezas : la imagina
cion de los otros es un lienzo mas ó menos
apto para la pintura.
Primores y siempre primores , no es pro
pio de una causa grande; la naturaleza
prodiga sus riquezas tal vez con aparente
desconcierto.
La naturaleza , sin la señal de la mano
del hombre es mas sublime.
Con dificultad entiende los preceptos de
pensar bien quien no piensa ya bien : es
es círculo de mala salida.
El dar reglas secas de lógica á un niño
me parece una teoría de andar explicada
al niño que está en andadores.
Para aprender bien una lengua es poca
cosa la gramática.
El pensar es un misterio , el hablar es
un misterio, el hombre un abismo.
Mucho nos gustan las cámaras oscuras ,
 277 —
los dagucrreótipos , y no recordamos que Una buena lógica , seria un vasto tratado
nuestra cabeza es el mejor daguerreótipo de todo el hombre.
del mundo. La universalidad , viveza y energía del
Me parece que ha de ser un gusto el co movimiento de la primera cruzada prueba
nocer desde la otra vida lo que vale nues la existencia de un espíritu público : los
tro saber actual. pueblos tenían escasa comunicacion ; pues
No basta conocer la moral, es menester ¿quién le habia creado?
sentirla
lica muestra
y con en
frecuencia:
esto, comola en
Religion
todo, su al || En el respeto por las cosas antiguas, hay
cató-
algun misterio.
ta sabiduría. Lo que se llama pasiones políticas suelen
Las pasiones á veces nos extravian , nos ser pasiones comunes.
envilecen, ó corromper. ; á veces nos guian, « La civilizacion es el vapor.» ¡ Qué ab
nos inspiran , nos elevan. surdo ! esto define á algunos economistas.
El mundo dice: «engríete, si quieres, Donde no hay cristianismo la muger es
de tu mérito, pero has de ocultar profun tá esclavizada : esto será tal vez que allí se
damente tu engreimiento : » aqui habría cumple con mas rigor el castigo. « Sub v¡-
delicadas reflexiones quehacer sobrela hu ri ete. ete.»
mildad cristiana.
Muy difícil ha sido siempre, y siempre
El hombre tiene necesidad de amar : y lo será , bajo un gobierno cualquiera , el
la base de la Religion es el amor. castigo de aquellos crímenes que ó proce
Estamos sedientos de saber, de conocer den de la exageracion de los principios en
la verdad , y el premio que promete la Re que el gobierno estriba, ó al menos la lle
ligion es el conocimiento de una verdad van por máscara. Esto tiene raices profun
infinita. das en el mismo corazon del hombre, en
Los pueblos niños desplegan imaginacion, su entendimiento y en la organizacion que
los bárbaros pasiones fuertes, los cultos en tal caso tienen casi por necesidad el go
( mientras siguen un sendero regular) in bierno y sus dependencias. lA cuantos go
genio, los cultos y en revolucion, todo. biernos eso matal
La propagacion de las Hermanas de la En cada crisis social nace un genio : la
Caridad seria un gran bien para la huma España está en crisis: ¿dónde está el genio?
nidad y para rehabilitar la Religion en la Las sociedades modernas con la aboli
opinion de los pueblos. cion de la esclavitud y con otros medios,
El divorcio de la Religion y de la polí han adquirido un fondo inagotable de mo
tica es un imposible ; la razon lo convence, vilidad : las instituciones fijas y robustas
la experiencia lo atestigua. eran pues mas necesarias que nunca.
Si dijéramos que el único resorte del co Quien se interesa mucho por las formas
razon del hombre es el propio interes , se políticas, mostrándose muy entusiasta de
seguirá que la Religion ha dado tambien este ó aquel sistema , ó es ambicioso ó po
en el blanco. co entendido.
El poder social ha perdido de su fuerza, La ciencia moderna mira las cosas muy
la Religion de su ascendiente , y hé aqui en globo: y hace bien, porque las cosas no
que vuelven á presentarse el duelo y el existen clasificadas, sino en globo: la difi
suicidio. cultad está en la debilidad del entendimien
Cuando el corazon necesita una doctri to humano. Los grandes talentos son poco
na, el entendimiento se la presta, aunque poner clasificadores, y poco á propósito para com
obras elementales. Este carácter , ó
sea fingiéndola. rumbo ó espíritu de la ciencia, aumenta
Un genio es una fábrica, un erudito un las dificultades de un buen plan de instruc
almacen. cion, y la dificultad de encontrar buenos
En el estudio de la sociedad , aun tal co profesores.
mo le tenemos con todo su aparato de aná En tiempo en que no sea mucha la fuer
lisis, debe de haber bastante poesía. za de las ideas , pueden estas hallarse en
 — 278 —
discordancia con las cosas; cuando las ideas En tanto como se habla del espíritu de
tienen mucho influjo , nó. provincialismo en España no sé que hasta
Todos los partidos quisieran que el go ahora se haya fijado su carácter, ni aun
bierno fuera una expresion de sus opinio probado su existencia.
nes y un sosten de sus intereses : asi es ¿Hay en España verdadera nacionalidad?
que todos quisieran influencia en el gobier Si ó nó : en qué consiste , sus causas , sus
no : es decir que todos quisieran gobierno indicios; hé aqui apuntado el objeto de
representativo si estuvieran seguros de al una extensa obra.
canzar mayoría. ¡Qué verdad mas pal Arte de pensar y arte de no errar , y
pable ! j Y cuán pocos piensan en ella ! tambien de no dejarse engañar ; son cosas
«mandad , disponed como querais; yo ni muy diferentes: la primera quizás no exis
quiero intervenir en ello, ni aconsejaros te ni existir puede ; la segunda es difícil
siquiera , aun en las cosas que á mí me pero nó imposible.
atañen ; aun en lo tocante á mi dinero » no
está en la naturaleza del hombre. Un viage bien hecho, es tarea muy ardua.
La sociedad necesita ahora mucho la Re Si bien se mira la única religion de los
ligion , por esto no podrá mostrársele es pueblos civilizados es el cristianismo ; esto
quiva. dice mucho.
No es lo mismo conocer la sana moral Los mayores extravíos á veces proceden
que el sentirla vivamente ; y va mucho de de abandonarse demasiado al sentimiento :
sentirla hasta con entusiasmo á practicarla las cuestiones sobre el suicidio , pena de
cual se debe. muerte, formas políticas, y otras seme
jantes son un buen ejemplo. Bueno es es
Bien y mal; hé aqui unas palabras de cuchar el sentimiento , pero si no se anda
mal definir. con prudencia en eso , bien pronto la ver
Talento ¡ qué palabra tan vaga I Sus de dad en muchas materias será tan varia co
finiciones y clasificaciones darían lugar á mo la organizacion , y como las afecciones
una grande obra. de nuestro cuerpo.
Hay espíritu de asociacion , pero es un Hay en el fondo de nuestra alma una
espíritu débil , le falta aliento, y solo la luz superior á todas las afecciones de mo
Religion puede dárselo. mento , una luz que es comun á todos los
hombres, y que es luz en todos tiempos;
Decis que el cristianismo ha civilizado el esto á mas de ser un aviso para no errar en
mundo; esto es decir que el cristianismo muchas cuestiones, nos suministra una ro
es una verdad. busta prueba de que el alma no es el re
Todo lo que está en contacto con tas ne sultado de la organizacion.
cesidades del hombre, progresa; porque No es fácil opinar contra los propios in
la necesidad es muy vivo acicate : y por es tereses : estos arrastran las opiniones.
to en la época actual progresarán las cien
cias relativas á la sociedad , porque los sa Bueno es el análisis ; pero miradas las
bios ocupan la silla de mando. En el siglo partes á veces no se conoce por eso el todo:
pasado estas ciencias habian sufrido un hor si desmontamos una máquina la mayor
rible extravío , y sin embargo se creia que parte de los hombres no sabrán para qué
hastian adelantado; ¿y porqué? porque el sirven las piezas.
hombre público gobernaba , y el sabio so Las clases sabias pervirtieron las igno
ñaba en su gabinete : unid en una estas dos rantes ; ahora parece que tratan de enmen
personas y veréis como se remedia el mal; dar el yerro; pero la cosa es difícil.
esto explica el cambio de ideas despues de
la revolucion francesa, y tambien varios Por costumbre miramos el derecho de
fenómenos muy extraños. testar como incuestionable; á la primera
ojeada filosófica parece que tiemblan sus
Un curso de oratoria bien entendido se cimientos, pero ahondando mas se encuen
ria un excelente curso de lógica. tran razones profundas y delicadas de esta
A los niños se les enseña la retórica y la legislacion.
poesía ; ¡ pobres niños ! y luego la lógica : Es bien notable que una filosofía que
¡ pobres niños! | apenas se acuerda de la Religion , sino co
 — 279
mo de un hecho humano, esté siempre po Hay talentos claros, porque son super
seida del pensamiento que preside los destinos ficiales; son como un arroyuelo de escasa
de la humanidad. Diríase que teme descu profundidad ; enturbiada un poco el agua,
brir á Dios , y que Dios se le aparece en todavía se distinguen la arena y piedrecitas
medio de una nube , en el curso de sus in del fondo.
vestigaciones. Hay talentos profundos pero claros : son
Se quiere popularizar la ciencia, y ja una grande antorcha , que todo lo alumbra.
mas habia andado por regiones tan encum El ingenio suple á veces el genio : es co
bradas. mo el agua que nos ofrece una gran pro
La historia no debe olvidar un hecho, fundidad , reflejándonos la inmensidad del
que quizás pocos han notado. Un hombre firmamento.
quería evitar la revolucion francesa por Hay en el mundo un vacío; los genios,
medio de una reforma ; y este hombre era si le padecen , lo sienten mas porque lo
el que se sujetó humildemente al juicio del tienen mas grande.
Papa : era Fenelon.
Hay entendimientos que parecen natu
Podríase hacer una excelente obra sobre ralmente falsos : siempre tienen la desgra
las modificaciones que serian convenientes cia de verlo todo al reves. Guardaos de dis
en la instruccion del clero , á causa de la putar con ellos.
nueva organizacion y nuevas necesidades
de la sociedad: allí se podria discutir muy Oís tal vez un solemne despropósito
bien si es útil ó nocivo, el separar la teo acompañado de una satisfaccion admirable:
logía de las universidades, encerrándola en ¿ Por qué os cansais en refutarle , y en ha
los colegios. cer entrar en razon á su autor? quien lo
ha dicho tan cumplido, no es capaz de
Economía política Tambien debiera comprender la refutacion.
haber economía moral.
Desde la locura rematada á la cordura
El precepto contra las usuras es profun perfecta, hay una escala de muchos grados:
damente económico; pues que de suyo el mundo está distribuido en ellos. Los ex
tiende á destruir zánganos , lo que es muy tremos son pocos.
favorable á la produccion.
La prensa comenzó dando áluz la Biblia,
Dice Destutt-Traci (t. 2, p. 219, Econ. y ha descendido hasta el lengua ge de las
pol. ) : «En materias algo difíciles la prác verduleras ; como la música nació en los
tica es provisionalmente bastante razona templos, y ha bajado hasta las tabernas.
ble mucho tiempo antes que lo sea la teo
ría, y puede suplir muy bien por ella.» Los poetas ramplones no desacreditan á
Sobre este particular pueden hacerse mu Homero y Virgilio ; una miserable sonata
chas reflexiones. de mandurria nada quita á Rossini ni á
Mozard ; y los prodigios de Miguel Angelo
Casi siempre se habla , se aplaude , se y de Rafael , no se destruyen por los ma
critica por costumbre, y sobretodo por au marrachos de patios y esquinas.
toridad agena.
La lengua no es el lenguage ; Gines de
Las imaginaciones muy fuertes, y la Pasamonte hablaba la misma lengua del
sensibilidad muy viva, no son los mejores Gran Gonzalo y de Fray Luis de Leon ; y
amigos de la lógica. las mugeres del rastro la misma lengua pe
Conviene ver lo que hay : nó mas de lo ro nó el lenguage de Santa Teresa ; los ór
que hay : un hombre que se desvanece por ganos de Marat la misma que Fenelon.
debilidad de cabeza ú otras causas, en el En el mismo Capitolio triunfó- el herois
mismo instante que cierra los ojos á la luz, mo y el parricidio.
figúrase quizás que ve brillantísimas cen
tellas, galanos colores y exquisitos matices. La revolucion francesa fundió los ele
mentos de Francia como metales en crisol,
Hay cierta manía de análisis que lleva á la convencion sacó la masa informe; Na
confundirlo todo , y hay cierto espíritu de poleon la elaboró , cinceló y pulió. Gene
exagerada imparcialidad que hace á los ralmente hay homogeneidad ; las diferen
hombres muy parciales ; estas son enfer cias que se notan son como las vetas de
medades de difícil curacion. metales que no ligan.
 — 280
En Francia el gobierno representativo Pisislrato á la fortaleza de Atenas , al lado
es la representacion de la administracion , de la gallarda doncella que representaba á
salvo el derecho de clamar. Minerva.
Si la prensa fuese el órgano de la opi Conviene aprender las reglas y acostum
nion pública, en Francia el gobierno esta brarse á ellas como los músicos al compas :
ría siempre en abierta oposicion con esta. despues lo llevan sin advertirlo.
En política como en Religion , el entu Los hombres son como las figuras de
siasmo supone la fe , la pura razon enfria. barro: conviene que se sequen en el mol
En España no debe haber tolerancia re de; del contrario no toman la forma.
ligiosa ó de cultos, porque no se tolera lo Pobre cabeza donde no hay presidente :
que no existe. No hay disidentes. Hay in este falta á los hombres sin carácter.
crédulos, las personas de estos cumplida- La parte inteligente de una nacion ha de
monte se toleran. Culto no tienen. estar en movimiento, y dirigir; pero ¿y si
El poder es violento cuando es débil. está loca , ó va errada ? ¡ á cuántos indivi
Sanson es la imagen del hombre : poder duos no pierde una cabeza , un pensamien
y debilidad. to falso! virtud, salud, fortuna, honor;
todo lo echa á perder. Hé aquí la sociedad,
La monarquía hereditaria , es una espe con la inteligencia en extravío.
cie de insaculacion. La perfeccion de la
prudencia consiste en desconfiar de sí mis ¿ Qué me importa un artículo fulminan
ma. El vicio radical de ciertas escuelas po te contra una exaccion , mientras miro en
líticas, consiste en el olvido de esta regla. casa los soldados del apremio ?
Fundan la sociedad en un pacto y preten Estamos los españolesen medio del mar,
den gobernarla con sola la razon. es menester acostumbrarse á las tormentas.
Dido pidiendo al rey Jarbas la permision El pueblo comprende mas pronto ellen-
de comprar tanto terreno como podría ro guage de las pasiones que el dela razon.
dear con una piel de buey y cortándola La sociedad actual es una muger delan
despues en tan delgadas tiras , que ciñeron te de un espejo.
espacio capaz de comprender una ciudad ,
es un ftermoso emblema de la política as En la actualidad todo se hace por acto
tuta de los pueblos comerciantes. reflejo.
Se ha dicho que Constantino trasladando La inteligencia es la luz que guía, lamo-
A Bizancio la silla del imperio, lo enflaque ral la ley que arregla y armoniza , la feli
ció; ¿no podría decirse que lo conservó, cidad el término y el premio.
al menos en oriente , construyendo una úl Una política ciega no atiende siquiera á
tima trinchera contra la irrupcion de los los hechos consumados, una política injus
bárbaros? ta los acepta y consolida , la justicia y la
Hay reputaciones que se parecen á los prudencia no quieren ni uno ni otro.
cadáveres que se conservan enteros en una Dos hombres que no se entienden , son
caja bien cerrada : en dándoles el aire se dos instrumentos que no estan en armonía.
convierten en polvo. Se dice que la verdad nunca daña , lo
La sátira se embota, la razon nó. niego.
El pensamiento falso expresado con una Un hombre con pereza es un reloj sin
imagen brillante es una muger fea cubierta cuerda.
con hermoso velo. Tenemos un nuevo pauperismo , los jó
Los hombres ensalzados por los pueblos venes ilustrados.
como emblema de libertad , suelen tener España es un pueblo nuevo, aquí po
la humorada de Marco Antonio que des drían hacerse grandes ensayos.
posado con Minerva por el voto de los ate
nienses se hizo pagar el dote que á tan no En Cataluña tenemos la civilizacion es
ble consorte correspondía. pañola y la cultura francesa.
Los ambiciosos marchan á la tiranía, al Las sociedades no se mueven con la risa,
lado de la imágen de la libertad, como sino con los intereses y la conviccion.
 — 281
Nuestros padres abundaban en buen sen recordamos al pensar en ciertas fusiones
tido, nosotros en razon. ¿La verdad de políticas. Vendaos los ojos-, que no veais el
qué parte está? líquido, tocadle con la punta de la lengua,
¿ Se nos pretenderá dar la centralizacion y diréis luego : « aqui hay agua , aqui azú
francesa, el eclecticismo filosófico, la civi car, aqui sal.»
lizacion vapor? Hay ciertas soluciones en que los cuer
De la impotencia gubernativa nace el pos no quedan mezcládos sino mientras du
pandillage. ra el calor : en enfriándose el líquido , se
verifica la separacion. No hay que hacer
Quien no gobierna no tiene el apoyo de caso de ciertas mezclas , de cierta homoge
la nacion ; el instinto de conservacion hace neidad aparente : dejad que se enfrie el lí
buscar un apoyo ; y de aqui el pandillage quido.
que es una compañía de seguros mutuos.
Apoyadme y yo os dejaré hacer. Es senci Cuando un partido político carece de
llo pero peligroso. convicciones, está privado de vida; enton
ces es como los cuerpos inorgánicos que no
Para conservarse los grandes partidos co se nutren , sino que crecen por agregacion ó
mo los grandes hombres, gobiernan; los yuxtaposicion, en tal caso son incapaces de
mezquinos intrigan ; los malvados corrom modificarse. Combinadlos con otro cuerpo
pen ; los osados oprimen. cualquiera , siempre se separan y efectúan
Para constituir la dictadura completa son la cristaliuwion. Como se presentaban antes,
menester 1.° Genio en el candidato. 2.° Di se presentarán despues : si alguna vez los
solucion social y política. 3.° Ausencia é habeis medido , sabed que será la misma su
imposibilidad del gobierno legal. 4.° Fuer figura ; para conocer sus ángulos no nece
za é influencia exterior en la nacion. sitais aplicar de nuevo el goniómetro; sin
Para mandar sirven los ambiciosos , mas peligro de error podeis serviros de la me
nó los vanos. dida vieja.
¿Quereis apreciar la fuerza de una si No os alucine el ver que un metal ha
tuacion ? ved qué ideas é intereses repre perdido su dureza , y que corre y circula
senta. como los otros líquidos : no veis que está
expuesto á una temperatura muy elevada?
¿Quereis otra señal mas sencilla? ved Dejad que esta baje ; el metal volverá á su
qué hombres figuran en ella. estado primitivo.
¿Qué valdría el respeto al trono si tuvié Para mantener en fusion dos cuerpos
semos la anarquía ? la tempestad no dejaría que se repelen, es necesario un tercero que
de serlo por llevar respetuosamente en prepondere sobre la accion de cada uno de
sus alas una niña dormida. ellos , que absorbiéndolos los una. Hé aqui
Mientras los cuerpos políticos hayan de una imágen bastante fiel del poder mo
arreglar todas las cuestiones políticas no nárquico.
saldremos jamas de la política , es decir del La monarquía hereditaria es una especie
malestar. de aplicacion del sistema de la suerte.
¡ Tanto temela sociedad el poner en movi
Los poderes nacidos de una revolucion , miento muchas voluntades en un negocio
tienen por el mismo hecho facultades dis de importancia ! No se fia ni de los candi
crecionales : su blanco y norma es la con datos ni de los electores.
veniencia pública ; su límite la razon y la
moral. ¡ Cuántas cosas ilegales son legíti Se dice que la repeticion de una idea , la
mas y cuántas cosas ilegítimas son legales ! gasta : la asercion es muy dudosa : una
insigne falsedad, una solemne extravagan
Observan los químicos, que los cuerpos cia , inculcadas de continuo y con sereni
que tienen poca afinidad , aunque puedan dad , producen no pocas veces un efecto
combinarse de diferentes maneras, dan un sorprendente.
compuesto en que se notan las propiedades
de los componentes: en una combinacion Se suele decir el calor de la conviccion;
de agua y azúcar, ó de agua y sal, se des ¡ cuán á menudo podria decirse la convic
cubren siempre las del azúcar y del agua , cion del calor I
y las de esta y de la sal. Este fenómeno lo Hay hombres que no pueden sostener su
reputacion sino ocultos tras una mampa
ra; salen á las tablas; se ve que era elmons
parturieiis ; el público los silba ; ¿ Quién tie
ne la culpa?
Quizás ahora se hace justicia á los hom
bres mucho mas pronto que antes. La ra
zon es porque un siglo de ahora es mas que
diez siglos anteriores. La posteridad se an
ticipa , llega ya en vida de quien apela á
su fallo.
Hobbes decia que si hubiese leido tanto
como otros, seria tan ignorante como ellos :
esta es una exageracion que encierra un
significado profundo.
Conocemos mas los libros que las cosas; y
el ser sabio consiste en saber cosas y no libros.
La educacion es al hombre lo que el
molde al barro : le da la forma.
La inconsecuencia natural al hombre,
produce grandes males y grandes bienes.
¿Cómo? un hombre religioso consecuente
seria un modelo : hé aquí los males de la
inconsecuencia : un impío consecuente ob
servaria una conducta monstruosa ; hé aqui
un bien de la inconsecuencia.
Tambien hay vanidad en la pretension
de no ser vano.
La vanidad es la molicie del orgullo.
El orgulloso será con frecuencia vano ,
si no ejerce gran dominio sobre sí mismo.
Y como este dominio es muy difícil sin vir
tud sólida, los orgullosos son vanos con mas
frecuencia de lo que ellos creen.
Una niña que en la edad de la hermosu
ra y de las ilusiones, se consagra al servi
cio de los enfermos , muestra mas grandor
de ánimo que todos los conquistadores del
mundo.
Bienaventurados los que lloran, dijo Jesu
cristo : i qué palabra ! ¡ y en qué siglo ! ella
por sí sola anunciaba á la humanidad un
nuevo porvenir.
El alma con las pasiones exaltadas es el
cuerpo en calentura. Tirita de frio, y tal
vez el ambiente está ardiendo ; se abrasa ,
y la atmósfera está helada. Lo primero que
debiéramos hacer en un caso semejante es
no juzgar de nada.
La perfeccion del disimulo consiste en
encubrirle.
La condescendencia habitual no está re
ñida con una gran firmeza de carácter. Es
ta es una cualidad preciosa que conviene
economizar.
No hay nada mas insulso que la preten
sion de ser gracioso.
A los hombres grandes se los llama con
solo su nombre, á secas. Esto es muy sig
nificativo. Es que la idea principai no ne
cesita ni consiente accesorios.
La afectacion es intolerable ; y la peor es
la afectacion de la naturalidad.
Los hombres que alaban siempre, son ó
simples ó bajos; los que no alaban nunca,
ó son imbéciles ó envidiosos.
Los hombres grandes son sencillos, y los
medianos son ampulosos , por la misma ra
zon que los cobardes son bravatones , y los
valientes nó.
Suele distinguirse entre la honradez po
lítica y la honradez privada ; á quien no ha
manejado con delicadeza los negocios par
ticulares, no le fiara yo la hacienda públi
ca. Hay mayor cebo y menor peligro.
Hay objetos que no se ven si no se sien
ten ; y no se ven bien si se sienten dema
siado. El sentimiento en tal caso es una
especie de lente; es difícil acertar en la
graduacion mas adecuada.
Si se combinan en un mismo sugeto la
riqueza , la ignorancia , la inmoralidad , la
presuncion , y la falta de educacion , el re
sultado es una cosa intolerable.
Cuando un objeto está presente sentimos
su nada ; por esto preferimos vivir de re
cuerdos y esperanzas.
No es tolerante quien no tolera la into
lerancia.
Muchos hombres exageran sus fuerzas;
pero tambien los hay que no las conocen ;
¡qué fortuna para ellos y para los demas,
si hubiera quien se las revelase !
En la sociedad hay muchos hombres dis
locados; podrían ser útiles y no hacen mas
que dañar ó embarazar.
Si hubiese un medio seguro de descubrir
las disposiciones particulares de cada uno,
no es posible decir hasta qué punto se mul
tiplicarian las fuerzas de la humanidad.
De un pensamiento expresado secamen
te á otro cubierto con una imágen feliz, va
la misma diferencia que de una bala tirada
con la mano á otra disparada con un fusil.
 — 283 —
Cuando uno recuerda lo que era la Eu mando cada dia establecimientos mayores ,
ropa cinco siglos atrás, la imaginacion se estos traen la acumulacion de la riqueza ;
asombra al pensar lo que será de aqui á de la acumulacion resulta la miseria del
cinco siglos. mayor número; detener á la humanidad
El porvenir de las naciones civilizadas en su carrera , es imposible ; ¿ á donde va
entraña acontecimientos tan colosales y mu mos á parar? El entendimiento se abruma
danzas tan profundas , que probablemente y el corazon se contrista. ¿Cómo se resuel
nosotros no nos formamos de ello ninguna ve el problema? ¿Será que la Providencia
idea , ni somos capaces de formárnosla. tenga reservado para lo venidero algun ar
cano venturoso , pero que la prole de Adan
El medio para deshacerse de un hombre no haya de alcanzarle sino despues de mu
amante de contradecir, es callar y escuchar cho sufrimiento , como tantas veces le ha
reposadamente. Atacará primero lo que ha sucedido ?
beis dicho, luego lo que pensará que que
reis decir; esto es, vuestras opiniones rea Al ver como perecen á millones los indi
les ó presuntas ; pero al fin se cansa y se viduos, como sufren inesplicables padeci
aburre , fastidiado de una víctima que se mientos generaciones enteras, tal vez du
hace el muerto. rante largos siglos, para obtener el triunfo
de una idea , ó el arraigo de una institu
Esos hombres, eternos impugnadores de cion, saltan á la vista dos verdades: l.'que
todo, son como las balas de canon; derri el destino del individuo humano no acaba
ban una muralla de mucho espesor, y muy en la tierra ; 2.° que ese ser que llamamos
recia , y pierden la fuerza en encontrando humanidad está subordinado á los desig
algunos colchones. nios de una Providencia.
Para las cosas grandes y arduas se nece Si la Inglaterra desapareciese del mapa
sitan , combinacion sosegada , voluntad de de Europa , resultaría un desequilibrio que
cidida , accion vigorosa : cabeza de hielo , haría imposible la paz europea.
corazon de fuego , mano de hierro.
La Religion es la mejor filosofía de la Creen algunos que la Europa no puede
historia. ya pasar por conflictos semejantes al de la
irrupcion de los bárbaros del norte , ó de
Los perezosos suelen ser grandes pro los árabes ; pero tal vez no han reflexiona
yectistas ; asi estando faltos de realidad se do bastante sobre lo que de sí podria darei
engañsn con ilusiones; y ademas el trabajar Asia gobernada por la Rusia. Mehemed-Alí
solo en proyecto se aviene muy bien con el no con sus ensayos en pequeño ha evidenciado
hacer nada, suma felicidad del perezoso. que el oriente es susceptible de grandes re
El adelanto de la maquinaria va recla voluciones. — /. B.
 DE LAS MATERIAS CONTENIDAS EN EL TOMO SEGUNDO.
Espartero. Art. 1.° Situacion de España,PÁG.S
Espartero , Cristina y D. Carlos , carácter
del grandor personal de Espartero, calida
des personales de Espartero. Reflexiones
sobre la humildad de su cuna. Su valor.
Difereucia entre el valor de un soldado y
el de un general. Escasez de sus talentos.
Dureza de corazon que manifestó en el
mando. Espartero general. Medios que
empleó para encumbrarse. Su destreza pa
ra aprovecharse de todas las situaciones.
Su mérito en la batalla de Lucbana. Do
cumentos justificativos. Espedicionde Don
Cu los. Conducta de Espartero con respec
to á ella. Plan de guerra. La combinacion,
de los tres ejércitos. Acciones de Ramales
y Guardamino. Título de Duque de la
Victoria. Felicitacion al gobierno por la su
presion del Guirigay. Documento justifi
cativo. Abrazo en las Córtes de 1839. Con
ducta de Espartero con respecto a Cabrera.
Conclusion de la guerra
Estudios políticos. Art. i.* El alto cuerpo
colegislador. Relaciones del sistema repre
sentativo con el absolutismo y la república.
Creación de un cuerpo legislativo media
dor. Fuerza absorvente de los cuerpos po
pulares. La soberanía parlamentaria. Cá
maras de Francia. El Senado de España.
Cámara de los Lores de Inglaterra. Razon
de las diferencias de dichos cuerpos. El
órden social y el politico. Anomalía de la
Constitucion de 1837. Ilusion sobre los
efectos de los altos cuerpos colegisladores.
Porvenir de las comunidades religiosa» m
España. Art. 1.° Indicacion sobre el ori
gen , naturaleza y objeto de las co:i.unida
des religiosas. Conjetura sobre su resta
blecimiento. Cuál será entonces su forma.
Dos grandes necesidades que aquejan á la
sociedad actual. Carácter del presente si
glo. Su cotejo con la Religion. Proceder de
aquella y de este con respecto al infortu
nio. Espresion notable de un personage cs-
trangero. Recuerdo de los claustros. La
prohibicion del restablecimiento de las co
munidades religiosas es contraria á la li
bertad. Lo que está sucediendo en Francia
é Inglaterra. La revolucion , la España y
las comunidades religiosas
Polémica religiosa. Carta octava á un es-
céplico en materias de Religion. Los nue
vos espiritualistas franceses y alemanes.
Ilusiones del escéptico. Filosofía alemana.
Leibnitz. Sus doctrinas. Su oposicion á Es
pinosa. Su religiosidad. Errores de Kant.
Sus do. -trinas Con respecto á las pruebas
metafisicas de la inmortalidad del alma , de
la libertad del hombre y duracion del mun
do. Observaciones sobre la abnegacion de la
razón. Fichtc. Sus errores. Scheling. Nota
bles palabras de madama de Stael. Hegel.
PÁG.S
Su vanidad intolerable. Dificultad de que se
estienda en Espana la filosofía alemana. . 21
Espartero. Art. i.° Espartero ambicionan
do la Regencia. Elementos políticos de
Barcelona. Viage delas Reinas á esta capi
tal. Descripcion de la entrada de E'partcro
en Barcelona el dia 13 de junio de 18i0.
Motin del 18 de julio. Sus causas. Respon
sabilidad que pesa sobre Espartero. Timi
dez de Espartero. Errores que se cometie
ron con respecto á él. Diferentes especies
de asonadas , y distinta conducta que en
ellas debe seguirse. Los moderados y Es
partero. Notables palabras del Sr. Martínez
de la Rosa. Conducta de Inglaterra. Hechos
y documentos justificativos. La presidencia
sin cartera. Un folleto notable. Abdicacion
de la Reina Gobernadora. Instalacion del
ministerio-regencia en Madrid. Espartero.
Cromwel. Napoleon. El intrigante y el
hombre de Estado. Camarilla de Esparte
3 ro. Cuestion sobre la regencia. Espartero
es elegido regente único. Carácter de la re
gencia única. Lo que dirá la historia 25
Estudios políticos. Art. 2.° El alto cuerpo
colegislador. Parangon de la Constitucion
de 1812 con la de 1837. Ilusiones sobre el
efecto del alto cuerpo colcgislador. De
fectos de que adolece esta institucion. In
dicaciones sobre la necesidad de reformar
le y el modo. Observaciones sobre el Es
tamento de Próceres del Estatuto Real . . 31
Porvenir de las sociedades religiosas en Es
13 paña. Art. 2.° Positivismo material de
nuestro siglo. Ocupaciones de los antiguos
monges del Oriente. En qué podrían ocu
parse los monges actuales. Su buena dispo
sicion paralas ciencias naturales y exactas.
Benedictinos de Inglaterra. Las comunida
des religiosas en sus relaciones con el progre
so de las ciencias de observacion. Gerhcrto:
ó sea el Papa Silvestre II. Alberto magno.
Rogcr. Bacon. El jesuíta Cavalieri. La Sueur
y Jacquicr, comentadores de Newton. Al
gunos inconvenientes de la época actual para
dedicarse á cierta clase de estudios con igual
fruto que en otros tiempos. Lo que deben
ser los religiosos de ahora. Las ciencias na
turales y la vida contemplativa 39
16 Polémica religiosa. Carta 9.a n un escéptico
en materias de Religion. Panteismo de la
filosofía alemana. Hegel. Loque es la Reli
gion en sentido de este filósofo. La sustancia
universal de su sistema. La idea. Su de
sarrollo. La existencia. Panteismo de He
gel. La Esféra lógica. Im razon imperso
nal. Las leyes objetivadas. Sus sueños con
respecto á las leyes de la naturaleza. Sus
pretendidas demostraciones astronómicas.
El planeta Ceres. Atrevimiento de Hegel
contra Newton. Ingenua confesion de Link,
admirador del filósofo aleman ií
 PÁO.S U
Espartero. Art. 3.° Espartero y la dictadu
ra. Si era posible la dictadura en tápana.
Condiciones que se necesitan para la dicta
dura en una nacion. Ausencia del repre
sentante dela Legitimidad. Disolucion so
cial y política que impida el establecimiento
de un gobierno regular por los trámites
ordinarios. Que la nacion donde se entro
nice la dictadura ó se halle en completo
aislamiento con respecto á las naciones ex
tranjeras ó en posicion militar muy po
derosa. Genio guerrero y político en la
persona del dictador. Pruebas de esta doc
trina y su aplicacion en España
Espartero gobernando. La regencia provi
sional en sus relaciones con los partidos ,
con el Trono y la nacion. Art. 4.° Errores
de la regencia provisional. Lo muy impo
lítico de este documento. Sus ataques al
partido moderado. Sus indecorosas alusio
nes al Trono. Espartero y la Religion. Ne
gocio del vicegerente de la nunciatura
apostólica D. José Ramírez, de ArelUno.
Sinrazon é injusticia del gobierno cu este
grave negocio Documentos justiíicativos.
Conducta de Espartero con el Papa. Alo
cucion del Sumo Pontífice en el consistorio
secreto del 1.° de marzo de isil. Mani-
flesto del gobierno del 30 de julio del mis
mo año. Sus acriminaciones contra el Su
mo Pontífice. Trata al Papa de una manera
indecente. Calumnia sus intenciones. Ne
gocio de la obra de la propagacion de la fe.
Documento justificativo. Proyectos cismá
ticos. Indirios quede largo tiempo andaban
revelando intenciones siniestras. Documen
tos justificativos. Proyecto del Sr. Alonso
sobre jurisdiccion eclesiástica, presentado
en la sesiou de diputados en 31 de diciem
bre de IS'ri. Su esposicion y sus artículos.
Otro proyecto del Sr. Alonso presentado en
la sesion de tO de enero de 1812. Su ca
rácter cismático. E«partero y Napoleon
comparados entre sí con respecto á la Igle
sia. Notables palabras de Napoleon en
Sta. Elena. Diferencia entre la España y la
Francia con respecto á la posibilidad de un
cisma. Conducta de Bonaparte sobre este
particular. Notable pasage de Botta en su
Historia de Italia
Ojeada sobre la conducta de Espartero.
Art. S.° Su alianza con los hombres de
Ayacucho y los del año 13. Lo misterioso
de esta conducta. Conjeturas sobre los mo
tivos de ella. Indicio de proyectos ulterio
res. Su comportamiento en la noche de la
insurreccion de octubre. Su ingratitud y
crueldad despucs de la victoria. Diferente
conducta de Espartero segun era distinto
el carácter de los motines. Rápido decai
miento de su prestigio. Desencadenamien
to de la prensa Aislamiento de Espartero.
Ignora basta lo que se dice de él en los
periódicos de Madrid
Espartero Art. (>.° Sucesos de Barcelona en
noviembre y diciembre de 18í"2. Situacion
de esta capital á principios de noviembre
del mismo año. Actitud de los republica
nos. Documentos justificativos. Sucesos del
anochecer del 13 de noviembre. La poca
prevision del Capitan General Van-Halen.
Sucesos del 13 y del 10. Carácter de aque
lla revolucion. Lo que había en el fondo de
ella. RazoDes que lo confirman. Prevencion
contra Zurbano. Los catalanes y las quin
tas. Juicio del general Van- Halen. Tre
menda actitud del pueblo. La junta presi
dida por D. Juan Manuel Carsy. Sus
primeros actos. Documentos justificativos.
Comienzan las amenazas de bombardeo
Zozobra de la ciudad. Negociaciones con el
Capitan General. Conducta de la Junta de
gobierno. Su incertidumbre. Nuevo aliento
que toma el General Van-Halen. La Jun
48 ta va perdiendo su fuerza. Salida de los
prisioneros. Espartero delante de Barce
lona. Lo que podía hacer y lo que hizo. Su
dureza de corazon. Su ceguera incompren
sible. Sobre él;pesa la responsabilidad del
bombardeo. Última* negociaciones. He
chos notables narrados en la Reseña His
tórica publicada por losindividuos de la pe
núltima Junta. Salida del venerable obis
po. Inexorabilidad de Espartero. El bom
bardeo. Ultimatum del Capitan General.
Horrorosa situacion de Barcelona. Nueva
salida del venerable obispo. Espectáculo
3ue presentaba la capital pocas horas antes
el bombardeo. Desesperacion de la ciu
dad. Ríndese Barcelona y entran las tro
pas. Marcha el Regente y se vuelve á Ma
drid. Su paso por Valencia. Fria acogida
que encuentra en Madrid. Indignacion pro
ducida por toda España por el bombardeo
de Barcelona. Se preparo la resistencia.
Declaracion de la prensa independiente. So
bre un tratado de comercio con la Inglater
ra. Esfuerzos de Espartero para disipar los
temores de la prolongacion de la minoría.
Nuevas elecciones. Manifiesto del partido
moderado. Manifiesto de los progresistas.
Duras calificaciones que sedan á la fraccion
aliada cou Espartero. Indicaciones que en el
mismo documento se hacen contra el Re
gente. Imposibilidad en que Espartero se en
cuentra de disipar el temor de la nacion con
respecto á la prolongacion de la minoría. . . 73
Espartero. Art. 7.° Sus intencione* y caida.
Examínase si el Regente abrigaba en rea
lidad el proyecto de prolongar la minoría.
33 Preséntase la cuestion en su verdadero
punto de vista. Rápida ojeada sobre el pro-
' nunciamiento de junio. Conducta tímida y
vacilante de Espartero. Conducta de Nar-
vaez. Entrada de los pronunciados en Ma
drid.
se refugia
Espartero
á bordo
levanta
del navio
el sitio
Malabar
de Sevilla y 110
Coníioeracioneí sobre la Apología católica
de las observaciones pacificas del Ilustri-
simo Sr. Arzobispo de Palmira D. Felii
Amal sobre la potestad eclesiástica, sus
relaciones con la civil , dada 'i luí en Ma
drid por el lllmo. Sr. D. Felix Torres y
Amal , obispo de Astorga. Método de la
09 impugnacion. Protesta del autor. Reflexio
nes sobre lo que dice el lllmo. Sr. Obispo
de Astorga con respecto al silencio de los
obispos en el asunto de las observeciones
pacíficas de su tio el Arzobispo de Palmi
ra. Injusticia con que trata el Sr. Obispo
de Astorga á la Congregacion del Indice.
Defiéndese la conducta de Roma en este
 PÁe.t
negocio. Opiniones políticas de) Sr. Arzo-
tiispo ite Palmira. Severas palabras que le
dirigió el Nuncio de Su Santidad en vin
dicacion del conde de Maistre. Esplícase el
sentido
atacadasdeporlasel Sr.
palabras
Arzobispo
del ilustre
de Palniira.
conde
Pos palabras sobre lo que se atribuye al
Sr. Veryan, obispo de Vich. Lo que valen
cierta» expresiones gratulatorias de que
habla el Sr. Obispo de Astorga. Palabras
del Sr. Arzobispo de Palmira antes de mo
rir. Cotejo entre su conducta y la de Fenc-
lon. Humildad de este grande hombre en
la condenacion de sn obra titulada Expli
caciones de las máximas de los Santos.
Mal efecto que puede producir en el ánimo
de los fieles el escrito del Sr. Obispo de
Astorga. Notable pasage sobre los bienes
de la Iglesia. Se impugna con la autoridad
del Concilio de Trento. El Sr. Obispo de
Astorga no tiene en su apoyo sobre este
particular al episcopado espanol. Doctrinas
de la apología sobre los deberes de la ca
ridad y la obediencia debida 1 la potestad
civil. Fatales consecuencias de la doctrina
del Sr. Obispo de Astorga. Extrañeza de
que Su I lima . se constituya delensor del
gobierno y de los cuerpos colegisladores en
lo tocante á los negocios eclesiásticos , y
maltrate tan duramente á sus adversarios.
Mas sobre la prohibicion de las Observa
ciones pacificas. Analízase el pasage de la
constitucion Sollicita ac provida de Bene
dicto XIV. Defiéndese á este Papa contra
las acriminaciones del Sr. Obispo de As
torga. Reflexiones sobre lo que dice el
Sr. Obispo con respecto a la extrema nece
sidad en el negocio de la confirmacion de
los Obispos. Gravedad de semejante indi
cacion. Universalidad de la actual discipli
na de la Iglesia sobre este punto. Pasage
del Concilio de Trento. Las expresiones del
Sr. Obispo de Astorga debieron de alarmar
y con muchísima razon á la Sede Apostó
lica. Las necesidades extremas y la situa
cion de España. Dos palabras sobre el
Jansenismo y los jansenistas. La realidad
y los nombres: contradiccion manifiesta en
que incurre el Sr. Obispo en lo tocante á la
prohibicion de las Observ aciones pacíficas.
En la Pastoral como en la Apología se ha
bla á un tiempo del Sumo Pontífice y del
Rey de Roma , y de todo se quiere sacar
partido para acriminar á la Curia romana.
Defiéndese de nuevo al ilustre conde de
Maistre contra las acusaciones del Señor
Arzobispo de Palmira. Noticia biográfica
de M. Itaston, eclesiástico de Ruan é im
pugnador del conde de Maistre. Dos pala
bras sobre el Sr. Arias, Arzobispo de Va
lencia. Cortedad de la prevision política
del Sr Arzobispo de Palmira. Los docu
mentos que aduce el Sr. Obispo de Astor
ga no hacen mucho honor en esta parte á
su llustrísimo tio ni por lo tocante á su
capacidad ni con respecto á su consecuen
cia. Reflexiones sobre la situacion del Se
ñor Obispo de Astorga. Conclusion 117
Porvenir de las comunidades religiosas en
España. Art. 3.° Nuevas necesidades de
la sociedad actual. Comparacion entre los
rio.»
proletarios y los esclavos. Su diferencia y
resultados que acarrea. Como se ha falsea
do la civilizacion europea. Varío que ha
dejado la falta de institutos religiosos. Una
J' Hermana de la Caridad. Utilidad de los
institutos religiosos para socorrer toda cía-
Ir^ se de infortunio 148
^Barcelona. Art. t.° Reflexiones sobre las
causas de su prosperidad , y refutacion de
algunas preocupaciones. Cotejo entre Ma
drid y Rarcelona. Opinion del general Seoa-
nc. Lo que diecu los enemigos del engran
decimiento de Barcelona. Examínase su
influencia industrial y mercantil sobre las
poblaciones subalternas del Principado.
de
Reflexiones
las grandes
generales
capitalessobre
europeas
la influencia 183
Soére la instruccion del clero. Diferentes sis
temas seguidos por los apologistas de la
Religion. Necesidades peculiares de cada
época , precision de acomodarse á ellas.
Admirable efecto que produce la reunion
en una misma persona de santidad , de sa
biduría , y del sacerdocio. Necesidad de
dotnr bien las cátedras de los seminarios.
Algunas observaciones sobre el aislamiento
de la enseñanza eclesiástica. Efectos que
siglo
puedey producir.
los anteriores
Diferencia entre nuestro 180
El Socialismo. Art. i." Efecto que producen
las doctrinas socialistas. Las ilusiones de
esta escuela no son para despreciadas. Ca
rácter que distingue á los modernos socia
listas de los antiguos utopistas. Causas de
este fenómeno. Como se presenta la socie
dad sin las luces de la razon cristiana. As
pecto aflictivo que ofrece la humanidad.
Religion
Reflexiones consoladoras que sugiere la 189
Alnunas reflexiones sobre la vida y la in
fluencia de los párrocos rurales. Contras
tes de la vida del párroco. Efectos que de
ella resultan. Interes que tienen la iglesia
y el Estado en que los párrocos correspon
dan dignamente al objeto de su mision.
Influencia que pueden tener los párrocos
en el desarrollo de la prosperidnd pública.
Aplicacion á España. Los párrocos y la
estadística.
á la mejoraComo
de ramopodrían
tan importante
estos contribuir 163
Polémica religiosa. Carta decima ó un es-
céptico en materias de Religion. Escuela
filosófica francesa de Mr. Cousiu. Razones
que tiene el clero francés para levantar la
sin
voz encontra
1R18ella.
y enLo181U.
que Su
enseñaba
panteismo
Mr. Cou-
Ci
tas justificativas. Con las teorías de Mr.
Cousiu, todas las religiones quedan redu
cidas á la nada. Conclusion . . 166
Barcelona. Art. 2.° La cuestion del derribo
de murallas y fortalezas examinada bajo
el punto de vista militar y político. Estado
de la cuestion. Graves razones que militan
por ambas partes. Suposicion de una in
vasion estrangera. Razones que en tal caso
militan á favor de la continuacion del pre
sente estado. Razones en contra. Quizás
estas son mas graves que aquellas. Dile
ma de difícil solucion. La cuestion de las
fortifiraciones considerada con relacion á
la conservacion del órden. Para esto de na-
 — 288 —
PÁG.S
" da sirven las murallas. La cuestion queda
reducida a si conviene ó no conservar al
gunos fuertes que dominen la poblacion.
Graves razones que militan por ambos la
dos. Lo qae produce ir» bombardeo. Daño
que hizo á Espartero ese acto de crueldad.
Cuáles son los verdaderos medios de go
bierno. Gravedad de la presente cuestion.
Pulso y detenimiento con que se debe proce
der en ella. A quien se debería oir autes de
resolverla. Ventajas materiales que Barcelo
na reportaría del derribo. Conjeturas sobre
el porvenir de la cuestion de las murallas.. 171
El Socialismo. Art, 2.° Teorías de Roberto
Owen. Circunstancias particulares de este
innovador. Su manifiesto de Lóndrcs. Re
chaza todos los sistemas sociales que han
existido hasta ahora. Intolerable orgullo de
Owen. Lo que son los innovadores sin el
'cristianismo. Origen de sus errores. Sus
calumnias contra la humanidad. Sus pom
posas promesas. Nuevo espíritu y nueva
voluntad que pretende producir cu el gé
nero humano. Bienestar universal. Pron
titud de su realizacion. Owen se lisonjea
de realizar sus tan brillantes sueños sin
revoluciones sangrientas. Consideraciones
que quiere tener á lo que id apellida las vie
jas supersticiones. Extraña confianza con
que habla de sus proyectos y dela proximi
dad de su realizacion . 177 Barcelona.
El Socialismo. Art. 3.° Continúa la exposi
cion de las teorías de Owen. Lo que es el
hombre segun las doctrinas de este refor
mador. La doctrina de Owen es un plagio
de la escuela materialista y fatalista. Nie
ga la espiritualidad del alma y el libre al-
bedrío. Horribles consecuencias de seme
jante doctrina. En qué consiste segun él la
verdadera felicidad
Socialismo. Art. -i." Continúa el examen de lfw tenría»
de Haberlo Owen. Cuál es la religion de este reforma
dor. Sa« errores sobre el culto. Ciencia de gobierno.
Quiere llegar á la abolicion de toda recompensa v de
t >da pena. Quiere declarar la completa irresponsabili
dad del individuo. Lo 004 seria la sociedad ron estas '
doctrinas. Vida coman. Imposibilidad de realizarla. Las
ajorara«las da Owen. Su sislcina de educacion. Owen
suelta la rienda á todas lu pasiones. Su sistema consi
derado bajo el aspecto económico. Su influencia en au
mentar la Violencia de las pasiones v el choque de los
intereses individuales. Lo que es la vida coman bajo la
influencia religiosa. El resultado del sistema de Owen
seria la pereza , la indolencia mas cumplida . el abando
no mas cumplido a todo Knige de pasiones. Se confir
ma con lo sucedido á Owen en América en su ensayo de
FCot—Harmonj. Es menestercontar on los hombres ta
les como son en sí, DO como deseariirnos que fuesen.
Conclusion
Barcelona. Art. 3.° Se desvanece un error sobre las causas
de sus remella*. Diferencia entre Barcelona v las demas
capitales de España. Papel quo ha representado desde
1833. Causas que han producido este fenómeno. No ha
dimanado del provincialismo. Reflexiones sobre este par
ticular. Equivocaciones quo con respecto al espíritu do
Cataluña corren muy válidas asi en España como en el
extranjero. Se desvanecen con la histeria en la mano.
Revolucion de 1610. Guerra de sucesion. Efectos do la
poliúca de la casa de ílorbon. Efectos de la revolucion
francesa. Despues de este suceso el provincialismo de
Cataluña ha desaparecido casi del lodo
Polémica religwsa. Carta undécima « un excéptico en
m-iterias de Rrfíjíon. Cómo ha podido introducirse en
Francia la filosofía alemana. Su opoiicmn ron el liento
FIN DEL TOMO SEGUNDO.
PÁG.S
francos. Conjeturas sobre el porvenir de esta filosofía en
Francia. Se propone el argumento de un escéptico contra
la Religion cristiana Palabras del escéptico. Su equivo
cacion sobre la enseñanza del crioUsnismo con respecto
al amor propio. Es falso que la Religion nos prohiba
amarnos k nosotros mismos. Pruebas sacadas del misma
catecismo. Lo que significa el principio de la caridad bien
ordenada. Lo que nos dice el catecismo sobre el origen r
destioo del hombre. La Religion cristiana hermana j ar
moniza de una manera admirable el amur de Dios , el de
si mismo y el del prójimo. Cómo se entiende la muerte1
del amor propio, de que hablan los autores místicos. Cómo
M entiende el aborrecimiento de si mismo. Cómo enten
dian los santos e| amor propio en medio de sus mortifi
caciones. Recursos que le quedan al escéptico despues de
desbaratados sus argumentos. Nuevo terreno en que en
tal caso se colocaria la cuestion. La mural del Evangelio
ha sido aplaudida hasta ppr los mas violentos enemigoa
del cristianismo. Un consejo á los impugnadores de la Re
ligion cristiana 193
Barcelona . Art. 4." Rdpúla njuantll sobre la» revueltaa da
Barcelona desde 4833 . y axámen de cus cautaa. Situa
cion de Barcelona al principio do la revolucian. Sus dis
posiciones particulares para contagiarse. Popularidad de
la revolucion en Barcelona en 1833. Empieza la reaccion
de ideas en 1835. Sucesos de 18)0. Revolucion de 1841.
Pronunciamiento de junio. Situacion aclual i 07
Inttruccion primaria. Su importancia bajo el aspecto re
ligioso y moral. Lo que deben ser los maestros. Dos ca
lidades de la infancia. Necesidad de que los maestros
profesen principios religiosos. Inconvenientes de la ficcion
en"este particular. Cómo se entona la Religion á los ni-
nos Observacíones sobre este panto. Aritmética. Obser-
bre ella. La precocidad. Situacion aclual de
vacion
r.spaua con respecto á la instruccion primaria..
efecto»
Art. 5.° Cnnsidcracionea generalea sobre lo»
del desarrollo de la industria en la» soctrdadta
moderna». Division entre fabricantes j trabajadores. Sus
relaciones con la situacion de los demas países industria
les Dolencia de las suciedades modernas. Atraso dela
economía política bajo el aspecto social. L'n dicho céle
bre. Razon de que la industria aumente los pobres. Re
flexiones sobre los grandes establecimientos
Polemica religiosa. Carta duodecima á un escéptico
terias de Religion. El Evangelio y las —
Barcelona. Art. 6." Relaciones entre
182 bajadores. Observaciones sobre la Socic
indicacion de algunos medios conciliatorios.
Polémica religiosa. Carla decimotercia á un esféptico en
materias de Re'igton. La humildad. Equivocaciones de
un escéptico. Dicho de Sia. Teresa. Pasase de San Fran
cisco de Sales. Cómo debe entenderse la homildad. Cuan
agradable es la humildad á los ojos del mundo
El Socialismo. Art. La utopia de Tomaa Moro. Noticia
de Tomás Moro. Reseña de sus doctrinas. Idea de utopia- 335
El Socialismo. Art. 6.° La utopia de Tomás Moro. Con—
cluve la reseña de las doctrinas de Tomás Moro 339
v erdadera idea del valor ó reflexiones sobro el origen , na
333
Elturaleza
Svcialtsmo.v variedades
Art. 7.°deDos los precios.;
palabras á Luis Revbaul con
respecto á su obra titulada Eatudjo* sobre loa reformado
res contemporáncos relativamente .i la Religion cri-nana- 337
Las sociedades blblicas v la encíclica del Papa S40
Sobre la revista de tos inUrwsea materiales y moraUa am 3M
Sr. D. Ramon
184 Literatura. Obrasde dela Sagra.
D.JuanArt.Manuel
|.° de BerrioMbal.
Traduccion de el Crucifijo; del Himno del ángel de ta
tierra; del hombre al lord Byron¡ la Cristiada de Jfeje—
da. Noticia de este poema. Plan d.l trabajo hecho por «l
Sr.de Berriozabal en la nueva Cristiada. Muestra: 1
vestidura de las siete fajas. El i"'0:n-' dolos espii
infernales Noticia de otra-, obras. Observaciones sobi
estilo del Sr. de Berri07.3bal. Indicacion de algunos
dificaciones que cu él se podrian liacer
Polémica religiosa. Carta decimocuarta á un sscfpÜ
materias dePensamientos
Religion sohre UtenUm, filosofía, políti
Miscelánea.
188 ca, y religion
Indice de las materias contenidas en ei i