ACREDITACIÓN.

Seminario: Pensar Teórico y Pensar Epistémico

Hugo Zemelman M.
Marco A. Flores Barrios. AMEB. Cel: +58 416 6147860
Correo: marcoafloresb@gmail.com
ENSAYO
Mucho se ha hablado y escrito, sobre el desfase de la educación, lo que se enseña
y cómo se enseña; y la realidad, la verdad verdadera que subyace en las
organizaciones y en la sociedad en general. Las necesidades de la economía en
todos sus aspectos, no se corresponde con lo que se enseña en las aulas, ni a nivel
universitario, ni a nivel técnico. Este desajuste, obviamente afecta también al ámbito
investigativo, porque no se acometen investigaciones que sean significativas y
vayan a la par del desarrollo real.
Como un ejemplo de ello, puedo referir, que estando elaborando mi Trabajo
Especial de Grado, conversando con el Director de la Escuela de Computación de
la facultad de Ciencias, de ese entonces, le planteaba revisar el Pensum de
Estudios de algunas de las Unidades Curriculares, para que se adaptaran a las
necesidades de las empresas e Instituciones del Estado, a lo que me contestó, que
en la Facultad de Ciencias se hacía ciencia y no estaban para satisfacer
necesidades particulares. No caí en polémicas, pero dentro de mí, me dije que no
había ninguna intención ni conexión entre la Facultad y su entorno.
Tiempo después, otras escuelas de Ciencias, se abrieron al entorno y comenzaron
a plantear soluciones y a prestar un servicio, que obviamente les generaba un
ingreso económico (Escuela de Química y de Biología).
En este devenir del conocimiento, los profesionales que se insertaron en la industria
e instituciones varias, estaban con conocimientos más actualizados que aquellos
que se quedaron en actividades netamente académicas, o, con un conocimiento
solamente teórico.
Otra situación que observo, es que los pensum de estudios no están actualizados y
están atados a conceptos y procesos que ya no tienen vigencia, es decir, no
presentan una redacción dinámica, que sea capaz de ajustarse a los cambios, una
redacción por decir, genérica que permita adaptar los contenidos a medida que se
detecten cambios a nivel de los conocimientos impartidos (vigilia de conocimientos
y tecnológica).
Sobre lo planteado, vemos entonces que el desfase es también a nivel del
pensamiento teórico (pensamiento obsoleto dentro de la academia) que ha llevado
a un inevitable desfase epistémico. A enseñar un conocimiento viejo no
evolucionado, y, a titular profesionales que reciben su diploma, pero con un cúmulo
de conocimientos que ya perdieron vigencia en mucho de los casos.
Aquí presento otro ejemplo de una vivencia: fui a un Instituto Universitario a ofrecer
mis servicios, y, la contratación era para enseñar un conocimiento en una
herramienta computacional que ya había salido del ambiente hacía más de quince
(15) años. Se lo hice saber al coordinador y su respuesta fue que así estaba
estipulado en el pensum de estudios, por lo tanto, eso era lo que se debía dictar. En
fin, accedí a la contratación y dicté ese conocimiento viejo. Pero no sólo era dictar
ese conocimiento viejo; ese conocimiento a impartir requería de saber programar y
a las pocas semanas de haber comenzado, detecté que el grupo de alumnos no
cumplía con el requisito de saber programar.
Me dirigí nuevamente al coordinador quien expresó asombro por la información
recibida, que no sabían resolver el problema más elemental de la programación. La
asignatura que dictaba, yo la recibí en el quinto semestre de la licenciatura. Le
expresé que me iba a retrasar en el contenido, porque tenía que pasar un mes
enseñándoles a programar y así lo hice. Al final aprobaron pocos alumnos, aun
siendo esa carrera de Técnicos Superiores en Informática.
Está claro, que existen titulaciones universitarias que sus conceptos aun se
mantienen, porque hacia ellas no se ha dirigido el esfuerzo de la ciencia como tal,
han sido contenidos estáticos, y, no han causado revuelo en el entorno económico-
social. Algunas de esas profesiones pertenecen a las Ciencias Sociales.
Lo aquí expresado, y si se quiere, en línea con lo planteado por Zemelman, nos
enfoca hacia un pensamiento de replantear las Instituciones Universitarias, que
busquen cambiar desde el adentro de su adentro, en lo más profundo de sus
existencias, auto reorganizarse y reconstruir su pensamiento de la realidad. Que,
de venir esa línea desde el entorno, se vería como una intromisión, con las
consecuencias políticas y sociales que este tipo de decisiones generan.
Pero es imperativo, un cambio y hay que aceptarlo, siendo lo conveniente que esto
surja de adentro y se desarrolle una relación constructiva con su entorno, en aras
de llevar un mejor proceso de adaptación y actualización hacia la realidad existente.

Referencia Bibliográfica.
Zemelman M., Hugo. Pensamiento Teórico y Pensamiento Epistémico: Los retos de
las ciencias sociales Latinoamericanas. Instituto Pensamiento y Cultura en
América Latina. Galeana N 96, Colonia Guerrero, México, D. F. s/f.