PUROS

HISTORIA

El tabaco es una planta originaria del continente americano.

Según observó Cristóbal Colón, los indígenas del Caribe
fumaban el tabaco valiéndose de una caña en forma de pipa
llamada tobago, de donde deriva el nombre de la planta.
Al parecer le atribuían propiedades medicinales y lo usaban
en sus ceremonias. En 1510, Francisco Hernández de Toledo
llevó la semilla a España, cincuenta años después lo introdujo
en Francia el diplomático Jean Nicot, al que la planta debe
el nombre genérico (Nicotiana). En 1585 lo llevó a Inglaterra
el navegante sir Francis Drake; el explorador inglés
sir Walter Raleigh inició en la corte isabelina la costumbre
de fumar el tabaco en pipa. El nuevo producto se difundió
rápidamente por Europa y Rusia, y en el siglo XVII llegó a China,
Japón y la costa occidental de África.
El tabaco es una planta originaria del continente americano.
Según observó Cristóbal Colón, los indígenas del Caribe
fumaban el tabaco valiéndose de una caña en forma de pipa
llamada tobago, de donde deriva el nombre de la planta.
Al parecer le atribuían propiedades medicinales y lo usaban
en sus ceremonias. En 1510, Francisco Hernández de Toledo
llevó la semilla a España, cincuenta años después lo introdujo
en Francia el diplomático Jean Nicot, al que la planta debe
el nombre genérico (Nicotiana). En 1585 lo llevó a Inglaterra
el navegante sir Francis Drake; el explorador inglés
sir Walter Raleigh inició en la corte isabelina la costumbre
de fumar el tabaco en pipa. El nuevo producto se difundió
rápidamente por Europa y Rusia, y en el siglo XVII llegó a China,
Japón y la costa occidental de África.
FISIONOMÍA

La Tripa: es la mezcla de las hojas que forman el interior del cigarro en esta
parte es donde está la fuerza del puro, es decir donde se aplican las secretas
combinaciones de hojas de cada marca para el sabor.
La tripa se forma plisando las hojas en forma de abanico, creando pasos de
aire horizontales que faciliten el tiro,y aseguren que todas y cada una de las
caladas contienen la totalidad de los sabores del tabaco
La tripa está formada por largas hojas de tabaco, que ocupan la longitud total
del puro (en los puros mecanizados, la tripa está formada por hojas cortadas en
trozo trozos pequeños);en los puros de calidad, la tripa se forma con hojas
largas para que el cigarro tenga el mismo sabor en toda su extensión y su
ceniza tenga consistencia.
FISIONOMÍA

El Capote: son las hojas del cigarro que envuelven la tripa y la

mantienen unida y contribuye a la buena combustión.La tripa se
envuelve con una hoja llamada capillo o capote; ésta influye en el
sabor, el aroma y la combustibilidad del puro y su sabor debe ser
compatible con el de la tripa y la capa.
FISIONOMÍA

La Capa: es la cubierta externa del puro, la que está a la vista

formada por hojas especiales que dan al tabaco su aspecto, color, y
aroma. Debe ser atractiva y bien veteada,de textura uniforme y suave
al tacto.
PARTES

1. CABEZA: es la parte del cigarro por donde se fuma; en los puros

mecanizados puede aparecer cortada de fábrica. La cabeza está rematada por la
perilla, que es un trozo de hoja que remata la cabeza del cigarro. Puede terminar
en forma de avellana o en rabo de cerdo cuando está hecho a mano. Su
realización manual es muy laboriosa y especializada. El cigarro puede abrirse
con diversos tipos de corte.
2. CAÑÓN O TALLO: es el cuerpo del cigarro.
3. PIE: es por donde se enciende el cigarro
ZONAS TABAQUERAS
ZONAS TABAQUERAS

Estados Unidos
Productor por excelencia de la variedad de hoja para capa Connecticut,
originaria del estado del cual adoptó su nombre. El tabaco de capa
Connecticut Shade es una selecta hoja color marrón rojizo; preciada por
su elasticidad, de fortaleza entre suave y media y se emplea para
elaboración de puros de calidad. Otra variedad, la capa Connecticut
Broadleaf, es de hoja ancha, más densa, muy oscura y nervada, se usa
para elaboración de cigarros puros maduros. La Connecticut en sus
distintas variedades se cultiva asimismo en Ecuador, Cuba, Honduras,
Nicaragua y República Dominicana.
A pesar de sus altos recursos tecnológicos, Estados Unidos no produce
un tabaco para tripa digno de mención.
ZONAS TABAQUERAS

Nicaragua
Su producción ha mejorado notablemente en años últimos debiéndose, en
gran parte al intercambio con el gobierno cubano, que aportando semillas y
técnicas ha favorecido la calidad de cultivo en este país.
El principal lugar de cultivo es el Valle de Jalapa, cuyas plantaciones de
tabaco producen variedades desarrolladas de las semillas de Connecticut.
También han mejorado la utilización de la variedad de Piloto Cubano, en su
variedad Habana 2000, cuyas capas resultan aromáticas y oscuras y las
destinadas a trica son algo más suaves sin acento en su sabor o fortaleza.
Los cigarros de Nicaragua son muy similares a los producidos en
Honduras.
 ZONAS TABAQUERAS

México
Produce su propio cultivo de hoja para capa, una variedad muy singular
derivada de la semilla Sumatra,
la Mexican Sumatra. Es una hoja curada al sol, cuya cosecha principal se
obtiene en el Valle de San Andrés en el estado de Veracruz. La mayor parte
de los puros de exportación se elaboran con esta hoja oscura para producir
los denominado cigarros "maduros". En otros países se utiliza para la
elaboracion de capote y tripa

Jamaica
El tabaco jamaicano se elabora a partir de variedades de Cuba, resultando
sumamente suave y ligero; es un buen complemento para tabacos como el de
Honduras o México en las mezclas para tripa o capillo. Las hojas para capa
se importan de Indonesia, Estados Unidos y Brasil.
 ZONAS TABAQUERAS

Honduras
Al igual que Nicaragua, este país se ha convertido en un buen productor de
tabaco, gracias a los aportes de técnicos cubanos. En ambos países se vio
afectada la continuidad de su producción por las catástrofes naturales que
debieron afrontar.
La región más productiva de Honduras es la del Valle de Sula, al norte, cuyo
tabaco es aún más fuerte que el cubano, y se utiliza para mezclar con otros más
suaves; le siguen en importancia, las regiones de Danlí y Tegucigalpa.
La temperatura elevada de esta zona y su humedad natural, otorgan a las hojas
provenientes de la semilla Connecticut, un fuerte aroma a bosque, y un color
oscuro perfecto para capa.
Las hojas destinadas a tripa y tirulo provienen de semillas cubanas que se
mezclan preferentemente con hojas más aromáticas importadas de República
Dominicana, Ecuador y Costa Rica.
ZONAS TABAQUERAS

República Dominicana
La posición geográfica de la República Dominicana, situándose, al igual que
Cuba, en la zona caribeña, goza del clima y el suelo ideal para el cultivo de
tabaco. Estas condiciones naturales proporcionaron a los exiliados de la
revolución cubana, expertos en el trato de la hoja de tabaco, los medios
óptimos para seguir su tradición. Con el tiempo, la resultante fue una
producción cuyo volumen de cultivo de tabaco de máxima calidad, superaba
incluso el que producía Cuba.
La mejora de calidad lograda por manos expertas, desarrollada a partir de
semillas cubanas, pusieron al puro dominicano a la altura del, hasta ese
entonces, irremplazable Habano. Colocando al tabaco de Dominicana entre
los más apreciados, elección que lo convirtió en el primer productor mudial
de cigarros hechos a mano.
A diferencia del cubano, el tabaco dominicano no es tan fuerte y especiado,
sino más bien suave con un terso sabor a nuez. La plenitud de su sabor ha
posibilitado la creación de mezclas equilibradas y más atractivas para
distintas exigencias.
República Dominicana

Las áreas de cultivo más importantes de la isla, en sus distintas variedades

de semilla, son: Valle del Cibao, Cotuí, La Vega, Moca y La Isabela.
1. Valle del Cibao, se encuentra en la zona Tabacalera Norte, muy cerca de la
provincia de Puerto Plata y estas son las tierras más pródigas, donde se
ubicaron renombradas fábricas ( T.N.D., Davidoff, etc.). Aquí se produce el
mejor tabaco de las variedades "olor" dominicano y "piloto cubano".
2. Cotuí, se encuentra en el centro de la isla y se incluye en la Zona
Tabacalera Noreste. Aquí se ha cultivado el mejor tabaco criollo del país, el
reputado y conocido internacionalmente "Bonao dominicano".
Ahora, los productores en ésta zona se están dirigiendo más, hacia la
producción de variedades como Olor dominicano y Piloto cubano.
3. La Vega, Moca y La Isabela, son tres subzonas, no menos importantes,
que están esparcidas por el interior de la Zona Norte, en las que se cultiva
también tabaco criollo de buena calidad.
República Dominicana
Piloto Cubano: las hojas que se obtienen de ésta variedad son las mas
parecidas del mundo al tabaco cubano de la zona de Remedios. La mayoría
de los cigarros torcidos en la República Dominicana siempre llevan algo de
piloto cubano en su tripa o capote, que les da carácter, fortaleza y
personalidad, siempre que esté bien fermentado. Una característica de esta
variedad es, que al ser el parénquima de la hoja muy grueso, la hoja necesita
un muy buen añejamiento.
Olor Dominicano: el "olor" dominicano, también llamado Chago Díaz, en
honor de su creador. Este tabaco, que tiene un sabor amargo muy
característico, se utiliza sobre todo para rebajar la fortaleza de algunos
cigarros. Las hojas que se obtienen de esta variedad son muy grandes y finas
y tienen la cualidad de arder muy bien, aunque ésta es una característica
intrínseca de todo el tabaco dominicano.
Bonao: esta tercera variedad, actualmente llamada "criollo", ha sido relegado
por las otras dos variedades, pero hace años tenía tanta calidad como el
piloto cubano.
 ZONAS TABAQUERAS

Cuba
Cuba es la elegida de la Tierra en lo que respecta al crecimiento de la planta
de tabaco. Una selección natural hizo de este suelo un factor de privilegio y
la aplicación de este recurso dio origen a los famosos puros Habanos, cuya
utilización data de tiempos anteriores a la conquista española.
Existen dos variedades principales de tabaco, el "Criollo" descendiente de
una especie autóctona, que es preferentemente utilizado para elaboración de
tripa; y el "Corojo", para uso exclusivo como Capa de cigarros.
La marca fundamental del tabaco cubano es la que estampa su fortaleza. Así
es como cualquier tabaco siempre resultará más suave o de sabor temperado
si es comparado con el tabaco que crece en Cuba. Posee un intenso aroma y
un sabor característico alto en azúcares naturales de su suelo, adicionado a la
sensación de áspera terrocidad.
Las mejores tierras de cultivo están dedicadas a la producción de hojas
cubanas de exportación.
Cuba

Los más importantes distritos tabaqueros son: Zona de Vuelta Abajo, Zona
de Semivuelta, Zona de Partido, Zona de Remedios y Zona de Oriente.
1. Vuelta Abajo, atesora el cuidado del mejor tabaco de Cuba, en la zona
occidental y sur de la provincia de Pinar del Río. El clima y suelo de esta
área es ideal; el terreno es profundo, rico en minerales, sedimentos y arena,
con temperatura media y humedad de máxima aptitud para el cultivo. La
fortaleza es el secreto de su privilegio natural.
2. Semi Vuelta, es la segunda región tabacalera de Pinar del Río, y su tabaco,
de hojas más gruesas y aroma más fuerte que el de Vuelta Abajo.
3. Partido, al sur de La Habana, donde la mayor parte de las plantaciones
está dedicada al cultivo de capa, obteniéndose la magnífica capa Corojo, y
también la Connecticut. La singularidad de Partido es que aquí se cultiva
tabaco tapado, por lo cual se logran hojas más claras y de textura delgada,
con las que se obtiene excelente tabaco para la producción de cigarros de
lujo para exportación.
Cuba

4. Remedios (también llamada Vuelta Arriba), en las provincias de Santa Clara, Sancti
Spíritus y Cienfuegos, el enclave original de las primeras plantaciones que antaño
poseían excelente calidad y productividad y que ahora se está intentando recuperar en
una de las regiones tabacaleras más ricas de Cuba. Su tabaco es de hojas gruesas y
aromáticas.
5. Oriente, abarca zonas de la provincia central de Ciego de Ávila, y ocupa las
regiones de Bayamo, Mayarí, Alto Songo, Jiguaní y Sagua del Tánamo, en el extremo
oriental de la isla, donde se obtiene el tabaco destinado a cigarros y abastecimiento de
la industria cigarrera de consumo nacional.
Corojo es un híbrido obtenido por un genetista holandés en 1948.
Las capas cubanas descendientes de la variedad Corojo, son capas finas y elásticas, de
sabor dulzón y con variedad de matices y colores, que pueden ser claros, rojizos y
oscuros.
Connecticut es una magnífica variedad de hoja para capa, muy fina, sin nervios, de
colores claros y de sabor amargo. El tabaco de capa Connecticut Shade es una selecta
hoja color marrón rojizo; preciada por su elasticidad, produce un humo de fortaleza
entre suave y media y se emplea para elaboración de puros de calidad. Otra variedad,
la capa Connecticut Broadleaf, es de hoja ancha, más densa, muy oscura y nervada, se
usa para elaboración de cigarros puros maduros.
Ecuador
Es un excelente productor de las variedades de Connecticut y Sumatra. Las
circunstancias climatológicas, con su techo de nubes que actúan como filtro
solar, permite el cultivo de hojas para capa curadas a la sombra y “al sol”. La
variedad Connecticut cultivada aquí es menos amarga que la original
americana y más fina y oscura. La derivada de Sumatra resulta en un tabaco
de aroma y sabor más suave que el original, con textura sedosa y gran gama
de tonos (desde el pálido de la Connecticut al oscuro de la Camerún).
Brasil
Posee una variedad autóctona que se cultiva en el Norte, principalmente en
la región de Cruz das Almas, en la costa oriental. Esta variedad llamada
Bahía es una hoja de tabaco que secada al sol y tras la fase de fermentación
adquiere color negro. Según la región de procedencia, se utiliza para tripa o
se produce una hoja de mejor calidad para capa, la Mata Fina, que aún
siendo suave contiene pleno sabor y se utiliza generalmente para fortalecer
ciertas mezclas. La variedad Arapiraca, también se cultiva en el norte de
Brasil y es secada al sol, siendo destinada en mayor porcentaje para tripa,
produciendo poca cantidad de capa.
 ZONAS TABAQUERAS

Argentina
Es productora de grandes volúmenes de tabaco que se utiliza mayormente
para cigarrillos no siendo adecuado para producción de puros premium.
Algunos cigarros se elaboran con tabaco misionero o correntino aunque las
tabacaleras expertas utilizan tabaco de importación.

Canarias
Existe una gran producción de cigarros cuyo tabaco no proviene de
plantaciones realizadas en las propias islas. Aquí se elaboran puros con
tabaco proveniente de otros países.
Canarias goza de reconocimiento mundial en la elaboración de cigarros
gracias a la influencia de emigrantes a Cuba que se transformaron en
perfectos maestros tabaqueros. Los de la isla de Palma, por ejemplo,
lograron ligas excelentes en la tripa, además de utilizar diferentes variedades
de Connecticut y Sumatra en las capas.
El archipiélago Canario es un "exportador natural" ya que su exportación
alcanza actualmente el 35% de la producción total.
 ZONAS TABAQUERAS

Camerún y República Centroafricana

Esta zona ha sufrido en los últimos años condiciones climáticas adversas por
lo que su producción de tabaco, básicamente hojas para capa de las
variedades Connecticut y Sumatra, se ha visto mermada. Los productores se
hallan actualmente realizando esfuerzos para mejorar la calidad y
producción utilizando nuevas variedades.
La hoja Camerún, de tonalidades verdosas al marrón oscuro (la más
atractiva) y textura rugosa, procede de semillas de Sumatra y su aprecio
tiene que ver con su sabor neutro que la hace apta para capote, y para
balancear cigarros muy plenos en sabor.

Filipinas
Antiguamente la producción de tabaco del sudeste asiático se concentraba en
estas islas, pero actualmente se ha desplazado mayormente, a Java y
Sumatra. Las plantaciones que aún son significantes se desarrollan
principalmente en la Isla de Luzón y en Mindanao. Sus hojas se utilizan para
tripa y tirulo mezclándolas con otras variedades más fuertes y aromáticas.
ZONAS TABAQUERAS
Indonesia
Las manos infatigables y expertas de los productores de Sumatra, Java y de
otras áreas de producción de Indonesia, fundamentan una empresa
legendaria, desarrollada en el siglo XIX por pioneros holandeses de gran
sabiduría.
Actualmente es el mayor productor mundial de tabaco de capa, que tiene dos
cosechas al año, en una de las cuales se obtiene una gran capa, de sabor
dulce, fina y de color oscuro.
Aquí la capa se cultiva al sol, ya que las características climáticas de la zona
la dotan de una espesa capa de nubes que actúa como las telas del tabaco
tapado.
 RITUAL DEL PURO
En todo ritual se observa un acto de profunda concentración y respeto, es un
instante de introspección que otorga una conexión intima y verdadera con
todo lo que nos rodea. Es igual para adentrarse en el rito de fumar, no es un
acto compulsivo, es un acto de celebración que requiere un ánimo distendido
y tiempo disponible. Los fumadores de cigarros premium se entregan a la
profundidad de este ritual sin prisas y disfrutan de sus distintos momentos.
Fumar significa sentir y apreciar el aroma, el sabor, las formas del humo y la
pausa hechizante que transfiere al fumador, que lo vive como una ceremonia
íntima. Así, observa los movimientos propios de un instante sagrado,
realizando con delicadeza y concentración todos los pasos: abrir el humidor
o tomar el cigarro en las manos, encenderlo a conciencia, y fumarlo
lentamente para percibir todos los matices y las significantes variaciones en
su sabor y aroma, hasta que el puro se apague por sí mismo.
Corte
Dentro del ritual del puro, no es cosa menor el realizar correctamente el corte, y su importancia
es proporcional a la calidad del puro de que se trate.
El tamaño del corte que realice afectará el sabor, la combustión y tiraje del cigarro; un corte
demasiado pequeño reduce el tiro y produce una concentración excesiva de nicotina; si es
demasiado grande, la bocanada resultará muy caliente y combustionará demasiado rápidamente.
Entre los aficionados el mejor corte es algo más pequeño que el diámetro total del puro.
El tipo de corte también difiere si el formato del puro es parejo o figurado.
Los cortapuros de bolsillo o sobremesa (los mejores tienen diversos diámetros y tope de acero
para realizar cortes profundos), de una o dos cuchillas, así como los cortapuros de alicate (poseen
un tope en ángulo y el cigarro debe colocarse con la misma inclinación para que sea parejo), y las
tijeras (logran cortes muy limpios pero requieren algo más de habilidad), realizan un corte tipo
guillotina, que es circular y muy preciso.
El cortapuros de cuña realiza un corte en ángulo de dos lados llamado corte en V o en cuña. La
mayor superficie de abertura de este tipo de corte puede facilitar el tiraje pero también puede
resultar en una bocanada con exceso de humo y calor.
El punzón, realiza un tipo de corte que es en realidad una perforación u orificio. No es muy
utilizado por los aficionados porque presenta varias dificultades. Este tipo de perforación hace
que se deposite en los lados y en el fondo del orificio cierta cantidad de nicotina y esto impide un
tiro regular, además, las sustancias depositadas afectan el gusto y la temperatura de la calada.
Encendido
La fase que requiere más profunda concentración en el ritual del puro, es la de
encenderlo. En el instante que media entre encender la llama y tomar la primera
calada se revela el arte y la elegancia de los fumadores. De ello depende que resulte
una experiencia deleitante o un verdadero despropósito.
Los aficionados disfrutan inmensamente de esta ceremonia tomando el puro con
delicadeza y colocándolo horizontalmente a una distancia de medio centímetro por
encima de la llama, sin tocar de pleno el pie del cigarro, de lo contrario carbonizará y
un sabor desagradable permanecerá durante toda la fumada. No colocan el puro en
sus bocas sino que lo sostienen y lo giran en su totalidad para formar un anillo de
brasa y lo soplan suavemente para que se forme un aro de ceniza perfecto. Acercando
el puro a la boca efectúan ligeras bocanadas mientras continúan rotándolo hasta que
encienda de modo uniforme, esto evita que se forme el efecto túnel, en el que un lado
arde más deprisa que otro.
Esta cuidadosa atención al encender un puro posibilitará que el resto de la fumada los
sumerja en una gratificante e intensa sensación de placer.
El encendido es también detector de la calidad de un cigarro. Un exceso de humedad
hará que el puro se apague por dificultar el tiro; uno elaborado totalmente a mano
también puede presentar imperfecciones en su torcido.
Conservación
Como resultado del riguroso tratamiento que reciben las hojas de tabaco se obtiene
un puro premium. Siendo un producto totalmente orgánico no puede conservarse
con medios artificiales como la inclusión de corservantes químicos. Por lo tanto, los
cuidados que deben proporcionarse al puro son similares a los que se tuvo con la
planta madre. Es decir, ha de controlarse su temperatura y humedad,
manteniéndolas estabilizadas para alterar lo menos posible su entorno ambiental,
que influye sensiblemente el la composición del cigarro y afecta invariablemente su
sabor, combustión y tiraje.
El instrumento óptimo, diseñado para la conservación de puros es el humidor. Este
repiciente o caja cerrada de estructura equilibrada y firme, posee orificios o ranuras
distribuidos de modo tal que circule una ventilación mínima y está dotado, en su
interior, de un higrómetro o dispositivo que crea un microclima de condiciones
relativas constantes donde, idealmente, su temperatura debiera oscilar entre los 16 y
18 grados centígrados y sostener una humedad relativa entre el 70 y 72 por ciento.
Dentro del humidor están dispuestas las tablillas y los contrachapados para
distribuir los cigarros.
 ALGUNOS ESTILOS Y TAMAÑOS
Corona (142 x 16,67 mm; cepo 42)
Especial (235 x 18,6 mm; cepo 47
Doble Corona (194 x 19,4 mm; cepo 49)
Churchill (178 x 18,65 mm; cepo 47)
Lonsdale (170 x 17,07 mm; cepo 43)
Gran corona (155 x 16,67 mm; cepo 42)
Corona gorda (143 x 18,26 mm; cepo 46)
Robusto (124 x 19,84 mm; cepo 50)
Petit Corona (129 x 16,67 mm; cepo 42)
Demi Corona (116 x 15,87 mm; cepo 40)
Trés Petit Corona (102 x 15,87 mm;
Panetela (170 x 13,10 mm; cepo 33)
Mini Panetela (121 x 10,32 mm; cepo 26)
Slim Panetela (175 x 11,11 mm; cepo 28)
Gran Panetela (192 x 15,08 mm; cepo 38)
Palma (152 x 15,08 mm; cepo 38)
Palma Larga (185 x 14,29 mm; cepo 36)
Pirámide (156 x 20,64 mm; cepo 52)
Torpedo (140 x 20,64 mm; cepo 52)
Obús (140 x 20,64 mm; cepo 52)
Perfecto Cubano (158 x 18,65 mm; cepo 47)
Culebra (146 x 15,48 mm; cepo 39)
Diademas (140 x 20,64 mm; cepo 52).
 Bibliografía:
Puros.com es el sitio de Havana Club: la división de Puros de
Tabacalera Sarandí S.A., una empresa Argentina ubicada en el
partido de Avellaneda, provincia de Buenos Aires. Los
objetivos de este website son comunicar las distintas líneas de
puros que comercializa la empresa, generar mecanismos de
interacción con su público, y brindar todo tipo de información
relacionada con el arte de fumar cigarros puros.