Está en la página 1de 5

Angel Gabriel Pérez Terán. Grupo: 615.

Fecha: 19/04/23

San Agustín Hipona

Historia

San Agustín de Hipona, también conocido como Agustín de Tagaste, fue uno de
los más importantes pensadores y teólogos de la Iglesia Católica en la Edad
Media. Nació en Tagaste, una ciudad de la provincia romana de Numidia (actual
Argelia), en el año 354. Su padre era un pagano y su madre era cristiana, y se le
educó en ambas tradiciones religiosas.

Agustín se trasladó a Cartago para estudiar retórica y filosofía, y allí se convirtió en


maniqueo, una secta dualista que creía en el bien y el mal como fuerzas opuestas.
Sin embargo, después de varios años, Agustín se desilusionó con el maniqueísmo
y se convirtió al cristianismo. Fue bautizado en Milán en el año 387 por el obispo
Ambrosio.

Después de su conversión, Agustín regresó a África y se convirtió en sacerdote y


obispo de Hipona, una ciudad costera en el norte de África (actualmente Annaba,
Argelia). Allí escribió algunas de sus obras más importantes, como "Confesiones",
"La Ciudad de Dios" y "Sobre la Trinidad".

En sus escritos, Agustín desarrolló una teología cristiana que influyó


profundamente en la Iglesia Católica. Fue un defensor de la gracia divina y la
predestinación, y argumentó que la salvación no podía ser alcanzada a través de
los esfuerzos humanos, sino que era un regalo de Dios. También argumentó que
la Iglesia era una comunidad de creyentes, no una institución política o social, y
que la verdadera ciudad de Dios estaba en el cielo, no en la Tierra.

San Agustín murió en Hipona en el año 430, durante un asedio de los vándalos.
Fue canonizado por la Iglesia Católica y su festividad se celebra el 28 de agosto.

Teoría

San Agustín de Hipona desarrolló una amplia teología cristiana que ha influido
profundamente en la Iglesia Católica y en el pensamiento occidental en general. A
continuación se presentan algunos de los aspectos más importantes de su teoría:

La gracia divina y la predestinación: Agustín creía que la salvación no podía ser


alcanzada a través de los esfuerzos humanos, sino que era un regalo de Dios.
Según su teología, la gracia divina es necesaria para que una persona pueda
llegar a la salvación, y esta gracia no se basa en los méritos humanos sino en la
elección divina. Además, Agustín sostenía que Dios ha predestinado a algunas
personas para la salvación y a otras para la condenación, y que esta elección no
depende de la conducta de las personas sino de la voluntad divina.
El pecado original: Agustín argumentaba que todos los seres humanos están
afectados por el pecado original, que es una herencia de la desobediencia de
Adán y Eva en el Jardín del Edén. Según esta teoría, el pecado original afecta a la
voluntad y a la razón humanas, lo que hace que las personas sean incapaces de
alcanzar la salvación por sus propios medios.
La Trinidad: Agustín desarrolló una teología de la Trinidad, que es la creencia
cristiana de que Dios es uno en tres personas: Padre, Hijo y Espíritu Santo.
Agustín argumentaba que estas tres personas son iguales en su divinidad y que
su relación es una relación de amor y comunión.
La Iglesia y la ciudad de Dios: Agustín distinguía entre la Iglesia, que es la
comunidad de creyentes, y la ciudad terrena, que es la sociedad humana en
general. Según su teología, la Iglesia es una comunidad de creyentes que está
llamada a vivir en la ciudad terrena, pero que no debe confundirse con ella.
Además, Agustín argumentaba que la verdadera ciudad de Dios está en el cielo, y
que la ciudad terrena es temporal y está destinada a desaparecer.
La teología moral: Agustín desarrolló una teología moral que enfatizaba la
importancia de la virtud y el autocontrol. Según su teología, las personas deben
luchar contra sus pasiones y deseos para alcanzar la virtud y la perfección moral,
y esto solo es posible con la ayuda de la gracia divina.
Estos son solo algunos de los aspectos más importantes de la teología de San
Agustín de Hipona. Sus escritos han tenido una influencia profunda en el
pensamiento cristiano y en la filosofía occidental en general.

Tomas de Aquino

Historia

Tomás de Aquino fue un teólogo y filósofo italiano del siglo XIII que es
considerado uno de los pensadores más importantes de la Edad Media. Nació en
el castillo de Roccasecca, cerca de Aquino, Italia, en 1225. Su familia era noble y
estaba relacionada con el emperador Federico II.

A la edad de 5 años, Tomás fue enviado a estudiar en la Abadía de Monte


Cassino, donde recibió una educación básica en artes y teología. A la edad de 14
años, ingresó a la Universidad de Nápoles, donde estudió bajo la tutela de Pedro
de España, uno de los más grandes filósofos de la época.

Tomás pronto se interesó en la filosofía aristotélica y comenzó a estudiar y


enseñar en el estilo escolástico, que era una forma de filosofía y teología que se
centraba en la discusión y el debate lógico. En 1245, se unió a la Orden de
Predicadores (también conocida como los dominicos), una orden religiosa fundada
por Santo Domingo de Guzmán que se dedicaba a la enseñanza y la predicación.

En los años siguientes, Tomás continuó sus estudios en París y Colonia, donde se
convirtió en uno de los líderes intelectuales de la orden dominicana. Escribió
numerosas obras en las que desarrolló una teología cristiana basada en la filosofía
aristotélica, y se convirtió en uno de los principales defensores del pensamiento
aristotélico dentro de la Iglesia Católica.

Entre sus obras más famosas se encuentran "Summa Theologica" y "Summa


contra Gentiles", que son dos grandes tratados de teología que abarcan todos los
aspectos de la fe cristiana y la filosofía. También escribió sobre temas como la ley,
la justicia, la política y la moralidad.

Tomás murió en 1274 mientras viajaba a Lyon para asistir a un concilio de la


Iglesia. Fue canonizado en 1323 por el Papa Juan XXII y se convirtió en uno de
los santos más importantes de la Iglesia Católica. Su pensamiento ha tenido una
influencia duradera en la teología y la filosofía occidental, y se le considera uno de
los grandes pensadores de la historia.

Teoría

La teoría de Tomás de Aquino es muy amplia y abarca diferentes áreas del


conocimiento, como la teología, la filosofía, la ética y la política. Aquí se presentan
algunos de los aspectos más destacados de su pensamiento:

Teología: Tomás de Aquino desarrolló una teología que se basaba en la razón y la


fe. Creía que la razón podía ayudar a entender mejor la fe y a explicarla de
manera más clara. Sostenía que Dios era la causa primera de todo y que se podía
conocer a través de la razón y la revelación divina.
Filosofía: Tomás de Aquino fue un gran admirador de la filosofía de Aristóteles y
consideró que su pensamiento era compatible con la fe cristiana. Desarrolló una
síntesis entre la filosofía aristotélica y la teología cristiana, lo que se conoce como
tomismo. Consideraba que la razón era la fuente del conocimiento y que se podía
llegar a la verdad a través de la reflexión y el análisis lógico.
Ética: Tomás de Aquino desarrolló una teoría ética basada en la ley natural.
Sostenía que la ley natural era una ley universal que se podía conocer a través de
la razón y que regía el comportamiento humano. Creía que la ley natural era el
fundamento de la moralidad y que los seres humanos debían actuar de acuerdo
con ella para alcanzar la felicidad.
Política: Tomás de Aquino consideraba que el estado era necesario para mantener
el orden y la justicia en la sociedad. Creía que el gobierno debía ser justo y que
debía estar basado en la ley natural. También sostenía que los seres humanos
tenían derechos y libertades que debían ser protegidos por el estado.
En general, la teoría de Tomás de Aquino se caracteriza por su énfasis en la razón
y la fe, su integración de la filosofía y la teología, y su preocupación por la
moralidad y la justicia en la sociedad. Su pensamiento ha tenido una gran
influencia en la teología y la filosofía occidental, y su obra sigue siendo objeto de
estudio y debate en la actualidad.
Guillermo de Ockham

Historia

Guillermo de Ockham (también conocido como Guillermo de Ockham o William of


Ockham en inglés) fue un filósofo y teólogo inglés nacido en el siglo XIII. Es
conocido principalmente por su filosofía nominalista y su método de reducción,
que se ha denominado "la navaja de Ockham".

Guillermo de Ockham ingresó a la orden franciscana en su juventud y estudió en


la Universidad de Oxford. Fue influido por la obra del filósofo francés Jean Buridan
y desarrolló una teoría nominalista que sostiene que los universales o conceptos
generales no tienen existencia real en sí mismos, sino que son meramente
nombres o etiquetas que se aplican a los objetos individuales.

La "navaja de Ockham" es un principio metodológico que establece que, cuando


hay varias explicaciones posibles para un fenómeno, la explicación más simple y
con menos supuestos es la más probablemente correcta. Este principio se ha
utilizado en la ciencia y en otros campos, y ha tenido una gran influencia en el
pensamiento occidental.

Guillermo de Ockham también tuvo una importante influencia en la teología y la


filosofía política. Sostenía que la autoridad en la iglesia debía basarse en la Biblia
y no en la tradición o la autoridad papal, y que los gobernantes civiles debían
limitar su poder y respetar los derechos de los individuos.

En resumen, Guillermo de Ockham fue un filósofo y teólogo influyente cuya teoría


nominalista y principio de la navaja de Ockham han tenido un impacto duradero en
la filosofía, la ciencia y otros campos.

Teoría

La teoría más conocida de Guillermo de Ockham es su principio de la navaja de


Ockham, que establece que, en caso de tener varias explicaciones posibles para
un fenómeno, la explicación más simple y con menos supuestos es la más
probablemente correcta. Este principio se basa en la idea de que no se deben
hacer más suposiciones de las necesarias y que se debe evitar la complejidad
innecesaria.

Otra de las teorías importantes de Guillermo de Ockham es su filosofía


nominalista. Según esta teoría, los universales o conceptos generales no tienen
existencia real en sí mismos, sino que son meramente nombres o etiquetas que se
aplican a los objetos individuales. En otras palabras, sólo existen los objetos
individuales y no hay una realidad común que subyace a las cosas particulares.
En el campo de la teología, Guillermo de Ockham defendió la primacía de la razón
frente a la autoridad. Sostenía que la autoridad en la iglesia debía basarse en la
Biblia y no en la tradición o la autoridad papal, y que la razón era una herramienta
fundamental para comprender la verdad religiosa.

En cuanto a la filosofía política, Guillermo de Ockham defendió la idea de que los


gobernantes civiles debían limitar su poder y respetar los derechos de los
individuos. Sostenía que la ley natural y la ley divina eran superiores a la ley
positiva, y que los gobernantes no tenían derecho a infringir los derechos
naturales de las personas.

En resumen, las teorías de Guillermo de Ockham incluyen su principio de la


navaja de Ockham, su filosofía nominalista, su defensa de la primacía de la razón
en la teología y su defensa de los derechos individuales en la filosofía política.
Todas estas teorías han tenido una gran influencia en la filosofía, la ciencia, la
teología y la política.

También podría gustarte