0 calificaciones0% encontró este documento útil (0 votos)
9 vistas1 página
La comunidad campesina de Hanccamayo denuncia amenazas y perversiones de extractores de materiales del río Apurímac que están afectando su vida, paz y patrimonio natural. Solicitan a las autoridades que cumplan con sus obligaciones de garantizar un ambiente saludable y los derechos ambientales, deteniendo a personas que exigen el cumplimiento de las normas medioambientales. También piden investigar a quienes extraen materiales de la comunidad de forma ilegal.
La comunidad campesina de Hanccamayo denuncia amenazas y perversiones de extractores de materiales del río Apurímac que están afectando su vida, paz y patrimonio natural. Solicitan a las autoridades que cumplan con sus obligaciones de garantizar un ambiente saludable y los derechos ambientales, deteniendo a personas que exigen el cumplimiento de las normas medioambientales. También piden investigar a quienes extraen materiales de la comunidad de forma ilegal.
La comunidad campesina de Hanccamayo denuncia amenazas y perversiones de extractores de materiales del río Apurímac que están afectando su vida, paz y patrimonio natural. Solicitan a las autoridades que cumplan con sus obligaciones de garantizar un ambiente saludable y los derechos ambientales, deteniendo a personas que exigen el cumplimiento de las normas medioambientales. También piden investigar a quienes extraen materiales de la comunidad de forma ilegal.
La comunidad Campesina de Hanccamayo del distrito de Coporaque de la provincia de
Espinar, ante las amenazas y perversiones de los extractores de materiales del rio Apurímac, se manifiesta ante la opinión pública lo siguiente: PRIMERO. - delitos que están afectando la vida, la paz, la gobernabilidad democrática y el patrimonio natural. Es obligación del Estado a través del Ministerio Público de la Fiscalía Medio Ambiental el Ana y Ala para garantizar un ambiente saludable para todas las personas y, además, asegurar el ejercicio pacífico de los derechos ambientales en entornos seguros y propicios. Esta obligación se ha reforzado más aún cuando, con la contribución peruana, la Asamblea General de la Organización de Naciones Unidas, en su sesión del 28 julio del 2022, declaró que el acceso a un medio ambiente limpio y saludable, es un derecho humano universal. El futuro de la comunidad campesina Hanccamayo y las perspectivas de vida y progreso de la humanidad dependen de la capacidad de nuestras sociedades de respetar y proteger a quienes, a su vez, protegen nuestros recursos. Con el compromiso de todos los actores del Estado y la sociedad, es posible trazar un camino hacia un desarrollo sostenible e inclusivo, que procure la prosperidad para todas las personas, priorice sus derechos humanos y asegure el futuro de nuestra comunidad para las generaciones venideras. El compromiso de las autoridades es solucionar este problema frente a los extractores y que las normas medio ambientales se cumplan frente a estos personajes advenedizos que nos persiguen, primero deteniendo y enmarrocando a nuestro Presidente Euder Taipe Yucravilca, Raúl Noa Ramos y Baltazar Yupanqui Huamani, tan simple hecho de exigir el cumplimiento y respeto a los recursos naturales de la comunidad de Hanccamayo, específicamente del rio Apurímac. Mediante la presente Ley General de Comunidades Campesinas (N° 24656), el Estado busca garantizar el desarrollo integral de las Comunidades Campesinas, y sobre todo el derecho a la propiedad del territorio y la participación de los comuneros. Las tierras que se encuentran dentro de sus límites son formalmente de su propiedad, según lo reconoce la legislación estatal. Se sabe que en la mayoría de estas instituciones existen áreas conducidas por la comunidad como tal, mientras que otras áreas son conducidas por las familias comuneras. Tal es caso que en nuestra comunidad campesina de Hanccamayo, existen personas caprichosas y dominantes de mala fe actúan en provecho de sus intereses personales económicos que se acostumbraron años tras años saqueando sus recursos netos de la comunidad. Estos depredadores no son netos de la comunidad, todavía con conductas matonescas y delincuenciales, practicando la organización criminal y para luego victimizarse ante la sociedad. Solicitamos a la Fiscalía la intervención especializada en lavado de activos con la finalidad de que se investigue a los que extraen los materiales de la Comunidad Campesina de Hanccamayo. ¡VIVA LA COMUNIDAD ORGANIZADA DE HANCCAMAYO! ¡JAMAS DE RODILLAS, ANTE EL ABUSO DE LOS PODERES ECONOMICOS!. ¡ALTO A LA DEPREDACIÓN DE NUESTROS RECURSOS NATURALES!.