Caso práctico

Para padres amonestados

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Retroalimentación
Los estilos de crianza que se identifican en el
video son:

Permisivo: madres, padres y cuidadores no

ponen límites de respeto, ni otorgan
responsabilidades a sus hijos e hijas y pueden
existir patrones de sobreprotección, como
cuidados excesivos, el no permitir la
exploración y experiencia por sí mismos, esto
impide que las niñas, niños y adolescentes
desarrollen la autonomía, seguridad, autoestima
y adquieran patrones de conducta responsables.

Autoritario: madres, padres y cuidadores establecen reglas

severas, mantienen una relación vertical, donde las niñas, niños y
adolescentes no pueden expresar sus ideas, solo obedecer. No se
reconoce la personalidad, las necesidades y las emociones de
niñas, niños y adolescentes, solo se tienen en cuenta las
expectativas que tienen los adultos sobre ellos y ellas, lo que
orienta las pautas que utilizan para educarlos. Esto impide que
niñas, niños y adolescentes desarrollen autonomía, autoestima y
seguridad, y por supuesto no se crecerán en un ambiente que les
proporcione alegría y confianza.

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Democrático: madres, padres y cuidadores
establecen límites, pero con amor y respeto,
nunca utilizando el castigo físico, los tratos
crueles, degradantes o humillantes. Acompañan
constantemente a sus hijos e hijas, pero confían
en las capacidades y autonomía de niñas, niños
y adolescentes, reconociendo sus derechos,
necesidades y emociones. Este estilo de crianza
permite que adquieran autonomía, seguridad,
confianza, responsabilidad y que crezcan en un
entorno que les proporciona alegría.

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2. Con base en los videos y en los contenidos
del módulo, selecciona que pautas son
positivas en la crianza y cuáles no.

03
 Retroalimentación
Pautas positivas

• Estimular y proteger el vínculo afectivo y de confianza con las niñas, niños y

adolescentes.
• Reconocer a niñas, niños y adolescentes como sujetos de derechos.
• Elogiar los pequeños y grandes logros de niñas, niños y adolescentes.
• Escuchar sus opiniones, aunque no las compartamos.
• Comunicación abierta, clara, sencilla sobre el cuerpo y los derechos sexuales.
• Reconocer la individualidad de niñas, niños y adolescentes, sus necesidades,
sus diferencias, sus sentimientos, no como personas que hay que mandar,
manipular o cambiar.
• Corregir consiente, con argumentos y sin ira.
• Poner límites con amor y respeto, nunca utilizando el castigo físico, los tratos
crueles, humillantes o degradantes.
• Participar de las actividades de las niñas, los niños y los adolescentes.
• Reconocer el padecimiento de una crianza violenta cuando madres, padres y
cuidadores la hayan sufrido, para no repetir esta con sus hijos e hijas.

Pautas negativas

• Considerar que las niñas, niños y adolescentes son propiedad de los padres y
madres y por ello hay que corregirlos como sea.
• Creer que como la crianza de padres, madres y cuidadores fue con castigos,
así debe ser la de sus hijas e hijos.
• No jugar con las niñas y niños, pensando que de esta manera se pierde
autoridad.
• Considerar que niñas, niños y adolescentes no saben nada, por eso hay que
cambiarlos y manipularlos.
• Castigar físicamente cuando las acciones de niñas, niños y adolescentes lo
requiera.
• Utilizar el juego como premio solamente cuando las acciones de niñas y niños
son correctas para la persona adulta.
• Pedir silencio e ignorar a la niña, niño o adolescente como ejercicio de
reflexión frente al error cometido.
• Utilizar el castigo físico en momentos donde el diálogo no ha funcionado con
niños, niñas y adolescentes.
• Implementar el castigo físico, los gritos, amenazas, desprecio u otros tratos
crueles, humillantes y degradantes.

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