Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Las dos reacciones utilizan moléculas portadoras para transportar la energía de una a
otra. Los portadores que mueven la energía de las reacciones dependientes de la luz a
las reacciones del ciclo Calvino pueden considerarse como “llenos” porque aportan
energía. Después de que se libera la energía, los portadores de energía “vacíos”
regresan a las reacciones dependientes de la luz para obtener más energía. Debe estar
familiarizado con las moléculas portadoras de energía utilizadas durante la respiración
celular: NADH y FADH 2. La fotosíntesis utiliza un portador de energía diferente,
el NADPH, pero funciona de manera comparable. La forma de menor energía, NADP +,
recoge un electrón de alta energía y un protón y se convierte en NADPH. Cuando el
NADPH cede su electrón, se convierte de nuevo a NADP +.
Para reemplazar el electrón en la clorofila, se divide una molécula de agua. Esta división
libera dos electrones y da como resultado la formación de oxígeno (O 2) y 2 iones de
hidrógeno (H +) en el espacio tilacoide. El reemplazo del electrón permite que la
clorofila responda a otro fotón. Las moléculas de oxígeno producidas como
subproductos salen de la hoja a través de los estomas y encuentran su camino hacia el
ambiente circundante. Los iones hidrógeno juegan un papel crítico en el resto de las
reacciones dependientes de la luz. Los pigmentos de la primera parte de la
fotosíntesis, las reacciones dependientes de la luz, absorben energía de la luz
solar. Un fotón golpea los pigmentos de la antena del fotosistema II para iniciar
la fotosíntesis. La energía viaja al centro de reacción que contiene clorofila a a la
cadena de transporte de electrones, que bombea iones de hidrógeno al interior
del tilacoide (la luz). Esta acción acumula una alta concentración de iones
hidrógeno. Los iones fluyen a través de ATP sintasa vía quimiósmosis para
formar moléculas de ATP, las cuales son utilizadas para la formación de
moléculas de azúcar en la segunda etapa de la fotosíntesis. El fotosistema I
absorbe un segundo fotón, lo que da como resultado la formación de una
molécula de NADPH, otro portador de energía y potencia reductora para las
reacciones independientes de la luz.